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La búsqueda de un hombre útil en medio de una generación perversa

Os haré pescadors

Dios siempre ha buscado hombres en las diversas generaciones para realizar sus propósitos. Y uno
de los principales propósitos del Señor siempre ha sido restaurar al hombre y hacer de él un
instrumento útil en su presencia. Sin embargo, para llevar a cabo este proyecto Dios llama, capacita
y envía a los hombres con su mensaje para salvar a otros.

Uno de los tantos casos que podríamos citar sería el de Noé:

2 Pedro 2:5 Reina-Valera 1960 (RVR1960)

5 y si no perdonó al mundo antiguo, sino que guardó a Noé, pregonero de justicia, con otras siete
personas, trayendo el diluvio sobre el mundo de los impíos;

También podríamos citar el caso de Abraham que intercedió por su sobrino Lot para que Dios no lo
destruyera junto con las ciudades de Sodoma y Gomorra sobre las cuales ya había determinado
juicio:

Génesis 18:22-27 Reina-Valera 1960 (RVR1960)

22 Y se apartaron de allí los varones, y fueron hacia Sodoma; pero Abraham estaba aún delante de
Jehová.

23 Y se acercó Abraham y dijo: ¿Destruirás también al justo con el impío?

24 Quizá haya cincuenta justos dentro de la ciudad: ¿destruirás también y no perdonarás al lugar
por amor a los cincuenta justos que estén dentro de él?

25 Lejos de ti el hacer tal, que hagas morir al justo con el impío, y que sea el justo tratado como el
impío; nunca tal hagas. El Juez de toda la tierra, ¿no ha de hacer lo que es justo?

26 Entonces respondió Jehová: Si hallare en Sodoma cincuenta justos dentro de la ciudad,


perdonaré a todo este lugar por amor a ellos.

27 Y Abraham replicó y dijo: He aquí ahora que he comenzado a hablar a mi Señor, aunque soy polvo
y ceniza.

Esto demuestra que Dios siempre busca hombres para salvar a otros hombres, y los entresaca de
en medio de una generación perversa.

En los días de su carne, llamó a doce hombre para salvar al mundo de aquel entonces; y esto ha
repercutido de tal manera que ese mensaje de salvación también ha llegado hasta nuestros días.

Mateo 4:17-22 Reina-Valera 1960 (RVR1960)

17 Desde entonces comenzó Jesús a predicar, y a decir: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se
ha acercado.
18 Andando Jesús junto al mar de Galilea, vio a dos hermanos, Simón, llamado Pedro, y Andrés su
hermano, que echaban la red en el mar; porque eran pescadores.

19 Y les dijo: Venid en pos de mí, y os haré pescadores de hombres.

20 Ellos entonces, dejando al instante las redes, le siguieron.

21 Pasando de allí, vio a otros dos hermanos, Jacobo hijo de Zebedeo, y Juan su hermano, en la
barca con Zebedeo su padre, que remendaban sus redes; y los llamó.

22 Y ellos, dejando al instante la barca y a su padre, le siguieron.

Pero en la lectura anterior, genera mucha tristeza que para esta generación no se hallará un hombre
útil y dispuesto a interceder y a salvar a una nación que se encontraba en detrimento. Una
generación sórdida y hundida en el pecado.

Ezequiel 22:30 Reina-Valera 1960 (RVR1960)

30 Y busqué entre ellos hombre que hiciese vallado y que se pusiese en la brecha delante de mí, a
favor de la tierra, para que yo no la destruyese; y no lo hallé.

I. Características de esa generación perversa:

1. (1-5) La culpa y el juicio de Jerusalén, la ciudad sangrienta.

- Ciudad derramadora de sangre


- ciudad practicante de abominaciones.
- Ciudad llena de idolatrías

Como se evidencia, Jerusalén era una ciudad muy a la par de ciudades tan abominables para Dios
como lo fue la misma Ninive :Nahúm 3:1 Reina-Valera 1960 (RVR1960) 3 !!Ay de ti, ciudad
sanguinaria, toda llena de mentira y de rapiña, sin apartarte del pillaje!
Jerusalén pasó de ser la ciudad Santa y especial de Dios a convertirse en un foco de perversidades.

a. Derramaron sangre de inocentes. La sangre de muchos profetas fue derramada a causa de


la corrupción espiritual de ellos que ya no querían oír la voz de Dios. Jesús mismo expresa
muchos siglos después el resultado de estas maldades perpetradas por los judíos:

Mateo 23:37 Reina-Valera 1960 (RVR1960)

37 !!Jerusalén, Jerusalén, que matas a los profetas, y apedreas a los que te son enviados! !!Cuántas
veces quise juntar a tus hijos, como la gallina junta sus polluelos debajo de las alas, y no quisiste!

Dios le dice a Ezequiel que pronuncie juicio sobre Israel. Su paciencia se ha agotado y es hora de
dictar sentencia de juicio sobre los transgresores

b. le mostrarás todas sus abominaciones: Esto se refiere a otro de los muchos pecados de
Jerusalén, el de la gran idolatría. Ezequiel notó que hacían ídolos dentro de ella para
contaminarse a sí misma. Ellos fueron contaminados por su infidelidad a Dios y a las
prácticas inmorales reales conectadas con la adoración de estos ídolos paganos.

Dos grandes y horribles realidades de nuestro mundo actual son el homicidio y la abominación. Estas
a su vez, van arrastrando tras de sí otros muchos flagelos que día a día hunden más y más a nuestra
sociedad.

- En nuestro mundo actual se cometen aproximadamente 500.000 homicidios por año.


- Creciente tasa del satanismo en el mundo actual.
- El crecimiento desmesurado del movimiento lgtbi.
- Las crueles cifras del aborto. (85 abortos por minuto en el mundo)
- El crecimiento del narcotráfico, la trata de personas y la prostitución (300.000.000 millones de
consumidores de algún alucinógeno)
- La proliferación de pandemias y enfermedades mortales como el vih ( se estiman 40.000.000 de
infectados e igual cantidad de decesos desde el descubrimiento de la enfermedad).
- Trafico de órganos.
- Miseria y pobreza absoluta (El 10% de la población mundial, 736 millones de personas, sobreviven
cada día con menos de 1,90 dólares. Son extremadamente pobres) Las cifras del hambre
870 millones de personas sufren inseguridad alimentaria en el mundo, uno de cada ocho habitantes
del planeta. 55 millones de niños padecen desnutrición aguda. 19 millones la padecen de forma
severa. Cada año mueren 3,5 millones de niños por desnutrición, 10.000 al día.

2. (6-12) Los principales culpables del detrimento espiritual, social y moral de Israel.

a. He aquí que los príncipes de Israel:

Esto hace referencia a los reyes y a los sacerdotes.

Los principales culpables de la descomposición de la nación lo fueron sus propios líderes o


dirigentes. A continuación alguna característica de ellos:

- Abuso del poder ( homicidas)


- Desprecio por la base de la sociedad, esto es la familia.
- Empobrecimiento social (malos salarios, despojamiento de bienes)
- Perversos e idolatras.
- Desviaciones sexuales

i. “A los judíos se les ordenó honrar a sus padres y madres (Éxodo 20:12), al igual que los creyentes
de hoy (Efesios 6:1-3). Dios incluso adjuntó una promesa especial a este mandamiento: “que tus
días sean largos sobre la tierra”, y ahora los judíos estaban a punto de ser exiliados de su tierra
“(Wiersbe).

ii. Esta lista terrible describe los pecados de los líderes de Jerusalén y Judá. Si esta fue la conducta
de los líderes, es de esperar que la conducta de los plebeyos sea tan mala o peor. Además, el costo
social de estos pecados era mucho peor entre los plebeyos, que tenían menos recursos para
ayudar a disminuir los efectos de sus pecados.
B. El juicio de Dios viene

1. (17-19) Reuniéndose en el horno de juicio de Dios.

a. la casa de Israel se me ha convertido en escoria: Una vez que Israel fue considerado como la
posesión preciosa de Dios. A través de su pecado y rebelión, Dios ahora los consideraba escoria:
las inútiles impurezas que provienen del refinamiento del metal.

2. (20-22) El juicio de fundido en el horno de Dios.

a. Como quien junta plata y bronce y hierro y plomo y estaño en medio del horno, para encender
fuego en él para fundirlo: Dios prometió hacer de Jerusalén un gran horno. Los ejércitos de
Babilonia no solo quemarían la ciudad, sino que también sería un derretimiento de Israel. Dios
soplaría en el fuego de refinación para avivarlo.

C. Los pecados de los profetas, sacerdotes, príncipes y personas.

1. (23-25) El pecado de los profetas de Israel.

Vino a mí palabra de Jehová, diciendo: Hijo de hombre, di a ella: Tú no eres tierra limpia, ni rociada
con lluvia en el día del furor. Hay conjuración de sus profetas en medio de ella, como león rugiente
que arrebata presa; devoraron almas, tomaron haciendas y honra, multiplicaron sus viudas en
medio de ella.

- Ya no es tierra limpia.
- Ya nos son rociados con lluvia

2. (26) El pecado de los sacerdotes de Israel.

Sus sacerdotes violaron mi ley, y contaminaron mis santuarios; entre lo santo y lo profano no
hicieron diferencia, ni distinguieron entre inmundo y limpio; y de mis días de reposo apartaron sus
ojos, y yo he sido profanado en medio de ellos.

a. Sus sacerdotes violaron mi ley, y contaminaron mis santuarios: Los sacerdotes de Israel no
tomaron su papel designado para servir y enseñar a la gente. Sus propias vidas fueron corruptas
(violaron mi ley) y realizaron su servicio sacerdotal en formas deshonrosas (contaminaron mis
santuarios).

b. ni distinguieron entre inmundo y limpio: este fue uno de los trabajos importantes de los
sacerdotes de Israel. Debían ayudar a la gente a entender cómo la ley de Dios se aplicaba a su vida
diaria declarando que las conductas de arena eran limpias o inmundas. No sabían la diferencia
para su propia vida o para las personas a quienes debían servir.

c. de mis días de reposo apartaron sus ojos: los sacerdotes fallaron en sus responsabilidades
básicas de honrar la ley de Dios ellos mismos, y de enseñar a la gente a hacerlo. Por lo tanto, Dios
fue profanado entre ellos, cuando debería haber sido glorificado entre Sus propios sacerdotes.

3. (27-29) Los pecados de los príncipes, profetas y personas de Israel.

a. Sus príncipes en medio de ella son como lobos que arrebatan presa: Cuando los líderes deberían
haber sido como pastores fieles, en cambio eran como lobos rapaces. Su interés no estaba en la
gloria de Dios y el bienestar de su pueblo; era derramar sangre, destruir personas y obtener
ganancias deshonestas.

b. Y sus profetas recubrían con lodo suelto: Las falsas visiones y las mentiras divinas de los falsos
profetas fueron dichas en el nombre del Señor. Sin embargo, esas supuestas revelaciones eran
como una pared hecha con mortero que no tenía cemento. Se veía bien desde el exterior, pero no
tenía fuerza y ‚Äã‚Äãnunca podría estar en el día crítico.

c. El pueblo de la tierra usaba de opresión: los príncipes de Israel maltrataban y maltrataban


corruptamente a otros como este (Ezequiel 22:6-12). No fue una sorpresa que la gente de la tierra
imitara el comportamiento de sus líderes, atacando unos a otros y a los más débiles con violencia y
opresión.

4. (30-31) La vana búsqueda de un hombre para mantenerse en la brecha.

Y busqué entre ellos hombre que hiciese vallado y que se pusiese en la brecha delante de mí, a
favor de la tierra, para que yo no la destruyese; y no lo hallé. Por tanto, derramé sobre ellos mi ira;
con el ardor de mi ira los consumí; hice volver el camino de ellos sobre su propia cabeza, dice
Jehová el Señor.

a. Y busqué entre ellos hombre que hiciese vallado: La imagen del vallado se conecta con la falsa y
débil pared de los falsos profetas solo unos pocos versículos antes (Ezequiel 22:28). Los falsos
profetas construyen con mortero sin templar; Dios buscó a un hombre para traer fuerza,
estabilidad y seguridad a Israel.

i. Dios busca a tales hombres. El problema no es que Dios no quiera esas personas o no las haya
llamado. Si hay un problema, es porque Dios busca y no encuentra ninguno. No encontró a nadie
con el carácter o la sabiduría o la relación real con Dios para construir tal fuerza, estabilidad y
seguridad entre su pueblo.

ii. “Es de suponer que Jeremías fue una excepción a la condena general de Ezequiel, pero no tenía
ningún rey y pocos escucharon sus palabras. Cualquier nación que carece de un liderazgo piadoso,
como Israel en ese momento, seguramente debe estar a punto de salir.” (Taylor)
iii. “El propio Jeremías había recorrido la ciudad en busca de un hombre piadoso (Jeremías 5:1-6),
pero su búsqueda fue un fracaso.” (Wiersbe)

b. y que se pusiese en la brecha delante de mí, a favor de la tierra: el hombre que Dios buscó no
solo era un constructor, sino también un hombre de oración. Como Abraham (Génesis 20:7) y
Moisés (Éxodo 32:9-14) y David (2 Samuel 24:15-18), Dios buscó a alguien que, mediante la
oración, se parara en la brecha entre un Dios santo y ellos. gente desobediente, rebelde, profana.
Este hombre en la brecha lucharía por rescatar al pueblo de Dios en oración.

c. y no lo hallé: aquí está la tragedia. Dios esperaba a alguien que condujera y orara para evitar el
juicio; pero no había ninguno. Había personas piadosas para estar seguras (como Jeremías), pero
ninguna para cumplir este rol en ese momento.

i. “Luego concluyó describiendo la absoluta desesperanza del caso. No había hombre para pararse
en la brecha, por lo tanto, el fuego de la ira debe continuar en su camino.” (Morgan)

ii. Afortunadamente, Dios encontró a un hombre para que se parara en la brecha. Esta es una
poderosa descripción de Jesús y su obra para su pueblo. Él es el muro de fortaleza, estabilidad y
seguridad para el pueblo de Dios. Él es quien alguna vez vive para orar por su pueblo (Hebreos
7:25). Dios no encontró a nadie en los días de Ezequiel, pero en Jesucristo ha provisto a este
último constructor de muros y al Hombre en la brecha.

d. Por tanto, derramé sobre ellos mi ira: a causa del gran pecado y corrupción de los príncipes,
profetas, sacerdotes y personas; porque no había nadie para dirigir ni orar en la brecha, el juicio
que Dios prometió seguramente llegaría. No podría ser devuelto.

i. “Así, la reprobación de Israel fue vindicada, no solo a causa de su contaminación, sino para su
restauración final, ya que no había fuerza en ella que pudiera llevarla de vuelta al Dios de quien
ella se había ido.” (Morgan)

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