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Recomendaciones

Farmacoterapéuticas en
Salud Mental

La Suma de Todos

Servicio Madrileño de Salud


febrero/2006 - Nº 3

Recomendaciones
Farmacoterapéuticas en
Salud Mental
Introducción Recomendaciones para la valoración
Criterios
diagnósticos
y tratamiento de la depresión infanto-juvenil
para la depresión
en la infancia y INTRODUCCIÓN
la adolescencia
Durante mucho tiempo se ha minimizado o inclu- ral), instrumentos diagnósticos utilizados, tipos
Clínica so se ha cuestionado la existencia de la enferme- de trastornos depresivos incluidos, etc., son al-
dad mental de los niños. Solo cuando la realidad gunas de las razones que pueden explicar esta
Tratamiento clínica y la investigación se ha impuesto a la fan- variabilidad.
de la depresión tasía de la infancia idealizada, se han empezado Globalmente, la prevalencia de la depresión se
en el niño y el a diagnosticar las diferentes patologías infantiles, sitúa en un 2% en el caso de los niños prepúberes
adolescente entre ellas la depresión. Hoy día, nadie duda de y un 4% en el caso de adolescentes2,3.
su existencia, incluso en edades muy tempranas.
Recomendaciones Otras fuentes aportan unas cifras de prevalencia
Aunque existen referencias desde los años de depresión entre el 0.4% y el 2.5% en niños y
para la cuarenta, el concepto de depresión infantil no
valoración el 0.4-8.3% en adolescentes. En España se han
se define hasta los sesenta, cuando surgen las estimado prevalencias de depresión mayor del
y tratamiento clasificaciones internacionales DSM y CIE. En los 1.8%, según criterios DSM III en niños de 9 años,
de la depresión años 70 se realizan las primeras investigaciones del 2.3% según criterios DSM III-R en adolescentes
en niños y en las que se diagnostica la depresión infanto- de 13-14 años y del 3.4% en jóvenes de 18 años
adolescentes juvenil utilizando los criterios recogidos en con criterios CIE-104.
esas clasificaciones. En un sentido amplio, la
Conclusiones depresión se considera como enfermedad cuando En un reciente estudio realizado en 379
la condición depresiva persiste e interfiere con la adolescentes españoles escolarizados, se
Autores de la revisión. determinó la presencia de manifestaciones
capacidad funcional del niño o el adolescente1.
Bibliografía. depresivas por medio del Cuestionario de
En la actualidad, para hacer el diagnóstico de de- Depresión Infantil (CDI), encontrando una
presión infantil se siguen utilizando los mismos prevalencia de 8.4% de puntuaciones de
criterios diagnósticos que para adultos. Sin em- rango de depresión leve y 1.8% de rango de
bargo, el conocimiento científico que aporta la depresión grave. En conjunto, la prevalencia de
psiquiatría del niño y el adolescente constata, no manifestaciones depresivas fue de 10.29%.5
sólo diferencias en cuanto a la depresión del adul-
En la distribución por sexos, antes de la adoles-
to, sino también según la edad del niño, por ser
cencia la depresión aparece con la misma fre-
éste un ser en continuo desarrollo cuyo momento
cuencia en varones y mujeres o es incluso más
evolutivo marca, tanto la expresión sintomática
frecuente en los primeros. Sin embargo, en ado-
de los diferentes trastornos mentales como las
lescentes la proporción en mujeres se incrementa
consecuencias de los mismos sobre el desarrollo
notablemente, sobre todo a partir de los 13 años,
y, por tanto, sobre el futuro del menor.
igualándose la distribución por sexos al patrón
Las cifras de incidencia y prevalencia de depresión de adultos. En cuanto a las manifestaciones de-
en niños y adolescentes referidas en los estudios pendientes del sexo, los varones presentan de-
son muy variables. Diferencias en la metodología presiones más graves, más precoces y de peor
de los estudios, criterios de inclusión y exclusión, pronóstico, asociadas frecuentemente a trastor-
el tipo de poblaciones incluidas (clínica o gene- nos de conducta.

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Recomendaciones para la valoración y tratamiento de la depresión infanto-juvenil

CRITERIOS DIAGNÓSTICOS PARA LA señala de forma específica que las formas de depresión atípicas
DEPRESIÓN EN LA INFANCIA Y LA son frecuentes en la adolescencia, y que en el diagnóstico de la
ADOLESCENCIA distimia en adultos se puede especificar si el comienzo es en la
adolescencia.
Los trastornos depresivos en la infancia y adolescencia se codi-
fican dentro de los criterios generales de adultos en las clasifi- Con el fin de limitar este capítulo a los aspectos específicos de
caciones CIE-106 y DSM-IV-TR7. Estas clasificaciones difieren en la depresión en la infancia y adolescencia, no se incluye la
algunos aspectos, pero en el núcleo de ambas está el concepto descripción psicopatológica de la depresión en el adulto.
de depresión como un trastorno episódico con varios grados de Igualmente, en la descripción de las clasificaciones se obvia el
gravedad, que se caracteriza por ánimo deprimido o pérdida de detalle de síntomas y criterios compartidos con adultos. A conti-
la capacidad de disfrutar que persiste al menos dos semanas. nuación, se describen las clasificaciones CIE-10 (tabla 1) y DSM-
Además, el individuo puede experimentar otros síntomas durante IV-TR (tabla 2).
el episodio: pensamiento depresivo, que incluye pesimismo sobre
el futuro e ideas suicidas, y síntomas biológicos, como despertar Ambas clasificaciones especifican el periodo de duración mínimo
precoz, pérdida de apetito o pérdida de peso. La DSM-IV-TR esta- de dos semanas para el diagnóstico de cuadro depresivo mayor.
blece que en niños el estado de ánimo irritable puede sustituir al En la CIE-10, señalan que pueden ser aceptados periodos más
ánimo deprimido, que la pérdida de peso puede manifestarse cortos si los síntomas son excepcionalmente graves o de
como el fracaso en conseguir el incremento de peso esperado comienzo brusco. El DSM IV-TR es más estricto en llegar al diag-
para la edad y que la distimia debe durar sólo un año para ser nóstico de episodio depresivo mayor, ya que no considera el
diagnosticada (dos en adultos). Destaca también, que algunos cuadro de episodio depresivo leve dentro del F32.
síntomas físicos, como las quejas somáticas y el aislamiento
social son particularmente frecuentes en niños, mientras que En este documento nos referiremos exclusivamente al Trastorno
otros como las ideas delirantes, son más raras. La CIE-10 tan sólo Depresivo Mayor (DSM IV-TR) o Episodio Depresivo (CIE 10).

Tabla 1. Clasificación de trastornos mentales CIE-106. Criterios de la OMS.


Código Tipo de Trastorno Características
F32 Episodios Depresivos P Episodio depresivo leve.
PEpisodio depresivo moderado.
PEpisodio depresivo grave sin síntomas psicóticos.
PEpisodio depresivo grave con síntomas psicóticos.
POtros episodios depresivos.
F33 Trastorno Depresivo Recurrente Al menos dos episodios con una duración mínima de dos semanas cada uno,
separados por un intervalo libre de alteración significativa del humor de varios
meses de duración.
F34 Trastornos del humor (afectivos) persistentes Duran años y tienen una intensidad fluctuante, no suficientemente grave como para
recibir otro diagnóstico.
PCiclotimia
PDistimia
F38 Otros trastornos del humor (afectivos)
F39 Trastorno del humor (afectivo) sin especificación

Tabla 2. DSM-IV-TR7. Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales. American Psychiatric Association.
Código Tipo de Trastorno Características
F32.x T. Depresivo Mayor, episodio único Este trastorno puede subcodificarse según especificaciones de gravedad, psicosis
o remisión.
F 33.x Trastorno depresivo mayor, recidivante Presencia de dos o más episodios, separados por un intervalo de al menos dos
meses seguidos en los que no se cumplan los criterios para un episodio depresivo
mayor. El último dígito codifica en los mismos subtipos que para el episodio único.
F34.1 T. Distímico Estado de ánimo crónicamente deprimido la mayor parte del día, todos los días,
manifestado por el sujeto u observado por los demás, durante al menos 1 año
(en niños).
F32.9 T. Depresivo no especificado

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INSTRUMENTOS DIAGNÓSTICOS Y DE Lactantes: Las manifestaciones son fundamentalmente somá-


SCREENING4. ticas, y a nivel relacional: están irritables, lloran continuamente o
se muestran muy inhibidos.
El diagnóstico debe ser clínico y nunca derivado exclusivamente Menores de 7 años: El síntoma de presentación más frecuente
de cuestionarios. Los instrumentos diagnósticos, en forma de es la ansiedad. Manifiestan irritabilidad, rabietas frecuentes,
entrevistas semiestructuradas de las que se derivan criterios diag- llanto inmotivado, quejas somáticas (cefaleas, dolores abdomi-
nósticos, requieren un entrenamiento para su aplicación y deben nales), pérdida de interés por los juegos habituales, cansancio
ser realizados por especialistas en salud mental. Los instrumentos excesivo o aumento de la actividad motora y abulia. También
de cribado sirven para hacer un cribado dentro de la población pueden presentar un fracaso en alcanzar el peso para su edad
y para evaluar la evolución de la gravedad del trastorno, pero cronológica, retraso psicomotor o dificultad en el desarrollo
no son instrumentos válidos para realizar un diagnóstico. Pueden emocional.
recoger información del paciente, de los padres o de los maes-
En niños pequeños, el trastorno depresivo mayor se asocia con
tros, las tres fuentes básicas de información en una valoración. frecuencia con los trastornos por ansiedad, las fobias escolares
y los trastornos de eliminación (encopresis, enuresis).
CLINICA
Niños de 7 años a edad puberal: Los síntomas se mani-
La exploración psicopatológica de la depresión infanto-juvenil fiestan principalmente en tres esferas:
debe realizarse con técnicas específicas, verbales y no verbales.
De no ser así, las limitaciones cognitivas y de verbalización a) esfera afectiva y conductual: irritabilidad , agresividad, agita-
ción psicomotriz o apatía, astenia, abulia, anergia, tristeza, y
propias de esta edad pueden impedir una correcta detección de
sensación frecuente de aburrimiento.
la depresión. Además, algunos niños tienen dificultad para reco-
nocer y entender el significado de algunos síntomas o para b) actividad escolar: falta de concentración, disminución del
comunicar lo que sienten o piensan; esta dificultad es mayor rendimiento escolar, fobia escolar.
cuanto menor es la edad, por lo que siempre se precisa de la
c) esfera somática: cefaleas, dolor abdominal, trastornos de
información de los padres y el medio escolar para completar la
control de esfínteres, trastornos del sueño (insomnio o hiper-
evaluación psicopatológica.
somnia), no alcanzar el peso para su edad cronológica, y dismi-
En general, la depresión infantil tiene un modo de presentación nución o aumento del apetito.
polimorfo y puede enmascararse con los distintos trastornos que También pueden aparecer, en relación a la gravedad del tras-
aparecen en determinados cuadros psicopatológicos. Su mani- torno, indecisión, ideas obsesivas, ideas recurrentes de muerte,
festación sintomática estará marcada por la edad de niño. Así, trastornos de conducta en la escuela y en la relación con sus
podemos agrupar la clínica según el desarrollo psicoevolutivo del compañeros, hipersexualidad, e incluso alucinaciones e ideas
menor1,4,8. delirantes congruentes con el estado de ánimo. En este sentido,

Tabla 3. Instrumentos diagnósticos y de cribado


Instrumento Acrónimo Autores, Año Población diana Tipo de
Kiddie Schedule for affective disorders Entrevista
and schizophrenic for school-age children KSADS Ambrosini,1989 Edad escolar semiestructurada
Diagnostic interview for children Entrevista
and adolescents DICA Herjenic y Reich, 1981 Niños y adolescentes semiestructurada
Children`s Depresión Scale CDS Lang y Tisher,1978 8-16 años Cuestionario
Beck Depresión Inventory BDI Beck et al,1961 A partir de 16 años Cuestionario
Children`s Depression Rating Scale CDRS-R Poznanski et al.,1984 8-12 años Entrevista
semiestructurada
Children`s Depresión Inventory CDI Kovacs,1992 6-17 años Cuestionario
Escala de sintomatología depresiva Cuestionario
para maestros SDM Doménech y Polaina,1990 para maestros
Cuestionario Español para la depresión infantil CEDI Rodríguez Sacristán y
Cardoze(modificación 5-10 años (padres)/
de las escalas de BDI y CDI) 11-16 años(niños) Cuestionario
Cuestionario
Escala de Sintomatología depresiva para padres Doménech,1991 para padres

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las alucinaciones son más frecuentes que las ideas delirantes


(a) Remisión: Disminución de la intensidad de los síntomas. En
en la depresión psicótica infanto-juvenil.En los niños prepube- DSM IV se define de la siguiente manera: Hay algunos síntomas
rales es frecuente la comorbilidad con el trastornos por déficit de de Episodio Depresivo Mayor pero no se cumplen los criterios
atención, los trastornos de comportamiento y trastornos de ó no hay signos o síntomas significativos de Episodio Depresivo
ansiedad. mayor durante menos de 2 meses (Remisión Parcial) o durante
más de dos meses (Remisión Total)
Adolescentes: Los síntomas son iguales a los de la edad
(b) Recuperación: Volver a la normalidad.
puberal, apareciendo más conductas negativistas y antisociales, (c) Recurrencia: Reaparición de los síntomas después de una
abuso de alcohol y sustancias, irritabilidad, inquietud, mal humor remisión.
y agresividad, hurtos, fugas, sentimientos de no ser aceptado, (d) Recaída: Reaparición de la enfermedad sin haber llegado al
falta de cooperación con la familia, aislamiento, falta de aseo estado de salud completa (antes de haber alcanzado una recu-
personal, retraimiento social con hipersensibilidad, tristeza y peración).
anhedonia.

Es frecuente que se presente el trastorno depresivo asociado a SUICIDIO Y DEPRESIÓN EN INFANCIA Y


trastornos disociales, trastornos por déficit de atención, tras- ADOLESCENCIA
tornos de ansiedad, trastornos por abuso de sustancias y tras-
tornos de la conducta alimentaria. En un estudio epidemiológico de 1.285 niños y adolescentes, la
probabilidad de tener un diagnóstico de trastorno afectivo era
8 veces mayor entre los menores que habían hecho algún intento
CURSO CLINICO DE LA DEPRESIÓN EN NIÑOS autolítico y 4 veces mayor si el menor había tenido ideación
Y ADOLESCENTES autolesiva20.

La depresión en los niños y adolescentes tiene un curso recu-


PREVALENCIA
rrente, es decir, tiende a reaparecer después de un período de
remisión (a). La remisión de los síntomas suele ocurrir a los 6-9 Las ideas de suicidio son frecuentes en los adolescentes (hasta
meses del inicio del episodio depresivo1,4. El 74% de los niños un 7,5% de la población general adolescente); sin embargo, las
que reciben algún tipo de tratamiento estarán recuperados(b) al tentativas son más raras (3,3%). Los métodos más frecuentes
año y el 92% a los 2 años9. Otras investigaciones aportan tasas parecen ser la venosección (31%) o intoxicación por fármacos
similares de remisión en pacientes que no habían recibido ningún (28,6%). Las tentativas aumentan el riesgo posterior de suicidio
tratamiento10. consumado, especialmente en varones21.

La recurrencia(c) de la depresión infantil es del 40-50% durante El suicidio consumado es un hecho raro en prepúberes,
la adolescencia y vida adulta11,12,13,14. Cuando la depresión aparece aumentando de forma importante en adolescentes, siendo a esta
en la adolescencia la recurrencia es del 30-50% en la vida edad más frecuente en varones que en mujeres (3:1 en prepú-
beres y 5,5:1 en jóvenes de 15 a 24)22.
adulta13.
En España, los datos recogidos por el Instituto Nacional de
Se consideran factores de mal pronóstico para la recurrencia en
Estadística registran en el periodo 1.980-1.998, 3 suicidios en
la edad adulta los antecedentes de trastornos afectivos en la niños menores de 10 años, 262 en niños de 10 a 14 años y
infancia o adolescencia, la gravedad de la sintomatología depre- 1.562 en adolescentes de 15 a 19 años. En la última actualiza-
siva, funcionamiento premórbido, factores de vulnerabilidad indi- ción del año 2.000, 9 menores entre 5 y 14 años y 272 jóvenes
vidual, antecedentes familiares de depresión recurrente, depen- entre 15 y 24 años consumaron suicidio en España23.
dencia emocional excesiva y ausencia de familia de apoyo15,16.
Existe un alto riesgo relativo de tener ideas o intentos de suicidio
Además, la depresión en la infancia y adolescencia se asocia en a lo largo de la evolución de los trastornos depresivos, cuando
la vida adulta con mayor riesgo de conductas autolíticas, difi- se compara con sujetos sin patología afectiva24,25,26. Los estudios
cultades de ajuste social y familiar, mayor comorbilidad de tras- de suicidios consumados en adolescentes han constatado que la
tornos de conducta, abuso de sustancias y trastornos de perso- gran mayoría de los adolescentes con suicidio consumado, hasta
nalidad17,18. el 90% en algunos estudios, padecían un trastorno psiquiátrico,
siendo los más frecuentes los trastornos afectivos seguidos de
Un 18% de adolescentes con depresión unipolar sufren una los trastornos por abuso de drogas y trastornos de conducta21.
recaída(d) al año19, presentando problemas de ajuste psicosocial, En más de la mitad de los casos, el suicidio consumado sucede
sobre todo si el trastorno afectivo se asocia a otros trastornos en niños o adolescentes con un trastorno de más de 2 años de
mentales y a estrés socio-familiar. duración26.

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Según datos procedentes de una revisión de suicidios consu- Se han revisado diversas guías de práctica clínica sobre ansiedad
mados evaluados en autopsias psicológicas, de forma llama- y depresión (NICE). Finalmente, se ha efectuado una búsqueda
tiva, entre un 65% y un 75% de adolescentes que consuman el exhaustiva en Medline, utilizando el Thesaurus y poniendo espe-
suicidio, nunca habían tenido contacto con servicios psiquiá- cial énfasis en la selección de meta-análisis, revisiones sistemá-
tricos; de un 7 a un 15% de los suicidas habían tenido contacto ticas y ensayos clínicos aleatorizados.
con servicios de psiquiatría en el mes previo al suicidio27.
El tratamiento de la depresión incluye la resolución del episodio
actual y la profilaxis efectiva para prevenir recaídas y reducir la
Factores de riesgo morbilidad. Existen distintos tipos de intervenciones que pueden
agruparse en psicosociales y tratamientos farmacológicos.
Se han identificado factores de riesgo que contribuyen a incre-
mentar la posibilidad de suicidio consumado, sea cual sea el tras-
torno mental subyacente: ser varón, tener antecedentes de TRATAMIENTO NO FARMACOLÓGICO:
intentos de suicidio previos, presencia de acontecimientos vitales INTERVENCIONES PSICOSOCIALES
estresantes, conductas de riesgo (promiscuidad sexual, consumo
de tóxicos y/o alcohol), escasas habilidades sociales y adapta- Las intervenciones psicosociales en la depresión del niño y el
tivas, deficiente supervisión por parte de los padres, antecedentes adolescente se justifican porque los mecanismos etiopatogénicos
de patología psiquiátrica parental y comorbilidad de la depresión del trastorno se sitúan en el mismo marco teórico que sustenta
con otros trastornos mentales1, 4,22. dichas intervenciones y porque los trastornos afectivos producen
alteraciones en las distintas áreas de la vida del paciente (cogni-
tiva, emocional, interpersonal, familiar) que constituyen el obje-
Evaluación del riesgo suicida tivo terapéutico de estas intervenciones.
El posible riesgo de suicidio en menores con sintomatología La investigación de la eficacia de los tratamientos psicoterapéu-
depresiva hace obligada su exploración, tanto en la evaluación ticos es necesaria para el avance de la psicoterapia. Su realiza-
inicial del paciente como en el seguimiento del tratamiento. Las ción es difícil y plantea el riesgo de sesgar los resultados. En un
situaciones de mayor riesgo y que deben ser siempre cuidado- análisis de las propuestas realizadas por la Task Force de la
samente evaluadas son los casos de adolescentes con historia American Psychologist Association (APA) se evidencian impor-
de trastorno mental o estado mental patológico como depre- tantes obstáculos para la aplicabilidad de los resultados de las
sión, manía, hipomanía, estados mixtos y psicosis, especial- investigaciones, siendo uno de los fundamentales la exclusión
mente cuando hay asociado consumo de sustancias, rasgos de explícita en los estudios de la variable “relación terapéutica” aún
impulsividad, ira o agitación. Los antecedentes de intentos, y reconociendo su papel como factor de cambio28. En algunos tipos
más si éstos han sido por métodos distintos de la intoxicación de psicoterapia este factor es especialmente relevante por lo que
por fármacos o la laceración, o la persistencia de ideación tras sería infructuoso y carente de sentido pretender investigar estos
uno de ellos, son situaciones de especial riesgo1,4. En los casos tipos de psicoterapia si se excluye la base sobre la que se
en los que el paciente está recibiendo tratamiento farmacoló- sustenta.
gico, éste debe ser estrechamente vigilado, especialmente al
inicio del mismo por la posible aparición de desinhibición o Los tratamientos psicoterapéuticos se componen de varios
acatisia1. factores entre los que las técnicas sólo constituyen un aporte
sobre la variabilidad final de los resultados; sin embargo, sólo
La evaluación del riesgo de suicidio debe ser realizada por un las técnicas se estudian rigurosamente. Algunas de ellas, por
especialista en salud mental, con experiencia infanto-juvenil. La sus características, no pueden estudiarse con el método cien-
detección o sospecha de riesgo suicida por el médico de aten- tífico; otras permiten estudios más cercanos a este método,
ción primaria debe ser motivo de derivación a los Equipos de aunque siempre con limitaciones: no pueden hacerse “ciegas”
Salud Mental de Niños y Adolescentes. ya que la inclusión aleatoria en un grupo de comparación
contradice el principio de la elección de psicoterapia con crite-
rios de indicación individuales, básicos para el éxito del trata-
TRATAMIENTO DE LA DEPRESIÓN EN EL miento.
NIÑO Y EL ADOLESCENTE El riesgo de sesgar las conclusiones de eficacia de las psicotera-
Para la realización de este apartado se ha efectuado una pias, debido a la imposibilidad de aplicarles una metodología
búsqueda bibliográfica siguiendo la sistemática que recoge la experimental determinada, puede dar lugar al cuestionamiento
pirámide de Haynes. del valor terapéutico otorgado a las técnicas que permiten ser
investigadas en detrimento de otras cuya eficacia no puede ser
Se han empleado revistas específicas que se sustentan en la demostrada con una metodología convencional. Mientras que
metodología de medicina basada en la evidencia. Se ha realizado para algunos autores, la falta de evidencia de eficacia de algunas
una búsqueda en la base de datos de la Colaboración Cochrane. psicoterapias no se debe interpretar como falta de eficacia, y por

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tanto, pueden considerarse dentro de la planificación terapéu- moderada. Las intervenciones comparadas fueron: fluoxetina sola
tica, para otros, este razonamiento no sería aceptable en otras (10-40 mg/d), TCC sola, TCC+fluoxetina (10-40 mg/d) y placebo.
campos de la medicina y no debería serlo tampoco en psiquia- La eficacia fue superior en el grupo que combinó la TCC y fluo-
tría29. xetina (diferencias estadísticamente significativas respecto a los
otros grupos). Asimismo, la eficacia de la monoterapia con fluo-
A continuación se describen las distintas técnicas de psicoterapia xetina fue superior a la de la TCC sola (p=0,01). Los pensa-
que se utilizan en el tratamiento de la depresión del niño y el mientos suicidas, que estaban presentes al inicio en un 29% de
adolescente. la muestra, mejoraron significativamente en los 4 grupos. En el
grupo de fluoxetina+TCC se registró la mayor disminución
TERAPIA COGNITIVO-CONDUCTUAL (TCC) (p=0,02). No se produjo ningún caso de suicidio.

La TCC es una intervención terapéutica centrada en el “aquí- El mantenimiento de la mejoría al seguimiento de pacientes
ahora”, focalizada en el paciente y basada en la adquisición de tratados con TCC ha sido objeto de estudio por varios autores35,36:
nuevas habilidades cognitivas y conductuales. Se fundamenta en Birmaher et al presentaron el seguimiento a dos años de tres
que la depresión es causada y mantenida por el modo en que la grupos de pacientes adolescentes diagnosticados de trastorno
persona percibe las situaciones y acontecimientos y la existencia depresión mayor (DSM-III-R) con BDI>13 que participaron en un
de déficits en las habilidades cognitivas y emocionales que capa- ensayo clínico aleatorizado de un tratamiento de 12-16 sesiones
citan al paciente para interactuar efectivamente con el mundo. de TCC (n=37), de terapia conductual sistémica familiar (n=35)
El papel del terapeuta es establecer una relación de colaboración y de Terapia de Apoyo (n=35). En el estudio inicial del trata-
con el niño y/o adolescente (alianza terapéutica) y ayudarle a miento inmediato los autores hallaron que la TCC muestra una
aprender nuevas formas de comportamientos y pensamientos remisión más rápida y completa de la sintomatología depresiva
que reduzcan la gravedad y la duración de la depresión y el (ausencia de trastorno depresivo mayor y BDI<9 durante 3
riesgo de recaída30. El tratamiento incluye técnicas conductuales semanas consecutivas y hasta el final del tratamiento) con una
y cognitivas. tasa de remisión del 60% frente a terapia conductual sistémica
familiar (29%) o terapia de apoyo (36%). El seguimiento a dos
Reinecke et al publicaron un meta-análisis con 6 estudios y 217 años de este mismo grupo de autores (estudio naturalístico)
pacientes en el que la TCC se mostró eficaz en adolescentes y mostró que no existen diferencias significativas en el resultado
niños con depresión y proponen la TCC como terapia de elección entre los tres grupos de tratamiento en términos de remisión,
en este trastorno31. recuperación, recaída o recurrencia, aunque los datos descrip-
tivos fueron mejores para TCC (su hipótesis era que la TCC es
Harrington et al, en otra revisión sistemática que incluyó 6 mejor a largo plazo). Además la mayoría de los pacientes se recu-
ensayos clínicos y un total de 376 niños y adolescentes con peraron (84%), el 30% tuvieron una recurrencia (principalmente
depresión leve a moderada, la TCC mejoró significativamente la en los primeros 4 meses tras la mejoría) y el 21% permanecieron
resolución de los síntomas, en comparación con otras interven- deprimidos durante el 80% del período de seguimiento. La
ciones no farmacológicas (psicoterapia de apoyo, grupo control gravedad de la depresión en el momento basal y la presencia
de pacientes en listas de espera, etc)32. de conflicto padres-hijos referidas en el momento basal y durante
el seguimiento predijeron una menor recuperación y tendencia a
Clark et al (2002) realizaron un ensayo que incluyó adolescentes
la recurrencia.
de 13 a 18 años con depresión mayor o distimia, hijos de padres
depresivos (n=88), tratados con TCC + abordaje habitual y abor- Vostanis et al37, en un ensayo clínico controlado compararon dos
daje habitual solo, no observaron diferencias significativas en la grupos de niños con diagnóstico de trastorno depresivo mayor
tasa de recuperación post-tratamiento y a los 2 años. El manejo (DSM-III-R) aleatorizados en grupos de 9 sesiones de TCC (n=29)
habitual , en este estudio, incluye en la mayoría de ocasiones y grupos de 9 sesiones de terapia no focalizada (n=28). Al segui-
tratamiento farmacológico a dosis adecuadas y en la duración miento de 9 meses, ambos grupos mantuvieron las mejorías
mínima establecida para adultos. Como señalan los autores, obtenidas tras el tratamiento pero el 27% de la muestra aún
estos pacientes, hijos de padres depresivos, pueden presentar un cumplían criterios diagnósticos de trastorno depresivo mayor. A
componente endógeno o genéticamente determinado mayor que los 2 años, aunque las mejorías obtenidas en ambos grupos se
les proporcione una menor capacidad de respuesta a interven- mantuvieron, se observó que el 20% de la muestra cumplía crite-
ciones psicosociales y mayor respuesta a intervenciones farma- rios para trastorno depresivo mayor.
cológicas .
La eficacia de sesiones de mantenimiento tras el tratamiento
En estudios realizados en adultos con depresión, la TCC ha inicial con TCC es estudiada por Clarke et al (1999)38, al diseñar
mostrado una eficacia similar al tratamiento farmacológico. Sin un estudio en el que se incluyeron tres grupos de adolescentes
embargo, en el estudio TADS, realizado en adolescentes, los resul- (14-18 años) con diagnóstico de trastorno depresivo mayor o
tados son diferentes34. El TADS fue diseñado para evaluar la distimia (criterios DSM III-R) y sin comorbilidad y que no preci-
eficacia de 4 modalidades terapéuticas en una muestra de 439 saron “tratamiento inmediato”. Un grupo siguió 16 sesiones de
adolescentes (12-17 años) con depresión mayor, al menos, TCC solo (n=45), otro grupo siguió las mismas sesiones de TCC

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y 9 sesiones de grupo de padres (n=42) y el tercer grupo estaba Mufson et al compararon dos grupos de pacientes adolescentes
en la lista de espera (n=36). Inmediatamente de la evaluación diagnosticados de depresión mayor, un grupo sigue tratamiento
post-tratamiento, los adolescentes de los dos grupos de trata- 12 semanas con psicoterapia interpersonal adaptada para
miento activo se aleatorizaron a seguimiento: (1) sesiones de adolescentes y otro seguimiento clínico durante el mismo
recuerdo cada 4 meses, (2) evaluación cada 4 meses y (3) evalua- tiempo. A la evaluación post-tratamiento se observó una mejoría
ción cada 12 meses. Las medidas de evaluación fueron entre- en síntomas depresivos, funcionamiento social general y de las
vistas diagnósticas (K-SADS-E y LIFE) por personal entrenado, relaciones interpersonales en el grupo de psicoterapia inter-
Escala de Hamilton de 14 items, GAF , BDI (adolescentes) y los personal40. Otros autores en otro ensayo comparando TCC y
padres (uno o ambos) completan el CBCL al final del tratamiento psicoterapia interpersonal con adolescentes de 12 a 18 años
de la fase aguda, a los 12 y a los 24 meses. En la fase aguda, la diagnosticados de trastorno depresivo mayor o distimia, en el
TCC demostró su eficacia a corto plazo frente a grupo control de que se excluyen los que tienen ideación suicida, no observaron
listas de espera. En el seguimiento a los 12 meses, todos los diferencias al final del tratamiento de 12 semanas ni a los tres
pacientes que estaban deprimidos al terminar el tratamiento, y meses de seguimiento entre el grupo de TCC (n= 25) y el grupo
que fueron asignados a las sesiones de recuerdo, estaban recu- de terapia interpersonal (n=23)41
perados (8 semanas o más de ausencia o mínimos síntomas
depresivos) , frente al 50% de aquellos pacientes que habían OTRAS INTERVENCIONES PSICOTERAPÉUTICAS:
sido asignados al grupo de seguimiento. Sin embargo a los 2
años existe una convergencia de resultados, de manera que el En la revisión realizada por Hazell de otras psicoterapias42 los
100% de los pacientes asignados a sesiones de recuerdo y el escasos ensayos aleatorizados controlados de terapia familiar,
90% asignados a seguimiento estaban recuperados. terapia familiar sistémica conductual y grupo de apoyo terapéu-
tico en adolescentes con depresión mayor no se encuentran dife-
Dada la alta comorbilidad que presentan los trastornos depre- rencias significativas frente a los grupos control de esos estudios
sivos, el estudio de la eficacia de los tratamientos en estos
(listas de espera, terapia de apoyo o grupo de habilidades
pacientes “reales” es muy relevante. En un ensayo clínico alea-
sociales, respectivamente).
torizado en el que se incluyeron 93 adolescentes de 13 a 17 años
con depresión y trastorno de conducta comórbido, se demostró No hay estudios aleatorizados controlados en el tratamiento de
la eficacia de una intervención cognitivo conductual grupal, niños y adolescentes con depresión para otras psicoterapias
evaluada como reducción de síntomas depresivos y una mejor (psicodinámica, apoyo familiar, terapias grupales salvo TCC, etc).
funcionalidad social respecto al grupo control, que fue tratado
con tutorización de hábitos de vida y actividades académicas. A
los 6 meses de seguimiento se objetivó una mejoría similar en Psicoterapia de Orientación Dinámica
ambos grupos de tratamiento39. A diferencia de otras técnicas de conducta o cognitivas, las inter-
Puesto que los conflictos padres-hijos son un factor de riesgo y venciones psicodinámicas se focalizan en las experiencias
un predictor de peor respuesta al tratamiento y mayor tasa de internas del niño o del adolescente.
recaídas, se justifica la inclusión de un componente de trabajo Se pretende que el niño y el adolescente se enfrente mejor a la
con familia a los tratamientos de TCC para niños y adolescentes, situación actual, acepte sus sentimientos y desarrolle su capa-
que incluya técnicas de uso de contingencias y habilidades de cidad psíquica, adquiriendo por tanto mayores recursos perso-
comunicación30. nales para conseguir una mejor integración psíquica y social.
Los estudios con TCC en su conjunto no hacen referencia a la A través de la relación terapéutica se re-actualizan los conflictos
ideación suicida o ésta es criterio de exclusión. precoces, permitiendo al terapeuta, a través de la interpretación,
hacerlos conscientes a su paciente promoviendo así un cambio
PSICOTERAPIA INTERPERSONAL: psíquico. En los niños más pequeños las formas de expresión no
verbal (juego, dibujo) son las más utilizadas en la técnica, mien-
La aplicación de las técnicas interpersonales en el tratamiento tras que en el adolescente, más semejante al adulto, se utiliza el
de la depresión en el niño y adolescente se fundamenta en la lenguaje.
asociación que existe entre la alteración de las relaciones inter-
personales y la depresión. Es una intervención psicológica origi- La mayoría de los trabajos publicados sobre este tipo de psico-
nalmente desarrollada para tratar a adultos con depresión terapias se basan en explicar los mecanismos y situaciones que
mayor. Se puede adaptar para adolescentes. Aunque el número provocan la depresión y los cambios que se van realizando a lo
de estudios es menor que en el caso de la TCC, en algunos largo del tratamiento, poniendo de manifiesto cómo interac-
ensayos clínicos aleatorizados se ha mostrado eficaz en el túan los recursos y defensas del paciente, junto con las inter-
control de los síntomas de la depresión en adolescentes con venciones técnicas del terapeuta y los resultados obtenidos en el
depresión leve a moderada. tratamiento43.

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TRATAMIENTO FARMACOLÓGICO la amitriptilina y la imipramina, siempre que no se superen los


5mg/kg y teniendo la precaución de realizar control electrocar-
Existe una gran controversia sobre los efectos del empleo de anti- diográfico45,46.
depresivos en los niños y adolescentes, que afecta a dos aspectos En definitiva, con los datos disponibles, en niños con depresión
fundamentales: las dudas sobre su eficacia y las alertas sobre mayor el balance beneficio/riesgo de los ATC es desfavorable,
su seguridad. Esta situación ha generado un clima de alarma debido a los problemas que afectan a su perfil de seguridad y a
social en el que han tomado parte las instituciones y organismos que no se ha podido demostrar su eficacia. En adolescentes, la
públicos, las compañías farmacéuticas y las asociaciones cientí- eficacia demostrada es moderada y debe valorarse su uso en
ficas y profesionales. Ante esta perspectiva se abren varios inte- relación al perfil de seguridad que presentan, según las caracte-
rrogantes: ¿procede tratar con fármacos a los niños y adoles- rísticas individuales de cada caso (gravedad de la depresión,
centes con depresión mayor?. En caso de que la respuesta a esta respuesta y tolerancia a otros antidepresivos, etc.).
pregunta fuese positiva, ¿con qué antidepresivo?, ¿cómo
adecuar la potencial necesidad de tratamiento farmacológico en
estos pacientes con los requisitos y condiciones de uso estable- IMAO:
cidas por las Autoridades Sanitarias para los antidepresivos en No hay estudios suficientes que justifiquen el uso de IMAO en
particular y los fármacos en general? la depresión de niños y adolescentes.
En el tratamiento de la depresión del niño y el adolescente, la El único ensayo clínico controlado y aleatorizado (ECCA) publi-
medicación debe utilizarse como una herramienta más dentro de cado es un pequeño ensayo de 5 semanas de duración en el que
un tratamiento integral que incluya intervenciones dirigidas a se comparó moclobemida con placebo en 20 pacientes de 9 a
mejorar el funcionamiento interpersonal, social y académico de 15 años con depresión mayor (13 de ellos con trastornos comór-
los menores. bidos)47. Los resultados en las escalas de valoración clínica fueron
favorables al fármaco, pero esto no fue así en las variables de
Este apartado se centra en la revisión de los antidepresivos en la
autoevaluación y evaluación por los padres. El pequeño tamaño
depresión del niño y el adolescente. muestral es una limitación importante de este estudio.

ANTIDEPRESIVOS TRICÍCLICOS (ATC): INHIBIDORES SELECTIVOS DE LA RECAPTACIÓN DE


Hazell et al publicaron una revisión sistemática en la que inclu- SEROTONINA (ISRS) Y NUEVOS ANTIDEPRESIVOS:
yeron 13 ensayos clínicos controlados con placebo con un total
de 506 pacientes con depresión entre 6 y 18 años44. 1- Ensayos clínicos aleatorizados publicados:
En esta revisión sistemática la respuesta a tricíclicos en niños es
FLUOXETINA:
semejante a placebo. En adolescentes, sin embargo, hay una
respuesta moderada a tricíclicos, superior a placebo, por lo que En un ensayo clínico (Simeon et al, 1990) doble ciego de 8
se sugiere que puede haber un lugar para el uso tricíclicos en el semanas de duración en el que participaron 40 pacientes de 13
tratamiento de los adolescentes con depresión, aunque su a 18 años con depresión mayor, de los que no se describe la
respuesta sea moderada. gravedad de la depresión, fluoxetina se asoció a mejores resul-
Las reacciones adversas que se presentaron con más frecuencia tados que placebo, pero las diferencias no alcanzaron significa-
en el grupo de tratamiento activo, con una diferencia estadísti- ción estadística48.
camente significativa respecto a placebo, fueron: vértigo, hipo- Emslie et al (1997) estudiaron 96 pacientes (7-17 años) con
tensión ortostática, temblor y boca seca. Para los demás reac- depresión mayor que fueron incluidos en un ensayo clínico de 8
ciones adversas conocidas (cansancio, cefalea, estreñimiento, semanas de duración y aleatorizados para recibir fluoxetina (20
palpitaciones, sudoración, etc…) las diferencias no alcanzaron mg/d) o placebo49. Fueron estratificados por edad y sexo. Se
significación estadística. Según estos datos, es poco probable que excluyeron niños con alto riesgo suicida. Fluoxetina fue superior
las reacciones adversas sean el principal obstáculo para la a placebo en el tratamiento de la fase aguda de la depresión
utilidad clínica de los antidepresivos tricíclicos en la depresión (escalas CDRS y CGIS), no encontrando diferencias significa-
juvenil. En esta revisión sistemática, no se hace referencia a las tivas por grupos de edad. Como criterio de inclusión se introdujo
reacciones adversas relacionadas con el comportamiento suicida. un criterio de gravedad (>40 en el CDRS-R y >4 en el CGI-
gravedad). En este estudio, la respuesta a placebo fue del 30%,
Todos los ATC son cardiotóxicos a altas dosis. Esto incrementa el baja respecto a otros estudios de eficacia.
riesgo de muerte por sobredosis, lo que hace que sean emple-
ados con cautela en pacientes con riesgo suicida. El de mayor En un segundo estudio, de 8 semanas de duración, Emslie et al
riesgo es la desipramina, no comercializada en España, con una (2002), realizaron un ensayo clínico con 219 menores (122
tasa de mortalidad de 0.4 por cien mil. El riesgo es menor para niños y 97 adolescentes de 8-18 años) con depresión mayor que

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fueron aleatorizados para recibir fluoxetina o placebo50. Se Braconnier et al (2003) realizaron un estudio aleatorizado doble
excluyeron pacientes con riesgo elevado de suicidio. Con los ciego para comparar respuesta a paroxetina y clomipramina. El
criterios de mejoría que definieron a priori (disminución en un estudio incluyó 121 adolescentes (12-20 años) con depresión
30% de las escalas CDRS) fluoxetina proporcionó mejoras mayor no psicótica. Se incluyeron pacientes con riesgo o idea-
respecto a placebo en la disminución de la escala (CDRS-R: 22 ción autolítica. Fueron aleatorizados para recibir paroxetina
vs 14.9 puntos) pero la diferencia no era significativa. (n=63) o clomipramina (n=58) durante 8 semanas53. A priori se
dividió la muestra en pacientes con 15 años o menos y pacientes
En un análisis posterior de los datos los autores comentaron que con más de 15. Así, los grupos en tratamiento con paroxetina
si hubiesen utilizado otros criterios y otro método de análisis las quedaron constituidos por 30 y 29 pacientes respectivamente. El
diferencias hubiesen sido significativas, y concluyeron que la fluo- diseño del estudio se hizo asumiendo una diferencia entre grupos
xetina es eficaz en el tratamiento de la depresión del niño y del de un 25% en el número de respondedores. Como variable prin-
adolescente. Al igual que en el estudio anterior, no se observaron cipal de respuesta se utilizaron la Montgomery Asberg Depresión
mejorías en las escalas de funcionamiento global y de calidad de Rating Scale y la CGI. No se encontraron diferencias significativas
vida. Este estudio está considerado como desfavorable en las entre ambos fármacos, pero clomipramina se asoció a más reac-
revisiones sistemáticas. ciones adversas. Tres pacientes que tomaban paroxetina y uno
que tomaba clomipramina viraron a sintomatología maniaca.
Sólo hay un estudio de prevención de recaídas, que se realizó con Este estudio no incluyó una rama con placebo ya que los inves-
fluoxetina: 40 niños y adolescentes con depresión se estudiaron tigadores por razones éticas rehusaron tener adolescentes con
para evaluar el efecto de fluoxetina frente a placebo en la depresión grave y potencialmente suicidas en régimen de
prevención de recaídas. El análisis se realizó en una fase de placebo.
extensión de 32 semanas de prevención de recaídas sobre un
ensayo clínico previo controlado con placebo. En esta fase, 20 SERTRALINA:
pacientes continuaron recibiendo fluoxetina (F/F) y a 20 se les
cambió a placebo (F/P). El tiempo hasta la aparición de recaídas Wagner et al (2003), realizaron un análisis combinado de los
aumentó significativamente en el grupo F/F (p=0,046), disminu- datos aportados por dos ECCA de 10 semanas de duración,
yendo también el número de pacientes que experimentaron una diseñados para evaluar el efecto de sertralina frente a placebo
recaída. La incidencia de reacciones adversas y el perfil de tole- en pacientes menores de 18 años con depresión mayor 54. Se
rabilidad fue similar en ambos grupos. incluyeron un total de 376 pacientes (6-17 años) con depresión
moderada o grave. Fueron excluidos los pacientes que tenían
PAROXETINA intentos autolíticos previos o riesgo de suicidio. Estudiando
juntos los resultados de ambos ensayos, sertralina redujo los
Keller et al (2001) llevaron a cabo un estudio de 8 semanas para síntomas medidos con las escalas de depresión CDRS-R y CGI,
comparar la eficacia, de paroxetina, imipramina y placebo en con una diferencia estadísticamente significativa en ambas
adolescentes con diagnóstico de depresión mayor (criterios DSM- escalas frente a placebo. La respuesta apareció en las primeras
IV). Incluyeron 275 adolescentes de 12 a 18 años, con un nivel semanas. Cuando se separan por grupos de edad, las diferen-
de gravedad de al menos 12 en la Escala de Hamilton de 17 cias respecto a placebo sólo eran estadísticamente significa-
items y al menos una puntuación de 60 en la Escala de tivas en el grupo de adolescentes, aunque el estudio no se
Valoración Global ( CGAS), de los cuales 190 completaron el diseñó para evaluar diferencias por la edad. Las reacciones
ensayo52. Se utilizó como variable principal de respuesta la HAM- adversas fueron más frecuentes en el grupo de sertralina. No
D y la CGI. Se consideró variable de mejoría frente a placebo un hubo diferencias significativas en la ideación suicida entre los
25% de diferencia entre grupos. Paroxetina mejoró significati- dos grupos.
vamente frente a placebo en la reducción de la puntuación de
la escala global de Hamilton (< que 8 o reducción del 50%) y CITALOPRAM:
alcanzó valores CGI entre 1-2. Un paciente que tomaba paroxe-
tina hizo un viraje a sintomatología maniaca. Wagner et al (2004) publicaron un ensayo clínico doble ciego
controlado con placebo de 8 semanas de duración para evaluar
No se observaron diferencias respecto a placebo para ninguno la eficacia de citalopram en niños y adolescentes (7-17 años;
de los fármacos al analizar variables de autoevaluación o valo- n=174) con depresión mayor55. La diferencia en la tasa de
ración de la depresión por los padres. Se incluyeron a pacientes respuesta al final del estudio fue significativa a favor de citalo-
con trastornos de conducta y se excluyeron a aquellos con riesgo pram.
de suicidio o con depresión con síntomas psicóticos. En el diag-
nóstico, se vio que la media de tiempo de enfermedad era de más VENLAFAXINA:
de 1 año. Este criterio implica cronicidad según criterios diag-
nósticos. En este estudio la tasa de respuesta al placebo fue muy Mandoki et al (1997) evaluaron la eficacia de venlafaxina en un
alta, lo que los autores atribuyeron al efecto de tener sesiones ensayo clínico doble ciego controlado con placebo de 6 semanas
semanales con un consultor. de duración en el que se incluyeron 40 pacientes (8-17 años) con

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depresión mayor. No se excluyeron pacientes con trastornos de su estudio de paroxetina, cambia inexplicablemente la defini-
conducta, sí pacientes con riesgo suicida. Terminaron el estudio ción predefinida de “respuesta” (reducción del HAM-D por
17 pacientes que tomaban placebo y 16 que tomaban venlafa- debajo de 8) para obtener una diferencia significativa y concluye
xina. No se pudo atribuir a venlafaxina una mejora en los que, a pesar de las conclusiones del autor, ese estudio no
síntomas de la depresión56. muestra diferencias significativas respecto a placebo. Del mismo
modo, refiere que el estudio de Emslie de 1997, tampoco
La descripción del estudio es pobre en la publicación, sin espe-
muestra diferencias estadísticamente significativas respecto a
cificar variables de respuesta principales. El número de pacientes
placebo en las variables de medida de “recuperación” predefi-
es muy pequeño, la dosis infraterapéutica (según lo observado
en adultos) y el único paciente que viró a manía tomaba venla- nidas y que, para su publicación, esas variables principales
faxina. fueron modificadas, obteniendo entonces los resultados posi-
tivos. Respecto al estudio de Wagner (sertralina), señala que,
OTROS FÁRMACOS: sólo el mayor tamaño muestral resultante de analizar combi-
nados los dos ensayos es responsable, por tener un poder esta-
No hay estudios publicados con escitalopram, fluvoxamina, dístico suficiente para detectar pequeñas diferencias, de los
mirtazapina o atomoxetina en niños y adolescentes con depre- resultados positivos obtenidos, ya que el análisis separado de
sión mayor. Según la revisión del Comité de Expertos de la MHRA ambos ensayos, idénticos, no ofrece diferencias significativas
de los estudios no publicados, en el caso de fluvoxamina no se respecto a placebo.
ha investigado la eficacia en depresión en niños y adolescentes
de este fármaco. No hay estudios terminados con escitalopram, Los autores concluyen que la eficacia de los antidepresivos ha
aunque sí están en marcha. Hasta la conclusión de los mismos sido sobrevalorada ya que éstos producen un beneficio clínico
consideran que las conclusiones del citalopram pueden extra- moderado, cuestionándose porqué la fluoxetina ha sido apro-
polarse a escitalopram en niños y adolescentes con depresión bada por la FDA para el tratamiento de la depresión infantil y la
mayor. Con mirtazapina hay dos ensayos doble ciego aleatori- MHRA la ha excluido de sus críticas aceptando la versión publi-
zados no publicados con resultados negativos. No se dispone de cada de los ensayos clínicos y no han hecho lo mismo para la
datos de estudios no publicados con atomoxetina sertralina.
No se dispone de ensayos clínicos en niños y adolescentes con Respecto a las reacciones adversas señala que, tanto en el
depresión resistente. En los artículos revisados en este trabajo se estudio de Keller de paroxetina como en el de Wagner de sertra-
coincide en la necesidad de reconsiderar el diagnóstico como lina, las diferencias en la aparición de las mismas son estadísti-
primer paso en caso de no respuesta al tratamiento en forma y camente significativas respecto a placebo y que, probablemente,
dosis convencionales57,58,59. son subestimadas en los estudios. Ningún estudio presentaba
datos de intentos autolesivos, ni consultas en urgencias o en
2. Revisiones sistemáticas: salud mental.

Se han encontrado cuatro revisiones sistemáticas hasta Respecto a la metodología, destaca la alta tasa de aban-
noviembre de 2.005, que se exponen a continuación en orden donos tanto en grupos de tratamiento como en controles con
cronológico de publicación. placebo, y el hecho de que no se evalúen cuando concluyen los
estudios. Refiere que las medidas categoriales para evaluar la
Jureidini et al60 (2.004) efectuaron un análisis de 6 ensayos evolución, hace que se sobredimensionen las pequeñas dife-
clínicos en los que se compararon paroxetina, fluoxetina, sertra- rencias entre los grupos. Duda además del verdadero “ciego”
lina o venlafaxina (n=477) con placebo (n=464). de los estudios, al señalar que la detección de reacciones
adversas orienta al psiquiatra hacia el tipo de tratamiento que
Señalaron que la industria farmacéutica financió directa o indi-
recibe el paciente, y que las diferencias en eficacia entre el
rectamente tres de los cuatro estudios más extensos (Emslie
(2.002) para fluoxetina, el de Keller para paroxetina y el de fármaco y el placebo son menores cuando se usa un placebo
Wagner para sertralina). activo (que produce reacciones adversas). En este sentido,
refiere que el gran efecto placebo encontrado en los seis estu-
En eficacia, sólo 2 de ellos, el de Emslie de 1997 para dios analizados hace que la significación clínica de las
Fluoxetina y el de Wagner de 2003 para Sertralina, mostraron pequeñas diferencias en eficacia encontradas con los fármacos
ventajas significativas para el tratamiento activo en las variables sea cuestionable.
de medida principales determinadas por los autores. Los resul-
tados del meta-análisis realizado por Jureidini indican, no En resumen, Jureidini et al consideran que la magnitud del bene-
obstante, un tamaño del efecto modesto, que para el autor tiene ficio es improbable que sea suficiente como para compensar los
poca relevancia clínica (0,26; IC 95%: 0,13-0,40). Jureidini riesgos que deberían asumirse. Señalan que no debería subesti-
critica el modo en el que los autores interpretan los resultados marse el papel de las intervenciones no farmacológicas en niños
de sus estudios en las publicaciones. Así, destaca que Keller, en y adolescentes con depresión.

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Whittington et al61 (2004) realizaron un meta-análisis de los Courtnay62 (2004), publicó un estudio diseñado para evaluar la
datos derivados de ensayos clínicos aleatorizados publicados y calidad y analizar los resultados de los ensayos clínicos contro-
no publicados (éstos aportados por la revisión del Comité de lados con placebo publicados antes de enero del 2004 que
Expertos sobre Seguridad del Medicamento de la MHRA de evaluavan la eficacia y seguridad de ISRS y venlafaxina en niños
Reino Unido (CMS) que evaluaban un ISRS o velanfaxina frente y adolescentes con depresión. Se incluyeron 6 ensayos clínicos,
a placebo en pacientes de 5-18 años con depresión). los mismos que analiza Jureidini, pero revisados en fecha poste-
rior e incluyendo las aportaciones de Jureidini. El estudio TADS
Los resultados de 2 ensayos clínicos publicados (el de Emslie de
no está incluído. Al igual que Jureidini, señala que sólo 2 ECCA,
1997 y el TADS de 2004) sugerían que fluoxetina presenta un
para fluoxetina y sertralina, mostraron resultados estadística-
balance beneficio/riesgo favorable. Los datos de los estudios no
mente significativos en las variables principales de eficacia.
publicados confirmaron esta afirmación.
Los ensayos publicados con paroxetina (1) o sertralina (2) apor- Respecto al estudio de sertralina, recoge las mismas observa-
taron resultados heterogéneos y, en el mejor de los casos, una ciones que Jureidini.
tendencia modesta a favor del beneficio del fármaco. En sus conclusiones, esta revisión sistemática señala que se ha
En el caso de paroxetina, al añadir los estudios no publicados dado una inadecuada proclamación de eficacia de estos
(2), la falta de evidencia de eficacia persiste y el riesgo de incre- fármacos en base a resultados positivos muy parciales u obte-
mento de ideas y tentativas autolíticas también (3.7% vs 2.5%), nidos en redefiniciones a posteriori de criterios de mejoría.
si bien esto último, según los autores, es difícil de interpretar por Refiere que los estudios publicados sobre la eficacia de los ISRS
el gran intervalo de confianza. y venlanfaxina en la depresión de niños y adolescentes no son
concluyentes y que la evidencia publicada respecto a la seguridad
En el caso de sertralina, no había estudios no publicados; en de estos fármacos tampoco es concluyente.
los publicados, sí se evidencia una mejoría significativa frente a
placebo y no hay un aumento de riesgo suicida. En un reanálisis Cheung et al63 (2005), hacen una revisión de ensayos clínicos
posterior de estos mismos estudios realizado por el CMS, en el publicados hasta Diciembre de 2.004 y no publicados disponibles
que se aportan más datos sobre remisión no publicados previa- (FDA webside y MHRA webside). De los artículos encontrados
mente, ellos concluyen que no hay evidencia de eficacia de respecto al uso de antidepresivos en menores con depresión, 8
sertralina y sí de un incremento del riesgo de ideación y reunían los criterios de ECCA en tratamiento agudo de la depre-
conductas suicidas, aunque una vez más señalan que esto último sión con nuevos antidepresivos en menores de 19 años. Revisaron
es difícil de interpretar por los amplios intervalos de confianza. 4 con fluoxetina (Simeon et al, 1990, Emslie, 1997, 2002, March
Con toda esta información Wittington et al, concluyen que el et al, 2004), 1 con sertralina (Wagner et al, 2003), 1 con citalo-
balance beneficio/riesgo es desfavorable para sertralina. pram (Wagner et al, 2004), 1 con paroxetina (Keller et al, 2001)
y 1 con venlafaxina (Mandoki et al, 1997). Básicamente los
No había ensayos publicados con citalopram. La revisión del mismos que las anteriores revisiones. Tras realizar la revisión más
CMS aporta dos ECCA no publicados con citalopram, en los que
minuciosa de eficacia y seguridad de los fármacos relacionándola
concluye que ante la falta de pruebas de eficacia, y el potencial
con la metodología empleada en los diferentes estudios (tamaño
incremento del riesgo suicida, el balance riesgo/beneficio es
muestral, lugar de selección, fármaco y dosis, duración, medidas
desfavorable.
principales y secundarias de respuesta, tasas de reacciones
Con venlafaxina había un ECCA publicado en el que no se adversas físicas, tasas de discontinuación debido a reacciones
demuestra eficacia ni tampoco un incremento de reacciones adversas, tasas de hostilidad e incremento de la activación, tasas
adversas graves. Con los dos ensayos no publicados aportados de viraje a manía, método de recogida de las reacciones adversas
por el CMS, el balance beneficio/riesgo sigue siendo desfavorable y de conductas suicidas en el grupo de tratamiento y de placebo)
para venlanfaxina. destacan los siguientes aspectos:
Por tanto, los autores concluyeron que la posibilidad de que un 1. La variabilidad en la metodología empleada y en las tasas de
fármaco pueda incrementar el riesgo suicida sin una clara respuesta fármaco/placebo hace que se deba ser muy cauto en
evidencia de eficacia hace desaconsejable su uso el la depre- la interpretación de los datos disponibles. Al igual que Jureidini,
sión de niños y adolescentes. Añadieron que, sin embargo, los cuestiona la aceptación de fluoxetina por la FDA y la MHRA
ISRS podrían ser seguros y eficaces para tratar otros trastornos con los mismos criterios por los que se rechazan otros fármacos.
de la infancia, como el trastorno obsesivo compulsivo y la
ansiedad, lo que abría la posibilidad de que determinados 2. No hay evidencia en adultos de que los ISRS difieran entre
subgrupos de menores deprimidos, por ejemplo, aquellos con sí. En relación con esto, señala que las tasas de respuesta a
ansiedad comórbida, pudieran beneficiarse de estos fármacos. placebo encontradas en los ECCA varían del 33% al 59% y se
Señalan como importante el sesgo de publicación hacia los resul- pregunta si quiere esto decir que hay diferente eficacia entre
tados positivos, y la dificultad para acceder a los datos de estu- placebos o más bien esto se debe a diferencias en la metodo-
dios no publicados a la hora de elaborar guías terapéuticas. logía de los estudios

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3. En parte, la demostración de eficacia de un fármaco en niños o análisis estratificados por subgrupos para evaluar resultados
es muy difícil por la escasez de los estudios que se realizan. Las de cualquier intervención. A esto habría que añadir la confusión
agencias reguladores exigen 2 ECCA positivos para aceptar la que pueden generar los tratamientos farmacológicos concomi-
indicación. En adultos, el 50% de los ECCA son negativos y tantes que no siempre han sido controlados adecuadamente en
frecuentemente se hacen 4 o 5 ensayos clínicos hasta conse- todos los estudios.
guir que dos de ellos den resultados positivos. En niños es muy
improbable que se realicen más de dos ECCA con una misma Otro aspecto relacionado con la clínica de la depresión y con la
medicación, por lo que se tienen menos oportunidades de ser respuesta al tratamiento es el amplio rango de gravedad de la
correctamente evaluados. sintomatología depresiva y la presencia de sintomatología
psicótica. La gravedad de la patología es importante dado que
4. Respecto a la seguridad, está claro que el tratamiento con a mayor gravedad mejor respuesta a la medicación hay, y menor
antidepresivos se relaciona con la aparición de reacciones al placebo. Este aspecto no está controlado en la mayoría de
adversas, sin embargo sólo en unos pocos de éstos son signi- los estudios. La presencia de sintomatología psicótica incorpora
ficativamente más frecuentes en el grupo de tratamiento frente un elemento de gravedad, además de ser cualitativamente dife-
al control. rente y susceptible de otros tratamientos farmacológicos
añadidos; en general la sintomatología psicótica es explícita-
5. Según la FDA existe un 2-3% de incremento en conductas mente excluida de los estudios.
relacionadas con el suicidio en jóvenes que toman un anti-
depresivo. Sin embargo, los estudios epidemiológicos de Los estudios no han sido diseñados para el análisis de aconteci-
tendencias seculares muestran una asociación entre el incre- mientos relacionados con el suicidio:
mento del uso de antidepresivo y el descenso de suicidios
P9@GI=7=8=C9GIB57CBH97=A=9BHC89AIM65>5DF9J5@9B7=5
consumados tanto en jóvenes como en adultos. Además los
ensayos realizados tienen múltiples limitaciones metodoló- P9@F=9G;CGI=7=85BC<5G=8C5@95HCF=N58C9B@CG8=GH=BHCG6F5NCG
gicas en lo que se refiere a la medición de las conductas de tratamiento en ensayos controlados
suicidas. Por tanto, no se pueden extraer conclusiones de esta
asociación. PAI7<CG9GHI8=CG9L7@IM9B9@F=9G;CGI=7=85D5F5DC89F=B7@I=F
pacientes (lo que ya orienta a que los casos son moderados o
6. No se han tenido en cuenta en los estudios las diferencias leves)
entre la depresión infantil y adolescente. Parece que en los
ensayos clínicos con antidepresivos se ha probado una PBC<5MIB7CBG9BGCF9GD97HC5@G=;B=:=758C89OGI=7=856=@=858Q
respuesta positiva en adolescentes pero no en niños, siendo o de conductas relacionadas con el suicidio, que van desde
el resultado global negativo, probablemente por el subgrupo los gestos autolesivos hasta la irritabilidad, la labilidad
infantil. Hay posibles diferencias en la depresión pre y post emocional o la deshinibición
puberal que pueden tener implicaciones para el tratamiento
(depresión prepuberal asociada a más factores psicosociales, P@5A5MCF]589@CG9GHI8=CG75F979B899G75@5G89GI=7=8=C M@5
OGI=7=856=@=858Q G9A=897CB5@;`B=H9A5=G@58C899G75@5GCF=9B
déficits neurocognitivos, trastornos disruptivos y riesgo de viraje
tadas a la valoración de otros aspectos de la psicopatología
a manía con IRSR)
PBCG9<57CAD5F58C9@F=9G;CF9@57=CB58C7CB9@5IA9BHC
7. La adherencia al tratamiento no ha sido recogida, pudiendo
inicial de ideación y/o comportamientos suicidas tras la pres-
ser los síndromes de discontinuación en parte responsables del
cripción de un ISRS con el efecto sobre el riesgo autolesivo rela-
incremento de reacciones adversas asociados a los trata-
cionado con la depresión a corto, medio y largo plazo.
mientos.
Los rangos de edad en los estudios con ISRS son muy amplios,
LIMITACIONES DE LOS ESTUDIOS sin distinción en ocasiones entre menores pre y post-púberes.
Esta distinción es importante desde el punto de vista farmacoci-
Las limitaciones de los estudios tienen que ver con tres grandes nético y farmacodinámico. La maduración de los receptores de
aspectos: los relacionados con la propia enfermedad y su cate- los neurotransmisores con la edad hace que cuanto mayores
gorización, los relacionados con el diseño de los estudios y los sean los niños más parecido biológico tienen a los adultos, por
relacionados con el efecto de los antidepresivos en la depresión. lo que se podría esperar una respuesta en los adolescentes más
parecida a la de los adultos.
Relacionados con la propia enfermedad
Relacionados con el diseño de los estudios.
La depresión, especialmente en los niños y adolescentes, se
caracteriza por la gran comorbilidad con otras entidades (tras- No existe consenso en cuanto a los instrumentos de medida
tornos de conducta, trastornos de ansiedad), lo que dificulta su a utilizar. Por un lado, en algunos estudios se utilizan escalas no
estudio, por lo que se necesitarían muestras muy homogéneas validadas en niños. Por otro, se utilizan como variable respuesta

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a veces la medida categorial de mejoría derivada de la escala CGI Europea65. Ambas agencias reguladoras tienen su propios
(mejoría clínica global) y otras veces un determinado porcentaje comités; el europeo se conoce como Comité de Medicamentos
de disminución (de entre 30 y 50%) en distintas escalas de de Uso Humano (CHMP) y los españoles son el Comité de
depresión (Hamilton, Beck, Montgomery-Asberg). Esto hace los Evaluación de Medicamentos de Uso Humano y el Comité de
resultados de los estudios difícilmente comparables. Seguridad de Medicamentos de Uso Humano. En el año 2001
el CHMP creó un grupo de expertos en pediatría, el PEG, que se
La respuesta a los antidepresivos tiene en general un tamaño
transformó en un grupo permanente dentro del propio comité en
del efecto de bajo a moderado (en adultos). Esto obliga a que
200466,67.
los estudios impliquen a muchos pacientes, y poblaciones lo más
homogéneas posible. Las conclusiones obtenidas en adultos no son extrapolables a la
El tratamiento de la depresión implica el tratamiento agudo y el población infantil. Las enfermedades infantiles son cualitativa y
de continuación, por los efectos de la depresión sobre el desa- cuantitativamente diferentes a las de los adultos. Los niños
rrollo biopsicosocial del niño. Sin embargo los estudios que presentan diferencias farmacocinéticas y farmacodinámicas que
existen para el tratamiento de la fase aguda son muy cortos en pueden hacerles especialmente vulnerables a determinadas reac-
el tiempo, y apenas hay estudios de continuación de trata- ciones adversas a medicamentos. Presentan diferencias meta-
miento. bólicas por lo que el tipo de interacciones farmacológicas pueden
ser diferentes. Los niños están creciendo, pueden presentar reac-
ciones adversas que afecten a su desarrollo y que no se obser-
Relacionados con el efecto de los antidepresivos. varán en adultos. La carencia de ensayos clínicos realizados en
niños incrementa la incertidumbre del uso de un medicamento.
La respuesta de la depresión al placebo es alta. También lo es
La falta de estudios de cinética conlleva el riesgo de infra o supra-
la respuesta de los niños al efecto placebo, al menos a corto
dosificación en algunos grupos de edad. El uso de formulaciones
plazo. Esto dificulta encontrar diferencias aunque las haya entre
producto activo y placebo. Por otro lado, obliga a realizar estu- que no son apropiadas para los niños aumenta la probabilidad
dios a medio-largo plazo donde se vea la persistencia del efecto de dosificar incorrectamente y disminuye el control de calidad
placebo frente al efecto del fármaco. Con la misma tasa de sobre el producto final que se administra.
respuesta a antidepresivos, aquellos estudios con mayor efecto En el momento actual ningún antidepresivo tiene aprobada la
placebo tienden a dar lugar a resultados negativos. Sin indicación de depresión mayor en niños en Europa, aunque se
embargo, los estudios con depresiones más graves y también
está evaluando la información disponible con fluoxetina68, que
aquellos con menos lugares implicados para el reclutamiento
sin embargo si tiene aprobada esta indicación en los Estados
(más homogeneidad de criterios) reportan tasas mayores de
Unidos desde el año 200369. A pesar de esta situación legal de
eficacia. Los estudios con fluoxetina coinciden en ser estudios
los medicamentos, extensible a toda la población y similar en el
de este tipo.
entorno de la Unión Europea, es bien conocido que tanto en el
Existen dificultades éticas a la hora de tratar a niños o adoles- ámbito hospitalario como en el de atención primaria un porcen-
centes con depresiones graves con placebo, dado el efecto posi- taje de niños superior al 40% reciben medicamentos fuera de
tivo demostrado de los antidepresivos en adultos. Esto se refleja indicación o no autorizados70,71.
en la exclusión de casos graves o con riesgo suicida de muchos
estudios, y también condiciona la respuesta al tratamiento, ya Los laboratorios farmacéuticos que tienen autorizados ISRS o anti-
que se ha visto, al menos en adultos, que a mayor gravedad, más depresivos relacionados con éstos, estaban llevando a cabo
respuesta al tratamiento antidepresivo. programas de ensayos clínicos encaminados a demostrar la
eficacia de estos medicamentos en depresión mayor en niños para
solicitar la aprobación de esta indicación, lo que explica que la
LAS AGENCIAS DE MEDICAMENTOS ANTE LA ALERTA DE mayoría de la información disponible sobre eficacia y seguridad
SEGURIDAD DE ANTIDEPRESIVOS EN NIÑOS.
procede de ensayos clínicos aleotorizados controlados que se han
Las decisiones que las autoridades sanitarias adoptan para la realizado en los últimos años y están promocionados por la indus-
incorporación de un nuevo medicamento, ampliación o restric- tria farmacéutica y que sólo una proporción pequeña se haya
ción de sus condiciones de uso o retirada del mercado, se apoyan hecho pública. Esta situación, que es demasiado habitual, justi-
en los informes científicos de los Comités de Expertos creados fica en parte que los ensayos evaluados por las autoridades sani-
específicamente para realizar estas tareas. En España esta tarias sean más numerosos que los ensayos clínicos disponibles
responsabilidad recae en la Agencia Española de Medicamentos para revisar o analizar por investigadores o sociedades científicas,
y Productos Sanitarios64, aunque para los medicamentos de e incorpora una cierta distorsión en los debates suscitados ante
registro centralizado, los de reconocimiento mutuo o en situa- las medidas adoptadas. De igual forma ha ocurrido con los estu-
ciones en las que la Comisión Europea insta a ello, la evalua- dios observacionales utilizados para evaluar la seguridad, algunos
ción la realiza la Agencia Europea del Medicamento con el fin de realizados a instancias de las agencias reguladoras y no todos
que se adopten medidas homogéneas en toda la Unión publicados en el momento de la evaluación de la alerta.

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En mayo de 2003, el Departamento de Salud del Reino Unido ningún país europeo para el tratamiento de la depresión mayor
creó un Grupo de Expertos (MHRA) para evaluar tres posibles en niños y por lo tanto que no deben ser utilizados en niños y
problemas: los comportamientos suicidas, el síndrome de reti- adolescentes más que en las indicaciones aprobadas.
rada y la dependencia asociados al uso de ISRS y antidepresivos
relacionados. La posible aparición de síndrome de retirada con P,97CBC79EI9IBA\8=7CDI9899B5@;IB5C75G=_BHCA5F@5
este grupo de medicamentos se detectó a principios de los años decisión, basada en la necesidad clínica individual de un niño
90, a través de los programas de notificación espontánea (tarjeta o un adolescente, de utilizar alguno de estos medicamentos
amarilla). Esta reacción adversa ha sido incorporada a las fichas para el tratamiento de la depresión o la ansiedad. En estos
técnicas de estos medicamentos y ha sido tratada en la literatura casos el CHMP recomienda una monitorización cuidadosa de
en numerosas ocasiones, incluidos los Boletines de los Centros la aparición de comportamientos suicidas, autolesiones u hosti-
de Farmacovigilancia72,73. A finales de los años 90 aparecen publi- lidad, de forma particular al inicio del tratamiento.
caciones en las que se asocian estos antidepresivos con cuadros P,97I9F859B75F97=85A9BH9EI9BCG9F9H=F9B9GHCGA98=75
de dependencia. Estos dos problemas fueron abordados a nivel mentos sin la supervisión de un médico por el riesgo de apari-
europeo en 1998; las conclusiones se hicieron públicas en el año ción de síndrome de retirada si el medicamento se retira de
2000 y en ellas se recomendaban las modificaciones necesarias forma abrupta, recomendando una disminución gradual de la
para armonizar las fichas técnicas en Europa incorporando la dosis durante varias semanas o meses.
información de las reacciones de retirada74. Desde 1990 han sido
continuas las publicaciones que asocian a estos antidepresivos En España esta información fue difundida a los profesionales sani-
con los comportamientos suicidas y también la evaluación del tarios por los cauces habituales, mediante notas informativas
problema a nivel europeo y las presiones de grupos de pacientes enviadas a través de la Red de Alertas, incluidas además en las
afectados. En Noviembre de 2002, el Comité de Seguridad de páginas web de la Agencia Española de Medicamentos y
Medicamentos del Reino Unido insta a que se realice un estudio Productos Sanitarios y de la Comunidad de Madrid y en el Boletín
epidemiológico que evalúe esta hipótesis y a que se constituya RAM del Centro de Farmacovigilancia de la Comunidad de
el Grupo de Expertos. Madrid.
Las primeras conclusiones del MHRA se hicieron públicas en 2003 En Estados Unidos la alerta también se está evaluando desde el
y fueron las relativas a paroxetina75 y venlafaxina76. año 2003, cuando el Reino Unido hace públicas sus primeras
conclusiones. Se ha realizado el análisis de los acontecimientos
El Reino Unido solicitó un arbitraje ante la Unión Europea, comen- adversos relacionados con el suicidio mediante dos abordajes
zando el proceso el 26 de junio de 2003, para que se evaluase diferentes y utilizando el metaanálisis de los ensayos clínicos. Por
la relación beneficio/riesgo de paroxetina. Se solicitó a las compa- un lado se ha realizado un metaanálisis de los acontecimientos
ñías farmacéuticas que aportaran toda la información disponible adversos graves relacionados con el suicidio recogidos por los
de eficacia y seguridad, procedente de ensayos clínicos, estudios promotores de los estudios en niños con antidepresivos y además
observacionales, notificación espontánea de sospechas de reac- se ha realizado una análisis muy similar, pero después de que un
ciones adversas y de la literatura al CHMP. Las conclusiones se grupo de investigadores de la Universidad de Columbia reeva-
hicieron públicas el 22 de abril de 2004. Posteriormente la luase cada acontecimiento adverso sucedido en los ensayos
Comisión Europea instó a este Comité a que reevaluara la infor- clínicos para clasificarlos de nuevo como comportamientos defi-
mación a la luz de la nueva información disponible procedente de nitivamente suicidas. Los dos abordajes encuentran una asocia-
estudios epidemiológicos, evaluación que finalizó el 8 de ción estadísticamente significativa entre el uso en ensayos
diciembre de 2004; además solicitó que se evaluara la informa- clínicos a corto plazo de antidepresivos en niños para la indica-
ción relativa al resto de ISRS y de inhibidores de la recaptación de ción de depresión mayor y los acontecimientos adversos graves
serotonina y noradrenalina68,77 . En la reunión celebrada entre el relacionados con el suicidio79. Al igual que en Europa, los trabajos
19 y 22 de abril de 2005 el CHMP concluye78: del comité asesor han durado varios años y sus conclusiones han
P+I9@CG7CADCFH5A=9BHCGGI=7=85G=BH9BHCG89GI=7=8=C9=895G generado repetidos comunicados por parte de la administración
de suicidio) y hostilidad (fundamentalmente agresión), compor- norteamericana80. El resultado final de dicha evaluación ha sido
tamiento de oposición y ataques de ira, se observan con mayor la incorporación al etiquetado de todos los antidepresivos de
frecuencia en niños y adolescentes tratados con, atomoxe- un recuadro negro de advertencia, el refuerzo de las adverten-
tina, citalopram, duloxetina, escitalopram, fluoxetina, fluvoxa- cias dirigidas a los profesionales sanitarios sobre el incremento
mina, mianserina, milnacepram, mirtazapina, paroxetina, rebo- de riesgo de comportamientos y pensamientos suicidas en niños
xetina, sertralina y venlanfaxina, que en los tratados con y adolescentes tratados con estos medicamentos y añadir una
placebo en los ensayos clínicos y recomienda la inclusión de información adicional sobre los resultados de los estudios en
una fuerte advertencia en toda la Unión Europea para informar pediatría. La FDA está además trabajando en una guía terapéu-
a los médicos y padres de estos riesgos. tica dirigida a los pacientes81.

P,97CA=9B85H5A6=\BEI9@CGD58F9GM@CGA\8=7CGG95B=B:CF En Australia82,83, y en Canadá84 los procesos han sido paralelos


mados de que estos medicamentos no están aprobados en a los llevados a cabo en la Unión Europea y en los Estados
Unidos y las conclusiones son similares.

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En conclusión, la práctica totalidad de los países desarrollados, - El tratamiento farmacológico de primera elección es la fluo-
ante esta alerta, han optado por medidas muy similares después xetina. Se debe iniciar el tratamiento con dosis bajas e ir incre-
de recibir los informes de sus respectivos comités de expertos. A9BH5B8CDFC;F9G=J5A9BH9 &58CG=GA[L=A5EI9G9<5IH=@=
Todos coinciden en reconocer que la información actualmente zado en ensayos clínicos de niños y adolescentes con depresión
disponible para evaluar la eficacia y la seguridad de estos medi- es de 60mg/día, siendo la más frecuentemente utilizada como
camentos en niños es muy escasa y de calidad muy heterogénea tratamiento de la fase aguda la de 20mg/día, incrementándola
y constatan la necesidad de realizar estudios robustos que deter- ocasionalmente a 40mg/día.
minen en qué subgrupo de pacientes y qué medicamentos
podrían presentar una relación beneficio/riesgo favorable en la - Mientras el paciente esté en tratamiento, deberá tener un
riguroso seguimiento por el especialista de Salud
depresión mayor.
Mental, especialmente en las fases iniciales.
&5Gbenzodiacepinas, asociadas a los antidepresivos en
RECOMENDACIONES PARA LA las dos o tres primeras semanas de tratamiento, pueden
VALORACIÓN Y TRATAMIENTO DE LA paliar las posibles reacciones adversas iniciales. Esta estra-
DEPRESIÓN EN NIÑOS Y ADOLESCENTES tegia es utilizada en adultos y podría incrementar la segu-
ridad en el uso de ISRS en menores. Sin embargo, esta asocia-
ción no está estudiada en niños y adolescentes y hay que
RECOMENDACIONES GENERALES: tener en cuenta que pueden aparecer efectos paradójicos con
estos fármacos.
P&5A98=757=_B8969G9FDF9G7F=H5G_@C9B75GCGB979G5F=CG
- Tras la remisión de la depresión (ausencia de síntomas y
siempre dentro de un tratamiento integral y siempre por profe-
recuperación total de la capacidad funcional al menos durante
sionales expertos.
ocho semanas) se deberá continuar el tratamiento farmacoló-
P@F=9G;C89GI=7=8=C8969G9FJ5@CF58CMJ=;=@58C5@C@5F;C89 gico por el especialista, a la misma dosis a la que se obtuvo
todo el tratamiento y muy especialmente al inicio del mismo y respuesta, al menos durante seis meses. Posteriormente, se
en los cambios de dosis. reducirá progresivamente.

P@BCHF5H5A=9BHCDI9897CB@@9J5FH5A6=\B85^CG;F5J9G9B9@
niño y el adolescente deprimido.
Otras alternativas farmacológicas:
- A pesar de que las pruebas disponibles señalan a la fluoxe-
RECOMENDACIONES ESPECÍFICAS: tina como alternativa de primera elección en los trastornos
depresivos moderados-graves de esta población, diversas
P@HF5H5A=9BHC89@589DF9G=_B8969G9Fintegral, abarcando circunstancias pueden obligar a la consideración de otros
la psicoterapia, la intervención psicosocial y valorando el trata- fármacos. Entre ellas podrían señalarse:
miento farmacológico de forma individualizada.
1. Intolerancia a la fluoxetina.
PB@589DF9G=_B@9J9MAC89F585 @5 psicoterapia es el trata-
miento de primera elección, siempre que sea posible. 2. No respuesta/respuesta insuficiente a fluoxetina (en dosis de
hasta 60 mg/día durante 6-8 semanas).
P@tratamiento farmacológico en depresión moderada o
grave se recomienda especialmente en los siguientes casos: 3. El paciente/familia se niega a tomar éste fármaco.

- Cuando la intervención psicoterapéutica sola consigue una En estos casos, podrían considerarse alternativas de segunda
mejoría insuficiente. elección sertralina y citalopram, dada la existencia de
hallazgos parciales positivos en adolescentes. En esta pobla-
- Presencia de síntomas psicóticos ción también diversos estudios sugieren la eficacia de los tricí-
7@=7CG &58CG=G=B=7=5@8969F]5G9F@5A=H5889@5IH=@=N5859B
- Alto riesgo suicida. En este caso, el paciente debe ser estre-
adultos, incrementándose si fuera necesario, hasta la dosis de
chamente vigilado en el contexto de un ingreso hospitalario. adulto en un periodo de 2 a 4 semanas.
- El paciente se niega, o no es posible realizar tratamiento 4. En los pacientes que tengan ya instaurado un tratamiento
psicoterapéutico. con otro antidepresivo distinto a fluoxetina y con una respuesta
En el caso de que se paute tratamiento farmacológico, adecuada, se recomienda continuar hasta la finalización del
tratamiento, manteniendo todos los controles de seguridad
&5=B8=757=_B8969G9FF95@=N585DCF9@psiquiatra. detallados anteriormente.

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5. En caso de no respuesta al tratamiento en forma y dosis cológico, lo que ocurre con cualquier tratamiento antidepresivo y
convencionales, es necesario reconsiderar el diagnóstico. en cualquier rango de edad y población. Igualmente deben ser
informados de las graves consecuencias del no tratamiento farma-
- Se valorará ingreso hospitalario en las siguientes
cológico (deterioro funcional, riesgo de suicidio). Deben ser adver-
circunstancias:
tidos de que la observación de algún efecto adverso ha de ser
1.- Depresión grave con síntomas psicóticos. inmediatamente comunicada a su psiquiatra y que cualquier
cambio en la dosis o administración del fármaco debe ser consul-
2.- Depresión con riesgo de suicidio moderado-grave. tado. El paciente y su familia deben saber dónde acudir en caso de
3.- Falta de contención familiar. observar reacciones adversas (teléfono, horario del Servicio de
Salud Mental, urgencias).
4.- Comorbilidad grave.
Todas las actuaciones deben quedar reflejadas en la historia clínica
del paciente.
ASPECTOS ÉTICO-LEGALES EN EL USO DE
ANTIDEPRESIVOS EN LA DEPRESIÓN DE e
Uso compasivo de medicamentos:. Se entiende por uso compa-
NIÑOS Y ADOLESCENTES sivo de medicamentos la utilización en pacientes aislados y al
margen de un ensayo clínico de medicamentos en investigación,
La evolución en la legislación del medicamento que se ha ido
incluidas especialidades farmacéuticas para indicaciones o
produciendo desde los años treinta del pasado siglo ha signifi-
condiciones de uso distintas de las autorizadas, cuando el
cado un cambio en las responsabilidades legales de los distintos
agentes que participan. Esto ha adquirido una relevancia muy médico bajo su exclusiva responsabilidad considere indispen-
concreta en la prescripción de los antidepresivos en menores con sable su utilización. Para utilizar un medicamento bajo las condi-
depresión, dado que no están aprobados para esta indicación en ciones de uso compasivo se requerirá el consentimiento infor-
esta población y, por tanto, la responsabilidad de la prescrip- mado del paciente o de su representante legal, un informe
ción la asume el médico que la realiza. clínico en el que el médico justifique la necesidad de dicho trata-
miento, la conformidad del director del centro donde se vaya a
La legislación española contempla dos ámbitos para garantizar aplicar el tratamiento y la autorización de la Agencia Española
a los pacientes sus derechos cuando se le prescribe un medica- de Medicamentos y Productos Sanitarios. El médico responsable
mento fuera de las condiciones en las que se aprueba: el marco comunicará a la Agencia Española de Medicamentos y
legal del uso de medicamentos dentro de un ensayo clínico o el Productos Sanitarios los resultados del tratamiento, así como las
del uso compasivo . Ante cualquiera de estas dos situaciones el sospechas de reacciones adversas que puedan ser debidas a
paciente o su representante legal debe ser informado adecua-
éste. Artículo 28, Capítulo V, del Uso compasivo. Real Decreto
damente y otorgar su consentimiento, y en ambos casos la admi-
223/2004, de 6 de febrero, por el que se regulan los ensayos
nistración sanitaria debe ser conocedora y supervisar dicha
clínicos con medicamentos. BOE núm. 33, de 7 febrero de 2004.
actuación85.
En el caso concreto del uso de los antidepresivos en la depresión
mayor de niños y adolescentes (incluida fluoxetina), la Agencia CONCLUSIONES
Española de Medicamentos y Productos Sanitarios en su nota
informativa de 26 de abril de 2005, recuerda que “para la utiliza- PB9@ACA9BHC57HI5@ @5G@=A=H57=CB9GA9HC8C@_;=75G89@CG
ción de medicamentos en indicaciones no autorizadas, se deben estudios disponibles, impiden obtener conclusiones definitivas
de seguir los procedimientos legalmente previstos (uso compa- para la toma de decisiones clínicas.
sivo). En todo caso, se deberá informar a los padres o tutores
legales de esta situación especial y obtener su consentimiento”. P&589DF9G=_B89@B=^CM89@58C@9G79BH9G975F57H9F=N5DCFIB5
Por lo tanto, la prescripción de éstos fármacos en la actual situa- alta respuesta al placebo.
ción de no autorización debe acompañarse de un consenti-
miento informado así como de una información sobre sus P&5DG=7CH9F5D=5A[G9J5@I5859B9GHI8=CG7@]B=7CG9BB=^CGM
beneficios y reacciones adversas posibles que, de aparecer, el adolescentes con depresión leve a moderada es la TCC. Se ha
clínico debe evaluar inmediatamente. El original del consenti- mostrado superior a otras alternativas no farmacológicas en la
miento informado debe quedar incluido en la historia clínica del fase aguda del tratamiento, aunque en los estudios efectuados
paciente y la familia debe recibir un ejemplar firmado del mismo. a más largo plazo las diferencias no se han mantenido.

Así pues, en todos los casos, el paciente y su familia deben ser P&59:=757=589@5DG=7CH9F5D=5=BH9FD9FGCB5@9B9@HF5H5A=9BHC
informados de la posibilidad de empeoramiento de la depresión y de la depresión del niño y el adolescente no está suficiente-
aparición de reacciones adversas tales como agresividad, nervio- mente investigada. Sin embargo, los resultados iniciales son
sismo, autoagresiones, etc… tras el inicio del tratamiento farma- esperanzadores.

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P @ICL9H=B5<589ACGHF58C9:=757=59B9@HF5H5A=9BHC89@5 AUTORES DE LA REVISIÓN


89DF9G=_BAC89F585M;F5J989@B=^CM9@58C@9G79BH9 (C<5M (por orden alfabético):
9J=89B7=5899:=757=5F9:9F=855CHFCG5BH=89DF9G=JCG9B9BG5MCG
,CG5F=C7I^5@@9F *98=5HF]59BHFC89-5@I8'5FH]B8905F;5G ZF95
7@]B=7CG 7CBHFC@58CG M 5@95HCF=N58CG (C 9L=GH9B 9GHI8=CG
89H9B7=_B*F=A5F=5 -9FJ=7=C'58F=@9^C89-5@I8 
7CAD5F5H=JCG899:=757=59BHF9@CG8=:9F9BH9G#-,-
'_B=75 IG9>C -9;IF5 -I68=F977=_B !9B9F5@ 89 G=GH9B7=5
P&55GC7=57=_B89@HF5H5A=9BHC:5FA57C@_;=7C:@ICL9H=B57CB 5FA57\IH=75 =F977=_B!9B9F5@89 5FA57=5M*FC8I7HCG-5B=H5F=CG89@5
@5.DI989C:F979FA9>CF9GF9GI@H58CGEI9@5ACBCH9F5D=5 CAIB=85889'58F=8 
7CB9@:[FA57CC@5.GC@59B58C@9G79BH9G7CB89DF9G=_B 'W89@CGZB;9@9GFIN'5FHCG -I68=F977=_B!9B9F5@89G=GH9B7=5
AC89F585;F5J9 5FA57\IH=75 =F977=_B!9B9F5@89 5FA57=5M*FC8I7HCG-5B=H5F=CG89@5
CAIB=85889'58F=8 
P&CG#-,- 5@=;I5@EI99@F9GHC89@CG5BH=89DF9G=JCG DI989B #BA57I@585 9FB[B89N GH965B -9FJ=7=C 89 5FA57=5 ZF95  89
DFC8I7=F5@DF=B7=D=C89@HF5H5A=9BHC89G=B<=6=7=_B7CB8I7 H9B7=_B*F=A5F=5 -9FJ=7=C'58F=@9^C89-5@I8 
HI5@ =FF=H56=@=858M
C@56=@=8589AC7=CB5@ "5M9J=89B7=589IB 'CBHG9FF5H!F59@@9FB5 /B=85889"CGD=H5@=N57=_BF9J989(=^CGM
=B7F9A9BHC89=895GGI=7=85G 5IHC@9G=CB9GM7CB8I7H5G5;F9 8C@9G79BH9G"CGD=H5@#B:5BH=@(=^C$9G`G -9FJ=7=C'58F=@9^C89-5@I8 
G=J5G 5IBEI9BCG9<589ACGHF58CIB=B7F9A9BHC89GI=7=8=CG @5F5"9FF[9N'5FH]B895@A5G985EI=DC89-5@I8'9BH5@89(=^CG
7CBGIA58CG9BB=^CGM58C@9G79BH9G M8C@9G79BH9G -9FJ=7=C 89 -5@I8 '9BH5@ 89.CFF9>_B 89F8CN -9FJ=7=C
'58F=@9^C89-5@I8 
P@HF5H5A=9BHC89@589DF9G=_B9BB=^CGM58C@9G79BH9G8969
<579FG9 H9B=9B8C 9B 7I9BH5 89 :CFA5 AIM 7@5F5 9@ H=DC M 5FA9B#6[^9N,I=N9BHFC89 5FA57CJ=;=@5B7=589@5CAIB=85889
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CAIB=85889'58F=8 
5@H9FB5H=J5GH9F5D\IH=75GM9@7CBH9LHC9B9@EI9G9F95@=N5
'=;I9@ZB;9@$=A\B9NFF=9FC-9FJ=7=C89-5@I8'9BH5@89F;5BNI9@5
P-9F]589G956@9EI9@5G5;9B7=5GF9;I@58CF5G9GH56@97=9F5BF97C -9FJ=7=C'58F=@9^C89-5@I8 
A9B857=CB9G7@5F5GD5F5@5F95@=N57=_B899GHI8=CG9B89DF9 F=GH=B5 'C@=BG !5FF=8C EI=DC 89 -5@I8 '9BH5@ 89 (=^CG M
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Correspondencia: Dirección General de Farmacia y Productos Sanitarios. Consejería de Sanidad y Consumo. C/ Recoletos, 1. 28001 Madrid.
Tel. 91.426.90.17. Fax 91.426.91.38.
Edita: Consejería de Sanidad y Consumo. Dirección General de Farmacia y Productos Sanitarios
Tirada: 2.300 ejemplares.
ISSSN: 1697-6274 / Depósito Legal: M-13724-2004 / Imprime: Pixel Creación y Producción Gráfica, S.L.

19
Servicio Madrileño de Salud
julio/2009 - Nº 4

Recomendaciones
Farmacoterapéuticas en
Salud Mental
1. Introducción
 t%FTDSJQDJØO
Trastorno por deficit de atención con
 t&QJEFNJPMPHÓB
 t%JBHOØTUJDP hiperactividad en niños y adolescentes
2. Tratamiento.
Recomendaciones
CBTBEBTFOMB 1. INTRODUCCIÓN
evidencia
 *.FUJMGFOJEBUP DESCRIPCIÓN
 t.FDBOJTNPEFBDDJØOZ
GBSNBDPDJOÏUJDB El trastorno por déficit de atención con hipe- síntomas de TDAH pueden ser conductas abso-
 t&WJEFODJBDMÓOJDB ractividad (TDAH) se define en la Clasificación lutamente normales en niños de menos de seis
 t4FHVSJEBE Estadística Internacional de Enfermedades y otros años. Los estudios en preescolares que han inten-
  &GFDUPTTPCSFQFTPZUBMMB
  &GFDUPTDBSEJPWBTDVMBSFT
Problemas de Salud (CIE-10)1 como un “grupo de tado identificar de manera precoz a los niños con
- Tics trastornos caracterizados por un comienzo precoz, TDAH han encontrado que la inmensa mayoría
  &QJMFQTJB la combinación de un comportamiento hiperactivo (69%) de los niños con síntomas graves de hipe-
2.II. Atomoxetina y pobremente modulado con una marcada falta de ractividad e impulsividad presentaban otros tras-
 t.FDBOJTNPEFBDDJØOZ atención y de continuidad en las tareas y porque tornos 3 lo que plantea enormes dudas sobre la
GBSNBDPDJOÏUJDB estos problemas se presentan en las situaciones validez del diagnóstico de TDAH en menores de
 t&WJEFODJBDMÓOJDB más variadas y persisten a lo largo del tiempo”. Los seis años.
 t4FHVSJEBE rasgos cardinales de este trastorno son el déficit de
  &GFDUPTTPCSFQFTPZUBMMB atención, la hiperactividad y un grado inapropiado
  &GFDUPTDBSEJPWBTDVMBSFT En la CIE-10 el TDAH se descarta si existen otros
- Tics de impulsividad. Los déficit en la persistencia y en trastornos que puedan producir los síntomas
  &QJMFQTJB la atención deben ser diagnosticados sólo si son de hiperactividad o déficit de atención como
- Otros excesivos para la edad y el cociente intelectual del
sucede en el caso de los trastornos afectivos o
  ***.FUJMGFOJEBUP afectado1.
de ansiedad. Por su parte, en la DSM-IV también
versus atomoxetina
se señala que los síntomas no deben aparecer
2.IV. Recomendaciones En el Manual Diagnóstico y Estadístico de los exclusivamente en el “transcurso de un trastorno
QSFWJBTBMJOJDJP Trastornos Mentales (DSM-IV-TR), clasificación
EFMUSBUBNJFOUP generalizado del desarrollo, esquizofrenia u otro
de la Asociación Americana de Psiquiatría 2 los
GBSNBDPMØHJDP trastorno psicótico, y no se explican mejor por la
criterios para el diagnóstico del TDAH son mucho
 74FMFDDJØOEFM menos restrictivos que en la clasificación de la presencia de otro trastorno mental (p. ej., tras-
GBSNBDP OMS (CIE-10). Para realizar el diagnóstico con torno del estado de ánimo, trastorno de ansiedad,
2.VI. Monitorización esta clasificación basta con que se cumplan los trastorno disociativo o un trastorno de la persona-
EFFGFDUPTBEWFSTPT síntomas de desatención o los de hiperactividad- lidad)”. No obstante, según diversos autores, los
 7**%VSBDJØOEF impulsividad, sin que necesariamente coexistan trastornos por déficit de atención se asocian con
tratamiento ambos. mucha frecuencia (hasta en un 65%) , con tras-
 7***4JUVBDJPOFT tornos del humor, trastornos de ansiedad, tras-
FTQFDJBMFT Los síntomas han de estar presentes antes de los tornos de conducta, tics o síndrome de Gilles de
siete años para la DSM1 y de los cinco para la CIE y la Tourette, trastornos del aprendizaje y retraso
1VOUPTDMBWF deben persistir durante al menos seis meses2. mental4-6.
'JDIBTEFGBSNBDPT
El diagnóstico del TDAH antes de los seis años de Los niños con TDAH pueden desarrollar una baja
Autores.
edad plantea una enorme dificultad. Los niños en autoestima e inseguridad como resultado de sus
Bibliografía. la edad preescolar están comenzando a aprender dificultades escolares y relacionales que podría
Metodología de la búsqueda a mantener la atención y controlar los impulsos, explicar la frecuencia de sintomatología ansiosa y
bibliográfica. así que lo que a otras edades se consideran depresiva asociada6.
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Tabla 1. Diferencias entre la DSM-IV1 y la CIE-102


%4.*7 $*&
Denominación Trastornos por déficit de atención con Trastornos hipercinéticos.
hiperactividad.
Diagnóstico Seis o más síntomas de desatención El diagnóstico requiere la presencia de déficit de atención
e hiperactividad: Seis o más síntomas de inatención y tres
o
o más de hiperactividad y uno o más de impulsividad.
Seis o más síntomas de hiperactividad-impulsividad.
El déficit de atención y la hiperactividad deben
Algunas alteraciones provocadas por los síntomas manifestarse en más de una situación.
se presentan en dos o más ambientes.
Los déficit en la persistencia y en la atención deben ser
Deben existir pruebas claras de un deterioro diagnosticados sólo si son excesivos para la edad y el CI
clínicamente significativo de la actividad social, (cociente intelectual) del afectado.
académica o laboral.
Inicio Antes de los 7 años (es un criterio diagnóstico). Generalmente antes de los 5 años.
Duración Persistencia de los síntomas al menos 6 meses.
Intensidad Intensidad desadaptativa e incoherente con el nivel El criterio para la valoración de si una actividad es
de desarrollo. excesiva está en función del contexto, es decir, de lo que
sería de esperar en esa situación concreta y de lo que
sería normal teniendo en cuenta la edad y el CI del niño.
Exclusión Los síntomas no aparecen en el transcurso de Excluye:
un trastorno generalizado del desarrollo (TGD),
t5SBTUPSOPHFOFSBMJ[BEPTEFMEFTBSSPMMP 5(%

esquizofrenia u otro trastorno psicótico, y no se
explican mejor por la presencia de otro trastorno t5SBTUPSOPTEFBOTJFEBE
mental (p. ej., trastorno del estado de ánimo,
trastorno de ansiedad, trastorno disociativo o un t5SBTUPSOPEFMIVNPS BGFDUJWPT

trastorno de la personalidad). t&TRVJ[PGSFOJB
Subtipos t$PNCJOBEP Trastorno de la actividad y de la atención: se satisface el
conjunto de pautas de trastorno hipercinético pero no se
t1SFEPNJOJPIJQFSBDUJWPJNQVMTJWP OPDVNQMF
satisface el de trastorno disocial.
criterios de inatención).
Trastorno hipercinético disocial: se satisface el conjunto
t1SFEPNJOJPEFMEÏGJDJUEFBUFODJØO OPSFRVJFSF
de pautas de trastorno hipercinético y de trastorno
síntomas de hiperactividad-impulsividad).
disocial.

$SJUFSJPTEFM%4.*7QBSBFMEJBHOØTUJDP tA menudo parece no escuchar cuando se le habla directa-


EFUSBTUPSOPQPSEÏGJDJUEFBUFODJØODPO mente.
hiperactividad
tA menudo no sigue instrucciones y no finaliza tareas esco-
"&YJTUFO
P
lares, encargos u obligaciones en el centro de trabajo (no
se debe a comportamiento negativista o incapacidad para

Seis o más de los siguientes síntomas de falta de atención comprender instrucciones).
han persistido por lo menos durante 6 meses con una inten- tA menudo tiene dificultades para organizar tareas y acti-
sidad que es desadaptativa e incoherente en relación con el vidades.
nivel de desarrollo.
tA menudo evita, le disgusta o es reticente a dedicarse a
'BMUBEFBUFODJØO tareas que requieran un esfuerzo mental sostenido (como
trabajos escolares o domésticos).
tA menudo no presta atención suficiente a los detalles o
incurre en errores por descuido en las tareas escolares, en tA menudo extravía objetos necesarios para tareas o activi-
dades (juguetes, ejercicios escolares, lápices, libros...)
el trabajo o en otras actividades.
tA menudo se distrae fácilmente por estímulos irrelevantes.
tA menudo tiene dificultades para mantener la atención en
tareas o en actividades lúdicas. tA menudo es descuidado en las actividades diarias.

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Seis o más de los siguientes síntomas de hiperactividad- $SJUFSJPTEFM$*&QBSBFMEJBHOØTUJDPEF
impulsividad han persistido por lo menos durante 6 meses trastorno hipercinético
con una intensidad que es desadaptativa e incoherente en
relación con el nivel de desarrollo. %ÏGJDJUEFBUFODJØO
1. Frecuente incapacidad para prestar atención a los detalles
)JQFSBDUJWJEBE*NQVMTJWJEBE
junto a errores por descuido en las labores escolares y en
tA menudo mueve en exceso manos o pies o se remueve en otras actividades.
el asiento.
2. Frecuente incapacidad para mantener la atención en las
tA menudo abandona su asiento en clase o en otras situa- tareas o en el juego.
ciones en que se espera que permanezca sentado. 3. A menudo aparenta no escuchar lo que se le dice.
tA menudo corre o salta excesivamente en situaciones en 4. Imposibilidad persistente para cumplimentar las tareas
que es inapropiado hacerlo (en adolescentes o adultos escolares asignadas u otras misiones.
puede limitarse a sentimientos subjetivos de inquietud).
5. Disminución de la capacidad para organizar tareas y acti-
tA menudo tiene dificultades para jugar o dedicarse tran- vidades.
quilamente a actividades de ocio.
6. A menudo evita o se siente marcadamente incómodo ante
tA menudo "está en marcha" o suele actuar como si tuviera tareas tales como los deberes escolares que requieren un
un motor. esfuerzo mental mantenido.
tA menudo habla en exceso. 7. A menudo pierde objetos necesarios para unas tareas o
actividades, tales como material escolar, libros, etc.
tA menudo precipita respuestas antes de haber sido comple-
tadas las preguntas. 8. Fácilmente se distrae ante estímulos externos.

tA menudo tiene dificultades para guardar turno. 9. Con frecuencia es olvidadizo en el curso de las actividades
diarias.
tA menudo interrumpe o se inmiscuye en las actividades de
otros (se entromete en conversaciones o juegos). Hiperactividad

B. Algunos síntomas de hiperactividad-impulsividad o desaten- 1. Con frecuencia muestra inquietud con movimientos de
ción que causaban alteraciones estaban presentes antes de manos o pies o removiéndose en su asiento.
los siete años de edad. 2. Abandona el asiento en la clase o en otras situaciones en
C. Algunas alteraciones provocadas por los síntomas se las que se espera que permanezca sentado.
presentan en dos o más ambientes (en la escuela o el trabajo 3. A menudo corretea o trepa en exceso en situaciones inapro-
y en casa). piadas.
%Deben existir pruebas claras de un deterioro clínicamente 4. Inadecuadamente ruidoso en el juego o tiene dificultades
significativo de la actividad social, académica o laboral. para entretenerse tranquilamente en actividades lúdicas.
&Los síntomas no aparecen exclusivamente en el transcurso de 5. Persistentemente exhibe un patrón de actividad excesiva
un trastorno generalizado del desarrollo, esquizofrenia u otro que no es modificable sustancialmente por los requeri-
trastorno psicótico, y no se explican mejor por la presencia mientos del entorno social.
de otro trastorno mental (trastorno del estado de ánimo,
trastorno de ansiedad, trastorno disociativo o un trastorno *NQVMTJWJEBE
de la personalidad). 1. Con frecuencia hace exclamaciones o responde antes de
que se le hagan las preguntas completas.
5%")UJQPDPNCJOBEP: si se cumplen los criterios A1 y A2
durante los últimos 6 meses. 2. A menudo es incapaz de guardar turno en las colas o en
otras situaciones en grupo.
5%")DPOQSFEPNJOJPEFMEÏGJDJUEFBUFODJØO si cumple
el A1, pero no el A2 en los últimos 6 meses. 3. A menudo interrumpe o se entromete en los asuntos de otros.
5%")DPOQSFEPNJOJPIJQFSBDUJWPJNQVMTJWPsi cumple 4. Con frecuencia habla en exceso sin contenerse ante las
el A2, pero no el A1 en los últimos 6 meses. situaciones sociales.

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F90 Trastorno hipercinético: Tienen que cumplirse 6 Para realizar un correcto diagnóstico es imprescindible la
síntomas de falta de atención, 3 de hiperactividad y 1 de impul- evaluación completa y sistemática del niño (de su funciona-
sividad y además los siguientes criterios: miento global y no sólo de la hiperactividad y déficit atencional)
teniendo en cuenta el nivel de desarrollo. Puesto que el diag-
tEl inicio del trastorno no es posterior a los siete años. nostico de TDAH requiere la presencia de los síntomas en más
de una situación, es fundamental que exista una comunicación
tLos criterios deben cumplirse en más de una situación.
con el medio escolar a poder ser directa, y no sólo a través
tLos síntomas de hiperactividad, déficit de atención e impul- de cuestionarios y escalas, exclusivamente orientados al TDAH
sividad ocasionan malestar clínicamente significativo o una pues la información aportada va a ser muy valiosa para realizar
alteración en el rendimiento social, académico o laboral. el diagnóstico.

tNo cumple los criterios para trastorno generalizado del desa- La realización de un adecuado diagnóstico diferencial es funda-
rrollo, episodio maniaco, episodio depresivo o trastorno de mental. Para ello habrá que descartar otros trastornos que
ansiedad. puedan cursar con síntomas de desatención y/o hiperactividad-
impulsividad.
F90.0 5SBTUPSOPEFMBBDUJWJEBEZMBBUFODJØO: Cumple los
criterios de trastorno hipercinético pero sin trastorno disocial. La valoración médica exige por parte del pediatra o del médico
de Atención Primaria (con apoyo del neurólogo o de otros
F90.1 5SBTUPSOPIJQFSDJOÏUJDPEJTPDJBM Se añade a los especialistas) la realización de un examen físico completo que
criterios de trastorno hipercinético los de trastorno disocial. excluya: deficiencias sensoriales, anomalías cromosómicas (X
frágil), trastornos metabólicos (hipertiroidismo o hipoglucemia),
F90.8 Otros trastornos hipercinéticos. retraso mental etc. La petición de pruebas complementarias no
se considera rutinaria sino basada en la historia clínica y en la
F90.9 5SBTUPSOP IJQFSDJOÏUJDP TJO FTQFDJGJDBDJØO Se
exploración física4. La realización de un electroencefalograma o
usará cuando no sea posible diferenciar entre F90.0 y F90.1,
de pruebas de neuroimagen sólo está indicada en presencia de
pero se satisface el conjunto de pautas de F90.
signos o síntomas neurológicos o clínica sugestiva de epilepsia,
ya que no hay datos suficientes que avalen la realización de
EPIDEMIOLOGÍA dichas pruebas como herramientas diagnósticas rutinarias5, 6.
La prevalencia del TDAH oscila entre el 1,7% y el 16%. Estas En la actualidad no hay ningún test psicológico que sea diagnós-
diferencias en la prevalencia son debidas a variaciones en tico de TDAH pero las pruebas neuropsicológicas pueden tener
los métodos de valoración y en los criterios diagnósticos7. La un valor fundamental tanto para realizar un adecuado diagnós-
prevalencia estimada utilizando criterios americanos es del tico diferencial como para valorar los efectos del tratamiento6.
3-7% (DSM-IV). Sin embargo, la prevalencia del TDAH en los
países europeos se sitúa en torno al 1,5% en la educación El psiquiatra debe evaluar cuidadosamente y en profundidad el
primaria.6 nivel de desarrollo psicológico y emocional, el estado anímico,
así como el funcionamiento y la dinámica familiar, sus recursos,
En el Reino Unido la prevalencia estimada de TDHA en niños estilos educativos y la red de apoyo social6. El diagnóstico dife-
y adolescentes se sitúa entorno al 1-2 % utilizando los crite- rencial con otros trastornos psiquiátricos es imprescindible ya
rios CIE-10, mientras que usando los criterios DSM-IV sería del que la falta de atención, la hiperactividad y la impulsividad
3-9 %8. característicos del TDAH pueden encontrarse en muchas otras
patologías mentales.
El TDAH afecta más frecuentemente a niños que a niñas, con
ratios que oscilan de 3:1 a 9:19. Por otra parte parece que en Es preciso un cuidadoso diagnóstico diferencial con los
niñas es más frecuente el subtipo inatento (utilizando criterios siguientes trastornos:
DSM-IV)4.
- Trastornos de ansiedad: diferentes factores estresantes en la
vida de un niño pueden estar en la base de los síntomas de
DIAGNÓSTICO desatención e hiperactividad y ser la ansiedad directamente
la causa de dichos síntomas6.
Independientemente de la clasificación que se utilice, para diag-
nosticar un TDAH hay que tener en cuenta que los síntomas - Trastornos afectivos y trastornos adaptativos: la inatención
deben manifestarse con una intensidad desadaptativa en rela- es un síntoma habitual en la depresión infantil, e igualmente
ción con el nivel de desarrollo. Además, deben producir pruebas puede haber un aumento aparente de la actividad en forma
claras (y no sólo las opiniones de los padres o tutores) de un de inquietud o agitación. Los síntomas de hiperactividad,
deterioro clínicamente significativo para cumplir los retos del impulsividad y déficit de atención también forman parte de
desarrollo apropiados a su edad en la actividad social, personal la clínica de las fases maníacas (aunque éste es un trastorno
y escolar10. muy poco habitual en la infancia)6.

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- Trastornos del aprendizaje: no es fácil discernir si los 1. ¿La causa de los síntomas es un genuino TDAH o se explica
síntomas de TDAH son debidos a las dificultades de por otras circunstancias o trastornos para los cuales el
aprendizaje o coexisten ambos problemas. Los niños con tratamiento de este síndrome no es el apropiado?6.
trastornos específicos del aprendizaje, lenguaje y proce-
samiento viso-motor y auditivo pueden plantear muchas 2. ¿La sintomatología actual está de alguna forma alterando
dudas diagnósticas con el TDAH. El funcionamiento su funcionalidad en la vida cotidiana hasta un grado en que
académico puede verse alterado por la disminución de la esté justificado el tratamiento?
comprensión o por una excesiva frustración. Estos niños El gran desafío del TDAH es el planteamiento de la estrategia
pueden evitar realizar las tareas permaneciendo inatentos, de intervención en la que se debe incluir no sólo el tratamiento
levantándose o dando respuestas precipitadas, lo que se farmacológico, cuando esté indicado, sino a la familia y al
manifiesta como trastornos del control de la actividad y la contexto escolar. Es decir el tratamiento debe ser multimodal6
atención en el medio escolar6. En la valoración neuropsico- e individualizado.
lógica dichos niños generalmente muestran alteraciones en
el área del problema en particular, mientras que los niños t53"5".*&/50'"3."$0-»(*$0%&/*º04
con TDAH pueden mostrar alteraciones generalizadas en :"%0-&4$&/5&4$0/5%")
varias áreas de la evaluación4.
3FDPNFOEBDJPOFTCBTBEBTFOMBFWJEFODJB
Por otra parte, los niños con TDAH pueden presentar alte-
En España, metilfenidato y atomoxetina (ATX) son los dos
raciones en las tareas de lenguaje y viso-espaciales, parti-
únicos fármacos con indicación autorizada como parte de un
cularmente en aquellas que requieren un esfuerzo mental
programa completo de tratamiento del TDAH en niños a partir
sostenido o son sensibles a las respuestas impulsivas 4 .
de los 6 años y adolescentes.
También son frecuentes los trastornos de la lecto-escritura.
Otros fármacos como dexanfetamina, clonidina, bupropion,
- Trastornos de conducta: en el trastorno oposicionista desa-
modafinilo y guanfacina son menos empleados y no tienen indi-
fiante, el descontrol conductual es la norma y la aparente
cación autorizada para el TDAH en nuestro país. También hay
desatención, la impulsividad y la hiperactividad pueden
otras formas farmacéuticas de metilfenidato (transdérmico) no
deberse a la propia conducta oposicionista6.
comercializado en España.
- Trastornos del espectro autista (TEA): los niños con TEA La metodología de búsqueda bibliográfica puede consultarse
muestran con frecuencia conductas hiperactivas, inatención en la página 18 de este documento.
e importante impulsividad que pueden generar un diagnós-
tico erróneo de TDAH.
2.I. METILFENIDATO12
- Otros trastornos psiquiátricos: abuso de sustancias, tras-
tornos psicóticos etc.
MECANISMO DE ACCIÓN Y FARMACOCINÉTICA:
- También hay que plantearse el diagnóstico diferencial por
la frecuencia con la que se presentan síntomas de déficit Metilfenidato es un estimulante débil del sistema nervioso
de atención e hiperactividad con los trastornos del vínculo central (SNC) autorizado para el tratamiento del TDAH en niños
(frecuentes en niños institucionalizados o adoptados), y a partir de los 6 años y adolescentes, como parte de un trata-
niños víctimas de maltrato y abusos sexuales en los que miento completo.
pueden presentarse alteraciones en todas las áreas del Su mecanismo de acción no se conoce completamente, pero se
desarrollo cognitivo, afectivo y social. cree que bloquea la recaptación de noradrenalina y dopamina
en la neurona presináptica, e incrementa la liberación de estas
- Por último, no hay que olvidar que los niños pueden
monoaminas en el espacio extraneuronal. El metilfenidato es
presentar también conductas hiperactivas como conse-
una mezcla racémica constituida por el d-isómero y el l-isómero.
cuencia de la influencia de factores socio-familiares como
El isómero d tiene una actividad farmacológica mayor que el
son la convivencia en un medio familiar caótico y desor-
isómero l.
ganizado o los límites educativos insuficientes, o diversas
circunstancias sociales adversas (acoso escolar, margina- El clorhidrato de metilfenidato se absorbe rápida y casi comple-
ción social etc)10, 11. tamente después de su administración oral. Debido al extenso
metabolismo de primer paso, su disponibilidad sistémica es de
sólo un 30% de la dosis. La administración junto con la comida
2. TRATAMIENTO acelera su absorción, aunque no tiene influencia alguna sobre
la cantidad absorbida. La concentración plasmática máxima se
Ante un niño con síntomas claros de TDAH antes de iniciar el alcanza 1-2 horas después de la administración pero existe una
tratamiento farmacológico deberíamos preguntarnos: considerable variabilidad entre individuos.

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El metilfenidato y sus metabolitos se une poco a las proteínas SEGURIDAD


plasmáticas (10-33%). Su vida media es de unas dos horas
y la mayor parte de la dosis administrada se elimina por vía Las reacciones adversas más frecuentes del metilfenidato son:
renal12. pérdida de apetito, insomnio de conciliación (retraso en el inicio
del sueño), nerviosismo, cefalea y palpitaciones. Estos efectos
Existen tres formas farmacéuticas con diferentes sistemas de suelen ser transitorios y pueden evitarse o reducirse haciendo
liberación y propiedades farmacocinéticas: una escalada de dosis hasta llegar a la dosis definitiva, adminis-
trando el fármaco después de las comidas y evitando las dosis a
tUna de liberación inmediata (Rubifen®). última hora del día12.
tDos de liberación modificada, con las siguientes caracterís- Por su importancia, deben tenerse en cuenta los posibles efectos:
ticas:
1. Comprimidos en forma de cápsula con un sistema de libera- &GFDUPTTPCSFFMQFTPZUBMMB
ción osmótica (OROS®), diseñados para mantener el efecto
durante doce horas. El funcionamiento de este sistema Hay evidencia de una disminución en la ganancia de peso y talla
depende de la integridad del comprimido por lo que éste en el tratamiento con metilfenidato, especialmente al inicio del
no debe ser partido ni mordido. Esta presentación contiene tratamiento22,23. Mientras que la disminución en la ganancia
un 22% de metilfenidato de liberación inmediata y un 78% de peso estimada parece estabilizarse al año y después se
de liberación retardada (Concerta®). normaliza, no ocurre lo mismo con la talla, produciéndose una
discreta disminución en la ganancia de talla estimada a los tres
2. Cápsulas con un conjunto de pequeñas esferas en su interior años del tratamiento, sin evidencia de normalización23. Este
(Pellets). El 50 % de estas esferas contienen metilfenidato efecto puede ser dosis dependiente, siendo menos frecuente
de liberación rápida y el otro 50% liberan el fármaco lenta- con dosis menores de 20 mg/dia22-25. Aunque para la mayoría
mente por ser resistentes al jugo gástrico. El efecto tera- de los niños y adolescentes la atenuación del crecimiento puede
péutico se mantiene durante unas siete horas (Medikinet®). ser clínicamente irrelevante, ya que alcanzarán una talla adulta
Existe la posibilidad de abrir la cápsula y espolvorearla con satisfactoria, puede existir un subgrupo de pacientes en los que
los alimentos para su administración. el crecimiento se vea significativamente atenuado26.
En niños pequeños y preescolares es necesario hacer una vigi-
EVIDENCIA CLÍNICA lancia especial por posible afectación muy significativa de la
tMetilfenidato, tanto en su forma de liberación inmediata talla24,26. Son necesarios más estudios bien diseñados metodo-
como en las presentaciones de liberación prolongada, ha lógicamente para clarificar la influencia de la dosis, los efectos
demostrado ser más eficaz que la ausencia de tratamiento o sobre la talla adulta y los mecanismos causales.
que el tratamiento con placebo13-16.
&GFDUPTDBSEJPWBTDVMBSFT
tEl tratamiento farmacológico con metilfenidato, es superior
al tratamiento conductual y al tratamiento “habitual” (apoyo El metilfenidato incrementa levemente la frecuencia
familiar, apoyo escolar y eventualmente tratamiento farma- cardiaca (FC) y la tensión arterial (TA), sin repercusión clínica
cológico no reglado) para los síntomas principales del TDAH significativa22,27,28. Este efecto ocurre al principio del trata-
(déficit de atención, hiperactividad e impulsividad)13. miento y luego se estabiliza y se mantiene a lo largo del mismo.
Hay evidencia no concluyente de que es dosis dependiente.
tEl tratamiento combinado (farmacológico y conductual) es No produce alteración del intervalo QT28. Se desconoce si este
clínica y estadísticamente superior al tratamiento conduc- incremento leve pero sostenido de la tensión arterial sistólica y
tual así como al tratamiento “habitual” para reducir los diastólica tiene efectos duraderos a largo plazo sobre el sistema
síntomas nucleares del TDAH. El tratamiento combinado no cardiovascular27. Se han descrito arritmias en casos de sobredo-
muestra ventajas significativas sobre el farmacológico en la sificación. No existen datos concluyentes sobre un mayor riesgo
mejoría de estos síntomas, aunque en un estudio se preci- de muerte súbita en pacientes tratados con metilfenidato.
saron menos dosis de estimulantes para conseguir los mismos
efectos13. Además puede tener una ventaja moderada para Los efectos cardiovasculares pueden ser potencialmente graves
los siguientes problemas: trastorno oposicionista-desafiante, en pacientes con cardiopatías o riesgo de muerte súbita28.
ansiedad, depresión, dificultades en la relación padres-hijo,
logros escolares y habilidades sociales13. Tics
tLas presentaciones de metilfenidato de liberación modificada Según la bibliografía revisada, no se ha demostrado una rela-
no reemplazan al metilfenidato de liberación inmediata. La ción causa-efecto entre el tratamiento con metilfenidato y los
elección dependerá de las características de cada indivi- tics; sin embargo, metilfenidato, puede actuar como desenca-
duo17-21. denante en niños previamente predispuestos29,30.

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En los niños con tics previos, éstos pueden exacerbarse tras la Se absorbe rápida y casi completamente tras la administración
administración de metilfenidato29, por ello, se debe evaluar la oral, alcanzando la máxima concentración plasmática media
historia de tics previos ya que el riesgo de presentar nuevos tics (Cmax) aproximadamente 1 a 2 horas después de la adminis-
es mayor12. tración y con una biodisponibilidad variable (63% - 94%). Se
metaboliza principalmente a través del sistema enzimático cito-
&QJMFQTJB cromo P450 2D6 (CYP2D6), generando dos metabolitos activos.
Se elimina principalmente por vía renal34.
Aunque la mayoría de los trabajos sobre TDAH excluyen
pacientes con crisis epilépticas, en pequeños ensayos con metil-
fenidato no se ha encontrado un aumento de crisis en pacientes EVIDENCIA CLÍNICA
epilépticos controlados 31. Un estudio indica que no existe La eficacia de ATX frente a placebo ha sido establecida en
evidencia científica de que el tratamiento a corto o largo plazo varios ensayos clínicos con asignación aleatoria y controlados
con metilfenidato aumente las posibilidades de comenzar con
con placebo:
crisis epilépticas32.
tUn meta-análisis que incluyó nueve ensayos clínicos contro-
lados con placebo, publicados entre 1985 y 2006 indica que
ATX fue superior (p< 0.01) al placebo para disminuir los
En enero de 2009 la Agencia Española de Medicamentos y síntomas de TDAH medidos con diferentes escalas. Además
Productos Sanitarios (AEMPS) publicó una comunicación sobre los síntomas de TDAH y del trastorno oposicionista desafiante
riesgos de medicamentos actualizando las condiciones de uso (TOD) también disminuyeron en el TDAH comórbido con
del metilfenidato. En esta comunicación se indica que el Comité TOD35.
de Evaluación de Medicamentos de la Agencia Europea de
Medicamentos y el Comité de Seguridad de Medicamentos de Uso tLa administración de ATX a largo plazo en niños de 6-7 años,
Humano evaluó ciertos aspectos de seguridad del metilfenidato y en general, mejora clínicamente los síntomas principales
aunque se concluye que el balance beneficio/riesgo es positivo se del TDAH y es bien tolerada. Su efecto es más intenso los
indica que su uso debe ajustarse a las siguientes condiciones: 3 primeros meses, después se estabiliza. No se ha evaluado
la seguridad de dosis > 1,8 mg/Kg/día36. Su eficacia y perfil
tEl tratamiento con metilfenidato debe realizarse bajo la
supervisión de un especialista con experiencia en trastornos de seguridad es similar cuando se comparan niños y adoles-
del comportamiento en niños y/o adolescentes. centes con TDAH37,38.

tMetilfenidato puede presentar efectos cardiovasculares (entre SEGURIDAD


los que se encuentran incremento de la presión sanguínea y
trastornos del ritmo cardíaco) por lo que se debe realizar un Las reacciones adversas frecuentes y normalmente de carácter
examen cardiovascular cuidadoso antes del inicio del trata- transitorio incluyen: dolor abdominal, disminución del apetito
miento y un seguimiento durante el mismo. con pérdida de peso asociada, naúseas y vómitos particular-
mente el primer mes de tratamiento.
tSe debe hacer una evaluación sobre la continuidad del trata-
miento al menos una vez al año. Menos frecuentemente pueden aparecer síntomas gripales,
cambios de humor, mareos, somnolencia, midriasis, estreñi-
tSe debe realizar un examen cuidadoso antes del tratamiento y
miento, erupciones cutáneas, prurito, dismenorrea y síntomas
un seguimiento regular a lo largo del mismo de los antecedentes
de disfunción sexual. También existe un riesgo potencial de
y síntomas psiquiátricos que pudiera presentar el paciente.
aparición de convulsiones con ATX34.
tDurante el tratamiento con metilfenidato, se debe monitorizar
el peso y la altura de los pacientes33. &GFDUPTTPCSFFMQFTPZUBMMB

ATX, inicialmente, puede inducir una disminución del peso que


2.II. ATOMOXETINA después se normaliza. No se ha descrito efecto significativo
sobre la talla en estudios a largo plazo36,38,39.
MECANISMO DE ACCIÓN Y FARMACOCINÉTICA
Es un fármaco no psicoestimulante, autorizado para el trata- &GFDUPTDBSEJPWBTDVMBSFT
miento en niños a partir de 6 años y adolescentes con TDAH.
Su mecanismo preciso de acción en el TDAH no está totalmente Con respecto a los efectos cardiovasculares, ATX produce incre-
aclarado, pero se cree que su efecto terapéutico es debido a la mento leve de la TA que se mantiene a lo largo del tratamiento
inhibición selectiva del transportador presináptico de la noradre- y no es dosis dependiente. La gran mayoría de los estudios
nalina, con lo que aumentaría su concentración intrasinaptica34. constatan un incremento medio de la FC36,38,40.

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La TA y la FC disminuyen con la interrupción del tratamiento en fenidato, sin embargo, la interpretación de estos datos está
la primera semana, aunque no hemos encontrado estudios que condicionada por el diseño abierto del estudio, la corta dura-
demuestren la reversibilidad a niveles basales previos al inicio del ción del tratamiento y la relativa baja dosis de ATX51.
tratamiento. Estos efectos no son clínicamente significativos41.
Dos recientes estudios, con asignación aleatoria y de diseño
doble ciego, han comparado ambos fármacos:
Tics
1. Uno, concluyó que ATX no fué inferior en eficacia a metil-
Aunque se ha descrito algún caso de aparición de tics en niños fenidato, para mejorar los síntomas del TDAH en niños
tratados con ATX42, dos estudios comparativos, de eficacia, de y que ambos fármacos fueron bien tolerados, aunque
ATX vs placebo en niños con TDAH y síndrome de Gilles de ATX se asoció con una incidencia más alta de efectos
la Tourette o tics motores crónicos indican que hay un efecto adversos52.
medio en la reducción de los síntomas cardinales del TDAH sin
2. En el otro estudio metilfenidato administrado con el sistema
empeorar el cuadro de tics43,44. de liberación osmótica (OROS®), fue más eficaz que ATX.
Además, este estudio sugiere que 1/3 de los pacientes
&QJMFQTJB pueden tener una respuesta preferencial a uno u otro
fármaco, lo que llevaría en la práctica clínica a recomendar
La ficha técnica de ATX advierte de un riesgo potencial de el cambio de fármaco si no hay una buena respuesta tera-
aparición de convulsiones con su uso, sin embargo, una revisión péutica o hay una baja tolerancia53.
actual de datos de ensayos clínicos de ATX y de notificaciones
espontáneas de reacciones adversas post-comercialización &OSFTVNFO
sugiere que la ATX no aumenta el riesgo de crisis en niños con
tExiste una clara evidencia de que metilfenidato y ATX son
TDAH45.
fármacos eficaces para mejorar los síntomas del TDAH en
Un trabajo reciente señala que se necesitan estudios contro- niños en edad escolar y adolescentes.
lados con adecuado nivel de evidencia para detectar cualquier tLos resultados de los estudios comparativos de eficacia de
efecto de ATX sobre las crisis en pacientes epilépticos tanto a ambos fármacos en general son poco consistentes.
corto como a largo plazo46.
tEl perfil de efectos adversos es similar, para ambos fármacos,
en cuanto al peso, frecuencia cardiaca y tensión arterial, requi-
Otros riendo una monitorización similar. Se recomiendan las mismas
Se han descrito como efectos adversos más raros y potencial- precauciones en cuanto al despistaje de patología cardiovas-
mente más graves las conductas e ideación suicida47. Un cular y monitorización de frecuencia cardiaca y tensión arterial
reciente meta-análisis que incluyó 14 ensayos en pacientes para ambos fármacos.
pediátricos encontró que la frecuencia de ideación suicida fué
del 0.37% en los pacientes que tomaban ATX frente al 0% del
grupo del placebo y que ningún paciente de los ensayos se 2.IV. RECOMENDACIONES PREVIAS AL INICIO
suicidó48.
DEL TRATAMIENTO FARMACOLOGICO

Hepatotoxicidad: se manifiesta habitualmente por dolor tEl tratamiento farmacológico tiene que formar parte de un
abdominal, vómitos o ictericia49. La duración del tratamiento plan integral, (multimodal) debiendo combinarse con inter-
con ATX antes de la afectación hepática, varía desde 3 meses a WFODJPOFTQTJDPUFSBQÏVUJDBTZBQPZPQFEBHØHJDP Lo
varios meses50. La ficha técnica de ATX indica que se debe inte- iniciará un médico con experiencia en TDAH tras realizar un
rrumpir el tratamiento en pacientes con ictericia o evidencia, correcto diagnóstico.
mediante pruebas de laboratorio, de daño hepático.
tAntes de iniciar el tratamiento, se debe realizar un adecuado y
exhaustivo estudio. En la valoración se debe incluir28:
2.III. METILFENIDATO VERSUS ATOMOXETINA
- Historia clínica detallada personal y familiar, orientada
especialmente hacia posibles alteraciones cardiovasculares
La mayoría de los ensayos clínicos comparativos, de eficacia,
(palpitaciones, síncopes, mareos, soplos, antecedentes de
tienen importantes limitaciones metodológicas (diseño, corta muerte súbita o infartos en familiares jóvenes).
duración de tratamiento y criterios de inclusión inapropiados).
En uno de ellos, con una gran muestra de niños, se encuentra - Examen físico: peso, talla, auscultación cardiaca, medición
una diferencia estadísticamente significativa favorable al metil- de frecuencia cardiaca y tensión arterial.

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- ECG si existen antecedentes de historia familiar de enfer- tLas preparaciones de liberación inmediata, por su perfil farma-
medad cardiaca o de muerte súbita. Si hay anomalías en el cocinético, se deben considerar si se necesita un régimen de
ECG derivar al cardiólogo. dosificación flexible o durante la etapa de titulación hasta
alcanzar niveles adecuados. Se deben administrar dividido en
- Evaluación neurológica. 2 ó 3 dosis.
- Valoración psiquiátrica que incluye el nivel de desarrollo tLas preparaciones de liberación modificada deben conside-
psicológico y emocional, la exploración psicopatológica, rarse para mejorar la adherencia y reducir la estigmatización.
así como la valoración del ámbito sociofamiliar (dinámica, Se deben administrar en dosis única por la mañana.
estilos educativos, red de apoyo).
Tabla 2. Equivalencias de dosis (mg)8
- Identificar si existe riesgo de abuso de sustancias o de uso
recreativo del fármaco. 3VCJGFO® Concerta® Medikinet®
10 – 10

2.V. SELECCIÓN DEL FÁRMACO 15 18 –


20 – 20
Se realizará de forma individualizada teniendo en cuenta los 30 36 30
siguientes factores: historia previa de tratamientos familiares y – – 40
del paciente y la respuesta a los mismos, comorbilidad, perfil
de efectos adversos, potencial de uso recreativo, cumplimiento 45 54 –
terapéutico, preferencias del paciente y/o de sus padres y coste
Atomoxetina debe ser el fármaco de primera elección si existe
económico54.
riesgo de abuso de sustancias o uso recreativo de metilfenidato.
Debe utilizarse también cuando la eficacia/tolerabilidad de
Gráfico 1. Costes comparativos* metilfenidato no es satisfactoria o cuando hay una clara prefe-
10 – rencia por un no estimulante6, 35.
8,67
La ausencia de efecto significativo de ATX sobre el crecimiento
8– Coste (%)/día frente a metilfenidato debe ser valorada en la elección del
fármaco en pacientes con talla baja o factores personales o
6– familiares asociados que puedan interferir con el crecimiento.

4– Para niños y adolescentes hasta 70 kg de peso, se debe iniciar el


2,53 tratamiento con una dosis diaria total de aproximadamente 0,5
2,11
2– mg/kg. Mantener durante un mínimo de 7 días antes del escalado,
0,36 de acuerdo con la respuesta clínica y tolerancia. La dosis de mante-
0– nimiento recomendada es de aproximadamente 1,2 mg/kg/día. No
Rubifen® Medikinet® Concerta® Atomoxetina se ha evaluado la seguridad de dosis > de 1,8 mg/kg/día36.
(30 mg) (30 mg) (36 mg) (80 mg)
En niños y adolescentes con mas de 70 kg de peso, la dosis
*Se han comparado DDDs y dosis equivalente de ConcertaR. total diaria inicial debe ser de 40 mg. La dosis de manteni-
Fuente de datos: BOT. Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos. miento recomendada es de 80 mg/día. Se puede administrar
Disponible en:http:/portalfarma.com (acceso 02-09-2009).
como una dosis única por la mañana o en dosis divididas por
la mañana y a última hora de la tarde o primera hora de la
(FOFSBMNFOUF TFEFCFSÓBDPOTJEFSBS noche en los pacientes que no alcancen una respuesta clínica
satisfactoria (eficacia/tolerabilidad).
.FUJMGFOJEBUP como fármaco de primera elección para el
tratamiento del TDAH sin comorbilidad o con trastorno de
conducta asociado. 2.VI. MONITORIZACION DE EFECTOS ADVERSOS
tSe debe iniciar el tratamiento con dosis bajas de liberación inme-
diata o con las dosis equivalentes de liberación prolongada. Cuando se inicie el tratamiento farmacológico, debe realizarse
un seguimiento de los pacientes para controlar posibles efectos
tDurante la fase de titulación las dosis deben incrementarse adversos y de manera particular a los que se administre ATX
gradualmente hasta obtener la respuesta clínica óptima o para detectar agitación, irritabilidad, cambios de conducta,
hasta que aparezcan efectos adversos. Los síntomas y los pensamientos o conductas suicidas y la potencial afectación
efectos adversos deben registrarse en cada cambio de dosis hepática que se manifiesta habitualmente por dolor abdominal,
para ser revisados. naúseas, oscurecimiento de la orina o ictericia.

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6OBWF[FTUBCMFDJEPFMUSBUBNJFOUPGBSNBDPMØHJDPDPO Como el TDAH es un trastorno crónico, no se recomienda de


NFUJMGFOJEBUPPBUPNPYFUJOBTFSFDPNJFOEB manera rutinaria discontinuar la medicación los fines de semana
o durante las vacaciones, sin embargo, en algunos casos de
a. Controlar el peso a los 3 y 6 meses después de su inicio y TDAH en los que predomine el déficit de atención pueden nece-
posteriormente cada 6 meses. sitar medicación sólo los días lectivos.
b. Controlar la talla cada 6 meses. La conveniencia de suspender la medicación durante las vaca-
c. Tanto el peso como la talla, deben registrarse en tablas ciones debe valorarse individualmente en función de la gravedad
de percentiles y ser revisados por el responsable del trata- y tipo de síntomas, tolerancia familiar a los mismos y perfil de
miento. efectos adversos (peso y talla)22.

d. La frecuencia cardiaca y presión arterial se deben tomar y Se desconoce el efecto a largo plazo de la administración
registrar en tablas de percentiles antes y después de cada crónica de estos fármacos en el sistema cardiovascular y en la
cambio de dosis. Una vez alcanzada la dosis óptima, se neuroquímica cerebral del niño en desarrollo y su repercusión
recomienda hacer controles al mes, a los 3 meses y rutina- en la edad adulta56.
riamente cada 6-12 meses28.
e. No se recomiendan analítica sanguínea rutinaria y ECG, a 2.VIII. SITUACIONES ESPECIALES
no ser que exista una indicación clínica.
t5%")&/13&&4$0-"3&4
f. En pacientes que tomen ATX, tampoco se recomienda No hay evidencia suficiente que avale la eficacia y segu-
analítica rutinaria de la función hepática, aunque se deben ridad del metilfenidato en este grupo de edad (menores de
realizar test para determinar los niveles de enzimas hepá- 6 años) por lo que no se puede recomendar su uso. La baja
ticas si aparece algún signo o síntoma de disfunción hepá- tolerancia del fármaco (11% de abandonos por reacciones
tica (prurito, coluria, molestias abdominales o síntomas adversas) hace que el tratamiento deba ser cuidadosamente
gripales inexplicados etc.)49. monitorizado57,58.
g. En adolescentes que estén tomando ATX, se deben moni- Las intervenciones psicoterapéuticas deben ser la primera línea
torizar como posibles efectos adversos la disfunción sexual de tratamiento, el metilfenidato no se considera una opción57;
y la dismenorrea. hay que tener en cuenta que en España no tiene la indicación
h. En niños/adolescentes que tomen metilfenidato se debe aprobada en este grupo de edad12 por lo que las condiciones de
vigilar el mal uso o el uso recreativo del fármaco. prescripción se harán siguiendo la legislación vigente.

i. Controlar los posibles síntomas psicóticos y alucinaciones t5%")$0/5*$404¶/%30.&%&(*--&4


que pueden surgir, como efectos adversos, durante el %&-"5063&55&
tratamiento con los fármacos utilizados para el TDHA55. No existe contraindicación de tratamiento con metilfenidato,
los beneficios de la medicación son superiores al riesgo de que
Si no se obtiene mejoría con los fármacos empleados en el
se produzcan tics30,59. No obstante, y puesto que en niños con
paciente con TDHA el clínico debería hacer una revisión del
diagnóstico y si se confirma el mismo, se puede valorar la tics previos estos pueden exacerbarse tras la administración
utilización de otros fármacos, no autorizados para esta indi- de metilfenidato, ATX debe considerarse como primera opción
cación, pero con experiencia clínica y siguiendo los trámites terapéutica en este tipo de pacientes.
establecidos en la legislación vigente, y otras intervenciones t5%")$0/&1*-&14*"
psicoterapéuticas y educativas.
Con respecto al manejo clínico de pacientes epilépticos con
TDAH, los datos existentes sugieren considerar añadir medica-
2.VII. DURACIÓN DEL TRATAMIENTO ción específica para tratar el TDAH.
Si la epilepsia del paciente está controlada y, los síntomas del
El tratamiento farmacológico se deberá adecuar a las necesi- TDAH son moderados, se debería empezar a utilizar metilfeni-
dades del paciente y de su familia. La duración debe ser indi- dato o atomoxetina, teniendo en cuenta que el metilfenidato
vidualizada y debería continuarse mientras sea clínicamente tiene una mayor base de evidencia con respecto a la eficacia y
efectivo. seguridad en este grupo de población.
Es recomendable revisar la indicación de mantenimiento del Si la epilepsia del paciente no está controlada y los síntomas
tratamiento al menos anualmente, evaluar el balance riesgo/ del TDAH son severos, entonces se debe considerar un uso muy
beneficio, y en casos desfavorables, considerar suspender la prudente de metilfenidato, y si éste fracasa, entonces puede
medicación. considerarse el uso de ATX46.

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PUNTOS CLAVE
tLa prevalencia del TDHA oscila entre el 1,7% y el 16%; tAtomoxetina TFDPOTJEFSBBMUFSOBUJWBBMNFUJMGF-
estas diferencias se deben a las variaciones en los métodos OJEBUPDVBOEPMBFGJDBDJBEFÏTUFOPFTTBUJTGBD-
de valoración y en los criterios diagnósticos (CIE 10 ó UPSJB OPTFUPMFSBCJFOPFYJTUFSJFTHPEFBCVTP
DSM-IV). Es necesario realizar un cuidadoso diagnóstico EFTVTUBODJBTUØYJDBTPVTPSFDSFBUJWPEFMNFUJMGF-
diferencial con otros trastornos que también son frecuentes nidato. Debe realizarse un seguimiento de los pacientes
en la infancia. para controlar los posibles efectos adversos cardiovascu-
t&MUSBUBNJFOUPGBSNBDPMØHJDP UJFOFRVFGPSNBS lares, psiquiátricos y hepáticos. En niños con tics previos,
QBSUFEFVOQMBOJOUFHSBM NVMUJNPEBM
EFCJFOEP atomoxetina debe considerarse como primera opción tera-
combinarse con intervenciones psicoterapéuticas péutica.
ZBQPZPQFEBHØHJDP. tEn niños preescolares las intervenciones psicoterapéuticas
tLa selección del fármaco se realizará de forma individua- deben ser la primera línea de tratamiento.
lizada y bajo la supervisión de un médico con experiencia tLa conveniencia de suspender la medicación durante las
en TDHA. Antes de iniciar el tratamiento se realizará un vacaciones debe valorarse individualmente.
adecuado y exhaustivo estudio (historia de alteraciones
cardiovasculares, evaluación neurológica, psiquiátrica, tSe desconoce el efecto a largo plazo de la administración
examen físico..) crónica de estos fármacos en el sistema cardiovascular y
en la neuroquímica cerebral del niño en desarrollo y su
t.FUJMGFOJEBUP TFDPOTJEFSBFMGÈSNBDPEFQSJNFSB repercusión en la edad adulta.
FMFDDJØOQBSBFMUSBUBNJFOUPEFM5%)"TJODPNPS-
tEs recomendable revisar la indicación de mantenimiento
CJMJEBEPDPOUSBTUPSOPEFDPOEVDUBBTPDJBEP. Debe
de tratamiento, al menos anualmente, así como evaluar el
realizarse un seguimiento de los pacientes para controlar
balance beneficio/riesgo.
los posibles efectos adversos cardiovasculares, psiquiá-
tricos y sobre el peso y la talla.

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FICHAS DE FÁRMACOS
Fuente de datos: Adaptado de Fichas Técnicas. Disponible en:
https://sinaem4.agemed.es/consaem/fichasTecnicas.do?metodo=detalleForm&version=new

Tabla 3.
Principio activo .FUJMGFOJEBUP
Dosis, pauta .FUJMGFOJEBUPEFMJCFSBDJØOJONFEJBUB 3VCJGFO®
WÓBPSBM
y duracion de t%PTJTEFJOJDJPNHVOBPEPTWFDFTBMEÓB FOFMEFTBZVOPZBMNVFS[P
JODSFNFOUBOEPMBEPTJTZMBGSFDVFODJB
tratamiento de la administración, si se considera necesario, a razón de 5-10 mg semanalmente.
t%PTJTNÈYJNB/PTFSFDPNJFOEBOEPTJTTVQFSJPSFTBNHEÓB

.FUJMGFOJEBUPEFMJCFSBDJØONPEJGJDBEB
Medikinet®: Se administra vía oral en dosis única por la mañada o después del desayuno.
t%PTJTEFJOJDJP&TUBEPTJTTFBMDBO[BOPSNBMNFOUFVUJMJ[BOEPVOBGPSNVMBDJØOEFMJCFSBDJØOJONFEJBUBFOEPTJT
divididas. Medikinet® 10 mg una vez al día corresponde a una dosis de inicio de 5 mg dos veces al día de
metilfenidato de liberación inmediata.
t%PTJTNÈYJNBNHEÓB
Concerta®: Se administra vía oral en dosis única por la mañana. Debe tragase entero con la ayuda de líquidos y
no se debe masticar, partir o triturar.
t%PTJTEFJOJDJPNHEÓB&TUBEPTJTTFBMDBO[BOPSNBMNFOUFVUJMJ[BOEPVOBGPSNVMBDJØOEFMJCFSBDJØO
inmediata en dosis divididas. Concerta® 18 mg una vez al día corresponde a una dosis de inicio de 5 mg tres
veces al día de metilfenidato de liberación inmediata.
t%PTJTNÈYJNBNHEÓB
No debe administrarse a niños menores de 6 años. La dosis debe individualizarse según las necesidades y respuesta
del paciente, iniciando con una dosis baja e ir aumentando, a intervalos semanales, hasta alcanzar una dosis
eficaz y bien tolerada. Se debe utilizar el régimen de dosificación con el que se consiga un control satisfactorio de
los síntomas con la dosis total diaria mas baja. Si no se observa mejoría después de un ajuste de dosis apropiado
durante un periodo de un mes, se debe suspender el tratamiento. El tratamiento no debe prolongarse durante un
tiempo ilimitado. Puede ser conveniente suspender periódicamente el tratamiento para evaluar el estado del niño y
la necesidad de continuarlo.
Via de administración Oral
Indicación autorizada TDAH en niños a partir de los 6 años y adolescentes como parte de un programa completo de tratamiento.
Reacciones adversas Reacciones adversas frecuentes:
t$FGBMFBT EJTNJOVDJØOEFBQFUJUP QBMQJUBDJPOFT JOTPNOJPZEPMPSBCEPNJOBM
Efectos sobre el peso y la talla:
t&MUSBUBNJFOUPDPONFUJMGFOJEBUPQVFEFBGFDUBSBMBHBOBODJBQPOEFSBMZEFFTUBUVSB&MFGFDUPTPCSFFMQFTPFT
reversible y éste se normaliza aproximadamente al año, no ocurre así con la talla.
t&OMBNBZPSÓBEFMPTOJ×PTZBEPMFTDFOUFTUSBUBEPTDPONFUJMGFOJEBUPMBBUFOVBDJØOEFMDSFDJNJFOUPWBBTFS
clínicamente irrelevante, alcanzando una talla adulta satisfactoria. Sin embargo puede existir un subgrupo de
pacientes en los que el crecimiento se vea significativamente atenuado.
Efectos cardiovasculares:
t&MNFUJMGFOJEBUPJODSFNFOUBMFWFNFOUFMBGSFDVFODJBDBSEJBDBZMBUFOTJØOBSUFSJBM TJOSFQFSDVTJØODMÓOJDB/P
produce alteraciones en el intervalo QT ni hay evidencia de que aumente el riesgo de muerte súbita.
Tics:
t"VORVFOPFYJTUFVOBSFMBDJØODBVTBFGFDUPFOUSFFMUSBUBNJFOUPDPONFUJMGFOJEBUPZMBBQBSJDJØOEFUJDT FO
algunos pacientes predispuestos a padecer tics puede actuar como desencadenante y adelantar su aparición. En
pacientes con tics previos puede producirse un leve aumento de éstos.
Crisis epilépticas:
t/PFYJTUFFWJEFODJBDJFOUÓGJDBEFRVFFMNFUJMGFOJEBUPQSPEV[DBDSJTJT OJEFRVFBVNFOUFFMOÞNFSPEFDSJTJTFO
niños con epilepsia y TDAH. La falta de evidencia es debida a las limitaciones metodológicas de los pocos trabajos
realizados sobre este tema.

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Principio activo .FUJMGFOJEBUP DPOUJOVBDJØO

Precauciones El metilfenidato no debe ser administrado en niños menores de seis años edad, ya que no hay evidencia suficiente
especiales que avale la eficacia y seguridad del fármaco en este grupo de edad.
En los tratamientos prolongados con metilfenidato es necesario realizar controles regulares de peso y talla. Los
pacientes con velocidades de crecimiento bajas o que no ganan el peso esperado deberán interrumpir el tratamiento
de forma temporal.
Se desconocen los efectos que pueden tener en niños portadores de cardiopatías el aumento de la frecuencia
cardiaca y la tensión arterial que produce el metilfenidato.
Debido a la falta de evidencia científica sobre la posibilidad de que el metilfenidato aumente el número de crisis en
pacientes epilépticos con TDAH, es recomendable en estos casos una escalada de dosis más lenta y controles más
frecuentes. Esta afirmación es también válida en los niños con tics o síndrome de Gilles de la Tourette.
Controlar los posibles efectos psicóticos/manía que pudieran surgir durante el tratamiento.
Contraindicaciones El metilfenidato está contraindicado en general en pacientes con:
t)JQFSTFOTJCJMJEBEDPOPDJEBBFTUFGÈSNBDP
t1BUPMPHÓBDBSEJBDB DBSEJPQBUÓBTDPOHÏOJUBTHSBWFT BSSJUNJBT JTRVFNJBNJPDÈSEJDB

t)JQFSUFOTJØOBSUFSJBMHSBWF
t"OTJFEBE BHJUBDJØOPUFOTJØONBSDBEBT
t)JQFSUJSPJEJTNP
t(MBVDPNB
t4ÓOUPNBTQTJDØUJDPT FTUSVDUVSBEFMBQFSTPOBMJEBEQTJDPQBUPMØHJDB IJTUPSJBMEFBHSFTJØOPUFOEFODJBTVJDJEB
t"OUFDFEFOUFTEFESPHPEFQFOEFODJBPBMDPIPMJTNP
Para más información consultar las fichas técnicas de las tres presentaciones.
Interacciones Debido a una posible crisis hipertensiva el metilfenidato está contraindicado en pacientes que se encuentren en
tratamiento (actual o en las 2 semanas anteriores) con inhibidores no selectivos, irreversibles de la MAO.
Se desconoce la influencia del metilfenidato en las concentraciones plasmáticas de los fármacos que se administran
concomitantemente. Se recomienda precaución con la combinación de metilfenidato con otros fármacos,
especialmente aquellos con un margen terapéutico estrecho.
Alternativas Atomoxetina
farmacológicas
Observaciones

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Tabla 4.
Principio activo Atomoxetina
Dosis y pauta Se administra vía oral en una dosis única por la mañana, con o sin alimentos, o en dos dosis al día divididas por la
mañana y a última hora de la tarde o primera hora de la noche.
Niños/adolescentes hasta 70 kg de peso:
t%PTJTEFJOJDJPBQSPYJNBEBNFOUF NHLHEÓB.BOUFOFSEVSBOUFVONÓOJNPEFEÓBTBOUFTEFMFTDBMBEPEF
acuerdo con la respuesta clínica y tolerancia.
t%PTJTEFNBOUFOJNJFOUPBQSPYJNBEBNFOUF NHLHEÓB
Niños/adolescentes con más de 70 kg de peso:
t%PTJTEFJOJDJPNHEÓB
t%PTJTEFNBOUFOJNJFOUPSFDPNFOEBEBNHEÓB
Via de administración Oral.
Indicación autorizada TDAH en niños a partir de los 6 años y adolescentes como parte de un programa completo de tratamiento.
Reacciones adversas t%PMPSBCEPNJOBM EJTNJOVDJØOEFMBQFUJUP OÈVTFBTZWØNJUPTQBSUJDVMBSNFOUFEVSBOUFFMQSJNFSNFTEFUSBUBNJFOUP
t&GFDUPTDBSEJPWBTDVMBSFTDPOJODSFNFOUPNFEJPEFMBGSFDVFODJBDBSEJBDBZEFMBUFOTJØOBSUFSJBM
t*SSJUBCJMJEBE DBNCJPTEFIVNPS BHSFTJWJEBEMBCJMJEBEFNPDJPOBMZSJFTHPQPUFODJBMEFBQBSJDJØOEFDPOWVMTJPOFT
t.ÈTSBSBTZQPUFODJBMNFOUFNÈTHSBWFTJODMVZFOBDPOUFDJNJFOUPTSFMBDJPOBEPTDPOFMTVJDJEJPZIFQBUPUPYJDJEBE
Precauciones Realizar ECG si hay antecedentes de historia familiar de enfermedad cardiaca, de muerte súbita, o si el examen
especiales cardiaco es patológico.
Controlar a lo largo del tratamiento y al cambio de dosis, agitación e irritabilidad, pensamientos o conductas
suicidas, cambios de conducta y la potencial afectación hepática.
Controlar los posibles efectos psiquiátricos que pudieran surgir durante el tratamiento.
Contraindicaciones Hipersensibilidad conocida a la atomoxetina o a alguno de los excipientes. Atomoxetina no se debe utilizar en
combinación con inhibidores de la monoaminoxidasa (IMAOs).
No se debe emplear en pacientes con glaucoma de ángulo estrecho o con afectación hepática
Interacciones ATX no se debe utilizar junto con IMAOs.
Inhibidores CYP2D6 (fluoxetina, paroxetina, quinidina y terbinafina).
ATX puede potenciar la acción del salbutamol (u otros agonistas beta 2) sobre el sistema cardiovascular.
Riesgo potencial de prolongación del intervalo QT cuando se administra ATX con otros medicamentos que
prolongan el intervalo QT (neurolépticos, antiarritmicos de la clase IA y III, moxifloxacino, eritromicina, metadona,
mefloquina, antidepresivos tricíclicos, litio o cisaprida), medicamentos que provocan desequilibrio electrolítico
(como diuréticos tiazídicos) y medicamentos que inhiben el CYP2D6.
Medicamentos que inhiben el umbral de convulsiones (antidepresivos, neurolépticos, mefloquina, bupropión o
tramadol).
Precaución cuando se utilicen medicamentos que actúan sobre la tensión arterial y medicamentos que actúen sobre
la noradrenalina.
Alternativas Metilfenidato.
farmacológicas
Observaciones

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Recomendaciones Farmacoterapéuticas
en SALUD MENTAL
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17 Banaschewski T, Coghill D, Santosh P, Zuddas A, Asherson P, 29 Gadow KD, Nolan EE, Sverd J, Sprafkin J, Schwartz J. Anxiety and
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METODOLOGÍA DE LA BÚSQUEDA
BIBLIOGRÁFICA
Las fuentes de información empleadas para la recuperación de la Los registros obtenidos de las bases de datos se vuelcan en el
información siguieron el modelo de “5S” de Haynes1 de organiza- programa gestor de referencias Reference Manager® eliminán-
ción estableciendo dos grupos: documentos de síntesis, sinopsis dose las referencias duplicadas.
y sumarios de la evidencia (SSS) y estudios originales (EO).
De la primera búsqueda se obtuvieron 197 referencias biblio-
Dentro de documentos SSS se buscan Guías de Práctica Clínica, revi- gráficas (146 correspondientes a EO y 51 correspondientes al
siones sistemáticas, meta-ánalisis, revistas secundarias e Informes bloque de SSS). Tras su valoración, y siguiendo unos criterios
de Evaluación. Para su localización se utiliza TripDatabase, la de inclusión establecidos por el grupo de trabajo, se decide
Biblioteca Cochrane Plus, Clinical Evidence, UpToDate, MEDLINE la selección de 41 referencias bibliográficas para su revisión y
(OVID), EMBASE (OVID) y PsycINFO (Proquest). volcado. De estas, 35 corresponden al bloque de estudios origi-
nales (EO) y 6 al bloque de SSS. La revisión y volcado se realizó
Para la localización de los EO se busca artículos que sean en documentos normalizados. También se incluyen 12 artículos
ensayos clínicos de intervenciones terapéuticas farmacológicas para lectura.
empleando las bases de datos automatizadas MEDLINE (OVID),
EMBASE (OVID) y PsycINFO (Proquest). De la segunda búsqueda se obtienen 196 referencias, de las
que el grupo de trabajo selecciona 13 artículos para su revisión
En estas bases de datos se realizan dos búsquedas, una primera y volcado.
búsqueda en enero de 2007 (ver tabla con estrategias de
búsqueda) y una segunda en el mes de julio de 2008 sobre Como parte de la metodología general de la Guía, para los
algunos aspectos relacionados con la comorbilidad con TDHA ensayos clínicos con asignación aleatoria, se pasa la escala
asociada y los efectos adversos del tratamiento. En concreto Jadad para constatar la calidad de dichos estudios y apoyar la
la valoración del efecto del tratamiento de metilfenidato y selección de los fármacos en esta patología. El 10% obtuvo el
atomoxetina, sobre los tics, convulsiones, retraso/detención máximo de puntuación (5 puntos), el 20% 4 puntos, el 45% 3
de crecimiento/talla corporal, afectación hepática, disminución puntos y el 25% 2 puntos.
de peso, efectos cardiovasculares (tensión arterial y frecuencia
cardíaca). También sobre la ansiedad, depresión, trastorno A pesar de la extensa bibliografía publicada sobre esta pato-
negativista desafiante y trastornos de conducta en casos de logía, ha resultado llamativo el escaso número de publicaciones
comorbilidad con TDHA. que cumplen los requisitos mínimos de calidad metodológica.
Incluso, los que cumplen requisitos mínimos, muchos tienen
Para la estrategia de búsqueda en las bases de datos MEDLINE limitaciones metodológicas que hacen que las recomenda-
y EMBASE relativa a ensayos clínicos y revisiones sistemáticas ciones no reúnan suficiente nivel de evidencia tanto a nivel de
se utilizaron filtros metodológicos validados. seguridad como de manejo de estos fármacos en la práctica
clínica.
En las búsquedas en las bases de datos se emplearon diversos
límites como la población de estudio empleando como rango de
edad niños y adolescentes y límites de idiomas para excluir aque-
llos escritos en lenguas diferentes al inglés, español y francés. BIBLIOGRAFÍA
Por último, en la búsqueda de ensayos clínicos se emplea el 1. Haynes RB. Of studies, syntheses, synopses, summaries,
límite temporal de año de publicación a los últimos 2 años en and systems: the "5S" evolution of information services for
la primera búsqueda ampliándose a 10 años en la segunda evidence-based healthcare decisions. Evid Based Med. 2006
búsqueda. Para la búsqueda de otro tipo de documentos (SSS) Dec;11(6):162-4.
no hay limitación temporal.

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Tabla 5. Estrategia de búsqueda en las diferentes bases de datos.


.&%-*/& 07*%
&.#"4& 07*%
1TZD*/'0 1SPRVFTU

1. exp Attention Deficit Disorder with Hyperactivity/ exp Attention Deficit Disorder/ (DE(ATTENTION
DEFICIT DISORDER
2. adhd.mp. ADHD.mp.
WITH HYPERACTIVITY)
3. addh.mp. ADDH.mp. OR ADHD OR ADDH
OR HYPERACTIV* OR
4. (attention adj3 deficit).mp. (attention adj3 deficit).mp.
HYPERKINES*) AND
5. hyperactiv$.mp. hyperactiv$.mp. SU("DRUG THERAPY")
6. hyperkinesi$.mp. or exp HYPERKINESIS/ hyperkinesi$.mp. or exp HYPERKINESIA/
7. (minimal adj brain adj3 disorder$).mp. (minimal adj brain adj3 disorder$).mp.
8. (minimal adj brain adj3 dysfunction$).mp. (minimal adj brain adj3 dysfunction$).mp.
9. (minimal adj brain adj3 damage$).mp. (minimal adj brain adj3 damage$).mp.
10. 1 or 2 or 3 or 4 or 5 or 6 or 7 or 8 or 9 1 or 2 or 3 or 4 or 5 or 6 or 7 or 8 or 9
11. drug therapy.fs. dt.fs.
12. Methylphenidate/ Methylphenidate
13. 12 or MPH.mp. or stimulant$.mp. or mixed 12 or MPH.mp. or stimulant$.mp. or mixed
amphetamine salt$.mp. or MAS.mp. amphetamine salt$.mp. or MAS.mp.
14. ((second adj generation adj3 stimulant$) or (OROS ((second adj generation adj3 stimulant$) or (OROS
adj MPH) or (OROS adj methylphenidate)).mp. adj MPH) or (OROS adj methylphenidate)).mp.
15. 13 or 14 13 or 14
16. modafinil.mp. modafinil.mp. or MODAFINIL/
17. reboxetine.mp. reboxetine.mp. or REBOXETINE/
18. selegiline.mp. or Selegiline/ selegiline.mp. or SELEGILINE/
19. risperidone.mp. or Risperidone/ risperidone.mp. or RISPERIDONE/
20. pemoline.mp. or Pemoline/ PEMOLINE MAGNESIUM/ or PEMOLINE/ or
pemoline.mp.
21. bupropion.mp. or Bupropion/ bupropion.mp. or Amfebutamone/
22. (atomoxetine or ATMX).mp. atomoxetine.mp. or ATOMOXETINE/
23. 15 or 16 or 17 or 18 or 19 or 20 or 21 or 22 22 or ATMX.mp.
24. 11 or 23 15 or 16 or 17 or 18 or 19 or 20 or 21 or 23
25. 10 and 24 11 or 24
26. 10 and 25

$PSSFTQPOEFODJBDirección General de Gestión Económica y de Compras de Farmacia y Productos Sanitarios. Subdirección de Compras de
Farmacia y Productos Sanitarios. Plaza de Carlos Trias Bertrán nº 7 planta 5ª. Edificio Sollube. 28020. Madrid. Tf: 914269917.
&EJUBConsejería de Sanidad. Dirección General de Gestión Económica y de Compras de Productos Farmacéuticos y Sanitarios.
5JSBEB3.000 ejemplares.
ISSSN: 1697-6274 / Depósito Legal: M-13724-2004 / *NQSJNFPixel Creación y Producción Gráfica, S.L.

19
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septiembre/2010 - Nº 5

Recomendaciones
Farmacoterapéuticas en
Salud Mental
1. Introducción
 t%FTDSJQDJØO
Trastornos de ansiedad en niños


t&WBMVBDJØO
t$MBTJGJDBDJØO y adolescentes
 t5SBTUPSOPTEFBOTJFEBE
NÈTGSFDVFOUFTFOMB
JOGBODJBZBEPMFTDFODJB
 t$PNPSCJMJEBE 1. INTRODUCCIÓN
 t&QJEFNJPMPHÓB

5SBUBNJFOUP DESCRIPCIÓN
Recomendaciones La ansiedad es una emoción de inquietud, sobre- *OGBODJBUFNQSBOB
CBTBEBTFOMB
FWJEFODJB salto o malestar interior que constituye una reac-
ción adaptativa ante una situación de peligro, tAngustia del extraño: 7º-8º mes.
 *"CPSEBKF
terapéutico estrés, o amenaza. Cuando esta reacción es exce-
tAngustia de separación: 7º mes, incrementán-
siva y/o carece de eficacia adaptativa se habla de
 **5SBUBNJFOUP trastorno de ansiedad1. Incluye síntomas cogni- dose hasta los 18 meses, y reduciéndose a los
GBSNBDPMØHJDP 2-3 años.
 t*OIJCJEPSFTTFMFDUJWPT tivos (preocupación excesiva), conductuales (evitar
EFMBSFDBQUBDJØOEF personas, situaciones y objetos fóbicos) y somáticos
serotonina tMiedo a las alturas: 6º-8º mes.
(taquicardia, dolor de cabeza, síntomas gastroin-
  4FSUSBMJOB
  'MVWPYBNJOB testinales). tMiedo a la oscuridad, a los monstruos, a los
  1BSPYFUJOB animales: de los 3 a 5 años.
  'MVPYFUJOB Los trastornos de ansiedad en la infancia (TAI)
 t"OUJEFQSFTJWPTUSJDÓDMJDPT se manifiestan de forma peculiar al estar sujetos *OGBODJBNFEJB
- Imipramina a los cambios evolutivos y al concepto de norma-
 t#FO[PEJB[FQJOBT lidad dentro del mismo2. En general surgen ante tMiedo a la enfermedad física.
- "MQSB[PMBN situaciones estresantes (separaciones, cambio de
- $MPOB[FQBN tMiedo al ridículo, a situaciones sociales
colegio, cambio de ciudad, enfermedades, conflictos
- $MPSBDFQBUP
familiares) afectando al funcionamiento del niño en enojosas.
1VOUPTDMBWF la esfera familiar, interpersonal y escolar.
tMiedo a la muerte (8º- 9º año).
'JDIBTEFGÈSNBDPT Dentro de la clasificación de los TAI se incluyen
también los trastornos obsesivo compulsivos (TOC) tPesadillas y terrores nocturnos.
Autores.
y los trastornos de estrés postraumático (TEPT),
Bibliografía.
ambos trastornos serán revisados en capítulos "EPMFTDFODJB
Metodología de la búsqueda. aparte. tMiedo al fracaso.

EVALUACIÓN tMiedo al ridículo, a situaciones sociales


enojosas, a las reuniones sociales.
Para la evaluación de los TAI se considera impor-
tante: 3. Realizar el diagnóstico diferencial con enferme-
dades físicas médicas y psiquiátricas (antece-
1. Determinar el grado de ansiedad, el tiempo dentes médicos/psiquiátricos)3. Es importante
de aparición y el curso de la sintomatología considerar la existencia de tratamientos farma-
ansiosa.
cológicos previos, así como cambios recientes
2. Diferenciar el trastorno de ansiedad de los miedos en los mismos. Es necesario evaluar el posible
propios del desarrollo evolutivo que son: uso/abuso de sustancias tóxicas.
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%JBHOØTUJDPEJGFSFODJBMDPOFOGFSNFEBEFT 3FTQVFTUBFYDFTJWBBMFTUSÏT
tCardiocirculatorias: arritmias, miocardiopatía, hipertensión tTrastorno de adaptación con ánimo ansioso (TA).
arterial, anemia.
tTrastorno de estrés agudo.
tSistema Nervioso: neoplasias, epilepsia, hemorragia suba-
racnoidea, corea de Huntington, infecciones. tTrastorno de estrés postraumático (TEPT).

1FOTBNJFOUPTZDPOEVDUBTSFQFUJUJWBT
tSistema Endocrino: enfermedad de Cushing, feocromoci-
toma, síndrome carcinoide, hipoglucemia, hipo e hipertiroi- tTrastorno obsesivo compulsivo (TOC).
dismo, hipo e hiperparatirodismo.

tInflamatorias: lupus eritematoso, artritis reumatoide. TRASTORNOS DE ANSIEDAD MÁS FRECUENTES


DE LA INFANCIA Y ADOLESCENCIA
tRespiratorias: asma, fibrosis quística.

5SBTUPSOPEFBOTJFEBEEFTFQBSBDJØO 5"4

5SBUBNJFOUPTGBSNBDPMØHJDPTQSFWJPT
La ansiedad de separación es propia de la infancia temprana, sin
tAntiasmáticos, corticosteroides, inhibidores selectivos de embargo se considera trastorno cuando es excesiva, persistente
la recaptación de serotonina (ISRS), antipsicóticos, anfeta- o aparece tardíamente. Se define como un miedo inapropiado
minas, antibióticos (penicilinas, sulfonamidas) (sobre la seguridad y salud) frente a la separación de figuras de
apego (padres, abuelos, hermanos). Su duración en el tiempo
&WBMVBDJØOVTPBCVTPUØYJDPT será de más de un mes y la sintomatología (pesadillas sobre
temas de separación, síntomas somáticos y miedo a quedarse
tSustancias de abuso: cannabis, cocaína, éxtasis solo) interfiere en el funcionamiento del niño, y no es secundario
a otro trastorno médico o psiquiátrico. En algunas ocasiones el
tMetales pesados: mercurio, fósforo, benceno, plomo.
paciente reacciona con agresividad verbal o física, lo que puede
Las evaluaciones en salud mental infanto–juvenil deberían llevar a errores de diagnóstico5.
incluir, además de la exploración psicopatológica y pruebas
Las clasificaciones, DSM-IV-TR 4 (Manual Diagnóstico y
psicométricas habituales, exploraciones complementarias
básicas (hemograma, ECG y tóxicos en orina). Estadístico de los Trastornos Mentales de la Asociación
Americana de Psiquiatría) y CIE-106 (de la Organización Mundial
de la Salud), coinciden prácticamente en la descripción del tras-
CLASIFICACIÓN torno, si bien la CIE-10 exige que la edad de inicio del TAS sea
Los TAI se dividen, según la clasificación DSM-IV-TR4, en: inferior a los 6 años y se excluye el diagnóstico si los síntomas
forman parte de una alteración más amplia de las emociones,
.JFEPTFTQFDÓGJDPT del comportamiento o de la personalidad. La duración debe ser
en ambas clasificaciones de al menos 4 semanas (para excluir
tTrastorno de ansiedad de separación (TAS). estrés agudo ante acontecimientos vitales).
tFobia específica. CRITERIOS DSM IV-TR4 DEL TAS:
tFobia social (FS).
A. Ansiedad excesiva e inapropiada para el nivel de desarrollo
tMutismo selectivo. del sujeto concerniente a su separación de figuras de apego.

tTrastorno de pánico con/sin agorafobia. tMalestar excesivo ante una separación o anticipación de
ésta.
tAgorafobia sin trastorno de pánico.
tPreocupación excesiva por la posible pérdida de alguna de
tHipocondriasis. estas figuras o la aparición de un acontecimiento adverso.

1SFPDVQBDJPOFTHFOFSBMFT tResistencia a ir a la escuela por miedo a la separación o a


estar solo en casa.
tTrastorno de ansiedad generalizada (TAG).
tMiedo a dormir solo y pesadillas repetidas con temática de
tSomatización inespecífica. separación.

2
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tQuejas repetidas somáticas (cefaleas, nauseas, vómitos, Para la clasificación CIE-106, la descripción clínica y las pautas
dolor abdominal). diagnósticas coinciden prácticamente y requiere para su diag-
nóstico “síntomas de excesiva ansiedad y/o preocupación
# La duración del trastorno es de, al menos 4 semanas. la mayor parte de los días durante al menos varias semanas
seguidas y generalmente durante varios meses".
$ La alteración provoca malestar clínicamente significativo y
deterioro familiar, académico y social.
'PCJBTPDJBM '4
PUSBTUPSOPEFFWJUBDJØOTPDJBM
% La alteración no ocurre en el transcurso de un trastorno
generalizado del desarrollo (TGD), ni esquizofrenia. Se define como ansiedad persistente y excesiva ante situaciones
sociales cuando el niño o el adolescente se exponen a la crítica
ante desconocidos, provocando un retraimiento y/o miedo
5SBTUPSOPEFBOTJFEBEHFOFSBMJ[BEB 5"(

frente a esas situaciones. Síntomas tales como: rechazo escolar,


Se define como una preocupación excesiva, crónica en nume- incapacidad de hablar en clase, ansiedad ante los exámenes,
rosas áreas (familiar, social, académica). Presentan inquietud timidez, malas relaciones con los compañeros, etc., deben
sobre hechos o acciones del pasado, del presente o del futuro. alertar sobre la posibilidad de una fobia social. Deben durar
Necesitan asegurarse de que hacen todo bien y preguntan más de seis meses, no ser secundarios a otro trastorno y afectar
constantemente a familiares, profesores y amigos sobre su al funcionamiento social del niño/adolescente 8. El mutismo
funcionamiento. selectivo entraría en esta categoría (miedo a hablar en situa-
ciones sociales por ejemplo en la escuela, y no así en la casa)
Para el diagnóstico, los síntomas tienen que haber estado como un subtipo de fobia social.
presentes al menos durante 6 meses, haber provocado
problemas con el funcionamiento del niño o adolescente, no CRITERIOS DSM-IV-TR4 DE LA FS:
ser secundario a otro trastorno psiquiátrico o médico (hipertiroi-
dismo) y no ser causado por el abuso de tóxicos7. 1. Temor acusado y persistente por una o más actuaciones en
público en las que el sujeto se ve expuesto a personas que no
CRITERIOS DSM IV-TR4 DEL TAG: pertenecen al ámbito familiar o a la posible evaluación por
parte de los demás. &OMPTOJ×PTFTOFDFTBSJPIBCFS
1. Ansiedad y preocupación excesiva sobre una amplia gama EFNPTUSBEPRVFTVTDBQBDJEBEFTQBSBSFMBDJPOBSTF
de acontecimientos o actividades que se prolonga más de 6 DPOTVTGBNJMJBSFTTPOOPSNBMFTZRVFMBBOTJFEBE
meses. TPDJBMBQBSFDFFOMBTSFVOJPOFTDPOJOEJWJEVPTEF
TVNJTNBFEBEZOPTØMPFOMBJOUFSSFMBDJØODPOVO
2. Resulta difícil controlar este estado de constante preocupa- BEVMUP

ción.
2. La exposición a las situaciones sociales temidas provoca casi
3. La ansiedad se asocia a tres o más de los seis síntomas invariablemente una respuesta inmediata de ansiedad.
siguientes:
3. Las situaciones sociales temidas se evitan o se anticipan por
tInquietud una ansiedad o sufrimiento intenso.

tFatigabilidad 4. Los comportamientos de evitación interfieren en la rutina


diaria del paciente.
tDificultad para concentrarse
5. La duración debe ser al menos de seis meses.
tIrritabilidad
6. Estas alteraciones no se deben a enfermedad médica y/o uso
tTensión muscular /abuso de sustancias.
tAlteraciones del sueño En la clasificación CIE-106, para un diagnóstico correcto deben
cumplirse las siguientes condiciones:
4. El centro de la ansiedad o preocupación no se limita a los
síntomas de eje I. tLos síntomas psicológicos, comportamentales y vegetativos
deben ser manifestaciones primarias de la ansiedad.
5. La preocupación, ansiedad, síntomas físicos, provocan
malestar clínicamente significativo o deterioro social, laboral tLa ansiedad debe predominar en situaciones sociales
o de otras áreas. concretas.
6. Estas alteraciones no se deben a enfermedad médica y/o uso tLa situación fóbica debe ser evitada siempre que sea
/abuso de sustancias. posible.

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COMORBILIDAD9 La psicoterapia cognitivo-conductual, proporciona al paciente


estrategias de afrontamiento adaptativas así como oportuni-
Los trastornos ansiosos en niños y adolescentes generalmente dades prácticas para desarrollar la capacidad de sobreponerse
no se presentan aislados, 1/3 reúne los criterios para al menos a los síntomas de ansiedad y a las situaciones que los desen-
2 o más subtipos de trastornos ansiosos. cadenan. Sus cinco componentes principales para niños con
trastornos de ansiedad son: psicoeducación para niños y padres
La comorbilidad con depresión es alta, con tasas que van desde sobre la ansiedad, entrenamiento en habilidades de relajación
un 28% hasta un 69%. La asociación con el trastorno por déficit (relajación muscular, respiración diafragmática, automonitoriza-
de atención, se ha descrito hasta en un 24%. Los patrones de ción), reestructuración cognitiva (desafío de expectativas nega-
comorbilidad ayudan a seleccionar un tratamiento específico. tivas, modificación de pensamientos automáticos negativos),
métodos de exposición y modelado (imaginación y exposición
Los trastornos de ansiedad y depresión en la adolescencia
real y en vivo o desensibilización sistemática) y prevención de
aumentan de 2 a 3 veces el riesgo de padecer estos trastornos recaídas16.
en la edad adulta.
Esta estructura básica se modifica dependiendo del niño y del
trastorno que presente, así, por ejemplo, en el tratamiento de
EPIDEMIOLOGÍA
la FS se suele incluir además el entrenamiento en habilidades
Son los trastornos más comunes en la población pediátrica sociales y la exposición a distinto tipo de situaciones sociales17.
española con una prevalencia entre 5-18%10. La edad más
La efectividad de otras modalidades psicoterapéuticas dife-
frecuente de comienzo es entre los 7 y los 12 años. En la infancia rentes a la cognitivo-conductual ha sido menos investigada.
temprana el más frecuente es el TAS. En la infancia tardía y en Apenas hay estudios de intervenciones desde otras perspec-
la adolescencia el más frecuente es el TAG. tivas ni estudios comparativos entre ellas, en el tratamiento de
estos trastornos18. No obstante, se están empezando a realizar
investigaciones en esta dirección en los últimos años19.
2. TRATAMIENTO. RECOMENDACIONES
Con respecto a las intervenciones familiares, la investigación
BASADAS EN LA EVIDENCIA
sugiere que los padres y familiares pueden jugar un impor-
tante papel en el desarrollo y mantenimiento de la ansiedad
2.I. ABORDAJE TERAPÉUTICO en la infancia. Por este motivo, habitualmente se incluyen, en
el tratamiento desde cualquier perspectiva terapéutica, además
de aspectos psicoeducativos, intervenciones destinadas a
Existen numerosos tipos de intervenciones para el tratamiento
mejorar las relaciones padres-hijos, estrategias de resolución
de los trastornos de ansiedad de niños y adolescentes. Los obje-
de problemas, reducción de la ansiedad parental y mejora de
tivos del tratamiento son: mejorar el cuadro clínico, favorecer el las pautas de crianza así como refuerzo de las habilidades de
desarrollo emocional y social del niño, prevenir otros síntomas afrontamiento y autonomía en el niño20.
psiquiátricos asociados (especialmente de tipo depresivo),
mejorar el pronóstico evitando la evolución crónica del proceso La terapia de familia propiamente dicha estudia las dificultades
y aumentar la calidad de vida11. dentro de la estructura y las interacciones familiares y no se
centra exclusivamente en un miembro, en este caso, el niño o
El plan de tratamiento debe tener en cuenta la naturaleza del adolescente. En concreto, se relaciona el tipo de apego con los
trastorno de ansiedad, la gravedad, el tiempo de evolución, la procesos de aprendizaje y modelos de conducta dentro de la
edad del paciente y su desarrollo cognoscitivo, así como las familia a la hora de explicar los problemas de ansiedad en los
características del medio familiar y los estilos educativos de los niños21.
padres12.

El tratamiento de los TAI se debe realizar desde una perspec- 2.II. TRATAMIENTO FARMACOLÓGICO
tiva biopsicosocial y multimodal incluyendo: psicoterapia, inter-
vención psicoeducativa (de los padres, del niño, del personal Como ya se ha mencionado, el tratamiento de los trastornos de
escolar) y en su caso, tratamiento farmacológico13. ansiedad de severidad leve o moderada, en el periodo infanto-
juvenil debería comenzar por psicoterapia cognitivo-conductual.
La psicoterapia es el tratamiento de elección y debe estar Las razones que justificarían la combinación con fármacos son:
presente en todos los casos14. Dentro de las psicoterapias, la la necesidad de una remisión inmediata de la ansiedad en caso
psicoterapia cognitivo-conductual es la que más evidencia de que ésta sea moderada o grave, la existencia de un trastorno
empírica ha obtenido para el tratamiento de los trastornos de concurrente, la respuesta parcial a la psicoterapia o la nece-
ansiedad infanto-juvenil15. sidad de potenciar los resultados de la misma22,23.

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En cuadros graves y cuando exista comorbilidad con otros tras- CGI (Clinical Global Impressions-Improvement), que el 80,7%
tornos, se puede iniciar con tratamiento farmacológico aún de los niños mejoraban cuando se utilizaba la terapia combi-
cuando la evidencia científica de su eficacia es limitada23. La nada, es decir TCC con sertralina, (p< 0,001); un 59,7% mejo-
prescripción la debe realizar un médico con experiencia en salud raba cuando se utilizaba TCC sólo (p< 0,001); y un 54,9% lo
mental infanto-juvenil y se deberá mantener un estrecho segui- hacia cuando se utilizaba sertralina sólo (p< 0,001). Todas las
miento del niño y/o adolescente mientras esté bajo los efectos terapias fueron superiores a placebo (23,7%). La terapia combi-
del tratamiento. nada fue superior a las monoterapias (p< 0,001). La dosis de
sertalina osciló entre 25 mg/día hasta 200 mg/día29.
Ninguno de los medicamentos revisados, tiene la indicación
aprobada, en niños y/o adolescentes, para los trastornos de En este mismo estudio, cuando se empleó la escala de ansiedad
ansiedad (exceptuando en el TOC), tal y como indican las fichas pediátrica, los resultados tuvieron una magnitud y respuesta
técnicas correspondientes aprobadas por la Agencia Española similar. En cuanto a los efectos adversos, incluyendo la ideación
del Medicamento y Productos Sanitarios. Se debe, por tanto, suicida y homicida, no fueron más frecuentes en el grupo de
tener en cuenta que la forma de prescribir estos fármacos, será sertralina que en el de placebo. Los autores concluyeron que
respetando la legislación vigente en materia de disponibilidad tanto la terapia cognitivo conductual como sertralina reducen la
de medicamentos en estas situaciones especiales24,25. severidad de los trastornos de ansiedad en niños pero que con
Como en todos los casos de indicaciones no aprobadas, el la combinación de ambas se producen mejores resultados29.
riesgo-beneficio del tratamiento farmacológico deberá ser Sertralina tiene la indicación aprobada, en psiquiatría infanto-
cuidadosamente evaluado, puesto que los efectos adversos juvenil (6-17 años) para el TOC, pero no tiene indicación apro-
a largo plazo de la medicación no han sido estudiados en la
bada en el resto de los TAI. En la práctica clínica se prescribe,
población infanto-juvenil26.
sobre todo, en aquellos cuadros de ansiedad con predominio de
De los diversos fármacos disponibles para el tratamiento de la pensamientos obsesivos.
ansiedad en niños y adolescentes, los inhibidores selectivos de
La ficha técnica de sertralina indica que, si se adoptase la deci-
la recaptación de serotonina (ISRS), se consideran la primera
sión de efectuar el tratamiento en niños menores de 18 años,
opción y como alternativas disponibles los antidepresivos tricí-
“se deberá supervisar cuidadosamente la aparición de síntomas
clicos (ATC) y la administración de benzodiazepinas (BDZ) a
corto plazo, solas o combinadas con un ISRS, mientras que estos de suicidio30.
alcancen el efecto terapéutico, durante las primeras semanas27.
'MVWPYBNJOB '79

La metodología de la búsqueda bibliográfica puede consultarse


en la página 14 de este documento. En un EC (ensayo clínico), FVX se mostró eficaz en el trata-
miento de niños y adolescentes de 6 a 17 años de edad con FS,
INHIBIDORES SELECTIVOS DE LA RECAPTACIÓN DE TAS y TAG31. En este estudio participaron 128 pacientes de 6 a
SEROTONINA (ISRS) 17 años, con TAG, TAS o FS y se comparó FVX frente a placebo,
utilizando psicoterapia de apoyo, resultando que FVX fue signi-
ficativamente superior a placebo. En general fue bien tolerada,
4FSUSBMJOB y al cabo de 8 semanas los pacientes tratados mostraron una
En uno de los ensayos clínicos revisados, se comparó la eficacia reducción significativa de la ansiedad evaluada por las escalas
y seguridad de sertralina frente a placebo para el tratamiento PARS (Pediatric Anxiety Rating Scale) y CGI. Los efectos secun-
del TAG en niños y adolescentes (de 5 a 17 años). Los resultados darios mas frecuentes fueron las molestias abdominales31. Los
mostraban que sertralina a las dosis estudiadas era segura y síntomas somáticos (SS) (sobre todo el cansancio y el dolor de
eficaz desde la semana 4ª a la semana 9ª en relación a mejora estómago) son frecuentes entre niños y adolescentes con tras-
global de la ansiedad (escala de ansiedad de Hamilton) así como tornos de ansiedad. Los SS están asociados con ansiedad grave
en la sintomatología clínica psicosomática, siendo los efectos y discapacidad/limitación en la vida normal. La FVX parece ser
secundarios leves. Las dosis utilizadas en el estudio fueron de efectiva en la reducción de la severidad de los SS. Los niños
25 mg/día durante la primera semana y de 50 mg/día desde tratados con FVX manifestaron menos SS postratamiento, así
la semana 2ª a la 9ª. La metodología del estudio se calificó como menor intensidad de los síntomas en comparación con
adecuada a pesar del reducido tamaño muestral (n=22)28. placebo32,33.

Otro ensayo clínico, en el que participaron 488 niños de 7 a En otro estudio, en niños (6 a 17 años) con comorbilidad
17 años con diagnóstico de TAS, TAG y FS asignados aleato- asociada, trastorno por déficit de atención con hiperactividad
riamente para comparar el tratamiento de la terapia cognitivo (TDHA) y ansiedad, el tratamiento con estimulantes mostró
conductual (TCC), sertralina, la combinación de sertralina con una reducción en la sintomatología del TDHA de forma compa-
TCC y placebo durante 12 semanas mostró, medido en la escala rable a los niños que sólo tienen TDHA. La monoterapia con

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metilfenidato no se asoció con incrementos significativos de la zada por el Comité de Medicamentos de Uso Humano, donde
ansiedad. Los beneficios de añadir FVX a los estimulantes para se informó de la ampliación de la indicación de FLX para el
reducir la ansiedad no están probados34. tratamiento de la depresión moderada a severa en niños y
adolescentes de 8 años de edad o más que no responden a
FVX tiene la indicación aprobada, en psiquiatría infanto-juvenil
psicoterapia41.
(8-18 años) para el TOC pero no tiene indicación aprobada en
el resto de los TAI. Según la ficha técnica del medicamento El uso de antidepresivos se ha vinculado, en varios ensayos
"no debe ser utilizada en niños y adolescentes menores de 18 clínicos, con el incremento del riesgo de ideas y conductas rela-
años, salvo en pacientes con TOC". Si se adoptase la decisión cionadas con el suicidio (pero no de suicidios consumados) en
de efectuar el tratamiento en niños menores de 18 años “se niños y adolescentes con depresión42. Es por esto que en las
deberá supervisar cuidadosamente la aparición de síntomas de primeras semanas desde el inicio del tratamiento antidepresivo,
suicidio"35 . se debe intensificar el seguimiento en pacientes infanto-juve-
niles y en las personas con elevado riesgo de suicidio43.
1BSPYFUJOB 1"3

En un estudio multicéntrico, en el que participaron 322 pacientes ANTIDEPRESIVOS TRICÍCLICOS (ATC)


de 8 a 17 años, PAR resultó eficaz y generalmente bien tolerada,
en el tratamiento de estos pacientes con problemas sociales de Imipramina
ansiedad. PAR fue significativamente superior a placebo en
niños y adolescentes con ansiedad social36. La metodología del Berstein et al44, realizaron un estudio de 8 semanas de dura-
estudio se calificó adecuada y la muestra aceptable, aunque ción en el que se incluyó una muestra de 63 adolescentes que
la duración del estudio fue relativamente corta y se excluyeron rechazaban ir al colegio y presentaban trastornos comórbidos
algunas comorbilidades. de ansiedad y depresión mayor. En dicho estudio se comparó el
tratamiento con imipramina (dosis media: 182,3 mg/día) frente
De los ISRS revisados, PAR no tiene ninguna indicación apro-
a placebo, combinándolo en ambos casos con TCC; el estudio
bada para población infanto-juvenil, motivo por el cual el grupo
mostró la eficacia de la imipramina combinada con TCC en el
que ha realizado esta revisión ha decidido no incluirlo en las
fichas de fármacos. En la ficha técnica figura que "no se debe tratamiento de adolescentes ansiosos y depresivos que recha-
utilizar paroxetina en niños y adolescentes ya que en ensayos zaban ir al colegio. Los efectos secundarios más frecuentes
clínicos controlados se ha observado un aumento del riesgo fueron: vértigo, hipotensión ortostática, temblor y boca seca.
de comportamiento suicida y hostilidad con el uso de paroxe- Previo al inicio del tratamiento con ATC se recomienda realizar
tina"37. registro de constantes vitales (tensión arterial, frecuencia
cardíaca), ECG y monitorizar los niveles plasmáticos de estos
'MVPYFUJOB '-9
fármacos para evitar la posible toxicidad.

Uno de los estudios concluyó que FLX puede ser útil y bien tole- Aunque puede considerarse la administración de un ATC para
rada en niños y adolescentes a partir de 7 años para el trata- controlar los síntomas de la ansiedad en niños y adolescentes,
miento agudo de los problemas de ansiedad generalizada y FS. se recomienda como primera opción un ISRS por su bajo perfil
Los efectos adversos descritos fueron en general leves (gastro- de efectos secundarios, su seguridad en caso de sobredosis y
intestinales, dolores de cabeza los más frecuentes). Se exclu- porque ensayos controlados recientes demuestran su eficacia
yeron pacientes con depresión38. en TAI.
Otro estudio, abierto, sobre la eficacia de FLX a dosis media
de 20 mg/día en niños y 40 mg /día en adolescentes con TAS, BENZODIAZEPINAS (BZD)
TAG o FS, a largo plazo (un año) concluyó que el tratamiento
con FLX durante un año puede ser beneficioso, siendo la FLX Los datos disponibles sobre el uso de BZD en niños siguen siendo
eficaz como tratamiento de mantenimiento en los trastornos de limitados por lo que su utilización se centra en la resolución
ansiedad de niños y adolescentes39. Hay que tener en cuenta las de los síntomas agudos de la ansiedad. Por otro lado, ante los
limitaciones metodológicas del estudio por lo que se hace nece- riesgos de dependencia de las BZD sólo se recomienda usarlas
sario disponer de más estudios a largo plazo que confirmen durante un período breve, tanto si se utilizan en monoterapia
dicha conclusión. o como coadyuvante junto con un ISRS durante las primeras
semanas de tratamiento.
La indicación autorizada en la ficha técnica para FLX es depre-
sión moderada-severa que no responde a psicoterapia40. En el Los efectos adversos observados con mayor frecuencia a corto
año 2006, la Agencia Española de Medicamentos y Productos plazo son sedación, somnolencia y disminución de la agudeza
Sanitarios emitió una comunicación, en base a la revisión reali- mental.

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"MQSB[PMBN $MPOB[FQBN
La bibliografía disponible revisada en niños, fue de baja calidad A dosis de hasta 2 mg/día no ha mostrado ser eficaz en el trata-
y se concluyó que se necesitan más estudios para evaluar la miento de los TAI. Se ha observado que produce desinhibición
eficacia y seguridad en este tipo de pacientes 45. En adultos, de la conducta46. Aunque existe una presentación pediátrica,
se ha estudiado ampliamente en el tratamiento del trastorno no está autorizado en ningún trastorno de ansiedad en niños ni
de angustia con o sin agorafobia, siendo el balance beneficio/ en adultos, sólo autorizado como antiepiléptico47.
riesgo aceptable.
$MPSB[FQBUP
Existe una presentación pediátrica48. Se recomienda especial
control clínico.

PUNTOS CLAVE

tLa ansiedad es una emoción de inquietud, sobresalto o t-BQTJDPUFSBQJBFTFMUSBUBNJFOUPEFFMFDDJØOZEFCF


malestar interior que constituye una reacción adaptativa FTUBS QSFTFOUF FO UPEPT MPT DBTPT La psicoterapia
ante una situación de peligro, estrés, o amenaza. Cuando cognitivo-conductual es la que más evidencia empírica ha
esta reacción es excesiva y/o carece de eficacia adaptativa se obtenido para el tratamiento de los trastornos de ansiedad
habla de trastorno de ansiedad. infanto-juvenil.
tLos trastornos de ansiedad más frecuentes en la infancia y tNinguno de los medicamentos revisados tiene la indicación
adolescencia son: trastorno de ansiedad de separación, tras- aprobada, en niños y/o adolescentes, para los trastornos de
torno de ansiedad generalizada y fobia social. ansiedad, salvo en el TOC, por lo que la forma de prescribir
estos fármacos, para esta indicación, será siguiendo la legis-
tSon uno de los trastornos psiquiátricos más comunes en la lación vigente.
población pediátrica española con una prevalencia entre
5-18%. tDe los diversos fármacos disponibles para el tratamiento
de la ansiedad en niños y adolescentes, MPTJOIJCJEPSFT
tLa comorbilidad con depresión es alta, con tasas que van TFMFDUJWPTEFMBSFDBQUBDJØOEFTFSPUPOJOB *434
TF
desde un 28% hasta un 69%. La asociación con el trastorno DPOTJEFSBOMBQSJNFSBPQDJØO y como alternativas dispo-
por déficit de atención, se ha descrito hasta en un 24%. nibles los antidepresivos tricíclicos (ATC) y la administración
de benzodiazepinas (BDZ) a corto plazo, solas o combinadas
con un ISRS, mientras que éstos alcancen el efecto terapéu-
tico, durante las primeras semanas.

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FICHAS DE FÁRMACOS
Fuente de datos: Adaptado de Fichas Técnicas. Disponible en:
https://sinaem4.agemed.es/consaem/fichasTecnicas.do?metodo=buscar&version=new.
Para más información consultar dicha fuente.

Tabla 1.
1SJODJQJPBDUJWP 4FSUSBMJOB
Dosis, pauta t%PTJTEFJOJDJPNHEÓB OJ×PTEFBB×PT

y duracion de t%PTJTEFJOJDJPNHEÓB OJ×PTEFB×PT

tratamiento
t%PTJTNÈYJNBNHEÓB&MNFOPSQFTPDPSQPSBMEFMPTOJ×PTFODPNQBSBDJØODPOFMEFMPTBEVMUPTEFCF
tenerse en cuenta al aumentar la dosis por encima de 50 mg con el fin de evitar una dosis excesiva.
Debe administrarse una vez al día, por la mañana o por la noche. Dado que la semivida de eliminación de sertralina
es de 24 horas, los cambios de dosis no deberían hacerse en intervalos de menos de 1 semana.
El tratamiento debe ser iniciado y supervisado por un especialista.
Vía de administración Oral
Indicación autorizada Trastornos obsesivo-compulsivos en niños y adolescentes (6 -17 años).
No tiene la indicación autorizada para otros trastornos de ansiedad en niños y adolescentes.
Reacciones adversas t'SFDVFOUFNFOUF 
DFGBMFB OÈVTFBT WØNJUPT EJBSSFB EPMPSBCEPNJOBM EJTQFQTJB BOTJFEBE JOTPNOJPP
somnolencia.
t0DBTJPOBMNFOUF 
UFNCMPS NBSFPT TFRVFEBEEFCPDB BTUFOJB TFEBDJØO SFEVDDJØOEFMBMJCJEP 
sudoración, anorexia, estreñimiento, síntomas gripales, tos, disnea, sofocos, palpitaciones, trastornos de la
acomodación, congestión nasal, alteraciones del sueño, incontinencia urinaria.
t3BSBNFOUF 
DPOWVMTJPOFT BDBUJTJB BMVDJOBDJPOFT BUBYJB OFVSPQBUÓB QTJDPTJT FTUPNBUJUJT HJOHJWJUJT 
rinitis, epistaxis, alopecia, sequedad de la piel, urticaria, edema, escalofríos, hipo, hipotensión ortostática,
migraña, taquicardia, arritmia cardíaca, amenorrea, cistitis, disuria, impotencia, conjuntivitis, tinnitus, alteraciones
hepatobiliares: hepatitis, incremento de los valores de transaminasas, ictericia.
t&YDFQDJPOBMNFOUF 
QBSFTUFTJB EJTUPOÓB IFNPSSBHJBEJHFTUJWB CSBEJDBSEJB EJQMPQJB GPUPGPCJB QÞSQVSB 
prurito, dermatitis de contacto.
Precauciones Deberá realizarse un especial control clínico en pacientes con epilepsia, debiendo modificarse la dosificación en
especiales insuficiencia renal y/o hepática.
No debe utilizarse en el tratamiento de niños y adolescentes menores de 18 años, excepto en los pacientes de 6
a 17 años con trastorno obsesivo compulsivo. Los comportamientos relacionados con el suicidio (intentos e ideas
de suicidio), y la hostilidad (mayoritariamente agresión, comportamientos oposicionistas e ira) fueron observadas
con mayor frecuencia en ensayos clínicos en niños y adolescentes tratados con antidepresivos frente a los tratados
con placebo. Si se decidiese iniciar el tratamiento, por una necesidad clínica, el paciente debe ser cuidadosamente
monitorizado para detectar la aparición de síntomas de suicidio. Además se carece de datos sobre la seguridad
a largo plazo en niños y adolescentes en lo que se refiere al crecimiento, madurez y el desarrollo cognitivo y
conductual.
Precaución cuando se utilice en pacientes con antecedentes de manía/hipomanía, éstos deben ser cuidadosamente
vigilados.
Los síntomas psicóticos pueden llegar a agravarse en pacientes con esquizofrenia.
Se aconseja que al suspender el tratamiento, se reduzca gradualmente la dosis de sertralina durante un periodo
de varias semanas o incluso meses de acuerdo con las necesidades de cada paciente, para evitar los síntomas de
retirada (mareos, alteraciones sensoriales, alteraciones del sueño (incluyendo insomnio y pesadillas), agitación o
ansiedad, nauseas y/o vómitos, temblor y cefalea).
El uso de sertralina se ha asociado con el desarrollo de acatisia.
En pacientes con diabetes el tratamiento con un ISRS puede alterar el control glucémico, por lo que debe ser
monitorizado.

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1SJODJQJPBDUJWP 4FSUSBMJOB DPOUJOVBDJØO

Contraindicaciones t$POUSBJOEJDBEPFOBMFSHJBBTFSUSBMJOB JOTVGJDJFODJBSFOBMPIFQÈUJDBHSBWF FQJMFQTJBOPDPOUSPMBEB BTÓDPNP


pacientes que reciban terapia electroconvulsiva.
t$POUSBJOEJDBEPFMUSBUBNJFOUPDPODPNJUBOUFDPO*."0TJSSFWFSTJCMFTEFCJEPBMSJFTHPEFTÓOESPNF
serotoninérgico, con síntomas tales como agitación, temblor e hipertermia.
t$POUSBJOEJDBEBMBBENJOJTUSBDJØODPODPNJUBOUFDPOQJNP[JEB TFMFHJMJOB NPDMPCFNJEB MJOF[PMJE
Interacciones t$POEFQSFTPSFTEFM4/$ BMDPIPMZPUSPTNFEJDBNFOUPTTFSPUPOJOÏSHJDPT-BBENJOJTUSBDJØODPOKVOUBEFTFSUSBMJOB
con otros medicamentos que potencian los efectos de la neurotransmisión serotoninérgica, tales como triptófano,
fenfluramina, agosnistas 5-HT o el medicamento a base de plantas hierba de San Juan (hypericum perforatum),
se ha de realizar con precaución y se ha de evitar siempre que sea posible, debido a una posible interacción
farmacodinámica.
t1SFDBVDJPOFTFTQFDJBMFTFOMBBENJOJTUSBDJØODPOKVOUBDPOMJUJP GFOJUPÓOB USJQUBOPT XBSGBSJOB DJNFUJEJOB 
digoxina, atenolol, medicamentos que afectan a la función plaquetaria, medicamentos metabolizados por el
citocroma P450.
Observaciones No tiene la indicación autorizada en todos los trastornos de ansiedad en niños y adolescentes por lo que para su
prescripción en indicaciones no autorizadas se seguirá la legislación vigente.

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Tabla 2.
1SJODJQJPBDUJWP 'MVPYFUJOB
Dosis, pauta t%PTJTJOJDJPNHEÓB
y duracion de t%PTJTNÈYJNBSFDPNFOEBEBNHEÓB
tratamiento
Los ajustes de dosis deberán realizarse cuidadosamente y de forma individualizada con el fin de mantener al
paciente con la menor dosis efectiva. Después de una o dos semanas se puede incrementar la dosis hasta 20 mg/
día.
Si no se alcanza beneficio clínico en 9 semanas, reconsiderar el tratamiento. Reevaluar tratamiento después de 5-6
meses para aquellos pacientes pediátricos que respondan.
El tratamiento debe ser iniciado y supervisado por un especialista.
Vía de administración Oral
Indicación autorizada Depresión moderada a grave en niños y adolescentes a partir de 8 años de edad, que no han respondido a
psicoterapia después de 4 a 6 sesiones, junto a psicoterapia.
No tiene la indicación autorizada para trastornos de ansiedad en niños y adolescentes.
Reacciones adversas t"MJOJDJPEFMUSBUBNJFOUPNPMFTUJBTHBTUSPJOUFTUJOBMFT DFGBMFB NBSFP BMUFSBDJPOFTEFMTVF×P UFNCMPS GBUJHB 
inquietud psicomotriz.
t.FOPTGSFDVFOUFTJSSJUBCJMJEBE JODSFNFOUPEFJEFBTTVJDJEBT BVUPMFTJPOFTZDPOEVDUBTBHSFTJWBT
t0USBTBMUFSBDJØOEFMBHMVDFNJB TVEPSBDJØO BMUFSBDJØOEFQSVFCBTIFQÈUJDBTIJQFSTFOTJCJMJEBEBGMVPYFUJOB 
síndrome serotoninérgico, también puede producir disminución del apetito con pérdida de peso.
Precauciones Al inicio del tratamiento controlar especialmente reacciones de desinhibición conductual, irritabilidad, labilidad
especiales emocional, incremento de ideas suicidas, autolesiones y conductas agresivas. Debe supervisarse cuidadosamente la
aparición de síntomas de suicidio.
Debe administrarse con precaución en pacientes con historia de manía o hipomanía porque puede activar un nuevo
episodio, y en pacientes con historia previa de convulsiones. Se recomienda hacer un seguimiento del crecimiento y
desarrollo puberal.
Disminuir gradualmente la dosis durante un periodo mínimo de 1-2 semanas para evitar la aparición de síntomas de
retirada.
Contraindicaciones t)JQFSTFOTJCJMJEBEBGMVPYFUJOBPBDVBMRVJFSBEFTVTFYDJQJFOUFT
t&ODPNCJOBDJØODPO*."0
Interacciones t*OIJCJEPSFTEFNPOPBNJOPPYJEBTB *."0
-BBENJOJTUSBDJØODPOKVOUBEFVO*."0DPOGMVPYFUJOBQVFEFHFOFSBS
reacciones adversas graves y a veces fatales, tales como: hipertermia, rigidez, variaciones en los signos vitales,
delirio, coma e incluso, la muerte. El tratamiento con fluoxetina sólo debe comenzar 2 semanas después de la
interrupción de un tratamiento con un IMAO irreversible y el día después de la interrupción de un tratamiento
con un IMAO-A reversible. Se deberá esperar por lo menos cinco semanas después de suspender fluoxetina para
iniciar un tratamiento con IMAO.
t'FOJUPÓOB NFEJDBNFOUPTTFSPUPOJOÏSHJDPT MJUJP USJQUØGBOP DBSCBNB[FQJOB IJFSCBEF4BO+VBO BOUJDPBHVMBOUFT
orales, alcohol, terapia electroconvulsiva, medicamentos que se metabolizan por la vía del citocromo CYP2D6.
Observaciones No tiene la indicación autorizada en los trastornos de ansiedad en niños y adolescentes por lo que para su
prescripción en dichas indicaciones se seguirá la legislación vigente.

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Tabla 3.
1SJODJQJPBDUJWP 'MVWPYBNJOB
Dosis, pauta t%PTJTJOJDJPNHEÓB1VFEFBVNFOUBSTFDPOJODSFNFOUPTEFNHEÓBTDPOGPSNFWBZBTJFOEPUPMFSBEB 
y duracion de hasta que se alcance la dosis efectiva.
tratamiento t%PTJTNÈYJNBFOOJ×PTOPEFCFFYDFEFSEFNHEÓB
Es aconsejable que la dosis diaria total de más de 50 mg se administre en dos tomas separadas. En caso de que las
dos dosis no sean iguales, la dosis mayor deberá ser administrada por la noche antes de acostarse.
El tratamiento debe ser iniciado y supervisado por un especialista.
Vía de administración Oral
Indicación autorizada TOC en niños y adolescentes de 8-18 años.
No tiene la indicación autorizada para otros trastornos de ansiedad en niños y adolescentes.
Reacciones adversas t'SFDVFOUFT/ÈVTFBTBDPNQB×BEBTPDBTJPOBMNFOUFEFWØNJUPT BTUFOJB EPMPSEFDBCF[B NBMFTUBS EPMPS
abdominal, anorexia, estreñimiento, diarrea, sequedad de boca, dispepsia, palpitaciones, taquicardia, agitación,
ansiedad, mareos, insomnio, nerviosismo, somnolencia, temblor, sudoración.
t0USBTQPDPGSFDVFOUFTIJQPUFOTJØOBSUSBMHJB NJBMHJB BUBYJB DPOGVTJØO SFBDDJPOFTFYUSBQJSBNJEBMFT 
alucinaciones, alteraciones de la eyaculación y reacciones cutáneas de hipersensibilidad.
t3BSBTUSBTUPSOPTEFMBGVODJØOIFQÈUJDB DPOWVMTJPOFT NBOÓB HBMBDUPSSFB GPUPTFOTJCJMJEBE
t0USPTHBOBODJBPQÏSEJEBEFQFTP
t3BSBNFOUFTÓOESPNFTFSPUPOJOÏSHJDP FQJTPEJPTTJNJMBSFTBMTÓOESPNFOFVSPMÏQUJDPNBMJHOP IJQPOBUSFNJB
t.VZSBSBNFOUFQBSFTUFTJB BOPSHBTNJBZBMUFSBDJPOFTEFMHVTUP&OFMUSBUBNJFOUPEFOJ×PTZBEPMFTDFOUFTGVFSB
de ensayos clínicos, se han observado convulsiones.
t4ÓOUPNBTEFSFUJSBEB NBSFPT USBTUPSOPTTFOTPSJBMFT USBTUPSOPTEFMTVF×P BHJUBDJØOZBOTJFEBE JSSJUBCJMJEBE 
confusión, inestabilidad emocional, nauseas y/o vómitos y diarrea, sudoración, palpitaciones, temblores y cefalea).
Precauciones Supervisar, especialmente, el riesgo de comportamiento e ideación suicida. Sopesar el riesgo/beneficio de la
especiales instauración de este tratamiento.
Precaución con la retirada del fármaco. Se recomienda retirada gradual durante un periodo de varias semanas o
meses.
Precaución en pacientes con insuficiencia renal y hepática, iniciar con dosis más bajas, deben estar cuidadosamente
monitorizados. Puede producir una elevación de los enzimas hepáticos, alteración del control de la glicemia.
Puede aumentar el riesgo de hemorragias en pacientes tratados con anticoagulantes orales.
Contraindicaciones t)JQFSTFOTJCJMJEBEDPOPDJEBBGMVWPYBNJOB
t&ODPNCJOBDJØODPO*."0
Interacciones t$PO*."0T DPOPUSPTBHFOUFTTFSPUPOJOÏSHJDPTZPOFVSPMÏQUJDPT IJFSCBEF4BO+VBO MJUJP BMDPIPM 
medicamentos que se metabolizan a través del citocromo P450, CPYA2 (tacrina, teofilina, metadona, mexiletina..)
y CYP3A4 (carbamacepina, ciclosporina..)
t/PBENJOJTUSBSKVOUPBUFSGFOBEJOB BTUFNJ[PMPDJTBQSJEBQPSSJFTHPEFQSPMPOHBDJØOEFMJOUFSWBMP255PSTBEFEF
Pointes.
Observaciones No tiene la indicación autorizada en todos los trastornos de ansiedad en niños y adolescentes por lo que si se
prescribe en indicaciones no autorizadas se seguirá la legislación vigente.

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METODOLOGÍA DE LA BÚSQUEDA
BIBLIOGRÁFICA
Para la recuperación de la información de evidencia científica Se obtuvieron 192 referencias bibliográficas (104 correspon-
respecto a la eficacia del uso de fármacos en el trastorno de dientes a EO y 88 correspondientes al bloque de SSS). Tras su
ansiedad por separación y el de ansiedad generalizada en valoración, y siguiendo unos criterios de inclusión establecidos
niños y adolescentes se emplearon las fuentes de información por el grupo de trabajo, se decidió la selección de 10 referen-
siguiendo el modelo de “5S” de Haynes1 de organización esta- cias bibliográficas para su revisión y volcado. De estas, 7 corres-
bleciendo dos grupos: documentos de síntesis, sinopsis y suma- ponden al bloque de estudios originales (EO) al que adicional-
rios de la evidencia (SSS) y estudios originales (EO). mente se incluyeron otros 4 EO y 3 al bloque de SSS. Se localizó
y se incluyó también un estudio adicional (EO) publicado recien-
Dentro de documentos SSS se buscan Guías de Práctica temente sobre sertralina que cumplía los criterios de inclusión.
Clínica, revisiones sistemáticas, meta-análisis, revistas secun-
darias e Informes de Evaluación. Para su localización se utiliza Ante la escasez de revisiones sistemáticas y ensayos clínicos con
TripDatabase, la Biblioteca Cochrane Plus, Clinical Evidence, asignación aleatoria sobre tratamiento farmacológico de tras-
UpToDate, MEDLINE (OVID), EMBASE (OVID) y PsycINFO tornos de ansiedad (excluyendo TOC y trastorno de estrés post-
(Proquest). traumático) en población infanto-juvenil se decidió la inclusión
de algunos estudios de menor calidad metodológica.
Para la localización de los EO se buscan artículos que sean
ensayos clínicos de intervenciones terapéuticas farmacológicas La revisión y volcado se realizó en documentos normalizados.
empleando las bases de datos automatizadas MEDLINE (OVID),
EMBASE (OVID) y PsycINFO (Proquest). Como parte de la metodología general de la Guía, para los
ocho ensayos clínicos con asignación aleatoria (ECA), se pasa
Las búsquedas en las bases de datos se realizan en marzo de la escala Jadad2 para constatar la calidad de dichos estudios
2007 (ver tabla con estrategias de búsqueda). Para la estrategia y apoyar la selección de los fármacos en esta patología. Se
de búsqueda en las bases de datos MEDLINE y EMBASE relativa descartan las fases de extensión y los estudios piloto. Dos
a ensayos clínicos y revisiones sistemáticas se utilizaron filtros ensayos clínicos con asignación aleatoria (ECA) obtuvieron el
metodológicos validados. máximo de puntuación 5 puntos, tres ECA 4 puntos, un ECA 3
puntos y dos obtuvieron 2 puntos.
En las búsquedas en las bases de datos se emplearon diversos
límites como la población de estudio empleando como rango
de edad niños y adolescentes y límites de idiomas para excluir
aquellos escritos en lenguas diferentes al inglés, español BIBLIOGRAFÍA
y francés. Por último, en la búsqueda de ensayos clínicos se 1. Haynes RB. Of studies, syntheses, synopses, summaries, and
emplea el límite temporal de año de publicación a los últimos systems: the "5S" evolution of information services for evidence-
5 años. Para la búsqueda de otro tipo de documentos (SSS) no based healthcare decisions. Evid Based Med. 2006 Dec;11(6):162-
hay limitación temporal. 4.

Los registros obtenidos de las bases de datos se vuelcan en el 2. Jadad AR, Moore RA, Carroll D, Jenkinson C, Reynolds DJ,
programa gestor de referencias Referente Manager® eliminán- Gavaghan DJ, McQuay HJ. Assessing the quality of reports of
dose las referencias duplicadas. randomized clinical trials: is blinding necessary? Control Clin Trials.
1996 Feb;17(1):1-12.

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Tabla 4. Estrategia de búsqueda en las diferentes bases de datos.


.&%-*/& 07*%
&.#"4& 07*%
1TZD*/'0 1SPRVFTU

1. exp Anxiety Disorders/ exp Anxiety Disorder/ (DE("ANXIETY


DISORDERS") OR
2. Phobic Disorders/ Phobia/
DE("PHOBIAS") OR
3. Agoraphobia/ Agoraphobia/ DE("SOCIAL PHOBIA")
OR DE("AGORAPHOBIA")
4. Anxiety, Separation/ Separation Anxiety/
OR DE("SEPARATION
5. Panic Disorder/ Panic/ ANXIETY") OR
6. Generalized anxiety.ti. Social Phobia/ DE("PANIC") OR
DE("SOMATOFORM
7. Social anxiety.ti. exp Somatoform Disorder/ DISORDERS") OR
8. Separation anxiety.ti. Generalized Anxiety Disorder/ DE("GENERALIZED
ANXIETY DISORDER") AND
9. GAD.ti. Generalized anxiety.ti. DE(DRUG THERAPY)
10. SAD.ti. Social anxiety.ti.
11. Panic disorder$.ti. Separation anxiety.ti.
12. Anxiety disorder$.ti. GAD.ti.
13. Overanxious disorder$.ti. SAD.ti.

14. Social phobia$.ti. Panic disorder$.ti.


15. agoraphobi$.ti. Anxiety disorder$.ti.
16. Simple phobi$.ti. Overanxious disorder$.ti.
17. exp Somatoform Disorders/ Social phobia$.ti.
18. 1 or 2 or 3 or 4 or 5 or 6 or 7 or 8 or 9 or 10 or 11 agoraphobi$.ti.
or 12 or 13 or 14 or 15 or 16 or 17
19. drug therapy.fs. Simple phobi$.ti.
20. exp Central Nervous System Agents/ 1 or 2 or 3 or 4 or 5 or 6 or 7 or 8 or 9 or 10 or 11
or 12 or 13 or 14 or 15 or 16 or 17 or 18 or 19
21. 19 and 20 exp central nervous system agents/
22. 18 and 21 dt.fs.
23. 21 and 22
24. 20 and 23

$PSSFTQPOEFODJBDirección General de Gestión Económica y de Compras de Productos Sanitarios y Farmacéuticos. Subdirección de


Compras de Farmacia y Productos Sanitarios. Plaza de Carlos Trías Bertrán nº 7 planta 5ª. Edificio Sollube. 28020. Madrid. Tf: 914269917.
&EJUBConsejería de Sanidad. Dirección General de Gestión Económica y de Compras de Productos Sanitarios y Farmacéuticos.
%PDVNFOUPEJHJUBMPixel Creación y Producción Gráfica, S.L.
ISSSN: 1697-6274 / Depósito Legal: M-13724-2004

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septiembre/2010 - Nº 6

Recomendaciones
Farmacoterapéuticas en
Salud Mental
1. Introducción
 t%FTDSJQDJØO
Trastornos generalizados del desarrollo
 t&QJEFNJPMPHÓB
 t$SJUFSJPTEJBHOØTUJDPTZ en niños y adolescentes
TVCDBUFHPSÓBT
 t1SFTFOUBDJØODMÓOJDBZ
curso
1. INTRODUCCIÓN
2. Tratamiento.
Recomendaciones
CBTBEBTFOMB DESCRIPCIÓN
evidencia Los TGD son trastornos de herencia compleja ya
Los Trastornos Generalizados del Desarrollo (TGD)
2.I. Abordaje se caracterizan por una perturbación grave y gene- que afectan a múltiples genes y demuestran una
terapéutico
ralizada de varias áreas del desarrollo: habilidades gran variación fenotípica2.
2.II. Tratamiento para la interacción social y la comunicación y la
GBSNBDPMØHJDP La mayoría de los TGD son idiopáticos. Menos del
 t"OUJQTJDØUJDPT
presencia de comportamientos, intereses y activi-
dades restringidos, repetitivos y estereotipados. 10% presenta un síndrome o trastorno médico
- Risperidona
  0MBO[BQJOB Constituyen uno de los trastornos mentales más identificable asociado (alteraciones cromosómicas,
 t.FUJMGFOJEBUP graves que podemos encontrar en la niñez. La trastornos metabólicos, enfermedades neurocutá-
 t"UPNPYFUJOB nomenclatura utilizada de forma más generalizada neas…)3.
 t.FMBUPOJOB
en la actualidad es la de Trastornos del Espectro
 t4FDSFUJOB
Autista (TEA). CRITERIOS DIAGNÓSTICOS Y SUBCATEGORÍAS
 t*OIJCJEPSFTTFMFDUJWPT
EFMBSFDBQUBDJØOEF
TFSPUPOJOB *434
Es un trastorno psiquiátrico de diagnóstico en Existen ciertas diferencias en las subcategorías
 t7FOMBGBYJOB la infancia. En contraste con otros trastornos, y de las Clasificaciones de la American Psychiatric
 t%JWBMQSPFY aunque se mantiene toda la vida, es más esperable Association (DSM IV-TR) 4 y de la Organización
 t7BMQSPJDP un progreso de la conducta y el aprendizaje que Mundial de la Salud (CIE-10)5 pero podemos consi-
 t-FWFUJSBDFUBN una evolución hacia el deterioro progresivo.
 t$JQSPIFQUBEJOBZ derar que la propuesta de criterios diagnósticos es
IBMPQFSJEPM prácticamente idéntica.
 t5FSBQJBDPNQMFNFOUBSJB EPIDEMIOLOGÍA
ZBMUFSOBUJWB Dado que la mayoría de los estudios revisados
La prevalencia actual del TGD en Europa y Estados en relación a los tratamientos farmacológicos
1VOUPTDMBWF
Unidos es del 6 por 1000. Estas cifras implican un utilizan como marco de referencia la Clasificación
'JDIBTEFGÈSNBDPT aumento de 10 veces sobre los estudios de hace Americana de Trastornos mentales, reflejaremos
50 años, los cuales reflejaban principalmente sólo sus criterios diagnósticos.
Autores.
el trastorno autista, mientras que los nuevos estu-
Bibliografía. dios incluyen Síndrome de Asperger y Trastorno La DSM IV-TR diferencia 5 subtipos:
Metodología de la búsqueda. Generalizado del Desarrollo no especificado (TGD-
NOS). La prevalencia del TGD está muy unida a la tTrastorno Autista.
historia de los cambios en los criterios y categorías
tTrastorno Desintegrativo Infantil.
diagnósticas1.
tTrastorno de Asperger.
En la distribución por sexos, y a pesar de los
cambios de las prevalencias del trastorno en las tTrastorno Generalizado del Desarrollo No
últimas décadas, se mantiene una frecuencia 3 a 5 Especificado (TGD-NOS).
veces mayor en niños que niñas, siendo el cuadro
más grave en éstas1. tTrastorno de Rett.
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5BCMB*$SJUFSJPT%4.*753QBSBFMEJBHOØTUJDPEF $&MUSBTUPSOPOPTFFYQMJDBNFKPSQPSMBQSFTFODJBEF
5SBTUPSOP"VUJTUB VOUSBTUPSOPEF3FUUPEFVOUSBTUPSOPEFTJOUFHSB-
UJWPJOGBOUJM
"6OUPUBMEFTFJTPNÈTÓUFNTEFMPTBQBSUBEPT Z
DPO QPSMPNFOPT EPTEFMBQBSUBEPZVOPEFMPT
BQBSUBEPTZ 5BCMB**$SJUFSJPT%4.*753QBSBFMEJBHOØTUJDPEF
5SBTUPSOP%FTJOUFHSBUJWP*OGBOUJM
1. Alteración cualitativa de la interacción social manifestada, al
menos, por dos de las siguientes características: A. Desarrollo aparentemente normal durante por lo menos los
dos primeros años, con presencia de comunicación verbal
tImportante alteración del uso de múltiples comporta- y no verbal, relaciones sociales, juego y comportamiento
mientos no verbales, como el contacto ocular, la expresión adaptativo apropiados a la edad del sujeto.
facial, las posturas corporales y los gestos reguladores de
la interacción social. B. Pérdida clínicamente significativa de habilidades previas
(antes de los 10 años) en por lo menos dos:
tIncapacidad para desarrollar relaciones con compañeros
adecuada al nivel de desarrollo. tLenguaje receptivo o expresivo.

tAusencia de la tendencia espontánea a compartir con otras tHabilidades sociales o comportamiento adaptativo.
personas disfrutes, intereses y objetivos.
tControl intestinal y vesical.
tFalta de reciprocidad social o emocional.
tJuego.
2. Alteración cualitativa de la comunicación manifestada al
menos por una de las siguientes características: tHabilidades motoras.

tRetraso o ausencia total del desarrollo del lenguaje oral $ Anormalidades en al menos dos de las siguientes áreas:
(no acompañado por intentos para compensarlo mediante tAlteración cualitativa de la interacción social.
modos alternativos de comunicación, tales como gestos o
mímica). tAlteraciones cualitativas de la comunicación.
tEn sujetos con un habla adecuada, alteración importante tPatrones de comportamiento, intereses y actividades
de la capacidad de iniciar o mantener una conversación restrictivos, repetitivos y estereotipados, en los que se
con otros. incluyen estereotipias motoras.
tUtilización estereotipada o repetitiva del lenguaje o lenguaje %El trastorno no se explica mejor por la presencia de otro TGD
idiosincrásico. o de esquizofrenia.
tAusencia de juego realista espontáneo, variado o de juego
imitativo social propio del nivel de desarrollo. 5BCMB***$SJUFSJPT%4.*753QBSBFMEJBHOØTUJDP
EF5SBTUPSOPEF"TQFSHFS
3. Patrones de comportamientos, intereses y actividades restrin-
gido, repetitivo y estereotipados manifestados por lo menos A. Alteración cualitativa de la interacción social, manifestada al
mediante una de las siguientes características: menos por dos de las siguientes características:
tPreocupación absorbente por uno o más patrones estereo- tImportante alteración del uso de múltiples comporta-
tipados o restrictivos de interés que resulta anormal, sea mientos no verbales como contacto ocular, expresión facial,
en su intensidad, sea en su objetivo. posturas corporales y gestos reguladores de la interacción
social.
tAdhesión aparentemente inflexible a rutinas o rituales
específicos no funcionales. tIncapacidad para desarrollar relaciones con compañeros
apropiadas al nivel de desarrollo del sujeto.
tManierismos motores estereotipados y repetitivos.
tAusencia de la tendencia espontánea a compartir disfrutes,
tPreocupación persistente por partes de objetos. intereses y objetivos con otras personas.
#3FUSBTPPGVODJPOBNJFOUPBOPSNBMFO QPSMPNFOPT  tAusencia de reciprocidad social o emocional.
VOBEFMBTTJHVJFOUFTÈSFBT RVFBQBSFDFBOUFTEF
MPTB×PTEFFEBE 1) interacción social, 2) lenguaje utili- B. Patrones de comportamiento, intereses y actividades restric-
zado en la comunicación social o 3) juego simbólico o imagi- tivos, repetitivos y estereotipados, manifestados al menos
nativo. por una de las siguientes características:

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tPreocupación absorbente por uno o más patrones de El TGD es un trastorno crónico. Las características comporta-
interés estereotipados y restrictivos que son anormales, mentales cambian a lo largo de la vida. La mayoría de los niños
sea por su intensidad, sea por su objetivo. permanecen dentro del espectro en la vida adulta e, indepen-
dientemente de su funcionamiento intelectual, siguen teniendo
tAdhesión aparentemente inflexible a rutinas o rituales dificultades para una vida autónoma, un empleo, y las rela-
específicos, no funcionales. ciones sociales así como un mayor riesgo de padecer enferme-
tManierismos motores estereotipados y repetitivos. dades psiquiátricas8.

tPreocupación persistente por parte de objetos.


$ El trastorno causa un deterioro clínicamente significativo de
2. TRATAMIENTO. RECOMENDACIONES
la actividad social, laboral y otras áreas importantes de la
BASADAS EN LA EVIDENCIA
actividad del individuo.
% No hay retraso general del lenguaje clínicamente significa- 2.I. ABORDAJE TERAPÉUTICO
tivo.
La valoración de estos pacientes debe tomar en consideración
& No hay retraso del desarrollo cognoscitivo ni del desarrollo múltiples áreas de funcionamiento (capacidad cognitiva, adap-
de habilidades de autoayuda propias de la edad, comporta- tativa y académica; habilidad social y comunicativa; interacción
miento adaptativo (distinto de interacción social) y curiosidad social con familiares e iguales y adecuación comportamental)9.
acerca del ambiente durante la infancia.
El tratamiento debe planificarse de forma individualizada inclu-
F. No criterios de otro TGD o esquizofrenia. yendo a padres y familiares, profesores y otros profesionales. Se
considerarán tanto los recursos disponibles como las caracterís-
ticas del paciente que pueden determinar (positiva o negativa-
5BCMB*7$SJUFSJPT%4.*753QBSBFMEJBHOØTUJDP mente) el impacto de la intervención10.
EF5(%OPFTQFDJGJDBEP
Los objetivos primarios del tratamiento son minimizar los rasgos
Esta categoría debe utilizarse cuando existe una alteración nucleares (problemas de interacción social, deficits de comu-
grave y generalizada del desarrollo de la interacción social recí- nicación, conductas o intereses restringidos y repetitivos) y los
proca o de las habilidades de comunicación no verbal, o cuando déficits asociados, maximizar la independencia funcional y la
hay comportamientos, intereses y actividades estereotipadas, calidad de vida y aliviar el distress familiar.
pero no se cumplen los criterios de un TGD específico, esquizo-
frenia, trastorno esquizotípico de la personalidad o trastorno de Las intervenciones educativas, incluyendo las estrategias
la personalidad por evitación. comportamentales y las terapias sobre habilidades, son las
claves del manejo de los TGD. Los tratamientos farmacológicos
PRESENTACIÓN CLÍNICA Y CURSO no constituyen el tratamiento primario. /PFYJTUFJOUFSWFO-
DJØOGBSNBDPMØHJDBCBTBEBFOMBFUJPMPHÓBOJFOTV
Los TGD remiten a un conjunto enormemente heterogéneo de curación. El control de los comportamientos maladaptativos
pacientes cuyos niveles evolutivos, necesidades terapéuticas y y de las comorbilidades psiquiatricas asociadas constituyen el
perspectivas vitales son enormemente diferentes. objetivo principal del manejo farmacológico7.

Uno de los hechos a considerar en la comprensión del TGD,


es que dado que se trata de un trastorno que aparece desde 2.II. TRATAMIENTO FARMACOLÓGICO
las primeras etapas de la vida, y afecta a todo el desarrollo
mental y con frecuencia repercute en el desarrollo cognitivo, El tratamiento debe ser planificado y realizado por profesionales
se suele asociaciar con el Retraso Mental (RM). Los estudios de especializados en el manejo de estos pacientes y, siempre, tras
prevalencia actuales para TGD y RM conjunta son menores del un diagnóstico completo y correcto.
50%6.
Tras la revisión de la bibliografía seleccionada se ha constatado
Los comportamientos maladaptativos asociados (hiperactividad, que en niños con TGD, los ensayos clínicos presentan ciertas
impulsividad, irritabilidad, oposicionismo, agresividad, autole- limitaciones (muestras pequeñas, tiempo limitado de exposi-
siones) y las comorbilidades psiquiátricas (ansiedad, trastornos ción, la mayoría con diagnóstico del subtipo de autismo, niños
del ánimo, trastornos del sueño, trastornos del pensamiento) en edad escolar y con alteración moderada-grave del compor-
deben ser evaluadas y abordadas pues interfieren frecuente- tamiento) por lo que su aplicabilidad está limitada y debemos
mente en la respuesta a los tratamientos educativos y psicoló- ser prudentes a la hora de establecer recomendaciones en niños
gicos realizados7. con esta patología.

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La metodología de la búsqueda bibliográfica puede consultarse Risperidona es el primer medicamento que obtuvo la aproba-
en la página 15 de este documento. ción por la FDA para el tratamiento sintomático de la irritabi-
lidad (incluyendo comportamiento agresivo, auto-lesiones deli-
beradas, y rabietas) en niños y adolescentes con TGD7. En el
ANTIPSICÓTICOS:
año 2006 la Agencia Española de Medicamentos y Productos
En pacientes con TGD que no responden a terapia de conducta Sanitarios (AEMPS), aprobó la indicación de risperidona para
o tratamientos de primera línea, los antipsicóticos atípicos los trastornos del comportamiento asociados al autismo30.
pueden mejorar los síntomas discapacitantes11-13. Posteriormente (octubre de 2008), el Comité de Medicamentos
de Uso Humano (CHMP) realizó una revisión de los productos
autorizados en la UE que contienen risperidona, y como conse-
Risperidona cuencia propuso armonizar las características del mismo. Se
actualizaron las fichas técnicas, eliminando los síntomas de
Es el fármaco con el que se han realizado más revisiones siste- autismo dentro de las indicaciones aprobadas. Pero la indica-
máticas y ensayos clínicos y con muestras más amplias. ción de autismo no fue eliminada por motivos de seguridad31.
Risperidona a dosis (de hasta 2 mg al día en niños con un peso
máximo de 45 kg y hasta 3,5 mg/día en los que pesan más 0MBO[BQJOB
de 45 kg) puede ser útil en la reducción de la irritabilidad y la
agresión, rabietas o autolesiones graves en los niños o jóvenes La poca evidencia disponible junto con sus limitaciones (muestra
con trastorno autista14. pequeña, corta duración) no permite establecer recomenda-
ciones para este fármaco32.
Risperidona mejora los patrones de comportamiento e intereses
y actividades, restrictivos, repetitivos y estereotipados, pero no En una revisión, cuyo objetivo era valorar el riesgo de discinesia
la interacción social ni la comunicación en niños y adolescentes tardía en niños y adolescentes tratados durante un año con
antipsicóticos atípicos para diferentes patologías psiquiátricas,
autistas.
indican que los niños con Cociente Intelectual (CI) bajo y TGD
Los efectos secundarios más frecuentemente asociados con el (88% de los pacientes) pueden ser más sensibles a los posi-
fármaco fueron la sedación, inicialmente, y el aumento de peso. bles efectos extrapiramidales y discinesias de retirada que los
La mayoría de los efectos son leves y limitados en el tiempo15-27. adultos33.

Un estudio multicéntrico en el que se incluyeron varias fases


METILFENIDATO
doble ciego y un seguimiento final de 22 meses, realizado en
niños con diagnóstico de autismo, mostraba una FMFWBDJØO Los estudios revisados muestran que metilfenidato se puede
EFQSPMBDUJOB 13-
EFWFDFTTPCSFFMOJWFMCBTBM considerar como tratamiento de las dificultades de atención/
EVSBOUF FM USBUBNJFOUP con risperidona, si bien este hiperactividad en niños y/o adolescentes con TGD14. Tal y como
incremento iba disminuyendo con el tiempo. Los pacientes no indica su ficha técnica metilfenidato está indicado como parte
presentaban ninguna alteración clínica relacionada con esta de un programa de tratamiento integral del trastorno por déficit
alteración analítica. No se pueden precisar las consecuencias de atención con hiperactividad (TDAH) en niños mayores de 6
potenciales de hipogonadismo crónico secundario a niveles años y adolescentes cuando otras medidas por si mismas, son
altos de PRL durante tiempo prolongado. insuficientes34.

Se deben vigilar signos clínicos como galactorrea y amenorrea. La dosis utilizada en niños con TGD y significativa hiperactividad
Si aparecen estos signos, valorar disminuir la dosis de risperi- y déficit de atención fue de 0.125 a 0.5 mg/Kg /día; El efecto
dona28. secundario más frecuentemente detectado fue la irritabilidad;
otros con incidencia significativa fueron dificultad para conciliar
El tratamiento crónico con risperidona en niños con autismo el sueño y disminución del apetito. El análisis de la dosis óptima
QVFEFQSPEVDJSVOBVNFOUPEFQFTPFYDFTJWP TFHÞO sugiere que hay diferencias interindividuales en la respuesta a
MPFTQFSBEP FOFMEFTBSSPMMPEFMOJ×P, siguiendo una las dosis35.
trayectoria curvilínea que decrece a lo largo del tiempo. Se debe
En niños y adolescentes con TGD y comorbilidad de síntomas
monitorizar el peso y tener en cuenta el aumento de peso, en el
de hiperactividad y déficit de atención, la respuesta es menos
primer mes, para valorar un cambio de la medicación o instaurar
favorable y se presentan más efectos secundarios que en niños
medidas de corrección (dieta y ejercicio). Se debe vigilar el
con TDAH36.
Indice de Masa Corporal (IMC) y descartar morbilidad asociada
(glucosa y triglicéridos). 4FQSFDJTBOFTUVEJPTBNÈTMBSHP Metilfenidato reduce la hiperactividad en pacientes con TGD.
QMB[PQBSBWBMPSBSMBTDPOTFDVFODJBTEFMFYDFTPEF No mejora la irritabilidad, letargia, esterotipias o lenguaje
HBOBODJBQPOEFSBMEFQFTPFOFTUPTOJ×PT29. inapropiado35.

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Los estudios sugieren el mantenimiento de la respuesta del y la tolerabilidad. La dosis máxima utilizada fue de 1,4 mg/kg/
metilfenidato a lo largo del tiempo36. dia (hasta máximo 100 mg/día), se concluye que atomoxetina
se muestra segura y eficaz para el tratamiento de la hiperacti-
En enero de 2009 la Agencia Española de Medicamentos y vidad en algunos niños con TEA41.
Productos Sanitarios (AEMPS) publicó una comunicación sobre
riesgos de medicamentos actualizando las condiciones de uso No se han encontrado estudios comparativos de metilfenidato
del metilfenidato. En esta Comunicación se indica que el Comité frente a atomoxetina en niños con TGD y comorbilidad asociada
de Evaluación de Medicamentos de la Agencia Europea de a TDAH.
Medicamentos y el Comité de Seguridad de Medicamentos de
Uso Humano evaluó ciertos aspectos de seguridad del metilfe- La ficha técnica de atomoxetina indica que se debe suspender
nidato y aunque concluyen que el balance beneficio/riesgo es el tratamiento en pacientes con ictericia o evidencia, mediante
positivo su uso debe ajustarse a las siguientes condiciones: pruebas de laboratorio, de daño hepático. Debe administrarse
con precaución en pacientes con historia de convulsiones, ideas
tEl tratamiento con metilfenidato debe realizarse bajo la de suicidio, medicamentos que prolongan el intervalo QT, medi-
supervisión de un especialista con experiencia en tras- camentos que inhiben la CYP2D6, medicamentos que producen
tornos del comportamiento en niños y/o adolescentes. desequilibrio electrolítico y aquellos que aumentan el umbral
tMetilfenidato puede presentar efectos cardiovasculares convulsivo39.
(entre los que se encuentran incremento de la presión Controlar los posibles síntomas psicóticos y alucinaciones que
sanguínea y trastornos del ritmo cardíaco) por lo que se
pueden surgir, como efectos adversos, durante el tratamiento
debe realizar un examen cardiovascular cuidadoso antes
con los fármacos utilizados para el TDHA42.
del inicio del tratamiento y un seguimiento durante el
mismo.
MELATONINA
tSe debe hacer una evaluación sobre la continuidad del
tratamiento al menos una vez al año. En niños con TGD y trastornos del sueño que han persistido a
pesar de las intervenciones conductuales, melatonina puede
tSe debe realizar un examen cuidadoso antes del trata- ser una alternativa. Existe evidencia de eficacia de melatonina
miento y un seguimiento regular a lo largo del mismo de a dosis de 5 mg en niños con dificultades de sueño y TGD,
los antecedentes y síntomas psiquiátricos que pudiera pero se necesitan estudios a más largo plazo para confir-
presentar el paciente. marlo14,43.
tDurante el tratamiento con metilfenidato, se debe monito- En España, según la ficha técnica aprobada por la AEMPS,
rizar el peso y la altura de los pacientes37.
melatonina no está recomendada para su uso en niños ni
En los últimos años se han asociado diversos riesgos al trata- adolescentes menores de 18 años debido a la escasez de datos
miento con metilfenidato, principalmente trastornos cardiovas- sobre su seguridad y eficacia. Su indicación aprobada es, en
culares y cerebrovasculares. También se han estudiado otros monoterapia, para el tratamiento a corto plazo del insomnio
aspectos de seguridad relacionados con trastornos psiquiátricos, primario caracterizado por un sueño de mala calidad en
y posibles efectos a largo plazo como alteración del crecimiento pacientes mayores de 55 años y a dosis más bajas44.
o maduración sexual37.
SECRETINA
ATOMOXETINA
Se han realizado numerosos estudios, llegando a abarcar casi
Es una alternativa/opción para los niños con TGD y comorbi- 700 niños. Secretina (humana, porcina o sintética) a dosis única
lidad asociada a TDAH, que no toleran o no responden a otros o múltiple, durante seis meses máximo no mejora los síntomas
fármacos38. Tal y como indica su ficha técnica atomoxetina está de TEA8,45-48. No se recomienda su uso en niños y adolescentes
indicado en el tratamiento del trastorno por déficit de atención con TGD14.
con hiperactividad (TDAH) en niños apartir de 6 años y adoles-
centes como parte de un programa completo de tratamiento39.
INHIBIDORES SELECTIVOS DE LA RECAPTACIÓN DE
Los niños con TGD pueden tener una alta vulnerabilidad para SEROTONINA (ISRS)
los efectos secundarios, siendo los más frecuentes molestias
gástricas, nauseas/vómitos, fatiga y palpitaciones40. Un único ensayo clínico mostró un pequeño aunque estadística-
mente significativo beneficio clínico de fluoxetina sobre compor-
En un estudio, se administró atomoxetina a dosis de 2,5 - 40 tamientos repetitivos en los niños y los jóvenes con TGD49. No
mg, iniciando el tratamiento con 0,25 mg/kg/dia incremen- hay datos suficientes para recomendar el uso de la fluoxetina en
tando cada 4-5 dias 0,3-0,4 mg/kg/dia en función de la eficacia estos pacientes14.

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VENLAFAXINA CIPROHEPTADINA Y HALOPERIDOL


La revisión de un único estudio con escaso rigor metodológico Los resultados de un ensayo clínico con muestra pequeña,
no permite su recomendación50. sugieren que la combinación de Ciproheptadina con un antipsi-
cótico convencional (Haloperidol), puede ser superior al antip-
sicótico convencional cuando se utiliza en monoterapia para
DIVALPROEX
tratar el autismo54. No se puede proponer su recomendación
La revisión de un único ensayo cínico muestra que divalproex con este único EC.
puede ser útil en el tratamiento de las conductas repetitivas
en pacientes con TGD aunque la evidencia es insuficiente como TERAPIA COMPLEMENTARIA Y ALTERNATIVA EN TGD
para proponer su recomendación51.
Para la mayoría de las intervenciones de terapia complemen-
taria y alternativa no hay suficiente evidencia científica para
VALPROICO, ÁCIDO
apoyar o refutar su uso como tratamiento para el TGD14,7.
Un ensayo clínico con valproato en formulación líquida (250
tDieta libre de gluten y caseína55,56.
mg/5 ml), no confirma su eficacia en el tratamiento de la agre-
sividad en niños y adolescentes con TGD52. tCarnosina57.
tVitamina B6 y Magnesio58.
LEVETIRACETAM (LVT)
tÁcidos grasos Omega-359.
Un ensayo clínico con resultados negativos sugiere que el
antiepiléptico LVT no parece ser eficaz en el tratamiento del
autismo53.

PUNTOS CLAVE

tLos Trastornos Generalizados del Desarrollo (TGD) se tEl tratamiento debe ser planificado y realizado por profe-
caracterizan por una perturbación grave y generalizada sionales especializados en el manejo de estos pacientes y
de varias áreas del desarrollo: habilidades para la interac- siempre tras un diagnóstico completo y correcto. Se reco-
ción social y la comunicación y la presencia de compor- mienda:
tamientos, intereses y actividades restringidas, repeti-
tivas y estereotipadas. Constituyen uno de los trastornos 1. Risperidona para alteraciones del comportamiento
mentales mas graves que podemos encontrar en la niñez. moderado grave (irritabilidad, agresión, rabietas o
autolesiones) en niños y/o adolescentes.
tLa prevalencia actual del TGD en Europa y Estados Unidos
es del 6 por 1000. Estas cifras implican un aumento de 10 2..FUJMGFOJEBUP para el tratamiento de las dificultades
veces sobre los estudios de hace 50 años, los cuales refle- de atención/ hiperactividad en niños y/o adolescentes
jaban principalmente sólo el trastorno autista, mientras con TGD.
que los nuevos estudios incluyen síndrome de Asperger 3."UPNPYFUJOB como alternativa para los niños y/o
y trastorno generalizado del desarrollo no especificado adolescentes con dificultades de atención/ hiperacti-
(TGD-NOS). El TGD es un trastorno crónico. vidad con TGD y que no toleran o no responden a otros
tLas intervenciones educativas, incluyendo las estrate- fármacos.
gias comportamentales y las terapias sobre habilidades, tLa prescripción de estos medicamentos, sin autoriza-
son las claves del manejo de los TGD. Los tratamientos ción en ficha técnica para esta indicación, se realizará
farmacológicos no constituyen el tratamiento primario. siguiendo la legislación vigente (Real Decreto 223/2004,
/P FYJTUF JOUFSWFODJØO GBSNBDPMØHJDB CBTBEB de 6 de febrero por el que se regulan los ensayos clínicos
FOMBFUJPMPHÓBOJFOTVDVSBDJØO El control de los con medicamentos y RD 1015/2009 de 29 de junio por el
comportamientos maladaptativos y de las comorbilidades que se regula la disponibilidad de medicamentos en situa-
psiquiátricas asociadas constituyen el objetivo principal ciones especiales).
del manejo farmacológico.

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FICHAS DE FÁRMACOS
Fuente de datos: Adaptado de Fichas Técnicas. Disponible en:
https://sinaem4.agemed.es/consaem/fichasTecnicas.do?metodo=buscar&version=new.
Para más información consultar dicha fuente.

Tabla 1.
1SJODJQJPBDUJWP Risperidona
Dosis, pauta Individualizada de acuerdo a las necesidades y respuesta del paciente.
y duración de
Trastornos de conducta:
tratamiento
t/J×PTLH Dosis de inicio: 0,25 mg/día, aumentos de 0,25 mg cada 2 días (días alternos). La dosis óptima
para la mayoría de pacientes es de 0,5 mg/día. Dosis de mantenimiento: 0,25 mg/día - 0,75 mg/día.
t/J×PT>,H Dosis de inicio: 0,50 mg/día, aumentos de 0,50 mg cada 2 días (días alternos). La dosis óptima
para la mayoría de pacientes es de 1 mg/día. Dosis de mantenimiento: 0,5 mg/día- 1,50 mg/día.
Evaluar y justificar el uso a largo plazo (duración máxima 6 meses). Se carece de experiencia en niños menores
de 5 años y en adolescentes los datos son limitados. El uso continuado debe ser evaluado y justificado
permanentemente.
Vía de administración Oral. Existen presentaciones en solución (1 mg/ml) y comprimidos desde 0,5 mg
Indicación autorizada Tratamiento sintomático a corto plazo (hasta 6 semanas) de la agresión persistente de los trastornos de la conducta
en niños de 5 años de edad en adelante y adolescentes con un funcionamiento intelectual por debajo de la media
o retraso mental diagnosticados de acuerdo al criterio DSM-IV, en los que la gravedad de la agresión u otros
comportamientos perturbadores requieran tratamiento farmacológico.
El tratamiento farmacológico debe formar parte de un programa terapéutico más exhaustivo, con medidas
educacionales y psicosociales. Se recomienda la prescripción de risperidona por un especialista en neurología
infantil y en psiquiatría para niños y adolescentes o médicos familiarizados con el tratamiento de los trastornos de
conducta en niños y adolescentes.
Reacciones adversas t"VNFOUPEFQFTPTJHOJGJDBUJWP
t4FEBDJØOMFWFZUSBOTJUPSJB
t4PNOPMFODJB GBUJHB WJTJØOCPSSPTB NBSFPT GBMUBEFDPODFOUSBDJØO
t4ÓOUPNBTFYUSBQJSBNJEBMFT UFNCMPSFT SJHJEF[ IJQFSTBMJWBDJØO CSBEJDJOFTJB BDBUJTJB EFQFOEJFOUFTEFMBEPTJT

t)JQPUFOTJØO PSUPTUÈUJDB
ZUBRVJDBSEJB SFGMFKBBMBIJQPUFOTJØO
PIJQFSUFOTJØO
t&TUSF×JNJFOUP EJTQFQTJB OBVTFBTWØNJUPT EPMPSBCEPNJOBM SJOJUJT
t*OTPNOJP BHJUBDJØO BOTJFEBE KBRVFDB
t*ODPOUJOFODJBVSJOBSJB
t"VNFOUPEPTJTEFQFOEJFOUFEFDPODFOUSBDJØOQMBTNÈUJDBEFQSPMBDUJOB
t"VNFOUPEFMPTOJWFMFTEFFO[JNBTIFQÈUJDPT
t)JQFSHMVDFNJBPSFTJTUFODJBBMBJOTVMJOB
t%JTNJOVDJØOMJHFSBEFMSFDVFOUPEFOFVUSØGJMPTZPUSPNCPDJUPT
t1SPMPOHBDJØOEFM25D
Precauciones Precaución en insuficiencia renal y hepática.
especiales
Disminución del umbral convulsivo.
Se debe monitorizar el peso en pacientes en tratamiento con risperidona.
El efecto sedante de risperidona debe ser estrechamente controlado en población infantil debido a las posibles
consecuencias sobre la capacidad del aprendizaje.
Debido a los posibles efectos de hiperprolactinemia prolongada en el crecimiento y maduración sexual en niños y
adolescentes, se realizarán evaluaciones clínicas del estado endocrinológico, mediciones de talla, peso, madurez
sexual, control de la función menstrual y otros posibles efectos relacionados con prolactina.
Contraindicaciones t)JQFSTFOTJCJMJEBEBMBSJTQFSJEPOB

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1SJODJQJPBDUJWP Risperidona DPOUJOVBDJØO

Interacciones t0USPTGÈSNBDPTEFBDDJØODFOUSBM JOEVDUPSFTPJOIJCJEPSFTFO[JNÈUJDPT



t$JNFUJEJOBZSBOJUJEJOBBVNFOUBOMBCJPEJTQPOJCJMJEBEEFSJTQFSJEPOB
t1SFDBVDJØODVBOEPTFVUJMJDFSJTQFSJEPOBKVOUPDPONFEJDBNFOUPTRVFTFTBCFRVFQSPMPOHBOFMJOUFSWBMP25
( p.ej., antiarrítmicos clase I y clase III), antidepresivos tricíclicos (amitriptilina), antidepresivos tetracíclicos
(maprotilina), algunos antihistamínicos, otros antipsicóticos, algunos antipalúdicos (quinina y mefloquina) y con
medicamentos que producen desequilibrio electrolítico (hipocalemia, hipomagnesemia), bradicardia o aquellos
que inhiben el metabolismo hepático de risperidona. Esta lista es indicativa y no exhaustiva.
t$BSCBNB[FQJOBEJTNJOVZFMBTDPODFOUSBDJPOFTQMBTNÈUJDBTEFMBGSBDDJØOBOUJQTJDØUJDBBDUJWBEFSJTQFSJEPOB4F
han observado efectos similares p. ej. con rifampicina, fenitoina y fenobarbital.
t'MVPYFUJOBZQBSPYFUJOBBVNFOUBOMBDPODFOUSBDJØOQMBTNÈUJDBEFSJTQFSJEPOB QFSPOPUBOUPMBGSBDDJØO
antipsicótica activa. Las fenotiazinas,los antidepresivos tricíclicos y algunos betabloqueantes pueden aumentar las
concentraciones plasmáticas de risperidona, pero no la fracción antipsicótica activa.
Alternativas Antipsicóticos clásicos: Haloperidol, tiaprida, sulpirida y pimozida.
farmacológicas
Observaciones Al no tener indicación en TGD se prescribirá siguiendo la legislación vigente.

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Tabla 2.
1SJODJQJPBDUJWP .FUJMGFOJEBUP
Dosis, pauta .FUJMGFOJEBUPEFMJCFSBDJØOJONFEJBUB 3VCJGFO®
WÓBPSBM
y duracion de t%PTJTEFJOJDJPNHVOBPEPTWFDFTBMEÓB FOFMEFTBZVOPZBMNVFS[P
JODSFNFOUBOEPMBEPTJTZMBGSFDVFODJB
tratamiento de la administración, si se considera necesario, a razón de 5-10 mg semanalmente.
t%PTJTNÈYJNB/PTFSFDPNJFOEBOEPTJTTVQFSJPSFTBNHEÓB

.FUJMGFOJEBUPEFMJCFSBDJØONPEJGJDBEB
Medikinet®: Se administra vía oral en dosis única por la mañana o después del desayuno.
t%PTJTEFJOJDJP&TUBEPTJTTFBMDBO[BOPSNBMNFOUFVUJMJ[BOEPVOBGPSNVMBDJØOEFMJCFSBDJØOJONFEJBUBFOEPTJT
divididas. Medikinet® 10 mg una vez al día corresponde a una dosis de inicio de 5 mg dos veces al día de
metilfenidato de liberación inmediata.
t%PTJTNÈYJNBNHEÓB
Concerta®: Se administra vía oral en dosis única por la mañana. Debe tragase entero con la ayuda de líquidos y
no se debe masticar, partir o triturar.
t%PTJTEFJOJDJPNHEÓB&TUBEPTJTTFBMDBO[BOPSNBMNFOUFVUJMJ[BOEPVOBGPSNVMBDJØOEFMJCFSBDJØO
inmediata en dosis divididas. Concerta® 18 mg una vez al día corresponde a una dosis de inicio de 5 mg tres
veces al día de metilfenidato de liberación inmediata.
t%PTJTNÈYJNBNHEÓB
No debe administrarse a niños menores de 6 años. La dosis debe individualizarse según las necesidades y respuesta
del paciente, iniciando con una dosis baja e ir aumentando, a intervalos semanales, hasta alcanzar una dosis
eficaz y bien tolerada. Se debe utilizar el régimen de dosificación con el que se consiga un control satisfactorio de
los síntomas con la dosis total diaria mas baja. Si no se observa mejoría después de un ajuste de dosis apropiado
durante un periodo de un mes, se debe suspender el tratamiento. El tratamiento no debe prolongarse durante un
tiempo ilimitado. Puede ser conveniente suspender periódicamente el tratamiento para evaluar el estado del niño y
la necesidad de continuarlo.
Vía de administración Oral
Indicación autorizada TDAH en niños a partir de los 6 años y adolescentes como parte de un programa completo de tratamiento.
Reacciones adversas Reacciones adversas frecuentes:
t$FGBMFBT EJTNJOVDJØOEFBQFUJUP QBMQJUBDJPOFT JOTPNOJPZEPMPSBCEPNJOBM
Efectos sobre el peso y la talla:
t&MUSBUBNJFOUPDPONFUJMGFOJEBUPQVFEFBGFDUBSBMBHBOBODJBQPOEFSBMZEFFTUBUVSB&MFGFDUPTPCSFFMQFTPFT
reversible y éste se normaliza aproximadamente al año, no ocurre así con la talla.
t&OMBNBZPSÓBEFMPTOJ×PTZBEPMFTDFOUFTUSBUBEPTDPONFUJMGFOJEBUPMBBUFOVBDJØOEFMDSFDJNJFOUPWBBTFS
clínicamente irrelevante, alcanzando una talla adulta satisfactoria. Sin embargo puede existir un subgrupo de
pacientes en los que el crecimiento se vea significativamente atenuado.
Efectos cardiovasculares:
t&MNFUJMGFOJEBUPJODSFNFOUBMFWFNFOUFMBGSFDVFODJBDBSEJBDBZMBUFOTJØOBSUFSJBM TJOSFQFSDVTJØODMÓOJDB/P
produce alteraciones en el intervalo QT ni hay evidencia de que aumente el riesgo de muerte súbita.
Tics:
t"VORVFOPFYJTUFVOBSFMBDJØODBVTBFGFDUPFOUSFFMUSBUBNJFOUPDPONFUJMGFOJEBUPZMBBQBSJDJØOEFUJDT FO
algunos pacientes predispuestos a padecer tics puede actuar como desencadenante y adelantar su aparición. En
pacientes con tics previos puede producirse un leve aumento de éstos.
Crisis epilépticas:
t/PFYJTUFFWJEFODJBDJFOUÓGJDBEFRVFFMNFUJMGFOJEBUPQSPEV[DBDSJTJT OJEFRVFBVNFOUFFMOÞNFSPEFDSJTJTFO
niños con epilepsia y TDAH. La falta de evidencia es debida a las limitaciones metodológicas de los pocos trabajos
realizados sobre este tema.

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1SJODJQJPBDUJWP .FUJMGFOJEBUP DPOUJOVBDJØO

Precauciones El metilfenidato no debe ser administrado en niños menores de seis años edad, ya que no hay evidencia suficiente
especiales que avale la eficacia y seguridad del fármaco en este grupo de edad.
En los tratamientos prolongados con metilfenidato es necesario realizar controles regulares de peso y talla. Los
pacientes con velocidades de crecimiento bajas o que no ganan el peso esperado deberán interrumpir el tratamiento
de forma temporal.
Se desconocen los efectos que pueden tener en niños portadores de cardiopatías el aumento de la frecuencia
cardiaca y la tensión arterial que produce el metilfenidato.
Debido a la falta de evidencia científica sobre la posibilidad de que el metilfenidato aumente el número de crisis en
pacientes epilépticos con TDAH, es recomendable en estos casos una escalada de dosis más lenta y controles más
frecuentes. Esta afirmación es también válida en los niños con tics o síndrome de Gilles de la Tourette.
Controlar los posibles efectos psicóticos/manía que pudieran surgir durante el tratamiento.
Contraindicaciones El metilfenidato está contraindicado en general en pacientes con:
t)JQFSTFOTJCJMJEBEDPOPDJEBBFTUFGÈSNBDP
t1BUPMPHÓBDBSEJBDB DBSEJPQBUÓBTDPOHÏOJUBTHSBWFT BSSJUNJBT JTRVFNJBNJPDÈSEJDB

t)JQFSUFOTJØOBSUFSJBMHSBWF
t"OTJFEBE BHJUBDJØOPUFOTJØONBSDBEBT
t)JQFSUJSPJEJTNP
t(MBVDPNB
t4ÓOUPNBTQTJDØUJDPT FTUSVDUVSBEFMBQFSTPOBMJEBEQTJDPQBUPMØHJDB IJTUPSJBMEFBHSFTJØOPUFOEFODJBTVJDJEB
t"OUFDFEFOUFTEFESPHPEFQFOEFODJBPBMDPIPMJTNP
Para más información consultar las fichas técnicas de las tres presentaciones.
Interacciones Debido a una posible crisis hipertensiva el metilfenidato está contraindicado en pacientes que se encuentren en
tratamiento (actual o en las 2 semanas anteriores) con inhibidores no selectivos, irreversibles de la MAO.
Se desconoce la influencia del metilfenidato en las concentraciones plasmáticas de los fármacos que se administran
concomitantemente. Se recomienda precaución con la combinación de metilfenidato con otros fármacos,
especialmente aquellos con un margen terapéutico estrecho.
Alternativas Atomoxetina
farmacológicas
Observaciones Al no tener la indicación en TGD se prescribirá siguiendo la legislación vigente.

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Tabla 3.
1SJODJQJPBDUJWP "UPNPYFUJOB
Dosis y pauta Se administra vía oral en una dosis única por la mañana, con o sin alimentos, o en dos dosis al día divididas por la
mañana y a última hora de la tarde o primera hora de la noche.
Niños/adolescentes hasta 70 kg de peso:
t%PTJTEFJOJDJPBQSPYJNBEBNFOUF NHLHEÓB.BOUFOFSEVSBOUFVONÓOJNPEFEÓBTBOUFTEFMFTDBMBEPEF
acuerdo con la respuesta clínica y tolerancia.
t%PTJTEFNBOUFOJNJFOUPBQSPYJNBEBNFOUF NHLHEÓB
Niños/adolescentes con más de 70 kg de peso:
t%PTJTEFJOJDJPNHEÓB
t%PTJTEFNBOUFOJNJFOUPSFDPNFOEBEBNHEÓB
Vía de administración Oral.
Indicación autorizada TDAH en niños a partir de los 6 años y adolescentes como parte de un programa completo de tratamiento.
Reacciones adversas t%PMPSBCEPNJOBM EJTNJOVDJØOEFMBQFUJUP OÈVTFBTZWØNJUPTQBSUJDVMBSNFOUFEVSBOUFFMQSJNFSNFTEFUSBUBNJFOUP
t&GFDUPTDBSEJPWBTDVMBSFTDPOJODSFNFOUPNFEJPEFMBGSFDVFODJBDBSEJBDBZEFMBUFOTJØOBSUFSJBM
t*SSJUBCJMJEBE DBNCJPTEFIVNPS BHSFTJWJEBEMBCJMJEBEFNPDJPOBMZSJFTHPQPUFODJBMEFBQBSJDJØOEFDPOWVMTJPOFT
t.ÈTSBSBTZQPUFODJBMNFOUFNÈTHSBWFTJODMVZFOBDPOUFDJNJFOUPTSFMBDJPOBEPTDPOFMTVJDJEJPZIFQBUPUPYJDJEBE
Precauciones Realizar ECG si hay antecedentes de historia familiar de enfermedad cardiaca, de muerte súbita, o si el examen
especiales cardiaco es patológico.
Controlar a lo largo del tratamiento y al cambio de dosis, agitación e irritabilidad, pensamientos o conductas
suicidas, cambios de conducta y la potencial afectación hepática.
Controlar los posibles efectos psiquiátricos que pudieran surgir durante el tratamiento.
Contraindicaciones Hipersensibilidad conocida a la atomoxetina o a alguno de los excipientes. Atomoxetina no se debe utilizar en
combinación con inhibidores de la monoaminoxidasa (IMAOs).
No se debe emplear en pacientes con glaucoma de ángulo estrecho o con afectación hepática
Interacciones ATX no se debe utilizar junto con IMAOs.
Inhibidores CYP2D6 (fluoxetina, paroxetina, quinidina y terbinafina).
ATX puede potenciar la acción del salbutamol (u otros agonistas beta 2) sobre el sistema cardiovascular.
Riesgo potencial de prolongación del intervalo QT cuando se administra ATX con otros medicamentos que
prolongan el intervalo QT (neurolépticos, antiarritmicos de la clase IA y III, moxifloxacino, eritromicina, metadona,
mefloquina, antidepresivos tricíclicos, litio o cisaprida), medicamentos que provocan desequilibrio electrolítico
(como diuréticos tiazídicos) y medicamentos que inhiben el CYP2D6.
Medicamentos que inhiben el umbral de convulsiones (antidepresivos, neurolépticos, mefloquina, bupropión o
tramadol).
Precaución cuando se utilicen medicamentos que actúan sobre la tensión arterial y medicamentos que actúen sobre
la noradrenalina.
Alternativas Metilfenidato.
farmacológicas
Observaciones Al no tener la indicación en TGD se prescribirá siguiendo la legislación vigente.

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METODOLOGÍA DE LA BÚSQUEDA
BIBLIOGRÁFICA
Para la recuperación de la información de evidencia cientí- bibliográficas para su revisión y volcado. De estas, 28 corres-
fica respecto a la eficacia del uso de fármacos en el Trastorno ponden al bloque de estudios originales (EO) y 16 al bloque de
Generalizado del Desarrollo (TGD) en niños y adolescentes se SSS. Por otro lado el grupo selecciona 6 referencias para lectura
emplearon las fuentes de información siguiendo el modelo de de las que 4 corresponden al bloque de SSS y 2 del bloque de
“5S” de Haynes1 de organización estableciendo dos grupos: estudios originales (EO). Por último, se localizan 6 referencias
documentos de síntesis, sinopsis y sumarios de la evidencia adicionales del bloque de revisiones sistemáticas (SSS) para su
(SSS) y estudios originales (EO). revisión y volcado.
Dentro de documentos SSS se buscan Guías de Práctica Para la selección de los artículos el grupo tuvo en cuenta la
Clínica, revisiones sistemáticas, meta-análisis, revistas secun- metodología del ensayo clínico (randomizados doble ciego
darias e informes de evaluación. Para su localización se utiliza controlado con placebo), el año de publicación reciente (menos
TripDatabase, la Biblioteca Cochrane Plus, Clinical Evidence, de 5 años), tamaño suficiente de muestra, edad de la muestra
UpToDate, MEDLINE (OVID), EMBASE (OVID) y PsycINFO (niños y adolescentes), que no incluyesen elevado número de
(Proquest). comorbilidades, a excepción de TDHA. En este último caso
se incluyeron dos ensayos abiertos. Se han incluido algunos
Para la localización de los EO se buscan artículos que sean ensayos con medicamentos de elevado interés y demanda
ensayos clínicos de intervenciones terapéuticas farmacológicas aunque no estuviesen comercializados en España, o sin la indi-
empleando las bases de datos automatizadas MEDLINE (OVID), cación aprobada en este trastorno. En cuanto a las revisiones,
EMBASE (OVID) y PsycINFO (Proquest). fundamentalmente, se han incluido las revisiones sistemáticas
Las búsquedas en las bases de datos se realizan en junio de y relacionadas con el tratamiento.
2007 (ver tabla con estrategias de búsqueda). Para la estrategia La revisión y volcado se realizó en documentos normalizados.
de búsqueda en las bases de datos MEDLINE y EMBASE relativa
a ensayos clínicos y revisiones sistemáticas se utilizaron filtros Como parte de la metodología general de la Guía, para los
metodológicos validados. 23 ensayos clínicos con asignación aleatoria (ECA), se pasa
la escala Jadad2 para constatar la calidad de dichos estudios
En las búsquedas en las bases de datos se emplearon diversos y apoyar la selección de los fármacos en esta patología. Tres
límites como la población de estudio empleando como rango ensayos clínicos con asignación aleatoria (ECA) obtuvieron el
de edad niños y adolescentes y límites de idiomas para excluir máximo de puntuación 5 puntos, cuatro ECA 4 puntos, diez
aquellos escritos en lenguas diferentes al inglés, español ECA 3 puntos, cinco ECA 2 puntos y uno obtuvo 1 punto.
y francés. Por último, en la búsqueda de ensayos clínicos se
emplea el límite temporal de año de publicación a los últimos
5 años. Para la búsqueda de otro tipo de documentos (SSS) no
hay limitación temporal. BIBLIOGRAFÍA
1 Haynes RB. Of studies, syntheses, synopses, summaries, and systems:
Los registros obtenidos de las bases de datos se vuelcan en el
the "5S" evolution of information services for evidence-based
programa gestor de referencias Referente Manager® eliminán- healthcare decisions. Evid Based Med. 2006 Dec;11(6):162-4.
dose las referencias duplicadas.
2 Jadad AR, Moore RA, Carroll D, Jenkinson C, Reynolds DJ, Gavaghan
Se obtuvieron 140 referencias bibliográficas (86 correspon- DJ, McQuay HJ. Assessing the quality of reports of randomized
dientes a EO y 54 correspondientes al bloque de SSS). Tras su clinical trials: is blinding necessary? Control Clin Trials. 1996
valoración, y siguiendo los criterios de inclusión establecidos por Feb;17(1):1-12.
el grupo de trabajo, se decidió la selección de 44 referencias

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Tabla 4. Estrategia de búsqueda en las diferentes bases de datos.


.&%-*/& 07*%
&.#"4& 07*%
1TZD*/'0 1SPRVFTU

1. exp Child Development Disorders, Pervasive/ exp Autism/ ((DE("PERVASIVE


DEVELOPMENTAL
2. (PDD or Pervasive Developmental Disorder$ (PDD or Pervasive Developmental Disorder$
DISORDERS")) AND
or Pervasive Child Development Disorder$ or or Pervasive Child Development Disorder$ or
DE(DRUG THERAPY)
Pervasive Development Disorder$ or Development Pervasive Development Disorder$ or Development
Disorder$, Pervasive or Disorder$, Pervasive Disorder$, Pervasive or Disorder$, Pervasive
Development or Asperger s Disorder or Asperger Development or Asperger s Disorder or Asperger
Disorder or Aspergers Disorder or Asperger s Disorder or Aspergers Disorder or Asperger s
Syndrome or Aspergers Syndrome or Autisti$ or Syndrome or Aspergers Syndrome or Autisti$ or
Autism$ or Kanner$ Syndrome or Cerebroatrophic Autism$ or Kanner$ Syndrome or Cerebroatrophic
Hyperammonemia$ or Rett Disorder or Rett s Hyperammonemia$ or Rett Disorder or Rett s
Disorder).mp. Disorder).mp.
3. 1 or 2 1 or 2
4. drug therapy.fs. exp central nervous system agents/
5. exp Central Nervous System Agents/ dt.fs.
6. 4 and 5 4 and 5
7. 3 and 6 3 and 6

$PSSFTQPOEFODJBDirección General de Gestión Económica y de Compras de Productos Sanitarios y Farmacéuticos. Subdirección de


Compras de Farmacia y Productos Sanitarios. Plaza de Carlos Trías Bertrán nº 7 planta 5ª. Edificio Sollube. 28020. Madrid. Tf: 914269917.
&EJUBConsejería de Sanidad. Dirección General de Gestión Económica y de Compras de Productos Sanitarios y Farmacéuticos.
%PDVNFOUPEJHJUBMPixel Creación y Producción Gráfica, S.L.
ISSSN: 1697-6274 / Depósito Legal: M-13724-2004

16
Servicio Madrileño de Salud
septiembre/2010 - Nº 7

Recomendaciones
Farmacoterapéuticas en
Salud Mental
1. Introducción
 t%FTDSJQDJØOZDMÓOJDB
Trastorno obsesivo-compulsivo


t%JBHOØTUJDPZFWBMVBDJØO
t&QJEFNJPMPHÓB en niños y adolescentes
 t&UJPMPHÓB

2. Tratamiento. 1. INTRODUCCIÓN
Recomendaciones
CBTBEBTFOMB
FWJEFODJB DESCRIPCIÓN Y CLÍNICA
2.I. Abordaje
terapéutico El Trastorno Obsesivo-Compulsivo (TOC) se carac- inicio más temprano es más probable encontrar
2.II. Tratamiento teriza por obsesiones y/o compulsiones recurrentes algún familiar afectado de TOC o trastorno por
GBSNBDPMØHJDP suficientemente graves como para provocar Tics. Habitualmente los síntomas en niños son simi-
 t*OIJCJEPSFT4FMFDUJWPT malestar o interferir en la vida de quien lo sufre. lares a los de los adultos6.
EFMB3FDBQUBDJØOEF Las obsesiones se definen como pensamientos,
4FSPUPOJOB *434
En el estudio de Swedo et al, el ritual más frecuente
imágenes o impulsos persistentes que son egodis-
  'MVWPYBNJOB
  4FSUSBMJOB tónicos, intrusivos y carentes de sentido. Las era el de limpieza (81% de casos), seguido del de
  'MVPYFUJOB compulsiones son conductas o actos mentales de repetición (50%) y comprobación (45%). Otros
  1BSPYFUJOB carácter repetitivo, que el individuo se ve obligado rituales frecuentes fueron: contar, ordenar/colocar
 t0USPT5SBUBNJFOUPT a realizar en respuesta a la obsesión (DSM-IV-TR)1. y acumular objetos. Las obsesiones frecuentes eran
3. Recomendaciones Los niños no siempre reconocen que sus obse- la escrupulosidad, el temor a sufrir uno mismo
FOGVODJØOEFMB siones y compulsiones son irracionales o exce- algún daño o infligirlo a los demás. La mayoría de
HSBWFEBE sivas. los pacientes sufrían obsesiones y compulsiones.
En algunos casos, las obsesiones y rituales produ-
4. Recomendaciones en Una persona que sufre TOC puede manifestar tanto cían la sensación interior de que “algo no estaba
GVODJØOEFMBFEBE obsesiones, como compulsiones o ambas. El conte- bien” hasta que se completaba un pensamiento o
nido específico de las obsesiones no debe estar en una acción.
$PNPSCJMJEBE
relación con otro diagnóstico del Eje I (ej: preocu-
6. Indicaciones paciones con la comida en la anorexia nerviosa, Algunos niños pequeños reconocen sus compor-
de manejo sentimientos de culpabilidad en la depresión). En tamientos rituales pero no los atribuyen a un
GBSNBDPMØHJDP general las compulsiones se llevan a cabo para pensamiento obsesivo. Además, en esta edad, es
disminuir la ansiedad o en respuesta a una obse- frecuente observar compulsiones sin obsesiones y
&WPMVDJØOBMBSHP
QMB[P sión. a menudo niegan que las compulsiones tengan que
ver con ansiedad o malestar y camuflan los rituales.
1VOUPTDMBWF Aunque se dispone de estudios, sobre TOC infantil,
Los síntomas cambian a lo largo del tiempo sin un
publicados antes de la década de los ochenta2-4, es
'JDIBTEFGÈSNBDPT patrón de evolución definido por lo que conocer y
a partir de entonces cuando este trastorno empezó
analizar el contenido específico de los síntomas (ej.
Autores. a estudiarse sistemáticamente en niños. Swedo et
rituales frente a obsesiones, comprobación frente
al en 19895 examinó a 70 pacientes niños y adoles-
Bibliografía. a lavado) no es útil en el TOC infantil. Puede ser
centes que cumplían criterios diagnósticos de TOC
Metodología de la búsqueda. complicado identificar los niños y adolescentes con
grave, y publicaron los siguientes hallazgos clínicos:
es más frecuente en niños que niñas (3:2), aunque TOC menos severo o a los que ocultan los síntomas.
la proporción se equilibra en la adolescencia. Algunos comportamientos son sugestivos de TOC:
largos rituales al dormir, pedir a los familiares
La edad media de inicio del trastorno es de 10 que repitan algunas frases, acumular objetos,
años; en los chicos se inicia a edades inferiores pasar muchas e improductivas horas haciendo los
(prepuberales) que en las chicas y en los TOC de deberes, lentitud excesiva7.
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DIAGNÓSTICO Y EVALUACIÓN Estudios de seguimiento, de al menos 7 años, de niños con


TOC indican que el 40% presentaban diagnósticos adicionales
-BFWBMVBDJØO adecuada es esencial para realizar un diagnós- (depresión o ansiedad), el 30% no cumplían ningún criterio
tico preciso y es el primer paso de un tratamiento adecuado. diagnóstico y entre el 50-40% de los pacientes seguían mani-
A veces requiere varias sesiones por las dificultades en referir festando TOC10.
la sintomatología. Es recomendable disponer de varios infor-
mantes (padres, hermanos, maestros). Algunos instrumentos
estandarizados pueden ser útiles para identificar los síntomas EPIDEMIOLOGÍA
iniciales y estudiar la evolución: Cuestionario de Obsesiones
En población adolescente Flament et al (1988)11 estimaron una
de Leyton y La Escala de Obsesiones y Compulsiones de Yale-
prevalencia de TOC del 0,8% y una prevalencia a lo largo de la
Brown para niños8.
vida del 1,9%. Zohar et al (1992)12 estimaron una prevalencia al
Cuando el TOC se inicia antes de los 9 años aumenta la proba- final de la adolescencia del 3% que es compatible con la esti-
bilidad de que los pacientes sufran el subtipo familiar del tras- mada en población adulta. Un tercio o la mitad de los adultos
torno y también de que presenten Trastorno de Tics7. Se ha enfermos iniciaron su trastorno en la infancia o adolescencia.
postulado que la combinación de TOC y Tics comórbidos consti- En general, la prevalencia se sitúa entre el 0,6-1%. Según el
tuye un subtipo de TOC. estudio de Peterson et al (2001)13 los síntomas del Trastorno de
Tics y de TDAH se asocian a los de TOC al final de la adoles-
Se ha descrito un subgrupo de TOC de inicio infantil que
cencia y al inicio de la edad adulta. Los tics en la infancia y al
presenta trastornos neuro-psiquiátricos infantiles auto-inmuni-
principio de la adolescencia pronostican un incremento de TOC
tarios asociados a una infección por estreptococos (PANDAS).
al final de la adolescencia y al comienzo de la madurez.
Manifiestan un inicio brusco de los síntomas después de ser
infectados por estreptococo beta-hemolíticos del grupo A. La
evolución de su enfermedad está caracterizada por un empeo- ETIOLOGÍA
ramiento rápido y súbito de los síntomas (TOC, Tics o ambos)
que se alterna con períodos de remisión. El inicio se produce No se conoce la FUJPMPHÓB del TOC, pero las diferentes líneas
antes de la pubertad y los niños presentan signos neurológicos de investigación postulan que podría ser el resultado de una
(coreiformes, tics) y con frecuencia otros trastornos comórbidos: disfunción del lóbulo frontal, del sistema límbico y de los
Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad (TDAH), núcleos basales. Parece que la alteración en la regulación de
Trastorno Negativista Desafiante, Depresión Mayor, Trastorno los neurotransmisores, la predisposición genética y los factores
de Ansiedad Excesiva o Ansiedad de Separación. Los síntomas ambientales desencadenantes desempeñan algún papel en el
comórbidos también evolucionan según el TOC. Estos niños desarrollo de la enfermedad. Existe evidencia de las investiga-
requieren una evaluación y tratamiento distintos, como el ciones neuropsicológicas que el TOC se asocia a alteraciones
cultivo de exudado faríngeo solicitando el valor de la estrep- en las funciones del córtex prefrontal, orbitofrontal, cingulado y
tolisina O y de la antidesoxirribonucleasa B esteptococica, así lóbulos parietales, afectando a: funciones ejecutivas de flexibi-
como una determinación de anticuerpos antinucleares (no tiene lidad cognitiva, inhibición motora y memoria no-verbal, integra-
porqué ser positiva)9. ción viso-motora y memoria viso-espacial.
Es preciso realizar el EJBHOØTUJDPEJGFSFODJBM. El Trastorno La alteración de la regulación de los neurotransmisores se atri-
Depresivo y los Trastornos de Ansiedad con rasgos obsesivos buye a varios sistemas (serotoninérgico, dopaminérgico). Existen
(rumiaciones, miedos) pueden parecerse al TOC. Las estereoti- hallazgos neuroanatómicos y neurofisiológicos que señalan
pias repetitivas que se observan en el Trastornos del Espectro anomalías del núcleo caudado y del circuito cortico-estriatal-
Autista (TEA) en el retraso mental o en síndromes derivados de talámico. También anomalías en el metabolismo de la glucosa
lesión cerebral orgánica pueden asemejar los rituales del TOC. en esas áreas. En los niños con PANDAS la fisiopatología que
A diferencia de las estereotipias, los rituales son metódicos, subyace es probable que sea una reacción autoinmune contra
complejos y egodistónicos y además, el resto de síntomas distin- estructuras cerebrales en niños genéticamente vulnerables. En
guen los cuadros. En los trastornos de alimentación aparece estudios familiares se ha demostrado que el 20% de los fami-
interés “obsesivo” por la comida, calorías o cuerpo, de manera
liares de primer grado de los TOC cumplen criterios diagnós-
muy específica en estos contenidos. Los pacientes con Trastorno
ticos de TOC. La agregación familiar de ST y TOC indican una
por Gilles de la Tourette (ST) pueden presentar síntomas obse-
predisposición genética a este trastorno con un posible modelo
sivo-compulsivos o un diagnóstico de TOC asociado7.
de herencia mixta, en particular los niños que manifestaban el
El DVSTPDMÓOJDP es frecuentemente episódico y con tendencia TOC entre los 5 y 9 años tienen un porcentaje muy superior de
a la cronicidad. Se observa remisión completa con episodios familiares con tics, de hecho, algunos estudios demuestran que
recurrentes leves, remisión parcial (síntomas moderados leves) y los Trastornos de Tics son una expresión alternativa del fenotipo
remisión parcial con episodios moderados graves. de tic familiar7.

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2. TRATAMIENTO. RECOMENDACIONES güenzan de ellos. Cuando llegan a recibir atención clínica,


BASADAS EN LA EVIDENCIA algunos niños y sus padres han entrado en un círculo vicioso
alrededor del síntoma. El trabajo con las familias sobre cómo
manejar la sintomatología y cómo participar en el tratamiento
2.I. ABORDAJE TERAPÉUTICO es esencial. Aunque un aspecto importante del trabajo con los
padres consiste en disminuir la sobreimplicación parental, estas
La elección de un QMBOUFSBQÏVUJDP variará en función de medidas deben acompañarse de intervenciones para disminuir
cada uno de los síntomas y factores relacionados con el niño la angustia del niño14.
y su familia. Deben tenerse en cuenta la comorbilidad y los
factores psicosociales estresantes. Sea cual sea la modalidad
de tratamiento usada la SFMBDJØOUFSBQÏVUJDB es la base de 2.II. TRATAMIENTO FARMACOLÓGICO
cualquier intervención.
Disponemos de pocos ensayos clínicos relacionados con el trata-
La primera parte de un programa de tratamiento, y muy impor- miento del TOC en niños y adolescentes en relación con los de
tante, es la psicoeducación: sesiones informativas acerca de la población adulta. Por este motivo, muchas cuestiones acerca
la etiología, la naturaleza del trastorno y el tratamiento. En esta del tratamiento permanecen aún sin responder. Por otro lado,
primera etapa debe considerarse si los profesores, compañeros muchos de estos ensayos presentan limitaciones metodológicas
y otros miembros de la familia deben conocer el diagnóstico. que nos llevan a reducir la confianza que podemos depositar en
Muchos niños con TOC no quieren que se conozca que padecen los resultados y conclusiones de los mismos16.
un trastorno, por tanto, es importante incluirlos en la discusión
de la decisión de comunicarlo. Algunos niños pueden precisar La evidencia disponible en relación al tratamiento psicológico
apoyo escolar. es limitada, no obstante el consenso clínico recomienda MB
QTJDPUFSBQJBDPNPUSBUBNJFOUPEFQSJNFSBMÓOFBFOFM
Para elaborar el plan terapéutico se tendrán en cuenta los
50$.
siguientes aspectos14,15:
En casos crónicos o graves, donde la terapia conductual no es
1. Valoración del grado de introspección de los síntomas TOC
efectiva, no está disponible o el paciente elige medicación, los
y la motivación a tratamiento.
Inhibidores Selectivos de la Recaptación de Serotonina (ISRS)
2. Evaluación de la gravedad de los síntomas y su impacto son la primera opción de tratamiento efectivo tanto solos como
funcional. en combinación con terapia conductual.

3. Valoración de síntomas comórbidos: depresión, ansiedad, &YJTUFFWJEFODJBRVFBQPZBFMUSBUBNJFOUPEFM50$FO


abuso de tóxicos, tics o ST. OJ×PTZBEPMFTDFOUFTDPO*434 La literatura científica no es
extensa, pero es consistente y muestra los efectos beneficiosos
4. Información a la familia. de los ISRS en términos de remisión de síntomas y mejoría de la
capacidad funcional global de los pacientes con TOC.
5. Valoración de la necesidad de tratamiento psicoterapéu-
tico. Existe una preocupación generalizada acerca del uso de medi-
camentos que afectan al Sistema Nervioso Central (SNC) en
6. Valoración del inicio de tratamiento psicofarmacológico.
las diferentes etapas de desarrollo. Deben valorarse los riesgos
7. Valoración de la respuesta a los tratamientos. potenciales de estos fármacos frente a las consecuencias/
riesgos del TOC no tratado que se pueden manifestar tanto en
Las obsesiones o compulsiones leves que no son fuente de el desarrollo psicosocial como en la vida adulta.
estrés o de dificultades importantes en la capacidad funcional,
pueden beneficiarse de un TFHVJNJFOUP B MP MBSHP EFM Es necesario ampliar la investigación en niños y adolescentes
UJFNQPTJOFMJOJDJPEFVOUSBUBNJFOUPFTQFDÓGJDP. con TOC para el tratamiento farmacológico en fase aguda, el
seguimiento a largo plazo y la evolución cognitiva y educa-
Cuando aparecen obsesiones o compulsiones relacionadas con tiva.
acontecimientos vitales estresantes o con factores propios del
desarrollo, la psicoterapia u otras JOUFSWFODJPOFTQTJDPTP- El tratamiento farmacológico del TOC sólo debería ser pres-
DJBMFT enfocadas a estos desencadenantes pueden ser útiles crito por un médico con experiencia en este trastorno en niños
por sí solos. La psicoterapia también puede ser útil en los casos y adolescentes y debería ser éste el profesional que tome las
de rasgos de personalidad obsesiva14. decisiones sobre cambios de dosis e interrupción del trata-
miento16.
El proceso de evaluación y planificación del tratamiento
puede tener efectos beneficiosos por sí mismo. Los niños con La metodología de la búsqueda bibliográfica puede consultarse
síntomas obsesivos, a menudo los ocultan porque se aver- en la página 14 de este documento.

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INHIBIDORES SELECTIVOS DE LA RECAPTACIÓN DE dosis de 10-50 mg/día, paroxetina obtuvo significativamente


SEROTONINA (ISRS) mejores resultados que placebo en la variable de respuesta
principal (cambio en la puntuación de la escala CY-BOCS-
En el TOC los únicos ISRS autorizados en niños y adolescentes
Children’s Yale-Brown Obsessive-Compulsive Scale-) desde la
son la GMVWPYBNJOB y la TFSUSBMJOB16-18.
evaluación basal hasta la última evaluación en la semana 10.
Sin embargo, no se encontraron diferencias significativas entre
'MVWPYBNJOB paroxetina y placebo en las variables de eficacia secundarias
estudiadas y además se observaron efectos secundarios severos
En un ensayo clínico doble ciego controlado con placebo de 10
semanas de duración en niños y adolescentes de 8 a 17 años, se en 3 de los 98 pacientes del grupo de paroxetina. Estos efectos
concluyó que el efecto de la fluvoxamina fue significativamente fueron: hostilidad (conducta agresiva) en 2 pacientes, y labi-
mayor que el de placebo en la reducción de la severidad de los lidad (pensamientos suicidas) en un paciente con paroxetina.
síntomas obsesivo-compulsivos. Las dosis de fluvoxamina utili- Este efecto fue considerado grave porque derivó en hospitaliza-
zada fueron desde 50 mg/día hasta 200 mg/día19. ción del paciente24.

De los ISRS revisados, paroxetina no tiene ninguna indicación


4FSUSBMJOB aprobada para población infanto-juvenil tal y como indica su
En un ensayo clínico con asignación aleatoria en el que se ficha técnica25, motivo por el cual y aún siendo un ISRS no se ha
compararon la terapia cognitivo conductual, sertralina, el trata- incluido en el apartado fichas de medicamentos.
miento combinado y placebo, sertralina mostró una mayor
eficacia que el placebo. Sin embargo, el tratamiento combinado OTROS TRATAMIENTOS
se mostró superior a sertralina20.
En otro estudio controlado con placebo, los pacientes tratados $MPNJQSBNJOB
con sertralina mostraron un nivel de mejoría mayor con dife-
rencia estadísticamente significativa con respecto a los tratados Los resultados de un metaanálisis de farmacoterapia en TOC
con placebo en las escalas CY- BOCS (p=0,005), en la NIMH- pediátrico, se concluyó que clomipramina tuvo un mayor efecto
GOCS (p=0,02) y la CGI-I21. La dosis inicial empleada fue de 25 en reducir los síntomas del TOC (frente a placebo) que el resto
mg/día en prepúberes y de 50 mg/día en adolescentes. La dosis de fármacos estudiados (paroxetina, fluoxetina, fluvoxamina y
máxima empleada fue de 200 mg/día tanto en niños como sertralina). Se sugiere que el motivo más probable es la doble
adolescentes22.
acción noradrenérgica y serotoninérgica.

'MVPYFUJOB A pesar de que clomipramina mostró superioridad frente a


placebo en relación a los ISRS, no debería considerarse como
Los resultados de un ensayo clínico con asignación aleatoria, primera elección debido a los efectos secundarios, sobre todo
doble ciego y controlado con placebo indicaron una mayor arritmogénicos. Podría ser la primera opción en casos resis-
mejoría en síntomas del TOC en los pacientes tratados con tentes al tratamiento considerado de elección (ISRS) o en los
fluoxetina después de 16 semanas de tratamiento. El trata- más severos como tratamiento adicional26.
miento con fluoxetina fue asociado con informes parentales
de mejoría en el funcionamiento psicosocial. La dosis media de Manejo de la clomipramina en niños con TOC:
fluoxetina al final de la semana 8 fue de 64,8 mg (20-80 mg
de rango)23. Se debe informar al paciente con TOC o Trastorno Dismórfico
del Cuerpo (TDC) y a la familia sobre los posibles efectos secun-
Estos resultados indican que fluoxetina es eficaz en TOC pediá-
darios, incluyendo la toxicidad en sobredosis.
trico, pero los efectos totales de fluoxetina tardan más de 8
semanas en desarrollarse. En este estudio la fluoxetina fue bien Antes de iniciar el tratamiento hay que realizar un electrocar-
tolerada (incluso a dosis de mayores de 60 mg/día, dado que diograma para descartar trastornos de la conducción.
ningún paciente abandonó el estudio por efectos secunda-
rios23. Si no se consigue respuesta clínica y no hay efectos secundarios
significativos considerar cuidadosamente un aumento progre-
1BSPYFUJOB sivo de la dosis16.

La revisión de un ensayo clínico con asignación aleatoria, doble La dosis máxima de clomipramina no debe superar los 5 mg/kg/
ciego y controlado con placebo, de 10 semanas de duración día o 250 mg/día por el riesgo de toxicidad, incluyendo convul-
realizado en niños de 7 a 17 años tratados con paroxetina a siones y cambios electrocardiográficos14.

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Si el tratamiento con clomipramina es efectivo, debe continuar tPara niños y adolescentes cuyo 50$ implique una reper-
durante al menos 6 meses, ya que puede haber mejoría de la DVTJØO MFWF en su funcionamiento se recomienda
respuesta más adelante16. En un estudio abierto de seguimiento USBUBNJFOUPEFBQPZPZBVUPBZVEB con apoyo e
se concluyó que la clomipramina fue bien tolerada durante un información a la familia o cuidadores.
año de seguimiento27.
tEn TOC con alteración funcional moderada a severa o leve
en la que el abordaje de autoayuda no ha sido efectivo
0USPTBOUJEFQSFTJWPT o ha sido rechazado, se recomienda tratamiento cognitivo
conductual breve (incluyendo exposición y prevención de
No deben utilizarse otros antidepresivos tricíclicos diferentes a respuesta), con participación de la familia o cuidadores y
la clomipramina para TOC ni en TDC en niños y adolescentes. adaptado al nivel de desarrollo del paciente.
Tampoco deben usarse otros antidepresivos: Inhibidores de la
Monoamino Oxidasa (IMAO) ni otros antidepresivos de segunda tSe recomienda el USBUBNJFOUPGBSNBDPMØHJDP de los
generación, no ISRS16. niños y adolescentes con 50$NPEFSBEPPTFWFSP 
TØMP cuando el paciente y su familia declinan el trata-
miento psicoterapéutico o no son capaces de implicarse en
Antipsicóticos el mismo y llevarlo a cabo o cuando no ha habido respuesta
al tratamiento psicoterapéutico, implicando a la familia o
No deben utilizarse antipsicóticos solos en el tratamiento ruti- cuidadores16.
nario del TOC pediátrico, pero sí pueden considerarse como
estrategia de aumento16. tLa recomendación en pacientes con TOC de gravedad
NPEFSBEBBHSBWF es el tratamiento combinado de
No existen datos publicados en niños, aunque sí hay datos QTJDPUFSBQJBZNFEJDBDJØO. Los resultados de una revi-
sobre su eficacia en adultos. De los datos obtenidos en un sión reciente29 indican que la terapia cognitivo conductual
metaanálisis en adultos, se extrae que la coterapia o coadyu- combinada con medicación reduce en mayor medida los
vancia al tratamiento de los ISRS con antipsicóticos es eficaz en síntomas de TOC que el tratamiento farmacológico solo,
pacientes adultos con TOC resistente al tratamiento después y que la psicoterapia cognitivo conductual es al menos
de 12 semanas de terapia a dosis máximas con ISRS en mono- igual de eficaz que la medicación sola. En esta revisión se
terapia. La coterapia (ISRS más antipsicóticos) fue eficaz en las concluye que hasta el momento existe insuficiente evidencia
primeras 4 semanas lo cual sugiere que si el paciente no ha para especificar la mejor secuencia de tratamientos en el
respondido en las primeras 4 semanas, es improbable que más TOC pediátrico.
adelante mejore. Haloperidol y risperidona mostraron evidencia
tSi estos fármacos, *434EFFMFDDJØO FODPNCJOBDJØO
clara de su eficacia en coterapia, no así olanzapina y quetia-
DPOMBUFSBQJBDPHOJUJWPDPOEVDUVBMCSFWF (inclu-
pina28. yendo exposición con prevención de respuesta) no son
0USBTDPOTJEFSBDJPOFT Hay que tener en cuenta que una efectivos, o producen efectos secundarios se puede recurrir
serie de factores pueden explicar la falta de respuesta a a PUSPT*434 o a la DMPNJQSBNJOB, sobre todo si estos
fármacos han sido efectivos anteriormente16.
cualquier tratamiento, como por ejemplo: la coexistencia de
trastornos comórbidos como los trastornos del aprendizaje,
como factores de riesgo psicosocial como conflictiva familiar
o padres con trastornos mentales. Estos trastornos tendrán 4. RECOMENDACIONES EN FUNCIÓN DE
que abordarse con intervenciones alternativas para dichos LA EDAD
aspectos. Es importante tenerlo en cuenta en caso de fracaso El rango de edades de la mayoría de los estudios revisados está
terapéutico antes de pasar a otro tratamiento de segunda entre los 6 y los 18 años. El único estudio localizado de TOC de
línea. inicio temprano, en niños de 4 a 8 años30, compara la eficacia
relativa de la terapia cognitivo conductual basada en la familia
(CBT) con la terapia de relajación basada en la familia (RT).
3. RECOMENDACIONES EN FUNCIÓN DE En este estudio se concluye que la implicación de los padres
LA GRAVEDAD en todas las fases del tratamiento, y la adaptabilidad de los
programas a cada caso en concreto, son factores que mejoran
Aunque todavía no hay datos suficientes para poder especificar la respuesta al tratamiento. No se encontraron diferencias signi-
la secuencia preferida de los tratamientos para el TOC pediá- ficativas entre la terapia de relajación y la CBT en reducción de
trico29, se tendrán en cuenta las siguientes recomendaciones en los síntomas, pero sí se encontraron diferencias en las tasas de
función de la gravedad: remisión clínica, favoreciendo a la CBT.

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5. COMORBILIDAD favorable para los antidepresivos ISRS en el tratamiento del TOC


pediátrico. Según los resultados que arroja este metanálisis, los
El manejo y tratamiento en niños y adolescentes con TOC se ISRS son una opción segura y eficaz de tratamiento, siempre que
complica debido a que frecuentemente tienen otros problemas se discutan con la familia y el paciente los riesgos y beneficios del
comórbidos16. En una encuesta de 70 menores con TOC, solo mismo, a pesar de que algunos autores contraindican el trata-
el 26 % tenía TOC como único trastorno5. Frecuentemente se miento ante el más mínimo riesgo suicida32.
presentan trastornos de ansiedad, como trastorno de ansiedad
generalizada, ansiedad de separación en niños pequeños y La dosis de inicio para niños y adolescentes con TOC debería
ansiedad social en jóvenes. Por este motivo es necesaria una ser baja, especialmente en los más pequeños. En la primera
cuidadosa valoración y considerar el tratamiento de los tras- semana debería ser de la mitad o un cuarto de la dosis normal
tornos comórbidos en la práctica clínica16. de inicio. Si la primera dosis no es efectiva deberá incrementarse
hasta obtener respuesta terapéutica, teniendo en cuenta el
En un estudio que analizó el impacto de la comorbilidad en la tiempo de demora de respuesta terapéutica (hasta 12 semanas)
respuesta al tratamiento con paroxetina, concluyó que la comor- a la hora de decidir el ritmo de aumento. No se debe superar el
bilidad psiquiátrica influye adversamente en la respuesta a la
máximo de dosis recomendada para niños y adolescentes.
farmacoterapia con paroxetina en el TOC pediátrico y aumentó
significativamente el riesgo de recaída tras la retirada del trata- t."/5&/*.*&/50
miento. Otra conclusión de los autores fue que los resultados de
los estudios con asignación aleatoria y controlados en niños con Cuando el paciente responde al tratamiento con un ISRS, la
TOC que utilizan criterios de exclusión múltiples pueden no ser medicación debe mantenerse al menos seis meses post-remi-
generalizables a muestras naturalísticas de TOC31. sión. La remisión se alcanza cuando los síntomas no son ya
clínicamente significativos y el niño o adolescente experimenta
En el caso de que el paciente con TOC presente depresión un funcionamiento pleno durante al menos doce semanas.
comórbida clínicamente significativa, el ISRS indicado es la
GMVPYFUJOB con el consecuente seguimiento y monitorización t*/5&3361$*»/03&%6$$*»/
de pensamientos y conductas autolíticas16.
Cuando se ha conseguido la remisión (es decir cuando los
Los resultados de un ensayo clínico con asignación aleatoria y síntomas no son significativos y el paciente ha recuperado su
controlado con placebo indica que los pacientes tratados con pleno funcionamiento), se ha mantenido durante seis meses y
fluoxetina, durante 16 semanas, presentan una mejoría de los el paciente y su familia lo desean, se debe hacer un intento de
síntomas del TOC significativamente mayor que los asignados disminuir la dosis. Se debe informar al paciente y a su familia
a placebo. Estos resultados indican que fluoxetina es eficaz en de la posibilidad de aparición de síntomas de discontinuación/
TOC, aunque los efectos de fluoxetina tardan más de 8 semanas retirada (mareos, alteraciones sensoriales, trastornos del sueño,
en manifestarse totalmente23. astenia, agitación o ansiedad, nauseas y/o vómitos, temblores
y cefalea) así como de la posibilidad de recaídas. Si aparecen
estos síntomas debe aconsejarse contactar con su médico; para
6. INDICACIONES DE MANEJO evitarlos, se debe disminuir la dosis gradualmente a lo largo de
FARMACOLÓGICO varias semanas en función de las necesidades de cada paciente.
A lo largo de la retirada se continuará con el tratamiento psico-
t*/*$*0 lógico, ya que puede reducir el riesgo de recaídas.
Al inicio del tratamiento, se debe informar al paciente y a la
familia de la demora en la respuesta terapéutica (alrededor de 12
semanas), la duración del tratamiento, los posibles efectos secun- 7. EVOLUCIÓN A LARGO PLAZO
darios y la necesidad de tomar la medicación correctamente.
Estas explicaciones deberían ir acompañadas de información Hay pocos datos en la literatura para poder analizar la influencia
por escrito. También se les debe informar acerca de la posible del tratamiento con ISRS sobre la evolución a largo plazo del
aparición de conducta suicida, autolesiones u hostilidad, parti- TOC iniciado en la infancia y adolescencia33.
cularmente al inicio del tratamiento, recomendando el contacto
En un estudio revisado que analizaba la eficacia del tratamiento
urgente con el médico si aparece esta sintomatología16.
a largo plazo con sertralina22 en pacientes con TOC moderado a
Aunque existe riesgo de aparición de ideación suicida en pacientes grave, con una duración media de la enfermedad de 5 años, se
pediátricos con tratamiento antidepresivo, tanto en depresión observó que más del 85% de los pacientes lograban la remisión
como en ansiedad o TOC, el riesgo relativo de ideación suicida/ completa o parcial de la enfermedad tras un año de tratamiento
intento suicida es clínicamente más significativo en el grupo de con sertralina. También se observó que el tratamiento a largo
depresión que en el grupo de TOC. El NNT (number needed to plazo con sertralina produjo tasas de remisión completa mucho
treat) se sitúa en 6 en TOC, mientras que el NNH (number needed mayores que las que se observaban al final de 12 semanas de
to harm) se sitúa en 200, lo cual indica un perfil riesgo-beneficio tratamiento.

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PUNTOS CLAVE

tEl Trastorno Obsesivo-Compulsivo (TOC) se caracteriza por tCuando aparecen obsesiones o compulsiones relacionadas
obsesiones y/o compulsiones recurrentes suficientemente con acontecimientos vitales estresantes o con factores
graves como para provocar malestar o interferir en la vida propios del desarrollo, la psicoterapia u otras intervenciones
de quien lo sufre. psicosociales enfocadas a estos desencadenantes pueden ser
útiles por si solos. La primera parte de un programa de trata-
tEs más frecuente en niños que niñas (3:2), aunque la propor- miento, y muy importante, es la psicoeducación.
ción se equilibra en la adolescencia. La edad media de inicio
del trastorno es de 10 años; en los chicos se inicia a edades tEn casos crónicos o graves, donde la terapia conductual no
inferiores (prepuberales) que en las chicas y en los TOC de es efectiva, no está disponible o el paciente elige medicación,
inicio más temprano es más probable encontrar algún fami- los Inhibidores Selectivos de la Recaptación de Serotonina
liar afectado de TOC o trastorno por Tics. Habitualmente los (ISRS) son la primera opción de tratamiento efectivo tanto
síntomas en niños son similares a los de los adultos. solos como en combinación con terapia conductual.
tLa elección de un plan terapéutico variará en función de cada tEn el caso de que el paciente con TOC presente depresión
uno de los síntomas y factores relacionados con el niño y su comórbida clínicamente significativa, el ISRS indicado es la
familia. fluoxetina, con el consecuente seguimiento y monitorización
de pensamientos y conductas autolíticas.
tLas obsesiones o compulsiones leves que no son fuente
de estrés o de dificultades importantes en la capacidad
funcional, pueden beneficiarse de un seguimiento a lo largo
del tiempo sin el inicio de un tratamiento específico.

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FICHAS DE FÁRMACOS
Fuente de datos: Adaptado de Fichas Técnicas. Disponible en:
https://sinaem4.agemed.es/consaem/fichasTecnicas.do?metodo=buscar&version=new.
Para más información consultar dicha fuente.

Tabla 1.

1SJODJQJPBDUJWP 'MVWPYBNJOB
Dosis, pauta t%PTJTJOJDJPNHEÓB&OMBQSJNFSBTFNBOBEFžB›EFMBEPTJTEFJOJDJP&MSJUNPEFBVNFOUPEFEPTJTEFCF
y duracion de dejar un tiempo mínimo de 4 a 7 días, teniendo en cuenta que existe una demora de respuesta que se puede
tratamiento alargar hasta 12 semanas.
t%PTJTNÈYJNBFOOJ×PTOPEFCFFYDFEFSEFNHEÓB
t%PTJTNBOUFOJNJFOUPNHEÓB
El tratamiento debe ser iniciado y supervisado por un especialista.
Vía de administración Oral
Indicación autorizada TOC en niños y adolescentes de 8-18 años
Reacciones adversas t'SFDVFOUFT/BVTFBTBDPNQB×BEBTPDBTJPOBMNFUFEFWØNJUPT BTUFOJB EPMPSEFDBCF[B NBMFTUBS EPMPS
abdominal, anorexia, estreñimiento, diarrea, sequedad de boca, dispepsia, palpitaciones, taquicardia, agitación,
ansiedad, mareos, insomnio, nerviosismo, somnolencia, temblor, sudoración.
t0USBTQPDPGSFDVFOUFTIJQPUFOTJØOBSUSBMHJB NJBMHJB BUBYJB DPOGVTJØO SFBDDJPOFTFYUSBQJSBNJEBMFT 
alucinaciones, alteraciones de la eyaculación y reacciones cutáneas de hipersensibilidad.
t3BSBTUSBTUPSOPTEFMBGVODJØOIFQÈUJDB DPOWVMTJPOFT NBOJB HBMBDUPSSFB GPUPTFOTJCJMJEBE
t0USPTHBOBODJBPQÏSEJEBEFQFTP TÓOESPNFTFSPUPOJOÏSHJDP FQJTPEJPTTJNJMBSFTBMTÓOESPNFOFVSPMÏQUJDP
maligno, hiponatremia.
t.VZSBSBNFOUFQBSFTUFTJB BOPSHBTNJBZBMUFSBDJPOFTEFMHVTUP&OFMUSBUBNJFOUPEFOJ×PTZBEPMFTDFOUFTGVFSB
de ensayos clínicos, se han observado convulsiones.
t4ÓOUPNBTEFSFUJSBEB NBSFPT USBTUPSOPTTFOTPSJBMFT USBTUPSOPTEFMTVF×P BHJUBDJØOZBOTJFEBE JSSJUBCJMJEBE 
confusión, inestabilidad emocional, nauseas y/o vómitos y diarrea, sudoración, palpitaciones, temblores y cefalea).
En estudios revisados, las más frecuentes fueron las molestias abdominales e incremento de la actividad motora.
Precauciones Supervisar, especialmente, el riesgo de comportamiento e ideación suicida. Sopesar el riesgo/beneficio de la
especiales instauración de este tratamiento.
Precaución con la retirada del fármaco. Se recomienda retirada gradual durante un periodo de varias semanas o meses.
Precaución en pacientes con insuficiencia renal y hepática, iniciar dosis más bajas y cuidadosamente monitorizados.
Puede producir una elevación de los enzimas hepáticos, alteración del control de la glicemia.
Puede aumentar el riesgo de hemorragias en pacientes tratados con anticoagulantes orales.
Contraindicaciones t)JQFSTFOTJCJMJEBEDPOPDJEBBGMVWPYBNJOB
t&ODPNCJOBDJØODPO*."0
Interacciones t$PO*."04 con otros agentes serotoninérgicos y/o neurolépticos, hierba de San Juan, litio, alcohol, medicamentos
que se metabolizan a través del citocromo P450, CPYA2 (tacrina, teofilina, metadona, mexiletina..) y CYP3A4
(carbamacepina, ciclosporina..).
tNo administrar junto a terfenadina, astemizol o cisaprida por riesgo de prolongación del intervalo QT/Torsade de Pointes.
Observaciones "MUFSOBUJWBTGBSNBDPMØHJDBT
t0USPT*434ZDMPNJQSBNJOBTPCSFUPEPTJIBOTJEPFGFDUJWPTBOUFSJPSNFOUF
t'MVPYFUJOB FODBTPEFEFQSFTJØODPNØSCJEB
Como estrategia de aumento pueden añadirse neurolépticos.
Se entiende por remisión la reducción de los síntomas a niveles clínicamente no significativos y un funcionamiento
plenamente normal del niño o adolescente de al menos doce semanas de duración, en función de las necesidades
de cada paciente.
Durante la disminución de la dosis, vigilar la aparición de síntomas de retirada. La reducción debe ser progresiva
durante varias semanas.
El tratamiento debe ser iniciado y supervisado por un especialista.

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Tabla 2.
1SJODJQJPBDUJWP 4FSUSBMJOB
Dosis, pauta t%PTJTEFJOJDJPNHEÓB OJ×PTEFBB×PT

y duracion de t%PTJTEFJOJDJPNHEÓB OJ×PTEFB×PT

tratamiento
t%PTJTNÈYJNBNHEÓB&MNFOPSQFTPDPSQPSBMEFMPTOJ×PTFODPNQBSBDJØODPOFMEFMPTBEVMUPTEFCF
tenerse en cuenta al aumentar la dosis por encima de 50 mg con el fin de evitar una dosis excesiva.
%FCFBENJOJTUSBSTFVOBWF[BMEÓB QPSMBNB×BOBPQPSMBOPDIF&OMBQSJNFSBTFNBOBEFžB›EFMBEPTJTEF
inicio. Dado que la semivida de eliminación de sertralina es de 24 horas, los cambios de dosis no deberían hacerse
en intervalos de menos de 1 semana.
El tratamiento debe ser iniciado y supervisado por un especialista.
Vía de administración Oral
Indicación autorizada Trastornos obsesivo-compulsivos en niños y adolescentes (6-17 años).
Reacciones adversas t'SFDVFOUFNFOUF 
DFGBMFB OÈVTFBT WØNJUPT EJBSSFB EPMPSBCEPNJOBM EJTQFQTJB BOTJFEBE JOTPNOJPP
somnolencia.
t0DBTJPOBMNFOUF 
UFNCMPS NBSFPT TFRVFEBEEFCPDB BTUFOJB TFEBDJØO SFEVDDJØOEFMBMJCJEP 
sudoración, anorexia, estreñimiento, síntomas gripales, tos, disnea, sofocos, palpitaciones, trastornos de la
acomodación, congestión nasal, alteraciones del sueño, incontinencia urinaria.
t3BSBNFOUF 
DPOWVMTJPOFT BDBUJTJB BMVDJOBDJPOFT BUBYJB OFVSPQBUÓB QTJDPTJT FTUPNBUJUJT HJOHJWJUJT 
rinitis, epistaxis, alopecia, sequedad de la piel, urticaria, edema, escalofríos, hipo, hipotensión ortostática,
migraña, taquicardia, arritmia cardíaca, amenorrea, cistitis, disuria, impotencia, conjuntivitis, tinnitus, alteraciones
hepatobiliares: hepatitis, incremento de los valores de transaminasas, ictericia.
t&YDFQDJPOBMNFOUF 
QBSFTUFTJB EJTUPOÓB IFNPSSBHJBEJHFTUJWB CSBEJDBSEJB EJQMPQJB GPUPGPCJB QÞSQVSB 
prurito, dermatitis de contacto.
t4ÓOESPNF4FSPUPOJOÏSHJDP EFCJMJEBE IJQFSSFGMFYJB BMUFSBDJPOFTEFMBDPPSEJOBDJØO

Precauciones Deberá realizarse un especial control clínico en pacientes con epilepsia, debiendo modificarse la dosificación en
especiales insuficiencia renal y/o hepática.
Los comportamientos relacionados con el suicidio (intentos e ideas de suicidio), y la hostilidad (mayoritariamente
agresión, comportamientos oposicionistas e ira) fueron observadas con mayor frecuencia en ensayos clínicos
en niños y adolescentes tratados con antidepresivos frente a los tratados con placebo. Si se decidiese iniciar
el tratamiento, por una necesidad clínica, el paciente debe ser cuidadosamente monitorizado para detectar
la aparición de síntomas de suicidio. Además se carece de datos sobre la seguridad a largo plazo en niños y
adolescentes en lo que se refiere al crecimiento, madurez y el desarrollo cognitivo y conductual.
Precaución cuando se utilice en pacientes con antecedentes de mania/hipomania, éstos deben ser cuidadosamente
vigilados.
Los síntomas psicóticos pueden llegar a agravarse en pacientes con esquizofrenia.
Se aconseja que al suspender el tratamiento, se reduzca gradualmente la dosis de sertralina durante un periodo
de varias semanas o incluso meses de acuerdo con las necesidades de cada paciente, para evitar los síntomas de
retirada (mareos, alteraciones sensoriales, alteraciones del sueño (incluyendo insomnio y pesadillas), agitación o
ansiedad, nauseas y/o vómitos, temblor y cefalea).
El uso de sertralina se ha asociado con el desarrollo de acatisia.
En pacientes con diabetes el tratamiento con un ISRS puede alterar el control glucémico, por lo que debe ser
monitorizado.
Contraindicaciones t$POUSBJOEJDBEPFOBMFSHJBBTFSUSBMJOB JOTVGJDJFODJBSFOBMPIFQÈUJDBHSBWF FQJMFQTJBOPDPOUSPMBEB BTÓDPNP
pacientes que reciban terapia electroconvulsiva.
t$POUSBJOEJDBEPFMUSBUBNJFOUPDPODPNJUBOUFDPO*."0TJSSFWFSTJCMFTEFCJEPBMSJFTHPEFTÓOESPNF
serotoninérgico, con síntomas tales como agitación, temblor e hipertermia.
t$POUSBJOEJDBEBMBBENJOJTUSBDJØODPODPNJUBOUFDPOQJNP[JEB TFMFHJMJOB NPDMPCFNJEB MJOF[PMJE

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1SJODJQJPBDUJWP 4FSUSBMJOB DPOUJOVBDJØO

Interacciones t$POEFQSFTPSFTEFM4/$ BMDPIPMZPUSPTNFEJDBNFOUPTTFSPUPOJOÏSHJDPT-BBENJOJTUSBDJØODPOKVOUBEFTFSUSBMJOB


con otros medicamentos que potencian los efectos de la neurotransmisión serotoninérgica, tales como triptófano,
fenfluramina, agosnistas 5-HT o el medicamento a base de plantas hierba de San Juan (hypericum perforatum),
se ha de realizar con precaución y se ha de evitar siempre que sea posible, debido a una posible interacción
farmacodinámica.
t1SFDBVDJPOFTFTQFDJBMFTFOMBBENJOJTUSBDJØODPOKVOUBDPOMJUJP GFOJUPÓOB USJQUBOPT XBSGBSJOB DJNFUJEJOB 
digoxina, atenolol, medicamentos que afectan a la función plaquetaria, medicamentos metabolizados por el
citocroma P450.
Observaciones "MUFSOBUJWBTGBSNBDPMØHJDBT
t0USPT*434ZDMPNJQSBNJOBTPCSFUPEPTJIBOTJEPFGFDUJWPTBOUFSJPSNFOUF
t'MVPYFUJOB FODBTPEFEFQSFTJØODPNØSCJEB
t$PNPFTUSBUFHJBEFBVNFOUPQVFEFOB×BEJSTFOFVSPMÏQUJDPT
Se entiende por remisión la reducción de los síntomas a niveles clínicamente no significativos y un funcionamiento
plenamente normal del niño o adolescente de al menos doce semanas de duración, en función de las necesidades
de cada paciente.
Durante la disminución de la dosis, vigilar la aparición de síntomas de retirada. La reducción debe ser progresiva
durante varias semanas.
El tratamiento debe ser iniciado y supervisado por un especialista.

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Tabla 3.
1SJODJQJPBDUJWP 'MVPYFUJOB
Dosis, pauta t%PTJTJOJDJPNHEÓB
y duracion de t%PTJTNÈYJNBSFDPNFOEBEBNHEÓB
tratamiento
Los ajustes de dosis deberán realizarse cuidadosamente y de forma individualizada con el fin de mantener al paciente
con la menor dosis efectiva. Después de una o dos semanas se puede incrementar la dosis hasta 20 mg/día.
Si no se alcanza beneficio clínico en 9 semanas, reconsiderar el tratamiento. Reevaluar tratamiento después de 5-6
meses para aquellos pacientes pediátricos que respondan.
El tratamiento debe ser iniciado y supervisado por un especialista.
Vía de administración Oral.
Indicación autorizada Depresión moderada a grave en niños y adolescentes a partir de 8 años de edad, que no han respondido a
psicoterapia después de 4 a 6 sesiones, junto a psicoterapia.
No tiene la indicación autorizada en TOC.
Reacciones adversas t"MJOJDJPEFMUSBUBNJFOUPNPMFTUJBTHBTUSPJOUFTUJOBMFT DFGBMFB NBSFP BMUFSBDJPOFTEFMTVF×P UFNCMPS GBUJHB 
inquietud psicomotriz.
t.FOPTGSFDVFOUF*SSJUBCJMJEBE JODSFNFOUPEFJEFBTTVJDJEBT BVUPMFTJPOFTZDPOEVDUBTBHSFTJWBT
t0USBTBMUFSBDJØOEFMBHMVDFNJB TVEPSBDJØO BMUFSBDJØOFQSVFCBTIFQÈUJDBT)JQFSTFOTJCJMJEBEBGMVPYFUJOB 
Síndrome serotoninérgico. Disminución del apetito con pérdida de peso.
Precauciones Vigilar el riesgo de conductas suicidas, autolesivas y hostiles, particularmente al inicio del tratamiento.
especiales
Debe administrarse con precaución a pacientes con historia de manía o hipomanía ya que puede activar o iniciar un
episodio.
Precaución en pacientes con historia previa de convulsiones.
Hacer un seguimiento del crecimiento y desarrollo puberal.
Al terminar el tratamiento se recomienda disminuir gradualmente la dosis por la posible aparición de síntomas de
retirada. Como mínimo una o dos semanas, pero pueden ser varias.
Contraindicaciones t)JQFSTFOTJCJMJEBEBGMVPYFUJOBPBDVBMRVJFSBEFTVTFYDJQJFOUFT
t&ODPNCJOBDJØODPO*."0
Interacciones t*OIJCJEPSFTEFNPOPBNJOPPYJEBTB *."0
-BBENJOJTUSBDJØODPOKVOUBEFVO*."0DPOGMVPYFUJOBQVFEFHFOFSBS
reacciones adversas graves y a veces fatales, tales como: hipertermia, rigidez, variaciones en los signos vitales,
delirio, coma e incluso, la muerte. El tratamiento con fluoxetina sólo debe comenzar 2 semanas después de la
interrupción de un tratamiento con un IMAO irreversible y el día después de la interrupción de un tratamiento
con un IMAO-A reversible. Se deberá esperar por lo menos cinco semanas después de suspender fluoxetina para
iniciar un tratamiento con IMAO.
t'FOJUPÓOB NFEJDBNFOUPTTFSPUPOJOÏSHJDPT MJUJP USJQUØGBOP DBSCBNB[FQJOB IJFSCBEF4BO+VBO BOUJDPBHVMBOUFT
orales, alcohol, terapia electroconvulsiva, medicamentos que se metabolizan por la vía del citocromo CYP2D6.
Observaciones "MUFSOBUJWBTGBSNBDPMØHJDBT
t0USPT*434ZDMPNJQSBNJOBTPCSFUPEPTJIBOTJEPFGFDUJWPTBOUFSJPSNFOUF
t$PNPFTUSBUFHJBEFBVNFOUPQVFEFOB×BEJSTFOFVSPMÏQUJDPT
Indicado como primera elección si el paciente presenta depresión comórbida.
No tiene la indicación autorizada en TOC por lo que se prescribirá siguiendo la legislación vigente para esta
indicación.

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AUTORES DE LA REVISIÓN BIBLIOGRAFÍA


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METODOLOGÍA DE LA BÚSQUEDA
BIBLIOGRÁFICA
(Grupo TOC y TICs)
Para la recuperación de la información de evidencia científica sión establecidos por el grupo de trabajo, se decide la selección
respecto a la eficacia del uso de fármacos en el trastorno obse- de 17 referencias bibliográficas para su revisión y volcado. De
sivo compulsivo (TCO) y trastorno por tics (TICs) en niños y éstas, 12 corresponden al bloque de EO y 5 al bloque de SSS.
adolescentes se emplearon las fuentes de información siguiendo La revisión y volcado se realizó en documentos normalizados.
el modelo de “5S” de Haynes1 de organización estableciendo También se incluyeron 11 referencias para lectura de las que
dos grupos: documentos de síntesis, sinopsis y sumarios de la 4 corresponden al bloque de SSS y 7 del bloque de estudios
evidencia (SSS) y estudios originales (EO). originales.

Dentro de documentos SSS se buscan Guías de Práctica Para la selección de los artículos se tuvo en cuenta en primer
Clínica, revisiones sistemáticas, meta-análisis, revistas secun- lugar la metodología del ensayo clínico (asignación aleatoria,
darias e informes de evaluación. Para su localización se utiliza doble ciego y controlado con placebo), el año de publicación
TripDatabase, la Biblioteca Cochrane Plus, Clinical Evidence, reciente, tamaño de la muestra y edad de la muestra (niños y
UpToDate, MEDLINE (OVID), EMBASE (OVID) y PsycINFO adolescentes).
(Proquest).
Tras la revisión de esta primera búsqueda el grupo de trabajo se
Para la localización de los EO se buscan artículos que sean decidió incorporar a la revisión 10 referencias adicionales, para
ensayos clínicos de intervenciones terapéuticas farmacológicas su revisión, localizadas mediante búsqueda manual entre las
empleando las bases de datos automatizadas MEDLINE (OVID), que se encontraban, al menos, un estudio realizado en adultos.
EMBASE (OVID) y PsycINFO (Proquest). Esta decisión se adoptó ante la falta de estudios en niños en el
caso concreto de pautas de refuerzo.
En estas bases de datos se realiza una primera búsqueda en
febrero de 2007 (ver tabla con estrategias de búsqueda) y una Tras valorar escasez de la evidencia localizada el grupo decide
segunda en julio de 2008. Las búsquedas estuvieron centradas realizar una segunda búsqueda en julio de 2008 en las bases
en la localización de artículos relacionados con el tratamiento de datos MEDLINE y EMBASE aumentando el límite de tiempo
farmacológico del trastorno obsesivo-compulsivo, tics y a los 10 últimos años y centrado en los medicamentos tiapride,
síndrome de Tourette en niños y adolescentes. sulpiride, pimozide y haloperidol. De las 41 referencias obte-
nidas se seleccionaron 7 para su revisión y volcado.
Para la estrategia de búsqueda en las bases de datos MEDLINE
y EMBASE relativa a ensayos clínicos y revisiones sistemáticas Como parte de la metodología general de la Guía, para los
se utilizaron filtros metodológicos validados. ensayos clínicos con asignación aleatoria (ECA), se pasa la
escala Jadad2 para constatar la calidad de dichos estudios
En las búsquedas en las bases de datos se emplearon diversos y apoyar la selección de los fármacos en esta patología. De
límites como la población de estudio empleando como rango los doce artículos seleccionados del grupo ninguno obtuvo el
de edad niños y adolescentes y límites de idiomas para excluir máximo de puntuación de 5 puntos, cinco ensayos clínicos con
aquellos escritos en lenguas diferentes al inglés, español asignación aleatoria obtuvieron 4 puntos, cinco ECAs 3 puntos,
y francés. Por último, en la búsqueda de ensayos clínicos se un ECA 2 puntos y un ECA 1 puntos.
emplea el límite temporal de año de publicación a los últimos
5 años. Para la búsqueda de otro tipo de documentos (SSS) no
hay limitación temporal.
BIBLIOGRAFÍA
Los registros obtenidos de las bases de datos se vuelcan en el
1 Haynes RB. Of studies, syntheses, synopses, summaries, and systems:
programa gestor de referencias Referente Manager® eliminán- the "5S" evolution of information services for evidence-based
dose las referencias duplicadas. healthcare decisions. Evid Based Med. 2006 Dec;11(6):162-164.
Como resultado de la búsqueda se obtuvieron 113 referencias 2 Jadad AR, Moore RA, Carroll D, Jenkinson C, Reynolds DJ, Gavaghan
bibliográficas (53 correspondientes a estudios originales (EO) y DJ, McQuay HJ. Assessing the quality of reports of randomized
60 correspondientes al bloque de sumarios, sinopsis y síntesis clinical trials: is blinding necessary? Control Clin Trials. 1996
(SSS)). Tras su valoración, y siguiendo unos criterios de inclu- Feb;17(1):1-12.

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en SALUD MENTAL
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Tabla 4. Estrategia de búsqueda en las diferentes bases de datos.


.&%-*/& 07*%
&.#"4& 07*%
1TZD*/'0 1SPRVFTU

1. Obsessive-Compulsive Disorder/ Obsessive Compulsive Disorder/ (DE("OBSESSIVE


COMPULSIVE DISORDER")
2. Obsessive-Compulsive Disorder.ti. Obsessive Compulsive Disorder.ti.
OR DE("TOURETTE
SYNDROME")) AND
MTH(TREATMENT
OUTCOME CLINICAL TRIAL)

3. Tourette Syndrome/ GILLES DE LA TOURETTE SYNDROME/


4. 1 or 2 or 3 1 or 2 or 3
5. drug therapy.fs. exp central nervous system agents/
6. 4 and 5 dt.fs.
7. 5 or 6
8. 4 and 7

$PSSFTQPOEFODJBDirección General de Gestión Económica y de Compras de Productos Sanitarios y Farmacéuticos. Subdirección de


Compras de Farmacia y Productos Sanitarios. Plaza de Carlos Trías Bertrán nº 7 planta 5ª. Edificio Sollube. 28020. Madrid. Tf: 914269917.
&EJUBConsejería de Sanidad. Dirección General de Gestión Económica y de Compras de Productos Sanitarios y Farmacéuticos.
%PDVNFOUPEJHJUBMPixel Creación y Producción Gráfica, S.L.
ISSSN: 1697-6274 / Depósito Legal: M-13724-2004

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septiembre/2010 - Nº 8

Recomendaciones
Farmacoterapéuticas en
Salud Mental
1. Introducción
 t%FTDSJQDJØOZDMÓOJDB Trastornos por Tics
en niños y adolescentes
 t%JBHOØTUJDPEJGFSFODJBMZ
DPNPSCJMJEBE
 t&QJEFNJPMPHÓB
 t&UJPMPHÓB
 t&WBMVBDJØO
2. Tratamiento. 1. INTRODUCCIÓN
Recomendaciones
CBTBEBTFOMBFWJEFODJB Los Trastornos por Tics se inician habitualmente La característica psicopatológica esencial de
2.I. Psicoeducación para en la edad escolar y en la mayoría de los casos los Trastornos por Tics 4 son los tics motores
QBDJFOUFTZGBNJMJBT evolucionan como trastornos neuropsiquiátricos ZWPDBMFT, que deben estar presentes en algún
2.II. Tratamiento complejos con problemas asociados. Sólo alre- momento durante la enfermedad. Un tic es un
QTJDPGBSNBDPMØHJDP dedor del 15% de los pacientes permanecen con NPWJNJFOUPNPUPSPWPDBMJ[BDJØOFTUFSFPUJ-
 t"OUBHPOJTUBT los tics como síntoma único. Se acepta que los QBEP OPSÓUNJDP SFDVSSFOUF SÈQJEPZTÞCJUP
EPQBNJOÏSHJDPT
factores genéticos, neurológicos y psicológicos y su RVFTFQSPEVDFFOTBMWBT. Habitualmente se
"OUJQTJDØUJDPTUÓQJDPT
- )BMPQFSJEPM interacción tienen un papel esencial en la etiología inician en áreas proximales del cuerpo (cabeza,
- Pimozida de estos trastornos. Para el clínico es importante cara y cuello), pueden ser movimientos aislados
- 4VMQJSJEBZ5JBQSJEB
conocer los patrones temporales de evolución a o fragmentos de movimientos más complejos.
"OUJQTJDØUJDPTBUÓQJDPTEF
‹HFOFSBDJØO corto y largo plazo para decidir cuándo iniciar las Representan acciones de grupos musculares en
- Risperidona intervenciones terapéuticas, cambiar los fármacos una o varias partes del cuerpo (al mismo tiempo
- Ziprasidona o simplemente cuando sólo ofrecer un seguimiento o secuencialmente). Los tics no tienen un objetivo,
- 0MBO[BQJOB
 t#FO[PEJBDFQJOBT y apoyo a la familia para afrontar los problemas parecen no tener sentido, son repentinos y pueden
 t0USPT psicosociales asociados1. ser precedidos de una sensación sensorio-motriz
- 5PYJOBCPUVMÓOJDB en forma de tensión nerviosa, presión, urgencia de
- "HFOUFTEPQBNJOÏSHJDPT
1FSHPMJEB DESCRIPCIÓN Y CLÍNICA impulso hacia el movimiento, incluso sensaciones
- .FUPDMPQSBNJEB dolorosas. Varían a lo largo del tiempo, en forma,
- Ondansetron
Las características principales de los trastornos por intensidad, frecuencia y complejidad. Pueden
2.III. Otros abordajes ser simples o complejos según el número de
terapéuticos Tics son: presencia de tics motores y/o vocales (ver
 t5FSBQJBDPHOJUJWP definición abajo), de comienzo en áreas proximales músculos implicados. Los tics vocales pueden ser
DPOEVDUVBM5SBUBNJFOUP (cabeza, cara, cuello), suceden muchas veces al día, desde carraspeos hasta fragmentos de palabras
EF3FWFSTJØOEF)ÈCJUPZ o frases. Algunos pacientes repiten movimientos
&YQPTJDJØODPO1SFWFODJØO al menos durante 4 meses, supresión de los tics por
de Respuesta (para Tics cortos períodos de tiempo (en especial después de (ecopraxia) y palabras de otra gente (ecolalia) o
asociados a TOC) los 10 años), presencia de sensaciones sensoriomo- sus propias palabras (palilalia). En ocasiones tras
 t"OUJCJØUJDPT1MBTNBGÏSFTJT
JOGVTJØOJOUSBWFOPTB trices premonitorias antes de los tics (después de el tic los pacientes sienten una sensación “de
EFJONVOPHMPCVMJOBT
 los 10 años) y presencia de tics durante el sueño. no haber terminado” y repiten el movimiento de
&TUJNVMBDJØONBHOÏUJDB forma voluntaria hasta que se desprenden de esa
USBOTDSBOFBM&TUJNVMBDJØO
DFSFCSBMQSPGVOEB La clasificación de los Trastornos por Tics es seme- sensación4.
2.IV. Situaciones jante en los dos sistemas de clasificación CIE-102
QBSUJDVMBSFT y DSM-IV3. En la CIE-10 existen cuatro catego- Los tics ocurren en salvas a lo largo del día y
 t5SBTUPSOPQPS5JDTZ rías: trastorno por tics transitorios (la duración no cambian en severidad en semanas o meses. Entre
5SBTUPSOPQPS%ÏGJDJU es mayor de 12 meses), trastorno crónico de tics los episodios hay períodos de tics distónicos, es
EF"UFODJØODPO
)JQFSBDUJWJEBE 5%")
 motores o vocales (tics motores o vocales por un decir movimientos que tienen una larga duración.
período de más de 1 año), Síndrome de Gilles de Algunos pacientes tienen una disminución de la
1VOUPTDMBWF
'JDIBTEFGÈSNBDPT la Tourette (ST) (tics crónicos motores y vocales por gravedad de los tics a partir de los veinte años. Sin
un período de más de 1 año), trastorno por tics no embargo, la forma más grave, el Síndrome de Gilles
Autores.
Bibliografía. especificado (no cumple criterios de los trastornos de la Tourette (ST) permanece en la edad adulta en
Metodología de la búsqueda. anteriores). dos tercios de los casos. Los tics aumentan durante
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actividades emocionales (ansiedad, felicidad), con el estrés, el matología. Pueden asociarse ocasionalmente con síndrome
cansancio o el uso de estimulantes. Mientras que el trabajo de Asperger. Muchos niños con trastornos por tics tienen
concentrado, la relajación muscular, la posición supina así como lenguaje poco fluido, incluso tartamudeo. En casi el 50% de
el uso de cannabis y alcohol disminuye los tics. Habitualmente casos con ST hay trastorno hipercinético comórbido; estos
no interfieren en los movimientos voluntarios dirigidos a un niños tienen un alto riesgo de psicopatología incluida impul-
objetivo. Pueden observarse también durante el sueño (son sividad, problemas de sueño, del aprendizaje, emocionales y
menos complejos e intensos)4. conductuales6.

En cuanto al DVSTPDMÓOJDP, son de inicio en la infancia, la Existe una clara asociación entre los síntomas de naturaleza
gravedad se incrementa en la pubertad, se atenúa la clínica en obsesivo-compulsiva y los trastornos por tics. Alrededor del
alguna medida después de la pubertad y tiende a la estabilidad 30-60% de los pacientes ST sufren de obsesiones y compul-
en la edad adulta. Los tics fluctúan en gravedad a lo largo del siones y al menos un 30% cumplen criterios diagnósticos de
tiempo con DJDMPT que duran una media de unos 3 meses. Los Trastorno Obsesivo-compulsivo (TOC). Por la similitud feno-
ciclos de mejoría y empeoramiento pueden dificultar la evalua- menológica puede ser difícil diferenciar entre compulsiones y
ción del tratamiento4. tics complejos. Las compulsiones están relacionadas con un
objetivo (reducir ansiedad interior), más que con un grupo
Los Trastornos por Tics parecen representar un continuum de muscular. El tic no tiene la función de reducir la ansiedad.
gravedad desde tics transitorios a trastornos de tics vocales o La relación más cercana, y difícil de distinguir entre TOC y ST
desde tics motores hasta ST4. puede ser observada en el fenómeno anteriormente descrito
de sensación de “no haber terminado”. En los TOC con tras-
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL Y COMORBILIDAD torno de tics, la conducta obsesivo-compulsiva se focaliza
más en síntomas sensorio-motrices, agresivos y sexuales,
El diagnóstico del ST y de otros Trastornos por Tics (trastorno sin embargo en los TOC sin tics la sintomatología de pensa-
por tics motores o vocales crónico, trastorno por tics transi- mientos e imágenes se relaciona más con ansiedad (conta-
torio, trastorno por tics no especificado), se realiza en base a minación, lavar,...). Es frecuente hallar en la historia clínica
la presencia de tics motores y/o vocales. El diagnóstico exige antecedentes de ansiedad, síntomas depresivos, aunque en la
además que el inicio de los síntomas se haya producido antes de mayoría de ocasiones los síntomas emocionales parecen ser
los 18 años de edad, que sean estables (presencia de síntomas secundarios al curso crónico y las dificultades psicosociales.
de más de 12 meses) y que además sean limitantes5. Puede Además el tratamiento con neurolépticos puede provocar
realizarse, con certeza, por la historia médica, exploración síntomas depresivos y rechazo escolar. Entre el 12-44% de
clínica y valoración neurológica y debe diferenciarse de otros pacientes con ST pueden presentar alteraciones del sueño
trastornos del movimiento6. incluidas parasomnias. Hay una reducción de la eficiencia del
sueño que puede conducir a somnolencia diurna e incremento
Los síntomas más destacados del ST son los tics motores y de la sensibilidad al estrés y más tics. El nivel intelectual es
vocales múltiples y crónicos. Estos son los signos en los que se habitualmente normal, pero alrededor del 50% con ST tienen
suele basar el diagnóstico del trastorno, si bien la severidad de problemas de aprendizaje6.
los tics varía ampliamente. A pesar de que un número significa-
tivo de pacientes tiene tics graves e invalidantes, hay estudios
familiares recientes que indican que en la mayoría de los indivi- EPIDEMIOLOGÍA1
duos con el trastorno los síntomas son relativamente leves y no Según los estudios epidemiológicos comunitarios de los últimos
suelen precisar atención médica5. 15 años, los tics pueden observarse en el 10% de niños esco-
Las enfermedades médicas y síntomas que deben incluirse en lares y en 4-18% de los adolescentes. Los tics crónicos tienen
el diagnóstico diferencial son: epilepsia, manierismo, síndrome una prevalencia de 3-4%. Para el ST la prevalencia es del 1%
de piernas inquietas, blefarospasmo, tortícolis, estereotipias, (rango: 0,03-3%). En niños y adolescentes la prevalencia es
corea, distonía, mioclonus, atetosis, acatisia, balismos (algunos claramente mayor que en adultos, lo cual refleja la tendencia
probablemente en el contexto de enfermedad de Wilson, corea a la remisión con la edad. En los estudios de seguimiento se
de Sydenham, hipertiroidismo, encefalitis, traumatismo craneal, observa que la tasa de remisión para tics simple/múltiples es
tumor craneal o intoxicaciones)6. del 50-70%; en el ST un tercio de los pacientes estará libre de
síntomas en la vida adulta. Los niños tienen una tasa mayor que
Los trastornos psiquiátricos se deben tener en cuenta, tanto las niñas (3-4,5/1)1.
para el diagnóstico diferencial como para la posible existencia
de trastornos comórbidos. Alrededor del 85% de pacientes ETIOLOGÍA7
con ST tienen otros trastornos neuropsiquiátricos asociados,
que son responsables en parte de la alteración psicosocial. La patofisiología es determinada principalmente por factores
La comorbilidad es más frecuente cuando hay historia familiar neurobiológicos. Múltiples determinantes y factores de riesgo
de tics, inicio temprano del trastorno o gravedad de la sinto- y su interacción facilitan la aparición del trastorno. Los factores

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biológicos implicados incluyen GBDUPSFTHFOÏUJDPT. Los estu- Symptom List) para padres y TSSL (Tourette Syndrome Symptom
dios en gemelos y familias proporcionan evidencias de que los List)1 para expertos, la escala Global de Síndrome de Tourette8
factores genéticos están implicados en la aparición del tras- y la Yale Global Tics Severity Scale para evaluar la severidad
torno. Recientes estudios informan que genes del cromosoma clínica de los tics9.
4,8 y 11 estarían implicados en la aparición del trastorno.
Varios GBDUPSFTFQJHFOÏUJDPT se asocian a la patogénesis
del ST como: bajo peso al nacer o incremento de esteroides 2. TRATAMIENTO. RECOMENDACIONES
androgénicos en períodos determinados del desarrollo. La BASADAS EN LA EVIDENCIA
BVUPJONVOJEBEQPTUJOGFDDJPTB (mycoplasma, borrelia,
estreptococo beta-hemolítico) se distingue como posible La evidencia disponible acerca del abordaje terapéutico de los
factor desencadenante en sujetos predispuestos (5-10%). Los trastornos por tics está dirigida principalmente al estudio y
estudios de neuroimagen y neurofisiología sitúan la lesión en tratamiento del ST. Es por ello, que en este apartado se hace
los circuitos motores, sensorio-motores, de asociación, inhi- referencia, en general, al ST que es uno de los trastornos por
bitorios y límbicos que cruzan los HBOHMJPTCBTBMFT. Las tics de mayor gravedad.
alteraciones en el TJTUFNBSFHVMBUPSJPDPSUJDPFTUSJBEP
QBMJEPUBMÈNJDPDPSUJDBM parecen ser la base patofisio- El USBUBNJFOUPNVMUJNPEBM es la base en la mayoría de los
lógica de los trastornos por tics. Se han postulado algunos pacientes ambulatorios pero en algunos casos, muy graves,
GBDUPSFTQTJDPTPDJBMFT de riesgo para individuos genéti- puede ser necesario el ingreso en un hospital de día: múltiples
camente vulnerables como trauma psicosocial grave, estrés comorbilidades, tratamientos ambulatorios previos fracasados y
diario recurrente, excitación emocional extrema, exposición a complicaciones psicosociales graves1.
fármacos androgénicos y uso de estimulantes. Los GBDUPSFT
El abordaje multimodal incluye JOUFSWFODJPOFTQTJDPFEVDB-
NPEVMBEPSFT incluyen aquellos que producen ansiedad. La
DJPOBMFT y EFBQPZP en el contexto de una relación terapéutica
conflictiva familiar, los problemas de relación madre-hijo y las
que se prolongará en el tiempo tanto con el paciente, la familia
dificultades sociales pueden influir negativamente en el curso
y la escuela. Es importante considerar que el estrés exacerba los
de la enfermedad7.
tics. Es necesario prestar atención terapéutica a las dificultades
de autoestima, afrontamiento social, ansiedad y depresión1.
EVALUACIÓN
El abordaje terapéutico incluye las siguientes opciones:
Las manifestaciones clínicas del ST pueden ser muy varia-
bles, por lo que es muy importante evaluar a cada paciente
cuidadosa e individualmente para determinar qué aspectos 2.I. PSICOEDUCACIÓN PARA PACIENTES Y
son más incapacitantes. Por tanto, la evaluación del paciente FAMILIAS
con un trastorno por tics ha de incluir información detallada
acerca de la frecuencia, intensidad, e interferencia de los -PTQBDJFOUFTDPO45MFWFDPOVOBCVFOBBEBQUBDJØO
tics; se ha de identificar la secuencia temporal de los tics y OPQSFDJTBONFEJDBDJØO ZFTUPTTPOMBNBZPSÓB La
su progresión por las distintas áreas corporales, así como su psicoeducación con los pacientes, las familias y el personal
gravedad y sus fluctuaciones. Seguidamente hay que explorar educativo (en lo referente a la naturaleza y curso del ST), la
la presencia de patología comórbida (Trastorno por déficit restructuración del entorno escolar (grupos pequeños de ense-
de Atención con Hiperactividad (TDAH), TOC, trastornos del ñanza y tutorías, adaptación del ritmo del alumno con ST) y las
aprendizaje, etc.), ya que estos trastornos pueden ser más terapias de apoyo a los pacientes y sus familiares son medidas
invalidantes que los tics y pueden ser pasados por alto si no que pueden ser suficientes para evitar el tratamiento psicofár-
se exploran específicamente5. Por ejemplo, el rendimiento macológico5.
académico puede verse alterado por la frecuencia de los tics,
por las ideas obsesivas, el déficit de atención, las alteraciones Las JOUFSWFODJPOFTQTJDPUFSBQÏVUJDBT más estudiadas y
de la personalidad o por combinaciones de estas dificultades. utilizadas son las de terapia de conducta: auto-observación,
En la mayoría de estos pacientes, predominan uno o dos de relajación, inversión de hábito, entrenamiento en conductas
estos aspectos, que serán por tanto los objetivos terapéuticos incompatibles con los tics, manejo de contingencias, entre-
clave en cada caso. namiento en habilidades sociales, técnicas de inoculación
de estrés y entrenamiento familiar. La terapia de orientación
Requiere una evaluación psiquiátrica completa con historia psicodinámica no es recomendable como primera elección para
de los síntomas, características psicopatológicas, funciona- reducir los tics. La terapia de conducta es secundaria al uso de
miento familiar, exploración física inicial, seguimiento médico fármacos y es solo una alternativa cuando los fármacos están
así como la realización de las exploraciones complementarias contraindicados, no tienen efecto o no hay cumplimiento tera-
pertinentes (análisis sanguíneos de anticuerpos anti esptrepto- péutico. Son técnicas especialmente recomendadas y útiles en
cocos, mycoplasmas y borrelia, EEG, RMN). Se dispone de varios tratar los problemas psicopatológicos asociados y las dificul-
instrumentos diagnósticos, como la TSSL (Tourette Syndrome tades de interacción familiar1.

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2.II. TRATAMIENTO PSICOFARMACOLÓGICO ANTAGONISTAS DOPAMINÉRGICOS

&MUSBUBNJFOUPQTJDPGÈSNBDPMØHJDPEFCFSÈDPOTJEF- Los neurolépticos son el “gold-standard” del tratamiento


SBSTFDVBOEPMPTTÓOUPNBTEFM45TPOJOWBMJEBOUFTZOP supresor de los tics. Aunque su eficacia está demostrada,
dado su perfil de tolerabilidad, es importante utilizar la mínima
TFSFTVFMWFODPONFEJEBTOPGBSNBDPMØHJDBT5. Es impor-
dosis posible, que reduzca la intensidad de los tics pero sin
tante tener en cuenta que, en muchos casos, la supresión de los
efectos secundarios. Los antipsicóticos atípicos han sido hasta
tics no debe ser el objetivo prioritario del plan de tratamiento,
ahora menos estudiados, pero en los ensayos disponibles han
puesto que los síntomas obsesivo-compulsivos, o el déficit de
demostrado una eficacia similar a los antipsicóticos típicos, con
atención, u otros trastornos comórbidos, pueden ser más invali-
una mejor tolerabilidad. Es importante reseñar que algunos
dantes que los tics y, por tanto, más importantes en la prioridad
pacientes con ST son especialmente vulnerables a desarrollar
de tratamiento. Si después de tratar los síntomas principales
cuadros de depresión y ansiedad asociados al tratamiento con
los tics aún siguen siendo un problema, es entonces cuando se
antipsicóticos, por lo que la aparición de síntomas sugestivos ha
debe considerar el tratamiento para suprimirlos10.
de ser estrechamente vigilada12.
&MUSBUBNJFOUPGBSNBDPMØHJDPTFEFCFFMFHJSTFHÞOMPT
t"/5*14*$»5*$045¶1*$04
TÓOUPNBTEJBOBZMPTFGFDUPTTFDVOEBSJPTQPUFODJBMFT.
El objetivo ha de ser más la reducción que la supresión de los Con respecto a los antipsicóticos clásicos, se ha demostrado
tics: las dosis han de aumentarse progresiva y lentamente, para una eficacia similar para los distintos fármacos, con reducción
poder encontrar la dosis mínima eficaz.5 Es muy importante que de la frecuencia e intensidad de los tics entre 60 y 80%13.
tanto el paciente como la familia entiendan la naturaleza fluc-
tuante del ST (por ejemplo, los tics pueden ser muy escasos
en el colegio y más frecuentes en casa, o al revés), para que )BMPQFSJEPM
la medicación se pueda ajustar de forma racional, aumentán-
Fármaco con gran experiencia en la práctica clínica, y con indi-
dola en función de la frecuencia y/o gravedad de los síntomas, y
cación aprobada en ficha técnica14, aunque no se han publicado
disminuyéndola durante los periodos de remisión relativa10. nuevos estudios en los últimos años. La dosis recomendada es
Para iniciar el tratamiento farmacológico es importante tener de 0,5 mg/12h en niños mayores de 5 años, y de 0,25 mg/12h
en cuenta tanto la severidad de los tics como otros factores: en menores de 5 años de edad. Se recomienda empezar el
expectativas del niño y su familia, capacidades adaptativas del tratamiento con dosis de 0,25-0,50 mg/día, con incrementos
niño, mecanismos de afrontamiento e interpersonales, control lentos y progresivos de dosis (0,25-0,50 mg/día) cada 5 a 7
de la impulsividad, regulación de afectos y nivel de apoyo social días, evitando en lo posible la aparición de efectos secundarios
y familiar11. (sedación, distonía aguda, síntomas extrapiramidales, aumento
de peso, embotamiento afectivo y cognitivo y efectos secun-
El tratamiento farmacológico debe plantearse durante al menos darios anticolinérgicos). También se han descrito otros efectos
un año, porque, debido a las oscilaciones de la clínica, es difícil secundarios como depresión, ansiedad de separación, ataques
distinguir la respuesta de la intervención de la supresión de los de pánico, fobia escolar14,15... Si apareciera alguno de estos
síntomas. 4ØMPTJMBTJOUPNBUPMPHÓBEFMPTUJDTHFOFSB efectos, la estrategia inicial ha de ser la reducción de dosis; si
JNQPSUBOUFT QSPCMFNBT  TF JOJDJB FM USBUBNJFOUP ello no es posible, hay que añadir agentes anticolinérgicos al
GBSNBDPMØHJDP TFJODSFNFOUBMBEPTJTPTFDBNCJBEF tratamiento. A veces, esto es más útil que la reducción de dosis,
medicamento. Es necesario aconsejar titulaciones lentas de ya que esta reducción puede ocasionar discinesias de retirada
la medicación para evitar efectos secundarios y encontrar la y empeoramiento de los tics, que suelen resolverse en 1–3
dosis óptima que permita al niño y a su familia desarrollar una meses16.
adecuada calidad de vida1.
Se han probado numerosos fármacos para el tratamiento del Pimozida
ST, incluyendo antidepresivos, estabilizadores del humor, medi-
Fármaco con amplia experiencia clínica aunque sin indica-
cación colinérgica, bloqueantes de canales del calcio, betablo-
ción aprobada en la ficha técnica17, produce menor sedación y
queantes y nicotina en combinación con neurolépticos a dosis
síntomas extrapiramidales que el haloperidol, pero se asocia a
bajas13.
prolongación de los tiempos de conducción cardiacos, por lo
A la hora de valorar los resultados de los estudios con estos que es preciso realizar electrocardiogramas de control rutinaria-
fármacos hay que tener en cuenta que hay pocos ensayos mente. Se han revisado varios estudios en los que pimozida se
controlados, no todos están bien diseñados y no todos son comparó frente a risperidona18,19. El tratamiento se inició con 0,5
metodológicamente adecuados. mg/día, con incrementos cada 5 ó 7 días de 0,25-0,50 mg/día,
hasta lograr el control de los síntomas. Al igual que otros antip-
La metodología de la búsqueda bibliográfica puede consultarse sicóticos, el aumento de dosis se relaciona con mayores efectos
en la página 15 de este documento. secundarios pero no necesariamente con una mayor eficacia16.

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4VMQJSJEBZ5JBQSJEB cativas entre ambos fármacos en cuanto al perfil de seguridad


y tolerabilidad, si bien risperidona indujo un mayor aumento de
La prevalencia de efectos secundarios extrapiramidales de estos peso.
neurolépticos es menor que la de haloperidol, siendo la eficacia
en reducción de tics similar10. Sulpirida, según los datos publi- La dosis recomendada de risperidona, según la evidencia citada
cados13, se ha administrado en niños con tics a dosis de 5-10 anteriormente, es de 0,25 a 0,5 mg/día al inicio, aumentando
mg/kg/día, repartidos en 2 ó 3 tomas, pero no tiene la indica- paulatinamente hasta 2-4 mg/día. Este fármaco carece de indi-
ción aprobada para Trastornos por Tics en su ficha técnica20. cación para los trastornos por tics en niños y adolescentes24. En
Tiaprida tiene la indicación aprobada en su ficha técnica21, y el caso de que los fármacos sin indicación sean prescritos en
la dosis recomendada es de 2,5-5 mg/kg/día, en 3 ó 4 tomas estos pacientes se seguirá la legislación vigente. Se requerirá
diarias. La dosis habitual es de 100 a 150 mg/día, con un el consentimiento informado del paciente o de su represen-
máximo de 300 mg/día. tante legal, un informe clínico en el que el médico justifique la
necesidad de dicho tratamiento, la conformidad del director del
Dentro de este grupo se incluyen las fichas de los fármacos centro donde se vaya a aplicar el tratamiento y la autorización de
haloperidol y tiaprida que tienen la indicación aprobada en la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios.
ficha técnica. (Real Decreto 223/2004, de 6 de febrero por el que se regulan
los ensayos clínicos con medicamentos y RD 1015/2009 de 29
t"/5*14*$»5*$04"5¶1*$044&(6/%"(&/&3"$*»/ de junio por el que se regula la disponibilidad de medicamentos
en situaciones especiales).
Risperidona
Ziprasidona
La eficacia de risperidona en el tratamiento del ST y los Trastornos
por Tics en niños y adolescentes se ha evaluado en varios ensayos En un estudio piloto se comparó ziprasidona frente a placebo
clínicos, controlados, doble ciego, demostrando su eficacia frente en un grupo de 28 niños y adolescentes con tics de gravedad
a placebo y en comparación con otros fármacos. moderada-severa. Se concluyó que, a dosis de 20-40 mg/día,
la ziprasidona fue eficaz, y superior a placebo, en la reducción
En un estudio revisado, de 8 semanas de seguimiento, se de la gravedad de los tics25. Ziprasidona no tiene indicación
comparó la eficacia reductora de tics de risperidona frente a como agente terapéutico para los trastornos por tics en niños y
placebo. Aunque la muestra incluida fue pequeña e incluyó adolescentes26.
tanto a niños como a adultos, (34 sujetos, 26 niños y 8 adultos,
con una media de edad de 19,7 ± 17,0 años, y un rango de
edad entre 6 y 62 años), risperidona fue más eficaz que placebo, 0MBO[BQJOB
con un perfil de seguridad aceptable salvo el aumento ponderal No se han encontrado estudios bien diseñados acerca de la
medio de 2,8 Kg22. eficacia de este antipsicótico en el ST en niños y adolescentes.
En otro estudio revisado, de 8 semanas de duración, se comparó Un estudio doble ciego cruzado de olanzapina frente a pimo-
la eficacia de risperidona frente a clonidina en una muestra de cida, en el que se comparó la eficacia reductora de tics, en
una muestra muy reducida de pacientes adultos, con un segui-
21 niños y adolescentes. Risperidona demostró una eficacia
miento a 52 semanas, concluyó que olanzapina fue tan eficaz
supresora de tics similar a clonidina, si bien se observó que
como pimozida a dosis bajas10.
risperidona a dosis bajas (1,5 mg/día) fue superior a clonidina
en los pacientes con TOC comórbido, ya que contribuyó a una
mayor reducción de los síntomas obsesivo compulsivos. Por otro BENZODIACEPINAS
lado, la respuesta a clonidina fue mejor en los casos de comor-
El uso de benzodiacepinas puede ser útil para el control de los
bilidad con TDAH, pues los síntomas de inatención e hiperacti-
trastornos de ansiedad en pacientes con ST, aunque no hay
vidad respondieron mejor a este fármaco que a risperidona. El
ensayos clínicos de calidad que avalen su eficacia13.
efecto adverso más frecuente fue la sedación. En este estudio,
la dosis de clonidina fue de 0,0025 a 0,005 mg/Kg/día (dosis
final media de 0,175 mg/día)23. OTROS
Además, risperidona demostró ser igual de eficaz que la pimo-
5PYJOBCPUVMÓOJDB
zida en un ensayo controlado, doble ciego en el que se inclu-
yeron 26 niños y adolescentes en el grupo de risperidona, y Las inyecciones de toxina botulínica en los músculos afectados
24 en el de pimozida18, y superior a pimozida en otro ensayo se recomiendan para tratar los tics vocales y motores focales,
con asignación aleatoria, doble ciego, y bien diseñado aunque en adultos10. Este tratamiento es seguro y eficaz, según algunos
con una muestra reducida de 19 niños y adolescentes19. En este ensayos clínicos realizados en adultos, pero no hay evidencia
estudio, no se detectaron diferencias estadísticamente signifi- científica que avale su uso en menores de edad.

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"HFOUFTEPQBNJOÏSHJDPT1FSHPMJEB opciones farmacológicas disponibles10. A pesar de ello, se ha


demostrado la eficacia de la terapia cognitivo–conductual
Pergolida, es un agonista dopaminérgico mixto D1/D2/D3, (TCC) en el TOC con y sin tics asociados, en niños y adoles-
que ha demostrado eficacia en el tratamiento del trastorno centes31. Aunque en este estudio se excluían los pacientes con
crónico por tics y en el ST en varios ensayos clínicos en niños diagnóstico primario de ST, sus resultados pueden generalizarse
y adolescentes27,28. Pergolida, como supresor de tics, se utiliza al TOC con ST asociado.
a dosis mucho menores que las utilizadas en la enfermedad de
Parkinson (aproximadamente una décima parte) – de 0,15 a No hay contraindicaciones para este tratamiento. Su aplicación
0,45 mg/día –. Es por ello, que los efectos secundarios cardio- depende más de la disponibilidad de profesionales capacitados
lógicos de pergolida observados en pacientes con enfermedad para llevar a cabo el tratamiento y de la disposición del paciente
de Parkinson no se han descrito en menores con trastorno por y su familia.
tics28. Los efectos secundarios más frecuentes son las náuseas
y vómitos, la hipotensión ortostática, congestión nasal y eleva-
ción transitoria de enzimas hepáticas. Aún así pergolida sólo ANTIBIÓTICOS. PLASMAFÉRESIS (INFUSIÓN INTRAVENOSA
debe utilizarse en casos de ST grave refractario a otros trata- DE INMUNOGLOBULINAS). ESTIMULACIÓN MAGNÉTICA
mientos28. TRANSCRANEAL. ESTIMULACIÓN CEREBRAL PROFUNDA

Todos estos abordajes terapéuticos están actualmente en fase


.FUPDMPQSBNJEB de investigación, y hasta el momento actual no han demostrado
eficacia en el manejo de los trastornos por tics10.
Hay pocos estudios acerca de su eficacia en trastornos por
tics. En un estudio disponible, metoclopramida se comparó con
placebo en una muestra pequeña de pacientes de 7 a 18 años. 2.IV. SITUACIONES PARTICULARES
Metoclopramida demostró eficacia en la reducción, intensidad y
frecuencia de los tics. El perfil de efectos secundarios fue acep-
table, aunque se asoció a incrementos del nivel de prolactina TRASTORNO POR TICS Y TRASTORNO POR DÉFICIT DE
en algunos pacientes. En el estudio se utilizaron dosis de 5 mg/ ATENCIÓN CON HIPERACTIVIDAD (TDAH)
día, con incrementos semanales de 5 mg hasta un máximo de
40 mg/día29. Según la bibliografía revisada, no se ha demostrado una rela-
ción causa-efecto entre el tratamiento con metilfenidato y los
tics; sin embargo, metilfenidato, puede actuar como desenca-
Ondansetrón denante en niños previamente predispuestos32,33.
En un ensayo clínico en el que se comparó la eficacia de ondan- En los niños con tics previos, estos pueden exacerbarse tras
setrón frente a placebo las conclusiones fueron poco valorables la administración de metilfenidato32 por ello, se debe evaluar
a nivel clínico, ya que la muestra fue pequeña e incluyó sujetos historia de tics previos ya que el riesgo de presentar nuevos tics
de 12 a 46 años; por otro lado el tiempo de seguimiento fue de es mayor34.
tan sólo 3 semanas30 .
Los resultados de un ensayo clínico, doble ciego y controlado
con placebo, con asignación aleatoria, en el que se estudió a
2.III. OTROS ABORDAJES TERAPÉUTICOS 136 niños y adolescentes con diagnóstico de TDAH y trastorno
por tics crónico comórbido, distribuidos en 4 grupos de trata-
Las siguientes modalidades terapéuticas están actualmente en miento: clonidina sola, metilfenidato solo, clonidina y metilfeni-
fase de investigación y no tienen indicación clara en el trastorno dato combinados, y placebo, concluyó que todos los grupos de
por tics, en niños y adolescentes. tratamiento activo mejoraron significativamente con respecto
a placebo, tanto los síntomas de hiperactividad como los tics.
TERAPIA COGNITIVO-CONDUCTUAL: TRATAMIENTO DE Además, la combinación de clonidina y metilfenidato fue la
REVERSIÓN DE HÁBITO Y EXPOSICIÓN CON PREVENCIÓN opción que demostró ser más eficaz en la mejoría del TDAH y
DE RESPUESTA (PARA TICS ASOCIADOS A TOC):
en la reducción de los tics35. Lo más relevante del estudio fue la
constatación de que el porcentaje de pacientes que referían un
Se han realizado varios estudios con asignación aleatoria, empeoramiento de los tics a lo largo del curso del tratamiento
con muestras pequeñas, y en todos ellos se ha demostrado la no era mayor entre los pacientes que recibieron metilfenidato
eficacia de este tipo de abordaje en la reducción de los tics. (20%) que entre los tratados con clonidina (26%) o con placebo
No existen datos de eficacia en comparación con las distintas (22%)35.

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PUNTOS CLAVE

tLa característica psicopatológica esencial de los Trastornos tEl tratamiento psicoeducativo con el paciente y su entorno es
por Tics son los tics motores y/o vocales. Un tic es un movi- en muchos casos la mejor opción terapéutica. Los pacientes
miento motor o vocalización estereotipado, no rítmico, recu- con ST leve con una buena adaptación no precisan medica-
rrente, rápido y súbito que se produce en salvas. Algunos ción, y estos son la mayoría.
pacientes tienen una disminución de la gravedad de los tics a
partir de los veinte años. Sin embargo, la forma más grave, el tLa indicación de tratamiento psicofármacológico ha de estar
Síndrome de Gilles de la Tourette (ST) permanece en la edad basada en un diagnóstico psiquiátrico adecuado, y conside-
adulta en dos tercios de los casos. rando cuidadosamente la presencia de patología comórbida.

tAlrededor del 85% de pacientes con ST tienen otros tras- tRisperidona ha demostrado una eficacia similar a otros
tornos neuropsiquiátricos asociados. En casi el 50% de casos antipsicóticos clásicos y mejor perfil de tolerabilidad, según
con ST hay trastorno hipercinético. Alrededor del 30-60% de la evidencia revisada, aunque no tiene esta indicación apro-
ST sufren de obsesiones y compulsiones. bada en ficha técnica. En estos casos su prescripción se hará
siguiendo la legislación vigente (Real Decreto 223/2004, de
tLos tics pueden observarse en el 10% de niños escolares y 6 de febrero por el que se regulan los ensayos clínicos con
en 4-18% de los adolescentes. Los tics crónicos tienen una medicamentos y RD 1015/2009 de 29 de junio por el que
prevalencia de 3-4%. Para el ST la prevalencia es del 1% se regula la disponibilidad de medicamentos en situaciones
(rango: 0,03-3%). especiales).
t)BMPQFSJEPMZUJBQSJEB son fármacos con la indicación
aprobada en ficha técnica.

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FICHAS DE FÁRMACOS
Fuente de datos: Adaptado de Fichas Técnicas. Disponible en:
https://sinaem4.agemed.es/consaem/fichasTecnicas.do?metodo=buscar&version=new.
Para más información consultar dicha fuente.

Tabla 1.

1SJODJQJPBDUJWP Risperidona
Dosis, pauta Individualizada de acuerdo a las necesidades y respuesta del paciente.
y duración de
Trastornos de conducta:
tratamiento
t/J×PTLH Dosis de inicio: 0,25 mg/día, aumentos de 0,25 mg cada 2 días (días alternos). La dosis óptima
para la mayoría de pacientes es de 0,5 mg/día. Dosis de mantenimiento: 0,25 mg/día - 0,75 mg/día.
t/J×PT>,H Dosis de inicio: 0,50 mg/día, aumentos de 0,50 mg cada 2 días (días alternos). La dosis óptima
para la mayoría de pacientes es de 1 mg/día. Dosis de mantenimiento: 0,5 mg/día- 1,50 mg/día.
Evaluar y justificar el uso a largo plazo (duración máxima 6 meses). Se carece de experiencia en niños menores
de 5 años y en adolescentes los datos son limitados. El uso continuado debe ser evaluado y justificado
permanentemente.
Vía de administración Oral. Existen presentaciones en solución (1 mg/ml) y comprimidos desde 0,5 mg.
Indicación autorizada Tratamiento sintomático a corto plazo (hasta 6 semanas) de la agresión persistente de los trastornos de la conducta
en niños de 5 años de edad en adelante y adolescentes con un funcionamiento intelectual por debajo de la media
o retraso mental diagnosticados de acuerdo al criterio DSM-IV, en los que la gravedad de la agresión u otros
comportamientos perturbadores requieran tratamiento farmacológico.
El tratamiento farmacológico debe formar parte de un programa terapéutico más exhaustivo, con medidas
educacionales y psicosociales. Se recomienda la prescripción de risperidona por un especialista en neurología
infantil y en psiquiatría para niños y adolescentes o médicos familiarizados con los trastornos de conducta en niños
y adolescentes.
Reacciones adversas t"VNFOUPEFQFTPTJHOJGJDBUJWP
t4FEBDJØOMFWFZUSBOTJUPSJB
t4PNOPMFODJB GBUJHB WJTJØOCPSSPTB NBSFPT GBMUBEFDPODFOUSBDJØO
t4ÓOUPNBTFYUSBQJSBNJEBMFT UFNCMPSFT SJHJEF[ IJQFSTBMJWBDJØO CSBEJDJOFTJB BDBUJTJB EFQFOEJFOUFTEFMBEPTJT

t)JQPUFOTJØO PSUPTUÈUJDB
ZUBRVJDBSEJB SFGMFKBBMBIJQPUFOTJØO
PIJQFSUFOTJØO
t&TUSF×JNJFOUP EJTQFQTJB OÈVTFBTWØNJUPT EPMPSBCEPNJOBM SJOJUJT
t*OTPNOJP BHJUBDJØO BOTJFEBE KBRVFDB
t*ODPOUJOFODJBVSJOBSJB
t"VNFOUPEPTJTEFQFOEJFOUFEFDPODFOUSBDJØOQMBTNÈUJDBEFQSPMBDUJOB
t"VNFOUPEFMPTOJWFMFTEFFO[JNBTIFQÈUJDBT
t)JQFSHMVDFNJBPSFTJTUFODJBBMBJOTVMJOB
t%JTNJOVDJØOMJHFSBEFMSFDVFOUPEFOFVUSØGJMPTZPUSPNCPDJUPT
t1SPMPOHBDJØOEFM25D
Precauciones Precaución en insuficiencia renal y hepática.
especiales
Disminución del umbral convulsivo.
Se debe monitorizar el peso en pacientes en tratamiento con risperidona.
El efecto sedante de risperidona debe ser estrechamente controlado en población infantil debido a las posibles
consecuencias sobre la capacidad del aprendizaje.
Debido a los posibles efectos de hiperprolactinemia prolongada en el crecimiento y maduración sexual en niños y
adolescentes, se realizarán evaluaciones clínicas del estado endocrinológico, mediciones de talla, peso, madurez
sexual, control de la función menstrual y otros posibles efectos relacionados con prolactina.
Contraindicaciones t)JQFSTFOTJCJMJEBEBMBSJTQFSJEPOB

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1SJODJQJPBDUJWP Risperidona (continuación)


Interacciones t0USPTGÈSNBDPTEFBDDJØODFOUSBM JOEVDUPSFTPJOIJCJEPSFTFO[JNÈUJDPT

t$JNFUJEJOBZSBOJUJEJOBBVNFOUBOMBCJPEJTQPOJCJMJEBEEFSJTQFSJEPOB
t1SFDBVDJØODVBOEPTFVUJMJDFSJTQFSJEPOBKVOUPDPONFEJDBNFOUPTRVFTFTBCFRVFQSPMPOHBOFMJOUFSWBMP25
( p.ej., antiarrítmicos clase I y clase III), antidepresivos tricíclicos (amitriptilina), antidepresivos tetracíclicos
(maprotilina), algunos antihistamínicos, otros antipsicóticos, algunos antipalúdicos (quinina y mefloquina) y con
medicamentos que producen desequilibrio electrolítico (hipocalemia, hipomagnesemia), bradicardia o aquellos
que inhiben el metabolismo hepático de risperidona. Esta lista es indicativa y no exhaustiva.
t$BSCBNB[FQJOBEJTNJOVZFMBTDPODFOUSBDJPOFTQMBTNÈUJDBTEFMBGSBDDJØOBOUJQTJDØUJDBBDUJWBEFSJTQFSJEPOB4F
han observado efectos similares p. ej. con rifampicina, fenitoina y fenobarbital.
t'MVPYFUJOBZQBSPYFUJOBBVNFOUBOMBDPODFOUSBDJØOQMBTNÈUJDBEFSJTQFSJEPOB QFSPOPUBOUPMBGSBDDJØO
antipsicótica activa. Las fenotiazinas,los antidepresivos tricíclicos y algunos betabloqueantes pueden aumentar las
concentraciones plasmáticas de risperidona, pero no la fracción antipsicótica activa.
Alternativas
Antipsicóticos clasicos: Haloperidol, tiaprida, sulpirida y pimozida.
farmacológicas
Observaciones No tiene indicación en TICs por lo que para prescribirlo se seguirá la legislación vigente.

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Tabla 2.
1SJODJQJPBDUJWP )BMPQFSJEPM
Dosis, pauta Debe individualizarse de acuerdo con las necesidades y la respuesta de cada paciente, realizando ajustes de la dosis
y duración de hasta alcanzar el control terapéutico óptimo.
tratamiento
La dosis recomendada en niños es de 0,05 mg/kg/día. En niños mayores de 5 años la dosis media es de 0,5 mg/12 h
(5 gotas dos veces al día) y en menores de 5 años es de 0,25 mg/12 h (aprox. 2 gotas dos veces al día).
El aumento de dosis debe ser lento y progresivo (de 0,25 a 0,50 mg/día), cada 5-7 días, evitando efectos secundarios.
En caso de fracaso terapéutico no prolongar el tratamiento durante un intervalo de tiempo superior a 1 mes.
Vía de administración Oral. Gotas.
Indicación autorizada Movimientos anómalos: tics motores, tartamudeo, y síntomas del síndrome de Gilles de la Tourette y Corea. Además
tiene indicación en otros trastornos.
Reacciones adversas Alteraciones relacionadas con el S.N.C (las mas frecuentes):
t"MUFSBDJPOFTFYUSBQJSBNJEBMFT (parkinsonismo, acatisia, distonía) (10-25%): la frecuencia y severidad de estas
alteraciones suelen estar relacionadas con la dosis y el inicio del tratamiento, revertiendo al disminuir la dosis o con
el tratamiento con fármacos anticolinérgicos o antiparkinsonianos. No obstante, en ocasiones, pueden presentarse
con dosis bajas o persistir en el tiempo, por lo que puede ser necesaria la interrupción del tratamiento
El tratamiento con haloperidol puede producir, al igual que otros antipsicóticos, unTÓOESPNFOFVSPMÏQUJDPNBMJHOP
(<1%), al igual que otros antipsicóticos, caracterizado por hipertermia, rigidez muscular, alteraciones mentales e
inestabilidad autónoma. Requiere retirada inmediata del fármaco y administración de tratamiento de soporte intensivo.
t%JTDJOFTJBUBSEÓB (<1%): Aparición de movimientos rítmicos involuntarios de la cara, ojos, lengua, boca
o mandíbula que se pueden acompañar de movimientos involuntarios del tronco y extremidades. Puede ser
irreversible. Se ha descrito, fundamentalmente, durante la administración prolongada del haloperidol y en pacientes
ancianos, principalmente mujeres, que reciben dosis altas.
t$POWVMTJPOFTUØOJDPDMØOJDBT (<1%): Puede favorecer la aparición de anomalías en el electroencefalograma
y una disminución del umbral de convulsiones, fundamentalmente en pacientes con antecedentes de epilepsia,
afectación del sistema nervioso central, alteraciones electroencefalográficas, convulsiones inducidas por un
tratamiento farmacológico o tratamiento anticonvulsivante previo.
El riesgo de aparición de convulsiones se incrementa en relación con: el inicio del tratamiento, las modificaciones
bruscas de la pauta de dosificación, la administración de dosis elevadas y/o el tratamiento combinado de diversos
fármacos antipsicóticos.
Sin embargo el haloperidol se ha recomendado como tratamiento antipsicótico en los pacientes con un elevado riesgo
de convulsiones. Esto es debido a su menor capacidad para inducir sedación comparado con otros neurolépticos,
dado que el potencial convulsivógeno está en relación directa con el efecto sedante de estos fármacos.
t0USBTSFBDDJPOFTBEWFSTBTOFVSPMØHJDBT somnolencia, sedación (10-25%); mareos, insomnio (1-9%)
t"MUFSBDJPOFT)FNBUPMØHJDBT
- leucopenia o leucocitosis (1-9%): suelen ser de intensidad moderada y reversible.
- anemia y linfomonocitosis
- agranulocitosis, rara (<1%) y se ha descrito con el tratamiento combinado de haloperidol.
En los pacientes que reciben un tratamiento prolongado con haloperidol se recomienda la realización de controles
analíticos periódicos.
t"MUFSBDJPOFT&OEPDSJOP.FUBCØMJDBT 
galactorrea, mastodinia, ginecomastia, modificación de la
libido, impotencia, hiperglucemia, hipoglucemia, hiponatremia y síndrome de secreción inadecuada de la hormona
antidiurética (SIADH).
t"MUFSBDJPOFT$BSEJPWBTDVMBSFT 
 taquicardia, hipotensión e hipertensión. Raramente se han descrito
BMUFSBDJPOFTEFMSJUNPDBSEÓBDPDPNPQSPMPOHBDJØOEFMJOUFSWBMP25ZUPSTBEFTEFQPJOUFTFOSFMBDJØODPOMB
administración de dosis elevadas.
t"MUFSBDJPOFT(BTUSPJOUFTUJOBMFT 
 anorexia, diarrea, hipersalivación, dispepsia, náuseas y vómitos.
t"MUFSBDJPOFT)FQBUPCJMJBSFT 
 Disfunción hepática con ictericia y eosinofilia en la que se sugiere la
implicación de una reacción de hipersensibilidad al haloperidol. El inicio de esta afectación hepática poco frecuente
se suele producir durante las cuatro primeras semanas de tratamiento, pudiendo persistir los síntomas varios meses
después de la interrupción del fármaco.
t"MUFSBDJPOFT%FSNBUPMØHJDBT 
 lesiones maculopapulares y acneiformes, fotosensibilidad y alopecia.
t"MUFSBDJPOFTEFMB7JTJØO cataratas y retinopatía.
También se han descrito en niños otros efectos secundarios como depresión, ansiedad de separación, ataques de
pánico, fobia escolar.

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1SJODJQJPBDUJWP )BMPQFSJEPM (continuación)


Precauciones Enfermedad cardiovascular severa: riesgo de hipotensión y/o desencadenamiento de dolor anginoso. En caso de ser
especiales necesario tratamiento vasopresor, no debe utilizarse adrenalina debido a que el haloperidol antagoniza su actividad y
puede producir hipotensión paradójica.
Epilepsia y otras alteraciones predisponentes a las convulsiones, ya que el haloperidol puede disminuir el umbral
convulsivo. Si estuviera indicado, mantener concomitantemente tratamiento anticonvulsivante adecuado.
Hipertiroideos con tirotoxicosis: riesgo de neurotoxicidad (rigidez, incapacidad para la marcha o el habla) durante el
tratamiento con antipsicóticos.
Antecedentes de síndrome neuroléptico maligno: se han descrito recurrencias con la reintroducción del tratamiento
antipsicótico.
Trastorno bipolar: haloperidol puede favorecer la aparición de un episodio depresivo.
Pacientes que requieran tratamiento con antiparkinsonianos para el control de los efectos extrapiramidales
ocasionados por haloperidol: puede ser necesario continuar la administración del antiparkinsoniano durante un
periodo de tiempo después de la suspensión del haloperidol para prevenir la reaparición de estos síntomas.
Exposición al sol no se recomienda durante el tratamiento, ya que pueden aparecer reacciones de fotosensibilidad.
Por sus efectos anticolinérgicos pueden agravarse patologías como el glaucoma de ángulo cerrado, la hipertrofia
prostática o la retención urinaria.
En niños (fundamentalmente si existe una infección aguda o deshidratación) se recomienda especialmente extremar
la precaución, ya que la aparición de reacciones distónicas graves es especialmente importante en esta edad.
Precaución en pacientes con enfermedad hepática, ajustando la dosis según el grado de funcionalismo hepático.
Contraindicaciones t%FQSFTJØOTFWFSBEFMTJTUFNBOFSWJPTPDFOUSBMPFTUBEPTDPNBUPTPT
t)JQFSTFOTJCJMJEBEBIBMPQFSJEPMPDVBMRVJFSBEFMPTDPNQPOFOUFTEFMBGPSNVMBDJØO
t&OGFSNFEBEEF1BSLJOTPO
t$POTVNPTJNVMUÈOFPEFCFCJEBTBMDPIØMJDBT
Interacciones t'ÈSNBDPTEFQSFTPSFTEFM4/$ el haloperidol puede potenciar los efectos de otros depresores del S.N.C.
como opiáceos, barbitúricos, anestésicos y alcohol.
t-JUJP aunque en raras ocasiones, se ha descrito la aparición de un síndrome encefalopático agudo tras la
utilización concomitante de litio y haloperidol, fundamentalmente cuando la concentración sérica de litio es
elevada. La administración simultánea con litio puede producir fiebre y alteraciones neuromusculares con deterioro
del estado de conciencia.
t"OUJDPBHVMBOUFT se ha descrito que haloperidol antagoniza la actividad anticoagulante de la fenidiona.
t"OUJDPMJOÏSHJDPT el tratamiento concomitante con haloperidol y fármacos anticolinérgicos, entre los cuales se
incluyen antiparkinsonianos, puede producir un incremento de la presión intraocular.
t.FUJMEPQB se ha descrito la aparición de demencia en pacientes que reciben tratamiento concomitante con
metildopa y haloperidol.
t%JGFOJMIJEBOUPÓOB DBSCBNB[FQJOB GFOPCBSCJUBM SJGBNQJDJOBZUBCBDP inducen el metabolismo
microsómico del haloperidol, con un incremento de su aclaramiento y una disminución de las concentraciones
plasmáticas de este fármaco.
t-FWPEPQB se antagonizan mutuamente los efectos de haloperidol y levodopa.
t"OGFUBNJOBT los efectos estimulantes de las anfetaminas pueden disminuir debido al bloqueo alfaadrenérgico
del haloperidol. El efecto antipsicótico del haloperidol también puede disminuir si se administra simultáneamente
con anfetaminas.
t&QJOFGSJOB la administración simultánea puede bloquear los efectos alfaadrenérgicos de la epinefrina, pudiendo
dar lugar a hipotensión y taquicardia graves.
t'ÈSNBDPTRVFQSPEVDFOSFBDDJPOFTFYUSBQJSBNJEBMFT pueden aumentar la frecuencia y la gravedad de los
efectos extrapiramidales asociados al haloperidol.
t&MIBMPQFSJEPMQVFEFQPUFODJBSMBUPYJDJEBEEFdiazóxido así como el efecto y la toxicidad de los BOUJEFQSFTJWPT
USJDÓDMJDPT
t"MDPIPMFUÓMJDP se ha registrado una potenciación de su toxicidad y posible aparición de hipotensión.
t'MVPYFUJOB se ha visto una potenciación mutua de toxicidad, con aparición de síntomas extrapiramidales.
Alternativas Otros antipsicóticos clásicos
farmacológicas Risperidona
ISRS: Fluoxetina (si TOC comórbido)
Observaciones La reducción de la dosis puede ocasionar dicinesias de retirada y empeoramiento de los tics, que suelen resolverse en
1 a 3 meses.

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1SJODJQJPBDUJWP Tiaprida
Dosis, pauta t%PTJTIBCJUVBM NHLHEÓB&OHFOFSBMNHEÓB
y duracion de
tratamiento t%PTJTNÈYJNBNHEÓB

Vía de administración Oral.


Tics.
Indicación autorizada
Patología hipercinética del niño y del adolescente (inquietud, nerviosismo, ansiedad, agitación, agresividad).
t'SFDVFOUFTTPNOPMFODJB TFEBDJØO JOTPNOJP BHJUBDJØO JOEJGFSFODJB NBSFP WÏSUJHP DFGBMFB BTUFOJBZGBUJHB
Parkinsonismo y síntomas relacionados: Temblor, hipertonía, hipocinesia e hipersalivación.
t1PDPGSFDVFOUFT"DBUJTJB EJTUPOÓB BVNFOUPEFMPTOJWFMFTQMÈTNÈUJDPTEFQSPMBDUJOB BNFOPSSFB HJOFDPNBTUJB 
Reacciones adversas crecimiento y dolor de pecho, disfunción orgásmica e impotencia, aumento de peso.
t3BSBT"MJHVBMRVFPUSPTOFVSPMÏQUJDPTQVFEFDBVTBS%JTDJOFTJBBHVEBZ4ÓOESPNF/FVSPMÏQUJDPNBMJHOP
t'SFDVFODJBOPDPOPDJEB1SPMPOHBDJØOEFMJOUFSWBMP25 BSSJUNJBTWFOUSJDVMBSFT UBRVJDBSEJBWFOUSJDVMBS
1VFEFJOEVDJSVOBQSPMPOHBDJØOEFMJOUFSWBMP25RVFQVFEFQPUFODJBSFMSJFTHPEFBSSJUNJBTWFOUSJDVMBSFTHSBWFT
tales como torsades de pointes. Antes de iniciar la administración se recomienda monitorizar los factores que
puedan favorecer la aparición de trastornos en el ritmo. Precaución en pacientes que presenten factores de riesgo
RVFQVFEBOQSFEJTQPOFSBMBQSPMPOHBDJØOEFMJOUFSWBMP25
Puede aparecer Síndrome Neuroléptico Maligno: hipertermia, rigidez muscular y disfunción autónoma. En caso de
hipertermia de origen desconocido interrumpir el tratamiento con tiaprida.
Precauciones
especiales No administrar en pacientes con enfermedad de Parkinson, salvo en casos especiales.
Utilizar con precaución en pacientes con factores de riesgo de embolia cerebral.
Los pacientes con antecedentes de epilepsia deberán monitorizarse estrechamente.
Precaución en insuficiencia renal (disminuir dosis), en ancianos y en niños.
Puede producir reacciones alérgicas a sus excipientes.
t)JQFSTFOTJCJMJEBEBMQSJODJQJPBDUJWPPBMHVOPEFMPTFYDJQJFOUFT
t5VNPSFTDPODPNJUBOUFTEFQFOEJFOUFTEFQSPMBDUJOBQSPMBDUJOPNBTIJQPGJTBSJPTZDÈODFSEFNBNB
Contraindicaciones
Feocromocitoma. Asociación con levodopa.
t&NCBSB[P OPTFIBOSFBMJ[BEPFTUVEJPTCJFODPOUSPMBEPT
ZMBDUBODJB
t" TPDJBDJPOFTDPOUSBJOEJDBEBTDPO-FWPEPQB BOUBHPOJTNPSFDÓQSPDPFOUSFMFWPEPQBZOFVSPMÏQUJDPT
t" TPDJBDJPOFTOPSFDPNFOEBEBT"MDPIPM NFEJDBNFOUPTRVFQVFEBOJOEVDJSUPSEBEFTEFQPJOUFTPMBQSPMPOHBDJØO
EFMJOUFSWBMP25CFUBCMPRVFBOUFT CMPRVFBOUFTEFMPTDBOBMFTEFMDBMDJPDPNPEJMUJB[FNZWFSBQBNJMP DMPOJEJOB 
guanfacina; digitálicos. Medicamentos que inducen hipocalemia, antiarrítmicos clase Ia, clase III. Otros
Interacciones medicamentos: pimozida, sultoprida, haloperidol, tioridazina, metadona, antidepresivos imipromínicos; litio,
bepridil, cisaprida, eritromicina, vincamina, halofantrina, pentamidina, esparfloxacino.
t" TPDJBDJPOFTRVFEFCFOUFOFSTFFODVFOUB%FQSFTPSFTEFM4JTUFNB/FSWJPTP$FOUSBMEFSJWBEPTEFMBNPSGJOB MB
mayoría de los antihistamínicos H1, barbitúricos, benzodiazepinas, ansiolíticos no benzodiazepínicos, clonidina y
sustancias relacionadas.
Observaciones

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AUTORES DE LA REVISIÓN BIBLIOGRAFÍA


(Orden alfabético) 1 Rothenberg A. & Banaschewski T. Tic Disorders. A Clinician´s
Handbook of Child and Adolescent Psychiatry. Ed Ch. Gillberg, R.
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13
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Recomendaciones Farmacoterapéuticas
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5SBTUPSOPTQPS5JDTFOOJ×PTZBEPMFTDFOUFT

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26 Ficha Técnica de Zeldox®. Laboratorio Pfizer, S.A. [Accedido en
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es/consaem/fichasTecnicas.do?metodo=detalleForm
27 Gilbert, DL, Sethuraman, G, Sine, L, Peters, S. Tourette's syndrome
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improvement with pergolide in a randomized, double-blind, cros-
of ADHD in children with tics: a randomized controlled trial.
sover trial. Neurology 2000; 54:1310-5.
Neurology. 2001; 58: 527–36.
28 Gilbert DL, Dure L, Sethuraman G, Raab D, Lane J, Sallee FR. Tic
reduction with pergolide in a randomized controlled trial in chil-
dren. Neurology. 2003;60:606–11.

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METODOLOGÍA DE LA BÚSQUEDA
BIBLIOGRÁFICA
(Grupo TOC y TICs)
Para la recuperación de la información de evidencia científica sión establecidos por el grupo de trabajo, se decide la selección
respecto a la eficacia del uso de fármacos en el trastorno obse- de 17 referencias bibliográficas para su revisión y volcado. De
sivo compulsivo (TCO) y trastorno por tics (TICs) en niños y éstas, 12 corresponden al bloque de EO y 5 al bloque de SSS.
adolescentes se emplearon las fuentes de información siguiendo La revisión y volcado se realizó en documentos normalizados.
el modelo de “5S” de Haynes1 de organización estableciendo También se incluyeron 11 referencias para lectura de las que
dos grupos: documentos de síntesis, sinopsis y sumarios de la 4 corresponden al bloque de SSS y 7 del bloque de estudios
evidencia (SSS) y estudios originales (EO). originales.

Dentro de documentos SSS se buscan Guías de Práctica Para la selección de los artículos se tuvo en cuenta en primer
Clínica, revisiones sistemáticas, meta-análisis, revistas secun- lugar la metodología del ensayo clínico (asignación aleatoria,
darias e informes de evaluación. Para su localización se utiliza doble ciego y controlado con placebo), el año de publicación
TripDatabase, la Biblioteca Cochrane Plus, Clinical Evidence, reciente, tamaño de la muestra y edad de la muestra (niños y
UpToDate, MEDLINE (OVID), EMBASE (OVID) y PsycINFO adolescentes).
(Proquest).
Tras la revisión de esta primera búsqueda el grupo de trabajo se
Para la localización de los EO se buscan artículos que sean decidió incorporar a la revisión 10 referencias adicionales, para
ensayos clínicos de intervenciones terapéuticas farmacológicas su revisión, localizadas mediante búsqueda manual entre las
empleando las bases de datos automatizadas MEDLINE (OVID), que se encontraban, al menos, un estudio realizado en adultos.
EMBASE (OVID) y PsycINFO (Proquest). Esta decisión se adoptó ante la falta de estudios en niños en el
caso concreto de pautas de refuerzo.
En estas bases de datos se realiza una primera búsqueda en
febrero de 2007 (ver tabla con estrategias de búsqueda) y una Tras valorar escasez de la evidencia localizada el grupo decide
segunda en julio de 2008. Las búsquedas estuvieron centradas realizar una segunda búsqueda en julio de 2008 en las bases
en la localización de artículos relacionados con el tratamiento de datos MEDLINE y EMBASE aumentando el límite de tiempo
farmacológico del trastorno obsesivo-compulsivo, tics y a los 10 últimos años y centrado en los medicamentos tiapride,
síndrome de Tourette en niños y adolescentes. sulpiride, pimozide y haloperidol. De las 41 referencias obte-
nidas se seleccionaron 7 para su revisión y volcado.
Para la estrategia de búsqueda en las bases de datos MEDLINE
y EMBASE relativa a ensayos clínicos y revisiones sistemáticas Como parte de la metodología general de la Guía, para los
se utilizaron filtros metodológicos validados. ensayos clínicos con asignación aleatoria (ECA), se pasa la
escala Jadad2 para constatar la calidad de dichos estudios
En las búsquedas en las bases de datos se emplearon diversos y apoyar la selección de los fármacos en esta patología. De
límites como la población de estudio empleando como rango los doce artículos seleccionados del grupo ninguno obtuvo el
de edad niños y adolescentes y límites de idiomas para excluir máximo de puntuación de 5 puntos, cinco ensayos clínicos con
aquellos escritos en lenguas diferentes al inglés, español asignación aleatoria obtuvieron 4 puntos, cinco ECAs 3 puntos,
y francés. Por último, en la búsqueda de ensayos clínicos se un ECA 2 puntos y un ECA 1 puntos.
emplea el límite temporal de año de publicación a los últimos
5 años. Para la búsqueda de otro tipo de documentos (SSS) no
hay limitación temporal.
BIBLIOGRAFÍA
Los registros obtenidos de las bases de datos se vuelcan en el
1 Haynes RB. Of studies, syntheses, synopses, summaries, and systems:
programa gestor de referencias Referente Manager® eliminán- the "5S" evolution of information services for evidence-based
dose las referencias duplicadas. healthcare decisions. Evid Based Med. 2006 Dec;11(6):162-164.
Como resultado de la búsqueda se obtuvieron 113 referencias 2 Jadad AR, Moore RA, Carroll D, Jenkinson C, Reynolds DJ, Gavaghan
bibliográficas (53 correspondientes a estudios originales (EO) y %+ .D2VBZ)+"TTFTTJOHUIFRVBMJUZPGSFQPSUTPGSBOEPNJ[FE
60 correspondientes al bloque de sumarios, sinopsis y síntesis clinical trials: is blinding necessary? Control Clin Trials. 1996
(SSS)). Tras su valoración, y siguiendo unos criterios de inclu- Feb;17(1):1-12.

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Tabla 4. Estrategia de búsqueda en las diferentes bases de datos.


.&%-*/& 07*%
&.#"4& 07*%
1TZD*/'0 1SPRVFTU

1. Obsessive-Compulsive Disorder/ Obsessive Compulsive Disorder/ (DE("OBSESSIVE


COMPULSIVE DISORDER")
2. Obsessive-Compulsive Disorder.ti. Obsessive Compulsive Disorder.ti.
OR DE("TOURETTE
SYNDROME")) AND
MTH(TREATMENT
OUTCOME CLINICAL TRIAL)

3. Tourette Syndrome/ GILLES DE LA TOURETTE SYNDROME/


4. 1 or 2 or 3 1 or 2 or 3
5. drug therapy.fs. exp central nervous system agents/
6. 4 and 5 dt.fs.
7. 5 or 6
8. 4 and 7

$PSSFTQPOEFODJBDirección General de Gestión Económica y de Compras de Productos Sanitarios y Farmacéuticos. Subdirección de


Compras de Farmacia y Productos Sanitarios. Plaza de Carlos Trías Bertrán nº 7 planta 5ª. Edificio Sollube. 28020. Madrid. Tf: 914269917.
&EJUBConsejería de Sanidad. Dirección General de Gestión Económica y de Compras de Productos Sanitarios y Farmacéuticos.
%PDVNFOUPEJHJUBMPixel Creación y Producción Gráfica, S.L.
ISSSN: 1697-6274 / Depósito Legal: M-13724-2004

16
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septiembre/2010 - Nº 9

Recomendaciones
Farmacoterapéuticas en
Salud Mental
1. Introducción
 t%FTDSJQDJØO
Trastorno bipolar


t&QJEFNJPMPHÓB
t$SJUFSJPTEJBHOØTUJDPT en niños y adolescentes
 t*OTUSVNFOUPT
EJBHOØTUJDPTZEF
TDSFFOJOH
 t$VSTPDMÓOJDP 1. INTRODUCCIÓN
 t"VNFOUPEFMEJBHOØTUJDP
EF5SBTUPSOP#JQPMBS 5#

DESCRIPCIÓN EPIDEMIOLOGÍA
2. Tratamiento
GBSNBDPMØHJDPEFM El trastorno bipolar (TB) es un trastorno afectivo de Existen diferencias considerables tanto en los datos
USBTUPSOPCJQPMBS larga evolución en el que se alternan a lo largo del epidemiológicos como en la conceptualización
FOFMOJ×PZFM tiempo episodios depresivos con episodios maníacos. y el abordaje del TB infantil en Europa y EEUU.
BEPMFTDFOUF Entre estos episodios los pacientes presentan En nuestro medio, la ausencia de datos epide-
 t-JUJP periodos eutímicos de duración variable dependiendo miológicos dificulta aproximarnos de forma más
 t7BMQSPBUP de la gravedad del trastorno. A medida que progresa adecuada a la magnitud del problema.
 t0YDBSCBDFQJOB el trastorno suele disminuir el tiempo entre los episo-
 t-BNPUSJHJOB dios. Alrededor del 7% de los pacientes no presentan Los escasos estudios epidemiológicos con niños y
 t5PQJSBNBUP recurrencia de los síntomas, el 45% sufre más de un adolescentes en población general han encontrado
 t3JTQFSJEPOB episodio y el 40% tiene un trastorno crónico. La una prevalencia nula en niños, tanto en Europa
 t2VFUJBQJOB como en EEUU3,4. Sin embargo en la adolescencia
breve duración de los episodios maníacos, la edad de
 t0MBO[BQJOB la prevalencia se cifra en 1.9% en Europa5 y entre
comienzo avanzada, escasos pensamientos suicidas
 t"SJQJQSB[PM 1-2% e EEUU6.
y pocos problemas psiquiátricos o médicos coexis-
 t0NFHB
tentes presagian buen pronóstico1.
Los datos de los estudios retrospectivos y de aque-
-JNJUBDJPOFTEFMPT llos con muestras clínicas en población infantil, son
estudios La existencia de este trastorno en niños y adoles-
centes ha sido cuestionada históricamente, a pesar de sin embargo mucho más heterogéneos. En EEUU, en
4. Recomendaciones que Kraepelin2 describió ya la aparición del mismo en un estudio de Lish y cols.7 en adultos con trastorno
QBSBFMNBOFKPEFM niños menores de 10 años. Sin embargo, desde hace bipolar, el 59% señalaban haber tenido síntomas
USBTUPSOPCJQPMBSFO durante la infancia y adolescencia. En un estudio
OJ×PTZBEPMFTDFOUFT algo más de una década ha aumentado considera-
blemente el interés y el estudio del trastorno bipolar posterior de Grant y cols.8, el 50-60% de los casos
4.I. Recomendaciones infantil. A pesar de ello, la mayoría de los estudios aparecía antes de los 19-23 años. En Europa varían
HFOFSBMFT considerablemente los resultados. Un estudio con
de los que se dispone en la actualidad acerca del
4.II. Recomendaciones inicio del trastorno en la infancia y la adolescencia datos de asociaciones de enfermos de 11 países
FTQFDÓGJDBT son retrospectivos o presentan muestras pequeñas, europeos muestra que el 33% de los pacientes diag-
"TQFDUPT ausencia de grupo control, altas tasas de comor- nosticados de trastorno bipolar tienen un inicio de la
ÏUJDPMFHBMFTFOFM bilidad (sobre todo con TDAH) o evaluaciones no enfermedad antes de los 20 años9. Un estudio multi-
USBUBNJFOUPEFMB estandarizadas entre otros muchos factores. Por otro céntrico10 llevado a cabo entre 1994 y 2001 en Francia,
NBOÓBFOOJ×PTZ lado, no existe consenso en los criterios diagnósticos Suiza y Alemania mostró tres picos de incidencia de la
BEPMFTDFOUFT adecuados para la infancia y adolescencia, por lo que enfermedad: a los 17,6 años (21,4% de los pacientes),
1VOUPTDMBWF se asumen los criterios de adultos no teniéndose en 24,6 años (57,3%) y 39,2 años (21,2%). En mues-
cuenta las características propias de los menores. tras clínicas, los resultados en EEUU y Europa son
Autores. Como en el caso de los adultos, la etiología y patogé- todavía más dispares. Así, en Europa menos del 1,7%
Bibliografía. nesis son atribuibles a múltiples causas con distinto de los ingresos psiquiátricos de menores de 18 años
grado de implicación, pero en los casos de aparición tienen diagnóstico de TB11. Sin embargo, en EEUU se
Metodología de la búsqueda.
precoz la contribución de la genética parece ser un ha encontrado que un 40% de las hospitalizaciones
factor especialmente relevante. psiquiátricas entre 5-13 años y un 25,86% entre
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14-18 años tienen diagnóstico de trastorno bipolar12. En España, el &QJTPEJPNBOÓBDP


único estudio13 publicado, con una muestra clínica, encontró que el
4% de los pacientes tratados en una unidad de de psiquiatría con $SJUFSJPT
edades entre 5-10 años cumplían criterios de TB. t1FSJPEPDBSBDUFSJ[BEPQPSFTUBEPEFánimo
QFSTJTUFOUFNFOUFFMFWBEP FYQBOTJWPPJSSJUBCMF
En conclusión, podemos decir que en EEUU los estudios mues- duraciónöEÓBT (menos si precisa hospitalización)
tran una edad de inicio más temprana y una mayor prevalencia
de TB en niños y adolescentes en muestras clínicas que en t"MNFOPT TJFMÈOJNPFTJSSJUBCMF
EFMPTTJHVJFOUFT
síntomas (DSM-IV), CIE-10 no especifica número de
Europa14. Estas diferencias tan llamativas obedecen a diferentes síntomas
perspectivas de la enfermedad, y sobre todo a diferentes formas
- Grandiosidad
de diagnóstico que se expondrán en siguiente apartado.
- n necesidad de sueño
Una vez diagnosticado el TB, la intervención terapéutica es - Verborrea
básica. La intervención multidisciplinar tanto psicoterapéutica - Fuga de ideas
como psicofarmacológica suele ser precisa así como el apoyo - Distraibilidad
desde otras disciplinas como la educativa. - l actividad dirigida a un fin o agitación psicomotriz
Aunque es aceptado que es preciso el uso de todos aquellos - l implicación en actividades placenteras con potencial
psicofármacos que se utilizan en adultos, fundamentalmente para producir consecuencias graves (compras excesivas,
indiscreciones sexuales…)
eutimizantes, como veremos a continuación existen pocos
estudios controlados en este sector de población y la evidencia t"MUFSBDJØOEFMGVODJPOBNJFOUPTPDJBMPMBCPSBM
científica es escasa al respecto. Hay que tener en cuenta cómo t/PEFCJEPBMFGFDUPEFTVTUBODJBTPBFOGFSNFEBEFT
se introducen y se ajustan las dosis de los distintos psicofár- médicas
macos y los efectos secundarios posibles. Además, a la hora
de planificar el tratamiento hay que considerar no sólo el trata-
miento en fase aguda sino también el posible tratamiento más &QJTPEJPNJYUP
adecuado en el mantenimiento, destinado a evitar recaídas y
emperoramiento del pronóstico. $SJUFSJPT
t4VDFTJØOSÈQJEBEFTÓOUPNBTNBOÓBDPT IJQPNBOÓBDPTZ
CRITERIOS DIAGNÓSTICOS depresivos
Los trastornos bipolares en la infancia y adolescencia se diag- t-PTTÓOUPNBTEFQSFTJWPTZNBOÓBDPTEFTUBDBOJHVBMNFOUF
nostican con los criterios generales de adultos en las clasifica- durante la mayor parte de la enfermedad
ciones CIE-10 y DSM-IV-TR. - $*&öTFNBOBT
- %4.*7öTFNBOB
Estas 2 clasificaciones difieren principalmente en la duración de los
síntomas y en el número de episodios necesarios para diagnosticar
un TB. Mientras que la DSM-IV es la más utilizada en EEUU, la El TB tiene 4 variantes, éstas son:
CIE-10 es la clasificación de referencia en la mayoría de los países
europeos. A continuación se detallan los síntomas que deben estar 1. Trastorno bipolar I (TB-I)
presentes en los episodios maníacos, hipomaníacos y mixtos: 2. Trastorno bipolar II (TB-II)

&QJTPEJPIJQPNBOÓBDP 3. Ciclotimia

5SBTUPSOPCJQPMBSOPFTQFDJGJDBEP 5#/04

$SJUFSJPT
t1FSJPEPEJGFSFODJBEPEFFTUBEPEFánimo persistentemente
FMFWBEP FYQBOTJWPPJSSJUBCMF de duración öEÓBT *$MBTJGJDBDJØO%4.*7
(DSM-IV), CIE-10 no especifica duración mínima
t%4.*7QSFTFOUFTBMNFOPT TJFMÈOJNPFTJSSJUBCMF
EFMPT
síntomas descritos para la manía 1. TRASTORNO BIPOLAR I
t$*&JSSJUBCJMJEBE l sociabilidad, l sentimientos de bienestar, Hay 6 criterios para el TB-I en función de la naturaleza del
l presión habla, l vigor sexual, l distractibilidad, n sueño
(no especifica número de síntomas) episodio actual (o más reciente) en los sujetos que han tenido
episodios afectivos recidivantes, al menos uno de ellos maníaco
t4JOBMUFSBDJØOEFMGVODJPOBNJFOUPMBCPSBMPTPDJBM TJO
TÓOUPNBTQTJDØUJDPT
o mixto. El episodio maníaco único se utiliza para describir a los
sujetos que presentan un primer episodio de manía o que no
t/PEFCJEPBMFGFDUPEFTVTUBODJBTPBFOGFSNFEBEFTNÏEJDBT vuelvan a tener un episodio.

2
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$ØEJHP 5SBTUPSOP#JQPMBS* $SJUFSJPT


F30.x Episodio maníaco único Presencia de un único episodio maníaco, sin episodios depresivos mayores anteriores.
F31.0 Episodio más reciente hipomaníaco Previamente se ha presentado al menos un episodio maníaco o un episodio mixto
Previamente se ha presentado al menos un episodio depresivo mayor, un episodio
F31.x Episodio más reciente maníaco
maníaco o un episodio mixto.
Previamente se ha presentado al menos un episodio depresivo mayor, un episodio
F31.6 Episodio más reciente mixto
maníaco o un episodio mixto.
F31.x Episodio más reciente depresivo Previamente se ha presentado al menos un episodio maníaco o un episodio mixto
F31.9 Episodio más reciente no especificado Previamente se ha presentado al menos un episodio maníaco o un episodio mixto

2. TRASTORNO BIPOLAR II **$MBTJGJDBDJØO$*&

Este diagnóstico queda reservado para los sujetos que presentan Las diferencias con la clasificación DSM-IV-TR en cuanto a la
tanto episodios depresivos mayores como episodios hipoma- clasificación de los episodios son que en la CIE-10 se matiza
níacos. si los episodios maníacos presentan o no síntomas psicóticos.
Además los episodios depresivos pueden ser leves, moderados
$ØEJHP $SJUFSJPT
o graves y estos últimos con o sin síntomas psicóticos. La CIE-10
contempla también el diagnóstico de TB actualmente en remi-
F 31.8 A. Presencia (o historia) de uno o más episodios sión, empleada cuando en la actualidad no hay ninguna altera-
depresivos mayores. ción significativa del humor ni la ha habido en varios meses.
B. Presencia (o historia) de al menos un episodio
hipomaníaco. $ØEJHPT$*&
$/PIBIBCJEPOJOHÞOFQJTPEJPNBOÓBDPOJVO F.30 Episodio maníaco
episodio mixto. F.30.0 Hipomanía
F30.1 Manía sin síntomas psicóticos
3. TRASTORNO CICLOTÍMICO. TIENE QUE CUMPLIR ESTOS 3 PUNTOS: F30.2 Manía con síntomas psicóticos
F31 Trastorno bipolar
$ØEJHP F31.0 Trastorno bipolar, episodio actual hipomaníaco
F 34.0 A. Presencia, durante al menos 2 años, de F31.1 Trastorno bipolar, episodio actual maníaco sin
numerosos períodos de síntomas hipomaníacos síntomas psicóticos
y numerosos períodos de síntomas depresivos F31.2 Trastorno bipolar, episodio actual maníaco con
que no cumplen los criterios para un episodio síntomas psicóticos
depresivo mayor. En los niños y adolescentes la F31.3 Trastorno bipolar, episodio actual depresivo
duración debe ser de al menos 1 año. leve o moderado
B. Durante el período de más de 2 años (1 año en F31.4 Trastorno bipolar, episodio actual depresivo
niños y adolescentes) la persona no ha dejado de grave sin síntomas psicóticos
presentar los síntomas del criterio A durante un F31.5 Trastorno bipolar, episodio actual depresivo
tiempo superior a 2 meses. grave con sintomas psicóticos
C. Durante los primeros 2 años de la alteración no se F31.6 Trastorno bipolar, episodio actual mixto
ha presentado ningún episodio depresivo mayor, F31.7 Trastorno bipolar, actualmente em remisión
episodio maníaco o episodio mixto. F31.8 0USPTUSBTUPSOPTCJQPMBSFT
F31.9 Trastorno bipolar sin especificación
4. TRASTORNO BIPOLAR NO ESPECIFICADO
***%JGFSFODJBTEJBHOØTUJDBT%4.*753Z$*&
Esta categoría incluye los trastornos con características bipo-
lares que no cumplen los criterios para ningún tipo de TB espe- Los criterios diagnósticos para clasificar un paciente según TB-I
cífico de los anteriores. ó II varían según la clasificación. Así, para diagnosticar un TB-I
según CIE-10 se requieren al menos 2 episodios, bien depre-
Por último cabe mencionar que el TB-I ó II puede presentarse sión y manía/episodio mixto o 2 episodios de manía/episodios
con ciclos rápidos, denominándose cicladores rápidos a los mixtos. Sin embargo para el DSM-IV-TR es suficiente con un
pacientes que presentan al menos 4 episodios, en cualquier episodio maníaco o mixto.
orden y combinación, de depresión mayor, manía, manía mixta Para diagnosticar un TB-II se necesita al menos un episodio de
o hipomanía en el último año. Esta categoría está asociada a depresión y uno de hipomanía. En este caso no hay diferencias
una respuesta más pobre al tratamiento farmacológico15. entre CIE-10 y DSM-IV-TR.

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INSTRUMENTOS DIAGNÓSTICOS Y DE SCREENING Además, conviene mencionar que los niños y adolescentes
presentan algunas dificultades diagnósticas propias de la edad
Hay que tener presente que el diagnóstico del TB debe ser que tienen que ver con:
clínico y nunca derivado exclusivamente de cuestionarios u otro
tipo de exploraciones complementarias. Los instrumentos diag- tEl nivel de desarrollo cognitivo. Éste dificulta la expre-
nósticos requieren un entrenamiento para su aplicación y deben sión de las emociones complejas, por lo que es frecuente
ser aplicados por especialistas en salud mental, a poder ser con realizar inferencias sobre el estado de ánimo a partir del
experiencia en el área infanto-juvenil. comportamiento17.

Uno de los instrumentos más utilizados por distintos estu- tCon las discrepancias que se producen en los síntomas refe-
dios para el diagnóstico de TB es el Washington Schedule for ridos por los padres, profesores y por los propios niños18.
Affective Disorders and Schizophrenia for School-Age Children-
Present and Lifetime version (WASH-U-KSADS). Se trata de una tPor la heterogeneidad en las escalas diagnósticas utilizadas
entrevista semiestructurada en la que los síntomas se valoran en los distintos estudios.
por los padres y por los propios pacientes según una escala de
severidad. Tiene que ser administrada por un clínico entrenado CURSO CLÍNICO
y raramente se usa en la práctica clínica habitual. Se puede
usar entre los 6-18 años. Además incluye preguntas específicas Las descripciones clínicas se asemejan a las de los adultos
importantes para la clasificación de los cicladores rápidos. El aunque es importante tener en cuenta que en la población
test sigue los criterios diagnósticos DSM-IV-TR. Sin embargo, pediátrica aparecen más cicladores rápidos. Así en un estudio
la entrevista es muy detallada, larga y laboriosa, lo que proba- con pacientes bipolares19 se observó que el 83,3% de los parti-
blemente influye en la fiabilidad de la misma, por agotamiento cipantes fueron clasificados como cicladores rápidos. Éstos
del paciente, y dificulta utilizarla de forma secuencial para ver la incluían 3 tipos: los rápidos (4 ó más episodios al año), ultra-
evolución diagnóstica. La entrevista Kiddie-SADS-present and rápidos (varios episodios en pocos días o semanas) y ultra-
lifetime versión (K-SADS-PL)16, permite un diagnóstico fiable dianos (ciclan varias veces en 24 horas). La población pediátrica
tanto del TB como de posible comorbilidad asociada y es una de además presenta más episodios mixtos20.
las más utilizadas en investigación.
Se ha sugerido que el TB en edad pediátrica se acompaña
Además, existen pruebas de screening o cribado, que ayudan frecuentemente de TDAH y trastorno oposicionista desafiante21.
a identificar y a valorar la gravedad de los síntomas relacio- Sin embargo, dichos cuadros comórbidos son poco frecuentes
nados con este trastorno. Resultados positivos en estas pruebas en adultos22. Por una parte, los cuadros de manía moderada se
no implican que el niño o adolescente tenga un TB, sino que confunden fácilmente con problemas de conducta23. Por otra,
sugieren que tiene más posibilidades de tenerlo y por tanto puesto que la mayoría de los cuadros de TDAH no desaparecen
debería ser evaluado clínicamente para confirmar o descartar el al llegar a la edad adulta, es posible que lo que se está diagnos-
diagnóstico. Algunas de estas escalas se utilizan además para ticando como comorbilidad con TDAH se deba a una expresión
monitorizar la respuesta al tratamiento. sintomática específica del TB a estas edades.

&TDBMBT &EBE $BSBDUFSÓTUJDBT


Es una escala con 11 ítems que valora la gravedad de los síntomas maníacos. Tarda entre
:PVOH.BOJB3BUJOH4DBMF
5-17 15-30 minutos en ser pasada. Se usa en la práctica clínica desde 1978. Esta escala no valora
:.34

síntomas depresivos.
Es una adaptación de la escala anterior para que sean los padres quienes puntúen la
1BSFOU7FSTJPOPGUIF:PVOH
5-17* severidad de los síntomas maníacos. Es muy útil para valorar el impacto de las intervenciones
.BOJB3BUJOH4DBMF 1:.34

terapéuticas. Se tarda tan solo unos 5 minutos en pasarse.


(FOFSBM#FIBWJPS*OWFOUPSZ 11+ Se trata de un cuestionario de cribado autoaplicado con 73 ítems. Los sujetos puntúan sus
(#*
5-17 propios síntomas de hipomanía/ humor alternante.
Se trata de una adaptación del instrumento anterior que permite a los padres puntuar los
1BSFOU7FSTJPO (FOFSBM
5-17** síntomas depresivos, hipomaníacos, maníacos y alternantes en sus hijos. Esta escala se usa
#FIBWJPS*OWFOUPSZ 1(#*

principalmente en investigación y su aplicación en contextos clínicos es muy escasa.


8FJOCFSH4DSFFOJOH"GGFDUJWF
7-17 Se trata se una escala auto-aplicada de 56 ítems que puede ser completada en 5 minutos
4DBMF 84"4

.PPE%JTPSEFS2VFTUJPOOBJSF Se trata de un instrumento de 15 ítems sí/no en relación a síntomas afectivos. Se puede repetir
12+
.%2
para valorar la mejoría tras tratamientos.
*Escala validada para padres de pacientes de 5 a 17 años de edad. Referencia: Gracious BL, Youngstrom EA, Findling RL, Calabrese JR. Discriminative validity of a parent
WFSTJPOPGUIF:PVOH.BOJB3BUJOH4DBMF+"N"DBE$IJME"EPMFTD1TZDIJBUSZ/PW 

**Escala validada para padres de pacientes de 5 a 17 años. Referencia: Youngstrom EA, Findling RL, Danielson CK, Calabrese JR. Discriminative validity of parent report of
IZQPNBOJDBOEEFQSFTTJWFTZNQUPNTPOUIF(FOFSBM#FIBWJPS*OWFOUPSZ1TZDIPM"TTFTT+VO 


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AUMENTO DEL DIAGNÓSTICO DE TRASTORNO BIPOLAR La metodología de la búsqueda bibliográfica puede consultarse
(TB) en la página 20 de este documento.

En EEUU entre los años 1996 y 2004 el diagnóstico de TB infantil


se ha multiplicado por 5,6 en niños hospitalizados de 5-13 años
LITIO
y por 4 en adolescentes hospitalizados de 14-18 años11. Varias
son las razones que se han intentado dar a esta realidad entre 5SBUBNJFOUPFOGBTFBHVEB
las que destaca la posible reconceptualización de los fenómenos
clínicos que antes recibían diferentes diagnósticos, sobre todo " Ensayos clínicos aleatorizados, doble ciego: Entre los estudios
los relacionados con problemas de conducta. revisados, se ha incluido un estudio aleatorizado, doble ciego
y controlado con placebo, publicado en 1998 que evalúa la
El diagnóstico no sólo ha aumentado en pacientes hospitali- eficacia del litio en fase aguda pero no evalua la eficacia clínica
zados, sino también en las consultas. Así, en un periodo de del litio sobre los síntomas específicos del trastorno bipolar en
10 años, entre 1994 y 2003, en EEUU el diagnóstico de TB ha la fase aguda y que, por los criterios de búsqueda elegidos, no
aumentado por dos en adultos, mientras que en niños y adoles- se encontraba a priori entre las publicaciones seleccionadas.
centes ha aumentado por 4024.
Los autores de este estudio27 reclutaron a 25 pacientes ambula-
Estos resultados indican, entre otras, dos posibilidades no torios de 12 a 18 años con diagnóstico de síndrome de depen-
excluyentes: que anteriormente fuera infradiagnosticado o dencia a sustancias y TB-I o II, manía o trastorno depresivo mayor
confundido con otros cuadros, o lo más probable, que debido a con algún predictor de futuro TB (presencia de delirios, viraje a
un cambio en la práctica clínica actualmente se esté sobrediag- TB durante el tratamiento con antidepresivos tricíclicos, marcado
nosticando en este grupo de edad. enlentecimiento psicomotor, familiar de primer grado diagnosti-
cado de TB), pero sólo la mitad de la muestra tenía diagnóstico de
TB-I (12 pacientes) y otros 5 tenían diagnóstico de TB-II. Durante 6
semanas, 13 pacientes fueron asignados de forma aleatoria para
2. TRATAMIENTO FARMACOLÓGICO DEL
recibir tratamiento con litio (2 semanas de ajuste de dosis hasta
TRASTORNO BIPOLAR EN EL NIÑO Y alcanzar niveles plasmáticos de 0,9-1,3 mEq/l, y 4 semanas a dosis
EL ADOLESCENTE mantenidas) y 12 recibieron placebo. El grupo en tratamiento con
A pesar de que el objeto de este capítulo es revisar el trata- principio activo mostró de forma significativa un menor porcen-
miento psicofarmacológico del TB en niños y adolescentes, FM taje de test positivos a sustancias a partir de la tercera semana de
USBUBNJFOUPBEFDVBEPQSFDJTB como se ha mencionado tratamiento y una mayor tasa de respuesta en el funcionamiento
anteriormente, VOBCPSEBKFJOUFHSBM RVFJODMVZBUSBUB (determinada por una puntuación ≥65 en la C-GAS).
NJFOUPQTJDPUFSBQÏVUJDPZ FOPDBTJPOFT BQPZPFOFM B. 0USPTFTUVEJPT Hasta la fecha sólo se han encontrado 2
NFEJPFTDPMBS0USBTFTUSBUFHJBTOPGBSNBDPMØHJDBT UBMFT estudios abiertos con litio en fase aguda. Uno se realizó con
como la terapia electroconvulsiva, también han sido empleadas pacientes en fase depresiva y el otro en combinación con
en adolescentes con TB, aunque el nivel de evidencia es menor valproato en pacientes en fase maníaca.
que el de otras intervenciones25,26.
En el primero de ellos, Patel y cols.28 evaluaron durante 6
El tratamiento del TB incluye la resolución actual del episodio semanas a 31 pacientes entre 12-18 años hospitalizados y
(depresivo, maníaco o mixto) y la profilaxis efectiva para prevenir diagnosticados de TB en fase depresiva, definida con la escala
recaídas y reducir la morbilidad. La evidencia científica acerca Children Depression Rating Scale-Revised (CDRS-R≥40). Se
de los tratamientos más adecuados es muy limitada. Además, administró litio a dosis inicial de 30 mg/Kg/día hasta conseguir
aunque son muy pocos los ensayos clínicos aleatorizados que niveles plasmáticos de 1,0-1,2 mEq/l y se permitió lorazepam a
se han realizado, los más numerosos son aquellos destinados a dosis de 2 mg/día como tratamiento coadyuvante. Solo 48% de
probar la eficacia de tratamientos farmacológicos para resolver los pacientes respondieron (respuesta definida como disminu-
MBTGBTFTBHVEBTEFNBOÓB/PIBZQVCMJDBEPOJOHÞOFOTBZP ción ≥ 50% en la CDRS-R basal). Tres pacientes abandonaron el
aleatorizado doble ciego para el estudio de la depresión bipolar estudio por ineficacia del tratamiento.
en esta franja de edad y los estudios de mantenimiento son
escasos y presentan importantes limitaciones metodológicas. El segundo estudio corresponde a la 1ª fase de un estudio
multifase. En él, Findling y cols.29 valoraron durante 20 semanas
A continuación se analizan los estudios de eficacia de aquellos la combinación de litio y valproato en 90 pacientes entre 5-17
fármacos estudiados en TB infanto-juvenil. Dada la escasez de años. Todos estaban diagnosticados de TB-I ó II y habían pade-
ensayos aleatorizados, doble ciego, controlados con placebo, cido al menos un episodio maníaco o hipomaníaco en los 3
en esta revisión se han incluido además datos procedentes de meses previos a la evaluación. Se permitió mediación coadyu-
ensayos abiertos, fundamentalmente para ilustrar la tolerabi- vante con antipsicóticos y estimulantes a dosis recomendadas
lidad y potenciales efectos adversos de los fármacos. por la FDA. Un 75.6% de los pacientes presentaban comorbi-

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lidad psiquiátrica, sobre todo con TDAH y trastorno de conducta. 0USPFTUVEJPEFEJTDPOUJOVBDJØO32 evaluó la eficacia del litio
Al final de las 20 semanas el 46.7% de los pacientes cumplió como tratamiento de mantenimiento. La primera parte del
criterios de remisión (CDRS-R ≤40 y YMRS ≤ 12.5 y CGAS≥51 estudio30 consistía en una fase abierta de tratamiento con litio
durante 4 semanas consecutivas). La dosis media de valproato durante 4 semanas, en la que fueron incluidos 108 pacientes
fue de 862.5 mg/día (niveles plasmáticos 79.8 μg/ml) y la de (hospitalizados o ambulatorios, con TB-I en fase maniaca) de
litio de 923.3 mg/día (niveles de 0.9 mEq/l). De este estudio 12 a 18 años. Se permitió medicación coadyuvante antipsi-
cabe destacar la muestra más grande de lo habitual, la mayor cótica a dosis recomendadas por la FDA. Cuarenta y cinco de
duración y los criterios de remisión más exigentes. los 108 pacientes fueron clasificados como respondedores al
tratamiento con litio (al presentar una disminución ≥33% en la
$ Tolerabilidad: Según muestran los estudios comentados, puntuación de las YMRS y mejoría en la CGI tras las 4 semanas)
el litio es bien tolerado en esta población, siendo los efectos y, de estos, 40 entraron en la fase controlada con placebo y
secundarios más frecuentes: polidipsia, poliuria, náuseas, fueron asignados de forma aleatoria a continuar o no el trata-
vómitos y mareos27. miento con litio. En la fase doble ciego, 19 pacientes recibieron
tratamiento con litio (niveles plasmáticos de 0,6-1,2 mEq/l) y
En el estudio abierto en fase depresiva se observó un aumento
21 con placebo (en este grupo la puntuación de la YMRS era
de peso en el 55.3% de la muestra30.
leve pero significativamente mayor). En ambos grupos se halló
En el estudio de litio y valproato durante 20 semanas29 se una tasa de empeoramiento (determinada según puntuación en
observó que los efectos secundarios más frecuentes fueron: Global Clinical Judgments) no significativamente diferente a las
emesis (47.8%), enuresis (45.6%), dolor de estómago (45.6%) 2 semanas. Además, tampoco hubo diferencias en las puntua-
y temblor (41.1%). Un 16.7% de los pacientes abandonaron el ciones de YMRS, HAM-D, BPRS, CGI-S y GAS en las 2 semanas
estudio por intolerancia. Ésta fue atribuible en un 80% de los y un número similar de pacientes en ambos brazos tuvo que
casos al litio y consistió en efectos secundarios neurológicos (5 abandonar el estudio debido a falta de eficacia (26,3% en el
pacientes), niveles elevados de tirotropina (3 pacientes), protei- grupo con litio y 28,5% en el grupo placebo).
nuria (1 paciente), emesis (1 paciente) y disforia (1 paciente). B. 0USPTFTUVEJPT Por último la 3º fase del estudio de Findling y
Dos abandonos se atribuyeron al valproato, debidos a aumento cols.33 consistió en un estudio abierto de 8 semanas, en el que
de transaminasas y empeoramiento de los síntomas maníacos. se valoró la tasa de reestabilización tras introducir tratamiento
% Dosis: Las dosis estudiadas se corresponden a unos niveles combinado con litio y valproato en 38 pacientes que habían
plasmáticos entre 0,6 y 1,3 mEq/l (rango de dosis 923.3-1733 recaído previamente estando en monoterapia con alguno de
mg/día)27,29. estos dos fármacos33. Tras las 8 semanas, un 89.5% de los
pacientes respondieron al tratamiento combinado sin necesidad
de añadir más fármacos. Un 10.53% de los pacientes requi-
2. Tratamiento de mantenimiento rieron tratamiento coadyuvante con antipsicóticos. La respuesta
se midió exclusivamente como una disminución significativa de
" Ensayos clínicos aleatorizados, doble ciego: Se han encon- puntuación en las 3 escalas (YMRS, CDRS-S y CGAS) entre el
trado dos ensayos clínicos con litio de estas características. GJOBMZFMQSJODJQJPEFMUSBUBNJFOUP/JOHVOPEFMPTQBDJFOUFT
abandonó el estudio por intolerancia. Cabe destacar que este
En el estudio de Findling y cols. mencionado previamente29, la
estudio multifase es el primero que valora la reestabilización
segunda fase consistía en un ensayo clínico aleatorizado doble
de niños y adolescentes tras recaídas por discontinuación de
ciego de 76 semanas de duración que comparaba la eficacia
medicación.
del litio y del valproato en el tratamiento de mantenimiento en
pacientes ambulatorios (5-17 años de edad) con diagnóstico $ Tolerabilidad: Los efectos adversos observados durante el
de TB-I o II31. Treinta pacientes recibieron litio y 30 valproato, tratamiento de mantenimiento fueron: emesis, poliuria, enuresis,
controlándose las dosis mediante las concentraciones plas- diarrea, aumento del apetito, cefalea y náuseas31-33.
máticas (0,6-1,2 mmol/l para el litio y 50-100 μg/ml para el
valproato sódico). El objetivo era determinar el tiempo hasta % Dosis: Las dosis estudiadas se corresponden con niveles
discontinuación del tratamiento por recaída o por otros motivos plasmáticos entre 0,6 y 1,2 mEq/l.
(efectos secundarios y mala adherencia entre ellos), que no
mostró diferencias significativas entre ambos tratamientos. $PODMVTJØO
0USBTWBSJBCMFTTFDVOEBSJBT DBNCJPBMPMBSHPEFMFTUVEJPFO
las escalas CDRS-R, YMRS y CGAS) tampoco fueron diferentes /PFYJTUFOJOHÞOFOTBZPBMFBUPSJ[BEPEPCMFDJFHPRVFIBZB
entre las dos ramas de tratamiento. El tiempo medio hasta una evaluado la eficacia del litio en el tratamiento del TB en fase
recaída fue de unas 16 semanas (114±57,4 días en el caso del aguda frente a placebo en niños y/o adolescentes. El único
litio y 112±56 en el valproato). El 60% de los pacientes tratados ensayo de estas características incluía solo 17 pacientes con
con litio y el 66,7% de los tratados con valproato abandonaron TB de total (25 pacientes reclutados), siendo el tamaño mues-
el estudio por reagudización de la sintomatología afectiva. tral insuficiente para mostrar diferencias entre litio y placebo.

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Además, todos los participantes presentaban dependencia a $ Tolerabilidad: Los efectos adversos referidos con más
sustancias, situación distinta a la de la mayoría de los niños frecuencia son: sedación, aumento de peso, mareo y molestias
y adolescentes que habitualmente acuden a tratamiento. Los gastrointestinales34,35. Se ha observado una plaquetopenia sin
ensayos abiertos sugieren utilidad potencial en las fases de repercusión clínica34.
manía pero no orientan hacia la posible eficacia del litio para
las fases depresivas del TB infantil. % Dosis: Las dosis iniciales estudiadas son de 20 mg/Kg/día,
que se incrementan paulatinamente hasta alcanzar unos niveles
Por otra parte, los estudios de mantenimiento sólo proporcionan plasmáticos de 50-120 μg/ml34,35.
datos preliminares sobre la utilidad del litio en la prevención
de recaídas. Mientras que en la comparación con placebo las
tasas de recaída son similares en las primeras semanas de trata- 2. Tratamiento de mantenimiento
miento, en la comparación con otro estabilizante del ánimo,
" Ensayos clínicos aleatorizados, doble ciego:/PTFIBOFODPO-
el valproato, las tasas de recaída a medio plazo también son
trado estudios que evalúen la eficacia frente a placebo en el
similares, siendo el tiempo medio de recaída con cualquiera de
tratamiento de mantenimiento. Sin embargo, se ha hallado un
los tratamientos de unos 4 meses y recayendo antes del año
estudio31 aleatorizado doble ciego de 76 semanas de duración
y medio aproximadamente los 2 tercios de los pacientes, no
demostrándose por tanto la utilidad del litio en monoterapia a que comparaba la eficacia del valproato y del litio en el trata-
miento de mantenimiento en pacientes ambulatorios (5-17 años
largo plazo. de edad) con diagnóstico de TB-I o II. Como ya se comentó en el
apartado del litio, el grupo tratado con valproato (30 pacientes
VALPROATO con concentraciones plasmáticas de 50-100 μg/ml) no mostró
diferencias significativas comparado con litio (30 pacientes con
concentraciones plasmáticas de 0,6-1,2 mmol/l) en el tiempo
5SBUBNJFOUPFOGBTFBHVEB hasta la discontinuación del tratamiento por recaída (unas 16
" Ensayos clínicos aleatorizados, doble ciego: la búsqueda semanas) u otros motivos (entre ellos, efectos secundarios
realizada no encontró estudios controlados con placebo que o mala adherencia) ni en el cambio a lo largo del estudio en
evalúen la eficacia del valproato en el tratamiento del TB en las escalas CDRS-R, YMRS y CGAS. El 60% de los pacientes
niños y adolescentes en fase aguda. tratados con litio y el 66,7% de los tratados con valproato
abandonaron el estudio por sintomatología afectiva.
La misma búsqueda sí halló un ensayo clínico34 aleatorizado,
doble ciego, que comparaba el tratamiento con valproato y con B. 0USPTFTUVEJPT/PTFFODPOUSBSPO
quetiapina en adolescentes hospitalizados con diagnóstico de
$ Tolerabilidad: Los efectos adversos referidos con más
TB-I en episodio maníaco o mixto. Cincuenta pacientes (12-18
frecuencia fueron cefalea y gastralgia31.
años) fueron distribuidos aleatoriamente para recibir valproato
(niveles plasmáticos medios de 101μg/ml) o quetiapina (dosis % Dosis: Dosis necesarias para obtener unos niveles plasmá-
media de 412 mg/día) durante 4 semanas. Ambos fármacos ticos de 50-100 μg/ml, empezando por 20 mg/Kg/día31.
fueron igual de eficaces a la hora de producir mejoría clínica
(cambio significativo en la puntuación de la YMRS), pero esta
mejoría fue significativamente más rápida en el grupo tratado $PODMVTJØO
con quetiapina. Además, la rama de tratamiento con quetia-
pina mostró significativamente mayor tasa de respuesta (defi- /PFYJTUFOFTUVEJPTRVFFWBMÞFOMBFGJDBDJBGSFOUFBQMBDFCPFO
nida por una puntuación de la CGI-I≤2) y de remisión (definida el tratamiento, agudo o de mantenimiento. Los datos de estu-
por una puntuación en la YMRS≤12). Sin embargo, debemos dios en fase aguda sugieren cierta utilidad con aceptable tole-
tener en cuenta que este estudio no dispone de grupo control rabilidad. Como se acaba de comentar en el caso del litio, existe
con placebo, que la mayoría de los pacientes presentaban un evidencia preliminar aunque limitada de su utilidad en mono-
episodio mixto y la mitad tenían síntomas psicóticos. terapia en el tratamiento a medio plazo del trastorno bipolar
infanto-juvenil (ver conclusiones relativas al litio)31.
B. 0USPTFTUVEJPT La búsqueda realizada ha encontrado un
estudio abierto de Pavuluri y cols.35 en el que durante 6 meses se
estudió el efecto del valproato en 35 pacientes entre 5-18 años
OXCARBACEPINA
diagnosticados de TB-I ó II en fase mixta. Se permitió trata-
miento con estimulantes según la recomendaciones de la FDA, 5SBUBNJFOUPFOGBTFBHVEB
risperidona durante un máximo de 7 días y 3 dosis de trazodona
en 2 ocasiones consecutivas como medicación de rescate. El " Ensayos clínicos aleatorizados, doble ciego: Sólo se ha encon-
73.5% mostró respuesta clínica (disminución ≥50% en la YMRS trado un ensayo controlado con placebo que evalúe la eficacia y
y CDRS-R final ≤ 40) y el 52.9% tuvo remisión clínica (mejoría seguridad de oxcarbacepina en el tratamiento agudo del TB en
clínica más CGI-I≤ 2). niños y adolescentes. Se trata de un estudio36 multicéntrico, con

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116 pacientes ambulatorios (7-18 años), con diagnóstico de TB-I 5#***P/&4ZFQJTPEJPEFQSFTJWP $%343ö
PNBOÓBNJYUB
con episodio maníaco o mixto, de los cuales 59 fueron asignados Este estudio permite utilizar medicación coadyuvante siempre
al grupo de oxcarbacepina (dosis media de 1515 mg/día) y 57 al que no cambien las dosis en el último mes. Se define 2 tipos
grupo placebo. Tras 7 semanas de tratamiento (2 semanas de de respuesta, primaria y secundaria. La 1º mide la impresión
incremento progresivo de dosis, 4 semanas de mantenimiento clínica global y se mide a través de la escala CGI. Una respuesta
y 1 semana de ajuste a la baja de la dosis) no se encontraron primaria positiva se considera entonces cuando CGI-I ≤2. La
diferencias estadísticamente significativas en la variable prin- respuesta 2º mide la sintomatología depresiva y queda definida
cipal de eficacia (cambio en la puntuación de la YMRS a lo largo como un descenso mínimo de la CDRS-R del 50%. Teniendo en
del estudio) ni en las secundarias (porcentaje de pacientes con cuenta esta diferenciación en la respuesta, al final del estudio se
una reducción ≥50% en la puntuación de la YMRS, cambio en halló que 84% de los pacientes cumplían criterios de respuesta
puntuaciones de CDRS, CGI y CHQ) entre ambas ramas. primaria y un 63% de respuesta secundaria. Un 58% presentó
remisión (valorada como CGI-I ≤2 y CDRS ≤28). Se observó que
B. 0USPT FTUVEJPT /P TF FODPOUSBSPO PUSPT FTUVEJPT RVF los pacientes que al final del estudio no cumplían criterios de
evaluasen la oxcarbacepina. respuesta primaria y secundaria tenían valores más altos de la
$ Tolerabilidad: En el estudio de Wagner y cols.36 los efectos escala YMRS al inicio del mismo lo que lleva a suponer que los
adversos comunicados eran similares a los de estudios en pacientes con manía mixta responden peor a la lamotrigina que
epilepsia, pero más frecuentes. Los efectos secundarios más los pacientes bipolares con sólo síntomas depresivos.
frecuentes en el grupo tratado con oxcarbacepina (frecuencia de
$ Tolerabilidad: los efectos adversos descritos con más
al menos el 5%) fueron: diplopía, mareo, náusea, somnolencia
frecuencia fueron cefalea, astenia y náuseas. Cabe señalar
ZSBTIFOOJ×PTBEFNÈTWJTJØOCPSSPTB BVNFOUPEFMBQFUJUPZ
que un 10.5% de los pacientes presentaron irritaciones de la
GBUJHBZFOBEPMFTDFOUFTWØNJUPTZFYBDFSCBDJØOEFM5#&M
piel, que se comprobó que no eran rash cutáneos. Un paciente
de los abandonos entre los pacientes tratados con oxcarbacepina
abandonó el estudio por ideación suicida.
fueron por efectos adversos frente al 2,4% en el grupo placebo.
%Dosis: la dosis máxima usada fue de 100 mg/día si el paciente
%Dosis: Las dosis medias evaluadas fueron de 1200 mg/día en
no tomaba valproato y de 50-100 mg/día si tomaba valproato.
niños de 7 a 12 años y 2040 mg/día en adolescentes de 13 a 18
años, que se alcanzaron con una pauta de incremento de 300
mg cada 2 días. 2. Tratamiento de mantenimiento
" Ensayos clínicos aleatorizados, doble ciego: La búsqueda
2. Tratamiento de mantenimiento bibliográfica descrita no encontró ningún ensayo clínico doble
ciego controlado con placebo que evaluase la eficacia de la
La búsqueda realizada no ha hallado ningún estudio que evalúe
lamotrigina en tratamiento de mantenimiento del TB. Sólo se ha
la eficacia de la oxcarbacepina en el tratamiento de manteni-
miento del TB en niños y adolescentes. hallado un estudio38 multicéntrico de 12 semanas de duración
realizado en pacientes adultos y adolescentes con TB-I estable
sobre la eficacia de un programa de atención dermatológica en
$PODMVTJØO la disminución de incidencia de rash secundario al tratamiento
con lamotrigina. Secundariamente se valoraba la mejoría clínica
El único estudio aleatorizado controlado con placebo no medida a través de las escalas Clinical Global Impressions-
demuestra ventajas del tratamiento con oxcarbacepina en la Bipolar versión (CGI-BP) y Clinical Global Impressions- Efficacy
NBOÓBBHVEB/PIBZFTUVEJPTFOGBTFEFNBOUFOJNJFOUPRVF Index (CGI-EI). La muestra consistía en 1175 pacientes ambu-
permitan evaluar la eficacia de la oxcarbacepina. latorios, de los cuales 40 estaban en el rango de edad de 13
a 17 años. En este subgrupo mejoró la CGI-BP-Severity tras 12
LAMOTRIGINA semanas de tratamiento.
B. 0USPTFTUVEJPT/PTFFODPOUSBSPO
5SBUBNJFOUPFOGBTFBHVEB
$ Tolerabilidad: El estudio de Ketter y cols.38 encontró incidencia
" Ensayos clínicos aleatorizados, doble ciego: La búsqueda de rash no grave algo menor en los adolescentes que en los
realizada no ha hallado estudios de estas características que adultos tratados con lamotrigina, aunque el tamaño del subgrupo
evalúen la eficacia de la lamotrigina en el tratamiento agudo de adolescentes es muy pequeño comparado con el tamaño mues-
del TB en niños y adolescentes. tral y los pacientes estaban tomando además otras medicaciones
que podían interferir en la observación. Este mismo estudio, no
B. 0USPTFTUVEJPT existe un estudio abierto de Chang y cols.37 concreta otros efectos secundarios específicos en adolescentes.
en el que se evalúa el efecto de la lamotrigina durante 8
semanas como monoterapia o tratamiento coadyuvante en 20 % Dosis: Las dosis medias evaluadas en los estudios son de
pacientes ambulatorios entre 12-17 años con diagnóstico de 100 a 200 mg/día.

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$PODMVTJØO risperidona en el tratamiento de la manía pediátrica aguda por la


FDA, publicados en la página de dicha agencia. En este estudio40
Aunque hay datos preliminares que sugieren la posible utilidad de se evaluó el tratamiento con risperidona a dosis altas y bajas, en
la lamotrigina en los síntomas depresivos del TB, son insuficientes niños y adolescentes de 10 a 17 años diagnosticados de TB-I con
para determinar la eficacia en los episodios depresivos en los niños episodio maníaco o mixto. Durante tres semanas, 50 pacientes
y adolescentes con TB. Con los datos referidos tampoco es posible recibieron dosis de 0,5-2,5 mg/día de risperidona, 61 pacientes
extrapolar conclusiones acerca de la eficacia de la lamotrigina en tomaron 3-6 mg diarios de risperidona y 58 pacientes tomaron
el tratamiento de mantenimiento del TB. Los estudios revisados placebo. Ambos grupos tratados con risperidona obtuvieron un
apuntan hacia tolerabilidad similar a la del fármaco en adultos. descenso significativo en los valores de la YMRS comparado con
QMBDFCP/PFTUÈOQVCMJDBEPTUPEPTMPTEBUPTEFFTUFFTUVEJP QPS
TOPIRAMATO lo que no es posible su evaluación en profundidad.

5SBUBNJFOUPFOGBTFBHVEB B. 0USPTFTUVEJPT En la búsqueda realizada se han encontrado


3 estudios abiertos. Uno de ellos sólo con risperidona, otro de
" Ensayos clínicos aleatorizados, doble ciego. Un ensayo clínico39 risperidona en pacientes en tratamiento con litio y otro que
publicado en 2005, comparó la eficacia de topiramato (dosis evalúa la combinación de risperidona con litio o valproato.
media de 278±121 mg/día) frente a placebo durante 4 semanas
en el tratamiento de 56 pacientes de 13 a 17 años, con TB-I y En el primero de ellos41 se evaluó el efecto del tratamiento en
episodio maníaco o mixto. El grupo con tratamiento activo (29 monoterapia con risperidona a dosis entre 2-4 mg/día durante
sujetos) no mostró mejoría significativamente mayor en la YMRS 8 semanas en 30 pacientes entre 6-17 años diagnosticados de
frente al grupo control (27 pacientes). Entre las variables secun- 5#* **P/04DPOFQJTPEJPNBOÓBDP IJQPNBOÓBDPPNJYUPFOFM
darias (CGI-I, BPRS-C, C-GAS y CDRS) sólo hubo diferencias signi- momento de la evaluación. Se permitió tratamiento coadyuvante
ficativas en los valores de la BPRS-C al final del estudio, a favor con estimulantes, benztropina y lorazepam. Tras este periodo un
del tratamiento activo. Estos resultados pueden estar influidos 70% de los pacientes presentaron respuesta (reducción en la
por el pequeño tamaño muestral y la breve duración del estudio. YMRS ≥30%). Solo el 23% de los pacientes alcanzó la eutimia
(definida como YMRS <10 y CDRS <28) al final del estudio.
B. 0USPTFTUVEJPT/PTFIBOMPDBMJ[BEPPUSPTFTUVEJPTDPOUPQJ-
ramato en esta población. El segundo estudio42 evaluaba la eficacia de añadir tratamiento
con risperidona (hasta un máximo de 2 mg/día) durante 12 meses
$ Tolerabilidad: En el estudio descrito el topiramato se toleró a 38 pacientes entre 4-17 años de edad que no respondieron tras
bien, siendo los efectos adversos más frecuentes disminución 8 semanas de tratamiento con litio a dosis terapéuticas (niveles
del apetito y náuseas. De todos modos, este estudio se inte- de 0.6-1.0 mEq/l). Los pacientes fueron diagnosticados de TB o
rrumpió antes de lo previsto ante la falta de eficacia del topira- de episodio maníaco o hipomaníaco antes de los 5 años de edad
mato en un ensayo paralelo en adultos con TB. y en el momento de la evolución todos presentaban un episodio
maníaco o hipomaníaco. Se permitió mantener el tratamiento con
% Dosis: Se han ensayado dosis de hasta 400 mg/día.
estimulantes y utilizar clonidina puntualmente. Al final del estudio
se observó un aumento tanto en la tasa de respuesta (reducción
2. Tratamiento de mantenimiento de la YMRS ≥50%) como en la tasa de remisión (disminución en
la YMRS ≥ 50% y mejoría en la CGI-I ≤2). La tasa de respuesta
La búsqueda realizada no ha hallado ningún estudio que evalúe pasó del 55.3% tras 8 semanas de monoterapia con litio a 85.7%
la eficacia del topiramato en el tratamiento de mantenimiento tras tratamiento combinado con risperidona. La tasa de remisión
del TB en niños y adolescentes. al final del tratamiento alcanzó el 57.1%.

$PODMVTJØO En el último estudio 43 se compararon la eficacia y seguridad


del tratamiento durante 6 meses con risperidona y litio o con
/PFYJTUFOEBUPTRVFBQPZFOMBFGJDBDJBEFMUPQJSBNBUPOJFOFM risperidona y valproato en 37 pacientes ambulatorios entre
tratamiento agudo ni en el de mantenimiento en el TB en niños 5-18 años con TB-I con un episodio maníaco o hipomaníaco.
y adolescentes. La dosis máxima de risperidona fue de 3 mg/día y se alcan-
zaron niveles plasmáticos de 0.6-1.0 mEq/l para el litio y 50-120
RISPERIDONA μg/ml para el valproato. Se permitió tratamiento coadyuvante
con estimulantes, benztropina, clonidina y trazodona. La tasa
5SBUBNJFOUPFOGBTFBHVEB de respuesta (disminución en la YMRS ≥ 50%) fue del 82.4%
en los pacientes tratados con risperidona y litio y del 80% en
" Ensayos clínicos aleatorizados, doble ciego: Aunque la búsqueda los tratados con risperidona y valproato. La tasa de remisión
inicial no localizó ningún estudio controlado con placebo, una (disminución en la YMRS ≥ 50% y mejoría en la CGI-I ≤2) fue
búsqueda manual posterior permitió encontrar datos relativos al de 64.7% en el brazo de risperidona y litio y de 60% en el de
estudio multicéntrico en el que se ha basado la autorización de la risperidona y valproato.

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Un estudio adicional44 abierto que compara risperidona y olan- QUETIAPINA


zapina en niños de 4 a 6 años será comentado en la sección
dedicada a la olanzapina.
5SBUBNJFOUPFOGBTFBHVEB
$ Tolerabilidad: En el estudio aleatorizado controlado con
placebo40 los efectos adversos que ocurrieron en al menos el " Ensayos clínicos aleatorizados, doble ciego: Se han hallado
5% de los pacientes y al menos el doble con risperidona que dos ensayos clínicos aleatorizados doble ciego34,45, que evalúan
con placebo fueron: somnolencia, dolor abdominal, náuseas, la eficacia de la quetiapina en el tratamiento de la manía aguda,
vértigo, fatiga, dispepsia, faringitis y aumento de la frecuencia en monoterapia en uno de los estudios y como tratamiento
cardiaca. Presentaron síntomas extrapiramidales el 23% de los coadyuvante en el otro. Ambos evalúan pacientes con TB-I en
pacientes tratados con 3-6 mg/día y el 12% de los que reci- fase maníaca o mixta y con frecuente comorbilidad con TDAH,
bieron 0,5-2,5 mg/día de risperidona, aunque en ningún caso que reclutan durante un ingreso hospitalario.
se observó discinesia tardía. Los pacientes en tratamiento El primer estudio34, compara quetiapina (dosis media al final
activo también presentaron efectos relacionados con aumento del estudio de 432 mg/día) y placebo, ambos como tratamiento
de prolactina (galactorrea y alteración de la eyaculación) y coadyuvante al valproato (niveles plasmáticos de 80-130 mg/dl).
aumento de peso significativamente mayor que placebo, pero Durante seis semanas, 15 adolescentes (12-18 años), recibieron
no relacionado con la dosis (risperidona 0,5–2,5 mg: 1,90 Kg valproato y quetiapina y otros 15 valproato y placebo. El grupo
<%& >SJTQFSJEPOBNH ,H<%& >
&MEF que recibió quetiapina mostró mejoría clínica significativamente
los pacientes en la rama de 0,5-2,5 mg/día de risperidona y el mayor (reducción significativa en la YMRS) y mayor tasa de
8,1% de la rama de 3-6 mg/día presentaron efectos secunda- respuesta (disminución ≥ 50% en la YMRS). Aunque el grupo
rios graves (efectos psiquiátricos y/o respiratorios) comparado con tratamiento activo presentó sedación (referida por el 80%
con el 5,1% del grupo control. de los pacientes) como único efecto adverso más frecuente que
el grupo control, tuvo también mayor tasa de abandonos. Estos
En el estudio abierto en monoterapia41, 20% de los pacientes
resultados deben ser interpretados con precaución ya que el
presentaron problemas gastrointestinales, 20% resfriados,
análisis estadístico asume una hipótesis unidireccional para la
16% aumento del apetito y 13% sedación. En el estudio en
eficacia del tratamiento combinado, es decir, se asume que la
pacientes con tratamiento previo con litio los efectos adversos
introducción de la quetiapina no puede producir un empeora-
más observados fueron aumento de peso (52.4%), náuseas y
miento.
vómitos (42.9%), aumento del apetito (47.6%) y dolor de estó-
mago (38.1%). En el estudio abierto combinado con valproato Un estudio45 posterior del mismo grupo, comparó la quetiapina
y litio, en ambas combinaciones, los 4 efectos secundarios frente al valproato. Cincuenta adolescentes (12-18 años) reci-
más frecuentes fueron: aumento de peso, sedación, náuseas y bieron aleatoriamente quetiapina (dosis media de 412 mg/día)
aumento del apetito. o valproato (niveles plasmáticos medios de 101 μg/ml) durante
4 semanas. Aunque ambos fármacos fueron igual de eficaces
% Dosis: Se ha demostrado eficacia y seguridad de la risperi-
a la hora de producir mejoría clínica (cambio significativo en
dona con dosis de hasta 6 mg/día40. la YMRS), la mejoría fue más rápida en el grupo tratado con
quetiapina. Además, la rama de tratamiento con quetiapina
2. Tratamiento de mantenimiento mostró significativamente mayor tasa de respuesta (puntua-
ción de la CGI-I≤2) y de remisión (puntuación en la YMRS≤12)
La búsqueda realizada no ha hallado ningún estudio que evalúe a las 4 semanas. Sin embargo, debemos tener en cuenta que
la eficacia de la risperidona en el tratamiento de mantenimiento este estudio no dispone de grupo control con placebo, que la
del TB en niños y adolescentes. mayoría de los pacientes presentaba un episodio mixto y la
mitad tenían síntomas psicóticos.
$PODMVTJØO B. 0USPTFTUVEJPT: Con los criterios de búsqueda descritos, no
Los resultados indican que la risperidona puede ser eficaz en se han encontrado otros estudios que examinen la quetiapina
el tratamiento agudo de la manía y que dosis altas conllevan en el tratamiento agudo de la manía en niños y adolescentes.
más efectos secundarios sin incremento en la eficacia. Algunos $ Tolerabilidad: Los efectos adversos más frecuentes obser-
estudios abiertos sugieren la necesidad de tratamiento prolon- vados con la administración de quetiapina fueron (por orden
gado y combinado con estabilizantes del ánimo para mejorar descendente de frecuencia): sedación, mareos, molestias
las tasas de respuesta, aunque no hay estudios que permitan gastrointestinales, sequedad de boca, incremento del apetito
evaluar las tasas de recaída en el tratamiento de manteni- e insomnio34,45.
miento. En el caso de utililización prolongada habría que
sopesar la utilidad clínica potencial frente a la aparición de % Dosis: Las dosis evaluadas en los estudios comentados son
efectos secundarios. de 400-600 mg/día34,45.

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2. Tratamiento de mantenimiento En el estudio abierto44 (4-6 años de edad) no se encontraron


diferencias significativas en los efectos secundarios entre
La búsqueda realizada no ha hallado ningún estudio que evalúe ambos grupos. En los grupos de olanzapina y risperidona los
la eficacia de la quetiapina en el tratamiento de mantenimiento efectos más frecuentes fueron aumento del apetito (60 y 50%),
del TB en niños y adolescentes. aumento de peso (2.2 Kg en el grupo de risperidona y 3.2 en el
grupo de olanzapina), resfriado (40 y 30%), cefalea (12 y 30%)
$PODMVTJØO y sedación (20 y 25%)

Aunque hay datos que apuntan a la eficacia del tratamiento % Dosis: 2,5-20 mg diarios de olanzapina. En el estudio
combinado con quetiapina y valproato en la manía aguda, abierto44 las dosis máximas usadas fueron 2 mg/día de risperi-
dona y 10 mg/día de olanzapina.
existen limitaciones metodológicas que obligan a interpretar
con precaución dichos hallazgos. Los datos de utilidad en
monoterapia en fase aguda son limitados y comparables a los 2. Tratamiento de mantenimiento
del valproato.
La búsqueda realizada no ha hallado ningún estudio que evalúe
la eficacia de la olanzapina en el tratamiento de mantenimiento
OLANZAPINA del TB en niños y adolescentes.

5SBUBNJFOUPFOGBTFBHVEB $PODMVTJØO
" Ensayos clínicos aleatorizados, doble ciego. En la búsqueda Los estudios revisados muestran que la olanzapina puede ser
bibliográfica descrita hemos hallado únicamente un ensayo eficaz en el tratamiento de la manía aguda en población pediá-
aleatorizado doble ciego controlado con placebo que evalúe la USJDB/PFYJTUFFWJEFODJBEFMBVUJMJEBEEFFTUBNFEJDBDJØOFO
eficacia del tratamiento con olanzapina en adolescentes diag- el tratamiento a medio plazo o en la prevención de recaídas.
nosticados de TB-I con episodio agudo maníaco o mixto46. Los Los efectos secundarios deben ser monitorizados durante su
161 pacientes incluidos (ambulatorios u hospitalizados), con uso.
edades comprendidas entre los 13-17 años, fueron aleatori-
zados tras un periodo de lavado de medicación antimaníaca,
estabilizante o antidepresiva, de manera que durante 3 semanas ARIPIPRAZOL
107 recibieron olanzapina a dosis de 2,5-20 mg/día (media de
10,7±4,5 mg/día) y 54 placebo. Los resultados mostraron dife- 5SBUBNJFOUPFOGBTFBHVEB
rencias significativas a favor del tratamiento con olanzapina en
el cambio en las puntuaciones de la YMRS y en el cambio en "Ensayos clínicos aleatorizados, doble ciego: La búsqueda
la CGI-BV, así como mayores tasas de respuesta (disminución realizada no ha encontrado estudios de estas caracterís-
≥50% en la YMRS) y remisión (YMRS≤12 en la semana 3) y ticas. Sin embargo, una búsqueda manual permitió localizar
menos tiempo hasta conseguir la respuesta y la remisión. un estudio multicéntrico controlado con placebo. En este
estudio 47 296 pacientes ambulatorios (de 10-17 años), con
B.0USPTFTUVEJPT sólo se ha encontrado un estudio abierto diagnóstico de TB-I con episodio maníaco o mixto, fueron
con olanzapina. En este estudio Biederman y cols.44 comparan distribuidos aleatoriamente a recibir placebo o aripiprazol
la olanzapina y la risperidona durante 8 semanas en 31 niños (dosis de 10 ó 30 mg/día) durante 4 semanas. El aripiprazol
FOUSFB×PTDPO5#* **Ø/04ZFQJTPEJPNBOÓBDP IJQP- (en ambas dosis) mostró mayor reducción en la puntuación
maníaco o mixto en el momento de la evaluación. Se permitió de la YMRS a partir de la primera semana de tratamiento y
tratamiento coadyuvante con estimulantes, benzotropina y lora- mejoría en las puntuaciones de la CGAS, CGIS-BP-S, CBI y
zepam. La tasa de respuesta (YMRS ≥ 30% y CGI-I 1 ó 2) fue ADHD-RS-IV, comparado con placebo. Las tasas de respuesta
de 69% para olanzapina y 53% para risperidona, sin diferencias (definida como una reducción≥50% en la puntuación de la
significativas entre grupos. Sólo los pacientes en tratamiento YMRS) fueron significativamente mayores con aripiprazol
con risperidona mostraron diferencias significativas en la escala (45% de respuesta a dosis de 10 mg/día y 64% a dosis de
CDRS final respecto a la basal. 30 mg/día).
$ Tolerabilidad: En cuanto a la valoración de la seguridad del B. 0USPTFTUVEJPT Biederman y cols.48, realizaron un estudio
fármaco en esta población (13-17 años), se ha observado que abierto con aripiprazol en monoterapia durante 8 semanas a
la olanzapina puede producir: incremento de peso y de apetito, dosis media de 9,4 ± 4,2 mg/día en 19 pacientes entre 6-17 años
somnolencia, sedación y aumento, en comparación con el con diagnóstico de TB y presencia de sintomatología maníaca,
nivel basal, de los valores de presión sistólica, pulso, prolac- hipomaníaca o mixta (YMRS≥15). La variable respuesta se
tina, enzimas hepáticas, ácido úrico, glucosa, colesterol total, considera como una disminución del 30% en la YMRS o una
HDL-colesterol y triglicéridos46. CGI-I de 1 ó 2. Se permitió tratamiento coadyuvante con esti-

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mulantes y benztropina. A las 8 semanas el 95% y 79% de los $ Tolerabilidad: Los efectos adversos más frecuentes fueron
pacientes presentó una reducción de la YMRS mayor del 30% somnolencia, síntomas extrapiramidales (parkinsonismo y
y del 50% respectivamente. Un 95% presentó mejoría en la acatisia) y fatiga. La somnolencia y los síntomas extrapirami-
escala CGI-I de manía. En contraste con estos resultados no EBMFTGVFSPOEPTJTEFQFOEJFOUFT/PTFIBOIBMMBEPDBNCJPT
se encontró reducción significativa en los síntomas depresivos clínicamente significativos en los parámetros bioquímicos ni en
medidos con la CDRS-R. el peso (cuando se tiene en cuenta el crecimiento)49.
$ Tolerabilidad: Los efectos secundarios con una frecuencia % Dosis: Las dosis de mantenimiento evaluadas son de 10-30
mayor al 5% y de al menos el doble con aripiprazol que con mg/día49.
placebo en el estudio de Chang y cols.47, fueron: somnolencia,
síntomas extrapiramidales y fatiga. El 7% de los pacientes
tratados con aripiprazol abandonaron el estudio, comparado $PODMVTJØO
DPOFMEFMHSVQPDPOUSPM/PTFFWJEFODJØVOBVNFOUP
Los resultados indican que el aripiprazol puede ser eficaz en el
significativo de peso en ninguna de las ramas de trata-
tratamiento agudo de la manía y que tanto la respuesta como
miento.
MPTFGFDUPTTFDVOEBSJPTTPOEPTJTEFQFOEJFOUFT/PEJTQPOFNPT
En el estudio de Biederman y cols.48 2 pacientes (11%) aban- de evidencia en la eficacia en el tratamiento de mantenimiento,
donaron debido a efectos secundarios extrapiramidales. Los aunque sí hay datos que sugieren que a largo plazo puede ser
efectos secundarios más frecuentes fueron: sedación (57%), un tratamiento seguro.
problemas gastrointestinales (42%), resfriados (32%), cefaleas
(32%) y astenia (20%). OMEGA 3
% Dosis: Las dosis usadas en los estudios son de 10 a 30 mg
diarios (Biederman y cols.48 reducen el máximo a 15 mg/día en 5SBUBNJFOUPFOGBTFBHVEB
los pacientes de menos de 12 años), empezando por 2-5 mg/
día y posteriores incrementos de 5 mg/día cada al menos 2 " Ensayos clínicos aleatorizados, doble ciego: la búsqueda
días. realizada no ha encontrado estudios de estas características.
B. 0USPTFTUVEJPT Existe un estudio abierto50 con ácidos grasos
2. Tratamiento de mantenimiento omega-3 de 8 semanas de duración en 20 pacientes entre
B×PTDPO5#* **Ø/04ZFQJTPEJPNBOÓBDP IJQPNBOÓBDP
" Ensayos clínicos aleatorizados, doble ciego: La búsqueda o mixto. Se permitió tratamiento coadyuvante con dosis fijas
realizada no ha encontrado estudios de estas características. de estimulantes. La disminución en la YMRS fue significativa,
Sin embargo, una búsqueda manual permitió localizar un
aunque modesta. Tan sólo el 35% de los sujetos presentaron
estudio multicéntrico controlado con placebo. Este estudio 49
respuesta clínica (reducción ≥ 50% en la YMRS) al final del
constituye la continuación del estudio de Chang y cols.47
estudio.
comentado en el apartado anterior al hablar del tratamiento
en fase aguda, con el objetivo de evaluar la seguridad en el $ Tolerabilidad: los efectos secundarios más frecuentes fueron:
tratamiento de mantenimiento. De los 296 pacientes ambu- molestias gastrointestinales (25%), resfriado (20%), cefalea
latorios que fueron incluidos en la fase de tratamiento agudo (15%), disminución del apetito (10%) y problemas de sueño
de 4 semanas de duración, 237 la completaron y entraron en (10%). Cuatro pacientes abandonaron el estudio por falta de
el estudio de mantenimiento de 26 semanas (84 pacientes eficacia.
en el grupo con aripiprazol a 10 mg/día, 77 con aripiprazol a
30 mg/día y 76 con placebo). Este estudio no evalúa eficacia, % Dosis: 1290-4300 mg/día de una combinación de ácidos
sino seguridad y tolerabilidad, y la única variable referida grasos omega 3 (EPA y DHA).
sobre el efecto del tratamiento en la psicopatología es la inci-
dencia de hospitalización debida a empeoramiento del TB,
que no mostró diferencias significativas entre los 3 grupos. 2. Tratamiento de mantenimiento
Los autores hallaron cambios significativos a las 30 semanas La búsqueda realizada no ha hallado ningún estudio que evalúe
en las escalas Simpson Angus Scale (en la rama de 30 mg/día la eficacia de los ácidos grasos omega-3 en el tratamiento de
de aripiprazol) y Abnormal Involuntary Movement Scale en mantenimiento del TB en niños y adolescentes.
ambas ramas de aripiprazol), pero no en la Barnes Akathisia
Rating Scale.
$PODMVTJØO
B. 0USPTFTUVEJPT La búsqueda realizada no ha encontrado
otros estudios que evalúen el tratamiento de mantenimiento Dados los resultados del estudio, los omega-3 se asocian con
con aripiprazol en el TB en niños y adolescentes. una muy modesta mejoría de los síntomas maníacos.

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3. LIMITACIONES DE LOS ESTUDIOS lo que el tipo de interacciones farmacológicas puede ser dife-
rente y, al estar en periodo de crecimiento, pueden presentar
Los estudios comentados tienen varias limitaciones, que pueden reacciones adversas que afecten a su desarrollo y que no se
clasificarse en dos grandes categorías: limitaciones relacionadas observarán en adultos. En comparación con los adultos, los
con la propia enfermedad y limitaciones relacionadas con el niños tienen más reserva hepática, mayor filtración glomerular
diseño de los estudios. y menos tejido adiposo, por lo que eliminan más rápidamente
medicamentos como el litio y pueden almacenar en su tejido
graso menos fármacos que los adultos. La maduración secuen-
*-JNJUBDJPOFTSFMBDJPOBEBTDPOMBQSPQJB cial de los receptores de los neurotransmisores también influye
enfermedad en el efecto diferencial de los tratamientos en niños y adoles-
centes.
En la mayoría de los estudios los pacientes presentan una alta
comorbilidad con TDAH, que puede llegar a ser del 70%, lo que Dada la escasa disponibilidad de información sobre la eficacia
implica que muchos pacientes estén siendo tratados de forma de tratamientos antimaníacos en niños y adolescentes, algunos
concomitante con psicoestimulantes, que pueden interferir con estudios pretenden validar un determinado tratamiento compa-
el tratamiento examinado y que pueden tener efectos clínicos rándolo con otro aún sin eficacia suficientemente demostrada
que generen confusión en los resultados. Muchos de ellos frente a placebo en este rango de edad.
también tienen comorbilidad elevada con el trastorno oposi- La respuesta de los niños al efecto placebo es alta, al menos
cionista desafiante y con otros trastornos de conducta. Todos a corto plazo. Esto dificulta encontrar diferencias aunque las
estos trastornos pueden presentar síntomas que se solapen con haya entre producto activo y placebo, obligando a realizar estu-
la clínica maníaca. dios a medio-largo plazo donde se evalúe la persistencia del
0USPBTQFDUPSFMBDJPOBEPDPOMBNBOÓBZTVSFTQVFTUBBMUSBUB- efecto placebo frente al efecto del fármaco. Los estudios con
miento es el amplio rango de manifestaciones clínicas, que casos más graves de manía (puntuación más alta en la YMRS o
pueden incluir episodios mixtos, la presencia o no de síntomas pacientes hospitalizados) tienen mayor capacidad para conse-
psicóticos, etc. Algunos estudios limitan sus criterios de inclu- guir resultados positivos.
sión al TB-I, mientras que otros incluyen también el TB-II e
incluso depresiones con características que hagan sospechar
**-JNJUBDJPOFTSFMBDJPOBEBTDPOFMEJTF×PEFMPT
un TB (viraje con tratamiento antidepresivo, antecedentes fami- estudios
liares de TB, etc.). Además, algunos estudios reclutan pacientes
hospitalizados, ambulatorios o de ambos tipos, lo que supone
diferencias en la gravedad. Esta heterogeneidad clínica puede La dificultad para reclutar este tipo de pacientes hace que la
mayoría de los estudios cuenten con tamaños muestrales
condicionar la respuesta terapéutica y la generalización poste-
pequeños y por lo tanto, con bajo poder estadístico y capacidad
rior de los resultados.
para encontrar diferencias entre los grupos de tratamiento en
Los rangos de edad en los estudios de tratamientos antima- estudio.
níacos suelen ser bastante amplios, sin distinguir en ocasiones
Además, la duración de la mayoría de los estudios es bastante
entre pacientes pre y post-púberes. Puesto que la maduración
breve limitándose a pocas semanas de tratamiento, lo que
de los receptores de los neurotransmisores sobre los que actúan
restringe la capacidad para encontrar diferencias en fase aguda
los psicofármacos está relacionada con la edad, esta distin-
y no permite valorar la eficacia como tratamiento de manteni-
ción tiene implicaciones farmacodinámicas que no siempre se
miento a largo plazo.
recogen adecuadamente.
Existe heterogeneidad de criterios para valorar la respuesta a
En cuanto a las dosis utilizadas de los fármacos antimaníacos, los tratamientos, de manera que algunos estudios utilizan el
disponemos de información sobre la dosis segura de algunos descenso en la puntuación YMRS, mientras que otros usan la
fármacos por la experiencia previa en niños y adolescentes mejoría en la escala CGI-I.
como antiepilépticos (p. ej., valproato, carbamacepina, lamotri-
gina) o como tratamientos en los trastornos de conducta (p. ej. Aunque lo ideal a la hora de diseñar un estudio de eficacia sería
risperidona). Sin embargo, para otros fármacos estudiados es poder disponer de un grupo control con placebo, esto genera
necesario extrapolar las dosis estudiadas en adultos, teniendo ciertas implicaciones éticas y lleva a que en muchos estudios
en cuenta las características farmacocinéticas y farmacodiná- se excluyan los casos más severos como aquellos con riesgo
micas de esta población. suicida o con necesidad de hospitalización.
Las conclusiones obtenidas en adultos no son extrapolables a La gravedad de este trastorno justificaría la realización de
la población infantil. Las enfermedades infantiles son cualitativa ensayos clínicos aleatorizados independientes que permitiesen
y cuantitativamente diferentes a las de los adultos. Los niños dilucidar la eficacia potencial de medicaciones que se han
presentan diferencias metabólicas respecto a los adultos, por demostrado eficaces en población adulta.

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4. RECOMENDACIONES PARA EL 2. En la fase aguda de tratamiento los fármacos con mayor


MANEJO DEL TRASTORNO BIPOLAR nivel de evidencia y con mayor rapidez de acción serían los
EN NIÑOS Y ADOLESCENTES antipsicóticos. A pesar de que la FDA ha aprobado recien-
temente 2 de ellos (la risperidona y el aripiprazol) para su
uso en esta franja de edad en las fases de manía aguda,
I. RECOMENDACIONES GENERALES ni la Agencia Europea del Medicamento ni la Agencia
Española del Medicamento han aprobado aún el uso de
1. Los niños no son adultos en pequeño, por tanto, los trata- ninguno de ellos.
mientos de unos no obligatoriamente son adecuados para
los otros. 3. En caso de insomnio o gran inquietud, las benzodiacepinas
pueden servir como tratamiento coadyuvante.
2. Una vez realizado un diagnóstico correcto, la intervención
terapéutica es básica y debe ser de tipo integrador. La 4. En aquellos pacientes con un diagnóstico confirmado, en la
medicación debe ser prescrita siempre por profesionales fase de mantenimiento y/o reagudización de los síntomas,
expertos. el uso de eutimizantes es una alternativa con cierto nivel de
evidencia (litio y valproato).
3. La utilización de los psicofármacos tiene que ser ponderada
según el diagnóstico, la gravedad de los síntomas, la fase 5. Se recomienda el tratamiento en régimen de ingreso ante
de la enfermedad y los posibles efectos secundarios. la presencia de:

4. Una vez realizada la indicación, es importante alcanzar una - Síntomas psicóticos


dosis individualizada en base a las características farma-
/FHBUJWBBUPNBSFMUSBUBNJFOUPPQSFTFODJBEFFGFDUPT
cocinéticas y farmacodinámicas propias de los pacientes
secundarios severos.
menores.
5. El tratamiento debe adecuarse al contexto psicosocial - Conductas de alto riesgo asociadas (auto o heteroagre-
propio del paciente y su familia (horarios escolares, espa- sividad, etc)
cios de ocio y tiempo libre, etc). - Falta de contención familiar.
6. Las conductas de riesgo (abuso de tóxicos, conductas - Comorbilidad grave.
sexuales, etc.) deben ser valoradas y vigiladas a lo largo de
todo el tratamiento, tomando medidas adicionales si fuese 6. En el caso de que se paute tratamiento farmacológico:
preciso (tratamiento anticonceptivo, analíticas de control,
etc). - La indicación debe ser realizada por un psiquiatra.

7. El no tratamiento puede conllevar daños graves en el niño - Es de primera elección.


y el adolescente con TB, así como empeoramiento del - Mientras el paciente esté en tratamiento, deberá tener
pronóstico a medio y largo plazo debido a la repercusión un riguroso seguimiento por el especialista de Salud
de la enfermedad en el funcionamiento social, escolar y Mental, a poder ser experimentado en psiquiatría
familiar. infanto-juvenil.
- El tratamiento de mantenimiento tras un primer episodio
II. RECOMENDACIONES ESPECÍFICAS
debe tener una duración en torno a los dos años
(siguiendo criterios de adultos), dependiendo, entre otros
1. El tratamiento depende de la fase de la enfermedad en factores, de los efectos secundarios.
la que se encuentre el paciente, tanto en lo referente a la
polaridad (manía, hipomanía, depresión, eutimia) como a Dada las dificultades encontradas para hacer recomendaciones
la gravedad. El tratamiento difiere también en situaciones basadas en la evidencia, desde la perspectiva clínica, sugerimos
agudas o en las que hay que plantear la necesidad de trata- el siguiente algoritmo basado en el de los autores europeos
miento de mantenimiento. James y Javaloyes51.

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-JUJP Si agitación, añadir Benzodiacepinas


  NNPMM
.BOJBDMÈTJDB
Si Psicosis, añadir antipsicóticos atípicos

7BMQSPBUPQPUÈTJDP
çHNM -JUJP 7BMQSPBUPØ FTUBCJMJ[BOUFT
.BOÓBDMÈTJDBP -JUJP $BSCBNB[FQJOB Ø5&$ UFSBQJB
%JTGPSJBPNJYUB
Ø7BMQSPBUP  FMFDUSPDPOWVMTJWB

'"--0 $BSCBNB[FQJOB '"--0 OPDPO$BSCBNB[FQJOB

&/-" &/-"
7BMQSPBUPTØEJDP 3&416&45" 3&416&45"
çHNMP &/
$BSCBNB[FQJOB 4&."/"4
çHNM
$JDMBEPSSÈQJEP

5. ASPECTOS ÉTICO-LEGALES EN EL Algunos fármacos administrados (como el litio y el valproato)


TRATAMIENTO DE LA MANÍA EN precisan un control analítico regular al que debe comprome-
NIÑOS Y ADOLESCENTES terse la familia. Así mismo, el paciente y su familia deben ser
informados de que la aparición de efectos adversos debe ser
Los fármacos utilizados en el tratamiento de la manía no son comunicada inmediatamente a su psiquiatra y de que antes de
inocuos: los efectos de los antipsicóticos sobre el metabolismo cualquier cambio de dosis tienen que consultar con el especia-
son ampliamente conocidos y el tratamiento con estabilizadores lista. También deben saber dónde acudir en caso de observar
del ánimo tampoco está exento de riesgos. Sin embargo, no tratar
reacciones adversas (urgencias, teléfono y horarios del Servicio
un episodio maníaco en niños y adolescentes puede tener conse-
de Salud Mental).
cuencias psicosociales importantes, como dificultades académicas,
deterioro de las relaciones sociales y familiares, promiscuidad Sería conveniente obtener por parte de los padres o tutores
sexual y abuso de sustancias, que pueden derivar en problemas legales del menor el consentimiento informado para la admi-
legales y hospitalizaciones. La aparición de una enfermedad nistración de estos tratamientos, pero, en cualquier caso, todas
mental de esta gravedad puede truncar las expectativas vitales estas intervenciones deben quedar reflejadas en la historia
del paciente y la familia, impidiéndole desarrollar su potencial.
clínica.
El hecho de que el trastorno bipolar sea difícil de diagnosticar,
La ficha técnica de algunos de los fármacos estudiados en
especialmente durante las primeras etapas de la vida, puede
generar cierta ambivalencia a la hora de plantear cuál es el trata- el tratamiento del trastorno bipolar en niños y adolescentes
miento más adecuado y cuál debe ser la duración del mismo. La incluye la indicación para su uso en menores con enfermedades
duda sobre el tratamiento puede surgir tanto en el profesional psiquiátricas (como por ejemplo la risperidona), mientras que
como en la familia. Los profesionales pueden demorar el inicio del otros están aprobados para su uso en la población pediátrica
tratamiento debido a la corta edad del paciente y los potenciales pero con otra indicación (por ejemplo la lamotrigina) y otros
efectos adversos de los fármacos. A esto hay que añadir que la no incluyen ninguna indicación en menores (por ejemplo la
atipicidad de los cuadros de inicio hace difícil su diagnóstico. olanzapina). En el caso de que los fármacos sin indicación sean
prescritos en estos pacientes se seguirá la legislación vigente.
Por otra parte, muchos padres pueden mostrarse inicialmente Se requerirá el consentimiento informado del paciente o de
reacios a que sus hijos tomen un tratamiento psicótropo por su representante legal, un informe clínico en el que el médico
temor a que adquieran un aspecto de “drogados”, al estigma justifique la necesidad de dicho tratamiento, la conformidad
que pueda generar entre sus compañeros, a las repercusiones del director del centro donde se vaya a aplicar el tratamiento
académicas o a que estos fármacos sean adictivos.
y la autorización de la Agencia Española de Medicamentos y
Antes de iniciar el tratamiento, es necesario que el paciente Productos Sanitarios. (Real Decreto 223/2004, de 6 de febrero
y sus padres se familiaricen con los riesgos y beneficios de la por el que se regulan los ensayos clínicos con medicamentos,
intervención farmacológica y los posibles efectos adversos, así artículo 28, y RD 1015/2009 de 29 de junio por el que se
como con las complicaciones a corto, medio y largo plazo de la regula la disponibilidad de medicamentos en situaciones espe-
instauración o no del tratamiento. ciales).

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PUNTOS CLAVE

1. Los estudios disponibles sólo permiten inferir eficacia de 3. La mayoría de las recomendaciones terapéuticas, tanto rela-
algunas medicaciones antipsicóticas para el tratamiento de tivas a tratamientos como a duración de los mismos, derivan
la manía aguda. de los estudios realizados en adultos52.
/PFYJTUFOEBUPTDPODMVZFOUFTFOFTUVEJPTEFOJ×PTZBEPMFT- 4. A pesar de que los tratamientos con antipsicóticos atípicos
centes relativos al tratamiento de mantenimiento destinado ofrecen ventajas respecto a la facilidad de uso frente a esta-
a la prevención de recaídas. Sin embargo, es importante bilizantes como el litio y el valproato que necesitan monito-
tener en cuenta el balance riesgo/beneficio a la hora de rización de niveles sanguíneos y analítica frecuentes, no hay
plantear un tratamiento farmacológico a medio largo plazo, que olvidar el perfil de efectos secundarios metabólicos y su
especialmente en población pediátrica. posible impacto en el desarrollo de niños y adolescentes.

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 36 Wagner KD, Kowatch RA, Emslie GJ, Findling RL, Wilens TE,
21 Tillman R, Geller B, Bolhofner K, Craney JL, Williams M, Zimerman McCague K, et al. A double-blind, randomized, placebo-contro-
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disorder in youth. Arch Gen Psychiatry. 4FQ 
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+BOJDBL1(0QFOMBCFMQSPTQFDUJWFUSJBMPGSJTQFSJEPOFJODPNCJOB-
29 'JOEMJOH 3-  .D/BNBSB /,  (SBDJPVT #-  FU BM $PNCJOBUJPO tion with lithium or divalproex sodium in pediatric mania. J Affect
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30 Kafantaris V, Coletti DJ, Dicker R, Padula G, Kane JM. Lithium %PVHIFSUZ. 8P[OJBL+0QFOMBCFM XFFLUSJBMPGPMBO[BQJOF
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46 Tohen M, Kryzhanovskaya L, Carlson G, Delbello M, Wozniak J, 50 Wozniak J, Biederman J, Mick E, Waxmonsky J, Hantsoo L, Best C,et
,PXBUDI3 FUBM0MBO[BQJOFWFSTVTQMBDFCPJOUIFUSFBUNFOU BM0NFHBGBUUZBDJENPOPUIFSBQZGPSQFEJBUSJDCJQPMBSEJTPSEFS
of adolescents with bipolar mania. Am J Psychiatry. 2007 a prospective open-label trial. &VS/FVSPQTZDIPQIBSNBDPM 2007
0DU 
 .BZ+VO 

47 $IBOH, /ZJMBT. "VSBOH$ FUBM&GGJDBDZPG"SJQJQSB[PMFJO 51 James AC, Javaloyes AM. The treatment of bipolar disorder
$IJMESFO  :FBST 0ME
 XJUI .BOJB 1BQFS QSFTFOUFE BU in children and adolescents. J Child Psychol Psychiatry. May
"NFSJDBO"DBEFNZPG$IJMEBOE"EPMFTDFOU1TZDIJBUSZ 0DUPCFS  

 #PTUPO ."
52 /*$&DMJOJDBMHVJEFMJOF#JQPMBSEJTPSEFSUIFNBOBHFNFOUPG
48 Biederman J, Mick E, Spencer T, Doyle R, Joshi G, Hammerness bipolar disorder in adults, children and adolescents, in primary and
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o #PTUPO ."

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METODOLOGÍA DE LA BÚSQUEDA Para la selección de los artículos se tuvo en cuenta en primer


BIBLIOGRÁFICA lugar la metodología del ensayo clínico (asignación aleatoria,
(Grupo TBIP) doble ciego y controlado con placebo), el año de publicación
reciente, tamaño de la muestra y edad de la muestra (niños y
Para la recuperación de la información de evidencia cientí- adolescentes). En cuanto a las revisiones, fundamentalmente, se
fica respecto a la eficacia del uso de fármacos en el trastorno incluyeron las sistemáticas y relacionadas con el tratamiento.
bipolar (TBIP) en niños y adolescentes se emplearon las fuentes
de información siguiendo el modelo de “5S” de Haynes1 de Sólo 9 artículos cumplieron estrictamente los criterios predefi-
organización estableciendo dos grupos: documentos de nidos de selección y se procedió a su revisión y volcado de toda
síntesis, sinopsis y sumarios de la evidencia (SSS) y estudios la bibliografía seleccionada en documentos normalizados.
PSJHJOBMFT &0

Tras valorar la evidencia localizada el grupo concluye que existe
Dentro de documentos SSS se buscan Guías de Práctica poca evidencia disponible, que además tiene limitaciones, por
Clínica, revisiones sistemáticas, meta-análisis, revistas secun- lo que se dificulta la extracción de conclusiones y recomenda-
darias e informes de evaluación. Para su localización se utiliza ciones. Por este motivo el grupo de trabajo decide en marzo
TripDatabase, la Biblioteca Cochrane Plus, Clinical Evidence, de 2008 realizar una actualización de la búsqueda bibliográfica
6Q5P%BUF  .&%-*/& 07*%
 &.#"4& 07*%
 Z 1TZD*/'0 así como hacer otra búsqueda ampliando la anterior con estu-
(Proquest). dios abiertos, ya que con la evidencia disponible no se obtienen
conclusiones definitivas sobre el uso de medicamentos en niños
1BSBMBMPDBMJ[BDJØOEFMPT&0TFCVTDBBSUÓDVMPTRVFTFBO y adolescentes con trastorno bipolar.
ensayos clínicos de intervenciones terapéuticas farmacológicas
FNQMFBOEPMBTCBTFTEFEBUPTBVUPNBUJ[BEBT.&%-*/& 07*%
 En la actualización de la búsqueda se obtuvieron 67 referencias
&.#"4& 07*%
Z1TZD*/'0 1SPRVFTU
 bibliográficas y 244 en la búsqueda ampliada. Los criterios de
selección es que fueran estudios de tratamiento farmacológico
En estas bases de datos se realiza una primera búsqueda en en niños y/o adolescentes con trastorno bipolar. Tras su valora-
enero de 2007 (ver tabla con estrategias de búsqueda). Para ción, y siguiendo los criterios de inclusión establecidos por el
MBFTUSBUFHJBEFCÞTRVFEBFOMBTCBTFTEFEBUPT.&%-*/&Z grupo de trabajo, se decidió la selección de 16 estudios origi-
EMBASE relativa a ensayos clínicos y revisiones sistemáticas se nales y 1 del bloque de SSS para su revisión y volcado.
utilizaron filtros metodológicos validados.
Además, previamente a la finalización de la elaboración de la
En las búsquedas en las bases de datos se emplearon diversos guía se aprobó la utilización por parte de la FDA (Food and
límites como la población de estudio empleando como rango Drug Administration) de la risperidona y el aripiprazol para
de edad niños y adolescentes y límites de idiomas para excluir los episodios de manía aguda en niños y adolescentes desde
aquellos escritos en lenguas diferentes al inglés, español los 10 años de edad. El grupo revisó los estudios, publicados
y francés. Por último, en la búsqueda de ensayos clínicos se bien en la web de la FDA o en forma de póster presentados
emplea el límite temporal de año de publicación a los últimos en congresos internacionales, que llevaron a dicha aprobación
5 años (2002-2007). Para la búsqueda de otro tipo de docu- seleccionándose 3 documentos.
mentos (SSS) no hay limitación temporal.
Como parte de la metodología general de la Guía, para los
Los registros obtenidos de las bases de datos se vuelcan en el ensayos clínicos con asignación aleatoria (ECA), se pasa la
programa gestor de referencias Referente Manager® eliminán- escala Jadad2 para constatar la calidad de dichos estudios y
dose las referencias duplicadas. apoyar la selección de los fármacos en esta patología. De los
BSUÓDVMPTTFMFDDJPOBEPTEFMHSVQP&0 VOFOTBZPDMÓOJDPDPO
Se obtuvieron 235 referencias bibliográficas (186 correspon- asignación aleatoria (ECA) obtuvo el máximo de puntuación, 5
EJFOUFTBMCMPRVFEF&0ZBMCMPRVFEF444
5SBTTVWBMP- puntos, tres ECA 4 puntos y cinco ECA 3 puntos.
ración, y siguiendo los criterios de inclusión establecidos por el
grupo de trabajo, se decidió la selección de 9 estudios originales
(uno adicional no recuperado en la búsqueda primaria por ser
del año 1998 pero que cumple el resto de criterios predefinidos, BIBLIOGRAFÍA
uno se descarta porque su objetivo no va dirigido a evaluar 1 ) BZOFT 3# 0G TUVEJFT  TZOUIFTFT  TZOPQTFT  TVNNBSJFT  BOE
la eficacia de un fármaco en este trastorno y se incluye otro systems: the "5S" evolution of information services for evidence-
que cumple todos los criterios pero no aparece en la búsqueda CBTFEIFBMUIDBSFEFDJTJPOT&WJE#BTFE.FE%FD 

por ser del año 2007) y 4 del bloque de SSS para su revisión y 164.
volcado. Además se seleccionaron 8 referencias para lectura y 2 Jadad AR, Moore RA, Carroll D, Jenkinson C, Reynolds DJ,
se dejan 13 estudios dudosos que en principio no reúnen las Gavaghan DJ, McQuay HJ. Assessing the quality of reports of
condiciones metodológicas o de edad requeridas para la selec- randomized clinical trials: is blinding necessary? Control Clin Trials.
ción. 'FC 


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Tabla 1. Estrategia de búsqueda en las diferentes bases de datos.


.&%-*/& 07*%
&.#"4& 07*%
1TZD*/'0 1SPRVFTU

1. exp Bipolar Disorder/ exp Bipolar Disorder/ %& #*10-"3%*403%&3



03%& ."/*"

2. bipolar.mp. bipolar.mp.
03%& "''&$5*7&
3. mania.mp. exp Mania/ %*403%&34
03
DE("AFFECTIVE
4. maniac-depress$.mp. mania.mp.
14:$)04*4
"/%
5. mood disorder$.mp. maniac-depress$.mp. DE("DRUG THERAPY")
6. affective disorder$.mp. Mood Disorder/
7. 1 or 2 or 3 or 4 or 5 or 6 mood disorder$.mp.
8. exp "behavior and behavior mechanisms"/ or exp affective disorder$.mp.
"psychological phenomena and processes"/ or exp
mental disorders/ or exp "behavioral disciplines
and activities"/
9. 7 and 8 exp mental function/ or exp "psychological and
psychosocial phenomena"/ or exp mental disease/
or exp "psychological and psychiatric procedures,
techniques and concepts"/
10. drug therapy.fs. 1 or 2 or 3 or 4 or 5 or 6 or 7 or 8 or 9
11. FYQ$FOUSBM/FSWPVT4ZTUFN"HFOUT dt.fs.
12. 10 or 11 FYQ$FOUSBM/FSWPVT4ZTUFN"HFOUT
13. 9 and 12 11 or 12
14. 9 and 13

$PSSFTQPOEFODJBDirección General de Gestión Económica y de Compras de Productos Sanitarios y Farmacéuticos. Subdirección de


Compras de Farmacia y Productos Sanitarios. Plaza de Carlos Trías Bertrán nº 7 planta 5ª. Edificio Sollube. 28020. Madrid. Tf: 914269917.
&EJUBConsejería de Sanidad. Dirección General de Gestión Económica y de Compras de Productos Sanitarios y Farmacéuticos.
%PDVNFOUPEJHJUBMPixel Creación y Producción Gráfica, S.L.
*444/%FQØTJUP-FHBM.

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