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diabetes
¿Cómo contrarrestarlos?
Los efectos secundarios de la
diabetes ¿Cómo contrarrestarlos?
No todas las personas con diabetes tienen daño renal (este es otro
de los concepto erróneos y populares sobre la enfermedad). Si
bien la glucemia no controlada puede causar el daño renal, los
diabéticos que mantienen sus niveles adecuados de glucosa en la
sangre pueden evitarla.
Los diabéticos que padecen daño renal adquieren esta afección
potencialmente mortal porque no pueden deshacerse de los
productos derivados de azúcares y almidones a través de sus
sistemas. Estos alimentos permanecen dentro y no se
descomponen ni eliminan, como les pasa a otros sin la
insuficiencia. Los azúcares y los almidones permanecen en el
sistema y hacen que el azúcar en la sangre aumente a niveles altos
que pueden ser peligrosos. No solo eso, además dificulta que las
proteínas pasen a través del sistema.
Cuando una persona tiene diabetes no controlada y evita
mantener sus niveles adecuados de glucosa en la sangre, el
proceso de eliminación de residuos de los riñones deja de
funcionar de manera efectiva. Los riñones tienen que trabajar más
y más para eliminar los productos de desecho y ni digiere las
proteínas. Éstos además filtran demasiada sangre y comienzan a
gotear. La proteína se pierde a través de los riñones y el cuerpo.
Finalmente, los desechos comienzan a acumularse en la sangre.
Estos son los conceptos básicos de la insuficiencia renal. Incluso a
mí me sorprende todo esto, pues siempre escuché a un familiar
cercano con diabetes decir que le aquejaba el daño renal (por
cierto, en este caso el paciente sí padece diabetes) pero no fue
hasta que comencé a investigar más sobre la diabetes cuando me
di cuenta de la gravedad del asunto. Este tema no debe tratarse a
la ligera, principalmente por los efectos que ocasiona el hecho de
tener diabetes.
La enfermedad renal se adquiere de muchas maneras. En los
diabéticos, se adquiere porque los riñones trabajaron demasiado
duro para filtrar los azúcares y los almidones que no pudieron ser
eliminados y para purificar la sangre. Como cualquier órgano con
exceso de trabajo, el riñón simplemente se agota y entra en
“modo off”. Y cuando eso ocurre, la persona a menudo se somete
a diálisis (una máquina funciona como si fueran sus riñones). En
algunos casos, una persona con enfermedad renal puede optar
por un trasplante, aunque desafortunadamente esto no suele
estar disponible para todos.
Una persona no puede vivir sin sus riñones. Por lo tanto, es
imperativo que alguien con diabetes entienda cómo funcionan sus
riñones y sepa lo que debe hacer para ayudar a estos órganos
vitales a funcionar de manera eficiente. Un diabético no tiene por
qué condenarse con el daño renal, no tiene por qué ser así.
Evita las complicaciones de la enfermedad simplemente siguiendo
las órdenes de tu médico y manteniendo un estilo de vida
saludable. Muchos diabéticos son pacientes no conformes. No
siguen la dieta como se recomienda en el índice glucémico y
comen aquello que tarda más en descomponerse y causa el mayor
daño a los riñones, sus magníficos órganos que hacen todo lo
posible para eliminar los desperdicios.
Presta atención al índice glucémico. Por cierto, se desarrolló en
1981 y es un salvavidas potencial para cualquier persona con esta
enfermedad, ya que establece claramente qué alimentos evitar.
Otra cosa a la que debes estar atento es controlar su nivel de
azúcar en la sangre. A un diabético a menudo se le dice que debe
usar un monitor de sangre varias veces al día para controlar sus
niveles de glucosa en sangre. Además, los niveles se registran y
deben presentarse a su médico durante cada visita programada.
Muchos diabéticos no cumplen con esta parte integral de su
tratamiento. La insulina y algunos medicamentos permiten que
los alimentos se descompongan y ayudan a los riñones a eliminar
el desperdicio. No hay razón para no tomar estos medicamentos
y hay muchos programas diferentes disponibles para aquellos que
no pueden pagarlos, aunque la mejor manera de curar la diabetes
incluye una no dependencia con las pastillas, ya que ocasionan
efectos colaterales en la salud a largo plazo (y esto lo digo con
total seguridad porque he visto en mi entorno más cercano los
daños que causan los medicamentos en personas diabéticas
pasados unos años).
E
El ejercicio y el control de peso son cruciales para mantener un
estilo de vida saludable (y no solo para los diabéticos, sino
también para la población en general). Sin embargo, muchas
personas simplemente se niegan a seguir estas pautas esenciales.
La diabetes no es necesariamente un precursor del daño renal. La
insuficiencia renal y la diabetes son dos enfermedades diferentes.
Una no siempre conduce a la otra.