Вы находитесь на странице: 1из 468

JORGE ORGAZ -GRACIELAMONTESI

EDUARDO ÁVALOS -LILIANA VILLAFAÑE

IGNACIO MARÍA VÉLEZ FUNES


DIRECTOR

DERECHO PROCESAL
ADMINISTRATIVO
II
."UEMA

~ $'t:)~E
í?~~ BH3LlorECA. eRAl
~ SIGLO ~ CENTRO DE RECURSOS PARA :L
.,. o APRENDIZAJE E INVESTIGACION
~
(o "f\~'\'v

c"tt¡7¡ . '--';;' : \ ~
tc:S P~t=~;:;Os
~ .', ) ~ ,': > .: /', L ES

é-, SE
,>, LA
,,'C; Ó~':<', '
NI .-\-1~ "í!L-~S;"' (;~Ál o
--..-.-.. ,
, :}::< ,,'('TÚE H
__ '_:_'-'UL,1.¡'RISrAMO
..
Asesores editoriales

Armando S. Andruet (h.)


Manuel Cornet
Raúl E. Fernández
Edgar Domingo Gribaudo
Justo Laje Anaya
Julio C. Sánchez Torres
Guillermo P. Tinti

Orgaz - Montesi - Ávalos - Villafañe


Vélez Funes (director)
Derecho Procesal Administrativo
Tomo 11

1 ¡\~~~r2,~! 0313
------ ------
I

ISBN 987-1145-15-2
COPYRIGHT © 2004, ALVERONI EDICIONES
Duarte Quirós 631- P. B., L. 1- Tel. (0351) 4217842 (5000) Córdoba
E-mail: alveroni@arnet.com.ar
República Argentina

Queda hecho el depósito que prevé la ley 11.723


Se terminó de imprimir en la ciudad de Córdoba
en el mes de octubre de 2004
PALABRAS PREVIAS

Según el compromiso asumido después de la publicación del


primer tomo aparecido en diciembre de 2003, hemos concluido el
trabajo en equipo para materializar la entrega del segundo tomo
de "Derecho Procesal Administrativo", que completa nuestra la-
bor y aporte para el estudio de esta asignatura según el vigente pro-
grama de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la Univer-
sidadNacional de Córdoba.
Bajo nuestra coordinación a mediados del presente año hemos
materializado el objetivo de desarollar los temas de estudio suge-
ridos por las unidades VIII, IX,X, XI, XII, XIII y XN del programa
oficialmente vigente en la materia bajo igual denominación, con
los abogados Eduardo Á valos, Liliana Villafañe, Jorge Orgaz y
Graciela Susana Montesi, según la misma metodología iniciada
en el primer tomo de esta obra.
Entre tanto, todos los participantes de este trabajo intelectual
hemos sido gratamente sorprendidos por la acogida que ha tenido
la primera entrega entre los estudiantes de derecho de la Univer-
sidad Nacional de Córdoba y otras casas de estudios privadas y
públicas, además de profesionales del derecho que actúan en el
ámbito de oficinas públicas o ejercen individualmente la profesión
de abogado a favor o en contra de la Administración Pública, pro-
curando la vigencia del principio de legalidad.
N o podemos dejar de recordar y resaltar que en el transcurso del
presente año Eduardo Ávalos obtuvo su título de postgrado de "Abo-
gado Especialista en Derecho Público", como también que fue de-
signado como Secretario Civil dela Cámara Federal de Apelaciones
de Córdoba, en razón de sus relevantes méritos como funcionario del
Poder Judicial de laNación, lo cual pone de relieve sus conocimien-
tos y experiencias en la temática abordada en este segundo tomo.
8 IGNACIO MARÍA VÉLEZ FUNES (DIRECTOR)

A principios de agosto del presente año,junto con Liliana Vi-


llafañe y Eduardo Ávalos hemos participado en la prueba de opo-
sicióny antecedentes convocada por la Facultad de Derecho y Cien-
cias Sociales de la Universidad Nacional de Córdoba, para optar a
los cargos de profesores adjuntos de la materia ''Derecho Procesal
Administrativo", cuyo concurso público estuvo a cargo de los pro-
fesores Dres. Juan Carlos Cassagne (Universidad de BuenosAi-
res), Alejandro Pérez Hualde (Universidad N acional de Cuyo) y
Beningno Ildarraz (Universidad N acional de Córdoba), aunque
hasta la actualidad no se ha expedido el dictamen deljurado.
En particular este segundo tomo, además de los temas concep-
tuales tratados por los coautores, revela una actualizadajurispru-
denciay doctrina en cada uno de los temas abordados que serán de
especial utilidad para los lectores, y también se ha considerado
de interés incluir algunos puntos específicos -fuera del progra-
ma de la materia-para que puedan ser de utilidad alos estudian-
tes de la asignatura de la carrera de Notariado de la Universidad
Nacional de Córdoba.
Se ha respetado incluso la metodología oficial del primer tomo,
de incluirlas propuestas de preguntas para la autoevaluaciónde cada
unidad desarrollada, como también la legislación vigente, de utili-
dad para su consulta, agregada como anexo aesta segunda parte.
Todos los participantes esperamos haber hecho una contribu-
ción en el ámbito del Derecho Procesal Administrativo, teniendo
especialmente en cuenta como destinatarios a los estudiantes de
derecho, alos fines de la aproximación y abordaje de los temas tra-
tados' todo de manera amena, sencilla y práctica.
Agradecemos su curiosidad e interés por la lectura de este nue-
vo tomo, sin pe:rjuicio de las observaciones, comentarios o sugeren-
cias que nos puedan arrimar para futuras presentaciones o nue-
vas ediciones.

Ignacio María V élez Funes


Director
Córdoba, agosto de 2004
Capítulo VIII
LOSRECURSOSAD~STRATIVOS

Por Graciela Montesi

Sumario: I. Los recursos administrativos: Concepto


amplio. II. Recurso, reclamación y denuncia. III. Re-
quisitos formales y sustanciales de los recursos. N.
Efectos de la interposición de los recursos. V. Vistas y
traslados. VI. Notificación y publicación. VII. Apertura
a prueba. VIII. Medios de prueba. IX. Producción y
valoración de la prueba. X. Los plazos en el procedi-
miento administrativo. XI. Interrupción, suspensión y
remisión de los plazos procesales. XII. Caducidad de
las actuaciones administrativas. XIII. El silencio admi-
nistrativo y el deber de resolver. XN. La suspensión
del acto administrativo como consecuencia de la inter-
posición de un recurso administrativo.

l. Los RECURSOS ADMINISTRATIVOS: CONCEPTO AMPLIO

Los recursos administrativos, en sentido amplio, son los reme-


dios o medios de protección del individuo para impugnar los actos
y hechos administrativos que lo afectan y defender sus derechos
frente a la Administración. 1

1 GORDILLO, Agustín, Tratado de derecho administrativo, t. 4: "El pro-


cedimiento administrativo", 4a ed., Fundación de Derecho Adminis-
trativo, Bs. As., 2000, pág. III-l.
-
10 GRACIELA MONTESI

Por medio del recurso administrativo se promueve el control de


la legalidad (legitimidad y oportunidad) de un acto emanado de la
autoridad administrativa, a fin de que se lo revoque o modifique,
con el objeto de restablecer el derecho subjetivo o interés legítimo
lesionado por dicho acto.
El recurso administrativo tiene por finalidad la impugnación
de un acto administrativo dando lugar a un nuevo procedimiento
en sede administrativa. En suma, el recurso es una facultad o un
derecho que se ejerce como acto de impugnación y defensa de un
derecho sustancial. Por lo que frente al recurso-derecho aparece
el deber jurídico de la Administración de revisar su propio acto,
revocándolo o modificándolo, cuando ha vulnerado, desconocido o
incumplido un derecho subjetivo o interés legítimo, por un lado, y
para restablecer, por otro, el imperio de la legalidad transgredida
por un proceder ilegítimo de la propia Administración. 2
Es menester distinguir los recursos en el procedimiento admi-
nistrativo y en el proceso judicial. 3
a) En el caso del recurso jurisdiccional, la autoridad que lo re-
suelve es unjuez unipersonal o un tribunal colegiado, pero siem-
pre imparcial e independiente, un tercero desinteresado en el pro-
ceso. En el recurso administrativo quien resuelve es, en principio,
un funcionario administrativo, aunque esto admite excepción en
el caso de actividades administrativas de lajusticiay del Congre-
so.
b) En el recurso jurisdiccional el tribunal ejerce funciónjuris-
diccional. En el recurso administrativo, su resolución implica el
ej ercicio de función administrativa.
c) En el recurso administrativo el control es de legitimidad y de
oportunidad. En el recurso jurisdiccional el control es sólo de legi-
timidad y está destinado a restablecer el ordenamiento jurídico
violado.

2 DROMI, Roberto, Derecho administrativo, Ciudad Argentina, Bs. As.,


1998, págs. 928y929.
3 GORDILLO, Agustín, op. cit., t. 4, págs. I11-4 y ss.
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS 11

d) En el recurso jurisdiccional el tribunal no actúa de oficio, ya


que prevalece el principio de la verdad fonnal. En el trámite de los
recursos administrativos el administrador tiene facultades para
actuar de oficio, impulsar el procedimiento, e instruir la prueba, y
prevalece el principio de la verdad material.
e) El acto que decide el recurso administrativo es un acto admi-
nistrativo; el que decide un recurso jurisdiccional es una senten-
cia.
f) La decisión que resuelve el recurso administrativo es suscep-
tible de otros recursos administrativos y judiciales. La sentencia,
en cambio, sólo es susceptible de ser impugnada por otros recur-
sosjudiciales.
g) En el ordenjudicial impera el principio de imposición de cos-
tas al vencido con pocas excepciones, mientras que el procedimiento
administrativo es gratuito.
h) En las acciones judiciales se exige el patrocinio letrado, en
los recursos administrativos no es necesario ni habitual.

11. RECURSO, RECLAMACIÓN Y DENUNCIA

Lo esencial del recurso administrativo consiste en que se


trata de un acto de impugnación de un acto o reglamento adminis-
trativo anterior, destinado a obtener del órgano emisor del acto,
del superior jerárquico, o del que ejerce el control de tutela, la re-
vocación, modificación o saneamiento del acto impugnado.
A diferencia de los recursos, las meras reclamaciones no son,
en principio, medios para impugnar actos administrativos. Se trata
de articulaciones que pueden o no tener contenido jurídico, que
presenta el administrado en ejercicio del derecho de peticionar ante
las autoridades administrativas (art. 14 de la Constitución N acio-
nal) tendientes a obtener el dictado de un acto favorable o provo-
car el ejercicio de la potestad revocatoria ex officio que, en algunos
supuestos, puede ejercer la Administración, aun cuando no hubiera
un recurso administrativo fonnalmente planteado. Las meras
reclamaciones se distinguen también de los recursos en que, en
-
12 GRACIELA MONTESI

principio, la Administración no se encuentra obligada a tramitar-


las ni a dictar resolución definitiva, salvo en aquellos casos que el
titular poseyere un derecho subjetivo que tuviera su fuente en la
ley, reglamento, acto o contrato administrativo. 4
Debemos también diferenciar las reclamaciones regladas en
las que si bien no se impugna un acto administrativo, la Adminis-
tración tiene el deber de tramitarlas. Un ejemplo de este tipo de re-
clamación es la quej a, que se trata de una vía administrativa que
no constituye técnicamente un recurso, en razón de que con ella el
administrado no pretende la impugnación de un acto, sino corre-
gir los defectos de trámite y particularmente el incumplimiento
de los plazos legales o reglamentarios del procedimiento adminis-
trativo. 5
Un capítulo aparte merece asignar a los reclamos reglados,
que constituyen un procedimiento previo para la habilitación de
la instancia judicial. Dentro de estos reclamos debemos diferen-
ciar el reclamo administrativo previo, contenido en el arto 30 de la
LNPA, del reclamo impropio, establecido para la impugnación de
actos de alcance general en el arto 24, inc. a, de la LNPA. El recla-
mo del arto 30 se interpone ante el Ministerio o Secretaría de la
Presidencia o autoridad superior de la entidad autárquica corres-
pondiente; es un remedio que se acuerda al particular, distinto y
al mismo tiempo similar al de los recursos, orientado a lograr el
restablecimiento de lajuridicidad en la Administración Pública
cuando su orden ha sido vulnerado. En tanto presupuesto proce-
sal para iniciar la demanda, resulta útil en la medida en que con-
cede al Estado la oportunidad de revisar su conducta y constituye
un medio para evitar la promoción de unjuicio, pues tiene por ob-
jeto que los órganos administrativos competentes examinen las
pretensiones de los administrados con aquel fin. 6

4 CASSAGNE,JuanCarlos,Derecho administrativo, t. n, 7a ed. act.,Lexis


Nexis Abeledo-Perrot, Bs. As., 2002, pág. 590.
5 CASSAGNE, Juan Carlos, Derecho administrativo, pág. 615.

6 COMADIRA, Julio Rodolfo, Procedimientos administrativos, t. 1, La Ley,

Bs. As., 2002, pág. 506.


..

LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS 13

a) El reclamo debe interponerse previo a demandar al Estado


Nacional o a sus entidades autárquicas.
b) Su contenido debe versar sobre los mismos hechos y derechos
que se invocarán en la eventual demandajudicial.
c) Se encuentran legitimados para interponer el reclamo los ti-
tulares de un derecho subjetivo o de un interés legítimo.
d) El plazo de resolución del reclamo es de noventa (90) días, a
cuyo término debe interponerse pronto despacho, y pasados cua-
renta y cinco (45) días más sin resolución queda habilitada la vía
judicial. El Poder Ejecutivo a requerimiento del organismo inter-
viniente, por razones de complejidad o emergencia pública, podrá
ampliar estos plazos a ciento veinte (120) días y a sesenta (60) días
respectivamente. 7
e) La denegatoria expresa del reclamo no podrá ser recurrida
en sede administrativa, profundizando con ello la distinción en-
tre recurso yreclamo.
f) La interposición del reclamo produce la suspensión de la pres-
cripción. En caso de denegatoria expresa o tácita -producida por
el silencio de la Administración-, deberá presentarse la deman-
da dentro del plazo perentorio de noventa (90) días hábilesjudicia-
les (art. 25, LNPA) a contar desde la denegatoria expresa o desde
el vencimiento del plazo para resolver el pronto despacho de cua-
renta y cinco (45) o sesenta (60) días, según el caso.
g) N o será necesario el reclamo previo: a) en los casos expresa-
mente previstos por la ley, por ejemplo, cuando se acciona por ex-
propiación irregular (art. 53, ley 21.499); b) cuando se intente una
repetición contra el Estado de lo pagado en una ejecución, o de un
gravamen pagado indebidamente, y c) cuando se demandare al
Estado por el pago de daños y perjuicios derivados de su responsa-
bilidad extracontractual (art. 32, LNPA).
Como dijimos más arriba, dentro del reclamo reglado tenemos
el reclamo previo a la demandajudicial, al que nos acabamos de re-
ferir, yelreclamo impropio previstoenelart. 24, inc. a, delaLNPA.

- _-\utorizada esta ampliación por la reforma incorporada al arto 31 de


la L"-PApor laley 25.344.
e,

14 GRACIELA MONTESI

Este último se encuentra previsto como necesario, previo a la im-


pugnaciónjudicial de los actos de alcance general-reglamentos. 8
a) El reclamo impropio procede cuando se afecte en forma directa
e inminente un derecho subjetivo.
b) Se interpone y es resuelto por el mismo órgano que dictó el
acto de alcance general.
c) La decisión que recaiga es irrecurrible (art. 73, primer párrafo
in fine, RLNPA).
d) La interposición del reclamo impropio puede producir la sus-
pensión de los efectos del acto si se confi.guranlas causales previs-
tas por el arto 12 de la LNPA 9
e) El reclamo impropio debe ser resuelto en el plazo de sesenta
(60) días, vencido el cual, el interesado deberá interponer pronto
despacho, pudiendo accionar luego de vencidos treinta (30) días sin
que se haya dictado resolución (art. 10, LNPA).
Finalmente, nos queda abordar el tratamiento deladenuncia
administrativa, que a diferencia de los recursos y las reclama-
ciones puede formular el portador de un interés simple, consiste
en el acto por cuyo mérito un particular pone en conocimiento del
órgano administrativo la comisión de un hecho ilícito o la irregu-
laridad de un acto administrativo o reglamento, sin que exista obli-
gación de tramitarla o de decidirla por parte de la Administración
Pública. Puedeocurrir,noobstante, queunavez acogidaladenun-
cia el administrado posea un verdadero poderjurídico para que la
misma se tramite como recurso. Es lo que acontece con la llamada
denuncia por ilegitimidad, prevista en el arto 1°, inc. e, aparta-
do 6, de la LNPAIO
La denuncia por ilegitimidad procede cuando se interpone un
recurso fuera de término o el administrado presenta la correspon-
diente petición una vez vencidos los plazos procesales para arti-

8 COMADIRA, Julio Rodolfo, op. cit., pág. 449.


9 Las causales previstas son: razones de interés público, o para evitar
perjuicios graves al interesado, o cuando se alegare fundad amente una
nulidad absoluta.
10 CASSAGNE, Juan Carlos, Derecho administrativo, pág. 591.
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS 15

cular los recursos administrativos correspondientes. Se trata de


una denuncia inspirada en el interés que tiene el Estado en velar
por el principio de legitimidad de sus actos que, de acogerse, revis-
te el carácter de un verdadero recurso informal que suple a los re-
cursos de re consideración, jerárquico o de alzada, según sea el
caso Y
a) Puede ser resuelta tanto por el Poder Ejecutivo, como por los
Ministros u órganos jerárquicamente inferiores.
b) Los órganos administrativos tienen el deber de tramitar es-
tas denuncias, pero quien las resuelve puede declararlas inadmi-
sibles: 1) por motivos de seguridadjurídica, 02) por entenderse que
medió abandono voluntario del derecho, al hallarse excedidas ra-
zonables pautas temporales.
c) El trámite de las denuncias será el correspondiente al recur-
so que sustituya.

111. REQUISITOS FORMALES Y SUSTANCIALES DE LOS RECURSOS

La interposición de los recursos administrativos se halla some-


tida a un conjunto variado y abundado de formalidades que tienen
como fin ayudar a la Administración a ejercer adecuadamente su
potestad de controlo fiscalización. Los requisitos formales a tener
en cuenta para conformar la existencia de un recurso son: a) que el
recurso se plantee por escrito y, desde luego, firmado; b) que se in-
dique nombre, apellido y domicilio del recurrente, y c) que esté
presentadoentérmino(art. 77,RLNPA).Asimismo, deberán tener-
se en cuenta las exigencias previstas por los arts. 15 y 16 del RLNPA:
a) estar escritos en forma legible, b) redactados en idioma nacio-
nal, c) deben contener el número de expediente a que correspon-
da, d) si actúa en representación, invocarla y acreditarla, e) firma
de los administrados o de sus representantes (art. 15); en tanto el

11 C_-\SSAGNE, Juan Carlos, Derecho administrativo, pág. 619.


-
16 GRACIELA MONTESI

arto 16 exige: a) indicación de nombre y apellido, documento de


identidad, domicilio real y constituido del interesado, b) relación
de los hechos, c) ofrecimiento y acompañamiento de prueba.
También se prevé la exigencia de cumplir con los requisitos sus-
tanciales para la interposición de todo recurso administrativo, los
que para la doctrina se traducen enlamanifestación clara por parte
del interesado de obtener un nuevo pronunciamiento de la Admi-
nistración: la petición en términos claros y precisos, como así tam-
bién establecer la relación de los hechos que desencadenan la pe-
tición, esto es, la fundamentación.
No obstante, que las formalidades y recaudos son numerosos,
el RLNPA, acogiendo el principio de informalismo, determina que
cuando se advierta alguna deficiencia formal se deberá intimar al
recurrente a subsanarla, y sólo en el caso de que no lo cumpla po-
drá la Administración desestimar el recurso.
Dentro de los requisitos sustanciales para la interposición de
un recurso en sede administrativa, debemos distinguir aquellos
que se refieren al sujeto y los que hacen al objeto del mismo.
a) Sujeto: en todo recurso intervienen dos sujetos: la Adminis-
tración Pública, que decide o resuelve el recurso, yel administra-
do, que lo interpone. A la Administración se le exige que el funcio-
nario que emite el acto actúe dentro de su competencia y en relación
a los administrados se requiere capacidad, lo que implica estar le-
gitimados para interponer un recurso.
Tenemos que advertir el problema de la legitimación; es decir,
que quien promueva un recurso tenga una aptitud específica que
le permita ser parte en el procedimiento declarativo de impugna-
ción. Debe, en consecuencia, poseer una legitimación previa, sin-
gularizada en la invocación de un derecho subj etivo o un interés
legítimo y no en un interés simple.
Sabemos que el interés simple o mero interés es el que tiene todo
ciudadano a que la ley se cumpla, a que los servicios funcionen co-
rrectamente, a que no haya corrupción. Se caracterizan porque
siempre se dan en una situación de concurrencia, hay ausencia de
interés personal y directo y sobre actos reglados o discrecionales
con límites normativos que determinan la conducta administra-
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS 17

tiva. Quien posee un interés simple sólo puede hacer meras denun-
cias 12 , poniendo en conocimiento a la Administración de la situa-
ción irregular. N o puede pretender la revocación administrativa
ni la anulaciónjudicial de los actos denunciados y, como consecuen-
cia, no puede interponer recursos administrativos ni demandaju-
dicial alguna.
En el interés legítimo hay una concurrencia de individuos a
quienes el órgano jurídico otorga una protección especial por te-
ner un interés personal y directo en la impugnación del acto. El
interés debe serde un círculo definido y limitado de individuos, de
modo personal y directo. El interés legítimo es de aquel que tiene
una situación diferenciada respecto del resto de los ciudadanos;
pretende también el restablecimiento de la legalidad cuando ha

12 La LNPA regula las denuncias en el Capítulo XIII, disponiendo: ar-


tículo 72: "Toda persona que tuviere conocimiento de la violación de
Leyes, Decretos o resoluciones administrativas por parte de órganos
de la Administración, podrá denunciarlo a la autoridad competente."
Artículo 73: "La denuncia podrá hacerse por escrito o verbalmente,
personalmente o por representante o mandatario. La denuncia escrita
debe ser firmada; cuando sea verbal, se labrará acta. En ambos casos
el funcioo.ario interviniente comprobará y hará constar la identidad
del denunciante". Artículo 74: "La denuncia deberá contener de un
modo claro, en cuanto sea posible, la relación del hecho, con las cir-
cunstancias de lugar, tiempo y modo de ejecución, y la indicación de
sus autores o partícipes, damnificados, testigos y demás elementos
que puedan conducir a su comprobación." Artículo 75: "El denuncian-
te no es parte en las actuaciones, salvo cuando por la denuncia se pre-
tenda o reclame algún derecho". Artículo 76: "Presentada una denun-
cia, el funcionario que la reciba la elevará de inmediato a la autoridad
superior de la dependencia, si no hubiera sido radicada directamen-
te ante la misma, y ésta deberá practicar las diligencias preventivas
necesarias, dando oportuna intervención al órgano administrativo
competente".
- =
18 GRACIELA MONTESI

sido violada, pero su interés no le es exclusivo ni tampoco concu-


rrente con los de los demás ciudadanos. Comparte su interés con
un grupo diferenciado de individuos. Tiene una situación en expec-
tativa. Quien posee un interés legítimo puede reclamar su recono-
cimiento en sede administrativa por medio de los recursos admi-
nistrativos. En sede judicial puede iniciar acción de ilegitimidad
para pedir la revocación o anulación del acto que lo afecta, pero no
puede solicitar indemnización por daños y perjuicios.
Finalmente, el derecho subjetivo implica la predeterminación
normativa de la conducta administrativa debida a un individuo en
situación de exclusividad. Genera un interés propio, excluyente
de la titularidad diferenciada, que habilita para exigir una pres-
tación también diferenciada. Es la figura subjetiva activa por ex-
celencia. Siempre traduce un interés particular más intensamente
protegido, por oposición al interés concurrente o compartido y por
el cual un administrado tiene la exigibilidad exclusiva a que laAd-
ministración no se exceda en sus facultades regladas. Por consi-
guiente, quien posea un derecho subjetivo puede reclamar su re-
conocimiento ante la propia Administración por vía de los recursos
administrativos, como ante lajusticia por medio de la acción de
plena jurisdicción peticionando, además de la extinción del acto
lesivo, el restablecimiento del derecho vulnerado y el resarcimiento
de los perjuicios sufridos.
b) Objeto: el objeto del recurso es un acto administrativo, pero
no todos los actos administrativos son recurribles. Debemos, en-
tonces, distinguir los distintos tipos de actos administrativos:
Acto definitivo: es el que resuelve sobre el fondo del problema
planteado por la necesidad administrativa o la petición del parti-
cular y produce efecto externo, creando una relación entre la Ad-
ministracióny las demás cosas o personas. Su nota fundamental
está en su autonomía funcional, que le permite producir derechos
y obligaciones y lesionar o favorecer por sí mismo al particular. Se
trata siempre de manifestaciones de voluntad que en forma defi-
nitiva definen el negocio planteado a la Administración, sin supe-
ditar su efecto a condiciones o plazos suspensivos. El acto definiti-
vo es el único normalmente impugnable por sí mismo porque es el
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS 19

único capaz por sí para producir el agravio al derecho subjetivo y


al interés del administrado. 13
Podemos citar como ejemplo de acto definitivo, la resolución que
concluye con el sumario administrativo aplicando una sanción al
agente.
Acto asimilable a definitivo: es aquel que, sin resolver el fondo
de la cuestión, impide totalmente la tramitación del reclamo in-
terpuesto. En tal situación el acto recibe el mismo tratamiento que
el acto definitivo.
Un ejemplo de acto asimilable a definitivo es la resolución que
ordena el archivo de las actuaciones en las cuales se tramita el re-
clamo o pretensión del administrado: aunque no resuelve el fondo
de la cuestión, impide totalmente la tramitación del problema de
fondo y, por ello, la protección que se otorga al afectado por el acto
es la correspondiente alas actos definitivos.
Actos interlocutorios o de mero trámite: son aquellos producto-
res dé efectos jurídicos directos, aunque no en cuanto al fondo de la
cuestión debatida sino en cuanto al trámite.
Ejemplo de este tipo de actos son, dentro del sumario adminis-
trativo, todas las medidas que se dictan durante el mismo con ex-
cepción de la resolución final, verbigracia: la iniciación del suma-
rio, designación del sumariante, apertura a prueba, decisión de
decretar el secreto de sumario, etcétera.
Actos preparatorios: son aquellos que no producen efecto jurí-
dico directo alguno, por ejemplo los dictámenes, informes, circu-
lares. Se trata de actos que no alcanzan a ser actos administrativos
y se quedan en actos no productores de efectosjurídicos directos.
Finalmente decimos que los actos definitivos o asimilables a ellos
son recurribles por recurso de reconsideración (art. 84) y recurso
jerárquico (art. 89). Los actos administrativos interlocutorios o de
mero trámite son impugnables por el recurso de reconsideración

13 ORTIZ, Eduardo, "Materia y objeto del contencioso administrativo",


Revista de Ciencias Jurídicas, 5:47,89 (San José, 1965), citado por
GoRDILLO, Agustín, op. cit., t. 3, pág. II-9.
...
20 GRACIELA MONTESI

(art. 84),noporeljerárquico (art. 89,a contrario sensu). Los actos


preparatorios no son impugnables a través delos recursos admi-
nistrativos.14

IV. EFECTOS DE LA INTERPOSICIÓN DE LOS RECURSOS

El principal efecto que produce la interposición de un recurso


administrativo es la suspensión o interrupción de los plazos del
procedimiento, máxime si se precisa tomar vista del expediente.
De este modo, cuando el interesado precise tomar vista de las ac-
tuaciones, se suspende por el tiempo que indique la Administra-
ción el plazo para recurrir (art. 76, RLNPA). Esta suspensión se
opera en forma instantánea y automática en el instante en que el
interesado presenta el pedido de vista de las actuaciones.
El recurso administrativo interrumpe los términos del procedi-
miento administrativo, aunque contenga defectos formales o haya
sido mal calificado, o sea deducido ante órgano incompetente por
error excusable (art. 10, inc. e, apartado 7, LNPA).
También produce la suspensión de la prescripción de la acción
por un año y por una sola vez por la constitución en mora del deu-
dor (art. 3986, CC). De este modo, un recurso o reclamación que
solicite concretamente un derecho sujeto a prescripción liberato-
ria, o que impugne un acto que lo denegara, produce el efecto de sus-
pender el curso de la prescripción durante un año, sin otro requisi-
to de que ella se efectúe "en forma auténtica" y siendo suficiente
autenticidad su recepción administrativa.
Otro efecto importante que produce la interposición de un re-
curso administrativo es la suspensión de los efectos del acto, tema
que abordaremos en profundidad en el último punto de este capí-
tulo.
Finalmente, otro de los efectos de la interposición de un recur-
so es el de ampliar las facultades o competencias del órgano admi-
nistrativo, abriendo una nueva instancia que permite a la Admi-

14 GORDILLO, Agustín, op. cit., t. 3, pág. II-13.


LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS 21

nistración considerar y resolver todo lo atinente a la cuestión que


se plantea.

V. VISTAS y TRASLADOS

Dentro del proceso judicial, que es regido por el derecho proce-


sal, se consagra el acceso irrestricto de las partes al conocimiento
de las actuaciones como así también, el retiro del expediente en este
tipo de procesos es una rutina. El acceso visual a los actuados sólo
encuentra como limitación temporal el hecho que el expediente se
halle "a despacho". De este modo, el traslado aparece como Ulla for-
ma especial de notificación a las partes de los actos procesales del
juzgado y de aquéllas.
En el procedimiento administrativo regido por el derecho ad-
ministrativo se consagra como esencial el derecho a los interesa-
dos a tener pleno acceso alas actuaciones administrativas. De esta
forma, la vista de las actuaciones administrativas constituye una
reglamentación del debido proceso adjetivo y se encuentra consa-
grada en el arto 38 del RLNPA que dispone expresamente: "La par-
te interesada, su apoderado o letrado patrocinante, podrán tomar
vista del expediente durante todo su trámite [... ]". La norma cita-
da estatuye el carácter informal de la vista en el procedimiento ad-
ministrativo en tanto el pedido de vista puede hacerse verbalmente
y no requiere de una resolución expresa para su concesión.
Ahora bien, ¿cuáles son los efectos que produce en el procedi-
miento el pedido de vista de las actuaciones?
a) No implica la suspensión del trámite del expediente, con ex-
cepción de aquellas vistas que impliquen verdaderos traslados en
las que se establece un plazo perentorio para que el administrado
conteste, caso este último en el que se deberá suspender el curso
del procedimiento hasta tanto se evacue el traslado o se deje ven-
cer el plazo acordado sin que el administrado lo conteste.
b) El interesado puede solicitar a la Administración que se le
fij e un plazo de vista de las actuaciones, estando facultado a sacar
copias de las piezas que necesitare a su costa.
22 GRACIELA MONTESI

c) El pedido de vista de las actuaciones produce la suspensión


delplazo para recurrir durante el ténnino en que se conceda la vista.
La suspensión es automática y se justifica en orden a que enla prác-
tica administrativa argentina suele ser corriente el dictado de
actos sin vista previa al particular afectado en sus derechos subje-
tivos o intereses legítimos.l5
d) También produce la suspensión de los plazos previstos por el
arto 25 de la LNPA para interponer la demanda en sede judicial.
e) La obtención de la vista implica la notificación de los actos
administrativos obrantes en las actuaciones, pero en modo algu-
no su consentimiento.
El citado arto 38 del RLNPA establece también las restriccio-
nes al otorgamiento de la vista: "[ ... ] con excepción de aquellas ac-
tuaciones, diligencias, informes o dictámenes que, a pedido del
órgano competente y previo asesoramiento del serviciojurídico co-
rrespondiente, fueren declarados reservados o secretos mediante
decisión fundada del respectivo subsecretario del Ministerio o del
titular del ente descentralizado de que se trate". Debemos desta-
car que las restricciones a la posibilidad de vista de las actuacio-
nes deben ser valoradas con criterio restrictivo y debidamentejus-
tificado, entendiéndose en principio como reservados sólo aquellos
temas que establece la normativa en vigencia y que se refieren a
operativos militares y/o fuerzas de seguridad, adquisición, fabri-
cación o venta de material bélico, estructuras orgánicas de los ser-
vicios de inteligencia, etc. (decreto 1666178).

VI. NOTIFICACIÓN y PUBLICACIÓN

El sistema de publicidad de los diversos actos que emite laAd-


ministración Pública difiere según se trate de actos administrati-
vos (de alcance individual), de reglamentos (de alcance general) o
de actos internos o interorgánicos. 16 Mientras los dos primeros

15 CASSAGNE, Juan Carlos, Derecho administrativo, pág. 563.


16 CASSAGNE, Juan Carlos, Derecho administrativo, pág. 569.
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS 23

poseen un régimen formal, el acto interorgánico, destinado a pro-


ducir efectos en principio y directamente sobre otros órganos de la
Administración se caracteriza por la prevalecencia de la libertad
formal en materia de publicidad (art. 104, RLNPA).
El art.11 de la LNPA expresamente dispone que "Para que el
acto administrativo de alcance particular adquiera eficacia debe
ser objeto de notificación al interesado, y el de alcance general, de
publicación [... ]".

Notificación del acto administrativo de alcance


individual

El acto administrativo requiere para su perfección que el mis-


mo sea notificado al particular y la reglamentación de la ley esta-
blece expresamente cuáles actos deben ser notificados: a) Los ac-
tos administrativos de alcance individual que tengan carácter
definitivo y los que, sin serlo, obsten a la prosecución de los trámi-
tes; b) los que resuelvan un incidente planteado o en alguna medi-
da afecten intereses legítimos o derechos subjetivos; c) los que de-
cidan emplazamientos, citaciones, vistas o traslados; d) los que se
dicten con motivo o en ocasión de la prueba y los que dispongan de
oficio la agregación de actuaciones, y e) todos los demás que la au-
toridad así dispusiere, teniendo en cuenta su naturaleza e impor-
tancia.
En cuanto a la forma de las notificaciones pueden llevarse a cabo
por cualquier medio que dé certeza de la fecha de recepción del ins-
trumento en que se recibió la notificación y, en su caso, el conteni-
do del sobre cerrado, si éste se empleare. En el procedimiento ad-
ministrativo nacional podrá realizarse:
a) Por acceso directo de la parte interesada (apoderado o repre-
sentante legal) al expediente, debiéndose en tal caso dejarse cons-
tancia expresa previajustificación de la identidad de la persona
que se notifica, pudiendo exigir se le entregue una copia certifica-
da del acto (art. 41, inc. a, RLNPA).
24 GRACIELA MONTESI

b) Por presentación espontánea de la parte interesada (su apo-


derado o representante legal) de la cual resulte hallarse en cono-
cimiento fehaciente del acto respectivo (art. 41, inc. b, RLNPA).
c) Por cédula diligenciada en forma similar a lo previsto por los
arts. 140y 141 del Código Procesal Civil y Comercial de la N ación
(art. 41, inc. c, RLNPA).
d) Por telegrama con aviso de entrega (art. 41, inc. d, RLNPAl.
e) Por oficio impuesto como certificado expreso con aviso de
recepción, debiendo la carta y documentos anexos ser exhibidos al
agente postal antes de su despacho, quien los sellarájunto con las
copias que se agregarán al expediente (art. 41, inc. e, RLNPA).
f) Por carta documento Cart. 41,inc.f,RLNPA).
g) Por los medios que indique la autoridad postal a través dE
sus permisionarios, conforme a las reglamentaciones que emita
(art. 41,inc. g, RLNPA). En este sentido seha admitidolanotifi-
cación por e-mail y por fax.
h) Por edictos o por radiodifusión, siempre que laAdministra-
ciónignore el domicilio del administrado (art. 42, RLNPA).
En todos los casos las notificaciones deberán contener el act.::
transcripto en forma íntegra, es decir sus fundamentos y part.e
dispositiva, con excepción de las cédulas y oficios donde se perro.:-
te reemplazar la transcripción agregando copia autenticada de h
resolución.

Publicación de los reglamentos

El arto 103 de la reglamentación dispone que los actos admini ::;-


trativos de alcance general producirán efectos a partir de su Pl:.-
blicación oficial y desde el día en que en ellos se determine; si m
designan tiempo, producirán efectos después de los ocho días, COIL-
putados desde el siguiente al de su publicación oficial.
Por su parte, el arto 104 establece que se exceptúan del artícul:
anterior los reglamentos que se refieran a la estructura orgánic2
de la Administración y las órdenes, instrucciones o circulares iL-
ternas, que entrarán en vigencia sin necesidad de aquella pubt-
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS 25

cación. Se trata en general de actos interorgánicos que, en princi-


pio' no producen efectos jurídicos respecto de terceros ajenos a la
Administración, y para los cuales basta, para su exigibilidad, el
conocimiento por los destinatarios.
Tratándose de una norma de alcance general, los reglamentos
participan de un régimen similar al de las leyes, por lo que deben
publicarse en forma íntegra en el Boletín Oficial o en otro periódi-
co oficial de amplia circulación, no siendo válidas las publicacio-
nes en periódicos privados o en un boletín interno de la repartición
cuando el acto está destinado a terceros.
MARIENHOFF relaciona la publicidad de los actos con la presun-
ción de conocimiento de la ley atribuida a los habitantes del país,
"quedando satisfecho por esa vía, el precepto constitucional según
el cual 'ningún habitante de la N ación será obligado a hacer lo que
no manda la ley, ni privado de lo que ella no prohíbe' (art. 19, Cons-
ti tución Nacional)".
En materia de notificaciones no se debe perder de vista que con
ellas no se consagra un inútil formalismo sacramental, sino que
se busca lograr que el particular tenga conocimiento cierto del acto
y quede debidamente informado de las posibilidades de defensa de
sus derechos e intereses, es decir, que no se produzca al adminis-
trado una situación de inferioridad o dificultad para el ejercicio de
tales derechos. Es por ello nulo, de nulidad absoluta e insanable,
según el arto 14 de la ley, el acto por el cual se sanciona a un parti-
cular por violación de una resolución publicada en el boletín infor-
mativo de la dependencia sancionadora, si aquella no fue publica-
da en el Boletín Oficial, pues la primera no posee el alcance de una
publicación general que permita presumir el conocimiento de los
actos por todos los habitantes del país. Se deriva, como consecuen-
cia de la falta de notificación regular de los actos administrativos
que éstos no produzcan efectos jurídicos, carezcan de ejecutividad,
no corran los términos para recurrir contra ellos y puedan ser re-
vocados en cualquier momento por la autoridad que los dictó o sus
superiores sin incurrir en responsabilidad. 17

17 Cm-LillIRA, Julio Rodolfo, op. cit., pág. 226.


26 GRACIELA MONTESI

Se discute en doctrina y jurisprudencia si la publicidad del acto


se relaciona con su validez o su eficacia. N o hay duda de que el
arto 11 de la LNPA se inclina por la segunda, como así también nu-
merosa doctrina y jurisprudencia, de lo que deriva que la falta de
notificación de un acto no anula su validez sino que sólo será inefi-
caz hasta su notificación.

VII. APERTURA A PRUEBA

La prueba consiste en aquella actividad tendiente a acreditar


la veracidad o inexactitud de los hechos que constituyen la causa
objetiva de la resolución que se dicte en el procedimiento adminis-
trativo. lB
Las leyes de procedimientos administrativos de la N ación y de
las provincias regulan de una manera muy esquemática lo relati-
vo a la prueba en el procedimiento administrativo, lo que hace
necesario una doble concurrencia: a) se hace necesario recurrir a
los principios fundamentales del procedimiento administrativo,
y b) se impone la aplicación analógica de las normas que rigen el
proceso judicial enlos casos no contemplados expresamente.
Uno de los principios fundamentales es el de la oficialidad en
la impulsión e instrucción de la prueba, según el cuallaAdminis-
tración tiene el deber legal de impulsar el procedimiento, hallán-
dose a su cargo la realización de todas las diligencias y medidas que
fueren viables para la averiguación de la verdad material, consti-
tuida básicamente por los hechos y actos que conformarán la cau-
sa del acto administrativo a dictarse. Lo expuesto no implica des-
plazar la intervención de los administrados en el procedimiento
probatorio. Cuando el administrado expresamente solicita la aper-
tura a prueba de las actuaciones, el así disponerlo constituye una
obligación de la Administración, puesto que si el particular tiene
derecho a ofrecer y producir prueba, la Administración tiene como
contrapartida el deber de proveerla.

18 CASSAGNE, Juan Carlos, Derecho administrativo, págs. 571 y 572.


LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS 27

Luego que se ha procedido a la apertura del período de prueba


dejan de aplicarse los principios generales que rigen la carga de la
prueba del derecho procesal conforme a los cuales corresponde al
actor o a quien alega la carga probatoria de acreditar los hechos
que fundan su pretensión, pues en el procedimiento administrati-
vo' la carga de la prueba corresponde a la Administración.
Finalmente, cabe precisar que en ciertas ocasiones, la Admi -
nistración en lugar de disponer la apertura a prueba de las actua-
ciones, considera que no hay hechos controvertidos y declara la
cuestión como de puro derecho. La declaración de puro derecho es
improcedente no obstante si el administrado ha controvertido los
hechos y solicitado la apertura a prueba, pudiendo aquella deci-
sión recurrÍrse por afectar derechos subjetivos del impugnante. 19

VIII. MEDIOS DE PRUEBA

En relación a la admisión de medios probatorios rige el prin-


cipio de la amplitud de la prueba, "[ ... ] salvo los que fueren ma-
nifiestamente improcedentes, superfluos o meramente dilatorios"
(art.46,RLNPA).
De este modo, el derecho po sitivo reconoce la existencia de di-
versas medidas de prueba20:

A Informes y dictámenes producidos por la


Administración

Los informes y dictámenes de los órganos técnicos y de aseso-


ramiento jurídico, enla medida en que configuran el o los antece-
dentes del acto, brindan al órgano que decide los elementos dejui-
cio imprescindibles para que la resolución a dictarse se encuentre
provista de todas las garantías de legitimidad y oportunidad.

::; GoRDILLO, Agustín, op. cit., t. 3, pág. VI-12.


~: Seguimos en este punto CASSAGNE, Juan Carlos, Derecho adminis-
trativo, págs. 573/577.
....
28 GRACIELA MONTESI

Los informes y dictámenes pueden ser de requerimiento obli-


gatorio o facultativo, con independencia de su fuerza vinculante
y, en caso de omitirse los primeros, la decisión que se dicte adole-
cerá de nulidad absoluta ya que no se admite su saneamiento a
posteriori del dictado del acto.
La reglamentación nacional prescribe que los órganos adminis-
trativos, a quienes se les requiera un informe o dictamen, están
obligados a prestar su colaboración permanente yrecíproca, fijando
distintos plazos máximos para que se expidan, según tuvieran o
no carácter técnico -20 o 10 días respectivamente- (arts. 14 y 48,
RLNPA).
En relación a sus efectos jurídicos los informes y dictámenes no
tienen en principio carácter vinculante, salvo que una norma ex-
presa así lo determine.

B. Informes de entidades privadas y públicas no


estatales

Al igual que en el proceso civil, son admisibles los informes pe-


didos a terceros y su valor probatorio habrá de depender de las cir-
cunstancias del caso (seriedad de la institución, razonabilidad del
informe).
La reglamentación vigente permite esta prueba de informes y
surge de ella que si los órganos o personas no contestaren los in-
formes que le hubiesen sido requeridos en el plazo prudencialmente
fijado o en sus ampliaciones, no corresponderá insistir en la pro-
ducción de la prueba: el procedimiento continúa a pesar de la no
recepción del informe; pero de llegar el mismo posteriormente
no cabe devolverlo o excluirlo: deberá ser tomado en cuenta sin re-
trotraer las etapas del procedimiento.

c. Prueba testimonial
El Reglamento Nacional de Procedimientos Administrativos
(art. 53) sienta algunas reglas en materia de prueba testimonial,
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS 29

declarando de aplicación analógica diversas normas del Código


Procesal Civil y Comercial de la N ación. Así tenemos que:
a) Las partes interesadas poseen el derecho de exigir que laAd-
ministración tome declaración a los cinco (5) primeros testigos que
se ofrezcan, siendo discrecional la admisión de los restantes pro-
puestos.
b) El proponente puede justificar la enfermedad de uno de los
testigos que no ha comparecido a fin de no perder su testimonio.
c) No pueden ser testigos los parientes por consanguinidad o afi-
nidad en línea directa de las personas interesadas ni tampoco el
cónyuge, no obstante que estuviera separado legalmente, salvo
el caso de reconocimiento de firmas.
d) Las partes pueden oponerse al ofrecimiento del testigo cuya
declaraciónjuzgareninadmisible o improcedente.
e) Las preguntas no contendrán más de un hecho, deben ser cla-
ras y concretas, no deben ser concebidas en términos afirmativos,
o sugiriendo la respuesta al testigo ni de manera ofensivas. Tam-
poco pueden contener referencias de carácter técnico, salvo que
estén dirigidas a personas especializadas.
f) Los testigos pueden ser careados cuando sus declaraciones
fueren contradictorias entre ellos y las partes o sólo entre ellos.
g) Las partes pueden alegar o probar la idoneidad de los testi-
gos propuestos lo que apreciará el instructor conforme a las reglas
de la sana crítica.
Si bien se les puede tomar juramento de decir verdad, las con-
secuencias de una declaración falsa en sede administrativa no con-
figura delito de falso testimonio por no ser aplicable el arto 448 del
Código Procesal. Ello implica una grave disminución del valor
probatorio de las declaraciones testimoniales de cargo siendo así
de mayor importancia otras pruebas como la instrumental o la
informativa. 21

:: GoRDILLO, Agustín, op. cit., t. 4, pág. VII-24.


-,
30 GRACIELA MONTESI

D. Prueba confesional y documental

Si bien el Reglamento en su arto 53 no admite la prueba confe-


sional tanto del particular como de un órgano de laAdministración.
admite la posibilidad de que se produzca la confesión voluntaria.
En relación a la prueba documental el principio es que los inte-
resados pueden presentar cualquier tipo de documentos, ya fuere:c.
públicos o privados, emitidos en nuestro país o en el extranjero. S:
los documentos estuvieren redactados en idioma extranjero, deberi.
pedirse su traducción por profesional matriculado (art. 28, RLNPA .
No será necesario adjuntar los documentos originales o testimo-
nios expedidos por escribanos o autoridades judiciales o adminis-
trativas competentes, pudiendo presentarse los originales para 81:
cotej o y certificación por la autoridad administrativa, dej ándose
copia en el expediente (art. 27, RLNPA).

E. Prueba pericial

El arto 54 del RLNPA establece que los administrados puede:::.


proponer a su costa peritos a fin de indagar sobre el conocimien-
to o apreciación de algún hecho que requiera conocimientos téc-
nicos, artísticos o prácticos especializados. En cambio la Adm:.-
nistración deberá abstenerse de designar peritos de su partE
excepto que ello fuere necesario para la debida sustanciación dE:
procedimiento.
Si bien en relación a esta prueba el RLNPA prevé un proced:.-
miento reglado y formal parala designación, presentación del CU~
tionario, aceptación del cargo y término para producir el infOllI:::
(arts. 55, 56y 57, RLNPA), debe prevalecer el principio delinfo::--
malismo y admitirse en consecuencia, la posibilidad de que el po:-
rito realice la diligencia y presente su dictamen en el expedier.:-:,
sin otro trámite, aun cuando no hubiera sido designado.
En cuanto al objeto de la prueba pericial, el principio es el :ic:
amplitud y flexibilidad probatorias en tanto la actividad admir.:...,,-
trativa está orientada a la búsqueda de la verdad material.
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS 31

IX. PRODUCCIÓN y VALORACIÓN DE LA PRUEBA

Entendemos que la prueba debe ser admitida por los funcio-


narios que intervienen en la tramitación del expediente adminis-
trativo. Así en el caso del sumario administrativo, si se ha desig-
nado un instructor que maneje directamente el procedimiento, en
virtud del principio de inmediación procesal, será a él a quien co-
rresponde adoptar las medidas sobre admisión o rechazo de las
pruebas propuestas. En ausencia de funcionario designado al efecto
y para asegurar el principio de informalismo en el procedimiento y
evitar dilaciones, serán encargados de recibir la prueba aquellos
funcionarios de la repartición donde se tramitare el expediente. 22
El mismo funcionario que admite una prueba debe determinar
su modo de producción, esto es, lugar, tiempo y forma en que la
diligencia probatoria habrá de practicarse: citación de los testigos
con indicación del día, lugar y hora de las audiencias, requerimien-
tos de los informes del caso a las oficinas públicas o privadas, en-
vío de interrogatorios a los funcionarios que pueden contestar por
escrito, designación de peritos, etcétera.
La producción material de la prueba debe realizarse siempre
con el control del interesado, ya sea de su propia prueba o la de
la Administración o de terceros, por lo cual deberá éste ser notifi-
cado de las diligencias a practicar.
Puede también producirse privadamente la prueba y luego
aportarla al expediente sin perjuicio del derecho que le asiste a la
Administración de verificar la prueba producida y en su caso man-
darla a producir nuevamente con su participación y control. En
general la producción privada de la prueba tiende a simplificar el
procedimiento, evitando a la Administración más complicadas
diligencias de prueba, si es que las así producidas le satisfacen; si
ello no ocurre le queda siempre la posibilidad de disponer la pro-
ducción formalizada de aquellas pruebas cuya producción priva-
da le provoque interrogantes. Las que no, se mantendrán en el
expediente y se apreciarán en la decisión.

~ C-}p..::m.LO, Agustín, op. cit., t. 4, págs. VII-lO y ss.


e

32 GRACIELA MONTES!

Otra variante enla producción de la prueba surge del arto 51 de:.


RLNPA23 referido a la posibilidad de delegar la producción de la
prueba en agentes públicos de la misma repartición si los hay eL
el domicilio del testigo o de otra repartición nacional, provincial e
municipal. También se aplica este principio de delegación en case
de pruebas que deban producirse fuera de la sede del organismo
donde se tramita el expediente (pericias, inspecciones, etc.), siem-
pre con el control del particular.
La apertura a prueba es una obligación de la Administracióc:
cuando el particular lo requiere, pero tanto la Administración com:
el administrado podrán producir pruebas en el expediente sin qUé
se encuentre formalmente abierto a prueba.
Así también consideramos que nada obsta a que tanto laAdmi-
nistración como el administrado produzcan pruebas luego de ter-
minado su periodo probatorio: en este caso no debe estarse a las
leyes formales del reglamento y se merituarán según las circUlli--
tancias del caso.
También puede hacerse valer en sede administrativa la prue-
ba producidajudicialmente, incluso aunque hubiere mediado i:r::.-
competencia del Juzgado y se hubiera declarado la nulidad de l~
actuaciones.
Como venimos afirmando, el particular tiene derecho aefectUE:
el control de toda la producción de la prueba, salvo norma exprE-
sa que disponga el secreto de parte de ella (como ocurre en los s'.:.-
marios administrativos) y siempre que tal restricciónsearazonabk
pues de lo contrario sería inconstitucional. La CSJN ha destacad:
el principio del adecuado control previo de la producción de la prue-
ba por el particular, señalando que si éste "no ha tenido OpOrtUE-
dad de [. .. ] controlar (la prueba) producida", como ocurre si se le ~
vista recién después de que la Administración haya producido~.:.

23 Se refiere al caso de testigos que no residan en el lugar de asien::


del organismo ante el cual se tramite y que debe decidir la cuestié=.
estableciendo que "[... ] se lo podrá interrogar en alguna oficina púb:':-
ca ubicada en el lugar de residencia del propuesto por el agente a qui~::
se delegue la tarea".
-
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS 33

propia prueba, hay violación de la garantía de defensa. 24 También


el reglamento nacional recepta este principio al indicar que toda
producción de prueba se hará con notificación de la audiencia o acto
procesal de que se trata, con una anticipación no menor de cinco
días. 25
Como corolario del derecho de los administrados de producir
y controlar la prueba, encontramos finalmente su necesaria par-
tici pación a los efectos de alegar sobre el mérito de la prueba pro-
ducida. El alegato es una parte esencial del derecho de defensa y
el arto 60 del RLNPA establece que una vez producida la prueba o
sustanciadas las actuaciones, la Administración debe dar trasla-
do al particular por diez días 26 para que ejerza el derecho constitu-
cional y legal de presentar alegato, pudiendo disponer la produc-
ción de nueva prueba en los siguientes casos: a) para mej or proveer,
y b) si ocurriere o llegare a su conocimiento un hecho nuevo. El
RLNPA también prescribe una suerte de preclusióndel plazo para
presentar el alegato, al disponer que vencido el mismo si no se pre-
sentaren los escritos correspondientes se dará por decaído el dere-
cho dejado de usar. Tal norma debe reputarse no escrita en aten-
ción a la primacía del principio del informalismo y a lo prescripto
en el propio reglamento, al contemplar la posibilidad de ampliar
la fundamentación de los recursos. 27
Finalmente resta abordar la valoración de la prueba enla que
la Administración no está sometida a reglas prefIjadas, lo que no
implica que su apreciación pueda ser totalmente discrecional ni
menos aún irrevisible y los superiores jerárquicos y jueces están
facultados para controlar la apreciación efectuada acerca de los
hechos, como elemento de la legitimidad del acto, y a revocar o
anularlos si reputan errónea aquélla. La apreciación administra-
tiva de los hechos debe a todo evento ser razonable, no pudiéndose

:.; CSJN, Fallos 247:724, 726.


:..: Art. 47 in fine del RLNPA.
:~ Cinco (5) días según la LPA de Córdoba.
: - Art. 77, segunda parte, del RLNPA.
34 GRACIELA MONTESI

desconocer arbitrariamente las pruebas aportadas al expediente.


Cabe destacar que el RLNPA en su arto 62 remite al arto 386 del
CPCN respecto ala valoración de la prueba, mientras que el arto 50
de la LPA de Córdoba refiere a "razonable criterio de libre convic-
ción" en la valoración.
En suma, entendemos que la prueba en sede administrativa
debe valorarse conforme a los mismos principios y reglas que en
sedejudicial.
Para finalizar, debe recordarse que en caso de duda debe estar-
se siempre a favor del administrado.

X. Los PLAZOS EN EL PROCEDIMIENTO ADMINISTRATIVO

En el procedimiento administrativo es indudable la importan-


cia que tiene el tiempo, generador y extintivo de situaciones jurí-
dicas, en cuanto constituye la base para determinar el cómputo de
los plazos que obligatoriamente deben observar el administrado
y la Administración en las distintas fases o etapas procedimenta-
les. 28 La obligatoriedad significa el deber de cumplir los plazos del
procedimiento y la facultad de exigir su cumplimiento, pero no debe
ser confundida con la "perentoriedad" ni con la "improrrogabili-
dad". La perentoriedad supone la caducidad o decaimiento del de-
recho dej ado de usar y se produce por el mero transcurso del tiem-
po sin necesidad de declaración judicial. La improrrogabilidad
alude a la imposibilidad de extender o ampliar los plazos procesa-
les.
En el sistema procesal administrativo, si bien tenemos el prin-
cipio de la obligatoriedad de los plazos también tenemos los de
prorrogabilidad o ampliación de los plazos (art. 1°, inc. e, aparta-
do 5, LNPA) dentro del cual podemos citar como ejemplo el dere-
cho que poseen los interesados de ampliar o mejorar los fundamen-
tos de los recursos interpuestos en cualquier momento, antes de la

28 Art. 1°, inc. e, apartado 1, de la LNPA.


LOS RECURSOS ADMINISTRATNOS 35

resolución29 yde no perentoriedad de los plazos, salvo el único caso


de excepción que es el referido a la interposición de recursos admi-
nistrativos(art.l°,inc.e,apartad06,LNPA).

Prórroga o ampliación de los plazos

Al consagrar la facultad de prorrogar o ampliar los plazos pro-


cesales de oficio o a pedido de parte, la ley de procedimientos ad-
ministrativos acoge el principio de la prorrogabilidad de los pla-
zos, lo que debe disponer la Administración Pública "antes del
vencimiento del plazo, mediante decisión fundada y siempre que
no resultaren perjudicados derechos de terceros". 30
Ahora bien, algunos autores 31 sostienen que siendo potestativo
de la Administración el otorgamiento o no del término ampliato-
rio, nada impide que se conceda la ampliación del plazo con poste-
rioridad a su vencimiento, supuesto no prohibido por el ordena-
miento jurídico administrativo ni tampoco contemplado en la
norma. Una vez concedida la prórroga, ésta se computa a partir de
la notificación del acto que la concede.

Caracteres particulares de los plazos32

a) Plazo para acudir a la instanciajudicial: el arto 25 de la LNPA


establece el plazo perentorio para acudir a lajusticia en noventa
(90) días hábiles judiciales, o sea que se trata de un plazo procesal
ajeno al trámite ante la administración pública. Dado que este
plazo puede ser suspendido por la interposición en término de re-

29 Art. 77, segunda parte, del RLNPA.


30 Art. 1°, ine. e, apartado 5, de la ley 19.549.
31 CASSAGNE, Juan Carlos ,Derecho administrativo, pág. 553; GORDILLO,
Agustín,op. cit., t. 4, pág. VIII-lO.
32 GORDILLO, Agustín, op. cit., t. 4, págs. VIII-ll y ss.
F

36 GRACIELA MONTE SI

cursos administrativos procedentes, o por el pedido de vista de las


actuaciones, pensamos que no es un plazo de caducidad.
b) Recurso presentado fuera de término: en lo que hace al plazo
para interponer recursos administrativos, pareciera ser perento-
rio pero prorrogable según surge del apartado 5 delinco e; no obs-
tante es un término que se suspende de pleno derecho ante el pedi-
do de vista de las actuaciones. Incluso si ha transcurrido el plazo
con su prórroga por suspensión automática o dispuesta por laAd-
ministración, todavía puede el particular interponer la denuncia
de ilegitimidad. En definitiva no debemos hablar de plazos pe-
rentorios en materia de interposición de recursos desde que laAd-
ministración está facultada para dar por decaído el derecho o no,
pero no se puede hablar de pérdida automática.
c) Caducidad de la instancia administrativa: en este punto, la
Administración tiene la facultad pero no el deber de declararla
ante la inactividad del particular que paralice por su culpa el pro-
cedimiento. Ahora bien, en caso de declararse la caducidad el par-
ticular no pierde ninguno de los derechos y pruebas en las actua-
ciones producidas y el plazo que hubiera existido antes empieza
a contarse de nuevo. Por tanto, tampoco se puede hablar de pe-
rentoriedad.
d) Derecho a presentar alegatos: tampoco estamos frente a un
plazo perentorio, puesto que si bien el arto 60 in fine del RLNPA
dispone que puede darse por decaído este derecho si no se presen-
tan los alegatos dentro de los diez (10) días, el arto 77 faculta al
particular a ampliar fundamentos en cualquier tiempo hasta el
momento de dictarse resolución.
Finalmente podemos concluir que el transcurso de los plazos:
a)permitealaAdministracióncontinuarconelprocedimiento;b)
impide en principio retrotraer etapas ya cumplidas; c) no hace per-
der a los particulares sus derechos, salvo los casos en que especial
y expresamente se disponga fundadamente lo contrario, como es
ahora el caso de la impugnación administrativa para agotar la vía
y acudir a lajusticia; d) no impide su prórroga incluso retroactiva, y
e)tampoco puede ser esgrimido para impedir el cuestionamiento
de la eventual ilegitimidad de los actos de la Administración.
-
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS 37

Cómputo de los plazos

Otra de las características esenciales de los plazos administra-


tivos es que son irretroactivos, lo que implica que empiezan a co-
rrer desde el primer día hábil siguiente al de su notificación y no
antes. 33 Ahora bien, antes de la sanción de la ley de procedimien-
tos administrativos los términos se computaban por días corridos
según la regla establecida por el Código Civil. Con la sanción de la
ley 19.549 tal situación ha variado, prescribiendo el arto 1°, inc. e,
apartado 2, que los plazos se deben contar "por días hábiles admi-
nistrativos salvo disposición legal en contrario o habilitación re-
suelta de oficio o a petición de partes". Se entiende por días hábiles
administrativos aquellos días en que trabaj a la Administración Pú-
blica: las ferias judiciales (enero y julio) son hábiles para la Admi-
nistración y por lo tanto los términos siguen corriendo; a la inver-
sa, puede haber días de asueto administrativo que no lo hayan sido
al mismo tiempo en lajusticia.
En relación a los plazos referidos a semanas, meses, años se
deberá tener en cuenta el tiempo natural de los mismos aplicando
el criterio del Código Civil (art. 25).

Cómputo de los términos

Volviendo al cómputo del plazo, éste se realiza desde el primer


día hábil siguiente al de la notificación cuando se trata de actos
administrativos de alcance particular, mientras que los reglamen-
tos (de alcance general) si no está fij ado en él desde cuando comienza
su vigencia, será obligatorio después de los ocho días siguientes al
de su publicación oficial.
Debemos distinguir: a) escritos presentados en las oficinas ad-
ministrativas: se deberá tener en cuenta el sello fechador, a falta
de éste deberá estarse a la fecha indicada en el recurso, y si éste no
la tuviera se tendrá por presentado en término por el principio

o,; Art. P, inc. e, apartado 3, de la LNPA.


-
38 GRACIELA MONTESI

mencionado que en caso de duda debe estarse a favor del adminis-


trado; b) en el caso de escritos presentados por carta o telegrama,
se tendrá como fecha de presentación la de la fecha de emisión y no
de recepción. Se considera en término la presentación hecha has-
ta la medianoche del último día; c) es válida también la presenta-
ción hecha ante escribano público en cuyo caso se tomará como fe-
cha la que surja del acta notarial.
El vencimiento de los plazos opera cuando finaliza el último día
hábil del término fijado en cada etapa del procedimiento. Sin em-
bargo, a través de un fallo dictado en el caso ''Fundación Universi-
dad Belgrano"34la Corte Suprema de Justicia de la N ación sostu-
vo que frente al formalismo moderado resultaba incongruente
negaren él lo que está permitido en el ámbito de lajusticia, lleván-
dose a cabo asíla aplicación supletoria de la norma del arto 124 del
CPCN. El criterio sustentado por la Corte era válido no sólo res-
pecto de los recursos contra actos administrativos que tramitaran
en la justicia sino que era extensible a todo el procedimiento ad-
ministrativo.
Finalmente, el decreto 1883/91 modificó el arto 25 del RLNPA
admitiendo expresamente la posibilidad de presentar escritos en
las dos primeras horas hábiles administrativas.

XI. INTERRUPCIÓN, SUSPENSIÓN Y REMISIÓN DE LOS PLAZOS


PROCESALES

La "suspensión" consiste en la detención del tiempo útil para


prescribir por causas concomitantes o sobrevinientes al nacimientc,
de la acción en curso de prescripción. Mientras actúa la causa que
opera la suspensión, el lapso que transcurre es inútil para prescri-
bir, pero en cuanto dicha causa cesa de obrar, el curso de la pres-
cripción se reanuda, sumándose al período transcurrido con ante-
rioridad a la suspensión.

34 ED, edición del 01/12/1978, pág. 2, considerando 8°, citado por C-\..,,-
SAGNE, Juan Carlos, Derecho administrativo, pág. 551.

LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS 39

En cambio, la "interrupción" consiste en la inutilización del


lapso transcurrido hasta ese momento. Consiguientemente, acae-
cido un hecho interruptivo de la prescripción, se requerirá el trans-
curso de un nuevo período completo, sin poder acumular el tiempo
anterior.
De lo expuesto resulta la diferencia que separa la interrupción
de la suspensión. Mientras ésta mantiene la eficacia de la prescrip-
ción pendiente, si bien detenida en su curso, la interrupción pro-
duce un efecto más intenso, borrando por completo el tiempo trans-
currido. 35
En la remisión el término se reinicia o vuelve a nacer a partir
de determinado momento teniéndose por no operado el transcur-
so que pudiera haber existido anteriormente del plazo.

Suspensión e interrupción de plazos por actuaciones


administrativas

La tramitación de actuaciones administrativas no originadas


en la interposición de recursos administrativos y que encuadren
directa o subsidiariamente en el marco de la LNPA, debe produ-
cir, a nuestro juicio, de acuerdo con lo dispuesto por el arto 1°, inc. e,
apartado 9, de la LNPA, la suspensión de los plazos legales y re-
glamentarios, incluso los relativos a la prescripción.
y ese efecto se debe generar aun cuando la gestión administra-
tiva padezca de los mismos vicios que la ley considera irrelevan-
tes para obstar el efecto interruptivo de los recursos (presentación
mal calificada, con defectos formales insustanciales o deducida
ante órgano incompetente por error excusable) o bien sea innece-
saria y siempre que ella no resulte ostensiblemente im proceden-
te.
Si el particular tiene pues el derecho de peticionar y la Admi-
nistración el deber de resolver, ¿por qué entonces, el ejercicio no

'.= CmLWIRA, Julio Rodolfo, op. cit., t. 1, pág. 95.


--
40 GRACIELA MONTESI

irrazonable de ese derecho no habrá de generar el efecto suspensi-


vo previsto por la norma?
No obstante, de lajurisprudencia de la Corte Suprema de Jus-
ticia de la N ación se desprende no sólo que las gestiones adminis-
trativas innecesarias "no obstan el curso de la prescripción", ni la
interrumpen, sino incluso, que aun cuando se trate de actuaciones
quedebenprecederalademandajudicial,ellastampocointerrum-
pen ni suspenden la prescripción. 36
También el alto tribunal ha dicho que si las presentaciones ad-
ministrativas fueron efectuadas ante un organismo incompeten-
te para pronunciarse sobre una determinada cuestión, el efecto
suspensivo de los plazos legales y reglamentarios, inclusive los
relativos a la prescripción no se produce, pues para ello es menes-
ter la intervención del órgano competente. 37
Sostuvo asimismo que el reclamo administrativo previo a la
demandajudicial carece de efecto interruptivo o suspensivo de la
prescripción cuando lo requerido ala autoridad administrativa no
guarda coherencia con lo pretendido en sede judicial. 38
En relación a las reclamaciones administrativas innecesarias
se ha decidido que la interposición de un reclamo administrativo
ante el órgano competente, aun cuando aquél fuese innecesario por
aplicación del arto 32 de la ley, pero no inoficioso por ser una arti-
culación posible del administrado no prohibida por el ordenamiento
procedimental, produce la suspensión de los plazos legales y regla-
mentarios, inclusive los relativos ala prescripción, razón por la cual
en tanto las actuaciones administrativas -practicadas con inter-

36 CSJN, "Mc Kee del Plata S.A.", Fallos 323:3351; "Díaz, José e
N ación Argentina", Fallos 307: 187; "Buenos Aires, Provincia de el Di-
rección General de Fabricaciones Militares", Fallos 316:439; "YPF e
Provincia de Buenos Aires", Fallos 293:427; citados por COMADIRA, J ulic
Rodoldo,op. cit., t. 1, pág. 96.
37 CSJN, "Compañía Azucarera Concepción", Fallos 322:496, citado po=-
COMADIRA, Julio R., op. cit., pág. 97.
38 CSJN, "Waiter Carlos", Fallos 320:2289.
-
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS 41

vención de autoridad competente-continúen, el plazo de la pres-


cripción sigue suspendido. 39

Interrupción de plazos por la interposición de recursos

La interrupción de un término se produce por la interposición


de un recurso, aunque éste contenga defectos formales o haya sido
mal calificado, o sea deducido ante órgano incompetente por error
excusable (art.10, inc. e, apartado 7, LNPA). Esta última disposi-
ción se relaciona no sólo con el principio del informalismo a favor
del administrado, sino también con las normas que imponen a la
Administración la obligación, en general, de intimar al particu-
lar a subsanar los defectos de sus presentaciones a fin de darles
trámite (art.10, inc. c, LNPA, y arts. 5°, inc. d, y 77, último párrafo,
RLNPA).40
Queda entonces perfectamente diferenciado, por un lado, el efec-
to del pedido de vista y de su concesión, consistente en la "suspen-
sión" de los plazos procesales para recurrir administrativamente
ypor el otro, el de la interposición del recurso administrativo, que
"interrumpe" los plazos del procedimiento.

Remisión de los plazos procesales

Conforme al arto 1°, inc. e, apartado 9, de la LNPA, las actua-


ciones practicadas con intervención del órgano administrativo
competente producen la suspensión de los plazos legales y regla-
mentarios' inclusive los relativos a la prescripción, "los que se
reiniciarán a partir de la fecha en que quedare firme el auto decla-
rativo de caducidad".

39 CNCAF, Sala IV, "Gallardo", 17/11/1998, citado por COMADIRA, Julio


Rodolfo , op. cit., pág. 97.
40 COMADIRA, Julio Rodolfo, op. cit., pág. 99.
42 GRACIELA MONTESI

En el plano administrativo se ha considerado que al expresar


la ley que los plazos se "reiniciarán", lo que significa que se inicia-
rán de nuevo, deberá considerarse remitido ellapso o tiempo trans-
currido antes de la iniciación de las actuaciones. Como se advierte
no se trataría de suspensión ni de interrupción. 41

XII. CADUCIDAD DE LAS ACTUACIONES ADMINISTRATIVAS

El procedimiento administrativo puede terminar en forma nor-


malo anormal. En forma normal, por acto administrativo expre-
so que resuelve la cuestión que determinó la existencia y desen-
volvimiento del procedimiento.
Las formas determinación que no respondan a esetemperamen-
to serán anormales o irregulares, entre ellas se halla la caducidad
de los procedimientos. 42
La ley regula el instituto de la caducidad estableciendo como
requisitos: a) paralización del procedimiento; b) por causa impu-
table al administrado, y c) por el lapso total de noventa (90) días,
debiendo notificarle al administrado al vencimiento de los prime-
ros sesenta (60) días que si su inactividad se mantiene por treinta
(30) días más se declarará la caducidad de oficio, archivándose el
expediente.
Resultan exceptuados de la aplicación de este instituto los si-
guientes trámites: a) los relativos a previsión social; b) los que la
Administración considerare que deben continuar por sus particu-
lares circunstancias, y c) aquellos en que, también a juicio de la
Administración, estuviere comprometido el interés público.
Debe interpretarse este instituto de caducidad de las actuacio-
nes armónicamente junto con el principio de "impulsión e instruc-
ción de oficio": se confía a la Administración la potestad valorativa
de acuerdo con los distintos grados de intereses públicos compro-

41 GORDILLO, Agustín, op. cit., t. 4, pág. VIII-28.


42 Art. 10, inc. e, apartado 9, de la LNPA, Yarts. 63 y 65 del RLNPA.
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS 43

metidos, el manejo de los procedimientos que ante ella se sustan-


cian.
La caducidad no opera de pleno derecho sino que debe ser de-
clarada de oficio. Ello implica el dictado de un acto administrati-
vo expreso que así lo disponga -emanado del órgano competente
para resolver la cuestión de fondo planteada en el expediente--que
debe notificarse al interesado y es recurrible.
La declaración de caducidad no impide al interesado ejercer sus
pretensiones en un nuevo expediente en el que podrá hacer valer
las pruebas ya producidas, no alterando los derechos sustanciales
que permanecen incólumes sin perjuicio de lo que corresponda por
imperio de la prescripción.
Asimismo, las actuaciones practicadas con intervención del
órgano competente producen la suspensión de todos los plazos le-
gales y reglamentarios, incluso los relativos a la prescripción, to-
dos los cuales se reinician a partir de la fecha en que quede firme el
auto declarativo de la caducidad.
Finalmente, la aplicación del instituto de la caducidad alaAd-
ministración debe descartarse dentro del régimen de procedimien-
tos nacional debiendo la Administración, luego de declararla, en-
viar las actuaciones a archivo. 43
En el ámbito de la leyde procedimientos administrativos de la
provincia de Córdoba el instituto de caducidad del procedimiento
estáprevistoenlosarts.113yss.Asemejanzadelaleynacionalse
prevé la declaración de oficio de la caducidad frente a la paraliza-
ción del trámite por el administrado por más de tres meses. En casos
de trámites iniciados por la Administración el término de la peren-
ción será de seis meses.

XIII. EL SILENCIO ADMINISTRATIVO Y EL DEBER DE RESOLVER

La contrapartida de la caducidad de las actuaciones por inacti-


vidad del particular, no es la caducidad de las actuaciones impu-

.;:3 COMADIRA, Julio Rodolfo, op. cit., pág. 103.


-
44 GRACIELA MONTESI

table a la Administración. El derecho establece que la inactividad


administrativa es el "silencio administrativo" que es dar carácter
decisorio a la falta de pronunciamiento de la Administración.
Cuando la Administración realiza su actividad, procurando el
interés general, debe hacerla con sumisión al bloque de legalidad,
dirigida al cumplimiento de los fines públicos de la forma más efi-
caz. De ahí que la labor de la Administración no pueda ser ni ile-
gal ni ineficaz. Por ello, es deber de la Administración decidir en
cada caso concreto. N o decidir o decidir fuera del plazo constitu-
yen actos irregulares de la Administración que peIjudican al par-
ticulary atentan contra la eficacia de la actividad de aquélla. Como
en el accionar diario, a veces, la Administración no resuelve, la
legislación nacional y la mayoría de las locales han contemplado
distintas soluciones ante la morosidad administrativa, porque.
de lo contrario, la carga que grava a la Administración Pública de
actuar y el derecho del particular a ese respecto vendrían a ser cier-
tamente ineficaces si los ordenamientos jurídicos no arbitrarar..
correlativamente los mecanismos correctivos. Si ante las situaci(~
nes de pasividad administrativa no se arbitraran remedios idón~
se configurarían situaciones de indefensión, toda vez que el part-
cular quedaría desprotegido frente a tal inactividad.
Las distintas técnicas legislativas para paliar la pasividad ac-
ministrativa se puedengraficar de la siguiente manera44 ;
1) Silencio negativo: pretensiones que requieran un pronun~.:..::­
miento expreso (art. 10, LNPA); supuestos en que es necesario ~_
reclamo administrativo previo (art. 31, modificado por ley25.3-±-.:::
y supuestos de denegación tácita de los recursos admimstratiFt::
(arts. 87, 91y98, reglamentación ala LNPA).
2) Silencio positivo, en caso que una norma asílo disponga (E..:""
10,LNPA).

44 HUTCHINSON, Tomás, "La inactividad de la Administración y su:'!:

trol", en Control de la Administración Pública, jornadas organiz¿:...:


por la Universidad Austral- Facultad de Derecho, Ediciones RAP. ::.-
As., 2003, pág. 161.
-
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS 45

3) Amparopormora(art.28,LNPA).
4) Queja(art. 71,RLNPA).
Todas estas técnicas tienen en común la pasividad administra-
tivay son todas necesarias, como lo veremos en detalle a continua-
ción.

A. El silencio negativo

La doctrina se mantiene unánime en cuanto a la naturaleza y


operatividad del silencio negativo. "El silencio es una denegación
presunta, una presunción legal y no un acto tácito o declaración
de vol untad administrativa; está montado en beneficio del parti-
cular y como una facultad suya, al cual, por consiguiente, corres-
ponde la opción, que expresamente se define, de impugnar el silen-
cio o de esperar resolución expresa (se entiende que para impugnar
luego ésta, si le conviene hacerlo), por cuanto lo que el silencio no
es, en todo caso, es una manera de pronunciarse de la Administra-
ción, a la cual se le recuerda su estricta obligación de resolver y de
hacerlo fundadamente". 45
El silencio administrativo, como principio, no se produce auto-
máticamente sino cuando el particular lo determine; no opera ope
legis, sino por voluntad del interesado. Ello encuentra excepción
en el reclamo administrativo previo en el orden nacional a partir
de la ley 25.344, supuesto éste en el que ante la omisión de la Ad-
ministración de resolver se configura el silencio aun contra la vo-
luntad del particular, quien no puede seguir esperando a que aqué-
lla cumpla con la obligación de resolver, quien debe actuar como
si en realidad el acto negatorio se hubiere cumplido.
Podemos a continuación señalar los requisitos generales para
que se configure el silencio negativ0 46 :

~5 GARcíA DE ENTERRiA, Eduardo, citado por HUTCHINSON, Tomás, "La


inactividad de la Administración y su control", op. cit., pág. 182.
"'" HUTCHINSON, Tomás, "La inactividad de la Administración y su con-
!Tol", op. cit., pág. 184.
aSi'

46 GRACIELA MONTESI

a) Demora de laAdministración porel transcurso del plazü_:c -::


resolver. En el silencio con efecto negatorio es procedimenta1n::e--:e-
necesario que, transcurrido el plazo legal que tenía para reso~-;-:::
la petición del particular, como mero presupuesto temporal, se c:c-
mine previamente alaAdministración para que, expresamer::¿ "
en un sentido u otro, se pronuncie dentro de un plazo determ:..=..=.-
do. De no cumplir la obligación legalmente impuesta, incurrir-¿ '2:.
mora.
b) Denuncia de la demora administrativa, exteriorizada po ~ ",.::
interposición del escrito de pronto despacho. Para que se produ.:-::.::
la mora administrativa es necesario que transcurra un deter= .-
nado plazo en que tal inactividad persista, tras el cual, fehacic-
temente, el interesado haya hecho ver a la Administración sUÍL~
gularidad, es decir, al solicitar -pronto despacho- que produz.::.=.
la debida resolución.
c) No siempre hace falta la denuncia de demora administra:-:-
va. En algunos casos, como en el sistema recursivo nacional, ve::.-
cido el plazo que tiene la Administración para resolver, el intere-
sado puede optar por la vía del silencio denegatorio sin necesida¿
que peticione pronto despacho.
d) La decisión del interesado de optar por el silencio. Lo hace e~
particular prefiriendo continuar el correspondiente trámite ad.rri.-
nistrativo o judicial, a esperar que la Administración resuelva.
Los principales casos de silencio expresamente legislados en e~
orden nacional son los siguientes47 :
a) Pretensiones que requieran un pronunciamiento concreto4E :
en este caso, transcurridos sesenta (60) mas hábiles, a menos que
una norma expresa fije un plazo menor, el particular podrá, sin
plazo, pedir pronto despacho. La subsistencia del silencio duran-
te treinta (30) días hábiles administrativos más, a partir del pedi-
do de pronto despacho, faculta al particular a considerar el silen-
cio como acto denegatorio expreso y continuar con otros remedios
administrativos y judiciales.

47 GORDILLO, Agustín, op. cit., t. 4, págs. VIII-35 y ss.


48 Art. 10 de la LNPA.
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS 47

b) Reclamo administrativo previ049 : es un remedio que se otor-


ga al particular orientado a lograr el restablecimiento de lajuri-
dicidad en la Administración Pública cuando su orden ha sido vul-
nerado. El individuo puede interponer sin plazo este reclamo. De
no existir pronunciamiento dentro de los noventa (90) días de pre-
sentado, el reclamante también sin plazo, requerirá pronto despa-
cho. Si el silencio continúa durante otros cuarenta y cinco (45) días,
ello permite al interesado considerar denegado su reclamo, pudien-
do iniciar la demanda, la que deberá ser interpuesta en los plazos
perentorios y bajo los efectos previstos en el arto 25 de la LNPA. Ya
vimos que el Poder Ejecutivo, a requerimiento del organismo in-
terviniente, por razones de complejidad o emergencia pública,
podrá ampliarfundadamente estos plazos, se encuentren o no en
curso, hasta un máximo de ciento veinte (120) Y sesenta (60) días
respectivamente.
c) Recurso de reconsideración50 : se puede considerar denegado
tácitamente sin necesidad de pedir pronto despacho, a partir de
treinta (30) días hábiles que se cuentan de tres maneras diferen-
tes: si se abrió a prueba y se presentó alegato, desde la presenta-
ción de éste; si no presentó alegato, desde el vencimiento del plazo
para hacerlo, y si no se abrió a prueba el recurso, el plazo de dene-
gación tácita se computa desde la interposición del recurso de re-
consideración.
d) Recurso jerárquic05l : el plazo para la producción del silencio
en el recurso jerárquico también es de treinta (30) días hábiles
administrativos que se computan, en caso de haberse ofrecido prue-
ba, del mismo modo que en el recurso de reconsideración. Pero en
caso de no haberse abierto a prueba el recurso el plazo de denega-
toria se computa no desde la interposición del recurso sino desde
la recepción del expediente por la autoridad competente.

49 Arts. 30 y 31 de la LNPA.
50 Arts. 86 y 87 del RLNPA.
51 Art. 91 del RLNPA.
---
48 GRACIELA MONTESI

e) Recurso de alzada52: este recurso tiene el mismo plazo de de-


negación tácita que el recurso jerárquico.

B. El silencio positivo

El silencio positivo tiende a proteger al interesado ante lainac-


tividad formal de la Administración e incentiva a ésta a resolver
de manera expresa si quiere evitar que lo pedido sea tácitamente
aceptado. La configuración del silencio ante la inactividad de la
Administración tiene por efecto la estimación de la petición dedu-
cida por el interesado.
Su operatividad es excepcional y subordinada ala existencia de
una normajurídica que concretamente le otorgue tal carácter.
Se sostiene que puede acarrear graves perjuicios alaAdminis-
tración, pues bastará, en muchos casos, la negligencia del funcio-
nario para que pretensiones tal vez desmesuradas sean estimadas.
Asimismo, se ha sostenido que su práctica es dudosa ya que, pro-
ducido el silencio con efecto positivo ¿cómo obligar a la Adminis-
tración a que ejecute dicho acto presunto?
N o obstante cabe reconocer que ofrecería una serie de ventajas
en los supuestos de licencias, aprobaciones o autorizaciones.

c. El amparo por mora


Finalmente, corresponde distinguir el instituto del silencio,
principalmente regulado por el arto 10 de la LNPA del amparo por
mora (art. 28, LNPA). Si bien ambos constituyen garantías para
el particular, el primero posibilita el acceso al proceso aunque la
Administración no haya dictado un acto expreso, el segundo "fa-
culta para exigir judicialmente una decisión administrativa ex-
presa", "uno posibilita huir del procedimiento administrativo, el
otro, seguir en él hasta que concluya con una decisión fundada y
expresa".

52 Art. 98 del RLNPA.


$

LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS 49

El amparo por mora no es otra cosa que una ordenjudicial de


pronto despacho de las actuaciones administrativas. Por medio de él
se posibilita a quien sea parte en el procedimiento administrativo
a acudir a la víajudicial a fin de que se emplace a la Administra-
ción a que cumpla con su cometido: decidir las cuestiones someti-
das a su resolución en un plazo que le fije eljuez. La decisión final
de éste no puede ser otra que "despache la Administración las ac-
tuaciones en forma expresa", no pudiendo esta última ampararse
en el silencio pretendiendo que decidió el asunto en esa forma.
En relación alos requisitos, trámite y demás cuestiones proce-
sales atinentes al amparo por mora, se desarrollarán en el Capí-
tulorespectivo.

D. Queja por defectos de tramitación e incumplimiento


de plazos

La queja es un reclamo administrativo que las partes interesa-


das en un procedimiento administrativo pueden interponer duran-
te su curso o sustanciación con el objeto de lograr que se cumplan
trámites omitidos o demorados o se realicen bienIos cumplidos de-
fectuosamente.
Como podemos ver, la inactividad de la Administración podrá
también ser controlada a través de la queja, cuya tramitación
será también materia de tratamiento en capítulos posteriores.
Para concluir, podemos decir que la regulación legislativa y
reglamentaria del silencio administrativo, constituye un positi-
vo instrumento a favor de la defensa de los derechos subjetivos e
intereses legítimos de los administrados, teniendo el mérito de
aportar un sistema particular de soluciones a una problemática
que, precisamente por su especificidad, requiere respuestas típi-
camente administrativas, con exclusión de interpretaciones ana-
lógicas. 53

53 COMADIRA, Julio R., op. cit., t. 1, pág. 223.


50 GRACIELA MONTESI

XIV. LA SUSPENSIÓN DEL ACTO ADMINISTRATIVO COMO


CONSECUENCIA DE LA INTERPOSICIÓN DE UN RECURSO
ADMINISTRATIVO

Tanto para la Administración como para los administrados


constituye un problema de gran trascendencia la cuestión relati-
va a determinar si los recursos que se promueven en sede adminis-
trativa acarrean en cada caso la suspensión del pertinente acto, o
bien, si por el contrario, su promoción no suspende el cumplimien-
to del acto administrativo.
En el plano teórico, este problema se vincula al reconocimien-
to de la ejecutoriedad como principio del acto administrativo, puesto
que de aceptarse el mismo la regla sería la no suspensión de los
efectos del acto a raíz de la interposición de un recurso. Desde otro
punto de vista, si se aceptara la tesis que reconoce efectos suspen-
sivos a los recursos deducidos en la órbita administrativa, es evi-
dente que los administrados dispondrán de un instrumento suma-
mente eficaz para defensa de sus derechos pero también es cierto
que se corre el riesgo de paralizar una actividad administrativa
legítima, que por imperio de su propia naturaleza exige que se
desarrolle sin intermitencias. 54
En nuestro país, parte de la doctrina apoyada en el principio de
ejecutoriedad del acto administrativo, que consiste en la facultad
atribuida por el ordenamiento jurídico a la Administración Pública
para disponer la realización o cumplimiento del acto administra-
tivo sin intervención judicial, acudiendo de ser necesario, a las
medidas de ejecución a fin de llevarlo a cabo, no acepta que la in-
terposición de un recurso en sede administrativa contra un acto

54 CASSAGNE, Juan Carlos, "La suspensión del acto administrativo como


consecuencia de la interposición de un recurso en sede administrati-
va",ED,41-997.
- -- -------.....
-.ii,~!li~~!~

LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS 51

tenga por efecto suspender su ejecución o cumplimiento, salvo tex-


to expreso que asílo autorice. 55
El arto 12 de la LNPA dispone que ''la fuerza ejecutoria" del acto
administrativo impide que los recursos interpuestos por los admi-
nistrados suspendan su ejecución y efectos, salvo que una norma
expresa preceptúe lo contrario. En vista que esta ley se inspira en
la doctrina que concibe a la ejecutoriedad como principio general
caracterizante del acto administrativo, consagra como derivación
lógica de él el efecto no suspensivo de la interposición de los recur-
sos administrativos.
En orden a lo expuesto, lajurisprudencia ha expresado que: a)
al carecer los recursos de efectos suspensivos, es procedente por
tanto la medida que se ej ecuta en base a los actos recurridos; b) al
no estar previsto normativamente el carácter suspensivo de los
recursos deducibles contra un acto de remoción, la Administración
pudo, efectivamente, desplazar al agente del ejercicio de sus fun-
ciones en el acto de notificarlo; c) dado que los recursos no tienen
efectos suspensivos, esta importante limitación debe ser compen-
sada con el estricto cumplimiento de dos exigencias básicas: noti-
ficar correcta e inmediatamente los actos de gravamen, y resolver
dentro de los plazos legales los recursos que contra ellos se deduz-
can. Una cosa es que las impugnaciones no suspendan ointerrum-
pan el procedimiento y otra, muy distinta, es que los recursos no
existan en dicho procedimiento; la intención del legislador no fue
suprimirlos sino acotar los efectos de su interposición. 56
N o obstante, la LNPA autoriza a la Administración a suspen-
der, de oficio o a petición de parte, la ejecución del acto por razones

55 MARIENHOFF, Miguel S., Tratado de derecho administrativo, t. 11, Bs.


As., 1966, pág. 381; DIEZ, Manuel Maria, Derecho administrativo, t. 11,
2a ed., Plus Ultra, Bs. As., 1976, pág. 276; CASSAGNE, Juan Carlos, "La
suspensión del acto administrativo como consecuencia de la interpo-
sición de un recurso en sede administrativa", op. cit.
56 CNCAF, SalaN, "SapagRoque, Alicia", 01/07/1986; Sala 111, "Tul a

Gómez, Mario", 11/05/1989; "Sociedad Industrial Como Ragor", 23/02/


1993, citados por COMADIRA, Julio R., op. cit., t. 1, pág. 238.

---- ~~---~---- -~-


52 GRACIELA MONTES!

de interés público, para evitarle perjuicios graves al interesado o


cuando se alegafundadamente una nulidad absoluta.
En estos tres casos de posible suspensión la decisión adminis-
trativa parece facultativa -dice "podrá"-, regulación criticada,
pues seha sostenido que silailegalidad es manifiesta, laAdminis-
tración no puede limitarse a la suspensión del acto, sino que debe
revocarlo.
Finalmente, cabe aclarar que sin la mediación de recursos ad-
ministrativos o pedidos de suspensión, igualmente resulta posible
ala Administración suspender los efectos por la vía oficiosa, cuando
ello está requerido por el interés público comprometido en lajuri-
dicidad, respetando el límite impuesto por el arto 17, segunda par-
te, de la LNPA. 57

57 Art. 17 de la LNPA: "El acto administrativo afectado de nulidad ab-


soluta se considera irregular y debe ser revocado o sustituido por ra-
zones de ilegitimidad aun en sede administrativa. No obstante, si el
acto estuviera firme y consentido y hubiere generado derechos sub-
jetivos que se estén cumpliendo, sólo se podrá impedir su subsisten-
cia y la de los efectos aún pendientes mediante dec1araciónjudicial de
nulidad".
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS 53

ACTIVIDAD DE AUTOEVALUACIÓN

1) ¿Puede dar un concepto de lo que significa un recurso admi-


nistrativo?
2) ¿Qué diferencias encuentra entre los recursos en el procedi:.
miento administrativo y en el proceso judicial?
3) ¿Qué tipo de reclamaciones conoce?
4) Distinga entre el reclamo previo a la demanda judicial y el
reclamo impropio.
5) Diferencie la mera denuncia administrativa con la denun-
cia por ilegitimidad.
6) ¿Qué requisitos debe contener un recurso administrativo y
quiénes están legitimados para interponerlo?
7) ¿Cuáles son los actos recurribles en sede administrativa?
8) Comente cuales son los efectos que produce en sede adminis-
trativa la interposición de un recurso.
9) ¿Qué entiende por "pedido de vista de las actuaciones admi-
nistrativas" y qué efectos produce?
10) Distinga los conceptos "notificación" y "publicidad" ya qué
clase de actos se refiere cada uno de ellos?
11) ¿Qué formas de notificación conoce?
12) ¿La notificación o publicidad de los actos hace a la validez o
a la eficacia del acto administrativo?
13) ¿A quién corresponde la carga de la prueba en el procedi-
miento administrativo?
14) Enumere los medios de prueba y exprese cuáles tienen más
importancia fundamentando su conclusión.
15) Distinga lo que significa admisión, producción, control y
valoración de la prueba en el procedimiento administrativo.
16) ¿Qué principios rigen en materia de plazos administrativos?
17) ¿Qué son los días hábiles administrativos?
18) ¿Cómo se computa el nacimiento y el vencimiento de un pla-
zo administrativo? ¿Cuál es el plazo de gracia para presentar un
escrito?
19) Distinga "suspensión, interrupción y remisión" de los pla-
zos procesales.
-
GRACIELA MONTESI
54

20 ) ¿Cuáles son los requisitos para que proceda la caducidad de


la instancia administrativa?
21) ¿Qué trámites están exceptuados de la aplicación de este
instituto?
22 ) ¿Qué remedios legales tiene el particular para paliar la in-
actividad de la Administración?
23) ¿Qué entiende por silencio administrativo Yqué significa-
do tiene para la ley de procedimientos administrativos?
24) La interposición de un recurso en sede administrativa, ¿pro-
duce por síla suspensión de los efectos del acto?
25) ¿En qué hipótesis la Administración puede de oficio o a pe-
dido de parte suspender los efectos de un acto?
Capítulo IX
LOSRECURSOSADNONITSTRATIVOS
EN EL ORDEN PROVINCIAL

Por Ignacio M. Vélez Funes


y Liliana N. Villafañe

Sumario: 1. Recursos administrativos. Clases. n. Re-


curso de reconsideración. nI. Recurso jerárquico. IV.
Recurso de alzada. V. Queja o recurso directo. VI. Re-
curso de revisión. VII. Aclaratoria. VIII. Efectos de los
recursos administrativos. IX. Reclamo administrativo
previo. X. Derechos reconocidos en la ley N° 8835.
XI. Amparo por mora. XII. Relevancia del agotamien-
to de la vía administrativa. XIII. Hábeas data. XIV.
Acceso al conocimiento de los actos del Estado (ley N
8803). XV. Regímenes recursivos especiales.

l. RECURSOS ADMINISTRATIVOS. CLASES

La doctrina ha elaborado varias clasificaciones de los recursos


administrativos teniendo en cuenta, por ejemplo, su finalidad,
objeto, causa y clase.
Sin embargo, la clasificación que se considera más útil desde
el punto de vista teórico-práctico es la que distingue tres tipos de
recursos: ordinarios, especiales y extraordinarios o excepciona-
les.
56 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

Héctor Jorge ESCOLA1 considera que ''los recursos ordinarios son


aquellos que revisten un carácter genérico, es decir, que no han sido
establecidos para situaciones determinadas, sino que pueden plantear-
se en todos los casos, excepto que exista una disposición que prevea,
exclusivamente, un cierto tipo de recurso para un supuesto dado [... ]".
En cambio, los recursos especiales, "son aquellos que sólo pue-
den plantearse enlos casos expresamente previstos por la ley, que
es la que especifica, concretamente, cuál será el recurso admisible,
pudiendo también prever su tramitación".
El autor antes referido considera que los recursos extraordina-
rios o excepcionales "son aquellos que proceden en casos particu-
lares, cuando no existe mérito ya para el planteamiento de los re-
cursos ordinarios o especiales, principalmente por el hecho de haber
quedado firme el acto administrativo observable [... ]".
En este capítulo nos referiremos a los recursos ordinarios y ex-
traordinarios previstos en la Ley de Procedimiento Administrati-
vo de la Provincia de Córdoba N° 6658 (t.o. de la ley 5350 -B.O.
del 24/11181), con las modificaciones incorporadas sucesivamen-
te por las leyes 7204 (B.O. del 30/11184), 7598 (B.O. del 16/11/87),
7911 (B.O. del 20/07/90) y 8248 (B.O. del 15112/92), para todo el
ámbito de actuación administrativa de la Administración central
o descentralizada.

11. RECURSO DE RECONSIDERACIÓN

El recurso de reconsideraciónes "la vía recursiva mediante lacua!


se impugna un acto ante el mismo órgano emisor, con la pretensión
de que lo revoque, sustituya o modifique por contrario imperio". 2

1 ESCOLA, Héctor J., Tratado general de procedimiento administrati-

vo, Depalma, Bs. As., 1995, págs. 261 y 262.


2 ILDARRAZ, Benigno - ZARZA MENSAQUE, Alberto R. - VIALE, Claudio Mar-
tín, Derecho constitucional y administrativo, 2a ed. act., Eudecor,
Córdoba, 2001, pág. 640.
w -----~

LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN PROVINCIAL 57

El acto administrativo definitivo, es decir aquel que resuelve


el fondo de la cuestión, una vez notificado podrá ser cuestionado
mediante el recurso de reconsideración.
Respecto ala categoría de acto administrativo precedentemente
referida, la Sala Contencioso Administrativa del Tribunal Supe-
rior de Justicia ha expresado: "El acto definitivo es el que resuelve
el fondo de la cuestión; a diferencia de los actos interlocutorios o de
trámite que sólo resuelven las medidas procedimentales. Excepcio-
nalmente, los actos de trámite pueden asimilarse a los definitivos
cuando impiden totalmente la tramitación de la cuestión que intere-
sa al administrado -archivo, caducidad de instancia, etcétera-".3
Este medio impugnativo podrá ser planteado por la persona que
alegue la afectación o lesión a los derechos subjetivos o intereses
legítimos, argumentando que el acto administrativo adolece de
vicios que lo invalidan.
El recurso de reconsideración, en el orden provincial, es obli-
gatorio para agotar la vía administrativa, aun cuando se preten-
da cuestionar un acto administrativo dictado por la autoridad com-
petente para decidir en última instancia, a diferencia del orden
nacional en que es optativo su empleo por el interesado recurren-
te.
Por ello, el Superior Tribunal de Justicia, a través de la Sala
Contencioso Administrativa, expresó: "Los actos administrativos
cuya anulación se pretende en esta sede, emanaron de la autoridad
con facultad para decidir en última instancia. El actor, a los fines
de agotar la vía administrativa, debió interponer recurso de recon-
sideración (arts. 77 y 87, ley 6658) [ ...j. 4
Según lo determina el arto 80 de laley 6658, este medio impug-
nativo deberá interponerse por escrito dentro del plazo de cinco días
hábiles administrativos contados a partir de la notificación del acto
que se impugne.

3 Sentencia N° 148, del 13110/2000, en autos "Marcoletta, Juan Carlos


el Provincia de Córdoba - plena jurisdicción", Foro de Córdoba, Suple-
mento de Derecho Administrativo y Constitucional, N° 3, pág. 118.
4 "García, Rubén José cl Provincia de Córdoba", 20/09/1984.
58 IGNACIO M_ VÉLEZ FUNES - LILIANA N_ VILLAFAÑE

El recurso deberá plantearse por ante la misma autoridad que


dictó el acto administrativo, por escrito y fundado, sin obligación
de patrocinio letrado.
Se deberá expresar el derecho subjetivo o interés legítimo que
se considera vulnerado, el vicio que adolece, expresando las razo-
nes fácticas y jurídicas que lo fundamentan y la pretensión en tér-
minos claros y precisos.
En el ámbito que nos ocupa, no se requiere el patrocinio letrado
para la interposición del recurso, resultando criticable esta cuestión
en virtud de su obligatoriedad para agotar la vía administrativa en
otros recursos administrativos.
Es decir, teniendo presente que el recurso de reconsideración
es necesario para agotar la vía administrativa y que debe inter-
ponerse de manera fundada, debería exigirse el patrocinio letra-
do a los fines de salvaguardar el pleno ej ercicio del derecho de de-
fensa.
Por regla general, el recurso de reconsideración será resuelto
por la misma autoridad de la que emanó el acto impugnado, sin
sustanciación, es decir, sin que el procedimiento se abra a prueba,
salvo cuando se tratare de la impugnación de decisiones definiti-
vas dictadas de oficio por la administración.
El acto administrativo que decide respecto al recurso de recon-
sideración podrá ser impugnado por medio del recurso jerárquico,
si se trata de una organización centralizada, o del recurso de alza-
da, si se trata de una entidad autárquica.
Amanera de conclusión, y teniendo como base las normas que
regulan este medio impugnativo, es posible la formulación del si-
guiente esquema conceptual:
- Objeto del recurso: es un acto administrativo definitivo o aquel
que sin tener esta característica impide la prosecución del trámite.
-Sujeto: tiene legitimación activa el titular de un derecho sub-
jetivo o un interés legítimo. El mero o simple interés no legitima
al recurrente para proponerlo como medio de impugnación de un
acto administrativo.
-Plazo de interposición: cinco días hábiles administrativos con-
tados a partir de la notificación del acto administrativo.
- c

LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN PROVINCIAL 59

-Plazo para resolver: treinta días hábiles administrativos (art. 67,


inc. h). Vencido éste sin que la Administración se expida, yno más
allá del término de tres meses, se deberá plantearpronto despacho,
a partir del cual comienza a correr un nuevo plazo de veinte días
hábiles administrativos para resolver; vencido el mismo, el admi-
nistrado queda habilitado para continuar con la vía recursiva que
por derecho corresponda.
-Autoridad: se interpone y será resuelto por la misma autori-
dad que dictó el acto.
-Forma: por escrito, fundadamente, sin exigencia del patroci-
nio letrado.
- Trámite: por regla general, sin sustanciación.
-Carácter: obligatorio para agotar la vía administrativa.
-Normativa aplicable: arts. 70, 77, 80, 81y82 de la ley 6658 y
sus modificaciones posteriores.
La Sala Contencioso Administrativa del Tribunal Superior de
Justicia, respecto al medio impugnativo analizado, ha expresado:
"El recurso de reconsideración debe interponerse ante la autoridad
de la que emanó el acto, procurando que dicha autoridad conozca
inmediata y directamente la oposición del administrado. Ello por
cuanto se trata de una exigencia formal esencial, en tanto la ley de
procedimiento administrativo provincial ha reducido a la 'errónea
designación' la enumeración de las formalidades excusables enel
trámite de los recursos (art. 79, ley 6658)[.. .] Los recursos deben in-
terpretarse según la intención del recurrente, máxime cuando la im-
pugnación administrativa es interpuesta porel administrado sin
patrocinio letrado, conforme la autorización legal que prevé el
arto 77 in fine de la ley 6658 [. ..J'. 5
Respecto a los plazos establecidos por la ley para plantear los
recursos administrativos, el Tribunal Superior de Justicia, Sala
Contencioso Administrativo, expresó: "El principio delInforma-
lismo no es aplicable al procedimiento recursivo cuya esencia es

5Sentencia N° 55, del 30/05/2001, en autos "Toranzo, Eduardo Anto-


nio d Estado Provincial- Plena jurisdicción" ,Foro de Córdoba, Suple-
mento de Derecho Administrativo y Constitucional, N° 6, pág. 186.
60 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

eminentemente formalista, salvo norma expresa o razonable-


mente implícita que lo autorice. Así, no resulta de aplicación tal
principio cuando hubiere vencido el plazo que tiene el adminis-
trado para interponer un recurso, que no puede ser subsanado con
posterioridad. Es que los plazos administrativos obligan por igual
a la Administración Pública ya los interesados en el procedimien-
to (art. 63, LPA) Y el vencimiento de los plazos que en la ley 6658 se
acuerdan a los administrados durante el procedimiento, hace de-
caer el derecho a efectuar las presentaciones del caso con posterio-
ridad [. ..T'. 6

111. RECURSO JERÁRQUICO

El "recurso jerárquico comporta un verdadero poder de revisión


de legitimidad y de oportunidad llevado a cabo por el superior je-
rárquico del órgano administrativo que dictó el acto objeto de im-
pugnación".7
Previo a la interposición del recurso jerárquico, debe necesaria-
mente --en el orden provincial- plantearse el recurso de recon-
sideración obligatoriamente.
Por ello, es factible que se produzcan diversas situaciones:
a) Que la Administración acoj a el recurso de reconsideración
planteado: en ese supuesto desaparece el agravio y por ende con-
cluye la etapa recursiva.
b) Que la Administración rechace expresamente el recurso de
reconsideración: en esta hipótesis el interesado cuenta con el pla-
zo de diez días hábiles administrativos a partir de la notificación,
para plantear el recurso jerárquico por ante la misma autoridad
de la que emanó el acto y quien deberá concederlo al superior com-
petente.

6 Sentencia N° 40, del 25/04/2002, en autos "Luna, Myriam del Valle el


Provincia de Córdoba - Plena jurisdicción" ,Foro de Córdoba, Suple-
mento de Derecho Administrativo y Constitucional, N° 9, pág. 150.
7 TSJ, sentencia N° 36, del 25/04/2002, en autos "Carranza, Daniel cl
Tribunal de Disciplina Notarial- P.J.".
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN PROVINCIAL 61

c) Que la Administración deniegue el recurso de reconsidera-


ción: si el recurso jerárquico fue planteado en forma subsidiaria,
se elevarán las actuaciones al superior a los fines de continuar con
el trámite. En este supuesto, el interesado podrá ampliar los fun-
damentos del recurso pero no será factible esgrimir nuevas preten-
SIOnes.
d) Que la Administración no resuelva en el plazo legal-treinta
días hábiles administrativos-el recurso de reconsideración: se de-
berá interponerpronto despacho, y vencido el plazo adicional (vein-
te días) sin que la Administración se expida, se considerará dene-
gado tácitamente y comenzará a correr el plazo de diez días para
plantear el recurso jerárquico.
La Administración cuenta con el plazo de treinta días hábiles
administrativos para resolver el recurso jerárquico o cualquier otro
(art. 67, inc. h, ley 6658). Vencido éste sin que la autoridad se ma-
nifieste expresamente, deberá plantearse pronto despacho, y ven-
cido el plazo adicional queda agotada la vía administrativa.
El régimen de pronto despacho se encuentra legislado en el arto 70
de la Ley de Procedimiento Administrativo Provincial N° 6658.
Resultan aplicables al recurso jerárquico las siguientes normas:
arts. 70, 77y83delaley6658.

IV. RECURSO DE ALZADA

El recurso de alzada es "aquel que resuelve el Poder Ejecutivo


contra el acto administrativo de las autoridades superiores de un
ente descentralizado. Es indudable que si el órgano que dictó el acto
objeto de impugnación es un órgano descentralizado, no integra
como tal el orden jerárquico administrativo (la Administración
Central), por lo cual el órgano al que se le confiere aquel poder de
revisión o control no es, con propiedad, su superior jerárquico."8

8TSJ, sentencia N° 36, del 25/04/2002, en autos "Carranza, Daniel d


Tribunal de Disciplina Notarial- P.J.".
62 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

Resulta importante recordar, previo al análisis del medio im-


pugnativo que nos ocupa, que los organismos descentralizados tie-
nen una relación de "tutela o control administrativo" con la admi-
nistración centralizada_
Uno de los medios de efectivizar ese controlo tutela, es elrecurso
de alzada.
Cuando un organismo autárquico dicta un acto administrati-
vo definitivo que afecta derechos subjetivos o intereses legítimos,
debe cuestionarse mediante el recurso de reconsideración.
Si el recurso de reconsideración es desestimado, el interesado
podrá plantear el recurso de alzada o la demanda contencioso ad-
ministrativa. Si opta por ésta, deberá accionaren contra del orga-
nismo descentralizado.
La Sala Contencioso Administrativa del Tribunal Superior de
Justicia ha resuelto: "Las acciones contencioso administrativas aun
cuando el Poder Ejecutivo intervenga resolviendo un recurso de
alzada, deben incoarse contra los entes autárquicos". 9
"Corresponde hacer lugar a la excepción de legitimatio ad cau-
sam pasiva por cuanto en lajurisdicción contencioso administra-
tiva existe el impedimento procesal de accionar en contra del Es-
tado Provincial cuando los actos originarios (denegatorios o
conculcatorios de derechos o intereses legítimos) emanan de enti-
dades autárquicas [' ..J' .10
Igual a lo que acontece con el recurso jerárquico que ya se ana-
lizó en el punto anterior, es posible que se presenten distintas si-
tuaciones:
a) Interpuesto el recurso de reconsideración, es acogido, desapa-
rece el agravio y, por ende, concluye la cuestión debatida.
b) Interpuesto el recurso de reconsideración, la entidad lo de-
niega expresamente: el interesado podrá plantear en el plazo de

9 Sentencia N° 8, del 30105/1991, en autos "Gregorio Riano e Hijos


S.R.L. el D.P.H.".
10 Sentencia N° 81, del 24/10/1990, en autos "N assivera y Bolaño S.R.L.
el Provincia de Córdoba".
pi

LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN PROVINCIAL 63

diez días hábiles administrativos contados a partir de la notifica-


ción, el recurso de alzada.
c) Si el recurso de alzada se interpuso en subsidio al de recon-
sideración, denegado éste se elevarán las actuaciones a los fines
de resolver aquél.
e) Que la Administración no resuelva en el plazo legal el recurso
de reconsideración: se deberá interponer pronto despacho, y ven-
cido el plazo adicional (veinte días hábiles administrativos) sin que
la Administración se expida, se considerará denegado tácitamen-
te y comenzará a correr el plazo de diez días para plantear el re-
curso de alzada o bien iniciar la acciónjudicial contencioso admi-
nistrativa.
El acto administrativo definitivo que se cuestiona a través del
recurso de alzada debe ser dictado por el órgano superior de la en-
tidad autárquica, por lo que deberá tenerse en cuenta las disposi-
ciones de cada estatuto respecto a esta cuestión y sobre la proce-
dencia del trámite de este recurso ante esa entidad descentralizada
y autárquica.
El órgano competente para resolver el recurso de alzada es la
máxima autoridad de la Administración Central, es decir, el Go-
bernador de la Provincia, quien deberá correr previa vista al Fis-
cal de Estado, a los fines de que éste realice el control de legalidad
en forma previa y obligatoria.
Teniendo en consideración las relaciones que existen entre el
organismo descentralizado y la Administración Central, el control
o "tutela" que ésta realiza a través del recurso de alzada se circuns-
cribe a la legitimidad o legalidad del acto, no pudiendo efectuarse
respecto a la oportunidad, mérito o conveniencia:
"[.. .] el alcance de la actividad que despliega el órgano revisor se
limita tamb ién a verificar la adecuación del acto al ordenamiento
jurídico ya ratificarlo o dejarlo sin efecto, sin poder modificarlo en
todo o en parte, porque la función del órgano que decide el recurso
no puede sustituir a aquél al que se le ha otorgado la competencia
para actuar. Por el contrario, debe limitar su actividad a ratificar
el acto, si es legítimo, y a dejarlo sin efecto en caso contrario [. ..]" "[. ..]
Los motivos se limitan sólo a la legitimidad del acto, procediendo
LOS RECURSOS ADMINISTRATNOS EN EL ORDEN PROVINCIAL 65

Respecto a su naturaleza, es posible advertir diferentes inter-


pretaciones:
a) La queja, para una corriente de opinión, es considerado un
"recurso" ya que se encuentra prevista en el arto 86 de la ley 6658,
en el capítulo denominado "De las impugnaciones".
Por esta razón, si el recurrente eligió la vía administrativa, no
resulta factible desistirla para promover la acciónjudicial. Ello
trae la siguiente consecuenciajurídica, especialmente cuando se
trata de la denegatoria del recurso de alzada: "[... ] la autoridad com-
petente de última instancia (art. 6°, ley 7182), imponiéndose al
administrado la carga del agotamiento de la vía administrati-
va, a través de la queja, previo a la interposición de la demanda
(art.178, Consto Provincial). Esto es así por cuanto la sola denega-
ción por el órgano autárquico del recurso de alzada interpuesto, no
goza de la nota de último acto administrativo incontrolable en su
sede, para habilitar la competencia de los jueces (arts. 1°, inc. a, y6°,
ley 7182)"P
Al ser considerado un "recurso" debe interponerse necesaria-
mente la quej a a los fines de agotar la vía administrativa, ante la
denegatoria del recurso de alzada.
b) Otra corriente opina que la quej a no es un recurso sino una
reclamación facultativa, ya que a través de la misma no se preten-
de revocar o modificar un acto administrativo. En consecuencia,
no es necesario su planteo para agotar la vía administrativa en el
supuesto de denegatoria del recurso de alzada.
La normativa aplicable la constituye el arto 86 de la Ley de Pro-
cedimiento Administrativo.

VI. RECURSO DE REVISIÓN

El recurso de revisión tiene carácter extraordinario ya que es


el medio previsto por el ordenamiento jurídico para cuestionar un
acto administrativo firme.

13 Dictamen de Fiscal de Cámara ContenciosoAdministrativa,N"239/1993.


a:
-
66 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

Se debe tener presente que el acto administrativo firme es aque.


que no ha sido impugnado en tiempo oportuno o ha sido consentJ-
do por el interesado.
Atento su naturaleza extraordinaria, se encuentran previst2.E
las causales para su procedencia en el arto 89 de la Ley de Proced:-
miento Administrativo.
Si se funda el recurso de revisión enla causal prevista en elinc. Ce
del arto 8°: "cuando resultaren contradicciones en su parte dispo-
sitiva", deberá plantearse en el término de diez días hábiles admi-
nistrativos contados a partir de la notificación.
El motivo referido precedentemente no constituye en sí miSIDG
una causal de revisión ya que podría invocarse en otros medio~
recursivos y, además, el plazo establecido por la norma para su in-
terposición demuestra que no se trataría de un "acto administra-
tivo firme".
El inc. b del arto 89 describe como causal de revisión: "Cuand.c
aparezcan documentos de valor decisivo para la resolución del asun-
to' ignorados al dictarse el acto o en tal momento de imposible apor-
tación al expediente [ .. .J'.
Los documentos alas que hace mención la norma deben tener
estrecha vinculación e importancia con la decisión de la cuestión
Además, la falta de incorporación de la documentación a las
actuaciones administrativas no debe ser imputable ala culpa, dole
o negligencia del interesado.
El inc. c del arto 89 determina otra causal de revisión, que con-
siste en "Cuando hubiere sido dictado fundándose en documentos
o circunstancias declarados falsos por sentenciajudicial firme [ ...j.
Frente a una decisiónjudicial firme dictada por autoridad compe-
tente necesariamente debe ceder la denominada "cosa juzgada
administrativa"14, para lo cual el ordenamientojurídico brinda una
herramienta: el recurso de revisión.

14 Conf. HUTCHINSON, Tomás, Régimen de procedimientos administra-

tivos, Astrea, Bs. As., 1992, pág. 153.


-
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN PROVINCIAL 67

El inc. d del arto 89 establece otra de las causales del recurso


extraordinario, motivo de análisis en esta ocasión: "Cuando hubiere
sido dictado mediante cohecho, prevaricato, violencia o cualquier
otra maquinación fraudulenta agrave irregularidad comprobada".
Por respeto al ''bloque de juridicidad" no resulta adecuado a dere-
cho mantener la "firmeza" de una decisión administrativa cuan-
do para su dictado han acontecido conductas delictivas.
En el supuesto de las causales descriptas en los incs. b, c y d, el
plazo para interponer el recurso de revisión es de veinte días de
"recob rarse o descubrirse los documentos o de que cesare la fuerza
mayor u obrar de tercero; o de comprobarse en legal forma los he-
chos indicados en los incs. c y d".
El recurso de revisión se interpone ante la misma autoridad que
dictó el acto administrativo. Debe expresarse con precisión y acre-
ditarse la causal que se invoca como fundamento del recurso.
En el supuesto de la causal regulada en el inc. d del arto 89, se
deberá demostrar-además-la existencia de unaresoluciónju-
dicial firme.
Las normas aplicables son los arts. 89 y 90 de la ley 6658.

VII. ACLARATORIA

Dentro del plazo de cinco días hábiles administrativos conta-


dos a partir de la notificación del acto administrativo, se podrá
solicitar-por escrito- aclaratoria a fin de que la autoridad que
dictó la decisión realice precisiones, corrija errores materiales o su-
pla algún ti po de omisión.
A través del pedido de aclaratoria se pretende precisar ciertos
aspectos del acto administrativo.
La doctrina cordobesa, respecto a este tema ha expresado: "La
cuestión que abarca la aclaratoria, que en su descripción teórica
aparece como sencilla, en la realidad no lo es tanto porque la deli-
mitación de la cuestión fáctica de la cuestiónjurídica no es tajante,
y siempre hay una zona en la que ambas quedan diluidas de ma-
nera tal que no es posible resolver una sin avanzar sobre la otra.
68 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

Cuando la base fáctica se funde en lajurídica, y para la precisión


sea necesaria una interpretación o calificaciónjurídica, ya no es la
aclaratoria la vía sino el recurso pertinente [' ..J'. 15
Resulta necesario destacar que la presentación de la aclarato-
ria no suspende ni interrumpe el plazo para interponer los
recursos que correspondan, ni menos la acción contencioso admi-
nistrativa posible en caso de haberse agotado la vía administrati-
va con el acto cuya aclaración se pretende por este procedimiento.
El arto 111 de la ley de procedimiento administrativo constitu-
ye la normativa aplicable.

VIII. EFECTOS DE LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS

Es preciso recordar que el acto administrativo goza de los si-


guientes caracteres: presunción de legitimidad, ejecutoriedad.
ej ecutividad, impugnabilidad y estabilidad.
Se presume-iuris tantum-que el acto administrativo ha sido
dictado de conformidad al ordenamiento jurídico, respetando el
bloque de juridicidad. Como consecuencia de ello, la Administra-
ción cuenta con atribuciones para disponer el cumplimiento del acto
administrativo en su sede (ejecutoriedad propia) o bien requerir
la intervención del Poder Judicial (ejecutoriedad impropia).
Respecto a esta cuestión, Héctor J. ESCOLA ha expresado: "[... :
si la presunción de legitimidad es fundamento suficiente de la eje-
cutividady ejecutoriedad de los actos administrativos no debe ol-
vidarse que esa ejecutividad y ejecutoriedad hallan también su
apoyo en la consideración de que la Administración Pública, al dic-
tarlos, obra como poder del Estado, desarrollando importantes fi-
nes de interés público, que no pueden ser diferidos. La propia fina-
lidad de la actividad de la Administración exige esa inmedi.ata
actuación de los actos administrativos dictados [... ]".l6

15 ILDARRAZ, Benigno - ZARZA MENSAQUE, Alberto R. - VIALE, Claudio Mar-


tín,op. cit., pág. 648.
16 ESCOLA, Héctor J., op. cit., pág. 261.
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN PROVINCIAL 69

La interposición de los recursos administrativos por parte le-


gitimada (impugnabilidad del acto) no provoca la suspensión de
los efectos del acto administrativo cuestionado, salvo que una nor-
ma expresamente dispusiera lo contrario, otorgando a los recur-
sos efectos suspensivos, o que el acto no tuviera presunción de le-
gitimidad por adolecer de nulidad manifiesta. 17
El arto 91 de la Ley de Procedimiento Administrativo recepta
el principio general antes enunciado y determina que la Adminis-
tración podrá disponer la suspensión de los efectos del acto admi-
nistrativo cuando pueda "causar ungrave daño al administrado
[' ..J' y se considerare que de la suspensión "no se derivará una le-
siónal interés público".
Al respecto la doctrina ha expresado: "[. ..] En principio, la in-
terposición de los recursos administrativos, es decir cuando el
interesado lo ha impugnado por razones de legalidad o de conve-
niencia y oportunidad ante la propia administración por efecto del
carácter de presunción de legitimidad y de la ejecutividad propia
de los actos, no cabe suspender su cumplimiento, salvo que la pro-
pia administración considere que con ello no se afecta el interés
público comprometido, dándosele entonces prevalencia al inte-
rés particular afectado, o bien porque con ello se produce un daño
irreparable. También los actos que adolecen de un vicio que impor-
ta una nulidad absoluta pierden su calidad de ser ejecutorios, por
lo mismo que constituye este supuesto una excepción al principio de
presunción de legitimidad [ .. .]' .18
Debemos tener presente, además, que el interés público debe
valorarse en relación a los daños y perjuicios que la suspensión de
los efectos del acto pueda causar ala comunidad.
Los posibles perjuicios (ya sea para el interesado o el interés
público) deben guardar una directa relación con los efectos del acto
administrativo de que se trata.

17 CASSAGNE, Juan Carlos, Derecho administrativo, t. II, pág. 223.


18 ILDARRAZ, Benigno - ZARZA MENSAQUE, Alberto R. - VIALE, Claudio Mar-
tín,op. cit., pág. 460.
70 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

IX. RECLAMO ADMINISTRATIVO PREVIO

La Ley de Procedimiento Administrativo de la Provincia de


Córdoba, en el Capítulo XVIII titulado "Régimen de demandas
judiciales contra la Provincia" regula lo atinente al reclamo admi-
nistrativo previo.
La persona que deba demandar ala Provincia de Córdoba, tie-
ne la facultad de formular un reclamo administrativo dirigido al
Poder Ejecutivo a través del ministerio que corresponda según la
materia o motivo de la pretensión que esgrimirájudicialmente.
El reclamo administrativo previo no resulta obligatorio, pero
ante el supuesto de que el interesado lo haya presentado, deberá
concluir su trámite antes de plantear la demandajudicial.
El reclamo deberá contener los "mismos hechos y derechos
que se invocarán en la eventual demandajudicial" y será resuelto
-previo dictamen de Fiscalía de Estado-porel Poder Ejecutivo.
El Poder Ej ecutivo cuenta con el plazo de sesenta días hábiles
administrativos, contados desde la presentación del reclamo, para
resolverlo.
Si transcurre el plazo señalado sin que la autoridad adminis-
trativa referida se pronuncie expresamente, el interesado podrá
requerir pronto despacho. Si transcurre el término de veinte días
hábiles administrativos sin que el Poder Ejecutivo se expida, se
podrá accionar directamente ante el Poder Judicial acreditando
el transcurso de los plazos referidos.
El último párrafo del arto 119 de la ley 6658 dispone claramen-
te que será necesario efectuar el reclamo administrativo previo
cuando así haya sido acordado o cuando exista alguna norma es-
pecial que asílo determine.
Al respecto la doctrina ha expresado: "La vía del reclamo admi-
nistrativo que se conoce como reclamación administrativa previa
se caracteriza porque, pese a ser optativo, no es necesario; por eso si
no es intentado no se pierde ningún derecho, y tampoco la cuestión
que es objeto del reclamo queda firme, pudiendo ser reclamada ul-
teriormente [ .. .]De todas maneras, cuando las provincias disponen
la vía de la reclamación administrativa previa, la misma es facul-
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN PROVINCIAL 71

tativa para los interesados, pero cuando es elegida, queda obligado


a agotarla sin perjuicio de la oportuna demandajudicial en caso
de denegatoria o incumplimiento" .19
Resulta importante destacar las interpretaciones efectuadas
por la doctrina y jurisprudencia respecto al alcance del "reclamo
administrativo previo" en relación al transcurso de los plazos de
prescripción.
La cuestión es analizada en base a la interpretación del térmi-
no "demanda" expresado en el arto 3986 del Código Civil.
La Cámara Contencioso Administrativa de 2a Nominación de
la Provincia de Córdoba ha expresado: "El reclamo administrati-
vo previo, cuando es condición impuesta por la ley para acceder a la
jurisdicción, interrumpe el término de la prescripción". 20
"El término 'demanda' utilizado por el arto 3986 del Código Ci-
vil, a los efectos de la interrupción de la prescripción debe ser toma-
do en sentido amplio, comprensivo de todo acto judicial, y ciertos
actos extrajudiciales igualmente formales, demostrativos de la vo-
luntad del acreedor de no abandonar su derecho y de su intención
de hacer valer su crédito. En consecuencia cabe atribuir efecto inte-
rruptivo del término de la prescripción al reclamo administrativo
efectuado por escrito y ante autoridad competente, y aun cuando
hipotéticamente no se reconociera dicho efecto al reclamo adminis-
trativo hecho en forma, debe aceptarse que el mismo constituye un
acto idóneo para exteriorizar en forma indubitable la voluntad
reclamatoria del pago de los daños, con la virtualidad suspensiva
asignada por el arto 3986, segunda parte, del Código Civil". 21

19 ILDARRAZ, Benigno - ZARZAMENSAQUE, Alberto R. - VIALE, Claudio Mar-


tín,op. cit., pág. 635.
20 Sentencia N° 30, del 23/04/1993, en autos "Llanes, Juan Carlos d
Provincia de Córdoba - plena jurisdicción", Sistema Argentino de In-
formática Jurídica, Sumario N° R10063.
21 TSJ, Sala Contencioso Administrativa, sentencia N° 120, del 11108/
1987, en autos "Linzoain, Horacio d EPOS", Sistema Argentino de In-
formática Jurídica, Sumario N° R732.
72 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

La Cámara Sexta Civil y Comercial de Córdoba, respecto a la


cuestión que nos ocupa, expresó: "En materia de prescripción libe-
ratoria, destacada doctrina sostiene que la reclamación adminis-
trativa sólo tiene efecto interruptivo cuando constituye un trámite
previo a la habilitación de la instanciajudicial, lo que no sucedía
en el sublite, toda vez que el accionante podía acudir a la Justicia
mediante la vía intentada sin necesidad de ocurrirpreviamente ante
el Estado, vía administrativa". 22
El profesor doctor Luis MOISSET DE ESPANÉs opina: "[...] aunque
las gestiones o reclamaciones de carácter administrativo no impor-
tan unademandajudicialni un reconocimiento de derecho porpart.f.
del Estado, se admite que pueden bastarpara interrumpir la pres-
cripción cuando ellas son exigidas por la ley como condición previa
para entablar la demanda judicial y que conservan ese efecto inte-
rruptivo, aunque dichas actuaciones administrativas sean nulas.
porque lo mismo habría quedado ya exteriorizada la voluntad con-
creta de no dejar prescribir el derecho[...J".23

X. DERECHOS RECONOCIDOS EN LA LEY N<> 8835 24

La ley W 8835 denominada "Carta del Ciudadano", al tratar e::


el Capítulo 1 (del Título Ir) los "Derechos de las personas en su re-
lación con el Estado" contempla en el arto 4°:
"Todas las personas en la provincia tienen derecho a: [. ..]
d) Recibir respuesta definitiva a la petición deducida contra al:-
tos administrativos definitivos que lesionen derechos subjetiw!
o que afecten derechos legítimos y que el reclamante considera..-.¿

22 Sentencia N° 156, del 01110/2002, en autos "Mariani, Juan Carlos,::


Provincia de Córdoba - daños y perjuicios",Actualidad Jurídica i!
Córdoba, N° 24, págs. 1438/1439.
23 MOISSET DE ESPANÉS, Luis, Interrupción de la prescripción por tÚ-

manda, UNC, Córdoba, pág. 26.


24 Ley 8835 (sancionada el 25/03/2000; promulgada el 27/03/2000. -:

publicada en B.O. del 28/03/2000).


...

LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN PROVINCIAL 73

que ha sido dictado con vicios que lo invalidan, dentro de un pla-


zo máximo de seis (6) meses calendarios computados desde el ini-
cio del trámite. Vencido este plazo, el administrado podrá solici-
tar, directamente, el avocamiento del titular del Poder Ejecutivo,
quien solicitará el envío de las actuaciones y -previa intervención
de Fiscalía de Estado-- resolverá la petición dentro de los treinta
(30) días siguientes [ .. .?
La Carla del Ciudadano, aun con deficiente uso del lenguaje
técnico, ha incorporado una nueva herramienta a favor de los ci u-
dadanos para obtener un pronunciamiento por parte de laAdmi-
nistración.
Si bien la intención del legislador es loable, resulta menester
realizar una serie de consideraciones respecto a la norma trans-
cripta en párrafos anteriores, a saber:
- se refiere a "petición deducida contra actos administrativos
definitivos", cuando en realidad el medio reconocido por la legis-
lación para cuestionarlos es el recurso administrativo;
- se encuentran legitimados los titulares de "derechos subjeti-
vos o que afecten derechos legítimos", a pesar de que los titulares
de las situaciones jurídicas subjetivas que cuentan con los medios
recursivos para cuestionar los actos administrativos que conside-
ren viciados son: derechos subjetivos e intereses legítimos.
Por ello, deberá interpretarse que el arto 40 se refiere a "intereses
legítimos" .
La norma establece que vencido el plazo de seis meses calenda-
rio el administrado "podrá" solicitar el avocamiento del titular del
Poder Ejecutivo, en forma directa ante el gobernador de la provin-
CIa.
La redacción de la norma no deja dudas respecto al carácter
optativo del pedido de avocamiento, por lo que no obliga al recu-
rrente instar su trámite como seha entendido en el recurso de queja
o directo para agotar la vía administrativa.
Además, es necesario que se haya cuestionado la validez de ac-
tos administrativos que afecten derechos subjetivos o intereses le-
gítimos, razón por la cual no sería procedente frente a otros supues-
tos.
-
74 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

Puede ocurrir que el titular del Poder Ejecutivo resuelva hacer


lugar al pedido de avocamiento y requiera el envío de las actuacio-
nes, pero transcurre el plazo de treinta días sin que emita decisión
expresa alguna.
¿Cuál es la conducta que debería seguir el administrado?
A pesar de que la ley 8835 no contempla expresamente este
supuesto, y efectuando un análisis general del sistema recursivo.
previsto en la Provincia de Córdoba, debería plantearse "prontc
despacho", enlos términos del arto 70 de la Ley de Procedimientc
Administrativo ante el mismo gobernador cuyo avocamiento fuf.
solicitado por el interesado ymientras no resuelva estará SUSpeIl-
dido el plazo de caducidad para promover cualquier acción conter:.-
cioso administrativa en sede judicial.

XI. AMPARo POR MORA

El arto 52 de la Constitución de la Provincia de Córdoba esta-


blece: "Para el caso de que esta Constitución, una ley u otra norma
impongan a un funcionario, repartición o ente público administra-
tivo un deber concreto a cumplir en un plazo determinado, toda per-
sona afectada puede demandar su cumplimientojudicialmente ..
peticionar la ejecución inmediata de los actos que el funcionario,
repartición o ente público administrativo se hubiera rehusado a
cumplir. Eljuez, previa comprobación sumaria de los hechos en un -
ciados, de la obligación legal y del interés del reclamante, puede li-
brarmandamientojudicial de pronto despacho en el plazo que pru-
dencialmente establezca."
La acción de amparo por mora de la administración receptada
en el arto 52 precedentemente transcripto, se encuentrareglamen-
tada en la ley 8508 en el ámbito de la provincia de Córdoba. 25
Al respecto, la Cámara Contencioso Administrativa de 2 a No-
minación de Córdoba ha expresado: "El arto 52 de la Constitución

25Ley 8508 (sancionada el 31/10/1995; promulgada el 13/11/1995, y


publicada en B.O. del 17/1111995).
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN PROVINCIAL 75

Provincial constituye una eficaz garantía instituida en protección


del administrado en su relación con la administración. Es que, como
lógica consecuencia del derecho de los ciudadanos de 'peticionar a
las autoridades', existe la obligación de la administración de res-
ponder (art. 19, inc. 9, de la Constitución Provincial), y tal respues-
ta obligatoriamente debe ser expresa conforme lo sostiene en forma
uniforme y pacífica la doctrina y jurisprudencia. LaAdministra-
ción se encuentra obligada a adoptar todas las medidas necesarias,
conforme las facultades que le otorgan las normas procedimenta-
les, a fin de producir dentro de los plazos legales establecidos por
tales normas, las resoluciones expresas requeridas por los adminis-
trados, satisfaciendo así el derecho de éstos a 'ser administrados'
que se encuentra tutelado constitucionalmente por la acción de
amparopormora".26
El amparo deberá presentarse ante los tribunales con compe-
tencia en materia contencioso administrativa que corresponda al
domicilio de la demanda o al lugar donde debió cumplirse el "de-
ber cuya mora se invoca".
La ley 8508 reconoce legitimación activa a "toda persona",
siempre y cuando la omisión de cumplir un deber impuesto por la
norma, por parte de la Administración, le afecte las siguientes si-
tuaciones jurídicas subjetivas: derecho subjetivo e interés legíti-
mo.
La Sala Contencioso Administrativa del Superior Tribunal de
Justicia, en relación a la legitimación activa, ha expresado: "En
virtud del arto 52 de la Constitución Provincial, el administrado es
titular de un poder de acción, reconocido como una garantía instru-
mental de legalidad, pues se encuentra en una situación cualifica-
da frente a la reticencia de la administración en dictar el acto que
resuelva la petición. La mentada situaciónjurídica de derecho sub-
jetivo o interés legítimo que se genera frente a la inactividad de la

26Sentencia N° 102, del 09/09/2002, en autos "Ferreyra, Claudia dPro-


vincia de Córdoba - amparo por mora", Actualidad Jurídica de Cór-
doba, N° 24, pág. 1445.
76 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

administración en resolver el reclamo --aun cuando éste pueda ser


considerado inadmisible o improcedente porcausas legales objeti-
vamente apreciadas-genera una relación que confiere legitima-
ción activa al administrado que acredite ser titular de una situa-
ciónjurídico subjetiva particularizada en los términos del arto JO
de la ley 8508". "Cuando el arto 52 de la Constitución Provincial exige
la acreditación del interés del reclamante o que sea una persona
afectada, quiere significar que sea titular de un derecho subjetivo o
interés legítimo respecto de lo pretendido. Ello implica que debe
acreditarse un interés personal y directo susceptible, por ende, de
afectar una situación diferenciada al resto de la comunidad [ .. .]'.27
En cambio, son legitimados pasivos: el Estado Provincial (cual-
quiera fuera el poder: Ejecutivo, Legislativo o Judicial), los muni-
cipios y comunas, entes centralizados o descentralizados y cual-
quier otro órgano de derecho público estatal o no estatal, dotado
de potestad pública. Los nombrados deberán actuar en ejercicio de
la función administrativa y en cumplimiento de respetar el dere-
cho constitucional de peticionar a las autoridades públicas, que
implica como correlato el de responder en los plazos legales esta-
blecidos por el ordenamiento legal.
La demanda debe contener una serie de requisitos, según lo
determina el arto 5° de la ley 8508:
a) Si se tratare de una persona física: su nombre y apellido,
domicilio real y constituido a los efectos legales. Si accionare una
personajurídica se deberá expresar su denominación, domicilio
social, datos de la inscripción registral y los datos identificatorios
de sus representantes y acompañar los instrumentos legales que
asílo acrediten;
b) Se deberá expresar la autoridad administrativa involucrada,
el deber omitido por la Administración, indicar la situaciónjurí-
dica subjetiva afectada (derecho subjetivo o interés legítimo), la

27 Sentencia N° 121, del 04/09/2001, en autos "Gutiérrez, Teófilo d

Provincia de Córdoba - amparo por mora", Foro de Córdoba, Suple-


mento de Derecho Administrativo y Constitucional, N° 8, pág. 121.
-
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN PROVINCIAL 77

norma que predetermina la obligación que la accionada ha omiti-


do cumplir;
c) Debe ofrecerse la prueba pertinente a los fines de acreditar
los extremos invocados enla demanda.
El tribunal interviniente se pronunciará sobre la "admisibili-
dad de la acción" dentro de las veinticuatro horas de presentada,
pudiendo acontecer las siguientes situaciones:
Si la considerara inadmisible la rechazará y ordenará el archi-
vo de las actuaciones.
Si la demanda adoleciera de defectos o resultare poco clara, el
tribunal emplazará al accionante para que la subsane, bajo aper-
cibimiento de rechazarla. Una vez cumplimentado debidamente
el emplazamiento, se expedirá acerca de su admisibilidad.
El trámite de esta acción será impulsado de oficio por el órgano
judicial interviniente.
Si el tribunal decide admitir la acción de amparo, emplazará
por el término de cinco días a la demandada para que presente un
informe respecto a la pretensión esgrimida en la causa. En el mis-
mo plazo del emplazamiento, podrá solicitar participación.
Las pruebas deberán ofrecerse conla demanda, con su contes-
tación o con el informe, pero el tribunal sólo admitirá aquellas me-
didas que considere pertinentes y "compatibles con el carácter
sumarísimo del proceso".
Si el tribunal resuelve, mediante el dictado de una sentencia,
hacer lugar al amparo, impondrá un plazo ala accionada para cum-
plir su deber. En caso de desobediencia a la orden de pronto despa-
cho judicial, se girarán los antecedentes al órgano judicial compe-
tente en materia penal.
Las resoluciones judiciales en este proceso, son irrecurribles.
Sin perjuicio de ello, el árt. 11 de la ley 8508 determina que la sen-
tencia podrá ser cuestionada por las partes solamente a través de
los recursos extraordinarios previstos por el Código Contencioso
Administrativo de la Provincia de Córdoba (ley 7182).
Las costas del proceso se impondrán al vencido, salvo que las
particularidades del caso justificaren un criterio diferente, lo que
deberá ser evaluado y debidamente fundado por el tribunal.
78 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

La Cámara Civil, Comercial y Contencioso Administrativo de


la ciudad de San Francisco estableció, en relación a la imposición
de costas, el siguiente criterio jurisprudencial: "Si se repara que el
único objetivo de un amparo por mora es lograr que la administra-
ción emita una resolución, y si al tiempo de la presentación del in-
forme del arto 7° de la ley 8508, esa resolución se ha dictado y se acom-
paña con aquél, lo que ha hecho la demandada es un allanamiento,
puesto que, precisamente, cumplió con el acto que el accionante le
reclamaba [. ..] El art.l O, tercer párrafo, de la ley 8508 establece la
imposición de costas al vencido. En tal sentido, vencido esellitigante
respecto de quien el fallo resulta totalmente adverso a la posición
jurídica asumida en el proceso, y así hay que calificar, sin dudas,
alque se allana". 28

XII. RELEVANCIA DEL AGOTAMIENTO DE LA VÍA ADMINISTRATIVA

Es necesario tener presente que el procedimiento administra-


tivo' especialmente el de naturaleza recursiva, es considerado un
medio o instrumento de control de lajuridicidad y de la conformi-
dad de los actos con el interés público o bien común, que debe ser el
obj etivo primordial de la actividad administrativa.
Además, el procedimiento recursivo constituye una garantía
a favor del administrado, ya que a través de aquél puede cuestio-
nar los actos administrativos persiguiendo la extinción o modifi-
cación de los que considere viciados y afecten unasituaciónjurídi-
ca subjetiva determinada.
En el sistema vigente en la Provincia de Córdoba, tiene gran
importancia el agotamiento de la vía administrativa como requi-
sito previo para acceder al controljudicial.
Agustín GORDILLO al referirse a esta cuestión expresa: "[... ] La
habilitación de la víajudicial o el agotamiento de la vía adminis-

28En autos "Petrodual S.R.L. cJ Municipalidad de San Francisco -am-


paro por mora", Foro de Córdoba, Suplemento de Derecho Administra-
tivo y Constitucional, N° 6, pág. 171.
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN PROVINCIAL 79

trativa vendrían a funcionar en ese esquema antiguo como condi-


ción previa a la existencia de competenciajudicial, lo cual es una
irrazonable restricción a la garantía constitucional, supranacio-
nal e internacional de acceso inmediato y expedito a una instan-
ciajudicial pronta y cumplida [... ]".29
Sin embargo, la Constitución de la Provincia de Córdoba, en el
arto 178, segundo párrafo, expresa: "La actuación del Estado, los
Municipios y demás personas jurídicas públicas en el ejercicio de
la función administrativa, quedan sometidos al controljudicial
de acuerdo con lo que determine la ley de la materia y sin otro requi-
sito que el interesado haya agotado la vía administrativa".
En la Provincia de Córdoba, el requisito del agotamiento de la
vía administrativa, tiene rango constitucional.
Asimismo, el Código Contencioso Administrativo (ley 7182), de-
termina que para acceder a lajurisdicción contencioso adminis-
trativa deben cumplirse una serie de requisitos, entre ellos, "que el
acto administrativo haya causado estado en razón dehaberse ago-
tadoasurespectolasinstancias administrativas [. .. ]"(art.1°,inc. a).
El arto 6° de la ley 7182 determina, además, que la demanda
contencioso administrativa "debe prepararse mediante el o los
recursos necesarios para obtener de la autoridad competente de
última instancia, el reconocimiento o denegación del derecho re-
clamado o interés legítimo afectado."
La Cámara Quinta Civil y Comercial de Córdoba determinó:
"Con la sanción del artículo 178 de la Constitución de la Provincia
de Córdoba, las personasjurídicaspúblicas, enel ejercicio de las fun-
ciones administrativas que tienen asignadas, quedan sujetas al con-
troljudicial de conformidad a la ley de la materia vigente -en la
actualidad la ley 7182-y previo el agotamiento de la vía adminis-
trativa".30

29 GORDILLO, Agustín, Tratado de derecho administrativo, t. II, pág.

XIII-9.
30 Auto interlocutorio N° 86, del 24/03/1993, en autos "Denuncia for-
mulada por Osear A. Reinaldi", Semanario Jurídico, N° 936, edición
del 10/06/1993.
80 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

Por todo ello, el agotamiento de la vía administrativa adquie-


re gran relevancia en el sistemajurídico vigente en la Provincia
de Córdoba porque:
- Es un requisito establecido por la Constitución Provincial y
por el Código Contencioso Administrativo para acceder al control
judicial del ejercicio de la función administrativa.
- Porque el procedimiento recursivo llevado a cabo -en el su-
puesto que nos ocupa- para obtener un acto administrativo que
causa estado, es un instrumento de control del ej ercicio de la fun-
ción administrativa.
- Porque a través del procedimiento recursivo el administrado
puede cuestionar lajuridicidad de un acto administrativo y la Ad-
ministración -si lo considera pertinente--lo modificará o extin-
guirá. Si el administrado satisface su pretensión en sede adminis-
trativa no deberá acudir a la víajudicial.
Sin embargo, actuales opiniones doctrinarias consideran que
en determinadas circunstancias el requisito del agotamiento de la
vía administrativa se ha transformado en una "traba para acce-
der a lajurisdicción contencioso administrativa".
En efecto, Pablo Esteban PERRINO respecto a esta cuestión, ex-
presa: "El requisito del agotamiento de la vía administrativa, ca-
lificado por GARCÍA DE ENTERRÍA como 'una reduplicación del privi-
1egio de la decisión previa', con razón viene siendo duramente
controvertido por la doctrina ya que, debido a su muchas veces in-
adecuada regulación y en otras a su irrazonable aplicación, con-
vierte-en unnÚInero muy significativo de casos-el tránsito pre-
vio por la vía administrativa en una trampa o carrera de obstáculos
para ellitigante, y demora injustificadamente el acceso a lajuris-
dicción. De ahí que ante los abusos en que se ha incurrido en su re-
glamentación y aplicación, las opiniones doctrinarias mayorita-
rias postulan, cuando no su eliminación, su morigeración mediante
una reforma sustancial del régimen recursivo propugnando el
carácter facultativo de los recursos administrativos". 31

31PERRINO, Pablo E., "El derecho a la tutela judicial efectiva y el acceso


a la jurisdicción contencioso administrativa", en Revista de Derecho
LOS RECURSOS ADMINISTRATNOS EN EL ORDEN PROVINCIAL 81

En idéntico sentido, según los alcances que asigna Juan Carlos


CASSAGNE al arto 18 de la Constitución Nacional, cuya regulación se
integra con las disposiciones del Pacto de San José de Costa Rica en
sus arts. 5°y 25, que consagran el derecho a la tutelajudicial efecti-
va, ha expresado la existencia de una incompatibilidad del esque-
ma del dogma revisor o de exigencia de agotamiento previo de vía
administrativa, con los principios de la tutelajudicial efectiva y de
la división de poderes, propugna ese autor la morigeración de esas
exigencias previas recordando al español GARCiADE ENTERRiA, quien
ha afirmado que el dogma revisor en sede administrativa es "un puro
convencionalismo procesal que actuaba en beneficio exclusivo de
una sola de las partes del poceso, la Administración Pública". 32

XIII. lIÁBEAS DATA

La Constitución de la Provincia de Córdoba, en su arto 50, esta-


blece: "Toda persona tiene derecho a conocer lo que de él conste en
forma de registro, la finalidad a que se destina esa información, y a
exigir su rectificación y actualización. Dichos datos no pueden re-
gistrarse con propósitos discriminatorios de ninguna clase ni ser
proporcionados a terceros, excepto cuando tengan un interés legíti-
mo. La ley reglamenta el uso de la informática para que no se vul-
neren el honor, la intimidad personal y familiary el pleno ejercicio
de los derechos [.. .j.
Atento la norma constitucional precedentemente transcripta,
en la Provincia de Córdoba se sancionó con fecha 25 de octubre
de 2000, la ley 8891 que regulaba la temática que nos ocupa.

Público, 2003-1, Rubinzal-Culzoni, Bs. As., 2003, pág. 266, YDerecho


procesal administrativo, t. 1, bajo la dirección de Juan Carlos CASSAG-
NE, Hammurabi, Bs. As., 2004, págs. 857/880.
32CASSAGNE, Juan Carlos, "La tutela judicial efectiva. Incompatibili-
dad con el dogma revisor y con la regla del agotamiento de la vía admi-
nistrativa", en Fragmentos de derecho administrativo, Hammurabi,
Bs. As., 2003, págs. 131/155.
82 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

Los términos de esa norma -salvo aspectos muy puntuales-


eran muy similares alos de la ley 25.326, y establecía concretamen-
te que la acción de hábeas data debía tramitarse de conformidad a
las reglas del amparo.
Sin embargo, el Poder Ejecutivo provincial vetó en forma total
la ley 8891 alegando la conveniencia de un sistema único y unifor-
me para todo el país, alos fines de contribuir a la seguridadjurídica.
Atento el veto total efectuado, no se analizará en este trabajo
el contenido de la legislación que nos ocupa.

XIV. ACCESO AL CONOCIMIENTO DE LOS ACTOS DEL ESTADO


(LEY N° 8803)

Consideraciones generales

La publicidad de los actos del Estado constituye uno de los as-


pectos de la forma republicana de gobierno adoptada en el arto 20
de la Constitución de la Provincia de Córdoba en concordancia con
el arto 10 de la Constitución Nacional.
El arto 15 de la Constitución de la Provincia de Córdoba garan-
tiza la publicidad de los actos del Estado estableciendo que una ley
determinará "el modo y la oportunidad de su publicación y el acce-
so de los particulares a su conocimiento"
En cumplimiento de este mandato constitucional, el Poder Le-
gislativo sancionó con fecha 6 de octubre de 1999, la ley 8803 me-
diante la cual regula el "derecho al acceso al conocimiento de los
actos del Estado".
El arto 10 de la ley 8803 establece que toda persona tiene dere-
cho a "solicitar y recibir información" de cualquier órgano perte-
neciente a la "Administración Pública provincial, municipal y co-
munal, centralizada y descentralizada, de entes autárquicos,
empresas y sociedades del Estado, sociedades anónimas con par-
ticipación estatal mayoritaria, sociedades de economía mixta [... ]
del Poder Legislativo y del Judicial, en cuanto a su actividad ad-
ministrativa, y del Defensor del Pueblo, Tribunal de Cuentas,
Consejo Económico y Social y Ministerio Público Fiscal [... ]".
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN PROVINCIAL 83

De esta disposición se desprende quienes son los legitimados


para solicitar la información como así también los suj etos pasivos
que se encuentran obligados legalmente a brindarla.
Es importante destacar que se considera "información" toda
aquella documentación que constituya los antecedentes de un acto
administrativo, como así también las "actas de reuniones oficia-
les" (art. 2°).
El arto 3° de la ley 8803 establece los supuestos en los cuales no
se suministrará información: cuando afecte la intimidad de las
personas, ni bases de datos domiciliarios y telefónicos, cuando
pudiera revelar la estrategia adoptada en la tramitación de una
causajudicial o que resulte protegida por el secreto profesional,
cuando se comprometa ''la seguridad de la provincia, la paz yel
orden público".

Procedimiento para acceder a la información

Toda persona deberá solicitar la información por escrito, expre-


sando sus datos identificatorios, "sin estar sujeta a ninguna otra
formalidad" (art. 6°).
La solicitud de información deberá ser satisfecha en el plazo de
diez días hábiles administrativos, pudiendo ser prorrogado por diez
(10) días más según las circunstancias del caso.
Si vencido el plazo la autoridad requerida no satisface la solici-
tud del requirente, éste podrá interponer acción de amparo por mora
de la Administración (art. 8°, primera parte).
Si la información fuere denegada mediante resolución expre-
sa, procederá la acción de amparo (art. 8°, segunda parte) cuando
se hubiere "resuelto en exceso de las previsiones del arto 3° o la fun-
damentación fuere arbitraria, insuficiente o aparente".
El acceso a la información es gratuito. Si fuere necesario la re-
producción de la documentación, los costos de la misma serán a
cargo del peticionante.
La Cámara de Apelaciones Civil y Comercial de la Ciudad de
Bell Ville reconoció legitimación procesal a un letrado para solici-
84 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

tar la información y para incoar la acción de amparo ante la nega-


tiva de la Administración en suministrarla. Para ello, el Sr. Vocal
Dr. Luis Alberto Caballero expresó: "[. ..] todo letrado de la matrí-
cula se encuentra legitimado en los términos del arto 10 de la ley 8803
y también por consecuencia, legitimado para deducir el amparo
según el arto 8 0 de la ley 8803. Tanto con mayor razón si reciben la
protección de la ley 5805, consagratoria de las facultades que tie-
nenen el ejercicio de la profesión plasmadas fundamentalmente a
través del arto 18 del mencionado estatuto legal, como atribución del
letrado en el ejercicio de su función de recabar, directamente de la
administración pública, de los Bancos Oficiales y de particulares,
informes, antecedentesy certificaciones sobre hechos atinentes a las
causas en las que intervengan, estableciéndose un plazo a la admi-
nistración para evacuar dichos informes [' ..J'. 33
La ley 8803, determina el modo y la oportunidad de la publici-
dad de los actos del Estado y el acceso a su conocimiento en virtud
de la garantía receptada por el arto 15 de la Constitución de la Pro-
vincia de Córdoba.
Esta legislación posibilita al ciudadano ejercer un control di-
recto sobre la actividad administrativa a los fines de mantenerla
y/o encaminarla bajo el denominado "principio de juridicidad" que
necesariamente debe regir para asegurar la existencia de un "Es-
tado de Derecho".
El caso "La Voz del Interior vs. Ente Regulador de Servicios
Públicos (ERSEP)", iniciado mediante una acción de amparo el pa-
sado 22 de julio de 2004, resulta el mal emblemático, frente a la
negativa del organismo público de poner a disposición de un perio-
dista todas las actas de directorio para efectuar una labor profe-
sional de información, fundado su derecho en la ley 8803. 34

33 Sentencia N° 10, del 03/05/2000, en autos "López Ballesteros, Horacio


Luis e/Municipalidad de Bell Ville - acción de amparo - apelación".
34 La Voz del Interior, edición del 23/07/04.
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN PROVINCIAL 85

xv. REGÍMENES RECURSIVOS ESPECIALES


a) Registro General de la Propiedad Inmueble de
Córdoba

Laley 5771 regula un régimen recursivo especial para cuestio-


nar las decisiones de las autoridades del Registro General de la
Propiedad.
Este sistema recursivo se pone en marcha cuando el registra-
dor realiza una" observación".
Luis MOISSET DE ESPANÉs expresa al respecto: "Cuando el regis-
trador encuentra vicios o defectos que obstan a la admisibilidad del
acto, debe, dentro de los treinta días de ingresado el documento al
registro, efectuar la pertinente observación" .35
La observación debe realizarse por escrito y encontrarse debi-
damentefundada,motivadaCart.16,ley5771),yaque,endefini-
tiva, se trata de un acto administrativo.
Ante esta circunstancia puede ocurrir que el administrado cum-
plimente las exigencias requeridas o subsane los defectos señala-
dos por el registrador.
Caso contrario, es decir si el administrado no está de acuerdo
con la observación, deberá cuestionarla mediante los denomina-
dos "recursos internos" que explicitaremos brevemente a continua-
ción.
Se consideran recursos internos: el recurso de rectificación o
recalificación Cante el registrador interviniente) y el de apelación
o también llamado reconsideración por ante el Director General.

Recurso de rectificación

Notificada fehacientemente la observación, el administrado


podrá plantear recurso de rectificación.

35 MorSSET DE ESPANÉS, Luis, Publicidad registral, 3a ed., Zavalía, Bs.


As., 2003, pág. 257.
86 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

Este medio impugnativo debe interponerse en el plazo de treinta


días (hábiles administrativos) por ante el registrador que realizó
la observación.
Este medio impugnativo debe ser presentado por Mesa Gene-
ral de Entradas del Registro General.
El recurso debe serfundadoyse deberá ofrecer y acompañar toda
la prueba que considere pertinente para acreditar las circunstan-
cias de hecho y de derecho que invoque.
El registrador cuenta con el plazo de quince días para resolver
este recurso de rectificación.
En el supuesto que el registrador acepte los argumentos esgri-
mido s por el recurrente, finaliza la controversia.
Puede ocurrir también que el registrador resuelva expresa-
mente el recurso rechazando la pretensión del administrado, o bien
dej ar transcurrir el plazo legal sin expedirse, lo que equivale a que
el recurso de rectificación ha sido denegado.
Es importante destacar que en el supuesto de acogerse el recurso
de rectificación se considera registrado de manera definitiva el
documento en cuestión.
Si el recurso de rectificación es denegado, el interesado deberá
cumplimentar la observación efectuada, oensudefecto, deberá acu-
dir ante el director general a través del recurso de apelación.

Recurso de apelación

Elart.17 de la ley 6737 determina que "contra la resolución que


mantenga la observación, o si no fuera resuelta dentro del plazo
previsto, podrá el interesado interponer, dentro del plazo de quince
días, recurso de apelación [' ..J'.
El recurso de apelación debe plantearse ante el director gene-
ral dentro del plazo de quince días hábiles administrativos, con-
tados a partir de la notificación de la resolución denegatoria del re-
curso de rectificación, o a partir del vencimiento del plazo para
resolverlo.
El director general tiene el plazo de treinta días para pronun-
ciarse, no existiendo disposición expresa alguna respecto al silen-
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN PROVINCIAL 87

cio por parte de la máxima autoridad del Registro General, por lo


que se considera que produce la denegatoria por silencio.
Si el director general acoge el recurso, finaliza la controversia.
Si el director general, de manera expresa o presunta (denega-
toria por silencio), desestima el recurso de apelación, se considera
cerrada la instancia administrativa, y su decisión será sometida
al controljudicial enlos términos y condiciones que a continuación
expresaremos.
"Con la culminación de este recurso también finaliza la etapa
de tratamiento registral del tema, y a partir de allí sólo es posible
continuar con las reclamaciones en sedejudicial, salvo, claro está,
que se optare por cumplimentar la observación discutida». 36

Recurso judicial

El arto 19 de la ley 6737 dispone que contra la resolución dene-


gatoria del director general se "podrá recurrir por ante la Cámara
de Apelaciones en lo Civil y Comercial».
Este recurso judicial deberá interponerse de manera fundada
por ante el Registro General en el plazo de diez días de notificada
la resolución denegatoria.
La Dirección General deberá elevar el recurso,junto a las de-
más actuaciones administrativas originadas como consecuencia
de la observación, al Tribunal Superior de Justicia para su remi-
sión a la Cámara que en turno corresponda.
La Cámara interviniente resolverá el recurso planteado sin
sustanciación y la inscripción registral provisoria se considerará
extendida hasta la conclusión del trámite recursivo.
Silaresoluciónjudicial acoge el recurso de apelación, lainscrip-
ción provisoria del documento se convierte en definitiva.
Si la sentencia, en cambio, no hace lugar al recurso de apela-
ción, se producirá la caducidad de la inscripción provisoria.

36 AHUMADA, Daniel, Ley registral inmobiliaria 5771 y disposiciones


técnico-registrales, Alveroni Ediciones, Córdoba, 2002, pág. 218.
88 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

En la actualidad el controljudicial de la actividad administra-


tiva-registral es realizado por las Cámaras Civiles, por aplicación
expresa del arto 19 de la ley 5771 y de la interpretaciónjurispru-
dencialllevada a cabo por el Superior Tribunal de Justicia:
"La naturalezajurídica del acto emanado del Sr. Director del
Registro General de la Propiedad en la especie, en cuanto que su
objetivo es plenamente iusprivatista, desde que se resuelve por el
mismo la cuestión atinente a la inscripción de un derecho real, de-
termina la competencia de la Cámara en lo Civil y Comercial". 37
Además, se sostiene que "en razón de lo dispuesto en la ley 7182
(Código de Procedimiento Contencioso-Administrativo ),es impor-
tante resaltar que aun esta ley fue sancionada con posterioridad
al texto actual de la Ley Provincial Registral; las decisiones que
adopta el registrador no deben ser revisadas por el procedimiento
contencioso-administrativo sino ante lajusticia ordinaria, ya que
están enjuego cuestiones de fondo: los asuntos atinentes al dere-
cho de propiedad hacen al derecho civil (privado), y no al derecho
administrativo (público) ."38
Sin embargo, existe un antecedentejurisprudencial que reco-
noce alas Cámaras Contencioso Administrativas la competencia
para resolver este ti po de controversias.
Nos estamos refiriendo, concretamente, a la causa "Lozita,
Sergio Guillermo el Provincia de Córdoba - ilegitimidad"39, en la
cual la Cámara Contencioso Administrativa de Segunda Nomina-
ción consideró que la resolución dictada por la Dirección General
del Registro de la Provincia es un "acto administrativo", razón por
la cual corresponde agotar la vía administrativa de conformidad
a la ley 6658 (recurso de reconsideración y jerárquico) y luego ob-
tener el controljudicial en los términos de la ley 7182.

37 TSJ, auto N° 419, del 07/12/1993, en autos "Brocal S.A. el C. Scagliotti


y otra - hipotecario - recurso de rectificación y apelación en subsidio".
38 AHUMADA, Daniel, op. cit., pág. 222.

39 Cám. Cont. Adm. 2a Nom., auto N° 16, del 11102/2000, en autos "Lo-
zita, S.eI Provincia de Córdoba - ilegitimidad".
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN PROVINCIAL 89

b) Recursos en el procedimiento disciplinario notarial


(ley N> 6291)

El régimen de la responsabilidad disciplinaria notarial en la


Provincia de Córdoba se encuentra regulado por la ley 6291. 40
Los bienes jurídicamente protegidos por la normativa citada
son: ''la institución notarial, los servicios que le son propios yel
decoro del notariado" (art. 21), estatuyendo las pautas y normas
de procedimientos para la determinación de la responsabilidad no-
tarial y la aplicación de sanciones disciplinarias, si correspondie-
re.
El procedimiento administrativo tendiente a determinar la
responsabilidad notarial, podrá iniciarlo el Tribunal de Discipli-
na Notarial de la Provincia de Córdoba, de oficio o por denuncia.
El Tribunal de Disciplina Notarial se encuentra integrado por
un presidente, dos vocales titulares y cuatro suplentes. El presi-
dente será nombrado por el Poder Ejecutivo. Los vocales titulares
y suplentes serán designados por el Poder Ejecutivo a propuesta
-en terna para cada cargo-del Consejo Directivo del Colegio de
Escribanos de Córdoba.
El Tribunal de Disciplina Notarial goza de amplias prerroga-
tivas' entre las que se encuentra el llamado "poder autónomo de
investigación" que debe ejercerse dentro del ''bloque dejuridicidad".
Asimismo, el notario cuyas conductas están sometidas a contra-
lor, goza de los siguientes derechos y garantías: a comparecer, cons-
tituir domicilio legal, a la defensa técnica, a ser oído, a ofrecer y pro-
ducir pruebas, a alegar de bien probado y a una decisión fundada en
"causas y antecedentes concretos" (arts. 33, 34y 35, ley6291).
La denominada "decisión fundada" es un acto administrativo
dictado por el Tribunal de Disciplina Notarial en ejercicio de la
función administrativa que produce efectos jurídicos respecto del
notario sometido a un procedimiento disciplinario.

40Ley 6291 (sancionada y promulgada el 30/05/1979 ,y publicada en


B.O. del 04/06/1979).
--
90 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

Las sanciones previstas por la ley 6291 son: apercibimiento,


multa, suspensión (de hasta un año y de uno a tres años) y destitu-
ción.
Es necesario tener presente que por expresa disposición legal
(art. 26), el escribano que sea sancionado con más de un mes de sus-
pensión implica la "clausura del registro a su cargo, el secuestro
de los protocolos y su depósito en la oficina del Tribunal mientras
dure la sanción."

Competencia contencioso administrativa

Disconforme con el acto administrativo defmitivo dictado por


el Tribunal de Disciplina Notarial de la Provincia de Córdoba, el
escribano podrá someterlo a controljudicial, previo agotamiento
de la vía administrativa, de conformidad a las disposiciones de la
ley 6658, y luego acudir alajurisdicción contencioso administra-
tiva perdiendo vigencia lo normado por el arto 37 de la ley 6291 que
estatuye un recurso de apelación por ante la Cámara Civil y Co-
mercial en turno de la ciudad de Córdoba.
La atribución de competencia contencioso administrativa ha
sido resuelta de manera unánime por lajurisprudencia cordobe-
sa:
"Con la sanción del arto 178 de la nueva Constitución de la Pro-
vincia de Córdoba, las personasjurídicas públicas, en ejercicio de
las funciones administrativas que tienen asignadas, quedan suje-
tas al controljudicial de conformidad a la ley de la materia vigente
-en la actualidad la ley 7182-y previo el agotamiento de la vía
administrativa". 41
El procurador del Tesoro de la Provincia de Córdobaha expre-
sado: "[. ..] si bien el arto 37 de la ley 6291 establece que de sus deci-
siones procederá un recurso de apelación por ante la Cámara Civil

41Cám. 5a Civ. Como Córdoba, auto interlocutorio N° 86, del 24/03/1993,


en autos "Denuncia formulada por Osear A. Rinaldi", Semanario Ju-
rídico, N° 936, edición del 10/06/1993.
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN PROVINCIAL 91

y Comercial en turno de la ciudad de Córdoba, su contenido fue re-


formadocon el dictado de la ley 7204, modificatoria de la ley 5350,
que estableció la aplicabilidad de ésta en relación a la actividadju-
rídico-pública de las entidades descentralizadas autárquicasy cual-
quierotro órgano o ente dotado de potestad pública y que actúe en
ejercicio de la función administrativa, incluso los entes de carácter
público o privado cuando ejerzan por delegación aquella potestad,
exceptuando los organismos previstos en materia tributaria, para
los cuales será de aplicación supletoria (art. JO), derogando toda
disposición que se le oponga (art. 125), lo que concordaba con lo es-
tablecido enel arto 10 de la ley 7182 [, ..1'.42
A los fines de agotar la vía administrativa, es necesario tener
en consideración el carácter -desde el punto de vista de la orga-
nización administrativa- que tiene el Tribunal de Disciplina N 0-
tarial.
Respecto a esta cuestión podemos observar la existencia de di-
símiles criteriosjurisprudenciales al respecto. En una primera
etapa se consideraba al Tribunal de Disciplina Notarial como un
organismo desconcentrado, y luego como un órgano descentrali-
zado, siendo este último el criterio jurisprudencial actual.

Tribunal de Disciplina Notarial:


órgano desconcentrado

Originariamente, el Tribunal de Disciplina Notarial era con-


siderado un ente des concentrado que carecía de personeríajurídi-
ca, y por ende de capacidad para estar enjuicio.
La Cámara en lo Contencioso Administrativo de 2a Nominación
de Córdoba ha expresado: "[.. .] en el marco de lo dispuesto por los
arts. 8 0 y concordantes de la ley 6291, es dable afirmar que el Tri-
bunal de Disciplina Notarial constituye un típico ente 'desconcen-

42Cám. Cont. Adm. 2a N om., sentencia N° 40, del 28/03/2000 , en autos


"Riera de Spila, OIga Esther el Superior Gobierno de la Provincia de
Córdoba y otra - Plena jurisdicción".
92 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

trado' que forma parte de la Administración Central, a través del


Ministerio de Gobierno [. ..]". "Por ello, al carecer de personeríaju-
rídica propia, las demandas que contra dicho organismo se deduz-
can, deben ser entabladas en contra de la Provincia de Córdoba, y
no del citado TDN, como pretende la accionada [ .. .]'. 43
Por ello, cuando el Tribunal de Disciplina Notarial dictaba un
acto administrativo, el notario debía -obligatoriamente-inter-
poner recurso de reconsideración en el plazo de cinco días conta-
dos a partir de la notificación por ante el mismo organismo.
Ante el supuesto de denegatoria, y a los fines de agotar la vía
administrativa, debía interponerse recurso jerárquico.
Todo ello, claro está, de conformidad a las pautas establecidas
por la Ley de Procedimiento Administrativo N° 6658.
Agotada en debida forma la vía administrativa la demanda
contencioso administrativa se dirigía contra la Provincia de Cór-
doba.

Tribunal de Disciplina Notarial: órgano descentralizado

A partir del caso "Carranza" el Tribunal Superior de Justi-


cia de Córdoba, luego de un profundo análisis interpretativo -lle-
vado a cabo por el Sr. vocal Dr. Domingo Sesin- consideró que el
Tribunal de Disciplina Notarial de la Provincia de Córdoba es un
organismo descentralizado, lo que motivó--evidentemente-una
manera distinta para agotar la vía administrativa.
La Sala Contencioso Administrativa del Superior Tribunal de
Justicia de Córdoba ha expresado: "[. ..] no existe duda en relación
a que el Tribunal de Disciplina Notarial ha sido creado por ley del
Estadoyqueselehaatribuidolafunciónpúblicade'fiscalizacióny
superintendencia del notariado'[. ..] es posible afirmar que nos en-
contramos ante un órgano dotado de personeríajurídica propia. En

43Cám. Cont. Adm. 2a Nom., sentencia N° 40, del 28/03/2000, en autos


"Riera de Spila, OIga e/Superior Gobierno de la Provincia de Córdoba
y otra - Plena jurisdicción".
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN PROVINCIAL 93

modo alguno puede constituir un ente desconcentrado de laAdmi-


nistracwn Central porque presupuestariamente no está a cargo del
Poder Ejecutivo [. .. j. 44
En efecto, de acuerdo al criterio jurisprudencial actual, cuan-
do el Tribunal de Disciplina Notarial dicta un acto administrati-
vo, debe plantearse obligatoriamente el recurso de reconsideración.
Denegado éste, procede -a opción del interesado-el recurso
de alzada o la vía contencioso administrativa (art. 84, ley 6658).
La acción judicial se dirige contra el Tribunal de Disciplina
Notarial.

c) Recursos en el procedimiento disciplinario de los


abogados (ley ~ 5805)

El arto 50 de la ley 5805 establece que el Tribunal de Disciplina


de Abogados, ejercerá "el poder disciplinario" sobre todos los abo-
gados inscriptos en la matrícula en el ámbito de la Provincia de
Córdoba.
Los integrantes del Tribunal de Disciplina de Abogados de la
Provincia de Córdoba son elegidos por voto directo, secreto y obli-
gatorio de los abogados inscriptos en la matrícula, a simple pI ura-
ridad de sufragios (art. 58).
El Tribunal de Disciplina dará inicio a un procedimiento disci-
plinario de oficio o por denuncia.
El Tribunal de Disciplina de Abogados "constituye una perso-
najurídica creada por ley (5805), de carácterpúblico no estatal, que
debe funcionar dentro el marco establecido por el arto 37 de la Cons-
tituciónProvincial. Como tal ejerce las potestades delegadas por la
Provincia en orden al ejercicio del poder disciplinario sobre todos
los abogados de la provincia". 45

44 TSJ, sentencia N° 36, del 25/04/2002, en autos "Carranza, Daniel d


Tribunal de Disciplina N otarial- P.J.".
a
45 Cám. Cont. Adm. 2 Nom., sentencia N° 186, del 24/11/1998, en au-
tos "G. dTribunal de Disciplina de Abogados - P.J.".
94 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

El Tribunal de Disciplina, previo el procedimiento legal, podrá


aplicar las siguientes sanciones: apercibimiento público o priva-
do, multa, suspensión hasta seis meses y cancelación de la matrí-
cula profesional.
El abogado que haya sido sancionado con la cancelación de su
matrícula, podrá ser admitido a la actividad profesional cuando
transcurran tres años contados a partir de que el acto administra-
tivo sancionatorio quedó firme.
Tal como ocurre en el supuesto tratado en el punto anterior, el
controljudicial se realiza en el ámbito contencioso administrati-
vo:
"En supuestos en que el ente profesional, en ejercicio de su potes-
tad, dispuso la aplicación de una sanción disciplinaria al letrado,
el controljudicial debe realizarse de conformidad a la ley de la
materia; esto es el sometimiento a lajurisdicción contencioso admi-
nistrativa y previo recorrer la vía administrativa pertinente". 46
En consecuencia, a los fines de agotar la vía administrativa se
deberá interponer recurso de reconsideración. Denegado éste, y
cumpliendo las pautas de la ley 6658, el administrado puede op-
tar entre la interposición del recurso de alzada (art. 84, ley 6658) o
bien, iniciar la acción contencioso administrativa.
Por todo ello, ha perdido vigencia lo normado por el arto 87 de la
ley 5805, que regula un recurso de apelación por ante la Cámara
Civil y Comercial en turno para cuestionar la decisión del órgano
disciplinario, recordando que con la sanción del arto 178 de la Cons-
titución Provincial las personas jurídicas públicas, en ejercicio de
la función administrativa, quedan sujetas -previo agotamiento
de la vía administrativa- al controljudicial de conformidad a la
ley7182.

46 TSJ, Sala Civil y Comercial, 22/12/1992, en autos "C.R. denuncia re-

mitida por el Colegio de Abogados de Córdoba - recurso de revisión",


del voto del Dr. Luis Moisset de Espanés.
--
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN PROVINCIAL 95

d) Recursos administrativos en el régimen disciplinario


policial (decreto N° 1753/04)

El día 12 de marzo de 2004, se publicó en el Boletín Oficial de la


Provincia de Córdoba el decreto 1753, reglamentario de laley 9120
que creó el Tribunal de Conducta Policial.
El reglamento del régimen disciplinario policial de la provin-
cia de Córdoba -decreto 1753-es aplicable a "todo el personal po-
licial en situación de actividad o retiro, por faltas cometidas den-
tro o fuera del territorio de la Provincia" (art. 1°), en ejercicio de sus
funciones o fuera de ellas (art. 3°).
Los actos administrativos que impongan al personal policial
sanciones disciplinarias podrán ser cuestionados mediante los
recursos de reconsideración y revisión, que haremos referencia a
continuación.

Recurso de reconsideración

El recurso de reconsideración deberá plantearse por escrito, de


manera fundada por ante la misma autoridad que impuso la san-
ción disciplinaria, en el plazo de cinco días contados a partir de la
notificación del acto administrativo.
El recurso de reconsideración podrá fundarse: "1) en disconfor-
midad con la apreciación de los hechos; 2) en disconformidad con
la calificación legal de los hechos; 3) en disconformidad con la gra-
duación del castigo; 4) en haberse excedido el superior en el ejerci-
cio de las facultades disciplinarias" (art. 103, decreto 1753).
El recurso de reconsideración será resuelto por el Tribunal
de Conducta Policial en pleno, sin sustanciación, en el plazo de
veinte días hábiles administrativos, vencidos los cuales se "pre-
sumirá la existencia de resolución denegatoria" (art. 10 1, decre-
to 1753).
El Tribunal de Conducta Policial en pleno al resolver el recur-
so de reconsideración podrá confirmar, modificar, anular o dej ar
sin efecto la sanción, pero legalmente se encuentra impedido de
agravar la sanción impugnada (art. 105, decreto 1753).
96 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

La decisión del Tribunal de Conducta Policial agota la vía ad-


ministrativa.
La interposición de este medio recursivo no suspende la ej ecu-
ción del acto administrativo sancionatorio, salvo cuando se tratare
de arresto.

Recurso de revisión

Con leves diferencias de redacción en relación al recurso de re-


visión previsto por el régimen general de la Ley de Procedimiento
Administrativo de la Provincia de Córdoba N° 6658, el arto 106 del
decreto N° 1753 prevé este medio impugnativo extraordinario.
El recurso de revisión procede contra "una resolución firme
recaída en sumario administrativo por falta disciplinaria". Debe
plantearse de manera fundada por ante el Tribunal de Conducta
Policial, estableciendo diferentes plazos legales según la causal
que semvoque.
Procederá el recurso de revisión cuando:
- La resolución contenga contradicciones en su parte dispositi-
va. En este supuesto deberá presentarse el recurso dentro de los
diez días hábiles administrativos siguientes a la notificación del
acto sancionatorio.
- Cuando aparezcan documentos de valor decisivo para la reso-
lución de la cuestión ignorados en ocasión de imponerse la sanción
o que no fueron aportados por fuerza mayor o por obra de terceros.
Fundado en esta causal, el recurso de revisión debe plantearse
dentro del plazo de veinte días hábiles administrativos contados a
partir de "recobrarse o descubrirse los documentos aludidos o de que
cesarelafuerzamayoroelaccionardeterceros"(art.106,inc.2).
-Cuandolasancióndisciplinariasehubiesefundadoendocumen-
tos o circunstancias "cuya declaración de falsedad se desconocía o se
hubiere dictado luego de producida la resolución" (art.106, inc. 3).
- Cuando la resolución que impone la sanción disciplinaria hu-
biere sido dictada mediante "cohecho, prevaricato, violencia o cual-
quier otra maquinación fraudulenta o grave irregularidad com-
probada" (art.106, inc. 4).
--
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN PROVINCIAL 97

En estos dos últimos supuestos, el plazo para la presentación


del recurso de revisión es de veinte días hábiles administrativos
contados a partir de la acreditación en legal forma de los supues-
tos indicados en la norma.
El recurso de revisión podrá fundarse en iguales causales a las
expresadas respecto al recurso de reconsideración, y deberá resol-
verse en el plazo de veinte días hábiles administrativos, vencidos
los cuales "se presumirá la existencia de resolución denegatoria"
(art.101, decreto 1735).
El decreto reglamentario 1735 establece en su arto 109 que se
aplicará supletoriamente el CPP de la Provincia de Córdoba.
f
98 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

ACTIVIDAD DE AUTOEVALUACIÓN

1) ¿Qué situaciones jurídicas subjetivas habilitan la interposi-


ción de recursos administrativos en el orden provincial?
2) ¿Qué tipo de acto administrativo es recurrible?
3) ¿En qué consiste el recurso de reconsideración? ¿Ante quién se
interpone? ¿En qué plazo? ¿Qué autoridad es la que debe resolverlo?
4) ¿En qué consiste el recurso jerárquico? ¿Cuál es el procedi-
miento establecido para su tramitación?
5) ¿En qué casos es procedente la interposición del recurso de
alzada? ¿Cuál es el procedimiento establecido para su tramita-
ción?
6) ¿Cuáles sonlas corrientes de opinión respecto ala "queja"?
7) ¿Qué recurso administrativo es posible plantear contra un
acto administrativo firme y cuáles son las causales para su proce-
dencia?
8) La presentación de la aclaratoria, ¿suspende o interrumpe
el plazo para la interposición de recursos administrativos?
9) ¿En qué supuestos procede el "reclamo administrativo previo''?
10) ¿Qué derechos reconoce la ley 8835 a las personas en su re-
lación con el Estado?
11) ¿Cuándo procede la interposición del "pronto despacho"?
¿Cuál es su finalidad?
12) ¿Quiénes tienen legitimación activa para plantear la "ac-
ción de amparo por mora" en la Provincia de Córdoba?
13) ¿Qué Tribunales resultan competentes para tramitar la
acción de amparo por mora?
14) ¿Qué remedio le reconoce laley 8803 (acceso al conocimiento
de los actos del Estado) ante la denegatoria expresa de la informa-
ción?Y ¿ante el silencio?
15) ¿Qué Tribunal resulta competente para efectuar el control
judicial de las decisiones del director del Registro de la Propiedad
Inmueble, según el criterio actual?
16) ¿Qué recurso/s deben interponerse frente a un acto admi-
nistrativo sancionatorio dictado por el Tribunal de Disciplina N 0-
tarial? ¿Porqué?
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN PROVINCIAL 99

17) ¿Qué tribunal resulta competente para efectuar el control


judicial de un acto administrativo sancionatorio dictado por el
Tribunal de Disciplina de Abogados? ¿Qué procedimiento previo
debe cumplimentar?
18) ¿Qué opinión le merece el requisito de "agotamiento de la
vía administrativa" en la Provincia de Córdoba?

CASOS PRÁCTICOS

1) El Directorio del Instituto Provincial de Atención Médica


(organismo autárquico), dicta la Resolución N° 20 que dispone:
"Rechazar por improcedente, el recurso de reconsideración inter-
puesto por el Sr. Andrés Juan Nieto en contra de la Resolución
N° 38/99, como así también el pedido de suspensión de la ejecu-
ción del acto recurrido [. ..]".
Deberá responder: el Sr. Nieto ¿debe interponer algún recurso
para agotar la vía administrativa? ¿Por qué?
2) El Sr. Ministro de Educación de la Provincia de Córdoba dic-
ta la Resolución N° 565 que dispone: "Rechazar lo solicitado por
N ora Beatriz Massa en relación al reconocimiento por servicios
prestados en horas cátedras, en establecimientos educacionales de-
pendientes de la Dirección de Enseñanza Media por ser sustancial-
mente improcedente [... ]".
Deberá expresar, si correspondiere, qué recurso o recursos ad-
ministrativos debería interponer la Sra. N ora Beatriz Massa para
agotar la vía administrativa? Fundamente su respuesta.
3) El Sr. Gobernador de la Provincia de Córdoba dicta el decre-
to N° 320 que resuelve aplicar una sanción disciplinaria de cesan-
tía a un agente de la Administración Pública Provincial.
¿Qué procedimiento recursivo se debe cumplimentar a los fines
de agotar la vía administrativa?
4) El Tribunal Superior de Justicia de la Provincia de Córdoba
dicta un acto administrativo a través del cual aplica, previos los
trámites de ley, una sanción disciplinaria (suspensión) a Juan
100 LILIANA N. VILLAFAÑE

Pérez que se desempeña como ascensorista en el edificio de Tribu-


nales 1 de esta ciudad de Córdoba.
¿Qué procedimiento debería cumplimentar el Sr. Pérez a los
fines de agotar la vía administrativa?
5) ¿Cómo se denomina y ante qué autoridad debe plantearse el
recurso administrativo que tiene por objeto impugnar una obser-
vación efectuada en el ámbito del Registro General de la Propie-
dad de Córdoba? En caso de denegatoria del mencionado recurso,
¿ante qué autoridad administrativa debe agotarse la vía adminis-
trativay, con posterioridad, qué tribunal ejerce el controljudicial?
Capítulo X
LOSRECURSOSAD~STRATIVOS
EN EL ORDEN FEDERAL

Por Líliana N. Villafañe

Sumario: 1. Consideraciones generales. II. Recurso


de reconsideración. III. Recurso jerárquico. IV. Re-
curso de alzada. V. Recurso de revisión. VI. La queja.
VII. Aclaratoria. VIII. Rectificación de errores mate-
riales. IX. Reclamo administrativo previo. X. Amparo
por mora administrativa. XI. Denuncia de ilegitimi-
dad. XII. Hábeas data. XIII. Regímenes recursivos
especiales.

l. CONSIDERACIONES GENERALES

En este capítulo analizaremos los recursos administrativos en


el orden federal, teniendo en consideración las disposiciones con-
tenidas en la ley 19.549y en el decreto 1759/72, sin perjuicio de que
haremos referencia a algunos regímenes recursivos especiales.
Las normas citadas son de aplicación en el ámbito de la Admi-
nistración Pública nacional centralizada y descentralizada, inclu-
sive las entidades autárquicas, con excepción de los organismos
militares,dedefensayseguridad(art.l°,ley19.549).
102 LILIANA N. VILLAFAÑE

11. RECURSO DE RECONSIDERACIÓN

Concepto

El recurso de reconsideración es un medio de impugnación que


persigue la revocación, modificación o sustitución del acto admi-
nistrativo por parte de la misma autoridad que lo emitió.
El recurso dereconsideración -en el ámbito que nos ocupa-es
de carácter ordinario y optativo, ya que al administrado no está obli-
gado a plantearlo para agotar la vía administrativa ni tampoco es
un presupuesto necesario para la procedencia de otros recursos.

Actos recurribles

Podrán cuestionarse a través del recurso de reconsideración:


a) Los actos administrativos definitivos, es decir, aquellos que
resuelvan el fondo de la cuestión.
b) Los actos que impidan la tramitación del reclamo o preten-
sión del administrado (por ejemplo, el acto que decide el archivo
de las actuaciones administrativas).
c) Los actos interlocutorios o de mero trámite, que afecten un
derecho subjetivo o interés legítimo (por ejemplo, la denegación de
una medida probatoria).

Plazo de interposición

El recurso de reconsideración puede plantearse en el plazo de


diez días hábiles administrativos contados a partir de la notifica-
ción del acto.

Órgano competente

El recurso de reconsideraciónse interpone ante la misma autori-


dad que dictó el acto, la que también es competente para resolverlo.
--
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN FEDERAL 103

Puede ocurrir que el acto administrativo cuestionado haya sido


dictado por una autoridad ala cual el superior le delegó tal compe-
tencia.
En este supuesto, el recurso de reconsideración será resuelto por
el órgano delegado. Pero si la delegación hubiere cesado, pueden
presentarse dos situaciones:
- Si en la oportunidad de plantear el recurso de reconsideración
la delegación ha cesado, la resolución del mismo le compete al ór-
gano delegante;
- Si la delegación cesa con posterioridad a la promoción del re-
curso de reconsideración, éste deberá ser resuelto por el órgano
delegado.

Plazo para resolver

La autoridad competente deberá resolver el recurso de recon-


sideración en el plazo de treinta días hábiles administrativos, los
que deberán computarse de la siguiente manera:
a) Si no se tramitó prueba alguna desde el día siguiente de la
presentación del recurso.
b) Si se produjo prueba, se computan desde el día siguiente ala
presentación del alegato o desde el día siguiente del vencimiento
del término para alegar, si el administrado no lo hizo.
Si la autoridad no resuelve el recurso de reconsideración en el
plazo fijado, el administrado podrá considerarlo tácitamente de-
negado, sin necesidad de plantear pronto despacho.
Al respecto, lajurisprudencia ha interpretado: "Que el particu-
lar pueda considerar tácitamente denegado el recurso no exime a
la Administración de su obligación de resolver; ergo aquél puede
iniciar un amparo por mora para que eljuez ordene a ésta resolver". 1

1 Cám. Nac. Fed. Cont. Adm., SalaIII, 16/09/86, en autos "Cacike Hi-

jos S.A.", citado por HUTCHINSON, Tomás, Régimen de procedimientos


administrativos, pág. 371.
.....
104 LILIANA N. VILLAFAÑE

Artículo 100 del decreto 1759/72

Atento el carácter facultativo del recurso de reconsideración,


es necesario tener en cuenta la disposición del arto 100 del decre-
to 1758/72 que se refiere a la posibilidad de interponer este recur-
so contra los actos administrativos que agoten la vía administra-
tiva.
Si durante el trámite del procedimiento se dicta un acto que
agota la instancia administrativa, el administrado tiene la posi-
bilidad de promover la acciónjudicial o plantear el recurso de re-
consideración o el de revisión, según corresponda.
El alcance de la norma que analizamos ha dado origen a disí-
miles interpretaciones.
Amodo de ejemplo, la Sala 2a de la Cámara Contencioso Admi-
nistrativa y Tributaria de la ciudad de Buenos Aires, en el caso
"Ramsay S.A.", ante la pregunta: ¿cuándo se agota la vía adminis-
trativa ante actos administrativos emanados de oficio de lamáxi-
ma autoridadjerárquica?, respondió: "[. ..] toda vez que ni el arto 100
(enelámbitonacionalJniel 119 (enelámbitolocalJ hanprevistoen
su texto el caso de los actos dictados de oficio, no estableciendo por
ende la norma un régimen de agotamiento de la vía diferenciado
para dicho tipo de actos, respecto de aquellos dictados como conse-
cuencia de una intervención previa en el procedimiento del parti-
cular afectado [...J'. 2
Es importante destacar que la interposición de un recurso de
reconsideración contra un acto que agota la vía administrativa,
suspende los plazos legales para acudir a la víajudicial.

Normas aplicables

El recurso de reconsideración se encuentra regulado en los


arts. 84, 85,86, 87, 88y 100 del decreto 1759/72 .

FLAX, Gregorio, Suplemento de Derecho Administrativo, Lexis N exis,


.2

edición del 30/07/2003, pág. 63


LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN FEDERAL 105

IIJ. RECURSO JERÁRQUICO

Concepto

El recurso jerárquico "es una de las formas en que se manifies-


tala relaciónjerárquica que caracteriza la organización adminis-
trativa, ya que es mediante esta vía que el órgano superior ejerce
el controljurídico sobre el desempeño en el ejercicio de la función
administrativa por parte de los órganos inferiores; ypor otra par-
te, al ser un recurso con sustanciación, el interesado puede mos-
trar con toda amplitud los fundamentos de su pretensión, desple-
gando con toda intensidad su defensa [. ..]". 3
En el ámbito nacional que nos ocupa, el recurso jerárquico es
necesario para agotar la vía administrativa.

Actos recurribles

Por medio del recursojerárquico pueden cuestionarse:


a) Los actos administrativos definitivos, es decir, queresuel-
ven el fondo de la cuestión.
b) Los actos administrativos que sin ser definitivos impiden la
continuación del procedimiento o "provocan una violación grave
y fundamental del debido proceso adjetivo, que no puede ser supli-
da en oportunidad de la decisión final del recurso". 4

Modos de plantear el recurso

Respecto a esta cuestión pueden presentarse distintas situaciones:


-El recurso jerárquico puede interponerse directamente, ya que
no requiere el planteo previo de otro recurso. En este supuesto se

3 ILDARRAZ, Benigno - ZARZA MENSAQUE, Alberto R. - VIALE, Claudio Mar-


tín,op. cit., pág. 641.
4 CASSAGNE, Juan Carlos, Derecho administrativo, t. II, pág. 604.
- l
106 LILIANA N. VILLAFAÑE

presenta ante la misma autoridad que dictó el acto administrati-


vo que se desea cuestionar, quien lo elevará a la autoridad compe-
tente en el plazo de cinco días hábiles administrativos.
- El recurso de reconsideración lleva implícito el recurso jerár-
quico (art. 88, decreto 1759172), por lo que denegado expresamen-
te aquél, el órgano inferior deberá elevar las actuaciones al supe-
rior para resolver elj erárquico.
Si la administración, vencido el plazo legal, no resuelve el re-
curso de reconsideración, el recurrente tendrá la facultad de con-
siderarlo denegado tácitamente y peticionar que se eleven las ac-
tuaciones administrativas para que el superior resuelva el recurso
jerárquico que se considera "implícito".

Plazo para resolver

La autoridad administrativa competente deberá resolver el


recurso jerárquico en el plazo de treinta días hábiles administra-
tivos los que serán computados de la siguiente manera:
-Desde que la autoridad que debe resolver recibe las actuacio-
nes administrativas.
- Si se produjo prueba, desde la presentación del alegato.
- Desde el vencimiento del plazo para alegar, si el recurrente
no hubiese cumplido con esa actividad procesal.
El arto 91 del decreto 1759172 expresamente determina que no
se requiere la interposición de pronto despacho para considerar
denegado por silencio el recurso jerárquico.
Al respecto, Tomás HUTCHINSON opina: "[... ] es facultad del par-
ticular considerar denegado tácitamente el recurso y puede hacerlo,
a partir del vencimiento del término, en cualquier plazo, o no ha-
cerlo y esperar el cumplimiento de la Administración del deber de
resolver [. .. ]".5

5 HUTCHINSON, Tomás, Régimen de procedimientos administrativos,


pág. 376.
106 LILIANA N. VILLAFAÑE

presenta ante la misma autoridad que dictó el acto administrati-


vo que se desea cuestionar, quien lo elevará a la autoridad compe-
tente en el plazo de cinco días hábiles administrativos.
-El recurso de reconsideración lleva implícito el recurso jerár-
quico (art. 88, decreto 1759/72), por lo que denegado expresamen-
te aquél, el órgano inferior deberá elevar las actuaciones al supe-
riorpara resolver eljerárquico.
Si la administración, vencido el plazo legal, no resuelve el re-
curso de reconsideración, el recurrente tendrá la facultad de con-
siderarlo denegado tácitamente y peticionar que se eleven las ac-
tuaciones administrativas para que el superior resuelva el recurso
jerárquico que se considera "implícito".

Plazo para resolver

La autoridad administrativa competente deberá resolver el


recurso jerárquico en el plazo de treinta días hábiles administra-
tivos los que serán computados de la siguiente manera:
- Desde que la autoridad que debe resolver recibe las actuacio-
nes administrativas.
- Si se produjo prueba, desde la presentación del alegato.
- Desde el vencimiento del plazo para alegar, si el recurrente
no hubiese cumplido con esa actividad procesal.
El arto 91 del decreto 1759/72 expresamente determina que no
se requiere la interposición de pronto despacho para considerar
denegado por silencio el recurso jerárquico.
Al respecto, Tomás HUTCHINSON opina: "[.. .J es facultad del par-
ticular considerar denegado tácitamente el recurso y puede hacerlo,
a partir del vencimiento del término, en cualquier plazo, o no ha-
cerlo y esperar el cumplimiento de la Administración del deber de
resolver [. .. ]".5

5 HUTCHINSON, Tomás, Régimen de procedimientos administrativos,


pág. 376.
..
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN FEDERAL 107

Autoridad competente para resolver

El art. 90 del decreto 1759/72 determina que los ministros y


secretarios de la Presidencia resolverán los recursos jerárquicos,
pero cuando el acto administrativo cuestionado emane de éstos,
deberá resolverlo el Poder Ejecutivo nacional.
A partir de la reforma de la Constitución de la N ación argenti-
na operada en 1994 que incorpora al "Jefe de Gabinete", ¿quién debe
resolver el recurso jerárquico?
Juan Carlos CASSAGNE responde a este interrogante expresan-
do:" [. .. ] tratándose de una facultad inherente al ejercicio de la ad-
ministración general del país, que a partir de la reforma constitu-
cional de 19941e ha sido asignada al Jefe de Gabinete (art. 100,
inc. 1, Const. N ac.), la resolución de los recursos jerárquicos inte-
graría la competencia atribuida a dicho funcionario, incluso si el
respectivo acto emanara de un ministro, en virtud de lajerarquía
que surge del precepto constitucional citado [... ]". 6

Entes descentralizados

Si bien el art. 93 del decreto 1759/72 establece que la normati-


va analizada es aplicable en el ámbito de los "entes autárquicos",
la doctrina considera que debe entenderse aplicable a los "entes
descentralizados" .
Sin peIj uicio quela autoridad superior del ente es la competente
para resolver el recurso jerárquico, en todas las demás cuestiones
-plazos, legitimación, condiciones objetivas, etc.-se aplican las
normas ya analizadas.

Normas aplicables

El recurso jerárquico se encuentra regulado por los arts. 88, 89,


90,91, 92y93 del decreto 1759/72.

6 CASSAGNE, Juan Carlos, Derecho administrativo, t. n, pág. 603.


108 LILIANA N. VILLAFAÑE

IV. RECURSO DE ALZADA

Concepto

El recurso de alzada, también llamado por la doctrina recurso


jerárquico impropio, es el medio impugnativo previsto por lalegis-
lación para cuestionar los actos administrativos de las entidades
descentralizadas y de las organizaciones jurídicas de participación
estatal. 7
Se trata de un recurso facultativo, ya que el administrado no se
encuentra obligado a plantearlo a los fines de agotar la vía admi-
nistrativa .
.Expresamente se encuentra legislado que la elección de la vía
judicial hace perder la administrativa, pero si el interesado hubiese
planteado el recurso de alzada podrá desistirlo en cualquier esta-
do del trámite para acudir a la instancia jurisdiccional (art. 95,
decreto 1759/72).
Este medio impugnativo posibilita que la Administración Cen-
trallleve a cabo un control de tutela respecto de las decisiones adop-
tadas por los organismos referidos.
"Esta especie de control--que procura asegurar el cumplimien-
to de los fines de la entidad, preservando el bien común-configu-
ra -a diferencia del control que dimana de lajerarquía- un po-
der condicionado o limitado que requiere atribución expresa y que
es de interpretación restrictiva". "La tutela entraña un poder de
revisión que ejerce la Administración Central sobre los actos de los
órganos superiores de las entidades descentralizadas y de los ór-
ganos de administración de las personas privadas estatales (vgr.,
sociedades del Estado)". 8

7Conf. CASSAGNE, Juan Carlos,Derecho administrativo, t. II, pág. 609.


8Conf. CASSAGNE, Juan Carlos, Derecho administrativo, t. II, págs. 608
y609.
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN FEDERAL 109

Actos recurribles

Son recurribles a través del recurso de alzada:


a) Los actos administrativos definitivos, es decir, los queresuel-
ven la cuestión de fondo debatida.
b) Los actos que sin ser definitivos impiden totalmente la tra-
mitación de la pretensión esgrimida por el administrado.
El arto 40 del decreto 1883/91 determina expresamente que son
recurribles los actos administrativos que emanaren del órgano
superior de empresas o sociedades de propiedad total o mayorita-
ria del Estado, excluyendo los actos concernientes a la actividad
privada del ente.
Para ello será necesario analizar cada caso en particular para
determinar si la cuestión es regida por el derecho público o priva-
do. Al respecto Tomás HUTCHINSON expresa: "[... ] cuando la norma
dice actos inherentes a la actividad privada, hace referencia a aque-
llos actos cuyo objeto se rige por el derecho civil, comercial, labo-
ral, etc. [. .. ] El derecho aplicable al objeto del acto que discuto es el
que determina la cuestión [.. .]". 9

Condiciones para la interposición

El recurso de alzada se interpone en el plazo de quince días


hábiles administrativos ante la autoridad que dictó el acto admi-
nistrativo, quién deberá elevarlo -en el plazo de cinco días- al
Ministro o Secretario de la Presidencia de la N ación en cuyajuris-
dicción actúe el organismo descentralizado.

Resolución del recurso: plazo y autoridad

El recurso de alzada deberá ser resuelto en el término de trein-


ta días, aplicándose supletoriamente -en este aspecto-lo nor-

9 HUTCHINSON, Tomás, Régimen de procedimientos administrativos,


pág. 197.
110 LILIANA N. VILLAFAÑE

mado respecto al recurso jerárquico en el arto 91 del decreto 1759/


72.
La autoridad competente pararesolver el recurso será el minis-
tro o secretario de la Presidencia en cuyo ámbito se encuentre com-
prendido el órgano descentralizado.
Para que se considere configurado el silencio administrativo y
por ende la denegación tácita, no se requiere la interposición de
pronto despacho.

Alcance del control

El arto 97 del decreto 1759/72 permite distinguir y realizar las


siguientes interpretaciones:
a) Si el órgano descentralizado ha sido creado por el Congreso
de la N ación en ejercicio de atribuciones constitucionales, el re-
curso de alzada sólo procederá por razones vinculadas a la legiti-
midad del acto. Ello significa que la autoridad competente podrá
realizar un control limitado, salvo que la legislación le autorice ex-
presamente uno de mayor amplitud.
En este supuesto, la autoridad se limitará a revocar el acto
administrativo cuestionado. Sólo podrá modificarlo o sustituirlo
-de manera excepcional- si razones fundadas de interés pú-
blico lo justifican.
b) Si el órgano descentralizado fuere creado en ejercicio de una
atribución concurrente por el Poder Legislativo o por el Poder Eje-
cutivo, el control es más amplio ya que abarca las cuestiones rela-
tivas a la legitimidad del acto y también lo concerniente a la opor-
tunidad, mérito o conveniencia.

Universidades nacionales

El texto del arto 94 del decreto 1759/72 enuncia que son cues-
tionables, a través del recurso de alzada, los actos administrati-
vos emanados del órgano superior del ente autárquico, "incluidas
las universidades nacionales [. ..]".
LOS REC SOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN FEDERAL 111

Esa inclusión xpresa en la norma referida ha quedado dero-


gada con la sanci / n de la Ley de Educación Superior N° 24.521.
Elart.32dela ey24.521contemplaunrecursojudicialdeape-
lación para cuest onar las decisiones del órgano superior de las
universidades na ionales, que es motivo de análisis en el capítulo
pertinente.

Normas aplica les

El medioimpu ativo que nos ocupa se encuentra legislado en


losarts. 94,95,96, 97y98 del decreto 1759/72, yel art. 4° del decre-
t01883/91.

v. RECURSO DE IÓN

El arto 22 de la ey de procedimiento administrativo N° 19.549


regula este recurs administrativo extraordinario determinando
las causales para u procedencia.
Al tratarse de recurso de carácter extraordinario, su proce-
dencia debe inter retarse en forma restrictiva.
Tomás HUTCHI SON lo define: "[. .. ] es el remedio procedimental
extraordinario e caminado a examinar de nuevo un acto firme o
sea pasado en aut ridad de cosajuzgada, cuando se ha llegado a él
por medios ilícito o irregulares, sin culpa o negligencia del parti-
cular, prescindie do o incorporando nuevos elementos de prueba
enelnuevoexpe ente [... ]".10

Podrá plante se el recurso de revisión para cuestionar un acto


administrativo fi

10 HUTCHINSON, To ás,Régimen de procedimientos administrativos,


pág. 150.
112 LILIANA N. VILLAFAÑE

Recordemos que un acto administrativo adquiere firmeza cuan-


do se han vencido los plazos legales para interponer recursos ad-
ministrativos, o bien antes del vencimiento de esos términos, el
interesado lo ha consentido.

Causales de revisión. Plazos

La ley de procedimientos administrativos en su arto 22 deter-


mina las causales de procedencia del recurso de revisión.
Asimismo establece los plazos para su interposición.
El inc. a establece que procederá la revisión "Cuando resultaren
contradicciones en la parte dispositiva, háyase pedido o no su acla-
ración".
Si el recurrente invoca esta causal deberá interponer el recur-
so de revisión dentro de los diez días de notificado el acto adminis-
trativo.
Es posible advertir en este supuesto que si el recurso de revi-
sión debe plantearse dentro del plazo de diez días, no estamos en
presencia de un acto firme, por lo que éste debería ser cuestionado
mediante los otros recursos administrativos ordinarios.
El inc.b determina que procederá la revisión "Cuando después
de dictado se recobraren o descubrieren documentos decisivos cuya
existencia se ignoraba o no se pudieron presentar como prueba por
fuerza mayor o por obra de tercero".
En este supuesto, el recurso de revisión deberá plantearse en
el término de treinta días contados a partir de que los documentos
se recobrasen o hubiese cesado la causal de fuerza mayor.
N o cualquier documento posibilita la apertura de esta instan-
cia recursiva extraordinaria, ya que tiene que tratarse de "docu-
mentos decisivos" en el sentido de que su incorporación a la causa
podrían ocasionar un cambio sustancial en la resolución del con-
flicto.
El inc. c determina como causal de revisión: "Cuando hubiese
dictado basándose en documentos cuya declaración de falsedad se
desconocía o se hubiere declarado después de emanado el acto.
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN FEDERAL 113

En esta ocasión se requiere que los documentos hayan sido de-


clarados falsos por unjuez competente mediante el dictado de una
sentencia de fecha posterior al acto administrativo que se preten-
de revisar, o bien e:xista un desconocimiento de ello por parte del
interesado.
El plazo de interposición de recurso basado en esta causal es de
treinta días contados a partir de la comprobación de las circuns-
tancias descri ptas e~n la norma.
Elinc. d del arto ~~2 de la LNPAhabilita la interposición del re-
curso de revisión "Cuando hubiere sido dictado mediante cohecho,
prevaricato, violeneia o cualquier otra maquinación fraudulenta
o grave irregularidad comprobada".
El recurso debe plantearse en el plazo de treinta días computa-
dos desde la fecha de comprobación legal de los hechos descriptos
enlanorma.

Decisión del reCUlrso

Si bien la norma analizada nada dice respecto ante quién debe


presentarse el recurso de revisión y qué autoridad deberá resolver-
lo, la doctrina entiende que se debe plantear por ante el mismo
órgano que emitió el acto cuestionado, quien también 10 resolverá
quedando a salvo la posibilidad que el superiorjerárquico se avoque
,al conocimiento y decisión de este medio impugnativo extraordi-
nano.
En la referida ocasión deberá precisar expresamente la causal
invocada y acompañar las constancias pertinentes a los fines de
acreditarla.
En principio, la autoridad competente deberá realizar-prima
facie- un examen de admisibilidad para luego proceder a resol-
ver el recurso, ya sea confirmando o revocando el acto administra-
tivo cuestionado.
-
114 LILIANA N. VILLAFAÑE

VI. LA QUEJA

La quej a, en el ámbito normativo que nos ocupa, no constituye


técnicamente un recurso, ya que no se encuentra legislado para
cuestionar actos administrativos.
Se trata de una vía administrativa que posibilita al adminis-
trado acudir ante el superiorj erárquico inmediato con la finalidad
de hacerle conocer "los defectos de tramitación e incumplimiento de
los plazos legales o reglamentarios en que se incurriere durante
el procedimiento [... ]" (art. 71, decreto 1759/72).
La expresión "defectos" debe interpretarse en sentido amplio,
ya que resulta comprensible de las irregularidades, omisiones o
anormalidades que pueden presentarse durante la tramitación de
un procedimiento administrativo.
Motiva la queja el incumplimiento de plazos en el procedimien-
to, excluyendo expresamente los referidos para la resolución de
recursos administrativos.
Atento la naturaleza y caracteres de esta reclamación, no exis-
te plazo para su interposición.
Presentada la queja ante el superior jerárquico, éste deberá
resolverla en el plazo de cinco días, que deberán computarse des-
de la recepción de la misma o desde la fecha de presentación del
informe por parte del órgano inferior.
La resolución de la queja es irrecurrible.
La presentación y tramitación de la quej a no suspende el trá-
mite del procedimiento.

VII. ACLARATORIA

Existen diversas opiniones doctrinarias respecto a la natura-


leza de la "aclaratoria", que se encuentra legislada en el arto 102
del decreto 1759/72. Básicamente encontramos las siguientes:
a) Un sector de la doctrina considera que no es un recurso, pues
"no sirve para enmendar un defecto de volición sino un defecto de
expresión [oo.] No se ataca una decisión de la Administración, sino
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN FEDERAL 115

que se peticiona solamente que la autoridad ponga en claro, ex-


plique, despeje las ambigüedades del acto [... ] no existe impug-
nación ni el órgano administrativo revoca, modifica o sustituye el
acto, que sonlas consecuencias de la aceptación de un recurso [...]".11
Por lo tanto, según esta postura doctrinaria que sostiene que
la aclaratoria no es un recurso, su interposición no interrumpe los
términos para recurrir, pues no existe una norma expresa que así
lo determine.
b) Otros autores entienden que "dado que se trata de laimpug-
nación de un acto administrativo no caben dudas de que se trata
de un verdadero recurso, aun cuando es de carácter alternativo o
paralelo frente al recurso jerárquico y al de reconsideración, como
al recurso de alzada [... ]" .12
La aclaratoria se plantea en el plazo de cinco días hábiles ad-
ministrativos contados desde la notificación del acto definitivo, por
ante la misma autoridad que lo dictó quien deberá resolverla den-
tro del término de cinco días.

VIII. RECTIFICACIÓN DE ERRORES MATERIALES

Si un acto administrativo contiene errores materiales o de he-


cho y aritméticos, la autoridad que lo dictó podrá -de oficio o a pe-
dido del interesado--proceder a su rectificación.
La rectificación no es considerada un recurso, ya que no persi-
gue la finalidad de impugnar un acto administrativo y aún la pro-
pia autoridad que lo dictó la puede realizar.
Atento la naturaleza de la petición, el administrado no tiene
plazo legal para requerir la rectificación, como tampoco se deter-
mina legalmente el término que tiene la autoridad para expedir-
se respecto a la cuestión.

11 HUTCHINSON, Tomás, Régimen de procedimientos administrativos,


pág. 398.
12 CASSAGNE, Juan Carlos, Derecho administrativo, t. n, pág. 617.
=

116 LILIANA N. VILLAFAÑE

Tomás HUTCHINSON distingue dos situaciones:


"a) Si el particular es quien pidió la rectificación, podrá haber una
denegación tácita [... ] en aplicación de lo dispuesto por el arto 10
de la LNPA. Para este caso, cabe dar al órgano un plazo de tres días
para que produzca el acto rectificatorio (art. 26, RLNPA); b) si no
hay petición del particular, la Administración puede rectificar, en
principio, en cualquier momento [... ]".13

IX. RECLAMO ADMINISTRATIVO PREVIO

Concepto

La ley 25.34414 ha introducido importantes reformas al régi-


men legal del reclamo administrativo previo contemplado enlos
arts. 30, 31y32delaley19.549.
En los casos que no se cuestionase un acto administrativo o re-
glamento, el interesado previo a iniciar una demanda judicial,
deberá formular-por regla general- el reclamo administrativo
previo.
La ley 19. 549-antes dele reforma referida-contemplaba una
serie de excepciones (art. 32) que implicaban la no obligatoriedad,
en la mayoría de los casos, de formular el reclamo administrativo
preVIO.
En la actualidad, y de conformidad a las reformas introducidas
por la ley 25.344, podemos sostener que el reclamo administrati-
vo previo es un "requisito hoy imprescindible para considerar ha-
bilitada la instanciajudicial en aquellos casos en que se cuestione
una conducta estatal, o se reclame una prestación, a través de una
pretensión que no importe para su progreso la necesidad de impug-
nar un acto administrativo o un reglamento. Las contadas excep-

13 HUTCHINSON, Tomás, Régimen de procedimientos administrativos,


pág. 397.
14 Ley N° 25.344, sancionada eI19/10/2000, publicada en el B.O. del 21/

11/2000.
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN FEDERAL 117

CÍones contempladas en el arto 32 son -como tales- excepciones


y no invalidan la regla expuesta [, .. 1".15

Órgano interviniente

El reclamo administrativo previo debe formularse por ante el


Ministerio o Secretaría de la Presidencia o ante el órgano superior
del ente autárquico, según corresponda.

Procedencia. Excepciones

Atento la redacción actual del arto 30 de la ley 19.549, es posi-


ble advertir distintas situaciones, a los fines de acceder a la vía
judicial:
- Si se trata de actos de alcance particular, deben cumplimen-
tarse los requisitos del art. 23.
- Si se trata de actos de alcance general, se deben reunir las exi-
gencias del arto 24.
- Si en el caso concreto no se cuestiona un acto ni un reglamento
debe formularse el reclamo administrativo previo.
También la normativa analizada determina los casos en los
cuales no procederá el reclamo administrativo previo. Ellos son:
-Las excepciones descriptas en el arto 32: a) cuando mediare una
normaexpresaqueasílodetermine(porejemplo,art.53,ley21.499);
b) cuando se pretenda repetir lo pagado al Estado en virtud de una
ej ecución o de repetir un gravamen pagado indebidamente, y c) si
se reclamasen daños y perjuicios contra el Estado por responsabi-
lidad extracontractual.
- Cuando se diera el supuesto contemplado en el arto 10 de la
ley 19.549 (silencio o ambigüedad).
- Cuando se pretenda cuestionar una vía de hecho administra-
tiva (art. 9°, ley 19.549).

15 USLENGHI, Alejandro, Proceso administrativo-II, 2003-2, Rubinzal-


Culzoni, Bs. As., 2003, pág. 27.
r~·----------------------

118 LILIANA N. VILLAFAÑE

Plazo para resolver el reclamo

La autoridad competente cuenta con el plazo de noventa días


-contados a partir de la presentación del reclamo- para expedir-
se.
Si vencido el plazo referido la autoridad no se expide, el intere-
sado requerirá pronto despacho, y si transcurrieren cuarenta y
cinco días más, se encuentra habilitado para iniciar la demanda
judicial.

Plazo para iniciar la demanda judicial

El arto 31 de la ley 25.344 determina expresamente que la de-


mandajudicial deberá ser interpuesta "en los plazos perentorios
y bajo los efectos previstos en el arto 25, sin perjuicio de lo que fuere
pertinente en materia de prescripción".
Esa disposición ha generado diferentes interpretaciones doc-
trinarias, especialmente teniendo como base otras normas vincu-
ladas a la problemática que nos ocupa.
Por ejemplo, Alejandro Juan USLENGHI 16 realiza la siguiente
interpretación:
- "[ ... ] si transcurrieren otros cuarenta y cinco días, podrá ini-
ciarse la demanda en cualquier momento mientras se mantenga
el silencio de la administración, sin que pese sobre su acción plazo
fatal alguno".
- "[ ... ] en cualquier momento en que le sea notificado al intere-
sado el rechazo de su reclamo administrativo en forma expresa, co-
mienza a computarse el plazo para deducir la demanda, según lo
previsto en el arto 25".
-"el plazo para demandar es fatal, es un plazo de caducidad que,
vencido, impide totalmente la reiteración de la pretensión que fue
motivo del reclamo [... ]".

16 USLENGHI, Alejandro, op. cit., pág. 36.


LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN FEDERAL 119

En cambio, N éstor BUJÁN -juez de la Cámara N acional de Ape-


laciones en lo Contencioso Administrativo Federal- considera
que: "La norma es clara: producido el silencio -es decir, vencido
el plazo de noventa (90) días con que cuenta la autoridad para re-
solver el reclamo y, pedido pronto despacho por el particular, trans-
curridos otros cuarenta y cinco (45) días sin que medie pronuncia-
miento por parte de la Administración, el interesado podrá iniciar
la demanda, la que deberá ser interpuesta en los plazos perento-
rios y bajo los efectos previstos en el arto 25 [... ]". "En tales condicio-
nes, el nuevo texto no otorga una real opción al administrado, el que
puede demandar dentro del plazo que éste establece o exponerse a
sufrir las consecuencias de no hacerlo [... ]". 17

Irrecurribilidad de la decisión

El arto 31 de la ley 19.549 determina que si el reclamo adminis-


trativo previo es denegado expresamente, esta decisión no será
recurrible en sede administrativa.
Ello es así porque se ha tenido especial consideración en laje-
rarquía de las autoridades que resultan competentes para resol-
ver el reclamo administrativo previo.

x. AMPARO POR MORA ADMINISTRATIVA


Consideraciones generales

El amparo por mora se encuentra regulado en los arts. 28 y 29


delaLey Nacional de Procedimiento Administrativo.
Cuando la Administración no resuelve una cuestión sometida
a su consideración, el ordenamiento jurídico brinda al interesado
el medio o instrumento denominado "amparo por mora adminis-
trativa".

17 BUJÁN, Néstor R., Proceso administativo-II, pág. 78.


=

120 LILIANA N. VILLAFAÑE

Este instituto permite exigirjudicialmente una decisión expre-


sa respecto a un asunto planteado en sede administrativa.
Por ello Guillermo MUÑoz expresa que: "El silencio me da lE.
posibilidad de huir, de escapar, de salirme del procedimiento ae-
ministrativo. En cambio el otro, el amparo por mora me permitE
seguir en el procedimiento administrativo hasta que se concluyA
con la decisión expresa y fundada que tengo yo como ciudadano.
como habitante, como particular, como administrado, tengo dere-
cho a exigir" .18
A través del amparo por mora, quien es parte en un expediente
administrativo puede acudir a sede judicial con el propósito que se
emplace a la Administración para que adopte una decisión expre-
sa en el plazo que el tribunal interviniente determine.
Es posible distinguir dos posibilidades:
a) El silencio o técnica del silencio permite acceder al proceso
judicial aunque la Administración no haya dictado un pronuncia-
miento expreso.
b) El amparo por mora permite exigir-a través de una orden
judicial de pronto despacho-la decisión administrativa expresa
y fundada.

Legitimación activa

Según se desprende de la norma analizada, pueden plantear un


amparo por mora quien "fuere parte en un expediente administra-
tivo". Por ello, y de conformidad a lo establecido en el arto 3° del de-
creto 1759/72, debemos considerar que la legitimación alcanza a
toda persona física o jurídica, pública o privada, que invoque las
situaciones jurídicas subj etivas de "derecho subjetivo o interés le-
gítimo".

18MUÑoz, Guillermo, citado por GAUNA, Juan Octavio, "Amparo por


mora de la Administración Pública", en El derecho administrativo
argentino, hoy, Editorial Ciencias de la Administración, Bs. As., 1996,
pág. 262.
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN FEDERAL 121

Condición objetiva de procedencia

Sin lugar a dudas, la condición objetiva para que proceda el


amparo por mora es la existencia de la mora administrativa que
el peticionante debe invocar y acreditar.
La norma analizada hace referencia al vencimiento de plazos,
y si no existieran éstos que hubiese "transcurrido un plazo que
excediere lo razonable", circunstancia esta última que deberá va-
lorarse en el caso concreto.

Trámite judicial

Previo examen de admisibilidad formal, el tribunal requerirá


a la "autoridad judicial interviniente que, en el plazo que le fije,
informe sobre las causas de la demora [... ]".
"El informe que se requiere ala autoridad administrativa-de
un órgano de la Administración centralizada o descentralizada-
no constituye un acto procesal previsto sólo en resguardo de la
Administración, sino también, y especialmente, como medio infor-
mativo para eljuez [... ]".19
Una vez producido el informe por el órgano administrativo, o
habiéndose vencido el plazo para efectuarlo, el tribunal procede-
rá a resolver el amparo por mora.
Puede ocurrir que no haga lugar al amparo por mora en virtud
de no encontrarse acreditado los supuestos de procedencia descrip-
tos en el arto 28 de la ley 19.549.
Eljuez podrá acoger el amparo por mora, en cuyo caso librará
al organismo que deba resolver una ordenjudicial de pronto des-
pacho.
La doctrina considera que la sentencia dictada no es declarati-
va, sino condenatoria, ya que impone a la Administración el cum-
plimiento de una determinada obligación.

19 HUTCHINSON, Tomás, Régimen de procedimientos administrativos,


pág. 174.
-
122 LILIANA N. VILLAFAÑE

La sentencia: ¿es apelable?

La expresión "La decisión deljuez es inapelable", contenida en


el arto 28, generó la existencia de diversos criterios doctrinarios y
jurisprudenciales.
En virtud de su ubicación (que no está al final del artículo) los
autores opinaban que la ina pelabilidad no está referida a la deci-
sión o sentencia final, sino a la resolución del juez respecto a la
admisibilidad del amparo por mora.
Respecto a la temática que nos ocupa, es importante destacar
la evolución de los criterios jurisprudenciales:
En una primera etapa, la Cámara Nacional enlo Contencioso
Administrativ020 se expidió en fallo plenario respecto a la inape-
labilidad de la sentencia dictada en un amparo por mora, realizan-
do una interpretación literal de la norma.
Años más tarde, el mismo tribunal-pero con otra integra-
ción- decidió que las sentencias de primera instancia en el am-
paro por mora son apelables. 21
Al respecto Juan Octavio GAUNAexpresa al comentar la causa
antes referida: "Las razones que se invocan es que del texto de la
ley no surge que la sentencia es inapelable, además un argumen-
to también que comparto dice que la doble instancia es un princi-
pio liminar de la organización procesal argentina, que se compa-
dece perfectamente con la acción de amparo, que resulta valioso
mantener esa doble instancia, sin perjuicio de reconocer la celeri-
dad que debe imprimirse a estos trámites de acción de amparo por
mora". 22

20 Cám. Nac. Cont. Adm., en autos "Esperanza D. d Entel", 25/11/1980,


LL,1981-A-180.
21Cám. Nac. Cont. Adm., en autos "Transportadoras de Caudales
Zudbesa d Empresa Ferrocarriles Argentinos", 25/02/1985, LL, 1985-
C-51l.
22 GAUNA, Juan Octavio, "Amparo por mora de la Administración Pú-

blica", op. cit., pág. 262.


LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN FEDERAL 123

En caso de incumplimiento de la ordenjudicial de pronto des-


pacho el tribunal interviniente en la causa deberá remitir las ac-
tuaciones a lajusticia penal.

XI. DENUNCIA DE ILEGITIMIDAD

Concepto

El arto r, inc. e, apartado 6, de la Ley Nacional de Procedimiento


Administrativo contempla la "denuncia de ilegitimidad".
Tiene su origen en lajurisprudencia administrativa de la Pro-
curación del Tesoro de la N ación.
Se la define como "un recurso administrativo impropio, parcial-
mente típico, supletorio del no usado en tiempo, cuyas notas sin-
gulares resultan, por una parte, de las pautas regladas de desesti-
mación formal, seguridad jurídica y abandono voluntario del
derecho y, por otra, de la circunstancia de que su habilitación no
exhuma la posibilidad de agotar la vía administrativa, perdida por
el transcurso del plazo para recurrir y, consiguientemente, la de
acceder a lajusticia". 23

Requisitos para su procedencia

a) Acto administrativo: atento que se considerará como denuncia


de ilegitimidad el recurso interpuesto extemporáneamente, nece-
sariamente debe existir un "acto administrativo".
b) Extemporaneidad: la denuncia de ilegitimidad sólo es pro-
cedente contra actos administrativos "cuyo plazo de impugnación
venció; no puede admitírsela, por tanto, como alternativa a los
recursos improcedentes como tales o que adolezcan de fallas pro-
cesales de orden sustancial, estos actos, pueden ser atendidos a

23 COMADlRA,Julio Rodolfo, Derecho administrativo, Lexis N exisAbeledo-


Perrot, Bs. As., 2003, pág. 201.
--
124 LILIANA N. VILLAFAÑE

través del principio de informalismo, en tanto no sean esenciales


oinsubsanables [... ]".24
c) Situaciónjurídica subjetiva: por tratarse la denu...'1cia de ile-
gitimidad de un sustituto del recurso administrativo planteado
vencido el término legal, sólo podrá interponerla quien invoque la
titularidad de un derecho subjetivo o un interés legítimo.
Sin embargo, el órgano administrativo podrá declarar la in-
admisibilidad de la denuncia de ilegitimidad en los siguientes
supuestos:
- Por razones de seguridadjurídica.
- Cuando pudiere entenderse que existió abandono voluntario
del derecho por encontrarse excedidas razonables pautas tempo-
rales, las que deberán ser valoradas en cada caso concreto. Sin
embargo, suele considerarse "más apropiado el plazo de noventa
días o el que corresponda si la impugnación ha de materializarse
por medio de un recurso especial, para admitir la obligación de la
Administración de sustanciar la denuncia, sin que quepa dentro
de ese lapso alegar motivos de seguridadjurídica o el exceso de ra-
zonables pautas temporales". 25

Trámite

A la denuncia de ilegitimidad se le deberá dar el trámite corres-


pondiente al recurso administrativo que sustituya.
Habitualmente el órgano administrativo se expide sobre la
procedencia o no del recurso extemporáneo como denuncia de ile-
gitimidad, previo dictamenjurídico.

Resolución: alcance y control judicial

La administración podrá acoger o desestimarformalrnente lade-


nuncia de ilegitimidad mediante el acto administrativo pertinente.

24 COMADIRA, Julio Rodolfo, op.cit., pág. 204.


25 COMADIRA, Julio Rodolfo, op.cit., pág. 206.
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN FEDERAL 125

Esta decisión es susceptible de ser recurrida e incluso acceder


al controljudicial, pero sólo podrán invocarse cuestiones que ha-
cen a la admisibilidad de la denuncia de ilegitimidad.
Cuando el órgano administrativo resuelve elfondo de la cues-
tión planteada en la denuncia ¿es posible interponer recursos para
agotar la vía administrativa y acceder al controlj udicial?
Julio COMADIRA nos brinda la respuesta a dicho interrogante:
"En tanto se acepte, en efecto, la validez constitucional del siste-
ma de acceso jurisdiccional regulado por el mecanismo de agota-
miento de la vía previsto en el arto 23 de la LNPA, ymás allá de la
valoración que, de lege ferenda, pueda realizarse de la exigibilidad
del referido agotamiento, no parece coherente propiciar la subsis-
tencia de aquel acceso, cuando no se observan los plazos recursi-
vos. De lo contrario se colocaría al denunciante en igual condición
que quien observa el procedimiento previsto en el ordenamiento,
cumpliendo con los plazos exigidos por éste [... l". 26
La Corte Suprema de Justicia de la Nación en el caso "Gorordo"
se expidió acerca de esta cuestión expresando:
"Que la decisión administrativa que desestima en cuanto al fondo
un recurso extemporáneo, tramitado enel caso como denuncia de
ilegitimidad, no es susceptible de ser impugnada en sedejudicial
porque, al haber dejado vencer el interesado el término para dedu-
cir los recursos administrativos, ha quedado clausurada la vía re-
cursiva, y, por ende, la posibilidad de agotar la vía administrativa,
requisito insoslayable para la habilitación de la instanciajudicial
(art.23, inc. a, ley 19.549)".21
Además, es necesario tener presente que la denuncia de ilegi-
timidad es un remedio extraordinario autorizado por el ordena-
miento jurídico con la finalidad de asegurar el control de legalidad
y eficacia de la actividad administrativa.

26COMADIRA, Julio Rodolfo, op. cit., pág. 21l.


27CSJN, en autos "Gorordo Hallaría de Kralj, Haydeé", 04/02/1999,
Fallos 322:74.
126 LILIANA N. VILLAFAÑE

XII. IlÁBEAS DATA

El tercer párrafo del arto 43 de la Constitución Nacional expre-


sa:
"Toda persona podrá interponer esta acción para tomar conoci-
miento de los datos a ella referidos y de su finalidad, que consten en
registros o bancos de datos públicos, o los privados destinados a
proveer informes, y en caso de falsedad o discriminación, para exi-
gir la supresión, rectificación, confidencialidad o actualización de
aquéllos. No podrá afectarse el secreto de las fuentes de información
periodística" .
La ley 25.326 y el decreto 1558/01 constituyen las normas re-
glamentarias del arto 43 de la Constitución Nacional en lo que res-
pecta al hábeas data.
De conformidad al derecho positivo vigente, es posible distin-
guir distintas etapas procedimentales que de seguido pasaremos
a desarrollar.

A. Etapa administrativa

El titular de los datos deberá intimar de modo fehaciente al ban-


co de datos públicos o privados con la finalidad de obtener infor-
mación sobre sus datos personales.
Este emplazamiento se realiza por el término de diez días co-
rridos.
Es posible, también, obtener mediante el acceso directo la in-
formación de su interés.
Conocida u obtenida la información, podrá reclamar la actua-
lización, supresión, rectificación o confidencialidad de sus
datos, la que deberá llevarse a cabo en un plazo de cinco días hábi-
les.
En este ámbito administrativo, la "petición se concreta con la
simple presentación al organismo consultado (público o privado),
y completando un formulario de acceso a la información se cum-
ple con la formalidad mínima prevista para autorizar el ingreso.
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN FEDERAL 127

En ocasiones, se admite agregar documentación que respalda otras


peticiones conexas con los datos archivados, en miras a su actuali-
zación o rectificación". 28
Vencidos los plazos de intimación sin obtener respuesta, o si ésta
resultara insuficiente, quedará expedita la acción de protección de
datos personales o hábeas data (arts. 14 y 33, ley 25.326).

B. Etapajudicial

La demanda

La demandajudicial, de conformidad al artículo 38, deberá for-


mularse por escrito y contemplará los siguientes requisitos:
a) Nombre, apellido, domicilio real y legal y demás datos per-
sonales de la persona que inicia el proceso judicial.
b) Individualización del archivo, registro o banco de datos y su
domicilio.
c) Deberá acreditar el cumplimiento del emplazamiento en sede
administrativa y el transcurso de los plazos previstos en la norma.
d) Deberá explicitar las razones por las que entiende que en el
archivo, registro o banco de datos obra información referida a su
persona; los motivos por los cuales considera que la información
resulta discriminatoria, falsa o inexacta.
e) Puede requerir que el tribunal interviniente ordene al ban-
co de datos o registro que determinada información está sometida
a proceso judicial. Eljuez podrá disponer el bloqueo provisional del
archivo respecto a los datos en cuestión, cuando sea manifiesto el
carácter discriminatorio, falso o inexacto.
f) Debe expresar la petición en forma clara y precisa (acceso,
actualización, supresión, individualización, confidencialidad,
etc.).

28 GOZAÍNI, Osvaldo A., Hábeas data, Rubinzal-Culzoni, Buenos Aires,

2001, pág. 422.


128 LILIANA N. VILLAFAÑE

Legitimación activa

De acuerdo a lo normado en el arto 34, la acción puede ser ej er-


cida por el afectado, sus tutores o curadores, y los sucesores de las
personas físicas, sean en línea directa o colateral, hasta el segun-
do grado, por sí o por intermedio de apoderado. Las personas de
existencia ideal, lo harán a través de sus representantes legales o
apoderados.
En esta causa, podrá intervenir como coadyuvante el Defensor
del Pueblo.

Legitimación pasiva

Según el arto 35, son legitimados pasivos los responsables y


usuarios de bancos de datos públicos y privados destinados a pro-
veer informes.
"La condición para adquirir la calidad de suj eto pasivo depen-
de de los datos almacenados y de la forma como se compilan. Una
cosa es el archivo común que no tiene finalidades informativas y
otra muy distinta el registro ordenado y sistemático que tienen los
bancos de datos. La diferencia que la norma constitucional esta-
blece entre registros públicos y privados destinados a proveer in-
formación es simplista, aunque efectiva alos efectos de lograr al-
guna precisión respecto a saber a quiénes se puede demandar
[. .. ]".29

Competencia

El arto 36 establece que será competente eljuez del domicilio


del actor, el del domicilio del demandado, el del lugar en el que el
hecho o acto se exteriorice o pudiera tener efecto, a elección del
actor.

29 GOZAfNI, Osvaldo, Hábeas data, pág. 408.


LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN FEDERAL 129

Osvaldo GoZAÍNI, al comentar este tema, expresa: "Si la deman-


da se articula como defensa de la intimidad contra empresas pri-
vadasdestinadasaproveerinformes,lajurisdicciónintervinien-
te corresponde a los tribunales civiles por razón de la materia.
Empero, también se ha dicho que si la demanda se dedica comer-
cialmente ala difusión de información contenida en sus bancos de
datos, en cuyo caso evidentemente desarrolla actividad mercan-
til [... ] lajusticiacomerciales competente por así asignarlo la cali-
dad de las personas". 30
La misma norma determina también que procederá la compe-
tencia federal: "cuando se interponga en contra de archivos de da-
tos públicos de organismos oficiales y cuando los archivos de datos
se encuentren interconectados en redes interjurisdiccionales, na-
cionales o internacionales".

Admisibilidad de la demanda

Una vez planteada la demanda, el juez interviniente deberá


analizar la procedencia formal de la misma, pudiendo rechazar in
limine la acción de hábeas intentada, o bien emplazar al accionante
para que proceda a cumplimentar algún tipo de requisito.
La Sala 1 dela Cámara Federal de Bahía Blanca, respecto a esta
cuestión, ha expresado: "Los jueces pueden rechazar in limine la
acción de hábeas data con criterio restrictivo y la mayor pruden-
cia y cautela, ya que de lo contrario podría interpretarse como una
negacióndejusticia".31

30 Cfr. dictamen del fiscal de la Instancia en la causa "Benseñor el


Organización Veraz S.A.", del 15/08/1995. GOZAíNI, Osvaldo, Hábeas
data, pág. 452.
31 Cám. Fed. Bahía Blanca, Sala 1, en autos "Gutiérrez, H. el Casino

Militar del Personal Superior de la Base N aval Puerto Belgrano", 301


12/1994.
130 LILIANA N. VILLAFAÑE

Normas aplicables

A este proceso resultan aplicables la ley 25.326, ley 16.986 y las


disposiciones del Código Procesal Civil y Comercial de la N ación
enlo atinente aljuicio sumarísimo.

Informe

Admitida la acción de hábeas data eljuez interviniente solici-


tará al accionado -archivo, registro o banco de datos-la remi-
sión de la información referida al demandante.
El plazo para contestar el informe no podrá superar los cinco días
hábiles, pudiendo ser ampliado por el tribunal según las circuns-
tancias del caso.
Al contestar el informe se deberán expresar las razones por las
que se incluyó la información cuestionada y los motivos por los
cuales no se satisfizo la pretensión articulada por el interesado en
la etapa prejudicial.
Según lo dispone el arto 40, los registros, archivos o bancos de
datos privados no podrán alegar confidencialidad de la informa-
ción, salvo que afecten las fuentes de información periodística.
Distinto tratamiento reciben los registros o bancos de datos
públicos: "Las únicas defensas admisibles provienen de la calidad
del dato registrado, de modo tal que los responsables o usuarios de
bancos de datos públicos pueden, mediante decisión, denegar el
acceso, rectificación o la supresión en función de la protección de
la defensa de laNación, del orden y seguridad públicos, o de la pro-
tección de los derechos e intereses de terceros". 32
En tales supuestos, eljuez de la causa podrá tomar conocimiento
personal y directo de los datos solicitados asegurando mantener la
confidencialidad.
De acuerdo al contenido del informe elaborado por el acciona-
do, el actor podrá --en el plazo de tres días- ampliar la demanda

32 GOZAíNI, Osvaldo, Hábeas data, pág. 449.


LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN FEDERAL 131

solicitando la su presión, rectificación, confidencialidad o actuali-


zación de sus datos. Deberá ofrecer en esta ocasión toda la prueba
que considere pertinente.
De la ampliación realizada se deberá correr traslado al deman-
dado por el plazo de tres días.
Esta ampliación de demanda procederá cuando la pretensión
originaria articulada en la acción de hábeas data haya sido la de
obtener información. Una vez conocida la misma, y de acuerdo a
sus características, el interesado podrá ampliar su objetivo de con-
formidad a lo anteriormente relatado.

Sentencia

Contestado el informe requerido o vencido el plazo para hacer-


lo, o en caso de ampliada y contestada la demanda y habiendo sido
producida la prueba, eljuez dictará sentencia.
Si la pretensión procesal fue sólo el acceso a la información, el
objeto de la demanda se cumple al conocer el contenido del infor-
me, si éste es remitido por la accionada.
Si originariamente el objeto de la demanda fue la supresión,
rectificación, actualización o confidencialidad de los datos, o hubo
ampliación de la demanda, eljuez en caso de estimarla proceden-
te fij ará un plazo para su cumplimiento.
La sentencia, según lo dispone el arto 43, deberá ser comunica-
da al organismo de control que deberá llevar un registro al efecto.

XIII. REGÍMENES RECURSIVOS ESPECIALES

A. Consejo de la Magistratura: facultades


disciplinarias. Recurso

Consideraciones generales

La Constitución Nacional, a partir de la reforma operada en


1994, incorpora en el arto 114 el Consejo de la Magistratura.
132 LILIANA N. VILLAFAÑE

Este organismo constitucional se encuentra regulado por la


ley 24. 93 733 y entre sus atribuciones encontramos la de ej ercer fa-
cultades disciplinarias sobre magistrados, que es la que particu-
larmente nos interesa en este capítulo.
Originariamente, la doctrina discutía la ubicación institucio-
nal del Consejo de la Magistratura, ya que para algunos formaba
parte del Poder Judicial y para otros debía ser categorizado como
un "órgano extrapoder".
La posterior sanción de la ley 24. 937 aclaró la cuestión ya que
en su arto 10 determinó que el Consejo de la Magistratura es un
órgano permanente del Poder Judicial de la N ación.
Sin embargo, desarrolla funciones administrativas, "y queda
sujeta, por ende, al derecho administrativo porque si bien orgáni-
camente integra el Poder Judicial no ej erce la función propia de
éste, esto es, la decisión de conflictos entre partes con intereses
contrapuestos mediante los procedimientos establecidos [. .. ]".34
El Consejo de la Magistratura exteriorizará sus decisiones me-
diante el dictado de actos administrativos que, de acuerdo a su na-
turaleza o contenido, variará la intensidad y el alcance del control
judicial posterior. También el Consejo de la Magistratura, atento
las atribuciones constitucionales otorgadas, podrá dictar los de-
nominados "actos institucionales" con las consecuenciasjurídi-
cas que ello acarrea en cuanto al procedimiento y al controljudi-
cial, ya que "constituye un acto que no produce efectos jurídicos
directos en la esferajurídica de los particulares o administrados,
operando consecuencias respecto de órganos del Estado [... ]". "Como
consecuencia de ello, los particulares o administrados carecen de
acción para demandar ante lajusticia la anulación de tales actos
que vinculan esencialmente órganos o entidades estatales, cuya
supervivencia definitiva será determinada por otros órganos cons-

33 Ley N° 24.937, sancionada el 10/12/1997 ,promulgada el 30/12/1997 ,


publicada en B.O. del 06/0111998.
34 COMADIRA, Julio Rodolfo, op. cit., pág. 545.
LOS RECURSOS TIVOS EN EL ORDEN FEDERAL 133

titucionales a través delprloc~~d.lIlllento que la misma Constitución


establece [... ]".35

Organización

El Consej o de la .1.ua.¡:;.1.'" tura, para su funcionamiento, se di-


vide en cuatro comisiones:
1) De Selección de .1.uac¡:;.1.'" y Escuela Judicial.
2) De Disciplina.
3) De Acusación.
4) De Administración y p.1.(:u..1.~,H:a a.
La Comisión de Dis . es la competente para requerir al
Consejo de la Magistratura aplicación de sanciones disciplina-
rias a los magistrados.

Procedimiento

24.937 regula la posibilidad de que


aplique sanciones disciplinarias, las
voto de los dos tercios de los miem-

aplicarse por "cuestiones vin-


~U',.LVIIL.L del servicio de justicia", quedando
de independencia en relación
"''-'J. .L~'-,.L.L''.LU¡P que dictaren en ejercicio de sus fun-

ciones judiciales.
Podrá iniciarse el procE~01Im:LerrLOdisciplinario, de oficio o ante
tIIr'Y<>1"H"'<:! del Poder Judicial, magistra-

que acrediten un interés legítimo.


advertencia, apercibimiento, mul-
".1.";.1..1.~VIIU.v sus haberes.

35 CASSAGNE, Juan Carlos, administrativo, t. Il, págs.71 y 72.


134 LILIANA N. VILLAFAÑE

Recurso

Elart.14delaley 937 determina que las sanciones discipli-


narias que aplique el "-11~~~~'"<J' de la Magistratura serán apelables
en sede judicial por Corte Suprema deJusticia de laNación.
El recurso de deberá interponerse por escrito, de
manera fundada, en plazo de cinco días contados a partir de la
notificación de
pr1esEmtan,ejf>or ante el Consejo de la Magistratura, ofre-
ciendo y U"'Jlll.pu.uC1.uu...,la prueba que el recurrente considere per-
tinente.
El Consejo, ~v.L.L.Lv.L.LUIV en cuenta los argumentos articulados por
el recurrente, un informe para lo cual la norma le otor-
ga el término de cinco
Dentro de los cinco siguientes, deberá elevar las actuacio-
la Corte Suprema de Justicia de la N ación
el plazo de veinte días.
el supuesto de análisis que nos ocupa, el
lVl:a{!]lst:rál;ur'a en ejercicio de la función administra-
magistrados sanciones disciplinarias las
'II.L.L",u..Lc;.u..u,,,, el dictado del acto administrativo

.o de la Magistratura, dictada en ej erci-


cio de la función aamlp.lfstratllva atribuida legalmente, podrá so-
u.UJ~~.L<.u.mediante el recurso de apelaciónregu-
24.937.

El primitivo arto del decreto ley 6582/58 era el que disponía


la "creación del N acional de la Propiedad del Automotor,
y prevía que por vía q~.Lc::u..L.LvJ..Ltaria se "determinará el número de
secciones en las que dividirá territorialmente el registro y los
LOS RECURSOS TIVOS EN EL ORDEN FEDERAL 135

, a los efectos de las inscripciones de los


automotores dentro de ........'II....u'... """-L",,,
La organización de los automotores tiene como fina-
lidadfacilitar las 'J .......,''' comerciales.
<A..u''''<A.'A.j ...

seccíonales son considerados


UUJlJ.\.A'i:> pero no hay con el Estado una

"relación de empleo" y el dJe:SeIn - de sus tareas tiene carácter


"personal e indelegable", que no es obstáculo para que requie-
ranla colaboración de personas bajo su exclusiva dependen-
cia y responsabilidad.
La prestación del . se remunera mediante el pago de
"aranceles" que sonfij por el Poder Ejecutivo Nacional y abo-
nados por las personas lo requieren.
Los encargados de los de automotores no reciben re-
muneración alguna del ,sino que se limitan a cobrar sus ser-
vicios de manera directa a usuarios, debiendo atender con esos
ingresos los gastos de UU"lJ'-'HCU.U"'C;"''''''V de la oficina y la retribución
de los empleados.
Los jefes de los ....O,Tl ".1"....,.,.<10 seccionales, según el arto 36 del decre-
to 6582/58, dependientes los registros nacionales de la propie-
dad del automotor y prendarios, serán designados y remo-
vidos por el Poder Ej a propuesta de la Dirección Nacional
de los Registros N . la Propiedad delAutomotoryde Cré-
ditos Prendarios en sus cargos mientras manten-

por instrumento público o pri-


vado y sólo producirá eIE~Cll)S entre las partes y con relación a ter-
ceros desde la fecha de su .pción en el Registro Nacional de la
Propiedad del Automotor .
Ello porque "el 6582/58 establece un régimen de ins-
cripción constitutiva para automotores." 36

36 MorSSET DE ESPANÉS, Luis, r::-UUUI[;~UUU registral, pág. 157.


-
136 LILIANA N. VILLAFAÑE

de los Registros Nacionales de la Pro pie-


ClI\,.,J.U.LJ..:u.

AUltOlnotor'yde Créditos Prendarios es el organismo de apli-


cación y tendrá a cargo el registro nacional de la propiedad au-
tomotor.
El Poder Ej nacional reglará la organización y el fun-
cionamiento del.llJ.1F.l.l'du.l.lo.u.vRegistro. Asimismo es la autoridad
el número de secciones en las que se
teITItoTI~o.eIlteelRegistroyfijarálos1ímitesdecadauna
de ellas.

.llJ.\.JIjU..LI.\.;a.l".lUl..lI:'''', su extinción, sus transmisiones y


UJ,..L.Lj.,H.v.L.L se anotarán en ellos los embargos y otras

<Jll".lV.l.1Cl.l controlará el funcionamiento de los re-

"1."""I.IlI'''· decreto-ley 6582/58 y decreto 335/88

.ón a la petición de inscripción o ano-


tación, el arto 40 decreto 335/88 dispone que no se podrá regis-
trar otro acto que suceda en orden de prioridad hasta tanto no
hubiere vencido el para interponer el recurso previsto en el
arto 16, o en su éste no fuere resuelto en forma definitiva.
Si se realiza observación ésta puede recurrirse.
El recurso interponerse ante el organismo que dictó la
resolución, ya sea Registro Seccional o la Dirección Nacional,
en el plazo de días hábiles administrativos computados a
partir del día te al de la notificación de la resolución recu-
rrida (art. 17, 335/88).
Debe por escrito, con patrocinio letrado habilita-
el fuero federal, debidamente fundado y debe-
1:'\ld. .l.l.Ll.<O.l.lto de prueba y de manera particular ex-
335/88):
...,.\:,.I..L\....L.I..L.L.I..L(;t.'-'.L'I/.l..Ly domicilio real del recurrente y la constitu-
ción del domicilio la ciudad de la sede del tribunal.
b) El acto o si uq.o.'v.LV.I..L que motiva el recurso.
...
LOS RECURSOS MINISTRATIVOS EN EL ORDEN FEDERAL 13,

c) La finalidad que e perSlgue.


d) Los hechos perti entes, explicados con claridad.
e) El derecho aplica le, precisándose la ilegitimidad que se atri-
buye al acto o situació impugnada.
f) La prueba ofrecid .
El arto 19 del decret 335/88 establece que la interposición del
recurso suspende los e ctos de la resolución recurrida y se exten-
derá la prioridad para registrar el acto observado hasta tanto se
resuelva en definitiva. Ello en concordancia con lo normado en la
primera parte del arto 4 del decreto reglamentario. Es la norma
general.
Pero también se de ermina que la interposición del recurso no
suspenderá los efectos el acto recurrido, ni extenderá la prioridad
para registrar el acto o servado cuando se presenten las siguien-
tes circunstancias:
-N o haberse acredi ado en debida forma la declararación de vo-
l untad de las partes in ervinientes o la personería de su represen-
tante legal o apoderad .
- N o ser el peticion rio la persona legitimada para solicitar la
inscripción o el despac o del trámite o no ser su titular.
- Haberse omitido 1 s recaudos extrínsecos de validez de una
petición o de una orde judicial.

Decisiones del enca 'lIado de Registro

Las decisiones de lo encargados de Registro en materia regis-


tral podránserrecurri as ante la Cámara Federal de Apelacio-
nes con competencia t rritorial en ellugar donde tenga su asien-
to el Registro Seccion contra cuya decisiones recurre.
El recurso se prese tará ante el Registro Seccional y éste debe-
rá elevar las actuacio es al tribunal por intermedio de la Direc-
ción Nacional dentro d los cinco (5) días hábiles administrativos
siguientes a su presen ación.
El registro podrá r vocar el acto impugnado haciendo lugar
al recurso. Caso contr rio remitirá, dentro de ese lapso, las actua-
ciones a la Dirección acional, pudiendo acompañar un informe
. --
138 LILIANA N. VILLAFAÑE

con las observaciones le merezca el recurso y ofrecer pruebas


(art. 20, decreto "'5'·U..l..L.lf"'H."''''''· ).
El arto 2°, inc. a, del reglamentario 335/88 establece la
facultad de la . entender en los recursos que se ded uz-
u.v'v.LO.LV.L.L"IO de los encargados de los registros y ele-
U.vl"""'L"!,"""-'''' ala Cámara Federal correspondien-

Decisiones de la

También podrá ante la Cámara Federal las decisio-


nes de la Dirección en cuestiones registrales.
Interpuesto el-r",,~,n''''h-respetando las exigencias ya mencio-
nadas- ante la Nacional, ésta deberá elevar las ac-
intermedio de la Secretaría de Justicia
I administrativos siguientes ala pre-
I Dirección Nacional podrá revocar el acto

dentro de ese lapso las actuaciones ala


I _.nf¡ 1
'1 el re:~::;:r:~e: ~r::::~ con as
-r"""nr·<:>-relactoimpugnadoden-
UO./-HJLv¡:, administrativos siguientes ala re-

cepción de las
Caso contrario ! de ese lapso se elevará al tribunal com-
petente, pudiendo Cll..lJ.IJJ..JIGLI. el informe y la prueba ofrecida por la
Dirección Nacional, o lo y ofrecer prueba si ésta lo hubie-
re omitido.
Si la Dirección NUV.LV-"ILU> o la Secretaría de Justicia revocaren
el acto impugnado de ello al recurrente en la forma y
plazo establecido en el anterior.
Es necesario que de acuerdo a la normativa vigente,
dentro del plazo que se para remitir las actuaciones al
tribunal competente, dictó la resolución podrá revocarla.
Asimismo, cuando se de decisiones de los encargados
de Registro podrán ser por el organismo de aplicación,
LOS RECURSOS ADMIN1STRATIVOS EN EL ORDEN FEDERAL 139

o el Ministerio de Justicia Cl ando se tratare de decisiones de este


último. Ello en virtud del PI .ncipio de jerarquía que rige las rela-
ciones entre los diferentes órganos.
Es importante destacar que el arto 38 del decreto 6582/58 expre-
samente contempla la posil ilidad de que el organismo de aplica-
ción inicie las acciones judic: ales correspondientes tendiente a ob-
tener la declaración de nuli ad de las inscripciones registrales o
de los documentos que las al rediten.
El trámite del recurso er sede judicial es analizado en el capí-
tulo pertinente, al cual nos] emitimos.

c. Registro Nacional de. eronaves: recursos

El arto 10 del decreto 49Qr¡ /73 37 establece que el Registro N acio-


nal de Aeronaves efectuará: a "toma de razón y las inscripciones o
anotaciones de derechos, re, oluciones, contratos y demás actos y
hechos jurídicos referentes a aeronaves y/o sus motores, y a sus
propietarios yexplotadores que disponga el Código Aeronáutico
y sus normas reglamentaril: s".
Ante un pedido de inscriI ción o anotación eljefe de Registro de
Aeronaves podrá, denegarla o efectuar una observación, la que
deberá ser por escrito yestru debidamente fundada.
El interesado podrá cues' ionarla mediante la interposición de
los recursos de revocatoria y, pelación en subsidio.
Estos recursos deben pI' tearse en el plazo de diez días, por
escrito y ser presentados PO] ante eljefe de Registro.
En supuesto de denegate ria del recurso de revocatoria, eljefe
de Registro elevará las actu: ciones dentro de las cuarenta y ocho
(48) horas a la Dirección de] omento y Habilitación, quien emití-
rá un dictamen al término dI cinco días de haberlo recibido, y pos-
teriormente deberá elevarle al Comando de Regiones Aéreas.

37 Decreto N° 4907/73, publica o en B.O. del 28/06/1973.


140 LILIANA N. VILLAFAÑE

"",,,,,..LV.L.LvoAéreas resolverá el recurso median-


olución final" en el plazo de quince días,
previo dictamenj ,
Una vez ilavía administrativa de la manera expresa-
da podrá recurrirse ' eljuez nacional enlo Contencioso Admi-
nistrativo. El deberá interponerse dentro de los quince días
de notificado el acto,
La interposición los recursos prorroga el plazo de inscripción
provisional illJ en.tn~¡g dure su sustanciación.
Lo antes expres se encuentra contemplado en el arto 54 del
decreto 4907/73,

D. Recursos en el'broclealLm:leIlto tributario (ley 11.683)

Federal de Ingresos Públicos (AFIP) puede


tes de ley, resoluciones que determinen tri-
forma cierta o presuntiva, impongan sancio-
nes OU"",.LU,.u,.L.L v"U.u..L.L"f" por repetición de tributos (art. 76, ley 11.683).
La Ley de Tributario ~ 11.683 establece dife-
rentes medios para cuestionar las resoluciones de
laAFIP, que referencia a continuación.

AFIP que detennina tributos

los presupuestos establecidos por el arto 16


dictará una resolución determinando el

ta con dos vías recursivas excluyentes: el


re(~or.lSl(le:~ ación y el recurso de apelación.

Según lo v".,a. ....'.Lv~,p el arto 76 de la ley 11.683, el recurso de re-


consideración debe por ante la misma autoridad que
dictó la resolución, I de los quince días contados a partir de
la notificación de la dictada por la AFIP.
LOS RECURSOS ADMINlSTRATIVOS EN EL ORDEN FEDERAL 141

El interesado podrá presentar el recurso directamente o por


correo mediante carta certi lcada con aviso de retorno.
La autoridad competeni e deberá resolver el recurso de recon-
sideración en el plazo de vei nte días.
Si el recurso de reconsidl ración es denegado yel contribuyen-
te desea obtener el controljl dicial de la medida, deberá abonar el
tributo y/o sus accesorios e in· ciar la demanda de repetición por ante
la Justicia Nacional de Prir era Instancia con competencia en lo
contencioso administrativc (art. 81, ley 11.683).

2. Recurso de apelación
El contribuyente, puede optar por la interposición del recurso
de apelación, por ante el Tri bunal Fiscal de la N ación, por escrito
y dentro del plazo de quinc días contados a partir de la notifica-
ción de la resolución.
El planteo del recurso dE apelación ante el Tribunal Fiscal de
la N ación, no requiere el pag del tributo determinado por laAFIP,
pero el contribuyente deberá comunicar a ésta de manera directa
o por correo (carta certifica a con aviso de retorno) respecto a la
presentación del medio impugnativo.
La interposición del reCl rso de apelación tiene efecto suspen-
sivo respecto de la intimaci~ n de pago del tributo y/o accesorios.
Denegado el recurso de l pelación por el Tribunal Fiscal de la
N ación cesa el efecto suspeIJ sivo y laAFIP se encuentra facultada
para ejecutar la deuda al co tribuyente(art. 92, ley 11.683).
Ante la denegatoria del 1 ·bunal Fiscal de la Nación, el intere-
sado podrá acudir a la Cám ra Nacional de Apelaciones Conten-
cioso Administrativa medü nte el recurso de revisión y apelación
limitada.

b) Resolución de laAFI1 que aplica multa

En este supuesto el contr ·buyente también puede optar por las


dos vías recursivas excluyer tes a las que hicimos referencia prece-
dentemente: el recurso de rec onsideraciónyel recurso de apelación.
142 IJIL'Uti"A N. VILLAFAÑE

A través de ellos podrá tanto la procedencia de la


sanción como el monto de
Atento a que la ley de plt()Ce~a.ll11i(:mt;o tributario no prevé la re-
petición de multas, la no se cumple hasta tanto no quede
firme.
LOS RECURSOS ADM NISTRATIVOS EN EL ORDEN FEDERAL 143

DE AUTOEVALUACIÓN

1. ¿Qué tipo de actos a .nistrativos son recurribles median-


te el recurso de reconsider ción? ¿Ante quién debe plantearse? ¿En
qué plazo?
2. ¿Cuál es el alcance según interpretaciones jurisprudencia-
les-delart.100deldecr to 1759/72?
3. ¿Cuándo y en qué co diciones resulta procedente el recurso
jerárquico? ¿Cuálessuc rácter?
4. ¿Ante qué autorida debe plantearse el recurso de alzada y
cuál es la competente par resolverlo?
5. ¿Cuál es el alcance o ntensidad del control que se lleva a cabo
a través del recurso de al ada?
6. ¿Qué clase de actos on impugnables mediante el recurso de
revisión y cuáles son las c usales de procedencia?
7.¿Cuáleselobjetivo elaquejasegúnlalegislaciónnacional?
8. ¿Cuándoresultapr cedente la "aclaratoria"?
9. ¿Cuándo procede - ecesariamente- el reclamo adminis-
trativo previo? ¿En qué pI zo se debe iniciar la demandajudicial?
10. ¿Cuál es la condici n objetiva para que proceda el amparo
por mora de la Administr ción? ¿Quiénes se encuentran legitima-
dos para plantearlo?
11. ¿Cuáles son los req isitos de procedencia de la denuncia de
ilegitimidad? ¿Qué aspec os o cuestiones pueden ser controlados
judicialmente?
12. ¿En qué consiste el hábeas data? ¿Cuál es su finalidad?
13. ¿Qué gestiones a .. strativas deben cumplimentarse pre-
vio a iniciar la acción de h 'beas data?
14. ¿Qué tribunal res Ita competente para entender en la ac-
ción de hábeas data?
15. ¿Qué sanciones di ci plinarias puede aplicar el Consejo de
la Magistratura? ¿A trav s de qué medio pueden cuestionarse?
16. En los casos de de egatoria o caducidad de inscripción de
matrícula de una aeronav dispuesta por el Jefe del Registro: ¿qué
recurso/s deben interpo er para agotar la vía administrativa?
¿Ante quién/es?
11"" -~------------

144 LILIANA n VILLAFAÑE

CASOS PRÁCTICOS

ministro del Interior de la N aciónAr-


"'''''JLU'l--iVHN° 365 que dispone: "Rechazar lo soli-
relación al reconocimiento por servicios
la Secretaría Privada del Ministerio del
tarl~ll3.1n[leIlte improcedente [. ..]".
correspondiere, ¿qué recurso o recursos
interponer la Sra. Clara Casas para ago-
?
decano de la Facultad de Derecho y Cien-
nl\i'e:r~sld:ad"Nacional de Córdoba ha dictado una
sumario administrativo viciado, donde
regular la sanción disciplinaria de
IJ"'.'i",J.U¡H en su condición de alumno, prohibiendo
concurrir a clases y rendir exámenes.
¿Qué recurso o debe interponer para agotar la vía ad-
ministrativa? ¿Cómo accede al controljudicial?
3. El Sr. Jefe de '-" u,UiifL"''''''de laNación dicta la resolución N° 288
procedente el recurso de reconside-
Sr. Andrés Juan Jiménez en contra de la
también el pedido de suspensión de la
[... ]".
'fUii"'i\..I."'ia TteCes:an' la interposición de un

agotar la vía administrativa o ya se


encuentra en "VJ.iUJ'''H/UIC'''' procesales de acudir a la víajudicial.
Fundamente
4. ¿Qué petición le formulara un administrado que
lo consulta y que está en un derecho subjetivo particu-
laracausadeunactouu~u.ii,o"i tivoexpresocuandoselehanven-
cido los plazos legales interponer un recurso administrativo?
Capítulo XI
ICIAL DE LA ACTIVIDAD
NISTRATIVA

Por Eduardo Ávalos

Sumario: l. Intro ucción. II. Sistemas de control.


III. Los elemento constitutivos del proceso con-
tencioso administr tivo. N. Principios que rigen el
proceso contencios administrativo. V. Caracterís-
ticas básicas de 1 jurisdicción contencioso admi-
nistrativa. VI. Dis intas clases de procesos conten-
cioso administrati os. VII. El control judicial del
ejercicio de facult des discrecionales de la Admi-
nistración. VIII. E control judicial de la inactivi-
dad administrativa Inactividad formal e inactividad
material de la Ad inistración. IX. La impugnación
judicial de los regl entos.

lo INTRODUCCIÓN

Dentro de la concepció liberal del Estado, que primó en el si-


gloXIXy que tuvo sus orí enes enla Revolución Francesa, surgió
el Estado de Derecho co o un mecanismo de equilibrio entre el
poder del Estado y los der chos de los particulares. Los titulares
de la función administrati aen un Estado de Derecho están some-
tidos a diferentes controle que hacen efectivo el principio de juri-
dicidad' pues nada se logr 'a si se planteara la sujeción del Esta-
do a normas preestablecid s y no se hubiesen previsto también los
146 EDUARDO ÁVALOS

mecanismos de control para lograrlo. La actividad de la


Administración debe entonces dentro de la leyy confor-
me a los principios que surgen del ordenjurídico. Sin
embargo, como esta con frecuencia no se cumple, se impone
entonces el control poder-deber irreversible, irrenuncia-
ble e intransferible asegurar la juridicidad de la actividad
administrativa. Sin no hay responsabilidad. N o podemos
hablar de pública y tampoco, eventualmente, in-
dividual, sin de los actos estatales.
Gobierno y control la fórmula orgánica de las estruc-
turas del poder, "para alos que mandan no les falte poder y para
que a los que obedezcan les falte libertad, resguardada con con-
troles idóneos que calidad y eficacia".l
Por ello, esta función control es sumamente vasta y consti-
tuye un género de diversas especies de fiscalización:
administrativa, y judicial.
El control último por . está asignado al Poder J udi-
cial, que se circunscribe lajuridicidad de los actos estatales; pro-
cede a instancia de parte debidamente legitimada, y se
expresamédiante el de actos jurisdiccionales llamados sen-
tencias, que hacen cosaj material y son emitidos por un
órgano imparcial. Desde esta perspectiva, po-
demos caracterizar en generales al proceso contencioso
administrativo como el instaurado para dar satisfacción
jurídica, con· de un órganojudicialypor aplicación de
normas o principios de administrativo, alas pretensiones
de los afectados por la administrativa del Estado, o de
particulares que esa actividad en reemplazo de aquél. 2
En esta noción --cabe está comprendido también el
proceso de lesividad, ya en esta oportunidad es la Administra-

1 Conf. DROMI, Roberto, subjetivo y responsabilidad pública,


Grouz, Madrid, 1986, pág.
2 Conf. DIEZ, Manuel Derecho procesal administrativo, Plus
Ultra, Bs. As., 1996, pág.
CONTROL JUDICIAL E LA ACTIVIDAD ADMINISTRATIVA 147

ción la que actúa para cons guir la invalidación de un acto admi-


nistrativo viciado, acto qu -por gozar de estabilidad- aquélla
no lo puede revocar por sí.
La conceptualización an es apuntada se enmarca dentro de un
sistema típicamentejudic· alista, adoptado por la Constitución
de 1853 en su art. 95 (hoy .109),alexpresarque"enningúncaso
el Presidente de la Nación p ede ejercer funciones judiciales, arro-
garse el conocimiento de ca sas pendientes o restablecer las fene-
cidas".
Se ha señalad03 que el e juiciamiento de las actividades del
Estado no surgió de unmo ento a otro, sino que es el resultado de
un proceso histórico que se i .ció con el control judicial de cuestio-
nes patrimoniales, de acue do con la teoría que aceptaba la suje-
ción del Estado al Derecho, e lo relacionado con el "fisco", titular del
patrimonio estatal y el cual o podía emitir actos administrativos.
El fisco, que no era poder pú lico ni representaba al poder sobera-
no del Estado, podía ser de andado ante los tribunales por cues-
tiones patrimoniales. Lueg se planteó, como lo hicieron los cons-
tituyentes revolucionarios anceses, la imposibilidad de enjuiciar
al Estado y a sus agentes a .nistrativos sin previa autorización
del poder público. Finalmen e, se estableció que losjueces con com-
petencia parajuzgar a laA .nistración debían formar parte de
ella misma para respetar el rincipio de división de poderes. Esto
lo encontramos en el derech francés a fines del siglo XVIII. Así, el
sistema francés va a buscar na fórmula de protección frente a la
administración bastante si guIar, la que se llamará proceso con-
tencioso-administrativo.
Esta denominación esim recisayredundante, ya que si se pre-
tende hacer referencia al ej rcicio de la funciónjurisdiccional, la
sola idea de proceso denota e ejercicio de dicha función. Esta con-
fusión terminológica surgió e el derecho francés. Como indicamos

3 Véase SARRÍA, Consuelo, "Co trol judicial de la Administración PÚ-


blica", en Justicia administra iva, Universidad del Norte Santo To-
más de Aquino - Católica de T cumán - Ediciones UNSTA, Tucumán,
1981, pág. 21.
148 EDUARDO ÁVALOS

más arriba, cuando al stablecerse el controljudicial de laAdmi-


nistración se le asignó .cha actividad a tribunales que formaban
parte de ella, hubo ento ces que distinguir las actividades típica-
mente administrativ de aquéllas de naturalezajurisdiccional
atribuidas a órganos p rtenecientes a la Administración. Por tal
motivo es más correcto ablarde proceso administrativo para
referirnos al ejercicio d las acciones procesales con que cuenta el
particular para poner e movimiento el controljudicial del ejerci-
cio de la función admi . strativa del Estado, que no debemos con-
fundir con el proced' iento administrativo, entendido como
el conjunto de normas y principios que regulan la actividad tanto
de la Administración co o de los particulares para la elaboración,
emisión, ejecución e im ugnación en sede administrativa de actos
administrativos.

a) Sistema administ

Es aquel en el cual la titularidad del controljudicial de la Ad-


ministración la tienen a toridades o tribunales que forman parte
de la propia Administra ión, que no tienen ninguna vinculación
con el Poder Judicial, p o actúan en forma separada e indepen-
diente de los órganos que ñecutanfunciones administrativas. Este
sistema es el que actual ente impera en Francia e históricamen-
te surgió por una especi interpretación que se dio a la teoría de
la separación de los pod res cuando en 1789 los políticos revolu-
cionarios franceses consi eraron que no era posible que la labor de
la Administración fuera . cultada por laactuacióndelosjueces,
titulares de otro poder, . que los titulares de la función adminis-
trativa pudieran ser req eridos ante los jueces por razón de sus
funciones. Inicialmente e prohibió absolutamente que los tribu-
nalesjudiciales pudier intervenir en litigios contralaAdminis-
tración, o turbar de cualq .er manera las actividades administra-
tivas. Posteriormente se crearon los Consejos de Prefectura y el
CONTROL JUDICIAL DE A ACTIVIDAD ADMINISTRATIVA 149

Consej O de Estado que no ejer ía una función propia, sino que se le


aplicó el concepto de "justicia retenida", en cuanto dicho organis-
mo se limitaba a presentar p oyectos de decisión en asuntos con-
tenciosos aljefe de Estado y és -e era quien decidía. A partir de 1872
se consagró lo que se ha deno .nado ''justicia delegada", cuando se
transfirió al Consejo de Esta o el ejercicio de esa funciónjurisdic-
cional. 4

b) Sistemajudicialista

Es aquel en el cual el titul r del controljudicial de la Adminis-


tración es un órgano indepe diente, que no forma parte de ella.
Ahora bien, este sistema pue e presentar algunas variantes: por
un lado, que esta competenc· a para juzgar a la Administración
haya sido atribuida alos trib nales ordinarios, como acontece en
nuestro país, Inglaterra, Es ados Unidos, Brasil y México, por
ejemplo. O bien, que la comp tencia sea atribuida a tribunales
independientes, pero diferen es a los ordinarios y especializados
en asuntos contencioso admi .strativos, como es el caso de Espa-
ña.
La estructura federal ado tada por la Constitución Nacional
obligó a las provincias a forjar us propias instituciones bajo el sis-
tema representativo yrepubr cano, de acuerdo con los principios,
declaraciones y garantías de a Constitución Nacional. En esas
condiciones, las provincias se ieron enla obligación de seguir, en
sus lineamientos generales, e esquemajudicalista de unidad de
jurisdicción impuesto por nue tros constituyentes.
Sin embargo, en su organi ación y funcionamiento, la mayor
parte de los ordenamientos pr vinciales se diferenciaron del mo-
delo nacional, y por influencia de algunos modelos europeos otor-
garon el conocimiento de esta ateria a los superiores tribunales
de provincia e incluso codific on todo lo inherente al proceso con-
tencioso administrativo. Post riormente, la tendencia en el dere-

4 Conf. SARRÍA, Consuelo, op. cit., pág. 25.


150 EDUARDO ÁVALOS

fue la de des concentrar la competencia ex-


tribunales de provincia, creando órganos
.tados para entender en acciones conten-

ILI..U;U.LLll""~"V que nos rige un sistemajudicialis-


general, el régimen contencioso adminis-
tiene bases constitucionales, ya que las
.I.\J\.o<U.<:¡q' determinan el órgano que tiene competencia
..""""t--..,,:,...,' ,el régimen federal es puramente le-
especial sobre dicha competencia contie-
.........'.I.".L.L.L aparte de decidir el fuero federal.
....f"'.LV' ............. ,

e) Sistema mixto

.LLllA."~'ó:) son aquellos en los cuales los asuntos con-


tencioso adm.iJnistr~tt~\rosse dividen entre los tribunales ordinarios
y tribunales vos. Es el caso por ejemplo de Italia en
donde las cuestiones a derechos subjetivos corresponden
a lajurisdicción pero las inherentes a intereses legíti-
mos, a tribunales Este sistema plantea la nece-
sidad de que las estén claramente definidas, a fin que
el particular pueda de antemano a que tribunal acudir.

111. Los ELEMENTOS .h""'",O..,'.".,..Tn-nn. DEL PROCESO CONTENCIOSO


ADMINISTRATIVO

Señala FIORINI6
exhiben y justifican necesarios, todos por igual, tres elemen-
tos: a) el órgano C01J.tE~j,J.clm;o administrativo, b)la materia conten-

5 Tal el caso de la de Córdoba, a partir del dictado de la ley


7182.
6 FIORINI, Bartolomé A. Qué es el contencioso, Abeledo-Perrot, Bs. As.,

1997, pág. 75.


CONTROL JUDICIAL DE LA ACTIVIDAD ADMINISTRATIVA 151

cioso administrativa, y c) el procedimiento contencioso adminis-


trativo. Estos elementos se presentan con matices distintos a los
de la actividadjurisdiccional de los juicios comunes, diferencias que
se justifican por el carácter jurídico que presenta la administra-
ción pública. Es necesario tener en cuenta que se trata de litigios
donde una de las partes -la Administración Pública- actúa con
miras del interés público a través de actos administrativos que go-
zan de presunción de legitimidad y ejecutoriedad. Es entonces la
actividad pública de la Adminilstración la que confiere las modali-
dades propias que ofrece el contencioso administrativo, adiferen-
cia de los litigios entre los particulares.
En cualquiera de los sistemas, la organización contencioso ad-
ministrativa no estableció por lo general muchas instancias. Un
ordenamiento procesal está informado por el principio de única
instancia cuando, con independencia de los recursos especiales y
extraordinarios, se prohibe la impugnación de resoluciones defi-
ni tivas a través del recurso de apelación. Por el contrario, está re-
gido por el principio de doble instancia cuando tales resoluciones
pueden ser puestas a conocimiento de un tribunal de una instan-
cia superior mediante la interposición de dicho recurso.
En el orden nacional rige como regla la doble instancia, ya que
ella es una característica deljuicio ordinario, por el que transita
--como se verá en el capítulo XIII-la acción contencioso adminis-
trativa en el ámbito federal ...Ahora bien, la regla de la doble ins-
tancia cede paso cuando estamos en presencia de la impugnación
judicial de actos administrativos mediante "recursos judiciales" .
En el ámbito provincial ha regido como regla la única instan-
ciajudicial a partir deljuzgamiento de las acciones contencioso
administrativas por los superiores tribunales de provincias. Sin
embargo, esa regla ha venido a desdibujarse en la medida que al-
gunas provincias, como la de Córdoba, han establecido órganos
judiciales inferiores con compE~tencia en esta materia.
Podría definirse a la materia contencioso administrativa como
el elemento esencial que impone lajurisdicción contencioso admi-
nistrativa. Es la "ratione mateliae" de estajurisdicción. La defini-
ción sobre este punto ofrece dos alternativas. La primera, que de-
11"'" --

152 EDUARDO ÁVALOS

lega la delimitación de lo que constituye la materia contencioso


administrativa a la función interpretativa de lajusticia. O sea, que
la materia se delimita a partir de lajurisprudencia de los tribuna-
les. Es lo que se ha denominado "cláusula general".
Otro modo de establecer la materia contencioso administrativa
es por determinación expresa de la ley. Es lo que ocurre por ejemplo
en Córdoba, donde la materia contencioso administrativa se encuen-
tra perlectamente definida en los arts. 10 y 20de la ley 7182.
Existe un sistema mixto donde además de establecerse la ma-
teria contenciosa administrativa a partir de la doctrina judicial,
la misma se integra además con algunas disposiciones legales que
establecen que determinados asuntos sean de resorte de dicho fuero.
Esto acontece en el ám.bito nacional, donde no existe hasta la fe-
cha un código procesal en lo contencioso administrativo.
Finalmente, en lo que respecta al procedimiento, éste ofrece en
el caso de Córdoba la €lxistencia de diversas acciones en base a la
situaciónjurídica tute,lada (derecho subjetivo o interés legítimo),
como también la existencia de doble instancia o única instancia
según sea parte deljuicio la Provincia o no lo sea (vgr., demandas
contra municipios, entes autárquicos, colegios profesionales). En
el orden nacional coexiste la acción ordinaria del Código Procesal
Civil y Comercial de la Nación, con recursos judiciales directos
instaurados por leyes especiales.

IV. PRINCIPIOS QUE R~GEN EL PROCESO CONTENCIOSO


ADMINISTRATIVO

En primer lugar, di~bemos señalar que, como en todo proceso


judicial, se deberespet:ar la garantía constitucional de debido pro-
ceso, como modo de re$Jización del derecho de defensa de las par-
tes (art. 18, CN). Esta g~arantía se traduce en el derecho a ser oído,
a ofrecer prueba, a una: sentencia fundada en ley, a hacerse patro-
cinar y representar pd?fesionalmente, como también, el derecho
a tener acceso al menc.s a una instancia judicial suficiente, con
amplitud de debate y
CONTROL JUDI IAL DE LA ACTMDAD ADMINISTRATIVA 153

Un principio que ha e a la estructura del proceso tiene que ver


con la posibilidad de q e el ordenamiento procesal le confiera el
carácter procesal de "p rte" a cada uno que pueda hacer valer sus
respectivas pretension s y defensas. La existencia de dos posicio-
nes encontradas, la del actor que interpone su pretensión y la del
demandado que se opo e, es un elemento esencial detodo proceso.
Por lo tanto, debe garan izarse el principio de contradicción e igual-
dad de trato de los litig ntes.
Otro aspecto impo ante para analizar es si el proceso conten-
cioso administrativo de e buscar la verdad real, o conformarse con
la verdad formal acerca a por las partes. Entendemos quetratán-
dos e este proceso del en· uiciamiento del ejercicio de la función ad-
ministrativa del Esta o, el tribunal debe tender a establecer la
verdad material de los echos invol ucrados en el pleito, por cuan-
to el interés público sub acente trasciende el interés de las partes.
De este modo, la adopci n de medidas para mejor proveer dispues-
tas de oficio por eljuez t· enen su más ampliajustificación.
Esta conclusiónnos eva a otro interrogante cual es si el proceso
debeserimpulsadodeofi .ooainstanciadeparte. Si tenemos en cuenta
lo señalado precedente ente, la respuesta es obvia. Encontrándose
comprometido el interé público, se impone el impulso procesal de
oficio. Sin embargo, tant enlaNación, como enlaProvinciade Cór-
doba, se encuentra previ ta en este tipo de procesos la perención dela
instancia, lo que es inco patible con aquel principio.

v. CARACTERÍSTICAS BÁ ICAS DE LA JURISDICCIÓN CONTENCIOSO


ADMINISTRATIVA

Señala TAWIL 7 que d sde la propia expresión "contencioso-ad-


ministrativo", que en su concepción francesa ha sido criticada por
su carácter contradictori al identificar dos conceptos opuestos -la
resolución de conflictos· urisdiccionales por parte de órganos de

7 TAWIL, Guido Santiago, dministración y justicia, t. 1, Depalma, Bs.


As., 1993, págs. 152 y ss.
154 EDUARDO ÁVALOS

suscitadas en su ámbito han


agravadas por las curiosas circunstan-
su nacimiento, ya que el contencioso-
tuvo su origen en Francia como con-
accidentes históricos e ideológicos com-

u.V~".L .L.L.LU contemporánea no se ha mostrado


naturaleza de lajurisdicción contencio-
algunos catedráticos españoles, como
como unajurisdicción especial, otros
pronuncian a favor de considerarla como
en el convencimiento de que de la misma
forma que en sus .L~~'-L.1",,,,el derecho administrativo era considera-
do una rama especial derecho común o privado, para convertir-
se con el tiempo en el común de las administraciones públi-
cas, lajurisdicción '"'v•..1",,'. ..1'-..1v.'v administrativa debería dej ar de ser
calificada de especial, erigirse en lajurisdicción que en el co-
mún de los casos en los pleitos en que interviene laAdmi-
la mayor parte de nuestros autores co-
m:gOl.CClon contencioso administrativa es
en modo alguno especial o excepcional.
ha atribuido alajurisdicción contencio-
carácter revisor. En base a ello, se
,",VJL.1'-'fL,",.1'v.1.1ineludible para la revisiónjudicial
u.V'~"''''JLVHprevia de la Administración, aun en
Así, se ha sostenido que no puede re-
~Ol[lt€mC:lO:m administrativa una situación
de una previa manifestación de la
como una decisión. Para los de-
se requiere siempre la existencia de una
v.l..1.u:u..LaULq. de la Administración Pública, puesto que
nel¡::n() Cl:lus:an.te,sino contra la decisión que es
tiv.L v\.,HU del recurrente. 8

8 Conf. FIORINI, "V.1l;'llH¡ A., op. cit., págs. 84 y 85.


CONTROL JUDICIAL DE LA CTIVIDAD ADMINISTRATIVA 155

En una interpretación des esurada de esta exigencia, se ha


interpretado que no resulta posi le plantear en sede judicial cues-
tiones no introducidas con ante .oridad ante la Administración;
que las pretensiones en sede ju cial no pueden exceder las formu-
ladas en sede administrativa ( s decir, si las pretensiones de la
demanda exceden las del recl o administrativo, la demasía no
puede ser atendida enjusticia or contrariar el requisito de con-
gruencia entre lo pedido a la A inistración y ante la instancia
judicial posterior), o que aun e el supuesto de anularse el acto
impugnado, los tribunales no pu den realizar declaraciones sobre
las pretensiones sustanciales d los recurrentes cuando ellas han
quedado sin resolver por parte e la Administración.
En la actualidad, si bien deb admitirse que la desmitificación
del carácter revisor de lajurisdi ción contencioso administrativa
no ha significado, a pesar de la e stencia de posturas que asílo han
propugnado, el total abandono d la exigencia de una decisión pre-
via, sí ha derivado, en cambio, n la atenuación de los efectos de
tal decisión sobre la revisiónjudi ial posterior. 9 Así, posiciones clá-
sicas tales como que la decisión revia constituye la materia pri-
ma para el litigio, es decir el pu to sobre el cual debería pronun-
ciarse el tribunal que decidirá 1 contienda, de a poco parecerían
verse reemplazadas por postura que observan enla decisión pre-
via únicamente un mero requisi o procesal de admisibilidad de la
acción, ala par que proclaman q e el objeto de la acción no debería
ser precisamente el acto admini trativo, sino aquellas pretensio-
nes que se planteen en sede judi ial en conexión con él, aun cuan-
do no guarden una estricta ide tidad con las que hubieran dado
lugar a la decisión administrati a. En suma, entendemos que el
preconcepto de una función re isora es la excusa para limitar
el ejercicio del controljudicial. Po ello propiciamos que no es el con-
tenido del acto administrativo i pugnado, sino las pretensiones
del administrado las que consti uyen o delimitan los poderes del
juez.

9 Conf. TAWIL, Guido Santiago, op. cit., pág. 166.


156 EDUARDO ÁVALOS

Por último, a diferencia de lo que acontece en materia de proce-


dimiento administrativo" donde el principio vigente en nuestro país
es el del informalismo a favor del administrado, la tendencia ge-
neralizada es la de considerar al proceso contencioso administra-
tivo como esencialmenh~ formalista, sobre todo en relación a los
aspectos que hacen al cumplimiento de los requisitos de habilita-
ción de la instancia.

VI. DISTINTAS CLASES DE PROCESOS CONTENCIOSO


ADMINISTRATIVOS

Es importante precisar en primer término que el instrumento


con que cuenta el particular y que concreta esta garantíajurídica
de controljudicial de la administración son las acciones, entendi-
das como la petición que pone en movimiento la funciónj urisdic-
cional, distinguiéndose entonces por su esencia misma de los re-
cursos que son los medios que tienen los particulares para impugnar
ante la misma Adminish'ación sus propias decisiones. 10
No debemos confundir estos recursos administrativos con los
llamados recursosjudiciales imperantes en el ámbito nacional, y
que coexisten ala par de la acción contencioso administrativa or-
dinaria, Estos mal llamados recursos -como ampliaremos en el
capítulo XIII-son fruto de regulaciones especiales de numerosas
materias que prevén una acción especial para impugnar las deci-
siones administrativas.
De acuerdo a la situaciónjurídica del administrado, distintos
ordenamientos jurídicos provinciales (porque no existe esta dife-
renciación a nivel nacional) consagran en sus legislaciones diver-
sas clases de acciones.
Así, la acción de plenajurisdicción es la que se ejerce por el par-
ticular cuando le ha sido vulnerado un derecho subj etivo, y por lo
tanto además de solicitar la anulación del acto administrativo, a
través de esta acción bus¡c:a también el restablecimiento del dere-

10 Conf. SARRÍA, Consuelo, op. cit., pág. 28,


CONTROL JUDICIAL DE LA ACTIVIDAD ADMINISTRATIVA 157

cho y el reconocimiento de los perjuicios. Esta situaciónjurídica


subjetiva administrativa es la que describimos como aquella en que
el pretensor se encuentra facultado por parte del ordenamiento ju-
rídico administrativo para exigir una obligación de parte de la
Administración, que consiste en una determinada conducta o ac-
cionar de aquélla, que aquél entiende no ha sido conforme lo dis-
pone el ordenjurídico. l l Se trata de una situaciónjurídica subjeti-
va concreta. Por ejemplo, C'uando se rescinde un contrato de obra
pública aduciendo que el contratista ha demorado injustificada-
mente la ejecución de la obra, o cuando se deja cesante a un agente
público por considerar que ha incurrido en una grave falta de ca-
rácterdisciplinario.
La acción de anulación o de ilegitimidad es la que se ejerce para
que se restablezca el orden jurídico vulnerado y puede ser ejercida
por quien tenga un interés legítimo. Se circunscribe a la anulación
del acto, mas no al reconocimiento de una pretensiónresarcitoria.
N o se pretende que la Administración actúe de una manera parti-
cular para alguien en especial, sino que lo que se requiere es que
se vuelva al ordenjurídico, cuya restauración afecta o involucra a
todos los individuos de un determinado grupo que se hallan en
igualdad de situación. Es lo que acontece en materia de impugna-
ciones que tienen lugar por oferentes en el marco de un procedi-
miento de licitación pública, ya sea cuestionando la adjudicación
del contrato u otras vicisitudes del procedimiento. O bien, por los
participantes de un concurso público para seleccionar a agentes
que pretenden ingresar a la Administración o concursos docentes.
Señala ILDARRAZ 12 que de todas maneras, si la actuación inco-
rrecta de la Administración Pública genera a su vez --como secue-
la-un perjuicio particular al reclamante, si es reclamado y pro-
bado el daño, deberá ser satisfecho o resarcido. Este resarcimiento

11 Conf. ILDARRAZ, Benigno - ZARZA MENSAQUE, Alberto - VIALE, Claudio


M.,op. cit.
12 ILDARRAZ, Benigno - ZARZA MENSAQUE, Alberto - VIALE, Claudio M., op.
cit., pág. 662.
a

158 EDUARDO ÁVALOS

no beneficia a todos los que integran el grupo diferenciado, sino ex-


clusivamente a quien lo alegó y probó.
La acción de lesividad es aquella por medio de la cuallaAdmi-
nistración puede demandar la invalidaciónjudicial de sus propias
decisiones. Constituye un remedio judicial articulado por la pro-
pia Administración Pública en contra de actos administrativos
dictados por ella, que al haber quedado firmes han consolidado
situaciones jurídicas de tipo subjetivo en favor de los particulares.
Alos fines de garantizar la estabilidad de las relaciones jurídicas"
salvo excepciones (véanse arts. 17 y 18 de la LNPA, por ejemplo),
la Administración no puede volver sobre dichos actos, por lo que
se requiere la intervención de losjueces con la participación del des-
tinatario beneficiario del aeto administrativo que se pretende anu-
lar.
La acción de interpretación consagrada por algunas provincias
como la de Formosa, Corrientes y La Rioj a, es procedente contra
todo acto, sea general o particular, cuya interpretación por parte
de la Administración supone la lesión de un derecho subjetivo o de
un interés legítimo. El oqjeto de esta acción es la de recabar del
órgano jurisdiccional la interpretación que se adecua al ordenju-
rídico aplicable. Es requisito fundamental que se trate de un caso
concreto para evitar que la acción se convierta en una mera con-
sulta.
Algunos Códigos en lo Contencioso Administrativo han previsto
una acción que permita ejercer la pretensión de plenajurisdicción
y otra que permita al particular ejercer la acción de anulación del
acto administrativo. La legitimación requerida en ambos casos es
distinta; para el primero, lID derecho subjetivo vulnerado, para el
segundo, un interés legítimo. Aparecen así dos clases de acciones.
Este sistema, que es el vigente en Córdoba según la ley 7182, es de-
nominado de pluralidad cL~ acciones y pluralidad de pretensiones.
Como en muchos casos la elección de una acción u otra es difi-
cultosa' y además se ha entendido que si no se elige la vía correcta
corresponde la desestimaeÍón de la demanda, en los últimos años
aparecieron códigos procesales administrativos que se inclinaron
por establecer un sistema de unidad de acción con pluralidad de
CONTROL JUDICIAL DE LA ACTIVIDAD ADMINISTRATIVA 159

pretensión. Así, en una misma acción se protegen los derechos sub-


jetivos y los intereses legítimos, discutiéndose el restablecimien-
to de una situaciónjurídica vulnerada o sólo la anulación del acto.
Es el caso de Mendoza (ley 3918), La Pampa (ley 952) y Corrientes
(ley 4106), por ejemplo.

VII. EL CONTROL JUDICLi\L DEL EJERCICIO DE FACULTADES


DISCRECIONALES DE lA ADMINISTRACIÓN

a) Introducción: Lo r4eglado y lo discrecional

Recordemos que en algunos supuestos el ordenamiento jurídi-


co prevé la actividad administrativa en todos sus aspectos. En otras
ocasiones -la mayoría-- ello no es así. La ley puede determinar
acabadamente todas y cada una de las condiciones de ej ercicio de
la función administrativa, definida en todos sus términos y conse-
cuencias. Así, por ejemplo, lajubilación por edad de un funciona-
rio, el ascenso por antigüedad, la aplicación de una alícuota pre-
establecida para liquidar un tributo, condiciona la conducta de la
administración, y no deja resquicio ajuicio subj etivo alguno de su
parte, salvo la constatación o verificación del supuesto mismo para
contrastarlo con el tipo legal. La decisión administrativa es obli-
gatoria en presencia de dicho supuesto y su contenido no puede ser
configurado libremente por la administración sino que habrá de
limitarse a lo que la propia ley ha previsto. l3
En cambio, la discrecionalidad surge cuando el ordenamiento
jurídico atribuye a algún órgano competencia para apreciar en un
supuesto dado lo que sea de interés público. El derecho no impone
asíalaautoridadadministrativa, por anticipado, una conducta que
debe necesariamente se¡guÍr, pudiendo entonces elegir entre dis-
tintos cursos de acción o de inacción, igualmente válidos. Así, la

13 Conf. GARCíA DE ENTERRÍA, Eduardo - FERNÁNDEZ, Tomás Ramón,


Curso de derecho administrativo, 7a ed., Civitas S.A., Madrid,1996,
pág. 442.
160 EDUARDO ÁVALOS

construcción de una obra pública, la fij ación del quantum de una


subvención, la graduación de una sanción disciplinaria cuando el
respectivo estatuto eontempla, por ejemplo, la aplicación de ''has-
ta diez días de suspensión" para determinada falta, son casos típi-
cos de potestades discrecionales de la Administración.
Las facultades dE~l órgano administrativo son regladas cuando
unanormajurídica predetermina, en forma concreta, una conducta
determinada, o sea cuando el ordenjurídico establece de antema-
no qué es específicamente lo que el órgano debe hacer en un caso
concreto. Serán discrecionales cuando el ordenjurídico le otorgue
cierta libertad para elegir entre uno y otro curso de acción, para
hacer una u otra cosa, o hacerla deuna u otra manera. Es decir que
la ley permite al administrador que sea él quien aprecie laoportu-
nidad o conveniencia del acto a los intereses públicos, pudiendo
elegir con cierta amplitud la decisión a adoptar.
También ha sido definida la discrecionalidad como "una moda-
lidad de ejercicio que el ordenjurídico confiere expresa o implíci-
tamente a quien desempeña la función administrativa para que,
mediante una apreciación subjetiva del interés público comprome-
tido, complete creatllvamente el ordenamiento jurídico en su con-
creción práctica, seleccionando una alternativa entre varias igual-
mente válidas para el derecho" .14
Ahora bien, nunealas atribuciones de un órgano administra-
tivo podrán ser totalmente regladas o totalmente discrecionales.
Es imposible e inconveniente en la práctica prever hasta el últi-
mo detalle lo que el órgano debe hacer. Siempre quedará algún
pequeño margen que deberá dejarse necesariamente al arbitrio del
funcionario actuante. Y lo mismo ocurre a la inversa: jamás exis-

14 Véase Tribunal Superior de Justicia de la Provincia de Córdoba, 25/


08/1997, en autos "Miranda Margarita Esther y otras e/ Superior Go-
bierno de la Provincia de Córdoba - plena jurisdicción - recurso de
apelación". En igual sentido, Cámara Federal de Apelaciones de Cór-
doba, Sala "A", 30/08/1999, en autos "Landenberg, Mauricio e/Minis-
terio de Salud y Acción Social- amparo".
CONTROL JUDICIAL DE LA ACTIVIDAD ADMINISTRATIVA 161

tirá una norma que autorice a un funcionario a hacer absolutamen-


te cualquier cosa, sin limitación alguna. Siempre existirá alguna
otra norma o principio que le fije de antemano ciertos principios a
que deberá ajustar su acción. 15 Así, por ejemplo, la competencia del
órgano es un aspecto siempre reglado.
La discrecionalidad no es sinónimo de oportunidad, mérito y
conveniencia de un acto administrativo. El poder discrecional es
algo diverso deljuicio de mérito, oportunidad y conveniencia que
realiza la Administración. La apreciación y la determinación de
la oportunidad o mérito puede resultar tanto del ejercicio de potes-
tades regladas como de discrecionales. Tampoco es posible identi-
ficar el llamado control de legitimidad con el de potestad reglada,
ni control de oportunidad con el de facultad discrecional. Por el
contrario, el control de legitimidad es notablemente más amplio
que el de facultad reglada16 , ya que incluye no solo ésto, sino tam-
bién el ejercicio de la discrecionalidad. Hablar de control de legiti-
midad es hablar de control delo reglado y de lo discrecional del acto
administrativo. Asimismo, el control dela oportunidad, mérito y
conveniencia de la decisión administrativa, que en principio se
encuentra vedado al Poder Judicial, es un concepto más restringi-
do que el de facultad discrecional.
Eljuez puede revisar el ejercicio de las facultades regladas y
también si se han transgredido los límites alas facultades discre-
cionales de la administración. Ambos aspectos integran el control
de legitimidad de un acto administrativo. Sin embargo, no podrá
anular un acto administrativo por considerarlo meramente inopor-
tuno o inconveniente. En cambio, la Administración sí puede re-
vocar sus propios actos, tanto por considerarlos ilegítimos o inopor-
tunos.

15 Conf. GORDILLO, Agustín, Tratado de derecho administrativo, t. 1,

Fundación de Derecho Administrativo, Buenos Aires, 1998, pág. X-26.


16 Conf. TAWIL, Guido Santiago, op. cit., pág. 319.
162 EDUARDO ÁVALOS

b) El control de la discrecionalidad por parte del Poder


Judicial

La doctrina y jurisprudencia nacional, hace relativamente poco


tiempo, han reflejado los avances provenientes del derecho com-
parado respecto alaevolución operada en otros países en lo que hace
al control de la discrecionalidad administrativa o mejor dicho, del
ej ercicio de la discrecionalidad.
Bastaba que la Administración invocara la presencia de facul-
tades discrecionales para enervar el control judicial, abdicando los
jueces, en muchas oportunidades, de la potestad de revisar los ac-
tos administrativos provenientes de facultades discrecionales. Sin
embargo, de a poco, se ha dado paso a una ampliación del alcance
de ese control. 17
Un acto administrativo es legítimo cuando está de acuerdo con
el ordenamiento jurídico. El control de legitimidad que ejerce el
Poder Judicial sobre la Administración abarca no sólo los aspec-
tos reglados sino también la porción discrecional de la actividad
administrativa. Un acto administrativo fruto de un ejercicio viciado
de la discrecionalidad, es ilegítimo.
Ahora bien, ¿cómo se controla la discrecionalidad? Evidente-
mente lo que es ajeno al control judicial es lo que se denomina el
núcleo interno de la discrecionalidad. La elección de una posibili-
dad entre dos o más igualmente justas, nunca compete a los jue-
ces, sino a la Administración. Sin embargo, subsisten los poder~
de los tribunales judiciales para penetrar en eljuzgamiento de la

17 Así, la CNCont. Adm.Fed., Sala III, en autos "Hughes Tool Compan:;>


S.A. el Gobierno N acional- Ministerio de Economía", LL, 1984-D-36ü.
ha sostenido la necesidad de que los jueces cuenten con los datos m-
dispensables para llevar a cabo la revisión de la legalidad y de la raz.o-
nabilidad de los actos administrativos, y que tal principio impone qUló
en el ejercicio de facultades discrecionales los órganos administra~­
vos satisfagan, con mayor razón aun que en el de las predominantE-
mente regladas, el imperativo de una motivación suficiente y adecu.aC.!.
de sus decisiones.
CONTROL JUDICIAL DE LA ACTIVIDAD ADMINISTRATIVA 163

discrecionalidad cuando los órganos administrativos incurren en


el vicio de irrazonabilidad o arbitrariedad, pues va de suyo, que en
tal caso, no se habrá elegido entre dos o más posibilidades igual-
mentejustas. 18
Existen ciertos límites jurídicos para el ejercicio del poder dis-
crecional de la Administración, y el Poder Judicial debe determi-
nar si esos límites, en un caso concreto, han sido violados o no. Ellos
son:
1) Razonabilidad: la decisión "discrecional" del funcionario
es ilegítima, a pesar de no transgredir ninguna norma concreta y
expresa, si es irrazonable. Esto ocurre cuando por ejemplo no se dan
los fundamentos de hecho o de derecho que la sustentan, o bien no
se tienen en cuenta los hechos acreditados en el expediente, o que
son públicos y notorios; o se funda en hechos o pruebas inexistentes
o no guarda una proporción adecuada entre los medios que emplea
y el fin que la ley desea, o sea, que se trata de una medida despro-
porcionada, excesiva con lo que se quiere lograr. 19
2) Arbitrariedad: un acto administrativo es arbitrario, cuando
obedece al mero voluntarismo del funcionario, con total desapego
del orden legal.
3) Finalidad: el arto 7°, inc. f, de la ley 19.549 establece como
elemento esencial del acto administrativo que "habrá de cumplir-
se con la finalidad que resulta de las normas que otorgan las fa-
cultades pertinentes al órgano emisor, sin poder perseguir en-
cubiertamente otros fines, públicos o privados, distintos de los que
justifiquen el acto, su causa y objeto".
Si el órgano administrativo no cumple o lo hace sólo en aparien-
cia con la finalidad que inspira la normajurídica que lo habilita a
actuar, entonces habrá obrado con "desvío de poder". Se trata de
un aspecto subjetivo muy difícil de acreditar, pero no se descarta
su verificación mediante indicios y presunciones. Hay desvío de

18 Conf. CASSAGNE, Juan Carlos, Fragmentos de derecho administra-


tivo, Hammurabi, Bs. As., 2003, pág. 103.
19 GORDILLO, Agustín, op. cit., pág. X-30.
-
164 EDUARDO ÁVALOS

poder si el funcionario pretende beneficiarse con el acto adminis-


trativo que dicta. También si pretende favorecer a un tercero o
perjudicarlo, por actuar o por decir, con ánimo de venganza. Pero
también hay desvío de poder cuando no se pretenda sino beneficiar
a la Administración, pero con una finalidad distinta a la querida
por la ley (por ejemplo imponer multas de tránsito por supuestas
infracciones, con el fin de recaudar, y no con el obj eto de preservar
la seguridad de los ciudadanos).
4) Buena fe: a igual resultado se arriba si el órgano encargado
del ejercicio de una potestad pública usa ésta de mala fe, utilizan-
do artilugios o artimañas para llevar a engaño o error a un parti-
cular. Tal tipo de conducta aun cuando la facultad que se ejerciera
en el caso fuera discrecional, es incompatible con lo que debe ser el
ejercicio de la función administrativa. 20
5) Igualdad de trato: no es más que una consecuencia de la
garantía de igualdad consagrada en el arto 16 de la Constitución
Nacional. Si por ej emplo la Administración sanciona en forma
despareja a dos administrados que han cometido una infracción
de policía, o bien si en el marco del derecho disciplinario, dos em-
pleados públicos son sancionados en forma desigual, aun cuando
hubiesen cometido la misma falta y estuvieren en igualdad de con-
diciones, tal desequilibrio empaña el ejercicio de una atribución
discrecional. Debemos remarcar que la exigencia de igualdad de
trato importa que estemos en presencia de igualdad de circunstan-
cias respecto de los sujetos involucrados. La ley debe ser igual para
los iguales en igualdad de circunstancias.
6) Principios generales del Derecho: su respeto constituye
un medio idóneo para lograr un control más efectivo de la discre-
cionalidad administrativa, ya que el sometimiento del Estado al
principio de legalidad implica su sujeción a todo el ordenamiento
jurídico, incluida la Constitución, los tratados internacionales y
todos los principios generales de derecho que de ellos emanan o que
surgen incluso del derecho natural. N o se trata de meros princi-

20 GORDILLO, Agustín, op. cit., pág. X-34.


CONTROL JUDICIAL DE LA ACTIVIDAD ADMINISTRATIVA 165

pios éticos o morales o de equidad, sino que son principios jurídi-


cos.
Señala TAWIL21 que de los tres principios fundamentales exis-
tentes en el derecho romano (vivir honestamente, no hacer daño a
otro y dar a cada uno lo suyo) la doctrina y la jurisprudencia han
deducido una extensa lista. Así, menciona el derecho a la vida, a
la equidad, o a la ley igual e imparcial para todos o igualdad ante la
ley, al de proporcionalidad e igualdad de las cargas públicas, al
debido proceso legal, al de que todo menoscabo patrimonial debe
ser indemnizado, a la teoría del enriquecimiento sin causa, a la
prohibición de ir contra los propios actos, etcétera.
Como podemos advertir entonces, la misión del operador jurí-
dico será en cada caso concreto establecer si la Administración ha
violado alguno de estos límites. Si no encuentra tal violación, ha-
brá de conformarse con la decisión administrativa, ya que como
hemos dicho, no puede el Poder Judicial avanzar sobre el núcleo
interno de la discrecionalidad. Si no se advierten vicios, no puede
eljuez sustituir el criterio de libre apreciación a cargo de la Admi-
nistración. Si por el contrario, algunos de estos límites se encuen-
tra transgredido, el acto administrativo es ilegítimo y podrá ser
declarada su nulidad. 22

c) Los conceptos jurídicos indeterminados como


técnica de reducción de la discrecionalidad

La técnica de los conceptos jurídicos indeterminados viene a


limitar la doctrina de la discrécionalidad, como ámbito exento de
contralorjudicial, al permitir eljuzgamiento pleno de ciertas de-
cisiones administrativas que consisten en aplicar conceptos defi-
nidos genéricamente por el ordenamiento positivo, tales como

21TAWIL, Guido Santiago, op. cit., pág. 430.


22A mayor abundamiento, véase SEsíN, Domingo, Administración Pú-
blica. Actividad reglada, discrecional y técnica, Depalma, Bs. As.,
1994.
i . - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -_ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ ____

-
166 EDUARDO ÁVALOS

"oferta más conveniente", "enfermedad contagiosa", ''buena fe",


"bien común", "interés público", "orden público", "utilidad públi-
ca", "emergencia", "edificio ruinoso", "idoneidad", 'Justo precio",
etcétera.
La delimitación de su significado, esencial para la aplicación
de la ley al caso concreto, fue considerada tradicionalmente como
parte de la esfera propia de la discrecionalidad administrativa. El
llamado concepto jurídico indeterminado no era más que una in-
determinación normativa cuya interpretación quedaba librada a
dicha discrecionalidad. 23
Sin embargo, con posterioridad se ha evolucionado, tratando de
evitar que so pretexto de la existencia de un concepto jurídico in-
determinado, se impida la revisiónjudicial. Desde esta óptica, como
lo señala TAWIL 24, conceptos típicamente indeterminados como el
de interés público resultan siempre fiscalizables judicialmente, en
tanto sólo una es la solución admisible comojusta. Lo propio acon-
tece con la apreciación de la oferta "más conveniente", cuya deter-
minación se transforma así en un supuesto de actividad reglada.
La gran diferencia entonces con el ej ercicio de facultades discre-
cionales resulta en consecuencia en que en el supuesto del concep-
to jurídico indeterminado, la calificación de las circunstancias con-
cretas admite una sola solución, o se da o no se da el concepto, o hay
buena fe o no la hay; o el precio esjusto o no lo es. De este modo,
mientras que la discrecionalidad --como hemos expuesto más arri-
ba-- se caracteriza por la pluralidad de soluciones justas, el con-
cepto jurídico indeterminado se encuentra unido a la idea contra-
ria (unidad de soluciónjusta) propia de toda actividad reglada.
Por ello -señala GARCÍA DE ENTERRÍA25_ el proceso de consta-
tación de si un concepto jurídico indeterminado se cumple o no se
cumple no puede ser nunca un proceso volitivo de discrecionalidad,

23 TAWIL, Guido Santiago, op. cit., pág. 410.


24 TAWIL, Guido Santiago, op. cit., pág. 414.
25 GARCÍA DE ENTERRÍA, Eduardo, La lucha contra las inmunidades

del poder en el derecho administrativo, Civitas S.A., Madrid, 1995,


pág. 36.

_:.0..' IIt.'SS'I••
<,~< .."'.<~'""'-"~.<~._ ·.....
CONTROL JUDICIAL DE LA ACTIVIDAD ADMINISTRATIVA 167

sino un proceso de juicio o estimación que ha de atenerse, necesa-


riamente' por una parte, a las circunstancias reales que han de
calificarse, ypor otra, al sentido jurídico preciso que la ley ha asig-
nado, con la intención de que la solución posible sea sólo una. N o
se trata pues de un proceso de libertad de elección entre al ternati-
vas igualmentejustas.

d) La llamada "discrecionalidad técnica"

Enseña GORDILL0 26 que la discrecionalidad que las normas ju-


rídicas otorgan al administrador no significa que éste pueda actuar
en contra de las reglas de la técnica, cuando éstas sean claras y
uniformes. En este aspecto, corresponde distinguir entre reglas
estrictamente técnicas -indiscutibles e indiscutidas por lo gene-
ral- y aspectos técnicos susceptibles de controversia.
Así, en el primer caso, si lo que la Administración ha actuado
es indubitablemente erróneo, la actividad administrativa será ile-
gítima. En cambio, si se trata de cuestiones técnicas en las que cabe
admitir la duda, y los mismos técnicos no están de acuerdo en cuál
es el criterio correcto, entonces la libertad del administrador es más
amplia y su conducta no será ilegítima por haber elegido una de
las soluciones posibles.
Si una técnica es científicaypor lo tanto, cierta, objetiva, uni-
versal, y sujeta a reglas que no dependen de la apreciación perso-
nal de un sujeto individual, es obvio que no puede hablarse de dis-
crecionalidad. Así, citando aALEssI27 , el autor antes referido afirma
que si la discrecionalidad "es una libertad, más o menos limitada,
de apreciación del interés público a los fines de valorar la oportu-
nidad de la acción o del contenido a dar a la acción misma [... ] es
errado hablar de una discrecionalidadmeramente técnica, ya que
los dos términos discrecionalidad y técnica son esencialmente

26 GORDILLO, Agustín, op. cit., pág. X-21.


27 ALESSI, Renatto, Diritto amministrativo, t. l, Milán, 1949, pág. 145.
168 EDUARDO ÁVALOS

inconciliables: [.. .] cuando se trata de una cuestión meramente téc-


nica ella es resuelta exclusivamente en base a criterios técnicos y
a reglas técnicas, y la Administración Pública no tiene ninguna
facultad de apartarse de tales reglas [... ]".
Así, si debe apreciarse la clausura de un inmueble por su inse-
guridad, si debe clausurarse un lugar público por plaga contagio-
sa, si debe decomisarse un alimento peligroso para la salud humana
o si debe suspenderse, por ser peligrosa, la forma de construir un
edificio, es indiscutible que la Administración deberá tomar en
cuenta para arribar a una decisión datos de caráctertécnico-cien-
tífico. No hay discrecionalidad técnica sino apreciación técnica, pro-
dueto de la razonabilidad.
Finalmente, CASSAGNE28 entiende que la locución "discreciona-
lidad técnica" resulta contradictoria y confusa, pues evoca la apli-
cación de la antigua concepción de la discrecionalidad como ámbi-
to exento de revisiónjudicial.

VIII. EL CONTROL JUDICIAL DE LA INACTIVIDAD ADMINISTRATIVA.


INACTIVIDAD FORMAL E INACTIVIDAD MATERIAL DE LA
ADMINISTRACIÓN

Señala TAWIL29 que la omisión de obrar por parte de la Adminis-


tración y sus entes descentralizados puede ser clasificada como
inactividad material e inactividad formal. La inactividad mate-
rial es aquella que se traduce en el incumplimiento por parte de la
Administración de sus competencias ordinarias, enla pasividad
de los entes administrativos para ejecutar o llevar a su debido cum-
plimiento los objetivos que le son propios. La inactividad formal
es aquella que se produce en el marco de un expediente o de un pro-

28 CASSAGNE, Juan Carlos, Fragmentos de derecho administrativo,


pág. 102.
29 TAWIL, Guido Santiago, op. cit., págs. 283 y ss.
-
CONTROL JUDICIAL DE LA ACTIVIDAD ADMINISTRATIVA 169

cedimiento administrativo, ante la falta de impulso o de respues-


ta del ente a una petición formulada por los administrados.
La inactividad formal tiende a ser superada mediante una téc-
nica consistente en asignar al silencio de la Administración un
sentido determinado, que podrá consistir en una aceptación o en
una denegatoria de la petición del particular. La técnica de asig-
narle al silencio un sentido positivo ha tenido acogida en la legis-
lación española, generando una difícil aceptación y constituyendo
una fuente de numerosos conflictos. En nuestro país, las legisla-
ciones administrativas le han otorgado al silencio un sentido ne-
gativo, consistiendo en una presunción o ficción legal establecida
en favor del administrado.
Frente al silencio administrativo, el administrado tiene un
abanico de posibilidades a seguir: a) considerar el silencio como una
denegatoria de la petición (art. 10, LNPA) o recurso interpuesto
(arts.87,91y93,RLNPA),previoprontodespacho(art.70,ley6658);
b) interponer una queja por defectos de tramitación e incumpli-
miento de plazos, siempre que no se refieran al plazo de resolución
de un recurso (art. 71, RLNPA; arto 86, ley 6658); c) iniciar una
acción de amparo por mora (art. 28, LNPA; arto 1°, ley 8508); d)
esperar la resolución expresa de la presentación o recurso por par-
te de la Administración que deberá necesariamente producirse.
La inactividad material se presenta en los más variados ámbi-
tos y de las más variadas formas. Podemos mencionar la falta de
prestación de los servicios públicos asumidos por el Estado, la fal-
ta de sanción de normas o disposiciones reglamentarias que resul-
tan esenciales para la ejecución de las leyes, la omisión de la crea-
ción de órganos que resultan indispensables para el cumplimiento
de actividades que disponen las leyes, el no ejercicio por parte de
la Administración de aquellas acciones que le han sido encomen-
dadas en defensa de derechos e intereses de la comunidad y el in-
cumplimiento de sentenciasjudiciales.
En nuestro país, la resistencia existente para controlar la in-
actividad administrativa material (si bien se avizora un panora-
ma más favorable) se finca en los resabios del dogma revisor pro-
pio de lajurisdicción contencioso administrativa, por el cual quedan
-
170 EDUARDO ÁVALOS

prácticamente fuera del controljudicial aquellas situaciones en


que se encuentra ausente un acto previo denegatorio, como es el
caso de las omisiones administrativas.
Si bien este escollo se ha visto en gran parte superado por la
utilización de la vía de la acción de amparo, este tipo de pretensio-
nes han estado destinadas al fracaso en algunas oportunidades, ya
sea porque los tribunales han desconocido la legitimación para
accionar de los peticionantes, o bien, porque se han ceñido a un
criterio restrictivo acerca de las atribuciones de los tribunales fren-
te a la Administración en el marco de la división de poderes.
Entre los casos jurisprudenciales que podemos mencionar fa-
vorables al control de la inactividad administrativa, se ubican, por
ejemplo, la condena al Estado a dictar una norma reglamentaria30 ;
o al dictado de una ley reglamentaria de un mandato constitucio-
nal como la sanción de la Ley de Comunas3 I; la condena al Estado
Nacional a ejecutar las obras necesarias para facilitar el acceso
de personas discapacitadas a un edificio público perteneciente al
Poder J udicial 32 ; a dar acabado cumplimiento el Estado Nacional
a través del Ministerio de Salud, a su obligación de asistencia, tra-
tamiento y suministro de medicamentos, en forma oportuna, re-
gular y continua a aquellos enfermos que padecen las consecuen-
cias del virus VIHlSida que se encuentren registrados en los
hospitales y efectores sanitarios del país33 ; al Ministerio de Salud
y Acción Social de la N ación para que realice todas las tareas, obras

30 Cám. Fed. Cont. Adm., Sala IIl, 08/05/1998, en autos "Diamante Díaz,
Leopoldo Efraín y otros el Banco Hipotecario Nacional".
31 Cám. Cont. Adro. y Trib. de la Ciudad de Buenos Aires, Sala la, 191
05/2003, en autos "García Elorrio, Javier María v. GCBA sI amparo",
en Derecho administrativo. Revista de doctrina, jurisprudencia, le-
gislacióny práctica, Lexis-Nexis, Bs. As., 2003, pág. 665.
32 En autos "Labaton, Ester Adriana el E.N. - Poder Judicial de la Na-
ción - amparo", LL, 1998-F-346.
33 En autos "Asociación Benghalensis y otros el Ministerio de Sa-
l ud y Acción Social- Estado Nacional sI aro paro -ley N° 16.986", ED,
178-779.

, .• ""'~ mi fr" -sil


CONTROL JUDICIAL DE LA ACTIVIDAD ADMINISTRATIVA 171

y adquisiciones pertinentes para producir la vacuna contra la fie-


bre hemorrágica argentina o "mal de los rastroj OS"34; o a continuar
con las entregas de las dosis necesarias de una medicación espe-
cial para el tratamiento de un grave padecimiento físic0 35 ; o bien
la condena recaída en contra de la Provincia de Buenos Aires a fin
que repare la omisión de poner en funcionamiento el fuero conten-
cioso-administrativo. 36

IX. LA IMPUGNACIÓN JUDICIAL DE LOS REGLAMENTOS

a) Caracterización de los reglamentos

Se ha definido al reglamento como el acto normativo de laAd-


ministración Pública, no sólo de esta última subjetivamente con-
siderada, sino también incluyendo a los provenientes del Poder
Legislativo y del Poder Judicial. 37 No todo acto administrativo de
alcance general es sin embargo un reglamento. Lo que lo caracte-
riza, además de su carácter de normajurídica, es su repetibilidad;
la reiterabilidad de los supuestos de hecho. N o es lo mismo unre-
glamento que establezca el régimen de licencias para el personal
de un órgano administrativo, que el acto por el cual se llama a con-
curso o licitación. Estos últimos agotan su eficacia en la mera emi-
sión, se consumen al ser dictados. Aquél, por el contrario, suscita

34 En autos "Viceconte, Mariela Cecilia el Estado N acional- Ministe-

rio de Salud y Acción Social sI amparo -ley N° 16.986", ED, 178-809.


35 CSJN, 24/10/2000, en autos "Campodónico de Beviacqua".
36 Supo Corte de Buenos Aires, 19/03/2003, en autos "Colegio de Abo-
gados de la Provincia de Buenos Aires el Provincia de Buenos Aires sI
amparo", en Derecho administrativo. Revista de doctrina,jurispru-
dencia, legislación y práctica, pág. 369.
37 Conf. GRECCO, Carlos Manuel, "Impugnación de reglamentos", en

Procedimiento administrativo, Jornadas organizadas por la Univer-


sidad Austral- Facultad de Derecho, Ciencias de la Administración,
Bs. As., 1998, pág. 69.
172 EDUARDO ÁVALOS

su aplicación cada vez que una de las personas involucradas o su-


jetas a su régimenjurídico solicite el beneficio de la licencia.
Dentro del sistema de la LNPA la distinción entre actos de al-
cance general normativos y no normativos desde el punto de vista
de su impugnación, carece de efectos prácticos. Asimismo, el de-
nominado acto plural o colectivo se encuentra excluido del regu-
latorio de impugnación de actos de alcance general.38

b) Las distintas vías

Los cauces formales de impugnación administrativa de actos


de alcance general son dos: el denominado "reclamo impropio" y el
recurso (conf. arto 24, incs. "a" y ''b'', LNPA). El primero es admisi-
ble cuando se ataca directamente el acto general. El segundo ac-
túa por conducto de un acto concreto de aplicación. En este supuesto,
los vicios que lo invalidan no provienen del acto administrativo
particular de aplicación sino del acto general que es causa de su
nacimiento.
Si bien se ha postulado que los únicos legitimados para inter-
poner el reclamo impropio son los titulares de derechos subjetivos,
se ha entendido que tanto el titular de un derecho subjetivo como
el de un interés legítimo se encuentra habilitado para atacar dis-
posiciones generales. Ello se extrae del arto 83 del RLNPA que
autoriza a las partes en el procedimiento administrativo a pedir
la derogación del acto de alcance general. Y el carácter de parte se
adquiere en dicho procedimiento, al invocarse tanto un derecho
subjetivo o como un interés legítimo (conf. arto 3°, RLNPA).
Entre una y otra vía de impugnación existen diferencias en
cuanto a los plazos de interposición y resolución. Así, el reclamo
impropio no tiene plazo de interposición (salvo el de prescripción),

38A mayor abundamiento, véase SAMMARTINO, Patricio Marcelo E., "Im-


pugnación de actos de alcance general", en Procedimiento administra-
tivo, Jornadas organizadas por la Universidad Austral- Facultad de
Derecho, Ciencias de la Administración, Bs. As., 1998, pág. 77.
CONTROL JUDICIAL DE LA ACTIVIDAD ADMINISTRATIVA 173

y debe ser resuelto por aplicación del arto 10 de la LNPA en el pla-


zo de sesenta (60) días, debiendo el interesado en caso de silencio
presentar pronto despacho. Transcurridos otros treinta días sin que
hubiese recaído resolución se configura la denegatoria tácita.
En el caso de la vía recursiva, el RLNPA prevé los plazos de los
recursos y su plazo de resolución.
En otro orden de ideas, de acuerdo a lo preceptuado por el arto 73
del RLNPA en su actual redacción según decreto 1883/91, a dife-
rencia de lo que ocurre por conducto de la impugnación indirecta
por vía de recursos, el reclamo impropio únicamente autoriza a
cuestionar la legitimidad del acto general, no así su oportunidad,
mérito o conveniencia. Una vez resuelto expresamente el reclamo
impropio queda expedita la acciónjudicial, sin que quepa a su vez
interponer, en contra del acto administrativo que lo desestima, un
recurso administrativo, puesto que a tenor del arto 73 del RLNPA
el acto administrativo que resuelve el reclamo impropio es asu vez
irrecurrible. También se puede acceder a la víajudicial, en caso de
silencio de la Administración, al no responder ella el reclamo ni el
pronto despacho. En caso de la hipótesis de impugnación de un
reglamento a través de su acto de aplicación, se accede a lajuris-
dicción luego de agotar a su respecto la vía administrativa, median-
te la interposición de los recursos administrativos regulados en el
RLNPA.
Corresponde preguntarse si el régimen de impugnación verte-
brado en la LNPAy su reglamento es aplicable respecto de las dis-
tintas expresiones que en nuestro ordenamiento constitucional
tiene la potestad reglamentaria, esto es: reglamentos autónomos,
de ejecución, delegados y de necesidad y urgencia; o si en cambio,
dicho régimen opera sólo para ciertas clases de reglamentos. Al
respecto, la Procuración del Tesoro de la Nación ha entendido que
el sistema de reclamos y recursos no debe ser utilizado para la
impugnación de actos de sustancia legislativa, como es el caso de
los reglamentos de necesidad y urgencia. 39 También dicho organis-

39 Procuración del Tesoro de la Nación, dictámenes 211:171.


174 EDUARDO ÁVALOS

mo ha entendido que los actos dictados por el Poder Ejecutivo en


virtud de una delegación legislativa tienen la mismajerarquía
normativa que las leyes, por lo que tampoco serían atacables a tra-
vés del sistema consagrado en la LNPAy su reglamentación. 40
Por su parte lajurisprudencia ha establecido que dado que los
reglamentos de necesidad y urgencia poseen una naturaleza más
similar a las leyes que a típicos actos administrativos de carácter
reglamentario, suimpugnaciónjudicial no se encuentra sujeta al
recaudo previo del agotamiento de la instancia administrativa ni
a los respectivos plazos de caducidad establecidos en el arto 25 de
la ley nacional de procedimientos administrativos. 41
Finalmente, cabe indagar si las sentencias anulatorias de re-
glamentos tienen eficacia erga omnes. Siguiendo a CASSAGNE 42
podemos señalar que en los distintos sistemas de controljurisdic-
cional que existen en el derecho comparado, ante causas que tie-
nen por objeto una pretensión anulatoria de un reglamento admi-
nistrativo se reconoce que los efectos jurídicos procesales de la
sentencia se extienden a quienes no fueron parte en los respecti-
vos procesos. Y este efecto erga omnes se prescribe tanto en los sis-
temas articulados sobre la base de tribunales administrativos
como en los llamados sistemas judicialistas, situación que se da aun
en aquellos países donde el controljurisdiccional de legalidad de
los reglamentos no está concentrado en un único tribunal superior
o constitucional.
En el derecho argentino, la doctrina del derecho constitucional,
atraída por la cuestión inherente a la inconstitucionalidad de las
leyes, casi no ha prestado atención al punto, a diferencia de la ad-
ministrativa' en la cual prevalece la opinión favorable al recono-
cimiento de los efectos erga omnes de las sentencias anulatorias

40 Procuración del Tesoro de la Nación, dictámenes 143:96; 199:97.


41 Cám. N ac. Cont. Adm. Fed., Sala N, 09/0212000, en autos "Fernán-
dez, Horacio E. el Estado Nacional".
42 CASSAGNE, Juan Carlos, "El control jurisdiccional de la actividad re-
glamentaria y demás actos de alcance general", en Actualidad en el
Derecho Público, N° 15/16, Ad-Hoc, Bs. As., 2001, pág. 265.
...

CONTROL JUDICIAL DE LA ACTIVIDAD ADMINISTRATIVA 175

de reglamentos. La tesis contraria a dicho reconocimiento, se cen-


tra en la posible violación al principio de separación de poderes,
como además, en el argumento que una sentencia que declara in-
constitucional o ilegal a un reglamento se limita a quienes han sido
partes en una controversiajudicial. No obstante, no existe norma
alguna que regule la cuestión y de una respuesta contundente. Sin
embargo, la Corte Suprema de Justicia de la N ación, en un caso
muy concreto y puntual decidió el efecto erga omnes de una sen-
tencia anulatoria de un reglamento y con vigencia sólo para el fu-
turo. 43

43En autos "Monges d Universidad de Buenos Aires", 26/12/1996, ED,


173-272. Allí expresó: "[ ... ] dada la naturaleza de la materia de que se
trata, corresponde declarar que la autoridad de esta sentencia debe-
rá comenzar a regir para el futuro, a fin de evitar perjuicios a los aspi-
rantes a ingresar a la Facultad de Medicina quienes, aun cuando se
hallaban ajenos al conflicto suscitado, ante la razonable duda genera-
da por éste, asistieron y eventualmente aprobaron el denominado
'Ciclo Básico Común' de la Universidad Nacional de Buenos Aires o,
en su caso, el Curso Preuniversitario de Ingreso creado por el Conse-
jo Directivo de la Facultad de Medicina. En tal sentido, cada estudiante
podrá perseguir hasta su conclusión el régimen por el que hubiere
optado, con los efectos para cada uno previstos L.. ]". La Corte no sólo
declara el efecto erga omnes de la invalidez de un reglamento, sino que
limita hacia el futuro los efectos de la declaración de nulidad, con lo
que se aparta de la doctrina administrativista que vincula la retroac-
tividad de los efectos de una anulación con la nulidad absoluta.
=
176 EDUARDO ÁVALOS

ACTIVIDAD DE AUTOEVALUACIÓN

1) ¿ Cómo se caracteriza el proceso contencioso administrativo


y cuáles son sus orígenes?
2) ¿Cuáles sony en qué consisten los distintos sistemas de con-
trol de la actividad administrativa?
3) ¿ Cuáles son los elementos constitutivos del proceso conten-
cioso administrativo?
4) ¿ Cuáles son los principios que rigen el proceso contencioso
administrativo?
5) ¿ Qué entiende por el "carácter revisor" de lajurisdicción con-
tencioso administrativa?
6) ¿ Cuáles son las distintas clases de procesos contencioso ad-
ministrativos?
7) ¿Cómo opera el control del ejercicio de la discrecionalidad ad-
ministrativa por el Poder Judicial?
8) ¿ Qué entiende por los conceptos jurídicos indeterminados
como técnica de control de la discrecionalidad?
9)¿ En qué consiste la inactividad formal y material de la Ad-
ministraciónycómo se ejerce su control?
10) ¿ Cómo se encuentra sistematizada la impugnación de re-
glamentos administrativos?
Capítulo XII
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO
EN LA PROVINCIA DE CÓRDOBA

Por Ignacio M. Vélez Funes


y Lilíana N. Villafañe

Sumario: 1. Los órganos de la jurisdicción. lI. La ma-


teria contencioso administrativa en Córdoba. lII. La
situación de los llamados actos de gobierno o políti-
cos. IV. Técnicas jurídicas de control de la discrecio-
nalidad. V. Otras materias excluidas. VI. La deman-
da. VII. La habilitación de instancia judicial. VIII. La
suspensión de los efectos de la decisión impugnada.
IX. Citación y notificación. X. Contestación de la de-
manda. Las excepciones. XI. La prueba. XII. La sen-
tencia. Efectos. XIII. Recursos contra la sentencia.
XIV. La ejecución de la sentencia. XV. Perención de
instancia. XVI. Control judicial de los entes regulado-
res.

l. Los ÓRGANOS DE LA JURISDICCIÓN

EljuristaBartolomé FIORINI 1 ha expresado, en numerosas oca-


siones, que los diferentes sistemas contencioso-administrativos
contienen necesariamente tres elementos que tienen una relación

1FIORINI, Bartolomé, Qué es el contencioso, Abeledo-Perrot, Bs. As.,


1997, pág. 75.
...
178 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

directa con el objeto jurisdiccional esencial: la sentencia conten-


cioso administrativa_
Los elementos que integran los sistemas son: el órgano juris-
diccional contencioso administrativo, la materia contencioso ad-
ministrativa y el procedimiento contencioso administrativo o re-
glas procesales deljuicio específico en esta especialidad.
Si nos remontamos a los antecedentes históricos, precisamen-
te en Francia, el Consejo de Estado hasta el año 1953 era un tribu-
nal administrativo de primera y única instancia. Pero en virtud
de las modificaciones llevadas a cabo en 1957 el referido organis-
mo administrativo-jurisdiccional se transformó en un tribunal de
segunda instancia2, sin integrar el Poder Judicial francés.
La ley provincial 7182, sancionada el 30de octubre de 1984(B.O.
del 2711111984) , aprobó el actual Código de Procedimiento Conten-
cioso Administrativo de la Provincia de Córdoba, dej ando sin efecto
el viejo código establecido por la ley 3897, donde el proceso sólo se
tramitaba en única y originaria instancia ante el entonces deno-
minado Tribunal Superior de Justicia de Córdoba (Sala Conten-
cioso Administrativa) según la competencia asignada a ese máxi-
mo tribunal por las disposiciones de la Constitución de la Provincia
de 1923.
Este nuevo régimen procesal resultó novedoso y de avanzada
en el derecho procesal de las provincias argentinas a esa época, por-
que creó tribunales especiales e instauró el sistema de única ins-
tancia en las causas que se promuevan por parte legítima, impug-
nando los actos administrativos de autoridades en ejercicio de
funciones administrativas con facultades para decidir en última
instancia, salvo en las causas en las que la Provincia sea parte como
actora o demandada.
Algunos años después, yporreiterados reclamos originados en
el Interior de la Provincia, se sancionó la ley 7818 3 que introduce
importantes modificaciones a la ley 7182, respecto a los órganos

2 FIORINI, Bartolomé, op. cit., pág. 76.


3 Ley 7818 (Boletín Oficial del 03/0111990).
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA PROVINCIA... 179

jurisdiccionales que intervendrán en el control judicial de la acti-


vidad administrativa, sin que hasta la fecha haya habido otra re-
forma que afecte el proceso contencioso administrativo de la Pro-
vincia de Córdoba, a pesar de la reforma constitucional acaecida
en 1987 donde se excluyó la competencia originaria y exclusiva del
ahora denominado Tribunal Superior de Justicia en materia con-
tencioso administrativa y limitando sólo su intervención en esas
causas por vía de recursos judiciales ordinarios o extraordinarios,
por la existencia de las Cámaras Contencioso Administrativas en
las distintas circunscripciones judiciales que ocupan el mapaju-
dicial de la Provincia de Córdoba.
A partir de la vigencia de la ley 7818, se reconoce competencia
en la materia contencioso administrativa yterritorialmente a to-
das las Cámaras Civiles y Comerciales de las circunscripciones del
Interior de la Provincia de Córdoba e incluso, además de la compe-
tencia y jurisdicción asignada especialmente a los tribunales cole-
giados que se crearon inicialmente como las Cámaras Contencioso
Administrativas de Córdoba enla primeracircunscripciónjudicial.
En consecuencia, y atento a lo dispuesto por los arts. 5° y 10 del
Código Contencioso Administrativo de la Provincia de Córdoba
(CCMA), los órganos jurisdiccionales desde entonces y actualmente
son:
-El Tribunal Superior de Justicia de Córdoba, ahora así deno-
minado a partir de la reforma constitucional de 1987, porinterme-
dio de la Sala Contencioso Administrativa integrada por tres de
sus vocales miembros;
-Las dos Cámaras Contencioso Administrativas enla primera
circunscripciónjudicial con asiento en el Departamento Capital;
- Las Cámaras Civiles y Comerciales enlas circunscripciones
del Interior de la Provincia de Córdoba, a las cuales se le amplía la
competencia en materia contencioso administrativa, además de
las otras que tienen asignada específicamente (en materia civil,
comercial, laboral y de familia);
- El Fiscal General como titular del Ministerio Público Fiscal
en todo el territorio de la Provincia de Córdoba (que es un órgano
judicial y distinto del Fiscal de Estado de la Provincia, cuyas fun-
- --
180 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

ciones son administrativas y de control de legalidad interna de la


Administración Pública Provincial, además de máxima autoridad
del cuerpo de abogados del Estado provincial, sin cuya firma tam-
poco puede el Gobernador provincial emitir ningún decreto o acto
administrativo equivalente) según las competencias y atribucio-
nes reconocidas por el arto 173 de la Constitución de Córdoba yre-
glamentado por la Ley Orgánica del Ministerio Público Fiscal 7826;
el Fiscal de las Cámaras Contencioso Administrativas yel Fiscal
de cada una de las Cámaras radicadas en el Interior de la Provin-
CIa.

11. LA MATERIA CONTENCIOSO ADMINISTRATIVA EN CÓRDOBA

a. La acción contencioso administrativa

El controljudicial de los actos derivados de la actividad admi-


nistrativas' y dictados en ejercicio de la función administrativa
es realizado en el ámbito de lajurisdicción contencioso adminis-
trativa, cuando vulnere o lesione un derecho subjetivo de carác-
ter administrativo o afecte un interés legítimo establecido o re-
conocido con anterioridad a favor del demandante, "en situaciones
jurídico-subjetivas creadas o reconocidas por la Constitución, o por
la ley, reglamento, ordenanza, concesión o permiso, contratoadmi-
nistrativo u otro acto administrativo, que sean preexistentes [ .. .]',
como reza textualmente el arto 1°, inc. c, del CCMA de nuestra
provincia. Además de la competencia específica asignada en ma-
teria contencioso administrativa, posteriormente por la ley pro-
vincial8508 se les asignó competencia especial y excluyente para
el trámite del amparo por mora administrativa y sobre la actua-
ción y actos del Ente Regulador de los Servicios Públicos (ERSEP)
creado después por laley 8835, en su relación con usuarios, consu-
midores y prestadores de servicios públicos.
A los fines de obtener el control judicial de los actos es necesa-
rio iniciar la acción contencioso administrativa específica, enten-
diendo como tal, "el derecho subj etivo público de ti po instrumen-
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA PROVINCIA... 181

tal, que implica la facultad de impetrar ante un órgano judicial


independiente e imparcial, que tiene la obligación de resolver se-
gún los principios y normas del derecho público una pretensiónju-
rídica sustentada en una situación jurídica subjetiva de tipo ad-
ministrativa, que se supone vulnerada como consecuencia del
ejercicio de la función administrativa por el accionar directo o in-
directo del aparato estatal". 4
Al respecto, la Sala Contencioso Administrativa del Tribunal
Superior de Justicia de Córdoba ha expresado:
"La ley 7182 ha establecido un verdadero proceso, en el que la
materia de la acción ante lajusticia es la pretensión que se deduzca
en relación con los actos de laAdministraciónPúblicay no solamente
respecto de estos últimos [. ..]. En la ley 7182 de un proceso conten-
cioso administrativo 'objetivo' entendido como un proceso 'al acto',
se pasa a un proceso 'subjetivo' donde se atiende a las 'pretensiones'
deducidas 'contra el acto', lo que significa que el controljudicial de
la administración está dirigido a la protección de los derechos e
intereses de los particulares enfrentados a las potestades de la ad-
ministración. Las potestades del trib unal no se limitan a una sim-
ple confrontación de la disposición general con normas de superior
jerarquía y, en consecuencia, a pronunciarse sobre su validez o in-
validez. La justicia administrativa no es ya, por lo tanto, un siste-
ma de protección de la legalidad objetiva a que está sometida la
Administración, según la tradición, ya definitivamente claudican-
te, del exces de pouvoir, sino un sistema de tutela de situacionesju-
rídicas subjetivas, tutela plenaria". 5
Para que la acción contencioso administrativa -que hemos
conceptualizado precedentemente- sea admisible, es necesario

4 ILDARRAZ, Benigno - ZARZA MENSAQUE, Alberto R. - VIALE, Claudio Mar-

tín, Derecho constitucional y administrativo, pág. 655.


5 TSJ, Sala Contencioso Administrativa, en autos "Banco de Crédito
Argentino S. A. d Municipalidad de Río Cuarto - plena jurisdicción",
sentencia N° 220, 29/12/1999, citado en Foro de Córdoba, Suplemen-
to de Derecho Administrativo y Constitucional, N° 1, pág. 53.
«
182 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAi"'\'E

cumplimentar los requisitos establecidos en el arto 1° del Código


Contencioso Administrativo de la Provincia de Córdoba a los cua-
les nos referiremos a continuación.
A diferencia de lo expuesto y a título de contraste, menciona-
mos el Código en materi a Contencioso Administrativa que sancio-
nó laProvincia de La Pampa el 12 de setiembre de 1979 a través de
la ley provincial 952 ; sobre la base de un proyecto único del maes-
tro Miguel S. MARIENHOFF, quien también redactó el proyecto de
la Ley de Procedimiento Administrativo de la misma provincia,
cuya aprobación legislativa fue sancionada por la ley provincial 951
y reglamentada el mismo día por el Poder Ejecutivo de la Provin-
cia de La Pampa según el decreto 1684.
En este sistema procesal de La Pampa, el arto 2° de la ley 952
establece las hipótesis de competencia en materia contencioso
administrativa del Tribunal Superior de Justicia de esa Provin-
cia, como único tribunal para conocer y decidir en esta materia es-
pecífica, mientras que el arto 3° de la mencionada norma procesal
fija las excepciones alaregla. Es decir que señala en qué casos pro-
cede la única acción contencioso administrativa prevista en ese sis-
tema para entender sobre pluralidad de pretensiones y en cuáles
casos no procede aquélla.
El Tribunal Superior de Justicia de La Pampa CSala"A") ha en-
tendido desde e121 de junio de 1994 que" [. ..) el fuero contencioso
administrativo es un fuero de excepción y que en razón de ello la
materia comprensiva del mismo debe limitarse restrictivamente
ya que la ley reguladora de su alcance y procedimiento establece
severas restricciones fundadas enlas muy particulares caracterís-
ticas que lo revisten [. .. )".6

6Protocolo de Interlocutorios 1986:42 y 43 en autos "Carreira, Daniel


e/ Ministerio de Asuntos Agrarios y otros si daños y perjuicios", reite-
rado y reproducido el criterio por la misma Sala "A" del TSJ el 23 de
agosto de 1994 en la causa "Arabel, Ricardo e/Dirección Provincial
de Vialidad de La Pampa si laboral", y el15 de diciembre de 2000 en
autos "Combustibles Pampeanos S.A. e/ Provincia de La Pampa - da-
ños y perjuicios", entre otros. En sendos casos se siguió el criterio doc-
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA PROVINCIA... 183

El Código Contencioso Administrativo y Tributario de la Ciu-


dad Autónoma de Buenos Aires (CCAyT) fue puesto en vigencia en
esa jurisdicción territorial mediante la ley 189 sancionada el13
de mayo de 1999 (B.O. N° 722 del 28/06/1999) después del nuevo
status jurídico de esa ciudad establecido a partir de la reforma de
la Constitución Nacional en 1994.
Es el más reciente sistema procesal que está vigente en nues-
tro país, atendiendo las cuestiones en materia administrativa me-
diante una única acción contencioso administrativa que autoriza
el trámite de una sola clase de proceso de conocimiento al que pue-
de llamarse "ordinario" por su similitud al igualmente denominado
por el Código Procesal Civil y Comercial de la N ación (arts. 269 y
ss., CCAyT).
Destacamos en particular y a diferencia de lo autorizado en
nuestro sistema procesal de la Provincia de Córdoba, que, según
la ley 189 de la Ciudad de Buenos Aires, "L .. ] Son causas conten-
cioso administrativas a los efectos de este Código todas aquellas
en que una autoridad administrativa, legitimada para estar enjui-
cio' sea parte, cualquiera que sea su fundamento u origen, tanto
en el ámbito del derecho público como del derecho privado [... ]"
(art. 2°, CCAyT).

trinario de MARIENHOFF y de los españoles Jesús GONzÁLEZ PÉREZ, Fer-


nando GARRIDO FALLA YTomás Ramón FERNANDEZ, coincidentes todos
ellos en la definición de la materia propia del contencioso administra-
tivo, en cuanto se ha entendido que "[. .. ] allí donde se aplique derecho
administrativo, allí donde exista un acto sujeto al derecho adminis-
trativo, los litigios que surjan deberán someterse a la decisión del juez
administrativo. Pero cuando no se aplique el derecho administrati-
vo, aunque uno de los sujetos de la relación sea un ente público, la nor-
majurídica sea civil, o mercantil o laboral [... ]; deberá acudirse alor-
den judicial al que se atribuye el conocimiento de las pretensiones
fundadas en el ordenamiento jurídico respectivo [... ]" (véase El con-
tencioso administrativo y la responsabilidad del Estado, Abeledo-
Perrot, Bs. As., 1988, pág. 35).
184 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

Actualmente los tribunales de la Ciudad de Buenos Aires (no


confundir con los tribunales ordinarios dependientes del Poder
Judicial de la N ación) competentes para entender en los asuntos
que tenga materia contencioso administrativa son: en primera
instancia los Juzgados de Primera Instancia en lo Contencioso
Administrativo (unipersonales); en segunda instancia, lo son las
Cámaras Contencioso Administrativas y Tributarios y enlo Con-
travencional y de Faltas (colegiados). También, por vía de recur-
sos extraordinarios, podrá intervenir el Tribunal Superior de J us-
ticia7 en estas causas ojuicios especiales.
Para que no haya dudas sobre la materia contencioso, el referi-
do CCAyTexpresamente señala en su art. 2:infine que "[.. .]Lacom-
petencia contencioso administrativa y tributaria es de orden públi-
co" por lo que no podrá ser delegada o resignada a favor de otro
tribunal.
N os congratula que en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires
se haya consagrado un sistema de doble instancia, además de la
ulterior y excepcional intervención del Tribunal Superior de Jus-
ticia, independientemente de quien sea parte en el proceso como
actor o demandado. También compartimos que se haya estable-
cido una única acción contencioso administrativa para atender
pluralidad de pretensiones de los actores, con indiferencia de que
se trate de cuestiones que tengan sustento en una situaciónjurí-
dica de "derecho subjetivo" o de "interés legítimo" como lo exige
nuestra Provincia de Córdoba en base a la división de acciones
que estableció el Consejo de Estado francés y a partir del cual se
abrevó en nuestro país. Este sistema fortalece la garantía de la
tutelajudicial efectiva a que está obligado el Estado por el arto 18
de la Constitución, en concordancia con los arts. 8°y 25 del Pacto
de San José de Costa Rica, facilitando el acceso a la jurisdicción
para el controljudicial de los actos administrativos particulares

7 Arts. 113 y 118 de la Constitución de la Ciudad Autónoma de Buenos


Aires (B.O. del 10/10/1996), y arto 7° de la Ley Orgánica del Poder Ju-
dicialN° 7, sancionada e15 de marzo de 1998 (B.O. del 15/03/1998).
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA PROVINCIA... 185

y reglamentos de la Administración Pública, toda vez que a ve-


ces existen zonas grises u oscuras para definir taj antemente la
existencia de una situaciónjurídica subjetiva de derecho subje-
tivo o de interés legítimo que habilite la acción judicial conten-
cioso administrativa respectiva.
Es condición de ejercicio de la acción contencioso administra-
tiva en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, según el arto 3° del
CCAyT aprobado por la ley 189, en los siguientes y taxativos su-
puestos:
a) Cuando se trate de actos administrativos de alcance particu-
lar definitivos o equiparables dictados de oficio o a petición de par-
te; es necesario el agotamiento de la instancia administrativa por
medio de las vías recursivas pertinentes;
b) Cuando se trate de actos administrativos de alcance general,
es necesario el agotamiento de la instancia administrativa por
medio de reclamo.
c) Cuando se trate de actos administrativos de alcance general
a los que se les haya dado aplicación mediante actos administrati-
vos definitivos o equiparables, es necesario el agotamiento de la
instancia administrativa;
d) La impugnación de reglamentos o actos administrativos de
alcance general por vía de actos de aplicación particular, no habi-
lita la revisión de actos de aplicación anterior no impugnados ad-
ministrativa o judicialmente.
Otra particularidad, para diferenciarlo del sistema contencio-
so cordobés, es que en Buenos Aires no puede demandarse autóno-
mamente la reparación de los daños y perjuicios ocasionados por
actos administrativos que se estimen ilegítimos sin haberse im-
pugnado, en tiempo y en forma, el acto que se pretende lesivo.
Por último, también este nuevo Código señala en su arto 5° los
casos en que no es necesario agotar la vía administrativa para
promover una instancia judicial "[. ..] cuando mediare una clara
conducta de la autoridad administrativa que haga presumir la in-
eficacia cierta de acudir a dicha instancia [. ..]', al igual que lo
preceptuado por el arto 32, inc. e, de la ley 19.549, sin modificación
por la ley 21.686 en este punto.
186 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIA.."N"A N. VILLAFAÑE

b. Legitimación procesal

Según COUTURE 8 , la legitimación es la aptitud legal para acti-


var el órgano jurisdiccional, a diferencia de la pretensiónjurídi-
ca, que es lo que el accionante solicita le sea expresamente recono-
cido en ese ámbito.
La legitimación procesal puede ser activa, es decir, el que ini-
cie o promueva la acción contencioso administrativa; o pasiva, que
es el sujeto contra quien se acciona o inicia el proceso.
Quien promueva una acción contencioso administrativa, debe-
rá ser un sujeto de derecho, es decir debe contar con la capacidad
para estar enjuicio (persona física, personajurídica, pública o pri-
vada).
Además, quien invoque la legitimación procesal activa debe
esgrimir y demostrar la existencia de una situaciónjurídica sub-
jetiva de tipo administrativa: derecho subjetivo o interés legítimo,
como condición imprescindible y necesaria para promover una
acciónjudicial en el sistema de la Provincia de Córdoba. En su de-
fecto, no se habilitará la instanciajudicial por carecerse de legiti-
mación suficiente o se admitirá la defensa de falta de acción como
excepción previa que puede articular la Administración Pública
demandada, quedando en consecuencia firme y consentido el acto
administrativo que supuestamente causa agravio al interesado
afectado.
"Concebirrwsengeneral el derecho subjetivo administrativo corrw
el interés personal, directo y exclusivo que tiene un administrado
determinado con relación a una norma que establece cuál es la con-
ducta administrativa debida [. ..]'. 9
Si la situaciónjurídica invocada es la de derecho subjetivo, de-
berá promover la acción contencioso administrativa de plenajuris-

8 COUTURE, Eduardo J., Estudios derecho procesal civil, t. III, Ediar,


Bs. As., 1978, pág. 208.
9 TSJ, Sala Contencioso Administrativa, en autos "Sicka, Rosa el Pro-
vincia de Córdoba -plenajurisdicción", sentencia W 29, del 11103/1999 ,
citado en Foro de Córdoba, N° 54 (1999), pág. 283.
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA PROVINCIA... 187

dicción; si en cambio se trata de un interés legítimo, será la acción


contencioso administrativa de ilegitimidad.
Además, debe tenerse presente que también el Estado puede
accionar por la vía del contencioso administrativa, invocando una
pretensión que se encuentra amparada por el derecho administra-
tivo, a través de la acción contencioso administrativa de lesividad.
En este caso, debe tenerse presente que la única personajurídica
habilitada para promover esta acción como actor es la misma
Admistración Pública, para obtener la nulidad o modificación de
un acto administrativo que ha tenido comienzo de ej ecución y que
alcanza a otra persona en su beneficio, baj o la apariencia de lega-
1idad pero con vicios que lo invalidan legalmente para mantener
su subsistencia.

c. Acto administrativo

El arto 10 de la ley 7182 establece claramente que las causas


judiciales deberán promoverse en lajurisdicción contencioso ad-
ministrativa cuando se cuestionen o impugnen "los actos adminis-
trativos de los poderes Legislativo, Ejecutivo o Judicial del Estado
Provincial, del Tribunal de Cuentas de la Provincia, de las entida-
des descentralizadas autárquicas, de las Municipalidades o de cual-
quierotro órgano o ente dotado con potestad pública y con facultad
para decidir en última instancia". El espectro de controljudicial
es amplio y general, destacándose ello porque el sistema de divi-
sión de poderes en la Provincia de Córdoba se encuentra fortale-
cido en este aspecto, al punto que los mismos actos de superin-
tendencia o administrativos del PoderJudicial de la Provincia son
susceptibles de controljudicial; incluso los producidos por el mis-
mo Tribunal Superior de Justicia o el Consejo de la Magistratura
de la Provincia de Córdoba, a diferencia de otras interpretaciones
que ha realizado la misma Corte Suprema de Justicia de laNación
respecto a sus propios actos de superintendencia.
La condición necesaria para poner en marcha lajurisdicción es
la existencia de un acto administrativo emitido en ejercicio de la
188 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

función administrativa. Es también, en ese sentido, la interpre-


tación efectuada por el Tribunal Superior de Justicia de Córdoba:
"Si bien la demanda ha sido incoada por un agente de laAdmi-
nistración provincial, vinculado a su empleadora por una relación
de empleo público, la naturaleza de la pretensión ejercida-recla-
mo indemnizatorio por infortunio laboral-escapa a la competen-
cia taxativamente atribuida al fuero contencioso administrativo por
la ley de la materia [. ..]En los términos del arto JO de la ley 7182, todo
lo atinente a la relación de empleo público es de competencia con-
tencioso administrativa a condición que exista un acto adminis-
trativo susceptible de ser revisado en sede judicial, en tanto el
mismo haya sido dictado por autoridad administrativa con facul-
tades para decidir en última instancia, que cause estado, es decir
que se hayan agotado a su respecto los recursos administrativos
previstos por las leyes específicas, que dicho acto sea consecuencia
del ejercicio de la función administrativa y que vulnere un dere-
cho subjetivo o un interés legítimo preexistente del administrado.
En la medida que dicha vía ha sido concebida con carácter restrin-
gido y únicamente para juzgar la actividad de la Administración
en ejercicio de la función administrativa, quedan excluidas de la
jurisdicción contencioso administrativa las cuestiones que deban
resolverse aplicando exclusivamente normas de derecho privado o
del trabajo" .10
La revisiónjudicial, se realizará especialmente en relación al
"acto administrativo base" respecto del cual se han interpuesto los
recursos para agotar la vía, debiendo -también-cuestionar los
demás actos dictados en consecuencia.

10TSJ en pleno, "Secretará Electoral Córdoba", Auto N° 28, del 07/08/


2002, "Sosa Lidia Susana el Superior Gobierno de la Provincia de Cór-
doba-Incapacidad-cuestión de competencia", citado enActualidad Ju-
rídica de Córdoba, N° 13, pág. 733.
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA PROVINCIA... 189

El acto sometido al controljudicial, debe ser definitivo (es de-


cir, resolver sobre el fondo de la cuestión), no debe encontrarse fir-
me y debe haber causado estado.
El acto administrativo ha causado estado, cuando se encuen-
tra agotada la vía administrativa y se ha obtenido de la autoridad
con facultad para decidir en última instancia un pronunciamien-
to expreso o presunto.
El arto 6" del Código Contencioso Administrativo de Córdoba ex-
presa claramente que previo a iniciar la acciónjudicial debe ago-
tarse la vía administrativa mediante los recursos necesarios para
"obtenerde la autoridad competente de última instancia, el recono-
cimiento o denegación del derecho reclamado o interés legítimo afec-
tado".
Bartolomé FIORINI, respecto a la resolución que causa estado ha
manifestado que la misma "exhibe una conjunción de elementos
sustanciales yprocesales. N o es el acto en sí, sino diversos recau-
dos complementarios que debe presentar la resolución para que
pueda causar estado; estos pueden agruparse enla siguiente for-
ma: a) los formales, que corresponden ala resolución administra-
tiva que se pretende impugnar; b) los sustanciales, que contienen
esta resolución; c) los temporales, para poder interponer el recur-
so. Estos tres recaudos invisten a la resol ución administrativa de
lacondíción de causar estado referida: a la manifestación de la reso-
lución, ala materia administrativa dellitigío y al término que regla
el recurso respectivamente [. ..] Así es como se comprueba que toda
decisión administrativa para que cause estado debe exhibir las si-
guíentes dos situaciones: un acto administrativodefinítivoynoha-
lIarse aún consentido, es decir no firme. La calificación de decisión
administrativa consentida o firme significa que es definitiva, pero
que, además, se halla despoj ada de la condición de causar estado,
porque ha desaparecido por im posibilidadjurídica de su conteni-
do o por caducidad, la posibilidad de recurrírsela para obtener la
habilitación de la instanciajudicial [... ]".n

11 FIORINI, Bartolomé, op. cit., págs. 216 y 217.


190 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

La Cámara Contencioso Administrativa de Córdoba ha expre-


sado respecto ala cuestión que nos ocupa: "El acto que causa esta-
do es una especie de acto clausurado en razón de haberse agotado
las instancias administrativas porel recurrente debido a que ema-
nade la más alta autoridad competente en la materiaycontraelcual
no procede ya un remedio obligatorio para el particular".12
En principio, y en virtud de un análisis literal del arto 10 de la
ley 7182, los hechos se encontrarían excluidos del control judicial.
Sin embargo, debemos tener presente que por vía indirecta "tam-
bién podemos llegar a enjuiciar los hechos en base a la siguiente
estrategia: cuando estamos frente a un hecho se debe provocar la
emisión del acto" .13

d. Función administrativa

El arto 10 de la ley 7182 requiere, además, que el acto sometido


al controljudicial sea consecuencia del ejercicio de la función ad-
ministrativa.
Claramente queda establecido que el Código Contencioso Ad-
ministrativo de la Provincia de Córdoba adopta el denominado
"criterio material" en la distinción de las funciones del Estado.
En efecto, considera que ejerce función administrativa no so-
lamente el Poder Ejecutivo, en su organización centralizada y
descentralizada, sino también el Poder Legislativo yel PoderJu-
dicial, Tribunal de Cuentas de la Provincia, Municipalidades y
aquellos órganos que la desarrollan por expresa disposición legal
(por ejemplo, personas jurídicas no estatales, como son los Colegios
Profesionales quienes tienen delegados el gobierno de la matrícu-
la profesional o la potestad disciplinaria sobre sus miembros).

12 "Fernández, Jorge el Municipalidad de Córdoba - contencioso admi-


nistrativo", Semanario Jurídico, t. LVIII, 1990-A.
13 SESÍN, Domingo, "La materia contencioso administrativa en Córdo-
ba",Revista de Derecho Público, Rubinzal-Culzoni, Bs. As., 2003-:.
pág. 107.
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA PROVINCIA... 191

Al respecto, lajurisprudencia cordobesa ha expresado: "Con la


sanción del arto 178 de la nueva Constitución de la Provincia de
Córdoba, las personasjurídicas públicas, en el ejercicio de las fun-
ciones administrativas que tienen asignadas, quedan sujetas al
control judicial de conformidad a la ley de la materia vigente-en
la actualidad la ley 7182- y previo el agotamiento de la vía admi-
nistrativa" .14
Respecto al controljudicial de la función administrativa lleva-
da a cabo por el Poder Judicial, la Sala Contencioso Administrati-
va del Tribunal Superior de Justicia de Córdoba, ha emitido el si-
guiente criterio: "El TSJ se ha pronunciado en sentido favorable
respecto del controljudicial de los actos administrativos sanciona-
torios emitidosporelPoderJudicial en orden a las atribuciones de
Superintendencia, mediante el ejercicio de la acción contencioso-
administrativa ante las Cámaras competentes y atento a que en la
demanda se impugnan 'actos de naturaleza administrativa' del
Poder Judicial, se ha agotado la vía administrativa, por tanto, re-
visable en esta sede, debemos concluir que la presente causa integra
la competencia de la Cámara Contencioso Administrativa adonde
debe remitirse para tramitación y resolución". 15

e. El principio de solve et repete

El arto 19, inc. 9, de la Constitución de la Provincia de Córdoba


garantiza a las personas el derecho a "acceder a lajurisdiccióny a
la defensa de sus derechos".
Siguiendo igual orientación el arto 49 establece que no puede
limitarse "el acceso a la Justicia por razones económicas". Pero
cuando se trata el tema de los tributos, la Constitución de la Pro-

14 "Denuncia formulada por Oscar A. Rinaldi, Cám. sa Civ. Como Cór-

doba, A.L N° 86, del 24/03/1993.


15 "Álvarez, Norma Beatriz cl Provincia de Córdoba - plenajurisdic-
ción - conflicto de competencia", sentencia N° 13, del 13/0S/1997 ,Bo-
letín Judicial de la Provincia de Córdoba, t. n, 1997, pág. 472.
-
192 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

vincia de Córdoba, en el arto 71 establece: ''La ley determina el modo


y la forma para la procedencia de la acciónjudicial donde se discu-
ta la legalidad del pago de impuestos y tasas".
"La cláusula transitoria duodécima de la actual Constitución
Provincial prescribe que hasta tanto se dicten las leyes reglamen-
tarias, subsisten los actuales regímenes legales. Esta norma es la
que justifica la vigencia del arto 9° de la ley 7182 [. .. ]" .16
El arto 9° de la ley 7182 establece que cuando se somete a con-
troljudicial un acto administrativo que ordenase el pago de una
suma de dinero proveniente de tributos vencidos, el demandante
deberá abonar previamente dicha suma, excluyendo los rubros que
constituyan multas, recargos o intereses.
Este requisito ha sido cuestionado por un sector de la doctrina,
que lo considera un obstáculo o impedimento para acceder a laju-
risdicción yen base a lo normado por los arts. 8° y 25 del Pacto de
San José de Costa Rica en lo referente a la tutelajudicial efectiva.,
sólo resultaría aplicable a las personas jurídicas.
La corriente doctrinaria que apoya la exigencia legal, argumen-
ta que los tributos resultan necesarios para el desenvolvimiento
de la Administración Pública y sin ellos, resultaría gravemente
afectado el desenvolvimiento económico financiero del Estado.
Lajurisprudenciadela Corte SupremadeJusticiadelaNación.
requiere "una irreparabilidad tal del agravio que lo coloque en una
situación de falencia, un desapoderamiento entonces total del re-
currente, o que le obligue a vender en ejecución la propiedad gra-
vada, en el caso de imposibilidad probada e inculpable de cumph-
miento. La CSJN reconoce que el arto 8°, primer párrafo, del Pacto
es operativo, pero que no obstante ello hay que alegar y probar al-
guna de las circunstancias expuestas, por ejemplo que le fueraÍm-
posible su pago debido al excesivo monto del depósito". 17

16 SESíN, Domingo, "La materia contencioso administrativa en Córck-


ba",op. cit., pág. 142.
17 GORDILLO, Agustín, Tratado de derecho administrativo, t. Il, ~

XIlI-35.
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA PROVINCIA... 193

Nosotros adherimos a esta última posición, porque la Adminis-


tración Pública muchas veces se vale de este principio de solve et
repete (pague primero y repita después) para obstaculizar la via-
bilidad de una acción contencioso administrativa que pretende
controlar sus propios actos administrativos. Incluso, nos anima-
mos a sostener que cuando el acto administrativo tributario -tal
como lo ha denominado recientemente la abogada de la Procura-
ción del Tesoro de la N ación María José Rodríguez en su reciente
obra lS_es palmariamente arbitrario u ostensible su vicio de nu-
lidad de este principio debe ceder en resguardo del principio de ju-
ricidad ytutelajudicial efectiva, por encima del interés fiscalista
o racaudatorio de los órganos de percepción de los tributos, rentas o
tasas.

III. LA SITUACIÓN DE LOS LLAMADOS ACTOS DE GOBIERNO O


POLÍTICOS

El arto 2° de la ley 7182 determina las cuestiones no suscepti-


bles de control en lajurisdicción contencioso administrativa.
Entre ellas, la normativa se refiere alas "relacionadas a los actos
que importen el ejercicio de un poder político de fuente directamen-
te constitucional".

1S RODRíGUEZ, María José, El acto administrativo tributario. Con la


aplicación de los principios y garantías del procedimiento adminis-
trativo, Ábaco, Bs. As., 2004, con prólogo laudatorio del Prof. Oscar
R. AGUILAR VALDEZ, de la carrera de Especialización en Derecho Tri-
butario de la Universidad Austral, que postula la pertenencia del de-
recho tributario (material y formal) al ámbito del derecho adminis-
trativo, en coincidencia con Juan Carlos CASSAGNE, que sostiene que
el derecho tributario forma parte del derecho administrativo (Dere-
cho administrativo, t. 1, Lexis Nexis, Bs. As., 2003, p. 193), ylajuris-
prudencia administrativa de la Procuración del Tesoro de la N ación
ha adoptado similar opinión conforme los dictámenes 237 :358; 237:462;
237:476 y 238:62, entre otros.
194 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

En relación aesta cuestión, Bartolomé FIORINI expresa: "Si real-


mente no existe posibilidad de recurrirse contenciosamente con-
tralos actos de gobierno ello acontecerá porque sus elementos cons-
titutivos provienen de normas constitucionales, es decir que no son
aplicaciones directas de derecho administrativo. Si esta exclusión
se presenta asílógicamente justificada, no se concibe que se la ex-
tienda cuando, a través de un acto de gobierno, se lesionan dere-
chos subjetivos de contenido administrativo [. .. ]".19
En la actualidad, ante una necesidad de independizarse de la
teoría elaborada en base al denominado "acto de gobierno", la doc-
trina nacional formula la referida al "acto institucional", como
distinto de aquél y no justiciable porque es fruto exclusivo de la
"función gubernativa o política". Bien señala CASSAGNE que "L.,]
el nacimiento de la categoría del acto institucional no traduce una
mera discrepancia semántica, sino que hunde sus raíces enla Cons-
titución Nacional, de la cual surge el reconocimiento de una regu-
lación distinta a la correspondiente a los actos administrativos".
El acto institucional se caracteriza porque no produce efectos
jurídicos directos en relación a los administrados pero sí producen
consecuencias respectos de otros organismos o entidades del Es-
tado (por ejemplo, apertura de sesiones ordinarias en la Legisla-
tura Provincial, designación de los Ministros, nombramientos de
jueces de la Corte Suprema de Justicia, intervención federal a una
Provincia, etc.). "Los actos institucionales, por mucho que algunos
autores se esfuercen por demostrar su asimilación con los actos ad-
ministrativos, es evidente que no gozan del mismo régimenjurí-
dico de éstos, no pudiendo explicar la doctrina contraria a su ad-
misión cuál es la razón por la cual los jueces no han declarado nunca
en nuestro país la invalidez de un acto institucional [... ]". Como nota
peculiar del acto institucional la doctrina señala -en coinciden-
cia con Agustín GoRDILLO-- que su emisión es en principio discre-

19 FIORINI, Bartolomé, op. cit., pág. 247.

-------===c:-~~~~~·_·----··· _._~-
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA PROVINCIA... 195

cional, pudiéndolos dictar tanto el órgano ejecutivo como el Con-


greso. 20
Por tales razones, concluye el autor citado, que el régimen de
los actos institucionales no puede asimilarse al de los actos admi-
nistrativos' que sí, en cambio, repercuten en forma directa con sus
efectos jurídicos en la esfera de terceros (administrados). Su régi-
mense asemeja más bien al de los actos interorgánicos, aunque en
un plano distinto y sólo en el constitucional.
Por todo ello, los administrados no se encontrarían legitimados
para iniciar una acciónjudicial para incoar como pretensión -por
ejemplo-, su revocación o anulación, atento a que los actos insti-
tucionales son dictados por los órganos competentes y de confor-
midad al procedimiento estatuido por la Constitución.
Si bien esta clase de actos -ya sea que se los denomine "actos
de gobierno o institucionales"- se encontrarían excluidos del con-
troljudicial, en virtud de su naturaleza y características, resulta
factible el control político.
El Tribunal Superior de Justicia de Córdoba, a través de la Sala
Contencioso Administrativa, respecto a esta cuestión ha expresa-
do: "La causal impeditiva de controljudicial en la materia conten-
cioso administrativa sobre los denominados 'actos de gobierno',
'cuestiones políticas' o 'actos institucionales', es de interpretación
restringida tanto más cuando nuestra Constitución Federal propi-
cia la configuración de un Estado de Derecho, el que visualiza en el
afianzamiento de lajusticia, en y sobre laAdministración, uno de
sus principales objetivos. Pretender sustraer de la funciónjurisdic-
cional el examen crítico del acto con fundamento en la finalidad
esencialmente política que inspiró la norma habilitante o de cober-
tura del acto, o en la conceptualización de éste como producto pura-
mente consuntivo de la ley, permitiría la desprotección de eventua-
les derechos de los afectados por las mismas". 21

20CASSAGNE, Juan Carlos, Derecho administrativo, t. I1, págs. 72 y ss.


21TSJ, Sala Contencioso Administrativa, "Metzadour, Víctor el Su-
perior Gobierno de la Provincia de Córdoba - contencioso administra-
tiva", sentencia N° 3, del 16/02/1990.
196 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

Sin perjuicio de lo antes expresado, es necesario tener presen-


te que una cuestión es el control del "acto institucional propiamente
dicho" y otra muy diferente es el tema de los actos o medidas de eje-
cución que se dicten como consecuencia del acto institucional.
Las medidas de cumplimiento o ejecución del acto institucional,
constituyen -generalmente-actos administrativos, susceptibles
de ser revisados judicialmente previa satisfacción de las exigen-
cias legales.
La Corte Suprema de Justicia de la Nación se ha referido en
numerosos pronunciamientos a un "control de razonabilidad", que
comprende "un doble aspecto: a) la relación entre la garantía afec-
tada por el acto de ejecución del acto institucional (estado de sitio)
y el estado de conmoción interior; b) la comprobación de si el acto
administrativo guarda, en concreto, una proporción adecuada con
los fines que se persiguen a través de la ley que declara el estado
de sitio [... ] el examen de razonabilidad que realizan los jueces debe
hacerse cuidando de no afectar por esa vía el ámbito propio y la
función del estado de sitio, porque un ejercicio irrazonable de di-
cho control puede conducir a que los órganos judiciales se extrali-
miten en el ejercicio de sus funciones, olvidando que les está veda-
do la apreciación de las condiciones de hecho que determinaron la
utilización de la facultad autorizada por el arto 23 de la Constitu-
ción Nacional, y que cada órgano del Estado debe obrar con inde-
pendencia de los otros, en sus respectivos campos de actuación [... ]",
recordando a esos efectos el precedente jurisprudencial al respec-
to de la Corte Suprema de Justicia de la N ación. 22
Por ello, el adminitrativista y juez del Tribunal Superior de Jus-
ticiade Córdoba, Dr. DomingoJ. SESÍN, realiza el siguiente esquema:
"En concreto pueden plantearse tres situaciones diversas:
a) Actos políticos o de gobierno susceptibles de ser controlados
judicialmente cuando en un caso concreto afecten situaciones ju-
rídicas subjetivas;

22 Fallos 195:439 y 236:657. CASSAGNE, Juan Carlos, Derecho adminis-


trativo, t. 11, págs. 78 y 79.

,.' ~ 'W ¡ n' 1::1


EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA PROVINCIA... 197

b) Actos políticos o de gobierno que no pueden ser anulados por


trasuntar una medida de alta política relevante para el gobierno.
En caso de producirpeIjuicios concretos, éstos sólo pueden ser in-
demnizados;
c) Actos políticos o de gobierno que no inciden en situaciones
individualizadas sino que repercuten genéricamente sobre la po-
blación, en cuyo caso no son controlables judicialmente".23

IV. TÉCNICAS JURÍDICAS DE CONTROL DE LA DISCRECIONALIDAD

El arto 2°, inc. b, de la ley 7182 determina que no corresponde la


vía contencioso administrativa a las cuestiones relacionadas "ex-
clusivamente con el ejercicio de un poder discrecional, salvo su-
puesto de arbitrariedad que vulnere derechos subjetivos o intere-
ses legítimos del accionante."
Debemos recordar que la discrecionalidad, de acuerdo al con-
cepto elaborado por el Dr. Domingo SESIN, es "una modalidad de
ejercicio que el ordenjurídico expresa o implícitamente confiere a
quien desempeña la función administrativa para que, mediante
una apreciación subjetiva del interés público comprometido, com-
plete creativamente el ordenamiento en su concreción práctica,
seleccionando una alternativa entre varias igualmente válidas
para el derecho". 24
Cuando nos referimos al ejercicio de la discrecionalidad, no
debemos confundirlo o asimilarlo con atribuciones irrazonables ni
arbitrarias, ya que aquélla deriva del ordenjurídico, se encuentra
dentro del bloque dejuridicidad.
Al integrar o derivar del ordenamiento jurídico, el controlju-
dicial consistirá en analizar si la discrecionalidad fue o no ejerci-
da dentro de ese ámbito y respetando sus límites.

23 SEsfN, Domingo, "La materia contencioso administrativa en Córdo-


ba",op. cit., pág. 131.
24 SEsfN, Domingo, "Discrecionalidad administrativa y conceptos ju-

rídicos indeterminados", enEl derecho administrativo argentino, hoy,


Ciencias de la Administración, Bs. As., 1996, pág. 295.
-
198 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

Por todo ello, "el control judicial debe revisar si efectivamente


ha sido correctamente ejercida 'dentro' de ese universo jurídico.
Esto no implica revisar su esencia (selección de una alternativa
entre otras igualmente válidas) sino sólo su contorno externo o in-
serción en el sistema ordinamental. El control de los jueces termi-
na al comprobar con el fondo de la cuestión que seha elegido una
solución correcta entre otras de igual condición dentro del mundo
jurídico. Por ello en lugar de hablar de técnicas de control de la dis-
crecionalidad se debería hablar de técnicas de control de su ejerci-
cio".25
La ley 7182, en la norma citada en este apartado, se refiere al
supuesto de "arbitrariedad", es decir, cuando se han violentado o
excedido los límites impuestos por el bloque dejuridicidad para el
ejercicio de atribuciones discrecionales.
Por ello, al interpretar el alcance del concepto antes referido,
Juan Carlos CASSAGNE, expresa: "En el terreno práctico, la irrazo-
nabilidad o arbitrariedad constituye una cuestión de grado direc-
tamente vinculada al caso concreto, pero lo cierto es que en este
juzgamiento, donde habrá que revisar casi siempre cuestiones de
hecho, radica la verdadera función de fiscalización que realizan
los jueces sobre la actividad administrativa". 26
En numerosas ocasiones, lajurisprudencia brinda las pautas
que se tuvieron en consideración para realizar el controljudicial
de este aspecto de la actividad administrativa. A modo de ilustra-
ción' transcribimos algunas de ellas:
a) "En el ejercicio de la potestad disciplinaria, el órgano legal-
mente autorizado, está facultado para apreciar minuciosamente la
conducta y elegir la sanción aplicable y el grado de ésta, cuando
existen varias preestablecidas. Sin embargo, aunque exista un mar-
gen discrecional, su congruencia e inserción dentro de la juridici-

25 SESÍN, Domingo, Administración Pública. Actividad reglada, dis-

crecionaly técnica. Nuevos mecanismos de control judicial, Depal-


ma, Bs. As., 1994, pág. 287.
26 CASSAGNE, Juan Carlos, Fragmentos de derecho administrativo,
Hammurabi, Bs. As., 2003, pág. 103.
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA PROVINCIA.. 199

dad es objeto de control, más prudente, más reducido, razonable,


pero control al fin". 27
b )"En autos se cuestiona el ejercicio de la potestad disciplina-
ria propia del Tribunal de Disciplina de Abogados, y tal facultad
importa actividad administrativa discrecional. La discreciona-
lidad forma parte del ordenjurídico de donde proviene en forma
expresa o implícita. Pero su cometido trascendente es agregar un
elemento nuevo a ese ordenamiento porque la valoración subjeti-
va que debe realizar no existía, completando de tal forma el siste-
majurídico. Con esa proyección, el control de losjueces abarca el
procedimiento de integración creativa de la discrecionalidad den-
tro del ordenjurídico, por lo que en esa labor debe comprobar si se
ha elegido una solución correcta entre otras de igual condición den-
tro del mundo jurídico, estando vedado al tribunal la sustitución
de un criterio u opción por otro, dentro de los igualmente válidos
para el derecho". 28
e) "La delimitación normativa de las actividades y de la autori-
dad de que gozan cada uno de los poderes del Estado, es a los fines
dehacerposible un sistema de equilibrioy control recíproco defun-
ciones, asegurando de tal modo el imperio de la legalidad. Sin em-
bargo, ala par de este primigenio esquema de distribución funcio-
nal, hallamos una porción de actos exentos de dicho control, basado
en la autonomía necesaria de la que deben gozar dichos poderes a
los fines de una adecuada consecución de sus objetivos. A través de
ella, el Estado desarrolla actividad discrecional en tanto ésta no se
encuentra sujeta a exámenes o limitaciones más allá del que impo-
ne el debido respecto a los derechosy garantías constitucionales, p ues

27 Del voto del Dr. SESÍN, TSJ en pleno, en autos "Malbrán, Sofía y otras
el Colegio Madres Escolapias y otros - amparo", sentencia N° 3, del 27/
03/2002, citado en Foro de Córdoba, Suplemento de Derecho Admi-
nistrativo y Constitucional, N° 8, 2002, pág. 127.
28TSJ en pleno, Secretaría Electoral, sentencia N° 5, del 07/05/2002,
en autos "Moscovich, Fabián D. el Tribunal de Disciplina de Abogados
de Córdoba - amparo" ,Actualidad Jurídica de Córdoba, N° 7, pág. 379.
200 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE
-
no toda actividad puede quedar sometida al controljurisdiccional,
sobre todo cuando aquella función se ejercita dentro del ámbito in-
terno propio de cada órgano" _"El Poder Judicial está facultado para
revisar si el órgano que ejerce la facultad privativa ha actuado den-
tro del marco de las disposiciones constitucionales o si se aparta en
forma evidente de ellasy de las leyes que reglamentan su ejercicio". 29
d)"Si la medida impugnada no es exorbitante nicapricJwsa aun-
que pueda parecer errónea o inconveniente, lo que no es equivalen-
te, eljuicio que su acierto pueda merecer a esta Corte nojustifica su
invalidación constitucional, pues toda discusión sobre el mayor o
menor acierto de la política y sobre la oportunidad y conveniencia
de llevarla a cabo, es por completo ajena al debate ante los tribuna-
les de justicia". 30

v. OTRAS MATERIAS EXCLUIDAS


Tampoco corresponde la vía ojurisdicción contencioso adminis-
trativa cuando los conflictos deban resolverse aplicando normas
de derecho privado o del trabajo (por ejemplo, indemnización por
daños causados por agentes públicos,juicios de desalojo) o sean sus-
ceptibles de otra acción o recurso de distintajurisdicción (por ejem-
plo, acciones expropiatorias).
Nuestros tribunales se han pronunciado respecto a estas cues-
tiones:

29 TSJ, Sala Electoral, en autos "Agua de Oro - Depto. Colón - Jouvé


María L. - amparo", sentencia N° 2, del 12/04/2000, citado por Foro de
Córdoba, Suplemento de Derecho Administrativo y Constitucional,
N° 1, 2000, pág. 80.
30 Del voto del Dr. Antonio Boggiano, CSJN, en autos "Guida, Liliana
clPoder Ejecutivo Nacional sI empleo público", G. 304. XXXIII, 021061
2000), citado por Foro de Córdoba, Suplemento de Derecho Adminis-
trativo y Constitucional, N° 2, 2000, pág. 84.

........-
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA PROVINCIA... 201

"Se debe delimitar el acto administrativo que es causa de un de-


terminado efecto y el efecto propiamente, pues si bien ambas esferas
están vinculadas, son susceptibles de ser analizadas por distintas
víasjurisdiccionales. Tratándose de un conflicto de contenido úni-
camente patrimonial, es de eminente raigambre civil, reservada al
derecho privado y por ende excluido de la competencia contencioso
administrativa".31
':A, los fines de la existencia de materia contencioso administra-
tiva es imprescindible que los derechos reclamados sean de carác-
ter administrativo, ya que en su defecto no procedería la vía elegida
por excederse la competencia del trib unal. No existe en el caso ma-
teria contencioso administrativa desde que el contrato de locación
de servicios profesionales en que funda su derecho es de raigambre
eminentemente civil, el actor no invoca derecho de carácter admi-
nistrativo presuntamente vulnerado, y no se da en el caso las parti-
cularidades que caracterizan un contrato administrativo como son
su objeto o, en su defecto la inclusión de cláusulas exorbitantes ex-
presas[' ..1'.32

VI. LA DEMANDA

a. Requisitos generales

De conformidad alo normado por el arto 13 del Código Conten-


cioso Administrativo de Córdoba, debemos tener presente los re-
quisitos generales que debe contener el escrito de demanda siguien-

31TSJ en pleno, en autos "Scorza, Enrique E. el Municipalidad de Cór-


doba", sentencia N° 20, del 05/05/1989.
32TSJ, Sala Contencioso Administrativa, en autos "Álvarez, Eliseo el
Municipalidad de Villa María - contencioso administrativo", 05/06/
1987.
--
202 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

do las pautas del Código Procesal Civil y Comercial de la Provin-


cia de Córdoba.
La demanda se deducirá por escrito en el cual deberá expresar-
se: el nombre, domicilio real, edady estado civil del demandante;
tipo y número de documento de identidad; el nombre y domicilio
del accionado; constitución de domicilio legal y patrocinio letrado
(arts. 80, 162y 175, CPCC).

b. Requisitos especiales

El Código Contencioso Administrativo de la Provincia de Cór-


doba establece los requisitos específicos que debe contener el es-
crito de demanda.
El sujeto que promueve una demanda contencioso administra-
tiva puede actuar por derecho propio o en representación de otras
personas (físicas ojurídicas). En este último supuesto deberá acom-
pañar los documentos que acrediten dicha representación.
Las autoridades y funcionarios públicos sólo deberán invocar
esa calidad.
El administrado que inicia un proceso contencioso administra-
tivo deberá acompañar la documentación necesaria a los fines de
acreditar la titularidad de un derecho subjetivo o un interés legí-
timo; requisito éste esencial a los fines de la legitimación procesal
activa.
En la demanda deberá individualizarse el acto administrati-
vo cuya revisiónjudicial se pretende expresando, además, su con-
tenido. Cuando resulte posible deberá el accionante acompañar el
testimonio del mismo o, en su caso, indicar con precisión el expe-
diente administrativo en que se hubiese dictado.
"Al momento de deducir la demanda, es allí donde el accionan-
te debe indicar concretamente los vicios que endilgan al acto admi-
nistrativo que goza de presunción de legitimidad, dando las razo-
nes pertinentes del porqué de su solicitud de declaración de nulidad.
De ese modo se fija la extensión del litigio, posibilitando a la deman-
dada el ejercicio pleno de su derecho de defensa, puesto que conoce

;:;::::=======:-,,=~~~~-~----------_.,,------_._- --- -
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA PROVINCIA... 203

específicamente las deficiencias que el demandante imputa al acto


objetivo de revisiónjurisdiccional [. ..J'. 33
Se deberán expresar los antecedentes de hecho y los fundamen-
tos de derecho que motivan la iniciación del proceso, la exposición
clara y precisa de lo que se demanda detallando las pretensiones
cuya satisfacción se pretenda, aun aquellas que persigan una con-
dena de naturaleza patrimonial.
Se debe, además, nominar el proceso que se deduce, es decir, si
se trata de una "acción de plena jurisdicción" o de una "acción de
ilegitimidad" o "acción de lesividad".
Respecto a esta cuestión la jurisprudencia actual de la Sala
Contencioso Administrativa del Superior Tribunal de Justicia de
la Provincia de Córdoba, admite la posibilidad de que el deman-
dante modifique la acción intentada hasta tanto no exista resolu-
ciónjudicial firme respecto a la habilitación de la instancia con-
tencioso administrativa. 34
El plazo para interponer la demanda difiere según haya exis-
tido o no en sede administrativa un pronunciamiento expreso.
Si la autoridad competente para decidir en última instancia se
expidió expresamente, el administrado cuenta con el plazo de trein-
ta días hábiles judiciales, contados desde la notificación del acto
para presentar la demanda.
Transcurrido el término antes señalado, sin que el administrado
haya presentado la demanda contencioso administrativa, el acto
administrativo queda firme y consentido no resultando -por
ende-jurídicamente posible su revisiónjudicial.

33 TSJ, Sala Contencioso Administrativa, en autos "Altamirano, Ro-

berto d Municipalidad de Villa María - contencioso administrativo",


sentencia N° 5, del 18/02/1998, citado en Boletín Judicial de la Pro-
vincia de Córdoba, t. 1, 1998, pág. 193.
34 Conf. TSJ, en autos "Telefónica Comunicaciones Personales S.A. d
Municipalidad de Colonia Caroya - plena jurisdicción", sentencia N°
85, del año 2002.
-- 9f
204 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

Si no existe por parte de la autoridad competente un pronuncia-


miento expreso, y previo la interposición de pronto despacho, po-
drá plantearse la acción contencioso administrativa hasta seis
meses después de la fecha de presentación de pronto despacho. Así
lo determina expresamente el arto 7° de la ley 7182.

1. Acción de plenajurisdicción

A través del proceso de plenajurisdicción el accionante preten-


de el reconocimiento o restablecimiento de una situaciónjurídica de
derecho subj etivo afectada por un órgano o ente en ejercicio de la
función administrativa.
Este proceso se caracteriza porque ''las partes se encuentran en
igualdad de condiciones, el debate es amplio, la prueba sin restric-
ciones y la litis se traba según lo dejen planteados las partes". 35
El Fiscal de Cámara no tiene el carácter de parte y sólo inter-
vendrá en la etapa de habilitación de instancia.
La sentencia que se dicte en esta clase de proceso producirá a
partir de su notificación efectos entre las partes.
La Sala Contencioso Administrativa del Tribunal Superior de
Justicia de Córdoba ha expresado: "Mediante el ejercicio de la acción
contencioso administrativa de plenajurisdicción, el administrado
pretende la reparación integral del derecho subjetivo de carácter
administrativo vulneradoporelacto ilegítimo de la administración,
declarado tal en un pronunciamientojurisdiccional que posee un
doble carácter-declarativoy constitutivo-, y cuya eficacia de cosa
juzgada alcanza sólo a las partes intervinientes de la relaciónjurí-
dico procesal [ .. j. 36

35 ILDARRAZ,Benigno - ZARZAMENSAQUE, Alberto R. - VIALE, Claudio Mar-


tín, Derecho constitucional y administrativo, pág. 662.
36 "Telefónica Comunicaciones Personales S.A. el Municipalidad de

Colonia Caroya - plena jurisdicción", sentencia N° 85,15/08/2002, ci-


tado en Foro de Córdoba, Suplemento de Derecho Administrativo y
Constitucional, W 9, 2002, pág. 151.
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA PROVINCIA... 205

2. Acción de ilegitimidad o anulación

En este proceso el accionante, titular de un interés legítimo,


pretende el restablecimiento del ordenjurídico vulnerado.
El Fiscal de Cámara interviene-además de la etapa de habi-
litación de instancia- durante todo el trámite del proceso en los
mismos términos y condiciones que las partes.
La sentencia deberá limitarse a resolver la validez o no del acto
administrativo sujeto arevisiónjudicial. Aquélla deberá notificar-
se a las partes intervinientes en el proceso y publicarse -su parte
resolutiva-en el Boletín Oficial o en un periódico local. Produci-
rá efectos "erga omnes".
"La acción contencioso administrativa de ilegitimidad no tiene
otro objeto que tutelar un interés legítimo, preservando la norma
jurídica objetiva sin aludir a quien se encuentra en una situación
individual, concreta y exclusiva [. ..]'.37

3. Acción de lesividad

También la ley 7182 legisla la posibilidad de que la Adminis-


tración inicie un proceso contencioso administrativo, a través de
la acción de lesividad.
En oportunidad de presentar la demanda, la accionante debe-
rá acompañar el expediente administrativo donde se dictó el acto
presuntamente irregular cuyo controljudicial se pretende.
Es titular de la acción de lesividad todo órgano que en ejercicio
de la función administrativa pretenda dej ar sin efecto un acto ad-
ministrativo presuntamente irregular y que no puede revocarlo
en su sede.

37TSJ, Sala Contencioso Administrativa, en autos "Leal, Emilio el


Provincia de Córdoba - ilegitimidad", sentencia N° 13,01103/2002, ci-
tado en Foro de Córdoba, Suplemento de Derecho Administrativo y
Constitucional, N° 8,2002, pág. 146.
.., ...-

206 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

Al respecto, podemos recordar el supuesto contemplado por el


arto 107 de la Ley de Procedimiento Administrativo Provincial 6658
que se refiere concretamente a esta acción procesal: "En los casos
de actos anulables, salvo el supuesto de dolo previsto en el artícu-
lo anterior, en los que se pretenda la declaración de nulidad abso-
luta "ex tune" de los actos, el Fiscal de Estado demandará su inva-
lidación o anulación en causa contencioso administrativa, dentro
del término de seis meses a contar desde la emisión del acto pre-
suntamenteirregular".
Según lo dispone el arto 14 de la ley 7182, la demanda de lesivi-
dad deberá notificarse "al o a los beneficiarios del acto impugnado".
El Fiscal de Cámara intervendrá en eljuicio en los mismos tér-
minos y condiciones que las partes, siendo a su cargo el diligencia-
miento de la prueba, que se ordenará de oficio.
Los Dres. Jesús Abad Hernando y Benigno lldarraz consideran
que "la demanda de lesividad consiste fundamentalmente en le-
gitimarcomo sujeto activo a la Administración, para demandar la
anulación de actos lesivos al ordenamientojurídico que fueranirre-
vocables en sede administrativa" (JA, 1975-D-475).
La Administración deberá iniciar la acción de lesividad cuan~
do -según lo disponen los arts. 105, 106 y 107 de la Ley de Proce-
dimiento de la Provincia de Córdoba- existan actos anulables,
considerados como tales los viciados por error y viol ación de laley
en cuanto al fondo del acto.
En la causa "Caj a de Jubilaciones, Pensiones y Retiros de Cór-
doba el Josefa M. Falca de Sallito - contencioso administrativo" se
promovió por ante el Tribunal Superior de Justicia (Sala Civil,
Comercial y Contencioso Administrativa) la acción tendiente a
declarar la nulidad de un acto administrativo porque la demandan-
te consideraba que se había otorgado el beneficio previsional en
base a un "error" en la determinación del grado de incapacidad. En
el proceso, mediante una nueva pericia médica se demostró la
inexistencia del "error" y se rechazó la demanda. La sentencia es
defecha4dejuniodemilnovecientosochentaydos.
El término para plantear la acción es de seis meses contados
desde la emisión del acto presuntamente irregular y no se ha visto
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA PROvTICL.\... 20~

plazo de prescripción como existe en otros ordenamientos provin-


ciales (MendozayCorrientes).
Por aplicación del régimen legal general, la sentencia no podrá
hacer declaraciones sobre derechos reales, personales o de otra
naturaleza y deberá limitarse a resolver sobre la validez del acto
administrativo y en el supuesto de declararse la nulidad deberá
notificarse a la autoridad que lo dictó y se publicará su parte dis-
positiva en el Boletín Oficial con efectos hacia el futuro sobre las
situaciones jurídicas subjetivas pendientes o prestaciones incum-
plidas.
En el sistema nacional se ha previsto este instituto como "proce-
so de lesividad"yresulta de la última partedelart.17 delaley 19.549,
en concordancia con el arto 18, que deben articularse armónicamen-
te para anular un acto regular o irregular, según el caso.

VII. LA HABILITACIÓN DE INSTANCIA JUDICIAL

Es una etapa preliminar dentro del proceso administrativo a


través de la cual el tribunal con competencia contencioso adminis-
trativa realiza un análisis previo respecto de la concurrencia de
los presupuestos procesales especiales necesarios para la admisi-
bilidad de la acción planteada. 38
En esta oportunidad procesal es posible advertir distintos mo-
mentos, a los que nos dedicaremos a continuación.

Requerimiento del expediente administrativo

Presentada la demanda ante la Cámara, ésta requerirá, me-


diante oficio, el envío del expediente administrativo para que en

38 COMADIRA, Julio Rodolfo, con la colaboración de Laura MONTI, Ley

Nacional de Procedimientos Administrativos. Anotada y comentada,


t. 1, La Ley, Bs. As., 2002, pág. 408.
-
208 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

el término de diez días hábiles judiciales la accionada lo acompa-


ñe al Tribunal.
En la práctica puede acontecer que la Administración requeri-
da:
a) Envíe las actuaciones administrativas originales;
b) Si considera indispensable el expediente administrativo,
podrá solicitar al tribunal copias certificadas del mismo o reque-
rirá su restitución en un plazo prudencial;
c) No enviar las actuaciones administrativas.
En ese último supuesto, a los fines de la habilitación de instan-
cia se tendrá en consideración las circunstancias expuestas y la
documentación acompañada por el accionante.
La doctrina señala la importancia de la remisión del expedien-
te administrativo ya que ésta "se presenta como una condición
suspensiva antes que como un requisito procesal. Cuando esta con-
dición se cumple, es decir, cuando se ha remitido el expediente
administrativo, se ha cumplido una obligación por parte de laAd-
ministración Pública, que provoca la habilitación de lajusticia
para intervenir, sin que esto signifique aún la existencia de la com-
petencia contencioso-administrativa". 39

Intervención del Fiscal de Cámara

Habiéndose cumplimentado el trámite antes expuesto, el tri-


bunal interviniente remitirá la causa al Fiscal de Cámara para que
dentro del tercer día dictamine si el asunto traído a consideración
corresponde o no a lajurisdicción contencioso administrativa.
Es decir, realizará un análisis preliminar acerca del cumpli-
miento de los requisitos de admisibilidad de la demanda. Porejem-
plo, controlará si el acto administrativo causó estado, si la deman-
da se interpuso en tiempo oportuno, si se encuentra prima facie
acreditada la situaciónjurídica subjetiva que se invoca, etcétera.

39 FIORINI, Bartolomé, op. cit., pág. 270.

s
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA PRO\TICB_. 1c~

El dictamen elaborado por el Fiscal es obligatorio pero nov1n-


culante para la Cámara.

La decisión de la Cámara

Una vez que el Fiscal de Cámara emitió su dictamen el Tribu-


nalpodrá:
a) Determinar-de oficio- que el asunto traído a considera-
ción corresponde ser analizado en el ámbito de lajurisdicción con-
tencioso administrativa, habilitando la instancia. Ello sin perjui-
cio de la "articulación que pudiera hacer la parte como excepción
de previo y especial pronunciamiento" (art. 11, ley 7182).
La Sala Contencioso Administrativa del Tribunal Superior de
Justicia de Córdoba respecto a esta cuestión ha expresado: "Se toma
necesario especificar que el trib unal competente debe analizar la
pretensión contencioso administrativa desde una doble perspecti-
va: primero su admisibilidad y recién entonces la viabilidad de la
pretensión sustancial susceptible de motivar una sentencia dene-
gatoria o favorable. Nuestro sistema normativo establece sólo dos
momentos para su análisis y resolución, siempre dentro de la pri-
mera etapa: a) Cuando habilita la pretensión al establecer si corres-
ponde o no la competencia del trib unal, previo dictamen del Fiscal
de Cámara, b) Cuando sin perjuicio de lo que haya establecido en la
habilitación, resuelve las excepciones de previoy especialpronuncia-
miento. Apartirde allí la competencia queda radicada de forma de-
finitiva no pudiendo volver a tratar ningún requisito de admisibi-
lidadal momento de emitir la sentencia (Jornadas Sanjuaninas de
DerechoAdministrativo, 'Admisibilidad de la acción contencioso
administrativa', Dr. Domingo Sesín, San Juan, 1999)".40

Alice, Mario el Municipalidad de Río Ceballos - plena jurisdicción" ,


40"
Auto N° 122, 02/07/2002, citado en Foro de Córdoba, Suplemento de
Derecho Administrativo y Constitucional, W 8, 2002, pág. 145.
210 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE
-
b) Puede ocurrir, que la Cámara considere que el caso traído a
su decisión no compete a lajurisdicción que nos ocupa. Para ello
debe dictar un decreto fundado mandando al "interesado a ocurrir
ante quien corresponda".
Esa trascendente decisión de la Cámara puede ser cuestiona-
da mediante los recursos determinados en el Código Contencioso
Administrativo de la Provincia de Córdoba.
En efecto, podrán interponerse los "recursos de reposición y de
apelación" en el supuesto que la Provincia sea parte o "reposición
y casación" en los demás casos.
Laj urisprudencia ha interpretado respecto a esta cuestión: "Si
bien la resolución del recurso de reposición que confirma la decla-
ración de incompetencia, es susceptible del recurso de apelación
(art. 11, segundo párrafo in fine, CPCA), ello es así cuando la Cá-
mara conoce y resuelve en primera instancia. Es decir en 'las cau-
sas en que la Provincia sea parte' (art. 10, CPCA). En todas las de-
más causas, en las que la demandada es una Municipalidad, lo hace
en instancia única, como resulta de la misma norma citada, de suerte
que la resolución que se impugna, sólo es pasible del recurso de ca-
sación(arl.11, CPCA)".41
Si bien la norma resulta clara en relación a los recursos que
deben plantearse ante la decisión de no habilitar la instancia con-
tencioso administrativa, existe discrepanciajurisprudencial res-
pecto al modo o forma de interposición de los medios impugnati-
vos.
Uno de los criterios, actualmente es opinión mayoritaria de la
Sala Contencioso Administrativa del Superior Tribunal de J usti-
cia, considera que deberá plantearse el recurso de reposición y una
vez resuelto éste-y si correspondiere-interponer recurso de ape-
lación. El argumento es el siguiente:

41Cám. Civ. Como San Francisco, en autos "Carignano, Ricardo y


otros cl Municipalidad de Miramar - contencioso administrativo",
A.I. N° 34, del 15/03/1999, citado en Foro de Córdoba, N° 54,1999,
págs. 281 y282.
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA PROVINCIA... 211

"La ley 7182 no prevé la interposición subsidiaria del recurso de


apelación (conf arto 43). Es más, en el marco del arto ll-habilita-
ción de instancia-la apelación debe ser interpuesta contra el deci-
sorio que resuelva el recurso de reposición, no antes, pues es condi-
ción de admisibilidad que el apelante efectúe una crítica completa
y razonada de los argumentos desestimatorios del recurso de re-
posición. La decisión que resuelve el recurso de reposición--admi-
tiéndolo o rechazándolo-es precisamente la que cumplimenta las
condiciones de impugnabilidad objetiva a las que se encuentra su-
peditado el recurso de apelación, cuando este último es interpuesto
contra una resolución recurrible. Aceptar una postura contraria
implicaría tanto como admitir la posibilidad de traer a revisión de
este Tribunal Superior decisiones sobre la base de agravios que bien
habrían podido ser subsanados ante el inferior, con el consiguiente
desgaste jurisdiccional que no se compadece con una razonable
aplicación del principio de economía procesal [. ..J'. 42
En cambio, otra corriente determina que nada impide que-como
ocurre en el proceso civil-se articule elrecurso de reposición y sub-
sidiariamente el de apelación:
"Es posible tanto interponer reposición y rechazada ésta, apelar,
cuanto deducir directamente los recursos de reposición y apelación
en subsidio contra el decreto o auto que hubiere sido dictado sin
sustanciación (art. 363, CPCC, aplicable al fuero contencioso ad-
ministrativo por remisión del arto 13, ley 7182) en tanto la admisión
de la apelación subsidiaria no contradice la hermeticidad recursi-
va que impone el arto 41 de la ley 7182, y constituye la solución in-
terpretativa que, por otra parte, sirve a la regla según la cual en caso
de duda los recursos deben ser concedidos". 43

42Del voto en mayoría de los Dres. Sesín y Tarditti.


43Del voto en minoría del Dr. Lanfranconi, TSJ, Sala Contencioso
Administrativa, Auto N° 191, del 28/11/2002, en autos "Abod Selmen
O. d Lotería de la Provincia y otra - plena jurisdicción", citado enAc-
tualidad Jurídica de Córdoba, N° 27, pág. 1593.
e

212 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

VIII. LA SUSPENSIÓN DE LOS EFECTOS DE LA DECISIÓN


IMPUGNADA

El acto administrativo, considerado como una declaración uni-


lateral de voluntad en ejercicio de la función administrativa que
produce efectos directos e inmediatos, goza de los siguientes carac-
teres: presunción de legitimidad, ejecutoriedad, ejecutividad, im-
pugnabilidad, estabilidad.
El ordenamiento jurídico ha establecido como regla, que los
recursos administrativos no suspenden la ejecución del acto admi-
nistrativo cuestionado.
Por ello, la suspensión de la ejecución del acto podrá requerirse
tanto en sede administrativa como en el ámbito judicial.
El arto 19 de la ley 7182 determina que los interesados podrán
solicitar al tribunal la suspensión de la ejecución del acto someti-
do a controljudicial, "al interponerse la demanda".
Ala petición se le otorga trámite de incidente y se resuelve pre-
vio traslado a la accionada, quien podrá allanarse u oponerse fun-
dad amente a la pretensión articulada.
En relación al requisito de la contracautela, queda a criterio del
tribunal su exigencia como así también "su modo y monto" .
La suspensión será procedente cuando se demuestre que la eje-
cución del acto es susceptible de causar un grave daño al adminis-
trado y que la suspensión no afectará el interés público.
Lajurisprudencia cordobesa ha interpretado: "La exigencia de
que cuando se solicite la suspensión de los efectos del acto adminis-
trativo, se indique la existencia de grave daño y la inexistencia de
lesiónalinteréspúblicosefundaenquese trata de una medida de ex-
cepción, donde no basta el mero pedido de la parte actora. Ello tiene
por finalidad que el Tribunal al resolver, oídas las consideraciones
que al respecto efectúen ambas partes, se encuentre en situación de
poder evaluarlas, a fin de establecer la procedencia o no de la medi-
da ". 44

44Cám. Cont. Adm. de la N om. Córdoba, en autos "Fulladoza Vital, José


el Tribunal de Disciplina de Abogados", del 15/04/1997 .
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA PROVINCIA.. 213

En igual sentido se ha expedido la Cámara Contencioso Admi-


nistrativa de 2a Nominación de Córdoba: "Al respecto se advierte
que en autos no se satisface la necesaria especificación del grave
daño (exigido por la ley) que acarrearía la continuidad de los efec-
tos del acto que se impugna, pues el daño que invoca el actor es
genérico e indeterminado. En efecto, la falta de precisiones al res-
pecto, impiden al tribunal considerar que con la ejecución de la
sanción aplicada, se vaya a ocasionar al peticionante un daño de
mayor magnitud que el ordinario que se produce con medidas dis-
ciplinarias de este tipo y que en todo caso pueden ser debidamente
reparados a posteriori en cuanto alos aspectos económicos ytam-
bién en los aspectos morales, con la debida difusión de una even-
tual invalidación del acto sancionatorio". 45
El Dr. Julio 1. ALTAMIRA GIGENA, respecto a este tema, ha expre-
sado: "[... ] desde el punto de vista procesal el pedido de suspensión
tiene un trámite distinto al de las medidas cautelares [... ] La regla
general es que no se puede solicitar en sede judicial la suspensión
de los efectos del acto si previamente no se lo ha pedido en sede
. t rat'lva []"
a dmirus .... 46
Bartolomé FIORINI afirma: "Lo que interesa destacar es que la
suspensión siempre lajuzga, la aprecia y la decreta o la deja sin
efecto el Poder Judicial, según las pruebas aportadas por la parte
interesada. La suspensión del acto administrativo se refiere siem-
pre ala ejecutoriedad del mismo; en esta medida no se impugna el
acto en su contenido de arbitrariedad, sino sólo se tiende a parali-
zar sus efectos [. .. ]".47

45 "Sauervein Luis F. el Tribunal de Disciplina Notarial de la Provin-


cia de Córdoba", A.l. W 29, del 20/03/2003, citado por Actualidad Ju-
rídica de Córdoba, N° 33.
46 ALTAMIRA GIGENA, Julio, "Las medidas cautelares en el contencioso
administrativo provincial", en El derecho administrativo argentino,
hoy, Ciencias de la Administración, Bs. As., 1996, pág. 213.
47 FIORINI, Bartolomé, op. cit., pág. 276.
214 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

IX. CITACIÓN y NOTIFICACIÓN

Habilitada la instancia y declarada la competencia del tribu-


nal se imprimirá ala acción planteada el trámite de ley, ordenan-
do la citación de la accionada para que comparezca a estar a dere-
cho y constituya domicilio a los efectos legales.
Según lo establece el arto 14 de la ley 71821a notificación de la
demanda se efectuará a la persona que corresponda según sea el
ente o autoridad que haya dictado el acto administrativo suj eto a
control judicial.
Por ejemplo, si el acto fue emitido por la Administración cen-
tralizada o des concentrada provincial la demanda se dirigirá a la
Provincia de Córdoba y la notificación deberá efectuarse a la "per-
sona del titular del Poder Ejecutivo". En cambio, si el acto es im-
. putable a la Cámara del Poder Legislativo, a la Provincia de Cór-
dobayasupresidente.
Si la accionada no compareciera a estar a derecho, a petición de
parte, se la declarará rebelde y el proceso continuará como si estu-
viere presente.
La declaración de rebeldía deberá notificarse por dos medios:
por cédula y mediante la publicación de edictos por el término de
cinco días.

X. CONTESTACIÓN DE LA DEMANDA. LAs EXCEPCIONES

Luego que la accionada compareció a estar a derecho o que el


proveído que declara su rebeldía se encuentra firme, se correrá
traslado por el término de diez días para que aquélla conteste la
demanda.
Atento la característica del proceso contencioso administrati-
va, no se encuentra legalmente prevista la posibilidad de plantear
"reconvención" .
Bartolomé FIORINI, respecto a esta cuestión, expresa: "La re-
convención está excluida de todos los códigos de la materia. Se sos-
tiene que la habilitación de instancia contra una resolución ad-
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA PROVINCIA... 215

ministrativa que causa estado no comprende la posible existen-


cia de una contestación reconvencional" .48
I Al contestar el traslado de la demanda podrán oponerse las ex-
cepciones dilatorias y perentorias.
Si la accionada planteara excepciones que impidan la continua-
ción del trámite del proceso, una vez firme el auto que las resuel-
ve, se correrá nuevamente traslado de la demanda.
Las excepciones dilatorias que no se hayan planteado como de
artículo previo, serán resueltas por la Cámara en oportunidad
de dictar sentencia definitiva.
Podrán oponerse, en forma de artículo previo, de conformidad
al arto 24 de la ley 7182, las siguientes excepciones:
"1) Incompetencia del tribunal: fundada sólo en que la resolu-
ción reclamada no da 1ugar a la acción contencioso administrati-
va o en que la demanda ha sido presentada fuera de término".
Esta defensa demuestra que la habilitación de instancia no es
definitiva y puede ser revisada nuevamente por el tribunal.
La Sala Contencioso Administrativa del Superior Tribunal de
Justicia de Córdoba, respecto a esta cuestión ha interpretado que:
"En el contexto de la ley 7182 las excepciones de incompetencia
siempre deben oponerse enforma de artículoprevioy dentro delplazo
de traslado ordinario de la demanda (arts.11, 25y26, ley 7182).
Ello en razón de privilegiarse la seguridad jurídica, evitando el
desgaste jurisdiccional que eventualmente provocaría un trata-
miento ulterior. Una vez admitida la demanda y resueltas las ex-
cepciones, si las hub iere, la competencia del trib unal quedará ra-
dicada en forma 'definitiva'[ .. .]Ello procura dar mayor celeridad
al proceso evitando que después de su dilatada tramitación, eljuez
se pronuncie en la sentencia sobre aspectos que no hacen al fondo
de la cuestión, como sucedía durante la vigencia del anterior códi-
go ritual. Es cierto que en virtud del arto 11 de la ley 7182, la Cáma-
ra Contencioso Administrativa debe establecer de oficio si el asun-
to corresponde a esajurisdicción, pero también es cierto que lo hace

;'0 FlORINI, Bartolomé, op. cit., pág. 278.


--
216 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

sujeto a las posibles excepciones de previo y especial pronunciamien-


to que interponga la demandada, después de lo cual la competen-
cia queda radicada en forma 'definitiva'y, por lo tanto, insusceptible
de ser revisada al momento de emitirse la sentencia, resolviéndose
el fondo de la cuestión". 49
También podrán articularse:
"2) Falta de capacidad procesal o de personería en los litigan-
tes o en quienes los representan; 3) defecto legal excepto en accio-
nes derivadas de la relación de empleo público o de materia previ-
sional, 4) litis pendentia".
Si la accionada plantea excepciones en forma de artículo pre-
vio, se correrá traslado de las mismas por el plazo de cinco días. Con
posterioridad, se dictará y notificará el decreto de autos y el tribu-
nal dictará resolución.
Cualquiera de las partes, y teniendo en consideración las carac-
terísticas de la defensa articulada, podrá requerir la apertura a
prueba del incidente por el término de diez días.

XI. LA PRUEBA

Encontrándose firme el decreto de rebeldía o habiéndose con-


testado la demanda se abrirá a prueba la causa por el término de
treinta días.
Dentro de los primeros cinco días del término probatorio debe-
rá ofrecerse la prueba testimonial.
Deberá tenerse presente que la declaración de las autoridades
o funcionarios administrativos se hará por oficio (art. 32, ley 7182).
La prueba documental, pericial y confesional podrán ofrecerse
hasta diez días antes del vencimiento del período de pruebas.
El tribunal, en cualquier clase de procesos, podrá disponer de
oficio las medidas que considere oportunas para esclarecer cues-

49 TSJ, Sala Contencioso Administrativa, en autos "Tejeda, Héctor L.


el Provincia de Córdoba - plena jurisdicción", del 23/04/1993.
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA PROVINCIA.. 217

tiones que hacen al asunto sometido a su decisión. Para ello, no se


requiere el asentimiento ni la conformidad de las partes, ya que
podrán tramitarse aun cuando éstas se opusieren.
La Sala Contencioso Administrativa del Superior Tribunal de
Justicia de Córdoba, ha expresado: "Teniendo en cuenta que enel
caso se debate en torno al reconocimiento de un derecho previsio-
nal que la Ley Fundamental de la Nación y la Constitución de la
Provincia han adjetivado como 'irrenunciable' e 'imprescriptible'
(arts. 14 bis, CN; 55, Consto Provincial, y 48, ley 8204) obvias razo-
nes de economía procesal y administrativa, a las que se añaden las
exigencias de una efectiva tutelajurisdiccional para el caso concreto
aconsejaban al tribunal de mérito para ejercer las facultades que le
confiere el arto 34 de la ley 7182 [ ...}". 50
Sin lugar a dudas, en el proceso contencioso administrativo
adquiere gran relevancia el expediente administrativo. Ante el
supuesto de negativa por parte de la Administración del envío de
las referidas actuaciones, el tribunal deberá aceptar cualquier otro
medido de prueba, sin limitación alguna (art. 18,inc. b,ley7182).
"La circunstancia formal valorada como dirimente porela quo
para descalificar la prueba, no se aviene con el principio de la li-
bertad probatoria que rige en el proceso contencioso-administra-
tivo(art. 31,ley7182), donde aun cuando dicha prueba haya sido
elaborada sin la participación y el control de la entidad previsio-
nal, sin embargo, puede erigirse en un elemento probatorio con-
ducente -o no-- para la delimitación de los hechos controverti-
dos".51
Producida e incorporada la prueba se correrá traslado, por el
plazo de nueve días, por su orden para que cada una de las partes
alegue de bien probado.

50 Foro de Córdoba, Suplemento de Derecho Administrativo y Cons-


titucional, N° 2,2000, pág. 123.
51 TSJ, Sala Contencioso Administrativa, en autos "Bencivenga, Tulio
Pabolo cl Caja Jubilaciones, Pensiones y Retiros de Córdoba - plena
jurisdicción", citado en Foro de Córdoba, Suplemento deDerecho Ad-
ministrativo y Constitucional, N° 2,2000, pág. 123.
a

218 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

Vencido el plazo antes referido, se dictará el decreto de "autos".


El arto 36 de la ley 7182 impone al tribunal el plazo de sesenta
días para que se dicte sentencia.

XII. LA SENTENCIA. EFECTOS

El tribunal interviniente en el proceso dictará sentencia alos


fines de resolver la cuestión contencioso administrativa someti-
da a su consideración. Para ello deberá tener presente las circuns-
tancias alegadas y probadas por las partes intervinientes en el
proceso.
La sentencia no podrá contener declaraciones respecto a dere-
chos reales, personales o de otra naturaleza.
La Sala Contencioso Administrativa del Superior Tribunal de
Justicia de Córdoba, ha interpretado: "El principio de razón sufi-
ciente que los magistrados deben respetar al emitir sus pronuncia-
mientos, exige la demostración de que un enunciado sólo puede ser
así y no de otra manera. De ello se deriva que la prueba en que se
fundamenta la sentencia sólo debe autorizar una única e indubitada
conclusión y no otras, excluyendo de tal modo la contingencia que
el estado de cosas definido en el decisorio pueda ser diferente". 52
"La materia litigiosa a la cual el tribunal dejuicio debe circuns-
cribir su decisión, no se integra únicamente por la pretensión esgri-
mida en la demanda sino también por su contestación. El deci-
sorio del a quo no transgrede las prescripciones del arto 38 de la
ley 7182 que impone al tribunal la obligación de resolver la cues-
tión contencioso-administrativa, conforme lo alegado y probado en

52 TSJ, Sala Contencioso Administrativa, en autos "Bencivenga, Tulio


Pabolo el Caja Jubilaciones, Pensiones y Retiros de Córdoba - plena
jurisdicción", citado en Foro de Córdoba, Suplemento deDerecho Ad-
ministrativo y Constitucional, N° 2,2000, pág. 123.
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA PROVINCIA... 219

autos, lo que en el marco de un proceso bilateral y contradictorio,


incluye a las cuestiones introducidas por ambas partes, y no sola-
mente por la actora como propicia la recurrente. El tribunal dejui-
cio tiene el deber de suministrar las razones que justifican su fallo.
Debe enunciar elporqué de su decisión, esto es, fundamentar la sen-
tencia y justificar la decisiónjurisdiccional. Esto constituye la mo-
.
twacwn ., [ ....
]"53
Las características y contenido de la sentencia dependerá del
tipo de proceso en el cual recae.
Si se trata de un proceso de plenajurisdicción, deberá resolver
acerca de la validez o no del acto administrativo cuestionado y
podrá contener declaraciones de naturaleza patrimonial, si co-
rrespondiere. Se deberá notificar a las partes y producirá sus efec-
tos respecto de ellas.
Por ello, lajurisprudencia ha interpretado: "En el marco de la
ley 7182, la competencia del tribunal de mérito frente al ejercicio de
una acción de plena jurisdicción es amplia. Ese carácter deriva,
precisamente, del objeto y finalidad propias de este tipo de acción,
consistentes en el reconocimiento del derecho subjetivo de carácter
administrativo yen el restablecimiento pleno de la situaciónjurí-
dico subjetiva lesionada (art. 38). De allí entones que el trib unal,
obrando con la plenitud de las atribuciones que se derivan del
carácter de esta acción, puede no solamente anular los actos ile-
gítimos de la Administración, sino que también puede condenar
a la misma al resarcimiento de los daños y perjuicios derivados de
su obrar antijurídico". 54

53 TSJ, Sala Contencioso Administrativa, en autos "Banco de Crédito


Argentino S.A. el Municipalidad de Río Cuarto - plenajurisdicción",
sentencia N° 220, del 29/12/1999, citado en Foro de Córdoba, Su-
plemento de Derecho Administrativo y Constitucional, N° 1,2000,
págs. 51 y 52.
54 TSJ, Sala Contencioso Administrativa, en autos "Aramburu, Héctor
el Provincia de Córdoba - plena jurisdicción", sentencia N° 14, del 29/
07/1997, citado en Boletín Judicial de la Provincia de Córdoba, t. n,
1997,pág.482.
220 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

Si la sentencia es dictada en unproceso de ilegitimidad, el tribu-


nal deberá expedirse-solamente-respecto a lajuridicidad o no del
acto administrativo motivo del proceso. Deberá notificarse alas par-
tes que hubiesen intervenido y deberá también publicarse-su parte
dispositiva- en el Boletín Oficial de la Provincia de Córdoba o en un
periódico local, a partir de lo cual producirá efectos erga omnes.
La Sala Contencioso Administrativa del Superior Tribunal de
Justicia de Córdoba ha expresado: "En las causas contencioso ad-
ministrativas de ilegitimidad la competencia del tribunal se limi-
ta a declarar la nulidad del acto. Lo contrario importaría invadir,
sin apoyatura normativa, el ámbito de actuación de otro poder sus-
tituyendo la voluntad de la Administración" .55
Además, se sostiene que la acción de ilegitimidad "veda toda
posib ilidad de atender al reclamo del accionante de que se lo rein-
corpore al cargo que tenía cuando fue cesanteado y que se le paguen
retroactivamente los haberes adeudados, con intereses actualiza-
dos. Ello así porque tales medidas exceden el alcance que a la ac-
ción de ilegitimidad le confiere el arto 39, segundo párrafo, del Có-
digo Contencioso Administrativo". 56

XIII. RECURSOS CONTRA LA SENTENCIA

a. Aclaratoria

Bartolomé FIORINI, en relación a este medio legal, opina: "Este


recurso tiende al esclarecimiento de carácter material sobre la
partedispositivadelfallo [... ]".57

55 "Duer, Alberto el Municipalidad de Inriville - ilegitimidad", A.1.


N° 182, del 18112/1989.
56 Cám. Cont. Adm. de la Nom. Córdoba, sentencia N° 139, del 221111
2002, en autos"Álvarez, Víctor Rugo el Superior Gobierno de la Pro-
vincia de Córdoba - ilegitimidad", citado en Actualidad Jurídica de
Córdoba, N° 25, pág. 1495.
57 FIORINI, Bartolomé, op. cit., pág. 329.
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA PROVINCIA... 221

El arto 40 de la ley 7182 reconoce a las partes en un proceso con-


tencioso administrativo, la posibilidad de solicitar la corrección de
un error material, la aclaración de un concepto oscuro o que se su-
pla cualquier omisión respecto a las cuestiones debatidas en eljui-
ClO.
La aclaratoria deberá plantearse en el término de tres días,
contados a partir de la notificación de la sentencia.
La solicitud de aclaratoria, suspende de pleno derecho el plazo
para interponer otros recursos contra la sentencia.
Lajurisprudencia cordobesa ha interpretado: "La interposición
de la aclaratoria suspende la eficacia de la resolución dictada has-
ta tanto sea integrada mediante su acogimiento o rechazo [ .. .]Esta
conclusión encuentra respaldo expreso en el arto 40 de la ley 7182,
en cuanto dispone que el auto que resuelve el pedido de aclaración
"constituirá con el decisorio aclarado la sentencia definitiva". 58

b. Recurso de apelación

Recordemos que la ley 7182 determina que el Tribunal Supe-


rior de Justicia de Córdoba, por intermedio de la Sala Contencioso
Administrativa, "conoce y resuelve en segunda instancia en las
causas en que la Provincia sea parte" (art. 10).
En consecuencia de ello, cuando la Provincia de Córdoba sea
parte en un proceso contencioso administrativo, procederá contra
la sentencia el recurso de apelación en los términos del arto 43 de
la ley 7182.
El recurso de apelación deberá plantearse por ante el tribunal
que dictó la sentencia dentro del término de cinco días hábiles ju-
diciales.

TSJ, Sala Contencioso Administrativa, en autos "Turtura, Emma


58
D. el Caja de Jubilaciones, Pensiones y Retiros de Córdoba", del 19/
12/1997.

222 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

Previo examen de admisión formal, el recurso será concedido


libremente y se elevarán las actuaciones a la Sala Contencioso
Administrativa la cual imprimirá el trámite de ley.
Se correrá traslado, en primer lugar, al apelante para que ex-
preselosagraviosyluegoalapeladoparaquelosconteste.
Posteriormente se dictará el decreto de "autos" y se dictará re-
solución.
La jurisprudencia ha expresado: "La segunda instancia, tal
como señala Couture (Fundamentos de derecho procesal civil, edi-
ción póstuma, pág. 354 Y ss.) conc. Ramacciotti - López Carusi110
(Compendio de derecho procesal civil y comercial de Córdoba, Bs.
As., 1981, t. 3,pág. 446) no constituye unnuevojuicio, sino que su
objeto consiste en verificar, sobre la base de la resolución impugna-
da yen los límites de los agravios formulados, el acierto o error de
lo resuelto porel tribunal aquo (conf sent. 94/98, 'Caballeroc / Sup_
Gob.T.59

c. Recurso de casación

En las causas en que la Provincia de Córdoba no sea parte, ro-


rresponderá recurrir la sentencia o los autos que pongan fin a la
acción mediante la casación.
El recurso de casación deberá plantearse ante el tribunal que
dictó la resolución, expresando concretamente las causales del
mismo y la actuación que se pretende.
Es necesario expresar y fundar debidamente cada motivo en
oportunidad de deducir el recurso ya que no se podrá -en otra opGr-
tunidad- plantear ningún otro.
Por ello, "La legislación vigente requiere que el recurso de casa-
ción se interponga mediante escrito, en el cual-además de citarsE
concretamente las disposiciones legales que se consideren violadas

59TSJ, Sala Contencioso Administrativa, en autos "Sicka, Rosa d Pro-


vinda de Córdoba - contencioso administrativa", sentencia N° 29, del.
11/03/1999.

---~
.. __ .. _.~
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA PROVINCIA... 223

o erróneamente aplicadas y expresarse cuál es la aplicación que se


pretende-deben indicarse separadamente cada motivo en sus fun-
damentos (art. 46, tercer párrafo, ley 7182)".60
Constituyen motivo de casación, atento lo normado por el arto 45
de la ley 7182: a) la "inobservancia o errónea aplicación de la ley
sustantiva o la doctrina legal, incluso en caso de sentencias con-
tradictorias de las Cámaras"; b) "por quebrantamiento de las
formas sustanciales establecidas para el procedimiento, o la sen-
tencia, excepto cuando el acto motivo de la nulidad hubiere sido
consentido o producido por el recurrente".
Planteado el recurso de casación el tribunal resolverá, sin sus-
tanciación, si corresponde o no concederlo.
Si decide concederlo, deberá remitir la causa al Tribunal Supe-
rior de Justicia de Córdoba y emplazará a las partes para que com-
parezcan ante el mismo dentro del plazo de tres días de recibida la
nnsma.
Si el recurrente no comparece en el plazo fijado se declarará
desierto el recurso planteado.
Si la parte que interpuso el recurso de casación compareció por
ante el Tribunal Superior de Justicia, éste con audiencia del Fis-
cal, se pronunciará acerca de su procedencia.
Si el Superior Tribunal considera que el recurso de casación fue
mal concedido, devolverá las actuaciones a la Cámara de origen.
Ello resulta legalmente factible porque: "La concesión de un
recurso por el inferior no inhabilita al tribunal de alzada para con-
trolar la concurrencia de los presupuestos procesales atinentes, a
su admisibilidad formal aun mediando conformidad de losjusti-
ciables, pudiendo en consecuencia revisar si el remedio intentado
ha sido deducido conforme a las condiciones de admisibilidad exi-

60 TSJ, Sala Contencioso Administrativa, en autos "Cuerpo de regu-

lación de honorarios de los Dres. Jorge H. Gentile y Marcelo O. Bolatti",


en autos "Monguillot, Jorge Alberto y otros el Municipalidad de Cór-
doba - plena jurisdicción", sentencia N° 20, del 14/03/2002, citado en
Foro de Córdoba, Suplemento de Derecho Administrativo y Consti-
tucional, N° 8, 2002, pág. 143.
224 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

gidas por el ordenamiento adjetivo vigente [. ..]El recurso de c.:a:.tD-


ción, en tanto remedio extraordinario, no cubre la discrepancia Ce
la recurrente con la determinación de los hechos y el encuadnl-
mientojurídico que realizan losjueces de la causa, en la med:iD.r.
que no se demuestre un vicio improcedente o in iudicando, efia::;:
para habilitar la instancia de anulación. Lo contrario conve~
a este trib unal en una instancia ordinaria para atender las ~JE-.
ciones de los litigantes a quienes anima un diverso criterio de U:-
terpretación, lo que no se compadece con la competencia atribl.l.idc.
al máximo órgano jurisdiccional por la Constitución de la ProtirJ.-
cia (art.165, inc. 3)".61
En cambio, si el Superior Tribunal de Justicia considera p~
cedente el recurso de casación procederá a otorgarle el trámite de
ley. Éste consiste en correr traslado por su orden, por el plazo
de nueve días, a fin de que las partes presenten un informe sobre
su derecho.
Posteriormente, yen el término de treinta días, se deberá dic-
tar sentencia. Si ésta declarase nulo el procedimiento, enviará la.
causa a la Cámara Contencioso Administrativa que le sigue en
turno para que se dicte una nueva resolución. Enlos demás casos,
deberá resolverse sobre el fondo de la cuestión debatida.

d. Recurso de revisión

El recurso de revisión se encuentra regulado en el arto 48 del


Código Contencioso Administrativo de la Provincia de Córdoba,
exteriorizando de esa manera la vol untad del legislador de hacer
prevalecer el criterio de verdad sobre el principio -no menos im-
portante-deseguridadjurídica.

61TSJ, Sala Contencioso Administrativa, en autos "Gamond, Eduar-


do el Caja de Jubilaciones, Pensiones y Retiros de Córdoba - amparo
por mora", sentencia N° 125, del 05/09/2000, citado en Foro de Córdo-
ba, Suplemento de Derecho Administrativo y Constitucional, ~ 4,
2001, pág. 101.
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA PROVINCIA... 225

Se trata de un medio recursivo de carácter extraordinario, ya


que procede contra "sentencia firme" y cuando se configuren las
causales que taxativamente ha determinado la legislación provin-
cial:
a) cuando la "sentencia ha recaído en virtud de pruebas que al
tiempo de dictarse aquélla, ignorase una de las partes o que estu-
vieran reconocidas o declaradas falsas, o que se reconocieran o de-
clarasen falsas después de la sentencia; b) si después de pronun-
ciada la sentencia, se recobrasen documentos decisivos ignorados
hasta entonces, extraviados o retenidos por fuerza mayor o por obra
de la parte a cuyo favor se hubiere dictado aquélla; 3) si la senten-
ciahubiera sido pronunciada a consecuencia de prevaricato, cohe-
cho, violencia u otra maquinación fraudulenta, cuya existencia se
hubiere declarado en fallo posterior irrevocable".
La doctrina considera que el trámite del recurso es igual al de
la casación. 62

e. Recurso de inconstitucionalidad

Este medio impugnativo se encuentra regulado en el arto 49 de


la ley 7182 y sólo es procedente en causas de única instancia.
Este recurso puede plantearse respecto a "sentencias definiti-
vas, autos interlocutorios que den por terminado el proceso o ha-
gan imposible su continuación" y con la finalidad de cuestionar la
constitucionalidad de "una ley, decreto, reglamento o resolución"
que haga referencia sobre materia "regida por la Constitución
Provincial y la sentencia o el auto fuera contrario a las pretensio-
nes del recurrente".

62 ILDARRAZ, Benigno - ZARZA MENSAQUE , Alberto R. - VIALE, Claudio Mar-


tín, Derecho constitucional y administrativo, op. cit., pág. 673.
226 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

XIV. LA EJECUCIÓN DE LA SENTENCIA

El Capítulo IV del Código Contencioso Administrativo de la


Provincia de Córdoba establece el régimen aplicable respecto a
la ejecución de la sentencia dictada en un proceso contencioso ad-
ministrativo.
Bartolomé FIORINI afirma que "las sentencias de los tribunales
contenciosos locales contra el Estado son obligatorias y por lo tan-
to, ejecutorias. La posibilidad de no poderse llevar a cabo esta eje-
cución corresponderá solamente a circunstancias relacionadas con
el interés público". 63
El arto 38 del Código Contencioso Administrativo determina que
la sentencia establecerá --cuando correspondiere-- un "plazo ra-
zonable para el cumplimiento espontáneo de la condena [...]".
Si en el plazo otorgado en la sentencia la autoridad administra-
tiva no cumple espontáneamente con la obligación impuesta el
tribunal, a pedido de parte, la intimará nuevamente acompañan-
do una copia del fallo.
Se deberá remitir, además, una copia de la sentencia al Fiscal
de Estado en los supuestos que la vencida en el proceso sea una
autoridad administrativa provincial.
Cumplidas las diligencias antes referidas, y dentro del plazo de
quince días de recibido el testimonio de la sentencia, laAdminis-
tración podrá solicitar fundadamente la suspensión de suejecución.
Para ello, deberá cumplimentar los siguientes requisitos:
a) Solicitar al tribunal la suspensión de la ej ecución porunpla-
zo determinado;
b) Deberá acompañar el pertinente acto administrativo en el que
conste las razones que fundamenten el pedido de suspensión, y
c) Deberá ofrecer indemnizar los daños y perjuicios por la de-
mora en el cumplimiento de la decisiónjudicial.
Ante este supuesto el tribunal correrá vista al interesado y lue-
go fij ará -analizando las razones de interés público invocado- el

63 FIORINI, Bartolomé, op. cit., pág. 319.


EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA PROVINCIA... 227

plazo máximo de duración de la suspensión de la ejecución de la


sentencia.
También la legislación autoriza al tribunal a decidir la "susti-
tución de la condena" por una indemnización definitiva, en los
supuestos de:
a) sentencia de cumplimiento imposible;
b) que la ejecución de la sentencia producirá una lesión directa
e inmediata al interés público.
La Cámara que interviene en el trámite de la causa establece-
rá el monto indemnizatorio, teniendo en consideración las circuns-
tancias de cada caso, como así también fij ará el plazo y la forma de
pago.
Bartolomé FIORINI, respecto a esta temática, expresa: "La expre-
sión exacta que debería utilizarse para este problema seríasuspen-
sión o sustitución de los efectos de la sentencia, porque la obliga-
toriedad de la sentencia, como acto del Poder J udicial,jamás podrá
dejar de tener existencia, salvo renuncia o desistimiento expreso
por el interesado. No es la sentencia lo que en realidad se suspen-
de, sino su ejecutoriedad parar ser sustituida por otra obligación o
prestación a favor del vencedor del litigio [... ]. La suspensión de los
efectos de la sentencia debe ser solicitada por el poder administra-
dor al PoderjJudicial y éste es, en realidad, el que debe considerar
la razonabilidad del pedido interpuesto y también decidir lo que
corresponde sustituir a la ejecutoriedad suspensa o imposible de
.
eJecu t ar []"
.... 64
Debemos tener presente, también, que en virtud de lo norma-
do por el arto 54 del Código Contencioso Administrativo, ante el
incumplimiento de la obligación impuesta en el plazo fijado, se
procederá de conformidad con lo dispuesto por el Código de Pro-
cedimiento Civil y Comercial de la Provincia de Córdoba.
Ello no ofrece dificultades cuando se trata -porejemplo-de obli-
gaciones de dar. Pero si se tratara de obligaciones de hacer y la
condenada en el proceso no la cumple en los plazos establecidos, se

64 FIORINI, Bartolomé, op. cit., págs. 326 y 327.


...
228 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

comunicará el incumplimiento al Poder Legislativo o al Concejo


Deliberante que corresponda.
La Sala Contencioso Administrativa del Superior Tribunal de
Justicia de Córdoba ha expresado: "[...] El Procurador del Tesoro
no se encuentra legitimado para apreciarper se la existencia de cir-
cunstancias impeditivas o que imposibiliten el cumplimiento de la
obligación de hacer impuesta a la Administración [.. .J'. 65
Todas las cuestiones que demoren o impidan la satisfacción de
la pretensión reconocida en un proceso judicial, deben ser anali-
zadas con prudencia en cada caso concreto.
Ello, como bienIo expresa Tomás HUTCHINSON, porque "Debili-
tado estará un ordenamiento jurídico cuando sea prácticamente
imposible que las sentencias que acogen la pretensión del particu-
lar puedan ser incumplidas o cumplidas a su antojo por el Estado,
y cabría aún más poner en duda la eficacia del controljudicial de-
bido a que éste no lograría sus efectos sino se asegurara adecuada-
mente la ejecución de las decisiones en que se concreta". 66

XV. PERENCIÓN DE INSTANCIA

La perención de instancia es una forma anómala de finalizar


el proceso contencioso administrativo y tiene lugar cuando el de-
mandante no lleva a cabo, durante el plazo expresamente deter-
minado por la ley, ningún acto procesal que sea idóneo para impul-
sarlo.
Para que opere la perención de instancia, el arto 55 de la ley 7182
requiere que la paralización sea mayor de un año, cualquiera sea
su estado, "salvo que los autos pendieren de pura actividad del tri-
bunal".

65 "Ozán, Fernando d Superior Gobierno de la Provincia de Córdoba",


del 29/0911987 .
66 "Ejecución de sentencias condenatorias contra el Estado", en El de-
recho administrativo argentino, hoy, Ciencias de la Administración,
Bs. As., 1996, pág. 254.
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA PROVINCIA... 229

La Cámara no puede declarar de oficio la perención de instan-


cia' sólo podrá hacerlo a petición de parte.
La Sala Contencioso Administrativa del Tribunal Superior de
Justicia de Córdoba ha expresado: "El Código Procedimiento Con-
tencioso Administrativo-ley 7182- no contiene normas relati-
vas a la perención de instancias superiores (arts. 55 y 58, y exposi-
ción de motivos a contrario sensu) razón por la que corresponde
aplicar supletoriamente las normas pertinentes del CPC (art. 13,
CPCC), el procedimiento contencioso administrativo, con excep-
ción de la etapa de habilitación (art. 11, CMCA), es de naturaleza
estrictamente dispositiva. Así entonces, los principios estableci-
dos en el arto 55 del CPCA, rigen igualmente en la instancia de
casación, con las pertinentes adecuaciones. Ello importa que la
carga del impulso procesal recae en todos los casos en el recurren-
te, salvo que los actos pendiesen de pura actividad del tribunal,
excepción que debe ser interpretada con criterio restrictivo [... ]".67
Declarada la perención de instancia, se torna válida la decisión
administrativa que fue base de la acción entablada y se impondrán
las costas al demandante (art. 58, ley 7182).

XVI. CONTROL JUDICIAL DE LOS ENTES REGULADORES

Como ya lo expresáramos al tratar el procedimiento de recla-


mo de los usuarios de los servicios públicos, la resolución dictada
por el Ente Regulador de los Servicios Públicos de Córdoba (ERSEP)
como cierre de un procedimiento de audiencia pública, causa es-
tado sin necesidad de interponer recurso administrativo alguno.
De igual modo, las resoluciones que dicte el ERSEP -ante los
reclamos por la prestación de los servicios públicos-causan esta-
do y agotan la vía administrativa. Sin peIjuicio de ello, las partes
podrán plantear recurso de reconsideración que deberá ser resuelto

67 "Juárez de Núñez, C. el Caja de Jubilaciones, Pensiones y Retiros

de Córdoba", sentencia N° 4, del 17/02/1998, citado en Boletín Judi-


cial de la Provincia de Córdoba, t. 1, 1998, pág. 174.
-
230 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

en el plazo de diez días hábiles administrativos por la máxima


autoridad de ese ente regulador de la provincia de Córdoba.
Este es un sistema especial regulado por la ley 8835 yreglamen-
taciones del mismo organismo, tal como se explicara en el Capítu-
lo VI del primer tomo de esta obra, por parte de Liliana Villafañe,
a cuyos términos nos remitimos. N o es ocioso recordar, que ningu-
na semejanza o paralelismo tiene con los medios de controljudi-
cial de los distintos entes reguladores nacionales, toda vez que ellos
están regulados por diferente legislación y reglamentaciones para
cada caso.
En los supuestos antes referidos, el controljudicial deberá rea-
lizarse en el ámbito de lajurisdicción contencioso administrativa
de la ciudad de Córdoba una vez agotado el reclamo o haberse ob-
tenido un acto administrativo definitivo en el ERSEP, siempre que
se reúnan -además-la totalidad de los requisitos estatuidos por
el art_ 10 de la ley 7182, para la procedencia de la acción contencio-
so administrativa que corresponda según el asunto.
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA PROVINCL.\... 231

ACTIVIDAD DE AUTOEVALUACIÓN

1) ¿Qué requisitos debencumplimentarse para acceder alaju-


risdicción contencioso administrativa?
2) ¿Cuáles cuestiones se encuentran excluidas legalmente de
lajurisdicción contencioso administrativa?
3) ¿Qué acciones contencioso administrativas contempla la ley
7182? ¿Cuándo procede cada una de ellas?
4) ¿Qué órganos judiciales intervienen en el proceso contencioso
administrativo?
5) ¿Qué documentación debe acompañar el actor cuando presen-
ta una demanda contencioso administrativa? ¿Por qué?
6) ¿Cuál es el alcance y la finalidad de la etapa procesal deno-
minada ''habilitación de instancia"?
7) ¿Qué medida cautelar se encuentra regulada en la ley 7182?
¿En qué oportunidad procesal debe requerirse? ¿Qué requisitos
deben cumplimentarse para su procedencia?
8) ¿Qué excepciones pueden plantearse? ¿En qué oportunidad
procesal?
9) ¿Qué medidas probatorias pueden ofrecerse?
10) ¿A partir de qué circunstancia la sentencia dictada en los
distintos procesos contencioso administrativos produce efectos
jurídicos?
11) ¿Qué recurso puede plantearse respecto a las providencias
dictadas sin sustanciación?
12) ¿Qué recursos pueden interponerse ala sentencias definitivas?
13) ¿En qué plazo opera la perención de instancia en el proceso
contencioso administrativo?
14) ¿En qué consistela etapa de ejecución de sentencia en el proceso
contencioso administrativo? ¿Qué trámites debencumplimentarse?

CASOS PRÁCTICOS

1)Antecedentes: la Cámara Contencioso Administrativa de 1"


Nominación de la Ciudad de Córdoba, en la causa caratulada:
232 IGNACIO M. VÉLEZ FUNES - LILIANA N. VILLAFAÑE

"Gatic S.A. clProvincia de Córdoba -plena jurisdicción" ,resuelve


mediante decreto fundado que el caso traído a su decisión no com-
pete a lajurisdicción contencioso administrativa.
Deberá responder:
¿Qué recurso/s debe interponer el actor para cuestionar la re-
ferida resolución?
2) Antecedentes: la Cámara Civil, Comercial y Contencioso
Administrativa de la ciudad de Río Cuarto en los autos caratula-
dos: "Chávez, Carlos clMunicipalidad de Río Cuarto -ilegitimidad"
decidió -mediante resol ución fundada- no habilitar la instancia
contencioso administrativa porque la demanda se planteó de ma-
nera extemporánea.
¿Qué recurso/s debe interponer el accionante para cuestionar
tal decisión?
3) Antecedentes: Juan José Gales, escribiente del Juzgado de
Primera Instancia y 1oa Nominación en lo Civil y Comercial de la
ciudad de Córdoba, es dejado cesante -previo procedimiento dis-
ciplinario-por el Superior Tribunal de Justicia de Córdoba.
Deberá responder:
a) ¿Qué recurso/s debe interponer el Sr. Gales para agotar la vía
administrativa?
b ) Una vez agotada la vía, ¿qué acción contencioso administra-
tiva debe plantear? ¿Por qué?
c) ¿Contra quién dirige la acción? Enla etapa procesal pertinen-
te, ¿ a quién debe notificarse la demanda?
d) ¿Qué características podrá tener la sentencia que se dicte en
este proceso?
e) Si la Cámarainterviniente, dicta la sentencia rechazando en
todas sus partes la demanda incoada por el Sr. Gales, qué recursos
podrá interponer para cuestionarla?
4)Antecedentes: el Directorio dela Caja de Jubilaciones, Pen-
siones y Retiros de Córdoba rechaza expresamente un recurso
de reconsideración planteado por la Sra. Juana Tejeda respec-
to de la resolución N° 50 que le denegaba lajubilación por inva-
1idez.
Al respecto deberá responder:

--------------- - -------- ------ - - - -


. - -
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA PROVINCIA... 233

a) ¿Qué acción contencioso administrativa debe iniciar la Sra.


Juana Tejeda? ¿En qué plazo?
b) ¿Ante qué Tribunal presenta la demanda?
c) ¿Contra quién dirige la acción? ¿Por qué?
d) ¿Qué excepciones podría plantear la demandada? ¿En qué
oportunidad? .
e) ¿Cuál puede ser el contenido de la sentencia dictada en este
proceso?
f) ¿Qué recurso/s podrían plantearse respecto a la sentencia dic-
tada en este proceso?
5)Antecedentes: en el ámbito del Ministerio de Educación de la
Provincia de Córdoba se celebró un procedimiento licitatorio a los
fines de adquirir equipamientos para las escuelas primarias pro-
vinciales. Participaron tres oferentes: A, B, C, y la adjudicación
recayóenlaempresa "C".
Deberá responder:
a) Disconforme con la decisión y previo agotamiento de la vía
por parte de la empresa "A", ¿qué acción contencioso administra-
tiva debe iniciar? ¿Porqué? ¿En qué plazo?
b) ¿Ante qué tribunal presenta la demanda?
c) ¿Contra quién dirige la acción? ¿Por qué?
d) ¿Quiénes son parte en este proceso?
e) ¿Cuál debe ser el contenido de la sentencia dictada en este
proceso?
f) ¿Qué recurso/s pueden plantearse respecto a la sentencia
definitiva?
Capítulo XIII
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO
EN LA NACIÓN

Por Eduardo Ávalos

Sumario: 1. Introducción: ¿existe en realidad la ac-


ción contencioso administrativa federal? lI. Norma-
tiva aplicable ante la ausencia de codificación. lII.
La habilitación de la instancia. IV. La suspensión de
actos administrativos en sede judicial. V. La ejecu-
ción de sentencias contra la N ación y la emergencia
permanente.

l. INTRODUCCIÓN: ¿EXISTE EN REALIDAD LA ACCIÓN CONTENCIOSO


ADMINISTRATIVA FEDERAL?

Ninguno de los instrumentos normativos que sirven de conducto


paralaimpugnaciónjudicial de actos administrativos nacionales
alude expresamente a esta denominación, a diferencia de la ma-
yoría de los ordenamientos procesales provinciales, que por lo ge-
neral desde sus primeros artículos definen la "materia contencio-
so-administrativa" objeto de regulación.
Como es sabido, no existe código contencioso administrativo
federal, aun cuando hubo numerosos intentos enese sentido. 1

1 El último proyecto que tuvo estado parlamentario fue el remitido por


el Poder Ejecutivo al Senado mediante mensaje de elevación del 21/
236 EDUARDO ÁVALOS

Sin embargo, no por ello podemos negar la esencia de procesos


de este tipo, aun cuando los instrumentos que los rigen -tal como
ampliaré infra- consisten en un Código Procesal Civil, un capí-
tulo de la ley de procedimientos administrativos y un conglome-
rado de leyes sueltas, que en forma anárquica yasistemática, es-
tablecen procedimientos especiales de revisión sobre materias
puntuales, de la más variada gama, generalmente mediante la
articulación de recursos judiciales directos ante jueces de primera
instancia o una Cámara. Además, reparemos que en la Capital
Federal existe un fuero especializado en la materia, el fuero en lo
Contencioso Administrativo Federal, que reconoce la existencia
de docejuzgados federales de primera instancia, y una Cámara de
Apelaciones con cinco Salas que actúa como tribunal de alzada
de aquéllos. Por su parte, en el interior, losjuzgados federales de sec-
ción tienen también competencia en causas contencioso adminis-
trativas, como también las Cámaras Federales de las distintas
jurisdicciones, aun cuando -por tener competencia múltiple--no
tengan una denominación que identifique la materia bajo trata-
miento.
Si por proceso administrativo entendemos el conducto por el cual
el Poder Judicial ejerce un control sobre el ejercicio de la función
administrativa del Estado e incluso de quienes sin serlo desempe-
ñan tal cometido, sin dudas el sistema nacional, aun con sus falen-
cias que no son pocas, reconoce su existencia. 2
Veamos ahora por qué carriles transita.

12/98. Su texto puede consultarse en diario ED, Suplemento de De-


recho Administrativo, del 30/06/1999.
2 En contra, MUÑoz, Guillermo. "Hacia una deconstrucción de la teo-
ría del proceso administrativo", en Derecho administrativo, en home-
naje al Profesor Miguel S. Marienhoff, Abeledo-Perrot, Bs. As., 1998,
pág. 1318. Este autor sostiene: "No existe, pues, en el ámbito federal,
un proceso administrativo. Tampoco un procedimiento administra-
tivo. Existe un fuero que lleva ese nombre, y que se maneja con crite-
rios cambiantes y difíciles de asir en una visión conjunta".
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA NACIÓN 237

11. NORMATIVA APLICABLE ANTE LA AUSENCIA DE CODIFICACIÓN

a) La Ley de Demandas contra la Nación N° 3952

Sancionada en el año 1900, esta ley vino a atemperar la necesi-


dad de la obtención de venia legislativa para demandar a la N a-
ción respecto a las llamadas "cuestiones civiles", con tal que se efec-
tuara una reclamación administrativa previa. 3 En el año 1932, la
ley 11.634 -en lo que se caracterizó como el comienzo de la decli-
nación de la teoría de la doble personalidad del Estad~extendió
la sustitución de la venia legislativa por el reclamo previo a todas
las acciones contra la N ación, sea en su carácter de personajurídi-
ca o de persona pública.
En el año 1972, la sanción de la ley nacional de procedimientos
administrativos N° 19.549 mantuvo esta exigencia, pero en su
arto 32 introdujo tal cantidad de excepciones que en la práctica tal
regla se convirtió en una rara excepción.
Sin embargo, en el año 2000, la ley 25.344 de Emergencia Eco-
nómica, entre otras cosas, modificó-con carácter permanente-
la LNPA, derogando muchas de las excepciones contempladas en
el arto 32. Por ello, este instituto, luego de tres décadas de haber
quedado en desuso, volvió a renacer, con el agravante que ahora,
también por imperio legal, los jueces, previo dictamen del Minis-
terio Público, deben controlar de oficio este recaudo. Más adelan-
te abundaremos sobre esto.
Otro aspecto de la ley 3952, que hoy conserva más que nunca
su vigencia, es el carácter declarativo que asigna a las sentencias
condenatorias dictadas contra el Estado Nacional.

3 Señala T AWIL que la recepción de la reclamación administrativa pre-


via, cuya denegatoria debía proceder necesariamente del Poder Eje-
cutivo, respondió, en sus orígenes, no tanto al propósito de conferir
un privilegio al Estado, sino de atenuar el existente con la venia legis-
lativa previa (TAWIL, Guido Santiago, op. cit., pág. 133).
238 EDUARDO ÁVALOS

b) El Código Procesal Civil y Comercial de la Nación4

El arto 319 del CPCN expresa que todas las contiendasjudicia-


les que no tuviesen señalada una tramitación especial, serán ven-
tiladas enjuicio ordinario. Es decir, que el proceso ordinario cons-
tituye un procedimiento residual, en defecto de una regulación
especial. 5
y como dentro del sistema de este cuerpo normativo no existe
ninguna mención específica de lo contencioso administrativo, o de
la impugnaciónjudicial de actos administrativos (no nos olvide-
mos que se trata de un Código Procesal Civil y Comercial) una ac-
ción de ese tipo --en ausencia de ordenamiento procesal adminis-
trativo- tramitará indefectiblemente por la vía ordinaria del
CPCN.
Entre las modificaciones a este cuerpo normativo introducidas
por la ley 25.488, que nos parecen más relevantes para destacar
en esta oportunidad, podemos mencionar en primer lugar la del
arto 12, concerniente alas cuestiones de competencia. Se señala que
tramitará ello por vía de incidente pero sin suspenderse el proceso
principal, el que seguirá su trámite por ante eljuez que previno,
salvo que se trate de cuestiones de competencia en razón del terri-
torio. En el régimen anterior, ambos jueces suspendían los proce-
dimientos, salvo medidas precautorias o diligencias de cuya omi-
sión pudiera resultar perjuicio.

4 Mediante ley 25.488 se ha introducido una importante reforma al


Código Procesal Civil y Comercial de la N ación, que rige desde el día
22/05/2002. En lo pertinente, haré mención a las innovaciones adopta-
das respecto al proceso ordinario, que es el que resulta de interés. Para
un prolijo estudio de la reforma consultar: PALACIO, Lino Enrique, "Ano-
taciones para una explicación de la reforma procesal civil y comercial
(ley 25.488)", enLL, edición del 21/1212001, págs. 1/5.
5 Ese carácter residual en realidad ha sido atemperado, por cuanto la
reforma introducida por la ley 25.488, al eliminar eljuiciosumario, deja
subsistente, dentro de los procesos de conocimiento, sólo los juicios
ordinario y sumarísimo.

------- -----¡¡---1iI¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡;~;
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA NACIÓN 239

El arte 36, ine.l, impone como deber de los jueces "tomar medi-
das tendientes a evitar la paralización del proceso", lo cual hasta
la reforma era una mera facultad. Talimperativo resulta incom-
patible con el mantenimiento del instituto de la caducidad de ins-
tancia. En efecto, si alguna de las partes no impulsa el proceso y
transcurre el plazo de caducidad ¿podrán ahora en más declarar
los jueces de oficio o a pedido de parte la caducidad de instancia, si
ese resultado, tras la reforma, se traduce en un deber incumplido
de su parte?
El arte 38, en su ine. 5, establece que es deber de los secretarios
dirigir en forma personal las audiencias testimoniales que tomaren
por delegación deljuez. Esta solución viene a receptar una situa-
ción de hecho cual es la delegación de esta tarea en los escribien-
tes del tribunal, por lo que la norma pone directamente en cabeza
de los secretarios esa actividad.
El instituto del beneficio de litigar sin gastos ha sufrido algu-
nas modificaciones en lo que respecta a su tramitación6 , sin embar-
go lo más significativo resulta ser la multa fijada en el arto 81, se-
gunda parte. Se establece que si se comprobase la falsedad de los
hechos alegados como fundamento de tal petición, se impondrá al
peticionante una multa que se fijará en el doble del importe de la
tasa de justicia que correspondiera abonar, no pudiendo ser esta
suma inferior a la de pesos un mil ($1000), siendo destinado el
importe de la multa a la biblioteca de las cárceles.
El arte 96 consagra la posibilidad de ejecutar la sentencia en
contra del tercero, salvo que en la oportunidad de formular el pe-
dido de intervención o de contestar la citación, hubiese alegado
fundadamente la existencia de defensas y/o derechos que no pudie-
sen ser materia de debate y decisión en eljuicio.
Esta solución viene a consagrar la oponibilidad de la sentencia
al tercero citado coactivamente o por intervención voluntaria,
aspecto que generó distintas posturas tanto doctrinaria como ju-
risprudencialmente. Se mantiene incluso el segundo párrafo del

6 Véanse arts. 78 y ss. del CPCN.


4

240 EDUARDO ÁVALOS

artículo que determinaba que en todos los casos la sentencia dic-


tada alcanzará al tercero como alos litigantes principales. El tex-
to agregado por la reforma viene a reforzar el sentido de la norma.
Una delas modificaciones más importantes se encuentra con-
tenida en el ine. 6 del art.125, que permite la documentación de
las audiencias de prueba por medio de fonograbación. Esta se rea-
lizará en doble ejemplar, uno de los cuales se certificará y conser-
vará hasta que la sentencia quede firme; el otro quedará a dis-
posición de las partes. Agrega el inc. 7 que en esas condiciones el
tribunal podrá decidir la documentación de audiencias de prueba
por cualquier otro medio técnico. Es decir, se permite así también
la filmación de las audiencias, lo que junto con la fonograbación
facilitan -por tratarse de un proceso escrito--que los operadores
jurídicos puedan tener otra percepción delas audiencias de prue-
ba, al poder estar en contacto con la versión literal de la decla-
ración e incluso, con la expresión natural y espontánea de quien
declara, aspectos que se ven desvirtuados cuando el acta es docu-
mentada a través de un tercero que aun en forma involuntaria,
filtra la declaración restándole inmediatez.
En relación a las notificaciones en la oficina también seha pro-
ducido una pequeña innovación. Se mantienen los días martes y
viernes para tal efecto, pero a diferencia del régimen anterior, en
que si algún martes o viernes era feriado, la notificación operaba
el día siguiente al día hábil, actualmente el arto 133 dispone que si
alguno de ellos fuera feriado, la notificación tendrá lugar el siguien-
te día de nota, o sea, el siguiente martes o viernes.
En materia de notificaciones, aparte de los casos en que el Có-
digo establece la notificación por cédula, aquélla también podrá
realizarse de acuerdo a lo preceptuado por el arto 136, por acta
notarial, telegrama con copia certificada y aviso de entrega y car-
ta documento con aviso de entrega. Se exceptúa de ello a la noti-
ficación de los traslados de demanda, reconvención, citación de
personas extrañas aljuicio y la sentencia definitiva, como ade-
más todas aquellas notificaciones que deban efectuarse con en-
trega de copias, que sólo se podrán realizar mediante cédula o acta
notarial.
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA NACIÓN 241

Sin embargo, se tendrá por cumplimentada la entrega de copias


si se transcribe su contenido en el telegrama o carta documento.
Además, la elección del medio de notificación se efectuará por
los letrados sin necesidad de manifestación alguna en el expedien-
te.
Es un verdadero adelanto la incorporación de otros medios de
notificación, puesto que el diligenciamiento de cédulas insume una
gran cantidad de tiempo a lo largo de todo el proceso. Además, se
agilizan notoriamente las notificaciones (por ejemplo, citaciones
de testigos) que se deban cursar al interior de la provincia o a otra
provincia, ya que de otro modo, habría que oficiar a los jueces con
jurisdicción en el lugar. Pese a lo importante de estas innovacio-
nes, pensamos que se ha desaprovechado la oportunidad para
regular las notificaciones por medios electrónicos, máxime si se re-
para en que el CongresodelaNaciónhareguladomedianteley25.506
(BO del 14/12/200 1) la utilización de la firma electrónica y la fir-
madigital.
Otra trascendental reforma constituye la eliminación deljui-
cio sumario. Recordemos que los procesos de conocimiento se en-
contraban divididos enjuicio ordinario, sumario y sumarísimo. El
arte 320 establecía una gran cantidad de hipótesis en que eran de
aplicación las reglas deljuicio sumario. Sin embargo, en la prácti-
ca, los juicios sumarios demoraban tanto como los ordinarios, sin
que se visualizara una verdadera diferenciación. La reforma vie-
ne a sincerar el sistema, quedando sólo eljuicio ordinario y el su-
marísimo. Este último para los procesos de conocimiento en que el
valor cuestionado sea inferior a cinco mil pesos ($5000), para el am-
paro entre particulares y como opción de trámite para la acción
meramente declarativa.
El plazo de ofrecimiento de prueba enjuicio ordinario también
ha sufrido variantes. Antes de la reforma, en esta clase dejuicios
se debía ofrecer con la demanda o contestación sólo la prueba do-
cumental. Luego de contestada la demanda se abría la causa a
prueba, oportunidad en que las partes podían ofrecerla. A partir
de la vigencia de la ley 25.488, el arte 333 determina que con la
demanda, reconvención y contestación de ambas deberá acom-
242 EDUARDO ÁVALOS

pañarse la prueba documental y ofrecerse todas las demás prue-


bas de que las partes intenten valerse. Es decir, se asimila la opor-
tunidad de ofrecer prueba al sistema que regía para el derogado
juicio sumario.
También, como recaudo a observar al momento de ofrecerprue-
ba, en relación a la testimonial, el citado artículo 333 señala que
si se ofreciera prueba testimonial se indicará qué extremos quie-
ren probarse conla declaración de cada testigo.
Se mantiene la audiencia preliminar prevista en el arto 360
acentuándose la necesidad de la presencia personal del juez en
dicho acto procesal. Así, el artículo modificado determina que el
juez presidirá esta audiencia con carácter indelegable agregando
que si eljuez no se hallare presente ella no se realizará. Es decir que
lejos de flexibilizarse la presencia deljuez en este acto procesal, se
mantiene como requisito fundamental la intervención directa del
magistrado.
En esta audiencia, eljuez invitará a las partes a una concilia-
ción, recibirá las manifestaciones de las partes referidas a la opo-
sición de la apertura de la causa a prueba y, en su caso, declarará
la cuestión como de puro derecho. Fijará los hechos articulados que
sean conducentes a la decisión deljuicio sobre los que versará la
prueba y proveera en dicho acto las que considere admisibles. La
Cámara Federal de Apelaciones de Córdoba declaró la nulidad de
lo actuado en oportunidades en que se omitió receptar esta audien-
cia. 7
Finalmente, enloquehaceala prueba de informes, laley25.488
modificó los arts. 398 y 399, unificándolos en una sola norma. Así,
el arto 398 se refiere ahora al plazo para que las oficinas públicas y
las entidades privadas contesten un pedido de informes o remitan
un expediente, estableciéndose un plazo de diez días para ello, salvo

7En autos "Prieto Cané, José Lucio d Estado Nacional - ordinario",


Prot. 277, Sala A, Seco 1, fs. 51/52; autos "Materia Hnos. SACIF d
Fertonani Alberto Francisco Ángel- ordinario", Prot. 59, Sala A, Seco II,
fs.77/81.
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA NACIÓN 243

que la providencia que lo hubiese ordenado fijara otro plazo. De esta


forma se unifica en diez días el plazo para cumplir la diligencia
indicada, tanto se trate de entes públicos como privados. También
se sustituye la ineficaz comunicación que 'en el antiguo texto co-
rrespondía efectuar al Ministerio de Justicia en caso que determi-
nada repartición no cumplía con el deber de contestar oportuna-
mente los pedidos de informes. A partir de la reforma los jueces
podrán en tal supuesto aplicar astreintes.
El arto 346 regula la interposición de excepciones previas, que
ahora con la reforma podrán interponerse conjuntamente con la
contestación de la demanda. El arto 347 menciona entre las excep-
ciones admisibles, las de incompetencia, falta de personería, falta
de legitimación para obrar, litispendencia, defecto legal, cosajuz-
gada, transacción, conciliación y desistimiento del derecho. Tam-
bién se mencionan defensas contenidas en leyes generales, como
beneficio de inventario o de excusión, entre otras, y finalmente la de
arraigo. Ahora bien,jurisprudencialmente, la invocación de la falta
de cumplimiento de los requisitos para interponer una deman-
da de tipo contencioso administrativa, ha tenido cabida a través
de la excepción de inhabilidad de instancia, figura extraña a este
Código pero que en la práctica ha servido de instrumento para tal
fin.
Eljuicio ordinario reconoce las siguientes etapas: demanda
y ofrecimiento de prueba, contestación de demanda - excepciones
- ofrecimiento de prueba; audiencia del arto 360; diligenciamiento
de prueba; alegatos y sentencia. Es un proceso de doble instancia,
pudiendo apelarse ante la Cámara las sentencias definitivas, las
interlocutorias y las providencias simples que causen gravamen
irreparable. Contra la sentencia de Cámara, a su vez, puede inter-
ponerse apelación ordinariaS ante la Corte Suprema, o bien recur-
so extraordinario federal.

8Admisible sólo cuando es parte el Estado y el valor cuestionado al-


canza la suma de $ 726.523 (véanse arto 24, inc. 6, apartado "a", del
decreto-ley 1285/58; arts. 254 y 255 del CPCN y resolución N° 1360/91
de la CSJN),
244 EDUARDO ÁVALOS

Éstos son los aspectos más relevantes del juicio ordinario del
CPCN que tras la última reforma ha sido dotado de mayor agilidad.

c) La Ley Nacional de Procedimientos Administrativos


N° 19.549 (LNPA) y su decreto reglamentario

Como un medio para cubrir de algún modo la laguna normati-


va existente, en el año 1972 al dictarse la LNPA se incluyeron en
el Título IV algunas disposiciones más bien propias de un Código
Contencioso que de una ley de trámite administrativo. En efecto,
aun cuando se trata de sólo nueve artículos, rigen -ya sea en for-
ma directa o supletoria-la totalidad de las acciones impugnato-
rias de actos administrativos, estableciendo los requisitos proce-
sales para su interposición Oegitimación, agotamiento de la vía,
plazo y pago previo). También se regula el instituto de la reclama-
ciónadministrativa previa encaso de demandas no impugnatorias
de actos administrativos yel amparo por mora de la Administra-
ción.
Una significativa modificación ha operado la ley de emergen-
ciaeconómicaN° 25.344, reformando--concarácterpermanent~
los arts. 30, 31 y 32 de la LNPA.
La principal innovación consiste en haber consagrado el con-
trol de oficio por los jueces de los recaudos previstos por los arts. 23,
24 y 25 de la LNPA para la interposición de demandas contencio-
sas, como además--enlos casos que correspond~ larec1amación
administrativa previa. Más adelante abundaremos sobre esto.
Además, la ley 25.344 en su arto 8°, sin modificar el CPCN ni la
LNPA expresamente, contempla una vista al fiscal para que se ex-
pida acerca de la procedencia de la instancia y competencia del tri-
bunal. Por su parte, el arto 9° fija un plazo de treinta días para opo-
ner defensas, excepciones y contestar demanda. Se contrapone esto
al plazo de sesenta días de traslado de demanda contemplado en el
Código Procesal cuando la accionada es laNación (art. 338, CPCN).
EnloquerespectaaldecretoreglamentariodelaLNPA~1759/
72,enelaño 1991, el decreto 1883 le introdujo una valiosamodifi-
--
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA NACIÓN 245

cación. En lo que aquí interesa, el arto 40, referido a las notifica-


ciones en sede administrativa, prevé una significativa ampliación
de los plazos para interponer la demanda contenciosa o el recurso
judicial en caso que la Administración haya incumplido una serie
de requisitos que debe contener la notificación, tales como laindi-
cación de los recursos administrativos oponibles, si el acto agota
la instancia administrativa o bien, si corresponde algún recurso
judicial o acción especial.

d) Los llamados "recursos judiciales" contra actos


administrativos

Recordemos que como consecuencia de la inexistencia de un


ordenamiento legal unificado, coexisten a nivel nacional,junto con
la acción ordinaria ante unjuez de primera instancia (que se nu-
tre tanto del CPCN como de la LNPA -Título IV-), un increíble
muestrario de procesos especiales (mal llamados recursos) que tra-
mitan ante instancias y fueros diversos, cuyas normas regulato-
rias, la mayoría de las veces, nada dicen sobre las condiciones de
admisibilidad, trámite, etcétera.
Esta situación conspira conla garantía del derecho de defensa,
por cuanto el administrado que pretende impugnarjudicialmen-
te un acto administrativo nacional, antes de embarcarse en el
mencionado juicio ordinario, deberá cerciorarse que el ordenamien-
to jurídico (ya sea mediante leyes o decretos-leyes) no haya instau-
rado un recurso judicial o recurso de apelación contra aquella de-
cisión. Y esto es de suma importancia, porque la mayoría de las
veces no es optativo para el administrado recorrer un camino u otro,
ya que en general, la existencia de un procedimiento especial des-
plaza la posibilidad de iniciar unjuicio ordinario. 9

9La Corte Suprema de Justicia de la N ación ha entendido que la ac-


ción ordinaria no resulta procedente cuando se encuentra regulado
un recurso especial (véanse Fallos 312:1724).
246 EDUARDO ÁVALOS

Estamarañanormativaobedece a que con el correr de los años,


cada legislación que ha ido regulando alguna materia en la que
interviene el Estado y eventualmente ha creado alguna autoridad
de aplicación de sus prescripciones, le ha conferido contra sus de-
cisiones un recurso judicial. lO
Es preciso remarcar que es errada la denominación como "re-
cursos" de estas VÍas procesales establecidas como medio de con-
troljudicial de la administración. En efecto, de sede administrati-
va a lajudicial no hay recursos sino acciones 11 , ya que no se trata
de una simple revisión de lo actuado sino de lajurisdicción plena
del tribunal para revisar, para repasar en todo su alcance y pleni-
tud el acto administrativo cuestionado o impugnado. 12 Por otra
parte, se habla de recursos cuando dentro de una misma esfera o
sede, ya sea ésta administrativa o judicial, acudimos al órgano su-
perior quien efectúa un control de lo actuado por el inferior. Pero
mal se puede emplear esta terminología cuando saltamos de la
administración al órgano judicial, siendo más apropiado denomi-
nar a estos remedios procesales como "acciones" y no "recursos".
Asimismo, el recurso presupone una instancia anterior, lo que no
ocurre en el proceso contencioso administrativo, por cuanto la ins-
tancia administrativa previa, se trate de recursos administrati-
vos o reclamaciones, no tiene entidadjurisdiccional, de conformi-
dad a 10 normado por el arto 109 de la Constitución Nacional.
Autorizada doctrina ha sostenido que el "recursojudicial" es un
acto procesal en el cual se formula una pretensión contra un acto
administrativo y con el que se inicia unjuicio administrativo es-

10 Para darse una idea de la magnitud de recursos judiciales a nivel


nacional, consultar DANIELIAN, Miguel, Recursos judiciales y procedi-
mientos administrativos, Rubinzal-Culzoni, Bs. As., 2000.
11 La Corte Suprema de Justicia de la Nación ha sostenido que este
tipo de recursos no deben ser entendidos como una apelación a un
tribunal de Alzada, toda vez que no se apela de la sede administrativa
a la judicial (conf Fallos 1:309).
12 Conf. DROMI, Roberto, Derecho administrativo, Ciudad Argentina,
Bs.As., 1997,pág. 914.
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA NACIÓN 247

pecial O extraordinario. 13 Consiste en un modo de impugnación de


actos administrativos, pero a diferencia de la acción contenciosa
propiamente dicha, existe a nuestro juicio una limitada posibili-
dad de adicionar a la pretensión impugnatoria una reclamación
de daños y perjuicios.14 Sin embargo, alguna jurisprudencia ha
descartado la procedencia de la pretensión resarcitoria por esta
vía. 15
N o debe entenderse a estas acciones como si se trataran de una
simple apelación, ya que en defensa de garantías constituciona-
les, debe mediar un "controljudicial suficiente" de la Administra-
ción, tal como reiteradamente lo ha sostenido nuestro más alto
Tribunal a partir del caso "Fernández Arias"16 y tal objetivo sólo
se cumple con un proceso enel que se permita una amplia posibili-
dad de ofrecer y producir prueba.

e) Los recursos judiciales en particular

Insumiría toda esta obra la mención y breve explicación de to-


dos los recursos judiciales existentes, que no sólo recaen en el fue-
ro contencioso administrativo, sino incluso ante el fuero civil, co-
mercial, penal económico, de la seguridad social, etc. Portal razón,

13 DIEZ, Manuel María, op. cit., pág. 218. En igual sentido ALTAMIRA
GIGENA, Julio l., "Impugnación de los actos administrativos que vul-
neren derechos de los agentes públicos", en Revista de la Universi-
dad de Buenos Aires, Universidad de Buenos Aires, Bs. As., 1983,
pág. 107.
14 Tal el caso del pedido de haberes caídos o daño moral en el marco de
un recurso judicial fundado en el arto 39 de la Ley Marco de Empleo
Público N° 25.164.
15 Cám. N ac. Apel. Cont. Adm. Fed., Sala 111,29/10/1998, en autos "Gas
Natural BANSA el Res. 202198 ENARGAS" y "Cooperativa de Obras,
Servicios Públicos y Servicios S. Ltda. de Tres Arroyos el ENRE", ED,
177-82l.
16 Fallos 247 :646.
248 EDUARDO ÁVALOS

pensamos más apropiado dedicarnos a los que la prácticajudicial


nos muestra como más comunes.

1. Recurso judicial contra actos administrativos de las


universidades nacionales (art. 32, ley 24. 521)

La Ley de Educación Superior N° 24.521 fija el marcoregulato-


rio de las instituciones destinadas a la formación superior. Den-
tro de ese contexto, el arto 32 establece: "Contra las resoluciones
definitivas de las instituciones universitarias nacionales, impug-
nadas con fundamento en la interpretación de las leyes de la N a-
ción' los estatutos y demás normas internas, sólo podrá interponer-
se recurso de apelación ante la Cámara Federal de Apelaciones con
competencia en el lugar donde tiene su sede principal la institu-
ción universitaria".
Esta norma reconoce como fundamento el afianzamiento de la
autonomía universitaria, derogando implícitamente la posibili-
dad de interponer recurso de alzada (art. 94, RLNPA) por ante el
Ministerio de Educación.
La Ley de Educación Superior le dedica un sólo artículo a este
recurso de apelación, sin que hasta la fecha haya sido reglamen-
tado. Son objeto del recurso bajo estudio, las resoluciones definiti-
vas de las instituciones universitarias nacionales, debiendo enten-
derse por tales, desde un punto de vista técnico, aquellas decisiones
que resolviendo el fondo del asunto, lesionan un derecho subjeti-
vo o un interés legítimo o que por tratarse de resoluciones interlo-
cutorias o de mero trámite, pusieran fin o impidieran la continua-
ción del procedimiento.
Aunque nada dice el texto legal, va de suyo que antes de inter-
ponerse el recurso judicial, se debe obtener en sede administrativa
un acto que "cause estado", es decir, que agote la instancia admi-
nistrativa. Tampoco determina la norma el plazo de interposición.
A falta de previsión expresa, resulta aplicable en forma supleto-
ria el último párrafo del arto 25 de la LNPA, que establece que
"Cuando en virtud de norma expresa la impugnación del acto ad-
ministrativo deba hacerse por vía de recurso, el plazo para dedu-
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA NACIÓN 249

cirlo será de treinta días desde la notificación de la resolución de-


finitiva que agote las instancias administrativas".
Cabe tener muy presente, que el plazo se puede ver ampliado
encaso que la Administración no dé cumplimiento alopreceptuado
por el arto 40 del RLNPA. Esta norma impone la necesidad deindi-
car respecto al acto que se notifica, los recursos que se pueden in-
terponer en su contra, y plazo de articulación, o en su defecto, si el
acto agota las instancias administrativas.
Todos estos recaudos (legitimación, agotamiento de la vía ad-
ministrativa, plazo) que hacen a la admisibilidad del recurso, no
obstante no estar mencionados en el arto 32 de la Ley de Educación
Superior, son inherentes a toda acción contencioso-administrati-
va, y deben ser cumplimentados por el administrado.
A partir del dictado de la ley 25.344, procede de oficio por el ór-
gano jurisdiccional el control de los requisitos aludidos .17
Otro aspecto relevante consiste enla falta de determinación del
trámite de este recurso. Si bien algunos tribunales -como por
ejemplo la Cámara Federal de Córdoba- dispuso aplicar analó-
gicamente las previsiones del recurso del arto 40 de la Ley de Em-
pleo Público N° 22 .140, hoy ello resulta inviable, al haber sido de-
rogado dicho régimen y sustituido por la Ley Marco de Empleo
Público N° 25.164. De todos modos, la tramitación de este tipo de
recursos se reduce a un traslado a la Administración, requiriéndole
incluso que adjunte las actuaciones administrativas, diligencia-
miento de las pruebas que hubieren ofrecido las partes, alegatos y
sentencia. Se trata de un proceso sumamente ágil, de única instan-
cia, pudiendo interponerse en contra de la sentencia definitiva
recurso extraordinario (art. 14, ley 48), si correspondiese.
En cuanto al alcance de la decisiónjudicial, sólo se somete a
consideración y control del mismo la legitimidad del acto impug-
nado, es decir si presenta o no vicios que lo tornen nulo o anulable
(arts. 14 y 15, LNPA), yno su conveniencia u oportunidad, ya que
en resguardo de la división de poderes, estas últimas sólo pueden

17 Sobre este punto abundaremos infra.


250 EDUARDO ÁVALOS

ser apreciadas por la Administración y no por eljuez. Además, la


sentencia sólo podrá declarar la nulidad del acto, y por lo tanto ha-
cer lugar al recurso, pero nunca modificarlo o sustituirlo.
Es preciso destacar que lajurisprudenciaha señalado que este
recurso se relaciona con las facultades que a las Universidades
Nacionales les otorga el arto 29 de la Ley de Educación Superior y
todas aquellas otras que aunque no estén enumeradas, resultan
de la actividad propiamente académica o institucional referida a
su desenvolvimiento como casas de estudio. 18 Sin embargo, poste-
riormente 19 , se ha precisado el ámbito material de aplicación de
este recurso judicial en los siguientes términos: "[ ... ] A partir de la
reforma constitucional del año 1994, quedó plasmada en el arto 75,
inc. 19, tercer párrafo, de la CN, lajerarquía constitucional de la
autonomía y autarquía universitaria. Dicha autonomía implica
la competencia de las universidades nacionales para darse sus
estatutos de estructura, organización y funcionamiento y, a la vez,
la capacidad para autogobernarse de acuerdo a los criterios pro-
pios, eligiendo sus autoridades y profesores, fijando el régimen dis-
ciplinario sin interferencia alguna de los poderes Legislativo y
Ejecutivo (conf. CSJN, voto de la mayoría en 'Ministerio de Cul-
turayEducación dUniversidadde Luján',LL, 1999-E-387, cita-
do por María Angélica GELLI, en 'Constitución de la N ación Argenti-
na. Comentadayconcordada', La Ley, Buenos Aires, 2003, pág. 582).
Asu vez, la Ley de Educación Superior N° 24.521, reglamentando
el precepto constitucional, consagró la autonomía académica e ins-

18 Por tal motivo se juzgó improcedente esta vía procesal para im-
pugnar cuestiones inherentes a la concesión de un establecimiento
comercial en el Colegio Nacional de Monserrat, dependiente de la Uni-
versidad Nacional de Córdoba, por cuanto significaría ampliar inde-
bidamente el marco de actuación del arto 32 de la ley 24.521 (Cám. Fed.
Córdoba, Sala B, en autos "Travaglini, Guillermo d U.N.C. - recurso
judicial", Prot. 42, f. 160).
19 Cám. Fed. Apel. Córdoba, Sala A, 20/05/2003, en autos "Gomez,
N éstor dUniversidad Nacional de Córdoba -recurso judicial", Prot. 309,
fs. 48/52, por mayoría.
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA NACIÓN 251

titucional de las universidades. Así el Capítulo 2 de dicha ley defi-


nió el alcance de la autonomía y sus garantías. Entre las atribu-
ciones inherentes a dicha autonomía, el arto 29 enumera una se-
rie de contenidos entre los que se destacan, en lo que hace a su
capacidad administrativa y de gestión, la potestad para 'Estable-
cer el régimen de acceso, permanencia y promoción del personal
docente y no docente' y 'Designar y remover al personal' (art. 29,
incs. h e y, de la ley 24. 521). Es decir que todo lo inherente al régi-
menjurídico de derecho público que vincula al personal docente y
no docente con la universidad, forma parte de la autonomía insti-
tucional de dichas casas de estudio. En concordancia con ello, los
propios Estatutos de la Universidad Nacional de Córdoba, en su
arto 3°, engloban dentro del concepto de autonomía el pleno gobier-
no de sus estudios, la elección de sus autoridades y el nombramiento
y remoción de profesores y personal. [... ] Ahora bien, recordemos
que el Capítulo 2 de la ley de Educación Superior no sólo abarca
los postulados referidos ala autonomía universitaria, sino que ade-
más --expresamente-, se refiere alagarantía de esa autonomía,
entre lo que se ubica,justamente, la herramienta procesal que nos
ocupa, es decir, elrecursojudicial del art. 32delaley24.521. Como
se expresó más arriba, esta acción contencioso administrativa di-
recta y especial constituye el mecanismo de controljudicial espe-
cífico de los actos administrativos dictados por las universidades,
impugnados con fundamento en la interposición de las leyes de la
N ación, los estatutos y demás normas internas [... ]".
Finalmente, creemos oportuno hacer mención a una reciente y
poco difundida legislación, referida alos concursos docentes, que
merece una reflexión. E121 de diciembre de 1999 fue publicada en
el Boletín Oficial la ley 25.200, circunscripta a concursos docen-
tes de educación superior. Se trata de una ley de cinco artículos.
Los tres primeros están referidos al acceso por los participantes a
la información de los avatares de un concurso, ya modo de un par-
ticular hábeas data, garantiza el derecho de solicitar su supresión,
rectificación o confidencialidad.
Los dos restantes se refieren a impugnaciones. Así, el arto 40 se-
ñala que "Cada institución reglamentará en el marco delaley 19.549,
252 EDUARDO ÁVALOS

las instancias, plazos y mecanismos para que el evaluado pueda


interponer el recurso administrativo correspondiente o impugnar
los resultados de la evaluación con suficiente plazo y fundamento" .
Como puede advertirse, este artículo es innecesario y redundante,
por cuanto todo el sistema recursivo de la LNPA -a excepción del
recurso de alzada ante el :.Ministerio de Educación-es plenamente
aplicable alas universidades, y de hecho, son las herramientas con
. las que los docentes acostumbran a impugnar el procedimiento o el
resultado de un concurso.
Por su parte, el arto 5° es el que genera mayores problemas: "Toda
recurrencia administrativa o impugnación implicará, hasta tanto
las instancias pertinentes resuelvan al respecto, el sostenimiento
de la situación anterior al diferendo". Lo que literalmente surge de
la norma es el mantenimiento de la situación de hecho o de derecho
anterior a la impugnación del concurso, mientras dure el trámite
de dicha impugnación. Supongamos que A gana un concurso para
acceder a la titularidad de una cátedra, que en los últimos años ha-
bía estado a cargo de B. Si B impugna el concurso, por el sólo hecho
de hacerlo, permanecerá a cargo de la cátedra hasta que se resuelva
la impugnación. Esta norma es manifiestamente inconstitucional,
porque implica un menoscabo a la garantía de idoneidad como re-
quisitopara acceder al empleo Cart. 16, CN). En efecto, si A ganó un
concurso, se lo presume el más idóneo y por lo tanto es quien debe
continuar al frente de la cátedra hasta tanto se demuestre que el
concurso estuvo viciado. Pero no, esta ley pone las cosas patas para
arriba y privilegia al menos idóneo, postergando el resultado de un
concurso por el sólo hecho de haber sido impugnado. También, esta
solución vulnera el principio contenido en el arto 12 de laLNPA, qui-
tándole presunción de legitimidad y ejecutoriedad al acto concursal.
Ahora bien, ¿por qué nos hemos detenido en esto y qué relación
tiene con el recurso de apelación del arto 32 de la ley 24. 521? Pues
porque se le ha otorgado a esta solución virtualidad para ser apli-
cada no sólo en sede administrativa, sino tambiénjudicial. Es de-
cir que sobre la base de esta norma, quien impugne un concurso do-
cente a través del recursojudicial del art. 32 de la Ley de Educación
Superior, puede pretender obtener la suspensión automática del
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA NACIÓN 253

mismo, en base al arto 5° de laley 25.200, sustituyendo de este modo


la aplicación del arto 230 del Código Procesal Civil y Comercial
de la N ación que, a través de la figura de la medida de no innovar,
permite obtener la suspensión de actos administrativos en sede ju-
dicial, y que requiere la verosimilitud del derecho del peticionan-
te y el peligro en la demora. Y justamente, el perdedor de un con-
curso no tiene a su favor la verosimilitud del derecho.
Como las leyes deben ser interpretadas de modo tal de armoni-
zar sus soluciones con todo el sistemajurídico yde no colocar en pugna
unas con las otras, entendemos que el arto 5° de la ley 25.200 no se
aplica en sedejudicial, sino exclusivamente en sede administra-
tiva. Es claro que el arto 5° de la ley, bajo comentario al aludir a
recurrencia administrativa, está refiriéndose a la interposición
de recursos en dicha sede. El problema surge con el término "impug-
nación". Ahora bien, veamos el contexto de este artículo. En tal sen-
tido, el arto 4° pone en cabeza de la institución universitaria la re-
glamentación, en el marco de laLNPA, de los mecanismos para que
el evaluado pueda interponer un recurso, o impugnar los resulta-
dos de un concurso. Quiere decir que para el legislador los mecanis-
mos de interposición de recursos o impugnaciones son de resorte de
la universidad. Por lo tanto, mal puede interpretarse que el arto 5°,
al referirse a "impugnación", esté aludiendo a unaimpugnaciónju-
dicial y no administrativa. Ello así por cuanto ése es el sentido del
artículo anterior que le sirve de antecedente. Y por otro lado, la re-
gulación de impugnaciones en sede judicial no es de competencia
de la Universidad, sino del Congreso de la Nación. Por lo tanto,
si el arto 4° le otorga potestades ala universidad para regular las im-
pugnaciones, esa regulación debe estar referida necesariamente sólo
al ámbito administrativo. Mal podría cada universidad regular dis-
tintos modos de impugnaciónjudicial de sus actos administrativos.
Por ello, entendemos que una sanahermeneútica aconsej a cir-
cunscribir el arto 5° de la ley 25.200 al ámbito administrativo. Así
incluso lo ha entendido algunajurisprudencia. 20

La medida cautelar solicitada es provisoria y limitada en el tiem-


20 "(. •• ]
po, y se extenderá hasta tanto la Administración dicte la resolución
254 EDUARDO ÁVALOS

2. Recursojudicial del arte 39 de la Ley Marco de


Regulación de Empleo Público Nacional N° 25.164

El arto 39 delaley25.164, que regula en forma genérica la rela-


ción de empleo público nacional, prevé un recurso ante lajusticia
en caso de actos administrativos que dispongan la aplicación de
sanciones al personal. Así, dicha norma establece: "Contra los ac-
tos administrativos que dispongan la aplicación de sanciones al
personal amparado por la estabilidad prevista en este régimen, el
agente afectado podrá optar por impugnarlo por la vía administra-
tiva común, yuna vez agotada ésta acudir a sede judicial, o recu-
rrir directamente ante la Cámara Nacional de Apelaciones en lo
Contencioso Administrativo Federal o por ante las Cámaras Fe-
derales con asiento en las provincias, según corresponda, confor-
me ellugar de prestación de servicios del agente. La opción formu-
lada es excluyente de cualquier otra vía o acción. El recurso judicial
directo sólo podrá fundarse en la ilegitimidad de la sanción, con
expresa indicación de las normas presuntamente violadas o de los
vicios que se atribuyen al sumario instruido".
Este recurso judicial, que viene a sustituir al contemplado por
el arto 40 de la derogada ley 22.140 (RégimenJurídico Básico de la
Función Pública), extiende su aplicación a todo tipo de sanciones
al personal, a diferencia del anterior, que sólo se circunscribía a
sanciones expulsivas (cesantía o exoneración). Además, trae la
novedad de ser optativo, por cuanto el empleado sancionado pue-

que ponga fin al periplo administrativo, de lo que se interpreta, que


de su propia diligencia dependerá la cobertura otorgada al actor. Todo
bajo el imperio de la ley 25.200, cuya constitucionalidad no ha sido
puesta en tela de juicio por la demandada [.. .]" (Cam. Fed. Córdoba,
Sala A, 31/07/2001, en autos "Lanzetti, Guillermo Ramón dU.N.C.
Facultad de Psicología - aro paro", Prot. 285, fs. 28/29, Seco I. En con-
tra, extendiendo los efectos del arto 5° de la ley 25.200, hasta tanto se
dicte sentencia definitiva en un recurso judicial: Cám.Fed. Córdoba,
Sala B, 15/08/2001, en autos "Dávila, Angélica Leonor d U.N.C. - re-
curso judicial- arto 32 de la ley 24.521", Prot. 265, fs. 97/98, Seco 1.
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA NACIÓN 255

de elegir el agotamiento de la vía recursiva y luego la interposi-


ción dejuicio ordinario ante unjuez de primera instancia, o bien,
directamente, el recurso judicial ante una Cámara Federal. Este
desdoblamiento de opciones es contrario a lajurisprudencia domi-
nante, en el sentido que existiendo una vía especial, queda exclui-
da la vía ordinaria.
El arto 40 de la ley 25.164 contempla, para la interposición del
recurso judicial, un plazo de noventa (90) días, y regula su trámi-
te, sumamente abreviado. El arto 41, que fij a los efectos de la sen-
tencia, también trae la novedad que el recurrente, de obtener
sentencia favorable de reincorporación, pueda optar por recibir una
indemnización renunciando a aquel derecho.
Cabe preguntarse, a modo de reflexión, qué recurso judicial debe
interponer un empleado público dependiente de una universidad
nacional en caso de ser sancionado. Por un lado, se trata de un acto
emanado de una universidad, lo que torna procedente el recurso
del arto 32 de la Ley de Educación Superior comentado en el punto
anterior. Por otro lado, al ser un empleado público sancionado,
encuentra cabida el recurso del arto 39 de la ley 25.164. El dilema
no es indiferente, por cuanto para la interposición del primer re-
curso se exigen treinta días, y para el segundo noventa. En nues-
tra opinión, resulta procedente el recurso judicial previsto para los
actos administrativos de las universidades, por cuanto importa una
norma especial en función del sujeto emisor del acto. Sin embar-
go, los tribunales deben mantener una amplitud de criterio en
cuanto a no rechazar in limine aquellos recursos que, fundados
en la ley 25.164, sean presentados dentro de los noventa días, ya que
la colisión normativa existente puede generar una duda razona-
ble en el administrado. Se trata en todo caso, de garantizar el prin-
cipio de tutelajudicial efectiva y el derecho de acceso a lajurisdic-
ción.

3. Defensa del consumidor (art. 45, ley 24.240)

El arto 45 de la ley 24.240 prevé un recurso judicial contra los


actos administrativos que disponen sanciones por comisión de in-
-
256 EDUARDO ÁVALOS

fracciones contempladas en dicho ordenamiento, aplicadas por la


Secretaría de Industria y Comercio de la Nación.
En el plazo de diez días de notificada la sanción, se podrá recu-
rrir ante la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Contencioso
Administrativo Federal dela Capital Federal, o ante las Cámaras
Federales de Apelaciones con asiento en las provincias, según co-
rresponda, de acuerdo all ugar de comisión del hecho. El recurso,
a diferencia de los casos anteriores, deberá presentarse en sede ad-
ministrativa, ante la misma autoridad que dictó la sanción, y será
concedido con efecto suspensivo, en relación o libremente, esto
último en caso que se hubieran denegado medidas de prueba.
Generalmente la administración adjunta las actuaciones ad-
ministrativas y eleva el recurso al órgano jurisdiccional para su
tramitación. La última parte de este arto 45 prevé que las provin-
cias dictarán normas referidas a la actuación de las autoridades
administrativas locales, estableciendo un régimen compatible con
el de sus respectivas constituciones. Una sanción aplicada porun
órgano administrativo local, por infracción a la ley 24.240, escapa
a la competencia del fuero federal, debiendo ser los tribunales lo-
cales los encargados de controlar el acto que se impugne.

4. Servicio Público de Autotransporte (art. 8°, ley 21.844)

Las sanciones de multa por transgresiones o infracciones alas


disposiciones contempladas en la ley 21.844 en que incurran los
prestadores de servicios públicos de autotransporte, aplicadas por
la Comisión Nacional Reguladora del Transporte, podrán recu-
rrirse, a opción del interesado, directamente en apelación ante
la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Contencioso Adminis-
trativo Federal, en el plazo de diez días -debiendo presentar el
recurso ante el órgano de aplicación- o bien, interponer recurso
de reconsideración -con el que queda agotada la vía administra-
tiva- siendo apelable ante dicho tribunal en igual plazo la reso-
l ución que recaiga. Es decir que se puede acudir directamente a
la Cámara por recurso judicial o previa interposición de reconsi-
deración.
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA NACIÓN 257

A su vez, las resoluciones que impongan sanciones de suspen-


sión o caducidad del permiso, deben ser recurridas de conformidad
a las previsiones de la LNPAy decreto reglamentario, y una vez
agotada la vía administrativa, se puede apelar ante la Cámara en
lo Contencioso Administrativo Federal de la Capital.
Por último, las resoluciones que impongan apercibimiento, sólo
son susceptibles de recurso de reconsideración.
Como podemos advertir, es un verdadero galimatías procesal,
por cuanto en base a la entidad de la sanción se deben utilizar di-
versos procedimientos, y la aplicación de la sanción menor apare-
ce exenta de controljudicial.

5. Servicio Nacional de Sanidad Animal

De acuerdo a lo dispuesto por la ley 23.899, le compete al Servi-


cio Nacional de Sanidad Animal (SENASA), la programación y
realización de las tareas necesarias para prevenir, controlar, erra-
dicar las enfermedades propias de los animales y las transmisibles
al hombre y ejercer el contralor higiénico sanitario integral de to-
dos los productos de origen animal.
Las sanciones que en el marco de esta actividad aplique el ad-
ministrador general del SENASA, o el funcionario en que la regla-
mentación delegue talfacultad, serán recurribles (art. 26 de la ci-
tada ley) por vía de recurso de apelación ante la Cámara Federal
con competencia en el lugar donde se hubiere cometido el hecho.
El recurso deberá interponerse y fundarse ante la autoridad que
hubiese aplicado la sanción dentro de los quince (15) días hábiles
de notificado, previo pago cuando se tratare de pena de multa.

6. Electricidad

La ley 24.065 es el marco regulatorio de la generación, transpor-


te y distribución de electricidad. Su órgano de aplicación es el Ente
Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE), creado como enti-
dad autárquica en el ámbito del Ministerio de Economía y Obras y
Servicios Públicos de laNación. El arto 76 de la ley establece que las
258 EDUARDO ÁVALOS

resoluciones del ente podránrecurrirse por vía de alzada, en los tér-


minos de la LNPA, y agotada la vía administrativa procederá el re-
curso en sede judicial directamente ante la Cámara Nacional de
Apelaciones en lo Contencioso Administrativo Federal.
Cabe aclarar que como en el sistema recursivo nacional, al igual
que el provincial, el recurso de alzada no es obligatorio, se puede
entonces prescindir de este recurso administrativo e interponer di-
rectamente el remedio judicial. Ahora bien, interpuesto el de alza-
da, habrá que esperar su resolución para acudir ala víajudicial, o a
lo sumo desistirlo, para interponer el recurso ante la Cámara en lo
Contencioso Administrativo Federal de la Capital Federal.

7. Gas

La ley 24. 076 creó el marco regulatorio del transporte y distri-


bución de gas natural, y como autoridad de aplicación el Ente N a-
cional Regulador del Gas (ENARGAS), entidad autárquica en el
ámbito del Ministerio de Economía y Obras y Servicios Públicos
delaNación. Las decisiones de "naturalezajurisdiccional" del ente,
tal como dispone el arto 66 de la ley, serán apelables ante la Cáma-
ra Nacional de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo Fe-
deral de la Capital Federal dentro de los quince días de notificada
la resolución, debiendo elevarse las actuaciones dentro de los cin-
co días contados desde la interposición, y luego, correrse un tras-
lado por quince días a la otra parte.
El arto 70, a su vez, señala que las resoluciones del ente podrán
recurrirse por vía de alzada en los términos delaLNPA, y que ago-
tadala vía administrativa procederá el recursojudicial. Esto me-
rece iguales reflexiones que en el caso anterior.

8. Régimen de producción, industrialización y comercio


vitivinícola

La ley 14.878 regula la producción, industria y comercio viti-


vinícola. Además, creó una entidad autárquica en el ámbito del
Ministerio de Economía, el Instituto Nacional de Vitivinicultura
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA NACIÓN 259

(INV) como autoridad de aplicación de este régimen legal. El


arto 28 de la ley establece, para el caso de resoluciones condena-
torias, la posibilidad de deducir recurso de apelación por vía con-
tenciosa ante eljuez competente dentro de los cinco (5) días há-
biles de notificado. En caso de tratarse de un infractor reincidente
previamente debe ingresarse el importe de la multa a la tesore-
ría del Instituto (art. 29).

9. Registro de la Propiedad del Automotor

De acuerdo a lo dispuesto por el arto 37 del decreto-ley 6582/58,


texto agregado por la ley 22. 977, las decisiones de los encargados
del Registro en materia registral, podrán ser recurridas ante la
Cámara Federal de Apelaciones con competencia territorial en el
lugar donde tenga su asiento el Registro Seccional contra cuya
decisión se recurre. El decreto 335/88, reglamentario del prime-
ro, establece que este recurso es la única vía para impugnar las
decisiones de los encargados de Registro y de la Dirección N acio-
nal en materia registral. El recurso debe interponerse ante el Re-
gistro Seccional o ante la Dirección Nacional, según cual fuere
el organismo que dictó la resolución impugnada. El plazo de in-
terposición es de quince (15) días hábiles administrativos (art. 17,
decreto 335/88), y tiene efectos suspensivos respecto de la resol u-
ción recurrida. Debe ser presentado por escrito con patrocinio le-
trado debiendo ofrecerse prueba en dicho acto.
El arto 20 del referido decreto contiene una curiosa solución.
Interpuesto el recurso ante el Registro Seccional, y antes de su ele-
vación al tribunal, por intermedio de la Dirección Nacional, dicho
Registro puede revocar el acto impugnado. En caso contrario, puede
acompañar un informe con las observaciones que le merezca el
recurso y ofrecer prueba.
A su vez, la Dirección Nacional puede revocar el acto impugna-
do luego de receptadas las actuaciones, y en caso contrario tiene la
posibilidad de ampliar el informe y la prueba ofrecida por el Re-
gistro Seccional. Según el arto 21, si el acto impugnado fuese ema-
nado de la Dirección Nacional, se sigue una mecánica similar pero
260 EDUARDO ÁVALOS

por intermedio de la Secretaría de Justicia. Es decir que la presen-


tación de este recurso judicial activa una serie de resortes admi-
nistrativos que permiten a la Administración, previamente a ele-
var las actuaciones al tribunal, revocar el acto impugnado. Algo
bastante particular.

f) Un palpable desorden normativo


La lectura de los párrafos precedentes demuestra el verdadero
caos normativo que impera a nivel nacional para la impugnación
judicial de actos administrativos. Puesto que no sólo pesalainexis-
tencia de un código específico sobre la materia, sino que además,
esta gran variedad de acciones especiales conspira contra toda ló-
gica y razón (yeso que hemos mencionado una mínima parte de los
recursos judiciales disponibles). Como se ha visto, algunos se in-
terponen en sede administrativa, otros ante el órgano jurisdiccio-
nal; en algunos casos ante jueces de primera instancia, en otros,
ante una Cámara; algunos requieren el pago previo de la multa,
otros no. Los plazos de interposición difieren notablemente, yade-
más no en todos los casos está habilitada lajurisdicción del inte-
rior del país, sino que hay que ir a litigar a la Capital Federal, sal-
vo que el interesado corra el riesgo de interponer el recurso en esta
ciudad, solicitando simultáneamente lainconstitucionalidad de
lajurisdicción exclusiva de los tribunales porteños.
También resulta patente que el legislador nacional, cada vez
que ha regulado una actividad, lahadotado de un órgano de aplica-
ción y le ha asignado una acción especial ante lajusticia para im-
pugnar sus decisiones. Cuanto más fácil, crear un régimen gene-
ral de impugnaciones a la que cada ordenamiento particular se
remita. ¿Puede ser que a esta altura del desarrollo del derecho en
nuestro país esto no se advierta? ¿O será también éste unmecanis-
mo de autotutela de la propia administración, al crear múltiples
acciones que dada su escasa difusión y asistemática construcción,
en definitiva, pretende mantener sus decisiones al margen del con-
troljudicial ?
lI
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA NACIÓN 261

A nuestro juicio, aun sin esperar la sanción de un código con-


I
j
'1

tencioso administrativo federal, urge el dictado de una ley que j

unifique todos los procedimientos especiales vigentes, tal como


surge del Título VII del proyecto de Código Contencioso Adminis-
tra tivo Federal, elevado a consideración del Senado de la N ación
en el año 1998. 21

IIl. LA HABILITACIÓN DE LA INSTANCIA22

a) Introducción

Es posible definir la habilitación de la instancia como eljuicio


previo que realiza el tribunal con competencia en lo contencioso
administrativo respecto de la concurrencia de los presupuestos
procesales especiales de admisibilidad de la acción. 23
La declaración de habilitación de la instancia -que no causa
preclusión- es el resultado de la primera verificación de la exis-
tencia de los requisitos procesales, y lo que se está decidiendo en
ella es el acceso a la justicia , más no el resultado del pleito y, en

21Así, el arto 43 de dicho proyecto dispone: "Todos los recursos direc-


tos o acciones especiales previstos actualmente en leyes o reglamen-
taciones y los que en el futuro se establezcan, se regirán por el proce-
dimiento que se implementa en este Título, y serán los únicos medios
válidos para la impugnación de los actos administrativos a los que se
refiere~".
22 Seguimos en este punto nuestro trabajo titulado "La habilitación de
la instancia en el fuero federal", publicado en Foro de Córdoba, Su-
plemento de Derecho Administrativo y Constitucional, N° 11, Advo-
catus, Córdoba, 2003, págs. 11/ 41, el que se puede consultar a mayor
abundamiento.
23 Conf. COMADIRA, Julio Rodolfo,Procedimientos administrativos, La
Ley, Bs. As., 2002, pág. 408.
...
262 EDUARDO ÁVALOS

consecuencia, tampoco se estájuzgando acerca de la procedencia


material de las pretensiones del actor o recurrente. 24
Habilitar la instancia significa declarar que el demandante
puede utilizar la víajudicial y ejercitar sus facultades procesales.
Presentes los presupuestos de admisibilidad, el juez atiende la
demanda y declarando su procedencia le da curso, la notifica al
demandado y emplaza a éste para que la conteste. El demandan-
te, entonces, con la habilitación de la instancia, obtiene en defini-
tiva el impulso inicial del trámite deljuicio. 25
Es importante destacar que se reconoce a los jueces la facultad
de revisar de oficio las condiciones de admisibilidad en la etapa
preliminar del proceso. Fuera de esta oportunidad, el órgano judi-
cial no puede volver a examinar tales recaudos, salvo que la deman-
dada introd uzca dicha cuestión como defensa. Por eso, no corres-
ponde alosjueces de primera instancia hacerlo de oficio al momento
de pronunciar la sentencia definitiva y tampoco a la alzada al co-
nocer de un recurso de apelación en el que se debate la cuestión de
fondo. Igualmente, corresponde entender que el trámite de habi-
litación de la instancia es aplicable a los recursos judiciales direc-
tos, puesto que más allá del nomen iuris son verdaderas acciones
especiales cuyo objeto es la impugnaciónjudicial de actos adminis-
trativos. 26
Enformaconcordanteconloestablecidoenelart.SOdelaley25.344,
la reforma al arto 31 de la LNPA establece-como yalo señalára-

24 Conf. Cám. Nac. Cont. Adm. Fed., Sala I1, 22/04/2003, en autos

"Schapiro Electrocivil", citado por COMADIRA, Julio Rodolfo, Procedi-


mientos administrativos, pág. 408.
25 Conf. GRAU, Armando E.,Habilitación de la instancia contencio-

so administrativa, Librería Platense Editora S.R.L., La Plata, 1971,


pág. 126.
26 Conf. PERRINO, Pablo E., "Proceso contencioso administrativo y ha-
bilitación de la instancia", en Control de la Administración Pública.
Administrativo, legislativo y judicial, Jornadas organizadas por la
Universidad Austral- Facultad de Derecho, Ediciones RAP S.A., Bs.
As., 2003, págs. 99 y ss.
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA NACIÓN 263

mos más arriba- el control de oficio por parte del órgano jurisdic-
cional de los requisitos de interposición de las acciones impugna-
torias de actos administrativos o de reglamentos, o bien, de la exis-
tencia de reclamo administrativo previo para el caso de las demás
demandas contra el Estado Nacional que no tienen ese objetivo. Ex-
presamente dispone la ley que los jueces no podrán dar curso a las
demandas mencionadas enlos arts. 23 (demandas impugnatorias
de actos administrativos), 24 (demandas impugnatorias de regla-
mentos) o 30 (demandas contra el Estado no impugnatorias de actos
administrativos) de la LNPA, sin comprobar de oficio, en forma
previa, el cumplimiento de los recaudos establecidos en esos artí-
culos y los plazos respectivos. Veamos cuáles son entonces dichos
requisitos.

b) Los requisitos de admisibilidad de las acciones


impugnatorias de actos administrativos

Señala GRAU27 que para presentar a los órganos judiciales un


caso para su conocimiento y decisión, debe demostrarse la concu-
rrencia de ciertas circunstancias que sirven para constituir o in-
tegrar eljuicio. Son requisitos de nacimiento, de admisibilidad o
de ejercicio de ciertas facultades procesales. Asimismo, es preciso
distinguir entre los requisitos comunes a toda demanda y de los
propios de la pretensión administrativa. A estos últimos nos cir-
cunscribiremos.

1) Legitimación (titularidad de un derecho subjetivo o


interés legítimo)

Si bien la legitimación es un recaudo propio de toda clase de


demandas, es preciso destacar que en materia contencioso admi-
nistrativa el accionante debe ser titular de un derecho subj etivo o

27 GRAU, Armando E., op. cit., pág. 68.


~-

264 EDUARDO ÁVALOS

de un interés legítimo. N o basta el mero interés. Y mantenemos


esta clásica distinción por cuanto es la diferenciación que se encuen-
tra contenida en la LNPA, aun cuando haya caído en desuso y los
modernos ordenamientos hagan abstracción de ella.
La LNPAcuando ensu Título IV se refiere alaimpugnaciónju-
dicial de actos administrativos, no alude expresamente a la situa-
ciónjurídica subjetiva tutelada, por lo que no encontramos impe-
dimento alguno para considerar que dicha protección también
. alcanza a los intereses legítimos 28 , tal como de ordinario ocurre
cuando ante el Fuero Contencioso Administrativo Federal se im-
pugnan concursos docentes universitarios, o licitaciones públicas,
por dar un ejemplo. Sólo se exige un derecho subjetivo vulnerado
para la impugnación directa de los reglamentos (art. 24, inc. a,
LNPA).29

2) Agotamiento de la vía administrativa

Agotar la vía administrativa implica obtener una decisión que


cause estad030 ; es decir, que provenga de la máxima autoridad con
competencia para resolver en última instancia administrativa
acerca del recurso o petición planteada en dicha sede. Se obtiene
ello cuando sobre la pretensión del administrado recae una deci-

28 En igual sentido, ALTAMIRA GIGENA, Julio l., "La legitimación en el


proceso contencioso administrativo", en Derecho administrativo,
pág. 1204.
29 Aun cuando lajurisprudencia ha extendido esta tutela también a los
portadores de intereses legítimos.
30 Enseña FIORINI (op. cit., pág. 216) que la expresión "que cause esta-

do" proviene del arto 10, inc. a, de la vieja ley española del siglo pasado,
y sólo debe ser interpretada en exclusiva relación con el recurso con-
tencioso administrativo. La resolución administrativa que causa es-
tado es aquella que presenta la posibilidad de ser recurrida por la vía
contencioso-administrativa; si desaparece la posibilidad de la inter-
posición del recurso contra la resolución administrativa, sea por con-
sentimiento o vencimiento del término, ésta se transforma en deci-
sión administrativa firme.
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA NACIÓN 265

sión administrativa definitiva que sea irrevisible, irrecurrible y


fmal dentro de las instancias administrativas. La Corte Suprema
de Justicia de la N ación ha señalado que el agotamiento de la vía
administrativa constituye una prerrogativa de naturaleza proce-
sal que integra el régimen exorbitante que caracteriza al derecho
público. 31
Entre las razones en que tanto la doctrina y lajurisprudencia
hanjustificado el requisito de agotamiento de la vía administra-
tiva, ubicamos las siguientes 32 : a) constituye una etapa concilia-
toria previa aljuicio; b) da a la Administración la oportunidad de
revisar el caso y corregir errores; c) pone en funcionamiento el con-
trolj erárquico de legitimidad y oportunidad, evitando que la Ad-
ministración sea llevada ajuicio por decisiones adoptadas por ór-
ganos inferiores; d)filtralas contiendas que llegan a los tribunales;
e) promueve la eficiencia administrativa evitando la interferen-
cia prematura de los jueces en el procedimiento administrativo; f)
facilita la tareajudicial al poner a disposición de los tribunales el
beneficio de la experiencia y pericia del organismo administrati-
vo que intervino previamente; g) permite una mejor defensa del
interés público, y h) impide que la administración resulte enjui-
ciada sorpresivamente.
Si bien hoy en día el requisito bajo análisis es concebido por los
litigantes como un irritante privilegio estatal, en sujusta medida
creemos que razones de interés público aconsejansumantenimien-
to; siempre y cuando su ejercicio esté presidido por reglas claras y
no se transforme en un vía crucis para eljusticiable. En este senti-
do, se ha señalad033 con acierto que los funcionarios rehúyen a la

31 Fallos 316:2454.
32 Seguimos en este punto a PERRINO, Pablo Esteban, "Procedimiento
administrativo y agotamiento de la vía", en Procedimiento adminis-
trativo, pág. 165.
33 Véase CANOSA, Armando, Las reformas al régimen dejuicios con-

tra el Estado y la ley de emergencia económica, Ábaco, Bs. As., 2001,


pág. 36.

266 EDUARDO ÁVALOS

posibilidad de concretar un acuerdo ante la duda que se considere


que existe connivencia con el reclamante, como también, que el
control dentro de la propia administración, incl usive elj erárqui-
co, es utópico dada la terquedad del funcionario administrativo en
reconocer su propio error y la poca probabilidad de que el superior
desconozca una decisión del inferior, lo que podría ser considera-
do un verdadero retiro de confianza, sobre todo cuando la decisión
proviene de funcionarios jerárquicos.
Se impone entonces un cambio de mentalidad dentro de laAd-
ministración, ya que existe una gran reticencia de su parte de re-
conocer cuándo el administrado tiene razón, y por otro lado, pre-
fiere diferir para el futuro cualquier reconocimiento de derechos
que implique la erogación de una suma de dinero. Por lo tanto, da
la sensación que el agotamiento de la vía administrativa se ha con-
vertido en un ritualismo estéril, no obstante haber nacido con un
noble objetivo.
Pese a todo, lo cierto es que en el sistema nacional vigente, el
arto 23 de la LNPA exige para la impugnación judicial de actos
administrativos: a) que se trate de un acto administrativo defini-
tiv034 y se hubieran agotado a su respecto las instancias adminis-

34Acto administrativo definitivo es aquel que implique la resolución


con plenos efectos jurídicos de una cuestión sometida al conocimien-
to de la Administración Pública en alguno de sus niveles o si es de trá-
mite, que decida indirectamente el fondo de la cuestión, de modo tal
que ponga término a ésta, haga imposible o suspenda su continuación.
(conf. TAWIL, Guido Santiago, op. cit., t. 1, pág. 99). Se ha entendido
por acto definitivo como aquel que resuelve sobre el fondo del proble-
ma planteado por el particular y produce efecto externo creando una
relación entre la administración y las demás cosas o personas. Su nota
fundamental está en su autonomía funcional, que le permite produ-
cir derechos y obligaciones y lesionar o favorecer por sí mismo al par-
ticular. Se trata siempre de manifestaciones de voluntad, que en for-
ma definitiva definen el negocio planteado a la administración sin
supeditar su efecto a condiciones o plazos suspensivos. El acto defi-
nitivo es el único normalmente impugnable por sí mismo, porque es
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA NACIÓN 267

trativas; b) aunque no fuera definitivo, que impidiera totalmente


la tramitación del reclamo interpuesto, es decir sea asimilable a
definitivo; c) se presentare el caso de silencio o ambigüedad a que
se refiere el art.10; d) finalmente, remitiéndose al arto 9°, que se esté
en presencia de una vía de hecho administrativa o se hubiese pues-
to en ejecución un acto administrativo encontrándose pendiente
de resolución un recurso con efectos suspensivos interpuesto en su
contra, o cuando aun resuelto, no se encontrare debidamente no-
tificada la resolución.
En afirmación que compartimos, se ha señalado que la instan-
cia administrativa no es ni puede considerarse como una primera
etapa del proceso judicial posterior, ni tampoco el controljudicial
de actos administrativos consiste en una acotada o restringida
posibilidad revisora, ni aún en los casos en que la ley ha estableci-
do recursos judiciales contra decisiones administrativas que se
presentan directamente ante un tribunal de alzada. 35
Ello implicaría limitar el derecho de defensa y la amplitud de
debate y prueba que integran lo que en su momento la Corte Su-
prema de Justicia de la N ación, desde el caso "Fernández Arias"36
del año 1960, llamó "control judicial suficiente", es decir la posibi-
lidad de que los justiciables tuviesen al menos una instancia para
discutir, sin cortapisas, los hechos y el derecho.
En el sistema imperante en el orden nacional, el agotamiento
de la vía administrativa se obtiene:
En el ámbito de la Administración central, si se pretende
impugnar un acto administrativo que no emane del órgano jerár-
quicamente superior competente en la materia, a través del recurso
jerárquico (arts. 89, 90, 91 y 92, RLNPA), ya que el recurso de re-
consideración (art. 84, RLNPA) no es obligatorio. El recurso jerár-

el único capaz por sí para producir el agravio al derecho subjetivo y al


interés del administrado (conf. GORDILLO, Agustín, Tratado de dere-
cho administrativo, t. 3, pág. II-7).
35 Véase REJTMAN F ARAR, Mario, Impugnaciónjudicial de la actividad
administrativa, La Ley, Bs. As., 2000, pág. 68.
36 Fallos 247:646.
---
268 EDUARDO ÁVALOS

quico puede ser interpuesto en forma directa dentro de los quince


días de notificado el acto administrativo respectivo, o bien, inter-
puesta la reconsideración, ello lleva implícito-por imperio de la
ley- el recurso jerárquico (art. 88, RLNPA). Además, puede ser
presentado en forma subsidiaria con el de reconsideración. En el
caso de vencido el plazo para resolver, que es de treinta días hábi-
les administrativos, no es necesario presentar pronto despacho, ya
que la denegatoria tácita podrá ser invocada en forma automáti-
ca si se vence el plazo mencionado (conf. arts. 87 y 91, RLNPA).
Optativamente, una vez resuelto en forma expresa el recurso je-
rárquico, el interesado puede interponer a su vez contra este últi-
mo acto el recurso de reconsideración previsto en el arto 100 del
RLNPA. Si se pretende impugnarjudicialmente un acto adminis-
trativo emanado de la máxima jerarquía de la Administración
Central entendemos que no es necesario interponer ningún recur-
so, ya que al emanar de la máxima autoridad administrativa es-
tos actos tienen la calidad de agotar por sí mismos la instancia
administrativa. N ada impide que el administrado interponga -si
así lo desea- recurso de reconsideración.
En el ámbito de la Administración descentralizada, si el
acto administrativo proviene de un órgano jerárquicamente infe-
rior, la vía administrativa queda agotada con el recurso jerárqui-
co que es resuelto por la máxima autoridad de dicho ente. Remiti-
mos ala mecánica descripta anteriormente.
Ahora bien, una vez resuelto en forma expresa el recurso jerár-
quico o denegado tácitamente por silencio, el administrado tiene
la opción de interponer recurso de alzada en el plazo de quince días
de notificado o de operadala denegatoria presunta (arts. 94,95,96,
97 y 98, RLNPA), o bien, iniciar la acción judicial. El recurso de
alzada es resuelto por el Poder Ejecutivo. Si se trata de un ente
descentralizado creado por ley, el control que ejerce el Poder Eje-
cutivo es restringido sólo ala legitimidad del acto, no a su oportu-
nidad, mérito o conveniencia.
El arto 94 del RLNPA incluye como materia del recurso de al-
zada a los actos administrativos de las universidades nacionales.
Sin embargo, este precepto ha quedado derogado por el arto 32 de
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATNO EN LA NACIÓN 269

la ley 24.521 que, suprimiendo el control administrativo por par-


te del Ministerio de Educación sobre las universidades, estableció
como única vía de impugnación de los actos administrativos defi-
nitivos de esas casas de estudio, un recurso de apelación ante la
Cámara Federal de Apelaciones de lajurisdicción.
Si se trata de un acto administrativo dictado por la máxima
autoridad del ente descentralizado, el interesado ya tiene agota-
da la vía administrativa. Sin embargo, puede voluntariamente
interponer recurso de reconsideración. Una vez resuelto éste, o si
no lo presentó, puede optar por interponer recurso de alzada o bien
la demandajudicial.
Si se trata de decisiones de la máxima autoridad de los entes
reguladores de servicios públicos privatizados, no es nece-
sario agotar la vía administrativa por cuanto dichos actos tienen
la virtualidad de agotarla por sí mismos. Ello sin perjuicio de que
a opción del interesado proceda el recurso de alzada, en los térmi-
nos ya señalados. 37

3) Plazo de interposición de la acción o ''recursojudicial''

Uno de los recaudos previstos en la ley 19.549, más precisamente


en su arto 25, es el cumplimiento de plazos bastante breves para
interponer la demanda ordinaria o el recurso judicial. Se trata de
un plazo de noventa (90) días hábiles judiciales para impugnar un
acto administrativo de alcance particular o un acto de alcance ge-
neral, ya sea en forma directa o indirecta (conf. arto 24, incs. a y b,
LNPA). Si la impugnación del acto administrativo debe hacerse
por medio de los llamados "recursos judiciales" a falta de plazo
expreso contenido en las leyes especiales que los regulan, el pla-
zo de interposición del mismo será de treinta días hábiles judicia-
les.
El vencimiento de estos plazos provoca indefectiblemente el
decaimiento del derecho a demandar. Ésa es la doctrina de nues-

37 Conf. REJTMAN FARAH, Mario, op. cit., pág. 73.


270 EDUARDO ÁVALOS

tro más alto tribunal. 38 En tal sentido, la CSJN ha señalado que


''los actos administrativos no impugnados judicialmente en tales
plazos devienen firmes e irrevisibles a pedido del interesado".
También es preciso considerar la doctrina emergente del fallo ple-
nario dictado en la causa Petracca por la Cámara Nacional en lo
Contencioso Administrativo Federal39 , en el sentido que el acto
administrativo consentido no puede ser impugnado judicialmen-
te ni derivarse del mismo una reclamación pecuniaria.
Se ha entendido que la fijación de tales plazos obedece a que la
marcha de la admínístraciónno se vea demorada como consecuencia
de mantener sinlimítaciones el derecho del particular a solicitar la
revisión del acto administrativo en cuestión y así dar certidumbre
a terceros involucrados, en el caso que existan otros particulares
damnificados por el acto impugnado. También, que dichos plazos
son una derivación de la presunción de legitimidad propia de los
actos administrativos, resultando necesario asegurar su estabili-
dad y dotar de agilidad a la acción de la administración, a fin que
ésta no se vea obstaculizada por intereses privados frente a los fi-
nes públicos comprometidos y la seguridadjurídica enjuego. 40
Se trata de plazos de caducidad y no de prescripción, distinción
ésta que no resulta indiferente: lo propio de la caducidad es su na-
turaleza perentoria, automática y fatal, se opera de pleno derecho
y su efecto fundamental es la pérdida o extinción del derecho no

38 Fallos 179:249.
39 Véase in extenso Fallos plenarios. Recopilación, supervisión y ano-
tación de Marcelo Gustavo CARATI'INI, Ciencias de la Administración,
Bs. As., 1997, pág. 192, donde se sostuvo que "La impugnación de los
actos administrativos prevista en los incs. ayb del art. 23 de la ley 19.549 ,
dictados durante la ejecución de un contrato de la administración, está
sujeta al plazo instituido por su arto 25". "No es admisible la acción de
cobro de pesos o indemnización de daños sin impugnar, dentro del
plazo del arto 25 de la ley 19.549 la legitimidad del acto administrativo
que ha desestimado la misma pretensión o cuyo contenido excluye el
pago de lo reclamado".
40 Conf. REJTMAN FARAH, Mario, op. cit., pág. 148.
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA NACIÓN 271

exigido. La prescripción, por el contrario, no reúne esas caracte-


rísticas. El beneficiario puede no hacer uso de ella, no opera ni fun-
ciona de pleno derecho yno produce la extinción definitiva del de-
recho, sino su subsistencia como obligación natural. 41
Otra característica de la "caducidad" es que en principio no es
susceptible de suspensión ni de interrupción, salvo disposición
legal en contrario (vgr., suspensión que produce la presentación de
un pedido de vista en sede administrativa (art. 76 in fine, RLNPA);
interposición del recurso de reconsideración previsto en el arto 100
de dicho reglamento, etc.).
Los plazos del arto 25 de laLNPA pueden a su vez verse amplia-
dos en caso que la administración no cumplimente lo preceptuado
por el arto 40 del RLNPA. En efecto, el decreto 1883/91 que modifi-
có el decreto 1759/72, reglamentario de la ley 19.549, estableció que
los instrumentos de notificación de un acto administrativo deben
indicar los recursos que se puedan interponer contra dicho acto, y
el plazo dentro del cual deben articularse los mismos, o en su caso, si el
acto agota las instancias administrativas. El incumplimiento de
dichos recaudos no torna nula la notificación, sino que prorroga el
plazo para interponer los recursos administrativos. Ahora bien, si
lo que se omitiera fuera la indicación que el acto administrativo
notificado agotó la instancia administrativa, los plazos del arto 25
de la LNPA comenzarán a correr luego de transcurrido un plazo
de sesenta días. Es decir que el plazo de noventa días contemplado
en el arto 25 de la LNPA comenzará a correr una vez vencidos los
sesenta días adicionales. En caso de "recursos judiciales", si el ins-
trumento de notificación omitiera señalar cuál es el recurso judi-
cial que procede presentar en contra del acto administrativo noti-
ficado' el plazo de interposición del mismo será de sesenta días
hábiles.
Consideramos que es una encomiable solución la aquí comen-
tada, por cuanto esclarece el camino a seguir en caso de impugna-
ciones de actos administrativos, aspecto que cobra muchísima re-

41 Conf. COMADIRA, Julio Rodolfo, op. cit., pág. 477.


272 EDUARDO ÁVALOS

levancia frente a la falta de sistematización en el orden nacional


de los innumerables recursos judiciales existentes, tal como se
indicó en el punto U.
Por su parte, lajurisprudenciaha establecido que no satisface
las exigencias del arto 40 del RLNPA la habi tual práctica de la
administración consistente en la mera transcripción en la respec-
tiva cédula de notificación, de diversos artículos del RLNPA o de
la norma que contiene la regulación del recurso judicial pertinen-
te, sin establecer que el acto administrativo notificado agota la
instancia administrativa.42
Rigen también las dos horas de gracia que consagra el arto 124
del Código Procesal Civil y Comercial de la Nación, aun cuando se
trate de recursos judiciales que deban ser presentados en oficinas
administrativas.
En caso de silencio de la administración, es decir cuando ésta
dej a vencer los plazos normativos sin resolver, la situación queda
captada por el arto 26 de la LNPA en virtud de lo cual no se aplican
los plazos del arto 25, sino los correspondientes ala prescripción de
la acción. Esta solución de la ley toma en cuenta que el particular
que realiza una petición a la Administración tiene derecho a una
decisión expresa y fundada (arts.14 y 18, CN), por cuanto se vin-
cula con el derecho a peticionar a las autoridades y al derecho de
defensa. Por eso sería inadmisible que a pesar de que la Adminis-
tración omitiera pronunciarse, se computaran plazos de caducidad
para demandar. 43 Asignar al silencio el carácter de denegatoria

42 "La mera transcripción de normas, cuyo ejercicio simultáneo resulta


incluso incompatible, no puede provocar sino confusión en el adminis-
trado, desvirtuando el objetivo tenido en cuenta en el arto 40 del RLNPA
de proporcionar certeza a la situación jurídica del justiciable y garan-
tizarle su derecho de defensa [.. .]" (Cám. Fed. Córdoba, Sala A, 22/021
2002, en autos "Bonada, Alberto Oscar el UN.C. (Fac. de Arquitectu-
ray Urbanismo) - recurso judicial", Prot. 58, f. 105, Seco II).
43 Como ocurre con la reforma introducida al arto 31 de la LNPA por la

ley 25.344, cuando se configura el silencio frente al reclamo adminis-


trativo previo a la demanda judicial en que ésta debe interponerse
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA NACIÓN 273

tácita es una facultad del administrado que puede ejercerse sin


limitación ni restricción temporal alguna.
Es común que el particular tenga por denegado tácitamente un
recurso administrativo e interponga la demanda judicial y que
durante su tramitación recaiga resolución expresa del recurso. Si
éste le fuera favorable, en buenahora se habría solucionado la
cuestión. Si éste le fuera desfavorable entendemos que el admi-
nistrado debería impugnar judicialmente este nuevo acto ad-
ministrativo -nunca dejarlo firme- y solicitar la acumulación
de las demandas en sede judicial.

4) Pago previo

En algunos juicios se obliga al accionante a abonar la cantidad


a que se refiere la controversia como requisito previo de admisibi-
lidad de la demanda. Esta carga, conocida como principio de salve
et repete, es un privilegio de la administración y tiene como funda-
mento la regularidad de la gestión fiscal.
En relación a esta regla se ha dicho que todo sistema que condi-
ciona el acceso a lajusticia a la obligación de sumas pendientes de
pago, no debe ser formulado con un criterio rígido, sino que tal con-
dicionamiento será o no lesivo del derecho a lajurisdicción cuan-
do, conforme a las circunstancias de cada caso concreto y singular,
la suma sometida a pago previo sea, por su cuantía, desproporcio-
nada ala capacidad del obligado. 44
Por su parte, la Corte Suprema de Justicia de la N ación ha es-
tablecido: "[ ... ] Que, según resulta de la doctrina establecida por
esta Corte en el caso 'Microómnibus Barrancas de Belgrano' (Fa-
llos 312:2490), los alcances que cabe otorgar a lo dispuesto por el
arto 8°, inc. 1, de la Convención Americana de Derechos Humanos
-a la que el inc. 22 del arto 75 de la Constitución N acional otorga

dentro de los plazos perentorios y con los mismos efectos del arto 25,
"sin perjuicio de lo que corresponda en materia de prescripción".
44 Conf. BIDART CAMPOS, Germán, "El Pacto de San José de Costa Rica

yel acceso fácil a la justicia", enED, 137-314.


-
274 EDUARDO ÁVALOS

jerarquía constitucional- son equivalentes, en relación con el


principio salve el repete, a los fij ados por lajurisprudencia del tri-
bunal elaborada con mucha antelación a dicho tratado, con funda-
mento en el derecho de defensa garantizado por el arto 18 de la Cons-
tituciónNacional L.. ]". "L .. ] Que en tal sentido, y como lo ha fijado
la al udidajurisprudencia -aplicable tanto a las personas físicas
como alas de existencia ideal-, las excepciones admitidas respecto
de la validez constitucional de las normas que requieren el pago
previo de las obligaciones fiscales como requisito para la interven-
ciónjudicial, contemplan, fundamentalmente, situaciones patri-
moniales concretas de los particulares, a fin de evitar que ese pago
previo se traduzca -a causa de la falta comprobada e inculpable
de los medios pertinentes para enfrentar la erogación- en un real
menoscabo de la defensa enjuicio [. ..]".45 En suma, la garantíaju-
dicial de acceso a lajusticia se encuentra condicionada a una cues-
tión de hecho consistente en la demostración de no poder afrontar
en cada caso la suma de dinero exigida como recaudo previo a la
interposición de la demanda contencioso administrativa o recur-
so judicial.

e) Los requisitos de admisibilidad de las demandas no


impugnatorias de aetos administrativos

1. Distinción entre la vía recursiva y la vía reclamatoria

El Título IV de la LNPA, como yalo hemos señalado, vino alle-


nar el vacío legislativo existente en su momento y, por lo tanto, re-
guló aspectos vinculados con el acceso a lajurisdicción, más pro-
pio de un código contencioso administrativo que de una ley de
procedimiento administrativo.

45CSJN, 27/12/1996, en autos "Sociedad Anónima Expreso Sudoeste


(S.A.E.S.) el Provincia de Buenos Aires (Ministerio de Economía)", en
Impuestos, LV-A-1210.
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA NACIÓN 275

Los arts. 23 a27 de la LNPA se refieren alaimpugnaciónjudi-


cial de actos administrativos, estableciendo a su respecto la nece-
sidad de agotar previamente la vía administrativa, mediante los
recursos administrativos previstos en el decreto reglamentario de
laley.46 Es decir que si se pretende impugnar judicialmente un acto
administrativo, previamente debemos agotar la vía mediante la
interposición de los recursos administrativos que permitan obte-
ner una decisión que cause estado. 47
Ahora bien, paralelamente a la vía recursiva, el legislador ha
plasmado otro camino que no es opcional ni alternativo, sino que
funciona para supuestos distintos, y que consiste en el reclamo
administrativo previo a la demanda judicial. A este instituto se
refieren los arts. 30 a 32 de la LNPA.
En efecto, la vía reclamatoria previa es un resabio de la venia
legislativa previa para demandar ala N ación, y está instaurada
justamente como requisito necesario para las demandas no1.m-
pugnatorias de actos administrativos. Eso surge expresamente
del arto 30 de la LNPA (texto según la reforma introducida por la
ley 25.344), que alude a este reclamo previo "salvo cuando se tra-
te de los supuestos de los arts. 23 y 24", es decir, las situaciones
de impugnación de actos administrativos de alcance individual
o general. 48
En síntesis: cualquier demanda contra el Estado Nacional o sus
entidades autárquicas, de cualquier naturaleza, requiere por re-
gla la interposición de un reclamo administrativo previo, que se
regirá por los arts. 30 a 32 de la LNPA. Si se trata de una demanda

46 Recursos de reconsideración (art. 84, RLNPA, de carácter optati-


vo);jerárquico (art. 89, RLNPA, de carácter obligatorio) y de alzada
(art. 94, RLNPA, de carácter facultativo).
47 Para los actos administrativos de alcance general, que tienen un
particular régimen de impugnación en sede administrativa, véase
arto 24 de la LNPA.
48 Recordemos que en ámbito de la Provincia de Córdoba, este recla-

mo administrativo previo a la demanda judicial es facultativo (art. 119,


ley 6658).
....
2713 EDUARDO ÁVALOS

impugnatoria de acto administrativo, ya no corresponde este re-


clamo administrativo previo, sino la interposición de recursos.
Recurso y reclamo tienen en común que ambos actos procesa-
les desarrollados en sede administrativa implican una petición
ante la administración. Ahora bien, mediante el primero, lo que
se ataca es un acto administrativo definitivo o asimilable a defini-
tivo, y es una exigencia previa a la interposición de la demanda
judicial. Por el contrario, mediante el reclamo administrativo pre-
vio no se ataca un acto administrativo, sino que más bien se está
en presencia de una situación de hecho, ya sea una acción o una omi-
sión de la administración que se pretende revertir. Por ejemplo,
reclama en sede administrativa en forma previa (y no recurre) la
empresa prestadora de agua corriente a quien la administración
le adeuda boletas impagas, el empleado público a quien por un error
se le liquidó mal su sueldo, etc. Es decir, a través del "reclamo" se
pide a la administración un dar, un hacer o un no hacer, sin que
exista acto administrativo que haya trasuntado la voluntad admi-
nistrativa susceptible de ser impugnado. Como contrapartida, a
través del "recurso" se ataca esa declaración de voluntad conteni-
da en un acto administrativo. Asimismo, los recursos se supeditan
a recaudos de tiempo (plazos de caducidad breves) y forma, mien-
tras que el reclamo no exige mayores formalidades y no está suje-
to a plazo alguno, salvo el de prescripción.

2) El reclamo administrativo previo a la demanda


judicial tras la ley 25.344

En su momento, el arto 32 de la LNPA consagró una gran


cantidad de excepciones49 a la obligación de interponer el reclamo

49Actos dictados de oficio, o bien que antes de su dictado el interesado


se hubiese presentado expresando su pretensión en sentido contrario;
acciones de repetición; daños y perjuicios contra el Estado; acciones de
desalojo u otra ación que no tramitara por la vía ordinaria, o cuando
mediare una clara conducta del Estado que hiciera presumir la inefica-
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA NACIÓN 277

administrativo previo a la demandajudicial, por lo que en la prác-


tica, desde el año 1972, el reclamo administrativo previo fue un ins-
titutoinusua1. 5o
Pero a partir de fines del año 2000, con la Ley de Emergencia
N° 25.344, esto último cambió puesto que se han eliminado la gran
mayoría de las excepciones a este reclamo, adquiriendo entonces
un protagonismo nunca alcanzado, con el agravante que este ins-
tituto también es de verificación obligatoria de oficio por los jue-
ces, tal como lo dispone el arto 31 de la LNPA.
De las excepciones consagradas en el citado arto 32 de la LNPA
subsisten sólo dos situaciones:
a) "Se tratare de repetir lo pagado al Estado en virtud de una
ejecución o de repetir un gravamen pagado indebidamente", aspec-
to este último innecesario puesto que la repetición de tributos se
encuentra puntualmente tratada en la ley 11.683, de procedimien-
to tributario.
b) "Se reclamaren daños y prejuicios contra el Estado por res-
ponsabilidad extracontractual". Repárese que se habla de respon-
sabilidad extracontractual, por lo que las pretensiones derivadas
de responsabilidad contractual no quedan incluidas en la excep-
ción, a diferencia de lo que sucedía anteriormente, donde se encon-
traba exenta de reclamo previo la demanda por daños y perjuicios
contra el Estado, sin efectuarse tal distinción.
En los casos en que la presentación del reclamo administrati-
vo aparece notoriamente como una conducta destinada al fracaso,
por ejemplo, en casos en que muchos reclamos similares hubieran
ya sido desestimados; al haber sido derogado el inc. e del arto 32 de

cia cierta del procedimiento, transformando el reclamo previo en un


ritualismo inútil; se demandare a un ente autárquico, empresa del Es-
tado, sociedad mixta o de economía mixta, etcétera.
50 Para profundizar sobre esta doble vía de acceso a la jurisdicción,
véase el excelente trabajo de Beatriz SILVESTRI y Rafael GONZÁLEZ
ARZAC, "La instancia administrativa previa a lajudicial en la ley 19.549
(recursos y reclamos)", ED, 72-763.
278 EDUARDO ÁVALOS

laLNPA que justamente contemplaba esta hipótesis como causal


de excepción al reclamo, ¿qué actitud corresponde adoptar? La
respuesta proviene de lajurisprudencia. Así, la Sala 1 de la Cáma-
ra Nacional en lo Contencioso Administrativo Federal, ha soste-
nido que"[. .. ] lo relativo al ritualismo inútil traduce un principio
jurídico que subsiste como tal, no obstante haber sido normativa-
mente suprimido por la reforma que la ley 25.344 (art. 12) intro-
dujo al arto 32, inc. e, de la ley 19.549".51 En efecto, no se puede con-
denar al particular a atravesar el inservible camino del reclamo
administrativo previo cuando se tiene la absoluta seguridad de que
la Administración ya se ha manifestado reiteradamente en senti-
do contrario. 52 Ahora cuidado: esta causal de excepción no es apli-
cable al agotamiento de la vía administrativa por vía de recurso
administrativo, ya que cuando esta excepción tuvo consagración
normativa, sólo estaba referida al instituto del reclamo previo.
Tampoco es procedente el reclamo administrativo previo a la
demandajudicial-aun cuando no lo dice la ley- en casos en que
la pretensión contra la administración para su viabilidad requie-
re la declaración de inconstitucionalidad de una ley. Esto es ele-
mental por cuanto la Administración tiene vedada la posibilidad
de hacerlo.
Dentro de las modificaciones al arto 30 de la LNPA, el arto 12 de
la ley 25.344 hace extensivo el reclamo previo al Estado Nacional
y entidades autárquicas, entes estos últimos que anteriormente
se encontraban exceptuados. La mención específica a las entida-
des autárquicas hace que el reclamo administrativo previo no sea
necesario en el caso de tratarse de otras formas de descentraliza-

51 En autos "Ramos, Silvia del Milagro y otro el E.N. D.G.F.M. sI em-


pleo público", 18/09/2001,ED, edición del 27103/2002, pág. 15. En igual
sentido, "Castillo, Carlos Abraham y otros el Dirección General de Fa-
bricaciones Militares sI empleo público", 23/10/2001, ED, edición del
30/1112001, pág. 20.
52 Conf. CANOSA, Armando, op. cit., pág. 91.
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA NACIÓN 279

ción administrativa, como sería el caso de las empresas del Esta-


do en sus diversas modalidades. 53
En cuanto alos plazos para resolver el reclamo, el arto 31 de la
LNPA establece que la administración cuenta con noventa días
para pronunciarse, vencido este plazo se debe interponer pronto
despacho, y si transcurriesen otros cuarenta y cinco días (y la ad-
ministración no contesta) la demanda se deberá interponer "en los
plazos perentorios y bajo los efectos previstos en el arto 25, sin per-
juicio de lo que fuere pertinente en materia de prescripción".
Verdadero despropósito la redacción de este precepto. Ello así
por cuanto los plazos del arto 25 de la LNPA son plazos de caduci-
dad, y como tales, sustancialmente distintos a los de prescripción,
e incluso incompatibles entre sí, por lo que la redacción de la nor-
ma es poco feliz.
Pero lo más sorprendente es que interpuesto el pronto despa-
cho, y vencidos cuarenta y cinco días sin que la Administración se
pronuncie, el plazo para interponer la demandajudicial queda cap-
tado por los plazos de caducidad del arto 25. Absoluta diferencia con
el régimen anterior (antigua redacción del arto 31 de la LNPA) en
que expresamente se consignaba que frente al silencio la deman-
da podía interponerse en cualquier tiempo, salvo el plazo de pres-
cripción. Era una solución mucho másjusta por cuanto nunca des-
aparece la obligación de resolver un reclamo por parte de la
Administración, aun cuando la ficción de la denegatoria tácita
permita al interesado estar en condiciones de demandar. Vale de-
cir que ahora para la administración resolver o no un reclamo pro-
duce idénticos efectos jurídicos.
Pero además se ha omitido modificar el arto 26 de la LNPA54,
quitándole coherencia al sistema, pues esta norma consagra como
53 Conf. POZO GOWLAND, Héctor M., "Cambios en el contencioso admi-
nistrativo federal. El reclamo administrativo", ED, edición del 29/12/
2000, pág. 6.
54 Recordemos que dicha norma establece: "La demanda podrá iniciar-
se en cualquier momento cuando el acto adquiriera carácter definiti-
vo por haber transcurrido los plazos previstos en el arto 10 y sin per-
juicio de lo que corresponda en materia de prescripción".
280 EDUARDO ÁVALOS

principio general aplicable a la vía recursiva la posibilidad de in-


terponer la demanda en cualquier término (salvo la prescripción)
para los casos de silencio de la Administración. Por lo tanto, en caso
de demandas impugnatorias de actos administrativos, en que la
vía hubiese sido agotada por denegatoria tácita del recurso respec-
tivo, el plazo para demandar es el de prescripción, mientras que si
se trata de una demanda no impugnatoria de acto administrati-
vo, cuyo reclamo previo no fuere contestado, el plazo para deman-
dar es el de caducidad, previsto en el arto 25 de laLNPA de noven-
ta días hábiles judiciales. Una verdadera contradicción.
Una cuestión que queda sin respuesta, vinculada con el proble-
ma anterior, es el plazo para interponer la demanda no impugna-
toria de acto administrativo, una vez resuelto expresamente el
reclamo previo y, por supuesto, denegado. ¿El plazo para deman-
dar es el de prescipción o también el de caducidad? Como la ley nada
aclara, y como el plazo de caducidad es algo excepcional que debiera
surgir en forma expresa, se puede defender el cómputo del plazo
de prescripción de la acción. Ahora bien, tampoco esta solución
parece razonable, porque en definitiva sería menos extenso el plazo
para demandar cuando la Administración omite resolver el recla-
mo que cuando lo hace expresamente. Veremos qué deciden los tri-
bunales sobre este punto. Enlo personal, entendemos que no pue-
de hacerse valer un plazo de caducidad si no surge expresamente
del texto legal. Ante la duda un administrado diligente demanda-
rá respetando el plazo menor, o sea el de caducidad, para evitar
sorpresas.
Continuando con las modificaciones al arto 31 se permite al
Poder Ejecutivo por razones de complejidad o emergencia pública
extender entre ciento veinte (120) y sesenta (60) días los plazos para
resolver el reclamo y el pronto despacho, respectivamente. Esto
constituye un verdadero exceso.
Finalmente (y esto sí es positivo), se dispone que "la denegato-
ria expresa del reclamo no podrá ser recurrida en sede administra-
tiva", lo que viene a despej ar diversas interpretaciones doctrina-
rias acerca de si denegado expresamente un reclamo quedaba
expedita la demandajudicial, o bien a su vez había que impugnar
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA NACIÓN 281

el acto administrativo denegatorio mediante los recursos adminis-


trativos. Queda entonces claro que el acto administrativo que se
dicte en respuesta del reclamo previo es irrecurrible.

IV. LA SUSPENSIÓN DE ACTOS ADMINISTRATIVOS EN SEDE JUDICIAL

a) Medida de no innovar

Señala CASSAGNE55 que en el contencioso administrativo clási-


co, representado en Argentina por los Códigos Provinciales, la
única medida cautelar que se regulaba era la suspensión del acto
administrativo; es decir, la suspensión de su cumplimiento o eje-
cutoriedad. N o obstante, la ausencia de un código en el orden na-
cional condujo, tanto a la jurisprudencia como a la doctrina, a
recepcionar por analogía la figura de la llamada "prohibición de
innovar", legislada en el ordenamiento procesal civil. Sin embar-
go, también ha coexistido la aplicación -en sede judicial- de la
fórmula contenida en el arto 12 de la LNPA, que requiere: a) que se
alegue fundadamente una nulidad absoluta, es decir que se trate
de una nulidad manifiesta del propio acto; b) existencia de moti-
vos de interés público, y c) que se dicte para evitar perjuicios gra-
ves al interesado.
La medida de no innovar está regulada en el arto 230 del Códi-
go Procesal Civil y Comercial de la N ación. Dicho artículo dispo-
ne que: "Podrá decretarse la prohibición de innovar en toda clase
de juicio, siempre que: 1) el derecho fuere verosímil; 2) existiese el
peligro de que si se mantuviera o alterara, en su caso, la situación
de hecho o de derecho, la modificación pudiera influir en la senten-
cia o convirtiera su ejecución en ineficaz o imposible, y 3) la caute-
la no pudiere obtenerse por medio de otra precautoria.

55CASSAGNE, Juan Carlos, "Las medidas cautelares en el contencioso


administrativo", LL, 2001-B-I090.
282 EDUARDO ÁVALOS

Tal como lo hemos señalado en otra oportunidad56 , a diferencia


de lo que ocurre en el proceso contencioso administrativo de la
Provincia de Córdoba (ley 7182), donde la suspensión de los efec-
tos del acto administrativo resulta ser un verdadero incidente, que
debe ser planteado junto con la demanda y en el que interviene
activamente la administración57 , en el orden federal setrata de una
medida cautelar, y como tal, reune los siguientes requisitos: pue-
de ser interpuesta antes o después de la demanda (art. 195), debe
decretarse y cumplirse inaudita parte, debiendo ser notificado el
afectado con la medida dentro de los tres días si no hubiese tomado
conocimiento de la misma con motivo de su ejecución (art. 198). Es
requisito indispensable el ofrecimiento de contracautela por quien
obtiene una medida cautelar (art. 199), salvo que se trate de la
Nación o quien litigue actuare con beneficio de litigar sin gastos o
sea de reconocida solvencia. Tiene además carácter provisional,
es decir subsistirá mientras duren las circunstancias que motiva-
ron su otorgamiento (art. 202). Como consecuencia de ello, las re-
soluciones judiciales que recaigan a su respecto no causan estado
y pueden ser revisadas frente a un cambio de circunstancias. Ade-
más, las que se hubiesen ordenado y hecho efectivas antes del pro-
ceso, caducan en el plazo de diez días siguientes al de su traba, si
no se hubiese interpuesto la demanda en ese plazo (art. 207).
Esta medida cautelar no exige de los magistrados el examen de
la certeza sobre la existencia del derecho pretendido, sino sólo su
verosimilitud. Eljuicio de verdad en esta materia se encuentra en
oposición a la fmalidad del instituto cautelar, que no es otra cosa
que atender a aquello que no excede del marco de lo hipotético,
dentro del cual, asimismo, agota su virtualidad. 58
56 De nuestra autoría: "La ley de emergencia económica 25.344, las
reformas al Código Procesal Civil y Comercial de la N ación y el régi-
men de medidas cautelares en tiempos de 'déficit cero' y 'corralito' ",
Foro de Córdoba, Suplemento de Derecho Administrativo y Consti-
tucional, N° 8, Advocatus, Córdoba, 2002, págs. 11 y ss.
57 Véase in extenso arto 19 del CMCA (ley 7182).
58 GALLEGOS FEDRIANI, Pablo O.,Las medidas cautelares contra laAd-
ministración Pública, Ábaco, Bs. As., 2002, págs. 64 y ss.
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA XACIÓX 253

Los requisitos de verosimilitud del derecho invocado y el peli-


gro de la demora se encuentran interrelacionados, de modo tal que
a mayor verosimilitud del derecho cabe no ser tan exigente con la
gravedad e inminencia del daño, y viceversa, cuando existe el ries-
go de daño extremo e irreparable, el rigor acerca de aquella exigen-
cia se puede atenuar. Sin embargo, entendemos que aun cuando
de existir realmente peligro en la demora, debe encontrarse acre-
ditado, aunque mínimamente, la verosimilitud del derecho. 59
La verosimilitud del derecho no es sólo apariencia de buen de-
recho, sino que exige que pueda preverse, según un cálculo de pro-
babilidades, que en la sentencia de fondo se declarará el derecho
en sentido favorable al solicitante de la medida cautelar.
En materia de suspensión de actos administrativos, el peticio-
nante de una medida cautelar de no innovar deberá cumplir con
una carga adicional, esto es, que su argumentación deberá destruir
la presunción de legitimidad de que gozan los actos administrati-
vos de conformidad al citado arto 12 de la LNPA. En efecto, en este
aspecto, la verosimilitud del derecho juega a priori en favor del acto
administrativo en cuestión.
El peligro en la demora se vincula ya sea con la posibilidad de
que al dictarse sentencia definitiva la misma sea ineficaz o de im-
posible cumplimiento, ya sea con que se le provoque al accionante
un daño innecesario. No se trata de la hipótesis de daño irrepara-
ble, puesto que toda clase de daños, aun los que tienen contenido
espiritual, pueden ser resarcidos en alguna medida mediante la
correspondiente indemnización de daños y perjuicios.

b) Medida cautelar innovativa

La medida cautelar innovativa es una diligencia precautoria


excepcional que tiende a modificar el estado de hecho o de derecho
existente antes de la petición de su dictado, medida que se traduce
en la injerencia del tribunal en la esfera de libertad de los justicia-

59 Conf. GALLEGOS FEDRIANI, Pablo O., op. cit.


284 EDUARDO ÁVALOS

bIes a través de la orden de que cese una actividad contraria a de-


recho o de que se retrotraigan las resultas consumadas de un pro-
ceder antijurídico. 60
Esa medida importa la emisión de un mandato judicial a la
Administración para que ésta observe una conducta activa, es de-
cir no una mera abstención de ejecutar ciertos efectos, sino, direc-
tamente, una obligación de hacer. Tal clase de medida debe afian-
zarse en el proceso administrativo cuando la suspensión de los
efectos del acto no sea una respuesta cautelar efectiva para la pro-
tección peticionada. 61
La medida cautelar innovativa no tiene una recepción expre-
sa en nuestro ordenamiento procesal federal, por lo que prácti-
camente la figurajurídica de la medida de no innovar, regulada
en el arto 230 del CPCN, ha sido la herramienta procesal para su
implementación. Al menos la experienciajudicial así lo demues-
tra. Por lo tanto, los requisitos de procedencia de esta medida son
también la verosimilitud del derecho y el peligro en la demora,
analizados supra. En razón de que el dictado de una medida cau-
telar innovativa implica alterar el estado de hecho o de derecho
preexistente, los jueces deben actuar con suma prudencia, a fin
de resguardar el principio de división de poderes.
Por su parte, nuestro más alto tribunal ha considerado que los
recaudos de viabilidad de las medidas precautorias deben ser pon-
derados con especial prudencia cuando la cautela altera el estado
de hecho o de derecho existente al momento de su dictado, habida
cuenta de que configura un anticipo dejurisdicción favorable res-
pecto del fallo final de la causa. 62

60 Conf. PEYRANO, Jorge W., "La batalla por la medida cautelar inno-
vativa", ED, 178-964, citado por GALLEGOS FEDRIANI, Pablo O., op. cit.,
pág. 119.
61 Conf. COMADIRA, Julio Rodolfo, "Las medidas cautelares en el pro-
ceso administrativo" ,LL, 1994-C-699 y ss., citado por GALLEGOS FEDRIA-
NI, Pablo O., op. cit., pág. 119.
62 Fallos 316:1833; 320:1633, entre otros.
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA NACIÓN 285

c) Medida cautelar autónoma

La procedencia de esta medida se vincula con la suspensión de


los efectos de un acto administrativo solicitada por el accionante
en sede judicial, encontrándose pendiente todavía la resolución de
la vía administrativa, y su consiguiente agotamiento. Esta insti-
tución, que no tiene regulación en nuestro derecho, ha sido una
creación pretoriana frente a situaciones donde la denegatoria de
la cautelar más la imposibilidad procesal de interponer la acción
de fondo, originaría un agravamiento de los derechos, constituyen-
do un medio adecuado para poner límites a la prerrogativa admi-
nistrativa de ejecutar el acto, aun cuando éste no se encontrase fir-
me. Estas medidas precautorias "autónomas" no persiguen sino
como objetivo evitar el peligro de la demora agravado, a veces, por
los propios tiempos de la Administración en resolver un recurso, y
frente a la imposibilidad para el particular de acudir aún a la vía
judicial por no tratarse de un acto que cause estado. 63
En efecto, como ya se ha visto, es requisito necesario de inter-
posición de una acción contencioso administrativa el haber ago-
tado previamente la vía administrativa, es decir, obtener a través
de la interposición de los recursos necesarios en cada caso un acto
administrativo que cause estado. El ordenamiento jurídico permi-
te, asimismo, solicitar en sede administrativa,junto con la inter-
posición de un recurso, la suspensión de los efectos de un acto ad-
ministrativo. Sin embargo, respecto a esta última petición, la
Administración no tiene iguales plazos para expedirse que para
la resolución de los recursos, por lo que bien puede darse que la
Administración deniegue la suspensión de los efectos del acto ad-
ministrativo pendiente, aun la resolución de aquél, o que lisa y lla-
namente nada conteste.
Es así que el recurrente tiene en ciernes la ej ecución de un acto
administrativo lesivo a sus derechos y, además, por otro lado, no
puede interponer la acción contencioso administrativa por cuan-

63 Conf. REJTMAN FARAH, Mario, op. cit., págs. 165 y ss.


286 EDUARDO AVALOS

to no ha agotado aún la vía, corriendo el riesgo que de hacerlo, sea


rechazada in limine su acción. Es entonces frente a esta situación
que lajurisprudencia de algunos tribunales, con un sentido garan-
tista, ha admitido la interposición de una medida cautelar autó-
noma, es decir, sin pretensión de fondo adicional, con el sólo objeto
de obtener en sede judicial la suspención de los efectos de un acto
administrativo que está siendo recurrido en dicha sede. Para ello,
se ha debido hacer abstracción del principio de accesoriedad de las
medidas cautelares, yen particular de lo normado por el arto 207
del Código Procesal Civil y Comercial de la Nación, en cuanto dis-
pone que las medidas cautelares ordenadas y hechas efectivas antes
del proceso caducan en el plazo de diez días siguientes al de su tra-
ba' si no se hubiese interpuesto la demanda en ese plazo. Obvia-
mente que una vez finiquitada la vía administrativa, recién allí
se debe computar el plazo de caducidad de estas medidas cautela-
res autónomas, puesto que el administrado ya se encuentra en con-
diciones de demandar.
Así lo ha entendido la jurisprudencia al señalar que "Si en el
mismo momento de solicitar una medida cautelar en sedejudicial
se interpuso un recurso jerárquico en la vía administrativa, el plazo
a que se refiere el arto 207 del Código Procesal comenzaría acorrer,
o se reanudaría a partir del momento en el que quedara expedita
la víajudicial. La suspensión del plazo a que se refiere el arto 207
del Código Procesal se justifica, pues de otro modo quien obtiene a
su favor una medida cautelar se puede ver obligado a iniciar una
acción formalmente inadmisible a los fines de evitar la caducidad
de la primera". 64
Sin embargo, otros tribunales han sido sumamente restricti-
vos respecto a este instituto procesal. 65

64 Conf. Cám. Nac. Cont. Adm., Sala IV, 24/08/1994, en autos "Hisisa
Argentina S.A.I.C.I.F. el B.C.R.A. si juicio de conocimiento", ED, edi-
ción del 2710311996, págs. 1 y ss.
65 Como por ejemplo, la Cámara Federal de Córdoba, Sala B, que ex-
presó: "Esta Sala estima que la medida generalmente denominada
'medida cautelar autónoma' solicitada por el actor, no resulta una vía
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO El LA NACIÓN 287

d) Las llamadas "medidas autosatisfacti

Esta clase de medidas constituyen la últim a novedad que ex-


hibe el derecho procesal argentino y cuya aplic. cíón ha comenza-
do a propiciarse en el campo del proceso conten ioso administrati-
vo. Se trata de una medida que se caracteriza, al] argen de la tutela
judicial clásica, por la satisfacción definitivay( nica de la preten-
sión. El despacho de medidas autosatisfactivas reclama una fuer-
te probabilidad de que lo pretendido por el requ· riente sea atendi-
ble' y no la mera verosimilitud con que se co tenta la medida
cautelar. Su dictado acarrea una satisfacción 'definitiva" de los
requerimientos del postulante, y se genera un proceso que no es
tributario ni accesorio respecto de otro, agotánc ose en sí mismo. 66
Por tal motivo, no es necesaria la iniciación I e una ulterior ac-
ción princí pal para evitar su caducidad o decaí .ento, no consti-
tuyendo' por lo tanto, una medida cautelar, Po] más que en gene-
ral se la ha calificado como tal. Éstas son, en lír. eas generales, los

apta para lograr la protección de los derechos inv ocados, por cuanto
su procedencia se encuentra condicionada a la exi tencia de un juicio
previo, esto es a la existencia de una litis, conforme 11 estipula el arto 230
del CPCN. Es decir, que el derecho invocado po la actora debe ser
sometido al pertinente proceso con la debida inte ención de la con-
traria para la admisibilidad de la medida de no inn var solicitada, por
cuanto el fundamento básico y jurídico de la prob ibición de no inno-
var es el fin de asegurar la igualdad de las partes €n una controversia
judicial. A mayor abundamiento, corresponde afi mar que si bien el
accionante puede ejercer su derecho de peticiona: ante la autoridad
judicial, ello no implica la posibilidad de desnatUl alizar, modificar o
limitar, por vía de una medida precautoria, el trá ite previsto en el
ordenamiento procesal para lograr la satisfacci< n de los derechos,
pues el instituto de marras no configura la vía proc sal adecuada para
1

analizar el asunto planteado, pues ello sobrepasa os límites y moda-


lidades propias de la cautela" (en autos "Chiavassa, Réctor Rugo s/
medida de no innovar", 06/03/1998, Prot. B, fs. 94196).
66 Conf. GALLEGOS FEDRIANI, Pablo O., op. cit., págs. 133 y ss.
288 EDUARDO ÁVALOS

aspectos más sobresalientes con que se este instituto,


que no está demás aclararlo, no cuenta recepción normativa
expresa y fue receptado por primera vez la Corte Suprema de
Justicia de la N ación en forma reciente.
En lo que respecta a su aplicación en
ministrativo, los ejemplos más que la doctrina invoca,
tal como lo señala GUGLIELMIN068 , como el administrado que
requiere urgente una prestación J..U.'::;UJ.'-'UII'-'VU
vida, el aspirante a ingresar a ~a.."'ULlli.LU~."l"~
ga el derecho a participar en un concurso
requerido para el cargo disputado,
dad sede del concurso, o el empleado 1Ju.~IJU\,V
empleo por más de diez días y la-'C1\.ull.J.U"L"l
las actuaciones para defenderse
tran suficiente tutelajurisdiccional en
amparo, sin que sea preciso justificar el ""UJ.l-'l.\JV
remedio no convalidado
didas autosatisfacitvas.
N o obstante ello, algunos recientes ~111n1~e()S vinculados con
el acuciante conflicto entre ahorristas, ¡-u".L",u. ...,,,'"
Estado Nacional como consecuencia de
nerada a partir de la instauración de
ponibilidad los depósitos bancarios, UJ.\~U',J.v.1J.y pesificación
asimétrica mediante, han tenido fa acogida, aun en for-
ma excepcional por la Justicia. 69

67 CSJN, 07/08/1997, en autos "Carnacho .n.\-l./O>L,a., Mariano el Grafi Graf


S.R.L. y otros", ED, edición del 05/02/1998. dicha causa se adelan-
tó una prótesis de un antebrazo a un que demandó por el
daño sufrido, del que aquella lesión era
68 GUGLIELMINO, Osvaldo C., "Medidas contra la Adminis-
tración", en Actualidad en el Derecho ,N° 13, Ad-Hoc, Bs. As.,
2000, págs. 79 y ss.
69 En tal sentido, se ha sostenido que se de un proceso atípico,
que se agota en sí mismo con su sólo cu:m¡:mJ!lo.l€nto, que no se trata de
una verdadera contienda, ya que el favorable de la medida
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRAT O EN LA NACIÓN 289

v. LA EJECUCIÓN DE SENTENCIAS CONTRA NACIÓN y LA


EMERGENCIA PERMANENTE

a) Antecedentes

Del contenido de las sentencias que pu den recaer en el proce-


so contencioso administrativo, pueden d rivarse tres clases de
mandatos para la Administración conde ada: un hacer, un no
hacer y un dar. La sentencia que acoge favor blemente unademan-
da impugnatoria de actos administrativos uede, por un lado, dis-
poner que la administración realice una c nducta positiva (vgr.,
reincorpore a un agente dejado cesante) o egativa (vgr., se abs-
tenga de excluir a un oferente de unproce o licitatorio). El cum-
plimiento de este tipo de decisionesjudicial s se inscribe dentro de
lo que el Código Procesal Civil y Comercial e la N ación tiene pre-
visto para las obligaciones de hacer. Así, el rt. 513 dispone que en
caso de que la sentencia contuviese conde a a hacer alguna cosa,
si la parte no cumpliese con lo que se le or enó para su ejecución
dentro del plazo señalado por eljuez, se h á a su costa o se le obli-
gará a resarcir los daños y perjuicios proveni ntes delainejecución,
a elección del acreedor.
Es frecuente que los tribunales aplique astreintes para torcer
la vol untad remisa de la Administración. n este sentido, la im-
posición de sanciones conminatorias como ~ 'a legal de compulsión
para que el deudor procure al acreedor aqt ello a que está obliga-
do, ha sido aceptada por nuestro más alto ribunal, sobre la base
de facultades ordenatorias einstructorias. o

solicitada consume toda discusión ulterior, r sultando por tanto in-


oficioso y estéril la emisión de un pronunci iento de fondo en razón
que no existe cuestión sobre la que opinar. N obstante ello, en forma
excepcional, ha sido aceptada, al tratarse en 1 caso de una ahorrista
de edad avanzada (Cámara Federal de Cór oba, Sala A, en autos
"Heredia de Guzmán, Rosa e/ Estado N acion - medida autosatisfac-
tiva", Prot. 291, fs. 78/82, Seco 1).
70 En autos "Iturriaga, Ernesto e/B. C.R.A.", 27/1 2/1997, Fallos 320: 186.
290 EDUARDO ÁVALOS

Pero por obra y gracia de la permanente


ca, no es el mismo panorama cuando lau.vJLL.Lu'j-.Lu.""
acto administrativo está acompañada de
toria y el accionante pretende hacer
dena al Estado a abonar una suma de
Haciendo un poco de historia de la de este proceso,
podemos mencionar la controversia que se al principio de la
constitucionalización de nuestro país ·-..LV'J""X"T-cuando la Corte Su-
prema de Justicia de laNación expresó que
cional es soberano en su esfera y uu..L.L.U.......... ,,,,,,...

los otros dos poderes que participan del rrnh,I<:,...-n,n


pues por el arto 86 de la CN se declara que
nación que tiene a su cargo la uu..u..L.L""""'"

ponen restricciones y se lo condena al pago reparaCIOnes CIVl-


les, el Poder Judicial se colocaría en una inconcilia-
ble con la supremacía que la Constitución al jefe de la
N ación". 71
Esta concepción doctrinaria se basó
cho administrativo francés 72, que le impide
nistrativo avanzar sobre decisiones del Ej
nera de entender el principio de
prohibición de ejecutar el crédito declarado
garle el carácter de declarativo, lo que eX"prE~$alilllen1tese incorporó
enelart. 7° de la ley 3952 del año 1900, se enladoctrinafran-
cesa que sostiene que ningún poder que no el Legislativo pue-
de disponer sobre la forma, tiempo y orden que deben ser paga-
das las deudas del Estado. Así, . imperante73 que

71 En autos "Vicente Seste y Antonio


1:322.
72 Véase al respecto ABERASTURY, Pedro, "El
ejecución de sentencias contra el Estado", en ,",vror'n
va, Lexis Nexis, Bs. As., 2003, págs. 515 y ss.
73 En autos "Roselli, Eliseo d Fisco Provincia

1934, Fallos 171:431; "Fisco d


Fallos 193:337.
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA N, CIÓN 291

no correspondía dictar emplazamiento contra la na ión, ante los


preceptos de la Constitución que atribuyen al Poder Legislativo y
sólo a él la facultad de crear recursos, la de arreglar 1pago de las
deudas del Estado, y determinar en general el desti o de las ren-
tas que aquéllos produzcan.
Pero desde 1965 esta concepciónjurisprudencial cambió radi-
calmente pues a partir de la armonización de los al os intereses
públicos y los derechos individuales comprometido¡ es cuando el
juez debe entrar a ponderar la conducta estatal. 74 Al año siguien-
te, el día 7 de setiembre de 1966 dictó el alto tribuna el fallo "Pie-
tranera". Allí se sostuvo que "la regla del arto 7° de 1a ley 3952 (o
sea el carácter meramente declarativo de las sentenc. as) no es otro
que evitar que la Administración Pública pueda verse colocada, por
efecto de un mandato judicial perentorio, en situació de no poder
satisfacer el requerimiento por no tener fondos previl tos en el pre-
supuesto para tal fin o en la de perturbar la marcha normal de la
Administración Pública. Desde ese punto de vista, ( ice la Corte,
la norma aludida es razonable, pero en modo alguno: ignifica una
suerte de autorización al Estado para no cumplir las s ntenciasju-
diciales. Ello importaría tanto como colocarlo fuera elordenju-
rídico, cuando es precisamente quien debe velar co más ahínco
por su respeto. Por ello, ha dicho este tribunal que el arto 7° de la
ley 3952 no descarta la pertinencia de una intervenciónjudicial
tendiente al adecuado acatamiento del fallo, en el supuesto de una
irrazonable dilación de su cumplimiento por la Adr inistración
Pública." En tales circunstancias, consideró aceptablE una senten-
cia que no fijaba plazo para su cumplimiento pero rel uería al Es-
tado Nacional que manifestara en qué fecha laiba a I umplir, con
la advertencia de que en caso de silencio o ante lafijació de un plazo
irrazonable el mismo sería fijado judicialmente.
De ahí pasamos a otro período caracterizado por la ejecución
forzada de las sentencias como regla. Me estoyrefiriE ndo al lapso

74 Enautos "Novaro de Lanús, N oemÍ y otros d La N aciÓ1 sI desalojo",


29/12/1965, Fallos 263:554.
292 EDUARDO ÁVALqS
I
¡

comprendido entre mediados de la década del '70 y hasta media-


dos de los '80, en que prácticamente todas las sentencias judicia-
les eran ejecutadas coactivamente, vencido un exiguo plazo de
generalmente veinte o treinta días para su cumplimiento, que fi-
jabanlos tribunales. No había en esa é.poca decisiónjudicial algu-
na que no fuera cumplida mediante su.cesivos embargos, ya que
cuando se trababa el primero y se cobraba, había quedado -por
efecto de lainflación-desactualizado el crédito, lo que generaba
nuevas planillas, nuevos embargos y cmitas adicionales. Así, se lle-
garon a trabar embargos sobre fondos públicos dispuestos para el
pago de salarios, o para la compra de insumos de hospitales públi-
cos' o destinados a la prestación de un servicio público, lo que fue
un verdadero abuso.
Luego se comenzó a recorrer el camino inverso. Luego de la
vuelta a la democracia a partir de 1988, cada gobierno ha tenido
su propia legislación de emergencia con las consiguientes impli-
cancias en el tema que analizamos. Así, y sin pretender abarcar la
totalidad de las medidas adoptadas, sino simplemente mencionar
algunas de ellas, a los fines ilustrativos, el entonces Presidente
doctor Raúl Ricardo Alfonsín por decreto 1096/85 declaró la emer-
gencia por la cual cambió la moneda (el austral) e instituyó el
"des agio" de las obligaciones. También, por decreto N° 2196/86, ins-
tituyó el estado de emergencia previsional suspendiendo la trami-
tación de pleitos de esa índole incluidas las ejecuciones de senten-
cias. Luego, mediante el decreto N° 679/88, estableció un sistema
de ejecuciones de sentencias difiriendo su satisfacción para uno o
más ejercicios presupuestarios. Por su parte, bajo la presidencia
del Dr. CarlosS.Menemsedictóenelaño 1989laLeydeReformadel
Estado N° 23.696, que entre otras cosas dispuso la suspensión por
dos años del cumplimiento de sentencias judiciales condenatorias
para el Estado, aun cuando fueron contempladas numerosas excep-
ciones; como también la ley 28.697 de Emergencia Económica. No
fue suficiente la suspensión de ejecuciones de sentencias, puesto
que por decreto de necesidad y urgencia 34/91, fue suspendida por
ciento veinte días la tramitación de todos los juicios que tuvieran
por objeto el cobro de sumas de dinero eontra la Administración

C-_~ __ ~ _ __
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA NACIÓN 293

Pública. También ese año tuvo sanción la ley 2 .982 de Consoli-


dación de Pasivos Estatales, y además, a partir de allí se incluye-
ron en cada ley de presupuesto-enforma casi istemática-dis-
posiciones sobre el cumplimiento de sentencias o comprendidas
en dicha consolidación, fijándose como principio e de cumplimiento
de las sentencias judiciales previa previsión presu uestaria. Duran-
te el gobierno del Dr. Fernando de la Rúa se san ionó la ley 25.344
(B. O. del 2111112000 ), que declaró en emergenci la situación eco-
nómico financiera del Estado Nacional, la prest ción de los serVÍ-
cios, y la ejecución de los contratos a cargo del ector público na-
cional. Finalmente, a poco del dictado del dec eto 1570101 que
instauró el llamado "corralito", y tras la asunci' n del presidente
provisional, Dr. Eduardo Duhalde, el Congreso e laNación dictó
la ley de Emergencia Pública y Reforma del Ré .men Cambiario
N°25.561 (B.O. del 07/0112002), que delegó ene Poder Ejecutivo
-con invocación del arto 76 de la CN- el reord namiento del sis-
tema financiero, bancario y del mercado de ca bios, y dio térmi-
no a más de diez años de convertibilidad y parid d uno a uno conla
divisa norteamericana. En ejercicio de tal deleg ción, surgió el de-
creto 214/02 que, tras la devaluación de la mo eda, dispuso la
pesificación de las obligaciones de dar sumas de dinero, de cual-
quier causa u origen, expresadas en dólares e tadounidenses u
otras monedas extranjeras, y de los depósitos e dichas monedas
existentes en el sistema financiero. Luego, y aú en forma conco-
mitante, surgió una vorágine normativa, con archas y contra-
marchas integrada por resoluciones del BCRA del Ministerio de
Economía que fijaron confusos esquemas de re rogramación de
depósitos y excepciones a dicho régimen, hasta 1 implementación
de un sistema voluntario de canje de depósitos p r bonos del Teso-
ro. 75
Ante la contundencia de esta cronología, so
Sólo cabe recordar que "los argentinos hemos

75 Para más detalles véase Cámara Federal de Córdo a, SalaA, en autos


"Lema, Armando E. y otra sI amparo", Prot. 293, f. 62.
294 EDUARDO ÁVALOS

siglo XX con el derecho de propiedad de distintos grupos minori-


tarios retaceado, suspendido o disminuido. Hemos transformada
la emergencia económica, que es transitoria y accidental, en lll!.Ia .
situación permanente de la vida, lo cual perturba y obstaculizas .
desarrollo económico y espiritual de nuestra sociedad". 76

b) La situación actual

1) La consolidación de deudas

En la actualidad coexisten dos regímenes de consolidación de


deuda. El más antiguo implementado por laley 23.982, que abar-
có las obligaciones de causa o título anterior al1 de abril de 1991.
En el marco de un importante debate doctrinario con opiniones a
favor y en contra, la Corte Suprema de Justicia de la Nación de-
claró la validez constitucional de este sistema de cancelación d~
pasivo estatal en diversos precedentes, enlos cuales sostuvo que
"[ ... ] los derechos reconocidos por la Constitución Nacional no SOE.
absolutos y están sujetos alas leyes que reglamenten su ejercicio
(art. 28), por lo que en momentos de perturbación social y econ~
mica es posible el ej ercicio del poder del Estado en forma más ge-
nérica que la admisible en períodos de sosiego y normalidad, pues
acontecimientos extraordinarios justifican remedios también ex-
traordinarios. Asimismo, ha dicho que el régimen de consolidación
instaurado por la ley no priva a los particulares de los beneficios
patrimoniales derivados de la sentencia, ni afecta la sustancia de
los derechos reconocidos, sino que sólo suspende temporalmente
la percepción íntegra de los montos recibidos (véase CSJN, Fallos
316:3176; 317:739; 318:1887; 320:2756)".
De conformidad con estas pautas, se siguió una tendencia bas-
tante restrictiva en el sentido de que todo se consolida a menos que

76CRIVELLI, Julio César, La emergencia económica permanente, Ába-


co, Bs. As., 2001, pág. 27.
-
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA NACIÓN 295

se aleguen y demuestren circunstancias especiales que justifiquen


un apartamiento del régimen. Es lo que ocurrió en el caso "Iache-
met" (Fallos: 316: 779) en razón de la avanzada edad de la actora;
"Escobar" (Fallos: 318: 1593) por la necesidad de atender alas gra-
vísimas lesiones sufridas por el actor; "Gutiérrez" (Fallos 321: 1984)
donde el alto tribunal tuvo en cuenta la necesidad de atender gas-
tos de rehabilitación compredidas. 77
El Capítulo V de la ley 25.344 implementó una continuación del
régimen de consolidación de la deuda pública instrumentada en
el año 1991 mediante la ley 23.982. Así, se estableció una nueva
consolidación de deudas respecto a obligaciones vencidas o de causa
o título posterior a131 de marzo de 1991 y anterior al1 de enero de
2000. Es decir que las obligaciones que temporalmente no fueron
alcanzadas por el régimen anterior, quedaron captadas por el actual.
Posteriormente, la ley 25.725 (E. O. del 1O/O 1/2003), en su arto 58,
prorrogó la fecha de corte establecida en la ley 25.344 (para todo tipo
de juicios) y la fij ó hasta e13l de diciembre de 2001.
Se incluye en este régimen a todos los entes comprendidos en
su momento en el arto 2° de laley 23.982, como además los entes de
carácter binacional y multinacional en los cuales el Estado tenga
participación. Queda excluida la ciudad autónoma de Buenos Ai-
res, el INDERy obligaciones previsionales a cancelarse en efecti-
vo' segúnlaley25.237, o consolidadas por laley23.982 a cuyo res-
pecto no se hubieran recibido los bonos correspondientes. También
están fuera del sistema las deudas corrientes y las inferiores a pe-
sos un mil ($1000), de conformidad a lo establecido por el arto 7°
del decreto reglamentario 1116/2000. 78
Se prevé la cancelación de las deudas en efectivo de acuerdo
a los recursos que anualmente contenga la Ley de Presupuesto

77 Rurz DE ARRIGO, Mara, "La importancia de las excepciones (en rela-


ción al régimen de consolidación de bonos)", LL, Suplemento de De-
recho Administrativo, edición del 29/09/2003, pág. 56.
78 Para mayores detalles del régimen de consolidación implementado
por la ley 25.344, consultar dicho decreto reglamentario.
296 EDUARDO ÁVALOS

de la Administración Nacional, en un plazo máximo de hasta die-


ciséis años. Alternativamente a esa forma de pago, los acreedo-
res podrán optar por suscribir a la par, por el importe total o par-
cial de su crédito, bonos de consolidación en moneda nacional o
en dólares estadounidenses. Sin embargo, tras la pesificación
de la economía implementada por el decreto 214/02, quedó ve-
dada la posibilidad de la opción a bonos expresados en dólares
estadounidenses. 79
El arto 18 de la ley 25.344 permite excluir del sistema de pago
de obligaciones mediante bonos de consolidación cuando mediaren
circunstancias excepcionales vinculadas a situaciones de desam-
paro e indigencia en los casos en que la obligación tuviere carác-
ter alimentaria. Recientemente, la Corte Suprema de Justicia de
la Nación confirmó una resolución que había excluido del pago con
bonos la condena indemnizatoria impuesta al Estado Nacional por
daños y peIjuicios que había sufrido un recién nacido durante el
parto, al contraer parálisis cerebral severa. 80

2) Las leyes de presupuesto (o lo que está fuera de la


consolidación)

Ahora bien, si un crédito escapa a la consolidación, ya sea por-


que el órgano deudor está excluido de la misma, o porque tempo-
ralmente es posterior a131 de diciembre de 2001 o porque cae en
alg-una de las pocas excepciones o por ser de monto inferior al pre-
visto ($200 en la ley 23.982, y $1000 en la 25.344), no vayamos a
pensar que el acreedor puede cobrar prontamente. Por el contra-
rio, entran ajugar aquí -salvo que se trate de una acción de ex-
propiación, que debe ser pagada sin restricciones, de conformi-
dad la doctrina de la CSJN en autos "Servicio Nacional de Parques

79Véase decreto 1873/2002.


80CSJN, 02/06/2003, en autos "Camal, Liliana B. y otro d Hospital
Churruca Visca",LL, Suplemento de Derecho Administrativo, edición
del 29/09/2003, pág. 56.
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA NACIÓN 297

Nacionales cl Franzini, Carlos y/o propietarios de Finca 'Las


Pavas' "s1-las disposiciones de distintas y sucesivas leyes de pre-
supuesto que han ido forjando todo un sistema de cumplimiento de
sentencias en base al principio de previsión presupuestaria pre-
via, como también, han establecido restricciones a la posibilidad
de ejecutar coactivamente una sentencia, al declararinembarga-
bIes los fondos públicos. Al respecto existe, por un lado, laley 11.672
(ley complementaria permanente de presupuesto) cuyo último texto
ordenado data de 1999 (decreto 689/99), y luego a esto se le adicio-
nanlas leyes de presupuesto posteriores. Todas contienen alguna
disposición sobre este tema, las que van integrando el conglome-
rado de normas permanentes de la ley 11.672.
En un primer momento, en el año 1991, el arto 22 delaley23.982
estableció que las deudas que escapaban al régimen de consolida-
ción, debían ser abonadas previa afectación presupuestaria de
los recursos pertinentes, pero si no se incluía ese gasto en la ley
o no se trataba el presupuesto (cosa frecuente en algún momen-
to) quedaba expedita la ejecución coactiva del crédito. Sin embar-
go, años después se incluyó en la Ley de Presupuesto para el año
1996, N° 24.624, la siguiente cláusula: "Los fondos, valores y de-
más medios de financiamiento afectados ala ejecución presupues-
taria del sector público, ya sea que se trate de dinero en efectivo,
depósitos en cuentas bancarias, títulos, valores emitidos, obliga-
ciones de terceros en cartera y en general, cualquier otro medio de
pago que sea utilizado para atender las erogaciones previstas en
el presupuesto general de la N ación, son inembargables y no se ad-
mitirá toma de razón alguna que afecte en cualquier sentido su libre
disponibilidad por parte del o los titulares de los fondos y valores
respectivos" .
Asimismo, se estipula el automático desembargo de los bienes
mencionados que hubiesen sido cautelados. Además, se establece
que los pronunciamientosjudiciales-que queden fuera de la con-
solidación- serán satisfechos dentro de las autorizaciones para

81JA,1995-IV-280.
298 EDUARDO ÁVALOS

efectuar gastos contenidas en el presupuesto respectivo. También


establece que las sentencias dictadas contra sociedades del Esta-
do S.A., con participación estatal mayoritaria, sociedades de eco-
nomíamixta, empresas del Estado o cualquier otro ente en que el
Estado tenga participación total o parcial, en ningún caso podrán
ejecutarse contra el Tesoro Nacional, limitándose la responsabi-
1idad del estado a su aporte o participación en dichas organizacio-
nes empresariales.
La Ley de Presupuesto para el año 2002 N° 25.565 (B. O. del 211
03/2002), en sus arts. 39 a 43, contiene también disposiciones in-
herentes a la satisfacción de las sentencias judiciales. Como prin-
ci pio general, se ratifica la mecánica establecida en legislaciones
anteriores respecto a que el pago de las sentencias se efectuará en
la medida que exista disponibilidad de previsiones presupuesta-
rias, sin perjuicio de los regímenes de la ley 23.982 y 25.344. Se
establece que en caso que el presupuesto correspondiente al ejer-
cicio financiero en que la condena deba ser atendida carezca de
crédito presupuestario, el Poder Ejecutivo nacional deberá efec-
tuar las previsiones necesarias a fin de su inclusión en el ejercicio
siguiente, a cuyo fin las entidades demandadas deberán tomar co-
nocimiento fehaciente de la condena antes del 31 de julio del año
correspondiente al enVÍo del proyecto de ley de presupuesto, debien-
do remitirse ala Secretaría de Hacienda, antes del 31 de agosto, el
detalle de las sentencias firmes a incluir en el citado proyecto.
En realidad, más que las sentencias en sí, que muchas veces no
contienen el pago de sumas líquidas, lo importante es remitir la
liquidación aprobada y firme a fin de poder serincluido el crédito
en la ley de presupuesto correspondiente. La satisfacción de los
créditos será en base a la antigüedad de la fecha de notificación
judicial de las sentencias. Sin embargo, no hay sanción algunafren-
te a la omisión de incluir el crédito en el respectivo presupuesto.
Elart.22delaley23.982,anuestrojuicio,contrastaconlaprohi-
bición de embargo antes aludida, por lo que entendemos que ha sido
derogado implícitamente por una norma posterior.
Cabe agregar que ha sido declarada inconstitucional una reso-
lución del Ministerio de Economía, la N° 71/99, que dispuso que la
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA NACIÓN 299

amortización de los bonos de consolidación de deuda se abonaría


mediante la emisión de nuevos bonos adicionales al mismo plazo
que los primitivos, porque atenta contra la devolución gradual del
crédito que es la amortización. 82
En síntesis: si se trata del pago de una obligación de dar suma
de dinero, y no queda atrapada por alguna de las dos leyes de con-
solidación vigentes (23.982 y 25.344), ello no significa que quede
libre de obstáculos la realización de la sentencia. Por el contrario,
a falta de consolidación, la suma mandada a pagar se abonará en
base a los recursos presupuestarios que se prevean en el ej ercicio
siguiente, debiendo el interesado cerciorarse que su crédito haya
sido efectivamente incluido en tal previsión. Si el crédito no entra
en el presupuesto, podemos preguntarnos si corresponde aplicar
el principio contenido en el arto 22 de la ley 23. 982 (o sea posibili-
dad de ejecución coactiva). Sin embargo, esta alternativa es iluso-
ria, porque no se puede embargar prácticamente nada, salvo qui-
zá algún bien de dominio privado del Estado. Así, por ejemplo, se
ha dispuesto que las prescripciones de la ley 24.624 no sugieren la
inembargabilidad de los bienes muebles de los organismos cuya
integridad patrimonial protege la norma83 , o bien que los recursos
de las empresas del Estado no pueden ser asimilados a aquellos que
se encuentran afectados al cumplimiento del presupuesto general
de la Administración N acional, pues dichas sociedades tienen un
régimen presupuestario diferente. 84

82 Cám. Nac. Trab., Sala VI, 26/03/2001, en autos "Solleiro, Ángel y otros
el PROARTEL S.A. (Canal 13)", LL, edición del 06/08/2001, pág. 7.
83 Cám. N ac. Fed. Civ. y Com., Sala 1, 29/08/1996, en autos "Sassi, Pedro

el Caja Nac. de Ahorro y Seguro", LL, edición del 17/02/1997, pág. 7.


84 Cám. N ac. Fed. Civ. y Com., Sala Il, 20/11/1997, en autos "La Bue-
nos Aires Cía. de Seguros el Capitán y/o Arm. y/o Prop. Buque La Pam-
pa)", LL, edición del 25/02/1998, pág. 11.
300 EDUARDO ÁVALOS

3) La emergencia en emergencia

Asimismo, como broche de oro, el Estado como consecuencia del


"defaulf'tampoco está atendiendo-salvo contadas excepciones-
con el pago de los servicios de intereses y amortización de capital
de bonos de consolidación ya emitidos yen poder de los acreedores.85
La Ley de Presupuesto para el año 2004 N° 25.827 en su arto 59 ha
continuado con el diferimiento de pago de los servicios de deuda
pública contraída originariamente con anterioridad al31 de di-
ciembre de 2001, o en virtud de normas dictadas antes de esa fe-
cha, hasta que el Poder Ejecutivo Nacional declare la finalización
del proceso de reestructuración de la misma. 86 De este modo, se ha
sancionado con fuerza legal el "default" de los títulos públicos an-
teriores al31 de diciembre de 2001, es decir, se continuará pagan-
do la deuda pública posterior a esa fecha, que el Estado Nacional
ha asumido como complemento de la deuda privada entre los ban-
cos y los ahorristas en plazos fijos u otras obligaciones, que son los
títulos boden. Se produce de este modo una diferencia de trato en
perjuicio de los acreedores.
Asimismo, al alcanzar eldefault a tenedores de bonos de consoli-
dación que los han recibido compulsivamente en pago de sentencias
judiciales, selos está equiparando con aquellos inversores que, se-
gún se dice, aceptaron el riesgo de adquirir bonos conjugosísimos
intereses, y se los califica de "fondos buitres", porque quien recibió
bonos consolidados por ser ganador de unjuicio, o como proveedor o
en pago de honorarios, que no sean de las causales de excepción, no
puede tener igual trato que quien los obtuvo por sola especulación
financiera. 87

85 Véase al respecto laley 25.565, arto 6°; el decreto 256/02 y las resolu-
ciones N° 73/2002, 350/2002 Y158/2003 del Ministerio de Economía.
86 El arto 60 de la referida ley 25. 827 establece una serie de excepcio-

nes.
87 A mayor abundamiento, véase ERIZE, Luis Alberto, "La cesación de

pagos a los acreedores de deudas consolidadas por las leyes de emer-


gencia 23.982 y 25.344", LL, edición del 29/10/2003, págs. 1 y ss.
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA NACIÓN 301

Entonces, respecto alos bonos de consolidación ya emitidos, se


presenta, por un lado, la pesificación de los emitidos en dólares, y
por el otro, la suspensión de los servicios de amortización de capi-
tal y pago de intereses.
Un tenedor de bonos de consolidación en dólares inició acción
de amparo tendiente a que se declare la inconstitucionalidad del
decreto 471/2002 que pesifica las obligaciones del sector público
nacional a razón de $1,40 por cada U$S 1. Eljuez de la Instancia
hizo lugar al amparo, y la Cámara declaró desierto el recurso de
apelación. ss En primera instancia se señaló que la pesificación for-
zosa de obligaciones del sector público nacional resulta violatorio
al derecho de propiedad, en tanto impone unilateralmente y enfor-
ma obligatoria la conversión de un empréstito, sustituyendo sus
términos sin el consentimiento ni conformidad del acreedor, vio-
lando las normas que regulaban la emisión del título originario.
Además que el decreto 471/2002 dej a al margen de sus disposicio-
nes a las obligaciones del sector público regidas por leyes extran-
jeras, otorgando distinto tratamiento para los acreedores del Es-
tado. En efecto, el decreto 471 sólo alcanzó a acreedores de títulos
públicos del sector público nacional regidos por la ley argentina,
con la exclusión de los regidos por la ley extranjera. Ello, segura-
mente, ha tenido la finalidad de evitar que el Estado Nacional sea
condenado por tribunales extranjeros, si se hubiera afectado el de-
recho de propiedad de los acreedores cuyos créditos están regidos
por laleyextranjera.
Podemos señalar además otro precedente, donde se hizo lugar
a una medida cautelar innovativa consistente en que el Estado
abonara los servicios de capital e intereses de bonos de consolida-
ción caídos endefault. 89
También han recaído pronunciamientos donde dada la impo-
sibilidad de emitir bonos de consolidación en dólares como había

88 Cám. Nac. Fed. Cont. Adm., Sala n, 08/08/2002, en autos "Falcón,


Isabel el Ministerio de Economía - amparo ley 16.986".
89 Cám. Fed. Córdoba, Sala A, en autos "Morales, Laura el Estado N a-

cional- amparo", 29/05/2003.


302 EDUARDO ÁVALOS

optado elinteresado, la Justicia ordenó al Estado depositar bonos


expresados en pesos pero por el valor de la acreencia originaria en
dólares, de acuerdo a la cotización del dólar libre. 90 Incluso, han
surgido algunos pronunciamientos judiciales que han ordenado al
Estado Nacional que abone a un tenedor de Bonex serie 1992 las
sumas respectivas sin pesificar. 91 Es de trascendencia económica
esta decisión, pues los títulos bonex 1992 forman parte de la deuda
pública en mano de particulares.
Finalmente, con motivo de una acciónjudicial iniciada por un
ciudadano tenedor de Bontes 2005, que voluntariamente aceptó la
oferta de canje de títulos de la deuda pública que el Poder Ej ecuti-
voimplementó mediante decreto 1646/01, seha declarado laincons-
titucionalidad del art.1 o del decreto 471/02, ordenando al Estado
mantener el empréstito del actor en dólares. 92
En definitiva, la pretensión deljusticiable no quedará satisfe-
cha con la sentencia que declare si está o no fundada, sino cuando
lo mandado en ella sea cumplido. Como señala GONZÁLEZ PÉREZ93 ,
si la sentencia declara que la pretensión es conforme al ordena-
miento jurídico y accede alo pedido, la tutelajurisdiccional no será
efectiva hasta que se efectúe el mandato judicial y el que accionó
obtenga lo pedido.
Desde el carácter meramente declarativo delas sentencias con-
tra el Estado, establecido en el año 1900, hasta el pago de senten-
cias con bonos defaulteados cien años después, vemos que lahisto-
ria poco ha cambiado.

90 Juzg. Fed. N° 2 Mendoza, en autos "Cortez, Jesús y otros el Ferro-


carriles Argentinos sI laboral", confirmado por la Cámara Federal de
Apelaciones de Mendoza, 18/12/2003.
91 Juzg. Cont. Adm. Fed. N° 9, en autos "Coppo, Cora Eugenia el P.E.N.
-ley 25.561- dtos. 1570101 y 214/02 sI amparo".
92 Cám. N ac. Civ. y Como Fed., Sala 1, 11/03/2004, en autos "Civit, Féliz
Guillermo el Poder Ejecutivo Nacional sI amparo".
93 GONZÁLEZ PÉREZ, Jesús, El derecho a la tutela jurisdiccional, Civitas

S.A., Madrid, pág. 131.


EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN LA NACIÓN 303

ACTIVIDAD DE AUTOEVALUACIÓN

1) ¿Qué herramientas normativas rigen la impugnaciónjudi-


cial de actos administrativos en el orden nacional?
2) ¿Qué son los llamados "recursos judiciales directos" contra
actos administrativos y qué ejemplos puede mencionar?
3) ¿Qué es la habilitación de la instanciajudicial?
4) ¿Cuáles son los requisitos de habilitación de la instanciaju-
dicial en las acciones impugnatorias de actos administrativos en
el orden nacional?
5) ¿Qué entiende por "reclamo administrativo previo a la de-
mandajudicial" y cómo está regulado enla LNPA?
6) ¿Cómo se suspenden los efectos de los actos administrativos
en sedejudicial federal?
7) ¿En qué difiere la respuesta anterior con respecto a: 1) me-
dida cautelar innovativa, 2) medida cautelar autónoma, y 3) medi-
da autosatisfactiva?
8) ¿Qué significa el caractermeramente declarativo de las sen-
tencias en el orden nacional y cómo lo interpretó lajurispruden-
cia?
9) ¿En qué consiste el régimen de consolidación de deudas se-
gún la ley 25.344 y qué mecanismo de pago establece?
10) ¿Cómo es la mecánica de pago de las sentencias que conde-
nan al pago de una suma de dinero pero que están fuera de la con-
solidación?
Capítulo XIV
EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS DE LAS
IRREGULARIDADES ADMINISTRATIVAS

Por Jorge Orgaz

Sumario: I. Introducción. Il. La Fiscalía de Investi-


gaciones Administrativas. IIl. El Defensor del Pue-
blo. IV. La Oficina Anticorrupción. V. Análisis com-
parativo entre la Fiscalía de Investigaciones Admi-
nistrativas, el Defensor del Pueblo Nacional y la
Oficina Anticorrupción Nacional.

l. INTRODUCCIÓN

En el presente capítulo analizaremos la naturaleza, caracte-


rísticas y funcionamiento de la Fiscalía de Investigaciones Admi-
nistrativas' el Defensor del Pueblo y la Oficina Anticorrupción,
instituciones integrantes del sistema de control de la Administra-
ción Pública nacional y provincial.
Pese a que en muchos casos observaremos límites difusos y su-
perposición de competencias entre las mismas, resulta imprescin-
dible recordar que la idea rectora en esta materia reside en que cada
una de las manifestaciones de la actividad administrativa sea fis-
calizada alos fines de garantizar la plena vigencia de los derechos
fundamentales de la ciudadanía.
Creemos que es preferible la confluencia entre estos organis-
mos que dejar alguna zona libre de su alcance, confiando en que
los inconvenientes de técnica legislativa serán superados toman-
306 JORGE ORGAZ

do en consideración los resultados obtenidos por cada uno de ellos


en el transcurso del tiempo.
Estamos convencidos, en definitiva, que el perfeccionamiento
de los mecanismos de control del poder producirá el fortalecimiento
del régimen republicano como condición imprescindible para el
desarrollo integral de nuestro país.

11. LA FISCALÍA DE INvESTIGACIONES AnMINISTRATIVAS

A Antecedentes

1) Antecedentes nacionales

El primer antecedente de la actual Fiscalía de Investigaciones


Administrativas (a partir de aquí, FIA) fue la Comisión Ejecutiva
Investigadora de Irregularidades en la Administración Pública
Nacional,creadaporeldecreto~56681 del 22 dejunio del año 1962.
Estaba constituida por un presidente y seis miembros depen-
dientes en forma directa del Presidente de la N ación. Su principal
función consistía en investigar de oficio o a solicitud de parte toda
clase de irregularidades cometidas en el ámbito de la Administra-
ción Pública nacional, entidades autárquicas y empresas del Es-
tado.
Su existencia fue más que efímera, pues sólo una semana más
tarde, a través del decreto N° 6111 2 , se la reemplazó por la Comi-
siónNacional de Investigaciones, que mantuvo la estructura y los
aspectos sustanciales de su predecesora.
A su vez, en setiembre del mismo año se dictó el decreto 10.0263 ,
que determinó que todas las actuaciones que venían sustancián-

1 Adla, XXIl-A-502.
2 Adla, XII-A-508.
3 Adla, XXIl-A-742.
EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS IRREGULARIDADES... 307

dos e ante dicha comisión continuarían su curso en la Secretaría


de Informaciones del Estado.
El 24 de octubre de 1962 por decreto N" 11.2654 se puso fin a tanta
inestabilidad institucional creándose la FIA. Entre los fundamen-
tos que justificaban su dictado, se señala que la investigación de
los actos de los funcionarios públicos y la calificación de su conducta
es una función permanente del Estado, que dicha tarea debía es-
tar a cargo de órganos Jndependientes del Poder Ejecutivo y que
debía garantizarse lapublicidad de las investigaciones sin afectar
la eficacia de los procedimientos llevados adelante por esta insti-
tución.
La FIA integraba el Ministerio Público a cargo del Procurador
General de la Nación. Estaba compuesta por un Fiscal General con
rangoequivalenteaunfiscaldeCámarayportresfiscalesadjun-
tos, cuyajerarquía era equiparable a la de los fiscales de primera
instancia.
Posteriormente, esta normativa sufrió reformas menores con
el dictado de los decretos N"14.0965, a finales del año 1962, y N" 43226
YN" 87257 en 1963, que permitieron aclarar algunas de sus disposi-
ciones y reglamentar otras, pero sin alterarla en su contenido fun-
damental.
Pasada más de una década, el13 de agosto de 1976, se dictó el
decreto-leyN°21.3838 ,queintrodujounaseriedecambiosenlaFIA
con el objeto adaptar su funcionamiento a los requerimientos de
aquel momento.
Precisamente, una de las principales innovaciones consistió en
ampliar y otorgar mayor jerarquía a sus autoridades como, por
ejemplo, a su Fiscal General, que pasó a tener la misma categoría
que la del Procurador General de la N ación.

4 Adla, XXIl-A-780.
5 Adla, XXIII-A-9.
6 Adla, XXIII-B-830.

7 Adla, XXIII-C-1845.
8 Adla, XXXVI-C-2081.
308 JORGE ORGAZ

Finalmente, en el año 1998 se dictó la ley N° 24.9469 , reglamen-


taria del Ministerio Público (en adelante LRMP) , incorporado por
el nuevo arto 120 de la Constitución Nacional a través de su refor-
ma de 1994, y que regula a la FIA de forma integral y sistémica a
partir de su arto 43. 10

2) Antecedentes provinciales

El ejemplo de la FIA fue imitado por diversas provincias argen-


tinas que establecieron sus propios organismos de contralor de las
irregularidades administrativas, fundamentalmente a partir de
la recuperación de las instituciones democráticas en 1983.
Fueron los casos de Chaco mediante la sanción de la ley N° 3468,
Formosa, en el art. 149 de suCartaMagnalocal,LaPampa, en el
arto 107 de su Constitución Provincial, y Río Negro, a través de la
ley N° 2394. 11

B. Ubicación y naturaleza institucional

Desde el dictado del decreto N° 11.265 sabemos que la FIA for-


ma parte del Ministerio Público. Sin embargo, la reforma produ-
cida por la ley N° 21.383 generó algunas dudas en razón de omitir
de forma expresa tal pertenencia.
LaLRMP eliminó definitivamente los interrogantes cuando en
la primera parte de su arto 43 establece que "La Fiscalía de Inves-
tigacionesAdministrativas forma parte del Ministerio Público Fis-

9 Adla, LVIII-A-101.
10 Esta norma se ubica dentro del Título II (Funciones y Actuación),
Sección II (Ministerio Público Fiscal), Capítulo II (Fiscalía de Inves-
tigaciones Administrativas).
11 Cfr. CANDA, Fabián Omar, "La Fiscalía de Investigaciones Adminis-
trativas", en Control de la Administración Pública, Ediciones RAP,
Bs. As., 2003, pág. 741.
EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS IRREGULARIDADES... 309

cal como órgano dependiente de la Procuración General de la N a-


. [ ....
cwn
/ ]"
El Ministerio Público Fiscal y el Ministerio Público de la De-
fensa conforman el Ministerio Público, receptado, como dijimos,
en el arto 120 de la Constitución Nacional. Por eso, afirma CANDA
que "[o . .] al ser incorporada al Ministerio Público, la FIA adquiere,
indirectamente, rango constitucional [. ..J'.12
Con igual razonamiento, al ser el Ministerio Público -según
nuestro criterio- un órgano "extrapoder"13, también la FIA ad-
quiere esta característica. Lo fundamental es resaltar que por
encima de las disputas doctrinarias existentes sobre este punto,
la FIAgoza de independencia y autonomía funcional en relación a

12 CANDA, Fabián Ornar, "La Fiscalía de Investigaciones Administra-

tivas",op. cit., pág. 742. Al momento del tratamiento de la ley 24.946


en el Senado de la N ación, el miembro informante por la mayoría, se-
nador Yoma, sostuvo igual criterio argumentando que "[. .. ] otro as-
pecto que venimos a salvar y que omitió la Convención Constituyente
de Santa Fe dejándolo diferido a la futura ley, es el vinculado a la Fis-
calía Nacional de Investigaciones Administrativas. A través del pro-
yecto que estamos considerando, se prevé que forme parte del Minis-
terio Público [... ]" (en Antecedentes Parlamentarios, N° 4, La Ley, Bs.
As., 1998, pág. 915).
13 Cfr. BIDART CAMPOS, Germán, Manual de la Constitución reformada,
t. III, Ediar, Bs. As., 1997, pág. 361; QUIROGA LAVIÉ, Humberto, "Nue-
vos órganos de control en la Constitución: el Defensor del Pueblo y el
Ministerio Público", enLa reforma de la Constitución, Rubinzal-Culzoni,
Santa Fe, 1994, pág. 289; SAGÜÉS, Néstor Pedro, Constitución de la
Nación Argentina, 8 a ed., Astrea, Bs. As., 1998, pág. 32. Entre otros
autores, GELLI considera que el Ministerio Público es un "cuarto poder"
(GELLI, María Angélica, Constitución de la Nación Argentina, 2a ed., La
Ley, Bs. As., 2003, pág. 842). Para BIANCHI, en cambio, es una institu-
ción que forma parte del Poder Judicial de la N ación (BIANCHI, Alberto,
"La Fiscalía Nacional de Investigaciones Administrativas. Funciona-
miento y pautas para su reforma", enED, 107-853).
310 JORGE ORGAZ

los tres poderes del Estado Federal; características imprescindi-


bles para desarrollar libremente su actividad.
Es por eso que el arto 14, quinto párrafo, de la LRMP establece
que en caso que sus magistrados sufran perturbaciones o presio-
nes por parte de cualquiera de los poderes del Estado, podrán de-
nunciarlas ante el Procurador General, quien será responsable de
poner el hecho en conocimiento de la autoridadjudicial competente,
solicitando se adopten todas las medidas necesarias para asegu-
rar a aquéllos el normal desenvolvimiento de sus tareas.
Internamente, la FIA es un organismo "desconcentrado" del
Ministerio Público, pues sus competencias y atribuciones surgen
expresamente de la ley que regula aquél. 14

C. Estructura orgánica

La segunda parte del arto 43 de la LRMPubica enla cúspide de


la organización administrativa de la FIA al Fiscal Nacional de In-
vestigacionesAdministrativas. 15

14 Enseña CASSAGNE que "[...] Tanto la concentración como la descon-


centración constituyen principios organizativos que se dan en el marco
de una misma persona pública estatal [. . .]", agregando que, ''[.. .] cuan-
do las competencias decisorias se asignan a órganos inferiores de la
Administración centralizada o descentralizada [. . .] el fenómeno re-
cibe el nombre técnico de 'desconcentración' [. . .T' (CASSAGNE, Juan Car-
los,Derecho administrativo, t. 1, 5a ed., Abeledo-Perrot, Bs. As., 1996,
pág. 253).
15El cargo de Fiscal Nacional es equiparable al de unjuez de Cámara
en los aspectos remunerativos, provisionales, tributarios, jerárqui-
cos, protocolares y de trato (art. 12 in fine, LRMP).
--
EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS IRREGULARIDADES... 311

Además, yen un ordenjerárquico descendiente, encontramos


a los Fiscales Generales 16 , a los Fiscales Generales Adjuntos 17 , ya
los Fiscales de Investigaciones Administrativas .18
Es importante destacar que todos los magistrados menciona-
dos son elegidos mediante concurso público de antecedentes yopo-
sición19 y que gozan de estabilidad en sus cargos mientras dura su
buena conducta y hasta los setenta y cinco años de edad20 , contan-
do con inmunidad de arresto, salvo cuando se encontraren en si-
tuaciones de flagrante delito.
Salvo los casos del Procurador General y del Defensor General,
que son removidos por las causales y el trámite deljuicio político
regulado por la Constitución N aciona121 , todos los demás funcio-
narios del Ministerio Público pueden ser destituidos mediante
resolución adoptada por el Tribunal de Enjuiciamiento especial-
mente creado a tal fin y tras el desarrollo del pertinente procedi-
miento, aspectos ambos regulados enlos arts. 19 y 20 de laLRMP,
respectivamente.

16 Los Fiscales Generales son asimilados en relación a sujerarquía,


protocolo y trato al Fiscal Nacional, aunque es éste quien les imparte
las instrucciones y les asigna las distintas causas en las que deben in-
vestigar (art. 12, inc. c, LRMP).
17 Los Fiscales Generales Adjuntos tienen una jerarquía similar a la
de unjuez de primera instancia (art. 12, inc. d, LRMP).
18 Los Fiscales de Investigaciones Administrativas poseen igualjerar-
quía que la de unjuez de primera instancia (art. 12, inc. d, LRMP).
19 Arts. 5° y 6° de la LRMP.

20 Conforme lo estipula el arto 13 de la LRMP, "Los magistrados del


Ministerio Público gozan de estabilidad mientras dure su buena con-
ducta y hasta los setenta y cinco (75) años de edad. Los magistrados
que alcancen la edad indicada precedentemente quedarán sujetos a
la exigencia de un nuevo nombramiento, precedido de igual acuerdo.
Estas designaciones se efectuarán por el término de cinco (5) años, y
podrán ser repetidas indefinidamente, mediante el mismo procedi-
miento".
21 Arts. 53 y 59 de la Constitución Nacional, arto 18 de la LRMP.
312 JORGE ORGAZ

Esta úl tima norma señala que la decisión del tribunal mencio-


nado puede ser absolutoria o condenatoria, limitándose en este
último caso a la remoción del condenado. Si se fundare en hechos
que puedan configurar delitos de acción pública o ello surgiere de
la prueba o aquélla ya hubiere sido iniciada, se dará intervención
enla forma que corresponda al tribunaljudicial competente (inc.
c,punt07,LRMP).
La sentencia podrá ser recurrida por el fiscal o el imputado ante
la Cámara N acional de Apelaciones en lo Contencioso Administra-
tivo Federal. El recurso deberá interponerse fundadamente por
escrito ante el Tribunal de Enjuiciamiento, dentro del plazo de
treinta días de notificado el fallo. El Tribunal de Enjuiciamiento
deberá elevar el recurso con las actuaciones a la Cámara mencio-
nada, dentro de los cinco días de interpuesto.
En el marco del derecho administrativo disciplinario, el arto 16
de la LRMP establece que también los integrantes de la FIA son
pasibles de las sanciones de prevención, apercibimiento ymulta
-de hasta un veinte por ciento de sus remuneraciones mensua-
les-, que serán aplicadas por el Fiscal Nacional. Todas las san-
ciones se graduarán teniendo en cuenta la gravedad de la falta, los
antecedentes en la función, y los peIjuicios efectivamente causa-
dos.
Por último, surge del mismo artículo que las causas por faltas
disciplinarias se resolverán previo sumario, que se regirá por la
norma reglamentaria que dicten el Procurador General de la N a-
cióny el Defensor General de la N ación, la cual deberá garantizar
el debido proceso adjetivo yel derecho de defensa enjuicio.

D.Función

Conforme el contenido del arto 45 de la LRMPla función enco-


mendada a la FIA consiste en realizar investigaciones sobre la re-
gularidad de la conducta de los agentes de la Administración na-
cional, sea esta centralizada o descentralizada, de las empresas y
de las sociedades estatales, yde todo otro ente en donde el Estado
EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS IRREGULARIDADES... 313

nacional tenga participación Cinc. a), o cuyo principal aporte eco-


nómico provenga del mismo Cinc. b). 22
Como puede apreciarse, la competencia delaFIAes sumamente
amplia, ya que puede investigar el desempeño del propio Presidente
de la República hasta el del funcionario público con menor jerar-
quía en la Administración.
Si como consecuencia de sus investigaciones la FIA llegara a
considerar la posible existencia de delitos, debe denunciar tales
circunstancias ante lajusticia competente, adquiriendo aquéllas
el valor de prevención sumaria. El ejercicio de la acción pública
quedará a cargo de los fiscales competentes ante el tribunal don-
de quede radicada la denuncia y, en su caso, ante las Cámaras de
Apelación y Casación con la intervención necesaria del Fiscal na-
cional de Investigaciones Administrativas o de los magistrados que
éste determine. La Fiscalía de lhvestigacionesAdministrativas po-
drá asumir, en cualquier estado de la causa, el ejercicio directo de
la acción pública, cuando los fiscales competentes antes mencio-
nados tuvieren un criterio contrario a la prosecución de la acción
Cinc. c).
Además, tal como lo establece el arto 48 de la LRMP, cuando en
el curso de un proceso judicial en sede penal se efectúe imputación
formal de delito contra un agente público por hechos vinculados
con el ejercicio de su función, eljuez de la causa deberá poner esta

22 "Se advierte -señala CANDA- que el legislador ha seguido un tem-


peramento mixto para encuadrar la competencia de la FIA, pues por
un lado ha utilizado un criterio de carácter subjetivo o estructural (así,
la facultad escrutadora del organismo alcanza a la Administración
Pública centralizada, descentralizada, empresas y sociedades del Es-
tado y todo otro ente en que el Estado Nacional tenga participación);
y por el otro se ha basado en un criterio objetivo o funcional, de mane-
ra que todo ente que tenga como principal fuente de recursos el aporte
estatal, puede ser objeto de investigación en la medida que ésta se centre
en el análisis sobre el regular destino conferido a esos fondos públi-
cos [. ..}" (CANDA, Fabián Ornar, "La Fiscalía de Investigaciones Admi-
nistrativas", op. cit., pág. 750).
.....
314 JORGE ORGAZ

circunstancia en conocimiento de la Fiscalía de Investigaciones


Administrativas.
Sobre este punto, el arto 4° del derogado decreto-ley N° 21.383
disponía que el obj etivo de dicha comunicación consistía en brin-
dar la oportunidad a la FIA para que en un plazo de diez días a par-
tir de su recepción decidiera si asumiría o no el ej ercicio de la ac-
ción pública.
La LRMP, que no contiene disposición expresa en este sentido,
podría conducir a afirmar que se ha privado ala FIAde la facultad
de intervenir en la causa penal, y que la comunicación no tiene otra
finalidad que la de permitirle solamente el inicio de la investiga-
ción de naturaleza administrativa.
Al respecto, creemos que ambos objetivos no resultan incom-
patibles y que, mediante la aplicación analógica del arto 45, inc. c,
de la LRMP, la comunicación que realiza elj uez de la causa posi-
bilita' al mismo tiempo, el inicio de las investigaciones adminis-
trativas y la participación en la causa penal por parte de la FIA. 23
Igualmente y según lo dispone la primera parte del arto 49 de la
LRMP, cuando en la investigación practicada por la Fiscalía re-
sulten comprobadas irregularidades administrativas, el Fiscal
Nacional de Investigaciones Administrativas pasará las actuacio-
nes con dictamen fundado a la Procuración del Tesoro de la Nación
o al funcionario de mayorjerarquía administrativa de la reparti-
ción de que se trate.
En ambas circunstancias las actuaciones servirán de cabeza del
sumario que deberá ser instruido por las autoridades correspon-
dientes.
Ensu segundo párrafo, el mismo arto 49 de la LRMP señala que
la FIAserá parte acusadora en el sumario y gozará de los mismos
derechos que la parte sumariada, pudiendo ofrecer, producir e in-
corporar pruebas, y atacar toda resolución que se presente como
contraria a su pretensión, bajo pena de nulidad absoluta de lo ac-
tuado o resuelto, según el caso.

23 Cfr. CANDA, Fabián Omar, "La Fiscalía de Investigaciones Adminis-


trativas",op. cit., págs. 756 y ss.
EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS IRREGULARIDADES... 315

En consonancia conlo afirmado en el párrafo precedente, y se-


gún se estipula en el segundo párrafo del arto 30 del Reglamento de
Investigaciones Administrativas-aprobado por decreto 467/99-24 ,
toda autoridad administrativa tiene la obligación de comunicar a
la FIAla iniciación de sumarios en su sede con el objeto de que ésta,
si lo estima conveniente, tome intervención en el mismo como parte
acusadora.
Sin embargo, la Procuración del Tesoro ha expresado, en sus
dictámenes, un criterio opuesto, afirmando que la LRMP al no con-
sagrar expresamente la facultad de la FIA para intervenir enlos
sumarios que le fueran notificados por los agentes administrati-
vos, la priva de la posibilidad de presentarse como parte acusadora
enellos. 25
Si la autoridad administrativa resuelve el sumario de forma
contraria a derecho y su superior no revoca el acto ilegítimo, la FIA
está legitimada para accionar judicialmente con el objeto de soli-
citar la anulación de dicharesolución. 26
Por último, señalemos que las investigaciones llevadas adelan-
te por la FIA pueden llegar también a un resultado negativo, cuan-
do no logren comprobar la autoría de delitos o irregularidades ad-
ministrativas por parte de los agentes públicos sometidos a su
control, determinando dicha situación el archivo de las actuacio-
nes.

E. Atribuciones

Los magistrados de laFIA cuentan con diversas facultades para


cumplir con su tarea que, según sean o no compartidas con el resto

24 Adla, LIX-B-1564.
25 Cfr. CANDA, Fabián Ornar, "La Fiscalía de Investigaciones Adminis-
trativas",op. cit., pág. 754.
26 Esta amplia legitimación surge de la interpretación conjunta del

arto 120 de la Constitución Nacional y del arto 10 de la LRMP.


-
316 JORGE ORGAZ

de los funcionarios del Ministerio Público, pueden clasificarse en


exclusivas y concurrentes.
Entre las primeras -enumeradas por el arto 50 de la LRMP-
la FIA puede disponer exámenes periciales, requiriendo de las re-
particiones o funcionarios públicos la colaboración necesaria, y
designar peritos ad hoc cuando las circunstancias así lo exij an
(inc. a). Por otra parte, podrá informar al Procurador General de
la N ación cuando estime que la permanencia en funciones de un
ministro, secretario de Estado o funcionario conjerarquía equiva-
lente o inferior, puede obstaculizar gravemente la investigación
(inc. b).
En relación a las segundas, el primer párrafo del arto 26 de la
LRMP afirma que los miembros de la FIA al igual que el resto de
los magistrados del Ministerio Público pueden solicitar informes
a organismos públicos federales, provinciales o municipales, a en-
tidades privadas y a particulares, requerir la intervención policial
para la realización de diligencias, y citar personas en carácter de
testigos.

111. EL DEFENSOR DEL PuEBLO

A. Conceptos generales

1. Antecedentes históricos

Si bien podemos encontrar antecedentes aún más remotos 27 , el


"ombudsman" o "defensor del pueblo" (a partir de ahora, DP), tie-

27 Los primeros antecedentes del defensor del pueblo se remontan a


los tiempos de Esparta y Atenas, donde los "Eflore" y los "Euthynoi"
eran los encargados de controlar las actividades de las autoridades
administrativas. También en China hallamos rastros de la institución,
ya que bajo la dinastía Han, el Emperador encomendó a un funciona-
rio denominado "Yan", el control de la administración imperial, cum-
pliendo su cometido con las denuncias que el pueblo le presentaba
dirigidas a subsanar cada una de las irregularidades cometidas por
EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS IRREGULARIDADES... 317

ne SU más decisivo impulso en Suecia a comienzos del siglo XVIII,


en el marco de la dialéctica relación existente entre el rey y el par-
lamento de ese país.
Sucedió que en el año 1713 el monarca sueco Carlos XII enfren-
taba una complej a situación política y militar producto de la gue-
rra que libraba contra Rusia, en aquel tiempo bajo las órdenes del
zarPedroI.
Dicha coyuntura obligaba al primero a estar lej os de la sede de
su gobierno durante largos períodos, descuidando la atención de los
asuntos internos de su administración. Por tal motivo, decidió
nombrar a un representante personal, quien se encargaría de re-
emplazarlo y de mantener el orden y la confianza de su pueblo
mientras permanecía en el campo de batalla, otorgándole amplias
facultades legislativas para cumplir con su tarea.
Este delegado real fue conocido en un primer momento con el
nombre de "Procurador Supremo", convirtiéndose años más tar-
de, en 1719, en el "Canciller de Justicia", para finalmente adqui-
rir el rango de "Consejero" mediante el cual adquirió lajerarquía
de un ministro de justicia. 28
Como vemos, la actuación de este funcionario era cada vez más
importante, circunstancia que llevó al parlamento a establecer
nuevas y necesarias reglas para su control con el objetivo de refor-
zar el debilitado equilibrio entre los poderes del Estado.
De esta forma, en 1809, la Constitución sueca incorporó junto
al Canciller de Justicia al "justitieomb udsman", verdadero repre-

los funcionarios públicos. Por su parte, en el Imperio Persa el rey Ciro


nombró al "O Olho de Reí" para que se ocupara de controlar de forma
permanente la actividad de todos los funcionarios públicos. Luego, en
el siglo XV, el Consejo de los Diez, en Venecia, estuvo a cargo de super-
visar las infracciones que tuvieran lugar en el ámbito de dicha ciudad
(cfr. http://www.defensor.gov.ar/institucion/antecedentes-sp.htm).
28 RUDHOLM, Sten, "Los guardianes de la ley en Suecia", en El omb uds-
mano El defensor del ciudadano, Fondo de Cultura Económica, Méxi-
co, 1986, pág. 50.
318 JORGE ORGAZ

sentante del "Riksdag" --es decir, del parlamento-cuya princi-


pal misión consistía en asegurar el cumplimiento de la ley por parte
de la Administración Pública y sus funcionarios, en resguardo de
los derechos de los ciudadanos, amenazados y vulnerados en diver-
sas ocasiones por la amplia concentración de poder en aquéllos.
Sobre este punto y analizando el alcance institucional de la
palabra "ombud", MAIORANO afirma que "[.. .] señala a una persona
que actúa como representante de otra. En el sentido técnico con que
se utiliza modernamente, se refiere al funcionario que representa
al Parlamento de quien es su vocero [. ..J'. 29
Por su parte SOTO KLoss, resaltando el fundamental objetivo a
lograr por esta institución, sostiene que dicho término indica la
existencia de un ''protector'', en este caso, de los derechos fundamen-
tales de las personas frente a los desvíos y abusos en los que pue-
den incurrir las autoridades públicas. 30
Esta última finalidad ya se advertía claramente en el texto de
la ley constitucional del 6 de junio de 1809 que reglamentaba la
nOVÍsima institución, al expresar en su arto 96 que sus funciones
consistían en "[...] controlar la observancia de las leyes por los tri-
bunales y los funcionarios, y demandar ante los tribunales compe-
tentes, de acuerdo con las leyes, a aquellos que en el ejercicio de su
función hubieren, por parcialidad, favor o cualquier otro motivo,
cometido ilegalidades o descuidado el correcto desempeño de los
deberes propios de su cargo [ .. .J'. 31
Por eso, F AIREN GUILLÉN -citado por QUIROGA LAVIÉ32- señala
que la palabra utilizada por la Constitución nórdica es la correcta,

29 MAIORANO, Jorge Luis, "Apuntes para un debate parlamentario. El


'ombudsman' sueco", enLL, 1984-C-839.
30 SOTO KLoss, Eduardo, "El ombudsman nórdico sajón", en Revista
Argentina de Derecho Administrativo, Año 1, N° 1 (1971), pág. 50.
31 MAIORANO, Jorge Luis, "Apuntes para un debate parlamentario. El
'ombudsman' sueco", op. cit., pág. 839.
32 QUIROGALAVIÉ, Humberto, "Nuevos órganos de control en la Cons-
titución: el Defensor del Pueblo y el Ministerio Público", en La refor-
ma de la Constitución", Rubinzal-Culzoni, Santa Fe, 1994, pág. 268.
EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS IRREGULARIDADES... 319

pues "ombudsman" significa "hombre que da trámite", en este caso,


a los reclamos que pudiera llegar a formular cualquier persona en
contra del accionar irregular de la Administración Pública.
Luego, la creciente complejidad en la gestión pública y su co-
rrespondiente fiscalización determinaron la creación de nuevos ór-
ganos con competencias de control específicas como, por ejemplo,
el "militieombudsman" (ombudsman militar), en 1915. Dicha ofi-
cina coexistió con el encargado de los asuntos civiles hasta 1967,
año en que se fusionaron ambas depende~cias. 33

2. Derecho comparado

Sin lugar a dudas, el DP es una de las instituciones que ha al-


canzado mayor difusión y adhesión en el derecho público compa-
rada, independientemente de las lógicas particularidades que ofre-
ce cada uno de los sistemas jurídicos al momento de precisar su
organización y funcionamiento.
Señalamos que tras su creación en Suecia, existen dos etapas
bien diferenciadas y con diverso alcance en la recepción de esta
institución por parte de las distintas legislaciones a nivel mun-
dia1. 34

33 Actualmente, y tras las reformas legislativas de 1976 y 1981, que


pretendieron lograr una mayor eficacia en su funcionamiento, encon-
tramos en Suecia cuatro clases de "ombudsman": el primero, al fren-
te de la institución, encargado de dictar las principales directivas, de
la publicidad de los distintos documentos elaborados por el organis-
mo y de la decisión de las cuestiones más importantes relativas al con-
trol de la autoridad pública local; otro que se ocupa del control del
servicio de justicia, de la policía y de las cárceles; el tercero que tiene
bajo su responsabilidad los asuntos civiles y militares; y el cuarto, cuya
labor se vincula a los impuestos, tasas y los diferentes aspectos del
bienestar social (cfr. MAIORANO, Jorge Luis, "Apuntes para un debate
parlamentario. El 'ombudsman' sueco", en op. cit., pág. 839).
34 Cfr. MAIORANO, Jorge Luis, "El ombudsman y la protección de los de-
rechos del hombre", enLL, 1992-C-796.
320 JORGE ORGAZ

La primera, de efectos restringidos, llega hasta al año 1919, en


donde solamente Finlandia había adoptado este organismo con
perfiles similares a los de su antecesor sueco. 35
Enlasegunda, que se origina una vez finalizada la Segunda Gue-
rraMundial, somos testigos de una verdadera"omhudsmanfa"36, con-
cepto al cual nos atrevemos a agregar el adjetivo "globalizada",
debido a la expansión sin fronteras del DP.
Distintas han sido, por ende, las denominaciones utilizadas
para nominarlo. Por ejemplo, en Canadá se lo llama "Protector del
Ciudadano", en Costa Rica "Defensor de los Habitantes", en El Sal-
vador "Procurador para la Defensa de los Derechos Humanos", en
Francia "Mediador", en Gran Bretaña "Comisionado Parlamen-
tario", en Guatemala "Procurador de los Derechos Humanos", en
Honduras, "Comisionado Nacional para la Defensa de los Dere-
chos Humanos", en Israel "Auditor del Estado", en Italia "Defen-
sor Cívico", yenMéxico "Comisión Nacional de los Derechos Hu-
manos".
Además, y con la clásica terminología sueca de "ombudsman"
o su equivalente en español, "DP", incorporaron este organismo de

35 Esta similitud encuentra una explicación de tipo histórica. Como


señala el ex ombudsman finlandés, Paavo KAsTARI, "[. . .] El Canciller
de Justicia de Finlandia se originó en la oficina correspondiente de
Suecia. Cuando Finlandia se separó de Suecia en 1809, y se anexó al
Imperio Ruso como un Gran Ducado autónomo constitucional, here-
dó el sistema legal que había existido bajo la Constitución sueca de
1772. En consecuencia, Finlandia tenía su propio Canciller de Justi-
cia, o Procurador, como se le llamaba durante el período ruso [. .. )"
(cfr. KAsTARI, Paavo, "Los guardianes de la ley en Finlandia", en El
ombudsman. El defensor del ciudadano, Fondo de Cultura Económi-
ca, México, 1986, pág. 99).
36 MARSHALL, Geoffrey, "El Reino Unido", en El ombudsman. El de-
fensor del ciudadano, Fondo de Cultura Económica, México, 1986,
pág. 233; GOZAíNI, Osvaldo Alfredo, "Técnica y contenido del defensor
del pueblo (Ombudsman)", en LL, 1988-E-851.
EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS IRREGULARIDADES... 321

control las legislaciones de Alemania, Argentina, Australia, Aus-


tria, Barbados, Bélgica, Bolivia, Bulgaria, Chile, Chipre, Colombia,
Corea del Sur, Croacia, Dinamarca, Escocia, Eslovenia, España,
Estonia, Estados Unidos, Finlandia, Filipinas, Gabón, Ghana, Gre-
cia, Guam, Guyana, Holanda, Hong Kong, Hungría, India, Irlan-
da, Islas Fidji, Islandia, Islas Salomón, Jamaica, Japón, Lichtens-
tein, Namibia, Nicaragua, Nigeria, Noruega, Nueva Guinea,
Nueva Zelanda, Pakistán, Panamá, Paraguay, Perú, Polonia, Por-
tugal, Puerto Rico, Rumania, Samoa Occidental, San Marino, Se-
negal, Sri Lanka, Sudáfrica, Sudán, Suecia, Suiza, Swazilandia,
Taiwán, Tanzania, Trinidad y Tobago, Túnez, Uganda, Vanuatu,
ZambiayZimbawe. 37
Tampoco debemos olvidar el reciente Proyecto de Constitución
de la Unión Europea que recepta al DP en su arto I -48. 38
Debemos agregar que el DP también encuentra recepción le-
gal en los distintos órdenes de gobierno en los que se organizan te-
rritorial y políticamente alguno de los países mencionados.
Por ejemplo, es el caso de la región de Andalucía, en España, o
de las regiones de Toscana, Liguria, Campiña, Umbría, Lombardía
y Lacio, en Italia, de las ciudades de Asónion y La Haya, en Holan-
da, yde Québec y Ontario, en Canadá, de los estados de Nebraska,
Iowa, Connecticut, Columbia, Florida, Georgia, Illinois, Hawai,
N ew Jersey, N ew México, Montana, Oregón y Ohio, en Estados
Unidos, o del Estado de Paraná, en Brasil.

37 Cfr. MAIORANO, Jorge Luis, "Apuntes para un debate parlamenta-

rio. El 'ombudsman' sueco", op. cit., pág. 837; "El ombudsman y la pro-
tección de los derechos del hombre", op. cit., pág. 796; "El Defensor
del Pueblo", en El derecho administrativo argentino, hoy, Ciencias de
la Administración, Bs. As., 1996, pág. 110.
38 Dice la mencionada norma que "El Parlamento Europeo nombrará
un Defensor del Pueblo, que recibirá e investigará las reclamaciones
relativas a casos de mala administración de las instituciones, orga-
nismos o agencias de la Unión y dará cuenta de ellas. El Defensor
Europeo del Pueblo ejercerá sus funciones con total independencia".
322 JORGE ORGAZ

Finalmente, debemos reconocer que esta notable aceptación


normativa del DPha significadounimporlante enriquecimiento
en su desarrollo y funcionamiento, pero sin alterar su esencia, vin-
culada de forma indisoluble a la defensa de los derechos humanos.

3. Fundamento

Tal como sosteníamos en el párrafo anterior, existió una impre-


sionante propagación de las oficinas del DP por todo el mundo al
concluir la segunda gran guerra del siglo pasado.
Es por todos sabido que las devastadoras consecuencias de este
prolongado conflicto bélico de escala internacional exigieron una
decidida participación de los gobiernos enla tarea de reconstruc-
ción de un gran número de países que habían quedado sepultados
bajo los escombros.
Entonces, se hacía necesario dejar atrás el clásico modelo del
Estado guardián y abstencionista forj ado a la luz del liberalismo
clásico, para profundizar una concepción que hacía de éste un pro-
motor imprescindible del cambio político, económico, social y cul-
tural de sociedades prácticamente disueltas por semejante con-
tienda bélica.
Esta transformación operada bajo los postulados del constitu-
cionalismo social no sólo fue de naturaleza cualitativa sino tam-
bién cuantitativa, ya que el Estado asumió una gran cantidad de
funciones quejamás se pensó pudiera llegar a desempeñar, y que
fundamentalmente fueron otorgadas dentro de su estructura al ór-
gano ejecutivo. Así pasó de la inacción casi absoluta a regular la
mayoría de los sectores de la economía, a prestar servicios públi-
cos, por mencionar algunos ejemplos aislados.
Como era de esperar, nuevamente la relación entre autoridad e
individuo generó un renovado debate en el ámbito jurídico, funda-
mentalmente en el derecho político, constitucional y administrati-
vo. Es que con el recuerdo aún latente de las atrocidades ocurridas
durante la Segunda Guerra Mundial, se hacía imperioso evitar de-
finitivamente los abusos perpetrados por parte del poder público en
detrimento de los derechos fundamentales de las personas.
-
EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS IRREGULARIDADES... 323

El desafío consistía entonces en establecer eficaces mecanismos


institucionales que sirvieran para controlar los desbordes de la
Administración Pública, ocupando la figura del DP un lugar de
preferencia entre ellos, tal como lo demuestra su rápida proyección.
Tiempo después, a fines de la década de los ochenta del siglo XX,
se produj o el derrumbe del bloque soviético y un marcado debili-
tamiento de la ideología que le sirvió de base, esto es, el comunis-
mo.
Los efectos de este trascendente hecho histórico se hicieron sen-
tir en el terreno político, con la adopción de la democracia como
régimen de gobierno por la inmensa mayoría de los países39 , y en
el económico, con el resurgimiento del mercado como casi excl usi-
vo sistema para el desarrollo material de los mismos.
En un intento de adaptación a estos nuevos parámetros comen-
zaron a producirse gran variedad de reformas en la estructura
administrativa de muchos estados, que consistieron sustancial-
mente en unamplio proceso de traspaso de las funciones anteriormen-
te ej ercidas por éstos al sector privado, mediante la concesión y la
privatización.
Sin embargo, no debemos cometer el error de creer que tales
acontecimientos implicaban retrotraer la situación al diseño de
Estado decimonónico. En otras palabras, de la reducción del nú-
mero de las competencias estatales no se deriva una mayor garan-
tía para la vigencia de los derechos más importantes de las perso-
nas. Un Estado de menor tamaño no es siempre un Estado menos
poderoso e incapaz de actuar arbitrariamente.
Más allá de los cambios producidos a lo largo del tiempo, la po-
sibilidad siempre latente del desconocimiento de los derechos hu-
manos por parte de las autoridades públicas impone fortalecer el

39 Resaltando la envergadura de este fenómeno político el profesor de


la Universidad de Harvard, Samuel HUNTINGTON, afirma con razón que
estamos en presencia de "la tercera ola democrática" de los tiempos
modernos (HUNTINGTON, Samuel P., La tercera ola -la democratiza-
ción a finales del siglo XX-, Paidós, Bs. As., 1995, pág. 32).
324 JORGE ORGAZ

sistema de organismos de control en su conjunto como una condi-


ción que asegure la plena vigencia del sistema republicano y de-
mocrático de gobierno.
Al respecto, y si bien PAREJO ALFONSO señala que "[.. .Jen el con-
trol de la Administración radica el eje, el centro de gravedad del
Defensor del Pueblo [. . .]'40, pensamos con MAIORANO que éste "[.. .]
será sólo un medio para cumplir su misión [. . .]'41, que se vincula
desde siempre a la protección de los derechos fundamentales del
hombre.

4. Caracteres generales

Por encima de la forma en que cada uno de los distintos siste-


mas normativos mencionados regula al DP, creemos que es posi-
ble y conveniente extraer algunas características comunes a todos
ellos que nos permitan precisar su naturaleza.
Enlo que se refiere a sufuente legal, generalmente el DP ha sido
incorporado directamente en las constituciones de los estados que
lo adoptan como organismo de control, poniéndose de manifiesto
la importancia que a él se le atribuye en eljuego institucional con
los demás poderes públicos. Naturalmente que este marco legal
básico es complementado por otras disposiciones legales de infe-
rior jerarquía que reglamentan su organización y actividad.
En la mayoría de los casos, el DP es un representante del Poder
Legislativo. Entrelas contadas ymás importantes excepciones aesta

40 PAREJO ALFONSO, Luciano, "El Defensor del Pueblo como institución


de control de la Administración Pública: contenido y alcance de su fun-
ción, procedimiento de actuación y tipos, efectos y publicidad de sus
resoluciones", en Debate Defensorial, Revista de la Defensoría del
Pueblo, N° 1, Tarea Asociación Gráfica Educativa, Lima, 1998, pág. 9.
41 MAIORANO, Jorge Luis, "El ombudsman y la protección de los dere-
chos del hombre", op. cit., pág. 799.
EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS IRREGULARIDADES... 325

regla, encontramos el "comisionado parlamentario" inglés42 yel


"mediateur" francés 43 , incorporados formalmente en el Poder Eje-
cutivo yde quien depende su designación, estructura y tarea.
Pese a su estrecha vinculación con el órgano legislativo, el DP
goza de autonomía funcional e independencia de cualquier poder
del Estado en el cumplimiento de sus funciones.
Es conveniente que la persona que ocupe el cargo de DP, cuen-
te con un incuestionable prestigio personal dentro de la sociedad
en la que le toque desempeñar sus actividades, pues más allá de
las cualidades técnicas que también debe reunir, gran parte de su
poder radica en su autoridad moral e intachable trayectoria.
El objeto del control llevado a cabo por el DP recae sobrelas irre-
gularidades, deficiencias, imperfecciones, errores e injusticias que
por acción u omisión pudiera llegar a cometer la Administración

42 N o encontramos mayores planteos en el derecho inglés en relación


a la ubicación institucional-dentro del ámbito del Poder Ejecutivo-
del comisionado parlamentario, debido a que existe una gran confianza
social en que la Administración Pública actuará dentro de los límites
jurídicos establecidos, además del profundo respeto del que gozan sus
funcionarios. Como señala Geoffrey MARSHALL, "[. . .] En Gran Breta-
ña se puede criticar a los administradores, pero no se siente una aver-
sión activa hacia ellos [. ..] En consecuencia, la insatisfacción con la
Administración y las propuestas de reforma han tendido a concen-
trarse en los recursos parlamentarios [ .. .]" (MARSHALL, Geoffrey, "El
Reino Unido", op. cit., pág. 233).
43 Al igual que en el caso inglés, la Administración francesa siempre
gozó de un merecido prestigio por su eficacia y transparencia, que hi-
cieron durante mucho tiempo innecesario un control externo de sufun-
cionamiento. "Sin embargo -señala Osvaldo GOZAÍNI- algunos pa-
decimientos endémicos de toda administración de justicia como la
celeridad en los trámites y cierta dificultad de competencia material
para definir la procedencia de la queja, llevó a legisladores france-
ses a buscar en el ombudsman una alternativa más de protección al
ciudadano [, ..1" (GOZAÍNI, Osvaldo Alfredo, "Técnica y contenido del
defensor del pueblo (ombudsman)").
326 JORGE ORGAZ

Pública, es decir que su misión no se limita a las conductas carac-


terísticamente delictivas de esta última.
La princip al misión encomendada a este órgano de control, como
lo dijimos, consiste en la tutela de los derechos humanos, para lo
cual podrá utilizar un arsenal de medidas que van desde la simple
crítica dirigida alas autoridades públicas responsables de su vio-
lación, pasando por la elaboración de propuestas legislativas y has-
ta el ejercicio de los recursos administrativos y acciones judiciales
pertinentes tendientes al restablecimiento del ordenjurídico le-
sionado.

B. El defensor del pueblo en el orden federal

1. Antecedentes

La poderosa onda expansiva alcanzada por la figura del DP a


nivel mundial también se hizo sentir en nuestro país, fundamen-
talmente de la mano de la recuperación democrática ocurrida en
el año 1983.
Como era lógico suponer, a partir de aquel trascendental mo-
mento de nuestra historia como N ación, la problemática relacio-
nada a la vigencia y tutela de los derechos humanos adquirió un
lugar de preferencia en el debate institucional argentino.
En esta dirección incorporaron también el DP las Constitucio-
nesdeCórdoba,LaRioja,RíoNegro,Salta,SanJuanySanLuis;
las normas provinciales como la ley 348 de Tierra del Fuego y las
municipales, como la ordenanza 40.381, que establecía en el ám-
bito de la ciudad de Buenos Aires al primer Controlador General
Comunal.
Al igual que en otras tantas instituciones, el derecho público
provincial y municipal se constituyó en este tema en fuente direc-
ta e ineludible de la reforma de la Constitución Nacional de 1994.
También se presentaron numerosos y variados proyectos de ley
en el seno del Congreso N acional a los fines de la creación y regu-
lación del DP, ya sea en forma general o especial.
EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS IRREGULARIDADES... 327

Entre aquellos que regulaban genéricamente al mismo, pode-


mos mencionar la propuesta legislativa de los entonces senadores
nacionales por la Provincia de La Rioja, Eduardo MENE~y Libra-
doSANcHEz.
Este proyecto que seguía los lineamientos establecidos por la
legislación española45 , adquiriría una determinante influencia en
el derecho argentino, porque luego de dos intentos frustrados en
los años 1985y 1987, en 1993 significó la base de la ley 24.28446 ,

44 Humberto QUIROGA LAVIÉ afirma que Eduardo MENEM fue el "pio-


nero" en la creación legislativa del Defensor del Pueblo en nuestro
país (QUIROGA LAVIÉ, Humberto, "Nuevos órganos de control en la
Constitución: el Defensor del Pueblo y el Ministerio Público", op. cit.,
pág. 269).
45 El Defensor del Pueblo fue incorporado a la Constitución de 1978 en

su arto 54, que dice: "Una ley orgánica regulará la institución del
Defensor del Pueblo, como alto comisionado de las Cortes Generales,
designado por éstas para defensa de los derechos comprendidos en
este título, a cuyo efecto podrá supervisar la actividad de la Adminis-
tración, dando cuenta a las Cortes Generales". En cuanto a su legiti-
mación procesal, y con el fin de que pueda cumplir debidamente su
cometido que se asocia directamente a la protección de los derechos
fundamentales, el arto 162, en sus incs. a y b, autoriza al Defensor del
Pueblo español a interponer el recurso de inconstitucionalidad y de
amparo, respectivamente. La ley orgánica que reglamenta el funcio-
namiento de la defensoría del pueblo es la número 3, del 6 de abril de
1981, que cuenta con treinta y siete artículos, divididos en cuatro tí-
tulos j unto a una disposición transitoria final. Sin entrar en detalles,
el Defensor del Pueblo español es un órgano unipersonal, vinculado
formalmente a las Cortes Generales -poder legislativo- aunque con
autonomía funcional respecto de cualquier poder del Estado, cuya
misión sustancial consiste en la defensa de los derechos fundamen-
tales establecidos en la Constitución frente a los ataques que contra
ellos realizan las autoridades públicas (cfr. MAIORANO, Jorge Luis,
"Apuntes para un debate parlamentario: el Defensor del Pueblo es-
pañol",op. cit., pág. 1145).
46 Adla, LIV-A-30.
328 JORGE ORGAZ

que junto a su modificatoria, ley 24.37947 , reguló por primera vez


al DP nacional, reglamentando en la actualidad el arto 86 de la
Constitución N acional.
También otros legisladores nacionales promovieron sus inicia-
tivas, como Auyero, Vanossi, Gentile, González, por mencionar sólo
algunos. Fuera del terreno político, merece destacarse la propuesta
presentada por el profesor PADILLA.
Además, existieron alternativas legislativas que propiciaban
la creación de defensorías del pueblo con competencias especiales,
como la "Oficina del Comisionado paraAsuntos Militares", presen-
tada por el ex diputado nacional Casella.

2. El defensor del pueblo en la Constitución Nacional

La Carta Magna Nacional sancionada en 1853 no contempla-


ba la institución del DP, motivo por el cual la doctrina debatía si
para su creación era suficiente la sanción de una ley, o, por el con-
trario, se hacía necesaria una reforma constitucional.
Enrolados en la primera postura, encontramos a PADILLA48 Ya
GoZAÍNI49 , para quienes al Congreso N acionalle bastaba la sanción
de una ley federal común a los fines de atribuir poderes de control
específicos a un organismo que, como el DP, estaría subordinado
jerárquicamente a aquél.
Para otros, conBIDART CAMPOS50 ala cabeza, la posición expuesta
podría generar conflictos relacionados con la posibilidad de actua-
ción del DP en lo que conocemos como "zona de reserva" de los otros

47 Adla, LIV-D-4392. Esta ley fue promulgada el 11 de octubre de 1994,


con el objeto de adaptar las disposiciones de la ley 24.284 al nuevo arto 86
de la Constitución Nacional incorporado tras su reforma de 1994.
48 PADILLA, Miguel, "La Constitución y el ombudsman", en ED, 109-967.
49 GOZAíNI, Osvaldo Alfredo, "Técnica y contenido del defensor del
pueblo (Ombudsman)".
50 BIDART CAMPOS, Germán, Manual de la Constitución reformada,
t. III, pág. 330. Recordemos que para el prestigioso constitucionalista
EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS IRREGULARIDADES... 329

poderes, por lo que recomendaba su incorporación al texto de la


Constitución Nacional.
Lo cierto es que este órgano de control recién fue incorporado a
la Carta Magna N acional a través de su reforma del año 1994, con-
solidando yj erarquizando la tendencia legislativa que venía insi-
nuándose sobre la materia. La gran expectativa que despertó esta
institución se demuestra con la gran cantidad de proyectos presen-
tados en el seno de la Convención Nacional Constituyente enca-
minados a lograr su inclusión·en la Ley Suprema de los argenti-
nos. 51
La Comisión encargada del tratamiento de los órganos de con-
trol elaboró un despacho consensuado, tratando de acercar las dis-
tintas posiciones existentes y tomando como propuesta orientadora
básica a la elaborada por Eduardo MENEM. Finalmente y sin ma-
yores modificaciones, fue aprobado por la Comisión Redactora.
Es el nuevo arto 86 de la Constitución N acional52 el que contem-
play otorga el marco jurídico fundamental al DP, señalando que:
"El Defensor del Pueblo es un órgano independiente instituido
en el ámbito del Congreso de la N ación, que actuará con plena au-
tonomía funcional, sin recibir instrucciones de ninguna autoridad.
Su misión es la defensa y protección de los derechos humanos y de-
más derechos, garantías e intereses tutelados en esta Constitución

argentino, el Defensor del Pueblo es un órgano extrapoder que goza


de plena autonomía funcional para el ejercicio de sus funciones, mo-
tivo por el cual puede llevar a cabo su actividad fiscalizadora de la
Administración Pública sin que ello signifique una fractura del clási-
co principio de división de poderes.
51 Entre las diversas propuestas podemos citar los trabajos de los con-
vencionales nacionales Bercoff, Bravo, Berhongaray, Cappelleri, Carde-
sa, Carrió, Cullen, Dressino y Mercado Luna, Maqueda, Massaccessi
y Verani, Menem, Ortiz Pellegrini, Paixao, Rosatti, entre otros.
52 La ubicación de esta norma la encontramos en la Segunda Parte
(Autoridades de la N ación), Título Primero (Gobierno Federal), Sec-
ción Primera (Del Poder Legislativo), Capítulo Séptimo (Del Defen-
sor del Pueblo) de la Constitución Nacional.
330 JORGE ORGAZ

y las leyes, ante hechos, actos u omisiones de laAdministración; y


el control del ejercicio de las funciones administrativas públicas.
El Defensor del Pueblo tiene legitimación procesal. Es designa-
do y removido por el Congreso con el voto de las dos terceras partes
de los miembrospresentesde cada una de las Cámaras. Goza de las
inmunidades y privilegios de los legisladores. Durará en su cargo
cinco años, pudiendo ser nuevamente designado por una sola vez.
La organización y el funcionamiento de esta institución serán
regulados por una ley especial".

Caracteres
Las principales características del DP nacional (de ahora en
más, DPN) las extraemos del contenido del arto 86 de la Carta
MagnaFederal conjugado con las disposiciones de su leyreglamen-
taria N° 24.284 (de aquí en adelante LRDPN) y su modificatoria,
ley N° 24.379.
Señalamos entonces que en caso de conflicto entre estas leyes y
la norma constitucional deberá prevalecer siempre la interpreta-
ción que otorgue primacía a esta última.

Denominación
Entre las diversas formas utilizadas para designar a este órga-
no de control 53 el constituyente nacional optó por la más común en
el ámbito del derecho latinoamericano, es decir, la de DP, a secas.

Función
Es el propio arto 86 de la Constitución Nacional, como hemos
visto, el que expresa que la misión del DPN consiste en "[. .. ] la

53 Véase punto III.1.2.


EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS IRREGULARIDADES... 331

defensa y protección de los derechos humanos y demás derechos,


garantías e intereses tutelados en esta Constitución y las leyes
[. ..]".
Cuando la norma constitucional en análisis se refiere a "dere-
chos humanos", lo hace en el sentido más extenso del término,
involucrando las disposiciones de la Carta Magna Federal que con-
forman el catálogo de derechos inalienables de los que son titula-
res todos los habitantes de nuestro país. Situamos aquí a los dere-
chos individuales o de ''primera generación", alos derechos nacidos
del constitucionalismo social o también conocidos como de "segun-
da generación".
Al hablar de los "demás derechos", la protección se expande a
todos aquellos que han sido incorporados por la reforma constitu-
cional de 1994, mediante la ampliación de la Primera Parte de la
Carta Magna Federal-por ejemplo, los derechos que protegen a
los usuarios, a los consumidores o al medio ambiente--, y a través
del arto 75, inc. 22, que recepta los principales instrumentos inter-
nacionales referidos a derechos humanos ubicándolos en la cima
del ordenamiento jurídico argentino, y que caen bajo el rótulo de
derechos de "tercera generación".
En relación a las "garantías", el DPN tutela sin distinciones to-
das las acciones que sean idóneas para defender los derechos con-
sagrados por la Constitución Nacional, entre las que se destacan
el amparo, el hábeas data, el hábeas corpus, entre otras.
Por último, los "intereses" comprenden las situaciones que no
quedan comprendidas en las anteriores y que merecen la tutela del
DPN, sin importar que sean legítimos o simples a tal fin.

Naturaleza institucional
El DPN, como en la gran mayoría de los ejemplos mencionados
a nivel del derecho comparado, es un representante del parlamen-
to que se encarga de su elección conforme el procedimiento esta-
blecido por el arto 2° de la LRDPN.
Dicha norma establece que ambas Cámaras del Congreso dela
N ación participan de la elección del DPN mediante la conforma-
332 JORGE ORGAZ

ción de una Comisión Bicameral permanente integrada por siete


senadores y siete diputados, y cuya composición debe mantener la
proporción de la representación del cuerpo.
En un plazo no mayor de treinta días contados a partir de la pro-
mulgación de esta ley, o luego, cuando cadaDPN concluya suman-
dato, la Comisión Bicameral reunida bajo la Presidencia del pre-
sidente del Senado, debe proponer a las Cámaras de uno a tres
candidatos para designar en el cargo, entre los que puede encon-
trarse el funcionario que hasta ese momento se desempeña en el
puesto y aspira -por única vez- a un nuevo período. A los fines
de su funcionamiento, las decisiones en el seno de dicha Comisión
se adoptarán por mayoría simple.
Corresponde que dentro de los treinta días siguientes al pronun-
ciamiento de la misma, ambas Cámaras elijan por el voto de dos
tercios de sus miembros presentes a uno de los candidatos propues-
tos; si en la primera votación ningún candidato obtiene la mayo-
ría exigida, deberá repetirse hasta alcanzarse y, fmalmente, si los
candidatos propuestos para la primera elección son tres ytampo-
co se alcanzara el quórum, las nuevas votaciones se tendrán que
hacer solamente con la participación de los dos candidatos más
votados, recurriéndose entonces en este último caso a una suerte
de "ballotage" en la elección del DPN.
Luego, y conforme lo estipula el arto 5° de la LRDPN, la desig-
nación delDPN adquiere la forma de una resolución conjunta sus-
crita por los presidentes de las Cámaras de Senadores y de Dipu-
tados, debiéndose publicar en el Boletín Oficial y en el Diario de
Sesiones de cada una de ellas.
Antes de comenzar con sus tareas, el DPN electo toma posesión
de su cargo ante las autoridades de ambas Cámaras prestandoju-
ramento de cumplir debidamente la misión que le ha sido encomen-
dada.
Esta relación institucional entre el DPN y el Congreso -que
encuentra como nexo alamencionada Comisión Bicameral-pro-
duce ciertos efectos para aquél.
En primer lugar, el DPN tendrá la obligación de presentar un
informe anual antes del31 de mayo ante ambas cámaras legisla-
EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS IRREGULARIDADES... 333

tivas 54 y, en segundo término gozará de las mismas inmunidades


y privilegios que la Constitución Nacional reconoce a los senado-
res y diputados nacionales. 55
Esta última garantía fue incluida en el texto del arto 86 de la
Carta Magna Nacional a petición del entonces convencional na-
cional cordobés Ortiz Pellegrini, quien sostuvo que si el DPN era
un delegado del Congreso Nacional, era elemental que tuviera
iguales inmunidades que los integrantes de este cuerpo delibera-
tivo, que le aseguraran llevar adelante su misión con éxito, efica-
cia y, fundamentalmente, total libertad. 56
Sin embargo, todo lo dicho hasta aquí no implica subordinar la
actuación del DPN a las decisiones del órgano legislativo federal,
pues aquél ejerce sus atribuciones con plena autonomía funcional
y sin recibir instrucciones de ninguna autoridad pública, confor-
me lo establece enfáticamente la primera parte del arto 10 de la
LRDPN.
En tal sentido, y resaltando su naturaleza de "órgano extrapo-
deres", BIDART CAMPOS enseña que "[. . .Jla ubicación normativa con-
gresional no implica que forme parte del Congreso, y mucho menos
que guarde dependencia respecto de él [ .. .]'.57
Por otra parte, el DPN resulta favorecido enla libre toma de sus
decisiones con las facultades que la LRDPNle reconoce de organi-
zar su estructura orgánica, funcional y administrativa, de nom-

54 Art. 31, primera parte, de la LRDPN. Además, el artículo prevé la


posibilidad de la presentación de informes especiales ''[. . .] cuando la
gravedad o urgencia de los hechos lo aconsejasen [. ..J".
55 Arts. 68 y 69 de la Constitución Nacional; arto 12 de la LRDPN.
56 Cfr. QUIROGA LAVIÉ, Humberto, "Nuevos órganos de control en la
Constitución: el Defensor del Pueblo y el Ministerio Público", op.
cit., pág. 274; MAIORANO, Jorge Luis, "El Defensor del Pueblo", op. cit.,
pág. 112.
57 BmART CAMPOS, Germán, Manual de la Constitución reformada,

t. III, pág. 325.


334 JORGE ORGAZ

brar SU personal58 , de dictar su reglamento interno 59, y de adminis-


trar su propio presupuesto mediante el servicio administrativo
financiero con el que cuenta. 60

Requisitos personales
El arto 4° de la LRDPN establece que para ser elegido DPN so-
lamente se requiere ser argentino nativo o por opción y haber cum-
plido la edad de treinta años.
Las condiciones se agravan para quienes lo auxilien en el cum-
plimiento de sus tareas, ya que según surge del arto 13 de la
LRDPN, además de las señaladas en el párrafo precedente, quie-
nes se desempeñen como alguno de los dos adjuntos con los que
cuenta el DPN deberán ser abogados, con ocho años de ejercicio
profesional o tener una antigüedad computable, como mínimo, en
cargos de cualquier poder del Estado o en la docencia universi ta-
ria, además de tener amplios conocimientos en derecho público.
Debe tenerse en cuenta también que el ejercicio del cargo de
DPN es incompatible con el desempeño de otra actividad pública,
comercial, profesional o política, permitiéndosele únicamente la
docencia. 61

Mandato
La norma del arto 3° de la LRDPN dice que el mandato del DPN
dura cinco años, pudiendo ser reelegido por una sola vez según el
procedimiento que analizamos anteriormente.
Asuturno,elart.10delaLRDPN dispone que el cese del DPN
en sus funciones se produce por la presentación de su renuncia, por
el vencimiento del plazo de su mandato, por una incapacidad so-

58 Art. 33, primer párrafo, de la LRDPN.


59 Art. 34 de la LRDPN.
60 Art. 36 in fine de la LRDPN.
61 Art. 7° de la LRDPN.
EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS IRREGULARIDADES... 335

breviviente, por haber sido condenado mediante sentencia firme


por la comisión de un delito doloso o por la notoria negligencia en
el cumplimiento de los deberes propios de su cargo o por haber in-
currido en alguna de las situaciones de incompatibilidad previs-
tas por la ley reglamentaria.
Seguidamente, el arto 11 de la LRDPN afirma que si el DPN se
encuentra bajo una incapacidad sobreviviente o ha actuado conne-
gligencia o incurrido en incompatibilidades en el ejercicio de su
cargo, para apartarlo de su actividad se requiere el voto de los dos
tercios de los miembros presentes de ambas cámaras, previo debate
y audiencia con el mismo, al que se garantiza plenamente su dere-
cho de defensa.
Finalmente, en todas estas situaciones yen los casos de muer-
te, imposibilidad o suspensión temporal, los adjuntos podrán re-
emplazarprovisoriamente al DPNhasta tanto se designe un nue-
vo ocupante del cargo. 62

Procedimiento
1) Forma de actuación
El arto 14 de laLRDPN sostiene que el DPN puede iniciar o con-
tinuar de oficio o a petición del interesado toda clase de investiga-
ciones comprendidas en el área de su competencia.
En este último caso, resulta oportuno precisar que la interven-
ción del DPN no constituye una instancia obligatoria, ya que como
enseña MAIORANO, "[. ..] no es un defensor oficial ni de pobres y au-
sentes[. .. ]'.63
Entonces, para el esclarecimiento de un problema de suincum-
bencia, una persona siempre tendrá la opción de recurrir al DPN o
plantear directamente los respectivos recursos administrativos
o acciones judiciales pertinentes por ante las autoridades compe-

62 Art. 13, primer párrafo, de la LRDPN.


63 MAIORANO, Jorge Luis, "El Defensor del Pueblo", op. cit., pág. 112.
336 JORGE ORGAZ

tentes, cuyos plazos 64 no se interrumpen por el inicio de la trami-


tacióndela queja ante aquél, conforme lo estipula el arto 22, segundo
párrafo, de laLRDPN.
Además, si una vez iniciada la tramitación de un reclamo por
ante el DPN el particular decidiera continuar con ella individual-
mente, se produce la suspensión de la actuación que dicho organis-
mo venía desarrollando. 65

2) Objeto
Toda la actividad desplegada por el DPN recae sobre los actos,
hechos u omisiones en los que incurra la Administración Públi-
ca nacional y sus agentes que signifiquen el ejercicio ilegítimo,
defectuoso, irregular, abusivo, arbitrario, discriminatorio, negli-
gente, gravemente inconveniente o inoportuno de sus funciones,
incluyendo aquellos capaces de perturbar o limitar el efectivo goce
de los derechos por parte de la comunidad en general.
Por la extensa enumeración de situaciones, desde el punto de
vista objetivo el poder de control con el que cuenta el DPN no sólo
se limita a los actos, hechos u omisiones que vulneran el ordena-
miento jurídico en cualquiera de sus esferas, sino que se extiende
a muchas otras actuaciones que la doctrina francesa y anglosajona
consideran ejemplos de "mala administración".
Obviamente que reconocerle al DPN este amplio campo de ac-
tuaciónresultó de suma importancia, pues comprende situaciones
que antes de su creación quedaban sin fiscalizar por la sola circuns-
tancia de no encuadrar en el clásico y restringido concepto de
antijuridicidad.

64 Según el arto 35 de la LRDPN, recordemos que salvo disposición ex-


presa en sentido contrario, los plazos previstos en dicha normativa
se cuentan en días hábiles administrativos.
65 Art. 21, segundo párrafo, de la LRDP.
EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS IRREGULARIDADES... 337

3) Sujetos
Partiendo desde una perspectiva subjetiva pasiva, la fiscali-
zación llevada a cabo por el DPN es extensa, pues abarca, según
la regla establecida por el arto 16, primer párrafo, de laLRDPN a
la Administración Pública nacional en su conjunto, esto es, la ad-
ministración centralizada y descentralizada, las entidades autár-
quicas, las empresas del Estado, las sociedades del Estado, las so-
ciedades de economía mixta, las sociedades con participación
estatal mayoritaria, y todo otro organismo del Estado nacional cual-
quiera fuere su naturalezajurídica, denominación, ley especial que
pudiera regirlo, o ellugar del país donde preste sus servicios.
Sobre este tema, el despacho discutido en su momento por la
Comisión Redactora de la Convención Constituyente de 1994, se-
ñalaba que el poder de control del DPN se limitaba a "las funcio-
nes administrativas estatales", conlo cual los concesionarios de los
servicios públicos privatizados escapaban al mismo.
Sin embargo, y luego de un arduo debate en el seno de aquella
Comisión, el texto definitivo de la Constitución N acional--con me-
jortécnica yfundamento-dispuso que corresponde a aquél "[.. .]
el control del ejercicio de las funciones administrativas públicas
[. . .]', quedando incluidos, por lo tanto, los prestatarios de los ser-
vicios públicos privatizados, fundamentalmente a partir del co-
mienzo de la última década del siglo pasado. Los lineamientos
establecidos por la norma constitucional son similares a los del
art.17delaLRDPN.
El cambio en la redacción de la norma merece resaltarse por-
que, coincidiendo con QUIROGA LAVIÉ, se hacía necesario un "[. ..]
mayor control para actividades que normalmente se ejercen a par-
tir de monopolios autorizados por la ley o por la concesión que los
habilita. Beneficio indudable para una sociedad donde los usuarios
de estos servicios son prácticamente la totalidad de sus integrantes
[. •. 1'.06

66 QUIROGA LAVIÉ, Humberto, Constitución de la Nación Argentina


comentada, Zavalía Editor, Bs. As., 1996, pág. 537. En su carácter de
Convencional N acional Constituyente en 1994, el autor fue quien pro-
»
338 JORGE ORGAZ

La parte final del arto 16 de la LRDPN, exceptúa de la esfera de


contralor propia del DPN, al Poder Judicial, al Poder Legislativo,
a la Municipalidad de la ciudad de Buenos Aires y a los organis-
mos de defensa y seguridad.
Esta solución legal que veda la posibilidad de control del Poder
Judicial Federal y del Congreso Nacional por parte del DPN fue
seguida por lajurisprudencia de la Corte Suprema de Justicia de
laNaciónenelcaso"FríasMolina,NélidaN.r1CajaNacionaldePre-
visiones para el Personal del Estado y Servicios Públicos"67 del mes
de setiembre de 1996.
En este pleito, más de sesenta mil jubilados reclamaban a la
Administración Pública el reajuste de sus haberes por entender que
les correspondía conforme a la legislación vigente en la materia.
El DPN pidió participación en el expediente formulando un pe-
dido de ''pronto despacho" en la resolución de las causas, teniendo
en cuenta las particularidades de las mismas -entre éstas, la edad
y escasos recursos de los interesados eran determinantes.
Su solicitud se fundamentó en el arto 8° de la Convención Ame-
ricana de Derechos Humanos que obliga a los Estados parte a to-
martodas las medidas necesarias que aseguren un procedimien-
to rápido y efectivo para la defensa de los derechos. En esta
oportunidad, el DPN también remarcó que su actuación se limi-
taba al control de la actividad administrativa del Poder Judicial,
dejando de lado lafunciónjurisdiccional que el ordenamiento cons-
titucionalle asigna con carácter exclusivo.
Pese a ello, el Alto Tribunal desestimó la solicitud del DPN, con-
siderando que"[. . .] el art.16 de la ley 24.284, dispone que el Poder
Judicial queda exceptuado del ámbito de competencia de la Defen-
soria del Pueblo, y concretamente el arto 20 del mismo ordenamien-
to establece que si la queja del afectado se formula contra personas,
actos, hechos u omisiones que no están bajo la competencia del De-

puso el cambio analizado, recibiendo el apoyo de sus pares Alfredo Bra-


vo, César J aroslavsky y Cristina Figueroa.
67 LL, 1997-A-67.
EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS IRREGULARIDADES... 339

fensor del Pueblo, o si se formula fuera del término previsto legal-


mente, el Defensor del Pueblo estará facultado para derivar la que-
ja a la autoridad competente [. ..J'.
Esta sentencia que limita sustancialmente la legitimación del
DPN, ha recibido, desde diversos ángulos, cuestionamientos de la
doctrina.
Por ejemplo, BIDART CAMPOS no duda en señalar que "[. . .] la ac-
tividad del congreso, en cuanto se despliega en el ámbito adminis-
trativo, queda sometida a la competencia del Defensor del Pueblo
[ .. .J', al igual que la actividad administrativa llevada a cabo por
el Poder Judicial de la N ación, ante la cual su legitimación no se
diluye "[. . .]cuando frente a dilaciones procesales que aparecen como
lesivas de derechos de losjusticiables en orden a la duración razo-
nable del proceso, a la tutelajudicial eficaz, y a la sentencia oportu-
na y útil, [. . .]pretende impulsary acelerar lajurisdicción del tri-
bunal, no como una forma de interferir en la funciónjudicial propia
y exclusiva de losjueces, sino en auxilio de las partes para resguar-
dar sus derechos en el proceso [. . .J'. 68
Además, QUIROGA LAVIÉ aclara que en este caso "[. . .] el Defen-
sor del Pueblo se hace parteeneljuicio pidiendo unprontodespa-
cho, sin abogar en relación al fondo del asunto [. . .]'.69

68 BIDART CAMPOS, Germán, Manual de la Constitución reformada, t.


III, pág. 329.
69 Sobre este punto, este autor plantea una serie de interrogantes: "[. . .]
¿cuál es el término que tiene la Corte para producir sentencia? En el
caso Frías Molina la presentación del Defensor del Pueblo se hizo a
los ocho meses y veinticinco días de ingresado el recurso extraordi-
nario a la Corte, sin que en ese tiempo se hubiere producido tramita-
ción alguna en el ámbito del Alto Tribunal. Se advierte, en consecuen-
cia, que la Corte no se encuentra limitada por los sesenta días hábiles
que prescirbe el arto 34.3.b. del Código Procesal Civil y Comercial de
la Nación. ¿Por qué no se encuentra limitada la Corte por dicha re-
gla, cuando sus sentencias tienen el carácter de definitivas y ella es
un 'tribunal colegiado' en los términos de la citada norma procesal?
[ ... ]" CQUIROGA LAVIÉ, Humberto, "El Defensor del Pueblo ante los es-
trados de la Justicia", enLL, 1995-D-I060 y ss.).
340 JORGE ORGAZ

Por su parte, SPOTAsostiene que la sentencia de la Corte Supre-


maincurre en un "[. .. ] error de valoración y, lo que es peor, de con-
cepto [. . .J', pues "[.. .J no medió en aquella causa ningún pedido o
exhortaciónalPoderJudicial[.. .JsinoqueelDefensordelPueblo
intentó coadyuvar procesalmente con la actora. Esa figura de la
coadyuvación procesal está perfectamente reconocida, porejemplo,
en el derecho constitucionalprocesal norteamericano. Además es, en
nuestro derecho, por el Defensor del Pueblo, una petición legítima
[. .. j.70

Por otro lado, cuando la Constitución Nacional afirma que en-


tre las misiones del DPN se encuentra la de controlar "las funcio-
nes administrativas públicas", se refiere a éstas de manera gené-
rica y sin distinguir entre ellas, quedando por ende comprendida
la actividad de esta naturaleza desarrollada por la justicia fede-
ral y el parlamento argentino.
Por estas razones, el DPN llegó incluso a plantear la causa bajo
análisis por ante la Comisión Interamericanade Derechos Huma-
nos, basado en los términos de los arts. 10, 80,25 Y44 de la Conven-
ciónAmericana sobre Derechos Humanos 71 , en un intento de re-

70 SPOTA, Alberto Antonio, "El Defensor del Pueblo", enED, N° 9145,


edición del 9 de diciembre de 1996, pág. 1.
71 Artículo 1°. Obligación de respetar los derechos.

1. Los Estados Partes en esta Convención se comprometen a respe-


tar los derechos y libertades reconocidos en ella ya garantizar su li-
bre y pleno ejercicio a toda persona que esté sujeta a su jurisdicción,
sin discriminación alguna por motivos de raza, color, sexo, idioma, re-
ligión, opiniones políticas o de cualquier otra índole, origen nacional
o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra condición so-
cial.
Artículo 8°. Garantías judiciales.
1. Toda persona tiene derecho a ser oída, con las debidas garantías y
dentro de un plazo razonable por unjuez o tribunal competente, in-
dependiente e imparcial, establecido con anterioridad por la ley, en
la sustanciación de cualquier acusación penal formulada contra ella
o para la determinación de sus derechos y obligaciones de orden civil,
laboral, fiscal o de cualquier otro carácter.

EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS IRREGULARIDADES... 341

mediar lo que consideró una flagrante denegación de justicia de


miles dejubilados argentinos por parte del Estado Nacional.

2. Toda persona inculpada de delito tiene derecho a que se presuma


su inocencia mientras no se establezca legalmente su culpabilidad.
Durante el proceso, toda persona tiene derecho, en plena igualdad, a
las siguientes garantías mínimas: a) Derecho del inculpado de ser asis-
tido gratuitamente por el traductor o intérprete, si no comprende o
no habla el idioma deljuzgado o tribunal; b) Comunicación previa y de-
tallada al inculpado de la acusación formulada; c) Concesión al incul-
pado del tiempo y de los medios adecuados para la preparación de su
defensa; d) Derecho del inculpado de defenderse personalmente o de
ser asistido por un defensor de su elección y de comunicarse libre y
privadamente con su defensor; e) Derecho irrenunciable de ser asis-
tido por un defensor proporcionado por el Estado, remunerado o no
según la legislación interna si el inculpado no se defendiere por sí
mismo ni nombrare defensor dentro del plazo establecido por la ley;
f) Derecho de la defensa de interrogar a los testigos presentes en el
tribunal y de obtener la comparecencia, como testigos o peritos, de
otras personas que puedan arrojar luz sobre los hechos; g) Derecho a
no ser obligado a declarar contra sí mismo ni a declararse culpable, y
h) Derecho de recurrir del fallo ante juez o tribunal superior.
3. La confesión del inculpado solamente es válida si es hecha sin coac-
ción de ninguna naturaleza.
4. El inculpado absuelto por una sentencia firme no podrá ser someti-
do a nuevo juicio por los mismos hechos.
5. El proceso penal debe ser público, salvo en lo que sea necesario para
preservar los intereses de lajusticia.
Artículo 25. Protección judicial.
1. Toda persona tiene derecho a un recurso sencillo y rápido o a cual-
quier otro recurso efectivo ante los jueces o tribunales competentes,
que la ampare contra actos que violen sus derechos fundamentales
reconocidos por la Constitución, la ley o la presente Convención, aun
cuando tal violación sea cometida por personas que actúen en ejerci-
cio de sus funciones oficiales.
2. Los Estados Partes se comprometen: a) A garantizar que la autori-
dad competente prevista por el sistema legal del Estado decidirá so-
bre los derechos de toda persona que interponga tal recurso; b) A de-
í 342 JORGE ORGAZ

Desde una visión subjetiva activa, la claridad del arto 18 de la


LRDPN es incuestionable, al abrir la posibilidad de canalizar un
reclamo mediante la intervención del D PN a toda persona física o
jurídica que se considere afectada en el libre ejercicio de sus de-
rechos por los actos, hechos u omisiones en los que incurra laAd-
ministración Pública, sin constituir un obstáculo para ello su
nacionalidad, residencia, internación en centro penitenciario o de
reclusión o cualquier relación de dependencia con el Estado.

4) Principios
Entre los principios que tipifican el procedimiento llevado ade-
lante por el DPN en el trámite de sus investigaciones podemos
mencionar al informalísmo, la flexibilidad y la celeridad.
En relación al informalismo, por ejemplo, basta observar que
los requisitos exigidos para la presentación de un reclamo cualquie-
ra son mínimos: deberá ser escrita y firmada por el interesado, in-
dicando su nombre, apellido y domicilio, en un plazo máximo de
un año contado desde que ocurriere el acto, hecho u omisión que la
motiva.
Este reclamo ante elDPN puede ser presentado de manera per-
sonal o por escrito, debiendo en este último caso remitirse mediante
correspondencia a dicha dependencia, aunque aclaramos que po-
demos obtener información previa utilizando otros mecanismos de
gran difusión en la sociedad actual. 72

sarrollar las posibilidades de recurso judicial, y c) A garantizar el cum-


plimiento, por las autoridades competentes, de toda decisión en que
se haya estimado procedente el recurso.
Artículo 44. Competencia.
Cualquier persona o grupo de personas, o entidad no gubernamental
legalmente reconocida en uno o más Estados miembros de la Organi-
zación, puede presentar a la Comisión peticiones que contengan de-
nuncias o quejas de violación de esta Convención por un Estado par-
te.
72 Creemos que es oportuno conocer cuales son los distintos medios
con los que contamos los ciudadanos para hacer llegar a conocimien-
..
EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS IRREGULARIDADES... 343

Es oportuno también resaltar que todas las actuaciones inicia-


das son gratuitas y que no se requiere patrocinio letrado para par-
ticipar de las mismas. 73
Si hablamos delaflexibilidad, puede constatarse quelalegiti-
mación exigida para presentar un reclamo ante el DPN es menos
rígida que la requerida en las situaciones jurídicas subjetivas con-
templadas por el derecho procesal administrativo -esto es, ser ti-
tular de un derecho subjetivo o interés legítimo-, siendo suficiente
demostrar alguna vinculación entre el interesado yel problema
llevado a conocimiento de aquél. 74
El procedimiento promovido por el DPN debe gozar de celeri-
dad. Por eso, una vez recibida la quej a -que sólo excepcionalmente
puede ser rechazada- 75 se informará del contenido de la misma
al organismo o autoridad pertinente, a fin de que por medio de su
responsable y en un plazo máximo de treinta días -sólo prorro-
gable cuando las circunstancias así lo aconsejen-, remita el in-
forme escrito en respuesta al planteo formulado. 76

to del DPN nuestras inquietudes y reclamos. Si enviamos una corres-


pondencia, la dirección de la Defensoría del Pueblo de la Nación es
Montevideo N° 1244/50, C1018ACB, ciudad de Buenos Aires. El telé-
fono de dicha dependencia es (011) 4819-1600 Yel fax (011) 4819-1581.
Finalmente, su correo electrónico es defensor®defensor.gov.ar y la
página web donde encontramos toda la información de la institución
es www.defensor.gov.ar.Mientrastanto.enlaciudaddeCórdoba.la
oficina del Defensor del Pueblo N acionalla encontramos en la calle
Tucumán N" 25,9° Piso, siendo su número de teléfono (0351) 4113202.
73 Art. 19 de la LRDPN.
74 Art. 18 de la LRDPN.

75 Conforme el arto 21 de la LRDPN, el DPN no debe dar trámite a la


queja cuando advierta mala fe, carencia de fundamento, inexistencia
de pretensión o fundamento fútil o trivial, cuando la cuestión planteada
se encuentre pendiente de resolución administrativa o judicial, o cuan-
do causare algún perjuicio a intereses o derechos de terceros.
76 Art. 23 de la LRDPN.
344 JORGE ORGAZ

Finalmente, y tal como se extrae del arto 29 de la LRDPN, una


l 1

vez concluida su tarea, el DPN procederá a comunicar al interesa-


do el resultado de sus investigaciones y gestiones, así como la res-
puesta que hubiese dado al organismo o funcionario implicado,
salvo en el caso de que ésta, por su naturaleza, sea considerada
como de carácter reservado o declarada secreta. Asimismo, debe
poner en conocimiento de la Auditoría General de la N ación, en los
casos que corresponda, las conclusiones a las que arribó mediante
su actuación.

5) Competencias
La regla en este tema es que el DPN nacional puede acudir a
cualquier medio probatorio que le permita resolver satisfactoria-
mente los distintos procedimientos en los que interviene.
En particular, para cumplir con su cometido, el DPN goza de
facultades que podemos clasificar enp reventivas y reparadoras.
Entre las primeras, y según surge del contenido del arto 24 de
laLRDPN, puede solicitar expedientes, informes, documentos, an-
tecedentes y todo otro elemento que estime útil a los efectos de la
fiscalización, dentro del término que se fije y sin que pueda negar-
se dicha entrega en base a su contenido secreto, salvo cuando esta
medida se fundamente enla protección de un interés relacionado
con la seguridad nacional.
En cuanto a las inspecciones y verificaciones, el DPN puede
realizar todas aquellas que estime convenientes alos fines de con-
ducir a buen término su tarea.
Correlativamente, todos los organismos y entes mencionados
más arriba y sus agentes están obligados a prestarle colaboración
al DPN para asegurar el éxito de la misma. 77

77Por eso, y en los términos del arto 25 de la LRDPN, todo aquel que
impida formular una denuncia ante el DPN u obstaculice su investi-
gación negándose, por ejemplo, a remitir los informes requeridos o
impidiendo el acceso a la documentación o expedientes cuyo estudio
es necesario para la investigación, comete el delito de desobediencia

---------- ~~ - ~--~-
EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS IRREGULARIDADES... 345

Además, no debemos olvidar que una de las características bá-


sic as del DPN -que ha sido seguida por la mayoría de las legisla-
ciones-78 , radica en que sus resoluciones carecen de coactividad
jurídica, es decir, no pueden anular ninguna de las decisiones adop-
tadas por parte de la Administración Pública y que han sido objeto
de su contralor.
Sin embargo, si se convence que el cumplimiento riguroso de
una norma puede llegar a provocar situaciones injustas o pe:rjudi-
ciales para cualquier ciudadano, el DPN tiene la posibilidad pro-
poner al poder legislativo o a la Administración Pública su modi-
ficación. 79

tipificado por el arto 239 del Código Penal, debiendo aquél remitir las
actuaciones al Ministerio Público Fiscal para el ejercicio de las accio-
nes pertinentes.
En el primero de los supuestos señalados, es decir, que haya negativa
a entregar la documentación oportunamente solicitada, el DPN pue-
de recurrir a la justicia para obtenerla.
Cuando exista una actitud persistente en entorpecer la actividad del
DPN por parte de cualquiera de los organismos o entes que caen bajo
la órbita de su control, éstos pueden ser objeto de un informe especial
o de una mención específica en el informe anual presentado ante el
Congreso de la N ación.
Finalmente, establece el arto 26 de la LRDPN que cuando el DPN, en
razón del ejercicio de las funciones propias de su cargo, tenga conoci-
miento de hechos presumiblemente delictivos de acción pública, los
debe comunicar de inmediato al Procurador General de la Nación. Éste
debe informar al DPN en cualquier caso y de manera periódica o cuando
éste lo solicite, el estado en que se hallan las actuaciones promovidas
por su intermedio.
78 Cfr. MAIoRANO, Jorge Luis, "Apuntes para un debate parlamentario.
El 'ombudsman' sueco", op. cit., pág. 842. Citando a PITARCH, agrega el
autor refiriéndose a la naturaleza no vinculante de las decisiones del
defensor del pueblo que, "[. . .] 'su magistratura es fundamentalmen-
te moral [. . .] y su función es básicamente educadora y asesora' [. ..J".
Por otra parte, es el criterio seguido por el arto 27, primer párrafo, de
laLRDPN.
79 Art. 27, segundo párrafo, de la LRDPN.
346 JORGE ORGAZ

Continuando con la enumeración, el DPN también puede for-


mular advertencias, recomendaciones, recordatorios y propuestas
a las autoridades sujetas a su control para la adopción de nuevas
medidas, debiendo ser respuestas por escrito en un plazo máximo
de treinta días. 80
La segunda categoría de competencias con las que cuenta elDPN
es la que se relaciona con su legitimación procesal, tema que ha
generado polémica tanto a nivel doctrinario como jurisprudencial.
Antes de analizar los distintas posiciones adoptadas al respec-
to, nos parece oportuno recordar la distinción existente entre la le-
gitimación procesal "ad processum" y "ad causam".
La primera se refiere a la capacidad con la que cuenta una per-
sona para estar enjuicio, mientras que la segunda constituye un
elemento imprescindible para la debida implementación de la re-
lación que se traba entre las partes. 81
La legitimación procesal "ad processum" del DPN emerge con
total claridad del texto del arto 86 de la Carta Magna nacional.
La legitimación procesal "ad causam" otorgada al DPN, según
GoZAÍNI, es representativa, pues no se analiza tanto el vínculo que
debe demostrar todo quien presenta un reclamo ante los tribuna-
les -que une la antijuridicidad con el daño sufrido-, sino la tras-
cendencia de los valores que protege. Este autor agrega que esta-
mos en presencia de un "mandato preventivo", mediante el cual "[.. .]

80 Conforme lo establece el arto 28 de la LRDPN, si formuladas las

recomendaciones, dentro de un plazo razonable no se produce una


medida adecuada en tal sentido por la autoridad administrativa
afectada, o ésta no informa al DP de las razones que estime para no
adoptarlas, éste puede poner en conocimiento del ministro del área,
o de la máxima autoridad de la entidad involucrada, los antecedentes
del asunto y las recomendaciones propuestas. Si tampoco así obtiene
unajustificación adecuada, debe incluir tal asunto en su informe anual
o especial, con mención de los nombres de las autoridades o funciona-
rios que hayan adoptado tal actitud.
81 GOZAÍNI, Osvaldo Alfredo, "Legitimación procesal del defensor del
pueblo (Ombudsman)", enLL, 1994-E-1379.
EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS IRREGULARIDADES... 347

se propicia que losjueces, en el análisis de admisión de una deman-


da, prioricen por sobre la acreditación del derecho subjetivo, la esen-
cia fundamental de la tutela que se solicita [ ...]'.82
En esta misma línea de pensamiento, BIDARTCAMPOSy MArORANO
semanifiestanafavordereconocerunalegitimaciónampliaalDPN
para la protección eficaz de los derechos humanos consagrados
constitucional y legalmente en el sistemajurídico argentino. 83
Ambos autores sostienen que de la interpretación conjunta de
los arts. 86 y 43 de la Constitución Nacional, surge que el DPN está
legitimado para actuar tanto en sede administrativa, interponien-
do toda clase de recursos, como en el ámbito judicial, mediante la
presentación de las más variadas acciones, como la ejercida en sede
penal, el recurso extraordinario por ante la Corte Suprema deJus-
ticiadelaNaciónyel amparo.
Este criterio fue seguido con algunos sobresaltos por lajuris-
prudencia de nuestro país, como por ejemplo en la causa "Consu-
midores Libres Cooperativa Limitada de Provisión de Servicios y
Acción Comunitaria e/Estado Nacional". 84
En relación a los hechos de este caso, señalemos que el DPN
junto a dos asociaciones interpuso una acción de amparo persi-
guiendo la declaraciónjudicial de nulidad del decreto 702/1995 que

82 GOZAfNI, Osvaldo Alfredo, "Legitimación procesal del defensor del


pueblo (Ombudsman)", op. cit., pág. 1379; QUIROGA LAVIÉ, Humberto,
El amparo constitucional, Rubinzal-Culzoni, Bs. As., 1998, pág. 252.
A su vez, señala PALACIO: 'T.. ,] En tanto [. . .] el Defensor del Pueblo no
es el titular del derecho invocado como fundamento de sus posibles
pretensiones, tal legitimación reviste carácter anómalo o extraordi-
nario [. ..]" (PALACIO, Lino Enrique, "El 'apagón' de febrero de 1999, los
llamados intereses difusos y la legitimación del defensor del pueblo",
enLL,2000-C-399).
83Cfr. BIDART CAMPOS, Germán, Manual de la Constitución reforma-
da, t. III, Ediar, Bs. As., 1997, pág. 327; MAIORANO, Jorge Luis, El om-
budsman. Defensor del Pueblo y de las instituciones republicanas, 2 a
ed., Macchi, Bs. As., 1999, págs. 533 y ss.
84 LL, 1995-E-516.
- 348 JORGE ORGAZ

disponía la intervención de la Comisión Nacional de Telecomuni-


caClOnes.
En su resolución, y en el aspecto que a nosotros nos interesa, el
Juzgado Nacional de 1a Instancia en lo Contencioso Administra-
tivo Federal N' 9 de la ciudad de Buenos Aires, sostuvo claramen-
teque"[. . .]ElDefensordelPuebloestálegitimadoparainterponer
acción de amparo en defensa de los derechos de los consumidores
(art. 86, segundo párrafo, CN) [. ..J'.
En la instancia superior, la Sala V de la Cámara Nacional de
Apelaciones enlo Contencioso Administrativo Federal de la ciu-
dad de Buenos Aires, se pronunció en sentido contrario. 85
El tribunal de alzada afirmó que dicha normativa estaba des-
tinada a regir en el ámbito interno de la Administración Pública,
motivo por el cual, en la medida que no lesionen --en forma direc-
ta e inmediata-derechos o intereses de los particulares, estaba
excluida del controljurisdiccional pretendido por la parte actora
yeIDPN.
También expresó que la reforma constitucional de 1994, no ha
operado ningún cambio en el criterio rector que de forma indiso-
luble vincula ala ilegalidad con el perjuicio; y que la legitimación
procesal conferida por el arto 86 de la Constitución N acional al DPN
no es susceptible de ser infinitamente extendida de tal forma que
autorice suintervenciónjudicial en defensa de la pura legalidad.
Por las razones esgrimidas, losjueces sostuvieron que al no ha-
berse podido demostrar que el decreto atacado provocaba alguna
lesión actual en los derechos de los usuarios del servicio público,
no correspondía hacer lugar ala acción de amparo interpuesta.
Exponiendo una visión clásica sobre el asunto y adhiriendo al
razonamiento de este tribunal, CASSAGNE afirma que "[. . .] no cie-
rra el acceso a lajusticia a quienes reúnan los requisitos inherentes
a la aptitud procesal para ser partes en unjuicio concreto que, si-
guiendo el impecable razonamiento de la Cámara --en el ordena-
miento contencioso administrativo-, sólo se encuentra reconoci-

85 LL, 1995-E-469.
$2

EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS IRREGULARIDADES... 349

da en cabeza de quienes invoquen, conjuntamente, ilegalidady per-


juicio [ ...1', agregando que "[. . .]De la sentencia surge que este nudo
umbilical no puede desatarse, ya que, aun cuando sólo se exija para
penetrar de lleno al proceso de fondo, no es admisible una acción en
defensa de la pura legalidad desvinculada de todo perjuicio [. . .]' .86
Descartando esta última solución, fue la Corte Suprema de Jus-
ticia de la N ación la que puso fin al debate, considerando que "[. ..]
la ConstituciónNacional reconoce la legitimación para promover la
acción de amparo a sujetos potencialmente diferentes a los afecta-
dos en forma directa por el acto u omisión [. . .]'87, entre los que se
encuentra, sin duda, el DPN.
Estalíneajurisprudencial fue seguida por el Juzgado Nacional
de la Instancia en lo Contencioso Administrativo Federal N° 4,
cuando le tocó resolver favorablemente el otorgamiento de una me-
dida cautelar en los autos "Defensor del Pueblo de la Nación el Se-
cretaría de Comunicaciones s/amparo" .88
En igual sentido e incorporando nuevos elementos para el aná-
lisis, podemos mencionar al fallo dictado por la Sala II de la Cáma-
ra Nacional en lo Contencioso Administrativo Federal en la cau-
sa "Nieva, Alejandro y otros cl Poder Ejecutivo N acional"89, en

86 CASSAGNE, Juan Carlos, "De nuevo sobre la legitimación para accio-


nar en el amparo", enLL, 1995-E-469.
87 LL, 1998-C-602; Fallos, 321:1352.

88 LL, Suplemento J urisprudencial de Derecho Administrativo, del 28/

05/1998, págs. 59 y ss. En la causa mencionada, se reconoció la legiti-


mación procesal del DP para presentarse en defensa de los usuarios
del servicio telefónico, pidiendo que se declarara la nulidad de parte del
articulado de una resolución de la Secretaría de Comunicaciones,
debido a que con ella se modificaba unilateralmente el Reglamento del
Cliente del Servicio Básico Telefónico sin haberse celebrado la audien-
cia pública correspondiente a estos casos.
89 LL, 1998-B-546. La sentencia dispuso que "[. . .] El Defensor del Pue-

blo posee legitimación activa para intervenir en causas donde se cues-


tiona -como en el caso-la presunta actuación irregular del Poder
350 JORGE ORGAZ

donde DPN intervino enlos términos del arto 90, inc. 2, del Código
de Procedimiento Civil y Comercial de la Nación. 90
Profundizando esta tendencia de la doctrinajudicial argenti-
na, el Juzgado Nacional de la Instancia en lo Contencioso Admi-
nistrativo Federal N° 1, en la sentencia recaída en autos "Monner
Sans, Ricardo dPoder Ejecutivo N acional''91, no sólo consideró que

Ejecutivo Nacional que, mediante el dictado de un decreto (375/1997)


habría fijado el marco regula torio de un servicio público, excediendo
así la esfera de su competencia e invadiendo la que constitucionalmen-
te le ha sido asignada a otro poder del Estado. Ello así, pues a través
del arto 86 de la CN actúa como controlador de las funciones admi-
nistrativas públicas r.. .]'.
90Dice el arto 90 del Código de Procedimiento Civil y Comercial de la
N ación: "Intervención voluntaria. Podrá intervenir en un juicio pen-
diente en calidad de parte, cualquiera fuera la etapa o la instancia en
que éste se encontrare, quien: 1) Acredite sumariamente que la sen-
tencia pudiere afectar su interés propio. 2) Según las normas del de-
recho sustancial, hubiese estado legitimado para demandar o ser
demandado en juicio".
91 LL, 1998-D-217. En el fallo se dijo que "[. ..] La citación del Defensor
del Pueblo impulsada por los miembros del colectivo, en virtud de lo
dispuesto por el arto 43, segundo párrafo, de la CN, no incididos en un
derecho subjetivo, debe revestir la naturaleza de una intervención obli-
gada, la cual no podría ser excusada por aquél en razón de haber res-
pondido a una citación anterior o con motivo de su previa interven-
ción en otro proceso, pues tal citación no encuentra limitaciones de
ese tipo ni por esa causa [. . .]", agregándose que "[. ..] Cuando el De-
fensor del Pueblo es citado por los miembros del colectivo, en virtud
de lo dispuesto por el arto 43, segundo párrafo, de la CN, puede mani-
festar que no está de acuerdo con el criterio sustentado por quien de-
duce la acción de amparo, o que no existe el derecho invocado o el pre-
tendido agravio colectivo. Sin embargo, si comparte las razones que
motivaron la promoción de tal acción, debe permanecer junto al ac-
cionante particular, pues si habiendo reconocido que le asistía razón
en la promoción de la acción no lo acompaña con su propia legitima-
ción y como consecuencia de tal abandono aquélla es rechazada por
faltar capacidad subjetiva, la actuación del mencionado funcionario
es inconstitucional [. . ']".
EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS IRREGULARIDADES... 351

el DPN está legitimado para entablar una acción de amparo, sino


que, en caso de ser citado, estaba obligado a participar en eljuicio.
También la Sala IV de la Cámara Nacional en lo Contencioso
Administrativo Federal resolvió reconocer la legitimación para
accionar del DPN de la N ación enlos autos: "YoussefianMartín el
PEN - Secretaría de Comunicaciones - sI amparo ley 16.986".92
A su turno, fue la Sala III de la Cámara Nacional en 10 Conten-
cioso Administrativo Federal la que reconoció legitimación proce-
sal al DPN en la causa "Defensor del Pueblo de la N ación el Poder
Ejecutivo siamparo". 93
Más cercana a nosotros, y en el marco de la emergencia econó-
mica e institucional cuyos efectos aún padece nuestro país, encon-
tramos la sentencia dictada por el Juzgado Nacional enlo Conten-
cioso Administrativo Federal N° 9, en el caso "Defensor del Pueblo
de la Nación el PEN sI amparo"94, en donde también se le reconoció
legitimación procesal a este órgano de control.

92 LL, 1998-D-712. En este caso el DPN adhirió a la demanda entabla-


da por el actor que perseguía se ordenara a la accionada abstenerse
·de prorrogar el período de exclusividad de las Licenciatarias del Ser-
vicio Básico Telefónico Nacional e Internacional, sin cumplir con la
realización previa de una audiencia pública. Al ser cuestionada por
parte de la demandada su legitimación, el tribunal sostuvo que "[. . .]
en lo que se refiere al Defensor del Pueblo de la Nación, no puede de-
jar de tomarse en cuenta la legitimación procesal que genéricamente
se le confiere en el arto 86 de la eN, y también que en el arto 43 de ésta
se regula de manera específica su habilitación para intervenir en los
juicios de amparo en casos como el sub examine. Debe dejarse en cla-
ro, asimismo, que su participación lo es en defensa de un derecho de
usuarios y consumidores: el de participación en el control de los ser-
vicios públicos, que se vería afectado por una ilegítima omisión de la
Administración [. ..]'.
93 LL, 1997 -C-836. En eljuicio, el DPN solicitó la declaración de incons-

titucional del arto 2° del decreto 921/1997 por el cual se disponía la


modificación de la las tarifas telefónicas y cautelarmente la suspen-
sión de dicho acto administrativo.
94 LL, 2002-F-211.
352 JORGE ORGAZ

El fallo mencionado, permitió al DPN presentarse ante lajus-


ticia federal para solicitar la inconstitucionalidad de los decretos
N° 1570/01 YN° 1606/01-relacionados con la implementación de
lo que se conoce como "corralito financiero"-, "[. . .]pues el arto 86
de la Constitución Nacional confiere a éste la defensa y protección de
los derechos humanos y demás derechos y garantías e intereses
tutelados por la Carta Magna {.. .]'.
El criterio expuesto fue ratificado por la Sala V de la Cámara
Nacional en lo Contencioso Administrativo Federal una vez for-
mulada la apelación por el Estado Nacional, e127 de septiembre
del año 2002. 95
Luego de esta reseñajurisprudencial podemos llegar a la con-
clusión de que, en general, lajusticia federal no ha puesto obstá-
culos a la hora de admitir la legi timación procesal del DPN.
Tal postura es compartida por nuestra parte, ya que es la que
mejor refleja el alcance de los arts. 86 y 43 de la Constitución N a-
cional, que deben ser interpretados sistemáticamente con el resto
de sus disposiciones tomando en consideración el espíritu del cons-
tituyente nacional al decidir la incorporación de este instituto, y
con la realidad histórica por laque atraviesa Argentina desde aquel
tiempo.
En efecto, ymás allá de un análisis técnico del problema, no de-
bemos olvidar que la reforma constitucional de 1994 tuvo entre sus
principales objetivos -y logros- el reconocimiento y fortaleci-

95Es GELLI quien duda en relación a si la legitimación que conceden los


arts. 86 y 43 de Constitución Nacional al DPN para la tutela de los
derechos humanos puede extenderse a aquellos de naturaleza contrac-
tual-como en este caso, el derecho de propiedad-, que según la doc-
trina de nuestro Alto Tribunal son renunciables (GELLI, María Angéli-
ca, Constitución de la Nación Argentina, 2a ed., La Ley, Bs. As., 2003,
pág. 657). En cambio, HERNÁNDEZ se encarga de resaltar la estrecha
vinculación existente entre el derecho de propiedad y la naturaleza y
dignidad humana (HERNÁNDEZ, Antonio María, Las emergencias y el
orden constitucional, Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Uni-
versidad Nacional Autónoma de México, México, 2003, pág. 76).
EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS IRREGULARIDADES... 353

miento de la protección de los derechos humanos, como fácilmen-


te puede comprobarse con el agregado del Capítulo Segundo a su
Primera Parte, denominado "Nuevos derechos y garantías", y con
la incorporación de los más importantes instrumentos sobre la ma-
teria, a través del arto 75, inc. 22.
Sucede que, en definitiva, resul ta imposible concebir la plena
vigencia de estos derechos sino contamos con instituciones que
posean con los medios y procedimientos suficientes para cumplir
eficazmente con este trascende~tal objetivo.
Retomando brevemente el caso "Frías Malina", señalemos que
la presentación efectuada por el DPN por ante la Corte Interame-
ricana de Derechos Humanos, abrió el debate en torno a si éste cuen-
ta con competencia procesal trasnacional.
Según CARNOTA 96 es imposible reconocerle al DPN tal legitima-
ción porque, en primer lugar, no está incluido por el arto 44 de la
Convención Americana sobre Derechos Humanos97 como sujeto
legitimado para presentar denuncias o comunicaciones, y porque,
en segundo término, al ser una institución que forma parte del
Estado argentino, nos encontraríamos en una situación en la que
el Estado demanda al propio Estado en el ámbito internacional.
En cambio, para GIL DOMÍNGUEZ en principio el DPN cuenta
con legitimación procesal trasnacional, ya que si puede litigar
contra la Administración Pública nacional "[. . .] nada obstaría a
que presentara una comunicación ante la Comisión en represen-
tación de un grupo de personas cuando existe una situación de vio-
lación de derechos humanos porparte de cualquiera de los tres po-
deres[.. .]'.98

96 CARNOTA, W alter, "El ombudsman, los jubilados y la Comisión Inte-


ramericana de Derechos Humanos", enED, 173-1072.
97 Véase nota 45.
98 Cfr. GIL DOMÍNGUEZ, Andrés - JIMÉNEZ, Eduardo Pablo, "El Defensor
del Pueblo en Argentina y Perú: dos propuestas constitucionales lati-
noamericanas", enLL, 1997-F-1431.
354 JORGE ORGAZ

6Jlnformes
Como dijimos, al ser un representante del Congreso Nacional,
el DPN rinde cuenta a él de sus actuaciones mediante la presenta-
ción de dos clases de informes: el anual u ordinario, de carácter obli-
gatorio' y el especial o extraordinario, de naturaleza facultativa.
Mediante el primero, que deberá presentarse antes del 31 de
mayo, el DPN brindará a ambas Cámaras información de todo lo
realizado a lo largo del año transcurrido en el ej ercicio de sus fun-
ciones. El segundo, podrá presentarse cuando la gravedad o urgen-
cia de los hechos asílo aconsejen.
Cualquiera de ellos, deberá ser publicado en el Boletín Oficial
yen los Diarios de Sesiones de ambas Cámaras del Parlamento
argentino.
Sobre este último punto, puede observarse que la difusión de
estos informes es una de las herramientas más importantes con las
que cuenta el DPN para llevar a buen puerto sus investigaciones.
En efecto, produce una fuerte ''presión moral"99 sobre los organis-
mos administrativos sujetos a su control.
También, y según hemos precisado anteriormente, el DPN po-
see una página propia en internet , y a través de ella no sólo sus in-
formes, sino también estadísticas, investigaciones y demás infor-
mación de interés, pueden llegar a conocimiento de millones de
ciudadanos, brindando de esta forma un canal de participación
importantísimo para ellos, circunstancia que trae aparejado el
fortalecimiento de la vida democrática de nuestro país. lOO

99 Cfr. MAIORANO, Jorge Luis, "Apuntes para un debate parlamenta-


rio. El 'ombudsman' sueco", enLL, 1984-C-842. Continúa diciendo este
especialista en la materia que "[. . .] Ese informe es, en los hechos, un
cuadro de honor negativo en el cual son nombrados los funcionarios
y los organismos cuya conducta negligente ha sido comprobada [.. ']".
100 Al final de este capítulo y a título ilustrativo, se acompaña como

"Anexo 1", el informe estadístico referido a las actuaciones del DP


durante el año 2003.
EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS IRREGULARIDADES... 355

Entonces, en este caso, la difusión es una "oportunidad moral"


que debemos aprovechar cada uno de nosotros para informarnos
acerca del comportamiento de la Administración Pública y, en caso
de irregularidades, corregir su rumbo en beneficio de todos.
En relación al contenido del informe anual, según lo establece
elart. 32 de la LRDPN, elDPN da cuenta del número y tipo de que-
jas presentadas; de aquellas que hubiesen sido rechazadas y sus
causas, así como de las que fueron objeto de investigación y el re-
sultado obtenido en cada una de ellas.
En este informe no deben constar datos personales que permi-
tan la pública identificación de los interesados en el procedimien-
to investigador, sin perjuicio de lo dispuesto en el arto 26 de la
LRDPN.
En su estructura, el informe deberá contener un anexo, cuyos
destinatarios serán las Cámaras del Congreso Nacional, y en el que
se debe incorporar una detallada rendición de cuentas del presu-
puesto ejecutado por la institución en el período que corresponda.
Finalmente, mediante este informe el DPN puede proponer al
Parlamento argentino modificaciones a la LRDPN que posibiliten
un mejor cumplimiento de las funciones que dicha normativa le
asigna.

c. El Defensor del Pueblo en el orden provincial


1.~tecetlentes

En el ámbito jurídico de Córdoba el primer antecedente que


encontramos relacionado a la implementación del D P provincial
(de aquí en adelante, DPP) es el proyecto presentado por el enton-
ces senador provincial José Zamanillo en el año 1986.
Un año después la Constitución Provincial incorporó esta ins-
titución con motivo de su reforma inspirándose el constituyente
local en la citada propuesta legislativa, en los numerosos ejemplos
ofrecidos por el derecho comparado, y enlos escasos precedentes
existentes en aquel momento en nuestro país.
-
356 JORGE ORGAZ

Esta última tendencia a nivel nacional parece haberse rever-


tido, pues hoy cuentan con este órgano de control, además de los
ejemplos ya mencionados, la ciudad de Buenos Aires y las provin-
cias de Chubut, Corrientes, Formosa, J ujuy, Mendoza, N euquén,
Santa Fe, Santiago del Estero, Tucumán, y las ciudades de Ave-
llaneda, La Plata, Pilar, Quilmas, Vicente López (Provincia de
Buenos Aires), Corral de Bustos, Villa María y Río Cuarto (Provin-
cia de Córdoba), Corrientes (Provincia de Corrientes), Chilecito
(Provincia de La Rioj a), Posadas (Provincia de Misiones), La Ban-
da y Santiago del Estero (Provincia de Santiago del Estero).

2. El Defensor del Pueblo en la Constitución Provincial

La Constitución de Córdoba establece las características bási-


cas del DPP en su arto 124101 , que dice:
"La Legislatura con el voto de los dos tercios de sus miembros
reunidos enAsamblea designa al Defensor del Pueblo, como co-
misionado para la defensa de los derechos colectivos o difusos, la
supervisión sobre la eficacia en la prestación de los servicios pú-
blicos y la aplicación en la Administración de las leyes y demás dis-
posiciones, de acuerdo con lo que determine la ley.
Goza de las inmunidadesy privilegios de los Legisladores, dura
cinco años en sus funciones y no puede ser separado de ellas sino por
las causales y el procedimiento establecido respecto aljuicio políti-
co",

3. Caracteres

Utilizando el mismo criterio escogido al encarar el estudio del


DP nacional, las características más importantes del DPPlas ob-

101 Ubicamos a esta norma en la Segunda Parte (Autoridades de la


Provincia), Título Primero (Gobierno Provincial), Sección Primera
(Poder Legislativo), Capítulo Séptimo (Defensor del Pueblo y Conse-
jo Económico Social) de la Constitución local.
pe zq

EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS IRREGULARIDADES ... 357

tendremos del contenido del arto 124 de la Constitución Provincial


combinado con las disposiciones de la ley reglamentaria del DPP
N° 7741 (de aquí en adelante, LRDPP).
También es oportuno aclarar en esta oportunidad que el DPP
comparte las principales notas de su similar nacional, motivo por
el cual solamente nos detendremos en las particularidades que me-
rezcan un análisis específico, remitiéndonos en lo demás a los con-
ceptos ya vertidos al abordar el estudio de éste último.

Denominación
En este punto, tanto el arto 124 de la Constitución de Córdoba
como la LRDPP utilizan para denominar a este instituto las mis-
mas palabras con las que se lo conoce en la mayoría de los países de
habla hispana, es decir, DP.
Un pequeño detalle, que pone de manifiesto el papel de repre-
sentante del poder legislativo que posee el DPP, es que también la
Ley Fundamental cordobesa lo llama "comisionado", término con
la que se lo designa, por ejemplo, en Inglaterra.

Función
La principal misión encargada al DPP surge del propio conte-
nido del arto 124 de la Carta Magna provincial, cuando sostiene que
le corresponde "[. . .] la defensa de los derechos colectivos o difusos,
la supervisión sobre la eficacia en la prestación de los servicios pú-
blicos y la aplicación en la administración de las leyes y demás
disposiciones, de acuerdo con lo que determine la ley [. ..J'.
En relación a los derechos denominados "difusos", señala QUI-
ROGALAVIÉ que en verdad sólo su pertenencia o titularidad adquiere
esa característica, pues el derecho tutelado está claramente iden-
tificado. 102

102 QUIROGA LAVIÉ, Humberto, Los derechos públicos subjetivos, De-

palma, Bs.As., 1985, pág. 107.


358 JORGE ORGAZ

Los intereses difusos, señala FERREYRADE DE LA RÚA, "[. . .] com-


prenden aquellos derechos que se relacionan con la defensa de va-
lores trascendentes de un grupo y que se refieren a la preservación
del medio ambiente o la ecología, la calidad de vida, la defensa de
losconsumidores,ytambiénelderechoanoserdiscriminado[...]'.103
En torno ala supervisión de la prestación de los distintos servi-
cios públicos provinciales, habrá que conjugar esta disposición
constitucional, el art.13 de la LRDPPy lo establecido por el arto 24
de la ley provincial 8835 -llamada "Carta del Ciudadano"-, en
razón de que todas tutelan un mismo interés. Con el obj eto de pro-
fundizar el tema, nos remitimos al Capítulo VI del Tomo 1 de la pre-
senteobra.
Por último, recordemos que la Constitución de Córdoba encar-
ga la tutela de los intereses difusos no sólo al DPP sino también a
los particulares104 y al Ministerio Público Fiscal105 , sólo que al pri-
mero no le otorga legitimación procesal a tal fin.

Naturaleza
El DPP es un representante de la legislatura que se encarga de
su elección conforme el procedimiento establecido por el arto 124
de la Constitución de la Provincia.
Luego, y antes de comenzar con su gestión, el DPP prestajura-
mento ante el presidente del órgano legislativo provincial, com-
prometiéndose a cumplir debidamente su cargo respetando suley
reglamentaria, la Constitución Provincial y la Carta Magna Fe-
deral, conforme lo manda el arto 20 de la LRDPP.
Esta vinculación institucional entre el DPP y la legislatura
provincial tiene diversas consecuencias para aquél.

103 FERREYRA DE DE LA RÚA, Angelina, "La protección de los llamados


intereses difusos en la Constitución Nacional y la Constitución de la
Provincia de Córdoba", en LL, 1996-B-790.
104 Art. 53 de la Constitución Provincial.
105 Art. 172, inc. 1, de la Constitución Provincial.
EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS IRREGULARIDADES... 359

En primer lugar, el DPP tendrá la obligación de presentar un


informe anual antes dell° de marzo ante ésta106 y, en segundo tér-
mino, gozará de las mismas inmunidades, privilegios, remunera-
ciones y régimen previsional que la Constitución Provincial reco-
nocealoslegisladores.107
La representación de la legislatura por parte del DPP no signi-
fica subordinar su actuación a las decisiones del órgano legislati-
vo provincial, ya que aquél goza de plena autonomía para llevar
adelante sus funciones que, además, no se podrán interrumpir por
ningún motivo, conforme lo establece el arto 5° de la LRDPP.
Refuerza este concepto, la posibilidad que cuenta el DPP de
dictar su propio reglamento interno 108 , de designar un adjunto y
demás personal para que lo auxilie en su tarea109 y de administrar
su presupuesto.

Requisitos personales
Para ser designado DP en la Provincia de Córdoba, y según lo
estipula el arto 3° de la LRDPP, se requerirá tener treinta años de
edad como mínimo, ser argentino nativo o por opción, tenerciuda-
danía en ejercicio y residencia enla provincia durante cuatro años
anteriores inmediatos aladesignación,salvo casos de ausenciamo-
tivada por servicios a la nación o a la provincia, o en organismos
internacionales.
A diferencia de lo que ocurre en el ámbito nacional en donde se
exige determinadas competencias profesionales, para ser adjun-
to del DPP por dicha norma.

106 Art. 19, primera parte, de la LRDPP. Este artículo prevé que el in-
forme anual se presentará sin perjuicio de los informes especiales que
en cualquier oportunidad el DP eleve o le soliciten la Legislatura o los
legisladores en particular.
107 Arts. 93 y 94 de la Constitución Provincial; arto 10 de la LRDPP.
108 Art. 18, primer párrafo, de la LRDPP.
109 Arts. 8°, primer párrafo, y9° de la LRDPP.
360 JORGE ORGAZ

Para asegurar la imparcialidad y plena dedicación en el ejerci-


cio de sus funciones, el cargo de DPP es incompatible con el desem-
peño de actividades políticas, gremiales y profesionales , conexcep-
ción de la docencia e investigación. 110

Mandato
Según el arto 5° de la LRDPP, el mandato del DPP dura cinco
años, pudiendo ser designado por nuevos períodos.
Sin embargo, el plazo mencionado puede no llegar a cumplir-
se, si el DPP presenta la renuncia a su cargo ante la legislatura
provincial, que decidirá sobre la misma con el voto de la mayoría
simple de sus integrantes presentes al momento del tratamiento
de dicho pedido. l l l
Si el DPP se encuentra temporalmente imposibilitado de ejer-
cer su cargo, será reemplazado por su adjunto hasta tanto lo rea-
suma nuevamente. 112

Procedimiento
1) Forma de actuación: tal como surge del art.ll, primer párrafo,
LRDPP el DPP puede iniciar o continuar de oficio o a petición del
interesado toda clase de investigaciones que sean de su competen-
CIa.
Recordemos que la intervención del DPP no es obligatoria para
quien está interesado en presentar un reclamo, motivo por el cual
no interrumpe los plazos con los que éste cuenta para interponer
los recursos administrativos y acciones judiciales que considere
convenientes, debiendo esta situación en razón de existir plazos
procesales enjuego ser puesta en conocimiento de aquella perso-
na que se presenta con su quej a originariamente ante el DPP. 113

110 Art. 6°delaLRDPP.


111 Art. 7°, primer párrafo, de la LRDPP. Inmediatamente después, la

Legislatura procederá a designar a un nuevo DPP.


112 Art. 8°, primer párrafo, de la LRDPP.

113 Art. 17, último párrafo, de la LRDPP.


EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS IRREGULARIDADES... 361

2) Objeto: como regla, toda la actividad desplegada por el DPP


recae sobre los actos, hechos u omisiones enlos que incurralaAd-
ministración Pública provincial y sus agentes que signifiquen en
términos generales el ejercicio irregular de sus funciones.
Es decir que desde elpunto de vista objetivo el poder de control
con el que cuenta el DPPno sólo se limita a los actos, hechos u omi-
siones que vulneran el ordenamientojurídico propiamente dicho,
sino que alcanza a distintas manifestaciones de mala administra-
ción.
3) Sujetos: desde unaperspectiva subjetiva pasiva, la fiscaliza-
ción llevada a cabo por el DPP según la regla establecida por el
art.12delaLRDPP,alcanzaalaAdministraciónpúblicaprovin-
cial en su conjunto; esto es, la Administración centralizada y des-
centralizada, las entidades autárquicas, las empresas del Estado, las
sociedades de economía mixta, las sociedades con participación esta-
tal mayoritaria, y todo otro organismo del Estado provincial cualquie-
ra fuere su naturalezajurídica, denominación, ley especial que pu-
diera regirlo, o el lugar del país donde preste sus servicios.
El artículo siguiente afirma que también son controladas por
el DPP las personas jurídicas no estatales o privadas que ejerzan
funciones estatales delegadas o prerrogativas públicas, o cuando
presten servicios públicos por concesión o cualquier otro acto ad-
ministrativo del Estado provincial.
Por último, y en una solución legal similar a la adoptada en el
orden federal-que nuevamente criticamos por no discriminar
entre la función típicamentejurisdiccional y la de naturaleza ad-
ministrativa que despliega el Poder Judicial provincial- según
el arto 11, segunda parte, de la LRDPP, el DPP "[. . .] no podrá in-
terueniren casos o asuntos que estén sometidos a la competencia del
Poder Judicial de laProvincia{.. .]'.
Es SESÍNll4 quien afirma que sólo en los casos que el órgano ju-
dicial provincial desarrolle actividades administrativas "{.. .] se-

114 SESÍN, Domingo, "Defensor del Pueblo, Poder Judicial y Derechos


de Incidencia Colectiva", en Foro de Córdoba, Suplemento de Dere-
362 JORGE ORGAZ

ría posible la participación del Defensor delPueblo para exhortar


la superación de las disfunciones o demás aspectos que se incardi-
nen esencialmente en el mérito, oportunidad y conveniencia de cier-
tas medidas o comportamientos [. . .]', sin que se afecte la división
de poderes como núcleo que caracteriza a un sistema republicano de
gobierno.
4) Principios: según el contenido del arto 18, segundo párrafo,
de la LRDPP, los criterios rectores del procedimiento que llevará
adelante el DPP son la informalidad, la gratuidad, la celeridad y
la necesidad de un pronunciamiento obligatorio. 115
En relación ala informalidad, el DPP debe dar trámite a todos
los reclamos que recibe y sólo excepcionalmente puede desecharlos
en aquellas ocasiones específicamente previstas por ley. Enuncia-
das por el arto 17 de la LRDPP, y teniendo en cuenta su naturaleza
podrá desestimar la denuncia cuando advierta mala fe, carencia o
trivialidad del fundamento o que el asunto no es de su competen-
cia. Además, yen relación a los plazos que rigen el procedimiento,
cuando haya transcurrido más de un año calendario desde que el
hecho, acto u omisión que motiva la queja se hubiere producido o
hubiere tomado conocimiento el interesado.
No debemos olvidar que en ningún caso la denuncia ante el DPP
interrumpe los plazos previstos para la presentación de los recur-
sos administrativos y acciones judiciales con los que pudiera lle-
gar a contar la persona involucrada en el asunto.

cho Administrativo y Constitucional, N° 1, Advocatus, Córdoba, 2000,


pág. 32.
115 La obligación que pesa sobre el DPP de pronunciarse sobre cada uno
de los asuntos en que interviene encuentra su correlato en el derecho
que tiene toda persona de peticionar a las autoridades, de vieja data
en el constitucionalismo argentino y receptado por la Constitución
Provincial en su arto 19, inc. 9.
EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS IRREGULARIDADES... 363

5) Competencias: el DPP cuenta solamente con facultades pre-


ventivas para lograr resolver cada uno de los asuntos que son lle-
vados a su conocimiento.
Enlos términos del arto 14de laLRDPP, el DPP está facultado
para solicitar a todas las autoridades que caen baj o la órbita de su
control, informes -que deberán contestarse en un plazo máximo
de diez días hábiles de formalizado el pedido-, expedientes y do-
cumentos e instarlas a realizar las investigaciones que permitan
al esclarecimiento de los hechos que determinan su actuación.
Puede también, según lo fija el arto 15 de laLRDPP, sugerir ala
Administración provincial la modificación de las pautas tenidas en
cuenta al momento del dictado de resoluciones y actos administra-
tivos, y al Poder Legislativo acerca de normas que al momento de su
aplicación generan situaciones injustas para los ciudadanos.
El DPP estará en condiciones de formular a las autoridades
públicas advertencias, recomendaciones, recordatorios y propues-
tas para la adopción de nuevas medidas.
Además, puede instar alas autoridades administrativas a cum-
plir acabadamente con las facultades de control y sanción que po-
seen en relación a los prestatarios de servicios públicos.
Correlativamente, todos los organismos y entes mencionados
más arriba y sus agentes están obligados a prestarle colaboración
al DPP para asegurar el éxito de su tarea.
En situaciones en las que las autoridades administrativas no
remitieran los informes, documentos o expedientes solicitados por
el DPP, o en los casos que se negaran a realizar las inspecciones o a
fundamentar la negativa a las modificaciones o recomendaciones
por él aconsejadas, aquél comunicará dichas circunstancias ala le-
gislatura -mediante los informes contemplados en el arto 19 de la
LRDPP-, organismo y funcionario jerárquico correspondiente.
Las resoluciones del DPP carecen de coactividadjurídica, es
decir, no pueden anular ninguna de las decisiones adoptadas por
parte de la Administración Pública y que han sido objeto de su con-
tralor. 116

116 Arts. 11 y 16 de la LRDPP.


364 JORGE ORGAZ

Una de las diferencias más nítidas existentes entre el DPP y su


par nacional radica en que la Constitución N acionalle reconoce
expresamente legitimación procesal para el cumplimiento de sus
funciones, mientras que la LRDPP se la niega, careciendo, por lo
tanto, de las denominadas facultades represivas.
En efecto, yenuna solución legal que criticamos, según el art. 16,
segunda parte, de la LRDPP, el DPP no puede "[... ] requerir deci-
siones de los Tribunales de Justicia [. . .]'.
Éste ha sido el criterio seguido por la doctrinajudicial del Tri-
bunal Superior de la Provincia de Córdoba en autos "González, Gui-
Hermo Eduardo y otro el César Pascual Pérez - amparo - recurso
de apelación", y "Molina Herrera, Adonis Ramón si amparo por
mora de la Administración (Fiscal de Estado) -recurso directo hoy
casación", ambos de fecha 21 de noviembre de 1996.
Entre otros aspectos, se trataba de resolver si con el objeto de
salvaguardar los intereses difusos reconocidos por el arto 53 de la
Constitución Provinci al 117,corresponde otorgar legitimación pro-
cesal a los fines de la interposición de la acción de amparo en un
caso y de la acción de amparo por mora en el otro, a quienes invoca-
ban su condición de "concejal" o de simple "habitante o ciudadano
de la NaciónArgentina".
Rechazando tal posibilidad, y en el marco teórico brindado por
enjundiosos votos del vocal Sesín (puntos 6. 6y 10, respectivamen-
te), ambos fallos señalan que "[.. .]En la Provincia de Córdoba, los
denominados intereses difusos han sido tutelados por el arto 53 de la
Constitución, y reglamentada su operatividad mediante la ley 7741.
Elart.11,apartado1, de la misma, le acuerda al Defensor del Pue-
blo la defensa de tales intereses. Empero, dicho funcionario tiene una
competencia limitada a lo expresamente facultado por la ley, care-
ciendo de una legitimación efectiva para estar enjuicio en defensa
de los mismos [. . .]'.

117 Dice esta norma que "La ley garantiza a toda persona, sin perjui-
cio de la responsabilidad del Estado, la legitimación para obtener de
las autoridades la protección de los intereses difusos, ecológicos o de
cualquier índole, reconocidos en esta Constitución".
EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS IRREGULARIDADES... 365

6) Informes: como representante de la Legislatura provincial,


el DPP rinde cuenta ante la misma de sus actuaciones mediante
la presentación de dos clases de informes: el anual u ordinario, de
carácter obligatorio, yel especial o extraordinario, de naturaleza
facultativa.
Tal como lo establece el arto 19 de la LRDPP, el primero deberá
presentarse antes del 1 de marzo, brindando el DPP al poder legis-
lativo información de todo lo realizado a lo largo del año transcu-
rrido en el ejercicio de sus funciones.n 8 El segundo, podrá presen-
tarse cuando las circunstancias así lo aconsejen, voluntariamente
o solicitud de la Legislatura o de cualquiera de sus integrantes.
Cualquiera de ellos deberá ser publicado en el Boletín Oficial
de la Provincia.
La publicidad de las investigaciones que desarrolla el DPP es
un elemento de vital importancia para que la ciudadanía en gene-
ral tome conocimiento de problemas directamente vinculados asus
derechos y calidad de vida. 119

IV. LA OFICINA ANTICORRUPCIÓN

A. La Oficina Anticorrupción en el orden federal

1. Antecedentes

Tal como lo demostramos en el primer volumen de esta obra,


nuestro país tiene el triste privilegio de ser uno de los estados con

118 Se acompaña como "Anexo II" los gráficos y estadísticas correspon-

dientes al año 2003.


119 Más allá de las publicaciones oficiales que permiten tomar contac-
to con las distintas actuaciones realizadas por el DPP, creemos que
es oportuno recordar que sus oficinas en la ciudad de Córdoba tienen
su sede en la calle Tucumán N" 25,2°,3° Y4° Piso, siendo sus números
telefónicos el 434-2060, 434-2061 y 423-9816 Y su correo electrónico
defpuebc@infovia.com.ar.
366 JORGE ORGAZ

menores índices de transparencia en la gestión de gobierno a es-


cala mundial. 120
Como consecuencia, la lucha contra el flagelo de la corrupción
es desde hace algunos años uno de los problemas centrales de la
agenda institucional argentina.
En este contexto, tanto el quinto como el sexto párrafo del nue-
vo arto 36 de la Constitución Nacional incorporado tras su refor-
ma de 1994, reflejan la preocupación del constituyente sobre este
tema, al establecer que "Atentará asimismo contra el sistema de-
mocrático quien incurriere en grave delito doloso contra el Estado
que conlleve enriquecimiento, quedando inhabilitado porel tiem-
po que las leyes determinen para ocupar cargos o empleos públicos"
y que "El Congreso sancionará una ley sobre ética pública para el
ejercicio de la función" (pública), respectivamente.
Si bien parte de la doctrina121 es escéptica en cuanto a la tras-
cendencia de esta norma constitucional, resulta importante resal-
tar que por primera vez los hechos por ella descriptos son califica-
dos como "atentados al sistema democrático" y por ende, sus autores
como verdaderos "delincuentes institucionales".
Luego, mediante la ley 24.7 59122 la República Argentina incor-
poró a su sistema normativo la Convención Interamericana con-
tra la Corrupción celebrada en el contexto de la Organización de
Estados Americanos (O .E.A.) en el año 1996, que brinda el marco
jurídico fundamental en la materia.
Tomando conciencia sus signatarios de la gravedad del proble-
ma de la corrupción que "[. . .] socava la legitimidad de las institu-
ciones públicas, atenta contra la sociedad, el orden moral y lajusti-
cia, así como contra el desarrollo integral de los pueblos[ .. .J', fijaron
como propósito "[. . .] Promover y fortalecer el desarrollo, por cada
uno de los Estados Partes, de los mecanismos necesarios[ .. .J' para
prevenirla, detectarla, sancionarla y erradicarla.

120 Pág. 191, nota 40, segunda parte.


121 QUIROGA LAVIÉ, Humberto, Constitución de la Nación Argentina
comentada, pág. 189.
122 Adla, LVII-A-12.
p -

EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS IRREGULARIDADES... 367

Por otra parte, la sanción de la Ley de Ética de la Función PÚ-


blica 25.188123 , contribuyó a respaldar la luchajurídica contra la
corrupción administrativa.

2. Ubicación y naturaleza institucional

La Oficina Anticorrupción nacional (de ahora en más, OAN) fue


creada por el art.13 de laLeyde Ministerios N° 25.233 124 en el año
1999 en el ámbito del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos
de la N ación.
Es un organismo "desconcentrado" de aquél, ya que sus compe-
tencias y atribuciones surgen expresamente de las normas que re-
gulan específicamente su actuación.

3. Estructura orgánica

Conforme lo establece el arto 6 del decreto 102/990125 -regla-


mentariodel arto 13 de la ley 25.233-1a OAN estará a cargo de un
Fiscal de Control Administrativo, con rango y jerarquía de Secre-
tario, que será designado y removido por el Presidente de la N a-
ción a propuesta del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos.
A su vez, y según el arto 9° de dicha normativa, la OAN estará
compuesta por la Dirección de Investigaciones y por la Dirección
de Planificación de Políticas de Transparencia, cuyos funcionarios
tendrán el rango y jerarquía de Subsecretarios, siendo su sistema
de designación y remoción similar al del Fiscal de Control Admi-
nistrativo.
En un claro intento de hacer efectiva su tarea, el arto 15 del de-
creto 102/99 exige a todos sus profesionales la acreditación de es-
pecial versación en derecho, sociología, ciencias económicas, sis-

123 Adla, LIX-E-5292.


124 Adla, LX-A-86.
125 Adla, LX-A-230.
368 JORGE ORGAZ

temas y gestión administrativa, análisis institucional y cultura


organizacional, y cualquier otra especialización requerida para
cumplir sus tareas específicas.
Puede observarse entonces que el problema de la corrupción es
analizado con un criterio multidimensional con el objeto de obte-
ner respuestas integrales al mismo.

4. Función

El arto 10 del decreto 102/99 encomienda a la OAN la tarea de


velar por la prevención e investigación de aquellas conductas que
dentro del ámbito fijado por este último, se consideren compren-
didas en la Convención Interamericana contra la Corrupción apro-
bada, como dijimos, por ley 24.759. 126

126Estas conductas se enumeran en el arto 60 de la Convención que bajo


el título de "Actos de corrupción", señala que"1. La presente Conven-
ción es aplicable a los siguientes actos de corrupción:
a. El requerimiento o la aceptación, directa o indirectamente, por un
funcionario público o una persona que ejerza funciones públicas, de
cualquier objeto de valor pecuniario u otros beneficios como dádivas,
favores, promesas o ventajas para sí mismo o para otra persona o
entidad a cambio de la realización u omisión de cualquier acto en el
ejercicio de sus funciones públicas;
b. El ofrecimiento o el otorgamiento, directa o indirectamente, a un
funcionario público o a una persona que ejerza funciones públicas, de
cualquier objeto de valor pecuniario u otros beneficios como dádivas,
favores, promesas o ventajas para ese funcionario público o para otra
persona o entidad a cambio de la realización u omisión de cualquier
acto en el ejercicio de sus funciones públicas;
c. La realización por parte de un funcionario público o una persona
que ejerza funciones públicas de cualquier acto u omisión en el ejerci-
cio de sus funciones, con el fin de obtener ilícitamente beneficios para
sí mismo o para un tercero;
d. El aprovechamiento doloso u ocultación de bienes provenientes de
cualesquiera de los actos a los que se refiere el presente artículo; y
EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS IRREGULARIDADES... 369

Su ámbito de aplicación comprende a la Administración Pública


nacional centralizada y descentralizada, empresas, sociedades y
todo otro ente público o privado con participación del Estado o que
tenga como principal fuente de recursos el aporte estatal.
El arto 2° de dicho texto legal enumera las competencias de la
OAN que según su naturaleza pueden clasificarse en investigati-
vas, procesales, registrales, programáticas y de asesoramiento.
En cuanto alas primeras, una vez recibidas las denuncias sobre
hechos de corrupción formuladas por particulares o por agentes
públicos, la OAN es competente para investigar preliminarmen-
te alos agentes públicos involucrados en ellos o a las instituciones
o asociaciones que tengan como principal fuente de recursos el
aporte estatal-prestado directa o indirectamente-, siempre que
exista sospecha razonable de irregularidades enla administración
de los mismos.
Si nos referimos a las segundas, goza de la facultad de denun-
ciar ante lajusticia los hechos que como consecuencia de sus inves-
tigaciones pudieran llegar a constituir delitos y de constituirse en
parte querellante enlos procesos en que se encuentre afectado el
patrimonio del Estado, siempre dentro del ámbito de su competen-
CIa.
También, cuando de la investigación llevada a cabo por la OAN
resulte la existencia de presuntas trasgresiones a normas admi-
nistrativas, las actuaciones pasarán con dictamen fundado al
Ministro de Justicia y Derechos Humanos, a la Procuración del
Tesoro de la Nación y al funcionario de mayor jerarquía adminis-
trativa de la repartición de que se trate, conforme con las compe-

e. La participación como autor, co-autor, instigador, cómplice, encu-


bridor o en cualquier otra forma en la comisión, tentativa de comi-
sión, asociación o confabulación para la comisión de cualquiera de
los actos a los que se refiere el presente artículo.
2. La presente Convención también será aplicable, de mutuo acuerdo
entre dos o más Estados Partes, en relación con cualquier otro acto
de corrupción no contemplado en ella".
370 JORGE ORGAZ

tencias asignadas por el Reglamento de Investigaciones Adminis-


trativas. En ambos casos, las actuaciones servirán de cabeza de
sumario que deberá ser instruido por las autoridades competen-
tes y la OAN podrá ser tenida como parte acusadora con facultad
de ofrecer, producir e incorporar toda clase de pruebas y recurrir
toda resolución adversa a sus pretensiones.
En relación alas prerrogativas mencionadas en tercer término,
la OAN es competente para llevar el registro de las declaraciones
juradas de los agentes públicos, de cuya evaluación se constatará
los eventuales casos de enriquecimiento ilícito o la incompatibili-
dad con el ejercicio de la función pública. En este punto, las dispo-
siciones del decreto bajo análisis, deben ser complementadas con
las del decreto 164/99127 , que detalla el procedimiento a seguir para
la formulación y presentación de las mismas.
En cuarto lugar, la OAN puede elaborar programas de preven-
ción y de promoción de la transparencia en la gestión pública.
Por último, la OAN también tiene competencia para asesorar
a los organismos del Estado con el obj eto de implementar políticas
o programas preventivos contrahechos de corrupción.
Desde una perspectiva orgánica, las tres primeras clases de
competencias se encuentran a cargo de la Dirección de Investiga-
ciones, mientras que las dos restantes recaen sobre la Dirección de
Planificación de Políticas de Transparencia.
Recordemos que la OAN actúa con un criterio de oportunidad,
pues sólo interviene en aquellos casos que el Fiscal de Control Ad-
ministrativo considere de significación institucional, económica
o social, tal como lo fij a el arto 40 del decreto 102/99.
Señala MAsSONI que "[. .. ] Este apartamiento del principio de le-
galidad tiene una razón muy sencilla, de tipo práctico: si nosotros
nos introdujéramos en la averiguación de todos los casos que nos
denuncian, quedaríamos paralizados de inmediato por exceso de
trabaJo J' 128
. [ ....

127Adla, LX-A-232.
128MASSONI, José, "La Oficina Nacional de Anticorrupción", en Control
de la Administración Pública, Ediciones RAP, Bs. As., 2003, pág. 685.
u

EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS IRREGULARIDADES... 371

5. Atribuciones

Las atribuciones otorgadas ala OAN están contempladas en el


arto 5° del decreto 102/99 y son las mismas de las que goza la FIA
para desempeñar su tarea, por remisión expresa de la parte final
del arto 13 de la ley 25.233 a las disposiciones de la LRMP.129
Hecha esta aclaración, las facultades con las que cuenta la OAN
también pueden clasificarse en exclusivas y concurrentes.
Conforme a las primeras -enumeradas por el arto 50 de la
LRMP-la OAN puede disponer exámenes periciales, requirien-
o do de las reparticiones o funcionarios públicos la colaboración ne-
cesaria y designar peritos ad hoc cuando las circunstancias así lo
exijan (inc. b).
Por otra parte, podrá informar al Ministro de Justicia y Dere-
chos Humanos cuando la permanencia de un agente público en el
cargo puede obstaculizar gravemente la investigación a los fines
de que se tomen las medidas pertinentes (inc. c).
En relación a las segundas, el primer párrafo del arto 26 de la
LRMP permite a los funcionarios de la OAN, al igual que el resto
de los magistrados del Ministerio Público, solicitar informes a or-
ganismos públicos federales, provinciales o municipales, a orga-
nismos privados y a particulares, requerir la intervención policial
para la realización de diligencias, y citar personas en carácter de
testigos (inc. a).

129 Creemos que haber extendido las atribuciones de la FIA a las de la


OAN constituye un error importante en razón de la distinta ubicación
institucional en la que se encuentran ambos organismos. En efecto,
las competencias otorgadas a la FIA son propias de un órgano inde-
pendiente del Poder Ejecutivo Federal mientras que la OAN, al for-
mar parte del Ministerio de Justicia y de Derechos Humanos de la
N ación se encuentra en absoluta dependencia del mismo.
372 JORGE ORGAZ

6. Informes

En razón de la relación institucional que los vincula, la OAN


está obligada a elevar al Ministro de Justicia y Derechos H uma-
nos un informe por cada investigación que realice, además de un
informe semestral y una memoria anual sobre su gestión en la
que inel uirá las recomendaciones sobre reformas administrati-
vas o de gestión que tengan como finalidad evitar que se repitan
ilícitos o irregularidades administrativas, tal como lo establecen
los arts.16y 17 del decreto 102/99.
El artículo siguiente, estipula que los informes serán públicos,
pudiéndose consultarlos personalmente o por internet, con pres-
cindencia de los medios de comunicación que disponga el Minis-
tro de Justicia y Derechos Humanos para su amplia difusión.

B. La Oficina Anticorrupción en el orden provincial

1. Antecedentes

La Oficina Anticorrupción Provincial (en adelante, OAP) fue


creada en el año 2000 mediante la sanción de la ley provincial 8835130
denominada "Carta del Ciudadano", que la regula a partir de su
art.50.
El legislador local profundizó de esta forma la política institu-
cional iniciada poco tiempo atrás en el ámbito del derecho federal,
motivo por el cual nos remitimos a los conceptos vertidos al abor-
dar sus antecedentes más importantes.

2. Ubicación y naturaleza institucional

El segundo párrafo del arto 50 de la ley 8835 establece que la OAP


funcionará en el ámbito del Ministerio de Justicia, adquiriendo las
características de un organismo des concentrado del mismo.

130 Adla, LX-C-3356.


- Q

EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS IRREGULARIDADES ... 373

3. Estructura orgánica

Según el arto 52 de laley 8335, la OAP estará a cargo de unfis-


cal de Control Anticorrupción, con rango y jerarquía de secretario
de Estado.
Será nombrado por el Poder Ejecutivo provincial, deberá con-
tar con más de treinta años de edad y tener ciudadanía en ejercicio
con una antigüedad mínima de cinco años. 131
Su mandato se extenderá por un período de cuatro años, pudien-
do ser reelecto por única vez.
La ley guarda silencio en relación a las condiciones técnicas o
profesionales que debe reunir este funcionario o el personal que lo
acompaña.

4. Función

La OAP tendrá la misión de velar por la prevención e investi-


gación de aquellas conductas que se consideren comprendidas en
la Convención Interamericana contra la Corrupción y de toda otra
irregularidad funcional, las violaciones alos deberes de funcionario
público y al régimen de declaraciones juradas e incompatibilida-
des establecidas por la legislación vigente.
Su competencia abarcará a la Administración Pública provin-
cial centralizada y descentralizada, empresas, sociedades, y todo
otro ente público o privado con participación del Estado provincial
o que tenga como principal fuente de recursos el aporte estatal
provincial.
Con el objeto de llegar a cumplir eficazmente su cometido, la OAP
goza de una serie de prerrogativas que enunciadas en el arto 51 de
la ley 8335 pueden clasificarse en investigativas, procesales, regis-
trales,programáticas, de asesoramientoy de propuesta legislativa.

131 Además de la residencia en el departamento que representaba,

estos eran los requisitos que exigía el arto 85 para ser senador provin-
cial.
374 JORGE ORGAZ

Entre las primeras, podemos mencionar la facultad de investi-


gar preliminarmente a los agentes a los que se atribuya la reali-
zación de algún acto de corrupción y a toda institución o asociación
cuya fuente principal de ingresos provenga del aporte estatal pro-
vincial, sea éste recibido de forma directa o indirecta y siempre que
exista sospecha razonable sobre la existencia de irregularidades
en la administración de dichos recursos.
En relación a las segundas, la OAP denunciará los supuestos
delitos de los que tomará conocimiento con motivo de sus investí-
gaciones, y se constituirá en querellante particular en los proce-
sos en que se encuentre damnificado el patrimonio público.
Las facultades mencionadas en tercer término se refieren a la
competencia que tiene la OAPpara llevar un registro de las decla-
raciones juradas de los funcionarios públicos, a cuyo efecto, podrá
exigir su presentación y realizar su evaluación para determinar
la posible existencia de enriquecimientos ilícitos o incompatibili-
dades con el ej ercicio de la función. Además, podrá registrar las
sanciones administrativas y judiciales aplicadas por violaciones
ala presente ley.
En cuarto lugar, la OAP elaborará programas de prevención de
la corrupción, de promoción de la transparencia en la gestión pú-
blica y de capacitación y divulgación del contenido de esta ley.
En materia de asesoramiento, la OAPbrindará su consejo téc-
nico a los distintos organismos del Estado provincial para la im-
plementarpolíticas y programas preventivos enla lucha contra la
corrupción.
Finalmente, la OAPtendrá la posibilidad de promovermodifi-
caciones a la legislación vigente, con el objeto de garantizar la
transparencia en materia de contrataciones del Estado provincial
y de perfeccionar el régimen de financiamiento de los partidos po-
líticos. 132

132 Esta última actividad, señala PALAZZO, "[. . .] se parece mucho a una

expresión de deseos pues en lo esencial este régimen es de competen-


cia federal [. . .]" (PALAZZO, José, "La Oficina Anticorrupción. Una no-
EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS IRREGULARIDADES... 375

v. ANÁLISIS COMPARATIVO ENTRE LA FISCALÍA DE


INvESTIGACIONES AoMINISTRATIVAS, EL DEFENSOR DEL
PuEBLO NACIONAL Y LA OFICINA ANTICORRUPCIÓN NACIONAL

A continuación realizaremos un análisis comparativo entre la


FIA, el DPN y la OAN con la intención de resaltar sus diferencias
y puntos de contacto, y de esta forma contar con una visión gene-
ral e integrada de todo lo hasta aquí estudiado.
Hemos decidido enfocar la comparación de estos institutos a ni-
vel federal pues allí encuentran regulación todos ellos, sin descar-
tar que los criterios utilizados puedan extenderse al ámbito pro-
vincial en la medida que sea posible.
Es oportuno aclarar que en nuestro análisis partiremos de las
características fundamentales de cada una de estas instituciones
sin detenernos en detalles que impidan lograr nuestro cometido.
Si tomamos en cuenta la ubicación institucional, surge nítida
la diferencia entre el DPN, como comisionado del poder legislati-
vo, la FIA, como integrante del Ministerio Público -por lo tanto,
de naturaleza extrapoder-y la OAN como un organismo del pro-
pio poder ejecutivo. 133
Esta distribución en distintas esferas de la estructura del Es-
tado posibilita la coexistencia de las tres figuras.
Desde el punto de vista de la finalidad, el DPN tiene una mi-
sión de mayor amplitud al ser el encargado de la tutela de los dere-
chos humanos y garantías consagradas en el texto de la Constitu-
ción Nacional, mientras que la FIA sólo se limita a proteger la

vedosa oportunidad insertada en el Título III de la ley 8335 llamada


Carta del Ciudadano", enLL Córdoba, 2001-945).
133 En razón de la diferencia específica entre la ubicación institucio-

nal de la FIAy la OAN, CANDA critica la solución legal adoptada en el


arto 13 de la ley 25.233, que asigna a esta última las mismas compe-
tencias y atribuciones que la primera (CANDA, Fabián Ornar, "La Fis-
calía de Investigaciones Administrativas", en Control de la Adminis-
tración Pública, Ediciones RAP, Bs. As., 2003, pág. 768).
376 JORGE ORGAZ

legalidad de la actuación administrativa y el patrimonio del Es-


tado, y la OAN a la prevención e investigación de los hechos de co-
rrupción en que pudieren incurrir los agentes públicos y las aso-
ciaciones que funcionan gracias al aporte dinerario estatal.
Está claro que el control de la regularidad administrativa y la
lucha contra la corrupción a cargo delaFIAyla OAN,respectiva-
mente, colaboran con una más eficaz tutela de lps derechos huma-
nos y, por ende, conla tarea del DPN.
En relación al ejercicio de sus competencias, tanto la FIA como
el DPN deben ajustar su actuación al principio de juridicidad en el
sentido de que están obligados a analizar y denunciar administra-
tiva y judicialmente las violaciones de las disposiciones legales
cuya vigencia deben garantizar ,mientras que, en cambio, la OAN
posee un amplio margen de discrecionalidad al contar con la posi-
bilidad de realizar sólo aquellas investigaciones de hecho de corrup-
ción que considere de significación institucional, económica o so-
cial.
En el caso de la OAN, el obj etivo perseguido por el legislador es
de naturaleza práctica y consiste en preservar los recursos con los
que cuenta dicho organismo para investigar los casos de corrup-
ción más importantes que afectan la regularidad en la gestión de
la Administración, sin olvidar que muchas veces adquieren perfi-
les internacionales.
EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL DE LAS IRREGULARIDADES... 377

ACTIVIDAD DE AUTOEVALUACIÓN

1) ¿Cuáles son los principales antecedentes de la FIA?


2) ¿Cuál es la ubicación institucional de la FIA?
3) ¿Cuáles son los principales funcionarios de la FIA?
4) ¿Cuál es la misión encomendada a la FIA?
5) Enumere las atribuciones con las que cuenta la FIA.
6) ¿En qué país tuvo su origen el DP?
7) ¿A qué poder del Estado se encuentra, por lo general, vincu-
lado el DP?
8) Con independencia de las particularidades que asume en cada
sistema normativo nacional ¿cuáles son las características gene-
rales del DP?
9) ¿ Cuál es el fundamento de la actividad del DP?
10) Mencione los principales antecedentes del DP en nuestro
país.
11) ¿Qué organismos públicos caen bajo el contralor del DPN?
12) ¿El DPN posee legitimación procesal? Mencione algunos
casos jurisprudenciales ilustrativos.
13) ¿Con qué atribuciones cuenta el DPN para cumplir con su
misión?
14) ¿Qué clase de informes debe presentar el DPN al Congre-
so?
15) ¿Qué rasgos distintivos podría señalar del DPP?
16) Indique los principales antecedentes de la OAN.
17) ¿Qué misión tiene la OAN?
18) ¿Cuál es la ubicación institucional de la OAN?
19) ¿Cuál es la principal misión de la OAN?
20) ¿Con qué atribuciones cuenta la OAN?
21) ¿De qué organismo forma parte la OAP?
22) ¿Qué características tiene la OAP?
23) ¿Cuáles son las principales competencias de la OAP?
24) ¿Cómo clasificaría las facultades de la OAP?
25) Enumere las similitudes y diferencias entre la FIA, el DPN
ylaOAN.
ANEXO LEGISLATIVO

LEGISLACIÓN NACIONAL

Ley de Defensoría del Pueblo de la N ación


Ley Nacional de Hábeas Data
Decreto Reglamentario de la Ley Nacional de Hábeas Data
Decreto Nacional de Creación de la Oficina Anticorrupción Nacional

LEGISLACIÓN PROVINCIAL

Ley Provincial de Defensor del Pueblo de Córdoba


Ley Provincial de Amparo por Mora Administrativa
Ley Provincial de Acceso al Conocimiento
de los Actos del Estado Provincial
Oficina de Anticorrupción de la Provincia de Córdoba
Decreto Reglamentario de la Ley de Creación del Tribunal
de Conducta Policial de Córdoba
CREACIÓN DE LA DEFENSORÍA DEL PUEBLO
LEY N° 24.284

Sanción: 01 / 12 / 1993
Promulgación: 02/ 12/ 1993
Publicación: B.O. delO6/ 12 / 1993

El Senado y Cámara de Diputados de la Nación Argentina reunidos en


Congreso, etc., sancionan con fuerza de
Ley24.284

Título 1
CREACIÓN. NOMBRAMIENTO. CESE Y CONDICIONES

Capítulo 1
CARÁCTER Y ELECCIÓN
Artículo 1. Creación. Se crea en el ámbito del Poder Legislativo de la Na-
ción la Defensoría del Pueblo, la cual ejerce las funciones que establece la
presente ley, sin recibir instrucciones de ninguna autoridad. El objetivo fun-
damental de esta institución es el de proteger los derechos e intereses de los
individuos y la comunidad frente a los actos, hechos y omisiones de la adminis-
tración pública nacional, que se mencionan en el artículo 14.
Artículo 2. Titular. Forma de elección. Es titular de ese organismo un fun-
cionario denominado Defensor del Pueblo quien es elegido por el Congreso de
la N ación de acuerdo con el siguiente procedimiento: a) Ambas Cámaras del
Congreso deben elegir una comisión bicameral permanente, integrada por
siete (7) senadores y siete (7) diputados cuya composición debe mantener la
proporción de la representación del cuerpo; b) En un plazo no mayor de trein-
ta (30) días a contar desde la promulgación de la presente ley, la comisión
bicameral reunida bajo la Presidencia del presidente del Senado, debe propo-
ner a las Cámaras de uno a tres candidatos para ocupar el cargo de Defensor
del pueblo. Las decisiones de la comisión bicameral se adoptan por mayoría
simple; c) Dentro de los treinta (30) días siguientes al pronunciamiento de la
comisión bicameral, ambas Cámaras eligen por el voto de dos tercios de sus
miembros presentes a uno de los candidatos propuestos; d) Si en la primera
votación ningún candidato obtiene la mayoría requerida en el inciso anterior
debe repetirse la votación hasta alcanzarse; e) Si los candidatos propuestos
para la primera votación son tres y se diera el supuesto del inciso d) las nue-
vas votaciones se deben hacer sobre los dos candidatos más votados en ella.
382 ANEXO LEGISLATIVO

Artículo 3. Duración. La duración del mandato del Defensor del Pueblo es


de cinco años, pudiendo ser reelegido por una sola vez según el procedimien-
to establecido en el artículo anterior.
Artículo 4. Calidades para ser elegido. Puede ser elegido Defensor del
Pueblo toda persona que reúna las siguientes calidades: a) Ser argentino na-
tivo o por opción; b) Tener 30 años de edad como mínimo.
Artículo 5. Nombramiento. Forma. El nombramiento del Defensor del
Pueblo se instrumenta en resolución conjunta suscrita por los presidentes de
las Cámaras de Senadores y de Diputados, la que debe publicarse en el Bole-
tín Oficial y en el Diario de Sesion'es de ambas Cámaras. El Defensor del Pue-
blo toma posesión de su cargo ante las autoridades de ambas Cámaras prestan-
do juramento de desempeñar debidamente el cargo.
Artículo 6. Remuneraciones. El Defensor del Pueblo percibe la remunera-
ción que establezca el Congreso de la Nación. Por resolución de los Presiden-
tes de ambas cámaras. Goza de la exención prevista en el artículo 20, inciso q)
de la ley nacional de impuesto a las ganancias y sus modificaciones. [Modificado
por el arto 2° de la ley 24.379 (B.O. del 12/ 10/ 1994)].

Capítulo 11
INCOMPATIBILIDADES. CESE. SUSTITUCIÓN.
PRERROGATIVAS
Artículo 7. Incompatibilidades. El cargo de Defensor del Pueblo es incom-
patible con el desempeño de cualquier otra actividad pública o comercial o
profesional, a excepción de la docencia, estándole vedada asimismo la activi-
dad política partidaria. Son de aplicación al Defensor del Pueblo, en lo perti-
nente, las normas en materia de recusación y excusación previstas en el Código
Procesal Civil y Comercial de la N ación. [Modificado por el arto 3° de la ley 24.3 79
(B.O. del 12110/19941.
Artículo 8. Actividad. La actividad de la Defensoría del Pueblo no se interrum-
pe en el período de receso del Congreso. [Modificado por el arto 4° de la ley 24.379
(B.O. del 12 / 10 / 1994)).
Artículo 9. Incompatibilidad. Cese. Dentro de los diez (lO)días siguientes
a su nombramiento y antes de tomar posesión del cargo, el Defensor del Pue-
blo debe cesar en toda situación de incompatibilidad que pudiere afectarlo
presumiéndose, en caso contrario, que no acepta el nombramiento.
Artículo 10. Cese. Causales. El Defensor del Pueblo cesa en sus funciones
por alguna de las siguientes causas: a) Por renuncia; b) Por vencimiento del
plazo de su mandato; c) Por incapacidad sobreviniente; d) Por haber sido con-
denado mediante sentencia firme por delito doloso; e) Por notoria negligen-
DERECHO PROCESAL ADMINISTRATIVO II 383

cia en el cumplimiento de los deberes del cargo o por haber incurrido en la


situación de incompatibilidad prevista por esta ley.
Artículo 11. Cese y Formas. En los supuestos previstos por los incisos a),
c) y d) del artículo 10 el cese será dispuesto por los Presidentes de ambas cá-
maras. En el caso del inciso c) la incapacidad sobrevíníente deberá acreditar-
se de modo fehaciente. En los supuestos previstos por el inciso e) del mismo
artículo, el cese se decidirá por el voto de los dos tercios de los miembros pre-
sentes de ambas cámaras, prevío debate y audiencia del interesado. En caso
de muerte del Defensor del Pueblo se procederá a su reemplazo provisorio
según las normas establecidas en el artículo 13, promoviéndose en el más bre-
ve plazo la designación del titularen la forma prevista en el artículo 2. [Mo-
dificado porel arto 5° de la ley 24.379 (B.O. del 12/ 10/ 1994)].
Artículo 12. Inmunidades. El Defensor del Pueblo gozará de las inmunida-
des establecidas por la Constitución Nacional para los miembros del Congre-
so. No podrá ser arrestado desde el día de su designación hasta el de su cese
o suspensión, excepto en el caso de ser sorprendido in fraganti en la ejecución
de un delito doloso, del o que se debe dar cuenta a los Presidentes de ambas
cámaras con la información sumaria del hecho. Cuando se dicte auto de pro-
cesamiento por la justicia competente contra el Defensor del Pueblo por de-
lito doloso, podrá ser suspendido en sus funciones por ambas Cámaras hasta
que se dicte sobreseimiento definitivo a su favor. [Modificado por el arto ¡o de
la ley 24.379 (B.O. del 12/ 10/ 1994)].

Capítulo III
DE LOS ADJUNTOS
Artículo 13. Adjuntos. A propuesta del Defensor del Pueblo la comisión
bicameral prevista en el artículo 2, inciso a) debe designar dos adjuntos que
auxiliarán a aquél en su tarea, pudiendo reemplazarlo provisoriamente en los
supuestos de cese, muerte, suspensión o imposibilidad temporal, en el orden
que la comisión determine al designarlos. Para ser designado adjunto del
Defensor del Pueblo son requisitos, además de los previstos en el artículo 4
de la presente ley: a) Ser abogado con ocho años en el ejercicio de la profesión
como mínimo o tener una antigüedad computable, como mínimo, en cargos
del Poder Judicial, Poder Legislativo, de la administración pública o de la do-
cencia universitaria; b) Tener acreditada reconocida versación en derecho
público. A los adjuntos les es de aplicación, enlo pertinente, lo dispuesto en los
artículos 3, 5, 7, 10, 11 y 12 de la presente ley. Perciben la remuneración que al
efecto establezca el Congreso dela Nación por resolución conjunta dejos Pre-
sidentes de ambas cámaras.[Modificado porel arto 6° de la ley 24.379 (B. O. del
12/10/1994)J
...
384 ANEXO LEGISLATIVO

Título 11
DEL PROCEDIMIENTO
Capítulo 1
COMPETENCIA. INICIACIÓN Y CONTENIDO DE
LA INVESTIGACIÓN
Artículo 14. Actuación. Forma y alcance. El Defensor del Pueblo puede
iniciar y proseguir de oficio o a petición del interesado cualquier investigación
conducente al esclarecimiento delos actos, hechos u omisiones de la adminis-
tración pública nacional y sus agentes, que impliquen el ejercicio ilegítimo,
defectuoso, irregular, abusivo, arbitrario, discriminatorio, negligente, grave-
mente inconveniente o inoportuno de sus funciones, incluyendo aquellos ca-
paces de alectar los intereses difusos o colectivos. Los legisladores, tanto
Provinciales como Nacionales, podrán receptar quejas de los interesados de
las cuales darán traslado en forma inmediata al Defensor del Pueblo.
Artículo 15. Comportamientos sistemáticos y generales. El Defensor del
Pueblo, sin perjuicio de las facultades previstas por el artículo 14 de la pre-
sente ley, debe prestar especial atención a aquellos comportamientos que
denoten una falla sistemática y general de la administración pública, procu-
rando prever los mecanismos que permitan eliminar o disminuir dicho carác-
ter.
Artículo 16. Competencia. Dentro del concepto de administración públi-
ca nacional, a los efectos de la presente ley, quedan comprendidas la adminis-
tración centralizada y descentralizada; entidades autárquicas; empresas del
Estado; sociedades del Estado; sociedades de economía mixta; sociedades con
participación estatal mayoritaria; y todo otro organismo del Estado nacional
cualquiera fuere su naturaleza jurídica, denominación, ley especial que pudie-
ra regirlo, o lugar del país donde preste sus servicios. Quedan exceptuados del
ámbito de competencia de la Defensoría del Pueblo, el Poder Judicial, el Po-
der Legislativo, la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires, y los organis-
mos de defensa y seguridad.
Artículo 17. Otros ámbitos de competencias. Quedan comprendidas den-
tro de la competencia de la Defensoría del Pueblo, las personas jurídicas pú-
blicas no estatales que ejerzan prerrogativas públicas y las privadas prestado-
ras de servicios públicos. En este caso, y sin perjuicio de las restantes facultades
otorgadas por esta ley, el Defensor del Pueblo puede instar de las autoridades
administrativas competentes el ejercicio de las facultades otorgadas por ley.
[Modificado por el arto BOde la ley 24.379 (B.O. del 12/ 10/ 1994)).
Artículo 18. Legitimación. Puede dirigirse al Defensor del Pueblo toda
persona fisica ojurídica que se considere afectada por os actos, hechos u omi-
siones previstos en el artículo 14. No constituye impedimento para ello la
DERECHO PROCESAL ADMINISTRATIVO II 385

nacionalidad, residencia, internación en centro penitenciario o de reclusión


y, en general, cualquier relación de dependencia con el Estado.

Capítulo 11
TRAMITACIÓN DE LA QUEJA
Artículo 19. Queja. Forma. Toda queja se debe presentar en forma escrita
y firmada por el interesado, con indicación de su nombre, apellido y domicilio
en el plazo máximo de un año calendario, contado a partir del momento en que
ocurriere el acto, hecho u omisión motivo de la misma. No se requiere al inte-
resado el cumplimiento de otra formalidad para presentar la queja. Todas las
actuaciones ante el Defensor del Pueblo son gratuitas para el interesado, quien
no está obligado a actuar con patrocinio letrado.
Artículo 20. Derivación. Facultad. Si la queja se formula contra personas,
actos, hechos y omisiones que no están bajo la competencia del Defensor del
Pueblo, o si se formula fuera del término previsto por el artículo 19, el Defen-
sor del Pueblo está facultado para derivar la queja a la autoridad competente
informando de tal circunstancia al interesado.
Artículo 21. Rechazo. Causales. El Defensor del Pueblo no debe dar curso
a las quejas en los siguientes casos: a) Cuando advierta mala fe, carencia de
fundamentos, inexistencia de pretensión o fundamento fútil o trivial; b) Cuan-
do, respecto de la cuestión planteada, se encuentre pendiente resolución
administrativa ojudicial. Puede rechazar también aquellas quejas cuya trami-
tación irrogue perjuicio al legítimo derecho de tercera persona. Si iniciada la
actuación se interpusiere por persona interesada recurso administrativo o
acción judicial, el Defensor del Pueblo debe suspender su intervención. Nin-
guno de los supuestos previstos por el presente artículo impide la investiga-
ción sobre los problemas generales planteados en las quejas presentadas. En
todos los casos se comunicará al interesado la resolución adoptada.
Artículo 22. Irrecurribilidad. Interrupción. Las decisiones sobre la admi-
sibilidad de las quejas presentadas son irrecurribles. La queja no interrumpe
los plazos para interponer los recursos administrativos o acciones judiciales
previstos por el ordenamiento jurídico.
Artículo 23. Procedimiento. Admitida la queja, el Defensor del Pueblo
debe promover la investigación sumaria, en la forma que establezca la regla-
mentación, para el esclarecimiento de los supuestos de aquélla. En todos los
casos debe dar cuenta de su contenido al organismo o entidad pertinente, a
fin de que por intermedio de autoridad responsable y en el plazo máximo de
treinta (30) días, se remita informe escrito. El plazo puede ser ampliado
cuando concurran circunstancias que lo circunstancias que lo aconsejen a
juicio del Defensor del Pueblo. Respondida la requisitoria, si las razones ale-
gadas por el informante fueren justificadas a criterio del Defensor del Pue-
386 ANEXO LEGISLATIVO

blo, éste dará por concluida la actuación comunicando al interesado la cir-


cunstancia.[Modificado por el arto 9° de la ley 24.379 (E. O. del 12 / 10/1994)].

Capítulo 111
OBLIGACIÓN DE COLABORACIÓN.
RÉGIMEN DE RESPONSABILIDAD
Artículo 24. Obligación de colaboración. Todos los organismos y entes con-
templados en el artículo 16, las personas referidas en el artículo 17, Ysus agen-
tes, están obligados a prestar colaboración, con carácter preferente, a la
Defensoría del Pueblo en sus investigaciones e inspecciones. A esos efectos el
Defensor del Pueblo o sus adjuntos están facultados para: a) Solicitar expedien-
tes, informes, documentos, antecedentes y todo otro elemento que estimen útil
a los efectos de la fiscalización, dentro del término que se fije. No se puede
oponer disposición alguna que establezca el secreto de lo requerido. La nega-
tiva sólo es justificada cuando ella se fundamenta en la salvaguarda de un in-
terés atinente a la seguridad nacional. b) Realizar inspecciones, verificaciones
y, en general, determinarla producción de toda otra medida probatoria conducen-
te al esclarecimiento de la investigación. [Modificado porel arto 10 de la ley 24.379
(B.O.de112/ 10/ 1994)).
Artículo 25. Obstaculización. Entorpecimiento. Todo aquel que impida la
efectivización de una denuncia ante el Defensor del Pueblo u obstaculice las
investigaciones a su cargo, mediante la negativa al enVÍo de los informes reque-
ridos o impida el acceso a expedientes o documentación necesaria para el curso
de la investigación, incurre en el delito de desobediencia que prevé el artícu-
lo 239 del Código Penal. El Defensor del Pueblo debe dar traslado de los ante-
cedentes respectivos al Ministerio Público Fiscal para el ejercicio de las accio-
nes pertinentes. La persistencia en una actitud entorpecedora de la labor de
investigación de la Defensoría del Pueblo, por parte de cualquier organismo
o autoridad administrativa, puede ser objeto de un informe especial cuando
justificadas razones así lo requieran, además de destacarla en la sección corres-
pondiente del Informe anual previsto en el artículo 31. El Defensor del Pue-
blo puede requerir la intervención de la Justicia para obtener la remisión dela
documentación que le hubiere sido negada por organismos y entes contempla-
dos en el artículo 16, las personas referidas en el artículo 17, o sus agentes.[Mo-
dificadoporelart.ll de la ley 24.379 (B.O. de112/ 10/ 1994)).
Artículo 26. Hechos delictivos. Cuando el Defensor del Pueblo, en razón
del ejercicio de las funciones propias de su cargo, tenga conocimiento de he-
chos presumiblemente delictivos de acción pública, los debe comunicar de
inmediato al Procurador General dela Nación. Este deberá informar, en cual-
quier caso y de manera periódica al Defensor del Pueblo, o cuando éste lo so-

DERECHO PROCESAL ADMINISTRATIVO II 387

licite, el estado en que se hallan las actuaciones promovidas por su interme-


dio.

TítulolII
DE LAS RESOLUCIONES
Capítulo Único
ALCANCE DE LAS RESOLUCIONES. COMUNICACIONES.
INFORMES
Artículo 27. Límites de su competencia. El Defensor del Pueblo no es com-
petente para modificar, sustituir o dejar sin efecto las decisiones administra-
tivas. Sin perjuicio de ello, puede proponerla modificación de los criterios
utilizados para su producción. Si como consecuencia de sus investigaciones llega
al convencimiento de que el cumplimiento riguroso de una norma puede provo-
car situaciones injustas o perjudiciales para los administrados, puede proponer
al Poder Legislativo o a la administración pública la modificación de la misma.
Artículo 28. Advertencia y recomendaciones. Procedimiento. El Defensor
del Pueblo puede formular con motivo de sus investigaciones, advertencias,
recomendaciones, recordatorios de sus deberes legales y funcionales, y pro-
puestas para la adopción de nuevas medidas. En todos los casos, los responsa-
bles estarán obligados a responder por escrito en el término máximo de trein-
ta(30) días. Si formuladas las recomendaciones, dentro de un plazo razonable
no se produce una medida adecuada en tal sentido por la autoridad adminis-
trativa afectada, o ésta no informe al Defensor del Pueblo de las razones que
estime para no adoptarlas, éste puede poner en conocimiento del ministro del
área, o de la máxima autoridad de la entidad involucrada, los antecedentes del
asunto y las recomendaciones propuestas. Si tampoco así obtiene unajustifi-
cación adecuada, debe incluir tal asunto en su informe anual o especial, con
mención de los nombres de las autoridades o funcionarios que hayan adopta-
do tal actitud. [Modificado por el arto 12 de la ley 24.379 CB. O. del 12110/1994)].
Artículo 29. Comunicación de la investigación. El Defensor del Pueblo debe
comunicar al interesado el resultado de sus investigaciones y gestiones así
como la respuesta que hubiese dado al organismo o funcionario implicados,
salvo en el caso que ésta por su naturaleza sea considerada como de carácter
reservado o declarada secreta. Asimismo, debe poner en conocimiento de la
Auditoría General de la Nación, en los casos que corresponda, los resultados
de sus investigaciones en los organismos sometidos a su control.
Artículo 30. Relaciones con el Congreso. La comisión bicameral prevista
en el inciso a) del artículo 2, de la presente ley, es la encargada de relacionar-
se con el Defensor del Pueblo e informar alas Cámaras en cuantas ocasiones
sea necesario.
388 ANEXO LEGISLATIVO

Artículo 31. Informes. El Defensor del Pueblo da cuenta anualmente a las


Cámaras de la labor realizada en un informe que les presenta antes del 31 de
mayo de cada año. Cuando la gravedad o urgencia de los hechos lo aconsejen
podrá presentar un informe especial. Los informes anuales, y, en su caso, los
especiales, serán publicados en el Boletín Oficial y en los Diarios de Sesiones
de ambas cámaras y la copia de los informes mencionados será enviada para
su conocimiento al Poder Ejecutivo nacional.[Modificadoporelart. 13 de la ley24. 379
(E. O. del 12 / 10/1994)].
Artículo 32. Contenido del informe. El Defensor del Pueblo en su informe
anual da cuenta del número y tipo de quejas presentadas; de aquellas que
hubiesen sido rechazadas y sus causas, así como delas que fueron objeto de
investigación y el resultado de las mismas. En el informe no deben constar datos
personales que permitan la pública identificación de los interesados en el
procedimiento investigador, sin perjuicio de lo dispuesto en el artículo 26. El
informe debe contener un anexo, cuyos destinatarios serán las Cámaras, en el
que se debe hacer constar la rendición de cuentas del presupuesto de la insti-
tución en el período que corresponda. En el informe anual, el Defensor del
Pueblo puede proponer al Congreso de la N ación las modificaciones a la pre-
sente ley que resulten de su aplicación para el mejor cumplimiento de sus
funciones.

Título IV
RECURSOSHUMANOSYMATERULES
Capítulo Único
PERSONAL. RECURSOS ECONÓMICOS. PLAZOS
Artículo 33. Estructura. Funcionarios y empleados. Designaciones. La
estructura orgánico/funcional y administrativa de la Defensoría del Pueblo,
debe ser establecida por su titular, y aprobada por la comisión bicameral pre-
vista en el artículo 2,inciso a). Los funcionarios y empleados de la Defensoría
del Pueblo serán designados por su titular de acuerdo con su reglamento den-
tro de los límites presupuestarios. Asimismo, el Defensor del Pueblo podrá
proponer a los Presidentes de ambas cámaras la nómina del personal que pres-
tando servicios en cualquiera de éstas, desee se le asignen funciones en cualquier
organismo.[Modificadoporelart.14delaley 24.379 (E.O. del 12/ 10/ 1994)].
Artículo 34. Reglamento interno. El reglamento interno de la Defensoría
del Pueblo debe ser dictado por su titular y aprobado por la comisión prevista
en el inciso a) del artículo 2 de la presente ley.
Artículo 35. Plazos. Modo del cómputo. Salvo disposición expresa en con-
trario los plazos previstos en esta ley se deben contar en días hábiles adminis-
trativos.
DERECHO PROCESAL ADMINISTRATIVO II 389

Artículo 36. Presupuesto. Los recursos para atender todos los gastos que
demande el cumplimiento de la presente ley provienen delas partidas que las
leyes de presupuesto asignan al Poder Legislativo de la Nación. A sus efectos
operativos, la Defensoría del Pueblo contará con servicio administrativo-fi-
nanciero propio. [Modificado por el arto 15 de la ley 24.379 (B.O. del 12 / 10/
1994)].
Artículo 37. Comuníquese al Poder Ejecutivo.
PROTECCIÓN DE DATOS PERSONALES
LEY N° 25.326

Sanción: 04 / 10 /2000
Promulgación: 30 /10/2000
Publicación: B. O. del 02 / 11/2000

El Senado y Cámara de Diputados de la N ación Argentina


reunidos en Congreso, etc., sancionan con fuerza de
Ley25.326

Capítulo 1
DISPOSICIONES GENERALES
Artículo 1° - Objeto. La presente ley tiene por objeto la protección integral
de los datos personales asentados en archivos, registros, bancos de datos, u
otros medios técnicos de tratamiento de datos, sean éstos públicos, o privados
destinados a dar informes, para garantizar el derecho al honor ya la intimidad
de las personas, así como también el acceso a la información que sobre las
mismas se registre, de conformidad a lo establecido en el artículo 43, párrafo
tercero de la Constitución Nacional.
Las disposiciones de la presente ley también serán aplicables, en cuanto
resulte pertinente, a los datos relativos a personas de existencia ideal.
En ningún caso se podrán afectar la base de datos ni las fuentes de infor-
mación periodísticas.
Artículo 2° - Definiciones. A los fines de la presente ley se entiende por:
- Datos personales. Información de cualquier tipo referida a personas fí-
sicas o de existencia ideal determinadas o determinables.
- Datos sensibles. Datos personales que revelan origen racial y étnico, opi-
niones políticas, convicciones religiosas, filosóficas o morales, afiliación sin-
dical o política e información referente a la salud o a la vida sexual.
- Archivo, registro, base o banco de datos. Indistintamente, designan al
conjunto organizado de datos personales que sean objeto de tratamiento o
procesamiento, electrónico o no, cualquiera que fuere la modalidad de su for-
mación, almacenamiento, organización o acceso.
- Tratamiento de datos. Operaciones y procedimientos sistemáticos, elec-
trónicos o no, que permitan la recolección, conservación, ordenación, almace-
namiento, modificación, relacionamiento, evaluación, bloqueo, destrucción, y
en general el procesamiento de datos personales, así como también su cesión
392 ANEXO LEGISLATIVO

a terceros a través de comunicaciones, consultas, interconexiones o transfe-


rencias.
- Responsable de archivo, registro, base o banco de datos. Persona fisica o
de existencia ideal pública o privada, que es titular de un archivo, registro, base
o banco de datos.
- Datos informatizados. Los datos personales sometidos al tratamiento o
procesamiento electrónico o automatizado.
- Titular de datos. Toda persona física o persona de existencia ideal con
domicilio legal o delegaciones o sucursales en el país, cuyos datos sean objeto
del tratamiento al que se refiere la presente ley.
- Usuario de datos. Toda persona, pública o privada, que realice a su arbi-
trio el tratamiento de datos, ya sea en archivos, registros, o bancos de datos
propios o a través de conexión con los mismos.
- Disociación de datos. Todo tratamiento de datos personales de manera
que la información obtenida no pueda asociarse a persona determinada o de-
terminable.

Capítulo 11
PRINCIPIOS GENERALES RELATIVOS
ALA PROTECCIÓN DE DATOS
Artículo 30 - Archivo de datos. Licitud. La formación de archivos de datos
será lícita cuando se encuentren debidamente inscriptos, observando en su
operación los principios que establece la presente ley y las reglamentaciones
que se dicten en su consecuencia.
Los archivos de datos no pueden tener finalidades contrarias a las leyes o
a la moral pública.
Artículo 40 - Calidad de los datos.
1. Los datos personales que se recojan a los efectos de su tratamiento de-
ben ser ciertos, adecuados, pertinentes y no excesivos en relación al ámbito y
finalidad para los que se hubieren obtenido.
2. La recolección de datos no puede hacerse por medios desleales, fraudu-
lentos o en forma contraria a las disposiciones de la presente ley.
3. Los datos objeto de tratamiento no pueden ser utilizados para finalida-
des distintas o incompatibles con aquellas que motivaron su obtención.
4. Los datos deben ser exactos y actualizarse en el caso que ello fuere ne-
cesario.
5. Los datos total o parcialmente inexactos, o que sean incompletos, deben
ser suprimidos y sustituidos, o en su caso completados por el responsable del
archivo o base de datos, cuando se tenga conocimiento de la inexactitud o ca-
rácter incompleto de la información de que se trate, sin perjuicio de los dere-
chos del titular establecidos en el artículo 16 de la presente ley.
DERECHO PROCESAL ADMINISTRATIVO II 393

6. Los datos deben ser almacenados de modo que permitan el ejercicio del
derecho de acceso de su titular.
7. Los datos deben ser destruidos cuando hayan dejado de ser necesarios
o pertinentes a los fines para los cuales hubiesen sido recolectados.
Artículo 5° - Consentimiento.
1. El tratamiento de datos personales es ilícito cuando el titular no hubie-
re prestado su consentimiento libre, expreso e informado, el que deberá cons-
tar por escrito, o por otro medio que permita se le equipare, de acuerdo a las
circunstancias.
El referido consentimiento prestado con otras declaraciones, deberá figu-
rar en forma expresa y destacada, previa notificación al requerido de datos, de
la información descripta en el arto SO de la presente ley.
2. No será necesario el consentimiento cuando:
a. Los datos se obtengan de fuentes de acceso público irrestricto;
b. Se recaben para el ejercicio de funciones propias de los poderes del Es-
tado o en virtud de una obligación legal;
c. Se trate de listados cuyos datos se limiten a nombre, documento nacio-
nal de identidad, identificación tributaria o previsional, ocupación, fecha de
nacimiento y domicilio;
d. Deriven de una relación contractual, científica o profesional del titular
de los datos, y resulten necesarios para su desarrollo o cumplimiento;
e. Se trate de las operaciones que realicen las entidades financieras y de
las informaciones que reciban de sus clientes conforme las disposiciones del
artículo 39 de la ley 21.526.
Artículo 6° - Información. Cuando se recaben datos personales se deberá
informar previamente a sus titulares en forma expresa y clara:
a. La finalidad para la que serán tratados y quiénes pueden ser sus desti-
natarios o clase de destinatarios;
b. La existencia del archivo, registro, banco de datos, electrónico o de cual-
quier otro tipo, de que se trate y la identidad y domicilio de su responsable;
c. El carácter obligatorio o facultativo de las respuestas al cuestionario que
se le proponga, en especial en cuanto a los datos referidos en el artículo si-
guiente;
d. Las consecuencias de proporcionar los datos, de la negativa a hacerlo o
de la inexactitud de los mismos;
e. La posibilidad del interesado de ejercer los derechos de acceso, rectifi-
cación y supresión de los datos.
Artículo 7° - Categoría de datos.
1. Ninguna persona puede ser obligada a proporcionar datos sensibles.
2. Los datos sensibles sólo pueden ser recolectados y objeto de tratamien-
to cuando medien razones de interés general autorizadas por ley. También
s

394 ANEXO LEGISLATIVO

podrán ser tratados con finalidades estadísticas o científicas cuando no pue-


dan ser identificados sus titulares.
3. Queda prohibida la formación de archivos, bancos o registros que alma-
cenen información que directa o indirectamente revele datos sensibles. Sin
peIjuicio de ello, la Iglesia Católica, las asociaciones religiosas y las organiza-
ciones políticas y sindicales podrán llevar un registro de sus miembros.
4. Los datos relativos a antecedentes penales o contravencionales sólo
pueden ser objeto de tratamiento por parte de las autoridades públicas com-
petentes, en el marco de las leyes y reglamentaciones respectivas.
Artículo 8° - Datos relativos a las salud. Los establecimientos sanitarios
públicos o privados y los profesionales vinculados a las ciencias de la salud
pueden recolectar y tratar los datos personales relativos a la salud física o
mental de los pacientes que acudan a los mismos o que estén o hubieren esta-
do bajo tratamiento de aquéllos, respetando los principios del secreto profe-
sional.
Artículo 9° - Seguridad de los datos.
1. El responsable o usuario del archivo de datos debe adoptar las medidas
técnicas y organiza tivas que resulten necesarias para garantizar la seguridad
y confidencialidad de los datos personales, de modo de evitar su adulteración,
pérdida, consulta o tratamiento no autorizado y que permitan detectar desvia-
ciones, intencionales o no, de información, ya sea que los riesgos provengan de
la acción humana o del medio técnico utilizado.
2. Queda prohibido registrar datos personales en archivos, registros o
bancos que no reúnan condiciones técnicas de integridad y seguridad.
Artículo 10 - Deber de confidencialidad.
1. El responsable y las personas que intervengan en cualquier fase del tra-
tamiento de datos personales están obligados al secreto profesional respecto
de los mismos. Tal obligación subsistirá aun después de finalizada su relación
con el titular del archivo de datos.
2. El obligado podrá ser relevado del deber de secreto por resoluciónjudi-
cial y cuando medien razones fundadas relativas a la seguridad pública, la
defensa nacional o la salud pública.
Artículo 11 - Cesión.
1. Los datos personales objeto de tratamiento sólo pueden ser cedidos para
el cumplimiento de los fines directamente relacionados con el interés legíti-
mo del cedente y del cesionario y con el previo consentimiento del titular de
los datos, al que se le debe informar sobre la finalidad de la cesión e identifi-
car al cesionario o los elementos que permitan hacerlo.
2. El consentimiento para la cesión es revocable.
3. El consentimiento no es exigido cuando:
a. Así lo disponga una ley;
DERECHO PROCESAL ADMINISTRATIVO II 395

b. En los supuestos previstos en el artículo 5°, inciso 2;


c. Se realice entre dependencias de los órganos del Estado en forma direc-
ta, en la medida del cumplimiento de sus respectivas competencias;
d. Se trate de datos personales relativos a la salud, y sea necesario por
razones de salud pública, de emergencia o para la realización de estudios
epidemiológicos, en tanto se preserve la identidad de los titulares de los da-
tos mediante mecanismos de disociación adecuados;
e. Se hubiera aplicado un procedimiento de disociación de la información,
de modo que los titulares de los datos sean inidentificables.
4. El cesionario quedará sujeto a las mismas obligaciones legales y regla-
mentarias del cedente y éste responderá solidaria y conjuntamente por la
observancia de las mismas ante el organismo de control y el titular de los datos
de que se trate.
Artículo 12 - Transferencia internacional.
1. Es prohibida la transferencia de datos personales de cualquier tipo con
países u organismos internacionales o supranacionales, que no proporcionen
niveles de protección adecuados.
2. La prohibición no regirá en los siguientes supuestos:
a. Colaboración judicial internacional;
b. Intercambio de datos de carácter médico, cuando así lo exija el tratamien-
to del afectado, o una investigación epidemiológica, en tanto se realice en los
términos del inciso e del artículo anterior;
c. Transferencias bancarias o bursátiles, en lo relativo a las transacciones
respectivas y conforme la legislación que les resulte aplicables;
d. Cuando la transferencia se hubiera acordado en el marco de tratados
internacionales en los cuales la República Argentina sea parte;
e. Cuando la transferencia tenga por objeto la cooperación internacional
entre organismos de inteligencia para la lucha contra el crimen organizado, el
terrorismo y el narcotráfico.

Capítulo 111
DERECHOS DE LOS TITULARES DE DATOS
Artículo 13 - Derecho de información. Toda persona puede solicitar infor-
mación al organismo de control relativa a la existencia de archivos, registros,
bases o bancos de datos personales, sus finalidades y la identidad de sus res-
ponsables. El registro que se lleve al efecto será de consulta pública y gratui-
ta.
Artículo 14 - Derecho de acceso.
1. El titular de los datos, previa acreditación de su identidad, tiene dere-
cho a solicitar y obtener información de sus datos personales incluidos en los
bancos de datos públicos, o privados destinados a proveer informes.
396 ANEXO LEGISLATIVO

2. El responsable o usuario debe proporcionar la información solicitada


dentro de los diez días corridos de haber sido intimado fehacientemente.
Vencido el plazo sin que se satisfaga el pedido, o si evacuado el informe, éste
se estimara insuficiente, quedará expedita la acción de protección de los da-
tos personales o de hábeas data prevista en esta ley.
3. El derecho de acceso a que se refiere este artículo sólo puede ser ejerci-
do en forma gratuita a intervalos no inferiores a seis meses, salvo que se acre-
dite un interés legítimo al efecto.
4. El ejercicio del derecho al cual se refiere este artículo en el caso de da-
tos de personas fallecidas le corresponderá a sus sucesores universales.
Artículo 15 - Contenido de la información.
1. La información debe ser suministrada en forma clara, exenta de codifi-
caciones yen su caso acompañada de una explicación, en lenguaje accesible al
conocimiento medio de la población, de los términos que se utilicen.
2. La información debe ser amplia y versar sobre la totalidad del registro
perteneciente al titular, aun cuando el requerimiento sólo comprenda un
aspecto de los dato personales. En ningún caso el informe podrá revelar datos
pertenecientes a terceros, aun cuando se vinculen con el interesado.
3. La información, a opción del titular, podrá suministrarse por escrito, por
medios electrónicos, telefónicos, de imagen u otro idóneo a tal fin.
Artículo 16 - Derecho de rectificación, actualización o supresión.
1. Toda persona tiene derecho a que sea rectificados, actualizados y, cuando
corresponda, suprimidos o sometidos a confidencialidad los datos personales
de los que sea titular, que estén incluidos en un banco de datos.
2. El responsable o usuario de un banco de datos, debe proceder a la recti-
ficación, supresión o actualización de los datos personales del afectado, rea-
lizando las operaciones necesarias a tal fin en el plazo máximo de cinco días
hábiles de haber recibido el reclamo del titular de los datos o advertido el error
o falsedad.
3. El incumplimiento de esta obligación dentro del término acordado en el
inciso precedente, habilitará al interesado a promover sin más la acción de
protección de los datos personales o de hábeas data prevista en la presente ley.
4. En el supuesto de cesión, o transferencia de datos, el responsable ousua-
rio del banco de datos debe notificar la rectificación o supresión al cesionario
dentro del quinto día hábil de efectuado el tratamiento del dato.
5. La supresión no procede cuando pudiese causar perjuicios a derechos o
intereses legítimos de terceros, o cuando existiera una obligación legal de
conservar los datos.
6. Durante el proceso de verificación y rectificación del error o falsedad de
la información que se trate, el responsable o usuario del banco de datos debe-
rá o bien bloquear el archivo, o consignar al proveer información relativa al
mismo la circunstancia de que se encuentra sometida a revisión.
DERECHO PROCESAL ADMINISTRATIVO II 397

7. Los datos personales deben ser conservados durante los plazos previs-
tos en las disposiciones aplicables o en su caso, en las contractuales entre el
responsable o usuario del banco de datos y el titular de los datos.
Artículo 17 - Excepciones.
1. Los responsables o usuarios de bancos de datos públicos pueden, median-
te decisión fundada, denegar el acceso, rectificación o la supresión en función
de la protección de la defensa de la Nación, del orden y la seguridad públicos,
o de la protección de los derechos e intereses de terceros.
2. La información sobre datos personales también puede ser denegada por
los responsables o usuarios de bancos de datos públicos, cuando de tal modo
se pudieran obstaculizar actuaciones judiciales o administrativas en curso
vinculadas a la investigación sobre el cumplimiento de obligaciones tributa-
rias o previsionales, el desarrollo de funciones de control de la salud y del
medio ambiente, la investigación de delitos penales y la verificación de infrac-
ciones administrativas. La resolución que así lo disponga debe ser fundada y
notificada al afectado.
3. Sin perjuicio de lo establecido en los incisos anteriores, se deberá brin-
dar acceso a los registros en cuestión en la oportunidad en que el afectado tenga
que ejercer su derecho de defensa.
Artículo 18 - Comisiones legislativas. Las Comisiones de Defensa Nacio-
nal y la Comisión Bicameral de Fiscalización de los Organos y Actividades de
Seguridad Interior e Inteligencia del Congreso de la Nación y la Comisión
de Seguridad Interior de la Cámara de Diputados de la Nación, o las que las sus-
tituyan, tendrán acceso a los archivos o bancos de datos referidos en el artículo 23,
inciso 2, por razones fundadas yen aquellos aspectos que constituyan materia
de competencia de tales Comisiones.
Artículo 19 - Gratuidad. La rectificación, actualización o supresión de datos
personales inexactos o incompletos que obren en registros públicos o privados
se efectuará sin cargo alguno para el interesado.
Artículo 20 - Impugnación de valoraciones personales.
1. Las decisiones judiciales o los actos administrativos que impliquen apre-
ciación o valoración de conductas humanas, no podrán tener como único fun-
damento el resultado del tratamiento informatizado de datos personales que
suministren una definición del perfilo personalidad del interesado.
2. Los actos que resulten contrarios a la disposición precedente serán
insanablemente nulos.

Capítulo IV
USUARIOS Y RESPONSABLES DE ARCHIVOS, REGISTROS Y
BANCOS DE DATOS
Artículo 21 - Registros de archivos de datos. Inscripción.
398 ANEXO LEGISLATIVO

1. Todo archivo, registro, base o banco de datos público, y privado destinado


a proporcionar informes debe inscribirse en el Registro que al efecto habilite
el organismos de control.
2. El registro de archivos de datos debe comprender como mínimo la si-
guiente información:
a. Nombre y domicilio del responsable;
b. Características y finalidad del archivo;
c. Naturaleza de los datos personales contenidos en cada archivo;
d. Forma de recolección y actualización de datos;
e. Destino de los datos y personas físicas o de existencia ideal a las que
pueden ser trasmitidos;
f. Modo de interrelacionar la información registrada;
g. Medios utilizados para garantizar la seguridad de los datos, debiendo
detallar la categoría de personas con acceso al tratamiento de la información;
h. Tiempo de conservación de los datos;
i. Forma y condiciones en que las personas pueden acceder a los datos re-
feridos a ellas y los procedimientos a realizar para la rectificación o actualiza-
ción de los datos.
3. Ningún usuario de datos podrá poseer datos personales de naturaleza
distinta a los declarados en el registro.
El incumplimiento de estos requisitos dará lugar a las sanciones adminis-
trativas previstas en el capítulo VI de la presente ley.
Artículo 22 - Archivos, registros o bancos de datos públicos.
1. Las normas sobre creación, modificación o supresión de archivos, regis-
tros o bancos de datos pertenecientes a organismos públicos deben hacerse por
medio de disposición general publicada en el Boletín oficial de la Nación o
diario oficial.
2. Las disposiciones respectivas, deben indicar:
a. Características y finalidad del archivo;
b. Personas respecto de las cuales se pretenda obtener datos y el carácter
facultativo u obligatorio de su suministro por parte de aquéllas;
c. Procedimiento de obtención y actualización de los datos;
d. Estructura básica del archivo, informatizado o no, y la descripción de la
naturaleza de los datos personales que contendrán;
e. Las cesiones, transferencias o interconexiones previstas;
f. Órganos responsables del archivo, precisando dependencia jerárquica
en su caso;
g. Las oficinas ante las que se pudiesen efectuar las reclamaciones en ejer-
cicio de los derechos de acceso, rectificación o supresión.
3. En las disposiciones que se dicten para la supresión de los registros
informatizados se establecerá el destino de los mismos o las medidas que se
adopten para su destrucción.
DERECHO PROCESAL ADMINISTRATIVO II 399

Artículo 23 - Supuestos especiales.


1. Quedarán sujetos al régimen de la presente ley, los datos personales que
por haberse almacenado para fines administrativos, deban ser objetos de re-
gistro permanente en los bancos de datos de las fuerzas armadas, fuerzas de
seguridad, organismos policiales o de inteligencia; y aquéllos sobre anteceden-
tes personales que proporcionen dichos bancos de datos a las autoridades
administrativas o judiciales que los requieran en virtud de disposiciones le-
gales.
2. El tratamiento de datos personales con fines de defensa nacional o se-
guridad pública por parte de las fuerzas armadas, fuerzas de seguridad, orga-
nismos policiales o inteligencia, sin consentimiento de los afectados, queda li-
mitado a aquellos supuestos y categoría de datos que resulten necesarios para
el estricto cumplimiento de las misiones legalmente asignadas a aquéllos para
la defensa nacional, la seguridad pública o para la represión de los delitos. Los
archivos, en tales casos, deberán ser específicos y establecidos al efecto, de-
biendo clasificarse por categorías, en función de su grado de fiabilidad.
3. Los datos personales registrados con fines policiales se cancelarán cuan-
do no sean necesarios para las averiguaciones que motivaron su almacena-
miento.
Artículo 24 - Archivos, registros o bancos de datos privados. Los particula-
res que formen archivos, registros o bancos de datos que no sean para un uso
exclusivamente personal deberán registrarse conforme lo previsto en el arto 21.
Artículo 25 - Prestación de servicios informatizados de datos personales.
1. Cuando por cuenta de terceros se presten servicios de tratamiento de
datos personales, éstos no podrán aplicarse o utilizarse con un fin distinto al
que figure en el contrato de servicios, ni cederlos a otras personas, ni aun para
su conservación.
2. Una vez cumplida la prestación contractual los datos personales trata-
dos deberán ser destruidos, salvo que medie autorización expresa de aquél por
cuenta de quien se prestan tales servicios cuando razonablemente se presu-
ma la posibilidad de ulteriores encargos, en cuyo caso se podrá almacenar con
las debidas condiciones de seguridad por un período de hasta dos años.
Artículo 26 - Prestación de servicios de información crediticia.
1. En la prestación de servicios de información crediticia sólo pueden tra-
tarse datos personales de carácter patrimonial relativos a la solvencia econó-
mica y al crédito, obtenidos de fuentes accesibles al público o procedentes de
informaciones facilitadas por el interesado o con su consentimiento.
2. Pueden tratarse igualmente datos personales relativos al cumplimien-
to o incumplimiento de obligaciones de contenido patrimonial, facilitados por
el acreedor o por quien actúe por su cuenta o interés.
3. A solicitud del titular de los datos, el responsable o usuario del banco de
datos, le comunicará las informaciones, evaluaciones y apreciaciones que sobre
400 ANEXO LEGISLATIVO

el mismo hayan sido comunicadas durante los últimos seis meses y el nombre
y domicilio del cesionario en el supuesto de tratarse de datos obtenidos por
cesión.
4. Sólo se podrán archivar, registrar o ceder los datos personales que sean
significativos para evaluar la solvencia económico-financiera de los afectados
durante los últimos cinco años. Dicho plazo se reducirá a dos años cuando el
deudor cancele o de otro modo extinga la obligación, debiéndose hacer cons-
tar dicho hecho.
5. La prestación de servicios de información crediticia no requerirá el pre-
vio consentimiento del titular de los datos a los efectos de su cesión, ni la ul-
terior comunicación de ésta, cuando estén relacionados con el giro de las ac-
tividades comerciales o crediticias de los cesionarios.
Artículo 27 - Archivos, registros o bancos de datos con fines de publicidad.
1. En la recopilación de domicilios, reparto de documentos, publicidad o
venta directa y otras actividades análogas, se podrán tratar datos que sean
aptos para establecer perfiles determinados con fines promocionales, comer-
ciales o publicitarios; o permitan establecer hábitos de consumo, cuando éstos
figuren en documentos accesibles al público o hayan sido facilitados por los
propios titulares u obtenidos con su consentimiento.
2. En los supuestos contemplados en el presente artículo, el titular de los
datos podrá ejercer el derecho de acceso sin cargo alguno.
3. El titular podrá en cualquier momento solicitar el retiro o bloqueo de su
nombre de los bancos de datos a los que se refiere el presente artículo.
Artículo 28 - Archivos, registros o bancos de datos relativos a encuestas.
1. Las normas de la presente ley no se aplicarán a las encuestas de opinión,
mediciones y estadísticas relevadas conforme a la ley 17.622, trabajos de pros-
pección de mercados, investigaciones científicas o médicas y actividades aná-
logas, en la medida que los datos recogidos no puedan atribuirse a una perso-
na determinada o determinable.
2. Si en el proceso de recolección de datos no resultara posible mantener
el anonimato, se deberá utilizar una técnica de disociación, de modo que no per-
mita identificar a persona alguna.

Capítulo V
CONTROL
Artículo 29 - Órgano de control.
1. El órgano de control deberá realizar todas las acciones necesarias para
el cumplimiento de los objetivos y demás disposiciones de la presente ley. A
tales efectos tendrá las siguientes funciones y atribuciones:
a. Asistir y asesorar a las personas que lo requieran acerca de los alcances
de la presente y de los medios legales de que disponen para la defensa de los
derechos que ésta garantiza;
DERECHO PROCESAL ADMINISTRATIVO II 401

b. Dictar las normas y reglamentaciones que se deben observar en el desa-


rrollo de las actividades comprendidas por esta ley;
c. Realizar un censo de archivos, registros o bancos de datos alcanzados por
la ley y mantener el registro permanente de los mismos;
d. Controlar la observancia de las normas sobre integridad y seguridad de
datos por parte de los archivos, registros o bancos de datos. A tal efecto, podrá
solicitar autorización judicial para acceder a locales, equipos o programas de
tratamiento de datos a fin de verificar infracciones al cumplimiento de la
presente ley;
e. Solicitar información a las entidades públicas y privadas, las que debe-
rán proporcionar los antecedentes, documentos, programas u otros elemen-
tos relativos al tratamiento de los datos personales que se le requieran. En
estos casos, la autoridad deberá garantizar la seguridad y confidencialidad de
la información y elementos suministrados;
f. Imponer las sanciones administrativas que en su caso correspondan por
violación a las normas de la presente ley y de las reglamentaciones que se
dicten en su consecuencia;
g. Constituirse en querellante en las acciones penales que se promovieran
por violaciones a la presente ley;
h. Controlar el cumplimiento de los requisitos y garantías que deben reunir
los archivos o bancos de datos privados destinados a suministrar informes,
para obtener la correspondiente inscripción en el Registro creado por esta ley.
1. El órgano de control gozará de autonomía funcional y actuará como ór-
gano descentralizado en el ámbito del Ministerio de Justicia de la N ación.
2. El órgano de control será dirigido y administrado por un Director desig-
nado por el término de cuatro (4) años, por el Poder Ejecutivo con acuerdo del
Senado de la Nación, debiendo ser seleccionado entre personas con anteceden-
tes en la materia.
El Director tendrá dedicación exclusiva en su función, encontrándose
alcanzado por las incompatibilidades fijadas por ley para los funcionarios
públicos y podrá ser removido por el Poder Ejecutivo por mal desempeño de
sus funciones.
Artículo 30 - Códigos de conducta.
1. Las asociaciones o entidades representativas de responsables o usuarios
de bancos de datos de titularidad privada podrán elaborar códigos de conducta
de práctica profesional, que establezcan normas para el tratamiento de datos
personales que tiendan a asegurar y mejorar las condiciones de operación de
los sistemas de información en función de los principios establecidos en la
presente ley.
2. Dichos códigos deberán ser inscriptos en el registro que al efecto lleve
el organismo de control, quien podrá denegar la inscripción cuando conside-
re que no se ajustan a las disposiciones legales y reglamentarias sobre la
materia.
402 ANEXO LEGISLATIVO

Capítulo VI
SANCIONES
Artículo 31- Sanciones administrativas.
1. Sin perjuicio de las responsabilidades administrativas que correspon-
dan en los casos de responsables o usuarios de bancos de datos públicos; de la
responsabilidad por daños y perjuicios derivados de la inobservancia de la pre-
sente ley, y de las sanciones penales que correspondan, el organismo de con-
trol podrá aplicar las sanciones de apercibimiento, suspensión, multa de mil
pesos ($1000) a cien mil pesos ($100.000), clausura o cancelación del archivo,
registro o banco de datos.
2. La reglamentación determinará las condiciones y procedimientos para
la aplicación de las sanciones previstas, las que deberán graduarse en relación
a la gravedad y extensión de la violación y de los perjuicios derivados de la
infracción, garantizando el principio del debido proceso.
Artículo 32 - Sanciones penales.
1. Incorpórase como artículo 117 bis del Código Penal, el siguiente:
"1°. Será reprimido con la pena de prisión de un mes a dos años el que inser-
tara o hiciera insertar a sabiendas datos falsos en un archivo de datos personales.
2°. La pena será de seis meses a tres años, al que proporcionara a un terce-
ro a sabiendas información falsa contenida en un archivo de datos personales.
3°. La escala penal se aumentará en la mitad del mínimo y del máximo,
cuando del hecho se derive perjuicio a alguna persona.
4°. Cuando el autor o responsable del ilícito sea funcionario público en
ejercicio de sus funciones, se le aplicará la accesoria de inhabilitación para el
desempeño de cargos públicos por el doble del tiempo que el de la condena."
2. Incorpórase como artículo 157 bis del Código Penal el siguiente:
"Será reprimido con la pena de prisión de un mes a dos años el que:
1°. A sabiendas e ilegítimamente, o violando sistemas de confidencialidad
y seguridad de datos, accediere, de cualquier forma, a un banco de datos per-
sonales;
2°. Revelare a otro información registrada en un banco de datos persona-
les cuyo secreto estuviere obligado a preservar por disposición de una ley.
Cuando el autor sea funcionario público sufrirá, además, pena de inhabi-
litación especial de uno a cuatro años."

Capítulo VII
ACCIÓN DE PROTECCIÓN DE LOS DATOS PERSONALES
Artículo 33 - Procedencia. La acción de protección de los datos personales
o de hábeas data procederá:
a. Para tomar conocimiento de los datos personales almacenados en archi-
vos, registros o bancos de datos públicos o privados destinados a proporcionar
informes, y de la finalidad de aquéllos;
DERECHO PROCESAL ADMINISTRATIVO II 403

b. En los casos en que se presuma la falsedad, inexactitud, des actualización


de la información de que se trata, o el tratamiento de datos cuyo registro se
encuentra prohibido en la presente ley, para exigir su rectificación, supresión,
confidencialidad o actualización.
Artículo 34 - Legitimación activa. La acción de protección de los datos per-
sonales o de hábeas data podrá ser ejercida por el afectado, sus tutores o
curadores y los sucesores de las personas físicas, sean en línea directa o cola-
teral hasta el segundo grado, por sí o por intermedio de apoderado.
Cuando la acción sea ejercida por personas de existencia ideal, deberá ser
interpuesta por sus representantes legales, o apoderados que éstas designen
al efecto.
En el proceso podrá intervenir en forma coadyuvante el Defensor del
Pueblo.
Artículo 35 - Legitimación pasiva. La acción procederá respecto de los
responsables y usuarios de bancos de datos públicos, y de los privados desti-
nados a proveer informes.
Artículo 36 - Competencia. Será competente para entender en esta acción el
juez del domicilio del actor; el del domicilio del demandado; el del lugar en el que
el hecho o acto se exteriorice o pudiera tener efecto, a elección del actor.
Procederá la competencia federal:
a. Cuando se interponga en contra de archivos de datos públicos de orga-
nismos nacionales, y
b. Cuando los archivo de datos se encuentren interconectados en redes
interjurisdiccionales, nacionales o internacionales.
Artículo 37 - Procedimiento aplicable. La acción de hábeas data tramita-
rá según las disposiciones de la presente ley y por el procedimiento que corres-
ponde a la acción de amparo común y supletoriamente por las normas del
Código Procesal Civil y Comercial de la Nación, en lo atinente al juicio suma-
rísimo.
Artículo 38 - Requisitos de la demanda.
1. La demanda deberá interponerse por escrito, individualizando con la
mayor precisión posible el nombre y domicilio del archivo, registro o banco de
datos y, en su caso, el nombre del responsable o usuario del mismo.
En el caso de los archivos, registros o bancos públicos, se procurará esta-
blecer el organismo estatal del cual dependen.
2. El accionante deberá alegar las razones por las cuales entiende que en
el archivo, registro o banco de datos individualizado obra información referi-
da a su persona; los motivos por los cuales considera que la información que le
atañe resulta discriminatoria, falsa o inexacta y justificar que se han cumpli-
do los recaudos que hacen al ejercicio de los derechos que le reconoce la pre-
sente ley.
404 ANEXO LEGISLATIVO

3. El afectado podrá solicitar que mientras dure el procedimiento, el regis-


tro o banco de datos asiente que la información cuestionada está sometida a un
proceso judicial.
4. El Juez podrá disponer el bloqueo provisional del archivo en lo referen-
te al dato personal motivo deljuicio cuando sea manifiesto el carácter discri-
minatorio, falso o inexacto de la información de que se trate.
5. A los efectos de requerir información al archivo, registro o banco de datos
involucrado, el criterio judicial de apreciación de las circunstancias requeri-
das en los puntos 1 y 2 debe ser amplio.
Artículo 39 - Trámite.
1. Admitida la acción eljuez requerirá al archivo, registro o banco de datos
la remisión de la información concerniente al accionante. Podrá asimismo
solicitar informes sobre el soporte técnico de datos, documentación de base
relativa a la recolección y cualquier otro aspecto que resulte conducente en la
resolución de la causa que estime procedente.
2. El plazo para contestar el informe no podrá ser mayor de cinco días há-
biles, el que podrá ser ampliado prudencialmente por eljuez.
Artículo 40 - Confidencialidad de la información.
1. Los registros, archivos o bancos de datos privados no podrán alegar la
confidencialidad de la información que se les requiere salvo el caso en que se
afecten las fuentes de información periodísticas.
2. Cuando un archivo, registro o banco de datos público se oponga a la re-
misión del informe solicitado con invocación de las excepciones al derecho de
acceso, rectificación o supresión, autorizadas por la presente ley o por una ley
específica; deberá acreditar los extremos que hacen aplicable la excepción
legal. En tales casos, eljuez podrá tomar conocimiento personal y directo de
los datos solicitados asegurando el mantenimiento de su confidencialidad.
Artículo 41- Contestación del informe. Al contestar el informe, el archivo,
registro o banco de datos deberá expresar las razones por las cuales incluyó la
información cuestionada y aquéllas por las que no evacuó el pedido efectuado por
el interesado, de conformidad a lo establecido en los artículos 13 a 15 de la ley.
Artículo 42 - Ampliación de la demanda. Contestado el informe, el actor
podrá, en el término de tres días, ampliar el objeto de la demanda solicitando
la supresión, rectificación, confidencialidad o actualización de sus datos per-
sonales, en los casos que resulte procedente a tenor de la presente ley, ofrecien-
do en el mismo acto la prueba pertinente. De esta presentación se dará tras-
lado al demandado por el término de tres días.
Artículo 43 - Sentencia.
1. Vencido el plazo para la contestación del informe o contestado el mismo,
yen el supuesto del artículo 42, luego de contestada la ampliación, y habien-
do sido producida en su caso la prueba, eljuez dictará sentencia.
DERECHO PROCESAL ADMINISTRATIVO II 405

2. En el caso de estimarse procedente la acción, se especificará si la infor-


mación debe ser suprimida, rectificada, actualizada o declarada confidencial,
estableciendo un plazo para su cumplimiento.
3. El rechazo de la acción no constituye presunción respecto de la respon-
sabilidad en que hubiera podido incurrir el demandante.
4. En cualquier caso, la sentencia deberá ser comunicada al organismo de
control, que deberá llevar un registro al efecto.
Artículo 44 - Ámbito de aplicación. Las normas de la presente ley conteni-
das en los Capítulos I, II, III y IV, y el artículo 32 son de orden público y de
aplicación en lo pertinente en todo el territorio nacional.
Se invita a las provincias a adherir a las normas de esta ley que fueren de
aplicación exclusiva en jurisdicción nacional.
Lajurisdicción federal regirá respecto de los registros, archivos, bases o
bancos de datos interconectados en redes del alcance interjurisdiccional,
nacional o internacional.
Artículo 45 - El Poder Ejecutivo Nacional deberá reglamentar la presen-
te ley y establecer el organismo de control dentro de los ciento ochenta días de
su promulgación.
Artículo 46 - Disposiciones transitorias. Los archivos, registros, bases o
bancos de datos destinados a proporcionar informes, existentes al momento
de la sanción de la presente ley, deberán inscribirse en el registro que se ha-
bilite conforme a los dispuesto en artículo 21 y adecuarse a lo que dispone el
presente régimen dentro del plazo que al efecto establezca al reglamentación.
Artículo 47 - Los bancos de datos presentadores de servicios de informa-
ción crediticia deberán suprimir, o en su caso, omitir asentar, todo dato refe-
rido al incumplimiento o mora en el pago de una obligación, si ésta hubiere sido
cancelada al momento de la entrada en vigencia de la presente ley [Vetado por
el Poder Ejecutivo].
Artículo 48 - Comuníquese al Poder Ejecutivo.
PROTECCIÓN DE LOS DATOS PERSONALES
DECRETO N° 1558/2001

Promulgación: 29/11/2001
Publicación: B. O. del 03/12/2001

Apruébase la reglamentación de la Ley N° 25.326. Principios generales rela-


tivos a la protección de datos. Derechos de los titulares de los datos. Usuarios
y responsables de archivos, registros y bancos de datos. Control. Sanciones.

Buenos Aires, 29 de noviembre de 2001

Visto el expediente ~ 128.949/01 del registro del Ministerio de Justicia y


Derechos Humanos, la Ley N° 25.326 y,
Considerando:
Que el artículo 45 de la mencionada ley establece que el Poder Ejecutivo
Nacional deberá reglamentar la misma y establecer el órgano de control a que
se refiere su artículo 29 dentro de los ciento ochenta (180) días de su promul-
gación.
Que el artículo 46 de la ley citada establece que la reglamentación fij ará el
plazo dentro del cual los archivos de datos destinados a proporcionar informes
existentes al momento de la sanción de dicha ley deberán inscribirse en el
registro a que se refiere su artículo 21 y adecuarse a lo que establece el régi-
men dispuesto por la ley.
Que el artículo 31, inciso 2, de la Ley N° 25.326 dispone que la reglamenta-
ción determinará las condiciones y procedimientos para la aplicación de san-
ciones' en los términos que dicha norma establece.
Que la Dirección General de Asuntos Jurídicos del Ministerio de Justicia
y Derechos Humanos, la Dirección de Asuntos Jurídicos de la Secretaría Le-
gal y Técnica de la Presidencia de la Nación y la Procuración del Tesoro de la
Nación han tomado la intervención que les compete.
Que la presente medida se dicta en uso de las facultades conferidas por el
artículo 99, inciso 2 de la Constitución Nacional.

Por ello,
El Presidente de la N ación Argentina decreta:
Artículo 1° -Apruébase la reglamentación de la Ley N° 25.326 de Protección
de los Datos Personales, que como anexo 1 forma parte del presente.
DERECHO PROCESAL ADMINISTRATIVO II 409

La Dirección Nacional de Protección de Datos Personales efectuará con-


troles de oficio sobre el cumplimiento de este principio legal, y aplicará las
sanciones pertinentes al responsable o usuario en los casos que correspondiere.
La Dirección Nacional de Protección de Datos Personales procederá, ante
el pedido de un interesado o de oficio ante la sospecha de una ilegalidad, a
verificar el cumplimiento de las disposiciones legales y reglamentarias en
orden a cada una de las siguientes etapas del uso y aprovechamiento de datos
personales:
a) legalidad de la recolección o toma de información personal;
b) legalidad en el intercambio de datos y en la transmisión a terceros o en
la interrelación entre ellos;
c) legalidad en la cesión propiamente dicha;
d) legalidad de los mecanismos de contr<>l interno y externo del archivo,
registro, bases o bancos de datos.
Artículo 5° - El consentimiento informado es el que está precedido de una
explicación, al titular de los datos, en forma adecuada a su nivel social y cul-
tural, de la información a que se refiere el artículo 6° de la Ley N° 25.326.
La Dirección Nacional de Protección de Datos Personales establecerá los
requisitos para que el consentimiento pueda ser prestado por un medio distin-
to a la forma escrita, el cual deberá asegurar la autoría e integridad de la de-
claración.
El consentimiento dado para el tratamiento de datos personales puede ser
revocado en cualquier tiempo. La revocación no tiene efectos retroactivos.
A los efectos del artículo 5°, inciso 2 e, de la Ley N° 25.326 el concepto de
entidad financiera comprende a las personas alcanzadas por la Ley N° 21.526
ya las empresas emisoras de tarjetas de crédito, los fideicomisos financieros,
las ex-entidades financieras liquidadas por el Banco Central de la República
Argentina y los sujetos que expresamente incluya la autoridad de aplicación
de la mencionada ley.
No es necesario el consentimiento para la información que se describe en
los incisos a), b), c) y d) del artículo 39 de la Ley N° 21.526.
En ningún caso se afectará el secreto bancario, quedando prohibida la
divulgación de datos relativos a operaciones pasivas que realicen las entida-
des financieras con sus clientes, de conformidad con lo dispuesto en los artí-
culos 39 y 40 de la Ley N° 21.526.
Artículo 6° - Sin reglamentar.
Artículo 7° - Sin reglamentar.
Artículo 8° - Sin reglamentar.
Artículo 9° - La Dirección Nacional de Protección de Datos Personales
promoverá la cooperación entre sectores públicos y privados para la elabora-
ción e implantación de medidas, prácticas y procedimientos que susciten la
410 ANEXO LEGISLATIVO

confianza en los sistemas de información, así como en sus modalidades de


provisión y utilización.
Artículo 10 - Sin reglamentar.
Artículo 11- Al consentimiento para la cesión de los datos le son aplicables
las disposiciones previstas en el artículo 5° de la Ley N° 25.326 Yel artículo 5°
de esta reglamentación.
En el caso de archivos o bases de datos públicas dependientes de un orga-
nismo oficial que por razón de sus funciones específicas estén destinadas a la
difusión al público en general, el requisito relativo al interés legítimo del
cesionario se considera implícito en las razones de interés general que moti-
varon el acceso público irrestricto.
La cesión masiva de datos personales de registros públicos a registros
privados sólo puede ser autorizada por ley o por decisión del funcionario res-
ponsable, si los datos son de acceso público y se ha garantizado el respeto a los
principios de protección establecidos en la Ley N° 25.326. No es necesario acto
administrativo alguno en los casos en que la ley disponga el acceso a la base de
datos pública en forma irrestricta. Se entiende por cesión masiva de datos
personales la que comprende a un grupo colectivo de personas.
La Dirección Nacional de Protección de Datos Personales fijará los están-
dares de seguridad aplicables a los mecanismos de disociación de datos.
El cesionario a que se refiere el artículo 11, inciso 4, de la Ley N° 25.326,
podrá ser eximido total o parcialmente de responsabilidad si demuestra que
no se le puede imputar el hecho que ha producido el daño.
Artículo 12 - La prohibición de transferir datos personales hacia países u
organismos internacionales o supranacionales que no proporcionen niveles de
protección adecuados, no rige cuando el titular de los datos hubiera consen-
tido expresamente la cesión.
No es necesario el consentimiento en caso de transferencia de datos des-
de un registro público que esté legalmente constituido para facilitar informa-
ción al público y que esté abierto a la consulta por el público en general o por
cualquier persona que pueda demostrar un interés legítimo, siempre que se
cumplan, en cada caso particular, las condiciones legales y reglamentarias
para la consulta.
Facúltase a la Dirección Nacional de Protección de Datos Personales a
evaluar, de oficio o a pedido de parte interesada, el nivel de protección propor-
cionado por las normas de un Estado u organismo internacional. Si llegara a
la conclusión de que un Estado u organismo no protege adecuadamente a los
datos personales, elevará al Poder Ejecutivo Nacional un proyecto de decre-
to para emitir tal declaración. El proyecto deberá ser refrendado por los Mi-
nistros de Justicia y Derechos Humanos y de Relaciones Exteriores, Comer-
cio Internacional y Culto.
.,
DERECHO PROCESAL ADMINISTRATIVO II 411

El carácter adecuado del nivel de protección que ofrece un país u organis-


mo internacional se evaluará atendiendo a todas las circunstancias que con-
curran en una transferencia o en una categoría de transferencias de datos; en
particular, se tomará en consideración la naturaleza de los datos, la finalidad
y la duración del tratamiento o de los tratamientos previstos, el lugar de des-
tino final, las normas de derecho, generales o sectoriales, vigentes en el país
de que se trate, así como las normas profesionales, códigos de conducta y las
medidas de seguridad en vigor en dichos lugares, o que resulten aplicables a
los organismos internacionales o supranacionales.
Se entiende que un Estado u organismo internacional proporciona un ni-
vel adecuado de protección cuando dicha tutela se deriva directamente del
ordenamiento jurídico vigente, o de sistemas de autorregulación, o del amparo
que establezcan las cláusulas contractuales que prevean la protección de da-
tos personales.

Capítulo III
DERECHOS DE LOS TITULARES DE LOS DATOS
Artículo 13 - Sin reglamentar.
Artículo 14 - La solicitud a que se refiere el artículo 14, inciso 1, de la Ley
N° 25.326, no requiere de fórmulas específicas, siempre que garantice la iden-
tificación del titular. Se puede efectuar de manera directa, presentándose el
interesado ante el responsable o usuario del archivo, registro, base o bancos
de datos, o de manera indirecta, a través de la intimación fehaciente por me-
dio escrito que deje constancia de recepción. También pueden ser utilizados
otros servicios de acceso directo o semidirecto como los medios electrónicos,
las líneas telefónicas, la recepción del reclamo en pantalla u otro medio idó-
neo a tal fin. En cada supuesto, se podrán ofrecer preferencias de medios para
conocer la respuesta requerida.
Si se tratara de archivos o bancos de datos públicos dependientes de un
organismo oficial destinados a la difusión al público en general, las condicio-
nes para el ejercicio del derecho de acceso podrán ser propuestas por el orga-
nismo y aprobadas por la Dirección Nacional de Protección de Datos Persona-
les, la cual deberá asegurar que los procedimientos sugeridos no vulneren ni
restrinjan en modo alguno las garantías propias de ese derecho.
El derecho de acceso permitirá:
a) conocer si el titular de los datos se encuentra o no en el archivo, regis-
tro, base o bancos de datos;
b) conocer todos los datos relativos a su persona que constan en el archivo;
c) solicitar información sobre las fuentes y los medios a través de los cua-
les se obtuvieron sus datos;
d) solicitar las finalidades para las que se recabaron;
e) conocer el destino previsto para los datos personales;

I
-""'II1II
412 ANEXO LEGISLATIVO

f) saber si el archivo está registrado conforme a las exigencias de la Ley


N° 25.326.
Vencido el plazo para contestar fijado en el artículo 14, inciso 2, de la Ley
N° 25.326, el interesado podrá ejercer la acción de protección de los datos per-
sonales y denunciar el hecho ante la Dirección Nacional de Protección de Datos
Personales a los fines del control pertinente de este organismo.
En el caso de personas fallecidas, deberá acreditarse el vínculo mediante
la declaratoria de herederos correspondiente, o por documento fehaciente que
verifique el carácter de sucesor universal del interesado.
Artículo 15 - El responsable o usuario del archivo, registro, base o banco de
datos deberá contestar la solicitud que se le dirija, con independencia de que
figuren o no datos personales del afectado, debiendo para ello valerse de cual-
quiera de los medios autorizados en el artículo 15, inciso 3, de la Ley N° 25.326,
a opción del titular de los datos, o las preferencias que el interesado hubiere
expresamente manifestado al interponer el derecho de acceso.
La Dirección Nacional de Protección de Datos Personales elaborará un
formulario modelo que facilite el derecho de acceso de los interesados.
Podrán ofrecerse como medios alternativos para responder el requeri-
miento, los siguientes:
a) visualización en pan talla;
b) informe escrito entregado en el domicilio del requerido;
c) informe escrito remitido al domicilio denunciado por el requirente;
d) transmisión electrónica de la respuesta, siempre que esté garantizada
la identidad del interesado y la confidencialidad, integridad y recepción de la
información;
e) cualquier otro procedimiento que sea adecuado a la configuración e
implantación material del archivo, registro, base o banco de datos, ofrecido por
el responsable o usuario del mismo.
Artículo 16 - En las disposiciones de los artículos 16 a 22 y 38 a 43 de la Ley
N" 25.326 en que se menciona a algunos de los derechos de rectificación, actua-
1ización' supresión y confidencialidad, se entiende que tales normas se refie-
ren a todos ellos.
En el caso de los archivos o bases de datos públicas conformadas por cesión
de información suministrada por entidades financieras, administradoras de
fondos de jubilaciones y pensiones y entidades aseguradoras, de conformidad
con el artículo 5°, inciso 2, de la Ley N° 25.326, los derechos de rectificación,
actualización, supresión y confidencialidad deben ejercerse ante la entidad
cedente que sea parte en la relación jurídica a que se refiere el dato impugna-
do. Si procediera el reclamo, la entidad respectiva debe solicitar al Banco
Central de la República Argentina, a la Superintendencia de AFJP o a la Su-
perintendencia de Seguros de la Nación, según el caso, que sean practicadas
las modificaciones necesarias en sus bases de datos. Toda modificación debe
DERECHO PROCESAL ADMINISTRATIVO II 413

ser comunicada a través de los mismos medios empleados para la divulgación


de la información.
Los responsables o usuarios de archivos o bases de datos públicos de acceso
público irrestricto pueden cumplir la notificación a que se refiere el artículo 16,
inciso 4, de la Ley N° 25.326 mediante la modificación de los datos realizada a
través de los mismos medios empleados para su divulgación.
Artículo 17 - Sin reglamentar.
Artículo 18 - Sin reglamentar.
Artículo 19 - Sin reglamentar.
Artículo 20 - Sin reglamentar.

Capítulo IV
USUARIOS Y RESPONSABLES DE ARCHIVOS, REGISTROS Y
BANCOS DE DATOS
Artículo 21 - El registro e inscripción de archivos, registros, bases o ban-
cos de datos públicos, y privados destinados a dar información, se habilitará
una vez publicada esta reglamentación en el Boletín Oficial.
Deben inscribirse los archivos, registros, bases o bancos de datos públicos
y los privados a que se refiere el artículo 1° de esta reglamentación.
A los fines de la inscripción de los archivos, registros y bases de datos con
fines de publicidad, los responsables deben proceder de acuerdo con lo esta-
blecido en el artículo 27, cuarto párrafo, de esta reglamentación.
Artículo 22 - Sin reglamentar.
Artículo 23 - Sin reglamentar.
Artículo 24 - Sin reglamentar.
Artículo 25 - Los contratos de prestación de servicios de tratamiento de
datos personales deberán contener los niveles de seguridad previstos en la Ley
N° 25.326, esta reglamentación y las normas complementarias que dicte la
Dirección Nacional de Protección de Datos Personales, como así también las
obligaciones que surgen para los locatarios en orden a la confidencialidad y
reserva que deben mantener sobre la información obtenida.
La realización de tratamientos por encargo deberá estar regulada por un
contrato que vincule al encargado del tratamiento con el responsable o usua-
rio del tratamiento y que disponga, en particular:
a) que el encargado del tratamiento sólo actúa siguiendo instrucciones del
responsable del tratamiento;
b) que las obligaciones del artículo 9° de la Ley N" 25.326 incumben también
al encargado del tratamiento.
414 ANEXO LEGISLATIVO

Artículo 26 - A los efectos del artículo 26, inciso 2, de la Ley N" 25.326, se
consideran datos relativos al cumplimiento o incumplimiento de obligaciones
los referentes a los contratos de mutuo, cuenta corriente, tarjetas de crédito,
fideicomiso, leasing, de créditos en general y toda otra obligación de conteni-
do patrimonial, así como aquellos que permitan conocer el nivel de cumpli-
miento y la calificación a fin de precisar, de manera indubitable, el contenido
de la información emitida.
En el caso de archivos o bases de datos públicos dependientes de un orga-
nismo oficial destinadas a la difusión al público en general, se tendrán por
cumplidas las obligaciones que surgen del artículo 26, inciso 3, de la Ley N" 25.326
en tanto el responsable de la base de datos le comunique al titular de los datos
las informaciones, evaluaciones y apreciaciones que sobre el mismo hayan sido
difundidas durante los últimos SEIS (6) meses.
Para apreciar la solvencia económico-financiera de una persona, confor-
me lo establecido en el artículo 26, inciso 4, de la Ley N" 25.326, se tendrá en
cuenta toda la información disponible desde el nacimiento de cada obligación
hasta su extinción. En el cómputo de cinco (5) años, éstos se contarán a partir
de la fecha de la última información adversa archivada que revele que dicha
deuda era exigible. Si el deudor acredita que la última información disponible
coincide con la extinción de la deuda, el plazo de reducirá a dos (2) años. Para
los datos de cumplimiento sin mora no operará plazo alguno para la elimina-
ción.
A los efectos del cálculo del plazo de dos (2) años para conservación de los
datos cuando el deudor hubiere cancelado o extinguido la obligación, se ten-
drá en cuenta la fecha precisa en que se extingue la deuda.
A los efectos de dar cumplimiento a lo dispuesto por el artículo 26, inci-
so 5, de la Ley N" 25.326, el Banco Central de la República Argentina deberá res-
tringir el acceso a sus bases de datos disponibles en Internet, para el caso de
información sobre personas físicas, exigiendo el ingreso del número de docu-
mento nacional de identidad o código único de identificación tributaria o la-
boral del titular de los datos, obtenidos por el cesionario a través de una rela-
ción contractual o comercial previa.
Artículo 27 - Podrán recopilarse, tratarse y cederse datos con fines de
publicidad sin consentimiento de su titular, cuando estén destinados a la for-
mación de perfiles determinados, que categoricen preferencias y comporta-
mientos similares de las personas, siempre que los titulares de los datos sólo
se identifiquen por su pertenencia a tales grupos genéricos, con más los datos
individuales estrictamente necesarios para formular la oferta a los destina-
tarios.
Las cámaras, asociaciones y colegios profesionales del sector que dispon-
gan de un Código de Conducta homologado por la Dirección Nacional de Pro-
tección de Datos Personales, al que por estatuto adhieran obligatoriamente
todos sus miembros,junto con la autoridad de aplicación, implementarán,
DERECHO PROCESAL ADMINISTRATIVO II 415

dentro de los noventa (90) días siguientes a la publicación de esta reglamen-


tación, un sistema de retiro o bloqueo a favor del titular del dato que quiera ser
excluido de las bases de datos con fines de publicidad. El retiro podrá ser to-
talo parcial, bloqueando exclusivamente, a requerimiento del titular, el uso
de alguno o algunos de los medios de comunicación en particular, como el
correo, el teléfono, el correo electrónico u otros.
En toda comunicación con fines de publicidad que se realice por correo,
teléfono, correo electrónico, Internet u otro medio a distancia a conocer, se
deberá indicar, en forma expresa y destacada, la posibilidad del titular del dato
de solicitar el retiro o bloqueo, total o parcial, de su nombre de la base de da-
tos. A pedido del interesado, se deberá informar el nombre del responsable o
usuario del banco de datos que proveyó la información.
A los fines de garantizar el derecho de información del artículo 13 de la Ley
N° 25.326, se inscribirán únicamente las cámaras, asociaciones y colegios pro-
fesionales del sector que dispongan de un Código de Conducta homologado por
la Dirección Nacional de Protección de Datos Personales, al que por estatuto
adhieran obligatoriamente todos sus miembros. Al inscribirse, las cámaras,
asociaciones y colegios profesionales deberán acompañar una nómina de sus
asociados indicando nombre, apellido y domicilio.
Los responsables o usuarios de archivos, registros, bancos o bases de da-
tos con fines de publicidad que no se encuentren adheridos a ningún Código de
Conducta, cumplirán el deber de información inscribiéndose en el Registro a
que se refiere el artículo 21 de la Ley N° 25.326.
Podrán tratarse datos sensibles obtenidos legalmente, a los fines de reali-
zar ofertas de bienes y servicios, cuando ello no cause discriminación y de
acuerdo a los parámetros que fije la autoridad de aplicación. Estos datos no
pueden ser cedidos a terceros sin el consentimiento previo de su titular.
Artículo 28 - Los archivos, registros, bases o bancos de datos mencionados
en el artículo 28 de la Ley W 25.326 son responsables y pasibles de las multas
previstas en el artículo 31 de la ley citada cuando infrinjan sus disposiciones.

CapítuloV
CONTROL
Artículo 29 -
1. Créase la Dirección Nacional de Protección de Datos Personales, en el
ámbito de la Secretaría de Justicia y Asuntos Legislativos del Ministerio de
Justicia y Derechos Humanos, como órgano de control de la Ley N° 25.326.
El Director tendrá dedicación exclusiva en su función, ejercerá sus funcio-
nes con plena independencia, no estará sujeto a instrucciones.
2. La Dirección Nacional de Protección de Datos Personales se integrará
con un Director Nacional Nivel "A" con función ejecutiva 1, designado por el
Poder Ejecutivo Nacional, por el plazo de cuatro (4) años, debiendo ser selec-
416 ANEXO LEGISLATIVO

cionado entre personas con antecedentes en la materia, a cuyo fin facúltase al


ministro de Justiciay Derechos Humanos, o a quien lo sustituya en sus funcio-
nes, a efectuar la designación correspondiente, como excepción a lo dispues-
to por el Anexo I del Decreto N° 993/91 Ysus modificatorios.
En el plazo de treinta (30) días hábiles posteriores a la asunción de su car-
go, el Director Nacional presentará un proyecto de su estructura organiza tiva
y reglamentación interna, para su aprobación por el Poder Ejecutivo Nacional y
publicación en el Boletín Oficial.
3. La Dirección Nacional de Protección de Datos Personales se financiará
a través de:
a) lo que recaude en concepto de tasas por los servicios que preste;
b) el producido de las multas previstas en el artículo 31 de la Ley N° 25.326;
c) las asignaciones presupuestarias que se incluyan en las previsiones
anuales del gobierno a partir del año 2002.
Transitoriamente, desde la entrada en vigencia de la presente reglamen-
tación y hasta el31 de diciembre de 2001, el costo de la estructura será afron-
tado con el crédito presupuestario correspondiente al Ministerio de Justicia
y Derechos Humanos para el año 2001, sin perjuicio de lo dispuesto en los
subincisos a) y b) del párrafo anterior.
4. La Dirección Nacional de Protección de Datos Personales contará con un
Consejo Consultivo, que se desempeñará "ad honorem", encargado de aseso-
rar al Director Nacional en los asuntos de importancia, integrado por:
a) un representante del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos;
b) un magistrado del Ministerio Público Fiscal con especialidad en la ma-
teria;
c) un representante de los archivos privados destinados a dar información
designado por la cámara que agrupe a las entidades nacionales de información
crediticia;
d) un representante de la Federación de Entidades Empresarias de Infor-
maciones Comerciales de la República Argentina;
e) un representante del Banco Central de la República Argentina;
f) un representante de las empresas dedicadas al objeto previsto en el ar-
tículo 27 de la Ley ~ 25.326, designado por las Cámaras respectivas de común
acuerdo, unificando en una persona la representación;
g) un representante del Consejo Federal de Consumo;
h) un representante del IRAM, instituto argentino de normalización con
especialización en el campo de la seguridad informática;
i) un representante de la Superintendencia de Seguros de la Nación;
j) un representante de la Comisión Bicameral de Fiscalización de los órga-
nos y Actividades de Seguridad Interior e Inteligencia del Honorable Congreso
de la N ación.
5. Son funciones de la Dirección Nacional de Protección de Datos Persona-
les, además de las que surgen de la Ley N° 25.326:
DERECHO PROCESAL ADMINISTRATNO JI 417

a) dictar normas administrativas y de procedimiento relativas a los trámi-


tes registrales y demás funciones a su cargo, y las normas y procedimientos
técnicos relativos al tratamiento y condiciones de seguridad de los archivos,
registros y bases o bancos de datos públicos y privados;
b) atender las denuncias y reclamaciones interpuestas en relación al tra-
tamiento de datos personales en los términos de la Ley N° 25.326;
c) percibir las tasas que se fijen por los servicios de inscripción y otros que
preste;
d) organizar y proveer lo necesario para el adecuado funcionamiento del
Registro de archivos, registros, bases o bancos de datos públicos y privados
previsto en el artículo 21 de la Ley N° 25.326;
e) diseñar los instrumentos adecuados para la mejor protección de los
datos personales de los ciudadanos y el mejor cumplimiento de la legislación
de aplicación;
f) homologar los códigos de conducta que se presenten de acuerdo a lo es-
tablecido por el artículo 30 de la ley 25.326, previo dictamen del Consejo Con-
sultivo, teniendo en cuenta su adecuación a los principios reguladores del
tratamiento de datos personales, la representatividad que ejerza la asociación
y organismo que elabora el código y su eficacia ejecutiva con relación a los
operadores del sector mediante la previsión de sanciones o mecanismos ade-
cuados.
Artículo 30 - La Dirección Nacional de Protección de Datos Personales
alentará la elaboración de códigos de conducta destinados a contribuir, en
función de las particularidades de cada sector, a la correcta aplicación de las
disposiciones nacionales adoptadas por la Ley N° 25.326 y esta reglamentación.
Las asociaciones de profesionales y las demás organizaciones representan-
tes de otras categorías de responsables o usuarios de archivos, registros, ba-
ses o bancos de datos públicos o privados, que hayan elaborado proyectos de
códigos éticos, o que tengan la intención de modificar o prorrogar códigos
nacionales existentes, podrán someterlos a consideración de la Dirección
N acional de Protección de Datos Personales, la cual aprobará el ordenamiento
o sugerirá las correcciones que se estimen necesarias para su aprobación.

Capítulo VI
SANCIONES
Artículo 31-
1. Las sanciones administrativas establecidas en el artículo 31 de la ley 25.326
serán aplicadas a los responsables o usuarios de archivos, registros, bases o
bancos de datos públicos, y privados destinados a dar información, se hubie-
ren inscripto o no en el registro correspondiente.
La cuantía de las sanciones se graduará atendiendo a la naturaleza de los
derechos personales afectados, al volumen de los tratamientos efectuados, a
418 ANEXO LEGISLATIVO

los beneficios obtenidos, al grado de intencionalidad, a la reincidencia, a los


daños y perjuicios causados a las personas interesadas y a terceros, y a cual-
quier otra circunstancia que sea relevante para determinar el grado de anti-
juricidad y de culpabilidad presentes en la concreta actuación infractora. Se
considerará reincidente a quien habiendo sido sancionado por una infracción
a la Ley N° 25.326 o sus reglamentaciones incurriera en otra de similar natu-
raleza dentro del término de tres (3) años, a contar desde la aplicación de la
sanción.
2. El producido de las multas a que se refiere el artículo 31 de la Ley N° 25.326
se aplicará al financiamiento de la Dirección Nacional de Protección de Datos
Personales.
3. El procedimiento se ajustará a las siguientes disposiciones:
a) La Dirección Nacional de Protección de Datos Personales iniciará actua-
ciones administrativas en caso de presuntas infracciones a las disposiciones
de la Ley N° 25.326 y sus normas reglamentarias, de oficio o por denuncia de
quien invocare un interés particular, del Defensor del Pueblo de la N ación o
de asociaciones de consumidores o usuarios.
~ b) Se procederá a labrar acta en la que se dejará constancia del hecho de-
nunciado o verificado y de la disposición presuntamente infringida.
En la misma acta se dispondrá agregar la documentación acompañada y
citar al presunto infractor para que, dentro del plazo de cinco (5) días hábiles,
presente por escrito su descargo y ofrezca las pruebas que hacen a su derecho.
Si se tratare de un acta de inspección, en que fuere necesaria una compro-
bación técnica posterior alos efectos de la determinación de la presunta infrac-
ción y que resultare positiva, se procederá a notificar al presunto responsable
la infracción verificada, intimándolo para que en el plazo de cinco (5) días
hábiles presente por escrito su descargo. En su primera presentación, el pre-
sunto infractor deberá constituir domicilio y acreditar personería.
La constancia del acta labrada conforme a lo previsto en este artículo, así
como las comprobaciones técnicas que se dispusieren, constituirán prueba
suficiente de los hechos así comprobados, salvo en los casos en que resultaren
desvirtuados por otras pruebas.
c) Las pruebas se admitirán solamente en caso de existir hechos controver-
tidos y siempre que no resulten manifiestamente inconducentes. Contra la
resolución que deniegue medidas de prueba sólo se concederá recurso de re-
consideración. La prueba deberá producirse dentro del término de diez (10)
días hábiles, prorrogables cuando haya causas justificadas, teniéndose por
desistidas aquellas no producidas dentro de dicho plazo por causa imputable
al infractor.
Concluidas las diligencias sumariales, se dictará la resolución definitiva
dentro del término de veinte (20) días hábiles.
Artículo 32 - Sin reglamentar.
DERECHO PROCESAL ADMINISTRATIVO II 419

Capítulo VII
ACCIÓN DE PROTECCIÓN DE LOS DATOS PERSONALES
Artículos 33 a 46 - Sin reglamentar.
OFICINA ANTICORRUPCIÓN
DECRETO N° 102199

Promulgación:23/ 12/ 1999


Publicación: B. O. del 29 / 12 / 1999

Objeto y ámbito de aplicación. Competencias y funciones. Estructura y orga-


nización. Informes finales al Ministro de Justicia y Derechos Humanos sobre
cada investigación. Derogación de los Decretos N" 152/97 Y7/97.

Buenos Aires, 23 de diciembre de 1999

Visto la Ley de Ministerios, y


Considerando:
Que, el HONORABLE CONGRESO DE LA NACIÓN mediante la Ley de
Ministerios (t.o. 1992) y sus modificatorias creó la OFICINAANTICORRUP-
CIÓN en el ámbito del MINISTERIO DE JUSTICIA Y DERECHOS HUMA-
NOS con el cometido de elaborar y coordinar programas de lucha contra la
corrupción y ejercer las competencias y atribuciones establecidas en los artí-
culos 26, 45 y 50 de la Ley N° 24.946.
Que, además, la Ley de Ministerios reconoce al MINISTERIO DE JUSTI-
CIA Y DERECHOS HUMANOS la potestad de entender en los programas de
lucha contra la corrupción e intervenir como parte querellante en los proce-
sos en que se encuentre afectado el patrimonio del Estado.
Que, conforme las potestades que la Ley de Ministerios le atribuye a la OFI-
CINAANTICORRUPCIÓN es necesario reglamentar sus funciones y estruc-
tura.
Que, la presente medida se dicta en ejercicio de las atribuciones conferi-
das por el Artículo 99 incisos 1) y 2) de la CONSTITUCIÓN NACIONAL y el
Artículo 17 de la Ley N° 25.064. .

Por ello,
EL PRESIDENTE DE LA NACIÓN ARGENTINA EN ACUERDO GENE-
RAL DE MINISTROS DECRETA:

Capítulo 1
DEL OBJETO Y ÁMBITO DE APLICACIÓN
Artículo 10 - La OFICINAANTICORRUPCIÓN funcionará en el ámbito del
MINISTERIO DE JUSTICIA Y DERECHOS HUMANOS, como organismo
422 ANEXO LEGISLATIVO

encargado de velar por la prevención e investigación de aquellas conductas


que dentro del ámbito fijado por esta reglamentación se consideren compren-
didas en la Convención Interamericana contra la Corrupción aprobada por
LeyN"24.759.
Su ámbito de aplicación comprende a la Administración Pública Nacional
centralizada y descentralizada, empresas, sociedades y todo otro ente públi-
co o privado con participación del Estado o que tenga como principal fuente de
recursos el aporte estatal.

Capítulo 11
DE LAS COMPETENCIAS Y FUNCIONES
Artículo 20 - La OFICINA ANTICORRUPCIÓN tiene competencia para:
a) Recibir denuncias que hicieran particulares o agentes públicos que se
relacionen con su objeto;
b) Investigar preliminarmente a los agentes a los que se atribuya la comi-
sión de alguno de los hechos indicados en el inciso anterior. En todos los su-
puestos, las investigaciones se realizarán por el solo impulso de la OFICINA
ANTICORRUPCIÓN y sin necesidad de que otra autoridad estatal 10 dispon-
ga;
c) Investigar preliminarmente a toda Institución o Asociación que tenga
como principal fuente de recursos el aporte estatal, ya sea prestado en forma
directa o indirecta, en caso de sospecha razonable sobre irregularidades en la
administración de los mencionados recursos;
d) Denunciar ante la justicia competente los hechos que, como consecuen-
cia de las investigaciones practicadas, pudieren constituir delitos;
e) Constituirse en parte querellante en los procesos en que se encuentre
afectado el patrimonio del Estado, dentro del ámbito de su competencia;
f) Llevar el registro de las declaraciones juradas de los agentes públi-
cos;
g) Evaluar y controlar el contenido de las declaraciones juradas de los
agentes públicos y las situaciones que pudieran constituir enriquecimiento
ilícito o incompatibilidad en el ejercicio de la función;
h) Elaborar programas de prevención de la corrupción y de promoción de
la transparencia en la gestión pública;
i) Asesorar a los organismos del Estado para implementar políticas o pro-
gramas preventivos de hechos de corrupción.
Artículo 30 - La OFICINAANTICORRUPCIÓN ejercerá las atribuciones
establecidas en los incisos a), b), c), d) y e) del artículo anterior en aquellos
casos que el Fiscal de Control Administrativo considere de significación
institucional, económica o social. Las investigaciones preliminares que se
realicen tendrán carácter reservado.
DERECHO PROCESAL ADMINISTRATIVO II 423

Artículo 4° - Cuando de la investigación practicada resulte la existencia de


presuntas transgresiones a normas administrativas, las actuaciones pasarán
con dictamen fundado al Ministro de Justicia y Derechos Humanos, a la PRO-
CURACIÓN DEL TESORO DE LA NACIÓN Yal funcionario de mayor jerar-
quía administrativa de la repartición de que se trate, de conformidad con las
competencias asignadas por el Reglamento de Investigaciones Administrati-
vas. En ambas circunstancias, las actuaciones servirán de cabeza del sumario
que deberá ser instruido por las autoridades correspondientes.
En las actuaciones en que el Fiscal de Control Administrativo considere
pertinente, la OFICINA ANTICORRUPCIÓN podrá ser tenida como parte
acusadora con facultades de ofrecer, producir o incorporar pruebas, así como
la de recurrir toda resolución adversa a sus pretensiones. Todo ello, bajo pena
de nulidad absoluta e insanable de lo actuado o resuelto según el caso.
Artículo 5° - Los integrantes de la OFICINA ANTICORRUPCIÓN en el
ejercicio de sus funciones podrán:
a) Requerir informes a los organismos nacionales, provinciales, comuna-
les; a los organismos privados y a los particulares cuando corresponda, así como
recabar la colaboración de las autoridades policiales para realizar diligencias
y citar personas a sus despachos, al solo efecto de prestar declaración testimo-
nial. Los organismos policiales y de seguridad deberán prestar la colaboración
que les sea requerida;
b) Requerir dictámenes periciales y la colaboración de expertos para el
mejor resultado de la investigación, a cuyo fin podrán solicitar a las reparti-
ciones o funcionarios públicos la colaboración necesaria, que éstos estarán
obligados a prestar;
c) Informar al Ministro de Justicia y Derechos Humanos que la permanen-
cia de un agente público en el cargo puede obstaculizar gravemente una inves-
tigación.

Capítulo III
DE LA ESTRUCTURA y ORGANIZACIÓN
Artícul06°-La OFICINAANTICORRUPCIÓNestará a cargo deun Fiscal
de Control Administrativo, con rango y jerarquía de Secretario, designado y
removido por el PRESIDENTE DE LA NACIÓN a propuesta del Ministro de
Justicia y Derechos Humanos.
Artículo 7° - Serán requisitos para el desempeño del cargo de Fiscal de
Control Administrativo:
a) Ser ciudadano argentino;
b) Tener no menos de treinta (30) años de edad;
c) Tener no menos de seis (6) años en el ejercicio de la profesión de aboga-
do o idéntica antigüedad profesional en el Ministerio Público o en el Poder Ju-
dicial.
424 ANEXO LEGISLATIVO

Artículo 8° - El Fiscal de Control Administrativo ejercerá las siguientes


funciones:
a) Presidir y representar a la OFICINA ANTICORRUPCIÓN;
b) Hacer cumplir la misión y los objetivos de la Oficina;
c) Proponer la designación de los integrantes de la Oficina al Ministro de
Justicia y Derechos Humanos;
d) Elaborar y elevar el Plan de Acción para su aprobación por el Ministro
de Justicia y Derechos Humanos;
e) Resolver el inicio y clausura de las actuaciones de la Oficina;
f) Suscribir y elevar los informes correspondientes;
g) Coordinar la actuación de la Oficina con los otros órganos de control
estatal;
h) Llevar el registro de las declaraciones juradas de los agentes públicos; y
i) Elevar al Ministro un proyecto de reglamento interno, para su aproba-
ción.
Artículo 9° - La OFICINA ANTICORRUPCIÓN estará compuesta por la
Dirección de Investigaciones, cuya función principal será fiscalizar el cumpli-
miento de los deberes de los agentes y el debido uso de los recursos estatales;
y la Dirección de Planificación de Políticas de Transparencia responsable de
la elaboración de políticas estatales contra la corrupción en el sector público
nacional.
Artículo 10. Las Direcciones de Investigaciones y de Planificación de Po-
líticas de Transparencia estarán a cargo de funcionarios que tendrán rango y
jerarquía de Subsecretario, designados y removidos por el Presidente de la
N ación a propuesta del Ministro de Justicia y Derechos Humanos.
Artículo 11. La Dirección de Investigaciones tendrá las siguientes funcio-
nes:
a) Recibir denuncias de particulares o agentes públicos, sobre hechos pre-
suntamente ilícitos y analizar si, de conformidad con los indicadores que pre-
vé el plan de acción, configuran hechos de significación institucional, social o
económica;
b) Investigar, con carácter preliminar, los casos que configuren conductas
previstas en el artículo 1° del presente;
c) Instar la promoción de sumarios administrativos o acciones judiciales
civiles o penales, o cualquier otra medida que se considere adecuada para el
caso y realizar su seguimiento;
d) Evaluar la información que difundan los medios de comunicación social,
relacionada con la existencia de hechos irregulares en el ámbito de sus funcio-
nes y en su caso, iniciar las actuaciones correspondientes;
e) Analizar la información vinculada con el ejercicio de sus competencias
producida por la SINDICATURA GENERAL DE LA NACIÓN y la AUDITO-
RÍA GENERAL DE LA NACIÓN;
DERECHO PROCESAL ADMINISTRATNO JI
425

f) Elaborar los informes relativos a su área.

Artículo 12. La Dirección de Planificación de Políticas de Transparencia


tendrá las siguientes funciones:
a) Elaborar y proponer al Fiscal de Control Administrativo un plan de
acción y los criterios para determinar los casos de significación institucional,
social o económica;
b) Realizar estudios respecto de los hechos de corrupción administrativa
y sobre sus causas, planificando las políticas y programas de prevención y
represión correspondiente;
c) Recomendar y asesorar a los organismos del Estado la implementación
de políticas o programas preventivos;

Artículo 13. El Plan de Acción contendrá las áreas críticas, por materias u
organismos, y los criterios de significación institucional impacto sobre la cre-
dibilidad de las instituciones, social-bienes sociales y población afectada-
y económico -monto del presunto perjuicio-. El Plan de Acción deberá pu-
blicarse en el Boletín Oficial y difundirse por Internet;

Artículo 14. La Dirección de Planificación de Políticas de Transparencia,


en ejercicio de sus funciones, podrá realizar encuestas y entrevistas, requerir
a los agentes públicos documentación e informes, relevar las denuncias formu-
ladas ante los organismos decontrolestatal,elPODERJUDICIALoel MINIS-
TERIO PÚBLICO y solicitar a centros de estudios, universidades, o cualquier
otra organización con fines académicos, toda información que fuese de su in-
terés.

Artículo 15. Los profesionales que se desempeñen en las distintas áreas de


la OFICINA ANTICORRUPCIÓN deberán acreditar especial versación en
derecho, sociología, ciencias económicas, sistemas y gestión administrativa,
análisis institucional y cultura organizacional, y cualquier otra especialización
que sea requerida para cumplir con sus tareas específicas.

Capítulo IV
DE LOS INFORMES
Artículo 16. La OFICINA ANTICORRUPCIÓN deberá elevar al Ministro
de Justicia y Derechos Humanos un informe final de cada investigación que
realice.

Artículo 17. La OFICINA ANTICORRUPCIÓN también deberá elevar al


Ministro de Justicia y Derechos Humanos un informe semestral y una memo-
ria anual sobre su gestión que contenga especialmente las recomendaciones
sobre reformas administrativas o de gestión que eviten que se reiteren ilícitos
o irregularidades administrativas.
426 ANEXO LEGISLATIVO

Artículo 18. Los informes previstos en el artículo anterior serán públicos


y podrán ser consultados personalmente o por Internet. El Ministro de Justi-
cia y Derechos Humanos dispondrá, además, su publicidad por los medios de
comunicación social que considere necesarios.

Capítulo V
DISPOSICIONES FINALES
Artículo 19. Deróganselos Decretos N° 152 del 14 de febrero de 1997 y W 878
del 1° de setiembre de 1997.
Artícul020.TodaalusiónalaOFICINANACIONALDEETICAPÚBLICA
en el Decreto N° 41 del 27 de enero de 1999 se entenderá referida a la OFICI-
NA ANTICORRUPCIÓN.
Artículo 21. Transfiérese ala OFICINAANTICORRUPCIÓN,la dotación
de cargos, créditos presupuestarios y bienes patrimoniales, incluyendo la
documentación y archivos pertinentes a la OFICINA NACIONAL DE ÉTICA
PÚBLICA.
Artículo 22. Dentro de los treinta (30) días de dictada la presente medida,
deberán efectuarse las modificaciones presupuestarias que correspondan en
las jurisdicciones involucradas.
Artículo 23. Comuníquese, publíquese, dése a la Dirección Nacional del
Registro Oficial y archívese.

Firmas: DE LA RÚA. Rodolfo H. Terragno. Ricardo R. Gil Lauedra. Adalberto


Rodríguez Giauarini. Juan J. Llach. José L. Machinea. Ricardo H. López
Murphy. Rosa Graciela C. de Femández Meijide. HéctorJ. Lombardo. Federi-
co T. M. Storani. MarioA Flamanique. Nicolás V. Gallo.

--
DEFENSOR DEL PUEBLO
LEY N° 7741

Sancwn:23/ 11 / 1988
Promulgación: 07/12/1998
Publicación: B.O. del 12/01 /1989

El Senado y Cámara de Diputados de la Provincia de Córdoba,


sancionan con fuerza de
Ley 7741
Artículo 1. El Defensor del Pueblo será designado conforme el procedi-
miento establecido por el artículo 124 de la Constitución Provincial.
Artículo 2. Prestará juramento ante el Presidente de la Asamblea Legis-
lativa, de desempeñar debidamente el cargo y de obrar en todo de conformi-
dad con lo que prescriben la presente ley, la Constitución Provincial y la de la
Nación. Asumirá el cargo del día designado por la Asamblea Legislativa.
Artículo 3. Para ser designado Defensor del Pueblo, serán requisitos:
1. Tener treinta años de edad como mínimo.
2. Ser argentino nativo o por opción.
3. Tener ciudadanía en ejercicio.
4. Tener residencia en la Provincia durante cuatro años anteriores inme-
diatos a la designación, salvo casos de ausencia motivada por servicios a la
Nación o a la Provincia, o en organismos internacionales.
Artículo 4. El Defensor del Pueblo durará cinco (5) años en sus funciones
y podrá ser designado por nuevos períodos.
Artículo 5. En el desempeño de sus funciones, el Defensor del Pueblo no
recibirá instrucciones, ni estará sujeto a mandato de autoridad alguna. Su
actividad no se interrumpirá por ningún motivo.
Artículo 6. El Defensor del Pueblo no podrá participar en actividades
políticas, sindicales o gremiales, ni ejercer profesión o empleo, con excepción
de la docencia y la investigación, ni ejecutar acto alguno que comprometa la
imparcialidad de sus funciones. Asimismo, le comprenden las inhabilidades,
incompatibilidades y prohibiciones establecidas para los legisladores en la
Constitución Provincial.
Dentro de los diez días de su designación, el Defensor del Pueblo deberá
cesar en toda situación de incompatibilidad, entendiéndose, en el caso contra-
rio, que no acepta la misma.
428 ANEXO LEGISLATIVO

Artículo 7. Para decidir sobre la renuncia que el Defensor del Pueblo


hiciere a su cargo basta el voto de la mayoría de los miembros presentes de la
Asamblea Legislativa. Producida la vacancia por cualquier causa, la Asamblea
Legislativa procederá de inmediato a designar al sucesor.
Artículo 8. El Defensor del Pueblo designará un Adjunto para que lo amci-
lie en el ejercicio de sus funciones y lo suplante en caso de imposibilidad tem-
poral. El adjunto deberá reunir los requisitos exigidos por el artículo 3 yesta-
rá sujeto a las incompatibilidades establecidas en el artículo 6.
Artículo 9. El Adjunto y los Asesores, secretarios y colaboradores directos
del Defensor del Pueblo, hasta el cargo de Subdirector inclusive, cesarán
automáticamente al asumir la función un nuevo Defensor del Pueblo.
Artículo 10. El Defensor del Pueblo gozará de las mismas inmunidades,
privilegios y remuneraciones que los legisladores provinciales. Estará suje-
to al mismo régimen previsional.
*Artículo 11. El Defensor del Pueblo tendrá las siguientes funciones, que
ejercitará de oficio o a pedido de parte:
1. Defender los derechos colectivos o difusos frente a actos, hechos u omi-
siones de la Administración Provincial.
2. Supervisar, en la Administración, la aplicación de las leyes y demás
disposiciones.
3. Supervisar la eficacia en la prestación de los servicios públicos provin-
ciales.
En el ejercicio de estas funciones no podrá el Defensor del Pueblo exami-
nar los criterios de oportunidad y conveniencia, que serán resorte exclusivo
del poder político. Asimismo, no podrá intervenir en casos o asuntos que es-
tén sometidas a la competencia del Poder Judicial de la Provincia.
4. Receptar todo tipo de denuncias ecológicas que sean realizadas a través
de la implementación del sistema telefónico denominado "Número Verde".
Artículo 12. A los efectos de la presente ley, se entenderá por Administra-
ción Pública Provincial la administración centralizada y descentralizada,
entidades autárquicas, empresas del estado, sociedades del estado, socieda-
des de economía mixta, sociedades con participación estatal mayoritaria y todo
otro organismo del estado provincial cualquiera fuere su naturaleza jurídica,
denominación, ley especial que pudiera regirlo o lugar donde preste sus ser-
VICIOS.

Artícuto 13. Quedan asimismo comprendidas en el ámbito de actuación del


Defensor del Pueblo las personas jurídicas no estatales o privadas, en cuanto
ejerzan funciones estatales delegadas o prerrogativas públicas, o en cuanto
presten servicios públicos por concesión o por cualquier acto administrativo
del Estado.
DERECHO PROCESAL ADMINISTRATIVO II 429

Artículo 14. Para el cumplimiento de sus funciones, el Defensor del Pue-


blo podrá:
1. Solicitar informes, los que deberán ser respondidos en un plazo de diez
días hábiles. Este plazo podrá ser ampliado cuando, ajuicio del Defensor del
Pueblo, concurran circunstancias que así lo aconsejen.
2. Requerir de las autoridades de los organismos administrativos, enti-
dades y empresas enunciados en los artículos 12 y 13, la remisión de expe-
dientes, informes, documentos, actuaciones, datos y elementos que estime
útiles a los fines del cumplimiento de su cometido o copia fehaciente de los
mismos.
3. Instar a la Administración para que realice las investigaciones condu-
centes al esclarecimiento de los hechos que motivan su actuación. A tal efec-
to, fijará los lineamientos que deberán tenerse en cuenta en la realización de
las mismas.
4. Informarse sobre la marcha de las investigaciones a que se refiere el
inciso 3.
La negativa o negligencia en la remisión de los antecedentes mencionados
en los incisos 1 y 2, o en la realización de las investigaciones a que se refiere el
inciso 3 del presente artículo, será comunicada por el Defensor del Pueblo a
la Legislatura, al organismo pertinente y al funcionario jerárquico que corres-
ponda, según su criterio.
*Artículo 15. Con motivo de sus intervenciones, el Defensor del Pueblo
estará facultado para:
1. Sugerir la modificación de criterios utilizados para la producción de
actos administrativos y resoluciones.
2. Formular a las autoridades yfuncionarios, advertencias, recomendacio-
nes, recordatorios de sus deberes legales y sugerencias para la adopción de
nuevas medidas.
3. Instar a las autoridades administrativas respectivas al ejercicio de sus
potestades de inspección y de sanción, cuando sus actuaciones se hubieren
provocado con ocasión de servicios prestados por particulares en virtud de acto
administrativo habilitante.
4. Sugerir al Poder Legislativo o a la Administración la modificación de
normas, cuando llegase al convencimiento de que su cumplimiento resulta
perjudicial para el administrado o provoca situaciones injustas.
En los casos previstos en los incisos 1,2 Y3, los funcionarios o responsables
deberán informar al Defensor del Pueblo si decidieron no aceptar sus sugeren-
cias, recomendaciones, advertencias, recordatorios o instancias, consignan-
do las razones que informan su decisión. Si no obtuviese respuesta incluirá
expresamente el asunto en los informes a que se refiere el artículo 19.
5. Promover ante los organismos públicos correspondientes, las actua-
ciones necesarias para dar curso a las denuncias previstas en el punto 4 del
artículo 11.
430 ANEXO LEGISLATNO

Artículo 16. En ningún caso podrá el Defensor del Pueblo modificar, sus-
tituir o dejar sin efecto decisiones administrativas, ni requerir decisiones de
los Tribunales de Justicia.
Artículo 17. El Defensor del Pueblo podrá desestimar la denuncia o la queja
en los siguientes casos:
1. Cuando advierta mala fe, carencia o trivialidad del fundamento, o que el
asunto no fuera de su competencia.
2. Cuando haya transcurrido más de un año calendario desde que el hecho,
acto u omisión que motiva la queja o denuncia se hubiere producido o hubiere
tomado conocimiento el interesado.
En ningún caso la presentación de queja o denuncia ante el Defensor del
Pueblo interrumpirá los plazos previstos para la interposición de recursos
administrativos o acciones judiciales. Tal circunstancia deberá ser puesta en
conocimiento del interesado.
*Artículo 18. El Defensor del Pueblo dictará el Reglamento Interno que rija
los aspectos procedimental es de su actuación, dentro de los límites fijados por
esta Ley, el que deberá ser publicado en el Boletín Oficial. Dicho reglamento
deberá ajustarse a los siguientes principios:
1) Impulsión e instrucción de oficio.
2) Informalidad.
3) Gratuidad.
4) Celeridad.
5) Pronunciamiento obligatorio.
Artículo 19. El Defensor del Pueblo dará cuenta anualmente a la Legisla-
tura de la labor realizada, en un informe que le presentará antes del 1 de marzo
de cada año, sin perjuicio de los informes que en cualquier oportunidad eleve
o le soliciten las Cámaras o los Legisladores individualmente. Asimismo,
deberá informar a cada interesado del resultado de su intervención. Podrá
informar a la opinión pública las conclusiones de sus trabajos y actuaciones.
Elinforme anual al que se refiere este artículo será publicado en elBoletín Oficial.
Artículo 20. Facúltase al Poder Ejecutivo a efectuar los ajustes presupues-
tarios que demande la aplicación de la presente ley.
Artículo 21. Comuníquese al Poder Ejecutivo.

ANEXO A
RESOLUCIÓN N° 1/90 - REGLAMENTO PROCEDIMIENTO
INTERNO
Visto: La necesidad de dar cumplimiento al artículo 18 de la ley 7741, dic-
tando efectivamente el reglamento interno que rija los aspectos procedimen-
tales de la actuación del Defensor del Pueblo.
DERECHO PROCESAL ADMINISTRATIVO II 431

y Considerando:
Que dicha reglamentación debe ajustarse a los principios de impulsión e
instrucción de oficio, informalidad, gratuidad, celeridad y pronunciamiento
obligado.

Por ello,
El Defensor del Pueblo resuelve:
Artículo 1°. Apruébase el procedimiento interno que como Anexo 1 forma
parte integrante del presente.
Artículo 2°. La presente resolución será firmada por el señor Defensor del
Pueblo.
Artículo 3°. Protocolícese, comuníquese, publíquese en el Boletín Oficial
y archívese.

ANEXO 1
PROCEDIMIENTO
Primera: La queja será presentada en Mesa de Entrada, en forma escrita
o verbal en cuyo caso deberá labrarse el acta correspondiente en original y
copia, entrgándose ésta al denunciante.
Segunda: En todos los casos el denunciante gozará de los beneficios de la
gratuidad en la iniciación y sustanciación del trámite.
Tercera: En el supuesto de realizarse una queja por medios postales podrá
verificarse la identidad del denunciante y/o la autenticidad de la firma del
mismo en la queja por cualquier medio idóneo.
Cuarta: El Director de Despacho realizará una clasificación previa de la
naturaleza de la queja, remitiéndola al Defensor del Pueblo, quien dispondrá
el trámite pertinente con intervención de la Secretaría correspondiente.
Quinta: Diligenciados los oficios y agregados todos los elementos de juicio
requeridos, las dependencias orgánicas pertinentes realizarán un informe de
lo actuado, dentro de los tres días de recibidos los mismos.
Sexta: La Secretaría actuante, analizará los elementos anteriormente
referidos, realizará un informe y confeccionará un proyecto de resolución, que
elevará a consideración del Defensor del Pueblo.
Séptima: El Defensor del Pueblo analizará todo lo actuado y resolverá en
consecuencia.
Octava: Todas las resoluciones deberán ser refrendadas por el o los Secre-
tarios actuantes.
432 ANEXO LEGISLATIVO

Novena: Las resoluciones definitivas se notificarán en forma personal, por


carta documento o cualquier otro medio fehaciente.
Décima: Las resoluciones definitivas que dicte el Defensor del Pueblo
serán irrecurribles. El denunciante podrá interponer únicamente el recurso
de reconsideración.
Decimoprimera: El Defensor del Pueblo podrá actuar de Oficio, sustan-
ciándose la causa por el mismo trámite establecido precedentemente.
Decimosegunda: En todos los casos la causa tendrá impulsión de Oficio.

7
ACCIÓN DE AMPARO POR MORA DE LA
ADMINISTRACIÓN
LEY N° 8508

Sanción: 31 /10/1995
Promulgación: 13 / 11 / 1995
Publicación: B.O. del 17 /11 /1995

El Senado y Cámara de Diputados de la Provincia de Córdoba,


sancionan con fuerza de
Ley 8508

Artículo 1° - Procedencia. Legitimación activa. Toda persona tiene dere-


cho a interponer Acción de Amparo por Mora de la Administración contra Fun-
cionarios, Reparticiones o Entes Públicos Administrativos que no hubieran
cumplido debidamente dentro de un plazo determinado un deber concreto im-
puesto por la Constitución, una leyu otra norma, siempre que la omisión afecte
un derecho subjetivo o un interés legítimo.
Artículo 2° - Legitimación pasiva. Son funcionarios, reparticiones o entes
públicos administrativos, a los fines de la presente ley, los del Estado provin-
cial, cualquiera fuera el poder, y de los municipios y comunas, centralizados
o descentralizados, y cualquier otro órgano o persona de derecho público es-
tatal o no estatal, dotado de potestad pública, en todos los casos en que actúen
en ejercicio de la función administrativa.
Artículo 3° - Obstáculos. No será admisible la acción de amparo por mora
de la administración cuando la intervenciónjudicial comprometa directa o in-
directamente la regularidad o continuidad de un servicio público o de activi-
dades estatales esenciales.
Artículo 4° - Competencia. Conocerán en la acción de amparo por mora de
la administración, en instancia única, los tribunales con competencia en ma-
teria contencioso administrativa correspondientes al domicilio de la deman-
dada o, a elección del demandante, al lugar donde debió cumplirse el deber
cuya mora se invoca.
Artículo 5°~ Demanda. Requisitos. La demanda se interpondrá por escri-
to y deberá contener:
1) Nombre, apellido, domicilio real, y constituido del accionante. Si re
tratare de persona jurídica, su denominación, domicilio social, domicilio coru:-
434 ANEXO LEGISLATIVO

tituido, el nombre de sus representantes y datos de inscripción registral cuando


correspondiera.
2) Relación circunstanciada del deber omitido por la administración, con
indicación precisa del derecho subjetivo o interés legítimo afectados, de la
norma que predetermine en concreto la obligación y de la autoridad adminis-
trativa involucrada.
3) El ofrecimiento de la prueba de que pretendiera valerse el accionante.
Siempre que se invoque representación legal o mandato de terceras personas,
se acompañarán con la demanda los instrumentos legales que lo acrediten.
Artículo 6° - Admisibilidad. El tribunal deberá pronunciarse sobre la ad-
misibilidad de la acción dentro de las veinticuatro horas de presentada.
Si ésta fuera manifiestamente inadmisible, la rechazará ordenando su
archivo.
Cuando la demanda adoleciera de defectos o resultase oscura, se empla-
zará al demandante para que la subsane en el término de veinticuatro horas,
bajo pena de rechazarla. Subsanada, se resolverá lo que corresponda sobre su
admisibilidad en igual plazo.
Artículo 7° - Citación y pedido de informe. Admitida la demanda, el tribu-
nal emplazará a la administración involucrada para que en el término de cin-
co días produzca informe sobre la mora objeto del amparo.
En ese mismo término la administración podrá solicitar participación y
contestar la demanda, sin perjuicio de su obligación de producir el informe
requerido.
Artículo 8° - Cuestiones previas. Recusación. No se admitirá la recusación
sin invocación de causa, la reconvención, la articulación de incidentes ni el
planteamiento de cuestiones previas.
Artículo 9° - Pruebas. Las pruebas deberán ofrecerse y las documentales
acompañarse con la demanda, con su contestación o con el informe.
Solamente se admitirán aquellas medidas de prueba que sean pertinentes
y que resulten compatibles con el carácter sumarísimo del proceso. No se
admitirá la absolución de posiciones y el número de testigos no podrá exceder
de tres por cada parte.
Cuando las pruebas documentales no estuvieren disponibles para la par-
te que las ofrece, bastará que las individualice indicando el lugar donde se
encuentran a los fines de ser requeridas.
Si alguna de las partes hubiera ofrecido prueba, deberá ordenarse su in-
mediata producción, fijándose la audiencia respectiva, que deberá tener
lugar dentro del tercer día a contar desde el vencimiento del plazo del artícu-
lo 7". Si existiera prueba pendiente de producción por causas ajenas a la di-
ligencia de las partes, eljuez podrá ampliar dicho término por igual plazo,
por única vez.
DERECHO PROCESAL ADMINISTRATIVO II 435

Artículo 10 - Sentencia. Costas. El tribunal dictará sentencia no más allá


de cuarenta y ocho horas de vencido el término del artículo 7° o, si se hubiera
abierto a prueba la causa, de vencido el plazo del artículo go.
La sentencia que admita el amparo contendrá el mandamiento de cumplir
el deber dentro de un término prudencial. Podrá también disponer se notifi-
que al Superior Jerárquico de la Autoridad Administrativa que hubieraincu-
rrido en mora, a los efectos que hubiere lugar.
Las costas se impondrán al vencido, sin perjuicio de que el tribunal hallare
mérito suficiente para disponer un criterio diferente de distribución, de acuer-
do con las particularidades del caso, debiendo fundar suficientemente su re-
solución en el último supuesto.
En caso de desobediencia al mandato de pronto despacho que contuviera
la sentencia, el tribunal girará los antecedentes al órgano judicial competen-
te en materia penal.
Artículo 11 - Recursos. Las resoluciones serán irrecurribles. Contra la
sentencia las partes podrán interponer solamente los recursos extraordina-
rios previstos por Ley N° 7182.
Artículo 12 - Perentoriedad. Impulso procesal. Todos los plazos estableci-
dos en la presente ley son de carácter perentorio. El tribunal ejerce la direc-
ción del proceso y su trámite será impulsado de oficio.
Artículo 13 - Normas supletorias. En todo lo no previsto por la presente ley
yen cuanto resulte compatible con las disposiciones precedentes y con el ca-
rácter sumarísimo del trámite, serán de aplicación supletoria la ley que regla-
menta la Acción General de Amparo, el Código Contencioso Administrativo
y el Código Procesal Civil, en ese orden.
Artículo 14 - Norma transitoria. La presente ley será de aplicación a las
causas iniciadas con posterioridad a su entrada en vigencia.
Artículo 15 - Comuníquese al Poder Ejecutivo.
LEY DE ACCESO AL CONOCIMIENTO
DE LOS ACTOS DEL ESTADO
LEY N° 8803

Sanción: 06/ 10/ 1999


Promulgación:22/ 10/ 1999
Publicación: 15/11 / 1999

El Senado y Cámara de Diputados de la Provincia de Córdoba,


sancionan con fuerza de
Ley 8803

Derecho de acceso al conocimiento de los actos del Estado


Artículo 1° - Toda persona tiene derecho, de conformidad con el principio
de publicidad de los actos de gobierno, a solicitar ya recibir información com-
pleta, veraz, adecuada y oportuna, de cualquier órgano perteneciente a la
Administración Pública provincial, municipal y comunal, centralizada y des-
centralizada, de entes autárquicos, empresas y sociedades del Estado, socie-
dades anónimas con participación estatal mayoritaria, sociedades de econo-
mía mixta y todas aquellas otras organizaciones empresariales donde el
Estado provincial, las municipalidades o las comunas tengan participación en
el capital o en la formación de las decisiones societarias, del Poder Legislati-
vo y del Judicial, en cuanto a su actividad administrativa, y del Defensor del
Pueblo, Tribunal de Cuentas, Concejo Económico y Social y Ministerio Públi-
co Fiscal.
Alcances del derecho de acceso a información pública
Artículo 2° - Alcances. Se considera como información a los efectos de esta
ley, cualquier tipo de documentación que sirva de base a un acto administra-
tivo, así como las actas de reuniones oficiales.
Debe proveerse la información contenida en documentos escritos, fotogra-
fías, grabaciones, soporte magnético o digital, o en cualquier otro formato y que
haya sido creada u obtenida por el órgano requerido que se encuentre en su
posesión y bajo su control.
Los límites del acceso a la información
Artículo 3° - Límites. No se suministra información:
a) Que afecte la intimidad de las personas, ni bases de datos de domicilios
o teléfonos.
b) De terceros qua la Administración hubiera obtenido en carácter confi-
dencial y la protegida por el secreto bancario.
..
438 ANEXO LEGISLATIVO

c) Cuya publicidad pudiera revelar la estrategia a adoptarse en la defen-


sa o tramitación de una causajudicial, o de cualquier tipo que resulte protegi-
da por el secreto profesional.
d) Contenida en notas internas con recomendaciones u opiniones produ-
cidas como parte del proceso previo a la toma de una decisión de autoridad
pública que no formen parte de los expedientes.
e) Cuya difusión comprometa la seguridad de la Provincia, la paz y el orden
público.
f) Cuya publicidad pudiera revelar estrategias empresariales.
g) Sobre materias exceptuadas por leyes específicas.
Información parcial
Artículo 40 - Información parcial. En caso que exista un documento que
contenga en forma parcial información cuyo acceso esté limitado en los térmi-
nos del artículo anterior, debe suministrarse el resto de la información soli-
citada.
Gratuidad
Artículo 50 - Gratuidad. El acceso a la información es gratuito en tanto no
se requiera la reproducción de la misma. Los costos de reproducción son a
cargo del solicitante.
Formalidad
Artículo 6" - Formalidad. La solicitud de información debe ser realizada por
escrito, con identificación del requirente, sin estar sujeta a ninguna otra for-
malidad. No puede exigirse la manifestación del propósito de la requisitoria.
Debe entregarse al solicitante de la información una constancia del requeri-
miento.
Procedimiento
Artículo 70 - Plazos. Toda solicitud de información requerida en los térmi-
nos de la presente ley debe ser satisfecha en un plazo no mayor de diez (10) días
hábiles. El plazo se podrá prorrogar en forma excepcional por otros diez (10)
días hábiles de mediar circunstancias que hagan difícil reunir la información
solicitada. En su caso, el órgano requerido debe comunicar, antes del venci-
miento del plazo de diez (10) días, las razones por las cuales hará uso de la
prórroga excepcional.
Silencio. Denegatoria. Habilitación de la vía del amparo
Artículo 80 - Silencio. Denegatoria. Si una vez cumplido el plazo previsto
en el artículo anterior, la demanda de información no se hubiera satisfecho se
considera que existe negativa en brindarla, quedando habilitada la acción de
amparo por mora de la Administración. Si la resolución fuere denegatoria,
procederá la acción de amparo cuando se hubiere resuelto en exceso de las
previsiones del arto 30 o la fundamentación fuere arbitraria, insuficiente o
aparente.
DERECHO PROCESAL ADMINISTRATIVO II

- Denegatoria fundada. La denegatoria de la información debe


por un funcionario de jerarquía equivalente o superior a direc-
forma fundada explicitando la norma que ampara la negativa.

- Responsabilidades. El funcionario público o agente respon-


forma arbitraria obstruya el acceso del solicitante a la informa-
o la suministre en forma incompleta u obstaculice de cualquier
UIIWIHIJ.HJllLU de esta ley, es considerado incurso en falta grave.

- Comuníquese al Poder Éjecutivo.


OFICINA ANTICORRUPCIÓN
DE LA PROVINCIA DE CÓRDOBA
DECRETO N° 87/01

Córdoba, 26 de enero de 2001

"' ....,"''''''''.. '"''' N° O171-007505/00 Yla Ley N° 8835.


Ycnnsíd¡~rni7.rln
cincuenta y uno (51) de la Ley W 8835 (CARTA DEL CIU-
n p·r.t"·rrI" las atribuciones de la Oficina anticorrupción
su inciso c), establece la vía reglamentaria para determi-
prIOCf~d1:n:j.lento a observar por dicha Oficina AnticoITupción, debiendo
del imputado al debido proceso, defensa y de ofrecer toda
pertinente, como también de ser puntualmente informado
la investigación en curso.
~UJJLH1LlU en consideración diversos antecedentes, como el regla-
V'u.LOuJ,a.Anticorrupción en el orden nacional, la Ley N° 5805 (Ré-
para Abogados), en el Código de Procedimientos Conten-
el Código Procesal Penal y El Código Procesal Civil y
Provincia de Córdoba.
nr<'"",on1" p reglamentación permitirá alcanzar los objetivos de trans-
pública, como así también de promoción y divulgación
y ciudadanos que informan y constituyen la génesis de la

lo dispuesto en el artículo 51 de la Ley N° 8835 y el artículo 144


"'"'...",.v.. de la Provincia de Córdoba, lo opinado por el Fis-
dictamen N° 2559/00 y en ejercicio de sus atribuciones cons-
titucionales.

f ,,,,.Wtall,.,Provisorio de la Cámara de Senadores


a cargo del Poder Ejecutivo
Decreta:
Artículo 1° o la ejecución del artículo 51 de la Ley N° 8835
y en cons",,, ... c .. ,,,,. ESTABLÉCESE que la OFICINA ANTICORRUPCIÓN
(O.A.) ejercerá atribuciones de conformidad a las disposiciones pertinen-
442 ANEXO LEGISLATIVO

tes cOIltemelalS en el Capítulo VI de la Ley N° 7233 y sus Decretos Reglamen-


~"'V '-1 ov y N° 1080/86, con las especificaciones contenidas en los artí-

. La OFICINAANTICORRUPCIÓN (O.A.)procederá de oficio


o por de:nuncilj:lde parte y en caso de denuncia anónima sólo intervendrá cuando
ésta sea verosímil, exista gravedad social, institucional o
el hecho denunciado y medie razonabilidad en mantener el

Cuando el Titular de la OFICINAANTICORRUPCIÓN (O.A.)


COl10(:ul!Jllelnto de un hecho que, prima facie, pudiera tipificar alguna de
lOUIIUL'lOL<l'1 comprendidas en el artículo cincuenta (50) de la Ley N° 8835, dará

mtlestiga,ción y levantará un acta circunstanciada en la que conste


I.¡OtOrInal~lOln, la relación de los hechos, la indicación del presunto
que posea y la nonna específica presuntamente violada.
Cuando se formule en forma personal, la denuncia será efec-
escrita o verbal y deberá contener: nombres completos, domi-
datos personales del denunciante, la relación precisa y circuns-
hechos, la indicación de los autores y las pruebas de que
ambos supuestos, el actuario levantará un acta que finnará el

Si el hecho denunciado, analizado prima facie, tipificara alguna


corldul~t¡:lS comprendidas en el artículo cincuenta (50) de la Ley N° 8835,
OFICINAANTICORRUPCIÓN declarará abierto el procedi-
de oficio la investigación. En caso contrario, ordenará sin
más el archivo de las actuaciones.
Si de las surgiera que el hecho denunciado carece de signifi-
econOJnlca. social o institucional, el FISCAL DE CONTROL ANTICO-
podrá desestimar la denuncia, sin perjuicio de dar traslado ó
nt!~rvenlciórl a la dependencia administrativa correspondiente o formular la
ante la sede judicial competente.
Una vez que se ha declarado la apertura del procedimiento, se
lo emplazará para que en el ténninoimprorrogable de cinco
pnrnn"""''7P'' fije domicilio real y especial, realice su descargo y ofrezca toda
que estime conveniente y útil para su defensa .
. La OFICINAANTICORRUPCIÓN tiene poder autónomo para
tarea dentro del procedimiento, el que deberá ejercerse pruden-
acuerdo a la naturaleza y circunstancias de cada caso.
Artículo 8°. El procedimiento específico se regirá por los principios de
111<llllU<1\,-, celeridad, impulso de oficio y eficacia de las actuaciones, las que

en todo tendrán carácter reservado.


DERECHO PROCESAL ADMINISTRATIVO II 443

. La OFICINA ANTICORRUPCIÓN podrá requerir a los orga-


ua"'~'U"'H;o", provinciales, municipales, comunales, y a las personas
IU"U.'l;¡l." públicas o privadas todo tipo de información, sea por medio

cOl$1JmlCaC~lón telefónica, fax, correo electrónico, o cualquier otro


de todo lo cual se dejará constancia en el expediente.
O. La OFICINA ANTICORRUPCIÓN podrá convocar a prestar
todas aquellas personas que pudieran tener conocimiento de los
motivo de la investigación en trámite con excepción de los que
"-t"P"U~'~ prevista en el artículo 306 de la Ley N° 8465.

1. A los fines de ej ercer las atribuciones reglamentadas en los dos


(9° Y 10°), la OFICINAANTICORRUPCIÓN podrá re-
de las autoridades policiales.
El FISCAL DE CONTROL ANTICORRUPCIÓN o personal
su cargo, con facultades expresamente especificadas, podrán
dependencias u organismos de la Administración Pública
de tomar vista, revisar actuaciones o documentación y re ca-
=o'"",'U que considere de utilidad para el desarrollo de la cau-
sao
También podrá solicitar autorización judicial para la realización de
filmaciones grabaciones de audio que considere necesarias en la investiga-
podrá requerir la colaboración de consultores técnicos. Debe-
"V'f" "a...,,'a fehaciente de la diligencia que se realice ó solicite, incor-
al expediente .
. Declarada la conclusión de la investigación, evaluación, con-
otra sustanciación llevada a cabo, el FISCAL DE CONTROL
elaborará un informe fundado, expresando si se han
las conductas referidas por el artículo cincuenta (50) de la Ley
a los autores responsables y precisará las demás cir-
cU''''''"'U'l.U<l.'' con el hecho investigado.

será notificado al interesado, salvo que derive en denuncia


"U.llla.pu administrativo.
"'Guu.u/--,a penal que corresponda será instada de inmediato por el titu-
INAANTICORRUPCIÓN(O.A.) ante la autoridad competente.
Recibido el informe de la OFICINAANTICORRUPCIÓN por
ésta deberá iniciar el sumario administrativo que
del plazo máximo de treinta (30) días.
La OFICINA ANTICORRUPCIÓN tendrá a su cargo el di.."€--
c",.. ,,'v,~ de las políticas de transparencia y para ello deberá:
los programas estatales contra la corrupción en el sector Pú-
444 ANEXO LEGISLATIVO

Realizar estudios y seminarios respecto de los hechos de corrupción


y sus causas.
HUHH\OCU las políticas y programas de prevención.

d)IAsesc)raLr a los organismos del Estado Provincial sobre la implementa-


políticas y programas preventivos.
16. El presente Decreto será refrendado por el Ministro de Jus-
el Fiscal de Estado y firmado por el Fiscal de Control Anticorrupción.
17. Protocolícese, comuníquese, publíquese en el Boletín Oficial
y
.I.".,.ur.Ltn.....J.'1''"'ACIÓN DE LA LEY N° 9120
u·JI""r.lX.',....
~-T-n.T DE CONDUCTA POLICIAL DE CÓRDOBA
DECRETO N° 1753

Córdoba, 18 de noviembre de 2003


"Tw,a"ifnen la ley N° 9120 - Ley de Creación del Tribunal de Con-

necesario reglamentar la misma a los fines de su implemen-

Por ello, uso de las atribuciones conferidas en el artículo 144 de la Cons-


titución Pr/,ví-h,..í

El Gobernador de la Provincia
Decreta:
Apruébase la Reglamentación de la ley N° 9120 - Creación del
V'f'Hwu".,a Policial, que como Anexo Único, compuesto de treinta
parte integrante del presente Decreto.
El presente Decreto será refrendado por el Señor Ministro de
el Señor Secretario General de la Gobernación y de Informa-

Protocolícese, comuníquese, publíquese en el Boletín Oficial


y archívese.

ANEXO ÚNICO AL DECRETO N° 1753


RE:GI..M~l~'O DEL RÉGIMEN DISCIPLINARIO POLICIAL

Capítulo 1
Disposiciones Generales
Artículo 1 Ámbito de aplicación. Las disposiciones de este Reglamento
el personal policial en situación de actividad o retiro, por
"V>ll"",n,u~" dentro o fuera de la Provincia.
446 ANEXO LEGISLATIVO

· Regla de interpretación. Las normas de este reglamento debe-


nt."TTIT¡:1bn·",,, teniendo en consideración que su finalidad es garantizar la
del servicio policial y el correcto desempeño del perso-
en los alcances de la ley N° 6702.

exclusivamente desde el punto de vista administrativo y


COjnSli:lQl1eIlCla de faltas cometidas en el ejercicio de sus funciones o fue-
de las decisiones de otras autoridades en los
competen. No podrán discutirse en lo administrativo los
\fU.lI.JtlUIllUi:lU tenidos por probados enjuicio criminal.
· Autonomía de la sanción administrativa. La amnistía o indul-
el perdón del particular ofendido, el sobreseimiento o la
eximirán de aplicar una sanción disciplinaria, en caso de así

· Principio de certeza. Mérito administrativo. En caso de duda


cu·cu.ns,ta:nC:Las de hecho no podrá imponerse sanción administrativa
administrativo se funda en los principios propios de esta
U'l'<'UlJlllll~lH,u y no es necesariamente equivalente al exigible en un

· Determinación de la sanción. Toda sanción disciplinaria debe-


ser impuesta de acuerdo a la naturaleza y gravedad de la falta
~'11.l1"JLIU'J"" en cuenta las circunstancias agravantes y atenuantes
presente reglamentación, así como las de persona, lugar, tiem-
U<;<lM'Jlll, propósitos, medios empleados, educación, conducta habitual y
an·tec:eaenl"~S del sancionado.

· Obligación de informar. El que comprobare la comisión de una


de facultades para reprimirla, lo informará de inmediato al
dependa el infractor o al Tribunal de Conducta Policial.
· Circunstancias agravantes. Serán circunstancias agravantes
"cu'''''J~.,las siguientes:
,-,u,a.",,,",vperjudiquen al servicio;
VUL<11JL\lLU afecten el prestigio de la Institución;
'-' u,a."'\lLV exista reincidencia;
,-,uca.",,,",vsean colectivas;
VUC<11JL\lLU se produzcan en presencia de subalternos;
'-' LLa.... mayor sea el grado de quien las comete;
V

V Lli:ll.l\ILU sean cometidas por un Jefe de dependencia;


VLJLCUJL\lI.V se causara perjuicio a un subalterno o a un particular.
DERECHO PROCESAL ADMINISTRATIVO JI 447

9°. Reincidencia. A los efectos de la agravación, habrá reinciden-


C01~liSlOn de una misma o diversas faltas, cualquiera sea la natural e-
de los términos siguientes:
(3) meses, si se tratare de faltas leves;
(6) meses, si se tratare de faltas graves;
si se tratare de faltas gravísimas.
10. Circunstancias atenuantes. Serán circunstancias atenuantes
las siguientes:
SaJ1.CIÓP,
""fA!J'" ''''JLH.-J.a motivada en la escasa antigüedad, considerándose tal

hasta un (1) año del egreso de los Institutos de forma-

conducta anterior y el buen concepto de sus superiores; y


mí,r,1t.n" acreditados durante el servicio.
11. Faltas colectivas. Las faltas se considerarán colectivas cuan-
cOlmle,t!clas por tres o más agentes que se concierten para su ejecución.

Capítulo 2
DE LAS FALTAS
12. Faltas disciplinaria. Constituirá falta disciplinaria toda trans-
deberes y obligaciones policiales establecidas expresamente en
relglGlmeptos o disposiciones en vigencia.
13. Faltas leves. Las faltas leves serán reprimidas con apercibi-
hasta quince (15) días o suspensión hasta diez (10) días y son
t;U1IHlJ.1U(l"HJlJ se detallan:

de celo o exactitud en el cumplimiento de los deberes inheren-


asignada, así como la negligencia o imprudencia en un acto del
de ello no deriven consecuencias dañosas para cosas o per-

de las medidas dispuestas para la seguridad del asien-

de las reglas establecidas para la higiene y conserva-


UV"lllao y demás dependencias, así como el descuido del mobiliario,
del servicio.
Imm",ttt'ir o transmitir órdenes en forma parcial, extemporáneamente o
o claridad debidas.
lli:UlCU'::;'1:: desprovisto del armamento reglamentario durante el servicio.

U"I~"'JLUH o demora en registrar o tramitar, en tiempo y en forma expe-


diarios, comunicaciones y demás actuaciones en que deba m-

n""'YH'''''' injustificada en comunicar las novedades del semcio a :ro


"u11m.uutO.
448 ANEXO LEGISLATIVO

8) La .-l~·~>,_n injustificada en la devolución, en los términos previstos, de


bienes, equipos, materiales, muebles o inmuebles provistos.
deSClllidlo en la conservación del uniforme, armamento, equipo o ele-

las disposiciones relativas al uso correcto de los uniformes


aLlnUULIJi:i y armamentos.
sin causa justificada, a otros miembros de la Institución,
de distintivos uniformes o parte de los mismos, armamento, munición o equi-
pos policiales
12) La en actividades lucrativas o de otro tipo que fueren
con su grado y cargo.
injustificadamente a un superior no inmediato sin seguir la vía

la debida compostura ante el llamado o presencia de un


superior.
15) La o incorrección en saludar a un superior y éste en retribuirle.
16) La de mantener o preservar al debida disciplina del personal
a sus órdenes subalternos.
17) La injustificada en presentarse al servicio o a la citación del

UllUi:iJlUll de presentarse a un servicio ordenado con antelación.


injustificada en la presentación, en los términos fijados por
la re!gll;lmenl;~I~lUn respectiva, a la asignación o nuevo destino dispuesto.
del lugar de trabajo para el cual haya sido designado sin la

Ullll¡:)JlUH o retardo, por un término mayor de veinticuatro (24) horas,


de domicilio o lugar de residencia transitoria, en caso de
un lapso mayor de cinco (5) dias.
WJ.l¡¡;1~11l;H1Jlllll"11I'U de documentación que no se ajuste a las previsio-
de Normas de la Correspondencia Policial.
nonl.."",, injustificada en notificar cambios de destino dispuestos .

.-ln...!.,w" injustificada en el diligenciamiento de descargos o recur-

i:ial[lCIUII1J~o disciplinarias o calificación de aptitudes, en que deba inter-


de su cargo o grado.
de las órdenes del servicio que resultaren de cada

ueIllUll-ai:iinjustificada en informar cualquier enfermedad o causa que


le impida DrI~Sent:arE;e al servicio.
28) La cuando no correspondiere, de certificado médico
expedido por ajeno a la institución, con la finalidad de justificar la
inasistencia
---
DERECHO PROCESAL ADMINISTRATIVO II 449

29) El ~ncumplimiento no justificado de la obligación de votar en las elec-


ciones nadonales, provinciales o municipales.
30) No 19uardar la debida compostura en los cafés, fondas, despachos de
bebidas, albacenes, confiterías, locales de baile y todo otro lugar de esparci-
miento en los que se encontrare estando franco deservicio y sin el uniforme de
la instituc~ón.
31) La Ingestión inmoderada y voluntaria de bebidas alcohólicas.
32) El ~rato injustificado con personas de mala reputación.
33) El i~lCumplimiento de las leyes civiles que rigen la vida familiar, así
como la falta de respeto por el propio o extraño hogar, cuando ambas conduc-
tas, por su ¡trascendencia, afecten al servicio. .
34) La intervención en rencillas de la vecindad.
35) La ¡)misión
, de satisfacer deudas.
36) El descuido en el aseo personal, uso del cabellos largo, desarreglo en
el vestir o Jrxhibir con el uniforme prendas, distintivos o insignias que no le
correspondan.
Artícul!) 14. Faltas graves. Las faltas graves serán reprimidas con arresto
hasta trein:ta (30) días o suspensión hasta veinte (20) días y son las que a con-
tinuación sie detallan:
1) La or,tlisión de requisar a personas privadas de su libertad, hacerlo en
lugares no Idestinados al efecto o permitirla sin observar las formalidades
reglaments,lrias.
2) La d~!mora injustificada en remitir a un detenido o infractor al destino
que se hubiere
,
dispuesto.
3) La cohducción de un vehículo oficial con inobservancia de las normas de
tránsito vigentes y otras contempladas en códigos y ordenanzas municipales,
salvo excep¡ciones extremas del servicio.
4) El extravío, destrucción o deterioro culposo de documentos públicos o
privados,jt~diciales o administrativos.
5) La ge:,stión injustificada ante cualquier agente por la situación de perso-
nas privad~ls de su libertad en razón de un interés personal, así como las en-
trevistas i~necesarias en los lugares de alojamiento de aquéllas.
6) La négligencia en la custodia de bienes o valores pertenecientes a ter-
ceros. I
¡

7) La ini~orrección o descortesía en la relación con el público, con sus igua-


les o subaltiernos o con personas privadas de su libertad.
8) IngrJsar o permitir el ingreso de bebidas alcohólicas en las dependen-
cias o móvil,es policiales.
9) La o~lÍsión del control debido de los servicios que por su función tenga
a su cargo. !
10) El albandono del servicio por un término no mayor de cuarenta y ocho
(48) horas.
450 ANEXO LEGISLATIVO

11) La omisión i;njustificada de comunicar a la autoridad que corresponda


del Tribunal de Conpucta Policial las sanciones impuestas conforme a lo esta-
blecido en este regl!flmento.
12) Sustraerse jal cumplimiento del servicio aduciendo enfermedad o
males supuestos, o !valiéndose de cualquier otro medio fraudulento.
13) El ejercicio ~busivo o indebido de facultades disciplinarias, así como la
no represión de tra~'lsgresiones o su ocultamiento.
14) Las observaciones indebidas, manifestadas al superior.
15) La . ¡ de recursos colectivos.
16) La indebida de sanciones impuestas por subordinados, la
omisión· de imponer las informadas o comunicadas o no hacer
cumplir las impuestas.
17) El uso del policial o sus prendas en tareas incompatibles con

~c..~'""''''''' descargos, reclamos o peticiones en forma res pe-

I1ULi:1l'lUl.lIj::; falsas, hacer comentarios, críticas, o emitir


juicio sobre las ca.Llu:aUljt; personales y funcionales de sus superiores, iguales
o subalternos, dichas expresiones puedan resultar ofensivas o perju-
diciales para el I

20) La negativa I las respectivas notificaciones de sanciones disciplinarias,


denegación de órdenes del servicio u otras resoluciones.
21) Las vías de agravios y cualquier conducta lesiva al honor de las
a particulares o funcionarios policiales.
l:UJelUljIli:lIllU a retención de haberes por créditos no satisfechos opor-
cuandoltulere su beneficiario.
lel:llJIlJleu.u<t.l:llIIH'::; ajenas a la Repartición para gestionar
de provecho funcional.
sin causa justificada a lugares reconocidos como de
mala reputación.
25) N o guardar debida compostura en los cafés, fondas, despachos de
bebidas, almacenes confiterías, locales de baile y todo otro lugar de esparci-
miento en los que encontrare con el uniforme u ostentando insignias de
policía.
26) Contraer con personas de mala reputación, a sabiendas.
27) Otorgar Hl:e¡l.l:li:l~, permisos o prórrogas, contrariando las disposicio-
nes pertinentes o de las facultades para ello.
28) La previa formal citación, a notificarse en sede ad-
sanC:LOELes disciplinarias, resoluciones un otras órdenes del
servicio.
29) La di¡;confj)Ilrni manifiesta con una orden del servicio.
30) La t;HJIIUJli:1l:.lU~l de circunstancias para obtener prórrogas o interrupción
las sanciones disciplinarias.
IDE:RECHO PROCESAL ADMINISTRATIVO II 451

reincidente fuera del servicio.


gravísimas. Las faltas gravísimas serán reprimidas con
,,,'¡":a~ O" (60) días, suspensión hasta cuarenta (40) días, cesantía
las que a continuación se detallan:
\.OHlH'.l,\'.l, el ejercicio abusivo de las atribuciones del cargo o el uso

abandono o todo otro obrar imprudente o negligente


deselnl1,eñlo de tares de consigna, centinela, vigilancia o custo-
au.u""o" privadas de su libertad u otra función asigna-

o producir cualquier daño de importancia a bienes


de la Repartición, sea dolosamente sin perjuicio de su
HU.UU.t;;U.ll"'"

""'Jv••",,,-/.uuL,,upenal, sea por impericia, imprudencia, negligencia


o inobservancia de reglamentos o deberes a su cargo.
4) El pedido o de propinas o dádivas por servicios prestados en
el desempeño de funciones o a consecuencia de ellos.
5) La ebriedad otras intoxicaciones por ingestión de estupefacientes
comprobadas fuera servicio y con trascendencia pública, durante el servi-
cio o vistiendo el policial.
6) Afirmar una negar o callar la verdad en todo o en parte respec-
to de informes, traducciones o interpretaciones que se formu-
o intérpretes en actuaciones administrativas o ju-

''''''''\''''1'''' JLV de las armas o violencia para someter a las personas,


así como todo de poder en el ejercicio de la función.
8) La pérdida o del armamento provisto, por incumplimiento
de las normas que su portación.
9) La en los informes transmitidos a sus superiores, que los
indujere a error.
10) Intervenir o cualquier forma participar en la gestión un organización
de los partidos POlltlllCOS, mientras permanezca en actividad.
11) Integrar asociación de amigos de la Policía de la Provincia y/o
cooperadora en y/o cualquier otra figura destinada a la recauda-
ción de fondos de vecinos, comerciantes, etc., que tengan por
colaboración con la Institución Policial, sin contar con
jurídica y/o la autorización de la Jefatura de Policía
de Conducta Policial con la firma de al menos dos
dicha actividad configurara a su vez algún ilícito penal
la comisión de tales hechos constituirá falta gravísi-

""o;nOl"f""'OQ o formular declaraciones públicas, referidas a

aspectos uu'",.vuu. .• "p o de carácter político, sin contar con la autorización de


la superioridad.
452 ANEXO LEGISLATIVO

13) La difusión de rumores que puedan provocar situaciones de desconcier-


to, desánimo o malestar entre el personal.
14) Acatar las decisiones de asociaciones gremiales o profesionales contra-
rias a la prestación normal de los servicios que le corresponden o a la misión
de la Polida, sea ostensible o encubiertamente.
15) El préstamo, cesión o venta a particulares de distintivos, prendas del
uniforme, ornamentos, equipos u otros bienes de la Institución.
16) La insubordinación o instigación a cometerla.
17) La falta de respeto al superior o desobediencia indebida a sus órdenes.
18) La negativa a prestar declaraciones testimoniales, informes o prue-
bas en causas que haya conocido en ejercicio de sus funciones o cuando sean
prestadas con reticencia, falsedad u ocultamiento perjudicial para la inves-
tigación.
19) El abandono del servicio que se prolongue por más de cuarenta y ocho
(48) horas.
20) El incumplimiento de los deberes contemplados en el Título I, Capí-
tulo 4, de lla Ley del Personal Policial, o la instigación de ello, so pretexto de
motivos religiosos, filosóficos o de cualquier otra índole, fuera de las excepcio-
nes previstas en el citado cuerpo normativo.
21) La organización, práctica o tolerancia enjuegos de naipes, apuestas o
juegos de azar en dependencias policiales o en ejercicio de la función.
22) El quebramiento del arresto impuesto.
23) Haber sido condenado como coautor, instigador, cómplice o encubridor
de delito doloso, o tener responsabilidad juzgada administrativamente en la
comisión de hechos directamente vinculados a aquellos que motivaron la ins-
trucción de sumario judicial.
24) La revelación apersonas ajenas a la repartición de informes, órdenes,
constancias o documentos reservados, cuya divulgación pueda causar daños
o perjuiciolS a la Institución, a cualquier otra autoridad de la provincia o de la
nación o a particulares.
25) La facilitación de evasión de alguna persona legalmente privada de su
libertad.
26) Desafiar, hacer además de extraer armas o efectuar cualqui{lr otra
demostración de agresividad hacia superiores, iguales o subalternos.
27) Todo acto que comprometa el decoro del empleo y toda contraven-
ción a las órdenes policiales vigentes, siempre que de ello resulte perjui-
cio para los intereses públicos o privados, dañe o afecte el prestigio de la
policía.
28) Formular, a sabiendas, denuncias o aseveraciones falsas ante auto-
ridades, medios de prensa o personas particulares, o llevar acabo hechos de ,
cualquier naturaleza, con el propósito de perjudicar de cualquier modo a la
Institución, a cualquier otra autoridad de la Provincia o de la Nación o a par-
ticulares.
,
j
--
DERECHO PROCESAL ADMINISTRATIVO II
453

Capítulo 3
DE LAS SANCIONES
Artículo 115. Sanciones. Las faltas disciplinarias cometidas por personal en
actividad sólo podrán ser reprimidas con alguna de las sanciones que se men-
cionan a continuación:
1) Apercibimiento;
2) Arresto;;
3) Suspensión;
4) Cesantía, o
5) Exoneración
El personal policial en situación de retiro quedará sujeto a las sanciones
previstas en el artículo 98 de la Ley del Personal Policial.
Artículo 17. Apercibimiento. El apercibimiento es la advertencia formu-
lada por escrito en términos claros y precisos, de la que dejará constancia en
el legajo personal del sancionado.

Artículo 18. Arresto. El arresto es la privación de libertad que consiste en


la permanencia del sancionado en su dependencia de revista o en el lugar que
se determine, con las modalidades que en cada caso correspondan.
En ningún caso se cumplirá en los lugares destinados a la detención de
personas ajenas a la Institución.

Artículo 19. Modalidades de ejecución del arresto. El arresto podrá impo-


nerse con las siguientes modalidades de ejecución:
a) Arresto con prohibición de prestar servicios. Cuando la sanción sea de
arresto con prohibición de prestar servicios, se deberá determinar si el mis-
mo se cumplirá en el domicilio del sancionado o en dependencias policiales y
en razón del grado y jerarquía según lo dispuesto en el artículo 20 del presen-
te reglamento.
Si el arresto fuese domiciliario, el sancionado permanecerá en su domici-
lio particular, dlel cual no podrá alejarse sin razones debidamente justificadas
y con conocimiento previo dela autoridad que impuso la sanción, salvo casos
excepcionales.
b) Arresto sin perjuicio de prestación de servicios. Cuando la sanción sea
de arresto sin peirjuicio de prestación de servicios, se impondrá con las siguien-
tes modalidades:
1) Si el sancionado prestare servicios en horario diurno, cumplirá la san-
ción en horario de 07,00 a 21,00 horas, concediéndose al sancionado tres (3)
Horas para almorzar.
2) Si el sancionado prestare servicios en horario nocturno, el arresto será
cumplido mediante su permanencia en la dependencia durante cuatro (4) horas
consecutivas, inmediatamente antes o después del servicio, según se determi-
ne.
454 ANEXO LEGISLATIVO

Artículo 20. Cumplimiento del arresto. El arresto se cumplirá de la si-


guiente forma:
1) OfilCiales Superiores y Jefes: por faltas leves y graves, con perjuicio del
servicio, en el domicilio. Por faltas gravísimas, con perjuicio del servicio, en el
domicilio o en la dependencia que se determine.
2) Ofieiales Subalternos y Personal Subalterno: por faltas leves y graves,
sin perjuieio del servicio en la dependencia de revista. Por faltas gravísimas
con perjuieio del servicio, en la dependencia que se determine.
El arr€isto por faltas gravísimas podrá cumplirse por un lapso no mayor de
ocho (8) cHas en los Cuerpos de Policía, con prohibición absoluta de salida,
cualquiera fuere el grado del personal sancionado.
Artículo 21. Suspensión de la ejecución del arresto. Las licencias por razo-
nes de salud extraordinarias, por asistencia de familiar a cargo o excepciona-
les suspenden el cumplimiento del arresto, el que continuará una vez finali-
zada la situación que motivó la suspensión.
El personal femenino que se hallare en período de embarazo o de lactan-
cia cumplirá el arresto finalizada dicha situación.
Artículo 22. Cambio de destino del personal bajo arresto. El personal que
fuere camlbiado de destino y se hallare cumpliendo arresto, lo continuará en
su nuevo lugar de revista.
Artículo 23. Sancionados en situación pasiva. El personal que revistare en
situación pasiva y cometiere faltas disciplinarias, será sancionado en tal opor-
tunidad y cumplirá el arresto al reintegrarse al servicio efectivo.
Artículo 24. Ejecución del arresto del personal retirado. El arresto del
personal en situación de retiro se cumplirá de la siguiente forma:
1) Por faltas leves y graves, en el domicilio del sancionado.
2) Por faltas gravísimas en el domicilio del sancionado o en la dependen-
cia que se determine. Este último caso, el sancionado deberá permanecer por
un lapso continuado de seis (6) horas en la dependencia, en el horario matuti-
no o vespertino.
Artículo 25. Notificación. El arresto deberá ser notificado al sancionado
por quien 10 impuso. La comunicación se efectuará verbalmente o por escri-
to, debiendo, en el primer caso, ratificarse por escrito dentro de las veinti-
cuatro horas siguientes, sin perjuicio de lo establecido en el presente regla-
mento.
La notificación del arresto deberá contener la especificación del motivo de
la sanción,. encuadramiento legal, cantidad de días de arresto, concepto mere-
cido deljef'e de dependencia del cual depende el sancionado, con prescinden-
cia del hecho cometido, sanciones que registra en el último y si concurren cir-
cunstancias atenuantes o agravantes. El sancionado deberá ser oído en su
descargo.
DERECHO PROCESAL ADMINISTRATIVO II 455

Artíeulo 26. Pluralidad de sanciones. El personal que hubiere sido objeto


de más de una sanción, estando en alguna de las situaciones que determinan
la suspensión de su ejecución, una vez desaparecida la causa de dicha suspen-
sión cumplirá todas las sanciones en forma simultánea, del modo que se deter-
mine en la más severa.

Capítulo 4
APLICACIÓN DE SANCIONES POR
LOS SUPERIORES JERÁRQUICOS
Artíeulo 27. Aplicación por el superior. Aplicará la sanción el superior de
quien dependa el subalterno, aun en forma accidental, aunque hubiera come-
tido la falta con anterioridad en otra dependencia y se conociere con posterio-
ridad al cambio de destino, con excepción de los Oficiales Jefes y Superiores,
quienes la deberán sancionar en forma directa cuando la constataren perso-
nalmente, cualquiera fuere el lugar de revista del infractor.
Artículo 28. Facultades Limitadas. Solicitud de ampliación. Cuando quien
deba aplicar una sanción considere que lajusta medida excede el límite de sus
facultades, la aplicará en el grado que se lo permita sus atribuciones, y por el
resto solilcitará la ampliación pertinente a la Secretaría de Investigaciones y
Aplicaci6n de Sanciones, conforme a lo establecido en la presente reglamen-
tación.
Este principio no será de aplicación para los casos en que, por razón de la
gravead de la falta cometida, se deba tramitar sumario administrativo para el
juzgamiento del imputado.
Artículo 29. Constatación de faltas de personal no dependiente. Las faltas
cometidas por personal que no dependa de quien las constatare serán comu-
nicadas al superior de aquél para la imposición de la sanción correspondien-
te, así como la fiscalizaci6n de su cumplimiento. Cuando se proceda conforme
a la última parte del artículo 27, previo a imponerse la sanción se requerirán
al superior de quien dependa el agente los antecedentes disciplinarios y el
concepto funcional, sin perjuicio de lo establecido en el presente reglamento.

Capítulo 5
DEL TRIBUNAL DE CONDUCTA POLICIAL
Artículo 30. Composición. El Tribunal de Conducta Policial actuará en
pleno o a través de sus oficinas, según lo establece la presente reglamentación.
Son oücinas del Tribunal las siguientes:
a) Oficina de Investigaciones y Aplicación de Sanciones;
b) Oficina de Inspección e Inteligencia Interna;
c) Oficina de Control de Gestión;
d) Oficina de Formación Ética y Democrática.
456 ANEXO LEGISLATIVO

Los integrantes del Tribunal de Conducta y los titulares de las secretarías,


en el ejercicio de sus funciones, procurarán mantener con el personal policial
la comunicación y coordinación necesarias en orden a lograr objetivos de ex-
celencia en el funcionamiento de los cuadros policiales, sin perjuicio de apli-
car todo el rigor de la ley en todo caso en que, por acción u omisión, se incumpla
o pretenda incumplirse este objetivo.

1) De la Oficina de Investigaciones y Aplicación de Sanciones


Artículo 31. Atribuciones. La Oficina de Investigaciones y Aplicación de
Sanciones tendrá asu cargo la investigación de las faltas disciplinarias y toda
otra clase de irregularidades cometidas por personal policial, sea en ejercicio
de sus funciones o fuera de ellas, así como eljuzgamiento o sanción de las fal-
tas leves y graves.
La Dirección de la Oficina de Investigación y Aplicación de Sanciones
estará a cargo de un miembro del Tribunal, que será elegido por sus pares.
Artículo 32. Integración. La Oficina de Investigaciones y Aplicación de
Sanciones contará con dos (2) Secretarías, a saber:
a) Secretaría de Actuaciones por Faltas Leves y Graves;
b) Secretaría de Actuaciones por Faltas Gravísimas.
El Poder Ejecutivo designará y removerá a los Secretarios, quienes deberán
ser abogados, con no menos de cuatro años de antigüedad en el título y experien-
cia en investigaciones administrativas y/o judiciales, ajenos a la institución poli-
cialy sin antecedentes de sanciones penales o administrativas. Durarán dos años
en sus funciones y su remuneración será equivalente a la de Gerente General.
En caso de cumplimentar su función eficientemente y con respeto irrestricto a
la ley, podrán ser designados por un único período consecutivo de dos años más.
Artículo 33. Asesor Policial. La Oficina de Investigaciones y Aplicación de
Sanciones será asistida por Asesor Policial, que será designado por el pleno del
Tribunal de entre el personal policial retirado. El Asesor Letrado durará dos
años en sus funciones, que ejercerá adhonorem, no pudiendo ser designado por
otro período y deberá ostentar, como mínimo la jerarquía de Subcomisario.
Tendrá como función brindar el asesoramiento que le fuere requerido por el
Director de la Oficina y el Secretario de Actuaciones por Faltas Leves y Gra-
ves, dando su opinión acerca de la oportunidad y conveniencia de considerar
que una conducta del personal policial encuadra en alguna de las faltas previs-
tas en la reglamentación vigente, así como respecto a la entidad de la sanción.
No podrá asesorar al Secretario de Actuaciones por faltas gravísimas.

2) De la Oficina de Inspección e Inteligencia Interna


Artículo 34. Atribuciones. La Oficina de Inspección e Inteligencia Interna
tendrá a su cargo las siguientes funciones:
DERECHO PROCESAL ADMINISTRATIVO II 457

a) Inspección: Inspeccionar periódicamente todas las reparticiones


policiales, con el objeto de controlar el estricto cumplimiento de la ley y delos
reglamentos vigentes por parte del personal policial en el ejercicio de sus
funciones. Con ese objeto podrá organizar una revisión exhaustiva de toda la
documentación llevada por la repartición inspeccionada, así como interrogar
al personal en forma individual o conjunta, y recibir de parte de éste, en for-
ma pública o reservada, todos los comentarios, propuestas, quejas e inquietu-
des respecto de la forma en que se lleva a cabo el servicio. Todo Integrante de
la Institución Policial podrá, por su parte, comunicar a esta oficina en todo
momento y espontáneamente, en forma oficial o reservada, cualquier comen-
tario, propuesta, queja, o inquietud relacionada con el servicio. El Director de
esta Oficina pondrá en conocimiento de la Oficina de Control de Gestión, es-
pontáneamente o a requerimiento de ésta última, todos aquellos datos que se
consideren relevantes para la función propia del control de gestión. Para el
cumplimiento de lo establecido en este inciso la Secretaría de Inspección ela-
borará un cronograma anual de inspecciones, que incluirá inspecciones
pautadas y sorpresivas y garantizará que todas las reparticiones policiales de
la provincia sean inspeccionadas.
b) Inteligencia interna: Realizar en forma permanente tareas de inteligen-
cia dentro de la Institución Policial, con el objeto de prevenir y detectar la co-
misión de faltas gravísimas, especialmente aquéllas que prima facie constitu-
yan delitos penales. Para ello contará con personal perteneciente y ajeno a la
Institución Policial, en actividad o retiro, que obrará reservadamente, pudien-
do actuar incluso como agente encubierto en caso de ser necesario. Los resul-
tados de estas tareas pueden dar lugar a la apertura de sumarios administra-
tivos y ser utilizados en ellos como prueba. Se mantendrá siempre en reserva
la identidad del personal actuante, que quedará exento de sanción disciplina-
ria si, para realizar adecuadamente su trabajo, se viera obligado a participar
en la comisión de alguna falta disciplinaria. Si se tratara de delitos, en la pri-
mera oportunidad de conocerse la posibilidad de su existencia se dará noticia
a la Fiscalía y/o Juzgado de Instrucción que corresponda, para asegurar tanto
e valor probatorio de los elementos a recabar como el resguardo de las garan-
tías constitucionales al imputado.
La Dirección de la Oficina de Inspección e Inteligencia Interna estará a
cargo de un miembro del Tribunal, que será elegido por sus pares.
Artículo 35. Integración. La Oficina de Inspección e Inteligencia Interna
contarácon dos (2) Secretarías, a saber:
a) Secretaría de Inspección;
b) Secretaría de Inteligencia Interna.
Los Secretarios serán designados de la misma forma y con idénticos requi-
sitos y remuneración a los previstos en el artículo 32 del presente reglamen-
to.
458 ANEXO LEGISLATIVO

3) De la Oficina de Control de Gestión

Artículo 36. Atribuciones. La Oficina de Control de Gestión tendrá por


función estblecer objetivos y estándares de eficacia y eficiencia en la presta-
ción del servicio de la Institución Policial, y controlar su cumplimiento por
parte de todas las reparticiones policiales, distinguiendo su cumplimiento y
observando su incumplimiento, conforme se establece en la presente regla-
mentación. Podrá asimismo hacer constar los incumplimientos en que incu-
rran los titulares de las Secretarías del Tribunal de Conducta a los efectos de
lo dispuesto en el artículo 32, última parte.
Por "eficacia" se entiende el logro de los objetivos establecidos por la Ofi-
cina. Por "eficiencia" se entiende el cumplimiento de esos objetivos de la manera
más inmediata y productiva y con el menor costo posible, de acuerdo a los están-
dares que la oficina determine.
La Oficina de Control de Gestión elaborará un cronograma anual de con-
trol, que incluirá controles pautados y sorpresivos y garantizará que todas las
reparticiones policiales de la provincia sean controladas.
Sólo las reparticiones policiales -no los policías individualmente- pue-
den ser distinguidas o castigadas por cumplimento o incumplimiento de obje-
tivos y estándares de eficacia y eficiencia, sin perjuicio de la incidencia indi-
vidual indirecta que resulta de la aplicación de las distinciones conforme surge
del párrafo siguiente.
Las reparticiones distinguidas por su eficacia y eficiencia ingresarán a un
orden de mérito, que será especialmente tenido en cuenta para la asignación
de puntaje a sus integrantes para el régimen de ascensos.
Las reparticiones que no cumplan con los objetivos y estándares de efica-
cia y eficiencia ingresarán a una orden de incumplimiento según el grado de
éste, de mayor a menor. La Oficina de Control de Gestión determinará qué
condiciones son necesarias para que una repartición que haya integrado el
orden de incumplimiento pueda ingresar al orden de mérito, tras la supera-
ción de los incumplimientos en que haya incurrido y el logro de los objetivos
y estándares establecidos.
Todas las Direcciones y demás organismos de la repartición policial pon-
drán a disposición de la Oficina de Control de Gestión toda la documentación
que les sea requerida por su Director, y colaborarán en la tarea de control de
gestión del modo en que sea establecido por la Oficina.
La Dirección de la Oficina de Control de Gestión estará a cargo de un
miembro del Tribunal, que será elegido por sus pares.
Artículo 37. Integración. La Oficina de Control de Gestión contará con una
Secretaría, cuyo titular será designado por el pleno del Tribunal. Deberá
poseer título universitario o reconocida experiencia en la materia, y tendrá la
remuneración prevista en el artículo 32 del presente reglamento.
DERECHO PROCESAL ADMINISTRATIVO II 459

4) De la Oficina de Formación Ética y Democrática


Artículo 38. Atribuciones. La Oficina de Formación Ética y Democrática
tendrá por función organizar los eventos, cursos, seminarios, etc., yestructu-
rar los programas que consideren necesarios para la formación ética y demo-
crática del personal policial, conforme a las pautas que se fijen al respecto
desde el Ministerio de Seguridad.
La Dirección de la Oficina de Formación Ética y Democrática estará a cargo
de un miembro del Tribunal, que será elegido por sus pares.
Artículo 39. Integración. La Oficina de Formación Ética y Democrática
contará con una Secretaría cuyo titular será designado por el pleno del Tribu-
nal. Deberá poseer título universitario o reconocida experiencia en la mate-
ria, y tendrá la remuneración prevista en el presente reglamento.

Capítulo 6
Del procedimiento
Artículo 40. Faltas Leves y Graves. En razón de su cargo y grado, el perso-
nal policial podrá imponer sanciones por faltas leves y graves conforme a lo
previsto en la ley 6702 y en esta reglamentación. Para la aplicación de sancio-
nes por faltas leves y graves se procederá de la siguiente manera:
1) En caso de que la sanción sea impuesta por personal policial en razón de
su cargo y grado, aquél procederá sin otra formalidad que la de notificar al
sancionado, disponer lo necesario para su cumplimiento e informar al sancio-
nado que tiene derecho a formular descargo por escrito dentro de las veinti-
cuatro horas de notificada la sanción, siempre que, a su entender, no sea ne-
cesaria la sustanciación de sumario administrativo, elevando inmediatamente
la imposición de dicha sanción y, en su caso, el escándalo del sancionado, al
Director de la Oficina de Investigaciones y Aplicación de Sanciones.
El Director de la Oficina, sin sustanciación pero fundadamente, podrá
modificar o desestimar la sanción comunicada en un plazo no mayor a veinti-
cuatro horas, vencido el cual la sanción se tendrá por ratificada, así como or-
denar la sustanciación de sumario administrativo si lo considerase necesario
en razón de los dispuesto en el artículo 52 del presente reglamento. En este
último caso se suspenderá la sanción hasta tanto se resuelva el sumario res-
pectivo. En caso de desestimación o modificación de la sanción, o cuando se
decida la sustanciación de sumario administrativo, se comunicará inmediata-
mente a la Dirección General de Personal y a quien impuso la sanción. De toda
modificación o desestimación se dará noticia a la Oficina de Control de Ges-
tión. La sanción aplicada o ratificada por el Director de la Oficina de Investi-
gaciones y Aplicación de Sanciones se hará constar en el legajo del sanciona-
do, con notificación a éste.
2) La Secretaría de Actuaciones por Faltas Leves y Graves investigará
asimismo todas aquellas faltas que considere propia de su ámbito de actuación,
460 ANEXO LEGISLATIVO

sea por comunicación directa del personal policial cuando éste entienda que
debe tramitarse sumario administrativo, sea por denuncia presentada por un
particular o de oficio. Remitirá a la Secretaría de Actuaciones por Faltas
Gravísimas las actuaciones que entienda correspondan a su órbita.
En caso de denuncia anónima o de la prensa se aplicará lo establecido en
el artículo 44 del presente reglamento.
Artículo 41. Faltas Gravísimas. Las faltas gravísimas serán juzgadas por
el Tribunal de conducta policial, previa sustanciación de sumario administra-
tivo ante la Secretaría de Actuaciones por Faltas Gravísimas de la Oficina de
Investigaciones y Aplicación de Sanciones, conforme a lo establecido en la
presente reglamentación.
Si el personal policial tomase conocimiento de la comisión de una falta
gravísima, comunicará ello inmediatamente a la Secretaría de Actuaciones por
Faltas Gravísimas para que ésta, si lo considera procedente, inicie el sumario
administrativo correspondiente.
La Secretaría de Actuaciones por Faltas Gravísimas remitirá a la Secre-
taría por Faltas Leves y Graves las actuaciones que involucren a faltas que,
según su criterio, sean de la naturaleza correspondiente a su órbita.
Artículo 42. Casos de supuesto delito. En caso de que una falta constituya
prima facie un delito penal, se remitirán de inmediato las actuaciones a la
Fiscalía de Instrucción u órgano judicial competente. La investigación admi-
nistrativa de esta clase de faltas será de máxima prioridad para la Secretaría
pertinente de la Oficina de Investigaciones y Aplicación de Sanciones.
Artículo 43. remisión y conmutación. Será facultad del Tribunal de Conduc-
ta Policial, con el acuerdo de dos de sus miembros, remitir o conmutar las
sanciones disciplinarias impuestas. La remisión de la pena consiste en perdón
del sancionado, eximiéndoselo del cumplimiento de la sanción. La conmuta-
ción consiste en disminuir la magnitud de la pena disciplinaria o en sustituirla
por otra más benigna.
Con motivo de las festividades del 25 de Mayo, 9 de Julio, Día de la Policía
y otras circunstancias especiales, el Tribunal de Conducta Policial, con el
acuerdo de todos sus miembros, podrá disponer, con carácter general, la remi-
sión o conmutación de las sanciones de arresto impuestas por faltas leves y
graves. Dicha disposición puede adoptarse por el día o lapso determinado, o
por todo el tiempo que faltare cumplir.
La remisión o conmutación de la sanción disciplinaria sólo hace a su cum-
plimiento, debiéndose dejar constancia de ello en el legajo personal.
Artículo 44. Denuncia anónima o de la prensa. Cuando se reciba una de-
nuncia anónima o proveniente de algún medio de prensa, la Secretaría que
corresponda procederá de la siguiente manera:
462 ANEXO LEGISLATIVO

Capítulo 9
INVESTIGACIÓN ADMINISTRATIVA PREVIA
Artículo 48. Procedencia. En los casos en que no estuviera individualiza-
do el supuesto autor de una falta disciplinaria, se llevará a cabo una investi-
gación administrativa previa, que tendrá por objeto precisar el hecho e indi-
vidualizar a sus supuestos autores, partícipes o encubridores. Deberá ser
ordenada por resolución del Director de la Oficina de Investigaciones y Apli-
cación de Sanciones y sustanciada por la Secretaría que corresponda según la
entidad de la falta.
Artículo 49. Plazo. El plazo máximo dela investigación administrativa
previa será de treinta (30) días hábiles administrativos. Si el plazo preceden-
te resultare insuficiente, el encargado de la investigación podrá solicitar al
Director de la Oficina de Investigaciones y Aplicación de Sanciones una pró-
rroga de hasta quince (15) días hábiles administrativos más, según las causas
de la demora y la naturaleza de la investigación en la prórroga sin que se hu-
biese logrado el objeto de la investigación, se resolverá conforme a lo dispuesto
en el artículo 51, última parte.
Artículo 50. Facultades. La Secretaría interviniente gozará de amplias
facultades para realizar la investigación. Podrá requerir directamente los
informes que resulten necesarios para ella. Los organismos requeridos debe-
rán evacuarlos con la mayor celeridad, prestando toda la colaboración que se
le solicitare al respecto.
Artículo 51. Resolución. Concluida la investigación administrativa, el
Director de la Oficina de Investigaciones y Aplicación de Sanciones dictará
resolución dentro del plazo máximo de tres (3) días hábiles administrativos,
a contar desde el día en que recibiera sus resultados de parte de la Secretaría
interviniente. El Director se pronunciará fundadamente sobre las comproba-
ciones efectuadas en el curso de la investigación e individualizará a los supues-
tos responsables si ello fuere posible, ordenando, si procediera, la apertura de
sumario administrativo, o declarando, en caso contrario, que no existe méri-
to para su sustanciación.

Capítulo 10
SUMARIO ADMINISTRATIVO
Artículo 52. Causales. Corresponde ordenar la instrucción de sumario
administrativo en los siguientes casos:
1) Cuando se trate de faltas gravísimas.
2) En los casos de faltas leves o graves cuando, por la naturaleza del hecho,
y siempre que estuviere individualizado el supuesto autor de la falta, sea
necesario recabar prueba adicional a la mera constatación de la falta por par-
te del superior jerárquico.
DERECHO PROCESAL ADMINISTRATIVO II 463

3) Cuando el personal policial, por actos de servicio o hechos ajenos a ést~,


haya sido sometido a proceso penal o contravencional y, en ellos, se haya dis-
puesto la elevación de la causa ajuicio o su procesamiento, o la condena con-
travencional, respectivamente, con la sola excepción de delitos culposos no
vinculados a la función.
Artículo 53. Secreto de Sumario. Facultades de la defensa. El sumario será
escrito y secreto, sin peIjuicio del derecho de defensa del imputado, pero éste o su
representante legal podrán tener acceso a él con posterioridad al acto de su decla-
ración, a partir del cual el defensor podrá solicitar que se le permita la asistencia a
los actos de sumario, lo que será concedido siempre que ello no ponga en peligro los
fines de la investigación o impida una pronta y regular actuación. Concedido el
pedido, se dará al defensor simple noticia verbal de la realización de los actos, siem-
pre que lo solicite. La resolución sobre este pedido será irrecurrible.
Artículo 54. Elevación delas actuaciones. Si por pedido de autoridad competen-
te debiera remitirse todo o parte de las actuaciones, elementos probatorios o cual-
quier otra constancia de sumario, se obtendrá previamente copia fiel de las piezas
pertinentes, sobre cuya base continuará la actuación sumarial. Silo originales fueren
necesarios para continuar el sumario, se remitirán copias autenticadas.
Artículo 55. Formalidades. El trámite de sumario administrativo se ajus-
tará a las siguientes formalidades:
1) Deberá aportar la mayor cantidad de elementos de juicio para acredi-
tar la existencia o inexistencia del hecho investigado y, en su caso, determi-
nar la responsabilidad del o los presuntos autores o partícipes.
2) Se recabarán los informes periciales y se practicarán todas las diligen-
cias necesarias para la debida aclaración de los hechos investigados.
3) La tramitación del sumario dejará constancia por escrito de las perso-
nas que hayan presenciado o tengan conocimiento de los hechos investigados,
a quienes se recibirá declaración testimonial yprestaránjuramento o promesa
de decir verdad, bajo pena de nulidad.
4) Se requerirá concepto funcional, planilla de constancia deservicio y
antecedentes disciplinarios de los implicados.
Artículo 56. Denuncia. El denunciante podrá adoptar todas las pruebas que
considere conveniente pero no podrá instar el trámite, quedando a criterio del
Secretario interviniente merituar la relevancia de las medidas probatorias.
Todo miembro de la repartición policial, cualquiera sea sujerarquía o grado,
podrá denunciar la comisión de faltas disciplinarias.

Capítulo 11
DECLARACIÓN DEL IMPUTADO
Artículo 57. Intimación y declaración sobre el hecho. Previo a la declara-
ción sobre el hecho se interrogará al imputado por sus condiciones pe~ona-
464 ANEXO LEGISLATIVO

les, si ha sido sumariado anteriormente, por qué causas y qué resolución recayó
sobre la misma. Luego se le hará saber detalladamente el hecho o la falta
administrativa que se le imputa, las pruebas existentes en su contra, que puede
obtenerse de declarar sin que ello lo perjudique y que puede ser asistido por
un letrado en calidad de defensor, o que puede defenderse por sí mismo, de-
biendo quedar constancia de tal determinación. Tras ello se lo invitará a ma-
nifestar cuanto desease en su descargo y a que ofrezca las pruebas que estime
útiles para su defensa.
Artículo 58. Suspensión de la audiencia. Derecho de defensa. Si el impu-
tado expresara el deseo de ser indagado en presencia de su defensor, se sus-
penderá la audiencia, se hará constar ello en el acto respectiva y se fijará para
su prosecución un término no mayor a tres (3) días hábiles administrativos. En
esa oportunidad se recibirá la indagatoria con o sin la presencia del letrado,
sin lugar a recurso alguno.
Artículo 59. derecho a declarar. Garantías. El imputado deberá declarar
libremente, sin que medie coacción alguna sobre su persona tendiente a lograr
su confesión o alguna declaración en particular, debiendo ser interrogado en
forme directa evitándose preguntas capciosas o sugestivas, debiéndose pro-
veer lo necesario para corroborar cuanta circunstancia alegue en su defensa.
La declaración podrá ser ampliada cada vez que así lo requiera el Secretario
interviniente o cuantas veces lo desee el imputado, siempre que su declaración
sea pertinente y no aparezca sólo como un procedimiento dilatorio o pertur-
bador. De este derecho únicamente podrá hacer uso el imputado hasta la no-
tificación del informe de cierre del sumario.
Artículo 60. Acta de declaración terminado el acto, el imputado suscribi-
rá el acta correspondiente juntamente con su defensor y el Secretario inter-
viniente, previa lectura y ratificación de todo su contenido. Si el acusado se
negare a ello, se dejará constancia de tal decisión, sin que por dicha circuns-
tancia el instrumento carezca de valor.

Capítulo 12
PRUEBA
Artículo 61. Libertad probatoria. Todo medio de prueba es admisible con
las limitaciones que surgen de la ley y de la Constitución Nacional y de la
Provincia, y la Secretaría interviniente podrá disponer la recepción y produc-
ción de todas las pruebas que considere pertinentes y útiles para el esclareci-
miento de los hechos.
Artículo 62. Valoración de la prueba. En los sumarios administrativos la
valoración de la prueba se regirá por el sistema de la libre convicción y de la
sana crítica racional.
DERECHO PROCESAL ADMINISTRATIVO II 465

Artículo 63. Prueba de la defensa. A partir de la declaración del imputado,


éste o su defensor podrán ofrecer prueba, proponiendo todas las diligencias
probatorias que consideren necesarias para el adecuado ejercicio de la defen-
sa. El Secretario interviniente admitirá y diligenciará la prueba ofrecida, siem-
pre que ella no sea evidentemente impertinente, inútil o sobreabundante, o
que sea evidente que sólo persigue fines dilatorios. Su resolución al respecto
será irrecurrible.

Capítulo 13
PLAZOS Y TÉRMINOS
Artículo 64. Plazo máximo. El término para la investigación a realizar en
el sumario administrativo no será mayor a sesenta (60) días hábiles adminis-
trativos, desde el inicio del trámite hasta la elevación del informe de cierre del
sumario, no computándose en ese lapso las demoras por diligencias que deban
practicarse fuera del lugar de asiento del sumario.
Artículo 65. Días inhábiles. Las actuaciones administrativas podrán
proseguirse inclusive los días inhábiles, cuando la suspensión de esos días
cause perjuicios o cuando así lo disponga el Director de la Oficina de Investi-
gaciones y Aplicación de Sanciones.
Artículo 66. Plazo de las diligencias. Las diligencias ordenadas en proce-
dimientos disciplinarios deben ser cumplidas dentro de las veinticuatro (24)
horas.
Artículo 67. Principio de celeridad. Todo aquél que intervenga en actuacio-
nes por procedimientos disciplinarios está obligado a propender, dentro de
sus atribuciones, a que aquellos se tramiten con la mayor celeridad, tomando
las iniciativas adecuadas a ese fin.
Artículo 68. Prórroga de plazo. Cuando el sumario no pudiere estar conclui-
do en los términos establecidos en el artículo 64 se solicitará al Tribunal de
Conducta Policial la prórroga del plazo, indicándose las causas que motivan
la solicitud y el tiempo que se estima necesario, el que no podrá exceder de
treinta (30) días hábiles. El tribunal mediante resolución firmada por al me-
nos dos de sus miembros, resolverá fundadamente en término de tres (3) días
hábiles la aceptación o el rechazo de la prórroga en función de las causas de la
demora. En caso de acordar la prórroga, fijará su tiempo teniendo en cuenta
la naturaleza de los actos que deben practicarse. Su resolución será irrecurri-
ble.
El tribunal, deberá remitir una copia del pedido de prórroga y de su reso-
lución, cualquiera sea su contenido, a la Oficina de Control de Gestión.
Vencidos todos los plazos sin que se haya elevado el informe de cierre del
sumario, el imputado podrá solicitar al Director de la Oficina de Investigacio-
nes y Aplicación de Sanciones que tome intervención en el sumario con el objeto
466 ANEXO LEGISLATIVO

de establecer las causas de la demora, ordenar las directivas pertinentes para


la continuidad y finalización del sumario dentro de un plazo que no podrá
exceder los treinta (30) días hábiles administrativos y remitir nuevamente los
antecedentes de la Oficina de Control de Gestión, para que ésta, si correspon-
diere, proceda conforme a lo dispuesto en el artículo 36, primer párrafo, últi-
maparte.
Artículo 69. Faltas Resultantes. Si en el curso de las actuaciones adminis-
trativas el Secretario interviniente advirtiera la comisión de una falta que no
tenga relación directa con el hecho origen del sumario, dispondrá, si fuera
procedente la apertura de un nuevo sumario para la investigación de esta falta,
o la comunicará al Director de la Oficina de Investigaciones y Aplicación de
Sanciones para que éste resuelva sobre ella, conforme a lo establecido en el
presente reglamento.
Artículo 70. Actos definitivos e irreproducibles. Aun antes de la indagato-
ria, el imputado o su defensor podrán asistir a los reconocimientos, pericias,
reconstrucciones o inspecciones, siempre que por su naturaleza y caracterís-
ticas se deban considerar definitivos e irreproducibles. Antes de proceder a
realizar algunos de los actos mencionados, el Secretario interviniente debe-
rá notificar al imputado, y en su caso a su defensor, de la medida dispuesta, la
cual se practicará en la fecha indicada aunque aquéllos no asistieran.
Artículo 71. Informe de cierre del sumario. Contenido. Cuando el Secreta-
rio interviniente estime concluida la investigación, elaborará el informe de
cierre del sumario, que deberá contener:
1) La individualización del imputado.
2) Una relación clara, precisa, circunstanciada y específica del hecho im-
putado yde la prueba del sumario, con indicación de las hojas en que se encuen-
tra cada una de las constancias o probanzas.
3) La reproducción de la declaración del imputado sobre el hecho o la cons-
tancia de que se abstuvo de declarar.
4) La opinión fundada del Secretario interviniente respecto a la resolución
que debiera dictarse.
Artículo 72. Vista a la defensa. El Secretario interviniente correrá vista del
informe de cierre de sumario aloa los imputados y a sus defensores si los
tuviera, para que éstos, en el término común de cinco (5) días hábiles adminis-
trativos, procedan conforme a lo establecido en el artículo 46.
Artículo 73. Elevación del informe de cierre de sumario y del alegato de la
defensa. Inmediatamente después de respondida la vista prevista en el artí-
culo anterior o del vencimiento del plazo allí establecido si no mediare respues-
ta alguna, el Secretario interviniente elevará el informe de cierre del suma-
rio junto con la respuesta de la defensa a la vista mencionada, si la hubiere, y
el resto de las actuaciones. Si se tratare de faltas leves o graves la elevación se
.
DERECHO PROCESAL ADMINISTRATIVO II 467

hará al Director de la Oficina de Investigaciones y Aplicación de Sanciones, y


al Tribunal de Conducta Policial si se tratara de faltas gravísimas.
Artículo 74. Informes. Antecedentes pendientes. Si para cerrar el sumario,
faltare únicamente la recepción de informes o antecedentes que se hubieren
solicitado, pero que, a criterio del Secretario interviniente, por su naturaleza no
modificarán las conclusiones del informe de cierre del sumario, éste se elevará
a quien corresponda prescindiéndose de dicha documentación, haciéndose
constar esta circunstancia sin peIjuicio de su posterior incorporación.
Artículo 75. Resolución del cierre del sumario. El Director de la Oficina de
Investigaciones y Aplicación de Sanciones si se tratare de faltas leves o graves,
o el Tribunal de Conducta Policial con la firma de al menos dos de sus miem-
bros si se tratare de faltas gravísimas, dictará resolución de cierre del suma-
rio administrativo dentro el término de diez (10) días hábiles administrativos,
a contar desde la fecha de ingreso a la mesa de entrada correspondiente del
informe de cierre del sumario elevado por la secretaría respectiva. Deberá
dictarse el archivo de las actuaciones administrativas si, a criterio del juzga-
dor, no hubiere mérito administrativo para imponer sanción alguna. En caso
de existir dicho mérito, deberá dictarse resolución condenatoria, imponién-
dose la sanción que corresponda. La resolución de cierre del sumario adminis-
trativo será siempre fundada, cualquiera sea su naturaleza. Rige lo dispues-
to en el artículo 5° del presente reglamento.
Artículo 76. Legajo personal. En los sumarios que concluyan con sanciones
disciplinarias se agregará al legajo personal del sancionado copia de la reso-
lución recaída.

Capítulo 14
ARRESTO PREVENTIVO
Artículo 77. Término. Al disponerse la tramitación de sumario administra-
tivo o durante ésta, a solicitud fundada del Secretario interviniente, el Direc-
tor de la Oficina de Investigaciones y Aplicación de Sanciones podrá disponer,
de acuerdo con la naturaleza y circunstancias de la falta imputada, el arresto
preventivo del acusado por un lapso no mayor de ocho (8) días, que deberá
cumplirse en los Cuerpos de Policía.
Esta medida puede ser dejada sin efecto por la misma autoridad que la
ordenó.

Capítulo 15
NOTIFICACIÓN DE RESOLUCIONES
Artículo 78. Notificación por la Secretaría. La notificación de lo resuelto
en sumario administrativo será efectuada por la Secretaría interviniente del
Tribunal de Conducta Policial tanto al interesado cuanto a la Dirección Gene-
468 ANEXO LEGISLATNO

ral de Personal de la Policía y, cuando correspondiere, también a la Dirección


General de la Administración de la Policía.
Artículo 79. Resolución firme. Toda resolución quedará firme una vez
vencido el término establecido para recurrirla sin que se haya hecho uso de tal
facultad.
Artículo 80. Registros de sanciones. Los registros de las sanciones inclui-
rán la falta disciplinaria sancionada y la naturaleza y cuantía de la pena im-
puesta.
Artículo 81. Sancionado de superior grado. Cuando resultaren varios res-
ponsables en una misma actuación, la copia de la resolución recaída será agre-
gada en el legajo personal del sancionado en superior grado, dejándose cons-
tancia en los legajos personales de los restantes.

Capítulo 16
SITUACIÓN PASIVA
Artículo 82. Aplicación restrictiva. La situación pasiva de es una medida
de carácter excepcional, que se aplicará restrictivamente en los casos que este
capítulo determina, con los efectos que allí se establecen.
Artículo 83. Efectos. La aplicación de la situación pasiva lleva implícitos
los efectos de la suspensión del servicio establecido como sanciones en la Ley
del Personal Policial, sin peIjuicio de las modalidades que en el presente ca-
pítulo se establecen.
Artículo 84. Personal comprendido. Revistará en situación pasiva el per-
sonal que se hallare comprendido dentro de las previsiones del artículo 73 de
la ley N" 6702.
Artículo 85. Mantenimiento de los efectos. El personal privado de su liber-
tad en proceso penal que obtuviera la excarcelación no podrá conseguir el
levantamiento de la situación pasiva cuando su presencia en el servicio pue-
da resultar un obstáculo para la investigación, o cuando por la naturaleza o
características del hecho sea inconveniente el servicio efectivo.
Artículo 86. Imputación por sumario administrativo. El personal imputado
en sumario administrativo no derivado de sumario judicial revistará en situa-
ción pasiva cuando concurran las circunstancias del artículo anterior.
Artículo 87. Proposición de la aplicación y levantamiento de la medida.
Cuando de las constancias de autos suIja alguna de las circunstancias previs-
tas en el artículo 85 de este reglamento, el Secretario Interviniente propon-
drá fundadamente al Director de la Oficina de Investigaciones y Aplicación de
Sanciones la aplicación de la mediada de situación pasiva. Si de las constan-
DERECHO PROCESAL ADMINISTRATIVO II 469

cias de autos no surgieran tales circunstancias, se propondrá el levantamiento


de la medida. El Director de la Oficina resolverá sin sustanciación pero fun-
dadamente, en el término de tres (3) días hábiles administrativos.
Artículo 88. Informe de la medida. El resultado del trámite previo regis-
tro en la Dirección General de Personal, se informará a la dependencia de
origen del sumariado, por el medio más rápido.
Artículo 89. Cese de la medida. Sanción disciplinaria. Al concluirse el
sumario administrativo, el Director de la Oficina de Investigaciones y Aplica-
ción de Sanciones, de oficio o a pedido del interesado, dejará sin efecto la
medida de situación pasiva. No se dejará sin efecto la medida si hubiese recaído
sanción disciplinaria por falta grave o gravísima.
Artículo 90. Haberes caídos. Los haberes caídos durante el tiempo de re-
vista en situación pasiva se harán efectivos en su totalidad cuando se dispon-
ga que tal medida queda sin efecto, conforme a lo dispuesto en el artículo an-
terior.

Capítulo 17
PROCESO PENAL PENDIENTE
Artículo 91. elevación de la causa ajuicio o procesamiento. Si el sumario
administrativo se hubiera iniciado por haberse dispuesto la elevación de la
causa ajuicio o el procesamiento el imputado en su proceso penal, respecto de
un hecho que encuadra a la vez en una falta disciplinaria, podrá dictarse reso-
lución administrativa condenatoria sin esperarse el pronunciamiento judicial
definitivo, en tanto hubiere suficientes elementos dejuicio.
Artículo 92. Suspensión del sumario administrativo. Si no hubiese méri-
to administrativo para imponer una sanción por falta disciplinaria, no se ar-
chivará el sumario administrativo mientras no medio resolución judicial fir-
me de absolución o sobreseimiento, disponiéndose la suspensión del sumario
administrativo y de todas las medidas impuestas contra el imputado en razón
del sumario hasta tanto se dicte sobreseimiento o sentencia absolutoria o
condenatoria en el proceso penal. Ocurrido ello, se dispondrá el archivo del
sumario o se impondrá la sanción disciplinaria que corresponda, según el caso,
de acuerdo con lo establecido en la presente reglamentación.
Artículo 93. Relación con el servicio. A los fines de establecer si el proceso
penal ha sido motivado por un hecho relacionado con el servicio se deberá
considerar no sólo el hecho imputado sino también las relaciones del denun-
ciante con el imputado y sus antecedentes.

470 ANEXO LEGISLATIVO

Capítulo 18
DEFENSA DEL PERSONAL
Artículo 94. Proceso penal. Cuando se siguiere juicio penal en que se halle
implicado personal policial y cuya responsabilidad sea emergente de hechos
ocurridos durante el cumplimiento del servicio o con motivo de él, los acusa-
dos tendrán derecho a la defensa técnica, conforme lo determine el artículo 16,
inciso ñ) de la ley N° 6702.
Artículo 95. Patrocinio legal. El patrocinio legal podrá ser ejercido por el
personal policial del Cuerpo Profesional- Escalafón Jurídico que designe la
Jefatura de Policía.
En caso de necesidad del servicio la Jefatura de Policía podrá contratar
profesionales, para que ejerzan la defensa técnica del personal.

Capítulo 19
DEFENSORES
Artículo 96. Los defensores podrán ser designados en cualquier momen-
to del sumario, para que asuman la defensa técnica del imputado en actuacio-
nes administrativas.
Artículo 97. Intereses contrapuestos. Cuando el defensor fuera designa-
do en un mismo sumario para asistir a varios imputados y su actuación resul-
tare incompatible para la defensa simultánea de aquéllos por existir intere-
ses contrapuestos, dicha designación valdrá para el primero que lo propuso.
Cuando fuere el defensor quien tomare la decisión con respecto a la incompa-
tibilidad antes mencionada, deberá comunicarla al Secretario interviniente
para la respectiva constancia en el sumario. El Secretario intimará a los im-
putados a presentarse por sí a designar nuevo defensor en el término de cua-
renta y ocho (48) horas hábiles bajo apercibimiento de continuar la causa se-
gún su estado.
Artículo 98. Revocatoria. La revocatoria de la defensa es facultad privati-
va del imputado.
Artículo 99. Atribuciones. Los defensores tendrán las siguientes atribucio-
nes:
1) En el acto de la declaración del imputado, podrán efectuar las aclaracio-
nes pertinentes sin entorpecer su desarrollo.
2) Luego de la declaración del imputado podrán ejercer todos los derechos
y facultades que les acuerda la presente reglamentación.
3) Podrán refrendar las declaraciones, ofrecimientos de prueba o recursos
del imputado.
DERECHO PROCESAL ADMINISTRATNO II 471

Capítulo 20
RECURSOS
Artículo 100. Vías impugnativas. Contra las resoluciones que impongan
sanciones disciplinarias procederán los recursos de:
1) Reconsideración.
2) Revisión.
Artículo 10 1. Plazo de resolución. Efectos. Los recursos deberán resolverse
en el plazo de veinte días hábiles, vencido los cuales se presumirá la existen-
cia de resolución denegatoria. Su interposición no suspenderá el cumplimien-
to de la sanción, salvo cuando se tratare de arresto.
Artículo 102. Formalidades. Para su admisión, todo recurso debe ajustar-
se a las siguientes formalidades:
1) Ser presentado por escrito, dentro del plazo establecido y dirigido a la
instancia que dispuso la medida.
2) Expresar los hechos o derechos en que se funda, en forma clara y preci-
sao
Artículo 103. Causales. El recurso podrá fundarse:
1) En disconformidad con la apreciación de los hechos.
2) En disconformidad con la calificación legal de los hechos.
3) En disconformidad con la graduación del castigo.
4) En haberse excedido el superior en el ejercicio de las facultades disci-
plinarias.
Artículo 104. Recurso de reconsideración. El recurso de reconsideración
se interpondrá por escrito y fundadamente dentro del plazo de cinco (5) días
hábiles siguientes al de la notificación de la sanción, por ante la autoridad que
la impuso. Se resolverá sin sustanciación.
En todos los casos el recurso de reconsideración será resuelto por el Tri-
bunal de Conducta Policial en pleno. Su resolución agotará la vía administra-
tiva.
Artículo 105. Resolución del tribunal. El Tribunal de Conducta Policial
deberá expedirse confirmando, modificando, anulando o dejando sin efecto la
sanción. En caso de modificación ésta no podrá agravar los efectos de la san-
ción impugnada.
Artículo 106. Recurso de revisión. Podrá disponerse en sede administra-
tiva la revisión de una resolución firme recaída en sumario administrativo por
falta disciplinaria en los siguientes casos:
1) Cuando resultaren contradicciones en su parte dispositiva.
2) Cuando aparezcan documentos de valor decisivo para la resolución del
asunto, ignorados al dictarse la medida o de imposible aportación al expedien-
te en ese momento por fuerza mayor o por obra de terceros.
472 ANEXO LEGISLATIVO

3) Cuando se hubiere impuesto la medida disciplinaria por resolución fun-


dada en documentos o circunstancias cuya declaración de falsedad se desco-
nocía o se hubiere dictado luego de producida tal resolución.
4) Cuando hubiere sido dictada mediante cohecho, prevaricato, violencia
o cualquier otra maquinación fraudulenta o grave irregularidad comprobada.
En el caso del inciso 1), el pedido deberá interponerse ante el Tribunal de
Conducta Policial dentro de los diez (10) días hábiles siguientes a la notifica-
ción de la resolución. En los demás supuestos podrá promoverse la revisión
dentro de los veinte (20) días hábiles de recobrarse o descubrirse los documen-
tos aludidos, o de que cesare la fuerza mayor o el accionar de terceros, o de
haber sido acreditados en legal forma los hecho indicados en los incisos 3) y 4).

Capítulo 21
DEL PERSONAL RETIRADO
Artículo 107. Personal retirado. Las faltas disciplinarias cometidas por
personal policial en situación de retiro serán sancionadas por el Tribunal de
Conducta Policial conforme a lo establecido en la presente reglamentación.
El personal retirado no tendrá facultades disciplinarias.
Artículo 108. Faltas disciplinarias del personal retirado. El personal re-
tirado podrá ser sancionado en los siguientes casos:
1) Cuando, vistiendo uniforme, incurra en cualquiera de las faltas que afec-
ten su dignidad o el decoro de la Institución.
2) Cuando por cualquier medio faltare el respeto debido a la Institución o
a sus integrantes.
3) Cuando deba responder por faltas cometidas mientras estaba en activi-
dad.
4) Cuando fuere condenado por delito doloso.
5) Cuando transgrediere disposiciones reglamentarias que específicamen-
te le incumbieran.
Artículo 109. En todo lo no previsto por la presente reglamentación serán
de aplicación supletoria las disposiciones pertinentes del Código Procesal
Penal de la Provincia de Córdoba.
Artículo 110. Disposición transitoria. Hasta tanto se cuento con la infra-
estructura necesaria para la puesta en práctica de lo establecido en esta regla-
mentación' el régimen disciplinario policial continuará aplicándose conforme
a las reglas y por el personal establecidos en el Decreto N° 3727/90.
BffiLIOGRAFÍA

ABERASTURY, PEDRO, "El presupuesto público en la ejecución de sen-


tencias contra el Estado", en Derecho Administrativo, Lexis
Nexis, Bs. As., 2003.
AHuMADA, DANIEL, Ley registral inmobiliaria 5771 y disposiciones
técnico-registrales, Alveroni Ediciones, Córdoba, 2002.
ALTAMIRA GIGENA, JULIO, "Impugnación de los actos administrativos
que vulneren derechos de los agentes públicos", en Revista de
la Universidad de Buenos Aires, Universidad de Buenos Ai-
res, Bs. As., 1983.
----,. "Las medidas cautelares en el contencioso administrati-
vo provincial", en El derecho administrativo argentino, hoy,
Editorial Ciencias de la Administración, Bs. As., 1996.
ÁVALOS, EDUARDO, "La ley de emergencia económica 25.344, las re-
forma al Código Procesal Civil y Comercial de la N ación y el
régimen de medidas cautelares en tiempos de 'déficit cero' y
'corralito' ", Foro de Córdoba, Suplemento de Derecho Admi-
nistrativo y Constitucional, N° 8, Advocatus, Córdoba, 2002.
BIANCHI, ALBERTO, ''La Fiscalía Nacional de Investigaciones Administrati-
vas. Funcionamiento y pautas para su reforma", enED, tomo 107.
BIDART CAMPOS, GERMÁN, "El Pacto de San José de Costa Rica y el
acceso fácil a la justicia", enED, tomo 137.
- - - - , Manual de la Constitución reformada, t. IIl, Ediar, Bs.
As., 1997.
BUJÁN, NÉSTOR H., Proceso administrativo-l!, 2003-2, Rubinzal
Culzoni, Bs. As., 2003.
CANDA, FABIÁN OMAR, "La Fiscalía de Investigaciones Administrati-
vas", en Control de la Administración Pública, Ediciones RAP,
Bs. As., 2003.
CANOSA, ARMANDO, Las reformas al régimen de juicios contra el
Estado y la ley de emergencia económica, Ábaco, Bs. As., 2001.
474
BIBLIOGRAFÍA

CARNOTA, W ALTER, "El ombudsman, los jubilados y la comisión Inte-


ramericana de Derechos Humanos", enED, tomo 173.
CASSAGNE, JUAN CARLOS (DIRECTOR), Derecho procesal administrati-
vo, t. 1, Hammurabi, Bs. As., 2004.
____ , "De nuevo sobre la legitimación para accionar en el am-
paro", enLL, tomo 1995-E.
____ , "El control jurisdiccional de la actividad reglamentaria y
demás actos de alcance general", en Actualidad en el Derecho
Público, N° 15/16, Ad-Hoc, Bs. As., 2001.
____ , "La suspensión del acto administrativo como consecuen-
cia de la interposición de un recurso en sede administrativa",
ED, tomo4l.
____ , "La tutela judicial efectiva. Incompatibilidad con el dog-
ma revisor y con la regla del agotamiento de la vía administra-
tiva", Fragmentos de derecho administrativo, Hammurabi, Bs.
As., 2003.
____ , "Las medidas cautelares en el contencioso administrati-
vo", LL, tomo 200l-B.
____ , Derecho administrativo, ts. 1 (5a ed.) y 11 (7a ed. act.),
Abeledo-Perrot, Bs. As., 1996 y 2002.
COMADIRA, JULIO RODOLFO, "Las medidas cautelares en el proceso
administrativo", LL, 1994-C, citado por GALLEGOS FEDRIANI, PA-
BLO O., Las medidas cautelares contra la Administración Pú-
blica, Ábaco, Bs. As., 2002.
____ , Ley Nacional de Procedimientos Administrativos. Ano-
tada y comentada, t. 1, La Ley, Bs. As., 2002.
____ , Procedimientos administrativos, t. 1, La Ley, Bs. As.,
2002.
____ , Derecho administrativo, Lexis Nexis Abeledo-Perrot, Bs.
As., 2003.
COUTURE, EDUARDO J., Estudios de derecho procesal civil, t. 111,
Ediar, Bs. As., 1978.
CRIVELLI, JULIO CÉSAR, La emergencia económica permanente, Ába-
co, Bs. As., 200l.
DANIELIAN, MIGUEL, Recursos judiciales y procedimientos adminis-
trativos, Rubinzal-Culzoni, Bs. As., 2000.
a
DIEZ, MANUEL MARÍA, Derecho administrativo, t. 11, 2 ed., Plus Ul-
tra, Bs. As., 1976.
DERECHO PROCESAL ADMINISTRATIVO II 475

DIEZ, MANUEL MARÍA, Derecho procesal administrativo, Plus Ultra,


Bs. As., 1996.
DROMI, ROBERTO, Derecho administrativo, Ciudad Argentina, Bs.
As., 1998.
- - - - , Derecho subjetivo y responsabilidad pública, Grouz, Ma-
drid,1986.
ERIZE, LUIS ALBERTO, "La cesación de pagos a los acreedores de deu-
das consolidadas por las leyes de emergencia 23.982 y 25.344",
LL, edición del 29/10/03.
ESCOLA, HÉCTOR J., Tratado general de procedimiento administra-
tivo, Depalma, Bs. As., 1995.
FERREYRA DE DE LA RÚA, ANGELINA, "La protección de los llamados
intereses difusos en la Constitución Nacional y en la Constitu-
ción de la Provincia de Córdoba", enLL, tomo 1996-E.
FIORINI, BARTOLOMÉ A., Qué es el contencioso, Abeledo-Perrot, Bs.
As., 1997.
FLAX, GREGORIO, Suplemento de Derecho Administrativo, Lexis
Nexis, Bs. As., edición del 30/07/03.
GALLEGOS FEDRIANI, PABLO O., Las medidas cautelares contra la
Administración Pública, Ábaco, Bs. As., 2002.
GARCÍA DE ENTERRÍA, EDUARDO, La lucha contra las inmunidades del
poder en el derecho administrativo, Civitas S.A., Madrid, 1995.
- - - - - FERNÁNDEz, ToMÁS RAMÓN, Curso de derecho administra-
tivo, 7a ed., Civitas S.A., Madrid, 1996.
GELLI, MARiA ANGÉUCA, Constitución de la Nación Argentina, 2 a ed.,
La Ley, Bs. As., 2003.
GIL DOMÍNGUEZ, ANDRÉS - J IMÉNEz, EDUARDO PABLO, "El Defensor del
Pueblo en Argentina y Perú: dos propuestas constitucionales
latinoamericanas", enLL, tomo 1997-F.
GoNZÁLEZ PÉREZ, JESÚS, El derecho a la tutela jurisdiccional , Civitas
S.A., Madrid.
- - - - - GARRIDO FALLA, FERNANDO - MARIENHOFF, MIGUEL S., FER-
NÁNDEZ, ToMÁS R., El contencioso administrativo y la respon-
sabilidad del Estado, Abeledo-Perrot, Bs. As., 1988.
GoRDILLO, AGUSTÍN, Tratado de derecho administrativo, ts. 1,2,3 y
4, Fundación de Derecho Administrativo, Bs. As., 2000.
GoZAÍNI, OSVALDO ALFREDO, Hábeas data, Rubinzal-Culzoni, Bs. As.,
2001.
476 BIBLIOGRAFÍA

GozAÍNI, OSVALDO ALFREDO, "Legitimación procesal del defensor del


pueblo (Ombudsman)", en LL, tomo 1994-E.
- - - - , "Técnica y contenido del defensor del pueblo (Ombuds-
man)", enLL, tomo 1988-E.
GRAU, ARMANDo E., Habilitación de la instancia contencioso admi-
nistrativa, Librería Platense Editora S.R.L., La Plata, 1971.
GRECCO, CARLOS MANUEL, "Impugnación de reglamentos", enProce-
dimiento administrativo, Jornadas organizadas por la Univer-
sidad Austral - Facultad de Derecho, Ciencias de la Adminis-
tración, Bs. As., 1998.
GUGLIELMINO, OSVALDO C., ''Medidas cautelares contra la Administración",
en Actualidad en el Dereclw Público, N° 13, Ad-Hoc, Bs. As., 2000.
HERNÁNDEZ, ANTONIO MARÍA, Las emergencias y el orden constitu-
cional, Instituto de investigaciones Jurídicas de la Universi-
dad Nacional Autónoma de México, México, 2003.
HUNTINGTON, SAMUEL P., La tercera ola -la democratización a fi-
nales del siglo XX-, Paidós, Bs. As., 1995.
HUTCHINSON, TOMÁS, "Ejecución de sentencias condenatorias con-
tra el Estado", en El derecho administrativo argentino, hoy,
Editorial Ciencias de la Administración, Bs. As., 1996.
- - - - , Régimen de procedimientos administrativos, Astrea, Bs.
As., 1992.
- - - - , "La inactividad de la Administración y su control" en
Control de la Administración Pública, Jornadas organizadas
por la Universidad Austral - Facultad de Derecho, Ediciones
RAP S.A., Bs. As., 2003.
ILDARRAZ, BENIGNO - ZARZA MENSAQUE, ALBERTO R. - VIALE, CLAUDIO
MARTÍN, Derecho constitucional y administrativo, 2a ed. act.,
Eudecor, Córdoba, 200l.
KAsTARI, PAAVO, "Los guardianes de la Ley en Finlandia", en El
ombudsman. El defensor del ciudadano, Fondo de Cultura Eco-
nómica, México, 1986.
MArORANO, JORGE LUIS, "Apuntes para un debate parlamentario. El
'ombudsman' sueco", enLL, tomo 1984-C.
- - - - , "El ombudsman y la protección de los derechos del hom-
bre", enLL, tomo 1992-C.
- - - - , El ombudsman. Defensor del pueblo y de las institucio-
nes republicanas, 2a ed., Macchi, Bs. As., 1999.
r DERECHO PROCESAL ADMINISTRATIVO II 477

I MAruENHOFF, MIGUEL S., Tratado de derecho administrativo, t. II,


Abeledo-Perrot, Bs. As., 1966.
MARsHALL, GEOFFREY, "El Reino Unido", en El ombudsman. El defen-
sor del ciudadano, Fondo de Cultura Económica, México, 1986.
MAssONI, JosÉ, "La Oficina Nacional de Anticorrupción" en Control
de la Administración Pública, Ediciones RAP, Bs. As., 2003.
MorssET DE ESPANÉs, LUIS, Interrupción de la prescripción por de-
manda, UNC, Córdoba.
- - - - , Publicidad registral, 3a ed., Zavalía, Bs. As., 2003.
MUÑoz, GUILLERMO, "Hacia una deconstrucción de la teoría del pro-
ceso administrativo", en Derecho Administrativo, en homenaje

I
al Profesor Miguel S. Marienhoff, Abeledo-Perrot, Bs. As., 1998.
ORTIZ, EDUARDO, "Materia y objeto del contencioso administrativo",
Revista de Ciencias Jurídicas, 5:47,89 (San José, 1965).
PADILIA, MIGUEL, "La constitución y el ombudsman", enED, tomo 109.
"
PALACIO, LINO ENRIQUE, "Anotaciones para una explicación de la re-
"ti',','" forma procesal civil y comercial (ley 25.488)", en LL, edición
del 21/12/0l.
- - - - , "El 'apagón' de febrero de 1999, los llamados intereses
difusos y la legitimación del defensor del pueblo", enLL, tomo
2000-C.
PALAZZO, JosÉ, "La Oficina anticorrupción. Una novedosa oportuni-
dad insertada en el Título III de la ley 8335 llamada la Carta
del Ciudadano", enLL Córdoba, 200l.
PAREJO ALFONSO, LUCIANO, "El Defensor del Pueblo como institución
de control de la Administración Pública: contenido y alcance
de su función, procedimiento de actuación y tipos, efectos y
publicidad de sus resoluciones", en Debate Defensorial, Revis-
ta de la defensoría del Pueblo, N° 1, Tarea Asociación Gráfica
Educativa, Lima, 1998.
PERRINO, PABLO E., "El derecho a la tutela judicial efectiva y el
acceso a la jurisdicción contencioso administrativa", en Revis-
ta de Derecho Público, 2003-1, Rubinzal Culzoni, Bs. As., 2003.
- - - - , "Proceso contencioso administrativo y habilitación de la
instancia", en Control de la Administración Pública. Adminis-
trativo, legislativo y judicial, Jornadas organizadas por la Uni-
versidad Austral- Facultad de Derecho, Ediciones RAP S.A.,
Bs. As., 2003.
478 BIBLIOGRAFíA

Pozo GoWLAND, HÉcroR M., "Cambios en el contencioso administrati-


vo federal. El reclamo administrativo", ED, edición del 29/12/00.
QUIROGA LAVIÉ, HUMBERTO, "El Defensor del Pueblo ante los estrados
de la justicia", enLL, 1995-D.
- - - - , "Nuevos órganos de control en la Constitución: el Defen-
sor del Pueblo y el Ministerio Público", en La reforma de la
Constitución, Rubinzal-Culzoni, Santa Fe, 1994.
- - - - , Constitución de la Nación Argentina comentada, Zavalía
Editor, Bs. As., 1996.
- - - - , El amparo constitucional, Rubinzal-Culzoni, Bs. As., 1998.
- - - - , Los derechos públicos subjetivos, Depalma, Bs. As., 1985.
RETJMAN FARAH, MARIo, Impugnación judicial de la actividad ad-
ministrativa, La Ley, Bs. As., 2000.
RODRÍGUEZ, MARÍA JosÉ, El acto administrativo tributario. Con la
aplicación de los principios y garantías del procedimiento ad-
ministrativo, Ábaco, Bs. As., 2004.
RUDH0L11, STEN, "Los guardianes de la ley en Suecia", en El om-
budsman. El defensor del ciudadano, Fondo de Cultura Eco-
nómica, México, 1986.
RUIZ DE ARruGO, MARA, "La importancia de las excepciones (en rela-
ción al régimen de consolidación de bonos)", LL, Suplemento
de Derecho Administrativo, edición del 29/09/03.
SAGUÉS, N ESTOR PEDRO, Constitución de la N ación Argentina, 8a ed.,
Astrea, Bs. As., 1998.
SANMARTINO, PATRICIO MARcELO E., "Impugnación de actos de alcan-
ce general", en Procedimiento administrativo , Jornadas orga-
nizadas por la Universidad Austral - Facultad de Derecho,
Ciencias de la Administración, Bs. As., 1998.
SARRíA, CONSUELO, "Control judicial de la Administración Pública", en
Justicia administrativa, Universidad del Norte Santo Tomás de
Aquino - Católica de Tucumán -Ediciones UNSTA, Tucumán, 1981.
SESÍN, DOMINGO, "Defensor del Pueblo, Poder Judicial y Derechos
de Incidencia Colectiva", en Foro de Córdoba, Suplemento de
Derecho Administrativo y Constitucional, N° 1, Advocatus, Cór-
doba,2000.
- - - - , "Discrecionalidad administrativa y conceptos jurídicos
indeterminados", en El derecho administrativo argentino, hoy,
Editorial Ciencias de la Administración, Bs. As., 1996.
DERECHO. PRo.CESAL ADMINISTRATIVO. II 479

SESÍN, DOMINGO, "La materia contencioso administrativa en Córdoba",


Revista de Derecho Público, Rubinzal-Culzoni, Bs. As., 2003-l.
- - - - , Administración Pública. Actividad reglada, discrecio-
nal y técnica. Nuevos mecanismos de control judicial, Depal-
ma, Bs. As., 1994.
SILVESTRI, BEATRIZ - GoNZÁLEZ ARzAc, RAFAEL, "La instancia adminis-
trativa previa a la judicial en la ley 19.549 (recursos y recla-
mos)", ED, tomo 72.
SOTo. KLo.ss, EDUARDO., "El ombudsman nórdico sajón", en Revista
Argentina de Derecho Administrativo, Año 1, N° 1 (1971).
SPOTA, ALBERTO. ANTo.NIo., "El defensor del Pueblo", en ED, N° 9145,
edición del 09/12/96.
TAWIL, GurDO. SANTIAGO, Administración y justicia, t. 1, Depalma,
Bs. As., 1993.
USLENGHI, ALEJANDRO., Proceso administrativo-lI, 2003-2, Rubinzal
Culzoni, Bs. As., 2003.
..
ÍNDICE

PALABRAS PREVIAS ................................................................................... 7

CAPÍTULO VIII
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS
Graciela Montesi
I. Los recursos administrativos: Concepto amplio. II. Recurso, reclama-
ción y denuncia. III. Requisitos formales y sustanciales de los recursos.
IV. Efectos de la interposición de los recursos. V. Vistas y traslados.
VI. Notificación y publicación. VII. Apertura a prueba. VIII. Medios
de prueba. IX. Producción y valoración de la prueba. X. Los plazos en
el procedimiento administrativo. XI. Interrupción, suspensión y
remisión de los plazos procesales. XII. Caducidad de las actuaciones
administrativas. XIII. El silencio administrativo y el deber de resol-
ver. XIV. La suspensión del acto administrativo como consecuencia
de la interposición de un recurso administrativo ........................................ 9

CAPÍTULO IX
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN
PROVINCIAL
Ignacio M. Vélez Funes - Liliana N. Villafañe
I. Recursos administrativos. Clases. n. Recurso de reconsideración.
III. Recurso jerárquico. IV. Recurso de alzada. V. Queja o recurso direc-
to. VI. Recurso de revisión. VII. Aclaratoria. VIII. Efectos de los recur-
sos administrativos. IX. Reclamo administrativo previo. X. Derechos
reconocidos en la ley N° 8835. XI. Amparo por mora. XII. Relevancia
del agotamiento de la vía administrativa. XIII. Hábeas data. XIV. Ac-
ceso al conocimiento de los actos del Estado (ley N° 8803). XV. Regí-
menes recursivos especiales ........................................................................ 55
482 ÍNDICE

CAPÍTULO X
LOS RECURSOS ADMINISTRATIVOS EN EL ORDEN FEDERAL
Liliana N. Villafañe
1. Consideraciones generales. II. Recurso de reconsideración. III. Recurso
jerárquico. IV. Recurso de alzada. V. Recurso de revisión. VI. La queja.
VII. Aclaratoria. VIII. Rectificación de errores materiales. IX. Reclamo
administrativo previo. X. Amparo por mora administrativa. XI. Denun-
cia de ilegitimidad. XII. Hábeas data. XIII. Regímenes recursivos espe-
ciales ............................................................................................................ 101

CAPÍTULO XI
CONTROL JUDICIAL DE LA ACTIVIDAD ADMINISTRATIVA
Eduardo Ávalos
1. Introducción. II. Sistemas de control. I1I. Los elementos constituti-
vos del proceso contencioso administrativo. IV. Principios que rigen el
proceso contencioso administrativo. V. Características básicas de la
jurisdicción contencioso administrativa. VI. Distintas clases de proce-
sos contencioso administrativos. VII. El control judicial del ejercicio
de facultades discrecionales de la Administración. VIII. El control
judicial de la inactividad administrativa. Inactividad formal e inacti-
vidad material de la Administración. IX. La impugnación judicial de
los reglamentos .......................................................................................... 145

CAPÍTULO XII
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO
EN LA PROVINCIA DE CÓRDOBA
Ignacio M. Vélez Funes - Liliana N. Villafañe
1. Los órganos de la jurisdicción. II. La materia contencioso adminis-
trativa en Córdoba. II!. La situación de los llamados actos de gobierno
o políticos. IV. Técnicas jurídicas de control de la discrecionalidad. V.
Otras materias excluidas. VI. La demanda. VII. La habilitación de ins-
tanciajudicial. VIII. La suspensión de los efectos de la decisión im-
pugnada. IX. Citación y notificación. X. Contestación de la deman-
da. Las excepciones. XI. La prueba. XII. La sentencia. Efectos. XIII.
Recursos contra la sentencia. XIV. La ejecución de la sentencia.
XV. Perención de instancia. XVI. Control judicial de los entes regula-
dores ............................................................................................................ 177

DERECHO PROCESAL ADMINISTRATIVO II 483

CAPÍTULO XIII
EL PROCESO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO
EN LA NACIÓN
Eduardo Ávalos
1. Introducción: ¿existe en realidad la acción contencioso administra-
tiva federal? lI. Normativa aplicable ante la ausencia de codificación.
lII. La habilitación de la instancia. IV. La suspensión de actos admi-
nistrativos en sede judicial. V. La ejecución de sentencias contra la
Nación y la emergencia permanente ......................................................... 235

CAPÍTULO XIV
EL PROCEDIMIENTO DE CONTROL
DE LAS IRREGULARIDADES ADMINISTRATIVAS
Jorge Orgaz
1. Introducción. II. La Fiscalía de Investigaciones Administrativas. lII.
El Defensor del Pueblo. IV. La Oficina Anticorrupción. V. Análisis com-
parativo entre la Fiscalía de Investigaciones Administrativas, el De-
fensor del Pueblo Nacional y la Oficina Anticorrupción Nacional ......... 305

ANEXO LEGISLATIVO

LEGISLACIÓN NACIONAL

Ley N" 24.284 - Creación de la Defensoría del Pueblo ............................. 381


Ley N° 25.326 - Protección de Datos Personales ...................................... 391
Decreto N° 1558/2001 - Protección de los Datos Personales ................... 409
Decreto N° 102199 - Oficina Anticorrupción ............................................. 421

LEGISLACIÓN PROVINCIAL

Ley N° 7741- Defensor del Pueblo ............................................................ 427


Ley N° 8508 - Acción de amparo por mora de la Administración ........... 433
Ley N° 8803 - Ley de Acceso al conocimiento de los Actos del Estado ... 437
Decreto N° 87/01 - Oficina Anticorrupción de la Provincia de Córdoba. 441
Decreto N° 1753 - Reglamentación de la Ley N° 9120 .............................. 445

BIBLIOGRAFÍA ................................................................................... ____ 4::;¡

Вам также может понравиться