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La Biblia herramienta divina

Apóstol German Ponce

La Biblia yo la veo como una herramienta divina, habrá muchas cosas, después de hacer esto
yo hubiera querido seguir y hacer más y talvez desarrollar una semana solo de lo que
realmente es la Biblia. Entonces del lado que ustedes ven allí, usted se da cuenta que están
los libros ordenaditos, de la parte de enfrente usted se va a dar cuenta cómo están allí dichos
los libros, la Torá o el Pentateuco que son los primeros cinco libros de la Biblia y viendo
esta descripción que hicimos me di cuenta que en el Antiguo Testamento se agrupan con el
número cinco y con el número dos; usted sabe que cinco es número de gracia y dos es un
número de gobierno.

Cuando se dice la Torá, cuando se dice el pentateuco son los primeros cinco libros de la
Biblia que usted los ve allí, luego los libros históricos están todo con azulito y son doce
libros históricos, usted mira que con verdecito están los libros poéticos, luego empezamos
con los profetas, son cinco profetas que les llaman mayores, no porque sean más o menos,
sino son libros más grandes, así se les llama y luego hay doce profetas menores. Entonces
se da cuenta, cinco del pentateuco, doce históricos, cinco poéticos, cinco de profetas
mayores y doce de profetas menores.

Del otro lado están los evangelios, usted los puede ver allí después de los evangelios de
Cristo Jesús aparece el libro de Los Hechos, después las catorce epístolas de Pablo, luego
aparecen las otras epístolas que están destinadas a algunas personas allí y por último el
Apocalipsis.

Entonces yo no quiero hacerle de esto una clase aburrida, porque yo lo que quiero y le pedí
al Señor desde anoche es, estuve estudiando y ahorita en la mañana también, porque lo que
yo quiero es que usted se enamore del libro, eso es lo que yo quiero, que se le olvide lo
que sea, pero no ese libro porque usted va a ver todo lo que hay en este libro, entonces
haber si no hecho a perder la clase, pero lo que yo quiero es trasladarle vida, no trasladarle
letra muerta.

Entonces me di a la tarea de buscar en cada libro la figura de Cristo Jesús, quiere decir que
la Biblia es como una llanta de bicicleta, todos los rayos van al centro y el centro es Cristo,
la Biblia no se debe de ver de otra manera, es un libro que trae la revelación del Hijo, de
Cristo Jesús. Entonces esto tampoco se lo puedo predicar así, esto primero Dios usted lo
guarde en su Biblia y esto le va a servir a usted de guía, pero por ejemplo en el libro de
Génesis, usted sabe que iba Abraham a subirse, iba a entregar a su propio hijo y de
pronto el lugar de su hijo lo quería sustituir por un cordero y él dice: ¿Dónde está el
cordero? Y le dieron un carnero, pero que sustituyó, entonces Cristo es ese cordero que
sustituyó.
Entonces yo quiero que se dé cuenta que pasó en el libro de Éxodo, hay un cordero pascual,
que se ofrece para que el pueblo que estuvo cautivo en Egipto durante 430 años pueda salir
libre, comieron el cordero, que se llama cordero de la pascua, porque pasaron por alto el
juicio y se fueron, entonces Cristo es el cordero, Levíticos nos habla de sacerdotes, Cristo
es el sacerdote, no sé si me doy a entender.

Entonces lo primero que quiero decirle es que es un libro escrito por diferentes personas,
en diferentes lugares, por gente que talvez tenía conocimiento y por gente que talvez no lo
tenía, pero lo que todos tenían es un llamado de Dios para recibir el mensaje divino. La
Biblia es como un libro que usted va a verlo perfectamente, un libro que esta hilvanado
todo.

Yo tengo una frase que la acuño desde hace mucho tiempo y le digo a las personas que la
Biblia es un libro que el Antiguo Testamento, aunque estamos en el nuevo, pero el Antiguo
se hace patente en el Nuevo y el Nuevo no contradice, se hace latente en el Antiguo, es
como agarrar un hilito y usted lo puede traer por toda la Escritura, entonces es un libro en
diferentes épocas, dado a diferentes personas, gente que eran pastores, había uno que se
llama Amós que era un hombre que era pastor de bueyes, no de ovejas, sino que de bueyes
y entonces toda la Biblia nunca la va a ver usted que se contradice, hay aparentes
contradicciones de la Escritura, pero es un libro que no fue hilvanado de una manera
terrestre, sino de una manera celeste para que todo ese libro pueda ser un libro para mí un
libro que yo le puse divino, es la herramienta divina.

Y se han dado a la tarea por mucho tiempo, no nos tocó a nosotros vivir esos años de
oscurantismo, pero el que quería, por ejemplo, buscar del libro tenía que hacerse fraile y
si se hacía fraile lo llevaban a un lugar donde la Biblia estaba encadenada y solo una persona
la podía leer y explicarla.

Seguramente alguna iglesia usted visitó en algún tiempo donde a nadie le decían que llevara
Biblia, se miraba ridículo si uno llevaba Biblia, solo el que estaba allí al frente era el que
decía algo, a veces nos aburría, ya tenían hecho todo y a veces nos íbamos. El peor enemigo
de la realidad en Dios, escúcheme con oídos circuncidados, es la religión, entrar a una
religiosidad vacía que no lleva frutos, ni cambio en la gente.

Entonces yo lo que quería primero era entregarle esto, para que usted lo valore, lo cuide,
aquí hay horas y horas de estudio, sobre todo en el lado azul y lo que yo quiero es provocarle
hambre por la palabra de Dios.

Yo lo pensé, venir a explicarle esto no es la tarea, ni tampoco hablarle de las 66 apariciones


de Cristo, cómo estaba Cristo en cada libro, seguramente que me llevaría unas cinco horas
para explicarle uno por uno. Esto de dónde está Cristo en los 66 libros y lo enseñé en la
televisión, se llama Emanuel y fueron veinte programas de media hora, o sea que fueron
diez horas sin interrupción y sin preguntas que di esto hace muchos años.
Entonces le regalo esto, porque a mí me hubiera gustado que al nomás empezar que me lo
hubieran dado y ustedes que son nuevecitos yo lo que quiero es que entren a saber que la
Biblia es una herramienta divina, la Biblia tiene respuesta para todo, es más dice hasta cómo
debe de sonarse uno la nariz, si te suenes duro, te sacas sangre dice, ¿qué le parece? O sea
que la Biblia esta para familia, para lo secular, para lo empresarial, para la vida espiritual,
para la vida misma de todos los días.

Insisto, lo que yo le pedí al Señor es que más que enseñarle, que yo lo deje, decía en mi ex
tierra, que yo lo deje picado, que yo lo deje con esa hambre de desear ir a buscar la
Escritura, me hubiera gustado regalarle un poquito de sal a usted, darle sal durante todo el
culto para que se le de sed de la palabra, para provocarle una sed.

Hebreos 10:7 ENTONCES DIJE: "HE AQUI, YO HE VENIDO (EN EL ROLLO DEL
LIBRO ESTA ESCRITO DE MI) PARA HACER, OH DIOS, TU VOLUNTAD." (LBLA)

Hay un diálogo divino, este diálogo no es en la tierra, este diálogo es en el cielo y entonces
habla El Padre con El Hijo y El Hijo que es el Verbo, fíjese que cosas, no están en la tierra,
están en el cielo hablando entonces fíjese que Cristo no había venido a la tierra, no se había
encarnado para que le pusiéramos de nombre Jesús, era el Verbo allá arriba, le dice: Padre
he venido en el rollo del libro está escrito de mí.

Y lo que me llamó la atención y claro que es un diálogo del cielo, es que de pronto veo yo,
primero un punto muy importante, primero es que en el cielo antes de que la tierra fuera
creada ya hay libros, para que usted se dé cuenta la importancia que tiene la palabra escrita,
le dice: “Padre ya leí el rollo de lo que habla de mí, ha llegado el tiempo, sacrificio,
holocausto no quisiste, prepárame un cuerpo, yo voy a bajar a la tierra”. Eso se llama el
misterio de la piedad, El Verbo, Dios, se despoja de sus atributos divinos y viene a la tierra,
pero el punto es que lo hizo, porque ya estaba escrito, dice el rollo, el libro.

La palabra libro en griego es Biblion, es Biblia, de allí nace el nombre Biblia, de un libro,
entonces a mí me llamó la atención un diálogo divino y desde antes que la tierra fuera creada
ya estaba escrito toda la comisión que iba a tener El Señor, entonces note la importancia de
una palabra escrita que hasta en el cielo lo tienen allí.

Cuando Cristo Jesús empieza a realizar su ministerio usted sabe que Satanás lo ataca, le
dice: “si tienes hambre haz que esta piedra se convierta en pan” y usted sabe. Entonces El
Señor no mandó a traer ángeles para que destruyeran al Diablo, si no que él les contestó en
el mundo espiritual, mire lo que vale la palabra, le dice: Sabes qué Satanás, escrito está.
Entonces la defensa de un cristiano se va a basar en lo que tiene la palabra escrita.

Yo soy muy delicado para eso, no quiero ofender a nadie, pero hay cosas que no se pueden
suavizar, pero no crea que usted va a estar protegido por un hilito de color rojo para que
no le hagan mal de ojo a su hijito, no crea que para ir a jugar futbol, para que les vaya bien
muchachos tienen que entrar con una pata de conejo pegada en la calzoneta, esto no lo va
a defender ningún santo, ninguna virgen, no, el único que lo va a defender aquí es El Señor,
pero Él va a utilizar su palabra, Él dijo: Escrito está.

Y fíjese que hace muchos años, yo creo que ya vamos a cumplir años aquí, entre nueve y
diez años, cuando compramos este terreno donde usted está ahora aquí sentado, teníamos
que poner la primera piedra y cuando yo iba a poner la primera piedra El Señor me habló
y me dijo: “la primera piedra representa toda la edificación, ¿cómo vas a edificar mi casa?
Señor con tu palabra”, entonces en lugar de una piedra pon mi palabra, agarré la primera
Biblia que yo tuve, allí la tenía guardada, entonces como un acto profético que Dios me
habló en lugar de poner una piedra, allí metí mi Biblia y entonces dije: Señor éste es un
acto profético para que sepan que todo lo que vayamos hacer aquí tiene que estar basado
en tu palabra.

Nosotros somos prosperados por la palabra, ésa es nuestra visión, entonces no va a servir
mucho que seamos prosperados por la palabra si usted no se dedica a leer la palabra, no
importa que sean muchachos, Jesús desde los doce años llegó y empezó a preguntar. Mire
le voy a decir algo, aprenda usted y cómo se aprende, preguntando. No hay preguntas
tontas, al revés, hay tontos que no preguntan. Si usted se da cuenta en la Biblia solo Judas
no preguntaba, así decía mi pastor, nos enseñaba mi pastor a los líderes, decía: ¿alguna
pregunta? Y todos callados, porque les quiero contar que solo Judas no preguntaba y todos
ya levantábamos la mano para no ser como Judas. Recuérdese, no hay preguntas tontas,
solo tontos que no preguntan.

Entonces yo no voy a pensar que usted lo va a entender todo, pero lo que le quiero dejar
es que vea la tarea, que vea la importancia de la Biblia que usted compró o que no ha
comprado o que está utilizando una que otro hermano tiene dos, usted tiene que tener su
herramienta divina.

DESARROLLO

1. La Biblia trae salvación

Hechos 8:30 Cuando Felipe se acercó corriendo, le oyó leer al profeta Isaías, y le dijo:
¿Entiendes lo que lees? Verso 31: Y él respondió: ¿Cómo podré, a menos que alguien me
guíe? E invitó a Felipe a que subiera y se sentara con él. (LBLA)

Varias cosas importantes, aquí había un hombre que venía desde África, de continente a
continente, él iba a Israel, porque él dijo: El Dios de Israel es el Dios verdadero y dice que
él era el encargado de los tesoros allá de Etiopía, África, de los reyes que estaban allá en
África, pero él era el encargado de los tesoros, era un hombre que tenía dinero y recuérdese
que en esos días no había una Biblia como hoy, la Biblia la usaban los sacerdotes, tenían sus
rollos allá en Israel, pero éste lo que logró es comprarse un rollo de Isaías, quiere decir que
hasta aprendió a leer hebreo este etíope eunuco.

Y entonces él va en un carruaje y él va leyendo y Dios por su espíritu mira a un evangelista,


mire el trabajo de un evangelista, un evangelista no es el que va a gritar y decirles a todos
en el parque que se van a ir al infierno, un evangelista es alguien que anuncia buenas nuevas.

Entonces va caminando Felipe y El Espíritu le habla y le dice: -ves a ese que viene en ese
carro, - Si, -Pídele jalón, porque él te va a dar jalón, aquí lo estoy parafraseando. Y cuando
se ven le pide jalón y le dice: “mira, vienes leyendo”. Ahora como que están mal las
costumbres, ahora andan, pero texteando verdad, pero aquella venia leyendo y le dice: -
¿Qué vienes leyendo?, -Vengo leyendo el libro de Isaías, - ¿y entiendes lo que lees?, -no,
como voy a entender, si alguien me lo explica con gusto lo voy a entender, por qué no te
subes, tú si sabes, -sí.

Se subió al carro con él, cuánto tiempo habrá pasado, no sé, pero mire la tare de un
evangelista, aunque el punto es la Escritura, el evangelista se sube y le empieza a explicar:
¿dónde vas? –En Isaías y dice que le explicó todo; mire qué cosa, le explicó de tal manera
el libro que cuando él se dio cuenta: - ¿entonces ésta es la realidad del Evangelio?, -sí. -
entonces me quiero bautizar ya, le dijo. ¿Y qué se requiere?, -primero que estés
arrepentido, -si estoy arrepentido de mis pecados, -y segundo que haya agua, porque el
bautismo es ser sumergido totalmente y entonces pararon el carro, se bajan los dos, lo
bautiza, entonces dice que desde allí ese hombre se fue ya gozoso, porque obtuvo la
salvación.

Entonces este libro lo que te trae es la Salvación, no hay otra manera, ahí está escrito toda
la obra de Cristo Jesús y el único camino para salvarse se llama Cristo Jesús y cuando a
usted le pregunten: “y los de otras religiones que no conocen”. Entonces usted les tiene que
decir: “mire, no dice que Jesús es una de las puertas, Él es la única puerta, dice Jesús es el
camino, no uno de los caminos, Él es la verdad, no una de las verdades, Él es la vida, la
única manera de salvarse a través de Cristo Jesús y qué hizo Cristo Jesús, usted lo tiene ahí
en la Biblia, por eso viene mucha gente por tiempo muy condenada a la iglesia y gente que
ya tiene tiempo, porque se dejan condenar.

Cuando uno lee el libro, cuando uno empieza a leer la Biblia, empieza a leer y dice:

Romanos 8:1 Por consiguiente, no hay ahora condenación para los que están en Cristo
Jesús, los que no andan conforme a la carne sino conforme al Espíritu. (LBLA)

Si de pronto el Diablo le dice: si, pero y los pecadotes que hiciste antes, allí los tiene Dios.
Entonces usted busca en el libro, busca en la Biblia y entonces allí dice que El Señor agarra
nuestros pecados, los tira al fondo de la mar y nunca más se vuelve acordar de ellos.
Leyendo este libro usted va entendiendo mejor el Evangelio.
Entonces el punto número uno para mi es que este libro le trajo a este etíope, a este eunuco,
iba leyendo su copia del libro y lo que le trajo fue Salvación. Este libro le va a traer
Salvación, no solo dice el infierno, lo va a salvar de muchas cosas, lo va a salvar de muchos
errores, lo va a salvar de seguir en la miseria y en la pobreza, los jovencitos o los solteros,
los va a salvar de casarse mal, este libro tiene todo, aquí esta nuestra salvación.

Entonces yo le ruego que ustedes sean una promoción tan especial que no estén
dependiendo de mí, no dependan de mí, no dependan del hombre, si la Iglesia leyera la
Biblia como debe de leerla ni consejeros tendríamos, este libro le trae a uno Salvación, por
eso a veces me dicen: pastor ore por mí, - ¿Y qué quiere?, -yo lo que quiero es entender
toda la escritura- entonces le digo: Señor. ponle hambre y sed por tu palabra. La Biblia dice
que cuando uno está en este libro uno obtiene Salvación.

2. La Biblia reforma nuestra vida

2 Crónicas 34:14 Y mientras ellos sacaban el dinero que habían traído a la casa del
SEÑOR, el sacerdote Hilcías encontró el libro de la ley del SEÑOR dado por Moisés.
(LBLA)

Aquí están en los días del Rey Josías y entonces el pueblo de Dios se había olvidado del
Señor, sabe, como no consultaron el libro se cometen muchos errores y de pronto como
ya no predicaban, ya no enseñaban, dijeron: “qué bonito, aquí podemos poner un ídolo de
esto, aquí podemos poner un ídolo de otro y cuando sintieron Dios se apartó”. Si algo Dios
no soporta es la idolatría. Cuando usted lee la Escritura en todo el Antiguo Testamento va
a ver que cuando Dios da la espalda, cuando Dios manda juicios, cuando Dios manda
pobreza, es cuando hay idolatría. Entonces este rey Josías empezó a traer una reforma y
empezó a quitar todos los ídolos.

Hace como 15 años me invitaron a la casa de un hermano y cuando iba entrando yo hermano
había una fuente con una señora cargando un niño, de entradita y cuando yo vi le dije: -
Hermana, pero usted es cristiana, -Si, –y mire tiene una virgencita allí, tiene a Santo Tomás
allá adentro, - es que eso me lo regaló mi abuelita, me dijo. Y fíjese que eso viene por
tradiciones.

Ahora, cuando Jesús vino dice la Biblia, porque aquí no venga a ver lo que el hermano
German dice, aquí venga a ver lo que dice la Biblia y dice la Biblia que cuando El Señor
entró y vio que había situaciones en el Templo que no eran claras, Él ponía orden y entonces
cuando yo vi esto de la idolatría el necesitaba reformar, pero uno se pone a pensar cómo
Dios entra y cómo el pueblo de Dios se echó para atrás, se olvidan de la palabra escrita.

Usted ve cuanto problema hay, por ejemplo: Pastor fíjese que me gusta un muchacho y yo
le digo: Hijita, está muy guapo, mira como hace de ejercicios, que brazotes tiene, pero no
me preguntas a mí, porque hasta me traen la foto, mire pastor, y yo que le puedo decir,
pero como yo tengo que contestar con la Biblia le digo: la Biblia dice:

2 Corintios 6:14 No estéis unidos en yugo desigual con los incrédulos, pues ¿qué
asociación tienen la justicia y la iniquidad? ¿O qué comunión la luz con las tinieblas? (LBLA)

Pero él es bonito, si bonito por fuera, pero va a ser feo por dentro, porque él no está
convertido y hay cosas que colisionan, pero este hombre empezó a reformar, este Josías
empezó a reformar y lo primero que hizo, usted lo va a leer en su casa, fue que quitó todos
los ídolos y de pronto fíjese que estaban buscando, dice que estaban en un lugar donde
estaba el dinero de las ofrendas, los diezmos y lo que fuera y entonces en medio de los
tesoros, eso me llamó la atención, de pronto uno que estaba allí encontró el libro, encontró
la Biblia y entonces uno de los pensamientos que quiero trasladarle es; son dos cosas en este
pasaje, primero, que para poder reformarse solo lo va hacer con la Biblia, no hay otra
manera, la Biblia sabe hasta qué le dice a uno, dice después de que quita el yugo desigual
dice: las malas compañías corrompen las buenas costumbres.

Y usted tiene un su amigo o una su amiga con la que creció, que hizo y deshizo y entonces
usted va y viene, es la comadre, es el compadre, usted es el padrino, la madrina y tantas
cosas que hay, pero cuando uno ya empieza a notar lo que está en la Escritura, uno empieza
a tomar decisiones y yo no digo que usted el lunes no le hable a nadie en su trabajo, solo
que sepa que una cosa es conocido y otra cosa es una compañía con la que usted va a
convivir, porque mi abuelita decía y eso si no es Biblia, pero mi abuelita decía: el que anda
con la miel algo se le pega.

Hermano German vamos hablar del libro, sabe qué dice el libro: anduvo con los leones y
se hizo león, están hablando que por quien estuvo reunido uno tiene esas cosas, por eso no
va haber reforma en nuestra vida, sépalo de una vez, usted quiere reformarse y para eso
necesita el libro y el libro estaba entre los tesoros.

Entonces mi pregunta sería, realmente, como usted está nuevecito, pero si yo estuviera
predicando para toda la gente que ya tiene tiempo, yo le diría: ¿Realmente es un tesoro
para ti la Biblia? Porque un tesoro se cuida, imagínese que a usted le pagaron hoy y en su
billetera trae todo el sueldo, no me va a decir que la va a dejar aquí, va ir al baño y va a
dejar aquí la billetera y se va; usted la cuida, usted dice: Pastor, pero estamos en el templo,
pero a veces hay Judas también en los templos, entonces usted lo cuida porque es un tesoro,
no me diga que si usted se compra un carrito y lo está pagando, no me diga que va a comer
y pone los platos encima, lo raya con el tenedor, no, usted lo cuida, es un tesoro.

Entonces cuando yo vi la Escritura aquí me di cuenta que si de verdad nos queremos


reformar necesitamos el tesoro de la palabra de Dios. Fíjese que ellos estaban en una crisis
espantosa, el pueblo estaba lleno de pobreza, de miseria y atacado por los enemigos y
cuando ellos vieron el libro, agarraron el libro y llamaron a una profetisa que se llamaba
Hulda y Hulda dice que era la encargada de la casa de la doctrina dice una versión en 2 de
Crónicas.

Entonces Hulda agarra el libro y les empieza a decir todo y sabe qué, empezó a decirles el
pecado que tenían y entonces este libro provocó arrepentimiento, es que esto es lo lindo
de este libro y en el verso 27 dice:

2 Crónicas 34:27 porque se enterneció tu corazón y te humillaste delante de Dios cuando


oíste sus palabras contra este lugar y contra sus habitantes, y te humillaste delante de mí, y
rasgaste tus vestidos y lloraste delante de mí, ciertamente te he oído--declara el SEÑOR.
(LBLA)

Entonces oiga hermano, una buena actitud frente a la palabra de Dios puede cambiar las
cosas, puede cambiar la vida, por eso yo veo que algunos, aquí no hay ninguno. Yo digo:
cierro mi Biblia y voy hacer el llamado para que Dios ministre y algunos se van, no tienen
el respeto por la palabra de Dios, me parece que no es su tesoro, me parece que todavía
creen que la Biblia es un libro que bueno es religioso, hay que llevarlo y ni modo para
graduarme, tengo que pasar. Yo no quiero eso, yo no quiero que usted sea una promoción
que tenga el libro como: Hay que llevar la Biblia, no, que nunca le falte la Biblia, nunca le
falte.

Recién había venido yo hace como 21 años aquí a San Pedro, yo trabaja allá, creo que era
por el barrio Guamilito, allí estaba la oficina de una compañía que yo representaba o que
me habían contratado y entonces me metí en contravía, yo estaba aprendiendo las vías y
entonces de malas allí estaba un policía y sonó el jolgorito y me dijo: ¿Qué está haciendo?
Todavía tenía placas guatemaltecas el carro. -Bueno, me dijo. -así que le voy a tener que
quitar esa licencia, -mire es de mi país allá, pero yo no conozco, Bueno ya me había hecho
la esquela y de pronto me dice: - ¿Qué lleva allí? - Ah es mi Biblia, le dije yo, -ah su Biblia,
me dijo, -si - ¿y usted es cristiano? - sí, le dije, -ah bueno. me dijo, sabe qué, no lo vuelva
hacer otra vez, - ¡Gloria a Dios!, dije yo. Lo que me salvó fue la Biblia, ni la iba leyendo, la
llevaba en el carro, pero entonces realmente lo que le quiero trasladar es que andar sin
Biblia no, porque este libro es un libro que es una herramienta divina, ese pueblo se pudo
reformar, ese pueblo volvió a la prosperidad porque encontraron el libro.

Me recuerdo que en la casa de mi abuela estaba la Biblia puesta en la sala, pero era como
un adorno. Usted ha visto algunas personas que en la sala tienen un atril, como un púlpito
y tienen la Biblia abierta, pero la usan como quien dice aquí viene el Diablo, pero aquí hay
una Biblia, ellos creen que agarran la Biblia y le dicen: atrás Satanás. Si Satanás se sabe la
Biblia también, que El Señor lo reprenda. Cuando estuvo tentando a Jesús le dijo: sáltate
de este pináculo porque escrito esta que a sus ángeles mandará. Él sabe la Biblia también,
por eso usted tiene que manejarla, que vergüenza que el Diablo la sepa y nosotros no.
Cuando hay un pueblo que conoce la Biblia la vida le va cambiar, va poder uno desarrollar
la comisión que uno tiene en Dios y uno va a poder tener reformas, si usted acaba de venir
al Evangelio hay una reforma espiritual, hay una reforma de su alma, no se va a lograr sin
libro, tiene que tener el libro.

3. La Biblia enseña escatología

Daniel 9:2 en el año primero de su reinado, yo, Daniel, pude entender en los libros el
número de los años en que, por palabra del SEÑOR que fue revelada al profeta Jeremías,
debían cumplirse las desolaciones de Jerusalén: setenta años. (LBLA)

Si usted ya está viniendo aquí con nosotros usted sabe que a mí me apasiona la escatología,
conocer un poquitito de lo que viene para la tierra, eso se llama en Teología, Escatología,
eventos del porvenir, los últimos eventos, el domingo que acabamos de pasar estuvimos
hablando cabalmente de toda la convergencia que hay. ¿Cómo saber el futuro? ¿Cómo saber
de escatología? A través del libro.

La verdad yo no sé cómo era usted antes, espero que antes, pero me imagina que ya no
agarra usted el periódico para buscar horóscopos, porque a quién no le gusta saber su
futuro. Yo quiero saber el futuro, yo no sé si a usted le gusta conocer el futuro, pero si
vamos a conocer el futuro aquí está el libro.

Entonces me di cuenta que el pueblo estaba cautivo en Babilonia, uno solo predica rápido,
pero uno no puede entender, sabe cómo es para que lo entienda, es que vienen por
ejemplo, que viniera el ejército mexicano a San Pedro Sula y nos llevara a todos y nos llevan
a todos y San Pedro Sula que era nuestra ciudad se queda sin una sola persona, por setenta
años olvidada y a todos los llevan, hay que leer la Biblia cómo los llevaron, dice que no
respetaron ni ancianos, ni niños y que la gran mayoría iban desnudos, en fila todos, que
tren ni que nada, a pie se los llevaron y los fueron a guardar allá y estuvieron setenta años,
creo que ni la edad sumada de usted con el que está a la par.

Entonces yo quiero que usted se dé cuenta que ellos estaban cautivos, todo el pueblo de
San Pedro Sula fue llevado cautivo, años de años, entonces viene Daniel y agarra el libro,
la Biblia y empieza a leer a Jeremías, empezó a hacer cálculos, entonces cada ciclo que pasa
hay un descanso, sumó y Dios le reveló por la palabra, a eso le llamo yo precisión profética,
dijo: quiero ver cuántos años llevamos y dijo: este año cumplimos los setenta años de
castigo, quiere decir que pronto volvemos a nuestro hogar.

¿Cómo sabe uno los eventos que pueden venir? No lo que diga la NASA a través de la luna
y el sol, no lo que digan los horóscopos, Dios reprenda al Diablo, note el valor del libro,
yo quiero que usted se enamore del libro, ese libro te dice todo, cómo va ser el futuro, qué
es lo que viene, todas las cualidades.
Hablaba yo con un pastor y me dijo: German te das cuenta que precisión profética y yo le
dije: si, pero cómo lo logramos:

Daniel 9:3 volví mi rostro a Dios, El Señor para buscarle en oración, súplicas, en ayuno,
cilio y ceniza. (LBLA)

Entonces también esto me habla de vida devocional, el libro me dice: ¿Quieres conocer el
futuro? Entonces métete en oración, métete en súplica, agarra la palabra y hasta el ayuno,
uno va entendiendo cuáles son las herramientas de esta vida espiritual.

Le voy a decir algo muy importante, a Daniel lo visitaban seres extraterrestres, porque ser
extraterrestre es todo aquel ser con inteligencia que no es de la tierra, extra: fuera,
terrestre: obviamente la tierra, venían ángeles, no crea que son seres con alitas que vienen,
no, son seres inteligentes de otras dimensiones, ángel es un enviado de Dios y le hablaba
Miguel, le hablaba Gabriel, él tenía contacto con seres que venían a visitarlo de parte de
Dios, él los escuchaba, les preguntaba, pero sin embargo no dejaba de leer la Escritura.

Lo que quiero es que valore la escritura, él podía preguntarle a ángeles, pero para eso
también como son corderitos tengo que decirle algo, porque a mí me cuesta un poquitito
atacar, porque a mí, mi pastor me decía: sembrando la verdad se marchita el error, pero
como usted es corderito tampoco quiero que lo engañen, porque alguien le puede decir:
así como visitaron a Daniel ángeles, también hubo algunos cientos de años un hombre que
se llamaba Joseph Smith y lo visitó un ángel que se llamaba Moroni y hoy en día ese es el
libro del Mormón y dicen que lo que ellos tienen es la revelación de un ángel.

Entonces talvez usted me podrá preguntar: bueno y no Daniel tenía revelaciones de ángeles,
entonces como toda la Biblia hay que leerla, dice:

Gálatas 1:8 Mas si nosotros, o un ángel del cielo os anunciare otro evangelio del que os
hemos anunciado, sea maldito. (RV1865)

Entonces cuando yo empiezo a ver estas cosas del libro, yo digo Dios mío, me faltaba, yo
seguía escribiendo y seguía poniendo muchas cosas, porque aquí yo veo que primero nos
salva, después nos reforma y para tener conocimiento de las cosas que vienen, la diferencia
está en la palabra escrita. Yo quiero que usted sepa que para lograr cosas aquí en Dios solo
es a través de la palabra escrita. Este es el clásico, el más lindo de lo que he predicado yo
mucho:

4. La Biblia nos prospera en todo

Josué 1:7 Solamente esfuérzate y sé muy valiente, para cuidar de hacer conforme a toda
la ley que mi siervo Moisés te mandó; no te apartes de ella ni a diestra ni a siniestra, para
que seas prosperado en todas las cosas que emprendas. (RV1960)
A veces leemos muy rápido, le dice: la palabra, el libro, agárralo y que sea tu guía para que
seas prosperado en todo, no dice solo en algo. Entonces yo digo, necesitamos una
prosperidad integral, primero la prosperidad del espíritu, segundo la prosperidad del alma,
pero tercero también la prosperidad del cuerpo, yo creo que Dios lo que quiere es que
seamos prosperados, entonces le dice aquí: nunca se aparte de tu boca este libro.

¿Qué significará tener en la boca el libro? Significa que uno ha leído tanto que lo tiene en el
corazón y de la abundancia del corazón habla la boca. Hay un pasaje en Mateo que dice:
Donde esté tu tesoro allí estará tu corazón. Si la Biblia es un tesoro, si es tu tesoro estará
en tu corazón y lo que está en tu corazón es lo que habla la boca.

¿Ha estado usted con una persona que está enamorada? Por ejemplo, una muchacha que
está enamorada, solo de él va hablar, lo que le quiero decirle es, cómo conoce el corazón
uno de la gente, lo que habla, pero entonces recuérdese que el corazón tiene que tener la
palabra de Dios, porque aquí dice: Nunca se aparte de tu boca este libro, sino que de día y
de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que está escrito,
porque entonces harás prosperar tu camino y todo te saldrá bien.

¿Habrá alguien que no quiere ser próspero? ¿Cuántos queremos la prosperidad en Dios?
¿Quién no va a querer ser prosperado? Por eso, entonces uno dice: allí dice que voy a ser
prosperado, pero yo no lo veo, usted puede decirle al Señor: yo obedecí tu palabra, allí
dice que yo me esfuerce.

Iban a la conquista, iban a la pelea, yo durante años pensé que se esforzaban en tirar las
flechas, es ser físicos, en hacer pechadas, como que fueran militares, claro que tenían que
verlo, pero el secreto espiritual de la vida de conquista, el secreto espiritual de la
prosperidad del hombre está en la palabra.

Pruébelo usted, casi que le digo pruebe a Dios, pero pruébese usted, agarre la Biblia, pero
no solo el día de corderitos, no solo martes y viernes que viene al culto o los domingos,
todos los días, diga: “Señor yo voy agarrar Josué 1:7 y 1:8 todos los días” de día y de noche,
agarra un pasaje, lo medita, meditar es imaginárselo.

Meditar es hablar en voz baja y usted hablando eso, meditándolo aún en su mente y dice: Y
todo lo que hagas se va prosperar. Sabe qué dice: Nadie te podrá hacer frente todos los días
de tu vida.

Este libro trae que con poquito se hace mucho, como Dios dice: El sí está meditando en la
palabra, ése si se deleita en la palabra, no se vaya a ofender, pero yo no quiero que usted
vaya a ir todos los días: “como dice Josué 1:7 y el hermano German también está diciendo
voy a tener que ir a leer, ¡hay Dios!”.
Cuando yo veo la palabra de Dios yo veo comida, entonces si usted quiere prosperidad
dice: Deléitate en la palabra de Dios, medita de día y de noche, esto para mí es un punto
muy importante, es un punto muy medular, mire todo lo que hay y está en el libro, yo
quiero que ustedes sean una promoción de libro, quiero que vayan y lean y cuando no
entiendan obviamente pregunten, ya le dije no hay preguntas tontas, solo tontos que no
preguntan, claro también no solo va a leer, vaya a las rodillas, mire contexto, dime Espíritu
Santo .

Salmos 1:1 Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos, Ni estuvo en


camino de pecadores, Ni en silla de escarnecedores se ha sentado; Verso 2: Sino que en la
ley de Jehová está su delicia, Y en su ley medita de día y de noche. (RV1960)

No dice esta su deber, dice esta su delicia. Entonces la palabra de Dios que está allí tiene
que ser un deleite, no se ponga tiempo, léase un capítulo, lo vuelve a leer, lo subraya lo
que le llamó la atención, pero empiece a hacerse el hábito, si no lo tiene empiece usted a
hacerse el hábito, porque esto tiene que ser un deleite.

Como los recién casados, aquellos que están para casarse dentro de una semana, cuando ya
son las nueve de la noche y el papá de la chava empieza a toser, como quien dice ya ándate
a la casa, usted se despide y entonces ese beso que usted da, aunque usted no tenga ni para
el bus, es una gasolina, que usted se va hasta corriendo feliz en la calle, porque es un deleite.
Perdóneme que le ponga este ejemplo.

Cada promoción tiene algo diferente, usted hoy talvez no tiene Biblia, pero sabe qué no
vaya a Pollo Campero esta semana, no se coma unas sus tres baleadas y se compra una
Biblia, no importa que sea sencilla, pero empiece a decirle: Señor yo quiero tener deleite,
porque allí va estar todo y hermana usted también que está casada a usted le conviene mujer
que su esposo lea la Biblia.

Usted tiene que empezar a orar para decir: quiero deleitarme en esta palabra: Señor mi
esposo que también se deleite, que mis hijos se deleiten porque usted sabe los muchachos.
Es que este libro cambia familias, este hombre fue a la conquista, este hombre fue
prosperado, pudo hacer cosas, porque leía, meditaba, confesaba, ejecutaba y tenía éxito.

Cuando la Biblia dice que se esfuerce, que medite la palabra, es átate a la palabra, lígate a
ella, no pierdas la visión, apodera, arrebata, crece, dedícate, insiste, es agarrar la palabra,
cualquier cosa se le puede olvidar, pero no su palabra, tenga un tiempo para la palabra de
Dios, dígale: Señor yo no quiero esto por obligación.

Esto es como para estudiar, cuando uno va a dedicarse a algo ni se ponga tan incómodo para
leer, ni tan cómodo que se vaya a dormir, si no hay que estar sentado, si no la pone en su
cama, cierra la puerta y se arrodilla allí y empieza a leer, porque está leyendo la palabra de
Dios, Dios le va hablar, empiece a leer por deleite.
La gente me pregunta: ¿Qué empiezo a leer? Lea la vida de Cristo, Mateo, Marcos, Lucas,
Juan, los evangelios, empiece a leer cómo hacia Cristo y al final saque de conclusión algo,
que cuando vaya actuar pregúntese usted qué haría Cristo y cómo voy a saber qué hacía
Cristo aquí en la palabra escrita, en la Biblia, es que tenemos que ser gente de Biblia.

Cuando uno ya ha avanzado en la escritura y uno trae el hábito de que esto nos sirvió para
salvarnos, para reformarnos, para conocer el futuro, para ir a la conquista, para tener la
prosperidad.

5. La Biblia es un escudo

Hechos 17:10 Inmediatamente, los hermanos enviaron de noche a Pablo y a Silas hasta
Berea. Y ellos, habiendo llegado, entraron en la sinagoga de los judíos. Verso 11: Y éstos
eran más nobles que los que estaban en Tesalónica, pues recibieron la palabra con toda
solicitud, escudriñando cada día las Escrituras para ver si estas cosas eran así. (RV1960)

No llegó cualquiera a predicar, no llegó el hermano German allí, no, llegó el Apóstol Pablo
a predicar, él llevaba el evangelio, la revelación, pero los de Berea, ésos eran la promoción
de corderitos de Ebenezer y entonces se paró a enseñar y todos con sus rollos, con su Biblia
viendo, ellos no le decían amén a todo. Cuando yo invite a alguien a predicar y diga algo
que no está no le diga amén, si usted viene a los cultos usted se da cuenta que yo los entreno
un poquito, leo un pasaje y le pongo otra cosa, porque a veces la gente le dice amén a todo,
no le diga amén a todo, sea como un bereano.

Quiere decir que cuando alguien está predicando los bereanos: “¿dónde dice que esta eso?
ah sí, perfecto. Ah no, aquí no dice eso”. Entonces la palabra escrita era como un escudo
donde ellos comprobaban, ellos no le decían amén a todo, los bereanos utilizaban la palabra
para comprobar que lo que les predican sea cierto.

Cuando alguien le diga a usted, por ejemplo, Jesús no es Dios, usted no le puede decir
amén, vaya a buscar en la Escritura y allí va encontrar, vaya al evangelio de Juan: Y el Verbo
era Dios, capítulo uno, verso uno. En Tito dice: Y nuestro gran Dios Cristo Jesús.

Creo que jueves o viernes me llamaron al programa y me decían: fíjese pastor; él no se


atrevió a decir Testigos de Jehová, fíjese que vienen los Testigos de Jehová en mi casa y mi
esposa es tan amable que por educación y cultura los pasa y los oye porque ni modo pastor
¿usted qué opina? Entonces antes que mi educación y mi cultura está lo que dice el libro:

2 Juan 1:9 Cualquiera que se extravía, y no persevera en la doctrina de Cristo, no tiene a


Dios; el que persevera en la doctrina de Cristo, ése sí tiene al Padre y al Hijo. Verso 10: Si
alguno viene a vosotros, y no trae esta doctrina, no lo recibáis en casa, ni le digáis:
!!Bienvenido! (RV1960)
Una vez se me acercó un muchacho y me dijo: Pastor y usted cómo sabe la Biblia, hay hijito
le dije, llevo 37 años de estar leyendo este libro, imagínese que no se me quedaran las cosas
después de 37 años de estar leyendo el libro, ya sería pena eso verdad. Yo empecé a los 16
años el camino del Evangelio, llegando a 17, que Dios bendiga a ese hombre que me llevó
al evangelio, porque yo recibí a Cristo y al otro día tenía un Nuevo Testamento para leerlo
y él me preguntaba: ¿German qué leyó? La prensa le decía yo y para qué le traje el Nuevo
Testamento, para ir a la iglesia, no me dijo, para que lo lea.

Entonces él me llevaba a la iglesia, iba por mí a la iglesia y me soportó, estaban los juegos
de béisbol, la serie mundial, a mí siempre me ha gustado el deporte, y llegó, había que ir
al culto y le dije: -no le dije, hoy no voy al culto, - ¿Por qué?, -juegan los Yankees contra
los Dodgers, -Si, pero El Señor nos está esperando allá, -cultos van a ver, pero el juego de
hoy una vez. Entonces estábamos discutiendo, cuando un vaso de vidrio que estaba boca
abajo se levantó, Dios sabe que me va a juzgar por lo que le estoy contando, se levantó
como unos 20 centímetros y estalló el vaso. Cuando yo vi eso, dije: Apurémonos que se
nos hace tarde el culto. Y entonces le dije: ¿pero por qué pasó eso?, -no sé, me dijo, yo
nunca lo había visto. Es más, lo voy a desafiar, si El Señor no hace algo especial esta noche
con usted en el culto, no lo vuelvo a venir a traer, usted quédese viendo sus partidos, -está
bueno, dije, y me fui.

Hermano nunca se me olvida, tenía diez días de ser cristiano, diez de octubre, yo acepté el
primero de octubre, el diez llego y El Señor me bautiza en Espíritu Santo, ese día hablé en
lenguas y entonces ya sabía que si yo ponía mi prioridad en Dios siempre iba a encontrar
cosas hermosas en Él.

Usted tiene que venir con la actitud a cada culto de qué me va dar hoy, Señor hoy vengo
abierto a que me hables y seguro que lo va hacer, pero si venimos a ver dónde está el que
me debe, o a buscar chava, ni venga, o peor, a vender. Entonces yo quiero llevarlo a que
amemos lo que dice la escritura.

6. La Biblia restaura

Nehemías 8:5 Y abrió Esdras el libro a la vista de todo el pueblo, pues él estaba más alto
que todo el pueblo; y cuando lo abrió, todo el pueblo se puso en pie. Verso 6: Entonces
Esdras bendijo al SEÑOR, el gran Dios. Y todo el pueblo respondió: ¡Amén, Amén!,
mientras alzaban las manos; después se postraron y adoraron al SEÑOR rostro en tierra.
Verso 8: Y leyeron en el libro de la ley de Dios, traduciéndolo y dándole el sentido para
que entendieran la lectura. (LBLA)

Esta es la misma historia de Daniel, Daniel ya le dije que él supo por leer el libro que se
acababan los setenta años y que volvían, ese regreso de México a San Pedro Sula, de
Babilonia a Jerusalén, el que llegó fue Nehemías y cómo estará una ciudad después de
setenta años que no la habiten, aparte la habían quemado, estaba destruida y él dijo: la
situación es difícil, pero vamos a restaurarla y para restaurarla lo primero que hizo fue sacó
el libro.

Si usted vino golpeado de su matrimonio, golpeado de su adolescencia, siendo muy niños


los contaminaron y ya conoce lo que ni su papá cree que usted sabe, la única manera de ser
restaurados es con el libro, no hay otra manera. Entonces yo estoy terminando esta
oportunidad, porque yo lo que quería dejarle es saber cuánto me faltará, me faltarán un
montón de cosas.

En Lucas 4:16 dice que estaba Jesús, llegó al culto y dijo: préstenme un rollo y cuando
empezó a leer en Lucas 4:16 dice que leyó un pasaje de Isaías y decía: El Espíritu de Jehová,
Adonaí esta sobre Mí y me ha ungido para empezar a dar vista a los ciegos y restaurar y
todo lo que usted sabe y Jesús dijo: este libro de lo que está hablando es de mí. Es decir que
leyendo el libro uno conoce su comisión existencial, es decir que uno sabe para qué vino
uno a la tierra.

CONCLUSIÓN

La Biblia es un libro escrito por diferentes personas, en diferentes lugares, por gente que
talvez tenía conocimiento y por gente que talvez no lo tenía, pero lo que todos tenían es
un llamado de Dios para recibir el mensaje divino.

La Biblia es como un libro que esta hilvanado todo, es un libro que el Antiguo Testamento
se hace patente en el Nuevo Testamento y el Nuevo se hace latente en el Antiguo, es un
libro que no fue hilvanado de una manera terrestre, sino de una manera celeste para que
todo ese libro pueda ser un libro divino. Es la herramienta divina.

1. La Biblia trae Salvación: La Biblia muestra que el único camino para salvarse se llama
Cristo Jesús, primero de no ir al infierno y después de muchas situaciones que se
puedan dar en la vida.
2. La Biblia reforma nuestra vida: El tesoro de la palabra de Dios nos reforma la vida,
nos cambia la vida, nos hace modificar nuestras acciones para conducirnos a lo que
Dios requiere.
3. La Biblia enseña Escatología: Daniel conoció escatología de su nación al leer la
Biblia, a pesar de que ángeles le hablaban, él sabía de la importancia de ese tesoro
de la Biblia, para conocer escatología de la Iglesia y aún de nosotros mismos debemos
meternos en oración, súplica, palabra y ayuno.
4. La Biblia nos prospera en todo: El secreto espiritual de la prosperidad del hombre
está en la palabra, primero la prosperidad espiritual y del alma y por último la
prosperidad del cuerpo.
5. La Biblia es un escudo: La Biblia es un escudo contra la falsa doctrina, nosotros
debemos evaluar todo lo que nos dicen si está en la Palabra del Señor, tal como lo
hacían los de Berea.
6. La Biblia restaura: La única manera de ser restaurados es con la Biblia, no hay otra
manera. Además, leyendo la Biblia, uno conoce su comisión existencial, es decir
que uno sabe para qué vino uno a la tierra.

Amén y Amén

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