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Se dice que los seres humanos envejecen según han vivido, esto supone que

los cambios sociales cuando el individuo llega a una edad avanzada, están
determinados por su previa conducta; debido a factores biológicos, patrones de
comportamiento, su personalidad y su ámbito cultural, demográfico y social.
Actualmente las personas llevan un ritmo de vida acelerado, las tareas y
responsabilidades diarias que asume conllevan a una sobrecarga de hábitos que
afectan su salud física y emocional. Entendiendo los estilos de vida como hábitos y
comportamientos que el individuo adopta o elige en su cotidianidad, de acuerdo a su
bienestar físico, mental y emocional, bien sea de manera consiente o no, influyendo
directamente en su estado de salud, ya que la prolongación de su vida dependerá de
su manera de vivirla.
De alguna forma cada uno de nosotros se encentra inmerso en pequeños
hábitos que terminan traduciéndose en conductas poco saludables; el estrés del
trabajo o la premura de entregar tareas en la universidad, las labores del hogar, la
alimentación desbalanceada, el tabaquismo, el alcoholismo, el dormir poco, la falta de
ejercicios, las pocas relaciones interpersonales e incluso cosas que no controlamos
como las condiciones medioambientales, se convierten en una bomba de tiempo, que
solo cuenta los segundos que nos arrebata.
Un estudio realizado por el laboratorio de medicina de la universidad de
Groningen, en Países Bajos, determino que muchas de las enfermedades comunes en
la actualidad como, la hipertensión arterial, la diabetes, el síndrome metabólico e
incluso la inflamación sistemática crónica de bajo grado, se relacionan directamente
con el estilo de vida de la sociedad moderna, el consumismo y el desequilibrio en la
manera de manejar los niveles de estrés. Podemos darnos cuenta que las consultas
médicas de atención primaria están llenas de pacientes, quienes llevan décadas
tratándose afecciones con fármacos a los que se vuelven dependientes y en ocasiones
hasta generan respuestas adversas, sin tomar en cuenta que sus patologías pudieran
mejorar solo cambiando su manera de vivir.
Es evidente que la solución no es tan fácil como aparenta, pero las
condiciones de salud de una persona se ven ampliamente mejoradas al momento de
adoptar comportamientos más saludables el aprovechar los momentos de ocio de
manera eficaz, y balancear los alimentos, pueden marcar un inicio a una mejor
calidad de vida, dando óptimos resultados.

Objetivo General

Promover estilos de vida saludables mediante implementación de estrategias


comunicativas tomando en cuenta los factores de riesgo a los que se expone el
individuo en la sociedad moderna.

Objetivos específicos
Identificar los estilos de vida que generan riesgo a la salud del individuo.
Determinar los conocimientos que posee la población sobre los estilos de vida y su
influencia en la salud-enfermedad
Concientizar mediante estrategias comunicativas sobre la importancia de modificar
estilo de vida insanos a conductas saludables

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