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Consumo rival (bien privado) significa que, si un bien es utilizado por una persona, no puede ser
utilizado por otra.
Consumo no rival (no hay un coste adicional), se refiere a los casos en los que el consumo de una
persona no impide o reduce el consumo de otra. Ej: defensa nacional.
En los bienes públicos la exclusión es imposible y el consumo no es rival (ejemplo, barcos que usan
el mismo faro) así como también el sistema de precios, ya que los consumidores no tienen ningún
incentivo para pagar.
Los bienes privados siempre tienen la propiedad de exclusión y consumo rival, es posible impedir
que los individuos disfruten de ellos si no pagan.
Bien público puro: el consumo no es rival, es imposible excluir a nadie. Estas propiedades pueden
provocar fallos en el mercado y constituir un argumento a favor del suministro público de los bienes
públicos.
Fallos de mercado:
En algunos casos el consumo no es rival, pero la exclusión es posible. Ej: una serie la cual no
reduce el número de veces que puede verla un individuo, pero le excluye por ser televisión de pago.
Cobrar por un bien no rival es ineficiente porque provoca subconsumo. Pero si no se cobra por un
bien no rival, entonces la ineficiencia adopta la forma de suministro ineficiente.
En algunos casos, el sector privado suministra bienes públicos de cuyo consumo no es posible
excluir a nadie. Normalmente, el consumidor sabe que hay polizones beneficiándose de sus
actividades, pero se fija en su propio beneficio directo.
Costes de exclusión: En ocasiones excluir no beneficia a los individuos como por ejemplo ocurre
codificando la señal de televisión, y otras veces, excluir beneficia como por ejemplo generando un
coste por peaje el cual hace que las autopistas estén menos congestionadas. Los costes de la
exclusión son relativamente pequeños en el caso de la mayoría de los bienes privados, pueden ser
grandes (prohibitivos) en el de algunos bienes suministrados por el Estado.
Bienes privados suministrados por el Estado: el coste marginal de suministrarlos a más personas
aumenta. Por esto mismo, uno de los argumentos del mercado constituye que debería existir la
provisión pública de algunos de estos bienes.