Tradición Perenne

71
Editorial Redacción
La Nube del No-Saber (II) Anónimo
El Libro del Patio Amarillo Anónimo
Jesús en el Corán (II) José María Casciaro
El Sermón del Monte según la Vedanta (XXIII) Swami Prabhavananda
Proverbios del Infierno William Blake

Editorial
Esto de los anónimos… ¿Quién habrá pensado, o meditado, reflexionado, concretado, quizás precisado los
sentimientos que le ha ocasionado el ver la Faz de Dios, el Despertar? Se requiere un esfuerzo de
introspección, de abandono, dejadez ante lo mundano… Incluso es fácil que el sujeto en cuestión se
desapegue, aumente la distancia con el resto de sus semejantes, de las cosas… Parece ser que hay un factor
común entre varios de estos sabios: el desapego les lleva a distanciarse y, una vez distanciados, se les acerca
alguien a preguntarles por qué están allí. Cuando se lo explican estos lo ven sencillo, simple, verdadero,
coherente. Una primera reacción será quedarse a oír más, pero el mundo les espera. Entonces se lo comentan a
otros, les dicen a quién visitaron. Y unos pocos se van aglomerando cerca de ese individuo extraño, casi
huraño, displicente, seco. Y alguien, con el tiempo, como pasó con Jesús, en Palestina, hace 2000 años, cree
que puede ser buena idea escribir algunas de las frases, los dichos, parábolas, fábulas, poemas… Aquí tenemos
dos bien distintos, uno Occidental, basado en la Tradición cristiana, y otro el oriental, basado en el taoísmo,
una Tradición china. Uno más místico, otro más operático. Uno más contemplativo, otro más alquímico.
Jesús en el Corán resulta interesante. Sorprende cómo este tipo de ideas, hechos, enseñanzas llegaron a
Mahoma. Es de suponer que había una tradición cristiana cerca de su ámbito de vida, quizás algún familiar…
Es fantástico releer el Sermón del Monte desde una óptica vedantina. Maravilloso. Y con qué diferencia de
punto de vista se acercan los orientales a una tradición que no conocen y que les resulta tan “extraña”, a cómo
se acercan los occidentales, intentado, muchas veces, que las cosas que descubren cuadren en su esquema
preestablecido.
William Blake es genial. Sus pinturas, sus poemas… Conducen. Recuerdan, salvando las distancias espaciales
y temporales, a Louis Cattiaux. Otro golpe de sabor que deja la boca, el alma, casi entumecida.

Una vez que todos los Bodhisattva allí presentes hubieron terminado de hablar, se dirigieron hacia
Manjusri y le dijeron: «Manjussri, ¿cómo explicarías tú, para terminar, la entrada al Dharma de la no-
dualidad?»
Manjusri respondió: «¡Oh, Virtuosos! Todos habéis hablado bien. Sin embargo, creo que todo lo que
habéis dicho implica aún dualidad. Personalmente pienso que no decir nada, no hablar, no declarar
nada, no conocer nada, no plantear ninguna pregunta ni formular ninguna respuesta, no pronunciar ni
enseñar nada, es entrar en el Dharma de la no-dualidad.»
El Sutra del Nombre Puro (Vimalakirti Nirdesa)

Aunque esta enseñanza está presentada en los sutras, la capacidad y las acciones de los hombres hoy
en día no son las mismas, ni tampoco son las condiciones de su aceptación y comprensión. Se diría, en
los días cuando el Tathagata estaba en el mundo, las personas tenían una habilidad superior y el
Predicador predicaba con su voz perfecta, a diferentes tipos de personas que todas igualmente
entendían; por lo tanto no había necesidad para esta clase de discurso. Pero después que el Tathagata
se murió, había algunos que eran capaces por su propio poder de escuchar extensivamente a otros y
alcanzar el entendimiento; había otros que por su propio poder podían escuchar un poco y sin
embargo entender mucho; había otros que, sin ningún poder mental de ellos mismos, dependían de
los discursos extensivos de otros para obtener el entendimiento; y naturalmente había otros que
miraban la verbosidad de los discursos extensos como algo dificultoso, y que buscaban lo que se
podía comprender, lo escueto y lo que todavía contenía mucho significado, y entonces eran capaces
de entenderlo. Por lo tanto, este discurso está diseñado a abarcar, en una forma general, el
significado ilimitado de la enseñanza vasta y profunda del Tathagata. Este discurso, por lo tanto,
debe ser presentado.
El Despertar de la Fe en el Mahayana (Mahayana-Sraddhotpada Shastra), Asvagosha

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La Nube del No-Saber

Uno de esos textos que más se mencionan en las conversaciones sobre
tradiciones espirituales, misticismo, Occidente. De fuente anónima, y datado en
el siglo XIV, eso no le quita ni una pizca de su sabor. Apartados 3 y 4.

3
Cómo se ha de hacer la Por tanto, está atento al tiempo y a
la manera de emplearlo. Nada hay
contemplación; de su excelencia
más precioso. Esto es evidente si te
sobre las demás actividades
das cuenta de que en un breve
Haz todo lo momento se puede ganar o perder el
que esté en He aquí lo que has de hacer. Eleva cielo. Dios, dueño del tiempo, nunca
tu mano tu corazón al Señor; con un suave
para movimiento de amor, deseándole por da el futuro. Sólo da el presente,
olvidar
sí mismo y no por sus dones. Centra momento a momento, pues esta es la
todo lo
demás, tu atención y deseo en él y deja que ley del orden creado. Y Dios no se
procurand sea esta la única preocupación de tu contradice a sí mismo en su creación.
o que tus
pensamien mente y tu corazón. Haz todo lo que El tiempo es para el hombre, no el
tos y esté en tu mano para olvidar todo lo hombre para el tiempo. Dios, el
deseos se demás, procurando que tus Señor de la naturaleza, nunca
vean libres
de todo pensamientos y deseos se vean anticipará las decisiones del hombre
afecto a las libres de todo afecto a las criaturas que se suceden una tras otra en el
criaturas del Señor o a sus asuntos tanto en tiempo. El hombre no tendrá excusa
del Señor o
a sus general como en particular. Quizá posible en el juicio final diciendo a
asuntos pueda parecer una actitud Dios: «Me abrumaste con el futuro
tanto en
irresponsable, pero, créeme, déjate cuando yo sólo era capaz de vivir en
general
como en guiar; no les prestes atención. el presente».
particular.
Quizá
pueda Lo que estoy describiendo es la Veo que ahora estás desanimado y
parecer obra contemplativa del espíritu. Es te dices a ti mismo: «¿Qué he de
una actitud la que más agrada a Dios. Pues hacer? Si todo lo que dice es
irresponsa
ble, pero, cuando pones tu amor en él y te verdad, ¿cómo justificaré mi pecado?
créeme, olvidas de todo lo demás, los santos Tengo 24 años y hasta este
déjate
y los ángeles se regocijan y se momento apenas si me he dado
guiar; no
les prestes apresuran a asistirte en todos los cuenta del tiempo. Y lo que es peor,
atención. sentidos, aunque los demonios no podría reparar el pasado aunque
rabien y conspiren sin cesar para quisiera, pues según lo que me acaba
perderte. Los hombres, tus de enseñar, esa tarea es imposible
semejantes, se enriquecen de modo por naturaleza, incluso con la ayuda
maravilloso por esta actividad tuya, de la gracia ordinaria. Sé muy bien,
aunque no sepas bien cómo. Las además, que en el futuro
mismas almas del purgatorio se probablemente no estaré más atento
benefician, pues sus sufrimientos se al momento presente de lo que lo he
ven aliviados por los efectos de esta estado en el pasado. Estoy
actividad. Y por supuesto, tu propio completamente desanimado.
espíritu queda purificado y Ayúdame por el amor de Jesús».
fortalecido por esta actividad
contemplativa más que por todas las Bien has dicho «por el amor de
demás juntas. En compensación, Jesús. Pues sólo en su amor
cuando la gracia de Dios llegue a encontrarás ayuda. En el amor se
entusiasmarte, se convierte en la comparten todas las cosas, y si amas
actividad más liviana y una de las que a Jesús, todo lo suyo es tuyo. Como
se hacen con más agrado. Sin su Dios, es el creador y dispensador
gracia, en cambio, es muy difícil y, del tiempo; como hombre, aprovechó
casi diría yo, fuera de tu alcance. el tiempo de una manera consciente;
como Dios y hombre es el justo juez
Persevera, pues, hasta que sientas de los hombres y de su uso del
gozo en ella. Es natural que al tiempo. Únete, pues, a Jesús, en fe
comienzo no sientas más que una y en amor de manera que
especie de oscuridad sobre tu mente perteneciéndole puedas compartir
o, si se quiere, una nube del no-saber todo lo que tiene y entrar en la
Te parecerá que no conoces ni amistad de los que le aman. Esta es
sientes nada a excepción de un puro la comunión de los santos y estos
impulso hacia Dios en las serán tus amigos: nuestra Señora,
profundidades de tu ser. Hagas lo santa María, que estuvo llena de
que hagas, esta oscuridad y esta gracia en todo momento; los ángeles,
nube se interpondrán entre ti y tu que son incapaces de perder tiempo,
Dios. Te sentirás frustrado, ya que y todos los santos del cielo y de la
tu mente será incapaz de captarlo y tierra, que por la gracia de Jesús
tu corazón no disfrutará las delicias emplean todo su tiempo en amar.
de su amor. Fíjate bien, aquí está tu fuerza.
Comprende lo que digo y anímate.
Pero aprende a permanecer en esa Pero recuerda, te prevengo de una
oscuridad. Vuelve a ella tantas veces cosa por encima de todo. Nadie
como puedas, dejando que tu puede exigir la verdadera amistad
espíritu grite en aquel a quien amas. con Jesús, su madre, los ángeles y
Pues si en esta vida esperas sentir y los santos, a menos que haga todo lo
ver a Dios tal como es, ha de ser que está en su mano con la gracia de
dentro de esta oscuridad y de esta Dios para aprovechar el tiempo. Ha
nube. Pero si te esfuerzas en fijar tu de poner de su parte, por pequeña
amor en él olvidando todo lo demás - que sea, para fortalecer la amistad,
y en esto consiste la obra de de la misma manera que esta le
contemplación que te insto a que fortalece a él.
emprendas-, tengo la confianza de
que Dios en su bondad te dará una No debes, pues, descuidar esta
experiencia profunda de sí mismo. obra de contemplación. Procura
también apreciar sus maravillosos
efectos en tu propio espíritu.
4 Cuando es genuina, es un simple y
De la simplicidad de
contemplación; que no se ha de repente hacia Dios como la chispa Nadie
del fuego. Es asombroso ver puede
adquirir por el conocimiento o la
imaginación
Acabo de describir un poco de lo
que supone la actividad
contemplativa. Ahora
estudiarla con más detenimiento, tal
como yo la entiendo; a fin de que
puedas proceder en ella
seguridad y sin errores.
Esta actividad no lleva tiempo aun
cuando algunas personas crean lo
contrario. En realidad es la más
breve que puedes imaginar; tan breve
como un átomo, que a decir de los
filósofos es la división más pequeña
del tiempo. El átomo es un momento
tan breve e integral que la mente
apenas si puede concebirlo. No
obstante, es de suma importancia,
pues de esta medida mínima de
tiempo se ha escrito: «Habréis de
responder de todo el tiempo que os
he dado. Y esto es totalmente
exacto, pues tu principal facultad
espiritual, la voluntad, sólo necesita
esta breve fracción de un momento
para dirigirse hacia el objeto de su
deseo.
Si por la gracia fueras restablecido
a la integridad que el hombre poseía
antes de pecar, serías dueño total de
estos impulsos. Ninguno de ellos se
la espontáneo deseo que salta de
cuántos bellos deseos surgen del exigir la
verdadera
espíritu de una persona que está amistad
acostumbrada a esta actividad. Y sin con
embargo, quizá sólo una de ellas se Jesús, su
madre,
vea completamente libre de apego a los
quiero
alguna cosa creada. Q puede ángeles y
suceder también que tan pronto un los
santos, a
hombre se haya vuelto hacia Dios, menos
con
llevado de su fragilidad humana, se que haga
todo lo
encuentre distraído por el recuerdo
que está
de alguna cosa creada o de algún en su
cuidado diario. Pero no importa. mano con
la gracia
Nada malo ha ocurrido: esta de Dios
persona volverá pronto a un para
aprovech
recogimiento profundo.
ar el
tiempo.
Pasamos ahora a la diferencia entre Ha de
poner de
la obra contemplativa y sus
su parte,
falsificaciones tales como los por
ensueños, las fantasías o los pequeña
que sea,
razonamientos sutiles. Estos se para
originan en un espíritu presuntuoso, fortalecer
curioso o romántico, mientras que el la
amistad,
puro impulso de amor nace de un de la
corazón sincero y humilde. El misma
orgullo, la curiosidad y las fantasías o manera
que esta
ensueños han de ser controlados le
con firmeza si es que la obra fortalece
a él.
contemplativa se ha de alumbrar
auténticamente en la intimidad del
corazón. Probablemente, algunos
dirán sobre esta obra y supondrán
que pueden llevarla a efecto
mediante ingeniosos esfuerzos.
Probablemente forzarán su mente e
extraviaría, sino que volaría al único imaginación de un modo no natural y
bien, meta de todo deseo, sólo para producir un falso trabajo
que no es ni humano ni divino. La
Dios mismo. Pues Dios nos creó a verdad es que esta persona está
su imagen y semejanza, haciéndonos peligrosamente engañada. Y temo
iguales a él, y en la Encarnación se que, a no ser que Dios intervenga
yació de su divinidad, haciéndose con un milagro que la lleve a
hombre como nosotros. Es Dios, y abandonar tales prácticas y a buscar
sólo él, quien puede satisfacer humildemente una orientación
plenamente el hambre y el ansia de segura, caerá en aberraciones
nuestro espíritu, que, transformado mentales o en cualquier otro mal
por su gracia redentora, es capaz de espiritual del demonio engañador.
abrazarlo por el amor. El, a quien ni Corre, pues, el riesgo de perder
hombre ni ángeles pueden captar por cuerpo y alma para siempre. Por
el conocimiento, puede ser abrazado amor de Dios, pon todo tu empeño
por el amor. El intelecto de los en esta obra y no fuerces nunca tu
hombres y de los ángeles es mente ni imaginación, ya que por este
demasiado pequeño para camino no llegarás a ninguna parte.
comprender a Dios tal cual es en si Deja estas facultades en paz.
mismo.
No creas que porque he hablado de
Intenta comprender este punto. Las la oscuridad y de una nube pienso en
criaturas racionales, como los las nubes que ves en un cielo
hombres y los ángeles, poseen dos encapotado o en la oscuridad de tu
facultades principales: la facultad de casa cuando tu candil se apaga. Si
conocer y la facultad de amar. así fuera, con un poco de fantasía
podrías imaginar el cielo de verano
Nadie puede comprender que rompe a través de las nubes o en
totalmente al Dios increado con su una luz clara que ilumina el oscuro
entendimiento; pero cada uno, de invierno. No es esto lo que estoy
maneras diferentes, puede captarlo pensando; olvídate, pues, de tal
plenamente por el amor. Tal es el despropósito. Cuando hablo de
incesante milagro del amor: una oscuridad, entiendo la falta o
persona que ama, a través de su ausencia de conocimiento. Si eres
amor, puede abrazar a Dios, cuyo incapaz de entender algo o si lo has
ser llena y trasciende la creación olvidado, ¿no estás acaso en la
entera. Y esta maravillosa obra del oscuridad con respecto a esta cosa?
amor dura para siempre, pues aquel a
quien amamos es eterno. Cualquiera No la puedes ver con los ojos de tu
que tenga la gracia de apreciar la mente. Pues bien, en el mismo
verdad de lo que estoy diciendo, que sentido, yo no he dicho «nube», sino
se tome a pecho mis palabras, pues «nube del no-saber». Pues es una
experimentar este amor es la alegría oscuridad del no-saber que está
de la vida eterna y perderlo es el entre ti y tu Dios.
tormento eterno.

Quien, con la ayuda de la gracia de

Dios, se da cuenta de los
movimientos constantes de la
voluntad y aprende a dirigirlos hacia
Dios, nunca dejará de gustar algo
del gozo del cielo, incluso en esta
vida. Y en el futuro, ciertamente lo
saboreará plenamente. ¿Ves ahora
por qué te incito a esta obra
espiritual? Si el hombre no hubiera
pecado, te habrías aficionado a ella
espontáneamente, pues el hombre
fue creado para amar y todo lo
demás fue creado para hacer posible
el amor. A pesar de todo, el hombre
quedará sanado por la obra del amor
contemplativo. Al fallar en esta obra
se hunde más a fondo en el pecado y
se aleja más de Dios. Pero,
perseverando en ella, surge
gradualmente del pecado y se
adentra en la intimidad divina.

El Libro del Patio Amarillo

Anónimo
Clásico taoísta de los siglos IV-V. En este caso se trata de una pequeña
selección de estrofas. El texto es una traducción del chino de Patrick Carré,
versionada al castellano por Montse Bofill. Esta es su última parte.

19
 Intentemos expicar las leyes
Posternado
a las propias de cada víscera.
puertas del El corazón es el dueño del reino,
misterio,
esperad la el rey de las cinco vísceras.
vía del El pensamiento que se mueve y se para en él,
cielo. el aliento que le acompaña.
Está muy
cercana. La Vía: preservar naturalmente,
Solo queda los rayos de mi divina claridad.
guardarla Yo he perforado mi esencia florida,
de forma
natural. armonizo yin y yang.
A lo divino Durante el día, ¡cuantas luces!
le gusta
En la noche, se conserva por sí solo.
fijarse
en lo puro Sedientos, tendréis bebida;
y en el no- hambrientos, seréis hartados.
actuar.
Recorred los seis receptáculos
y escondeos en mao y you.
Desviad el yin del yang
y ocultadlo en el nueve.
Expertos en este arte,
ignoraréis el envejecer.

20

El aliento del hígado resplandece,

largo y afilado.
Debidamente ordenadas, las cinco vísceras
producen tres rayos de luz.
En lo alto, se unen al triple calentador;
abajo, a la escarcha de jade.
Mi divino y mis almas
se encuentran en medio.
Fuente que brota, la saliva
disipa los perfumes y los miasmas.
Se levanta contra el tapón invertido,
y la sala de las luces la contiene.
El fragor del trueno
reverbera en ecos.
 A la izquierda mao y a la derecha you :
he aquí mi tesoro.
Posternado a las puertas del misterio,
esperad la vía del cielo.
Está muy cercana. Solo queda
guardarla de forma natural.
A lo divino le gusta fijarse
en lo puro y en el no-actuar.
Esencia y dios suben y bajan:
claras son sus razones.
Libremente circulad sobre la vía del cielo,
hierba de larga vida.
Recorred los siete orificios:
ignoraréis la vejez.
Volved a sentaros a las puertas del cielo
y esperad yin y yang.
Volved a bajar por la garganta
para entrar en la divina claridad.
Pasad bajo los doseles floridos,
donde se está puro y fresco.
Arrojaos al abismo claro y frío:
veréis mi forma.
Si conseguís volver al cinabrio
podréis vivir mucho tiempo.
Abajo está el estanque florido
donde la esencia de los riñones se emite.
Se alza hasta la sala de las luces
y llega al campo de cinabrio.
Obrad de modo que los dioses
abran las puertas del destino.
Progresad en la vía del cielo
hasta la raíz mágica.
Yin y yang desfilarán
como estrellas fugaces.

21

El aliento de los pulmones

 se eleva en el triple calentador.
Posternaos a las puertas del cielo
y esperad la antigua vía.
Los licores puros de la fuente exquisita
impregnan los seis receptáculos.
Sube y baja por las narices,
las orejas lo saben.
Observad el cielo y la tierra:
preservad al muchachito.
El armonioso equilibrio de las esencias tornasoladas
inhibe los cabellos y la dentadura.
Tenéis un aspecto radiante
Mantengo
sin recorrer a ninguna droga.
mi
Esto vuelve a descender por la garganta pensamie
en forma de gotitas de lluvia nto en la
respiració
Que los dioses reunidos n interior:
recogen juntos. resplande
Más abajo, en el templo carmesí, ce la
divina
un resplandor purpúreo se extiende. claridad.
Sumergíos en el dosel florido Surgiendo
de las
hasta la divina choza.
puertas
No guardéis más que el corazón o su dios: del cielo,
se interpelarán. accedo a
lo
Contemplando mi divina claridad, ininterrum
aparto a los demonios. pido.
Encontrad al dios de vuestro bazo, Sin deseo
y
os habréis reunido con la gran familia. desligado
Id después hasta el tubo del estómago: s de todo,
cultivad la
entrad en la vacuidad.
raíz
Escoged la raíz mágica y cultivadla florida.
para que nunca se marchite. Alimentao
s del
Cerrad las puertas del destino
aliento
como las de la Capital de Jade. oscuro
Vuestra longevidad, durante decenas de miles y viviréis
largo
de años, no tendrá fin. tiempo.

22
 El principio divino del bazo
domina el centro.
Por la mañana, departe con los cinco dioses;
armoniza las tres luminarias.
En lo alto, toca las puertas del cielo
y se recoge en la sala de las luces.
Impregna los seis receptáculos y los cuida
equilibrando los cinco elementos.
Metal, madera, agua y fuego
tienen por monarca la tierra.
Sol, luna y constelaciones:
manifiestan el yin y el yang.
Invadiendo las venas,
el sudor se hace elixir.
Defended las siete cavidades:
separad de ellas los malos augurios.
Dos dioses se abrazan:
caída de cimas antiguas.
Desde lo alto recibid el aliento primordial:
vuestros años siempre se alargarán.

23

Señor de las cinco vísceras,

el riñón es el venerable mayor.
Posternado ante el yin supremo,
esconde su realidad.
Entra por los dos orificios; vuelve a salir de ellos:
unión en el Patio Amarillo.
Respiración de vacuidad
manifiesta mi forma.
Consolida mis tendones y mis huesos;
mis venas desbordan de sangre.
Mi corazón se ilumina y yo desaparezco
visitando lo puro y lo mágico.
Sentado en la choza,
contemplo al muchachito.
Mantengo mi pensamiento en la respiración interior:
 resplandece la divina claridad.
Surgiendo de las puertas del cielo,
accedo a lo ininterrumpido.
Sin deseo y desligados de todo,
cultivad la raíz florida.
Alimentaos del aliento oscuro
y viviréis largo tiempo.
De vuelta a las siete puertas,
bebed en el abismo supremo.
Atravesad el pecho misterioso:
recorreréis las magias de la pureza.
Sentados en la choza,
percibiréis al muchachito.
Os interroga sobre el Tao de la Inmortalidad,
os pregunta vuestras técnicas especiales.
He absorbido hierbas mágicas,
el púrpura de las cimas floridas.
Peinado con la más simple blancura,
tengo los talones en el campo de cinabrio.
Me baño en el estanque florido
para regar la raíz mágica.
El acuerdo de las cinco vísceras
abre las puertas del destino.
Los cinco sabores alcanzan su perfección:
es el regreso del aliento de bondad.
Practicad con el pelo suelto
y viviréis largo tiempo.

24

La gran Vía, es la inmensidad

que ningún pensamiento puede complicar.
He aquí, he dicho. No habléis de ello
vanamente.
Diálogos para el Tao Supremo para el mundo.

Jesús en el Corán (II)

José María Casciaro
Análisis del tratamiento de la figura de Jesús en el inicio de la tradición
 musulmana y su apreciación desde el Sagrado Corán. Texto correspondiente al
artículo homónimo aparecido en SCRIPTA THEOLOGICA, nº 30 (1998/1), pp:
13-38. Segunda parte de cuatro.

Los milagros de Jesús Dimos a J

Con
permiso de
Dios curaré
El Corán menciona muchos milagros de Jesús. Unos proceden
al ciego de
nacimiento de los evangelios canónicos, otros de los apócrifos conocidos; de
y al
leproso y algunos pocos milagros no hay referencias en los escritos que han
resucitaré llegado hasta nosotros:
a los
muertos (
... ). Qur 3,49: Y como enviado a los hijos de Israel- «Os he traído un
Ciertament
e, tenéis en signo [habla Jesús] que viene de vuestro Señor. Voy a crear
ello un
signo, si es para vosotros, de la arcilla, a modo de pájaros. Entonces, soplaré
que sois en ellos y, con permiso de Dios, se convertirán en pájaros. Con
creyentes».
permiso de Dios curaré al ciego de nacimiento y al leproso y
resucitaré a los muertos ( ... ). Ciertamente, tenéis en ello un
signo, si es que sois creyentes».

El milagro de los pájaros aparece en el Evangelio del Pseudo

Mateo, cap. 27, en el Evangelio del Pseudo Tomás, 2,2-4, en el
Evangelio Árabe de la Infancia, 36,2 y 46,1-2, y en el Evangelio
Armenio de la Infancia, 18,2.

Una vez más se plantea la cuestión de cómo conoció Mahoma Jesús,

hijo de
esos pasajes: ¿por vía meramente oral, por lectura directa, por María, las
escucha de alguien que le leía o traducía? pruebas
claras y le
fortalecim
os con el
Qur 5,110: Cuando dijo Dios: «Jesús, hijo de María! Recuerda Espíritu
mi gracia, que os dispensé a ti y a tu madre cuando te fortalecí Santo

con el Espíritu Santo y hablaste a la gente en la cuna y de

adulto, y cuando te enseñé la Escritura (al-Kitab), la sabiduría,
 la Torah y el Evangelio. Y cuando creaste de arcilla a modo de
pájaros con mi permiso, soplaste en ellos y se convirtieron en
pájaros con mi permiso. Y curaste al ciego de nacimiento y al
leproso con mi permiso. Y cuando resucitaste a los muertos con
mi permiso. Y cuando alejé de ti a los hijos de Israel cuando
viniste a ellos con las pruebas claras y los que de ellos no creían
dijeron: "Esto no es sino magia manifiesta"».

En Qur 5,111 se repite en parte lo dicho en 2, 87: es la cuestión

de «las pruebas claras», es decir, de los milagros que atestiguan la
misión divina de un enviado, tema recurrente en el Corán. Por
ejemplo:

Qur 43,63. Cuando Jesús vino con las pruebas claras, dijo: «He
venido a vosotros con la sabiduría, y para aclararos algo de
aquello en que discrepáis. ¡Temed, pues a Dios y obedecedme!».
Qur 2,253: ... Dimos a Jesús, hijo de María, las pruebas claras y
le fortalecimos con el Espíritu Santo.

El Sermón del Monte según la Vedanta (XXIII)

Swami Prabhavananda
Este discípulo de Sri Ramakrishna, siguiendo las enseñanzas de su maestro,
explica a Jesucristo tomando como base uno de sus más conocidos sermones. El
libro, breve pero intenso, es más que recomendable para el buscador. Esta es la
referencia: El Sermón del Monte según la Vedanta,
Swami Prabhavananda, edt. Kier, Buenos Aires, 2003. Este es el vigésimo
fragmento, mediando ya el capítulo VII.

Pero la En la India, las enseñanzas del Yoga sobre los centros espirituales han sido La
realización corroboradas por las experiencias de los aspirantes durante miles de años. religión
mística, Pero la realización mística, por supuesto, no se limita a la India: es la misma verdadera
por para todos, sean hindúes, cristianos, judíos o adeptos de cualquier otro nos
supuesto, sendero religioso. En cuanto a una notable semejanza con las experiencias muestra
de los yoguis indios, considerad el ejemplo de Jacobo Boehme, un cristiano
no se limita cómo
místico del siglo XVI, que, en sus Confesiones, describe su propio
a la India: vencer al
despertar espiritual:
es la mundo y
misma “Pues el Espíritu Santo no se detendrá en la carne pecadora, sino que se alcanzar
para todos, eleva como el destello de un relámpago, como el fuego echa chispas y llamas el
sean de una piedra cuando un hombre la percute. conocimie
hindúes, “Pero cuando el destello es atrapado en la fuente del corazón, entonces el nto de
cristianos, Espíritu Santo surge, en los siete espíritus originales evolutivos, dentro del Dios, pero
cerebro, como el amanecer del día, el rubor matutino...
judíos o los
“De este Dios tomo mi conocimiento y de ninguna otra cosa; ni conoceré
adeptos de maestros
ninguna otra cosa que no sea ese mismo Dios...
cualquier de la
“Aunque un ángel del cielo me contara esto, empero por todo eso no podría
otro creerle, mucho menos aforrarme a ello, pues tendría siempre que dudar si eso religión
sendero era ciertamente así o no. Pero el Sol mismo surge en mi espíritu, y en falsa
religioso. consecuencia yo no estoy muy seguro de ello.” mantiene
n firme la
Guardaos de los falsos profetas, que vienen a vosotros con vestidos de promesa
ovejas, pero por dentro son lobos rapaces. del buen
éxito y la
Por sus frutos los conoceréis. ¿Acaso se recogen uvas de los espinos, o
riqueza en
higos de los abrojos?
el mundo.

Así, todo buen árbol da buenos frutos, pero el árbol malo da frutos malos.
No puede el buen árbol dar malos frutos, ni el árbol malo buenos
Todo árbol que no da buen fruto, es cortado y echado en el fuego.
Asi que, por sus frutos los conoceréis.

Jesús nos dice que discriminemos entre los profetas verdaderos y falsos, y
entre la religión verdadera y falsa. La religión verdadera nos muestra cómo
vencer al mundo y alcanzar el conocimiento de Dios, pero los maestros de la
religión falsa mantienen firme la promesa del buen éxito y la riqueza en el
mundo. Los frutos de la religión verdadera son la iluminación, el amor
desinteresado, y la compasión hacia todos. Sri Ramakrishna siguió los
senderos de muchas religiones durante su vida en la tierra, y aplicó siempre la
misma prueba a cada una: “¿Me dará ella la iluminación de Dios?” Cuando
se le hablaba de alguna nueva secta, preguntaba: “¿Enseña el amor a Dios?
¿Enseña cómo realizar a Dios?” Si no era así, nada tenía que hacer con ella.

Proverbios del Infierno

William Blake
Capítulo VI del libro del autor titulado “El Rey del Mundo” (Trad. castellana:
El Rey del Mundo, Fidelidad, Buenos Aires, 1985 (trad. de Atilio Neira).
 Cárcamo, Madrid, (trad. de P. García)).

En tiempo de siembra, aprende; en tiempo de La abeja laboriosa no tiene tiempo para la tristeza.
cosecha, enseña; en invierno, goza.
El reloj cuenta las horas de la necesidad, pero
Conduce tu carro y tu arado sobre los huesos de ningún reloj puede contar las horas de la sabiduría.
los muertos.
Los únicos alimentos sanos son aquellos que no
El camino del exceso conduce al palacio de la coge la red ni el cepo.
sabiduría.
Usa número, pesa y medida en un año de escasez.
La Prudencia es una vieja solterona rica y fea
cortejada por la Incapacidad. Ningún pájaro se eleva demasiado alto, si vuela con
sus propias alas.
Aquel que desea pero no obra, engendra peste.
Un cuerpo muerto no venga las injurias.
El gusano perdona al arado que lo corta.
El acto más sublime consiste en colocar otro
Sumerge en el río a aquel que ama el agua. delante de ti.

El necio no ve el mismo árbol que ve el sabio. Si el necio persistiera en su necedad se volvería

sabio.
Jamás se convertirá en estrella aquel cuyo rostro no
irradie luz. Villanía, máscara de la astucia.

La Eternidad está enamorada de las obras del Pudor, máscara del orgullo.
tiempo.
Las prisiones están construidas con piedras de la
Ley, los burdeles con piedras de la Religión.

El orgullo del pavo real es la gloria de Dios.

Lubricidad del chivo, generosidad de Dios.

La cólera del león es la sabiduría de Dios.

La desnudez de la mujer es la obra de Dios.

Exceso de pena, ríe. Exceso de alegría, llora.