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INDICE
CAPÍTULO 1. INTRODUCCIÓN: EL MÉTODO INDUCTIVO RÍTMICO
CAPÍTULO 2. PERFILES CIENTÍFICOS
CAPÍTULO 3. ENCONTRAR SU PROPIO RITMO
CAPÍTULO 4. LA FRECUENCIA CARACTERÍSTICA DE ACTIVACIÓN
CAPÍTULO 5. RITMO Y CONCENTRACIÓN
CAPÍTULO 6. INICIEMOS: EL MÉTODO Y LA PREPARACIÓN
CAPÍTULO 7. ACCIONES SOBRE EL CUERPO FÍSICO
CAPÍTULO 7.1 EL SOPORTE
CAPÍTULO 7.2 LA RESISTENCIA
CAPÍTULO 7.3 LA AGRESIÓN
CAPÍTULO 7.4 LA MODIFICACIÓN
CAPÍTULO 7.5 EL MOVIMIENTO EXTERNO
CAPÍTULO 7.6 LA EXPULSIÓN
CAPÍTULO 7.7 LA CRONICIDAD
CAPÍTULO 7.8 EL MOVIMIENTO INTERNO
CAPÍTULO 7.9 LOS SENTIDOS
CAPÍTULO 7.10 LA REPRODUCCIÓN
CAPÍTULO 7.11 LA SEXUALIDAD
CAPÍTULO 7.12 EL RECUPERO
CAPÍTULO 7.13 EL FUEGO AMIGO
CAPÍTULO 7.14 EL DON DADO
CAPÍTULO 7.15 EL DON RECIBIDO
CAPÍTULO 7.16 EL DECAIMIENTO
CAPÍTULO 7.17 EL ADIÓS
CAPÍTULO 8. ACCIONES SOBRE EL CUERPO EMOTIVO
CAPÍTULO 8.1 DESILUSIÓN
CAPÍTULO 8.2 CELOSÍA
CAPÍTULO 8.3 MELANCOLÍA
CAPÍTULO 8.4 IRA
CAPÍTULO 8.5 ANSIEDAD
CAPÍTULO 8.6 VERGÜENZA, HUMILLACIÓN
CAPÍTULO 8.7 INSEGURIDAD
CAPÍTULO 8.8 TEMOR
CAPÍTULO 8.9 ABURRIMIENTO, APATÍA
CAPÍTULO 8.10 RENUNCIA
CAPÍTULO 8.11 IMPOTENCIA
CAPÍTULO 8.12 FRUSTRACIÓN
CAPÍTULO 13 SORPRESA
CAPÍTULO 9. ACCIONES SOBRE EL CUERPO MENTAL
CAPÍTULO 9.1 FALTA DE DESEO
CAPÍTULO 9.2 EXCESO DE APEGO
CAPÍTULO 9.3 AVERSION
CAPÍTULO 9.4 EXCESO DE ORGULLO
CAPÍTULO 9.5 CONFUSIÓN
CAPÍTULO 9.6 FALTA DE CONFIANZA
CAPÍTULO 9.7 MIEDO
CAPÍTULO 9.8 INAFECTIVIDAD
CAPÍTULO 9.9 SENTIMIENTO DE VACÍO
CAPÍTULO 9.10 TENDENCIA A LA DEPRESIÓN
CAPÍTULO 10. ACCIONES SOBRE EL CUERPO DEL ALMA
CAPÍTULO 10.1 CONCENTRACIÓN
CAPÍTULO 10.2 MEDITACIÓN
CAPÍTULO 10.3 CONTEMPLACIÓN
CAPÍTULO 10.4 ILUMINACIÓN
CAPÍTULO 11. COMO PROGRESAR
CAPÍTULO 12. CONCLUSIONES
NOTA SOBRE EL AUTOR
CAPÍTULO 1. INTRODUCCIÓN: EL MÉTODO
INDUCTIVO RÍTMICO
Lo que presento en las próximas páginas es un método entendido en su doble
definición, así como dicha por la Enciclopedia Treccani: la primera que habla
del método solo ‘‘(actividad de) búsqueda, estudio, investigación’’, la
segunda que habla del método como ‘‘procedimiento seguido en perseguir un
propósito, en el realizar cualquier actividad, según un orden y un plan
preestablecidos a la vista del fin que se tiene la intención de llegar’’
(http://www.treccani.it/vocabolario/metodo/).
Entonces tenemos:
1. Un Ritmo Basal personal (RB) que representa la situación de bienestar
psicofísico;
2. Una posible (desafortunadamente frecuente…)” perdida del ritmo” que
nos conlleva a situaciones de malestar de naturaleza, justamente física,
emotiva, mental;
3. La existencia de ondas de propagación hace que un malestar físico se
repercute también sobre las esperas emotivas y mentales (experiencia que
estoy seguro de que les es familiar)
4. Frecuencias Características de Activación (FCA) para cada uno de
nuestros cuerpos que – en el caso de los Cuerpos Físicos, Emotivos,
Mentales- si mandados en resonancia de la manera correcta la solución de
arritmia y el regreso al Ritmo Basal;
5. Una Frecuencia Característica de Activación del cuerpo Anímico que si
mandado en resonancia de la manera correcta les asegurará un periodo de
bienestar extendido y constante.
He aquí, en estos cinco puntos directos y sin galas como costumbre mía, ahí
está la esencia, el propósito, la naturaleza, la base del MIR. Los invito a leer y
releer este capítulo varias veces para hacer suyo su contenido: poco a poco se
dará cuenta de que, cuando lo lea al ritmo correcto, estará tan alejado del
mundo que lo rodea y cuánta lectura indeleblemente fijada en su mente.
¡Vamos, ya casi lo logramos…aún un capítulo de preparación- el próximo – y
después se comenzará a vivir lo mejor!
CAPÍTULO 5. RITMO Y CONCENTRACIÓN
Este es un capítulo fundamental. En las páginas anteriores hemos visto que
como cada uno de nosotros posee un propio Ritmo Basal, como sea posible
encontrarlo y como de su “perdida deriven todos nuestros malestares; como
cada uno de nosotros sea producto de la unión (que definiría sin miedo como
“unión hipostática”) de los cuatro cuerpos Físico, Emotivo, Mental y
Anímico y como cada uno de estos tenga una Frecuencia Característica de
Activación a través de la cual se llega a restablecer el Ritmo Basal perdido; y
como nuestro método consista justamente en las técnicas de resonancia de
estas Frecuencias Características según el estado para abordar.
Todo lo dicho, considero absolutamente necesario persistir en la importancia
de la concentración como elemento/momento habilitante la aplicación del
método. En el capítulo tres fui bueno: para quien no fue capaz de llegar solo
con el pensamiento a la concentración necesaria, introduje el segundo y
agradable camino para el descubrimiento del propio Ritmo Basal. Pero ahora
el camino es uno solo.
Para utilizar de lo mejor el MIR necesita concentrarse, necesita alcanzar un
nivel adecuado de atención. En pocas palabras debemos eliminar cada posible
fuente de distracción y debemos progresivamente entrenar nuestro cerebro
para mantenerlo focalizado en el pensamiento de nuestro interés.
Para una definición de concentración y de como ella sea levadura para
nuestro método hago una vez más el trabajo de Alice Bailey "Del intelecto a
la intuición".
"La concentración es el acto de concentrar la mente, aprender a enfocarla y
luego hacer uso de ella. Así que el primer paso es el control mental. Esa es la
capacidad de hacer que la mente quiera pensar, de pensar lo que quiere, de
formular conceptos y secuencias de pensamientos sobre el comando.
Tenemos dos métodos simples para llegar allí. El primer método dice que "la
mejor manera de eliminar es “sustituir” o que interesarse profundamente en
un sujeto nuevo y complicado, y focalizar la propia atención sobre un nuevo
y dinámico argumento el cual tenderá de manera automática a educar la
mente y concentrarse sobre un solo punto. El segundo método afirma que la
concentración se desarrollará rápidamente si cultivamos la costumbre de la
precisión en cada acto de la vida cotidiana”
Yo soy absolutamente del segundo camino: aprendemos a hacer todo con
atención con precisión, con orden y poco a poco aprendemos a concentrarnos,
a dedicar nosotros mismos a la cosa que estamos haciendo, sin distracciones:
nos daremos cuenta que el pensamiento queda fijo y que esos diez, veinte
minutos o el tiempo necesario para la obra, serán vividos en su más absoluta
y total intensidad.
Estar concentrados es la base para el logro de cualquier objetivo.
La buena noticia se las he tenido hasta el final: la extra gran mayor parte de
las personas que formé con el método, me dijeron que como beneficio de las
técnicas aprendidas obtuvieron la capacidad de concentración instantánea con
más recaídas positivas sobre la vida cotidiana y en ámbito profesional. La
cosa no me sorprendió: la clave está siempre en el ritmo...vive en tu Ritmo
Basal correcto y tendrás la potencialidad de alcanzar cualquier resultado.
Basta quererlo.
Este, que es el último de un tipo puramente hipotético, es un capítulo que
aparentemente es simple pero central en términos de concentración. No
puedo ayudarlos excepto con técnicas y sugerencias: es un paso que debe
hacer para lo cual, como comenté anteriormente, con el método sea muy
facilitado.
Antes de cerrar y de pasar- finalmente- a la explicación del Método Inductivo
Rítmico los invito a un rápido y agradable experimento para probar su
capacidad de concentración. En el Automóvil (mejor si es pasajero), en casa,
mientras caminan pongan su canción favorita, esa la cual se saben el texto de
memoria y que cada vez que la escuchan les abre el mundo, y dense el
objetivo de escuchar todas las palabras, una después de la otra, en la segunda
estrofa, o antes, su mente estará ya vagando hacia otros pensamientos, otros
compromisos, otras personas.
¡¿Sin embargo, fue tan fácil?! ¿Qué se necesita para mantener la
concentración durante dos o tres minutos en algo que te gusta?
La concentración habilita el método. Recuérdenlo Siempre
CAPÍTULO 6. INICIEMOS: EL MÉTODO Y LA
PREPARACIÓN
Este es el último capítulo que podrán leer antes de haber encontrado su Ritmo
Basal. Los siguientes capítulos serán “implementados” o dirigidos a
ayudarles a levantarlos del malestar o aflicción que están pasando en ese
momento específico. Sin conocer su Ritmo Basal les será imposible poner en
práctica el método.
Dicho todo esto, avancemos para describir las cosas que necesita. Además de
su Ritmo Basal, en orden aleatorio, necesitará:
• Ustedes mismos presentes, consientes, con la justa concentración y
voluntad
• La Frecuencia Característica de Activación del área que querrán poner
en resonancia (que encontrarán en los capítulos siguientes)
• Un metrónomo (ya sea en app o instrumento)
• Un lugar sin interferencias de ruidos violentos y/o con la presencia de
otras personas, dotado de luz extendida (natural, mejor o artificial)
• Una lámpara, preferiblemente led
• (Cuando sirvan) pañuelos de papel o de tela o solapas de hoja de color
azul, rojo, verde,
• Más o menos 15/30 minutos de su tiempo
No necesitaran nada más. Solo de concentrarse e iniciar a trabajar sobre
ustedes mismos y para ustedes mismos.
En las siguientes páginas encontrarán toda la combinación de elementos
necesaria para lograr el objetivo prefijado y entonces:
1. La FCA (Frecuencia Característica de Activación) sobre la cual fijar el
metrónomo;
2. Las palabras claves sobre las cuales fijar su mente en el curso del
proceso de la puesta en resonancia;
3. La necesidad de operar en un ambiente iluminado o no iluminado;
4. La necesidad – a través la lámpara led y el pañuelo de color – de activar
una difusión de color o no;
Todos estos cuatro puntos son evidenciados con claridad cuando es necesario.
De un punto de vista operativo, una vez preparados los cuatro elementos
arriba descritos, procederán como primera cosa en el encendido del
metrónomo al ritmo indicado. Para casa uno de los caminos que les estoy por
describir no existe un tiempo, una duración para seguir servilmente… será su
ritmo a decirles cuando es el momento de pasar a la siguiente fase.
Por lo tanto, estamos sentados cómodos, con la combinación de luces y
colores indicada y el metrónomo en función. Mi consejo es iniciar
concentrándose en el ritmo del metrónomo hasta hacerle asumir
connotaciones casi hipnóticas. Es una fase, estas que en la mayor parte de los
casos que he experimentado dura sobre 5 minutos, aunque, si cuestionan
sobre el tema, casi todas las personas juraban que hubiera durado no más de 1
o 2 minutos. En esta fase concéntrense en el ritmo y liberen progresivamente
la mente de cualquier otro pensamiento, olviden el cuerpo, las emociones…
reconduzcan todo a unidad, una unidad sometida a su voluntad de silencio y
paz.
Cuando su intuición les dirá que es el momento justo pronuncien en la mente
una frase para repetir más veces para inducirlos al estado de concentración
adecuado para activar la resonancia: en esta fase no escucharán más el
metrónomo como un cuerpo externo emisor de sonidos, más bien como
fuente interna de armonía y simetría, una cuna ancestral.
La frase es la siguiente, fue agarrada del libro de Alice Bailey “Del intelecto
a la intuición” y fue modificada ligeramente por mí: “Más radiante de la luz,
más puro que el amor, más delgado que el pensamiento, es el sí, el espíritu
que está en mí. Yo soy ese sí, ese sí soy yo”.
En esta frase, un mantra diría, alguien sin alejarse demasiado de su verdadero
significado, que - en concierto con el ritmo - activa el área de nuestro interés
y el proceso de resonancia, de poner en "fase de escucha" de nuestro cuerpo
interesado en el proceso.
Personalmente, aunque nunca estoy seguro de cuál es el "estado de trance",
percibo la activación de la resonancia y la fase de escucha interna después de
las ocho, máximo diez repeticiones de la oración. Repeticiones que deben
tener lugar en la concentración absoluta y después de haber devuelto a la
unidad todos los componentes de nuestro Cuerpo "inferior", luego el Cuerpo
Físico, Cuerpo Emocional y Cuerpo Mental.
Tan pronto como tengamos la percepción de estar listos (en algunos casos
solo una sensación física de un temblor interno) le diremos a la mente o la
voz (según su instinto) el "pensamiento clave" preparado para nuestro
propósito. Lo recomiendo: ¡no es una secuencia de palabras que se repitan
como loros por docenas de veces! Todo lo contrario. Son estímulos,
levaduras, que deben conducir a una reflexión sobre su significado y su
acción. Tienes que internalizarlo mientras el metrónomo da el ritmo e incluso
si no lo notamos, harán el "grueso del trabajo" predisponiendo el estado
mental correcto para la escucha, la comunicación, la expresión de la voluntad,
la eliminación de la falta de armonía.
En este momento estamos en completa y absoluta resonancia: cada uno de
nuestros pensamientos, y la voluntad subyacente, se amplifica, llegando al
aspecto atómico y subatómico y al aspecto de nuestro ser en cuanto a nuestra
conciencia. Las palabras que forman el pensamiento clave deben ser
capturadas en su esencia, en su significado más profundo, con intensidad, con
la absoluta certeza de que nos llevarán de vuelta al ritmo Basal, que es
nuestro propósito. Hasta que percibamos con claridad esclarecedora que se ha
logrado el propósito.
Como mencioné, la observación de las muchas personas a las que transmití el
método indica en un intervalo de tiempo de entre 10 y 20 minutos la duración
típica de cada sesión. En su mayoría, duró menos (generalmente en personas
que ya habían dominado el método durante años), menos del 10% de los
casos tuvo una duración mayor pero nunca superó los 30 minutos. De manera
similar, la percepción del retorno al ritmo basal de uno se produce en un
rango que varía entre tres y cinco sesiones, que generalmente se realiza a
diario (luego en tres / cinco días).
Un momento fundamental, que por razones ambientales siempre tendemos a
subestimar cuando no se tiene en cuenta, es la preparación para la salida de la
resonancia. La mejor forma es activar un proceso de pensamiento destinado a
recuperar la fuente del sonido, del ritmo, fuera de sí mismo, de manera suave
y progresiva.
Cuando percibimos que el metrónomo ha vuelto a ser otra cosa de nosotros,
cuando la parte posterior activa del oído percibe su posición geográfica,
podemos concluir que el camino ha terminado. Un último pensamiento de
gratitud hacia nosotros, hacia el universo, hacia la paz, hacia el movimiento
eterno y hacia el amor, y estamos listos para volver a la vida diaria.
Ahora todo te ha sido revelado. A partir de ahora, el manual adquiere un
carácter técnico y, siguiendo el diagrama del capítulo 3, ilustrará,
problemática por problemática, los cuatro elementos preparatorios que
necesitará.
Ahora tiene su bienestar en sus manos ... ¡No lo desperdicie, no deje que la
inercia se haga cargo! Cultívenlo y ayuden a su prójimo a unirse a él también.
CAPÍTULO 7. ACCIONES SOBRE EL CUERPO
FÍSICO
Como en el esquema ya presentado el ritmo que caracteriza el Cuerpo Físico
en todas sus manifestaciones cubre la escala que va desde +9 a + 17 BPM
más allá de su Ritmo Básico. En otras palabras, agarrando como
momento/ritmo inicial su Ritmo Básico deberán establecer el metrónomo a
un número de un BPM superior coherente a este con relatividad a la situación
de malestar que están interesados a dirigir.
A modo de ejemplo: si su ritmo básico es igual a 46 y desean crear el estado
mental correcto para responder mejor al dolor (capítulo 7.1 +9 BPM - lo que
debe hacer es configurar el metrónomo a 55 latidos por minuto (55 = 46 + 9).
El Cuerpo Físico es nuestro cuerpo más pesado y esa la prueba evidente,
cotidiana, continua – pero nosotros sabemos aparente, engañosa y errónea –
de nuestro ser organismos vivos vinculados a la tierra y a la materia, a la
naturaleza, y a los elementos, a la suerte o a la mala suerte. Y que tal vez y
solo con un mínimo de disciplina (alimentar o atlética, por ejemplo) y
justamente suerte, podemos esperar si poder prolongar – si no otro en calidad
– nuestro ciclo de vida.
Un lastre tan pesado este traje de buceo que estamos obligados a usar para ser
y actuar en el mundo inferior que solo el engaño mencionado anteriormente –
el pensar que sea parte esencial, ineludible e inevitable, de nuestra esencia –
hace tolerable. Entonces, necesariamente agregaría yo, apenas muestra
señales de malestar, inmediatamente nos aflige, determina cambios de humor,
influencia en la capacidad de emocionarse, en nuestro estado mental, en la
capacidad misma de generar pensamiento.
Más que de “dictadura del relativismo”, concepto sobre el cual a menudo y
voluntariamente ha puesto atención Benedicto XVI y, de hecho, el concepto
contemporáneo, me gustaría hablar de "dictadura de la corporeidad", un
concepto del cual el hombre es probablemente un esclavo y súcubo desde la
noche de los tiempos y de la cual nos podemos liberar solo con el
pensamiento y el envejecimiento del instinto, única puerta que nos abre al
mundo superior y a la liberación.
El objetivo de las acciones sobre el cuerpo físico es justamente esto: crear un
estado mental favorable a hacer que el cuerpo físico limite al máximo su
acción negativa sobre cuerpo emotivo y cuerpo mental haciendo entonces
perder nuestro Ritmo Básico. Esta acción que, simultánea y cada vez más
acelerada por la experiencia, nos llevará a una educación y una actitud de
concentración que, como verá, es propedéutica para cada paso adicional.
Aunque los procesos en el Cuerpo Físico son, aparentemente, menos
complejos en el nivel esotérico, de hecho, representan la base, las raíces, las
bases más sólidas posibles: permitir que el pensamiento supere la
incomodidad y no permita que influya en mi pensamiento positivo es
ciertamente línea de meta muy importante.
En la página siguiente, las posibles acciones en el cuerpo físico y el número
de BPM de referencia adicionales. Consulte cada subcapítulo para todas las
demás actividades preparatorias.
Y se reitera cuando claramente indicado en la introducción, o que este
método y este manual NO DEBA NUNCA JAMÁS SER CONSIDERADO
FUERA DEL ÁMBITO DE LAS TÉCNICAS DE MEDITACIÓN
TENIENDO COMO OBJETIVO SOLO EL DE INDUCIR UN ESTADO
MENTAL FAVORABLE.
Capítulo Movimientos Físicos BPM Agregados
7.1 El soporte +9
7.2 La resistencia +10
7.3 La agresión +11
7.4 La modificación +12
7.5 El movimiento externo +12
7.6 La expulsión +13
7.7 La cronicidad +13
7.8 El movimiento interno +14
7.9 Los sentidos +14
7.10 La reproducción +15
7.11 La sexualidad +15
7.12 El recupero +15
7.13 El fuego amigo +16
7.14 El don dado +16
7.15 El don recibido +17
7.16 El decaimiento +17
7.17 El adiós +17
CAPÍTULO 7.1 EL SOPORTE
Como se mencionó en la introducción, la capacidad de asegurar que el dolor
físico no se extienda y afecte la emocionalidad y el intelecto es un momento
fundamental de todo el viaje que estamos por comenzar. Y durante nuestro
viaje en esta tierra es una constante absoluta, más absoluta que la constante
de Planck: tanto para el hombre anclado y encadenado a su corporeidad como
para el ser iluminado ahora consciente de que se está preparando para
abandonar para siempre el mundo inferior. El proceso sirve a realizar el
sujeto capaz de visualizar el dolor y la fuente del dolor y sucesivamente, una
vez objetivados, sacarlos fuera de nosotros, observarlos y entonces
imponerles su querer: el fin del sufrimiento inducida por ellos. Que de todo
eso que está afuera de nosotros podamos disponer como queramos una vez
que hemos sido capaces de darles forma: basta observarlo y no tendrá más
secretos, zonas oscuras, ángulos inexplorados regresando a obedecer al
pensamiento.
PREPARACIÓN:
• BPM: +9 En su Ritmo Basal
• Situación Ambiental: luz natural coherente con la hora del día
• Color: ningún color
• Comienzo de la resonancia: “más radiante de la luz, más puro del amor,
más delgado que el pensamiento, es el sí, el espíritu que está en mí. Yo soy
ese sí, ese sí soy yo”
• Pensamiento Clave: “El dolor es un estado mental, nada más. Es el
intento del cuerpo de prevalecer sobre la mente. Es engaño del cuerpo sobre
la mente. Su fuerza es la capacidad de esconderse: basta entonces solo
llevarlo afuera a la luz para vencerlo. Yo te veo, yo te domino, yo te anulo”.
objetivo propuesto.
PREPARACIÓN
• BPM: +15 en su Ritmo Basal
• Situación Ambiental: luz coherente con la hora del día. Mejor en la
segunda parte de la tarde
• Color: ninguno
• Inicio de resonancia: “más radiante de la luz, más puro del amor, más
delgado que el pensamiento, es el sí, el espíritu que está en mí. Yo soy ese
sí, ese sí soy yo”
• Pensamiento Clave: “Alguien preguntó a Bokoju, un Maestro Zen:
Después de tu iluminación, ¿cuál fue tu práctica espiritual? Bokoju
respondió: Corto la leña en el bosque, saco agua del pozo. Cuando tengo
hambre, como. Cuando estoy cansado reposo. Cuando tengo sueño, duermo:
nada más”.
CAPÍTULO 7.13 EL FUEGO AMIGO
En este capítulo hablamos de esas situaciones en las cuales nuestro
organismo produce reacciones adversas a ese mismo: cuando somos victimas
del por así dicho “fuego amigo”. Como comportarnos cuando “¿el enemigo
somos nosotros dentro de nosotros?” Para construir el estado mental adapto a
afrontar una tal situación, el proceso que debemos poner a actuar prevé la
transformación del enemigo (del dicho “enemigo” que tal no es: definirlo así
es solo una simplificación útil para facilitar el proceso de traducción en
imágenes de lo que no es visible a la vista) en un sujeto “aparte de sí”. El
proceso mental subyacente es análogo a ese indicado para la Resistencia que
aquí reiteramos: para hacer algo más de nosotros que ahora está dentro de
nosotros: de todo lo que está afuera de nosotros, podemos disponer como
queramos, basta iluminarlo y no tendrá más secretos, zonas oscuras, ángulos
inexplorados.
PREPARACIÓN:
• BPM: +16 en su Ritmo Basal
• Situación Ambiental: luz, luz, luz
• Color: Verde
• Inicio de Resonancia: “más radiante de la luz, más puro del amor, más
delgado que el pensamiento, es el sí, el espíritu que está en mí. Yo soy ese
sí, ese sí soy yo”
• Pensamiento Clave: “yo soy la vía, la verdad y me amo. Y amo a mi
prójimo como a mi mismo. Y donde hay amor no hay conflicto, no hay
contradicción, no hay rencor. Yo te perdono y te amo”.
CAPÍTULO 7.14 EL DON DADO
En este capítulo y en el próximo afrontaremos dos temas que, aunque
afirmando directamente al amor, la clave de todas las cosas, son
indudablemente para considerar como “modernos”. ¿En qué sentido
modernos? En el sentido que donar y recibir a los cuales se refieren estos dos
capítulos (entonces donar y recibir telas y órganos como la sangre, riñones,
médula, etc.) son de hecho “momentos de amor”, permitidos por los recientes
desarrollos de las técnicas médicas y quirúrgicas. En otras palabras, no
existen ni parábolas, ni koan, ni pasajes meditativos – si no precisamente
recientes, contemporáneos – que se traten. En más, hablando de el “don
recibido”, entonces en el próximo capítulo, hablaremos también de la
donación de ser, no más en vida o que conduzca una vida que sus queridos
hayan entendido como referible al amor y por lo tanto al don, aunque no sea
directamente explicita. Ya sea por el don dado que por el don recibido el
objetivo al cual tiende el proceso al de crear el ambiente mental adecuado con
el fin que el amor envuelva ya sea lo que recibimos que lo que donamos. Que
el orden de las cosas haga de esta pista de meditación base para el desarrollo
de pensamiento relativo a este momento “moderno” de amor.
PREPARACIÓN
• BPM: +16 en su Ritmo Basal
• Situación Ambiental: luz, luz, luz
• Color: luz blanca frente a la mirada del sujeto
• Inicio de la resonancia: “más radiante de la luz, más puro del amor, más
delgado que el pensamiento, es el sí, el espíritu que está en mí. Yo soy ese
sí, ese sí soy yo”
• Pensamiento Clave: “yo soy el que genera amor y que exuda amor en
cada momento de su actuar y qué, en fin, agradecido, lo pagas a manos
llenas con el fin que tú también puedas colorear cada función tuya. Porque
tu eres como yo. Porque tú eres yo. Amor”.
CAPÍTULO 7.15 EL DON RECIBIDO
En este capítulo como en el anterior afrontaremos dos temas que, aunque
afirmando directamente al amor, la clave de todas las cosas, son
indudablemente para considerar como “modernos”. ¿En qué sentido
modernos? En el sentido que donar y recibir a los cuales se refieren estos dos
capítulos (entonces donar y recibir telas y órganos como la sangre, riñones,
médula, etc.) son de hecho “momentos de amor”, permitidos por los recientes
desarrollos de las técnicas médicas y quirúrgicas. En otras palabras, no
existen ni parábolas, ni koan, ni pasajes meditativos – si no precisamente
recientes, contemporáneos – que se traten. En más, hablando de el “don
recibido”, entonces en el próximo capítulo, hablaremos también de la
donación de ser, no más en vida o que conduzca una vida que sus queridos
hayan entendido como referible al amor y por lo tanto al don, aunque no sea
directamente explicita. Ya sea por el don dado que por el don recibido el
objetivo al cual tiende el proceso al de crear el ambiente mental adecuado con
el fin que el amor envuelva ya sea lo que recibimos que lo que donamos. Que
el orden de las cosas haga de esta pista de meditación base para el desarrollo
de pensamiento relativo a este momento “moderno” de amor.
PREPARACIÓN
• BPM: +16 en su Ritmo Basal
• Situación Ambiental: luz, luz, luz
• Color: luz blanca frente a la mirada del sujeto
• Inicio de la resonancia: “más radiante de la luz, más puro del amor, más
delgado que el pensamiento, es el sí, el espíritu que está en mí. Yo soy ese
sí, ese sí soy yo”
• Pensamiento Clave: “Quien pienses que yo sea, dime, ¿tú que ahora me
conoces, tu que ahora estás en mi y me haces ver, respirar, recordar, sentir
dolor, provocar placer? Yo soy como tu y vivo como tú en el amor. Que
amor es lo que nos colorea ya sea en el mundo inferior que en el mundo
superior”.
CAPÍTULO 7.16 EL DECAIMIENTO
La pérdida de la “conciencia de sí y del otro de sí” es uno de los momentos
más dramáticos en la vida de un ser humano y que contiene una paradoja: su
venida progresiva impide la clara y neta percepción para el ser que ha sido
afectado y cuando avanza se hace objetivamente evidente, es justamente en
ese momento que llega completamente menos la capacidad de reconocerlo.
Como probablemente ya evidente en este preámbulo, la tarea de activar este
proceso es delegado a una persona querida por el sujeto que con amor y
paciencia se la leerá. El objetivo del proceso no es invertir una evolución
natural de la vida cuan permitir a la verdadera esencia del individuo de
continuar, incesantemente, a transmitir amor al cuerpo físico que la contiene.
En este proceso se reveló muy eficaz un pasaje tomado de la “Canción para la
infancia” de Peter Handke que alguien recordará también en un pasaje de la
obra maestra de Wim Wender “El cielo sobre Berlín”.
PREPARACIÓN:
• BPM: +17 en su Ritmo Basal
• Situación Ambiental: Penumbra
• Color: luz blanca extensa
• Inicio de la resonancia: “más radiante de la luz, más puro del amor, más
delgado que el pensamiento, es el sí, el espíritu que está en mí. Yo soy ese
sí, ese sí soy yo”
• Pensamiento clave: “Cuando el niño era niño, no sabia que era un niño,
para él toda tenía un alma, y todas las almas eran todo uno. Cuando el niño
era niño, era la época de estas preguntas: ¿por qué yo soy yo, y por qué no
eres tú? ¿por qué estoy aquí, y por qué no estoy allí? ¿Cuándo comienza el
tiempo en el tiempo, y donde termina el espacio? ¿la vida debajo del sol es
tal vez solo un sueño? ¿No es solo la apariencia de un mundo delante del
mundo que no veo, siento y olfateo? ¿hay de verdad el mal y gente de
verdad mala? ¿Cómo puede ser que yo, que soy yo, no estaba antes de
convertirme, y que, una vez, yo, que soy yo, no seré más lo que soy? He
aquí, ese niño está aún en ti, eres tú, y hoy eres finalmente libre de poder
regresar a ver todo con los ojos de amor, es un privilegio que te pertenece y
te lo recordaré siempre”.
CAPÍTULO 7.17 EL ADIÓS
Este proceso quiere tomar y sostener el ser humano cuando, finalmente, está
en contacto directo con su alma que le ha confesado como el fin del cuerpo
físico y de la existencia terrenal ya próxima. En ese momento el alma
interviene siempre, e infaltablemente también en aquellos que siempre han
ignorado la existencia. Leer esta página quiere decir prepararse en el
momento, suceda incluso en cien años: en el momento exacto la podemos
recordar y la repetiremos obteniendo – también en este caso – infaltablemente
la solución, cosa que nos levantará definitivamente de cualquier dolor físico.
Es uno de los koan más bellos que cree que es de Hasan Basri. El proceso
aquí descrito sirve para ayudarles a grabar este koan en la mente. En el
momento que se necesite surgirá, sin necesidad alguna de preparación.
PREPARACIÓN
• BPM: +17 en su Ritmo Basal
• Situación Ambiental: Oscuridad absoluta
• Color: Ninguno
• Inicio de la resonancia: “más radiante de la luz, más puro del amor, más
delgado que el pensamiento, es el sí, el espíritu que está en mí. Yo soy ese
sí, ese sí soy yo”
• Pensamiento Clave: “Otra vez que vi un niño venir hacia mi sosteniendo
una lámpara encendida en la mano. ¿Desde donde traes la luz? Le pregunté.
El la apagó inmediatamente y me dijo, O Hasan, dime donde fue y yo te diré
donde la agarré”.
CAPÍTULO 8. ACCIONES SOBRE EL CUERPO
EMOTIVO
Según la Enciclopedia Treccani la emotividad es la “capacidad más o menos
intensa según los individuos, para probar emoción, para reaccionar frente a
estímulos agradables o desagradables. Con aceptación más extensa, en
lenguaje corriente, impresionabilidad, sensibilidad, facilidad a la emoción”
http://www.treccani.it/vocabolario/emotivita/.