AMBIENTE DE CUIDADO

Material para Grupos de Cuidado y

Apoyo

Transcrito y adaptado por: Danny Carmona

 Sesión: La avaricia

“Uno de la gente le dijo: -Maestro, di a mi hermano que reparta la herencia conmigo-. Él le

respondió: ¡Hombre! ¿Quién me ha constituido juez o repartidor entre vosotros? Y les dijo:
“Mirad y guardaos de toda codicia, porque, aun en la abundancia, la vida de uno no está
asegurada por sus bienes”. (Lucas 12. 13-15)

Luego Jesús de expresar que debemos guardarnos de la avaricia. Les reafirmo esta
enseñanza contándoles la siguiente historia: “Un hombre rico tenía un terreno que produjo
una cosecha muy buena. Él pensó: ¿Qué hago ahora que no tengo donde guardar la
cosecha? Entonces se dijo: Esto es lo que voy hacer; tumbare todos mis graneros y los hare
más grandes. Así podre guardar allí toda mi cosecha y todo lo demás. Me diré a mí mismo:
Tienes bastante acumulado para muchos años. Come, bebe y diviértete. Pero Dios le dijo:
Tonto, esta noche morirás, y entonces ¿Quién se quedara con todo lo que guardaste? Esto
es lo que pasa con el que consigue mucho para sí mismo, pero no es rico delante de los ojos
de Dios”. Lucas 12. 16-21.

Bien se puede afirmar que: “El corazón sigue al tesoro”  La gente avara cree merecerse
todas las cosas buenas que aparecen en su camino. Su pensamiento es: lo que es mío es mío
porque yo me lo he ganado; y mucho más está por venir. Por consiguiente, es difícil lograr
que una persona avara se separe de su dinero y de sus cosas. ¿Por qué? Porque es el ídolo o
dios de su corazón.

Según la apreciación de Lucas 16.21: “Esto es lo que pasa con el que consigue mucho
para sí mismo, pero no es rico delante de los ojos de Dios”  ¿Somos ricos para con Dios
o tontos para con Dios? Esa respuesta depende de cual generoso sea nuestro corazón. La
gente avara tiene por lo general alguna historia que relatar, esta historia explica su tendencia
a la avaricia. Por ejemplo, criarse en un hogar donde hay poca seguridad financiera, o
ninguna, podría explicar porque una persona tiende a aferrarse a cualquier suma de dinero.
De igual manera, es fácil entender por qué alguien que alguna vez perdió todo ahora se aferra
a lo que tiene.

VER LO INVISIBLE
La avaricia se disfraza. Tal vez jamás hemos conocido a un hombre o mujer que haya
admitido: “Luchar con la avaricia”. Lo que dicen es: “Soy cuidadoso”. Es casi imposible
identificar la avaricia en nuestra vida, la avaricia se oculta detrás de varias virtudes. La gente
avara ahorra, y ahorrar es algo bueno. La gente avara suele planificar, y planificar es algo
bueno. La gente avara desea asegurarse de que su futuro financiero este seguro, y eso es algo
bueno. ¿No es verdad? Es fácil ocultar la avaricia: de nosotros mismos. Pero la gente que nos
rodea sabe.
¿Cómo podemos identificarla?  La gente avara no da con alegría. La gente avara es reacia
a compartir. Las personas avaras son malos perdedores. La gente avara es reacia a expresar
gratitud. La gente avara no está contenta con lo que tiene. La gente avara trata de controlar a
la gente con su dinero.
La avaricia no tiene límites socioeconómicos, podemos conocer de gente avara pobre y
rica. La avaricia no es un asunto financiero; es un asunto del corazón. Las ganancias
financieras no hacen que la gente sea menos avara. Las ganancias o pérdidas financieras no
cambian nada, porque la avaricia procede del corazón.

EL HOMBRE EN EL ESPEJO
¿Es la avaricia un problema para usted? ¿Le cuesta dar dinero? ¿Encuentra rápidamente
una excusa para no hacerlo? ¿Hace preguntas que le da una apariencia de ser un buen
administrador cuando en realidad lo que está haciendo es buscar una excusa para no dar?
Cuando da, ¿siente que la otra persona le debe algo a cambio? En otras palabras ¿sus
obsequios van siempre acompañado de condiciones? Si este es un asunto del corazón, le
aseguro que su familia siente que está compitiendo con sus cosas. A veces sienten que usted
valora más sus cosas que a ellos. Tal vez sientan que le tienen que mendigar cuando necesitan
que usted les ayude financieramente.

Consideremos esta advertencia que dio Jesús: “¡Tengan cuidado! – advirtió a la gente -.
Absténganse de toda avaricia; la vida de una persona no depende de la abundancia de sus
bienes”. Lucas 12.15

¿Por qué tener cuidado con esta emoción? La avaricia es la más sutil de todas. Tomemos
nota de esta afirmación: “la vida de un hombre no depende de la abundancia de sus bienes.”
Para la persona avara, las cosas equivalen a su vida. Se tragaron la mentira de que “mis cosas
son mi vida”, por lo tanto, el manipular o pedir o dañar sus cosas es… una amenaza personal.
Sus cosas son una extensión de quienes son.

LA FUERZA IMPULSORA
El miedo es la fuerza que impulsa a la avaricia. El miedo alimenta la avaricia. La avaricia
está apoyada por una serie interminable de qué pasa si…
“Porque el temor que me espantaba me ha venido. Y me ha acontecido lo que yo temía”.
Job 3.25. ¿Qué bienes o posesiones tiene usted que evita compartir? ¿Qué cosas teme
que le pueden ocurrir?
¿Qué si no hay suficiente? ¿Qué si no me dan lo que me corresponde? ¿Qué si tiene más
que yo? ¿Qué si la economía se derrumba? La gente que tiene avaricia atascada en el corazón
teme que Dios no lo pueda cuidar o que no vaya a hacerlo. El espacio entre lo que sospechan
que Dios está dispuesto a hacer y lo que ellos desean se convierte en una inmensa fuente de
ansiedad. ¿Cómo está su confianza en este día con la realidad temporal que esta
viviendo?
 Las personas con problemas de avaricia nunca pueden tener todo lo que necesita para
satisfacer su necesidad de sentirse segura frente a cualquier eventualidad. Su apetito nunca
se ve satisfecho, Los avaros casi nunca tienen paz con los demás ni con ellos mismos. La
avaricia termina por presionar las relaciones en todos los niveles, carcomiendo relaciones de
muchos años a causa de objetos que tienen una vida útil de unos pocos años.

Para Profundizar:

1. ¿Cómo afecta la avaricia a las personas?

2. “La avaricia no es un asunto financiero; es un asunto del corazón. ¿está usted de acuerdo?
¿Por qué?

3. ¿Cómo evaluaría en su propia vida la avaricia? ¿La está experimentando? ¿De qué
manera necesitaría ayuda en esta área?