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El jugo de tomate podría mejorar la presión arterial

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arterial.aspx

En un estudio reciente, los participantes con presión arterial elevada que consumían
un promedio de poco menos de una taza de jugo de tomate al día experimentaron
una disminución significativa de su presión arterial sistólica y diastólica
En otro estudio, las personas con los niveles más elevados de licopeno en la sangre
mostraban un 55 % menos probabilidades de sufrir cualquier tipo de accidente
cerebrovascular en comparación con aquellos con menores cantidades
Los tomates contienen otros antioxidantes beneficiosos, como el alfa tocoferol
(vitamina E), alfa caroteno y beta caroteno, pero en menores cantidades que el
licopeno
Estudios demuestran que las personas con menores niveles de licopeno desarrollan
un mayor riesgo de aterosclerosis, también conocida como acumulación aguda de
placa, incluyendo la aterosclerosis en arterias carótidas (las cuales se transmiten al
cerebro) detectables por medio de los ultrasonidos
El licopeno captura especies reactivas de oxígeno (ROS, por sus siglas en inglés) para
prevenir el daño en las grasas, las proteínas y las cadenas de ADN, las cuales causan
envejecimiento y mayores riesgos de enfermedades

Para responder a la pregunta de si consumir jugo de tomate genera una influencia positiva
en los niveles de la presión arterial, la respuesta es "sí", basado parcialmente en un estudio
clínico reciente de Japón, el cual tuvo una duración de un año e involucró a 481 personas de
ambos sexos.

Este estudio publicado en Food Science & Nutrition, involucró a participantes de entre 21 a 74
años de edad, a quienes se les suministró la cantidad deseada de jugo de tomate libre de
sodio (con un consumo promedio de poco menos de una taza al día) después de someterse
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a una prueba de detección de factores de riesgo cardiovasculares como presión arterial,
tolerancia a la glucosa y perfiles lipídicos séricos.

Finalmente, los nuevos exámenes revelaron que 94 personas con niveles elevados y
moderadamente elevados de presión arterial, incluyendo aquellos sin tratamiento,
experimentaron disminuciones significativas tanto en la presión arterial sistólica como en la
diastólica, y no se implementaron otros cambios en su estilo de vida en general.

"Además, se observó una disminución significante en los niveles de colesterol de


lipoproteínas de baja densidad (LDL-C) en 125 participantes con dislipidemia no tratada
(niveles elevados de grasa en la sangre).”

Los investigadores identificaron el antioxidante licopeno no solo como el pigmento natural


que le otorga el color a los tomates, sino también como el carotenoide natural más
abundante que existe en dicha fruta. Los jitomates cocidos en el puré de tomate, aumentan
la eficacia y la biodisponibilidad, y promueven una mayor absorción de licopeno en el
intestino.

Otros alimentos de origen vegetal contienen licopeno, pero no en mayores cantidades que
los tomates. Otros nutrientes encontrados en los tomates incluyen flavonoides como la
rutina, kaempferol y quercetina, así como luteína (carotenoide), vitamina C, folato y potasio.

Todos estos ingredientes ayudan a mantener la salud cardíaca, pero es necesario aumentar
el consumo de potasio ya que puede ser uno de los cambios más importantes en la
alimentación para reducir el riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares.

Además, las personas con menores niveles de licopeno en la sangre desarrollan un mayor
riesgo de aterosclerosis, también conocida como acumulación aguda de placa, así como una
mayor densidad y rigidez arterial.

Las personas con aterosclerosis en sus arterias carótidas (las cuales se transmiten al
cerebro) detectables por medio de los ultrasonidos también desarrollan menores niveles de
licopeno en la sangre en comparación con las personas con carótidas normales.

Estudios adicionales demuestran que el licopeno está relacionado con numerosas ventajas
cardíacas, especialmente por sus excelentes beneficios antioxidantes.

Esta exuberante fruta roja (no es el vegetal que todos piensan) contiene muchos otros
antioxidantes beneficiosos, tal como el tocoferol alfa (vitamina E), el caroteno alfa, el
betacaroteno y el retinol (vitamina A), pero casi ninguno alcanza los niveles de licopeno.

El licopeno para la presión arterial también puede mejorar la


salud del corazón
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Un estudio israelí del 2001 observó que el licopeno, el cual existe en los tomates, también se
encuentra en diversas frutas y verduras. Su cualidad de desactivar los radicales libres lo
convierte en un antioxidante realmente eficaz.

Investigadores en Finlandia revelaron que, debido al abundante contenido de licopeno en


los tomates y otros productos, el riesgo de desarrollar accidentes cerebrovasculares
isquémicos podría reducirse hasta un 59 %.

Las personas del estudio incluyeron a 1031 hombres de mediana edad. Aquellos con los
mayores niveles de licopeno en la sangre se encontraron con un 55 % menos
probabilidades de desarrollar cualquier tipo de accidente cerebrovascular en comparación
con las personas con menores cantidades.

Para el tipo más común de accidentes cerebrovasculares (aquellos causados por coágulos
sanguíneos), los hombres obtuvieron un 59 % menos probabilidades de desarrollar un
accidente cerebrovascular. Según University Health News:

"Este es el primer estudio que documenta una disminución en el riesgo de accidente


cerebrovascular con el consumo de licopeno, aunque estudios observacionales previos han
demostrado que su consumo se encuentra asociado con menores tasas de enfermedad cardíaca y
aterosclerosis, así como con un menor riesgo de morir por cualquier causa.

Los ensayos clínicos también han demostrado que los beneficios del licopeno incluyen reducir el
colesterol, la presión arterial, la inflamación y el estrés oxidativo, incluyendo el daño provocado
por los radicales libres al colesterol LDL.

Dado que todos estos procesos dañinos se encuentran involucrados en el desarrollo de accidentes
cerebrovasculares, los hallazgos de los investigadores finlandeses no son tan sorprendentes”.

Las implicaciones para la enfermedad cardiovascular (ECV) y sus diversos efectos


secundarios son inmensos. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS),
estas son las causas más comunes de mortalidad a nivel mundial, con 15.2 millones de
muertes registradas tan solo en el 2016.

Incluso si no son enfermedades terminales, la ECV puede causar daños permanentes en los
órganos que pueden llevar a consecuencias devastadoras para la calidad de vida, casi
siempre debido a la aterosclerosis, también conocida como acumulación aguda de placa, la
cual eventualmente endurece y estrecha las arterias.

Las enfermedades relacionadas, como la diabetes y la presión arterial elevada, contribuyen


con sus propias consecuencias; los trastornos relacionados con el corazón repercuten
gravemente entre sí, por lo que la regulación de la presión arterial, así como el metabolismo
de los lípidos y la glucosa, ayudan a prevenir el desarrollo de ECV y de sus complicaciones
generalizadas.
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El licopeno ofrece numerosas maneras para mejorar la salud
Existen numerosos estudios que demuestran que el aumento de los niveles de licopeno
produce numerosos beneficios celulares, al reducir las incidencias e incluso ejercer un
efecto preventivo sobre la diabetes, la enfermedad cardiovascular, el cáncer y el Alzheimer.

La revista Molecules señala diferentes hallazgos significativos del licopeno, al citar los
siguientes estudios:

Los niveles de licopeno dentro del plasma humano han demostrado una relación
inversa con el daño oxidativo del ADN.
Estudios anteriores han informado que una alimentación rica en licopeno, así como
una buena suplementación, proporcionaron efectos protectores contra el daño del
ADN en células humanas normales y cancerígenas.
El consumo de alimentos, jugos o suplementos ricos en licopeno ha demostrado
efectos protectores contra los daños en el ADN de los linfocitos.
Se encontró una alta protección de linfocitos del daño oxidativo por el oxígeno
singlete y dióxido de nitrógeno en personas con un mayor consumo de jugo de tomate
rico en licopeno.
El licopeno puede proteger a las células linfoides humanas del oxígeno singlete al
unirse a la superficie celular.

El licopeno captura las especies reactivas de oxígeno (ROS) para prevenir el daño en las
grasas, las proteínas y las cadenas de ADN, las cuales causan envejecimiento y mayores
riesgos de enfermedades.

Las ROS atacan al cuerpo constantemente y de diferentes maneras, algunas de las cuales
podemos disminuir mientras que otras son inevitables, estas incluyen desde fumar hasta la
contaminación del aire o el consumo de alimentos procesados. Un estudio explica cómo la
oxidación es un factor que desencadena la presión arterial elevada, también conocida como
hipertensión:

"Las EOR se involucran en numerosas funciones fisiológicas (como en la señalización celular), y


normalmente se crean como subproductos del metabolismo del oxígeno.

Sin embargo, los factores ambientales estresantes (UV, radiaciones ionizantes, contaminantes y
metales pesados), así como los xenobióticos (medicamentos antiblásticos) aumentan
considerablemente la producción de ROS, lo que provoca el desequilibrio que causa el daño
celular y tisular (estrés oxidativo).

Si el estrés oxidativo no se controla de manera rigurosa, puede ser responsable del desarrollo de
numerosas enfermedades, tanto crónicas como degenerativas, y puede acelerar el proceso de
envejecimiento del cuerpo y causar patologías agudas (traumatismo y apoplejía)".

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Los mecanismos corporales son los responsables de los excelentes beneficios producidos
por los niveles elevados de licopeno, y los estudios señalan los cuatro procesos que activan
su funcionamiento. Dentro de sus beneficios encontramos los siguientes:

Facilita la comunicación celular en sitios denominados como "intersecciones", los


cuales son importantes para detener el crecimiento celular a tiempo, lo cual es clave
para prevenir el desarrollo de cáncer.
Estimula el sistema inmunológico para ayudar a destruir los microorganismos
invasores y las células cancerígenas tempranas.
Regula las vías de comunicación endocrinas (glandulares).
Regula el ciclo reproductivo celular, al prevenir el desarrollo de cáncer.

El problema de las estatinas


Los accidentes cerebrovasculares isquémicos, conocidos por su estrecha relación con los
coágulos, se producen cuando los vasos sanguíneos dentro del cerebro se vuelven tan
estrechos que se obstruyen fácilmente por los depósitos de grasa, también conocida como
placa, la cual disminuye el flujo sanguíneo que se transfiere a las células cerebrales.

Al consumir 25 mg de licopeno por medio de la alimentación y suplementación, se encontró


que los pacientes con colesterol ligeramente elevado experimentaban resultados
comparables para reducir el colesterol tal como los que se observaron con las estatinas.

Las estatinas, las cuales son consideradas como el medicamento más rentable jamás
vendido, han recaudado más de un billón de dólares. Es irónico, porque estudios
adicionales demuestran que las personas que consumen este medicamento mueren con
mayor frecuencia que aquellas que reciben placebos.

También es irónico el hecho de que no existe evidencia alguna que demuestre que reducir
el colesterol o el LDL mejora la salud de cualquier persona.

Como suele suceder, los bajos niveles de colesterol son un problema de salud. El colesterol
se encuentra en cada célula del cuerpo, lo que ayuda a producir membranas celulares,
hormonas (incluyendo testosterona, progesterona y estrógeno) y ácidos biliares que ayudan
a digerir la grasa.

¿Qué beneficios se pueden obtener con el consumo del


tomate?
Una manera de demostrar los beneficios del licopeno es por medio de los resultados que
obtuvieron los investigadores al eliminarlo de la alimentación de mujeres posmenopáusicas
durante un mes: se observó una reducción significativa de luteína, zeaxantina, beta-

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caroteno, glutatión peroxidasa y superóxido dismutasa en los perfiles sanguíneos de dichas
mujeres.

Por lo que concluyeron lo siguiente:

"El consumo diario de licopeno puede ser importante, ya que actúa como un antioxidante para
disminuir la reabsorción ósea en mujeres posmenopáusicas y, por lo tanto, puede ser beneficioso
para reducir el riesgo de osteoporosis".

Según un estudio del 2011, una de las mejores ventajas del licopeno incluido en los tomates
es que se pueden obtener mejores beneficios por medio de los alimentos, como el puré de
tomate, salsa de tomate, sopa de tomate, jugo de tomate y otros productos ricos en
licopeno, como la sandía.

De acuerdo con Edward Giovannucci, profesor de nutrición y epidemiología en la Escuela de


Salud Pública de Harvard:

"Los suplementos pueden proporcionar una forma pura de licopeno, pero no es seguro que se
obtengan las mismas cantidades cuando se comparan con los alimentos. Es posible que no se
obtengan las mejores formas de licopeno por medio de los suplementos.

También existen numerosos compuestos en los alimentos que son similares al licopeno, y algunos
de ellos pueden impulsar los beneficios de este componente".

Aunque pueden tener un menor tamaño, los tomates orgánicos pueden proporcionar
mayores beneficios fenólicos, en comparación con los convencionales.
Cuando se trata del catsup, la variedad orgánica contiene aproximadamente un 57 %
más de licopeno.
Al consumir tomates, ya sean crudos o cocidos, se recomienda incluir grasas
saludables como el aceite de oliva, ya que el licopeno es un nutriente soluble en grasa.
Calentar tomates a 88 °C (190.4 °F) durante 30 minutos, con una temperatura similar a
la que se utiliza para preparar una sopa, aumenta los niveles de absorción del
licopeno.
Los tomates se encuentran en la lista “Dirty Dozen” del Grupo de Trabajo Ambiental, la
cual enumera las 10 principales frutas y verduras que contienen los niveles más
elevados de pesticidas, por lo que, si se le complica adquirir productos orgánicos o
cultivarlos, se recomienda lavar bien los tomates antes de consumirlos.

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