Revista

Española
de FÍSICA
una publicación de la Real Sociedad Española de Física
www.rsef.es Volumen 33  • Número 1  • 2019

•  Carta del Presidente de la RSEF •  Reseñas, Noticias, Puntos de Interés

•  Temas de Física y Notas de clase •  Mi clásica favorita: Vera Rubin
•  Entrevista al Nobel Carl Wieman •  Nodos de la Física: Centro  
•  Recordando a Sir Michael Atiyah de Astrobiología
 Revista
Española
de FÍSICA Volumen 33  •  Número 1  • Enero-marzo 2019

Revista de Física (RdF)

www.revistadefisica.es ÍNDICE
Es una publicación de la Real Sociedad Española
de Física, que es miembro de la Federación
1 Editorial, Carta del Presidente. 50 años de la EPS: una lección aún vigente, José
Premios
Iberoamericana de Sociedades de Física (FEIASOFI)
y de la European Physical Society (EPS) y mantiene
Adolfo de Azcárraga
acuerdos con la American Physical Society (APS) y Temas de Física
otras sociedades científicas. El equipo de dirección,
5 Los arcanos de la radiación cósmica de ultra alta energía, Antonio Bueno Villar
que no se hace responsable del contenido de los La Fundación BBVA y la RSEF colaboran un año más en la convocatoria y adjudicación de los PREMIOS DE FÍSICA RSEF - Fundación BBVA.
trabajos que aparecen firmados, agradece a los 10 Año Internacional de la Tabla Periódica (2019): una oportunidad para abordar En esta convocatoria se concederán ocho premios en las siguientes categorías y modalidades, con las dotaciones brutas indicadas:
autores su contribución voluntaria contextos de didáctica e historia de la física y la química, Gabriel Pinto, Manuela
Martín Sánchez, M. Araceli Calvo Pascual y Almudena de la Fuente Medalla de la Real Sociedad Española de Física
Director:
dotada con 15.000 euros
Augusto Beléndez Vázquez (UA)
19 Generación de combustibles sintéticos a partir de H2O y CO2: Electrolizadores de
Subdirectores:
óxido sólido, Marc Torrell Faro Investigador Joven
Antonio Dobado González (UCM) en las modalidades de Física Teórica y Física Experimental
José María Ortiz de Zárate Leira (UCM) 25 Wolframio: desde una supernova al Laboratorium de Bergara, Juan J. Iruin dotada cada una de ellas con 6.000 euros
Elena Pinilla Cienfuegos (UPV)
Editor General: Notas de clase Enseñanza y Divulgación de la Física
Miguel Ángel Fernández Sanjuán (URJC) 30 Píldoras de Física: un canal de comunicación entre docentes, Verónica Tricio en las modalidades de Enseñanza Media y Enseñanza Universitaria
Gómez, Ana Blanca Martínez-Barbeito, Chantal Ferrer Roca, Rafael García- dotada cada una de ellas con 6.000 euros
Secretaria de redacción:
Itziar Serrano Molina
Física, Innovación y Tecnología
Consejo editorial:
32 Un modelo significativo de tipo microscópico para la enseñanza-aprendizaje
dotado con 8.000 euros Convocatoria
Convocatoria 2019
2019
Antonio Acín Dal Maschio (ICFO) de los circuitos de corriente continua, Arturo Carcavilla Castro, M.ª Lucía Puey
Ángel Ballesteros Castañeda (UBU) Bernués Mejores Artículos en las Publicaciones de la Real Sociedad Española de Física
Mariona Coll (ICMAB-CSIC) 36 La Física es cool con el Energy Stick y la bola de plasma, Fernando Ignacio de Prada con dos premios asignados respectivamente a temas de Enseñanza y Divulgación
Eva M.ª Fernández Sánchez (UNED) Pérez de Azpeita, José Antonio Martínez Pons dotado cada uno de ellos con 1.500 euros
Pascuala García Martínez (UV)
Maia García Vergniory (DIPC) 40 Puntos de interés Modo y plazo de presentación de candidaturas
José Ignacio Íñiguez de la Torre Bayo (USAL)
M.ª del Carmen Lemos Fernández (US) 43 Recordando a Sir Michael Atiyah, J. Adolfo de Azcárraga Toda la documentación necesaria relativa a un premio deberá ser remitida en su totalidad (incluidas, en su caso, las cartas de presentación,
Mª del Prado Martín Moruno (UCM)
Benjamín Montesinos Comino (CAB, CSIC-INTA) Una entrevista con el Nobel Convocatoria 2019
cartas de apoyo y otros avales) antes de las 14 horas (hora peninsular) del martes 21 de mayo de 2019, por correo postal o por correo
electrónico, a la Real Sociedad Española de Física:
Pablo Nacenta Torres (IES Alameda de Osuna, 45 Carl Wieman, por Jenaro Guisasola
Madrid) Facultad de Ciencias Físicas
Jose M.ª Pastor Benavides (DEDF, RSEF)
Mi clásica favorita
Plaza de las Ciencias, 1
Ramón Román Roldán (DEDF, RSEF) 49 Vera Rubin, la astrónoma que nos hizo replantearnos de qué está hecho el
28040 Madrid
Carlos Sabin Lestayo (IFF-CSIC) universo, Sara Gil Casanova
Andrés Santos Reyes (UNEX)
Nodos de la Física
Tel.: 91 394 43 50 - secret.y.admon@rsef.es
Convo
Jesús Miguel Seoane Sepulveda (URJC) https://rsef.es/images/Fisica/BasesPdF2019.pdf

Si la candidatura contuviese errores subsanables, estos deberán ser subsanados en un plazo improrrogable de 7 días naturales desde que
Isabel Tanarro Onrubia (IEM-CSIC) 56 Centro de Astrobiología. 20 años estudiando la vida y el Universo, J. Miguel Mas- sean comunicados para que pueda ser tenida en consideración.
Mariam Tórtola Baixauli (IFIC, UV) Hesse, Víctor Parro, Ricardo Amils, Eduardo González-Pastor, Francisco Najarro,
Composición y edición: Olga Prieto-Ballesteros, Eduardo Sebastián y Juan Ángel Vaquerizo La convocatoria de estos premios se resolverá antes del 22 de septiembre de 2019
Disegraf Soluciones Gráficas, S. L.
http://www.disegrafsl.es 65 Hemos leído que… Real Sociedad Española de Física. Junta de Gobierno
Reseñas de libros de interés PRESIDENTE PRESIDENTES DE SECCIONES LOCALES J. Bernardo Parra Soto (Adsorción, GEADS)
Entidades patrocinadoras de la Real Sociedad
Española de Física:
67 Diez siglos de ciencia y científicos toledanos, Enrique García Gómez José Adolfo de Azcárraga Feliu M.ª del Mar Sánchez López (Alicante) J. Mª. Rodríguez Espinosa (Astrofísica, GEAS)
Universidad Complutense de Madrid 68 Microelectrónica. La historia de la mayor revolución silenciosa del siglo xx, J. P. Martínez Jiménez (Aragón) R. García Herrera (Física de la Atmósfera y de
Fundación BBVA Ignacio Mártil de la Plaza VICEPRESIDENTES J. Pisonero Castro (Asturias) Océano, GEFAO)
Fundación Ramón Areces 69 El año en que salvé a Einstein, José de la Peña Aznar
Íñigo Luis Egusquiza Egusquiza A. Ruiz Jimeno (Cantabria) J. A. Fernández González (Física Atómica y
CIEMAT 70 Descubriendo la luz. Experimentos divertidos de óptica, María Viñas Peña
Ministerio de Educación, Cultura y Deporte Miguel Ángel Sanchis Lozano M. A. López de la Torre (Castilla-La Mancha) Molecular, GEFAM)
(coord.)
Sidilab J. Jesús Ruiz Lorenzo (Extremadura) J. José Suñol (Calorimetría y Análisis Térmico, GECAT)
La Revista de Física se publica a razón In memoriam SECRETARIO GENERAL J. L. Legido Soto (Galicia) F. Monroy Muñoz (Coloides e Interfases, GECI)
de cuatro números por volumen anual, 71 Chus Martín Fernando Sols Lucia E. Romera Gutiérrez (Granada) P. Gómez Sal (Cristalografía y Crecimiento
por la Real Sociedad Española de Física J. Federico Echávarri Granado (La Rioja) Cristalino, GE3C)
Noticias
TESORERA G. Pinto Cañón (Didáctica e Historia de la Física
Depósito Legal: M-20734-1986 72 Entrega de los Premios de Física RSEF-FBBVA 2018 V. Madurga Pérez (Navarra)
María Varela del Arco y la Química, GEDH)
ISSN: 0213-862X
72 David Pérez García, Premio Miguel Catalán y Académico Correspondiente de la RAC I. L. Egusquiza Egusquiza (País Vasco)
73 Simposio de Tecnologías Cuánticas RSEF-FRA C. Hernández García (Salamanca) J. M. Martínez-Duart (Energía, GEE)
Real Sociedad Española de Física EDITOR GENERAL R. M.ª Benito Zafrilla (Física Estadística y No
73 Ignacio Cirac recibe el Diploma de Miembro Distinguido de la RSEF L. Rull Fernánez (Sevilla)
Facultad de Ciencias Físicas-UCM Miguel Ángel Fernández Sanjuán
Plaza de las Ciencias, 1
74 Ángel Rubio recibe en Londres la Medalla y el Premio Max Born 2018 A. Cross Stotter (Valencia) Lineal, GEFENOL)
28040 Madrid 74 Cold Atom Workshop-Bilbao 2018 M. Santander Navarro (Valladolid) J. José García Ripoll (Información Cuántica, GEIC)
75 Rafel Rebolo, Premio Nacional de Investigación Blas Cabrera VOCALES L. Bañares Morcillo (Láseres Ultrarrápidos, GELUR)
http://rsef.es J. Buceta Fernández (Sección Exterior)
75 Pablo Artal, Premio Nacional de Investigación Juan de la Cierva M.ª L. Amieva Rodríguez, F. Bartolomé Usieto, R. Vilaseca Alavedra (Óptica Cuántica y Óptica
Para temas relacionados con la RdF:
76 Jornada de presentación de IPARCOS en la UCM M.ª V. Fonseca González, A. Gil Gil, J. Guisasola PRESIDENTES DE DIVISIONES Y GRUPOS No Lineal, GEOCONL)
revista.de.fisica@rsef.es
76 La iniciativa 11 de Febrero no para de crecer Aranzábal, M.I. Hernández Hernández, ESPECIALIZADOS A. Sastre Santos (Nanociencia y Materiales
Tel.: 91 394 4359/50 M.ª José Calderón Prieto (División de Física de la
J. A. Manzanares Andreu, L. Morellón Alquézar, Moleculares, GENAM)
Fax.: 91 394 4162
J. Mª. Pastor Benavides, R. Pérez Pérez, A. Sastre Materia Condensada DFMC-GEFES) P. García Martínez (Mujeres en Física, GEMF)
Para enviar artículos o colaboraciones consultar A. Dobado González (División Física Teórica y de D. Cortina Gil (Física Nuclear, GEFN)
Santos, S. Serrano Calle, C. Untiedt Lecuona, P.
la página web de la Real Sociedad Española Partículas-DFTP)
Varela Nieto, L. Viña Liste, P. Wahnon Benarroch. J. San Román del Barrio (Polímeros, GEPO)
de Física en el apartado de Normas de Publicación
J. Mª Pastor Benavides (División de Enseñanza y I. Tanarro Onrubia (Física de Plasmas, GEFP)
Divulgación de la Física) A. Guerrero Conejo (Reología, GEREO)
A. Fernández Muñoz (Grupo de Estudiantes M. Martínez Piñeiro (Termodinámica, GET)
La astrónoma Vera Rubin (1928-2016), con tan solo 18 años de edad, mirando a través del telescopio de la Universidad de Vassar (Nueva York). Foto: Vassar College. de la RSEF, GdeE) C. Sánchez-Ramos Roda (Física Médica, GEFM)
Cortesía: AIP Emilio Segrè Visual Archives.
 Carta del Presidente de la RSEF
50 años de la EPS: una lección aún vigente
M
e gustaría recordar aquí una celebración que, pese
a que ha pasado casi inadvertida, tiene aspectos
relevantes para los difíciles tiempos que hoy
atraviesa Europa. Me refiero al quincuagésimo
aniversario de la European Physical Society (EPS), que conme-
moramos el pasado 28-IX-2018 en la Universidad de Ginebra,
en la misma Aula Magna donde nació públicamente en la tar-
de del 26-IX-1968. La creación de la EPS hace cincuenta años
fue posible sobre todo gracias al liderazgo del italiano Gilber-
to Bernardini, quien sería su primer presidente (1968-70), y
también del Director General del CERN, el francés Bernard
Grigory. EL CERN, que ya era conocido por esa sigla tras dejar
atrás su imprecisa caracterización como Conseil Européen pour
la Recherche Nucléaire, no jugó un papel formal en la creación
de la EPS; sin embargo, además de facilitar sus instalaciones,
su modelo europeo de cooperación tuvo una gran influencia
en la génesis y estructura de la EPS. Bernardini, por cierto, ha-
bía sido director de investigación (1960-61) del propio CERN
y por tanto conocía bien su espíritu europeísta.
La idea de una sociedad europea de física se había con-
cebido en 1965 en Bolonia, en una conferencia de la Società
Italiana di Fisica. Medio año después, en abril de 1966, tuvo
lugar una reunión de un centenar de físicos europeos, inclu-
yendo de países del Este, en la Scuola Normale Superiore de
Pisa, presididos por el premio Nobel inglés P.M.S. Blackett.
Cuando concluyó, la idea de la EPS estaba ya consolidada y
se había creado el germen de un futuro Steering Committee,
presidido por Bernardini, para llevarla a buen término. En
su intervención en Pisa, el holandés S.R. de Groot afirmó:
“culturalmente hablando, Europa es y ha sido durante mu-
chos siglos una única comunidad. Geográficamente, Europa
es un continente bien definido. Este hecho ha sido resaltado
desde Montaigne hasta Nietzsche. De acuerdo con un hom-
bre como Ortega y Gasset, esta unidad ha existido a pesar
de nuestras guerras, incluso como consecuencia de ellas. La
física europea nunca estuvo confinada en países aislados; ha
llegado el momento de organizar más formalmente la comu-
nidad europea de físicos”. La conferencia de Pisa aprobó uná-
nimemente que debían “darse pasos para la creación de una
Sociedad Europea de Física cuya función sería a) proporcionar
un foro para discutir asuntos de interés común para todos los
físicos europeos y b) proporcionar medios para intervenir en
asuntos que no pueden ser tratados adecuadamente por los
organismos nacionales”. Por lo que se refiere a los jóvenes,
concluyó que “el problema más importante es facilitarles las
mismas oportunidades con independencia del país donde
hubieran realizado la primera parte de sus estudios”.
En mayo de 1967, el Steering Committee decidió en Lon-
dres la estructura de la EPS. Ante la alternativa de crear una
nueva sociedad de miembros individuales o una federación
de sociedades nacionales se optó por una solución interme-
dia, la de una Sociedad cuyos miembros serían las Sociedades
Nacionales de Física y que incluiría igualmente miembros in-
dividuales y centros de investigación. Para vincular también a
los países del Este, el Steering Committee de la EPS se reunió
en Praga en mayo de 1968, un mes histórico para Europa por
muchos motivos. En esa ciudad —un ejemplo de europeís-
mo— habían vivido y trabajado en algún período de sus vidas
Tycho Brahe, Johannes Kepler, Bernard Bolzano, Ernst Mach
(que fue incluso rector de la Univ. Carlos, creada en 1348 por
Carlos I de Bohemia), Christian Doppler y Albert Einstein.
Allí, sin más obstáculos que superar, se fijó la constitución
legal de la EPS para el 26 de septiembre de 1968; el rector de
la Universidad Carlos manifestó su esperanza de que la unión
de los físicos europeos contribuyera a reducir la tensión en
las relaciones internacionales.
En la mañana de ese día, y en la sala del Consejo del CERN,
se firmó el documento fundacional de la EPS. Lo hicieron 62
miembros individuales y 20 sociedades nacionales de física,
academias e instituciones de investigación, incluido el pro-
pio CERN; por la tarde tuvo lugar la ceremonia oficial en la
Universidad de Ginebra. Entre las sociedades nacionales de
física se encontraba la —entonces— Real Sociedad Española
de Física y Química, representada en Ginebra por Joaquín Ca-
talá de Alemany, el fundador del IFIC de Valencia1. También
firmaron las Sociedades de Israel, Turquía e Instituciones de
cinco países del Este, incluyendo la Academia de Ciencias
de la URSS. La sede de la EPS, hoy en Mulhouse (Francia),
se fijó inicialmente en Ginebra (con una delegación en la
Academia de Ciencias en Praga que se mantuvo hasta 1973);
su emblema lo diseñó la sociedad checoslovaca. Hoy, la EPS
incluye 42 Sociedades que cubren prácticamente toda Europa
y que representan a más de 130.000 físicos (la mayor parte
miembros de la alemana DPG y del británico IOP), más de
40 miembros asociados (la mayoría centros de investigación
como el CERN) y unos 3.500 miembros individuales. La EPS
colabora, además, con más de 20 sociedades como la APS, y
publica EurophysicsNews, que tiene una tirada en papel de
25.000 ejemplares.
El primer presidente de la EPS, el florentino Gilberto Ber-
nardini, afirmó en el Aula Magna de la Universidad de Ginebra
(recordemos, el 26-IX-1968; quizá hoy cabría alguna matiza-
ción sin alterar el espíritu original): “históricamente, Europa
1
  Como sucedió con el CERN, el centro mixto CSIC-Universidad de Va-
lencia es hoy conocido sobre todo por la sigla IFIC del Instituto de Física
Corpuscular de los tiempos de Joaquín Catalá, refundado en 1985 tras el
acuerdo CSIC-UV.
Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  1
Carta del Presidente  •  José Adolfo de Azcárraga
es el crisol de la mayor civilización del mundo, que
ha sido durante siglos una fuerza poderosa en el
progreso humano. Pese a las actuales apariencias,
las profundas afinidades culturales e intelectuales
que constituyen la base de la civilización todavía
existen, pese a nuestras guerras e incluso por ellas.
Es a esta unidad cultural a la que la EPS pretende
hacer una pequeña pero tangible contribución en
los años venideros… Es Europa la que más tiene
que ofrecer para formar la estructura de la sociedad
del futuro en la que la ciencia podría jugar el papel
de un nuevo humanismo. La EPS se basa en esa
esperanza”. En palabras de Bernardini, la EPS se
creó también como “una prueba más de la deter-
minación de los científicos a colaborar tan juntos
como fuera posible para contribuir positivamente
a reafirmar la unidad cultural de Europa”.
He querido recordar estos hechos para resaltar
que la EPS fue fruto del profundo europeísmo de sus
fundadores; la idea de Europa como unidad cultu-
ral subyace en todos los propósitos y declaraciones
que llevaron a su creación. Esto resulta sorpren-
dente —quizá menos recordando a Ortega— en
un momento en el que Europa atravesaba un pe-
ríodo especialmente convulso. La EPS se creó sólo
cuatro semanas después que, en la noche del 20 al
21 de agosto, los ejércitos del Pacto de Varsovia
invadieran Checoslovaquia, aplastando los inten-
tos de democratización y las libertades civiles que
habían comenzado a florecer en la ‘primavera de
Praga’. Ese trágico acontecimiento está olvidado
ya; incluso algunos jóvenes, en esta época de fake
news y de ignorancia de la Historia, ni siquiera
imaginan que pudo existir. Sin embargo, pese a
que la Guerra Fría atravesaba entonces uno de sus
peores momentos, los físicos europeos olvidaron
sus nacionalidades y se unieron para crear la EPS,
incluyendo a representantes de la Sociedad Che-
coslovaca y de la Academia de Ciencias de la URSS.
De hecho, es probable que la EPS fuera la primera
sociedad científica que incluyera miembros de am-
bos lados del telón de acero.
2  Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019
Hoy, pese a la existencia de la Unión Europea,
ese sentimiento europeísta se encuentra herido
por lo que, ante una Europa debilitada y frágil,
resulta imprescindible retomar los ideales de la
fundación de la EPS. En efecto, convocado por un
Primer Ministro de forma aventurada, el 23-VI-
2016 se celebró en el Reino Unido un referéndum
(consultivo, pues la voluntad popular reside cons-
titucionalmente en Westminster) sobre la perma-
nencia de UK en la UE; el resultado dio la victoria
al Brexit por sólo un 3’8%. Su sucesora Theresa
May, pese a haber hecho (una tibia) campaña en
favor del Bremain, sentenció la situación afirman-
do: “Brexit means Brexit”. El gobierno británico, ig-
norando cualquier consideración sobre márgenes
de error y confianza ante una diferencia tan exigua
y en una decisión de semejante envergadura (no es
arriesgado imaginar que la repetición del referén-
dum dos semanas después podría haber favorecido
el Bremain), inició los pasos para la desconexión
de UK de la UE activando el artículo 50 del Tra-
tado de Lisboa. Cerca de dos años y medio des-
pués, el pasado 25 de noviembre, los presidentes
europeos de la UE aprobaron el documento final
negociado con UK. Como afirmó el Presidente de
la Comisión Europea Jean-Claude Juncker, ese
domingo fue “un día triste para Europa”. No obs-
tante, la situación permite desde el 10-XII-2018
que UK desactive unilateralmente el artículo 50
regresando así al punto de partida; también cabe
la convocatoria de nuevas elecciones e incluso un
segundo referéndum.
La posible ruptura UK-UE llega en un momen-
to especialmente difícil, con todo tipo de populis-
mos crecientes en la Unión Europea. Es cierto que
UK presenta algunas singularidades que el general
De Gaulle aprovechó para vetar con dos sonoros
“non”, en enero de 1963 y noviembre de 1967,
sendas solicitudes de ingreso de UK en el enton-
ces Mercado Común, algo que casi nadie recuerda
fuera del Reino Unido. Pero el hecho es que una
Europa sin UK es una Europa disminuida; las con-
tribuciones del Reino Unido al pensamiento, a la
Ciencia en general y a la física en particular son
extraordinarias y, sin duda, ingredientes esencia-
les de la Europa actual (y de la Civilización en su
conjunto). La especial aversión de los británicos a
la burocracia y control bruselenses es bien cono-
cida y base de buena parte del euroescepticismo;
no obstante, ha constituido una sorpresa —al me-
nos para quien esto escribe— que su tradicional
pragmatismo no haya cuestionado a priori decidir
sobre un asunto tan trascendental por un porcen-
taje estadísticamente desdeñable. El anumerismo,
por lo visto, no conoce fronteras. Sin embargo, al
contrario de lo que sucede con unas elecciones
cuyo resultado puede enmendarse en las siguien-
tes, un Brexit sería irreversible y dejaría un país
dividido —más aún de lo que ya está— durante
muchas décadas.
 50 años de la EPS  •  Carta del Presidente

Presidentes de la EPS.
En la primera fila a la
derecha, el actual Pre-
sidente Rüdiger Voss;
en el centro de la
segunda, la Presidenta
electa y Presidenta
en abril Petra Rudolf.
En la fila del fondo, a
la izquierda, el Presi-
dente de la APS Roger
Falcone.

La actual situación en Europa me lleva a una úl- nuestro tiempo cultural, que ha evolucionado de
tima consideración: el origen de todos los populis- forma vertiginosa tras la invención de la escritura
mos y el riesgo que entrañan. Lo primero que hay y, muy especialmente, desde el Renacimiento y el
que apreciar es que, aunque pueda parecer otra último siglo. El enorme desfase entre estos dos
cosa, populismos y nacionalismos excluyentes no tiempos, biológico y cultural, constituye un grave
son nuevos y que, además, nunca han traído nada problema en nuestros días.
bueno. Einstein, quien durante un período de su
vida no tuvo nacionalidad alguna tras renegar de
la alemana, calificaba el nacionalismo de “enfer-
medad de la Humanidad”. Lo segundo, más difícil
de aceptar por quienes se resisten a admitir que
las leyes de la evolución darwiniana también rigen
para los seres humanos, es que nuestra naturale-
za está profundamente influida por esa evolución
biológica2, al igual que lo está la de los chimpancés
o la de las ocas de Konrad Lorenz, a quien éstas
seguían instintiva y ciegamente. Como en 1972
afirmó Theodosius Dobzhansky, uno de los padres
de la que se llamó ‘síntesis moderna’ (de la teoría
de la evolución), “nada en biología tiene sentido
salvo a la luz de la evolución”. Y, como muestra
la etología o ciencia del comportamiento animal,
también éste está condicionado por esa evolución.
Y ahí radica el problema: muchos de los instin-
tos que afectan hoy a la conducta de los seres hu-
manos, aunque en el pasado fueron una ventaja
evolutiva para la especie Homo Sapiens, ya no son
adecuados para las complejas sociedades actuales.
Nuestro tiempo biológico ha cambiado poco des-
de los últimos habitantes de Altamira, pero no así

2
  Véase Sobre la naturaleza humana, el triunfo de Occidente y sus Un ejemplo de fija-
consecuencias, CLAVES de Razón Práctica, nº 175, págs. 40-44 ción: Konrad Lorenz
(2007), que puede encontrarse en la sección de Artículos de seguido ciegamente
Prensa de http://www.j.a.de.azcarraga.es . por sus gansitos.

Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  3

Carta del Presidente  •  José Adolfo de Azcárraga
Como consecuencia, cuando escasea la educa-
ción tolerante y abierta, dominan inevitablemen-
te patrones de conducta primitivos y excluyentes
—tribales, en suma— de los que no imaginábamos
su existencia ni su origen. Sólo desde esta perspec-
tiva puede comprenderse, por ejemplo, el salvaje
comportamiento de algunos aficionados al fútbol
supuestamente civilizados, o que se intente negar
el respeto que merecen grupos enteros de perso-
nas porque se las sitúa en un ‘entorno’ diferente,
lo que proporciona la excusa para excluirlas una
vez caracterizadas como ‘extrañas’. El mecanismo
biológico que produce la fijación al entorno de los
comienzos de la vida (prägung, impronta, en la ter-
minología original) es evolutivo y por tanto el ins-
tinto resultante es inevitable, si bien los entornos
a los que nos fijamos son diferentes. Sin embargo,
aunque ese troquelamiento fuera ventajoso en su
día, hoy es un lastre del que hay que desprender-
se. La barrera entre ‘nosotros’ y ‘los otros’ pudo
ser evolutivamente útil para nuestra especie hace
muchos miles de años, pero hoy es un obstáculo
para la convivencia. Por eso, entendido su origen,
los comportamientos excluyentes que nacen de
la natural fijación a nuestro entorno inmediato
han de reconocerse y calificarse como ejemplos
de primitivismo biológico: la inevitable —por ins-
tintiva— fijación al entorno de los primeros años
de la vida no ha sido atemperada y relativizada por
una educación abierta. La educación que —ésta
sí— hace especialmente singular al Homo Sapiens
es lo único que puede corregir el troquelamiento
instintivo —i.e. irracional— si se basa en la tole-
rancia y no se utiliza para reforzarlo, lo que desgra-
ciadamente también es posible. Los populismos
y totalitarismos pescan en el primitivismo y, por
ello, evitan toda educación abierta que pueda
desenmascararlos y debilitarlos. Así pues, y como
diría Karl Popper, es preciso pasar de la sociedad
cerrada o tribal a la sociedad abierta. Para ello
debemos ser conscientes de las trampas que nos
tiende el origen biológico de nuestra naturaleza
que, por escondido, es nuestro peor enemigo. Hay
que hacer más énfasis en lo mucho que los seres
4  Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019
humanos tenemos en común y mucho menos en
nuestras diferencias.
El avance de los populismos y nacionalismos
excluyentes en Europa —y no sólo en ella— y el
déficit democrático que entrañan no debe ignorar-
se. Por eso es importante recuperar hoy la lección
de europeísmo que condujo a la EPS. Por lo que se
refiere al Brexit, a la física y a la Ciencia en general,
la UE debería tender puentes con el Reino Unido
—si finalmente se inclinara por la antigua splen-
did isolation— dejando aparte cualquier agravio,
real o imaginado, que un Brexit pudiera acentuar.
Por lo que respecta a la investigación, convendría
que el programa Horizon del European Framework
Programme mantuviera la libre participación de
UK siguiendo, por ejemplo, un modelo de asocia-
ción como con Noruega y Suiza. Es imprescindi-
ble, además, preservar en y para UK el magnífico
y europeizante programa Erasmus de la UE. Pero,
haya finalmente Brexit o Bremain, investigadores,
tecnólogos y docentes europeos no debemos am-
parar políticas que sólo cabe tildar de regionales:
la posible solución a muchos de nuestros problemas
requiere más y mejor Europa, no menos. Y, por su-
puesto, un notable avance de la educación liberal
en la acepción más noble del término.
Adición (17 de enero): esta carta se escribió el
11-XII-18; el pasado 15-I-19 el parlamento britá-
nico rechazó el documento resultante de la nego-
ciación UK-UE. La pugna entre Leavers y Remainers
y los giros del Brexit (ver REF vol. 30, jul-sep 2016)
continúan mientras se acerca el 29 de marzo.
J. Adolfo de Azcárraga
Dpto. de Física Teórica,
Univ. de Valencia e IFIC
(CSIC-UV)
Los arcanos de la radiación
cósmica de ultra alta energía
Antonio Bueno Villar
Las observaciones llevadas a cabo durante más de catorce años en el Observatorio Pierre Auger
han demostrado que la radiación cósmica, correspondiente a las partículas más energéticas jamás
detectadas, tiene un origen extragaláctico
H
a transcurrido algo más de cincuenta años desde
que se descubrió que las partículas que forman la
radiación cósmica pueden alcanzar energías ma-
croscópicas (por encima del Julio). Sin embargo,
actualmente, aún no sabemos qué núcleos atómicos confor-
man el flujo de partículas que continuamente bombardea la
atmósfera terrestre. Tampoco sabemos qué fuentes los origi-
nan ni qué mecanismos son capaces de conferirles energías
que, en algunos casos, superan en varios órdenes de magni-
tud a la de los protones acelerados en el mayor colisionador
hasta ahora construido: el LHC. Para resolver estos misterios
se construyó el Observatorio Pierre Auger. Un conjunto de
detectores localizados en Malargüe (Mendoza, Argentina)
que abarca una superficie de 3.000 km2. Estudiando las di-
recciones de llegadas de más de 30.000 partículas, hemos
demostrado que los rayos cósmicos de más alta energía tie-
nen un origen extragaláctico. Hemos cerrado así un debate
de décadas, pero aún quedan interesantes medidas que hacer
y analizar para resolver uno de los rompecabezas más parti-
culares de la física actual.
Los rayos cósmicos
Los confines del conocimiento bullen de misterios singulares
a los que la Ciencia trata de dar una respuesta precisa. La
física no es, en absoluto, diferente en ese aspecto. Es cierto,
sin embargo, que hay fronteras de la física donde nuestro
nivel de desconocimiento es superior al de otros campos. Un
ejemplo de ello es el de los rayos cósmicos [1, 2]. A pesar de
que conocemos su existencia desde hace más de un siglo,
no tenemos, hoy en día, ninguna teoría plausible, verifica-
da con sólidas evidencias experimentales, que describa las
propiedades de este tipo de radiación que continuamente
bombardea la atmósfera terrestre.
En lo que sigue, vamos a entender por rayo cósmico un
núcleo atómico (compuesto por uno o varios nucleones)
que ha sido producido en algún lugar de nuestra galaxia
(excluido el sistema solar) o fuera de la misma. Al hablar
de nucleón, nos referimos indistintamente a un protón o un
neutrón. Nuestro interés se va a centrar en los rayos cósmi-
cos de ultra alta energía (UHECR, por sus siglas en inglés).
Los llamamos así pues su energía cinética está por encima
del trillón de electronvoltios (eV). En lenguaje técnico usa-
mos el prefijo griego “exa” para designar a este múltiplo
del eV y, por tanto, 1 EeV=1018 eV. En unidades del sistema
internacional, 1 EeV equivale a 0,16 J. Hasta la fecha, este
tipo de radiación es la más energética conocida. Una sen-
cilla operación matemática, nos permite darnos cuenta de
que los protones acelerados en el LHC (el colisionador de
partículas más potente jamás construido), cuyas energías
en el sistema de centro de masas casi alcanzan los 7 TeV (1
TeV = 1012 eV), poseen 0.1 EeV cuando su energía cinética
se mide en el mismo sistema de referencia que la de los ra-
yos cósmicos. La partícula más energética jamás detectada
alcanzó la Tierra con una energía cinética de 320 EeV [3].
Es decir, unas tres mil veces más elevada que la que los hu-
manos somos capaces de conferir a los protones en nuestro
mejor acelerador.
Las fuentes y mecanismos de aceleración de los UHECR
no están plenamente identificados y entendidos. Los meca-
nismos de aceleración propuestos se basan en la existencia
de enormes potenciales electromagnéticos o gravitatorios.
Otra posibilidad es la existencia de irregularidades del cam-
po magnético, que hacen que los rayos cósmicos adquieran
energía mediante colisiones con los componentes de exten-
sas nubes de gas magnetizadas. Existe también una gran va-
riedad de objetos que pueden ser considerados como fuentes
de rayos cósmicos: los núcleos de galaxias activas, explosio-
nes de supernovas, pulsares, etc.
Durante más de cinco décadas se ha conseguido detectar
la lluvia de UHECR que continuamente percute contra la Tie-
rra [4]. El flujo medido de tales partículas es extremadamen-
te pequeño. Para energías superiores a 10 EeV (por encima
del Julio), esperamos que, en promedio, cada cien años una
partícula de este tipo atravesará una superficie equivalente
a un campo de fútbol. Esto hace inviable colocar detectores
en globos aerostáticos o satélites con el fin de estudiar direc-
tamente las partículas primarias de este flujo. El conjunto de
datos recolectados sería misérrimo. Por tanto para estudiar
los UHECR, la única solución posible es colocar, en vastas ex-
tensiones de terreno, multitud de detectores de partículas. Al
llegar a la atmósfera terrestre, el rayo cósmico colisiona con
uno de los núcleos que la conforman produciendo una cas-
cada de hadrones (partículas que interaccionan fuertemente,
tales como el protón, el pion, etc.). Dichas partículas secun-
Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  5
Temas de Física  •  Antonio Bueno Villar

darias sufren interacciones sucesivas, dando lugar un absoluto misterio la composición del flujo de
a una lluvia de partículas capaz de alcanzar la su- UHECR (¿eran protones?, ¿núcleos más pesados
perficie terrestre. Típicamente, para una energía como el helio, nitrógeno o incluso el hierro?, ¿el
inicial de 10 EeV, llegan a la superficie unos diez haz era puro o compuesto de varias especies?).
mil millones de partículas. Fundamentalmente fo- Con el propósito de dilucidar estos enigmas, cru-
tones, electrones y positrones y, en una cantidad ciales todos para entender el comportamiento
unas mil veces menor, muones. Registrando en del universo a energías extremas, los profesores
nuestros sensores las señales producidas por esta James W. Cronin (Nobel de física en 1980) y Alan
lluvia de partículas, podemos estimar la energía, A. Watson propusieron, en 1992, construir el ins-
dirección de llegada y tipo de partícula que dio trumento científico de mayor superficie: el Obser-
lugar a la cascada. vatorio Pierre Auger.
Hasta principios de los años noventa del si-
glo xx, los esfuerzos de la comunidad internacional El instrumento científico más extenso jamás
dirigidos a comprender el misterio de los UHECR construido: el Observatorio Pierre Auger
no había dado frutos. Eran desconocidas las fuen- El Observatorio Pierre Auger ha revitalizado
tes donde se producían estas partículas. Al poseer el estudio de los rayos cósmicos de ultra alta
carga eléctrica, los campos magnéticos desviaban energía [5]. Su extraordinario impacto en este
la trayectoria de los rayos cósmicos en su viaje a campo de la física se debe a dos razones. Por
la Tierra y, por tanto, no resultaba evidente esta- un lado, el uso de una técnica de detección que
blecer si su origen era galáctico o extra-galáctico. denominamos híbrida, pues de manera simultá-
Tampoco se sabía qué mecanismos eran los res- nea se registran datos con sensores de luz que
ponsables de conferir energías macroscópicas a se agrupan en un detector de fluorescencia (FD)
Fig. 1. (Arriba) núcleos atómicos. Y por último, también constituía y con un conjunto de detectores de partículas
Representación de que denominamos detector de superficie (SD).
todos los instrumen-
De esta manera, la información calorimétrica
tos que constituyen el
Observatorio Pierre precisa (medida de la energía del rayo cósmico)
Auger. Cada punto proporcionada por el FD permite una calibración
corresponde a un de- del SD utilizando solo datos experimentales, evi-
tector de Cherenkov tando así las incertidumbres sistemáticas aso-
de agua. Las líneas
azules represen-
ciadas con el uso de sucesos simulados. Por otro
tan los detectores lado, el Observatorio Pierre Auger ha reunido el
de fluorescencia. conjunto de datos más grande registrado hasta la
También se dibujan fecha. El tamaño de la muestra de datos se expre-
los instrumentos que
sa usualmente en unidades de superficie, tiempo
sirven para medir las
condiciones atmos- y ángulo sólido y se conoce como exposición. La
féricas. (Abajo) A la del Observatorio Pierre Auger supera actual-
izquierda, un telesco- mente el valor de 100.000 km2 × sr × año. Unas
pio de fluorescencia;
diez veces mayor que la acumulada por todos
a la derecha, una de
las 1.600 estaciones los experimentos de rayos cósmicos realizados
con las que cuenta el hasta la fecha.
detector de superficie. El observatorio está ubicado en la Pampa
Amarilla, cerca de la ciudad de Malargüe (Pro-
vincia de Mendoza, Argentina), a una altitud de
aproximadamente 1.400 m (875 g cm–2 de pro-
fundidad atmosférica). El sitio es notablemente

6  Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019

 Los arcanos de la radiación cósmica de ultra alta energía  •  Temas de Física

plano con variaciones menores de 20 m de alti- de la partícula primaria (lo que técnicamente
tud en toda su superficie. El detector SD cubre conocemos como el espectro de energías) con
un área de 3.000 km2. Una superficie similar a la una precisión estadística sin precedentes (Figu-
de la provincia de Álava. Está formado por 1.600 ra 2, panel superior). Para energías por encima
estaciones Cherenkov de agua, dispuestas en una de 0.3 EeV, la exposición excede en casi un factor
cuadrícula triangular con un espaciado de 1,5 km diez la acumulada por el experimento Telescope
(Figura 1). Las estaciones registran las señales de Array (un detector de rayos cósmicos que opera
luz Cherenkov emitidas por las partículas de la actualmente en Estados Unidos). El FD mide con
cascada que las atraviesan. El ciclo de trabajo del un error sistemático del 14 % la energía deposi-
SD es cercano al 100 %. Dado el espaciado entre tada por la parte electromagnética de la cascada
estaciones, la eficiencia de detección es máxima (es decir, la energía debida a fotones, electrones
para partículas primarias con energía superior a y positrones). La calibración de la escala de ener-
1 EeV. Veinticuatro telescopios (cada uno con un gía del SD se lleva a cabo con datos experimen-
campo de visión de 30° × 30°) forman el FD. Se tales registrados simultáneamente por el SD y el
distribuyen en conjuntos de seis en cuatro zonas FD [6]. Evitamos así el uso de sucesos simulados
de observación. El FD recoge la luz de fluorescen- que vienen afectados de sensibles incertidum-
cia producida de manera isótropa a medida que bres, relacionadas con el desconocimiento que
la cascada de partículas deposita energía en la at- tenemos de cómo se comporta la interacción
mósfera. Dicha luz de fluorescencia está compues- fuerte entre partículas a escalas de energía muy
ta por fotones de longitudes de onda entre 300
y 400 nm, emitidos principalmente por núcleos
de nitrógeno excitados. El ciclo de trabajo del FD
asciende al 13 %, ya que opera exclusivamente en
noches claras sin luna. Instrumentos adicionales
de última generación miden la concentración de
aerosoles en la atmósfera, la cantidad de nubes
sobre el detector, así como el resto de condiciones
atmosféricas que pueden afectar a las medidas de
los telescopios de fluorescencia. La instalación del
detector se inició en 2004 y se completó en 2008.
Su coste final fue de unos 50 millones de dólares
(aproximadamente el sueldo neto anual de Messi).
Desde el inicio, ha estado produciendo datos de
manera estable y de acuerdo a las especificaciones
esperadas.
Fig. 2. (Arriba) El es-
Para estudiar las propiedades de los rayos
pectro de energía. La
cósmicos hasta energías más bajas (alrededor de línea roja corresponde
0.1 EeV), una pequeña porción del SD (aproxima- a un ajuste a una
damente unos 24 km2) fue equipada con 61 detec- ley de potencias. Se
tores Cherenkov de agua adicionales, dispuestos indican los valores del
índice espectral y las
en una geometría más densa de 750 m de espa- energías a las que el
ciado. Asimismo se instalaron tres telescopios de flujo cambia su com-
gran elevación, conocidos como HEAT, cuyo campo portamiento. (Cen-
de visión cubre elevaciones de 30 a 60 grados, lo tro) Valor promedio
de Xmax en función de
que permite el estudio de cascadas de menor ener- la energía para medi-
gía. Además, el proyecto AMIGA está desplegando das realizadas con el
contadores de centelleo (cada uno con un área de FD (círculos negros)
30 m2 y enterrados a 2,3 m bajo tierra) en lugares y el SD (cuadrados
vacíos). (Abajo) Fluc-
muy cercanos a los detectores Cherenkov de agua,
tuaciones de Xmax en
con el objetivo de medir con mejor precisión el nú- función de la energía.
mero de muones. Finalmente, la instrumentación Los puntos corres-
se completa con 124 antenas (proyecto AERA) ponden a medidas
que, instaladas sobre una superficie de 6 km2, de- hechas con el FD. Las
líneas de este gráfico y
tectan en una banda de frecuencia de 30 a 80 MHz las del gráfico central
los pulsos de radio emitidos durante el desarrollo corresponden a las
atmosférico de la cascada. predicciones de los
modelos hadrónicos
de última genera-
¿Qué conocemos de los rayos cósmicos? ción (aquellos que
El Observatorio Pierre Auger ha medido el flujo reproducen los datos
de los rayos cósmicos en función de la energía de LHC).

Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  7

Temas de Física  •  Antonio Bueno Villar
superiores a las de LHC. El espectro de energías
se ajusta mediante una ley de potencias que es
función de la energía del primario E−γ, siendo γ
el índice espectral. Para una energía de aproxi-
madamente 5.1 EeV, el índice espectral cambia
de un valor 3,29 a otro de 2,53, dando lugar a
lo que comúnmente denominamos el tobillo. La
interpretación de este rasgo tan peculiar está
aún abierta a debate, aunque puede ser indica-
tivo del cambio de naturaleza del flujo de rayos
cósmicos al pasar de partículas de origen galác-
tico a otras que provienen predominantemente
de fuentes extragalácticas. El principal rasgo del
espectro de energías es la dramática supresión
del flujo para una energía de 39 EeV. El motivo
de dicha supresión es también una cuestión sin
resolver. Puede ser debido a la imposibilidad de
las fuentes de acelerar partículas por encima de
esa energía o puede ser una indicación de la exis-
tencia del efecto GZK. Dicho efecto, propuesto
independientemente en 1966 por Greisen, Zatse-
pin y Kuzmin, establece la supresión del flujo de
protones extragaláctico de ultra alta energía
debido a las pérdidas de energía ocasionadas
al colisionar con los fotones de la radiación de
fondo de microondas, durante la propagación de
dichos protones hacia la Tierra.
La manera más precisa de estudiar la composi-
ción química del flujo de UHECR es mediante las
medidas hechas con el detector de fluorescencia,
pues están basadas en las propiedades de la parte
electromagnética de la cascada, que se conocen
con mucha mejor precisión que la parte asociada
a los muones provenientes de desintegraciones
de hadrones cargados. Para inferir el número
másico A de la partícula primaria utilizamos el
observable conocido como Xmax [6]. Este corres-
ponde a la profundidad atmosférica a la cual el
número de partículas de la cascada alcanza su
máximo. Núcleos ligeros son más penetrantes y,
por tanto, dan lugar a mayores valores de Xmax
que los esperados para núcleos más pesados.
Además, las fluctuaciones esperadas en la posi-
ción del máximo son mayores para núcleos lige-
ros. Como se puede ver en los paneles central e
inferior de la Figura 2, la comparación con los
modelos indica que la composición del flujo evo-
luciona hacia núcleos ligeros en el intervalo de
energías entre 0,15 EeV y 2,1 EeV. Esto es con-
sistente con una posible evolución de núcleos
pesados de origen galáctico a núcleos ligeros de
origen extragaláctico. Para energías superiores
se revierte la tendencia y nuestros datos indican
una transición hacia composiciones donde pre-
dominan los núcleos más pesados. Debido a que
el ciclo de trabajo del FD es solo de un 13 %, los
datos acumulados para la zona donde se produce
la supresión del flujo son escasos. En el análisis
más reciente solo se seleccionan 62 sucesos por
encima de 30 EeV. Para paliar este déficit se utili-
8  Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019
zan los datos del detector de superficie. Al ser su
ciclo de trabajo cercano al 100 %, por encima de
30 EeV se han seleccionado 517 sucesos. Como
se observa en el panel central de la Figura 2, el
acuerdo entre los datos del FD y del SD es nota-
ble. Los datos del SD permiten extender el estu-
dio a dos intervalos más de energía en la zona
de supresión del flujo. Sin embargo la precisión
de los análisis basados en la información del SD,
que es una mezcla de señales electromagnéticas
y muónicas, viene afectada de mayores errores
sistemáticos pues, como ya han demostrado
medidas previas del Observatorio Pierre Auger,
existen discrepancias de origen aún desconocido
entre el número de muones medidos en los datos
experimentales y los predichos por los modelos.
Por qué los modelos predicen sistemáticamente
un número menor de muones al medido en los
datos es una cuestión de física fundamental que
aún adolece de una explicación aceptable.
El Observatorio Pierre Auger también es capaz
de identificar partículas neutras como fotones y
neutrinos en el flujo primario de UHECR [6]. Al
carecer de carga eléctrica, estos mensajeros cós-
micos no sufren los efectos de los campos mag-
néticos y, por tanto, son ideales para dilucidar
la distribución espacial de las fuentes donde se
generan los UHECR. Dichos fotones y neutrinos
provienen fundamentalmente de las desinte-
graciones de piones creados tras la colisión de
protones con los fotones de microondas que im-
pregnan todo el Universo. Un fotón es una par-
tícula que penetra mucho más en la atmósfera
que cualquier núcleo y genera una señal en los
detectores de superficie pobre en muones. Por
su parte, los neutrinos, al experimentar solo la
interacción débil, pueden atravesar grandes pro-
fundidades atmosféricas produciendo cascadas
de partículas muy cercanas a la superficie con
una clara predominancia de la componente elec-
tromagnética; componente que, para el caso de
los protones, está muy suprimida al tener lugar
el máximo de la cascada a profundidades atmos-
féricas menores. Aún no se ha encontrado ningún
candidato de fotón o de neutrino en nuestro con-
junto de datos. Sin embargo, los límites puestos
a los flujos difusos de estos tipos de partículas a
ultra altas energías son los más restrictivos que
existen hoy en día.
De galaxias lejanas
Para desvelar cuáles son las fuentes donde se
producen las partículas más energéticas que he-
mos detectado en la Tierra y entender cómo se
propagan hasta nosotros, debemos estudiar sus
direcciones de llegada. Si dichas fuentes se loca-
lizan en ciertas zonas específicas del campo de
visión del Observatorio Pierre Auger, esperamos
ver diferencias en la intensidad del flujo de rayos
cósmicos en función de la porción de cielo con-

siderada. Es lo que técnicamente denominamos
como anisotropía. Ya hemos mencionado que los
campos magnéticos desvían las trayectorias de
los núcleos cargados eléctricamente. Por ejem-
plo, para núcleos que atraviesan la galaxia, la des-
viación puede ser de varias decenas de grados
para valores de E/Z = 10 EeV, donde Z es el nú-
mero atómico del núcleo considerado. Este efecto
induce a una determinación errónea del punto
original donde se creó el rayo cósmico que hace
muy difícil determinar qué fuente lo generó. Sin
embargo, la desviación disminuye al aumentar la
energía cinética del núcleo considerado. Es por
ello que para el estudio aquí reseñado se consi-
deraron los sucesos con una energía superior a
4 EeV. Con este umbral de energía garantizamos
también que la eficiencia de detección del SD es
del 100 %.
A pesar de los efectos de los campos magné-
ticos, es todavía posible detectar anisotropías
a grandes escalas angulares, si, por ejemplo, la
fuentes de producción presentan una distribución
espacial no uniforme. Típicamente estas búsque-
das de anisotropías en ventanas angulares de gran
tamaño se hacen analizando cómo se distribuyen
las direcciones de llegada de los rayos cósmicos
en función de la ascensión recta (el equivalente
a la longitud en coordenadas terrestres). Dichas
distribuciones se describen como una superposi-
ción de armónicos esféricos, donde la información
más relevante proviene típicamente de los prime-
ros términos (dipolo, cuadrupolo).
Los datos seleccionados para el estudio que
describimos fueron registrados durante doce
años de operación del Observatorio Pierre Au-
ger (de 2004 a 2016) y corresponden a sucesos
reconstruidos con ángulos cenitales entre 0 y 80
grados. Con esta selección cubrimos un 85 % del
cielo. Los sucesos seleccionados se dividieron
en dos intervalos de energía: 4 EeV< E< 8 EeV y
E ≥ 8 EeV. El número total de sucesos en cada uno
de ellos es de 81.701 y 32.187, respectivamen-
te. Los datos del intervalo de más bajas energías
son compatibles con una distribución uniforme
(isótropa) en las direcciones de llegada. Sin em-
bargo, para energías iguales o superiores a 8 EeV,
se registra una clara anisotropía en la intensi-
dad del flujo medido. Como se ve en la Figura 3,
nuestros datos se pueden describir mediante un
dipolo [7]. Es decir, en una zona del cielo la inten-
sidad del flujo presenta un exceso, mientras que
en la zona diametralmente opuesta observamos
un déficit de rayos cósmicos. La amplitud del di-
polo tiene un valor de 6,5+–10,, 93 %. La probabilidad
de que esta medida sea fruto de la casualidad es
de una parte en diez millones, o lo que, en len-
guaje técnico, se cuantifica como un efecto de 5.2
σ. La dirección del dipolo está a unos 125 grados
del centro galáctico. Estar tan alejado de la zona
de mayor concentración de materia de nuestra
Los arcanos de la radiación cósmica de ultra alta energía  •  Temas de Física
galaxia sugiere que los rayos cósmicos de ultra Fig. 3. Mapa en
alta energía son de origen extragaláctico. Con coordenadas ecuato-
riales que muestra la
esta medida hemos dado respuesta a un enig- intensidad del flujo
ma que perduraba desde hace más de cincuenta de rayos cósmicos
años. No es de extrañar que la prestigiosa revista por encima de 8 EeV.
Physics World incluyera esta investigación entre El centro galáctico
se muestra como un
los diez logros más importantes de la física en
asterisco, mientras
el año 2017. que la línea disconti-
A pesar de la importancia de este resultado, aún nua muestra el plano
debemos acumular más datos y de mayor calidad galáctico.
para dilucidar cuáles son las fuentes de produc-
ción de los UHECR, qué mecanismos los aceleran,
cuál es la razón para la supresión del flujo prima-
rio y de qué núcleos está compuesto. Para ello es-
tamos mejorando el SD con nuevos sensores que
nos permitirán separar la señal electromagnética
de la muónica. Así podremos acceder a la informa-
ción sobre la masa atómica del núcleo primario
de manera individualizada para cada suceso re-
gistrado. Gracias a este nuevo proyecto, conocido
como AugerPrime, que tomará datos hasta 2025,
lo mejor está aún por llegar.
Bibliografía
[1] M. Nagano, A.A. Watson, Rev. Mod. Phys. 72 (2000)
689. 

[2] A. Letessier-Selvon, T. Stanev, Rev. Mod. Phys. 83
(2011) 907. 

[3] D.J. Bird et. al., Astrophysical Journal 441 (1995) 144.

[4] J. Linsley, Phys. Rev. Lett. 10 (1963) 146. 

[5] A. Aab et. al., “The Pierre Auger Collab.”, Nucl. Ins-
trum. Meth. A 798 (2005) 172. 

[6] A. Aab et. al., “The Pierre Auger Collab.”, arXiv:
1708.06592v2 [astro- ph.HE].
[7] A. Aab et. al., “The Pierre Auger Collab.”, Science 357
(2017) 1266.
Antonio Bueno Villar
Departamento de Física Teórica
y del Cosmos & C.A.F.P.E.,
Universidad de Granada
Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  9
Año Internacional de la Tabla Periódica (2019):
una oportunidad para abordar contextos de didáctica
e historia de la física y la química
Gabriel Pinto, Manuela Martín Sánchez, M. Araceli Calvo Pascual
y Almudena de la Fuente
La celebración del sesquicentenario de la propuesta de tabla periódica que realizó Mendeléiev en 1869
es una buena ocasión para profundizar en el desarrollo histórico, los aspectos educativos relacionados
y el significado de este icono universal de la ciencia
L
a ONU proclamó 2019 como el Año Internacional de la
Tabla Periódica de los Elementos Químicos, lo que se in-
cluye entre las iniciativas emprendidas para potenciar
las relaciones entre ciencia, tecnología y desarrollo.
Aparte de otras acciones, como la divulgación entre el público
en general de este icono universal, dicha efeméride puede ser
de utilidad para el profesorado de física y química, en las dis-
tintas etapas educativas, para profundizar y abordar contextos
de didáctica e historia de estas dos ciencias. Para ello, es im-
portante conocer cómo se tratan el tema de la tabla periódica y
aspectos relacionados en el currículo actual español, así como
algunos de los recursos didácticos que facilitan su aprendizaje.
Introducción
Mucho se ha escrito sobre la tabla periódica (TP). Según Rudy
M. Braum: “es la piedra Rosetta de la naturaleza. Para el no
iniciado es solo un centenar de recuadros numerados, cada
uno de ellos con una o dos letras, dispuestos con una extraña
simetría asimétrica” [1]. En su libro de introducción a la TP,
Eric Scerri recoge la referencia anterior, entre otras, y señala
que, probablemente, es el icono más reconocible de toda la
ciencia y que figura entre las ideas más fecundas y unifica-
doras de toda la ciencia moderna [2].
La TP no solo es un instrumento fundamental para el estu-
dio de la química, sino que su evolución es un paradigma de
la historia de la ciencia como resultado de una obra colectiva.
Los descubrimientos de la física, desde finales del siglo xix al
desarrollo de la mecánica cuántica, la han ido afinando y han
subsanado anomalías de los primeros ordenamientos de los
elementos químicos. Por ello, y considerando que su estudio y
comprensión involucran conceptos básicos complementarios
de física y de química, es un excelente tema para abordar con-
textos de aprendizaje, en las distintas etapas educativas, sobre
aspectos de estas dos ciencias e implicaciones históricas.
En este sentido, es una oportunidad y un reto para docen-
tes de estas disciplinas la celebración, en 2019, del Año Inter-
nacional de la Tabla Periódica de los Elementos Químicos (IYPT
2019, por sus siglas en inglés). El 20 de diciembre de 2017, la
Asamblea General de la ONU proclamó dicha celebración, para
promover y celebrar la significación de la TP, con ocasión del
150º aniversario del descubrimiento del sistema periódico
10  Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019
por el químico ruso Dimitri I. Mendeléiev (1834-1907), que
coincide, además, con el centenario de la creación de la IUPAC
(International Union of Pure and Applied Chemistry) y otras
conmemoraciones relacionadas [3].
La tabla periódica en los currículos de Educación
Primaria y Educación Secundaria
Si se analiza la presencia de la TP y del concepto y descrip-
ción de los elementos químicos en los contenidos, criterios de
evaluación y estándares de aprendizaje evaluables de los cu-
rrículos oficiales de la Educación Primaria [4] y la Educación
Secundaria [5] se observa que, explícitamente, no aparecen
hasta la Educación Secundaria Obligatoria (ESO). No obstante,
en el currículo de Primaria (Tabla 1), desde un enfoque macros-
cópico, el Bloque 4 de la asignatura de Ciencias de la Naturaleza
se refiere a los materiales, que incluye clasificarlos estudian-
do sus propiedades, separar los componentes de mezclas, así
como realizar experimentos sobre distintos fenómenos físicos
y químicos de la materia, entre otros aspectos. Además, el Blo-
que 5 especifica el estudio de conductores y aislantes, imanes, y
conocer grandes descubrimientos y avances de la ciencia. Esto
hace conveniente un estudio microscópico, adaptado al nivel
del alumnado de Primaria, en el que puedan diferenciar sus-
tancias puras (elementos y compuestos) de mezclas, así como
entender la naturaleza del cambio químico. En dicho contexto,
resulta adecuado recalcar la importancia del descubrimiento
de los elementos químicos y la necesidad de clasificarlos.
Como se ha indicado, la TP se introduce como tal en el cu-
rrículo oficial de ESO, en el Bloque 2, de la enseñanza de Física
y Química de 2.º y 3.º de ESO (Tabla 2), después del estudio de
los modelos atómicos, de manera que se presenta la estructu-
ra atómica (número atómico, tendencia a formar iones, etc.)
como explicación de la ordenación de los elementos en la TP y
su clasificación en metales, no metales y gases nobles. Aunque
no está explícita la descripción de ningún elemento químico,
se indica que el alumnado debe investigar “las propiedades
y aplicaciones de algún elemento y/o compuesto químico de
especial interés”, lo que entronca con los contenidos transver-
sales del “Bloque 1. La actividad científica”, en el que se pide
que los estudiantes relacionen “la investigación científica con
las aplicaciones tecnológicas en la vida cotidiana”.
 Año Internacional de la Tabla Periódica (2019): una oportunidad para abordar contextos de didáctica e historia…  •  Temas de Física

En la asignatura de Física y Química de 4.º de ESO
(Tabla 3) se aborda el estudio de la TP en relación
con las configuraciones electrónicas que, a su vez,
permiten explicar los tipos de enlace y las fuerzas
intermoleculares, de modo que el alumnado sea ca-
paz de razonar las propiedades de distintos elemen-
tos (o compuestos) en función de las interacciones
entre sus átomos o moléculas, además de realizar
ensayos de laboratorio para deducir el tipo de en-
lace. La introducción a la química orgánica aborda
el estudio descriptivo del carbono y sus formas alo-
trópicas, paradigma de la relación entre estructura
y propiedades de los elementos. Por otro lado, una
profundización en la evolución histórica de la TP y
el descubrimiento de los elementos puede dar pie a
evaluar si el alumnado “describe hechos históricos
relevantes en los que ha sido definitiva la colabora-
ción de científicos y científicas de diferentes áreas de
conocimiento” (“Bloque 1. La actividad científica”).
En la materia de Física y Química de 1.º de Bachi-
llerato (Tabla 4) no se exponen de forma explícita
contenidos relacionados con la TP y los elementos, si

Tabla 1. Presencia de la TP y los elementos químicos en el currículo de Educación Primaria, en la asignatura troncal “Ciencias de la Naturaleza”.

Contenidos Criterios de evaluación Estándares de aprendizaje evaluables

Bloque 4. Materia y energía

Estudio y clasificación de algunos mate-
riales por sus propiedades. Utilidad de
algunos avances, productos y materiales
para el progreso de la sociedad.
Diferentes procedimientos para la medida
de la masa y el volumen de un cuerpo.
Explicación de fenómenos físicos observa-
bles en términos de diferencias de densi-
dad. La flotabilidad en un medio líquido.
La luz como fuente de energía. Electri-
cidad: la corriente eléctrica. Circuitos
eléctricos. Magnetismo: el magnetismo
terrestre. El imán: la brújula.
Planificación y realización de experiencias
diversas para estudiar las propiedades de
materiales de uso común y su comporta-
miento ante la luz, el sonido, el calor, la
humedad y la electricidad.
Observación de algunos fenómenos de
naturaleza eléctrica y sus efectos (luz y
calor). Atracción y repulsión de cargas
eléctricas.
Separación de componentes de una
mezcla mediante destilación, filtración,
evaporación o disolución.
Reacciones químicas: la combustión, la
oxidación y la fermentación.
Utilidad de algunos avances, productos y
materiales para la sociedad.
1. Estudiar y clasificar materiales por sus
propiedades.
2. Conocer los procedimientos para la me-
dida de la masa, el volumen, la densidad
de un cuerpo.
3. Conocer leyes básicas que rigen
fenómenos, como la reflexión de la luz,
la transmisión de la corriente eléctrica,
o el cambio de estado, las reacciones
químicas: la combustión, la oxidación y la
fermentación.
4. Planificar y realizar sencillas investiga-
ciones para estudiar el comportamiento
de los cuerpos ante la luz, la electricidad,
el magnetismo, el calor o el sonido.
5. Realizar experiencias sencillas y peque-
ñas investigaciones sobre diferentes fenó-
menos físicos y químicos de la materia.
1.1. Observa, identifica, describe y clasifica algunos mate-
riales por sus propiedades (dureza, solubilidad, estado de
agregación, conductividad térmica).
2.1. Utiliza diferentes procedimientos para la medida de
la masa y el volumen de un cuerpo.
2.2. Identifica y explica fenómenos físicos observables en
términos de diferencias de densidad.
3.2. Conoce las leyes básicas que rigen el cambio de esta-
do, las reacciones químicas: la combustión, la oxidación y
la fermentación.
4.5. Realiza experiencias sencillas para separar los com-
ponentes de una mezcla mediante: destilación, filtración,
evaporación o disolución, comunicando de forma oral y
escrita el proceso seguido y el resultado obtenido.
5.1. Identifica y expone las principales características
de las reacciones químicas; combustión, oxidación y
fermentación.
5.2. Separa los componentes de una mezcla mediante
destilación, filtración, evaporación o disolución.
5.4. Identifica, experimenta y ejemplifica argumentando
algunos cambios de estado y su reversibilidad.
5.5. Investiga a través de la realización de experiencias
sencillas sobre diferentes fenómenos físicos y químicos
de la materia: planteando problemas, enunciando hipó-
tesis, seleccionando el material necesario, extrayendo
conclusiones, comunicando resultados, manifestando
competencia en cada una de las fases, así como en el co-
nocimiento de las leyes básicas que rigen los fenómenos
estudiados.
5.6. Investiga a través de la realización de experiencias
sencillas para acercarse al conocimiento de las leyes bá-
sicas que rigen fenómenos, como la reflexión de la luz, la
transmisión de la corriente eléctrica, el cambio de estado,
las reacciones químicas: la combustión, la oxidación y la
fermentación.

Bloque 5. La tecnología, objetos y máquinas

Conductores y aislantes.
La ciencia: presente y futuro de la socie-
dad.
Beneficios y riesgos de las tecnologías y
productos.
Importantes descubrimientos e inventos.
3. Conocer las leyes básicas que rigen los
fenómenos, como la reflexión de la luz, la
transmisión de la corriente eléctrica.
4. Realizar experiencias sencillas y
pequeñas investigaciones sobre dife-
rentes fenómenos físicos de la materia:
planteando problemas, enunciando
hipótesis, seleccionando el material nece-
sario, montando realizando, extrayendo
conclusiones, comunicando resultados,
aplicando conocimientos básicos de las
leyes básicas que rigen estos fenómenos,
como la reflexión de la luz, la transmisión
de la corriente eléctrica.
3.3. Expone ejemplos de materiales conductores y aislan-
tes, argumentado su exposición.
3.4. Observa e identifica las principales características y
los imanes y relaciona la electricidad y magnetismo.
3.5. Conoce y explica algunos de los grandes descubri-
mientos e inventos de la humanidad.
4.2. Valora y describe la influencia del desarrollo tecnoló-
gico en las condiciones de vida y en el trabajo.
4.3. Conoce y explica algunos de los avances de la ciencia
en: el hogar y la vida cotidiana, la medicina, la cultura y el
ocio, el arte, la música, el cine y el deporte y las tecnolo-
gías de la información y la comunicación.

Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  11

Temas de Física  •  Gabriel Pinto, Manuela Martín Sánchez, M. Araceli Calvo Pascual y Almudena de la Fuente

bien el estudio de técnicas espectroscópicas (Bloque 2)
está relacionado con el descubrimiento de numerosos
elementos químicos y la determinación de sus masas
atómicas. Por otro lado, los contenidos de “Química e
industria” introducen los procesos siderúrgicos, así
como aplicaciones tecnológicas de metales y aleacio-
nes. También se profundiza en el estudio del carbono
y de los nuevos materiales sintetizados a partir de éste.
Ya en la asignatura de Química de 2.º de Bachi-
llerato (Tabla 5), dentro del Bloque 2, se parte del
estudio de los modelos atómicos (Bohr y mecano-
cuántico) para profundizar en la estructura actual de
la TP y las propiedades de los elementos relacionadas
con su posición. Además, la introducción de la teoría
de bandas permite abordar las distintas propiedades
conductoras de algunos elementos y sus aplicaciones
tecnológicas. Aunque no figura de forma expresa la
TP, en la asignatura de Física de 2.º de Bachillerato,
dentro del “Bloque 6. Física del siglo xx”, se abordan
el origen y aplicaciones de la Física Cuántica, aspec-
tos clave para interpretarla. Esto se hace con la in-
clusión de estándares de aprendizaje evaluables para
el alumnado como “interpretar espectros sencillos,
relacionándolos con la composición de la materia”.
Breve historia de la tabla periódica
El desarrollo de la TP ha sido ampliamente estudia-
do [2, 6]. Además, suele ser de los pocos ejemplos
de historia de la ciencia, junto con el del desarro-
llo del modelo atómico, que se estudia en etapas

Tabla 2. Presencia de la TP y los elementos químicos en el currículo de 2.º y 3.º de ESO, en la materia de Física y Química.
Contenidos
Bloque 2. La materia
Estructura atómica. Isótopos.
El Sistema Periódico de los
elementos.
Elementos y compuestos de
especial interés con aplicacio-
nes industriales, tecnológicas y
biomédicas.
Criterios de evaluación
6. Reconocer que los modelos atómicos
son instrumentos interpretativos de
las distintas teorías y la necesidad de
su utilización para la interpretación y
comprensión de la estructura interna
de la materia.
7. Analizar la utilidad científica y tec-
nológica de los isótopos radiactivos
8. Interpretar la ordenación de los
elementos en la Tabla Periódica y
reconocer los más relevantes a partir
de sus símbolos.
10. Diferenciar entre átomos y molécu-
las, y entre elementos y compuestos en
sustancias de uso frecuente y conocido.
Estándares de aprendizaje evaluables
6.3. Relaciona la notación ZAX con el número atómico, el número másico
determinando el número de cada uno de los tipos de partículas subató-
micas básicas.
7.1. Explica en qué consiste un isótopo y comenta aplicaciones de los
isótopos radiactivos, la problemática de los residuos originados y las
soluciones para la gestión de los mismos
8.1. Justifica la actual ordenación de los elementos en grupos y perio-
dos en la Tabla Periódica.
8.2. Relaciona las principales propiedades de metales, no metales y
gases nobles con su posición en la Tabla Periódica y con su tendencia a
formar iones, tomando como referencia el gas noble más próximo.
10.1. Reconoce los átomos y las moléculas que componen sustancias
de uso frecuente, clasificándolas en elementos o compuestos, basándo-
se en su expresión química.
10.2. Presenta, utilizando las TIC, las propiedades y aplicaciones de
algún elemento y/o compuesto químico de especial interés a partir de
una búsqueda guiada e información bibliográfica y/o digital.

Tabla 3. Presencia de la TP y los elementos químicos en el currículo de 4.º de ESO, en la materia de Física y Química.
Contenidos
Bloque 2. La materia
Modelos atómicos Sistema
Periódico y configuración
electrónica.
Enlace químico: iónico, cova-
lente y metálico.
Introducción a la química
orgánica.
Criterios de evaluación
2. Relacionar las propiedades de un
elemento con su posición en la Tabla
Periódica y su configuración electrónica.
3. Agrupar por familias los elementos
representativos y los elementos de
transición según las recomendaciones de
la IUPAC.
4. Interpretar los distintos tipos de en-
lace químico a partir de la configuración
electrónica de los elementos implicados
y su posición en la Tabla Periódica.
5. Justificar las propiedades de una
sustancia a partir de la naturaleza de su
enlace químico.
7. Reconocer la influencia de las fuerzas
intermoleculares en el estado de agre-
gación y propiedades de sustancias de
interés.
8. Establecer las razones de la singulari-
dad del carbono y valorar su importancia
en la constitución de un elevado número
de compuestos naturales y sintéticos.
Estándares de aprendizaje evaluables
2.1. Establece la configuración electrónica de los elementos representa-
tivos a partir de su número atómico para deducir su posición en la Ta-
bla Periódica, sus electrones de valencia y su comportamiento químico.
2.2. Distingue entre metales, no metales, semimetales y gases nobles
justificando esta clasificación en función de su configuración electró-
nica.
3.1. Escribe el nombre y el símbolo de los elementos químicos y los
sitúa en la Tabla Periódica.
4.1. Utiliza la regla del octeto y diagramas de Lewis para predecir la
estructura y fórmula de los compuestos iónicos y covalentes.
5.1. Explica las propiedades de sustancias covalentes, iónicas y metáli-
cas en función de las interacciones entre sus átomos o moléculas.
5.2. Explica la naturaleza del enlace metálico utilizando la teoría de los
electrones libres y la relaciona con las propiedades características de
los metales.
5.3. Diseña y realiza ensayos de laboratorio que permitan deducir el
tipo de enlace presente en una sustancia desconocida.
7.2. Relaciona la intensidad y el tipo de las fuerzas intermoleculares
con el estado físico y los puntos de fusión y ebullición de las sustancias
covalentes moleculares, interpretando gráficos o tablas que contengan
los datos necesarios.
8.1. Explica los motivos por los que el carbono es el elemento que
forma mayor número de compuestos.
8.2. Analiza las distintas formas alotrópicas del carbono, relacionando
la estructura con las propiedades.

12  Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019

 Año Internacional de la Tabla Periódica (2019): una oportunidad para abordar contextos de didáctica e historia…  •  Temas de Física

preuniversitarias, lo que da idea de su relevancia. elementos, por propiedades químicas similares, de

Aquí se realiza únicamente un esbozo, para enmar-
car el tema y reseñar un conjunto de referencias
útiles sobre la historia de su génesis, como el tra-
tado de Química Inorgánica de Moeller [7], el dis-
curso de Nogareda con motivo del centenario de
la TP de Mendeléiev [8], y el trabajo de Weeks [9].
La historia de la TP en un sentido amplio se
podría decir que comienza con el filósofo y mate-
mático griego Demócrito (c. 460 a. C.-c. 370 a. C.),
creador de la doctrina atomista. Pero fue el inglés
John Dalton (1766-1844) quien estableció el pri-
mer modelo atómico con una base científica y, en
1808, introdujo el concepto de peso atómico.
En todo caso, uno de los primeros intentos de
clasificación de los elementos es, en 1829, el or-
denamiento por “triadas” elaboradas por Johann
W. Döbereiner  (1780-1849), químico alemán y
profesor en la Universidad de Jena. Agrupó los
tres en tres (calcio-estroncio-bario, cloro-bromo-
yodo, etc.) y advirtió que, en cada triada, uno de
ellos tenía de peso atómico aproximadamente la
media aritmética de los otros dos (Fig.1) [10].
A continuación, siguiendo el orden cronológico,
cabe destacar la contribución de Max Joseph von
Pettenkofer (1818-1901), profesor de química y
de higiene en Múnich, que sugirió en 1850 que,
entre elementos de comportamiento similar, las
diferencias de pesos atómicos eran constantes o
múltiplos de una constante, con lo que se podrían
formar una progresión aritmética modificada.
En 1853, el inglés John H. Gladstone (l827-
1902) ordenó los elementos en función de sus
pesos atómicos, sin citar a Döbereiner, pero ha-
ciendo referencia al trabajo publicado en 1843
por el fisicoquímico y naturalista alemán Leopold
Gmelin (1788-1853), donde éste agrupaba los ele-

Tabla 4. Presencia de la TP y los elementos químicos en la asignatura de Física y Química del currículo de 1.º de Bachillerato.
Contenidos
Bloque 2. Aspectos cuantitativos de la química
Métodos actuales para
el análisis de sustancias:
Espectroscopía y espectro-
metría.
Bloque 3. Reacciones químicas
Química e industria.
Bloque 5. Química del carbono
El petróleo y los nuevos
materiales.
Criterios de evaluación
6. Utilizar los datos obtenidos mediante técnicas
espectrométricas para calcular masas atómicas.
7. Reconocer la importancia de las técnicas espec-
troscópicas que permiten el análisis de sustancias y
sus aplicaciones para la detección de las mismas en
cantidades muy pequeñas de muestras.
4. Conocer los procesos básicos de la siderurgia, así
como las aplicaciones de los productos resultantes.
5. Valorar la importancia de la investigación cien-
tífica en el desarrollo de nuevos materiales con
aplicaciones que mejoren la calidad de vida.
5. Diferenciar las diferentes estructuras que presen-
ta el carbono en el grafito, diamante, grafeno, fullere-
no y nanotubos relacionándolo con sus aplicaciones.
Estándares de aprendizaje evaluables
6.1. Calcula la masa atómica de un elemento a partir de los
datos espectrométricos obtenidos para los diferentes isótopos
del mismo.
7.1. Describe las aplicaciones de la espectroscopía en la identi-
ficación de elementos y compuestos
4.2. Argumenta la necesidad de transformar el hierro de fundi-
ción en acero, distinguiendo entre ambos productos según el
porcentaje de carbono que contienen.
4.3. Relaciona la composición de los distintos tipos de acero
con sus aplicaciones.
5.1. Analiza la importancia y la necesidad de la investigación
científica aplicada al desarrollo de nuevos materiales y su
repercusión en la calidad de vida a partir de fuentes de infor-
mación científica.
5.1. Identifica las formas alotrópicas del carbono relacio-
nándolas con las propiedades físico-químicas y sus posibles
aplicaciones.

Tabla 5. Presencia de la TP y los elementos químicos en la asignatura de Química del currículo de 2.º de Bachillerato.
Contenidos Criterios de evaluación Estándares de aprendizaje evaluables
Bloque 2. Origen y evolución de los componentes del Universo
Clasificación de los ele- 5. Establecer la configuración electrónica de 5.1. Determina la configuración electrónica de un átomo, conocida su
mentos según su estruc- un átomo relacionándola con su posición en posición en la Tabla Periódica y los números cuánticos posibles del
tura electrónica: Sistema la Tabla Periódica. electrón diferenciador.
Periódico. 6. Identificar los números cuánticos para 6.1. Justifica la reactividad de un elemento a partir de la estructura
Propiedades de los elemen- un electrón según en el orbital en el que se electrónica o su posición en la Tabla Periódica.
tos según su posición en el encuentre. 7.1. Argumenta la variación del radio atómico, potencial de ioniza-
Sistema Periódico: energía 7. Conocer la estructura básica del Sistema ción, afinidad electrónica y electronegatividad en grupos y periodos,
de ionización, afinidad elec- Periódico actual, definir las propiedades comparando dichas propiedades para elementos diferentes.
trónica, electronegatividad, periódicas estudiadas y describir su variación 12.1. Explica la conductividad eléctrica y térmica mediante el mode-
radio atómico. a lo largo de un grupo o periodo. lo del gas electrónico aplicándolo también a sustancias semiconduc-
Propiedades de los metales. 12. Conocer las propiedades de los metales toras y superconductoras.
Aplicaciones de supercon- empleando las diferentes teorías estudiadas 13.1. Describe el comportamiento de un elemento como aislante,
ductores y semiconduc- para la formación del enlace metálico. conductor o semiconductor eléctrico utilizando la teoría de bandas.
tores 13. Explicar la posible conductividad eléctrica 13.2. Conoce y explica algunas aplicaciones de los semiconductores y
de un metal empleando la teoría de bandas. superconductores analizando su repercusión en el avance tecnológi-
co de la sociedad.

Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  13

Temas de Física  •  Gabriel Pinto, Manuela Martín Sánchez, M. Araceli Calvo Pascual y Almudena de la Fuente

Fig. 1. Fragmento del Worcester College de Oxford, ordenó los elementos

artículo publicado en trece grupos por las semejanzas entre sus pro-
por J. W. Döbereiner
en 1829 [10], donde
piedades físicas y químicas y, dentro de cada grupo,
propone las triadas los colocó según sus pesos atómicos. Por aquella
de elementos. época, había muchos químicos trabajando en torno
a una ordenación de los elementos conocidos (cerca
de 60) y les intrigaba la repetición de propiedades
químicas, con cierta periodicidad, en función de los
pesos atómicos. El geólogo francés Alexandre-Émile
de Chancourtois  (1820-1886), en 1862, colocó los
elementos conocidos (y algunos compuestos) por
orden creciente de peso atómico, sobre una curva he-
licoidal inscrita alrededor de un cilindro vertical con
una circunferencia de 16 unidades (el peso atómico
del oxígeno), en la que los elementos que caían en la
misma vertical tenían propiedades químicas seme-
jantes. Sugirió así que las propiedades de los elemen-
tos tenían un carácter numérico. A su ordenamiento
mentos en diez triadas, tres grupos de cuatro y lo denominó vis tellurique (tornillo telúrico), por estar
otro grupo de cinco elementos [11]. el telurio en el centro de la gráfica (Figura 2). Según
En 1857 William Odling (1829-1921), químico Scerri, aunque los trabajos de Chancourtois recibie-
inglés que fue profesor en la Royal Institution y del ron poca atención en su tiempo, fue realmente quien
descubrió la periodicidad química [2].
Entre 1864-1868, el químico y músico inglés
John A. R. Newlands  (1837-1898) apreció que,
cuando los elementos se ordenaban por pesos
atómicos crecientes, cada ocho elementos existían
semejanzas entre las propiedades físicas y quími-
cas (Figura 3) [12]. Como existía cierto parecido
con la escala musical, la llamó “Ley de las Octavas”.
Esta ley, ridiculizada en su tiempo, no fue admitida
por la Royal Society de Londres, aunque en 1887
se le otorgó la Medalla Davy.
La clasificación alcanza una solución incipiente
hacia 1869, con los esfuerzos de Mendeléiev [13]
y del médico y químico alemán Julius Lothar Me-
yer (1830-1895) [14], ambos trabajando de forma
independiente. La tabla de Meyer está fechada en
diciembre de 1868, pero no se publicó hasta 1870,
mientras que la de Mendeléiev fue comunicada por
Menshutkin (por enfermedad del autor), en octubre
de 1868, a las Sociedad Rusa de Química y se publi-
có en 1869 (Figura 4). En 1882, la Royal Society, con
gran sentido de la justicia, concedió conjuntamente
la Medalla Davy a Meyer y Mendeléiev. Hay cierta
disputa sobre quién de los dos fue el primero, como
recoge Spronsen [15] de forma detallada. Este autor
admite que realmente la de Meyer, basada en pro-
piedades físicas de los elementos, es anterior, pero
no fue muy conocida hasta después de su muerte,
cuando la publicó la Universidad de Tubinga y, por
otra parte, señala que Mendeléiev fue más cons-
ciente de la importancia de su clasificación.
La tabla original de Mendeléiev fue modificada,
por ejemplo, para introducir, el grupo de los ga-
Fig. 2. Organiza- ses inertes que en aquel momento aún no estaban
ción original de descubiertos. Sin duda es admirable su intuición
los elementos por
Chancourtois en 1862
si se tiene en cuenta la inexactitud de muchos de
y boceto actual de su los datos de que se disponía. Dado que trabajó con
tornillo telúrico. datos de 63 elementos frente a los 118 conocidos

14  Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019

 Año Internacional de la Tabla Periódica (2019): una oportunidad para abordar contextos de didáctica e historia…  •  Temas de Física
en la actualidad, se ha comparado su proeza a re-
solver un puzle con solo la mitad de las piezas. De
la tabla se deducía la periodicidad de las propieda-
des, que se correspondían esencialmente con las
valencias de los elementos, y que dependían, a su
juicio, de los pesos atómicos. Es aún más sorpren-
dente que predijera la existencia y propiedades de
elementos no descubiertos entonces, como el galio
(eka-aluminio) y el germanio (eka-silicio).
Los estudios de Mendeléiev, Meyer y otros cien-
tíficos, en la construcción de la TP, se acrecientan
si se considera que, en su época, no se conocía la
estructura de la materia a nivel atómico e, incluso,
la separación y purificación de los elementos era
aún muy rudimentaria. El Congreso Internacional
de Química de Karlsruhe (Alemania), en 1860, al
que asistieron los dos científicos citados, puso de
manifiesto que existían regularidades entre los
elementos químicos. Estos autores se referían a
un “sistema periódico”, término que permanece en
varios idiomas, como el alemán (periodensystem),
aunque con el tiempo se fue denominando “tabla
periódica” en otras lenguas, como el inglés (perio-
dic table), el francés (tableau o table périodique)
y el español, al concretarse en filas y columnas.
Gracias a la TP de Mendeléiev y otras como las
comentadas, se pudieron relacionar las propieda-
des de los elementos y sus compuestos con otros
de similar comportamiento. Su tabla supuso un
verdadero renacimiento de la química y se puede
decir que varios de los descubrimientos posterio-
res tienen su base en la búsqueda de las causas de
las irregularidades, que no se podían explicar con
los pesos atómicos. Entre los problemas estaban,
aparte de “huecos” de elementos ya comentados,
las inversiones de orden, como telurio-yodo. Es-
tas inversiones se explicarían, como otros aspec-
tos esenciales de la TP, en 1913, por el físico inglés
Henry Moseley  (1887-1915), al justificar el con-
cepto de número atómico, mediante la ley que lleva
su nombre. La ley de Moseley establece la relación
empírica entre la longitud de onda de rayos X emi-
tidos por los átomos con su número atómico (Figu-
ra 5). Fue la base para establecer la “ley periódica”
moderna, según la cual, las propiedades físicas y
químicas de los elementos muestran tendencias
periódicas al ponerlos en orden de sus números
atómicos (y no del peso atómico, como establecía
la primitiva ley periódica de Mendeléiev). Como
dice Moeller [7], dado que el peso atómico depen-
de fundamentalmente del núcleo, es lógico que no
fuera el responsable del comportamiento químico,
mientras que el número atómico, que indica el nú-
mero de electrones del átomo (y que coincide con
el de protones), estaría más relacionado con dicho
comportamiento. Como es bien conocido, Moseley
falleció con solo 27 años en la batalla de Galípoli
(Turquía) durante la Primera Guerra Mundial, pero
su aportación fue fundamental para la compren-
sión de la estructura atómica y de la TP.
En la historia de la TP no se pueden olvidar los Fig. 3. Tabla de ele-
nombres de Soddy, Bohr, Schrödinger y Seaborg. mentos de Newlands,
colocados en “octa-
Frederick Soddy (1877-1956) fue un químico y fí-
vas”.
sico inglés, premio Nobel de Química en 1921 por
el concepto de isótopo, que explicó la importancia
del peso atómico ponderado (teniendo en cuen-
ta la proporción de cada isótopo). El físico danés
Niels Bohr  (1885-1962) realizó contribuciones
fundamentales para la comprensión de la estruc-
tura del átomo y de la mecánica cuántica. El físico
y filósofo alemán Erwin Schrödinger (1887-1961)
también destacó por su contribución al desarrollo
de la mecánica cuántica, y el físico norteamerica-
no Glenn T. Seaborg (1912-1997) añadió diez ele-
mentos a la TP, incluido el plutonio.
Diversas estructuras se le han ido asignando a
lo largo de la historia a la tabla de Mendeléiev ini-
cial, disponiendo los elementos de las formas más
diversas. La más conocida y usada que aparece en
casi todos los libros de texto y publicaciones es
la forma alargada. Varios artículos del Journal of
Chemical Education publicados en las últimas ocho
décadas explican muy diferentes posibilidades. Se
recomiendan al respecto los trabajos de Quam y
Battel Quam [16-18].
Recursos didácticos para el aprendizaje de
la tabla periódica y aspectos asociados
La asimilación por el alumnado de ESO y Bachille-
rato de los conceptos implicados en la comprensión
de la TP, su significado e importancia, no es sencilla
ni inmediata. Entre otros motivos, se debe a la com-
plejidad de la física cuántica, que da soporte a la in-
Fig. 4. Tabla de
elementos de Men-
deléiev, publicada en
la revista alemana
Zeitschrift fϋr Chemie,
en 1869.
Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  15
Temas de Física  •  Gabriel Pinto, Manuela Martín Sánchez, M. Araceli Calvo Pascual y Almudena de la Fuente
Fig. 5. Representa-
ción de la raíz cuadra-
da de las frecuencias
de emisión de rayos X
de los elementos en
relación a su número
atómico, publicada
por Moseley en la
revista británica Phi-
losophical Magazine,
en 1914.
terpretación actual del átomo. Recientemente se
han recogido algunos recursos didácticos para el
aprendizaje de los modelos atómicos y las propie-
dades periódicas de los elementos [19].
Existe abundante bibliografía sobre la TP. A
modo de ejemplo, destacamos la clara revisión his-
tórica, acompañada de una representación artísti-
ca de la propia tabla, que propusieron Fernández
y Fernández [20], donde destacan que Moseley es
el autor conceptual de la TP mediante la aplica-
ción del número atómico. Otro trabajo de utilidad
para el alumnado de primaria y de ESO, relaciona
los elementos de la TP con los alimentos y con las
funciones que desempeñan en el organismo [21].
En un artículo reciente, se recogen interesantes
propuestas de juegos educativos para fomentar
el aprendizaje de la clasificación periódica de los
elementos, incluyendo más de 100 referencias
sobre el papel de la gamificación en la educación
científica y ejemplos de herramientas formativas
para memorizar, comprender y aplicar la TP [22].
Además de los propios libros de texto, existen mul-
titud de libros específicos sobre la TP. En concreto,
el neurólogo y escritor inglés Oliver Sacks (1933-
2015) recoge su fascinación por la tabla periódica,
desde niño, en un libro muy motivador [23]. Tam-
bién recomendamos el libro de Gray con imágenes
de muy alta calidad sobre todos los elementos [24].
Dada la variedad de recursos educativos actua-
les, que incluyen vídeos, aplicaciones de teléfo-
nos móviles, etc., aparte de artículos en revistas
y libros, como los citados, hemos seleccionado
16  Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019
algunos en la Tabla 6. Sin duda, estos recursos se
multiplicarán durante la celebración de la efemé-
ride objeto de este trabajo, abriendo más perspec-
tivas y oportunidades al profesorado. Obviamente,
las aportaciones de la Tabla 6 son solo una mues-
tra de la variedad de recursos disponibles para el
aprendizaje de la TP y temas relacionados. Siempre
es un reto para el profesorado inculcar el interés
por este icono que, como tantos aspectos de la vida,
es más apreciado cuanto más se conoce. Profun-
dizar en su conocimiento significa, por ejemplo,
comprender cómo ese orden que se vislumbraba a
partir de mediados del siglo xix, se debe a la estruc-
tura atómica que revela la física cuántica. Así, algu-
nos de los hitos más importantes del aprendizaje
de la TP son cuando el alumnado descubre que los
elementos alcalinos tienen propiedades similares
porque todos tienen configuración electrónica s1,
o que los gases nobles son inertes porque tienen
completa su capa de valencia, por citar dos ejem-
plos. Otro paso importante en el aprendizaje es la
interpretación de las propiedades periódicas.
Como sugerencia de temas adicionales a tratar,
se recomienda profundizar en la denominación
y símbolos de los elementos, que serán la base
de la nomenclatura de los compuestos químicos.
Algunos ejemplos de planteamientos iniciales al
respecto, para tratar con el alumnado, pueden ser
preguntar por qué en unas TP aparecen símbolos
de elementos como Uuh, Uus y Uuo y en otras más
recientes se sustituyen por Lv, Ts y Og, respectiva-
mente. También se pueden discutir con el alumna-
do otros ejemplos y conceptos relacionados, como
la controversia en el uso de términos como peso
atómico, masa atómica relativa y masa atómica.
Por cercanía, se propone analizar, según su eta-
pa educativa, aspectos como:
• La contribución española en el descubrimien-
to de tres elementos químicos (V, W y Pt; este
último el único de etimología española en su
nombre y símbolo);
• Las aportaciones de Miguel A. Catalán Sañu-
do (1894-1957) en el descubrimiento de las
series espectrales que denominó multipletes,
así como sobre la interpretación de la configu-
ración electrónica y la elaboración de una TP
basada en los espectros atómicos [25], como
se recoge en la Figura 6;
• Las contribuciones de Blas Cabrera y Felipe
(1878-1945) al estudio de las propiedades
magnéticas de los átomos, que contó con una
gran proyección internacional;
• La obra de Enrique Moles Ormella (1883-
1953), que llegó a ser secretario de la Comisión
de Pesos Atómicos de la IUPAC.
Conclusión
La tabla periódica, conocida (aunque no siempre
comprendidos su significado e implicaciones) por
casi todas las personas que tienen estudios bási-
 Año Internacional de la Tabla Periódica (2019): una oportunidad para abordar contextos de didáctica e historia…  •  Temas de Física

Tabla 6. Algunos recursos didácticos propuestos para el estudio de la tabla periódica.

Título y fuente Características

The International Year of the Periodic Table Información, actividades, vídeos, enlaces, etc., sobre la celebración del Año Internacional de la
https://www.iypt2019.org/ Tabla Periódica de los Elementos Químicos.

Webelements Ofrece datos e ilustraciones de más de 80 propiedades de los elementos. Además, incluye la
http://bit.ly/1lPViSI venta de productos educativos.

RSC Periodic table Tabla periódica interactiva (disponible también como app) que incluye historia, vídeos y tenden-
http://rsc.li/1eSlfuQ cias de propiedades atómicas.

Dynamic periodic table En varios idiomas, se presenta gran cantidad de información, como las configuraciones electró-
http://bit.ly/1oiWTlf nicas y propiedades de los elementos (con visualizaciones modificables).

The Periodic Table of the Elements, in Pictures

Versión muy visual de aplicaciones de los elementos químicos, dispuestos en una tabla periódica
and Words
en inglés, especialmente indicada para Educación Primaria y ESO.
https://bit.ly/2qjAbRz

The Periodic Table Challenge

Una TP “vacía” donde se pueden rellenar los huecos de cada elemento con su símbolo.
http://bit.ly/2B9iHI9

Periodic Table Battleship Una versión del tradicional juego de los “barquitos”, para aprender la ubicación de los elementos
http://bit.ly/2mnGRKC en la TP.

Periodic Table of Videos

Vídeos divulgativos sobre cada uno de los elementos químicos.
https://bit.ly/2hv9ZAb

The Periodic Table Song Una canción que recoge el nombre de todos los elementos químicos, en inglés, por orden de
https://bit.ly/2Bm6rYI número atómico creciente subtitulada en español.

Commission on Isotopic Abundances and Atomic

Información actualizada de los elementos químicos y, especialmente, la abundancia de isótopos
Weights (IUPAC)
de cada uno de ellos.
https://bit.ly/2AvhCiP

Tabla Periódica Recomendaciones de la Real Sociedad Española de Química para nombrar todos los elementos
https://bit.ly/2nz6CVT químicos en español.

History of Periodic Table Vídeo donde se describe de forma amena (en inglés) la historia del desarrollo de la TP, en 7 mi-
https://bit.ly/2yOcHVn nutos.

Compoundchem Infografías realizados por el Prof. Andy Brunning sobre temas de física y química; incluyen la
https://bit.ly/1cG4VQ7 historia de los modelos atómicos y diversas tablas periódicas.

cos, es un icono universal de la ciencia. Su desarro-
llo histórico es un tema de estudio esencial para
que el alumnado descubra cómo se construye la
ciencia (éxitos y fracasos, tarea colectiva, interre-
lación de distintas áreas, etc.) y cómo la interpre-
tación de la propia tabla se vislumbra solo cuando
se conoció el modelo atómico cuántico (primer
tercio del siglo xx). Además, sus implicaciones son
esenciales para entender múltiples aspectos de las
propiedades de elementos y compuestos.
La celebración de su Año Internacional en 2019,
permitirá desarrollar multitud de actividades para
su comprensión y conocimiento, tanto a nivel edu-
cativo como divulgativo. Por ello, se anima a los
docentes de las distintas etapas educativas, a abor-
dar tareas e ideas al respecto, fomentando además
la creatividad de sus alumnos y del público en ge-
neral que, a veces, ven este tema como algo tedioso
y poco aplicado.
Agradecimientos
Se agradecen las ayudas recibidas de la UPM
(proyecto de innovación educativa Chem-Innova),
la Sección Territorial de Madrid de la RSEQ (pro-
yecto Química, una ciencia muy aplicada), y la
Fundación Obra Social “la Caixa” (proyecto Cien-
cia y tecnología al alcance de todos). Además, se
agradece la información recibida del Dr. José María
Fernández (Instituto de Estructura de la Materia
del CSIC) sobre la tabla periódica de M. A. Catalán.
Bibliografía
[1] R. M. Baum, “Celebrating the periodic table”, Chem.
Eng. News, 2003, 81(36), 127-129.
[2] E. Scerri, La Tabla Periódica: Una Breve Introducción
(Alianza Editorial, Madrid, 2013).
[3] International Year of the Periodic Table of the Che-
mical Elements, “The Periodic Table of Chemical
Elements: A Language for Science”. Accesible en:
https://www.iypt2019.org/ (consultada en octu-
bre de 2018).
[4] R. D. 126/2014, de 28 de febrero, por el que se esta-
blece el currículo básico de la Educación Primaria.
BOE n.º 52, 01/03/2014.
[5] R. D. 1105/2014, de 26 de diciembre, por el que se
establece el currículo básico de la Educación Se-
cundaria Obligatoria y del Bachillerato. BOE n.º 3,
03/01/2015.

Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  17

Temas de Física  •  Gabriel Pinto, Manuela Martín Sánchez, M. Araceli Calvo Pascual y Almudena de la Fuente

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químicos: la tabla periódica de los elementos”, An.
Quím., 2012, 108(3), 314-321.
[21] R. Valero Molina, “El Sistema Periódico y su rela-
ción con la vida cotidiana. Parte I”, An. Quím., 2013,
109(4), 301-307.
[22] A. J. Franco-Mariscal et al., “A game-based ap-
proach to learning the idea of chemical elements and
their periodic classification”, J. Chem. Educ., 2016,
93(7), 1173-1190.
[23] O. Sacks, El Tío Tungsteno. Recuerdos de un Químico
Precoz (Anagrama, Madrid, 2006).
[24] T. Gray, The Elements: A Visual Exploration of Every
Known Atom in the Universe (Black Dog & Leventhal
Publishers, Nueva York, 2009). Con información
complementaria y algunas imágenes accesibles en:
http://periodictable.com/theelements/pages.html
(consultada en octubre de 2018).
[25] C. E. Moore, Atomic Energy Levels, Vol. I (National
Standards Reference Data System, NSRDS, Washing-
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[6] S. Esteban Santos, La Historia del Sistema Periódico
(Cuadernos de la UNED, Madrid, 2009).
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1959), pp. 98-113. Gabriel Pinto
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Reales Sociedades Españolas
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de Física y de Química.
The periodic system of the elements”, J. Chem. Educ.,
E.T.S. de Ingenieros Industriales,
1932, 9(9), 1593- 1604. UPM
[10] J. W. Döbereiner, “Versuch zu einer Gruppierung
der elementaren Stoffe nach ihrer Analogie”, Anna-
len der Physik und Chemie, 1829, 15, 301 - 307.
[11] J. H. Gladstone, “On the relations between the ato-
mic weights of analogous elements”,  Philosophical
Magazine, 1853, 5, 313–320. Manuela Martín Sánchez
[12] W. H Taylor, “J. A. R. Newlands: A pioneer in atomic Grupo Especializado de Didáctica
numbers”, J. Chem. Educ., 1949, 26(9), 491-496 e Historia de la Física y la Química,
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de Física y de Química
léiev (Nivola Libros y Ediciones, Tres Cantos, Madrid,
2002).
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Mendeleev and Meyer”, J. Chem. Educ., 1969, 46(3), Grupo Especializado de Didáctica
136-139. e Historia de la Física y la Química,
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sifications of the elements. I. Introduction and short de Física y de Química.
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Profesorado y Educación, UAM
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sifications of the elements. II. Long charts”, J. Chem.
Educ., 1934, 11 (4) 217-223.
[18] G. N. Quam, M. Battel Quam, “Types of graphic clas-
sifications of the elements. III. Spiral, helical and Almudena de la Fuente
miscellaneous charts”, J. Chem. Educ., 1934, 11 (5) Grupo Especializado de Didáctica
288-297. e Historia de la Física y la Química,
Reales Sociedades Españolas
[19] G. Pinto, “Recursos para el aprendizaje de los mo-
de Física y de Química.
delos atómicos y las propiedades periódicas de los
Colegio de Nuestra Señora
elementos químicos”, Alambique, Didáctica de las de los Ángeles, Madrid
Ciencias Experimentales, 2018, 93, 41-45.

18  Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019

Generación de combustibles
sintéticos a partir de H2O y CO2:
Electrolizadores de óxido sólido
Marc Torrell Faro
El incremento en el uso de energía renovable está sujeto al uso de sistemas de almacenamiento.
Los electrolizadores de alta temperatura representan una alternativa eficiente que, mediante el uso
de energía renovable sobrante, pueden generar combustibles sintéticos, consumiendo CO2 y H2O.
E
l uso de energía renovable tiene muchos beneficios
potenciales, entre los que se incluyen una reducción
de las emisiones de CO2, la diversificación de los su-
ministros de energía y una menor dependencia de
los mercados de combustibles fósiles. Durante las últimas
décadas, se ha realizado un esfuerzo relevante en Europa
para promover este tipo de fuentes de energía. A pesar de la
alta producción de energía renovable, parte de la producción
se desperdicia porque no se produce durante los picos de
consumo. Sistemas eficientes de almacenamiento de energía
pueden ser la solución a este problema, maximizando el uso
de fuentes de energía con bajas o nulas emisiones de CO2.
Una de las soluciones más prometedora es el desarrollo de
procesos de energía renovable a combustible (Power to Gas)
para el almacenamiento químico de la misma. La energía pro-
ducida por fuentes renovables durante los períodos de bajo
consumo (o precio) se usaría para reducir electroquimica-
mente H2O y CO2 a gas de síntesis (H2O y CO), y, así, unir inte-
ligentemente las dos principales infraestructuras energéticas
de nuestra sociedad moderna (redes de gas y electricidad)
mediante la tecnologia de electrólisis a elevada temperatura
basada en celdas de óxido sólido (SOEC). IREC, mediante las
investigaciones realizadas en el marco del proyecto europeo
ECO, está desarrollando y optimizando la tecnología SOEC
para su uso como sistema de almacenamiento químico de
energía generando gas natural a partir de H2O y CO2.
Uso de energía renovable y la necesidad
del almacenamiento químico
Durante los últimos años se está viviendo una transición del
modelo energético, pasando de un modelo basado en gran-
des centrales generadoras que suministran la energía a sus
consumidores a un escenario mucho más diversificado don-
de las energías renovables, especialmente parques eólicos y
solares, juegan un papel importante. Estas nuevas fuentes de
energía están descentralizadas y permiten, salvo leyes que
intentan contener lo inevitable, el nacimiento de esquemas
locales de generación que transformarán el esquema clásico
de distribución. El éxito de estos nuevos escenarios está su-
jeto a la incorporación de sistemas de distribución energética
inteligentes y la necesidad de sistemas eficientes de almace-
namiento de la energía.
En la actualidad, existen más de 2TWe de energía renova-
ble instalados en el mundo [1]. Europa, con una capacidad
instalada de más de 400 GWe, genera alrededor del 16 % de
su energía consumida mediante fuentes de energía renova-
ble (RES). Entre ellos 140 GWe son generados por molinos
eólicos. En España hay instalados más de 23 GWe [2]; y Di-
namarca, con 5 GWe (1.2GWe en mar abierto) [3], tiene la
capacidad de producir más energía eólica que la demanda
total de energía del país. Otro ejemplo es Alemania, donde
la inversión en eólica y solar de los últimos años ha llevado
a generar, en momentos concretos de los últimos años, un
exceso de producción energética (85 % del cual renovable)
que obliga a las compañías comercializadoras a bonificar el
consumo de energía para mantener la estabilidad de la red
de distribución.
Uno de los principales problemas de las fuentes de energía
renovable es la discontinuidad de su producción energética,
ya que están sujetas a fenómenos ambientales. Dicha discon-
tinuidad, no por eso impredecible, genera un claro desajuste
o falta de sincronía entre la generación por fuentes de energía
renovable y la demanda energética de la población.
La gráfica de la figura 1a [4] muestra un ejemplo del per-
fil de consumo energético combinado con la generación de
energía eólica durante una semana. El perfil de producción y
consumo proviene de una planta eólica situada en Bonneville
(Oregon-EE. UU.). En ella, se observa cómo existen valles de
generación energética solapados con picos de consumo. En
estos puntos es donde se requiere el uso de otras fuentes de
energía para alcanzar la demanda total. En otros momentos,
se observa el caso contrario, con consumos menores a la pro-
ducción eólica. En estos momentos es donde las tecnologías
de almacenamiento podrían jugar un papel importante.
Los excesos de producción, o periodos de bajo precio de
la energía, obligan a los controladores de las redes a desco-
Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  19
Temas de Física  •  Marc Torrell Faro
Fig. 1. a) Perfil
de producción de a)
energía eólica y
consumo de energía.
b) Balance energético
considerando el uso
del almacenamiento
de la energía eólica
sobrante.
b)
nectar la generación de algunas fuentes de energía
renovable. De este modo, se evita que la frecuen-
cia de la red suba más allá de los límites legales o
soportables para la red. A su vez, mediante esta
práctica, se mantiene el precio, ya que el coste de
producción de la energía podría ser mayor que el
de venta. ¿Y si pudiéramos almacenar ese exceso
de energía, ahora desaprovechado, para usarlo du-
rante los picos de consumo? Es ahí donde los sis-
temas de almacenamiento de energía y su control
dinámico se vuelven imprescindibles. En la figura
1b se presenta un hipotético balance energético
entre las zonas de más generación que demanda
y viceversa. El control dinámico de la demanda es
un concepto por el cual el consumo de electricidad
de una serie de dispositivos se gestiona de manera
que responda al estado de la red y a sus fuentes.
Estos sistemas, para ser realmente útiles, necesi-
tan de tecnologías que les permitan almacenar la
energía de forma útil, rápida y eficiente. En este
artículo se presenta en detalle el caso de los elec-
trolizadores de alta temperatura basados en óxi-
dos sólidos (SOEC) como una de las alternativas
más eficientes y flexibles para el almacenamiento
químico de energía.
El uso de CO2 como materia prima para
generar nuevos combustibles
A pesar de todos los esfuerzos de concienciación
y acuerdos gubernamentales, el uso de fuentes de
energía basadas en combustible fósiles y las con-
secuentes emisiones de CO2 generadas por esta
sociedad siguen aumentando, y se han situado
por encima de 41.000 millones de toneladas en
el año 2017 [5]. La concentración atmosférica de
CO2 ya superó los 400 ppm el pasado 2016, marca-
dos como límite por la comunidad científica para
20  Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019
intentar frenar a tiempo el calentamiento global.
La captura, transformación y reutilización de este
CO2, o de las futuras emisiones, se presenta como
uno de los mayores retos para la sostenibilidad
energética, y el uso de los electrolizadores de óxi-
do sólido, una de las posibles soluciones para mi-
nimizar este impacto.
A mitad de los años 60 del siglo xx ya se pre-
sentaron celdas electrolizadoras de óxido sólido
para la reducción electroquímica del CO2 [6]. Su
primer objetivo fue la aplicación de estos dispo-
sitivos para la regeneración de oxígeno para los
habitantes de las misiones espaciales del progra-
ma americano de vuelos tripulados. Esas inves-
tigaciones fueron lideradas por el Westinghouse
Research Laboratories de la NASA y publicadas
por Chandler y Pollara [7], que fueron los pione-
ros en proponer la tecnología. Al mismo tiempo,
Elikan et al. fueron quienes, también con el so-
porte de la NASA, propusieron el concepto de las
SOEC como un tipo de generadores que podían
producir oxígeno reduciendo el CO2 y el H2O, en
lugar de cargar las misiones con pesados tanques
de oxígeno [8]. Esta idea ha ido evolucionando, y,
hoy en día, es una de las que presentan mayor po-
tencial para generar oxígeno en el caso de viajes
tripulados a marte, donde existe una atmósfera en
la que predomina el CO2. En el siglo xxi, centros
de investigación de todo el mundo han reactivado
la investigación en la coelectrólisis de CO2 y H2O
con el objetivo de reducir las emisiones de CO2,
almacenar la energía sobrante de fuentes reno-
vables y substituir los combustibles fósiles por
combustibles sintéticos [6].
El dióxido de carbono (CO2), junto con el
agua (H2O), se puede transformar mediante la
tecnología de coelectrólisis en H2 + CO, mezcla
también conocida como gas de síntesis o syn-
gas, que es el precursor de varios combustibles
[9], entre ellos del metano o gas natural (CH4)
que se obtiene sometiendo el syngas a procesos
catalíticos ampliamente conocidos, como el Fis-
cher-Tropsch u otros [10]. La reducción del CO2
y el H2O a gas de síntesis se realiza inyectando
corriente a un dispositivo electrolizador. Es por
eso que la tecnología de coelectrólisis es uno de
los máximos exponentes de las llamadas rutas
Power to Gas (o Power to Liquid) de almacena-
miento químico de energía eléctrica. El exceso de
electricidad producido en las fuentes de energía
renovable se emplea para la producción de com-
bustibles sintéticos que pueden ser almacena-
dos. Dichos combustibles podrán almacenarse y
transportarse para ser utilizados en el momento
y lugar más adecuados en motores convenciona-
les o pilas de combustible. Si los gases exhaus-
tos de su utilización se recapturan y recirculan
nuevamente para su coelectrólisis, se obtiene un
ciclo cerrado sin huella de carbono (Figura 2).
Esta tecnología presenta la ventaja de acoplar
 Generación de combustibles sintéticos a partir de H2O y CO2: Electrolizadores de óxido sólido  •  Temas de Física

las dos principales infraestructuras energéticas

(electricidad y gas natural) con rendimientos del
ciclo cerrado completo, que se estiman alrede-
dor del 60 %. La viabilidad de estas rutas se ve
directamente comprometida por la eficiencia de
los procesos de conversión de electricidad a gas,
así como de gas a electricidad, involucrados. Los
dispositivos electrolizadores de alta temperatu-
ra basados en celdas de óxido sólido, conocidos
como solid oxide electrolyser cells (SOEC) presen-
tan eficiencias muy elevadas, superiores al 85 %
[12], lo que justifica el creciente interés por estas
tecnologías. Además, un electrolizador SOEC no
es más que una celda de combustible tipo SOFC
(solid oxide fuel cells) trabajando en modo inver-
so, convirtiéndose en una pila que genera poten-
cia a partir de los combustibles generados por el
electrolizador, como pasa también en la clásica
pila Daniel cuando invertimos sus polos y nos
permite depositar el Cu reducido sobre nuestro presenta ventajas en términos de eficiencia y Fig. 2. Ciclo basado
electrodo. Así, la tecnología SOC genera un ciclo coste, ya que se puede sustituir el aporte eléc- en generación y
almacenamiento de
cerrado de generación y consumo de energía, trico por aporte térmico, mucho más disponible energía, incluyendo
con un nulo o bajo impacto de carbono aprove- y económico. síntesis de combusti-
chando energía renovable y consumiendo un gas Paralelamente al proceso de coelectrólisis, se bles sintéticos.
nocivo como el CO2 como una de las principales conoce que se produce una reacción de equilibrio
materias primas. químico entre las formas oxidadas y reducidas
(ec. 3). Cuando empezamos a reducir el H2O y el
Cómo funciona una celda SOEC? CO2, estos se encuentran con el H2 y el CO gene-
Las principales ventajas de las celdas SOEC frente rados, dando lugar a esta conocida reacción de
a otras soluciones son su elevada eficiencia, el equilibrio llamada reacción de desplazamiento
uso de los productos almacenados tanto en pi- del agua (o water gas shift, WGS). Su existencia
las SOFC como en motores convencionales y la hace que actualmente los investigadores del cam-
compatibilidad con los nuevos escenarios ener- po todavía no tengan una posición común sobre
géticos, tanto por el uso de energías de origen si el CO se genera mayoritariamente vía “electro-
renovable como por el impacto en la reducción química” por la electrólisis directa del CO2 o vía
de emisiones del CO2. “química” por la reacción de equilibrio. Lo que sí
Como hemos comentado, la electrólisis de alta está demostrado es que la reducción del CO2 en
temperatura puede reducir el agua y el dióxido de presencia de agua se produce a voltajes mucho
carbono a hidrogeno y monóxido de carbono, esas más bajos que cuando se pretende su reducción
dos reacciones (ecuación 1 y ecuación 2) son endo- en seco; convirtiendo a la coelectrólisis en el mé-
térmicas, como muestran sus valores de ΔH. Como todo más eficiente para la reducción de CO2 [6] y
los parámetros termodinámicos de energía de la reducción de sus emisiones mediante un uso
Gibbs, entalpía y entropía, dependen de la tempe- alternativo del mismo.
ratura, estos varían dependiendo de las condiciones
en que se den las reacciones, sus valores a diferen- CO + H2O ↔ CO2 + H2 (Ec. 3)
tes temperaturas se presentan en la Figura 3.

H2O + 2e – → H2 + O2– ΔHτθ = 286 kj/mol Ec.1

CO2 + 2e – → CO2 + O2– ΔHτθ = 283 kj/mol Ec.2

Como se puede observar, la demanda total de

energía de ambas reacciones (ΔH, entalpía de la
reacción) es prácticamente constante, pero esa
demanda se reparte de forma distinta entre la
demanda eléctrica (ΔG, energía de Gibbs) que
decrece con la temperatura, y la demanda tér- Fig. 3. Termodinámi-
ca de las diferentes
mica (TΔS, entropía), que aumenta con la tem- reacciones que tienen
peratura. Eso implica que realizar la electrólisis lugar en un proceso
a elevada temperatura, como requieren las SOEC, de coelectrólisis.

Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  21

Temas de Física  •  Marc Torrell Faro
Fig. 4. Esquema de Qué compone, cómo funciona y cuáles son
una celda SOC en modo los materiales que se utilizan en una celda
electrolizador (SOEC)
y modo generador
SOEC
de potencia eléctrica Una celda electrolizadora de óxido sólido está
(SOFC). compuesta básicamente por dos electrodos
(ánodo y cátodo) y un electrolito. La función del
electrolito es aislar eléctricamente los dos elec-
trodos, separar los gases que se encuentran en
la cámara anódica y catódica y hacer de conduc-
tor de los iones O2– . Estos iones de oxigeno son
la base del funcionamiento de la celda. A un lado
del electrolito se encuentra el ánodo, también co-
nocido como electrodo de oxígeno y que tiene la
función de convertir los iones O2– en O2 molecular
que es liberado. Al otro lado el cátodo, o electrodo
de combustible, es el responsable de catalizar la
reducción del H2O a H2 y el CO2 a CO utilizando los
electrones inyectados y liberando los O2– genera-
dos hacia el electrolito, como se esquematiza en
la Figura 4a. El esquema de la Figura 4b explica el
funcionamiento del mismo dispositivo en modo
pila (SOFC).
Dichos procesos tienen lugar a elevadas tem-
peraturas, requiriendo de la utilización de mate-
riales cerámicos. Para el electrolito se requiere un
conductor iónico puro, que opere con bajas resis-
tencias a elevadas temperaturas, como es el óxido
de zirconio dopado con óxido de itrio. Este mate-
rial, conocido como YSZ, es el electrolito típico y
más utilizado en las celdas de óxido sólido [11].
Existen otros candidatos menos utilizados, pero
que también presentan propiedades para su uso,
como electrolitos —como son el mismo óxido de
zirconio dopado con otros elementos, como el es-
candio o el calcio—, óxidos de cerio dopados con
Fig. 5. Esquema
de una curva de
polarización típica
obtenida al medir
un dispositivo SOEC
a la temperatura de
trabajo y los distintos
sobrepotenciales de
activación, óhmico o
de difusión (η) que
hacen aumentar el
potencial de equilibro
inicial o potencial
en circuito abierto
(OCV).
22  Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019
gadolinio, itrio o samario, u otros óxidos mixtos
basados en lantano [12].
Para el electrodo de oxígeno, se requiere un
material que, aparte de su resistencia a atmos-
feras oxidantes a elevada temperatura, presente
actividad catalítica y conductividad, tanto elec-
trónica como iónica. Típicamente los materiales
tipo perovskitas sirven para cubrir estas funcio-
nalidades. Hoy, el material más utilizado es una
perovskita basada en una cobaltita de lantano y
estroncio dopada con hierro, conocida como LSCF
(La0.6Sr0.4Co0.2Fe0.8O3). El LSCF no ha sido históri-
camente el cátodo de las celdas SOC, ya que el
electrodo de oxigeno más utilizado había sido el
LSM. La ventaja del LSCF es que permite trabajar
a temperaturas más bajas (700-750 °C) con bue-
nos rendimientos y presenta un comportamiento
mixto muy bueno de conducción de electrones e
iones. Esa característica, que presentan los mate-
Fig. 6. Esquema de un diagrama de Nyquist obtenido al medir
un dispositivo SOEC a la temperatura de trabajo.
riales llamados conductores mixtos (de iones y
electrones), facilita la generación de puntos acti-
vos para la reacción y la consecuente generación
del oxígeno molecular (O2) a partir del O2– [12].
Para el electrodo de combustible, responsable
de la propia reducción del H2O y el CO2, se utiliza
de forma muy mayoritaria el cermet (metal + ce-
rámico) de níquel e YSZ. El Ni-YSZ se impone en la
mayoría de celdas fabricadas, debido a su buena
actividad catalítica, bajo coste, estabilidad quími-
ca y adecuado coeficiente de expansión térmica,
evitando problemas mecánicos de la celda, ya que,
normalmente, esta capa de la celda es la que se
utiliza de soporte mecánico para la misma.
Para generar los sistemas electrolizadores,
estas celdas se apilan formando el llamado api-
lamiento o stack. Estos stacks serán la base de los
sistemas modulares que permitirán generar siste-
mas de distintas potencias, dependiendo del área
activa de cada celda y del número de celdas que
se apilen en cada uno de ellos.
La forma más habitual de conocer la cantidad
de energía que se puede almacenar mediante una
celda electrolizadora, así como la cantidad de po-
tencia que puede generar una pila de combustible,
es mediante su caracterización electroquímica.
Normalmente, se recurre a la medida de curvas
 Generación de combustibles sintéticos a partir de H2O y CO2: Electrolizadores de óxido sólido  •  Temas de Física
de polarización, también conocidas como curvas
voltaje (V) frente corriente (I) (Figura 5), así como
a las medidas de espectroscopia de impedancia
compleja, basada en la aplicación de corriente al-
terna a diferentes frecuencias con una cierta am-
plitud. Esta técnica permite separar los distintos
fenómenos que ocurren en la celda dependiendo
de sus tiempos característicos (más rápidos o más
lentos). Su representación en función de la parte
imaginaria de la impedancia (Z’’) frente a la parte
real (Z’) da los arcos conocidos como representa-
ción de Nyquist. Cada arco representa un fenóme-
no electroquímico distinto (Figura 6).
Qué se está investigando
Desde el Institut de Recerca en Energia de Ca-
talunya (IREC) se está participando en varios
proyectos para la mejora del rendimiento y la du-
rabilidad de las celdas SOEC. En este aspecto, IREC
participa en uno de los proyectos europeos más
importantes en activo en el campo de la coelec-
trólisis: el proyecto ECO [13]. El proyecto ECO,
con la colaboración de otros 6 socios europeos, se
centra en el desarrollo y validación de un sistema
de electrólisis de elevada eficiencia para la con-
versión del exceso de energía renovable, mediante
la reducción simultánea de vapor de agua y CO2 a
través de celdas electrolizadoras de óxido sólido,
en hidrocarburos almacenables y distribuibles (Fi-
gura 7). El proyecto pretende trasladar la tecnolo-
gía SOEC, desde la prueba de concepto, donde se
encuentra actualmente, a su validación en plantas
industriales, en los próximos 3 años.
Uno de los objetivos del departamento de ma-
teriales avanzados para la energía de IREC es
conseguir mejorar el rendimiento de estas pilas
mediante la innovación en los materiales utili-
zados. De esta forma se ha propuesto el uso de
materiales mesoporosos nano estructurados para
su aplicación en el electrodo de oxígeno [14]. Los
materiales mesoporosos, como los que se mues-
tran en la Figura 8. Son materiales cerámicos que
presentan una red de porosidad periódicamente
distribuida y que muestran una alta estabilidad
a elevadas temperaturas. A dichas temperaturas,
estos materiales tienen una elevada conductividad
iónica y, mezclados con fases activas catalítica-
mente, forman un excelente electrodo que, aumen-
tando los puntos activos y su distribución, debida
a su mesoestructura, evita la aparición de puntos
de elevada densidad de corriente que pueden lle-
var a la rápida degradación de las celdas [15].
El proyecto ECO también tiene una parte enfo-
cada a la implementación industrial de la tecno-
logía SOEC. Para ello, se estudian detalladamente
diferentes casos industriales de estudio, donde se
podría implementar la tecnología. Los tres casos
son: i) La transformación del CO2 generado en una
cementera para, mediante un sistema SOEC, gene-
rar gas natural; ii) mejora del biogás de una planta
de biomasa mediante transformación del CO2 , y Fig. 7. Resumen
iii) enriquecimiento directo del biogás transfor- gráfico del proceso y
mándolo a metano. objetivos del proyecto
ECO_SOEC
Entrada al mercado de la tecnología SOEC
A nivel económico, se debe considerar que habla-
mos de una tecnología que todavía no se encuentra
madura para su comercialización, pero sí que se
pueden evaluar los beneficios de la generación de
combustibles o hidrocarburos sintéticos. Algunos
estudios concluyen que solo en casos muy excep-
cionales se debe convertir una fuente de energía,
como la electricidad, a otra fuente, como el hidro-
geno [16]. De todas formas se debe considerar
el origen de esta energía convertida. Cuando el
origen de esta energía es primario (fotovoltaica o
eólica), esta puede ser convertida a cualquier otra
forma de energía aumentando su propio valor. El
valor de los combustibles sintéticos radica en la
producción de electricidad con un impacto neutro
de carbono. Teniendo en cuenta la evolución en
las tasas de emisión de CO2 y las tasas cargadas a
combustibles que implican esas emisiones, en un
futuro próximo las circunstancias serán favorables
a la producción de combustibles sintéticos, como
ya lo son en países como Noruega o Islandia. Con-
siderando precios de electricidad cercanos a los
30 €/MWh, los precios de los combustibles sinté-
ticos podrían resultar competitivos con la gasolina
alrededor de los 0.8 €/L. Estos valores no están
lejos de los precios actuales en países como Esta-
dos Unidos u otros, y siempre se ven fuertemente
Fig. 8. a) Imagen SEM de polvo de NiO
mesoporoso; b) imagen TEM del mis-
mo material, y c) reproducción 3D de la
estructura simétrica del polvo mesoporoso
sintetizado.
Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  23
Temas de Física  •  Marc Torrell Faro
alterados por los impuestos, dependiendo del ori-
gen y la huella de carbono del combustible.
Agradecimientos
El autor quiere agradecer la financiación del pro-
yecto ECO (GA.nº 699892) en el marco del pro-
grama H2020 de la FCH-JTI, al proyecto FETEN
(PROD00028) del programa “Industria del conei-
xement” (AGAUR) y el proyecto COSIN (COMR-
DI15-1-0037) del programa RIS3CAT, así como a
todos los trabajadores de IREC que colaboran en la
consecución de estos resultados y conocimiento.
Referencias
[1] REN21 Annual Report; http://www.ren21.net/
[2] Red Eléctrica Española; http://www.ree.es/
[3] https://hipertextual.com/2016/01/energia-eolica
[4] https://bravenewclimate.com/2011/10/29/gws-sg-es/
[5] https://www.co2.earth/
[6] Y. Zheng et al., “A Review of High Temperature Co-
electrolysis of H2o and Co2 to Produce Sustainable
Fuels Using Solid Oxide Electrolysis Cells (Soecs):
Advanced Materials And Technology”, Chem. Soc. Rev.
46, 1427-1463 (2017).
[7] H. W. Chandler y F. Z. Pollara, “Oxygen Regenera-
tion in a Solid Electrolyte System”, AICHE Chemical
Engineering Progress Series Aerospace Life Support
62, 38–42 (1966).
[8] L. Elikun, J. P. Morris y C. K. Wu “Development of a
Solid Electrolyte Carbon Dioxide and Water Reduc-
tion System for Oxygen Recovery”, Westinghouse
Electric Corporation (NASA, Washington D.C. 1972).
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[9] C. Graves, S. D. Ebbesen, M. Mogensen y K. S. Lack-
ner, “Sustainable Hydrocarbon Fuels by Recycling
CO2 and H2O with Renewable or Nuclear Energy”,
Renew. Sustain. Energy. Rev. 15, 1–23 (2011)
[10] The Fischer Tropsch Archive, http://www.fischer-
tropsch.org/
[11] J. B. Goodenough, “Ceramic Solid Electrolytes”, Solid
State Ionics 94, 17-25 (1997).
[12] J. T. S. Irvine et al., “Evolution of the Electrochemical
Interface in High-Temperature Fuel Cells and Elec-
trolysers”, Nat. Energy 1, art. 15014. (2016).
[13] http://www.eco-soec-project.eu/
[14] L. Almar et al.,“High-surface-area Ordered Meso-
porous Oxides for Continuous Operation in High
Temperature Energy Applications”, J. Mater. Chem.
2, 3134-3141 (2014).
[15] M. Torrell, L. Almar, A. Morata y A. Tarancón,
“Synthesis of mesoporous nanocomposites for their
application in solid oxide electrolysers cells: micros-
tructural and electrochemical characterization”, Fa-
raday Discuss. 182, 423-435 (2015).
[16] F. S. Zeman y D. W.Keith, “Carbon neutral hydrocar-
bons”, Phil. Trans. R. Soc. A. 366, 3901–3918 (2008).
Marc Torrell Faro
Institut de Recerca en Energia de
Catalunya (IREC), Barcelona
www.atlab.es
www.irec.cat
Wolframio: desde una supernova
al Laboratorium de Bergara
Juan J. Iruin
El nombramiento del Laboratorium de Bergara como Sitio Histórico de la European Physical Society
es un reconocimiento al aislamiento del wolframio en esa villa por parte de los hermanos Elhuyar
a finales del siglo xviii

D
esde su aislamiento en 1783 por los hermanos El-
huyar en Bergara, el wolframio ha jugado y sigue
jugando un papel clave en el desarrollo de nuestra
sociedad occidental. Su incorporación como filamen-
to en las bombillas incandescentes, su contribución a la dure-
za de las herramientas de corte de la industria automovilística
y otras aplicaciones más recientes, como empleo en catali-
zadores de reacciones químicas, son solo algunos ejemplos.
Su génesis en el Universo y su posterior distribución en
las diferentes capas de la Tierra ilustran la compleja historia
que hay detrás de cada uno de los constituyentes de la Tabla
Periódica de los elementos.

El Laboratorium, Sitio Histórico de la EPS

El pasado 20 de octubre de 2018, en un acto solemne presi-
dido por el Lehendakari del Gobierno Vasco, Iñigo Urkullu,
se produjo la proclamación como Sitio Histórico de la So-
ciedad Europea de Física (European Physical Society, EPS)
del llamado Laboratorium, un museo abierto en el Palacio de
Errekalde de la villa guipuzcoana de Bergara. Con ese nom-
bramiento, el Laboratorium, y Bergara, se suman a una lista
de otros enclaves relevantes en la historia de la Ciencia euro-
pea, siendo el tercero de los sitios radicados en España, junto
con la Residencia de Estudiantes del CSIC y el Observatorio
Fabra de Barcelona [1].
El Palacio Errekalde está estrechamente vinculado, como
la villa de Bergara en su conjunto, a los inicios de la Ciencia
en el País Vasco, ya que a finales del siglo xviii residió en él
Xabier María Munibe, VIII Conde de Peñaflorida quien, du-
rante años, fuera el Director del Real Seminario (en su origen
Real Seminario Patriótico Bascongado), fundado en 1776 por
la Real Sociedad Bascongada de Amigos del País (RSBAP).
El museo Laboratorium recoge el legado del Laboratorium
Chemicum, perteneciente al Real Seminario, un laboratorio
organizado por el químico francés L. J. Proust, uno de los pila-
res en la historia de la Química tal y como hoy la entendemos,
recordado por su ley de las proporciones definidas en la cons-
titución de moléculas mediante elementos químicos. El Labo-
ratorium Chemicum estuvo instalado en otro de los edificios
de la villa de Bergara, la Casa de Zabala, y en él, los hermanos
Fausto y Juan José Elhuyar (o Delhuyar, o de Luyart… que sobre
la grafía del apellido hay para todos los gustos) llevaron a cabo,
Placa conmemorativa del nombramiento del Laboratorium de Bergara como
Sitio Histórico de la European Physical Society.
en el verano de 1783, una serie de experiencias que culmina-
ron con la presentación a la Asamblea General de la RSBAP, en
septiembre de ese año, de una minuciosa memoria [2] en la
que describían el análisis de la wolframita (químicamente un
wolframato de hierro y manganeso) y, a partir de ese mineral
y por primera vez, el aislamiento de un nuevo metal que los
Elhuyar llamaron volfram (wolframio).
Pero el Laboratorium Chemicum no fue solo el enclave
casual del descubrimiento del wolframio. En ese mismo lugar,
Pierre-François Chabaneau desarrolló y patentó métodos de
purificación y separación de platino, y logró, finalmente, la
obtención del primer lingote maleable de ese metal. Y se de-
sarrollaron también métodos para la producción de chapas
de hierro y hojalata, siendo igualmente pionero en el análisis
de aguas. Todo ello gracias a sus instalaciones, dotadas del
instrumental más puntero, incluyendo hornos de alta tempe-
ratura, poco usuales en la época. Así lo reconocía en 1788 Ni-
colas Thunborg cuando llegó a Bergara para hacerse cargo de
las cátedras de mineralogía y metalurgia. Según Thunborg el
Laboratorium Chemicum “era un edificio aparte muy grande
y bastante instalado. Instrumentos y metal precioso no faltan.
Cuando me hicieron el inventario me quedé grandemente
sorprendido, pues no habiendo visto más que los laborato-

Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  25

Temas de Física  •  Juan J. Iruin

El Presidente de la European Physi- El wolframio como material estratégico

cal Society (EPS), Prof. Rüdiger Voss,
durante su intervención en el acto
de proclamación del Laboratorium
de Bergara como Sitio Histórico de
la EPS
rios de Upsala y Estocolmo, me atrevo a decir que
aquéllos no son más que una cuarta parte en com-
paración con éste”.
Pero, sin duda, el descubrimiento más famoso
acontecido en el Laboratorium Chemicum fue el
aislamiento del wolframio. Y así lo recalcan las
primeras líneas de la petición formal que el Di-
rector del Donostia International Physics Center
(DIPC), Ricardo Díez Muiño, envió a principios de
2018 a la EPS para que el Laboratorium de Ber-
gara fuera declarado Sitio Histórico. Merced a sus
relevantes propiedades que le sitúan, por ejemplo,
como el elemento metálico de más alto punto de
fusión (3422 °C) y el segundo con más alto pun-
to de ebullición (5930 °C), el wolframio ha sido,
desde los inicios del siglo xx, el componente fun-
damental de las humildes bombillas de filamento
incandescente que ahora están pasando a mejor
vida. Tras una tormentosa sucesión de inventos,
patentes y litigios, las bombillas que comenzaron
su existencia de la mano de Edison y su filamento
de carbono, alcanzaron su desarrollo final cuando
ese filamento se sustituyó por uno de wolframio.
Copia de la primera
página del informe
presentado por los
hermanos Elhu-
yar a la Comisión
Segunda de las Juntas
Generales de la Real
Sociedad Bascon-
gada de Amigos del
País, celebradas en
Vitoria entre el 27 de
setiembre y el 1 de
octubre de 1783. En
ese informe se descri-
be el aislamiento del
wolframio.
El wolframio ha sido, y sigue siendo, un elemento
fundamental en la preparación de aleaciones de
gran resistencia mecánica y térmica, lo que le ha
permitido no tener prácticamente rival en muchas
herramientas de corte y perforación, así como en
balística. Por ejemplo, el 25 % del wolframio que
se produce en el mundo se emplea en las herra-
mientas de corte de los principales fabricantes de
automóviles, lo que le ha convertido en un ele-
mento vital para la economía occidental, como lo
atestigua que la Comunidad Europea lo conside-
re un suministro estratégico de cara a mantener
nuestras economías y estilos de vida.
Pero, además de estos usos más o menos con-
vencionales, el wolframio tiene una importan-
te presencia en la física y la química de nuestro
tiempo. Más de cuatro mil artículos se publican
anualmente sobre el wolframio y algunos de sus
compuestos. En las siguientes líneas, a modo ejem-
plo, se resumen brevemente algunas aplicaciones
relevantes en el momento actual.
El wolframio es un material estratégico para el
desarrollo de la fusión nuclear como fuente alter-
La antigua mina de wolframio del Monte Neme en Galicia.
nativa de energía, al ser considerado idóneo para
las paredes del reactor experimental ITER y de los
futuros reactores comerciales de fusión. Sus pro-
piedades ya mencionadas y su baja absorción de
tritio son las bases de esa selección [3].
El wolframio y sus compuestos se han venido
empleando como catalizadores de muchas reac-
ciones químicas desde hace tiempo [4]. Por poner
solo un ejemplo relevante, el wolframio, en for-
ma de compuestos a base de sus óxidos y los de
vanadio y titanio, es un catalizador fundamental
en las reacciones necesarias para eliminar óxidos
de nitrógeno en los gases derivados de las plantas
de producción térmica de energía. Mediante una
reacción catalítica con amoníaco, los productos
finales son los inocuos nitrógeno gas y vapor de
agua.
El descubrimiento del grafeno en 2005 ge-
neró nuevas expectativas en el estudio de otros
materiales que, como él, pueden presentarse en

26  Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019


Estructura del diseleniuro de wolframio.
capas exfoliables, lo que deja la puerta abierta a
nuevas propiedades. Entre esos materiales, los di-
calcogenuros de metales de transición (TMDCs)
están siendo objeto de múltiples estudios por sus
relevantes propiedades. De fórmula general MX2,
donde M es generalmente molibdeno o wolframio
y X azufre, selenio o teluro, en el caso de los TMCDs
basados en wolframio destacan sus potenciales
usos en nanoelectrónica, fotónica, almacenamien-
to de energía, etc. Por ejemplo, el diseleniuro de
wolframio, descubierto en 2014, exhibe una mag-
netoresistencia [5] poco habitual.
Y, por sólo poner un ejemplo que nos acerca a
los participantes en el acto de proclamación del
Laboratorium como Sitio Histórico de la EPS, el
primer experimento en el que las técnicas del atto-
segundo, una vez establecidas en fase gaseosa, se
aplicaron al estudio de electrones fotoemitidos
desde una superficie sólida, se hicieron sobre una
de wolframio [6].
El wolframio en el Universo
Uno de los firmantes del último artículo reseña-
do, el Prof. Pedro Miguel Echenique Landiribar,
Presidente del DIPC, Centro proponente de la
declaración de Sitio Histórico, fue el ponente de
una de las conferencias que adornaron el acto. El
conferenciante ilustró la trayectoria seguida por
el wolframio desde su formación hasta su actual
presencia en la Tierra. En su recorrido tomó como
punto de partida el proceso de formación del Uni-
verso tras el Big Bang, en el que la materia ha re-
corrido la escalera cuántica de Weisskopf [7], en
la que, al disminuir la temperatura con el paso del
tiempo, fueron apareciendo estados cuánticos de
mayor grado de complejidad: los núcleos, átomos,
moléculas, líquidos, la materia condensada y la
materia animada.
El elemento que nos ocupa, el wolframio, es
mucho más raro en el Universo que otros como
el hidrógeno (once órdenes de magnitud), el car-
bono (siete) o el silicio (seis) pero tiene, sin em-
bargo, las cualidades inherentes a los elementos
Wolframio: desde una supernova al Laboratorium de Bergara  •  Temas de Física
constitutivos de esa sistematización sin par que
nos revela el orden del mundo físico y que llama-
mos Tabla Periódica, cuyo Año Internacional cele-
braremos en este 2019. En esa Tabla periódica el
wolframio aparece en la posición 74 (su número
atómico) con una masa atómica oficial de 183,85
unidades (u), resultado de la presencia en la natu-
raleza, en diferentes composiciones, de una serie
de isótopos estables de masas aproximadas a 180,
182, 183, 184 y 186 unidades de masa atómica.
Hoy, gracias entre otros a los seminales traba-
jos de G. Gamow [8], sabemos que los procesos
de nucleosíntesis que ocurrieron en los primeros
instantes tras el Big Bang no produjeron elemen-
tos estables más pesados que el litio (de número
atómico 3 y masa atómica 6,94 u). La posterior y
fundamental nucleosíntesis del carbono a partir
del helio, que tuvo lugar en las estrellas, abrió la
puerta a la generación de otros elementos ligeros,
en procesos que implicaron una aproximación de
los núcleos, positivamente cargados, hasta colisio-
nar. A medida que se fueron generando elementos
más pesados, la carga de los núcleos se incremen-
taba y también la repulsión entre ellos, lo que
condujo a una situación en la que, en las estrellas
que albergaron estos procesos, no hubiera tanta
energía como para dar lugar a ulteriores fusiones.
Eso provoca que no podamos justificar el origen
de elementos más pesados que el hierro (con nú-
mero atómico 26 y una masa de 55,85 u) mediante
fenómenos de nucleosíntesis.
Para explicar el origen de esos elementos más
pesados, incluido el propio wolframio, necesita-
mos procesos de captura de neutrones por parte
de los núcleos de los elementos más ligeros. Los
neutrones, sin carga, pueden aproximarse adecua-
damente a esos núcleos, generando con ello isóto-
pos inestables que, general y progresivamente,
emiten energía y acaban formando isótopos esta-
bles de números y masas superiores.
Hay dos procesos de captura de neutrones por
elementos menos pesados que el hierro que han
dado lugar a elementos más pesados, entre ellos a
los diferentes isótopos del wolframio. El llamado
proceso rápido de captura de neutrones (rapid
neutron capture) [9] necesita una alta densidad
de neutrones en el lugar en el que tiene lugar. Has-
ta no hace mucho, la hipótesis mas plausible era
que eso puede ocurrir durante la explosión de una
supernova, una estrella másica que no puede tener
ya reacciones nucleares en su núcleo. Ello le lleva
a colapsar (contraerse) y generar una fuerte emi-
sión de energía que acaba con la expulsión de las
capas más externas de la estrella, lo que da lugar
a la difusión, por todo el Universo, de los elemen-
tos creados en las especiales condiciones de ese
cataclismo.
Sin embargo, la hipótesis de que la explosión
de una supernova es el lugar en el que se produce
el proceso rápido de captura de neutrones tiene
Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  27
Temas de Física  •  Juan J. Iruin
Radiación prove- ciertos problemas, como el hecho de que la com-
niente del púlsar posición del Universo en los diferentes elemen-
PSR B1509-58, una
tos es relativamente uniforme y, sin embargo, las
estrella de neutrones
de giro muy rápido. explosiones de las supernovas pueden darse en
condiciones bastante diferentes.
Más recientemente [10], se ha propuesto que las
condiciones para ese proceso rápido de captura de
neutrones se dan también en la colisión entre pare-
jas de estrellas de neutrones (púlsares) que tras su
explosión como supernovas han quedado orbitan-
do una alrededor de la otra. Después de millones
de años con órbitas que se van acercando, las dos
estrellas de neutrones colisionan y en los primeros
instantes, tras esa colisión, se dan las condiciones
adecuadas para el proceso rápido de captura de
neutrones. Ese modelo ha sido confirmado en 2017
por los detectores de ondas gravitacionales LIGO y
Advance VIRGO, que detectaron una colisión final
de dos estrellas de neutrones.
Un mecanismo diferente basado en la captura
lenta de neutrones (slow neutron capture) tuvo
que introducirse como consecuencia de la relativa
abundancia de diferentes isótopos de elementos pe-
sados. Mientras que la captura rápida de neutrones
tiene lugar en espacios temporales de segundos, la
captura lenta se prolonga durante miles de años y
pasan décadas entre sucesivas incorporaciones de
los neutrones. Se cree que el proceso se produce en
estrellas de masas entre una y diez veces inferiores
a la del sol. Este tipo de estrellas pasan, al final de su
vida, por una fase conocida como Rama Asintótica
Gigante (Asymptotic Giant Branch AGB), en la que
se dan las condiciones adecuadas para esa captura
lenta de neutrones. Se cree que este proceso es el
28  Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019
responsable de la formación de la mitad de los ele-
mentos más pesados que el hierro.
El wolframio en la Tierra
Si desde estos procesos de formación que tuvieron
lugar a nivel de todo el Universo nos centramos
ahora en la abundancia y localización del wolfra-
mio en la Tierra, nuestro planeta y el resto del sis-
tema solar aparecen hace unos 4 600 millones de
años, a partir de la acumulación gravitacional de
materiales disponibles en una nebulosa provocada
por la explosión de una supernova cercana o por
una de estrellas binarias de neutrones.
A partir de esos materiales, la Tierra fue confi-
gurando su actual estructura a lo largo de un pro-
ceso conocido como acreción, dando lugar a un
núcleo formado, fundamentalmente, por una alea-
ción de hierro y níquel que atrajo hacia si muchos
otros elementos conocidos como siderófilos. Por
encima de él está el manto, formado fundamental-
mente por silicatos de otros elementos conocidos
como litófilos y, por encima de ese manto, encon-
tramos la corteza o parte más externa que, en su
capa superior, está en contacto con la atmósfera.
En cualquier caso, la cantidad de wolframio
existente tanto en el manto como en la corteza te-
rrestre es bastante superior a la que modelos de
creación de la Tierra, descritos simplificadamente
arriba, pueden establecer. Y lo mismo pasa con la
concentración de los metales pertenecientes al
grupo del platino (rutenio, rodio, paladio, osmio,
iridio y el propio platino), así como de otros meta-
les preciosos como el oro o la plata. Para explicar
esa aparente contradicción, se ha propuesto que
ello es debido al intenso bombardeo de meteori-
tos que tuvo lugar en algún momento durante las
fases finales de la acreción. Es lo que se conoce
como Recubrimiento Tardío o Late Veneer. Esos
meteoritos o condritas no habían sufrido los mis-
mos procesos de formación que la Tierra y, por
tanto, su composición en elementos era distinta a
la de la zona de la Tierra en la que incidían.
En este sentido, el wolframio y sus isótopos
se han convertido en una excelente herramien-
ta para comprobar la fiabilidad de esa hipótesis
del Recubrimiento Tardío. Aunque la formación
y abundancia de los diferentes isótopos estables
del wolframio, por la posible diferente incidencia
de los procesos rápidos y lentos de captura de
electrones, derivadas de la posible diferente tie-
ne todavía algunos episodios oscuros, la relativa
abundancia de los isótopos 182W/184W ha sido
utilizada por Willbold y colaboradores [11] para
comprobar la importancia del Recubrimiento Tar-
dío en la modificación de la composición de nues-
tro planeta. Para ello, midieron esa relación de
forma muy precisa en la corteza actual y en cier-
tas rocas de 3 800 millones de años de antigüe-
dad en Isua, Groenlandia que, por esa edad, son
anteriores a esa lluvia catastrófica de meteoritos.
 Wolframio: desde una supernova al Laboratorium de Bergara  •  Temas de Física

Sus resultados indican que la relación 182W/184W

es significativamente más alta en esas rocas y ar-
gumentan que ello es debido a que se ha podido
demostrar que los meteoritos que incidieron en la
corteza tenían un contenido más bajo de 182W que
las rocas originales de esa corteza, lo que originó
un descenso en el contenido de ese isótopo en la
mayoría del manto. Sin embargo, las especiales
condiciones en las que se encontraban las rocas
de Isua preservaron el contenido original.
En otro interesante uso del wolframio en los fe-
nómenos de datación de nuestro sistema planetario,
la relación entre los isótopos de hafnio y wolframio,
ambos de masa 182 (182Hf/182W), ha sido usada
como cronómetro radiométrico. El 182W se generó
por descomposición del 182Hf a través de una etapa
intermedia en la que se formó tántalo de la misma
masa,182Ta. Pero mientras que el hafnio es litófilo,
el wolframio es moderadamente siderófilo. Por esa
razón la relación 182Hf/182W en el manto terrestre
tiene valores de entre 10 y 40, un orden de magnitud
superior al que se da en los meteoritos que cayeron [5] Mazhar N. Ali, Jun Xiong, Steven Flynn, Jing Tao, Representación artís-
sobre la Tierra. Y ello es debido, como ya hemos di- Quinn D. Gibson, Leslie M. Schoop, Tian Liang, tica de la colisión de
un meteorito (cono-
cho antes, a que esos meteoritos no han sufrido en Neel Haldolaarachchige, Max Hirschberger, N.
cido como Theia) con
su seno la diferenciación siderófilo/litófilo. P. Ong y R. J. Cava, “Large, non-saturating magne- la Tierra, cataclismo
Por esa misma razón, la comparación entre los toresistance in WTe2”, Nature 514, 205-208 (2014). que se piensa dio
valores de esa relación 182Hf/182W, medida en la [6] A. L. Cavalieri, N. Müller, Th. Uphues, V. S. Yakovlev, lugar a la formación
de la Luna.
superficie de la Tierra y de la Luna, ha resultado A. Baltuska, B. Horvath, B. Schmidt, L. Blümel, R. Hol-
reveladora a la hora de establecer la edad de la zwarth, S. Hendel, M. Drescher, U. Kleineberg, P. M.
formación de la Luna a partir del gigantesco im- Echenique, R. Kienberger, F. Krausz y U. Heinzmann,
pacto del meteorito conocido como Theia, hace “Attosecond spectroscopy in condensed matter”, Na-
cincuenta millones de años [12]. ture 449, 1029-1032 (2007).
En definitiva, la historia del wolframio en la [7] V. F. Weisskopf, “The Origin of the Universe”, Ameri-
Tierra es ilustrativa de la compleja génesis y evo- can Scientist 71 (5), 473-480 (1983).
lución de los elementos constitutivos de la Tabla [8] G. Gamow, “The Evolution of the Universe”, Nature
Periódica y, por ende, de nosotros mismos. En pa- 162, 680-682 (1948).
labras del Prof. Echenique, al terminar su charla [9] R. K. Wallace y S. E. Woosley, “Explosive hydrogen
en el acto de Bergara con el que comenzaba este burning”, Astrophysical Journal Supplement Series 45,
artículo: “resulta emocionante y sobrecogedor 389-420 (1981).
ser conscientes de que somos polvo de estrellas [10] S. Goriely, A. Bauswein y H-T. Janka, “r-process nu-
y que estamos metidos en un proceso cíclico que cleosynthesis in dynamically ejected matter of neu-
nos llevará inexorablemente a ser material del que tron star mergers”, The Astrophysical Journal Letters,
nacerán nuevas estrellas”. 738:L32 (6pp), (2011).
[11] M. Willbold, T. Elliot y S. Moorbath, “The tungs-
Bibliografía ten isotopic composition of the Earth’s mantle befo-
[1] https://www.eps.org/page/distinction_sites re the terminal bombardment”, Nature 477, 195-198
[2] Véase la página numerada como (46) y siguientes en (2011).
este documento: http://www.liburuklik.euskadi.eus/ [12] A. N. Halliday, “HF-W Chronometry and Inner Solar
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Juan J. Iruin
tion of NO over commercial DeNOx-catalysts: experi-
Catedrático (jubilado)
mental determination of kinetic and thermodynamic de Química Física
parameters”, Chemical Engineering Science 53(4), UPV/EHU
657-669 (1998).

Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  29

Notas de clase
Una pizarra en la que intercambiar experiencias docentes
Píldoras de Física: un canal
de comunicación entre
docentes
Verónica Tricio Gómez
Dpto. de Física. Universidad de Burgos
Ana Blanca Martínez-Barbeito
IES Cardenal Herrera Oria. Madrid
Chantal Ferrer Roca
Dpto. de Física Aplicada. Universidad de Valencia
Rafael García-Molina
Dpto. de Física. Universidad de Murcia
Internet supone una inmensa fuente de recursos y cada
profesor va encontrando aquellos que le resultan más útiles
(por eficaces, motivadores o novedosos). Pero en esta pro-
fesión a veces tendemos al individualismo y, quizás porque
no encontramos ocasión, desperdiciamos el gran esfuerzo
que supone buscar y filtrar recursos didácticos que podrían
usar muchos más docentes si supieran de su existencia.
Con este propósito nacieron las Píldoras de Física, una
sección iniciada en diciembre de 2015 a propuesta de la
Junta Directiva del Grupo Especializado de Enseñanza de la
Física (GEEF), integrado desde el mes de mayo de 2018 en
la División de Enseñanza y Divulgación de la Física (DEDF),
de la Real Sociedad Española de Física.
Introducción
La finalidad de las Píldoras de Física (PF) [1] es abrir un nue-
vo canal de comunicación entre los miembros de la DEDF
(y con anterioridad del GEEF), mediante el intercambio de
ideas, recursos, metodologías docentes, etc., proyectándolas
30  Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019
lustración por gentileza de Alberto
García Gómez (albertogg.com).
Fig. 1. Logotipo de las Píldoras de Física.
más allá de las aulas donde se suelen usar de forma indivi-
dual. De este modo, se informa cada mes a todos los socios
de la DEDF sobre la existencia de materiales (vídeos, textos,
simulaciones, reflexiones…) de interés para la enseñanza y la
divulgación de la Física.
Tal como se plantearon originalmente las PF, sus desti-
natarios naturales son los docentes, con el objetivo de que
puedan llevarlas a la práctica con sus estudiantes. Las PF no
están concebidas como herramienta didáctica en el proceso
de aprendizaje del alumnado, al modo que propone J. Ortega
[2], sino como un foro donde dar a conocer y compartir dife-
rentes recursos didácticos entre docentes, mediante breves
textos que remiten a las fuentes originales (de forma similar
a como aparecen noticias breves en prestigiosas revistas de
enseñanza y/o de divulgación de la Física [3-6]).
En la Fig. 1 se muestra el logotipo empleado para las PF,
que fue diseñado por Fernando Herrera, técnico del depar-
tamento de Física de la Universidad de Burgos, siguiendo
nuestras instrucciones.
Características
Las PF son recursos para la enseñanza de la Física aplicables
a los niveles educativos de secundaria, bachillerato y prime-
ros cursos universitarios [7-9]. Su estilo y contenido deben
cumplir los siguientes requisitos:
• Concreción: ilustran un aspecto particular de la Física o la
abordan desde un determinado punto de vista. Esto es, no
pueden ser blogs, pero sí un grupo reducido de libros de
Física de temática o formato similar (por ejemplo, cómics

Fig. 2. Una entrega de Píldoras de Física.
de Física); un vídeo de un experimento; el guion de una
práctica de laboratorio que destaque por la originalidad
de su contenido o de su preparación.
• Facilidad de acceso y uso: sólo se precisa un dominio bá-
sico de la informática para su empleo; además, siempre se
recurre a software de uso libre y de fácil disponibilidad en
los centros educativos.
• Utilidad como recurso didáctico: aun siendo de carácter
divulgativo, han de tener rigor científico, calidad, conve-
niencia, oportunidad del contenido seleccionado.
Propuesta y distribución de las PF
Cualquier miembro de la DEDF puede proponer una (o va-
rias) PF.1 Tras su recepción, son revisadas por un comité crea-
do a este efecto (constituido por los firmantes de esta nota),
que vela por el cumplimiento de los requisitos mencionados
previamente.
1
  Para ello, tan solo deben enviarlas por correo electrónico a vtricio@ubu.
es o rgm@um.es.
Notas de clase
Las PF se distribuyen a los socios, primero mediante co-
rreo electrónico y posteriormente en forma de boletines que
se publican en la web de la DEDF (Fig. 2), a la que se accede
a través de la web de la Real Sociedad Española de Física o
mediante el enlace: https://rsef.es/noticias-actividades-geef/
item/745-pildoras-de-fisica. Las píldoras se publican en “do-
sis” mensuales (excepto en agosto) y en cada entrega el nú-
mero de píldoras oscila entre tres y cinco.
Tipología y temática de las Píldoras de Física
Tanto la tipología como la temática de las píldoras han sido
muy variadas a lo largo de las treinta y una entregas que han
tenido lugar hasta la fecha de redacción de este artículo. Las
propuestas no sólo abordan muchos de los diversos campos
de la Física, sino también numerosas manifestaciones de la
Física en distintos ámbitos del conocimiento y de la vida. A
continuación se detallan algunos ejemplos:
Por tipos:
• Vídeos: conferencias, fenómenos que ilustran conceptos
físicos.
• Experimentos: Propuestas de demostraciones y experi-
mentos que se pueden realizar en el aula con el alumna-
do, incluyendo el uso de aplicaciones de teléfonos móviles
como instrumento de medida.
• Actividades para llevar a cabo en el aula: materiales para
organizar debates científicos.
• Música: canciones con referencias a la Física.
• Textos: artículos de revistas, libros de divulgación, cómics
de Física.
• Simulaciones: péndulos, caos y problema de los tres cuerpos.
Por temas:
• Reflexiones sobre la docencia de la Física: percepción estu-
diantil sobre las actividades de los docentes.
• Elementos básicos para el trabajo experimental: referencias
legales a las unidades de medida; cómo evaluar un proyec-
to de investigación.
• La Física en los museos de ciencia: colección de instrumen-
tos de Física en MUNCYT, museos de ciencia gestionados
por profesores.
• Biofísica: modelo de funcionamiento de un pulmón, imá-
genes en el infrarrojo de seres vivos.
• Física del deporte: olimpiadas, fútbol.
• Física del siglo XX: experimento de Franck-Hertz, simula-
ción de contracción relativista.
• Reseñas biográficas de físicos españoles coetáneos: Juan
Ignacio Cirac, Javier García Sanz, Jorge Wagensberg, Ge-
rardo Delgado Barrio.
• Física en la expresión artística: fórmulas de Física para de-
corar paredes, carteles de temática Física.
• Historia de la Física: cena relativista de Einstein, mujeres
relevantes en la Física.
• Presencia de la Física en la sociedad: físicos en billetes de
banco.
• Física en las redes sociales: retos de Física en Twitter y
Facebook.
• Física en los medios de comunicación: serie The Big Bang
Theory, programa de radio Longitud de onda, de Radio
Clásica.
Próximamente vamos a publicar en la misma web de la
sección de Píldoras de Física un listado ordenado por temas y
Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  31
Notas de clase

Tabla I. Resumen de temáticas y tipologías de las Píldoras de Física.

con sus propuestas para las Píldoras de Física. ¡Esperamos
seguir contando con vuestras colaboraciones!
Número
Tema Tipo
de píldoras
Referencias
arte web/vídeo 5
[1] Presentación de Píldoras de Física. https://rsef.es/images/Fisica/
web/simulación/actividad/libro/ PildorasFisicaGEEFPresene16.pdf
astrofísica 7
vídeo
[2] J. Ortega Ruiz, Píldoras de Física de 1º de Bachillerato, Trabajo Fin
átomo web/vídeo 3 de Máster, Universidad Internacional de La Rioja, 2012.
básicos artículo 4 [3] Physics World, http://physicsworld.com/
biofísica experimento/vídeo 2 [4] The Physics Teacher, http://aapt.scitation.org/journal/pte
[5] Physics Today, http://physicstoday.scitation.org/journal/pto
cuántica artículo/libro 2
[6] Revista Española de Física, http://revistadefisica.es/
deporte libro/experimento 2 [7] V. Tricio Gómez, A. Blanca Martínez-Barbeito. Píldoras de Fí-
docencia artículo/web 2 sica. Comunicación presentada en las XI Jornadas de Enseñanza
electromagnetismo problema/vídeo/experimento 3 de la Física. Burgos, 16-18 de septiembre de 2016.
[8] A. Blanca Martínez-Barbeito. Píldoras de Física. Comunicación
físca general expdrimento/problema/artículo 6
presentada en la Jornada de Enseñanza de la Física. Madrid, 1 de
fluidos experimento/actividad 3
diciembre de 2016.
gravitación web/música 2 [9] A. Blanca Martínez-Barbeito, C. Ferrer Roca, R. García-
historia artículo/libro/web 4 Molina, V. Tricio Gómez. Píldoras de Física: una propuesta para
institucional web 2 compartir recursos entre docentes. Comunicación presentada en el
Encuentro Ibérico de Enseñanza de la Física. Santiago de Com-
juguetes web 2
postela, 17-21 de julio de 2017. pp. 769-770 en Libro de Resúmenes
materia condensada vídeo/libro 2 de la XXXVI Reunión Bienal de la RSEF, Ed. RSEF.
vídeo/web/experimento/
mecánica 12
simulación
medios de
música/artículo 2

Un modelo significativo
comunicación
meteorología web 1
museos web
música/vídeo/experimento/
4
de tipo microscópico para
ondas
problema
música/vídeo/problema/
5
la enseñanza-aprendizaje
óptica
simulación
5
de los circuitos de
corriente continua
partículas música/experimento 2
relatividad artículo 2
sociedad web/artículo/actividad/vídeo 11
temático persona
web/artículo 3
relevante
termodinámica web/simulación 2

Arturo Carcavilla Castro

IES Ramón y Cajal. Huesca

por fecha de publicación para facilitar la búsqueda o consulta,

ya que el número de píldoras distribuidas es de un centenar
aproximadamente. La Tabla I resume las temáticas abordadas
en las píldoras, así como el tipo de soporte para su acceso y el
número de las publicadas hasta septiembre de 2018.
Percepción por parte del profesorado y petición de
colaboración
Desde el inicio de esta actividad se han recibido por parte de
los socios numerosas felicitaciones por esta sección. Espe-
ramos que el contenido de las píldoras, convenientemente
dosificado y puesto en contexto por cada docente, contribuya
a mejorar la enseñanza y divulgación de la Física.
Aprovechamos esta ventana de la Revista Española de Fí-
sica para agradecer una vez más a los miembros del GEEF, y
ahora también a los de la actual DEDF, que han contribuido
M.ª Lucía Puey Bernués
Dpto. de Física Aplicada,
Universidad de Zaragoza
Se muestra un modelo microscópico de la corriente eléctrica
en un conductor metálico basado en el modelo de Drude,
que además puede ser representado mediante una sencilla
animación interactiva. El aspecto esencial es que el gene-
rador proporciona a cada una de las cargas móviles una
cantidad fija de energía potencial eléctrica. Por efecto de la

32  Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019


fuerza del campo eléctrico, se va transformando en energía
cinética, que a su vez se pierde por choques con los iones.
Introducción
Es bien conocido que los alumnos tienen graves dificultades
para asimilar satisfactoriamente los conceptos, leyes y teorías
científicas. Desde el trabajo de Viennot [1] se sabe que utili-
zan unos modos de pensamiento más o menos estructurados,
que han venido en llamarse preconcepciones, esquemas al-
ternativos, etc., que son resistentes a la instrucción, pues, en
muchas ocasiones, continúan utilizándose después de largos
años de escolarización. El movimiento de las concepciones
alternativas surge con fuerza a finales de la década de los
setenta del siglo pasado. La consecuencia inmediata fue la
propuesta de modelos de enseñanza-aprendizaje basados
en el cambio conceptual. En los ochenta comenzaron a en-
sayarse estos modelos [2], pero se ha comprobado que no
son satisfactorios. Se han propuesto algunas hipótesis para
describir características comunes a muchas de estas ideas de
los alumnos y otras que pretenden explicar las dificultades
del cambio conceptual. El caso de los circuitos de corriente
continua no ha sido una excepción. A partir del estudio de
Cohen et al. [3] han venido realizándose trabajos similares
en diversos países que han confirmado sus resultados. Una
recopilación de estos trabajos la podemos encontrar en el tra-
bajo de Hierrezuelo y Montero [4], y un breve extracto de las
ideas que manifiestan los alumnos se incluye a continuación.
Por lo que respecta a la intensidad de la corriente, considerar
la corriente eléctrica como un flujo de energía; que la corriente
se consume en los aparatos eléctricos conectados al circuito; uti-
lizar un razonamiento secuencial, según el cual, los elementos
de circuito situados posteriormente, según el sentido de la co-
rriente, no influyen en la corriente que circula por los anteriores.
Por lo que respecta a la diferencia de potencial, se observa que
los alumnos la utilizan menos que la intensidad de la corriente
para analizar el comportamiento de los circuitos. Se suele con-
siderar como una consecuencia de la intensidad de la corriente,
más que como su causa. Por ejemplo, en un circuito abierto, pue-
den decir que entre los extremos del corte, la V es cero porque
la I es cero. Sería una aplicación “mecánica” de la ley de Ohm.
Podemos concluir diciendo que en la enseñanza de los cir-
cuitos eléctricos es importante dejar bien asentados cuanto
antes una serie de hechos básicos, por ejemplo, la necesidad
de que el circuito esté cerrado para que funcione, que es ne-
cesario utilizar los dos polos de una pila, que en un circuito
en serie es indiferente el orden en el que estén colocados los
elementos… Posteriormente será el momento de proponer
algún modelo explicativo y usarlo.
Ejemplos de items
Para mostrar claramente de qué estamos hablando, pondre-
mos dos ejemplos. El primero es parte del estudio realizado
por Solano et al. [5] en el que se analizan las respuestas a un
test de 5 items sobre el comportamiento de estos circuitos y
que se pasó a alumnos españoles de 11 a 18 años del plan de
estudios de 1970 (EGB y BUP) y de la LOGSE.
El primer ítem era:
Observa los circuitos 1 y 2 de la Figura 1. El brillo de la
bombilla 1 será:
a) Mayor en el circuito 1 que en el circuito 2.
Notas de clase
b) Igual en el circuito 1 que en el circuito 2.
c) Menor en el circuito 1 que en el circuito 2.
d) Nulo en el circuito 2.
e) …
Justifica brevemente tu respuesta.
Fig. 1.
A pesar de ser una pregunta muy simple no es acertada por
el 50 % de los alumnos en los niveles superiores (47 % en 1.º
de Universidad del plan antiguo y 45 % con el nuevo).
El siguiente ejemplo proviene del artículo ya mencionado
[3]. Sus items son más difíciles que los anteriores y se pasaron
a 145 estudiantes, de los cuales 96, de edades entre 17 y 18
años, estudiaban física como una materia principal y habían
completado el estudio de la electricidad y el magnetismo.
También fue administrado a 21 profesores. El promedio de
respuestas correctas de los estudiantes fue del 38.2 % y el de
los profesores 51.5  %.
Una muestra es el siguiente ítem:
En el circuito dado en la Figura 2, la lectura del amperíme-
tro es I. Una resistencia adicional R’ se conecta, en paralelo
con R, entre M y N. En consecuencia:
a) La lectura I no cambia y las corrientes en R y R’ son inver-
samente proporcionales a sus resistencias.
b) La d.d.p. entre M y N no cambia.
c) La lectura I crece y la d.d.p. entre M y N decrece.
d) El calor desarrollado en R no cambia.
e) La lectura I crece y la d.d.p. entre M y N crece.
Esta pregunta fue contestada correctamente por menos
del 5 % de estudiantes y de profesores.
Fig. 2.
Significatividad de los conceptos
En la bibliografía que citamos se analizan las posibles causas
de esta situación y se proponen hipótesis para su remedio.
No es nuestro propósito, en este momento, analizar esas cau-
sas, sino tratar de contribuir a su corrección con un modelo
microscópico que proporciona una significatividad al con-
cepto de diferencia de potencial y de potencia disipada en
Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  33
Notas de clase
un conductor, y un modo intuitivo de relacionarlos con la
intensidad de la corriente. Una unidad didáctica completa
sobre circuitos eléctricos de corriente continua se muestra
en el sitio web [6] y unas animaciones del modelo, que es
lo que nos interesa en este momento, se pueden visualizar
en el apartado “Modelo microscópico” del citado sitio. Para
acceder a él hay que ir a la web citada, luego al núcleo de la
unidad, posteriormente al modelo microscópico y, una vez
allí, ya se pueden manipular las diferentes situaciones.
El modelo que proponemos está basado en el modelo clá-
sico o modelo de Drude. Podemos considerarlo una trans-
posición didáctica de dicho modelo [7] adecuada a niveles
de secundaria. Los mecanismos generales que permiten el
paso de un objeto de saber a un objeto de enseñanza han sido
estudiados en matemáticas por Chévalard [7] y se agrupan
bajo el nombre de transposición didáctica. Estudia el paso
del savoir savant al savoir enseigné, esto es, del saber aceptado
por la comunidad científica, al saber que se puede enseñar en
niveles básicos. El concepto es aplicable a todos los campos.
Es deseable que el significado que transmitamos a los alum-
nos sea accesible a su capacidad, que esté adecuadamente
ajustado al resto de conocimientos que se utilicen y que no
entorpezca el desarrollo conceptual posterior. Nuestra ex-
periencia nos dice que las animaciones de este modelo son
comprendidas inmediatamente, que resultan de gran ayuda y
que los alumnos razonan con el modelo muy pronto. Vamos a
mostrar a continuación un breve análisis teórico. No preten-
demos que dicho análisis se introduzca en los contenidos a
impartir. Describimos primero el modelo de Drude y después
el simplificado, que es el que proponemos.
Modelo clásico de la conducción eléctrica o modelo
de Drude
Seguimos el desarrollo seguido en el ya texto clásico de P.
A. Tipler [8] en lo que respecta al modelo clásico, aunque lo
resumimos.
Los electrones libres en el interior del metal, en el modelo
de Drude o modelo clásico, se comportan como las molécu-
las de un gas, además con la distribución de velocidades de
Maxwell-Boltzman.
En este modelo se supone que un electrón se desplaza du-
rante un corto intervalo de tiempo y luego realiza un choque
contra un ion de la red. Después del choque la velocidad del
electrón no tiene ninguna relación con la que tenía antes de
la colisión.
En presencia de un campo eléctrico E, un electrón libre ex-
perimenta una fuerza de valor eE. Si esta fuerza fuera la única
que actuara sobre el electrón, su velocidad se incrementaría
uniformemente, con una aceleración a = eE/m. Mediante
ella, los electrones adquieren una velocidad adicional, que
se añade a la velocidad aleatoria que llevaban y que llama-
remos velocidad de desplazamiento o velocidad de arrastre
vd (Figura 3).
La velocidad de desplazamiento es la velocidad media de
un electrón escogido al azar.
Esta velocidad es mucho más pequeña que la velocidad
térmica aleatoria y por ello la velocidad de los electrones
después del choque es independiente de su velocidad inicial.
La distancia media que un electrón recorre entre choques
se llama recorrido libre medio λ. Es el producto de la veloci-
34  Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019
dad media vm (media de los módulos, aproximadamente igual
a la velocidad cuadrática media y muy diferente a la velocidad
de desplazamiento, que es la media de los vectores velocidad)
por el tiempo medio que transcurre entre choques.
Fig. 3. Fragmento de conductor.
La velocidad de desplazamiento es del orden de 1010 veces
menor que la velocidad media de los electrones. Esto no se
puede representar en una animación, por eso proponemos
el modelo simplificado, en el que solo representamos la ve-
locidad de arrastre.
Una simplificación del modelo clásico de la conducción
eléctrica en metales
Planteamos un modelo que permite visualizar la diferencia
de potencial, la intensidad de corriente y la potencia disipada
en circuitos con conductores metálicos, que son magnitudes
que los alumnos no acaban de comprender, incluso confun-
den a veces por su falta de significatividad para ellos, sobre
todo la diferencia de potencial. Este modelo permite ser re-
presentado en las animaciones que hemos indicado. En ellas
se utilizan las ideas esenciales que son:
a) La intensidad de la corriente es la cantidad de carga que
atraviesa una sección del conductor en la unidad de tiempo.
b) La diferencia de potencial entre dos puntos es igual a la
energía de tipo eléctrico que la unidad de carga positiva
pierde al desplazarse entre esos dos puntos. Esa energía
la pierde mediante choques con los iones. Lo más fácil e
intuitivo es considerar la energía que pierde un solo elec-
trón, por choques cuando se desplaza entre dos puntos.
c) No se acumula carga en ningún punto del circuito, por
ello, en cada fragmento, la cantidad de carga que entra
debe ser igual a la que sale.
d) Si consideramos tres puntos A, B y C, en el circuito, las
diferencias de potencial cumplen que VAC = VAB + VBC. Esto
se comprende al relacionar la diferencia de potencial con
la energía perdida por choques. La energía perdida en el
tramo AC debe ser igual a la suma de las que pierde en los
dos subtramos AB y BC.
e) Para evitar complicaciones con signos hemos supuesto
que las cargas móviles son positivas y se mueven como
ocurre con el sentido convencional de la corriente y salen
del polo positivo de la pila.
f) La potencia que se disipa en un tramo sería igual a la ener-
gía que pierden las cargas móviles, por choques, en ese
tramo, en la unidad de tiempo.
En este modelo simplificado, consideramos que, en au-
sencia de campo eléctrico, los electrones estarían en reposo.
También suponemos que el recorrido libre medio es la dis-
tancia entre iones que llamamos L (Figura 4). Dicho de otra
manera, en este modelo, los electrones chocan contra todos
los iones de una fila.
 Notas de clase

Aunque cambiemos la longitud del alambre (sin cambiar

Fig. 4. Cargas móviles que se desplazan chocando con una serie de iones.
nada más, Figura 6), cada electrón recibe en la pila la misma
energía que antes. Si aumentamos su longitud debe reali-
zar más choques en un recorrido, por tanto, en cada choque
deberá perder menos energía que antes, luego debe ir más
despacio. La intensidad será menor.

Suponemos que los electrones pierden toda la energía ci-

nética en cada choque con un ion positivo, son acelerados
por el campo eléctrico y vuelven a chocar con el siguiente
ión y así sucesivamente.
Los iones están espaciados una distancia L. El campo eléctrico
que los acelera es constante, así que su aceleración también lo es. Fig. 6. Circuito con el conductor más largo.
Se puede demostrar que V es directamente proporcional
a I2. Esto es consecuencia de la diferencia más importante Al contrario ocurriría si acortamos el alambre (Figura 7).
entre los dos modelos, el de Drude y el simplificado, que es la
siguiente: en el modelo de Drude la velocidad media, al ser la
de arrastre mucho menor, no depende del campo, mientras
que en el simplificado sí depende. Sin embargo, lo esencial,
en niveles medios y elementales, que son los apartados a, b,
c, d, e y f, que hemos señalado, sí que se representa con este
modelo, al resultar V, una función creciente de I.
Fig. 7. Circuito con el conductor más corto.
Razonamientos con el modelo
Vamos a mostrar algunos de los razonamientos que podría- Aunque cambiemos el grosor del alambre (Figura 8, sin
mos hacer, aplicando el modelo a diversas situaciones. Se pue- cambiar nada más), cada electrón recibe en la pila la misma
den ver en la animación “Modelo microscópico” de la web [6]. energía que antes. Si aumentamos solamente su grosor, rea-
Una pila proporciona a cada uno de los electrones la mis- lizará el mismo número de choques que antes, luego en cada
ma energía de tipo eléctrico y cada uno de ellos debe perderla uno perderá la misma energía que antes y deberá ir a la misma
en un recorrido completo por el circuito. velocidad. Sin embargo al ser más grueso pasan más electrones
¿Cómo la pierde? Chocando con los iones positivos. a la vez por una sección del alambre. La intensidad será mayor.
Nos preguntamos qué variables podemos cambiar y qué
consecuencias tiene, en la corriente eléctrica, el cambiarlas,
por tanto, qué predicciones podemos hacer con el modelo.
1. Podemos cambiar la longitud del alambre (ponerlo más
largo o más corto).
2. Podemos cambiar el grosor del mismo (ponerlo más grue-
so o más delgado).
3. Podemos cambiar el número de pilas que ponemos en se- Fig. 8. Conductor más grueso.
rie (por ejemplo aumentar el número de pilas).
4. Alambre con grosores diferentes. Si aumentamos el número de pilas en serie (Figura 9, sin
Interesa que los alumnos practiquen en situaciones varia- cambiar nada más), cada electrón, al pasar por todas ellas, re-
das. La articulación de la teoría [9] es una habilidad cognitiva cibe más energía que antes y debe perderla a base de realizar
que consiste en conocer los detalles de aplicación de las teo- el mismo número de choques, luego en cada choque debe
rías a situaciones concretas y que no se puede pretender que perder más energía, luego deberá ir más deprisa para tener
sean descubiertos por los alumnos a causa de su complejidad más energía cinética que poder perder en cada choque. La
y de su artificiosidad. Consideramos esencial el aplicar este intensidad será mayor.
modelo a diversas situaciones, de un modo dirigido por el
profesor y no pretender un redescubrimiento. Particular-
mente el concepto de diferencia de potencial, que es básico,
nos parece imposible de descubrir por los alumnos.
Partimos del circuito básico de la Figura 5.

Fig. 9. Circuito con más pilas.

El caso más difícil es el de un alambre igual de largo que

el primero pero con la segunda mitad, doble de gruesa (Figu-
ra 10). Por lo que respecta a la velocidad relativa de las cargas,
deberán ir más despacio por la gruesa y más deprisa por la
Fig. 5. Circuito básico de partida. delgada, para que no se acumulen en ningún sitio.

Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  35

Notas de clase
Además, debido a que la diferencia de potencial entre los
extremos de la pila es la misma en el caso del alambre de
grosor uniforme y en el caso de los dos grosores diferentes, la
velocidad y en consecuencia la diferencia de potencial deberá
ser mayor que antes en la parte delgada y menor que antes en
la gruesa para que la suma de ambas diferencias de potencial
sea igual a la inicial. La intensidad será mayor que antes.
Fig. 10. Circuito con el conductor de grosor variable.
La corriente eléctrica en los currículos de Física de
Secundaria y Graduado en Física
En Secundaria, actualmente el currículo estatal se rige por
el Real Decreto 1105/2014 [10] y en él encontramos los con-
tenidos:
Electricidad y circuitos eléctricos. Ley de Ohm. Explicar el fenó-
meno físico de la corriente eléctrica e interpretar el significado de
las magnitudes intensidad de corriente, diferencia de potencial
y resistencia, así como las relaciones entre ellas.
En el Real Decreto lo propone en 2.º y 3.º de ESO y con
contenidos similares en las asignaturas de Física y Química y
Tecnología, insistiendo en el carácter más práctico de la Tec-
nología. Algunas Comunidades Autónomas los introducen
en 2.º curso y otras en 3.º o en ambos cursos.
Previamente se han debido de ver algunos conceptos rela-
cionados con la energía, que son necesarios para poder com-
prender el modelo que proponemos, especialmente:
Relacionar los conceptos de energía, calor y temperatura en tér-
minos de la teoría cinético-molecular y describir los mecanismos
por los que se transfiere la energía térmica en diferentes situa-
ciones cotidianas.
Hay que destacar que se ha visto la teoría cinético-molecu-
lar que es una explicación de tipo microscópico semejante al
modelo que proponemos y, por tanto, el dar los dos modelos,
hace que se produzca un refuerzo en la comprensión de los
mismos
En el primer curso del grado de Física de la Universidad de
Zaragoza [11], la competencia 6 es “Conocer el funcionamien-
to básico de un circuito eléctrico” y como resultado de apren-
dizaje, “Resolver circuitos sencillos de corriente continua”.
Bibliografía
[1] L. Viennnot, Le raisonnement spontané en dynamique élémentaire
(Hermann, Paris, 1979).
[2] G. J. Posner, K. A. Strike, P. W. Hewson y W. A. Gertzog. “Ac-
comodation of a Scientific Conception: Toward a Theory of Con-
ceptual Change”, Sci. Educ. 66, 211-227 (1982).
[3] R. Cohen, B. Eylon y U. Ganiel, “Potencial difference and current
in simple electric circuits: a study of student’s concepts”, Am. J.
Phys. 51, 407-412 (1983).
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[4] J. Hierrezuelo y A. Montero, La ciencia de los alumnos (Laia,
MEC, 1988).
[5] F. Solano, J. Gil, A.L. Pérez y M.I. Suero, “Misconceptions per-
sistence on the electric circuits of direct current”, Rev. Bras. Ens.
Fis. 24, 460-470 (2002).
[6] A. Carcavilla y M. L. Puey, http://ntic.educacion.es/w3/recur-
sos/bachillerato/fisica/corriente_continua/circuitos2/index.htm
INTEF. Instituto Nacional de Tecnologías Educativas y de For-
mación del Profesorado. Ministerio de Educación y Formación
Profesional (2007).
[7] Y. Chevalard, La transposition didactique du savoir savant au savoir
enseigné (La Pensée Sauvage Grenoble, 1991).
[8] P. A. Tipler, Física para la Ciencia y la Tecnología, Vol. II (Reverté,
Barcelona, 1999) 4ª edición, cap. 27.
[9] S. Ohlsson, “The cognitive skill of theory articulation: a neglec-
ted aspect of science education”, Sci. Educ. 76, 181-192 (1992).
[10] Real Decreto 1105/2014, de 26 de diciembre, por el que se esta-
blece el currículo básico de la Educación Secundaria Obligatoria
y del Bachillerato.
[11] https://estudios.unizar.es/estudio/ver?id=124
La Física es cool con el
Energy Stick y la bola
de plasma
Fernando Ignacio de Prada Pérez de Azpeita
Dpto. de Física y Química,
IES Las Lagunas. Rivas (Madrid)
José Antonio Martínez Pons
Profesor Honorario,
Universidad de Alcalá de Henares (Madrid)
La experiencia con estudiantes de nivel preuniversitario mues-
tra que las ideas y fenómenos relativos a la electricidad son
considerados difíciles y poco atractivos. La mayoría no rela-
cionan correctamente conceptos como materia y electricidad,
enlace y conductividad, campo eléctrico y diferencia de po-
tencial, energía y frecuencia, configuración electrónica y es-
pectro de emisión, etc.  Para una mejor comprensión de estos
conceptos el docente puede utilizar juguetes educativos como
recurso didáctico. Este tipo de recursos, en general, no son
suficientemente aprovechados por el docente. Así, el Energy
Stick y la bola de plasma, son dos atractivos ingenios educa-
tivos [1] que se pueden relacionar con la metodología STEM,
favoreciendo la asociación entre el aprendizaje, la investi-
gación, el razonamiento y el entretenimiento (gamificación).

En este artículo se muestran algunas de las investigaciones
que forman parte del proyecto didáctico ¡Electrifícate, si te
atreves! realizado con alumnos de ESO y Bachillerato del IES
Las Lagunas (Rivas). El trabajo ha sido seleccionado para
participar en reconocidas Ferias de la Ciencia, Congresos de
Docentes y Jornadas de Enseñanza de la Física y Química,
generando gran interés por parte de los asistentes, espe-
cialmente de los docentes, que solicitaban más información.
Como respuesta a este interés nace este artículo.
Juguetes o ingenios didácticos utilizados
El Energy Stick, o tubo de conductividad eléctrica (Figura 1), está
formado por un cilindro de plástico transparente con sus extre-
mos plateados (electrodos de aluminio) que contiene dos pilas
de botón de 1.5 V como fuente de alimentación, conectadas
en serie, un circuito integrado muy sensible, capaz de detectar
intensidades de corriente muy bajas circulando a través de la
piel, formado por un generador de tonos, un transductor pie-
zoeléctrico de sonido que funciona como un altavoz y produce
el sonido, transistores que funcionan como interruptores elec-
trónicos del transductor y tres leds parpadeantes, dispuestos en
paralelo, de colores verde, azul y rojo. Hasta que no se agarren
sus extremos con ambas manos, la corriente eléctrica no circula
y todos estos elementos permanecen inactivos. Es un juguete
educativo recomendado para experimentar con los circuitos
y la conductividad eléctrica de los cuerpos de forma inocua.
Fig. 1. Energy Stick.
Fig. 2. Bola de plasma.
La bola de plasma (Figura 2) consiste en una esfera de vi-
drio llena de una mezcla, de gases nobles, como neón, argón
y xenón, a presión reducida (entre 0.01 y 0.001 atm). El adap-
tador de corriente alterna de la bola tiene una salida de 12 V y
650 mA, que corresponde con la potencia que necesita la bola
para funcionar correctamente (Potencia = Tensión · Intensi-
Notas de clase
dad = 7.8 W) y que la bobina de Tesla del interior sea capaz de
generar una corriente alterna de alta frecuencia (30 000 Hz)
y alto voltaje (5 000 V). El campo eléctrico creado en el inte-
rior es tan intenso que es capaz de arrancar electrones de los
átomos e ionizarlos, proceso favorecido a baja presión, ya que
un recorrido medio más largo entre colisiones permite que los
electrones alcancen una mayor aceleración [2]. Los electrones
liberados colisionan con otros átomos y liberan más electro-
nes (efecto cascada por impacto). Cuando los electrones son
capturados por otros átomos y retornan a su estado estable,
emiten la energía absorbida en forma de luz, de una frecuen-
cia y color característico, que depende de las transiciones
electrónicas entre los niveles energéticos de los átomos del
gas. Así, el neón es responsable del color naranja que vemos
en las puntas de los rayos, y el argón y xenón, de los colores
violeta y azul, respectivamente. Como consecuencia de todo
este proceso, se crea el denominado cuarto estado de la ma-
teria o plasma [3], el estado más abundante en el Universo.
Si la bola de plasma se conecta durante mucho tiempo,
como resultado de los impactos entre los electrones y los
átomos del conductor por donde circulan, el adaptador se re-
calienta, comprobándose el efecto Joule. Al igual que sucede
si dejamos puesto un dedo varios minutos sobre la superficie
de la bola conectada.
Electrificación educativa
Una buena forma de comprender la electricidad es formando
parte de un circuito eléctrico humano, eso sí, de una forma
segura a la vez que muy divertida. Cuando se agarra el Energy
Stick con ambas manos por los extremos de aluminio, se cie-
rra un circuito eléctrico. La piel, aunque esté aparentemente
seca, contiene agua y sales minerales que permiten la circu-
lación de los electrones. El aparato envía una microcorriente
por nuestra piel, que activa los leds de colores y el zumbido.
Como la intensidad de corriente se encuentra por debajo del
umbral de sensibilidad (0.5 mA), no produce ninguna sensa-
ción en nuestro organismo [2].
Es muy interesante e instructivo formar un circuito eléc-
trico con todos los alumnos de una clase, unidos en serie a
través de los dedos, o manos, para cerrar el circuito y que la
corriente circule por todos ellos (Figura 3). Al soltarse cual-
quiera de ellos, el circuito queda abierto, se interrumpe el
paso de la corriente, y se apagan los leds. Los circuitos forma-
dos pueden servir para investigar la diferencia de conducti-
vidad eléctrica en otras zonas del cuerpo (nariz, orejas, uñas,
pelo) y de la ropa. La distinta intensidad de la señal que emite
el Energy Stick indica que no todas las superficies ofrecen la
misma resistencia al paso de la corriente eléctrica.
Investigaciones sobre conductividad eléctrica
El Energy Stick permite comprobar, de forma cualitativa y
atractiva, una propiedad fundamental de la materia, la capa-
cidad de un material para conducir la corriente eléctrica, con
la ventaja de que son los propios estudiantes los que forman
parte del circuito eléctrico, aumentando su grado de impli-
cación e interés. Esta investigación permite relacionar una
propiedad de las sustancias con el tipo de enlace químico
que une sus átomos o iones. Para ello se intercalan distin-
tos materiales (regla de madera, plástico, papel o aluminio) y
sustancias (grafito, cloruro de sodio o sulfato de cobre) den-
Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  37
Notas de clase
Fig. 3. Circuito humano realizado durante la XVII Edición de Ciencia en Acción
(Mención de Honor en Demostraciones de Física. Ermua, 2017).
tro de un circuito formado por dos, o más, estudiantes y el
Energy Stick (Figura 4a). Los materiales metálicos (y algunos
covalentes, como el grafito), debido a su estructura interna,
son buenos conductores de la corriente, como se comprueba
al iluminarse los leds. A diferencia de los objetos de plástico,
papel o madera, que no los encienden porque los componen-
tes de estos materiales son malos conductores.
También es posible analizar la conductividad de líquidos
y disoluciones (Figura 4b) sin más que intercalarlos en el cir-
cuito eléctrico. Así, al disolver en agua una sustancia iónica,
como el cloruro de sodio, e introducirla en el circuito formado
por el Energy Stick, se comprueba como conduce la electrici-
dad. En este caso, los iones (Na+, Cl–) se pueden mover libre-
mente, lo que permite la circulación de las cargas eléctricas.
(a
(b
Fig. 4. Análisis de conductividad de (a) una calabaza y (b) de agua destilada.
VI Finde Científico (MUNCYT de Alcobendas, 2016).
38  Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019
A pesar de la idea generalizada de que el agua destilada es
aislante de la electricidad, al investigar con agua destilada
y desionizada de una conductividad inferior a 5  μS/cm, se
comprueba, gracias a la alta sensibilidad del Energy Stick, que
los leds se encienden. Hay que tener en cuenta la presencia
de pequeñísimas cantidades de sales disueltas, los iones que
aporta el dióxido de carbono del aire cuando se disuelve en
agua y que aunque el agua es un electrolito muy débil, se
encuentra disociada en iones (oxonio e hidróxido), con una
constante de disociación Kw = [H3O+]·[OH-] = 10–14 a 25 ºC,
esto significa que, como la concentración del agua pura es
de 55.5 M y la [H3O+] = 10–7, una de cada 555 millones de
moléculas de agua se encuentra disociada.
Sin embargo, si utilizamos un aceite mineral de grado cos-
mético no se encienden los leds, debido a que este aceite está
formado por moléculas de hidrocarburos que no se disocian
en iones (Figura 5). El mismo efecto sucede con un aceite
vegetal.
Fig. 5. Dispositivo individual para medir conductividades mostrado en la VI
Jornada Con-Ciencia en la Escuela (Círculo de Bellas Artes de Madrid, 2016).
Una forma sencilla de comprobar la hipótesis de Planck
No es fácil realizar investigaciones sobre la mecánica cuán-
tica mediante materiales sencillos. Sin embargo, el siguiente
experimento permite comprender el significado de la hipó-
tesis de Planck, la energía de una radiación electromagnética
es directamente proporcional a su frecuencia (Tabla 1) y del
efecto fotoeléctrico, no es el brillo o la intensidad de la luz, lo
que determina la energía de una radiación electromagnética,
sino su frecuencia [4].
Tabla 1. Longitud de onda, frecuencia y energía de los colores rojo,
verde y azul.
Longitud de onda Energía/fotón
Color Frecuencia (THz)
(nm) (J·10-13)
ROJO 620 - 750 400 - 484 2.65 – 3.21
VERDE 495 - 570 526 - 606 3.49 – 4.02
AZUL 450 - 475 631- 668 4.18 – 4.43
El campo eléctrico creado en el interior de la bola de plas-
ma se extiende más allá de su superficie. Como se comprueba
por la ionización e iluminación de un tubo fluorescente (o
de tubos de descarga de gases) colocado cerca de la bola y sin
tocarla. Si ahora utilizamos el Energy Stick y lo vamos aproxi-
mando lentamente por un extremo, igualmente se observa
que, debido al campo eléctrico generado por la bola que causa
una pequeña diferencia de potencial entre los electrodos del

cilindro, los leds se iluminan a cierta distancia. Sin embargo,
no lo hacen a la vez, se comprueba que siguen un orden deter-
minado: primero lo hace el rojo (el de menor frecuencia y el
que necesita menos energía para iluminarse), a continuación,
el verde y finalmente, el azul (el de mayor frecuencia y el que
necesita mayor energía para iluminarse), como indica la ley
de Planck (Figura 6). Este efecto se produce en cualquier di-
rección alrededor de la bola debido a que el campo eléctrico
es radial; su módulo es constante en todos los puntos de una
superficie concéntrica de igual radio.
Si a continuación alejamos los leds iluminados, como el
potencial eléctrico disminuye uniformemente a medida que
nos alejamos en la dirección del campo eléctrico, y a la ley de
Planck, se verifica la secuencia inversa en el apagado; primero
lo hace el azul, a continuación, el verde y, finalmente, el rojo.
Fig. 6. Demostración de la ley de Planck realizada en las X Jornadas de
Enseñanza de la Física, organizadas por la RSEF (2016).
La jaula de Faraday más enrollada
La ventaja de una Jaula de Faraday es que permite proteger el
interior de un receptáculo (avión, microondas, cables coaxia-
les, etc.) de campos eléctricos externos. Este efecto aislante
puede comprobarse si situamos el Energy Stick cerca de la bola
de plasma, de manera que esté encendido por la presencia del
campo generado (Figura 7a), y hacemos descender sobre él un
muelle metálico (slinky). Los leds dejan de emitir luz (Figu-
ra 7b) debido a que el metal anula el campo electromagnético
en su interior, actuando de Jaula de Faraday. Si realizamos el
Notas de clase
mismo experimento con un muelle de plástico, se comprueba
que, en esta ocasión, no produce ningún efecto.
El campo eléctrico exterior creado por la bola produce una
redistribución de las cargas eléctricas en el metal de modo que
dentro del espacio encerrado por el muelle se genera un cam-
po eléctrico de igual intensidad y sentido contrario que el del
campo externo, anulándose el campo en el interior del muelle.
(a (b
Fig. 7. Investigación del efecto Jaula de Faraday durante el V Congreso de
Docentes de Ciencia y Tecnología (Facultad Educación. UCM. 2018).
Conclusión
Comprobada la utilidad de ambos ingenios para mejorar la
enseñanza, y la comprensión, de principios fundamentales
relacionados con la materia, la luz y la electricidad. El Energy
Stick y la bola de plasma son dos atractivos recursos educa-
tivos que enriquecen la docencia de la física a la vez que la
hacen más cool, tan recomendables, que no deberían faltar
en ningún centro escolar.
Referencias
[1] J. Lincoln, “Plasma globe revisited”, The Physics Teacher 56, 62-
63 (2018).
[2] L. K. Wolf, “What’s that stuff? Plasma Globes”, Chemical and En-
gineering News 86 (43), 40 (2008).
[3] N. Guibert, “Deconstructing a plasma globe”, The Physics Teacher
37, 11-13 (1999).
[4] J. Lincoln, “Fun and engaging activities using the Energy Stick”,
Arbor Scientific. https://youtu.be/RYm3soCD9Jg (2015)
Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  39
Puntos de interés
Descripción breve y sencilla de iniciativas docentes en nuestros colegios e institutos
que han de ser resaltadas, de investigaciones relevantes de autores españoles o de
extranjeros en instituciones españolas, y de otros hechos interesantes sobre ciencia
y enseñanza, políticas educativa y científica y sus actores1

SIMULADOR PORTÁTIL didas en banco óptico como visual-

lustración por gentileza de Alberto García

PARA EXPERIMENTAR mente.
“La posibilidad de que el paciente ex-
LA VISIÓN POST-CIRUGÍA perimente la visión con una lente mul-
tifocal antes de la cirugía resulta muy

as lentes multifocales se emplean
en operaciones de cataratas o para
la corrección de la presbicia, en
modo de lentes intraoculares o lentes
de contacto. Existen en el mercado dis-
tintos diseños de lentes y la elección
entre uno u otro depende de la toleran-
cia y preferencias de cada paciente. Los
simuladores visuales basados en ópti-
ca adaptativa que incorporan diferen-
tes elementos ópticos La tecnología desarro-
activos son una herra-
mienta para simular la
visión a través de dife-
rentes diseños multifo-
cales de forma realista
antes de ser implantados
en el paciente.
En un trabajo publi-
cado en Scientific Reports
(DOI: 10.1038/s41598-
019-38673-w), los investi-
gadores del Laboratorio
de Óptica Visual y Bio-
fotónica (VioBioLab) del
Instituto de Óptica (CSIC,
Madrid), María Viñas, Clara Benedi
García, Sara Aissati, Daniel Pascual,
Vyas Akondi, Carlos Dorronsoro y Su-
sana Marcos, han demostrado por pri-
Gómez (albertogg.com).
atractiva para aliviar la incertidumbre
y poder manejar sus expectativas”,
explica la Dra. Marcos, directora del
equipo de investigación, quien añade
que “los simuladores visuales son una
técnica ideal para proporcionar a los
pacientes una experiencia realista de
la multifocalidad antes de la implan-
tación de una lente intraocular. En la ofrecieron la misma respuesta visual a
actualidad, esta tecnología SimVis ha través del foco”.
llada está protegida me-
diante cuatro patentes
de las que el CSIC es ti-
tular, licenciadas a la em-
presa 2EyesVision S.L.,
una spin-off del CSIC
fundada, entre otros,
por varios de los investi-
gadores de este estudio.
Una de estas patentes
recibió en 2018 el Pre-
mio a la Mejor Patente
del Año de la Fundación
Madrid+d.
sido incorporada a un simulador visual
binocular ligero, autónomo y portá- AGUJEROS NEGROS: DESDE
til, que está en fase de estudio clínico EL INFINITO Y MÁS ALLÁ
y posterior comercialización. El nuevo

mera vez la correspondencia entre la
visión con diferentes simuladores vi-
suales y la lente real implantada en el
ojo. Para ello han utilizado diferentes
tecnologías de simulación: modulador
de fase espacial y lente optoajustable
en modo de multiplexación temporal
(tecnología SimVis). Los resultados
muestran una buena corresponden-
cia general en la calidad óptica y visual
medidas con las lentes multifocales
reales y las simuladas, tanto en me-
  Sección preparada por Augusto Beléndez, en
1  de luz y la tecnología SimVis. Como
colaboración con actores implicados, que anima
a proponer contribuciones relevantes para ser
consideradas aquí.
simulador se puede controlar a través
de una aplicación para el teléfono móvil
o la tablet, la cual también permite lle-
var un registro de las pruebas realizadas
en cada paciente.
El realismo de la simulación se ha va-
lidado en un grupo de pacientes com-
parando la agudeza visual obtenida a
distintas distancias usando una lente
trifocal comercial —con focos para
distancias de lejos, intermedias y cer-
ca— y a través de la misma lente simu-
lada mediante un modulador espacial
indica la Dra. Viñas, “la respuesta a la
multifocalidad variaba entre sujetos,
pero la lente trifocal real y la simulada
L
os agujeros negros son frecuen-
temente descritos como regio-
nes acotadas del espacio donde
el campo gravitatorio impide que
cualquier forma de materia o energía,
incluso la luz, pueda escapar. Hay ac-
tualmente evidencias observacionales
sólidas que demuestran la existencia
de estos monstruos devoradores de
estrellas en nuestro universo, incluso
en el centro de nuestra propia galaxia,
la Vía Láctea, así como en el centro de
casi todas las demás galaxias conocidas.
La existencia de los agujeros negros
es una de las más impactantes previsio-
nes de la principal teoría física moderna
de descripción del campo gravitatorio

40  Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019

 Puntos de interés

—la Relatividad General de Einstein—.
El estudio científico detallado de estos
objetos se realiza mediante modelos
matemáticos sofisticados. Traducir las
anteriores ideas en una formulación
matemáticamente un agujero negro
como la región resultante de quitar
aquellos lugares del universo desde
donde una partícula puede ‘escapar’, o
dicho de otra forma, los lugares desde
donde la partícula puede ‘ale-
jarse tanto como se quiera’ de
él”, añade el Dr. Flores. Esa
“región lejana’’ al agujero es
también importante porque
desde ella es posible detectar
información sobre ese obje-
to, por medio de la radiación
electromagnética o incluso
gravitacional característica
emitida por la materia de su
entorno al caer en el agujero.
Como indica el Dr. Herrera,
“el problema consiste enton-
ces en formalizar con pre-
cisión qué debe entenderse
Los autores confían en que esta for-
mulación permita entender mejor los
agujeros negros, al facilitar su estudio
en situaciones muy poco convenciona-
les, como las regiones que contienen
ciertas clases de ondas gravitaciona-
les (otra extraordinaria previsión de
la Relatividad General, recientemente
detectadas experimentalmente, y cuyo
descubrimiento ha merecido el Premio
Nobel de Física de 2017). En efecto, en
estas regiones las nociones clásicas no
son aplicables, pero sí esta formulación
alternativa.
LOS ÚLTIMOS CUATRO
SIGLOS DE LA VIDA
DEL SOL

L
por ‘región lejana’ al agujero”. as manchas solares son la mani-
Esta idea “se formaliza me- festación más evidente del mag-
diante la noción de infinito netismo solar. La aparición de
luminoso, inicialmente in- estas regiones, más frías que el resto
troducida por Roger Penrose de la fotosfera solar, presenta un ciclo
en los sesenta”, concluye el de aproximadamente 11 años cuyo
matemática rigurosa, y suficientemente Dr. Herrera. Ahora bien, la noción tra- descubrimiento tuvo una importante
amplia para describir la gran variedad dicional hace ciertas hipótesis que pue- repercusión en el devenir de la física
de posibles tipos de agujeros negros, no den no ser válidas en situaciones muy estelar y la física de la Tierra. En el si-
es una tarea simple. De hecho, a lo lar- genéricas. Lo que han hecho los autores glo xix, el astrónomo suizo Rudolf Wolf
go de los últimos cincuenta años, han es introducir una formulación matemá- (1816-1893) ideó un índice de actividad
aparecido diversas formas de describir tica alternativa más amplia y flexible de solar, basado en el conteo de manchas
matemáticamente estos objetos. este concepto. solares con pequeños telescopios, que
En un trabajo reciente-
mente publicado en Journal
of High Energy Physics (DOI:
10.1007/JHEP09(2018)123)
por investigadores de la
Universidad Federal de San-
ta Catarina en Brasil (Ivan P.
Costa e Silva), y de las Uni-
versidades de Málaga (José
Luis Flores), y Córdoba
(Jónatan Herrera), se ha in-
troducido una formulación
matemática novedosa y
más general de la noción de
agujero negro. Como seña-
la el Dr. Flores, “una forma
comúnmente establecida
de presentar estos objetos
es la siguiente: puesto que
desde el agujero negro no
es posible escapar, aquella
región del universo desde
donde las partículas sí pue-
den hacerlo no formarán
parte del mismo”. Por tan-
to, “resulta natural definir

Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  41

Puntos de interés
denominó “número de manchas sola-
res relativo”. Diferentes instituciones
fueron recogiendo el legado de Wolf
y han seguido manteniendo día a día
este índice que, con el paso del tiempo,
se ha convertido en una de las series
temporales más famosas de la física y
la estadística. El propio Wolf intentó
conocer la historia del Sol durante los
último cuatro siglos usando observa-
ciones telescópicas de manchas solares
realizadas por antiguos astrónomos.
Sin embargo, aunque contar manchas
D
parece una tarea sencilla, hay una serie
de inconvenientes que han provocado
que aparezcan varias versiones no con-
cordantes de la historia reciente del Sol.
Por ello, geofísicos y astrofísicos
han estado analizando detenidamente
los problemas de las diferentes versio-
nes del número de manchas solares en
los últimos diez años y las primeras
señales de consenso están empezando
a aparecer. Los investigadores Andrés
Muñoz-Jaramillo, del SouthWest Re-
search Institute (Boulder, CO, USA),
y José Manuel Vaquero, de la Univer-
sidad de Extremadura, han mostrado
recientemente hasta qué punto es di-
fícil conocer la actividad solar durante
los siglos pasados (Nature Astronomy,
DOI: 10.1038/s41550-018-0638-2).
Mediante técnicas de visualización de
datos, han presentado un guía visual de
nuestro conocimiento de la evolución
de las manchas solares. El problema
principal es de cobertura observacional.
Los dos primeros siglos de observacio-
nes telescópicas de manchas solares
(siglos xvii y xviii) están caracterizados
por una falta evidente de registros que
hace muy complicada la intercompara-
ción de observadores, instrumentos y
metodologías. Esta intercomparación
es de vital importancia, ya que distintos
observadores, usando telescopios de di-
ferentes magnitudes, tienden a reportar
números diferentes de manchas para el
mismo día.
A pesar de las dificultades, Muñoz-
Jaramillo y Vaquero se muestran opti-
mistas por las continuas mejoras que
se han hecho en la evaluación de estas
observaciones históricas y el desarro-
llo de nuevos métodos para ajustarlas
a una base observacional común. Sin
embargo, aunque cada vez tenemos al-
goritmos más sofisticados para evaluar
la actividad solar del pasado a partir del
conteo de manchas solares, la mayor
42  Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019
prioridad es la identificación, la in-
terpretación y la traducción adecua-
da de observaciones históricas gracias
a equipos interdisciplinares en donde
participen físicos, historiadores de la
ciencia y filólogos.
LA INTERFASE LÍQUIDO-
VAPOR SIGUE DÁNDONOS
SORPRESAS
urante las últimas décadas se ha
desarrollado con éxito la teoría
de fluidos no homogéneos basa-
da principalmente en el Funcional de la
Densidad. Sin embargo, esta teoría pre-
senta ciertos problemas
al aplicarse a la interfase
líquido-vapor debido a
la existencia de Ondas
Capilares: fluctuaciones
térmicas de la interfase
que, sin la presencia de
algún campo que las li-
mite (como, por ejem-
plo, la gravedad), crecen
sin límite al aumentar el
tamaño del sistema. La
existencia de estas on-
das capilares fue predi-
cha en los años setenta
por Wertheim y Weeks,
asumiendo que la in-
terfase líquido-vapor se
comporta como la piel de un tambor: una
lámina flexible cuya energía instantánea
es la tensión superficial líquido-vapor
multiplicada por el área de la interfase.
Esta descripción revela la presencia de
un Modo de Goldstone (una excitación
que no cuesta energía), responsable de
que las fluctuaciones crezcan sin límite
al aumentar el tamaño del sistema. El
modo de Goldstone se manifiesta en el
factor de estructura, que se puede medir
en experimentos de scattering, y que obe-
dece perfectamente a la teoría de Wer-
theim y Weeks para valores pequeños
del vector de onda (es decir, para escalas
grandes).
Sin embargo, y como era de esperar,
esta descripción falla a escalas micros-
cópicas puesto que, a estas escalas, la
interfase no puede asimilarse a una lá-
mina flexible, sino que está compuesta
por moléculas que presentan una cier-
ta estructura espacial y que tienen sus
propias fluctuaciones en densidad. Este
problema, similar a la catástrofe ultra-
violeta en electromagnetismo, se ha
venido evitando aplicando un cutoff:
eliminando a mano las fluctuaciones
de la interfase de pequeño tamaño, en
concreto aquellas menores que el tama-
ño de una molécula. Esta solución ad
hoc resulta insatisfactoria, tanto por la
arbitrariedad a la hora de elegir el cu-
toff como por la incapacidad de la teoría
para enlazar con las escalas microscópi-
cas, que no quedan correctamente des-
critas. Para evitarlo, se han propuesto
diversas enmiendas, la mayoría de las
cuales pasan por definir una tensión
superficial efectiva que depende de la
escala. Este “apaño”, investigado duran-
te décadas por numerosos grupos, ha
sido incapaz de producir una descrip-
ción coherente de las fluctuaciones in-
terfaciales.
Andrew O. Parry (Imperial College,
Londres) y Carlos Rascón (Universidad
Carlos III de Madrid) acaban de propo-
ner una teoría puramente microscópica
que ha sido publicada en Nature Phy-
sics (DOI: 10.1038/s41567-018-0361-z)
y que resuelve estos problemas. Como
señala el Dr. Carlos Rascón, “la clave
reside en la observación de que tanto
la función de correlación como el fac-
tor de estructura presentan, además del
modo de Goldstone, una jerarquía de
resonancias que no habían sido des-
critas con anterioridad y que limitan
fuertemente sus propiedades estructu-
rales”. A su vez, “el método revela una
familia de modelos integrables cuya
tensión superficial, perfil de densidad
y funciones de correlación pueden ob-
tenerse analíticamente”, añade el Dr.
Rascón.
Recordando a Sir Michael Atiyah
(22-IV-1929, 11-I-2019)
J. Adolfo de Azcárraga
Atiyah fue una figura esencial de las matemáticas que no desdeñó analizar aspectos fundamentales
de la física y preocuparse por la sorprendente y profunda relación entre las dos.
E
n la mañana del pasado once de enero falleció Sir
Michael Atiyah1 en su casa de Edimburgo, de cuya
universidad era profesor honorario desde 1997; te-
nía 89 años. Con él desaparece una figura esencial
de las matemáticas y no sólo de ellas: Atiyah realizó con-
tribuciones fundamentales a la geometría, la topología y el
análisis y, además, influyó de forma decisiva en muchos de-
sarrollos modernos de la física teórica. Su carrera científica
está repleta de galardones: recibió la medalla Fields en el
Congreso Internacional de Matemáticos de Moscú (1966), la
medalla Copley (1988) de la Royal Society, la medalla Ben-
jamin Franklin (1993) de la Americal Philosophical Society,
el premio Abel (2004) —junto con Isadore Singer— de las
manos del Rey de Noruega, y muchas otras distinciones. Era,
además, miembro de la Orden del Mérito británica, a la que
sólo pueden pertenecer 24 personas en un momento dado, y
Caballero de la Legión de Honor francesa (2011). Fue Presi-
dente de la Royal Society (1990–1995) y de la Royal Society
de Edimburgo (2005–2008); también lo fue (1997-2002) de
las famosas Pugwash Conferences on Science and World Affairs
en favor del desarme nuclear y de la paz.
Hijo de libanés y escocesa, nacido en Londres y, como él
decía, concebido en Florencia por lo que estuvo a punto de
llamarse Michelangelo, el joven Michael fue al colegio en
Jartum (Sudán), donde su padre era oficial diplomático de
enlace de las autoridades coloniales británicas y, después, a
una boarding school en El Cairo. Pese a su componente ára-
be, en su casa se hablaba inglés; el padre de Atiyah, Edward,
había estudiado en Oxford —donde conoció a su esposa— y
la familia se consideraba británica culturalmente. Michael
Atiyah, sin embargo, usaba el árabe con otros miembros de
su familia paterna; yo mismo tuve ocasión de aprovechar su
conocimiento de esa cultura. Tras trasladarse la familia al
Reino Unido, Michael estudió en el Trinity College de Cam-
bridge, donde también realizó el doctorado (Some Applica-
tions of Topological Methods in Algebraic Geometry, 1955)
bajo la supervisión del gran matemático escocés William D.
Hodge. La carrera profesional de Atiyah le llevó a numerosos
centros: Savilian professor of Geometry en Oxford (1963-69),
a menudo visitante y luego profesor (1969-72) del Instituto
1 
Visitó la RSEF el pasado mayo e impartió la conferencia Have fun with
numbers and become rich or famous; véase la Revista Española de Física
vol. 32, nº 3, págs. 32-38 (2018) .
de Estudios Avanzados de Princeton, etc. Finalmente regresó
a Cambridge desde Oxford como Master del Trinity College
(1990-97), donde permaneció hasta su marcha a Edimbur-
go. En Cambridge contribuyó decisivamente a la creación del
Isaac Newton Institute for Mathematical Sciences, del que fue
su primer director (1990) y que hoy alberga al DAMTP y al
Dpto. de Matemática Pura y Estadística Matemática.
La primera mitad de su carrera fue la de un matemático
puro dedicado a enlazar entre sí partes de las matemáticas
aparentemente disconexas; en la segunda mitad, se ocupó de
relacionar las matemáticas con la física, influyendo en cien-
tíficos como Edward Witten (el único físico que ha obtenido
la Medalla Fields, en 1990) y Roger Penrose, con quienes
mantuvo una estrecha relación. Sus contribuciones matemá-
ticas más importantes han sido la teoría K topológica, inicia-
da en 1961 por Atiyah y Friedrich Hirzebruch, y el famoso
teorema de Atiyah y Singer (The index of elliptic operators
on compact manifolds, 1963) que relaciona ecuaciones diferen-
ciales y topología. El teorema A-S fue la base de la concesión de
la medalla Fields y del premio Abel; Atiyah comentó en 2015
que el teorema del índice parecía “magia negra, pues permite
obtener información de ecuaciones diferenciales sin resolver-
las”. La segunda mitad de su carrera la dedicó a la relación en-
tre las matemáticas y la física teórica, en una época dorada en
la que ambas se fertilizaron mutua y extraordinariamente (si
bien algunos matemáticos tradicionales mostraron reticencias
ante lo que caracterizaron como ‘theoretical mathematics’ por
la ausencia de demostraciones más convencionales).
Para Atiyah, sin embargo, el programa más ambicioso era
tratar de entender el sentido profundo de la conexión entre
la física y las matemáticas. Por ejemplo, el teorema del índice
ha resultado de gran interés para las teorías gauge; teorías
matemáticas topológicas como los invariantes de nudos de
Jones en dimensión tres y los invariantes de Donaldson en
dimensión cuatro —una dimensión singular tanto en física
como en geometría— han mostrado tener relación con ciertas
teorías cuánticas de campos en esas dimensiones. A su vez,
el propio Simon Donaldson (medalla Fields, 1986) se había
inspirado en la física de forma análoga a como Hodge lo hizo
en las ecuaciones de Maxwell para su teoría de las formas
armónicas. Hay muchos más ejemplos de esa fertilización
cruzada: supersimetría y teoría de Morse, teorías de cuerdas,
geometría no conmutativa, espacios de moduli en las teorías
de Yang-Mills, monopolos e instantones, etc. Quizá esto pueda
Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  43
Sir Michael Atiyah: una figura esencial de las matemáticas  •  J. Adolfo de Azcárraga
Sir Michael Atiyah
(3-V-2018)
sorprender hoy pero, incluso en el s. xix, grandes
físicos y matemáticos fueron ambas cosas a la vez.
Como el Nobel (1979) S. Weinberg, Atiyah siem-
pre insistió en la importancia de comprender. Y al
final de su vida Atiyah atacó problemas físicos ver-
daderamente fundamentales, como la determina-
ción del valor de las constantes de acoplamiento de
las distintas interacciones o el maridaje de la física
cuántica y la gravedad, fuerza que consideraba que
no se debía ignorar aunque fuera mucho más débil
que las restantes. En una ocasión, su hijo le recordó
que los matemáticos hacían sus mejores contribu-
ciones antes de los cuarenta años y que él ya tenía
más de ochenta. Pero Atiyah seguía el consejo que
le dio el físico y hoy pastor anglicano John Polking-
horne: “no tienes nada que perder; sigue adelante
con lo que crees”. Fiel a ese principio —como él
comentaba, “mi reputación ya está establecida y
puedo permitirme algún error”— Atiyah dedicó su
tenacidad y extraordinaria energía a obtener mate-
máticamente la constante de estructura fina α gene-
ralizando (nota 1) la fórmula más bella y concisa de
las matemáticas, la de Euler e2πi = 1, “el equivalente
matemático del ser o no ser” hamletiano. Y no sólo
α: como hay cuatro álgebras de división (reales ℝ,
complejos ℂ, cuaterniones ℍ y octoniones 𝕆), esta-
ba convencido de poder obtener las constantes de
acoplamiento de las cuatro interacciones2 a partir
de consideraciones matemáticas fundamentales.
Este proceder me recuerda los primeros intentos
de Kepler de describir las seis órbitas planetarias
(de Mercurio a Saturno) por circunferencias en
seis esferas inscritas y circunscritas a los cinco só-
2 
Quiero mencionar aquí que Luis J. Boya, medalla de la RSEF,
especuló hace bastantes años sobre esa conexión en su nota
Division algebras and Symmetries of Elementary Particles, con-
siderando precisamente los grupos de automorfismos de las
cuatro álgebras.
44  Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019
lidos platónicos, razonamiento geométricamente
elegante pero falso (el modelo tampoco es único,
pues permite 30 posibilidades). El convencimien-
to no siempre basta, y las sucesivas versiones del
trabajo que Atiyah me envió sobre su ‘cálculo’ de
la constante de estructura fina α y que incluían sus
especulaciones sobre las otras tres no permiten
concluir que α se obtenga explícitamente; ignoro
si la ‘última’ versión ha sido aceptada en los Proc.
Roy. Soc. A, revista a la que pensaba enviarla.
En sus últimos meses Atiyah estuvo práctica-
mente recluido trabajando en su afirmación, hecha
en el sexto Heidelberg Laureate Forum el pasado
septiembre, de que había conseguido probar la Hi-
pótesis de Riemann (1859) sobre la función ζ(s) y
que afecta a la misteriosa distribución de los núme-
ros primos dentro de los números naturales. La HR
es uno de los siete problemas del milenio estableci-
dos por el Instituto Clay3 en el año 2000 y seleccio-
nados por un comité al que perteneció el propio
Atiyah. La comunidad matemática se mantiene es-
céptica respecto de la prueba de Atiyah de la HR,
cuyos métodos no son ajenos a los de su ‘cálculo’
de α. Sobe la HR existe un preprint de cinco pági-
nas, más breve incluso que la propia descripción del
problema del Instituto Clay, así como un youtube de
la sucinta presentación de Atiyah en Heidelberg. En
una ocasión, Feynman comentó que “equivocarse
no es malo: siempre se puede aprender mucho”.
Quizá no sea cierto en general, pero sí lo es para un
científico de la talla de Sir Michael Atiyah.
Descanse en paz la prodigiosa mente mate-
mática de un hombre afable y cordial, gran con-
versador y magnífico exponente de la fe de los
científicos en la existencia de un mundo racional
cuyas leyes pueden soñarse y quizá alcanzarse.
Nada sintetiza mejor la visión de Atiyah que este
texto suyo, Dreams, que no traduciré:
“in the broad light of day mathematicians check
their equations and their proofs, leaving no stone
unturned in their search for rigour. But, at night,
under the full moon, they dream, they float among
the stars and wonder at the mystery of the heavens:
they are inspired. Without dreams there is no art,
no mathematics, no life”.
J. Adolfo de Azcárraga
RSEF, Dpto. de Física Teórica UV
e IFIC (CSIC-UV)
3 
De los siete problemas sólo se ha probado la conjetura de
Poincaré en 2003 por el excéntrico matemático ruso Grigori
Y. Perelman, quien rechazó en 2010 el premio de un millón
de dólares del Instituto Clay; en 2006 tampoco aceptó la me-
dalla Fields.
Una entrevista con el Nobel
Carl WIEMAN
Cómo mejorar la enseñanza de las ciencias en la universidad
Entrevista realizada por Jenaro Guisasola
E
l profesor Carl Wieman estudió física en el MIT y se
doctoró en la Universidad de Stanford. Actualmente
es profesor de Física y de Enseñanza de la Física en
la Universidad de Stanford. Durante los años 2010 a
2012 fue Director Asociado de Ciencias en la Oficina de Po-
lítica y Ciencia de la Casa Blanca. Ha desarrollado una exten-
sa investigación experimental en física atómica y óptica. Su
descubrimiento, junto con Eric Cornell y Wolfgang Ketterle,
de condensados de Bose-Einstein (BEC) en gases de átomos
alcalinos les valió a los tres el premio Nobel de física en 2001.
Desde sus comienzos, el profesor Wieman estuvo preocupa-
do por la Enseñanza de la Física, preocupación que le llevó a
investigar sobre la enseñanza de las ciencias en su conjunto
desde un punto de vista no convencional. Actualmente, su
investigación en esta área se centra en mejorar la educación
universitaria de pregrado en ciencias desarrollando nuevas
técnicas de enseñanza y evaluando su efectividad.
El profesor Carl Wieman visitó Madrid para participar
en el ciclo de conferencias que la RSEF organiza junto con
la Fundación Ramón Areces (FRA) y en la celebración del
quincuagésimo aniversario de la UAM. En su visita, impartió
sendas conferencias en la Facultad de Ciencias Físicas (dentro
del ciclo “Hablemos de Física” de esa Facultad), en la FRA y en
la UAM, estas dos últimas dentro de los actos de la UAM, que
también patrocina la FRA. Persona amable y cercana, muy
dispuesta a atender preguntas y a profesores y estudiantes,
tuve la oportunidad de realizarle una entrevista sobre sus
investigaciones sobre la enseñanza científica de la Física.
Jenaro Guisasola: He tenido ocasión de seguir sus interesan-
tes conferencias en la UCM y en la fundación Ramón Areces,
y he leído su libro Improving How Universities Teach Science.
Personalmente, creo que los profesores universitarios están
más preocupados por la investigación que por la enseñanza,
y es realmente impresionante saber de alguien como usted,
que ha ganado un Premio Nobel y es un físico, que le importa
mucho la enseñanza de las ciencias. Realmente lo aprecio.
Muy a menudo, las personas tienden a enseñar de la misma
forma en que les enseñaron, de pie en una plataforma al
lado de la pizarra transmitiendo un discurso. ¿Cómo giró
su interés hacia la innovación en la Enseñanza de la Física?
Carl Wieman: Fue resultado de la curiosidad científica al
trabajar con mis estudiantes de doctorado en física. Sentí
curiosidad por saber por qué estos estudiantes podían pasar
17 años destacando en cursos de física y en exámenes, pero
luego, cuando estaban en el laboratorio, no sabían cómo ha-
cer física. Sin embargo, después de uno o dos años trabajando
Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  45
Entrevista  •  Una entrevista con el Nobel Carl Wieman: Cómo mejorar la enseñanza de las ciencias en la universidad
en el laboratorio, se habían convertido en físicos
competentes. Me sorprendió especialmente el he-
cho de que los estudiantes que eran mejores en
los cursos y en los exámenes nunca se convertían
en los mejores físicos. Eso me llevó a comenzar a
investigar sistemáticamente lo que se sabía sobre
el aprendizaje en general y del aprendizaje de la
Física en particular. Descubrí que había mucha
investigación en estas áreas. Una vez que la hube
digerido, entendí por qué mis estudiantes de pos-
grado eran así, y obtuve una perspectiva comple-
tamente diferente de la enseñanza, y comencé a
hacer investigación en la Enseñanza de la Física.
J. G.: ¿Hace cuánto tiempo descubrió el campo de
la Enseñanza de la Física y la psicología cognitiva?
C. W.: Eso fue hace aproximadamente 30 años. Du-
rante mucho tiempo, tuve dos grupos de investiga-
ción paralelos, uno de ellos haciendo física atómica,
que llevó al BEC y a experimentar con él, y el otro
haciendo investigación en Enseñanza de la Física.
J. G.: Veo que empezó en la investigación en Ense-
ñanza de la Física mucho antes de que recibiera el
premio Nobel. ¿Supone mucho trabajo mantener
dos líneas de investigación en Física?
C. W.: Comencé a trabajar en investigación edu-
cativa e innovación aproximadamente 10 años an-
tes de ganar el Premio Nobel, pero la gente prestó
mucha más atención a lo que tenía que decir sobre
Enseñanza de la Física después de ganarlo.
Sí, supone mucho trabajo mantener dos líneas
de investigación en física. Tenga en cuenta que en
Estados Unidos investigar en Enseñanza de la Fí-
sica supone una línea de investigación en Física,
como Física atómica o de partículas.
J. G.: En la conferencia habló sobre el modelo de
la Iniciativa Carl Wieman de Educación en Cien-
cias (CW Science Education Iniciative-CWSEI).
¿Podría resumir las herramientas educativas que
juegan un papel más importante en su enfoque?
C. W.: Me di cuenta de que había cientos de experi-
mentos en los que el profesorado de ciencias com-
paraba la enseñanza tradicional con el aprendizaje
activo basado en la investigación, y descubrí que el
aprendizaje activo era más efectivo, especialmente
para ayudar a los estudiantes a aprender a pensar
como científicos. Además, esos resultados eran
completamente comprensibles en términos de los
principios subyacentes de aprendizaje que habían
sido establecidos por la psicología cognitiva. Así que
eso me planteó una nueva pregunta: “¿Se puede —y
de ser así, cómo— ampliar este mejor enfoque de
la enseñanza, de forma que en lugar de constituir
experiencias aisladas, sean la forma habitual de en-
señar las ciencias en las universidades?”.
46  Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019
Nadie más estaba intentando tales experimentos
de forma generalizada, así que decidí hacerlo. Puse
mucha atención en lo que se necesitaría, observan-
do la investigación sobre el cambio organizacional y
la adopción de la innovación. Eso llevó al diseño del
CWSEI, con su enfoque en cambiar departamentos,
y hacerlo a través de un programa de subvenciones
competitivo que proporcionó fondos sustanciales.
Esos fondos permitieron la incorporación de ex-
pertos en los departamentos, que eran expertos en
su disciplina, pero también en la enseñanza, como
resultado del programa de formación que he es-
tablecido. Luego, trabajarían en la facultad con el
profesorado del departamento para entrenarse en la
adopción de la enseñanza basada en la investigación.
J. G.: Mientras leía su libro, noté que muchas de
las estrategias de enseñanza que usa para mejorar
el aprendizaje de los estudiantes y mejorar la cali-
dad de la enseñanza son habilidades que los cien-
tíficos usan en su trabajo para resolver problemas
y avanzar en el conocimiento. Parece como si fue-
ran una versión educativa del enfoque científico
utilizado por los científicos en su trabajo. ¿Es di-
fícil para los estudiantes pensar de esa manera?
C. W.: De ningún modo. Solo necesitan ser enseña-
dos apropiadamente. Al darles problemas apropiados
en los que trabajar, que explícitamente les permiten
practicar los procedimientos del pensamiento cien-
tífico para aprender, con comentarios oportunos y
específicos para guiar su mejora, el proceso no es más
difícil, y ciertamente mucho más agradable que la for-
ma tradicional en la que se les enseña. Un elemento
clave es darles la oportunidad de tomar las decisiones
que adoptan los científicos para resolver problemas.
Con demasiada frecuencia, se prescinde de esas de-
cisiones y solo se les dan las respuestas. Esto les priva
de la práctica necesaria y de la satisfacción de tener
algún control. Con una enseñanza tan pobre, termi-
nan sintiendo que están memorizando mucha infor-
mación inútil, solo buena para aprobar exámenes.
J. G.: En cierto modo, su enfoque del aprendiza-
je se basa en ayudar al estudiante a redescubrir
algunas cosas por sí mismo. Pero esto puede ser
difícil y llevar mucho tiempo. Después de todo,
no cubrimos, por ejemplo, todas las etapas —Lo-
rentz, Poincaré, etc.— que llevaron a la relatividad
especial y se pasa casi directamente a Einstein.
Dado que la capacidad de los estudiantes varía,
¿podría su enfoque requerir demasiado tiempo
para cubrir todo el programa que los estudiantes
deben dominar en el tiempo disponible?
C. W.: Hay dos supuestos muy comunes pero in-
correctos contenidos en esta pregunta, y el error
en ambos se ilustra en el artículo de Science de
Deslauriers, Schelew y Wieman que mencioné en
mi conferencia. El primer supuesto es equiparar

cobertura con el aprendizaje. Si la cobertura del
programa fuera todo lo que es importante, bas-
taría con que el instructor diera a los estudiantes
la tabla de contenidos del libro de texto de Física
para leer, y su educación estaría completa. Como
se ilustra en ese estudio de Science y en otros luga-
res, si uno realmente mide el aprendizaje que tie-
ne lugar, cubrir un tema en una clase estándar da
como resultado un aprendizaje casi nulo del tema.
La segunda suposición incorrecta es que en la
instrucción basada en la investigación, como des-
cribí, uno no puede cubrir tanto programa como
en un curso de clase magistral convencional. El
artículo de Science es una comparación directa de
la cantidad de materia que podría cubrirse en la
misma cantidad de tiempo de clase utilizando los
dos métodos diferentes de enseñanza. Como se
muestra allí, y en muchos otros estudios que po-
dría mencionar, cuando se realiza correctamente,
la instrucción basada en la investigación puede
cubrir aproximadamente la misma cantidad de
material, al mismo tiempo que se logra un apren-
dizaje mucho mayor del programa. Saber cómo
optimizar el uso del tiempo y la cobertura del pro-
grama es parte de la habilidad que un instructor
necesita para aprender a ser un buen profesor. No
hay nada mágico en esa habilidad. En la página de
“recursos para instructores” de la web de CWSEI,
junto con muchas otras guías de una a dos pági-
nas sobre la implementación de diversos aspectos
de la enseñanza basada en la investigación, hay un
breve artículo sobre qué debe hacer un instructor
para ser eficiente al cubrir el programa. Entre otras
cosas que se pueden leer allí, esto no significa que
los estudiantes estén redescubriendo el desarrollo
de la ciencia por su cuenta, como se sugirió ante-
riormente. De hecho, todo lo contrario. En cambio,
los estudiantes están practicando el pensamiento
científico más reciente, cuidadosamente estructu-
rado y diseñado por el instructor, examinando la
historia solo en la medida en que se refleja direc-
tamente en el pensamiento actual. Pero todo eso
debe ser decidido por el instructor, basándose en
su experiencia en la disciplina, y no dejándolo en
manos de los estudiantes. En los cursos de física
de la división superior que ahora se imparten en
Stanford con estos nuevos métodos, muchos de
los instructores están descubriendo que realmen-
te pueden cubrir los temas con más profundidad.
J. G.: En la enseñanza convencional, se preparan
notas para las clases magistrales y se resuelven los
problemas del libro o apuntes, para explicarlos
en la clase. Este tipo de trabajo probablemente
se puede volver a utilizar una y otra vez durante
los años siguientes, pero el nuevo enfoque de la
enseñanza que aboga el CWSEI parece requerir
mucho trabajo por parte de los profesores todos
los años. ¿Es este el caso? ¿Se puede esperar que
los profesores acepten este trabajo extra?
Jenaro Guisasola  •  Entrevista
Los profesores Carl
Weiman (derecha.) y
Jenaro Guisasola, en
el Aula Magna Blas
Cabrera de la Facultad
de Ciencias Físicas
de la UCM, donde el
professor Wieman
impartió la primera de
sus tres conferencias
en Madrid.
C. W.: En realidad sucede todo lo contrario. Los
profesores encuentran que, cuando han desarro-
llado una buena actividad para que los alumnos
la realicen en clase, es muy fácil reutilizarla con
pocos cambios. Esto es igualmente cierto cuando
es una actividad desarrollada por otro miembro
del departamento. Si bien es muy difícil tomar las
clases magistrales de otra persona y simplemen-
te impartirlas, es muy fácil utilizar la práctica de
otra persona. Esto se debe a que es una guía sobre
lo que los estudiantes están trabajando, pero el
profesorado está prestando atención a lo que los
estudiantes están haciendo, si realizan un buen
trabajo y dónde hay problemas, y a cómo ayudar-
los a entender y razonar mejor. Eso es diferente
con cada alumno y cada año, y es donde el profe-
sorado proporciona su máximo valor. Esto signi-
fica que reutilizar los materiales propios o incluso
utilizar los de otra persona llevará menos tiempo
que el que utilizan para modificar sus clases ma-
gistrales de un año a otro. Hay un ejemplo de un
curso de Quantum Mechanics (QM) que desarro-
llé en Colorado que se ha utilizado durante más
de 10 años, casi sin cambios en los materiales. Hay
muchos otros ejemplos de buenos materiales que
se comparten y reutilizan.
En realidad, una vez que los profesores apren-
den a enseñar de esta manera, a menudo encuen-
tran que la enseñanza es mucho más estimulante y
gratificante, que pasan más tiempo en ella, en bus-
ca de nuevas ideas y diferentes formas de enseñar
temas particulares para hacerlos más interesantes
y efectivos para los estudiantes. Sin embargo, eso
es por elección y no se requiere en absoluto para
ser un buen profesor.
J. G.: Explica en sus documentos la necesidad de
medir lo que los estudiantes realmente aprenden.
Suena como que hay algo específico en su enfoque
de evaluación. ¿Cómo hace realmente las evalua-
ciones? ¿Podría explicar esto con dos ejemplos?
Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  47
Entrevista  •  Una entrevista con el Nobel Carl Wieman: Cómo mejorar la enseñanza de las ciencias en la universidad
C. W.: Esto es realmente bastante complicado,
y lo hago de diferentes maneras, con diferentes
niveles de rigor dependiendo de la situación. Lo
más fácil se presenta cuando existe un cuestiona-
rio con conceptos que alguien ha desarrollado y
que cubre los temas relevantes. Estas pruebas del
cuestionario de conceptos contienen preguntas
específicamente elegidas para tener una situación
simple nueva para el estudiante donde un físico
podría aplicar fácilmente el concepto relevante
para predecir lo que sucederá, pero ante la que, si
un estudiante se limita a seguir un procedimiento
de solución memorizada fija, no tendrá éxito.
En general, elijo algún aspecto particular del ra-
zonamiento físico en la forma en que tomaron una
decisión o respondieron una pregunta para resolver
un problema relacionado con el tema que los alum-
nos debían aprender. Esto se denomina “análisis de
tareas cognitivas”, y sondea cómo piensan las perso-
nas, en este caso los físicos. Luego diseño preguntas
que ponen a los estudiantes en una situación similar
y veo si siguen el mismo proceso de razonamiento.
Encuentro una situación o parámetros ligeramen-
te diferentes a los que los estudiantes han visto antes
y hago una pregunta para probarlos. Por ejemplo, en
mi curso introductorio de QM aprendemos cómo
funciona un láser. En la prueba, les doy el problema:
“Su láser de gas estaba funcionando, pero ahora la
potencia es la cuarta parte de lo que estaba”. “Plantea
tres posibles cambios que podrían haber ocurrido en
el láser para causar esta caída de potencia, y explica
por qué cada cambio da el resultado observado”.
En otras ocasiones, puedo usar las notas de
los exámenes, si están razonablemente bien di-
señados. En nuestros estudios de laboratorios
de instrucción, que se suponía debían ayudar a
los estudiantes a aprender el programa del cur-
so cubierto por los exámenes, esa era una opción
adecuada. Observamos cómo los estudiantes que
hicieron el curso de laboratorio obtuvieron en los
48  Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019
exámenes de física puntuaciones mejores que los
que no hicieron el curso de laboratorio.
J. G.: He leído sus artículos en importantes revis-
tas científicas, como Science o Physical Review PER.
Por lo tanto, mi última pregunta, pero no menos
importante, para los profesores interesados en ​​
el área de Enseñanza de la Física es: ¿cree que la
investigación en Enseñanza de la Física también
debería desarrollarse en los departamentos de Fí-
sica como otra área de investigación?
C. W.: Esto ya ha sucedido en los Estados Unidos.
La Sociedad Americana de Física ha reconocido
oficialmente la Investigación en Enseñanza de la
Física (Physics Education Research-PER) como un
campo de la física. Hay sesiones de PER en mu-
chas reuniones de la APS y una de las series del
Physical Review está dedicada a PER. Hay aproxi-
madamente 50 departamentos de Física que tie-
nen profesores que realizan PER como su área
principal de investigación en física y estudiantes
que obtienen Ph.D.s en física investigando en
PER. Esto incluye Cornell, Harvard, Washington
University, Maryland, Colorado, Ohio, Stanford y
muchos otros centros. Dicha investigación solo
puede ser realizada por físicos; los profesores de
las Facultades de Educación nunca pueden tener
la profundidad necesaria en conocimientos de Fí-
sica para estudiar cómo los estudiantes aprenden
a pensar como físicos, el objetivo educativo más
importante. No es fácil cambiar la forma en que
se piensa acerca de la enseñanza cuando ha habido
una forma tradicional durante más de 200 años.
Siento que esta empresa representa un cambio
cultural para las universidades, los estudiantes y
la sociedad, lo cual me parece muy prometedor.
J. G.: Muchas gracias por sus explicaciones. Ha
sido un placer conversar con usted.
 Mi clásica favorita
Vera Rubin,
la astrónoma que nos hizo replantearnos
de qué está hecho el universo
por Sara Gil Casanova*
Cuanto más se lee sobre Vera Rubin, más difícil es que no se convierta en tu clásica favorita. Hay muchas
facetas por las que admirarla. Su perseverancia en perseguir su sueño de ser astrónoma, pese a los
obstáculos por el sexismo de la época. Su brillantez, que hizo que se aceptara mayoritariamente un
resultado muy controvertido: la evidencia de la existencia de la materia oscura. Su sencillez y cercanía
con los estudiantes. Su feminismo y su apoyo a generaciones de astrónomas. Era bien sabido que estaba
disponible para ellas las 24 horas. Hizo campañas para que los paneles, departamentos y premios fueran
más igualitarios. Y lo hizo todo sin perder el humor y su pasión por la ciencia. Su entusiasmo y curiosidad
por entender el universo nunca la abandonaron.

En una galaxia espiral, la proporción de
materia luminosa a oscura es de uno
a diez. Es también probablemente un
buen número para indicar la proporción
de nuestra ignorancia frente a nuestro
conocimiento. Ya hemos salido de la
guardería, pero estamos aún en tercero
de primaria.
Vera Rubin
Sus primeros años
Vera Rubin, una de las astrónomas más
brillantes del siglo xx, o Florence Vera
Cooper por su nombre de soltera, na-
ció en Filadelfia (Pensilvania) en 1928.
Sus padres eran inmigrantes judíos. Él
era ingeniero electrónico y trabajaba
para la compañía de teléfono Bell. Su
madre, que trabajó para la misma com-
pañía, sería ama de casa tras casarse.
Ambos se convertirían más tarde en
un apoyo fundamental en la carrera
de Rubin.
El interés de Vera por la astronomía
empezó muy pronto. Cuando tenía diez
años su familia se mudó a Washington
y desde la ventana de su nueva habita-
ción Vera podía mirar las estrellas. Mu-
chas noches se quedaba despierta hasta
tarde, mirando a través de la ventana,
fascinada por los movimientos en el
*  Física y divulgadora, co-creadora de AstroChat.
cielo. Cuando había lluvia de estrellas,
memorizaba por dónde aparecían los
meteoros y a la mañana siguiente di-
bujaba un mapa con ellos. La curiosidad
le llevó a la biblioteca a buscar libros
de astronomía, ante las protestas de la
bibliotecaria, que pidió un permiso de
su madre para “autorizarla a leer libros
para adultos”.
A los catorce años Vera decidió que
necesitaba un telescopio. Encargó una
lente y un tubo de cartón y su padre le
ayudó a construirlo. No era gran cosa,
pero le convenció de que quería ser
astrónoma. Empezaría una carrera de
obstáculos en la que muchos le dirían
que no era una profesión para mujeres.
Afortunadamente, Rubin estaba con-
vencida de que no era así. Había leído
un librito sobre Maria Mitchell, la pri-
mera astrónoma profesional de Estados
Unidos. Y sabía que Mitchell había sido
profesora en una prestigiosa universi-
dad para mujeres, Vassar. Allí, de 1865
a 1885 había formado a varias promo-
ciones de astrónomas. La astronomía sí
era para mujeres.
Desafortunadamente, su profesor de
física del instituto no pensaba lo mis-
mo. No sabía muy bien qué hacer con
las pocas alumnas que tenía y optaba
por ignorarlas. En clase se refería a los
grandes científicos en exclusiva como
hombres brillantes y el único lugar en
que incluía a una mujer era a Marie
Curie, pero no como científica brillan-
te sino trabajadora, que al parecer es lo
máximo a lo que podía aspirar una mu-
jer. El último año del instituto, cuando
Vera le contó muy ilusionada que había
conseguido una beca para ir a Vassar, el
único comentario del profesor fue que
todo le iría bien mientras se mantuviese
alejada de la ciencia. Afortunadamente
para la ciencia, el profesor no podía es-
tar más equivocado.
En Vassar el ambiente era muy dis-
tinto. Allí se encontró con excelentes
profesores, una gran biblioteca y mucho
compañerismo. Y por si eso fuera poco,
tenía un pequeño telescopio a su dispo-
sición. Rubin comentaba que uno de los
momentos más memorables fue la visita
de Richard Feynman durante su segun-
do curso, con el que discutirían varios
proyectos científicos. Ese mismo curso
habría otro momento muy destacado.
En 1947 conoció a Robert (Bob) Rubin,
hijo de unos amigos de sus padres, y
pronto se prometieron. Curiosamente,
Bob estudiaba en Cornell, donde daba
clases Feynman, y las primeras palabras
de Vera a su futuro marido fueron: “¿co-
noces a Richard Feynman?”. Al año si-
guiente, nada más graduarse en Vassar,
Vera y Bob se casaban. Un matrimonio
que duraría nada menos que 60 años,
hasta la muerte de él.

Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  49

Mi clásica favorita  •  Vera Rubin, la astrónoma que nos hizo replantearnos de qué está hecho el universo
Vera Rubin, a los 18,
usando el telescopio
en la Universidad de
Vassar. Crédito: Vassar
College. Cortesía: AIP
Emilio Segrè Visual
Archives.
Lo habitual de la época hubiera sido que Vera
dejara sus estudios, pero ella quería seguir con su
carrera. Solicitó matricularse en la universidad de
Princeton, donde la rechazaron porque entonces
aún no aceptaban mujeres en la especialidad de
astronomía. De hecho no lo harían hasta nada
menos que 1975, casi 30 años después. Donde sí
la aceptarían fue en Harvard, pero finalmente Vera
optó por matricularse en Cornell, donde estudiaba
su marido. Al director del departamento de astro-
nomía de Harvard no le hizo mucha gracia: “Mal-
ditas mujeres. Cada vez que voy a conseguir a una
buena va y se casa”, le contestó.
En Cornell el departamento de física era im-
presionante. Vera estudió mecánica cuántica nada
menos que con Hans Bethe, ganador de un Nobel
por sus investigaciones sobre las reacciones nu-
cleares en el sol. También asistió a las conferencias
sobre electrodinámica cuántica del carismático
Feynman, que más tarde también se llevaría un
Nobel por este tema. Eso sí, el departamento de
Vera Rubin en el Ob-
astronomía, por el contrario, era muy flojo. El di-
servatorio de Lowell, rector recibió a Vera aconsejándola que se dedicara
en 1965. a otro campo aludiendo que apenas había trabajo
50  Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019
en astronomía. Afortunadamente también estaba
Martha Stahr, la única profesora en toda la univer-
sidad de Cornell, que era especialista en dinámica
de galaxias. Eso determinaría el tema que eligió
Vera para su trabajo fin de máster: ¿presentan las
galaxias movimientos más allá de lo que se espera
por la expansión de Hubble?
“Madre joven encuentra el centro
del universo”
Cuando Vera acabó su trabajo fin de máster, em-
barazada ya de nueve meses, quiso presentar los
resultados en la conferencia de la Asociación Ame-
ricana de Astronomía, pero su jefe de departamen-
to le dijo que en ese estado no podía y que sería él
quien lo presentaría y lo firmaría. Vera, especial-
mente indignada porque él no había participado
en absoluto en dicho trabajo, le contestó que, em-
barazada o no, lo presentaba ella. Cuando llegó el
día, en pleno invierno y con un bebé de un mes,
Vera pidió a sus padres, que sí tenían coche, que la
llevaran a la conferencia. Su padre le comentaría
más tarde que había envejecido 20 años, condu-
ciendo en plena nevada con su nieto de un mes.
Los comentarios tras las presentación de su
trabajo, titulado “la rotación del universo”, no
fueron muy positivos. Vera recuerda que la única
voz amable fue la de Martin Schwarzschild (hijo
de Karl, famoso por sus trabajos sobre agujeros
negros). Curiosamente, a quién sí gustó su trabajo
fue a la prensa local. O al menos el exotismo que
representaba que una mujer, joven y madre, lo pre-
sentara. El Washington Post titulaba la noticia nada
menos que con “Madre joven encuentra el centro
del universo”. Claramente, no habían entendido el
trabajo de Vera. Cincuenta años más tarde, cuando
Vera fue galardonada con la prestigiosa Medalla
de la Ciencia, varios de sus amigos hicieron una
portada falsa del mismo periódico, con el titular
“Abuela vieja consigue una Medalla de Ciencia”.
Sabían que al verlo Vera se acordaría de la noticia
original (y así fue).
Poco después de finalizar su máster, Vera y su
familia se mudaron a Washington, donde su ma-
rido había aceptado un trabajo en el Laboratorio
de Física Aplicada Johns Hopkins (APL). Entre las
ofertas de trabajo eligió esta porque pensó que fa-
cilitaría que Vera se reincorporase a la investiga-
ción (el laboratorio estaba cerca de Georgetown,
una universidad con un buen departamento de
astronomía). Vera no lo tenía tan claro. Con un
bebé, se planteó seriamente dejar la investigación
y la astronomía. Los siguientes meses se quedó
en casa, intentando mantenerse al día leyendo el
Astrophysical Journal. Sin embargo, cada vez que
llegaba la revista se daba cuenta de lo mucho que
echaba de menos la astronomía. Al cabo de seis
meses, animada por su marido, se matriculó en
el doctorado de la universidad de Georgetown.
Eso sí, iba a ser necesario el apoyo logístico de
toda la familia. Sintiéndose culpable porque sus

padres la pudieran considerar una “mala madre”,
Vera les pidió ayuda. Descubrió que sus miedos
eran infundados y que, una vez más, sus padres la
querían apoyar con su carrera. Fue así como todos
se pusieron en marcha. Cuando salía del trabajo,
Bob iba a recoger a la madre de Vera y la llevaba a
casa con el bebé, a la vez que recogía a Vera para
llevarla a las clases de la facultad, que eran por la
tarde. Él la esperaba en el coche cenando mientras
Vera iba al Observatorio.
Al contrario de lo que le había pasado en Cor-
nell con el director del departamento, Vera sí se
sintió apoyada por el director del Observatorio de
Georgetown. El impulsor del programa de docto-
rado de astronomía, el padre Francis J. Heyden, era
curiosamente un astrónomo jesuita. Vera recuerda
cómo, a principios de los años 50, el padre Francis
fomentó un departamento inclusivo. Además de
Vera, madre de un bebé, había varias personas con
estilos de vida no convencionales y Harvey Banks,
un astrónomo negro, pionero en la utilización de
computadoras.
Otra influencia positiva en las investigaciones
de Vera fue George Gamow. Curiosamente, el
compañero de despacho de Bob lo conocía y les
puso en contacto. Finalmente se conocieron en
persona cuando Gamow fue a dar una charla al la-
boratorio donde trabajaba su marido. Vera quería
asistir pero Gamow le informó de que las mujeres
tenían la entrada prohibida. Así que tuvieron que
conversar en recepción. Fue allí donde, entre va-
rias preguntas interesantes, Vera decidió el tema
de su tesis: la distribución a gran escala de las ga-
laxias en el universo.
A lo largo de su tesis Vera llegaría a la conclu-
sión de que las galaxias tienden a amontonarse en
lugar de estar distribuidas al azar. Aunque ahora
es un resultado aceptado, fue ignorado durante
décadas. Tampoco fue publicado por el rechazo de
un profesor cuyo estudiante trabajaba en el mismo
campo. No es de extrañar que en esta época Vera
le preguntara muchas veces a su marido si alguna
vez se sentiría una astrónoma de verdad.
En 1955, a los 27 años, acabada la tesis y madre
de dos niños, Vera conseguía una posición en la
universidad, como investigadora asociada primero
y finalmente como profesora asociada. Al mismo
tiempo también enseñaba astronomía en el insti-
tuto de sus hijos, participaba en un programa para
acercar la ciencia a los más jóvenes y en un comité
por los derechos humanos.
De Georgetown a Carnegie
En la década de los sesenta del siglo pasado Vera
empezó por fin a sentirse una astrónoma de ver-
dad. Sin duda contribuyó el trabajar con Margaret
y Geoffrey Burbidge, unos astrónomos excepcio-
nales que trataban de igual a igual a Vera y mostra-
ban interés y respeto por sus ideas. Margaret era
además todo un referente para Vera. Había sido la
primera mujer en usar el observatorio de Monte
Sara Gil Casanova  •  Mi clásica favorita
Palomar, donde se encontraba uno de los mayores
telescopios de Estados Unidos. Las mujeres tenían
prohibido el acceso con la principal excusa de que
las instalaciones no estaban preparadas para ello.
En particular, alegaban que no había baños para
ellas. En el “monasterio”, como lo llamaban, las
únicas mujeres que entraban era para limpiar y
para cocinar. Margaret fue en calidad de “esposa”
y se alojó en una cabaña, sin calefacción ni agua
caliente. Una vez allí, consiguió utilizar el telesco-
pio de forma extraoficial. Era un secreto a voces.
En 1963, el astrónomo Allan Sandage le propuso a
Vera que hiciera una solicitud para utilizarlo, pese
a que oficialmente siguiera la prohibición respec-
to a las mujeres. Y así fue como, en diciembre de
1965, Vera Rubin se convirtió en la primera mujer
en observar oficialmente desde Monte Palomar.
Cuando le señalaron el único baño de las instala-
ciones, el baño de la discordia, Vera fue a recortar
una silueta con forma de mujer de papel, lo pegó
en la puerta del baño y exclamó: “solucionado, ya
tenemos baño”.
De hecho, si algo caracterizó a Vera durante
toda su vida fue el no quedarse indiferente ante
las injusticias. Una anécdota de esta época dice
mucho de su carácter. Junto a sus estudiantes de
doctorado, realizó un trabajo sobre las velocidades
de estrellas lejanas al centro de nuestra galaxia.
Cuando enviaron la publicación al Astronomical
Journal el editor la llamó para decir que aceptaba
el artículo siempre que no incluyera el nombre de
los estudiantes. Antes que acceder a lo que veía
como una injusticia, Vera contestó que entonces
prefería retirar la publicación. Vera ganó esta ba-
talla: el editor aceptó incluirlos.
En 1965 Vera decidió dejar Georgetown y traba-
jar para el Departamento de Magnetismo Terres-
tre del Instituto Carnegie. El día que fue allí para
pedir que la contrataran el director la invitó a que
Vera Rubin en 1970.
presentara su trabajo. Durante la comida conoció Crédito: Carnegie
a Kent Ford (1931-), que sería su compañero de Institution of Wash-
investigaciones durante los próximos años. Vera ington.
Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  51
Mi clásica favorita  •  Vera Rubin, la astrónoma que nos hizo replantearnos de qué está hecho el universo
Vera Rubin en el se volvió a casa con una placa fotográfica de Ford y
Observatorio de Kitt deberes: calcular en esa placa las velocidades de las
Peak.
estrellas. Tres meses más tarde le daban el trabajo.
Vera y Kent constituirían un estupendo equipo
de investigación. Él era especialista en desarrollo
de instrumentación y había diseñado un sistema
electrónico de detección óptica que mejoraba la
eficiencia de las placas fotográficas en un factor 20.
Gracias a una beca de la National Science Foun-
dation pudo desarrollar varios de estos sistemas
y distribuirlos a observatorios de todo el mundo.
Vera era la teórica, que se encargaba de procesar y
analizar los datos y escribir las publicaciones.
Empezaron su trabajo observando cuásares
(núcleos de galaxias muy luminosos). Sin embar-
go, pronto se dieron cuenta de que era un tema en
el que había mucha competencia. Los cuásares se
acababan de descubrir hacía solo un par de años
y eran aún un misterio que todos querían resol-
ver. Rubin y Ford no tenían su propio telescopio
y dependían de solicitar tiempo en observatorios,
lo que complicaba más las cosas. Después de un
tiempo Vera tuvo claro que prefería trabajar sin
esa presión. Decidió elegir un problema que fuera
interesante, pero no tanto que le vinieran a moles-
tar antes de resolverlo. Fue así como empezaron a
medir las curvas de rotación de las galaxias. Para
ello tendrían que ir con el instrumento desarro-
llado por Kent a distintos observatorios. Muchas
veces volaban a Flagstaff, Arizona, trabajaban algu-
nas noches en el observatorio de Lowell y después
conducían hasta el observatorio de Kitt Peak. Las
condiciones para observar eran a veces especial-
mente duras. Vera recuerda noches a −20 ºC en las
que se turnaban para poder ir a ratos a un cuartito
con calefacción anexo a la cúpula del telescopio.
Lo que ves no es lo que tienes
¿Qué es exactamente lo que estaban midiendo
Rubin y Ford? El instrumento que utilizaban con
los telescopios era un espectrómetro, capaz de
52  Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019
descomponer la luz que nos llega en las distintas
frecuencias que la componen. Los espectrómetros
nos permiten desde deducir los ingredientes de las
estrellas, a partir de la luz que emiten, a calcular
sus velocidades. En el caso de Rubin y Ford estaban
interesados en lo segundo: medir las velocidades
de distintas regiones de una galaxia para obtener
sus “curvas de rotación”. Aproximadamente, las
estrellas en el disco de una galaxia se mueven en
órbitas circulares alrededor del centro. Si el disco
está inclinado hacia nuestro punto de vista, las es-
trellas en un lado se nos acercan mientras que las
del lado opuesto se alejan. En el primer caso, por
el llamado efecto Doppler, veremos cómo la luz de
las estrellas se desplaza hacia las frecuencias más
altas del espectro (hacia el azul), mientras que la
de las que se alejan se desplaza hacia frecuencias
más bajas (hacia el rojo). Este desplazamiento es
proporcional a la velocidad de la fuente de luz (en
este caso la estrella) respecto a quien la observa.
Una de las primeras galaxias que observaron
Vera y Kent fue nuestra galaxia vecina, Andrómeda
(M31). No era la primera vez que se estudiaba esta
galaxia, pero sí con instrumentación tan avanza-
da como la que había diseñado Ford. Andrómeda
ofrecía una oportunidad única para estudiar la
dinámica de una galaxia como la nuestra. Al ser
bastante extensa en nuestro cielo (unos dos gra-
dos) es posible obtener el espectro individual de
unas regiones de gases que emiten cierta radia-
ción (regiones HII). Durante 1967 y 1968, entre los
dos consiguieron capturar decenas de espectros
de regiones HII, en un rango de distancias de 3 a
24 kiloparsecs desde el núcleo de la galaxia (por
comparación nuestro sol está a unos 8 kiloparsecs
del centro de nuestra galaxia).
En lo siguientes años seguirían realizando me-
didas muy detalladas de las curvas de rotación de
varias galaxias. Lo que esperaban encontrar es que
las estrellas más alejadas del centro se movieran
más despacio que las más cercanas. Es en el centro
de las galaxias espirales donde se ven más estre-
llas, y por lo tanto donde se espera que haya más
masa. Más masa implica que la gravedad hará que
las estrellas más cercanas se muevan más rápido,
del mismo modo que se puede observar en los pla-
netas del Sistema Solar. Midiendo las velocidades
de las estrellas en distintas partes de las galaxias,
Rubin y Ford esperaban también calcular cómo se
distribuía la masa en ellas. Sin embargo, lo que se
encontraron no cuadraba con estas hipótesis. Las
estrellas más alejadas del centro de la galaxia, en
las regiones supuestamente con pocas estrellas y
masa, las estrellas seguían moviéndose tan rápido
como las estrellas más cerca del centro.
Años después, Rubin recordaba su sorpresa
cuando empezaron a ver los primeros resultados.
Durante meses Vera intentó entenderlo. Al final,
un día empezó a hacer dibujos en un papel y de re-
pente lo vio. Si un halo de materia oscura rodeaba
cada galaxia la masa estaría repartida por toda ella,

en lugar de concentrarse en el centro. La fuerza
de la gravitación, y por lo tanto la velocidad de las
estrellas, sería la misma en toda la galaxia.
Un resultado no esperado requiere muchas más
observaciones, y es lo que Rubin y Ford hicieron
durante años. Al final Rubin afirmaría “lo que ves
en una galaxia no es lo que tienes”. Los cálculos de
Rubin indicaban que las galaxias debían de alojar
al menos 10 veces más materia de la que se veía
con los telescopios. Al menos el 90 % de la masa en
las galaxias era “materia oscura”, materia que no
podíamos observar y que no sabíamos de dónde
venía. El término no lo acuñó ella, sino el excéntri-
co astrónomo Fritz Zwicky (1898-1974) en 1933.
Había analizado los desplazamientos Doppler de
varias galaxias en un cúmulo de galaxias y había
encontrado un resultado sorprendente: las ga-
laxias se estaban moviendo tan deprisa que se es-
caparían del cúmulo a no ser que hubiera mucha
más masa de la que se podía observar. Como el
cúmulo no parecía estar desintegrándose, Zwicky
llegó a la conclusión de que debía de contener una
cantidad apreciable de “materia oscura”, unas diez
veces más de la que se veía.
El concepto de “materia oscura” era algo que
costaba asumir. Sin embargo, las observaciones y
análisis de Rubin fueron tan concienzudos que,
pese a lo excepcional del resultado, la mayoría de
la comunidad astronómica tardó poco en rendirse
ante la evidencia. Había demasiados datos como
para ponerlos en duda. Decenas de curvas de ro-
tación de galaxias, recogidas en placas fotográfi-
cas, revelaban que, por increíble que pareciera,
las estrellas son solo una pequeña parte de lo que
compone una galaxia.
Científica y madre
El trabajo de investigación que nos hizo empezar
a cuestionarnos los ingredientes del universo sa-
lió en gran parte de una mesa de comedor. Era
allí donde Vera trabajaba la mitad de la jornada,
para poder cuidar a la vez a sus cuatro hijos. Para
ella fue la parte más complicada de ser mujer y
científica. Pese al enorme apoyo de sus padres y
la implicación de su marido, decía que en muchas
ocasiones se sentía sobrepasada y agotada. A la vez,
comentaba que de lo que se sentía más orgullosa
era precisamente de sus cuatro hijos, todos con
doctorados en ciencia. David (1950), geólogo, Ju-
dith (1952–2014), astrónoma, Karl (1956), mate-
mático y Allan (1960), también geólogo.
Todos sus hijos crecieron pensando que la cien-
cia debía de ser algo enormemente divertido. Re-
cordaban a su madre trabajando en casa, muchas
veces rodeada de estudiantes o colegas, emociona-
da. Tanto, que un día Karl, a los cinco años, le llegó
a preguntar a su madre si tenía que pagar para que
la dejaran trabajar en astronomía. Nancy Roman,
la astrónoma conocida como la “madre del Hub-
ble”, recordaba una entrañable anécdota en casa
de los Rubin. En una cena en la que estaba de in-
Sara Gil Casanova  •  Mi clásica favorita
vitada, la hija de Vera preguntó a su madre quién
más venía a cenar, y al comentarle que un astró-
nomo, Judith, extrañada, preguntó si los hombres
también podían dedicarse a la astronomía. Todos
los hijos de Vera pensaban que casi todo el mundo
era científico y las astrónomas mujeres.
Judith acabaría siguiendo los pasos de su madre,
aunque en un principio lo que más le gustaba era
la química, el campo de su padre. Sin embargo, en
una de las clases que Vera daba en su instituto oyó
a su madre hablar de agujeros negros y… no hubo
marcha atrás. Le atrajo profundamente la existen-
cia de una ciencia que podía estudiar lo que no se
podía ver. Décadas más tarde su padre seguía re-
prochándole, en broma, que fuera una desertora y
se hubiera pasado al lado oscuro. Judith siempre
consideró a su madre como su principal mentora
y animadora, sin cuyo apoyo no habría conseguido
ser astrónoma. Le hacía especial ilusión haber com-
partido con su madre congresos y publicaciones.
Fueron muchas las investigadoras que tuvieron
a Vera Rubin como ejemplo de que era posible ser
científica y madre a la vez. Algo que hasta entonces
aún era la excepción.
Mujeres en ciencia
Uno de los temas que más preocupó a Vera Rubin
durante toda su vida fue la desigualdad de oportu-
nidades en ciencia. Su filosofía en este tema la re-
sumió así: “No hay problema en ciencia que pueda
ser resuelto por un hombre pero no por una mujer;
En todo el mundo, la mitad de los cerebros están
en mujeres. Todos necesitamos permiso para hacer
ciencia, pero, por razones que están muy enraiza-
Vera Rubin hacia 1985.
Fotografía de Mark
Godfrey.
Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  53
Mi clásica favorita  •  Vera Rubin, la astrónoma que nos hizo replantearnos de qué está hecho el universo
Vera Rubin reciebiendo das en la historia, este permiso se les da mucho más
la Medalla Nacional de a menudo a los hombres que a las mujeres”.
la Ciencia, en 1993.
Rubin creía que parte de la explicación del bajo
número de mujeres científicas era la falta de ro-
les. Contaba cómo su nieta, con solo dos años, ya
tenía claro que ser médicos era cosa de chicos y
enfermera de chicas. Aunque sus padres quisieran
invertir los roles en los juegos, ella decía que “un
chico no podía convertirse en una chica”. Si no has
visto mujeres médicas, no crees que sea una posi-
bilidad. Por ello, en 1976, cuando descubrió que
el primer show del planetario del Museo Smithso-
nian del Espacio sobre historia de la astronomía
Vera Rubin, la segunda en América mostraría solo hombres, hizo campaña
por la izquierda. NASA
Sponsors Women
durante meses para que se incluyera a mujeres.
in Astronomy and Esta batalla la perdió, pero no fue más que una de
Space Science 2009 las muchas en las que se implicaría.
Conference. University Según avanzaban los años, lo que más le frus-
of Maryland University traba era constatar que las cosas apenas mejora-
College (UMUC) Inn
and Conference Cen-
ban. Las investigadoras le contaban el mismo tipo
ter, Adelphi (21-23 de de problemas que había tenido ella 30 años antes.
octubre de 2009). Cuando su hija Judith habló con su consejera uni-
54  Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019
versitaria, preocupada por no haber sido seleccio-
nada en su universidad favorita, esta le dijo que no
se preocupara, que siempre tenía la opción de ca-
sarse en lugar de ir a la universidad. Cuando Judith
volvió de su primera conferencia internacional, las
dos comentaron frustradas cómo Judith había sido
la única mujer presente.
Vera Rubin trabajó toda su carrera para mejorar
la situación de las nuevas generaciones de inves-
tigadoras. En muchas ocasiones hacía llamadas
a los comités organizadores para intentar hacer
cambios. También le preocupaba el bajo núme-
ro de premios que recibían. Cada año se le podía
ver ocupada nominando a mujeres a los premios
de la Asociación Americana de Astronomía y las
Academias Nacionales. Y también animando a
otros a que hicieran lo mismo. También escri-
bía en los boletines de dichas asociaciones y en
distintas publicaciones para llamar la atención
sobre las “deplorables” estadísticas de mujeres en
ciencia. Su influencia se podía notar en el número
creciente de investigadoras que trabajaban en la
misma institución que lo hacía ella, Carnegie. Con
muchas de ellas siguió su relación aún después de
que dejaran Carnegie y las apoyó con su carrera
a distancia. Cuando no conseguían un trabajo o
les rechazaban una publicación, Vera estaba ahí
animando. Siempre les decía que hay subidones
y bajones, pero que tienes que seguir haciendo lo
que amas. Era bien sabido que estaba disponible
las 24 horas del día para las astrónomas.
Muchas son las investigadoras que recuerdan a
Vera como la primera persona con la que sintieron
que su trabajo se tomaba en serio. Una de ellas
recuerda cómo el primer día que Vera la invitó a
su casa y conoció a su marido se quedó conmo-
vida por la complicidad y amor que había entre
los dos, después de más de 50 años de matrimo-
nio. Y cuando la llevó a su oficina pudo ver que
en la puerta había chapas con el mensaje “Apoyo
a las mujeres en ciencia” en varios idiomas. Otra
investigadora recuerda como su contratación fue
posible gracias a que Vera renunciara a su sueldo.
Quería dar paso a las generaciones siguientes pero
no renunciar a seguir investigando, así que se in-
ventó un nuevo título, “Investigador Senior” para
no ser emérita y que todo el mundo tuviera claro
que iba a seguir trabajando.
Astrónoma hasta el final
Vera Rubin dedicó toda su carrera a estudiar las
galaxias. Por ejemplo, en 1992 descubrió una
galaxia (NGC 4550) en la que la mitad de sus es-
trellas están girando en una dirección y la otra
mitad en la contraria. Una explicación posible
sería que la galaxia fuera resultado de la fusión
de dos galaxias, cada una de las cuales rotaba en
una dirección. Más tarde Rubin encontraría más
galaxias con este comportamiento. Más aún, ella y
colegas encontraron evidencias de perturbaciones
gravitacionales debido a encuentros cercanos con

otras galaxias nada menos que en la mitad de las
galaxias del cúmulo de Virgo.
Pero Vera, además de hacer sus investigaciones
en astronomía, aún hacía mucho más. En 1996
se le pidió unirse al Comité Nacional de Ciencia
para un puesto de seis años. Parte de su trabajo era
confeccionar informes para el congreso e incluso
testificar ante comités de congresistas. También
se convirtió en la asesora extraoficial de Hillary
Clinton para los eventos que tenían que ver con
ciencia. Y en 1997 escribió un libro Bright Galaxies,
Dark Matters donde, entre anécdotas personales,
recogía en términos divulgativos gran parte de su
trabajo realizado durante su carrera.
En esta época, los 90, también empezaron a
llegar los reconocimientos. Entre ellos destacan
la Medalla Nacional a la Ciencia, en 1993, y la Me-
dalla de Oro de la Real Sociedad Astronómica, en
1996. También tiene un asteroide nombrado en
su honor (asteroide 5726 Rubin) y una región de
Marte, la cresta de Vera Rubin.
No fue hasta 2006, a los 78 años, cuando bajó el
ritmo de sus actividades. Y no fue por ella, si no por
Bob, su marido, que contrajo cáncer y moriría un
par de años después. Fue un duro golpe para Vera
pero pese a ello siguió activa. En 2009 asistía a una
conferencia de mujeres en astronomía, mostrando
como siempre su curiosidad por el trabajo de las
investigadoras jóvenes. No era la única octogenaria
en esa reunión, también la acompañaba Nancy Ro-
man, y Vera no perdía oportunidad para presentar
a las más jóvenes el trabajo de esta otra pionera.
Vera Rubin murió el día de Navidad de 2016, a
los 88 años. Muchísimas investigadoras recorda-
ron en artículos y en redes sociales lo mucho que
le debían. Su humildad, su curiosidad, su cercanía,
su apoyo. Vera no había sido solo una gran astró-
noma, sino también una persona excepcional.
Olvidada por los Nobel
Pocos meses antes de que Vera muriera fueron
muchos los que pidieron, como ya lo habían he-
cho numerosas veces antes, que se le concediera el
Nobel de Física. Y una vez más, el Nobel no llegó.
Algunos lo justificaban diciendo que mientras no
hubiera evidencia directa de la materia oscura no
se le podía conceder. Sin embargo, existen prece-
dentes de casos similares, uno de ellos el Nobel
dado a los astrónomos que descubrieron que la
expansión del universo se estaba acelerando en
lugar de desacelerando, aun cuando seguían  sin
estar claras las causas de esta aceleración. Preci-
samente una de las explicaciones más probables
es la existencia de energía oscura, de la que aún
no sabemos su naturaleza. Los paralelismos con el
descubrimiento de Vera Rubin son evidentes. Otro
ejemplo es el Nobel por el descubrimiento de las
primeras evidencias indirectas de ondas gravita-
cionales, concedido décadas antes de detectarlas
directamente. Otro argumento que a veces se da
para justificar que no se llevara el Nobel es que
Sara Gil Casanova  •  Mi clásica favorita
hubo muchos investigadores implicados en el des- Reunión de astróno-
cubrimiento de la materia oscura. Aunque cierto, mas en homenaje a
Vera Rubin en 2017.
Vera Rubin y Kent Ford fueron los primeros en
Entre ellas están
aportar evidencias claras y contundentes. Además, Wendy Freedman y
siempre se hubiera podido compartir el premio. Sandy Faber. Foto
Por otro lado, incluso investigadores que apues- por Natasha Metzler,
tan por una explicación alternativa a la de la ma- Carnegie Science.
teria oscura para explicar los hallazgos de Rubin
piensan que se merecía el Nobel. Independiente-
mente de que exista o no esta materia oscura, el
trabajo de Vera fue el primero en establecer, más
allá de cualquier duda, que la dinámica de las ga-
laxias es muy distinta a la que esperábamos. Este
resultado es suficientemente importante y Vera
fue la primera en revelarlo. Como le dijo una vez
a su hijo pequeño, “he descubierto algo en astro-
nomía que aún no sabe nadie más”.
¿Qué opinaba Vera Rubin de todo esto? Nunca
pareció darle mucha importancia a los premios,
o al menos cuando eran para ella: “Mis números
representan mucho más para mí que mi nombre”.
Vera pudo ser olvidada por el Comité Nobel, pero
sin duda no lo ha sido por generaciones de cien-
tíficas para las que se convirtió en un referente.
Científicas que la recordaron cuando pudieron
conseguir lo que hacía solo unas décadas parecía
imposible: “Querida Vera, somos cuatro astróno-
mas en el Observatorio de Chile de Cerro Tololo.
Le escribimos este telegrama porque hemos pen-
sado que debía de saber esto: esta noche los cua-
tro grandes telescopios están siendo usados por
nosotras, por cuatro mujeres”.
Referencias
[1] Entrevista en 1989 para el American Institute of Physics:
https://www.aip.org/history-programs/niels-bohr-
library/oral-histories/33963
[2] Entrevistas en 1995 y 1996 para el American Institute
of Physics: https://www.aip.org/history-programs/
niels-bohr-library/oral-histories/5920-1
[3] Vera Rubin, “An Interesting Voyage”, Annual Review
of Astronomy and Astrophysics, 2011.
[4] Vera Rubin, Bright Galaxies, Dark Matters, American
Institute of Physics Press, 1997.
[5] Web dedicada a la memoria de Vera Rubin, con tes-
timonios, fotografías y recursos adicionales: https://
dtm.carnegiescience.edu/remembering-vera
Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  55
Nodos de la Física
Descripción de la estructura, objetivos y actividades de los centros de acción científica, públicos y privados, más
significativos en España que, con una notable participación de físicos, realizan investigación científica o técnica
y docencia avanzada
Centro de Astrobiología.
20 años estudiando la vida y el Universo
Por J. Miguel Mas-Hesse, Víctor Parro, Ricardo Amils, Eduardo González-Pastor, Francisco Najarro, Olga Prieto-Ballesteros,
Eduardo Sebastián y Juan Ángel Vaquerizo
E
l Centro de Astrobiología (CAB) comenzó su andadura
en noviembre de 1999, y este año celebra su 20 ani-
versario. Su origen se remonta a la propuesta presen-
tada a la NASA por un grupo de científicos españoles
y norteamericanos liderados por Juan Pérez-Mercader para
unirse al entonces (1998) recién creado NASA Astrobiology
Institute (NAI). Después de un detallado análisis y evaluación
del proyecto y tras un intercambio de cartas a nivel guber-
namental, el CAB se integró en el NAI en abril de 2000, con-
virtiéndose de esta manera en su primer Miembro Asociado
fuera de Estados Unidos.
El Centro de Astrobiología se constituyó como un Centro
Mixto participado por el Instituto Nacional de Técnica Ae-
roespacial (INTA), que aportaba su experiencia en el campo
de la investigación espacial, y el Consejo Superior de Investi-
gaciones Científicas (CSIC), con su amplio bagaje científico. El
Gobierno de la Comunidad de Madrid apoyó también las acti-
vidades del CAB desde sus comienzos. En noviembre de 2018
el CAB recibió la mención de Unidad de Excelencia María de
Maeztu otorgada por la Agencia Estatal de Investigación.
La sede del CAB se ubica en el campus del INTA en Torre-
jón de Ardoz, a 20 km al noreste de Madrid. Consta de un
edificio principal, inaugurado en 2003, con una superficie
construida de aproximadamente 8.000 metros cuadrados.
En 2012 se inauguró un segundo edificio en el campus del
Centro Europeo de Astronomía Espacial (ESAC) de la Agencia
Espacial Europea, también en las cercanías de Madrid. Asi-
mismo, la Universidad de Valladolid mantiene una Unidad
Asociada al CAB dedicada a espectroscopía Raman y que se
sitúa en las instalaciones del CSIC en el Parque Tecnológico
de Boecillo (Valladolid).
Objetivos
El Centro de Astrobiología se fundó con el objetivo de des-
entrañar el origen de la vida (¿cómo se formó?), tanto en
el espacio (¿dónde?) como en el tiempo (¿cuándo?), con-
siderándola siempre como un proceso físico-químico ín-
timamente ligado a la evolución del Universo. El enfoque
astrobiológico para responder estas cuestiones parte de
una aproximación multi y transdisciplinar, que podríamos
resumir como sigue:
• El primer paso consiste en entender el origen de los ele-
mentos químicos, a partir de un universo primordial que
tan sólo contenía hidrógeno, helio y trazas de otros ele-
mentos. La formación y evolución de estrellas y galaxias
generó todos los elementos que conocemos hoy en día,
que se dispersaron por el medio interestelar.
56  Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019
• Estos elementos se agruparon en el espacio entre las es-
trellas, dando lugar a cadenas moleculares cada vez más
complejas, que podemos estudiar hoy mediante nuestros
radiotelescopios.
• Las sucesivas generaciones de estrellas ya no se forma-
ron a partir de material prístino, sino a partir de nubes
ricas en todo tipo de elementos y complejos moleculares.
Estos dieron lugar a sistemas planetarios de composición
compleja.
• Los astrofísicos del CAB estudian estos procesos y pro-
porcionan información sobre las condiciones de contorno
aplicables a distintos sistemas planetarios, incluida la Tie-
rra primigenia. Los geólogos planetarios complementan
estos datos con información acerca de las propiedades de
los planetas y la actividad que los hace evolucionar: den-
sidad, temperatura, existencia de tectónica y vulcanismo,
presencia de campo magnético, de atmósfera, interacción
entre las capas rocosas y los fluidos, establecimiento de
ciclos de elementos de interés biológico, y, en último tér-
mino, la posible habitabilidad de los planetas.
• Con estas condiciones de contorno, y conociendo los com-
puestos moleculares esperables a lo largo de la evolución
de los distintos planetas, los bioquímicos estudian los
procesos que pudieron dar lugar a la vida. Sabemos que
el proceso se desarrolló por completo al menos en la Tie-
rra, pero partimos de la base de que de manera similar
pudo haberse desarrollado en infinidad de entornos, ya
sean planetas, lunas de planetas gigantes, asteroides, etc.
Asimismo, los biólogos estudian cómo, una vez formada,
la vida en la Tierra se adaptó a las cambiantes condicio-
nes ambientales y cómo evolucionó hacia la complejidad,
asumiendo que en otros planetas el proceso pudo haber
sido similar.
• Finalmente, los ingenieros diseñan instrumentos para
explorar otros planetas, ya sea in situ o de manera remo-
ta, y construyen cámaras en las que podemos simular las
condiciones de prácticamente cualquier entorno fuera de
la Tierra.
La combinación de investigadores y tecnólogos de disci-
plinas tan variadas nos permite desarrollar un análisis no
 J. Miguel Mas-Hesse, Víctor Parro, Ricardo Amils, Eduardo González-Pastor, Francisco Najarro, Olga Prieto-Ballesteros…  •  Nodos de la Física
sólo multidisciplinar (en paralelo en los diferentes
campos de interés), sino también transdisciplinar,
con científicos de diversos campos colaborando
entre sí y con los ingenieros que fabrican la ins-
trumentación que requieran.
Estructura y organización del Centro
de Astrobiología
En la actualidad el CAB se organiza en cuatro de-
partamentos, con sus correspondientes líneas de
investigación:
Departamento de Astrofísica
• Formación y evolución de galaxias.
• Medio interestelar y circunestelar.
• Formación y evolución de estrellas, enanas ma-
rrones y planetas.
• Observatorio virtual: explotación científica de
archivos astronómicos.
Departamento de Planetología y Habitabilidad
• Geología planetaria y atmósferas.
• Habitabilidad y ambientes extremos.
Departamento de Evolución Molecular
• Química prebiótica.
• Evolución molecular, mundo RNA y biosensores.
• Estudios de evolución experimental con virus
y microorganismos.
• Biodiversidad microbiana.
• Mecanismos moleculares de la adaptación bio-
lógica.
• Biomoléculas en exploración planetaria.
Departamento de Instrumentación Avanzada
• Instrumentación espacial.
• Cámaras de simulación de ambientes planetarios.
Asimismo, el CAB dispone de más de diez labo-
ratorios y equipos de ensayos que cubren todos
sus campos de actividad.
Actividad científica
Departamento de Astrofísica
La actividad del Departamento de Astrofísica se
centra en el estudio de los procesos que fueron
necesarios para la aparición y evolución de la vida
en el Universo. Estos objetivos abarcan desde la
formación de los elementos químicos en el interior
de las estrellas y la formación y evolución de las
galaxias que las albergan, hasta los procesos de
formación de planetas en torno a nuevas estre-
llas, así como la formación y evolución de com-
puestos químicos de mayor o menor complejidad
en el espacio interestelar. A lo largo de la historia
del Universo, sucesivas generaciones de estrellas
han creado en su interior todos los elementos
pesados que conocemos. Los átomos de esos ele-
mentos químicos formaron moléculas, granos de
polvo y mantos de hielo en el medio interestelar
e intergaláctico hasta condensarse en sistemas
Sede principal del
Centro de Astrobio-
logía en el campus de
INTA, Madrid , y es-
quema de estructura
y organización.
planetarios con planetas rocosos, ricos en agua y
oxígeno, como la Tierra, condiciones en las que la
vida surgió hace más de 3.000 millones de años y
que deben de repetirse en infinidad de sistemas
planetarios.
La actividad del Departamento no se limita al
desarrollo de programas científicos, tanto obser-
vacionales o de laboratorio como teóricos, sino
que incluye asimismo una intensa participación
en el desarrollo de instrumentación astronómica,
tanto de Tierra como espacial. Esto nos garantiza
una posición privilegiada para poder ir abordan-
do los diferentes desafíos científicos con la ins-
trumentación ya en marcha y la que entrará en
funcionamiento a lo largo de esta década. Cabe
también resaltar la actividad relacionada con el
Observatorio Virtual y las bases de datos. Las prin-
cipales líneas de investigación son las siguientes:
Evolución del Universo
Investigadores del Centro de Astrobiología estu-
dian la formación de las primeras estrellas en la
historia del Universo. Pensamos que este proceso
tuvo lugar tan sólo unos 200-300 millones de años
después de la Gran Explosión con la que comenzó
todo, cuando las nubes primordiales de hidróge-
no y helio colapsaron y dieron lugar a la ignición
de los procesos de fusión nuclear que generan
la energía emitida por las estrellas. La radiación
ultravioleta emitida por estas estrellas debió de
ionizar las nubes de hidrógeno circundantes, ge-
nerando fotones asociados a la transición Lyman
alfa, que hoy en día podemos ver y estudiar con
telescopios suficientemente potentes. Mediante
el telescopio espacial Hubble y el Gran Telescopio
de Canarias (GTC) hemos conseguido detectar la
emisión de galaxias en los primeros mil millones
Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  57
Nodos de la Física  •  Centro de Astrobiología. 20 años estudiando la vida y el Universo
La vida como con-
secuencia de la evo-
lución del Universo
(Ñito/ Art Tempus).
de años de la historia del Universo, lo que nos ayu-
da a comprender los primeros pasos de su evolu-
ción. Con el lanzamiento del James Webb Space
Telescope (JWST), de NASA y ESA, a principios
de 2021, seremos capaces de estudiar la primera
generación de estrellas en la historia del Univer-
so, y de verificar si todo se desarrolló como nos
imaginamos.
Formación y evolución de estrellas y exoplanetas
Las actividades realizadas en el campo de la física
estelar y subestelar cubren objetivos científicos de
alto interés que abarcan un amplio rango de ma-
sas, desde los planetas hasta las estrellas masivas
de 120 masas solares: formación y evolución, en-
torno (medio inmediato que rodea a los objetos),
caracterización de las propiedades físico-químicas
de las atmósferas, y búsqueda de (exo)planetas.
Las actividades también abarcan los estudios de
discos protoplanetarios y de escombro.
Astroquímica en el medio interestelar y circunestelar
Los investigadores de este grupo se dedican al es-
tudio observacional, teórico y experimental de los
procesos físico-químicos en nubes interestelares y
entornos circunestelares. En las nubes difusas se
dan reacciones químicas, pero las moléculas ge-
neralmente se disocian debido al fuerte campo de
radiación ultravioleta. En las nubes densas, donde
se forman las estrellas jóvenes, se han detectado
numerosas especies moleculares, como resultado
de una compleja red de reacciones químicas y de
Ilustración de un
biofilm bacteriano
(María Lamprecht).
58  Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019
la interacción entre la fase sólida (granos de pol-
vo) y la fase gaseosa. Los granos de polvo actúan
como pequeños reactores químicos sobre los que
se forman moléculas de agua en forma de hielo.
La irradiación (fotónica e iónica) del hielo gene-
ra especies de interés prebiótico que se pueden
integrar en cometas y otros cuerpos de los siste-
mas planetarios primitivos. Las enormes envoltu-
ras alrededor de estrellas evolucionadas, lugares
principales de formación molecular, y la química
de discos protoplanetarios también centran los
esfuerzos de los investigadores del CAB.
Observatorio Virtual: Explotación científica
de archivos astronómicos.
La actividad de la Unidad de Archivo de Datos se
centra en cuatro líneas de trabajo: gestión de ar-
chivos astronómicos, desarrollo de herramientas
de análisis de datos y estándares de Observatorio
Virtual (OV), desarrollo de proyectos de ciencia-
OV y actividades educativas y de divulgación.
Por otra parte, las principales misiones espaciales
en las que participan miembros del Departamento
de Astrofísica en estos momentos son las siguientes:
PLATO: científicos del CAB coordinan la contri-
bución española a la misión PLATO, de la Agencia
Espacial Europea, que será lanzada en 2026 con el
objetivo de encontrar y caracterizar (composición,
densidad, presencia de atmósferas, etc.) planetas
análogos a la Tierra en torno a estrellas similares
al Sol, y a una distancia parecida. El interés de en-
contrar análogos terrestres radica en el hecho de
que, si la vida surgió en ellos hace tiempo, habrá
evolucionado de manera similar a como lo ha he-
cho en la Tierra, por lo que nos resultará más fácil
identificarla desde la distancia. Los biomarcado-
res atmosféricos definidos para la Tierra deberían
de ser aplicables también en estos exoplanetas,
mientras que en otros entornos más extremos la
adaptación ha podido inducir desviaciones tan im-
portantes de su metabolismo que nos cueste reco-
nocerla de manera remota. Mientras se desarrolla
la instrumentación de PLATO, trabajamos con los
datos proporcionados por otras misiones espacia-
les, como Kepler y TESS, de NASA, o Cheops, de
ESA, para buscar planetas potencialmente habi-
tables, aunque sus condiciones sean diferentes a
las de la Tierra.
James Webb Space Telescope (JWST): con un
lanzamiento previsto para 2021, el JWST será ca-
paz de observar las primeras estrellas que se en-
cendieron en la historia del Universo, cuando éste
tenía 200-300 millones de años de edad, así como
las propiedades de exoplanetas que orbitan en
torno a otros planetas, entre otros aspectos. Cien-
tíficos del CAB han participado activamente en el
desarrollo de los instrumentos MIRI (Mid-Infrared
Instrument) y NIRSpec (Near Infrared Spectrogra-
ph), en colaboración con ingenieros del INTA.
 J. Miguel Mas-Hesse, Víctor Parro, Ricardo Amils, Eduardo González-Pastor, Francisco Najarro, Olga Prieto-Ballesteros…  •  Nodos de la Física
También se participa en distinto grado en otras
misiones como Cheops, ARIEL, SPICA o Athena,
todas ellas de la Agencia Espacial Europea (ESA).
Departamento de Planetología y Habitabilidad
El objetivo científico de los investigadores de este
departamento es caracterizar las condiciones de
habitabilidad del sistema solar, tanto en el pasa-
do como en el presente, mediante el estudio de la
información registrada en las geosferas, biosferas,
hidrosferas y atmósferas de ambientes extremos
terrestres, así como en otros objetos planetarios
potencialmente habitables (ej. Marte o Europa). El
resultado del análisis de la interacción entre el am-
biente (geología, condiciones físicas) y la biología
se utiliza en la búsqueda de señales de vida, tanto
en la Tierra, desde su origen, como fuera de nuestro
planeta. Hay dos grupos de investigación en este
departamento, cuya interacción es muy intensa por
la interdisciplinariedad del objetivo descrito:
Geología planetaria y atmósferas
La actividad principal se centra en el estudio de
los objetos planetarios del Universo que poseen
superficies sólidas, incluyendo la Tierra. Se inves-
tiga el origen, la composición, la estructura y los
procesos y agentes por los cuales planetas, saté-
lites, cometas, asteroides y meteoritos evolucio-
nan desde su formación, con especial interés en
los cuerpos potencialmente habitables.
Habitabilidad y ambientes extremos
Los investigadores de este grupo persiguen la ca-
racterización de ambientes extremos de interés
astrobiológico y su biodiversidad con el fin de co-
nocer los límites de la vida y facilitar su búsqueda
fuera de la Tierra.
Entre las actividades que se realizan en el de-
partamento destacan:
• La participación en misiones de exploración
del sistema solar, tanto en las etapas de pla-
nificación (JUICE, Bepi-Colombo), en las de
explotación científica (MSL/REMS-2012, Exo-
Mars-2016, InSight/TWINS-2018), y en las del
desarrollo instrumental (Exomars/RLS-2020,
Mars2020/MEDA). En estos momentos se está
participando en la definición de una futura mi-
sión a las lunas heladas de Júpiter, a la búsque-
da de compuestos de interés astrobiológico.
• Caracterización de ambientes extremos como
análogos terrestres. Los ambientes extremos
en la Tierra sirven a los investigadores del CAB
para entender los procesos físico-químicos y
geológicos asociados a la potencial habitabili-
dad y presencia de vida en la Tierra primitiva y
en otros planetas. A partir de programas euro-
peos se coordina el estudio de análogos de gran
interés para la comunidad científica internacio-
nal, como Río Tinto y la laguna de Tírez (Espa-
ña) y el área hidrotermal de Dallol (Etiopía).
Asimismo, se realizan regularmente campañas
en otros análogos de Marte y las lunas oceáni-
cas como la Antártida, las áreas hidrotermales
de Islandia y Nueva Zelanda, los cráteres de im-
pacto en Escandinavia, el desierto de Atacama
(Chile) o el desierto de Chott el Djerid (Túnez).
Estas campañas se desarrollan con frecuencia
en el marco de colaboraciones internacionales
y sirven asimismo para la evaluación de instru-
mentación en condiciones extremas.
• Simulación y modelización del material plane-
tario y caracterización de procesos geológicos.
Para ello se utilizan cámaras de simulación úni-
cas en el mundo, que han sido diseñadas por
investigadores del centro. En ellas se pueden
recrear ambientes de superficies, atmósferas
e interiores planetarios así como ambientes
interestelares. Están provistas de fuentes de
radiación y diversas técnicas espectroscópicas
y espectrométricas para el análisis in situ de las
muestras. Estos sistemas se han desarrollado
para el estudio de procesos físico-químicos-bio-
lógicos que ocurren en ambientes extremos en
el Universo y para probar el funcionamiento de
instrumentación espacial. Caben destacar tres
instrumentos en relación a las actividades de
este departamento:
°° EPIC (The Experimental Projectile Impact
Chamber). Banco de pruebas para evaluar
y ayudar a la interpretación de los datos de
campo y teledetección sobre los procesos
que generan los cráteres de impacto.
°° PASC (Planetary Ambient Simulation Cham-
ber). Sistema de ultra vacío capaz de repro-
ducir de manera controlada los ambientes
de superficies y atmósferas de la mayoría de
planetas y lunas del sistema solar.
°° HPSC (High Pressure Simulation Chamber).
Celda de alta presión para recrear los am-
bientes profundos de los objetos planetarios
provistos de capas acuosas subsuperficiales.
Departamento de Evolución Molecular
La vida es el resultado de la evolución de la ma-
teria y energía en el Universo y en este departa-
mento seis grupos de investigación formados por
químicos, físicos y biólogos tratan de abordar di-
versas preguntas relacionadas con el origen y la
evolución de la vida en nuestro planeta, así como
de desarrollar técnicas que nos permitan identifi-
car vida en otros cuerpos planetarios.
Grupo de química prebiótica
Dedicado al estudio de aspectos críticos previos al
origen de la vida, como el origen de la simetría bio-
lógica, primeros polímeros catalíticos o autoorga-
nización de moléculas en superficies. Esta línea de
investigación se centra en la química prebiótica,
que comprende todos los procesos fisico-químicos
naturales que tienen lugar dentro de un ambiente
Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  59
Nodos de la Física  •  Centro de Astrobiología. 20 años estudiando la vida y el Universo
Expedición a las
salmueras ácidas
de Dallol (Etiopía),
(arriba), y Río Tinto,
en Huelva (abajo).
planetario, desde su formación hasta la emergen-
cia del primer sistema autorreplicativo en el cual
empezaron a operar procesos de selección darwi-
niana. Se intentan encauzar algunas cuestiones
importantes aún no resueltas: i) el origen abiótico
de los precursores químicos de la vida, tales como
los aminoácidos y los azúcares sencillos, y cómo
se combinan para originar oligómeros y polímeros
abióticos con nuevas propiedades (catalizadoras,
metabólicas, etc); ii) cómo se originó la homoqui-
ralidad de los compuestos bio-orgánicos actuales;
iii) cómo moléculas complejas forman asociacio-
nes supramoleculares tales como vesículas, mem-
branas etc., y iv) el autoensamblaje de moléculas
en superficies , empleando el instrumento PASC
mencionado anteriormente.
Grupo de evolución molecular, mundo RNA
y biosensores
Los objetivos científicos de este grupo son los si-
guientes: i) investigación de escenarios prebióticos
heterogéneos y aproximaciones basadas en quí-
mica de sistemas para el origen y evolución tem-
prana de la vida; ii) estudio de la polimerización
de macromoléculas de aparición temprana que
combinan información genética con capacidades
funcionales (incluyendo la polimerización de ribo-
nucleótidos en medios catalíticos) y las relaciones
genotipo/fenotipo en el RNA; iii) estudio del ple-
gamiento tridimensional de moléculas de RNA en
diferentes condiciones iónicas mediante métodos
bioquímicos, microarrays de DNA y microscopía
de fuerza atómica (AFM); iv) optimización de sis-
60  Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019
temas de evolución in vitro de ácidos nucleicos;
selección de aptámeros de RNA y DNA específicos
para biomarcadores de bajo peso molecular, molé-
culas de RNA y proteínas; desarrollo de aptámeros
con aplicaciones en diagnóstico y terapia en el ám-
bito de la virología; v) desarrollo de microarrays
y biosensores basados en nanotecnología que no
requieren marcaje, usando como sondas ácidos
nucleicos naturales o sus análogos artificiales in-
movilizados sobre diferentes superficies.
Grupo de estudios de evolución experimental
con virus y microorganismos
Este grupo se dedica al estudio de la dinámica y
las bases moleculares de la adaptación biológica
mediante la realización de experimentos contro-
lados en el laboratorio con virus y bacterias. Los
objetivos de este grupo son los siguientes: i) es-
tudio de las relaciones entre tasa de error, capa-
cidad adaptativa y extinción de las poblaciones
virales; ii) estudio de las vías evolutivas seguidas
por poblaciones de microorganismos expuestas
a diferentes patrones de cambio en las presiones
selectivas; iii) reconstrucción de paisajes de fitness
a partir de datos reales obtenidos mediante téc-
nicas de secuenciación masiva, y iv) estudio de la
influencia de los agentes ambientales externos en
la estabilidad y la capacidad de evolución de los
replicadores acelulares.
Grupo de mecanismos moleculares de la
adaptación biológica
Centrado en el estudio de las estrategias molecu-
lares y funciones metabólicas de adaptación de los
microorganismos de muestras naturales a condi-
ciones extremas. Para ello se emplean técnicas de
biología molecular y “ómicas” como metagenómi-
ca funcional y metatranscriptómica que permiten
acceder y estudiar todos los microorganismos de
una comunidad, cultivables o no cultivables. Otra
línea de investigación es el estudio de transferen-
cia de material genético en poblaciones bacteria-
nas, mediante DNA extracelular y su relevancia
en adaptación. Este grupo ha identificado nuevos
mecanismos de resistencia a: i) arsénico, níquel y
pH ácido de microorganismos planctónicos y de
rizosfera de plantas del Río Tinto; ii) cloruro só-
dico y radiación en microorganismos de diversos
ambientes hipersalinos (lagos hipersalinos andi-
nos, salinas y rizosfera de plantas halófitas). Otros
objetivos de este grupo son los siguientes: i) bús-
queda de genes de resistencia a frío en microor-
ganismos de rizosfera de plantas antárticas; ii)
construcción de plantas con genes de resistencia a
pH ácido, radiación UV y NaCl; iii) implementación
del método de metagenómica funcional mediante
el desarrollo de vectores y huéspedes hiperhaló-
filos para expresión de genes de ambientes hiper-
salinos, y el empleo de microfluídica para rastrear
las bibliotecas metagenómicas.
 J. Miguel Mas-Hesse, Víctor Parro, Ricardo Amils, Eduardo González-Pastor, Francisco Najarro, Olga Prieto-Ballesteros…  •  Nodos de la Física
Grupo de biodiversidad microbiana
Estudio de los microorganismos y poblaciones mi-
crobianas que habitan ambientes terrestres aná-
logos a regiones extraterrestres potencialmente
habitables. En concreto, este grupo se centra en
el estudio de su biodiversidad, ecología y evolu-
ción. Además investiga cuáles son los límites de la
vida y los mecanismos moleculares y celulares que
permiten la adaptación a los ambientes extremos.
El estudio experimental se basa tanto en el trabajo
de campo para la recogida de muestras y deter-
minación de parámetros ambientales, como en el
trabajo de laboratorio. Los objetivos de este grupo
de investigación son los siguientes: i) descripción
de la ecología microbiana y establecimiento de
modelos que expliquen la ecología y adaptación
al ambiente; ii) identificación de genes/funciones
esenciales en la adaptación, mediante metatrans-
criptómica, metabolómica y metaproteómica; iii)
análisis de los factores fundamentales de estrés
sobre la actividad metabólica de las principales
comunidades microbianas. Estos objetivos se de-
sarrollan en dos líneas de trabajo fundamentales:
i) diversidad, distribución y adaptación de mi-
croorganismos psicrófilos (Antártida, glaciares) y
de acidófilos extremos (estudios de adaptación a
metales tóxicos y a radiación en algas acidófilas de
Río Tinto, y de diversidad microbiana en otros am-
bientes ácidos) y ii) ecología microbiana del aire.
Grupo de biomoléculas en exploración planetaria
Enfocado a entender el potencial metabólico y la
preservación de biomarcadores moleculares en
el espacio y tiempo en ambientes análogos a los
descubiertos en otros cuerpos planetarios. Todo Cámara de simula-
ello con un enfoque transdisciplinar que permita ción de condiciones
marcianas MARTE.
tener una visión integrada sobre la habitabilidad
planetaria. La aproximación experimental se basa
en el estudio del material biológico tanto in situ
(mediante campañas de campo en desiertos sa-
linos, desiertos helados, permafrost ártico y an-
tártico, subsuelo profundo) y en el laboratorio,
su preservación e interacción con el medio físico,
la identificación de biomarcadores moleculares,
y el desarrollo de metodologías e instrumentos
para su detección in situ. Este grupo ha liderado
el diseño del instrumento SOLID (Signs Of LIfe De-
tector) que permite la detección e identificación
de microorganismos y compuestos bioquímicos
mediante el análisis automatizado de muestras
sólidas (suelos, rocas de tierra o hielo) y muestras
líquidas. El corazón de SOLID es un biochip con
más de 300 anticuerpos, llamado LDChip (Chip de-
tector de vida), para detectar un número similar
de compuestos o microorganismos. Actualmente
SOLID tiene un nivel de desarrollo de TRL6 (es-
tándar NASA), y se ha presentado en varias con-
vocatorias de instrumentos para la exploración
de Marte, confiando en que sea aceptado y pueda
entrar en funcionamiento a mediados de la próxi-
ma década.
Departamento de Instrumentación
El Departamento de Instrumentación del CAB
desarrolla toda su actividad de investigación en
el campo las tecnologías de instrumentación es-
pacial para la exploración planetaria y astrofísica.
Estas tareas son el resultado de una relación multi
y transdisciplinar entre los miembros del Departa-
mento de Instrumentación, y el resto de científicos
del centro.
Los aspectos tecnológicos que quedan cubier-
tos por la actividad del departamento van desde la
concepción de prototipos y nuevos conceptos de
instrumentación, hasta el diseño y supervisión de Instrumento Exo-
la industria especializada en la fabricación de los Mars/RLS-2020.
modelos de vuelo. Este amplio rango de desarrollo Exomars 2020 es
pasa en ocasiones por la realización de campañas la primera misión a
Marte liderada por
de ensayos para la validación y maduración de la ESA con un claro
la instrumentación y tecnologías desarrolladas, propósito astrobio-
ya sea en cámaras de simulación o en entornos lógico. Los objetivos
ambientales representativos (los denominados principales son bus-
car señales de vida
análogos terrestres): temperatura, presión, viento,
presente y pasada en
entornos acuosos, o acidez extrema, por mencio- Marte y caracterizar
nar algunos parámetros relevantes. Para ello el de- geoquímicamente el
partamento cuenta con distintas infraestructuras, ambiente potencial-
cámaras de simulación planetaria y tecnologías de mente habitable. El
CAB, junto con el
vacío en el Laboratorio de Simulación de Ambien- INTA, ha liderado
tes Planetarios del CAB, para apoyar científica y el desarrollo del es-
tecnológicamente a los investigadores del grupo. pectrómetro Raman
En el marco de la actividad del departamento, tam- (RLS), que será el
primero de estos ins-
bién se llevan a cabo las labores de operación de trumentos en analizar
los instrumentos y explotación de los datos cien- muestras de fuera de
tíficos recabados por los desarrollos tecnológicos, la Tierra.
Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  61
Nodos de la Física  •  Centro de Astrobiología. 20 años estudiando la vida y el Universo
(Izq). Foto del boom en directa colaboración con el resto del personal
2 y del sensor UV de del centro y unidades asociadas.
REMS tomada por
Tras unos primeros años centrados en el diseño
una de las cámaras
de MSL-Curiosity de prototipos y modelos de campo, desde el año
en un paisaje de 2005 el departamento ha consolidado la experien-
dunas marciano. En cia adquirida en proyectos previos, centrándose
el boom 2 se puede en actividades específicas de desarrollo de instru-
apreciar el sensor de
temperatura del aire,
mentación de vuelo. Para ello se han establecido
el sensor de humedad estrechos lazos de colaboración con otros centros
y el sensor de viento de investigación tanto nacionales como interna-
(NASA/JPL). cionales, así como con la industria aeroespacial
(Dcha). Imagen española. En este sentido cabría destacar el lide-
tomada por el propio razgo del departamento en el desarrollo de esta-
lander de InSight en
ciones medioambientales para la exploración de
Marte en la que se
aprecia uno de los Marte, como REMS, TWINS y MEDA, además de
sensores de TWINS la colaboración en otros instrumentos de vuelo
(protuberancia blan- como RLS-Raman laser Spectrometer de la misión
ca sobre el fondo de EXOMARS de la ESA al planeta rojo con la unidad
los paneles solares)
(NASA/JPL).
asociada UVA-CSIC, o los telescopios de la misión
PLATO y el espectrómetro SAFARI/SPICA con el
Departamento de Astrofísica.
El instrumento REMS (Rover Environmental
Monitoring Station), a bordo del rover Curiosi-
ty de la misión Science Laboratory de NASA, se
encuentra desde agosto de 2012 reconociendo
y caracterizando ambientalmente el entorno del
cráter marciano Gale. REMS recoge continuamen-
te datos de presión, temperatura atmosférica y del
suelo, velocidad y dirección del viento, humedad
atmosférica y radiación ultravioleta incidente.
Durante este tiempo, el instrumento ha tomado
Imagen del instru-
mento SOLID durante
unas pruebas en el
Ártico.
62  Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019
más de 30 millones de lecturas de cada uno de los
sensores. Los investigadores del grupo participan
en el análisis de los datos científicos, contribuyen-
do asimismo a las discusiones y reuniones cien-
tíficas que periódica y frecuentemente reúnen a
todos los miembros nacionales e internacionales
del equipo REMS.
TWINS (Temperature and Wind sensors for
InSight mission) es un instrumento formado por
sensores de dirección y velocidad de viento y
temperatura atmosférica, que forman parte del
lander de la misión de NASA InSight, dedicada a
la caracterización del interior del planeta Marte,
y cuyo lanzamiento tuvo lugar en mayo de 2018,
con una llegada a Marte y comienzo de operaciones
en noviembre del mismo año. TWINS hace uso de
los modelos de repuesto que fueron desarrollados
para el instrumento REMS mediante remodelacio-
nes y ajustes, con el fin de adaptar el instrumento a
las necesidades y limitaciones concretas de InSight.
El papel y retorno científico que el instrumento
TWINS desempeñará en la misión InSight, será de
vital importancia: (i) en una primera fase, partici-
pó en la caracterización del entorno ambiental de
la misión, determinando el momento preciso para
llevar a cabo la crítica actividad del despliegue de
los instrumentos ubicados a bordo, esto es, cuando
los vientos y las condiciones ambientales fueran
calmos; (ii) una vez desplegados los instrumentos,
los datos científicos proporcionados por TWINS
permitirán descartar falsas lecturas sísmicas oca-
sionadas por los vientos fuertes del entorno; (iii)
por último, los datos proporcionados por TWINS
serán de gran valor científico dado el detallado
registro que se llevará a cabo, y complementarán
a aquellos proporcionados por REMS en el cráter
Gale, constituyendo la primera red meteorológica-
ambiental sobre la superficie de Marte.
El instrumento MEDA (Mars Environmental
Dynamics Analyzer) para la misión Mars2020 de
NASA representa la evolución natural de REMS en
términos de prestaciones y de variables meteoro-
lógicas que medir. Su lanzamiento está previsto
para el año 2020 y en la actualidad el grupo inves-
tigador está trabajando en el montaje, la calibra-
ción y la aceptación de los distintos modelos de
vuelo. Su principal objetivo científico es la carac-
terización de los parámetros ambientales locales,
propiedades físicas del polvo, así como el estudio
de las condiciones de habitabilidad para una futura
exploración humana. Para ello, el instrumento ha
sido concebido como un conjunto de sensores que
registrarán: la humedad relativa (Relative Humidi-
ty Sensor–HS), la temperatura del aire (Air Tempe-
rature Sensor–ATS), el balance neto de radiación IR
(Thermal IR Sensor–TIRS), la velocidad y dirección
del viento marciano (Wind Sensors–WS), la radia-
ción y las propiedades de los aerosoles en suspen-
sión (Radiation and Dust Sensor–RDS), y la presión
atmosférica (Pressure Sensor–PS).
 J. Miguel Mas-Hesse, Víctor Parro, Ricardo Amils, Eduardo González-Pastor, Francisco Najarro, Olga Prieto-Ballesteros…  •  Nodos de la Física
Unidad de Cultura Científica
Dado el gran interés social de las cuestiones rela-
cionadas con la Astrobiología, el CAB ha dado una
gran importancia desde su fundación a las acti-
vidades de divulgación, difusión y comunicación,
con el objetivo de:
• Asegurar la transferencia de conocimiento en-
tre diferentes disciplinas, así como con el sector
industrial.
• Formar a una nueva generación de astrobiólogos.
• Fomentar la extensión de la cultura científica
en España y en otros países.
La Unidad de Cultura Científica del CAB (UCC-
CAB), dependiente de la Dirección del Centro,
posibilita la interrelación entre los investiga-
dores y el público en general, de modo que la
Astrobiología sea una ciencia al alcance de la ciu-
dadanía. Los objetivos generales de la UCC-CAB
son potenciar la divulgación de los avances cien-
tíficos en el campo de la Astrobiología, optimizar
las vías de comunicación internas y externas con
las que cuenta el CAB y posibilitar una interac-
ción fluida entre la comunidad investigadora
del CAB y el gran público. El CAB ha trabajado
desde su creación en el fomento de la cultura
científica orientada hacia estos pilares, integran-
do en la UCC-CAB todas las actuaciones y polí-
ticas que tuvieran relación con la difusión del
conocimiento, las relaciones públicas, la comu-
nicación institucional, el trabajo y la imagen del
Centro.
De forma esquemática, las líneas de actuación
de la UCC-CAB son las siguientes, atendiendo a
ámbitos diversos:
Dirigidas a la comunidad científica y universitaria Modelos de vuelo
• Seminarios y coloquios en el Auditorio del CAB. de los sensores
MEDA. De izquierda a
• Escuela Internacional de Astrobiología Josep
derecha, ATS (Atmo-
Comas i Solà en colaboración con la NASA y la sphere Tempera-
UIMP. ture Sensor), TIRS
(Thermal InfraRed
Sensor) y WS2 (Wind
Dirigidas a la comunidad educativa y a la sociedad
Sensor 2).
en general
• Visitas escolares guiadas al CAB.
• Seminarios y conferencias para escolares y para
público en general.
• Realización de talleres y charlas en eventos de
divulgación científica para escolares y para pú-
blico general:
°° Semana de la Ciencia (Comunidad de Madrid)
°° Ferias de la ciencia (toda España).
°° Finde Científico (Comunidad de Madrid).
°° Ciudad Ciencia (toda España).
°° Noche de los investigadores europea (Comu-
nidad de Madrid).
°° Ciencia en el Barrio (Comunidad de Madrid).
°° Expoastronómica (Comunidad de Castilla-La
Mancha).
• Programas educativos:
°° PARTNeR (INTA-NASA), Proyecto Académico
con el Radio Telescopio de NASA en Robledo, de
radioastronomía educativa para estudiantes.
°° Proyecto CESAR, Cooperation through Edu-
cation in Science and Astronomy Research
(INTA-ESA-Isdefe), de enseñanza de la as-
tronomía, ciencias planetarias y exploración
espacial para escolares. Algunas de las acti-
°° Proyecto MeteoMarte, de meteorología de vidades organizadas
Marte en las escuelas. por la UCC del CAB.
Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  63
Nodos de la Física  •  Centro de Astrobiología. 20 años estudiando la vida y el Universo
°° Aplicaciones didácticas del Observatorio
Virtual, de aplicación didáctica de las herra-
mientas de Observatorio Virtual en el aula y
en actividades de ciencia ciudadana.
Dirigidas a los medios de comunicación
• Redacción de notas de prensa.
• Atención a medios.
• Videos serie Astrobiologíaerie Astrobiología (CE-
MAV-UNED TV).
Otras áreas de actuación
• Documentación y biblioteca.
• Coordinación editorial:
°° Edición de Zoé, Revista de Astrobiología.
°° Soporte técnico y de difusión de eventos di-
vulgativos e institucionales.
• Redes sociales:
°° Sitio Web del CAB.
°° Blogs divulgativos.
°° Facebook, Twitter e Instagram.
°° Canal de YouTube del CAB.
• Asistencia a congresos sobre comunicación so-
cial, enseñanza y divulgación de la ciencia.
El CAB alberga asimismo la oficina de coordi-
nación española de la Red de Difusión del Obser-
64  Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019
vatorio Austral Europeo (ESON). La UCC del CAB
pertenece a la Red de Unidades de Cultura Científi-
ca y de la Innovación (Red UCC+i) de la Fundación
Española para la Ciencia y la Tecnología (FECyT).
Epílogo
En los últimos 20 años los investigadores del CAB han
publicado más de 2.500 artículos en revistas inter-
nacionales, la mayoría (> 80 %) en el primer cuartil
de impacto. Durante este tiempo han viajado a los
lugares más extremos de nuestro planeta, estudiando
cómo la vida ha sido capaz de adaptarse a cualquier
entorno, han desarrollado y continúan desarrollando
diversos instrumentos espaciales (INTEGRAL/OMC,
Bepi Colombo/MIXS, ExoMars2020/RLS, JWST/
MIRI+NIRSPEC, PLATO, SPICA/Safari), operan dos
estaciones ambientales en Marte (MSL/REMS e
InSight/TWINS) y acaban de entregar una tercera
(Mars2020/MEDA), simulan en sus laboratorios
las condiciones de cualquier entorno extraterrestre
y estudian los procesos que dieron lugar a la vida.
Estamos convencidos de que en la próxima década
podremos encontrar vida en Marte, si es que existe,
mediante el instrumento SOLID. Pero aún estamos
lejos de comprender el origen de la vida. El camino
será largo, pero la meta está cada vez más próxima.
Hemos leído que…
Registro rápido e informal de noticias que, llegadas a nuestro
consejo de redacción, hacen pensar o actuar a un/a físico/a1
Sección coordinada por Elena Pinilla Cienfuegos

““
Las extensas aplicaciones de los mate- do en el CERN ya tiene pro-

lustración por gentileza de Alberto García

riales bidimensionales análogos al gra- yectado su sucesor, el Futuro
feno no paran de crecer, y el disulfuro Colisionador Circular (FCC,
de molibdeno (MoS2), un material con por sus siglas en inglés),
tan solo tres átomos de grosor, es uno constituido por un anillo

Gómez (albertogg.com).
de estos materiales estrella. Reciente- de 100 kilómetros (frente a
mente, el grupo de investigación lide- los 27 Km del LHC) bajo la
rado por el Prof. Tomás Palacios (del frontera franco-suiza, para

““
Instituto Tecnológico de Massachu- un acelerador superconduc-
setts, MIT) en colaboración con inves- tor de protones, mucho más
tigadores de la Universidad Politécnica grande que el actual LHC y
de Madrid y la Universidad Carlos III, con una energía de hasta 100 TeV (un Circulan por internet unos vídeos cu-
han desarrollado un nuevo disposi- orden de magnitud más potente que el riosos de cómo se genera plasma entre
tivo que convierte en dos uvas cuando se calientan
electricidad la señal de juntas en un horno microon-
wifi. El dispositivo se das y es que, por fin, físicos
compone de una ante- canadienses han dado ex-
na rectificadora o “rec- plicación a la formación de
tena” que convierte la estas chispas que pueden
señal alterna que llega darse por ejemplo también,
de la wifi en corriente entre dos bolas de hidro-
continua. La incorpo- gel situadas suficientemente
ración del MoS2 al dis- cerca (unos 3 mm). Usando
positivo es crucial para cámaras térmicas y simula-
el funcionamiento del ciones por ordenador, han
diodo, pues es lo su- descubierto que se producen
ficientemente rápido resonancias electromagnéti-
como para rectificar las cas entre las uvas (o bolas de
señales en la banda de hidrogel) y surge un punto
altas frecuencias típi- Imagen: Esquema del Futuro Colisionador Circular. / CERN caliente entre las dos. Este
cas de la radiación wifi
(el material permite rectificar hasta los LHC). Todo ello se recoge
10 GHz). Aunque la potencia de la señal en un informe de diseño
wifi que se recoge con estas rectenas es conceptual que, según
baja, sí que sería suficiente para alimen- la Directora General del
tar sensores que en un futuro próximo CERN, Fabiola Gianot-
tendremos integrado en nuestra ropa, ti, “muestra el enorme
en los edificios, o incluso en nuestro potencial del FCC para

““
propio cuerpo. https://bit.ly/2FWtJXX mejorar nuestro cono-
cimiento de la física
fundamental y para con-
La era post-LHC ya ha llegado. El Gran seguir avances en muchas
Colisionador de Hadrones (LHC) ubica- tecnologías que tienen un
amplio impacto en la so- Imagen: Vídeo editado para artículo publicado en PNAS 116 (10) 4000-
ciedad”. Este elaborado 4005, 5 de marzo de 2019. Autores: Hamza K. Khattak et al..
1
  Animamos a que los lectores nos hagan llegar estudio es fruto de una
noticias documentadas que la redacción pueda
gran colaboración científica en la que punto tiene suficiente energía como
considerar y editar para esta sección. En el twitter
participan 150 universidades, institutos para ionizar el sodio y el potasio de la
de la RSEF, @RSEF_ESP, se puede seguir a diario
una extensión virtual de la sección, por medio de de investigación y socios industriales piel de las uvas, y la sobrecarga de estos
tuits con el hashtag #RSEF_HLQ. Animamos a con el apoyo de la Comisión Europea electrolitos produce la explosión del
los lectores usar el hashtag y tuitear sus propios a través del programa Horizonte 2020. plasma. Más allá de la curiosidad de ver
“Hemos leído que”! https://bit.ly/2R9FThC chispear unas uvas, la explicación de

Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  65

Hemos leído que…

este fenómeno podría tener apenas un kilómetro y per-

aplicaciones futuras, por manecer operativo durante
ejemplo en nanofotónica 90 días. Entre sus logros
para el diseño de nuevas an- está confirmar que en el pa-
tenas omnidireccionales de sado Marte estuvo cubierto
microondas. Aunque pue- de agua y que pudo ser ha-
da parecer divertido, ¡este bitable, o ser el primero en
arriesgado experimento ha descubrir un meteorito fue-
dañado más de un microon- ra de la Tierra. Finalmente
das! Así que, nota mental: la NASA ha dado por com-
¡No hacer en casa! https:// pletada la misión del Rover

““
bit.ly/2Hfgamu de Exploración de Marte
(MER) Opportunity tras no
obtener ningún contacto
Muchas alegrías nos dio el desde el pasado 10 de junio,
fantástico Rover Oppor- al parecer después de que
tunity tras 15 años explo- una intensa tormenta de
rando Marte. Desde que Imagen: Representación artística de un Mars Exploration Rover (NASA/JPL/ polvo hubiera inutilizado
Cornell University).
aterrizó en el “planeta rojo” sus paneles solares. Otras
el 24 de enero de 2004, este misiones, como la Curiosity
gran robot de 185  kilogramos y valo- recorrida (más de 45 km), y de días de o la Insight, son las encargadas ahora
rado en 400 millones de dólares ha funcionamiento ¡5.111 días marcianos!, de explorar y estudiar la superficie de
batido todos los récords de distancia cuando fue proyectado para recorrer Marte. https://bit.ly/2EFRWyV

Esperamos tus trabajos

para la Revista Española de Física en:
revistadefisica.es

Created by Liravega - Freepik.com

Las contribuciones, que han de tener un tono divulgativo, pueden tener cabida en
alguna de nuestras secciones, aunque destacamos: “Temas de Física” para contenidos
relacionados con investigación y “Notas de Clase” para trabajos de enseñanza.

Los trabajos publicados pueden optar a los Premios de Física RSEF-Fundación BBVA.

66  Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019

Reseñas de libros de interés
Diez siglos de ciencia y científicos
toledanos
Enrique García Gómez
Covarrubias Ediciones, 2018, 236 págs.
Es frecuente que los eruditos locales reco-
pilen y escriban sobre la historia y los per-
sonajes de su localidad, lo cual es siempre
encomiable y es una forma de que salgan
a la luz datos biográficos enterrados y
olvidados. También despierta en los ha-
bitantes el amor a su terruño. Este libro
es de esta naturaleza, pero su interés es
especial porque especial es la ciudad de
Toledo, donde han transcurrido tantos
hechos trascendentes en la historia de la
humanidad, donde tan grandes científi-
cos han proliferado en todas sus épocas.
Toledo y su entorno es especial, por lo
que el libro tiene un ámbito mayor que
el rural, siendo de interés para todos los
amantes de la historia de la ciencia.
Tiene un elegante prólogo de César
Nombela (Carriches, Toledo, 1946),
quien también está en la lista de los cien-
tíficos toledanos referenciados. Es uno
de los dos científicos vivos de la lista de
García Gómez. Es el famoso microbió-
logo, discípulo de Severo Ochoa, inves-
tigador y organizador de esta disciplina
y otras afines, presidente del Consejo
Superior de Investigaciones científicas,
creador y primer director del Centro de
Secuenciación Automatizada del ADN,
Rector de la Universidad Internacional
Menéndez Pelayo, creador de varias
instituciones de prestigio internacional,
con una larga lista de distinciones.
Pero como esta reseña se escribe
para una revista de Física, destaquemos
aquí a aquellos físicos ilustres toledanos
o que desarrollaron su labor en Toledo.
En ese sentido hay que destacar la as-
tronomía, o en su versión moderna la
astrofísica, ciencia en la que Toledo ha
contribuido de forma muy singular a su
desarrollo. En este sentido, el libro em-
pieza por Azarquiel y acaba con Francis-
co Sánchez Martínez, el otro científico
vivo de la lista de García Gómez. Pero
antes de centrarnos en los físicos, haga-
mos unas pocas excepciones.
El primero de la lista por orden cro-
nológico es Ibn Wafid, botánico y agró-
nomo del siglo xi, creador del Jardín de
la Huerta del Rey, donde se ubicó el pa-
lacio de Galiana y donde han ocurrido
tantas hechos históricos y científicos.
Continuó su labor Ibn Bassal. Además
de estos dos personajes, no podemos
dejar de comentar la labor del agricul-
tor Gabriel Alonso de Herrera y del bo-
tánico Francisco Hernández.
Alonso de Herrera (Talavera de la
Reina, ¿1470?-¿1540?) escribió un libro
de Agricultura General (1513), por en-
cargo del Cardenal Cisneros, que vio su
primera edición en Alcalá de Henares.
Se reeditó 36 veces, se tradujo al italiano
y al francés ya en el siglo xvi y estuvo en
vigor hasta nuestra guerra civil. Se trata
de un compendio práctico escrito para
agricultores. Su pervivencia muestra el
interés y la trascendencia de este libro.
Al final del estudio de García Gómez se
incluyen varias portadas de sucesivas
reediciones de Agricultura General.
La obra de Francisco Hernández (La
Puebla de Montalbán, ¿1517?-Madrid,
1587) es extraordinaria, es la obra cum-
bre de la botánica del Renacimiento es-
pañol, muy desconocida excepto para
los historiadores de la ciencia. Ejerció la
medicina en varios lugares de entre los
que hay que destacar el Monasterio de
Guadalupe, pues tenía ocho hospitales
y un gran renombre internacional. Fue
discípulo y amigo de Nicolás Monardes.
Su gran obra es la Historia de las plan-
tas de Nueva España. Felipe II tenía un
gran interés en las plantas americanas
y filipinas, no sólo por su valor estético,
sino por su potencial curativo, confian-
do para ello en los médicos indios a los
que reconocía su experiencia. Decidió
enviar un barco para este estudio ex-
haustivo, además de otros objetivos de
carácter cosmográfico. Fue esta la pri-
mera expedición científica de la historia.
Para la parte botánica y farmacológica
de la expedición confió en Francisco Her-
nández. No sólo quería un estudio per-
fectamente completo, sino que también
Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  67
que trajera algunos ejemplares y semi-
llas para ser plantados en los jardines de
Aranjuez, con fines terapéuticos. Francis-
co Hernández cumplió con su objetivo.
Describió 3.000 especies de plantas, 500
animales y hasta minerales desconocidos
en España. Iban en la expedición pintores
y el libro de Francisco Hernández incluía
2.073 dibujos de plantas primorosamente
coloreados. El Rey le reprochó que tarda-
ra demasiado tiempo en su estudio, unos
siete años. Como buen ejemplo del bené-
fico poblamiento español en América, el
libro fue escrito no sólo en castellano y en
latín, sino también en náhuatl.
Al final, este libro, esta gran joya de
la ciencia española del Renacimiento, se
perdió, en gran parte, en el incendio de
El Escorial de 1671. Sólo sobrevivieron
algunas páginas y algunas malas copias
posteriores. Felipe II no acertó al enco-
mendar la valoración de tan perfecto
estudio, digno de un gran naturalista, a
personas de mucha menor inteligencia.
Al final del libro se reproducen algunos
de los dibujos de plantas y animales de
Francisco Hernández.
Azarquiel (Toledo, 1029-Córdoba, 1100)
es tenido por muchos estudiosos como
el más grande astrónomo español. En el
libro se consideran sus grandes obras, su
perfección a la hora de diseñar y construir
astrolabios y otros instrumentos astronó-
micos, especialmente la “azafea”, invento
suyo, un astrolabio válido para cualquier
latitud. Famosas fueron sus clepsidras,
piscinas cuyo nivel quedaba fijo según
las fases de la luna, restableciéndose con
precisión si alguien extraía o añadía agua
de ellas. Hay un gran descubrimiento de
Azarquiel, reconocido por Alfonso X, y es
la descripción de la órbita de Mercurio
como “pepinada”, la primera vez que se
habló de la trayectoria oval de un planeta.
El autor conoce bien la contribución
de Alfonso X a la astronomía, su activi-
dad inaudita al frente de la Escuela de
Traductores de Toledo y las grandes tra-
ducciones que promovió, sin las cuáles
la ciencia europea se hubiera retrasado
o —quién sabe— ni siquiera habría re-
nacido. Sin embargo, no figura en la lista
de los sabios referenciados por el autor.
Hubiera sido oportuno ya que la figura
de Alfonso X no está ausente en ningún
libro de historia de la ciencia por sucinta
que sea y porque logró la época sublime
de la ciencia toledana. Además podría
haber ampliado en su capítulo la lista de
Reseñas de libros de interés
ilustres traductores de quienes supo ro-
dearse, limitada a Yehuda ben Moshe en
el libro. De todas formas, la importancia
de Alfonso X está bien reconocida en la
introducción de este libro, de forma que
no se puede considerar una omisión.
Magnífica fue la figura de Juanelo
Turriano (Cremona, Italia, 1500-Tole-
do, 1585), el relojero italiano de Carlos I
y de Felipe II, autor de un mecanismo
que subía agua del Tajo hasta la ciudad
de Toledo salvando un desnivel de unas
100 varas, mediante enormes cazoletas
móviles y que parecía un gigante bai-
lando o pisando uvas y que causaban
más admiración a los visitantes de Tole-
do que la propia hermosísima catedral.
Fabricó miles de autómatas y relojes,
algunos de los cuales traspasaron la
frontera de la leyenda. El llamado Reloj
Grande de Juanelo tenía 1.500 piezas y
reproducía mecánicamente la posición
de las planetas, el Sol, la Luna y propor-
cionaba otros datos de interés astronó-
mico y festivo. Murió pobremente.
Hay otros astrónomos en la lista de
García Gómez, como Isaac Israeli ben
Joseph o Eulogio Jiménez Sánchez,
amén de médicos, inventores, natura-
listas, etc. Si nos limitamos a la Física
del Cosmos en un sentido amplio, es
preciso recordar los nombres de Ma-
riano Medina, el inefable hombre del
tiempo, del geofísico Gonzalo Payo y
del astrofísico Francisco Sánchez.
Muchos podemos recordar cuando
el pronóstico meteorológico de TVE se
encomendaba a Mariano Medina (Peña
Aguilera, Toledo, 1922-Madrid, 1994)
que dibujaba las isobaras del mapa del
Microelectrónica. La historia de la ma-
yor revolución silenciosa del siglo xx
Ignacio Mártil de la Plaza
Ediciones Complutense, 2018, 176 págs.
68  Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019
tiempo con tiza en una pizarrita y sus
predicciones se basaban en muy escasos
datos y ni mucho menos de la calidad de
los de ahora, claro. Sin embargo sus pre-
dicciones tenían una gran probabilidad
de acierto y, como buen divulgador que
era, nos enseñaba a interpretar el mapa
de isobaras. En el libro se cuenta una
graciosa anécdota: la cámara de TV sólo
sacaba a Mariano Medina de cintura para
arriba; en cierta ocasión, sus amigotes le
bajaron los pantalones en plena presen-
tación, pero él mantuvo la compostura y
ningún espectador notó nada especial en
la pantalla de su televisor.
Gonzalo Payo (Toledo, 1931-Toledo,
2002) fue el director del Observatorio
Geofísico de Toledo y Presidente de la
Comunidad de Castilla-La Mancha. Fue
también diputado en las Cortes Generales
y Presidente de la Diputación de Toledo,
Además de su trabajo sobre sismología y
geomagnetismo, escribió poesía y novelas.
Sobre Francisco Sánchez Martínez
(Toledo, 1936), el Centro de la Cultura
Popular Canaria y el Gobierno de Cana-
rias han editado recientemente su bio-
grafía. Su autor, José Benjamín Navarro
García, ha realizado un buen trabajo,
fruto de largas conversaciones con él.
Partiendo de la nada, al jubilarse, deja
Francisco Sánchez como fruto de su
esfuerzo, su tesón, su don de gentes, su
inteligencia y con lo que él mismo llama
su “optimismo patológico”, el Instituto
de Astrofísica de Canarias (IAC), uno de
los mayores centros de investigación del
Cosmos del mundo, y el Observatorio
Norte Europeo, ENO, con gran canti-
dad de telescopios instalados en el Teide
Ignacio Mártil es Catedrático de Elec-
trónica en la Universidad Complutense
de Madrid. Su investigación se centra
en el estudio de las propiedades eléc-
tricas y ópticas de materiales semicon-
ductores, así como de los dispositivos
electrónicos basados en ellos.
En el libro Microelectrónica. La histo-
ria de la mayor revolución silenciosa del
siglo xx confluyen dos características
de la personalidad del profesor Mártil:
su pasión por el estudio y la investiga-
ción así como su afán por transmitir.
De esta manera la lectura de su libro
es una gran ocasión para entender el
desarrollo de la Electrónica desde los
primeros principios físicos hasta el de-
sarrollo de lo que ha dado lugar a lla-
(OT) o en La Palma (Roque de los mu-
chachos, ORM), gracias a multitud de
convenios internacionales que han dina-
mizado a los astrofísicos del IAC y a los
de toda España. Todo esto fue logrado
a pesar de un ambiente frecuentemente
hostil de la política científica española.
El ORM tiene entre otros grandes
telescopios el GTC, el Gran Telescopio
Canario que con sus 10,6 m de diámetro
efectivo es el mayor del mundo en longi-
tud de onda visible e infrarroja. Esta es la
gran obra de Francisco Sánchez. El diseño
y gran parte de su fabricación es española
y su planificación y explotación científi-
ca cuenta con las contribuciones de la
Universidad de Florida (5 %) y de México
(5 %). Cuenta además con extraordinarios
instrumentos posfoco. Con todo ello, y
con la valía de sus investigadores e in-
genieros, el IAC y el GTC se sitúan a la
cabeza mundial de la astrofísica.
Es estimulante ver juntos en este
libro el nombre de Francisco Sánchez
junto a otros dos toledanos de la talla
histórica de Azarquiel y Alfonso X el
Sabio. Podría parecer que con el gran
salto temporal entre estos astrónomos,
no debiera existir una conexión real
entre ellos; sin embargo, alguna sutil
conexión sí debe existir: todos ellos vi-
vieron en Toledo.
En definitiva, este libro es cierta-
mente recomendable, no sólo para to-
ledanos orgullosos de su pasado y su
presente, sino para comprender mejor
nuestra física y nuestra historia.
Eduardo Battaner López
Universidad de Granada
marse las tecnologías de la información
y las comunicaciones. Todo ello con un
hilo conductor histórico, en el que se
destacan los aspectos más importantes
de la vida y de los descubrimientos de
los científicos que han construido esta
historia.
Este libro cubre un vacío importante
ya que, tradicionalmente, estos temas
de investigación y desarrollo parecían
restringidos a los expertos. El profesor
Mártil hace el esfuerzo de acercar los
conocimientos más punteros al gran
público, apartando miedos y recelos, y
aproximando a los lectores al tema a tra-
vés del disfrute de un aprendizaje senci-
llo y natural, y no por ello falto de rigor
científico y de respeto por la materia.

En este libro se analiza qué son los
semiconductores, cuál ha sido la histo-
ria de los dispositivos que han conduci-
do al desarrollo de la Microelectrónica y
cómo ésta ha cambiado nuestras vidas
y marcado la evolución de nuestra so-
ciedad científico-tecnológica. El profe-
sor Mártil explica en su libro cómo la
historia de la Física de los semiconduc-
tores es más la historia de tareas per-
severantes y tenaces que la de grandes
ideas geniales, el reflejo de una era de
organización y trabajo colaborativo
en lugar de protagonismos singulares
e individualidad. Así se describen las
aportaciones colectivas y los logros de
grupos de científicos (físicos, químicos,
ingenieros y tecnólogos) dentro de ins-
tituciones públicas y privadas que han
El año en que salvé a Einstein
José de la Peña Aznar
Editorial Caligrama, 2018, 302 págs.
Cuando la RSEF me propuso comen-
tar la novela de José de la Peña Aznar,
acepté por varios motivos. Un título lla-
mativo, una cubierta impresionante, los
Congresos Solvay en Bruselas (ciudad
donde desarrollé gran parte de mi inves-
tigación posdoctoral en la ULB) y el café
Metropole (que siempre frecuentaba en
mis estancias en el Departamento de
Chimie-Physique II en el Campus Plai-
ne). Y, claro está, los fundamentos de la
física cuántica, que hoy aceptamos con
normalidad y que, en aquel momento,
fueron uno de los grandes avances en la
historia de la física. Una vez finalizada
su lectura, reconozco que lo que más me
ha impresionado es el relato que hace el
autor de la Primera Guerra, de los efec-
tos psicológicos sufridos por los conten-
dientes en aquel desastre, y del veneno
de los nacionalismos que condujeron a
sido motor de la Microelectrónica. El
ejemplo más característico en este sen-
tido nos lo relata el profesor Mártil al
describirnos los acontecimientos que
dieron lugar al nacimiento del transis-
tor en los Laboratorios Bell (centro de
investigación de la conocida empresa
ATT, gigante de las telecomunicaciones
de EE. UU.), en las navidades de 1947.
Las explicaciones que ofrece el libro
sobre procesos físicos y sobre el funcio-
namiento de los sistemas electrónicos
objeto de estudio se realizan con la ayu-
da de numerosas figuras, tablas y esque-
mas. Las descripciones se entremezclan
con abundantes anécdotas y referencias
históricas, lo que enriquece y hace muy
amena la lectura. No debe pensar el lec-
tor experto en la materia que el texto
la Segunda Guerra y que hoy de nuevo
amenazan a Europa.
El primer capítulo sobre la Batalla de
Passchendaele es impresionante y funda-
mental en el desarrollo de la novela. Es
una versión escrita con todo realismo de
las imágenes que habremos visto en di-
ferentes documentales. Se complementa
con posterioridad en otros capítulos don-
de el autor hace unas reflexiones profun-
das de la “monstruosidad de la guerra”.
En el siguiente capítulo el inspector
Jan Van Hoff recibe, años después de ter-
minada la Primera Guerra, el encargo de
proteger a los participantes en el Congre-
so Solvay de 1927. Son los veintinueve
científicos que aparecen en la fotografía
de la cubierta. Allí, los físicos distingui-
mos con claridad a Einstein, Marie Curie,
Lorentz, Planck, Born, Schrodinger, Ehr-
enfest, Pauli, Heisenberg… Para el lector
no entendido en física, es posible que de
todos los científicos solo reconozca a los
dos primeros y le resulte difícil y confuso
recordar tal cantidad de nombres. Esto,
evidentemente, no es una objeción a la
novela.
Los capítulos III y IV tratan de los
congresos Solvay, de la elección de sus
participantes, su diferente composición
y de la discontinuidad de los mismos.
La Primera Guerra fue responsable de
su interrupción e influyó posteriormen-
te en la participación de los científicos
alemanes y austriacos; esto es: la casi
totalidad de las figuras más relevantes
de la mecánica cuántica. Hacia ellos es
donde el inspector Van Hoff debe cen-
trar su preocupación por las posibles
Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  69
Reseñas de libros de interés
le va a resultar excesivamente sencillo
tanto en contenido como en explica-
ciones. El planteamiento que realiza el
autor no trivializa en conceptos que son
intrínsecamente complejos, sino que los
desarrolla con un lenguaje accesible y
comprensible para cualquier persona
interesada. Aporta por tanto una nueva
visión, con frescura e ingenio, de esta
disciplina, y el libro resultará de gran
ayuda también para la formación de los
estudiantes interesados por esta materia.
Quienes se acerquen a este libro y conoz-
can la trayectoria divulgativa del profesor
Mártil reconocerán su lenguaje didáctico
y su entusiasmo por la Microelectrónica.
María Luisa Lucía Mulas
Universidad Complutense de Madrid
amenazas que pudieran recibir, y sobre
ello se centra el capítulo V.
En el capítulo VI el autor vuelve a 1917
y a la batalla de Passchendaele. La narra-
tiva es sobrecogedora. Se decía de aquella
guerra que para salvar la vida los hombres
tenían que enterrarse vivos. Como ya he
expresado anteriormente, es lo que más
me ha impresionado de la novela.
La aparición del profesor Ehrenfest
y su relación con el inspector van Hoff,
permiten al lector disfrutar de un capí-
tulo VII algo relajante. Su paseo desde
la Gare du Nord hasta el hotel Metro-
pole en la Place Brouckère a través del
Boulevard Adolphe Max, nos muestra
un poco la vida de Bruselas. La historia
del burgomaestre de Bruselas es muy
interesante y me ha resultado comple-
tamente desconocida.
El armisticio no es el fin de la guerra.
Después llegan la desolación, las secue-
las, las epidemias y las muertes. Todo
ello queda de nuevo muy bien reflejado
en el capítulo VIII, cuya frase final es
concluyente: “El día después de la gue-
rra estaba siendo más duro de lo que
pensábamos”.
Vuelve a aparecer el profesor Ehren-
fest en el siguiente capítulo para explicar
al inspector Van Hoff unas nociones de
la teoría general de la relatividad. Aquí la
novela es poco verosímil porque la for-
mación que se le supone a un inspector
en aquellos años no parece suficiente
como para mantener tal conversación.
Me ha parecido muy divertida la parte
dedicada a la física teórica y experimen-
tal, y al “efecto Pauli”, que no conocía.
Reseñas de libros de interés
«¿Cómo es de peligrosa Bélgica?» es
un análisis de la complejidad del país que
un siglo después sigue siendo un enigma
para muchos de los que hemos vivido allí.
Todo ello se trata en el capítulo X.
En el capítulo XI el profesor Ehrenfest
explica la mecánica cuántica al inspector.
El razonamiento que he hecho sobre la
teoría general de la relatividad es de nuevo
aplicable. Estas materias son en la actuali-
dad parte del Grado y del Máster en física,
lo que demuestra la preparación que es ne-
cesaria para comprender estas asignaturas.
El capítulo XII titulado «El Concilio»
me parece poco convincente. Buscar un
paralelismo entre la religión (el concilio
Descubriendo la luz. Experimentos
divertidos de óptica
María Viñas Peña (coord.)
Colección Divulgación. Editorial Catara-
ta. CSIC, Madrid, 2018. 262 págs.
La divulgación científica en España es
hoy en día un tema relevante y su nece-
sidad sigue vigente después de muchos
años en los que se han producido gran-
des avances. Muchos temas científicos
de actualidad se pueden encontrar en
los grandes medios de comunicación. Es,
sin embargo, menos común encontrar
publicaciones sobre experimentación en
física orientados al gran público. Por ello,
es una buena noticia la reciente aparición
del libro Descubriendo la luz. Experimentos
divertidos de óptica, en la Colección Divul-
gación de la editorial Catarata, del CSIC.
Este interesante libro está coordinado
por María Viñas Peña, investigadora del
CSIC y cuenta con trece coautores más,
todos ellos, igualmente, jóvenes investi-
gadores del CSIC y con gran experiencia
en actividades de divulgación de la ópti-
ca experimental orientada a alumnos de
Enseñanza Secundaria (EOS y Bachillera-
70  Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019
de Nicea) y la ciencia (en este caso el
Consejo Solvay) es atrevido. Si Cristo tie-
ne dos naturalezas (hombre y dios) como
la luz (onda y corpúsculo) es irrelevante.
Basta pensar en un físico no creyente.
Hans Gross es el hombre que inten-
tará atentar contra Einstein. Las ano-
taciones del diario de Hans empiezan
a aparecer en el capítulo XIII en letra
cursiva. El autor a lo largo de la nove-
la mezcla con ingenio la realidad y las
anotaciones.
En la cena de las confidencias (capí-
tulo XIV), Paul y Jan (Ehrenfest y van
Hoff, que han decidido tutearse) hablan
de sus problemas más íntimos. Es un
to). El libro, con un diseño muy cuidado,
consta de seis capítulos, una revisión de
los experimentos y un glosario de térmi-
nos. El primer capítulo, introductorio, in-
tenta responder a la pregunta ¿qué es la
luz? Realiza un viaje histórico desde la An-
tigua Grecia pasando por las contribucio-
nes de Isaac Newton, Christian Huygens,
Max Planck y mencionando a los grandes
científicos del siglo xx que contribuyeron
a la formulación de la teoría cuántica de la
radiación. Se introducen los importantes
y necesarios conceptos de la reflexión, la
refracción, la dispersión y la polarización
de la luz, explicados de forma sencilla y
eficaz, ayudando a su comprensión con
profusión de ilustraciones de calidad.
Al final del capítulo, al igual que se ha
realizado en todos los siguientes de este
libro, se proponen sencillos experimen-
tos para comprender conceptos como el
del índice de refracción, ayudándose de
bolas de hidrogel que, una vez inmersas
en agua, no son visibles dentro del reci-
piente transparente que las contiene, así
como otros experimentos relacionados,
por ejemplo, con la polarización de la
luz (una sencilla demostración con gafas
polaroid). El segundo capítulo trata de
fuentes y detectores de luz introduciendo
el fundamento del espectroscopio como
base inicial y terminando con temas de
actualidad como las fuentes láser, LEDs,
para terminar con el fundamento de los
sensores ópticos y la visión artificial. Se
proponen como experimentos, por ejem-
plo, la construcción de un espectroscopio
o de una bombilla por medio de sencillos
montajes. El tercer capítulo trata sobre
los instrumentos ópticos, con concep-
tos muy básicos de los sistemas ópticos
y elementos reflectores y refractores. Se
capítulo conmovedor donde los proble-
mas familiares y psicológicos de ambos
se ven amplificados por la guerra.
Del capítulo XV hasta el final, la no-
vela se centra en las reuniones del Con-
greso, el atentado y el viaje a París. En
ellos quiero destacar lo que el inspec-
tor Jan reconoce como ineficiencia de
la policía belga. Esto, sigue pareciendo
una constante un siglo después.
En resumen, la novela de José de la
Peña Aznar me parece ingeniosa. Mezcla
el humor y la tragedia y se lee con facilidad.
Carlos Fernández Tejero
Universidad Complutense
proponen experimentos de gran impac-
to visual como la pirámide pseudoholo-
gráfica o la cámara oscura. En el cuarto
capítulo se introduce una descripción del
ojo humano con ilustraciones muy bien
elegidas, adentrándose en la anatomía
de los ojos de animales diversos como,
por ejemplo, el caso del pulpo cuyo ojo
es muy similar al humano. Se proponen
igualmente experimentos muy llamativos
que incluyen la percepción de los colores
y las ilusiones ópticas. El quinto capítulo
introduce fenómenos luminosos, muy es-
pectaculares, observados en la naturaleza,
como la bioluminiscencia, y en la obser-
vación astronómica como los eclipses.
En el sexto y último capítulo se hace una
descripción de las tecnologías basadas en
la luz, muy bien seleccionadas, un domi-
nio de gran actualidad cuyo tratamiento
divulgativo se hace, además, muy necesa-
rio para que el gran público, que incluye
a los jóvenes, tengan una idea fidedigna
del enorme alcance que tienen estas téc-
nicas en nuestros días y que han revolu-
cionado nuestra forma de vida y nuestra
cotidianidad. Entre ellas, como ejemplo
evidente, la tecnología de las comunica-
ciones. Es difícil dar una idea detallada
en esta reseña sobre la profusión de es-
tupendas ilustraciones, experimentos al
alcance de todas las edades, que cubren
el enorme abanico desde la naturaleza de
la luz hasta las últimas tecnologías ópticas
y fotónicas. Por ello, no podemos sino re-
comendar la lectura de este libro a todos
aquellos, enseñantes y grandes curiosos,
que se interesan por la ciencia. Un libro
éste con un previsible éxito editorial.
María Luisa Calvo Padilla
Universidad Complutense de Madrid
In memoriam
Chus Martín
E
l 7 de enero falleció el catedráti-
co de física teórica Jesús Martín,
Chus para todos nosotros, a los
74 años. Con una personalidad
arrolladora, magnética, insólita, ha de-
jado honda huella en todos los que lo
conocimos, y un terrible vacío imposi-
ble de compensar. Era cercano y ama-
ble, inteligente e interesante, además
de divertido y muy generoso.
Nacido en La Matilla (Segovia), se li-
cenció en Físicas por la Complutense en
1966. Con una beca francesa realizó un
tercer ciclo dirigido por A. Lichnerowicz,
allí conoció a su director de tesis L. Bel
con quien acabó el doctorado en la recién
creada Autónoma de Madrid en 1972 y,
esquivando la irrespirable situación de la
época, regresó a París. Volvió como agre-
gado en la Universidad del País Vasco
(1978-80).
En 1980 arribó como catedrático de
física matemática a Salamanca, don-
de permaneció hasta su jubilación en
2013. La impronta que dejó por doquier
es quizás superlativa allí, donde fue De-
cano de la Facultad de Ciencias, presi-
dente de la sección local de la RSEF,
dirigió un grupo de investigación en
Gravitación, impartió la lección inau-
gural del curso 1999-2000, y ejerció una
labor docente alabada especialmente
por los estudiantes.
Chus estaba excepcionalmente do-
tado para la docencia. Fue coautor de
libros de texto de Física para secunda-
ria y primer año universitario. Es difícil
hacer justicia a sus clases, estructura-
das, claras a la par que amenas. Solía
adornar sus enseñanzas con historietas
originales y divertidas. Embrujaba y en-
candilaba a sus alumnos de tal forma
que en poco tiempo quedaban pren-
dados de la física. Fue el maestro por
excelencia.
Su obra científica es extensa. Baste
citar algunas de sus contribuciones des-
tacadas:
• un teorema de no existencia de la-
grangianos relativistas a orden supe-
rior a 1/c2.
• un esquema pionero de aproxima-
ción postminkowskiano que resolvía
el movimiento relativista de par-
tículas en interacción gravitatoria
coherentemente con las ecuaciones
de Einstein. La extensión de este es-
quema condujo al modelo teórico
para analizar los datos observacio-
nales del púlsar B1913+16, primera
prueba indirecta de la existencia de
ondas gravitatorias.
• múltiples aportaciones a las solu-
ciones exactas y aproximadas de las
ecuaciones de Einstein con simetría
axial y sus desarrollos multipolares.
Principalmente, destilaba entusias-
mo por la ciencia y creó escuela: su
árbol “genealógico” de discípulos re-
presenta hoy una parte sustancial de
la comunidad relativista española. Fue
un promotor significado de la Sociedad
Española de Gravitación y Relatividad
(SEGRE) y de los Encuentros Relati-
vistas Españoles (ERE), reunión anual
que comenzó a finales de los 70 en un
ambiente distendido para evolucionar
hasta convertirse en un prominente
congreso internacional de prestigio. Él
no fue ajeno a esta transformación.
Recordarlo sin referirse a su carácter
vitalista sería realmente injusto dando
una visión sesgada. Se desvivía por cual-
quiera que buscara ayuda o consejo, en
especial por sus epígonos, a quienes
prestó apoyo y cuidado siempre que
hizo falta, se preocupó por su forma-
ción consiguiéndoles fondos —a veces
incluso él mismo los transportaba en su
coche— y se las arreglaba para sacar lo
mejor de cada uno de ellos, afianzándo-
los en sus capacidades e impulsándolos.
Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  71
También los acogía con invitaciones a
tomar algo o a inolvidables cenas y ter-
tulias, gracias a la hospitalidad de Fina
y su familia, amenizadas con juegos
de manos que él gustaba de practicar.
Conversar con él era un deleite —a pe-
sar de su tendencia a monologar—, no
dejaba a nadie indiferente. Conectaba
con los demás y su vehemencia solía
situarlo como protagonista, era muy
afectivo, desprendido y desinteresado,
disfrutaba con la gente, ya fuera en su
casa o en la calle, en la academia o en
los bares. Le gustaba una mesa bien
regada y aderezada. O contar chistes,
¡qué provisión de chascarrillos! Llenaba
cualquier ambiente y, con su iniguala-
ble vozarrón, sobresalía. En su departa-
mento se solía bromear cuando alguien
lo buscaba: “¿habéis visto a Chus? No
está, no lo he oído”. Hay pocos como
él, indulgente con un pelín de mala uva
ocasional, cautivador, siempre optimis-
ta, inalterablemente aferrado a una vida
que consumía a bocanadas.
Tenía una faceta excéntrica, con sus
adorables rarezas. Coleccionaba basto-
nes —siempre portaba uno—, abanicos
—se sofocaba—, monedas, peonzas,
lupas, artilugios de toda condición…
Se divertía con el bricolaje, construyó
artesanalmente un armario usando sus
propias herramientas… ¡para poder
guardarlas metódicamente! Porque
también era meticulosamente orde-
nado, escribía sus cálculos en un papel
especial, con un lápiz concreto —B del
0,7—, usando plantilla, y los encuader-
naba manualmente: estudiarlos daba
especial gozo. Y tenía —al menos— un
vicio: regalar cosas a todos.
Su tesón nos hizo dudar a muchos de
lo implacable de la nefasta enfermedad,
haciendo buenas las palabras de Borges:
la muerte es más inverosímil que la vida.
¿Cómo puede morir un gran hombre,
que ha repartido tanta fuerza, tanta sa-
biduría, ha tenido tantos amigos, y ha
dado tanto?
Eduardo Ruiz
Universidad de Salamanca
José M. M. Senovilla
Universidad del País Vasco/
Euskal Herriko Unibertsitatea
Noticias
Entrega de los Premios de Física RSEF-FBBVA 2018
E
l pasado 12 de diciembre de 2018
tuvo lugar, en el palacio del Mar-
qués de Salamanca de Madrid,
la recepción de premiados y la
ceremonia de entrega de los Premios de
Física 2018, Real Sociedad Española de
Física-Fundación BBVA. El acto estuvo
presidido por los presidentes de las dos
instituciones; asistió la presidenta del
CSIC, Rosa Menéndez. La velada comen-
zó con la intervención del Presidente de
la RSEF, José Adolfo de Azcárraga, quien,
tras agradecer a la Fundación BBVA y a
su Presidente el generoso patrocinio a
nuestros premios, se refirió al 50 aniver-
sario de la European Physical Society y a
las lecciones que pueden extraerse de su
creación (véase la «Carta del Presidente»
en este número). Tras reconocer el tra-
bajo de los jurados, y ver una presenta-
ción describiendo el trabajo de todos los
premiados (la lista completa junto con
sus trayectorias puede encontrarse en el
número anterior de la Revista Española
de Física), se pasó a la entrega de los pre-
David Pérez García, Premio Miguel Catalán
y Académico Correspondiente de la RAC
E
l Profesor de la UCM y miembro
de la RSEF David Pérez García,
que en 2017 recibió el Premio
de Investigación Miguel Cata-
lán a investigadores de menos de cua-
renta años de la Comunidad de Madrid,
impartió el pasado 14 de noviembre, en
la Real Academia de Ciencias (RAC), la
conferencia titulada “Problemas inde-
cidibles en Física Cuántica”. En ella, y
en línea con la indecibilidad de Gödel y
Turing en matemáticas, mostró que hay
sistemas cuánticos de muchos cuerpos
que son de hecho indecidibles. Este
resultado negativo tiene sin embargo
un aspecto positivo: predice la existen-
cia de un nuevo efecto que denomina
“transición de fase cuántica mediada
por el tamaño del sistema”, que podría
comprobarse experimentalmente. Tras
su conferencia, el Prof. David Pérez re-
cibió el Diploma que lo acredita como
Académico Correspondiente de la RAC.
72  Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019
Los galardonados junto con el presidente de la Fundación BBVA, la presidenta del CSIC y el presidente
de la Real Sociedad Española de Física. Foto: Fundación BBVA.
mios, tras la cual, todos los galardonados
tomaron la palabra, tanto para mostrar
su agradecimiento como para resaltar
aspectos de su trabajo y de la física en
España. Todas las intervenciones de los
premiados fueron destacadas e inclu-
so entrañables. La entrega de premios
se cerró con unas emotivas palabras de
Francisco González, Presidente de la Fun-
Licenciado en Mate-
máticas por la UCM en
2000, se doctoró en la
misma universidad en
2004. Tras realizar una
estancia postdoctoral en
el Max Planck Institute
de Alemania (2005-2006),
desde 2006 está ligado a
la UCM, primero como
Investigador Ramón y
Cajal y Profesor Titular
de 2007 a 2016, año en el que es nom-
brado Catedrático de Universidad. Es Di-
rector del Grupo de Investigación UCM
Matemáticas e Información Cuántica.
Su área de investigación es la de las
tecnologías cuánticas y los problemas
matemáticos asociados a las mismas,
con la introducción y desarrollo de nue-
vas técnicas matemáticas en otras áreas.
Destacan sus aportaciones en nuevas
técnicas para análisis complejo y teoría
dación BBVA que, además de agradecer la
labor de la RSEF, recordó al antiguo Pre-
sidente Gerardo Delgado, recientemente
fallecido, así como su participación como
miembro del jurado en las tres primeras
ediciones de los Premios Fronteras del
Conocimiento en la categoría de Cien-
cias Básicas y en otras actividades de la
Fundación BBVA.
analítica de números; en
el desarrollo de la teoría
matemática para descri-
bir y clasificar las fases
cuánticas de la materia;
en espacios de operado-
res en teoría de la com-
plejidad y en el problema
de la indecibilidad en físi-
ca de la materia. Lo ante-
rior se produce en el área
de información cuántica,
que se está convirtiendo en la base de los
futuros desarrollos de ordenadores.
Además del Premio “Miguel Catalán”,
ha recibido el Premio Real Academia de
Ciencias Endesa en Matemáticas para in-
vestigadores menores de cuarenta años
en 2013 y el Premio John von Neumann
Guest Professor en la Universidad Técni-
ca de Munich en 2014. Al año siguiente
le fue concedida una ERC Consolidator
Grant del European Research Council.
 Noticias

Simposio de Tecnologías Cuánticas RSEF-FRA

L
a Fundación Ramón a la termodinámica cuántica
Areces (FRA) y la RSEF, (Anna Sanpera, UAB/Icrea),
con la asistencia del la sincronización cuántica
Grupo de Informa- (Roberta Zambrini, IFISC) y a
ción y Tecnologías Cuánti- las redes cuánticas (Antonio
cas (GIC) y la Red Española Acín, ICFO/Icrea). En el
de Información y Tecnolo- campo de la nanofotónica,
gías Cuánticas, organizó un F.   J. García-Vidal (UAM)
simposio los días 21 y 22 de nos explicó cómo es posi-
noviembre de 2018 con in- ble manipular moléculas y
vestigadores nacionales e in- reacciones químicas usando
ternacionales del campo de luz. Leticia Tarruell (ICFO)
las tecnologías cuánticas. Fotografía: cortesía de la Fundación Ramón Areces. mostró resultados expe-
El acto se abrió con una rimentales con líquidos y
primera conferencia del Prof. gotas cuánticas de átomos
Ignacio Cirac, del Instituto Max Planck átomos ultrafríos (Immanuel Bloch, ultrafríos y Fernando Luis (ICMA)
de Óptica Cuántica, desgranando algo- MPQ/LMU), la optomecánica cuánti- presentó los avances en la computa-
ritmos para resolver problemas intere- ca (Markus Aspelmeyer, Univ. Viena) ción cuántica con sistemas de espines
santes en ordenadores cuánticos. Otros o la construcción de la futura internet moleculares.
ponentes internacionales ilustraron los cuántica y los protocolos necesarios Las jornadas fueron un éxito de pú-
fundamentos de los circuitos cuánticos para operarla (Stephanie Wehner, TU blico y asistencia y desde la RSEF y el
superconductores y la computación Delft/QuTech). GIC agradecemos a la Fundación Ra-
cuántica con ellos (Andreas Wallraff, Por la parte nacional, pudimos disfru- món Areces su confianza y apoyo en la
ETH), la simulación cuántica con tar de interesantes charlas introductorias organización de este evento.

Ignacio Cirac recibe el Diploma de Miembro

Distinguido de la RSEF

D
urante la celebra-
ción el pasado mes
de noviembre del
Simposio Interna-
cional de Tecnologías Cuán-
ticas en la sede de Fundación
Ramón Areces en Madrid,
el presidente de la RSEF, J.
Adolfo de Azcárraga, hizo
entrega a Ignacio Cirac del
Diploma que lo reconoce
como Miembro Distinguido
de la RSEF. Esta categoría de
Miembro Distinguido de la
RSEF viene recogida en sus
estatutos que señalan que,
con carácter excepcional, la Junta de
Gobierno podrá designar como Miem-
bro Distinguido de la RSEF a cualquier
persona que haya destacado en la inves-
tigación, la docencia, la promoción de
la física o en el apoyo a las actividades
de la Sociedad. El Prof. Cirac participó
en el simposio con la conferencia invi-
tada “Resolviendo problemas cuánticos
con ordenadores cuánticos”.
Juan Ignacio Cirac Sasturain se li-
cenció en Física en la UCM, donde
realizó el doctorado. Tras su paso por
la UCLM, el Joint Institute for Labora-
tory Astrophysics (JILA) de la Universi-
dad de Colorado (EE. UU.) y el Instituto
de Física Teórica de la Universidad de
Innsbruck (Austria), recaló en el Insti-
tuto Max-Planck para la Óptica Cuán-
tica, donde dirige su División Teórica
desde 2001. Es profesor honorario de
la Universidad Técnica de
Munich y profesor invitado
del ICFO.
Su investigación se cen-
tra en la teoría cuántica
de la información, Ignacio
Cirac ha recibido nume-
rosos premios y distin-
ciones, entre los que cabe
destacar la Medalla Max
Planck (2018), la Meda-
lla de Honor del Instituto
Niels Bohr (2013), el Pre-
mio Wolf en Física (2013),
la Medalla Franklin en Fí-
sica (2010), el Premio de la
Fundación BBVA Fronteras del Cono-
cimiento en la categoría de Ciencias
Básicas (2008), el Premio Nacional de
Investigación Blas Cabrera (2007), el
Premio Príncipe de Asturias de Inves-
tigación Científica y Técnica (2006), el
Premio Electrónica Cuántica de la EPS
(2005), la Medalla de la RSEF (2002) y
el Premio Investigadores Noveles de la
RSEF (1992).

Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  73

Noticias

Ángel Rubio recibe en Londres la Medalla

y el Premio Max Born 2018

E
l pasado 20 de no- res de la “European Theore-
viembre el Prof. Ángel tical Spectroscopy Facility”
Rubio Secades, miem- (ETSF). El Prof. Rubio tiene
bro de la RSEF, re- un excelente historial de
cibió en el Royal Lancaster publicaciones relacionados
Hotel de Londres la Medalla con la teoría y modelización
y el Premio Max Born 2018. de las propiedades electró-
La ceremonia contó con los nicas y estructurales de ma-
principales exponentes de la teriales y nanoestructuras.
física en Gran Bretaña ade- Su actividad investigadora
más de los presidentes de la es reconocida internacio-
EPS, DPG e IOP. La Sociedad nalmente y ha recibido nu-
Alemana de Física (DPG) creó merosos honores y premios,
este Premio en 1972 para re- entre los que se encuentran:
Ángel Rubio recibe el premio de manos de la presidenta de la IOP (Julia
conocer la labor investigado- Higgins) y del presidente del DPG (Dieter Meschede). Foto: IOP. Fellow de la American Phy-
ra del físico alemán Max Born sical Society 2004; Friedrich
(premio Nobel en 1954), cuya Wilhelm Bessel Prize, Hum-
trayectoria profesional se desarrolló Ángel Rubio se doctoró en Física por bodt Stiftung 2005; Fellow de la Ame-
entre Gran Bretaña y Alemania. El ga- la Universidad de Valladolid (UVA). Su rican Association for Advanced Science
lardón se concede anualmente a inves- trabajo postdoctoral lo realizó en la 2010; dos proyectos del European Re-
tigadores destacados que desarrollen Universidad de California en Berkeley. search Council Advanced Grant (2011
su labor en alguno de estos dos países En 2001 se trasladó a la Universidad del y 2016); Premio Rey Jaime I de Inves-
mencionados. El jurado ha destacado País Vasco como Catedrático de Física tigación Básica 2014, Foreign Asso-
al Prof.Rubio por su “liderazgo a nivel de la Materia Condensada. Desde 2015 ciate member of the U. S. National
mundial en el campo de la física com- es el Director del Departamento de Academy of Sciences 2014 y Miller
putacional del estado sólido y por la Teoría del Instituto Max Planck para la Visiting Professor, UC Berkeley. En
predicción de propiedades de nuevos Estructura y la dinámica de la Materia 2016 recibió la Medalla de Física de la
materiales y nanostructuras”. en Hamburgo. Es uno de los fundado- RSEF-BBVA.

Cold Atom Workshop-Bilbao 2018

E
l 16 y 17 de noviembre tuvo
lugar en Bilbao el Cold Atom
Workshop-Bilbao 2018, prime-
ra reunión del recientemente
creado Foro de Física de Átomos Fríos
(FFAF). Los organizadores fueron Mi-
chele Modugno (Ikerbasque, UPV/EHU)
y Fernando Sols (UCM), actuales Secre-
tario y Coordinador del FFAF. Este es
el primer Foro que se constituye dentro
de la RSEF. La finalidad del FFAF es fo-
mentar el conocimiento de la física de
átomos fríos en la RSEF y en la sociedad conferencias de apertura y de cierre mente, habló de las perspectivas que se
española en general, así como impulsar fueron impartidas, respectivamente, abren en este nuevo campo de la física,
la colaboración científica e institucional por Leticia Tarruell y Maciej Lewens- con énfasis en la simulación y el diseño
sobre este tema entre los físicos españo- tein, ambos del ICFO (Barcelona) y ga- de nuevos sistemas cuánticos. También
les o que trabajan en España. lardonados en recientes convocatorias cabe resaltar la intervención del físico
En la reunión de Bilbao participaron de los premios RSEF-Fundación BBVA. experimental Morgan Mitchell (ICFO),
todos los grupos españoles que investi- Tarruell es la directora del grupo que quien dirige investigación sobre tram-
gan en física de átomos fríos. También obtuvo el primer condensado de Bose- pas de unos pocos átomos fríos.
intervinieron físicos españoles residen- Einstein en España. Lewenstein, líder La próxima reunión del FFAF tendrá
tes en Alemania y el Reino Unido. Las de un grupo teórico destacado mundial- lugar en Barcelona en octubre de 2020.

74  Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019


Rafel Rebolo, Premio Nacional de Investigación
Blas Cabrera
E
l miembro de la RSEF Rafael
Rebolo ha recibido el Premio
Nacional de Investigación Blas
Cabrera de Ciencias Físicas, de
los Materiales y de la Tierra. El jurado
le ha concedido el premio por unani-
midad por “la relevancia de sus contri-
buciones al conocimiento del cosmos.
En particular se destacan sus aportacio-
nes pioneras en el descubrimiento de
exoplanetas gigantes y súper-Tierras,
el decaimiento de estrellas en agujeros
negros y la detección del fondo de mi-
croondas y su anisotropía”.
Los Premios Nacionales de Inves-
tigación, creados en 1982, son con-
cedidos por el Ministerio de Ciencia,
Innovación y Universidades y suponen
el reconocimiento más importante de
España en el ámbito de la investigación
científica.
Rafael Rebolo López, actual director
del IAC, se licenció en Ciencias Físicas
Pablo Artal, Premio Nacional de Investigación
Juan de la Cierva
E
l miembro de la RSEF Pablo
Artal ha recibido el Premio Na-
cional de Investigación Juan de
la Cierva de Transferencia de
Tecnología. El jurado le ha concedido
el premio por unanimidad “por sus
contribuciones pioneras en la utiliza-
ción de métodos innovadores para la
evaluación y corrección de la visión y
su impacto en la salud ocular. Destaca
también su trayectoria científica y tec-
nológica de muy alto nivel, reconocida
a nivel nacional e internacional”.
Pablo Artal Soriano es catedrático
de Óptica y director del Laboratorio
de Óptica de la Universidad de Murcia
(LOUM). Licenciado en Ciencias Fí-
sicas por la Universidad de Zaragoza,
se doctoró en Física por la UCM. Ha
sido becario postdoctoral en el Institut
d’Optique, Orsay (Francia) y en la Uni-
versidad de Cambridge (Reino Unido)
e investigador en el Instituto de Óptica
de Madrid (CSIC). Ha realizado varias
estancias de investigación colaborativa
Fotografía: IAC/ES
por la Universidad de Granada y se
doctoró en Astrofísica por la Univer-
sidad de La Laguna. En 1988 se incor-
poró al CSIC, del que es Profesor de
Investigación desde 1998. Desde 2002
es profesor externo del Instituto Max
Planck de Astronomía en Heidelberg.
A lo largo de su carrera en el IAC ha
en laboratorios en Europa, Australia y
Estados Unidos. Actualmente es profe-
sor distinguido en la Universidad South
Central China.
Ha publicado más de 200 artículos,
ha presentado más de 150 conferencias
invitadas en reuniones internacionales
y es coinventor de 25 patentes inter-
nacionales. Ha sido pionero en varios
avances muy innovadores para el estu-
Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019  75
Noticias
dirigido varios proyectos de investi-
gación en el ámbito de la cosmología
observacional  y de la física estelar y
exoplanetaria y ha publicado más de
400 artículos. En 2000 recibió el Pre-
mio Iberdrola de Ciencias y Tecnología
y el Premio Jaime I de Investigación. En
2002 obtuvo el premio Canarias de In-
vestigación y, en 2015, el Premio Jules
Janssen de la Sociedad de Astronomía
de Francia. En 2018 recibe el Premio
Gruber de Cosmología compartido
con los miembros del equipo Planck.
Es miembro de la Max Planck Society
(Alemania) y Académico correspon-
diente de la Real Academia de Ciencias
Exactas, Físicas y Naturales de España.
También es Académico de Honor de la
Academia de Ciencias de la Región de
Murcia, Doctor Honoris Causa por la
Universidad Politécnica de Cartagena y
Director Científico del programa IAC:
Centro de Excelencia Severo Ochoa.
dio de la óptica del ojo y ha contribuido
en gran medida a la mejor comprensión
de los factores que limitan la resolución
del sistema visual humano. El Dr. Artal
es cofundador de Visiometrics SL y de
Voptica SL, una empresa spin-off para
desarrollar los simuladores visuales
de óptica adaptativa. Ha sido mentor
de muchos estudiantes graduados y
postdoctorales. Ha sido editor de la re-
vistas JOSAA y JOV.
Es miembro fellow de la OSA, ARVO,
SPIE y EOS. Es académico numera-
rio de la Academia de Ciencias de la
Región de Murcia. En 2013 recibió la
Medalla Edwin H. Land de la OSA en
reconocimiento a sus contribuciones
científicas al avance de las alternati-
vas de diagnóstico y corrección en óp-
tica visual. Ese mismo año consiguió
la exclusiva ERC Advanced Grant, en
2015 fue galardonado con el Premio
Jaime I a las Nuevas Tecnologías y en
2019 el premio Edgar D. Tillyer de la
OSA.
Noticias

Jornada de presentación de IPARCOS en la UCM

E
l pasado 21 de enero desarrollan aplicaciones que
se celebró en la Fa- luego se pueden utilizar para
cultad de Físicas de la puesta a punto de instru-
la UCM la jornada mentación, en muchos ca-
de presentación de IPAR- sos destinada a aplicaciones
COS (Instituto de Física de médicas (diagnóstico y tera-
Partículas y del Cosmos), un pia). IPARCOS se crea con 41
instituto que trabaja tanto miembros permanentes o en
en física de partículas como vías de serlo y unos 40 inves-
en astrofísica, cosmología e tigadores en formación.
instrumentación avanzada y Los investigadores de
aplicaciones. En la jornada IPARCOS trabajan en instala-
participaron Ángel Arque- Fotografía de Jesús de Miguel ciones de la Facultad de Cien-
ros, su director en funciones, cias Físicas, pero también
Ángel Gómez, decano de la sica de partículas, como en astrofísica, forman parte de colaboracio-
Facultad de Físicas, Ignacio Lizaosain, cosmología, instrumentación avanzada nes internacionales con equipos exter-
vicerrector de Política Científica, In- y aplicaciones”. nos, como el observatorio astrofísico
vestigación y Doctorado y Juan Anto- IPARCOS une a físicos teóricos con del  Roque de los Muchachos, el  ob-
nio Tejada, vicerrector de Planificación astrofísicos observacionales que están servatorio del Calar Alto, de Almería,
y Evaluación Institucional. El Prof. Ar- trabajando con datos que luego a su vez grupos de física nuclear en acelerado-
queros señaló que “la ventaja de tener utilizan los teóricos. Además hay físicos res de partículas en desarrollo... Desde
un instituto es que se puede acudir, de experimentales en el LICA (Laboratorio IPARCOS se tiene claro que cualquier
manera conjunta, a todo tipo de con- de Instrumentación Científica Avanza- lugar es bueno para hacer Física de
vocatorias, ya que se trabaja tanto en fí- da) y en estudios de física nuclear, que calidad.

La iniciativa 11 de Febrero no para de crecer

D
esde que en 2015 la fueron charlas/talleres de/
Asamblea General sobre científicas en centros
de la Organización educativos, 174 actividades
de las Naciones organizadas también por
Unidas proclamara el 11 de centros educativos y 337 en
febrero como el “Día Inter- otros espacios, como centros
nacional de la Mujer y la de investigación, bibliotecas
Niña en la Ciencia”, las acti- públicas, universidades o li-
vidades para visibilizar la la- brerías. Todo ello repartido
bor de las científicas no han por todas y cada una de las
parado de crecer en nuestro provincias españolas, desde
país. Son muchas las barreras grandes ciudades a pequeños
que aún existen hoy en día municipios rurales. En total,
(sutiles a veces) que dificul- las actividades han llegado
tan la presencia de mujeres Leni Bascones en Taller de Superconductividad. Escaparate en Zaragoza a más de 150.000 personas,
en las denominadas carreras dedicado a Carmen Magallón. Investigadoras del Centro de Tecnología con un grandísimo alcance en
STEM (siglas en inglés de Nanofotónica de Valencia. Charla de Julia Herrero sobre el 11 de Febrero redes sociales y medios de co-
Ciencia, Tecnología, Inge- en un centro educativo. municación. Todo esto se ha
niería y Matemáticas) y hace conseguido gracias al trabajo
falta la implicación de todas y todos niñas y para ayudar a cerrar la brecha desinteresado de muchísimas personas,
para cambiar una sociedad que impide de género en Ciencia. Y la respuesta no y aún queda mucho margen y buenas
participar plenamente a las mujeres en ha parado de crecer. Desde que en 2017 ideas para aumentar la participación en
los ámbitos de la ciencia y la ingenie- se organizaran más de 300 actividades próximas ediciones. La RSEF ha apo-
ría. Ante esta necesidad, la iniciativa 11 en toda España, el entusiasmo, que se yado desde el principio esta iniciativa
de Febrero surgió como plataforma de ha ido contagiando año a año, ha he- y esperamos que la labor, que ya es de
encuentro con el fin de facilitar y difun- cho que las cifras de 2019 sean apabu- toda la ciudadanía, cale pronto en nues-
dir la organización de actividades para llantes. Este año ha habido un total de tra educación y consigamos una socie-
fomentar vocaciones científicas en las 2.746 actividades de las cuales, 2.235 dad más justa e igualitaria.

76  Revista Española de Física  •  33-1  •  Enero-marzo 2019

 Revista
Española
de FÍSICA Volumen 33  •  Número 1  • Enero-marzo 2019

Revista de Física (RdF)

www.revistadefisica.es ÍNDICE
Es una publicación de la Real Sociedad Española
de Física, que es miembro de la Federación
1 Editorial, Carta del Presidente. 50 años de la EPS: una lección aún vigente, José
Premios
Iberoamericana de Sociedades de Física (FEIASOFI)
y de la European Physical Society (EPS) y mantiene
Adolfo de Azcárraga
acuerdos con la American Physical Society (APS) y Temas de Física
otras sociedades científicas. El equipo de dirección,
5 Los arcanos de la radiación cósmica de ultra alta energía, Antonio Bueno Villar
que no se hace responsable del contenido de los La Fundación BBVA y la RSEF colaboran un año más en la convocatoria y adjudicación de los PREMIOS DE FÍSICA RSEF - Fundación BBVA.
trabajos que aparecen firmados, agradece a los 10 Año Internacional de la Tabla Periódica (2019): una oportunidad para abordar En esta convocatoria se concederán ocho premios en las siguientes categorías y modalidades, con las dotaciones brutas indicadas:
autores su contribución voluntaria contextos de didáctica e historia de la física y la química, Gabriel Pinto, Manuela
Martín Sánchez, M. Araceli Calvo Pascual y Almudena de la Fuente Medalla de la Real Sociedad Española de Física
Director:
dotada con 15.000 euros
Augusto Beléndez Vázquez (UA)
19 Generación de combustibles sintéticos a partir de H2O y CO2: Electrolizadores de
Subdirectores:
óxido sólido, Marc Torrell Faro Investigador Joven
Antonio Dobado González (UCM) en las modalidades de Física Teórica y Física Experimental
José María Ortiz de Zárate Leira (UCM) 25 Wolframio: desde una supernova al Laboratorium de Bergara, Juan J. Iruin dotada cada una de ellas con 6.000 euros
Elena Pinilla Cienfuegos (UPV)
Editor General: Notas de clase Enseñanza y Divulgación de la Física
Miguel Ángel Fernández Sanjuán (URJC) 30 Píldoras de Física: un canal de comunicación entre docentes, Verónica Tricio en las modalidades de Enseñanza Media y Enseñanza Universitaria
Gómez, Ana Blanca Martínez-Barbeito, Chantal Ferrer Roca, Rafael García- dotada cada una de ellas con 6.000 euros
Secretaria de redacción:
Itziar Serrano Molina
Física, Innovación y Tecnología
Consejo editorial:
32 Un modelo significativo de tipo microscópico para la enseñanza-aprendizaje
dotado con 8.000 euros Convocatoria
Convocatoria 2019
2019
Antonio Acín Dal Maschio (ICFO) de los circuitos de corriente continua, Arturo Carcavilla Castro, M.ª Lucía Puey
Ángel Ballesteros Castañeda (UBU) Bernués Mejores Artículos en las Publicaciones de la Real Sociedad Española de Física
Mariona Coll (ICMAB-CSIC) 36 La Física es cool con el Energy Stick y la bola de plasma, Fernando Ignacio de Prada con dos premios asignados respectivamente a temas de Enseñanza y Divulgación
Eva M.ª Fernández Sánchez (UNED) Pérez de Azpeita, José Antonio Martínez Pons dotado cada uno de ellos con 1.500 euros
Pascuala García Martínez (UV)
Maia García Vergniory (DIPC) 40 Puntos de interés Modo y plazo de presentación de candidaturas
José Ignacio Íñiguez de la Torre Bayo (USAL)
M.ª del Carmen Lemos Fernández (US) 43 Recordando a Sir Michael Atiyah, J. Adolfo de Azcárraga Toda la documentación necesaria relativa a un premio deberá ser remitida en su totalidad (incluidas, en su caso, las cartas de presentación,
Mª del Prado Martín Moruno (UCM)
Benjamín Montesinos Comino (CAB, CSIC-INTA) Una entrevista con el Nobel Convocatoria 2019
cartas de apoyo y otros avales) antes de las 14 horas (hora peninsular) del martes 21 de mayo de 2019, por correo postal o por correo
electrónico, a la Real Sociedad Española de Física:
Pablo Nacenta Torres (IES Alameda de Osuna, 45 Carl Wieman, por Jenaro Guisasola
Madrid) Facultad de Ciencias Físicas
Jose M.ª Pastor Benavides (DEDF, RSEF)
Mi clásica favorita
Plaza de las Ciencias, 1
Ramón Román Roldán (DEDF, RSEF) 49 Vera Rubin, la astrónoma que nos hizo replantearnos de qué está hecho el
28040 Madrid
Carlos Sabin Lestayo (IFF-CSIC) universo, Sara Gil Casanova
Andrés Santos Reyes (UNEX)
Nodos de la Física
Tel.: 91 394 43 50 - secret.y.admon@rsef.es
Convo
Jesús Miguel Seoane Sepulveda (URJC) https://rsef.es/images/Fisica/BasesPdF2019.pdf
Si la candidatura contuviese errores subsanables, estos deberán ser subsanados en un plazo improrrogable de 7 días naturales desde que
Isabel Tanarro Onrubia (IEM-CSIC) 56 Centro de Astrobiología. 20 años estudiando la vida y el Universo, J. Miguel Mas- sean comunicados para que pueda ser tenida en consideración.
Mariam Tórtola Baixauli (IFIC, UV) Hesse, Víctor Parro, Ricardo Amils, Eduardo González-Pastor, Francisco Najarro,
Composición y edición: Olga Prieto-Ballesteros, Eduardo Sebastián y Juan Ángel Vaquerizo La convocatoria de estos premios se resolverá antes del 22 de septiembre de 2019
Disegraf Soluciones Gráficas, S. L.
http://www.disegrafsl.es 65 Hemos leído que… Real Sociedad Española de Física. Junta de Gobierno
Reseñas de libros de interés PRESIDENTE PRESIDENTES DE SECCIONES LOCALES J. Bernardo Parra Soto (Adsorción, GEADS)
Entidades patrocinadoras de la Real Sociedad
Española de Física:
67 Diez siglos de ciencia y científicos toledanos, Enrique García Gómez José Adolfo de Azcárraga Feliu M.ª del Mar Sánchez López (Alicante) J. Mª. Rodríguez Espinosa (Astrofísica, GEAS)
Universidad Complutense de Madrid 68 Microelectrónica. La historia de la mayor revolución silenciosa del siglo xx, J. P. Martínez Jiménez (Aragón) R. García Herrera (Física de la Atmósfera y de
Fundación BBVA Ignacio Mártil de la Plaza VICEPRESIDENTES Océano, GEFAO)
J. Pisonero Castro (Asturias)
Fundación Ramón Areces 69 El año en que salvé a Einstein, José de la Peña Aznar
Íñigo Luis Egusquiza Egusquiza A. Ruiz Jimeno (Cantabria) J. A. Fernández González (Física Atómica y
CIEMAT 70 Descubriendo la luz. Experimentos divertidos de óptica, María Viñas Peña
Ministerio de Educación, Cultura y Deporte Miguel Ángel Sanchis Lozano M. A. López de la Torre (Castilla-La Mancha) Molecular, GEFAM)
(coord.)
Sidilab J. Jesús Ruiz Lorenzo (Extremadura) J. José Suñol (Calorimetría y Análisis Térmico, GECAT)
La Revista de Física se publica a razón In memoriam SECRETARIO GENERAL J. L. Legido Soto (Galicia) F. Monroy Muñoz (Coloides e Interfases, GECI)
de cuatro números por volumen anual, 71 Chus Martín Fernando Sols Lucia E. Romera Gutiérrez (Granada) P. Gómez Sal (Cristalografía y Crecimiento
por la Real Sociedad Española de Física J. Federico Echávarri Granado (La Rioja) Cristalino, GE3C)
Noticias
TESORERA G. Pinto Cañón (Didáctica e Historia de la Física
Depósito Legal: M-20734-1986 72 Entrega de los Premios de Física RSEF-FBBVA 2018 V. Madurga Pérez (Navarra)
María Varela del Arco y la Química, GEDH)
ISSN: 0213-862X
72 David Pérez García, Premio Miguel Catalán y Académico Correspondiente de la RAC I. L. Egusquiza Egusquiza (País Vasco)
73 Simposio de Tecnologías Cuánticas RSEF-FRA C. Hernández García (Salamanca) J. M. Martínez-Duart (Energía, GEE)
Real Sociedad Española de Física EDITOR GENERAL R. M.ª Benito Zafrilla (Física Estadística y No
73 Ignacio Cirac recibe el Diploma de Miembro Distinguido de la RSEF L. Rull Fernánez (Sevilla)
Facultad de Ciencias Físicas-UCM Miguel Ángel Fernández Sanjuán
Plaza de las Ciencias, 1
74 Ángel Rubio recibe en Londres la Medalla y el Premio Max Born 2018 A. Cross Stotter (Valencia) Lineal, GEFENOL)
28040 Madrid 74 Cold Atom Workshop-Bilbao 2018 M. Santander Navarro (Valladolid) J. José García Ripoll (Información Cuántica, GEIC)
75 Rafel Rebolo, Premio Nacional de Investigación Blas Cabrera VOCALES L. Bañares Morcillo (Láseres Ultrarrápidos, GELUR)
http://rsef.es J. Buceta Fernández (Sección Exterior)
75 Pablo Artal, Premio Nacional de Investigación Juan de la Cierva M.ª L. Amieva Rodríguez, F. Bartolomé Usieto, R. Vilaseca Alavedra (Óptica Cuántica y Óptica
Para temas relacionados con la RdF:
76 Jornada de presentación de IPARCOS en la UCM M.ª V. Fonseca González, A. Gil Gil, J. Guisasola PRESIDENTES DE DIVISIONES Y GRUPOS No Lineal, GEOCONL)
revista.de.fisica@rsef.es
76 La iniciativa 11 de Febrero no para de crecer Aranzábal, M.I. Hernández Hernández, ESPECIALIZADOS A. Sastre Santos (Nanociencia y Materiales
Tel.: 91 394 4359/50 M.ª José Calderón Prieto (División de Física de la
J. A. Manzanares Andreu, L. Morellón Alquézar, Moleculares, GENAM)
Fax.: 91 394 4162
J. Mª. Pastor Benavides, R. Pérez Pérez, A. Sastre Materia Condensada DFMC-GEFES) P. García Martínez (Mujeres en Física, GEMF)
Para enviar artículos o colaboraciones consultar A. Dobado González (División Física Teórica y de D. Cortina Gil (Física Nuclear, GEFN)
Santos, S. Serrano Calle, C. Untiedt Lecuona, P.
la página web de la Real Sociedad Española Partículas-DFTP)
Varela Nieto, L. Viña Liste, P. Wahnon Benarroch. J. San Román del Barrio (Polímeros, GEPO)
de Física en el apartado de Normas de Publicación
J. Mª Pastor Benavides (División de Enseñanza y I. Tanarro Onrubia (Física de Plasmas, GEFP)
Divulgación de la Física) A. Guerrero Conejo (Reología, GEREO)
A. Fernández Muñoz (Grupo de Estudiantes M. Martínez Piñeiro (Termodinámica, GET)
La astrónoma Vera Rubin (1928-2016), con tan solo 18 años de edad, mirando a través del telescopio de la Universidad de Vassar (Nueva York). Foto: Vassar College. de la RSEF, GdeE) C. Sánchez-Ramos Roda (Física Médica, GEFM)
Cortesía: AIP Emilio Segrè Visual Archives.
 Revista
Española
de FÍSICA
una publicación de la Real Sociedad Española de Física
www.rsef.es Volumen 33  • Número 1  • 2019

•  Carta del Presidente de la RSEF •  Reseñas, Noticias, Puntos de Interés

•  Temas de Física y Notas de clase •  Mi clásica favorita: Vera Rubin
•  Entrevista al Nobel Carl Wieman •  Nodos de la Física: Centro  
•  Recordando a Sir Michael Atiyah de Astrobiología