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Síndromes

paraneoplásicos
Bases biológicas, endocrinológicos, hematológicos,
cardiovasculares, gastrointestinales, renales, DERMATOLÓGICOS,
neurológicos, oftalmológicos, ARTROPATÍAS Y MIOPATÍAS,
colagenopatías, vasculitis y amiloidosis,
SÍNDROME anorexia-caquexia cancerosa y fiebre tumoral
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Índice
Capítulo 1
Bases biológicas de los síndromes paraneoplásicos pág. 6
Capítulo 2
Síndromes paraneoplásicos endocrinológicos pág. 16
Capítulo 3
Síndromes paraneoplásicos hematológicos pág. 28
Capítulo 4
Síndromes paraneoplásicos cardiovasculares pág. 46
Capítulo 5
Síndromes paraneoplásicos gastrointestinales pág. 58
Capítulo 6
Síndromes paraneoplásicos renales pág. 64
Capítulo 7
Síndromes paraneoplásicos dermatológicos pág. 71
Capítulo 8
Síndromes paraneoplásicos neurológicos pág. 78
Capítulo 9
Síndromes paraneoplásicos oftalmológicos pág. 91
Capítulo 10
Síndromes reumatológicos paraneoplásicos:
artropatías y miopatías pág. 100
Capítulo 11
Otros síndromes paraneoplásicos:
colagenopatías, vasculitis y amiloidosis pág. 107
Capítulo 12
Síndrome anorexia-caquexia cancerosa
y fiebre tumoral pág. 117

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Carta de
presentación
Los síndromes paraneoplásicos, manifestaciones infrecuentes de las neoplasias, pue-
den acontecer antes del diagnóstico de estas, por lo que su detección, en ocasiones
compleja y multidisciplinar, puede ser crucial para un diagnóstico temprano. En otras
ocasiones, el síndrome aparece durante la evolución de la neoplasia, por lo que, tanto la
monitorización clínica como la detección de las proteínas o anticuerpos que se produ-
cen, pueden utilizarse como marcadores tumorales del curso de la neoplasia primaria;
siendo tan importante su tratamiento como el de la propia enfermedad de base.

Se pretende en esta monografía una revisión exhaustiva de estos procesos llevada a


cabo por oncólogos y por otros especialistas implicados en el proceso de diagnóstico y
monitorización de los mismos, con el auspicio del Grupo Español de Tumores Huérfanos
e Infrecuentes (GETHI).

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Capítulo 1
Bases biológicas de los
síndromes paraneoplásicos
Autores:
Nuria Rodríguez Salas, Ramón de las Peñas Bataller
Beatriz Jiménez Munarriz Consorcio Hospital Provincial de Castellón
Servicio de Oncología Médica
Hospital Universitario La Paz

Introducción dad, siendo en ocasiones tan importante su


Los tumores malignos pueden producir alte- tratamiento como el de la propia enfermedad
raciones distantes del tumor primario y de sus de base.
metástasis; son los denominados síndromes
paraneoplásicos. Estos constituyen un gru- Bases moleculares de los
po heterogéneo de entidades que se definen síndromes paraneoplásicos
como aquel conjunto de síntomas y signos que 1. Factores directamente relacionados con la
ocurren con una frecuencia aumentada en el célula tumoral
paciente con cáncer y que no están directa- En el proceso de transformación neoplásica
mente relacionados con la neoplasia primaria ocurren de forma progresiva alteraciones pro-
ni con sus metástasis, ni tampoco son conse- fundas en el funcionamiento celular normal y
cuencia de infecciones, trastornos metabólicos en la relación de las células con su entorno in-
o nutricionales, ni de la toxicidad de la diferen- mediato y con el organismo completo en gene-
tes terapias oncológicas utilizadas. ral. De forma muy básica, la disregulación de
la programación génica y, por tanto en última
Estos síndromes están ocasionados básica- instancia, del funcionamiento celular normal,
mente por (Figura 1): se traduce esencialmente, según Hanahan y
1. la producción por el tumor de sustancias Weinberg1, en las siguientes características de
que directa o indirectamente causan sín- las células tumorales (Figura 2):
tomas a distancia. ·· Autosuficiencia de factores de crecimiento
2. la depleción de sustancias normales que ·· Insensibilidad a las señales inhibitorias del
ocasionan manifestaciones paraneoplá- crecimiento
sicas. ·· Capacidad de invasión y metástasis
3. la respuesta del huésped hacia el tumor. ·· Capacidad ilimitada de replicación y proli-
feración
Los síndromes paraneoplásicos pueden acon- ·· Desarrollo de mecanismos de angiogénesis
tecer antes del diagnóstico de la neoplasia, ·· Resistencia a los mecanismos de elimina-
por lo que su detección, en ocasiones comple- ción de células alteradas o apoptosis
ja y multidisciplinar, puede ser crucial para un ·· Reprogramación del metabolismo celular
diagnóstico temprano. En otras ocasiones, el ·· Génesis de inestabilidad genómica
síndrome aparece durante la evolución de la ·· Evasión de la destrucción por el sistema
enfermedad, por lo que, tanto la monitorización inmune
clínica como la detección de las proteínas o an- ·· Promoción de fenómenos de inflamación
ticuerpos, pueden utilizarse como marcadores peritumoral
tumorales durante la evolución de la enferme-

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En los tumores se altera profundamente el fun- paces de unirse al DNA mediante los domi-
cionamiento interno de la célula neoplásica y nios denominados dedos de zinc, los cuales
se altera con una importancia igual o mayor pueden localizarse a nivel nuclear o cito-
la relación de las células con todo su entorno; plasmático y tras la unión al ligando tras-
estos son mecanismos esenciales en el man- portarse al núcleo. Un ejemplo de ellos son
tenimiento del fenotipo neoplásico tal como los receptores de glucocorticoides, minera-
ha sido descrito previamente2. Así, gracias a locorticoides, estrógenos y andrógenos.
que la célula secreta sus propios factores de ·· Receptores asociados a proteínas G: son
crecimiento continúa una proliferación ilimita- proteínas transmembrana que atraviesan la
da, reprograma la forma de usar la energía al misma siete veces. Tras su unión al ligando
estimular a las células vecinas3 y es capaz de pueden activar dos vías de transmisión de
inducir la secreción de factores proangiogéni- señal: la vía de la adenilato-ciclasa o la ruta
cos por las células normales de su entorno y de la activación de fosfolipasa C que gene-
generar una anormal vascularización, secre- ra inositol trifosfato y diacil-glicerol.
ción de enzimas que destruyan barreras titu-
lares y permitan la invasión tisular, metástasis ·· Receptores de citoquinas:
a distancia, etc4. Para el mantenimiento del ·· Receptores con actividad tirosina-
crecimiento, el tumor genera a su alrededor un quinasa (RTKs): son receptores
entorno de células inflamatorias propicias, así transmembrana que se activan tras la
como mecanismos que evitan la destrucción unión en la porción extracelular al li-
de las células neoplásicas por el sistema inmu- gando, lo que ocasiona dimerización
ne del huésped5. del receptor y su auto o transfosfo-
rilación, produciendo a su vez la ac-
La comunicación celular normal se establece tivación por fosforilación en residuos
en tres niveles: de tirosina de múltiples cascadas de
·· Comunicación endocrina: mediante la pro- señalización como la conocida vía de
ducción de hormonas que actúan en órga- Ras/Raf/MEK-MAPK, Jun/fos, PI3K-
nos distantes. CA-AKT, etc. que culmina con la di-
·· Comunicación paracrina: la que se realiza visión celular o con la supervivencia
entre células cercanas. Se establece ge- celular respectivamente.
neralmente a través de proteínas que ac-
túan como: 1- factores de crecimiento, 2 ·· Receptores de la ruta JAK/STAT: si-
- a través de las denominadas citoquinas o milares a los RTKs, pero sus ligandos
factores de crecimiento secretados básica- son interferones, interleuquinas, pro-
mente por los leucocitos, también llamadas lactina, eritropoyetina, trombopoyeti-
linfoquinas o interleuquinas –si se secretan na, hormona del crecimiento y facto-
por linfocitos– y monoquinas –si se secre- res estimulantes de colonias. Tras la
tan por monocitos o macrófagos. unión del ligando al receptor, se ac-
·· Comunicación autocrina: tiene lugar en la tiva la ruta JAK que consiste en una
misma célula que produce factores de cre- quinasa que fosforila a las proteínas
cimiento u otros ligandos que a su vez inte- STAT (Signal Transducer and Activa-
ractúan sobre sus propios receptores. tor of Transcription), que se transloca
al núcleo donde encuentra sus genes
Todas estas hormonas, factores de crecimien- diana.
to, citoquinas, son capaces de actuar gracias a
la existencia de receptores para las mismas en ·· Receptores para TGF-β (transforming
la célula, que a su vez transmiten de diferentes growth factor β): son receptores transmem-
formas señales intracelulares que modifican la brana que tras su unión ligando inducen su
programación génica de la célula y por tanto actividad quinasa en residuos serina/treo-
su funcionamiento6,7. Se clasifican en: nina sobre proteínas denominadas SMAD
·· Receptores nucleares o de esteroides: ca- que son su ruta de transmisión. Los ligan-

7
dos de estos receptores son TGF-β, activi- como AP-1 regula la expresión de genes
nas, miostatina. en las células T efectoras.

·· Receptores para TNF (tumour necrosis fac- En la célula tumoral estos mecanismos están
tors): son receptores triméricos, cuyos li- alterados, por lo que tanto la producción de
gandos son TNF-α y TNF-β. El mecanismo sustancias por las células tumorales y su en-
de acción involucra a otras dos moléculas: torno, como la alteración en los receptores y
NFκB (nuclear factor κB) y su proteína con en las vías de transmisión de señal, son capa-
efecto inhibidor llamada IκB. Tras la acti- ces de mantener el fenotipo neoplásico y hacer
vación del receptor por TNF-α, se fosforila progresar al tumor. Por tanto, en líneas genera-
IκB que a su vez se une a moléculas de ubi- les se puede decir que la pérdida de la normal
quitina y es destruido por el proteasoma; homeostasis celular y tisular en las neoplasias
esto hace que NFκB quede libre en el cito- induce la sobreproducción de una gran varie-

Figura 1. Interacción entre huésped y tumor

HUÉSPED TUMOR Y SU ENTORNO

RESPUESTA INMUNE

EVASIÓN DEL S. INMUNE


LINFOCITOS TUMOR
SECRECIÓN DE CITOQUINAS,
HORMONAS Y FACTORES DE
CRECIMIENTO

DEPLECIÓN DE
SUSTANCIAS NORMALES
VASOS CÉLULAS
DENDRÍTICAS

plasma, se transloque al núcleo e induzca dad de productos celulares biológicamente


la transcripción génica. activos (hormonas, péptidos con funciones
hormonales-like, citoquinas, factores de creci-
·· Receptores para células T (TCR): son pro- miento, etc.), en cantidades y en localizaciones
teína dimérica transmembrana que actúan anatómicas anormales. Como consecuencia
como receptor para fragmentos de antí- de ello, se pueden producir una gran variedad
genos específicos que están englobados de síndromes paraneoplásicos por la acción
en el complejo principal de histocompati- de estas sustancias a distancia, como son los
bilidad. Tras su activación se incrementan síndromes por sobreproducción ectópica de
los niveles de calcio intracelular, se activa hormonas, interleuquinas, procoagulantes8,
la calcineurina que a su vez defosforila a factor de necrosis tumoral, etc. (Figura 1)
NF-AT (nuclear factor of activated T cells),
entra en el núcleo y es allí donde en con- 2. Factores relacionados con la respuesta in-
junto con otros factores de transcripción mune del huésped

8
En general, la aparición de un tumor está aso- supresión causa autoinmunidad letal que pro-
ciada a la expresión de antígenos tumorales voca un síndrome de fallo multiorgánico infla-
nuevos que son capaces de inducir una res- matorio.
puesta del sistema inmune (neoantígenos).
Desde el punto de vista molecular, son de tres El TGF-ß inhibe la producción de IL-12 e IL-2
tipos: aquellos productos de genes mutados, y por tanto la proliferación de células T. Es el
de genes disregulados (por ejemplo, los ex- principal antagonista del INF-gamma lo que
presados solo en el periodo embrionario por disminuye la actividad citotóxica de los linfoci-
lo que los linfocitos T no se han adaptado a él) tos T CD8+ y los NK; además tiene un papel en
y de virus oncogénicos9. Estos antígenos son la respuesta inmune humoral ya que disminuye
de tres tipos: asociados al tumor (tumour asso- la diferenciación y proliferación de las células
ciated antigen), asociados al tejido (tumor tis- B y es necesario para la diferenciación de cé-
sue antigen) o propio de un individuo o clonal lulas T helper-17 a células T reguladoras (Treg).
(clonal tumour tissue antigen). Estos antígenos
tumorales quedan expuestos al sistema inmu- Se conoce que los tumores secretan grandes
ne de diferentes maneras: por expresión de los cantidades de TGF-ß y sus elevadas concen-
mismos en la superficie celular tumoral o du- traciones se encuentran en tumores como
rante la degradación celular en la apoptosis, adenocarcinomas de púlmón, mama, glio-
tras lo cual los cuerpos apoptóticos son fago- blastoma multiforme, carcinoma colorectal,
citados por los macrófagos y células dendríti- hepatocarcinoma, carcinoma vesical, renal y
cas. Estos antígenos tumorales son capaces gástrico. Su producción se asocia a estadios
de inducir una respuesta inmune adaptativa avanzados con afectación metastásica. En re-
excesiva y de reacción cruzada, que provoca sumen, el TFG-ß influye en la generación del
una reacción frente al tumor y hacia sus ho- estado de tolerancia inmunitaria.
mólogos en células normales en otros órganos
distantes, produciéndose un espectro de sín- C-X-C-MOTIF Quimoquinas factor 4 (CXCR4)
dromes paraneoplásicos inmunomediados por Las quimoquinas son moléculas que se encar-
autoanticuerpos, respuesta citotóxica, etc10. gan de dirigir las células del sistema inmune
a los diferentes órganos donde sean requeri-
La vigilancia inmune tiene lugar por los linfo- das. Una de las principales quimoquinas son
citos T citotóxicos (CD8), las células Natural el CXCR4, expresado por las células tumorales
Killer, macrófagos/células dendríticas y por la y su ligando (el SDF-1 o CXCL12 o también
citotoxicidad dependiente de anticuerpo. conocido como el factor 1 derivado de las cé-
lulas estromales), producido en los diferentes
Los diferentes tipos de citoquinas e interleuqui- órganos y tejidos. Su unión juega un papel im-
nas son las que median los contactos célula- portante en la reparación de daños fisiológicos
célula, tanto en la respuesta inmune citotóxica titulares. La interacción de CXCR4 con SDF-1
como humoral; estas son secretadas principal- se asocia a estados de diseminación tumoral e
mente por linfocitos, células dendríticas, pre- invasión tisular a distancia en los distintos tu-
sentadoras de antígeno, entre otras11,12,13. mores. Así mismo, la unión de CXCR-4 + SDF-
1/CXCL12 estimula la producción tumoral de
La excesiva producción de citoquinas puede TGF-ß con la consecuente tolerancia inmune
modificar la respuesta inmune del huésped así previamente descrita.
como producir efectos no deseados en órga-
nos o sistemas alejados de la neoplasia.
*Las principales citoquinas implicadas en la res- IL-10
puesta inmune tumorales son: Esta interleuquina es producida por las célu-
las Th2, T-reguladoras y Th17, y su expresión
TGF-ß inhibe la presentación de Ag, la expresión del
Es el principal factor supresor inmune secre- CMH de clase II y la regulación de la señal co-
tado por las células tumorales. En ratones su estimuladora mediante la expresión de molé-

9
culas como CD80 y CD86. Además, la IL-10 naive y las células dendríticas y entre sus fun-
suprime la liberación de TNF-α y de IL-2. Sus ciones esta la estimulación de la proliferación
niveles elevados se asocian a mal pronóstico de NK y el crecimiento de las células T durante
oncológico y se suelen encontrar en pacientes la fase de mantenimiento de la respuesta in-
con estadios avanzados. mune tras el ataque inicial; por tanto su inhibi-
ción provoca anergia celular.
IL-2
Es un factor de crecimiento para los linfocitos TNF-α (tumor necrosis factor)
T “estimulados por antígenos” y es el respon- Es producido por los macrófagos junto con la
sable de la expansión clonal tras el reconoci- IL-1 tras recibir estímulos proinflamatorios. En-
miento antigénico en la inmunidad adaptativa. tre sus funciones se encuentran: la activación y
Se produce principalmente por los CD4+, CD8 reclutamiento de neutrófilos y monocitos para

La figura 2 refleja la interacción de las distintas citocinas


inflamatorias y uno de los mecanismos de tolerancia
inmunológica que se detallarán más adelante.

Figura 2. Interacción IL-12 / IFN-gamma / HLA-DR y evasión del sistema inmune

Migración GL
linfáticos

LINFOCITOS Presentación del Ag


LINFOCITOS
Reconocimiento a linfocitos T
del Ag por la CPA mediante el MHC

+
cÉlula presentadora
· Aumento de NK de antigeno
· Expresión de MHC II Producción de
· Mantenimiento de respuesta inmune IL-12 e IFN-γ

Secreción de TGF-B +
IL-10 e inhibición del
CÉLULA TUMORAL sistema inmune

10
la migración a sitios de inflamación en los dis- te en la liberación al medio del antígeno, que
tintos tejidos; la activación de célula del endo- es capturado por las células presentadoras de
telio vascular y por tanto la expresión de molé- antígeno y da lugar a la activación de células
culas de adhesión; y finalmente el aumento de T citotóxicas, que a su vez se unen a la célu-
producción de factor tisular por el endotelio, la diana, se activan tras la presentación del
lo que estimula la cascada de coagulación y antígeno por la célula presentadora (general-
aumento de permeabilidad vascular endotelial. mente la célula dendrítica) y liberan sus mo-
Las células tumorales son las encargadas a su léculas efectoras en forma de gránulos líticos
vez de producir TGF-ß como estímulo inflama- que contienen enzimas (perforinas, granzimas
torio y por tanto desencadenar la producción y el ligando de Fas) y son capaces de provocar
de TNF-α. la muerte de la célula tumoral a través de las
caspasas que inducen apotosis15.
MIF o Factor inhibidor de la migración de
macrófagos Las células NK (Natural Killer) son muy simi-
Como su nombre indica, esta molécula ade- lares a las células T citotóxicas y contienen
más de inhibir la migración de macrófagos, es gránulos líticos, pero su mecanismo de acción
necesaria para el mantenimiento de su activi- es diferente. Se activan por reconocimiento
dad; por tanto, sin su estímulo, los macrófagos de sus receptores de una fracción (Fc) de un
inducen la apoptosis y no se puede perpetuar anticuerpo unido a un antígeno o a una célu-
la actividad inflamatoria. MIF además induce la tumoral donde secreta sus gránulos líticos.
la producción de TNF-alfa, INF gamma, IL-1B, No precisan de la presentación de antígeno via
IL-6, IL-8, entre otras citocinas vinculadas a la MHC (complejo principal de histocompatibili-
respuesta inflamatoria. Por otro lado, se cono- dad).
ce que también posee actividad en la tumori-
genesis mediante la inhibición del gen supre- Se puede concluir pues que, tanto las células
sor p53. T citotóxicas como las células NK, son efecto-
En resumen, MIF juega un papel importante en ras contra las células tumorales siempre que
la inmunidad innata. tengan un antígeno tumoral reconocible por
ambas. La acción citotóxica de estos linfoci-
IL-6 tos sobre las células normales que expresan
Tanto IL-1 como TNF-α inducen la expresión antígenos tumorales ocasiona a su vez la des-
de IL-6 que está implicada en el reclutamien- trucción de la célula normal. Esto ocurre, por
to de neutrofilos, migración celular y prolifera- ejemplo, en los casos de destrucción neuronal
ción de linfocitos T en el tejido afectado. IL-6 progresiva en algunos síndromes paraneoplá-
promueve la producción de metaloproteinasas sicos neurológicos como consecuencia de la
por los fibroblastos y por tanto la degradación reacción inmune citotóxica cruzada entre cé-
de la matriz extracelular; así mismo, estimula la lula tumoral con expresión anormal de deter-
diferenciación de células B en células plasmá- minados antigénicos y la célula con expresión
ticas productoras de anticuerpos (Ac). normal antigénica17.

IFN-gamma Los macrófagos son también efectores con-


El IFN-gamma es la principal citocina activa- tra las células tumorales mediante tres me-
dora de macrófagos y es producida por los canismos: el primero de ellos es a través de
linfocitos T CD8+, CD4+ y NK. Este inhibe la sus receptores mediante el reconocimiento del
producción de TGF-B y PgE2; por tanto los ni- Fc en el anticuerpo, que a su vez reconoce a
veles bajos de IFN-gamma reflejan una disfun- un antígeno de la célula tumoral, posibilitan-
ción del sistema inmune y la dificultad para la do su fagocitosis y eliminación. El segundo
erradicación de tumores14. es mediante la presentación de moléculas de
la familia de TNF (tumour necrosis factor) en
• Respuesta citotóxica su membrana que pueden interaccionar con
La respuesta inmune frente a un tumor consis- receptores de TNF en la célula tumoral. Fi-

11
nalmente, mediante el reconocimiento de se- Los síndromes paraneoplásicos ocasionados
ñales de hipoxia asociadas al crecimiento de por este mecanismo pueden ser tratados con
las neoplasias y la consecuente liberación de estrategias inmunomoduladoras como son la
componentes tóxicos al medio como mecanis- plasmaféresis, esteroides e inmunoglobulinas
mo de control. intravenosas, o de forma más dirigida como es
el tratamiento con anticuerpos dirigidos a CD-
• Respuesta inmune humoral 20 o anticuerpos que bloqueen antígenos de
La respuesta humoral está mediada por anti- superficie específicos18.
cuerpos que secretan las células plasmáticas.
El antígeno se une al receptor de una célula • Evasión del sistema inmune
B, la señaliza y al mismo tiempo se interioriza Normalmente el sistema inmune tiene cierta
para su posterior procesamiento en péptidos capacidad para reconocer la transformación
que activan a las células T cooperadoras. Las tumoral y eliminarla, pero estos mecanismos
señales del antígeno unido y de las células T pueden fallar y dar origen al desarrollo del
cooperadoras (CD4) inducen a la célula B a tumor; esto se debe a que este último posee
proliferar y a diferenciarse en células plasmá- mecanismos de escape a la destrucción in-
ticas secretoras de un anticuerpo específico. munológica. Muchos de estos mecanismos
están controlados por el propio tumor y otros,
En líneas generales, se puede decir que el pa- los menos, están relacionados con el huésped.
pel de este tipo de respuesta inmune es poco Dentro de los mecanismos relacionados con el
importante dada la baja eficacia como citolí- tumor, estos pueden deberse a que el tumor
tico contra los tumores, y ello se debe a que no es una diana idónea y no puede ser recono-
los antígenos tumorales reconocidos por anti- cido por las células citotóxicas (inmunosensi-
cuerpos son muy generales y no suelen inducir bilidad defectiva) o ser incapaz de inducir una
respuestas eficaces. respuesta inmune efectiva (inmunogenicidad
defectiva). Entre los mecanismos de escape
Estos anticuerpos pueden actuar bloqueando relacionados con el huésped se incluyen aque-
o estimulando multitud de receptores y estruc- llos por los que el huésped es incapaz de res-
turas como son los canales de calcio-voltaje ponder al tumor antigénico y aquellos en los
dependientes, receptores de la acetilcolina, re- que las células del huésped no pueden matar
ceptores hormonales, etc. las células tumorales porque estas cambian
sus antígenos.
Los anticuerpos paraneoplásicos son una he-
rramienta útil en el diagnóstico y monitoriza- Es decir, se trata de mecanismos pasivos o
ción de pacientes con síndromes paraneoplá- de no reconocimiento como anormal una célu-
sicos de etiología tumoral; si bien el número de la tumoral debido a: carencia de antígeno aso-
anticuerpos identificados sigue creciendo, es ciado del tumor, carencia de MHC1 en el tumor
en muchas ocasiones desconocido el antígeno (que es preciso para que el atnígeno se ancle a
contra el que reaccionan y su mecanismo últi- la superficie celular), evasión de la destrucción
mo de actuación. Muchos antígenos tumorales por NK mediante la génesis de una señal MHC
son similares a los que se expresan en lugares inhibitoria, pérdida de las moléculas coestimu-
inmunológicamente privilegiados, como son ladoras por la célula tumoral (por ejemplo, B7,
el sistema nervioso central y el testículo; por que es el ligando de CD28 en el lnfocitoT), li-
ello, cuando se expresan en lugares inmuno- beración de antígenos asociados al tumor al
lógicamente competentes desencadenan una medio, etc.
excesiva respuesta inmune humoral. Una vez Además, tenemos mecanismos de evasión
los anticuerpos se producen, estos circulan del sistema inmune, denominados activos
por todo el organismo y son capaces de actuar como:
en lugares distantes, incluso atravesando ba- 1- la inducción de la expresión de FasL, el cual
rreras como la hematoencefálica y reconocer está habitualmente expresado en los linfocitos
antígenos de células normales. T citotóxicos, que en condiciones normales

12
tras unión a Fas a la célula diana induce a acti- 3. Factores dependientes del entorno tumoral
vación de caspasas y a la consecuente muerte • Células dendríticas
por apoptosis; por tanto, si la célula tumoral Son clásicamente conocidas como células
expresa FasL puede interaccionar con Fas del presentadoras de antígenos (CPA). Estas cé-
linfocito T y ocasionar su muerte por apopto- lulas tienen una enorme capacidad de secretar
sis; 2- la secreción de moléculas inmunosu- diferentes tipos de citoquinas y otros factores
presoras: TGF-beta, prostaglandinas, IL-10, proinflamatorios, así como también están do-
indoleamina 2,3-dioxigenasa (IDO)19, 3- Los tu- tadas de receptores de adhesión, moléculas
mores pueden aprovechar el papel fisiológico MHC y moléculas coestimuladoras. Las CPA
de los linfocitos T reguladores para bloquear se originan en los diferentes tejidos a través
las reacciones inmunes, activándolos con la del reclutamiento de progenitores mieloides
sobreexpresión de autoantígenos tolerados y circulantes y se diferencian en los tejidos para
además también el papel fisiológico de la in- funciones muy diversas: activar a linfocitos T,
ducción de células mieloides supresoras que NK y promover la diferenciación de linfocito B
inhiben a los linfocitos T citotóxicos. a célula plasmática. Las células tumorales son
capaces de reclutar células dendríticas inma-
Finalmente en la evolución de la enfermedad duras a través de la secreción de citoquinas.
neoplásica ocurren una selección de aquellas
células menos sensibles a la acción del siste- • Invasión y metástasis
ma inmune y más agresivas: es la llamada in- La característica distintiva de las células que
munoselección20. componen los tumores malignos es su capa-
cidad de invadir los tejidos adyacentes, dise-
El conocimiento de esta relación entre sistema minarse y dar lugar a focos metastáticos a dis-
inmune y tumor está dando lugar a novedo- tancia. Esta cascada de acontecimientos está
sas y prometedoras terapias en enfermedades constituida por etapas bien definidas que im-
como el melanoma, neoplasias de pulmón, etc. plican interacciones muy diversas entre las cé-
lulas tumorales y el organismo hospedador21.

Figura 3. Características biológicas básicas de la célula tumoral

Inestabilidad Insensibilidad a Reprogramación


genómica y señales inhibidoras del metabolismo
mutación del crecimiento energético

Autosuficuencia
de factores de Capacidad de
crecimiento invasión y metástasis

Resistencia a
la apoptosis Proliferación ilimitada

Evasión del Inflamación


Angiogénesis y
sistema inmune “tumoral”
linfangiogénesis

13
Así, en la primera etapa de este proceso se síndromes relacionados. Las actuales técnicas
precisa la adquisición de potencial invasivo de de análisis masivo de la expresión de cDNA
las células malignas mediante tres mecanis- nos permiten: identificar nuevos antígenos tu-
mos: alteraciones en la adhesión celular, de- morales9; el estudio de las proteínas mediante
gradación proteolítica de la matriz extracelular las actuales técnicas de proteómica y metabo-
y movilidad de las células tumorales. Tanto en lómica, que son capaces de detectar la anor-
la neoplasia primaria como en las metástasis mal producción de éstas por el tumor y por
se precisa la génesis de nuevos vasos sanguí- tanto identificar los trastornos consecuencia
neos y linfáticos (angiogénesis y linfangiogé- de su mal o excesivo funcionamiento en cada
nesis) que son capaces de transportar oxígeno contexto tumoral25; el estudio de productos de
y nutrientes y eliminar los productos de dese- degradación de las células tumorales como
cho de una masa de rápido crecimiento y me- son la detección de ácidos nucleicos circu-
tabolismo acelerado. lantes, que nos ayudan como marcadores de
pronóstico. El adecuado conocimiento de la
Todos estos procesos están regulados por in- relación célula-célula y su entorno explica va-
tensos cambios intracelulares y en los recep- riedad de síndromes paraneoplásicos, siendo
tores de la célula tumoral (como receptores de estos mecanismos susceptibles de medir y de
citoquinas), así como por cambios en la secre- ser dianas moleculares para nuevos fármacos
ción por parte de las células tumorales de di- antineoplásicos (como son las terapias antian-
versas sustancias autocrinas: por ejemplo SF giogénicas y las nuevas inmunoterapias)26,27.
(scatter factor) e IGF II (insulin growth factor II) Finalmente, el conocimiento de los mecanis-
que estimulan la movilidad celular; sustancias mos que mantienen el fenotipo neoplásico
de acción paracrina segregadas por las células y la presencia en múltiples tejidos de células
tumorales, como metaloproteasas de la matriz progenitoras pueden explicar parte de los as-
(superfamilia de enzimas endopeptidasas que pectos menos conocidos de resistencia a los
inducen la degradación de la matriz extracelu- tratamientos y de la progresión de las enferme-
lar y membranas basales), factores pro y anti- dades oncológicas, así como ser en el futuro
angiogénicos, como VEGF (vascular endotelial fuente de nuevas terapias28.
growth factor), interferon alfa, trombospondi-
na, etc. implicados en el switch angiogénico,
mediante los cuales la célula tumoral induce en
el entorno la génesis de novo y/o la prolifera-
ción de vasos sanguíneos pre-existentes como
reacción al entorno hipóxico y acidótico deri-
vado del rápido y caótico crecimiento anormal
tumoral; factores paracrinos secretados por las
células del huésped, como IGF-I (insulin growth
factor I) e interleukinas, implicadas en la migra-
ción celular, etc23. (Figura 3)

Técnicas biológicas de estudio de


síndromes paraneoplásicos
Las nuevas tecnologías de estudio de la célula
tumoral, su comportamiento y su relación con
el entorno, están aumentando el conocimiento
en el mecanismo por el que se producen los
síndromes paraneoplásicos. Así, la aparición
del radioinmunoensayo (RIA) desde hace más
de dos décadas ha ayudado a identificar la so-
breproducción de hormonas y sus respectivos

14
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15
Capítulo 2
Síndromes paraneoplásicos
endocrinológicos
Autores:
Enrique Espinosa y Pilar Zamora
Servicio de Oncología Médica
Hospital Universitario La Paz

Introducción mia, a pesar de que su incidencia ha disminui-


Los síndromes paraneoplásicos endocrinológi- do mucho en la última década, seguido por el
cos fueron los primeros en ser descritos, en la síndrome carcinoide, la secreción ectópica de
primera mitad del siglo XX, y por tanto, son los ACTH, el SIADH, la hipocalcemia y otros sín-
mejor caracterizados de este conjunto de com- dromes de aparición excepcional (Tabla 1). En
plicaciones raras del cáncer. Se deben a la pro- este capítulo daremos repaso a los principales
ducción de sustancias con actividad hormonal aspectos de cada uno de ellos.
por parte del tumor, sustancias responsables
del efecto a distancia. La producción hormonal Hipercalcemia
anómala –y con ella el cuadro clínico– desapa- Control fisiológico de la calcemia
rece cuando el tratamiento del tumor tiene éxi- El nivel sanguíneo de calcio depende de los
to, a diferencia de lo que sucede con los sín- procesos de formación y destrucción ósea, así
dromes neurológicos. Dentro de los síndromes como de la absorción intestinal y de la reabsor-
hormonales, el más frecuente es la hipercalce- ción renal del propio calcio. La hormona para-

Figura 1.

Control de PTH: niveles calcio y vitamina D


Control osteoclastos: osteoprotegerina, calcitonina
NO CONTROL

expresión
RANKL
PTH Osteoblasto PTHrP

proliferación

maduración
Activación renal Osteoclasto
de vitamina D

TUMOR

absorción renal absorción intestinal liberación


de calcio de calcio ósea de calcio

16
Tabla 1. Lista de síndromes paraneoplásicos endocrinológicos

Síndrome Hormona Tipo de tumor

Hipercalcemia PTHrP Pulmón, mama


Otros: vitamina D, Hematológicos
IL, PTH, TGF Raros: cabeza y cuello, riñón, próstata,
origen desconocido

Cushing ACTH, CRH Pulmón: microcítico, carcinoide


Páncreas: carcinoma, carcinoide, de los islotes
Suprarrenal: carcinoma, feocromocitoma
Otros: medular de tiroides, timo, hígado, mama,
próstata, linfomas, origen desconocido

Síndrome carcinoide Serotonina Carcinoides (ver tabla 3)

SIADH ADH Microcítico pulmón

Hipoglucemia IGF Sarcomas, digestivos, pulmón, medular de tiroides,


suprarrenal, próstata, linfoma

Acromegalia GH Islotes del páncreas, linfoma


GHRH Carcinoides

Ginecomastia HCG, estrógenos Ovario, testículo, pulmón, digestivos, suprarrenal,


vejiga, mama, melanoma…

Hipocalcemia Calcitonina Medular de tiroides, microcítico de pulmón, mama

IL: interleucina, TGF: factor transformante de crecimiento, CRH: hormona liberadora de ACTH,
IGF: factor de crecimiento insulínico, GH: hormona de crecimiento

tiroidea (PTH), la vitamina D y, en menor medi- en el riñón y estimula la maduración de los


da, la calcitonina, controlan la calcemia. El gen osteoclastos. Finalmente, la calcitonina es un
de la PTH es inhibido a través de un receptor inhibidor directo de la actividad osteoclástica,
de calcio cuando se eleva el nivel sanguíneo si bien su mecanismo íntimo de acción no está
de calcio iónico o cuando hay niveles altos de bien aclarado. Estas sustancias son, por tanto,
calcitriol (la forma activa de la vitamina D). Por las que controlan estrechamente el nivel san-
el contrario, la producción de PTH aumenta guíneo de calcio.
cuando baja el nivel de calcio o cuando sube el
de fósforo. La PTH estimula la actividad de los En el hueso, los osteoblastos y los osteoclas-
osteoclastos en el hueso (como después vere- tos conviven en una situación de equilibrio, de
mos) y la producción de vitamina D en el riñón. modo que cuando predomina la acción de los
También en el riñón favorece la reabsorción de primeros se forma hueso, mientras que este se
calcio y la eliminación de fósforo (Figura 1). destruye cuando prevalece la actividad de los
La activación del precursor de la vitamina D en osteoclastos. El equilibrio es controlado por
el riñón, por su parte, depende de los niveles la hormona paratiroidea a través del sistema
de PTH, calcitriol y fosfato. La vitamina D ac- RANK/RANKL/osteoprotegerina1. La hormona
tiva aumenta la absorción de calcio y fósforo paratiroidea estimula la expresión del ligando
en el intestino, favorece la acción de la PTH para el factor nuclear κB (RANKL) en la mem-

17
brana de los osteoblastos. RANKL se une a su mante de crecimiento alfa. Por otra parte, se
receptor en la membrana del precursor de os- han comunicado casos aislados en los que
teoclastos y, en presencia del factor de creci- existía una auténtica producción ectópica de la
miento macrofágico, estimula la formación de PTH normal (neuroectodérmico, pulmón, ova-
estos últimos (Figura 1). Dicho receptor –RANK– rio, tiroides, timo), pero se trata de un evento
no está solo presente en los osteoclastos, sino tan raro que, ante una hipercalcemia que curse
también en las células normales de la mama con niveles elevados de PTH, se debe pensar
y en muchos tumores de origen mamario y antes en un hiperparatiroidismo primario9.
prostático. Otra sustancia producida por los
osteoblastos, la osteoprotegerina, compite por Síntomas y alteraciones de laboratorio
el receptor y tiene el efecto opuesto2. La hipercalcemia se define por un nivel supe-
rior a 10’2 mg/dL, aunque es más exacto el va-
PHTrP lor del calcio iónico (normal entre 1’12 y 1’23
La hipercalcemia tumoral se debe, en el 80% mmol/L). Los síntomas más frecuentes de la
de los casos, a la producción de una sustancia hipercalcemia son los gastrointestinales –vó-
similar a la PTH, llamada PTHrP. PTHrP com- mitos y estreñimiento– si bien pueden apare-
parte el 70% de su cadena con la hormona cer manifestaciones neurológicas o renales y,
original –si bien tiene un tamaño mayor– y se en casos extremos, arritmias (Tabla 2). La diu-
une a los mismos receptores. Existen tres iso- resis osmótica con inhibición de la hormona
formas y no se trata de una sustancia ajena antidiurética da lugar a poliuria y, esta, junto
al organismo normal, sino que se produce en con los vómitos, conduce a la deshidratación y
algunos tejidos sanos, donde posee acciones el fracaso renal. La complicación es potencial-
fisiológicas a través de mecanismos autocri- mente mortal y, aún cuando la mayor parte de
nos y paracrinos3. Concretamente, colabora los casos se resuelven favorablemente, debe
en la formación de hueso, la diferenciación de considerarse una urgencia oncológica.
cartílago, piel, mama y dientes4-6, el transporte Los cánceres de pulmón y de mama son los
de calcio en la mama y en la placenta7, la re- más frecuentemente asociados a esta com-
lajación del músculo liso y la función inmune. plicación, tanto en cifras absolutas (por su
A diferencia de la PTH, y por causas descono- prevalencia) como relativas. Es frecuente que
cidas, la PTHrP no estimula la activación de coexistan las metástasis óseas, pero esto no
vitamina D, mientras que sí da lugar a una al- siempre sucede. En el cáncer de mama la
calosis metabólica; estas son, por tanto, dife- PTHrP se expresa habitualmente, por lo cual la
rencias con el hiperparatiroidismo primario. La hipercalcemia no guarda relación alguna con la
pTHrP es la responsable casi exclusiva de la extensión de las metástasis óseas. Algunos tu-
hipercalcemia en el cáncer de mama, mientras mores hematológicos (mieloma, linfomas agre-
que comparte la responsabilidad del cuadro sivos, leucemias T) también pueden dar lugar a
con otros factores en los tumores hematológi- hipercalcemia y, con la excepción del mieloma,
cos. De hecho, se puede detectar la proteína no suelen acompañarse de lesiones óseas. En-
por inmunohistoquímica en más de la mitad de tre los carcinomas, la lista de causantes está
los tumores mamarios, aunque las enfermas formada por los de riñón, próstata, cabeza y
nunca hayan sufrido una hipercalcemia. cuello y origen desconocido. La hipercalcemia
es un fenómeno propio de fases avanzadas de
Otras sustancias hipercalcemiantes la enfermedad, por lo que suele conllevar una
En los tumores hematológicos, la PTHrP es supervivencia escasa a pesar del tratamiento.
algunas veces responsable de cuadros de hi- De todos modos, la incidencia de hipercalce-
percalcemia, pero en el resto de los casos el mia clínica se ha reducido drásticamente des-
mecanismo es la producción extrarrenal de de la incorporación de los bifosfonatos al tra-
vitamina D8. Este tipo de tumores también tamiento de las metástasis óseas.
suele producir sustancias activadoras de los
osteoclastos, como interleucina 1, interleucina El diagnóstico diferencial no suele crear pro-
6, factor de necrosis tumoral y factor transfor- blemas, pero en caso de duda la presencia de

18
Tabla 2. Síntomas de hipercalcemia

Neurológicos y psiquiátricos Somnolencia, confusión, desorientación, estupor, coma,


irritabilidad, depresión, hipotonía, hiporreflexia

Gastrointestinales Anorexia, vómitos, estreñimiento, úlcera péptica,


pancreatitis

Cardiovasculares Arritmias, hipertensión

Renales Poliuria, polidipsia, hipercalciuria, nefrocalcinosis,


insuficiencia renal

hipofosfatemia orienta hacia el origen tumoral bloqueando la isoprenilación. La incorpora-


y también se pueden determinar en sangre la ción de grupos “prenilo” a las proteínas que
presencia de PTHrP y el nivel de PTH. ligan GTP es importante para la integridad del
osteoclasto, de ahí que el fármaco disminu-
Tratamiento ya su actividad. También podría favorecer la
Los pacientes con hipercalcemia leve (hasta 12 supervivencia y la actividad de los osteoblas-
mg/dL) y asintomática pueden ser tratados de tos. Se han descrito casos de hipocalcemia
forma ambulatoria. Algunas veces la situación secundaria al zoledronato, por lo que es re-
se controla con actividad física, hidratación comendable monitorizar la cifra durante los
forzada y la retirada de fármacos que favore- primeros días. La osteonecrosis mandibular
cen la elevación del calcio, como las tiazidas. es una complicación propia de la administra-
Cuando se desea reducir la calcemia, se admi- ción a largo plazo para prevención de eventos
nistra una dosis de zoledronato, con un control óseos, de modo que no se ve en los pacien-
analítico a la semana. En casos moderados tes con hipercalcemia. Lo mismo sucede con
–cifra 12 a 14 mg/dL– se debe individualizar la insuficiencia renal asociada al fármaco; la
la necesidad de ingreso, pero claramente por elevación de creatinina debida a la hipercal-
encima de 14 mg/dL se requiere ingreso hos- cemia, si la hay, suele corregirse rápidamente
pitalario para la administración de hidratación con la hidratación y no es impedimento para
intravenosa y zoledronato. La mitramicina y los administrar zoledronato. Los bifosfonatos son
bifosfonatos de primera y segunda generación útiles independientemente de la causa de la
ya no se emplean. hipercalcemia, pero se ha comunicado que su
actividad es menor en tumores con produc-
Respecto a la hidratación, se administra junto ción masiva de PTHrP, como algunos carcino-
con furosemida para garantizar la natriuresis, mas epidermoides11.
que arrastra el exceso de calcio. No hay nor-
mas fijas sobre la cantidad de líquido que debe Comienza a haber experiencia con el deno-
administrarse, aunque se recomiendan entre 4 sumab para tratar la hipercalcemia maligna.
y 6 litros en las primeras 24 horas, según la Puede considerarse si el zoledronato fracasa
tolerancia del paciente a la sobrecarga hídrica. o está contraindicado (por ejemplo, debido a
insuficiencia renal grave). Se administra por
El zoledronato se administra por vía intrave- vía subcutánea, 120 mg cada semana por 4
nosa a la dosis de 4 mg, en infusión de 15 semanas, y luego mensualmente12. Debe con-
minutos, y normaliza la cifra de calcio en un siderarse el empleo simultáneo con vitamina D
periodo de 4 a 10 días10. Parece actuar inhi- para evitar la hipocalcemia.
biendo la farnesil-difosfato sintasa y, por tanto,

19
Para casos resistentes, además de la hidrata- otros casos, es el del tumor causante, si bien
ción forzada, se pueden probar la calcitonina puede ser necesario añadir vitamina D.
(4-8 U/kg cada 6 u 8 horas), los corticoides (1
mg/kg) y el nitrato de galio (200 mg/m2/día en Producción ectópica de acth
infusión continua de 5 días). La calcitonina tie- Etiopatogenia y síntomas
ne una acción muy rápida –es el tratamiento de El síndrome de Cushing tumoral fue el primer
elección para situaciones críticas– y funciona síndrome paraneoplásico descrito y su estudio
bien a corto plazo, pero se desarrolla taquifi- condujo a la hipótesis de que algunos tumo-
laxia en cuestión de días. El nitrato de galio, res podían producir sustancias que actuaran a
por su parte, es nefrotóxico, lo cual limita su distancia.
utilidad, pero parece conseguir mejores resul-
tados que los bifosfonatos en los carcinomas El síndrome de Cushing se debe a la produc-
epidermoides13. Finalmente, la osteoprotegeri- ción excesiva de corticoides y, en la mayoría
na aún es un fármaco experimental. de los casos, esto es secundario a la produc-
ción de ACTH en un tumor hipofisario que
Hipocalcemia y Osteomalacia produce ACTH (enfermedad de Cushing, la
La hipocalcemia es un fenómeno más frecuente más frecuente) o en un tumor extrahipofisario
de lo que se piensa, pero suele pasar desaper- (producción ectópica). La distinción entre uno
cibido entre la plétora de síntomas que aquejan y otro origen es importante, porque la extirpa-
a los pacientes con tumores avanzados. Se ve ción del tumor puede ser curativa.
en carcinomas de mama, pulmón y próstata con
metástasis óseas líticas14. En otros casos más Se ha publicado un análisis detallado de 40
raros no hay metástasis óseas, sino que el tu- pacientes con producción ectópica de ACTH16.
mor produce calcitonina. Entre estos destaca el La distribución por géneros fue al 50%. Los
medular de tiroides, aunque la secreción de cal- tumores más frecuentes fueron neuroendocri-
citonina se ha descrito en carcinomas de mama, nos, especialmente carcinoides pulmonares,
colon o microcítico de pulmón y en tumores car- seguidos por los microcíticos también de pul-
cinoides. Sin embargo, muchos de estos tumo- món y el medular de tiroides. En conjunto, los
res segregan formas inactivas de la hormona, tumores pulmonares daban cuenta de la mitad
por lo que no dan lugar a hipocalcemia. de los casos. Cuando el origen era neuroen-
docrino se producían con más frecuencia al-
Los pacientes con hipocalcemia pueden referir teraciones psiquiátricas, hipertensión y acné
tetania y fasciculaciones. Para estos casos sin- que cuando el origen era microcítico, pero por
tomáticos se recomienda el calcio intravenoso. lo demás todos los pacientes presentaban los
síntomas habituales, es decir, cara de luna
La osteomalacia es la contrapartida adulta del llena, obesidad troncular, edema, miopatía
raquitismo. Como síndrome paraneoplásico, proximal, atrofia cutánea, hiperpigmentación
se manifiesta en forma de dolor óseo secunda- y hematomas. En el análisis destacaban la in-
rio a fracturas y deformidades, así como mio- tolerancia a la glucosa, incluso con diabetes
patía con la consiguiente debilidad muscular. franca, y la alcalosis hipopotasémica.
Se trata de una complicación excepcional des-
crita en algunos hemangiomas y hemangiope- Diagnóstico
ricitomas y en casos aislados de mieloma y Ninguna prueba analítica es suficiente por sí
carcinoma prostático15. La posible causa radi- sola para aclarar el diagnóstico en todos los ca-
ca en una falta de activación de la vitamina D sos. De forma rutinaria, se determina el cortisol
en el riñón y la presencia de una sustancia no en orina de 24 horas y se realiza la supresión de
identificada que induce la eliminación urinaria cortisol con dosis bajas de dexametasona. La
de fosfato. Desde el punto de vista analítico, supresión debe ser negativa si hay producción
hay hipofosfatemia, normocalcemia, nivel bajo ectópica de ACTH, es decir, la administración
de vitamina D, elevación de fosfatasa alcalina exógena del corticoide no hace descender la
e hiperfosfaturia. El tratamiento, como en los cifra de cortisol. Cuando se da esta condición

20
y el cortisol está elevado, el siguiente paso es Tratamiento
comprobar que la cifra de ACTH esté eleva- La extirpación del tumor es el tratamiento
da; si el valor fuera normal, estaríamos ante un de elección, porque resuelve el síndrome de
Cushing de origen suprarrenal, pero en el caso Cushing en la mayoría de los casos. Cuando
que nos ocupa la cifra debe ser alta. Habitual- no existe posibilidad de resección, bien por
mente el valor de ACTH es mucho mayor en la extensión de la enfermedad o porque no
los casos de secreción ectópica que en el sín- se encuentre el primario, hay dos opciones:
drome de Cushing, pero hay solapamiento en la suprarrenalectomía bilateral y los fármacos
el caso de los tumores de lento crecimiento. que suprimen la actividad suprarrenal.
El último paso para distinguir entre estos dos
orígenes es la prueba de supresión con dosis La suprarrenalectomía suele resolver el pro-
altas de dexametasona: el cortisol descenderá blema y puede considerarse en pacientes con
en un síndrome de Cushing, pero no si la se- síntomas graves, como hipertensión incontrola-
creción es ectópica (o si el origen de la enfer- ble o astenia extrema. La vía laparoscópica es
medad está en la suprarrenal). eficaz y segura19. Obliga a seguir de por vida
un tratamiento sustitutivo (hidrocortisona 20-30
Se dan resultados falsos. Por ejemplo, en al- mg/día + fludrocortisona 0’5 mg/día + sal).
gunos carcinoides el cortisol baja en respuesta
a la dexametasona; el paciente también puede Las opciones farmacológicas son el ketocona-
estar tomando un inductor hepático que ace- zol, el mitotane, la aminoglutetimida y la meti-
lere el metabolismo de la dexametasona. Para rapona. Todos ellos tienen en común la inhibi-
los casos dudosos se emplean la prueba de ción de la 11-hidroxilasa y cada uno de ellos
la metirapona y la administración de hormona inhibe además algunas otras de las enzimas
liberadora de ACTH (CRH). La metirapona blo- involucradas en la síntesis de la aldosterona,
quea la conversión de 11-desoxicortisol a cor- el cortisol o la testosterona a partir del coleste-
tisol, lo cual eleva la ACTH en personas sanas rol. El ketoconazol es el más empleado por su
y en la enfermedad de Cushing, pero no en la rápido inicio de acción y su perfil de toxicidad
secreción ectópica de ACTH. Lo mismo suce- más favorable en comparación con los otros.
de en respuesta a la administración de CRH. El Se presenta en comprimidos de 200 mg (Pan-
empleo conjunto de las pruebas de metirapo- fungol®, Fungarest®) y la dosis requerida está
na o de CRH con la de dexametasona eleva la habitualmente entre 400 y 1.200 mg/día. Los
exactitud del procedimiento17. Ocasionalmente efectos adversos más frecuentes son digesti-
se elevan las cifras de otras hormonas, como vos, en forma de náuseas y vómitos, mientras
calcitonina, gastrina o hidroxiindolacético, pero que el efecto potencialmente más grave es la
estos marcadores no se emplean para el diag- hepatotoxicidad. El ketoconazol es también un
nóstico. potente inductor enzimático, por lo que debe
administrarse con cuidado en personas que
Obviamente, es fundamental la localización del toman anticomiciales, cisaprida, midazolam,
tumor. Antes de la introducción del escáner, era simvastatina y digoxina. También se han des-
frecuente tener que recurrir a la recogida se- crito interacciones con vincristina y docetaxel.
lectiva de sangre para localizar el tumor, pero
hoy en día esta técnica ha caído en desuso. El mitotane (Lysodrén®) se suministra en com-
Cuando la TC no encuentra el tumor primario, primidos de 500 mg. El tratamiento en adultos
se puede recurrir a la resonancia magnética y se inicia con 2-3 g diarios y se va incremen-
la gammagrafía con octreótido. La resonancia tando progresivamente. La dosis diaria total,
sirve especialmente para aclarar imágenes du- que suele estar en torno a los 6 gramos, se
dosas en el mediastino y en el área pancreáti- puede dividir en dos o tres tomas, preferente-
ca. Por su parte, la gammagrafía se basa en el mente durante las comidas. El comienzo de la
hecho de que algunos de estos tumores tienen acción es lento. Si aparecen reacciones adver-
receptores para el octreótido18; si es el caso, sas graves, como neurotoxicidad, o si se pro-
además ofrece una opción terapéutica. duce una situación de estrés metabólico, hay

21
que interrumpir temporalmente el tratamiento. de este tipo de tumores produce la hormona, si
En caso de toxicidad leve, se reduce la dosis bien solo un 5-10% de los enfermos desarrolla
hasta alcanzar la máxima tolerada. Los prin- el síndrome. El SIADH se ha descrito también
cipales efectos secundarios son leucopenia, en otros tumores: mesotelioma, timoma, leu-
alargamiento de la actividad de protrombina, cemias, enfermedad de Hodgkin, carcinomas
trombopenia, astenia, anorexia, neuropatía pe- de nasofaringe, duodeno, páncreas, estómago
riférica, ataxia, mareo y vértigo, además de los o próstata y tumores cerebrales. La vasopresi-
debidos a la falta de función de las glándulas na se une a sus receptores renales, donde se
suprarrenales. El fármaco se metaboliza por absorbe un exceso de líquido y se reduce la
vía hepática, por lo que no es recomendable absorción de sodio. Algunas veces el tumor no
administrarlo en caso de insuficiencia de este segrega la ADH, sino un péptido similar deno-
órgano. No hay experiencia sobre su uso en minado factor natriurético atrial.
pacientes con insuficiencia renal ni en ancia-
nos. Es posible monitorizar los niveles en caso La mayoría de los pacientes permanecen asin-
de duda: han de situarse entre los 14-20 mg/L. tomáticos, pero pueden referir astenia, ano-
El mitotane induce las enzimas del citocromo rexia, cefalea y dificultad de concentración. En
P450, por lo que hay riesgo de interacción con estos casos el síndrome se detecta en el aná-
otros medicamentos, como los anticomiciales. lisis de sangre. Ocasionalmente hay hiponatre-
El tratamiento se debe continuar mientras se mia intensa, que se manifiesta con confusión,
observen beneficios clínicos. Si no se obser- delirio y convulsiones, seguidos de coma. Ya
varan beneficios clínicos después de 3 meses que las causas posibles de hiponatremia son
con la dosis óptima, debería interrumpirse. numerosas, deben excluirse cuidadosamen-
te. Con retención de líquidos, puede tratarse
La aminoglutetimida (Orimetén®) se suminis- de insuficiencia cardíaca, síndrome nefrótico,
tra en comprimidos de 250 mg. Se comien- insuficiencia hepática o ascitis maligna. Con
za con un comprimido cada 6 horas y puede volumen normal, hay que descartar hipotiroi-
alcanzarse la dosis total diaria de 2 gramos. dismo, insuficiencia suprarrenal o fármacos.
Sus principales efectos secundarios son la Por su parte, el SIADH puede aparecer como
somnolencia, el exantema y las molestias di- consecuencia de la producción de la hormona
gestivas; también pueden aparecer leucopenia en el tumor, en el sistema nervioso central o
o trombopenia. Es poco eficaz por sí sola, de en los pulmones, pero el origen no supone una
modo que suele combinarse con metirapona diferencia de cara al tratamiento.
para aumentar su actividad. La metirapona,
otro inhibidor de la 11-hidroxilasa, se admi- Como en todos los síndromes paraneoplásicos
nistra a dosis que varían entre 0’5 y 6 gramos endocrinos, el tratamiento más eficaz es el del
diarios. Es un fármaco de acción rápida y entre tumor de base. Además de esto, si los sínto-
sus principales efectos secundarios figuran el mas no son graves, puede conseguirse una
acné y el hirsutismo. elevación moderada del sodio en sangre redu-
ciendo la ingesta hídrica a medio litro al día y, si
El pronóstico depende, lógicamente, del de la no se corrige, cortisona. En casos graves, debe
neoplasia de base. Los tumores neuroendo- administrarse salino hipertónico a un ritmo muy
crinos cuentan con más posibilidades de una lento –1 mEq/L/hora– (para no producir daño
resección completa, mientras que los microcí- cerebral) y acompañado de furosemida 20,21.
ticos de pulmón tienen un pronóstico malo16.
En casos con mala respuesta al tratamiento hi-
Secreción inadecuada de adh (siadh) droelectrolítico se puede recurrir al tolvaptán
El SIADH fue descrito por primera vez en 1957 (Samsca®). Este es un antagonista del receptor
en un paciente con cáncer pulmonar. De he- de vasopresina, especialmente al V2. Se admi-
cho, el tipo de tumor más frecuentemente aso- nistra por vía oral a la dosis inicial de 15 mg/
ciado al síndrome es el microcítico de pulmón, día, con la posibilidad de subir a 30 mg/día si no
en tres cuartas partes de los casos. La mayoría hay buena respuesta 22.

22
Síndrome Carcinoide la intensidad son extraordinariamente varia-
Etiopatogenia bles. La localización más frecuente del tumor
Los tumores carcinoides pueden sintetizar mu- en un paciente con síndrome carcinoide es el
chas sustancias hormonales: ACTH, gastrina, intestino medio (íleon), pero se ven también
somatostatina, insulina, hormona del creci- casos en el intestino proximal o los pulmones;
miento, péptido liberador de gastrina, seroto- si el origen es bronquial, el eritema puede ser
nina, calcitonina, neurotensina, MSH, sustan- muy extenso y prolongarse durante días.
cia P, neuropéptido K, glucagón, polipéptido
pancreático, VIP y prostaglandinas. De entre No todos los pacientes presentan un síndro-
todas ellas, es la serotonina la responsable me carcinoide completo, sino que hay cuadros
del síndrome carcinoide; se llega a detectar en parciales. El tumor puede pasar inadvertido
más del 90% de los casos y se ha comproba- durante mucho tiempo, de modo que el pa-
do un papel activo en la aparición de la mayor ciente solo note molestias abdominales difu-
parte de los síntomas típicos (Tabla 3). Es po- sas, diarrea ocasional y, si acaso, algún episo-
sible que la sustancia P, el neuropéptido K y dio menor de eritema.
el octreótido jueguen también un papel en la
aparición de los síntomas23. De todos modos, Diagnóstico
más de la mitad de los pacientes con tumores La existencia del síndrome se detecta midien-
carcinoides no sufre el síndrome, al menos en do el hidroxiindolacético en orina de 24 horas.
las fases precoces de la enfermedad, porque Los niveles normales están por debajo de 10-
la producción hormonal es escasa. 15 mg/día 24. Pueden aparecer falsos positivos
por consumo de alimentos ricos en serotoni-
En los casos típicos, el triptófano es convertido na (plátano, piña, kiwi, nueces y aguacate) o
a 5-hidroxitriptófano y este a serotonina, que por el uso de ciertos fármacos (paracetamol,
bien se almacena en los gránulos del tumor o aspirina). La sensibilidad de la prueba se in-
es liberado a sangre. La serotonina sanguínea crementa midiendo a la vez la concentración
se almacena en gránulos plaquetarios, aunque de serotonina en plaquetas. En los carcinoides
una cantidad circula libre. La serotonina san- de intestino delgado es el 5-hidroxitriptófano el
guínea se convierte en 5-hidroxiindolacético, que se eleva en lugar del hidroxiindolacético.
que se elimina por orina. En los casos atípicos
falla la conversión a serotonina, de modo que El escáner es fundamental para la localización
el 5-hidroxitriptófano se concentra en sangre del tumor. Detecta la mayoría de los tumores
y solo es convertido en el riñón antes de su bronquiales y los casos con metástasis he-
eliminación por orina. Estos casos atípicos son páticas, pero puede pasar por alto pequeños
propios de carcinoides del intestino proximal. tumores de íleon. En estos casos, se pueden
realizar una gammagrafía con octreótido 25
Síntomas o una tomografía por emisión de positrones
El ataque típico consiste en un eritema súbi- 26. La gammagrafía es muy sensible, si bien
to que afecta cara y cuello, acompañado de los granulomas, las heridas y el bocio pueden
sensación de calor o prurito, palpitaciones y conducir a falsos positivos.
diarrea líquida. Puede ser espontáneo o preci-
pitarse con el ejercicio o la comida. Casi la mi- Tratamiento
tad de los enfermos puede sufrir a largo plazo Como ya hemos comentado en los apartados
una lesión de las válvulas cardíacas derechas anteriores, siempre debe intentarse la resec-
–especialmente insuficiencia tricuspídea– por ción del tumor primitivo. La cirugía de me-
depósito de material fibroso. Otros síntomas tástasis hepáticas también es recomendable
menos frecuentes son la broncoconstricción, siempre que se pueda27-29. En enfermos sin
la impotencia y la hiperpigmentación con hi- opciones quirúrgicas, se deben evitar los pre-
perqueratosis, mientras que en casos raros se cipitantes de los ataques y se recomienda el
han descrito artralgias, confusión, pérdida de uso de fármacos de forma escalonada. Para
visión y fibrosis retroperitoneal. La duración y las formas de diarrea leve, bastan la loperami-

23
da o el difenoxilato, que pueden complemen- Algunos pacientes desarrollan taquifilaxia, en
tarse en caso necesario con un antihistamínico cuyo caso se debe aumentar la dosis. Las for-
y un antagonista del receptor de serotonina mas de liberación normal se administran cada
(ondansetrón, granisetrón). El tratamiento de la 6-12 horas cuando es preciso un comienzo de
insuficiencia cardíaca o del broncoespasmo es acción urgente. Los análogos de somatostati-
sintomático, con diuréticos y broncodilatado- na se toleran muy bien, siendo los principales
res, respectivamente. efectos secundarios las molestias abdomina-
les, diarrea y formación de cálculos biliares.
La mayor parte de los pacientes con síndrome Cuando los análogos de somatostatina fraca-
carcinoide debe recurrir a los análogos de la san, se puede recurrir al interferón31. El interfe-
somatostatina. Se trata de fármacos muy efica- rón se administra por vía subcutánea tres ve-
ces –control de síntomas alrededor del 80%– y ces a la semana, a dosis que varían entre 3 y
bastante cómodos de administrar gracias a las 9 M.U. Es más tóxico que los análogos, pero
formas de liberación prolongada30. En España muestra una eficacia similar. Pueden combi-
están comercializados el lanreótido (Somatuli- narse ambos tipos de fármacos en casos re-
na autogel®, dosis de 60, 90 y 120 mg) y el oc- fractarios. Cuando fallan todas las opciones,
treótido (Sandostatin Lar®, dosis de 10, 20 y 30 se puede recurrir a la quimioembolización de
mg), que se administran cada cuatro semanas. las metástasis hepáticas, con o sin quimiotera-

Tabla 3. Tumores neuroendocrinos: tipo de hormona producida y síntomas

LUGAR PRODUCCIÓN SÍNTOMAS

Proximal

Bronquio, timo, Serotonina, Broncoespasmo, enrojecimiento atípico


estómago, duodeno histamina, ACTH,
prox., páncreas CRH, GH, gastrina

Intestino medio

Desde 2ª duodeno a Serotonina, Obstrucción intestinal, enrojecimiento


ciego taquiquinina, típico, diarrea
bradiquinina,
prostaglandinas

Distales

Colon transverso a Somatostatina, Por crecimiento local


recto neurotensina,
hidroxitriptófano

Páncreas

Insulinoma Insulina, proinsulina Hipoglucemia

Gastrinoma Gastrina Zollinger-Ellison

VIPoma VIP Diarrea acuosa, aclorhidria

Glucagonoma Glucagón Eritema necrolítico, diabetes

Somatostatinoma Somatostatina Litiasis biliar, diabetes, esteatorrea, acloridria

No funcionantes Sustancia P Por crecimiento local

GFRoma GRF Acromegalia

24
pia simultánea. Entre la quimioterapia emplea- Otros
da figuran la dacarbacina y el 5-fluorouracilo; Los prolactinomas forman parte del síndrome
la estreptozotocina es más tóxica y difícil de MEN1. Habitualmente se trata de tumores hi-
conseguir. pofisarios de comportamiento benigno, aunque
hasta un 20% llega a producir invasión local. Un
Otros síndromes Paraneoplásicos exceso de producción de prolactina da lugar a
Endocrinos disminución de la libido y galactorrea.
Los tumores neuroendocrinos, como ya se ha
comentado previamente, son ricos en produc- Los VIPomas son tumores normalmente localiza-
ción de sustancias hormonales. La tabla 3 refleja dos en los islotes pancreáticos, aunque hay casos
el tipo de hormona habitual según la localización, descritos en sistema nervioso, bronquios, colon,
así como los síntomas asociados. hígado o suprarrenales35. Excepcionalmente for-
ma parte del síndrome MEN1. La variedad pan-
Hipoglucemia creática es la más maligna, en el sentido de que
Se trata habitualmente de insulinomas, si bien suele diagnosticarse con metástasis. El péptido
está descrita con otros como sarcomas, mesote- intestinal vasoactivo activa la adenilciclasa de
liomas y tumores gastrointestinales. Los insulino- las células intestinales y produce diarrea acuosa
mas son tumores situados prácticamente siem- intensa. Como consecuencia, descienden los ni-
pre en el páncreas, de un tamaño normalmente veles de potasio y bicarbonato, lo cual a su vez
inferior a los 2 cm; solo un 10% son malignos y produce acidosis. Algunos pacientes pueden su-
en un 5% están asociados al MEN1 (neoplasia frir eritema súbito y dolor abdominal.
endocrina múltiple).
El glucagonoma es extraordinariamente raro de
La causa de hipoglucemia es la producción de los islotes pancreáticos y su rasgo característico
factor de crecimiento insulínico, particularmente es el eritema necrolítico migratorio. Dicho eritema
el precursor del tipo II (pro-IGF-2). Se han des- comienza en los muslos o ingles y se extiende
crito otros mecanismos de producción: secreción hacia periné y piernas en un plazo de 1-2 se-
ectópica de insulina, síntesis aumentada del re- manas; el área central se erosiona y puede co-
ceptor de insulina e hipermetabolismo de la glu- lonizarse por Candida o Staphyloccocus, lo cual
cosa. Los pacientes refieren síntomas debidos a produce prurito y dolor intensos. Puede haber
la hipoglucemia (cefalea, mareo, visión borrosa, también onicolisis y úlceras orales. No se sabe
somnolencia y, raramente, convulsiones o coma) qué relación existe entre todas estas alteraciones
y síntomas debidos a la reacción catecolaminér- cutáneas y el glucagón, aunque el nivel de esta
gica secundaria (temblor, palpitaciones, ansie- sustancia no guarda relación con la gravedad de
dad, náuseas, hambre y sudor). los síntomas. Otros síntomas producidos por el
tumor son diabetes, pérdida de peso, exantema,
Los tumores extirpables tienen buen pronósti- dolor cólico, diarrea o estreñimiento, tromboem-
co32. Cuando la resección quirúrgica no es posi- bolismo y alteraciones neurológicas (demencia,
ble, se recurre a los corticoides o a los análogos ataxia, debilidad muscular)36. Es habitual la pre-
de somatostatina. sencia de metástasis hepáticas en el momento
del diagnóstico. Las causas habituales de muerte
Acromegalia son las mencionadas metástasis en hígado o el
La acromegalia se caracteriza por un engro- tromboembolismo.
samiento de la piel y crecimiento de las zonas
acras (nariz, orejas, labios, manos y pies), junto Finalmente, la ginecomastia está asociada a la
con hepatomegalia. Aunque suele deberse a un producción de HCG. Se han descrito algunos ca-
adenoma hipofisario, algunos pacientes sufren sos en pacientes con cáncer de pulmón37 y de
tumores de otro origen que no segregan GH sino vejiga38.
GH-RH, siendo los predominantes de estómago
y pulmón33,34. Como tratamiento sintomático se
emplean los análogos de somatostatina.

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27
Capítulo 3
Síndromes paraneoplásicos
hematológicos
Autores:
Francisco Javier Peñalver Párraga
y Pilar Martínez Barranco
Unidad de Hematología. Hospital Universitario
Fundación Alcorcón

Introducción
En los pacientes con cáncer es frecuente en-
contrar alteraciones hematológicas manifesta-
das como defectos en el número de las células
sanguíneas y de la hemostasia. Estas anor-
malidades hematológicas pueden ser conse-
cuencia de la neoplasia o del tratamiento. Las
leucemias, linfomas y discrasias de células
plasmáticas son neoplasias hematológicas
que con frecuencia afectan la médula ósea,
sustituyendo la hemopoyesis normal, produ- Figura 2. Mieloptisis: Metástasis de células neoplásicas
en biopsia de médula ósea
ciendo mieloptisis, caracterizada por citope-
nias o pancitopenia y un cuadro leucoeritro-
blástico (dacriocitos, granulocitos inmaduros y Anemia
hematíes nucleados en la extensión de sangre Introducción. La anemia es la complicación
periférica) (Figura 1). Los tumores sólidos tam- hematológica más frecuente observada en los
bién pueden infiltrar la médula ósea y producir pacientes con cáncer. Se presenta en cerca
mieloptisis (Figura 2). Los más frecuentemente del 50% de estos pacientes en algún momen-
implicados son el cáncer de mama, próstata, to de la evolución de la enfermedad o del tra-
microcítico de pulmón y gástrico. tamiento.

Vamos a revisar las alteraciones hematológi- Cuando se valora un paciente con anemia y
cas producidas por el cáncer excluyendo la cáncer hay que considerar que, en general, la
mieloptisis y las derivadas del tratamiento. anemia relacionada con el cáncer es un pro-
blema multifactorial en el que están implicados
componentes inmunes, nutricionales y meta-
bólicos que pueden afectar a la gravedad de
la anemia.

Hay múltiples factores que pueden contribuir


al desarrollo de anemia en los pacientes con
cáncer. En la valoración de las causas de ane-
mia deben considerarse 3 situaciones:
·· Sangrado (anemia por pérdidas sanguíneas)
·· Aumento de la destrucción de hematíes
Figura 1. Cuadro leucoeritroblástico: Sangre periférica
con cuadro leucoeritroblástico
(anemia hemolítica)

28
·· Descenso de la producción de hematíes blación de hematíes microcíticos-hipocromos.
(anemia hiporregenerativa) Presenta abundantes depósitos de hierro en
los macrófagos medulares, con un escaso o
Otras anemias por efecto directo de la neo- ausente número de sideroblastos y niveles sé-
plasia pueden producirse por hemorragia ricos de EPO inapropiadamente bajos para el
(trombopenia por supresión medular por el grado de anemia. También presenta concen-
tratamiento, trombopenia inmune, inhibido- traciones plasmáticas de hierro y de la capa-
res adquiridos de la coagulación: enfermedad cidad total de la fijación de hierro bajas (TIBC),
de von Willebrand y déficit de factor VIII), por con concentraciones de ferritina normales o
la absorción alterada de nutrientes con défi- aumentadas en plasma. Un receptor soluble
cit de hierro (linfoma gástrico, amiloidosis en de la transferrina bajo puede ayudar a distin-
mieloma, malabsorción postquirúrgica), déficit guir la AEC del déficit de hierro.
de B12 (cirugía gástrica o del íleon terminal) y
sangrado tumoral interno o in situ (en especial,
hepatocarcinoma).

INFLAMACIÓN
La anemia paraneoplásica puede ser por el CÁNCER
efecto directo de la neoplasia (hemofagocito-
sis) o por el efecto de un producto producido
por la neoplasia (hemólisis).

ANEMIA POR DESCENSO


DE LA PRODUCCIÓN HEPCIDINA
Incluye anemia de la enfermedad crónica y CITOQUINAS

aplasia pura de células rojas.

• Anemia de la enfermedad crónica (AEC)


Es frecuente en neoplasias no hematológicas,
siendo incluso la primera manifestación de la BLOQUEO INHIBICIÓN SUPRESIÓN
neoplasia. El grado de anemia es a menudo, METABOLISMO PRODUCCIÓN PROFILERACIÓN
HIERRO EPO ERITROIDE
pero no invariablemente, proporcional al es-
tadio de la enfermedad. La fisiopatología es
similar a la observada en la infección e infla-
mación crónica. En respuesta a la neoplasia se
producen hepcidina y citoquinas (interferon-α,
interferon-ß, interferon-γ, TNF-α, TGF-ß, IL-1
e IL-6) que producen anemia mediante el blo- ANEMIA
queo de la utilización del hierro, inhibiendo la
síntesis de eritropoyetina (EPO) y suprimiendo
la eritropoyesis (Figura 3). La IL-1, IL-6 y el in-
terferon-alfa inducen un aumento de hepcidina Figura 3. Patogénesis de la anemia de enfermedad
crónica
(hormona reguladora del hierro), secuestrando
el hierro en los macrófagos, no estando dis-
ponible para su uso en la eritropoyesis. En la El tratamiento de la AEC es el de la neopla-
macroglobulinemia de Waldenström (MW) las sia subyacente. El uso de EPO recombinante
células linfoplasmocíticas producen hepcidina. puede ser útil en muchos pacientes, siempre
que no tengan deficiencia de hierro. Puede ser
La AEC o anemia de la inflamación debe diag- útil disponer de los niveles basales de EPO en
nosticarse tras excluir otras causas de anemia. plasma. Así, pacientes con AEC y una concen-
Cursa como una anemia normocítica-normo- tración de EPO menor de 500 mU/mL (algunos
crómica, pero puede tener una pequeña po- autores sugieren niveles menores de 100-200

29
mU/mL) responderán con frecuencia al trata- anemia hemolítica microangiopática y la he-
miento con EPO recombinante. mofagocitosis.

• Aplasia pura de células rojas (APCR) • Anemia hemolítica autoinmune (AHAI)


Es una anemia hiporregenerativa severa, ca- En la AHAI se produce la destrucción de he-
racterizada por un descenso marcado o au- matíes por células del sistema inmune (fago-
sencia de progenitores eritroides en la médula citos u otras células citotóxicas) mediada por
ósea, con reticulocitopenia importante, leu- anticuerpos dirigidos contra antígenos de los
cocitos y plaquetas normales, que puede ser hematíes del paciente. Se caracteriza por la
consecuencia de una neoplasia. presencia de inmunoglobulina (IgG) o comple-
mento (C3d) en la superficie de los hematíes
Clásicamente la APCR se asociaba a timomas circulantes, demostrado por la prueba de la
con una incidencia del 10-15%, aunque en las antiglobulina directa (PAD) o test de Coombs
series actuales la implicación del timoma es directo, presencia de esferocitos en la exten-
menor. La leucemia linfocítica crónica (LLC-B) sión de sangre periférica, reticulocitosis y da-
es una de las neoplasias hematológicas más tos bioquímicos de hemólisis: aumento de LDH
frecuentemente asociada con APCR. Alrede- y bilirrubina indirecta junto con el descenso de
dor del 6% de pacientes con LLC desarrollan la haptoglobina.
APCR. En otras series, la leucemia de linfoci-
tos grandes granulares (LLGG) es la causa más Según el rango térmico del autoanticuerpo
frecuente de APCR. Otras neoplasias hema- pueden clasificarse en AHAI por anticuerpos
tológicas implicadas son: linfomas Hodgkin y calientes (AHAI-AC) y por aglutininas frías
no Hodgkin (LH, LNH), leucemia linfoblástica (AHAI-AF).
aguda (LLA), leucemia mieloide crónica (LMC),
mieloma múltiple (MM) y mielofibrosis con me- La AHAI asociada al cáncer está relacionada
taplasia mieloide (MMM). También se han im- más frecuentemente con síndromes linfoproli-
plicado otros tumores no hematológicos como ferativos (SLP). La AHAI-AC es más frecuente
el cáncer microcítico de pulmón, de mama y en la LLC (11-25%). Puede aparecer en cual-
gástrico, aunque en muchos casos no se ha quier momento durante el curso de la enferme-
establecido una relación causa efecto entre dad y no es un factor pronóstico adverso. Otros
el tumor sólido del paciente y el desarrollo de tumores también pueden cursar con AHAI-AC
APCR. como el LNH, LH, linfoadenopatía angioinmu-
noblástica con disproteinemia, adenocarcino-
La patogenia implica la inhibición de las célu- mas, carcinomas de células escamosas, MM,
las que responden a EPO mediante inmuno- MW, leucemia mieloide aguda (LMA), LLA y
globulinas inhibidoras, citotoxicidad mediada mielodisplasia (SMD).
por anticuerpos de los eritroblastos e inhibi-
ción por linfocitos-T de las células que respon- El tratamiento de la neoplasia puede resolver
den a EPO. la anemia pero, en general, es necesario el
tratamiento específico de la anemia con inmu-
El tratamiento de la neoplasia subyacente pue- nosupresores (esteroides, ciclosporina, etc.),
de producir la resolución de la anemia. Cuan- agentes citotóxicos (ciclofosfamida, etc.) o
do no hay respuesta de la APCR al tratamiento esplenectomía. En los últimos años se ha co-
antineoplásico, es necesario el uso de trata- municado que la combinación de ciclofosfami-
miento inmunosupresor incluyendo corticos- da, dexametasona y el anticuerpo monoclonal
teroides, ciclofosfamida, azatioprina, globulina anti-CD20 (rituximab) puede ser muy efectiva
antitimocito, ciclosporina y danazol. en el control de la AHAI-AC asociada a SLP.

ANEMIA POR AUMENTO DE Aunque la mayoría de las AHAI asociadas al
LA DESTRUCCIÓN cáncer son producidas por anticuerpos calien-
Incluye la anemia hemolítica autoinmune, la tes, ciertas neoplasias se asocian con AHAI-AF,

30
estas incluyen LLC, MW y linfomas. Se estima La AHM asociada a neoplasia puede ser con-
que el 5-10% de los pacientes con AHAI-AF secuencia de una PTT o de una coagulación
aparentemente idiopática (no relacionada con intravascular diseminada (CID). Aunque algu-
infección viral o bacteriana) tienen una neopla- nas características de la AHM y de la oclusión
sia hematológica subyacente. trombótica resultante de los vasos de pequeño
y mediano tamaño que produce fallo orgánico
Entre los pacientes con AHAI-AF asociada a pueden encontrarse en el espectro clínico de
neoplasias linfoides, las de bajo grado (LLC, la CID, esta representa un grupo distinto de
linfoma linfocítico bien diferenciado) pueden enfermedades.
tener especificidad antigénica I, mientras que
las formas más agresivas, es más probable Los pacientes con PTT se presentan con
que tengan especificidad por el antígeno i. trombopenia y esquistocitosis llamativa, con
Aunque hay excepciones, el hallazgo de un an- coagulación normal o levemente alterada. El
ticuerpo anti-i en ausencia de infección viral es fibrinógeno y el dímero D son generalmente
una indicación clara de investigar la presencia
de un linfoma.

Como las aglutininas frías son el resultado de


la proliferación neoplásica, su concentración
plasmática puede utilizarse como marcador
tumoral. En pacientes con tumores no linfoides
también pueden producirse aglutininas frías
monoclonales, normalmente con especificidad
anti-I y cadenas ligeras kappa, en especial en
adenocarcinomas.
Figura 4. Esquistocitos en sangre periférica
También en las AHAI-AF el tratamiento de la
neoplasia subyacente puede controlar la ane- normales. El nivel de LDH debido a hemólisis
mia. La principal recomendación terapéutica o isquemia tisular está más elevado en la PTT.
es evitar el frío. En general, los corticoides son También son más frecuentes los eritroblastos
inefectivos salvo en algunos casos con títulos (hematíes nucleados) debido al estrés de la eri-
bajos de anticuerpos fríos. Tampoco la esple- tropoyesis. El diagnóstico diferencial entre PTT
nectomía es útil pues la hemólisis es principal- y CID se resume en la tabla 3 del caso clínico.
mente hepática. El rituximab ha demostrado En algunos pacientes la AHM puede ser la for-
ser efectivo en muchos casos consiguiendo el ma de presentación del cáncer. Sin embargo,
control de la anemia y del SLP subyacente. para implicar al cáncer como causa de la AHM
hay que excluir otras causas.
• Anemia hemolítica microangiopática (AHM)
La AHM asociada al cáncer engloba un grupo La AHM puede presentarse tanto en tumores
de enfermedades que incluyen la púrpura trom- sólidos como en neoplasias hematológicas. La
bótica trombocitopénica (PTT), el síndrome he- asociada a tumores sólidos es generalmente
molítico urémico (SH) y la anemia hemolítica mi- trombótica, con un riesgo elevado de compli-
croangiopática inducida por quimioterapia. En caciones trombóticas e insuficiencia renal. La
la AHM se produce la destrucción de los hema- AHM asociada a leucemia cursa generalmente
tíes en la microcirculación. Cursa con anemia como CID con riesgo de hemorragia por coa-
hemolítica Coombs directo negativa, trombope- gulopatía de consumo (ver CID).
nia, datos bioquímicos de hemólisis (aumento
de LDH y bilirrubina indirecta y descenso de La AHM puede presentarse también como una
haptoglobina) y es característica la presencia complicación de la quimioterapia (mitomicina
de esquistocitos (fragmentos de hematíes) (Fi- C, cisplatino, bleomicina, gemcitabina), el uso
gura 4) en la extensión de sangre periférica. de radioterapia y de las dosis altas de quimio-

31
terapia y de ciclosporina en el trasplante he- de macrófagos o células del cáncer con célu-
mopoyético. las hematopoyéticas ingeridas. El tratamiento
es el de la neoplasia subyacente, pero el pro-
El mecanismo de la PTT asociado al cáncer nóstico es malo.
no está claro. Refleja un consumo directo de
plaquetas, debido a un daño endotelial o a Eritrocitosis
una activación primaria de las plaquetas pro- Definición. Exceso de la masa eritrocitaria
duciendo en algunos casos la acumulación de total del organismo, medida por dilución ra-
multímeros anormalmente grandes de factor dioisotópica, superior al 120% de la corres-
von Willebrand (FVW). La AHM asociada al pondiente al sujeto por su superficie corporal.
cáncer se ha comunicado con cánceres dise- Según la clasificación de la OMS 2008 de las
minados, a menudo ocultos. Los tumores só- neoplasias del sistema hematopoyético y lin-
lidos más frecuentemente implicados son los foide, se asume que una Hb > 185 g/L en el
adenocarcinomas mucinosos: gástrico, mama, hombre o > 165 g/L en la mujer, exime de la
páncreas, próstata y pulmón. medida de la masa eritrocitaria y permite ha-
blar de eritrocitosis.
En el cáncer de próstata metastático puede
observarse un cuadro de CID de baja intensi- El aumento de glóbulos rojos de tamaño nor-
dad crónica, produciendo anemia, esquistoci- mal, supuesto un volumen plasmático también
tos escasos y alteraciones de la coagulación normal, se traduce en el aumento de la masa
menos pronunciadas o atípicas. o volumen eritrocitario que ocasiona hipervis-
cosidad sanguínea con dificultad de flujo intra-
La AHM asociada a neoplasia tiene muy mal vascular y disminución del aporte de oxígeno
pronóstico. En ocasiones se controla si el tra- a los tejidos.
tamiento del cáncer subyacente es efectivo
(ver PTT). Existe sospecha de poliglobulia cuando algu-
no de estos parámetros se eleva:
• Hemofagocitosis ·· la concentración de hemoglobina (g/dl) es
La anemia se produce por la ingestión de he- > 16.5/18.5 en mujeres/hombres, o
matíes por macrófagos o células neoplásicas. ·· el hematocrito (L/L) es > 48 o 52% en mu-
El Síndrome Hemofagocítico esta frecuente- jeres y hombres, respectivamente o
mente relacionado con infecciones y particu- ·· el número de hematíes normal es 5 x 1012/L.
larmente con la infección por el virus Epstein Se utiliza con menos frecuencia ya que en
Barr, pero también puede complicar ciertas pacientes talasémicos pueden estar ele-
neoplasias, produciendo anemia y otras cito- vados con Hb o Hcto en rango normal o
penias en ausencia de infección documenta- reducido.
da. Los tipos de cáncer que se asocian con
hemofagocitosis son las leucemias y los linfo- Si solo tenemos una determinación aislada
mas, generalmente de línea T, aunque también con un valor alto, debemos confirmarla repi-
se han descrito el linfomas de célula NK, de tiendo el test para comprobar que no se trata
célula B y neoplasias mieloides. Raramente los de un error de laboratorio.
tumores sólidos cursan con hemofagocitosis.
Se sospecha por la presencia de fiebre, ade- Fisiología de la eritropoyesis. Al igual que el
nopatías, hepatoesplenomegalia, citopenias resto de las células sanguíneas, los hematíes
de al menos dos series hematopoyéticas, hi- derivan de una célula madre pluripotencial tras
pertrigliceridemia, hipofibrinogenemia, prolon- un proceso de diferenciación. En condiciones
gación del tiempo de protrombina (TP) y tiem- normales, el precursor eritroide más inmaduro
po de tromboplastina parcial activado (TTPA) y depende de la hormona EPO para diferenciar-
alteraciones de las pruebas de función hepá- se y producir glóbulos rojos. El 90% de la EPO
tica. Se diagnostica mediante una biopsia de circulante es sintetizada por los riñones en res-
médula ósea, donde se objetiva la presencia puesta a la hipoxia, como resultado de dismi-

32
nuciones en la concentración de hemoglobina ·· Hematuria macroscópica puede ser el úni-
(anemia), reducción en la saturación de oxíge- co dato de la presencia de un carcinoma
no (hipoxemia), disminución en la liberación de de células renales.
oxígeno por la hemoglobina (hemoglobinopa- ·· Tumores endocrinos funcionantes asocia-
tías de alta afinidad por el oxígeno) o reduc- dos con policitemia pueden producir hiper-
ción en el aporte de oxígeno al riñón (oclusión glucemia y alteraciones electrolíticas como
vascular). En la policitemía vera (PV) se pro- la hipokaliemia.
duce una eritrocitosis EPO-independiente que ·· Alteraciones en las pruebas de función he-
suprime la producción renal de EPO con nive- pática pueden sugerir hepatocarcinoma,
les séricos de EPO bajos. La eritrocitosis EPO- especialmente si el paciente tiene el diag-
dependiente (hipoxia, tumor secretor de EPO) nóstico de cirrosis, hepatitis viral o hemo-
es característica de la eritrocitosis secundaria cromatosis.
y se asocia con niveles séricos de EPO norma-
les o altos. Una vez establecido el diagnóstico de sospe-
cha se deberá definir si se trata de una eritroci-
Clasificación tosis verdadera vs. relativa (medida de la masa
1. Eritrocitosis relativa o pseudoeritrocitosis: eritrocitaria). Si estamos ante una eritrocitosis
masa eritrocitaria normal y aumento de eri- primaria, cabe identificar la entidad concreta
trocitos, Hb o Hcto. Puede ser debido a (PV vs. formas familiares) y determinar la etiolo-
microcitosis (talasemia menor), deshidra- gía de una eritrocitosis considerada secundaria.
tación (disminución del volumen plasmá-
tico) o síndrome de Gaisböck (obesidad, Nosotros nos vamos a centrar en el estudio de
exceso de alcohol, tabaquismo e hiperten- la eritrocitosis secundaria asociada a neopla-
sión arterial). sia que es el objeto de este capítulo.
2. Eritrocitosis verdadera o absoluta prima-
ria: causada por una mutación adquirida Evaluación de la eritrocitosis secundaria.
o heredada que conlleva una anormalidad Las eritrocitosis secundarias pueden ser con-
en los precursores eritroides. Incluye la PV génitas o adquiridas. En ambas situaciones, el
y raras variantes familiares (ej.: mutación aumento de los niveles séricos de EPO repre-
en receptores de eritropoyetina, policite- sentan una respuesta adecuada a la hipoxia
mía de Chuvashia). Se reserva el término generalizada, como en la enfermedad pulmonar
poliglobulia idiopática para definir poliglo- obstructiva crónica o en las hemoglobinopatías
bulia primaria que no cumple con los crite- con alta afinidad por el oxígeno. En algunos de
rios para el diagnóstico de PV, negatividad estos pacientes, los niveles de EPO son nor-
para mutación de JAK2 en el exón 12 y 14. males debido a una adecuada respuesta a la
3. Eritrocitosis verdadera o absoluta secun- regulación producida por la elevación de la ca-
daria: causada por un factor circulante que pacidad para transportar oxígeno.
estimula la eritropoyesis, normalmente la
EPO. En la mayoría de los casos en res- Por otro lado, las eritrocitosis asociadas con
puesta a la hipoxia, pero también por un tumores o enfermedad vascular renal se aso-
tumor secretor de EPO. cian normalmente con niveles séricos de EPO
significativamente elevados, ya que ni el riñón
Evaluación inicial. Establecer la etiología de hipóxico ni los tumores secretores de EPO son
la policitemia (Tabla 1). La causa más común sensibles a la regulación debida al incremento
de policitemia es la hipoxia secundaria a enfer- en la capacidad de transporte de oxígeno ge-
medad pulmonar. Las pruebas de laboratorio nerado por la elevación de la masa eritrocitaria.
nos proporcionan información sobre la causa La poliglobulia se ha descrito en asociación
de la policitemia con enfermedades renales tales como el carci-
·· Elevación del total de leucocitos y/o pla- noma de células renales, la estenosis de arte-
quetas y/o VCM disminuido, alta sospecha ria renal, la hidronefrosis, el tumor de Wilms y
de PV. la poliquistosis renal.

33
Tabla 1. Causas de eritrocitosis

Niveles de eritropoyetina inadecuadamente elevados

Neoplasias productoras de eritropoyetina (más común):


·· Carcinoma de células renales
·· Carcinoma hepatocelular
·· Hemangioblastoma cerebeloso
·· Feocromocitoma
·· Miomas uterinos (fibromas)

Lesiones renales que producen eritropoyetina:


·· Quistes
·· Hidronefrosis
·· Estenosis de la arteria renal
·· Post-trasplante renal (15%). Más frecuente en los 2 primeros años, tratándose por lo general de
varones hipertensos con excelente función renal. A veces es independiente de la eritropoyetina

Niveles de eritropoyetina adecuadamente elevados

Hipoxemia secundaria:
·· Enfermedad pulmonar crónica
·· Shunts de derecha a izquierda (cianosantes)
·· Hipoventilación alveolar (primaria, síndrome de Pickwick y síndrome de apnea del sueño)
·· Alturas superiores a 3.000 m (eritrocitosis de la altura)
·· Anomalías en el transporte o cesión de oxígeno:
–– Carboxihemoglobina (fumador)
–– Algunos casos de metahemoglobinemia congénita
–– Cobalto (bloqueo del metabolismo tisular del oxígeno)

Mutaciones germinales y somáticas causas de policitemia

·· Policitemia vera
·· Mutaciones del receptor de la eritropoyetina
·· Eritrocitosis de Chuvashia (anomalías genéticas en la vía del sensor de O2)
·· Metahemoglobinemia congénita
·· Policitemia idiopática familiar
·· Hemoglobinas con alta afinidad por el oxígeno
·· Déficit congénito de 2,3-DPGM

Miscelánea

·· Uso de andrógenos o esteroides anabólicos


·· Diuréticos (disminuyen el volumen plasmático)
·· Dopaje sanguíneo en atletas (transfusión de sangre autóloga)
·· Autoinyección de eritropoyetina
·· Síndrome de POEMS

eritrocitosis se resuelve con la resección qui-


Eritrocitosis paraneoplásica. La producción rúrgica del tumor. La poliglobulia también es
de EPO en la eritrocitosis asociada a neoplasia una manifestación paraneoplásica conocida
es autónoma del estímulo hipóxico. Los tumo- del carcinoma hepatocelular (2.5-10% de los
res renales constituyen aproximadamente 1/3 pacientes), debida también a la producción
de los casos de poliglobulias asociadas a neo- de EPO por el tumor. Los cinco tumores más
plasia. Se ha demostrado que el tejido tumoral frecuentemente asociados con la hiperproduc-
produce cantidades excesivas de EPO y que la ción de EPO son el carcinoma hepatocelular,

34
el carcinoma de células renales, el hemangio- veces, la desviación standard por encima de la
blastoma cerebeloso, el feocromocitoma y el media o un valor mayor de 11 x 109/L en adul-
mioma uterino. Niveles séricos elevados de tos. La leucocitosis mayor de 50 x 109/L, no
EPO están presentes en el 23% de los pacien- leucémica, se denomina reacción leucemoide.
tes con carcinoma hepatocelular. Sin embargo, La leucocitosis es frecuentemente debida a un
la incidencia de EPO elevada es mayor que la incremento en el número absoluto de neutrófi-
de eritrocitosis, debido a la inhibición de la eri- los (neutrofilia), aunque también puede reflejar
tropoyesis por la neoplasia y al sangrado aso- un incremento en el número absoluto de linfo-
ciado con las varices esofágicas y/o la coagu- citos, eosinófilos, monocitos o más raramente
lopatía en relación con una disminución de la basófilos. La leucocitosis neutrofílica se define
producción de los factores de coagulación. como un recuento absoluto de neutrófilos ma-
La eritrocitosis ocurre en 1-5% de los pa- yor de 7.5-7.7 x 109/L.
cientes con carcinoma de células renales por
producción de EPO por el tumor. Una muta- Regulación de neutrófilos. El recuento de
ción del gen Von Hippel-Lindau presente en neutrófilos periférico refleja el equilibrio entre
muchos de estos tumores, que interviene en varios compartimentos. La médula ósea con-
la degradación de un factor intermediario de tiene un pool en división, un pool en madura-
la vía del sensor de oxígeno, hace que la pro- ción y un pool de almacenamiento. Fuera de
ducción de EPO no se detenga en ausencia de la médula ósea hay un pool circulante, un pool
hipoxia. marginal de neutrófilos adheridos al endotelio
vascular y un pool en los tejidos. El recuento
El mioma uterino se asocia con eritrocitosis se- absoluto de neutrófilos mide solo los neutró-
cundaria, niveles normales o aumentados de filos del pool circulante durante su periodo de
EPO producida por las células del leiomioma y tránsito de la médula ósea a los tejidos (3 a 6
la característica desaparición de la eritrocitosis horas).
tras la miomectomía. Una prueba de la presen-
cia del síndrome de eritrocitosis miomatosa es Causas de neutrofilia. Primarias y secunda-
la ausencia de anemia en un paciente con me- rias. En este capítulo solo vamos a hacer refe-
norragias significativas. rencia a la etiología asociada a neoplasia.
En cuanto al manejo: control de la causa sub-
yacente, si es posible resección quirúrgica del Neutrofilia secundaria a neoplasia. La leu-
tumor secretor de EPO y flebotomía o sangría cemia con frecuencia, aunque no siempre, se
para reducir la masa eritrocitaria y la hipervis- manifiesta con leucocitosis. Además, varios
cosidad, en función de la presencia de sínto- tumores sólidos se asocian con leucocitosis e
mas. Estos pacientes pueden alcanzar alivio incluso con reacción leucemoide, la cual puede
de la sintomatología con una reducción leve ocurrir en respuesta al alto grado de necrosis
del hematocrito, pero pueden empeorar si re- en la masa tumoral. La elevación del recuento
ducimos el hematocrito a un rango normal. de leucocitos presente en los tumores sólidos
es normalmente moderada, de 12-30 x 109/L.
Granulocitosis Sin embargo, se pueden alcanzar valores tan
Introducción. Los términos granulocitosis y elevados como 100 x 109/L, tanto en ausen-
neutrofilia son considerados equivalentes. La cia de metástasis medulares como en pacien-
granulocitosis puede también hacer referencia tes con infiltración medular. También pueden
a leucocitosis debida a incremento de eosinó- ocasionar un cuadro leucoeritroblástico por
filos o basófilos. El recuento absoluto de leu- infiltración directa de la médula ósea. El meca-
cocitos en adultos varía entre 4.4 y 11 x 109/L, nismo por el cual el tumor induce leucocitosis
la mayoría de los cuales (aproximadamente el no es bien conocido. Además de infiltración
60%) son neutrófilos maduros. medular e inflamación, algunos tumores sóli-
dos secretan sustancias con actividad de fac-
Definición. La leucocitosis se define como un tor estimulante de colonias granulocíticas (G-
recuento absoluto de leucocitos mayor de 2 CSF). En modelos murinos, G-CSF y GM-CSF

35
han sido aislados de tumores asociados con nofilia, distinguimos: eosinofilia leve (0.5-1.5 x
neutrofilia marcada. Las neoplasias asociadas 109/L), moderada (1.5-5 x 109/L) y severa (> 5
con leucocitosis incluyen cáncer de pulmón de x 109/L ).
célula grande (tipo broncogénico), carcinoma
de célula renal y gástrico. El tratamiento en La eosinofilia en sangre periférica se divide en
estos casos debería ser directamente el de la 3 categorías:
enfermedad subyacente. ·· Eosinofilia primaria: en neoplasias hema-
tológicas, como leucemias agudas o neo-
Granulocitopenia plasias mieloproliferativas crónicas (NMP),
Introducción. Leucopenia, granulocitopenia y con evidencia de expansión clonal de eo-
neutropenia se utilizan indistintamente. Granu- sinófilos.
locitopenia se refiere a una reducción en el ·· Eosinofilia secundaria: la causa infeccio-
número de todas las células circulantes de la sa más frecuente son los parásitos. Cau-
serie granulocítica (ej.: neutrófilos, eosinófilos y sas secundarias no infecciosas incluyen
basófilos). Leucopenia hace referencia a un re- trastornos alérgicos, medicación, toxinas,
cuento disminuido de linfocitos y/o neutrófilos enfermedades autoinmunes y endocrinas
de cualquier causa. como la enfermedad de Addison. Se ha
descrito en LH, LNH y en otros cánceres
Definición de neutropenia. Variabilidad según metastáticos, pero la eosinofilia asociada a
el centro. La neutropenia se define como un estos casos no es clonal.
recuento absoluto de neutrófilos < 1.5 x 109/L. ·· Hipereosinofilia: se define como eosinofilia
Algunas instituciones utilizan valores sensible- moderada-severa (≥ 1.5 x 109/L). La afecta-
mente diferentes, por ejemplo, OMS: neutró- ción orgánica puede estar presente pero no
filos ≤ 1.8 x 109/L. Se divide en 3 categorías: es necesaria para el diagnóstico. Cuando
Neutropenia leve (neutrófilos entre 1-1.5 x tras una evaluación minuciosa no se iden-
109/L), moderada (entre 0.5- 1 x 109/L) y grave tifica causa primaria ni secundaria y las
(< 0.5 x 109/L). manifestaciones clínicas están ausentes,
se denomina síndrome hipereosinófilo de
Neutropenia asociada a neoplasia. La neu- significado incierto.
tropenia puede ser un signo de neoplasia he-
matológica, tener en cuenta la presencia de Evaluación del paciente. La eosinofilia en
esplenomegalia y/o adenopatías. También sangre periférica pone de manifiesto con fre-
puede reflejar invasión medular por tumores cuencia un proceso alérgico, infeccioso o neo-
sólidos, produciendo mieloptisis y cuadro leu- plásico (Tabla 2).
coeritroblástico en sangre periférica. En tumo-
res sólidos, la neutropenia suele ser un efecto Eosinofilia asociada a neoplasias y enfer-
secundario de la quimioterapia. Muchos agen- medades hematológicas. La eosinofilia pue-
tes quimioterápicos citotóxicos causan mielo- de aparecer asociada a hemopatías benignas
supresión, con nadir en el recuento de leuco- o malignas y a tumores sólidos.
citos que ocurre de días a pocas semanas tras ·· Síndrome hipereosinófilo: se asocia con
su administración, según el agente específico. eosinofilia marcada en sangre periférica y
En determinadas circunstancias, (administra- afectación multiorgánica (cardíaca, tracto
ción quimioterapia intensiva), cuando la pro- gastrointestinal, pulmones, cerebro y riño-
babilidad de neutropenia prolongada es alta, nes). Algunos son idiopáticos, otros están
el soporte con G-CSF o GM-CSF puede estar asociados a linfocitos aberrantes o anor-
indicado. malidades cromosómicas que dan lugar a
la activación del receptor tirosin-quinasa.
Eosinofilia
Definición. Un valor absoluto de eosinófilos en ·· Mastocitosis: se caracteriza por la prolife-
sangre periférica > 0.5 x 109/L es anormal en la ración y acumulación de mastocitos en di-
mayoría de los casos. Según el grado de eosi- ferentes órganos: piel, hígado, bazo, médu-

36
la ósea y ganglios linfáticos. Los síntomas displásicos, con concentraciones plasmá-
son el resultado de las organomegalias, ticas normales de IL 3 y 5, hiperplasia me-
alteraciones hematológicas o cutáneas y dular con displasia mieloide y tendencia a
complicaciones debidas a la liberación de progresar a LMA.
mediadores de los mastocitos. La eosinofi-
lia periférica acompaña a la mastocitosis ·· Linfomas: aproximadamente un 15% de
sistémica en un 20% de casos y la biopsia los pacientes con LH y un 5% de los LNH-
de médula ósea muestra con frecuencia hi- B tienen una leve eosinofilia periférica. La
pereosinofilia. eosinofilia en el LH se correlaciona con la

Tabla 2. Causas de eosinofilia

Causas de eritrocitosis: asma (extrínseco e intrínseco, poliposis nasal y síndrome de


intolerancia a la aspirina), rinitis alérgica, urticarias, dermatitis atópica, reacciones de
hipersensibilidad a fármacos.

Infecciones: por parásitos (sobre todo helmintos), fúngicas específicas (aspergilosis


broncopulmonar y coccidioidomycosis) y otras (virus y bacterias, infrecuentes).

Neoplasias y enfermedades hematológicas: síndrome hipereosinófilo, leucemia, linfomas,


tumores sólidos y mastocitosis.

Enfermedades con afectación orgánica específica:


·· Cutáneas (dermatitis atópica, urticaria, eczema, episodio de angioedema y eosinofilia).
·· Pulmonares (bronquiectasias, fibrosis quística, síndrome de Löeffler).
·· Gastrointestinales (gastroenteritis eosinofílica, esofagitis eosinofílica, enfermedad
celíaca).
·· Conectivopatías (síndrome Churg-Strauss, granulomatosis de Wegener, AR, PAN, LES,
esclerodermia, fascitis/miositis eosinofílica).
·· Cardíacas (fibrosis o miocarditis eosinofílica endomiocárdica).
·· Renales (cistitis eosinofílica, rechazo injerto renal).

Enfermedades del sistema inmune: síndrome Wiskott-Aldrich, síndrome Hiper-IgE (de


Job), síndrome Hiper-IgM, deficiencia de IgA.

Trastornos endocrinos: insuficiencia adrenal.

AR: artritis reumatoide. PAN: poliarteritis nodosa. LES: lupus eritematoso sistémico

·· Leucemia eosinofílica aguda: es una varian- expresión de IL-5mRNA por las células de
te del subtipo M4 de la clasificación FAB y Reed-Sternberg. El LNH linfoblástico T y la
presenta anormalidades en el cromosoma leucemia/linfoma T del adulto se han aso-
16. Otras leucemias agudas que pueden ciado con eosinofilia por un mecanismo si-
presentar eosinofilia son: LLA-B con t(5;14) milar. En el síndrome de Sezary, la disregu-
y LNH linfoblástico T con t(8;13). La Leuce- lación de la producción de citoquinas por
mia eosinofílica crónica es una enfermedad los linfocitos Th2 se asocia con un aumen-
mieloproliferativa crónica clonal caracteri- to sérico de IgE y eosinofilia.
zada por la hiperproducción de eosinófilos

37
·· En los tumores sólidos, el hallazgo de infil- Una vez se objetiva trombocitosis, hay que
tración eosinofílica no afecta al pronóstico. confirmarlo mediante la repetición del hemo-
Suelen ser secretores de mucina. Se inclu- grama y la revisión de una extensión de sangre
yen: tumores cervicales de célula grande periférica, para excluir casos de trombocitosis
no queratinizantes, carcinomas de pulmón espúrea. Si la trombocitosis se confirma, cabe
indiferenciados, cáncer de ovario, carci- prestar especial atención a las siguientes situa-
nomas escamosos de vagina, pene, piel y ciones: trauma o cirugía recientes (sobre todo
nasofaringe, adenocarcinoma gástrico, de a esplenectomía previa), signos que sugieran
colon y útero y carcinoma urotelial de vejiga. proceso infeccioso o inflamatorio, historia de
sangrado, trombosis o deficiencia de hierro,
Trombocitosis diagnóstico previo de enfermedad hematoló-
Introducción. El límite alto de la cifra de pla- gica y sintomatología sugestiva de neoplasia
quetas considerada normal en adultos, oscila (pérdida de peso, astenia).
entre 350-450 x 109/L. La trombocitosis se de-
fine como un valor de plaquetas > 450 x 109/L Si descartamos un proceso reactivo, tendre-
(OMS). Puede ser un fenómeno reactivo o un mos que clasificar la trombocitosis en NMP vs.
marcador de enfermedad hematológica (ca- SMD. Esta es una posibilidad diagnóstica ra-
racterística de presentación de una NMP o zonable en un paciente con trombocitosis cró-
SMD, síndrome 5q-). Una trombocitosis reac- nica, ferritina normal y un bazo intacto.
tiva leve-moderada ocurre con frecuencia al
inicio de tumores sólidos. Si esto contribuye al Trombocitopenia
estado de hipercoagulabilidad asociado a las La causa más frecuente de trombocitopenia
neoplasias es incierto. en pacientes con cáncer es el tratamiento
con quimioterapia o radioterapia. La invasión
Definiciones. La elevación en la cifra de pla- medular es también una causa común de
quetas puede ser causada por un mecanismo trombopenia en pacientes con neoplasias
mediado por citoquinas (reactivo) o el resulta- hematológicas y tumores sólidos. En algunos
do de un factor de crecimiento independiente SLP puede aparecer trombocitopenia asociada
(autónomo), con la consiguiente hiperproduc- de mecanismo autoinmune. En estos casos,
ción de plaquetas por megacariocitos clona- además del control del SLP subyacente, puede
les/neoplásicos, como en un NMP o SMD. ser necesario el tratamiento con esteroides y
otros inmunosupresores. Al igual que en otros
·· Trombocitosis reactiva: pacientes con una cuadros inmunes asociados a neoplasia, el
condición médica o quirúrgica (cirugía, in- rituximab también ha mostrado ser efectivo
fección bacteriana, trauma) que se asocia en el tratamiento de la trombopenia inmune
con un incremento en la cifra de plaquetas asociada a SLP. Otras causas de trombopenia
que se normalizará tras la resolución del son las que se producen por aumento de la
proceso. destrucción de plaquetas en la microcirculación
en la AHM (PTT) y por consumo en la CID
·· Trombocitosis autónoma: trombocitosis en asociadas al cáncer.
la presencia de un diagnóstico estableci-
do de NMP (trombocitemía esencial (TE), Hipercoagulabilidad
PV, mielofibrosis primaria (MFP), leucemia asociada al cáncer
mieloide crónica (LMC)) o SMD (los que se Fisiopatología. La hipercoagulabilidad aso-
asocian más frecuentemente con trombo- ciada al cáncer implica la interrelación de múl-
citosis son el síndrome 5q- y la anemia re- tiples factores que incluyen sustancias pro-
fractaria sideroblástica). coagulantes producidas por el tumor (factor
tisular y procoagulante del cáncer) o por cé-
El diagnóstico de TE es por exclusión de las lulas normales en respuesta al tumor (mono-
causas de trombocitosis reactiva y de los otras citos, plaquetas, células endoteliales) y otras
neoplasias mieloproliferativas. condiciones comórbidas (reposo, infección,

38
cirugía, quimioterápicos, etc). El factor tisular del 10% de los pacientes con carcinoma de
(FT) forma un complejo con el factor VII para páncreas.
activar los factores IX y X iniciando la cascada
de la coagulación. El FT es una proteína trans- La mayoría de neoplasias asociadas con even-
membrana expresada por células parenquima- tos tromboembólicos son clínicamente eviden-
tosas y del tejido conectivo humano normal y tes y diagnosticadas previamente, aunque en
por células de sarcoma, melanoma, neuroblas- algunos casos pueden preceder al diagnóstico
toma, linfoma, cáncer pancreático y colorrec- de neoplasia meses o años. Los pacientes con
tal, carcinoma ovárico de células claras y de neoplasias hematológicas tienen mayor ries-
la leucemia promielocítica aguda (LPA). Este go de desarrollar trombosis venosa profunda
FT está implicado en la hipercoagulabilidad (TVP) (OR 28), seguidos por neoplasias de pul-
asociada con LPA y con menor frecuencia con món (OR 22), tracto gastrointestinal (OR 20),
otros tipos de leucemia. cerebro (OR 6.7), riñón (OR 6.2) y mama (OR
4.9). El riesgo de TVP es mayor en los primeros
El procoagulante del cáncer (PC) es una cis- 3 meses desde el diagnóstico de la neoplasia.
teína proteasa dependiente de calcio aislada Los pacientes con TVP tienen una incidencia
en tejido maligno y fetal, pero no en el tejido clínicamente significativa de neoplasia que se
normal. El PC activa el factor X, independien- diagnostica de 3-6 meses tras la presentación
temente del FT. Está presente en extractos de de la trombosis.
células obtenidas de pacientes con LPA, me-
lanoma maligno y neoplasias de colon, mama, La trombosis de la vena hepática (síndrome de
pulmón y riñón. Budd-Chiari) o de la vena porta se asocia con
síndromes mieloproliferativos (PV). Hasta un
La diferenciación celular inducida por el ácido 75% de los pacientes con trombosis portal o
all-trans-retinoico (ATRA) disminuye la expre- de la vena hepática idiopática pueden tener un
sión del FT y del PC y mejora el estado de síndrome mieloproliferativo oculto. Los carci-
hipercoagulabilidad. nomas de células renales, adrenales y los he-
patomas también se asocian con la trombosis
El tejido del huésped también puede expresar de la vena hepática. Ciertas neoplasias están
actividad procoagulante en respuesta a es- más frecuentemente asociadas con tromboe-
tímulos del tumor. Están implicados los mo- mbolismo venoso y otros cuadros de hiper-
nocitos (inducen la producción de FT y otros coagulabilidad. Así, algunos tumores sólidos
activadores del factor X), plaquetas (aumento (páncreas, cerebral, gástrico) se asocian con
de la activación plaquetaria en síndromes mie- una alta incidencia de tromboembolismo veno-
loproliferativos clonales, producción de trom- so. Un estadio avanzado del tumor también se
bina, ADP y niveles elevados de FVW inducido asocia con mayor riesgo de TVP.
por el tumor) y las células endoteliales (factor
de necrosis tumoral (TNF) e IL 1.) El tratamiento de la TVP con anticoagulantes
en pacientes con cáncer se asocia con una
Trombosis venosa. El Síndrome de Trous- alta incidencia de recurrencia y de hemorragia
seau (ST: tromboflebitis migratoria superficial, mayor. El uso de heparinas de bajo peso mole-
flegmasia alba dolens) es una variante rara de cular (HBPM) puede ser más efectivo y seguro
trombosis venosa caracterizada por una trom- que la anticoagulación oral en pacientes con
boflebitis superficial migratoria y recurrente, en TVP y cáncer. Se recomienda mantener anti-
localizaciones infrecuentes del brazo o el tórax. coagulación indefinida con HBPM en pacien-
Los pacientes con ST generalmente tienen un tes con cáncer avanzado o hasta remisión y si
tumor oculto, que no siempre es evidente en el el paciente está recibiendo quimioterapia.
momento de la presentación. Si se descubre el
tumor, con frecuencia es un adenocarcinoma. Trombosis arterial. Es mucho menos frecuen-
La mucina producida por estos tumores puede te que la TVP y la causa más común es la endo-
desencadenar este síndrome. Ocurre en más carditis trombótica no bacteriana (endocarditis

39
marántica). La trombosis de las arteriolas del gulación con fibrinolisis secundaria: disminu-
sistema nervioso central y de las extremidades ción de fibrinógeno y plaquetas, elevación de
se asocian con síndromes mieloproliferativos, los productos de degradación del fibrinógeno
en especial TE y PV. La isquemia digital puede (PDF) y cambios mínimos en los tiempos de
ser un fenómeno paraneoplásico en tumores coagulación (TP y/o TTPA).
sólidos.
PÚRPURA TROMBÓTICA
COAGULACIÓN INTRAVASCULAR TROMBOCITOPÉNICA
DISEMINADA La PTT se caracteriza por AHM, trombopenia
Introducción. Es la coagulopatía más frecuen- por consumo, lesiones trombóticas microvas-
te asociada al cáncer. El cáncer es la tercera culares y la afectación trombótica de varios
causa más frecuente de CID después de la órganos específicos. Se presenta con trombo-
sepsis bacteriana y el traumatismo grave. citopenia, aumento del consumo y de la pro-
ducción de plaquetas pero no de fibrina, con
Fisiopatología. El mecanismo de la activación niveles de los factores de la coagulación gene-
de la coagulación es poco conocido. La CID ralmente normales y con TTPA o TP normales
se desencadena por la generación excesiva o ligeramente prolongados (ver AHM). Puede
y descontrolada de trombina que produce un ocurrir en más del 6% de pacientes con carci-
extenso y sistémico depósito intravascular de noma metastásico.
fibrina. La consecuencia es hemorragia grave,
isquemia tisular, complicaciones trombóticas y El mecanismo de la PTT asociada a neoplasia
anemia hemolítica microangiopática. es desconocido. Presenta dos diferencias fun-
damentales con la PTT idiopática:
CID aguda. Con frecuencia en LPA y adeno-
carcinomas. Los procoagulantes FT y PC son 1. Los niveles de la proteasa que fragmenta
importantes en la CID asociada a LPA que está los multímeros de FVW son normales a di-
caracterizada por un estado de hiperfibrinolisis ferencia de la marcada disminución obser-
además de la activación de la coagulación. La vada en la PTT idiopática.
CID aguda se manifiesta con hemorragia por
consumo de los factores de coagulación. En la 2. Los pacientes responden poco a nada a la
LPA, la CID puede ser evidente al diagnóstico plasmaféresis, el tratamiento de elección
o poco después del inicio del tratamiento. El de primera línea en la PTT idiopática.
carcinoma de próstata también puede asociar-
se con síntomas hemorrágicos, mediante la Cuando un paciente con PTT tiene una pre-
activación de la fibrinolisis. sentación atípica o no responde a la plasmafé-
resis, debe investigarse la presencia de una
CID crónica. El cáncer, en especial los tumo- neoplasia sistémica, incluyendo la realización
res sólidos, es la causa más frecuente. Estos de una biopsia de médula ósea. Los pacientes
pacientes tienen una situación de hipercoa- con PTT y neoplasia generalmente fallecen en
gulabilidad, pudiendo desarrollar TVP, isque- pocas semanas desde el diagnóstico si no se
mia digital, infartos renales, ACVA, etc. La CID controla la neoplasia subyacente.
crónica o compensada se produce cuando
la sangre está expuesta continua o intermi-
tentemente a pequeñas cantidades de FT y
los mecanismos compensadores (producción
hepática de factores de la coagulación y de
plaquetas en médula ósea) son capaces de
mantener niveles suficientes de factores de la
coagulación y plaquetas. Muchos pacientes
están asintomáticos pero las pruebas de coa-
gulación revelan una activación leve de la coa-

40
Casos clínicos
Autores:
P. Martínez-Barranco
F. J. Peñalver
Unidad de Hematología. Fundación Hospital Alcorcón

CASO CLÍNICO 1: PÚRPURA TROMBÓTICA (AHM y trombocitopenia) se estableció el diag-


TROMBOCITOPÉNICA PARANEOPLÁSICA nóstico de púrpura trombótica trombocitopéni-
Paciente varón de 70 años de edad que acu- ca (PTT) secundaria a cáncer gástrico. Se re-
dió a urgencias por hemorragia digestiva con comendó el tratamiento de la enfermedad de
anemización importante. En la endoscopia se base. Se inició tratamiento quimioterápico palia-
objetivó hemorragia activa secundaria a lesión tivo con oxaliplatino y capecitabina, con mejoría
proliferativa gástrica, sugestiva de carcinoma. progresiva de las alteraciones hematológicas y
Se trató inicialmente con soporte hemoterápico. progresivo descenso de la LDH (Tabla 1). Antes
En el estudio realizado destacaba: del alta el paciente presentaba independencia
transfusional.
·· Rx de tórax: derrame pleural bilateral de es-
casa cuantía.
·· TAC toraco-abdomino-pélvico: derrame CASO CLÍNICO 2: COAGULACIÓN
pleural bilateral. Engrosamiento difuso de la INTRAVASCULAR DISEMINADA
pared gástrica, con engrosamiento del epi- Paciente varón de 86 años de edad diagnosti-
plón mayor, moderada ascitis (sobre todo cado en septiembre/07 de tumor vesical infil-
perihepática y en gotiera derecha). Trabecu- trante pT2G3, con metástasis ganglionares en
lación y aumento de atenuación de la grasa retroperitoneo.
mesentérica. Nodularidad retroperitoneal
(peripancreática) y en hilio hepático de pe- En el estudio realizado por hematuria macros-
queño tamaño. Posibles depósitos en es- cópica se objetivó:
queleto axial: sútil interrupción de la cortical ·· Citología positiva.
en margen anterolateral izquierdo de D10. ·· Cistoscopia: tumor de aspecto mixto en
·· Biopsia gástrica: mínimos fragmentos de cara anterior.
adenocarcinoma gástrico, de tipo tubular, ·· RTUV: lesiones polipoideas sólidas en cara
moderadamente diferenciado. posterior y toda la cara anterior de aspecto
infiltrante. Se realizó resección incompleta.
Con estos hallazgos, se confirmó el diagnóstico ·· TAC toraco-abdomino-pélvico: persisten-
de adenocarcinoma gástrico estadio IV con me- cia de gran masa vesical afectando toda la
tástasis peritoneales y probablemente óseas. vejiga. Hidronefrosis II/IV bilateral. Múltiples
Durante el ingreso desarrolló anemia severa adenopatías retroperitoneales.
sin rendimiento transfusional, con elevadas ne-
cesidades transfusionales (2 concentrados de Se planteó cistectomía paliativa por gran sufri-
hematíes (CH)/día) y trombopenia grado 3-4 miento vesical que el paciente rechazó. Ante-
(plaquetas de 20-50 x 109/L)). Destacaban da- cedentes de carcinoma de colon tratado quirúr-
tos bioquímicos de hemólisis con LDH elevada gicamente en diciembre/2002.
y haptoglobina baja. En la extensión de sangre
periférica se objetivó esquistocitosis y trombo- Ingresó por deterioro del estado general y he-
penia severa compatible con anemia hemolítica maturia severa con anemia de altos requeri-
microangiopática (AHM). Con estos hallazgos mientos transfusionales (2 CH/24-48 horas).

41
Casos clínicos

Tabla 1. Evolución analítica durante el ingreso

Datos de laboratorio Al diagnóstico Durante el ingreso Al alta

Leucocitos x 109/L 11.120 11.470 14.590

Hemoglobina (g/dl) 6.7 8.1 9.6

Plaquetas x 109/L 44 31 214

LDH (240-480 U/L) 2147 5380 837

PT (actividad %) 66.8 97.3 86.9

TTPA (segundos) 29.2 32.7 24.4

Fibrinógeno (150-400 mg/dl) 260 454 132

42
La analítica realizada mostraba alargamiento Coombs directo negativa con elevados reque-
de los tiempos de coagulación (TP y TTPA) con rimientos transfusionales, trombopenia grave
trombopenia grado 4 (plaquetas < 25 x 109/L). progresiva y la presencia característica de es-
En la extensión de sangre periférica se objeti- quistocitos (hematíes fragmentados) en la ex-
vó cuadro leucoeritroblástico y destacaban las tensión de sangre periférica, además de datos
alteraciones de la serie roja con anisocitosis, bioquímicos de hemólisis (aumento de LDH, de
esferocitosis discreta, policromasia, algunos bilirrubina indirecta y descenso de haptoglobi-
dacriocitos y esquistocitos, junto con trombo- na). Este cuadro puede manifestarse de forma
penia severa, compatible con anemia microan- similar en la PTT y en la CID secundarias a neo-
giopática. plasias. Aunque los datos clínicos y analíticos
son muy similares, ambos cuadros presentan
En resumen, el paciente presentaba un cuadro diferencias que se resumen en la tabla 3. En
leucoeritroblástico en sangre periférica sugesti- general, los pacientes con PTT cursan con
vo de infiltración medular por su neoplasia de AHM y trombopenia más severa con esquis-
base, con trombopenia grado 4 de doble com- tocitosis importante pero con coagulación nor-
ponente (consumo e hipoproducción) y datos de mal o alterada levemente. Por el contrario, en
coagulopatía intravascular diseminada (Tabla 2). los pacientes con CID destaca la coagulopatía
El paciente falleció a los 4 días del ingreso. con hiperfibrinolisis, trombopenia por consu-
mo algo más moderada y anemia hemolítica
microangiopática menos severa.
Comentario. Presentamos dos casos de ane-
mia hemolítica microangiopática asociada a Aunque ambos cuadros se manifiesten de
cáncer. La AHM se presenta con anemia grave forma similar son dos entidades distintas. El

Tabla 2. Evolución analítica durante el ingreso

Datos de laboratorio Basal Al ingreso (día 0) +1 Pre-exitus (+3)

Leucocitos x 109/L 11.120 11.470 14.590 11.470

Hemoglobina (g/dl) 6.7 8.1 9.6 8.1

Plaquetas x 109/L 44 31 214 31

LDH (240-480 U/L) 2147 5380 837 5380

PT (actividad %) 66.8 97.3 86.9 97.3

TTPA (segundos) 29.2 32.7 24.4 32.7

Fibrinógeno(150-400 mg/dl) 260 454 132 454

(1)CLE: Cuadro leucoeritroblástico


*Hemoglobina post-transfusional

43
Casos clínicos

Tabla 3. Diagnóstico diferencial entre PTT y CID

Anemia Trombopenia 5 Esquistocitos 5 LDH 9 Fibrinógeno 5 DD TP/TTPA


(< 8g/dl) (< 25x109/L) (alargados)

PTT +++ +++ +++ +++ 0/+ 0/+ 0/+

CID + ++ + + +++ +++ +++

DD: Dímero D

mecanismo de la PTT asociada al cáncer es (secundaria a mieloptisis) y de consumo por


desconocido y a diferencia de la PTT idiopá- CID. El paciente tenía una neoplasia vesical di-
tica, los niveles de proteasa que fragmenta seminada con exposición de tejido tumoral a la
los multímeros de FvW (ADAMTS-13) son nor- circulación e infiltración medular. La exposición
males y por tanto no responden al recambio del tejido tumoral puede producir un estímulo
plasmático o plasmaféresis. El estímulo inicial continuo de la coagulación con hiperfibrinolisis
puede ser un daño endotelial o una activación secundaria que se manifiesta con alargamien-
primaria de las plaquetas desencadenado por to de los tiempos de coagulación (TP y TTPA)
el tumor que produce un consumo directo de y el descenso del fibrinógeno. Este estímulo
estas por la formación de microtrombos en la mantenido puede hacer claudicar los meca-
microcirculación. En la CID, factores procoa- nismos compensadores (producción hepática
gulantes producidos por el tumor o el estímulo de factores de coagulación y producción de
de la coagulación producido por efecto direc- plaquetas por la médula ósea). La anemia en
to del tumor desencadenan la activación de la este cáncer diseminado con infiltración medu-
coagulación con hiperfibrinolisis. lar pudo también tener un mecanismo mixto:
anemia hiporregenerativa por mieloptisis, un
El caso 1 es un ejemplo de PTT asociada a componente de AHM por destrucción de los
adenocarcinoma, como forma de presentación hematíes en la microcirculación y sangrado
del tumor. Los adenocarcinomas mucinosos (hematuria).
son los tumores que con más frecuencia de-
sarrollan PTT, en especial los adenocarcino- Los pacientes con PTT o CID asociada al
mas gástricos, como en el caso que nos ocu- cáncer tienen muy mal pronóstico y pueden
pa. La PTT puede ser la forma de presentación fallecer en pocos días o semanas desde el
del cáncer y puede asociarse con cánceres diagnóstico. Los mecanismos implicados en
diseminados con frecuencia ocultos. desencadenar estas entidades están directa-
mente relacionados con el tumor. El tratamien-
El caso 2 cursó con un cuadro leucoeritro- to de la neoplasia subyacente es la única es-
blástico, que indica mieloptisis o infiltración trategia terapéutica que puede controlar estos
neoplásica medular, y datos de coagulopatía cuadros.
intravascular diseminada. La trombopenia tan
severa probablemente reflejaba un componen-
te mixto de trombopenia por hipoproducción

44
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45
Capítulo 4
Síndromes paraneoplásicos
cardiovasculares
Autores:
Javier Espinosa Arranz, Rafael López Bajo, Rocío Galán Moral,
Milagros García Pérez, María Dolores Pineda Pineda, Mercedes
Murcia Simón, Roberto Gómez Díaz
Servicio de Oncología Médica, Hospital General de Ciudad Real

Introducción de los pacientes con un episodio de trombosis


La relación entre el cáncer y las alteraciones o embolismo idiopático tendrán un diagnóstico
en la coagulación es bien conocida. Trous- de malignidad en los dos años siguientes2,3. En
seau identificó por primera vez la trombosis los pacientes oncológicos son más probables
como una complicación del cáncer en 1865 las recidivas de la trombosis a pesar del tra-
y la combinación de ambas condiciones es lo tamiento anticoagulante y las complicaciones
que se ha venido llamando clásicamente como hemorrágicas.
síndrome de Trousseau. En el 10% a 15% de
los pacientes diagnosticados de cáncer es po- En este apartado se van a repasar los meca-
sible diagnosticar una trombosis venosa es- nismos patogénicos subyacentes a las com-
pontánea, un tromboembolismo después de plicaciones tromboembólicas relacionadas
una cirugía oncológica, un tromboembolismo con el cáncer, el diagnóstico, el tratamiento y
durante el tratamiento quimioterápico o una la prevención.
trombosis de un acceso venoso central. Los
tumores pueden producir trombosis por me- ETIOPATOGENIA
canismos locales, por ejemplo por compresión Las causas de trombosis en el cáncer son
de la vena cava en los tumores de pulmón o múltiples. El tumor libera factores procoagu-
de la vena renal en el cáncer renal. La inmo- lantes que activan la coagulación sanguínea
vilización también contribuye a la enfermedad produciendo trombina, que, a su vez, favorece
tromboembólica. Aproximadamente el 20% de la angiogénesis, el crecimiento y la progresión
todos los episodios tromboembólicos parecen tumoral. Esta interacción entre células tumora-
secundarios a una enfermedad maligna, lo que les, sistema hemostático y células sanguíneas,
significa que el cáncer es una de las causas junto con ciertas características del tumor y del
más importantes de este tipo de episodios. tratamiento oncológico son factores de riesgo
Una trombosis puede ser la primera manifesta- que condicionan una etiopatogenia de enfer-
ción clínica de un cáncer. Las complicaciones medad tromboembólica (ETE) en la que están
tromboembólicas ocurren con mayor frecuen- implicados tres mecanismos fisiopatológicos:
cia en el árbol venoso; es la trombosis venosa estado de hipercoagubilidad, daño endotelial y
profunda la situación más frecuente y que en estasis del flujo sanguíneo. (Tabla1)
muchas ocasiones amenaza la vida del enfer-
mo. La supervivencia se encuentra reducida en El proceso parece iniciarse con la interacción
general en los pacientes que presentan esta entre las células del sistema monocito-macró-
patología asociada al cáncer1. fago y las células tumorales: aquellas liberan
el factor de necrosis tumoral, la interleukina-1
La presencia de una neoplasia incrementa el y la interleukina-6. Ello provoca por una parte,
riesgo de trombosis entre 4 y 7 veces, y por otro el daño en la pared endotelial, creando una su-
lado, entre un 4% y un 10% según las series perficie proclive a la trombogénesis: quedando

46
Tabla 1. Etiopatogenia

Estado protrombótico o de hipercoagubilidad

Procoagulantes de las células tumorales: factor tisular, factor procoagulante del cáncer,
fracción de ácido siálico de la mucina de los adenocarcinomas y citocinas liberadas por las
células tumorales (IL-1, VEGF, TNF- α)

Interacción de las células tumorales con las plaquetas, el sistema monocito-macrófago


y células endoteliales: interacción mediante células de adhesión e interacción indirecta
mediante citocinas (Il-1, IL-6, VEGF, TNF-α)

Alteraciones familiares o adquiridas de la coagulación: trombofilias

Hipoxia tisular

Daño endotelial

Cirugía del cáncer

Terapia antitumoral

Accesos venosos centrales

Estasis circulatoria

Inmovilización prolongada del paciente

Compresión vascular extrínseca del tumor

al descubierto el factor tisular subendotelial. densidad vascular y un pronóstico desfavora-


El factor tisular también se puede expresar ble, así como con la enfermedad más avanza-
de forma aberrante en las células del sistema da. El factor tisular, además de favorecer la an-
monocito-macrófago, en las células endote- giogénesis, incrementa el crecimiento tumoral
liales y en las propias células tumorales. Las y favorece la metastatización1.
primeras no suelen expresar el factor tisular,
pero la estimulación por endotoxinas o cito- En la primera fase, de iniciación, el factor tisu-
quinas inflamatorias y factores complementa- lar activa el factor VII, formando un complejo
rios pueden inducir a expresarlo. Las células con él, el cual a su vez activa al factor X. Jun-
endoteliales, que habitualmente no expresan to con el factor Va, el factor Xa es capaz de
el factor tisular, lo pueden hacer por citoqui- convertir la protrombina en trombina (factor II
nas como el factor de necrosis tumoral-α y la a factor IIa). Esta induce la formación del coá-
IL-1ß producidas por las células neoplásicas. gulo induciendo la conversión de fibrinógeno
Estas citoquinas además inducen la expresión a fibrina1. En la segunda fase, de propagación,
de moléculas de adhesión sobre las células el complejo factor tisular/factor VIIa activa el
endoteliales, capaces de atraer a otras célu- factor IX, que junto con el VIIIa, activa al X. Ello
las tumorales. El acúmulo de células neoplá- se traduce nuevamente en la conversión de
sicas induce la expresión de factor tisular en protrombina en trombina y de fibrinógeno a fi-
las células endoteliales. La expresión de fac- brina. Se activan además las plaquetas y otros
tor tisular en las células tumorales, aparte de factores como el V, el VIII y el XI. Los fosfolípi-
ser un factor importante en la hipercoagulabi- dos cargados negativamente (presentes en la
lidad inducida por cáncer, se correlaciona con membrana plaquetaria) y el calcio, son esen-
la angiogénesis (favorece la síntesis del factor ciales en el proceso de formación de la fibrina1.
de crecimiento endotelial vascular –VEGF–), la

47
Por otra parte, la liberación de sustancias por junto con el factor tisular, así como por las mo-
el sistema monocito-macrófago es capaz de léculas de mucina y ácido siálico de los ade-
provocar la activación de las plaquetas y de nocarcinomas.
los factores X y XII de la coagulación directa-
mente, lo cual genera trombina y la trombosis4. Hay diversos mecanismos que ocasionan daño
El factor X también se puede activar por las endotelial y esto contribuye a la trombosis (Ta-
cisteína-proteasas, sustancias procoagulantes bla 2). Entre los cuáles tenemos:

Tabla 2. Factores de riesgo

Factores asociados a la propia neoplasia

Enfermedad tumoral activa

Localización del tumor primario (páncreas, estómago, tumores cerebrales, pulmón,


linfoma, mieloma, ginecológicos y genitourinarios, excepto próstata)

Presencia de adenopatías voluminosas con compresión vascular extrínseca

Enfermedad avanzada o metastásica

Factores relacionados con el paciente

Edad avanzada (> 65años)

Presencia de comorbilidades: obesidad, infecciones, insuficiencia renal, cardíaca

Hospitalización e inmovilización prolongada

Raza negra

Sexo femenino

Embarazo

Cifras de plaquetas ≥ 350000/mm³, leucocitos ≥11000/mm³ y Hemoglobina < 10 previa a


quimioterapia

Consumo de tabaco

Estados de trombofilia geneticamente determinados o adquiridos

Factores asociados al tratamiento antineoplásico

Cirugía mayor reciente

Administración de quimioterapia

Presencia de catéter venoso central

Terapia hormonal: moduladores selectivos de receptor de estrógenos, acetato de


megestrol y fosfato de estramustina

Terapia antiangiogénica

Uso de factores estimulantes de eritropoyetina

48
Variables predictivas independientes Puntuación

Índice de masa corporal ≥ 35 kg/m² 1

Localización del tumor primario:


0
·· Bajo riesgo (mama, colorrectal, cabeza y cuello)

·· Alto riesgo (pulmón, linfoma, ginecológico y genitourinario,


excepto próstata) 1

·· Muy alto riesgo (estómago y páncreas) 2

Recuento plaquetario previo a ≥ 350000/mm³ 1

Hemoglobina basal < 10 g/ml y uso de factores estimulantes de


eritropoyetina 1

Recuento leucocitario previo a quimioterapia > 11.000/mm³ 1

Categorias de riesgo y tasas de ETV asociada a la quimioterapia: bajo riesgo (0 puntos): 0.3-0,8%;
alto riesgo (1-2 puntos): 1,8-2% y muy alto riesgo ≥ 3: 6,7-7,1%.

1. La cirugía del cáncer. En las primeras etapas de la enfermedad, entre


2. Accesos venosos centrales: la superficie el diagnóstico y el tratamiento antineoplásico
trombogénica de los catéteres venosos el riesgo se incrementa y es mayor durante las
centrales puede activar las plaquetas y los hospitalizaciones. En el periodo de remisión es
factores X y XII de la coagulación. Si ade- más bajo, y vuelve a incrementarse con la reci-
más se sobreinfectan por gram negativos, diva y en etapa de fase terminal.
que liberan endotoxina, o por gram positi-
vos, que liberan mucopolisacáridos, se al- Recientemente Khorana et al.5 Han desarrolla-
tera la pared endotelial y se activa el factor do un modelo simple para predecir ETV aso-
XII, aumentando el riesgo de trombosis4. ciada a la quimioterapia basada en variables
3. Diversos tratamientos empleados en on- clínicas y de laboratorio (Tabla 3).
cología, tales como los derivados del pla-
tino, el 5FU a altas dosis, la mitomicina, CLÍNICA Y DIAGNÓSTICO.
el tamoxifeno y los factores estimulantes 1-TROMBOSIS VENOSA PROFUNDA
pueden aumentar el riesgo de trombosis La trombosis venosa profunda (TVP) es la ma-
quizá por el daño vascular que inducen4. nifestación clínica más frecuente del estado
de hipercoagulabilidad asociado al cáncer. La
También hay que tener en cuenta la situación localización más frecuente es en miembros in-
de estasis sanguíneo facilitada por la compre- feriores, pero puede presentarse en otros pun-
sión extrínseca que ejerce el tumor sobre los tos si existen factores locales que contribuyan:
vasos sanguíneos o a la inmovilización prolon- vena cava superior, la vena porta, las venas re-
gada, sobre todo en una larga estancia hospi- nales, etc. Así mismo, contribuyen los catéte-
talaria favoreciéndose el estado protrombótico. res venosos centrales6. La cirugía oncológica,
en particular la cirugía abdominal y la craneo-
Por otra lado, hay una gran variedad de facto- tomía, conllevan mayor riesgo de TVP. Trata-
res de riesgo relacionados con complicaciones mientos como la quimioterapia a altas dosis, el
tromboembólicas que se pueden dividir en tres trasplante autólogo de médula ósea, la quimio-
grupos: a) relacionados con el propio cáncer; radioterapia en tumores ginecológicos, el tra-
b) factores específicos del paciente, y c) rela- tamiento con bevacizumab o con talidomida o
cionados con el tratamiento administrado. el tamoxifeno, confieren especial riesgo7.

49
Predicción clínica y analíticas son reflejo de la obstrucción de las
Los síntomas clásicos (dolor, aumento de la arterias pulmonares, en relación directa con el
temperatura local, el enrojecimiento y el ede- tamaño del trombo desprendido. Se trata de
ma) se observan en pocos pacientes, por lo un cuadro clínico muy grave que en muchas
que nos tendremos que ayudar de la sospecha ocasiones acaba con la vida del enfermo. Se
y las pruebas complementarias. dice que es la segunda causa de muerte en los
pacientes oncológicos (alrededor del 11%).
El diagnóstico debe comenzar con la sospecha
clínica. El riesgo de enfermedad tromboembólica Los síntomas más frecuentes son: disnea
venosa (ETV) aumenta con el número de facto- (84%), dolor pleurítico (76%), inquietud, sensa-
res de riesgo que presenta el paciente. Existen ción de gravedad (63%), tos (50%), dolor en la
varios sistemas de puntuación que intentan va- pantorrilla (39%), sudoración (36%) y hemop-
lorarlo, aunque ninguno de ellos está validado tisis (28%). Otros síntomas menos frecuentes
totalmente. Ante un paciente con factores de son: dolor no pleurítico, síncope, palpitaciones
riesgo, podemos basarnos en un modelo pre- y dolor anginoso. La disnea y el dolor pleurítico
dictivo clínico (Tabla 4) y realizar después una al mismo tiempo lo presenta el 40% de los en-
prueba de imagen. fermos, mientras que la disnea, el dolor pleurí-
tico y la hemoptisis a la vez, el 22%.

Tabla 3. Modelo predictivo de TVP basado en el modelo predictivo de Wells et al.8

Característica clínica Puntos

Cáncer activo (tratamiento en curso o en los últimos 6 meses o paliativo) 1

Parálisis, paresia o reciente inmovilización de las extremidades inferiores 1

Reciente encajamiento > 3 días o cirugía mayor (< 4 semanas) 1

Hipersensibilidad localizada en la distribución de las venas profundas 1

Edema en toda la extremidad 1

Hinchazón de la pantorrilla > 3 cm comparada con pierna asintomática


(medida 10 cm debajo de la tuberosidad tibial) 1

Edema (con fóvea) en la pierna sintomática 1

Venas superficiales colaterales (no varicosas) 1

Diagnóstico alternativo verosímil -2

Alta probabilidad: 3 o más puntos (prevalencia TVP 75%)


Media probabilidad: 1-2 (17%)
Baja probabilidad: < o = 0 (En paciente con síntomas en las dos piernas, se valorará la más sintomática.)

2-TROMBOEMBOLISMO PULMONAR
El tromboembolismo pulmonar es la migración Los signos más frecuentes son: taquipnea su-
de un émbolo proveniente sobre todo del sis- perior a 20 rpm (85%), taquicardia superior
tema venoso profundo de los miembros infe- a 100 lpm (58%), aumento del segundo tono
riores, aunque puede migrar desde otros pun- pulmonar (57%), estertores pulmonares (56%),
tos. Las manifestaciones clínicas, radiológicas fiebre mayor de 37,5ºC (50%), y signos de TVP

50
(41%). Otros signos son: roce pleural, cianosis, necesarias las pruebas de imagen en los pa-
hepatomegalia y reflujo hepatoyugular. cientes con cáncer para el diagnóstico de ETV
porque la mayoría presentan valores elevados
Predicción clínica de DD o síntomas subclínicos subyacentes.
En el 95% de los casos el trombo procede de
venas profundas de extremidades inferiores, y Diagnóstico
más raramente son émbolos constituidos por La anamnesis permitirá identificar los posi-
tumores, fibrina, aire, médula ósea o cuerpos bles antecedentes familiares de enfermedades
extraños. Solo el 25-35% de las sospechas trombóticas y los antecedentes personales, in-

Tabla 4. Escala de probabilidad de TEP validada de Wells.

Escala de Wells Puntos

Primera posibilidad diagnóstica EP 3

Signos de TVP 3

EP o TVP previas 1,5

Frecuencia cardíaca > 100/min. 1,5

Cirugía o inmovilización en las 4 semanas previas 1,5

Cáncer tratado durante los 6 meses previos o en tratamiento paliativo 1

Hemoptisis 1

Probabilidad clínica

Baja 0-1

Intermedia 2-6

Alta =o>7

Improbable =o<4

Probable >4

iniciales de TEP son confirmadas y el 60-80% cluyendo los hábitos tóxicos: alcohol, tabaco,
de los casos de TEP mortales no son diagnos- drogas, y los factores predisponentes, tales
ticados. como el consumo de anticonceptivos, próte-
sis valvulares mecánicas, edad avanzada, in-
Predicción analítica movilización, neoplasias, insuficiencia cardía-
La utilidad del Dimero D (DD) es debatible en ca o venosa crónica, lesión por traumatismo,
los pacientes con cáncer, porque los valores cirugía o parto. En la exploración física se rea-
pueden estar alterados debido al proceso infla- lizará la toma de constantes, tensión arterial, la
matorio asociado. Carrier analizó tres estudios frecuencia cardíaca, la frecuencia respiratoria,
examinando la utilidad del DD y la predicción la temperatura, y se atenderá de forma espe-
clínica en los pacientes oncológicos. Los re- cial a la exploración cardiopulmonar y de las
sultados de estos estudios muestran que son extremidades inferiores.

51
La ecografía Doppler es la prueba de uso más Se emplea sobre todo la heparina de bajo peso
utilizada en el diagnóstico de TVP, con una sen- molecular (HBPM). La HBPM ha reemplaza-
sibilidad global del 89%. Cuando se sospecha do a la heparina no fraccionada en casi todas
una TVP proximal al ligamento inguinal (vena sus indicaciones. Los metaanálisis indican que
ilíaca externa proximal, vena ilíaca común o la HBPM puede ser más efectiva y al menos
vena cava inferior) debe realizarse una veno- tan segura como la heparina no fraccionada
grafía por tomografía computarizada (TC) o por (HNF) en el tratamiento inicial de la enfermedad
resonancia magnética (RM). La venografía por tromboembólica, con la ventaja de su manejo
RM tiene una alta sensibilidad para el diagnós- extrahospitalario y evitando la monitorización
tico de TVP de venas pélvicas y de vena cava exhaustiva que precisa la HNF2. Los estudios
en comparación con la flebografía ascendente, de supervivencia señalan ventaja al tratamiento
con una sensibilidad del 100% y una especifi- inicial con HBPM sobre la heparina no fraccio-
cidad del 96%. nada, con respecto a la mortalidad a 3 meses,
aunque el mecanismo de este efecto no está
Para el diagnóstico de la TVP de las extremi- claro2. Las complicaciones más frecuentes son
dades superiores, la ecografía Doppler es tam- las hemorrágicas, que se neutralizan con sul-
bién útil aunque no lo es para las trombosis de fato de protamina. La trombopenia y osteopo-
venas subclavias proximales y otras venas in- rosis son complicaciones comunes de ambas
tratorácicas. En estos casos y para la trombo- formas de heparinas, si bien, menos frecuente
sis venosa mesentérica la TC con venografía es para las HBPM.
la prueba de elección.
La heparina no fraccionada (HNF) requiere hos-
La angiografía por TC multidetector se ha con- pitalización y control de laboratorio. Está indi-
vertido en el método de elección para visualizar cada en determinadas situaciones de TVP o
las arterias pulmonares cuando se sospecha de embolia pulmonar masiva con compromiso
una embolia pulmonar (EP), ya que se puede hemodinámico.
visualizar hasta un nivel segmentario con una
sensibilidad del 83% y una especificidad del En algunos pacientes, particularmente los que
96%. La probabilidad clínica influye en la es- prefieren medicación oral o tienen aversión
pecificidad del valor predictivo de la prueba e por las inyecciones, se pasa a anticoagulantes
influye el nivel más proximal de la trombosis, orales (ACO) después de un paso previo por
por lo que debe considerarse la realización de heparina, pero en general, el tratamiento con
pruebas adicionales en caso de probabilidad anticumarínicos no se recomienda por las mo-
clínica baja y trombo segmentario. La TC mul- dificaciones que sufren los niveles durante los
tidetector identificó a más pacientes con EP tratamientos oncológicos, o las alteraciones in-
que la gammagrafía de ventilación/perfusión testinales o hepáticas frecuentes en estos pa-
en un ensayo clínico aleatorizado10 que incluyó cientes, que hacen impredecible su absorción
a 1.417 pacientes con sospecha de EP. Por lo y metabolización. Los pacientes que reciben
tanto, la gammagrafía debe reservarse para los ACO para la prevención secundaria de fenó-
pacientes con alergia a los contrastes o insufi- menos tromboembólicos de repetición, tienen
ciencia renal. 3 veces más riesgo de recidiva y 2 veces más
riesgo de sangrado que los pacientes sin cán-
TRATAMIENTO DE LA ENFERMEDAD cer2. Además, la HBPM ha demostrado ser más
TROMBOEMBÓLICA eficaz en la prevención de las recidivas de las
El tratamiento anticoagulante constituye la base TVP que los anticumarínicos, sin modificar el
terapéutica y debe iniciarse tan pronto como sea riesgo de complicaciones hemorrágicas12.
posible11. El tratamiento de la ETV pretende mejo-
rar los síntomas, evitar la progresión del trombo, Respecto a los nuevos anticoagulantes orales,
prevenir la embolia de pulmón, reducir el riesgo en este momento, no existe suficiente eviden-
de recurrencia y disminuir el riesgo de síndrome cia para recomendar su uso de forma rutinaria
postrombótico e hipertensión pulmonar. en estos pacientes.

52
Para la trombolísis, la ausencia de ensayos drá 5 días por lo menos, al margen de los ACO.
randomizados específicos en pacientes con El tiempo de mantenimiento del tratamiento re-
cáncer, obliga a seguir las mismas indicacio- comendados por las guías actualmente es de
nes que en los pacientes sin cáncer. En gene- 3 a 6 meses, aunque no disponemos de en-
ral se recomienda el empleo de trombolísis en sayos clínicos que nos orienten sobre cuál es
pacientes con cáncer con eventos trombóticos la duración óptima. La dosis terapéutica puede
que comprometan la vida o la pérdida de un mantenerse durante este periodo o bien dosis
miembro. Las indicaciones y los potenciales terapéuticas durante 4 semanas y tras este
beneficios deben de ser valorados individual- periodo reducir dosis de anticoagulación un
mente. 25% durante los 5 meses siguientes, como se
realizó en algunos ensayos clínicos. Posterior-
Tratamiento con HBPM mente, se recomienda mantener el tratamiento
Para el tratamiento con HBPM, con carácter mientras persista el factor causante (el tumor,
práctico, se debe obtener una muestra de san- un acceso venoso central, la quimioterapia...).
gre basal para conocer el tiempo de trombo- Aunque habrá que evaluar periódicamente la
plastina parcial activado (TTPA) y el recuento indicación y las posibles complicaciones, pres-
de plaquetas y comprobar que no existe con- tando especial interés a posibles complicacio-
traindicación para recibir tratamiento con he- nes, pronóstico y calidad de vida del paciente13.
parina. Las contraindicaciones absolutas son: Desde el servicio de urgencias, una vez confir-
diátesis hemorrágica, trombopenia menor de mado el diagnóstico de TVP, puede iniciarse el
50.000, o antecedente de trombopenia por tratamiento mediante la administración, desde
heparina, hemorragia cerebral o traumatismo el día primero, de HBPM y de acenocumarol
craneal reciente, aneurisma cerebral o aórtico con las medidas higienicoposturales. La ACO
disecante, la retinopatía hemorrágica, fenóme- exige controles de laboratorio a partir del tercer
nos hemorrágicos activos gastrointestinales, o cuarto día para mantener un INR entre 2-3,
retroperitoneales y pulmonares, la hipertensión retirando en ese momento la HBPM11.
grave no controlada y la cirugía del SNC en los
últimos 7 días. Contraindicaciones relativas Existen procesos concomitantes en los que es
son: el antecedente hemorrágico no activo en necesario establecer un balance riesgo/bene-
la actualidad, un traumatismo grave reciente, la ficio de la utilización de HBPM. Deberá, enton-
pericarditis o el derrame pericárdico, la hernia ces, contar con otros especialistas. La edad
de hiato, la hepatopatía crónica, los trastornos avanzada no constituye contraindicación y hay
de la coagulación sin hemorragia, el ulcus pép- que individualizar cada situación.
tico antiguo y la cirugía reciente (menos de 3
a 7 días). Administrar HBPM subcutánea a la Los pacientes con cáncer tienen mayor riesgo
dosis y frecuencia recomendada para cada uno de complicaciones con el tratamiento anticoa-
de los preparados disponibles. gulante. Los efectos adversos de las HBPM
más frecuentes son las hemorragias; pueden
En pacientes con obesidad importante (> 120 existir también trombopenia, reacciones alér-
kg) o insuficiencia renal grave (creatinina > 3,5 gicas, necrosis cutánea en la zona punción y
mg/ml) deberá ajustarse la dosis de HBPM mi- desmineralización ósea con mayor riesgo de
diendo niveles de anti-Xa a las cuatro horas fracturas en mujeres embarazadas y pacientes
de su administración, ajustando la dosis para ancianos tras tratamientos prolongados.
mantener niveles de anti-Xa entre 0,6 y 1 UI/ml.
Las variaciones estructurales y químicas exis-
En los pacientes en los que se ha decidido tentes entre las diversas HBPM condicionan el
tratamiento con ACO, si no existe contraindi- diferente perfil biológico y farmacológico para
cación, este debe iniciarse desde el día 1-3, a cada una de las HBPM. Poseen una actividad
dosis inicial 2 mg/día de acenocumarol o 5 mg/ anti-FIIa y anti-FXa in vitro distinta, pero tam-
día de Warfarina. Si el paciente se remite a do- bién una actividad antitrombótica in vivo dife-
micilio, el tratamiento con HBPM, se manten- rente. Son eficaces y seguras en la profilaxis y

53
tratamiento de la enfermedad tromboembólica. 150 UI/kg mientras exista la indicación. Una
El tratamiento inicial domiciliario puede aplicar- dosis de mantenimiento de 10.000 UI/día pa-
se a pacientes con bajo riesgo de hemorragias, rece eficaz. Cuando se presenta inestabilidad
cuando existe garantía de una correcta admi- hemodinámica y/o previsión de TEP masivo
nistración de la HBPM y cuando existe un ade- se debe considerar inicio de tratamiento con
cuado sistema de vigilancia médica. En caso HNF y posteriormente fibrinolisis (con altepla-
de evidencia de TEP o trombosis de la cava, en sa (rt -PA), urocinasa, estreptocinasa), en UCI
casos de flegmasía alba o cerúlea dolens, de (nivel evidencia II)7,11. En caso de estar contra-
insuficiencia cardíaca, respiratoria o renal, en indicada de forma absoluta la anticoagulación
asociación con otros procesos graves o con ci- o cuando la enfermedad tromboembólica reci-
rugía reciente, el tratamiento domiciliario inicial diva a pesar de la correcta anticoagulación, se
está contraindicado. Contraindicación relativa indicará la colocación de un filtro de cava.
para el tratamiento domiciliario inicial son la
edad avanzada y los estados de hipercoagu- En la tabla 6 se expresan las características
labilidad11. más importantes de las HBPM comercializadas
en España.
En el TEP, se tomarán las siguientes medidas:
administración de oxígeno con ventimask al PROFILAXIS DE LA ENFERMEDAD
50%, canalización vía venosa periférica, anal- TROMBOEMBÓLICA
gesia (puede utilizarse cloruro mórfico a do- Todos los pacientes que frecuentan los servi-
sis de 10 mg (1 amp.)), optimización hemodi- cios de urgencias con factores de riesgo de
námica y heparina sódica: 5000 UI (50 mg) o enfermedad tromboembólica, sobre todo los
80 U/kg inicial, seguido de perfusión continua enfermos con cáncer, que presenten inmovili-
a 1000-2000 UI/hora, o 18 U/kg/h con bomba zaciones prolongadas, etc. y que permanecen
de perfusión. Controles de TTPA cada 4-8 h, durante horas o días encamados o que son
manteniéndolo en valores de 1,5 a 2,5 veces el hospitalizados, son candidatos a recibir trata-
control normal11 (Tabla 5). miento con HBPM a dosis profiláctica, por lo
menos hasta su movilización.

Tabla 5. Modificación del ritmo de perfusión de HNF en función del peso del paciente y de los
controles de anticoagulación

TTPa TTPa Cambio de Otras


Próximo control TTPa
(segundos) ratio dosis UI/kg/h medidas

< 35 1,2 +4 Bolo 80 UI/kg (control a las 6 horas)

35-45 1,2 - 1,5 +2 Bolo 40 UI/kg (control a las 6 horas)

46-70 1,5 - 2,3 0 - (control a las 6 horas) y


posteriormente, cada 24 h

71-90 2,3 - 3 -2 - (control a las 6 horas)

> 90 >3 -3 Detener 1 hora (control a las 6 horas)

En general se puede utilizar HBPM a dosis de Aunque los datos que soportan la profilaxis en
1 mg/kg cada 12 horas, vía subcutánea (refe- pacientes con cáncer hospitalizados son esca-
rido a enoxaparina) o de 200 UI/kg s.c./día de sos, y los datos presentados de los pacientes
daltiparina durante el primer mes, seguido de hospitalizados sin cáncer no son extrapolables

54
Tabla 6. Heparinas de bajo peso molecular comercializadas en España

Bemiparina Dalteparina Enoxaparina Nadroparina

Actividad anti-Xa/anti-IIa 8 2,7 3,8 3,6

Dosis terapéutica (U/kg/día) 115/día 100/12 h 100/12 h 85,5/12 h


< 50 kg 5000 5000 4000 4100
50-60 7500 5000-7500 5000 5100
60-70 7500 5000-7500 6000 6150
70-80 10000 7500 7000 7200
80-90 10000 7500 8000 8200
> 90 10000 7500 9000 9000

Presentación comercial 2500 2500 1000 1000


(UI/0,1 ml) (100 UI = 1 mg)

Nombre comercial Hibor® Fragmin® Clexane® Fraxiparina®

a los pacientes con cáncer, en ausencia de es- Antes de iniciar la anticoagulación profiláctica
tudios específicos en esta población, se reco- debe tenerse en cuenta el tipo de tumor, la lo-
mienda profilaxis con anticoagulantes durante calización, y la supervivencia esperada. La he-
el ingreso en los pacientes ingresados por en- parina sódica subcutánea se administra a do-
fermedad médica aguda o con movilidad redu- sis de 5.000 UI/8-12 horas sin monitorización,
cida en ausencia de contraindicación. aunque la HBPM es la más utilizada a dosis de
40 mg sc/día de enoxaparina o 5.000 UI sc/día
En los pacientes portadores de catéteres ve- de dalteparina7.
nosos centrales, las guías actuales no reco-
miendan la profilaxis antitrombótica de forma En pacientes sometidos a cirugía abdominal o
rutinaria. pélvica, la tromboprofilaxis con HBPM es tan
segura y efectiva como la HNF14 y esta debe
En pacientes con cáncer ambulatorios y que mantenerse durante 4 semanas15. Algunos
están en tratamiento quimioterápico activo, la estudios le conceden a la HBPM enoxapari-
anticoagulación profiláctica de rutina, no se re- na más efectividad en reducir el riesgo de en-
comienda. Se debe considerar la trombopro- fermedad tromboembólica con respecto a la
filaxis con HBPM en pacientes con alto riesgo HNF, sin diferencias en los efectos secundarios
de ETV y ausencia de contraindicación. Ac- ni el coste económico16. El inhibidor selectivo
tualmente no existe una definición unánime de del factor X activado, el pentasacárido fonda-
alto riesgo, recomendándose el uso de la es- parinux, se ha comparado con la HBPM en la
cala de Khorana, valorando la anticoagulación prevención de la enfermedad tromboembólica
profiláctica en aquellos pacientes que presen- postcirugía, y ambas estrategias parecen igual
ten un score mayor o igual a 3, y/o pacientes de seguras y efectivas2.
con carcinoma de páncreas o pulmón con bajo
riesgo de hemorragia. PRESPECTIVAS FUTURAS
El tratamiento anticoagulante con BMP en
Los agentes recomendados son la heparina de estudios retrospectivos y ahora también en
bajo peso molecular o heparina no fraccionada. estudios prospectivos aleatorizados parece
aumentar la supervivencia de los pacientes

55
con cáncer, asociada a los tratamientos es- queñas (menos de 3 mm) no se pueden identi-
pecíficos17. Lo mismo que la HBPM prolonga ficar por ecocardiografía.
la supervivencia en la enfermedad avanzada,
se está investigando su uso en la adyuvancia La mejor prueba diagnóstica es la ecocardio-
en cáncer de mama y otros tumores, con lo grafía transesofágica. En una serie de 51 pa-
que se espera mejorar aún más los resultados cientes oncológicos con síntomas de ictus,
tan prometedores que se han logrado en los al menos la mitad de ellos tenían alteraciones
próximos años con los nuevos quimioterápi- cardíacas que causaban émbolos además de
cos y la inmunoterapia con anticuerpos mo- detectarse lesiones vegetantes en el 18% de
noclonales2. los casos19.

El estudio de los mecanismos íntimos de la El tratamiento recomendado según el Seventh


coagulación permitirá en los próximos años ACCP Consensus Conference on Antithrom-
descubrir nuevas vías en la profilaxis y el tra- botic Therapy consiste en heparina IV o SC en
tamiento de la enfermedad tromboembólica en aquellos pacientes con endocarditis abacteria-
los enfermos con cáncer. na y TEP y en todos los pacientes con cáncer
diseminado en quienes se encuentre lesiones
3-ENDOCARDITIS TROMBOTICA en la ecocardiografía aunque no presenten
NO BACTERIANA embolismos sistémicos o pulmonares20.
Este término se refiere a lesiones que se ob-
servan como microscópicos agregados pla-
quetarios o bien hasta llegar a formar grandes
formaciones vegetantes en las válvulas cardía-
cas, especialmente la aórtica y la mitral18.

En autopsias se suelen encontrar en más del


75% de casos, sobre todo con histología de
adenocarcinomas; la incidencia entre pacien-
tes con cáncer de pulmón puede ser mayor
del 7%. Las lesiones vegetantes son plaque-
tas alteradas intercaladas con zonas de fibrina.
Varían en tamaño desde microscópicas hasta
grandes y exuberantes masas con tendencia a
provocar una zona de isquemia si embolizan.

El factor desencadenante de este proceso no


se conoce. El daño endotelial provocado por
citokinas circulantes tales como el factor de
necrosis tumoral o la interleukina-1, puede
acumular plaquetas en presencia de un siste-
ma de la coagulación activado.

Las manifestaciones clínicas resultan de la em-


bolización sistémica sobre todo en el bazo, los
riñones y las extremidades, siendo en el SNC
y en las arterias coronarias donde originan ma-
yor morbilidad.

El diagnóstico ha de basarse en la sospecha


clínica. Menos del 50% de los pacientes tienen
ruidos cardíacos audibles y las lesiones pe-

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57
Capítulo 5
Síndromes paraneoplásicos
gastrointestinales
Autores:
Dr. Cecilio Santander*, Dr. Sergio Casabona* y Dr. Enrique González**.
*Servicio de Aparato Digestivo del Hospital Universitario de La Princesa
**Servicio de Cirugía General y del Aparato Digestivo del Hospital Universitario del Henares

Los síndromes paraneoplásicos del aparato di- tomas originados por factores humorales ela-
gestivo se refieren a los síntomas o signos que borados por dichos tumores, siendo los más
se producen sobre el sistema gastrointestinal e frecuentes el enrojecimiento de cara y tronco y
hígado, y que son originados desde un tumor la diarrea1. Se pueden asociar a gastritis cróni-
primario distante o sus metástasis. De forma ca atrófica y anemia perniciosa, dolor abdomi-
general se pueden agrupar en tres grupos prin- nal, obstrucción intestinal, estreñimiento, dia-
cipales, que incluyen: rrea, pérdida de peso, rectorragia, y síntomas
secundarios a enfermedad metastásica.
1. Efectos hormonales de los tumores carci-
noides, VIPomas, gastrinomas y somatos- El síndrome de diarrea acuosa también conoci-
tatinomas, así como los efectos gastroin- do como síndrome VIPoma, síndrome del cóle-
testinales de la hipercalcemia. ra pancreático o síndrome de Verner-Morrison
2. Hepatopatía paraneoplásica o síndrome cursa con elevación en suero del polipéptido
de Stauffer. intestinal vasoactivo (VIP), y se trata de un
3. Trastornos paraneoplásicos de la motili- síndrome secundario a tumores raros secre-
dad intestinal: seudoobstrucción intesti- tores de VIP, normalmente solitarios > 3cm y
nal, gastroparesia y acalasia secundaria/ un 75% localizados en la cola pancreática,
seudoacalasia. siendo metastásicos al diagnóstico hasta un
80%. También se han observado asociados al
Efectos hormonales de los síndrome MEN1, al carcinoma epidermoide de
tumores carcinoides pulmón, hepatoma y feocromocitoma2. Cursa
Los síndromes hormonales paraneoplásicos con diarrea acuosa que persiste con el ayuno,
que afectan al tubo digestivo son los efectos con deposiciones de color té y no-malolientes
hormonales de los tumores carcinoides, VI- que exceden un volumen de 700 ml/día (70% >
Pomas, gastrinomas y somatostatinomas, así 3000 ml/día). Los pacientes no suelen presen-
como los efectos gastrointestinales de la hiper- tar dolor abdominal. Hasta un 20% presentan
calcemia (estreñimiento, náuseas y vómitos), flushing, astenia, náuseas, vómitos, debilidad
que se exponen en el capítulo 2. y calambres musculares, relacionados con hi-
popotasemia y deshidratación3. Los pacientes
Los tumores carcinoides son tumores neuroen- presentan niveles de VIP en suero > 75 pg/ml.
docrinos que tienen su origen en la mayoría El tratamiento se basa en reposición de iones
de los casos en el tracto gastrointestinal y en y fluidos, análogos de somatostatina que inhi-
los pulmones, desde células enterocromafines ben la secreción de VIP (octreotido/lanreotido),
productoras de serotonina. Se dividen en tu- corticoides (en casos refractarios), cirugía, qui-
mores de bajo grado o bien diferenciados y de mioterapia y terapias más recientes como las
alto grado o pobremente diferenciados. El sín- dirigidas molecularmente (everolimus, suniti-
drome carcinoide engloba un conjunto de sín- nib). Según los estudios realizados la media de

58
supervivencia de los pacientes con este tipo H. Stauffer. Es una patología infrecuente carac-
de tumores es de 96 meses. terizada por la elevación de fosfatasa alcalina,
velocidad de sedimentación globular (VSG),
El síndrome de Zollinger-Ellison se define α-2-globulina, gamma-glutamil transferasa
como una tríada que comprende enfermedad (GGT), trombocitosis, tiempo de protrombina
ulcerosa péptica severa, hipersecreción áci- prolongado, hipoalbuminemia y hepatoesple-
da gástrica y tumor de páncreas de células no nomegalia, en ausencia de metástasis hepá-
beta productor de gastrina, siendo la gastrina ticas. Este síndrome fue descrito inicialmente
el agente responsable del síndrome4. La ma- en pacientes con síntomas inespecíficos como
yoría de gastrinomas se localiza en el triángulo fiebre, pérdida de peso, y astenia, en asocia-
del gastrinoma (limitado entre la confluencia ción a hipernefromas.
de los conductos biliares, tercera porción duo-
denal y cuello de páncreas). La frecuencia de Esta disfunción hepática nefrogénica no me-
gastrinomas es igual en páncreas y duodeno. tastásica, frecuentemente aparece como ma-
Los síntomas principales son dolor abdominal, nifestación inicial del adenocarcinoma renal
úlceras pépticas, pirosis, estenosis pilóricas, (hipernefroma), pero también asociado a otros
duodenales y esofágicas, y diarrea secundaria tumores como adenocarninoma broncogénico,
a la hipersecreción y a la malabsorción intes- leiomiosarcoma, angiosarcoma, histiocitoma
tinal. Un tercio de los pacientes con síndrome maligno y carcinoma de próstata.
de Zollinger-Ellison presentan un cuadro he-
reditario de carácter autonómico dominante La disfunción hepática paraneoplásica en au-
o síndrome de neoplasia endocrina múltiples sencia de metástasis hepática, suele observar-
de tipo I (síndrome NEM Iw o de Wermer), ca- se en el carcinoma de células renales, la inci-
racterizado por la presencia de tumores en dencia de este tumor está aumentando en las
múltiples órganos, sobre todo en glándulas últimas décadas, y se ha denominado el “tumor
paratiroides, hipófisis y páncreas, que suelen del internista” por la forma de presentación atí-
presentar nefrocalcinosis o cólicos renales. El pica, no asociada con el propio riñón. La tría-
diagnóstico se realiza con la medición de gas- da clásica del hipernefroma, constituida por
trina en ayunas > 1.000 pg/mL (475 pmol/L) y hematuria, dolor abdominal y masa palpable,
con el test de estimulación con secretina. Una ocurre solamente en el 10% de los pacientes;
vez diagnosticado el síndrome de Zollinger- de modo que generalmente el diagnóstico se
Ellison el gastrinoma debe ser localizado con retrasa considerablemente por la ausencia de
pruebas de imagen. síntomas orientadores hacia el tumor renal. Ge-
neralmente se manifiesta por hepatomegalia y
Los somatostatinomas son tumores raros que niveles elevados de fosfatasa alcalina y aumen-
suelen originarse en el páncreas (55%) o el in- to del tiempo de protrombina, con niveles de
testino y liberan grandes cantidades de soma- bilirrubina total normales o colestasis disociada
tostatina. Causan un síndrome caracterizado (colestasis anictérica), pero también han sido
por la presencia de dolor abdominal, diabe- descritos casos de ictericia franca (colestasis
tes mellitus/intolerancia a la glucosa, coleli- ictérica)6.
tiasis, diarrea/esteatorrea y pérdida de peso5.
El diagnóstico se establece con la medición La disfunción hepática en pacientes con hiper-
en ayunas de somatostatina > 30 mg/mL. El nefroma en ausencia de enfermedad hepática
tratamiento es quirúrgico o análogos de soma- metastásica ocurre de forma infrecuente. En
tostatina (octreotido, lanreotido) para lesiones una serie de 365 pacientes, el 21% presenta-
irresecables. ron elevación de fosfatasa alcalina como ma-
nifestación paraneoplásica7. Cuando la disfun-
Hepatopatía paraneoplásica o síndrome ción hepática está presente, generalmente se
de Stauffer acompaña de fiebre, pérdida de peso, astenia y
El síndrome de Stauffer o hepatoesplenome- estos pacientes tienen un pronóstico peor.
galia nefrogénica fue descrito en 1961 por M.

59
En general, la biopsia hepática revela la ima- distensión y vómitos. Los pacientes con com-
gen de colestasis sin otros hallazgos específi- promiso predominante del intestino delgado a
cos, observando una infiltración inespecífica de menudo desarrollan sobrecrecimiento bacte-
neutrófilos, linfocitos, monocitos y raramente riano y síndrome de asa ciega, y esto desen-
granulomas, en ocasiones se puede compro- cadena a veces esteatorrea y diarrea. El com-
bar una dilatación de los sinusoides hepáticos. promiso colónico predominante suele generar
Los hallazgos de las pruebas de imagen, desde estreñimiento y megacolon. Los pacientes con
la ecografía de abdomen, TAC, colangio RMN y ambos tipos de compromiso pueden presentar
colangiopancreatografía retrógrada endoscópi- ciclos de diarrea alternando con estreñimiento,
ca (CPRE) confirman la presencia de unas vías según la intensidad de la esteatorrea y el com-
biliares (intra y extrahepáticas) normales, sin di- promiso relativo de cada órgano. Estos pacien-
lataciones ni obstrucciones. La etiología de este tes tienen frecuentemente autoanticuerpos an-
síndrome no está completamente aclarada; se tinucleares neuronales (ANNA-1 y anti-Hu) que
ha sugerido el posible papel de la producción son detectados mediante inmunofluorescen-
desde el tumor de ciertas citocinas, como la cia11. Se ha postulado que este anticuerpo esté
interleucina-6 (IL-6) o de factor estimulador de dirigido frente a un epitopo que es compartido
las colonias de granulocitos-macrófagos (GM- por elementos neuronales del sistema nervio-
CSF)8, y se han señalado casos de resolución so entérico y las células tumorales, dañando
completa de las anormalidades hepáticas des- de esta forma los reflejos entéricos. Aunque
pués de la extirpación del tumor primitivo o ne- los síntomas de la seudoobstrucción paraneo-
frectomía, pero pueden reaparecer en caso de plásica pueden resolverse con el tratamiento
recurrencia tumoral local o aparición de metás- del tumor primario con resultados favorables,
tasis. Del mismo modo, el pronóstico del tumor la persistencia de los síntomas gastrointesti-
es peor si la disfunción hepática no desaparece nales es muy común, a pesar del tratamiento
con la extirpación del tumor renal, debido ge- antineoplásico efectivo. El tratamiento con pro-
neralmente a la presencia de tumor residual. cinéticos en los pacientes con seudoobstruc-
ción intestinal es poco efectivo, al igual que
Los clínicos deberíamos tener en cuenta este raro el tratamiento con laxantes clásicos como la
síndrome y sus variantes (colestasis ictérica), de lactulosa o asociaciones de laxantes, aunque
forma que el carcinoma renal debe ser incluido en la actualidad existen nuevos fármacos con
en el diagnóstico diferencial tanto de la colestasis resultados prometedores para el control de los
ictérica como de la colestasis anictérica. síntomas de estos pacientes como son la Li-
naclotida (290 mcg/24 horas) y la Prucaloprida
Trastornos de la motilidad (2 mg/24 horas).
intestinal paraneoplásicos
Entre los pacientes con manifestaciones neuro- La gastroparesia también puede ser secunda-
lógicas asociadas a carcinoma de pulmón oat ria a síndrome paraneoplásico, viéndose sobre
cell y presencia de anticuerpos antinucleares todo asociado al carcinoma de pulmón de cé-
neuronales, el 12% presentaron alteraciones lulas pequeñas, aunque también se ha visto re-
gastrointestinales, como seudoobstrucción in- lacionado con el cáncer de mama, carcinoma
testinal crónica, gastroparesia o acalasia. de ovario, adenocarcinoma de páncreas, tumor
Aproximadamente la mitad de los casos de carcinoide, sarcoma retroperitoneal, linfoma
seudoobstrucción crónica son secundarios a de Hodgkin y colangiocarcinoma12. Los sínto-
procesos neurológicos, paraneoplásicos, au- mas son idénticos a los de la gastroparesia por
toinmunes, metabólicos/endocrinos e infec- otras causas, como náuseas y vómitos, sacie-
ciosos. Esta afección rara suele presentarse dad precoz, dolor abdominal. Se han visto au-
asociada a carcinoma de células pequeñas de mento de determinados autoanticuerpos como
pulmón, pero también a otros tumores como ANNA-1 y anti-Hu. Esta dismotilidad se debe
tumor carcinoide, linfoma, melanoma y cáncer a una neuropatía visceral del plexo mientérico,
de riñón, mama y próstata9,10. Los pacientes causada por la infiltración de linfocitos y células
tienen grados variables de dolor abdominal, plasmáticas, y la posterior degeneración axo-

60
nal en el plexo. El diagnóstico se establece con adecuado. Se han publicado casos de disfagia
una gammagrafía gástrica. En cuanto al trata- (acalasia y espasmo esofágico), disfunción de
miento de estos pacientes se basa en medidas la vesícula, insuficiencia autonómica y neuro-
higiénico-dietéticas, procinéticos/antieméticos patía periférica. Los síntomas pueden prece-
(cinitaprida, metoclopramida, domperidona, der al diagnóstico del tumor primario en varios
ondansetrón, levosulpirida, eritromicina) y en años. La anatomía patológica de este síndrome
los casos más avanzados se puede optar por se limita al plexo mientérico, donde se observa
la colocación de una gastrostomía descompre- un infiltrado linfocítico inflamatorio que acom-
siva con sonda de doble luz, utilizando la luz paña en forma variable la degeneración neuro-
gástrica para aspirar el contenido gástrico y la nal. Los autoanticuerpos de reacción cruzada
luz yeyunal para alimentación. que se hallan en el suero de estos pacientes
se unen a las células del tumor primario y a las
Los trastornos motores esofágicos son altera- neuronas del plexo mientérico, para provocar
ciones de la motilidad esofágica, causadas por inflamación y destrucción de ese plexo. La de-
variaciones de los mecanismos de control neu- tección de ANNA-1 en el suero puede ayudar
rohormonal o muscular del cuerpo esofágico al diagnóstico. Los criterios manométricos de
y/o de sus esfínteres, que se pueden producir acalasia son la aperistalsis esofágica (100%
tanto por defecto como por exceso de activi- de ondas interrumpidas), relajación incompleta
dad contráctil, y/o en la secuencia en que se o ausente del EEI y presión basal del cuerpo
produce dicha actividad. esofágico positiva por retención alimentaria
(Figura 1). Los hallazgos manométricos son su-
Los trastornos motores esofágicos secundarios perponibles tanto en acalasia primaria (etiolo-
son las alteraciones motoras esofágicas que se gía desconocida) como en acalasia secundaria
asocian a otra enfermedad, con anormalidades (asociada a otras enfermedades), por lo que
similares o idénticas a las primarias. La acalasia son otras exploraciones complementarias las
secundaria a un síndrome paraneoplásico se que ayudarán a establecer el diagnóstico etio-
debe a la invasión tumoral y obstrucción me- lógico. El tratamiento de la acalasia secunda-
cánica del esófago distal (pseudoacalasia debi- ria o pseudoacalasia es indestinguible del de
da a invasión de adenocarcinoma de esófago, la acalasia primaria. Las alternativas terapéuti-
carcinoma epidermoide de esófago y adeno- cas disponibles son de carácter paliativo y sus
carcinoma gástrico), por invasión de células objetivos son disminuir la presión del EEI para
neoplásicas de la submucosa del EEI, ocasio- mejorar el vaciamiento esofágico, controlar los
nando bloqueo de las neuronas mientéricas, y síntomas y evitar las complicaciones (retención
por síndrome paraneoplásico desde tumores de alimentos en el esófago, regurgitación, as-
distantes al esófago (carcinoma de pulmón, piración pulmonar y pérdida de peso). El trata-
leiomioma, linfoma, adenocarcinoma de mama, miento farmacológico incluye nitratos y los blo-
hepatocarcinoma, sarcoma, linfangioma, carci- queantes de los canales del calcio: nifedipina
noma renal, mesotelioma, carcinoma de prós- 10 mg sublingual 15 minutos antes de las tres
tata, adenocarcinoma de páncreas) mediante comidas principales o dinitrato de isosorbide 5
la secreción de factores humorales no carac- mg vía oral 20 minutos antes de las tres co-
terizados que alteran la función esofágica13,14. midas principales. El tratamiento endoscópico
Los síntomas principales de los pacientes son se refiere a la dilatación endoscópica del car-
la disfagia para sólidos y líquidos, dificultad dias con balón neumático, que se puede re-
para eructar, regurgitación, dolor torácico, pi- petir hasta tres dilataciones con incrementos
rosis, pérdida de peso, sensación de globo e progresivos del diámetro del balón empleado
hipo. La disfagia es la sensación de dificultad (30-35-40 mm) y debe siempre acompañarse
de paso del alimento (sólido o líquido) de la ca- de tratamiento antisecretor con IBP (inhibido-
vidad oral al estómago. La disfagia es conside- res de la bomba de protones) a dosis estándar
rada un síntoma de alarma, indicando la nece- para evitar la esofagitis por reflujo. También en-
sidad de una evaluación inmediata que defina doscópicamente se puede realizar la inyección
la causa exacta y permita iniciar el tratamiento de toxina botulínica en cardias, que se precisa

61
Figura 1. Manometría esofágica de alta resolución en acalasia secundaria. Los hallazgos manométricos
de acalasia (primaria y secundaria) son aperistalsis esofágica, relajación incompleta o ausente del esfínter
esofágico inferior (EEI) con presión de relajación residual media > 15 mmHg, presión de reposo del EEI
aumentada o normal y presión basal del cuerpo esofágico positiva (superior a la presión gástrica) por
 
retención alimentaria. Esfínter esofágico superior (EES).

repetir en caso de persistencia o recidiva de la los pacientes de más edad. La cardiomiotomía


disfagia debido al efecto transitorio de la toxina quirúrgica (abierta o laparoscópica) consiste en
botulínica. La inyección de toxina botulínica de la miotomía anterior de las fibras del EEI, que
tipo A bloquea la transmisión nerviosa porque se extiende 1 cm hacia el estómago y varios
inhibe la liberación de acetilcolina desde las hacia el esófago, se asocia una fundoplica-
terminales nerviosas presinápticas y produce tura como método antirreflujo. En pacientes
un bloqueo de la placa motora. La razón de su muy ancianos y con enfermedades asociadas
uso en la acalasia es compensar la pérdida de importantes que impiden cualquier tratamien-
efecto de la inervación inhibidora con una dis- to eficaz puede conseguirse una alimentación
minución del efecto de la inervación excitadora. adecuada mediante la colocación de una son-
Se administra por vía endoscópica inyectando, da gastrostomía15.
con una aguja de escleroterapia, 20-25 unida-
des en cada cuadrante justo por arriba de la
unión esofagogástrica. Produce una disminu-
ción de la presión del EEI y, como consecuen-
cia, un alivio parcial de los síntomas en las tres
cuartas partes de los pacientes un mes des-
pués del tratamiento. Su principal problema es
la transitoriedad de su efecto, ya que menos de
la mitad de los pacientes refieren mejoría trans-
currido un año, incluso tras varias sesiones de
tratamiento. Su eficacia parece ser mayor en

62
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63
Capítulo 6
Síndromes paraneoplásicos
renales
Autores:
Ana Mª Jiménez Gordo, Emilio Ríos González, Mª Luz Lozano Maneiro
Servicio de Oncología Médica. Hospital Universitario Infanta Sofía
Servicio de Urología. Hospital Universitario Infanta Sofía
Servicio de Nefrología. Hospital de Fuenlabrada

Introducción ción de líquidos. Su valoración debe incluír la


Existen numerosas causas que pueden oca- determinación sérica de iones, pH, osmolari-
sionar patología renal en los pacientes onco- dad y ácido úrico. Además, es necesario ana-
lógicos, y la mayoría de ellas no son de ori- lizar sedimento, osmolaridad e iones en orina.
gen paraneoplásico. En la tabla 1 se describen También puede ser necesaria la realización de
las más importantes. La más frecuente es la alguna prueba de imagen para descartar una
insuficiencia renal prerrenal debido a la deple- obstrucción de la vía urinaria.

Tabla 1. Causas de diversas manifestaciones de nefropatía en el paciente oncológico

MECANISMO PATOGÉNICO ETIOLOGÍA

Infiltración tumoral del parénquima renal Infiltra tumor primario (leucemias, linfomas)
Infiltran las metástasis

Uropatía obstructiva por infiltración tumoral del Infiltración tumoral del tracto urinario (cáncer de
uréter, radioterapia... recto, retroperitoneales, ginecológicos)
Fibrosis retroperitoneal secundaria a infiltración
tumoral o radioterapia

Alteraciones del balance hídrico Insuficiente aporte hídrico/depleción de volumen


(vómitos, diarrea...)

Disbalance iónico (calcio, potasio, sodio, Debidos al tumor o a su tratamiento


magnesio, fósforo)

Infecciones Secundarias a la inmunodepresión inducida por el


tumor o su tratamiento

Toxicidad farmacológica o nefritis por Secundaria a tratamiento con citostáticos,


radioterapia inmunoterapia, antibióticos, contrastes iodados,
AINEs...

Obstrucción tubular renal por diferentes Productos tumorales, ácido úrico, síndrome de
sustancias lisis tumoral...

Lesiones glomerulares de origen incierto Síndromes paraneoplásicos

64
Tabla 2. Tipos de nefropatías paraneoplásicas y tumores más frecuentemente asociados a cada una de ellas

NEFROPATÍA TUMORES ASOCIADOS

Glomerulonefritis membranosa Cáncer de estómago, pulmón, colon...

Glomerulonefritis de mínimos cambios Linfoma (sobre todo Hodgkin), cáncer de páncreas,


mesotelioma...

Glomeruloesclerosis focal y segmentaria Leucemia linfática crónica, linfomas T, leucemia


mieloide aguda...

Nefropatía IgA Linfomas MALT, cáncer de pulmón, cabeza y cuello,


páncreas, micosis fungoides, liposarcoma...

Glomerulonefritis membranoproliferativa Leucemia linfática crónica, linfomas, tricoleucemia,


melanoma...

Glomerulonefritis mesangial Cáncer de pulmón

Glomerulonefritis rápidamente progresiva Linfoma, gammapatías monoclonales...

El diagnóstico de síndrome paraneoplásico re- Síndrome nefrótico


nal es poco frecuente y en ocasiones resulta Se caracteriza por la presencia de proteinuria
dificultoso. Las nefropatías de origen paraneo- (más de 3 g en 24 horas) e hipoalbuminemia,
plásico se definen como aquellas que no están siendo frecuente que se asocie a hiperlipemia
relacionadas con el tumor primario ni sus me- y a un riesgo elevado de trombosis, que puede
tástasis, no son consecuencia de infecciones, ser aditivo al de la neoplasia subyacente. Clíni-
trastornos metabólicos ni toxicidad de las te- camente es indistinguible del idiopático, y man-
rapias utilizadas2. Típicamente cumplen 3 crite- tiene la función renal inicialmente preservada.
rios: desaparecen con la remisión o extirpación
del tumor, reaparecen con la recaída del tumor, El 11% de los casos que se presentan como
y se puede establecer una relación patofisio- síndrome nefrótico de etiología incierta termi-
lógica entre el cáncer y la nefropatía, como la nan asociándose a la presencia de un tumor,
detección de complejos de antígenos tumora- y en el 80% de estos el diagnóstico es concu-
les y anticuerpos subepiteliales en el glomérulo rrente con el del tumor o precede a la aparición
renal3. (Tabla 2) del mismo en menos de 7 meses5. La coinci-
dencia de síndrome nefrótico y tumor puede
Es muy importante realizar una identificación llegar al 22% en los pacientes mayores de 60
precoz de la causa desencadenante de la in- años. Por este motivo se recomienda una eva-
suficiencia renal, ya que pueden tratarse de luación con mamografía, TAC y colonoscopia
trastornos agudos y reversibles si se instaura en todos los casos diagnosticados de síndro-
el tratamiento adecuado lo antes posible. me nefrótico, especialmente en los ancianos6.

La neoplasia más frecuentemente asociada al


MANIFESTACIONES CLÍNICAS síndrome nefrótico es el linfoma de Hodgkin,
Los síndromes paraneoplásicos renales se mani- que en el 80% de los casos se manifiesta como
fiestan habitualmente como un síndrome nefró- glomerulonefritis de mínimos cambios. En los
tico, aunque menos frecuentemente se pueden linfomas no Hodgkin se han identificado inmu-
presentar como un síndrome nefrítico agudo4. nocomplejos tumorales en los glomérulos. En

65
los pacientes con carcinomas la lesión histo- LESIONES GLOMERULARES
lógica más frecuente es la glomerulonefritis Nefropatía membranosa
membranosa, que se presenta en el 80-90% Se manifiesta en el 72% de los casos de sín-
con síndrome nefrótico. Mucho menos fre- drome nefrótico paraneoplásico. Su aparición
cuente es la presencia de otras glomerulone- suele preceder a la presentación de la neopla-
fritis, como la membranoproliferativa o de míni- sia en el 40% de los casos, una media de 6 me-
mos cambios. Estos síndromes se han descrito ses; se hace de forma simultánea en el 40% y
ocasionalmente en pacientes con tumores be- solo es posterior a la presentación de la misma
nignos como el angiomiolipoma renal o el feo-
cromocitoma.

La evolución del síndrome nefrótico es muy


variable, y depende de la lesión glomerular
subyacente. En el caso de presentarse como
nefropatía membranosa se ha descrito remi-
sión espontánea en el 25-50% de los casos.
El riesgo de desarrollar insuficiencia renal pro-
gresiva aumenta con la cuantía y persistencia
de la proteinuria y con la existencia de hiperco-
lesterolemia, y es mayor en la edad avanzada.
Figura 1. Glomerulonefritis membranosa. Aspecto al
En una serie se describieron un 20% de casos microscopio óptico
que desarrollaron insuficiencia renal terminal en
10 años7. En los casos con glomerulonefritis de en el 20%. La evolución clínica es muy variable,
mínimos cambios, la evolución del síndrome aunque frecuentemente el síndrome nefrótico
nefrótico es coincidente con la de la neoplasia desaparece tras la remisión de la neoplasia.
causal en el 75% de los casos, aunque la pre- Sin embargo, solo se asocian con neoplasias el
sencia de proteinuria puede preceder la apari- 6-22% de los casos diagnosticados de nefro-
ción del linfoma. patía membranosa, más frecuente en pacien-
tes de edad avanzada y fumadores de más de
El tratamiento es sintomático, con diuréticos de 20 paquetes tabaco/año9.
asa y antiproteinúricos tipo IECAs o ARA-II, así
como el tratamiento del tumor subyacente. En En el estudio microscópico se objetiva engro-
los casos asociados a tumores raramente se samiento de la membrana basal (Figura 1). Con
indican tratamientos inmunosupresores, a no inmunofluorescencia directa o microscopio
ser que estén indicados para el tratamiento de electrónico se demuestran depósitos granula-
la neoplasia causal. res subepiteliales de IgG y complemento (Figu-
ra 2). En la tinción con plata se evidencia una
Síndrome nefrítico agudo imagen característica “en púa de peine” en la
Consiste en el inicio brusco de hematuria y pro- membrana basal glomerular. Se han descrito
teinuria acompañados de azotemia y retención varios casos con depósitos de inmunocomple-
de agua y sodio, que dan lugar a congestión jos con antígenos tumorales en el glomérulo10.
circulatoria, hipertensión y edema8. En la ori- El receptor glicoproteico transmembrana tipo
na se objetivan cilindros de hematíes debido M fosfolipasa A2 (PLA2R1) se ha identificado
a la lesión de los capilares en los glomérulos como el antígeno responsable de la mayoría de
renales. El filtrado glomerular se reduce por la casos de nefropatía membranosa idiopática,
infiltración de células inflamatorias. Puede aso- que se detecta en el 70-90%, siendo su apa-
ciarse proteinuria en rango no nefrótico (menor rición excepcional en los casos de nefropatía
de 3 g en 24 horas). Su evolución depende de secundaria, junto con la paraneoplásica. Ade-
la glomerulopatía asociada y del tratamiento de más, en las formas idiopáticas, los depósitos
la neoplasia subyacente. de membrana frecuentemente son IgG4 frente
a los depósitos de IgG1 y IgG2 se presentan en

66
las formas asociadas a tumores. La presencia linfoma de Hodgkin desarrollan una nefropatía
de más de 8 células inflamatorias en el glomé- de mínimos cambios.
rulo aumentan la posibilidad de presentar pro-
ceso maligno asociado3. En el microscopio óptico se objetivan escasas
o nulas alteraciones de los capilares glomeru-
Se ha asociado a tumores de estómago, pul- lares. El diagnóstico se realiza por micros-
món y colon, y más raramente a los de recto, copio electrónico, en que se evidencia una
fusión de los podocitos (Figura 3). El meca-
nismo patogénico es incierto. Se ha aludido
a un mecanismo inmunológico subyacente, y
se ha asociado a deficiencia en las funciones
de las células T. En otras publicaciones se ha
sugerido que las células tumorales pueden se-
cretar VEGF, que aumentaría la permeabilidad
del glomérulo9,12.

Glomerulonefritis rápidamente progresiva


Los pacientes desarrollan una insuficiencia re-
nal aguda que se hace terminal en el curso de
semanas o pocos meses. La lesión histológica
característica corresponde a glomerulonefritis
con proliferación extracapilar (en semilunas). El
patrón de daño implicado con inmunofluores-
Figura 2. Depósitos granulares de Ig G y cencia o microscopio electrónico es muy va-
complemento con microscopio de fluorescencia en
la nefropatía membranosa
riable. El riesgo de oliguria (fallo renal terminal
e hipertensión) aumenta si más del 80% de los
páncreas, vía biliar, cabeza y cuello, ovario, glomérulos renales están afectados.
mama, próstata, riñón y piel. El principal trata-
miento es el del tumor causal. También hay que
hacer el tratamiento sintomático adecuado,
con diuréticos de asa, IECAs, ARA-II... Se ha
destacado la posibilidad de respuesta a agen-
tes antiangiogenicos, dada la implicación del
VEGF en la patogénesis de estos procesos11.

Nefropatía de mínimos cambios


Se asocia sobre todo al linfoma de Hodgkin,
aunque también se ha descrito en otros trastor-
nos linfoproliferativos, cáncer de páncreas, pul-
món, colon, mesotelioma y cáncer renal. Suele
manifestarse como síndrome nefrótico.

Solo en el 10-15% de los casos el diagnósti-


co de la nefropatía precede al del linfoma, pero Figura 3. Glomerulonefritis de mínimos cambios.
en algunos casos puede precederlo hasta en Fusión de los podocitos en el microscopio electrónico
42 meses, el 30-35% se diagnostica simultá-
neamente al linfoma de Hodgkin, y el 40-45%
después del diagnóstico del tumor. En el 75% El 7% de los pacientes con glomerulonefritis
de los casos la evolución del síndrome nefró- rápidamente progresiva tienen un tumor13. La
tico es coincidente con la de la neoplasia. Sin mayoría de ellos desarrollan la nefropatía una
embargo, solo el 0,47% de los pacientes con media de 36 meses después del diagnóstico

67
del tumor. Su desarrollo se ha relacionado con ma de Hodgkin en fases finales, leucemia linfá-
alteraciones inmunológicas en el huésped o por tica crónica, mieloma múltiple, macroglobuline-
mediadores en la enfermedad o el tratamiento mia de Waldenström y carcinoma renal.
de la neoplasia. Si se manifiesta precozmente
durante el curso de la neoplasia, el tratamien- CRIOGLOBULINEMIA
to agresivo y eficaz de la misma puede inducir Se caracteriza por elevada presencia de inmu-
una remisión en la glomerulonefritis. noglobulinas circulantes IgG e IgM que precipi-
Su presencia se ha descrito en pacientes con tan con frío. Puede dar lugar a insuficiencia renal
diferentes trastornos linfoproliferativos, gam- aguda y síndrome nefrótico. En el microscopio se
mapatías monoclonales, y pocas veces con objetiva glomerulonefritis proliferativa difusa con
tumores sólidos como cáncer renal, gástrico o depósito de crioglobulinas. Se asocia a la pre-
de pulmlón. sencia de carcinoma hepatocelular en hepato-
patía por virus de hepatitis tipo C. Su evolución
Otras glomerulopatías es favorable con el tratamiento de la neoplasia y
GLOMERULONEFRITIS ocasionalmente puede requerir esteroides.
MEMBRANOPROLIFERATIVA
Se ha descrito asociada a la leucemia linfática ALTERACIONES MICROVASCULARES
crónica, linfoma de Burkitt, sarcoma de células Vasculitis
reticulares, carcinoma microcítico de pulmón, PÚRPURA DE SCHÖNLEIN-HENOCH. Se
linfoma linfocítico, tricoleucemia, melanoma, caracteriza por la presencia de púrpura no
cáncer renal, gástrico... trombocitopénica, artralgias, dolor abdominal
y glomerulonefritis, que en ocasiones puede
Aparte del control de la neoplasia, el tratamien- dar lugar a una forma rápidamente progresiva
to con prednisona en estos casos puede resul- o a síndrome nefrótico. Suele asociarse a nive-
tar de ayuda9. les séricos elevados de IgA. En el microscopio
puede corresponder con diferentes patrones,
GLOMERULOESCLEROSIS pero con inmunofluorescencia se evidencian
FOCAL Y SEGMENTARIA depósitos granulares mesangiales y capilares
Se asocia en algunos casos a linfoma linfo- de IgA, IgG, C3 y fibrinógeno, pero no de C1q,
blástico de células T, leucemia linfática crónica, C4 ni IgA secretora. Ocasionalmente se ha
leucemia mielomonocítica aguda y linfomas de asociado a cáncer de pulmón. Frecuentemen-
células T. te es reversible con el tratamiento adecuado
de la neoplasia subyacente y requiere manejo
GLOMERULONEFRITIS sintomático3.
PROLIFERATIVA MESANGIAL
Se ha descrito sobre todo en tumores pulmo- Microangiopatía trombótica
nares. El síndrome hemolítico-urémico (SHU) es una
coagulopatía de consumo que se caracteriza
NEFROPATÍA IgA por anemia hemolítica microangiopática, insu-
Ocasionalmente se ha visto asociada a carci- ficiencia renal y trombocitopenia. En ocasiones
noma broncogénico, carcinoma escamoso de existe afectación del sistema nervioso central,
lengua, carcinoma de nasofaringe, liposarcoma con fiebre, convulsiones o déficits neurológicos.
retroperitoneal, adenocarcinoma de páncreas, En el riñón se alteran principalmente las arterio-
renal y tumores secretores de mucina, micosis las aferentes del glomérulo, que están práctica-
fungoide y síndrome de Sezary. mente ocluídas por los depósitos de fibrina. La
expresión de ADAMTS13 es normal en las for-
AMILOIDOSIS mas paraneoplásicas, lo que las hace más re-
Consiste en el depósito de amiloide en el es- sistente al tratamiento con plasmaféresis14.
pacio extracelular, posiblemente asociado a la
presencia de inflamación crónica, que afecta Se asocia a leucemia aguda promielocítica,
predominantemente al riñón. Se asocia al linfo- cáncer de próstata, estómago y páncreas. En

68
una revisión realizada el 89% de los casos con mores torácicos y en sistema nervioso central
cáncer presentaban un adenocarcinoma. Se ha (SNC). Los pacientes presentan hiponatremia
relacionado con la mucina secretada por estas con disminución de osmolaridad plasmática y
células. Además, se ha asociado con la admi- aumento de osmolaridad en orina y de la secre-
nistración de mitomicina C y tiene un 50% de ción de sodio por orina. El tratamiento habitual
mortalidad, a pesar de que en una serie el 35% incluye la restricción hídrica y tratamiento con
del total estaba en remisión tumoral cuando se furosemida. Recientemente se ha comercializa-
manifestó el SHU15. do un anatagonista selectivo del receptor V2 de
la vasopresina, tolvaptan, que en dosis de 15
En el microscopio de inmunofluorescencia se a 60 mg/d es capaz de revertir la pérdida de
demuestran depósitos del complemento, fibri- sodio en el túbulo renal característica de este
na e inmunoglobulinas en las arteriolas y asas síndrome16,17. Ocasionalmente también se ha
capilares glomerulares. Se manifiesta como descrito secreción de factor natriurético por
una insuficiencia renal aguda con proteinu- parte de algunos tumores de SNC.
ria leve, microhematuria y cilindruria, y puede
evolucionar a crónica. El tratamiento es sinto- Diabetes insípida nefrogénica
mático, con esteroides y terapia antiagregante Se ha descrito en el leiomiosarcoma. Produce
plaquetaria. poliuria y polidipsia hipotónica debido a una al-
teración en la función de la hormona antidiuré-
ENFERMEDADES tica en el riñón.
TUBULOINTERSTICIALES
Hipercalcemia Alteraciones en el balance del potasio
El calcio induce vasoconstricción y depósito de Puede haber pérdida tubular de potasio por
calcio en túbulos e intersticio renal, que condu- daño tubular renal, como se ha descrito previa-
cen a obstrucción intratubular, atrofia y fibrosis. mente, aunque puede ser efecto secundario a
El tratamiento precoz mejora la insuficiencia otras circunstancias, como insuficiencia renal,
renal, pero si se mantiene, pueden producirse insuficiencia adrenal y ocasionalmente el sín-
daños irreversibles. drome de lisis tumoral.

Disfunción tubular Hipofosfatemia


Además de insuficiencia renal, puede haber Recientemente se ha descrito un síndrome de
acidosis tubular, pérdida de sodio, fósforo y hipofosfatemia debido a pérdidas de fosfato en
potasio por el túbulo renal. Se ha descrito en el túbulo renal inducida por una hormona fosfa-
pacientes con mieloma múltiple, por depósitos túrica, el factor de crecimiento de fibroblastos
tubulares de cadenas ligeras, o por leucemia 23 (FGF23) que conduce a déficit de vitamina
monocítica o mielomonocítica aguda, que pue- D y osteomalacia. Se ha detectado en relación
den secretar lisozima, sustancia que induce con tumores mesenquimales, generalmente
daño tubular renal. benignos, y desaparece con la resección del
tumor18.
Síndrome de Fanconi
Se presenta con acidosis tubular renal tipo II, Hipouricemia
aminoaciduria, glucosuria y fosfaturia. Se ha des- Se ha descrito en pacientes diagnosticados de
crito en pacientes con carcinoma de páncreas, carcinoma de páncreas, pulmón (microcítico y
mieloma múltiple y leucemia mieloide aguda. no microcítico), lengua, glioblastoma multifor-
me, mieloma múltiple, leucemia mieloide agu-
ALTERACIONES ELECTROLÍTICAS da, colangiocarcinoma, hepatocarcinoma y en-
Y ANALÍTICAS fermedad de Hodgkin5.
Hiponatremia
La hiponatremia euvolémica es característica
del SIADH (secreción inadecuada de hormo-
na antidurética). Se ha descrito asociada a tu-

69
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70
Capítulo 7
Síndromes paraneoplásicos
dermatológicos
Autores:
Dario Sánchez Cabrero y Fátima Albizuri
Servicio de Oncología Médica.
Hospital Universitario La Paz

Introducción repetidos de flushing o eritema en región facial,


Hasta en un 1% de los pacientes con neo- orejas, cuello y tórax superior (desencadena-
plasias pueden identificarse un síntoma guía do por una vasodilatación transitoria de los
mucocutáneo. Dada su accesibilidad, la piel vasos superficiales de la piel que puede du-
supone un importante órgano de estudio para rar de 10 a 30 minutos). En casos avanzados
alertar de la presencia de un tumor maligno. puede evolucionar a una rosácea severa con
Los hallazgos mucocutáneos pueden sugerir engrosamiento de la piel y presentar una facies
cánceres sistémicos en varias formas: leonina. En casos extremos se han observado
lesiones pelagroides (hiperqueratosis, xerosis,
1. Por la asociación de trastornos mucocutá- descamación, glosistis, hiperpigmentación)
neos hereditarios con cánceres sistémicos. por consumo de triptófano.
2. Propagación del cáncer a la piel por ex-
tensión directa, linfática o hematógena Clínicamente la expresión cutánea suele aso-
(metástasis cutánea). ciarse a otros síntomas como la diarrea, bron-
3. Por acción indirecta de múltiples media- coespasmo e insuficiencia cardíaca.
dores biológicamente activos (hormonas,
anticuerpos, etc.). Estos cuadros son co- El tratamiento de elección es la resección tu-
múnmente conocidos como síndromes moral pero, dado que la mayoría ya presentan
paraneoplásicos. afectación hepática, suele optarse por el tra-
tamiento sintomático, siendo de elección los
Con frecuencia es difícil definir la relación cau- antagonistas de la serotonina.
sal entre el síndrome paraneoplásico y el tumor.
Las manifestaciones cutáneas pueden presen- Dermatomiosistis
tarse de manera sincrónica o metacrónica (tan- Las lesiones cutáneas se caracterizan por una
to precediendo al diagnóstico de la neoplasia inflamación eritemato-violácea del área perior-
como desarollándose tiempo después). bitaria, asociado en ocasiones a edema pal-
pebral (eritema en heliotropo) (Figura 1). Los
SÍNDROMES PARANEOPLÁSICOS pacientes presentan eritema facial, fotosensi-
MUCOCUTÁNEOS bilidad, así como pápulas atróficas, violáceas,
Síndrome carcinoide confluyente en prominencias óseas, como ar-
Es un proceso infrecuente, asociándose princi- ticulaciones metacarpofalángicas e interfalán-
palmente a la presencia de un tumor neuroen- gicas (signo de Gottron) (Figura 2). También
docrino productor de sustancias vasoactivas es característica la afectación periungueal con
(histamina, serotonina, prostaglandinas, etc.) eritema, telangiectasias, engrosamiento de la
no metabolizadas por el hígado (por lo que im- cutícula y pequeños infartos hemorrágicos.
plica casi siempre la presencia de metástasis Suele empeorar con la exposición a radiación
hepáticas). Suele presentarse como episodios ultravioleta.

71
del aparato digestivo o del aparato urogenital.
Difiere de otras formas de acantosis nigricans
por presentar una hiperqueratosis e hiperpig-
mentación más pronunciada (Figura 3). En su
evolución se afecta la mucosa oral, los labios,
las areolas y las zonas de roce. En algunos
casos los nudillos y las palmas muestran una
acentuación máxima, con exageración de los
dermatoglifos, dando lugar a las palmas en as-
pecto de tripa (acantosis palmar). La acantosis
Figura 1. Dermatomiositis paraneoplásica eritema nigricans puede preceder hasta en 5 años a
en heliótropo
otros síntomas relacionados con la neoplasia.
Se debe estudiar la afectación muscular ya Suele evolucionar de acuerdo con la neoplasia,
que puede cursar con miositis (lo que se tra- regresando con la curación de la misma.
duce en debilidad muscular proximal). En las
formas paraneoplásicas no suelen manifestar
el fenómeno de Raynaud y responden de for-
ma pobre al tratamiento corticoideo.
Entre el 10-30% de los pacientes con derma-
tomiosistis presentan una neoplasia subyacen-
te. Los principales tumores relacionados son el
cáncer de ovario y mama en las mujeres y el de
próstata y pulmón en los varones.

Figura 3. Acantosis nigricans maligna

Dermatosis neutrofílica aguda


(síndrome de Sweet)
Erupción cutánea asimétrica en forma de pápu-
las/placas eritematosas induradas y dolorosas
que se extiende por la cara, extremidades y la
parte superior del tronco. Es producido por un
Figura 2. Dermatomiositisparaneoplásica. infiltrado neutrofílico en la dermis papilar, sin
Pápulas de Gottron vasculitis asociada.

Acantosis nigricans maligna Hasta un 40% precede o es concomitante a


Consiste en una hiperpigmentación y engro- una neoplasia, siendo típica la leucemia mieloi-
samiento aterciopelado, asimétrico de la piel. de aguda (representando los tumores sólidos
Se extiende principalmente por el cuello, las una proporción mucho más pequeña). En el
axilas, las ingles y otros pliegues del cuerpo, caso de las formas paraneoplásicas, no suelen
lo que le da a la piel un aspecto sucio. Se cla- asociarse a fiebre y las lesiones pueden evo-
sifican en 5 tipos. Los 4 primeros se relacionan lucionar a vesículas y ulceración, afectándose
con formas hereditarias (Tipo 1) o con trastor- las mucosas.
nos endocrinos, principalmente de resistencia
a la insulina (Tipo 2, Tipo 3) o inducida por fár- El tratamiento de elección es la corticoterapia
macos (Tipo 4). (prednisona), aunque la dapsona se considera
una alternativa eficaz. Aunque la mayor parte
El Tipo 5 es un síndrome paraneoplásico aso- responde de forma satisfactoria, hasta un 20-
ciada más frecuentemente a adenocarcinomas 30% de los casos presentan recurrencias.

72
Eritema gyratum repens Reticulohistiocitosis multicéntrica
Forma parte de los llamados “eritemas figura- Se caracteriza por pequeñas pápulas rosado-
dos”. Se caracteriza por presentar anillos con- marronáceas que se extienden principalmente
céntricos, eritematosos, serpiginosos y pruri- por la zona periungueal, pudiendo extenderse
ginosos, que emigran 1 cm al día, produciendo a codos, rodillas y región periorbitaria. Puede
un aspecto en vetas de madera (Figura 4). Sue- asociar artropatía destructiva simétrica en ma-
len localizarse en tronco y zona proximal de nos y rodillas.
extremidades. Su asociación con neoplasias
es muy alta (aproximadamente el 77-82% de Entre el 20 y el 25% se relacionan con neopla-
los casos). En la mayoría de los casos, suele sias hematológicas o adenocarinomas.
preceder al diagnóstico de la neoplasia entre 1
mes y 6 años, siendo las más frecuentemente Acroqueratosis paraneoplasica de
asociadas, el cáncer de pulmón (32-40%), de Bazex (síndrome de Bazex)
esófago (8%) y mama (6%). Se trata de un cuadro psoriasiforme. Las lesio-
nes se asemejan en clínica y localización pero,
a diferencia de esta, no responden a los trata-
mientos habituales. Consiste en placas erite-
matosas y violáceas, descamativas, simétricas
que afectan a codos, rodillas, manos, pies, y
otras zonas acrales (pabellones auriculares,
nariz, etc.) (Figura 5). Posteriormente desarro-
llan una queratodermia palmoplantar con una
coloración más violácea, así como distrofia un-
gueal y paroniquia.

Se asocia habitualmente a carcinomas epider-


Figura 4. Eritema gyratum repens
moides supradiafragmáticos (orofaringe, larin-
ge, esófago y pulmón) y puede preceder en un
Si bien responde al tratamiento de la malig- año al diagnóstico del tumor. Suelen responder
nidad subyacente, los corticoides sistémicos únicamente al tratamiento de la enfermedad
son útiles para su manejo. subyacente.

Pénfigo paraneoplásico
A diferencia del pénfigo vulgar suele presen-
tar una afectación mucosa importante (esto-
matitis intensa y persistente), lesiones acrales
(afectación palmoplantar y panoriquia) y puede
acompañarse de una erupción cutánea poli-
morfa que puede recordar al eritema exuda-
tivo multiforme o a una necrólisis epidérmica
tóxica. En la sangre se objetivan anticuerpos
antiplaquina circulantes.

Figura 5. Síndrome de Bazex


En dos tercios de los casos se presenta pos-
terior al diagnóstico de la neoplasia (principal-
mente neoplasias linfoides, leucemia linfoide Queratosis palmoplantar
crónico y en ocasiones a la enfermedad de Se produce una hiperquearotisis de las palmas
Castleman infantil). La afectación de mucosas y las plantas, pudiendo ser focal, punctata o
suele conducir a un fallo respiratorio por bron- difusa. Muchas de ellas son adquiridas, aso-
quiolitis obliterante (lo que condiciona una su- ciadas a procesos benignos como psoriasis o
pervivencia global entre 1 mes y 2 años). la pitiriasis rubra pilaris. Puede acompañar a

73
un síndrome de Bazex o a una acantosis ni- un desbalance en la síntesis de histamina y se-
gricans maligna (palmas con aspecto de tripa). rotonina por parte de las células neoplásicas,
así como por una alteración de la regulación de
El inicio repentino de una queratodermia pal- las células T. Por esto aparece principalmen-
moplantar y la ausencia de otros datos induce te en neoplasias de estirpe linfoide (linfoma
a descartar una neoplasia subyacente. de Hodgkin) aunque también puede verse en
otras neoplasias (cáncer de mama, carcinoi-
Eritema necrótico migratorio des o gastrointestinales).
Es la manifestación cutánea del denominado
“síndrome del glucagonoma”, entidad clínica Raramente el prurito localizado es sugestivo
rara pero bien descrita, secundaria al aumento de una neoplasia. Una excepción podría ser el
de producción de glucagón en los carcinomas prurito nasal y el tumor cerebral (que además
de las células alfa pancreáticos. parece asociarse a peor pronóstico).

El eritema necrótico migratorio superficial con- Síndrome de secreción de ACTH


siste en placas eritematosas de morfología ectópica (síndrome de Cushing)
anular confluyentes que crecen con aclara- El síndrome de Cushing se asocia a un exceso
miento central. Los bordes suelen mostrar ve- de glucocorticoides, ya sean de origen endó-
sículas, ampollas erosiones y descamación (Fi- geno o exógeno. Cabe destacar 3 formas cla-
gura 6). Afecta a región peribucal, perigenital, sificadas según el origen de la hormona:
así como áreas de pliegues e intertriginosas y
zona distal de extremidades. La afectación de ·· Enfermedad de Cushing: síndrome de
la mucosa oral puede producir glositis y quei- Cushing asociado a un adenoma produc-
litis angular. tor de hormona adrenocorticotrópica hi-
pofisaria (ACTH).
·· Síndrome de Cushing medicamentoso:
síndrome de Cushing causado por la ad-
ministración exógena de glucocorticoides.
·· Síndrome de secreción ectópica de ACTH:
tumores ectópicos, no hipofisarios, pro-
ductores de ACTH. Los tumores más fre-
cuentemente implicados son el carcinoma
de células pequeñas de pulmón (el más
asociado), los tumores carcinoides y el feo-
cromocitoma.

Figura 6. Eritema necrótico migratorio


Las lesiones cutáneas asociadas al síndrome
de Cushing son:
El eritema necrótico migratorio responde mal a ·· Piel atrófica con telangiectasias y equimo-
la mayoría de los tratamientos, resolviéndose sis secundarias a fragilidad capilar.
después de la resección tumoral. En los últi- ·· Estrías de color violáceo distribuidas más
mos años se está controlando de forma sinto- frecuentemente en abdomen y tronco.
mática con los análogos de la somatostatina ·· Hipertricosis facial con pigmentación del ca-
(octeótrido) al inhibir la producción de gluca- bello y aumento de lanugo en brazos y rostro.
gón, pero no el crecimiento del tumor. ·· Alopecia androgenética en mujeres.
·· Acné de aparición reciente, monomorfo
Prurito y prúrigo con escasos o sin comedones cerrados.
Si bien es un síntoma muy frecuente, pudién- ·· Hiperpigmentación generalizada (similar a
dose atribuir a múltiples procesos, el prurito la enfermedad de Addison), más intensa en
generalizado puede ser secundario a una neo- zonas de roce, mucosas y zonas expues-
plasia subyacente. Su origen se encuentra en tas, causada por el aumento de secreción

74
de prohormona-ACTH que contiene MSH u pueden presentar una clínica atípica que haga
hormona melanocitoestimulante. sospechar la asociación a algún síndrome más
·· Aumento de dermatosis infecciosas como complejo o a la presencia de una neoplasia in-
la candidiasis mucocutánea, la pitiriasis terna, como veremos a continuación.
versicolor o las dermatofitosis.
1. Queratosis seborréicas
Además el paciente presenta el fenotipo La aparición brusca de un gran número de ellas
cushingnoide, caracterizado por obesidad con asociadas a un prurito intenso pueden asociar-
redistribución de la grasa (cara de luna llena, se a la presencia de adenocarcinomas gas-
cuello de bisonte, obesidad central y adelga- trointestinales (signo de Leser-Trélat). Suelen
zamiento de extremidades). Asocia síntomas localizarse en la espalda, adoptando una dis-
generales de astenia, debilidad muscular y/o posición en árbol de Navidad (Figura 7). Pue-
alteraciones psiquiátricas. Las mujeres pue- de acompañarse de acantosis nigricans. No
den presentar alteraciones menstruales como obstante, en la actualidad muchos autores se
amenorrea. cuestionan esta relación dada la alta incidencia
de ambos procesos por separado en la pobla-
Hirsutismo e hipertricosis ción de edad avanzada.
El inicio abrupto podría relacionarse con un tu-
mor productor de andrógenos (principalmente
ovárico), y suele acompañarse de otros estig-
mas de virilización.

Mucho menos frecuente es la hipertricosis la-


nuginosa adquirida. Debuta con la aparición
brusca de vello fino no pigmentado en la cara,
y que posteriormente se extiende al tronco
y las extremidades (respeta la región palmo-
plantar y los genitales). A diferencia del hir-
sutismo no se acompaña de otros signos de Figura 7. Signo de Lesser-Trelat
virilización. Puede asociarse a alteraciones de
la mucosa oral como la glositis o la queilitis
angular. Suele asociarse al cáncer colorrectal, 2. Papilomatosis florida cutánea
el de pulmón y el de mama. Se relaciona con Crecimiento brusco de lesiones verrucosas
mal pronóstico. (de apariencia similar a las víricas) confluen-
tes distribuidas por tronco, cara y extremida-
Paniculitis necrotizante des. Pueden llevar a la deformidad del rostro y
Necrosis del panículo graso subcutáneo por las extremidades. Se relaciona con neoplasias
efecto de la lipasa pancreática (producida en gástricas, de mama, pulmón y ovario. Algunos
exceso). Como resultado aparecen placas autores la consideran una variante de la acan-
eritematosas dolorosas, principalmente en tosis nigricans maligna.
glúteos y regiones pretibiales. Al evolucionar
las placas pueden adoptar un patrón abs- 3. Leiomiomas
cesiforme ulcerativo que drena un material La aparición de varias de estas lesiones de
marronáceo (producto de la licuefacción de distribución en bandas o segmentarias puede
la grasa subcutánea). Aparece en procesos estar en relación con neoplasias renales (pu-
pancreáticos incluyendo los adenocarcino- diendo formar parte del síndrome hereditario
mas pancreáticos. leiomiomatosis/cáncer renal).

Tumores cutáneos Lesiones vasculares


Los tumores cutáneos son una patología fre- Las manifestaciones vasculares asociadas a
cuente en dermatología, en raras ocasiones neoplasias internas son bastante inespecíficas.

75
1. Síndrome de Trousseau 3. Quistes epidérmicos/fibromas/
Episodios espontáneos, recurrentes y múltiples leiomiomas/tricoepiteliomas/neurofibromas
de tromboflebitis superficial y migratoria. Se Su asociación forma parte del síndrome de
asocia hasta en un 50% de los casos a cáncer Gardner, presentando los pacientes un riesgo
de páncreas (especialmente los localizados en mayor de cáncer de colon.
cuerpo y cola), de pulmón, de próstata, de estó-
mago, de colon, leucemias y linfomas. Los epi- 4. Fibrofoliculomas/tricosdicomas
sodios aumentan con la progresión del tumor. El síndrome de Birt-Hogg-Dubé presenta un
riesgo aumentado de desarrollar carcinomas de
2. Vasculitis pulmón y renales.
La prevalencia de malignidad asociada a vas-
culitis es del 3-8%. La mayoría corresponden a
neoplasias hematológicas (leucemia de células
peludas, leucemia linfoide crónica, mieloma,
etc.) Solo un pequeño porcentaje se asocia a
tumores sólidos (el más común el de pulmón,
seguido por los tumores gastrointestinales).
La clínica es variable, desde púrpura palpable,
pápulas o nódulos, a necrosis y ulceración. Su-
ponen una alerta paraneoplásica cuando son
persistentes con mala respuesta al tratamien-
to en pacientes mayores. La vasculitis puede
preceder de 2 a 4 años al proceso maligno, de
ahí la importancia de un seguimiento estrecho
a estos pacientes.

Asociaciones
Existen varias patologías dermatológicas co-
munes que, por sí solas, no son indicadores
de malignidades internas pero en ocasiones
forman parte de síndromes más complejos,
la mayoría de ellos genodermatosis, que
durante su evolución sí pueden desarrollar
neoplasias. Por lo tanto es importante su
reconocimiento, seguimiento y tratamiento
precoz, ya que aumentará la supervivencia
de estos pacientes.

1. Adenomas sebáceos /carcinomas


sebáceos
En el síndrome de Muir Torre suelen presentarse
en el tronco. Estos pacientes presentan un ries-
go mayor de desarrollar carcinomas gastrointes-
tinales.

2. Tricolemomas/lipomas/angiomas
En el síndrome de hamartomas múltiples (tam-
bién llamado síndrome de Cowden), además de
estos tumores cutáneos, hay un mayor riesgo de
desarrollar cáncer de mama, endometrio, colon,
pulmón y tiroides.

76
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77
Capítulo 8
Síndromes paraneoplásicos
neurológicos
Autor:
Manuel Barón Rubio
Servicio de Neurología.
Hospital Universitario Fundación Alcorcón

Los síndromes paraneoplásicos neurológicos nos frecuente (Tabla 2)6. Las pruebas comple-
(SPN) son un conjunto de trastornos hetero- mentarias más frecuentemente empleadas en
géneos, poco frecuentes y originados de for- el estudio de estos cuadros son la resonancia
ma remota por un cáncer, generalmente por magnética (RMN), el estudio de líquido cefa-
mecanismos inmunológicos. Pueden afectar a lorraquídeo (LCR) y los estudios neurofisioló-
cualquier parte del sistema nervioso central y gicos.
periférico de forma localizada o difusa1-3.
En segundo lugar, la búsqueda de anticuerpos
A pesar de su baja frecuencia, su importancia relacionados con estos cuadros se centra en
es doble: 1) habitualmente preceden al diag- los denominados “anticuerpos onconeurona-
nóstico del cáncer, pudiendo detectarse en es- les” que son aquellos que se asocian de ma-
tadios precoces; 2) producen una discapaci- nera fehaciente tanto a la presencia de cáncer
dad severa y requieren un tratamiento agresivo como a la de SPN7. No siempre se detectan;
y precoz, que en muchos casos no es eficaz. esto ocurre sobre todo en los SPN del sistema
Desde el punto de vista patogénico se acep- nervioso periférico. Cuando aparecen, no son
ta un origen inmunomediado4,5 y se describen específicos ni de un SPN ni de una neoplasia
dos grandes grupos de enfermedades: unas concreta. Por ejemplo, los anticuerpos anti-
relacionadas estrechamente con una neopla- Hu suelen relacionarse con cáncer de pulmón
sia, en las que se han encontrado anticuerpos y con un cuadro difuso de encefalomielitis,
contra antígenos intracelulares; otras, más re- pero puede aparecer en otras neoplasias y con
cientemente descritas, no siempre relaciona- otras manifestaciones clínicas.
das con una neoplasia y asociadas a anticuer-
pos contra antígenos de superficie neuronal Finalmente, si el paciente no tiene un cáncer
(Tabla 1). conocido, debe buscarse una neoplasia ocul-
ta8. En el caso de pacientes con un tumor
Los SPN constituyen un reto diagnóstico que conocido, es necesario establecer la relación
se fundamenta en tres pilares: el estudio clí- entre ambos procesos, bien porque se trate
nico para caracterizar el síndrome y descartar de una relación establecida (Hu y cáncer de
otros procesos, la búsqueda de anticuerpos pulmón) bien porque el SPN mejore al tratar el
específicos y establecer su posible relación tumor. La neoplasia que más frecuentemente
con una neoplasia. se asocia a SPN es el cáncer de pulmón de
células pequeñas (CPCP).
En primer lugar, respecto a la clínica, es impor-
tante reconocer los llamados “síndromes pa- Teniendo en cuenta estos tres factores, clínica,
raneoplásicos clásicos” que se asocian estre- anticuerpos y relación con neoplasia, se han
chamente a la presencia de neoplasia, frente a clasificado en “SPN definidos” o “SPN posi-
los “síndromes no clásicos” de asociación me- bles” (Tabla 3)6.

78
Tabla 1. Principales anticuerpos paraneoplásicos: síndromes y neoplasias relacionadas

Anticuerpos Síndrome paraneoplásico Neoplasias


1. Anticuerpos onconeuronales

Anti-Hu Encefalomielitis Pulmón (85%), sobre


Encefalitis límbica, encefalitis de tronco, todo CPCP
degeneración cerebelosa, neuronopatía Otros: neuroblastoma,
sensitiva, disautonomía próstata

Anti-Yo Degeneración cerebelosa Mama, ovario


paraneoplásica

Anti-Ri Opsoclonus-mioclonus CPCP, mama, ovario,


Degeneración cerebelosa, encefalitis vejiga
de tronco

Anti-CV2/CRMP5 Encefalomielitis CPCP, timoma


Encefalitis límbica, degeneración
cerebelosa, neuropatía periférica,
neuritis óptica, corea

Anti-Ma2 Encefalitis límbica, encefalitis de tronco Testicular


Anti-anfifisina Síndrome de la persona rígida Mama, CPCP
Encefalomielitis, encefalitis límbica,
degeneración cerebelosa, mielitis,
polineuropatía

Anti-Tr* Degeneración cerebelosa Linfoma de Hodgkin

2. Anticuerpos contra receptores de superficie

Anti-NMDAR Encefalomielitis Teratoma ovárico


Encefalitis límbica, encefalitis de tronco, (50% mujeres < 12a)
degeneración

Anti-Lgi1 Encefalitis límbica < 10% (CPCP, timoma)


Anti-CASPR2 Síndrome de Morvan < 20% (CPCP, timoma)
(encefalitis límbica, neuromiotonía)

Anti-AMPAR Encefalitis límbica CPCP, mama, timoma (> 60%)


Anti-GABA(b)R Encefalitis límbica CPCP (70%)
Anti-mGluR1 Degeneración cerebelosa Hodgkin
Anti-GlyR Encefalomielitis progresiva con No
rigidez y mioclonus

Anticanales del calcio P/Q Lambert-Eaton CPCP


Degeneración cerebelosa

Antireceptor de acetilcolina Miastenia gravis Timoma (15%)


Antireceptor de acetilcolina Neuropatía autonómica CPCP
gangliónico

*Anti-Tr: contra antígeno de superficie a diferencia del resto de onconeurnales


CPCP: cáncer de pulmón de células pequeñas

79
Tabla 2. Síndromes paraneoplásicos

Encefalopatías Polineuropatías

- Encefalomielitis* - Axonal
- Encefalitis límbica* - Desmielinizante (aguda/crónica)
- Degeneración cerebelosa subaguda* - Asociadas a paraproteína
- Opsoclonus-mioclonus* · Macroglobulinemia de Waldeström
- Encefalitis de tronco · Mieloma osteosclerótico (POEMS)
- Neuritis óptica · Amiloidosis
· Mieloma osteolítico
- Neuropatía vasculítica

Mielopatías Unión neuromuscular y músculo

- Mielitis - Neuromiotonía
· Encefalomielitis · Lambert-Eaton*
· Mielitis necrotizante · Miastenia gravis
- Síndrome del hombre rígido · Dermatomiositis*
· Miopatía necrotizante
· Miopatía caquéctica

Neuronopatías

- Neuronopatía motora
- Neuronopatía sensitiva subaguda*
- Neuronopatía autonómica
· Pseudoobstrucción intestinal crónica*
· Pandisautonomía

Con frecuencia se observa clínica heterogénea, superposición de síndromes o afectación difusa


*Síndromes paraneoplásicos clásicos. POEMS: polineuropatía, organomegalia, endocrinopatía, proteína M, cambios cutáneos)

El tratamiento de estos cuadros incluye el del cialmente en tumores de estirpe ectodérmica


propio tumor e inmunoterapia. Son de mal pro- como el CPCP.
nóstico en la mayoría de los casos1,9.
En este capítulo se tratarán los siguientes as- Hay que destacar la importancia del descubri-
pectos: 1) patogenia y principales anticuerpos miento de anticuerpos específicos relaciona-
relacionados; 2) aspectos prácticos del mane- dos con estos cuadros2,5. Primero se identifi-
jo y tratamiento de estos cuadros; 3) descrip- caron anticuerpos dirigidos contra antígenos
ción de los principales SPN. intracelulares y posteriormente otros contra
antígenos de superficie10, con mecanismos
PATOGENIA patogénicos y trascendencia diagnóstica y te-
Se considera que su origen está mediado por rapéutica diferentes:
una respuesta inmune cruzada pero el meca- ·· Anticuerpos contra antígenos intracelula-
nismo exacto no se conoce y es probablemen- res. Su papel patogénico directo no está
te heterogéneo4. Se postula que la presencia demostrado; probablemente medien inmu-
de antígenos tumorales similares a antígenos nidad celular, con destrucción neuronal por
neuronales (intracelulares/superficiales) des- linfocitos T citotóxicos. Se han dividido en
encadena una respuesta inmunológica celular “bien caracterizados”, dirigidos contra an-
y/o humoral que traspasa la barrera hema- tígenos de estructura molecular bien cono-
toencefálica y produce una lesión que se tra- cida y confirmados en diferentes estudios,
duce en clínica neurológica. Esto ocurre espe- y en “parcialmente caracterizados”, que

80
Tabla 3. Criterios diagnósticos de síndromes paraneoplásicos

Síndrome paraneoplásico definido Síndrome paraneoplásico posible

Síndrome clásico Síndrome clásico


+ Ac. bien caracterizados + Ac. parcialmente caracterizados

Síndrome clásico Síndrome clásico


+ Cáncer SIN Ac. NI cáncer

Síndrome no clásico Síndrome no clásico


+ Ac. bien caracterizados + Ac. parcialmente caracterizados

Síndrome no clásico Síndrome no clásico


+ Cáncer y mejoría tras su tratamiento + Cáncer (no respuesta a tratamiento)

necesitan más estudios7. Los onconeuro- Esta clasificación no debe ser considerada
nales son anticuerpos bien caracterizados axiomática, sino una aproximación que per-
en los que además se ha establecido una mite ayudar a orientar estos cuadros, con mu-
relación inequívoca con la presencia de chas excepciones2. Por ejemplo, los anticuer-
cáncer. Se asocian a lesión del sistema ner- pos contra antígenos de superficie no siempre
vioso a diferentes niveles por lo que pueden se asocian a un único cuadro clínico caracte-
producir cuadros clínicos heterogéneos. rístico; recientemente se han identificado pa-
La respuesta a tratamiento inmunológico, cientes con antireceptor NMDA que presentan
generalmente dirigido contra inmunidad clínica de tronco-cerebelo. También los anti-Tr
humoral, suele ser mala. Un ejemplo ca- se dirigen contra un antígeno de superficie y
racterístico son los anti-Hu, contra la pro- sin embargo se consideran onconeuronales en
teína HuD intracelular, expresada tanto en cuanto a su trascendencia patogénica, clínica y
tejido nervioso como en CPCP, por lo que diagnóstica: producen lesión neuronal por me-
generalmente se presenta en este tumor y canismos mal conocidos probablemente celu-
se manifiesta clínicamente por una encefa- lares; clínicamente dan lugar a un cuadro cere-
lomielitis. beloso con secuelas permanentes; se asocian
·· Anticuerpos contra antígenos de superfi- fuertemente al linfoma de Hodgkin. Muchos
cie: incluyen proteínas relacionadas con anticuerpos contra antígenos de superficie
canales iónicos y con receptores neurona- clásicamente no se han relacionado con tumo-
les sinápticos o extrasinápticos. Tienen un res, pero posteriormente sí se han identificado
papel patogénico conocido a través de la casos paraneoplásicos, como en anti-NMO o
inmunidad humoral. Producen inactivación antireceptor de glicina, por ejemplo.
neuronal y en menor medida destrucción
celular por lo que pueden ser reversibles. Se considera que anticuerpos como anti-anfifi-
No siempre se relacionan con un tumor de sina y anti-GAD deberían incluirse en un grupo
base. Podrían afectar a grupos neuronales intermedio5: GAD65 y anfifisina son antígenos
específicos por lo que con frecuencia pro- intracelulares sinápticos; los anticuerpos tie-
ducen cuadros neurológicos más definidos nen un papel patogénico directo, probable-
y característicos. Muchas veces tienen una mente median inmunidad humoral y celular;
buena respuesta a tratamiento. Un ejem- producen cuadros clínicos diversos y no siem-
plo característico son los anticuerpos anti- pre se asocian a un tumor de base; tienen una
receptor NMDA (subunidad NR1) que pro- respuesta variable a tratamiento.
ducen un cuadro clínico característico y se
puede asociar a teratoma ovárico.

81
Tabla 4. Orientación en algunos síndromes paraneoplásicos. Clínica predominante

CLÍNICA PREDOMIANTE SOSPECHA DIAGNÓSTICA


Alteración de conducta y cognitiva, crisis Encefalitis límbica

Nistagmo, ataxia de tronco y apendicular Degeneración cerebelosa subaguda


(opsoclonus-mioclonus / encefalitis de tronco)

Alteración oculomotora. Hipoventilación Encefalitis de tronco

Rigidez Síndrome del hombre rígido

Parestesias y ataxia de tronco. Alteración Neuronopatía sensitiva


sensitiva superficial y profunda

Hipotensión, estreñimiento, palpitaciones Neuropatía disautonómica

Debilidad proximal, fatigabilidad Lambert-Eaton

A pesar de su importancia, en muchos pacien- to y el seguimiento evolutivo. Además se debe


tes con un SPN no se encuentran anticuerpos tener en cuenta el manejo de pacientes con
específicos. Esto puede ser debido a que aún cáncer conocido que presentan estos cuadros.
no se han descubierto o más probablemente
porque en muchos casos, las alteraciones in- Diagnóstico
munológicas estén mediadas por mecanismos El diagnóstico se fundamenta en 1) un cuadro
no relacionados con anticuerpos específicos. clínico neurológico, excluyendo otras causas,
2) la presencia de anticuerpos específicos y 3)
ESTUDIO Y TRATAMIENTO DE LOS la existencia de cáncer1,3.
SÍNDROMES PARANEOPLÁSICOS
El manejo práctico de estos pacientes incluye 1. Estudio clínico. Habitualmente se presentan
su diagnóstico, el estudio de neoplasia oculta como cuadros agudos o subagudos de curso
en pacientes sin cáncer conocido, el tratamien- agresivo, precedido con frecuencia con fase

Tabla 5. Datos clínicos característicos en síndromes paraneoplásicos. Ejemplos

SIGNO CLÍNICO SOSPECHA DIAGNÓSTICA

Disautonomía asociada a encefalopatía Encefalomielitis (anti-Hu)

Corea Encefalomielitis (anti-CV2/CRMP5, -Hu)

Distonía de mandíbula, laringoespasmo Encefalitis de tronco (anti-Ri)

Oftalmoplejia Encefalitis de tronco (anti-Ma2)

Movimientos anormales bucolinguales Encefalitis anti-NMDAR

Crisis distónicas faciobraquiales Encefalitis límbica anti-Lgi1

Hiponatremia Encefalitis límbica anti-Lgi1

Encefalopatía y neuromiotonía Síndrome de Morvan (anti-CASPR2)

Hipereclepsia y rigidez Encefalomielitis rigidez mioclonus (anti-GlyR)

82
prodrómica inespecífica. Tienen manifestacio- ·· RMN: permite descartar otras complicacio-
nes heterogéneas pero algunos rasgos clínicos nes; puede mostrar lesiones inespecíficas
pueden ayudarnos a sospechar un síndrome como alteraciones de señal en encefalo-
clásico (Tabla 4). Por ejemplo, un cuadro de cri- mielitis o atrofia cerebelosa en fases tar-
sis epilépticas con alteración conductual y cog- días de la degeneración cerebelosa para-
nitiva haría sospechar una encefalitis límbica. neoplásica.
Además en ocasiones se asocian a signos clí- ·· LCR: ayuda a descartar una carcinoma-
nicos característicos, infrecuentes, que ayudan tosis meníngea; con frecuencia aparecen
al diagnóstico, como la distonía mandibular en cambios inflamatorios que, por otra parte,
anti-Ri (Tabla 5). Se han descrito casos de dos son inespecíficos (aumento de linfocitos en
SPN en el mismo paciente al mismo tiempo o fases iniciales, proteinorraquia después,
consecutivos. bandas oligoclonales hasta el 60% de los
pacientes).
Debe hacerse diagnóstico diferencial con otros ·· Electromiografía (EMG): ayuda a localizar un
cuadros más frecuentes como metástasis o síndrome periférico; muestra hallazgos es-
efectos secundarios de la quimioterapia u otros pecíficos en el síndrome de Lambert-Eaton,
procesos como una infección por herpes en la la miastenia gravis, la neuromiotonía y la
encefalitis límbica (Tabla 6). dermatomiositis.
·· Electroencefalograma (EEG): identifica crisis
Por otra parte, las pruebas complementarias epilépticas, patrones sugestivos de encefa-
también pueden apoyar el diagnóstico de SPN: lopatía metabólica o patrones específicos.

Tabla 6. Diagnóstico diferencial (principales)

Síndrome Diagnósticos diferenciales

Degeneración cerebelosa -Tumor (más frecuente metástasis)


subaguda -Tóxico
-Alcohólico / Déficit de B12, B1…
-Autoinmune (anti-GAD, Miller-Fisher…)

Encefalitis límbica -Infeccioso (grupo herpes)


-Tumor (más frecuente glioma)
-Autoinmune (anti-GAD, lupus, Sjögren, vasculitis aislada SNC)

Opsoclonus-mioclonus -Infeccioso (HIV, Hepatitis C, Whipple…)


-Postinfeccioso (estreptococo…)
-Metabólico (electrolitos, hipoxemia…)
-Tóxico

Neuronopatía sensitiva -Tóxico (cisplatino)


subaguda -Autoinmune (Sjögren)
-Infeccioso: HIV
-Hipervitaminosis B6, déficit B12

Neuropatía autonómica -Metabólico: diabetes


-Autoinmune: Guillain-Barré, Sjögren
-Neurodegenerativo: atrofia multisistemas

Lambert-Eaton -Miastenia
-Botulismo

Dermatomiositis -Tóxica (esteroides)


-Autoinmune (miositis con cuerpos de inclusión, miopatías necrotizantes)

83
Tabla 7. Criterios de sospecha clínica de etiología paraneoplásica

· Cuadro agudo-subagudo, agresivo

· Síndrome paraneoplásico clásico

· Afectación de diferentes áreas del sistema nervioso central y periférico

· Datos clínicos específicos

· Riesgo alto de cáncer (tabaco, síndrome constitucional…)

· Tumor conocido

· Descartadas otras etiologías

· Datos típicos en pruebas complementarias (EEG en enecefalitis NMDAR…)

La sospecha de síndrome SPN será alta en un cos sugestivos, como un cuadro sugestivo de
paciente con una clínica y estudios comple- encefalitis antireceptor de NMDA.
mentarios sugestivos y con factores de riesgo
para cáncer (Tabla 7). Se recomienda enviar muestras de sangre y
LCR a un laboratorio de referencia en determi-
2. Anticuerpos. Se deben buscar anticuerpos nados casos. Por ejemplo, un estudio negativo
específicos en todos los casos en que se sos- en caso de alta sospecha que pudiera deber-
pecha un SPN, especialmente ante un síndrome se a un anticuerpo poco habitual o a problemas
clásico (Tabla 1). Los anticuerpos contra antíge- técnicos; un resultado positivo inesperado; un
nos intracelulares (onconeuronales) se estudian estudio dudoso (título bajo), etc. Esto permite
por procedimientos diferentes a los dirigidos un mayor rendimiento diagnóstico por una parte
contra antígenos de superficie5,11. y, por otra, reunir biobancos que son imprescin-
dibles para avanzar en el estudio patogénico y
Para los anticuerpos onconeuronales habitual- diagnóstico de estas entidades infrecuentes y
mente se emplean métodos comercializados de mal conocidas.
Inmunoblot que examinan al mismo tiempo un
panel de anticuerpos intracelulares (por ejemplo, 3. Asociación a neoplasia. Se considera que
anti-Hu, -Yo, -Ri, -Ma/Ta, -CV2, -anfifisina). No el hallazgo de una neoplasia se relaciona con un
se recomienda analizarlos de forma aislada por- SPN, sobre todo cuando este mejora al tratar el
que un mismo síndrome puede estar causado cáncer o tiene una asociación conocida con un
por anticuerpos diferentes (por ejemplo, dege- determinado tumor (Tabla 1). Así en una pacien-
neración cerebelosa subaguda y anti-Yo, -Hu, te con anti-Yo, el hallazgo de una neoplasia de
Ri, CV2/CRMP5…). Se pueden detectar en sue- mama es característica. Por el contrario, en un
ro y LCR (más sensible). Suelen estudiarse en paciente con cáncer de laringe y anti-Hu, debe-
suero solamente, pero si la sospecha clínica es ría sospecharse una relación casual y buscar una
alta y los resultados son negativos, deben anali- segunda neoplasia, especialmente un CPCP.
zarse también en LCR.
*Criterios diagnósticos
Por otra parte, los anticuerpos contra antígenos En la tabla 3 se establecen los criterios para
de superficie son más difíciles de estudiar y de- diagnosticar un SPN definido y un SNP posible,
ben analizarse tanto en suero como en LCR. Se en función de presentación clínica, la determi-
solicitarán cuando aparecen cuadros específi- nación de anticuerpos específicos y la asocia-

84
ción del cuadro a un tumor. Esta clasificación plear corticoides, azatioprina o micofenolato. En
es importante para establecer la estrategia de general, los síndromes mediados por anticuer-
búsqueda tumoral y de tratamiento en los SPN6. pos contra antígenos de superficie responden
mejor que los mediados contra antígenos intra-
Búsqueda de neoplasia oculta celulares.
En el caso de un SPN definido se debe hacer
un estudio exhaustivo y sistemático, incluyen- Además en se pueden emplear tratamiento sin-
do, si el resultado es negativo, la tomografía por tomático en cuadros específicos, como 3-4 dia-
emisión de positrones. Se repite periódicamente minopiridina en Lambert-Eaton, piridostigmina
porque un tumor puede manifestarse hasta cua- en miastenia, benzodiacepinas en síndrome de
tro años más tarde de la aparición del SPN8. hombre rígido, etc.

En un SPN posible se realiza un estudio inicial, al Evolución


menos básico. El seguimiento debe individuali- El pronóstico de la neoplasia subyacente parece
zarse. En síndromes que pueden asociarse o no ser mejor tanto por el diagnóstico precoz como
a neoplasia es difícil determinar el estudio a rea- por el hecho de que el SPN podría asociarse a
lizar. Por ejemplo, en el 15% de las miastenias una respuesta inmunológica más agresiva frente
se encuentra timoma por lo que se recomienda al tumor.
hacer al menos un TC torácico y en función de
la evolución y respuesta al tratamiento, repetirlo Respecto al propio cuadro paraneoplásico, el
o ampliar el estudio. En el síndrome de Lambert- pronóstico depende del mecanismo patogénico
Eaton, se ha establecido una puntuación para (mejor en anticuerpos contra antígenos de su-
intentar identificar los pacientes con más riesgo perficie), de la localización (mejor en sitios que
y en los que merece la pena hacer un seguimien- pueden regenerarse como la vaina de mielina) y
to más allá del estudio inicial; el límite en este de la precocidad del tratamiento9.
cuadro se establece en dos años. En cambio,
un síndrome de Guillain-Barré podría relacionar- Muchos de estos cuadros dejan secuelas seve-
se con linfoma pero la asociación es infrecuente ras que limitan la calidad de vida y precisan un
y no se recomienda el estudio salvo datos de seguimiento y tratamiento permanente. Por otra
sospecha adicionales. parte, es frecuente la progresión o la recidiva de
un SPN. No suele ser sencillo distinguir si es-
Tratamiento tamos ante fluctuaciones del cuadro secuelar o
Se fundamenta en la erradicación del tumor, la ante una reactivación del SPN. El seguimiento
supresión de la respuesta inmune y tratamientos clínico y en ocasiones la seriación de anticuer-
sintomáticos específicos1,3,9. pos pueden ayudarnos a diagnosticar una reci-
diva e instaurar nuevamente tratamiento inmu-
La eliminación del tumor reduciría la carga anti- nomodulador.
génica y por tanto mejoraría el cuadro paraneo-
plásico o al menos evitaría su progresión. Un No está claro si es necesario un tratamiento a
ejemplo es la extirpación de un teratoma ovárico largo plazo. En la mayoría de los casos no se
en la encefalitis antireceptor NMDA. plantea. En cambio en síndromes en los que se
ha visto recidivas frecuentes, sería recomen-
La inmunoterapia debe ser lo más agresiva y dable un tratamiento crónico oral. También en
precoz posible para evitar un daño estructural los que el curso puede ser progresivo durante
que pueda ser irreversible. Habitualmente los meses puede emplearse tratamiento oral cró-
fármacos de primera línea son corticoides, in- nico o ciclos de tratamiento periódico, como
munoglobulinas y/o plasmaféresis. De segunda inmunoglobulinas mensuales.
línea se plantea rituximab y/o ciclofosfamida. Se
ha planteado el empleo de anticuerpos mono- Síndromes paraneoplásicos en pacientes
clonales de reciente desarrollo. Si es necesario con cáncer ya diagnosticado
un tratamiento de mantenimiento, se puede em- En estos casos el diagnóstico es más compli-

85
cado. Es mucho más frecuente que un cuadro más frecuente es la degeneración cerebelosa
neurológico se deba a una complicación direc- subaguda, seguida de la encefalitis límbica,
ta del tumor o de su tratamiento que a un SPN la encefalomielitis y la neuronopatía sensitiva.
que, por otra parte podría pasar desapercibi- Son menos frecuentes el opsoclonus-mioclo-
do. Por ejemplo, en una paciente con cáncer nus o el síndrome de persona rígida.
de pulmón en la que aparece un cuadro cere-
beloso, es mucho más probable que se deba Encefalitis antireceptor NMDA
a metástasis, carcinomatosis meníngea o toxi- Es el síndrome más frecuente. Es una ence-
cidad del tratamiento que a una degeneración falitis difusa que presenta un curso clínico
cerebelosa subaguda paraneoplásica. progresivo, típico. Se precede de un pródro-
mo pseudogripal. En adultos, las primeras
Si se identifica un SPN debe plantearse en pri- manifestaciones son psiquiátricas asociadas
mer lugar si se relaciona con el tumor conocido insomnio y alteración mnésica. Posteriormen-
o habría que buscar una segunda neoplasia, te aparecen crisis epilépticas refractarias, que
en el caso de que la relación no sea consisten- en niños pueden ser la primera manifestación.
te. Así en el ejemplo anterior de una mujer con Después pueden aparecer otros síntomas que
cáncer de pulmón conocido y un cuadro cere- incluyen movimientos anormales multiformes
beloso subagudo, si se identifican anticuerpos y abigarrados (desde discinesias orofaciales
anti-Yo, debería buscarse un cáncer de mama a distonía y rigidez generalizada), alteración
que sería el responsable del SPN con mucha del lenguaje (bradilalia, mutismo, ecolalia), dis-
mayor probabilidad. minución progresiva del nivel de conciencia,
disautonomía con compromiso cardíaco e hi-
Además se plantea si la aparición del cuadro poventilación central que requiere ventilación
supone reactivación o no del tumor de base. mecánica.
Se ha visto que en algunos casos un SPN pre-
dice una progresión tumoral por lo que se reco- La RMN no suele mostrar alteraciones, el LCR
mienda reevaluar la situación de la neoplasia. es inflamatorio en la mayoría de los casos y el
EEG puede mostrar un patrón típico llamado
Otro aspecto importante es la interacción de ondas delta en cepillo (extreme delta brush).
quimioterapia e inmunosupresión que poten-
cia la toxicidad e interfiere con la eficacia del Es más frecuente en mujeres jóvenes, en las
tratamiento. En estos casos la inmunoterapia que en el 50% se asocia a teratoma ovárico,
muchas veces no puede ser lo suficientemente pero puede aparecer en cualquier segmento
agresiva por lo que se reduce su eficacia. de edad, siendo idiopático en la mayoría de
los casos.
Finalmente, la aparición de un SPN influye en
muchas ocasiones en la decisión de continuar Con inmunoterapia y extirpación del teratoma,
o no con tratamiento activo para el tumor de la mayoría tienen buena evolución aunque la
base. En principio es recomendable mantener mortalidad desde el 5% y más del 20% tienen
tratamiento porque al mejorar el tumor puede secuelas severas.
mejorar el SPN y por tanto el estado funcional
del paciente pero debe individualizarse1. Encefalomielitis
Afecta a todo el sistema nervioso, generalmen-
Síndromes clínicos te de forma difusa o multifocal. Cuando predo-
A continuación se describen algunos de los mina un cuadro focal puede manifestarse por
cuadros más característicos (Tabla 2)3,12. En ejemplo como una encefalitis límbica, de tron-
general, son más frecuentes los relacionados co, mielitis, neuronopatía sensitiva o disauto-
con anticuerpos contra antígenos de superfi- nomía.
cie (especialmente la encefalitis por anticuerpo
anti-receptor de NMDA o el síndrome de Lam- Este cuadro se asocia típicamente con anti-
bert-Eaton) que los SPN clásicos. De estos, el cuerpos anti-Hu y con CPCP, presente hasta

86
en el 75% de los casos. Predomina la altera- posibilidad para la marcha y la sedestación. El
ción del hipocampo (encefalitis límbica) pero LCR y la RMN son normales. El tratamiento no
con frecuencia aparecen signos de tronco, suele ser eficaz.
alteración periférica y/o disautonomía. Otros
anticuerpos que se han descrito habitualmen- Los anticuerpos onconeuronales más fre-
te son CV2/CRMP5, asociado a timoma y que cuentes son: anti-Hu, en encefalomielitis, con
puede manifestarse predominantemente con CPCP; anti-Yo, en cáncer de mama y ovario;
una neuritis óptica o corea. anti-Tr en linfoma de Hodgkin, quizás con me-
jor pronóstico. También se ha visto con anti-
El pronóstico es pobre con secuelas per- GAD, no paraneoplásico en principio. Hasta
manentes a pesar de tratamiento. Puede ser en el 50% son seronegativos en el momento
causa de la muerte especialmente cuando se actual.
afecta el tronco cerebral o el sistema nervioso
autónomo. Opsoclonus mioclonus ataxia
El opsoclonus es un trastorno de la motilidad
Encefalitis límbica ocular que consiste en sacadas conjugadas,
Se manifiesta por alteraciones psiquiátricas, multidireccionales, de gran amplitud, continuas
déficit de memoria reciente y crisis epilépticas. e involuntarias. Se suele asociar a mioclonias
Se deben a lesión del hipocampo. Puede aso- focales o difusas y, con menos frecuencia, a
ciarse a anticuerpos onconeuronales o a an- ataxia de tronco, inatención, inquietud o alte-
ticuerpos de superficie neuronal. En el primer ración del sueño. Puede ser paraneoplásico,
caso forma parte del espectro de la encefalo- pero también desencadenado por otras cau-
mielitis, descrita previamente. sas como infecciones víricas, lesiones estruc-
turales (hemorragias, tumores), alteraciones
En cambio, las encefalitis límbicas causadas metabólicas o faringitis postestreptocócica. La
por anticuerpos contra antígenos de superficie RMN y el LCR son habitualmente normales.
no siempre son paraneoplásicas. Se relacio-
nan con neoplasia las encefalitis antireceptor En niños, predomina el opsoclonus. En el 40%
AMPA en que predominan los síntomas psi- de los casos es paraneoplásico asociado a un
quiátricos; o las anti-GABA(b), sobre todo con neuroblastoma, al que suele preceder; en los
crisis. No son paraneoplásicas las anti-LGI1, demás casos, la causa más frecuente es vírica.
con crisis distónicas faciobraquiales e hipo- Hasta el momento no se han descrito anticuer-
natremia. Las anti-CASPR2 se manifiestan por pos específicos. El tratamiento del tumor junto
un síndrome de Morvan (encefalitis límbica y con inmunosupresión, especialmente ACTH,
neuromiotonía). La respuesta a tratamiento in- corticoides, inmunoglobulinas, suele dar bue-
munomodulador es mejor en este grupo. nos resultados a pesar de secuelas cognitivas
o posibles recaídas al reducir los corticoides.
En ambos grupos el LCR suele ser inflamato-
rio. La RMN puede mostrar lesiones focales en En adultos, el opsoclonus aparece habitual-
hipocampo o ser normal. El EEG puede revelar mente con mioclonias y ataxia. Es paraneoplá-
enlentecimiento focal e, incluso, actividad epi- sico en el 20% de los casos. Los tumores más
leptiforme. Se debe hacer diagnóstico diferen- frecuentes son CPCP y mama asociado a anti-
cial con encefalitis herpética. Ri. La respuesta a tratamiento es peor que en
niños y mejora con el diagnóstico precoz.
Degeneración cerebelosa paraneoplásica
Es el síndrome clásico más frecuente. Clínica- Síndrome de la persona rígida
mente se manifiestan por un cuadro pancere- Se relaciona con la lesión de interneuronas
beloso progresivo con vértigo, ataxia de tronco medulares encargadas de la inhibición de la
y apendicular (inestabilidad de la marcha y dis- motoneurona anterior. Se manifiesta por ri-
metría), disartria y alteración en la mirada con gidez y espasmos musculares dolorosos que
seguimiento sacádico y nistagmo, dejando en afectan a la musculatura axial y proximal de los
muchas ocasiones secuelas severas, con im- miembros inferiores. Puede haber síndromes
87
parciales. El EMG muestra actividad de unidad testinal, retención urinaria, sequedad de boca,
motora continua. alteración pupilar, alteración del ritmo cardíaco.

Puede ser paraneoplásica o no. Cuando es pa- Polineuropatías


raneoplásica pueden encontrarse anticuerpos Son heterogéneas y en general clínicamente
anti-anfifisna y se asocia a CPCP y a cáncer inespecíficas. La mayoría no se asocian a anti-
de mama, predominantemente. Cuando se re- cuerpos paraneoplásicos.
laciona con anti-GAD, no suele ser paraneo-
plásico. Una variante asociada a antireceptor Muchos pacientes con cáncer presentan una
de glicina es la encefalomielitis progresiva con polineuropatía crónica sensitivomotora axonal
rigidez y mioclonias, tampoco paraneoplásica. tóxica y/o carencial, no paraneoplásica. Cuan-
do es paraneoplásica se relaciona sobre todo
Además de la inmunoterapia, debe emplearse con CPCP. En algunos casos se han encontra-
tratamiento sintomático con baclofeno y ben- do anticuerpos anti-CV2/CRMP5 con un cua-
zodiacepinas. El pronóstico es malo, con po- dro clínico muy severo.
bre respuesta al tratamiento.
Otros cuadros descritos son la neuropatía vas-
Neuronopatía sensitiva culítica que se presenta más como polienuro-
Se debe a la lesión de la segunda neurona patía que como mononeuropatía múltiple; la
sensitiva en los ganglios raquídeos dorsales. plexopatía braquial relacionada con linfoma de
Se manifiesta por alteración sensitiva glo- Hodgkin; las neuropatías inflamatorias desmie-
bal, tactoalgésica y posicional, dando lugar a linizantes agudas (Guillain-Barré) o crónicas
dolor, parestesias y ataxia. En EMG hay una (CIDP) que en pacientes con linfomas deben
alteración sensitiva axonal aislada. Debe di- diferenciarse de infiltración tumoral.
ferenciarse de neuronopatías por cisplatino o
autoinmunes sistémicas (Sjögren). Neuropatías asociadas a paraproteinemia
Aproximadamente el 10% de los pacientes
La causa más frecuente es el CPCP, con anti- con una polineuropatía sensitivomotora cróni-
cuerpos anti-Hu. En estos casos, puede apa- ca tienen una paraproteinemia de base. Ade-
recer con clínica multifocal en el contexto de más, la presencia de polineuropatía en una
una encefalomielitis. Algunos tienen anti-CV2/ gammapatía monoclonal de significado incier-
CRMP5, habitualmente junto con anti-Hu; en es- to, aumenta las probabilidades de transforma-
tos casos suele aparecer además una polineuro- ción maligna.
patía mixta sensitivo-motora, axonal y desmieli-
nizante. El tratamiento suele ser ineficaz. En general mejoran con tratamiento del mielo-
ma por lo que es imprescindible distinguirlas
Neuronopatías autonómicas de las polineuropatías tóxicas por quimiotera-
La forma de presentación más característi- pia, mucho más frecuentes. Destacan:
ca es una pseudoobstrucción intestinal por la ·· Polineuropatía inespecífica, generalmente
pérdida de neuronas del plexo entérico. Se da asociada a IgA o IgG.
con anti-Hu y CPCP. Se manifiesta por estreñi- ·· Amiloidosis con afectación de fibra fina y
miento pertinaz y molestias abdominales ines- dolor distal, alteración de la sensibilidad
pecíficas. Puede haber afectación neurológica tactoalgésica y disautonomía.
más difusa. ·· La macroglobulinemia de Waldeström,
asociada a paraproteína IgM puede asociar
Otro síndrome es la pandisautonomía con polineuropatías heterogéneas (axonal, des-
afectación simpática y parasimpática global, mielinizante, crioglobulinemia…). Los anti-
con frecuencia no paraneoplásico. En ocasio- cuerpos anti-MAG son menos frecuentes.
nes hay anticuerpos antireceptor gangliónico ·· El mieloma osteosclerótico asocia polineu-
de acetilcolina. Se presenta con anhidrosis, ropatía en el 50% de los pacientes en el
hipotensión ortostática, dismotilidad gastroin- contexto del síndrome POEMS (polineuro-

88
patía, organomegalia, endocrinopatía, pro- ·· Pueden afectar a cualquier nivel del sis-
teína M, cambios cutáneos). Es desmielini- tema nervioso y con frecuencia producen
zante, a veces difícil de diferenciar de una cuadros difusos o multifocales.
CIDP (desmielinización más extensa y ma- ·· Los síndromes clásicos se asocian con fre-
yor afectación motora en POEMS). cuencia a un tumor.
·· En estos pacientes, deben buscarse an-
Neuromiotonía (síndrome de Isaac) ticuerpos onconeuronales que tienen una
Se caracteriza por una actividad continua de alta especificidad para una neoplasia sub-
la fibra muscular en reposo que da lugar a yacente. No están presentes en todos los
mioquimias, calambres y pseudomiotonía (di- pacientes.
ficultad para la relajación muscular). El EMG ·· Los anticuerpos contra antígenos de su-
muestra descargas irregulares espontáneas perficie, a diferencia de los onconeurona-
de unidades motoras aisladas en forma de do- les, pueden asociarse o no a cáncer. Dan
bletes, tripletes o multipletes. El síndrome de lugar a encefalitis y alteraciones de la unión
Morvan, neuromiotonía y encefalitis límbica, se neuromuscular, fundamentalmente.
asocia a anti-CASPR2. Es más frecuente en ti- ·· El síndrome más frecuente es la encefali-
moma. tis por anticuerpos anti-NMDAR. Puede
asociarse a teratoma ovárico pero que no
Síndrome de Lambert-Eaton siempre es paraneoplásico.
Se produce por alteración de la unión neuro- ·· Los síndromes clásicos más frecuentes
muscular por anticuerpos contra canales del son la degeneración cerebelosa subaguda,
calcio voltaje-dependientes tipo P/Q que im- la encefalomielitis, la encefalitis límbica y la
piden la entrada de calcio en el axón terminal neuronopatía sensitiva. Las encefalitis no
(presináptico), disminuyendo la liberación de siempre son paraneoplásicas.
acetilcolina al espacio sináptico. En el 50% ·· Los SPN definidos obligan a buscar una
de los casos es paraneoplásico, asociado a neoplasia subyacente.
CPCP; se han descrito casos en que se asocia ·· Con frecuencia preceden a la aparición del
a degeneración cerebelosa. tumor, incluso hasta varios años.
·· El tratamiento de los SPN consiste en la
Clínicamente se manifiesta por debilidad de erradicación del tumor y la inmunoterapia.
cinturas, sobre todo en miembros inferiores, Debe instaurarse lo antes posible. Los sín-
con dificultad para levantarse o subir escale- dromes con anticuerpos contra receptores
ras. Es típica la arreflexia que mejora tras el de superficie responden mejor y tienen me-
ejercicio. La musculatura bulbar (ptosis, diplo- jor pronóstico.
pia, disartria, disfagia…) se afecta más tardía-
mente a diferencia de la miastenia gravis. En
el EMG con la estimulación repetitiva de alta
frecuencia, se observa un aumento del área
del potencial de acción motor por encima del
100%. La respuesta a tratamiento suele ser
favorable. Incluye tratamiento antitumoral, in-
munomodulación y fármacos que mejoran la
trasmisión sináptica, especialmente 3-4 diami-
nopiridina.

PUNTOS CLAVE
·· Los SPN son cuadros poco frecuentes pero
que deben sospecharse en pacientes con
un proceso agudo o subagudo grave, con
clínica característica, en los que se descar-
tan otras etiologías.

89
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90
Capítulo 9
Síndromes paraneoplásicos
oftalmológicos
Autores:
Isabel Prieto Muñoz Laura Cabrejas Martínez
Oncología Radioterápica. Oftalmología.
Fundación Jiménez Díaz Fundación Jiménez Díaz

Los síndromes paraneoplásicos con afectación control la unión neuromuscular, al músculo o


oftalmológica son poco frecuentes y muchas al control central del movimiento pueden tener
veces pueden pasar inadvertidos. La mayoría manifestaciones oftalmológicas en forma de
se encuentran dentro de los síndromes para- diplopia u oscilopsia (síndrome de Lambert-
neoplásicos neurológicos y pueden afectar a Eaton, miastenia gravis, síndrome de opso-
la visión (retinopatía asociada al cáncer (CAR), clonus-mioclonus...) (Tabla 1). Asimismo, otros
retinopatía asociada al melanoma (MAR) y neu- síndromes paraneoplásicos dermatológicos
ropatía óptica paraneoplásica (NOP)). Otros pueden tener también manifestaciones oftal-
síndromes paraneoplásicos afectan también a mológicas (dermatomiositis, pénfigo…).
la visión aunque no están dentro de los sín-
dromes neurológicos paraneoplásicos habi- Globalmente, los síndromes neurológicos pa-
tualmente descritos (proliferación melanocítica raneoplásicos son entidades poco frecuentes
uveal difusa bilateral (BDUMP) y maculopatía (0,5-1% de todos los pacientes con cáncer),
viteliforme paraneoplásica (PVM)). Algunos pero se dan en el 2-3% de los pacientes con
de los síndromes neurológicos que afectan al neuroblastoma o carcinoma microcítico de

Tabla 1. Sindromes paraneoplásicos con manifestaciones oftalmológicas.

Sindromes paraneoplásicos con manifestaciones oftalmológicas

SÍNDROMES · Retinopatía asociada al cáncer (CAR)


PARANEOPLÁSICOS QUE · Retinopatía asociada al melanoma (MAR)
AFECTAN A LA VISION · Neuropatía óptica paraneoplásica (NOP)
· Proliferación melanocítica uveal difusa bilateral (BDUMP)
· Maculopatíaviteliformeparaneoplásica (PVM)

SÍNDROMES · Síndrome de Lambert-Eaton


PARANEOPLÁSICOS QUE · Miastenia gravis
AFECTAN A LA MOTILIDAD · Miositis orbitaria
OCULAR · Sd de opsoclonus-mioclonus
· Flutter ocular

SINDROMES · Dermatomiositis
PARANEOPÁSICOS · Pénfigo paraneoplásico
DERMATOLÓGICOS
CON AFECTACIÓN
OFTALMOLÓGICA

*En negrita, síndromes paraneoplásicos descritos como "clásicos", cuya presencia tiene una alta asociación con un cáncer de base2.

91
pulmón y en el 30-50% de los pacientes con rológico paraneoplásico muy poco frecuente.
timoma1. En el 60% de los pacientes los sínto- Se asocia sobre todo al carcinoma microcíti-
mas neurológicos preceden al diagnóstico de co de pulmón, aunque se han descrito casos
cáncer. asociados a tumores ginecológicos (ovario y
endometrio), mama, carcinoma de pulmón no
El diagnóstico de un síndrome neurológico pa- microcítico, linfoma y próstata4.
raneoplásico se basa fundamentalmente en
los siguientes aspectos2: La CAR fue descrita por primera vez en 1976
·· Exploración neurológica para determinar por Sawyer5 en tres pacientes con cáncer
si nos encontramos ante un cuadro clínico de pulmón de células pequeñas. Keltner et
"clásico" (alta asociación a cáncer) o "no al.6, siete años después, postulan que la au-
clásico" (a veces se asocian a cáncer aun- toinmunidad juega un papel crucial en CAR
que no de una forma tan frecuente como y Kornguth et al., demostraron anticuerpos
los síndromes clásicos). La identificación anticélulas ganglionares de la retina4.
de un síndrome paraneoplásico clásico
debe propiciar la búsqueda de un tumor, El mecanismo autoinmune de la CAR se basa,
teniendo en cuenta que puede tratarse de como en otros síndromes paraneoplásicos, en
una entidad no solo maligna sino también el mimetismo molecular de determinados antí-
benigna (Tabla 1). genos tumorales con antígenos de los fotorre-
·· Presencia de anticuerpos onconeurales ceptores y células ganglionares. Se han iden-
bien caracterizados o no en suero o LCR. tificado anticuerpos antiantígenos retinianos
·· Diagnóstico previo de cáncer y exclusión mediante técnicas de inmunofluorescencia que
de otros trastornos relacionados con el reaccionan tanto con los segmentos externos
cáncer y/o tratamiento que justifiquen las de los fotorreceptores como con las células
manifestaciones clínicas. ganglionares de la retina y el nervio óptico6. Se
·· Otros estudios electrofisiológicos. han identificado más de 18 antígenos como
posibles dianas de dichos autoanticuerpos, el
Trataremos este capítulo de síndromes paraneo- más conocido de ellos la recoverina, proteína
plásicos oftalmológicos de la siguiente manera: de unión al calcio de 23kDa presente tanto en
·· Síndromes paraneoplásicos que afectan a los conos como en los bastones retinianos y
la visión: CAR, MAR, PVM, BDUMP y NOP. encargada de controlar la fosforilación del re-
·· Síndromes paraneoplásicos que afectan a ceptor visual rodopsina mediante la inhibición
la motilidad ocular: síndrome miastenifor- de la rodopsin-kinasa (GRK-1). La expresión
me de Lambert-Eaton, miastenia gravis, aberrante de proteína recoverina y la presencia
opsoclonus mioclonus, Flutter ocular y de autoanticuerpos contra dicha proteína en
miositis. las células tumorales es crítica para el desa-
·· Síndromes paraneoplásicos dermatológi- rrollo de CAR. Los genes para esta proteína se
cos con afectación oftalmológica: derma- han localizado en humanos en el cromosoma
tomiositis, pénfigo. 17; una mutación en el gen p53, gen supresor
tumoral localizado también en el cromosoma
SÍNDROMES PARANEOPLÁSICOS 17 cerca del lugar del gen de la recoverina, po-
QUE AFECTAN A LA VISIÓN dría dar lugar a la producción masiva de reco-
1. Retinopatía asociada a cáncer verina altamente inmunogénica que produciría
La retinopatía asociada a cáncer (CAR) es una grandes cantidades de IgG-antirecoverina,
retinopatía adquirida autoinmune en la que se que aparecerían en el suero de estos pacien-
produce una degeneración de los fotorrecep- tes. Los elevados niveles de IgG-antirecoveri-
tores y de las células ganglionares de la retina na penetrarían la barrera retiniana y se unirían
mediada por células tumorales con autoanti- a las moléculas de recoverina de los fotorre-
cuerpos contra antígenos específicos de la re- ceptores. La cascada de la fototransducción
tina3. Constituye la retinopatía paraneoplásica dependiente del calcio y de la luz y modulada
más frecuente a pesar de ser un síndrome neu- por la recoverina conduciría a un aumento de

92
la fosforilación de la rodopsina, el receptor vi- 1 (TULP1), la transducina, la arrestina, el anti-
sual, a través de la inhibición de la rodopsina- núcleo de los fotorreceptores y proteínas hsc
kinasa. Por la absorción de la luz, la rodopsina 70,44- y 43-.
es modificada en su estructura molecular y se
descompone en sus componentes proteicos y La pérdida bilateral y subaguda de visión en
pigmentarios. El cómo este proceso fotoquími- pacientes con CAR sucede a lo largo de sema-
co produce modificaciones de la membrana y nas o meses. La edad media está en 65 años
con ello la excitación nerviosa es algo que no y se afectan igualmente varones y mujeres4. La
se conoce bien, pero parece que en el caso disfunción de los conos se traduce en pérdi-
del CAR, la molécula de rodopsina fosforilada da progresiva de la agudeza visual, pérdida de
incrementaría los niveles intracelulares de cal- visión de los colores, fotofobia y escotomas
cio y con ello la activación de las vías de la centrales. La disfunción de los bastones puede
apoptosis de las células fotorreceptoras (Figu- traducirse en ceguera nocturna, disminución
ra 1). El tejido retiniano de pacientes con CAR de la adaptación a la oscuridad, escotomas en
muestra una degeneración extensa de la capa anillo y defectos del campo visual. Al inicio del
nuclear externa junto con segmentos internos cuadro es típico que los pacientes presenten
y externos de la capa de fotorreceptores. Las un fondo de ojo normal, y a medida que pro-
capas internas de la retina y el epitelio pigmen- gresa aparezca un estrechamiento arteriolar,
tario están preservadas y aparecen pocos infil- un epitelio pigmentado de aspecto moteado y
trados inflamatorios, lo que sugiere realmente una papila pálida. Por lo general, el pronóstico
la existencia de otras vías de muerte celular. suele ser malo.

Existen otros antígenos implicados en la CAR La mitad de los pacientes con CAR debutan
los más importantes de las cuales son la 46 con síntomas visuales antes del diagnóstico
kD-enolasa retiniana, una tubby-like proteína de cáncer, y lo sutil de los síntomas dificulta

FOTORRECTOR
Producción

T
ectópica de
recoverina

Factores
tumorales
Rodopsin-Kinasa
Apoptosis

Rodopsina-P Rodopsina

Ca+
Ca+ Ca+
IgG antirecoverina Ca+
Ca+

Figura 1. Mecanismo fisiopatológico de la retinopatía asociada a cáncer. La producción masiva de


anticuerpos-antirecoverina inducidos por factores tumorales favorecen la fosforilación de la rodopsina,
facilitando la entrada de calcio en la célula y el inicio del proceso apoptótico del fotorreceptor6.

93
un diagnóstico precoz. La tríada de fotosensi- drán fotofobia, pérdida de la visión de los co-
bilidad, escotomas en anillo y estrechamiento lores y escotomas centrales. El ERG mostrará
arteriolar en un paciente anciano con síntomas defectos en la respuesta de los conos. Se han
visuales que no concuerdan con los hallaz- descrito casos en carcinoma de endometrio y
gos exploratorios puede hacer sospechar un de laringe asociados a anticuerpos de 23 Kd y
CAR. El electrorretinograma (ERG) típicamente 50 Kd y a antígenos de 40 Kd localizados en los
muestra una afectación severa de las ondas a segmentos externos de los fotorreceptores8.
y b como consecuencia de afectación difusa
de los fotorreceptores retinianos7. Los poten- 2. Retinopatía asociada a melanoma
ciales evocados visuales y el LCR son norma- La retinopatía asociada a melanoma (MAR) es
les. Los tests inmunohistoquímicos que detec- un síndrome paraneoplásico raro en pacientes
tan la presencia de anticuerpos antiantígenos con melanoma9. A diferencia de CAR, en MAR
retinianos son cruciales para el diagnóstico los pacientes suelen tener un diagnóstico pre-
de CAR. Es importante recordar que aunque vio de melanoma metastásico. El tiempo me-
el más frecuente el anticuerpo anti-recoverina, dio desde el diagnóstico de melanoma y MAR
su negatividad no excluye el diagnóstico, dado es de 3,6 años (rango 2 meses-19 años). La
que puede haber respuesta inmunológica fren- edad media de presentación es durante la sex-
te a otros antígenos. Teniendo en cuenta que ta década de la vida con una clara predilección
más de la mitad de los casos precede al diag- por el sexo masculino (ratio 4,7:1)10.
nóstico del tumor, la búsqueda extensa de un
cáncer oculto es de vital importancia. Al igual que en la CAR, el mimetismo molecular
juega un papel fundamental. Sin embargo, pre-
No hay ninguna pauta de tratamiento estan- senta algunas diferencias respecto a la CAR.
darizada. Dada su etiopatogenia inmune, se Mientras que en la anterior los mecanismos
han ensayado numerosas terapias inmuno- de degeneración retiniana son bastante cono-
moduladoras para mejorar los síntomas de los cidos, en la retinopatía asociada a melanoma
pacientes. Tampoco el tratamiento del cáncer algunos de estos mecanismos permanecen to-
de base ha demostrado mejorar los resultados davía sin descubrir. En la respuesta inmunohis-
visuales4,7. El uso de corticoides orales o intra- toquímica se implican antígenos localizados en
venosos ofrece resultados contradictorios. Lo la capa de células bipolares, donde las células
que sí parece eficaz son los corticoides y otras horizontales y amacrinas se entremezclan con
terapias inmunomoduladoras en la prevención los axones de las células de Müller. A diferen-
de la pérdida de visión debido a la naturaleza cia de la CAR, los antígenos no son claramen-
autoinmune del trastorno. El uso de plasmafé- te identificables en las reacciones de Western
resis en monoterapia no ha demostrado ser útil blot, sugiriendo que los antígenos implicados
y la combinación de plasmaféresis con corti- son pequeñas cantidades de proteoglicanos,
coides puede estabilizar la agudeza visual. La lípidos, carbohidratos o una combinación de
terapia con inmunoglobulinas intravenosas ellos. Hasta la fecha se han identificado au-
también ofrece resultados contradictorios y los toanticuerpos contra la proteína transducina,
antagonistas del calcio no han demostrado su que forma parte de la transducción de la señal
utilidad en humanos. Se ha descrito un caso visual, contra un 22 kDa antígeno neuronal y
de un paciente con CAR demostrado seroló- contra una proteína 35 kDa en las células de
gicamente y neuropatía óptica paraneoplásica Müller de la glía. Otros estudios han identifica-
tratado con alemtuzumab con mejoría de la vi- do mitofilina y titin como potenciales antígenos
sión, mejoría que se mantuvo a lo largo de los contra los que aparecen anticuerpos exclusi-
ocho años de seguimiento. vamente en suero de pacientes con MAR11. El
hecho de que hasta la fecha ninguno de los
Existe una variante clínica de CAR que solo antígenos asociados a MAR haya desencade-
afecta a los conos (disfunción de conos aso- nado una respuesta humoral inmune identifica-
ciada al cáncer) y que fue descrita por primera ble sobre la superficie celular sugiere que los
vez por Cogan en 1990. Estos pacientes ten- mecanismos celulares más que los humorales

94
serían los responsables del ataque inmune pri- asociada al melanoma o una entidad distinta12.
mario contra la retina. También se ha intentado Como en el caso de la MAR, la PMV está aso-
establecer una relación entre la existencia de ciada al melanoma pero no se asocia a un anti-
anticuerpos antiretinianos y la supervivencia cuerpo antiretiniano concreto. Se han descrito
de pacientes con melanoma. casos aislados con anticuerpos anti-bestrofina
y anti-peroxiredosina-3, lo que sugiere que la
La sintomatología clínica típica refleja una dis- respuesta inmunológica pudiera estar dirigida
función de los bastones. Los pacientes suelen hacia el epitelio pigmentario de la retina.
tener fotopsias y pérdida de visión nocturna.
A pesar de que suelen tener buena agudeza La sintomatología clínica es variada: desde
visual y mantienen el campo visual central, fotopsias y nictalopia como MAR a pérdida
puede deteriorarse con el tiempo. El aspec- de visión central debido a la maculopatía. La
to del fondo de ojo es similar a los pacientes exploración del fondo de ojo muestra lesio-
con CAR. Aunque los campos visuales típi- nes viteliformes del epitelio pigmentario de la
cos muestran una reducción concéntrica, se retina a nivel macular con desprendimiento
han descrito también defectos campimétri- seroso. El ERG no muestra un patrón carac-
cos arqueados, centrales y paracentrales. El terístico como en CAR o MAR. La tomografía
ERG muestra un patrón típico con una onda de coherencia óptica (OCT) puede mostrar del
a normal y una onda b electronegativa, como desprendimiento en la zona macular junto con
consecuencia de una función normal de los áreas de atrofia o hipertrofia del epitelio pig-
fotorreceptores, pero alterada en la capa de mentario de la retina. Antes de pensar en una
células bipolares, que originaría la creación de PMV conviene descartar otras maculopatías
una corriente Na+ a través de la membrana viteliformes más frecuentes como las distrofias
de la glía y las células de sostén de Müller. El viteliformes, la maculopatía polimorfa vitelifor-
examen histológico muestra una degeneración me aguda, la distrofia macular de Best o un
de estas células, aunque a veces, como en la desprendimiento drusenoide del epitelio pig-
CAR, pueden afectarse los fotorreceptores y mentario en el contexto de una degeneración
células ganglionares10. macular asociada a la edad.

Al igual que en la CAR, no existe un protoco- 4. Proliferación melanocítica uveal


lo general de tratamiento. Las estrategias te- difusa bilateral (BDUMP)
rapéuticas en general son poco efectivas, con Constituye un síndrome paraneoplásico raro
casos aislados de éxito. El tratamiento citorre- caracterizado por lesiones melanocíticas uvea-
ductor del melanoma con cirugía o radiotera- les múltiples sobreelevadas, pigmentadas y no
pia seguido de inmunoglobulinas intravenosas pigmentadas, seguido de áreas de desprendi-
(IVIg) o distintas combinaciones de corticoi- miento de retina exudativo y formación de ca-
des, plasmaféresis e IVIg se han propuesto tarata. Se describió por primera vez por Robert
como alternativas terapéuticas. El pronóstico Machemer en 196613. Se asocia a tumores de
visual es mejor que la CAR al afectar más a la ovario, útero, pulmón y páncreas. Habitual-
visión periférica y tener un curso clínico más mente precede a las manifestaciones clínicas
estable, aunque en algunos casos se pierde la de un tumor de base. El mecanismo etiopato-
visión central10. génico es desconocido. Las células tumorales
producirían factores de crecimiento melanocí-
3. Maculopatía viteliforme tico que liberan a la circulación. Apoyando esta
paraneoplásica (PMV) hipótesis, podrían encontrarse también lesio-
De forma más reciente, se han descrito una se- nes hiperpigmentadas en piel y mucosas.
rie de casos en la literatura de una patología
retiniana paraneoplásica asociada al melano- Los pacientes presentan pérdida de agudeza
ma, pero con hallazgos funduscópicos y elec- visual que varía de la normalidad a percepción
trofisiológicos diferentes. Existe controversia de luz. El fondo de ojo inicialmente es normal,
sobre si supone una variante de la retinopatía pero posteriormente se asocian múltiples par-

95
ches rojizos (fondo en "patrón de jirafa") y de- síntomas de ataxia, síndrome Devic-like y of-
sarrollo de cataratas. La angiografía muestra talmoplejía , polineuropatía, nistagmus (down-
zonas de hiperfluorescencia bilateral corres- beatorup-beat), síntomas cerebelosos… De
pondientes a esas zonas de atrofia de epitelio forma menos frecuente, la neuropatía óptica
pigmentario y de desprendimiento exudativo. puede aparecer de forma aislada. Estos pa-
La OCT muestra asimismo zonas de atrofia y cientes suelen tener un antecedente de cáncer
de hipertrofia del epitelio pigmentario así como conocido, el más frecuente de los cuales es el
el desprendimiento neurosensorial. En la eco- carcinoma microcítico de pulmón seguido del
grafía ocular es típico encontrar un engrosa- timoma.
miento difuso de la coroides con tumoraciones
elevadas pigmentadas. Como en el resto de El mimetismo molecular de las células tumo-
los síndromes paraneoplásicos oftalmológi- rales con algunos antígenos neurales y la res-
cos, es importante destacar la importancia de puesta autoinmune asociada vuelve a tener
la búsqueda del tumor maligno primario oculto un papel fundamental. La mayoría de los pa-
en cualquier caso de BDUMP. El pronóstico vi- cientes con PON presentan anticuerpos contra
sual y vital es muy malo. CRMP-5/CV-2 (collapsing response mediating-
protein 5), una proteína citoplásmica neuronal,
La mayoría de estos pacientes no responden aunque se han descrito casos con anticuerpos
al tratamiento con corticosteroides o radiote- frente a otros antígenos14.
rapia, pero se han descrito casos de mejoría
en relación con el tratamiento del tumor. La ci- El patrón clínico típico es el de un paciente
rugía de catarata y el tratamiento del despren- con antecedente de cáncer que presenta una
dimiento de retina exudativo no suele ser útil pérdida indolora, subaguda, bilateral y progre-
para mejorar la visión de estos pacientes. siva de agudeza visual y de los colores. Sin
embargo, la pérdida de visión también puede
5. Neuropatía óptica paraneoplásica (PON) ser aguda. Los pacientes con PON pueden te-
Constituye una forma de neuropatía óptica ner asociada una parálisis de otro par craneal,
muy poco frecuente. Habitualmente se aso- polineuropatía, nistagmo vertical y signos de
cia a otros síndromes neurológicos paraneo- patología cerebelosa. El fondo de ojo mostrará
plásicos, en particular encefalomielitis y CAR, un edema de disco con hemorragias y exuda-
aunque también pueden manifestar signos y dos asociados (Figura 2). La OCT de capa de

Figura 2. Varón de 78 años, fumador y sin otros antecedentes médicos de interés que acudió por pérdida de visión durante 3-4
días acompañado de cefalea y debilidad en las extremidades inferiores. El fondo de ojo mostraba un edema de papila bilateral. Tras
la normalidad de los estudios complementarios y ante la sospecha clínica se pidió un TAC de tórax que mostró una masa pulmonar,
confirmándose posteriormente tras la cirugía un carcinoma microcítico de pulmón. Se trataba de una neuropatía paraneoplásica
bilateral con anticuerpos anti CV-2 y buena respuesta al tratamiento con corticoides.

96
fibras nerviosas mostrará un aumento del gro- diagnóstico. El test del hielo en la consulta de
sor correspondiente al edema. oftalmología (mejoría de la ptosis tras aplicar
hielo) ayudará a realizar el diagnóstico.
Es fundamental solicitar una prueba de imagen
(RMN) para descartar causas compresivas, 2. Síndrome miasteniforme de
una analítica de sangre con bioquímica, VSG, Lambert-Eaton (SMLE)
PCR y serología para descartar causas isqué- El SMLE es uno de los síndromes paraneoplá-
micas, infecciosas o autoinmunes no tumora- sicos de causa autoinmune más representati-
les (vasculitis), así como realizar una punción vos y bien definidos, en el cual la liberación de
lumbar con análisis bioquímico, citológico y acetilcolina en la unión neuromuscular se en-
serología de LCR para descartar otras etiolo- cuentra disminuida o bloqueada por la presen-
gías. El hallazgo de anticuerpos anti-CRMP-5/ cia de anticuerpos anticanales de calcio voltaje
CV2 apoyará el diagnóstico. Como en todos dependientes (anti-VGCC)15. La probabilidad
los síndromes paraneoplásicos anteriores, en de que un paciente presente un tumor es del
el caso de no tener un diagnóstico de tumor de 50-60%, en la mayoría de los casos asociado
base lo buscaremos. El tratamiento con corti- al carcinoma microcítico de pulmón, lo que mo-
coides o inmunosupresores puede tener bue- tiva que frente al diagnóstico primario de SMLE
na respuesta. las pruebas de screening de neoplasias estén
justificadas hasta 2 años tras el diagnóstico.
SÍNDROMES PARANEOPLÁSICOS QUE
AFECTAN A LA MOTILIDAD OCULAR Las manifestaciones clínicas típicas del SMLE
1. Miastenia gravis (MG) incluyen una tríada típica consistente en debi-
La MG es una enfermedad neuromuscular au- lidad proximal progresiva de predominio ma-
toinmune y crónica caracterizada por grado tutino, síntomas autonómicos como sequedad
variable de debilidad en la musculatura es- bucal y disfunción eréctil y arreflexia, presen-
quelética. Debuta con un cuadro insidioso de tando en estadios avanzados afectación cra-
pérdida de fuerza muscular, que mejora con neobulbar con ptosis, diplopia y disfagia15.
el descanso y reaparece con el ejercicio o al
final del día. Suele iniciarse en los músculos La sintomatología ocular oscila entre el 0 y el
perioculares y en el párpado, por lo que el of- 80% y la de síntomas bulbares entre el 5 y el
talmólogo debe estar alerta en su diagnóstico 80%. Este amplio rango de prevalencias pro-
ante un cuadro de diplopía o ptosis palpebral bablemente sea secundario a la inconsistencia
intermitente. o fluctuación de los síntomas al momento de
la evaluación. En todo caso, la afectación ocu-
La MG constituye el síndrome paraneoplásico lar del SMLE no suele ser un síntoma al debut
más frecuente de los timomas1. Su frecuencia de la enfermedad, a diferencia de otros síndro-
oscila entre 10-50%, siendo más baja para mes miasteniformes con los que hay que ha-
aquellos pacientes con enfermedad benigna y cer el diagnóstico diferencial. Aunque se han
más alta a mayor edad llegando a tener una reportado algunos casos de SMLE con sínto-
frecuencia de más del 80% para los hombres mas oculares exclusivos, cabe destacar que la
por encima de los 50 años y para las mujeres afectación craneobulbar generalmente señala
mayores de 60 años. El proceso autoinmune progresión dentro de la historia natural de la
puede ser iniciado por las células epiteliales tu- enfermedad.
morales las cuales expresan una proteína simi-
lar al receptor de acetilcolina. Los anticuerpos 3. Miositis orbitaria
antireceptores de acetil colina están presentes Como manifestación paraneoplásica, es muy
en el 75-85% de los pacientes con MG gene- rara. Se ha descrito asociado a linfoma no
ralizada. La prueba de Tensilon es diagnóstica, Hodgkin de alto grado. El paciente puede acu-
aunque no siempre es positiva. La electromio- dir con síntomas de diplopia y dolor con los
grafía de fibra única es sensible y específica movimientos oculares. Si la inflamación orbi-
para MG y debe realizarse para documentar el taria es más extensa, puede tener exoftalmos.

97
4. Síndrome opsoclonus-mioclonus 5. Flutter ocular
El síndrome de opsoclonía-mioclonía consiste Clínicamente caracterizado por ráfagas inter-
en movimientos oculares involuntarios y caó- mitentes de movimientos sacádicos conjuga-
ticos en todas las direcciones de la mirada; a dos horizontales sin intervalo intersacádico. La
menudo se asocia a ataxia y mioclonías de ex- amplitud de los movimientos sacádicos varía
tremidades y tronco, y puede aparecer tanto y pueden ser tan pequeños que solo pueden
en adultos como en niños. El opsoclono-mio- ser evidenciados por el oftalmoscopio o lám-
clono paraneoplásico (“ojos bailones-pies bai- para de hendidura. La causa más frecuente
lones”) puede ser el síntoma inicial en el 2-5% es la paraneoplásica, por lo que es importante
de los niños con neuroblastoma y el 50% de descartar un tumor de base si todavía no se
los niños afectados tienen neuroblastomas di- ha realizado el diagnostico. En adultos, el tu-
ferenciados, habitualmente localizados en el mor más frecuente es el carcinoma microcítico
tórax. Los síntomas siguen un curso oscilante de pulmón seguido del cáncer de mama. En
con eventuales remisiones espontáneas y bue- niños, el 50% de los casos son una manifesta-
na respuesta a los corticoides y al tratamiento ción paraneoplásica del neuroblastoma.
del tumor, aunque no es infrecuente que quede
cierto grado de déficit neurológico o un retraso Los pacientes suelen quejarse de oscilopsia
en el desarrollo psicomotor. y la mayoría de pacientes de otros síntomas
neurológicos asociados. Algunos pacientes
En los adultos este síndrome se asocia, por un tienen anticuerpos anti-Ri y anti-Hu, aunque el
lado, a tumores de mama y trompa de Falopio tener una batería de autoinmunidad negativa
en mujeres, y a cáncer de pulmón de células no descarta el diagnóstico. Si el tumor no está
pequeñas por otro. En el primer caso, las mu- diagnosticado debe de completarse el estudio
jeres pueden desarrollar un síndrome clínico con exploraciones complementarias para des-
subagudo con opsoclono, ataxia, vértigo, di- cartarlo dada su alta asociación con un tumor
sartria, disfagia, oscilopsia y diplopia. En sue- de base.
ro y LCR se detectan anticuerpos llamados
anti-Ri que reconocen un grupo de proteínas SÍNDROMES PARANEOPLÁSICOS
neuronales RNA-binding (antígenos NOVA) de DERMATOLÓGICOS CON
55 y 80 kDa, localizadas preferentemente en AFECTACIÓN OFTALMOLÓGICA
el tronco del encéfalo, lo que sugiere que los 1. Dermatomiositis
anticuerpos anti-Ri (ANNA-2) son marcadores Miopatía inflamatoria, que se caracteriza por
de un tipo de encefalitis de tronco. cambios cutáneos previos a la debilidad mus-
cular proximal. Desde el punto de vista oftalmo-
Cuando se trata de un cáncer de pulmón de lógico, es importante diagnosticar la presencia
células pequeñas, el inicio tiene carácter suba- de un eritema en heliotropo (eritema violáceo
gudo y en algunos casos, el síndrome dura alrededor de los párpados). Si presenta más
varios meses hasta que provoca una encefa- signos típicos de la dermatomiositis (ver ca-
lopatía permanente. Las alteraciones anato- pítulo de síndromes paraneoplásicos derma-
mopatológicas consisten en una degeneración tológicos) es de vital importancia diagnosticar
neuronal llamativa a nivel del núcleo dentado esta entidad y buscar un tumor de base, dado
cerebeloso, lo cual sugiere una relación con la que de un 10 a un 25% presentan un cáncer
degeneración cerebelosa cortical. asociado. Los más frecuentes son cáncer de
mama, ovario, pulmón y próstata.
En pocas ocasiones se ha descrito opsoclono
asociado a linfoma de Hodgkin y neoplasias 2. Pénfigo paraneoplásico
de útero, vejiga urinaria, mama, tiroides, timo y Se caracteriza por lesiones dolorosas en piel
otros cánceres de pulmón. En adultos este sín- y mucosas que afecta sobre todo a palmas,
drome carece de tratamiento específico, pero plantas y torso, por pérdida de adhesividad
existen casos de respuesta a los glucocorticoi- entre las células epidérmicas. A nivel oftal-
des o tras tratamiento del cáncer subyacente. mológico producen conjuntivitis bilateral. De

98
forma menos frecuente se forman bullas o cia corneal. Se piensa que es producido por
erosiones conjuntivales y corneales. Algunas autoanticuerpos contra proteínas epidérmicas.
de las formas crónicas y más graves pueden Se han descrito casos paraneoplásicos aso-
producir simbléfaron y pérdida de transparen- ciados con síndromes linfoproliferativos B.

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99
Capítulo 10
Síndromes reumatológicos
paraneoplásicos: artropatías
y miopatías
Autores:
Jacqueline Usón Jaeger Pilar López Criado
Sección de Reumatología, Hospital Oncología Médica, MD Anderson
Universitario de Móstoles. Madrid Internacional España

El reconocer las manifestaciones reumáticas recurrencia temprana.


de un tumor oculto es un difícil reto diagnós- La patogenia de los SRP es compleja, intri-
tico y terapéutico compartido por el reumató- gante y poco conocida. El crecimiento tumoral
logo y el oncólogo. Por un lado, el reumatólo- produce o media la formación de hormonas,
go necesita tener la suficiente destreza clínica péptidos, mediadores auto y paracrinos, anti-
para distinguir aquellas manifestaciones reu- cuerpos, linfocitos citotóxicos que producen
máticas paraneoplásicas que permitiría un manifestaciones SRP. Además la muerte ce-
diagnóstico de la neoplasia en fase curativa. lular no apoptósica de las células tumorales
Por otro lado, el oncólogo ha de reconocer inducen autoantígenos biológicamente activos
que los síndromes reumatológicos paraneo- que también puede favorecer el desarrollo del
plásicos (SRP) pueden simular la enfermedad SRP1.
metastásica para no desestimar erróneamente
la terapia curativa y reconocer los SRP en pa- Los SRP son poco frecuentes, y generalmen-
cientes oncológicos tratados y así detectar la te sus manifestaciones clínicas son similares a

Tabla 1. Características generales de los SRP

Antecedentes personales de una neoplasia previa, exposición carcinógenos

Antecedentes familiares de cáncer

Debut tardío, mayor de 50 años

Síntomas generales como fiebre, astenia y anorexia

Relación temporal entre el comienzo del SRP y la detección de la neoplasia no mayor de dos años

Ausencia de metástasis musculoesqueléticas

Factor reumatoide negativo, cultivo de líquido sinovial estéril y ausencia de cristales en líquido sinovial

Respuesta pobre a tratamiento convencional

Mejoría o desaparición del SRP tras tratar la neoplasia

Reaparición del SRP con la recurrencia tumoral

100
la enfermedad reumática no asociada a tumor. queñas articulaciones de la mano de modo
Para conocer mejor e investigar estos intere- simétrico. El líquido sinovial es típicamente
santes y raros síndromes se podría crear un re- no inflamatorio con recuento de leucocitos de
gistro internacional y/o europeo de pacientes menos de 2.000 células por dl de predominio
con material biológico. Se puede estimar que mononuclear4.
aparecen en un 5-7% de los pacientes con tu-
mores1. En la tabla 1 figuran las características Las acropaquias de los dedos de las manos
generales de los SRP vigentes descritos hace y/o los pies aparecen de manera simétrica o
más de 15 años2. Un debut tardío y una res- asimétrica (Figura 1). Si el crecimiento es rá-
puesta pobre al tratamiento convencional son pido, puede existir eritema y dolor quemante4.
probablemente las dos características que ha-
cen sospechar de un posible SRP. En la tabla 3
se enumeran las situaciones clínicas en las que
se recomienda hacer una búsqueda de tumor
oculto2.

En este y en el siguiente capítulo de esta obra,


se describen los SRP según la clasificación que
figura en la tabla 2 adaptada por los autores de
ambos capítulos. A continuación se describen
las artropatías y miopatías paranoeplásicas
más descritas en la literatura médica como la Figura 1. Acropaquia o dedos en palillo de tambor: la
osteoartropatía hipertrófica, la poliarteritis pa- extremidad distal de los dedos aumenta el volumen y
raneoplasica y la dermatomiositis y otros SRP las uñas se curvan y engruesan (Banco de Imagen de
la Sociedad Española de Reumatología)
articulares más raros de manera sencilla y con-
cisa con el propósito de facilitar su detección
clínica precoz. La periostitis, aposición del periostio, afecta
inicialmente a la diáfisis distal de los huesos
SRP Articulares largos; tibia, radio, cúbito, peroné y fémur (Fi-
1. Osteoartropatía hipertrófica gura 2). Es común que los pacientes se que-
La osteoartropatía hipertrófica (OAH) o síndro- jen de dolor sordo y profundo en los miem-
me de Pierre Marie-Bamberger es el SRP más bros inferiores que calma con la elevación de
frecuente y mejor caracterizado1. Se asocia a los mismos4.
múltiples enfermedades intra y extratorácicas,
siendo las neoplasias y, en particular, los carci-
nomas pulmonares los tumores más frecuente-
mente encontrados. Según los estudios, del 4
al 10% de los carcinomas pulmonares pueden
presentar OAH3. Es más frecuente en el varón
y la prevalencia es mayor en el adenocarcino-
ma que en el carcinoma de células pequeñas, 2a 2b
siendo este de peor pronóstico por su rápida
invasión local. Otros tumores más raros son los Figura 2. 2a Radiografia anteroposterior de pies
y 2b anteroposterior del tercio distal de pierna: se
mesoteliomas, neuroleiomiomas diafragmáti- observa aposición perióstica (flechas) típica de la
cos y los linfomas intratorácicos4. osteoartropatía hipertrófica (Banco de Imagen de la
Sociedad Española de Reumatología)

La OAH se caracteriza por la tríada clínica; ar-


tritis, acropaquias y periostitis. Pueden existir Una manifestación de la OAH menos conocida
artralgias, oligoartritis o poliartritis de las gran- son pliegues de las manos muy marcados de-
des articulaciones de los miembros inferiores limitando profundos surcos denominado acan-
pudiendo afectarse también los carpos y pe- tosis palmar5.

101
Tabla 2. Síndromes reumatológicos paraneoplásicos

· Artritis Conectivopatías
· Osteoartropatía hipertrófica Síndrome de lupus-like
· Poliartritis paraneoplasica Síndrome antifosfolípido-like
· Polimialgia Reumática-like Síndrome de Sjögren
· RS3PE-like Esclerodermia
· Fascitis palmar y artritis
· Síndrome hombro-mano
· Paniculitis y artritis
· Reticulohistocitosis Multicéntrica

· Miositis Vasculitis
· Dermatomiositis Vasculitis pequeño vaso y cutánea
Vasculitis sistémica
Granulomatosis de Wegener
Síndrome de Raynaud y necrosis digital
Eritromelalgia

Misceláneas
Amiloidosis
Osteomalacia oncogénica

Se han encontrado niveles circulantes eleva- globular puede encontrarse elevada así como
dos de factor de crecimiento plaquetario y en- la fosfatasa alcalina por crecimiento óseo. La
dotelial vascular en pacientes con carcinomas búsqueda tumoral es obligada en todos los
pulmonares. Estos factores inducen angiogé- pacientes con OAH. En general, si el tumor es
nesis, hiperplasia endotelial y la formación de curable también lo es la OAH incluido las arco-
acropaquias4. Recientemente se ha descrito paquias4. El tratamiento sintomático del dolor
que el factor patogénico clave implicado en óseo y la artritis consiste en antiinflamatorios
la perostitis proliferativa es el factor de creci- no esteroideos, analgésicos y artrocentesis.
miento entotelial vascular6. Como curiosidad, Se ha descrito el uso de ácido zoledronico con
en una familia con OAH primaria, que remeda buenos resultados en casos de dolor óseo no
clínicamente la forma paraneoplasica, se ha controlable posiblemente porque reduce los
detectado una mutación genética que induce niveles de factor de crecimiento vascular en-
una elevación de la prostaglandina E2 circu- totelial8.
lante7 un conocido estímulo para la activación
osteoblástica mediado por el factor de creci- 2. Poliartritis paraneoplásica
miento entotelial vascular. Manger y Schett9 revisa las características clí-
nicas de 121 pacientes descritos hasta la fecha
El diagnóstico de la OAH, es clínico y radiológi- en los que la neoplasia se detectó menos de
co. Si radiológicamente, no existen claros sig- 4 años del inicio de la artritis. Encuentra que
nos de periostitis, una gammagrafía ósea con la edad media del comienzo de los síntomas
tecnecio 99 metaestable demuestra una hiper- articulares es 54.2 años con una afectación
captación lineal en los lugares de aposición mujer/hombre del 1.7:1. Aproximadamente en
perióstica4. Las pruebas de laboratorio no son un tercio se detectó una neoplasia hematológi-
específicas. La velocidad de sedimentación ca. El tumor solido más frecuente reportando

102
es el adenocarcinoma de pulmón y de mama. Hoy, la arteritis de células gigantes per sé no
La poliartritis tiende a ser asimétrica, de co- se considera un SRP dado que el riesgo de
mienzo agudo, se acompaña de elevación de neoplasia no es mayor que en la población ge-
reactantes de fase aguda y generalmente el neral y si aparece es tardío, más de diez años
factor reumatoide, anticuerpos anti-nucleares del diagnóstico de la arteritis del célular gigan-
y anticuerpos antiproteínas citrulinadas son tes1,11.
negativos pero estos marcadores pueden ser
positivos en el 27 %,19% y el 10% respecti- 4. RS3PE-like
vamente. Hasta la fecha se desconoce el me- El síndrome RS3PE fue descrito por primera
canismo patogénico. La artritis responde mal vez por McCarty en 198512. Clínicamente se
a AINES y corticoesteroides y mejora o remite caracteriza por sinovitis simétrica seronegativa
tras el tratamiento curativo del tumor. recurrente, edema con fóvea y respuesta es-
pectacular a tratamiento esteroideo. Es de ori-
3. Polimialgia reumática-like gen idiopático, si bien se han reportado algu-
La polimialgia reumática (PMR) es un síndro- nos casos asociados a linfomas no-Hodgkin,
me de dolor e impotencia funcional simétrico leucemias y adenocarcinomas en aproximada-
en cintura escapular y pelviana con elevación mente un 20% de los casos descritos según
de la velocidad de sedimentación glomerular una revisión reciente13. La metaloproteinasa-3
de y/o proteína C reactiva que afecta a per- es el marcador serológico específico que se
sonas mayores de 60 años. Recientemente se han encontrado elevado en presencia de un
ha demostrado en un gran cohorte en Reino tumor solido oculto14. El paciente con tumor
Unido de pacientes con diagnóstico de PMR oculto, no responde eficazmente a esteroides
atendidos en atención primaria que el riesgo de y puede presentar síntomas constitucionales13.
diagnóstico de neoplasia frente la población sin Sin embrago no se han descrito diferencias
PMR es mayor solo en los primeros seis meses demográficas ni clínicas entre RS3RPE idiopá-
del diagnóstico10. A su vez, se ha descrito el tica y RS3RPE-like13.
síndrome llamado PMR -like en personas más
jóvenes que la PMR con dolor e impotencia 5. Fascitis palmar y poliartritis
funcional en cinturas asimétrico que no respon- La fascitis palmar y poliartritis es un SRP raro
de a tratamiento esteroideo y que remite tras descrito como entidad propia por Medsger et
tratar la neoplasia que suele ser de pulmón, ri- al. en 1982 en seis mujeres posmenopausicas
ñón, colon o mieloma múltiple1,2. con tumor oculto de ovario15. Desde entonces
se han reportado en la literatura aproximada-

Tabla 3. Búsqueda de tumor oculto

· Consideraciones epidemiológicas

· Exposición a carcinógenos

· La presencia o antecedentes de otros síndromes paraneoplásicos

· Enfermedades/síndromes como
· Poliartritis carcinomatosa
· Osteoartropatía hipertrófica
· Dermatomiositis
· Polimialgia reumática-like
· Artritis-fascitis palmar
· Eritema nodos o de más de 6 meses de evolución
· La aparición del fenómeno de Raynaud en mayores de cincuenta años

103
mente 100 casos asociados con adenocarcino- como una artritis es simétrica, erosiva y muti-
ma de ovario en el 31% y con otros tumores re- lante afectando las interfalángicas proximales,
productivos femeninos malignos y benignos16. interfalángicas distales, rodillas, hombros, car-
La manifestación principal es la rápida fibrosis pos y tobillos. Típicamente se observa pápulas
palmar bilateral con retracción de los dedos. en el dorso de los dedos que rodean al lecho
La poliartritis es simétrica con afectación de la ungueal que parecen “cuentas de coral”. En
pequeñas articulaciones de las manos y me- aproximadamente la mitad de los casos puede
nos frecuente rodillas y pies. Los reactantes existir una elevación de la velocidad de sedi-
de fase aguda pueden encontrarse elevados mentación, leve anemia e hipercolesterolemia.
pero no se ha detectado el factor reumatoide ni Radiológicamente no hay reacción perióstica
anticuerpo-peptido citrulinado elevado. La ma- ni osteopenia yuxtaarticular. Existe un aumento
yoría de los pacientes se puede detectar una del espacio articular y la aparición de erosiones
marcador tumoral como el Ca 125 o Ca 19-916. en los márgenes de la articulación. El 25% de
La patogenia se desconoce pero se ha pues- la reticulohistiocitosis multicéntricas se asocian
to en relación con factores de proliferación de a tumores como carcinomas de pulmón, estó-
fibroblastos. Los síntomas no responden a AI- mago, mama, cérvix, colon y ovario y tumores
NES ni glucocorticoides. El pronóstico es malo hematológicos como linfomas18. El diagnóstico
dado que en la mayoría de los casos descritos se hace por biopsia cutánea y es obligado ha-
el tumor ha metastatizado16. cer un despistaje tumoral1,18.

6. Síndrome hombro-mano SRP Articulares


El síndrome hombro-mano es una forma de 1. Dermatomiositis
dolor regional complejo tipo dos o distrofia La dermatomiositis es una miositis inflamatoria
simpático-refleja que se caracteriza por mani- que afecta a un adulto por millón. El 25% se
festaciones tróficas y vasomotoras de la mano asocia a tumor oculto y por ello es obligado
junto con la pérdida rápida y progresiva de la hacer una búsqueda tumoral1,9. Los tumores
movilidad del hombro. Radiológicamente, exis- más relacionados con la dermatomiositis son
te una osteopenia parcheada en hombro y en los sólidos de ovario, pulmón, gastrointestina-
la mano. Cuando no existe causa aparente, les, mama y testículo. Con menos frecuencia,
como traumatismos, cirugía, hemiplejía, infar- puede asociarse con linfomas, leucemias y
to de miocardio, puede que este síndrome sea melanoma. En la mayoría de los casos repor-
una manifestación de tumor oculto en pulmón, tados, el tumor se diagnostica en el plazo de
sistema nervioso central, vejiga, útero, mama o un año tras el diagnostico de miositis y mejora
esófago1,2. e incluso se cura con el tratamiento específico
del tumor1,9.
7. Paniculitis y artritis
La aparición de nódulos subcutáneos, artritis Las características clínicas, histológicas y ana-
mono o poliarticular en los miembros inferiores líticas que pueden predecir la presencia de un
puede ser una maifestación PRP del cáncer de tumor oculto con dermatomiositis son la forma
páncreas. Los nódulos subcutáneos histológi- amiopática, la necrosis epidérmica, la vasculitis
camente son focos de necrosis grasa con cé- leukocitoclastica y la ausencia de anticuerpos
lulas fantasma de paredes gruesas. Hasta un musculares en suero1,9. En general, los varones
20% puede existir un aumento de eosinófilos mayores de 65 años tienen mayor riesgo de
en sangre periférica. Este SRP se ha descrito tumor oculto. La dermatomiositis amiopática
más en mujeres1,17. cursa solo con afectación cutánea y aunque es
generalmente de mejor pronóstico, puede aso-
8. Reticulohistiocitosis multicéntrica ciarse a tumor oculto más que cuando existe
Es una enfermedad muy rara por una infiltra- afectación muscular y cutánea.
ción granulomatosa de histiocitos y células gi-
gantes multinucleadas en la piel y en las articu- La ausencia de anticuerpos anti-Jo1, anti-PN-
laciones. La infiltración articular se manifiesta Scl, antiU1RNP, antiU3RNP, antiKu es más

104
propio de una dermatomiositis paraneoplásica.
Sin embargo la presencia del anticuerpo anti-
p155 tiene una elevada especificidad y valor
predictivo negativo que la dematomiositis es
paraneoplasica19. Estos anticuerpos son pro-
teínas contra factores del respuesta inmune
tumoral (anti-TIF) que muestran reacción con
tejido muscular20. Hoy existen ensayos ELISA
comercializados para detectar anti-p155/140.

Las manifestaciones clínicas de la dermato-


miositis son similares a la dermatomiositis idio-
pática. Generalmente el síntoma inicial es la
debilidad proximal. La creatinin fosfoquinasa
se eleva en casi todos los pacientes. El 50%
pueden tener artritis inflamatoria en rodillas,
codos, carpos, metacarpofalángicas, interfa-
lángicas proximales y tobillos. Las manifesta-
ciones cutáneas incluyen eritema heliotropo de
los parpados, edema peri-orbital, rash malar,
rash cutánea en zonas expuestas al sol, pápu-
las de Gotron, telangiectasias peri-unguea-
les (Figura 3), y ocasionalmente eritrodermia
exfoliativa y áreas de necrosis epidérmica con
denudación. Esta última lesión cutánea se ha
descrito únicamente en la dermatomiositis pa-
raneoplásica1,9.

Figura 3. Pápulas de Grotton: pápulas rojizas


descamativas de los nudillos de la mano (banco de
imagen de la sociedad española de reumatología)

En general la clínica muscular mejora con cor-


ticoides pero las lesiones cutáneas son más
difíciles de tratar. Se ha descrito remisión tras
cirugía, radioterapia o quimioterapia del tumor
en el 53% de los casos reportados21.

105
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106
Capítulo 11
Otros síndromes
paraneoplásicos:
colagenopatías, vasculitis
y amiloidosis
Autores:
María Isabel González Anglada,
Carlos Guijarro Herraiz
Unidad de Medicina Interna.
Fundación Hospital Alcorcón. Madrid

SÍNDROMES REUMATOLÓGICOS neoplasia y enfermedad reumatológica es bidi-


PARANEOPLÁSICOS: CONECTIVOPATÍAS reccional: las neoplasias se pueden complicar
Las manifestaciones musculoesqueléticas de con la aparición de síndromes reumatológicos
las neoplasias se aceptan como entidad clíni- y, al revés, enfermedades reumáticas pueden,
ca, aunque la mayoría de estas posibles aso- en su evolución, complicarse por la aparición
ciaciones se basan en un pequeño número de una neoplasia.
de casos descritos (Tabla 1). La relación entre

Tabla 1. Síndromes reumáticos paraneoplásicos

Síndromes reumáticos paraneoplásicos

Articular Cutánea
· Osteoartropatia hipertrófica · Fascitis palmar y artritis
· Poliartritis carcinomatosa · Paniculitis y artritis
· Artritis amiloidea · Eritema nodoso
· Gota secundaria · Fascitis eosinofílica
· Sacroileitis · Síndrome de escleroderma-like
· Enfermedad de Still del adulto

Muscular Vascular
· Miositis y dermatomiositis · Vasculitis paraneoplásica
· Síndrome de miasteniforme Eaton-Lambert · Granulomatosis de Wegener
· Síndrome de Raynaud y gangrena digital
· Eritromelalgia

Miscelaneas Miscelaneas
· Distrofia simpática refleja · Reticulohistiocitosis multicéntrica
· Artropatía de Jaccoud · Crioglobulinemia
· Síndrome de lupus-like · Hiperóstosis esquelética
· Policondritis recidivante · Osteomalacia

107
Los síndromes reumatológicos paraneoplási- reumatoide, la esclerosis sistémica y el lupus
cos son aquellos síndromes reumatológicos eritematoso sistémico (LES). Además de la
asociados a las neoplasias que ocurren a dis- enfermedad inmune per se, algunos fármacos
tancia respecto al tumor primario o las me- usados en el tratamiento de las enfermedades
tástasis y que son inducidos por la neoplasia reumatológicas aumentan el riesgo de desa-
a través de hormonas, péptidos, mediadores rrollar neoplasias: la ciclofosfamida se asocia
autocrinos y paracrinos, anticuerpos y linfoci- a un mayor riesgo de cáncer vesical y hemato-
tos citotóxicos. Aparecen en un 7% de los pa- lógico, el metotrexate y la ciclosporina tienen
cientes con tumores y tienen un curso paralelo un mayor riesgo de linfoma. Además, el grado
al del tumor12. Sus características clínicas más de inmunosupresión se relaciona con el riesgo
relevantes se describen en la tabla 2. posterior de neoplasia3.

El cáncer puede aparecer en la evolución de Cuando un paciente presenta un síndrome


enfermedades reumatológicas por una disre- reumatológico se debe sospechar que es pa-
gulación inmune o como consecuencia de los raneoplásico si tiene un antecedente de neo-
tratamientos inmunosupresores. La asociación plasia, una historia familiar de cáncer, ha sido
más clara de enfermedad inmune y neoplasia sometido a fármacos que pueden inducir neo-
es la alta incidencia de linfoma en el síndro- plasia y si la presentación de ese síndrome
me de Sjögren. En los pacientes con síndro- reumatológico es atípica, coexiste con otro
me de Sjögren se puede observar inicialmente síndrome paraneoplásico o presenta marcado-
un aumento de la producción de anticuerpos res serológicos de malignidad.
policlonal, seguida de una infiltración tisular
de linfocitos, la aparición de una linfadenopa- En el capítulo 10 se recogen los síndromes para-
tía generalizada de linfocitos atípicos con la neoplásicos reumatológicos articulares y mus-
producción de una proteína monoclonal y fi- culares y a continuación los completamos con
nalmente un linfoma. Los pacientes con Sjö- las conectivopatías, vasculitis y amiloidosis.
gren tienen 44 veces más riesgo de desarro-
llar linfoma no Hodgkin (LNH). También existe Síndromes lupus-like paraneoplásicos
una mayor incidencia de neoplasia en la artritis Los anticuerpos antinucleares (ANA) se consi-

Tabla 2. Características de los síndromes reumáticos paraneoplásicos

Características comunes de los síndromes reumáticos paraneoplásicos

· Historia previa de neoplasia, exposición a carcinógenos o historia familiar de cáncer

· Edad tardía de inicio > 50 años

· Síntomas constitucionales prominentes

· Rápido inicio y artritis inflamatoria inusual: periostitis, dermatomiositis, vasculitis cutánea,


síndrome de Raynaud, fascitis, síndrome miasteniforme

· Relación temporal entre el inicio de los síntomas paraneoplásicos y el hallazgo del cáncer

· Ausencia de metástasis en huesos y articulaciones

· Factor reumatoide negativo, negatividad del líquido articular para cristales y cultivo

· Pobre respuesta a tratamiento convencional

· Mejoría de los síntomas con tratamiento de la neoplasia subyacente

· Reaparición del síntoma paraneoplásico con la recurrencia del tumor

108
deran un marcador de enfermedades reumá- en múltiples vasos de pequeño calibre con el
ticas, pero pueden estar presentes en otras consiguiente fallo multiorgánico. Los criterios
enfermedades e incluso en individuos asin- de SAP catastrófico son:
tomáticos, elevándose su incidencia con la 1. Evidencia de afectación en 3 o más órga-
edad. Varios estudios indican una relación en- nos o tejidos.
tre neoplasia y fenómenos inmunes; de hecho 2. Desarrollo de manifestaciones simultá-
hay una mayor incidencia de ANA en el suero neas en menos de 1 semana.
de pacientes con neoplasia y, en sentido con- 3. Confirmación histopatológica de oclusión
trario, hasta en un 2,9% de los pacientes con de vasos pequeños en al menos 1 órgano.
ANA se diagnostica una neoplasia. Un 27,7% 4. Pesencia de anticuerpos antifosfolípido o
de pacientes con cáncer presentan ANA +, la anticuerpos anticardiolipina.
mayoría con patrón homogéneo en la inmu-
nofluorescencia y con títulos habitualmente Se considera diagnóstico de SAP catastrófico
bajos 1:80, aunque en un 12% pueden ser definitivo si cumple los 4 criterios. La morta-
más elevados 1:160-1:640. Se han descrito lidad del SAP catastrófico es muy elevada,
tanto en tumores sólidos como en neoplasias del 48%. Se puede lograr una supervivencia
hematológicas: tumores de mama, colorrecta- de 78% tras tratamiento con anticoagulantes,
les, gástricos, hepatocarcinoma, hipernefro- corticoides y plasmaféresis.
ma, pulmón, páncreas, próstata, ovario, veji-
ga, riñón y linfomas. Dentro de los linfomas es La presencia de anticuerpos antifosfolípidos
más frecuente en los linfomas foliculares , en es más frecuente en pacientes con neoplasias
los linfomas de células del manto y en los lin- (22%) que en pacientes sin neoplasia (3,4%).
fomas T4. Los anticuerpos anticardiolipina más frecuen-
tes en los pacientes con neoplasias son los
Un 17% de los pacientes tumorales con ANA IgG. Los pacientes con anticuerpos anticardio-
positivos presentan síntomas o síndromes lipina positivos tienen una mayor incidencia de
reumatológicos. Las manifestaciones clínicas eventos tromboembólicos 27,7%.
más frecuentes consisten en poliartralgia o
poliartritis; son menos frecuentes la afectación Aunque tanto la clínica trombótica como los
de serosas (pleuritis, pericarditis, peritonitis) anticuerpos antifosfolípidos son frecuentes
y las citopenias como anemia, leucopenia o en los pacientes con cáncer, solo un 22% de
trombopenia con descenso de complemento. los pacientes con anticuerpos antifosfolípidos
cumplen criterios de SAP, pero de ellos tres
La respuesta al tratamiento antiinflamatorio, cuartas partes presentaron un SAP catastró-
corticoideo y, sobretodo, de la neoplasia sub- fico. Las neoplasias asociadas fueron sólidas
yacente suele ser eficaz. en el 76% (adenocarcinoma de pulmón, ova-
rio, mama, carcinoide, colon, gástrico, uterino,
Síndrome antifosfolípido meningioma, leomiosarcoma, colangiocarci-
El síndrome antifosfolípido (SAP) es una en- noma) y 24% hematológicas (leucemia mie-
fermedad autoinmune caracterizada por trom- loide aguda, leucemia linfoide crónica (LLC) y
bosis vascular y/o morbilidad en el embarazo LNH). La mortalidad en los pacientes con SAP
junto con la presencia de anticuerpos antifos- catastrófico fue del 48%5.
folípidos. Los criterios de SAP son: manifesta-
ciones clínicas (trombosis venosas o arteriales, Polimialgia reumática y arteritis de células gi-
pérdidas fetales, abortos de repetición), junto gantes paraneoplásica
con dos determinaciones serológicas positivas Aunque los pacientes con polimialgia reumáti-
(anticardiolipinas, anticoagulante lúpico o an- ca no parecen tener alta incidencia de neopla-
ticuerpo anti-beta2 glicoproteína). Un 1% de sia, varias neoplasias hematológicas y tumores
los pacientes con SAP desarrollan el denomi- sólidos pueden presentarse como un síndrome
nado síndrome antifosfolípido catastrófico. El que recuerda a la polimialgia.
SAP catastrófico se caracteriza por trombosis

109
La polimialgia asociada a la neoplasia tiene VASCULITIS ASOCIADAS A NEOPLASIAS
rasgos que son atípicos: edad inferior a 50 Las vasculitis son una inflamación de la pared
años, afectación asimétrica, articulaciones do- vascular de arterias de pequeño, mediano o
lorosas, VSG menor de 40 o mayor de 100 y gran calibre, vénulas y arteriolas. La asociación
suele ser habitual una mejoría solo parcial o entre vasculitis y neoplasia es bidireccional: en
tardía con 10 mg de prednisona. Puede prece- un 5% de pacientes con vasculitis se diagnos-
der entre 1 y 13 meses el diagnóstico de neo- tica una neoplasia y en un 8% de los pacientes
plasia y desaparecer con el tratamiento de la con neoplasia sólida y un 22% de pacientes
neoplasia. con neoplasias hematológicas se diagnostica
una vasculitis.
Por otro lado, puede diagnosticarse un cáncer
en pacientes con arteritis de células gigantes En los pacientes con vasculitis asociadas
con frecuencia similar a la de la población ge- a neoplasias, un 63-77% se asocian a neo-
neral. Sin embargo, aunque existe un ligero in- plasias hematológicas, describiéndose en la
cremento del riesgo de malignidad en pacien- leucemia de células peludas, la LLC, mieloma
tes con arteritis temporal con biopsia positiva múltiple (MM), Hodgkin, LNH, leucemia aguda
comparada con los controles, el intervalo entre mieloblástica, histiocitosis maligna y síndro-
el desarrollo de arteritis de células gigantes y mes mielodisplásicos8. Un 23-37% se aso-
el inicio de la neoplasia no apoya que sea un ciaron a tumores sólidos: cáncer de pulmón
proceso paraneoplásico verdadero6. Un re- en 23%, digestivos 17,5%, renal 14%, vejiga
ciente metaanálisis que recoge un total de 6 5,3% y de endometrio 3,5%. En un 5,5% se
estudios publicados de polimialgia/ACG en- trata de una neoplasia no inespecífica9,10.
cuentra un riesgo de malignidad de 1.14 (95%
CI: 1.05-1.22). El riesgo fue mayor en los pri- El tipo de vasculitis más frecuente asociada a
meros 6-12 meses tras el diagnóstico de 2.16 tumores es la leucocitoclástica 62% y la pa-
(95% CI: 1.85-2.53)7. narteritis nodosa 12%. Otras menos frecuen-

Tabla 3. Manifestaciones clínicas de las vasculitis paraneoplásicas

Fiebre 42% Afectación pulmonar 10%

Síntomas generales 58% Afectación gastrointestinal 8%

Afectación cutánea: 78% Afectación cardíaca 3%

Púrpura 45%

Nódulos

Livedo

Úlceras

Edema

Artralgias o artritis 45%

Neuropatía periférica 32%

Afectación renal: 23%

Glomerulonefritis 12%

Microaneurismas 12%

Insuficiencia renal 7%

110
tes son la púrpura de Schönlein Henoch, la
poliarteritis microscópica, arteritis de células
gigantes, vasculitis netrotizante, vasculitis lin-
focitica, Síndrome de Churg-Strauss, granulo-
matosis de Wegener y vasculitis inclasificable.
Se llega al diagnóstico mediante biopsia cutá-
nea en el 80%, biopsia renal en el 8%, muscu-
lar en 4%, pieza quirúrgica en 8% y autopsia
en 8%.

La presentación clínica es similar a la de los Figura 2. Vasculitis de arteria de mediano calibre


pacientes con vasculitis primaria: fiebre, púr-
pura, artralgias, neuropatía periférica, insufi- so o fármacos que no ocurre en la asociada
ciencia renal, afectación intestinal o cardíaca a neoplasia. El mecanismo patogénico de
(Tabla 3). El único signo sugestivo de su posi- aparición de la vasculitis leucocitoclástica
ble asociación a tumores es un llamativo dete- es 1) la disminución del aclaramiento de los
rioro del estado general. complejos inmunes, 2) producción anormal
de inmunoglobulinas que podrían reaccionar
La vasculitis leucocitoclástica es la más fre- contra antígenos vasculares dando lugar a
cuente y se presenta como púrpura palpable la formación de inmunocomplejos in situ o
o lesiones maculopapulares con o sin artritis a la formación de estos complejos en la cir-
y menos frecuente úlceras y urticaria, locali- culación y el depósito en las paredes de los
zándose habitualmente en miembros inferiores vasos y, finalmente 3) la producción de in-
(Figura 1). Un 3,8% de los pacientes con vas- munoglobulinas no solo por la célula tumoral
culitis leucocitoclástica tienen una neoplasia11. sino también por el endotelio normal.

Una vasculitis de arterias de mediano calibre,


similar a una panarteritis nodosa, puede apare-
cer en la leucemia de células peludas. La vas-
culitis con frecuencia ocurre tras el diagnóstico
y, en general, tras esplenectomía; y se caracte-
riza histológicamente por un infiltrado inflama-
torio intramural de células peludas leucémicas.
Las manifestaciones clínicas son fiebre, vascu-
litis cutánea, mialgia, artritis y dolor abdominal
por vasculitis mesentérica; también puede ha-
Figura 1. Úlcera cutánea y púrpura palpable como ber arteritis coronaria y mononeuritis múltiple.
manifestación de una vasculitis leucocitoclástica en
paciente con adenocarcinoma de colon La PAN puede aparecer de forma excepcional
asociada a otras neoplasias como el mieloma,
La vasculitis granulomatosa cutánea es menos donde pueden dar lugar a fracaso renal agudo
frecuente. La media de tiempo desde el inicio no tanto por la gammapatía como por la necro-
de la vasculitis hasta el diagnóstico de neopla- sis vascular. El tratamiento inmunosupresor es
sia es 17 días. Se puede acompañar de otros necesario y la evolución paralela a la neoplasia
síntomas como astenia, anorexia, artralgia o es habitual. Se ha visto utilidad de la plasmafé-
artritis, dolor abdominal, hematuria y polineu- resis en casos de mieloma y mala evolución
ropatía. Los hallazgos histológicos son infil- con corticoides e inmunosupresores12.
tración neutrofílica, leucocitoclasia y necrosis
fibrinoide en la pared de los vasos de arterio- Los pacientes con vasculitis y crioglobuline-
las, capilares y vénulas postcapilares. En las mia con frecuencia están asociados también a
vasculitis leucocitoclásticas no paraneoplási- infección por virus hepatitis C y se manifiesta
cas suele existir un desencadenante infeccio- clínicamente por urticaria con el frío, úlceras

111
cutáneas, púrpura, poliartralgias, polineuro- sa a gangrena digital. En un 30% la afectación
patía, hipertensión arterial e insuficiencia renal es asimétrica. Con frecuencia es refractario a
con proteinuria. tratamiento vasodilatador y simpatectomía,
pero puede regresar tras el tratamiento de la
Las vasculitis asociadas a neoplasias pueden neoplasia.
preceder al diagnóstico de neoplasia en el
20%, ser simultáneo en el 64% o aparecer en Los mecanismos implicados en la isquemia di-
la evolución de la enfermedad en el 16%. gital son varios: 1) vasoespasmo arterial para-
neoplásico; 2) oclusión vascular secundario al
La etiología de la vasculitis asociada al cáncer estado hipercoagulable, y 3) vasculitis necroti-
es desconocida. Es rara la existencia de factor zante paraneoplásica.
reumatoide, antígeno del virus B de la hepati-
tis, ANA, ANCA, crioglobulinas e hipercomple-
mentemia y los estudios de inmunofluorescen- Eritromelalgia paraneoplásica
cia en la biopsia son en general negativos. La Se caracteriza por crisis de severo dolor que-
asociación más frecuente es la crioglubuline- mante, eritema y calor en los pies y menos
mia tipo I o II en enfermedades linfoproliferati- frecuentemente en las manos. Se desencade-
vas como la leucemia mielomonocítica aguda, nan por la exposición al calor y ejercicio. Se
linfoma linfocítico, MW o LLC. asocia a la policitemia vera y la trombocitemia
esencial y puede preceder en meses o años a
Los mecanismos patogénicos sugeridos in- su diagnóstico. El tratamiento consiste en áci-
cluyen: 1) inflamación vascular inducida por do acetil salicílico 325-650 mg al día y el de la
inmunocomplejos en los que participan antíge- neoplasia.
nos del tumor; 2) daño vascular por anticuer-
pos con reacción cruzada a células tumorales AMILOIDOSIS
y endoteliales; 3) daño vascular directo por La amiloidosis es una enfermedad poco fre-
invasión de la pared vascular por las células cuente producida por el depósito extracelu-
tumorales circulantes, como en el caso de la lar de fibrillas compuestas por fragmentos de
leucemia de células peludas; 4) liberación de proteínas de bajo peso molecular (5 a 25 KD).
sustancias que dañan el endotelio (enzimas,
factores quimiotácticos, sustancias vasoacti-
vas), y 5) producción de un trombo o émbo-
lo que puede dañar la pared vascular por un
efecto mecánico directo.

Las vasculitis paraneoplásicas a menudo res-


ponden a corticoides, pero son frecuentes las
recurrencias. El tratamiento radical del tumor
primario suele acompañarse de la resolución
de la vasculitis.
Figura 3. Amiloidosis hepática
Síndrome de Raynaud paraneoplásico y
gangrena digital Los depósitos de amiloide se identifican his-
El fenómeno de Raynaud cuando se presenta tológicamente por su aspecto homogéneo en
en mayores de 50 años se puede asociar a car- la hematoxilina eosina, una ultraestructura fi-
cinoma de pulmón, ovario, mama, páncreas, brilar en microscopia electrónica y porque se
riñón, linfoma, leucemia y mieloma. Los pa- tiñen con rojo Congo, mostrando una caracte-
cientes con Raynaud paraneoplásico con más rística birrefringencia con la luz polarizada. Se
frecuencia son varones y de mayor edad que han identificado más de 20 proteínas precur-
los no paraneoplásicos13. Puede preceder a la soras que pueden formar depósitos de amiloi-
neoplasia y en un 80% de los pacientes progre- de. Se distinguen varios tipos de amiloidosis

112
Tabla 4. Clasificación de la amiloidosis

Tipo de amiloide Clasificación Proteína

AL Primaria Cadena ligera kappa o lambda

AA Secundaria Proteína A

AL Localizada Cadena ligera kappa o lambda

ATTR Familiar

Neurológica Transtirenina mutante (prealbúmina)

Cardiopática Transtirenina mutante (prealbúmina)

Nefropática

Fiebre mediterránea familiar Proteína A

Cadena-alfa del fibrinógeno

Lisozyma

AApoA1 Apolipoproteína A-I Apolipoproteína A1

Amiloidosis sistémica senil Transtirenina normal (prealbúmina)

Ab2M Diálisis B2 microglobulina

según la proteína protagonista (Tabla 4). Las la que aparece en el hipernefroma, la enferme-
más frecuentes son la amiloidosis primaria, en dad de Hodgkin y la LLC.
la que la proteína amiloide es AL, y la secun-
daria, formada por la proteína AA. Las fibrillas La amiloidosis primaria (AL) complica un
amiloideas se depositan en los distintos tejidos 10-15% de los pacientes con MM y menos
y órganos como riñón, piel y nervio, alterando frecuentemente en la macroglobulinemia de
la estructura tisular y dando lugar a disfunción Waldenströn (MW). Ambas enfermedades se
orgánica14. caracterizan por la producción monoclonal de
inmunoglobulinas por el clon neoplásico, y son
La amiloidosis puede aparecer como compli- los fragmentos de cadenas ligeras monoclona-
cación en la evolución de los pacientes con les los que dan lugar al depósito amiloide. Los
cáncer (Tabla 5). La amiloidosis asociada a tu- mielomas de cadenas ligeras lambda son en
mores es de dos tipos: la amiloidosis primaria los que con mayor frecuencia ocurre la amiloi-
o AL y la amiloidosis secundaria o AA. En la dosis. En la etiopatogenia de la amiloidosis AL
amiloidosis primaria (AL) las fibrillas son frag- se ha implicado una desregulación génica en
mentos de cadenas ligeras monoclonales, con las células plasmáticas que conduciría a una
o sin cadenas pesadas, y es la que ocurre en disminución del aclaramiento de las proteínas,
el mieloma múltiple (MM). En la amiloidosis se- de su degradación y un aumento de la fibrilo-
cundaria (AA) las fibrillas están formadas por génesis; aunque el mecanismo exacto no se
fragmentos de la proteína amiloide del suero ha aclarado15. En este sentido se han descrito
que es un reactante de fase aguda (AA), y es cambios cromosómicos en los pacientes con

113
Tabla 5. Tipos de amiloidosis y neoplasias asociadas

Amiloidosis primaria AL Amiloidosis secundaria AA

Mieloma múltiple Enfermedad de Hodgkin


Macroglobulinemia de Waldenström Leucemia linfática crónica
Gammapatía monoclonal de significado incierto Linfoma no Hodgkin
Carcinoma de vejiga
Carcinoma gástrico
Carcinoma ovárico
Carcinoma de pulmón

amiloidosis y mieloma, fundamentalmente la drome nefrótico secundario a amiloidosis


delección 13q14. En la amiloidosis primaria AL AA en pacientes con carcinoma renal, Hod-
los depósitos afectan fundamentalmente al ri- gkin y LLC.
ñón 28%, corazón 17%, nervio periférico17%,
túnel del carpo 21%, piel 15%, lengua y mé- ·· El corazón está afectado con frecuencia
dula ósea. en la amiloidosis primaria AL, y da lugar a
insuficiencia cardíaca, arritmias y blo-
En la amiloidosis secundaria (AA) la proteína queos AV con necesidad de implantación
depositada son fragmentos la proteína amiloi- de marcapasos. El diagnóstico de amiloi-
de A del suero, que es un reactante de fase dosis cardíaca se debe sospechar ante
aguda. La amiloidosis secundaria ha sido des- un ECG con bajo voltaje y bloqueos; y un
crita asociada a carcinoma renal, enfermedad ecocardiograma característico con engro-
de Hodgkin y LLC. Esta proteína AA se depo- samiento del septo ventricular > 12 mm y
sita en el riñón, vasos cardíacos, el hígado y el una disminución de la complianza ventri-
bazo. Otros tumores en los que se ha descrito cular. También existe una distorsión de la
la amilodosis AA es el carcinoma epidermoide relación normal entre masa del ventrículo
de pulmón, adenocarcinoma gástrico, vejiga, izquierdo y voltaje izquierdo en ECG. La
ovario, adrenal y leiomiosarcoma uterino. evolución de la cardiopatía es rápida con
insuficiencia cardíaca refractaria fallecien-
Las manifestaciones clínicas de la amiloido- do en 6 meses.
sis dependen del lugar y cantidad de depósito
proteico. ·· En los pacientes con amiloidosis secunda-
ria AA la afectación cardíaca ocurre fun-
·· El riñón es el lugar más frecuente donde damentalmente en los vasos coronarios e
se depositan tanto AA como AL. La clínica intramiocárdicos, manifestándose por angor
más frecuente es la proteinuria 73%, pro- e infarto agudo de miocardio.
gresando a síndrome nefrótico un 50%,
insuficiencia renal 28% o ambos; un 18% ·· En el nervio periférico da lugar a neuro-
requieren diálisis. Las cadenas ligeras eli- patía y es más frecuente en la amiloidosis
minadas por la orina se depositan primero AL y, por tanto, en relación con MM o MW.
en el mesangio del glomérulo y posterior- La neuropatía amiloidea se caracteriza por
mente se extienden a la membrana basal. ser una neuropatía sensitivomotora. Clíni-
La hipercalcemia, deshidratación, infec- camente presentan disestesias en pies y
ción, antiinflamatorios y contrastes radio- manos, dolores lancinantes y sensación
lógicos pueden contribuir a la insuficiencia de quemazón, disminución de la sensibi-
renal. Se han descrito varios casos de sín- lidad térmica en zonas acras y signos de

114
disfunción autonómica como hipotensión El pronóstico de la amiloidosis depende de la
postural, diarrea, impotencia y disfunción extensión de la afectación orgánica, siendo
urinaria. Aparecen úlceras indoloras y ar- peor si existe afectación cardíaca. La super-
ticulaciones de Charcot. El tratamiento vivencia de los pacientes con mieloma y ami-
de la discrasia plasmática puede mejorar loidosis tras tratamiento quimioterápico es de
las manifestaciones de la amiloidosis, así 12-18 meses, y es mejor tras el trasplante de
como el trasplante de médula ósea. médula ósea. El tratamiento de la neoplasia en
la amiloidosis AA da lugar a una disminución
·· Síndrome del túnel carpiano: se produce de la producción de proteína amiloide con la
una compresión mecánica del nervio me- consiguiente mejoría de los síntomas.
diano por engrosamiento del ligamento del
carpo secundario a depósito amiloide. Es
frecuente encontrarlo en los pacientes con
amiloidosis AL.
·· Los depósitos hepáticos y esplénicos son
frecuentes en AL y AA pero habitualmente
son asintomáticos. De forma excepcional
se ha descrito coagulopatía por secuestro
de factor X entre las fibrillas.
·· En la piel se deposita fundamentalmente
AL en arterias y venas de pequeño calibre,
con la consiguiente fragilidad y ruptura,
dando lugar al típico hematoma en antifaz
por púrpura en la región periorbital. Tam-
bién es característico el depósito en la len-
gua con la aparición de macroglosia.

Figura 4. Amiloidosis hepática, birrefingencia


con luz polarizada

El diagnóstico de la amiloidosis requiere la do-


cumentación histológica de la sustancia amiloi-
de en cualquier tejido afecto. El procedimiento
inicial de diagnóstico debería ser la aspiración
de grasa abdominal, que es positivo en el 75%.
La biopsia de MO en los casos de mieloma o
linfoma además de diagnosticar el tumor, pue-
de ser positivo para amiloide en el 50% de los
pacientes. Si la grasa abdominal y la biopsia
de MO han sido negativas, se realizará biopsia
rectal o bien de otro órgano afecto.

115
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116
Capítulo 12
Síndrome anorexia-caquexia
cancerosa y fiebre tumoral
Autores:
Dra. María Hernández Yánez Dr. Jesús García-Donas
Facultativo especialista en Oncología Médica. Jefe de la Unidad de Tumores Ginecológicos
Hospital José Molina Orosa. Lanzarote y Genitoruinarios del Centro Integral
Oncológico Clara Campal. Madrid

SINDROME ANOREXIA-CAQUEXIA Este síndrome no es exclusivo de la enferme-


CANCEROSA dad neoplásica, pudiendo acompañar a otras
patologías como la insuficiencia cardíaca con-
Introducción gestiva, SIDA, procesos inflamatorios reuma-
La caquexia en el paciente con cáncer se defi- tológicos y la enfermedad inflamatoria intesti-
ne como un trastorno sistémico caracterizado nal entre otros.
por una pérdida acelerada de peso (en torno
al 10% en 6 meses), lipolisis, pérdida de masa Etiopatogenia
muscular y visceral y pérdida de apetito. Se Desde el punto de vista etiológico, el síndrome
considera un síndrome multiorgánico con nu- anorexia-caquexia oncológica es multifactorial
merosas implicaciones fisiológicas (síndrome influyendo en él circunstancias tan diversas
de anorexia-caquexia), que además conlleva como las propias características del tumor, el
una disminución de la calidad de vida del en- tipo de tratamiento antineoplásico recibido, al-
fermo. De hecho, constituye uno de los prin- teraciones neuropsiquiátricas (como la depre-
cipales factores pronósticos en el paciente sión) y alteraciones clínicas (como la disgeusia,
oncológico, habiéndose asociado a una peor náuseas, obstrucción intestinal, estreñimiento,
respuesta al tratamiento y una disminución de disfagia, mucositis, xerostomía y el dolor).
la supervivencia global1.
En cuanto a los mecanismos moleculares
La incidencia de la caquexia tumoral es va- implicados en su aparición, aún se conocen
riable y depende del tipo de cáncer (hasta el poco. Sabemos que el tumor es capaz de al-
80% de pacientes con neoplasias gastrointes- terar la respuesta hormonal y la secreción de
tinales y el 60% con neoplasias pulmonares citoquinas, neuropéptidos y neurotransmiso-
presentan pérdida de peso en el momento del res del propio paciente, además de provocar
diagnóstico), el estadio (alrededor del 50% de una situación de “hipermetabolismo”.
casos con tumor extendido) y la fase de la en-
fermedad (en torno al 80% de pacientes en si- Para una mejor comprensión, abordaremos
tuación terminal)1. De forma general, se estima cada uno de estos puntos de forma separada,
que el 50% de los individuos en el momento sin embargo, debe tenerse en cuenta que en el
del diagnóstico tienen anormalidades en su paciente suceden de forma simultánea.
conducta alimentaria, y ese porcentaje puede
incrementarse hasta el 80% antes de la muer- 1. Producción de citoquinas
te. Algunas series han identificado la caquexia Se trata de proteínas de bajo peso molecular
tumoral como la causa final del fallecimiento implicadas en la comunicación intercelular y el
hasta en un 20% de los casos1. control de numerosos procesos fisiológicos.
Las citoquinas proinflamatorias [principalmen-

117
te las interleuquinas 1, 6 y 8 (IL-1, IL-6 y IL- ·· Grasas. En los pacientes con cáncer se
8), el factor de necrosis tumoral o TNFα (del produce habitualmente un aumento de la
inglés tumor necrosis factor) y el interferón γ lipolisis, que resulta en el incremento de
(IFN-γ)] han sido relacionadas con el desarrollo los niveles de glicerol y ácidos grasos en
de la caquexia, ya que incrementan los niveles sangre; ambas sustancias son sustratos
séricos del factor liberador de corticotropina utilizados para la producción de gluco-
(CRF), capaz de activar señales anorexígenas sa en la célula tumoral. Este fenómeno se
en el hipotálamo. Además el CRF aumenta los produce fundamentalmente gracias a la li-
niveles de leptina cerebrales2. beración del factor movilizador de lípidos
(FML) por el tumor, que estimula la lipóli-
La leptina es una hormona que se sintetiza a sis a través del ciclo intracelular del AMP.
partir del tejido adiposo y juega un papel im- Además, en la caquexia cancerosa se ob-
portante en el equilibrio del peso corporal al serva una disminución de la actividad de la
disminuir la ingestión de alimentos y aumentar lipoprotein lipasa (enzima responsable de
el gasto energético basal. El ayuno y la pérdida internalizar en la célula los triacilgliceroles
de peso provocan de forma fisiológica una dis- circulantes para su utilización energética),
minución en los niveles de leptina, que a nivel debido fundamentalmente al aumento de
hipotalámo da lugar a la activación del centro citoquinas circulantes. Esta situación con-
del hambre y contribuye a reducir el metabo- diciona el desarrollo de una hipertrigliceri-
lismo basal2. demia secundaria5.

2. Hiposecreción de neuropéptido Y (NPY) ·· Proteínas. Los pacientes con caquexia


El NPY es un péptido de 36 aminoácidos sin- experimentan pérdida de masa muscular,
tetizado en las neuronas del núcleo arcuato debido a la escasa producción proteica y
del hipotálamo que actúa como un potente in- el alto consumo muscular. Esta situación
ductor del centro del hambre. En condiciones de catabolismo proteico está influenciada
fisiológicas la caída en los niveles de leptina por el factor inductor de proteólisis (PIF),
provocan la liberación del NPY. Sin embargo, una sustancia con actividad proteolítica
en el síndrome anorexia-caquexia este meca- que ejerce su acción activando la vía ATP-
nismo parece fallar debido a la alta producción ubiquitina-proteasoma responsable de la
de citoquinas, en especial la IL-1, y el aumen- degradación de proteínas del músculo es-
to de la concentración cerebral de serotonina, quelético, al mismo tiempo que inhibe la
que suprime la respuesta del neuropéptido Y, síntesis proteica.
induciendo saciedad2,3.
Tratamiento
3. Anomalías en el metabolismo El mejor tratamiento del síndrome anorexia ca-
(“hipermetabolismo”) quexia cancerosa es el tratamiento de la cau-
·· Carbohidratos. El sustrato principal de las sa, es decir, el tratamiento de la enfermedad
células tumorales es la glucosa, que obtie- tumoral. Desafortunadamente, esto no siem-
nen a partir del lactato a través del ciclo pre es posible, siendo fundamental resolver
de Cori; la sobreactivación de dicho ciclo síntomas intercurrentes que puedan contribuir
(conocida como “efecto Warburg”) es res- a esta situación como las náuseas, vómitos,
ponsable, parcialmente, del incremento del mucositis y otros relacionados directamente
gasto energético4. con el tratamiento de quimio/radioterapia.

·· Por otra parte, se desarrolla a nivel sisté- Ningún estudio intervencionista sobre suple-
mico una resistencia periférica a la insulina mentación con alimentación oral, enteral o pa-
que hace que los tejidos sanos vean redu- renteral ha demostrado beneficio en la supervi-
cida su utilización de glucosa mientras que vencia del paciente o en la ganancia de peso6.
esto no ocurre en el tejido tumoral.

118
De hecho, estas maniobras solo parecen ser bargo, hay que tener en cuenta que este
eficaces a la hora de mejorar el estado nutri- tratamiento no está exento de efectos se-
cional de los pacientes oncohematológicos cundarios, habiéndose descrito un mayor
ingresados. riesgo de trombosis venosa profunda.

Se han comunicado diversos estudios aleato- ·· Por otro lado, Yavuzsen et al.10 realizaron
rizados con ácido eicosapentanoico (EPA), un un análisis de 55 estudios controlados y
ácido graso alfa-3 omega poliinsaturado que aleatorizados donde se utilizaron diferen-
parece tener la capacidad de mejorar del ape- tes fármacos orexigenos para el tratamien-
tito. Sin embargo, los resultados de dichos tra- to del síndrome de la anorexia-caquexia
bajos son contradictorios. tumoral. Los autores concluyeron que el
acetato de megestrol es mejor que pla-
Actualmente la investigación clínica se centra, cebo, el dronabinol y la cisaprida en la
mayoritariamente, en diferentes fármacos que estimulación del apetito. Sin embargo no
tratan de incrementar el apetito y disminuir hallaron diferencias cuando se comparó
la pérdida de peso en pacientes oncológicos. con la administración de corticosteroi-
Sin embargo, los resultados aún son limitados des. Así mismo, AM demostró mejorar la
y no existen claros candidatos a incorporarse calidad de vida de los enfermos y reducir
a la práctica asistencial en los próximos años. la pérdida de peso cuando se comparó
frente a placebo.
Aunque con una eficacia limitada, actualmente
existen diversas sustancias que se emplean en ·· En cuanto a la dosis, parece existir una co-
la consulta diaria para mejorar los síntomas de rrelación directa entre la dosis y la eficacia.
este síndrome: Así, aunque la posología optima se ha esta-
blecido entre 480-800 mg/día, en algunos
·· Agentes orexigénicos de primera línea: estudios la utilización de dosis superiores
progestágenos y esteroides. a 800 mg consiguieron mejores resultados.
·· Los agentes progestacionales (acetato de
megestrol y medroxiprogesterona) son los ·· Los corticoesteroides [prednisolona (5
más utilizados. Aunque su mecanismo de mg/8h vía oral) y dexametasona (3-6 mg/
acción no ha sido bien establecido, se cree día vía oral)] inciden favorablemente sobre
que interfieren con la producción de cito- el apetito, aportando sensación de bienes-
quinas. Su eficacia en términos de incre- tar y mejorando el performance status del
mento de apetito y peso ha sido validada paciente. Sin embargo, su eficacia sobre la
en diferentes estudios aleatorizados y en ganancia de peso es discutible dado que
dos metaanálisis. en buena parte se debe a una retención hí-
drica; además, su efecto se agota por en-
·· Uno de ellos, firmado por Pascual et al.9, cima de las cuatro semanas.
incluyó 26 estudios y analizó la seguridad
y eficacia del acetato de megestrol (AM) ·· Loprinzi et al.11 compararon en 495 enfer-
en el síndrome de la caquexia-anorexia en mos el efecto de acetato de megestrol (800
pacientes oncológicos y no oncológicos mg/d) vs. dexametasona (0,75 mg/12 h) vs
frente a otros fármacos orexígenos y en- fluoximesterona (un derivado de la testos-
tre diferentes dosis de AM (< de 800 mg/d terona a dosis de 10 mg/12 h), todos ellos
frente a > 800 mg/d). Dicho trabajo conclu- por vía oral, sobre la ganancia de peso, el
yó que el acetato de megestrol incrementa apetito y calidad de vida. En cuanto al ape-
el apetito [(Riesgo relativo (RR): 2, 33 (95% tito, tal y como referían estudios anteriores,
CI 1, 52-3, 59)], provoca ganancia de peso no existieron diferencias entre AM y corti-
[(RR: 2, 16 (CI 95% 1,45-3,21)] y mejora la coesteroides; sin embargo, la fluoximeste-
calidad de vida de los pacientes oncológi- rona mostró un menor estímulo del apetito
cos [(RR: 1, 81(CI 95% 1,13-2,89)]. Sin em- que AM. Por otra parte, no hubo diferen-

119
cias en ganancia de peso ni calidad de vida mo sin disminución de la cifra de leucocitos y
cuando se compararon los tres fármacos. sin foco infeccioso establecido, puede deber-
Curiosamente el grupo de los pacientes se a una liberación de pirógenos tumorales o
tratados con dexametasona presentó ma- liberados en la reacción inflamatoria del hués-
yor número de efectos adversos de forma ped; en esos casos se considera una fiebre de
estadísticamente significativa. origen tumoral y se trata de un síndrome pa-
·· Agentes orexigénicos de segunda línea. raneoplásico, frecuente en múltiples tipos de
·· Existen diferentes fármacos en este subgru- cáncer. Así, este síndrome puede presentarse
po con diferentes niveles de evidencia. incluso antes del diagnostico del tumor prima-
·· La ciproheptadina (8 mg/8 h oral) y los fár- rio, siendo en ocasiones el síntoma de alarma
macos antiserotoninérgicos parecen con- de la enfermedad.
trarrestar la acción del NPY mediante la
disminución de los niveles de serotonina. Otra causa de fiebre no infecciosa en el pa-
·· Los aminoácidos de cadena ramificada ciente con cáncer son algunos fármacos
han demostrado ser capaces de frenar la (como la bleomicina, gemcitabina e interfe-
proteolisis12. rones), capaces de inducir la formación de
·· Los procinéticos (metoclopramida 10 mg anticuerpos IgE específicos que se unen a la
oral cada 8 horas) son útiles en el trata- superficie de los mastocitos y basófilos, indu-
miento de las náuseas, lo cual puede me- ciendo su degranulación tras sucesivas admi-
jorar la ingesta, si bien no han demostra- nistraciones15.
do eficacia en el incremento del apetito13.
·· Los cannabinoides tales como el dro- También algunas situaciones clínicas como el
nabinol, han demostrado ser sustancias tromboembolismo pulmonar, reacciones trans-
activas en el tratamiento de las náuseas fusionales, metástasis en el sistema nervioso
y anorexia del paciente con HIV y en los central, enfermedades autoinmunes y la insufi-
pacientes con cáncer también parecen ciencia suprarrenal (entre otras) pueden produ-
tener resultados positivos14. cir fiebre en el paciente oncológico.

·· Otros agentes orexigénicos. La fiebre de origen tumoral se presenta en el


·· Se han ensayado multitud de sustancias 5% de los pacientes neoplásicos y su diag-
con una potencial acción orexígena, como nóstico es de exclusión. Es especialmente
la melatonina, la talidomida, los β2 agonis- frecuente en neoplasias hematológicas (en la
tas y los AINES. Algunas de ellas, como la enfermedad de Hodgkin es incluso un factor
melatonina y la talidomida, actúan regu- pronóstico), el cáncer renal, el carcinoma de
lando la producción de TNF; sin embargo, pulmón, el hepatocarcinoma, las metástasis
su utilización en la práctica es anecdótica. hepáticas y, en general, en los casos con gran-
·· des masas necróticas. Las principales citoqui-
FIEBRE TUMORAL nas pirogénicas liberadas por un tumor son las
La fiebre tumoral es un síndrome caracterizado interleuquinas 1 y 6, el factor de necrosis tu-
por la aparición de hipertermia en el paciente moral (TNF) y el interferón (IFN).
oncológico, que ocurre como consecuencia de
la elevación transitoria del punto prefijado del Para favorecer su correcta identificación, se
centro termorregulador. Este proceso es el re- han definido una serie de criterios diagnósti-
sultado de la interacción de diversos procesos cos de fiebre de origen desconocido en el pa-
infecciosos y no infecciosos. ciente tumoral. Estos son:
1. Fiebre documentada de 37,8º C o más
Cuando la fiebre aparece en el contexto de 2. Duración de dos semanas o más
una neutropenia postquimioterapia o postra- 3. Un mínimo de tres hemocultivos negativos
dioterapia estamos ante una fiebre de etiología 4. Un cultivo de orina negativo
infecciosa en la mayoría de los casos. En cam- 5. Radiografía de tórax sin alteraciones
bio, cuando la fiebre se presenta en un enfer- 6. Ausencia de un mecanismo alérgico

120
7. Falta de respuesta a un tratamiento anti- la prueba. En una alta proporción de enfermos
biótico empírico de 7 días de duración con fiebre tumoral se produce una deferves-
8. Lisis completa y rápida de la fiebre en el cencia sostenida a las 12-24 horas de la toma
test del naproxeno16 de este fármaco.

La prueba del naproxeno consiste en admi- Aunque el mejor tratamiento de la fiebre tumo-
nistrar 250 mg/12 horas durante 36 horas y se ral es el etiológico, como tratamiento sintomá-
considera remisión completa (fiebre tumoral) si tico hay que destacar los AINES, sobre todo el
hay una disminución de la temperatura a me- naproxeno. De eficacia similar a este tenemos
nos de 37,2º en las primeras horas del inicio de la indometacina y el diclofenaco.

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