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Índice

Introducción ............................................................................................................. 2
Administración del ambiente ................................................................................... 3
1. Desarrollo sostenible ..................................................................................... 3
2. Evaluación del impacto ambiental ................................................................. 5
3. Estrategia para el control de la contaminación ............................................ 17
El enfoque del control de la contaminación .................................................... 18
Aplicación de tecnologías de control de la contaminación. ............................. 19
Gestión integral de residuos ........................................................................... 20
Cambio de énfasis en la prevención de la contaminación .............................. 21
4. Ética ambiental ............................................................................................ 23
Conclusión............................................................................................................. 34
Introducción

El rápido movimiento de la industrialización en todo el mundo ha amenazado


seriamente la capacidad de la humanidad para mantener un equilibrio ecológico. La
industrialización es el requisito previo del crecimiento económico de cualquier país;
pero la industrialización no planificada y la liberación de residuos por parte de las
industrias genera contaminación o degradación ambiental. Cada actividad de
desarrollo se relaciona directamente con los recursos naturales y ambientales. El
desarrollo económico sin consideraciones ambientales ocasiona crisis ambientales.
El papel ecológico desempeñado por los sectores corporativos responsables de sus
actividades comerciales en el medio ambiente se está haciendo particularmente
explícito en el mercado global, especialmente en la India. La gestión de los recursos
ambientales y naturales en un país como India se ha vuelto más urgente. Cada
industria siente la necesidad de la gestión del desarrollo sostenible. Además, la
conciencia global y la aceptación de la importancia de los problemas ambientales
han motivado el desarrollo de una nueva área de gestión conocida como "Gestión
ambiental corporativa". El sistema de gestión ambiental es una parte del sistema de
gestión global. La influencia destructiva de las actividades económicas del hombre
en el medio ambiente en nombre de una economía global sostenible no es de origen
reciente.

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Administración del ambiente

La gestión ambiental ha sido una importante iniciativa política de los Estados Unidos
para los administradores públicos desde fines del siglo XIX. Se puede argumentar
que la expedición de 1871 al Parque Nacional Yellowstone dio origen a la gestión
de los recursos naturales. Esta columna demostrará la importancia de la Expedición
Geológica Hayden de 1871 sobre la administración pública, la diferencia entre la
gestión ambiental y de los recursos naturales y la forma en que Estados Unidos
avanzó para convertirse en uno de los líderes mundiales en la preservación de los
recursos naturales.

Los administradores públicos han estado muy preocupados por cómo la política
afecta los problemas ambientales, desde la calidad del aire hasta el fracking. La
razón principal de esto tiene que ver con el ciudadano promedio. Los
estadounidenses están muy preocupados por los efectos que la política tendrá
sobre el medio ambiente para ellos y para las generaciones futuras. Si bien esto
parece mostrar una gran preocupación por la conservación del medio ambiente, en
realidad esto también presenta la preocupación de los estadounidenses por la
gestión de los recursos naturales por parte del gobierno.

1. Desarrollo sostenible
La gobernanza ambiental aboga por la sostenibilidad como la consideración
suprema en la gestión de todas las actividades humanas: políticas, sociales y
económicas. El concepto de sostenibilidad se basa en el desarrollo sostenible. El
desarrollo sostenible se puede explicar de varias maneras, pero la definición más
ampliamente reconocida fue formulada por la Comisión Brundtland en 1987: “El
desarrollo sostenible es un desarrollo que satisface las necesidades del presente
sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer sus
propias necesidades.”

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El desarrollo sostenible se basa en los tres pilares de la sostenibilidad: la
sostenibilidad económica, ambiental y social. Solo se logra cuando hay equilibrio o
una compensación entre estos tres aspectos.

Sin embargo, algunos autores han ampliado este enfoque y han agregado un cuarto
pilar (por ejemplo, cultural, político o institucional); es muy importante comprender
que el desarrollo sostenible es un enfoque holístico e integrado, lo que significa que
para lograr un desarrollo sostenible es necesario para ser un equilibrio entre
diferentes esferas de la vida.

En la Cumbre de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas en 2015, los líderes


mundiales adoptaron la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, que incluye un
conjunto de 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) destinados a poner fin a
la pobreza, combatir la desigualdad y la injusticia y hacer frente al cambio climático
para 2030. Los objetivos, que se enumeran a continuación, están todos
acompañados por objetivos específicos: 169 en total.

Objetivos de Desarrollo Sostenible

1. Acabar con la pobreza en todas sus formas en todas partes.


2. Poner fin al hambre, lograr la seguridad alimentaria y mejorar la nutrición y
promover una agricultura sostenible
3. Asegurar vidas saludables y promover el bienestar para todos en todas las
edades.
4. Garantizar una educación de calidad inclusiva y equitativa y promover
oportunidades de aprendizaje a lo largo de toda la vida para todos.
5. Lograr la igualdad de género y empoderar a todas las mujeres y niñas.
6. Asegurar la disponibilidad y gestión sostenible del agua y saneamiento para
todos.
7. Garantizar el acceso a una energía asequible, confiable, sostenible y
moderna para todos.
8. Promover el crecimiento económico sostenido, inclusivo y sostenible, el
empleo pleno y productivo y el trabajo decente para todos

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9. Construir infraestructura resistente, promover la industrialización inclusiva y
sostenible y fomentar la innovación.
10. Reducir la desigualdad dentro y entre los países.
11. Hacer que las ciudades y los asentamientos humanos sean inclusivos,
seguros, resilientes y sostenibles
12. Asegurar patrones de consumo y producción sostenibles.
13. Tomar medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus impactos.
14. Conservar y utilizar de manera sostenible los océanos, mares y recursos
marinos para el desarrollo sostenible.
15. Proteger, restaurar y promover el uso sostenible de los ecosistemas
terrestres, gestionar de forma sostenible los bosques, combatir la
desertificación, detener y revertir la degradación de la tierra y detener la
pérdida de biodiversidad
16. Promover sociedades pacíficas e inclusivas para el desarrollo sostenible,
brindar acceso a la justicia para todos y crear instituciones eficaces,
responsables e inclusivas a todos los niveles.
17. Fortalecer los medios de implementación y revitalizar la alianza mundial para
el desarrollo sostenible.

2. Evaluación del impacto ambiental


La protección del medio ambiente aprovecha una serie de principios que se aceptan
en todo el mundo y que a menudo se introducen en el marco de acuerdos
internacionales. Estos principios deben seguirse en el diseño de políticas y pueden
servir como una referencia para los auditores. Los principales conceptos
ambientales explicados en este capítulo son:

1. bienes públicos
2. el principio de prevención
3. el principio de precaución
4. el principio de quien contamina paga
5. mejor técnica disponible

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Muchos recursos ambientales, incluidos la calidad del agua, los espacios abiertos,
la biodiversidad y un clima estable, se caracterizan como bienes públicos.

Los bienes públicos no disminuyen cuando se comparten; No son rivalizables ni


excluibles. Esto significa que el uso de estos bienes por parte de un individuo no
reduce su disponibilidad para otros, y los individuos no pueden ser excluidos de
manera efectiva de su uso.

Los bienes públicos globales son necesidades que no deben ser destruidas por
ninguna persona o estado.

Prevenir el daño ambiental siempre es más barato que cubrir el costo de la


recuperación, y recuperar las condiciones previas a veces es imposible (por
ejemplo, debido a la extinción de una especie). El principio de prevención establece
que se debe evitar una actividad dañina en el caso de ciertas consecuencias
desfavorables. Sin embargo, si los beneficios para la sociedad son mayores, el
principio no se aplica. El principio de prevención ha sentado las bases de las normas
sobre el transporte de residuos peligrosos.

Si una acción o política conlleva un riesgo sospechoso de causar daños al público


o al medio ambiente, y en ausencia de un consenso científico de que la acción o la
política es realmente dañina, la carga de la prueba de que no es perjudicial recae
en quienes toman la decisión. acción. Cuando existan amenazas de daños graves
o irreversibles, la falta de certeza científica no se utilizará como razón para posponer
medidas rentables para prevenir la degradación ambiental.

El principio de precaución se aprobó por primera vez en 1982 cuando la Asamblea


General de las Naciones Unidas (ONU) aprobó la Carta Mundial de la Naturaleza.
Posteriormente, el principio se ha integrado en muchos otros tratados
internacionales jurídicamente vinculantes, como la Declaración de Río y el Protocolo
de Kyoto. Las medidas de política para prevenir el cambio climático y aquellas para
regular el cultivo y el uso de organismos modificados genéticamente (OGM) son
ejemplos bien conocidos de la aplicación del principio de precaución.

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El principio de precaución se utiliza para determinar si se debe tomar una acción
ante datos incompletos.

Cuando el riesgo ambiental es incierto o desconocido, pero las consecuencias de la


materialización del riesgo serían grandes o el daño sería irreversible, se debe
asumir que el riesgo es significativo y que las medidas de protección deben
planearse en consecuencia.

De acuerdo con la OCDE (1972), el principio de "quien contamina paga" requiere


que el que contamina asuma el costo de las medidas para reducir la contaminación
de acuerdo con el alcance del daño causado a la sociedad o el exceso de un nivel
aceptable (estándar) de contaminación.

Este principio es importante desde el punto de vista de las finanzas públicas y se


menciona en el principio 16 de la Declaración de Río sobre el Medio Ambiente y el
Desarrollo.

El principio de "quien contamina paga" conduce a la responsabilidad ambiental,


cuyo objetivo es prevenir y remediar el daño ambiental. La responsabilidad
ambiental es una obligación basada en el principio de que una parte contaminante
debe pagar por el daño que causa al medio ambiente a través de sus actividades.

En algunos países, la responsabilidad ambiental es una responsabilidad estricta si


el daño puede atribuirse a una parte específica. La responsabilidad estricta significa
que una persona es legalmente responsable por el daño y la pérdida causados por
sus actos y omisiones, independientemente de la culpabilidad (incluida la culpa en
los términos del derecho penal).

La Directiva de responsabilidad ambiental de la UE define el daño ambiental como


el daño a las especies protegidas y los hábitats naturales, el daño al agua y el daño
al suelo. La directiva solo se puede aplicar si existe un vínculo causal claro entre la
actividad y el daño.

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La responsabilidad ambiental y el principio de "quien contamina paga" se pueden
usar al desarrollar preguntas y criterios de auditoría.

 El responsable de la contaminación ambiental también debe ser responsable


de cubrir los costos relacionados.
 El contaminador debe pagar por los daños que ha causado al medio
ambiente.

De acuerdo con los requisitos de la Mejor técnica disponible (BAT), el operador debe
utilizar la mejor tecnología posible económicamente justificable para proteger el
medio ambiente. BAT no es un enfoque de "no escatimar gastos" que siempre exige
el uso de la mejor tecnología disponible, independientemente del análisis de costo-
beneficio; en la práctica, el aspecto del costo también se tiene en cuenta.

El concepto BAT se utilizó por primera vez en el Convenio OSPAR de 1992 para la
Protección del Medio Ambiente Marino del Atlántico Nordeste para todo tipo de
instalaciones industriales. BAT se menciona en varias directivas de la UE y
documentos legales en otros países (incluidos los Estados Unidos). Ha adquirido el
estatuto de derecho consuetudinario.

Los documentos de referencia BAT se pueden utilizar como fuente de criterios o


para desarrollar recomendaciones de auditoría:

 Las agencias ambientales en muchos países almacenan los documentos de


referencia BAT (BREF), que se encuentran más fácilmente a través de una
búsqueda en Internet.
 Documentos de referencia de BAT europeos (BREF).

Los gobiernos abordan el impacto ambiental con una variedad de instrumentos que
van desde acuerdos internacionales hasta leyes de gobierno locales y nacionales,
todos los cuales buscan controlar, incentivar o monitorear el impacto ambiental y de
sostenibilidad.

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El papel de los gobiernos en la protección del medio ambiente se ejerce
principalmente en la planificación a largo plazo mediante la preparación de
estrategias, la regulación de sectores mediante el desarrollo de leyes, el
establecimiento de normas, la expedición de permisos y licencias y el control del
cumplimiento de las regulaciones.

Los gobiernos cuentan con una serie de mecanismos para regular el


comportamiento ambiental de las empresas y el público, como:

 convenciones y tratados internacionales


 legislación y regulaciones
 políticas y programas
 permisos y licencias
 monitorear y controlar
 Evaluaciones de Impacto Ambiental

Además de los instrumentos regulativos hay también:

 instrumentos económicos (por ejemplo, tasas e impuestos ambientales y


planes de comercio de emisiones).

Instrumentos voluntarios como:

 Sistemas de gestión ambiental

Cuando los auditores estudian si los gobiernos han logrado organizar las actividades
de las empresas y los ciudadanos de la mejor manera posible, pueden centrar su
auditoría en estos instrumentos de política y en los objetivos establecidos por los
gobiernos.

Enfocando una auditoría en instrumentos de políticas puede pedir, por ejemplo:

 ¿Los instrumentos de política apoyan los objetivos estratégicos del país?


 ¿Son los instrumentos de política coherentes y no se contradicen entre sí?
 ¿Se implementan las políticas?

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Los gobiernos se han comprometido con numerosos convenios y convenios
internacionales sobre medio ambiente y sostenibilidad. Esto conlleva compromisos,
pero a menudo también obligaciones financieras importantes.

Ejemplos de convenios internacionales relevantes para la auditoría ambiental:

 La Convención de Ramsar sobre la conservación de los humedales (1971)


 La Convención sobre el comercio internacional de especies amenazadas de
fauna y flora silvestres (1973)
 El Convenio de Viena y el Protocolo de Montreal para proteger la capa de
ozono (1985)
 El Convenio de Basilea sobre el control de los desechos peligrosos y su
transferencia a través de las fronteras (1989)
 El Convenio sobre la Diversidad Biológica (1992).
 La Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático
(1992)
 La Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación
(1994).
 El Convenio de Rotterdam sobre la aprobación previa de la transferencia de
productos químicos peligrosos (1998)
 El Protocolo de Cartagena sobre Bioseguridad (2000).
 El Convenio de Estocolmo sobre contaminantes orgánicos persistentes
(2001)

Los compromisos derivados de dichos acuerdos pueden servir a los auditores como
criterios.

Los gobiernos formulan políticas nacionales y sectoriales, a menudo en forma de


estrategias, planes de desarrollo y planes de acción. El ciclo de diseño de políticas
comienza identificando los problemas que deben abordarse; continúa con el diseño,
implementación y ejecución de políticas; y se completa con la evaluación de la
política. Es una buena práctica involucrar a diferentes partes interesadas y grupos
de interés en este proceso para garantizar que se consideren todos los temas

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importantes y que las políticas se basen en una comprensión integral de las partes
interesadas. Una discusión amplia aumenta la aceptación de una política adoptada
y asegura los mejores resultados.

Las principales áreas ambientales generalmente tienen estrategias integrales


separadas, por ejemplo, la estrategia de agua, la estrategia de turismo, el plan de
energía a largo plazo, la estrategia de manejo forestal y el programa para aumentar
la proporción de energías renovables en la combinación de energía.

Las estrategias establecen objetivos estratégicos a largo plazo para un sector


determinado. Los objetivos a corto plazo y las acciones concretas generalmente se
compilan en un plan de acción. Los documentos estratégicos pueden tener
diferentes nombres; a veces las estrategias y los planes de acción se combinan en
un documento.

Todos los documentos de políticas, que regulan el sector a ser auditado, deben ser
examinados para identificar los criterios.

Los instrumentos regulatorios / administrativos (también llamados 'instrumentos de


comando y control') establecen condiciones claras y permiten poca flexibilidad para
alcanzar los objetivos. Dichos instrumentos incluyen regulaciones, prohibiciones,
permisos y normas.

Las normas ambientales son un buen ejemplo de instrumentos regulatorios:

 calidad del aire (por ejemplo, PM10 en 24 horas, 150 μg / m3)


 calidad del agua (por ejemplo, el pH del lago debe estar entre 6.5 y 7.5)
 uso de un recurso natural (por ejemplo, no más del 50% del bosque natural
puede estar dañado)

Las normas pueden especificar el estado deseado del medio ambiente o establecer
límites de contaminación / daños. Consulte también el material de la INTOSAI
WGEA 'Instrumentos basados en el mercado para la protección y gestión del medio
ambiente'.

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Las normas generalmente se definen en números y, por lo tanto, son ideales para
la medición. Las normas ambientales son buenas fuentes de criterios de auditoría.

Los permisos, licencias y acuerdos regulan la relación entre el gobierno y las


empresas.

Un gobierno puede establecer diversas condiciones para actividades que pueden


tener un efecto adverso en el medio ambiente, incluyendo:

 Límites de contaminación (legislación nacional, tratados internacionales,


normas ambientales, etc.)
 Medidas para la mitigación del impacto ambiental.
 condiciones para el monitoreo (por ejemplo, emisiones al aire)
 Requisito de usar la mejor técnica disponible para actividades específicas
 requisitos relacionados con la presentación de informes y la supervisión a fin
de determinar si se cumplen las condiciones del permiso

El NAOE utilizó los datos en los permisos de extracción en su auditoría de recursos


minerales. Se auditaron las actividades de las autoridades estatales en la
organización de la extracción de los recursos minerales utilizados en la construcción
(arena, grava, piedra caliza y dolomita).

Un auditor puede estudiar el proceso de emisión de permisos (por ejemplo, si se


sopesa el impacto de las actividades planificadas en el medio ambiente y se
establecen las medidas de mitigación adecuadas o si se establecen las condiciones
de monitoreo y reporte).

Los auditores pueden analizar si se verifica que todas las compañías que deberían
tener un permiso hayan obtenido uno.

Los permisos ambientales pueden venir con condiciones, que son buenas fuentes
de criterios de auditoría.

Muchas actividades llevan a consecuencias ambientales, que son una carga para
la sociedad, ya que a menudo es necesario cubrir ciertos gastos. Los costos que no
están incluidos en el precio real se denominan "costos externos".

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Tales costos incluyen:

 El costo de desechar un producto al final de su vida útil.


 La degradación ambiental causada por las emisiones, contaminantes y
residuos generados durante la producción.
 El costo de los problemas de salud causados por sustancias tóxicas.

Los gobiernos utilizan instrumentos basados en el mercado para guiar el


comportamiento de las empresas y los ciudadanos y para abordar la falla del
mercado de los costos externos o las llamadas "externalidades ambientales". Las
externalidades se refieren a situaciones en las que la producción o el consumo de
bienes y servicios impone costos o beneficios a otros que no se reflejan en los
precios cobrados por los bienes y servicios que se proporcionan.

Los instrumentos basados en el mercado (MBI) pueden ser impuestos, cargos,


gravámenes, esquemas de permisos negociables, sistemas de devolución de
depósitos, subsidios y más. Estos instrumentos se pueden utilizar para proporcionar
a los productores y consumidores incentivos para cambiar su comportamiento hacia
un uso más eficiente de los recursos naturales al reducir el consumo y buscar formas
más efectivas de lograr un progreso ambiental al tiempo que les brinda flexibilidad
en la forma en que lo hacen.

Los instrumentos basados en el mercado se pueden implementar de manera


sistemática, en una economía o región, a través de sectores económicos o por
medio del medio ambiente (por ejemplo, el agua).

 Impuestos y cargas ambientales.


o Los impuestos ambientales se pueden utilizar, por ejemplo, para
favorecer el reciclaje y desalentar la inversión y el uso de vertederos
o Los impuestos o los precios mínimos pueden elevar el costo de los
productos para desalentar su uso, por ejemplo, los impuestos que
aumentan el precio de los agregados extraídos en comparación con el
uso de otros productos, o el precio mínimo del carbono

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o La desgravación fiscal también se puede utilizar para alentar la
construcción de infraestructura en sitios utilizados anteriormente para
respaldar la regeneración
o Sistemas de devolución de depósitos: se puede aplicar un depósito
(impuesto) a un producto y devolverlo si se implementa cierto
comportamiento (por ejemplo, un depósito de devolución en botellas de
bebidas)
 Subvenciones e incentivos ambientales.
o Los subsidios (directos e indirectos) y la fijación de precios mínimos para
los insumos se pueden utilizar como una herramienta para aumentar el
costo de actividades más destructivas para el medio ambiente para
alentar el uso de opciones menos dañinas
o Esquemas de comercio (por ejemplo, comercio de emisiones y asignación
de recursos)
o Esquemas de responsabilidad e indemnización.

Los instrumentos basados en el mercado proporcionan datos financieros sólidos


para la auditoría. Es posible estudiar qué tan bien se implementa un instrumento,
qué tan efectivamente se cobra un impuesto o con qué frecuencia se emiten las
multas.

El análisis de la efectividad de los MBI es más desafiante: el auditor debe tener


cuidado con otros instrumentos y procesos que pueden haber tenido un mayor
efecto en el área auditada.

La Evaluación de impacto ambiental (EIA) es una evaluación del posible impacto


positivo o adverso que un proyecto propuesto puede tener en el medio ambiente.
La evaluación tiene en cuenta los aspectos ambientales, sociales y económicos del
proyecto.

El término EIA se refiere tanto a un proceso de toma de decisiones como a un


documento derivado del proceso de evaluación. Sin embargo, algunos críticos dicen
que una EIA se utiliza como una herramienta de ayuda en la toma de decisiones en
lugar de una decisión.

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Los requisitos de EIA pueden variar de un país a otro. La ley nacional a menudo
establece condiciones para llevar a cabo una EIA:

 Proyectos que necesitan ser evaluados (tamaño del proyecto)


 Condiciones sobre cómo realizar evaluaciones (quién las realiza y en qué
etapa de un proyecto)
 Aspectos del entorno susceptibles de verse afectados significativamente por
el proyecto propuesto
 Impacto significativo derivado del proyecto y evaluación de alternativas.
 Medidas para la prevención y mitigación de impactos significativos.
 impacto social y económico

Los auditores obtienen la información relevante mediante el estudio del proceso de


EIA y los informes de EIA. Las condiciones establecidas en los informes EIA a
menudo se agregan a los permisos expedidos a los desarrolladores.

La Evaluación Ambiental Estratégica (SEA) es un proceso sistemático de apoyo a


la decisión que tiene como objetivo garantizar que los aspectos ambientales y, en
la medida de lo posible, otros aspectos de sostenibilidad se consideren de manera
efectiva al desarrollar políticas, planes y programas.

Tanto las EIA como las SEA son instrumentos que se basan en el principio de
precaución.

Además de los instrumentos regulatorios y financieros, también existen planes


voluntarios para fomentar un mejor comportamiento ambiental. Un Sistema de
Gestión Ambiental (EMS) es una herramienta voluntaria con la cual las
organizaciones pueden administrar y mejorar su desempeño ambiental. Un EMS
ayuda a las organizaciones a identificar el impacto y los riesgos ambientales para
incorporarlos en su proceso de toma de decisiones en línea con los aspectos
financieros. Un EMS requiere que una organización se fije objetivos para la mejora
continua en el rendimiento y para supervisar los logros.

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Las herramientas más comunes de EMS son:

 ISO 14001, un estándar que es reconocido y usado globalmente.


 Sistema de gestión y auditoría medioambientales (EMAS), orientado
principalmente a los Estados miembros de la UE

Sin embargo, tener cualquiera de estas acreditaciones indica que una organización
ha establecido una política ambiental, identificó su impacto ambiental significativo,
estableció objetivos y un plan de acción para minimizar el impacto y revisa
periódicamente su desempeño ambiental.

Las empresas que implementan ISO 14001 o EMAS tienen mejores datos y una
mejor comprensión de sus responsabilidades ambientales. Por lo tanto, debe
fomentarse el uso de esquemas ambientales voluntarios.

Informar sobre el desempeño ambiental de las organizaciones está ganando


reconocimiento. Además de los informes ambientales, existen informes más
amplios de sostenibilidad y responsabilidad social corporativa que cubren temas
sociales. Los informes de sostenibilidad están ganando adeptos entre las empresas
que desean demostrar responsabilidad y presentan las medidas que han tomado
tanto en el ámbito ambiental como en el social. Consulte más información en
'Informes de sostenibilidad: conceptos, marcos y el papel de las Entidades
Fiscalizadoras Superiores'.

Los requisitos de EMS se pueden utilizar en un proceso de adquisición como criterio


o en la evaluación de los aspectos ambientales de una adquisición.

El monitoreo ambiental implica la recopilación de datos a ciertos intervalos y el


análisis de los datos para identificar tendencias. El monitoreo debe ser tomado en
cuenta por los tomadores de decisiones para corregir la política, cuando sea
necesario. Es una buena práctica poner los datos de monitoreo a disposición del
público en general.

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El control del comportamiento de las empresas y los habitantes es necesario para
garantizar el cumplimiento de las normativas. Esto suele ser hecho por la inspección
ambiental. A veces los municipios también tienen un papel en el control del
cumplimiento de las regulaciones ambientales. La falta de datos sobre las
condiciones ambientales suele ser un obstáculo importante en las auditorías. En
algunos casos, tiene sentido contratar expertos para recopilar datos. Los auditores
también pueden hacer algunas observaciones que no requieren experiencia
específica (por ejemplo, recolectar evidencia visual con una cámara y un GPS).

3. Estrategia para el control de la contaminación


A lo largo del siglo XX, el creciente reconocimiento de los impactos ambientales y
de salud pública asociados con las actividades antropogénicas (analizadas en el
capítulo Riesgos para la salud ambiental) ha impulsado el desarrollo y la aplicación
de métodos y tecnologías para reducir los efectos de la contaminación. En este
contexto, los gobiernos han adoptado medidas normativas y otras políticas
(analizadas en el capítulo Política ambiental) para minimizar los efectos negativos y
garantizar que se cumplan las normas de calidad ambiental.

El objetivo de este capítulo es proporcionar una orientación a los métodos que se


aplican para controlar y prevenir la contaminación ambiental. Se introducirán los
principios básicos seguidos para eliminar los impactos negativos en la calidad del
agua, aire o tierra; se considerará el cambio de énfasis del control a la prevención;
y se examinarán las limitaciones de construir soluciones para medios ambientales
individuales. No es suficiente, por ejemplo, proteger el aire eliminando los metales
traza de un gas de combustión solo para transferir estos contaminantes a la tierra a
través de prácticas inadecuadas de manejo de desechos sólidos. Se requieren
soluciones multimedia integradas.

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El enfoque del control de la contaminación

Las consecuencias ambientales de la rápida industrialización han resultado en


innumerables incidentes de sitios de recursos de tierra, aire y agua contaminados
con materiales tóxicos y otros contaminantes, que amenazan a los humanos y los
ecosistemas con graves riesgos para la salud. El uso más extenso e intensivo de
materiales y energía ha creado presiones acumulativas sobre la calidad de los
ecosistemas locales, regionales y globales.

Antes de que hubiera un esfuerzo concertado para restringir el impacto de la


contaminación, la gestión ambiental se extendía poco más allá de la tolerancia del
laissez-faire, atenuada por la eliminación de desechos para evitar las molestias
locales perturbadoras concebidas en una perspectiva a corto plazo. La necesidad
de remediación se reconoció, por excepción, en los casos en que se determinó que
el daño era inaceptable. A medida que se intensificaba el ritmo de la actividad
industrial y crecía la comprensión de los efectos acumulativos, un paradigma de
control de la contaminación se convirtió en el enfoque dominante de la gestión
ambiental.

Dos conceptos específicos sirvieron de base para el enfoque de control:

 El concepto de capacidad de asimilación, que afirma la existencia de un nivel


específico de emisiones al medio ambiente que no produce efectos
ambientales o de salud humana inaceptables
 El principio del concepto de control, que asume que los daños ambientales
pueden evitarse controlando la manera, el tiempo y la velocidad a la que los
contaminantes ingresan al medio ambiente.

Bajo el enfoque de control de la contaminación, los intentos de proteger el medio


ambiente se han basado especialmente en aislar los contaminantes del entorno y
en el uso de filtros y depuradores de final de tubería. Estas soluciones han tendido
a centrarse en objetivos de calidad ambiental o límites de emisiones específicos del

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medio, y se han dirigido principalmente a descargas de fuentes puntuales en medios
ambientales específicos (aire, agua, suelo).

Aplicación de tecnologías de control de la contaminación.

La aplicación de métodos de control de la contaminación ha demostrado una


eficacia considerable en el control de los problemas de contaminación, en particular
los de carácter local. La aplicación de tecnologías apropiadas se basa en un análisis
sistemático de la fuente y la naturaleza de la emisión o descarga en cuestión, de su
interacción con el ecosistema y del problema de contaminación ambiental que se
debe abordar, y del desarrollo de tecnologías apropiadas para mitigar y monitorear
los impactos de la contaminación.

En su artículo sobre el control de la contaminación del aire, Dietrich Schwela y


Berenice Goelzer explican la importancia y las implicaciones de adoptar un enfoque
integral para la evaluación y el control de fuentes puntuales y fuentes no puntuales
de contaminación del aire. También resaltan los desafíos, y las oportunidades, que
se están abordando en países que están experimentando una rápida
industrialización sin haber tenido un fuerte componente de control de la
contaminación que acompañara el desarrollo anterior.

Marion Wichman-Fiebig explica los métodos que se aplican al modelo de dispersión


de contaminantes del aire para determinar y caracterizar la naturaleza de los
problemas de contaminación. Esto constituye la base para comprender los controles
que se van a poner en práctica y para evaluar su efectividad. A medida que la
comprensión de los impactos potenciales se ha profundizado, la apreciación de los
efectos se ha expandido de lo local a lo regional a lo global.

Hans-Ulrich Pfeffer y Peter Bruckmann brindan una introducción al equipo y los


métodos que se utilizan para monitorear la calidad del aire, de manera que se
puedan evaluar los problemas potenciales de contaminación y evaluar la efectividad
de las intervenciones de control y prevención.

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John Elias proporciona una visión general de los tipos de controles de
contaminación del aire que pueden aplicarse y los problemas que deben abordarse
al seleccionar las opciones de gestión de control de contaminación adecuadas.

Herbert Preul aborda el desafío del control de la contaminación del agua en un


artículo que explica la base por la cual las aguas naturales de la tierra pueden
contaminarse de fuentes puntuales, no puntuales e intermitentes; la base para
regular la contaminación del agua; y los diferentes criterios que se pueden aplicar
para determinar los programas de control. Preul explica la manera en que se reciben
las descargas en los cuerpos de agua, y puede analizarse y evaluarse para evaluar
y gestionar los riesgos. Finalmente, se proporciona una visión general de las
técnicas que se aplican para el tratamiento de aguas residuales a gran escala y el
control de la contaminación del agua.

Un estudio de caso proporciona un ejemplo vívido de cómo se pueden reutilizar las


aguas residuales, un tema de considerable importancia en la búsqueda de formas
en que los recursos ambientales se puedan usar de manera efectiva, especialmente
en circunstancias de escasez. Alexander Donagi proporciona un resumen del
enfoque que se ha seguido para el tratamiento y la recarga de aguas subterráneas
de las aguas residuales municipales para una población de 1,5 millones en Israel.

Gestión integral de residuos

Bajo la perspectiva del control de la contaminación, los desechos se consideran


como un subproducto no deseado del proceso de producción que se debe contener
para garantizar que los recursos de suelo, agua y aire no se contaminen más allá
de los niveles considerados aceptables. Lucien Maystre proporciona una visión
general de los problemas que deben abordarse en la gestión de residuos, y
proporciona un vínculo conceptual con los roles cada vez más importantes del
reciclaje y la prevención de la contaminación.

En respuesta a la extensa evidencia de la grave contaminación asociada con el


manejo no restringido de los desechos, los gobiernos han establecido estándares
para prácticas aceptables de recolección, manejo y eliminación para garantizar la

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protección del medio ambiente. Se ha prestado especial atención a los criterios para
la eliminación ambientalmente segura a través de rellenos sanitarios, incineración y
tratamiento de residuos peligrosos.

Para evitar la carga ambiental potencial y los costos asociados con la eliminación
de desechos y promover una administración más completa de los recursos escasos,
la minimización y el reciclaje de desechos han recibido una atención creciente. Niels
Hahn y Poul Lauridsen proporcionan un resumen de los problemas que se abordan
en la búsqueda del reciclaje como una estrategia de gestión de residuos preferida,
y consideran las posibles implicaciones de la exposición de los trabajadores.

Cambio de énfasis en la prevención de la contaminación

La reducción al final de la tubería corre el riesgo de transferir la contaminación de


un medio a otro, ya que puede causar problemas ambientales igualmente graves, o
incluso terminar como una fuente indirecta de contaminación en el mismo medio. Si
bien no es tan costoso como la remediación, la reducción al final del proceso puede
contribuir significativamente a los costos de los procesos de producción sin aportar
ningún valor. Por lo general, también se asocia con regímenes regulatorios que
agregan otros conjuntos de costos asociados con la aplicación del cumplimiento.

Si bien el enfoque de control de la contaminación ha logrado un éxito considerable


en la producción de mejoras a corto plazo para los problemas locales de
contaminación, ha sido menos efectivo para abordar los problemas acumulativos
que son cada vez más reconocidos a nivel regional (por ejemplo, lluvia ácida) o
global (por ejemplo, agotamiento del ozono).

El objetivo de un programa de control de la contaminación ambiental orientado a la


salud es promover una mejor calidad de vida reduciendo la contaminación al nivel
más bajo posible. Los programas y políticas de control de la contaminación
ambiental, cuyas implicaciones y prioridades varían de un país a otro, cubren todos
los aspectos de la contaminación (aire, agua, tierra, etc.) e involucran la
coordinación entre áreas como el desarrollo industrial, la planificación urbana, el
desarrollo de los recursos hídricos y el transporte. las políticas.

21
Thomas Tseng, Victor Shantora e Ian Smith proporcionan un ejemplo de estudio de
caso del impacto multimedia que la contaminación ha tenido en un ecosistema
vulnerable sometido a muchas tensiones: los Grandes Lagos de América del Norte.
La limitada eficacia del modelo de control de la contaminación para tratar las toxinas
persistentes que se disipan a través del medio ambiente se examina en particular.
Al centrarse en el enfoque que se está aplicando en un país y las implicaciones que
esto tiene para la acción internacional, se ilustran las implicaciones para las
acciones que abordan la prevención y el control.

A medida que las tecnologías de control de la contaminación ambiental se han


vuelto más sofisticadas y más caras, ha habido un interés creciente en las formas
de incorporar la prevención en el diseño de procesos industriales, con el objetivo de
eliminar los efectos ambientales nocivos y al mismo tiempo promover la
competitividad de las industrias. Entre los beneficios de los enfoques de prevención
de la contaminación, las tecnologías limpias y la reducción del uso de tóxicos está
el potencial para eliminar la exposición de los trabajadores a los riesgos para la
salud.

David Bennett proporciona una descripción general de por qué la prevención de la


contaminación está surgiendo como una estrategia preferida y cómo se relaciona
con otros métodos de gestión ambiental. Este enfoque es fundamental para
implementar el cambio hacia el desarrollo sostenible, que ha sido ampliamente
respaldado desde el lanzamiento de la Comisión de Comercio y Desarrollo de las
Naciones Unidas en 1987 y se reiteró en la Conferencia de Río de las Naciones
Unidas sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo (UNCED) en 1992.

El enfoque de prevención de la contaminación se centra directamente en el uso de


procesos, prácticas, materiales y energía que evitan o minimizan la creación de
contaminantes y desechos en la fuente, y no en medidas de reducción
"complementarias". Si bien el compromiso corporativo juega un papel crítico en la
decisión de perseguir la prevención de la contaminación Bennett llama la atención
sobre los beneficios sociales en la reducción de riesgos para el ecosistema y la

22
salud humana, y la salud de los trabajadores en particular. Identifica los principios
que pueden aplicarse de manera útil al evaluar las oportunidades para seguir este
enfoque.

4. Ética ambiental

La ética ambiental es la disciplina en filosofía que estudia la relación moral de los


seres humanos, y también el valor y el estatus moral del medio ambiente y sus
contenidos no humanos. Esta entrada cubre: el desafío de la ética ambiental al
antropocentrismo (es decir, centrado en el ser humano) incrustado en el
pensamiento ético occidental tradicional; el desarrollo temprano de la disciplina en
los años sesenta y setenta; la conexión de la ecología profunda, la ética ambiental
feminista, el animismo y la ecología social a la política; el intento de aplicar las
teorías éticas tradicionales, incluido el consecuencialismo, la deontología y la ética
de la virtud, para apoyar las preocupaciones ambientales contemporáneas; la
preservación de la biodiversidad como objetivo ético; las preocupaciones más
amplias de algunos pensadores acerca de la naturaleza, el ambiente construido y
la política de la pobreza; la ética de la sostenibilidad y el cambio climático, y algunas
direcciones para posibles desarrollos futuros de la disciplina.

Si bien los especialistas en ética ambiental a menudo intentan distanciarse del


antropocentrismo incorporado en los puntos de vista éticos tradicionales, también
suelen extraer sus recursos teóricos de los sistemas y teorías éticos tradicionales.
Considere las siguientes dos preguntas morales básicas: ¿Qué tipo de cosas son
intrínsecamente valiosas, buenas o malas? ¿Qué hace que una acción sea correcta
o incorrecta?

Las teorías éticas consecuencialistas consideran que el “valor” / “desvalor” o


“bondad” / “maldad” intrínsecos son nociones morales más fundamentales que
“rectitud” / “maldad”, y sostienen que si una acción es correcta / incorrecta está
determinada por si Las consecuencias son buenas / malas. Desde esta perspectiva,
las respuestas a la pregunta están informadas por las respuestas a la pregunta. Por

23
ejemplo, el utilitarismo, un caso paradigmático de consecuencialismo, considera el
placer (o, más ampliamente, la satisfacción del interés, el deseo y / o la preferencia)
como el único valor intrínseco en el mundo, mientras que el dolor (o la frustración
del deseo, el interés, y / o la preferencia) es el único desvalor intrínseco, y sostiene
que las acciones correctas son aquellas que producirían el mayor equilibrio de
placer sobre dolor.

Como el enfoque utilitario es el equilibrio entre el placer y el dolor como tal, la


cuestión de a quién pertenece el placer o el dolor es irrelevante para el cálculo y la
evaluación de lo correcto o incorrecto de las acciones. Por lo tanto, el utilitario del
siglo dieciocho Jeremy Bentham, y ahora Peter Singer, han argumentado que los
intereses de todos los seres sintientes (es decir, los seres que son capaces de
experimentar placer o dolor) —incluyendo los no humanos— afectados por una
acción deben tomarse igualmente en consideración al evaluar la acción. Además,
al igual que Routley (ver la sección 2 anterior), Singer sostiene que el privilegio
antropocéntrico de los miembros de la especie Homo sapiens es arbitrario, y que es
una especie de "especismo" tan injustificable como el sexismo y el racismo. Singer
considera que el movimiento de liberación animal es comparable a los movimientos
de liberación de mujeres y personas de color. A diferencia de los filósofos
ambientales que atribuyen un valor intrínseco al entorno natural y sus habitantes,
Singer y los utilitaristas en general atribuyen un valor intrínseco a la experiencia del
placer o la satisfacción del interés como tal, no a los seres que tienen la experiencia.
Del mismo modo, para los objetos utilitarios, no sensibles en el medio ambiente,
tales como especies de plantas, ríos, montañas y paisajes, todos los cuales son
objeto de preocupación moral para los ambientalistas, no tienen un valor intrínseco,
sino más bien instrumental para la satisfacción de seres sintientes. Además, debido
a que las acciones correctas, para el utilitario, son aquellas que maximizan el
equilibrio general de la satisfacción del interés sobre la frustración, pueden resultar
prácticas como la caza de ballenas y la matanza de un elefante por marfil, que causa
sufrimiento a animales no humanos. Después de todo, para tener razón: tales
prácticas pueden producir considerables cantidades de satisfacción de intereses
para los seres humanos, que, en el cálculo utilitario, superan la frustración de

24
intereses no humanos que implica. Como resultado de todas las consideraciones
anteriores, no está claro en qué medida una ética utilitaria también puede ser una
ética ambiental. Es posible que este punto no se aplique tan fácilmente a un enfoque
consecuencialista más amplio, que atribuya valor intrínseco no solo al placer o la
satisfacción, sino también a diversos objetos y procesos en el entorno natural.

Las teorías éticas deontológicas, en contraste, sostienen que, si una acción es


correcta o incorrecta, en su mayor parte es independiente de si sus consecuencias
son buenas o malas. Desde la perspectiva del deontólogo, existen varias reglas o
deberes morales (por ejemplo, "no matar ni dañar a los inocentes", "no mentir",
"respetar los derechos de los demás", "cumplir las promesas"), observancia /
violación de la cual es intrínsecamente correcto / incorrecto; es decir, correcto /
incorrecto en sí mismo independientemente de las consecuencias. Cuando se les
pide que justifiquen una supuesta regla moral, un deber o su derecho
correspondiente, los deontólogos pueden apelar al valor intrínseco de aquellos
seres a los que se aplica. Por ejemplo, el defensor de los "derechos de los animales"
Tom Regan (1983) sostiene que aquellos animales con valor intrínseco (o lo que él
llama "valor inherente") tienen el derecho moral a un trato respetuoso, lo que genera
un deber moral general de nuestra parte, no de Trátelos como meros medios para
otros fines. Tenemos, en particular, un deber moral prima facie de no hacerles daño.
Regan sostiene que ciertas prácticas (como la caza deportiva o comercial y la
experimentación con animales) violan el derecho moral de los animales de valor
intrínseco a un trato respetuoso. Argumenta que tales prácticas son intrínsecamente
erróneas, independientemente de si de ellas surgen o no algunas consecuencias
mejores. ¿Exactamente qué animales tienen un valor intrínseco y, por lo tanto, el
derecho moral a un trato respetuoso? La respuesta de Regan es: aquellos que
cumplen el criterio de ser el "sujeto de la vida". Ser un sujeto de este tipo es una
condición suficiente (aunque no necesaria) para tener un valor intrínseco, y ser un
sujeto de la vida implica, entre otras cosas, tener percepciones sensoriales,
creencias, deseos, motivos, memoria, Sentido del futuro, y una identidad psicológica
a lo largo del tiempo.

25
Algunos autores han ampliado aún más la preocupación por el bienestar individual,
argumentando el valor intrínseco de los organismos para lograr su propio bien, ya
sea que esos organismos sean capaces de la conciencia o no. La versión de Paul
Taylor de esta visión, que podríamos llamar biocentrismo, es un ejemplo
deontológico. Argumenta que cada ser viviente individual en la naturaleza ya sea un
animal, una planta o un microorganismo, es un "centro de vida teleológico" que tiene
un bien o un bienestar propios que se pueden mejorar. o dañado, y que todos los
individuos que son centros de vida teleológicos tienen el mismo valor intrínseco (o
lo que él llama "valor inherente") que les da derecho al respeto moral. Además,
Taylor sostiene que el valor intrínseco de los seres vivos salvajes genera un deber
moral prima facie de nuestra parte para preservar o promover sus bienes como fines
en sí mismos, y que cualquier práctica que trate a esos seres como meros medios
y, por lo tanto, muestre una falta de respeto Para ellos están intrínsecamente
equivocados. Una defensa más reciente y biológicamente detallada de la idea de
que los seres vivos tienen representaciones y objetivos y, por lo tanto, tienen valor
moral. A diferencia del biocentrismo igualitario y deontológico de Taylor, Robin
Attfield defiende una visión jerárquica de que mientras todos los seres un bien propio
tiene un valor intrínseco, algunos de ellos (por ejemplo, las personas) tienen un valor
intrínseco en mayor medida. Attfield también respalda una forma de
consecuencialismo que toma en consideración e intenta equilibrar los muchos y
posiblemente conflictivos bienes de diferentes seres vivos (ver también Varner 1998
para una defensa del individualismo biocéntrico con afinidades tanto para los
enfoques consecuencialistas como para los deontológicos). Sin embargo, algunos
críticos han señalado que la noción de bien o bienestar biológico es solo descriptiva
y no prescriptiva. Por ejemplo, incluso si el VIH tiene un bien propio, esto no significa
que debamos asignar ningún peso moral positivo a la realización de ese bien.

Más recientemente, la distinción entre estos dos enfoques tradicionales ha tomado


su propia forma específica de desarrollo en la filosofía ambiental. En lugar de
confrontar las concepciones del valor con las concepciones de los derechos, se ha
sugerido que puede haber dos concepciones diferentes del valor intrínseco en juego
en la discusión sobre el bien y el mal ambientales. Por un lado, está el valor

26
intrínseco de los estados de cosas que deben promoverse, y este es el enfoque de
los pensadores consecuencialistas. Por otro lado (deontológico) están los valores
intrínsecos de las entidades que deben respetarse. Estos dos focos diferentes para
la noción de valor intrínseco aún ofrecen espacio para que continúen los
argumentos fundamentales entre los deontólogos y los consecuencialistas, aunque
en una forma algo modificada.

Tenga en cuenta que la ética de la liberación animal o los derechos de los animales
y el biocentrismo son individualistas en el sentido de que sus diversas
preocupaciones morales se dirigen solo a individuos, no a grupos ecológicos como
especies, poblaciones, comunidades bióticas y ecosistemas. Ninguno de estos es
sensible, un sujeto de la vida o un centro de vida teleológico, pero la preservación
de estas entidades colectivas es una preocupación importante para muchos
ambientalistas. Además, los objetivos de los liberacionistas de animales, como la
reducción del sufrimiento y la muerte de los animales, pueden entrar en conflicto
con los objetivos de los ambientalistas. Por ejemplo, la preservación de la integridad
de un ecosistema puede requerir el sacrificio de animales salvajes o de algunas
poblaciones de animales indígenas que amenazan con destruir hábitats frágiles. Por
lo tanto, hay controversias acerca de si la ética de la liberación animal es una rama
adecuada de la ética ambiental.

Al criticar el enfoque individualista en general por no dar cabida a las


preocupaciones de conservación de las comunidades ecológicas, J. Baird Callicott,
una vez abogó por una versión del holismo ético de la tierra que toma la declaración
de Leopold: "Una cosa está bien cuando tiende a preservar la integridad y la
estabilidad". y la belleza de la comunidad biótica. Es incorrecto cuando tiende a lo
contrario: ser el principio deontológico supremo. En esta teoría, la comunidad biótica
de la tierra per se es el único lugar de valor intrínseco, mientras que el valor de sus
miembros individuales es meramente instrumental y depende de su contribución a
la "integridad, estabilidad y belleza" de la comunidad en general. Una implicación
directa de esta versión de la ética de la tierra es que un miembro individual de la
comunidad biótica debe sacrificarse siempre que sea necesario para la protección

27
del bien holístico de la comunidad. Por ejemplo, Callicott sostiene que, si el sacrificio
de un ciervo de cola blanca es necesario para la protección del bien biótico holístico,
entonces es un requisito ético de la tierra hacerlo. Pero, para ser coherente, el
mismo punto también se aplica a la identificación humana.

A pesar de la variedad de posiciones en ética ambiental desarrolladas durante los


últimos treinta años, se han centrado principalmente en temas relacionados con la
vida silvestre y las razones de su conservación. La importancia de la experiencia en
el desierto para la psique humana ha sido enfatizada por muchos filósofos
ambientales. Næss, por ejemplo, nos exhorta a asegurarnos de pasar tiempo
viviendo en situaciones de valor intrínseco, mientras que Rolston busca la
"recreación" del alma humana meditando en el desierto. Del mismo modo, los
teóricos críticos creen que la apreciación estética de la naturaleza tiene el poder de
volver a encantar la vida humana. A medida que la naturaleza se vuelve cada vez
más rara, la exposición de la gente a las cosas salvajes en su estado natural se ha
reducido, y según algunos autores, esto puede reducir la posibilidad de que nuestras
vidas y otros valores se transformen como resultado de las interacciones con la
naturaleza. Un argumento de Bryan Norton llama la atención sobre una analogía
con la música. Alguien expuesto por primera vez a un nuevo género musical puede
sufrir una transformación en preferencias musicales, gustos y valores como
resultado de la experiencia. Tal transformación puede afectar sus otras preferencias
y deseos también, tanto de manera directa como indirecta. En el intento de
preservar las oportunidades para experiencias que pueden cambiar o mejorar las
valoraciones de la naturaleza de las personas, ha habido un movimiento desde
principios de la década de 2000 para encontrar formas de reconstrucción. entornos
degradados, e incluso partes de ciudades.

En contraste con el enfoque en lugares silvestres, se ha prestado relativamente


poca atención al entorno construido, aunque este es el lugar en el que la mayoría
de las personas pasa la mayor parte de su tiempo. En la Gran Bretaña de la
posguerra, por ejemplo, los nuevos desarrollos de viviendas construidos a bajo
precio eran a menudo sustitutos pobres para las comunidades tradicionales. Se han

28
asociado con menores cantidades de interacción social y mayor crimen en
comparación con la situación anterior. La destrucción de viviendas tradicionales
altamente funcionales y de alta densidad, de hecho, podría compararse con la
destrucción de ecosistemas y comunidades bióticas muy diversos. Del mismo modo,
la pérdida de la enorme diversidad de lenguajes naturales del mundo ha sido llorada
por muchos, no solo por profesionales interesados en la lingüística. Los entornos
urbanos y lingüísticos son solo dos de los muchos "lugares" habitados por humanos.
Algunas teorías filosóficas sobre ambientes naturales y objetos pueden extenderse
para cubrir entornos construidos y objetos no naturales de varios tipos. Ciertamente,
hay muchos paralelismos entre los dominios naturales y artificiales: por ejemplo,
muchos de los problemas conceptuales involucrados en la discusión de la
restauración de objetos naturales también aparecen en el contexto paralelo de la
restauración de objetos hechos por el hombre.

El Convenio sobre la Diversidad Biológica fue influenciado por Nuestro futuro


común, un documento anterior de las Naciones Unidas sobre la sostenibilidad
producido por la Comisión Mundial sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo. La
comisión fue presidida por Gro Harlem Brundtland, Primer Ministro de Noruega en
ese momento, y el informe a veces se conoce como el Informe Brundtland. Este
informe notó la marea creciente de evidencia de que los sistemas planetarios vitales
para sustentar la vida en la Tierra estaban bajo tensión. La pregunta clave que
planteó es si es equitativo sacrificar opciones para el bienestar futuro en favor de
apoyar los estilos de vida actuales, especialmente las formas de vida cómodas y, a
veces, lujosas, que se disfrutan en los países ricos. Como lo expresa Bryan Norton,
el mundo enfrenta un desafío global para ver si diferentes grupos humanos, con
perspectivas muy diferentes, tal vez puedan "aceptar la responsabilidad de
mantener un conjunto no decreciente de oportunidades basadas en los posibles
usos del medio ambiente". La preservación de opciones para el futuro puede
vincularse fácilmente con nociones de equidad si se acuerda que "el futuro no debe
enfrentar, como resultado de nuestras acciones de hoy, una gama de opciones y
opciones seriamente reducidas, ya que tratan de adaptarse". al ambiente que
enfrentan ”. Tenga en cuenta que las referencias al "futuro" no deben limitarse

29
únicamente al futuro de los seres humanos. De acuerdo con el enfoque no
antropocéntrico de gran parte de la filosofía ambiental, el cuidado de la
sostenibilidad y la biodiversidad puede abarcar el cuidado de las oportunidades
disponibles para los seres vivos no humanos.

Sin embargo, cuando el concepto de "desarrollo sostenible" se articuló por primera


vez en el Informe Brundtland, el énfasis fue claramente antropocéntrico. Ante la
creciente evidencia de que los sistemas planetarios vitales para el soporte vital
estaban bajo presión, el concepto de desarrollo sostenible se construye en el
informe para alentar ciertas direcciones y tipos de desarrollo económico y social
coordinados globalmente. El informe define el "desarrollo sostenible" de la siguiente
manera:

El desarrollo sostenible es un desarrollo que satisface las necesidades del presente


sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer sus
propias necesidades. Contiene dentro de ella dos conceptos clave:

 el concepto de "necesidades", en particular las necesidades esenciales de


los pobres del mundo, a los que se debe dar prioridad absoluta; y
 La idea de las limitaciones impuestas por el estado de la tecnología y la
organización social a la capacidad del medio ambiente para satisfacer las
necesidades presentes y futuras.

Por lo tanto, los objetivos de desarrollo económico y social deben definirse en


términos de sostenibilidad en todos los países: desarrollados o en desarrollo,
orientados al mercado o planificados centralmente. Las interpretaciones variarán,
pero deben compartir ciertas características generales y deben derivar de un
consenso sobre el concepto básico de desarrollo sostenible y sobre un amplio
marco estratégico para lograrlo.

El informe continúa argumentando que "el mundo industrial ya ha utilizado gran


parte del capital ecológico del planeta. Esta desigualdad es el principal problema
"ambiental" del planeta; También es su principal problema de "desarrollo". En el
concepto de desarrollo sostenible, el informe combina la noción de "rendimiento

30
sostenible" del economista de recursos con el reconocimiento de que los países en
desarrollo del mundo tienen derecho al crecimiento económico y la prosperidad. La
noción de rendimiento sostenible implica pensar en los bosques, ríos, océanos y
otros ecosistemas, incluidas las especies naturales que viven en ellos, como una
reserva de "capital ecológico" de la que fluyen todo tipo de bienes y servicios.
Siempre que el flujo de dichos bienes y servicios no reduzca la capacidad del capital
mismo para mantener su productividad, el uso de los sistemas en cuestión se
considera sostenible. Por lo tanto, el informe argumenta que "el rendimiento máximo
sostenible debe definirse después de tener en cuenta los efectos de la explotación
del capital ecológico en todo el sistema".

Existen claros precursores filosóficos, políticos y económicos del concepto de


sostenibilidad de Brundtland. Por ejemplo, John Stuart Mill distinguió entre el
"estado estacionario" y el "estado progresivo" y argumentó que al final del estado
progresivo se encuentra el estado estacionario, ya que "el aumento de la riqueza es
No ilimitado”. Mill también reconoció una deuda con los pronósticos sombríos de
Thomas Malthus, quien había conjeturado que la población tiende a aumentar
geométricamente, mientras que los recursos alimenticios aumentan en forma
aritmética, por lo que la demanda de alimentos inevitablemente superará la oferta.

Tales advertencias resuenan con pesimismo más reciente sobre el aumento de la


población humana y su impacto en las personas más pobres, así como en la pérdida
de biodiversidad, la escasez de agua dulce, el consumo excesivo y el cambio
climático. En su controvertido trabajo The Population Bomb, Paul y Anne Ehrlich,
argumentan que, sin restricciones al crecimiento de la población, incluida la
imposición del control de la natalidad obligatorio, el mundo enfrentó la “hambruna
masiva” a corto plazo. En una defensa posterior de su trabajo inicial, los Ehrlichs
declararon que la falla más seria en su análisis original "era que era demasiado
optimista sobre el futuro", y comentan que "Desde que se escribió La bomba,
aumenta el flujo de gases de efecto invernadero hacia la atmósfera, una
consecuencia de la casi duplicación de la población humana y la casi triplicación del
consumo global, indica que los resultados probablemente serán una interrupción

31
climática catastrófica causada por el calentamiento del invernadero ”. También fue
en 1968 que Garrett Hardin publicó su muy citado artículo sobre la "tragedia de los
bienes comunes" que muestra que los recursos comunes siempre están sujetos a
degradación y extinción frente a la búsqueda racional del interés propio. Para
Hardin, la creciente presión sobre los recursos compartidos y el aumento de la
contaminación son resultados inevitables del hecho de que "no hay una solución
técnica para el problema de la población". El problema se puede analizar desde la
perspectiva del llamado dilema del prisionero (vea también el problema del jinete
libre). A pesar del pesimismo de los escritores en ese momento y la defensa de
establecer límites al crecimiento de la población, también hubo un optimismo que
refleja la opinión de Mill de que un "estado estacionario" no sería uno de miseria y
declive, sino uno en el que los humanos Podría aspirar a una distribución más
equitativa de los recursos disponibles y limitados. Esto queda claro no solo entre
quienes reconocen los límites al crecimiento económico sino también entre quienes
defienden el cambio a una economía de estado estacionario o al menos quieren que
se tenga más en cuenta la ecología en la economía.

El informe Brundtland pone menos énfasis en los límites que Mill, Malthus y estos
escritores más recientes. Describe la sostenibilidad como un desafío y una
oportunidad para que el mundo sea más social, político y ambientalmente justo. En
la búsqueda de justicia intergeneracional, sugiere que se agreguen nuevos
derechos humanos a la lista estándar, por ejemplo, que "todos los seres humanos
tienen el derecho fundamental a un ambiente adecuado para su salud y bienestar".
El informe también sostiene que “el disfrute de cualquier derecho requiere el respeto
de los derechos similares de los demás y el reconocimiento de responsabilidades
recíprocas e incluso conjuntas. Los estados tienen una responsabilidad hacia sus
propios ciudadanos y otros estados”. Desde la publicación del informe, muchos
escritores han apoyado y defendido la opinión de que la justicia global y económica
requiere que las naciones que se han enriquecido a través de la anterior
industrialización y la explotación ambiental deberían permitir a las naciones menos
desarrolladas oportunidades similares o equivalentes de desarrollo, especialmente
en términos de acceso a recursos ambientales. Según lo previsto en el informe, la

32
idea de desarrollo sostenible se ha integrado fuertemente en la noción de
conservación ambiental. El informe también ha preparado el escenario para una
serie de conferencias, declaraciones y protocolos internacionales posteriores,
muchos de los cuales mantienen el énfasis en las perspectivas para el futuro de la
humanidad, en lugar de considerar la sostenibilidad en un sentido más amplio.

33
Conclusión

Se dice que el medio ambiente es una parte esencial de la vida de cada organismo,
incluso para las entidades legales, es decir, las corporaciones. La vida corporativa
no debe destruir el balance ambiental, sino que debe contribuir en gran medida al
desarrollo sostenible de un país.

Los valores sociales colocados en los bienes y servicios ambientales están


cambiando tan rápidamente que es probable que las estimaciones estén obsoletas
antes de que estén disponibles para su uso. La planificación para el desarrollo
sostenible requiere una estimación del PNB ajustado al medio ambiente. Sin
embargo, a pesar de las irregularidades teóricas, el eslogan para la gestión
ambiental y la contabilidad ambiental ha ganado un beneficio perpetuo inherente a
ella. Además, la creciente conciencia y aceptación de la importancia de los recursos
naturales y ambientales a nivel mundial y nacional ha contribuido al desarrollo de la
gestión ambiental. La valoración de los bienes y servicios ambientales y la
incorporación de datos ambientales a los niveles nacional y corporativo sugieren
diferentes técnicas. En muchos países, las prácticas de divulgación con respecto a
temas ambientales se han vuelto obligatorias. Pero en algunos países, ese mandato
no está en todas partes. Dar un paso internacional y, en particular, formular técnicas
de valoración en relación con los problemas ambientales es ahora una necesidad
urgente. Se pueden emitir directrices obligatorias en todos y cada uno de los países
para incorporarlas en el informe anual de la empresa, incluida la legislación
relacionada con el medio ambiente, como en los países desarrollados [4]. La
dedicación con la que se está realizando el trabajo para el desarrollo de la gestión
ambiental conducirá seguramente a que la gestión ambiental ocupe una posición
más estable y eficaz en el futuro próximo, ya que podría mejorar considerablemente
el valor de la economía como herramienta de toma de decisiones, especialmente
en Determinación de la política nacional. Se espera que la implementación de la
gestión ambiental provoque un cambio en las actitudes y el pensamiento de la
gerencia. A pesar de las dificultades asociadas con la gestión ambiental, existen
muchas pruebas que demuestran que un gran número de países en todo el mundo
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han intentado sinceramente enfrentar los nuevos desafíos y amenazas. La actividad
económica no debe guiarse solo por el "motivo de lucro", sino que también debe
incluir la "calidad de vida" y el "equilibrio ecológico". La clave para un crecimiento
sostenible, por lo tanto, no es proporcionar menos, sino brindar de manera eficiente
con la ayuda del sistema de gestión ambiental.

Para desarrollar la armonización siguiendo la política contable, se puede iniciar un


plan integral en relación con la gestión ambiental para todo tipo de empresas. Crea
una nueva atmósfera con conciencia ambiental en los sectores corporativos y
prepara y publica balances ambientales que allanarán el camino para una mayor
seriedad entre las empresas. Tradicionalmente, muchos costos ambientales
internos no se reconocen, asignan o asignan a las actividades. Se sugiere que a
través de la gestión ambiental, las empresas deben reconocer y controlar
completamente todos los costos ambientales, incluidos los costos mencionados.
Una empresa debe internalizar estos costos anticipándolos y administrándolos. Los
gastos ambientales deben separarse para mejorar la toma de decisiones y la
responsabilidad de las responsabilidades ambientales. Cada empresa debe
concentrarse y reservar una parte de sus fondos para alcanzar el equilibrio
ambiental y ecológico. A menos que se mantengan registros completos sobre el uso
de los recursos naturales y el medio ambiente y sus servicios, no se puede esperar
un desarrollo confiable y sostenible. Por lo tanto, se considera esencial hacer un
esfuerzo para incorporar el efecto de los recursos ambientales en toda la función
comercial de una corporación comercial. La tecnología está disponible hoy para
reducir la contaminación ambiental y debe usarse para corregir el exceso de
brutalidad ecológica y minimizar el grado de contaminación ambiental. Las prácticas
de divulgación actuales de la mayoría de los sectores corporativos en la India no
reflejan completamente el impacto ambiental de los resultados corporativos. Existe
la necesidad y el desafío de que las empresas se vuelvan más ecológicas cuando
nos adaptamos a la industrialización y la globalización. Sólo una empresa
ambientalmente aceptable tiene un futuro seguro. Las empresas que buscan

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ganancias a largo plazo deben considerar un aspecto ecológico en su estrategia y
política de negocios. Cuanto antes se tomen precauciones para protegerlos, mejor
será. El entorno ya contaminado exige su gestión perseverante. Se ha negociado
un gran número de acuerdos internacionales sobre medio ambiente que tienen
efectos comerciales sostenibles. Además, algunos países, incluida la India, están
tomando medidas unilaterales dirigidas hacia la protección del medio ambiente que
también tienen implicaciones comerciales para los países socios. Sin lugar a dudas,
la industria india debe apostar por un mayor nivel de estándares ambientales en el
futuro, ya que la protección ambiental del país necesita dichos estándares, así como
la demanda de importantes

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