Semillero de Estudios Antropológico SEA, una experiencia investigativa con

alcance interinstitucional

La Institución Universitaria Tecnológico de Antioquia es reconocida por la gran

variedad de programas académicos que permiten a sus estudiantes ampliar sus
conocimientos y proyecciones como futuros profesionales. Uno de los campos que se
ha visto fortalecido en los últimos años, ha sido la investigación, desarrollada a través
de los diferentes semilleros. Uno de ellos es el Semillero de Estudios Antropológicos
SEA con una importante trayectoria en la Facultad de Derecho y Ciencias Forenses
del TdeA.
SEA inicia en el año 2013, con la profesora Natalia Restrepo Hernández, una
apasionada de su profesión, quien observó el interés en la investigación por parte de
sus alumnos y decide crear el semillero para sembrar en los estudiantes de
Investigación Judicial, Criminalística y Tanatopraxia el espíritu investigativo. El queda
adscrito al grupo de investigación de Ciencias Forenses y de la salud, coordinado por
Luz Miryam Gomez Piñeres. Es así como por esta motivación se da inicio a uno de
los semilleros más prometedores de la Facultad en mención, que recibió el nombre
de Semillero de Estudios Antropológicos SEA. Hasta el día de hoy ha venido
creciendo paso a paso y dejando una huella en la vida de sus miembros y la historia
de la Institución. Inicialmente seis estudiantes: Andrea Vera Jaramillo, Santiago
Vahos, Tatiana Vélez, Stiven Álvarez, Henry Medina y Brahian García; siendo los
primeros cuatro, pertenecientes al Programa Profesional en criminalística y el último
a Tanatopraxia.

Para el año 2015 otra persona, movido por este mismo sentimiento de pasión y amor
hacia los estudiantes y su profesión, se vincula en todo este proceso, es el profesor
Gabriel Molina Vides, actual Coordinador del Laboratorio de Criminalística y
Morfofisiología. Con esta nueva vinculación el semillero cuenta ya con dos grandes
maestros que constantemente hacen convocatoria para atraer más estudiantes
motivados e interesados por la investigación en Antropología Forense, Cultural y de
la Muerte. De esta forma el número de participantes aumenta a nueve estudiantes y
con el pasar de los años sigue creciendo. Debido al trabajo realizado por los docentes,
los aportes de los estudiantes no se hacen esperar, pues, el semillero no sólo
pretende formar de manera académica, sino también de manera personal, generando
el crecimiento íntegro en valores de cada individuo, al abordar el ser humano desde
un aspecto biológico, cultural y humanístico.

Para poder dimensionar al hombre y a la mujer como tal desde las perspectivas
anteriormente mencionadas, fue necesario crear líneas de investigación dentro del
semillero: una acerca de la Antropología Forense liderada por Natalia Andrea
Restrepo; Antropología Cultural y de la Muerte a cargo de Gabriel Molina Vides;
Bioarqueología con Katherine González y Antropología visual dirigida por Ruth
Adriana Higuita, se pretende a futuro crear la línea de Odontología Forense con el
docente: Juan Carlos Arango Restrepo.

De esta manera es cómo han funcionado 2 coordinadores, estudiantes de distintos

semestres y áreas, todos unidos en pro de un sinfín de sueños y expectativas que
poco a poco se fueron llevando a cabo, como la vinculación de más docentes, entre
ellos, Jairo Sandoval (Médico Patólogo), Ruth Adriana Higuita (docente del
Departamento de Educación y Cultura del TdeA en Fotografía y Pintura), Mónica
Marín (antropóloga), Pascasio Chamorro (profesor de artes), Juan Carlos Arango
(Odontólogo y docente de Anatomía), Mónica Mesa (Comunicadora Social –
Periodista del TdeA y Socióloga), Sayde Caro (Ingeniera Química y docente del TdeA)
y Cecilia Alvear (psicóloga, médica y docente del TdeA y la Universidad de Antioquia).

Producción científica y cultural

Dentro de los frutos y logros académicos que ha dado el semillero nos podemos
encontrar con 2 artículos: “Teoría biosocial: una perspectiva antropológica”, publicado
en la revista Facultad de Ciencias Forenses y de la Salud N°10 Enero-Diciembre 2014
del Tecnológico de Antioquia y “Las colecciones de referencia osteológica como una
herramienta forense e investigativa en Colombia” publicado en la Revista Cuadernos
de Medicina Forense: 2018 vol.24 no.1-2: 43-49 y también se realizó un seminario en
el año 2016 llamado “Investigación interdisciplinaria en tierras bajas y paisajes
inundables de América. Tafonomía, prospección geofísica y arqueología” en
acompañamiento de la universidad de Antioquia.

PRIMER FESTIVAL ANTROPOLÓGICO DE LA VIDA Y LA MUERTE

Otro de los frutos del semillero se dio sobre el año 2015.

Gracias a las ideas y el compromiso de las mentes soñadoras
de los estudiantes y los docentes, se empieza a fundar un
Festival que promovería múltiples temas sociales y
culturales, pero también científicos. A este festival se le dio el
nombre de “Festival Antropológico de la Vida y la Muerte”. Un
evento que inició, si bien con pocos recursos, pero con una
actitud arrolladora por parte de los integrantes del Semillero.
Esta propuesta surge como herramienta social para crear
conciencia sobre aspectos de la vida y de la muerte, El tema
central fue: “La vida, el primero de todos los derechos”. Es en
esta época que surge la línea de Antropología Cultural y de
la Muerte.

Durante el primer semestre del año 2015 se inicia la tarea de

planeación, y es entonces cuando surge el primer tema
cultural y el que posteriormente se mantendría como un simbolismo del semillero,
precisamente es un homenaje al poema La Gran Miseria Humana, creación del Poeta
del Cementerio: Gabriel Escorcia Gravini. Además de esto se enfatizó en un tema
ligado a la temática propuesta por el poeta: el tabú que se tenía respecto a la muerte.

El “Primer Festival de la Vida y la Muerte” superó las expectativas con un resultado

digno de ser recordado, sobre todo porque fue construido y desarrollado con todo el
esfuerzo de sus integrantes, es decir, las ponencias fueron realizadas por los mismos
docentes y estudiantes integrantes del Semillero de Estudios Antropológicos SEA, en
el que participó el docente Juan Carlos Arango y los estudiantes Katherine González
y Andrés Rojas, quienes presentaron ponencias con dominio del tema ante un
auditorio con más de 150 personas.

El Festival le apunta a la proyección social de nuestra Institución, y es así como las

nuevas generaciones de niños y adolescentes se convierten en beneficiarios de las
actividades propuestas cada año. La Universidad de Medellín se unió al Festival
desde su primera versión, aportando saberes y apoyando la labor social con la
creación del taller: “La Muerte, tan natural como la Vida”, orientada por Alejandra
Betancourt, funcionaria del Instituto Nacional de Medicina Legal y actualmente,
estudiante del décimo semestre de psicología en nuestra Institución.
El Festival Antropológico de la Vida y de la Muerte cuenta con una obra de creación
artística dirigida por el docente Pascasio Chamorro, quien lleva a danza y teatro
experimental la vida y obra del Poeta del Cementerio Gabriel Escorcia Gravini y su
obra cumbre: La Gran Miseria Humana.
Ya teniendo el resultado de este primer festival, los estudiantes y docentes se vieron
aún más impulsados a seguir con este gran proyecto y es justo en ese momento
Donde empieza el recorrido de grandes años para SEA.

SEGUNDO FESTIVAL ANTROPOLÓGICO

DE LA VIDA Y LA MUERTE

En el año 2016, para el segundo Festival

Antropológico se trabajó el tema: “el derecho
a la vida y el deber de vivir y morir
dignamente”, y por supuesto llevado de la
mano con el anteriormente mencionado
homenaje al Poeta del Cementerio (Gabriel
Escorcia Gravini). En este año se logra que el
Festival llegue a muchas más partes y que se
vuelva un evento interinstitucional, ya que se
vincularon más grupos de investigación,
como él (Hippocampus) de la Institución
Universitaria Politécnico Grancolombiano, la
Universidad de Medellín y la Universidad de
Antioquia; instituciones educativas como
Mariscal Robledo y Colegio Ferrini, así como
las instituciones gubernamentales (Instituto
Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses(INMLCF), la Subsecretaría de
Derechos Humanos, el Jardín Cementerio Universal, la Funeraria San Vicente y la
Casa de Justicia de Robledo, se integran al proyecto cultural de la Facultad de
Ciencias Forenses y Salud para ese entonces, hoy Facultad de Derecho y Ciencias
Forenses.

El Segundo Festival Antropológico de la Vida y de la Muerte se da a conocer dentro

del Tecnológico de Antioquia y fuera de este, la participación de dichas entidades y
personas. Entre ellas cabe mencionar al médico Jorge Arturo Pérez, el abogado
Edwin Santamaría, Deimon Vélez, edil de la Comuna Siete de Robledo y el Dr. Víctor
Ignacio Ortega de la Institución Universitaria Politécnico Grancolombiano,
trabajadores del Tecnológico de Antioquia y estudiantes de las universidades
mencionadas. También se unen a este hermoso proyecto entidades culturales como
el semillero de ballet experimental del Tecnológico de Antioquia, dirigido por Pascasio
Chamorro y la Fundación Universitaria Bellas Artes de Medellín.

En este año surgen maravillas artísticas y gastronómicas, como exposiciones

fotográficas y platos propios del festival introducidos por el profesor Juan Carlos
Arango, como el ceviche camarón fantasma, los venenos (bebidas tropicales), los
ahorcados y el perro muerto.
Culturalmente se hace un homenaje a un personaje propio de nuestra región
antioqueña como lo son los animeros, que aún existen en los municipios de Puerto
Triunfo, Copacabana, Puerto Berrio, Asunción, Becachí, Yolombó, entre otros.
La Red de Escuelas de Musica de Medellín, de la Comuna Siete de Robledo realiza
el primer concierto en el jardín Cementerio Universal.
TERCER FESTIVAL ANTROPOLÓGICO DE LA VIDA Y LA MUERTE

Ya para el año 2017 el Festival Antroplógico de la Vida y de la Muerte se había

convertido en uno de los eventos institucionales más significativos e importantes del
Tecnológico de Antioquia, con un constante
flujo de estudiantes que se vinculaban al
mismo y tenían la experiencia, de ser más que
parte de un grupo, ser parte de una familia, la
familia de ciencias forenses.

También son varios los docentes que

aportaron su grano de arena al semillero con
sus saberes como profesionales; incluso en
este año y gracias a Katherine González, una de sus integrantes, se le dio una imagen
al semillero por medio del logo que aún hoy sigue siendo el gran distintivo del grupo;
Dicho logo se compone de las letras SEA, siendo la “A” una composición de piezas
óseas.

En este año la temática que se llevó a

cabo para el festival fue la de prevención
del suicidio, en esta ocasión se contó con
el gran aporte de expertos en el tema,
quienes realizaron ponencias acerca de
cómo se puede tratar y prevenir un tema
tan delicado como lo es el suicidio. En
este participaron docentes integrantes del semillero como la Psicóloga clínica Cecilia
Alviar Ramirez.

Este sin duda es el tema que hasta el momento ha causado mayor impacto,
precisamente a causa de los grandes incrementos en las tasas de suicidio en
Colombia. Incluso en la Institución Universitaria se contó con muchos de los
testimonios de estudiantes que en algún momento de sus vidas pasaron o estaban
pasando por la situación de plantearse el querer quitarse la vida y el cómo este
Festival y sus charlas ayudaron a encontrar una vía alterna a la problemática. Se trató
temas como el riesgo de conducir en estado de embriaguéz, con la participación de
Liliana Valoyes Yurgaqui de la Universidad EAFIT y el departamento de egresados
del Tecnológico de Antioquia con Nestor Pulgarín.
CUARTO FESTIVAL ANTROPOLÓGICO DE LA VIDA Y LA MUERTE

En el 2018 se realizó el IV Festival Antropológico de la Vida y la Muerte con el objeto

de tratar el tema con respecto a la manera de vivir el duelo, sin duda un tema de gran
sensibilidad y que era necesario manejar con gran tacto. Para este año el Semillero
creó un vínculo de saberes, experiencias y trabajo con el Jardín Cementerio Universal
y la Subsecretaría de derechos Humanos, donde se desarrollaron la mayor parte de
las actividades.

La acogida del proyecto del Semillero de Estudios Antropológicos, ha sido de tal

magnitud que la Universidad
Pontificia Bolivariana y la Red
Iberoamericana de Cementerios
Patrimoniales le ha otorgado un
reconocimiento al Tecnológico de
Antioquia Institución Universitaria
por el Festival Antropológico de la
Vida y la Muerte. Adicional a esto,
también ha llegado a trabajar con
víctimas de desaparición forzada y
la Subsecretaria de Derechos
Humanos del municipio de
Medellín.

Actualmente toda la logística del festival ya no corre solo por cuenta del Semillero de
Estudios Antropológicos (SEA) y del Tecnológico de Antioquia, sino que también
participan activamente por parte de la Policía Nacional, estudiantes de la Universidad
de Antioquia, la Universidad Pontificia Bolivariana, el Jardín Cementerio Universal y
la Funeraria San Vicente. Sin duda el festival más que ser un logro es la posibilidad
de poner el Semillero al servicio de la comunidad, desde un carácter más humanístico
y en pro de seguir creando un impacto positivo en todo aquel que haga parte o
conozca las siglas SEA. Un semillero lleno de experiencias, motivación y nuevos
proyectos que se quieren alcanzar de manera integrada con diferentes ramas del
saber. Por esto nos hemos convertido en un Semillero intra e interdisciplinario, para
que cada uno aporte nuevas ideas al Festival Antropológico de la Vida y la Muerte.

Aunque el Semillero de Estudios Antropológicos, durante estos años ha conseguido

un sinfín de logros sigue proyectándose para llegar más allá. Crecer como semillero,
como grupo, como familia, como Institución y de esta manera también ofrecer más en
términos de conocimiento, experiencias y aprendizajes a nuestra Región Antioqueña,
que ve en el Tecnológico de Antioquia una Institución Universitaria acreditada que día
a día lucha por la reacreditación.