ENSAYO SOBRE LA CORRIENTE NATURALISTA EN LA EDUCACION.

Parte este trabajo reflexivo como lectura del libro Principales Corrientes y
Tendencias del inicio del siglo XXI de la pedagogía y la didáctica (200)), de los
doctores en educación cubana: Justo Chávez, Gustavo Deler y Amparo Suarez.
Fundamentados los actores en el análisis de los términos Pedagogía y
Didácticas, y cómo ha evolucionado los procesos educativos en los últimos 300
años en Latinoamérica. En su análisis en la corriente naturalista sobre la
pedagogía, presentan como el positivismo, la pedagogía pragmática, la
tecnológica y sus derivaciones (neopositivismo, estructuralismo, ciencismo) y
las didácticas implementadas por los educadores como el conductismo, el
cognitivismo y activa, han repercutido en las sociedades sobre la calidad de la
educación y las consecuencias positivas y/o negativas en el desarrollo de
convivencia de los pueblos.

La corriente naturalista se entiende como: El hombre tiene como madre a la

naturaleza; el ambiente y la herencia (programación genética) son
determinantes en la formación de la conciencia humana; El hombre crea la
cultura y la sociedad en un sentido histórico, pero éstas en última instancia,
constituyen proyecciones de la propia naturaleza.

Entre otras definiciones tenemos: Considera que el hombre es un ser pasivo,

que recibe inductivamente el conocimiento de la realidad, y su conciencia va
creciendo por agregación, pero también, sin dejar el naturalismo, hay una
tendencia que considera al hombre un ser activo en la construcción del
conocimiento y mediante la educación el hombre se apodera de la herencia
cultural a partir de la propia cultura y de la sociedad. Desde esta perspectivas
los autores analizan como se desarrollo en educacion las diferentes
tendencias. Analicemos una de ellas el positivismo.

En el positivismo la educación no depende de la colaboración intencional entre

la voluntad educativa del maestro y la voluntad educable del alumno, sino que
está determinada por las matrices de la educación, propias de la constitución
individual y del ambiente social. Partiendo de esta lógica se forman individuos
individualista, desvinculando al ser de todo lo que involucra lo social, en
donde el fin es que el hombre cubra sus necesidades básicas sin medir las
consecuencias sobre los otros y el ambiente natural.

El positivismo pedagógico al negar la libertad y la espiritualidad de la

educación se reduce a un mecanismo metodológico, en el que no hay sitio
para la libertad de enseñar por parte del educador, ni para la libertad de
aprender por parte del alumno

PEDAGOGIA NATURALISTA: el naturalismo pedagogico es un principio

poderoso que sirvió para fundar la escuela nueva o activa, junto con la
libertad del niño, el auto actividad, el laicismo y la coeducación entre otros,
abrió nuevos cauces con base en los desarrollos de la biología y la psicología a
inicios del siglo XX.

La educación naturalista tiene objetivos que van más allá de una imposición,
este pretende el desarrollo personal, el desenvolvimiento de todas las
capacidades del niño para conseguir una mayor perfección. El naturalismo en
la educación es formar al niño como un ser social pensando en el bienestar de
los demás, como por ejemplo pensar en la educación de los demás utilizando
métodos útiles creados por el educador.

Entre sus principales ponentes tenemos a Juan Jacobo Rousseau, que resalto
que en la naturaleza del hombre su desarrollo es por su continuidad
progresiva y no por transformaciones, la relación que se presenta entre el
sujeto y el ambiente natural es una relación activa. Entre los postulados de
Rousseau, parte de que el niño tiene naturaleza propia; establece el
paidocentrismo; los recursos educativos deben adaptarse a las etapas del
crecimiento del niño; la educación debe ser gradual; dar al niño lo que
necesita; la educación dura toda la vida; en igual forma entre los principios
didácticos tenemos: Enseñar por interés natural de los niño y no por el
esfuerzo artificial; patrocina la autoeducación; y la enseñanza debe ser
intuitiva.

Otro aporte es el Dewey que señala los factores educativos en el desarrollo

natural como un fin fija la atención en los órganos corporales; el fin del
desarrollo natural se traduce en el respeto a la movilidad física y el fin general
se traduce el de entender las diferencias individuales existentes entre los
niños.

Estas dos corrientes y sus derivaciones aun no dan respuestas al ser humano
que la sociedad requiere, revisando las otras tendencias pedagógicas y
didácticas en combinación se puede equilibrar porque entre todas ellas
pueden aportar la pedagogía y la didáctica para una educación de calidad y
del buen vivir.

En el contexto venezolano, se camina estas tendencias con la social en este

caso este se representa el humanismo, humanismo se contrapone al
naturalismo. El naturalismo es la aceptación, como bueno y valido, de la
naturaleza del ser humano. Mientras el humanismo entiende que la acción del
hombre, por su carácter intelectual y racional, es superior a la acción de la
naturaleza, a la cual aquella deberá, a veces, rectificar y mejorar.

Y, paralelamente, el naturalismo ve también la naturaleza humana como

buena y perfecta, de modo que su desarrollo espontáneo -sin la intervención
humana- lleva ya al hombre a lo que puede y debe ser su plenitud humana. El
humanismo, en cambio, considera que la naturaleza humana adolece de fallos
internos, de modo que el buen desarrollo humano sólo se consigue mediante
una ayuda externa estimulativa, orientadora y correctiva (dada por la
educación). El humanismo pedagógico, en cambio, afirma que con lo primero
no se superan los defectos humanos ni se forma el carácter ético del hombre,
y, con lo segundo, el hombre no llega a aquel nivel de conocimientos
recomendado por el humanismo.

Pero, además, hay el naturalismo "científico", el cual, ateniéndose al

positivismo y al materialismo, desconoce los ideales humanos superiores,
prescinde de los valores humanos más elevados y reduce la ética a la práctica
de la convivencia y la democracia pacíficas. La Pedagogía Humanista, por su
parte, no se contenta con este programa de "ética mínima", sino que abre
también al hombre la perspectiva de una ética superior y de ideales humanos
elevados.

Dadas las citas anteriores en la Republica Bolivariana de Venezuela, a través

de los programas nacionales de formación del magisterio, se dan los pasos
para alcanzar un modelo del proceso educativo, basada en la experiencia de
nuestros propios docentes, para formar un nuevo ser, que se apropie de una
concepción humana, en donde no predomine la explotación del hombre por el
hombre, deslatrar la cultura de opresores contra oprimidos, ir en busca de un
ser cooperativo, solidario, consciente del rol que le corresponde en un mundo
convulsionado, destructor del medio ambiente, esclavo de la tecnología
adictiva, desligada de su entorno.