MEDITACION 1 ¨24 x 24¨

VEINTICUATRO HORAS POR DÍA DE ORACIÓN

Y VEINTICUATRO DE TRABAJO
San Benito dice que nosotros debemos establecer una vida según la regla del “ora et labora”. Yo diría que
no podemos dividir en dos partes el “ora et labora”; debe ser como los hilos de esta prenda que tengo: si
se tiran los hilos de una prenda de vestir, pobre don Ottorino, se cae el palco; se desarma el entramado
de la tela.
Nuestras acciones deben ser entrelazadas así: veinticuatro horas de oración y veinticuatro horas de
trabajo. El trabajo será dormir unas cuantas horas, será comer, será jugar, será dedicarse a alguna
actividad, pero la oración debe acompañarnos siempre. La oración, hermanos míos, debe ser el respiro
del alma. Como tú respiras el aire, así el alma cristiana debe respirar a Dios. Ustedes deben, despacito,
despacito, tomar la costumbre de hablar con Dios.
¡Es imposible olvidarse de Dios! Cuando saltas de la cama y estás apurado, no dejas el pantalón en la
habitación, sino que te lo pones. No te disculpas diciendo: “¡Tenía apuro y he salido de la pieza sin zapato
y sin medias!”. ¡No! Puedes tener todo el apuro que quieras, pero antes de salir de la habitación te vistes.
Y ¿cómo es posible no ponerse también en contacto con Dios?
Hace falta que nos metamos en las manos de Dios con esta disposición. Y entonces he aquí el programa:
“Ora et labora”, oración y trabajo unidos juntos como en un entramado. ¡Qué lejos están de Dios ciertos
cristianos que se contentan con una señal de la cruz a la noche, que van a Misa el domingo, una ‘misita’
con apuro…!
PADRE OTTORINO

¨Caramelos
MEDITACION 2 ambulantes¨
COMO TENER A JESUS AL CENTRO
Si yo vivo en intimidad con Jesùs y sè encontrarme con EL con simplicidad, tratar con El con amor y
afecto, toda mi jornada es un reflejo de mi encuentro con El.
En las notas escritas durante la peregrinación a Tierra Santa puso: Ya es tarde, regresamos de Nazareth.
He visto el pueblo de Jesùs, he visto los montes que El miraba, que El subìa cuando joven, el pueblo de su
infancia, de su juventud, donde Jesus preparaba y meditaba su misión. Mirando estos montes me da la
impresión de encontrarme con Jesus y con sus pensamientos. Facilmente se entra en su intimidad…¨
Tu debes sentir la presencia de Dios en tu Vida. Jesus tiene que ser para ti una persona simpre presente,
conocida, amada, seguida incondicionalmente…lo tienes que sentir cercano por la mañana, cuando abres
los ojos al nuevo dìa y saludarlo con alegría como el espsos saluda a la esposa con alegría antes de
comenzar su jornada. De su luz, tienen que surgir tus pensamientos, palabras y acciones¨

Libro Sueño Un Mundo, pags.11 a 14

“Hay días un poco pesados en los que es difícil hacer meditación, es difícil rezar, o porque algo en
nuestra vida está cambiando. Normalmente, con la lectura de cosas espirituales (el Evangelio de Jesùs, la
Biblia) se logra superar esos días. Den gran valor a la lectura de cosas espirituales, nos ayudarà a leer
nuestra propia vida. En muchos momentos, especialmente nosotros que estamos llamados a vivir una
vida de ‘carmelos’, pero ‘ambulantes’, alguna vez somos muy ambulantes y poco carmelos. Eso, aun
siendo ambulantes, es sumamente necesario que nos ayudemos también con un cierto arte para volver a
ser caramelos. Y pienso que la lectura de cosas espirituales es un medio maravilloso para llegar a este
punto¨
PADRE OTTORINO

MEDITACION 3 ¨¿Estoy en mi lugar?¨

Este es uno de los pilares de la espiritualidad de P.Ottorino, con raíz en la
formación que recibió de seminarista diocesano en sus años de preparación
al sacerdocio. Este es su camino de santidad: la búsqueda constante de la
voluntad de Dios, marcando esto toda su vida. No realizó nada sin la
seguridad de estar haciendo sólo aquello que Dios quería: “Nada sin el
permiso de Jesús, todo bajo su presencia¨

Colocó en la entrada de la Casa de Formación, la imagen que está justamente en la entrada de nuestro
querido templo San Cayetano, una cruz compuesta por pedacitgos de mosaico en la que se encuentra
uno fuera de lugar, con la pregunta: ¿Estoy en mi lugar?

Esto nos llama a reflexionar: ¨Dios tiene un proyecto sobre mi vida. Todo hombre es como un pedacito
en el maravilloso mosaico ideado por Dios sobre la humanidad. Su preocupación tiene que ser la
búsqueda consciente y responsable del lugar que el Creador le ha asignado”

Con la ayuda de Dios, de su presencia bondadosa en nuestras vidas, nos suple lo que necesitamos para
cumplir con ese proyecto, su Providencia nos acompaña y hemos de ser nosotros quienes sin quedarnos de
brazos cruzados le demos una mano a esa Providencia.
Págs. 17 a 20 de Sueño un Mundo.
MEDITACION 4 ¨Es Dios quien llama…

por qué le haces esperar¨

Antes de cada acción y de cada decisión, nos dirijimos a Jesús para que nos ayude a entender la voluntad
del Padre en nosotros. La oración es un dialogo conciente y personal con Dios, para aprender a pensar,
sentir, hablar y actuar como Jesús. La oración es un contacto personal y consciente con Dios.

El P. Ottorino vivía empapado de Dios, su testimonio de vida, saturado y en comunión con Dios. Muchos
recuerdan como celebraba la misa, o cuando inmóvil contemplaba el tabernáculo o a la imagen de la
Virgen, o cuando por la noche en la noche, en la obscuridad de la capilla, se quedaba largo tiempo
dialogando con su amigo Jesus. Era un verdadero maestro de oración con la vida.

Los medios pueden ser múltiples y diversos, por ello nos e aferraba a fórmulas y prٞácticas, sino que
inventaba formas y métodos nuevos con incansable imaginación, algunos como:

-Las llamadas telefónicas rápidas

-Las jaculatorias simples e insistentes

-Los 5 minujtos por la noche

-El desierto

-El tratamiento de sol

Un aspecto fundamental de la vida de P. Ottorino era la unión entre la oración y la acción. Siempre decía:

“Esta es nuestra especialización:

Ser hombres que creen en Dios,
Que hablan con Dios,
Que conversan con Dios
Y que enseñan a los hombres a
Hablar y a conversar con Dios”
Págs. 33 a 39 de Sue;o un Mundo
MEDITACION 5 ¨!Más allá de las montañas!”
“Cuando estudiaba el segundo básico, un día, en la Iglesia del
seminario, mientras meditaba en Jesús crucificado, mirando su
imagen en el tríptico sobre el altar, tuve una fuerte impresión,
pensando que más allá de las montañas pintadas detrás del crucifijo,
estaba el mundo que no lo conocía ni lo amaba”

Para P. Ottorino, la vocación se hizo cada vez más clara, en la línea

misionera: a los 14 años, un día de Pentecostés, sintió que Dios lo
llamaba “más allá de las montañas¨

Era tan entusiasmado por la animación juvenil y su compromiso por despertar la colaboración de los laicos, que
afirmaba: Si fuera necesario, sería capaz de romper un zapato con tal de entrar donde el zapatero, para acercarlo
a Dios, lo haría¨
El apostolado exige una profunda riqueza humana y una preparación adecuada, su expresión lo dice: Ser hombre,
Hombre de Dios, ¡Apóstol! Para significar que son necesarias aquellas virtudes humanas que permitan llevar el
evangelio.
Jesús te quiere hombre:
-Equilibrado
-Sociable
-Educado
-Preparado
Págs. 41 a 46 de Sueño un Mundol.
MEDITACION 6 ¨!Apóstoles del 2,000!”
“En el apostolado no encontramos santos ya hechos, sino que
encontraremos almas que tiene que ser roturadas con un paciente y
constante trabajo.

Los acercamos con caridad y gentileza humana, pero después del

primer paso de acercamiento, es necesario tener la valentía, presentar
a Cristo, a costa de ser signo de contradicción.

Es necesario preparar a las almas para la intervención quirúrgica que

tiene que hacer Cristo en ellas”

El P.Ottorino acompañó el servicio apostólico de sus religiosos, proponiendo ideas y medios con
“genialidad” y capacidad creativa. Siguió el ejemplo de San Cayetano, al querer ofrecer una figura nueva
de apóstol, no tanto de lecciones teóricas o discursos bulliciosos, sino mas bien con el servicio humilde y
el testimonio silencioso. No quiso para ellos una vida entre muros de convento, sino compartida con el
pueblo en medio del trabajo ordinario¨

Nos invita a nosotros a ser apóstoles que están en todos los hechos de la vida contemporánea para ser
testigos de lo eterno.
Págs. 47 a 54 de Sueño un Mundo.

MEDITACION 7 ¨!Estar Juntos y Contentos!”

Reúnanse seguido entre ustedes, para rezar juntos y discutir
fraternalmente cual es el mejor modo de vivir la caridad y para
encontrar los medios siempre más adecuados para difundirla.

Así reconocerán todos que ustedes son mis discípulos: si se tienen amor
unos a otros (Juan 13,35)

El P. Ottorino sintió muy fuerte la necesidad de transferir el Amor de Dios entre los hermanos e hizo de la
caridad fraterna un punto central de su vida. La crítica y la murmuración eran, para él, faltas graves,
inadmisibles en la vida del Apóstol, les decía: “Perdona, soporta, comprende, ayuda y ten una sonrisa para
todos”
¡Hablar mal del hermano: jamás! Habla para bien del hermano. Es un deber hablarle al hermano cuando
caigo en la cuenta de que ha cometido un error: es un deber de caridad y de amor verdadero”
Una de las ideas que presentaba P. Ottorino a sus religiosos era: llevar una “Vida Apostólica Juntos: ¡donde
todos fijamos la meta, remamos para el mismo lado si queremos avanzar y vamos cantando!”

Págs. 55 a 66 de Sueño un Mundo.

MEDITACION 8 ¨!¡Hijo, Ven a mi!”
“El nacimiento de Jesús había acontecido en un
contexto que en la lógica humana poco convenía a
la llegada del Hijo de Dios. María lo había dado a
luz lejos de su casa, mientras estaba de viaje para
cumplir con un deber burocrático. Sólo José
estaba allí para vivir junto a ella en la fe las
molestias y la alegría de ese evento. Nada dejaba
transparentar la grandeza de lo que había acontecido de modo que alguien pudiese darse cuenta.
Solamente algunos pobres pastores, que estaban allí en la cercanía, habían tenido ojos y corazón para ver
una luz y dejarse llevar por el deseo de conocer aquel signo venido de lo alto, “un niño envuelto en pañales,
que yace en un pesebre” (Lc 2,7). Es con ellos que María y José comparten la grandeza de ese misterio,
frente al cual dice Lucas “Mientras tanto, María conservaba estas cosas y las meditaba en su corazón”.
También nosotros, a este punto del retiro, queremos vivir nuestros Compromisos tomados aquí, con la
actitud de María de conservar y meditar en el corazón lo que Dios ha realizado y que serán parte de
nuestra historia.
También para nosotros hay siempre muchas cosas por hacer, con la Providencia de Dios y nuestras
piernas y entusiasmo, lo podremos lograr. No estamos solos. Por el contrario, hace falta saber mirar la
lámpara del Santísimo y dejar que él obre en nosotros. Así fue para María y será también para nosotros,
el guardar todo esto en nuestro corazón.

Págs. 27 a 32 de Sueño un Mundo.