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MARCO TEORICO

La computadora hoy en día, con sus características de multimedia y la posibilidad de


conectarse a redes a distancia, ricas en información de todo tipo, no es sólo un
mecanismo para manejo de información; es, sobretodo, un mecanismo para comunicar e
intercambiar. La enorme accesibilidad a información diversificada favorece la apertura
de los campos disciplinarios. Los recursos de las NTIC ponen el acento en la necesidad
de establecer vínculos entre las disciplinas escolares, los diversos aprendizajes escolares
y la realidad extraescolar. Sin embargo, para que la información que circula en las
computadoras, a través de las redes, pueda enriquecerse y transformarse en saber, se
debe acompañar de un cambio en el papel del maestro: de ser proveedor de saber en el
aula, a ser mediador y facilitador del aprendizaje dentro de un contexto
interdisciplinario.

Muchos de los desarrollos recientes que integran las NTIC a la enseñanza de las
ciencias están basados en modelos de aprendizaje colaborativo, que hacen uso intensivo
del potencial comunicativo e interactivo de las nuevas tecnologías, aprovechando, al
mismo tiempo, el acceso a fuentes universales de información y conocimiento
científico.

Esta potencialidad de usos, sin embargo, requiere de una revisión a fondo de los marcos
teóricos y empíricos que los fundamentan. En lo que sigue, trataremos de dar una visión
panorámica de las tendencias que predominan en la investigación y el desarrollo
educativos, y presentaremos un caso estudiado. (Waldegg Casanova, 2002)

Las computadoras, como otras tecnologías, han sido desarrolladas y más ampliamente
usadas en los países desarrollados. Los países en vías de desarrollo, y en especial los
que no hablan inglés, no las han utilizado tanto, ni siquiera en los niveles superiores de
su educación.

En México, sin embargo, tal situación ha cambiado significativamente en la última


década. En un principio usada preponderantemente dentro de la administración de la
educación superior, a computadora ha empezado a ser motivo de reflexión en el área de
la educación infantil en donde ya se habla de que "es urgente iniciar trabajos de
introducción de computadoras en la educación primaria y si fuera posible en preescolar,
simultáneamente debe hacerse una intensa labor de sensibilización entre todos los
maestros del sistema educativo nacional" (Vidal, Mauro, & Borrini, 2001)
El uso del computador y de software educativo ya es parte del quehacer de muchos
establecimientos educacionales y la implementación del proyecto de red ha incorporado
este tipo de tecnología en la mayoría de los establecimientos de educación básica.

El desarrollo tecnológico en su creciente y acelerado procesos ha repercutido en el


mundo del trabajo y de la educación introduciendo interesantes modificaciones en los
ámbitos sociales, culturales, educativos. La incorporación de la tecnología informática,
multimedia e Internet en los establecimientos educacionales es una realidad y a la vez
una necesidad, puesto que ayuda a mejorar la calidad de la educación ya que, en
particular permiten acceso rápido a información de dominio público que hoy en día
abarca todos los campos.

El desarrollo e implementación de los laboratorios de computo se debe al trabaja


mancomunado de la comunidad educativa así surge la inquietud de implementar los
laboratorios de computo con la colaboración de las autoridades del plantel.

De esta forma es importante que quien dirija y sea responsable de este laboratorio sea
un profesional capacitado que cumpla el rol de administrador de laboratorios de
cómputo.

Este administrador tiene un papel importante ya que es él quien prepara, mantiene y


optimiza el buen funcionamiento de esta infraestructura para desarrollar de mejor
manera el proceso educativo y las acciones derivadas de él.(Velasco & Mariela, 2012)

Es cierto que la computadora ofrece a los alumnos una cantidad sin fin de información,
pero ¿de qué les sirve si no pueden dar sentido a esa información, si no tienen los
antecedentes y el criterio para poder interpretar y aplicar la información que reciben?
No es suficiente saber manejar las computadoras y la informática, sino que es crucial
también saber el significado y el valor de la información y cómo usarla para los fines
apropiados.

Hoy muchos jóvenes conocen cómo usar la tecnología, buscar información en Internet,
programar y todavía más. Si les preguntamos cómo llegar a una página en Internet nos
llevarán de inmediato, pero no les pidamos que nos expliquen qué han encontrado
porque muy a menudo les falta la cultura básica necesaria para aplicar adecuadamente
lo que hallaron.
La educación pretende desarrollar todas las potencialidades del ser humano. Se propone
ayudar a la persona a ampliar sus perspectivas, a buscar la verdad, a comprender las
grandes ideas de nuestro mundo y nuestra cultura, a ayudar a generar nuevas y
originales ideas, a descubrir el significado de las cosas, a ejercer el buen juicio, a
alcanzar la madurez emocional y a comenzar, en fin, la búsqueda de la sabiduría. La
pregunta clave es cómo la tecnología de la computación puede ayudar a los alumnos a
desarrollar su creatividad, su discernimiento y el buen juicio. (Chadwick, 2001)

Desde hace aproximadamente un cuarto de siglo se inició en el terreno educativo la


incorporación de las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC),
primeramente en los países más desarrollados y poco a poco en los de menor desarrollo;
este proceso de incorporación a las instituciones educativas se ha acelerado en los
últimos años trayendo como consecuencia la necesidad del desarrollo de competencias
en los docentes en el campo tecno educativo.

La incorporación de las TIC en los programas educativos ha cobrado especial


relevancia, bajo el supuesto de que estas herramientas pueden promover una mejor
calidad educativa y facilitar el aprendizaje; además de contribuir a reducir la brecha
digital.

Sin embargo, existe un debate en torno a poder identificar cuáles son los impactos que
las mismas pueden generar efectivamente en la educación para comprender dicho
impacto, se ha planteado con más fuerza la necesidad de estudiar de manera empírica la
manera en que profesores y alumnos usan las TIC en el desarrollo real de las prácticas
que se llevan a cabo en el aula. (Velasco, H., & Mariela, A. 2012).

La influencia del mercado en la distribución del acceso a las TIC se puede observar a
través de la relación entre los ingresos del hogar y la tenencia de computadores y de
conexiones a internet en los hogares. Como se desprende de la lectura de la última
columna de los cuadros 1 y 2, los datos más recientes de las encuestas de hogares en los
países latinoamericanos que disponen de información sobre el tema arrojan diferencias
sustanciales entre países en cuanto a los porcentajes de hogares que poseen computador
o que se conectan a Internet en el hogar. (Kaztman, 2010)

Una de las características distintivas de la realidad contemporánea son las fuertes


diferencias en el grado de penetración de las nuevas tecnologías de información y
comunicación entre generaciones. De hecho, son numerosos los autores que sostienen la
existencia en los países de América Latina de una asociación positiva entre edad y la
amplitud de la brecha digital por clase social. Lo que se afirma es que, pese a que en la
región la conectividad tiene aún un alcance limitado y que su penetración ocurre de
manera segmentada, las nuevas generaciones se encuentran más familiarizadas con el
lenguaje digital que las anteriores.(Kaztman, 2010)

Usar las TIC para mejorar la enseñanza —y el aprendizaje— de las asignaturas significa
aprovechar el potencial educativo de los recursos digitales para apoyar las necesidades
de la enseñanza de cada disciplina. Cada materia tiene requerimientos pedagógicos
específicos para poder ser enseñada con efectividad y, eventualmente, las TIC podrían
contribuir a apoyar dichos aprendizajes.

Una pedagogía efectiva es siempre una combinación de estrategias didácticas:


instrucción a la clase completa, práctica guiada, trabajo grupal y reflexión individual,
entre otras. Los diferentes tipos de dispositivos y recursos tecnológicos ofrecen
potencialidades educativas para mejorar estos diferentes momentos de la clase.

Por ejemplo, con programas y contenidos adecuados, los proyectores y pizarras digitales
permiten enriquecer el trabajo del docente con la clase completa; el uso de portátiles en
el aula puede apoyar actividades grupales, y los computadores en el laboratorio
permiten el trabajo individual guiado por el profesor.

Dadas las dificultades para encontrar efectos en el aprendizaje de asignaturas en pruebas


de logro estandarizadas, otra corriente de investigación ha surgido. Esta plantea que
dichos problemas se explican porque la exposición a las TIC afecta el aprendizaje de los
estudiantes en formas distintas a las que reflejan ese tipo de pruebas, pero que son
igualmente esenciales para el desarrollo de un aprendizaje efectivo en la sociedad del
conocimiento.

Estos “nuevos aprendizajes” se refieren fundamentalmente al desarrollo de


competencias asociadas a la necesidad de lidiar con la enorme cantidad de información
que ofrecen las TIC, tales como habilidades de manejo, organización y evaluación de
información, así como participar en la sociedad actual donde la creación de
conocimiento se vuelve algo central.(Sunkel, Trucco, CEPAL, & Europea, 2012)

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