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Introducción
La búsqueda de Dios nos conduce, sin duda, a una vida sobrenatural, donde
experimentamos crecimiento y fortaleza en nuestra fe. La Presencia de Dios en su
plenitud hace que lo imposible se vuelva visible y nos lleve a contemplar grandes
milagros. Nuestro desafío es disponernos a crecer en la fe de los milagros y
prepararnos para ver, como herederos del Dios de los cielos, las maravillas que
necesitamos ver en este tiempo
Elías, un hombre que buscó al Dios de los milagros (1 Reyes 17:8-24)
Permanecía en Su Presencia y en el lugar que él quiere: Dios le dijo a
Elías que fuera a Sarepta donde la viuda le sustentaría. Era el lugar y el
entorno donde Dios le iba a bendecir. Cuando no entendemos la visión
decidimos escoger el lugar donde servir a Dios, queremos cambiar la familia
que Dios nos ha dado, el trabajo donde estamos, sin llegar a cumplir el plan
perfecto que Dios quiere y que, para ello, nos ha enviado allá
Dios nos sustenta allí donde nos envía: Dios bendice es en el lugar donde
quieres que estemos. En ocasiones, nos parece que es mejor otro lugar u
otro ambiente, por eso, cuando nosotros mismos escogemos, lo terminamos
haciendo mal. Cuando dejo que Dios escoja y me sustente, veré los milagros
que alcanzó a ver Elías, pues no hay lugares que bendicen, sino que Dios
me bendice en el lugar donde Él me envía
Entiende la visión y la orden y la comparte a la viuda: Es necesario para
heredar las promesas de Dios, tener clara la visión de lo que Dios quiere,
pero también la orden que Dios nos imparte como una instrucción específica
a seguir, dando cumplimiento a la visión. La visión sin orden se dilata y es
solo un concepto, mientras que la orden sin la visión no tendrá el impacto
necesario. La clave está en seguir la visión, pero también obedecer la orden,
tal y cual, como Dios nos la está entregando. Elías pudo haber pensado que
el sustento de una viuda era imposible, pero al seguir la visión y la orden, vio
la Gloria de Dios
Quien entiende la visión y la orden ve milagros en su vida y en su
entorno: Cuando decido obedecer, aún, en las condiciones de dificultad y
escases, la mano de Dios se mueve y podremos ver su acción sobrenatural
Dio testimonio: Cuando la viuda manifiesta “ahora veo que eres profeta de
Dios” es una frase que denota el reflejo de la Presencia de Dios en Elías. El
no compartió un mensaje, pues su propia vida era el testimonio de un Dios
grande y poderoso. En este tiempo, nuestro mensaje más contundente
debería ser nuestra vida y no un mensaje que en ocasiones, no va
acompañado de la Presencia de Dios
Lleva a otros, palabra de vida: Elías declara lo bueno que Dios haría con
la viuda y su familia, llevando esperanza y declarando el cumplimiento por fe,
de la Palabra de Dios. No habló de lo suyo, sino de lo que viene del corazón
de Dios
Trasmite vida y aliento: Cuando somos herederos de las promesas de Dios,
donde quiera que vayamos (a nuestro entorno familiar, laboral o ministerial)
llevaremos aliento y vida donde solo hay oscuridad y muerte. Dios quiere
usarnos en aquellas vidas o ambientes, donde la esperanza se perdió y el
aliento se fue
Aplicación Teoterápica
La vida sobrenatural es lo que debe caracterizar a los hijos e hijas de Dios. Si
queremos ver grandes milagros, no solo en nuestra vida, sino ser de bendición para
los que están a nuestro alrededor, es importante que permanezcamos firmes en la
visión y demos cumplimiento a las instrucciones de Dios para llevar bendición hasta
lo último de la tierra