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ENSAYO

PROCESOS DE REPARACIÓN COLECTIVA Y ENFOQUE REPARADOR DE LOS

PROGRAMAS DE LA REFORMA RURAL INTEGRAL

AUTOR: MOISÉS DAVID ASÍS MMERCADO

DOCENTE: SIXTO BARRIGA

FACULTAD DEE CIENCIAS HUMANAS

PRE GRADO DE DEREHO

BARRANQUILLLA

JULIO, 2019

CORPORACIÓN UNNIVERSITARIA AMERICANA


5.1.3.3. Reparación colectiva en el fin del conflicto En el marco del fin del conflicto, el Gobierno

Nacional y las FARC-EP hemos acordado que el Gobierno Nacional fortalecerá los procesos de

reparación colectiva y garantizará que los planes y programas de la Reforma Rural Integral

tengan, donde haya lugar, un enfoque reparador.

5.1.3.3.1. Carácter reparador de los Planes de Desarrollo Rural con Enfoque Territorial (PDET)

El nivel de victimización y afectación como criterio de definición de las zonas donde se pondrán

en marcha los PDET tiene una intención reparadora, y en esa medida, en su implementación se

buscará garantizar el carácter reparador para las víctimas y las comunidades.

5.1.3.3.2. Planes de reparación colectiva con enfoque territorial Con el fin de reconocer los daños

causados por el conflicto a las comunidades y de contribuir a transformar sus condiciones de

vida para que puedan reconstruir sus proyectos, en el marco del fin del conflicto el Gobierno

Nacional fortalecerá los procesos de reparación colectiva territorial de conformidad con este

Acuerdo. Con ese propósito, todos los PDET incorporarán planes de reparación colectiva; y en

los territorios donde no se implementan los PDET se fortalecerán los planes de reparación

colectiva en donde haya comunidades especialmente victimizadas, priorizando las iniciativas de

las comunidades.

En ambos casos los planes de reparación colectiva con enfoque territorial deberán incorporar

los siguientes elementos: • Medidas materiales y simbólicas dirigidas a atender el daño: Medidas

dirigidas a las víctimas directas, individuales y colectivas, tales como acciones de dignificación,

de memoria, homenajes y conmemoraciones, obras de infraestructura y arquitectura

conmemorativa. • Medidas de convivencia y reconciliación: Medidas dirigidas a atender los

daños en el tejido social y promover la convivencia al interior de las comunidades incluyendo a


las víctimas, a los ex integrantes de organizaciones paramilitares, a integrantes de las FARC-EP

en proceso de reincorporación a la vida civil y también a terceros que hayan podido tener alguna

participación en el conflicto. Así como medidas para construir y fortalecer la confianza entre las

autoridades públicas y las comunidades. • Articulación: Los planes de reparación colectiva

deberán articularse, donde haya lugar, con los PDET y con los diferentes planes y programas

acordados, así como con los distintos esfuerzos de verdad y justicia. • Planes de acción: Se

elaborará un plan de acción de reparación colectiva de manera participativa. Estos planes

deberán incluir: i) El diagnóstico del daño colectivo; ii) La identificación de las medidas

materiales y simbólicas que serán implementadas de manera prioritaria; y iii) El cronograma para

su implementación.

• Mecanismos de participación: La participación activa de las víctimas y sus organizaciones

en conjunto con las autoridades territoriales será la base de los planes de reparación colectiva

territorial. Para ello se crearán espacios de participación para definir las prioridades en la

implementación de las medidas de reparación colectiva; asegurar la participación comunitaria en

la implementación de las medidas de reparación; y establecer mecanismos de seguimiento y

veeduría a los proyectos. Se garantizará la participación de las mujeres en estos espacios de

participación. • Medidas de contribución a la reparación: Donde haya lugar los planes de acción

colectiva incluirán la participación de quienes cometieron daños con ocasión del conflicto en

desarrollo de las acciones concretas de contribución a la reparación a las que se refiere este

Acuerdo.

ESTE TEXTO FORMA PARTE DEL ACUERDO FINAL PARA LA TERMINACIÓN

DEL CONFLICTO Y LA CONSTRUCCIÓN DE UNA PAZ ESTABLE Y DURADERA.


PREGUNTA DE TRABAJO, QUE PONDERA UN CONCEPTO INDIVIDUAL:

¿Está usted de acuerdo con la implementación de este concepto de reparación en que sea el

Gobierno Nacional el que debe fortalecer los procesos de REPARACIÓN COLECTIVA y

garantizar que los planes y programas de la Reforma Rural Integral tengan, donde haya lugar, un

enfoque reparador?

SI o NO Y POR QUÉ?

Discernir sobre temas sociales, políticos y culturales de nuestra actualidad, siempre van a

resultar siendo temas atractivos y polémicos; es por ello que EL ACUERDO FINAL PARA LA

TERMINACIÓN DEL CONFLICTO Y LA CONSTRUCCIÓN DE UNA PAZ ESTABLE Y

DURADERA, ha suscitado una dualidad de opinión en torno a su implementación, pues, si bien

es cierto que el Pueblo colombiano se manifestó en las urnas, a través de un Referendo,

prevaleciendo el no sobre el sí, hay que decir también que el proceso previo a esta votación,

estuvo viciado a través de una campaña sucia, mediática, que sembró terror en el colombiano

promedio, y que dicho resultado no significa que el pueblo colombiano decline su Derecho

Constitucional y Fundamental a vivir en Paz.

Sea oportuno el momento, para recordar que Colombia ha sido protagonista de varios

acuerdos en medio de momentos convulsionados por altos índices de violencia, que han segado

la vida de miles o mejor de millones de compatriotas; muchos de estos compatriotas actuando

como protagonistas del conflicto junto con el Estado colombiano, y muchos otros coterráneos

víctimas de esta cruel violencia.

Antes del Proceso de Paz con Las FARC – EP, el acuerdo o negociación más reciente fue el

gestado durante el Gobierno del sr. Álvaro Uribe Vélez, con los Paramilitares o Autodefensas
Unidas de Colombia, conflicto que recrudeció la violencia en el campo y la ciudad y que llegó a

permear de una manera antes vista, la clase política colombiana, y del cual fueron víctimas en

demasía, Líderes Sociales, Campesinos, Sindicalistas Líderes Políticos y un grueso de la

población, sobre todo la rural, que padeció la mayor tasa de desplazamiento nunca antes vivida

en Colombia.

Para sumergirnos un tanto en este tema es necesario tener claro algunos conceptos como:

Reparación. En forma general, la reparación consiste en la implementación de acciones que

tienden a hacer desaparecer los efectos de los daños cometidos (Programa Presidencial de

Derechos Humanos y DIH, 2008, p. 33).

Cuando no es posible la restitución, debido a la imposibilidad de volver al estado normal el

bien jurídico afectado, como por ejemplo cuando se vulnera el Derecho a la Vida, la restitución

entonces se debe ajustar a la Jurisprudencia Internacional, es decir. Con una justa indemnización

o compensación pecuniaria a la cual debe sumarse las medidas positivas del Estado para

conseguir que los hechos lesivos no se repitan (Corte IDH, Caso Bámaca Velásquez vs.

Guatemala).

Para mayor precisión nos podemos remitirnos a la Convención Americana sobre derechos

Humanos de 1969, “PACTO DE SAN JOSÉ”, donde se encuentra prescrito el Derecho a la

Reparación, en su Artículo 63, Numerales 1 y 2, en los cuales se encuentra circunscrito el

concepto jurisprudencial antes mencionado.

Otro concepto que debemos tener claro son:


Enfoque Reparador. Hace referencia al aporte efectivo, tendiente a reparar sustancialmente

los daños acaecidos a Las Comunidades afectadas por causa o con ocasión del conflicto.

Sistema Integral. La calidad de integral se define, en la medida en que interactúan de manera

articulada diferentes mecanismos, con la finalidad de entregar la mejor respuesta a las víctimas

del conflicto armado.

Ya teniendo mayor claridad de estos términos, podemos concretizar la respuesta a la pregunta

que nos ocupa “Está usted de acuerdo con la implementación de este concepto de reparación en

que sea el Gobierno Nacional el que debe fortalecer los procesos de REPARACIÓN

COLECTIVA y garantizar que los planes y programas de la Reforma Rural Integral tengan,

donde haya lugar, un enfoque reparador. SI o NO Y POR QUÉ?”

La respuesta es un contundente y determinante SI; el porqué de esta respuesta, se sustenta en

lo siguiente:

Primero. La propiedad sobre la tierra es un problema histórico que precisamente, es una de las

causas de la génesis del conflicto armado en Colombia; se puede considerar unánime el concepto

de concentración inequitativa de la tierra y el marcado atraso del sector rural.

Segundo. Los daños ocasionados a la Población rural y el Campesinado han sido de un efecto

devastador, que merecen la completa atención del Gobierno.

Tercero. El Gobierno viene a ser el administrador del Proceso de Paz, toda vez que debe

garantizar su implementación y además, el cumplimiento transparente de quienes intervienen en

él. Priorizando el proceso de acuerdo con la necesidad de cada vereda, municipio o Sub Región,

partiendo siempre desde el campo.


Cuarto. El Gobierno debe garantizar la participación activa de las víctimas, en conjunto con

los Actores del Conflicto, durante el proceso reparador.

Quinto. La presencia eficaz del Estado en todo el territorio Nacional, es fundamental en la

consecución de una Paz estable y Duradera.

Sexto. Es responsabilidad del Gobierno propender el logro y mantenimiento de la Paz, como

lo enuncia el Artículo 95 de nuestra Constitución Política

Séptimo. El Artículo 22 de la Constitución Política de la República de Colombia impone la

paz como un derecho y un deber de obligatorio cumplimiento.

Ya discriminando el cuestionamiento que se hace, el Gobierno Nacional si debe fortalecer los

procesos de REPARACIÓN COLECTIVA, pues son varios los factores que nos han llevado a

esta crucial situación de violencia y de los cuales podríamos listar varios como responsabilidad

directa del Gobierno, tales como: ausencia del Estado en muchas zonas del País, ausencia que se

manifiesta con la desprovisión de servicios básicos tales como vivienda, salud, seguridad y

educación. Esta negligencia e inobservancia del Estado a comunidades marginales, incluidas

campesinos, negritudes e indígenas entre otros, fue el detonante para la génesis del conflicto

que ha desatado la violencia por décadas en Colombia y que ha dejado millones de víctimas.

El fortalecimiento de los procesos de REPARACIÓN COLECTIVA, debe ir orientado a

promover y garantizar el goce efectivo de los derechos que han sido vulnerados o limitados

causa o con ocasión del conflicto armado colombiano; además, los procesos de REPARACIÓN

COLECTIVA, fortalecidos por el gobierno Nacional también deben garantizar a las

comunidades víctimas del conflicto, el acceso a la justicia. Más allá de todo lo expuesto, el

gobierno Nacional, para lograr el fortalecimiento de estos procesos, debe actuar mediante
equipos interdisciplinarios buscando mediante la investigación y el juzgamiento, la sanción de

los responsables, estableciendo programas sociales en salud,, vivienda,, educación y

reactivación de la economía, todo con el objeto de restablecer el tejido social altamente

deteriorado y con ello lograr mejoras sustanciales en la convivencia pacífica y el desarrollo

social de las comunidades afectadas por el conflicto armado colombiano.

Así como la negligencia del Estado fue el detonante para el nacimiento del conflicto

armado interno, de igual manera, el fin de dicho conflicto debe representar el momento en que

se gesta el fortalecimiento del programa de Reparación Colectiva, siendo función del Estado

colombiano garantizar que quienes, de una u otra manera, participaron de este conflicto,

participen también en la reparación de las víctimas, pues se hace necesario que haya

reconocimiento de las comunidades víctimas del conflicto y del daño causado por los actores

del conflicto armado interno.

En cuanto al otro tópico a abordar en este ensayo, a saber: “que los planes y programas de

la Reforma Rural Integral tengan, donde haya lugar, un enfoque reparador”, básicamente, el

acuerdo final pretende establecer quienes son los individuos y las comunidades víctimas del

conflicto , cuál es su nivel de afectación debido al conflicto y determinar el carácter reparador,

de todos los mecanismos existentes en el acuerdo final,, es decir, es prioridad la reparación

de las víctimas, además, es claro que allí juegan un papel muy importante el Gobierno y la

Guerrilla de las FARC EP.

Este enfoque reparador de los planes y Programas de la Reforma Rural, no es más que la

garantía de la transformación del sector rural y del modo de vida de las comunidades rurales y

además, la apropiada distribución de la tierra.


En conclusión, podemos decir que sabiendo, como bien lo contempla nuestra Carta Magna,

que uno de los fines del Estado, es el de la Paz, dentro de un marco jurídico, democrático y

participativo que garantice un orden político, económico y social justo, es imperativo que para el

cumplimiento de los acuerdos deben estar inmersos todos los actores del conflicto armado, en el

caso que nos ocupa, a saber, Gobierno, Guerrilla, víctimas y otros que directa o indirectamente,

tengan algún tipo de relación con el conflicto armado en nuestro País. Como bien se ha

enunciado en este escrito, la ausencia del Estado en algunas zonas del País fue entre otras, la

génesis del conflicto armado colombiano, conflicto sostenido en el tiempo, y en el cual

comunidades enteras han sido vulneradas en sus mínimos derechos, sin que el Estado haya

podido garantizarles sus mínimos existenciales, siendo estos de obligatorio cumplimiento en el

Estado Social de Derecho; es por ello que además de la participación de todos los actores,

directos e indirectos del conflicto, haya un “Administrador” de los procesos, para intentar

esta vez, garantizar así el cumplimiento del Acuerdo Final, y que en la medida de lo posible

éstos estén orientados a la reparación, el conocimiento de la verdad y la garantía de la no

repetición, como pilares de mecanismos excepcionales dentro de un proceso de justicia

transicional. Este “Administrador”, no podría ser otro que el Gobierno Nacional.

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