Historia(s) y Estéticas Fotográficas.

Una mirada semiótica sobre trayectos y tensiones en la fotografía artística y

documental argentina y latinoamericana contemporánea.

RESUMEN TÉCNICO

A partir de las indagaciones realizadas por Mario Pezzela sobre la estética

cinematográfica, este Proyecto se propone considerar a la estética de la fotografía,
documental o artística, desde dos puntos de vista diferentes aunque complementarios:
por un lado, se trata de estudiar el conjunto de factores socio-económicos y socio-
técnicos que marcaron el nacimiento y desarrollo de la fotografía, especialmente en
nuestro país y Latinoamérica a partir del siglo XIX y, por el otro, también se trata de
trazar a grandes rasgos los lineamientos de las estéticas visuales que aquellas tradiciones
fotográficas inauguraron o sustentaron, su perduración o clausura en el tiempo y su
proyección en las formas e imágenes fotográficas que integran nuestro horizonte
cultural contemporáneo.

Es un hecho conocido que la invención de la técnica fotográfica marcó un hito en la

cultura de la modernidad que transformaría radicalmente nuestro régimen de la visión
permitiéndonos apreciar lo infinitamente pequeño o lo extremadamente lejano
(Benjamín) o volver a ver, en un marco casi-perceptivo (Schaeffer), un acontecimiento
del pasado (Barthes, Dubois) o simplemente ofreciéndonos a la vista aquello que es
literalmente invisible a los ojos (Muybridge). Y son innumerables los autores que, desde
las anticipadas y premonitorias reflexiones de Walter Benjamin, se han dedicado al
estudio e investigación de las características y consecuencias de este gran proceso
sociocultural (Bourdieu) que ha sido determinado, entre otros factores, también por lo
fotográfico. Inmersos en esta tradición, lo que nos interesa abordar aquí es la indagación
socio-semiótica de la(s) estética(s) de la fotografía argentina y latinoamericana que han
tenido (o tienen) lugar en las distintas prácticas fotográficas o usos sociales de la
fotografía… desde el documentalismo gráfico hasta las artes visuales.

Y aunque en la actualidad ya se habla, y no sin razón, de la post-fotografía (los avances

registrados en la comunicación digital parecen haber dejado atrás para siempre los
problemas derivados del colodión húmedo), la fotografía en su versión tradicional sigue
ocupando un lugar de máxima relevancia en la vida de la sociedad. O bien, dicho en
otros términos, los dilemas y debates político-ideológicos (Tagg) y ético-estéticos
(Batchen) que instaló y alentó la invención de esta técnica de producción y
reproducción de imágenes hace más de ciento cincuenta años siguen habitando nuestras
preocupaciones y discusiones, también teóricas, acerca de lo real (y lo ficcional), lo
comunicable (y lo incomunicable), lo verdadero (y lo falso) y tantas otras dicotomías –y
su posible deconstrucción– que a la larga resultaron categorías conceptuales necesarias,
e históricas, para explicar nuestra experiencia humana… Instancias, todas ellas,
implicadas en la imaginación fotográfica que se disemina en los géneros, los estilos, los
comportamientos de lo fotográfico y en el deseo, anterior a la fotografía misma, de
fotografiar.