UNIVERSIDAD FERMÍN TORO

VICE REDACTORDO ACADÉMICO

FACULTAD DE CIENCIAS JUDÍDICAS Y POLITICAS
ESCUELA DE DERECHO

ESTUDIO DE CASO

Mariangel Gonzalez Rodriguez

BARQUISIMETO, JULIO 2019

El caso contra un hombre de Murrieta acusado de asesinato en la muerte
a tiros de su esposa – una oficial de Policía de Escondido – fue
desechado la semana pasada a favor de una acusación del gran jurado,
según documentos judiciales.

Freddy Pérez Rodas, de 28 años, se declaró no culpable a cargos de

asesinato e incendio premeditado. Él está siendo retenido bajo una fianza
de 2 millones de dólares.

La policía ha dicho que Pérez Rodas le disparó a su esposa, Laura Pérez,

de 25 años, en su vivienda de Murrieta la tarde del 23 de julio, escondió
su cuerpo en una unidad de almacenamiento en Moreno Valley y luego
incendió la vivienda en un intento para cubrir el crimen. La hija de cuatro
años de la pareja se encontraba en casa cuando su madre fue asesinada.

Laura Pérez había sido oficial de Policía en Escondido por cerca de nueve
meses.

Las acusaciones de asesinato e incendio premeditado, las cuales fueron

presentadas el mes pasado, eliminan la necesidad de una audiencia
preliminar.

En una audiencia preliminar, un juez decide si hay suficiente evidencia

para qué un acusado sea llevado a juicio.

De la misma manera, la defensa tiene una oportunidad de interrogar a los

testigos en una audiencia pública.

El gran jurado, sin embargo, opera en secreto y la defensa no tiene la

oportunidad de interrogar a los testigos. Al menos 12 de 19 jurados deben
votar a favor de una acusación.

“Decidimos que era en el mejor interés del caso”, dijo el sub fiscal de
distrito, Mike Cabral, sobre la decisión de llevar el caso al gran jurado.

La abogada de Pérez Rodas, Johnnetta Anderson, no pudo ser

contactada para emitir un comentario el viernes.
La policía empezó a investigar el caso luego que Pérez Rodas llamara al
911 para reportar que su vivienda en Grand Oaks Court estaba en llamas
y que temía por su esposa quien aún estaba adentro.

Los bomberos rápidamente extinguieron las llamas pero no encontraron a

Pérez.

De acuerdo a documentos de allanamiento, Pérez Rodas dijo que había

tratado de llamar a su esposa en su celular durante la tarde y no había
recibido una respuesta. Él se alarmó cuando llegó a casa con su hija y vio
que el SUV de su esposa aún estaba fuera, según le dijo Pérez Rodas a
la policía. Se suponía que ella debía estar en el trabajo.

Él dijo que abrió la puerta principal y humo empezó a salir de la vivienda.

De vuelta en la estación de policía, Pérez Rodas eventualmente admitió

haberle disparado a su esposa, según escribió el detective John Therien
en documentos de allanamiento.

Pérez Rodas dijo que tuvo un forcejeo con su esposa cuando él trató de
salir de la vivienda después de una discusión que tuvieron sobre una
aventura que él alegaba ella había tenido en el pasado, según escribió
Therien. Él dijo que la empujó y que ella sacó su pistola de su bolsa.

Después que él saco una segunda pistola de su habitación, según Pérez

Rodas, su esposa le apuntó con la pistola y él le disparó tres veces, de
acuerdo a documentos de corte.

Los documentos de corte indican que Pérez Rodas llevó a los

investigadores a la unidad de almacenamiento, donde encontraron el
cuerpo de su esposa, dinero en efectivo, pasaportes y ambas pistolas.