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6ª Monografía de la SATO

Tratamiento de una lesión del


nervio periférico en Cirugía
Ortopédica y Traumatología

Editoras Grupo Andaluz


Mª Pilar Pradilla Gordillo de la mano
Mª Ángeles García-Frasquet (GAMA)
SATO Juana Díaz del Río
6ª Monografía de la SATO

Tratamiento de una lesión del


nervio periférico en Cirugía
Ortopédica y Traumatología

Editoras
Mª Pilar Pradilla Gordillo
Mª Ángeles García-Frasquet
Juana Díaz del Río
Reservados todos los derechos. Ni la totalidad ni parte de este libro pueden reproducirse
o transmitirse por ningún procedimiento electrónico o mecánico, incluyendo fotocopias,
grabación magnética o cualquier almacenamiento de información y sistema de recuperación,
sin el previo permiso escrito del editor.

© Sociedad Andaluza de Traumatología y Ortopedia


Colegio Médico, Avda. de la Borbolla, 47 - 41013 Sevilla

Maquetación: Tipográfiko (David Carmona Fernández)


Impresión: Lienzo Gráfico
ISBN-13: 978-84-695-7960-2
Nº de registro: 201339483
Depósito Legal: SE 1168-2013
Índice

6ª Monografía SATO
Tratamiento de una lesión del nervio periférico en Cirugía
Ortopédica y Traumatología

ÍNDICE DE AUTORES...................................................................................................5

JUNTA DIRECTIVA SATO.............................................................................................7

PRESENTACIÓN...........................................................................................................9
Pradilla Gordillo, Mª Pilar

PRÓLOGO................................................................................................................... 11
Dr. Cuadros Romero, Miguel

PRIMERA PARTE. GENERALIDADES


¿QUÉ ES UN NERVIO PERIFÉRICO?........................................................................14
Dra. Pradilla Gordillo, Mª Pilar

VALOR DE LA IMAGEN EN LAS LESIONES NERVIOSAS.ECOGRAFIA.RNM........21


Dr. García de la Oliva, Alejandro

CUÁNDO Y POR QUÉ SOLICITAR UN EMG/ENG. ¿QUÉ NOS APORTA?...............30


Dr. Montes Latorre, Enrique

CÓMO OPERAR UN NERVIO. SUTURAS, INJERTOS, TRANSFERENCIAS,


CÁMARAS, FACTORES DE CRECIMIENTO..............................................................36
Dra. Díaz del Río, Juana

REHABILITACIÓN ANTES Y DESPUÉS DE LA CIRUGÍA.........................................46


Dr. Méndez Ferrer, Juan Bosco

DOLOR NEUROPÁTICO..............................................................................................54
Dr. Boceta Osuna, Jaime
SEGUNDA PARTE. TRATAMIENTO QUIRÚRGICO
7. PERPECTIVA HISTÓRICA DE LA CIRUGÍA NERVIOSA........................................63
Dra. García Frasquet, Mª Ángeles

8. PLEXO BRAQUIAL..................................................................................................72
Dra. Pradilla Gordillo, Mª Pilar

9. LESIONES INTERMEDIAS ENTRE PLEXO Y HOMBRO


(ESPINAL, TORÁCICO LARGO Y SUPRAESCAPULAR)...........................................88
Dr. Cárdenas Clemente, José

10. HOMBRO (AXILAR)...............................................................................................97


Dr. Cuadros Romero, Miguel

11. HÚMERO (NERVIO RADIAL)...............................................................................106


Dr. Jiménez Guardeño, Antonio

12. CODO (MEDIANO, RADIAL Y CUBITAL)............................................................120


Dr. Del Cerro Gutiérrez, Miguel

13. ANTEBRAZO (INTERÓSEO POSTERIOR Y RAMA SENSITIVA


DEL NERVIO RADIAL)..............................................................................................127
Dr. Najarro Cid, Francisco

14. MUÑECA (MEDIANO Y CUBITAL)......................................................................136


Dr. Galán Novella, Adolfo

15. MANO-DEDOS (DIGITALES, RAMA MOTORA DE MEDIANO Y CUBITAL)......142


Dr. Hernández Cortés, Pedro

16. PLEXO LUMBO-SACRO Y CADERA (CIÁTICO COMÚN Y CRURAL)...............159


Dra. Pradilla Gordillo, Mª Pilar

17. RODILLA (CPE)....................................................................................................164


Dr. Casañas Sintes, Joaquim

18. TOBILLO Y PIE.....................................................................................................172


Dra. Uceda Carrascosa, Mª del Pilar
Índice de autores
(Orden alfabético. Aparece el primer autor del capítulo)

Boceta Osuna, Jaime 54


Unidad de H. Domiciliaria y C. Paliativos. HUV. Macarena (Sevilla)

Cárdenas Clemente, José 88


Unidad de Miembro Superior. Hospital Virgen del Rocío (Sevilla)
Clínica Sagrado Corazón (Sevilla)

Casañas Sintes, Joaquim 164


Traumaunit. Centro Medico Teknon. Hospital Universitario de Bellvitge (Barcelona)

del Cerro Gutiérrez, Miguel 120


Unidad de Cirugía de la mano. Hospital Beata María Ana (Madrid)

Cuadros Romero, Miguel 97


Unidad de Miembro Superior y Microcirugía. Hosp. Univ. Virgen de la Victoria (Málaga)

Díaz del río, Juana 36


Unidad de cirugía de mano, Hospital de Virgen del Valme (Sevilla)

Galán Novella, Adolfo 136


Servicio de Traumatología y cirugía ortopédica. H. U. Costa del Sol. Marbella (Málaga)

García de la Oliva, Alejandro 21


Unidad de Gestión Clínica de Radiodiagnóstico. Hospital Virgen Macarena (Sevilla)

5
García Frasquet, María Ángeles 63
Unidad de Miembro Superior. Hospital Universitario Virgen Macarena (Sevilla)

Hernández Cortés, Pedro 142


Servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología. Hospital Clínico “San Cecilio” (Granada)

Jiménez Guardeño, Antonio 106


Servicio de Traumatología y Ortopedia. Hospital Infanta Elena (Huelva)

Méndez Ferrer, Juan Bosco 46


Unidad de Rehabilitación. Hospital Virgen del Rocío (Sevilla)

Montes Latorre, Enrique 30


Unidad de Electrofisiología, Hospital Virgen del Rocío (Sevilla)

Najarro Cid, Francisco 127


Unidad de Miembro superior. Hospital Fremap (Sevilla)

Pradilla Gordillo, Mª Pilar 14, 72, 159


Unidad de Cirugía de mano y nervio periférico. Hospital Nisa-Aljarafe (Sevilla)

Uceda Carrascosa, Mª del Pilar 172


Servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología. Hosp. Univ. Reina Sofía (Córdoba)

6
Junta Directiva de la Sociedad Andaluza
de Traumatología y Ortopedia 2011/2013

PRESIDENCIA: Gabriel Domecq Fernández de Bobadilla


VICEPRESIDENCIA 1ª: Jerónimo de la Hoz Marín
VICEPRESIDENCIA 2ª: Miguel Cuadros Romero
SECRETARÍA: JUAN RIBERA ZABALBEASCOA
TESORERÍA: FRANCISCO JAVIER MONTILLA JIMÉNEZ

PUBLICACIONES Y COMUNICACIONES
VOCALÍA Y REDACTOR JEFE: MARIO MELLA SOUSA
Publicaciones: Pedro Bernáldez Domínguez
Revista: Daniel Cansino Muñoz- Repiso
Página web: Jorge Luis Carrasco Ruiz
Biblioteca: Pedro Hernández Cortes

PRESIDENCIA FUNDACIÓN SATO: Miguel Cuadros Romero


VOCALÍA DE EMÉRITOS: Manuel Ruiz del Portal Bermudo
ASUNTOS PROFESIONALES, DEONTOLOGÍA: Ramón Rodríguez Morales
RELACIONES CON LAS INSTITUCIONES: FERNANDO LÓPEZ VIZCAYA
GRUPOS DE ESTUDIOS Y RELACIÓN CON SOC. AFINES: Manuel Mesa Ramos
RELACIONES CON LA UNIVERSIDAD: Luis Méndez Pérez

DOCENCIA E INVESTIGACIÓN
COORDINADOR DE LA VOCALÍA: Andrés Prieto Álvarez
Investigación: MANUEL GIRÁLDEZ SÁNCHEZ
Coordinación de actividades docentes: Juana Díaz del Río
Formación de residentes especializada: Mª Ángeles García Frasquet
Residentes Andalucía Occidental: Sara Chacón Cartaya
Residentes Andalucía Oriental: GUILLERMO SALMERÓN VÉLEZ

7
VOCALÍAS PROVINCIALES:
Almería
José Ángel Ruiz Molina
JAVIER DE TORRES URREA
Cádiz
JOSÉ JUAN BALLESTER ALFARO
Juan Almansa Buades

Ceuta
Nabil Mawas Terki

Córdoba
PILAR UCEDA CARRASCOSA
ANTONIO CUEVAS PÉREZ

Granada
Juan Tercedor Sánchez
Manuel Zabala Gamarra

Huelva
Fernando Alonso Vizcaíno
Antonio Jiménez Guardeño

Jaén
José Villalón Ogaya
Juan Valenzuela Pulido

Málaga
Francisco Villanueva Pareja
Rafael López Arévalo

Melilla
Fernando Sánchez Castillo

Sevilla
Ricardo Mena-Bernal Escobar
LUIS ROCA RUIZ

8
Presentación de la 6ª Monografía SATO

Mª Pilar Pradilla Gordillo

Queridos colegas/amigos:
Un año antes de la publicación de esta monografía, dirigimos el LXII Seminario
SATO titulado “Lesiones traumáticas de los nervios periféricos”. Animados por
los participantes al mismo y por el grupo GAMA (Grupo Andaluz de estudio de la
Mano) fue por lo que creímos que era útil plasmar en un escrito los conocimientos
que adquirimos en el mismo.
A pesar de que la incidencia de las lesiones nerviosas periféricas por causas trau-
máticas es desconocida, todos los traumatólogos en el ejercicio de su carrera se han
enfrentado en más de una ocasión a ellas. Sin embargo, la cirugía nerviosa parece
ocupar un lugar secundario (al menos aparentemente) en el campo de la cirugía or-
topédica y de la traumatología.
Somos nosotros los que las diagnosticamos y por ello creemos que somos los que
debemos tratarlas tanto de urgencias (heridas) como en un tiempo posterior (fractu-
ras, luxaciones, estiramientos etc.).
El espíritu de estos artículos es fiel a las charlas que se dieron en febrero del 2012, y
por ello el índice de la monografía está diseñado igual que en el seminario, de forma
algo diferente a como lo hemos hecho en otras ocasiones. Como veréis está plan-

9
teado por regiones anatómicas debido a que nuestra actividad está muy parcelada y
hay compañeros que trabajan en el hombro y otros en rodilla (por ejemplo); la forma
de tratar las lesiones es común en algunos aspectos pero también es diferente en el
tiempo y la forma según la zona.
Creemos que esta novedad hará la monografía atractiva y sobre todo útil y práctica
ya que cualquier traumatólogo (sea cual sea su campo de actuación) podrá benefi-
ciarse de ella, es lo que esperamos.
Con la 6ª hemos abierto un ciclo nuevo que estamos seguras que no decaerá: gra-
cias a todos los autores y gracias a los pioneros de las monografías, especialmente a
nuestro vocal de publicaciones, Dr. Pedro Bernáldez Domínguez y a la Junta Direc-
tiva de la SATO que nos ha facilitado su ayuda en todo momento.

“Porque una carrera académica pone a un joven en una situa-


ción embarazosa, ya que exige que produzca publicaciones cien-
tíficas en cantidad impresionante... seducción de lo superficial
que solo los caracteres fuertes pueden resistir.”
(Albert Einstein)

10
Prólogo

Miguel Cuadros
Vicepresidente 2º

Es un honor para mí el poder prologar esta magnífica monografía dedicada a los


nervios periféricos, fruto del LXII Seminario Sato “Lesiones y tratamiento de una
lesión nerviosa periférica en Cirugía Ortopédica y Traumatología” dirigido por la
Dra. Mª Pilar Pradilla Gordillo en el Hospital Nisa-Aljarafe de Sevilla los días 10
y 11 de Febrero de 2012. Estoy convencido que será de gran utilidad, no sólo para
aquellos que como ella y yo mismo amamos y nos dedicamos a la cirugía de los ner-
vios periféricos y más concretamente a la del plexo braquial, sino que también lo será
para todos los compañeros que inician sus andaduras en esta especialidad, así como
a todos en general.
El número de cirujanos con experiencia en el campo de los nervios periféricos es
relativamente pequeño si los comparamos con los traumatólogos y cirujanos plásti-
cos en general. Este tipo de cirugía es compleja y laboriosa, necesita una importante
especialización y a veces, los resultados no son tan satisfactorios como quisiéramos.
Hablar de la cirugía de los nervios periféricos significa tener conocimientos de
anatomía, neurología, neurofisiología y técnica quirúrgica, tanto en macro como en
microcirugía. Es necesaria cierta disposición y disciplina por la precisión que sus téc-
nicas requieren; la paciencia es otra cualidad indispensable, ya que son lesiones muy

11
complejas, cuyo tiempo en quirófano es muy superior a cualquiera de las cirugías
que se practican a diario en nuestra especialidad. Y por último, es imprescindible
transmitir ilusión al paciente para que tras una largo período de espera y tratamiento
rehabilitador pueda alcanzar su/nuestro objetivo final.
Esta monografía sirve como recopilación de las técnicas, diagnósticos y tratamien-
tos de los distintos nervios, tanto de la extremidad superior como inferior, que expu-
simos en las comunicaciones y trabajos un grupo de especialistas y amigos andaluces,
bajo la estupenda supervisión de la Dra. Pradilla.
Una vez más te doy las gracias, querida Pilar, por acordarte de mí para este prólogo,
y que nuestro cariño y amistad perdure en el tiempo.

12
Primera parte

Generalidades
Mª Pilar Pradilla Gordillo

Capítulo 1

¿Qué es un nervio periférico?


Mª Pilar Pradilla Gordillo
Unidad de Cirugía de mano y nervio periférico. Hospital Nisa-Aljarafe (Sevilla)

Correspondencia: pragor@telefonica.net

Palabras claves: Nerve fibre, nerve injury, degeneration, regeneration

P
ara conocer la patología nerviosa ESTRUCTURA
hemos considerado fundamental el
dedicar un capítulo al conocimien- Situación en el sistema nervioso
to de la estructura del nervio sano, su fisio- Clásicamente el Sistema Nervioso (SN)
logía y el lugar que ocupa dentro del SN. se divide en central, periférico y autónomo.
Posteriormente veremos cómo reaccio- La unidad funcional básica es la NEURO-
na el nervio ante una agresión (tipo de NA y el SN es un conjunto de ellas (más de
lesiones), como se produce la reparación cien mil millones). Las hay de muchos tipos
(degeneración-regeneración) y cuáles son y formas pero su función es siempre la mis-
los factores que influyen en el la misma. ma: Inter-conexionar los distintos niveles
Estos datos permitirán al cirujano saber del SN para poder llevar información hasta
a qué tipo de lesión se enfrenta, como solu- la estructura diana: músculos, piel, glándu-
cionarla y comprender porque los tiempos las etc. El impulso nervioso llega través de
de curación son de los más lentos dentro la dendrita (múltiples señales aferentes) y
de la patología del ser vivo. se emite por el axón (señal eferente única),

14
¿Qué es un nervio periférico?

“Teoría de la Polarización dinámica de Ca- cervical medio (inconstante) y la 7-8 y 1ª


jal”. La conexión de neurona a neurona se dorsal reciben el ganglio estrellado (suma
hace a través de las terminales pre sinápti- del cervical inferior y del 1º torácico).
cas (situadas en la superficie del soma y de Para nuestra monografía son interesan-
las dendritas) donde se secretan los neu- tes aquellas neuronas que llegan al mús-
rotransmisores que tendrán un efecto de culo (efecto de contracción-relajación) y
excitación o inhibición según el receptor de que por tanto producen un movimiento o
la neurona post sináptica1. aquellas que transmiten sensaciones y que
En el sistema nervioso central (SNC) nos permitirán, por ejemplo, sentir un ob-
hay tres niveles: jeto con la mano.
• Encefálico superior o cortical, aquí se
producen las funciones superiores del ser Anatomía microscópica. Histología
humano: memoria, asociación de ideas, Cada nervio periférico (NP) está cons-
razonamiento…Hace que las actuaciones tituido según su nivel y su acción por un
del subconsciente sean más determinan- número variable de axones, entre 400 (rama
tes y precisas. al músculo pectoral) a 40.000 (raíz C7)2.
• Encefálico inferior o subcortical, responsa- El axón es la fibra nerviosa “en si” y todas
ble de la actividad subconsciente: conducta las estructuras que lo rodean solo tienen la
emocional, presión arterial, respiración… función de mantener la continuidad del flujo
• Médula espinal, contiene la sustancia gris axonal y la nutrición de estas fibras3. Hay dos
interna (cuerpos neuronales) y sustancia tipos: mielínicas (en las cada fibra está en-
blanca periférica (dendritas y axones ro- vuelta por una célula de Schwan) o amielíni-
deados de mielina los cuales se separarán cas (la célula de Schwann envuelve a varias).
en dos haces completamente independien- La unión de varios axones forma un
tes, los ascendentes y los descendentes). fascículo y a su vez la suma de fascículos
El sistema nervioso periférico (SNP) constituye el NP. Los fascículos están in-
corresponde a los axones de las neuronas mersos en el endoneuro y rodeados por
del último nivel, aquéllas que están encla- el perineuro, la cubierta más externa que
vadas en la médula o en los ganglios. Estos envuelve al nervio es el epineuro.
axones son motores, sensitivos o simpáti- Endoneuro, perineuro y epineuro cons-
cos. Los nervios periféricos son la unión tituyen el tejido conectivo básico (30-75%
de ellos y por lo tanto serán nervios mo-
tores, sensitivos o mixtos. Hay 31 parejas
Raíz posterior del nervio raquídeo
de nervios raquídeos que emergen por los
Raíz anterior del
agujeros de conjunción (Fig.1). nervio raquídeo
El sistema nervioso autónomo (SNA) Ganglión espinal

está compuesto por el simpático y el para- Ramo posterior del N.R.


simpático. Solo nos interesa el primero que Ramo anterior del N.R.
es el que forma parte del plexo cérvico-bra-
quial. Se une al SNP cuando los nervios ra- R. Comunicante
quídeos emergen del agujero de conjunción, blanco

así la pareja del nivel 5-6 recibe el ganglio Fig. 1. R. Comunicante


gris
Ganglión simpático

15
Mª Pilar Pradilla Gordillo

del nervio) y cada uno tiene una función su movimiento. En la fig. 3 apreciamos el
específica. En la fig. 2 vemos un corte his- doble modelo de circulación, longitudinal
tológico y en él apreciamos la dificultad que en el epineuro y tipo red en el peri-endo-
tendremos en al acto quirúrgico para orien- neuro que explica el profuso sangrado al
tar los axones y/o los fascículos, los cuales, hacer una neurolisis interna.
además, irán cruzándose entre ellos a lo lar-
go de su trayecto hasta el órgano a inervar4. FUNCIÓN
La vascularización posee un sistema in- Endoneuro, perineuro y epineuro cons-
trínseco que consiste en un plexo de vasos tituyen, no solo las barreras mecánicas que
peri-endoneurales y un sistema extrínseco protegen a la fibra nerviosa, sino que uni-
longitudinal a través de la adventicia que dos a la red vascular y a la membrana plas-
le da mucha libertad al tronco nervioso en mática del axón permiten el intercambio

Fig. 2.

Logitudinal Plexual

Fig. 3.

16
¿Qué es un nervio periférico?

de iones que es el pilar fundamental del ROTROFICOS de ahí que el transporte


proceso de reconstrucción nerviosa. (“Uni- retrógrado se active y se acelere cuando hay
dad funcional vascular de Lundborg”)3. una lesión para evitar así la muerte celular.
De forma regular aparecen a lo largo del
axón, zonas libres de mielina llamadas “nó- APLICACIÓN CLÍNICA
dulos de Ranvier” y es justo en ellos donde Tras una sección nerviosa, la pérdida
se produce el intercambio (Fig. 4). de la parte distal de la neurona induce a
A través del axón se transportan en am- cambios estructurales y funcionales en la
bas direcciones, los mensajes químicos parte proximal restante incluyendo la pre-
entre el cuerpo de la neurona (síntesis de paración metabólica para el remplazo del
neurotransmisores) y la diana (Fig. 5). volumen axoplásmico perdido3,5.
La supervivencia de la célula no es solo La degeneración o primer paso para la
cuestión de factores locales sino de la in- regeneración es inmediata, es decir ambos
fluencia trófica dirigida a ella desde tejidos fenómenos forman parte del mismo proce-
no neuronales y/o tejidos “blanco”. Estas se- so y son simultáneos tal como vemos en la
ñales la constituyen los FACTORES NEU- fig. 6. La Calpaína, proteasa activada por
el calcio, altera el equilibrio normal entre

Membrana axonal: intercambio de iones

Ca+

Calpaina

Proteolisis Síntesis proteica

Microtúbulos y
Neurofilamentos

Fig. 4. Fig. 6.

• Transporte axonal anterógrado lento (0,1-30 mm/día)


Microtúbulos, neurofilamentos y microfilamentos
• Transporte axonal anterógrado rápido (+ 400 mm/día)
Componentes para la membrana axonal (glicoproteinas, lípidos)
• Transporte retrógrado (100-290 mm/día) (3-8 mm/día)
Aumenta cuando hay una lesión del axón (reciclado, información al cuerpo)

Fig. 5.

17
Mª Pilar Pradilla Gordillo

la proteólisis y la síntesis destruyendo en de Schwann, fibroblastos, miofibroblastos


el primer caso los componentes axonales y capilares. Pero si las ponemos, observare-
y en el segundo permitiendo la formación mos que en 6 semanas ya hay paso de fibras
de los microtúbulos y los neurofilamentos. al extremo distal. Sobre el cuarto día, los
La neurona intentará sobrevivir y va cilindroejes y sus puntas buscan el blanco
a permanecer en estado hipermetabóli- adecuado orientándose longitudinalmente,
co durante meses a la espera de tener las con movimientos constantes (abundante
condiciones adecuadas para reunirse con el actina), pueden retraerse si no encuentran su
extremo distal. Los cambios se producen objetivo o si el contacto con dicho objetivo
tanto en el cuerpo como en los extremos es demasiado suave. Este comportamiento
proximal/distal del axón. recuerda a la célula neuronal embrionaria
En el cuerpo aumenta la síntesis proteica. donde el cono de crecimiento envía varias
En la primera hora post-lesión, aparece prolongaciones (citoplasmáticas) de reco-
en el extremo proximal un infiltrado infla- nocimiento del sustrato (filopodio, lame-
matorio, amplia presencia de mucopolisa- lipodio y pseudopodio). El filopodio es el
cáridos, fibroblastos, células de Schwann, más largo y se siente atraído por diferentes
células del perineuro y neo-vasos. Esto se llamadas, si considera apropiado el “blan-
produce, al menos, en el primer nódulo de co”, anida allí y desarrolla su estructura en
Ranvier intacto. Se conoce como pseudo- función del blanco a inervar (ej. Formará la
neuroma y su tamaño es el triple de diáme- placa motora al llegar a un músculo).
tro del nervio original; el cilindro neural En el extremo distal se forma el glio-
queda vacío pero en los días siguientes ma que equivale al neuroma proximal. Se
comienzan a nacer los brotes colaterales conoce como degeneración walleriana,
desde los nódulos de Ranvier donde toda- los macrófagos ayudan a las células de
vía haya axones. Schwann a acabar con la mielina y todo
Si no ponemos las condiciones adecua- el detritus. En el 4º día hay una intensa
das para la regeneración, estamos ante un actividad de las células de Schwann para
verdadero neuroma: acúmulo desordenado formar los nuevos tubos endoneurales
de colágeno, axones regenerativos, células (bandas de Bünger) (Fig. 7).

CUERPO NEURONAL EXTREMO PROXIMAL EXTREMO DISTAL

Núcleo: Aproximación a la • Degeneración axonal retrógrada • Degeneración Walleriana:


periferia • Formación del pseudoneuroma • Desintegración de los microtúbulos y
Citoplasma: Cromatolisis neurofilamentos
• Alteración del tejido conectivo (colágeno)
• Proliferación de células de Schwann
(bandas de Bünger) (gliosis reactiva)
• Aparición de macrófagos
• Formación del cono de • Elevada actividad de la fosfatasa ácida y de
crecimiento (filopodio) enzimas oxidativas y colinesterasa
Aumento de RNA y de la Paso de axones (6 semanas) • Formación de una lámina basal
síntesis proteica (4-40 días) Neuroma • Diferenciación en fibras mielínicas o no

Fig. 7.

18
¿Qué es un nervio periférico?

Los brotes avanzarán buscando estos tu- Axonometsis. Grado II. Hay una pér-
bos endoneurales situándose al principio dida de la continuidad de los axones en
en la superficie de una célula de Schwann el lugar de la lesión pero el tubo neural,
para luego empotrarse en el citoplasma y perineuro y epineuro permanecen intactos.
dejar que los axones se vayan diferencian- Grado III. Pérdida de los tubos neuro-
do en mielínicos o no. ¿Porque señal lo nales.
hacen? No se trata de factores mecánicos Grado IV. Solo se mantiene el epineuro
solamente (es decir de afrontar extremos) En esta lesión hay degeneración walle-
sino de los factores de crecimiento que riana. El pronóstico se ensombrece a ma-
son péptidos de las familias de las neuro- yor grado pues los axones han de localizar
trofinas: factores de crecimiento nervioso, sus dianas. Pueden llegar tarde a la reiner-
NGF; neurotróficos, NTFs; promotores vación y encontrar que el daño muscular,
del crecimiento, NPFs; dependientes de por ejemplo, sea irreversible.
los fibroblastos,b-FGF; semejantes a la Neurotmesis. Grado V. Destrucción
insulina, IGF-I,II; citoquinas etc6,7,8. Se completa. No puede haber recuperación
localizan en las células de Schwann, los fi- espontánea.
broblastos endoneurales, los macrófagos e
incluso tejidos no neuronales y aunque su
función exacta no es conocida plenamen-
te si sabemos que su presencia o ausencia Bibliografía
hace que los brotes axonales encuentren 1. Guyton A, Hall J, “Sistema nervioso”,
o no su destino. Es de vital importancia Tratado de fisiología médica, Cap. 45,
que exista el flujo axonal retrógrado para Pág. 621-37, 2001 Mc Graw-Hill
reciclado de materiales y para pasar infor- 2. Chuang DCC. Neurotization pro-
mación al soma neuronal. cedures for brachial plexus injuries.
Hand Clin. 11: 633-45, 1995
TIPO DE LESIONES 3. Lundborg G, “The nerve trunk”, Ner-
Según el grado de afectación de los ve Injury and Repair, Cap. 2, Pág. 32-
componentes del axón se utiliza univer- 63, 1988 Churchill Livingstone
salmente la clasificación de Seddon9 mo- 4. Zancolli E, Cozzi E, “Topografía fu-
dificada años más tarde por Sunderland10 nicular de los nervios periféricos”, At-
que contempla 5 grados y posteriormente las de anatomía quirúrgica de la mano,
por Mackinon y Richarson que incluyeron Cap. 7, Pág. 652-74, 1993
un sexto tipo o patrón mixto. 5. Lundborg G, Danielsen N, ”Injury,
Neuroapraxia. Grado I. Se produce un Degeneration and Regeneration”,
bloqueo de la conducción por isquemia y Operative nerve repair and recons-
desmielinización local pero la continuidad truction, Cap. 7, Pág.109-131, 1991
de los axones se mantiene. Se traduce clí- 6. Levi-Montalcini R, Angeletti P.
nicamente en una parálisis motora pero no Nerve growth factor. Physiol Review
sensitiva o simpática. Hasta que no se res- 1968; 48:534-69
taura la mielina no se recupera la clínica, 7. Dekker A, Gispen W, de Wied L. Mi-
puede tardar de días a semanas. nireview: Axonal regeneration, growth

19
Mª Pilar Pradilla Gordillo

factors and neuropeptides. Life Scien-


ces 1987; 41: 1667-78
8. Hurst L, Badalamante M, “Bioche-
mical Properties of Peripheral Nerve”,
Operative nerve repair and recons-
truction, Cap. 4, Pág. 55-72, 1991
9. Seddon H. Three types of nerve inju-
ries. Brain 1943; 66: 237-88
10. Sunderland S. A classification of pe-
ripheral nerve injuries producing loss
of function. Brain 1951; 74: 491-516

20
Valor de las técnicas de imagen en las lesiones del nervio periférico

Capítulo 2

Valor de las técnicas de


imagen en las lesiones del
nervio periférico
A. García de la Oliva, B. Fernández García, A. Arias Medina
Unidad de Gestión Clínica de Radiodiagnóstico.
Hospital Virgen Macarena (Sevilla)

Correspondencia: adelaoliva@us.es

Palabras claves: resonancia, ultrasonidos, nervio

Introducción más reducido de la Radiología en el es-


Es un hecho demostrado el valor de tudio del NP habría que señalar quizás
las pruebas de imagen como herramienta un menor hábito del radiólogo en el es-
diagnóstica a la hora de valorar la pa- tudio de la patología del NP dentro de su
tología del sistema músculo-esquelético. actividad diaria y también que, en la ma-
Son muy utilizadas cuando se requiere yoría de casos, se consigue un diagnós-
demostrar patología a nivel óseo o mus- tico fiable por medio de la exploración
cular así como en el manejo de las masas física y las pruebas de electrofisiología
de partes blandas. Su uso en el estudio sin ser necesario el apoyo de las pruebas
de la afección del nervio periférico (NP) de imagen. En este capítulo se mostrará
está sin embargo menos extendido. En- la indicación de cada técnica de imagen
tre las causas que expliquen este papel según la localización de la patología y

21
A. García de la Oliva, B. Fernández García, A. Arias Medina

describiremos la apariencia radiológica es mayor y el tiempo invertido en el estudio


normal del NP y la semiología de la pa- de estos tractos nerviosos, en ocasiones de
tología mas frecuente. gran recorrido, es sensiblemente menor.
Por otro lado es también importante a
Consideraciones técnicas la hora de estudiar la patología de un NP
e indicaciones saber si el paciente se presenta o no una
Cuando una prueba radiológica es soli- masa palpable. Si el paciente presenta una
citada a un paciente afecto por una neu- masa de partes blandas debería realizarse
ropatía periférica, casi siempre es debido en primer lugar RX y EC; con la RX po-
a la existencia de una discrepancia entre demos demostrar la dependencia ósea de
la clínica del paciente y las pruebas de la lesión así como la afectación del hueso
electrofisiología o bien cuando es necesa- de forma secundaria y poner además de
rio determinar la localización anatómica manifiesto la existencia de calcificacio-
exacta de una lesión. nes dentro de la masa, lo cual nos puede
El siguiente paso es decidir qué prueba ayudar a estrechar el diagnóstico. Con la
de imagen es la idónea con el fin de evi- EC definimos la naturaleza sólida o quís-
tar gastos innecesarios, tiempos de espera tica de la lesión. Si mediante el campo
inútiles al médico y al paciente, así como de visión de la EC abarcamos de forma
elevadas dosis de radiación. En el diagnós- completa la masa en cuestión y se trata
tico por imagen del NP son dos funda- además de una lesión sólida, no tendría-
mentalmente, las pruebas radiológicas a mos que realizar en principio ninguna
elegir, la ecografía (EC) y la resonancia otra prueba de imagen y se debería pasar
magnética (RM). La elección entre una directamente la biopsia y estudio anato-
y otra dependerá de múltiples factores: mo-patológico de la lesión. A saber, que
localización de la anormalidad, existencia la RM y TC son pruebas muy sensibles a
de una masa palpable, disponibilidad de la hora de detectar una lesión de partes
cada técnica, experiencia del radiólogo y blandas pero son de escasa especificidad y
las preferencias del médico solicitante. en muchas ocasiones al realizarlas caemos
Entre todos ellos es la localización el en una sobrecarga de pruebas de imagen
aspecto más importante a tener en cuenta. que en contadas ocasiones nos darán un
En general, en los casos de neuropatías pe- diagnóstico de seguridad y sin embargo
riféricas cuya causa se sospeche localizada retrasan el diagnóstico y el manejo de
en los tractos de salida del plexo braquial o este tipo de pacientes. Un resumen de
lumbosacro sería la RM la prueba de elec- este algoritmo diagnóstico se presenta en
ción ya que estos troncos nerviosos se en- la tabla 1.
cuentran a gran profundidad y protegidos La ECOGRAFÍA tiene como ventajas
por barreras óseas que impiden el acceso de la gran disponibilidad en los centros hospi-
los ultrasonidos. Por el contrario los NP del talarios, la ausencia de radiación ionizante,
miembro superior e inferior deberían ser el bajo coste, tiempos de exploración más
estudiados, en caso de necesidad, mediante cortos, tratarse de una técnica portátil y ser
EC ya que al tratarse de estructuras más una prueba dinámica que permite estudiar
superficiales la resolución espacial de la EC el nervio en reposo o con los movimientos

22
Valor de las técnicas de imagen en las lesiones del nervio periférico

voluntarios del paciente. Como desventaja ta capacidad multiplanar y ausencia de


se nos presentan los ultrasonidos como una radiación ionizante. Tiene una mayor
técnica muy operador-dependiente y de es- especificidad tisular que la EC, permi-
casa reproductibilidad. Es prioritario que el te diferenciar claramente grasa y sangre
radiólogo (u operador, según el caso) esté y detecta con una muy alta sensibili-
lo suficientemente entrenado en el manejo dad la existencia de edema, muy útil en
del estudio del NP así como disponer de el estudio de la patología del sistema
un ecógrafo de alta resolución equipados músculo-esquelético. Es una modalidad
con traductores de alta frecuencia y banda de imagen NO operador-dependiente y
ancha (5-15 megaherzios), de lo contrario altamente reproductible. Sin embargo se
nuestro estudio estaría condenado al fra- trata de una técnica poco disponible en
caso y sería más útil solicitar directamente los centros, estática y con un consumo de
una RM para estudiar cualquier tipo de NP tiempo y dinero sustancialmente mayor
aunque perdamos tiempo en ello y la reso- que los ultrasonidos. Al igual que hemos
lución del nervio periférico sea menor. comentado al hablar de la EC, en la RM
La RESONANCIA MAGNÉTICA existen unas consideraciones técnicas im-
nos permite estudiar nervios periféricos prescindibles para realizar un estudio de
que están a gran profundidad, presen- imagen con garantías. En este sentido es

NEUROPATÍA PERIFÉRICA

Clínica + electrofisiología

Masa palpable Masa no palpable

Plexo braquial
RX + eco Resto
Plexo lumbosacro

Visión completa
de la lesión
RM eco

Sí No + —

Tto
RM Tto Tto RM
biopsia

Tabla 1. Algoritmo diagnóstico de las lesiones del nervio periférico mediante técnicas de imagen.

23
A. García de la Oliva, B. Fernández García, A. Arias Medina

imprescindible disponer de antenas es- el aspecto de la señal de los líquidos es-


pecíficas que se adapten a la estructura táticos. En las secuencias potenciadas en
anatómica a estudiar. Si no disponemos T1, los líquidos estáticos (vejiga, líquido
de antenas específicas para el estudio de articular) aparecen con baja señal, oscuros
rodilla, tobillo, mano, codo, etc., la señal o hipointensos. En las secuencias poten-
emitida por esas antenas se degradará y se ciadas en T2, aparecerán brillantes o hi-
obtendrá una imagen de muy baja calidad perintensos. Las secuencias potenciadas
independientemente de la intensidad del en T1 presentan un mayor detalle ana-
campo magnético de que disponga la re- tómico normal de las estructuras, en las
sonancia. Este aspecto es, probablemente, secuencias potenciadas en T2 es donde se
el máximo responsable a la hora de ver pone de manifiesto la existencia de pa-
en las consultas placas de RM con mala tología ya que en estas secuencias, como
calidad de imagen. hemos comentado, el líquido aparece de
En la RM se emplean dos tipos de se- mayor intensidad y en las diferentes si-
cuencias estándar que se denominan de tuaciones patológicas (inflamación, infec-
forma universal como secuencias poten- ción, necrosis) no existe más que un me-
ciadas en T1 y T2. Esa denominación dio rico en líquido o agua libre, producido
viene determinada según los tiempos de por una alteración en la permeabilidad en
relajación o pérdida de señal de los di- las membranas de las células enfermas. El
ferentes tejidos al aplicarles un campo edema, del mismo modo, aparece hiper-
magnético externo. Las bases físicas de la intenso en las secuencias T2. Este edema
RM exceden el propósito de este capítulo se define mejor aún en un tercer tipo de
pero conviene saber que todo estudio de secuencias muy utilizadas en músculo-
RM constará de ambos tipos de secuen- esquelético, las llamadas secuencias de
cias, T1 y T2, ¿cómo diferenciarlas? Esta supresión grasa y de todas ellas la más
diferencia se basa fundamentalmente en conocida y utilizada son las llamadas se-
cuencias STIR. Estas secuencias son fá-
cilmente reconocibles por visualizarse los
líquidos y el edema brillantes y mostrar la
médula ósea y el tejido celular subcutáneo
(generalmente ricos en grasa) oscuros o
hipointensos.
Las estructuras que tengan poco agua
como el menisco, ligamentos y tendones
presentarán baja señal en todas las secuen-
cias de pulso. Por último en la RM po-
demos administrar contraste intravenoso,
gadolinio, fundamentalmente en el mane-
jo de tumores o para definir la existencia
Tabla 2. Características de señal en RM de de colecciones en el seno de una infección.
los diferentes tejidos respecto a la señal del
músculo. Círculo blanco: hiperintenso. Círculo En resumen, las secuencias T1 nos faci-
gris: isointenso. Círculo negro: hipointenso. litan un buen detalle anatómico, la pato-

24
Valor de las técnicas de imagen en las lesiones del nervio periférico

logía se muestra hiperintensa en las se- La EC demuestra con una mayor re-
cuencias potenciadas en T2 y el edema es solución la estructura interna nerviosa,
claramente visible en las secuencias STIR. observándose los tractos nerviosos como
Un cuadro resumen de las características imágenes hipoecogénicas (fascículos) em-
de señal de los diferentes tejidos se aporta bebidas en un fondo hiperecogénico (epi-
en la tabla 2. neuro) conformando el aspecto fascicular
comentado previamente (Fig. 1).
Apariencia del nervio En RM el plano axial es el más útil para
periférico normal en las el estudio del NP, observándose en las
pruebas de imagen secuencias potenciadas en T1 como una
En ambas técnicas el NP presenta un imagen redondeada u ovoidea bien defi-
aspecto fascicular. Las fibras nerviosas nida de señal similar al músculo adyacen-
están agrupadas en fascículos. Las fibras te. En las secuencias potenciadas en T2
nerviosas individuales están rodeadas la señal del nervio es medianamente alta
por una capa de tejido conectivo, el en- comparada con la del músculo adyacente
doneuro. Cada fascículo está recubierto (Fig. 2). El NP normal no capta contraste
por una membrana de tejido conectivo tras la administración de gadolinio intra-
denominado perireuro. Los fascículos a venoso. En casos de neuritis de cualquier
su vez están rodeados por una vaina lla- causa, el nervio comprimido pierde su
mada epineuro. aspecto fascicular normal, se engruesa y
puede captar contraste.
Fig. 1. Ecografía.
Aspecto
PATOLOGÍA DEL
fascicular NERVIO PERIFÉRICO
normal del NP. Las patologías más frecuentes que afec-
tan al NP son los síndromes por atrapa-
miento, lesiones traumáticas, complicacio-
nes post-cirugía y los tumores. Además la
RM nos informa sobre el estado del mús-
culo en casos, por ejemplo, de denervación
tanto aguda como crónica.

1. Masas y tumores del


nervio periférico
En el estudio de las masas que producen
neuropatía periférica hay que diferenciar
si se trata de una masa quística o sólida.
Entre las masas quísticas las que más fre-
cuentemente se relaciona con neuropatía
periférica es el ganglión. Al tratarse de una
lesión líquida se define muy bien por EC,
Fig. 2. RM: Aspecto fascicular normal del NP. como una imagen simple o en ocasiones

25
A. García de la Oliva, B. Fernández García, A. Arias Medina

con finos septos con refuerzo sónico pos- neurofibroma, ambos benignos y presen-
terior (Fig. 3). tándose en la mayoría de ocasiones como
Los principales tumores sólidos y de- una masa palpable. Son menos frecuentes,
pendientes del NP son el schwanoma y el el hemangioma, linfoma y resto de tumo-
res malignos. Los schwanomas son lesio-
nes de lento crecimiento que suelen afectar
a pacientes entre 20-40 años, y constituyen
aproximadamente el 5% de todos los tu-
mores benignos de partes blandas. Se trata
de un tumor con una verdadera cápsula,
de morfología ovoidea o fusiforme, ob-
servándose típicamente en las pruebas de
imagen como el nervio entra y sale de la
lesión (Fig. 4). El tumor suele ocupar una
Fig. 3. Ecografía: lesión de apariencia quística posición excéntrica o periférica respecto
con refuerzo sónico posterior. Ganglión. al nervio. Pueden presentar áreas de dege-
neración quística en su interior así como
calcificaciones y su transformación malig-
na es rara. Los neurofibromas también se
muestran como una masa fusiforme con la
imagen del nervio entrando y saliendo de
la lesión y con vascularización interna. El
tumor en este caso suele ocupar una posi-
ción central dentro del nervio, a diferencia
que el schwanoma. En los estudios de RM
con gadolinio pueden presentar un aspec-
to típico “en diana” debido a la existencia
de fibrosis central no captante en este
tipo de tumores (Fig. 5). Los neurofibro-
mas plexiformes, que son exclusivos de la
Fig. 4. Ecografía: lesión ovoidea hipoecogénica
observándose el NP entrando y saliendo de la neurofibromatosis tipo 1, se muestran con
lesión. Schwanoma. frecuencia como múltiples tumoraciones
dentro de un tronco nervioso, el cual adop-
ta una morfología tortuosa, presentando
un riesgo de malignización mayor (Fig. 6).
Los tumores malignos de la vaina del NP
son raros, afectan con mayor frecuencia a
los troncos nerviosos del plexo braquial
Fig. 5. RM y ciático y pueden alcanzar gran tamaño
con contraste. con un crecimiento rápido. A diferencia de
Neurofibroma.
Aspecto típico los tumores benignos, producen síntomas
“en diana”. como dolor local o clínica neurológica.

26
Valor de las técnicas de imagen en las lesiones del nervio periférico

2. Lesiones traumáticas trata de la alteración de la función de un


Las lesiones traumáticas pueden estar nervio debida a la compresión del mismo
producidas por varios mecanismos como por una causa mecánica o dinámica. Sue-
tracción, contusión, heridas penetrantes y le producirse en localizaciones predecibles
cirugía. Las laceraciones nerviosas pueden donde el nervio está más predispuesto a la
ser parciales o completas. En este tipo de compresión, como en el interior de túneles
lesiones las técnicas de imagen pueden osteofibrosos por donde el nervio cambia
ayudar a decidir la actitud a seguir así de dirección o bien en las cercanías de las
como valorar los cambios postquirúrgicos, articulaciones donde es frecuente la forma-
como la fibrosis que es causante en oca- ción de osteofitos. La compresión puede
siones de neuropatías por atrapamiento. ser aguda, crónica o intermitente. El nervio
Cuando existe una laceración nerviosa, las atrapado pierde su aspecto fascicular nor-
células de schwann y los axones tienden a mal, se engruesa y puede captar contraste.
restablecer la continuidad nerviosa. A ve- Estos cambios por edema (neuritis com-
ces en su intento de restablecer esa conti- presiva) se observan tanto en el punto de
nuidad nerviosa crecen de forma desorde- compresión como proximal a él (Fig. 8).
nada lo que conduce a la formación de una
masa fibrosa, sólida, redondeada u ovoidea 4. Denervación muscular
en relación con el nervio lacerado, lo que se Por último, haremos mención a los
denomina neuroma (Fig. 7). cambios que se pueden producir en la
imagen del músculo cuando éste se en-
3. Síndromes por atrapamiento cuentra afectado por una neuropatía
Los síndromes por atrapamiento son periférica, lo que se denomina como
una de las principales entidades por la que patrón de denervación. En ocasiones la
una prueba de imagen es solicitada. Se anormalidad primaria no es visible por
las técnicas de imagen, sin embargo ob-
servamos cambios en el aspecto del mús-
culo o músculos que están inervados por

Fig. 6. RM
con contraste. Fig. 7. Ecografía. Fig. 8. Ecografía. Nervio hipoecogénico y
Neurofibroma Neuroma engrosado adyacente a imagen estrellada
plexiforme. post-quirúrgico. hipoecogénica por fibrosis.

27
A. García de la Oliva, B. Fernández García, A. Arias Medina

ese nervio patológico lo que nos llevaría lo de señal muy elevada (Fig. 9). Este pa-
a poder localizar dónde se encuentra la trón de edema muscular puede observarse
anormalidad. Para detectar este patrón de en las secuencias STIR de RM de forma
denervación muscular es de mayor utili- muy precoz, incluso a las 24-48 horas de
dad la RM y podemos observar cambios producirse la denervación. Por el contra-
por denervación aguda y crónica. En la rio los signos de denervación muscular
denervación aguda, se observa un patrón pueden necesitar hasta 2-3 semanas para
muscular de edema. El músculo aparecerá ser detectados mediante electromiografía.
en la imagen de RM hipointenso en las Cuando la lesión está instaurada de for-
secuencias potenciadas en T1 e hiperin- ma crónica podemos observar el patrón
tenso en las secuencias potenciadas en T2. denominado como denervación crónica
En este caso la secuencia STIR es de gran que consiste en una sustitución grasa del
utilidad por su alta sensibilidad para el músculo acompañado frecuentemente de
edema y pondrá de manifiesto un múscu- una disminución de su tamaño por atro-
fia. La grasa presenta una señal alta en las
secuencias potenciadas tanto en T1 como
en T2 y el músculo se verá hipointenso o
de baja señal en las secuencias STIR ya
que se trata de una secuencia que suprime
la señal de la grasa (Fig. 10).
Fig. 9. RM
secuencia
STIR. Músculo CONCLUSIONES
edematoso Las pruebas de imagen son útiles en el
hiperintenso por
denervación manejo de las lesiones del nervio periférico.
aguda. La ecografía muestra una mayor reso-
lución en el estudio del NP del miembro
superior e inferior. La RM se reserva para
el estudio de los troncos nerviosos profun-
dos del plexo braquial y lumbosacro.
Es necesario contar con equipos de eco-
grafía de alta resolución y radiólogos en-
trenados en la patología del NP.
La RM es la técnica de elección para el
estudio del patrón de denervación muscu-
lar, tanto agudo como crónico.

Fig. 10. RM secuencia T1. Músculo


hiperintenso con cambios grasos y atrofia por
denervación crónica.

28
Valor de las técnicas de imagen en las lesiones del nervio periférico

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29
Enrique Montes Latorre

Capítulo 3

Conceptos básicos del estudio


neurofisiológico
Enrique Montes Latorre
Unidad de Electrofisiología, Hospital Virgen del Rocío (Sevilla)

Correspondencia: enriquemonteslatorre@hotmail.com

Palabras claves: electromyography, electroneurography

L
as exploraciones neurofisiológicas estudia los troncos nerviosos y la placa
—electromiografía y electroneuro- neuromuscular, y la electromiografía
grafía— son técnicas que estudian como la técnica que evalúa los potencia-
los potenciales eléctricos de los músculos les eléctricos del músculo, habitualmente
y de los nervios a través de instrumentos mediante electrodos de aguja, insertados
electrónicos, que recogen y amplifican a través de la piel.
estas señales. Permiten una valoración
del sistema nervioso periférico desde el ELECTRONEUROGRAFÍA
asta anterior de la médula y las raíces Los estudios de conducción nerviosa se
nerviosas hasta la unión neuromuscular basan en la aplicación de estímulos eléc-
y los músculos. Aunque se utiliza el tér- tricos sobre un nervio y la obtención de
mino electromiografía en un sentido am- unos potenciales eléctricos en un terri-
plio que designaría a todos los estudios, torio cutáneo dependiente de ese nervio
lo más apropiado es diferenciar la elec- o en músculos inervados por el mismo.
troneurografía como la exploración que Aunque los nervios son habitualmente

30
Conceptos básicos del estudio neurofisiológico

mixtos- esto es tienen componentes mo- Parámetros


tores y sensitivos- los estudios distinguen Si tuviéramos que elegir un solo pará-
claramente ambas modalidades. La razón metro relevante en los estudios de conduc-
fundamental de esta separación es téc- ción, sería la amplitud. Es el dato que nos
nica: no es posible registrar simultánea- aporta mayor información; en las lesiones
mente las respuestas motoras y sensitivas neurógenas se correlaciona directamente
al estimular un mismo tronco nervioso y con el grado de debilidad y de síntomas
los exámenes deben realizarse de forma sensitivos, y cuando su valor es cero, no
secuencial. permite establecer ninguna otra determi-
Los estudios de conducción motora nación. Bajas amplitudes de respuesta ha-
evalúan los axones motores de una for- cen poco fiables los valores de conducción
ma indirecta. El resultado de su acti- y pueden llevar a un diagnóstico erróneo
vación es un gran potencial compuesto de patología desmielinizante. No existe
por la suma de impulsos en decenas o una cifra “normal” universal de amplitud,
cientos de fibras musculares individuales. así que cada resultado será normal o anor-
De esta forma se obtiene un efecto de mal en comparación con unos valores es-
magnificación (la analogía con los fue- tándar para ese nervio y con los obtenidos
gos artificiales puede ser apropiada aquí). en el lado sano, si la lesión no es bilateral.
Debe tenerse en cuenta que el potencial Muchos médicos opinan que las veloci-
de acción muscular compuesto depende dades de conducción son los parámetros
no sólo de los axones, sino también de más importantes y de hecho utilizan este
la placa neuromuscular y de las propias término para solicitar los estudios. Sin
fibras musculares. Cualquier trastorno embargo, las alteraciones en la velocidad
en uno de estos tres niveles provocará de conducción dan cuenta de un reducido
alteraciones en los potenciales de acción grupo de patologías —relacionadas habi-
musculares compuestos. tualmente con procesos desmielinizantes
Los estudios de conducción sensitiva focales o universales— dentro del cuadro
registran directamente los potenciales so- global de trastornos neuromusculares. En
bre la piel. Sin embargo, sus amplitudes general, consideramos patológicas las ve-
son tan pequeñas que deben ser medidas locidades de conducción menores de 50
en microvoltios, frente a los milivoltios metros por segundo en nervios de miem-
de los potenciales compuestos motores. bros superiores y menores de 40 metros
Por tanto, son más susceptibles de alte- por segundo en los de miembros inferio-
ración por factores técnicos y fisiológicos res. La edad del paciente y la temperatura
(edad, edema, temperatura cutánea). Por afectan de forma importante a las veloci-
otra parte, los axones sensitivos son más dades de conducción y siempre deben te-
sensibles a los procesos fisiopatológicos nerse en cuenta.
que los motores, lo que permite realizar La latencia expresa el tiempo en milise-
diagnósticos más tempranos de lesión gundos entre el estímulo y el inicio del po-
nerviosa y también localizar las lesiones tencial resultante. La latencia motora dis-
proximal o distalmente a los ganglios de tal depende no sólo de la conducción por
las raíces posteriores. las fibras nerviosas sino también del tiem-

31
Enrique Montes Latorre

po de transmisión neuromuscular y del de registra el músculo en reposo. Su reconoci-


propagación de los potenciales de acción miento e identificación es fundamental en
musculares hasta llegar bajo el electrodo el diagnóstico electromiográfico. Existe
de registro. En general, la causa más fre- una actividad espontánea normal, que se
cuente de incremento de la latencia moto- genera en la proximidad de la unión neu-
ra distal es desmielinización o compresión romuscular, distinguiéndose dos tipos: el
de la porción distal del nervio. También es ruido de placa y las espigas de placa mo-
muy útil aquí, la comparación con el lado tora. A menudo los pacientes perciben un
sano, manteniendo la misma distancia en- dolor sordo, que desaparece al cambiar la
tre estímulo y electrodo de registro. posición de la aguja.
Toda actividad en reposo que no se co-
ELECTROMIOGRAFÍA rresponda con la de inserción o la de placa
La electromiografía consiste en el regis- neuromuscular debe ser considerada pato-
tro directo de la actividad muscular tanto lógica. Su presencia implica afección del
durante el reposo como durante la con- sistema nervioso periférico, facilita la lo-
tracción voluntaria. Se realiza mediante calización de la lesión, según los miotomas
la inserción de un electrodo a través de la afectos, y permite conocer la gravedad y la
piel en diferentes músculos. La selección evolución temporal de la patología. Ade-
de los mismos dependerá de la sospecha más, algunos tipos de actividad espontánea
clínica o de los hallazgos de los estudios son bastante específicos de enfermedades
de conducción. concretas. Por ejemplo, las descargas mio-
Se valora: tónicas sólo se detectan en algunas enfer-
• La actividad de inserción medades del músculo.
• La actividad espontánea Una descripción pormenorizada de la
• Los potenciales de unidad motora actividad anormal en reposo excede los
durante la contracción voluntaria, y objetivos de este artículo, por lo que se
• Los trazados durante la contracción mencionarán sólo los principales tipos. Las
máxima. ondas positivas, los potenciales de fibri-
La actividad de inserción es la despo- lación, las descargas repetitivas comple-
larización de las fibras musculares que jas y las descargas miotónicas tienen un
se produce al mover la aguja dentro del origen postsináptico: su morfología co-
músculo. Normalmente tiene una dura- rresponde a potenciales de acción de fibras
ción inferior a 300 milisegundos una vez musculares aisladas. Las ondas positivas y
que la aguja se ha detenido en un punto. los potenciales de fibrilación se asocian
Se observa un aumento de la actividad normalmente con enfermedades neuró-
de inserción en diferentes procesos tanto genas (asta anterior, raíz o nervio), pero
neuropáticos como miopáticos. Si el teji- también se observan en algunas miopatías.
do muscular ha sido sustituido por tejido Debe tenerse en cuenta que no se observan
adiposo o conjuntivo y en la isquemia, la inmediatamente tras la lesión y el tiempo
actividad de inserción estará disminuida. de aparición depende de la longitud de los
La actividad espontánea es la que apa- axones dañados. Esta es una de las razones
rece una vez se ha detenido la aguja y se por la que estudios muy precoces no apor-

32
Conceptos básicos del estudio neurofisiológico

tan toda la información, como se discutirá más unidades. Con la contracción máxima
más adelante. Las descargas repetitivas se activan tantas unidades que la línea de
complejas se producen por la despolariza- base queda oculta por ellas. Es el llama-
ción secuencial y recurrente de varias fibras do patrón interferencial completo. En los
musculares individuales. Tienen un inicio procesos miopáticos se reclutan muchas
y un final brusco y su sonido recuerda el de unidades para un nivel anormalmente
un motor en marcha. Suelen relacionarse bajo de esfuerzo (reclutamiento precoz).
con procesos evolucionados. Normalmente producen un patrón inter-
Dentro de la actividad anormal de ori- ferencial, pero de baja amplitud. En los
gen presináptico se sitúan las fascicula- procesos neurógenos, la pérdida de uni-
ciones, las mioquimias, los calambres y dades motoras se traduce en un recluta-
la actividad muscular continua. Su mor- miento reducido: existen pocas unidades
fología se corresponde con los potenciales motoras, a veces de gran amplitud por los
de unidad motora (mayor tamaño que las procesos de reinervación-recaptación de
fibras aisladas). Las fasciculaciones son fibras musculares, y descargan con una
descargas involuntarias e intermitentes de frecuencia elevada, produciendo un ruido
unidades motoras. Pueden aparecer en su- “cascado” característico. La línea de base es
jetos normales y también se relacionan con visible por la pérdida de unidades (patrón
muchos otros procesos neurógenos (des- simplificado de esfuerzo).
de radiculopatías a mononeuropatías por
compresión) y no sólo con la temida escle- El perfil temporal. ¿Cuándo realizar
rosis lateral amiotrófica. Las mioquimias el estudio neurofisiológico?
son descargas de potenciales agrupados El conocimiento de la evolución tempo-
que disparan de forma semirrítmica. Apa- ral de los hallazgos neurofisiológicos en las
recen en la hipocalcemia, en la tirotoxico- lesiones traumáticas de nervios facilita la
sis y, de forma característica, en lesiones toma de decisiones.
post-irradiación. En la neuroapraxia existe un bloqueo de
El análisis de los potenciales de unidad la conducción al estimular proximalmente
motora permite determinar si el trastorno a la lesión; la estimulación distal producirá
es primordialmente miopático o neuropá- potenciales normales si no hay degenera-
tico. En los procesos neurógenos, la dura- ción axonal; no suele observarse actividad
ción media de los potenciales de unidad espontánea.
motora está prolongada, su morfología es La neurotmesis y la axonotmesis
polifásica y la amplitud es pequeña en las completa determinan un bloqueo de la
fases iniciales tras la lesión (reinervación conducción a través de la lesión desde un
temprana) y grande en las fases tardías. En primer momento. Sin embargo, la dege-
los procesos miopáticos, la morfología es neración walleriana no ocurre hasta los
también polifásica, pero la duración media días 3 a 5 para las fibras motoras y los
y la amplitud están disminuidas. días 6 a10 para las sensitivas. Por ello los
A medida que aumenta la contracción estudios de conducción distal se manten-
muscular voluntaria, las unidades motoras drán normales a pesar de la debilidad y lo
descargan con más rapidez y se reclutan síntomas sensitivos. A lo largo de los si-

33
Enrique Montes Latorre

guientes 7-10 días se pierden las respues- ducción (normales o patológicos), presen-
tas eléctricas distalmente a la lesión. Si cia o ausencia de actividad espontánea,
la axonotmesis es incompleta los axones morfología de los potenciales de unidad
preservados mantendrán una respuesta motora (normales o reinervativos) y el re-
motora en los músculos distales. La am- clutamiento (normal o reducido) permite
plitud y el área de esta respuesta y la ac- establecer el curso temporal de las lesiones
tividad voluntaria en la electromiografía con pérdida axonal.
dependerán del número de axones ínte-
gros. Si se pierden los axones más gruesos El informe neurofisiológico
y rápidos se observará cierta caída de las Cuando un clínico se enfrenta con un
velocidades de conducción e incremento informe neurofisiológico, puede resultar
de las latencias, pero sin alcanzar el rango una tarea ingrata intentar extraer infor-
desmielinizante. mación de la avalancha de cifras y datos
Durante las primeras tres semanas tras y termina ignorando las tablas para con-
la lesión no se observa actividad anormal centrarse en las conclusiones del estudio.
en reposo; sí se aprecia un reclutamiento No obstante, es recomendable identificar
disminuido de los potenciales de unidad si se han realizado sólo conducciones o
motora, proporcional al grado de debili- también electromiografía de aguja. Debe
dad. Posteriormente aparecerán los signos valorarse qué nervios y qué músculos se
de denervación (fibrilaciones y ondas po- han estudiado en relación con la sospe-
sitivas) que pueden mantenerse durante cha clínica. La regla de velocidades de
años. El tiempo de aparición de esta acti- conducción expuesta más arriba permite
vidad espontánea dependerá de la longitud una aproximación general a los estudios
del nervio entre el músculo examinado y el de nervio. Otra estimación general es que
lugar de la lesión. son patológicas amplitudes menores del
A medida que el nervio se va regeneran- 50% de las obtenidas en el miembro con-
do se van registrando potenciales reiner- tralateral. La presencia de actividad espon-
vativos nacientes: de baja amplitud y muy tánea en la electromiografía es habitual-
polifásicos. Con el tiempo estos potencia- mente un indicador de patología. Algunas
les aumentan su amplitud y su duración, de las anormalidades observadas pueden
manteniendo la polifasia. Los trazados de ser hallazgos fortuitos, sin relación con el
esfuerzo son simplificados con unidades de motivo de consulta. Otras veces las altera-
gran tamaño: estos axones han “adoptado” ciones obedecen a motivos técnicos, baja
fibras musculares “huérfanas” de los axones temperatura cutánea, estimulación insufi-
desaparecidos. De la misma forma, los po- ciente, edema, obesidad, etc. La longitud
tenciales de acción muscular compuestos de los exámenes depende de la sospecha y
presentan respuestas desincronizadas con de los resultados que se vayan obteniendo.
dispersión temporal, explicable por las di- Se puede descartar una polineuropatía de
ferencias de velocidad de conducción entre fibra gruesa con una reducida selección de
las fibras más rápidas y las más lentas. nervios motores y sensitivos, pero localizar
De esta forma, la combinación de la una lesión del plexo braquial conlleva exá-
clínica, hallazgos de los estudios de con- menes más amplios.

34
Conceptos básicos del estudio neurofisiológico

Conclusión 3. Kimura J. Electrodiagnosis in diseases


Los estudios neurofisiológicos permiten of nerve and muscle. 3rd edition. New
confirmar la afectación del sistema nervio- York. Oxford University Press. 2001
so periférico tanto clínica como subclíni- 4. Misulis KE. Essentials of Clinical
ca, separar lesiones focales de trastornos Neurophysiology. Boston. Butterwor-
más amplios como la polineuropatía o las th Heinemann. 1993
miopatías, establecer el perfil temporal, la 5. Nardin RA, Rutkove SB, Raynor
severidad de las lesiones y anticipar el pro- EM. Diagnostic accuracy of electro-
nóstico. Una adecuada comunicación en- diagnostic testing in the evaluation of
tre el clínico y el neurofisiólogo permitirá weakness. Muscle Nerve. 2002 Aug;
obtener la máxima información de cada 26(2): 201-5
estudio y evitará exámenes no justificados 6. Pease WS, Lew HL, Johnson EW.
o de escaso rendimiento diagnóstico, dado Practical Electromyography. 3rd
que las pruebas son molestas en el mejor edition. Philadelphia. Lippincott
de los casos y muy desagradables y dolo- Williams&Wilkins 2007
rosas en el peor. 7. Preston DC, Shapiro BE. Electrom-
yography and Neuromuscular disor-
ders. 2nd edition. Philadelphia. Else-
vier. 2005.
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35
Juana Díaz del Río

Capítulo 4

¿Cómo operar un nervio?


Suturas, injertos, transferencias,
cámaras, factores de crecimiento
Juana Díaz del río
Unidad de cirugía de mano, Hospital de Virgen del Valme (Sevilla)

Correspondencia: jdiazdelrio@gmail.com

Palabras claves: suture, fibrin, graft, nerve transfer procedures, growth


factors y chamber

INTRODUCCION impredecibles. En el éxito/fracaso influyen


Hasta el siglo XIX se desconocía la bio- muchos factores tales como el mecanismo
logía de la reparación nerviosa y se pensaba lesional, la edad del paciente, el nivel y la
que la funcionalidad no se recuperaba en extensión del daño, las estrategias de tra-
un nervio lesionado a pesar de restablecer tamiento y la técnica quirúrgica empleada.
la continuidad. Se ignoraba que los tiem-
pos de reinervación eran largos y por ello Lesión Nerviosa. Clasificación
las anastomosis se consideraban fallidas. Ya sabemos los cambios que se producen
La capacidad de regeneración del Siste- en todos los componentes de la célula ner-
ma nervioso periférico es reconocida desde viosa tras la sección del axón (axotomía).
hace más de una década pero los resulta- Conocemos la degeneración walleriana y la
dos tras una lesión nerviosa siguen siendo reacción cromatolítica en la parte proximal.

36
¿Cómo operar un nervio? Suturas, injertos, transferencias, cámaras, factores de crecimiento

En el proceso de regeneración también es Objetivo de la reparación nerviosa


sabido el papel de las células de Schwann El objetivo de la reparación nerviosa es
para la formación de las bandas de Bunger la reinervación de los órganos dianas diri-
(guía de los futuros axones), la presencia de giendo la regeneración de los axones sen-
los factores neurotróficos etc. Por tanto, los sitivo, motor y autonómico hacia el cabo
efectos de la axotomia son reversibles, pero distal con mínima pérdida de fibras en la
eso no quiere decir que la regeneración sea zona de sutura5 (Brushart 1991).
perfecta y es muy probable que algunos Para alcanzar dicho objetivo debemos
axones no alcancen jamás su órgano diana. intentar realizar una sutura nerviosa pri-
Conociendo los tiempos de degenera- maria sin tensión, con adecuada alinea-
ción-regeneración así como la anatomía ción de los fascículos nerviosos y sin de-
regional del nervio podremos determinar morar su realización. Millesi6,7 demostró
cuándo y cómo realizar la reparación. que el resultado de la reparación de un
Se ha hecho un intento de clasificar a nervio con injerto era superior a la repa-
las lesiones nerviosas en base a la exten- ración primaria bajo tensión.
sión anatómica de las mismas intentando Muchos factores pueden influir en
correlacionar el grado con la clínica y el retrasar la reparación cómo es el propio
pronóstico. La clasificación universalmen- mecanismo lesional: un aplastamiento o
te aceptada fue realizada originariamente estiramiento conlleva una lesión más am-
por Seddon1 en 1943, modificada algunos plia, tanto longitudinal como transversal,
años después por Suderland2 en 1961, y que una sección nerviosa.
posteriormente ampliada por Winegrad-
Mackinnon3 y Richarson y cols.4, para in- Principios del tratamiento quirúrgico
cluir una sexta categoría que representa un Millesi y Terzis8 en 1984 describen
patrón mixto de lesión (Fig. 1). cuatros principios generales para el trata-

Suderland/ Seddon Lesión Potencial


Mackinnon Recuperación
I Neuroapraxia Bloqueo iónico Completa
Desmielinización
segmentaria
II Axonotmesis Axon lesionado Completa
Endoneuro intacto
III Endoneuro lesionado Lenta Incompleta
IV Solo epineuro intacto Neuroma continuidad
V Neurotmesis Pérdida continuidad Ninguna
VI Combinación de anteriores Impredecible
Fig. 1.

37
Juana Díaz del Río

miento quirúrgico de las lesiones nerviosas OPCIONES TRATAMIENTO


periféricas, QUIRÚRGICO
• Preparación de los cabos nerviosos bajo El tratamiento de las lesiones del siste-
magnificación (lupas o microscopio), ma nervioso periférico es complicado por
realizando la exéresis del tejido cicatri- la variedad en la severidad de las mismas, la
zal, con neurótomo o bisturí oftálmico, repercusión funcional y la falta de consenso
hasta la identificación de los fascículos o en la elección de la técnica de reparación.
grupos fascículares.
• Aproximación de los extremos para va- Reparación primaria
lorar la tensión entre ellos y que estará Si queremos conseguir el objetivo, he-
relacionada con el ”gap” existente. mos de proveer una estructura para el cre-
Millessi9 en 1984 y Mackinnon10 en cimiento axonal. A lo largo de los años se
1989 resaltan que existe diferencia entre han desarrollado varias opciones y técnicas
déficit y gap nervioso. El déficit nervioso quirúrgicas, cada una con sus indicaciones
consiste en la pérdida de tejido secundaria y limitaciones. Entre ellas disponemos de
a la lesión del nervio, mientras que en el técnicas de reparación termino-terminal,
gap se sumaría la merma de longitud se- termino-lateral, injertos nerviosos, trans-
cundaria a la retracción. ferencias nerviosas, utilización de cámaras
• Coaptación de los dos extremos valo- y factores que influyen en el crecimiento
rando la adecuada orientación, tomando del tejido nervioso.
como referencia externa la vasculariza- La reparación primaria se refiere a la
ción epineural, y la existencia de óptimo coaptación termino terminal de los extre-
contacto entre los fascículos o grupos mos nerviosos ya sea con el uso de material
fascículares. Esta coaptación puede ser de sutura y/o uso fibrina. Esta técnica es
directa o indirecta, si realizamos la in- más adecuada en secciones con tejido bien
terposición de injerto nervioso. vascularizado y sin contaminación de la
• El último paso sería mantener la coap- herida. El factor predictivo más importan-
tación mediante la realización de la re- te es una reparación termino-terminal sin
paración nerviosa con sutura y/o uso de tensión con gaps, menores de 2,5 cm y rea-
fibrina. lizada precozmente (Mackinnon 1989)14.
Giddinns y cols11 muestran que una su- La correcta alineación de los dos extremos
tura de monofilamento nylon 9/0 resiste nerviosos que van a ser reparados es crítica si
las fuerzas de distracción mientras que el queremos tener esperanzas en un adecuado
10/0 puede fallar bajo dicha tensión por crecimiento axonal. Los métodos que dispo-
el contrario la de 8/0 tendría tendencia a nemos para realizar esta alineación se basan
darle tensión a esta reparación. El factor en inspección directa de los extremos (vasos
pronóstico más importante del resulta- epineurales), técnicas inmuno-histoquímicas
do funcional es la reparación sin tensión y estimulación eléctrica.
(Clark y cols.12 en 1992, Driscoll y cols.13
en 2002). El uso del 10/0 y 8/0 debería Sutura Primaria
valorarse según estos criterios y en concor- La reparación primaria se puede rea-
dancia con el diámetro del nervio. lizar con suturas de hilo, pegamento de

38
¿Cómo operar un nervio? Suturas, injertos, transferencias, cámaras, factores de crecimiento

fibrina o cámaras. Dentro de los tipos de sensitivos ya que para los motores es pre-
suturas primarias se distinguen la térmi- ciso dañar los axones, con el consiguiente
no-terminal (epineural y fascicular) y la riesgo de la pérdida de una función. Pero
término–lateral. creemos que aún son necesarios estudios
De todas ellas, es la epineural la más experimentales y experiencia clínica para
clásica y la más usada. Se realiza según incluir esta técnica dentro del arsenal te-
los principios referidos previamente de rapéutico de lesiones nerviosas.
magnificación, preparación de los cabos,
aproximación, coaptación (evitar la in- Pegamento Tisular
curvación de los fascículos, la rotación y Hasta los años 40 (Egloff y cols)17 no
la tensión de los extremos) y, por último, aparecen las primeras referencias en la lite-
la reparación “en si” ya sea con fibrina o ratura del uso de sustancias adhesivas para
con hilo. Éste es no reabsorvible de 8-9 la reparación del sistema nervioso perifé-
“0”.El número de suturas varia con el diá- rico, pero su introducción comercializada
metro del nervio desde 2-3 puntos en un como pegamento de fibrina (Tissucol) no
nervio digital hasta 8–10 para los nervios es hasta 1970 (Isaacs y cols)18.
más proximales. El pegamento actúa mediante la activa-
La sutura fascicular sigue los mismos ción de las últimas fases de la cascada de la
principios que la sutura epineural pero es coagulación, se forma una sustancia pare-
más exacta pues coapta grupos fasciculares cida al coágulo sanguíneo que se compor-
que se identifican según la topografía del ta como un pegamento cilíndrico mante-
nervio lesionado. Se realiza siempre bajo niendo los dos extremos nerviosos juntos.
microscopio. Los inconvenientes están re- Las ventajas radican en la reducción del
lacionados con la mayor disección de los tiempo quirúrgico y en la disminución de
extremos nerviosos que dañaría la circu- la fibrosis e inflamación; la lesión del ner-
lación intraneural y favorecerían la forma- vio es mínima.
ción de fibrosis. Las mayores críticas a este método de
La sutura termino-lateral sería una op- reparación radican en la seguridad para
ción en aquellas lesiones nerviosas en las mantener los extremos nerviosos unidos
que el extremo proximal del nervio lesio- pero existen estudios que demuestran que
nado está muy dañado o existe un gap muy la resistencia final es tan grande como con
amplio. Fue descrita en lesiones del ner- el uso de sutura (Nishimura y cols, 2008)19.
vio facial15 o del plexo braquial. Viterbo y
cols16 recuperaron esta técnica en el inicio Reparación Secundaria
de los años 90 al demostrar en modelos ex- Si al realizar la preparación de ambos ex-
perimentales en ratas, que existía re-iner- tremos nerviosos tenemos dificultad para
vación en el muñón distal. En la técnica, se realizar una sutura sin tensión o un gap
realiza una incisión lateral en el epineuro muy grande, disponemos de dos opciones
del nervio donante, evitando incluso lesio- • Puentear el déficit con un injerto ner-
nar la fibra nerviosa y sobre él se sutura el vioso o una cámara.
muñón distal del nervio lesionado. Estaría • Abandonar el “gap” y hacer una transfe-
indicada en los “gaps” pequeños de nervios rencia nerviosa o “neurotización”.

39
Juana Díaz del Río

Injerto Nervioso tiva. Los nervios donantes más usados son


Los tipos de injertos disponibles son el sural, el antebraquial cutáneo medial,
autoinjertos, aloinjertos y xenoinjertos, los el antebraquial cutáneo lateral y la rama
dos últimos están sujetos a un protocolo de sensitiva del nervio radial. La elección
histocompatibilidad. dependerá del diámetro, la longitud y la
Los autoinjertos (Fig. 2) cumplen los morbilidad del sitio donante
requisitos de un conductor nervioso, no Ladak y cols22 en 2011, determinaron
provocan una respuesta inmunológica que el autoinjerto es el mejor método para
(existe inmunógenos que son antígenos el tratamiento del déficit en el sistema ner-
o bien respuestas inmunológicas) y pro- vioso periférico. Los autoinjertos permiten
veen factores neurotróficos y células de la regeneración directa al tener una estruc-
Schwann para la regeneración axonal. Los tura que respeta la topografía intraneural.
factores más importantes para promover el Las limitaciones se deberían a la morbilidad
crecimiento axonal, a través del injerto, son del sitio donante (pérdida sensitiva, neuro-
el diámetro (Kline, 1990)20 y la vasculari- ma, fibrosis...) y a la limitación en cuanto a
zación de los tejidos circundantes (Matsu- la cantidad de tejido nervioso disponible.
yama y cols, 2000)21. Los nervios de mayor Los aloinjertos (Fig. 3) nos resolverían
diámetro corren el riesgo de necrosis cen- esas situaciones en las que tenemos un gran
tral y formación de tejido cicatricial. La déficit puesto que nos evitaría los inconve-
realización de injertos de pequeño calibre, nientes del autoinjerto: morbilidad del sitio
en lechos con buena vascularización, tiene donante y necesidad de una segunda inter-
mejor pronóstico. vención para la extracción del mismo. Sin
Los injertos más usados son nervios sen- embargo, y a pesar de que el tejido nervioso
sitivos que dejan escasa morbilidad por lo tiene menor potencial inmunogénico que
que la pérdida sensitiva es poco significa- la piel, el músculo o el hueso, requiere un
tratamiento de inmunosupresión para evi-
tar el rechazo (Mackinnon y cols23, 2001).

Cámaras
Este concepto fue introducido en los
años 1980, principalmente como una he-
rramienta para la investigación del proceso

Fig. 2. Fig. 3.

40
¿Cómo operar un nervio? Suturas, injertos, transferencias, cámaras, factores de crecimiento

de regeneración. Inicialmente eran tubos distal, transfiriendo algunos axones de un


de silicona (Lunborg y cols)24 interpuestos nervio proximal sano, el cual tiene varias
en defectos de 1 cm sobre el ciático de una aportaciones para una misma función, a un
rata, se demostraba que los axones se po- nervio distal denervado y próximo a su re-
dían regenerar a través de dicho tubo. La ceptor (Tuttle, 1913)26. El conocimiento en
utilización de las cámaras permite el con- la topografía nerviosa así como el perfeccio-
trol y la óptima aposición de los extremos namiento en las técnicas microquirúrgicas
nerviosos, minimizando la pérdida axonal y ha permitido progresar en las técnicas de
la mala alineación en el crecimiento axonal las transferencias nerviosas. Es necesario un
que favorecería la formación del neuroma. exhaustivo conocimiento de la topografía
Inicialmente las cámaras procedían de intraneural así como la ayuda con la elec-
tejidos naturales (venas, músculo, tejido tro-estimulación para poder realizar esta
conectivo...) cuya ventaja era la mínima técnica. Tradicionalmente, estaba limitada
morbilidad del sitio donante así como a las lesiones por avulsión del plexo braquial
el bajo coste. Posteriormente se han de- (Narakas, 1988)27 pero actualmente forma
sarrollado otras opciones compuestas de parte rutinaria de las opciones tratamiento
materiales sintéticos (silicona) de buena para las lesiones del sistema nervioso peri-
tolerancia pero no biodegradables por lo férico (Chuang, 2007)28 (Fig. 5).
que había que retirarlas ya que creaban te-
jido reactivo que podían tener un efecto
compresivo (Fig. 4). Actualmente están
realizados en materiales biodegradables
(polímeros de ácido glicólico, ácido láctico
o caprolactona…), que no solo actúan de
conductores sino que pueden promover la
regeneración nerviosa al introducir en su
luz factores de crecimiento, componentes
estructurales de la matrix y células gliales.
Los resultados muestran un aumento en el
número de axones así como en el espesor Fig. 4.
de la vaina de mielina (Rich y cols)25.
Son usadas fundamentalmente en la re-
paración de pequeños gap (<3cm) de ner-
vios sensitivos, pero con la mejoría tanto
en las propiedades físicas (permeabilidad,
propiedades del material...) como en el
enriquecimiento de su luz, se están am-
pliando sus indicaciones.

Transferencias Nerviosas
Mediante las transferencias nerviosas
convertiríamos una lesión proximal en Fig. 5.

41
Juana Díaz del Río

Las ventajas son que evitaríamos el au- el grosor de las vainas de mielina y las células
toinjerto y que la reinervación sería muy de Schwann respecto a su no uso (Rich y
precoz al estar cercano el receptor, por el cols, 1989; Mohanna y cols, 2005)25,30.
contrario corremos el riesgo de la pérdida
parcial de la función del nervio donante. PRINCIPIOS DEL TRATAMIENTO
DE LA LESIÓN DEL NERVIO
Factores Estimulan Crecimiento PERIFÉRICO (figs. 6 y 7)
Las células madres mesenquimales es- Es importante tener una sistemática en
tán en la médula ósea y se diferencian en el diagnóstico y el tratamiento de la lesión
líneas celulares de origen mesodérmico nerviosa.
para formar músculo, hueso, cartílago, 1. Adecuada anamnesis y exploración clíni-
grasa y tendón (Pittenger y cols, 1999)29. ca del paciente.
En un entorno, con las condiciones y los 2. Personal e instrumentación necesaria para
estímulos apropiados, su plasticidad les realizar la cirugía: Instrumental, lupas/mi-
hace diferenciarse en líneas no mesenqui- croscopio y material de reparación (Fig. 8).
males como células mielínicas del sistema 3. Seguir los cuatros principios primordiales:
nerviosos periférico. Las ventajas que nos Preparación de los extremos, aproxima-
ofrecen son su fácil acceso, su capacidad ción sin tensión, coaptación y reparación.
de proliferación en el huésped, la baja in- 4. Intentar la reparación primaria
munogenicidad y la rápida proliferación. 5. Si no fuese técnicamente posible, reali-
Los factores de crecimiento (FC) se usan zar la reparación con las otras opciones
para promover la regeneración nerviosa disponibles:
mejor y más rápidamente. Una de las prin- • Injerto nervioso.
cipales limitaciones para la recuperación • Cámaras.
funcional del nervio lesionado es la tasa de • Transferencias nerviosas.
regeneración axonal de aproximadamente 1 6. Se retrasará la reconstrucción siempre
mm al día. La utilización de los FC en ratas que aparezcan factores no controlables
demuestra que los nervios regenerados au- tales como los tejidos desvitalizados, los
mentan el número y el diámetro de las fibras, defectos nerviosos grandes etc.

AUTOINJERTO
REPARACIÓN PRIMARIA

0mm 0,5mm 1cm 1,5cm 2cm 2,5cm 3cm 3,5cm 4cm 4,5cm 4,5cm 5cm >5cm

CÁMARAS

ALOINJERTO

Ducic et al “Innovative treatment of peripheral nerve injuries.Combined


reconstructive concepts” Annals Plastic Surgery Vol. 68,nº2, feb 2012
Fig. 6.

42
¿Cómo operar un nervio? Suturas, injertos, transferencias, cámaras, factores de crecimiento

Lesión nervio periférico

Contusión/tracción - Defecto parcial


Sección completa limpia incisa Sucia paciente mal estado

Reparación inmediata Reparación diferida

Longuitud defecto

No pérdida tejido Pérdida tejido


Sutura sin tensión Sutura con tensión

Cabo proximal reparable Cabo proximal no reparable Gap >3 Gap <3

Ter ter Tem-lat Neurotización Autoinjerto Autoinjerto Tubulización

Autoinjerto
+ aloinjerto Natural Sintético

Fig. 7.

3. Winogrand JM, Mackinnon SE. Pe-


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¿Cómo operar un nervio? Suturas, injertos, transferencias, cámaras, factores de crecimiento

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45
Juan Bosco Méndez Ferrer

Capítulo 5

Rehabilitación de las
neuropatías periféricas
Juan Bosco Méndez Ferrer
Unidad de Rehabilitación. Hospital Virgen del Rocío (Sevilla)

Correspondencia: boscomendez@yahoo.es

Palabras claves: peripheral nerve, peripheral neuropaty, rehabilitation

E
l mayor potencial de recuperación
de los pacientes con neuropatías Peripheral Nerve Injury Classification
periféricas, haya sido o no interve-
nido quirúrgicamente, va a depender de la Tissue Damage Recovery
naturaleza de la lesión. Epineurium None
En base a la localización de la lesión dentro Perineurium
de la estructura del nervio periférico, Seddon Endoneurium Incomplete
realizó una clasificación de las Neuropatías: Axoon
• Bloqueo nervioso transitorio por isque- Full
Myelin
mia: se trata habitualmente de aparición
de parestesias, y en menor medida de- Sunderland Grade 1 2 3 4 5
bilidad, por compresión temporal de la Seddon Grade Neurapraxia Axonotmesis Neurotmesis

estructura nerviosa (aproximadamente

46
Rehabilitación de las neuropatías periféricas

durante 20-30 minutos). Es un cuadro eventualmente compromiso muscular.


reversible de forma espontánea en la El tratamiento rehabilitador va a depen-
mayoría de los casos. der de la fase evolutiva donde se encuentre
• Neuroapraxia: bloqueo de conducción el proceso.
sin que aparezca daño estructural del • En una primera fase, hasta que se inicie
axón. La lesión suele evolucionar hacia la reinervación de la zona a tratar, deben
la mejoría, con resolución del cuadro en prevenirse las complicaciones, tales como
las primeras 2-3 semanas. adherencias cutáneas, edema, rigideces
• Axonotmesis: existe bloqueo de la con- articulares, atrofias musculares, etc. Para
ducción por la rotura del axón, existiendo ello se debe insistir al paciente y los cui-
continuidad del tubo endoneural. Suele dadores en las medidas posturales que
requerir periodos prolongados de trata- intenten evitar la aparición de rigideces
miento rehabilitador, con aceptable pro- o retracciones articulares. Las moviliza-
nóstico de recuperación parcial o total. ciones pasivas y activo-asistidas deben
• Neurotmesis: se produce una sección ser diarias y precoces para mantener la
transversal del nervio. Presenta un mal movilidad de los segmentos afectados y
pronóstico funcional. evitar la presión sobre puntos declives. En
Por tanto, en el tratamiento rehabilita- caso de existir dolor o inflamación en la
dor de las neuropatías periféricas, el esta- región, pueden ser útiles las infiltraciones
blecimiento de los objetivos terapéuticos, corticoideas, los ultrasonidos pulsantes o
se debe basar en los síntomas y signos ob- electroterapia de baja frecuencia (TENS).
jetivos que presenten los pacientes: También puede asociarse el uso de calor
• Síntomas motores: se caracterizan por local por el aumento en la velocidad de
una exploración objetiva relativamente conducción nerviosa que provoca. En
fácil y son debilidad, torpeza, amiotrofia. caso necesario puede iniciarse un progra-
• Síntomas vegetativos: se producen por ma de estimulación muscular eléctrica
afectación de las fibras del sistema ner- para mantenimiento de la musculatura,
vioso simpático y son sudoración, enro- colocando los electrodos de forma longi-
jecimiento… tudinal al vientre muscular, y utilizando
• Síntomas sensitivos: se trata de síntomas tiempos de estimulación cortos con repo-
más subjetivos, con una difícil explora- sos largos y frecuencias bajas para evitar la
ción. Suelen tener predominio nocturno. fatiga muscular. Otras medidas a utilizar
Son parestesias o dolor de características son las Microondas, Onda corta pulsadas,
neuropáticas. láser (sobre todo en trastornos sensitivos),
Cuando existe afectación de un ner- magnetoterapia, corrientes interferencia-
vio motor puro, esperaremos encontrar les o diadinámicas.
pérdida de fuerza y amiotrofia distal a la • En las fases subaguda y crónica, donde
lesión, pudiendo existir manifestaciones aparecen signos de reinervación sensiti-
dolorosas mal localizadas. Por el contario, vo-motora, deben realizarse programas
la lesión de un nervio sensitivo o sensitivo- de fortalecimiento muscular analítico,
motor va a generar dolor y parestesias en y de recuperación sensitiva y funcional.
una zona determinada, pudiendo coexistir El inicio de ejercicios de fortalecimien-

47
Juan Bosco Méndez Ferrer

to de la musculatura debilitada debe ser En el postoperatorio se debe realizar


lo más temprano posible, comenzando un trabajo de flexibilización de la cicatriz,
con ejercicios pasivos, posteriormente mantenimiento de arcos articulares, medi-
activo-asistidos y realizando una re- das analgésicas y antiedema, potenciación
sistencia progresiva al movimiento. La muscular progresiva y por último reeduca-
reeducación propioceptiva enfocada a la ción sensitiva. En los casos de las transpo-
estabilización de las articulaciones sobre siciones musculares el inicio precoz de las
todo en miembros inferiores, y a una contracciones isométricas va a mejorar la
bipedestación autónoma temprana, va a capacidad muscular y evitar las adheren-
permitir la realización precoz de progra- cias entre planos.
mas de reeducación de la deambulación, La valoración de los resultados del tra-
con o sin asistencia de férulas activas tamiento rehabilitador se realiza mediante
o ayudas para la marcha. Los déficits varios instrumentos de medida.
persistentes de función deben tratarse
mediante ortesis que asistan las funcio- Medical Research Council Grading Sys-
nes deficitarias, y realizando programas tem for Nerve Recovering:
de Terapia Ocupacional que mejoren el • Recuperación Motora:
uso de extremidad parética, entrenen las • 0: ausencia de contracción.
actividades de la vida diaria y las acti- • 1: contracción perceptible de la mus-
vidades profesionales. En el caso de las culatura proximal sin movimiento.
afecciones sensitivas, sobre todo a nivel • 2: contracción perceptible de la muscu-
de miembro superior, se pueden utilizar latura proximal y distal sin movimiento.
técnicas más específicas de desensibili- • 3: moviliza proximal y distal contra
zación, y/o reeducación de sensibilidades gravedad.
elementales o complejas. • 4: moviliza proximal y distal contra
Los programas de rehabilitación tras la resistencia parcial del movimiento.
cirugía de Neuropatías van a depender del • 5: recuperación motora completa.
tipo de cirugía que se trate (cirugía pri- • Recuperación sensitiva:
maria o de secuelas, liberaciones o suturas • 0: ausencia de recuperación sensitiva.
nerviosas, transposiciones musculares…). • 1: recuperación de la sensibilidad pro-
En caso de que exista posibilidad de rea- funda.
lizar un trabajo preoperatorio, debe aumen- • 1+: recuperación de la sensibilidad al-
tarse la elasticidad y movilidad de la piel, gésica.
mantener o recuperar los arcos articulares • 2: recuperación de la sensibilidad al-
(mediante técnicas manuales, instrumenta- gésica y parcial de la táctil superficial.
les, electroestimulación o utilizando orte- • 2+: similar con hiperalgesia o alodinia.
sis activas que disminuyan las retracciones • 3: recuperación de la sensibilidad al-
articulares, de especial importancia en ma- gésica y táctil superficial.
nos), mejorar el trabajo muscular, del grupo • 3+: similar con recuperación parcial
a transferir y resto de miembros y favorecer de la capacidad discriminativa de la
la Terapia Ocupacional para planificar la sensibilidad entre dos puntos.
adaptación a la fase postoperatoria. • 4: recuperación sensitiva completa.

48
Rehabilitación de las neuropatías periféricas

Functional Independence Measure- Los objetivos genéricos del tratamiento


ment (FIM): herramienta mundialmente serán:
utilizada para la medida de la discapacidad • Conseguir movilidad activo-pasiva de
en el paciente neurológico, con demostra- flexión y abducción activa de hombro,
da fiabilidad y validez para monitorizar superior a 90º.
los avances en el estado funcional de los • Conseguir movilidad activa de codo a
pacientes sometidos a tratamientos de 90º y muñeca a orto-posición.
rehabilitación. Consta de dos subescalas • Conseguir pinza término-terminal o en
(motora con 13 ítems y cognitiva con 5 su defecto término-lateral del primer y
ítems), tomando principalmente funciones segundo dedo.
motoras y de autocuidado involucradas en • Capacidad para tocarse el hombro
las Actividades de la Vida Diaria (AVD). opuesto y llevarse la mano a la boca, fa-
Los 18 ítems se subdividen en 6 áreas: voreciendo la sinergia flexora de las arti-
cuidados personales, control de esfínteres, culaciones del miembro superior.
transferencias, locomoción, comunicación • Prevenir el daño articular de las estruc-
y conciencia del mundo exterior. Cada turas del miembro superior afecto.
ítem es valorado con una puntuación de 0 • Tratamiento del miembro superior con-
(completamente dependiente) a 7 (com- tralateral (sobre todo de las lesiones por
pletamente independiente), pudiendo sobreuso).
oscilar la puntuación entre 18 puntos (13 • Disminuir el dolor.
puntos de la subescala motora), a 126 pun- Dentro de las lesiones neurológicas trau-
tos (91 puntos de la subescala motora). máticas en el miembro superior, la de mayor
complejidad terapéutica y la más discapa-
Neuropatías periféricas del citante es la lesión traumática del Plexo
miembro superior Braquial, englobando a las raíces espinales
El miembro superior es una cadena ci- desde C5 hasta T1. Por tanto, vamos a pre-
nética de gran complejidad y cuyos movi- sentar un plan de tratamiento global de las
mientos analíticos (sobre todo en su extre- lesiones traumáticas del Plexo Braquial, que
mo distal) requieren de un entrenamiento serán extrapolables a otras lesiones neuroló-
exhaustivo en caso de existir una lesión. gicas de miembro superior.
La función del miembro superior no sólo
es la de alcanzar objetos o manipularlos, Lesiones de buen pronóstico
sino también su uso como adyuvante en la funcional:
comunicación. En el caso de las lesiones con buen pro-
Los objetivos del tratamiento rehabilita- nóstico funcional, se realizará un programa
dor van a ser diferentes según el pronóstico de tratamiento basado en la recuperación
funcional de la lesión neurológica (recupe- de la movilidad:
ración espontánea vs cirugía de reparación • Cinesiterapia analítica pasiva del hom-
nerviosa vs cirugía paliativa). Por lo tanto, bro desde que finalice el período infla-
es esencial en estos casos realizar un progra- matorio de partes blandas (aproximada-
ma consensuado con el cirujano ortopédico mente 3 semanas), en todo el rango de
y dentro del equipo de rehabilitación. movimiento posible, evitando la apari-

49
Juan Bosco Méndez Ferrer

ción de artro-fibrosis y realizando esti- guirá la cronología habitual (primero la


ramientos musculares de agonistas-an- dolorosa y la térmica y finalmente, el re-
tagonistas para evitar retracciones. conocimiento de objetos).
• Cinesiterapia activa, iniciando hacia las • En la fase crónica, a partir de los tres me-
3-6 semanas ejercicios activos-asistidos ses, debe continuarse el mismo patrón de
y posteriormente trabajo contra-resis- tratamiento, realizándose un replantea-
tencia progresivo. El paciente debe ser miento de objetivos. Si no existe mejoría o
instruido en la sala de tratamiento en la aparece una estabilización con un miem-
realización de los ejercicios de tonifica- bro superior no funcional antes de los
ción, continuándolos posteriormente en seis meses, se podrá intentar un cambio
su domicilio. de dominancia del miembro superior o la
• Ortesis: en caso de uso inicial de ortesis posibilidad de intervención quirúrgica.
se debe instruir al paciente para trabajar
de forma isométrica el resto de músculos Cirugía de reparación nerviosa
no englobados por la ortesis. En el caso de los injertos nerviosos, se
• Electroestimulación muscular: de efi- deben limitar los balances de la articula-
cacia controvertida, no existen estudios ción del hombro, evitando movilizaciones
que muestren una evidencia clínica para que realicen una tracción de la sutura, se-
su uso. En caso de axonotmesis sin ac- gún la técnica, hasta de un mes. Se pueden
tividad espontánea distal a la lesión, se utilizar ortesis o vendajes tipo cabestrillo,
pueden utilizar impulsos triangulares instruyendo al paciente cuidadosamente
con fases de reposo prolongadas para de las maniobras y posiciones incorrectas.
evitar la fatiga muscular. Una vez pasado este tiempo el programa
• Electroterapia analgésica si hay dolor de rehabilitación será similar al patrón ge-
asociado (TENS). neral de tratamiento.
• Uso de EMG inicialmente diagnósti-
co, y posteriormente como control del Transferencias tendinosas
pronóstico funcional. Se puede realizar La evaluación y el tratamiento de las
“biofeedback” electromiográfico para transferencias tendinosas seguirá un pa-
favorecer la contracción de agonistas y trón general en el diseño del programa
relajación de antagonistas. del tratamiento rehabilitador, con algunas
• En la fase subaguda, se debe iniciar de peculiaridades:
forma intensiva el tratamiento de Tera- En la fase pre-quirúrgica, se debe entre-
pia Ocupacional, cuyos objetivos espe- nar e intentar garantizar un balance mus-
cíficos en la primera fase serán confec- cular de los grupos musculares a transferir
cionar ortesis para mantener la correcta de 4-5 (Medical Research Council) debi-
posición articular y asistir en el uso de do a que se prevé una pérdida de 0,5-2
ortesis activas. Se asociará el tratamiento puntos del balance muscular tras la cirugía.
sensitivo vigilando las zonas de anestesia El resto es similar al patrón descrito ante-
e hipoestesia para evitar las lesiones en riormente.
estas regiones (trabajos de protección), En el postoperatorio precoz, se usará
y reeducación de la sensibilidad que se- una ortesis pasiva para proteger las sutu-

50
Rehabilitación de las neuropatías periféricas

ras de los músculos transferidos durante 4 Otras neuropatías de miembro


semanas, iniciándose el trabajo activo de superior
las articulaciones libres. Es controvertido En caso de afectación selectiva de la
el uso de la electroestimulación en esta Cintura Escapular (Síndrome del desfila-
fase, siempre utilizando corrientes de baja dero torácico, lesiones de Nervio Espinal,
intensidad y frecuencia y poniendo los Torácico Largo, Axilar), tendrán especial
electrodos lejos de los puntos de sutura. importancia los ejercicios precoces ventila-
En el postoperatorio tardío, una vez ter- torios que permitan, por una parte favorecer
minado el primer mes de inmovilización, la relajación muscular, y por otra ampliar
se debe iniciar el tratamiento de la cica- el espacio entre primera costilla y clavícu-
triz, evitando las adherencias y el drena- la. Además, se intentará el fortalecimiento
je linfático para prevenir los edemas del progresivo de músculos erectores cervico-
miembro afecto. Asimismo se utilizará la torácicos (serrato mayor, pectoral menor,
electroestimulación en caso de no haber trapecio superior, elevador de escápula),
comenzado en el postoperatorio inmedia- combinado con auto-estiramientos mus-
to, entrenando nuevos patrones de movi- culares. En aquellos casos en los que exista
miento. El dolor es un síntoma frecuente una anomalía anatómica (como una costilla
que dificulta el inicio de las movilizacio- cervical) el tratamiento conservador se ex-
nes, requiriendo generalmente uso de me- tenderá menos de seis meses. En los casos
dicación analgésica con opioides menores. de debilidad de la musculatura suspensora
A medida que las suturas tendinosas se de la cintura escapular el paciente será ins-
van volviendo más resistentes (sobre el truido en los ejercicios que deberá conti-
día 45) se comenzarán ejercicios contra- nuar de forma más prolongada.
resistencia progresivos, potenciando la si- Las neuropatías traumáticas del Su-
nergia flexora del miembro superior para praescapular van a generar unos cuadros de
conseguir una elevación de la mano, y dolor intenso de características neuropáti-
compensando los déficits persistentes con cas en la región lateral del hombro, siendo
terapia ocupacional. En caso de lesiones necesario el diagnóstico diferencial con las
estabilizadas con buenos balances articu- tendinopatías traumáticas del hombro. En
lares, y musculatura parcialmente compe- caso de dolor severo, resistente a electro-
tente se puede espaciar el tratamiento en terapia, que dificulte la realización de la
sala permitiendo al paciente continuar los cinesiterapia, se puede realizar un bloqueo
ejercicios en su domicilio. (guiado por ecografía o electroestimula-
A partir del tercer mes, aproximada- ción) del nervio con anestésicos locales y
mente, se debe lograr el fortalecimiento corticoides, o bien uso de radiofrecuencia
máximo del grupo transferido, iniciando pulsada a nivel de la fosa supraescapular.
un trabajo de coordinación motora fina e Las lesiones suelen tener un buen pronós-
integrando el miembro superior en el es- tico y resolverse en pocos meses con trata-
quema corporal. Si existe posibilidad, se miento rehabilitador.
intentará un reentrenamiento de las acti- De forma general, las neuropatías trau-
vidades de la vida diaria (AVDs) y activi- máticas del miembro superior por debajo
dades laborales. de codo (Nervios Radial, Cubital y Me-

51
Juan Bosco Méndez Ferrer

diano) van a tener peor pronóstico que las • Movilidad activa de cadera a 30º de
proximales, requiriendo un análisis precoz flexo-extensión.
de la mejoría en los primeros seis meses de • Rodilla con extensión completa y
tratamiento rehabilitador, y realizándose flexión de 90º (bajar escalones).
un planteamiento quirúrgico precoz. • Tobillo a orto-posición (apoyo
Dentro de las lesiones del nervio Media- plantígrado) y flexión plantar de 15º
no, el Síndrome del Túnel Carpiano va a ser (impulso de antepié).
la neuropatía más frecuente del ser humano. • Balance muscular de los músculos esta-
El tratamiento rehabilitador suele ser mo- bilizadores articulares (sobre todo cuá-
deradamente eficaz a corto plazo, con reci- driceps y glúteos) mayor a 3 (MRC).
divas frecuentes a medio plazo. Por tanto Potenciar la sinergia extensora del
debe realizarse un planteamiento quirúr- miembro inferior para lograr una bipe-
gico en caso de lesiones muy invalidantes. destación autónoma precoz.
Sí es esencial el tratamiento rehabilitador • Prevenir el daño articular de las estruc-
precoz tras la cirugía, con trabajos de des- turas del miembro inferior afecto.
ensibilización de la cicatriz y eliminación de • Tratamiento del miembro inferior con-
las adherencias en los flexores. tralateral (sobre todo de las lesiones por
sobreuso).
Neuropatías periféricas del • Disminuir el dolor.
miembro inferior En el tratamiento rehabilitador de las
El miembro inferior tiene una función neuropatías traumáticas de miembro infe-
principal de soporte y desplazamiento, rior, se realizará un programa de rehabili-
requiriendo por tanto una estabilización tación cuyo objetivo inicial va a ser lograr
precoz de todas las articulaciones implica- una bipedestación autónoma y posterior-
das (sobre todo cadera y rodilla), así como mente marcha con ayudas:
una reeducación de la propiocepción que • Cinesiterapia analítica pasiva de las ar-
permita el entrenamiento de un patrón de ticulaciones afectas. A partir de las pri-
marcha funcional. meras 3-4 semanas, si la inflamación lo
Las neuropatías en el miembro infe- permite y existen datos de reinervación
rior suelen ser menos frecuentes que en el se debe iniciar los ejercicios activos asis-
miembro superior y pueden pasar desaper- tidos y posteriormente resistidos, inten-
cibidas inicialmente, siendo importante la tando potenciar la sinergia extensora del
exploración neuromotora del miembro in- miembro inferior y supliendo los déficits
ferior en aquellos pacientes con fracturas de musculatura glútea con lumbar. Se
de pelvis (nervios ciático común, pudendo hará hincapié en la musculatura cuadri-
y obturador), fracturas de cabeza de pe- cipital para conseguir una buena estabi-
roné (nervio ciático-poplíteo externo), lidad de rodilla y logrando bipedestación
fracturas tibiales o luxaciones de rodilla asistida por andador y/o bastones.
(nervio ciático-poplíteo interno). • Ortesis: en caso de no lograrse un ba-
Los objetivos genéricos del tratamiento serán: lance muscular superior a 3 puntos, se
• Conseguir balances articulares suficien- estabilizará la articulación mediante uso
tes para lograr una marcha funcional: de una ortesis para iniciarse la bipedes-

52
Rehabilitación de las neuropatías periféricas

tación lo más precoz posible. El paciente cuadro de síndrome miccional, con dolor a
debe ser instruido en el uso de la ortesis. la sedestación prolongada, eyaculación do-
• Electroestimulación muscular: no existe lorosa y vulvodinia, y aunque a corto plazo
evidencia que apoye su uso, en caso de uti- los bloqueos nerviosos pueden mejorar la
lizarse se hará mediante impulsos trian- clínica, suelen requerir cirugía. Las lesiones
gulares con fases de reposo prolongadas. del Obturador generan parestesias en el
• Electroterapia analgésica tipo TENS si borde interno de los muslos, así como de-
existe dolor asociado. bilidad en los adductores y suele tener buen
La afectación más discapacitante en los pronóstico con tratamiento conservador.
miembros inferiores es la lesión traumática
del Nervio Ciático Común, que ocupa las
raíces espinales de L4 a S3. Se trata de un
síndrome caracterizado por una dificultad BIBLIOGRAFÍA
para la flexión de la rodilla en el contexto de 1. Sánchez Blanco I, Ferrero Méndez
debilidad en todo el miembro inferior. En A, Aguilar Naranjo JJ, Climent Bar-
casos de parálisis incompleta, generalmen- berá JM, Conejero Casares JA, Flórez
te existe una predominancia del Ciático García MT, Peña Arrebola A, Zam-
Poplíteo externo que ocupa 2/3 partes del budio Periago R. Manual SERMEF
tronco principal. El tratamiento rehabilita- de Rehabilitación y Medicina Física.
dor suele ser largo e insatisfactorio, pudién- Editorial Panamericana. 2006.
dose producir cambios en la situación del 2. Miranda Mayordomo M. Rehabilitación
paciente hasta dos años después de la lesión. Médica. Madrid. Aula Médica. 2004.
En caso de dolor neuropático en el 3. Martín del Rosario FM. Neuropatía
miembro inferior, es importante el diag- periféricas por atrapamiento de miem-
nóstico de la zona lesionada, pudiéndose bro superior e inferior. Generalidades
realizar bloqueos guiados por TAC o eco- y tratamiento rehabilitador. I Jornadas
grafía. En aquellos pacientes con dolor de Actualización en Medicina Física y
refractario por contractura del músculo Rehabilitación.
Piramidal se pueden realizar infiltraciones 4. Robinson MD, Shannon S. Rehabi-
de puntos gatillo (guiadas por Eco o TAC) litation of Peripheral nerve injuries.
de anestésico local o toxina botulínica. Phys Med Rehabil Clin North Am.
En las lesiones del CPE que cursen con 2002;13:109-35
pie caído, se debe educar al paciente en 5. Tung TH, Mackinnon SE. Braquial
aquellas medidas posturales que eviten la Plexus injuries. Clin Plasic Surg.
rigidez en equino, así como la prescripción 2003;30:269-287.
precoz de ortesis que asistan a la marcha (a 6. Gerritsen AA, De Krom MC, Struijs
ser posible, tipo Dictus). MA, Scholten RJ, de Vet HC, Bouter
En aquellos casos de traumatismos pélvi- LM. Conservative treatment options
cos, es posible que exista lesión de los ner- for carpal túnel syndrome: asistemá-
vios inguinales, siendo las más frecuentes tico review of randomised controlled
las neuropatías de Pudendo y Obturador. trials. J Neurol. 2002; 249(3):272-80.
La neuropatía del Pudendo generará un

53
Jaime Boceta Osuna

Capítulo 6

Dolor neuropático tras una


lesión de nervio periférico
Jaime Boceta Osuna
Unidad de H. Domiciliaria y C. Paliativos. HUV. Macarena (Sevilla)

Correspondencia: jaimeboceta@telefonica.net

Palabras claves: peripheric nerve injury, neurophatic pain.

C
uando un traumatismo lesiona un entender cómo podemos influir en ellos,
nervio periférico es probable que mediante fármacos y otras intervenciones,
encontremos dos tipos de dolor. y tener en cuenta que se trata de un tipo
Uno es el dolor de tipo somático, res- de dolor difícil, en el que es aconsejable
puesta normal ante un daño de tejidos, consultar a expertos.
cuya función adaptativa permite evitar un Un breve recuerdo neurofisiológico del
mayor daño, y cuyo tratamiento no es di- dolor somático nos ayudará a entender las
fícil. Otro es el dolor neuropático, de más diferencias con el dolor neuropático.
difícil control.
La lesión de un nervio periférico origina Neurofisiología del dolor
una serie de cambios en dicho nervio, y a La transmisión nociceptiva implica 3
medio y largo plazo en el asta posterior neuronas conectadas en serie. Para enten-
medular y en la corteza cerebral, que tien- der el dolor neuropático por daño de un
den a amplificar y perpetuar el dolor. Es nervio periférico, y las posibilidades de
importante conocer dichos cambios para analgesia, conviene recordar cómo funcio-

54
Dolor neuropático tras una lesión de nervio periférico

nan. (Mencionaremos entre paréntesis y en llamados “receptores de capsaicina”.


cursiva los fármacos que pueden actuar sobre Condicionan el 2º tiempo del dolor,
el dolor en cada uno de esos niveles). quemante, tras un pinchazo. (La capsai-
cina actúa aquí)
1. Primera neurona nociceptiva • Fibras Ad: débilmente mielinizadas, de
Los receptores de dolor o nociceptores conducción más rápida, condicionan el
son terminaciones periféricas de neuro- 1º tiempo del dolor, inmediato, tras un
nas cuyo cuerpo está en los ganglios ra- pinchazo.
quídeos (o en los ganglios de los pares • Las fibras aα y aβ transmiten sensibili-
craneales), y cuyos axones centrípetos pe- dad no dolorosa.
netran en la médula, donde harán sinap-
sis con la segunda neurona. Su activación 1.2. Proyección a médula
puede ser directa, pero suele ocurrir a tra- Del ganglio sale una prolongación al asta
vés de mediadores, que ejercen actividad posterior medular, allí hace sinapsis con la
excitadora o inhibidora sobre las termi- 2ª neurona, directamente o por interneu-
naciones nerviosas, activando los canales ronas medulares (que son importantes en
iónicos de la membrana plasmática, mo- la modulación del dolor). Normalmente
dificando su permeabilidad y generando la activación del nociceptor provoca libe-
potenciales de acción que se transmiten. ración de glutamato y sustancia p en esa
Las sustancias implicadas son: sinapsis, lo cual activa receptores postsi-
• Mediadores de la inflamación, que sen- nápticos. La cantidad de glutamato y sus-
sibilizan los receptores produciendo hi- tancia p que se libera en la sinapsis está
peralgesia y dolor secundario. (Los AINE regulada por las encefalinas (opioides na-
actúan aquí). turales; también pueden actuar aquí los fár-
• Sustancia P, neurotransmisor que liberan macos opioides). El glutamato y la sustancia
los axones, periféricamente en la piel, y p causan pequeños cambios en la membra-
centralmente en la médula. (Los opioides na postsináptica, acercando su potencial
y la capsaicina bloquean su liberación). de membrana al umbral de generación de
• Histamina, serotonina, bradicinina: su un potencial de acción, que transmitirá el
relación con el dolor es menos clara. dolor por vía ascendente. También en ese
nivel postsináptico actúan las encefalinas
Las fibras que conducen el dolor por di- (y los opioides), alejando ese potencial de
chos nervios periféricos son de dos tipos. membrana de dicho umbral.
Las interneuronas medulares, liberado-
1.1. Fibras aferentes ras de encefalinas que inhiben la trans-
• Fibras C: son las más numerosas. Son misión del dolor, están reguladas por las
axones amielínicos, que terminan libre- vías descendentes. Habitualmente están
mente en los tejidos. Su conducción es inhibidas por neuronas que contienen
lenta. Responden al estímulo mecánico GABA, el neurotransmisor inhibidor
intenso, térmico, o químico irritante. más abundante en el Sistema Nervioso
Tienen receptores TRP-1 (Transient Central, que habitualmente inhibe a las
Receptor Potencial) de tipo vaniloide, interneuronas inhibidoras.

55
Jaime Boceta Osuna

2. Segunda neurona nociceptiva 3. Vía ascendente


o neurona de proyección: su cuerpo está Transmite la sensibilidad dolorosa hacia
en la sustancia gris del asta posterior, que la 3ª neurona.
se estructura en las láminas de Redex ( I
a VI del asta posterior, VII a IX del asta 3.1. Sistema espinotalámico
anterior, y X rodeando el canal). Hay 2 anterolateral (sel).
subtipos de 2ªNeurona: Haz espinotalámico lateral: el axón
• Propiamente nociceptiva, que recibe in- mielinizado de la 2ª neurona de la lámina
formación de las fibras C y Ad. Están I conduce la sensibilidad dolorosa, cruzan-
en la lámina I (zona marginal). do a la sustancia blanca contralateral en
• Multireceptoriales, que reciben infor- esa metámera, y sube después por el SEL
mación de las fibras C, Ad, y también hasta la 3ªneurona en el tálamo.
de otras. Están en la lámina V. Se es- Haz espinotalámico anterior o medial:
timulan cuando hay un daño periférico los axones de las neuronas de las láminas
mantenido (una lesión de nervio pe- V y VII contralaterales, proyectan hacia las
riférico), produciendo una sensibiliza- fibras reticulares de la médula, bulbo, protu-
ción central. berancia y cerebro medio, a la sustancia gris
Por tanto, en la médula, la información periacueductal, al hipotálamo y al tálamo.
nociceptiva está parcialmente segregada Provocan reflejos respiratorios, circulato-
de la “inocua”: rios, endocrinos y emocionales al dolor.
• la información nociceptiva viene desde
las fibras C y Ad a las láminas I, II, y V. 3.2. Sistema de la columna dorsal:
• la táctil no dolorosa viene desde las fi- Los axones de las láminas IV, V, VI y
bras AB a las láminas III, IV y V. IX ipsilaterales transmiten la sensibilidad
• la propioceptiva viene a las láminas VI, inocua y el dolor visceral hacia los nú-
VII y IX. cleos dorsales del bulbo, núcleo gracilis y
cuneatus. Allí cruzan y suben por el lem-
nisco medial para proyectar al tálamo.

56
Dolor neuropático tras una lesión de nervio periférico

4. Tercera neurona nociceptiva: Fisiopatología del dolor


tálamo-corteza neuropático tras lesión
Localizada en Núcleos Ventroposterola- periférica
terales del Tálamo (NVT) y Parte Medial Tras una lesión nerviosa se produce una
del Tálamo Posterior (POm). Proyectan reacción patológica del sistema sensorial,
hacia la corteza somatosensorial. que responde amplificando la señal nociva
inicial, en periferia, y centralmente.
5. Vías descendentes moduladoras Ocurren cambios que afectan a todos los
Las neuronas del córtex frontal, hipo- niveles del procesamiento nociceptivo.
tálamo y sistema límbico, proyectan hacia
el mesencéfalo (sustancia gris periacue- 1. Cambios en las terminales
ductal), que proyecta hacia el bulbo (con- nociceptivas
junto de redes neuronales llamado Médula
Rostral Ventromedial –MRV-). 1.1. Inflamación local y sensibilización
Desde la MRV salen fibras descenden- periférica
tes excitadoras o inhibidoras hacia el asta Tras la sección del axón hay degenera-
posterior (lámina I). Fisiológicamente pre- ción walleriana de las fibras distales, faci-
domina la influencia inhibidora, pero en el litada por los macrófagos de las células de
dolor neuropático crónico ocurre al revés. Schwann, que liberan neurotrofinas que
En la sustancia gris periacueductal hay estimulan la regeneración neuronal y sen-
neuronas que contienen GABA, un neuro- sibilizan ante el estímulo sensorial. Con-
transmisor inhibidor, que mantiene habitual- tribuyen a la formación del neuroma, que
mente inhibidas las interneuronas medulares tiene fibras sensitivas y también simpáti-
liberadoras de encefalinas. Al producirse un cas, lo que explica la causalgia (aumenta el
estímulo doloroso, se liberan endorfinas en dolor si aumenta la actividad simpática).
la sustancia gris periacueductal, las cuáles Cuando el neuroma restablece la comu-
inhiben a las neuronas inhibitorias (libe- nicación sensitiva, hay hiperalgesia prima-
radoras de GABA). Esta inhibición de la ria a estímulos térmicos (fibras C y Ad),
inhibición implica una mayor liberación de táctiles (AB), y químicos (C). El neuroma
encefalinas por las interneuronas medulares, es foco de descargas ectópicas y explica
lo cual causa una disminución de la cantidad signo de Tinnel.
de glutamato y sustancia P liberadas en la También se liberan sustancias vasoac-
sinapsis medular (neurotransmisores de las tivas, que causan hiperemia y llegada de
vías ascendentes de impulsos dolorosos), con células inflamatorias, que liberan media-
lo que disminuye la transmisión de impulsos dores, prostaglandinas y citocinas, lo cual
dolorosos hacia el tálamo y la corteza. sensibiliza al nociceptor y a sus vecinos
Estas vías descendentes tienen como (Sensibilización Periférica). Por eso due-
mediadores serotonina y norepinefrina, le más cualquier estímulo álgico cercano a
que pueden ser regulados por los antidepre- la lesión.
sivos tricíclicos, los inhibidores selectivos y no La excitabilidad se debe a cambios en
selectivos de la recaptación de serotonina, que canales de sodio voltaje-dependientes
pueden desinhibir esta vía descendente. Nav, que se acumulan y cambian su pa-

57
Jaime Boceta Osuna

trón de expresión y propiedades. Son es- tral, con cambios en la respuesta eléctrica de
tructuras proteicas de la membrana plas- la Membrana Plasmática (MP), en las pro-
mática, con un poro o canal selectivo de piedades de sus receptores y canales, y en la
Na sensible a los cambios de potencial. Se expresión de neurotransmisores. Hay muerte
clasifican en: neuronal y reorganización de asta posterior.
• sensibles a TTX (Nav 1.1 a 1.7): res-
ponden a despolarizaciones pequeñas, y 2.1 Aumento de excitabilidad
se inactivan rápidamente. Se localizan en (activación, modulación)
neuronas sensoriales, nociceptivas o no. El aumento de llegada de estímulos por
• resistentes a TTX (Nav 1.8 y 1.9) son fibras Ad o C tiene distintas consecuencias:
específicos de neuronas nociceptivas, de fi- • Las Fibras Ad generan en la 2ªN poten-
bras C, con umbral de activación más ciales postsinápticos excitadores rápidos.
alto e inactivación lenta. Liberan glutamato, que interacciona con
Tras la lesión nerviosa aumentan los Nav receptores que producen entrada de sodio
específicos de dolor en los neuromas, fibras y despolarización de la MP postsináptica.
proximales, y neuronas de ganglios raquí- • Las fibras C producen despolarizaciones
deos. Las neuronas aferentes disminuyen prolongadas, mediadas por sustancia p
su umbral de excitabilidad, produciéndose en los receptores NK-1, y glutamato en
descargas más frecuentes e incluso espon- los receptores NMDA. (Aquí actuarían
táneas. (Aquí actuan los anticonvulsivos blo- los bloqueadores de sustancia p como la cap-
queadores de canales de Na). saicina, y los antagonistas NMDA como
También intervienen otros canales de ketamina, dextrometorfano, metadona…)
Ca y de K voltaje dependientes, y cambia, Si la estimulación es continua e in-
por la inflamación neurógena, el umbral de tensa, se suman potenciales y se generan
excitación de canales de los receptores TRP- despolarizaciones prolongadas e intensas,
1, receptores de Capsaicina, que son elemen- ayudadas por la entrada de Ca por canales
tos de traducción de estímulos sensoriales. sensibles activados, fase de la sensibiliza-
La actividad ectópica AB provoca pares- ción llamada “activación”.
tesias y disestesias, y la actividad ectópica C Los receptores y canales se vuelven más
causa dolor quemante persistente e hiperal- excitables, con aumento de respuesta a
gesia primaria. La afectación de las fibras cada sucesivo estímulo: sensibilización
adyacente extiende la hiperalgesia secunda- uso dependiente o “wind up” (como dar
ria a territorios vecinos, y el aumento espi- cuerda: cada estímulo sucesivo dolerá
nal de entradas excitadoras produce sensi- más). Esta fase llamada “modulación”,
bilización central y plasticidad en el SNC. justifica la hiperalgesia, la extensión a te-
rritorios vecinos o hiperalgesia secundaria,
2. Cambios en la médula espinal. y el dolor ante estímulo inocuo (alodinia).
(Sensibilización central: activación–
modulación, modificación) 2.2 Alteraciones en la transcripción
El estímulo aferente repetitivo genera un neuronal (modificación)
aumento de la capacidad de amplificación Después se altera la expresión de genes
nociceptiva llamado sensibilización cen- en las neuronas lesionadas y vecinas. Se

58
Dolor neuropático tras una lesión de nervio periférico

induce la expresión de genes implicados Aumenta la excitabilidad en núcleo gra-


en la muerte celular. Se altera la síntesis de cilis y neuronas talámicas.
las proteínas que forman neurotransmiso- En las vías descendentes moduladoras
res, canales y enzimas, tanto en la médula hay disminución de las inhibidoras y los
como más arriba. Son cambios lentos y sistemas espinales de opioides endógenos,
duraderos que aumentan la expresión de y se incrementan las facilitadoras. Hay
elementos excitadores y disminuyen la de cambios en RVM que promueven predo-
los inhibidores. minio facilitador sobre las neuronas del
asta posterior.
2.3 Activación de la microglía
La reacción inflamatoria de la microglía Posibles cambios
también actúa en ganglios y médula. neurovegetativos
En el ganglio los macrófagos fagocitan El Síndrome Doloroso Regional Com-
las células dañadas (causando un déficit plejo tipo I, anteriormente llamado Dis-
sensorial), y éstas liberan citocinas que per- trofia Simpático Refleja, típicamente cau-
petúan la inflamación y estimulan la síntesis sado por la inmovilización de un miembro,
de Interleucina 6 y TNF, que aumentan la y el tipo II, antes llamado causalgia, que
síntesis de canales Nav nociceptivos. suele estar causado por lesiones nerviosas,
En la médula, la microglía produce re- tienen en común la existencia de un dolor
versión de las corrientes de cloro del recep- cuya distribución anatómica no se corres-
tor GABA, disminuyendo su acción inhi- ponde a un nervio o raíz concretos, puede
bidora, y libera citocinas inflamatorias que haber cambios de temperatura, trofismo
mantienen la sensibilización central. de la piel, y atrofia muscular. La forma de
comprobar si existe afectación simpática
2.4 Reorganización sináptica del asta es realizando un bloqueo de la inervación
posterior simpática de la zona. Si se evidencia dicho
La degeneración de fibras C condicio- componente se tendrá en cuenta para el
na una proyección anormal de fibras AB tratamiento especializado.
por arborización desde láminas pro-
fundas hacia superficiales, que reciben Tratamiento farmacológico
ahora información de mecano-receptores del dolor neuropático
de umbral bajo y la integran como dolor Se han descrito los posibles momentos
(alodinia). y lugares en los que podemos actuar con
fármacos en este tipo de dolor, cuyo trata-
3. Cambios supraespinales miento inicialmente corresponde al trau-
Se pierde parcialmente la segregación matólogo que lo atiende. No obstante, dado
de la transmisión sensorial medular ascen- que se considera un tipo de dolor difícil, es
dente. El Sistema de la Columna Dorsal conveniente consultar con las unidades de
(sensibilidad táctil) expresa neuropéptidos dolor para ajustar el tratamiento farmaco-
excitadores (CGRP y Sust. P) y se vuelve lógico y realizar un seguimiento del mismo.
hiperexcitable, provocando alodinia táctil Recordaremos brevemente los principales
al frío e hiperestesia térmica. grupos farmacológicos empleados.

59
Jaime Boceta Osuna

• Los opioides de segundo escalón como • TENS. Son las siglas de Transcutaneous
el tramadol (véase revisión Cochranne de Electrical Nerve Stimulation, y consisten
2007), o de tercero como la morfina, me- en la aplicación de corrientes mediante
tadona, oxicodona, fentanilo, etc, ocupan electrodos que se adhieren a la piel en las
los receptores “mu” localizados en el asta metámeras afectadas por el dolor, conec-
posterior, y disminuyen la liberación pre- tados a un generador externo con pilas.
sináptica de neurotransmisores excitadores Los impulsos pueden ser de diferentes
como el glutamato y la sustancia P, con la tipos, podemos cambiar la intensidad y
consiguiente disminución de potenciales de frecuencia. No está totalmente claro el
acción y decremento del impulso doloroso. mecanismo de acción, pero parece que al
• Los antidepresivos, tricíclicos (amitrip- estimular las fibras A periféricas median-
tilina), y los inhibidores selectivos y no te estas corrientes, producimos en el asta
selectivos de la recaptación de setotoni- posterior medular una inhibición presi-
na, podrían deber su efecto analgésico a náptica de la transmisión dolorosa de las
la desinhibición de la vía descendente. fibras C, y una inhibición postsináptica
• Los anticonvulsivos (gabapentina, car- de las neuronas de proyección.
bamacepina, etc) deben su efecto anal- • Estimulación eléctrica medular: consis-
gésico a su bloqueo de los canales del te en el implante de unos electrodos en el
sodio o del calcio. espacio epidural posterior, que estimula
• Los anestésicos locales en perfusión cordones posteriores, conectados a un
intravenosa (lidocaína) o por vía oral generador implantable, que produce las
(mexiletina) son una opción a considerar corrientes eléctricas. Se intenta provocar
en dolores refractarios a otros fármacos. una parestesia que cubra la zona dolorosa.
Recientemente se ha comercializado la Existen diversos tipos de electrodos, ge-
lidocaína tópica en parches al 5%, cuyos neradores y parámetros de estimulación.
resultados en cuanto a analgesia y segu- • Estimulación de nervio periférico y
ridad son prometedores. subcutánea: similar a la anteriormente
descrita, los electrodos se colocan cerca-
Terapias no farmacológicas nos al nervio periférico dañado o en el
Son terapias, invasivas o no, que pueden espacio subcutáneo generando una pa-
ayudar en el tratamiento del dolor neu- restesia en la zona.
ropático por lesión de nervio periférico.
Dentro de estas técnicas no farmacológi- Tratamiento quirúrgico
cas podemos incluir la acupuntura. Tam- Es un último recurso que se puede valo-
bién destacan las técnicas encaminadas rar cuando el dolor no responde a ninguno
a provocar neuromodulación: bloqueo o de los tipos de terapia previamente descri-
modificación controlada y reversible del tas durante un largo tiempo de evolución.
sistema de transmisión nociceptivo para Una de las técnicas posibles es la provoca-
modificar su funcionamiento alterado. Es ción de una lesión quirúrgica o térmica de
posible ejercer la neuromodulación a tra- la zona de entrada de la raíz dorsal (Dorsal
vés de diversas técnicas de estimulación Root Entry Zone o DREZ) que afecte a
del sistema nervioso periférico o central. las láminas I y II del asta posterior.

60
Dolor neuropático tras una lesión de nervio periférico

BIBLIOGRAFÍA: 4. Hollingshead J, Dühmke RM, Cor-


1. Pozo Gavilán ME del. Fisiopatología nblath DR. Tramadol para el dolor
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Ed. ESRA – España. 2009. ISBN Sons, Ltd.). Fecha de la modificación
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Número 1. Oxford: Update Soft-
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update-software.com. (Traducida de
The Cochrane Library, 2007 Issue 1.
Chichester, UK: John Wiley & Sons,
Ltd.). Fecha de la modificación más
reciente: 03 de mayo de 2006.

61
Segunda parte

Tratamiento quirúrgico
Perspectiva histórica de la lesiones traumáticas de los nervios periféricos

Capítulo 7

Perspectiva histórica de la
lesiones traumáticas de los
nervios periféricos
María Ángeles García Frasquet
Unidad de Miembro Superior. Hospital Universitario Virgen Macarena (Sevilla)

Correspondencia: 11163magarcia@gmail.com

Palabras claves: nerve injury, demographics, upper and lower limb

E
l cirujano ortopédico se enfrenta se estimó que la incidencia de las lesiones
cotidianamente a lesiones en el neurales postraumáticas era de 13.9% por
Sistema Nervioso Periférico de cada 100.000 habitantes y año. Para un
etiología diversa: problemas compresi- periodo de 10 años (1986-1996) Noble
vos o canaliculares, tumorales, traumatis- publica que en la población de EEUU,
mos… El 90% de los daños producidos la tasa de prevalencia de lesión nerviosa
por estos motivos asientan en el miembro entre pacientes politraumatizados es del
superior. La frecuencia de las complica- 2.8%. Sin embargo, no incluyó la afecta-
ciones neurológicas causadas por heridas ción de las raíces nerviosas, plexo braquial
penetrantes, armas de fuego, fracturas, y laceraciones en los dedos o en nervios
luxaciones, factores yatrógenos o a distan- menores. El 59% presentaban edades
cia es difícil de valorar. En un estudio rea- comprendidas entre los 18 y 53 años y la
lizado en Suecia entre los años 1998-2006 mayoría (83%) eran varones. Estos datos

63
María Ángeles García Frasquet

demográficos son similares a los de otras movilización del miembro. Los resulta-
revisiones promovidas por algunas com- dos desde entonces y durante años fue-
pañías aseguradoras americanas. ron decepcionantes, lo que hizo a muchos
Por otro lado, Tuncali alerta sobre la po- considerar que la cirugía nerviosa (¡y más
sibilidad de que pequeñas laceraciones de para el cirujano ortopédico!) estuviera
menos de 2 cm en el miembro superior se fuera de lugar.
asocien a graves lesiones neurológicas que A partir de la Segunda Guerra Mundial
pueden pasar desapercibidas. Fueron ex- se incrementaron las investigaciones acer-
plorados 226 pacientes y más de la mitad ca de la anatomía y mecanismos de neuro-
(59%), presentaron una lesión de al menos regeneración, reconociéndose que resulta-
una estructura profunda. En el 18.7% se dos mediocres se relacionan con el fracaso
trataba de un nervio aislado y en el 14.9% de la regeneración axonal en el lugar de
había una lesión neurológica combinada la sutura. Hoy los avances tecnológicos en
con una arteria o tendón. el diagnóstico por imagen, el instrumental
El severo déficit funcional a que dan lu- neuro-quirúrgico y los nuevos conceptos
gar los traumatismos en los nervios perifé- en reparación nerviosa consiguen incre-
ricos y las características de la población a mentar el éxito de la recuperación funcio-
la que afectan, hacen indispensable que el nal, electromiográfica e histológica.
cirujano ortopédico sepa detectar aquellos
que se producen en su entorno y no que- Introducción al
den sin tratar. miembro superior

Recuerdo histórico Plexo Braquial


Una de las primeras reseñas de una Hasta hace pocas décadas la cirugía de
neurorrafia se atribuye a Gabriele Ferrara las lesiones del Plexo Braquial (PB) se
(1543-1627) en su obra “Nuova Selva di abordaba con tremendo pesimismo. De
Chirugia divisa en tre parti”, publicada en hecho, en la reunión de la SICOT cele-
Venecia en 1596. Su descripción se acerca brada en Paris en 1996, se concluía que
bastante al protocolo quirúrgico del siglo su reparación era casi imposible y que,
XXI. Exponía cómo debían identificarse incluso cuando se llevaba a cabo, no se
en primer lugar los extremos del nervio garantizaba un resultado funcional. En
lesionado, sumergirse en una cocción de los últimos años hemos asistido a un
vino y rosas, aplicar tracción suave para extraordinario desarrollo en las técnicas
aproximarlos y suturarlos con una agu- quirúrgicas para la reconstrucción del
ja curva con esmero sin dañarlos con el PB, dado el incremento de la frecuencia
hilo. Finalmente, recomendaba aislar la y las características de la población afec-
herida, envolviéndola en un vendaje con tada. Según Narakas (1985), el 70% de las
una mezcla de aceites e inmovilizar la ar- lesiones traumáticas del PB se producen
ticulación vecina por unos meses. Estos por accidentes de tráfico y el 70% de éstas
pasos corresponden hoy a la desinfección, se deben a accidentes de motocicleta. En
identificación apropiada de los extremos, España se estima una prevalencia de en-
correcta técnica de sutura, cuidados e in- tre 160 y 320 lesiones de PB en adultos.

64
Perspectiva histórica de la lesiones traumáticas de los nervios periféricos

En este curso se expondrá cómo la repa- dimientos quirúrgicos realizados en la


ración de lesiones parciales es muy grati- región axilar origina una lesión de NTL.
ficante. En lesiones completas la cirugía El resultado clínico es la aparición de una
puede conseguir recuperar la movilidad escápula alada sin atrofia de la musculatura
del hombro y codo y mejorar la función del hombro. La impotencia funcional que
de la mano y dedos. Es fundamental co- presentará el paciente le impide elevar o
nocer el protocolo diagnóstico para va- tirar de objetos pesados, practicar deportes
lorar extensión, localización y severidad. como el tenis o hacer tareas que impliquen
Se incluirá la exploración clínica, EMG, elevar el brazo a nivel del hombro.
RMN y mieloTAC para posteriormente Cuando se lesiona el XI Par Craneal o
establecer la indicación terapéutica. Ha- Nervio Espinal queda sin inervación la la-
brá que determinar si existe posibilidad ringe además del trapecio y esternocleido-
de recuperación espontánea o si el trata- mastoideo. Provoca también una escápula
miento debe ser quirúrgico y, en este caso, alada más evidente con la rotación externa
los plazos a considerar. del hombro, pero en éste caso el ángulo
superior se aleja más de la línea media que
Lesiones intermedias entre el el inferior por la parálisis del trapecio.
plexo y el hombro El Nervio Supraescapular (NSE) es
Comparados con los relativamente ro- un nervio mixto. En la última década ha
bustos troncos de la zona (las ramas del comenzado a identificarse como causa de
Plexo Braquial), estos nervios parecen hombro doloroso con una frecuencia cada
frágiles y están rodeados de escaso tejido vez mayor. Las fracturas de clavícula o de
conjuntivo. Su anatomía los hace suscep- omóplato, compresiones en la escotadura
tible a la lesión, aunque son casos muy supraescapular o bajo el ligamento espi-
raros. La habilidad para llevar a cabo una noglenoideo pueden causar una disfunción
exploración cuidadosa y descartar otros del NSE. Esta impedirá la rotación exter-
diagnósticos diferenciales es imperativa na y abducción del hombro al deteriorarse
para optimizar los resultados del trata- la inervación de los músculos supraespino-
miento. Al no ser nervios sensitivos y so e infraespinoso.
presentarse como dolor y pérdida de la
función motora, es clínicamente difícil Hombro: Nervio Axilar
distinguir estas patologías de una afec- El Nervio Circunflejo o Axilar (NA)
ción musculo-esquelética local. Es im- tiene en su breve recorrido anatómico una
portante tener esto en cuenta antes de estrecha relación con la articulación gleno-
indicar intervenciones como la artrosco- humeral, factor que lo hace especialmente
pia de hombro. susceptible de lesiones en caso de fracturas
El Nervio Torácico Largo (NTL) iner- o fracturas-luxaciones proximales del hú-
va segmentariamente el serrato anterior. mero. No obstante su frecuencia representa
Por su longitud (24 cm) y por su trayec- menos del 1% de todas las complicaciones
to, suele lesionarse por traumatismos ce- neurológicas. Se describe una incidencia de
rrados (compresión o tracción) o heridas daño del NA en las luxaciones de hombro
penetrantes. Hasta el 30% de los proce- del 48% y la probabilidad se duplica si se

65
María Ángeles García Frasquet

produce una fractura asociada a la luxa- • La existencia de una parálisis NR pri-


ción. Por ser un nervio monofascicular y de maria en fracturas cerradas puede re-
corto trayecto se recupera en gran número presentar un factor contribuyente para
de casos bastante satisfactoriamente. Pero la indicación de cirugía, así como deter-
además, se describe invariablemente como minados patrones de fractura (Holstein
uno de los nervios que más frecuentemente Lewis). Sin embargo hay autores que
complica los procedimientos quirúrgicos contradicen esta tendencia basándose en
que se realizan en el hombro. Es vulnerable que faltan datos derivados de estudios
en técnicas habituales como la reconstruc- prospectivos randomizados.
ción de fracturas mediante placas, los en- • Puede ocurrir que la parálisis aparezca
clavados o la artroscopia, pues está íntima- secundariamente. En algunas circuns-
mente relacionado con la cápsula articular. tancias la actuación debe ser inmediata
Se han tratado de describir “zonas seguras”, (por ejemplo, la retirada de un cerclaje),
enfatizando la protección del NA para ob- aunque en otras lesiones postreducción
tener los mejores resultados clínicos. La ex- continúa la controversia.
ploración es muy demostrativa cuando se • Y ¿qué ocurre en las fracturas abiertas o
produce disfunción del NA, manifestándo- en las lesiones por armas de fuego? La
se como una impotencia para la abducción probabilidad de que el NR se encuentre
del hombro en rotación interna tanto activa lacerado o atrapado es claramente mayor
como pasiva. (64% para Foster).
Se propondrá un algoritmo que nos
Húmero: Nervio Radial orienta acerca de las lesiones del NR más
De todas las lesiones neurales que com- frecuentemente encontradas según la lo-
plican las fracturas de los huesos largos calización y tipos fractura, sistematizando
la más frecuente es la del Nervio Radial su manejo.
(NR). Si tenemos en cuenta su prolongado
trayecto en el brazo, comprobaremos que Codo
su deslizamiento es reducido al perforar el La posición anatómica de los nervios
septo intermuscular lateral desde el com- Radial (NR), Mediano (NM), Cubital
partimento posterior al anterior. La preva- (NC) y sus ramas en el codo los predispo-
lencia de la parálisis del NR tras fracturas ne a sufrir lesiones en determinados pa-
de la diáfisis humeral, estimada en una re- trones de fractura. Suelen ser neurapraxias
visión sistemática publicada por Shao en en el 86-100% de los casos y se resuelven
2005, fue del 11.8% y las cifras globales en un intervalo de 2 a 6 meses. Los casos
de recuperación son del 88.1%. El objetivo de mayor gravedad ocurren en el contexto
de este trabajo es responder a la cuestión de fracturas abiertas. Para Amillo, el me-
crucial de si se debe tratar una lesión del jor pronóstico lo presentan las lesiones del
NR conservadora o quirúrgicamente y, en NM y el peor las del NR.
el caso de que optemos por una actitud ex- El incidente neurológico más frecuente
pectante, en qué punto debemos conside- en las luxaciones o fracturas-luxaciones del
rar la exploración nerviosa. Se describirán codo parece ser la neurapraxia del NC, que
distintos escenarios: espontáneamente se resuelve tras reduc-

66
Perspectiva histórica de la lesiones traumáticas de los nervios periféricos

ción cerrada. El NM se puede encontrar ralmente es difícil. Es fundamental de-


atrapado en el espacio humero-cubital, lo tectar cualquier déficit lo antes posible,
que en pacientes pediátricos se detectará difícil sobre todo en la edad pediátrica.
como un aumento radiológico de la inter- La aparición inmediata de la clínica está
línea medial (signo de Matev). relacionada con la contusión directa, el
Las fracturas supracondíleas de codo estiramiento en fracturas muy despla-
en los niños se acompañan de alteracio- zadas o laceraciones por esquirlas óseas.
nes neurológicas en un 10 al 19% de los Si surge tras las maniobras de reducción,
casos. Dependiendo del desplazamiento debe valorarse el atrapamiento en el trazo
posteromedial o posterolateral del frag- de fractura y si ocurre tardíamente, con-
mento distal, se asociará un compromiso siderar la inclusión del nervio en el tejido
del NR o del NM respectivamente. El NC cicatricial.
se lesiona en fracturas de columna medial Puede aparecer una parálisis del NIOP
o supracondíleas en flexión. La fractura tras los procedimientos de reinserción del
luxación de Monteggia se ha relacionado bíceps braquial, así como en las vías de ac-
con daño al Nervio Interóseo Posterior ceso anterior (Henry) y posterior (Thomp-
(NIOP) o con menor frecuencia el NM. son) al tercio proximal del radio. Por otro
Insistiremos en la necesidad de reconocer lado, el NM que discurre en la cara pro-
precozmente estos cuadros y recomenda- funda del flexor superficial de los dedos,
remos la actitud a seguir. puede ser confundido con un tendón y ser
Las secuelas de tales traumatismos pue- lesionado inadvertidamente.
den determinar neuropatías de aparición
tardía por adherencias, deformidades en Muñeca
varo o valgo, compresiones por osificacio- La lesión neurológica más frecuente en
nes heterotópicas o callos de fractura. los traumatismos de extremo distal de cú-
Además, se han documentado gran can- bito y radio es la del NM (2-7%). Ocurre
tidad de problemas neurales alrededor del en traumatismos de alta energía con graves
codo de etiología yatrógena: abordajes desplazamientos que pueden complicarse
quirúrgicos incluso en procedimientos mí- con un síndrome del túnel carpiano por
nimamente invasivos como la artroscopia. hematoma dentro del canal. La parálisis
baja del NM se presenta como pérdida de
Antebrazo la oposición y déficit sensitivo. Alguna re-
Las fracturas cerradas del antebrazo cuperación se espera tras la reparación, por
tratadas mediante reducción abierta y lo que potencialmente es menos devasta-
fijación interna se han relacionado con dora que la parálisis alta.
una incidencia de complicaciones neuro- El NC, aunque raramente (0.05%), pue-
lógicas que según diversos estudios osci- de verse dañado. En teoría está más ex-
la entre el 1 y el 10%. La mayoría son puesto a estiramiento y a contusión por
neurapraxias que se solucionan espontá- traumatismos directos por ser más móvil
neamente. Sin embargo, determinar si la y más superficial al transcurrir fuera del
lesión ha sido originada por la fractura canal carpiano.
o por la intervención quirúrgica gene- La causa más frecuente de lesión de los

67
María Ángeles García Frasquet

nervios que transcurren por la muñeca son mucho menor que en el miembro supe-
las heridas y ocupan un porcentaje alto de rior (5 a 1), representan una importante
la urgencias hospitalarias. causa de invalidez en sujetos jóvenes y
en edad activa. Suelen producirse en el
Mano contexto de traumatismos severos por
Aproximadamente uno de cada 5 pa- accidentes de tráfico, laborales o por ar-
cientes atendidos en urgencias presenta mas de fuego. Generalmente se trata de
una lesión en la mano. De ellas, el 82% traumatismos complejos con gran canti-
son heridas y pueden dar lugar a secue- dad de lesiones concomitantes: heridas,
las incapacitantes. Las más frecuentes son fracturas, luxaciones, lesiones vasculares
laceraciones de los nervios colaterales, y traumatismos a distancia (torácicos,
seguidos por NM, NC y también ramas abdominales, craneales o de otros miem-
sensitivas del NR. Se describirán cómo de- bros). Según diversos autores, el diag-
ben diseñarse cuidadosamente las incisio- nóstico de neuropatía puede retrasarse
nes durante la exploración quirúrgica para hasta en un 11% de politraumatizados,
maximizar la exposición de las estructuras ya sea por dificultades para llevar a cabo
dañadas. La reparación suele poder ha- la exploración neurológica inicial o por
cerse de modo primario. Las alteraciones atribuir los posibles déficits a problemas
sensitivas o los neuromas derivados de un centrales. En algunos pacientes que han
tratamiento incorrecto pueden causar una pasado un tiempo prolongado en coma,
gran invalidez. el daño se relaciona con ciertas posicio-
nes con áreas de hiperpresión mantenidas
Introducción al durante el encamamiento, hematomas en
miembro inferior miembros fracturados, inmovilizaciones
Las primeras referencias acerca de una mal aplicadas o como secuela de síndro-
lesión neurológica aguda pueden situarse mes compartimentales no diagnosticados.
hace 3500 años en el libro del Génesis: Existe además un número muy signi-
25
Cuando ese hombre se dio cuenta de que ficativo de artículos que reseñan lesio-
no podía vencer a Jacob, lo tocó en la coyun- nes de los nervios del miembro inferior
tura de la cadera, y ésta se le dislocó mientras como complicación de procedimientos
luchaban…31 El sol salió así que hubo pasado quirúrgicos diversos. En su etiopatoge-
Penuel, pero él cojeaba del muslo. 32 Por eso los nia se han implicado mecanismos diver-
israelitas no comen, hasta la fecha, el nervio sos tales como el estiramiento, la com-
ciático, que está sobre la articulación del mus- presión, la isquemia o el traumatismo
lo, por haber sido tocado Jacob en la articu- directo, ya sea por sección inadvertida o
lación femoral, en el nervio ciático. (Génesis a través de materiales como suturas o ce-
32:25-33). mento. No sólo la intervención propia-
Narra cómo Jacob sufrió una lesión del mente dicha causará el daño neural, sino
Nervio Ciático (NC) tras una luxación de que la posición del paciente durante la
cadera en su batalla con el Ángel. cirugía o determinadas técnicas de anes-
Aunque la frecuencia de las lesiones de tesia regional pueden ser responsables de
los nervios de la extremidad inferior es la disfunción.

68
Perspectiva histórica de la lesiones traumáticas de los nervios periféricos

Plexo lumbo-sacro y cadera. Nervio cilmente, al contrario de lo que sucede con


Ciático Común y Nervio Crural la disfunción del nervio femoral (NF).
Las publicaciones acerca de las repara- El nervio femoral discurre en el interior
ciones del plexo lumbosacro (PLS) son del músculo psoas y sale de la pelvis bajo
escasas ya que, a diferencia del plexo bra- el ligamento ilioinguinal, donde es vulne-
quial, se encuentra protegido dentro de rable ante traumatismos penetrantes. El
anillo pelviano y raramente se ve compro- retraso en el diagnóstico no es extraño, lo
metido. Cuando esto ocurre, se trata de que se atribuye a la necesidad de realizar
politraumatismos de suprema gravedad un tratamiento urgente para controlar la
que amenazan la vida e impiden el diag- hemorragia que se produce por la lesión de
nóstico. Algunos artículos describen las le- la arteria femoral adyacente. En ocasiones,
siones neurológicas encontradas en fractu- la parálisis no se hace evidente hasta que el
ras inestables de la pelvis y sólo unos pocos paciente no comienza a deambular. En al-
hacen referencia al éxito en el tratamiento gunos pacientes el dolor y el déficit motor
de las mismas. puede resultar incapacitante.
Durante los traumatismos en la región
de la cadera, especialmente en la columna Rodilla
posterior, el nervio ciático (NCi) puede Cuando el NCi alcanza la fosa poplítea
resultar comprometido en varios modos: se divide en sus dos ramas: Ciático poplí-
por la cabeza femoral dislocada o frag- teo externo (CPE) y nervio tibial (NT).
mentos acetabulares desplazados que lo El nervio de la extremidad inferior que
compriman, lo lesionen directamente con mayor frecuencia se lesiona es el CPE.
o porque quede atrapado. El 13% de las Su trayecto superficial al rodear el cuello del
luxaciones posteriores se asocian a lesión peroné, donde se encuentra relativamente
del NCi. Por otra parte, el tejido fibroso fijo, lo hace más susceptible a ser dañado.
cicatricial y las osificaciones heterotópicas Por el contrario, el NT está bien protegido
masivas alrededor de la cadera pueden ro- por tejidos blandos en la fosa poplítea.
dearlo alterando su conducción. Las causas son contusiones o estiramien-
El NCi puede resultar dañado en los tos sin fractura o luxación. La luxación de
procedimientos de reemplazo articular de rodilla se asocia en un 16 a un 50% a una
la cadera. Además de la lesión directa o lesión del CPE.
indirecta por el empleo de separadores, se Los resultados iniciales de reconstruc-
han publicado artículos que señalan que ción del CPE fueron pobres, lo que deter-
un alargamiento del miembro de más de minó que su reparación fuese cuestionada
2 cm puede comprometer la vasculariza- y se optara por transferencias tendinosas
ción longitudinal del nervio y ocasionar en su lugar. Estudios recientes son más
su isquemia. La presentación clínica con alentadores, consiguiendo abandonar el
un pie caído se explica porque las fibras empleo de férulas posturales para mante-
correspondientes al CPE se encuentran ner el pie, aunque una mejor recuperación
fijas en la escotadura ciática y el cuello del funcional es deseable.
peroné, por tanto son más susceptibles al La lesión del NT es muy infrecuente y se
estiramiento. El diagnóstico se realiza fá- produce en el curso de fracturas del extremo

69
María Ángeles García Frasquet

superior de la tibia o de heridas penetran- 5. Barrett JP, Downey MS, Hillstrom HJ.
tes. Se han publicado artículos con lesiones Retrospective analysis of neurapraxia
yatrógenas de este nervio en osteotomías de and axonotmesis injuries of select pe-
tibia mal ejecutadas. También se han des- ripheral nerves of the foot and ankle
crito en prótesis de rodilla primarias o de and their conservative and surgical
revisión. En otro caso se tomó el NTP en treatment (external neurolysis and
lugar del tendón del músculo delgado plan- neurectomy). J Foot Ankle Surg 1999;
tar. Provoca impotencia funcional para la 38(3):185-193.
flexión del pie y anestesia de toda la planta, 6. Bertelli JA, Ghizoni, F. Abduction in
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en el pie y tobillo son relativamente raras. 1998; 4:109-117.
Existen pocos estudios al respecto. Noble en 8. Blas Dobón JA, Rodrigo Pérez JL,
una revisión de pacientes politraumatizados Montaner Alonso D, Escudero Torre-
en 1998, encuentra un 10% de lesiones de lla M. Lesión del nervio axilar en las
los nervios peroneo profundo y peroneo fracturas proximales de húmero: Estu-
superficial a nivel del tobillo. Solamente se dio clínico y electromiográfico. Trauma
registró una lesión del NT a esta altura. Fund MAPFRE 2011; 22(2): 74-78.
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70
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71
Mª Pilar Pradilla Gordillo

Capítulo 8

Lesiones del plexo braquial


Mª Pilar Pradilla Gordillo
Unidad de Cirugía de mano y nervio periférico. Hospital Nisa-Aljarafe (Sevilla)

Correspondencia: pragor@telefonica.net

Palabras claves: brachial, plexus, injury, surgery

T
al como decíamos en el primer ca- La lesión traumática de un plexo es
pítulo, se considera que un nervio muy grave para la función del miembro
periférico (NP) es el conjunto de superior; afortunadamente, la incidencia
axones de las neuronas situadas en el últi- no es muy alta, unos 320 casos anuales
mo nivel (las enclavadas en la médula o en en España de los que el 70% se debe a
los ganglios) y por lo tanto, en el momento accidentes de tráfico y de ellos (al igual
que salen del agujero de conjunción ya son que en el resto del mundo) el 60%-70%
NP. Por cuestiones prácticas, se considera son accidentes de moto.
al plexo braquial como al conjunto de las El tratamiento de estas lesiones es mul-
raíces y de sus divisiones en troncos pri- tidisciplinar; desde el ingreso del paciente
marios y secundarios, para llamar NP a en urgencias se requerirán medios espe-
las ramas terminales del plexo, es decir al cíficos de diagnóstico (electrofisiología
radial, cubital etc. y estudios de imagen), tratamiento re-
Tengamos en cuenta, que el plexo son habilitador, tratamiento quirúrgico muy
NP y por lo tanto pueden ser reparados, complejo, además del más que posible
con la excepción de las raíces avulsionadas, tratamiento posterior de las secuelas,
algo que comentaremos más adelante. entre ellas el dolor neuropático (por vía

72
Lesiones del plexo braquial

farmacológica o por cirugía) y los déficits plexos (cervical, braquial, lumbosacro,


de la función del miembro superior. No coccígeo).
podemos olvidar que una lesión plexual Al nervio raquídeo se une la cadena sim-
requerirá un tratamiento medio de 3-5 pática. Lo hace por medio de los ramos
años en donde sumamos la reparación “comunicantes grises” (amielínicos) que
nerviosa primaria, la cirugía paliativa y la contienen los axones post-ganglionares
rehabilitación. de las células cuyos cuerpos están en el
El impacto social y económico es muy alto ganglión y los “comunicantes blancos”
con respecto al resto de la cirugía nerviosa. (mielínicos) que contienen los axones pre-
ganglionares de las células cuyos cuerpos
Recuerdo anatómico están en la médula. Controlan la sudora-
Hay 31 parejas de raíces (motoras, sen- ción, dilatación del iris y el centro del ace-
sitivas y/o simpáticas). lerador cardiaco (Fig. 1).
Cada raíz o nervio raquídeo se divide en El conjunto de los ramos posteriores cervi-
dos ramas de volumen desigual al dejar el cales (C1-C8), que son ocho, van a aportar
agujero de conjunción: inervación motora a algunos músculos del
• la rama posterior o dorsal es delgada y se cuello (rectos posteriores, Oblicuos mayor
destina a los músculos y los tegumentos y menor, complejo, esplenio, trapecio, tras-
de la región dorsal del cuerpo; verso espinoso y espinoso) así como a la
• la  rama anterior o  ventral es mucho piel de la nuca.
más voluminosa, se dirige hacia de- El conjunto de los ramos anteriores for-
lante y se distribuye por los músculos marán los plexos cervical y braquial.
y tegumentos de la región ventral del El plexo cervical está formado por las
cuerpo. La unión de ellas forman los cuatro primeras raíces cervicales (C1-C4).

Raíz posterior del nervio raquídeo

Raíz anterior del nervio raquídeo

Ganglión espinal

Ramo posterior del N.R.

Ramo anterior del N.R.

R. comunicante blanco

R. comunicante gris Ganglión simpático


Fig. 1.

73
Mª Pilar Pradilla Gordillo

Se dividen en dos grupos: Las raíces C5 y C6 reciben el ganglio


• Superficial (5 ramas), cervical trasver- cervical medio que es inconstante y las raí-
sa, auricular, mastoidea, supraclavicular, ces C7-8 y D1 el ganglio estrellado (suma
supra-acromial. del cervical inferior y del 1 torácico).
• Profundo (10 ramas), repartidas en cua- Las raíces se agrupan en troncos que se-
tro grupos según la dirección: rán primarios o secundarios (Fig. 3):
• Ascendentes: Recto lateral y recto • Primarios
anterior menor. • Superior: Unión de C5-C6.
• Descendentes: Musculatura de la re- • Medio: C7 aislado.
gión infra-hiodea y nervio frénico (4º • Inferior: C8-D1.
raíz con aportación de la 3ª y la 5ª). • Secundarios, son el resultado de la división
• Internas: Recto anterior mayor y m. en rama anterior y posterior de cada tron-
largo del cuello. co primario. Esta separación y entrecru-
• Externas: ECM, trapecio, angular zamiento se produce bajo la clavícula. El
y romboides. Los dos primeros se nombre se hace en referencia a la posición
inervan principalmente del par cra- que ocupan con respecto a la arteria axilar.
neal XI. • Antero-externo (TSAE o “cuerda
El plexo braquial lo constituyen los axo- lateral”): Unión de las ramas ante-
nes motores, sensitivos y simpáticos de las riores del tronco primario superior
cuatro últimas raíces cervicales y la primera y medio.
dorsal (C5-D1) (Fig. 2). En algunas varian-
tes anatómicas pueden participar la raíz C4
o la raíz D2, lo que se conoce como plexo
Plexo braquial
“Pre-fijado” o “Post-fijado” respectivamente.
No obstante hay estudios anatómicos que
demuestran que en un porcentaje muy alto
de personas hay aportación al plexo desde
los ramos ventrales de T2 aunque, de mo-
mento, no tenga relevancia clínica.

Fig. 2. Fig. 3.

74
Lesiones del plexo braquial

• Antero-interno (TSAI o “cuerda Mecanismo de la lesión


medial”): Rama anterior del tronco Tracción y estiramiento acompañado de
inferior. un giro del cuello es el mecanismo más
• Posterior (TSP o “cuerda posterior”): frecuente de lesión.
Unión de las tres ramas posteriores. La posición del brazo predice que por-
ción del plexo será el más afectado; cuando
El plexo braquial emite 18 ramas entre el hombro está en abducción sufren más
colaterales (12) y terminales (6) las raíces bajas mientras que en adducción
Colaterales son las raíces altas las que menos resisten
• Anteriores (3): Músculos subclavio, pec- el estiramiento.
toral mayor y pectoral menor; estos últi- Existe también un efecto de tijera entre
mos se unen entre sí para formar el “asa la clavícula y la primera costilla que lesiona
de los pectorales” más a los troncos secundarios (Narakas)
• Posteriores (9):
• Nervio supraescapular: inerva a los Etiología
músculos supra e infraespinoso Las lesiones del plexo son de tal mag-
• Nervio del angular: Músculo angu- nitud que, lógicamente, se acompañan de
lar del omóplato otras alteraciones, pocas de ellas son ais-
• Nervio del romboides ladas. En un 10-20% hay daño vascular y
• Nervio superior del subescapular en el 30-40% traumatismos del sistema
• Nervio inferior del subescapular músculo-esquelético.
• Nervio del músculo dorsal ancho Ante una fractura de la primera costilla, la
• Nervio del m. redondo mayor ausencia o disminución del pulso periférico,
• Nervio del serrato mayor la presencia de un hematoma supraclavicu-
• Accesorio del braquial cutáneo interno lar o el mediastino ensanchado (la radiogra-
Todos nacen por encima de la clavícula fía simple aprecia los dos signos anteriores)
salvo el inferior del subescapular, dorsal hay que sospechar que estamos en presen-
ancho y redondo menor que lo hacen en cia de una lesión arterial (subclavia y/o bra-
el hueco axilar. quial); habrá que hacer un tratamiento ur-
Terminales gente (reparación del vaso y evacuación del
• Nervio circunflejo, nace en común hematoma) pero hasta que el estado general
con el nervio radial del paciente no se normalice no podremos
• Braquial cutáneo interno actuar sobre el plexo, incluso en una herida
• Músculo-cutáneo, nace de la raíz con exposición de los extremos nerviosos.
externa del mediano e inerva a los Una neurorrafia de urgencia tan solo se debe
músculos córaco-braquial, bíceps y hacer si hay un cirujano “capaz y descansa-
braquial anterior do” sino es mejor posponerlo. No es infre-
• Nervio mediano que proviene de la cuente que la rotura de los vasos se descubra
unión de ramas de ambos troncos “a posteriori” en el acto quirúrgico, lo que
secundarios anteriores ensombrece el pronóstico de la reparación.
• Nervio cubital Los traumatismos del sistema músculo-
• Nervio radial esquelético son muy frecuentes y puede

75
Mª Pilar Pradilla Gordillo

haber fracturas de cualquier hueso de nes de Sunderland en el mismo nervio.


miembro superior o inferior así como Siempre seguimos cuatro pasos:
TCE y lesiones de la columna cervical sin • Exploración clínica.
olvidar los traumatismos abdominales. • Pruebas diagnósticas (Imagen y EMG/
ENG).
Planificación • Rehabilitación (Pre y post-Cirugía).
Es importante planificar desde el primer • Cirugía primaria/secundaria.
momento que diagnosticamos una lesión • Algoritmo.
plexual cuáles serán los pasos cronológicos En la fig. 4 exponemos la conducta a
a seguir. Nuestra actuación puede ir cam- seguir en las lesiones cerradas por tracción
biando desde los primeros días hasta que pero hacemos tres exclusiones específicas:
la lesión se cura espontáneamente o deci- • Las parálisis provocadas por heridas son
dimos intervenirla. de exploración y tratamiento urgente,
No obstante, a diferencia del resto de las siempre que lo permita el estado general
lesiones nerviosas periféricas, la evolución del enfermo.
clínica es más impredecible porque habla- • Las que se acompañan de lesión vas-
mos de lesiones de diferentes características cular con compromiso en la viabilidad
anatomopatológicas, y que combinan lesio- del brazo serán urgentes y requerirán

Ninguna mejoría Cirujía 4-5 meses

Observación
Parcial
3-4 meses
Observación
Ninguna escalonada
hasta los 6 meses
Lesión por tracción

Completa
Cirujía 3 meses
Avulsionada
Fig. 4. Algoritmo

Raíz afectada Pérdida motora Pérdida sensitiva


Rotación externa hombro
Flexión-abducción hombro
C5-C6 Pulgar e índice
Flexión codo
Extensión muñeca?
Lo anterior + extensión codo,
C5-C6-C7 Pulgar, índice y medio
muñeca, dedos, pulgar
C8-T1 Flexión dedos y pulgar intrínsecos Anular y meñique
C5-T1 Todo lo anterior Todo lo anterior
Fig. 5.

76
Lesiones del plexo braquial

EXPLORACIÓN DEL PLEXO BRAQUIAL

Nombre Derecho Izquierdo


Fecha de nacimiento Fecha del examen
Nº Hª Clínica Fecha de la lesión
Dirección Tipo de accidente
Nº de Asegurado
Fecha del Post-op
Lesiones asociadas
• Fracturas
• Parálisis diafragmática
• Síndrome de C-B-H
• Lesiones vasculares
• Otras: Lesión medular, amputaciones...

Electrofisiología

Mielo-RNM
Fig. 6.

reparación inmediata del vaso. El plexo nes del miembro superior, sobre todo de
se reparará normalmente en un segundo la mano, realizadas por la familia y/o el
tiempo aunque de forma más precoz que propio paciente, siempre que sea posible.
las lesiones sin compromiso vascular.
• Las lesiones aisladas de las ramas termi- A partir de la tercera semana
nales del plexo: axilar y MC, en concreto, a) Nueva exploración clínica. Normal-
son igualmente de tratamiento más pre- mente la exploración sensitiva y motora
coz. La asociación de EMG y la clínica es más fácil. El paciente puede colaborar
son muy seguras en el diagnóstico. y disponemos de una hoja de exploración
(Narakas, 1970) (Fig. 6) que nos servirá de
Primeros días seguimiento en las sucesivas revisiones. En
a) Estabilización general del paciente, ella anotaremos la fuerza de cada múscu-
tratamiento de las lesiones acompañantes lo del miembro superior, según la clasi-
(vasculares y músculo-esqueléticas). ficación internacional MRCB (Medical
b) Balance sensitivo-motor (Fig. 5). Research Council, 1981) (Fig. 7) y el área
c) Movilización pasiva de las articulacio- sensitiva afectada, por lo que simple visua-

M0 - Parálisis completa S0 - Ausencia de sensibilidad


M1 - Contracción visible o palpable S1 - Sensibilidad cutánea profunda y con dolor
M2 - Contracción eficaz sin gravedad S2 - Sensibilidad superficial táctil y con dolor
M3 - Contracción eficaz contra gravedad S3 - S2 con desaparición de las hiperestesias
M4 - Contracción eficaz contra gravedad y resistencia S4 - Comienza a discriminar 2 puntos
M5 - Fuerza muscular normal S5 - Sensibilidad normal

Fig. 7.

77
Mª Pilar Pradilla Gordillo

lización de estas hojas nos irá diciendo la Hay que hacer un diagnóstico dife-
mejoría o la ausencia de recuperación. rencial entre una lesión “pre” o “post-
Existen otras clasificaciones, como la Hi- ganglionar” puesto que el tratamien-
guet o Daniels, ésta última muy extendida to será diferente, en la primera no es
y que tiene la particularidad de añadir los posible una reparación directa pero
signos +/- a los grados 2-4. El + se utiliza en la segunda sí.
cuando la fuerza se aproxima al siguiente
grado y el – si se aproxima al anterior. Pre-ganglionar,
En general, estas exploraciones tienen • Respuesta motora “0” de los músculos
el inconveniente de la subjetividad; para dependientes de la raíz avulsionada
evitar errores se aconseja ser sistemático, • Parálisis de los músculos paraverte-
mantener una posición correcta, estabi- brales (inervados por la rama poste-
lizar las articulaciones (evita compensa- rior del nervio raquídeo)
ciones) y comparar con el lado sano. • Signo de Tinel –
b) EMG/ENG. • No hay alteraciones vegetativas (an-
c) Rehabilitación asistida. hidrosis..)
• PES (potenciales evocados sensitivos) +
Diagnóstico • Parálisis del frénico (avulsión de C4),
a) Con estas exploraciones seriadas (pri- torácico largo, angular y romboides
meros días, primer mes y a los tres me- (avulsión C5-C6), C-B-H (C8-D1)
ses) ya podremos hacer una aproxima- y alteraciones medulares (Brown-
ción al diagnóstico definitivo así como al Sequard)
pronóstico de la lesión, basándonos en la
extensión, la topografía y el tipo anatomo- Post-ganglionar,
patológico. • La parálisis motora/sensitiva se co-
• Nº de raíces afectadas: De 1 a 5 (C5-T1). rresponde con las raíces y/o troncos
• Topografía: Supraclaviculares (Pre y afectados
postganglionares), infraclaviculares y • No hay parálisis de los músculos pa-
Mixtas. ravertebrales
• Anatomía Patológica: Además de los 5 • Signo de Tinel +
grados de Sunderland o los 6 de Mac- • Las funciones vegetativas están perdidas
kinon y Richarson, existe un tipo espe- • PES –
cífico del plexo que es la AVULSIÓN
o arrancamiento de la raíz desde la
médula (Fig. 8); en la clínica se llama
“lesión Pre-ganglionar” porque se pro-
duce proximal al ganglión raquídeo, las
fibras motoras sufrirán una degenera-
ción walleriana pero las fibras sensi-
tivas no, debido a que cuerpo y axón
siguen en continuidad (esto lo capta el
ENG aunque haya anestesia clínica). Fig. 8.

78
Lesiones del plexo braquial

b) EMG/ENG. Si no lo hicimos el pri- Objetivos: La lesión del plexo es una


mes mes, estamos obligado a realizarlo a catástrofe para la función del miembro
los tres meses. superior. Tenemos que establecer un or-
den de prioridades y a partir de ellas y en
Indicaciones y objetivos del función de las fuentes axonales de las que
tratamiento quirúrgico dispongamos, intentar inervar la mayor
Podemos indicar un tratamiento qui- musculatura y sensibilidad posible. Serían:
rúrgico cuando: • Flexión del codo
• Haya una ausencia de regeneración es- • Estabilidad dinámica del hombro
pontánea. • Extensión de la muñeca
La clínica motora/sensitiva no progresa • Flexión de los dedos
y los EMG seriados no muestran cambios. • Flexión de la muñeca
• Ante una regeneración no coherente, • Extensión de los dedos
pobre o no útil • Oposición del pulgar
• Ante avulsiones comprobadas por los • Sensibilidad del territorio del mediano
estudios eléctricos o de imagen
El momento de la cirugía está muy discu- Tratamiento
tido, pero suele oscilar entre los 3-6 meses
post-accidente, más precoz en avulsiones y Abordajes
más lento en los casos que progresan. Básicamente, las incisiones cutáneas para
Igualmente, la edad del enfermo es un explorar un plexo braquial son supraclavi-
tema de debate; hace unos años, se des- culares y/o infraclaviculares acompañadas
cartaba la cirugía nerviosa en personas de o no de osteotomía de clavícula. En ciertos
más de 50 años. casos, también podremos hacer un abordaje
Sin embargo, hoy día, gracias al número transversal aunque éste limita el acceso a los
creciente de transferencias nerviosas hay troncos secundarios. Es habitual el uso de in-
mucha más tolerancia tanto para el momen- cisiones complementarias en hombro o brazo
to de la intervención como para la edad. para la práctica de las neurotizaciones (Fig. 9).

Fig. 9.

79
Mª Pilar Pradilla Gordillo

Técnicas troclear funcionase (Pallazi, 2002;


Los injertos nerviosos puentean los de- García López, 2004)) o incluso para
fectos que dejan la resección del neuroma el Interóseo posterior; se puede aña-
traumático y normalmente son extraídos dir la rama sensitiva del antebraquial
de nervios cutáneos tales como el sural y cutáneo externo (ABCE) para bus-
el braquial cutáneo interno. En lesiones car sensibilidad en la mano
muy extensas podremos tener escasez de • Ramas aisladas del mediano en an-
los mismos, por lo que habitualmente se tebrazo (FDS, FCR, PL) para rama
combinan con las transferencias nerviosas. motora del radial (ECRB o IOP)
Las transferencias nerviosas o “neuroti- (Brown, Mackinnon, 2008)
zaciones” han sido el gran descubrimiento • Nervio Interóseo anterior para ramo
para la cirugía del plexo y gracias a ellas, motor recurrente del mediano (opo-
los resultados han cambiado drásticamen- sición) o para rama motora del ner-
te el pronóstico de los lesionados. Aportan vio cubital
fibras sanas y solo tienen una “interface” • Ramas aisladas del nervio cubital
quirúrgica. Las hay de tres tipos: del pro- (FCU) para radial
pio plexo, del plexo contralateral y externas • Ramos sensitivos de mediano, cu-
al plexo: bital, radial o músculo cutáneo para
inervar zonas deficitarias
Propio plexo (intraplexuales) • Podríamos tomar cualquier fascículo
• C7 ipsilateral completa (Gu, 1992; de las raíces o de los troncos siempre
Lei Xu, 2008) o parcial (Huawei que no dejasen secuelas en la zona
Yin, 2011) donante (caso de Martins que uti-
• Ramas motoras del plexo cervical liza uno de la cuerda posterior para
profundo (Chuang, 1995) inervar al supraescapular)
• Tóraco-dorsal
• Subescapular inferior para el axilar Contralateral
(Borrero, 1999) • C7 completa (Gu Y, 1992; Feng,
• Pectoral medial para el axilar 2010)
• Rama de la porción larga del múscu- • Nervio pectoral (Gilbert, 1992)
lo tríceps para el axilar (Leechaven-
gvongs, 2003) Externas al plexo
• Fascículos del nervio cubital para bí- • Frénico (4º raíz) (Gu Y, 1989)
ceps braquial (Oberlin, 1994)) • Rama del platisma (VII par cra-
• Fascículos del nervio cubital para el neal) para el supraescapular (Berte-
tríceps (Flores, 2012) lli,2007)
• Fascículos del nervio mediano para • Espinal (XI par craneal) (Narakas,
braquialis (Tung, 2003) Allieu, 1988)(6% de parálisis del es-
• Rama del músculo braquialis para pinal acompañan al plexo, Bertelli)
rama epitroclear del mediano (Ac- • Hipogloso (XII par craneal)
cioli, 1999) o para músculos más • Intercostales (T3-T5)
distales del mediano si la rama epi- El mapa topográfico de Narakas (Fig. 10)

80
Lesiones del plexo braquial

nos será de gran ayuda en el acto quirúrgico Parciales (Fig. 11-12-13-14)


tanto para saber en qué zona del nervio re- • Parciales C5-C6, sanas C7-D1
ceptor debemos situar el injerto como para • Rotas: Injertos + Transfer del espinal
identificar el fascículo nervioso que vamos al supraescapular (SE)
a transferir. • Avulsionadas: Triple transfer
• Espinal al SE
Estrategias quirúrgicas según las • Fascículo de cubital al bíceps
lesiones (Oberlin)
Una vez expuesto el plexo la prime- • Fascículo de mediano al Braquialis
ra opción será siempre la utilización de
injertos dado que las mayores y mejores
fuentes dadoras de axones son las pro-
pias raíces y/o los troncos. Sin embargo, A
hoy día, lo habitual es combinar injerto
y neurotización para obtener con ésta
última una reinervación más precoz y
aprovechar el número de injertos que
siempre es limitado.

Fig. 10.
C

Fig. 11. A) Neuroma del tronco primario superior.


B) Injerto de 4cm hasta la división en los ramos
anterior y posterior.
C) Incisión complementaria para la sutura
directa de nervio espinal y supraescapular.

81
Mª Pilar Pradilla Gordillo

Fig. 12.

Fig. 13.

Fig. 14.

82
Lesiones del plexo braquial

• Rama del tríceps al deltoides (si • Transferencias tendinosas para la


está paralizado) extensión de muñeca y dedos
• Parciales C5-C6-C7, sanas D8-D1 • Parciales C8-D1, sanas C5-C7
• Rotas: Injertos + Transfer del espinal • Rotas o avulsionadas, son de resul-
al SE tados pobres por la distancia hasta
• Avulsionadas: el órgano receptor. Generalmente
• Espinal al SE hacemos neurotizaciones combi-
• Neurotizar al nervio axilar con nadas con cirugía paliativa
rama del pectoral o del frénico • Rama del m. braquial anterior
• Intercostales para el m. dorsal para el mediano (Accioli) y del
ancho ABCE, intentando conseguir
• Oberlin una sensibilidad protectora, o
• La misma rama pero para el in-
teróseo posterior consiguiendo
así una extensión de muñeca.

Totales
• Totales C5-D1 (Fig. 15-16)
• Rotas o combinadas con avulsio-
nes; injertaremos todas las raíces
posibles, siguiendo el orden de los
objetivos enumerados previamente
y los combinaremos con neuroti-
zaciones
• Avulsión completa, solo son po-
sibles las transferencias nerviosas.
Aquí ocupa un lugar preferente la
utilización de la raíz C7 contrala-
teral.
Fig. 15.

83
Vía clínica Primera visita en Segunda visita Tercera visita Cuarta visita Ingreso-alta Primer control Primera visita en Segunda visita Tercera y
consulta (Tres meses) (Cuatro-cinco (Día previo al hospital ambulatorio consulta tras la (Seis meses) cuarta visita
Parálisis (1 Semana-1 mes meses) ingreso) (4-5 Días) En sala de curas cirugía (1 y 2 años)
braquial post-lesión) (Entre el 7-º10 (1 Mes )
º día post-
operatorio)
Asistencia - Exploración clínica - Exploración - Exploración -Verificación -Según -Hoja de consulta - Revisión -Revisión -Revisión
Clínica - Diagnóstico de las clínica clínica del cuadro Protocolo a rhb - Retirada de -Exploración Exploración
lesiones - Diagnóstico y - Diagnóstico y Clínico -Cura de las vendaje clínica clínica
pronóstico de las pronóstico de las heridas - Plantear
lesiones lesiones transferencias
- Toma de tendinosas
la decisión
quirúrgica.
Inclusión en leq
Pruebas - Petición de emg/eng -Petición de - Estudio pre- -Verificación de - Según -No precisa -No se precisan -Petición de
- Hoja de consulta mielo-rnm (ante anestésico las pruebas protocolo ninguna salvo la emg/eng
a rhb (si no la ha la sospecha Mala evolución de
comenzado) de avulsiones las heridas
- Hoja de consulta a radiculares)
la clínica del dolor (si
no se controla bajo la
medicación habitual)
Medicacion -Tratamiento para el -Control de la -Control de la - Según -Revisar los -Revisión de la
dolor (si lo hay) según medicación medicación protocolo tratamientos analgesia
prescripción médica: prescritos en -Retirada de la
analgesia primer el alta hpbm
nivel?
Actividad -La habitual hasta - Insistir en los - La indicada - Según - Mantendrá - Indicación de - Deben
el momento del movimientos previamente por protocolo el vendaje 4 ejercicios pasivos comenzar a
accidente salvo del pasivos de la el traumatólogo y semanas domiciliarios, incorporarse
miembro afectado: mano paralizada por el servicio de - Puede y debe complementarios al mundo
Mª Pilar Pradilla Gordillo

movilizaciones - Uso de férulas rehabilitación caminar a los prescritos laboral siempre


pasivas de todas en la mano sobre en rhb que no sean
las articulaciones todo si notamos trabajadores
y activas de las no rigidez articular manuales
afectadas
Informacion y - Conversación y - - Decisión -Conversación - Según -Importante la - Estado anímico
apoyo explicación verbal del Incentivarmovilizar quirúrgica con el paciente protocolo conversación, - Pensar en
significado de una la mano si está - Consentimiento y la familia hablar sobre prepararse
lesión de plexo paralizada informado sobre las fechas de para un cambio
- Folleto explicativo - Explicación - Apoyo dudas lógicas recuperación en laboral
- No es preciso hablar verbal del posible psicológico de esta cirugía función del tipo de

Fig. 17.
de cirugía tto quirúrgico cirugía, tamaño
de los injertos etc

84
Lesiones del plexo braquial

Conclusiones 61(5): 1016-1023


• Las lesiones del plexo braquial son dis- 2. Ahmed-labib M, Golan J, Jacques L.
tintas a las de los nervios periféricos de- Functional outcome of brachial plexus
bido a varias razones: extensión en cm., reconstruction after trauma. Neurosur-
número de raíces y troncos dañados, gery 2007; 61:1016–1023
afectación a doble nivel y varios grados 3. Bertelli JA, Ghizoni MF. Improved
histológicos con la presencia exclusiva technique for harvesting the accessory
de la “avulsión”. nerve for transfer in brachial plexus in-
• No podemos actuar con la celeridad juries. Operative neurosurgery 2 2006
deseada aun sabiendo que hay lesiones Vol. 58: 366-370
irrecuperables (avulsiones) que se po- 4. Bertelli JB, Ghizoni MF. Transfer of
drían tratar en las primeras semanas; the Platysma Motor Branch to the Ac-
tenemos que esperar un tiempo, como cessory Nerve in a Patient With Tra-
exponemos en el algoritmo, dada la va- pezius Muscle. Neurosurg 2011; Vol 68
riedad anatomopatológica. (2): 567–570
• Prácticamente siempre, hay que hacer 5. Bertelli JB, Ghizoni MF. Combi-
cirugía paliativa. ned injury of the accessory nerve and
• Los injertos musculares vascularizados brachial plexus. Neurosurgery 2011;
conectados al nervio frénico y/o a los 68:390–396
intercostales forman parte del arsenal 6. Bonnard Ch, Sloof ACJ. Brachial
terapeútico sobre todo para la muscula- plexus lesions. Ed. Springer-Verlag
tura de la muñeca y de los dedos. Berlin Heidelberg 1999
• El reimplante de las raíces avulsiona- 7. Bonnel F, Rabischong P. Anatomy and
das es un hecho experimental y clínico systematization of the brachial plexus
aunque los resultados no sean todavía in the adult. Anat Clin. 1981; Vol
los esperados como para generalizar su 2:289-298.
utilización. 8. Brown JM, Mackinnon. Nerve trans-
• Las células gliales, los factores de creci- fers in the forearm and hand. Hand
miento etc. serán en un futuro la solu- Clin 2008; 24: 319-340
ción para que se produzca una regene- 9. Carlstedt T, Anand P, Htut M, Misra
ración nerviosa en zonas donde hoy no P, Svensson M. Restoration of hand
es posible. function and so called “breathing arm”
• Por último, en la FIG. 17 exponemos una after intraspinal repair of C5-T1 bra-
guía clínica orientativa para el segui- chial plexus avulsion injury. Neurosurg
miento de una lesión del plexo braquial. Focus 2004; 16 (5), E7:1-5
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85
Mª Pilar Pradilla Gordillo

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fer to lower trunk via a subcutaneous fer via the prespinal and retropharyngeal
tunnel across the anterior surface of route to repair brachial plexus root avul-
chest and neck for total root avulsion sion: a preliminary report. Neurosurg
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Lesiones del plexo braquial

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C5 root and upper trunk of the brachial

87
José Cárdenas Clemente

Capítulo 9

Lesiones intermedias entre plexo


y hombro (espinal, torácico largo
y supraescapular)
José Cárdenas Clemente
Unidad de Miembro Superior. Hospital Virgen del Rocío (Sevilla)
Clínica Sagrado Corazón (Sevilla)

Correspondencia: ppcardenas@telefonica.net

Palabras claves: spinal accessory nerve, long thoracic nerve, serratus


anterior palsy, trapezius palsy, scapular winging, suprascapular nerve,
suprascapular neuropathy, arthroscopy, tendon transfers

D
entro de la patología traumática caso del nervio supraescapular que puede
nerviosa podemos encontrar una tener una afectación que nos haga suponer
serie de lesiones que, no siendo una lesión del manguito) o presentar défi-
muy frecuentes, tienen una gran impor- cits funcionales que no sean muy evidentes
tancia en este contexto ya que en muchos (ejemplo de escápula alada).
casos pueden pasar desapercibidas o tener A continuación vamos a tratar de con-
un diagnóstico difícil. A veces son com- cretar los aspectos clínicos, diagnósticos y
patibles con otras patologías (como en el de posibilidades de tratamiento de las le-

88
Lesiones intermedias entre plexo y hombro (Espinal, torácico largo y supraescapular)

siones del nervio espinal, torácico largo y nicos podemos apreciar la existencia de
supraescapular. cicatrices en la zona referida.
Frecuentemente encontramos a la explo-
NERVIO ESPINAL ración una contractura muscular a expen-
sas, sobre todo, del elevador de la escápula
Anatomía y los romboides mayor-menor, al haber un
El nervio espinal está constituido por el intento de compensación.
XI par craneal y se compone de una raíz Los pacientes presentan debilidad para
craneal, que se une al vago, y una raíz espi- elevar el brazo e imposibilidad para enco-
nal, principalmente motora, que es la que gerse de hombros, así como atrofia muscu-
presenta la patología que veremos. lar, que podemos objetivar claramente por
Inerva esternocleidomastoideo y tra- la asimetría de hombros y un descenso del
pecio, aunque éste último puede también hombro afecto6.
recibir inervación de raíces cervicales. Du- Es característica la existencia de una es-
chenne en 1855 hace las primeras referen- cápula alada, es decir, un omóplato pro-
cias a una parálisis del trapecio. minente en ciertas posiciones, sobre todo
Recordemos que el músculo esterno- con la abducción y rotación externa con-
cleidomastoideo realiza la flexión lateral, tra-resistencia. Este signo también lo ha-
rotación y extensión de la cabeza, y el mús- llaremos en las lesiones del nervio torácico
culo trapecio eleva la escápula, la desplaza largo, como podremos ver más adelante6,7,8.
a medial y le proporciona rotación.
Diagnóstico
Etiología En primer lugar debemos realizar radio-
El 93% de las lesiones son iatrogénicas grafías de la columna cervical y del hombro,
(cirugía de ganglios, masas, carótida,…). con idea de descartar otras patologías, como
siendo, pues, la más frecuente de las lesiones artropatías cervicales o lesiones óseas.
iatrogénicas de los nervios periféricos 1,2. También resulta de mucha ayuda la rea-
Otras causas son debidas a traumatismos lización de TAC o RNM de las mismas
(actividades deportivas, sobre todo)3, heri- zonas referidas, más selectivas a la hora de
das, tracción sobre extremidad superior, localizar masas de partes blandas u óseas,
masas óseas o de partes blandas, neuritis atrofias musculares, reacciones inflamato-
(Parsonage-Turner) y, en casos excepcio- rias o, en ocasiones, herniaciones del nú-
nales, se ha descrito como consecuencia de cleo pulposo en región cervical.
un Síndrome del Latigazo Cervical4,5. Sin embargo el método diagnóstico de
Habitualmente la lesión se produce en el elección es la realización de un electromio-
triángulo cervical posterior, que es donde grama (EMG), que nos dará una informa-
se encuentra más superficial. ción específica del estado del nervio espinal.
Si la sospecha es clara debemos comprobar
Clínica no sólo la inervación del esternocleidomas-
En ocasiones, la clínica con la que debu- toideo y trapecio, sino también de otros gru-
tan estas lesiones es el dolor, aunque puede pos musculares que puedan ser transferibles
también no existir. En los casos iatrogé- en el momento de indicar una cirugía.

89
José Cárdenas Clemente

Tratamiento En casos de lesiones crónicas o que no


Al ser una lesión iatrogénica, la cirugía puedan ser resueltas actuando directamen-
de exploración es precoz pero podemos te sobre el nervio, debemos plantearnos ci-
hacer un tratamiento conservador, en ca- rugías de secuelas. Anteriormente se rea-
sos de Parsonage-Turner o neuroapraxia lizaban artrodesis escápulo-torácicas, pero
por tracción. Consiste en el tratamiento actualmente es una técnica muy abando-
sintomático del dolor, en base a la inten- nada, por las numerosas complicaciones
sidad del mismo, y es aconsejable también (neumotórax, pseudoartrosis,…) y la nota-
la rehabilitación y el uso de órtesis7 que ble pérdida de movilidad. También están
puedan colaborar en evitar la aparición de siendo cada vez más abandonados los pro-
un “hombro congelado” o síndromes suba- cedimientos estabilizadores estáticos, con-
cromiales. La evolución la seguiremos me- sistentes en sujetar la escápula con fascia
diante EMG seriados. lata o artificial, ya que en un gran número
Si en el transcurso de un año, aproxima- de casos terminan cediendo.
damente, no encontramos mejoría, debe- Hoy en día son de elección las técnicas de
mos valorar la indicación quirúrgica. transferencias musculares, destacando entre
La cirugía variará en función de los ha- ellas la de Eden-Lange, normal o modificada:
llazgos. Podremos realizar una neurolisis • Normal, transferencias del músculo “ele-
del nevio cuando comprobemos que exis- vador de la escápula” al trapecio superior,
te integridad del mismo, por el contrario, el músculo romboides menor al trapecio
si hallamos una sección, la opción es una medio y el romboides mayor al trapecio
sutura termino-terminal, si no hay retrac- inferior en la normal,
ción de cabos, o la colocación de un injerto • Modificada, transferencias del músculo
nervioso cuando haya retracción o defecto “elevador de la escápula” a la espina de la
parcial del nervio9 (FIGs. 1 y 2). misma, el músculo romboides menor a

Fig. 1. Fig. 2.

90
Lesiones intermedias entre plexo y hombro (Espinal, torácico largo y supraescapular)

la fosa del supraespinoso y el romboides tanto muy característico y que, a diferencia


mayor a la fosa del infraespinoso 6,10,11. de la provocada por la lesión del nervio
espinal, se puede apreciar a la flexión de
NERVIO TORÁCICO LARGO los miembros superiores. Para confirmarla
debemos colocarnos detrás del paciente y
Anatomía pedirle que eleve sus brazos, sin extender
Nace de las raíces C5-C6-C7 y es un ner- completamente los codos, y que presione
vio motor puro. Inerva al músculo serrato sus manos contra la pared, veremos como
anterior o mayor. Ya en el año 1837, Velpeau, la escápula afectada sobresale12.
nos describe una lesión del serrato anterior.
Dicho músculo parte de las costillas 1ª Diagnóstico
a 9ª y se inserta en el borde medial de la Básicamente usaremos los mismos me-
escápula, y su función es mantenerla y lle- dios diagnósticos que en las lesiones del
varla hacia delante, ayuda en la flexión y nervio espinal: radiografías cervicales, de
abducción del hombro. tórax y hombro, que nos descarten otras
patologías, como masas o artropatías.
Etiología La realización de un TAC o una RNM
Principalmente es traumática, bien sea también será importante para valorar atro-
por traumatismos directos, o por compre- fias musculares, masas óseas o de partes
sión directa sobre los hombros (que puede blandas, lesiones que puedan pasar des-
ser provocada por mochilas, realizar pe- apercibidas en las radiografías o protru-
sas,…)3 Otra de las causas habituales son siones cervicales.
las iatrogénicas, tras procedimientos qui- También el electromiograma es el mé-
rúrgicos, como por ejemplo la cirugía del todo diagnóstico de elección, en el que
estrecho torácico, la cirugía mamaria o la debemos incluir el nervio espinal, para
de pulmón. También podemos encontrar descartar que la escápula alada pueda ser
casos debidos a heridas, o tras radioterapia provocada por lesión del mismo.
en procesos oncológicos.
Al igual que con el nervio espinal hay Tratamiento
neuritis, como el Parsonage-Turner, que En ausencia de lesiones que justifiquen
pueden desencadenar la patología. la cirugía, debemos comenzar con trata-
miento conservador, que consistirá en ali-
Clínica vio sintomático del dolor.
La principal sintomatología es el dolor, Podemos constatar que la mayoría de las
acompañado de una importante dificultad lesiones traumáticas tienen una resolución
para elevar el brazo. espontánea entre los 6 y 9 meses, plazo que
A la inspección podremos apreciar atro- puede alargarse, según algunos autores,
fia muscular y contractura de musculatura hasta los 24 meses si no hay antecedente
antagonista, especialmente romboides ma- traumático, como por ejemplo en las virales.
yor, romboides menor y trapecio. El paciente deberá realizar ejercicios de
La lesión del nervio torácico largo es la rehabilitación para mejorar la posible atro-
principal causa de escápula alada, signo por fia y no debilitar musculatura. El uso de

91
José Cárdenas Clemente

órtesis externas también será de gran ayuda Las artrodesis escápulo-torácicas y los
para conseguir estos objetivos, colaborando procedimientos estabilizadores estáticos
a su vez en la estabilización de la escápula7. no son habitualmente utilizados, por las
Alrededor del 25% de estas lesiones son causas referidas previamente.
susceptibles de tratamiento quirúrgico, Cuando no podemos actuar sobre el
estableciendo la indicación, según la etio- nervio son de elección las transferencias
logía, a partir de 12 meses, como hemos musculares, destacando la transferencia de
comentado previamente. pectoral mayor (completo o porción es-
Si a la exploración quirúrgica apreciamos ternal) a ángulo inferior de escápula, con
lesión del nervio habrá que realizar suturas añadido de fascia lata para completar el
termino-terminales o injertos nerviosos, o recorrido12,16.
bien neurolisis en los casos que sean moti-
vados por una importante fibrosis13. NERVIO SUPRAESCAPULAR
En casos concretos podremos realizar
neurotizaciones del nervio torácico largo, Anatomía
siendo las más utilizadas para ello la rama Es un nervio mixto que emerge del
lateral toracodorsal14 y los intercostales15. tronco superior (C5-C6). Motoriza a los

Fig. 3.

92
Lesiones intermedias entre plexo y hombro (Espinal, torácico largo y supraescapular)

músculos supraespinoso e infraespinoso


y da sensibilidad a la articulación gleno-
humeral, zona acromial e incluso piel17.
Schilf en el año 1952 ya nos describe le-
siones del supraescapular por atrapamien-
to. Posteriormente Kopell y Thompson en
1959 realizan una descripción más detalla-
da de la neuropatía suprescapular.
El músculo supraespinoso tiene la fun-
ción de separar el brazo y el infraespinoso
la rotación externa del húmero.
Fig. 4.
Etiología
La principal causa de lesión del nervio También podremos encontrar atrofia de
supraescapular es la compresión (atrapa- ambos músculos (Fig. 4) y, en ocasiones, un
miento) del mismo, bien a nivel de esco- signo de “Tinnel” positivo.
tadura supraescapular, bajo el ligamento Es de ayuda realizar un test de adducción
transverso superior (FIG. 3), o a nivel de la (addución del brazo afecto) que será positivo.
escotadura espinoglenoidea, bajo el liga-
mento transverso inferior. Diagnóstico
También podemos verla con relativa fre- El diagnóstico se realizará de forma si-
cuencia en deportistas, sobre todo aquellos milar a las lesiones que hemos comentado
que realizan una actividad repetitiva de ele- previamente. Habrá que realizar radiogra-
vación del brazo por encima de la cabeza. fías (masas óseas, callos de fractura, exos-
Otras causas son: masas, quistes o gan- tosis etc), TAC y RNM que nos informará
gliones paralabrales, tracción muscular en de masas de partes blandas, atrofias mus-
roturas masivas de manguito18,19, neuritis culares y roturas de manguito con retrac-
tipo Parsonage-Turner, microembolias ción. Podemos usar un test de inyección
vasa nervorum (por daño en íntima de la de anestésico local que eliminará el dolor,
arteria supraescapular), heridas, luxacio- aunque suele ser poco utilizado20.
nes glenohumerales, fracturas de cintura Como escrito previamente el diagnósti-
escapular, o bien, de forma iatrogénica (en co de elección es el EMG21.
abordajes posteriores de escápula)20.
Tratamiento
Clínica Podemos iniciar un tratamiento conser-
La clínica que presenta este tipo de lesio- vador, durante seis meses a un año, donde
nes es similar a la del síndrome subacromial incluiremos modificación de la actividad
con rotura de manguito: dolor de hombro, física, AINEs y rehabilitación, aunque
sobre todo superior y posterolateral, limi- hay algunos autores que lo desaconsejan,
tación de la abducción (por afectación de ya que, si el motivo es una compresión del
supraespinoso) y limitación de la rotación nervio, sólo se podrá solucionar si se reali-
externa (por afectación del infraespinoso)20. za una descompresión quirúrgica.

93
José Cárdenas Clemente

Si tras el tiempo establecido no en- También la exéresis de gangliones y


contramos mejoría en la clínica habrá reparación labral podemos realizarla de
que proceder al tratamiento quirúrgico, forma artroscópica, así como la descom-
realizando una exploración si se trata de presión del atrapamiento a nivel del liga-
heridas o causas iatrogénicas, y según la mento transverso inferior26,27.
afectación del nervio que encontremos
podremos optar por sutura directa del
mismo, neurolisis e injerto si hay un de-
fecto. En ciertos casos podremos realizar Bibliografía
una neurotización con nervio espinal22,23, 1. Pérez Martínez J.J. Lesión del nervio
muy utilizada sobre todo en cirugías del espinal accesorio. Tratamiento fisio-
plexo braquial. terápico de las secuelas. Rev Fisioter.
Si la causa es una masa, como en caso de 2006; 5 (2) : 21 – 30.
gangliones paralabrales, habrá que realizar 2. Camp SJ, Birch R. Injuries to the
una exéresis del mismo y reparación labral. spinal accessory nerve: a lesson to
Cuando nos encontramos con una cro- surgeons. J Bone Joint Surg Br. 2011
nicidad que nos impida actuar sobre el Jan;93(1):62-7.
nervio, podemos recurrir a transferencias 3. Duralde XA. Neurologic Injuries
musculares, siendo las más utilizadas las de in the Athlete’s Shoulder. Journal of
dorsal ancho y de elevador de la escápula24. Athletic Training. 2000;35(3):316-
Sin embargo, al ser la principal causa el 328.
atrapamiento del nervio, el tratamiento de 4. Fidalgo MJ, Martín E. Latigazo cer-
elección es la descompresión quirúrgica, vical con lesión del nervio espinal ac-
que actualmente se realiza de forma ar- cesorio asociada. Caso clínico. Rehabi-
troscópica20 (figs. 5 y 6). litación (Madr).2010;44(2):187–190.
Según la técnica de Lafosse25, una de las 5. López-Oliva Muñoz F, Martínez Ibá-
más utilizadas, realizaríamos la sección del ñez J, García Polo P. Lesión del nervio
ligamento transverso superior mediante espinal accesorio por latigazo cervical.
un portal supero-medial (próximo al de Patología del Aparato Locomotor.
Neviaser), y accediendo con la óptica des- 2004; 2 (4): 288-290.
de un portal lateral. 6. Wiater JM, Bigliani LU. Spinal acces-

Figs. 5 y 6.

94
Lesiones intermedias entre plexo y hombro (Espinal, torácico largo y supraescapular)

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95
José Cárdenas Clemente

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96
Lesiones en la región del hombro (nervio axilar)

Capítulo 10

Lesiones en la región del hombro


(nervio axilar)
Miguel Cuadros Romero
Unidad de Miembro Superior y Microcirugía.
Hospital Universitario Virgen de la Victoria (Málaga)

Correspondencia: m.cuadros@telefonica.net

Palabras claves: palsy axilar nerve, palsy suprascapular nerve,


arthroscopy, tendon transfers.

R
evisamos la relación anatomoclí- ces cervicales V y VI en el 86% de los ca-
nica del Nervio Axilar, utilizando sos; estas fibras formarán parte del Tronco
como referencia mi propia Tesis Primarios Superior y se separarán para
doctoral y actualizando los últimos con- formar la rama terminal menor del Tronco
ceptos, en relación a los actuales estudios Secundario Posterior del Plexo Braquial,
anatómicos; así como las distintas causas así descenderá sobre el músculo Subesca-
de lesión que afectan a dicho nervio. pular tras la Arteria Axilar; a continuación
pasa por el “cuadrilátero húmero-tricipital
NERVIO AXILAR de Velpeau”, dando lugar a sus distintas
ramas: articular, rama para el Redondo
Anatomía menor, rama terminal interna o posterior
Las fibras del Nervio Axilar (también y rama terminal externa o anterior para el
llamado Circunflejo) proceden de las raí- Deltoides.

97
Miguel Cuadros Romero

El número de fascículos varía entre 1 y te en los traumatismos frontales el Nervio


15; se trata pues, de un nervio oligofasci- Axilar suele acompañarse de lesiones del
cular. El 90% son fibras motoras, de ellas Nervio Músculocutaneo, mientras que en
un 20% de las fibras del Nervio Axilar son los traumatismos axilares pueden afectarse
para el músculo Redondo menor y el 80% ramas del Plexo Infraclavicular, fundamen-
restante para el músculo deltoides (Fig. 1). talmente el Nervio Radial.
En nuestra Tesis doctoral hemos dividi-
Mecanismo de la lesión do el Nervio Axilar en tres zonas topográ-
Los mecanismos de lesión más impor- ficas distintas según sea, antes, durante o
tantes son la tracción del nervio seguida de después del cuadrilátero de Velpeau (zonas
movimientos extremos que pueden ser de A,B y C) (Figs. 3 a 6).
abducción y rotación externa, abducción y
rotación interna, hiperextensión o de rota- Clínica
ción interna forzada. Son raras las lesiones El dolor se manifiesta como una co-
por traumatismo abierto o arma de fuego. rriente eléctrica en la región deltoidea en
Es más común la compresión del Nervio el momento del accidente; con el tiempo
Axilar dando lugar al Sindrome del Túnel se desarrolla una atrofia muscular del Del-
Cuadrilateral, casi siempre producido por toides que da lugar al clásico hombro en
una compresión en rotación interna y addu- “charretera”. La pérdida de la sensibilidad
ción. El cuadrilátero húmero tricipital está se localiza en la cara externa del hombro
constituido por el músculo redondo menor (zona autónoma del Nervio Axilar).
por arriba, la porción larga del tríceps por En la exploración vemos:
dentro, el músculo redondo mayor por de- • Parálisis del músculo Redondo menor que
bajo y el cuello del húmero por fuera (Fig. consiste en una pérdida de la rotación ex-
2). El Nervio Axilar suele ir acompañado de terna que puede estar suplida por el mús-
lesiones de nervios vecinos, así normalmen- culo infraespinoso (nervio supraescapular).
• Parálisis del Deltoides que se manifiesta
fundamentalmente por una pérdida de

1. M. Supraespinoso
Nervio axilar 2. M. Infraespinoso

Esp. Cuadrilátero
Esp. de Velpeau:
3. M. Redondo menor
4. M. Redondo mayor
5. M. Tríceps
6. Húmero
7. Nervio axilar
Fig. 1. Fig. 2.

98
Lesiones en la región del hombro (nervio axilar)

Fig. 4. Zona anatomo-quirúrgica de


transición A-B. 1: N. axilar; 2: N. radial; 3: N.
musculocutáneo; 4: N. mediano; 5: N. cubital;
6: N. braquial cutáneo interno.

Fig. 5. Zona anatomo-


quirúrgica de
transición B-C.
1: N. axilar;
2: N. radial;
3: N. musculocutáneo;
4: N. mediano;
5: N. cubital;
6: M. pectoral mayor;
Fig. 3. 7: M. pectoral menor.

la abducción aunque también de la ante-


pulsión y retropulsión; la primera puede
ser compensada por el músculo bíceps,
por lo que se debe examinar al paciente
sin gravedad y contra-resistencia, evitan-
do así confusiones. Hay un signo típico
descrito por el Dr. Santos Palazzi que se-
ría el “Signo del Mico”, que consiste en
la incapacidad de poder rascarse la axila.
El diagnóstico se complementa con ra-
diografías del hombro, muy evidentes en Fig. 6. Zona anatomo-quirúrgica de transición B-C.
1: tronco radio-circunflejo; 2: N. musculocutáneo;
las luxaciones y/o fracturas, y con otros es- 3: N. mediano; a: N. axilar; b: N. radial; 4: N. cubital
tudios de imagen como la resonancia mag-
nética y la ecografía, útiles en los tumores
y en los síndromes de compresión como ción espontánea en 4-6 meses aunque los
el síndrome del Cuadrilátero de Velpeau. casos aislados tardan más por lo que con-
Otro medio complementario muy útil para viene esperar de 6 a 9 meses para tratarlos
el diagnóstico y la evolución es el estudio quirúrgicamente.
neurofisiológico (EMG/ENG) (Fig. 7). Sin embargo, los grados III,IV y V de
Sunderland siempre serán de tratamiento
Pronóstico quirúrgico.
En los grados I y II de Sunderland la El diagnóstico diferencial lo haremos con
mayoría de los casos tienen una recupera- la cérvico-braquialgia que afecte a la raíz

99
Miguel Cuadros Romero

Fig. 7.

C5 y en algunos casos la C6; con lesiones recidivantes mediante la técnica de Cap-


de nervios asociados como el Supraescapu- sular Chift, de Putti-Plat, o Bristow; esto
lar, las ramas del tríceps y otros. Hay que se podría evitar con la maniobra de Tug-
hacer también el diagnóstico diferencial test (Bigliani y Flatow) (Fig. 8).
con lesiones del hombro, como la rotura También se producen lesiones del nervio
del manguito de los rotadores, la capsuli- axilar en las fracturas del acromion, de la
tis adhesiva/hombro congelado, mal unión escápula y del tercio proximal del húmero.
en fractura del troquiter y por último, con Así en el estudio de Laat y cols. demues-
otras lesiones nerviosas como el síndrome tran que de 101 pacientes con lesiones
del Parsonnage-Turner, la esclerosis lateral nerviosas como consecuencia de la fractura
amiotrófica o la siringomielia. de luxación de hombro, el 37% correspon-
dían al Nervio Axilar, el 80% de ellos eran
Etiología y discusión mayores de 65 años, 4 meses después de la
El nervio se puede lesionar con luxacio- lesión sólo 8 pacientes tenían disfunción
nes anteriores o antero-internas del hom- motora. A los 8 meses, dos seguían con
bro como ya demostraron Pasila, Coene y completa disfunción, 2 tenían una parcial
otros, o en el tratamiento de las luxaciones recuperación y 4 recuperación completa,
lo que indica que el 90% de estas lesiones
como consecuencia de fracturas y/o luxa-
Anterior capsule Posterior capsule ciones en las personas mayores son debidas
a una neurapraxia o lesiones grado 1 ó 2
de Sunderland y es por esto que en este
tipo de pacientes debemos ser muy cau-
Axillary n. tos a la hora de operarlos, nunca antes de
los 9 meses y con un buen estudio clínico
de imagen (RX, TAC,RM para descartar
Axillary n.
(main. trunk) pseudoartrosis, lesiones de manguito), así
como un minucioso estudio neurofisioló-
Fig. 8. gico (EMG/ENG) (Fig. 9).

100
Lesiones en la región del hombro (nervio axilar)

Igualmente son posibles las lesiones en vio Axilar se pueden producir por lesiones
heridas de arma de fuego, arma blanca o o traumatismos de baja energía cinética,
incluso por asta de toro. teniendo en un 70% de los casos una re-
Quienes mejor han estudiado la com- cuperación espontánea. Sin embargo, los
presión de la Arteria Circunfleja Posterior traumatismos por alta energía cinética son
y del Nervio Axilar (Sindrome del Cuadri- casi siempre quirúrgicos.
látero de Velpeau) han sido Cahill (1.983), El nervio axilar se puede lesionar a varios
Narakas (1.991), y Milessi (1.999). niveles : en su origen en las raíces C5,C6,
Cuidado en las compresiones produci- C7, en el tronco secundario posterior (ra-
das durante la Anestesia General o en la dial-circunflejo), en el propio trayecto del
realización de un estudio TAC o en el uso nervio (zonas A,B y C) y por último a la
de muletas mal ajustadas o incluso como entrada en músculo (avulsión) .
se ha publicado recientemente al realizar El tratamiento será distinto según el lugar:
una toracoscopia A nivel radicular C5, C6 proponemos
Por último, no descartar la iatrogenia una cirugía mediante neurotización del
posible tanto al realizar una artroscopia nervio accesorio del Espinal (XI) al ner-
como en la cirugía abierta. vio supraescapular. El Dr. Borrero sugiere
la neurotización con el nervio subescapu-
Conclusiones y tratamiento lar. Mi maestro y compañero el Dr. Santos
Podemos decir que las lesiones del Ner- Palazzi ha realizado neurotizaciones para
el Nervio Axilar con el Nervio de pectoral
menor, estando ésta más indicada cuando
hay avulsión de la raíz C7. Últimamente
se ha popularizado la neurotización directa
del nervio axilar mediante las ramas del
tríceps (Leechevagohns, Bertelli) (Fig. 10).
Cuando hay lesiones a nivel del tronco se-
cundario posterior la reparación se suele rea-
lizar con injertos mediante un doble aborda-
je anterior y posterior , realizando siempre
primero la sutura distal de los injertos.
No hemos tenido ocasión de realizar
nunca la neurotización muscular directa,
que si hemos realizado en el Nervio Su-
praescapular, como preconiza Brunelli
desde 1.987.
Los tiempos de indicación quirúrgica
varían según las distintas posibilidades, así
en los casos de lesión aislada del Nervio
Axilar podemos esperar de tres a seis me-
ses o incluso 9 si se trata de personas ma-
Fig. 9. yores. En el caso de Rotura del Manguito

101
Miguel Cuadros Romero

Fig. 10.

Varón, 22 años. Politraumatismo. Nov. 92.


Lesión de nervio axilar, musculocutáneo,
rotura manguito rotador

Fig. 11.

102
Lesiones en la región del hombro (nervio axilar)

de los Rotadores conviene realizar la repa- ocurre es operar alrededor de los 3 meses.
ración de ambos (nervios y manguitos de El Nervio Axilar en sí se puede consi-
los rotadores) dentro de las 3/12 semanas. derar como un” nervio benigno” debido a
Si la lesión es a nivel radicular o asociada que la lesión está muy cercana al músculo
con otros nervios lo ideal que no siempre efector. Caso clínico (Fig.11 a 13).

Fig. 12.

Fig. 13.

103
Miguel Cuadros Romero

BibliografÍa Lesiones del Plexo Braquial. Hospital


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105
Antonio Jiménez Guardeño

Capítulo 11

Lesiones en el brazo
(nervio radial)
Antonio Jiménez Guardeño
Servicio de Traumatología y Ortopedia. Hospital Infanta Elena (Huelva)

Correspondencia: jimenezgua@hotmail.com

Palabras claves: radial nerve palsy

E
l nervio Radial es el nervio que más malos resultados. La pérdida de función
frecuentemente se lesiona en los del radial crea una invalidez muy significa-
traumatismos del miembro supe- tiva, el sujeto no puede extender los dedos
rior, es el tercero tras el mediano y cubital trifalángicos ni el pulgar a lo que se suma
en las heridas y es la lesión nerviosa perifé- la incapacidad de extender la muñeca exis-
rica más común asociada a una fractura de tiendo gran dificultad para asir los objetos.
los huesos largos, siguiéndole muy de lejos
el Ciático Poplíteo Externo. Existen series Recuerdo anatómico
en la literatura en las que de la totalidad El nervio Radial es la rama terminal más
de las lesiones nerviosas periféricas, el 74% voluminosa del tronco secundario posterior
afectan al miembro superior y de ellas el o Circunflejo-radial y a él contribuyen to-
70% al nervio radial. das las raíces del Plexo Braquial (desde C5
Por otro lado la importancia del conoci- a C8 y variablemente D1). En la axila se si-
miento de estas lesiones se debe a que hay túa sobre los músculos subescapular, dorsal
que saber cuándo y cómo actuar para evitar ancho y redondo mayor. Penetra en el brazo

106
Lesiones en el brazo (nervio radial)

entre la arteria braquial y la cabeza larga del el signo del autopista (Fig. 2). Una vez que
tríceps, por el espacio húmero-tricipital y se haya superado la atención urgente del
desciende acompañando a los vasos hume- lesionado ante un traumatismo en el brazo,
rales profundos. A continuación sigue un la exploración minuciosa de la función del
curso helicoidal, estuchado por el tríceps nervio radial debe ser la norma y en caso de
para ponerse en íntimo contacto con el hú- lesión de éste encontraremos:
mero en su llamado canal de torsión (Fig • Incapacidad para la extensión del codo,
1). Proximal a éste, es donde da las ramas pese a que como las lesiones son fre-
para el músculo tríceps, hecho importante, cuentemente en el canal de torsión no
porque las lesiones suelen ser distales a estas se ven afectadas las ramas del tríceps
ramas por lo que la extensión del codo no que son más proximales y por tanto no
suele verse afectada. En el tercio distal del se suele ver afectada esta función.
brazo, se dirige hacia delante, atravesando el
tabique intermuscular externo, situándose
entre los músculos braquial y braquiorra-
dialis. Ya delante del epicóndilo se divide
en sus dos ramas terminales: superficial de
carácter sensitivo y profunda o nervio inte-
róseo posterior.
Es un nervio mixto, aunque de predo-
minio motor que inerva a los extensores
del codo, muñeca y dedos, supinadores y
abductor largo del pulgar. Su área de iner-
vación sensitiva se extiende por la región
dorso-radial del brazo, dorsal del antebra- Fig. 1.
zo y dorso-radial de la mano.

Diagnóstico
Desde el punto de vista del diagnóstico
clínico, en el Servicio de Urgencias puede
ser difícil reconocer una lesión del nervio,
puesto que puede quedar enmascarada por
la falta de colaboración del paciente debi-
da al dolor intenso del traumatismo, o bien
las lesiones son tan severas que impera la
conservación de la vida y de la extremidad,
a la exploración nerviosa detallada. No obs-
tante, se puede intentar realizar maniobras
de exploración sencillas para descubrir la
lesión del nervio radial como es detectar la
incapacidad para la extensión y abducción
del pulgar pidiendo al enfermo que realice Fig. 2.

107
Antonio Jiménez Guardeño

• La típica mano caída por afectación de Etiología


los extensores de muñeca, extensores de Considerando las lesiones traumáticas
los dedos, y extensores y abductor largo y dejando aparte la patología neurológi-
del pulgar. No obstante si la lesión ocu- ca compresiva, la causa más frecuente de
rre en su bifurcación en ramas profunda lesión del nervio radial en el brazo son
y superficial, se conserva la extensión de las fracturas de la diáfisis humeral. Puede
la muñeca y supinación porque se con- también lesionarse en las luxaciones gle-
serva la inervación del braquioradialis y no-humerales o durante sus maniobras de
extensor “carpi radialis longus”. reducción, pero en estos casos suele tra-
• El déficit de supinación no es muy evi- tarse de neurapraxias por estiramiento y
dente porque se compensa por la acción su recuperación “ad íntegrum” es la regla.
del bíceps. La segunda causa son las heridas ya sean
• Teóricamente habría anestesia en su por arma blanca o de fuego, siendo estas
zona sensitiva, pero raramente existe últimas la causa más frecuente en épocas
una área totalmente autónoma salvo en de conflictos bélicos. Los traumatismos
la zona sobre el primer interóseo entre cerrados de partes blandas pueden con-
primer y 2º metacarpianos. tundir el nervio o comprimirlo por un
hematoma. También se puede lesionar en
el contexto de grandes traumatismos con
lesiones ósteo-articulares y vásculo-ner-
viosas asociadas. Las causas iatrogénicas,
ya sea durante las maniobras de reducción
y osteosíntesis de las fracturas humerales,
o bien en los abordajes quirúrgicos de tu-
mores del brazo, también pueden lesionar

Húmero

Fascia
posterior
Fascia
Septo anterior
intermuscular
Nervio
radial

Fig. 3. Fig. 4.

108
Lesiones en el brazo (nervio radial)

este tronco nervioso. Por último las lesio- El prototipo de fractura que lesiona el
nes por inyección o la parálisis del “sába- nervio radial es la descrita por Holstein
do noche” por compresión mantenida en Lewis, en la que el pico del fragmento
el brazo son otros mecanismos de lesión distal, desplazado hacia proximal y radial,
del nervio radial. lesiona el nervio radial cuando atraviesa
el tabique intermuscular externo. En los
Fractura de húmero con trabajos de Ekholm la relación entre esta
parálisis radial asociada fractura y la parálisis radial fue del 22%,
Las fracturas de la diáfisis humeral son frente al 8 % con otros trazos de fractura.
la causa más frecuente de lesión del ner- Otros autores no han encontrado tal re-
vio radial, e inversamente este nervio es lación (Fig. 5).
el tronco nervioso del miembro superior
que más se lesiona en las fracturas de
húmero (70%) frente a 8% del mediano
y 22% del cubital. La incidencia de pará-
lisis radial primaria tras fractura de hú-
mero varía entre el 1.8 y el 18% con una
media del 10%. Esta relación se explica
teniendo en cuenta el íntimo contacto
del nervio con el húmero aproximada-
mente 6.3 cm desde 17 a 11 cm proximal
al epicóndilo, como describe Carlan en
sus trabajos (Fig. 3).
El nervio puede verse lesionado por el
propio mecanismo que causó la fractura,
por los fragmentos óseos, fundamental-
mente en fracturas espiroideas y oblicuas,
y en las maniobras de reducción.
Topográficamente es más frecuente en
fracturas de tercio medio y distal del hú-
mero, con una incidencia del 33 y 50%
respectivamente. En el tercio distal del
húmero el nervio está en total contacto
con la diáfisis humeral y además está fi-
jado por el tabique intermuscular externo,
por tanto es justo este punto, en que el
nervio atraviesa el tabique intermuscular,
la zona de mayor vulnerabilidad (Fig. 4).
En el tercio medio el nervio no está tan
fijo y hay mayor cantidad de tejidos blan-
dos interpuestos por lo que las lesiones a
este nivel suelen tratarse de neuroapraxias. Fig. 5.

109
Antonio Jiménez Guardeño

Por lo que respecta a la cronología de Parálisis radial primaria


aparición de la parálisis en relación a la Es aquella que ya está presente en la
fractura se distingue: exploración en el momento de la fractura
(Figs. 6, 7 y 8).
En la literatura existen diferentes pautas
de tratamiento ante una fractura de húme-
ro con parálisis radial primaria:
Unos autores, como Sin, defienden la ex-
ploración precoz del nervio independien-
temente del trazo de fractura y basan su
actuación en varios puntos:
• Técnicamente debe ser una cirugía más
fácil y segura.
• Se puede determinar, de entrada, el esta-
do del nervio (intacto, atrapado en el foco,
Fig. 6. atravesado por un fragmento, lacerado…)
y la extensión de la lesión, lo que facilita
tomar decisiones de reparación.
• Se puede estabilizar la fractura con lo
que se disminuye el riesgo de lesiones
nerviosas secundarias, y
• Se podría realizar mejor el acortamiento
del húmero si fuese necesario para la re-
paración nerviosa.
Otros como Naoman abogan por la ex-
ploración nerviosa precoz en función de
la localización y trazo de la fractura y del
estado de las partes blandas, recomendan-
Fig. 7. do la exploración precoz del nervio en:
fracturas abiertas, fracturas del tercio distal
fundamentalmente oblicuas, fractura de
Holstein-Lewis y parálisis post-reducción.
La tercera corriente con Shaw, Sakellari-
des y otros, sostiene que el nervio se debe
explorar a las 6-8 semanas y ofrece las si-
guientes razones:
• Todos sus pacientes mostraban algún
signo de recuperación antes del 2º mes
por lo que se evitarían intervenciones
innecesarias.
• No hay interferencia con la consolida-
Fig. 8. ción de la fractura

110
Lesiones en el brazo (nervio radial)

• El período de espera permite al neuro- rradialis (2 cm proximal al epicóndilo), y


ma delimitarse, a la vez que este periodo teniendo en cuenta que la velocidad de
es lo suficientemente corto para que no recuperación nerviosa es de 1mm/día,
haya gran retracción nerviosa. con la latencia antes mencionada, para las
El cuarto grupo, entre cuyos seguidores fracturas de húmero la recuperación puede
se encuentra Green, defienden la observa- tardar en evidenciarse 5 - 6 meses.
ción de la parálisis y la exploración tardía En casos de codo flotante, la fractura
no antes del 4º o 5º mes, basándose en que desplazada que no se reduce por manio-
la velocidad de regeneración nerviosa es de bras cerradas y por tanto necesita reduc-
1mm por día y puesto que existe una la- ción abierta y osteosíntesis interna, fractu-
tencia inicial de 30 días, para las fracturas ras con lesión vascular y fracturas abiertas,
de tercio medio de húmero se tardaría en- exploramos el nervio en el mismo acto
tre 90 y 120 días para recoger inervación quirúrgico porque pensamos que aunque
del braquiorradialis o los extensores radia- la mayoría se recuperan, puede haber casos
les del carpo por lo que es lógico esperar de nervios englobados en el foco y lacera-
al menos ese tiempo antes de proceder a dos, la cirugía secundaria del nervio sería
la exploración quirúrgica. Con este enfo- peor, evitamos lesionarlo con el material
que se evitan intervenciones innecesarias. de osteosíntesis, y además la exploración
En la serie de Ekholm el 89% consiguen precoz no añade más dificultad a la reduc-
recuperación completa sin tratamiento. ción y osteosíntesis de la fractura.
En los trabajos de Shao, en la exploración En las fracturas de húmero subsidiarias
de rutina, solo 12% de los nervios estaba de reducción abierta asociadas a parálisis
lesionado y no se ha demostrado mejor radial primaria preferimos como método
resultado en exploración precoz que en de osteosíntesis la placa; creemos que no es
reconstrucciones tardías. buena indicación el clavo sin apertura del
Nuestra actitud ante una parálisis radial foco, por el riesgo de agravar la lesión si el
primaria es la siguiente: nervio está englobado en los fragmentos,
Si nos encontramos ante un paciente con o lesionarlo por los tornillos de bloqueo,
fractura susceptible de tratamiento con- no obstante si la fractura por su trazo es
servador, o incluso que pueda ser tratado indicación de clavo ( fracturas transversas
con osteosíntesis percutánea, más aún si se en tercio medio), podemos colocarlo con
trata de una persona mayor optamos por apertura del foco con exposición y aisla-
la observación de la parálisis con control miento del nervio y “mini-open” en los
clínico y electromiográfico. Si no se ini- tornillos de bloqueo distal para evitar una
cia recuperación, hacia el 5º- 6º mes pro- lesión nerviosa sobreañadida.
gramamos la exploración quirúrgica del En nuestra revisión de 150 fracturas de
nervio. Actuamos así teniendo en cuenta húmero, en 15 casos (10%) existía paráli-
las observaciones clínicas de Seddon, se- sis radial primaria, en 10 ( 66,6% ) el tra-
gún las cuales se puede calcular el tiempo tamiento fue ortopédico o percutáneo sin
aproximado de recuperación midiendo en exploración del nervio y en 5 (33,3%) fue
RX la distancia entre la fractura y donde quirúrgico con exploración del nervio. De
estaría la inervación del músculo braquio- los casos explorados en 2 el nervio estaba

111
Antonio Jiménez Guardeño

seccionado y en 3 en continuidad. De los 10 del tríceps, otros usan modificación de


casos en que no se exploró el nervio 9 pre- los abordajes y material de osteosíntesis y
sentaron recuperación total y de los tratados otros transponen el nervio asociado a la
quirúrgicamente en 3 hubo recuperación cirugía de la fractura.
total, 1 necesito transferencias y en otro Ante una parálisis radial secundaria existe
persiste una hipoestesia leve (Gráfico 1). controversia de cuando es el mejor momen-
to para explorar el nervio. Para algunos au-
Parálisis radial secundaria tores como Kawsny o Vansteenkiste, es in-
Es aquella que no está presente en el mo- dicación absoluta de exploración inmediata
mento de la primera exploración y aparece por el riesgo de haberse lesionado durante la
después, o durante el tratamiento. Su inci- reducción o al colocar la osteosíntesis, para
dencia en la literatura es del 5.1 %. Puede otros como Shah o Wand, en cuya serie de
aparecer después de las maniobras de reduc- 45 parálisis postoperatorias, exploraron 5 y
ción, incluso con tratamiento conservador, en todos el nervio estaba en continuidad y
tras el tratamiento quirúrgico y por englo- las 45 recuperaron la función, no hay in-
bamiento en el callo de fractura o tardía. dicación de exploración de urgencia. Los
Para minimizar el riesgo de lesión del que optan por esperar lo hacen con control
nervio, unos lo intentan localizar preope- clínico, progresión del signo de Tinel y con-
ratoriamente definiendo medidas radio- troles EMG. En este sentido pueden tener
gráficas o en relación con la aponeurosis interés las aportaciones recientes de algunos

FRACTURAS DE HÚMERO
150 CASOS

PARALISIS RADIAL PRIMARIA


15 CASOS (10%)

TRATAMIENTO ORTOPEDICO TRATAMIENTO QUIRURGICO + EXPLORACION DEL NERVIO


10 CASOS ( 66.6 %) 5 CASOS (33.3%)

SECCIONADO EN CONTINUIDAD
2 CASOS 3 CASOS

RECUPERACIÓN HIPOESTESIA RECUPERACIÓN HIPOESTESIA


TOTAL LEVE TOTAL LEVE
9 CASOS 1 CASO 3 CASOS 1 CASO

TRANSFERENCIAS
1 CASO
Gráfico 1: Parálisis radial primaria

112
Lesiones en el brazo (nervio radial)

autores que realizan estudios con ultrasoni- condiciones adversas, como mal estado
dos en la parálisis radial para determinar el general del paciente, se puede diferir la
estado del nervio. neurorrafia de 3 a 7 días, incluso 18 días
Nosotros, en la mayor parte de los ca-
sos, preferimos esperar con control clínico,
EMG y optamos por explorar el nervio si
no hay recuperación a partir del 4º mes.
Ahora bien si se trata de un paciente joven,
la reducción de la fractura no fue anatómica,
estaba localizada en el canal de torsión, no
se identificó el nervio radial en el momento
de la cirugía o usamos un clavo intramedu-
lar con bloqueo creemos que está justificada
la exploración inmediata (Figs. 9,10 y 11).
En nuestra serie de 150 fracturas revi-
sadas, en 8 (5.3 %) ocurrió parálisis radial Fig. 9.
secundaria, 4 (50%) habían sido tratadas
con placa, 1 (12.5 %) con clavo y 3 (33,5
%) con agujas intramedulares. Seis pacien-
tes (75%) recuperaron al 6º mes y en 2 no
hubo recuperación y fueron intervenidas
encontrando un caso con atrapamiento
nervioso por el cerrojo distal del clavo y
otro por la placa (Gráfico 2).

Heridas con lesión del


nervio radial
En las heridas del brazo el nervio radial
es el tercero en frecuencia en lesionarse Fig. 10.
tras el mediano y el cubital.
Puede tratarse de heridas por arma blan-
ca más frecuentes en nuestro medio, heri-
das en el contexto de accidentes de tráfico
o heridas por arma de fuego propias de los
conflictos bélicos.
La actitud terapéutica de la mayoría
de los autores, con la que coincidimos,
es la exploración y reparación inmediata
del nervio lesionado en las primeras seis
u ocho horas, preferiblemente con sutura
directa o en el caso de pérdida de sustan-
cia mediante injerto nervioso. En caso de Fig. 11.

113
Antonio Jiménez Guardeño

FRACTURAS DE HÚMERO
150 CASOS

PARALISIS RADIAL SECUNDARIA


8 CASOS (5,3%)

OSTEOSÍNTESIS CON PLACA OSTEOSÍNTESIS CON CLAVO OSTEOSÍNTESIS PERCUTÁNEA


4 CASOS (50%) 1 CASO (12,5%) 3 CASOS (33,5%)

RECUPERACIÓN TOTAL 6º MES NO RECUPERACIÓN


6 CASOS (75%) 2 CASOS (25%)

ATRAPAMIENTO ATRAPAMIENTO
PLACA CERROJO CLAVO
1 CASO 1 CASO

Gráfico 2: Parálisis radial secundaria

como postula Kleinert. Si se trata de heri- Tratamiento


das sucias por explosión, con gran atrición El tratamiento conservador va destinado
de tejidos blandos y cuerpos extraños múl- a mantener el arco de movimiento pasivo
tiples lo más adecuado es desbridar, marcar completo de todas las articulaciones y la
los cabos nerviosos y suturar entre la 3ª y prevención de contracturas con fisioterapia
la 6ª semana cuando hayan cicatrizado los y mediante ortesis dinámicas o estáticas.
tejidos blandos, aunque según algunos au- En el tratamiento quirúrgico hay que
tores este tiempo se puede prolongar hasta separar por un lado la cirugía nerviosa
el tercer mes (Figs. 12, 13 y 14). (neurolisis, sutura, injerto y transferencias

Fig. 12. Fig. 13.

114
Lesiones en el brazo (nervio radial)

Fig. 14. Fig. 15.

nerviosas) frente a la cirugía paliativa de para algunos autores se pueden realizar su-
las transposiciones tendinosas. Existen al- tura nerviosa directa en defectos de hasta 5
gunos métodos adyuvantes como el acor- cm movilizando el tronco nervioso. En los
tamiento humeral. “gap” mayores de 5 o 6 cm se obtienen me-
jores resultados con el injerto nervioso, no
Cirugía nerviosa directa obstante el pronóstico empeora en pérdi-
En relación al momento de la cirugía los das de sustancia mayores a 10 cm (Fig. 15).
mejores resultados son para reparaciones En relación a las transferencias nerviosas
realizadas antes de 6º mes. Según los traba- distales, MacKinnon, aplicando los princi-
jos de Sunderland el pronóstico empeora en pios del plexo braquial describió la trans-
reparaciones después de los 12 meses. Za- ferencia de ramas del mediano superfluas
chary concluye que aunque se puede repa- destinadas al flexor superficial de los dedos
rar con éxito entre los 9 y los 16 meses, los hasta el nervio interóseo posterior cuando
plazos anteriores ofrecen mejor resultado. las condiciones para la reparación del ner-
La neurolisis está indicada en las lesio- vio eran adversas (Figs. 16 y 17).
nes sin solución de continuidad. La sutura Como resultados del tratamiento qui-
se recomienda para lesiones con pérdida rúrgico los diferentes autores llegan a las
de sustancia menor o igual a 2cm aunque siguientes conclusiones:

Fig. 16. Fig. 17.

115
Antonio Jiménez Guardeño

• Buen resultado si la extensión de la mu- Burkhalter describió una transferencia


ñeca consigue una fuerza de M4 y los precoz del pronator teres al extensor car-
dedos más de M3. pi radialis brevis al mismo tiempo de la
• Mejor resultado en lesiones más distales, reparación nerviosa, con la idea de servir
puesto que están más cerca los efectores. de ferulización interna que proporcionase
• Los resultados de la sutura son mejores extensión de la muñeca, además actuaría
que los del injerto. como ayuda después de la reinervación y
• Mejor resultado en heridas limpias que como sustituto en los casos de mal resul-
en contusiones y fracturas. tado de la reparación nerviosa.
• Mal resultado en gap mayores de 10 cm. En la actualidad existen tres corrientes
en la literatura acerca de las combinacio-
Cirugía paliativa: nes para restaurar las distintas funciones
transferencias tendinosas abolidas por la lesión nerviosa del radial:
El objetivo que se persigue es conseguir • Transferencias del cubital anterior: se
la extensión de la muñeca, restablecer ex- transfiere pronador redondo a segun-
tensión de las metacarpo falángicas de los do radial, cubital anterior a extensores
dedos, y la extensión y abducción del pulgar. de los dedos y palmar menor a extensor
La mayor parte de las lesiones del nervio largo del pulgar.
radial ocurren distalmente a la salida del • Transferencia del palmar mayor (Starr,
tríceps, por lo que son poco frecuentes las Brand…): Transfiere pronador redondo
transferencias para restaurar la función de a segundo radial, palmar mayor a exten-
este músculo. La sensibilidad no hace falta sores de los dedos y palmar menor a ex-
restaurarla porque su déficit es poco inva- tensor largo del pulgar.
lidante y porque a veces existen conexiones • Transferencia del flexor superficial (Bo-
con otros troncos nerviosos, como el nervio yes, Chuinard…): Pronador redondo a
cutáneo lateral antebraquial, que suplen el los dos radiales, Flexor superficial del
déficit del radial. tercero a extensor común, flexor superfi-
Se indican: cial del cuarto a extensor largo del pul-
• Primariamente en pérdidas de sustancia gar y palmar mayor a abductor largo y
>12 cm, edad avanzada y trofismo local extensor corto del pulgar.
inadecuado. Parece ser que la combinación más utili-
• Fracaso de la reparación nerviosa des- zada en la actualidad es la combinación del
pués de esperar el intervalo de tiempo, Palmar Mayor, puesto que como defiende
según la cifra de Seddon, y Boyes es preferible conservar el cubital
• En lesiones tardías (>12 meses). anterior como flexor de la muñeca debido
Por otro lado, no existe ningún límite de a que el eje normal de movimiento de la
tiempo de demora para realizar una trans- muñeca se dirige de dorso-radial a volar-
ferencia. Brodman publicó transferencias cubital, además éste es el estabilizador
tendinosas satisfactorias después de 24 cubital más importante de la muñeca. Es
años, aunque describió la denominada de- evidente que en casos en los que la lesión
generación gelatinosa que puede poner en esté distal a su división en el codo no es
peligro la eficacia de la transposición. necesario transferir el pronador redondo,

116
Lesiones en el brazo (nervio radial)

puesto que la extensión de la muñeca está Agradecimientos


conservada ya que no se afecta la inerva- A la Dra. Mª Pilar Pradilla Gordillo, por
ción de los músculos primer y segundo donación de gran parte de material icono-
radial (Figs. 18, 19 y 20). gráfico.

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119
Miguel del Cerro Gutiérrez

Capítulo 12

Lesiones en el codo (nervios


mediano, cubital y radial)
Miguel del Cerro Gutiérrez *, Fernando Corella
Montoya*/**, M Ocampos Hernández*/**, y T. Vázquez***
* Unidad de Cirugía de la mano. Hospital Beata María Ana (Madrid)
** Unidad de Cirugía de la mano, Servicio de COT. Hospital Infanta
Leonor (Madrid)
*** Departamento de Anatomía y Embriología Humana I. Facultad de
Medicina, Universidad Complutense (Madrid)

Correspondencia: migueldelcerro@yahoo.es

Palabras claves: radial, median, cubital nerve palsy, elbow

Nota de los autores Palmar Menor es el Palmar Largo en lu-


La terminología anatómica ha cam- gar del Palmaris Longus, etc… Dada la
biado en los últimos años. La aceptada confusión que puede crearse por la falta
actualmente (International Anatomical de costumbre, hemos utilizado esta nueva
Terminology. IFAA & FCAT. Paname- terminología poniendo entre paréntesis
ricana ed. 2001), ha modificado términos la anterior. No obstante creemos que es
como cubital por ulnar, humeral por bra- muy importante recomendar que comen-
quial y castellanizado todos los latinos: cemos a acostumbrarnos a estas nuevas
El Supinador Largo o Braquiorradialis es denominaciones que, en poco tiempo, se
actualmente el músculo braquiorradial, el acabarán imponiendo.

120
Lesiones en el codo (nervios mediano, cubital y radial)

Introducción Anatomía y ramas sensitivas


Son múltiples las lesiones nerviosas que En la cara anterior del codo, plano supra-
pueden producirse en un traumatismo del poneurótico, podemos distinguir (Fig. 1) el
codo, tanto por el mecanismo como por la nervio cutáneo antebraquial medial (CAM),
iatrogenia en el manejo manual y quirúrgi- rama directa del cordón medial del plexo
co de las mismas. Se calcula que alrededor braquial, la rama sensitiva del nervio mus-
del 80-90% de las lesiones nerviosas de la culocutáneo o nervio cutáneo antebraquial
extremidad superior son causadas por frac- lateral (CAL) y la rama sensitiva del ner-
turas1. En los niños, la incidencia de lesión vio radial.
neurológica en las fracturas del codo varía El CAM puede lesionarse en el abordaje
entre un 5% y un 20%2. del nervio ulnar para su transposición, pu-
No es objeto de este trabajo el diagnós- diendo ser una causa de neuromas doloro-
tico, pronóstico y su tratamiento, sino des- sos. El CAL y la rama sensitiva del radial
cribir, basándonos en la disección anató- pueden lesionarse al realizar un aborda-
mica, las distintas estructuras que pueden je anterior (cirugía del tendón bicipital,
lesionarse en función del traumatismo y/o abordaje anterior del nervio radial…). Es
del abordaje quirúrgico que hagamos del poco frecuente que estas ramas sensitivas
nervio afectado. queden lesionadas de una manera directa
Así como las lesiones de las ramas sen- por un traumatismo en la región del codo.
sitivas son más frecuentes y tienen menos En un plano más profundo, separando
consecuencias, al realizar las incisiones y la la expansión aponeurótica del bíceps (la-
disección, los “grandes nervios” alrededor certus fibrosus) visualizaremos la arteria
del codo (radial, mediano y ulnar-cubital) braquial (humeral) y el nervio mediano
pueden lesionarse de distintas maneras (Fig. 2) y si elevamos el músculo braquio-
según el tipo de fractura o luxación, la rradial (Fig. 3) observaremos al nervio
energía del traumatismo y otros muchos radial introduciéndose en la arcada de
factores del momento del accidente. Fröhse, dando antes la rama sensitiva del
borde externo del antebrazo.
Por la cara medial, el nervio ulnar se in-
troduce en la arcada del flexor ulnar del

Fig. 1. vb: Vena Basílica


cam: Cutáneo Antebraquial Medial (CAM)
nr: Nervio radial (rama sensitiva)
mc: Nervio músculo cutáneo (rama sensitiva) o
cutáneo antebraquial lateral (CAL) Fig. 2. Lacertus fibroso elevado

121
Miguel del Cerro Gutiérrez

carpo (arcada de Osborne) cruzada ante-


riormente por el CAM en un punto que
varía entre 4 cm distal y 6 cm proximal a
la epitróclea3 (Fig. 4).
Los tres grandes nervios salen del ante-
brazo por tres arcadas musculares distintas:
por la arcada de Fröhse el nervio radial, por
la del pronador el nervio mediano y por
la arcada de Osborne el nervio ulnar. Las
lesiones más específicas que pueden pre-
Fig. 3. AH: Arteria Humeral sentar cada uno de ellos en el curso de los
BB: Bíceps Braquial
BR: Braquioradial
traumatismos del codo, son las siguientes:
NM: Nervio Mediano
NR: Nervio Radial Nervio Radial
La incidencia de las lesiones del nervio
radial en relación con las fracturas de hú-
mero es conocida por todos y no es el tema
que nos ocupa. Este nervio, rama del cordón
posterior, rodea el húmero en el surco radial
y alcanza el codo pegado al septo intermus-
cular lateral, quedando situado profundo al
músculo braquiorradial. A la altura de la ca-
beza radial da una rama profunda motora
(nervio interóseo posterior, NIP) que saldrá
Fig. 4. AR: Arteria Radial del codo por la arcada del supinador (Fröh-
N.C.: Nervio Cubital
VB: Vena Basílica se) y una rama superficial sensitiva, que irá
cam: Cutáneo Antebraquial Medial profunda al braquiorradial y superficial al

Fig. 5. RSR: Rama sensitiva del N. Radial


NIP: Nervio Interóseo posterior
AF: Arcada de Fröhse Fig. 6. Abordaje anterior de Henry.

122
Lesiones en el codo (nervios mediano, cubital y radial)

extensor largo del carpo (Fig. 5). El suelo


de este túnel está constituido por la cápsula
anterior de la articulación del codo por lo
que, todos los traumatismos que afecten de
una manera u otra a esta zona de la cápsu-
la, pueden lesionar el NIP al que podremos
abordar por una vía anterior (Henry, Fig. 6)
o una posterior (Thompson, fig. 7).
Una de las causas más frecuentes de le-
sión del nervio interóseo posterior son las
fracturas-luxaciones de Monteggia con
Fig. 7. Abordaje posterior de Thompson
ECD: Extensor Común desplazamiento anterior de la cabeza ra-
S: Supinador dial (tipo I de Bado, fig. 8).

Fig. 8. Fr-luxación de
Monteggia, tipo I de
Bado

Fig. 9. 1- Tríceps
2- Arcada de Struthers
3- Septo Intermuscular
Medial
4- Canal Epitrócleo-
olecraniano
5- Arcada de Osborne
NC- Nervio Cubital

123
Miguel del Cerro Gutiérrez

1 2

Fig. 10. Zonas más frecuentes de


compresión del nervio cubital.
1. Arcada de Struthers.
2. Canal epitrócleo olecraniano.
3. Arcada de Osborne.

Nervio Ulnar (Cubital)


Es una rama del cordón medial que pre-
senta diversas zonas de compresión fre-
cuentes (Fig. 9)4. Aunque puede lesionarse
en algunas fracturas y luxaciones y algunos
traumatismos no muy severos, pueden pro-
vocar adherencias y compresiones en las zo-
nas más conocidas (Fig. 10); es más habitual
que quede englobado en el tejido cicatricial
postquirúrgico (fig. 11) o lesionarse durante
las manipulaciones de las fracturas5.
El 14% de las luxaciones de codo pre-
sentan neurapraxias cubitales6 y en los
niños, alrededor del 60% de fracturas
Fig. 11. Nervio cubital englobado en tejido
cicatricial una vez retirada la placa de una desplazadas de la epitróclea presentan
fractura supracondílea de codo. sintomatología ulnar (cubital).

124
Lesiones en el codo (nervios mediano, cubital y radial)

También están descritas las lesiones di- día menos frecuente, desgraciadamente) y
rectas del nervio durante las artroscopias las de tratamiento quirúrgico.
de codo7 y en la implantación de una pró- Si hemos decidido tratar una lesión o
tesis de esta articulación5 por lo que se re- fractura ortopédicamente y tiene asociada
comienda realizar siempre una transposi- una lesión nerviosa, realizaremos controles
ción del mismo al realizar una artroplastia. clínicos y EMG periódicos actuando sobre
la lesión nerviosa en función de los resul-
Nervio Mediano tados del EMG y de la evolución clínica.
Alcanza la articulación del codo cubierto Ante una recuperación progresiva de la
por el lacertus fibrosus y lateral a la arteria movilidad y sensibilidad, con mejoría elec-
braquial (Figs. 2 y 3). Se introduce entre las tromiográfica, creemos que se debe esperar
dos cabezas del pronador redondo dando en previsión de una recuperación completa.
previamente, por su borde radial, la rama Si no se inicia la recuperación o existe un
interósea anterior, el nervio motor del flexor estancamiento en la evolución clínica y elec-
largo del pulgar, el del flexor profundo del tromiográfica, nuestra actitud es más agresi-
índice y el del pronador cuadrado (Fig. 12). va y realizamos una exploración quirúrgica
Las lesiones de este nervio, exclusivamente del nervio lesionado. Está muy discutido
motor, son casi siempre neurapraxias que se el momento en que debe hacerse. Aunque
resuelven espontáneamente8. Está indicada clásicamente se ha recomendado esperar a
su exploración de urgencia si se asocia a un los seis primeros meses para realizar una ex-
compromiso vascular en una fractura supra- ploración del nervio, en nuestra experiencia
condílea irreductible (Fig. 13)8. cuanto más precozmente abordemos a un
nervio lesionado que no muestra recupera-
Actitud ante una lesión del ción, más posibilidades tendrá de iniciar una
codo con lesión nerviosa pronta mejoría, por lo que nos parece más
Vamos a distinguir entre lesiones sus- correcto realizarlo durante los tres primeros
ceptibles de tratamiento ortopédico (cada meses posteriores a la lesión.

Fig. 12. NM: Nervio Mediano. Fig. 13. Fractura supracondilea con
NIA: nervio Interóseo Anterior. compromiso vasculo nervioso.

125
Miguel del Cerro Gutiérrez

Si la lesión o fractura es susceptible de Bibliografía


tratamiento abierto, reducción, síntesis, 1. Nelson AJ y cols. Traumatic nerves
etc… realizaremos una exploración ner- injuries about the elbow. Othop Clin
viosa en el mismo acto quirúrgico. North Am. 30: 991-994, 1999
Otro tema es la aparición de una lesión 2. Amillo S, Mora G. Surgical manage-
nerviosa, motora habitualmente, posterior ment of neural injuries associated with
al acto quirúrgico y que el paciente no te- elbow fractures in children. J Pediatr
nía previamente: Ante esa situación, rea- Orthop. 19: 573-577, 1999
lizamos una revisión quirúrgica inmediata 3. Masear VR, Meyer RD, Pichora DR.
del nervio. Las consecuencias que puede Surgical anatomy of the medial ante-
tener la espera, en la evolución de una le- brachial cutaneous nerve. J Hand Surg
sión nerviosa que ha aparecido tras la ciru- 14: 267-271, 1989
gía y que no existía antes, no se compensan 4. Del Cerro M, Rios Luna A. Com-
con los resultados finales. presión del nervio cubital en el codo.
Sdm. del túnel cubital. Libro: “NEU-
Conclusiones ROPATÍAS COMPRESIVAS Y DE
Se han descrito los principales nervios ATRAPAMIENTO” Ed.: “Momento
tanto motores como sensitivos que pueden Medico Iberoamericana S.L. 1ª Ed.
quedar lesionados en el curso de un trau- 107-118, 2007
matismo de codo y/o su abordaje quirúrgi- 5. Patterson SD, Bain GI, Metha JA.
co, basándonos en la disección anatómica. Surgical approaches to the elbow. Clin
Su diagnóstico, tratamiento y pronóstico Orthop. 370: 19-33, 2000
corresponde a los demás ponentes. No- 6. Ristic S, Strauch RJ, Rosenwaser MP.
sotros, nos hemos limitado a describir de The assesment and treatment of nerve
una manera muy concreta, las zonas donde dysfunction after trauma around the
pueden lesionarse estos nervios en función elbow. Clin Orthop. 370: 138-153,
de su localización anatómica ya que pen- 2000
samos que, un perfecto conocimiento de 7. Kelly EW, Morrey BF, O,Driscoll SW.
la anatomía, es fundamental para poder Complications of elbow arthroscopy. J
y saber tratar tanto las lesiones como las Bone Joint Surg 83: 25-34, 2001
complicaciones que pueden suceder en el 8. Cramer KE, Green NE, DEVITO
curso de todo tipo de traumatismos tanto DP. Incidence of anterior interosseus
graves como banales, ya que estos últimos nerve palsy in supracondilar humerus
se asocian, en ocasiones, a lesiones motoras fractures in children. J Pediatr Orthop.
y/o sensitivas de difícil comprensión si no 13: 502-505, 1993
se conoce su anatomía.

126
Lesiones en antebrazo

Capítulo 13

Lesiones en antebrazo
Francisco Najarro Cid
Unidad de Miembro superior. Hospital Fremap (Sevilla)

Correspondencia: paconajarro@gmail.com

Palabras claves: nerve injury, arcade of Frohse, radial nerve, Wattenberg syndrome

S
iguiendo con las lesiones nerviosas, alemán Frohse, de la arcada que lleva su
nos centramos en aquellas que se nombre en 1908.
producen en la zona del antebrazo Ya en 1955 se describe el llamado “sín-
en relación con el Nervio Radial. drome pronador radial”24 y Capener en
Los encontramos con mucha frecuen- 1964 describe el borde superior del supi-
cia en patologías postraumáticas siendo nador como un verdadero ligamento anu-
mucho menos frecuentes en lesiones sin lar que puede comprimir el nervio a ese
relación con traumatismos. nivel4. En 1972 Rules y Maudsley descri-
Dentro de los traumatismos, debemos ben este tipo de lesiones en algunas formas
incluir la posibilidad de lesionarlo en resistentes de “codo de tenis” que explica-
nuestras cirugías y debemos tenerlo muy ría la posible mejoría con la liberación28.
en cuenta para intentar evitar su lesión en Más hacia distal se describe el atrapa-
todo momento. miento de la rama sensitiva en el antebrazo
Históricamente la primera lesión aislada por Matzdoffe en 192623 aunque el que le
del Nervio IOP se describe en 1905 por da nombre al síndrome como tal fue War-
Guillain10 aunque queda para la Historia temberg40 que describe su atrapamiento
la descripción realizada por el anatomista como una meralgia parestésica en 1932.

127
Francisco Najarro Cid

Se trata por tanto de una patología todas las posibilidades que tenemos en el
complicada por la complejidad de su ana- tratamiento de esta patología.
tomía; en toda la literatura el tratamiento
es discutido tanto en cuanto al momento Anatomía
de realizarlo como en las las posibles vías Anatómicamente el nervio radial atra-
de abordaje. Intentaremos recoger todas viesa la zona del codo en dirección a la
las posibles opciones y aportar claridad a zona anterior de la cabeza y el cuello del
radio, y tras atravesar el musculo supina-
dor (previamente sale la rama sensitiva) se
transforma en Nervio interóseo posterior.
Éste, al salir de la masa del supinador, da
todas las ramas musculares en un trayecto
muy corto. La distribución de ramas está
descrita en diferentes trabajos aunque hay
una variabilidad pequeña8, 29 (Figs. 1 y 2).
En todo este trayecto, el nervio atraviesa
un verdadero túnel27, que está formado por:
• Suelo: cápsula articular y haz profundo
del supinador en la zona más distal

Fig. 1.

Posterior Interosseous Nerve


Branches Distribution

First (recurrent) Extensor digitorum communis


Second Extensor digitorum
communis (middle third)
Third Extensor carpi ulnaris
Fourth Extensor digiti minimi
Fifth
Medial Extensor pollicis longus
Extensor Indicis proprius
Lateral Extensor pollicis longus
Extensor pollicis brevis
wrist capsule
Sixth
First Extensor pollicis brevis
Abductor pollicis longus
Second Abductor pollicis longus
Third (recurrent) Supinator

Fig. 2. Fig. 3.

128
Lesiones en antebrazo

• Techo: en la zona proximal el braquio- Las lesiones del Túnel radial dan lugar,
radialis y el braquial anterior, posterior- a veces, a una clínica que se confunde con
mente el Extensor carpi radialis brevis una epicondilalgia y en ocasiones, no po-
y por último el haz superficial del su- demos llegar al diagnóstico diferencial
pinador. hasta realizar una infiltración de la zona
Como vemos en la Fig. 3, para visualizar del nervio6, 10. Este tipo de clínica aparece
el trayecto nervioso tenemos que seccionar cuando hay zonas de compresión altas o
el techo del túnel. bien compresiones en múltiples zonas.
En este trayecto todos los autores re- El atrapamiento de la propia rama sensi-
conocen que existen una serie de puntos tiva del nervio radial en el antebrazo puede
anatomicos de compresión: tener una zona de compresión alta o múl-
• Engrosamiento de la fascia en la arti- tiple, aunque la más típica es la más distal,
culación radio-humeral, descrito entre descrita por Watemberg y que se localiza
otros por Lister17. a unos 10 cm de la estiloides radial, donde
• Vasos de la arteria recurrente radial que a veces la rama atravesaba por un túnel del
atraviesa en profundidad la zona alta músculo Braquioradialis.
del túnel.
• El borde fibroso del ECRB. b) Motora Pura
• El borde proximal del supinador (Arca- Las formas de presentación pueden ser:
da de Frohse)4. • Como una parálisis completa con afec-
• El borde distal del supinador7, con la pre- tación proximal a la entrada del supina-
sencia de lesiones ocupantes de espacio. dor y afectando a todas las ramas mo-
• Compresión en múltiples localizacio- toras: ECD, EPI, EDQ, ECU, APL,
nes, que llevaría a algunos autores a la EPB, EPL, o bien
liberación completa del túnel en caso • Como una parálisis parcial, y a veces pro-
de patología16. gresiva, afectando muy frecuentemente a
Por otra parte la rama sensitiva, conti- los dedos más cubitales (4º y 5º) dando
núa primero en la profundidad hasta que lugar a una garra pseudocubital; dada la
atraviesa la fascia para hacerse subcutánea, lesión del extensor del pulgar, a veces, hay
aproximadamente a 10 cm de la estiloides que plantearse el diagnóstico diferencial
radial. Es en este trayecto, donde pasa de con lesiones del mismo (efecto tenodesis
ser submuscular a subcutánea, donde el en los casos de lesión nerviosa)5. La locali-
nervio se suele atrapar con más frecuencia. zación o progresión depende de la afecta-
ción de las diferentes ramas según el orden
Formas clínicas de salida, que ya recogimos en la fig. 2.
La patología se puede presentar de dos for-
mas principalmente, sensitiva y motora pura. Causas lesionales
Vamos a dividir las causas en cuatro
a) Sensitiva grandes grupos:
Son secundarias puras a compresiones
altas o bien, a compresión directa de la 1. Médicos
rama sensitiva en el antebrazo. Existen descritas en la literatura, cau-

129
Francisco Najarro Cid

sas como la Diabetes, que por su neuro- guir las diferentes opciones, cada una
patía pueden afectar a las ramas del ner- de ellas con sus pros y sus contras.
vio radial. Igualmente, se observan en el En primer lugar la doble vía, puesta al
Saturnismo42 y en las intoxicaciones con día por Morrey, y que en principio es la
Arsénico (medicamentos que contienen más segura en cuanto a posibles lesiones
arsénico). del nervio radial. Sin embargo, se han pu-
El tratamiento en estos casos debe ir blicado complicaciones nerviosas por el
orientado al tratamiento de la enfermedad aumento de la presión en el túnel radial
de base que mejorará el cuadro neurológico. debido a la pronación forzada necesaria
para este procedimiento20, e incluso pasar
2. Traumáticos el tendón por vía anómala lo que condi-
a) Heridas y lesiones abiertas, ciona una compresión directa del nervio22.
b) Lesiones nerviosas tras fracturas y La vía anterior, incisión única, nos
luxaciones, sobre todo las fracturas del obliga a una disección mucho más cui-
tercio proximal del Radio, las luxaciones dadosa por lo que las lesiones pueden ser
de radio y cubito, las fracturas-luxaciones más graves. Incluso, la perforación del
de Monteggia y las luxaciones inveteradas canal para la reinserción ha sido obje-
de la cabeza radial14, 32, 36, 37. to de estudio, de modo que la dirección
c) Lesiones nerviosas tras procedimien- ideal para evitar cualquier lesión nervio-
tos quirúrgicos. En este apartado, inclui- sa, debe ser perpendicular a 90º y con
mos las lesiones que podemos producir en: una desviación cubital21, 9.
• El tratamiento de las fracturas ra-
diales. Ante cirugía proximales por 3. Compresivos
traumatismos, la anatomía puede En este apartado incluimos:
variar3 por lo que hay que tener muy • Las malformaciones arterio-venosas,
claro la vía de abordaje12, seguir las principalmente en la zona proximal sobre
zonas de seguridad y las formas de las ramas recurrentes de la arteria radial.
protección que tenemos. Podemos • Lesiones articulares del codo, como las
intentar localizar el nervio y prote- artritis sépticas, la condromatosis sino-
gerlo durante la disección o simple- vial y la artritis reumatoidea, que con las
mente colocar el antebrazo en pro- zonas inflamatorias, pueden producir
nación, lo cual relaja el nervio y evita compresiones a este nivel41.
posibles lesiones18, 39. • Miositis osificante, a veces secundarias a ci-
• Artroscopias de codo, con lesiones rugía, traumatismos y fracturas a este nivel.
descritas en el portal antero-lateral11. • Lesiones ocupantes de espacio como tu-
• Prótesis de la cabeza radial, bien mores (lipomas33, 34) o quistes sinoviales15.
durante la resección de la cabeza y
colocación del implante13, 38 o bien 4. Idiopáticos
en las complicaciones tardías de las Es una patología que ha sido llamada
prótesis2. de diferentes formas aunque significando
• Las reinserciones del músculo bí- lo mismo; desde la parálisis Idiopática es-
ceps. En este tema, debemos distin- pontánea, parálisis en ausencia de trauma-

130
Lesiones en antebrazo

tismo, parálisis progresiva no traumática, El tratamiento conservador es también


parálisis progresiva del NIOP hasta neu- una opción en las lesiones traumáticas, tras
ritis del NIOP. la cirugía o no, siempre que se produzca
Debemos plantearnos su tratamiento una recuperación entre las 8 y 12 semanas.
aunque desconozcamos la causa directa Sin embargo, el tratamiento conservador
de los síntomas. debe estar contraindicado en las lesiones
ocupantes de espacio, en las lesiones por
Diagnóstico traumatismos y en los casos de dolor de
Para llegar al diagnóstico correcto en este larga evolución.
tipo de patologías, tendremos que valorar: Además de estas contraindicaciones,
• Exploración Clínica, valorando si se trata debemos tener presente que vamos a ob-
de una lesión sensitiva o hay una paráli- tener peores resultados en los casos deri-
sis motora y valorar los déficits por si nos vados del trabajo o como llaman los anglo-
orientan a la localización de la lesión. sajones “work compensation”35.
• Radiología, fundamental para la valora-
ción de las fracturas, control de las os- 2. Quirúrgico
teosíntesis que realizamos e incluso para Optaremos por el tratamiento cruento
valorar lesiones óseas, luxaciones invete- en casos de:
radas, calcificaciones, etc. • Fracaso del tratamiento conservador
• Ecografía y RNM, que nos permite • Neuritis espontáneas, ya que en ellas se
diagnosticar la existencia de malforma- demuestran curaciones inferiores al 21%
ciones y lesiones ocupantes de espacio. en el primer mes, por lo que no debemos
• EMG-ENG, útil en ocasiones, pero hay esperar mucho más para la liberación.
que partir de la base que en muchos pro- • Si no hay recuperación, al menos parcial,
cesos idiopáticos con clínica exclusiva- tras un mes, salvo en el caso de las lesio-
mente sensitiva, puede ser normal. nes tras cirugía, que como ya hemos in-
dicado, debemos esperar más allá del mes.
Tratamiento Una vez decidido el tratamiento debe-
mos plantearnos las posibles vías de abor-
1. Conservador daje y los procedimientos quirúrgicos que
Es básico, hay que hacer un reposo fun- debemos realizar.
cional con cabestrillo y tomar AINES, anti- a) Vías de abordaje
neuríticos, etc. Es el tratamiento de elección Son fundamentalmente tres, y que po-
en los casos en los que solo hay transtornos dremos combinar:
sensitivos, e incluye evitar los movimientos • Anterior o de “Henry” modificada (Fig. 4):
repetitivos, sobre todo de pronosupinación accedemos desde proximal al túnel y lle-
que pueden ser la causa del problema. gamos a la zona alta de la arcada liberando
Igualmente, en este capítulo, debemos todo desde proximal hasta la arcada distal
incluir aquellos problemas médicos que ya incluyendo los bordes musculares y las
valoramos, cuyo tratamiento debe ser con- posibles lesiones de los vasos recurrentes.
servador y orientado a la patología de base • Posterior o de “Thompson” (Fig. 5): rea-
(A. Reumatoide, Saturnismo etc). lizamos la liberación de distal a proxi-

131
Francisco Najarro Cid

mal localizando las ramas terminales y la combinación con procesos de “work


el borde inferior del supinador. Es la vía compensation” o con cuadros de Epicon-
indicada para las lesiones más distales. dilitis, el porcentaje de mejorías se queda
• Transmuscular a través del Braquiora- en el 40%19, 31.
dialis, que se plantea como alternativa, • Liberación y endoneurolisis, indicada en
aunque las más indicadas son las an- enfermos menores de 50 años y en los
teriores. que el atrapamiento tiene una duración
b) Procedimientos de menos de 7 meses26.
Podemos realizar: • Reconstrucción mediante suturas o in-
• Liberaciones nerviosas completas a lo jertos. Utilizamos para ello el antebra-
largo de todo el trayecto nervioso, o solo quial cutáneo interno o en caso de lesio-
en la zona correspondiente al túnel1, 30. nes más grandes el nervio safeno25.
Con la liberación se consiguen mejorías
de hasta el 86% en algunas series pero Conclusiones
como en otros tipos de tratamientos, Hemos repasado las lesiones del Nervio
radial a nivel del antebrazo. En nuestro
resumen, hemos dado importancia a la
complicada anatomía de esta localización,
y las múltiples zonas de lesión que pode-
mos encontrar.
Esto a su vez, produce una serie de
formas clínicas muy diversas y difíciles
de diagnosticar en ocasiones. Es además
una patología de múltiples orígenes, des-
tacando los traumatismos pero debiendo
Fig. 4. tener muy en cuenta los producidos por
nuestros propios actos quirúrgicos (iatro-
genias), debemos conocer las formas que
tenemos para su protección y por último,
las posibilidades de tratamiento tanto de
tipo conservador como quirúrgico, valo-
rando las posibles vías de abordaje y las
técnicas de reparación para conseguir
buenos resultados.
Teniendo presenta todos estos aspectos,
seremos capaces de identificar, prevenir y
en su caso tratar estas lesiones.

Fig. 5.

132
Lesiones en antebrazo

Bibliografía paralysis in an orchestra conductor


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135
Adolfo Galán Novella

Capítulo 14

Lesiones en la muñeca
Adolfo Galán Novella
Servicio de Traumatología y cirugía ortopédica. Hospital Universitario
Costa del Sol. Marbella (Málaga)

Correspondencia: adgano@hotmail.com

Palabras claves: Nerve fibre, nerve injury, median nerve, cubital nerve

Consideraciones anatómicas nerviosa. Es muy importante conservar o


Además de las características gene- restaurar el deslizamiento de los nervios
rales de cualquier nervio periférico, los periféricos, y prevenir su compresión o
que cruzan la muñeca (mediano y cubi- atrapamiento.
tal) tiene una peculiaridad: “Es donde el
deslizamiento longitudinal de los nervios Diagnóstico clínico
periféricos tiene mayor recorrido, en la zona Cuando un nervio ha dejado de funcio-
proximal al túnel carpiano”. El nervio nar y existe una herida en su trayecto, rea-
mediano puede deslizarse 15,5 mm lon- lizaremos el diagnóstico de sección ner-
gitudinalmente, y el cubital 14,8 mm. El viosa hasta que se demuestre lo contrario.
mesoneuro o paraneuro, estructura laxa La parálisis simpática es un signo seguro
de tejido conectivo con pedículos vascu- de interrupción de los axones. La piel es-
lares, es el que permite el deslizamien- tará roja y seca en el territorio que inerva
to normal del nervio. Si se lesiona, bien el nervio afectado.
por el traumatismo o por la intervención El dolor intenso indica un daño en la
quirúrgica, se comprometerá la función continuidad axonal, difícilmente compati-

136
Lesiones en la muñeca

ble con el diagnóstico de bloqueo de la con- sensitiva es cuidadosa tanto del dermatomo
ducción no degenerativo (neuroapraxia). afectado como de los que le rodean. (Fig. 1).
Unas abrasiones lineales en la piel son Exploración neurofisiológica:
indicativas de ruptura de estructuras axia- Tras la sección nerviosa, los axones pier-
les. El análisis de la fuerza que ha actuado den la capacidad para ser excitados y se
sobre la extremidad es muy importante interrumpe la transmisión neuromuscular.
para diagnosticar estas lesiones. La estimulación directa del nervio distal-
Signo de Tinel: mente al nivel de la lesión no producirá
El signo de Tinel debería reservarse para respuesta. Sin embargo, se mantendrá algo
la neuropatía traumática. Se percute lige- de conducción durante varios días después
ramente a lo largo del nervio afecto, desde de la sección nerviosa. Los hallazgos de
distal a proximal y al llegar al lugar de las estas investigaciones deben ser interpreta-
fibras en regeneración se produce dolor, dos con gran cuidado en los primeros 10 a
pinchazo o calambre. 14 días después de la sección de un nervio.
Un signo de Tinel positivo sobre una le- Los test electrodiagnósticos no pueden di-
sión aguda (primeras 24 h) indica ruptura ferenciar de forma fiable una neuroapraxia
o separación. de una degeneración walleriana en los pri-
Tras una reparación adecuada el signo meros días tras la lesión nerviosa.
de Tinel se mueve centrífugamente y es
más intenso que en el lugar de la sutura. Planificación quirúrgica
Si la reparación fracasa, seguirá siendo Aunque la reparación de los nervios me-
más intenso en el lugar de la sutura y no diano y cubital no debe demorarse, es ne-
progresará. cesario, antes de la intervención, asegurar
Inspección de la herida: que disponemos de un equipo quirúrgico
• Heridas limpias: Por cuchillo, cristal, con la experiencia y nivel necesarios, del
bisturí. Reparación directa. material apropiado microquirúrgico y de
• Heridas sucias: Fracturas abiertas, pro- un buen equipo de apoyo.
yectiles…Riesgo de sepsis. Asociación Como la primera reparación debe ser la
frecuente a lesión arterial. mejor reparación posible, no pasa nada si
• Lesiones por tracción cerrada: Peor pro- se demora la exploración y reparación qui-
nóstico. Amplia retracción de los nervios rúrgica 24-48h hasta que dispongamos de
seccionados y de los vasos. Considera-
ble daño longitudinal dentro del tronco
afectado.
Exploración neurológica:
Seguimos el sistema del Medical Re-
search Council que valora la fuerza mus-
cular de M0 a M5 y la sensitiva de S0 a S4.
Esta evaluación de la inervación se realiza
en todos los músculos distales al lugar de
lesión en ese mismo día y en exploraciones
subsiguientes. Igualmente la exploración Fig. 1. Dermatomos sensitivos.

137
Adolfo Galán Novella

las condiciones adecuadas, siempre que no


exista una lesión vascular o un síndrome
compartimental que obligue a la solución
urgente de estos problemas.
Una vez comenzamos la intervención la
exposición debe ser adecuada, identifican-
do todas las estructuras. Se debe resecar el
área nerviosa lesionada (Fig. 2 y 3).
Fig. 2. Exposición adecuada e identificación de
estructuras. ¿Sutura directa o injerto?
Es preferible la sutura termino terminal
siempre que el defecto tras la resección sea
pequeño, se necesite poca movilización del
nervio para cerrar dicho defecto, y la repara-
ción nerviosa quede sin tensión y sin exce-
siva flexión de las articulaciones adyacentes.
Probaremos a realizar una sutura epi-
neural (nailon 7/0) con una flexión máxi-
ma de la muñeca a 30º:
• Si se aproximan los cabos sin desgarrar
el epineuro y sin causar “blanqueamien-
Fig. 3. Contusión de nervio mediano con to” de los vasos epineurales, se puede su-
aspecto hemorrágico. La contusión nerviosa es
un factor de mal pronóstico.
turar definitivamente,
• pero si no es así, habrá que injertar.

Fig. 4. Las suturas del epineuro se aseguran


adecuadamente para una reparación potente.
La reparación se completará utilizando suturas
de nailon 9/0 a través del perineuro y epineuro.
Mediante este método se precisarán entre 18
y 25 suturas para reparar el nervio mediano de
un adulto en la muñeca. Reparación epineural:
suturas laterales con extremos largos de 8/0.
Reparación anterior y posterior con nailon 7/0.
(Tomado de edición en español de: Green’s Fig. 5. Sutura directa epiperineural. La sutura se
Operative Hand Surgery. David P. Green et al. realiza sin tensión en zona sana (después de la
2007 Marban Libros S.L. Madrid). sutura tendinosa).

138
Lesiones en la muñeca

• Primaria diferida (6-21 días): Siempre es


necesario realizar alguna resección, aun-
que sólo sea de 1 mm del muñón nervio-
so, incluso en los casos de sección limpia.
• Secundaria (a partir de las 3 semanas):
Supone la resección de un neuroma
proximalmente y de un glioma distal-
mente. Será preferible la realización de
Fig. 6. Bulbos terminales. Neuroma proximal y
glioma dista. (Tomado de edición en español un colgajo que reabrir una cicatriz cerra-
de: Green’s Operative Hand Surgery. David P. da. Se resecan los bulbos terminales (pal-
Green et al. 2007. Marban Libros S.L. Madrid). pación) y se realiza una sutura epineural
8/0 (Fig. 6).

Sutura directa Pegamento de fibrina


Los nervios mediano y cubital se seccio- Permite utilizar menos puntos de sutura.
nan a nivel de la muñeca habitualmente en Tenemos que evitar la inyección del pro-
“heridas limpias”. Es el caso ideal para las ducto en la línea de sutura.
suturas primarias.
La sutura directa puede ser de tres tipos Preparación del lecho
según el tiempo que transcurra desde la nervioso
lesión a la sutura: La preparación del lecho para la repara-
• Primaria: 0-5 días. Se retrae la adventi- ción del nervio es de la mayor importancia.
cia exponiendo el verdadero epineuro y El nervio no debe dejarse colocado fren-
pasando unas finas suturas a través del te a un tendón desnudo o sobre músculo
epineuro interno condensado y del peri- lacerado. Debe intentar cubrirse con tejido
neuro de los paquetes seleccionados. Los sinovial adyacente o con grasa no lesionada.
paquetes coincidentes se identifican por
su tamaño y por su posición en el nervio Cierre y cuidados
y se confrontarán uno con otro mediante postoperatorios
sutura perineural de nailon de 10/0. Fi- Tras la sutura se debe utilizar anestésico
nalmente el epineuro se asegura con otra local alrededor de los muñones proximales
sutura (Figs. 4 y 5). de nervios cubital y mediano (Tabla 1).

Inmovilización Inmovilización
(3 primeras semanas) (de 3ª a 6ª semana) A partir de la 6ª semana
Codo 90º Codo libre
Muñeca 30º Muñeca neutra-20ºextensión Flexión activa vigorosa contra
MTC-F 70º MTC-F 30º resistencia
IFP 30º IFP 30º Estiramiento pasivo suave
Mover IFD Mover IFD
Tabla 1.

139
Adolfo Galán Novella

Injertos nerviosos Aquiles. La rama comunicante que sale


Cuando es necesario la utilización de del nervio peroneo común es muy variable
injertos nerviosos el más comúnmente pero normalmente está presente.
usado es el nervio safeno externo. Es más También se puede utilizar el nervio cutá-
fácil identificar este nervio en la parte dis- neo antebraquial medial, que está en estrecha
tal de la incisión justo lateral al tendón de relación con las venas axilar y braquial. No
debe ser confundido con el nervio cubital.
Para suturar los injertos, estos deben co-
locarse de manera bastante libre. Se pasa
la sutura a través del epineuro del injerto y
a través del perineuro y del epineuro inter-
no condensado alrededor de los paquetes
individuales del propio tronco nervioso
(Figs. 7 a 9).
Existen otros métodos para intentar
restaurar la función como son el injerto
nervioso vascularizado, injerto de músculo
congelado-descongelado, tubulación (Fig.
10), transferencias nerviosas, neurotización
Fig. 7. Sutura de injerto. (Tomado de edición muscular directa y aloinjerto.
en español de: Green’s Operative Hand
Surgery. David P. Green et al. 2007 Marban
Libros S.L. Madrid). Resultados
Cuatro factores influyen claramente en
el pronóstico de la reparación:
Fig. 8. Preparación de
injerto en paráisis cubital. • La edad: en pacientes jóvenes los resul-
tados son mejores
• Nivel de la lesión: Las lesiones en la
muñeca tienen mejor pronóstico que las
heridas más proximales.
• Causa de la lesión: Peor pronóstico
cuanto más contusa sea la herida.

Fig. 9. Injerto nervioso


sobre el nervio cubital
(sutura realizada con
pegamento biológico). Fig. 10. Neurotube para defecto de nervio cubital.

140
Lesiones en la muñeca

• Retraso entre la lesión y la reparación. Bibliografía


El tiempo transcurrido influye negativa- 1. Birch R, Bonney G, Wynn Parry CB:
mente en el pronóstico. Surgical Disorders of the Peripheral
Kilinc A et al. , en una revisión que rea- Nerves. London, 1988 Churchill Li-
lizan de lesiones nerviosas, encuentran que vingstone.
el nervio mediano es el que más se afecta 2. Green DP et al.: Green´s Operative
en las heridas de la muñeca, seguida de la Hand Surgery, 5th ed. New York 2005.
afectación conjunta del mediano y cubital Elsevier Inc.
y en tercer lugar la afectación aislada del 3. Kilinc A et al. Results of primary
nervio cubital. repair of injuries to the median and
En este estudio la recuperación motriz ulnar nerves at the wrist. Chir Main
del nervio mediano se consiguió en un 28(2): 87-92, 2009.
70%, al igual que la garra cubital permane- 4. Lenoble E, Dumontier C, Meriaux
ció en un 29% de casos. Sin embargo, si los JL, Mitz V, Sokolow C, Lemerle JP.
dos nervios se afectaban a la vez, los resul- Cold sensitivity after median or ulnar
tados eran peores. Igual sucede en cuanto nerve injury based on a series of 82
a la recuperación sensitiva. La intoleran- cases. Ann Chir Main Memb Super
cia al frío alcanza al 70% de los pacientes 9:9–14, 1990
cuando ambos nervios están afectos. 5. Wilgis EFS: Longitudinal excursion
of nerves: Nerve repair and grafting.
In: Green DP (ed): Operative Hand
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141
Pedro Hernández Cortés

Capítulo 15

Lesiones nerviosas en la región


palmar de la mano: mediano,
cubital y nervios colaterales
Pedro Hernández Cortés
Servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología. Hospital Clínico
“San Cecilio” (Granada)

Correspondencia: hdezcp@hotmail.com

Palabras claves: hand, finger, median, ulnar, y nerve guide

INTRODUCCIÓN
Los nervios digitales son sin discusión,
los que con más frecuencia se lesionan de
todos los nervios periféricos de nuestra
economía. A pesar de su pequeño tama-
ño son de crucial importancia, pues sus-
tentan la sensibilidad táctil epicrítica y la
estereognosis.

ANATOMÍA Fig. 1. Disección de los principales elementos


nerviosos de la cara palmar de la mano. El
Los elementos nerviosos que se loca- retináculo flexor se encuentra dividido y el
lizan en la mano en su vertiente volar Canal de Guyon “destechado”.

142
Lesiones nerviosas en la región palmar de la mano: mediano, cubital y nervios colaterales

y distal al pliegue palmar de la muñeca róseo para discurrir transversalmente a


son tributarios de los nervios mediano través de las estructuras profundas de la
(NM) y cubital (NC) (Fig. 1). El NM mano, junto con el arco arterial palmar
después de entrar en el túnel del carpo profundo. En su curso inerva a todos
emite sus ramas terminales: 1. La rama los músculos de la eminencia hipotenar,
recurrente para la eminencia tenar, en el a los músculos interóseos palmares y
lado radial, se coloca entre las fibras de dorsales, a los lumbricales III y IV para
la cabeza superficial del flexor corto del llegar a la cabeza profunda del Flexor
pulgar y abductor corto del pulgar. Iner- Pollicis Brevis (FPB), al que inerva des-
va a estos músculos, al oponente y da ra- pués de pasar por el hiato del adductor.
mas para los músculos lumbricales I y II. La inervación de la mano se aparta
Se han descrito variaciones anatómicas con frecuencia de la descripción ha-
que describen un curso subligamenta- bitual que encontramos en los libros
rio, transligamentario o extraligamenta- de texto. Las anomalías más frecuen-
rio, según su relación con el retináculo tes (Biaforas y González, 2007; Loukas,
flexor o ligamento transverso volar del 2007) consisten en comunicaciones en-
carpo (Al-Quatam, 2010). 2. Nervios di- tre los NM y NC a nivel del antebra-
gitales palmares comunes, son sensitivos zo (anastomosis de Martin-Gruber) o
y se localizan en los espacios interóseos a nivel distal (anastomosis de Rechie-
del 1º al 3º, para luego ramificarse a ni- Cannieu, anastomosis motora mediano-
vel de la cabeza de los metacarpianos, cubital en la masa muscular tenar para
a la entrada de la fascia de Skoog, en la cabeza profunda del FPB), si bien no
los nervios palmares propios o colaterales, son las únicas posibilidades. Es frecuen-
que llegan hasta el pulpejo discurriendo te la comunicación entre la rama super-
a ambos lados de los tendones flexores ficial del NC y el NM (anastomosis de
y recogen la sensibilidad de los tres pri- Berentini).
meros dedos y porción radial del 4º. La piel dorsal de los dedos distal a
Al llegar a la muñeca el NC discurre la articulación interfalángica proximal
ulnar al pedículo vascular cubital por el (IFP) está inervada por los nervios di-
canal de Guyon, cuyo techo está forma- gitales palmares. Una pequeña rama
do por la porción superficial del retiná- sensitiva emerge de cada nervio digital
culo flexor y el músculo Palmaris Brevis. a nivel de la base de la falange proximal
En esta zona se divide en dos ramos (fig. y sigue un trayecto oblicuo hasta alcan-
1): 1. Ramo superf icial, sensitivo, del que zar la piel del dorso, en vecindad a la
emergen el nervio digital palmar común IFP. Después de dar esta rama, el nervio
del 4º espacio y el nervio digital propio de digital propiamente dicho se trifurca a
la mitad cubital del 5º dedo. 2. El ramo nivel de la articulación interfalángica
profundo es motor, se origina en el canal distal (IFD) en una rama dorsal que
de Guyon y se introduce en la arcada recoge la sensibilidad del área periun-
formada en el origen de la musculatu- gueal, una rama para la porción apical
ra hipotenar. Tras rodear el gancho del del dedo y finalmente, una rama volar
hueso ganchoso, entra en el plano inte- para el pulpejo (Cohem y Cronin, 1983).

143
Pedro Hernández Cortés

ETIOLOGÍA DE LAS LESIONES palmar del NM es vulnerable en cualquier


TRAUMÁTICAS DE LOS NERVIOS abordaje anterior de la muñeca, sobre todo
DE LA PALMA DE LA MANO si se realiza disección en la cara cubital del
Si combinamos escenario, mecanismo, tendón del flexor carpi radialis (FCR); La
localización y grado, la etiología de las rama recurrente para la eminencia tenar del
lesiones traumáticas de los nervios en la NM se puede dañar en incisiones muy
palma de la mano tiene infinitas posibi- radiales en la cirugía del STC, cuando la
lidades. Estudio epidemiológicos recien- disección llega muy distal, o cuando prac-
tes (Kumar, et al., 2007; Andjelkovic, et al., ticamos una exoneurolisis del NM. Las
2010) concluyen que más del 83% de los posibles variaciones anatómicas facilitan
afectados son adultos jóvenes de sexo mas- la iatrogenia; Por último, se han descrito
culino y con una edad media de 34,7 años. lesiones de la rama motora profunda del
Estas lesiones rara vez son aisladas y en el NC en la vecindad del ganchoso durante
48% de las ocasiones se localizan en Zona la apertura del retináculo flexor para el tra-
II. La baja laboral es de 6 meses o más tamiento del STC (Yoong, et al., 2008). Lo
en la mayoría de los pacientes y hay un cual confirma la necesidad de un adecuado
porcentaje no despreciable de incapacidad conocimiento anatómico de la muñeca y
secundaria. Dependiendo del ámbito de una adecuada técnica quirúrgica para la
estudio, predomina un escenario de acci- ejecución de este procedimiento tan co-
dente laboral o doméstico, en éste último mún y aparentemente sencillo.
caso, las heridas por cuchillo o cristal son
la causa más frecuente. REPARACIÓN DE LAS LESIONES
No obstante, hay otra importante fuente DE LOS NERVIOS DE LA PALMA
de lesiones nerviosas frecuentes y comple- DE MANO Y DEDOS
jas: “La iatrogenia”. Cada intervención o Cualquier herida en la mano, indepen-
instrumentación invasiva es un ejercicio de dientemente de su apariencia, puede es-
anatomía que desafía a nuestros conoci- conder lesiones tendinosas y/o nerviosas,
mientos, pericia y fortuna. No cabe duda que con demasiada frecuencia pasan des-
que la prevención es el mejor tratamiento, apercibidas.
y una adecuada cualificación y conciencia- La correcta sistemática asistencial co-
ción disminuyen la incidencia de lesiones mienza por un alto índice de sospecha ba-
secundarias a nuestra actuación. sado en un adecuado conocimiento de la
Como ejemplos, el nervio colateral pal- anatomía topográfica de la mano.
mar-radial del pulgar cruza sobre el Flexor La anamnesis debe incluir datos del me-
Pollicis Longus y queda en riesgo en la teno- canismo de producción de la lesión, pues
lisis por división de la polea A1 en el trata- tiene un gran valor pronóstico y de orien-
miento del pulgar en resorte; La lesión de tación terapéutica. Las heridas contusas,
los nervios colaterales suele acompañar a las producidas por aplastamiento, sierras o
heridas tendinosas y al igual que Nervios herramientas motorizadas, a diferencia de
digitales palmares comunes pueden ser da- las heridas incisas limpias por cuchillos o
ñados durante la cirugía de la Enfermedad cristales, producen un daño tisular extenso
de Dupuytren; La rama sensitiva cutáneo que requiere un desbridamiento mayor de

144
Lesiones nerviosas en la región palmar de la mano: mediano, cubital y nervios colaterales

los cabos nerviosos, y en consecuencia un nerviosas digitales con reparación vascular


defecto que dificulta la sutura primaria. frente a 13,7mm cuando la arteria colate-
Siempre se debe examinar la sensibi- ral correspondiente no es permeable.
lidad distal a la herida. Una aguja intra-
muscular estéril puede ser suficiente. Con Lesiones crónicas
frecuencia, en trabajadores manuales, el Un paciente con una lesión antigua en
pulpejo del dedo presenta callosidades y un nervio digital, inicialmente desapercibi-
cierto grado de insensibilidad que puede da, tratada sin éxito o no tratada, demanda
crear confusión al explorador. Por ello es atención fundamentalmente por dos mo-
preferible evaluar la piel del dorso de la tivos: 1 Falta de sensibilidad en un territo-
falange distal y región periungueal, que rio cutáneo primordial, como puede ser la
como ya hemos detallado en el epígrafe porción ulnar del pulgar, porción radial del
de anatomía, también está inervada por el índice o borde cubital de la mano y 5º dedo,
nervio digital volar. o la mayor parte de las veces, 2. Por dolor
La exploración quirúrgica es obligatoria secundario al neuroma postraumático.
cuando la proximidad de una herida abier-
ta a una estructura nerviosa corresponde Técnicas de reparación
anatómicamente con un déficit motor o Cualquier técnica descrita para la re-
sensitivo. construcción de nervios periféricos, de la
sutura directa o el injerto libre a las trans-
Lesiones agudas ferencias nerviosas puede encontrar su
Las lesiones abiertas de los nervios pal- aplicación en lesiones de los nervios pal-
mares y digitales tienen indicación de re- mares de dedos y mano.
paración quirúrgica primaria siempre, salvo
que el paciente presente una alta morbili- Sutura
dad o asocie múltiples lesiones orgánicas En las secciones nerviosas simples, la
(por ejemplo, politraumatizados) que deban reparación primaria debería realizarse tan
tratarse con una jerarquía de prioridad se- pronto como sea posible. La aproximación
gún su repercusión vital y funcional. y alineación de los tejidos siempre es mejor
Aunque hay una tendencia a la repa- en los 3 primeros días. La supervivencia
ración simultánea de todas las estructu- neuronal y una menor fibrosis del cabo
ras dañadas en la atención de urgencias, distal son ventajas adicionales a la pronta
la reparación nerviosa primaria en una reparación. La sutura primaria ha de rea-
lesión compleja con una extensa afecta- lizarse sin tensión, pues ésta afecta nega-
ción tisular, alto grado de contaminación tivamente a la vascularización nerviosa y
o precariedad vascular es muy discutible y empobrece los resultados clínicos (Edsha-
la demora del tratamiento aporta ventajas. ge, 1964). La reparación primaria puede
La reparación simultánea de las lesiones llevarse a cabo mediante sutura, fibrina o
vasculares mejora el resultado funcional de neurotubos (Weber, 2000).
la reparación nerviosa. Piquet, et al. (2010) Los principios de reparación incluyen
publica una discriminación estática de dos la disección del nervio hasta tejido sano,
puntos de 8,84 mm tras las reparaciones alineación apropiada de los cabos y aproxi-

145
Pedro Hernández Cortés

mación sin tensión de los mismos. Se han diferida es frecuente la necesidad de un


descrito múltiples estrategias para mejorar injerto, pues los nervios como los vasos
la alineación de los cabos, como la iden- tienen cierto grado de tensión que deter-
tificación de los grupos fasciculares en la mina la retracción de los cabos secciona-
superficie de corte o la correspondencia de dos y este acortamiento se estructura en
los vasos superficiales (Edshage, 1964). poco tiempo. Sin embargo, hay ocasiones
La sutura sigue siendo el patrón de refe- en las que la sutura secundaria es factible
rencia para mantener la continuidad entre tras la movilización de los extremos ner-
los cabos lesionados. No se debe menos- viosos o colocar el dedo en cierto grado
preciar al “simple nervio colateral” y su de flexión.
reparación debe realizarse en condiciones
óptimas, en quirófano, con magnificación, Injerto libre autólogo
en un campo exangüe y por una persona Cuando no es posible realizar una re-
cualificada. La disminución del tamaño, paración primaria sin tensión, nos vemos
profundidad y número de puntos minimi- abocados a una reconstrucción mediante
za el traumatismo al nervio. La superio- la interposición de algún material que
ridad de una técnica de sutura sobre otra puentee el defecto. Aunque la investi-
no ha sido demostrada (Isaacs, 2010). El gación en conductos biológicos autó-
mayor criterio para indicar una repara- genos de vena o músculo, aloinjertos y
ción por sutura nerviosa es la posibilidad conductos sintéticos prospera, el injerto
de realizarla sin tensión. Si un punto de autógeno convencional es la técnica de
9/0 mantiene el contacto de los cabos sin reparación más usada para cubrir defectos
romperse, la tensión es aceptable (Fig. 2). nerviosos y se considera el patrón de re-
Las ventajas del uso de la fibrina son su
fácil aplicación, la disminución del trau-
matismo en los cabos nerviosos y que
puede formar una barrera contra la fibrosis
que no bloquea la regeneración nerviosa
(Palazzi y cols, 1995). Su principal defecto
es la escasa fuerza de coaptación. La com-
binación de pocos puntos de sutura con la
aplicación de fibrina mejora la resistencia
a la tracción de la reparación.
La reparación primaria no es sinónimo
de sutura. Después de la resección del
tejido nervioso dañado según que me- Fig. 2. Sección traumática del nervio colateral
canismo, puede quedar un defecto que ulnar del índice (flecha blanca), simultánea a
una sección detendones flexores superficial
impida la sutura sin tensión y obligar a la y profundo en zona II. El superficial se
interposición de un injerto o realizar una encuentra reparado. La imagen de la derecha
“entubulización” con material biológico o muestra el inicio de la sutura nerviosa. Si
un solo punto de Nylon de 9/0 es capaz de
sintético para restablecer la continuidad mantener el contacto de los cabos, la sutura
en la lesión aguda. En una reparación puede ser realizada sin tensión.

146
Lesiones nerviosas en la región palmar de la mano: mediano, cubital y nervios colaterales

ferencia (“gold standard”). Millesi (1972) lo largo de su recorrido, desde el nervio


demostró que la regeneración axonal a digital común, al pulpejo. Higgins y cols,
través de un injerto nervioso es mejor que publicaron en 2002, una guía para la se-
a través de una simple anastomosis si se lección de injerto nervioso convencional
realiza bajo tensión. en los defectos nerviosos digitales. Los
autores toman como referencia una divi-
Fuente de obtención de injertos sión anatómica del recorrido del nervio
En la reconstrucción de los nervios pal- digital (Fig. 4) en base a la superficie del
mares de mano y dedos se han empleado área de sección y número de fascículos.
autoinjertos obtenidos principalmente Para injertar los defectos en zona 4, el
de nervio sural, nervio interóseo poste- mejor donante por densidad de fascícu-
rior (NIOP) y nervio interóseo anterior los es el nervio sural. El LABCN es el
(NIOA) a nivel de muñeca, nervio antebra- que mejor se adapta en la reconstrucción
quial cutáneo externo (LABCN) y antebra- de las zonas 2 y 3. Por calibre, tanto el
quial cutáneo interno (MABCN) (Fig. 3). NIOP, NIOA y el MABCN pueden ser
Los criterios para la selección del ner- empleados de forma adecuada para injer-
vio donante no están establecidos. Va- tar defectos en zona 1, pero de nuevo el
rios factores influyen en la elección, pero que muestra la densidad fascicular más
de forma primaria el cirujano busca un parecida es el NACE.
nervio de calibre similar al lesionado. Generalmente no se precisan injertos
Sin embargo, debemos considerar otros polifasciculares o estratificados (“Cable
factores como la facilidad de extracción, grafting”) para los nervios digitales. De
longitud de nervio disponible, morbilidad nuevo, la reconstrucción debe llevarse a
de la zona donante, como visibilidad de la cabo sin tensión. Por ello es aconsejable
cicatriz o el déficit funcional secundario. diseñar injertos con un 10-20% de lon-
El calibre y la densidad fascicular del ner- gitud superior al defecto. Una vez inter-
vio digital varían de forma significativa a puesto entre los cabos nerviosos, el injerto

Fig. 3. Autoinjerto del nervio antebraquial cutáneo interno a nivel del codo y antebrazo proximal
(imagen izquierda). Autoinjerto del nervio interóseo posterior a nivel de la muñeca.

147
Pedro Hernández Cortés

Fig. 4. División anatómica del Nervio Digital en función del calibre y densidad fascicular. Zona 1:
distal a la trifurcación en la falange distal; Zona 2: de la salida de la rama dorsal mayor a nivel de la
articulación metacarpofalángica a la trifurcación ; Zona 3: de la bifurcación del nervio digital común
a zona 2 ; Zona 4: desde la muñeca a la bifurcación del nervio digital común.

Fig. 5. Reconstrucción de defecto nervioso digital secundario a cirugía de Dupuytren, mediante


autoinjerto de nervio antebraquial cutáneo interno. Sellado de la sutura con fibrina (Tissuecol®).

148
Lesiones nerviosas en la región palmar de la mano: mediano, cubital y nervios colaterales

Nervio donante adecuado en función del calibre y número de fascículos

Zona 1 Zona 2 Zona 3 Zona 4


Área
NIA LABCN LABCN Sural
NIOP
MABCN

Fascículos LABCN LABCN LABCN Sural


Tabla 1. Transcripción de la tabla de elección de nervio donante en función del segmento afectado
del nervio digital del artículo de Higgins, et al., 2002.

puede fijarse mediante sutura microqui- compresión nerviosa y necesidad de se-


rúrgica, sellado de fibrina o ambos (Fig. 5). gunda intervención para retirada, como
se observó con estructuras permanentes
Tubulización como los tubos de silicona.
Aunque los conductos nerviosos pue- Los estudios comparativos de los prin-
den utilizarse para reparar nervios en cipales conductos nerviosos comercializa-
ausencia de un defecto significativo, el dos, se ha realizado en animal de experi-
papel más aceptado de estos dispositivos mentación (Waitayawinyu , et al., 2007;
es el de puentear pequeñas pérdidas de Shin et al., 2009), utilizando como control
sustancia cuando la reparación primaria el autoinjerto. Los autores del primer tra-
sin tensión no es posible. Los conductos bajo concluyeron que los tubos de Co-
nerviosos acumulan 30 años de investiga- lágeno tipo I proporcionan los mejores
ción en neurotrofismo y neurotropismo resultados en la reparación nerviosa, que
(Lundborg, et al., 1982; Brushart y Seiler, son equivalentes al autoinjerto. Los tubos
1987). Estos dispositivos se comportan de PGA se relacionaban con una regene-
como una cámara que protege el coágulo ración axonal peor organizada y de menor
de fibrina entre los cabos entubulados en densidad. Shin y colaboradores publica
un medio rico de factores neurotróficos, sin embargo, los mejores resultados con
aislando la reparación nerviosa de la in- los conductos de poli-DL-láctico-epsi-
vasión del tejido conectivo cicatricial. lon-caprolactona. La recuperación fun-
Actualmente se comercializan conduc- cional después de la utilización del con-
tos de colágeno (neuragen®), ácido poligli- ducto ácido poliglicólico era la más pobre.
cólico (PGA)[neurotube®] y policaprolac- Las ventajas frente al injerto son la dis-
tona (neurolac®), con diferentes grados de ponibilidad, la facilidad de uso, evitar la
permeabilidad para mantener el intercam- morbilidad de la zona donante, acortar el
bio metabólico y de nutrientes a su través. tiempo quirúrgico y que en indicaciones
La estructura semirrígida de estos cons- seleccionadas parecen proporcionar resul-
tructos previene de complicaciones como tados equivalentes al autoinjerto clásico.
el colapso o la torsión de la reparación, y Las indicaciones de tubulización son:
al ser reabsorbibles, evitan la irritación o Reparación de nervios sensitivos de pe-

149
Pedro Hernández Cortés

queño calibre con defecto < 3Cm.en pa- de tejido nervioso en la luz, para acumular
ciente que quiera evitar la morbilidad de la factores neurotróficos (Fig. 6).
toma de autoinjerto. Se consideran contra- Los resultados que se publican con los
indicaciones: Posibilidad de sutura directa, conductos sintéticos son muy alentadores.
calibre del nervio > 10 mm (no hay comer- En Estudios animales han demostrado
cializados tubos de más grosor), defecto > adecuada regeneración nerviosa a través
3 Cm, nervio motor (relativa), problemas de diferentes materiales. En estudios hu-
de cobertura cutánea/ Infección (Bertleff, manos, las series son generalmente cortas
et al., 2005; Bushnell, et al., 2008; Agnew y y heterogéneas, pero con las indicaciones
Dumanian, 2010). expuestas los resultados de recuperación
La técnica de aplicación es sencilla. Debe- sensitiva son al menos tan buenos como
mos utilizar un tubo algo mayor del diáme- las técnicas convencionales. Weber, 2000
tro del nervio (se comercializan con calibre publica un estudio aleatorizado en hu-
de 1,5 – 10 mm). El tratamiento de los ex- manos, concluyendo mejores resultados
tremos nerviosos lesionados debe ser el mis- con PGA que con sutura directa o injerto
mo que para una sutura o reparación me- (76% de resultados buenos o excelentes) y
diante un injerto. Algunos autores aconsejan publica una recuperación de discrimina-
fijar el tubo a los tejidos blandos circundan- ción de dos puntos entre 4 mm y 8 mm.
tes. Introducción de 2 mm de cada nervioso
en la luz mediante 2 suturas de Nylon 8/0 Transferencias nerviosas
para cada cabo. Las suturas actúan como La pérdida de sensibilidad en la mano es
elemento tractor y posteriormente como muy incapacitante y sin embrago, no des-
fijación. Se aconsejan dos suturas por cabo pierta mucho interés entre los cirujanos.
para evitar rotaciones. La cámara se rellena Aunque se han descrito numerosas técnicas
de suero salino y heparina, incluso en de- para paliar la pérdida de función motora,
fectos de más entidad, puede dejarse restos hay muy pocos artículos en los que se estu-
die la reparación de la función sensitiva. La
restauración de la sensibilidad es un prerre-
quisito para reparar la función motora.
Las trasferencias nerviosas, llamadas por
Suderland “nerve-crossing”. Consisten en
la transferencia de un nervio al que se sa-
crifica para la neurotización del cabo dis-
tal lesionado de un nervio más importante,
mediante sutura directa o interposición de
un injerto. La pérdida de función por el sa-
crificio del nervio donante debe ser mucho
menor que la que se debe a la pérdida del
nervio receptor.
Después de que se regeneren los axones,
Fig. 6. Reconstrucción de defecto de
aproximadamente 1 Cm en el nervio digital alcancen la piel y reinerven los corpúsculos
ulnar del pulgar mediante tubo neurolac®. sensitivos, el área sensitiva del cerebro to-

150
Lesiones nerviosas en la región palmar de la mano: mediano, cubital y nervios colaterales

davía sigue percibiendo la sensibilidad re- igualmente para resensibilizar las caras
ganada como obtenida en la zona donante. adyacentes de pulgar e índice. Si la única
Al principio, esto puede causar confusión, zona a reparar es la radial del 2º, se puede
pero el cerebro puede adaptarse y reinte- utilizar el colateral ulnar del 4º dedo.
grar la nueva señal sensitiva. Esto ocurre Finalmente en algunos casos de parálisis
mejor y más rápido en gente joven e inte- cubital es útil resensibilizar la cara ulnar
ligente (Brunelli, 2004). de la mano, mediante la transferencia del
Lejos de ser una técnica menor, es una nervio digital radial del 3º o 4º dedo a la
operación microquirúrgica con todas sus cara ulnar del 5º.
exigencias. La coaptación debe hacerse lo Después de estas transferencias es obli-
más distal posible para minimizar la dis- gada la reeducación sensorial. General-
tancia que los axones han de recorrer. mente se espera a que el paciente haya
En la revisión que Brunelli realiza en recuperado la sensibilidad de protección.
2004, se sugiere que para la reconstruc- El entrenamiento tiene dos fases: 1. Loca-
ción sensitiva del lado radial del índice lización del estímulo, 2. Identificación del
y cubital del pulgar, podemos tomar dos objeto que produce el estímulo.
ramas del nervio radial. Si la piel en la pri- Los resultados de estas transferencias
mera comisura está en malas condiciones, tienen difícil interpretación y dependen
entonces la transferencia se hará a nivel del sistema de evaluación. Brunelli utiliza
de la muñeca. Se hace una incisión en el el sistema de Higet-Zachary de 1942: S0:
dorso de la mano entre el Extensor Polli- no sensibilidad, S1: Sólo sensación de es-
cis Longus (EPL) y Extensor Pollicis Brevis tímulo doloroso (protección), S2: algo de
(EPB) para tomar dos ramas del nervio sensación táctil, S2+:igual con hiperestesia,
radial. Después se realiza otra incisión en S3:Recuperación de la sensación táctil y
la cara palmar de la muñeca entre el Fle- dolorosa, S3+:discriminación de dos pun-
xor Carpi Radialis (FCR) y palmaris lon- tos >10 mm, S4: Discriminación < 10 mm.
gus para tener acceso al NM, que se sigue Los resultados de media son S2 y S2+.
distalmente en la palma para exponer los
fascículos para la cara radial del 2º dedo y Sutura termino-lateral
cubital del pulgar. Estos fascículos deben La experiencia documentada de trata-
disecarse del tronco nervioso principal y se miento de lesiones de los nervios digitales
unen a las ramas del radial que han pasado mediante sutura termino-lateral es limitada.
de forma subcutánea del dorso a la palma. La aplicación clínica de la sutura ner-
También es posible, aunque a veces más viosa terminolateral en el miembro supe-
difícil, pasar dos ramas dorsales del NC al rior, es en: 1. Lesiones de plexo braquial,
1º y 2º dedo mediante un abordaje dorsal. 2. Lesiones de nervio cubital o mediano,
El cambio de vector de dorsal a palmar 3. Nervios colaterales digitales y 4. Tra-
se hace en el pliegue palmar distal, diri- tamiento de los neuromas dolorosos de
giendo las ramas transferidas hacia el 2º la rama sensitiva del nervio radial (Al-
metacarpiano. Qattan, 2001).
Los nervios digitales de las caras adya- Desde un punto de vista técnico, la inter-
centes del 4º y 5º dedo se pueden utilizar vención se realiza bajo magnificación, des-

151
Pedro Hernández Cortés

pués de la identificación del nervio donante indicación en casos muy concretos, cuando
y el cabo distal del nervio herido, se crea el paciente quiere evitar la morbilidad del
una ventana epineural en el nervio donan- injerto, que sigue siendo el “gold standar” y
te. El nervio lesionado se sutura de forma es una buena posibilidad tras el fracaso de
terminolateral sin tensión a la ventana con un tubo o guía nerviosa y en ausencia de
monofilamento de nylon de 8/0 ó 9/0. neuroma sintomático del cabo proximal.
En la revisión de la literatura podemos
encontrar 5 estudios de sutura termino- COLGAJOS EN ISLA
lateral para tratamiento de las lesiones de NEUROVASCULAR-CUTÁNEA
los nervios digitales (Frey and Giovanoli, Es una opción quirúrgica paliativa de
2003; Landwehrs and Bruser, 2008; Men- elección cuando hay un daño nervioso
nen, 2003; Pelissier et al., 2001; Voche and irreparable en presencia de un defecto
Quattara, 2005) con un número de pa- cutáneo y sin nervios digitales receptores
cientes que oscilaba entre 2 y 9. La me- identificables. La indicación principal es el
dia de los resultados proporcionaba un paciente que requiere una cobertura cutá-
S3+ en la escala de McKinnon y Dellon nea de la superficie palmar del pulpejo del
y una discriminación de dos puntos en- pulgar y resensibilización del mismo. Una
tre 8 y 18 mm con medias de 8,7 a 12,7 técnica clásica es el colgajo en isla hetero-
mm. Es una buena alternativa con 96% de digital descrito por Littler (Littler, 1953;
resultados buenos y reproducibles. Tiene Tubiana, 1961) que se ilustra en la fig. 7.

Figura 7. Colgajo cutáneo-neurovascular heterodigital por técnica de Littler (1953) para cobertura
sensible del pulpejo del pulgar.

152
Lesiones nerviosas en la región palmar de la mano: mediano, cubital y nervios colaterales

Una isla cutánea de la porción ulnar del 4º tuación tan profunda dificulta su abordaje
dedo se diseca en continuidad del pedí- para la reparación. El camino progresiva-
culo neurovascular correspondiente hasta mente más dorsal hace difícil el acceso a
la zona palmar media, donde se tuneliza las ramas terminales del nervio por una
de forma subcutánea para transferirla al incisión palmar estándar, además existe el
pulpejo del pulgar. Los inconvenientes riesgo de dañar los elementos vasculares
relacionados con este tipo de colgajo se de la arcada arterial profunda de la mano,
relacionan, por una parte con la morbi- por lo que recientemente se ha descrito un
lidad del sitio dador (precisa cobertura abordaje dorsal con osteotomía del meta-
cutánea con un injerto de piel de espesor carpiano para la reparación de la rama mo-
completa y queda un déficit sensitivo) y tora del NC (Watkins, et al, 2011).
por otra, con los problemas vinculados a
la reorientación cortical del territorio sen- Tratamiento de los neuromas
sitivo trasplantado. Las sensaciones tácti- La fisiopatología del neuroma es muy
les permanecen siempre localizadas en el compleja y no muy bien entendida. En ge-
dedo donante. Otras alternativas técnicas neral aceptamos que se debe a una regene-
serían el colgajo inervado tipo “Cross fin- ración anómala de los axones dañados junto
ger” (Cohen y Cronin, 1983), el colgajo ho- a la fibrosis cicatricial (Watson, et al., 2010).
modigital de flujo inverso resensibilizado El dolor intenso y persistente sin embargo,
(Kojima, 1990) o el colgajo homodigital no es frecuente y se relaciona con factores
dorsal de flujo inverso sensible (Takehisi, de irritación mecánica entre otros. Por ello,
et al., 2006). entendemos que sean relativamente más
frecuentes en la mano y que inicialmente
Lesiones motoras proceda realizar un tratamiento conserva-
Las lesiones de las ramas motoras del dor para la desensibilización. En la actuali-
nervio mediano y/o cubital en la palma son dad, se emplean con frecuencia los deriva-
muy raras (Haussmann, 1980; Ozaksar, et dos del ácido gabapentínico.
al, 2007). Dependiendo del momento del Si tras 6 meses de tratamiento conser-
tratamiento y el tejido afectado, se tratan vador, persisten síntomas incapacitantes y
habitualmente mediante sutura termino- que alteran la calidad de vida del paciente,
terminal de acuerdo con los principios de se puede realizar un tratamiento quirúrgi-
neurorrafia primaria, mediante la extirpa- co encaminado a paliar el dolor y mejorar
ción del neuroma y sutura secundaria en la función deficitaria. Se han descrito nu-
la rama recurrente del NM o mediante merosas técnicas que reflejan la dificultad
injerto libre de sural en caso de defectos para tratar estas lesiones con éxito. No hay
en la rama motora del NC. Se han descrito ningún método con una tasa alta y repro-
neurotizaciones de ambos nervios por el ducible de buenos resultados. Los dos pa-
NIOA aumentado con un autoinjerto li- rámetros más importantes que condicio-
bre. El trayecto de la rama motora del NC nan nuestras posibilidades de tratamiento
en la palma cursa íntimamente aplicado a son la existencia de cabo distal al neuroma
los metacarpianos, que lo protegen de las y si la función del nervio afectado es o no
lesiones penetrantes dorsales, pero esta si- sacrificable.

153
Pedro Hernández Cortés

En presencia de cabo distal, el mejor Tratamiento postoperatorio


tratamiento es realizar un injerto nervio- A pesar de la frecuencia de las lesiones
so. En ausencia del mismo, si restaurar la de los nervios digitales que precisan repa-
función dañada es crítico se puede realizar ración, no hay un método de tratamiento
una transferencia de tejido para reinervar. rehabilitador postoperatorio bien estable-
En casos en los que no es posible realizar cido. En algunos centros, se inmovilizan
un injerto y existe una historia de inter- los dedos entre 2 y 4 semanas en férulas
venciones fallidas para controlar el dolor, que bloquean la extensión, para prevenir
se puede resecar el neuroma y el cabo que las fuerzas de tracción perjudiquen a
proximal tratarlo de diferentes formas: la reparación. Sin embargo, dos estudios
• Movilización a músculo, a hueso o a vena. comparativos recientes (Clare et al., 2004;
Aunque se han esgrimido razones bioquí- Yu et al., 2004) han mostrado que no hay
micas como el bajo contenido de factor diferencias estadísticamente significativas
neurotrófico en estos tejidos, la técnica entre los protocolos de movilización pre-
persigue disminuir el estímulo mecánico coz y diferida, en cuanto a la discrimina-
sobre el cabo nervioso lesionado. Un por- ción final de dos puntos y el test de Sem-
centaje de pacientes sigue experimentan- mes-Weinstein. Los pacientes sometidos a
do dolor. En particular, si la movilización ferulización tenían una mayor incidencia
es muy cercana o a tejidos relativamente de rigideces articulares e intolerancia al
superficiales. La movilización a pronador frío, mientras aquellos que no fueron in-
cuadrado o supinador largo se han publi- movilizados tuvieron una reincorporación
cado en numerosas ocasiones como exito- laboral más temprana.
sa, aunque para ello se necesite una amplia
intraneurodisección, para poder desplazar Resultados comparativos y
el nervio digital, o combinar la moviliza- algoritmo terapéutico
ción con un injerto libre (“wandering ner- Para la mayoría de los autores, la repara-
ve”, McKinnon, 1988). ción de los nervios digitales se sigue de bue-
• Centro-centralización (Gorkisch, 1984) y nos resultados en la mayoría de los casos, si
sutura termino-lateral (Al Qattam, 2000). el tratamiento es adecuado. Lo que no está
La introducción del cabo proximal en tan claro es que es “un buen resultado” y cuál
una vaina epineural parece prevenir la es el mejor tratamiento para cada ocasión.
formación de neuroma. Se han descrito El resultado no sólo depende del trata-
diferentes modificaciones técnicas que miento efectuado y está muy condicionado
abarcan desde la división longitudinal por la edad y el mecanismo de producción
del nervio proximal y sutura termino- de la lesión. Los criterios de evaluación
terminal de los dos cordones, con lesión responden a diferentes esquemas y ta-
proximal intencionada en uno de ellos blas (Escala de la sociedad americana de
(Gorkisch, 1984) o la ya mencionada su- cirugía de la Mano, Escala de Dellon y
tura termino-lateral. McKinnon (Tabla 2), sistema de Higet-
• Cobertura con colgajo de partes blandas. Zachary, discriminación estática de 2 pun-
• Otras técnicas: “Stripping”, capuchón de tos [SPD], discriminación en movimiento
silicona… de dos puntos [MPD]), lo cual dificulta la

154
Lesiones nerviosas en la región palmar de la mano: mediano, cubital y nervios colaterales

Nervio donante adecuado en función del calibre y número de fascículos

SPD MPD
Grado (mm) (mm) Recuperación de sensibilidad
S0 Anestesia completa
S1 Recuperación de la sensibilidad dolorosa profunda
S1+ Recuperación de la sensibilidad dolorosa Superficial
S2 Idem y recuperación de algo de sensibilidad táctil
S2+ Como en S2 pero con hiperrespuesta
Recuperación de sensibilidad táctil y dolorosa con
S3 >15 >7
desaparición de la hiperrespuesta
Igual a S3 con buena localización del estímulo, pero con
S3+ 7-15 4-7
SPD menor de lo normal
S4 2-6 2-3 Normal
Tabla 2

comparación de los resultados entre series. sultados de SPD para las suturas termino-
Finalmente, los test de evaluación sensi- latrerales oscilan entre 8,7 y 12,7 mm de
tiva y estereognosica no siempre reflejan media en los 5 estudios clínicos publicados
bien la satisfacción del paciente. (Frey and Giovanoli, 2003; Landwehrs and
Si tomamos sólo el parámetro SPD para Bruser, 2008; Mennen, 2003; Pelissier et al.,
analizar los resultados de las series de repa- 2001; Voche and Quattara, 2005).
ración de nervios digitales que a lo largo del En cualquier caso, los resultados publi-
capítulo se han consultado, encontramos cados han de ser puestos en tela de juicio,
que para Wang, et al., en 1996 la reparación porque entendemos pueden estar influen-
primaria por sutura rinde una discrimina- ciados por el “solapamiento” sensitivo o el
ción de menos de 7 mm en el 80% de los “colateral sprouting” del nervio contrala-
casos. El mismo autor publica un SPD de teral sano, como demuestran Wang, et al.,
menos de 7 mm en el 78% de los injertos (1996) realizando bloqueos anestésicos del
primarios y en el 60% de los injertos secun- nervio digital sano, obteniendo en algunos
darios. Los conductos sintéticos proporcio- casos la disminución o desaparición de la
nan entre el 66% y 88% de SPD menor a sensibilidad que previamente se había re-
10 mm, dependiendo de la serie y tipo de cogido en el lado tratado.
defecto [Siempre menor a 3 cm] (Bertleff, et
al., 2005; Bushnell, et al., 2008; Agnew y Du- Propuesta personal de tratamiento
manian, 2010). Brunelli (2004) obtiene una • Lesión aguda sin defecto: Sutura prima-
discriminación estática de 10 mm o peor ria simple o combinada con sellado de
como media en sus transferencias nerviosas fibrina.
y un peor resultado en los colgajos en isla • Lesión aguda o crónica con defecto me-
cutánea neurovascular. Finalmente, los re- nor a 3 cm: Tubo neural sintético.

155
Pedro Hernández Cortés

• Lesión aguda o crónica con defecto tionship to the hypertrophic muscle


mayor o igual a 3 cm: Autoinjerto libre. overlying the transverse carpal liga-
Preferencia LABNC. ment. J Hand Surg Am 2010; 35(11):
• Lesión aguda asociada a pérdida cutá- 1820-1824.
nea sin nervios receptores adecuados en 5. Andjelkovid S, Lesid AR, Palibrk T,
zona sensitiva primordial: Colgajos en Vuckovid C, Sudjid V, Bumbasirevid
isla neurovascular. MZ, Jakovljevid A, Djukid VR. [Digi-
• Fracaso de reconstrucción con conduc- tal nerve injury of the hand-epidemio-
tos neurales sintéticos o injerto: Sutura logic and clinical analysis]. Acta Chir
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Pedro Hernández Cortés

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158
Lesiones del plexo lumbo-sacro. Lesiones en la cadera

Capítulo 16

Lesiones del plexo lumbo-sacro.


Lesiones en la cadera
Mª Pilar Pradilla Gordillo
Unidad de Cirugía de mano y nervio periférico. Hospital Nisa-Aljarafe (Sevilla)

Correspondencia: pragor@telefonica.net

Palabras claves: Lumbosacral, sciatic, femoral, plexus, injury, surgery

A
l igual que en el plexo braquial, se suelen deberse a heridas que precisarán
considera al plexo lumbo-sacro actuación quirúrgica precoz o a fracturas/
como al conjunto de las raíces y de luxaciones de cadera y fémur. La inciden-
sus divisiones en troncos primarios y secun- cia es baja.
darios, para llamar NP a las ramas termi-
nales del plexo, es decir crural, ciático, etc. Recuerdo anatómico
La lesión traumática de un plexo es muy El plexo lumbo-sacro (Fig. 1) lo cons-
grave para la función del miembro infe- tituyen los ramos anteriores (axones mo-
rior; afortunadamente, la incidencia es tores y sensitivos) de las raíces lumbares y
muy baja y la recuperación espontánea (si sacras aunque se puede subdividir en dos
el paciente sobrevive a las lesiones acom- regiones: plexo lumbar (L1-L3 y parte de
pañantes: fracturas de pelvis, sacro y arti- L4) y plexo sacro (L4-S4).
culación sacro-ilíaca) es muy alta. El plexo lumbar camina dentro del
Por el contrario, las lesiones que afectan músculo psoas y aporta varias ramas antes
a los nervios terminales crural y ciático de dejar la pelvis y dar dos de los ramos

159
Mª Pilar Pradilla Gordillo

El plexo sacro se constituye cerca del mús-


culo piramidal para formar el nervio ciático
el cual sale de la pelvis por la escotadura ciá-
tica, desciende entre la tuberosidad isquiática
y el trocánter mayor y ya en la cara posterior
del muslo se divide en dos ramas antes de
alcanzar la rodilla. Inerva el resto de la mus-
culatura pélvica y del miembro inferior.
• Ramos para el cinturón pelviano
• Ramos musculares para el pirami-
dal, obturador interno, géminos y
cuadrado crural.
• Nervio Glúteo superior para los
músculos glúteos mediano y menor
así como al tensor de la fascia lata.
• Nervio Glúteo inferior para el mús-
culo glúteo mayor.
• Ramos para las extremidades inferiores
• Nervio ciático menor, cutáneo.
Fig. 1. • Nervio ciático mayor o isquiático (NC).
• Ramos musculares, semitendino-
so, semimembranoso, bíceps.
que inervan el miembro inferior: Nervio • División en Ciático poplíteo ex-
femoral o crural y nervio obturador. terno (NCPE) y Tibial posterior.
• Ramos musculares: Psoas, Cuadrado lum-
bar e inter-transversos lumbares Mecanismo de la lesión
• Ábdominogenital mayor y menor y Etiología
• Génitocrural Las lesiones del plexo lumbosacro suelen
• Fémorocutáneo producirse habitualmente por fracturas de
• Femoral o crural, cercano a la arteria ilia- la pelvis particularmente cuando se afecta
ca pero íntimamente unido a ella cuando el sacro o la articulación sacro-iliaca y el
se acerca al arco crural y pasa al miembro mecanismo es la tracción.
inferior El Nervio Ciático puede resultar compro-
• Músculos cuadriceps y sartorio metido en los traumatismos de la región de
• Sensibilidad de la cara antero-medial la cadera, especialmente, la columna poste-
del muslo, parte inferior de la rodilla y rior, por diferentes causas: dislocación de la
cara medial de la pierna y el pie cabeza femoral o fragmentos desplazados
• Obturador, del acetábulo que lo compriman, lo lesionen
• Músculos obturadores, adductores y al directamente o quede atrapado. El 13% de
recto interno las luxaciones posteriores se asocian a le-
• Sensibilidad en la parte inferior de la sión del NC. Por otra parte, el tejido fibroso
cara interna del muslo cicatricial y las osificaciones heterotópicas

160
Lesiones del plexo lumbo-sacro. Lesiones en la cadera

masivas alrededor de la cadera pueden ro- a los grandes vasos y a las vísceras intra-
dearlo alterando su conducción. abdominales. Lo habitual es que tratemos
Igualmente, es dañado en los procedi- las lesiones óseas precozmente (fijación de
mientos de reemplazo articular de la cade- la pelvis etc) y con ello conseguiremos re-
ra. En este caso, además de la lesión directa vertir la lesión neurológica.
o indirecta por el empleo de separadores, Si pasadas varias semanas la parálisis
se han publicado artículos que señalan que persiste practicaremos los estudios neu-
un alargamiento del miembro de más de rológicos pertinentes (clínicos, eléctricos
2 cm puede comprometer la vasculariza- y de imagen) y comenzaremos la rehabi-
ción longitudinal del nervio y ocasionar litación precoz para prevenir las rigideces,
su isquemia. La presentación clínica con especialmente el “pie caído”
un pie caído se explica porque las fibras Existen muy pocas publicaciones en la
correspondientes al CPE se encuentran literatura con respecto al tratamiento qui-
fijas en la escotadura ciática y en el cuello rúrgico. Lang y cols. analizaron retrospecti-
del peroné, por tanto son más susceptibles vamente 10 casos y aconsejaron la actuación
al estiramiento. El diagnóstico se realiza quirúrgica precoz y el uso de injertos, logran-
fácilmente, al contrario de lo que sucede do que los pacientes se sostuvieran en pie y
con la disfunción del nervio femoral (NF). caminasen aunque con la ayuda de ortesis.
El Nervio Femoral discurre en el interior Ante las avulsiones, también hay estu-
del músculo psoas y sale de la pelvis bajo el dios anatómicos que demuestran la posi-
ligamento ilioinguinal, donde es vulnerable bilidad de utilizar los nervios intercostales
ante traumatismos penetrantes (ejemplo el (IC) 10-11-12 para neurotizar una raíz
asta de toro). El retraso en el diagnóstico lumbar (R Vialle). Los resultados pueden
no es extraño, lo que se atribuye a la necesi- ser prometedores.
dad de realizar un tratamiento urgente para Hay mucha controversia en cuanto al
controlar la hemorragia que se produce por momento de la cirugía ya que en general,
la lesión de la arteria femoral adyacente. En las lesiones del plexo se recuperan par-
ocasiones, la parálisis no se hace evidente cialmente y es difícil decidir el momento.
hasta que el paciente no comienza a deam- Wood aconseja hacerlo en los tres prime-
bular. En algunos pacientes el dolor y el ros meses. Nosotros creemos que va a de-
déficit motor puede resultar incapacitante. pender del estado general y de la extensión
de la lesión, pero ante una parálisis total
Indicaciones y objetivos del del miembro inferior estamos de acuerdo
tratamiento quirúrgico en el abordaje precoz. Si es parcial podría-
Describiremos solamente los tres ner- mos esperar hasta los 5-6 meses.
vios más frecuentemente dañados.
Nervio ciático
Plexo-lumbosacro El NC es el más ancho del organismo.
En las primeras horas y días nos limita- Su afectación suele ser por tracción y lo más
remos a la estabilización del paciente y al frecuente es que sea parcial por lo que el
tratamiento de las lesiones acompañantes, posible abordaje quirúrgico debe hacerse
generalmente muy graves porque implican bajo electrofisiología intraoperatoria. En el

161
Mª Pilar Pradilla Gordillo

acto quirúrgico se suele ver un “neuroma en tura abierta que nos permita la exploración
continuidad” (Figs. 2 y 3). directa del nervio, pero en la mayoría de
El momento de la cirugía debe ser pre- los casos podremos esperar varias semanas
coz, si estamos ante una herida o una frac- y ver la evolución, porque tal y como di-
jimos al principio el tiempo demarcará el
sitio dañado y la resección será más limi-
tada, tanto en anchura como en longitud.

Nervio femoral
La causa más frecuente de lesión es la
herida, bien sea traumática o iatrogénica
(cirugía de la hernia inguinal…).
En el primer caso nuestra actuación es
inmediata; si las condiciones lo permiten,
el nervio crural será reparado en el mismo
acto en el que ligamos o suturamos los va-
sos inguinales y/o las lesiones musculares.
Si esto no fuese posible, se repararía en los
primeros días o semanas.
Por el contrario, las heridas iatrogéni-
cas, son más difíciles de diagnosticar; el
reposo habitual del postoperatorio puede
enmascarar la parálisis. Este diagnóstico
hay que sospecharlo en el momento que
el enfermo refleje parestesias difusas en el
muslo, dolor “acalambrado” sobre la cica-
triz y sobre todo la más mínima debilidad
a la marcha. No es extraño que la lesión
sea parcial por lo que, a veces, podremos

Fig. 2. Neuroma nervio ciático post-luxación Fig. 3. Parálisis parcial del nervio ciático post-
coxo-femoral. fractura de fémur.

162
Lesiones del plexo lumbo-sacro. Lesiones en la cadera

potenciar el resto de la musculatura del of the lower limbs. Foot Ankle Surg
cuádriceps sin necesidad de cirugía (como 1998; 4:109-117.
siempre, valorar la edad, trabajo etc.) pero 3. Huittinen VM. Lumbosacral nerve
si la parálisis es total (clínica más EMG) injury in fracture of the pelvis. A post-
se procederá a la exploración quirúrgica y mortem radiographic and pathoana-
al injerto. tomical study. Acta Chir Scand 1972
(suppl): 429-38
Conclusiones 4. Issack PS, Helfet DL. Sciatic Nerve
• Es indispensable conocer la distribución Injury Associated with Acetabular
sensorial del Miembro inferior para di- Fractures. HSSJ 2009; 5: 12–18. DOI
ferenciar entre una lesión del plexo lum- 10.1007/s11420-008-9099-y.
bosacro o una lesión periférica 5. Lang EM, Borges J, Carlstedt T. Sur-
• Fémoro cutáneo lateral (cara externa gical treatment of lumbosacral plexus
del muslo): L2-L3 injuries. J Neurosurg Spine. 2004 Jul;
• Obturador (cara interna del muslo): 1(1):64-71.
L4-L5 6. Terzis JK, Kostopoulos VK. Vascula-
• Fémoro cutáneo posterior (cara pos- rized Nerve Grafts for Lower Extre-
terior muslo y rodilla): plexo sacro mity Nerve Reconstruction. Ann Plast
• Por suerte, las lesiones del plexo lum- Surg 2010; 64: 169–176.
bo-sacro son escasas. Normalmente, se 7. Tung TH, Martin DZ, Novak CB,
exploran quirúrgicamente sobre los 6 Lauryssen C, Mackinnon SE. Nerve
meses post accidente. reconstruction in lumbosacral plexo-
• El nervio ciático precisa ser evaluado pathy. Case report and review of the li-
con mucha exactitud para no confundir terature. J Neurosurg. 2005 Jan; 102(1
daños parciales con lesiones más bajas Suppl):86-91.
(solo tibial posterior, por ejemplo). 8. Vialle R, Lacroix C, Harding I,
• Debemos tener cuidado con las lesiones Loureiro MC, Tadié M. (2010) Mo-
del nervio femoral que dan una sintoma- tor and sensitive axonal regrowth after
tología motora muy leve y apenas alte- multiple intercosto-lumbar neurotiza-
raciones sensitivas. El diagnóstico puede tions in a sheep model. Spinal Cord
ser tardío y por lo tanto, el tratamiento 2010: 48, 367-374.
quirúrgico ineficaz. 9. Vialle R. y cols. Anatomical feasibili-
ty of using the ninth, 10th, and 11th
intercostal nerves for the treatment of
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163
Joaquim Casañas Sintes

Capítulo 17

Lesiones del nervio ciático en


la región de la rodilla
Joaquim Casañas Sintes
Traumaunit. Centro Medico Teknon. Hospital Universitario
de Bellvitge (Barcelona)

Correspondencia: dr.casanas@traumaunit.es

Palabras claves: Peronel nerve, Knee, femoral, injury, surgery

Introducción y anatomía
El nervio ciático común (Fig. 1) está forma-
do por las ramas anteriores de las raíces L4 a
S3. Es el nervio más largo del organismo y
sale de la pelvis atravesando la escotadura ciá-
tica mayor por debajo del músculo piriforme;
casi inmediatamente se identifican las dos
divisiones conocidas como CPI y CPE que
inervarán las extremidades inferiores.
Muy brevemente exponemos la muscu-
latura dependiente de ambos así como la
zona donde emiten dichas ramas:
Ciático poplíteo interno Fig. 1. Distribución de los ramos motores del
• Muslo, ramos motores del semitendino- CPI y del CPE.

164
Lesiones del nervio ciático en la región de la rodilla

so, semimembranoso, adductor mayor y maniobra invasiva o quirúrgica para realizar


porción larga del bíceps una reparación de una lesión de nervio ciá-
• Región poplítea, gemelos, plantar delga- tico debemos estar seguros de que su evo-
do y poplíteo lución espontánea no es satisfactoria y que
• Pierna, tibial posterior, flexor común de hemos agotado los periodos potenciales de
los dedos, flexor del gordo y músculos espera de recuperación espontánea.
cortos del pie. En muchas ocasiones las lesiones de
Ciático poplíteo externo nervio ciático están asociadas a lesiones
• Muslo, porción corta del bíceps vasculares que hacen enlentecer el perío-
• Pierna, tibial anterior, extensor común do de recuperación espontánea. Es pues
de los dedos, extensor del gordo y pedio imprescindible realizar una exploración
Como vemos, todos los grupos musculares vascular meticulosa de la extremidad va-
posteriores a excepción de la porción corta lorando la presencia de los pulsos, la tem-
del bíceps dependen del CPI. Por tanto, en peratura y si es necesario ayudarnos de
cualquier patología del ciático poplíteo ex- técnicas de imagen. Ante cualquier duda
terno asociada a lesiones de dudoso origen de lesión vascular debemos solicitar una
entre la cadera y la rodilla, la afectación de angioresonancia o una ultrasonografía
este grupo muscular nos orientará sobre el vascular ya que la utilización de isquemia
origen y la ubicación de la lesión (importante
la experiencia de un electromiografista).

Diagnóstico y manejo
de la lesión
Para la exploración y evolución de las le-
siones que afectan al tronco ciático común
debemos seguir una sistemática homogénea
como en las lesiones de nervio periférico,
consistente en la evaluación motora, sensi-
tiva y vegetativa. Para ello es imprescindible
conocer la secuencia de reinervación de los
ramos motores del ciático, y ser exigentes en
los resultados de las electromiografías que
solicitemos, para así evaluar el punto de
la lesión y su proceso de recuperación que
tiene que ser concordante con la anatomía
fascicular nerviosa.
Sin lugar a dudas, el realizar mapeos de la
zona de anestesia y de la evolución del signo
de Tinel es imprescindible saber si la lesión Fig. 2. Imagen de compensación vascular en una
nerviosa que estamos manejando va evolu- lesión de luxación de rodilla. En estos casos, está
contraindicada la cirugía con isquemia preventiva
cionando según el período de tiempo espe- por el riesgo de oclusión de las colaterales que
rado. Por lo tanto antes de decidir cualquier mantienen la viabilidad de la extremidad.

165
Joaquim Casañas Sintes

preventiva en la cirugía de extremidades la presencia de axonotmesis o neurotmesis


que tengan una perfusión vascular afectada de los troncos que estamos estudiando.
puede ocasionar una lesión vascular tardía Tenemos por lo tanto que ubicar de for-
de consecuencias dramáticas (Fig. 2). ma razonada cual es el punto de la lesión
Para el diagnóstico de las lesiones del de nuestro tronco ciático para poder evaluar
ciático nos apoyaremos en diferentes téc- en consecuencia el tiempo de recuperación
nicas complementarias de imagen. espontánea y por lo tanto el tiempo de rei-
• Radiología convencional nos informa acerca nervación de los territorios mencionados.
de las lesiones óseas que han podido oca- Además hay que realizar mapas sensitivos
sionar el daño por elongación de los tron- seriados de la zona de reinervación. Si-
cos (luxación de rodilla, pruebas de ines- guiendo este criterio derivará el tiempo de
tabilidad al varo forzado etc) o por daño espera para la siguiente visita y la solicitud
directo (presencia de espículas óseas). En del próximo electromiograma que se irán
general, la radiología es muy inespecífica y realizando de forma secuenciada en función
nos aporta poca información. de la evolución de la lesión y el tiempo que
• La resonancia nuclear magnética también esperamos de su reinervación. Si asistimos
ha sido empleada para valorar lesiones a una reinervación motora y una mejora
de los troncos mencionados pero nos de la zona de anestesia del mapa sensiti-
aporta poca sensibilidad de certeza en vo acorde con los tiempos esperados según
cuanto a la imagen que podemos obte- nuestra ubicación del punto de lesión, esta
ner (edema o hematoma dentro de los actitud será expectante, si por el contrario
troncos nerviosos, o dudosa señal de pér- no se cumplen los tiempos de reinervación
dida de continuidad) además de no ser espontánea precisaremos de indicación qui-
una prueba de utilidad para seguimiento rúrgica y revisión de los troncos lesionados.
y evolución de la lesión.
• La ecografía de alta definición demostró Tipos de lesiones
tener más sensibilidad para evaluar de El nervio que con más frecuencia se afecta
forma certera la presencia o pérdida de en la rodilla es el ciático poplíteo externo y
continuidad de los fascículos dentro de en él nos vamos a centrar. Según los diferen-
un tronco nervioso, pero nos encontra- tes tipos de lesiones, daremos unas pautas
mos en la misma situación que la reso- de tratamiento en cuanto al momento de
nancia nuclear magnética que no nos la cirugía y la técnica quirúrgica a emplear:
aporta información para el seguimiento • Lesiones agudas con sutura terminó ter-
y pronóstico. minal.
La prueba más específica y sensible para • Lesiones crónicas reparadas mediante
el diagnóstico y pronóstico de las lesiones injerto nervioso.
del nervio periférico es la electromiografia • Lesiones asociadas a traumatismos de la
y electroneurografia convencional. Para rodilla.
ello, a partir de la tercera o cuarta semana de • Lesiones en continuidad-atrapamientos
la lesión evaluaremos la presencia de activi- • Lesiones para tumorales.
dad espontánea o fibrilación de los grupos • Lesiones agudas con sutura término ter-
musculares denervados; nos orientara hacia minal.

166
Lesiones del nervio ciático en la región de la rodilla

Son realmente lesiones de poca preva- buen resultado de la misma junto con la
lencia pero asimismo son lesiones con un dilación en el tiempo de su lesión inicial.
alto grado de recuperación si se manejan de Debido a que también existe una dege-
forma adecuada y en los tiempos adecua- neración proximal, los injertos son mayo-
dos. Deben tratarse mediante reparación res de lo esperado en la primera inspección
micro quirúrgica antes de los 10 días de la por lo que aún habrá que ascender 2 o 3
lesión, para evitar la retracción de los ex- centímetros sobre la zona del neuroma
tremos, así obtenemos un balance muscular terminal del tronco del ciático poplíteo
final que oscila de 3-4+/5 en alrededor del externo proximal.
85% los casos según la serie más extensa Los injertos nerviosos oscilan entre 3
publicada que existe de 806 casos en Loui- y 9 centímetros lo cual es un criterio que
siana (Review Lower-extremity peripheral nos puede servir para diferenciar en cierto
nerve injuries: a Louisiana State University modo la expectativa de nuestro resultado
Health Sciences Center literature review with aunque también habrá que tener presente
comparison of the operative outcomes of 806 la edad del paciente, el tiempo de evolu-
Louisiana State University Health Sciences ción, el origen de la lesión, el estado vas-
Center sciatic, common peroneal, and tibial cular, etc.
nerve lesions. [Neurosurgery. 2009]) Siguiendo como ejemplo la misma
referencia mencionada previamente, se
Lesiones crónicas reparadas evidenció la recuperación de un balance
mediante injerto nervioso muscular a 3/5 o superior en un 75% de
Ésta es de las lesiones más frecuentes los casos en aquellos pacientes con in-
con la que nos encontramos junto con jertos nerviosos inferior a 6 centímetros,
las lesiones asociadas a traumatismos del 38% en aquellos casos que el injerto
en la rodilla. Habitualmente son como oscilaba entre 6 y 12 centímetros y del
consecuencia de lesiones deportivas con 16% en aquellos pacientes con injertos
traumatismos directos, asociados o no superiores a 12 cm.
a lesiones ligamentosas de la rodilla o
como consecuencia de lesiones iatrogé- Lesiones asociadas a
nicas sobre cirugías de la rodilla, exéresis traumatismos de la rodilla
de tumoraciones en esta zona o cirugías Habitualmente son consecuencia de le-
esqueléticas. El problema habitual es que siones en accidentes deportivos, accidentes
muchas veces son cirugías realizadas en de alta energía como los accidentes de cir-
otros centros en donde no existe una cul- culación, precipitaciones en accidentes de
tura correcta para manejo de las lesiones montaña o accidentes laborales. El manejo
nerviosas y por lo tanto son pacientes que de dichas lesiones siempre son complica-
habitualmente llegan a los centros de refe- dos y habitualmente no existe un patrón
rencia con una dilación del tiempo consi- estándar de protocolo de tratamiento. Pero
derable. En estos casos es imprescindible si debemos de tener claro que antes de rea-
el tener que realizar cirugías reconstruc- lizar cualquier maniobra quirúrgica sobre
tivas mediante injerto nervioso cuya lon- el nervio periférico hay que obtener la es-
gitud son los factores determinantes del tabilidad ligamentosa, bien en el mismo

167
Joaquim Casañas Sintes

acto quirúrgico o bien previamente. Por pueden haber mantenido la vasculariza-


lo tanto es habitual tener que realizar una ción de la extremidad tras el traumatismo,
primera cirugía reconstructiva en el pivote pero que con la isquemia y las maniobras
central o el pivote postero-lateral y un se- quirúrgicas pueden ocluirse y por lo tanto
gundo tiempo quirúrgico para realizar la comprometer la viabilidad de la extremi-
revisión del tronco del nervio del ciático dad que estamos intentando reconstruir.
poplíteo externo y tratarlo mediante neu- Este es un hecho, que de ocurrir es to-
rolisis o injerto nervioso. talmente injustificable, ya que si bien se
No olvidar, como dijimos en el párra- puede entender la pérdida de la extremi-
fo anterior la asociación vascular, que en dad tras un traumatismo agudo no existe
el caso de las luxaciones alcanza el 50%. justificación para que esto suceda tras una
Insistimos en realizar siempre un estu- cirugía diferida.
dio vascular previo a nuestra cirugía que Nuestras recomendación es realizar esta
habitualmente se realizará con isquemia cirugía de reconstrucción del ciático poplí-
preventiva. Existe un riesgo importante teo externo de forma diferida asistidos de
de oclusión de los vasos colaterales que registro electrofisiológico intraoperatorio

Fig. 3. Aspecto característico de un registro intraoperatorio mostrando la caída del potencial a lo


largo de la zona de lesión.

168
Lesiones del nervio ciático en la región de la rodilla

para poder evaluar exactamente la viabi- algunas ocasiones y para reconstruir defec-
lidad de los fascículos que encontramos y tos nerviosos de no gran longitud utiliza-
donde y cual es potencial nervioso proximal mos un nervio sural vascularizado que ob-
necesario (habitualmente no inferior a 100 tenemos de los vasos que vienen a nutrirlo
Mvolts para poder realizar la sutura proxi- de forma directa desde la arteria poplítea.
mal de nuestro injerto nervioso (Fig. 3).
Éstas son lesiones de mal pronóstico Lesiones en continuidad-
puesto que muchas ocasiones los injertos atrapamientos
nerviosos que precisamos para tener que Son lesiones más frecuentes de lo que es-
realizar la reparación con estos criterios de pontáneamente en un principio uno puede
garantía de potencial nervioso nos obliga creer. Debemos diferenciarlas claramente
a tener que realizar injertos nerviosos de de las radiculopatías L5 que nos ocasiona-
más de 10 cm de longitud. rán igualmente sintomatología de pie caído.
Habitualmente utilizamos injertos ner- Puede debutar tanto como un cuadro de
viosos libres del nervio Sural aunque en paresia progresiva y torpeza de la marcha

Fig. 4. Imagen característica de una lesión por elongación del CPE, aspecto filiforme, ausencia de
conducción en la zona de la lesión. Es necesario ir a buscar proximalmente un potencial de acción
suficiente para colocar el injerto nervioso.

169
Joaquim Casañas Sintes

como con un cuadro de parálisis súbita. El mos revisar tanto la rama profunda como
origen puede ser de diferentes etiologías, el ramo superficial puesto que en muchas
bridas aponeuróticas, arcadas vasculares, ocasiones estamos ante una buena función
compresiones por decúbito, tumores intrín- del fascículo superficial con una función
secos o extrínsecos al nervio ciático poplíteo aceptable de la musculatura peronea pero
externo, etc. También es importante men- con una debilidad manifiesta del tronco
cionar la presencia de este cuadro asociado dependiente del ramo profundo. En estas
a secuelas de síndrome compartimentales ocasiones el tratamiento consiste siempre
clínicos o subclínicos en el contexto de en la neurolisis y la epineurotomia men-
traumatismos y fracturas de la pierna. cionada para resolver el cuadro clínico que
En estos casos es imprescindible la rea- nos encontramos.
lización de la cirugía asistida de registro
electrofisiológico intraoperatorio (Fig. 4) Lesiones para tumorales
que nos marcará el punto de tratamiento Queremos mencionar por último un
así como la zona de la lesión donde tener cuadro etiopatológico de causa de pará-
que realizar nuestra cirugía para la des- lisis del ciático poplíteo externo no tan
compresión intrínseca del nervio ciático o infrecuente como puede parecer y de un
su epineurotomia. Es importante también manejo particular. Consiste en la presen-
en estos casos tener presente que debe- cia de quistes intra neurales sinoviales del
ciático poplíteo externo y de que se han
apuntado diferentes teorías de su origen.
La teoría que está más consensuada y que
claramente se ha podido demostrar anato-
mo patológicamente es la fistulización de
un quiste sinovial de la articulación tibio
peronea proximal dentro del tronco del
ciático poplíteo externo y que ocasiona un
cuadro habitualmente indoloro de paresía
progresiva de la extensión del tobillo.
El diagnóstico muchas veces viene pro-
ducido por referir paciente la presencia de
la tumoración lateral en la zona proximal
de la rodilla y que al diagnóstico la reso-
nancia nuclear magnética demuestra un
patrón quístico con incluso una reiner-
vación de la musculatura dependiente de
dicho nervio.
El tratamiento consiste en abordaje qui-
rúrgico identificación del pedículo sinovial
resección del mismo y evacuación micro
Fig. 5. Imagen característica de un ganglión
intraneural con el contenido mucinoso propio quirúrgica del quiste intraneural, acto qui-
de producción sinovial. rúrgico de gran dificultad debido el apla-

170
Lesiones del nervio ciático en la región de la rodilla

namiento que presentan los fascículos y la 4. Gelberman RH. Operative Nerve Re-
facilidad de la lesión de los mismos. Es la pair and Reconstruction. Lippincott
cirugía que se debe realizar en manos de 1991
expertos micro cirujanos puesto que es di- 5. Kline DG, Kim D, Midha R, Harsh
fícil identificar el tejido conectivo del inter C, Tiel R. Management and results of
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171
Mª del Pilar Uceda Carrascosa

Capítulo 18

Lesiones en tobillo y pie


Mª del Pilar Uceda Carrascosa
Servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología.
Hospital Universitario Reina Sofía (Córdoba)

Correspondencia: ucedasan@gmail.com

Palabras claves: ankle, foot injury, surgery

E
l objetivo de este trabajo es identi- osteofasciales y osteomusculares que justifi-
ficar las estructuras nerviosas que can la sintomatología encontrada y que di-
pueden lesionarse en traumatismos fiere de la encontrada en miembro superior.
de tobillo y pie, conocer la sintomatolo- Tras un extenso estudio bibliográfico
gía que nos alerta de su afectación, saber podemos afirmar que la lesión de un ner-
diagnosticar estas lesiones y establecer el vio periférico en traumatismos de tobillo
tratamiento correcto. y pie es una patología infra diagnosticada
La incidencia de lesión de nervios en e infra tratada.
miembros inferiores es menor a la lesiones
de nervios en miembro superior en una INTRODUCCIÓN
relación 5/11. Además, la recuperación es- La inervación del tobillo y pie depende
pontánea en estas localizaciones es inferior del plexo lumbo-sacro: ramas ventrales de
al 50 % si la comparamos con el miembro L-1, L-2, L-3, L-4 y L-5 y ramas ventrales
superior, donde la recuperación está próxi- de S-1, S-2 y S-3.
ma al 90%2. Los nervios periféricos en pie y Los nervios que participan en la inerva-
tobillo discurren por desfiladeros, estuches ción de pie y tobillo son:

172
Lesiones en tobillo y pie

• Nervio Ciático y sus dos ramas, nervio El nervio tibial posterior, proximal al
ciático poplíteo interno (CPI) y nervio anillo del soleo da ramas motoras para la
ciático poplíteo externo (CPE) o nervio musculatura gemelar y el músculo soleo.
peroneo común. Distal al anillo del soleo nacen las ramas
• Del CPI surge el nervio tibial poste- motoras para los músculos flexor largo de
rior y nervio safeno externo, los dedos, flexor largo del primer dedo y
• Del CPE nace el nervio peroneo su- músculo tibial posterior. Las ramas plantar
perficial y el nervio peroneo profun- medial y lateral se encargan de inervar la
do o nervio tibial anterior. musculatura intrínseca del pie. El nervio
• Nervio Femoral colabora con el nervio tibial posterior es responsable de toda la
safeno interno. inervación sensitiva del pie a excepción de
Vamos a estudiar las 5 ramas que pue- una pequeña zona en el margen interno
den lesionarse, describiendo su anatomía, del arco longitudinal.
la etiología de cada una, la clínica y los me-
dios de diagnóstico. Lesiones traumáticas del
En último apartado comentaremos el Nervio Tibial Posterior
tratamiento a seguir según sus particula- El síndrome del canal tarsiano traumá-
ridades. tico (STT) representa el 10-17% de to-
dos los síndromes del canal tarsiano3. Está
1. Nervio Tibial Posterior provocado por una lesión del nervio tibial
Neuro-anatomía: El nervio Tibial pos- posterior o sus ramas terminales en el ca-
terior parece la continuación del nervio ciá- nal del tarso. Pueden provocar este síndro-
tico. Aparece por el vértice del hueco popli- me las fracturas de extremo distal de tibia,
teo acompañando a los vasos poplíteos con fracturas de calcáneo, (Fig. 1) fracturas de
los que desciende hasta el anillo del múscu-
lo soleo al que atraviesa y avanza superficial
a los tendones flexores de los dedos, con el
músculo tibial posterior, músculo flexor lar-
go del primer dedo y con los vasos tibiales
posteriores. En el tercio distal de la pierna
se sitúa medial al tendón de Aquiles y entra
en el canal del tarso, que es una estructura
osteofibrosa delimitada por el borde poste-
rior del maléolo tibial y la apófisis posterior
del astrágalo y calcáneo y dando sus tres ra-
mas terminales: Nervio plantar medial, ner-
vio plantar lateral y rama calcánea medial.
Las ramas plantares van acompañadas por
las arterias plantar interna y externa respec-
tivamente, La rama calcánea medial a veces
surge del nervio tibial posterior antes del Fig. 1. Las fracturas de calcáneo son causa de
canal del tarso. un síndrome del túnel tarsiano.

173
Mª del Pilar Uceda Carrascosa

astrágalo, fracturas de tobillo y lesiones por sa y la neurolisis quirúrgica del nervio y


aplastamiento4. sus tres ramas terminales, disminuyendo
Es un síndrome sensitivo y neuroatrófi- las parestesias, el dolor y recuperándose la
co del pie que se manifiesta con dolor en sensibilidad5, 6 (Fig. 2). Se publican peores
la planta y zona interna del pie, tobillo y resultados en STT de origen traumático,
talón, hipoestesia, Tinel ++, parestesias y al existir adherencias del nervio y una en-
fenómeno de Valleix. En cuadros avanza- fermedad intraneural.
dos, la atrofia de la musculatura intrínseca Cuando no mejora la clínica y existe una
determina los dedos en garra con predo- neuralgia adhesiva, se utiliza la técnica del
minio de la musculatura extensora. En el enterramiento, provocando la ruptura de
diagnóstico son de utilidad los potenciales la vía del dolor periférico. Se realiza una
evocados y la electromiografía. liberación del nervio, se reseca la parte
El tratamiento implica tratar la cau- afectada y el extremo proximal se entierra
en músculo, fascia o hueso con una sutura
epineural (Fig. 3). Los resultados son bue-
nos en un 65-83%7.
La técnica de neuroestimulación del
nervio periférico (NEP), en casos resis-
tentes, consiste en identificar las zonas de
dolor e hiperestesia, exponer el nervio le-
sionado, suturar las derivaciones al epineu-
ro y conectarlas al generador implantado
en el muslo.

Lesión traumática de las


ramas terminales
Nervio Plantar Medial: Frecuente en
Fig. 2. Neurolisis quirúrgica del nervio
tibial posterior (cortesía del Dr. Pedro corredores con valgo en retropié o prona-
Hernández Cortés). ción excesiva y en hipertrofia del músculo
abductor. Cursa con dolor fulgurante en
cara medial del arco que se irradia a los
tres dedos mediales y dedos en garra. El
tratamiento de elección es la “neurolisis”.
Nervio Plantar Lateral: En fracturas por
stress de metatarsianos (Fig. 4). El dolor se
localiza en el talón y la planta del pie8, 9.
Nervio Calcáneo Medial: Normal-
mente se trata de una sección iatrógena
del nervio o un neuroma postraumático.
Aparece dolor y parestesias en talón. El
Fig. 3. Esquema de técnica del enterramiento tratamiento consiste en resecar el neuroma
tras la extirpación del neuroma. y enterrar el extremo proximal.

174
Lesiones en tobillo y pie

Otras causas de Lesión del Nervio 2. Nervio Safeno Externo


Tibial Posterior o Sural Medial
Heridas: Las lesiones de nervios por
heridas en la extremidad inferior están Neuro-anatomía
muy asociadas a daños de piel, músculos, Es una rama sensitiva del Nervio Tibial
hueso y vasos en la misma zona anatómi- Posterior que emerge del mismo por la
ca10. (Fig. 5). cara posterior, recibe el nervio accesorio
En esta pérdida de continuidad del ner- del safeno externo (rama del nervio ciá-
vio tibial posterior, está justificada la repa- tico poplíteo externo) y forman el Nervio
ración microquirúrgica del mismo. El pie Sural. Este nervio, atraviesa la aponeuro-
anestesiado tiende a favorecer las lesiones sis profunda haciéndose superficial para
tróficas y ulceraciones y un ligero retorno descender con la vena safena externa en
de la sensibilidad es útil. las proximidades del tendón de Aquiles.
En fracturas diafisarias de tibia asocia- Se anastomosa con el nervio peroneo co-
das a procesos improductivos de reducción municante y se curva debajo del maleolo
de las mismas11 se han publicado lesión del peroneo dando la rama cutánea dorsal ex-
nervio tibial posterior. terna y la rama calcánea lateral12. Inerva la
piel de la pantorrilla, borde lateral del pie y
borde lateral del 5º dedo así como la mitad
externa del talón.

Lesión traumática del Nervio Sural


Este nervio puede lesionarse de manera
iatrógena por ser una fuente donante de
injertos y, también, en la toma de biopsias.
Igualmente, puede afectarse cuando atra-
viesa la fascia, en las fracturas de maléolo
externo, esguinces recidivantes de tobillo,

Fig. 4. Fractura por stress de 3º Metatarsiano que Fig. 5. Herida en cara antero-interna de pie con
debutó con afectación del nervio plantar lateral. grave afectación vasculo-nerviosa.

175
Mª del Pilar Uceda Carrascosa

cirugías de tendón de Aquiles y en cirugías Separándose del nervio peroneo superficial


de calcáneo13. desciende y atraviesa el tabique intermus-
La clínica es de hipoestesia, parestesias cular llegando al compartimento anterior.
y dolor en su trayecto. El test de provoca- Desciende profundo a la musculatura ex-
ción con la flexión y supinación del tobillo tensora de los dedos y primer dedo, rela-
orientan al diagnóstico. cionándose con el músculo tibial anterior
y los vasos tibiales anteriores. Avanza bajo
3. Nervio Tibial Anterior o el retináculo extensor hasta la articulación
Nervio Peroneo Profundo tibio-peroneo-astragalina y da dos ramas
terminales. Todas las ramas motoras nacen
Neuro-anatomía en su recorrido proximal, excepto la rama
Es un nervio que emerge del nervio pero- para el músculo pedio, que surge tras su paso
neo común o nervio ciático popliteo exter- bajo el retináculo. Se encarga de la sensibili-
no, en el compartimiento externo de la pier- dad de la primera comisura interdigital.
na, a la altura del cuello del peroné, entre las
cabezas del músculo peroneo lateral largo. Lesión Traumática del Nervio
Tibial Anterior
Las causas posibles de lesión son:
• En un síndrome compartimental anterior
por ejercicio excesivo o traumatismo di-
recto del grupo muscular anterolateral. Se
manifiesta con dolor anterolateral en pier-
na, parálisis en la extensión de pie y dedos
y alteraciones sensitivas. El tratamiento es
la apertura urgente del compartimento14.
• En fracturas diafisarias de tibia por la
proximidad al paquete vásculo-nervioso.
Esta lesión es más frecuente en manio-
bras insatisfactorias de reducción15 como
una epifisiolisis de tobillo y la evolución
será peor cuanto más tiempo transcurra
antes de la reducción16.
• Síndrome tarsal anterior traumático, por
ejemplo en las fracturas dístales de tibia,
manifestándose con dolor, hipoestesia y
anestesia de primera comisura y déficit
de extensión del primer dedo y dedos
largos. El tratamiento implica la apertu-
ra urgente del retináculo17,18.
También podemos encontrar un síndro-
Fig. 6. Osteofitos y consolidación viciosa en me tarsal anterior por osteofitos dorsales
tibia que provocan un síndrome tarsal anterior. en el canto tibial anterior (Fig.6) por el uso

176
Lesiones en tobillo y pie

de botas de esquí, por microtraumatismos • Esguinces de repetición de tobillo. La


repetidos en corredores al atarse una llave clínica es de dolor y parestesias que em-
a la zapatilla y por practicar abdominales peoran con el calzado.
con los pies bajo barra metálica. • Síndrome compartimental en deportis-
• Lesión yatrógena en fracturas diafisarias tas por ejercicio excesivo y en fracturas
intervenidas con enclavados con blo- de tobillo. En el 9% de las fracturas de
queo proximal o por fijadores externos tobillo no intervenidas se presenta le-
(Fig. 7). Robinson publica una disfun- sión de nervio peroneo superficial frente
ción del nervio peroneo anterior en 5.3 a 21% de las fracturas intervenidas. La
% de las fracturas diafisarias de tibia in- sintomatología es el dolor persistente y
tervenidas. La debilidad en el músculo habitualmente no se identifica la lesión23.
extensor largo del primer dedo nos debe • Neuromas incisionales en intervencio-
alertar. El tratamiento obliga a veces a nes percutáneas, mini abordajes y ar-
un injerto con el nervio sural19, 20. troscopia de tobillo, con un porcentaje
de 4.4 % de lesiones de nervio periférico.
4. Nervio Peroneo Se manifiesta con dolor bien localizado y
Superficial disestesias que empeoran con el calzado.
Con el test de infiltración con anestésico
Neuro-anatomía local se diferencia un neuroma de una
Rama del nervio peroneo común que des- sección de nervio24.
ciende por el compartimento antero-lateral,
perfora la fascia profunda por encima de la
punta del maleolo externo, se hace subcutá-
neo y se divide en dos ramas superficiales al
retináculo: ramo cutáneo dorsal intermedio
y ramo cutáneo dorsal medial que dan ra-
mas cutáneas digitales para los dedos21.
Es un nervio que da la sensibilidad del
dorso de pie desde el 1º al 3º dedo (excep-
to primer espacio interdigital,) y borde la-
teral del pie (excepto cara lateral del quin-
to dedo). Su inervación motora es para los
músculos peroneo lateral largo y corto.

Lesiones traumáticas del Nervio


Peroneo Superficial
Puede estar comprimido en el momento
que deja la fascia profunda y se hace super-
ficial. El tratamiento quirúrgico consiste
en liberar el nervio con fasciotomia proxi-
mal y distal al punto de salida22. Fig. 7. Lesión del nervio tibial anterior en la
Las causas son: colocación de los pines proximales.

177
Mª del Pilar Uceda Carrascosa

5. Nervio Safeno Interno aguda o de manera diferida. Si el gap es


mayor de 3 cm o no se cumplen las cir-
Neuro-anatomía cunstancias anteriores se aconseja el injer-
Es un nervio sensitivo puro, rama pro- to, en fase aguda o diferida25.
funda del nervio femoral. Desciende con la
arteria femoral por el conducto de los mús- Injerto nervioso con nervio sural e
culos adductores y rodea el cóndilo interno injerto nervioso vascularizado
y avanza con el gemelo interno perforando El nervio donante es el nervio sural.
la aponeurosis superficial. Acompaña a la Cuando el gap es menor o igual a 6 cm
vena safena magna y discurre por delante los resultados con el injerto son buenos26.
del maléolo tibial, dando el ramo múscu- Si el gap es mayor o igual a 6 cm, se utiliza
lo-cutáneo de la pierna que se anastomosa el injerto nervioso vascularizado. Esto se
con el nervio peroneo superficial, y ramos produce en lesiones por tracción o avul-
articulares para la articulación tibio-tar- sión. Se utiliza el nervio sural con la arteria
siana así como numerosos ramos cutáneos y vena sural. Los resultados son buenos al
para el borde interno del pie. Inerva cara recuperarse la sensibilidad y función par-
anterior medial de muslo, rodilla y pierna cialmente27.
y borde interno de pie y talón.
Transferencia (Neurotización)
Lesión traumática del Nervio Para conseguir la extensión del tobillo
Safeno Interno se realiza la transferencia (Neurotización)
Las causas posibles de lesión son la ex- de ramas motoras del nervio tibial poste-
tirpación de vena safena, las fracturas del rior al nervio peroneo común. Tambien
maléolo tibial y la fasciotomía para liberar puede utilizarse como nervio motor, de
el compartimento medial. Se manifiesta manera opcional, el nervio peroneo su-
por dolor en la zona medial del tobillo y perficial28.
pie que aumenta con el uso de calzado.
El tratamiento es conservador con par- Aloinjertos nerviosos
ches analgésicos, cortisona y bloqueos te- Ante la falta de continuidad pueden
rapéuticos en zona de la lesión con posible utilizarse productos sintéticos tubulares
extirpación del neuroma. (Avance Nerve Graft, Axogen). Son mi-
croestructuras con proteinas y factores de
Tratamiento quirúrgico crecimiento. Entre las ventajas del uso del
de lesiones traumáticas aloinjerto se encuentran el no sacrificar
de nervios periféricos de un nervio sensitivo donante, no provocar
pie y tobillo morbilidad en la zona donante y la infinita
disponibilidad29.
Micro-sutura Agotadas las posibilidades terapéuticas y
Cuando el gap es menor o igual a 3 cm pensando en proporcionar al paciente un
con bordes sanos, es una sección limpia y tobillo y pie funcionalmente bueno, se rea-
no existe tensión tras la sutura se aconseja lizarán cirugías definitivas con artrodesis, y
la microsutura (epi o endoneural) en fase transposiciones tendinosas.

178
Lesiones en tobillo y pie

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