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Cultura de paz

y la no
violencia

Mediación
Comunitaria y
Cultura de Paz

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El enfoque de la cultura de paz
y la no violencia
La denominación de la materia que presentamos es tan significativa como
su contenido. En cada una de las palabras que la conforman subyace un
enfoque, una filosofía y conceptos que requieren ser definidos y
conceptualizados. La mediación comunitaria es una forma de gestionar los
conflictos de convivencia en forma constructiva y pacífica y se enmarca
dentro del campo de la cultura de paz y la no violencia.

Cultura de paz
Cuando pensamos en el concepto de cultura de paz, no hablamos de una
noción utópica sino de la colaboración, las relaciones de cooperación y de
producción entre las naciones, personas y grupos para manejar los
conflictos de manera constructiva, sin apelar a la violencia. No se trata de
evitar el conflicto que forma parte de nuestra vida cotidiana, sino de
abordarlo de manera positiva.

En la Declaración y Programa de Acción sobre una Cultura de Paz de la ONU


53/243 se expresa que:

…la paz no sólo es la ausencia de conflictos, sino que


también requiere un proceso positivo, dinámico y
participativo en que se promueva el diálogo y se solucionen
los conflictos en un espíritu de entendimiento y cooperación
mutuos.
Se define a la Cultura de Paz como un conjunto de
valores, actitudes, comportamientos y estilos de vida que
rechazan la violencia y previenen los conflictos atacando a
sus raíces a través del diálogo y la negociación entre los
individuos, los grupos y los estados. 1

1A/RES/53/243. (1999). Declaración y Programa de Acción sobre una Cultura de Paz. Asamblea
General de las Naciones Unidas. Recuperado de https://goo.gl/Gt4RcB

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Para lograrlo es necesario que las sociedades realicen un pasaje, una
transición, de tratar los conflictos y desacuerdos de manera violenta a una
cultura de paz.

Para tratar de garantizar estos propósitos, la ONU desarrolló un programa


de acción y dentro de sus artículos encontramos lo que enuncia en el
artículo 1, donde especifica cuáles serían las acciones a emprender para
lograr garantizar la cultura de paz. Sostiene que esta se sustenta en
valores, actitudes, comportamientos y estilos de vida basados en:

a) El respeto a la vida, el fin de la violencia y la promoción y


la práctica de la no violencia por medio de la educación, el
diálogo y la cooperación;

b) El respeto pleno de los principios de soberanía,


integridad territorial e independencia política de los Estados
y de no injerencia en los asuntos que son esencialmente
jurisdicción interna de los Estados, de conformidad con la
Carta de las Naciones Unidas y el derecho internacional;

c) El respeto pleno y la promoción de todos los derechos


humanos y las libertades fundamentales;

d) El compromiso con el arreglo pacífico de los conflictos;

e) Los esfuerzos para satisfacer las necesidades de


desarrollo y protección del medio ambiente de las
generaciones presentes y futuras;

f) El respeto y la promoción del derecho al desarrollo;

g) El respeto y el fomento de la igualdad de derechos y


oportunidades de mujeres y hombres;

h) El respeto y el fomento del derecho de todas las


personas a la libertad de expresión, opinión e información;

i) La adhesión a los principios de libertad, justicia,


democracia, tolerancia, solidaridad, cooperación,
pluralismo, diversidad cultural, diálogo y entendimiento a
todos los niveles de la sociedad y entre las naciones; y
animados por un entorno nacional e internacional que
favorezca a la paz.2

2A/RES/53/243. (1999). Declaración y Programa de Acción sobre una Cultura de Paz. Asamblea
General de las Naciones Unidas. Recuperado de https://goo.gl/Gt4RcB

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Es evidente que la paz requiere de actores implicados, no espectadores.
Implica iguales posibilidades para todos en el plano de la salud, la
educación, la justicia, la vivienda, la expresión artística, el deporte,
etcétera.

Todos estamos comprometidos en la promoción, fortalecimiento y


desarrollo de una cultura de paz en el nuevo milenio. La paz no es una
utopía; es un proyecto posible, solo hace falta hacerle espacio.

Distinción entre cultura de paz, educación para la paz y


construcción de paz

Entonces, definimos cultura de paz como un conjunto de valores, actitudes,


tradiciones, comportamientos y estilos de vida. Es una meta, un camino
hacia el que transitamos a través de la construcción de nuevas políticas y la
profundización en el desarrollo de las relaciones humanas.

La educación para la paz supone aprender a convivir en valores como la


libertad, la justicia, la democracia, la solidaridad, el respeto, la inclusión, la
cooperación, la autonomía. Es un contenido transversal.

La construcción para la paz, por otro lado, son las acciones emprendidas
para garantizar una paz sostenible.

Figura 1: Construcción, educación y cultura de paz

Cultura de paz

Educación
para la paz

Construcción
de paz

Fuente: elaboración propia.

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No violencia

Figura 1: Mahatma Gandhi

Fuente: Gandhi Foundation, s. f., https://goo.gl/DB4Eof

Si pensamos en una cultura de paz como un movimiento a nivel de todas


las naciones, personas y grupos involucrados, debemos tener en cuenta
que cada uno tendrá un camino propio, marcado por su acervo cultural, sus
tradiciones, sus políticas, lenguajes y religiones donde la diversidad y la
tolerancia sean el objetivo a alcanzar.

El ámbito por excelencia para el trabajo por la paz es el local, nuestras


propias comunidades, que es donde se comparten las preocupaciones
acerca de lo social, lo político y lo económico y es justamente aquí donde la
mediación comunitaria tiene un papel muy importante que jugar. La mayor
parte de los conflictos son de relación; las relaciones prevalecen a lo largo
del tiempo por tanto es muy importante preservarlas. La mediación
comunitaria facilita el diálogo y la comunicación entre las personas y logra
que se conozcan, se acerquen y, por otro lado, que puedan ser
protagonistas de las soluciones a sus propios conflictos, alcanzando de ese
modo un grado mayor de empoderamiento social.

Desde la mediación comunitaria abordamos conflictos específicos, pero


también intervenimos en tratar de transformar procesos de alto grado de
confrontación y trabajamos para formar ciudadanía, todo esto es en pos de
la construcción de la paz (Alzate Sáenz de Heredia, Fernández Villanueva y
Merino Ortiz, 2013).

Nueva Agenda Mundial de Desarrollo Sostenible 2030

La Cumbre Mundial sobre el Desarrollo Sostenible 2015 tuvo lugar del 25 al


27 de septiembre en la sede de la ONU en Nueva York. En ella los Estados

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miembro de la ONU aprobaron la nueva Agenda Global de Desarrollo
Sustentable conformada por 17 Objetivos y 169 metas que deberán ser
cumplidos de aquí al 2030

Figura 2: Objetivos de desarrollo sostenible

Fuente: Naciones Unidas, 2015, https://goo.gl/794Qnx

Estos objetivos abarcan aspectos tanto sociales, económicos, como


ambientales. La meta es que estos objetivos sean aplicados por todos los
países del mundo, ya sean estos desarrollados o en vías de desarrollo. Son
objetivos de carácter universal, por lo que afectan a todo el mundo.

Dentro de estos objetivos se encuentra el objetivo 16 que es muy


importante, ya que hace referencia a todos los que estamos trabajando en
la gestión de conflictos y la cultura de paz.

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Figura 3: Objetivo 16

Fuente: ONU, s.f., https://goo.gl/LbmGTD

La Nueva Agenda Mundial de Desarrollo Sostenible 2030 reafirma que el


desarrollo sostenible no es posible sin la paz, ni la paz puede existir sin el
desarrollo sostenible.

En este objetivo se establece que los objetivos políticos deben estar al lado
de los objetivos sociales, económicos y ambientales. El objetivo contiene
12 metas, a saber:

16.1 “Reducir significativamente todas las formas de violencia y las


correspondientes tasas de mortalidad en todo el mundo”
(Rodrigues, 2016. p. 3). Aquí se intenta velar por la seguridad de
las personas que viven temiendo por sus vidas y comprometiendo
al Estado como garante de su protección. Alude también a
terminar con las violencias de género, la violencia en el marco del
narcotráfico, violencia de pandillas, la brutalidad policial, entre
otras.
16.2 “Poner fin al maltrato, la explotación, la trata y todas las
formas de violencia y tortura contra los niños” (Rodrigues, 2016. p.
3). Hace un llamado a la implementación de leyes y sistemas de
protección infantil contra peligros como abuso infantil, tráfico
sexual infantil, trabajo infantil. Este objetivo está apoyado por la
Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño.
16.3 “Promover el estado de derecho en los planos nacional e
internacional y garantizar la igualdad de acceso a la justicia para

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todos” (Rodrigues, 2016. p. 3). Alude a la promulgación de leyes
justas que respeten los derechos humanos y a su cumplimiento
por parte de las instituciones de justicia. Aboga por el
fortalecimiento de las instituciones y la lucha contra todo forma
de discriminación.
16.4 “De aquí a 2030, reducir significativamente las corrientes
financieras y de armas ilícitas, fortalecer la recuperación y
devolución de los activos robados y luchar contra todas las formas
de delincuencia organizada” (Rodrigues, 2016. p. 3). Trata sobre la
delincuencia organizada transnacional y sus protocolos sobre el
tráfico de personas, el tráfico ilícito de migrantes y la fabricación y
tráfico de armas de fuego.
16.5 “Reducir considerablemente la corrupción y el soborno en
todas sus formas” (Rodrigues, 2016. p. 3). Está relacionado con
terminar con la corrupción, los sobornos, la eliminación de los
flujos financieros ilícitos y la facilitación de la recuperación de
activos en relación con los casos de corrupción.
16.6 “Crear en todos los niveles instituciones eficaces y
transparentes que rindan cuentas” (Rodrigues, 2016. p. 3). Este
objetivo sustenta toda la Agenda 2030, ya que trata del
fortalecimiento institucional. Apunta a la transformación, ya que
con su cumplimiento garantizará que los gobiernos cumplan con
sus compromisos para el 2030.
16.7 “Garantizar la adopción en todos los niveles de decisiones
inclusivas, participativas y representativas que respondan a las
necesidades” (Rodrigues, 2016. p. 3). Es un objetivo centrado en
las personas, implica que se implementen estrategias de inclusión
hacia las personas marginadas y grupos vulnerables.
16.8 “Ampliar y fortalecer la participación de los países en
desarrollo en las instituciones de gobernanza mundial” (Rodrigues,
2016. p. 3). Se propone que la sociedad civil y los Estados
miembros trabajen en conjunto para lograr la inclusión de las
voces locales.
16.9 “De aquí a 2030, proporcionar acceso a una identidad jurídica
para todos, en particular mediante el registro de nacimientos”
(Rodrigues, 2016. p. 3). Aquí se trata de la necesidad de tener un
sistema de registro civil y estadísticas vitales eficaces para lograr la
identidad oficial a través de los registros de nacimiento, de
matrimonio y de defunción.
16.10 “Garantizar el acceso público a la información y proteger las
libertades fundamentales, de conformidad con las leyes
nacionales y los acuerdos internacionales” (Rodrigues, 2016. p. 3).
Se refiere a la importancia de la libertad y el acceso a la
información como base fundamental de los demás derechos
humanos, ya que es a través de esto que se puede garantizar la

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transparencia, lo cual permite potenciar la participación de todos
en el proceso de desarrollo.
16.a “Fortalecer las instituciones nacionales pertinentes, incluso
mediante la cooperación internacional, para crear a todos los
niveles, particularmente en los países en desarrollo, la capacidad
de prevenir la violencia y combatir el terrorismo y la delincuencia”
(Rodrigues, 2016. p. 3). Remarca la importancia de establecer
instituciones eficaces que puedan garantizar interacciones seguras
y legales entre las personas y sus gobiernos, sin lo cual no se podrá
lograr cumplir con la agenda de gobernanza pacífica e inclusiva del
objetivo 16.
16.b “Promover y aplicar leyes y políticas no discriminatorias en
favor del desarrollo sostenible” (Rodrigues, 2016. p. 3). Promueve
la no discriminación en todos los aspectos de la implementación
del objetivo 16. Promueve de igual modo la participación y la
inclusión, ya que la discriminación puede ser un factor que impida
que las personas participen como así también lo son los excluidos
del mercado laboral, los perseguidos políticos, etcétera
(Rodrigues, 2016).

De acuerdo con la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible:

... la Carta de las Naciones Unidas comienza con la célebre


frase “Nosotros los pueblos”. Hoy día somos “nosotros los
pueblos” quienes emprendemos el camino hacia 2030. En
nuestro viaje nos acompañarán los gobiernos, así como los
parlamentos, el sistema de las Naciones Unidas y otras
instituciones internacionales, las autoridades locales, los
pueblos indígenas, la sociedad civil, las empresas y el sector
privado, la comunidad científica y académica y toda la
población. Ya se han comprometido con esta Agenda
millones de personas que la asumirán como propia. Es una
Agenda del pueblo, por el pueblo y para el pueblo, y
precisamente por ello creemos que tiene el éxito
garantizado.
El futuro de la humanidad y de nuestro planeta está en
nuestras manos, y también en las de la generación más
joven, que pasará la antorcha a las generaciones futuras.
Hemos trazado el camino hacia el desarrollo sostenible, y
nos corresponde a todos garantizar que el viaje llegue a
buen puerto y que sus logros sean irreversibles.3

3A/69/L.85. (2015). Anexo Transformar nuestro mundo: la Agenda 2030 para el Desarrollo
Sostenible. Naciones Unidas. Recuperado de https://goo.gl/86F3CE

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Conclusión
Entendiendo la paz como un proceso positivo, dinámico y participativo
para promover el diálogo y el encuentro para gestionar los conflictos desde
un espíritu de entendimiento y cooperación mutuos, encontramos así la
potencia de la mediación comunitaria como esa instancia por excelencia de
construcción de paz en el ámbito comunitario que propone prevenir y
transitar los conflictos de convivencia de un modo dialogado, cooperativo y
pacífico. Es fundamental que los vecinos puedan seguir siendo vecinos.

La Mediación Comunitaria propicia la creación de espacios


en los cuales la propia sociedad entabla un diálogo
constructivo para superar sus inconvenientes de todos los
días, imagina nuevos sentidos y traza nuevos senderos hacia
la concordia. Este instituto conlleva así un contenido
profundamente humano y se torna una propuesta de
entendimiento. (Nató, Rodríguez Querejazu y Carbajal,
2006. p. 10).

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Referencias
Alzate Sáenz de Heredia, R., Fernández Villanueva, I., y Merino Ortiz, C.
(2012). Desarrollo de la cultura de la paz y la convivencia en el ámbito
municipal: La mediación comunitaria. Política y Sociedad, 50(1), 179-194.

A/69/L.85. (2015). Anexo Transformar nuestro mundo: la Agenda 2030


para el Desarrollo Sostenible. Naciones Unidas. Recuperado de
https://goo.gl/86F3CE

A/RES/53/243. (1999). Declaración y Programa de Acción sobre una


Cultura de Paz. Asamblea General de las Naciones Unidas. Recuperado de
http://www.un.org/es/comun/docs/?symbol=A/RES/53/243

Nató, A., Rodríguez Querejazu, M. G., y Carbajal, L. (2006). Mediación


Comunitaria. Conflictos en el escenario social urbano. Buenos Aires:
Universidad.

Rodrigues, C. (2016). Guía de incidencia política para el objetivo 16.


Transparency, Accountability & Participation for 2030 Agenda. Recuperado
de http://tapnetwork2030.org/wp-
content/uploads/2016/04/TAP_Goal16Toolkit_Espanol.pdf

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