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ANÁLISIS NARRATIVO DE TEXTOS BÍBLICOS

EJEMPLOS PARA EL ANÁLISIS DE UN PERSONAJE

En la primera actividad de este curso, entramos al mundo del texto y su contexto a través de la
mirada y experiencia de un personaje elegido por nosotros y nosotras. Recreamos su mirada a
partir de los insumos del texto y de las lecturas. A continuación, algunos insumos que pueden
ayudar a analizar personajes en la narrativa bíblica. Los ejemplos son tomados del libro de
Shimon Bar-Efrat, El arte de la narrativa bíblica. Cristiandad, 2003.

I. PARA LA RECOPILACIÓN DE INSUMOS SOBRE LA CARACTERIZACIÓN DEL PERSONAJE

El narrador crea sus personajes: la caracterización

Un personaje de una obra literaria no es más que el conjunto de los medios usados
en su descripción. Mientras que en la vida real un individuo existe tanto si alguien
lo describe o no, en la literatura es el retrato el que crea el personaje (Bar-Efrat,
2003, 60).

• El narrador cuidadosamente construye cada personaje a través de la caracterización


directa: nos descripciones y valoraciones del personaje; y la caracterización indirecta:
sus palabras, acciones, las palabras de otros, sus acciones, sentimientos, etc.
• El proceso para realizar el análisis de un personaje dentro de la narrativa bíblica sería el
siguiente: a) recopilar los insumos que aporta el narrador, b) valorar y analizarlos, c)
sacar conclusiones sobre el personaje, su caracterización y su función en la narración (y
cuando corresponda, en el marco literario más amplio).
• Otro paso que se puede dar posteriormente es comparar el personaje con otros
similares, o en circunstancias similares, o valorar cambios en el personaje entre un texto
y otro (por ejemplo, podríamos comparar a Abraham e Isaac en los relatos sobre las
hermanas/esposas, o valorar el personaje de Abraham en Génesis 16 y 23, para ver
distinciones en situaciones muy similares.

A continuación, ejemplos de la caracterización de personajes. Aquello que se nos describe de


manera explícita (es bueno, alto, bonita, sagaz, triste, enfermo) es una caracterización directa,
una afirmación que se toma como un hecho. La caracterización indirecta es más complicada,
aunque más frecuente. Requiere que saquemos conclusiones a partir de acciones, palabras, las
opiniones de otros personajes, etc. Como señala Bar-Efrat:

Mientras que los mecanismos directos para dar forma a los personajes son importantes por su
calidad (son aserciones claras e inequívocas), los indirectos lo son por su cantidad. Es decir, en la
narrativa bíblica, se da en mucho mayor grado la construcción indirecta de los personajes que la
directa. En consecuencia, el peso de la caracterización recae sobre todo en este método. Formas
indirectas de modelar los personajes aparecen en todos los rasgos externos, como el habla o las
acciones, que pudieran indicar algo sobre la vida interior del individuo. El lector ha de interpretar
esos detalles y construir la idiosincrasia mental y emocional del personaje, empresa que el narrador
no acomete. En consecuencia, la caracterización indirecta requiere un esfuerzo mental del lector y,
por tanto, éste participa más activamente en la trama (Bar-Efrat, p. 81).

Caracterización directa

La caracterización directa consiste en la descripción que hace el narrador de la apariencia física,


el estado anímico y la personalidad del personaje. La información sobre la apariencia física no
tiene la intención de que podamos visualizar a la o el personaje, sino que ofrece información que
sirve para avanzar la trama del relato. La caracterización directa incluye la apariencia, el carácter,
estado de ánimo, personalidad u otros elementos que el narrador nos señala de manera directa.

La caracterización directa la aporta el narrador, otros personajes, y Yahvé. Cada uno tiene un
impacto distinto en nuestra apreciación. El narrador se considera confiable, Yahvé es el que
evalúa los personajes, y otros personajes pueden tener opiniones que varían según su rol e
intereses en el relato.

• Apariencia

“Lía tenía los ojos apagados, Raquel era guapa y de buen tipo” (Gn 29.17):
esta información pretende explicar por qué Jacob ama a Raquel y no a Lía.

La descripción detallada de la vestimenta y armadura de Goliat – “…casco de


bronce…malla de bronce… grebas de bronce…jabalina de bronce, lanza
de…seis kilos…” - es un medio para enfatizar lo sorprendente de la victoria
de David (1 Sm 17).

En 2 Sam 13.1, Tamar es descrita como “hermosa”. Al final del relato asume
importancia su vestimenta: “vestía ella una túnica con mangas, porque así
vestían antes las hijas del rey que eran vírgenes” (v.18); “rasgó la túnica de
mangas que llevaba” (v.19). La hermosura ( ‫ )יָפֶ ה‬de una mujer, en muchos
textos bíblicos, “explica” el deseo de uno o varios hombres hacia ella (Sara,
Raquel, Abigail, Betasbé, Susana).

Carácter, personalidad, y/o estado de ánimo. De la misma manera que la descripción física, los
rasgos de personalidad descritos por el narrador tienen que ver directamente con la trama del
relato.

“Noé fue en su época un hombre recto y honrado y procedía de acuerdo


con Dios” (Gn 6.9): nos prepara para el hecho de que Noé es escogido para
ser rescatado del diluvio.

En 2 Sam 13, el narrador presenta a Amnón en el v.1 como hijo de David,


prendado de Tamar, la hermana de Absalón. En el v.2 el narrador describe
el estado anímico de Amnón: “estaba tan atormentado que se puso
enfermo”. Este estado anímico mueve las acciones de la trama. En la escena
central del relato, el narrador nos describe otro sentimiento de Amnón que
cambia la dirección de la trama: “Amnón la aborreció con tan gran
aborrecimiento, que fue mayor su aborrecimiento que el amor con que la
había amado”. El gran deseo de Amnón se convierte en odio luego de haber
logrado lo que quería: estar con Tamar.

También tenemos una caracterización que deriva de las palabras de otros personajes acerca del
personaje que analizamos:

Abigail tratando de evitar que David mate a su esposo y tome sus


propiedades y bienes, crea un discurso que alaba a David, en tanto ella se
somete como su sierva y le ofrece regalos: “Ciertamente el Señor le dará
una dinastía que se mantendrá firme, y nunca nadie podrá hacerle algún
daño, pues usted pelea las batallas del Señor” (1 Sam 25.28). Estas
palabras acerca de David deben ser analizadas en su contexto, como
parte de un discurso que busca convencer, suavizar, y no como datos que
aporta el narrador sobre David.

• Caracterización indirecta

Las palabras y acciones de un personaje nos sugieren rasgos de su personalidad, intenciones,


confiabilidad, etc. La caracterización indirecta requiere de la participación de la lectora o el
lector, quien debe interpretar los detalles aportados y sacar conclusiones acerca del personaje.
Las palabras, el discurso, de un personaje refleja algo acerca de sí, como también de quien lo y
la escucha. Ilumina calidades de la persona, su posición social, de sus intenciones, convicciones
y estado emocional y psicológico.

La hospitalidad y el respeto de Abrám hacia sus huéspedes resalta en su fórmula


de invitación: “Señor mío, si te he caído en gracia, no pases de largo cerca de tu
servidor…” (Gn 18.3)

Las palabras de Moisés ante la misión que Yahvé le encomienda nos dicen
mucho de su carácter: “¿Quién soy yo para acudir al Faraón o para sacar a los
israelitas de Egipto? (Ex 3.11)

Las acciones revelan la naturaleza de la persona, de hecho, revelan mucho más que sus
palabras. En la narración bíblica, los hechos son la forma predilecta de caracterizar a los y las
personajes.

Después de su brutal asesinato de la reina Jezabel, Jehú, “entró, comió y


bebió” (2 Re 9.34), como si no hubiera pasado nada.

Jonás huye a Tarsis después de haber recibido una orden directa de


Yahvé para ir a predicar a Níneve.

La solidaridad de Ruth hacia su suegra Noemí, resalta en el compartir de


los alimentos: “Mostró a su suegra lo que había espigado, sacó lo que le
había sobrado después de haberse saciado…” (Ruth 2.18).

II. PARA EL ANÁLISIS DEL PERSONAJE Y SU FUNCIÓN DENTRO DEL RELATO/LIBRO

Una vez hecho el estudio del personaje, nos toca reflexionar sobre el significado de dicha
caracterización. ¿Qué función tiene en el texto? ¿Hay contradicciones, ambigüedades? ¿Qué
intencionalidad tiene el narrador con la caracterización que desarrolla?

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