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UNIVERSIDAD DE SONORA

DEPARTAMENTO DE GEOLOGÍA

Dr. Jesús Roberto Vidal Solano

Avendaño Martínez Diana Laura

López Ángeles Dahina Yanileysi

Periodo: 12 de Junio – 12 de Julio 2018


Prologo
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El siguiente escrito es un trabajo derivado del análisis de la literatura que comprende los
trabajos encontrados hasta el momento sobre estudios de la Sierra de Las Navajas, no busca
ser un compendio definitivo de la información, pero permite sentar las bases para integrar la
información de trabajos que lleguen a encontrarse más adelante. Formatted: Font: Bold

Resumen
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Introducción

La Sierra Las Navajas es un volcán riolítico extinto de composición hiperalcalina


de que se encuentra en el extremo norte del Cinturón Volcánico Mexicano, al sur
de la Sierra Madre Oriental, delimitado por las ciudades de Pachuca y Tulancingo,
Hidalgo, México.

La Sierra de las navajas ha sido objeto de estudio por la importancia que tiene al
ser considerada como la fuente principal de obsidiana, materia prima con
características ideales para su manipulación y clave para el desarrollo de las
civilizaciones prehispánicas en Mesoamérica, la mayor parte de las
investigaciones han tenido un enfoque arqueológico, dedicados a caracterizar la
obsidiana para determinar su fuente de origen, la organización social relacionados
a los aspectos naturales, las técnicas de explotación, extracción y
comercialización, etc., sin embargo, son pocos los trabajos que mencionan
aspectos geológicos para explicar el proceso de formación de la obsidiana y la
evolución magmática del volcán. Por lo que es importante complementar los
trabajos previos de cartografía para realizar una interpretación geológica detallada
que nos ayuden a comprender mejor la evolución volcánica y petrogenética.

Ha sido objeto de estudio por la importancia que tiene al ser considerada como la
fuente principal de obsidiana, materia prima con características ideales para su
manipulación y clave para el desarrollo de las civilizaciones prehispánicas en
Mesoamérica.

La mayor parte de las investigaciones han tenido un enfoque arqueológico,


dedicados a caracterizar la obsidiana para determinar su fuente de origen, la
organización social relacionados a los aspectos naturales, las técnicas de
explotación, extracción y comercialización, etc., sin embargo, son pocos los
trabajos que mencionan aspectos geológicos para explicar el proceso de
formación de la obsidiana, la evolución magmática del volcán.

Los primeros estudios fueron realizados por Humboldt (Humboldt, 1966; Thiemer-
Sachse, 1992) y Holmes (Holmes, 1900- 1919), quienes hicieron observaciones
acerca de los sitios de explotación de obsidiana y concluyeron que se requería un
estudio específico para determinar el proceso de formación de la obsidiana.

En 1900-1901 Ezequiel Ordóñez desarrolló una investigación llamada “Las


rhyolitas de México” en el cual realizó un estudio geológico sobre la Sierra de las
Navajas, abordando la zona de manera general.

En 1963 personal de la Compañía de Real del Monte y Pachuca efectuó un


estudio sobre la Geología y yacimientos minerales del Distrito de Pachuca-Real
del Monte, donde Geyne et al. describen la geología de la Sierra de las Navajas.

En 1988 Pastrana (1998) hace una síntesis de los estudios geológicos que se
hicieron en el área y explica el proceso geológico de la formación de obsidiana,
concluyendo que fue originada durante la salida a la superficie de un domo
riolítico, ubicado hacia la cima del cerro Cruz del Milagro que es la mayor
elevación de este sector de la Sierra, con una altura de 3 180 msnm,
posteriormente una erupción de tipo explosivo provocó el desplazamiento de un
lahar que descendió hacia el sur-oeste desde la cúspide, cubriendo un área en
forma de abanico de alrededor de 4 por 2.5 km.

En 2001 Lighthart Ponomarenko realizó una investigación más completa titulada


“La Geología, Petrología y Geo-arqueología de Sierra de las Navajas”, los
objetivos principales de su estudio fueron el análisis petrográfico y geoquímico del
conjunto rocoso en Sierra Las Navajas, la determinación de la evolución química y
la historia eruptiva, el desarrollo de modelos de fraccionamiento cristalino, fusión
parcial y mezcla de magma usando análisis químicos y petrográficos, la
caracterización del depósito de avalancha de escombros, la integración de los
estudios arqueológicos ya completados en Las Navajas y la reconstrucción de un
entorno tectónico para Sierra Las Navajas en el momento de su actividad.
La Sierra de las navajas ha sido objeto de estudio por la importancia que tiene al
ser considerada como la fuente principal de obsidiana, materia prima con
características ideales para su manipulación y clave para el desarrollo de las
civilizaciones prehispánicas en Mesoamérica, la mayor parte de las
investigaciones han tenido un enfoque arqueológico, dedicados a caracterizar la
obsidiana para determinar su fuente de origen, la organización social relacionados
a los aspectos naturales, las técnicas de explotación, extracción y
comercialización, etc., sin embargo, son pocos los trabajos que mencionan
aspectos geológicos para explicar el proceso de formación de la obsidiana y la
evolución magmática del volcán. Por lo que es importante complementar los
trabajos previos de cartografía para realizar una interpretación geológica detallada
que nos ayuden a comprender mejor la evolución volcánica y petrogenética.

La recopilación de la información y la elaboración del proyecto GIS es solo el


primer paso dentro del trabajo de gabinete, este análisis previo tiene como objetivo
definir el enfoque de las futuras investigaciones a desarrollar y de las posibles
estrategias para abordarlas.

Metodología

Se llevó a cabo el trabajo documental ,documental, recopilamos toda para la


recopilación la de bibliografía relacionada al área de estudio, se revisó una serie
de archivos (tesis, artículos, libros, entre otros) para realizar un análisis
bibliográfico y la construcción de una base de datos con el objetivo de tener un
control de la información de interés.

Hicimos uso de las imágenes satelitales obtenidas de Google Earth (figura) y otros
satélites, los cuales nos permitieron confeccionar la cartografía al proporcionarnos
rasgos topográficos distintivos, así como de los elementos naturales propios del
paisaje los cuales fueron de utilidad para la interpretación de la información
recabada y determinantes para la toma de decisiones.

Se organizó la información y los datos obtenidos de la bibliografía por medio de un


Sistema de Información Geográfica para facilitar , el almacenamiento,
manipulación, análisis, interpretación y modelización de datos referenciados
espacialmente,.

que en conjunto estas herramientas permitieron el almacenamiento,


manipulación, análisis, interpretación y modelización de datos (figura) que están
vinculados a una referencia espacial, por medio del software ArcGis que facilitó la
incorporación de aspectos geológicos y topográfico.

Generalidades

La sierra de las Navajas El Complejo Volcánico Riolítico de La Sierra de las


Navajas (CVSse localiza al sur-este del estado de Hidalgo, comprendida entre los
municipios de Acatlán, Huasca de Ocampo, Mineral del Monte, Epazoyucan,
Singuilucan y Tulancingo.

El estudio se realizó en el Complejo Volcánico de la Sierra de las Navajas el cual


queda comprendido dentro de los límites geográficos de la carta geológica y
topográfica Tulancingo (F14-D82) 1:50000 del SGM.

El acceso al área, se efectúa partiendo de la ciudad de Pachuca por la carretera


Pachuca-Tulancingo. El centro volcánico es limitado por la autopista 130 hacia el
sur y la carretera Huasca-Tulancingo hacia el norte.
Figura. Mapa de localización
Figura. Imagen satelital del área de estudio, obtenida de Google Earth

El área de estudio queda en el extremo oriental de la Faja Volcánica


Transmexicana, se encuentra enmarcado por campos volcánicos en valles
intermontanos que descienden de la Sierra de Las Navajas hasta el Valle del Río
Tulancingo.

A partir del sustrato geológico se desarrolló un suelo que por el piso altitudinal y el
tipo de clima que permitió una vegetación de bosques de coníferas: Pinus teocote
y michoacana, oyamel, cipres, encino, y matorrales de enebro. Vegetación
confinada a sitio de alta montaña.
Figura. Modelo digital de elevación

La morfología del área es variada, se presentan diversos tipos de estructuras


volcánicas bien conservadas, como: conos cineríticos, volcanes compuestos,
volcanes escudo y calderas, además de extensos flujos piroclásticos y derrames
lávicos basálticos, que tienen forma de mesetas y planicies sobre las que se han
originado algunos lagos, debido al cierre de las cuencas.

La estructura volcánica de la Sierra de las Navajas es un remanente desgastado y


erosionado de un estratovolcán que se eleva desde un nivel base de 2.250 metros
sobre el nivel del mar (msnm) hasta una elevación máxima de 3,180 metros msnm
y consta de varios picos altos separados por cañones boscosos bajos. La porción
más baja está localizada hacia el norte y constituye el valle del Río Tulancingo, el
cual se ubica por debajo de los1500 metros msnm como se muestra en el modelo
Geología Regional

De acuerdo a la Síntesis geográfica del estado de Hidalgo realizada por el INEGI


en (1992) se describen las características geológicas y estructurales de las rocas
que afloran en las provincias Sierra Madre Oriental, Eje Neovolcánico y la Llanura
Costera del Golfo Norte que cubren el estado de Hidalgo. Indican que hubo
diferentes eventos geológicos de tipo orogénico, que asociados al volcanismo y al
relleno de cuencas oceánicas que dieron el carácter estructural a la entidad.

La Sierra Madre Oriental tuvo su desarrollo sobre estructuras (cuerpos geológicos


deformados) precámbricas y paleozoicas, sobre las que ahora se encuentran
rocas mesozoicas que forman pliegues de diferentes tipos y orientaciones. En
Hidalgo el carácter estructural de esta cordillera es acentuado por pliegues
complejos recostados hacia el noreste y grandes fallas de empuje, que han
arrancado de raíz fragmentos del basamento Precámbrico y Paleozoico, e
imbricado la secuencia mesozoica suprayacente. La continuidad de los fenómenos
volcánicos durante casi todo el terciario, se manifiesta en el gran espesor y en la
extensión que cubren las rocas ígneas del Eje Neovolcánico, donde pueden
encontrarse domos riolíticos, volcanes compuestos, conos cineríticos enteros y
erosionados, y mesetas formadas por flujos piroclásticos y derrames de basalto.

La Provincia del Eje Neo-volcánico cubre una gran porción del estado de Hidalgo,
sobre todo en el sur, y está constituida predominantemente por rocas volcánicas
terciarias y cuaternarias (brechas, tobas y derrames riolíticos, intermedios y
basálticos), de composición y textura variada, las cuales forman en conjunto un
extenso y grueso paquete que, en algunas localidades, como Pachuca, alcanza
varios miles de metros de espesor.

El Terciario es dominantemente volcánico, constituido por el Grupo Pachuca


(Oligoceno - Mioceno). Comprende ocho formaciones, con derrames andesíticos a
dacíticos, basaltos y brechas cubiertas por tobas y derrames riolíticos a dacíticos y
escasos basaltos, cuyo espesor conjunto es de 2 000 m. Cubren
discordantemente a sedimentos cretácicos (Geyne et al., 1963).

Grupo Pachuca (To-plADa)

Está constituido por rocas volcánicas de diferentes edades que en discordancia


erosional sobreyacen a la Formación El Morro. Son favorables para
emplazamiento de vetas, como ocurre en el distrito minero Pachuca - Real del
Monte. La sucesión más completa ocurre en la Sierra de Pachuca. La componen
siete formaciones: Santiago, Corteza, Pachuca, Real del Monte, Santa Gertrudis,
Vizcaína y Cerezo.
Formación Pachuca

Denominación propuesta por Geyne et al. (1963). Está constituida por una serie de
capas lacustres de arcilla y margas, cubiertas por derrames andesíticos y dacíticos
interestratificados con varios miembros tobáceos lenticulares, alternados con
brechas y aglomerados volcánicos. Su localidad tipo está en la mina San Juan
Pachuca. Aflora en El Chico, Hgo., y en la barranca del río Amajac. Su espesor
varía de 300 a 500 m. La unidad sobreyace a la Formación Corteza y subyace a la
Formación Real del Monte. Su edad es Oligoceno Tardío - Mioceno Temprano.

Formación Real del Monte

La designación supraescrita fue propuesta por Geyne et al . (1963). Está


constituida por derrames lávicos de rocas volcánicas intermedias (andesíticas -
dacíticas) con piroclastos. La localidad tipo se ubica en el poblado de Real del
Monte. Otros afloramientos ocurren al norte de la población. El espesor es de 350
m. La unidad yace discordantemente sobre la Formación Pachuca y subyace a la
Formación Santa Gertrudis. Le corresponde edad Mioceno Temprano - Medio.

Formación Santa Gertrudis

Nombre propuesto por Geyne et al . (1963) para designar un conjunto de rocas


volcánicas andesíticas a dacíticas con piroclastos. Su localidad tipo se halla en la
población de Real del Monte, en la veta Santa Gertrudis, de las minas La Rica y
La Purísima. Espesor: 350 m. La unidad sobreyace a la Formación Real del Monte
y subyace a la Formación Vizcaína. Se le asigna edad Mioceno Medio - Tardío.

Formación Vizcaína

Introducida esta denominación por Geyne et al . (1963), esta unidad está


compuesta por derrames de lava y capas de brechas andesíticas a dacíticas. Su
localidad típica se halla en el poblado de Real del Monte. Comúnmente el espesor
varía de 200 a 400 m; por acuñamiento se reduce hasta a 20 m. La unidad
sobreyace a la Formación Santa Gertrudis y subyace a la Formación Cerezo. Se le
asigna edad Mioceno Tardío.

Formación Cerezo

La definió Geyne (1963). Está compuesta por derrames lávicos, brechas


volcánicas de andesita, dacita y riodacita. Su localidad tipo se encuentra en el
poblado El Cerezo. Elespesor es de ≈220 m. Sobreyace a las formaciones
Vizcaína y Santa Gertrudis; subyace a la Formación Zumate. Le corresponde edad
Mioceno Tardío - Plioceno Temprano.
Toba andesítica y Andesita

Galindo (1983) la describe como toba dacítica y andesítica; petrográficamente la


clasifica como toba dacítica que varía a andesita. Le corresponde edad pliocénica.
En la porción de toba andesítica ocurre estratificación horizontal. La integran rocas
piroclásticas (tobas y brechas volcánicas andesíticas a dacíticas). La parte de
andesita es gris oscura, con fenocristales de feldespato en matriz afanítica. Aflora
al sur y al sureste de Tulancingo, en cercanías a Ciudad Sahagún y a Apan, así
como en las comunidades de Acoculco y Chignahuapan. Estas rocas cubren a
tobas riolíticas y a lavas dacíticas y riolíticas. Así mismo están cubiertas por rocas
andesíticas y basálticas, así como por depósitos lacustres. Como interés
geoeconómico, en esta unidad concurren características físicas propicias para
agregados pétreos en la industria de la construcción, revestimiento de caminos de
terracería, cimientos y mampostería.

Riolita Navajas (TplR-TR)

Unidad constituida por derrames de lava riolítica gris clara, de estructura fluidal
con vesículas, horizontes de brecha y toba riolítica, interestratificados entre sí y
con pequeñas cantidades de material volcánico epiclástico. La localidad tipo se
ubica en el cerro Las Navajas, al SE de Pachuca. También se expone en masas
densas, compactas. Contiene fenocristales de cuarzo y sanidino. Se estima un
espesor de 600 m. Sobreyace discordantemente a diversas formaciones
volcánicas del Grupo Pachuca, y directamente sobre las formaciones Soyatal -
Mezcala. Se interdigita con las formaciones San Cristóbal y Atotonilco el Grande.
Queda cubierta discordantemente por la Traquita Guajolote (López-Reyeset al.,
1997). Se le asigna edad Plioceno - Pleistoceno.

Formación Atotonilco el Grande (Tpl-QCgp-Ar)

Segerstrom (1961) propuso esta denominación. La localidad tipo de esta unidad


se ubica en el noroeste de la población de Atotonilco el Grande. Aflora en las
barrancas de Meztitlán, Alcholoya y Amajac, así como en la localidad de
Alcholoya . Está constituida por capas de fangosita a conglomerado, tobas
aglomeráticas, depósitos fluviales, capas de ceniza volcánica y pómez. El
conglomerado está formado por gravas, arenas y limos. La formación de
referencia sobreyace en discordancia a rocas terciarias. Su contacto superior está
cubierto por derrames basálticos y depósitos aluviales del Cuaternario.
Representa el relleno de valles y cuencas lacustres endorreicas, cerradas por
corrientes fluviales que transportaron material producto de la erosión y formaron
grandes abanicos aluviales, así como acumulaciones fluvio- lacustres
complementadas por intensa actividad ígnea. Se le asigna edad pliocénica tardía.
Esta unidad es de interés económico. El conglomerado es utilizable como
agregado pétreo para revestimiento de caminos de terracería y brechas.

Traquita Guajolote

Consiste en lava vesicular gris, holocristalina, de textura porfídica, con


feldespatos, plagioclasa y cuarzo. Contiene minerales secundarios: hematita,
limonita y arcillosos. Aflora en el cerro Gordo, ubicado al Este de Pachuca, a lo
largo de 9 km en dirección N-S y 5 km de anchura (de oriente a poniente). En el
área de estudio aflora en cercanías del volcán Las Navajas. Su nombre alude al
de un rancho ubicado en el extremo meridional de su área de afloramiento
(Geyneet al., 1963). Esta unidad sobreyace discordantemente a la Riolita Navajas
y a la Formación San Cristóbal. No la cubre unidad litológica alguna. Se le asigna
edad holocénica. La traquita es de interés para utilizarse como agregado pétreo en
la industria de la construcción, así como para cimientos y mampostería.

Aluvión

Depósitos no consolidados producto de la desintegración de las rocas,


compuestos por cantos rodados, gravas, arenas, limos y arcillas. Ocurren a lo
largo de las márgenes de los ríos Tortugas y Tulancingo así como de los arroyos
confluentes en la cuenca de este río
Geología Local

Descripción de las unidades geológicas

De acuerdo a los trabajos desarrollados se tiene un panorama geológico que


difiere entre un trabajo y otro, es importante considerar el enfoque que cada autor
tiene, el periodo en que se realizó y los medios tecnológicos para ejecutarlo. Se
describe brevemente la interpretación de los eventos geológicos relacionados al
complejo volcánico.

De manera general Geyne et al (1963) Describe a esta unidad como una


secuencia riolítica de derrames lávicos, capas de brecha, toba, y depósitos de
aludes ardientes, que se encuentran en el cerro de Las Navajas, a sólo 3 o 4 km al
oriente del distrito minero Pachuca-Real del Monte. Es una secuencia riolítica de
derrames lávicos con buena estructura fluidal, porfiríticos-holocristalinos, con
fenocristales de cuarzo y sanidino en matriz micrográfica; y con intercalaciones de
brechas soldadas y no soldadas de flujo de cenizas vítreas, con fragmentos líticos,
pumíticos y de obsidiana.

Estudios posteriores concuerdan con dicha descripción, documentando que está


conformada por derrames de lava, horizontes de brecha y toba de composición
riolitica (López-Reyes et al., 1997), derrames piroclásticos donde los derrames de
lava riolítica, se observan de coloración gris clara, de estructura fluidal, con
vesículas horizontales, horizontes de brecha y toba riolítica, interestratificadas
entre sí y con pequeñas cantidades de material volcánico epiclástico (Solana-
López, 2010).Detalladamente Sánchez-Rojas et al. (2005) mencionan que está
constituida por un complejo volcánico de composición principalmente riolítica, con
flujos de lava y domos intercrecidos con depósitos de caída y de flujo, así como
flujos de avalancha, algunos derrames basálticos, con abundante vidrio volcánico.

Agregan que los derrames de lava son de color gris claro, con estructura fluidal y
con hileras de vesículas, ocasionalmente densa, con un 5% de fenocristales de
cuarzo y sanidino de hasta 0.5 mm de tamaño, con hornblenda en forma de
cristales prismáticos verdosos como mineral principal, los cuales componen
menos del 3% de la roca, con una matriz cristalina compuesta por cuarzo y
feldespato con aparente intrecrecimiento micrográfico incipiente en cristales de
hasta 0.7 mm de diámetro. Asimismo, consideran que los derrames con estructura
fluidal y vesículas contienen niveles de esferulitas y las paredes de las vesículas
están tapizadas por cristales de cuarzo y feldespato.
Se ha reportado un espesor de entre 500 m (Geyneet al., 1963; De Cserna et al.,
1987; Vázquez-Sánchez y Jaimes-Palomera, 1989; Sánchez-Rojas et al., 2005) y
600 m (López-Reyes et al., 1997; Solana-López, 2010) para las rocas del complejo
volcánico de Sierra de las Navajas.

Pastrana (1998) explica el proceso geológico de la formación de obsidiana,


diciendo que fue originada durante la salida a la superficie de un domo riolítico,
ubicado hacia la cima del cerro Cruz del Milagro que es la mayor elevación de este
sector de la Sierra, con una altura de 3 180 msnm, posteriormente una erupción
de tipo explosivo provocó el desplazamiento de un lahar que descendió hacia el
sur-oeste desde la cúspide, cubriendo un área en forma de abanico de alrededor
de 4 por 2.5 km. Las dimensiones y forma de abanico del lahar dependieron de la
topografía inmediata preexistente del centro eruptivo y de la cantidad de agua y
volátiles, que constituyen un depósito de materiales fragmentarios sin clasificación
ni estratificación precisa. Sin embargo, los bloques más grandes de obsidiana se
ubican preferentemente cerca de la base del depósito, debido a su mayor
densidad relativa y se encuentran empotrados en una matriz de materiales con
diferente grado de compactación. Los bloques de obsidiana, de variadas
dimensiones y calidad, se encuentran mezclados entre sí a diferentes
profundidades y zonas del lahar, formando un depósito discontinuo y subterráneo,
donde las obras mineras prehispánicas fueron necesarias primero para localizar y
posteriormente extraer obsidiana de dimensiones y calidad adecuada para la talla
de diversos instrumentos y objetos. La capa del lahar en su parte más alta próxima
a los 3 000 msnm, tiene un espesor de 2 a 15 m aproximadamente y, al descender
topográficamente a unos 2 870 msnm, su espesor aumenta a más de 50 m. Las
minas prehispánicas alcanzaron profundidades cercanas a los 40 m donde se
encuentran los grandes bloques de obsidiana. La explotación prehispánica agotó
aproximadamente un 40% del potencial geológico del yacimiento, mientras que la
minería moderna de obsidiana para artesanía alcanza actualmente profundidades
mayores a los 50 metros. La capa del lahar en su parte más alta próxima a los 3
000 msnm, tiene un espesor de 2 a 15 m aproximadamente y, al descender
topográficamente a unos 2 870 msnm, su espesor aumenta a más de 50 m. Las
minas prehispánicas alcanzaron profundidades cercanas a los 40 m donde se
encuentran los grandes bloques de obsidiana.

Lighthart (2001)

Las rocas del basamento expuestas al norte de Sierra Las Navajas consisten en
rocas sedimentarias plegadas de la Sierra Madre Oriental y secuencias volcánicas
terciarias no relacionadas con Las Navajas. Los afloramientos de estas rocas se
encuentran en colinas aisladas y en el cañón del Río Grande de Tulancingo.
Expuestos en las paredes del cañón hay varios cientos de metros de calizas
marinas y lutitas finamente intercaladas de edad Mesozoica, probablemente
Jurásica (Moran-Zenteno, 1994).

Durante la etapa inicial de vulcanismo en Sierra Las Navajas tres flujos hicieron
erupciones en complejos: el complejo Las Minas, el complejo Guajalote y el
complejo Ixatla, todos encontrados expuestos en los flancos sur y oeste de Sierra
Las Navajas.

Cada una de estas series de flujos piroclásticos y de lava hiperalcalina agrupados


por composición química similar, petrografía y ubicación geográfica. Estos
depósitos piroclásticos intercalados y flujos de lava de riolitica ricos en obsidiana
construyeron la estructura volcánica original en Las Navajas. La mayoría de los
depósitos piroclásticos son depósitos pumicíticos no consolidados, aunque
depósitos de cenizas de piedra pómez, depósitos de bloques, cenizas y tobas
soldadas también se encuentran en toda el área de estudio.

El colapso sectorial del lado norte del volcán produjo una avalancha catastrófica
de escombros tipo Bezymianny (Siebert et al., 1987). La desestabilización de la
pendiente asociada aparentemente expuso la cámara de magma, causando una
erupción explosiva. Los depósitos piroclásticos de esta erupción se superponen
directamente a la avalancha de escombros a 48 kilómetros de Las Navajas.

Dentro del anfiteatro en forma de herradura producido por el colapso del sector, el
volcanismo posterior produjo un complejo de flujos de riolita que comenzó a llenar
el anfiteatro de colapso y desbordamiento local de la escarpa de avalancha. Tal
colapso posterior a la depresión por avalancha de escombros también es típico de
los eventos de colapso tipo Bezymianny (Siebert et al. 1987).

Más allá del complejo volcánico de Las Navajas, la avalancha de escombros está
cubierto cerca del volcán por lavas basálticas medianamente alcalinas, suelos
lateríticos basálticos y aluvión. Más al norte está cubierto por depósitos lacustres
probablemente depositados por lagos efímeros entre húmedos, y por varios
depósitos de flujo de pómez, uno de los cuales se asoció con el evento de
avalancha. Los conos de ceniza y los flujos de lava ligeramente alcalinos varían en
composición desde basaltos a mugearitas y andesitas basálticas y parece estar
químicamente relacionado con el vulcanismo hiperalcalino en Las Navajas.

Erupciones piroclásticas

Sierra Las Navajas está construida principalmente por depósitos piroclásticos


intercalados con lava de riolítica de composición similar. Los materiales
piroclásticos están expuestos dentro de Sierra Las Navajas en canteras o como
afloramientos erosionados, frecuentemente con alturas de 30 metros o más.
Complejo de flujo Las Minas

El complejo de flujo Las Minas, que contiene riolita con bandas de flujo de
obsidiana y depósitos piroclásticos extensos, representa el volcanismo más silíceo
en Sierra Las Navajas. Las rocas de Las Minas se encuentran al sur y al oeste de
lo que hoy es el pico más alto de Las Navajas, Cerro Las Navajas, en el flanco
noroeste cerca del pueblo de Ixtula Sembo y como bloques dentro de la avalancha
de escombros al norte

Esta unidad se conoce como el complejo de flujo Las Minas porque casi todas las
minas de obsidiana pre-Colonial y todas las modernas en Las Navajas se han
dirigido a la obsidiana verde de este complejo de flujo. La obsidiana Las Minas es
típicamente de color verde botella en la sección delgada, libre de cristales, con
una fractura concoidea perfecta e iridiscente.

Los bloques que carecen completamente de vesículas aparecen negros en la


muestra de la mano, pero los bordes finos casi siempre son verdes. La obsidiana
Las Minas no verde es extremadamente poco común. Sin embargo, a veces
puede aparecer de color marrón verdoso o marrón en la sección delgada. Las
esferulitas son raras, excepto en muestras altamente erosionadas, y los
fenocristales están ausentes.

La obsidiana de Las Minas típicamente crece en la superficie como rocas que van
desde 5 centímetros hasta casi 100 metros de ancho.

Las riolitas de Las Minas no vidriosas son de color beige o azul gris claro en la
mano muestra, generalmente afaniticas con una masa de suelo casi de porcelana
y microfenocristales de feldespato, anfíboles sódicos y piroxenos. Son comunes
las bandas de flujo muy delgadas en la escala de milímetros, al igual que la tinción
de oxidación marrón alrededor de los microfenocritales máficos. El color parece
ser en gran medida un artefacto de la intemperie. En la sección delgada la
desvitrificación a menudo esferulítico o fragmentado, la matriz consiste en
intercrecimientos de cuarzo y feldespato con pequeños cristales dispersos de
aenigmatita. arfvedsonita. Riebeckita y aegerina, Micro fenocristales incluyen
feldespato, cuarzo, aenigmatita arfvedsonita. y / o aegerina.

Complejo de flujo Guajalote

Los flujos de Guajalote se ubican en el flanco suroccidental de Sierra Las Navajas,


en dirección oeste, hacia la comunidad de Guajalote. Los flujos están compuestos
por obsidiana roja desmenuzada desmenuzada y riolitas vidriosas con bandas de
flujo.

Complejo de flujo Ixatla


Las riolitas Ixatla entraron en erupción antes y después del colapso del sector del
volcán. El flujo Ixatla caracterizado por una obsidiana marrón claro, libre de
fenocristales, comenzó a erupcionar antes del colapso del sector y está expuesto
tanto a lo largo del flanco sur de Las Navajas como en el depósito de la avalancha
de escombros al norte.

Las riolitas de Ixatla se encuentran dentro del depósito de avalancha de


escombros. Uno de estos flujos se expone como un paquete intacto, con la capa
rica en obsidiana característica en la parte inferior y riolitas cristalinas en la parte
superior, dentro del depósito de avalanchas de escombros en las paredes del
Arroyo Alcholoya. Estos primeros flujos de Ixatla pueden haberse ventilado a lo
largo del flanco sur del volcán, antes de que el colapso del sector eliminara una
gran cantidad de materiales excesivos creando así una ruta más rápida y fácil
hacia la superficie a través del anfiteatro colapsado. Las riolitas de Ixatla
comenzaron a llenar el anfiteatro colapsado.

Estos cubren el escarpe de avalancha, al occidente y nororiente y se exponen en


las paredes de profundos acantilados cortados a través de los flujos posteriores al
colapso.

La obsidiana transparente de Ixatla marrón o gris a veces es cristalina en la


muestra de la mano, pero con microcristales extremadamente pequeños de
feldespato y aegerina visibles en la sección delgada. Las bandas de flujo de
escala fina, vistas como variaciones de color en la escala de milímetros, son
comunes tanto en la obsidiana como en las riolitas cristalinas. Los flujos rioliticos
están claramente divididos en bandas, alternando bandas delgadas de obsidiana y
riolita cristalina o desvitrificada. Los piroclásticos asociados con este complejo
parecen ser depósitos a nivel de aire relacionados con pequeñas erupciones que
acompañaron el emplazamiento de riolitas después del colapso.

Complejo de flujo El Horcón

Las riolitas de El Horcón se exponen mejor como altos picos remanentes tanto
dentro del anfiteatro colapsado como desbordando los bordes este y oeste de la
escarpa de avalancha. Estos picos. Cerro Ladera Grande, Cerro El Horcón, Cerro
Jacal y Cerro La Providencia, son las características más distintivas visibles en
Sierra Las Navajas.

Las riolitas de El Horcón a veces contienen bandas de flujo de obsidiana rica en


sanidina que aparece gris opaco en la muestra de la mano y marrón o gris verdoso
en los bordes delgados.
Abundantes fenocristales y microfenocristales que varían en tamaño a
aproximadamente 4 mm, incluye sanidina, óxidos opacos y aenigmatita. Las
riolitas cristalinas aparecen en la muestra de la mano y en la sección delgada de
forma similar a los otros flujos de riolita ya descritos, aunque los fenocristales de
feldespato son a menudo un poco más grandes y más abundantes que en los
otros flujos.

Las erupciones piroclásticas asociadas con el complejo El Horcón fueron


aparentemente muy explosivos, por lo que la mayoría de los depósitos
piroclásticos atribuidos a este flujo se encuentran al norte de Sierra Las Navajas,
están separadas del depósito de la avalancha de escombros subyacente por una
capa de suelo, lo que indica un lapso de tiempo significativo entre el colapso del
sector y las erupciones piroclásticas.

Traquita comendítica de Cerro Gordo

El área se caracteriza por las traquitas comendíticas que estallaron en el Cerro


Gordo, al oeste de Las Navajas. El complejo volcánico de Cerro Gordo es
contemporáneo con Las Navajas. Donde las riolitas post-colapso desbordan la
escarpa de la avalancha occidental, y también se desbordan traquitas
comendíticas asociadas con el complejo de Cerro Gordo. Por el contrario, las
lavas traquíticas de Cerro Gordo parecen haber cubierto el extremo norte del
oeste de la franja de avalancha.

Avalancha de escombros y depósitos piroclásticos asociados

Avalancha de escombros

La Sierra Las Navajas fue la fuente de un depósito masivo de avalanchas de


escombros que resultaron del colapso del sector del flanco norte del volcán
aproximadamente hace 2 millones de años. La avalancha de escombros viajó
aproximadamente 48 km hasta la al norte de Sierra Las Navajas y cubrió un área
de al menos 510 km2. La distribución del depósito dentro y al norte del cañón del
Río Grande de Tulancingo coincide con la proyección hacia el norte y hacia el
noreste de las paredes del colapso depresión lejos del volcán.

Los flujos de El Horcón posteriores al colapso desbordaron la escarpa oriental,


oscureciéndola en gran medida. La ubicación de la escarpa se infiere debajo de El
Horcón que fluye en base a la expresión topográfica y en los límites orientales de
la exposición a la avalancha. Debido a que el depósito se produce en ambos lados
del Cañón de Tulancingo, debió haber sido emplazado antes del corte del cañón.
El sistema de fallas normales con tendencia al NW corta la avalancha de
escombros después de su emplazamiento, de modo que la superficie superior del
depósito al norte de la falla es aproximadamente 100 metros más alta que al sur
de la falla. Un afluente al Río Tulancingo siguió preferentemente este camino,
formando el Arroyo Alcholoya.

El depósito, como se expone en las paredes del cañón del río Tulancingo tiene un
espesor de 25 a 200 metros. Basado en un espesor promedio entre 45 y 80
metros, el depósito tiene un volumen estimado de 32 ± 9 km3. Porque mucho del
depósito está enterrado debajo de basaltos y aluvión, y aún más se ha erosionado
en 2 millones de años desde su emplazamiento, el espesor original y la extensión
máxima del depósito de avalancha de escombros son desconocidos.

El depósito consiste en bloques intactos de riolita, obsidiana, basalto y a veces


traquita de cientos de metros y una fina matriz. La obsidiana es tanto del complejo
Las Minas como del complejo Ixatla, basado en propiedades físicas y en análisis
químicos de bloques dentro del depósito de avalancha, que son idénticos a los de
la riolita que fluye en Las Navajas. Las traquitas, que se pueden encontrar como
grandes bloques en el depósito de avalanchas de escombros dentro del cañón de
Alcholoya, deben haber sido recogidas de los depósitos de Cerro Gordo al norte
de Las Navajas durante el transporte de avalanchas

Piroclástos El Meco

Más de 40 km al noreste de Las Navajas y al suroeste del pueblo de Agua Blanca


cerca del Rio El Meco, un depósito de flujo piroclástico de 30 metros de grosor se
superpone directamente depósitos de avalancha de escombros, que se
caracterizan aquí por la riolita, obsidiana y bloques de basalto de no más de 40 cm
de ancho en una matriz de harina de roca. El depósito piroclástico es mal
clasificado, con pequeñas líticos (aproximadamente 1 cm) y piedra pómez (hasta
15 cm) en una matriz de grano fino.

Volcanismo máfico asociado

El volcanismo máfico en Las Navajas consiste en basalto levemente alcalino,


mugearita (traqui-andesita basáltica) y conos de ceniza de andesita basáltica y
flujos de lava que estallaron alrededor de la base de Las Navajas, particularmente
al norte y al este. De nueve conos de ceniza individuales en el área, seis son
predominantemente alcalinos (basaltos y mugearitas). Los tres restantes exhiben
composición variable que van desde basaltos alcalinos a andesitas. Esta
asociación de basaltos medianamente alcalinos con centros de riolita hiperalcalina
es común, particularmente donde el volcanismo hiperalcalino se asocia con
tectónica extensional.
Basaltos del Cañón

Los cursos de lava volcánica más antiguos expuestos en el área del campo son
una secuencia de cinco flujos de lava basáltica expuesta en el Arroyo Alcholoya al
norte de Las Navajas. Estas localmente subyacen los depósitos de avalancha de
escombros de Sierra Las Navajas. El más alto de estos los basaltos, expuestos
cerca del pueblo de San Bartolo en el cañón de Alcholoya, han sido fechados a
2.41 ±0.08 Ma.

Conos cineríticos y flujos de lava asociados

Una alineación del noroeste de conos de ceniza indica que el menor el estrés de
compresión se orientó hacia el noreste. Esta la tendencia se puede ver en los
conos de ceniza de Cerro Tezontle, Cerro Aguatepec, y Cerro Tepenacasco que
juntos forman una alineación al noroeste, y en los conos de ceniza Cerro Tecoaco,
Cerro Verde y Cerro Prieto, que forman una alineación casi paralela al suroeste de
la primera. Una tercera tendencia menos marcada, noroeste-sureste puede ser
trazado desde Cerro Gordo a través de un cono de ceniza sin nombre cerca de
Nopalillo (Cerro de Nopalillo) al sureste de La Paila. Más evidencia de una
orientación noreste estrés extensional dominante se ve en las fallas normales de
tendencia noroeste que cortan el cañón del Río Grande de Tulancingo al norte

Fonotefrita de Cerro Gallo

El mínimo magma silícico que estalló en esta área es un nefelina-normativa


fonotefrita. Estalló al norte y ligeramente al oeste de Cerro Gordo. Es la única roca
nefelina-normativa encontrada cerca de Las Navajas. Tiene fenocristales de
olivino y plagioclasas de un orden de magnitud mayor que los encontrado en los
basaltos y andesitas basálticas que rodean a Sierra Las Navajas. La matriz es
completamente criptocristalina, en vez de criptocristalina o vidriosa, con
plagioclasas y olivino individualmente discernibles.

Depósitos lacustres

Los depósitos lacustres indican que probablemente haya grandes montículos en el


depósito de avalanchas de escombros que afectaron significativamente el drenaje.
Tales montículos son característicos de las avalanchas de escombros volcánicos
jóvenes. Desde entonces, estos montículos han sido desgastados y erosionados,
dejando solo los depósitos del lago como evidencia de su emplazamiento y como
parte del depósito de avalanchas.
figura. Mapa geológico Lighthart (2001)
Resultados de la Integración geológica de la región y el área de estudio. Formatted: Font: Bold

De acuerdo a la integración de las a las litologías reportadas, descritas y Formatted: Indent: First line: 0.49"

cartografiadas, principalmente por los trabajos geológicos más importantes,


realizados hasta el momento en el área de estudio (Lighthart, 2001; Servicio
Geológico Mexicano, 2005), descritas y representadas en el mapa geologico de
Lighthart (2001) se realizó realizamos una correlación con las litologíaslitológica
que permite unificar y ordenar las secuencias involucradas en la región.

de la carta geológica de Tulancingo (F14-D82) realizada por el Servicio


Geológico Mexicana

Las rocas más antiguas corresponden a una secuencia sedimentaria Cretácica


correlacionable con la parte superior de la Fformación Soyatal, que aflora
restringidamente en los sectores noroeste y norte-centro de la carta F14D82
Tulancingo (SGM, 2005), específicamente al norte de Huasca de Ocampo y en la
barranca Salto de Alcholoya.

Sobreyaciendo discordantemente al basamento sedimentario Cretácico, se Formatted: Indent: First line: 0.49"

manifiestan diferentes eventos volcánicos sobrepuestos., Een el sector occidental


se tiene el dominio de rocas volcánicas cuyas edades varían del Oligoceno al
Mmioceno definidas informalmente en el distrito minero Pachuca- Real del Monte.

Entre las rocas volcánicas, las más antiguas están representadas por
derrames de composición andesítica con intercalaciones de brecha volcánica
andesítica de la misma composición y de edad oligocéenica (andesita-brecha-
andesitica; SGM, 2005), correlacionables con el paquete andesítico que forma la
base del volcanismo del Grupo Pachuca., Aa la esta secuencia le siguen flujos de
riolita con intercalaciones de depósitos de caída libre bien piro-consolidados del
Mioceno (Riolita-Ignimbrita de la Formación Vizcaína; SGM, 2005)., Lle
sobreyacen lavas riodaciticas con niveles de material volcano epiclástico
comúnmente bien estratificados, también del Mioceno (Riodacita de la Formación
Cerezo; SGM, 2005), que se representan en una franja de 7km de longitud,
orientada al NW-SE. Las ultimas emisiones Miocénicas corresponden a una
secuencia volcánica de la Formación Zumate (de dacita-brecha volcánica dacÍtica;
SGM, 2005) de la Formación Zumate.

En l Plioceno en la región , está representado por manifestaciones


volcánicas efusivas y explosivas de composición intermedia (toba andesítica-
andesita, (TplTA-A; SGM, 2005), constituidas por una toba andesítica de lapilli,
con intercalación de una andesita basáltica. Estas rocas, que cartográficamente,
se relaciona con la unidad Fonotefrita Cerro Gallo delimitación realizadareportada
Commented [jrVIDAL1]: Discutir este punto en el siguiente
por Lighthar (2001) que denomina como Fonotefrita de Cerro Gallo. ¿? apartado
El Plioceno- Pleistoceno está representado por la unidades volcánicas
máficas datadas en 2.58±0.15 y constituidas tanto por lavas, capas clásticas,
bloques, bombas y niveles de escoria de la Formación San Cristobal (basalto-
piroclástico de la Formación San Cristobal; SGM, 2005). Esta unidad, , constituida
por lavas, capas clásticas, bloques, bombas y niveles de escoria (2.58±0.15) y
cartográficamente involucra a flujos de basalto y conos cineríticos reportados en la
Sierra Las Navajas por Lighthart (2001). Una edad de 2.41 ±0.08 Ma fue obtenida,
por este último autor, en la unidad mencionada como se relaciona con los Basaltos
del Cañón que Lighthart (2001) menciona en su trabajo y fecha en 2.41 ±0.08 Ma.

En el Pleistoceno, se origina el Ccomplejo Vvolcánico Rriolítico Las Navajas


(CVRLN; SGM, 2005), el cual está constituido por flujos de lava, domos, depósitos
de caída y de flujos piroclástico, de composición riolítica, que producen una así
como gran cantidad de vidrio volcánico.

De acuerdo a Lighthart (2001) la historia volcánica de Sierra Las Navajas


puede definirse por tres eventos principales de volcanismo. Un primer evento
efusivo considerado como el de mayor volumen, un segundo evento compuesto
por actividad diversa tanto efusiva, como explosiva y de colapso, y finalmente, uno
tercer evento de volumen limitado y exclusivamente efusivo.

Las unidades litológicas definidas por Lighthart (2001) para la Sierra Las Navajas
contemplan se divide en cuatro complejos de flujo que distintos en dos etapas.
Cada se uno se componen de unao o más flujos de lavas que golpean derivadas
la de una misma cámara de magmamagmática. La etapa inicial de vulcanismo en
Sierra Las Navajas está representada por tres secuencias de flujo de obsidiana: 1)
el Guajalote mínimamente expuesto y que fluye hacia el Ssuroeste, 2) el de Las
Minas, que representa una importante fase de construcción del volcán y fluye
hacia el Ooeste y el Ssur, así como, 3), y el de Ixatla, que fluye al sur y en el hacia
el centro del volcán, y 4). Las riolitas de El Horcón que representan el derrame
riolítico eruptivo final en la Sierra Las Navajas.

Formatted: Indent: First line: 0.49"

El complejo de flujo Las Minas representa una importante fase de construcción de


montaña en Las Navajas

Los flujos de Guajalote estallaron durante una ruptura en las erupciones de Las
Minas, ya que un torrente de Guajalote se acuña entre las torres de Las Minas,
donde los dos se ven juntos.
El flujo de Ixatla hace erupción y la actividad piroclástica asociada a este complejo
de flujo pudo haber desencadenado la avalancha de escombros tras el colapso.

El colapso del sector ocurrió al final de la primera fase de volcanismo produciendo


una avalancha de escombros masiva depositada al norte del volcán y dejó un
anfiteatro en forma de herradura abierto hacia el norte dentro del volcán. Las
erupciones piroclásticas siguieron inmediatamente que el sector colapsó cuando la
cámara de magma se desestabilizó por la eliminación de las rocas volcánicas
superpuestas. La avalancha de escombros y los piroclásticos se entremezclan en
depósitos distales, lo que indica un emplazamiento simúltaneo.

Los depósitos piroclásticos típicamente ignimbritas acompañados de depósitos de


caída, bloques y ceniza presentes están relacionados con cada uno de los flujos. Commented [jrVIDAL2]: Pasar esto a la discusión

Las riolitas de El Horcón representan el derrame eruptivo final en la Sierra Las


Navajas.

Otras unidades volcánicas contemporáneas al Complejo volcánico de flujos Las


Navajas son definidas por Lighthart (2001) como el Lighthart (2001) correlaciona al
Complejo volcánico de flujos Las Navajas con el Complejo Vvolcánico Traquita
Cerro Gordo (CVTCG) correlacionable con la unidad Traquita Guajolote
cartografiada por el Servicio Geológico Mexicano (2005). . Sin embargo, la
Traquita Guajolote fue cartografiada por el Servicio Geológico Mexicano como un
evento posterior al Complejo volcánico Las Navajas. Commented [jrVIDAL3]: Pasar esto a la discusión

Posterior al evento del complejo volcánico de las NavajasCVRLN Formatted: Indent: First line: 0.49"

ocurrieron emisiones de lava y explosiones constituidas por material piroclástico


(Basalto y piroclástico-basalto; SGM, 2005). También han sido reportados , a
través de conos monogenéticos con , se forman depósitos pumicíticos porosos,
débilmente endurecido y sin matriz, consistente en lapilli y ceniza bien clasificada
(piroclástico; SGM, 2005). Otras unidades, basálticasaltos cartografiadas por el
SGM (2005) contemplan con iintercalaciones de toba basáltica (basalto-toba
basáltica). Esta litología puede ser correlacionada con y que Lighthart (2001)
engloba la unidad como flujos jóvenes de lava y conos cineríticos definida por
Lighthart (2001).

Finalmente, las unidades más jóvenes en la región se componen por Los


depósitos de la avalancha de escombros fueron cubiertos por estos flujos de lava,
depósitos lacustres, y aluviones, que particularmente han sidoson expuestos
dentro del cañón del Río Grande de Tulancingo.
Discusión Formatted: Font: Bold

Solo se trabajó con el trabajo de tesis de Lighthart (2001), ya que hasta ahora
representa el estudio más completo de la Sierra de las Navajas, se correlaciono
cartográficamente con la carta del Servicio Geológico Mexicano para comprender
y unificar los dos trabajos así mismo establecer la cronología de eventos y
relaciones de campo. Sin embargo, se detectaron las siguientes interrogantes:

1. No se determinó con precisión la relación cartográfica de algunas


litologías descritas por Lighthart (2001), como:
Ignimbritas terciaras y el Complejo riolitico de Tulancingo, aparecen en
el mapa, pero no se mencionan en la descripción.

2. La unificación de la litología Traquita Cerro Gordo Lighthar (2001) y


Traquita (QhoB-TB) del SGM no se pudieron asociar, ya que Lighthar
menciona que este fue un evento contemporáneo a las emanaciones de
flujo del Complejo Volcánico y el SGM lo maneja como una unidad
reciente, posterior a los flujos.
3. Se abordan de manera general los depósitos piroclásticos de flujo y de
caída, no clara la relación de cuáles corresponden a cada uno de los
eventos, si es que están asociados o simplemente son originados por
otro complejo volcánico vecino.
4. En la parte inferior izquierdo del mapa se representa una litología
denominada “piroclastos calcoalcalinos”, sin embrago, no se describen
dentro de la investigación y al relacionarlo con las litologías del SGM no
se determina una relación concreta. Lighthart (2001), lo representa en
una sección geológica y lo coloca como un evento reciente.

No existe una columna estratigráfica correspondiente al mapa geológico de


Lighthart (2001), que ayude a establecer el orden de sucesión de los
eventos y las relaciones campo.

Conclusiones Formatted: Font: Bold

El Como resultado de la integración der las relaciones litológicas, fue Formatted: Indent: First line: 0.49"

posible permitió realizar una columna estratigráfica compuesta para explicar de


manera general todos los eventos geológicos que ocurrieron en el área de Las
Navajasestudio.
La interpretación de la información recopilada, a partir de los trabajos
geológicos previos, permitió d en primer momento detectar los algunos estudios
geológicos específicos aspectos faltantes dentro de los trabajos geológicos
previos:

1.- El establecimiento cronológico detallado para comprender la cronología


de los eventos volcánicos.

2.- específicos que generaron los El estudio de todos los depósitos


piroclásticos involucrados en la actividad del volcán. En particular los que delimitan
aque se encuentran al norte de la Sierra de las Nnavajas y de los cuales no se
tiene un reconocimiento detallado, por lo que se requiere hacer la una
caracterización petrológica (petrografía y geoquímica) y una cartografía el estudio
petrográfico preciso de dichos depósitos que permitan descifrar su origen y
dinámica de su emplazamiento.

3.-

El reconocimiento en campo nos ayudaría a corroborar, detallar y


establecer de manera clara la cartografía del sitio.

Respecto a la problemática planteada al principio de esta investigación se


concluye en que lo más factible es cambiar El estudio geológico de los depósitos
piroclásticos distales del CVRLN en la lazona de estudio (ComplejoVolcánico Las
Navajas) y enfocarlo en la zona de la Barranca de Alcholoya, donde ya que este
representa un punto que nos aportaría se definirían elementos clave para realizar
una interpretación de los depósitos piroclásticos , los cuales nos arrojarían
información relevante sobre la evolución tectono-magmática del Complejo y su
relación con la geodinámica asociada aldel contexto geodinámico del Eje
Neovolcanico.

Las investigaciones realizadas en la Sierra de las Navajas son escasos, así que es
un área con potencial para realizar estudios específicos.
Bibliografía Formatted: English (United States)

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