IGLESIA NUEVA SION – EL MILÁN.

SEMINARIO PARA SERVIDORES Y SERVIDORAS DE ESCUELA BÍBLICA

INFANTIL.

Maestros de Excelencia Instrumentos de vida.

“Formando una generación de excelencia para Jesús”

BIENVENIDOS.

INICIO = 25 DE AGOSTO DE DOS MIL DIECINUEVE.

 EJERCICIO DE APERTURA:

1. ¿Quién es un buen maestro?

2. ¿Qué hace que un maestro sea bueno?

3. ¿Qué características tiene un buen alumno?

4. ¿Cuántas personas de las que usted enseña tienen esas características que usted mencionó?
Tomé entre mis manos la pequeña mano de un niño.
Él y yo íbamos a caminar juntos durante un tiempo. Yo debía guiarle hasta el Padre. Era una tarea que me
abrumaba, pues era tremenda la responsabilidad.
Y yo le hablaba al pequeño solamente del Padre. Le pinté la severidad del Padre si el niño hacía cosas que
no le agradaban. Pasamos junto a árboles altos.
Yo le dije que el Padre tenía poder para derribarlos, echarlos abajo por su rayo fulminante.
Caminamos bajo el sol. Le hablé de la grandeza del Padre que hizo el sol que quemaba y resplandecía.
Y, en un ocaso, nos encontramos con el Padre.
El niño se escondió detrás de mí; tenía miedo; no quería mirar a ese rostro tan severo. El recordó mi
descripción; no quería poner su mano en la mano del Padre. Yo estaba entre el niño y el Padre. Comencé a
examinarme. Yo había sido tan exageradamente serio.

Tomé entre mis manos la pequeña mano de un niño.

Debía guiarle hasta el Padre. Yo me sentía agobiado por la multitud de cosas que iba a enseñarle.
No perdíamos el tiempo dando vueltas. Nos apurábamos para ir de un lugar a otro. En un momento estábamos
comparando las hojas de los árboles,
Al siguiente estábamos examinando el nido de un pájaro. Mientras el niño me preguntaba en cuanto al nido,
Yo lo sacaba corriendo de allí para que siguiera a una mariposa.
Si por casualidad se llegaba a quedar dormido, lo despertaba porque no quería que se perdiera nada. Yo
quería que viera.
Hablábamos del Padre a menudo y rápidamente. Yo vaciaba en sus oídos todas las historias que debía saber;
pero a menudo nos interrumpía el soplo del viento, del cual debíamos hablar;
La salida de las estrellas, que debíamos estudiar,
Él burbujear de la corriente, que debíamos seguir para ver dónde nacía
Y luego, al ocaso, nos encontramos con el Padre.
El niño apenas lo miro. El Padre le extendió su mano, pero el niño no tenía el interés suficiente para tomarla.
Sus mejillas ardían de fiebre. Se dejó caer, exhausto, sobre el suelo, y se quedó dormido; otra vez yo estaba
entre el niño y el Padre. Comencé a examinarme. Le había enseñado tantas, tantas cosas.
Tomé entre mis manos la pequeña mano de un niño para guiarlo hasta el Padre. Mi corazón estaba lleno de
gratitud por el hermoso privilegio.
Caminamos lentamente. Yo adaptaba mis pasos a los pasitos cortos del niño.
Hablamos de las cosas que al niño le llamaban la atención.
A veces era una de las aves del Padre; mirábamos cómo construía su nido, la mirábamos poner sus huevos.
Después nos interesaba el cuidado que daba a sus hijitos.
A veces juntábamos las flores del Padre, y apretábamos sus pétalos suaves, y admirábamos sus colores
brillantes. A menudo contábamos historias del Padre. Yo se las contaba al niño y él me las contaba a mí. Nos
las contábamos los dos una y otra vez.
A veces parábamos para descansar, recostándonos en los árboles del Padre, y dejábamos que su aire
refrescara nuestra frente, y no hablábamos.
Y luego, al ocaso, nos encontramos con el Padre,
Los ojos del niño brillaron. Miró hacia arriba con amor, confianza y deseo al rostro del Padre
Puso su mano en la mano del Padre. Por un momento se olvidaron de mí. Yo estaba contento.

“No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros, y os he puesto para que vayáis y
llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca”
Juan 15:16
¿Qué clase de maestro busca Dios?
“Porque el siervo del Señor no debe ser contencioso, sino amable para con todos, apto para
enseñar, sufrido; que con mansedumbre corrija a los que se oponen, por si quizás Dios les conceda
que se arrepientan para conocer la verdad, y escapen del lazo del diablo, en que están cautivos a
voluntad de él.”
2 Timoteo 2:24-26
“Porque el siervo de Dios no debe andar en peleas. Por el contrario,debe ser bueno con todos, saber
enseñar, y tener mucha paciencia. Y cuando corrijas a tus enemigos, hazlo con humildad . Tal vez
Dios les dé la oportunidad de arrepentirse y de conocer la verdad. Entonces podrán darse cuenta
de que cayeron en una trampa del diablo y lograrán escapar”.
2 Timoteo 2:24-26
El maestro Cristiano
Una persona con vocación, llamada y capacitada por Dios. Debe presentar las virtudes espirituales
que menciona. Galatas 5:22,23.
Tareas y Responsabilidades del Maestro
Alcanzar
Testificar
Cultivar
Enseñar
Dirigir
Formación del carácter cristiano.
Compartir la palabra de Dios (conocimiento espiritual)
Maestro que predica con su ejemplo
La mejor lección que dará será con su ejemplo. Ejemplo significa: “el molde” o “modelo”.
“Sed imitadores de mi como yo de Cristo” 1 Corintios 11:1.

El Maestro y la enseñanza
¿Cómo es que crece un Maestro?
Balance
Crecimiento Espiritual.
Crecimiento en el conocimiento de sus alumnos.
Crecimiento en las aptitudes de enseñanza.
El maestro enseña a través de:
Sus palabras
Sus Hechos
Su personalidad
El maestro tiene que conocer lo que ha de enseñar
Solo la Palabra de Dios es la verdad
El maestro tiene que conocer lo que ha de enseñar
¿Que efecto tiene para tu vida la lección bíblica que vas a presentar?
Deuteronomio 4:1: “Ahora, pues, oh Israel, oye los estatutos y decretos que yo os enseño, para
que los ejecutéis, y viváis, y entréis y poseáis la tierra que Jehová el Dios de vuestros padres os da”

Deuteronomio 5:1: “Llamó Moisés a todo Israel y les dijo: oye, Israel, los estatutos y decretos que
yo pronuncio hoy en vuestros oídos aprendedlos y guardadlos para ponerlos por obra”

El Maestro
1: Los maestros son responsables de causar que sus estudiantes aprendan.
2: Los maestros son responsables delante de Dios por su influencia.
3: Los maestros son responsables porque ellos controlan el contenido, el estilo, el ambiente y asi
mismos.
4: Los maestros deben evaluar su éxito en base al éxito de sus alumnos.
5: Los maestros tienen más impacto por su carácter y su compromise que el que tienen por su
comunicación.
MENSAJE: “Causar que aprendan”
Sugerencias:
A: Ame a sus alumnos consistente e incondicionalmente.
P: Ponga en práctica sus talentos y dones, siendo usted mismo.
R: Regularmente cambie su estilo de acuerdo con cada situación.
E: Exponga el tema de acuerdo con las necesidades y los intereses de sus alumnos.
N: Note constantemente las actitudes, la participación y las acciones de sus alumnos.
D: Dependa del Espíritu Santo para una enseñanza sobrenatural.
A: Aprenda a usar sus habilidades fuertes para compensar sus debilidades.

Necesidades
1: Identificar la necesidad ( del alumno) es la responsabilidad principal del maestro.
2: Satisfacer la necesidad es el llamado principal del maestro.
3: Para satisfacer esta necesidad nuestra enseñanza debe ser deliberada, organizada, sistemática,
práctica y evaluada ( según las características y las circunstancias de la audiencia).
Discipulado
No más clases Sino encuentros hacia una Transformación Espiritual
Tarea
Tarea que da vida
Discipulado
Aplicando, enseñando, llevando la palabra y discipulando.
Responsabilidad de llevar a cabo esta encomienda que Dios ha dejado a cada uno de nosotros.
Efesios 4:11-15: “Y Él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; a
otros, pastores y maestros, a fin de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la
edificación del cuerpo de Cristo, hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento
del Hijo de Dios, a un varón perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo; para que ya
no seamos niños fluctuantes, llevados por doquiera de todo viento de doctrina, por estratagema de
hombres que para engañar emplean con astucia las artimañas del error, sino que siguiendo la
verdad en amor, crezcamos en todo en aquel que es la cabeza, esto es, Cristo.”
Efesios 4:11-15: “11 Él fue quien les dio a unos la capacidad de ser *apóstoles; a otros, la de ser
evangelistas; y a otros, la de ser pastores y maestros. 12 Hizo esto para que todos los que
formamos la iglesia, que es su cuerpo, estemos capacitados para servir y dar instrucción a los
creyentes. 13 Así seremos un grupo muy unido y llegaremos a tener todo lo que nos falta; seremos
perfectos, como lo es Cristo, porque conocemos al Hijo de Dios y hemos confiado en él. 14 Ya no
seremos como niños, que ahora piensan una cosa y más tarde piensan otra, y que son fácilmente
engañados por las falsas enseñanzas de gente astuta que recurre a toda clase de trampas. 15 Al
contrario, el amor debe hacernos decir siempre la verdad, para que en todo lo que hagamos nos
parezcamos cada vez más a Cristo, quien gobierna sobre la iglesia..” (BLS)
El maestro y el discipulado en el alumno

Comentarios:
#1: La responsabilidad del desarrollo o de equipar cae sobre el maestro.
#2: Es más efectivo equipar cuando el maestro asume el papel bíblico.
#3: El desarrollo es evaluado mejor por lo que el alumno hace después del estudio.
#4: El equipar se debe enfocar más intensamente en los más comprometidos.
#5: La meta final del desarrollo es producir discípulos que se multipliquen.
MENSAJE: “Equipar para servir”
Sugerencias:
E: Entrene a sus alumnos hasta que apliquen con destreza por si mismos.
Q: Quede reproducido al enfocarse en las habiliades de ellos, no en su propio estilo.
U: Use el diversificar de la capacitación de acuerdo a las características y circunstancias de sus
alumnos.
I: Incremente la motivación por medio de la relación personal, la retribución y la recompensa.
P: Posea lo básico antes de desarrollar habilidades más avanzadas.
A: Anime a sus alumnos con más frecuencia al principio de la práctica.
R: Reafirme a sus alumnos independientemente de su nivel de rendimiento.

Aplicación para una transformación

1: La aplicación es la razón principal para la revelación de Dios.
2: La aplicación y la información deben estar apropiadamente balanceadas.
3: La aplicación enfoca la Escritura hacia las necesidades del alumno.
4: La aplicación tiene que llevar al alumno desde el estudio de la Biblia hasta la obediencia al Señor.
“Aplicar para cambio de vida”
Sugerencias:
A: Anhele y pida a Dios que desarrolle en usted el corazón de quien aplica.
P: Prepare aplicaciones en relación a las necesidades de sus alumnos.
L: Logre planear todas las partes del estudio de forma que aplique a la vida del alumno.
I: Ilustre la aplicación con la Escritura, historia, experiencia personal e imaginación.
C: Conduzca a sus alumnos a la obediencia.
A: Aplique un estilo apropiado al pedir un compromiso.
R: Refuerze las aplicaciones llevándolos a relaciones de responsabilidad.
“Así TODOS nosotros, que con el rostro descubierto reflejamos como en un espejo la gloria del
Señor, somos transformados a su semejanza con más y más gloria por la acción del Señor, que es el
Espíritu” 2 Corintios 3:18
Deuteronomio 6:4-9: “Oye, Israel: Jehová nuestro Dios, Jehová uno es. Y amarás a Jehová tu Dios
de todo tu corazón, y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas. Y estas palabras que yo te mando
hoy, estarán sobre tu corazón; y las repetirás a tus hijos, y hablarás de ellas estando en tu casa, y
andando por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes. Y las atarás como una señal en tu
mano, y estarán como frontales entre tus ojos; y las escribirás en los postes de tu casa, y en tus
puertas”

RETENCIÓN

El Hogar y el Maestro
(Retención)
1: La retención de los datos por parte del niño es responsabilidad del padre en el hogar y del
maestro en la iglesia.
2: La retención aumenta en la medida que el alumno reconoce la relevancia o importancia del
contenido para su vida.
3: La retención requiere que el padre y el maestro enfoque los datos que son más importantes.
4: La retención arregla los datos de tal forma que sean fáciles de memorizar.
5: La retención disminuye el tiempo de la memorización para dar más tiempo a la aplicación.
“Maximizar lo esencial”
Avivamiento
II Samuel 12:1-15: “Jehová envió a Natán a David; y viniendo a él, le dijo: Había dos hombres en una
ciudad , el uno rico y el otro pobre. El rico tenía numerosas ovejas y vacas; pero el pobre no
 tenia más que una sola corderita, que él había comprado y criado, y que había crecido con él y
con sus hijos juntamente, comiendo de su bocado y bebiendo de su vaso, y durmiendo en su
seno; y la tenía como a una hija. Y vino uno de camino al hombre rico; y éste no quiso tomar de
sus ovejas y de sus vacas, para guisar para el caminante que había venido a él, sino que tomó
la oveja de aquel hombre pobre, y la preparó para aquel que había venido a él.
Entonces se encendió el furor de David en gran manera contra aquel hombre, y dijo a Natán: Vive
Jehová, que el
que tal hizo es digno de muerte. Y debe pagar la cordera con cuatro tantos, porque hizo tal cosa, y
no tuvo misericordia.
Entonces dijo Natán a David: Tú eres aquel hombre. Así ha dicho Jehová, Dios de Israel: Yo te ungí
por rey sobre Israel, y te libré de la mano de Saúl, y te dí la casa de tu señor, y las mujeres de tu
señor en tu seno; además te dí la casa de Israel y de Judá; y si esto fuera poco, te habría
añadido mucho más. ”“¿Por qué, pues, tuviste en poco la palabra de Jehová, haciendo lo malo
delante de sus ojos? A Urias heteo heriste a espada, y tomaste por mujer a su mujer, y a él lo
mataste con la espada de los hijos de Amón.
Por lo cual ahora no se apartará jamás de tu casa la espada, por cuanto me menospreciaste, y
tomaste la
mujer de Urias heteo para que fuese tu mujer. Así ha dicho Jehová: He aquí y haré levantar el mal
sobre tí de
tu misma casa, y tomaré tus mujeres delante de tus ojos, y las daré a tu prójimo , el cual yacerá con
tus mujeres a la vista del sol. Porque tú lo hiciste en secreto; mas yo haré esto delante de todo
Israel y a pleno sol.
Entonces dijo David a Natán: Pequé contra Jehová.
Y Natán dijo a David: También Jehová ha remitido tu pecado; no morirás.
Mas por cuanto con este asunto hiciste blasfemar a los enemigos de Jehová, el hijo que te ha
nacido ciertamente morirá. Y Natán se volvió a su casa. Y Jehová hirió al niño que la mujer de
Urias Había dado a David, y enfermó gravemente”
AVIVAMIENTO
“Pasos que Natan uso para llevar a David al avivamiento.”
2a. Samuel 12: 1 “Jehová envió a Natán a David…. Comisión
2a. Samuel 12: 7 Tú eres aquel hombre….. Confrontación
2a. Samuel 12: 9 la Palabra de Jehová,…. Mandamiento
2a. Samuel 12:10 Por lo cual ahora…… Consecuencia
2a. Samuel 12:13 Pequé contra Jehová…… Confesión
LA LEY DEL AVIVAMIENTO MODELO

Comentarios:
#1: El avivamiento es posible sólo para los que primero han experimentado el segundo nacimiento.
#2: El avivamiento no es un evento terminado sino una experiencia contínua.
#3: El avivamiento siempre requiere el arrepentimiento real y el abandonar el pecado conocido.
#4: El avivamiento siempre trae como resultado un fervor renovado.
#5: El avivamiento reestablece el sistema central de prioridades de la vida.
MENSAJE: “Renovar el corazón”
Sugerencias:
A: Anhele el avivamiento con la oración ferviente y persistente tanto en público como en privado.
V: Varíe su enseñanza de acuerdo a la madurez espiritual de sus alumnos.
I: Instruya en el conocimiento y práctica de las disciplinas espirituales.
V: Verbalice el llamado final a un compromiso con claridad y expectación.
A: Anticipe que el avivamiento venga acompañado de una intensa guerra espiritual.
D: Dése cuenta que el avivamiento lo necesitan la mayoría de los cristianos todo el tiempo.
O: Ofrézcase a Dios como un vaso limpio comprometido al avivamiento.

El Maestro de Dios es el canal

Avivamiento
La corona o el fin de todo esto es cuando tomamos el corazón del alumno y lo ponemos en las
manos de Dios.
"Y oío la voz del Señor que decía: ¿Aquién enviaré, y quién irá por nosotros? Entonces respondí:
Héme aquí; envíame a mí" Isaías 6:8
Tomé entre mis manos la pequeña mano de un niño para guiarlo hasta el Padre. Mi corazón estaba
lleno de gratitud por el hermoso privilegio.
Caminamos lentamente.Yo adaptaba mis pasos a los pasitos cortos del niño.
Hablamos de las cosas que al niño le llamaban la atención.
A veces era una de las aves del Padre; mirábamos cómo construía su nido, la mirábamos poner sus
huevos. Después nos interesaba el cuidado que daba a sus hijitos.
A veces juntábamos las flores del Padre, y apretábamos sus pétalos suaves, y admirábamos sus
colores brillantes. A menudo contábamos historias del Padre. Yo se las contaba al niño y él me las
contaba a mí. Nos las contábamos lo dos una y otra vez.
A veces parábamos para descansar, recostándonos en los árboles del Padre, y dejábamos que su
aire refrescara nuestra frente, y no hablábamos.
Y luego, al crepúsculo, nos encontramos con el Padre,
Los ojos del niño brillaron. Miró hacia arriba con amor, confianza y deseo al rostro del Padre, puso
su mano en la mano del Padre. Por un momento se olvidaron de mí. Yo estaba contento.

"Formando una generación de excelencia para Jesús"

Maestros de Excelencia Instrumentos de vida.
Hasta la próxima