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Funciones y responsabilidades del revisor fiscal.

Angie Vanessa Rodríguez Cadena

Ledis Janice Cardona mazo

Yesid Luis salamanca Ipuchima

Fundación universitaria del área andina

Especialización en revisoría fiscal y auditoria forense

Responsabilidad del revisor fiscal y sistema penal acusatorio.


Tabla de contenido ii

1. Caso 1……………………………………………………………………………...Error!

Bookmark not defined.

2. Caso 2…………………………………………………………………………..…10

Conclusiones. ........................................................................................................ ….14

Referencias ................................................................................................................. 15
iii

Introducción

La Constitución Política, artículo 334, asigna al Estado la dirección general de laeconomía, y le otorga la facultad de

intervenir por mandato de la ley en lasdistintas etapas del proceso económico, desde la producción hasta el consumo delos

bienes y servicios. Muchas son las leyes, decretos y reglamentos que se handictado al amparo de ciertas normas

constitucionales, regulando varios ynumerosos aspectos de la economía en todos sus sectores.Las responsabilidades que el

Estado Colombiano le ha estado asignando a losContadores Públicos y en especial a los Revisores Fiscales, hace que su

trabajose vean enmarcado en grandes situaciones de riesgo que por efecto de laspresiones, los problemas fiscales de la

Empresas, los quiebras que se han dadoen grandes multinacionales, el flujo de dinero ilegal, el lavado de activos, lalegalización

de fortunas mal habidas, la triangulación empresarial, los estadosfinancieros sin sustentaciones físicas y razonables y la

misma presión social yeconómica de su entorno, han puesto en tela de juicio la profesión contable.Debemos hacer una reflexión

sobre lo qué es una profesión, su responsabilidadsocial, su finalidad, cómo ayuda la ética al cumplimiento del deber del

profesional,y ante todo una concientización acerca de que todos los profesionales, incluyendopor supuesto a los Contadores

Públicos, tenemos una responsabilidad con laSociedad, por el hecho de ser profesionales y hacer parte de ella.El Revisor

Fiscal debe conocer el ordenamiento jurídico, en particular en aquellasáreas más directamente relacionadas con su

especialidad. Pero sí el RevisorFiscal reduce su ética profesional a lo que está aceptado o tolerado por lasociedad, tendremos un

ejército de profesionales, que con su firma, puedenrespaldar indelicadezas y abusos contra el bien común.La Revisoría Fiscal

entonces no es una función, ni mucho menos una actividad;no es un órgano más del Estado, ni una unidad funcional de la

organización, antetodo, debe concebirse como una institución, es decir, como producto social ycultural que se construye a

partir de unos acuerdos sociales básicos, por lo cualsu papel reside en la defensa del interés público
Caso 1 1

JUZGADO LABORAL DE CIRCUITO DE BOGOTA

Bogotá, D.C., 24 de Mayo de 2019

PROCESO: ACCION Y RESTABLECIMIENTO DEL DERECHO


ACTOR: JAVIER CALAMARO
CONTRA: SUPERINTENDENCIA DE ECONOMÍA SOLIDARIA
RADICADO: Expediente núm.110010325000201900546

AUDIENCIA PUBLICA N° 489

En la Ciudad de Bogotá DC, a los Quince (15) días del mes de Julio de Dos mil Dieciséis
(2016)., el suscrito Juez Octavo Laboral del circuito, en asocio con su secretaria, se
constituyó en audiencia pública y declaró legamente abierto el acto con el fin de dar lectura
a la siguiente:
SENTENCIA N° 178

I. ANTECEDENTES

El señor JAVIER CALAMARO identificado con cedula Ciudadanía N° 15.875.458 de


Cali, interpuso ante esta Corporación demanda de nulidad y restablecimiento del derecho
consagrada 137 del CPC (ley 1437 de 2011). contra las Resolución número 0024 del 05
de enero de 2016, expedidas por la SÚPERINTENDENCIA DE ECONOMÍA
SOLIDARIA.

1.1 HECHOS
La Resolución N° 0024 de 05 de enero de 2016 sanciona al señor Javier Calamaro y
lo inhabilita para el ejercicio de cargos en entidades sometidas a la vigilancia y control
de la Superintendencia de Economía Solidaria por el término de cinco años. Además,
ordena dar traslado a la Junta Central de Contadores con el fin de investigar y sancionar
disciplinariamente la conducta del revisor fiscal.

1.2. PRETENSIÓN:
La demanda instaurada busca la nulidad de los actos citados y que, como
consecuencia de lo anterior, se ordene a la demandada la Superintendencia de
Economía Solidaria, habilitar al señor Javier Calamaro para el ejercicio de cargos en
entidades sometidas a la vigilancia y control de la Superintendencia. Lo anterior basado
en los siguientes argumentos:

• Los estados financieros durante el periodo de ejercicio siempre fueron


aprobados por Superintendencia de Economía Solidaria sin objeciones.
• La Resolución N° 0024 de 05 de enero de 2016 no señala las normas que
en concepto de la entidad Superintendencia de Economía Solidaria fueron2
desconocidas, no efectúa un análisis de los descargos presentados por el señor
Javier Calamaro, ni del contenido del memorando que el revisor fiscal en el
momento adecuado envió a la Gerencia de la Cooperativa, incumpliendo con
ello el deber de motivar las decisiones administrativas en sus aspectos de hecho
y de derecho, omisión que conlleva a la nulidad de la citada resolución por
violación del debido proceso consagrado en el artículo 29 de la Constitución
Nacional.
• Por último, sostiene el demandante que para la fecha en que se
profiere la Resolución, el ya no se encontraba inscrito en el registro mercantil ya
que dejó de ejercer el cargo el 30 de agosto de 2013

2.1 . CONTESTACIÓN DEL ACCIONADO


La superintendencia de economía Solidaria, mediante apoderada, contestó la demanda,
oponiéndose a sus pretensiones, con fundamento en lo siguiente:

Pretende el demandado que se confirme la Resolución N° 0024 de 05 de enero de 2016


emitida por la Superintendencia de Economía Solidaria en la que sanciona al señor
Javier Calamaro basado en los siguientes argumentos:
Sí se realizaron objeciones a los estados financieros a través de oficio de junio 14 de
2011 y se formularon requerimientos al informe de revisoría fiscal, correspondiente al
primer trimestre de ese año (que debió ser presentado el 15 de abril de ese mismo año).

Sostiene que con ocasión a la negligencia en el cumplimiento de los deberes del


revisor fiscal comenzaron los problemas de la Cooperativa Nacional Bucaramanga, los
cuales la llevaron a su liquidación, causando perjuicios tanto a sus asociados como a
terceros que depositaron sus ahorros, pues la Cooperativa Nacional Bucaramanga
únicamente estaba autorizada para captar dinero de sus asociados, presentándose así
captación ilegal de ahorros.

Sólo al final de la gestión de Javier Calamaro, este advierte a la gerencia de la


Cooperativa Nacional Bucaramanga sobre ciertas irregularidades, labor que a su juicio
debió ejercer en forma permanente desde el 2009, cuando se aprobó la captación de
ahorros de terceros, poniendo en conocimiento de la Asamblea General, del Consejo
de Administración y de la Junta de Vigilancia en su debida oportunidad las presuntas
irregularidades.
En cuanto a la afirmación de la demanda referente a que no toda omisión es sancionable,
señala que los contadores públicos están en la obligación de dar cumplimiento a sus
funciones, así como a observar las normas legales vigentes, tales como la Ley 43 de
1990, el Código de Comercio entre otras. Al efecto, transcribe el artículo 207 del C. de
Co y los artículos 9 y 37.6 de la Ley 43 de 1990, de donde concluye que el contador
calamaro incumplió estos preceptos normativos al omitir pronunciarse por escrito ante la
Asamblea, Junta Directiva o Gerente de las irregularidades existentes al interior del ente.
II.2.4. En lo que respecta a la prescripción de la responsabilidad objetiva alegada por el3
demandante, invoca jurisprudencia constitucional que alude a la diligencia, el cuidado y
la pericia. Señala, entonces, que los contadores públicos, atendiendo a su condición de
expertos en la materia, deben propender por el cumplimiento de las normas que tengan
injerencia en su ejercicio profesional, el cual, al ser omitido, da lugar sanción disciplinaria.

II.2.3. Luego, señala que el apoderado continúa el texto de la demanda con la


transcripción de los mismos argumentos que fueron expuestos por éste en el escrito de
descargos, los cuales se analizaron en la etapa procesal pertinente, por lo cual transcribe
las consideraciones plasmadas en la Resolución 024 de 2016, acotando que con las
conductas desplegadas por el profesional contable Calamaro se vulneraron los artículos
37.4 y 37.6 de la Ley 43 de 1990.

2. CONCIDERACIONES

Este despacho es competente para conocer de la presente acción y resolver por


disposición del artículo 137 del CPC (ley 1437 de 2011).

CASO CONCRETO

Una vez escucha a las partes y las pruebas allegadas al expediente jurisprudencial
aplicada a los casos de autos, encuentra el despacho que no hay lugar al amparo a lo
solicitado, por las razones siguientes:
El señor JAVIER CALAMARO, interpuso ante esta Corporación demanda de nulidad y
restablecimiento del derecho consagrada 137 del CPC (ley 1437 de 2011). contra la
Resolución número 0024 del 05 de enero de 2016, expedidas por la
SÚPERINTENDENCIA DE ECONOMÍA SOLIDARIA.
Según el demandante Los estados financieros durante el periodo de ejercicio siempre
fueron aprobados por Superintendencia de Economía Solidaria sin objeciones.

La Resolución N° 0024 de 05 de enero de 2016 no señala las normas que en


concepto de la entidad Superintendencia de Economía Solidaria fueron desconocidas,
no efectúa un análisis de los descargos presentados por el señor Javier Calamaro, ni
del contenido del memorando que el revisor fiscal en el momento adecuado envió a la
Gerencia de la Cooperativa, incumpliendo con ello el deber de motivar las decisiones
administrativas en sus aspectos de hecho y de derecho, omisión que conlleva a la
nulidad de la citada resolución por violación del debido proceso consagrado en el artículo
29 de la Constitución Nacional.
Por último, sostiene el demandante que para la fecha en que se profiere la
Resolución, el ya no se encontraba inscrito en el registro mercantil ya que dejó de
ejercer el cargo el 30 de agosto de 2013

En atención a las reclamaciones La superintendencia de economía Solidaria, mediante


apoderada, contestó la demanda, oponiéndose a sus pretensiones, con fundamento en
lo siguiente:
4
Pretende el demandado que se confirme la Resolución N° 0024 de 05 de enero de 2016
emitida por la Superintendencia de Economía Solidaria en la que sanciona al señor
Javier Calamaro basado en los siguientes argumentos:
Sí se realizaron objeciones a los estados financieros a través de oficio de junio 14 de
2011 y se formularon requerimientos al informe de revisoría fiscal, correspondiente al
primer trimestre de ese año (que debió ser presentado el 15 de abril de ese mismo año).

Sostiene que con ocasión a la negligencia en el cumplimiento de los deberes del


revisor fiscal comenzaron los problemas de la Cooperativa Nacional Bucaramanga, los
cuales la llevaron a su liquidación, causando perjuicios tanto a sus asociados como a
terceros que depositaron sus ahorros, pues la Cooperativa Nacional Bucaramanga
únicamente estaba autorizada para captar dinero de sus asociados, presentándose así
captación ilegal de ahorros.

Sólo al final de la gestión de Javier Calamaro, este advierte a la gerencia de la


Cooperativa Nacional Bucaramanga sobre ciertas irregularidades, labor que a su juicio
debió ejercer en forma permanente desde el 2009, cuando se aprobó la captación de
ahorros de terceros, poniendo en conocimiento de la Asamblea General, del Consejo
de Administración y de la Junta de Vigilancia en su debida oportunidad las presuntas
irregularidades.

En cuanto a la afirmación de la demanda referente a que no toda omisión es sancionable,


señala que los contadores públicos están en la obligación de dar cumplimiento a sus
funciones, así como a observar las normas legales vigentes, tales como la Ley 43 de
1990, el Código de Comercio entre otras. Al efecto, transcribe el artículo 207 del C. de
Co y los artículos 9 y 37.6 de la Ley 43 de 1990, de donde concluye que el contador
calamaro incumplió estos preceptos normativos al omitir pronunciarse por escrito ante la
Asamblea, Junta Directiva o Gerente de las irregularidades existentes al interior del ente.

En lo que respecta a la prescripción de la responsabilidad objetiva alegada por el


demandante, invoca jurisprudencia constitucional que alude a la diligencia, el cuidado y
la pericia. Señala, entonces, que los contadores públicos, atendiendo a su condición de
expertos en la materia, deben propender por el cumplimiento de las normas que tengan
injerencia en su ejercicio profesional, el cual, al ser omitido, da lugar sanción disciplinaria.

Luego, señala que el apoderado continúa el texto de la demanda con la transcripción de


los mismos argumentos que fueron expuestos por éste en el escrito de descargos, los
cuales se analizaron en la etapa procesal pertinente, por lo cual transcribe las
consideraciones plasmadas en la Resolución 024 de 2016, acotando que con las
conductas desplegadas por el profesional contable Calamaro se vulneraron los artículos
37.4 y 37.6 de la Ley 43 de 1990.

Teniendo en cuenta lo anteriormente expuesto, los documentos anexos al expediente


este juzgado considera que el demandado la superintendencia de economía solidaria, 5
demostró que el revisor fiscal incumplió sus obligaciones al no dar cuenta oportuna
de las irregularidades al ente competente y colaborar con las entidades de control. Y
ordena compulsar copias a la Junta Central de Contadores para que se investigue y
sanciones disciplinariamente.

Son funciones del revisor fiscal:

Dar oportuna cuenta, por escrito, a la asamblea o junta de socios, a la junta


directiva o al gerente, según los casos, de las irregularidades que ocurran en
el funcionamiento de la sociedad y en el desarrollo de sus negocios…”
(Negrilla y subrayado fuera de texto).

Lo anotado demuestra con suficiencia que la SUPERINTENDENCIA se ajustó a derecho


al hallar disciplinariamente responsable al contador sancionado por haber omitido la
presentación de las observaciones o advertencias a que se hallaba obligado en el ejercicio
de su función como revisor fiscal; y tal hecho se corrobora mediante la aceptación que su
mismo apoderado hace de la falta en que aquel incurrió, al admitir que las supuestas
advertencias se hicieron terminado su periodo; lo cual, desde luego, no apunta a desvirtuar
el cargo así formulado por la Administración, pues la norma transcrita no admite duda
alguna en cuanto a que dichas observaciones deben elevarse por escrito.

A partir de lo señalado, se procede entonces a verificar si era menester que la conducta


omisiva cuestionada generare la acusación de un daño a la empresa, en los términos
indicados por el demandante, como presupuesto para la procedencia de la sanción
disciplinaria. Al respecto, arguye el demandante que no toda omisión es susceptible de ser
sancionada.

Sea lo primero precisar que las normas regulatorias de la profesión de contador público
previstas en la Ley 43 de 1990, están llamadas a garantizar que la información contable y
financiera de los entes económicos refleje la realidad de acuerdo con las normas y
principios de contabilidad generalmente aceptados, pues en virtud de ella se habrán de
generar decisiones por parte de socios, inversionistas, del mismo Estado y de la comunidad
en general, que de resultar errónea o imprecisa, puede afectar negativamente el
desenvolvimiento económico asociado al ente de que se trate, y a todos quienes directa o
indirectamente tengan relación con éste. De ahí que la observancia estricta de la ética y de
la normativa que regula el ejercicio profesional del contador público revista la mayor
importancia, y que por tanto, su desconocimiento acarree las consecuencias sancionatorias
previstas en la mencionada Ley.

A fin de tener presente el contenido ético de la profesión contable, vale la pena transcribir
el contenido del artículo 35 de la Ley 43 de 1990:
6
Las siguientes declaraciones de principios constituyen el fundamento esencial
para el desarrollo de las normas sobre ética de la Contaduría Pública:

La Contaduría Pública es una profesión que tiene como fin satisfacer


necesidades de la sociedad, mediante la medición, evaluación,
ordenamiento, análisis e interpretación de la información financiera de las
empresas o los individuos y la preparación de informes sobre la
correspondiente situación financiera, sobre los cuales se basan las decisiones
de los empresarios, inversionistas, acreedores, demás terceros interesados y
el Estado acerca del futuro de dichos entes económicos. El Contador Público
como depositario de la confianza pública, da fe pública cuando con su firma y
número de tarjeta profesional suscribe un documento en que certifique sobre
determinados hechos económicos. Esta certificación, hará parte integral de lo
examinado. El Contador Público, sea en la actividad pública o privada es un
factor de activa y directa intervención en la vida de los organismos públicos y
privados. Su obligación es velar por los intereses económicos de la
comunidad, entendiéndose por ésta no solamente a las personas naturales o
jurídicas vinculadas directamente a la empresa sino a la sociedad en general,
y naturalmente, el Estado. La conciencia moral, la aptitud profesional y la
independencia mental constituye su esencia espiritual. El ejercicio de la
Contaduría Pública implica una función social especialmente a través de la fe
pública que se otorga en beneficio del orden y la seguridad en las relaciones
económicas entre el Estado y los particulares, o de éstos entre sí”.
(Subrayado fuera de texto).

Asimismo, el artículo 8 ibídem dispone:

“De las normas que deben observar los Contadores Públicos. Los Contadores
Públicos están obligados a:

1. Observar las normas de ética profesional.

2. Actuar con sujeción a las normas de auditoría generalmente aceptadas.


3. Cumplir las normas legales vigentes.

4. Vigilar que el registro e información contable se fundamente en principios


de contabilidad generalmente aceptados en Colombia. (Subrayado fuera de
texto).

La normativa expuesta permite explicar que la responsabilidad disciplinaria derivada de las


faltas a la ética y a las normas legales en que incurren los contadores públicos no se halle
sometida al examen referente a la eventual causación de un daño patrimonial específico a
la empresa, pues por un lado, el objeto evaluable en este ámbito de la responsabilidad es
la conducta del profesional en si misma; y, por el otro, ello encuentra su razón de ser en7
las graves implicaciones que para el ente económico, la sociedad y el Estado puede
revestir una información económica desfasada, irreal o equívoca.

De este modo, la inobservancia de los deberes a que estaba obligado el demandante frente
a la Empresa en su calidad de revisor fiscal, se enmarca en las conductas previstas en las
normas invocadas por la Junta Central de Contadores así:

“Artículo 37. En consecuencia, el Contador Público debe considerar y estudiar


al usuario de sus servicios como ente económico separado que es,
relacionarlo con las circunstancias particulares de su actividad, sean éstas
internas o externas, con el fin de aplicar, en cada caso, las técnicas y métodos
más adecuados para el tipo de ente económico y la clase de trabajo que se
le ha encomendado, observando en todos los casos, los siguientes principios
básicos de ética profesional:

(…)

37.4. Responsabilidad.

(…)

37.6. Observaciones de las disposiciones normativas…” (Subrayado fuera de


texto).

Por su parte, las mencionadas conductas generan la sanción de suspensión del ejercicio
profesional, sin condicionamiento alguno previsto en la Ley, relacionado con el efecto de la
misma, según se deriva del tenor literal del artículo 25 de la Ley 43 de 1990:

“Artículo 25. De la suspensión. Son causales de suspensión de la inscripción


de un Contador Público hasta el término de un (1) año, las siguientes:

2. La violación manifiesta de las normas de ética profesional,


(…)
4. Desconocer las normas jurídicas vigentes sobre la manera de ejercer la
profesión…” (Subrayado fuera de texto).

Lo expuesto, conlleva a colegir que la Junta Central de Contadores aplicó la normativa


sancionatoria correspondiente a las faltas encontradas en el ejercicio profesional del
contador público, sin que para ello requiriere efectuar verificaciones adicionales, que, se
recalca, no se hallan consagradas legalmente.

Así, la responsabilidad objetiva se refiere a la imposición de sanciones de plano, con


fundamento en la simple constatación fáctica de una determinada infracción y sin efectuar
un análisis de los elementos subjetivos de la conducta previamente tipificada, como son8
la intencionalidad, la culpabilidad e incluso la imputabilidad1. De este modo, y dado que el
dolo comporta un factor subjetivo asociado a la intencionalidad del infractor, el análisis de
su eventual existencia se asocia con la verificación de la objetividad o subjetividad con que
fue endilgada la falta, y por ende la responsabilidad del sujeto disciplinado.

Pues bien, en el presente caso, es claro que el elemento subjetivo referente al dolo no
constituyó un factor estimable a la hora de calificar la falta en que incurrió el contador,
puesto que el criterio subjetivo de la conducta infractora se encontró soportada en sede de
culpa y no de dolo. Así se deriva de la Resolución 367 de 2009, al señalarse allí lo siguiente:

“…el comportamiento que vulnera la ética profesional se puede calificar como


GRAVE A TÍTULO DE CULPA, como consecuencia del actuar profesional del
Contador Público JAVIER CALAMARO, al demostrarse que omitió
pronunciarse en su calidad de Revisor Fiscal de la Sociedad COOPERATIVA
NACIONAL BUCARAMANGA., oportunamente y por escrito ante la
Asamblea, Junta Directiva o Gerente General sobre las irregularidades al
interior del ente, relacionadas con el manejo de altas sumas que no
pertenecían a los socios.

Ahora la culpa grave se halla determinada, además, por la omisión de deberes de cuyo
conocimiento tiene certeza el profesional por tratarse de obligaciones asociadas
directamente a su campo ordinario de operación como contador público, de forma tal que
su inobservancia resulta inexplicable frente a profesionales de un rango equivalente, o
incluso, inferior2.

Así las cosas, la Sala observa que la Administración no desatendió el postulado legal3
referente a la proscripción de la responsabilidad objetiva en materia disciplinaria, pues la
conducta del contador sancionado fue evaluada y calificada a título de culpa grave, sin que
el elemento concerniente al dolo hubiere revestido importancia alguna para efectos de la
mencionada calificación. Además, el actor se limitó a cuestionar la no existencia de aquel
como fundamento de violación al debido proceso, sin efectuar ante esta instancia
cuestionamientos frente a la valoración culposa mencionada, por lo que no es necesario
incurrir en mayores indagaciones con respecto a los razonamientos esbozados por la
Administración para encontrar el comportamiento del contador sancionado, como
gravemente culposo.

1
Léase la Sentencia C-690 de 1996.
2
Esta apreciación encaja en la concepción de culpa grave prevista en el código civil en su artículo 63, al señalar que
esta consiste en no manejar los negocios ajenos con aquel cuidado que aun las personas negligentes o de poca
prudencia suelen emplear en sus negocios propios.

3
Artículo 13 de la Ley 734 de 2002.
Ahora, en cuanto a los cargos que generaron la imposición de la sanción, relacionados9
con el no pronunciamiento del contador frente a los mayores valores pagados por concepto
de pólizas de seguro, la expedición de cuentas por cobrar a socios sin identificar, el
dictaminar los estados financieros sin el soporte de sus afirmaciones, entre otros, la Sala
observa que ellos no fueron refutados ante esta instancia mediante un aporte probatorio
diferente del acervo recopilado en el procedimiento administrativo, o a través del
señalamiento de cargos precisos en relación con tales asuntos contra los actos acusados.
Al efecto, el demandante se limitó a transcribir los descargos respondidos en el marco de
las diligencias previas, consistentes en la simple negación de la conducta endilgada y en
la manifestación de afirmaciones que aluden a un ejercicio profesional irreprochable, por
lo que en este punto no se hallan elementos de juicio que soporten el adelantamiento de
un juicio referente a la veracidad de las conductas concretas por las cuales fue encontrado
disciplinariamente responsable el contador Mario Gordillo.

Incluso, según se anotó anteriormente, el apoderado del demandante admite que no hubo
pronunciamientos escritos referentes a las advertencias que debió efectuar el contador en
relación con las irregularidades advertidas en los movimientos económicos evidenciados,
lo que conlleva a admitir que la conducta omisiva objeto de sanción fue de indudable
ocurrencia. Igualmente, el actor alude, en un vano intento por defender la ilegalidad de los
actos acusados, a algunos planteamientos por los cuales la Administración no aceptó
determinados cargos generados en la queja del señor Garavito, como por ejemplo, el que
la no existencia de contratos de seguros no era imputable al revisor fiscal al corresponder
a la órbita de los contratantes expresar su voluntad de contratar verbalmente o por escrito,
lo cual sin duda, en nada aminora la responsabilidad que a aquel correspondía de elevar
mediante escrito las observaciones pertinentes en materia de los pagos cuestionados por
concepto de pólizas de seguros.

Así las cosas, concluye la Sala que el actor no logró desvirtuar la presunción de legalidad
que ampara los actos acusados, por lo que no accederá a las pretensiones de la demanda,
como en efecto se dispondrá en la parte resolutiva de esta providencia.

En mérito de lo expuesto, JUZGADO LABORAL DE CIRCUITO DE BOGOTA


administrando justicia en nombre de la República y por autoridad de la Ley

RESUELVE

1 DECLARAR INPROCEDENTE el amparo solicitado por el señor JAVIER


CALAMARO, identificado con cedula Ciudadanía N° 15.875.458 de Cali

CÓPIESE, NOTIFÍQUESE Y CÚMPLASE.


Se deja constancia de que la anterior providencia fue leída, discutida y aprobada por la
Sala en la sesión de la fecha.

EL JUEZ
YESID LUIS SALAMANCA
Caso 2 10

JUZGADO LABORAL DE CIRCUITO DE BOGOTA

Bogotá, D.C 26 de Mayo de 2019

ACTOR: MARIA GUTIERREZ


CONTRA: SUPERINTENDENCIA DE ECONOMÍA SOLIDARIA
RADICADO: Expediente num 1262929366222002

Pretensión
La señora María Gutiérrez identificada con CC 17.417.443 de Villavicencio, Meta instaura
ante este juzgado, acción de nulidad y restablecimiento del derecho contra la Resolución
N° 069 del 16 de marzo de 2016 emitida por el Grupo de Investigaciones Especiales de
la Superintendencia de Sociedades. Amparada en el artículo 85 del código contencioso
administrativo.

Argumentado que ella ejerció funciones como Revisor Fiscal de la sociedad Argometrix
de Colombia desde el 30 de noviembre de 2012. Que en el momento en que fue
contratada le informó la Junta de socios que el tipo de revisoría fiscal que debía ejercer
era potestativa y, por lo tanto, dentro de sus funciones solo estaba verificar y fiscalizar la
normatividad tributaria. Que la entidad Argometrix de Colombia no está obligada a tener
revisor fiscal y por lo tanto no le corresponde atender las responsabilidades e
irregularidades de los administradores, ya que las funciones se limitan a firmar las
declaraciones tributarias.

Hechos:
La Resolución N° 069 del 16 de marzo de 2016, sanciona a la señora María Gutiérrez en
calidad de Revisor Fiscal de la sociedad Argometrix de Colombia, con una multa de
sesenta (60) salarios mínimos legales a favor de la Superintendencia de Sociedades.
La entidad Argometrix de Colombia es una entidad sometida a vigilancia de la
Superintendencia de Sociedades. El 30 de noviembre de 2014 mediante Resolución N°
300 ordena investigar administrativamente a la Sociedad Argometrix de Colombia, El 10
de diciembre de 2014, la Superintendencia realiza visita de auditoría en la Sociedad y
deja constancia de que la dirección no existe, El 23 de enero de 2015 mediante
requerimiento de información dirigido a la dirección registrada en el certificado de
existencia y representación legal, en ejercicio de sus facultades de control, ordena al
Revisor Fiscal allegue los siguientes documentos: estados financieros en formato
comercial a seis (6) dígitos, certificados y dictaminados en los términos de los artículos
37 y 38 de la Ley 222 de 1995 con corte a 31 de diciembre de 2014; estados financieros
en forma comercial certificados y dictaminados de los años 2012 y 2013; relación de las
transacciones celebradas durante el 2014; patrimonio de la sociedad Argometrix de
Colombia del año 2014; avalúos técnicos, cuentas corrientes y de ahorro; copia de los
memorandos, oficios de recomendaciones, solicitudes de información y cualquier otro
documento en el que evidencia el trabajo del Revisor Fiscal allegados a la administración
de la sociedad durante los años 2012, 2013, 2014; informar si la empresa se encuentra11
en situación de cesación de pagos (Ley 1116 de 2006).
• Como respuesta de lo anterior el 25 de marzo de 2015 la señora María Gutiérrez
(revisor fiscal) da respuesta al requerimiento de la Superintendencia de Sociedades y
allega los siguientes documentos e información: estados financieros impresos del
sistema contable de los años 2012, 2013 y 2014; manifiesta que de los años 2012, 2013
y 2014 no existen estados financieros certificados por orden de la Sociedad Argometrix
de Colombia; allega relación de patrimonio; no allega avalúos, cuentas corrientes ni de
ahorro; no tiene copia de memorandos allegados a la administración de la sociedad;
allega balance de los años 2012, 2013 y 2014.
• La Superintendencia de Sociedades formula pliego de cargos contra la señora María
Gutiérrez en calidad de Revisor Fiscal de la sociedad Argometrix de Colombia por no
contar con estados financieros dictaminados por los años 2012, 2013 y 2014 y por no
cumplir sus funciones en el ejercicio del cargo, tales como informar las irregularidades al
máximo órgano social sobre la dirección inexistente, y no tener los estados financieros
certificados ni dictaminados.
• La empresa Argometrix de Colombia se constituyó conforme al certificado de existencia
y representación legal desde 1 de diciembre de 2007.
La sociedad presenta la siguiente información en balances de prueba por los años 2011,
2012 y 2013:

Año Activos $ Ingresos $


2011 5.436.000.000 2.728.336.000
2012 6.225.000.000 2.234.834.000
2013 6.336.000.000 1.200.070.000

Pretensión de la demandante: la demanda instaurada busca se declarare la nulidad de


la Resolución N° 069 del 16 de marzo de 2016, emitida por el Grupo de Investigaciones
Especiales de la Superintendencia de Sociedades, por medio de la cual sanciona con
multa de 60 salarios mínimos mensuales a la señora María Gutiérrez.

Contestación del accionante: Pretende el demandado que se confirme la Resolución


N° 069 del 16 de marzo de 2016 emitida por la Superintendencia de Sociedades en la
que sanciona a la señora María Gutiérrez basado en los siguientes argumentos:
• El certificado de existencia y representación legal de la sociedad Argometrix de
Colombia demuestra que la constitución de la sociedad se realizó mediante escritura
pública N° 3333 de 2007. En dicha escritura de constitución se nombró como revisor
fiscal de la sociedad Argometrix de Colombia a la señora María Gutiérrez. Conforme al
Código de Comercio, el artículo 164 establece que los revisores fiscales inscritos en
cámara de comercio ostentan tal carácter para todos los efectos legales mientras no se
cancele dicha inscripción. El revisor fiscal debe cumplir con las funciones establecidas
en el artículo 207 del Código de Comercio y no solo las funciones relacionadas con la
información tributaria.
CONSIDERACIONES DE LA SALA: 12
Se deniega las pretensiones de la demanda teniendo en cuentas las razones expuestas
anteriormente, contra la Resolución N° 069 del 16 de marzo de 2016, emitida por la
superintendencia de sociedades, toda vez que esta se encuentra facultada para imponer
dichas sanciones y según el artículo 216 del código del comercio, el revisor fiscal que no
cumpla con las funciones previstas por la ley (Art, 207 y 209 Co Co) así sean de manera
potestativa, o que las cumpla de forma irregular o de manera negligente será sancionada
con multas o con suspensión del cargo, (Of 220-44542, 10 de septiembre de 2004) de
igual manera la entidad demandada hizo un recuento de las actuaciones administrativas
realizadas por las señora María Gutiérrez durante su periodo como Revisor Fiscal de la
entidad Argometrix de Colombia

FALLO
Esta sala Deniega las pretensiones de la demanda porque, La revisoría fiscal potestativa
debe ejercer las funciones establecidas en los estatutos de la sociedad y en caso tal de
no estar regulado, debe cumplir con las obligaciones consagradas en el artículo 207 del
Código de Comercio.

CÓPIESE, NOTIFÍQUESE Y CÚMPLASE.


Se deja constancia de que la anterior providencia fue leída, discutida y aprobada por la
Sala en la sesión de la fecha.

EL JUEZ

ANGIE VANESSA RODRIGUEZ


13
CONCLUSIONES

Concluimos de forma general que la revisoría fiscal es el órgano de control para las sociedades
colombianas; en ella se precisa la máxima expresión del ejercicio de nosotros los contadores
públicos. El papel de revisor fiscal es de suma importancia opinamos que de igual forma es un
auditor, en otras palabras un ente de control muy relevante que debe certificarse de las
anomalías que estén sucediendo en el funcionamiento de la sociedad y en el avance de sus
negocios o movimientos para así analizar a tiempo sus contratiempos.
REFERENCIAS 14

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