Академический Документы
Профессиональный Документы
Культура Документы
ASPECTOS
NEUROPATOLÓGICOS Y MÉDICO-LEGALES
INTRODUCCIÓN
3897
JOSÉ ASO ESCARIO
3898
FRACTURAS Y HEMORRAGIAS TRAS TCE. ASPECTOS NEUROPATOLÓGICOS Y MÉDICO-LEGALES
Estas cifras nos dan idea del problema y subrayan algunos interesan-
tes aspectos médico-legales. Por ejemplo, los casos fatales corresponden
en una gran mayoría a accidentes de circulación, pero son muy frecuen-
tes los TCE tras agresiones, aunque no suelen ser graves. El patrón lesio-
nal más frecuente en las agresiones incluye contusión facial o fractura de
los huesos de la cara, por lo que las lesiones del esqueleto facial deberán
ser investigadas en la autopsia (cosa no demasiado frecuente).
Otro elemento muy importante a mi juicio es que, precisamente por
corresponder las lesiones más graves a accidentes de circulación son
objeto de escasa atención en las autopsias forenses. Ya que la regulación
de la autopsia legal en España en lo referente al accidente de circulación
permite limitar la autopsia a algunas partes o, incluso, prescindir de la
apertura cadavérica, son pocas las veces en que la cavidad craneal es
examinada en detalle por el forense.
Cierto es que la distinción entre lo que se ha dado en llamar autopsia
interna y autopsia externa (limitada esta última sólo al examen externo)
es algo admitido en prácticamente todos los países. Hay trabajos clásicos
en la literatura médico-legal que señalan cuáles son las reglas guía para
el estudio necrópsico de accidentes de circulación, así como las diferen-
tes lesiones tanto externas que pueden orientar sobre la mecánica del
accidente tanto en choques de vehículos como en atropellos, según el
tipo de accidentes (4, 5, 6, 7, 8).
Sin embargo hay bastante consenso en que la llamada «autopsia exter-
na» sólo debería ser realizada en una serie de supuestos o indicaciones
concretas:
Las indicaciones de una autopsia interna son las siguientes (modifi-
cado de 4):
1. Posible relación causal de un accidente previo con una muerte
tardía.
2. Posible demostración de una muerte natural en un sujeto sin sig-
nos externos de lesiones visibles
3. Incompatibilidad o falta de congruencia de las lesiones externas
con la presumible causa de la muerte
4. Sujetos hallados en la vía pública con diagnostico diferencial
entre accidente-agresión-muerte natural
5. Conductor de vehículo
6. Peatón presumiblemente atropellado
7. Otras indicaciones: obtención de muestras para toxicología, indi-
caciones sociales como posibilidad de embarazo o dudas de patologías
previas, petición expresa de los allegados, tasas significativas de tóxicos
3899
JOSÉ ASO ESCARIO
FRACTURAS CRANEALES
Mecanismo de producción
3900
FRACTURAS Y HEMORRAGIAS TRAS TCE. ASPECTOS NEUROPATOLÓGICOS Y MÉDICO-LEGALES
Energía cinética
3901
JOSÉ ASO ESCARIO
3902
FRACTURAS Y HEMORRAGIAS TRAS TCE. ASPECTOS NEUROPATOLÓGICOS Y MÉDICO-LEGALES
3903
JOSÉ ASO ESCARIO
Carga impulsiva
Carga de impacto
3904
FRACTURAS Y HEMORRAGIAS TRAS TCE. ASPECTOS NEUROPATOLÓGICOS Y MÉDICO-LEGALES
RESUMEN
Por su morfología
3905
JOSÉ ASO ESCARIO
ANATOMÍA PATOLÓGICA
Fracturas lineales
3906
FRACTURAS Y HEMORRAGIAS TRAS TCE. ASPECTOS NEUROPATOLÓGICOS Y MÉDICO-LEGALES
3907
JOSÉ ASO ESCARIO
Hematoma subgaleal
3908
FRACTURAS Y HEMORRAGIAS TRAS TCE. ASPECTOS NEUROPATOLÓGICOS Y MÉDICO-LEGALES
FRACTURAS DEPRIMIDAS
3909
JOSÉ ASO ESCARIO
niños y no significa que el objeto productor sea circular, sino que basta
con que sea romo y el cráneo elástico para su producción.
A veces se describe una variedad que se conoce como fractura con-
minuta, en la que el cráneo se halla fragmentado en múltiples trozos.
Ocurren en impactos con alta energía que se disipa en un área relativa-
mente pequeña durante un periodo de tiempo corto. Generalmente, la
fractura es estrellada, radiando desde el lugar del impacto (21).
3910
FRACTURAS Y HEMORRAGIAS TRAS TCE. ASPECTOS NEUROPATOLÓGICOS Y MÉDICO-LEGALES
Herida cráneo-cerebral
Partes blandas
El hueso
La duramadre
El encéfalo
3911
JOSÉ ASO ESCARIO
Fracturas abiertas:
3912
FRACTURAS Y HEMORRAGIAS TRAS TCE. ASPECTOS NEUROPATOLÓGICOS Y MÉDICO-LEGALES
Fracturas cerradas
Longitudinales.
3913
JOSÉ ASO ESCARIO
Transversas
3914
FRACTURAS Y HEMORRAGIAS TRAS TCE. ASPECTOS NEUROPATOLÓGICOS Y MÉDICO-LEGALES
Fracturas de bóveda
3915
JOSÉ ASO ESCARIO
PROBLEMÁTICA MÉDICO-LEGAL
3916
FRACTURAS Y HEMORRAGIAS TRAS TCE. ASPECTOS NEUROPATOLÓGICOS Y MÉDICO-LEGALES
3917
JOSÉ ASO ESCARIO
HEMORRAGIAS TRAUMÁTICAS
Primarias
3918
FRACTURAS Y HEMORRAGIAS TRAS TCE. ASPECTOS NEUROPATOLÓGICOS Y MÉDICO-LEGALES
Por impacto
Hematoma epidural
Características
Se encuentra en el 5-15% de los traumatismos craneales fatales. El
50% corresponden a laceraciones de la arteria meníngea media y en
muchos casos ello deriva de una fractura de la escama del temporal. Sin
embargo, puede dañarse esta arteria sin fractura. En la serie de TREIL
et al. (34), compuesta por pacientes con rotura de la arteria meníngea
media, el 20% no tenía evidencia de fractura craneal.
En el niño pueden no estar acompañadas de fractura por razones de
mayor elasticidad craneal. Generalmente se dan en la región temporal y
solo en el 10% ocurren en la fosa anterior o posterior. Ya que van des-
pegando la duramadre, su morfología es ovoidea o lenticular, lo que los
diferencia de otros hematomas como el subdural. Al crecer aplana el cere-
bro, contrariamente al hematoma subdural, como luego veremos. Estos
hematomas se hacen clínicamente evidentes con 25 a 50 ml de volumen.
En los casos fatales se encuentran volúmenes de 75-100 ml (35).
Sin embargo, estos parámetros no son exactos ya que se ha demos-
trado, por ejemplo que la concurrencia de lesiones asociadas, tales como
contusiones cerebrales u otro tipo de patología expansiva, disminuye el
volumen de coágulo necesario para producir deterioro neurológico (36).
Personalmente he observado a este respecto evoluciones fatales con
sólo 40 gramos de hematoma.
Los de origen venoso evolucionan más lentamente y a veces pueden
reabsorberse.
Problemas médico-legales
Los principales son los siguientes:
1. Etiología del hematoma.
El hematoma epidural es traumático casi sin excepción. Solamente un
mínimo porcentaje de casos se deben a coagulopatía (37). La determina-
ción de la existencia de tal coagulopatía así como la comprobación de
3919
JOSÉ ASO ESCARIO
3920
FRACTURAS Y HEMORRAGIAS TRAS TCE. ASPECTOS NEUROPATOLÓGICOS Y MÉDICO-LEGALES
Hemorragia subaracnoidea
3921
JOSÉ ASO ESCARIO
3922
FRACTURAS Y HEMORRAGIAS TRAS TCE. ASPECTOS NEUROPATOLÓGICOS Y MÉDICO-LEGALES
3923
JOSÉ ASO ESCARIO
3924
FRACTURAS Y HEMORRAGIAS TRAS TCE. ASPECTOS NEUROPATOLÓGICOS Y MÉDICO-LEGALES
Problemas médico-legales
Los hematomas subdurales agudos plantean problemas médico-lega-
les principalmente por su mecanismo de producción.
3925
JOSÉ ASO ESCARIO
3926
FRACTURAS Y HEMORRAGIAS TRAS TCE. ASPECTOS NEUROPATOLÓGICOS Y MÉDICO-LEGALES
3927
JOSÉ ASO ESCARIO
Extraaxiales
Son las que se localizan fuera del neuroeje. Tanto el hematoma sub-
dural como el epidural son extraaxiales. Por el contrario, la contusión y
la hemorragia cerebrales son lesiones intraaxiales.
Intraaxiales
Secundarias
3928
FRACTURAS Y HEMORRAGIAS TRAS TCE. ASPECTOS NEUROPATOLÓGICOS Y MÉDICO-LEGALES
Hemorragias de Duret
Son hemorragias secundarias a compresión del tronco del encéfalo
pur una hernia cerebral. Asientan el la línea media, lo que ayuda a dife-
renciarlas de otras variedades de hemorragia.
Infartos hiperperfundidos
En ocasiones no se trata de verdaderas hemorragias sino de infartos
que han dañado la pared vascular y han originado, secundariamente, un
sangrado. Hay que tener en cuenta esta posibilidad principalmente en
hemorragias diferidas.
3929
JOSÉ ASO ESCARIO
BIBLIOGRAFÍA
3930
FRACTURAS Y HEMORRAGIAS TRAS TCE. ASPECTOS NEUROPATOLÓGICOS Y MÉDICO-LEGALES
23 TANG R.A., KRAMER L.A., SCHIFFMAN J., WOON C., HAYMAN L.A., PARDO G.: (1994).
Chiasmal trauma: Clinical and imaging considerations. Surv Ophthalmol, 34(4):
381-383.
24 KAWAI K., AOKI M., NAKAYAMA H., KOBAYASHI K., SANO K., TAMURA A.: (1995). Posterior
pituitary hematoma in a case of posttraumatic diabetes insipidus. Case Report. J
Neurosurg, 83(2): 368-371.
25 MILLMAN B., GIDDINGS N.A.: (1994). Traumatic carotid-cavernous sinus fistula with
delayed epistaxis. Ear Nose Throat J, 73(6): 408-411.
26 GOODWIN J.R., JOHNSON M.H.: (1994). Carotid injury secondary to blunt head trauma:
Case Report. J Trauma, 37(1): 119-122.
27 HISS J., KAHANA T.: (1995). The medico-legal implications of bilateral cranial fractures
in infants. J Trauma, 38(1): 32-34.
28 COURTAT P., PEYTRAL C.: (1989). Diagnostic et évaluation des syndromes vertigineux
après traumatisme cranio-cervical. Revue Francaise du Dommage Corporel, 15-2:
135-142.
29 HEIN P.M., SCHULTZ E.: (1989). Die sturtzbedingte schädelhirnverletzung. Beitr Geritchl
Med, 47: 447-450).
30 HEIN P.M., SCHULTZ E.: (1990). Contrecoup fractures of the anterior cranial fossae as a
consequence of blunt force caused by a fall. Acta Neurochir, 105:24-29.
31 MCELHANEY J.H., HOPPER R.H., NIGHTINGALE R.W. ET AL.: (1995). Mechanisms of basilar
skull fracture. J. Neurotrauma, 12:669-678.
32 MERIGNARGUES G., GOT C., TARRIERE C., HONNART F., ET AL.: (1975). Nouv. Press Med, 4
(31): 2245-2248.
33 CONTOSTAVLOS D.L.: (1998). Exsanguination from impact head trauma; the explana-
tion for the «Empty Heart»’ sign. Forensic Science International 95:201–212.
34 TREIL J., MOREL C., BONAFE A. ET AL.: (1977). Traumatic rupture of the middle menin-
geal artery. Angiographic appearances. A review of 30 cases. J Neuroradiol, 4: 399-
414.
35 LEETSMA J.E.: (1988). Forensic Neuropathology. New York. Raven Press.
36 CORDOBÉS F., DIAZ-LOBATO R., RIVAS J.J., MUÑOZ M.J., CHILLON D., PORTILLO J.M., LAMAS
E.: (1981). Observations of 82 patients with extradural hematoma. Comparison of
results before and after the advent of computerized tomography. J Neurosurg, 54:
179-186.
37 GRABEL J.C., SACHER M., ROTHMAN A.S.: (1989). Bilateral extradural hematomas in a
thrombocytopenic infant receiving anticoagulants. Case report. Neurosurgery 25:
828-830.
38 ASO J.: (1999): Los traumatismos craneales. Aspectos médico-legales y secuelas.
Editorial Masson. Barcelona.
39 GUY G., FOURNIER H.D., MERCIER P.H., MENEI P., ALHAYEK G.: (1994). L’hématome extra-
dural. Mythes et réalites à propos de 3 observations exemplaires. J. Chir, 131(2): 527-
531.
40 TAKENAKA N., MINE T., SUGA S., TAMURA K., SAGOU M., HIROSE Y., OGINO M., OKUNO T.,
ENOMOTO K.: (1990). Interpeduncular high-density signal in severe shearing injury.
Surg Neurol 34(1): 30-38.
3931
JOSÉ ASO ESCARIO
41 FUJITSU K., KUWABBARA T., MURAMOTO M., HIRATA K., MOCHIMATSU Y.: (1988): Traumatic
intraventricular hemorrhage: Report of twenty-six cases and considerations of patho-
genic mechanisms. Neurosurgery, 23(4):423-430.
42 DIAZ F.F., DOUGLAS HY J.R., LARSON D., ROCKSWOLD G.L.: (1979). Early diagnosis of
delayed osttraumatic intracranial hematomas. J Neurosurg, 50 :217.
43 SPRICK C., BETTAG M., BOCK W.J.: (1989). Delayed traumatic intracranial hematomas.
Clinical study of seven years. Neurosurg Rev 12 (Suppl 1): 228-230.
44 SAWAUCHI S., MURAKAMI S., TAMI S., OGAWA T., SUZUKI T., ABE T.: (1996). Acute subdural
hematoma caused by profesional boxing. No Shinkei Geka 24 (10): 905-911.
45 FONT C.R.: (1992). Cráneo y caída casual: Perfiles. Rev Esp Med Legal, XIX 72-73:
221-226.
46 FONT, C.R.: (1992). Caída casual o asesinato: Diagnóstico diferencial. Medicina y
Seguridad en el Trabajo, 156:56-64.
47 FONT, C.R.: (1992). Indice homicidio/caída: Diagnóstico diferencial. Medicina y
Seguridad en el Trabajo, 155:77-83.
3932