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Metodo del Cabildeo
Viernes 02 de Abril de 2010 11:46 Jairo Mejia Vaca

PRESENTACIÓN
Con el presente Manual de cabildeo, el Movimiento Ciudadano por la Democracia
(MCD) continúa con su serie de manuales educativos, los cuales buscan impulsar
una nueva identidad cultural ciudadana. Ésta tiene como ejes fundamentales, la
ética en lo público, los derechos humanos y la democracia. En este contexto, el
MCD está impulsando el proyecto Yo ciudadano, yo gobierno, que tiene como
objetivo central, promover modelos diferentes de participación ciudadana para
establecer nuevas relaciones entre los ciudadanos y su gobierno.
El proyecto busca coadyuvar al fortalecimiento de la sociedad civil y promover
junto con ella una nueva cultura ciudadana, a la que definimos como un proceso
educativo y político, en el cual el ciudadano conoce y ejerce sus derechos, asume
sus obligaciones y participa en la toma de decisiones, en el diseño, la
implementación y el monitoreo de políticas públicas. En este sentido, la ciudadanía
contribuye a proponer soluciones a los problemas que enfrenta la sociedad, todo
esto en un nuevo marco de relación corresponsable entre ciudadanía y gobierno.
El MCD busca contribuir en la construcción de una nueva cultura ciudadana,
preparando e impartiendo talleres y cursos-seminarios a nivel nacional, además de
elaborar y divulgar materiales de capacitación teórica-metodológica dirigidos a
diferentes organizaciones sociales y civiles, interesadas en conocer e influir
políticamente en las distintas áreas y niveles de gobierno como en otros ámbitos
de lo público.
El principal objetivo del presente manual es ofrecer una herramienta metodológica
a las organizaciones que han practicado el cabildeo en forma empírica con sus
respectivas autoridades. La importancia del cabildeo radica en conocer los pasos
básicos para planificar una campaña de incidencia política, dirigida a lograr
cambios concretos en las decisiones gubernamentales o a impulsar políticas
públicas desde lo civil.
Para la realización de este manual se utiliza la metodología desarrollada por la
Oficina de Washington para Asuntos Latinoamericanos (WOLA, por sus siglas en
inglés). WOLA es un organismo no-gubernamental estadounidense, que a través
de su "Programa de Capacitación en Cabildeo" ofrece apoyo a organizaciones
locales que trabajan en América Central.
El MCD y WOLA coordinaron un curso-seminario dirigido a organizaciones civiles y
grupos ciudadanos en el que se compartió la metodología del cabildeo y su
aplicación concreta en casos escogidos por los participantes. El presente manual
pone al servicio de los grupos civiles la metodología del cabildeo desarrollada en
dicho curso-seminario, que seguramente será enriquecida con los comentarios y
aportes de los ciudadanos que la utilicen.

INTRODUCCIÓN
En este Manual se ofrece una metodología sencilla dirigida a organizaciones
sociales y civiles interesadas en aprender a planificar campañas de cabildeo. Su
empleo puede coadyuvar al logro de cambios concretos en las acciones
gubernamentales, a la cohesión y unidad a nivel grupal y a la eficaz administración
de los recursos con los que se cuenta. Antes de empezar a exponer de manera
sintética en qué consiste la metodología del cabildeo, es necesario aclarar
brevemente el significado de cabildeo e incidencia. En algunos países estos
términos tienen una acepción y empleos distintos. Así, mientras el cabildeo es
considerado la política de looby, la cual consiste en hacer arreglos o lograr
acuerdos no públicos entre políticos; la incidencia es un proceso de movilización
política de la sociedad civil, cuyo objetivo es influir o persuadir a un actor con
poder de decisión. Cabe destacar que en esta guía se emplean como sinónimos
los términos cabildeo e incidencia, para indicar el proceso de influencia de la
ciudadanía sobre los actores con poder de decisión.
El método para efectuar una campaña de cabildeo consiste en ocho pasos, cuyas
técnicas exigen reflexión y análisis participativo, éstos son:
Análisis del problema: El primer paso del cabildeo es definir una acción
específica frente a un problema determinado que se desea impulsar.
Afinación de la propuesta: En segundo lugar se tiene que precisar exactamente
qué se pretende lograr. Mientras más clara sea la propuesta, mayores son las
posibilidades de éxito.
Análisis del espacio de decisión: Ya que está claro lo que se quiere lograr, se
procede a analizar cómo se toma la decisión que se busca impulsar o influir.
Mapa de poder: En este paso se detecta a los actores que tienen influencia sobre
aquel o aquellos actores que toman la decisión. Es decir, quiénes son todos los
actores políticos y sociales relacionados con la decisión de la propuesta.
Autoanálisis: En esta etapa se identifican las fuerzas y las debilidades de la
organización que impulsará la campaña de cabildeo.
Estrategia de influencia: La estrategia es la parte más creativa del cabildeo, en
ésta se intenta definir cómo se puede tener influencia sobre los espacios de
decisión, neutralizar oponentes, ganar y motivar aliados, e influir sobre los
indecisos. La estrategia siempre se define en relación a quien o quienes se busca
influir.
Plan de actividades: Las actividades son las tareas concretas a través de las
cuales se pretende efectuar la estrategia y lograr las metas planteadas.
Evaluación continua: Después de realizar la campaña de cabildeo, habrá que
evaluar cada uno de los pasos seguidos. Esto es de suma importancia, ya que se
requiere saber con exactitud lo que se hizo bien y lo que se hizo mal, experiencia
útil para que en las futuras campañas de cabildeo se afinen las capacidades y se
corrijan las deficiencias del grupo en el proceso de incidencia.
En otras palabras, la campaña de cabildeo inicia con la identificación y desglose
del problema que interesa al grupo y así poder desentrañar algunas propuestas
concretas de solución. Resuelto esto el grupo elige y afina una sola propuesta. Los
siguientes pasos ayudan al grupo a dar forma a la estrategia política de influencia.
Para ello, se define quién es el actor clave (el blanco) en la campaña de cabildeo.
A través de un ejercicio de análisis denominado mapa de poder, se detectan los
actores secundarios con capacidad de influir sobre el blanco. Dichos actores se
clasifican en aliados, indecisos y oponentes.
Con el autoanálisis se define la manera como se va a organizar la campaña de
cabildeo. Por un lado, es necesario señalar con precisión los grupos e
instituciones que intervendrán en dicha campaña y por el otro, es importante
identificar las fuerzas y debilidades de la organización y cómo actuar en relación a
estas últimas. Después se trabaja la estrategia política, cuyos argumentos y
acciones propuestos por el grupo ayudarán a persuadir al blanco para que acepte
la propuesta planteada.
El grupo debe realizar por escrito cada una de las actividades necesarias para
efectuar la estrategia, los nombres de las personas responsables de éstas, la
calendarización de dichas actividades y los recursos necesarios. Se recomienda
que la campaña de cabildeo sea evaluada constantemente, con base en la nueva
información adquirida a lo largo del trabajo, en las coyunturas políticas y en la
organización del grupo. Finalmente, se sugiere se identifiquen los logros obtenidos
y las dificultades encontradas en el transcurso de la campaña, para medir qué
tanto se lograron los cambios propuestos y el impacto del cabildeo a nivel
organizativo e individual.
¿QUÉ ES EL CABILDEO?
El cabildeo es la capacidad para alcanzar un cambio específico en un programa o
proyecto gubernamental, también es la capacidad de influir en un actor con poder
de decisión. Para alcanzar lo anterior se debe elaborar una estrategia específica. El
cabildeo se pude simplificar de la siguiente manera: un proceso en el cual se
fortalece la sociedad civil a través de promover su participación activa, organizada
y planificada, para incidir en el ámbito de lo público, en el pleno uso de sus
derechos humanos y constitucionales. Es decir, el cabildeo implica poder participar
de manera directa en el diseño, la ejecución, el monitoreo y la evaluación de los
programas gubernamentales o en el impulso de leyes o reglamentos. Por este
motivo se requieren tres aspectos a desarrollar en el proceso de cabildeo:
investigar, consensuar y negociar.
Las organizaciones sociales y civiles recurren al cabildeo en su afán por lograr un
cambio efectivo en la vida pública, donde las propuestas de los ciudadanos se
lleven a cabo.
El Cabildeo es un proceso:
A través del cual se busca alcanzar cambios específicos en políticas institucionales.
En el que es posible involucrar a varias organizaciones e individuos.
Que generalmente es abierto y público.
En el cual los grupos de ciudadanos hacen valer su derecho para tratar de cambiar
la sociedad.
En el que se recrea la democracia de manera integral.
En el que se capacita a los ciudadanos para la influencia política.
Educativo en el que se rescatan, tanto los saberes profesional y práctico de los
ciudadanos.
Que fomenta el trabajo de red entre grupos o instancias civiles, sociales y
políticos.
¿Cuáles son las capacidades a desarrollar en el cabildeo?
Capacidad de consensuar una propuesta al interior de los grupos para que tenga el
mayor respaldo y consistencia.
Capacidad para incidir en instancias gubernamentales.
Capacidad para influir sobre un actor con poder de decisión.
Capacidad para iniciar un proceso de cambio social que implica la construcción de
una nueva relación ciudadanía-gobierno.
¿Cuáles son las condiciones para poder emprender una campaña de cabildeo?
Escoger y definir un problema o tema específico.
Tener un objetivo claro y concreto.
Determinar al blanco de nuestra acción.
Analizar el escenario político para ubicar a los actores con poder de decisión.
Desarrollar una estrategia de influencia política sobre los actores con poder de
decisión.
Elaborar un plan de actividades.
¿Cuál es la función del cabildeo?
1.- Proponer soluciones a problemas sociales, políticos y económicos
El cabildeo permite pasar de la queja-denuncia a la solución propositiva. Es decir,
contribuye a desarrollar y potenciar la capacidad para dejar de ser parte del
problema y constituirse en parte de la solución, al asumir de manera progresiva la
corresponsabilidad en la implementación de políticas públicas, leyes o
reglamentos, para así atender a fondo las necesidades de la población. Esto
significa construir un nuevo marco social en el cual se respeten de manera integral
los derechos humanos de los ciudadanos, se venza la cultura del autoritarismo, se
erradiquen las prácticas de exclusión y de encubrimiento que siguen
reproduciéndose en nuestra sociedad y se dejen de repetir los esquemas
paternalista y corporativista por parte del gobierno para, de esta forma, lograr
transitar a prácticas democráticas en la relación ciudadanía-gobierno y la voz de
ambos tenga el mismo peso y la misma responsabilidad en su respectivo ámbito
de acción.

2.- Fortalecer el poder de las organizaciones de la sociedad civil


El cabildeo permite contrarrestar las prácticas viciadas del gobierno y al mismo
tiempo erigir una nueva cultura de participación ciudadana. En este sentido,
contribuye a impulsar a las organizaciones sociales y civiles, para que éstas
desarrollen mayor capacidad de incidencia en las esferas de gobierno, con la
intención que la ciudadanía y sus organizaciones aumenten su nivel de
convocatoria que les permita influir sobre los principales actores que toman las
decisiones.
3.- Promover la participación democrática de los ciudadanos
El cabildeo, como instrumento de trabajo, enriquece y fortalece la democracia al
trascender el ámbito formal de ésta (lo electoral) y fomentar su aspecto social (la
participación de los ciudadanos en los asuntos públicos), con el fin de desarrollar
nuevas formas de relación ciudadanía-gobierno.
4.- Buscar la solidaridad entre los ciudadanos
El cabildeo promueve la solidaridad entre los ciudadanos para enfrentar de mejor
manera problemas comunes, al propiciar que sus voces y puntos de vista
empiecen a ser tomados en cuenta. Todo esto a partir del ejercicio de sus
derechos ciudadanos.
¿CÓMO PLANIFICAR UNA CAMPAÑA DE CABILDEO?
1.- Análisis del problema
A) Selección de los problemas general y específico
Antes de emprender una campaña de cabildeo, es necesario tener en cuenta
qué se quiere cabildear. Esto requiere hacer un ejercicio de discusión y
discernimiento colectivos para elegir sólo un problema a tratar. Es frecuente que
los problemas seleccionados por los grupos sean muy globales, de ser así, es
oportuno desglosarlos hasta llegar a uno específico. Mientras más concreta sea la
definición de un problema, mayores son las posibilidades de solución.
La selección del problema específico que el grupo pretende
abordar es una tarea compleja. A continuación se enuncian
algunos de los criterios básicos a considerar:
Qué tipos de conocimientos temáticos tiene el grupo.
En qué áreas temáticas tiene compromiso social el grupo.
En cuáles temas se verían afectadas las vidas de los
miembros del grupo.
Qué intereses temáticos tiene la mayoría de los miembros del
grupo.
Cuáles serían los temas que pueden aglutinar a otros sectores
y grupos sociales.

B) Identificar los componentes del problema


Ubicado el problema específico es necesario desmenuzarlo
para identificar sus componentes y elementos causales, ya
que un problema es el resultado de muchos factores
específicos y sólo puede ser resuelto a través de sus causas
concretas. Un método útil para el análisis del problema es una
lluvia de ideas, para tratar de identificar todos los
componentes que lo integran. Después, se realiza un listado
mínimo descartando aquellos aspectos que tengan una
relación menor con el problema. Lo ideal es llegar a un nivel
de desglose que permita reconocer los mecanismos concretos
que pueden ser modificados con la intención de pensar
posibles soluciones. Entre todos los factores se escoge de uno
a tres, para la elaboración de una campaña de cabildeo.
C) Ordenar y priorizar los componentes del problema
Ya que se cuenta con una primera relación o listado de los
componentes de un problema hay que agrupar a éstos
temáticamente. Los criterios que se proponen para reunirlos
son los siguientes:
Tipo de problema (político, social, económico, administrativo
o legal).
Instituciones que están relacionadas con el tema en cuestión.
Agenda de trabajo de los períodos legislativos, de las
audiencias y de las giras de funcionarios.
Una vez que se tiene el listado ordenado se recomienda
jerarquizar los componentes para escoger los aspectos más
importantes o los más fáciles de solucionar en primera
instancia, o bien, los de más interés para el grupo. Para la
priorización se sugieren los mismos criterios utilizados para la
selección del problema.
D) Fases en la generación e implementación de políticas
Un instrumento útil en la identificación y análisis del problema
es el concepto de las fases que generalmente existen en la
generación e implementación de políticas gubernamentales o
de instituciones nacionales e internacionales. Son cuatro las
fases distinguibles:
La definición de la agenda pública o institucional.
La formulación de políticas concretas y su transformación en
leyes o programas.
La aplicación de leyes o la implementación de programas.
El monitoreo y la evaluación de impacto.
La incidencia se realiza en todas las fases. Es importante
determinar claramente cuál de éstas demanda más atención
en un momento dado, y cuál ofrece la mayor posibilidad de
influencia. Es más fácil intervenir en ciertas fases que en
otras porque ofrecen mayor oportunidad de acceso o
incidencia o porque la naturaleza y capacidad del grupo tienen
más potencialidad en una que en otra, lo cual influirá en la
definición de la estrategia.
E) Proposición de soluciones concretas frente a los
componentes principales
Identificada la fase en que se encuentra el problema, se
comienza a desarrollar una propuesta, la cual se puede
generar en cualquiera de las cuatro fases antes mencionadas.
Una vez que se han indicado los componentes de un
problema, se puede pensar en posibles soluciones para cada
componente. Hay que recordar que la finalidad del cabildeo
no es la de emitir un pronunciamiento en contra de un
problema específico, sino ofrecer una solución concreta al
mismo.
F) Selección de tres a cinco propuestas
Se sugiere a los grupos seleccionen de tres a cinco propuestas
con miras a enfrentar el problema elegido, éstas se deben
considerar eventuales en una agenda tentativa de acción.
Es necesario considerar las limitaciones del grupo, ya sean
éstas institucionales, de recursos humanos o económicos.
Esto es de suma importancia, ya que al no tener presente
esas limitaciones el grupo se puede perder y/o desviar.
Es importante tener en cuenta que antes de adoptar
definitivamente alguna propuesta de solución es
recomendable, en la medida de lo posible, consultar con
expertos para que el grupo determine los criterios en la
selección de las propuestas centrales a trabajar para la
solución del problema.
2.- Afinación de la propuesta
A) Selección de una sola propuesta a trabajar
Dado el alto grado de trabajo que se concentra generalmente
en la planeación y realización de una campaña seria de
incidencia, es importante no querer hacer aquello que no está
al alcance del grupo. En la mayoría de los casos es necesario
unificar esfuerzos y optimizar los recursos humanos y
económicos en una o dos propuestas, orientadas éstas a
lograr o impulsar un cambio específico. Grupos que lanzan
diez o más iniciativas a la vez, perderán eficacia en su
campaña de cabildeo.
B) Revisión y afinación de la propuesta
La propuesta debe estar dirigida a solucionar el problema que
ha seleccionado el grupo. Definirla requiere precisar lo que el
grupo quiere hacer. Se recomienda al mismo que escriba su
propuesta con todos sus detalles, ya que éste ejercicio le será
útil como base de su campaña de cabildeo.
La afinación de la propuesta tiene como finalidad especificar y
detallar las pasos y tareas a realizar. Es decir, definir
exactamente qué es lo que se quiere, quién lo va a hacer,
cómo lo va a hacer, y en qué tiempo se va a realizar.
Lograr una propuesta específica y detallada, exige que ésta
reúna ciertas características:
1) Cuantificable y medible,
2) Específica y entendible,
3) Técnica, política y económicamente factible,
4) Realizable en un plazo razonable, y
5) Que contribuya a la formación y/o fortalecimiento de
alianzas y coaliciones.
Cuantificable y medible: sólo dando un valor a la propuesta
se sabe si se ha fracasado o se ha ganado.
Específica y entendible para todos por igual: la afinación
de la propuesta debe ser entendible al interior del grupo. Esto
es clave en el cabildeo, puesto que el uso de alguna palabra
o concepto contenida en la propuesta puede tener diferentes
significados para los integrantes del grupo. Por lo tanto, es
necesario darle contenido común, tanto a las palabras como a
los conceptos utilizados en la propuesta para unificar
significados y criterios.
Técnica, política y económicamente factible: Una
campaña de cabildeo requiere de muchos recursos
humanos, materiales y de tiempo. Si el grupo es de reciente
creación, es recomendable comience con promover
propuestas no tan ambiciosas o complicadas, y sí con grandes
posibilidades de éxito. Esto es temporal, mientras se
adquieren mayor experiencia, relaciones y recursos humanos
y materiales.
Realizable en un plazo razonable: Si se desean obtener
logros importantes, se sugiere jerarquizar los intereses, es
decir, hay que señalar qué se abordará en primer lugar, qué
en segundo lugar, qué en tercero y así sucesivamente, todo
dentro de un plazo no muy largo.
Que contribuya a la formación y fortalecimiento de
alianzas y coaliciones: Si la propuesta está hecha de
manera clara y precisa, ésta debe servir de plataforma para
buscar el apoyo y adhesión del mayor número de grupos
posibles, o a la creación o fortalecimiento del trabajo
coordinado o de red, ya que el éxito de una propuesta puede
estar determinada, según sea el caso, por el mayor apoyo de
grupos y personas.
3.- Análisis del espacio de decisión
Ya efectuado el análisis del problema y afinada la propuesta,
el siguiente paso consiste en analizar el espacio de
decisión, o sea, identificar quién tiene el poder de decisión
sobre la propuesta. Es importante familiarizarse lo más rápido
posible con el procedimiento para la toma de decisiones en
cada fase. Mientras más se conoce sobre el proceso, se
tendrá más posibilidades de influir en él. El análisis del
espacio de decisión requiere contestarse las siguientes
preguntas:
¿Quién finalmente toma la decisión sobre la propuesta?
¿Cómo se toma la decisión?
A) ¿Quién exactamente toma la decisión final?
En esta parte del cabildeo se busca identificar al actor que
finalmente tomará la decisión, es decir, la persona que en
última instancia decide si es afirmativa o negativa la
respuesta respecto a la propuesta del grupo. Este actor
principal es el blanco en la campaña de cabildeo. En ésta
se busca personalizar a la oposición, ya que no se está
cabildeando a instituciones sino a personas.
En caso que haya varias personas e instancias involucradas
en la toma de decisión, el grupo elaborará una lista en la
que ordena los distintos nombres de las personas o
instituciones, empezando por el que se considere más
importante.
B) ¿Cómo se toma la decisión?
Para influir en la toma de decisión existen procedimientos
formales y complicados. Por ejemplo, cuando la propuesta
requiere de la emisión de alguna ley o reglamento, entonces
hay que entender cómo funciona la Asamblea Legislativa o la
institución que se va a cabildear.
Es necesario identificar los siguientes pasos en la toma de
decisiones:
¿En qué momento se toman las decisiones?
¿Existe una reunión especial para tomar la decisión?
¿Existe una comisión especial para la toma de decisiones?
¿Quiénes conforman la comisión?
¿Cada cuánto se reúne la comisión?
¿Quiénes son los responsables de elaborar la agenda de la
comisión?
En la toma de decisiones también existen procedimientos
no formales. Algunos ejemplos pueden ser una instrucción
presidencial, presiones del sector privado, consulta con
asesores influyentes y recomendaciones de organismos o
instituciones nacionales e internacionales.
Para influir en el blanco hay que emplear tanto el
procedimiento formal como el no formal. Se puede tener más
oportunidad de éxito siguiendo el primero, sin embargo, en
ocasiones sólo hay posibilidad de incidir si se tiene acceso al
procedimiento no formal.
Por último, cabe mencionar que en la mayoría de los grupos,
no se toma en cuenta el tiempo estimado para hacer un buen
análisis del espacio de decisión. Para su realización a veces
se requiere realizar tareas de investigación con el fin de
recabar la información necesaria, ejercicio que en general no
se lleva a cabo y le impide a las organizaciones saber
exactamente cuáles son los procedimientos y la
calendarización en la toma de decisiones. Si no se tiene
presente esto, y si no se hace una inversión de tiempo
suficiente en este paso, es muy probable que la campaña de
cabildeo fracase.

4.- Mapa de poder


El mapa de poder es un ejercicio de análisis que permite al
grupo, por un lado, identificar al actor clave (el blanco), el
cual constituye la primera audiencia, y por otro lado, para
reconocer a los actores secundarios (aliados, oponentes e
indecisos) los cuales conforman la segunda audiencia.
Precisamente éstos tienen la capacidad de influir en cierto
grado sobre el blanco en alguna etapa del proceso de
decisión.
En seguida se describe a los actores secundarios:
Aliados: Son los actores que simpatizan y están a favor de
una propuesta específica. Éstos no necesariamente son
nuestros amigos. No hay que hacer tarea de convencimiento
con ellos, sino coordinar acciones a favor de la propuesta.
Oponentes: Son aquellos actores que están en contra de la
propuesta. No se les debe considerar como enemigos ni
catalogarlos como malas personas. A quienes no se pueda
persuadir hay que dejarlos de lado para ahorrar esfuerzos, y
sí concentrarse en aquellos que es posible convencer o
neutralizar su posición.
Indecisos: Son quienes no tienen una opinión definida en
relación a la propuesta o no se sabe exactamente cuál es su
posición. Justamente los indecisos se pueden convertir en un
blanco alterno. La tarea es convertir a los indecisos en
aliados potenciales.
En el cabildeo, el aliado, el oponente y el indeciso pueden
cambiar de posición dependiendo de la propuesta específica.
Es decir, no son actores estáticos o inamovibles. Por último,
hay que detectar el grado de influencia de los actores
secundarios sobre el blanco, por lo que se precisa hacer
una lista empezando por el aliado más importante, después
el segundo y así sucesivamente, porque el objeto del mapa
de poder es ubicar a los actores que ayudan a llegar al
blanco. Para esto es imprescindible un manejo continuo de
información.
Para realizar el mapa de poder, se ubica en el centro al
blanco y alrededor a todos los actores secundarios que
influyen en él, escribiendo sus nombres y apellidos.
Aunque se plantee una campaña a nivel nacional, se debe
tener en cuenta la influencia internacional.
Como resultado del ejercicio de análisis, se elabora el mapa
de poder. A continuación se ejemplifica éste:
El mapa de poder puede cambiar constantemente en el
desarrollo de la campaña de cabildeo, por lo que se
recomienda realizar este ejercicio por lo menos cada dos
semanas para refrescar y agregar nueva información.
También para los actores secundarios se puede realizar un
mapa de poder para realizar minicabildeos. En seguida una
serie de preguntas sugerentes para poder ejecutarlos:
¿Quiénes son los actores con más influencia sobre el blanco?
¿Quiénes son los asesores del blanco ?
Los indecisos clave ¿son realmente indecisos?
Los aliados clave ¿son realmente aliados?
Los opositores ¿son realmente opositores?
5.- Autoanálisis: la organización para el cabildeo
El autoanálisis es un ejercicio para definir cómo se va a
organizar la campaña de cabildeo. En ésta hay que precisar
quién conforma el equipo de trabajo que lleva a cabo las
actividades específicas; la aportación de cada organización o
miembro del grupo; cuál va a ser el procedimiento en el
proceso de decisión al interior del equipo de trabajo. Además,
es importante aclarar cuáles serán sus facultades, sus límites
para negociar y tomar decisiones, además de determinar
cuándo es conveniente consultar a las bases o a la coalición.
Asimismo, hay que establecer claramente las reglas del juego
entre las organizaciones participantes, las cuales no
necesariamente tienen que ser aliadas tradicionales, esto se
plantea con el afán de crear un espacio de reflexión, en el que
se pretende evaluar las fortalezas y limitaciones de la
organización, institución o coalición. El auto análisis, que
puede hacerse en cualquier momento de la campaña de
cabildeo, requiere se incluyan los siguientes pasos:
1) Identificar de manera precisa a las organizaciones que
impulsarán la campaña de cabildeo, contestando a las
preguntas que a continuación se enuncian:
¿Cuáles son las organizaciones participantes?
¿Quiénes son los representantes oficiales de dichas
organizaciones?
2) Precisar los mecanismos en el proceso de decisión al
interior de la coalición o grupo de trabajo, haciéndose las
siguientes preguntas
¿Cuáles son las organizaciones que integran el equipo de
trabajo?
¿Cómo se van a comunicar con los grupos que no pertenecen
a la comisión?
¿Quiénes del equipo podrían formar una comisión de
negociación de alto nivel?, precisando de manera clara lo que
se puede negociar y lo que no se puede negociar.
¿Quiénes formarán el equipo de prensa?, determinando lo que
están autorizados a decir.
¿Cómo se van a manejar los desacuerdos y conflictos?,
nombrando una comisión responsable que defina los
mecanismos para su resolución.
3) Aclarar el aporte de cada organización en la campaña de
cabildeo teniendo en cuenta:
La cantidad de recursos humanos y materiales con los que se
cuenta para su mejor distribución.
La cantidad de tareas a distribuir dentro del equipo de
trabajo.
4) Realizar un análisis político bajo las siguientes
consideraciones:
Investigar sobre políticas, programas y planes oficiales.
Medir el nivel de relaciones con los actores del sector público.
Identificar el grado del conocimiento sobre la temática o
problemática y el manejo de datos estadísticos.
Evaluar la relación con la prensa.
Ubicar el grado de movilización de las bases y la relación del
grupo con las mismas.
Identificar a posibles aliados a nivel nacional e internacional.
Comprobar el poder de convocatoria, credibilidad, legitimidad
y representatividad del grupo o coalición ante la sociedad.
5) Hacer un análisis de las fuerzas y debilidades del grupo,
para así poder medir el nivel de incidencia real con la que se
cuenta.
6) Proponer posibles soluciones a las debilidades
descubiertas.
7) Desarrollar una estrategia para aumentar la capacidad
institucional del grupo y seleccionar dos o tres actividades que
lo fortalezcan, las cuales pueden ser, entre otras:
Capacitar a los miembros.
Socializar la información.
Fomentar la participación cooperativa.
Imaginar los escenarios posibles para ubicar al grupo y sus
miembros.
6.- Estrategia de influencia
Una estrategia es un conjunto de actividades coordinadas y
dirigidas a alcanzar un objetivo común. Las mismas son
diseñadas y realizadas por los miembros de un grupo. En el
cabildeo, la estrategia es el conjunto de acciones orientadas
a influir o convencer al blanco para lograr la aprobación de la
propuesta. Diseñar una estrategia para el cabildeo implica
haber realizado previamente las siguientes tareas:
Investigar: El diseño, programación y calidad de la
investigación es crucial. La efectividad del trabajo de
incidencia está sustentada en los resultados alcanzados por
una investigación objetiva. Ésta requiere de datos
estadísticos, pronunciamientos de expertos, testimonios de
personas afectadas directamente, ya que cualquier
información falsa o no comprobable puede llevar a un
resultado equivocado, parcial y subjetivo, con lo cual se
puede desacreditar al grupo que está llevando a cabo la
campaña de cabildeo.
Saber a qué nivel se toman las decisiones: Por ejemplo, si es
a nivel gubernamental, es necesario precisar si el cabildeo se
hará con el gobierno municipal, estatal o federal. En caso que
se pueda efectuar en cualquiera de estos tres, se debe decidir
en cuál se tiene mayor posibilidad de éxito para alcanzar las
metas planteadas por el grupo.
Elaborar una propuesta: Es necesario pasar por un proceso de
discusión interno para así llegar a consensos duraderos, es
decir, que el diseño de la propuesta no la elaboren unos
cuantos, sino que participen todos los involucrados en la
campaña de cabildeo, esto no impide que una comisión
elegida por la asamablea, retome las aportaciones hechas y
proponga una redacción que será aprobada por todos los
miembros.
Identificar al blanco: Ubicar al actor principal de la campaña
de cabildeo, que es quien toma la decisión final sobre la
propuesta.
Detectar a los aliados, oponentes e indecisos: La
identificación de estos actores es vital para poder acceder o
influir sobre el blanco.
La medición de fuerzas y debilidades del grupo que
cabildeará: Es preciso definir las capacidades y las
limitaciones (humanas, materiales y financieras) del grupo
para no querer hacer aquello que no está a su alcance.
En una campaña de cabildeo pueden desprenderse varias
actividades a realizar dentro de la estrategia, por lo que se
recomienda se dé prioridad a aquellas que realmente influirán
en la toma de decisiones del blanco. Entre todas las
acciones posibles, las relacionadas con los medios de
comunicación, la movilización y la presión son de gran
relevancia.
La formulación de la estrategia de influencia y la definición de
tareas es la parte más creativa en la incidencia. A través de
este proceso se trata de descubrir cómo convencer al blanco
y a los indecisos, cómo motivar a actuar a los aliados y
cómo neutralizar a los oponentes.
A) Análisis de los intereses, motivaciones y posiciones de los
actores identificados
En la estrategia para el cabildeo y las actividades que
emanen de ella deben estar orientadas para influir en los
actores que se consideren importantes. Se deben analizar los
intereses, motivaciones y posiciones de los actores (blanco,
aliados, oponentes e indecisos) en relación a la propuesta,
para que los mismos sirvan de guía, por un lado, en la
elaboración de los argumentos que se emplearán para
convencerlos, y por el otro, en el diseño de las medidas de
presión que se utilizarán.
B) Definición de argumentos y formas de presión
Una de las vías más seguras tanto para conseguir mayores
niveles de conciencia acerca del problema que se desea
resolver como para lograr un amplio apoyo hacia una
propuesta específica, consiste en la formulación de
argumentos o mensajes convincentes dirigidos a los actores
primario y secundarios.
Los argumentos deben estar basados en información objetiva
y datos comprobables, pronunciamientos de expertos,
testimonios de personas afectadas directamente, etcétera. Su
estilo, contenido, lenguaje, fuentes de información, formato y
el momento de presentación deben configurarse en torno al
ambiente político y a los intereses, motivaciones y
posiciones de los actores arriba mencionados en los cuales
se trata de influir. Asimismo, en los argumentos deben
plantearse objetivos concretos. Hay argumentos generales y
específicos. Mientras los primeros forman parte de la hoja de
propuesta, los segundos pueden emplearse como base para la
elaboración de un documento de trabajo al interior de la
organización, el cual sirva de guía en el proceso de convencer
a los actores (blanco, indecisos, oponentes y aliados).
A continuación se ponen a consideración algunas de las
actividades más recurrentes que se emplean en el cabildeo:
Utilizar opiniones expresadas por personas influyentes.
Construir "opinión pública" a través de artículos editoriales en
la prensa y/o encuestas.
Exigir el cumplimiento de compromisos previos.
Criticar o elogiar aciertos de los actores primario y
secundarios.
Movilizar a los votantes para presionar a sus representantes.
Promover manifestaciones públicas.
Realizar actos de desobediencia o resistencia civil.
Ahora bien, ciertamente las acciones confrontativas tienen su
lugar. Sin embargo, por lo general es más eficaz utilizar,
primero, acciones persuasivas, sobre todo si partimos de la
base que el objetivo primordial durante la campaña de
cabildeo es convencer a los que tienen el poder de
decisión; ya que si se pasa rápidamente a la confrontación y
la denuncia pública se puede ocasionar rigidez en la posición
del blanco, con lo cual el objetivo se verá seriamente
obstaculizado.
C) Convencer, motivar y neutralizar a los actores con poder
de decisión
A continuación se ponen a consideración algunos de los
criterios básicos para poder influir en los actores con poder
de decisión.
Para convencer al blanco hay que definir:
Sus intereses, motivaciones y posiciones generales.
Sus intereses, motivaciones y posiciones en relación a la
propuesta.
Los argumentos que pueden utilizarse para que apoye la
propuesta.
Otras medidas de presión para convencerlo, determinadas por
el grupo.
Para convencer a los indecisos hay que identificar:
Quién es el indeciso que puede apoyar más a que la
propuesta tenga éxito.
Sus intereses, motivaciones y posiciones en relación a la
propuesta.
Los argumentos que pueden utilizarse para que apoyen la
propuesta.
Definir qué se quiere exactamente de ellos.
Para motivar a los aliados es necesario puntualizar:
Quién es el aliado principal.
Sus intereses, motivaciones y posiciones en relación a la
propuesta.
Los argumentos que pueden utilizarse para que sigan
apoyando la propuesta.
Definir cuál es su función e importancia en la campaña de
cabildeo.
Para convencer o neutralizar a los oponentes hay que
determinar:
Quién es el oponente principal.
Sus intereses, motivaciones y posiciones en relación a la
propuesta .
Definir los argumentos y las acciones que pueden realizarse
para que apoye la propuesta o por lo menos neutralizar su
posición.
En caso que la campaña de cabildeo incluya una estrategia
de prensa, ésta por lo menos debe considerar:
Cuáles son los mensajes o argumentos que se esperan
colocar.
Cómo convencer a los periodistas, con base en sus propios
intereses y motivaciones, a que escriban artículos acerca del
tema.
Las diferentes formas de llegar a la prensa pueden ser a
través de hacer un llamado a periodistas amigos, convocando
a conferencias de prensa, emitiendo boletines, entre otros.
Otros aspectos que hay que tomar en cuenta son:
Mantener al interior del grupo una comunicación permanente.
Coordinar el trabajo.
Buscar financiamiento para cabildear la propuesta.
Por último, es importante recordar que muchas de las
decisiones que toma una persona están determinadas por
factores subjetivos, tales como:
La forma en que enmarcamos un problema (dónde se centra
la atención).
Las suposiciones que uno maneja relacionado al universo
(cómo funciona el mundo).
Los valores personales.
De estos tres factores, la forma de enmarcar un problema es
lo más fácil de modificar a través de argumentos persuasivos.
En cambio, lo más difícil de cambiar son los valores
personales. Por esta razón, debemos evitar atacar
frontalmente los valores del otro, porque crea hostilidad y
resistencia.
7.- Planificación de actividades
Las actividades son las tareas concretas que el grupo llevará a
cabo para planificar y ejecutar su campaña de cabildeo. En
este paso se busca detallar todas y cada una de las
actividades necesarias para:
Terminar de preparar la campaña.
Ejecutar las estrategias definidas en el paso anterior.
En cada campaña de cabildeo existen dos actividades que
no pueden faltar, éstas son 1) la preparación de una hoja de
propuesta y 2) las visitas cara a cara con el blanco,
indecisos, oponentes y aliados. En la primera, se
especifica breve y claramente la propuesta y la importancia
de ésta . En la segunda, se expone de forma más directa y
efectiva la iniciativa, además que sirve para recoger
información adicional. Se debe tomar en cuenta que ambas
acciones demandan escasos recursos económicos y son fáciles
de realizar.
Hoja de propuesta
En cualquier campaña de cabildeo debe prepararse
una hoja de propuesta, la cual sirve de guía para la campaña.
Dicha hoja debe contener un planteamiento breve
y conciso acerca de la importancia de
la propuesta y sus argumentos principales.
Se sugiere que la hoja de propuesta no exceda de
dos páginas.
Si se desea puede mencionarse brevemente a los
grupos que la suscriben.
Los miembros del grupo deben procurar que cada una de sus
actividades contribuya a la realización de la estrategia de
incidencia que se empleará para acercarse a los actores que
tengan poder de decisión, las mismas pueden estar
dirigidas a:
Apoyar con tareas de investigación para la elaboración de la
propuesta.
Sondear la propuesta en actos políticos clave.
Impulsar actividades para el fortalecimiento interno del grupo
que llevará a cabo la campaña de cabildeo.
Realizar acciones para persuadir al banco, a los indecisos y
a los oponentes.
Para cada actividad propuesta se debe nombrar un
responsable, el cual se encargará de realizar las tareas
correspondientes y la calendarización de las actividades, así
como la estimación y asignación de los recursos necesarios
(ya sean humanos, materiales o económicos) para llevar a
cabo el plan de actividades. Entre las tareas más importantes
están:
Preparar y programar visitas a los actores identificados.
Efectuar actividades de prensa.
Elaborar una hoja de propuesta.
Diseñar una estrategia específica para el cabildeo de la
propuesta.
Aprobar el plan de acción final de la campaña de cabildeo.
Gestionar y asignar recursos.
Realizar tareas de investigación y de análisis para afinar la
propuesta.
Otras que determine el grupo.
Una vez que se ha hecho un listado de todas las actividades
es recomendable readecuar el plan de actividades acordado,
tomando en cuenta las capacidades reales de la organización
y/o las posibilidades de conseguir más aliados y recursos
adicionales. Es de suma importancia hacer un análisis en
términos de los costos y beneficios de cada actividad
propuesta (por ejemplo, muchas veces los estudios largos y
los seminarios-talleres no producen mucho impacto, pero
ayudan en el proceso de elaboración de la estrategia y del
plan de actividades), motivo por el cual se recomienda, en la
medida de lo posible, escoger las acciones que tengan un
mayor impacto con el menor costo.
8.- Evaluación constante
La evaluación es un elemento esencial en cualquier campaña
de cabildeo. Al aplicarla se rescatan tanto los éxitos como
los fracasos, ejercicio que fortalece la capacidad del grupo
para futuras campañas de incidencia política. Evaluar implica
atender tres niveles diferentes:
A nivel de la política (logrando cambios específicos en
políticas, programas y comportamiento de funcionarios
públicos). En este sentido, hay que tomar en cuenta el trabajo
de la organización en la planificación e implementación de la
estrategia, los esfuerzos de construir alianzas y coaliciones, la
efectividad de los argumentos, las audiencias que se lograron
alcanzar, y los éxitos o fracasos en su intento de incidir en la
toma de decisiones de los actores con poder de decisión.
Es decir, ¿qué cambios específicos se lograron en términos de
políticas, leyes, programas o comportamientos?
A nivel de la sociedad civil (fortaleciendo organizaciones de
base, ONG’s, OC’s, etcétera, lo que permite construir nuevas
relaciones de poder mucho más equitativas). Hay que evaluar
el impacto de la labor de incidencia en términos del
fortalecimiento de la organización, institución o coalición para
promover, defender y/o garantizar el cambio especifico
planteado.
A nivel de la democracia (aumentando el espacio político y
los niveles de participación de los ciudadanos, organizaciones
e instituciones de la sociedad civil). Deben evaluarse los
logros y fracasos en términos de la democratización. En qué
ámbitos se logró aumentar el espacio político de acción, de
participación y el grado de legitimación de la sociedad civil en
su labor de incidencia.
Conclusiones
1. El Proyecto Yo Ciudadano, Yo Gobierno, generado por el
MCD, pretende, entre otras cosas, propiciar junto a la
ciudadanía, alternativas informativas, participativas y de
acción constructivas y propositivas que permitan un mayor
nivel de incidencia en las políticas públicas. En este contexto,
con la publicación de este Manual, se pone a disposición de
personas, grupos y organizaciones un instrumento educativo-
metodológico acerca de cómo realizar una campaña de
cabildeo.
2. Para poder cumplir las funciones de gobierno, se requieren
métodos claros, expeditos y efectivos de comunicación entre
gobernantes y ciudadanos. Con el cabildeo se fomentan
nuevas formas de relación entre ciudadanos y gobierno, al
incidir aquellos en las decisiones y la gestión
gubernamentales y, de esta manera, acabar con las prácticas
autoritarias, corporativistas y clientelares asumidas
tradicionalmente por el gobierno.
3. El Proyecto Yo ciudadano, yo gobierno, entre otras
cosas, impulsa una nueva cultura que exige a los ciudadanos
se vean como seres integrados e integrales con derechos y
obligaciones. Asimismo, alienta a las organizaciones
ciudadanas para que éstas den propuestas a los problemas
que afectan a la sociedad. En este sentido, el cabildeo
promueve, por un lado, la solidaridad entre los grupos y por
el otro, pasar de la queja-denuncia a la solución propositiva.
4. Tan importante como el forjar una nueva cultura
ciudadana, está la labor en favor de la democratización del
país. En relación a esto, la incidencia enriquece y fortalece no
sólo la democracia representativa (lo electoral), sino también
la democracia participativa al procurarse que los ciudadanos
sean sujetos que co-gobiernen.
Finalmente se puede inferir, en pocas palabras, que en cada
campaña de cabildeo se está inmerso en un proceso de
aprendizaje, largo y complejo de un nuevo tipo de relación y
corresponsabilidad social, que requiere persistencia y
creatividad.
Glosario
Cabildeo: Capacidad de incidir en aquellos actores que tienen
poder de decisión en ciertas problemáticas de interés para las
organizaciones sociales y civiles.
Campaña de cabildeo: Es un plan de acción estratégico a
través del cual se pretende influir en los actores con poder de
decisión para lograr cambios concretos en las decisiones
gubernamentales.
Espacio de decisión: Saber identificar a los actores principal
y secundarios para saber quién toma la decisión, cómo y
cuándo la toma, en relación a la iniciativa o propuesta
generada por alguna organización o coalición, para poder
incidir en alguno de ellos.
Blanco: Es el actor clave que finalmente toma la decisión,
sea ésta afirmativa o negativa respecto a la propuesta
promovida por el grupo o coalición.
Mapa de poder: Es un ejercicio de análisis para reconocer al
blanco y a los actores secundarios que pueden influir sobre él.
Estrategia: Es el conjunto de acciones coordinadas dirigidas
a convencer o incidir en el blanco para que acepte la
propuesta.
Monitoreo: Son actividades que realizan algunos miembros
del grupo que está cabildeando, ya sean éstas permanentes o
periódicas, para realizar un diagnóstico del comportamiento
de los actores involucrados en la campaña de cabildeo. Esto
implica llevar un registro del actuar de los mismos a través de
declaraciones públicas o de la cubertura que hagan de ellos
los medios de comunicación, con el fin de evaluar el impacto
de la estrategia, ya sea para continuarla o para replantearla.

QUÉ SE ENTIENDE POR CABILDEO?


EL PORQUÉ DE ESTA PUBLICACIÓN
Desde hace algunos años, en Centroamérica ha cobrado cada
vez más importancia el desarrollo de acciones planificadas de
cabildeo para incidir en las políticas que afectan los procesos
y el desarrollo de estos países. Aunque siempre el cabildeo
ha sido una práctica de la diplomacia, es desde hace pocos
años que las organizaciones e instituciones sociales se han
ido apropiando del término y han ido identificando la
necesidad de desarrollar esas acciones en el marco de
estrategias o planes que les permitan enfocar más sus
acciones y lograr un mejor impacto.
El objeto de publicar este folleto es contribuir a ese esfuerzo
mediante la provisión de información básica y de una
herramienta sencilla que destaque los aspectos más
importantes en la elaboración de una estrategia de cabildeo,
partiendo de reconocer que en la mayoría de los casos (de
grupos y organizaciones sociales y líderes de base) existe
una experiencia acumulada en este tipo de trabajo aunque
no se le haya dado este nombre. Esta herramienta entonces,
está concebida como una base que permite ordenar y
enfocar acciones de cabildeo en el marco de la experiencia
acumulada.
La elaboración de este folleto está basada en la experiencia
institucional de Oxfam U.K./I. ( que ha sido base de
elaboración de metodologías de cabildeo que están siendo
utilizadas en la región) y en la experiencia acumulada de
muchos años, tanto en el trabajo concreto de cabildeo en
Centroamérica como en talleres con ONG's y líderes de base.
Sin embargo, la experiencia misma de los grupos debe ser la
base y punto de partida de la elaboración de una estrategia
de cabildeo, y esperamos también que pueda ser insumo y
retroalimentación para ir perfeccionando esta herramienta.
Esperamos que este folleto sea entonces una contribución
metodológica que ayude a potenciar las capacidades de la
sociedad civil para incidir en las políticas que afectan a los
pueblos de la región.
Patricia Ardón
1996
Las actividades de cabildeo, como se entienden hoy en el
contexto centroamericano, tienen su origen en lo que se ha
dado por llamar "hacer lobby". Este "hacer lobby" refleja el
hecho de que las conversaciones y discusiones que tienen
lugar con el objetivo de influir políticas y acciones no se dan
siempre en los foros o reuniones formales, sino en los
tiempos de descanso y en los corredores o en el "lobby" de
los lugares en donde tienen lugar las reuniones y foros de
decisión.
Aunque esta ha sido una práctica de muchos años de actores
políticos y sociales en la región, es desde hace pocos años
que el cabildeo empieza a ser concebido como un trabajo o
actividad que demanda determinados niveles de conocimiento
y especialización. Desde nuestro punto de vista, la
importancia de desarrollar un trabajo de este tipo con una
adecuada planificación debe estar concebido en el marco de
una estrategia que precise claramente los objetivos que se
quieren lograr, y que permita sistematizar la experiencia y
conocimientos de individuos y grupos en función de las
transformaciones deseadas.
Generalmente se utiliza el término cabildeo en referencia,
tanto al desarrollo de acciones específicas y puntuales que
buscan lograr un impacto inmediato, como en el marco de
una estrategia de mediano o largo plazo. Por ejemplo, se
puede hacer cabildeo para darse a conocer, para lograr
financiamiento para un proyecto, para lograr un apoyo
concreto a una actividad o para intentar convencer de nuestro
argumentos a una persona, grupo o institución con el objetivo
de que apoyen nuestros planteamientos o modifiquen sus
políticas y decisiones. También se desarrollan acciones de
cabildeo como parte de una estrategia más amplia de
incidencia que intenta lograr cambios específicos en las
políticas de gobiernos, organismos inter-gubernamentales,
instituciones comerciales, ONG's internacionales, etc.
El cabildeo se puede hacer a nivel local, nacional, regional e
internacional según el tema de que se trate y las necesidades
y posibilidades de influir en el proceso de toma de decisiones.
La palabra incidencia es de uso más reciente y es la
traducción para la palabra inglesa "Advocacy". Cuando se
habla de incidencia o de una estrategia de incidencia
generalmente se habla de la intención de "incidir" o influir en
políticas para lograr cambios o modificaciones a las mismas,
lo que casi siempre implica más de una acción o serie de
acciones y a más de una institución o grupo.
Es importante sin embargo notar que muchas veces se usa
cabildeo o incidencia de forma indistinta, es decir, sin hacer
diferenciación y usando cualquiera de las dos palabras para
describir acciones y estrategias dirigidas a influir la toma de
decisiones sobre aspectos y políticas concretas.
Para evitar confusiones, aquí utilizaremos siempre el término
CABILDEO, entendiendo por éste al desarrollo de aquellas
acciones y/o estrategias que buscan incidir en las políticas y
niveles de decisión.
PORQUE ES IMPORTANTE DESARROLLAR UNA ESTRATEGIA
DE CABILDEO
Porque contribuye al logro de objetivos que nos planteamos y
nos ayuda a clarificar cuáles son más estratégicos.
Porque es un instrumento que nos permite planificar a corto,
mediano y largo plazo las acciones que queremos desarrollar
para lograr los objetivos que queremos alcanzar.
Porque nos ayuda, en base a lo anterior, a priorizar nuestras
acciones tomando en cuenta los recursos materiales y
humanos con que contamos.
Porque puede involucrar a muchos actores que se interesan
por lograr los mismos objetivos u objetivos similares,
sumando así esfuerzos en la misma dirección.
Porque nos permite conocer los planteamientos de otros
grupos, personas o instituciones diferentes a nosotros y
aumenta nuestro conocimiento sobre los factores que inciden
en nuestra situación.
Porque el diseño de una estrategia nos da flexibilidad para ir
adaptándonos a los cambios de la realidad en forma más
planificada.
Porque nos ayuda a ser realistas sobre lo que queremos
lograr.
Porque ayuda a sistematizar información para aprender de la
experiencia para futuras acciones.

CUANDO ESTAMOS HACIENDO CABILDEO


Estamos haciendo acciones de cabildeo cada vez que
intentamos convencer a alguien de la validez de nuestros
planteamientos o acercando a otras personas a conocerlos
con el objeto de aunar esfuerzos alrededor de un objetivo.
Hacemos cabildeo también cuando nos acercamos a otros
actores buscando que contribuyan a influir sobre otros
grupos, personas, instituciones o gobiernos para el logro de
nuestros objetivos.
La diferencia entre hacer acciones de cabildeo aisladas o
espontáneas y hacerlas en el marco de una estrategia más
global, es que en el marco de una estrategia podemos
identificar más claramente nuestros objetivos y los recursos
con que contamos para lograrlos. Usando una metodología
adecuada, podemos también sistematizar nuestra experiencia
para revisar nuestros objetivos y reformular nuestra
estrategia de ser necesario. Y ,muy importante, podemos
también identificar aliados para el logro de nuestros objetivos.
Este folleto pretende ser una contribución tanto para el
desarrollo de acciones puntuales de cabildeo como para el
desarrollo de una estrategia en el marco global de nuestro
trabajo, pero enfatizando la necesidad de concebir el cabildeo
en el ámbito de nuestra estrategia global de trabajo.
ALGUNOS CRITERIOS PARA PRIORIZAR LOS TEMAS DE
CABILDEO
Algunos de los aspectos más importantes a considerar para
priorizar los temas sobre los cuales deseamos hacer trabajo
de cabildeo son:
a. La importancia que el tema tiene para la gente con la que
trabajamos, a quienes se pretende beneficiar y/o en relación
a nuestros objetivos globales.
b. La experiencia directa que tenemos sobre el tema, que
permita hacer un trabajo basado en nuestra credibilidad.
c. Que tengamos o queramos desarrollar propuestas
concretas para modificar la situación o las políticas que se
deseen cambiar o modificar.
d. Que tengamos la capacidad (o la desarrollemos) para
incidir en la temática desde nuestro espacio de trabajo o
especialización. También es útil analizar:
Es un tema de actualidad en la agenda político-social?
Es prioritario para los gobiernos, instituciones o grupos en
quienes se desea influir?
e. Tenemos acceso a las instituciones/foros/personas claves
en la toma de decisiones en relación al tema o nos puede
alguien facilitar ese acceso? Tenemos aliados que tengan ese
acceso?
f. Es posible lograr cambios concretos en relación al tema?
ELEMENTOS PRINCIPALES PARA EL DESARROLLO DE UNA
ESTRATEGIA DE CABILDEO
Para desarrollar un trabajo de cabildeo eficaz y eficiente es
necesario dar los siguientes pasos:
1. Análisis del Problema
Es fundamental desarrollar un análisis de la problemática que
deseamos resolver y de los factores que inciden en esta
problemática. Esto nos permitirá identificar nuestros objetivos
y examinar su viabilidad. Al mismo tiempo, en análisis de la
problemática nos permitirá clarificar los distintos elementos
de la situación, a la vez que socializamos y nos apropiamos
como grupo de la información y de un análisis común.
2. Objetivo
Es necesario definir con claridad el objetivo que se quiere
lograr. Los objetivos pueden dirigirse a cambiar o modificar
una política o a lograr una acción o serie de acciones
específicas para modificar una situación.
Un ejemplo de un objetivo de cabildeo para cambiar o
modificar una política puede ser el que una organización u
organizaciones se planteen que la población beneficiaria de un
programa gubernamental participe en el diseño y planificación
del mismo y en el desarrollo de los proyectos que un Gobierno
impulsa.
Un objetivo de cabildeo para lograr una acción específica es
por ejemplo que la población beneficiada de un proyecto o
proceso participe en una reunión en donde se discute su
problemática, en función de informarse sobre las posiciones
de distintos sectores al respecto.
Los objetivos deben ser específicos, cuantificables, realistas y
prioritarios.
Una vez definido el objetivo es importante hacerse
nuevamente las siguientes preguntas:
Es este un objetivo importante o prioritario dentro de nuestro
trabajo o hay otros grupos que por su naturaleza trabajan
más y/o mejor sobre el tema?
Es un objetivo viable/factible de alcanzar en el contexto y
coyuntura en la que planificamos? De no ser así, podemos
definir un objetivo más preciso y alcanzable?
A nivel de grupo, tenemos una idea clara y compartida de los
principios que son la base de nuestra posición respecto al
objetivo que deseamos alcanzar?
Se pueden aceptar arreglos/modificaciones a esta posición o
hay aspectos de ésta que no son negociables para nuestro
grupo o para la población interesada?
Hay otro grupo o grupos que sabemos que comparten nuestro
objetivo y con los cuales podríamos desarrollar
conjuntamente una estrategia? De ser así, podemos desde el
principio empezar a trabajar conjuntamente en la planificación
del cabildeo.
3. Definición de Metas
Además del objetivo, necesitamos formular nuestras metas a
corto y mediano plazo. Por ejemplo:
A corto plazo:
Presentar una documento conjunto con X organismo en la
reunión del Banco Mundial del mes de noviembre.
Lograr que se conozca públicamente nuestra posición, a
través de X y X medios de comunicación.
A mediano plazo:
Desarrollar una estrategia de seguimiento a la reunión del
Banco Mundial acorde con la receptividad que ha tenido
nuestro planteamiento
Lograr que la División X del Banco se reúna con nosotros para
discutir la situación.
A largo plazo:
Lograr que el Banco Mundial modifique su política en relación
a la participación de las organizaciones sociales en X
Programa.
El establecimiento de las metas nos será muy útil en el
proceso de ir evaluando el impacto de nuestra estrategia.
4. Información Necesaria
Después de definir el objetivo y conformar el grupo inicial
para el desarrollo de la estrategia, el siguiente paso es pensar
en la información que vamos a necesitar y sistematizarla
(ordenarla).
Para desarrollar un trabajo de cabildeo e incidencia eficaz y
eficiente debemos contar con información y analizarla en
relación con:
a. Cuáles son los antecedentes del caso?
Al elaborar un plan o una estrategia de cabildeo es necesario
conocer qué pasos se han dado hasta ese momento para
lograr el objetivo que se persigue: las reuniones que se han
tenido con funcionarios, instituciones, etc.; las acciones que
se han llevado a cabo para lograr el objetivo y cuáles han sido
las respuestas y logros obtenidos. Si el caso es parte de una
problemática más amplia, qué resultados se han obtenido en
relación a la problemática.
b. Cuáles son las cifras importantes?
Debemos contar con información precisa que contribuya a
respaldar nuestra argumentación. Por ejemplo, cuántas
personas son las afectadas por la situación prevaleciente en
relación al problema? Cuánto tiempo se ha estado trabajando
alrededor de esta problemática? Cuánto dinero o recursos
están en discusión en comparación al total de recursos
disponibles?, etc.
c. Con qué otra información contamos para respaldar nuestra
posición y nuestros planteamientos?
En relación al problema de que se trata, es útil hacer un
listado de los acuerdos, derechos, legislación, casos que
constituyan precedente, etc. que puedan respaldar nuestros
planteamientos en un ámbito más amplio del que nos
movemos. Igualmente es útil hacer un listado de posibles
mecanismos de negociación o solución previamente acordados
o ya existentes en relación al problema.
En esta fase es sumamente importante identificar nuestras
fuentes de información y asegurarnos de que las cifras y
datos que tenemos son confiables y pueden ser sustentados
sobre bases firmes.
5. Identificación de las Instituciones Objeto de Cabildeo
-Análisis de Poder y Mapeo
Un aspecto clave en el desarrollo de una estrategia de
cabildeo es la identificación de los distintos niveles de toma
de decisiones en relación a la problemática que abordamos,
así como de las instituciones a nivel nacional, regional e
internacional capaces de llevar a cabo y/o de influir hacia los
cambios deseados. Por ello es necesario:
a. Identificar a los actores principales en relación al tema que
nos ocupa.
Quién o quiénes toman la decisión en relación al problema
que se desea resolver o a la política que se quiere
transformar?
Cómo funciona el proceso de toma de decisiones?
Cuáles son los foros en que se toman esas decisiones y
cuándo se toman?
Analizar cuáles son las políticas de estos actores en relación al
tema y porqué? Sus argumentos y motivaciones; sus
fortalezas y debilidades y los argumentos o acciones que
puedan influir sobre ellos.
De todos los actores, quiénes coinciden con nuestra posición;
quiénes son contrarios a ésta y quiénes serían receptivos a
nuestros planteamientos?
Quiénes influyen esas decisiones y cuál sería su motivación?
El hacer este análisis nos ayudará a clarificar exactamente
quién o quienes serán el "objeto" de cabildeo y las
instituciones e individuos que pueden influir sobre las
decisiones. El análisis de las motivaciones nos ayudará a
entender mejor las actitudes y posiciones de individuos,
grupos y/o instituciones en relación a la problemática, lo que
nos permitirá identificar más claramente las líneas de acción a
seguir.
6. Identificación de Aliados
El éxito de nuestra estrategia dependerá no solamente de
nuestra propia capacidad sino también de la presión y/o
influencia que otras instituciones, organizaciones, grupos e
individuos puedan ejercer frente a quienes serán objeto de
cabildeo (quienes toman la decisión respecto al tema de que
se trata). De ahí la importancia de identificar a nuestros
aliados, que son aquellos que emprenderán acciones en el
marco de nuestra estrategia para lograr un objetivo
compartido.
Los aliados pueden serlo sólo en función de un objetivo
concreto o pueden ser nuestros aliados porque comparten
nuestros objetivos globales y a mediano/largo plazo. Sin
embargo es importante notar que no todos nuestros amigos
son necesariamente nuestros mejores aliados en una
estrategia de cabildeo. Su eficacia depende de su capacidad
de influencia y no de que compartamos principios y objetivos
globales similares.
En una estrategia de cabildeo, nuestros aliados pueden ser
organizaciones de solidaridad, redes nacionales, regionales e
internacionales, embajadas, organizaciones internacionales,
ONG's, gobiernos, iglesias, organismos de Derechos
Humanos, organismos multilaterales, etc.
Es importante identificar desde el inicio cuáles son los aliados
que comparten plenamente nuestros planteamientos y que
estarían dispuestos a desarrollar un plan de acción conjunto,
y cuáles son aquellos que por su naturaleza pueden contribuir
con acciones específicas o puntuales en momentos clave,
aunque no compartan nuestros objetivos globalmente.
Igualmente es importante identificar a aquellas personas,
grupos o instituciones que aunque no compartan nuestra
posición, ya sea por falta de información o por desacuerdo
con algunos aspectos, son susceptibles de contribuir a nuestro
objetivo.
7. Análisis de las Capacidades Propias
Para poder viabilizar una estrategia de cabildeo es muy
importante analizar nuestras capacidades:
Cuáles son las fortalezas y las debilidades de nuestro grupo u
organización para poder influir sobre los espacios de decisión
en relación al objetivo que nos proponemos?
Con qué recursos humanos contamos para desarrollar nuestra
estrategia y cuáles son sus capacidades y limitaciones?
Con qué recursos materiales contamos para desarrollar
nuestra estrategia?
Este análisis nos ayudará a examinar con realismo nuestras
posibilidades para definir un plan de acción viable y sostenible
sobre la base de nuestros recursos. Igualmente nos sitúa en
mejor posición para identificar la forma en que nos podemos
complementar con nuestros aliados.
Es posible también que decidamos que el objetivo buscado es
estratégico para nosotros y que, si no contamos con los
recursos necesarios, decidamos desarrollar esas capacidades
internamente como parte de nuestro plan de acción.
8. Elaboración del Plan de Acción
La elaboración del Plan de Acción es el paso en el que se
definen las formas en que se puede influir la toma de
decisiones, ganar aliados, neutralizar a los oponentes y
ejercer influencia sobre los indecisos.
El primer paso en el desarrollo del Plan de Acción es la
descripción del mensaje que queremos comunicar.
a. Mensaje
La redacción del mensaje nos ayuda para clarificar la esencia
de lo que queremos comunicar para lograr nuestro objetivo y
también para asegurar que todas las personas y grupos que
participan con las acciones de cabildeo comparten nuestro
objetivo, están apropiados del mismo y lo comunican con
claridad.
El mensaje debe estar escrito en palabras claras y sencillas,
incluir la información básica sobre la situación y un breve
análisis de la misma, el cambio que se quiere lograr y sus
efectos sobre la población afectada, así como las exigencias o
recomendaciones específicas en relación a las acciones que se
pide que se emprendan para lograr dicho cambio,
argumentando sobre la validez de emprender esas acciones y
respaldando nuestra información con estadísticas e
información de fuentes directas.
Idealmente, el mensaje debe ser un documento de una o dos
páginas como máximo y debe evitar hacer valoraciones o
juicios no sustentados sobre hechos comprobables y/o
fuentes confiables. En términos generales, la receptividad al
mensaje será mucho mayor si se utiliza un lenguaje
persuasivo y no confrontativo.
Una síntesis de un mensaje poco claro sería por ejemplo:
"Queremos que la población afectada participe en el diseño de
los programas que les afectan. Hacemos este llamado porque
sabemos que no hay voluntad política para cumplir con lo
acordado".
El mensaje es poco claro porque no especifica la acción
concreta que se quiere lograr y el tiempo en que se quiere
alcanzar el objetivo, y porque no especifica en que sustenta la
valoración de falta de voluntad política.
Un mensaje claro en relación a este mismo objetivo sería por
ejemplo:
"Queremos que la población de X comunidades participe, a
través de su representante, en la Comisión del Programa de
Desarrollo Local de la Región Central a ser conformada el 20
de marzo próximo. En dos oportunidades hemos solicitado por
escrito el reconocimiento formal de la participación de la
población sin que hasta el momento hayamos tenido
respuesta. Su no inclusión a la fecha constituye una violación
del Acuerdo...que especifica la participación activa de la
población en este proceso".
Una vez que se tenga claro el mensaje, posteriormente puede
agregársele una solicitud para emprender una acción concreta
según el caso, como por ejemplo:
Debido a esta situación, solicitamos que se envíen cartas a las
siguientes personas exigiendo el compromiso de dicho
Acuerdo.."
b. Identificación de formas y medidas de influencia
Puede haber muy diversas formas de influir una política o una
decisión. Estas pueden ser a través de un cabildeo directo con
los niveles de decisión, indirecto a través de nuestros aliados,
por medio de un trabajo con la prensa para conseguir que se
hagan públicos nuestros planteamientos y la problemática que
nos interesa, a través de campañas públicas, manifestaciones,
etc. o combinando varias o todas estas modalidades.
Cabildeo Directo
Consiste en sostener reuniones o comunicarse directamente
con aquellos organismos, grupos o individuos que pueden
afectar políticas por medio de presiones o influencias o
directamente con quienes toman las decisiones en relación al
problema que nos interesa, sobre la base del análisis de Poder
que desarrollamos anteriormente.
A manera de ejemplo de un cabildeo directo podemos
mencionar que el grupo visite Embajadas, que se reúnan con
funcionarios clave en la toma de decisiones y que soliciten a
organismos internacionales que presionen a un Gobierno o a
una institución. Podemos también sostener reuniones
directamente con quienes toman las decisiones.
Cabildeo Indirecto
Aquí es importante definir qué aliados se van a priorizar y
cómo podemos potenciar su influencia. Por ejemplo, podemos
solicitar a ONGs internacionales que hablen con sus
respectivas Embajadas en relación a la problemática para que
sus Gobiernos presionen, que se activen redes den otros
países en apoyo a la solución de la problemática para
recaudar fondos; que se envíen cartas solicitando a las
autoridades competentes que tomen las medidas necesarias,
etc.
Prensa
La prensa y los medios de comunicación pueden ser
sumamente útiles para publicitar un problema y presionar a
que quienes toman las decisiones hagan pública su posición.
Es útil analizar y hacer un sondeo sobre la forma en que
pueden apoyar nuestra estrategia los aliados en los medios y
asesorarnos sobre la forma de elaborar el mensaje que
deseamos dar.
Campañas Públicas
Pueden incluir concentraciones, eventos públicos, foros de
discusión, publicaciones, etc. En relación a las campañas
públicas es importante analizar con objetividad nuestro poder
de convocatoria y el impacto que se puede lograr en los
distintos medios que deseamos influir.
Movilizaciones y otras medidas de hecho
Parte de una estrategia puede ser el desarrollo de
movilizaciones, manifestaciones u otros en función de
presionar para lograr nuestro objetivo. Idealmente, estas
formas deben adoptarse cuando se agotan otras posibilidades
o se ha demostrado su inoperancia, evitando así la
confrontación innecesaria y el desgaste de nuestros recursos
y capacidades.
c. Programación de Actividades
Sobre la base del análisis que hemos hecho de nuestros
recursos y capacidades, así como del Plan de Acción que
vamos a desarrollar, debemos hacer una programación
realista de todas las actividades y acciones que queremos
desarrollar, lo más específica posible, incluyendo las personas
que desarrollarán dichas acciones, las fechas en que se
desarrollarán y los costos que implicará su desarrollo.
En esta etapa es importante revisar si se han hecho las
consultas necesarias con los involucrados (de manera
importante con los miembros de nuestra organización o
grupo, con las bases, con los directivos, etc.) o incluir dichas
consultas en la primera fase de la programación, dejando
posteriormente un tiempo para reformular la estrategia si es
necesario.
Es importante enfatizar que el Plan de Acción puede incluir
toda una gama de líneas de acción complementarias entre sí,
como las aquí mencionadas y otras. La creatividad es muy
importante ya que muchas veces permite dar cauce a la
experiencia acumulada, y puede hacer la diferencia en el éxito
o el fracaso de una estrategia.
Al llegar a este punto es necesario analizar globalmente
nuestra estrategia, identificar vacíos y necesidades y, de ser
necesario, replantear nuevamente nuestros objetivos y metas
o precisarlos mejor en función de contar con un Plan de
Acción realista y viable.
8. Seguimiento y Evaluación
Es importante hacer una evaluación periódica del desarrollo
de nuestra estrategia de cabildeo y de su impacto. Esto nos
permitirá ver en dónde estamos fallando y en dónde tenemos
logros, así como hacer los cambios o readecuaciones que sean
necesarias. En algunos casos nos permitirá reconocer que las
metas que nos propusimos no son posibles de alcanzar en la
forma y el período en que las planificamos, que no contamos
con los aliados adecuados o que necesitamos priorizar
algunos aspectos no incluidos anteriormente. En suma, nos
permitirá readecuar nuestra estrategia sobre la marcha
potenciando así nuestros recursos y capacidades.
Igualmente nos ayudará a sistematizar la experiencia para el
trabajo futuro.
OTRAS CONSIDERACIONES PARA EL DESARROLLO DE UN
TRABAJO DE CABILDEO EFICAZ Y EXITOSO
a. Las propuestas deben ser claras y realistas. Nunca debe
quedarse solamente en la denuncia de una situación.
b. Es importante establecer un diálogo. No debe esperarse
que el cambio deseado se va a dar por una reunión o una
carta.
c. Es necesario ser enérgico, persistente y persuasivo.
d. Es clave identificar áreas o puntos de interés común con el
objetivo de cabildeo o con aquellos aliados potenciales, en
función de enfatizar éstos en nuestra comunicación y no los
aspectos negativos.
e. La buena preparación es fundamental, sobre todo contar
con la información necesaria tanto sobre la problemática
como sobre las instancias y mecanismos de decisión.
f. Ser conciso y específico en el mensaje que se quiere dar.
g. Identificar objetivos específicos para toda reunión o
comunicación.
h. Estimular la creatividad para buscar nuevas formas de
incidir.
i. Buscar al máximo la objetividad.
j. Dedicar tiempo y recursos a la elaboración de la estrategia
de cabildeo y a su evaluación periódica.
k. Asegurar que el mensaje llegue siempre claramente
(preferiblemente por escrito) y que nuestros interlocutores
establezcan mínimamente un compromiso de respuesta para
cada acción que desarrollamos.
FINALMENTE, LO MAS IMPORTANTE:
TENER CLARAMENTE DEFINIDO EL OBJETIVO QUE QUEREMOS
LOGRAR.
Definición de estrategias
Etimológicamente hablando el término "estrategia" ha estado
relacionado con la guerra. Estrategia significa, según el
diccionario, el arte de dirigir y coordinar las operaciones
militares. Este término militar contempla el largo plazo, el
conjunto o la totalidad y el cómo se va a hacer.
Hoy la estrategia no solo es un término militar. Se utiliza en
diferentes ámbitos de acción, como en la economía, en la
publicidad y en la política.
En el ámbito económico se pueden citar dos estrategias muy
comunes: los famosos "dumpings", que son ahora ilegales, y
son las comunes maneras de abarrotar el mercado con
mercancías para bajar el costo del producto con el cual se
está compitiendo. En sentido contrario, el desabastecimiento
es otra estrategia común y consiste en concentrar mercancía
en espera de mejores precios, es crear escasez con el
propósito de que la demanda del producto presione para
elevar los precios.
La publicidad es otra área, muy permeable para el uso de
estrategias, incluso no percibidas por todos nosotros como
consumidores. Una de ellas es el anuncio sublimado cuyo
propósito es crear la necesidad, no satisfacerla. Otra
estrategia es la saturación del mensaje que es utilizada por
los grandes periódicos del mundo, consiste en insistir con una
misma noticia y un mismo enfoque, con el fin de lograr algún
propósito hasta lograrlo.
En el ámbito de la política entre las estrategias más conocidas
está el boicot, que consiste en impedir que el adversario logre
su propósito. Es una vieja acción laboral-obrera de la época
del anarcosindicalismo. Por ejemplo, en términos de las
luchas sociales en Europa y en Estados Unidos, ha consistido
en movilizaciones de trabajadores asalariados para llamar al
consumidor a no comprar productos, para obligar a una gran
transnacional a que cambie su conducta o su posición. Otras
estrategias usadas en el campo político son la desinformación,
la difamación, las huelgas de hambre, las marchas y las
pintas en las calles.
Lo fundamental de una estrategia es la creatividad. Existen en
la historia interesantes ejemplos de estrategias creativas. Uno
de ellos se dio después del zapatismo en México, que como
sabemos es un país que tiene una vasta historia sindical y una
compleja historia de lucha social. En esa época México estaba
sobresaturado de huelgas, la gente ya no creía en ellas, éstas
ya no eran útiles para presionar o impresionar; más bien
producían el efecto al contrario. Entonces, una estrategia que
utilizaron los estudiantes para ganar las simpatías a favor del
zapatismo fue limpiar las paredes del Palacio Nacional. A la
gente le produjo una gran impresión ver toda la espumería en
el Palacio Nacional, se asombraron y maravillaron y apoyaron
la forma pacífica en que estos jóvenes estaban protestando.
Otro ejemplo tuvo lugar en Estados Unidos, en una ocasión en
que se dieron casos de violación, ocurridos todos en la noche,
en un barrio de población negra. Las mujeres habían ido a la
policía pero no habían logrado nada y por ello estaban
conscientes de que tenían que llamar la atención. Se dieron
cuenta de que estaban muy solas en su contacto con la policía
y que necesitaban el apoyo de la gente. Entonces convocaron
a muchas mujeres, entre ellas las violadas, a quienes les
pidieron que relataran su recuerdo de la apariencia física de
los violadores con el propósito de hacer fotos robots de los
violadores. Éstas fueron pegadas en supermercados y en
otros lugares públicos y llamaron a la gente a presenciar una
manifestación en las principales calles del centro del Estado.
La manifestación fue de noche, todas las mujeres iban
vestidas de blanco con una candela encendida y con un rótulo
que decía "queremos ser amigas de la noche", "que la noche
no nos dé miedo". El alcalde las llamó y empezaron a negociar
a través de esta forma de protestar.
Definición
¿Qué es estrategia? Es un conjunto de actividades dirigidas
todas hacia un fin. Ese fin debe tener una relación directa con
la propuesta, además, de ser una flecha para influir sobre el
blanco por vía directa o indirecta. Directa, cuando está
conducida hacia el blanco, sin un aliado o indeciso de por
medio. Indirecta, cuando la estrategia se hace por medio de
un aliado o de un indeciso.
La estrategia es una acción que inicia un círculo el cual se
cierra al momento de tener un producto concreto, no
abstracto. Por ejemplo, logramos que gracias a nuestra
estrategia María Pérez intervenga en el Congreso para que la
bancada de tal partido presente el proyecto como iniciativa de
ley: ése es nuestro producto. No solo hay que determinar
cómo se va a realizar una estrategia, sino hay que esperar un
producto concreto de ella.
Las estrategias pueden ser:
De comunicación. Si en un proceso de incidencia se
dejan de lado los medios de comunicación, se está
desaprovechando uno de los recursos fundamentales para
presionar, persuadir o influir sobre la decisión que debe tomar
el blanco. Éste es un recursos fundamental en el trabajo de
incidencia,
De organización. Los organizadores deben crear
grupos, comisiones, frentes, fortalecer la organización y la
institución del grupo que está trabajando.
De movilización. Son fundamentales, ya que ahí se
encuentran los métodos más tradicionales: las marchas, las
concentraciones, las ferias, los festivales, las reuniones e
incluso las exposiciones de arte.
De influencia. Entre ellas está el cabildeo, las
comunicaciones, las cartas los telegramas, la presión
internacional y todas aquellas actividades cuyo propósito es
llegar al corazón del blanco lo más personalizadamente
posible.
El cabildeo
Muchas veces utilizamos la palabra cabildeo como sinónimo de
incidencia, sin embargo, no es lo mismo. El cabildeo es una
estrategia de un plan de incidencia. Es una técnica muy
compleja con su propia metodología y su propósito es generar
comunicación directa y personalizada con el fin de persuadir,
presionar, influir y/o neutralizar a los actores que toman las
decisiones. Esto significa que al realizar un trabajo de cabildeo
hay que estudiar documentos, realizar reuniones, visitas,
tener conversaciones con un actor definido a quien hay que
presionar, neutralizar o influir. Para ello, hay que tener una
propuesta directa que presentar, donde sepamos para qué
vamos a persuadir, a quién vamos a presionar.
El cabildeo es diferente al diálogo. El diálogo se puede dar
para obtener información, abrir espacios, etc., en cambio el
cabildeo requiere un plan, donde se sepa específicamente qué
se quiere lograr.
Se debe tener cuidado de no convertir el cabildeo en un fin en
sí mismo. El cabildeo forma parte de una serie de estrategias
que deben ser contempladas en un proceso de incidencia.
Las estrategias son varias; un plan de incidencia nunca tiene
solo una estrategia, pero tampoco debe de tener cien, esto
debe definirse adecuadamente.
Las estrategias tienen que salir de nuestro análisis de poder.
Deben responder a preguntas como: ¿cuál es el espacio de
discusión?, ¿cuál es la correlación de fuerzas?, ¿quiénes
somos nosotros?, ¿cuál es nuestro propio autoanálisis que nos
ayudará en la campaña?
No se realizan en sucesión lineal, una después de la otra. Los
organizadores, al convertirse en estrategas, deben saber
manejar la dirección de éstas, de modo que se puedan
realizar simultáneamente. Por supuesto que unas pueden
aparecer antes, otras después, pero para cumplir el objetivo
deseado tendrán, muchas veces, que realizarse
simultáneamente. Además, las estrategias cambian durante la
campaña, porque se van adecuando a los movimientos de los
actores y a la coyuntura política. En función de ellas hay que
modificarlas y darles la orientación adecuada.
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