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16 revista DOMINGO, 9 SEPTIEMBRE 2007
LA CONTRA
VÍCTOR-M. AMELA
IMA SANCHÍS
LLUÍS AMIGUET
VÍCTOR-M. AMELA
Pizarra
vibracional
Sabemos que la Tierra es agua.
Que la vida comenzó en el agua.
Que somos agua. Que el agua
transmite los sonidos con más
fluidez que el aire. Como si el
agua fuese una pizarra
vibracional, como si sus átomos
escribiesen. Emoto sostiene que
si proyectas un pensamiento en
un vaso de agua, ese agua lo
recoge y almacena. Si el
pensamiento es de amor y
gratitud, ese agua devendrá
salutífera: ofrécela a quien
quieras beneficiar... Investigue la
ciencia todo esto. Mientras, la
poética visión de Emoto reanima
el mundo, lo reencanta,
embellece la vida: convierte toda
el agua de este planeta en tu
prolongación y reflejo. A cada
sorbo de agua, a cada gota de
ducha, al río en que me baño, al
mar: ¡amor y gracias! Salud.
ÁLBUM
DE CROMOS
GUILLÉN
L A VA N G U A R D I A
“El agua registra
mensajes”
Q
ué es el agua?
–Yo. ¡Tú! Eres agua en
un 70%.
–Ah.
–Cuándo eras un óvulo
recién fertilizado por un
espermatozoide, ¡eras un 95% de
agua! Pero me atrevo a dar otra
respuesta a tu pregunta...
–¿Cuál?
–El agua es mensajera de Dios.
Como Tales de Mileto, el primer
filósofo presocrático, sostengo que el
agua es el arjé, el principio de todas
las cosas.
–¿En qué se basa?
–El agua es el fluido vital, la vida
circulando. La vida, en el cosmos, se
expresa como agua. ¡Esto siempre se
ha sabido! Es un conocimiento
universal y antiquísimo. Pero...
jamás lo hemos investigado.
–¿Y qué habría que investigar?
–Cómo el agua es capaz de
almacenar información.
–¿Qué información?
–Cualquier información del
universo. El agua resuena con
cualquier vibración y la recoge.
–Esto es muy críptico...
–¡No! Los colores, sonidos, músicas,
magnetismos, ideas, emociones,
pensamientos, intenciones... ¡Son
vibraciones, frecuencias de onda!
–¿Y el agua puede registrarlas?
–¡Sí, sí! Hay que investigarlo. Yo, por
ahora, he buscado el modo de hacer
visible esta capacidad del agua.
–¿Cómo?
–Mediante microfotografías de los
cristales del agua helada. Es agua
previamente expuesta a cierta
información vibracional. Esos
cristales expresan esa información.
–Tendrá que explicármelo mejor.
–Sí. Tomo agua de una fuente. En el
laboratorio la reparto en 50 placas de
Petri, 0'50 cc. de agua en cada placa.
Una placa la expongo a música de
Mozart, otra a música heavy metal,
otra a insultos, otra a pensamientos
amorosos, otra a una emoción de un
grupo de personas...
–¿Y qué pasa con esa agua, en
cada caso?
–Que el agua ¡resuena con cada
vibración! Congelo esa agua y luego
dejo que vaya descongelándose bajo
el microscopio. Cuando aparecen los
cristales, los fotografío.
–Ah, sí, he visto esas fotografías...
–Si el agua recibió un mensaje de
amor y gratitud, ¡cristaliza en
bellísimos hexágonos!, de geometrías
MANUEL LOZANO
tupidas, ricas, hermosas...
–¿Y qué hace el agua insultada?
–¡No forma cristales! O aparecen
cristales deformes, irregulares,
tortuosos, quebrados, feísimos. Lo
mismo pasa con el agua que ha
“escuchado” música heavy metal,
tan cargada de ira contra el mundo.
–Hay a quien le gusta...
–Es verdad: ahora quiero hacer el
mismo experimento sin nadie en la
habitación, y luego con alguien a
quien le guste esa música. ¿Qué
registrará el agua, la ira de la
música o el goce de una persona?
–Me deja usted cristalizado.
–A un frasco de agua le apliqué la
palabra japonesa “gracias”: esa agua
formó un cristal hexagonal
esplendoroso. A otro frasco con agua
del mismo manantial le apliqué la
palabra “estúpida”: no formó cristal.
–¿El agua “lee”? ¿O registró su
vibración emocional, Emoto?
–Hum... Debo investigarlo mejor.
–¿El agua de manantial es pura?
–Sí, aunque depende del manantial.
En principio, mejor a cuanta más
altura... Pero lo más importante es
que el agua circule.
–¿Por qué?
–Cuando el agua fluye y circula,
Masaru Emoto
Estudia el agua
Tengo 65 años. Nací en
Yokohama. Vivo en
Japón. Soy investigador
del agua. Estoy casado
y tengo tres hijos y dos
nietos. ¿Política? Todo
es vibración y
resonancia. ¿Dios?
Cada amanecer. Hablo
en el II Forum de la
Excelencia, “El
despertar de la
conciencia”, el día 29
(Librería Excellence).
He publicado
‘Mensajes del agua’
(La liebre de Marzo) y
‘El poder curativo del
agua’ (Obelisco)
salta y se arremolina, está contenta.
Esa agua ¡produce unos cristales
despampanantes!
–¿Cuál es el cristal de agua más
bello que ha visto?
–La de algún manantial de Japón. Y
el de algún agua transformada...
–¿Transformada?
–Tomé agua destilada: apenas formó
cristales. Coloqué esa agua sobre la
fotografía de una niña, hija de un
amigo. Formó un bonito cristal. ¿Le
cuento otro caso?
–Sí.
–Tomé agua de la presa de Fujiwara.
Un grupo de personas, guiadas por el
reverendo monje Kato Hoki,
dedicaron luego junto al lago una
oración al agua, durante una hora...
–No me diga que aquel agua lo
agradeció...
–El agua de antes de la oración
formó un cristal muy deforme,
horripilante. La de después... formó
uno de los cristales más bellos y
luminosos que he visto, un hexágono
que es una obra de arte lumínica.
–Si esto es así, ¿podríamos
purificar agua a conciencia?
–Estudiémoslo. Ciertos sabios del
antiguo Egipto dominan agua a
conciencia y hasta la respiraban...
–Quizá Moisés, que partió las
aguas del mar, fue uno de ellos...
–Yo sostengo que podemos cargar el
agua de vibraciones benéficas ¡y
usarla como agua curativa!
–Algo así es la homeopatía...
–Y las esencias florales de Bach. Y la
llamada agua HADO, cargada de
energías sutiles por resonancia
magnética. ¡Nos queda mucho que
aprender de los mensajes del agua!c