Вы находитесь на странице: 1из 10

Cannabis medicinal: un conflicto inconcluso en las

ciencias médicas

Autores: José Vera


Amaro Pérez
Curso: Psicología Social Clásica
Profesor de Cátedra: José Toro
Profesora Ayudante: Antonia Gutiérrez
Fecha: 13/05/2019
¿Cómo podemos explicar el razonamiento qué existe en los gobiernos y sus diferentes
políticas públicas, de tipo preventivas en la sociedad?, ¿es la prevención útil y efectiva?.
Buscaremos acercarnos a las respuestas analizando un tema de contingencia social,
como lo es el consumo de cannabis en Chile, poniendo énfasis en cómo se realizan las
campañas preventivas con respecto a su consumo y evidenciando la poca utilidad de las
mismas. Siendo estos modos de promoción enfocados en los fines y no en los medios,
donde resulta más sencillo realizar una política del miedo en vez de una concientización
a la población. Pero antes es necesario ver de qué manera el Estado cómo tal llega a
tomar determinada posición prohibitiva y también penalizadora.

Cuando se comienza a hablar de temas tan controversiales como los son el uso de
cannabis ya sea por uso médico o recreativo es que emergen variadas posturas que
apoyan el uso de algunas drogas como lo algunas que la niegan y desaconsejan
profundamente su consumo ya sea recreativo o medicinal. Ambas posturas son apoyadas
por sus respectivas miradas científicas acerca del tema en donde no se ha llegado a un
consenso claro si es que benefician o perjudican a la salud ya que su amplia composición
química hace complejo su análisis (Luengo y Jara, 2016)

Gracias a este debate inconcluso acerca del cannabis en nuestro País, se ha llevado a
cabo la discusión de parte en el poder legislativo sobre un proyecto de ley llamado “cultivo
seguro” las cual fue impulsada y solicitada por dos asociaciones de cannabis medicinal
las cuales tienen presencia en varios países de Latinoamérica y llevada a la cámara de
diputados por la diputada Karol Cariola. Las asociaciones que impulsaron este proyecto
de ley son “Mamá Cultiva” y la Fundación Daya. Esta permitiría la plantación de cannabis
con el fin de uso medicinal y evitaría la incautación de plantas en una redada policial si él
o la persona que se le incautaron sus plantas presenta una receta médica que pruebe la
necesidad del cannabis.

Organismos importantes de la salud, cómo lo es el Colegio Médico de Chile han


declarado su oposición frente a este proyecto de ley argumentando que el uso de
cannabis, ya sea bruta o procesada, no está aprobada por ninguna asociación de
estupefacientes, además de que ningún país europeo ha aprobado el cultivo de
marihuana medicinal, dadas las medidas de control y de seguridad necesarias para una
población consumidora. (Colegio Médico de Chile, 2019).
Estas declaraciones están mayoritariamente respaldadas por los estudios de la fundación
Epistemikos, que refieren a estudios médicos basados en la evidencia (MBE), pero ante
lo expuesto anteriormente nace la interrogante: ¿qué son estos estudios MBE?. Ël
modelo de estudios médicos basados en evidencias son extensas revisiones
bibliográficas acerca de investigaciones médicas referentes a temas correspondientes a
la medicina, además de la aplicación de ideas formales a raíz de estas. (Simonovis,
Baddour, Garcia y Madera, 2001)
El propósito de formar un nuevo método de revisión bibliográfica refiere al conformar un
nuevo paradigma dentro de las ciencias médicas y así formar una observación clínica
sistemática y la aplicación de los conocimientos postulados en la evidencia existente a
pacientes que presenten una condición similar a la descrita en el estudio (Simonovis. Et
al, 2001).
El MBE reconoce tres niveles de sustentación médica que se dividen en: 1) bueno, 2)
malo y 3) pésimo. Los primeros son los estudios sistemáticos de revisión bibliográfica,
más conocidos como meta-análisis, asimismo se pueden catalogar en este grado los
estudios clínicos randomizados (ECR), entendiéndose como randomizado a una
investigación clínica con una muestra elegida aleatoriamente (Letellier y Moore, 2003) el
segundo son estudios observacionales como los de cohorte o el de caso-control y el
tercero. que son los estudios retrospectivos, casos anecdóticos y casos clínicos
particulares. (Duclos,1999) también se puede agregar un cuarto grado que sería la
experiencia clínica de una o un médico/a. Es tal el caso de hegemonía de este modelo
de ciencia que en algunos países se les obliga a los médicos a seguir los procedimientos
respaldados por los estudios MBE y si un médico actúa de forma distinta, el paciente
puede demandarlo por malas prácticas (Duclos,1999). Se puede considerar que el
objetivo de este método clínico investigativo nacido en los finales del siglo XX fue el de
agilizar el diagnóstico y el tratamiento de las enfermedades, ya que la evidencia
recopilada previamente de algún caso aleatorio de la misma enfermedad y el tratamiento
usado en aquella ocasión es que marque un camino a seguir por el médico que use este
método.

En contraparte existen médicos que se oponen a este tipo de estudios ya que relegan el
sentido común y la experiencia clínica del médico, igualmente sus detractores opinan que
hacen una vista ciega de la particularidad de la persona en cuestión, negando así su
individualidad y la cualidad subjetiva de cada persona (Fernández Sacasas, 2011),
también en la elección de las personas en los estudios randomizados habitualmente se
excluyen a lxs ancianxs, a las mujeres y a pacientes con comorbilidad, entendiéndose
esta como personas con más de una enfermedad crónica (Diaz y Gallego, 2004) Así
mismo se cree que la relación médico-paciente se ve deteriorada por el uso del tiempo
en la búsqueda de la evidencia en vez del acompañamiento emocional que requiera el
paciente en el momento de recibir su tratamiento, haciendo así una medicina
deshumanizada (Letellier y Moore 2003), aspecto fundamental en el ejercicio de la
medicina en busca del bienestar de la persona

Otra crítica potente al uso del MBE es la realizada por el autor ya mencionado Fernández
Sacasas (2011) que afirma:
‘’Más de 50 % de las áreas de la Medicina están descubiertas de evidencias. En el manejo
de un enfermo, el médico práctico tiene que enfrentar múltiples problemas, para los
cuales no existen evidencias; en la farmacopea actual se usan casi 100.000 preparados
medicamentosos y no pasan de 1.000 los que han sido sometidos a evidencias’’.

Otras investigaciones contemporáneas a la formación del modelo MBE es que se


descubre el sistema endocannabinoide, el cual descubre dos tipos de receptores de
cannabinoides presentes en el cuerpo humano (Sulak 2015). A partir de aquí es que se
comienza el estudio de las propiedades médicas de los cannabinoides presente en el
cannabis, estos en su mayoría están compuesto por el Tetrahidrocanabinol o THC que
es el principal componente psicoactivo de la cannabis , también el Cannabidiol o CBD,
que es el principal componente analgesico de esta y en menor cantidad otros
cannabinoides como cannabinol (CBN) y cannabigerol (CBG) (, PTSD: National Center
for PTSD ,2015). Y debido a la variedad Genética que se ha logrado con los métodos de
Mendel es que se han conseguido 3 grandes grupos de cannabis: en primer lugar son las
que tiene altas concentraciones de THC y bajas de CBD, en segundo lugar están las que
tienen un concentración homogénea de ambos cannabinoides y en tercer lugar están las
que tienen baja concentración de THC y altas concentraciones de CBD ( Langley 2019).
Gracias a esta variedad genética se puede lograr hacer tratamientos especializados para
las distintas dolencias que pueden afectar a un paciente médico, en donde son posibles
de tratar dolores crónicos, espasmos musculares, Náuseas, etc. (Langley,2019), por lo
que podemos notar que habrá una raza de planta de cannabis específica para el malestar
del paciente en cuestión, creando así una incongruencia con el modelo MBE que buscaba
replicar el tratamiento que se revisó en la búsqueda bibliográfica por parte del médico.

Entonces cabe preguntar si ¿es el MEB un buen modelo a seguir desde las ciencias
médicas para prohibir o incentivar el uso de medicinas alternativas, en este caso el
cannabis medicinal?, Nosotros creemos creemos que falta fundamentación más precisa
al respecto, partiendo desde la crítica que realiza Fernado Sacasas (2011). Además, es
interesante qué pese a que sí hay médicos que no se guían por dichos modelos, y que
tengan argumentos al respecto para estar apartados del MBE siga siendo tan difícil
visibilizar dichas posturas y legislar con respecto al uso de cannabis sativa, incluso yendo
más allá de la prescripción médica. Nuestra pregunta guía es ¿Por qué los planes de
prevención sobre el consume de marihuana fracasan?, ¿Es la forma de informar la
población la adecuada?
Según el último informe de consumo de drogas en las Américas realizado este 2019 por
la OEA este vislumbro el alto consumo de algunas drogas por parte de estudiantes
secundarios de nuestro país, en donde se vio que el 24% de ellos admiten fumar tabaco,
el 30% admite consumir cannabis sativa y el 4% ha consumido cocaína (CNN 2019). Ante
estas cifras que ponen en alerta sobre al Estado sobre la situación de consumo de drogas
en Chile por parte de los estudiantes de educación media, es que este implementará un
nuevo plan antidrogas. El ministro de salud Mario Santelices declara :”coinciden con la
baja percepción de riesgo que tienen los jóvenes del daño que las drogas producen en el
sistema nervioso, y crean un daño neurológico permanente” (CNN, 2019). Ante estas
declaraciones podemos inferir que la campaña va en pro de mostrar esos daños
neurológicos que dejarían las drogas, pero si recordamos y diferenciamos esta campaña
con la que realizó la CONACE en 2008 titulada “vuelve a ser inteligente, no consumas
marihuana1” en donde la razón de crearla era con la finalidad de ridiculizar a las personas
consumidoras de marihuana, mostrándolas con claras faltas de facultades motoras y
mentales. Esa razón instrumental que en pro de crear un miedo que podemos entender
como el medio sin considerar los fines para las cuales se puede utilizar la marihuana, en
este caso particular el miedo que intenta ejercer con respecto al uso de marihuana está
efectivamente funcionando al revés, de hecho esto lo muestra el estudio realizado por el
SENDA en el que podemos evidenciar un aumento de consumo de marihuana entre los
años 2008 hasta el 2016, los cuales incrementan desde un 26% hasta un 35,7%. a partir
de lo anterior podemos especular que la misma campaña preventiva puede estar
fomentando la curiosidad de su efecto y su capacidad de abstraer de la realidad a la
persona que la utiliza, sumado a esto tenemos que tener en cuenta la creciente
aceptación del uso de marihuana en la sociedad, pasando de un ‘’interruptor de la
realidad social’’ a ser parte de la cotidianeidad, con lo cual actualmente se percibe su uso
de manera más normalizada o habitualizada (Canales, Estrella y Cottet, 2014).

Hay variados estudios que se contradicen en su disputa si la marihuana hace mal o no,
en donde parece haber distintas utilidades de la razón para hacer más dicotómica esta
disputa, en donde la autoridad, pues esta figura es la que ha estudiado del tema y por su
título debe saber más que los que lo escuchan por lo que quien dice la información juega
un papel importante para hacerla creíble. Podemos tomar como ejemplo las
declaraciones del psiquiatra de la universidad de los Andes Álvaro Jeria que dijo “... Basta
con consumirla 30 veces (la marihuana) para tener 300% más de probabilidad de tener
esquizofrenia …” mientras que desde la otra vereda la fundación Daya declara que el
uso medicinal de la marihuana se puede utilizar con enfermedades neurodegenerativas
gracias al componente cbd que es neuroprotector, además de usarse en múltiples
enfermedades dolorosas como la fibriomalgia etc. (Romero, SF).

Esta disputa científica con distintas evidencias nos hace pensar: ¿Qué lado tiene razón?,
¿a cuál creerle si ambas tienen evidencias científicas sobre el tema? pues hemos visto

1
Para verla ingrese a https://www.youtube.com/watch?v=IcSNKBkcX6Y
que la nueva religión absoluta de conocimiento está en la ciencia y los avances de ésta,
pero cuando se contraponen es difícil tomar la decisión correspondiente de quien dice la
verdad. Por otro lado no hay que olvidar que la ciencia está hecha por personas y estas
tienen intereses personales que motivan la temática y la postura que adoptan frente al
estudio, si por ejemplo observamos el lugar de trabajo de don Álvaro Jeria, su postura
emerge desde el ámbito clínico, y su lugar de nacimiento profesional es desde una
universidad privada asociada a personas de pensamientos políticos conservadores, y
desde su profesión que es la recomendación de fármacos frente a patologías de carácter
mental y si la marihuana que fue usada por sus propiedades medicinales en las culturas
precolombina, esta planta podría reemplazar a la utilización de muchos fármacos para la
ansiedad , depresión etc. Y como dice Keneth Gergen “el conocimiento puede
transformarse en poder en manos de otros “(1998) ese poder aquí, podemos decir que
es el poder de convencimiento que los argumentos podrían adoptar, además que en el
programa en donde el doctor emitió sus declaraciones no existía una contraparte que
debatiera sus acotaciones.

Desde otro punto de vista se pueden ver desde las declaraciones que fueron
anteriormente mencionadas por parte del Ministro de Salud Mario Santelices, es que se
ha visto un claro cambio de la concepción de las drogas por parte de la juventud de hoy
en día, pues antes las drogas eran muy mal vistas, con mucho miedo por su posible
efecto y desde lejos pues podría producir una alta dependencia en caso de probarlas y
así evitar una posible consecuencia negativa en un futuro. Es por este claro cambio que
no se puede tratar el temas de las drogas desde una fomentación del miedo por su posible
efecto, pues por parte de la juventud actual se ha perdido ese miedo hacia estas y se ha
reemplazado ese miedo por un sentimiento de curiosidad por sus efectos en donde la
dependencia histórica de los principios sociales normativos desde los cuales se juzga el
uso de drogas se encuentran unidos a la circunstancia histórica contextuales en las
cuales se formulan, estas se encuentran en constante cambio que se da en conjunto con
el mismo cambio social, producto del creciente conocimiento que se tiene en estas y otras
materias (Gergen, 1998).

Alrededor del mundo existen programas antidrogas que saben que el miedo no ha servido
para evitar que los/ las jóvenes consuman y se animen a probar las drogas, ¿y cómo es
que han cambiado dichos programas en estos países?, pues han visto que hay que
satisfacer esa curiosidad sobre el efecto de las drogas de cierta forma, es por eso que el
programa antidrogas Holandés llamado Drugslab2 en donde hay dos presentadores

2
para ver el capitulo de druglab acerca de la mariihuana ingrese a
https://www.youtube.com/watch?v=FAh0eGvXa1g&has_verified=1
jóvenes (una chica y un chico ) los cuales capítulo a capítulo van probando distintas
drogas con el fin de mostrar y documentar que les hace sentir las drogas que van
probando. su lema es “probamos las drogas por ustedes, para que no tengan que
hacerlos ustedes “. Iniciativas como estas, que apuntan a la información y concientización
de posibles consecuencias y sensaciones pueden generar más conciencia de la temática.
Sin embargo, el gobierno insiste en medidas instrumentalistas y no basadas en promover
la toma de conciencia de la población.

A modo de una breve conclusión y también de opinión personal, debemos decir que la
fundamentación que otorga el colegio médico para no aprobar el uso de cannabis
medicinal nos resulta algo vago, esto de sobremanera teniendo en cuenta la cantidad de
medicamentos que no tienen evidencia de su real efectividad, sobre todo cuando cada
caso puede ser tan distinto a otro. Por lo tanto, cómo modelo a seguir para legislar al
respecto de uso de medicinas alternativas queda a medio camino, ya que no pude
realizarlo de manera efectiva y se basa en generalidades que no en todos los casos
pueden resultar extrapolables. Como alternativa al MBE deberían existir comisiones
investigadoras especializadas impulsada desde el mismo gobierno o congreso, con el fin
de recabar información lo más verídica posible y menos sesgada, de realizar estudios
comparados y así llegar a conclusiones más precisa sobre cómo debe legislar y qué es
lo mejor para la población. No debemos dejar de tener en cuenta el alto índice de
consumo en chile, por lo que debería ponerse más atención el por qué se ha fallado en
las distintas medidas preventivas que el Gobierno Chileno ha utilizado.
Y para finalizar es que creemos entre ambos autores que una política basada en el miedo
no concientiza sobre el consumo de marihuana, donde el gobierno por medio de sus
políticas públicas y su promoción apelan a la efectividad a través de su razonamiento
instrumental donde los medios apuntan a la información sesgada en una materia que en
transcurso de la historia ha cambiado debido a que constantemente se desmitifica el
consumo de marihuana, en donde la exposición de información de distintas perspectivas
de su uso han fomentado el ser responsables concientizados, pero que el principal
promotor público del bando rígido de la negatividad sobre el consumo de marihuana sea
el gobierno y su promoción del miedo a través de los medios masivos de comunicación,
coartando en algunos caso la agencia del individuo, esto gracias a una razón instrumental
y no a la información y responsabilidad de la población. Esto apoyado por la baja
efectividad en políticas públicas, como lo que sucede con el uso de marihuana.
Referencias:
-Colegio Médico de chile. (2019) DOCUMENTO DE POSICIÓN DEL COLEGIO
MÉDICO DE CHILE SOBRE EL PROYECTO DE LEY QUE“MODIFICA EL
CÓDIGO SANITARIO PARAINCORPORAR Y REGULAR EL USO
MEDICINALDE PRODUCTOS DERIVADOS DE CANNABIS” .Recuperado de
http://www.colegiomedico.cl/wp-
content/uploads/2019/06/documento_cultivo_seguro.pdf

-Chávez,M.(22 de Marzo 2019). Escolares Chilenos son los que más consumen tabaco,
marihuana y cocaína en toda América. Recuperado de
http://www.economiaynegocios.cl/noticias/noticias.asp?id=555911
-Diaz,J. y Gallego,B. (2004). Medicina basada en evidencias. Controversias actuales.
Revista Habanera de Ciencias Médicas.20(3)

-Duclos,J. (1999). Medicina basada en evidencias: ¿una estrategia que acerca o aleja a
la medicina interna?. Revista Médica de Chile.127(11). doi:
http://dx.doi.org/10.4067/S0034-98871999001100015

-Fernández Sarcasas,J. (2011). Controversias en torno a la medicina basada en


evidencias. Revista Habanera de Ciencias Médicas.10(3)

-Jeria. A(entrevistado). (11 de Diciembre 2018). (Emisión diaria). Abusleme(Director). 24


horas noticias. Santiago, Región Metropolitana, Chile
-Langley,P. (2019) Establishing Credibility for medical marijuana: the Proposed of
Prometheus Dispensary Registry for Botannical Cannabis. Innovation in
Pharmacy.10(1) Doi:https://doi.org/10.24926/iip.v10i1.1553

-Letellier,M. y Moore,M. (2003). La Medicina basada en evidencia. Visión después de


una década. Revista médica de Chile.22(8),939-946 .doi:
http://dx.doi.org/10.4067/S0034-98872003000800016

-Luengo,C, y Jara.P,(2016). Legalizacion de la Marihuana en Chile: Un Tema de


Reflexión para Enfermería. Ciencia y enfermería.22 (2). doi:
http://dx.doi.org/10.4067/S0717-95532016000200012

PTSD: National Center for PTSD (2015). Marijuana Use and PTSD among
Veterans. Recuperado de :
https://www.ptsd.va.gov/professional/treat/cooccurring/marijuana_ptsd_vets.asp

-Simonovis,N. Baddour, Y. Garcia,S y Madera,C. (2001) ¿Qué Significa Medicina


Basada en Evidencia?. Revista de la Facultad de Médicina.24(2).120-122

-Romero,P.(Sin fecha(. Breve guía para entender cómo funciona las propiedades
medicinales del cannabis
-Sulak,D. (2015) An introduction to the endocannabinoid system

Вам также может понравиться