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HE DECIDIDO LLAMAR AL
APÓSTOL PABLO.
Porque ¿quién conoció la mente del Señor? ¿Quién le instruirá? Mas nosotros
tenemos la mente de Cristo.
Se podría entender que esta es la medida de la iglesia o del ideal del creyente
que cada uno de nosotros deberíamos de ser
- ¡Dime!
Quiero decir, que cada uno de vosotros dice: Yo soy de Pablo; y yo de Apolos
porque aún sois carnales; pues habiendo entre vosotros celos, contiendas y
disensiones, ¿no sois carnales, y andáis como hombres?
De cierto se oye que hay entre vosotros fornicación, y tal fornicación cual ni aun
se nombra entre los gentiles; tanto que alguno tiene la mujer de su padre.
¿Osa alguno de vosotros, cuando tiene algo contra otro, ir a juicio delante de
los injustos, y no delante de los santos? 2¿O no sabéis que los santos han de
juzgar al mundo? Y si el mundo ha de ser juzgado por vosotros, ¿sois indignos
de juzgar cosas muy pequeñas?
- ¿Sin amor? Allá ni loco voy. Creo que mejor voy a ir a Tesalónica.
Filipos sería una buena opción si no fuera por esas dos hermanas que
nunca se ponen de acuerdo en nada, siempre discutiendo (Fil 4: 2)
- No sé muy bien, pero creo que fue por el uniforme de mujeres, y algunos
decorados en la iglesia. Una quiere de un color, y la otra de otro color, y así. No
termina más.
- Ah, no yo para nada voy ahí. Entonces creo que me mudaré a Colosa y
buscare a Dios allí.
Pero tengo unas pocas cosas contra ti: que toleras que esa mujer Jezabel, que se dice
profetisa, enseñe y seduzca a mis siervos a fornicar y a comer cosas sacrificadas a los
ídolos.
y ahí ni loco voy.
Luego pensé ir a Laodicea, pero el Apóstol Juan me dijo que allí son tibios
(Apo 3:16)
Después pensé ir a Pérgamo, pero otra vez el Apóstol Juan me dijo que hay
Pero tengo unas pocas cosas contra ti: que tienes ahí a los que retienen la doctrina de
Balaam, que enseñaba a Balac a poner tropiezo ante los hijos de Israel, a comer de
cosas sacrificadas a los ídolos, y a cometer fornicación
Y también tienes a los que retienen la doctrina de los nicolaítas, la que yo aborrezco