Вы находитесь на странице: 1из 10

MILES CHRISTI

COMBATIENDO SIN TREGUA EN TODOS LOS FRENTES PARA QUE CRISTO


REINE. «VIVAT JESU, AMÓRE NOSTRUM, ET MARÍA, SPES NOSTRÆ!»

Página principal ▼

domingo, 20 de enero de 2019

NOVENA EN HONOR A SAN FRANCISCO DE


SALES
Novena publicada por la Imprenta de Juan de la Cuesta en Valladolid, año
1859. El acto de contrición es tradicional.

ADVERTENCIA PARA HACER ESTA NOVENA


Todo lugar y tiempo es a propósito para dar gracias a Dios y presentarle
súplicas; y así siempre y donde quiera se puede hacer esta Novena; pero
el Templo, Casa de Oración, o un sitio retirado donde esté alguna imagen
del Santo, promete con más seguridad el fruto de la devoción. Los días
inmediatos a su Fiesta, que es a veinte y nueve de Enero, parecen el
tiempo más proporcionado, y también será bien empezarla el Martes de la
solemnidad del Espíritu Santo, y acabar la Víspera del Corpus Christi, así
para implorar la unción del Santo Espíritu, que llenó con tanta abundancia
el corazón del Santo, como para pedirle que el Señor nos disponga para
celebrar dignamente la Octava del Santísimo Sacramento, y en ésta
proseguir con la Novena del Corazón de Jesús, cuya devoción reconoce el
origen de su nueva práctica en el devotísimo espíritu de este singular
Prelado, y en su orden de la Visitación. La materia de las Oraciones
particulares de cada día, son las tres máximas principalcs de la doctrina
espiritual de este gran Maestro de la devoción; y los seis medios con que
dispuso en su corazon, las ascensiones divinas para subir a aquella
anticipada bienaventuranza y altísima unión con Dios que logró en esta
vida mortal, para que las almas al mismo tiempo que piden, beban
también su espíritu principal.
  
NOVENA A SAN FRANCISCO DE SALES, OBISPO Y PRÍNCIPE DE
GINEBRA, Y FUNDADOR DE LA ORDEN DE LA VISITACIÓN,
DOCTOR MÍSTICO Y MAESTRO DEL DIVINO AMOR
  
Por la señal ✠ de la Santa Cruz, de nuestros ✠ enemigos, líbranos Señor ✠
Dios nuestro. En el nombre del Padre, y del Hijo ✠, y del Espíritu Santo.
Amén.
  
ACTO DE CONTRICIÓN
Señor Jesucristo, Dios y hombre verdadero, Creador y Redentor mío, de
todo corazón me arrepiento de haberte ofendido, Señor y Dios mío, a
quien amo sobre todo, y propongo firmemente nunca más pecar, evitar
todas las ocasiones de pecado, confesarme y cumplir la penitencia que
me fuere impuesta. En satisfacción de mis pecados te ofrezco tu
sacratísima vida, Pasión y muerte, y todo el precio de tu Sangre
derramada por nosotros, los méritos de Santa María siempre Virgen y de
todos los Santos, junto con todas mis obras y toda mi vida, y confío en tu
bondad y misericordia infinita, que por los méritos de tu preciosa Sangre
me sean remitidos todos mis delitos y me sea concedida toda gracia, para
que restablecida en mí una vida santa, merezca servirte perfectamente
hasta el fin. Tú que, siendo Dios, vives y reinas con el Padre y el Espíritu
Santo bendito por los siglos. Amén.

ORACIÓN AL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS PARA TODOS LOS DÍAS


Corazón amabilísimo de Jesús, que por la abundancia de tu benignísima
misericordia y para manifestación más sensible del inmenso amor con
que miras a los corazones humanos, deseando dilatar el Reino de tu amor
y penetrar a todos de las más vivas llamas de aquel fuego divino que
viniste a encender en el mundo, enviaste a él en estos últimos siglos, en
que lastimosamente se ve resfriada la devoción de muchos, al dulcísimo
San Francisco de Sales, nuevo Vaso de elección, en cuyo pecho
depositaste con tanta largueza los tesoros de tu luz y amor, previniéndolo
con tan copiosas bendiciones de dulzura, para que hecho todo para todos,
mostrase a toda suerte de gentes el camino llano y seguro de la perfecta
virtud cristiana. Concédenos, Divino Corazón, que embriagados con la
dulzura de tu amor, protegidos de los altos méritos de este tu escogido
Siervo, e instruidos con sus celestiales avisos, conozcamos la vanidad de
cuanto el mundo estima para despreciarla; la fealdad del pecado, para
aborrecerla; la preciosidad de tu gracia, para conservarla a toda costa; la
grandeza y verdadera hermosura de tu ser divino, para amaros con todas
las facultades de nuestras almas, y la suavidad apetecible del yugo de tu
divina Ley, para que rindamos gustosos nuestra cerviz a tan dichosa
servidumbre, y abracemos con todo el conato de nuestro corazón la ligera
carga de tus Mandamientos, todos amor, dulzura y verdadera libertad.
Compadecéos, amorosísimo Corazón, de tantas almas, que deslumbradas
con los errados dictámenes del ciego y vano mundo, atraídos de los
venenosos silbos de la antigua serpiente, y presas en los dorados lazos de
los fugitivos placeres de los sentidos, incauamente duermen en una falsa
seguridad con lastimoso peligro de su salvación. Mirad, Corazón
clementísimo, que por ellas padeciste congojas y agonías en el Huerto, y
terribles desamparos en la Cruz, y que su amor os obligó a que quedaras
Sacramentado, haciéndonos compañía hasta el fin del mundo: no se
frustren, Señor, tan preciosos trabajos y tan amorosos excesos. Atended
tambien a los fervorosos esmeros con que os sirvieron y desearon los
desagravios más cumplidos de vuestro sagrado honor los purísimos
corazones de María y José; y por la complacencia que tuviste en los
méritos suyos, olvidad los deméritos nuestros. Mirad juntamente el amor
tan fino con que siempre buscó únicamente tu mayor gloria el seráfico
corazón de San Francisco de Sales: acordáos, Señor, de él y de toda su
mansedumbre y dulzura de caridad, con que llorando las ofensas
vuestras, se deshacía por ganaros almas, y dilalar el Reino sacrosanto de
tu amor: Venga, pues, a nosotros ese tu Reino, y sea arrojado fuera de las
almas el Príncipe de las tinieblas, que las tiraniza, alúmbrelas siempre tu
luz, apodérese de todos los corazones tu amor, anímelos tu gracia, para
que eternamente cantemos tus misericordias en la gloria. Amén.
   
Rezar un Padre nuestro y un Ave María por la conversión de los
pecadores.
  
DÍA PRIMERO - 20 DE ENERO
Glorioso San Francisco de Sales, luz de las almas, que para conducirlas a
Dios su único centro: querías ante todas cosas arraigar en los corazones
la unidad y simplicidad de amor, impidiendo que el alma tuviera otra mira
en todo fuera de Dios, ya que en la vida eterna descansa tan
cumplidamente tu corazón en el supremo bien, que siempre fue el único
Norte de tus ansias: alcánzanos del Corazón de Jesús esta unidad y
pureza de amor, y la gracia especial que deseamos, si ha de conducir a la
mayor gloria del Señor. Amén.
   
Pedir la merced o gracia que se necesite.
   
GOZOS EN HONOR A SAN FRANCISCO DE SALES
  
Pues derramó en ti el Señor
De su amor dulces raudales,
Alcánzanos, San Francisco de Sales,
La dulzura de su amor.
  
Noble, hermoso, docto, Santo
Y predicador famoso
De los herejes espanto,
Doctor y Obispo celoso,
Fundador y Director:
¡Qué pocos a ti habrá iguales!
Alcánzanos, San Francisco de Sales,
La dulzura de su amor.
  
Voto de Virginidad
En las aras de María
Hiciste de tierna edad,
Y en las mismas la alegría
Consiguió tu corazón
Después de angustias mortales.
Alcánzanos, San Francisco de Sales,
La dulzura de su amor.
  
Setenta y dos mil herejes,
Joven aún, has convertido,
Ginebra gime el que dejes
A su Beza convencido;
Por ti la cruz del Señor
Logra triunfos inmortales.
Alcánzanos, San Francisco de Sales,
La dulzura de su amor.
  
Nunca Francia más dichosa
Fue, ni Saboya se vio
Con devoción tan copiosa
Que el tiempo que la ilustró
Tu luz, cual hermoso Sol
Que desterraba sus males.
Alcánzanos, San Francisco de Sales,
La dulzura de su amor.
  
Juan con clamores divinos,
En el desierto hizo llanos
Para el Señor los caminos;
Tú en los pueblos mas profanos,
Los caminos del Señor,
Haces todos usuales.
Alcánzanos, San Francisco de Sales,
La dulzura de su amor.
  
Del amor de Dios sois sal,
Tu alma paloma sin hiel,
Tu boca suave panal,
Tus palabras dulce miel,
Tu espíritu luz y ardor,
Y tus consejos mil sales.
Alcánzanos, San Francisco de Sales,
La dulzura de su amor.
   
Con tan dulce suavidad
Al pecador recibías,
Que deshecho en caridad,
Por él lágrimas vertías,
Y él viendo tu compasión,
Reconocía sus males.
Alcánzanos, San Francisco de Sales,
La dulzura de su amor.
   
Robador de corazones
Te llamaron, no me espanto,
Pues tus dulces expresiones
Eran tan suave encanto,
Que el más obstinado error
Se rendía a flechas tales.
Alcánzanos, San Francisco de Sales,
La dulzura de su amor.
  
Tus escritos son testigos
De que eras Etna amoroso,
Que exhalabas incentivos
Ardores del fervoroso
Fuego, Que en tu corazón
Ardió en llamas celestiales.
Alcánzanos, San Francisco de Sales,
La dulzura de su amor.
   
La Visitación mantiene,
De tu espíritu heredados,
Los fervores con que tiene
Por el orbe dilatados
Del Divino Corazón,
Los cultos más especiales.
Alcánzanos, San Francisco de Sales,
La dulzura de su amor.
   
Si participan blancura
Las liebres de andar por nieve,
¿Qué santa, decías, qué pura
Se hará el alma que a Dios llegue?
La frecuente Comunión
Das por remedio de males.
Alcánzanos, San Francisco de Sales,
La dulzura de su amor.
  
Aunque yo explicar quisiera
El amor tan señalado,
La devoción verdadera
Con que tú amaste al sagrado
Corazón del Salvador,
No hallará voces iguales.
Alcánzanos, San Francisco de Sales,
La dulzura de su amor.
   
En la gloria ya triunfante
Entre serafines vives,
Donde, de perfecto amante,
Laurel inmortal recibes,
Purs tanto amaste al Señor,
Y allá con Él tanto vales.
Alcánzanos, San Francisco de Sales,
La dulzura de su amor.
  
Pues derramó en ti el Señor
De su amor dulces raudales,
Alcánzanos, San Francisco de Sales,
La dulzura de su amor.

Antífona: Oh Sacerdote y Pontífice Francisco, tú que obras virtud, buen


pastor de tu pueblo, ruega por nosotros al Señor. 
℣. Lo amó el Señor y lo adornó.
℟. Lo revistió con estola gloriosa.
  
ORACIÓN
Oh Dios, que quisiste que el bienaventurado Francisco, tu confesor y
pontífice, se hiciese todo a todos por la salvación de las almas,
concédenos benigno que, llenos de la dulzura de tu inmensa caridad, por
los consejos y merecimientos de este gran Santo, consigamos la alegría
eterna. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.
  
En el nombre del Padre, y del Hijo ✠, y del Espíritu Santo. Amén.

DÍA SEGUNDO - 21 DE ENERO


Por la señal...
Acto de Contrición, Oración al Sagrado Corazón de Jesús, un Padre
nuestro y Ave María
   
Glorioso San Francisco de Sales, Maestro enviado del cielo para suavizar
el camino de la perfección cristiana; pues para que las almas con alas de
paloma, como deseaba David, volaran a descansar unidas con el sumo
bien, las imponías en la santa libertad de espíritu, deshaciéndolas de
todas las cosas, personas, empleos y lugares, por seguir únicamente la
voluntad de Dios conocida: alcánzanos del Corazón de Jesús esta santa
indiferencia que trae la verdadera paz al alma, y la gracia particular que
deseamos. Amén.
  
Pedir la merced o gracia que se necesite. Los Gozos y la Oración se
rezarán todos los días.
   
DÍA TERCERO - 22 DE ENERO
Por la señal...
Acto de Contrición, Oración al Sagrado Corazón de Jesús, un Padre
nuestro y Ave María
   
Dulcísimo San Francisco de Sales, que mirabas a todos los prójimos
dentro del costado del Salvador para deshacerte (como tú mismo dijiste)
en dulzura de caridad con ellos, y explicaste el incendio de tu corazón,
diciendo: «Me parece que no hay en el mundo quien ame a los pecadores
tiernamente sino Jesucristo y yo»: alcánzanos del mismo Corazón de
Jesús, de donde tú la participaste, esta dulzura de caridad con el prójimo,
para que amándole como a nosotros mismos, seamos solamente un
corazón y un alma donde perfectamente reine Dios por amor y gracia, y
añadid si conviene, la gracia particular que deseamos. Amén.
  
Pedir la merced o gracia que se necesite. Los Gozos y la Oración se
rezarán todos los días.
  
DÍA CUARTO - 23 DE ENERO
Por la señal...
Acto de Contrición, Oración al Sagrado Corazón de Jesús, un Padre
nuestro y Ave María
   
Seráfico San Francisco de Sales, Varón de deseos, que como encendidas
saetas, enviabas continuamente al cielo hasta penetrar el corazón del
Verbo, suspirando por su amor divino, y exhortando a todos a desear esta
preciosa joya, decías: «Que solo el amor de Dios goza la excelencia de
comenzarse a poseer luego que se empieza a desear»; alcánzanos del
Corazón de Jesús una centella de sagrado fuego, con que inflamado el
nuestro, se exhale en vivos deseos de su divino amor, y también la gracia
que deseamos si conviene para su gloria. Amén.
  
Pedir la merced o gracia que se necesite. Los Gozos y la Oración se
rezarán todos los días.
  
DÍA QUINTO - 24 DE ENERO
Por la señal...
Acto de Contrición, Oración al Sagrado Corazón de Jesús, un Padre
nuestro y Ave María
   
Glorioso San Francisco de Sales, Maestro enviado del cielo para suavizar
el camino de la perfección cristiana; pues para que las almas con alas de
paloma, como deseaba David, volaran á descansar unidas con el sumo
bien, las imponías en la santa libertad de espíritu, deshaciéndolas de
todas las cosas, personas, empleos y lugares, por seguir únicamente la
voluntad de Dios conocida: alcánzanos del Corazón de Jesús esta santa
indiferencia que trae la verdadera paz al alma, y la gracia particular que
deseamos. Amén.
  
Pedir la merced o gracia que se necesite. Los Gozos y la Oración se
rezarán todos los días.
  
DÍA SEXTO - 25 DE ENERO
Por la señal...
Acto de Contrición, Oración al Sagrado Corazón de Jesús, un Padre
nuestro y Ave María
   
Extático San Francisco de Sales, que para lograr el fin porque únicamente
anhelaba tu corazón, que era aficionarte a Dios, hasta unirte
estrechamente con su Majestad, vivías continuamente en oración,
sabiendo que la ocupación interior y comercio con Dios es el medio más
eficaz de aficionarse a un objeto tan atractivo y amable, que no puede ser
conocido sin ser amado, ni tratado sin que robe poderosamente la
voluntad: alcánzanos del corazón de Jesús el don de oración, para que
gustando y viendo que suave es Dios, se vean nuestros corazones
venturosamente prendados de su divina beldad, y si conviene para este fin
la gracia que pretendemos. Amén.
  
Pedir la merced o gracia que se necesite. Los Gozos y la Oración se
rezarán todos los días.
  
DÍA SÉPTIMO - 26 DE ENERO
Por la señal...
Acto de Contrición, Oración al Sagrado Corazón de Jesús, un Padre
nuestro y Ave María
   
Rectísimo San Francisco de Sales, que deseando justamente dar a Dios lo
que es de Dios, querías que todas las acciones, aun las más menudas,
desde por la mañana hasta la noche sirvan de materia al amor sagrado,
ordenando tu intención en general, y en particular a la única gloria del
Señor: alcánzanos del corazón de Jesús, que sea su amor el primer móvil
de todas nuestras acciones, y el único término de todas nuestras ansias y
solicitudes, y la gracia que con esta misma intención de sola su gloria
deseamos. Amén.
  
Pedir la merced o gracia que se necesite. Los Gozos y la Oración se
rezarán todos los días.
  
DÍA OCTAVO - 27 DE ENERO
Por la señal...
Acto de Contrición, Oración al Sagrado Corazón de Jesús, un Padre
nuestro y Ave María
   
Pacientísimo San Francisco de Sales, que para unirte con el Divino querer,
plantaste en tu corazón una grande sumisión a todas las disposiciones de
Dios, particularmente en los sufrimientos y tribulaciones, que son las
pruebas más ordinarias del amor, mirando las penas para amarlas en su
fuente, que es la divina Providencia: alcánzanos del Corazón de Jesús, luz
para conocer este tesoro de la perfecta resignación, por cuyo medio se
convierte el alma en un cielo sereno, donde resplandece como sol el
reinante amor celestial; y para el mismo fin consíguenos la gracia que
deseamos. Amén.
  
Pedir la merced o gracia que se necesite. Los Gozos y la Oración se
rezarán todos los días.
  
DÍA NOVENO - 28 DE ENERO
Por la señal...
Acto de Contrición, Oración al Sagrado Corazón de Jesús, un Padre
nuestro y Ave María.
    
Prudentísimo San Francisco de Sales, que de todas las criaturas hacías
escala por donde subías a tu amado Dios, tomando solamente de ellas el
resplandor de la bondad divina, que de varias maneras participan todas,
levantando la atención a la primera causa, sin fijarla en las segundas,
conservando así imperturbable la divina presencia, que despertaba en tu
corazón un amor continuo del Sumo bien: alcánzanos del Corazón de
Jesús, la luz que te alumbraba, para que teniendo siempre presente a
Dios, como le tenías, le amemos como le amabas, y por medio para este
fin el favor que deseamos. Amén.
  
Pedir la merced o gracia que se necesite. Los Gozos y la Oración se
rezarán todos los días.

Jorge Rondón Santos en 8:45

Compartir

No hay comentarios:

Publicar un comentario
Preferiblemente, los comentarios (y sus
respuestas) deben guardar relación al contenido
del artículo. De otro modo, su publicación
dependerá de la pertinencia del contenido. La
blasfemia está prohibida.

‹ Página principal ›
Ver versión web

PRONTUARIO
Jorge Rondón Santos
Exilio
Soldado raso dispuesto a la guerra por el Reino de Jesús y María
mileschristi1958@yahoo.es Twitter@Jorge_Rondon16
Ver todo mi perfil

Con la tecnología de Blogger.

Вам также может понравиться