Escrito Reflexivo

Karen Valeria Villalobos Navarro

ID 607 593
Corporación Universitaria Minuto de Dios
Licenciatura en Educación Infantil
Electiva CP

Escrito Reflexivo
La profesora Rosalba Scholasticus

Desde una perspectiva de aprendizaje como un ejercicio reflexivo, desde la obra

La Profesora Rosalba Shcolasticus, se pueden apreciar diversas perspectivas que nos
ponen en contexto en un aula de clases y de qué manera el movimiento y la expresión
también se hacen participes en el proceso de desarrollo en las actividades formadoras
de enseñar y aprender.

En un comienzo la profesora Rosalba Scholasticus, se muestra rígida, de carácter

fuerte, sus expresiones trasmiten severidad y trasforma el lugar en un ambiente de
disciplina y escucha. Mira el grupo de estudiante por debajo de sus lentes con un aire
de superioridad que van acompañados de sus indicaciones, métodos de evaluación, y
el notable desprecio por los niños enfermos que lo demuestra con sus expresiones de
desagrado y ordenes de aislamiento; los prejuicios hacia dos estudiantes en concreto
Patarroyo y Rodríguez, además de señalar a los repitentes y tildarlos de delincuentes.

Esta caracterización de la profesora Shcolasticus hace una alusión al ejercicio

docente. La obra se desarrolla en un contexto donde la hipérbole es el principal
recurso, en la exageración de gestos, expresiones, actitudes y movimientos, sin
embargo, no se puede descartar que la ficción muchas veces supera la realidad cundo
se rememora a los tipos de maestros del siglo IX, pese a las reformas de los
lineamientos legales para la formación y enseñanza estos métodos de enseñanza se
conservan vigentes dado a la construcción de docentes con nominación de normalistas,
y más aún es de sorprender que los docentes que se forman en la actualidad lejos del
enfoque tradicional y con una tendencia a la escuela nueva, están propensos a caer en
las misma prácticas debido a la efectividad de los métodos anteriores, aunque se haya
dejado a un lado los castigos y el condicionamiento operante se vea actualmente con
menos fuerza, la memorización y la rigidez de la enseñanza no pierde su fuerza.

Las acciones que el cuerpo realiza hay que resaltarlas con gran prioridad, ya que
estos movimientos y expresiones constituyen un lenguaje no verbal que se realza con
más fuerza y dice mucho más de lo que las palabras alcanzan a decir. Existen
momentos relevantes en la obra en los que se ve una interacción con el público y este
se muestra temeroso, con la capacidad de recordar a la profesora Scholasticus que
alguna vez llegaron a conocer en su infancia, una voz fuerte que intimida y que señala,
te hace débil e inferior ante tanta autoridad.
 Cabe resaltar que la profesora Scholasticus cuando realiza una reminiscencia en
su labor docente, cae en cuenta de los efectos un poco negativos que ha tenido en sus
estudiantes, al imponer su criterio herido, con sus acciones negativas y de vez en
cuando falta de cordura; todo surge desde una carta que Rodríguez escribe como
guion de obra sobre la trágica historia de la pérdida de un hijo y un amor de una mujer
que casualmente coincide con la vida de Rosalba Scholasticus, que de manera tajante
coarta la vocación de escritor de aquel niño, señalándolo fuertemente de incapaz e
ignorante, acompañado las palabras con una mirada de desprecio y dolor.

Es difícil olvidar las mofas e imitaciones que la profesora hace hacia sus
estudiantes, pues pueden ser graciosas las formas en las que muchas veces las
personas se desarrollan en un espacio educativo, pero lo que posiblemente la
profesora Scholasticus busca alcanzar es menos preciar a su grupo de estudiantes,
buscando la sumisión de parte de ellos, aclarando con una voz fuerte e imponente que
no espera recibir nada de parte de sus estudiantes, únicamente busca cumplir lo que le
han ordenado desde la secretaria de educación, es así como se puede inferir que las
ciencias humanas muchas veces pierden la capacidad de reconocer al otro como ser
humano, ser pensante que siente, se cuestiona y busca compartir con otros lo que vive
como persona en un contexto, de esta manera la educación deja perder su humanidad
y se limita a la reproducción de enseñanzas sin sentido.

A modo de conclusión es innegable que en cada docente en su interior se

puede encontrar a una profesora Scholasticus que busca mantener el control de su
grupo y se desespera con los imprevistos y las injusticias de un sistema educativo
decadente que busca resurgir en pro de un progreso, pero yendo un poco más allá, la
obra nos deja un mensaje reflexivo que invita a cuestionarse acerca de cuál es el tipo
de maestro que soy en el aula de clase, con mis colegas, amigos o mis familiares, que el
intelecto y el razonar, el tener la razón no lleve a la sociedad a perder su sentido de
humanidad, es un llamado a no perder la pasión por lo que se hace, que con los años,
los esfuerzos de un buen trabajo realizado traerá sus recompensas, y a no permitir que
la profesora Rosalba Scholasticus se apodere de los docentes cuando no haya
creatividad o las ideas se vean agotada, no perder el horizonte cuando se afirma que
realmente en los niños está el futuro y el mismo presente, pues ellos mismos son
quienes construyen su conocimiento, aprenden a partir de lo que les llama la atención y
docente únicamente se convierte en un medidor que guía el mejor camino para
alcanzar un desarrollo integral.