LOS CONECTORES

Se utilizan para indicar la dirección del desarrollo estructural del texto; por ello, se convierten en
uno de los componentes fundamentales para la cohesión global. La información del texto está
puesta al servicio de la intensión del mismo; es por esta razón que los conectores cumplen la
función de enlace entre las ideas.

Los conectores que más se usan para estructurar ideas son:

CONECTORES DE ADICIÓN CONECTORES DE ÉNFASIS.

Y, también, además, a esto se suma, a su vez, incluso, Sobre todo, lo que es más importante,
ciertamente, lo que es más, repetitivos, a meditar,
A parte, a un , adicional a lo anterior se incluye. exaltar que, especialmente, en otras palabras se
reitera que.

CONECTORES DE SEMEJANZA CONECTORES DE REAFIRMACIÓN

De igual modo, igual, análogamente, así mismo, de la En realidad, realmente, de todos modos, de
misma manera, del mismo modo, todavía más. hecho, de cualquier manera, después de todo, en
fin, mejor dicho, de otro modo, mejor dicho, es
decir, para decirlo de otro modo, esto es, osea

CONECTORES DE ILUSTRACIÓN O AMPLIACIÓN. CONECTORES DE RESUMEN

Por ejemplo, como, en otras palabras, es decir, de esta Para resumir, en conclusión, para finalizar, en
manera, así mismo, igualmente, para ilustrar como síntesis, por último
ejemplo, para mayor claridad.

CONECTORES DE CONTRASTE CONECTORES DE TEMPORALIDAD

Restrictivos: Pero, sin embargo, empero, por el contrario,
no obstante, aun así, ahora bien, con todo,
aunque inversamente, a pesar
Exclusivos: No solo, también, más bien, antes.
En el principio, inmediatamente, al instante, acto
seguido, en otra ocasión, al cabo de, mientras, al
mismo tiempo, simultáneamente, a la vez,
después, entre tanto, luego, más tarde, antes,
posteriormente, ahora, a continuación, ahora, a
continuación.

CONECTORES DE EFECTO Y CONDICIÓN CONECTORES CONDICIONALES EXCLUSIVOS

Sí, porque, por consiguiente, asi pues, por lo tanto, en Si en caso de que, supongamos, en tanto que, si a
resumidas cuentas, en definitiva, por ende, por eso por eso vamos, en ese caso.
esta razón, puesto que, en consecuencia, de ahí que, así
por este motivo, pues, de manera que, de hecho…
 CAMBIO DE ÉNFASIS O PERSPECTIVA ORDENADORES GENERALES

Por otra parte, de otra manera, en otro sentido, por el (De mayor uso) Para empezar, por otra parte,
contrario, de otro modo, en contraste si, con tal que, después, entonces, desde entonces, al final, al
puesto que, siempre que. principio.

CONECTORES ORDENADORES (TRES TIPOS)

A) Enumerativos: En primer lugar, luego, después,

enseguida, a continuación.
B) Conclusivos: Por último; en fin, finalmente,
brevemente, en pocas palabras, dicho de otro
modo, , total, en resumen, en conclusión.
C) Continuativos: Bueno, entonces, digamos…
ENCUENTRE LA ESTRUCTURA TEXTUAL DEL ARTÍCULO, DESDE LA UBICACIÓN DE LOS CONECTORES

1 La relación entre arte y belleza ha sido compleja desde

2 tiempos antiguos. Bajo el cobijo del mito y la religión o tras la

3 secularización moderna de la cultura, el arte y la belleza han

4 logrado uniones felices y han padecido drásticos desencuentros

5 que ponen al descubierto la contingencia de la unión entre arte

6 y vida, tan reiteradamente proclamada como acusada. El arte y

7 la belleza, son asi mismo, nociones escurridizas. Comparable al

8 arte que es un concepto refutable, sobre la belleza nadie tiene la ¿

9 tampoco la última palabra, como ocurre con la felicidad. La ILUSTRACIÓN O AMPLIACIÓN

10 confrontación entre arte y vida no ceja porque la belleza pulsa

11 de por medio, tensa a ambos como una promesa que los une o ILUSTRACIÓN O AMPLIACIÓN; DISYUNCIÓN

12 los opone y les recuerda su lugar: a la vida sus dependencias

13 y su prosa – vida sin belleza-, y al arte la soberanía meramente

14 decorativa de sus poéticas –belleza inútil-.

15 El arte del siglo XX nos legó prevenciones y temores contra

16 la belleza, difíciles de superar. Para las vanguardias de principios

17 del siglo, el arte como producción de belleza es el arte del

18 pasado, el arte del poder y de los valores burgueses cuya

19 validez desestimó la Primera Gran Guerra. Según la consígna

20 dadaísta, lo que el nuevo artista necesita para el arte del

21 presente ya no es estética, sino un estado mental, y junto a su

22 actitud libertaria campea la consigna política activista del arte

23 comprometido de los movimientos revolucionarios de

24 entonces. La instrumentalización de la belleza en los sistemas

25 totalitarios afianza la indisposición, desacredita la belleza en

26 el mundo de la vida cotidiana y la consagra para el arte de

27 propaganda; la belleza queda para la publicidad, para acreditar

28 con su aura de exclusividad la prodigalidad de los estímulos

29 para el consumo. Los artistas que se atienen a la autonomía

30 del arte tampoco se comprometen con la belleza; para

31 inmunizarse contra cualquier poder radicalizan dicha

32 autonomía, la convierten en un autoreferencia que no admite

33 para el arte más logros que los estéticos, compensaciones a la

34 lidia experimental con los medios respectivos de cada arte. Por

35 eso es hoy tan difícil concebir una relación desaprensiva entre

36 el arte y la belleza, o practicar una crítica de arte capaz de

37 nombrarla..

Tomado de: Fernández, Carlos y otros. “¿Quién le teme a la belleza?”

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