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LA ECOLOGIA LITERARIA
COMO RESPONSABILIDAD
DEL ESCRITOR
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~ECOLOGIA EN LA LITERATURA
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Para el propósito dicho tomamos un punto de partida constituido
por dos ideas centrales: la literatura en tanto producción socio-cultural for-
ma parte del eco-sistema vital de la especie y, por otra parte, dado que el
"envenenamiento" del eco-sistema humano forma parte de las consecuen-
cias del desarrollo de un modelo civilizatorio determinado (cuyas expre-
siones orgánicas son el capitalismo y el socialismo existente -aun cuando
este último sea una evolución más o menos antagónica de aquel modelo
general-), la literatura como producto y productora, en parte al menos,
de esa "civilidad", de algún modo participa de sus degradaciones y, tam-
bién, de sus expresiones disidentes: aquellas que se empeñan en crear nive-
les de conciencia, instrumentos y actos que negando dicho modelo civiliza-
torio superen la posibilidad del aniquilamiento, de la destrucción de las
raíces vitales de un entorno y, así, detengan la dinámica alienante y deshu-
manizadora.
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La primera es la predominante y hegemónica hoy y, además, se tien-
de a proponerla como la verdadera y natural literatura. La segunda es mar-
ginal, salvo casos de excepción y, casi siempre, es presentada como litera-
tura "enrarecida" por el peso que la realidad y, a veces, la politicidad tie-
nen en ella.
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En segundo lugar, es una literatura fundamentahnente interesada en
el "verbismo" más que en la comunicación. A veces se justifica esta cir-
cunstancia con aquella célebre frase: "y al principio fue el Verbo", inter-
pretada como si en el origen estuviese la palabra en sÍ, desnuda y primaria.
Olvidan que Verbo, en el caso blblico, y en el literario durante años, signi-
ficó sobre todo palabra creadora, capaz de realizarse en praxis, en produc-
ción de nuevos elementos, hechos y relaciones. Verbo es la palabra genési-
ca, no la palabra fonética.
Así, esta literatura contribuye 'a reforzar algunos de los objetivos del
colonialismo cultural: borrar la identidad histórica, lo que contribuye a la
estandarización cultural y, mediante ella, facilitar la penetración de la sub-
cultura industrializada servida por las transnacionales en música, seriales de
tv, filmes estereotipados, aparte del campo que abren a la sub literatura
euro-norteamericana del best-seller.
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En fin, es una literatura que contribuye al desarrollo de enclaves cul-
turales y que carece de pertinencia como factor beligerante, de reconquis-
ta o construcción de la identidad como aventura creadora del modo hispa-
noamericano, sea singular o plural, de hacer su propia historia.
~ERACION DE LA LITERATURA
La literatura, sobre todo si
partimos de las afirmaciones ante-
riores, debe ser responsable. Debe
hablar, responder por y con todos,
otros (de los que -el mismo autor
forma parte), constituirse en comu-
nidad del nos-otros.
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relaciona con mucho menos media- de tantas transformaciones libera-
ciones en relación con las otras for- doras, todos los productos que en él
mas de arte, al punto de que ya es se realicen (y el literario es uno de
común hablar de arte y de literatura ellos), para ser útiles deben colocar-
como entidades separables, con pro- se y ser producidos en el epicentro
pia sustancialidad. Y, creo, esto se de esa sociedad, ubicándose así den-
debe a que en 10 literario entra, de- tro de los intereses históricos y no
be entrar, "10 que acontece en 'la limitadamente individualistas, en
rúa' " de modo más intenso y pa- una dinámica colectiva y no elitista.
tente que en cualesquiera de las
otras formas artísticas. De allí que la posibilidad de
que nuestra literatura contemporá-
En consecuencia, toda formali- nea sirva a la liberación, pasa por su
zación que aparte a la literatura de propia liberación interior (como es-
su esencia y proximidad a 10 históri- pacio particular de la liberación ma-
co y social, aniquila y "tortura" su yor, la social), para lo cual no es in-
naturaleza, su función comunicati- dispensable el apriori de la revolu-
va, identificadora, de encuentro de ción social sino que, incluso, puede
la memoria activa y vital de la exis- ser uno de sus antecedentes, de sus
tencia y conciencia. síntomas de necesidad y proximi-
dad.
Por supuesto que la esencia de
toda producción social es histórica, La literatura en su estado ac-
sujeta a cambios. Ahora bien, esas tual contribuye a liberar a la socie-
transformaciones posibles y necesa- dad en la medida en que ella misma
rias sólo cobran sentido histórico se libere de su propia polución, co-
real en la medida en que contribu- mo proceso de limpieza de la at-
yen a fortalecer el papel "natural" mósfera cultural societaria.
de la literatura. Así como las revo-
luciones sociales sólo tienen sentido Dicha liberación interna es
en la medida en que acumulanjusti- "objetivamente" posible por dos ra-
cia y libertad, pues ellas constitu- zones: la literatura es un espacio de
yen las relaciones "naturales" nece- resonancia muy alta de las contra-
sarias en la existencia societaria. Por dicciones sociales y, además, por-
ello, pues, afirmamos que la pro- que en ella se instala un ámbito
ducción literaria ni debe asumirse muy alto de conciencia crítica,
como desinteresada ni comunicarse cuestionadora. Todo ello en razón
como eliticidad. Ella, por su esencia de que la literatura es, por naturale-
social, debe ser, decimos, responsa- za, creación dentro y con la materia
ble. social (hecho éste de la ecología li-
teraria que se ha venido intentando
En un mundo social que, co- anular, restringir, cuestionar su legi-
mo el hispanoamericano, requiere timidad). Y, además, por el hecho
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de que los cambios en los compo-
nentes de la superestructura no
siempre son el simple reflejo de mo-
dificaciones en la base económica
sino que, incluso, se pueden produ-
cir independientemente de ésta co-
mo parte de una crisis histórica, es-
tructural, de la sociedad, que suele
expresarse primero en los medios de
producción menos vinculados al po-
der (entre los cuales puede contarse
la literatura).
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del desarrollo de las identidades au- micos, que lo oscurecen e impiden
tónomas y d) es necesario limpiar su indispensable transparencia p!ra
de incomunicación y escoria for- comunicar con propiedad razones y
mal-elitista y neutralista a nuestra sentimientos, denotaciones y conno-
literatura para que ella pase de trán- taciones.
sito del coloniaje a vía que contri-
buye a la liberación. El escritor de ese tipo de lite-
ratura apenas compone planos ver-
Sobre esos cuatro factores his- bistas, a veces estéticamente impe-
tóricos, objetivos, es necesario cons- cables, pero sin ninguna virtualidad
truir una literatura del estar (la que socio-ética.
incorpora la existencia concreta y
hacia ella se dirige; la q~e se nutre La literatura comunzocante, ne-
de la totalidad concreta y no de la cesaria y posible, es la que pudiéra-
neutralidad abstracta) frente a la li- mos denominar como textualidad
teratura del ser, metafísica, ideali- de estancia, puesto que ella radica
dad impertinente, esencialismos su producción en la materia viva de
irreales. la existencia social-humana. En ella,
la personalidad del escritor, su pun-
En general, la literatura de po- to de vista, la subjetividad, son el
lución es una textualidad de esen- continente del mundo plural de las
cias. Es decir, se nutre de espacios relaciones, potencialidades, imagi-
con la imaginación degradada, vacía naciones, creatividades del territo-
de realidad, de juegos fonéticos con rio humano y social de la historia.
el lenguaje, y morfémicos y moná- No es una literatura con y sobre los
Valores, Eternidades, Universales, de chanchos, lustrabotas • . .) a la
sino en torno a las categorías de la escritura de "buena e intensa poesía,
realidad real: la historia, la antropo- donde la vida real, de un modo ori-
logía cultural, la econ<;>mía, los com- ginal y personalizado, penetra en la
bates con sus frustraciones y esplen- poesía y permite que ella sea cróni-
dores, la política, la vida personali- ca y arma viva de un tiempo, futu-
zada. En fin, es una literatura que ros textos de historia, geografía,
porta cédula de identidad social. Y zoología, botánica, psicología so-
no se trata del realismo seco y cien- cial, del país. Todo ello con un len-
tificista, racionalista. Es un nuevo guaje que recobra la limpieza comu-
realismo, humanista y social, inte- nicativa. Esto ha logrado que la
grador de los diversos componentes poesía vuelva a ser asunto p4blico,
de la existencia socio-individual, artículo de consumo social y coti-
donde la subjetividad del escritor es diano, recitada en mercados, emiso-
siempre el medio y el modo para ras, anfiteatros, festivales. Allí están
presentar potenciando, dramatizan- como muestra de los Talleres las in-
do, comunicando, las formas y con- sólitas antologías de Poesía Campe-
tenidos del texto. Y así, y no por sina y Poesía de las Fuerzas Arma-
propuesta decretada, interviene en das, recién editadas por el Ministe-
los niveles socio-individuales de rio de Cultura.
conciencia y en la formación de es-
pacios de conciencia original y crea- En fm, pues, un eco-sistema
tiva, de los cuales el mismo escritor nuevo supone una nueva literatura
es, con muchos otros, sujeto, desti- que haga predominar el lenguaje so-
no y "cronista". cial, la temática humano-histórica,
individual-colectiva, la función co-
De esta posibilidad literaria mllllicante y orgánico-creadora de
hay ya significativos ejemplos. Voy los textos.
a citar el que más me impresiona y
apasiona: los Talleres de Poesza en Entonces, ese numeroso grupo
Nicaragua, promovidos por Ernesto de escritores que estimulan la libe-
Cardenal y coordinados por Mayra ración social deben comenzar por
jiménez. Con ellos se ha dado la practicarla en su propia "política"
primera expresión histórica de una de producción literaria: la literatura
revolución que intenta socializar los no se debe separar de la vida como
medios de producción poética y no el escritor no se puede separar de su
simplemente, aunque sería bastan- condición social.
te, abaratar costo de libros, alfabeti-
zar, masificar las ediciones. Se han Esa literatura comunicadora,
incorporado las clases populares de estancia, se escribe desde y hacia
(soldados, campesinos, amas de ca- la "inmensa mayoría" (de la que el
sa, policías, estudiantes, cuidadores autor forma parte) y, así, se puede
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cumplir la más importante misión sabilidad con que se ha topado hoy
de la literatura en nuestras socieda- el escritor de nuestra comunidad so-
des: "proteger al pueblo con pala- cio-lingüística. Sobre todo los in-
bras", es decir, incorporarse a él, conformes. Los otros no dejarán de
a su lenguaje de palabras, sentimien- ser las usinas verbistas de una indus-
tos, para contribuir con él a la desa- tria cultural tóxica.
lienación genérica. Y esto no supo-
ne disminuir calidad, supone crear y es en este nivel de la r.efle-
otra. xión donde ética y estética se dan la
mano en el núcleo de la responsabi-
y esa es la situación y respon- lidad del escritor.
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su obra, que es su seguridad, sino en su versión de lo social, que es el com-
ponente de sus inseguridades. De allí que en la literatura separa temática
de lenguaje o, simplemente, se regocija en éste, elitizando la producción li-
teraria. Y en la sociedad integra movimientos disidentes sin pasar, en la
mayoría de los casos, del "abajofirmantismo".
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"invadida" por esos hechos y estimule a la integración de conciencia y pra-
xis en el escritor.
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tunees, comenzar a pasar a una conciencia orgánica, a una ética social co-
mo producto de la conciencia unificada, a un esfuerzo directo sobre la so-
ciedad como producto de esa unidad y fuente nutritiva de su literatura.
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piritualz"smos y adocenamientos de valores y degollación de la vida, y se si-
túe en la fantasía y en la imaginación mucho más ricas de la realidad, la
fuerte realidad, que tiene todos los colores, todos los gustos, todas las po-
sibilidades, todas las intenciones y el espíritu. Yo también he pensado con
bastante frecuencia en que sz· el lenguaje es para hablar con uno mismo, en-
tonces no es lenguaje sz·no una oración, y uno, una mónada" (Antidio Ca-
bal).