Вы находитесь на странице: 1из 73

FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA – FUCLA

PROCESOS DEMOCRÁTICOS

ADRIANA MARIA ARBOLEDA BETANCUR

2010
PROCESOS DEMOCRÁTICOS

I. FICHA TÉCNICA – IDENTIFICACIÓN


Nombre de la institución: FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA
Nombre de la Asignatura: Procesos Democráticos
Nombre del autor del módulo: Adriana María Arboleda Betancur
Programa Académico: Teología, Lic. Educación Religiosa,
Antropología y Trabajo Social
Campo de formación: Socio humanístico
Número de créditos 2
Ciudad Medellín
Fecha de Elaboración 2010

II. JUSTIFICACIÓN DEL CURSO


El nuevo concepto de ciudadanía exige la interacción entre individuos y sociedad, en una
relación dinámica que supone una dimensión comunitaria de la misma, desligada del atributo
de la nacionalidad. En tan sentido la democracia se fortalece con ciudadanos y ciudadanas que
aportan desde la exigibilidad de sus derechos, especialmente desde la participación directa
para la toma de decisiones, pero además actuando como verdaderos veedores del
cumplimiento de los principios democráticos consagrados en la Constitución política. De esta
manera podemos acercarnos a lo que otros han llamado las ciudadanías democráticas, donde
dichas ciudadanías realmente existen y desaparece el ideal impuesto por el modelo de
ciudadano cívico donde las personas son simples y pasivos acatadores de normas construidas
desde los ejes de poder dominante. Por el contrario, las personas conscientes de su inserción
en la sociedad aportan en la construcción de nuevos referentes interpretativos y de acción
política democrática1.

El módulo que te dispones a estudiar pretende brindar elementos teóricos sobre la teoría del
Estado, del poder, la democracia y la gobernabilidad, a la luz de los nuevos conceptos
constitucionales que suponen la legitimidad de sus gobernantes en tanto reconozcan los
derechos humanos, los derechos de los pueblos y el reconocimiento de las distintas
identidades y diversidades individuales y colectivas que conforman la sociedad. Además
pretende que la discusión de los temas permita el análisis de la realidad compleja que vive el
país, de tal forma que como estudiantes asuman compromisos académicos y éticos para la
superación de los conflictos que vive el país.

III.OBJETIVOS GENERAL DEL CURSO


Contribuir a que los estudiantes se acerquen al conocimiento teórico de diferentes categorías
políticas y filosóficas y puedan aportar al debate sobre el papel de la ciudadanía y la ética en
los llamados Estados modernos.

Arboleda, Adriana. Ponencia para estudiantes de trabajo social de la facultad de Humanidades de la Fundación Universitaria Claretiana
FUCLA. Agosto de 2008.
2 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA
PROCESOS DEMOCRÁTICOS

IV. COMPETENCIAS A DESARROLLAR


Una vez el estudiante, ha aprehendido los fundamentos teóricos del Estado, el poder, los
distintos derechos y acciones propias de la participación democrática, podrá desarrollar las
siguientes competencias sico-afectivas y transversales que le permiten obtener el logro de:

 Habilidades interpretativas

 Habilidades propositivas

 Habilidades argumentativas

De las distintas problemáticas sociales y de los mecanismos de participación ciudadana


consagrados en la Constitución Política de Colombia.

OBJETIVOS ESPECÍFICOS DE APRENDIZAJE

Examinar las diferentes categorías políticas que determinan la realidad del poder público en
cualquier Estado y que influyen en la realidad de la sociedad contemporánea y la construcción
de las nacionalidades e identidades.

Reflexionar y debatir la teoría democrática y constitucional, a la luz de la Constitución


colombiana de 1991 y los nuevos conceptos de ciudadanía activa y solución pacífica de los
conflictos.

Brindarle a los estudiantes herramientas teórica de la teoría política, que le permitan entender
y debatir la realidad del mundo, especialmente la situación conflictiva del país. Al finalizar el
curso los estudiantes estarán en capacidad de diferenciar los discursos políticos e ideológicos y
tomar posturas sobre temas que representen la defensa de los principios democráticos y los
derechos humanos en el Estado Social y Democrático de Derechos.

HABILIDADES INTELECTUALES

 Que sea consciente de la importancia de la otredad en la configuración permanente de su


ser.

 Que le dé un lugar significativo en su vida a la dimensión política como práctica para


dirimir los conflictos sociales y para definir los destinos colectivos.

 Que tenga una visión renovada de riqueza, de corte más ontológico y humanista.

 Que pueda discutir críticamente el concepto de desarrollo a partir de los modos de


producción.

 Que se consciente de los problemas estructurales del mundo contemporáneo en política,


economía y ecología.

HABILIDADES INTERPERSONALES

 Que tenga en cuenta el conocimiento cabal y riguroso de la condición humana para la toma
de decisiones administrativas y profesionales.

3 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

 Que desarrolle habilidades emocionales que propicien el diálogo y el reconocimiento entre


los seres humanos.

 Que tenga capacidad de elección y auto dirección inteligentes, que aprenda críticamente y
que evalúe de manera positiva las contribuciones de los demás.

 Que tenga un conocimiento básico de su entorno y de los mecanismos de participación en


las esferas correspondientes.

HABILIDADES EN LA COMUNICACIÓN

 Que sea capaz de leer, escribir, escuchar y leer efectivamente, incluyendo la sensibilidad
para diferencias de lenguaje y de cultura.

4 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

V MAPA CONCEPTUAL
PROCESOS DEMOCRÁTICOS

UNIDAD 1

CATEGORÍAS POLÍTICAS QUE ORIENTAN EL ESTADO MODERNO


OBJETIVO ESPECÍFICO

Que el estudiante reconozca que el proceso histórico que dio origen a las instituciones políticas modernas surge del rechazo a las
formas absolutistas y autoritarias al poder político ejercido en la edad media y se inspira en nuevos conceptos de gobierno y del papel
del ciudadano y las ciudadanas.

INDICADOR DE EVALUACIÓN:

El estudiante estará en capacidad de analizar las instituciones modernas del Estado, las formas de gobierno y los modelos de
producción a la luz de los procesos emancipatorios de la edad media y la modernidad.

El estudiante estará en capacidad de hacer una definición de términos básicos a través de la elaboración de un ensayo que recoja uno
de los temas abordados y de cuenta de la integración de dichos conceptos en la realidad política actual.
PROCESOS DEMOCRÁTICOS

Los documentos de apoyo son:

MAPA CONCEPTUAL

7 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

1. CONCEPTOS HEREDADOS DE LA MODERNIDAD


El siglo XVII hizo su entrada triunfal en el mundo introduciendo conceptos, ideologías y formas
de gobierno que influenciaron toda la humanidad y que hasta el día de hoy se siguen
debatiendo y exigen de la sociedad, no sólo que participen del debate, sino que se posicionen
para garantizar que no retrocedamos al oscurantismo que representan los poderes absolutistas
o dictatoriales. El principal de estos conceptos es de la democracia, forma de gobierno que se
predica en la mayoría de los Estados y cuyo patrimonio se sustenta en tres elementos
jurídicos: el principio de la separación de poderes, el régimen representativo y el principio de
la legalidad. Estos tres pilares constituyen la base del constitucionalismo y la fuerza legal del
demoliberalismo. La nueva realidad política no sólo replantean las formas de gobierno
existentes, sino que suponen un cambio de toda la sociedad que empieza a defender principios
como el sufragio universal, impensables en las monarquías de la edad media.

Pero para llegar a estos conceptos hubo muchas luchas y antecedentes históricos que
moldearon las condiciones para ello. Concretamente la revolución francesa inauguró los
conceptos de solidaridad, fraternidad e igualdad que determinan la política actual. Sin
embargo, una de las grandes obras del siglo XX cuestiona el ejercicio del poder en
comunidades disciplinadas que atentan contra la dignidad humanidad, que se sigue
imponiendo en los llamados Estados moderno. Estamos hablando de Vigilar y Castigar, escrita
por Michel Foucault, del cual extraemos la introducción que refleja la temeridad y la
arbitrariedad con los seres humanos2.

Algunos autores señalan que dicha obra no sólo es un cuestionamiento a los límites de la
acción penal, sino una denuncia profunda de las formas de autoritarismo que se mantienen. La
llamada “historia política de los cuerpos” es la historia de la infamia y expresa una crítica al
ejercicio del poder por parte de los Estados, tal como lo expresa el mismo autor en Microfísica
del poder”, otra de sus obras famosas:

‘Hay que admitir en suma que este poder se ejerce más que se posee, que no es el
“privilegio” adquirido o conservado de la clase dominante, sino el efecto de conjunto de
sus posiciones estratégicas, efecto que manifiesta y a veces acompaña la posición de
aquellos que son dominados. Este poder, por otra parte, no se aplica pura y
simplemente como una obligación o una prohibición, a quienes “no lo tienen”; los
invade, pasa por ellos y a través de ellos; se apoya sobre ellos, del mismo modo que
ellos mismos, en su lucha contra él, se apoyan a su vez en las presas que ejerce sobre
ellos.(...) El derrumbamiento de esos “micropoderes” no obedece, pues, a la ley del
todo o nada; no se obtiene de una vez para siempre por un nuevo control de los
aparatos ni por un nuevo funcionamiento o una destrucción de las instituciones; en
cambio, ninguno de sus episodios localizados puede inscribirse en la historia como no
sea por los efectos que induce sobre toda la red en la que está prendido” 3

El surgimiento de la modernidad supuso entonces un serio cuestionamiento al modelo


jerárquico y centralizado del poder concentrado en la figura del monarca. El punto de quiebre
lo representan las llamadas revoluciones burguesas que plantean un cambio de ideología al
otorgarle atributos al ciudadano que hasta el momento sólo ostentaba el rey, además articula
cultural e ideológicamente a los intelectuales franceses e ingleses que unidos impulsan el
pensamiento de la Ilustración como oposición al absolutismo impuesto desde la nobleza

Actividad Nó 1 al final del Módulo.


3
Foucault, M., Microfísica del poder, La Piqueta, Madrid, 1992
PROCESOS DEMOCRÁTICOS

europea. El movimiento de la ilustración se inició en Francia y luego se expendió por toda


Europa influyendo el siglo XVII y XVIII con principios como igualdad, libertad y fraternidad,
defendidos por la naciente burguesía y determinantes en la nueva concepción de gobierno y
poder. Ilustración, Renacimiento y Revolución, tres palabras que cuestionan el absolutismo,
pero también la idea del poder divino o sagrado. Por el contrario, y como lo dice Foucault,
nada hay más material que el poder. Por ello un concepto laico del poder termina cuestionando
todas las instituciones e imponiendo nuevos paradigmas en las sociedades modernas.

Así mismos se desarrollo el concepto del Racionalismo político que impregna los siglos
venideros en la literatura, la filosofía, la política, la ciencia y la economía, señalando que todo
está determinado por la razón y el desarrollo de las ideas por parte de los hombres y mujeres.
El concepto de racionalismo está ligado a la idea materialista de la realidad, es decir que sólo
existe aquello que el ser humano puede ver, comprender y racionalizar. Es por ello que los
principios cristianos son transformados en virtudes laicas sostenidas en el amor al prójimo y
los derechos ciudadanos, contenidos en las primeras cartas de derecho.

1.1. LA IGUALDAD

Todos los hombres son iguales por naturaleza, así proclama la revolución francesa el derecho
más sagrado para sociedad de entonces. Defendida, entre otros, por Juan Jacobo Rousseau,
sostiene que todos los ciudadanos tienen derecho a la participación y a gobernar puesto que
están dotados del poder natural con que nacen todos los hombres, poder que sólo puede ser
delegado por voluntad libre y expresa del titular permitiendo que la libertad se mantiene por
que “libremente” ha enajenado sus derechos a la sociedad. De esta manera se garantiza que
no haya opresión puesto que el gobernante está sujeto a la opinión de quienes lo han delegado
para dicha tarea.

El concepto está ligado a una idea formal que expresa la igualdad de todos ante la ley, tal
como se desprende de la Declaración de los Derechos del Hombre y el Ciudadano de 1789 y
que se diferencia de la igualdad material, en tanto ésta última hace referencia a la igualdad de
las condiciones materiales para garantizar la satisfacción de todas las necesidades, esto es, el
acceso a los bienes de producción y de consumo.

En palabras del profesor Norberto Bobbio, libertad e igualdad están íntimamente ligadas al
Estado liberal, por ello desde sus inicios el derecho inspira dos principios básicos:

 La igualdad frente a la ley:

El principio de igualdad sólo se viola cuando se trata desigualmente a los iguales. De ahí que lo
constitucionalmente vetado sea el trato desigual ante situaciones idénticas. Ha de reunir el
requisito de la razonabilidad, es decir, que no colisione con el sistema de valores
constitucionalmente consagrado. En palabras de la Corte Constitucional colombiana, estar en
igualdad de condiciones frente a la ley se traduce en igualdad de trato e igualdad de
oportunidades para todos. Del respeto al derecho a la igualdad depende la dignidad y la
realización de la persona humana, por eso las normas que otorgan beneficios, imponen cargas
u ocasionan perjuicios a las personas en forma injustificada, contrarían el sentido de la justicia
y del respeto que toda persona merece.

Los últimos desarrollos exigen que el cumplimiento del principio y derecho de igualdad tenga
en cuenta las diferencias de tipo económico, social, político y cultural para hacer posible la

9 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

justicia. Es decir, que la igualdad en ciertas circunstancias permite el trato desigual como una
forma de hacer posible la dignidad humana.

La igualdad de derechos:

El paradigma de los derechos humanos vino ligado a su universalidad y a la concepción


iusnaturalista de los mismos. Es decir, todos los seres humanos nacen con derechos y por
tanto son imprespcriptibles. Las nuevas concepciones que cuestionan el naturalismo han
enriquecido esta visión de igualdad al plantear la necesidad de que la ley garantice a todos los
ciudadanos el reconocimiento de los mismos y las condiciones materiales para su realización.
En una aparente dicotomía hoy no se concibe la igualdad de derecho si a la vez no se reconoce
las diferencias étnicas, culturales, de género y religiosas. La realización de todos los derechos
sólo en posible en la medida que dicho reconocimiento suponga el reconocimiento de la
divergencia. A manera de Sieyes:

“Los derechos políticos, como los derechos civiles, deben corresponder a las cualidades
del ciudadano. Esta propiedad legal es idéntica para todos, sin consideración sobre las
mayores o menores propiedades con que cada uno pueda contar por su fortuna y para
sus bienes. Todo ciudadano que reúna las condiciones establecidas para ser electo tiene
derecho a ser representado, y su representación no puede ser una fracción de la
representación de otro. Ese es un derecho; todos lo ejercen en igualdad, de la misma
manera que están por igual protegidos por la ley que han contribuido a elaborar”.4

1.2. LA LIBERTAD

La libertad es un derecho defendido o luchado por muchos en la historia de la humanidad, pero


es en el siglo XVII y XVIII cuando se consolida como un principio fundamental de los nacientes
Estados nación. En Francia reconocen algunas de las categorías esenciales de este derecho: la
libertad de cultos, de prensa o de expresión, de trabajo, que además da un salto cualitativo al
proclamar en la nueva Constitución que estos derechos serán para todos los ciudadanos y por
tanto protegidas por la ley. No obstante, se necesitaron otros siglos para que la libertad
individual fuera plenamente reconocida, al menos formalmente, como un derecho universal,
dando paso a la abolición de todas las formas de esclavitud y privación injusta de la libertad.

La libertad de opinión surge como una protesta contra el pensamiento único de la edad media
que otorgaba a la iglesia católica el dominio sobre lo que podía ser considerado como verdad
en todos los ámbito como la ciencia, la astrología, la, botánica, entre otros, no sólo en lo
religioso; y que se expresó en prácticas atroces como el tribunal de la inquisición que
pretendió dominar el espíritu humano y atacar cualquier forma de pensamiento diverso o de
oposición a las posturas absolutistas de la época. La lucha por la libertad expresada en las
corrientes Humanistícas, de la ilustración, del Renacimiento y la Reforma, se han extendido
hasta los tiempos modernos, donde el derecho sigue siendo materia de debate en relación con
su pleno reconocimiento material.

Por lo anterior, la revolución francesa hizo cobrar conciencia en primer término del derecho a
la libertad de expresión y de conciencia como una forma de oposición radical contra el
pensamiento dictatorial impuesta por gobiernos en particular o cualquier estructura de poder
en general. Del otro lado de la moneda, el derecho otorga a los ciudadanos y ciudadanas el
derecho a expresar libremente sus opiniones, especialmente cuando éstas están dirigidas
4
Sieyes, Emmanuel. ¿Qué es el tercer Estado? Ensayo sobre los privilegios.
10 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA
PROCESOS DEMOCRÁTICOS

contra el mismo gobierno, ésta libertad se hace extensiva a la libertad de prensa, de radio, de
información, de cine donde además se exige y protege la independencia y autonomía de dichos
medios y se prohíbe cualquier tipo de censura gubernamental.

En conclusión, los derechos de libertad, pregonados por el Estado liberal, son todas aquellas
prerrogativas que parten de reconocer la autonomía del ser humano y por ende la negación del
poder del Estado sobre el individuo. Algunos autores han definido el derecho a la libertad como
el valor social fundamental, por virtud del cual la persona humana tiene el poder de
autodeterminación respecto de toda fuerza exterior, fijando, en consecuencia, el ámbito de
ejercicio de su propia acción.

En sentido negativo, los derechos de libertad significan la ausencia de impedimentos de


cualquier tipo (jurídicos, políticos, económicos o religiosos) que restrinjan o impiden la
actuación del la persona. Y la dimensión positiva supone la posibilidad de participar
activamente en la vida social, política y económica del Estado.

El derecho a la libertad conlleva el reconocimiento de otros derechos:


 La negación de cualquier forma de esclavitud
 El derecho a la ciudadanía
 La libertad de pensamiento, de expresión y de información
 La libre asociación y libertad de reunión
 La libre circulación y residencia

1.3. LA FRATERNIDAD

El concepto de Fraternidad integra el tríptico de la revolución francesa y se afirma como un


nuevo principio ya no de naturaleza cristiana sino de orden político, que sin embargo se fue
desvaneciendo en el ejercicio de lo público. La llegada de la industrialización y el
posicionamiento del capitalismo dejaron por fuera esté principio que entraba en serias
contradicciones con los valores supremos de la libertad económica y la propiedad privada. Las
constituciones modernas lo han rescatado como principio fundamental de los Estados
democráticos que pretende imponer una carga pública para atender a los individuos y sectores
de la sociedad con menores recursos y cuyas derechos estén siendo afectados por la exclusión
económica y/o social.

Algunos teóricos ligan la fraternidad con el principio de solidaridad y la realización de la justicia


material. Las sociedades mayormente industrializadas, en las cuales la producción de bienes
(materiales y culturales) es exorbitante respecto a las necesidades de la población y su poca
capacidad de consumo, intentan implementar políticas públicas que permitan la realización
satisfactoria de dichas necesidades y de paso la realización de la democracia, entendida como
el bienestar de todos y todas en la sociedad al ser superada la desigualdad.
En conclusión la fraternidad como principio político parece poco viable y después de la
ilustración siguió el camino de la ética social y sólo en algunos casos de la ética política,
distanciada de un mundo que privilegia el individualismo, la riqueza y el uso de la fuerza como
solución de los conflictos sociales.

En palabras del profesor Cristóbal Orrego “Lógicamente, cuando las comunidades políticas
están muy diferenciadas también se pueden encontrar sustitutos de la fraternidad, que, como
decía el profesor Baggio, sean fraternidades encapsuladas o limitadas al interior de un
determinado grupo. El profesor Baggio mencionaba a la masonería; pero también podemos

11 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

considerar, como hace uno de los artículos aquí recogidos, los modos de considerarse
hermanos dentro de determinadas fronteras (paradigmáticamente, la pertenencia a una
patria), que, llevados a sus extremos, pueden ser las distintas formas de nacionalismo. De
manera que la fraternidad puede constituir un valor positivo y hasta puede ser una categoría
de convivencia, en la medida en que exista una estructura, un contexto que se cierra a lo que
es completamente universal, pero, al mismo tiempo, con la condición de que se eviten los
extremos de la exclusión de los otros (los extranjeros)”.

EL PODER COMO CONCEPTO POLITICO

El profesor Jesús Vallejo Mejía define el concepto de poder, ligado a la teoría del Estado, como
“una relación social en la que la voluntad de una persona o un grupo de personas impone, de
grado o por la fuerza, la obediencia de otro u otros sujetos. Supone este fenómeno, por
consiguiente, quien mande y quien obedezca, si bien en la práctica esta relación es más
compleja y no puede siempre mirársela como si fuese de una sola vía, pues entre los que
mandan y los que obedecen se traban interacciones de diversa clase” 5

El poder, como ejercicio real de fuerza, se impone de manera desigual en las distintas
comunidades y en la sociedad en general, por ello el ideal de democracia basada en la igualdad
supone la distribución equitativa del mismo y la autonomía de las personas para retenerlo o
delegarlo. Este planteamiento es el que desarrollan los intelectuales de los siglos XVII y XVIII
al plantear la idea de un Estado moderno, liberal y democrático, que garantice la participación
de todos los ciudadanos y gobernantes que representen a los mismos en las instituciones del
Estado. Sin embargo, este poder, por ser delegado, está sometido a reglas que determinan su
titularidad, los modos de adquisición, los procedimientos para su ejercicio y controles
taxativos. Por supuesto que esta definición expresa una idealización del concepto que se
plasma en leyes y constituciones, pero que evita la discusión necesaria sobre los factores
reales de poder que mueven las sociedades tal como lo expresa Ferdinand Lasalle en su obra
¿Qué es una constitución? Donde deja claro como éstos rigen en toda sociedad, influenciando
las leyes, los gobiernos y las constituciones mismas.

El instrumento de poder político del rey, el Ejército, está organizado, puede reunirse a
cualquier hora del día o de la noche, funciona con una magnífica disciplina y se puede utilizar
en el momento en que se desee; en cambio, el poder que descansa en la nación, señores,
aunque sea, como lo es en realidad, infinitamente mayor, no está organizado: la voluntad de
la nación, y sobre todo su grado de acometividad o de abatimiento, no siempre son fáciles de
pulsar para quienes la forman: ante la inminencia de una acción, ninguno de los combatientes
sabe cuántos se sumarán a él para darla. Además, la nación carece de esos instrumentos del
poder organizado, de esos fundamentos tan importantes de una Constitución, a que más
arriba nos referíamos: los cañones. Cierto es que los cañones se compran con dinero del
pueblo: cierto también que se construyen y perfeccionan gracias a las ciencias que se
desarrollan en el seno de la sociedad civil, gracias a la física, a la técnica, etc. Ya el solo hecho
de su existencia prueba, pues, cuán grande es el poder de la sociedad civil, hasta dónde han
llegado los progresos de las ciencias, de las artes técnicas, los métodos de fabricación y el
trabajo humano. Pero aquí viene a cuento aquel verso de Virgilio: Sic vos non vobis! ¡Tú,
pueblo, los haces y los pagas, pero no para ti! Como los cañones se fabrican siempre para el
poder organizado y sólo para él, la nación sabe que esos artefactos, vivos testigos de todo lo
que ella puede, se enfilarán sobre ella, indefectiblemente, en cuanto se quiera rebelar. Estas
5
Vallejo Mejía, Jesús. Curso de teoría constitucional, teoría del Estado. Universidad de Antioquia. 1998.
12 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA
PROCESOS DEMOCRÁTICOS

razones son las que explican que un poder mucho menos fuerte, pero organizado, se sostenga
a veces, muchas veces, años y años, sofocando el poder, mucho más fuerte, pero
desorganizado, de la nación; hasta que ésta un día, a fuerza de ver cómo los asuntos
nacionales se rigen y administran tercamente contra la voluntad y los intereses del país, se
decide a alzar frente al poder organizado su supremacía desorganizada.6

El cuestionamiento al absolutismo supuso que las nuevas corrientes políticas y filosóficas se


plantearan los límites jurídicos del poder estatal, para ello se hacía necesario disolver la
monarquía e imponer nuevas instituciones políticas que defendieran este nuevo concepto. Por
lo anterior la idea de las democracias modernas, el discurso de los derechos humanos, la
participación política de los ciudadanos y la división de poderes, no puede ser desligada de
esta nueva idea del poder que parte de un ideal de justicia, igualdad y libertad que ha sido
reconocido formalmente en todas las constituciones, pero que no representa una realización
material que la humanidad hoy pueda predicar.

La nueva naturaleza del poder también permitió el surgimiento de la teoría de la soberanía del
pueblo, al determinar que el poder reside en el pueblo, de él emana, él es quien lo cede,
delega y limita, por lo que una nación democrática puede predicarse si ella es la expresión de
la voluntad de este pueblo. En parte el planteamiento ya había sido abordado por Aristóteles
ya que el razonamiento plantea que si el poder político está establecido en beneficio de todos,
todos deben tomar parte en su establecimiento y control. Pero no todo es tan simple.
Rousseau explica en su teoría del Contrato social que la sociedad política es el resultado de un
pacto –contrato- entre los gobernantes y el pueblo. A través de éste el pueblo renuncia a una
parte de sus derechos, especialmente de su trozo de poder individual a cambio de vivir
pacífica y tranquilamente en sociedad. De ésta manera ya no hay absolutismo, por tanto
tampoco hay subordinación, ni injusticia, ni desigualdad, ya que los ciudadanos soberana y
libremente han delegado en los gobernantes la autoridad y el poder político.

“Esta tesis, que se llama de la soberanía popular, le da como sede a la soberanía la


universalidad de ciudadanos, ella aparece como la suma de las soberanías individuales. Se
opone a la tesis de la soberanía de la nación que acogió la revolución francesa. Este principio
fundamental de derecho francés en que André Hauriou quiere ver el gusto por la organización
nacional, y que no parece preocupar a otros derechos, consiste en designar al conjunto de los
individuos, como haciendo un solo cuerpo, titulares de la soberanía. La soberanía, entonces,
no existe fraccionada en cada uno de los habitantes de un país, sino que reposa en todo el
cuerpo social que se denomina nación”7

El poder soberano del Estado tiene como dos de sus características fundamentales el poder de
auto organización, que le permite regularse autónomamente, sin sujeción a poderes
extranjeros o personalistas; y de otro lado el poder de expedir normas jurídicas a partir de
procedimientos establecidos con anterioridad.

El poder público otorga facultades al Estado para realizar todo tipo de actos a través de sus
instituciones e incluso por medio de la fuerza al otorgársele legitimidad para organizar ejércitos
y disponer de armas para la defensa o el ataque en caso de ser necesario. En la práctica las
instituciones estatales centralizan el poder y lo integran socialmente para garantizar la
permanencia de las normas y/o pactos definidos. Como veremos más adelante, la
concentración del poder por parte de las instituciones estatales no es garantía de prácticas

6
Lasalle, Ferdinand. Qué es una Constitución.
7
Vidal Perdomo, Jaime. Derecho constitucional general. Universidad Externado de Colombia. 1978.

13 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

pacíficas, no de soberanía popular, por el contrario la realidad dolorosamente ha enseñado que


los peores conflictos y vulneración de derechos se han vivido en medio de democracias
formales y que en otras ocasiones los mismos Estados han degenerado en acciones violentas
contra sus propios ciudadanos.

2. TEORÍA DEL ESTADO


Muchos autores coinciden en señalar a Maquiavelo como el primero en referirse al concepto de
Estado, tal como lo entendemos hoy: “todos los Estados, todos los dominios, que han tenido y
tienen un imperio sobre los hombres son o repúblicas o principados” 8 pero es entre los siglos
XVIII y XIX cuando se consolida plenamente lo que hoy llamamos teoría del Estado. La
definición ha sido diversa y representa teorías jurídicas, filosóficas y sociológicas que se
discuten en el ámbito político y académico. Veamos algunas de ellas:

Tabla No. 1. Definiciones sobre el Estado


AUTOR DEFINICION
PARA LUIS “El Estado es una organización política que engloba a toda la sociedad en
CARLOS sus ordenamientos, con estas características: a) es una organización
SÁCHICA institucionalizada. b) Es una organización personalizada en el campo
jurídico y representativo de la sociedad. c) Es soberana. d) Está en
evolución. Y e) Sirve a, o es trascendida por unos fines”.
JOSÉ ANTONIO El Estado “es un poder político y un complejo institucional organizado sobre
DE GABRIEL un territorio determinado, en el que es capaz de ejercer con una eficacia
razonable el monopolio de la legislación y el uso público de la fuerza sobre
la sociedad o las personas bajo su jurisdicción.”
JELLINEK El Estado es una “Corporación formada por un pueblo, dotado de un poder
de mando originario y asentado en un determinado territorio”.
LEÓN DUGUIT Lo define como un “grupo humano fijo sobre un territorio determinado en
el que los más fuertes imponen su voluntad a los más débiles”.
FISCHBACH El Estado es una “Organización que aspira a la regulación de la convivencia
de un pueblo determinado, asentado sobre un cierto territorio, mediante la
creación de una voluntad dominante sobre la totalidad de los ciudadanos”.
JESÚS VALLEJO “Estado es una institución en la que una colectividad que habita un
MEJÍA territorio determinado se sujeta a un poder legítimo, político y soberano, y
al ordenamiento jurídico establecido o reconocido por dicho poder”.
Max Weber "El estado es el agente que detenta el monopolio de la violencia legítima
dentro de la sociedad".

Otros autores amplían la definición a partir de tres teorías que enfatizan posturas diversas:

2.1. TEORÍA DE LOS TRES ELEMENTOS

Esta es la definición más conocida y aceptada, tanto en el mundo académico, como en la


sociedad en general, como lo podemos constatar en las definiciones antes expuestas. Como su
nombre lo indica el Estado se caracteriza por constar de tres elementos esenciales: territorio,
población y poder, que se articulan en una pirámide de poder.

8
Maquivelo. El Principe.

14 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

Cada uno de los elementos constitutivos del Estado puede ser definido así: 9

El territorio, lugar en el cual el Estado ejerce su soberanía y está constituido no sólo por el
suelo sino por el subsuelo, las áreas marinas y submarinas y el espacio aéreo, el espectro
electromagnético y el segmento correspondiente de la órbita geoestacionaria.

El pueblo, constituido por todas las personas que se encuentran en ese territorio y que por
ello están bajo la influencia de lo determinado por el ordenamiento jurídico.

La soberanía, entendida como la característica del poder estatal que implica que dicho poder
sea supremo en el orden interno e independiente en el orden externo. El derecho, como
instrumento de la soberanía, regula y relaciona estos tres elementos.

Críticos de esta teoría, como E. Stein, señalan que la misma es insuficiente puesto que no
logra explicar objetivamente “qué es lo que hace de un territorio, un territorio estatal, de un
pueblo el pueblo estatal, de un poder el poder estatal, y de los tres elementos heterogéneos
una unidad”. Cuestionamiento que amplían las posturas que entienden el territorio como algo
más que el concepto de tierra o suelo y que lo ligan a las identidades étnicas y culturales, sin
hablar de los nacionalismos recientes que incluso están por encima del mismo concepto de
unidad heterogénea. Además, el mismo concepto de poder, entendido como la fuerza que se
deriva de la población, es cuestionado ya que el reconocimiento de los Estados en la llamada
comunidad internacional está ligado a intereses políticos y económicos que en la mayoría de
los casos la población no puede controlar.

2.2. TEORÍA DE LA INTEGRACIÓN

Esta teoría es de poca aceptación y ha sido defendida, entre otros, por Rudolf Smend, quien
sostiene que “la unidad buscada es de naturaleza espiritual. Los ciudadanos en el Estado
aspiran a vivir juntos en comunidad y acomodan su conducta a esta vida común”. De esta
actitud interna de cada individuo surge una comunidad como realidad espiritual, una especie
de voluntad general que cada uno siente en su propia voluntad y en la voluntad y conducta de
sus conciudadanos y que se manifiesta de modo especialmente claro en el comportamiento de
los órganos de la comunidad, que no actúan para sí mismos, sino para el bienestar de toda la
comunidad. El Estado existe en tanto sus ciudadanos garanticen dicha existencia y los órganos
estatales lo afirmen.

Para Smend la diferencia entre el Estado con otras instituciones es que el primero garantiza su
propia existencia, mientras que las demás requieren de la protección jurídica del Estado para
poder existir. La unidad estatal es necesaria por motivos políticos internos y externos, ya que
en cada territorio debe existir una fuerza ordenadora de última instancia. La Constitución es
para él la ordenación jurídica de la integración política de los ciudadanos en el Estado y, por
ello, también el fruto de la eficacia integradora de sus normas, muy especialmente de sus
valores y derechos fundamentales.

Smend rechaza la teoría convencional de los elementos del Estado (poder, pueblo y territorio)
y coincide con Kelsen en señalar que la misma t concibe el Estado de modo corpóreo, como
una estructura psicofísica y tangible, lo que hace desembocar a la teoría del Estado que parte
de esta fundamentación, desde el principio, en una concepción espacialista y estática. Por otro
9
Vicerrectoría de Docencia. Universidad de Antioquia Medellín – Antioquia. Colombia. 2003

15 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

lado, Smend subraya la importancia política de los preámbulos de las Constituciones y de sus
declaraciones.

2.3. TEORÍA DEL ESTADO COMO UNIDAD DE ACCIÓN

Teoría expuesta por el jurista y politólogo alemán Hermann Heller quien señala que el Estado
es “una unidad de dominación, independiente en lo exterior e interior, que actúa de modo
continuo, con medios de poder propios y claramente delimitado en lo personal y territorial.” 10
De acuerdo con Heller el Estado es semejante a una empresa industrial en la que, mediante
una división del trabajo, sus obreros fabrican productos que cada uno de ellos por separado no
podría obtener aunque se dedicara a ello toda la vida.

Al igual que Smend, Heller coincide en que la unidad de acción se basa en la unidad de
voluntades, pero a diferencia del primero sostiene que sólo se puede hablar de Estado cuando
toda la sociedad integrada llega a una actuación conjunta, a la coordinación de las conductas
de cada uno de sus miembros mediante la formación de órganos. Esta conexión operativa no
absorbe por completo al individuo; siempre queda un ámbito libre de vida privada no
coordinada y para la vida de la sociedad que fluye de la libre coordinación de los grupos. El
volumen del sector de vida coordinada en cada Estado difiere de unos a otros. A aquellos
Estados que imponen una coordinación innecesaria y exhaustiva se los llama totalitarios. Pero
en todos los Estados la coordinación ha aumentado a lo largo del siglo XX como consecuencia
de la manipulación social.

2.4. ESTADO Y NACIÓN

Comúnmente ambos conceptos suelen confundirse y/o usarse como sinónimos, sin embargo es
importante que al estudiar la teoría del Estado tengamos claras las diferencias conceptuales y
políticas que ambas categorías encierran.

Para empezar es importante señalar que la nación suele verse como un atributo del Estado,
pero de acuerdo con las tesis de Stein Rokkan, las sociedades organizadas en Estados sólo
pueden llamarse naciones cuando en el transcurso de su devenir alcanzan algunas
características como: un sistema de valores estandarizado, una creciente movilización y
participación política de la población y avances tendientes a la igualdad en las oportunidades
económicas; señala también que la participación decisiva en este proceso le cabe a las elites
dirigentes, ya que, si bien son ellas las que impulsan básicamente las movilizaciones, limitan,
por otra parte, la ampliación de la participación política y económica de manera que pueden,
incluso bloquear el desarrollo de la nación.

El concepto de Nación está relacionado con la comunidad que se encuentra unidad por vínculos
sociales y no jurídicos, tales como la étnicidad, la identidad, la lengua, la cultura y la historia.
Por ello es que los teóricos señalan que la construcción de nación es un proceso al cual las
sociedades llegan después de construcciones colectivas y no mediante la abstracción de la ley
como puede ocurrir con los órganos estatales. Los pueblos toman conciencia de su identidad
común y por tanto llega a consensos que le permiten construir proyectos políticos, sociales y
económicos comunes; es en este momento cuando hablamos de la constitución de la Nación
como tal. En tal sentido la Nación no requiere de territorio para su existencia, pero si puede
ser éste un motivo de unidad reivindicativa, de articulación y de definición de la Nación misma.
10
Heller, Hermann. "Supuestos históricos del Estado actual"
16 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA
PROCESOS DEMOCRÁTICOS

Piénsese por ejemplo en la actualidad el caso Palestina, del País Vasco o las nacionalidades
indígenas en el continente.

El concepto también ha generado polémicas por las tendencias e intereses con los cuales suele
ser definida. Por ejemplo la concepción esencialista alemana se apoya en criterios raciales,
culturales y espirituales; mientras que la concepción francesa pregona la libre adhesión de los
individuos a la comunidad como su elemento fundante. La confusión entre los conceptos de
nación y nacionalismo utilizados en muchas ocasiones como sinónimos contribuyen al debate.
Los nacionalismos, surgidos con fuerza en el siglo XX, representan ideologías, muchas veces
ligadas a conceptos raciales y territoriales como sucedió en Alemania con el social
nacionalismo que reivindicaba el concepto de raza superior aria y que permitió el surgimiento
de un movimiento político que impuso su poder en todas las instituciones con las
consecuencias que hoy conocemos.

2.5. SURGIMIENTO DEL ESTADO MODERNO

El Estado Moderno se empieza a consolidar entre los siglos XIV y XV, cuando entra en crisis
el feudalismo por las pocas tierras en manos de los señores feudales. La posibilidad de los
reyes de volver a tener las tierras de cultivo, hace que retomen su dominio en algunas zonas
consolidando la monarquías locales, pero a la vez se ven obligados a compartir el poder con
terratenientes también posesionados de sus dominios y con la naciente burguesía que maneja
el comercio, además tienen que aceptar nuevos principios que rigen las relaciones sociales
tales como el reconocimiento de los límites a su poder económico y de mando. En la práctica
es el inicio del reconocimiento que la sociedad debe organizarse en un órgano estructurado y
organizado políticamente, que sea reconocido formalmente por otros Estados y que se
contraponga al autoritarismo y totalitarismos ejercidos por los reyes; los Estados modernos se
estructuran sobre las ruinas y decadencias de las monarquías rechazadas por quienes manejan
los factores reales de poder. De esta transición también surge lo que hoy se conoce como
monarquías constitucionales donde los reyes tienen poder nominal porque existe una
Constitución que regula la división de poderes y la participación democrática.

2.5.1. Características del estado moderno:

El Estado Moderno se caracteriza por los siguientes aspectos:

 Entidad territorial. Ésta se refiere al medio físico que es necesaria para la sustentación
del Estado y debe ser de una magnitud tal que no convierta en demasiado pesadas las
tareas que el Estado debe afrontar. Esta idea es de por sí contraria a las monarquías y el
feudalismo que se fundamentaban en la idea del control territorial absoluto. Por el
contrario los Estados modernos acogen la idea de delimitación territorial reconocida por
otros Estados, lo que no quiere decir que se abandonen las ideas expansionistas y
colonialismo, prueba de ello es la primera y segunda guerra mundial que tuvo dentro de
sus fines la redefinición del control territorial en Europa.

 Establecimiento de un poder central suficientemente fuerte. Se logra suprimir o reducir


drásticamente a los antiguos poderes feudales, entre ellos el propio poder de la iglesia,
que se vincula a lo que actualmente se conoce como proyecto de Estado Nacional. Más
adelante aparece la división de poderes, el sufragio universal y el reconocimiento de
algunos derechos para la población considerada como ciudadana.

17 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

 Creación de una infraestructura administrativa, financiera, militar y diplomática. Se


desarrolla una burocracia administrativa que trabaja impersonalmente para el Estado.
Burocracia y capacidad financiera se retroalimentan. La obtención y administración de
recursos exige personal dedicado por completo a estas tareas de recaudo de impuestos. La
diplomacia se convierte en un instrumento indispensable para las relaciones con las demás
entidades estatales que constituyen un sistema en su conjunto.

 Consolidación de la unidad económica. El Estado debe ser capaz de regular y dirigir la


economía en su propio seno, y con respecto al exterior, implantar un sistema aduanal y
normas precisas que controlen la entrada y salida de bienes.

 Creación de instituciones políticas, económicas y militares. El ejército pasó de estar al


servicio del rey para ser una fuerza que se define como de defensa y protección del Estado
y su soberanía.

2.6. TIPOS DE ESTADO

2.6.1. Estado de derecho:

El Estado de Derecho es un desarrollo del Estado moderno. Con la decadencia de las


monarquías y se consolida el concepto de democracia basado en la idea de que el pueblo tiene
que gobernar directamente o a través de sus representantes elegidos mediante sufragio
universal, es el nacimiento de la democracia representativa. Para lo anterior se requiere una
ley que determine con claridad dicha forma de gobierno, así como la forma en que debe estar
organizado el Estado. A dicha norma se le conoció como Constitución.
Por lo anterior el Estado de Derecho se define como aquel en el que autoridades e individuos
se rigen por el derecho consagrado en la Constitución Nacional, donde se incorporan los
derechos y libertades fundamentales y es aplicado por instituciones imparciales y accesibles
que generan certidumbre a la población. Los contenidos de la definición pueden desglosarse de
la siguiente manera:

18 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

Gráfico No. 1

Desde esta perspectiva tenemos entonces que el Estado de Derecho se caracteriza no sólo por
mantener los elementos integrales del mismo (poder, territorialidad y población), sino por
garantizar la constitución de los poderes públicos que en todo caso se rigen por el Principio
de Legalidad el cual establece que los poderes públicos deben actuar conforme a la ley, de tal
forma que todos sus actos sólo tienen validez en tanto estén acordes a lo señalado por la
normatividad. Dicho principio parte de reconocer que los actos del Estado no pueden incidir
negativamente en los derechos subjetivos limitándolos o extinguiéndolos, sólo así se garantiza
la seguridad jurídica a todos los ciudadanos.

La definición del Estado de Derecho supone una concepción positivista en la cual todas las
contradicciones sociales se resuelven mediante la aplicación de la ley que es el elemento
esencial del poder estatal. La ley es el dios que determina lo que es justo, valido y legitimo,
por ello, el derecho es el atributo esencial del poder soberano del Estado. Los derechos existen
en cuanto estén consagrados en una norma y la ley es legítima de pleno derecho, no puede ser
discutida porque se basa en el poder soberano y supremo del legislador que siempre actúan en
“sabiduría”. Por lo tanto se considera ilegal e ilegítimo todo acto que atente contra la
supremacía de la ley. De esta concepción es famosa la frase del filosofo Hanz Kelsen: “Dura es
la ley, pero es la ley” que posibilitó arbitrariedades como la del partido social nacionalista de
Adolfo Hitler que se legalizó a partir de referendos, normas y una nueva constitución,
aplaudidas por gran parte del pueblo alemán. El positivismo ha sido cuestionado por el
constitucionalismo moderno en la cual la primacía son los derechos y principios
constitucionales como lo ha reconocido la Corte Constitucional colombiana.

19 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

La separación de poderes:

Es la principal característica del Estado de derecho. Pese a que se reconoce que el poder es
uno sólo, la teoría política dice que hay que dividirlo para poder limitarlo y evitar volver al
absolutismo y a los regímenes autoritarios. Para ello, se encomienda su ejercicio a tres
órganos que sean autónomos y se puedan vigilar y controlar entre sí, fijando mecanismos para
que las actuaciones de cada uno estén en el marco legal y constitucional de acuerdo con el
ordenamiento jurídico imperante. En Colombia este principio se encuentra consagrado en el
artículo 113 de la Constitución Política de 1991.

Los tres órganos reconocidos son: el poder legislativo, el poder ejecutivo, y el poder judicial. El
primero, ejercido en condiciones normales por el Congreso (o parlamento en otros Estados), es
el encargado de redactar, promulgar, reformar y derogar las leyes; el segundo, cuyo
responsable es el gobierno de turno, procura el cumplimiento de la ley y se encarga de todos
los actos de gobierno; el tercero, que está a cargo de los tribunales de justicia, administra la
justicia a nombre de la nación. Pero además, la idea de la separación de poderes se ha
pretendido ampliar señalando que si bien existen tres ramas básicas del poder público, junto a
ellas se deben estructurar otros órganos separados que cumplan funciones de preservación de
los principios democráticos como es el Caso de la Corte Constitucional que es ejerce la
salvaguarda de la Carta Magna garantizando su cumplimiento por todas las instituciones.
Igualmente la Defensoría del Pueblo que pretende ser una institución exclusivamente dedicada
a garantizar los derechos humanos de todos los habitantes del país.

La teoría clásica de la división de poderes, reconocida por la mayoría de los Estados modernos,
también suele ser relativa por la característica que toman ciertas formas de gobierno y la poca
autonomía de los poderes públicos. Es el caso de los regímenes presidencialistas, en donde se
dan muchas atribuciones y prerrogativas al Poder Ejecutivo en la figura central del presidente
constitucional que personifica al Estado nación. A diferencia de los sistemas de gobierno
parlamentaristas, en donde es el Poder Legislativo el que se convierte en el primer poder del
Estado, los sistemas presidencialistas en países como el nuestro llegan a reducirse en unas
cuantas personas detentadoras efectivas del poder estatal; esto es, en la persona del
presidente del Ejecutivo y su círculo inmediato de poder. A lo anterior debe agregarse que con
la figura de estados de sitio o de conmoción interior se permite que el presidente de la
república ejerza simultáneamente los tres poderes.

2.6.2. Estado liberal:

El desarrollo de los procesos revolucionarios en Inglaterra, Estados Unidos y Francia, dio


origen a la constitución de un nuevo concepto de Estado conocido como Estado liberal, que
creó una nueva forma de gobernar remplazando al Estado absolutista. Pero igualmente está
relacionado con el surgimiento del capitalismo que propicio el desarrollo industrial y la
ideología de la propiedad privada y el principio de la libre competencia.

El cambio político desplazó la relación Estado – ciudadano. Ya no era el monarca quien


disponía de la vida y libertad de los habitantes, sino que éstos podían ser libres y tomar parte
en las decisiones de gobierno. Los ciudadanos “libres” podían participar a través de los
miembros de gobierno elegidos por voto directo, dando origen a la democracia representativa.
El Estado liberal garantizaba los derechos civiles y políticos de los individuos, quienes dejaron
de ser súbditos para pasar a ser ciudadanos.

20 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

Entre las características que presenta el Estado Liberal se cuentan:

 Pregona el individualismo: El Estado está al servicio del individuo, por la separación del
Estado y la sociedad civil. De allí el surgimiento del reconocimiento de los derechos
civiles y políticos. El concepto del derecho a la vida y la libertad son fundamentales para
entender la supremacía del ser humano sobre el resto de la naturaleza.

 Pregona la libertad: que es reconocida como un derecho fundamental de carácter


inviolable y que se refiere a diversos aspectos: libertad de pensamiento, de expresión, de
asociación, de prensa, etc., cuyo único límite consiste en la libertad de los demás, y que
debe constituir una garantía frente a la intromisión del gobierno en la vida de los
individuos.

 Reconoce el principio de igualdad entre los hombres , entendida únicamente en lo que


se refiere a diversos campos jurídico y político. Es decir, para el liberalismo, todos los
ciudadanos son iguales ante la ley y para el Estado, pero esto no significa que exista
igualdad de clase social o de posición económica entre los seres humanos.

 El respeto a la propiedad privada ilimitada: como fuente de desarrollo individual, y


como derecho inobjetable que debe ser salvaguardado por la ley y protegido por el
Estado.

 Abstencionista: Sus estructuras no deben inmiscuirse en exceso o limitar al individuo.

 Surgimiento del concepto de Nación: El rey no es la personificación del Estado, sino que
éste lo es de la Nación. Es el reconocimiento de la soberanía popular y del constituyente
primario que establece que el poder viene del pueblo.

 Surgen las Constituciones Políticas: Surge la Constitución, una norma superior que
tiene como fin esencial limitar a la acción del poder político del Estado, brindarle
garantías al ciudadano para la participación directa y definir la estructura del Estado.

 Surge el mandato representativo: Una minoría de representantes, elegida por los


ciudadanos, asume el gobierno y el ejercicio del poder político.

2.6.3. Estado social y democrático de derecho:

El concepto de Estado Social y democrático de Derecho es de por sí complejo, por ello es difícil
encontrar definiciones exacta sobre el tema ya que los mismos Estados han dado
características en las cuales interviene la economía, las prestaciones sociales y la efectiva
garantía de los derechos. En general, los constitucionales están de acuerdo en situar sus
orígenes en Alemania a mediados del siglo veinte, en el período o etapa intermedia de las
guerras mundiales. Su surgimiento estuvo influenciado por los acontecimientos económicos de
1929 cuando se produjo la gran depresión económica que generó no sólo consecuencias para
el gran capital, sino que tuvo efectos devastadores en la satisfacción de las necesidades
básicas del conjunto de la población.

Las políticas de los gobierno se orientaron a estimular la economía, que se encontraba


totalmente deprimida, por medio del incentivo de la demanda y de la producción, creando

21 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

empleos para que se generara riqueza y la misma fuera distribuida, en especial, entre las
clases deprimidas y bajas que sufrieron con mayor rigor la crisis. La formación de movimientos
sociales y partidos políticos presionó a los Estados para que se convirtieran en un instrumento
para poder solucionar los problemas sociales a través del reconocimiento y protección de los
derechos ciudadanos.

Para que las políticas sociales sean una realidad, deben legalizarse a través de pactos sociales
pluralistas que se formalizan en las nuevas Constituciones Políticas. Por ello la idea
democrática del Estado social supone que la legitimidad de los gobernantes está en el
cumplimiento de la Constitución, el reconocimiento de los derechos a toda la población y el
compromiso en la realización de principios de justicia social.

El Estado Social y Democrático de Derecho ha sido designado como aquel que se


responsabiliza por la «procura existencial», que consiste en garantizar a la mayoría de la
población el máximo grado de bienestar con el fin de satisfacer todas las necesidades
individuales y colectivas en pro de una existencia digna. Las instituciones y funcionarios
públicos tienen la obligación de posibilitar a todos los individuos todo aquello necesario para
subsistir y que pueda estar por fuera de su alcance. En tal sentido, el concepto de dignidad
humana adquiere una dimensión de principio rector de la democracia y de legitimidad del
Estado puesto que ya no es sólo un derecho fundamental, sino una categoría para definir el
alcance de los demás derechos: todo derecho fundamental tiene sentido en cuanto su concepto
gira en torno a la dignidad de la persona, al desarrollo de la personalidad, pero no sólo en un
plano estrictamente individual, sino en su dimensión social, por cuanto es el fundamento del
orden político y de la paz social.

Actualmente el Estado Social y de Derecho se caracteriza por el reconocimiento de los


derechos individuales y colectivos, y obligado al cumplimiento de su función social a través de
políticas sociales que garanticen la dignidad humana. Se denomina social porque es
intervencionista, porque no se interesa sólo por el individuo, sino también por la colectividad y
sus contenidos y la consagración del principio del prevalencia del interés general sobre el
particular. El estado social hoy es por antonomasia democrático y pluralista.

Características generales del Estado social y democrático de derecho:

 La seguridad de los distintos aspectos vitales en la sociedad nacional. Antes la defensa de


la sociedad nacional se centraba capitalmente en la defensa exterior y en la defensa
interna frente al delito o la subversión. Hoy ha de añadirse a ello la defensa frente a las
contingencias y necesidades económicas globales, frente al deterioro del medio
ambiente, frente al agotamiento de los recursos naturales, frente a la radicalización y
extensión de los antagonismos en el seno de la sociedad nacional, entre otros.

 La realización de una serie de prestaciones sociales que preferiblemente deben estar no


sólo proclamadas, sino también garantizadas por los textos constitucionales. Algunas de
ellas son:

 La fijación de un salario vital mínimo con independencia de la clase de ocupación y


destinado a ser revisado de acuerdo con la coyuntura económica nacional. Incluso
algunos Estados han establecido subsidios de desempleo o amparos especiales para
personas que no puedan acceder a actividades laborales: madres cabeza de familia,
jóvenes estudiantes.

22 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

 La procura de un puesto de trabajo para todo ciudadano útil, para lo cual ha de


desarrollarse una política de pleno empleo.

 La atención de los que estén incapacitados para el trabajo temporal o permanente:


obreros de industrias decaídas, paro coyuntural, ancianos, limitados físicos, entre
otros.

 Procura la satisfacción de las necesidades básicas de toda la población y no sólo el


reconocimiento formal de los derechos. Además avanza en el reconocimiento de derechos
colectivos e incluso abstractos como la paz y la convivencia pacífica.

 Se debe garantizar una equitativa distribución de los bienes y servicios para elevar el
nivel de vida de la población. Lo anterior supone un reconocimiento eficaz de los
derechos económicos, sociales y culturales. El derecho a la igualdad es interpretado en
función de lograr la igualdad material entendiendo que en una sociedad siempre hay
individuos, comunidades o sectores sociales que requieren atención especial para
garantizar su dignidad y el acceso a todos los derechos.

 Exigencia constitucional para que los derechos se materialicen en programas de acción y


políticas públicas que hagan efectivo su reconocimiento y protección.

Requisitos fundamentales del Estado Social de derecho:

Algunos de los elementos fundamentales del estado Social de derecho pueden resumirse en los
siguientes puntos:

 La participación democrática: La Constitución Política reconoce plenamente los


derechos y garantías de los ciudadanos, pero además consagra mecanismos tendientes a
permitir su protección. Además se crean mecanismos de participación e incidencia directa
en políticas públicas. En el caso de Colombia, la Constitución de 1991 consagra la
mayoría de estos derechos y mecanismos, aunque ello no implica que la población tenga
hoy unas mejores condiciones de vida puesto que el reconocimiento formal de los
derechos no implica su reconocimiento material y mucho menos su plena vigencia.

 Reconocimiento de una concepción integral de los derechos: Además de los


derechos civiles y políticos, las actuales constituciones brindan especial importancia a los
derechos llamados de segunda y tercera generación, tales como los derechos
económicos, culturales, ambientales, la seguridad social, los derechos de las minorías
sociales y los grupos étnicos, entre otros.

 Reconocimiento del constituyente primario: La misma corte constitucional, en la


sentencia C-1.200 de 2003, ha expresado que en desarrollo de los principios
democráticos y la soberanía popular, el poder constituyente reside exclusivamente en el
pueblo que puede darse su propia Constitución. Este poder no tiene límites jurídicos y
supone un pleno ejercicio del poder político de los asociados.

23 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

3. FORMAS DE GOBIERNO
Los gobiernos son las formas en que se organizan los Estados para ejercer el poder político y la
autoridad institucional y varían de país a país dependiendo de su tradición política e incluso
cultural. Es importante diferenciar las formas de gobierno de las formas de Estado cuyas
características son más amplias, como analizamos en el capítulo anterior. Así mismo el
concepto es diferente del de sistemas políticos que alude a la estructura y funcionamiento de
los poderes públicos. Son los gobiernos la autoridad que planea, organiza, dirige y controla las
instituciones del Estado.

Las formas o sistemas de gobierno que actualmente se reconocen son: el parlamentario, el


presidencialista, el convencional o de asamblea, el federalismo, el socialismo y las monarquías
absolutas.

3.1. SISTEMA PARLAMENTARIO:

El parlamento aparece como una forma de gobierno que se opone a la monarquía. Se


caracteriza por que el gobierno no emana directamente del pueblo, sino del parlamento que es
quien debe tener la confianza del primera para no ser derrocado o cambiado. La institución
política se compone generalmente por una o dos cámaras o asambleas, que suele ejercer el
poder legislativo en un Estado. Su significado inicial era el de un lugar en el que se habla;
etimológicamente el término deriva del verbo francés parler (`hablar').

El gobierno parlamentario se caracteriza por presentar un poder ejecutivo dual y un poder


legislativo bicameral. El primero está representado por el jefe de estado y el jefe de gobierno
que debe gozar del respaldo del parlamento para gobernar, de lo contrario tendrá que
disolverlo y convocar a nuevas elecciones o renunciar. El jefe de gobierno también es conocido
como primer ministro, canciller o presidente del Consejo y es quien tiene la función ejecutiva y
administrativa y en la mayoría de los casos su nombramiento depende del partido mayoritario
dentro del parlamento, como es el caso de Inglaterra. Por su parte el jefe de estado suele ser
el presidente o un monarca, cuyas funcionas son diferentes que en el sistema presidencial ya
que éste solo cumple un desempeño formal similar en muchos casos al de un embajador,
además es elegido de forma indirecta.

El régimen parlamentario se caracteriza por asumir plenamente el tema de la responsabilidad


política del ejecutivo frente al parlamento. De ella se desprende que el ejecutivo también tiene
la facultad de disolver el parlamento. Esta disolución busca equilibrar los poderes entre ambas
instancias –ejecutivo y parlamento-, ya que la dispuesta la resuelve el pueblo a través de las
elecciones. Al respecto señala Javier Perez Royo: “Tradicionalmente el instituto de la disolución
fue entendido como un arma a favor del gobierno en su relación con el parlamento. Vendría a
ser el contrapeso contra la moción de censura. Si el parlamento puede retirar la confianza al
gobierno, éste puede amenazar con la disolución de la Cámara y la convocatoria a nuevas
elecciones. En el estado de partidos de hoy es claro que la función es distinta. La disolución no
es más que el instrumento para que se pronuncie el árbitro inapelable de todo el proceso
político: el cuerpo electoral”.11

11
Perez Royo, Javier. Curso de Derecho Constitucional. Madrid. Marcial Pons, Ediciones Jurídica. 1994.

24 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

Es justamente esta característica lo que define las llamadas monarquías parlamentarias


existentes en Europa, por ejemplo en Inglaterra, España o Bélgica, donde pese a seguir
teniendo una tradición cultural monárquica, los reyes no cumplen funciones de gobierno sino
de estado meramente formales.
Los parlamentos tienen diferentes funciones dependiendo de la tradición política, ideológica,
cultural y hasta religiosa de los Estado. En Estados Unidos, por ejemplo, el Congreso decide
aspectos políticos de la nación dependiendo de la fuerza de los dos partidos dominantes
(Republicano y Demócrata) y la relación con el presidente. En Europa, Inglaterra, Alemania o
España, deciden sobre políticas ya definidas por el jefe de Estado. En el caso de China, el
parlamento depende casi que en su totalidad de las definiciones del partido.

PRESIDENCIALISMO:

El sistema presidencialista se desarrollo y expandió con la Constitución de los Estados Unidos,


expedida en 1787 después de la revolución contra Inglaterra. Se caracteriza por aspectos tales
como:

 Darle supremacía al poder ejecutivo dentro de las demás ramas del poder público. Por ello
existe independencia entre el ejecutivo y el legislativo basada en la teoría de la separación
de los poderes. Sin embargo, el ejecutivo tiene iniciativa legislativa otorgada por la ley o la
Constitución para proponer la creación o modificación de las normas.

 El presidente congrega las funciones de jefe de estado y jefe de gobierno, es elegido en


forma directa mediante votación ciudadana diferente a la del parlamento e incluso por una
mayoría diferente a la expresa en el Congreso. Por ello, a diferencia del régimen
parlamentario, el presidente no tiene facultades legales para disolver el parlamento o el
congreso porque no existe relación de confianza ni de interdependencia, disolverlo
implicaría un atentado al principio de legalidad o en un golpe de estado. Tampoco el
parlamento tiene facultades para destituir al presidente, sólo puede aplicar las normas que
la Constitución y/o las leyes de atribuyan en caso de muerte, renuncia o incapacidad del
jefe de estado, es decir que la facultad es legal y previa.

 El presidente puede implementar medidas excepcionales como los estados de sitio, de


excepción o ley marcial, durante los cuales asume funciones propias de los demás
poderes.

 Los críticos de este régimen cuestionan el centralismo del poder y del gobierno en una
única persona, lo que en la práctica termina reproduciendo las ideas absolutistas y
dictatoriales propias de gobiernos autoritarios.

“Se considera que el régimen presidencial acentúa la separación de poderes, en tanto que
el parlamentario pone énfasis en la colaboración de los mismos. Pero esta apreciación no
es del todo exacta, pues el correcto funcionamiento de los regímenes modernos obliga en
la práctica, a que las altas autoridades del Estado se pongan de acuerdo acerca de las
políticas que deben adelantarse para la satisfacción del bien común. No obstante ello, hay
que admitir que el régimen parlamentario se aproxima mejor a este ideal”. 12

3.2. CONVENCIONAL O ASAMBLEARIO:

12
Vallejo Mejía, Jesús. Lecciones de Teoría Constitucional. Medellín. Editorial Diké, 2000.
25 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA
PROCESOS DEMOCRÁTICOS

Quizá la referencia más cercana a este tipo de gobierno en la misma revolución francesa,
cuando la burguesía emergente derrota a la monarquía de Luis XVI y convoca a una Asamblea
que es quien define los postulados del nuevo gobierno y la forma de ejercer el poder.
Actualmente los constitucionalistas señalan a Suiza como el país que mejor representa este
modelo, ya que se trata de un Estado federado donde sus habitantes gozan de una democracia
directa organizada desde la comuna, el Cantón y la confederación, con una iniciativa legislativa
permanente y mecanismos constitucionales claros para ejercer los mecanismos de
participación. Esta forma se gobierno se caracteriza por resaltar la preponderancia del
legislativo sobre el gobierno y porque el poder y las funciones del ejecutivo han sido delegadas
a la Asamblea que es quien determina el rumbo del Estado. Por lo anterior, los gobiernos son
delegados de dicha Asamblea que la representa como en las democracias representativas, pero
dependen de ésta para no nombramiento o su remoción, lo que limita la independencia de los
gobernantes que dependen de la simpatía o aceptación del cuerpo colegiado. Por su parte los
miembros de la Asamblea son elegidos por el Cuerpo Colegiado que cumple las funciones del
parlamento y que a su vez es elegido por votación popular directa.

3.3. FEDERALISMO:

Esta forma de gobierno se caracteriza porque el poder político está dividido entre una
autoridad central o nacional y unidades locales autónomas más pequeñas tales como
provincias o estados, por lo general bajo los términos de una constitución. Se diferencia de
una confederación en que ésta es una alianza de países independientes que mantienen sus
respectivas autonomías, unidos en acciones o cooperación en asuntos específicos de interés
mutuo. En una nación federal los actos del gobierno central pueden afectar de modo directo
tanto a los estados miembros como a los ciudadanos individuales, mientras que en una
confederación tales actos suelen afectar de una forma directa a los países miembros y sólo por
vía indirecta a los ciudadanos.

En un Estado federal, al gobierno central le son asignados poderes concretos. Tiene soberanía
plena en relación con los asuntos exteriores y es preeminente con respecto a la administración
interna dentro de sus poderes asignados.

3.4. SOCIALISMOS:

El Socialismo como teoría política se define como un sistema económico y político basado en la
socialización de los sistemas de producción y en el control estatal (parcial o completo) de los
sectores económicos, lo que se oponía frontalmente a los principios del capitalismo. Además se
propone establecer una sociedad comunista o sin clases como forma de superación de la
desigualdad social y económica.

Como sistema político, el socialismo se concibe como un paso previo al comunismo, que se
caracteriza por la idea de que el poder reside en la clase trabajadora, el proletariado, que es
quien gobierna a través de un partido único, jerárquico que representa las aspiraciones del
pueblo.

3.5. LA MONARQUÍA ABSOLUTA:

Es una forma de gobierno en la que el rey ostenta el poder absoluto en todas las ramas del
poder público, es decir que no se predica la división de poderes y los derechos ciudadanos
están sujetos al mandado del monarca. A diferencia de las monarquías constitucionales, aquí el

26 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

monarca es jefe de Estado, de gobierno, juez y aplicador de justicia, por ello las decisiones del
Estado están sujetas a su entera voluntad y no a Constituciones o leyes hechas por el
parlamento. Nuevamente asistimos a la idea del poder divino y supremo encabeza del rey.

Este tipo de gobiernos es común en las naciones árabes y las repúblicas islámicas, Estados que
son señalados de totalitarios, fundamentalistas y teocráticos ya que se gobierna bajo la tutela
de Alá, único dios, y el Corán, libro sagrado, es la fuente jurídica valida que orienta las
decisiones de la nación.

4. MODOS DE PRODUCCION:
Para algunos las formas de producción son las relaciones en las que los individuos producen,
es decir las relaciones sociales que establecen los productores entre sí, las condiciones en que
intercambian sus actividades y participan en el proceso productivo. Esto es porque en la
producción, los hombres no actúan solamente sobre la naturaleza, sino que actúan también los
unos sobre los otros, asociándose de un cierto modo, contrayendo determinados vínculos y
relaciones, para actuar en común y establecer un intercambio de actividades a la vez que se
relacionan con la naturaleza y efectúa la producción. A nivel más amplio el concepto de señala
una noción teórica que permite comprender la totalidad social. Todo modo de producción está
constituido por una estructura global, formada, a su vez, por tres niveles e instancias: el nivel
Ideológico, el nivel jurídico político y el nivel económico.

Estas formas se producción se han expresado de forma diversa a lo largo de la historia de la


humanidad y están relacionadas con las luchas políticas e ideológicas que los pueblos han
libreado. Dichas expresión se concretan en los siguientes modelos sociales:

4.1. COMUNIDAD PRIMITIVA:

La comunidad primitiva es precisamente la primera forma en que los seres humanos se


organizan para satisfacer sus necesidades y surge con el ser humano mismo. Cuando
comienza a desarrollarse la sociedad, también aparece la comunidad primitiva que va a durar
miles de años, hasta que sus miembros desarrollan sus fuerzas productivas y sus relaciones
sociales de producción. En un principio los seres humanos fueron nómadas porque dependían
directamente de lo que la naturaleza le proporcionaba.

La estructura económica de la comunidad primitiva era simple. Como los seres humanos
todavía no dominaban la naturaleza, dependían mucho de ella y en consecuencia existía
propiedad colectiva de los medios de producción, por lo que el trabajo también era
comunitario, lo que trajo como consecuencia la distribución comunitaria de los bienes. En estas
comunidades tampoco existían las clases sociales, por lo que las relaciones sociales de
producción son relaciones de cooperación y ayuda mutua, relaciones armónicas, donde no
había la explotación del hombre por el hombre.

Estos primeros seres humanos producen apenas lo necesario para la satisfacer las necesidades
de la sociedad por eso es llamada sociedad de autoconsumo o auto subsistencia porque no se
produce excedente económico.

Sus instrumentos de producción van desde piedras en estado natural, piedra tallada, pulida, y
luego utilizan los metales (cobre, bronce, hierro, etc.) hasta llegar a elaborar hachas, cuchillos,

27 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

entre otros. Al mejorarse los instrumentos de producción se crea una división natural del
trabajo, determinado por el sexo y la edad.

4.1.1. Primera gran división social del Trabajo:

La sociedad primitiva sigue desarrollándose hasta que aparece la primera división social del
trabajo: los que se dedicaban a la caza y pesca y los que se dedican a la agricultura y
pastoreo; sin embargo esta división aumentó la producción y la productividad. Con la creación
de vasijas de barro para el agua nace la segunda división del trabajo.

Esta primera división generó que las comunidades aumentaran la producción cosechando más
de lo que se necesita, y así se crea el excedente económico, lo que hará posible el intercambio
o trueque surgiendo así los mercaderes, lo que representa la tercera división del trabajo. La
propiedad colectiva de los medios de producción va evolucionando y pasa de la propiedad
colectiva a la familiar, llegando a la propiedad privada que generan otros fenómenos:

• Los rebaños y la tierra empezaron poco a poco a ser propiedad privada


• Los productos excedentes comenzaron a ser intercambiados; el ganado desempeñó las
funciones del dinero.
• Distribución desigual de los bienes. Los que tienen propiedad y los que no tienen
propiedad.
• Era conveniente conseguir más fuerza de trabajo y la guerra la suministró: los prisioneros
fueron transformados en esclavos.
• Nació la primera gran escisión de la sociedad en dos clases: Amos y Esclavos

Al surgir el excedente económico, la comunidad primitiva se apropia de él y lo intercambia.


Nacen así las clases sociales, lo que representa el periodo de transición de la comunidad
primitiva al esclavismo.

4.2. EL ESCLAVISMO:

Desintegrada la sociedad de comunidad primitiva, las fuerzas productivas crean las condiciones
para que se modifiquen las viejas relaciones sociales de producción. Ello da origen a una nueva
organización social con rasgos propios conocido como Esclavismo, que también permite que se
desarrolle la propiedad privada de los medios de producción. La propiedad se da sobre el
producto total y sobre el propio productor o esclavo.

Con el esclavismo aparecen dos clases sociales fundamentales y antagónicas: los esclavistas
que son los dueños de los medios de producción y los esclavos que son los trabajadores. La
aparición de estas clases sociales se debe a la producción y el desarrollo del excedente
económico del cual se apropia una clase social, convirtiéndose en poseedora de los medios de
producción. Esta apropiación permite el aumento de la producción y la productividad.

La base de la producción es el esclavo que realiza las actividades productivas. La existencia de


esclavos que se dedican a las labores productivas permite la existencia de ciertas clases que
cultivan la filosofía, la astronomía, las matemáticas, entre otras, floreciendo así la cultura.

Algunos autores ven rasgos positivos en este modelo de producción, tales como: el desarrollo
de la agricultura, la construcción de grandes obras de infraestructura que incluso se mantienen

28 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

hasta el día de hoy, la ganadería, la notable utilización de piedras preciosas como rubíes y
diamantes, y el empleo de sistemas de riego. El comercio se desarrolló ampliamente en el
Esclavismo, apareciendo un grupo de gente que se dedica a esta actividad y conocidos como
los Mercaderes. Apareció y se desarrollo la moneda que facilita el intercambio de productos.
Sin embargo, estos logros no pueden opacar la realidad de que régimen esclavista fundó sus
relaciones sociales de producción esclava en base a la explotación de los seres humanos que
fueron convertidos en propiedad privada y en un medio de producción.

La realidad de desconocimiento de todos sus derechos llevo a los esclavos a revelarse y así
surgen las rebeliones de esclavos quienes no estaban de acuerdo con el trabajo forzoso, ni los
tratos crueles a los que eran sometidos. Dichas rebeliones abrieron el camino para que se
diera el proceso de transición del esclavismo al feudalismo. Muchos de los esclavos fueron
liberados, repartiéndoseles las tierras para que la cultivasen a cambio de tributos. Estos
esclavos liberados eran los colonos o antecesores de los siervos feudales.

4.2.1. Otras características de este período son:

 La agricultura empezó a suministrar, además de grano, legumbres y frutas, aceite y vino.


Los oficios (tejidos, trabajos de los metales), se separaron de la agricultura.

 Un trabajo tan variado no podía ser ya cumplido por un solo individuo. Los esclavos
dejaron de ser simples auxiliares y los llevaban por decenas a trabajar en los campos o en
los talleres.

 Nació la producción directa para el cambio, la producción mercantil, y con ella el comercio.
La producción ya no es para el consumo personal, sino para el intercambio, los productos
pasan necesariamente de unas manos a otras.

 Tan pronto como el dinero, y con él el mercader, interviene como intermediario entre los
productores, se complica más el sistema de cambio. Las mercancías no sólo irán de mano
en mano, sino de mercado en mercado.

4.3. EL FEUDALISMO:

El Feudalismo es un sistema contractual de relaciones políticas y militares entre los miembros


de la nobleza de Europa occidental durante la alta edad media. Se caracterizó por la concesión
de feudos (casi siempre en forma de tierras y trabajo) a cambio de una prestación política y
militar, contrato sellado por un juramento de homenaje y fidelidad. Tanto el señor como el
vasallo eran hombres libres. Este era un sistema natural y cerrado, donde se producía para
satisfacer las necesidades del feudo, no para negociar o comerciar.

La implantación del modo de producción feudal surge cuando los jefes militares de los pueblos
conquistados fueron repartiendo la tierra a sus súbditos reales. Muchos pequeños campesinos
libres se fueron reuniendo alrededor de un gran señor para que les diera protección
permitiendo el surgimiento de dos instituciones fundamentales del desarrollo feudal:

 El feudo, que es una porción de tierras más o menos amplia que le pertenece
hereditariamente a un Señor a cambio de que le preste servicios militares al rey o los
jefes militares de más alta jerarquía.

29 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

 La servidumbre que es la forma que asumen las relaciones sociales de producción


durante el feudalismo. Se basa en la existencia de dos clases fundamentales y
antagónicas: los señores feudales, dueños de los principales medios de producción, y los
siervos, dueños de los instrumentos de labranza.

La Servidumbre es una relación diferente al esclavismo; el siervo no es un hombre


completamente libre pero tampoco es un esclavo; está sujeto a las tierras y cuando éstas
pasan a propiedad de otro Señor Feudal, los siervos siguen en sus tierras; pero ambas
instituciones coinciden en que se basan en relaciones de explotación que en el feudalismo
asume desde la renta de la tierra que se da en tres formas: en especie, en trabajo y en
dinero.

4.4. EL CAPITALISMO:

La ampliación de la producción y productividad en los centros artesanales (los “Burgos”,


antecedentes de las ciudades); el desarrollo del capital comercial que concentra recursos para
ampliar la producción y el comercio; las revoluciones burguesas que acabaron con el poder de
los señores feudales (instaurando la burguesía) y los descubrimientos geográficos, fueron
parte de los cambios que favorecieron el traspaso del Feudalismo al Capitalismo.

El capitalismo es un sistema económico en el que los individuos privados y las empresas de


negocios llevan a cabo la producción y el intercambio de bienes y servicios mediante complejas
transacciones en las que intervienen los precios y los mercados. Aunque tiene sus orígenes en
la antigüedad, el desarrollo del capitalismo es un fenómeno europeo y moderno; fue
evolucionando en distintas etapas, hasta considerarse establecido en la segunda mitad del
siglo XIX. Desde Europa, y en concreto desde Inglaterra, el sistema capitalista se fue
extendiendo a todo el mundo, siendo el sistema socio-económico casi exclusivo en el ámbito
mundial hasta el estallido de la I Guerra Mundial, tras la cual se estableció un nuevo sistema
socioeconómico, el Comunismo, que se convirtió en el opuesto al capitalista.

El capitalismo es un sistema de libre empresa y economía de mercado. Algunas veces se utiliza


el término “Economía mixta” para describir el sistema capitalista con intervención del sector
público que predomina en casi todas las economías de los países industrializados.

Se puede decir que el fundador del Capitalismo es el filósofo escocés Adam Smith, que fue el
primero en describir los principios económicos básicos que lo definen. En su obra clásica
Investigación sobre la naturaleza y causas de la riqueza de las naciones (1776), Smith intentó
demostrar que era posible buscar la ganancia personal de forma que no sólo se pudiera
alcanzar el objetivo individual sino también la mejora de la sociedad. Los intereses sociales
radican en lograr el máximo nivel de producción de los bienes que la gente desea poseer.

Con una frase que se ha hecho famosa, Smith decía que la combinación del interés personal, la
propiedad y la competencia entre vendedores en el mercado llevaría a los productores,
"gracias a una mano invisible", a alcanzar un objetivo que no habían buscado de manera
consciente: el bienestar de la sociedad.

Ya antes del inicio de la industrialización había aparecido una de las figuras más características
del capitalismo, el empresario. Un elemento clave del capitalismo es la iniciación de una
actividad con el fin de obtener beneficios en el futuro; puesto que éste es desconocido, tanto la

30 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

posibilidad de obtener ganancias como el riesgo de incurrir en pérdidas son dos resultados
posibles, por lo que el papel del empresario consiste en asumir el riesgo de tener pérdidas.

Podemos resumir las características del sistema capitalista en los siguientes puntos:

 Los medios de producción, entiéndase, la tierra, la maquinaria y toda herramienta


necesaria para producir los bienes, son propiedad privada, es decir, se encuentran
legalmente en las manos de unos pocos, que hoy conocemos como empresarios o
patrones, o más recientemente en manos de corporaciones financieras o empresas
multinacionales.

 La actividad económica es organizada y coordinada por la interacción entre productores en


los mercados.

 El control del sector público sobre el sector privado debe ser mínimo o no existir. La
actividad del Estado y del gobierno debe de reducirse a la vigilancia, la aplicación de la ley
y garantizar la propiedad privada de los medios de producción, es decir, debe fungir como
intermediario entre las pugnas de los empresarios.

4.5. EL SOCIALISMO:

El socialismo es el modo de producción que se desarrolló en el siglo XX, y designa aquellas


teorías y acciones políticas que defienden un sistema económico y político basado en la
socialización de los sistemas de producción y en el control estatal (parcial o completo) de los
sectores económicos, lo que se opone frontalmente a los principios del capitalismo.

Aunque el objetivo final de los socialistas era establecer una sociedad comunista o sin clases,
se han centrado cada vez más en reformas sociales realizadas en el seno del capitalismo. A
medida que el movimiento evolucionó y creció, el concepto de Socialismo fue adquiriendo
diversos significados en función del lugar y la época donde se arraigó.

Los pensadores del socialismo se oponen al capitalismo por razones éticas y prácticas. Según
ellos, el capitalismo constituye una injusticia: explotar a los trabajadores, degradarlos,
transformándolos en máquinas o bestias, para permitir a los ricos incrementar sus rentas y
fortunas aún más mientras los trabajadores se hunden en la miseria. De igual manera
sostienen que el capitalismo es un sistema ineficaz e irracional para desarrollar las fuerzas
productivas de la sociedad, que, como se evidencia en la actual coyuntura, atraviesa por crisis
cíclicas causadas por periodos de superproducción o escasez de consumo, no proporciona
trabajo a toda la población (con lo que permite que los recursos humanos no sean
aprovechados o queden infrautilizados). En consecuencia, el socialismo rechaza que el
capitalismo genere lujos, en vez de satisfacer necesidades, mediante el reconocimiento radical
de la igualdad económica y social. Los socialistas comparten con los liberales el compromiso
con la idea de progreso y la abolición de los privilegios aristocráticos aunque, a diferencia de
ellos, denuncia al liberalismo por considerarlo una fachada tras la que la avaricia capitalista
puede florecer sin obstáculos. En 1917 surgió la primera nación que se desarrolló bajo éste
modo de producción: la URSS: Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas.

Entre las características del modo productivo socialista están:

31 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

• Existe planificación central de la producción, desapareciendo el individualismo del


capitalismo.

• Propende por la planificación de acuerdo a las necesidades básicas de la población.

• Existe un compromiso para superar las diferencias antagónicas en la sociedad.

• Busca la satisfacción de las necesidades sociales y no la obtención de ganancias.

• La planificación tiene como objetivos eliminar el desempleo y la inflación.

Sin embargo, en la actualidad países de identidad socialista han articulado políticas propias del
capitalismo combinadas con los ideales socialistas, por ejemplo con: los precios se rigen por la
oferta y la demanda, fomento a la inversión privada incluyendo la inversión extranjera y el
desarrollo de la propiedad privada sobre los medios de producción, entre otros.

EN SÍNTESIS:
Los tres últimos siglos representan una historia de lucha contra las formas de gobierno
autoritarias y absolutistas en gran parte del mundo. Las categorías político jurídicas que
caracterizan los Estados modernos intentan, a veces con poco éxito, reglarse a través de
instituciones heredadas de las revoluciones burguesas de la edad media en el continente
europeo, tales como la división de poderes, la participación ciudadana y el principio de
legalidad, de tal forma que se garantice la dignidad humana como elemento esencial que
legitima las formas de gobierno.

El acercamiento a categorías jurídicas como el concepto de Estado, las formas de gobierno y


los modos de producción nos brindan elementos para analizar las instituciones actuales en el
mundo, específicamente en Colombia donde la Constitución de 1991 definió estructurarse con
un Estados Social y de Derecho. Poder distinguir estos conceptos nos debe permitir hacer una
observación y avaluación crítica sobre la democracia en el país y el papel que deben asumir los
ciudadanos, las ciudadanas y la sociedad para hacer efectivos principios de soberanía popular,
participación, toma de decisiones y veeduría a los gobernantes.

Sin embargo, esta realidad política también está determinada por factores reales de poder que
se expresan especialmente en las formas y modos de producción. La realidad moderna
evidencia como el sistema capitalista regula no solamente lo concerniente a la economía, sino
que influye toda la institucionalidad, especialmente las formas de gobierno y los derechos de la
población, elementos que analizaremos con mayor precisión en la segunda unidad.

REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS:

FOUCAULT, Michel. Un dialogo sobre el Poder y otras conversaciones. 2a. Edición. Madrid. El libro
de Bolsillo, Alianza Editorial. 1984.

FOUCAULT, Michel. Vigilar y castigar: nacimiento de la prisión. 27ª edición. Madrid, España:
Editorial Siglo XXI. 1998. 314 pg.

32 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

SIEYES, Emmanuel. ¿Qué es el tercer Estado? Ensayo sobre los privilegios. 1ª. Edición. Madrid,
España. Alianza Editorial S.A. 1994. 185 p.

VALLEJO MEJÍA, Jesús. Curso de teoría constitucional, teoría del Estado. Universidad de
Antioquia. 1998.

LASALLE, Ferdinand. ¿Qué es una constitución. 2ª. Edición. España. Editorial Barcelona. Ariel,
2002 183 p.

SÁCHICA, Luis Carlos “Exposición y glosa del constitucionalismo moderno”, Ed. Temis, Bogotá
1976.

JELLINEK, George. Teoría general del Estado, Editorial Albatros. Buenos Aires, 1980.

DUGUIT, Leon, Manual de Derecho Constitucional: Teoría General del Estado, el Derecho y el
Estado y las libertades públicas, Granada, Ed. Comares, 2007, p.75.

FISCHBACH, O. G.: Teoría General del Estado, Segunda Edición, Editorial Labor S. A,
Barcelona-Buenos Aires, 1929.

VIDAL PERDOMO, Jaime. Derecho Constitucional General e instituciones políticas en Colombia.


9ª. Edición. Bogotá, Colombia. Editorial Legis, 2005.

MAQUIAVELO, Nicolás, El Príncipe, vigésima primera edición, Editorial Porrúa S.A. de C.V.
México 2003, 74pp.

Vicerrectoría de Docencia. Universidad de Antioquia Medellín – Antioquia. Colombia. 2003.

HELLER, Hermann "Teoría del Estado”. Fondo de Cultura económica. México. 1942.

SMITH, Adam. Investigación sobre la naturaleza y causas de la riqueza de las naciones.


Publicación España: Oikos Tau, 1987. Biblioteca Universidad de Antioquia.

33 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

UNIDAD 2

HORIZONTES DEMOCRÁTICOS EN COLOMBIA


OBJETIVO ESPECÍFICO

Que el estudiante adquiera capacidad crítica para analizar los problemas contemporáneos de la
democracia en Colombia y el papel legitimador de los derechos humanos en las democracias
modernas.

INDICADOR DE EVALUACIÓN

El estudiante estará en capacidad de realizar una lectura crítica de la Constitución política de


Colombia, a la luz de la actual coyuntura del país y debatirla con sus demás compañeros de
clase, priorizando el análisis sobre el discurso legitimador de los derechos humanos.

34 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

MAPA CONCEPTUAL
PROCESOS DEMOCRÁTICOS

1. EL CONCEPTO DE CONSTITUCIÓN POLÍTICA

La definición de una constitución es amplia, pero siempre aparece como elemento común su
carácter superior y regulador de los Estados y las formas de gobierno. En las democracias
modernas es impensable concebir la democracia sin leyes superiores que la limiten y regulen el
ejercicio del poder. Sólo en la dictaduras, la monarquía absolutas o en gobiernos de corte
totalitario éstas pasan a un segundo plano. Sin embargo, el debate político es por qué en las
democracias constitucionales se vulneran derechos, se otorga poca participación o el ejercicio
del poder sigue estando concentrado tanto en los regímenes presidencialistas como los
parlamentarios. El caso colombiano es emblemático puesto que cuenta con una de las
constituciones más modernas no sólo en el continente, sino en el mundo, sin embargo
padecemos una larga historia de conflictos y negación de derechos equiparable al de países
con poca tradición democrática.

Veamos algunos conceptos constitucionales elaborados por estudiosos del tema:

Tabla No. 2: Definiciones sobre el concepto de Constitución


AUTOR DEFINICION
PIETRO VIRGTA “Ley suprema de organización jurídica de un país, relacionada con la
estructura y funcionamiento del Estado, así como relativa al régimen
político de éste, la cual condiciona la validez de todas las demás
leyes”13.
ANDRÉ HAURIOU “Conjunto de reglas relativas al gobierno y a la vida de la comunidad
estatal consideradas desde el punto de vista de la existencia
fundamental de ésta”14.
PELLEGRINO ROSSI “Es el conjunto de leyes que forman la organización de un estado y
reglan la acción y la vida, lo mismo que se llama constitución del
cuerpo físico al conjunto de leyes que presiden su organización y
reglan el movimiento de la vida”15.
GREGORIO PECES- “La Constitución puede ser cauce de la construcción de una democracia
BARBA MARTÍNEZ avanzada, a partir de la cual, y sin renunciar a la libertad política, se
puede alcanzar la sociedad socialista»16.
HENRY CAMBELL “Es la ley orgánica y fundamental de una Nación o Estado, la cual
BLACK puede se escrita o no-escrita, estableciendo el carácter y la concepción
de su gobierno, sentando los principios básicos a los cuales su vida
interna ha de conformarse, organizando el gobierno y regulando,
distribuyendo y limitando las funciones de sus diferentes
departamentos, y prescribiendo la extensión y manera de ejercicio de
los poderes soberanos17”.
HARVEY WALKER

13

Pietro Virgta, Diritto Constituzionale, p. 68. Citado por Olano y Olano, ob. cit., p. 63.
14
HAURIOU, André. Derecho constitucional e instituciones políticas. Barcelona. Ediciones Ariel. 1971. Pp 60 -69
15
ROSSI, Pellegrino Obras completas. Tomo Primero, Guillamin Librería, París, 1866, pág. LXI.
16
PECES-BARBA MARTÍNEZ, Gregorio. La Constitución como reglas del juego, en El País, Madrid, 6 de diciembre de 1977, pág.
7.
17
BLACK, Henry Campbell. Citado por Rodrigo Borja en su libro Derecho político y constitucional. Fondo de Cultura Económica.
Argentina. 1991. 365 P.
PROCESOS DEMOCRÁTICOS

ERNESTO “La norma jurídica que regla el ejercicio del poder soberano, por lo que
BERNAREGGI son normas constitucionales aquellas que someten al derecho el
ejercicio de la soberanía, y es constitucional aquella ordenación estatal
en la cual el ejercicio del poder soberano está reglado por el derecho”
CARLOS ESTÉVEZ “Es un documento solemne escrito, en que los Estados consignan la
GAZMURI forma de su gobierno, la organización y atribuciones de los poderes
públicos de que éste se compone, y las garantías, libertades y
derechos de que gozan los miembros de la colectividad política 19”
BENOIT JEANNEAU “Acta fundamental que determina la organización del Estado y
reglamenta el ejercicio del poder”.
RENE CAPITANT “El conjunto de reglas fundamentales que rigen la organización y las
relaciones de los poderes públicos, y fijan los grandes principios del
derecho público del Estado”20.
JUAN B. ALBERDI “La Constitución es una gran ley, que pesa sobre el legislador lo mismo
que sobre el último de los legislados. La Constitución es la ley de las
leyes”21.
SEGUNDO LINARES “Constitución, en sentido absoluto, puede significar una regulación
QUINTANA legal fundamental, es decir, un sistema de normas supremas y
últimas; de donde resulta que la Constitución es norma de normas” 22.
HUDSON HOLT “Es el conjunto de principios que determinan la aplicación práctica o el
ejercicio de la soberanía de un estado”
GEORGES BURDEAU “La Constitución es el estatuto del poder23”

Como se desprende de las definiciones anteriores, el concepto jurídico que define la


constitución como una ley superior es el que prevalece, al considerarla como una ley
fundamental proclamada por un país y que contienen los principios y normas para la
organización del derecho público, lo cual conlleva una idea de jerarquía, como lo expresaba el
profesor Hans Kelsen, quien sostenía que en todo Estado el sistema normativo está
jerarquizado, lo que hace que algunas normas jurídicas sean más importantes que otro. De allí
la idea “clásica” de la pirámide invertida que establece el siguiente orden jerárquico:

18
WALKER, Harvey. "An American Conception of Public Administration" United States, American Political Science Review.Oct,
1945.
19
ESTEVEZ GAZMURI, Carlos. Elementos De Derecho Constitucional Chileno Chile, Jurídica, 1949. 495 p.
20
Citado por Gwéanël LE BRAZIDE en su artículo: René Capitant y Carl Schmitt frente al parlamentarismo: de Weimar a la quinta
república. Cuestiones Constitucionales. Revista Mexicana de Derecho Constitucional. Número 6 Enero-Junio. Año 2002.
21
ALBERDI, Juan Bautista. Organización de la confederación Argentina. Tomo segundo. Buenos Aires. Besanzón, Imprenta de José
Jacquin. 1858.
22
LINARES QUINTANA, Segundo V. Tratado de la ciencia del derecho constitucional argentino y comparado: parte general: teoría
de la constitución. 2ª edición. Buenos Aires. Alfa, 1953. 513 p.
23
BURDEAU, Georges. La democracia. Editorial Ariel, 1959
37 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA
PROCESOS DEMOCRÁTICOS

CONSTITUCIÓN
CONSTITUCIÓN
LEYES
LEYES
DECRETOS
DECRETOS
NORMAS
NORMAS
INFERIORES
INFERIORES

Gráfico No. 2
Sin embargo la definición de Kelsen, de carácter meramente jurídica, desconoce la realidad
política y de poder que suelen expresar dichas constituciones. Así lo entendió el
constitucionalista Ferdinand Lasalle, para quien las constituciones son el fruto de las relaciones
de poder que subyacen en cualquier Nación. Explica que las constituciones no sólo son una
característica de la modernidad, sino un elemento esencial sin el cual no se puede concebir hoy
un Estado y mucho menos los factores reales de poder.

Por lo anterior, Lassalle define a la Constitución como el resultado de la suma de los factores
reales de poder. Así, lo que debe plasmarse en un régimen constitucional son las aspiraciones
de las fuerzas sociales y políticas de un Estado. Explica entonces que existen dos tipos de
Constituciones: la Constitución real y la formal. La primera es efectiva porque corresponde a la
expresión de los factores reales de poder, y la otra, únicamente es una hoja de papel. Por ello
se pregunta: ¿Cuándo una Constitución escrita puede considerarse buena y duradera? Es muy
simple: “cuando esa constitución escrita corresponde a la constitución real, a la que tiene sus
raíces en los factores de poder que rigen en el país. Allí donde la constitución escrita no
corresponde a la real, estalla inevitablemente un conflicto que no hay manera de eludir, y en el
que a la larga, tarde o temprano, la constitución escrita, la hoja de papel tiene necesariamente
que sucumbir ante el empuje de la constitución real de las verdaderas fuerzas vigentes en el
país”.

“He ahí, pues, señores, lo que es, en esencia, la Constitución de un país: la suma de los
factores reales de poder que rigen en ese país. ¿Pero qué relación guarda esto con lo
que vulgarmente se llama Constitución, es decir, con la Constitución jurídica? No es
difícil, señores, comprender la relación que ambos conceptos guardan entre sí. Se
toman estos factores reales de poder, se extienden en una hoja de papel, se les da
expresión escrita, y a partir de este momento, incorporados a un papel, ya no son
simples factores reales de poder sino que se han erigido en derecho, en instituciones
jurídicas, y quien atente contra ellos atenta contra la ley, y es castigado. Tampoco
desconocen ustedes, señores, el procedimiento que se sigue para extender por escrito
esos factores reales de poder, convirtiéndolos así en factores jurídicos. Claro está que
no se escribe, lisa y llanamente: el señor Borsig, fabricante, es un fragmento de
Constitución; el señor Mendelssohn, banquero, es otro trozo de Constitución, y así
sucesivamente; no, la cosa se expresa de un modo mucho más pulcro, mucho más
fino.”24

Esta realidad señalada por Lasalle sigue teniendo vigencia, especialmente en país con poca
tradición democrática. El caso de América Latina es reflejo de ello porque los Estados han
enfrentado dictaduras militares, gobiernos populistas, entre otros, que se han expresado

24
Lasalle, Ferdinand. ¿Qué es una Constitución?

38 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

siempre a través de constituciones. En Colombia, por ejemplo, los últimos años han estado
marcados por la discusión sobre la validez de la Constitución y su constante reforma. Incluso el
gobierno actual ha planteado el concepto del “Estado de opinión” para señalar que por encima
de la constitución está la voluntad del pueblo y como éste es el constituyente primario,
entonces es él –el pueblo- a través de la mayoría del voto quien fija el rumbo del
ordenamiento jurídico y no la norma constitucional.

1.1. ¿QUIÉNES HACEN LAS CONSTITUCIONES?

Formalmente, el titular del poder constituyente es el pueblo a quien se le otorga el derecho


para hacer o reformar la constitución. A este conjunto de ciudadanos con capacidad de decidir
se le conoce como el constituyente primario, quienes otorgan legitimidad a la Constitución
escrita que es promulgada por el Congreso que hace las veces de constituyente secundario. En
otras ocasiones pueden ser nombradas Asambleas, congresos o consejos Constituyentes, que
deben ser elegidas por el constituyente primario para que los represente en la creación o
modificación del texto constitucional.

1.2. CARACTERÍSTICAS DE LAS CONSTITUCIONES:

Las constituciones cumplen una función de garantía contra toda extralimitación de poder por
parte del Estado respecto a los ciudadanos, ésta es la esencia del constitucionalismo moderno:
el límite al poder arbitrario o cualquier factor de autoritarismo. Por lo anterior las
constituciones dedican parte de su articulado a consignar lo referente a los derechos humanos,
tanto los de carácter individual, como los sociales económicos y culturales y los colectivos.

Las cartas constituciones establecen los procedimientos y funciones de los poderes públicos,
indicando cuáles son las instituciones del Estado y las competencias de cada una de ellas, lo
que está determinado por el principio de separación de los poderes. Además los preámbulos
consignados en las constituciones tienen carácter vinculante al desarrollar los principios
fundamentales sobre los que se edifica toda la normatividad constitucional. De esta manera se
consignan las bases ideáticas que caracterizan al Estado en cuestión. En el caso colombiano
también la Corte Constitucional ha defendido el carácter vinculante del preámbulo y la
obligatoriedad de sus principios:

“El pueblo de Colombia,

en ejercicio de su poder soberano, representado por sus delegatarios a la Asamblea Nacional


Constituyente, invocando la protección de Dios, y con el fin de fortalecer la unidad de la nación
y asegurar a sus integrantes la vida, la convivencia, el trabajo, la justicia, la igualdad, el
conocimiento, la libertad y la paz, dentro de un marco jurídico, democrático y participativo que
garantice un orden político, económico y social justo, y comprometido a impulsar la integración
de la comunidad latinoamericana, decreta, sanciona y promulga la siguiente Constitución…”

Recogiendo los postulados de Rousseau y de Locke, las constituciones son reconocidas como
pactos de convivencia o consensos sociales sobre los cuales se edifica el poder público y la
voluntad general de los ciudadanos, lo que permite la convivencia y la superación de los
conflictos. Este aspecto es precisamente lo que intentó recoger la Constitución de 1991 en la
39 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA
PROCESOS DEMOCRÁTICOS

Asamblea Nacional Constituyente como parte del proceso de concertación con los grupos
insurgentes desmovilizados meses atrás. Pero también en otros países del mundo la solución
de los conflicto ha estado seguida de reformas o promulgación de nuevas constituciones.

Por ello la función de las Constituciones es amplia, como lo señala Jorge de Esteban 25, al
establecer varias componentes:

 Una función legisladora que determina el marco legal en el que se mueve el Estado.

 Una función política que fija la concepción del poder, la ideología y formas de gobierno y el
reconocimiento de los derechos humanos.

 Una función organizativa porque señala el catalogo de normas sobre la organización


estatal donde se define la soberanía y la convivencia pública.

 La función jurídica ya que todo forma de gobierno está sujeta a lo que dice la ley, es decir
la Constitución.

 La función ideológica que se da porque la Constitución es una declaración programática


que refleja la ideología del grupo o grupos que la realizan, aunque sea en función de todos
los ciudadanos. Y finalmente,

 Una Función transformadora en tanto ella es reflejo de las transformaciones sociales del
Estado que representa.

1.3. CLASIFICACIÓN DE LAS CONSTITUCIONES

Desde el punto de vista teórico, algunos constitucionalistas las clasifican de cinco maneras:

1.3.1. Pétrea, rígida o flexible:

Esta clasificación tiene en cuenta la posibilidad de reformas o no. En las Constituciones rígidas
el poder de reforma es limitado y generalmente el órgano legislativo no está facultado para
hacerlo porque el poder se le delega a otro órgano o directamente al constituyente primario.
Por el contrario, las Constituciones flexibles permiten su fácil modificación a través del
legislativo, incluso siguiendo el mismo trámite que se utiliza para una ley como sucede por
ejemplo en Inglaterra. Un caso reciente que ilustra el concepto de constitución Pétrea lo
represento la República de Honduras donde se prohíbe absolutamente ciertas reformas y
donde se discute el papel del constituyente primario en la reforma de la misma, discusión que
pretendió saldarse con un golpe de estado contra el mandatario elegido por voto popular,
intensificando el conflicto en esa nación.

1.3.2. Breves y extensas:

Hacen relación al número de artículos que contiene. Las Constituciones breves contienen los
principios fundamentales relacionados con la forma de Estado, el funcionamiento del mismo y
los derechos y libertades individuales. Posteriormente la ley es quien reglamenta cada una de
25
De Esteban, Jorge. Las Constituciones de España. Madrid, 1981.
40 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA
PROCESOS DEMOCRÁTICOS

las normas dándoles el contenido de acuerdo con la concepción constitucional. Ejemplo de este
tipo son las constituciones anglosajones (Estados Unidos e Inglaterra).

Las Constituciones extensas son las que más se utilizan en la actualidad y al contrario de las
anteriores, tienen grandes articulados y desarrollos para garantizar las normas tengan carácter
superior. En éstas no sólo se recoge lo relacionado con la forma y funcionamiento del Estado,
sino todo lo relacionado con los derechos humanos, las definiciones sobre el modelo económico
y monetario, las relaciones exteriores, e incluso normas transitorias como ocurrió con la
Constitución de 1991 en Colombia.

Ambas características reciben críticas, la primera porque deja un poder muy amplio al
legislativo para que asume, a través de las leyes, la discusión y aprobación de normas que son
del ámbito constitucional, por ejemplo lo relativo a los derechos humanos. La segunda porque
incluye en el articulado normas que pertenecen al ámbito de la ley y que por lo mismo suelen
ser modificadas con mucha facilidad, lo que termina desvirtuando el contenido y carácter de la
Carta Magna. El caso de Colombia refleja la facilidad con que suele reformarse la Constitución
al punto de que muchos estudiosos señalan que el espíritu de la modificación realizada en
1991 ya está desvirtuada por todos los cambios que ha sufrido la misma.
1.3.3. Codificas o dispersas:

Otros autores hablan de Constituciones escritas y no escritas. Esta clasificación en la


actualidad es poco probable. Con el desarrollo de la teoría constitucional todos los Estados han
codificado sus normas, incluso desde el desarrollo de las revoluciones burguesas se cuentan
con normas escritas. En algunos Estados puede ocurrir que normas de carácter constitucional
se encuentren dispersas en diversas leyes, pero que son aceptadas por los gobernantes y el
poder legislativo como tales.

1.3.4. Originarias o derivadas:

Las originarias crean instituciones propias o nuevas, mientras que las derivadas siguen
modelos ya adoptados por el derecho constitucional vigente en otros países. En la actualidad la
mayoría de constituciones son derivadas por el consenso dentro de la comunidad internacional
en la constitución de instituciones que regulan el poder público, por ejemplo en lo relacionado
con los derechos humanos, la guarda constitucional, la democracia participativa y
representativa y las funciones del Estado.

1.3.5. Normativas, nominales, semántica:

Las normativas son aquellas que efectivamente se cumplen. Las nominales las que están
escritas pero no se cumplen y las semánticas las que le permiten al gobernante amplias
libertades por lo que son propias de gobiernos de facto.

2. CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE 1991


En 1990 después de un proceso de negociación con varias organizaciones insurgentes como el
Movimiento 19 de Abril –M 19-, el Partido Revolucionario de los Trabajadores –PRT- y el
Movimiento Quintin Lame, que culminó con la entrega de armas y desmovilización, se acordó
la promulgación de una nueva constitución política que remplazara a la de 1886 y en la cual se
reconocieran derechos y principios que no estaban consagrados en ésta. Para ello de convoca

41 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

una Asamblea Nacional Constituyente que elaboró un texto que fue promulgado en 1991,
dando origen a la actual Constitución Política de Colombia de 1991.

Pero la historia de Colombia ha sido rica en su experiencia constitucional, lo cual implica una
profunda crisis y conflictos que siguen sin resolverse y que se ven reflejadas en las constantes
reformas que sufre la Carta Magna que ha sido la expresión del gran poder presidencial en el
país, así como de quienes desde el ámbito económico, ideológico y militar han decidió el
destino de la nación.

Antes de la Constitución de 1991, Colombia estuvo regida por más de cien años por la
Constitución de 1886 que era la expresión de la ideología conservadora que venció en la
guerra civil de final del siglo XIX. Esta constitución instauró un Estado confesional, que giró
alrededor de la religión católica y la alianza con la jerarquía eclesial, desconociendo la libertad
de cultos e imponiendo, a través del concordato, una alianza que le permitió a la iglesia
católica incidir en políticas públicas. Así mismos, consagró la centralidad del poder en cabeza
del presidente de la república con amplias funciones institucionales. En materia de derechos
humanos lo que se estableció fue un régimen de restricción de los derechos fundamentales en
función de la seguridad estatal y ningún mecanismo efectivo para garantizar el cumplimiento
de los pocos derechos reconocidos. Como se expuso en puntos anteriores, se dejó los derechos
al vaivén del desarrollo legal, en manos de un congreso que nunca se mostró interesado en
hacerlos efectivos.

Pero quizá la principal característica de la Constitución del 86 es la preponderancia otorgada a


la institución del estado de sitio que rigió casi por casi toda su vigencia y que le otorgaba
poder especiales al ejecutivo para legislar y normas facultativa en materia de orden público. El
estado de sitio se concibe como una norma de carácter excepcional pero que en Colombia se
convirtió en la norma cotidiana que en períodos presidenciales llegó a durar cerca de las dos
terceras partes del mismo. Las normas implementadas en el marco del estado de sitio fueron
leyes antiterroristas que otorgaron poderes especiales a los militares y otras instituciones y
que desafortunadamente permitieron la vulneración sistemática de los derechos humanos y el
escalamiento del conflicto armado interno, dos problemas que se mantienen en la actualidad.

La larga vida de la Constitución del 1986 también fue posible por el bipartidismo implantado en
el país y que se consolidó en 1957 con el Frente Nacional, pacto político que permitió la
alternancia del gobierno entre el partido liberal y el partido conservador, instaurando lo que
algunos autores han llamado la dictadura de los partidos, que hicieron frente a cualquier tipo
de oposición social y política que intentara acabar con el poder hegemónico. Esto es lo que en
parte explica el genocidio de la Unión Patriótica, partido político de izquierda exterminado, en
lo que constituye una de las páginas más vergonzosas de la historia reciente de Colombia.

“En suma, la Constitución de 1986 le sirvió de soporte institucional a un régimen abiertamente


excluyente y represivo. La hegemonía del liberalismo y el conservatismo se mantuvo en buena
medida gracias a la utilización habitual del estado de sitio, sin mayores controles políticos o
ciudadanos, como mecanismo de coerción directa elevado a rango constitucional, y a la
utilización sistemática de la violencia como componente esencial de la praxis política
institucional o parainstitucional del Estado colombiano.” 26

26
MANTILLA QUIJANO, Alejandro y MÚNERA RUIZ, Leopoldo. En: Cuando la excepción es la regla. Colombia: estado de
excepción y régimen político. Coordinación Colombia Europa Estados Unidos. Observatorio de Derechos Humanos y Derecho
Humanitario. 1ª. Edición. Bogotá, Colombia. Ediciones Antropos. 2005. 146 p.
42 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA
PROCESOS DEMOCRÁTICOS

Por lo anterior es que la Constitución de 1991 implica no sólo un cambio constitucional, sino
una ruptura con el régimen político anterior, que se expresa en la conformación de la
Asamblea Nacional Constituyente que le dio vida al nuevo texto constitucional: integrantes de
los grupos guerrilleros desmovilizados, indígenas, académicos, intelectuales, sindicalistas,
políticos, entre otros, reflejaron la diversidad de la nación colombiana, pero también los
distintos interés políticos, económicos e ideológicos que representaban. Y esto, claro está, se
ve reflejado en la nueva constitución, que si bien es rica por ejemplo en el reconocimiento de
los derechos humanos, también abrió las puertas a la entrada triunfante del modelo neoliberal
que acabó con la economía nacional y ha permitido el desconocimiento de derechos sociales y
económicos.

En relación con el catalogo de derechos consagrados, hay que reconocer que la Constitución
colombiana es de las más modernas al consagrar un sistema de derechos individuales y
colectivos que podrían llegar a representar un verdadero límite al poder presidencial que siguió
casi intacto en el nuevo texto. Este reconocimiento de los derechos se complementa con la
creación de los mecanismos de protección de los mismos, así como de los mecanismos de
participación y la creación de la Corte Constitucional que vigila que el espíritu de la
constitución prevalezca en todo el ordenamiento jurídico.

La consagración de los principios y valores constitucionales y de los derechos humanos como


normas superiores, son reconocidas como normas legitimadores del Estado y el poder público,
repercutiendo en el régimen político. Por ejemplo, se restringe los estados de sitio o estado de
excepción que ahora son controlados en su extensión y tienen control por parte de la Corte
Constitucional que analiza no sólo la formalidad sino el contenido material y las causas
debatidas por el ejecutivo para su implementación. Así mismo se establece expresamente que
en caso de declararse dicho estado en ningún caso se podrán restringir o limitar dichos
derechos.

La constitución mantiene el régimen presidencialista intacto al dejarle amplias funciones y


atribuciones. Este aspecto es todavía más preocupante en los últimos años con la reforma
constitucional que permite la reelección presidencia que incluso tiende a ser indefinida, lo que
a la postre implica acabar con la división de poderes y los controles al poder ejecutivo. Hoy
muchos señalan que avanzamos hacía la muerte de la Constitución del 91, al menos de todo el
espíritu democrático que ella recogió. La tendencia constitucional del actual gobierno
colombiano refleja un retorno al pasado, a todas la idea conservadores que niegan el Estado
de Derecho y la supremacía de los derechos individuales y colectivos. Incluso hoy ya no se
habla de Estado de Derecho, sino de Estado comunitario y más recientemente de Estado de
opinión, en una clara alusión a que sean las “mayorías gobernantes” quienes determinen como
se debe comportar el poder político, sin reconocimiento ni acatamiento de los principios,
valores y normas constitucionales. Ahora ya no se trata de la supremacía constitucional, sino
de la supremacía de las encuestas y los medios de comunicación.

2.1. CARACTERÍSTICAS DE LA CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE 1991:

 Los principales cambios de la constitución de 1991, con relación a la constitución de


1886, es el reconocimiento de Colombia con un Estado Social de Derecho, caracterizado
por ser un Estado unitario, descentralizado, presidencialista y con autonomía de las
entidades territoriales.

43 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

 Se establece un sistema judicial acusatorio con la Fiscalía General de la Nación como


órgano acusador dentro del poder judicial independiente de los jueces que se encargan
de juzgar y sancionar las conductas consideras delitos en el ordenamiento jurídico.

 Se crea la Corte Constitucional como organismo independiente de la Corte Suprema de


Justicia que desde 1910 ejercía la función de control constitucional, a quien se le confía la
guarda de la supremacía e integridad de la Constitución. En virtud de estas funciones
decide sobre las demandas de inconstitucionalidad que presenten los ciudadanos en
acción pública contra las leyes, decretos legislativos, leyes aprobatorias de tratados
internacionales, convocatorias a referendo o asamblea constituyente y contra las
decisiones judiciales relacionadas con la acción de tutela de los derechos
constitucionales.

 Se instituye la acción de tutela como un mecanismo expedito y efectivo para que los
ciudadanos puedan hacer valer sus derechos fundamentales a partir del artículo 8 de la
Declaración Universal de Derechos Humanos de 1948.

 Se prohíbe la reelección presidencial mediata (la reelección presidencial inmediata ya


estaba prohibida en la Constitución de 1886 y constituciones anteriores). Esta norma fue
derogada por acto legislativo de reforma constitucional aprobada en el año 2004 y
declarada exequible por la Corte el 19 de octubre de 2005.

3. TEORIA DE LOS DERECHOS HUMANOS


La lucha por los derechos humanos tiene una constante a lo largo de la historia de los pueblos
que han luchado por la democracia, la participación y la dignidad humana. En la práctica la
lucha por los derechos humanos ha sido una lucha por el poder político del Estado. En
consecuencia, la reivindicación de los Derechos Humanos se está planteando como una
reivindicación de poder social, así como del poder político.

Pero lo fundamental ahora es el reconocimiento que tienen los derechos, no sólo los
fundamentales, como principios legitimadores de las democracias y de un poder público
participativo e incluyente. Los derechos humanos representan un nuevo consenso internacional
y expresan lo que algunas han llamado un “consenso ético global”, por responder a las
necesidades de amplios sectores sociales y reflejar un deseo colectivo de reconocimiento de los
valores a la dignidad, la libertad y la vida, además el rechazo a toda forma de atropello y
desconocimiento de los derechos. Dicho consenso también comprende un concepto integrador
de los derechos y garantías ciudadanas que clama por la integración de los seres humanos en
el mundo laboral y cultural y se preocupa por la existencia misma de la humanidad ante los
atentados al medio ambiente y el desconocimiento de los derechos de los pueblos.

La ética de los derechos humanos admite un reconocimiento de que las garantías ciudadanas y
la inclusión de los pueblos con sus diferencias étnicas y culturales son producto de la
convergencia de resistencias colectivas al mundo polarizado que intenta imponer pensamientos
avasalladores de la diversidad. Es decir que se convierten en un plan de acción, una
orientación de civilización política asumida por los Estados para lograr la democracia y la
justicia social, pero de igual manera representan un proyecto de humanidad que cuestiona los
etnocentrismos y cualquier forma de atropello de la dignidad humana. La igualdad no sólo es el
reconocimiento de las diferencias –culturales, étnicas, religiosas, de género- sino la ampliación
del reconocimiento de lo humano o de protección de la humanidad.

44 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

DEFINICIONES:

Existen múltiples definiciones de los derechos humanos, cada una de ellas dependiendo de las
distintas concepciones jurídicas, políticas, religiosas o ideológicas de quien las exponga.
Algunas de dichas concepciones son:

 Los Derechos Humanos son prerrogativas que de acuerdo al derecho internacional, tiene la
persona frente al Estado para impedir que éste interfiera en el ejercicio de ciertos
derechos fundamentales, o para obtener del Estado la satisfacción de ciertas necesidades
básicas y que son inherentes a todo ser humano por el mero hecho de ser humano.
 Los Derechos Humanos son un conjunto de principios, de aceptación universal,
reconocidos constitucionalmente y garantizados jurídicamente, orientados a asegurar al
ser humano su dignidad como persona, en su dimensión individual y social, material y
espiritual.

CARACTERÍSTICA DE LOS DERECHOS HUMANOS

Las propiedades fundamentales de los Derechos Humanos son las siguientes:

 Inmutabilidad. Tradicionalmente se atribuye a los Derechos Humanos esta característica


según la cual los derechos no cambian y se mantienen inmodificables. Sin embargo, esta
característica no es admisible si se tiene en cuenta que los Derechos Humanos tienen
carácter histórico y se pueden enriquecer de acuerdo con los contextos y culturas donde
sean reconocidos. Frente a la vieja concepción liberal que defendía el carácter absoluto o
ilimitado de los derechos, hoy se entiende que por su propia naturaleza los Derechos
Humanos tienen, además de la "limitación" cultural objetiva de la historicidad y de la
situacionalidad, límites de naturaleza ético-jurídica que responden a la realidad concreta
de los sujetos y pueblos que reclaman sus derechos.

 Tanto el fundamento como las garantías de los derechos son conquistas históricas. El
reconocimiento de la dignidad de la persona humana como fundamento de los Derechos
Humanos y la necesidad de garantizar su respeto es el resultado de una larga lucha
histórica que aún no ha concluido.

 El carácter de absolutos pero no en la acepción, antes señalada, de ilimitados, sino en


otros sentidos básicos, que son complementarios entre sí:

o Constituyen la dimensión ético- jurídica fundamental.


o No pueden ser infringidos justificadamente y tienen que ser satisfechos sin ninguna
excepción.
o Confieren un poder inmediato y directo sobre el bien de la personalidad de que se trate,
y son oponibles frente a todos.
o Tiene prevalencia frente a aquellas decisiones políticas y normas jurídicas que, aún
siendo formalmente legítimas, no preserven valores recogidos en la Constitución.
o Son originarios o innatos. Se adquieren por ser persona, sin la necesidad de
concurrencia de ninguna otra circunstancia.
o Son extrapatrimoniales. Esta característica significa que no pueden ser reducidos a una
mera valoración económica.

45 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

 El carácter de inalienables. Esta característica significa que son irrenunciables, incluso


por sus propios titulares. Los Derechos Humanos, en cuanto que son inalienables se le
adscriben a la persona humana al margen de su consentimiento o incluso en contra del
mismo. Los bienes sobre los que recaen la protección de los Derechos Humanos son
atribuidos a los y las humanas de una forma ineludible. Sin embargo esta característica
que otorga derechos personalísimos, en la mayoría de los casos no responden a sus
necesidades y parece difícil que personas puedan renunciar a derechos que ni siquiera le
son reconocidos plenamente.

 Tienen carácter sistémico, es decir que son integrales. Los Derechos Humanos
constituyen un sistema, en el sentido de conforman una unidad y en cuanto que
elementos integrantes de la misma son interdependientes. Lo cual se demuestra por los
siguientes elementos:

o La existencia de un común fundamento, todos están encaminados a garantizar la


dignidad humana y son el presupuesto de la legitimidad del poder ejercido por los
gobierno democráticos.

o La esencial unidad existente entre el fundamento y las garantías de los Derechos


Humanos. Es decir, la misma naturaleza de los derechos evidencia una característica
dual: el fundamento indirecto mira hacia la dignidad de los hombres y mujeres
humana y el fundamento directo mira hacia las garantías del derecho de que se
trate.

o La derivación de ciertos derechos -los que podemos denominar Derechos Humanos


específicos- respecto de otros a los que podemos denominar Derechos Humanos
genéricos. Así, por ejemplo, el derecho a la objeción por conciencia es derivación de
un derecho más genérico, cual es la libertad de conciencia; el derecho a la
información es concreción de la libre expresión.

 El núcleo de cada derecho, que permite enlazar sistemáticamente los derechos genéricos
con sus respectivos derechos específicos es el contenido esencial de los mismos. El
contenido o ámbito de ejercicio de un éste, está en conexión directa con el ejercicio de
otro derecho.

 La existencia del principio de coordinación de los Derechos Humanos. Este principio


demuestra el carácter unitario e interdependiente de los derechos por el hecho de que
cuando uno de ellos quiebra, automáticamente empiezan a quebrar los demás,
empezando por aquellos que tienen una conexión directa con el derecho violado y
terminando por aquellos que tienen una conexión indirecta con el mismo. En tal sentido
se puede afirmar también el principio de coordinación de las garantías de los mismos, de
tal manera que la garantía de un derecho es determinante o produce un efecto en
cadena de protección de los demás derechos.

 El carácter dialéctico de los Derechos Humanos. Lo cual se traduce en una tensión


política que suele enfrentar dos puntos de vista y dos visiones diferentes del mundo: esto
se puede ver en los siguientes puntos:

o Entre los poderes estatales dominantes y los poderes sociales dominados.

46 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

o Entre la ideología de los Derechos Humanos dominante y las ideologías de los


Derechos Humanos dominadas.

o Entre las exigencias de las víctimas y las exigencias de los victimarios.

o Entre los derechos reconocidos estatalmente como derechos fundamentales y los


Derechos Humanos no positivizados y socialmente exigidos. Piénsese, por ejemplo,
en los derechos colectivos, aún no suficientemente reconocidos en el orden
constitucional interno de los Estados y en las normas del derecho Internacional, y sin
embargo, ya exigidos por los pueblos, comunidades o grupos sociales: por ejemplo el
derecho a la autodeterminación de los pueblos o el derecho a la paz.

 El carácter expansivo. Este carácter que afecta tanto a la idea como al contenido de los
Derechos Humanos se manifiesta en el proceso histórico de:

o El surgimiento y desarrollo de tres sucesivas generaciones de derechos: los civiles y


políticos, los derechos económicos, sociales y culturales y los derechos colectivos y
de los pueblos.

o Concreción de nuevos derechos que nacen como consecuencia de la dinámica interna


de derechos preexistentes y del mismo contexto de los pueblos.

o la progresiva universalización de los Derechos Humanos, tanto en relación a los


derechos garantizados y en relación a sus garantías.

CLASIFICACIÓN DE LOS DERECHOS HUMANOS

Los Derechos Humanos, pese a que se caracterizan por ser integrales, se han catalogado de
diferentes maneras de acuerdo a su desarrollo histórico, el objeto y el sujeto de
protección. La clasificación más común los agrupa en:

Derechos de primera generación: los derechos civiles y políticos.


Derechos de segunda generación: los derechos económicos, sociales y culturales.
Derechos de tercera generación: los derechos colectivos y de los pueblos.

47 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

Los derechos de la primera generación: derechos civiles y políticos:

Suelen ser definidos como aquellos derechos que se atribuyen a las personas, bien en cuanto
personas en sí mismas consideradas, bien en cuanto que ciudadanos pertenecientes a
un determinado Estado. Estos derechos pretender proteger la existencia de la persona y
garantizar su plena participación en el ejercicio del poder político.

Características:

 Es la primera forma de aparición de los Derechos Humanos, por eso se les denomina
también, desde la perspectiva actual, derechos de primera generación. En su origen, en el
siglo XVIII, reciben varios nombres, tales como derechos individuales, innatos, esenciales
y derechos del hombre y el ciudadano.

 En su origen los derechos individuales son concebidos como la expresión de los derechos
innatos o "derechos esenciales" del que era portador el hombre en el estado de naturaleza
previo a la entrada del hombre en sociedad. Por lo anterior son defendidos por la
concepción naturalista del derecho y la ética.

 Ante todo se trata de proclamar, a través de estos derechos, la facultad de hacer de todo
ser humano frente al Estado:

o Los derechos civiles suponen la exigencia de los particulares frente al poder del Estado
de la exclusión de su actuación. Por ello se les ha llamado "derechos autonomía".

o Los derechos políticos suponen la posibilidad de participación de los ciudadanos en la


formación de la voluntad política del Estado a través del derecho de sufragio. Por eso se
les ha denominado derechos de participación.

 Los derechos individuales tienen, en esta primera fase, las siguientes características:

o Reconocimiento y garantía formal de los derechos fundamentales, pasando a formar


parte de los textos constitucionales.

o Concepción individualista de los derechos, sólo existen para los individuos y no para las
colectividades.

o Concepción de los derechos como ámbito de autonomía y no injerencia por parte del
Estado.

o Consiguientemente, la libertad es el valor tomado como fundamental.

o El derecho de propiedad aparece como un derecho básico o central, junto con la


libertad y la seguridad.

o La ley es considerada como expresión de la voluntad general y, en consecuencia, se


entiende que la garantía de los derechos innatos debe pasar necesariamente por el
reconocimiento de la ley.

48 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

o Primacía de la ley que regula toda la actividad estatal, en lo concerniente al poder


ejecutivo y judicial.

o La ley es freno y límite de la acción del Estado.

o Se subraya la importancia de la garantía de los derechos a través de la ley.

o La ley reconoce y garantiza el principio de división de poderes.

o La ley reconoce y garantiza el principio de la independencia del poder judicial.


o
o La única función de las leyes es garantizar esos derechos preexistentes.

 El sujeto activo de los mismos es la persona individual, considerada como un todo


absoluto y aislado.

Los derechos de la primera generación se subdividen en dos grandes bloques de derechos:

 Los derechos civiles: que comprenden el derecho a la vida, a la libertad, a la integridad


personal y a la seguridad personal.

 Los derechos políticos: que también se denominan genéricamente como derechos a la


participación política. Comprende, entre otros el derecho a la asociación política, a la
reunión, a acceder a los cargos públicos, al sufragio, activo y pasivo y a participar en la
elaboración de las leyes y reformas constitucionales.

Los derechos de segunda generación: derechos económicos, sociales y culturales:

Es en el siglo XIX donde podemos situar las primeras reivindicaciones de los derechos
económicos y sociales, con la aparición del proletariado como protagonista histórico y
debido al creciente proceso de industrialización. Las primeras consecuencias de la
revolución industrial habían dado lugar a condiciones de trabajo degradantes y muchas
veces infrahumanas, que ponen de manifiesto la insuficiencia de los derechos si la
democracia política no se convertía además en democracia social. Ya no basta con
asegurar la existencia individual y la participación, es necesario desarrollar políticas
sociales, económicas y culturales que hagan posible la existencia colectiva y el ejercicio
de la dignidad.

Características:

 Actualmente estos derechos tienen una doble dimensión: objetiva y subjetiva.

o En sentido objetivo pueden entenderse como el conjunto de normas a través de las


cuales el Estado lleva a cabo su función equilibradora de las desigualdades sociales.

o En su sentido subjetivo, podrían entenderse como las facultades de los individuos y de


los grupos a participar de los beneficios de la vida social, lo que se traduce en
determinados derechos y prestaciones, directas o indirectas, por parte de los poderes
públicos.

49 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

 Son concreción de los valores de libertad, igualdad y fraternidad:

o Libertad entendida no solo como ausencia de impedimentos, sino como poder,


como posibilidad de acceso a los medios, como satisfacción de necesidades,
poseedores de determinados bienes que hagan posible el pleno desarrollo de la
personalidad. Si los derechos civiles y políticos habían surgido para reivindicar la
libertad como libertad ante el poder, la segunda generación de derechos surgen, por el
contrario, para reivindicar la libertad como "hallarse libre de necesidad".

o Igualdad en el sentido de trato igual a situaciones iguales o diferentes, según


sea el caso, teniendo en cuenta para su tratamiento las circunstancias relevantes, en la
que el Estado tiene la obligación de participar. Si en los derechos civiles la igualdad era
entendida como "igualdad ante la ley", en los derechos económicos, sociales y
culturales la igualdad es entendida como igualdad en los bienes materiales básicos
para una existencia digna.

 Solidaridad entendida como equivalente a la justicia social. Son derechos, por tanto, en los
que el valor justicia pasa a tomar una nueva dimensión y una mayor potenciación. De la
justicia como igualdad abstracta ante la ley se pasa al concreto concepto de justicia social.
Esa relevancia especial del valor solidaridad se refleja en el derecho a la participación en
los recursos sociales a los distintos miembros de la comunidad.

Tabla No. 3.
DIFERENCIAS ENTRE LOS DERECHOS CIVILES Y POLÍTICOS Y LOS DERECHOS
ECONÓMICOS, SOCIALES Y CULTURALES

Derechos civiles y políticos Derechos económicos, sociales y


culturales
La persona a la que hacen referencia es la La consideración de la dignidad de la persona
persona humana. humana se hace en relación a un hombre y
una mujer situados social e históricamente y
en relación a unas necesidades concretas.
Los derechos son entendidos como derechos Aparecen como derechos que tienen un origen
superiores y anteriores al Estado. histórico y social concreto.
Nacen como principios que establecen límites Se plantean como exigencias de los individuos
frente a los poderes públicos, como límite o de los grupos frente al Estado, a fin de que
impuesto a la arbitrariedad del Estado. éste proporcione los medios que hagan posible
una vida humana digna o un nivel de vida
adecuado como alude la declaración universal.
Surgen para especificar ante todo, aunque no Surgen con la finalidad de pormenorizar las
exclusivamente, el valor libertad. exigencias del valor igualdad.
Son derechos que pretenden una acción de Pretenden una actuación positiva del Estado
freno a los poderes del Estado. para que garantice igualdad social, económica
y cultural.
Son derechos que nacieron ligados a proteger Estos derechos hacen parte de las luchas
los poderes de la burguesía naciente en la contra los abusos por parte de la burguesía a
edad media. que había dado lugar la doctrina de los
derechos individuales.
Hacen que se establezca una relación de Buscan el reconocimiento de los grupos

50 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

Derechos civiles y políticos Derechos económicos, sociales y


culturales
confrontación entre individuo – Estado. sociales, con sus diferencias, y la articulación
entre ellos.

Los derechos de la tercera generación: de los pueblos o derechos de solidaridad:

Con esta denominación se hace referencia a la existencia de unos nuevos derechos humanos,
surgidos como consecuencia de la especificidad de las circunstancias históricas actuales
y que responden ante todo al valor solidaridad. Este grupo fue promovido a partir de la
década de los setenta para propiciar la existencia de los pueblos y las condiciones de
vida digna ya no sólo para las personas concebidas en mera individual, sino que buscan
garantizar la existencia de la humanidad.

Características:

 Son derechos que reciben varios nombres: derechos de los pueblos, derechos de
cooperación, derechos de solidaridad, derechos de tercera generación.

 La evolución de las luchas sociales ha venido produciendo durante las dos últimas
décadas el surgimiento de nueva categoría de derechos, algunos de los cuales han tenido
reconocimiento pero otros no han sido consagrados o reconocidos por el sistema de
Naciones Unidas, por ejemplo los derechos de los pueblos.

 Nacen de la necesidad de garantizar protección y reconocimiento de derechos a los


grupos sociales y pueblos, ello supone replantear las garantías tradicionales con la
pretensión de darles su máxima potencialidad.

Clasificación:

Aunque no existe acuerdo en la doctrina a la hora de enumerar y clasificar los derechos de la


tercera generación, dentro de esta categoría se pueden enumerar: el derecho a la soberanía y
autodeterminación de los pueblos, al desarrollo, al medio ambiente sano y a paz, entre otros.

El concepto de autodeterminación hace referencia a la posibilidad que tienen los pueblos de


elegir libremente su proyecto político, económico, social y cultural, sin la coerción y limitación
de otros Estados o naciones. Y el calificativo "libre" alude a una libertad que puede ser
entendida de dos maneras: negativamente, como ausencia de coacción o impedimento, o
positivamente, como posibilidad de auto-realización. Es un derecho que las últimas décadas ha
tenido mayor desarrollo y ha implicado un rechazo absoluto a la dominación colonial
extranjera. Sin embargo, se ha avanzado poco en el reconocimiento de este derecho a nivel
interno, es decir en el reconocimiento a los pueblos y nacionalidades que existen al interior de
los mismos Estados. Hasta ahora los derechos son limitados a ciertos reconocimientos de los
pueblos indígenas y los grupos étnicos.

El reconocimiento de este derecho implica que son los pueblos, naciones, comunidades o
minorías étnicas quienes son el objeto del derecho a proteger. Es decir, que se supera la visión
individualista y biológica de los derechos humanos, para entender que dichos individuos
requieren de la libertad y la igualdad de los pueblos para garantizar su propia existencia.

51 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

La libre determinación de los pueblos es la base los derechos de primera y segunda


generación, como también el punto de partida para los de tercera generación. Es un derecho
clave, desde el que se puede comenzar una lectura de todos los demás, asegurando de este
modo un orden lógico y sistemático de los mismos. Por ejemplo, mal se puede considerar que
un ciudadano tiene derecho de elegir o ser elegido, o de educarse o trabajar libremente, si el
pueblo del que es miembro está sometido a una potencia extranjera en lo político y en lo
económico.

Es a su vez la expresión de los valores que inspiran a los demás derechos: a la vida, porque se
trata de la existencia no sólo de cada uno, sino de un colectivo, de un entorno social para la
vida de cada cual. A la libertad, como lo expresa su mismo nombre. A la igualdad, porque
propone las bases para un tratamiento igualitario de los hombres y mujeres de todos los
pueblos, y el de éstos entre sí. Y la solidaridad, porque es lo que aglutina a los miembros de
un pueblo y lo identifica como tal; y es lo que lo dignifica en cuanto lo aplica como criterio para
relacionarse con otros pueblos. La libre determinación es el punto de partida para el desarrollo
digno de un pueblo, es lo que posibilita un empleo más racional de los recursos naturales, y
por ende también se relaciona con el derecho a un medio ambiente sano, y finalmente es la
condición de posibilidad para la paz.

El derecho a la libre autodeterminación conlleva otros derechos tales como:

 La libre autodeterminación política. La cual comprende el derecho de cada pueblo a


mantener su actual forma de organización política, o a cambiarla si lo estima conveniente,
sin interferencia de otros Estados. Lo que puede significar, eventualmente, lograr su
independencia como un Estado soberano. Además, el poder elegir sus gobernantes, la
oportunidad y el modo de hacerlo.

 La autodeterminación económica. Que supone que cada pueblo pueda mantener su


forma de organización económica, modificarla o definir los tipos de relaciones económicas
que le sean más propicias. Además poder disponer de los propios recursos naturales.

 La autodeterminación cultural, que comprende la posibilidad de preservar, mantener y


desarrollar su propia cultura, lengua, religión, identidad, entre otros.

EN SINTESIS:

Como señala el Padre Javier Giraldo en su escrito “Solo los Estados violan los Derechos
Humanos”: “La palabra "derecho"; las fórmulas "derechos del hombre", "derechos del
ciudadano", "derechos humanos" y sus conceptualizaciones, se originaron frente a situaciones
de abusos de poder (feudalismo; absolutismo monárquico; conquista y colonización; guerras
mundiales) y buscaron dar expresión convencional a los derechos del vasallo, del súbdito, de
la plebe, de los colonizados, de los expoliados, de los pueblos dominados, etc., frente a la
arbitrariedad del poder, limitándola siempre” 27. Por ello las categorías que abordan el
constitucionalismo moderno y la teoría de los derechos humanos son la expresión primordial
de la democracia. El desarrollo histórico de ambos conceptos es lo que le da justificación a los
Estados modernos. Cualquier estructura de poder política sólo podrá legitimarse formalmente
si cuenta con una normatividad superior que integre no sólo el contenido de los derechos sino
también mecanismos que garanticen su eficacia, así como herramientas para la participación
activa de la ciudadanía.
27
GIRALDO, Javier. Solo los Estados violan los derechos humanos.
52 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA
PROCESOS DEMOCRÁTICOS

El anterior postulado es el que se recoge en la Constitución Política expedida en Colombia en


1991. Allí no sólo se define que éste es un Estado Social, Democrático y de Derecho, también
se allega, casi que en su totalidad el Sistema Internacional de los Derechos Humanos, todo
enmarcado en principios que buscan el pleno reconocimiento de la dignidad humano como
valor fundante en nuestra nación.

Sin embargo, la sola existencia del texto constitucional y el reconocimiento de los derechos
humanos no son suficientes para garantizar que los asociados del Estado disfruten a plenitud
de tales derechos. La realidad política plantea desafíos de reflexión y análisis para entender
por qué en la realidad estos postulados no se cumplen. Nuevamente entonces vemos como las
reflexiones del profesor Ferdinand Lasalle recobran sentido cuando habla de las Constituciones
reales y las Constituciones de papel y como existen factores reales de poder que en la práctica
están por encima de los mismos principios constitucionales, lo que dificulta su aplicabilidad y la
contradicción entre lo que dicen las normas y la realidad del país.

A lo anterior se suma, para el caso de Colombia, la existencia de un conflicto social y armado y


la definición de un modelo de Estado diferente – Estado comunitario – que limitan aún más la
vigencia de un orden constitucional y democrático que recoja los principios de la filosofía
demoliberal. Dicha realidad es la que nos proponemos revisar en la tercera unidad.

REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS:
Pietro Virgta, Diritto Constituzionale, p. 68. Citado por Olano y Olano, ob. cit., p. 63.
HAURIOU, André. Derecho constitucional e instituciones políticas. Barcelona. Ediciones Ariel.
1971. Pp 60 -69

ROSSI, Pellegrino Obras completas. Tomo Primero, Guillamin Librería, París, 1866, pág. LXI.

PECES-BARBA MARTÍNEZ, Gregorio. La Constitución como reglas del juego, en El País, Madrid,
6 de diciembre de 1977, pág. 7.

BLACK, Henry Campbell. Citado por Rodrigo Borja en su libro Derecho político y constitucional.
Fondo de Cultura Económica. Argentina. 1991. 365 P.

WALKER, Harvey. "An American Conception of Public Administration" United States, American
Political Science Review.Oct, 1945.

ESTEVEZ GAZMURI, Carlos. Elementos De Derecho Constitucional Chileno Chile, Jurídica,


1949. 495 p.

CAPITANT, Rene. Citado por Gwéanël LE BRAZIDE en su artículo: René Capitant y Carl Schmitt
frente al parlamentarismo: de Weimar a la quinta república. Cuestiones Constitucionales.
Revista Mexicana de Derecho Constitucional. Número 6 Enero-Junio. Año 2002.

ALBERDI, Juan Bautista. Organización de la confederación Argentina. Tomo segundo. Buenos


Aires. Besanzón, Imprenta de José Jacquin. 1858.

53 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

LINARES QUINTANA, Segundo V. Tratado de la ciencia del derecho constitucional argentino y


comparado: parte general: teoría de la constitución. 2ª edición. Buenos Aires. Alfa, 1953.
513 p.

BURDEAU, Georges. La democracia. Editorial Ariel, 1959

LASALLE, Ferdinand. ¿Qué es una constitución. 2ª. Edición. España. Editorial Barcelona. Ariel,
2002 183 p.

DE ESTEBAN, Jorge. Las Constituciones de España. Madrid, 1981.

MANTILLA QUIJANO, Alejandro y MÚNERA RUIZ, Leopoldo. En: Cuando la excepción es la


regla. Colombia: estado de excepción y régimen político. Coordinación Colombia Europa
Estados Unidos. Observatorio de Derechos Humanos y Derecho Humanitario. 1ª. Edición.
Bogotá, Colombia. Ediciones Antropos. 2005. 146 p.

GIRALDO, Javier. Solo los Estados violan los Derechos Humanos. Octubre de 1993. Página web
Desde los márgenes: http://www.javiergiraldo.orh

54 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

UNIDAD 3

PROBLEMÁTICAS ACTUALES EN LA DEMOCRACIA


EN COLOMBIA

OBJETIVO ESPECÍFICO:

Abordar algunos ejes principales de las problemáticas colombianas contemporáneas,


específicamente el debate sobre las democracias representativas en sociedad en conflicto.

INDICADOR DE EVALUACIÓN:

El estudiante estará en capacidad de analizar cómo se expresa el conflicto y la crisis


institucional en su realidad local, y el papel del profesional universitario en la búsqueda de
soluciones.

55 FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CLARETIANA


PROCESOS DEMOCRÁTICOS

MAPA CONCEPTUAL
PROCESOS DEMOCRÁTICOS

1. EL DESAFÍO DE LA DEMOCRACIA
Definir la democracia es importante porque permite establecer qué esperamos de ella. Como lo
expresa Giovanni Satori, si la definimos de manera irreal entonces nunca podremos acercarnos
a realidades democráticas. Desde el punto de vista de la definición clásica, la democracia es el
poder del pueblo, pero esto por sí mismo no representa la realidad política de los Estados que
se llaman a sí mismos democráticos. Las definiciones, como hemos visto, siempre contraponen
diversas teorías y concepciones que obedecen a planteamientos de tipo ideológico, por ello
puede haber tantas ideas políticas como individuos en la sociedad. Lo que hacemos aquí es
recoger dos ideas esenciales de la concepción liberal y de las ideas socialistas, para acercarnos
a un concepto que exprese la realidad de las aspiraciones sociales hoy.

Para los liberales, el concepto de democracia está ligado a cinco valores fundamentales: a) la
libertad, b) la propiedad, c) la participación directa, d) el sufragio universal y e) la separación
de poderes expresión de la democracia representativa. Estas ideas han sido cuestionadas por
el marxismo que plantea que las revoluciones burguesas han implantado democracias formales
y un constitucionalismo que en teoría reconoce los derechos, pero que la práctica evidencia
que están lejos de cumplirse la satisfacción de las necesidades básicas del conjunto de
ciudadanos por parte de Estados, que gobiernan para satisfacer otro tipo de intereses. En
consecuencia, se plantean las ideas socialistas que cuestionan la propiedad privada y la
libertad simplemente económica basada en la especulación del mercado. Por ello proponen
pasar de la transformación teoría del poder, garantizando que el pueblo tome las riendas
garantizando la socialización de los medios de producción y de consumo, privilegiando el valor
de la igualdad y la nacionalización de las riquezas. Sin embargo, ambas concepciones tienen
como falencia la minimización que hacen de ciertos derechos al dar preponderancia a otros,
desconociendo ambos la integralidad de los derechos. Mientras el liberalismo privilegia el valor
de las instituciones y un aparente reconocimiento de la libertad individual, el socialismo
relativiza los derechos individuales al previlejar la comunidad, originando mecanismos
coercitivos que atentan contra otros derechos. El discurso contemporáneo plantea entonces la
necesidad de integrar ambos concepto en el poder público y en las constituciones: una
democracia social con la democracia económica.

La democracia social que se reconozca a sí misma como una estructura social horizontal,
integrada por el conjunto de democracias primarias que vigorizan y alimentan la democracia
desde la base, a partir de la sociedad civil que se articulan para auto gobernarse. La
consecuencia es que la democracia social se expresa en micro democracias que sirven de base
a la macro democracia de conjunto y a la superestructura política. La democracia económica
exige la igualdad económica, la eliminación de los extremos de pobreza y riqueza y la
redistribución que garantice el bienestar general. Ambas democracias se necesitan, con
condiciones de existencia la una de la otra; las democracias sociales y económicas amplían y
complementan la democracia política.

La discusión sobre el tipo de democracia en Colombia es la que determina la coyuntura política


en los últimos tiempos. Tanto algunos columnistas de medios de comunicación, como algún
sector de la academia han evidenciado que el país se enfrenta a una profunda crisis
institucional que está echando por la borda los logros jurídicos, políticos y filosóficos ganados
con la Constitución de 1991 y ampliados en los primeros desarrollos jurisprudenciales de la
Corte Constitucional. De un Estado liberal que reconoce los derechos y libertades individuales,
estamos girando nuevamente a un Estado de corte confesional que desconoce y ataca las
diferencias políticas, culturales, sexuales y de género y por tanto el reconocimiento de los
derechos consagrados en el ámbito nacional e internacional. A ello se suma una profunda crisis
PROCESOS DEMOCRÁTICOS

en la distribución equitativa de la riqueza que conlleva el desconocimiento de los derechos


económicos, sociales y culturales. La pobreza y el desempleo crecen en las áreas rurales y
urbanas aumentando la desigualdad y la exclusión social.

Finalmente, lo más grave de todo es el escalamiento del conflicto social y armado que sigue
dejando miles de muertos y un país que se resigna al autoritarismo como única forma de
gobierno.

1.1. LA DEMOCRACIA DIRECTA:

Consiste en el gobierno directo del pueblo sin necesidad de representantes. Todos los poderes
confluyen en el pueblo: el ejecutivo, judicial y legislativo, que orienta directamente el poder
público. Para ello el pueblo se reúne en asambleas y allí se decide todo lo relativo al gobierno.

Este modelo de democracia es cuestionado y casi que descartado por todos los teóricos
constitucionalistas que la han descartado para la historia, “es un recuerdo que pertenece a la
historia” señala Jaime Vidal Perdomo, además se recuerda que el mismo Rousseau la descartó
y sentó las bases para la democracia representativa en su famoso Contrato Social. Pese a lo
anterior es absurdo señalar que este tipo de democracia no existe. Países como Suiza
mantienen algunos elementos del sistema asambleario, pero además otras comunidades o
naciones la tienen como su forma de gobierno principal. Los casos más representativos siguen
siendo las comunidades indígenas donde el la Asamblea en conjunto toma las decisiones y
elige por consenso a sus líderes políticos. Basado en tradiciones culturales que se defienden y
se diferencian de las instituciones estatales. No obstante, estas comunidades también han sido
permeadas por el concepto formal de democracia y cada vez más recurren a instituciones
propias del Estado liberal.

1.2. LA DEMOCRACIA REPRESENTATIVA:

Es un tipo de gobierno en el cual el pueblo no ejerce directamente el poder político, sino que lo
hace a través de sus representantes que elige por medio del voto directo ejerciendo su
soberanía. El pueblo se considera el constituyente primario que otorga poder al constituyente
secundario – el Congreso – para que en su nombre haga las leyes. Entre las características de
este modelo de democracia se encuentran:

 Los actos de los representantes o mandatarios, se consideran cumplidos por el mismo


representado que ha delegado su poder soberano. Teóricamente, pueblo mantiene su
poder, pero ha delegado su ejercicio en sus representantes. De esta manera, los actos se
consideran legítimos porque representan las aspiraciones del pueblo y por eso no tienen
que ser ratificados por un pronunciamiento popular. Este principio es el que permite que
los Congresos o Parlamentos impulsen leyes que sólo tienen que estar sujetas al
cumplimiento formal de la ley, o en otros casos al control constitucional como en
Colombia, donde toda la legislación debe ser examinada por la Corte Constitucional. Esta
presunción de legitimidad ha permitido en los Estados modernos todo tipo de desmanes
por parte de los gobernantes que han convertido en leyes políticas autoritarias y
arbitrarias que atentan contra la dignidad humana ya que no se discute la justicia de las
normas sino su legalidad.

 El mandato es colectivo: Quiere esto decir que el mandato no es de las personas que han
votado por él, sino de la nación entera, la cual ha delegado el ejercicio de la soberanía que

58
PROCESOS DEMOCRÁTICOS

ella detenta, no por porciones a cada uno de los representantes, sino a todos en cuerpo
conforme a las formas que la constitución establezca. La posibilidad de un mandato entre
el elector y el elegido queda descartada. La soberanía, siendo indivisible, no puede ser
delegada en su ejercicio sino al junto de sus representantes. En la teoría de Rousseau, por
el contrario, la soberanía se entendía divisible y por tanto podía existir una especie de
contrato entre elector y representante sobre la parte de la soberanía que le correspondía.

 El mandato no es imperativo, es representativo: es una de las principales contradicciones


ya que este principio establece que quien haya sido elegido representante de la nación, no
tiene la obligación jurídica de seguir las instrucciones de los que consignaron su voto por
él. Al resultar elegido, el representante de despoja de sus vínculos con el elector y se
convierte en mandatario único de la nación. La consecuencia de ello es que el
representante no es responsable delante de sus electores y el no cumplimiento no genera
como sanción la pérdida del mandato. En Colombia sólo con la Constitución de 1991 se
estableció la revocatoria del mandato para alcaldes y gobernadores que no cumplan con el
voto programático, sin embargo los requerimientos son tan complejos que la figura se
hace casi imposible de aplicar por los ciudadanos que la impulsen.

2. EL CONFLICTO QUE NO SE RESUELVE


Colombia lleva más de cuarenta años en una guerra no declarada y que pretende ser
desconocida por sus gobernantes, lo que se convierte en el principal obstáculo para su
superación. Es un conflicto que ha dejado cientos de bajas entre los dos bandos, pero que,
peor aún, constituye la principal causa de muertes violentas de civiles inocentes que han sido
masacrados de diferentes maneras, en hechos que comprometen la responsabilidad de los dos
actores que se disputan el poder: los grupos guerrillero y el Estado, representado en sus
fuerzas oficiales y los grupos paramilitares.

Si bien la Constitución política define a Colombia como un Estado Social de Derecho, en la


práctica se ha convertido en un Estado violento donde el ciclo de violencia imperante se genera
y se perfila alrededor de un modelo de sociedad intrínsecamente conflictivo que hunde sus
raíces en la gestación histórica de la nacionalidad colombiana, pero cuyos factores llegan a un
intensivo nivel de conciencia social en los albores del siglo pasado, generando movimientos
sociales y políticos de carácter no violento que luchan por superar dichas contradicicones.
Dicho modelo conflictivo se caracteriza por la concentración de la tenencia de la tierra, la
marginación estructural de las mayorías en materia económica y el monopolio y centralidad del
poder político. Lo anterior se complementa mediante la implementación de unas opciones
políticas, unas estrategias, una doctrina contrainsurgente y unos métodos represivos, que
desfiguran la esencia misma del Estado de derecho.

El poder político colombiano se ha negado consecutivamente a las salidas políticas de fondo


para superar el conflicto y, por el contrario, ha acentuado su postura militarista como una
opción viable para derrotar la oposición, sea esta pacífica o violenta por la vía armada. Ello se
complementa desde una doctrina contrainsurgente promovida desde el ala militar que defiende
la teoría del enemigo interno “todo el que no está conmigo, está contra mí”. Tesis que se
refuerza desde la concepción del Estado comunitario y las políticas antiterroristas que implican
un cambio político y filosófico al asumir, contrario a la clásica teoría constitucional, que a quien
se debe proteger y defender es al Estado; en ese orden de ideas, los ciudadanos y ciudadanas
no tienen derechos, sino obligaciones frente al Estado, lo que a la postre significa la
relativización y negación de los derechos humanos. Además, se suma la estrategia represiva

59
PROCESOS DEMOCRÁTICOS

contra la población, desde la institucionalidad y la para-institucionalidad, expresada en los


grupos paramilitares y la parapolítica. Los métodos han sido de todo tipo: detenciones
arbitrarias, ejecuciones extrajudiciales (eufemísticamente nombrados como “falsos positivos”),
desapariciones y desplazamientos forzados, señalamientos, persecución y vigilancia ilegal,
como lo que actualmente ha sido denuncia en relación con el Departamento Administrativo de
Seguridad –DAS-.

La preponderancia de una concepción militarista del ejercicio del poder político y de la


democracia ha caracterizado los distintos gobiernos colombianos. Bajo la definición de una
específica idea de defensa y seguridad nacionales, fundada en el apremio de la lucha contra el
comunismo, el terrorismo y el narcotráfico, se insertan una serie de dispositivos y facultades al
estamento militar, se configura aún hoy, la estrategia paramilitar, bajo formas de control
social, político y económico, y se exacerba el conflicto armado. Esa concepción arraigada en la
lógica del enemigo interno y de la defensa a ultranza de la propiedad privada de la tierra, ha
traído consigo la ideación de un plan o política sistemática de exterminio de amplios sectores
de la población.

El gobierno actual, ha radicalizado este discurso mediante la implementación de la “política de


defensa y seguridad democrática”, que niega la existencia del conflicto armado, para calificarlo
como amenaza terrorista, y extender en el escenario internacional la tesis de la legítima
defensa preventiva aún en los Estados vecinos; fortaleció la red de informantes con un secreto
e inexpugnable sistema de recompensas al que no penetran las instancias de control y que es
reacio a modificar aún por recomendación de la Comunidad internacional; presiona a las
Fuerzas Militares en la obtención de resultados en la lucha contra las organizaciones ilegales, a
cambio de licencias o permisos y bonificaciones mantenidas en reserva por Directivas del
Ministerio de Defensa; subordina las autoridades civiles al estamento militar a través de la
doctrina de acción integral; legaliza las estructuras paramilitares como paso previo para la
consolidación del modelo de control económico, político y social de bastas zonas del territorio
nacional, dejando como consecuencia una honda crisis institucional que para muchos hace
inviable la democracia y aún el mismo Estado Social de Derecho.

Sin embargo, esta estrategia no ha dado resultado para superar el conflicto, algunas cifras son
claras al respecto: durante la era de la política de seguridad democrática han sido asesinadas o
desaparecidas por motivos políticos 13.634 personas por fuera de combate. Y hay un
incremento del 67% de las ejecuciones extrajudiciales directamente atribuidas a la fuerza
pública (entre julio 2002 y diciembre de 2007, 1.122 personas fueron asesinadas y
presentadas ante la opinión pública como guerrilleros abatidos en combate). Entre los años
2008 y 2009 fueron asesinados cerca de 100 sindicalistas. Las cifras sobre reclutamiento
forzado de niños y niñas son dramáticas, hasta el año 2003 se habían registrado un número
cercano a los 11.000 niños y niñas en las filas de la guerrilla y de los paramilitares. La
violencia contra las mujeres ha provocado, por su gravedad y extremo silenciamiento,
informes de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, la Relatora sobre la violencia
contra las mujeres de Naciones Unidas y organizaciones especializadas en género, que han
alertado sobre las mutilaciones de que son víctimas, la violencia sexual como forma de
humillar el enemigo, la esclavitud o la condición de servidumbre a las que son sometidas. Pero
también el gasto militar se ha disparado, llegando hoy a cerca del 7.5% del PIB.

El gasto en defensa es igual a la suma de todas las transferencias en salud, educación y


saneamiento ambiental. Alrededor de 2,3 billones de pesos de la inversión total del gobierno,
cerca del 65%, se destina a inversión en equipo militar. El aumento del gasto militar va de la

60
PROCESOS DEMOCRÁTICOS

mano de un incremento del pie de fuerza, que sin embargo no garantiza la protección de la
vida de los habitantes del país, como lo muestran el aumento en las cifras de homicidios en
casi todo el país, lo que representa el fracaso de la seguridad democrática defendida por el
actual presidente de la República.

Todo lo anterior, evidencia que la democracia colombiana sigue siendo un ideal no alcanzado
que tiende a desaparecer, que la sociedad no avanza en ganar consensos que le permitan
construir una nación basada en el reconocimiento del principio de solución política de los
conflictos. La sociedad colombiana está llamada a ejercer una ciudadanía activa que salga del
letargo de las últimas décadas, que la ha llevado a balizar los métodos de terror y asumir la
guerra como hechos aislados de la cotidianidad.

Desde el año 2003 cuando el país decidió entender la magnitud de la barbarie sufrida por un
amplio sector de la población, se inicio un ciclo que preveía el rompimiento del silencio
nacional. Los medios de comunicación decidieron estar por encima de sus intereses
económicos y políticos para mostrarle al país la cruda realidad del paramilitarismo; más
recientemente, también se decidió a develar las causas y consecuencias de los homicidios por
fuera de combate ejecutados por las fuerzas armadas. Sin embargo, nuevamente estamos
asistiendo al silencio, nuevamente el aturdimiento se apodera de la población y los rostros
sufridos de las víctimas dan paso a otras tragedias o a otras distracciones que no permiten
avanzar en soluciones reales.

El conocimiento de los derechos humanos y su aplicabilidad requieren transformarse en una


filosofía de vida, un paradigma ético fundamental de la ciudadanía para combatir la barbarie
en que está sumergido nuestro país, donde matanzas, exterminios, asesinatos selectivos,
secuestros, corrupción, tráfico de drogas y de informaciones, analfabetismo, desempleo,
trabajo infantil, exclusión social, parecen cosas normales en una sociedad que se pretende
democrática.

Hoy la tarea de luchar por el pleno reconocimiento de los derechos humanos pasa por
confrontar el concepto de democracia limitada o de baja intensidad, como describe Boaventura
de Sousa Santos los modelos políticos contemporáneos, que se reducen a procedimientos
administrativos y niegan los procesos de distribución social y pleno reconocimiento de las
garantías del conjunto de la población empobrecida y excluida social, política y
económicamente.

La realidad concreta de los derechos humanos en Colombia nos plantea desafíos en relación
con la necesidad de superar el conflicto social y armado que ya lleva cuatro décadas sin que se
resuelva las causas que le dieron origen, pero que además propugne por la superación de los
métodos de barbarie que evidencian una degradación de la guerra, cruel por naturaleza. En
palabras del padre Javier Giraldo:

“El gran desafío ético que lanza un conflicto armado es la posición que se asume frente
a la violencia, frente a la guerra y frente a sus métodos. La repugnancia ética que
causa toda destrucción de vidas humanas, todo atentado contra la libertad o contra los
bienes producidos por los seres humanos, no tiene discusión. Los mismos actores
armados reconocen constantemente, en las entrevistas y discursos, que están
realizando, a su pesar, lo que les repugna.

61
PROCESOS DEMOCRÁTICOS

“Esto explica que se hayan multiplicado organizaciones que propenden por la paz, y que
el discurso sobre la paz se haya centrado cada vez más en urgir un cese del fuego. Las
atrocidades de la guerra, sobre todo en el nivel de degradación en que la vivimos hoy
en Colombia, facilitan las movilizaciones masivas por la paz, que se apoyan en
sentimientos ampliamente compartidos de horror ante los efectos de la guerra. En este
clima han arraigado también ciertos discursos de reconciliación entendida como olvido
del pasado, promovidos por sectores de la Iglesia y otras instituciones 28.

Si pretendemos que la democracia se convierta en un instrumento efectivo para la


construcción de una sociedad más justa, la lucha por los derechos humanos tiene que estar en
la agenda de cada ciudadana y ciudadano. Son los derechos los presupuestos legitimadores de
una sociedad respetuosa de la vida y la dignidad humana. Pero está visto que éstos no se van
a conseguir por generación espontanea, será necesario una fuerza social que integre las
expectativas de los distintos sectores sociales que obliguen a los gobernantes y las
instituciones del Estado a su pleno reconocimiento.

3. LA PAZ COMO DERECHO


La Constitución de 1991, además de las características ya enumeradas, introdujo un nuevo
concepto que no se encontraba presente en la anterior Carta: La convivencia pacífica como
uno de los fines del Estado y más concretamente el derecho a la paz como parte de los
derechos de la sociedad. Estos dos conceptos, además de novedosos, adquieren gran
importancia si se tiene en cuenta la realidad conflictiva que vive el país, que incluso genera
tensiones más allá de las fronteras nacionales, poniendo en riesgo otro de los principios
constituciones que es el de velar por la integración latinoamericana. El derecho a la paz, sin
embargo, ha estado relegado en la discusión teórica y en su aplicación efectiva, de hecho es
difícil determinar el contenido y núcleo esencial de dicha garantía.

La Constitución Política establece en su artículo 22 que: “La paz es un derecho y un deber de


obligatorio cumplimiento.”. Pero además, el artículo 2 señala que: “Son fines esenciales del
Estado: servir a la comunidad, promover la prosperidad general y garantizar la efectividad de
los principios, derechos y deberes… defender la independencia nacional, mantener la
integridad territorial y asegurar la convivencia pacífica y la vigencia de un orden justo. ” La
Corte Constitucional al referirse al tema ha ampliado el concepto señalando que este derecho
es el instrumento con el que cuenta la sociedad para procurar su supervivencia, seguridad y
tranquilidad. Las fuerzas militares, entonces, tienen que estar al servicio de estos valores para
garantizar un Estado que propicie a sus ciudadanos la tranquilidad y la convivencia para el
goce efectivo de sus derechos. De acuerdo con los planteamientos de la Corte Constitucional,
la paz no puede entenderse desde la definición negativa como ausencia de guerra, sino en su
sentido amplio y positivo que implica la superación de todas las formas de violencia que
puedan poner en riesgo el disfrute de los derechos y la convivencia pacífica del conjunto de la
sociedad. La convivencia no resulta del exterminio físico del enemigo, sino de políticas que
garanticen el bienestar general de todos y todas las habitantes y el reconocimiento pleno de su
dignidad. Los gobernantes están obligados a impulsar políticas públicas que eviten las causas
que puedan originar guerra o conflictos por la insatisfacción de la población. Al respecto señala
Celestino del Arenal: “a pesar de que tenemos los medios necesarios para su solución, el
hambre, la incultura, la miseria, la opresión, el subdesarrollo, la violación de los derechos
28

GIRALDO, Javier. Elementos de lectura sobre la tragedia. 17 de marzo de 2001.


62
PROCESOS DEMOCRÁTICOS

humanos, en suma, continúan siendo una realidad trágica para la mayoría de la población
mundial, que se ve abocada por la muerte a la miseria y la opresión, sin esperanza de
solución, como no sea a través del conflicto y de la rebelión y con ello, poniendo en peligro la
paz”29. Por eso la paz está interdependientemente ligada al concepto de democracia directa,
participativa, de forma tal que la ciudadanía se ejerza de manera activa para el complimiento
de los fines últimos del Estado. En la medida que la sociedad pueda participar directamente en
la vida política del país, haciendo parte de las decisiones, teniendo libertad y vida digna, los
Estados podrán garantizar solución pacífica y consensuadas de los conflictos que s puedan
generar.

De lo dicho se muestra que la paz se concibe desde diferentes enfoques:

 Como Derecho a Vivir sin guerra.


 Como derecho individual que garantice la tranquilidad de cada ciudadano o ciudadana.
 Como derecho colectivo, que obliga a los Estados a proteger a la población de cualquier
agresión interna o externa. De aquí se deriva el concepto de seguridad como obligación y
carga gubernamental a favor de la sociedad.
 Como derecho del Estado que obliga a sus habitantes a protegerlo de la llamada amenaza
terrorista.
Los tres primeros enfoques tienen en común que la paz se concibe como un derecho
ciudadano, como parte de los derechos humanos, y en tal sentido goza de todas las
características de éstos. Este planteamiento es importante porque genera obligaciones para los
gobernantes que tienen que adelantar todo tipo de acciones para su cumplimiento. En el caso
colombiano, por ejemplo, este derecho es el sustento de los movimientos de paz que exigen
una solución política y negociada del conflicto que aqueja al país. En este sentido se pronunció
el director de la Unesco al señalar que:

“La paz duradera es premisa y requisito para el ejercicio de todos los derechos y
deberes humanos. No la paz del silencio, de los hombres y mujeres silenciosos,
silenciados. La paz de la libertad - y por tanto de leyes justas -, de la alegría, de la
igualdad, de la solidaridad, donde todos los ciudadanos cuentan, conviven, comparten…
“Paz, desarrollo y democracia forman un triángulo interactivo. Los tres se requieren
mutuamente. Sin democracia no hay desarrollo duradero: las disparidades se hacen
insostenibles y se desemboca en la imposición y el dominio…

“Es preciso identificar las raíces de los problemas globales y esforzarnos, con medidas
imaginativas y perseverantes, en atajar los conflictos en sus inicios. Mejor aún es
prevenirlos. La prevención es la victoria que está a la altura de las facultades distintivas
de la condición humana. Saber para prever. Prever para prevenir. Actuar a tiempo, con
decisión y coraje, sabiendo que la prevención sólo se ve cuando fracasa. La paz, la
salud, la normalidad, no son noticia. Tendremos que procurar hacer más patentes estos
intangibles, estos triunfos que pasan inadvertidos…

“La renuncia generalizada a la violencia requiere el compromiso de toda la sociedad.


No son temas de gobierno sino de Estado; no de unos mandatarios, sino de la sociedad
en su conjunto (civil, militar, eclesiástica). La movilización que se precisa con urgencia

29
Del Arenal, Celestino. Paz y Derechos Humanos. Revista del Instituto Interamericano de Derechos Humanos Quinta Edición Enero a Junio, 1987,
P. 2.
63
PROCESOS DEMOCRÁTICOS

para, en dos o tres años, pasar de una cultura de guerra a una cultura de paz, exige la
cooperación de todos. Para cambiar, el mundo necesita a todo el mundo. Es necesario
un nuevo enfoque de la seguridad a escala mundial, regional y nacional. Las fuerzas
armadas deben ser garantía de la estabilidad democrática y de la protección ciudadana,
porque no puede transitarse de sistemas de seguridad total y libertad nula, a otros de
libertad total y seguridad nula. Los ministerios de guerra y de defensa han de
convertirse progresivamente en ministerios de la paz”30.

El desafío actual es llenar de contenido material y hacer posible el valor superior de la paz
consagrado en Constituciones Políticas y declaraciones internacionales. No sólo es Colombia la
que vive una realidad confusa y a veces desesperanzadora, es la humanidad toda la que se
encuentra en peligro. El desarrollo de la guerra preventiva y de conceptos como “daños
colateral”, “fuego a amigo”, han puesto en riesgo la vida de pueblos enteros. El negocio
armamentista sigue llenado los bolsillos de algunos banqueros, empresarios y gobernantes,
que cínicamente han hecho de la muerte de los más débiles la forma más fácil de
enriquecerse. Por ello el derecho a la paz no puede seguir siendo marginal y aislado de los
derechos civiles, políticos, sociales o culturales, tiene que convertirse en un imperativo de
obligatorio cumplimiento, que exija de los Estados políticas internas y externas tendientes a
superar los conflictos, violencias y todas las causas que pongan en riesgo el futuro de la
humanidad y el futuro del planeta.

EN SINTESIS:

El estudio del contenido de las tres unidades permite evidenciar una clara disparidad entre el
reconocimiento formal de los derechos, los principios constitucionales y la democracia
participativa en contrates con la realidad compleja en un país donde se evidencia la
precariedad del ejercicio real de tales derechos. Algunos estudiosos del tema como el profesor
Boaventura de Sousa Santos han nombrado dicha contradicción como la democracia limitada o
de baja intensidad, donde se le da más trascendía al contenido teórico de la norma que a los
procesos de distribución social y económica que garanticen la superación de la exclusión y
pobreza de las grandes mayorías.

Dicha realidad es clara en Colombia donde se han dado pasos significativos para avanzar en el
reconocimientos de instituciones democráticas y participativas que permitan un papel activo y
decisivo por parte del conjunto de la población, especialmente de aquellos sectores más
discriminados –mujeres, niños, niñas, jóvenes- pero que a la vez afronta uno de los conflictos
sociales y armados más prolongados en el continente, además de una permanente y
sistemática vulneración de los derechos humanos.

Por lo anterior es que cada vez se hace más énfasis en el papel activo que deben jugar los
ciudadanos y las ciudadanas para que cumplan su papel de veedures del poder público y exijan
el cumplimiento de las obligaciones estatales que garanticen la plenitud de los derechos y
principios constitucionales, especialmente todo lo referente a los derechos humanos. Se
requiere una población que a través de la movilización social llene de contenidos derechos
como la paz, la seguridad y la tranquilidad que han sido relegados, pero que representan la
posibilidad de un Estado democrático, en una sociedad que ejerza su derecho al uso y goce de
todos los derechos.

30
Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura –UNESCO- El Derecho Humano a la Paz. Declaración del Director
General. París, Francia, enero de 1997.
64
PROCESOS DEMOCRÁTICOS

REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS

GIRALDO, Javier. Elementos de lectura sobre la tragedia. 17 de marzo de 2001.

DEL ARENAL, Celestino. Paz y Derechos Humanos. Revista del Instituto Interamericano de
Derechos Humanos Quinta Edición Enero a Junio, 1987, P. 2.

Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura –UNESCO- El


Derecho Humano a la Paz. Declaración del Director General. París, Francia, enero de 1997.

65
PROCESOS DEMOCRÁTICOS

FUENTES BIBLIOGRÁFICAS Y DOCUMENTALES

ALBERDI, Juan Bautista. Organización de la confederación Argentina. Tomo segundo. Buenos


Aires. Besanzón, Imprenta de José Jacquin. 1858.
BOBBIO, Norberto. El futuro de la democracia. 1ª. Edición. Bogotá, Colombia. Fondo de la
Cultura Económica. 1986.
BOBBIO, Norberto. Estado, gobierno y sociedad. Contribución a una teoría general de la
política. Plaza y Janés Editores. España, 1987. 487 p.
BOBBIO, Norberto. Liberalismo y democracia. 2ª. Edición. Bogotá, Colombia. Fondo de Cultura
Económica., 1993. 115 p.
BORJA, Rodrigo. Derecho político y constitucional. Fondo de Cultura Económica. Argentina.
1991. 365 P.
BURDEAU, Georges. La democracia. Editorial Ariel, 1959
BURGOS, Germán. ¿Por qué los gobiernos y las legislaturas optan por un poder judicial
independiente? Algunos marcos analíticos de respuesta. Poder judicial y democracia. 1ª.
Edición. Bogotá, Colombia. FICA. 2005. 197 p.
DE ESTEBAN, Jorge. Las Constituciones de España. Madrid, 1981.
DE ZUBIRIA SAMPER, Andrés. ¿Por qué la constituyente? Un pacto social para un nuevo país.
2a. edición. Bogotá. Rodríguez Quito Editores. 1990. 143 pg.
DEL ARENAL, Celestino. Paz y Derechos Humanos. Revista del Instituto Interamericano de
Derechos Humanos Quinta Edición Enero a Junio, 1987, P. 2.
DUGUIT, Leon, Manual de Derecho Constitucional: Teoría General del Estado, el Derecho y el
Estado y las libertades públicas, Granada, Ed. Comares, 2007, p.75.
ESCOBAR, Guillermo. Introducción a la teoría jurídica de los derechos humanos. 1ª. Edición.
Centro de Iniciativas de Cooperación al Desarrollo. Universidad de Alcalá. Madrid, España.
2004. 242 p.
ESTEVEZ GAZMURI, Carlos. Elementos De Derecho Constitucional Chileno Chile, Jurídica,
1949. 495 p.
FISCHBACH, O. G.: Teoría General del Estado, Segunda Edición, Editorial Labor S. A,
Barcelona-Buenos Aires, 1929.
FOUCAULT, Michel. Un dialogo sobre el Poder y otras conversaciones. , 2a. Edición. Madrid. El
libro de Bolsillo, Alianza Editorial. 1984.
FOUCAULT, Michel. Vigilar y castigar: nacimiento de la prisión. 27ª edición. Madrid, España:
Editorial Siglo XXI. 1998. 314 pg.
GALLARDO, Helio. Fundamentos de formación política: Análisis de coyuntura. 2ª. Edición. San
José, Costa Rica. Editoriales DEI, 1990. 136 p.
GAONA CRUZ, Manuel. Estudios Constitucionales. 1ª. Edición. Colombia. Litocamargo. 1988.
407 p.
GARCÍA-PELAYO, Manuel. Las Transformaciones del Estado Contemporáneo. 1ª. Edición.
España. Editorial Alianza. 2005. 224 p.

66
PROCESOS DEMOCRÁTICOS

GIRALDO, Javier. Solo los Estados violan los Derechos Humanos. Octubre de 1993. Página web
Desde los márgenes: http://www.javiergiraldo.orh

GIRALDO, Javier. Elementos de lectura sobre la tragedia. 17 de marzo de 2001. web Desde los
márgenes: http://www.javiergiraldo.orh
HAURIOU, André. Derecho constitucional e instituciones políticas. 1ª. Edición. Barcelona.
Ediciones Ariel, 1971. 958 P.
HELLER, Hermann "Teoría del Estado”. Fondo de Cultura económica. México. 1942.
ISAZA DELGADO, José Fernando y CAMPOS ROMERO, Diógenes. Algunas consideraciones
cuantitativas sobre la evolución reciente del conflicto en Colombia. Revista análisis político,
Universidad Nacional. nº 65, Bogotá, enero-abril, 2009: págs. 3-24
http://www.unal.edu.co/iepri/publica/apol65.pdf
JELLINEK, George. Teoría general del Estado, Editorial Albatros. Buenos Aires, 1980.
LASALLE, Ferdinand. ¿Qué es una constitución. 2ª. Edición. España. Editorial Barcelona. Ariel,
2002 183 p.
LINARES QUINTANA, Segundo V. Tratado de la ciencia del derecho constitucional argentino y
comparado: parte general: teoría de la constitución. 2ª edición. Buenos Aires. Alfa, 1953. 513
p.
MAQUIAVELO, Nicolás, El Príncipe, vigésima primera edición, Editorial Porrúa S.A. de C.V.
México 2003, 74pp.
MANTILLA QUIJANO, Alejandro y MÚNERA RUIZ, Leopoldo. En: Cuando la excepción es la
regla. Colombia: estado de excepción y régimen político. Coordinación Colombia Europa
Estados Unidos. Observatorio de Derechos Humanos y Derecho Humanitario. 1ª. Edición.
Bogotá, Colombia. Ediciones Antropos. 2005. 146 p.
MODULO ESCUELA DE FORMACIÓN Y COMPETENCIAS CIUDADANAS. Sena, Gobernación de
Antioquia.
MOTTA, Cristina (Compiladora) Ética y conflicto. Lecturas para una transición democrática.
Bogotá : Tercer Mundo, 1995. 81-110 pág.
OLANO VALDERRAMA, Carlos Alberto y OLANO GARCÍA, Hernán Alejandro, Derecho
constitucional general e instituciones políticas-Estado social de derecho, 3 edición, Bogotá,
Ediciones Librería del Profesional, 2000.
Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura –UNESCO- El
Derecho Humano a la Paz. Declaración del Director General. París, Francia, enero de 1997
PECES-BARBA MARTÍNEZ, Gregorio. La Constitución como reglas del juego, en El País, Madrid,
6 de diciembre de 1977, pág. 7.
PERIDODICO DESDE ABAJO. Cartilla La Política: Explicada a los niños y a los jóvenes. 1ª.
Edición. Colombia. Ediciones Desde Abajo. 2002. 72 p.
RAWLS, John. Justicia distributiva, en revista Estudios Públicos del CEP, Nº 24, 1986.
RAWLS, John. La justicia como equidad: Una reformulación. 1ª. Edición. Barcelona, España.
Tecnos, 2002. 288 p.
REVISTA DE ESTUDIOS POLÍTICOS. Universidad de Antioquia. No. 11, Julio – diciembre, 1997.

67
PROCESOS DEMOCRÁTICOS

REVISTA ESTUDIOS DE DERECHO. Universidad de Antioquia. Año LX, No. 130. Diciembre,
1998
RODRÍGUEZ R., Libardo. Estructura del poder público en Colombia. 7ª. Edición. Colombia.
Editorial Temis. 1997. 225 p.
ROSSI, Pellegrino Obras completas. Tomo Primero, Guillamin Librería, París, 1866, pág. LXI.
ROUSSEAU, Jean Jacques. El Contrato Social. Madrid. Ed. SARPE. 1983. 185 p.
ROUSSEAU, Jean-Jacques. Discurso sobre el origen de las desigualdades entre los hombres.
Madrid. 1923.
SABINE. George H. Historia de la teoría Política. Primera edición en español (FCE-México) Fondo
de Cultura Económica. Traducción de Vicente Herrero. 1945. Santafé de Bogotá, 1992, 677 p.
SÁCHICA, Luis Carlos “Exposición y glosa del constitucionalismo moderno”, Ed. Temis, Bogotá
1976.
SARTORI, Giovanni. ¿Qué es la democracia? 1ª. Edición. Colombia, Altamir ediciones 1994.
342 p.
SIEYES, Emmanuel. ¿Qué es el tercer Estado? Ensayo sobre los privilegios. 1ª. Edición. Madrid,
España. Alianza Editorial S.A. 1994. 185 p.
SMITH, Adam. Investigación sobre la naturaleza y causas de la riqueza de las naciones.
Publicación España: Oikos Tau, 1987. Biblioteca Universidad de Antioquia.
STEIN, Ekkhart. Derecho Político. Aguilar ediciones. Madrid, 1973.
VALLEJO MEJÍA, Jesús. Curso de teoría constitucional, teoría del Estado. Universidad de
Antioquia. 1998.
VIDAL PERDOMO, Jaime. Derecho Constitucional General e instituciones políticas en Colombia.
9ª. Edición. Bogotá, Colombia. Editorial Legis, 2005.
WALKER, Harvey. "An American Conception of Public Administration" United States, American
Political Science Review. Oct, 1945.

68
PROCESOS DEMOCRÁTICOS

CUADERNO DE ACTIVIDADES E INTERACTIVIDADES

Actividad 1

1) Leer “el cuerpo de los condenados” de Michel Foucault

2) Debatir con el grupo la relación entre la agresión al cuerpo humano con la agresión al
cuerpo social.

3) ¿Qué instituciones intervienen en el relato y cuál es su papel en el mismo?

VIGILAR Y CASTIGAR:
Michel Foucault31

SUPLICIO

I. EL CUERPO DE LOS CONDENADOS

Damiens fue condenado, el 2 de marzo de 1757, a "pública retractación ante la puerta


principal de la Iglesia de París", adonde debía ser "llevado y conducido en una carreta,
desnudo, en camisa, con un hacha de cera encendida de dos libras de peso en la mano";
después, "en dicha carreta, a la plaza de Grève, y sobre un cadalso que allí habrá sido
levantado [deberán serle] atenaceadas las tetillas, brazos, muslos y pantorrillas, y su mano
derecha, asido en ésta el cuchillo con que cometió dicho parricidio32 quemada con fuego de
azufre, y sobre las partes atenaceadas se le verterá plomo derretido, aceite hirviendo, pez
resina ardiente, cera y azufre fundidos juntamente, y a continuación, su cuerpo estirado y
desmembrado por cuatro caballos y sus miembros y tronco consumidos en el fuego, reducidos
a cenizas y sus cenizas arrojadas al viento".33

"Finalmente, se le descuartizó, refiere la Gazette d'Amsterdam.34 Esta última operación fue


muy larga, porque los caballos que se utilizaban no estaban acostumbrados a tirar; de suerte
que en lugar de cuatro, hubo que poner seis, y no bastando aún esto, fue forzoso para
desmembrar los muslos del desdichado, cortarle los nervios y romperle a hachazos las
coyunturas. . .

"Aseguran que aunque siempre fue un gran maldiciente, no dejó escapar blasfemia alguna; tan
sólo los extremados dolores le hacían proferir horribles gritos y a menudo repetía: 'Dios mío,
tened piedad de mí; Jesús, socorredme”. Todos los espectadores quedaron edificados de la
solicitud del párroco de Saint-Paul, que a pesar de su avanzada edad, no dejaba pasar
momento alguno sin consolar al paciente."

31
FOUCAULT, Michel. Vigilar y castigar: nacimiento de la prisión. 27ª edición. Madrid, España: Editorial Siglo XXI.
1998. 314 pg.
32
* Parricidio, por ser contra el rey, a quien se equipara al padre. [T.]
33
Pièces originales ft procédures du procès fait à Robert-François Damiens, 1757, t. MI, pp. 372-374.
34
Gazette d'Amsterdam, 1 de abril de 1757.

69
PROCESOS DEMOCRÁTICOS

Y el exento35 Bouton: "Se encendió el azufre, pero el fuego era tan pobre que sólo la piel de la
parte superior de la mano quedó no más que un poco dañada. A continuación, un ayudante,
arremangado por encima de los codos, tomó unas tenazas de acero hechas para el caso,
largas de un pie y medio aproximadamente, y le atenaceó primero la pantorrilla de la pierna
derecha, después (12) el muslo, de ahí pasó a las dos mollas del brazo derecho, y a
continuación a las tetillas. A este oficial, aunque fuerte y robusto, le costó mucho trabajo
arrancar los trozos de carne que tomaba con las tenazas dos y tres veces del mismo lado,
retorciendo, y lo que sacaba en cada porción dejaba una llaga del tamaño de un escudo de seis
libras.36

"Después de estos atenaceamientos, Damiens, que gritaba mucho aunque sin maldecir,
levantaba la cabeza y se miraba. El mismo atenaceador tomó con una cuchara de hierro del
caldero mezcla hirviendo, la cual vertió en abundancia sobre cada llaga. A continuación, ataron
con soguillas las cuerdas destinadas al tiro de los caballos, y después se amarraron aquéllas a
cada miembro a lo largo de los muslos, piernas y brazos.

"El señor Le Bretón, escribano, se acercó repetidas veces al reo para preguntarle si no tenía
algo que decir. Dijo que no; gritaba como representan a los condenados, que no hay cómo se
diga, a cada tormento: '¡Perdón, Dios mío! Perdón, Señor.' A pesar de todos los sufrimientos
dichos, levantaba de cuando en cuando la cabeza y se miraba valientemente. Las sogas, tan
apretadas por los hombres que tiraban de los cabos, le hacían sufrir dolores indecibles. El
señor Le Bretón se le volvió a acercar y le preguntó si no quería decir nada; dijo que no. Unos
cuantos confesores se acercaron y le hablaron buen rato. Besaba de buena voluntad el crucifijo
que le presentaban; tendía los labios y decía siempre: 'Perdón, Señor.'

"Los caballos dieron una arremetida, tirando cada uno de un miembro en derechura, sujeto
cada caballo por un oficial. Un cuarto de hora después, vuelta a empezar, y en fin, tras de
varios intentos, hubo que hacer tirar a los caballos de esta suerte: los del brazo derecho a la
cabeza, y los de los muslos volviéndose del lado de los brazos, con lo que se rompieron los
brazos por las coyunturas. Estos tirones se repitieron varias veces sin resultado. El reo
levantaba la cabeza y se contemplaba. Fue preciso poner otros dos caballos delante de los
amarrados a los muslos, lo cual hacía seis caballos. Sin resultado.

"En fin, el verdugo Samson marchó a decir al señor Le Bretón que no había medio ni
esperanza de lograr nada, y le pidió que preguntara a los Señores si no querían que lo hiciera
cortar en pedazos. El señor Le Bretón acudió de la ciudad y dio orden de hacer nuevos
esfuerzos, lo que se cumplió; pero los caballos se impacientaron, y uno de los que tiraban de
los muslos del supliciado cayó al suelo. Los confesores volvieron y le hablaron de nuevo. Él les
decía (yo lo oí): 'Bésenme, señores.' Y como el señor cura de Saint-Paul no se decidiera, el
señor de Marsilly pasó por debajo de la soga del brazo izquierdo y fue a besarlo en la frente.
Los verdugos se juntaron y Damiens les decía que no juraran, que desempeñaran su cometido,
que él no los recriminaba; les pedía que rogaran a Dios por él, y recomendaba al párroco de
Saint-Paul que rezara por él en la primera misa.

"Después de dos o tres tentativas, el verdugo Samson y el que lo había atenaceado sacaron
cada uno un cuchillo de la bolsa y cortaron los muslos por su unión con el tronco del cuerpo.
Los cuatro caballos, tirando con todas sus fuerzas, se llevaron tras ellos los muslos, a saber:
primero el del lado derecho, el otro después; luego se hizo lo mismo con los brazos y en el
35
** Exento: oficial de ciertos cuerpos, inferior al alférez y superior al brigadier. [T.]
36
* Escudo de seis libras: cierta moneda de la época. [T.]

70
PROCESOS DEMOCRÁTICOS

sitio de los hombros y axilas y en las cuatro partes. Fue preciso cortar las carnes hasta casi el
hueso; los caballos, tirando con todas sus fuerzas, se llevaron el brazo derecho primero, y el
otro después.

"Una vez retiradas estas cuatro partes, los confesores bajaron para hablarle; pero su verdugo
les dijo que había muerto, aunque la verdad era que yo veía al hombre agitarse, y la
mandíbula inferior subir y bajar como si hablara. Uno de los oficiales dijo incluso poco después
que cuando levantaron el tronco del cuerpo para arrojarlo a la hoguera, estaba aún vivo. Los
cuatro miembros, desatados de las sogas de los caballos, fueron arrojados a una hoguera
dispuesta en el recinto en línea recta del cadalso; luego el tronco y la totalidad fueron en
seguida cubiertos de leños y de fajina, y prendido el fuego a la paja mezclada con esta
madera.

"...En cumplimiento de la sentencia, todo quedó reducido a cenizas. El último trozo hallado en
las brasas no acabó de consumirse hasta las diez y media y más de la noche. Los pedazos de
carne y el tronco tardaron unas cuatro horas en quemarse. Los oficiales, en cuyo número me
contaba yo, así como mi hijo, con unos arqueros a modo de destacamento, permanecimos en
la plaza hasta cerca de las once.

"Se quiere hallar significado al hecho de que un perro se echó a la mañana siguiente sobre el
sitio donde había estado la hoguera, y ahuyentado repetidas veces, volvía allí siempre. Pero no
es difícil comprender que el animal encontraba aquel lugar más caliente." 37

Actividad: 2

Foro virtual. Para el mismo tendremos en cuenta los conceptos estudiados hasta este punto,
especialmente lo referente a la teoría del Estado. Además abordaremos la discusión que existe
en la actualidad sobre el concepto de Estado Comunitario y Estado de Opinión. Es importante
prepararse para el foro con lecturas adicionales que aborden el tema y que puedan nutrir la
discusión colectiva.

Previamente los y las estudiantes deberán entregar al menos tres preguntas que deban
orientar la realización de esta actividad.

Actividad 3:

DEBATAMOS…

Colombia se define como un Estado Social de Derecho, participativo, democrático y pluralista.


¿Creen ustedes que el régimen presidencialista que caracteriza al gobierno del país hace
posible que se cumpla este precepto o por el contrario, deberíamos virar hacia un régimen
parlamentario?

Actividad 4

Realizar un ensayo que recoja su postura en relación a cómo se aplican en Colombia las
categorías expuestas en la primera unidad. El mismo debe dar cuenta de las discusiones y
concepciones que evidencian los temas desarrollados.

37
Citado en A. L. Zevaes, Damiens le régicide, 1937, pp. 201-214.

71
PROCESOS DEMOCRÁTICOS

Actividad 5:

1) Leer el preámbulo y los títulos I, II y III de la Constitución Política de Colombia.

2) Establecer qué relación guardan estos artículos con lo visto en el primer y segundo
capítulo del módulo.

72
PROCESOS DEMOCRÁTICOS

Actividad 6:

Realizar un ensayo que contenga los siguientes elementos:

1) Una análisis de la situación integral de derechos humanos en su región


2) Una mirada crítica a la concepción de derechos humanos que expresan las autoridades
locales.
3) Una síntesis de las políticas públicas que abordan el tema de los derechos humanos y su
aplicación efectiva.

Actividad 7:

Leer u analizar el informe anual sobre situación de derechos humanos en Colombia, elaborado
por la Oficina de la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, el cual
puede encontrar en el siguiente enlace:
http://www.hchr.org.co/documentoseinformes/publico.php3

Actividad 8:

Realizar un artículo donde se analice cómo el conflicto social y político que vive el país, afecta
su realidad local y la democracia en general. En el mismo, usted deberá tener en cuenta todas
las categorías analizadas en el módulo.

73

Вам также может понравиться