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La expresión oral se presenta en dos formas diferentes: la espontánea y la reflexiva. La expresión oral se
produce de forma espontánea, para llamar la atención de los demás, narrar hechos ocurridos; expresar
sentimientos, deseos, estados de ánimo o problemas; argumentar opiniones o manifestar puntos de vista
sobre los más diversos temas. La expresión oral espontánea por excelencia es la conversación, que se utiliza
en las situaciones cotidianas de la vida.
Cuando se expone de forma reflexiva algún tema, se hace, generalmente de forma objetiva, tras haberlo
pensado y analizado detenidamente. Esta modalidad expresiva se utiliza en los discursos académicos,
conferencias, charlas, mítines, etc., y en algunos programas de los medios de comunicación.
La principal finalidad de la expresión oral espontánea es la de favorecer el rápido intercambio de ideas entre
las personas, pero puede tener otras. La persona que habla es el centro del discurso coloquial, dirigido a un
'tú' que escucha. A su vez, el 'tú' se convierte en 'yo' cuando le contesta.
La estructura del discurso es generalmente abierta, porque el texto se produce en el momento mismo en el
que se habla. El emisor puede variar su discurso, alargarlo o acortarlo, en función de la reacción que cause en
quien le escucha.
La expresión oral, por lo general, es dinámica, expresiva e innovadora. Cobra en ella gran importancia el
acento, el tono y la intensidad dados a cada palabra o frase, porque atraen o refuerzan la atención del oyente.
La modulación de la voz, los gestos, los movimientos de nuestro rostro y cuerpo, etc., ayudan a comprender
el verdadero significado del discurso; también influyen la intención y el estado de ánimo de quien habla.
En la expresión oral se reflejan las variedades lingüísticas geográficas, sociales y de estilo, que ponen de
manifiesto la procedencia y la cultura de quien se está expresando. Las oraciones suelen ser breves y sencillas.
El contexto, la situación y los gestos favorecen la elipsis (omisión o supresión) de palabras:
Cuando describimos a alguien, explicamos cómo es físicamente, la ropa que lleva, los rasgos significativos de
su personalidad, lo que le gusta o desagrada...; es decir, todo lo que forma parte de su forma de ser y su
apariencia.
Una descripción es el dibujo, hecho con palabras, de personas, animales, lugares u objetos, mediante la
exposición de sus características, cualidades, usos, etc., a fin de que otros puedan crear una imagen mental
de ellos. La descripción también es la explicación minuciosa de sentimientos y sensaciones, o de los procesos
o procedimientos para hacer algo.
En la vida cotidiana, usamos constantemente las descripciones para explicar cómo es lo que nos rodea,
nuestros sentimientos o ilusiones, los procesos para hacer algo, como llegar a un sitio, preparar una tarta...
La descripción tiende a ser concisa, clara y objetiva en los textos técnicos, científicos y humanísticos,
completada en ocasiones con gráficos o imágenes; en los propagandísticos y literarios suele ser subjetiva,
pues es habitual que influyan emociones o valoraciones personales.
Tipos de descripciones
Descripciones de personas
El retrato es la forma más habitual de describir a una persona. En él se mezclan las características físicas,
psicológicas y morales del personaje.
Si solo se describen los rasgos físicos y la vestimenta de la persona, se habla de prosopografía; por el contrario,
la etopeya se ocupa únicamente de las cualidades psicológicas y morales: carácter, forma de ser y de actuar,
personalidad...
Por último, hay que mencionar la caricatura, en la que se dibujan las peculiaridades de la persona, mediante
rasgos muy exagerados, con una finalidad humorística.
Descripciones de lugares
El interés puede centrarse en el lugar mismo o en su importancia como marco en el que se desarrolla una
acción. Tanto si se describe un paisaje amplio, como una ciudad, o si se trata de un interior, es importante
observar el orden elegido por el autor para realizar la descripción: el tipo de planos (desde uno general, que
abarca muchas cosas, a un primerísimo plano, que centra su atención en pequeños detalles), si se ordenan los
datos de izquierda a derecha, de arriba hacia abajo...
Descripciones de objetos
Se describen las formas, los colores, los pequeños detalles o matices, las texturas...
Escasean los verbos, son copulativos o apenas presentan acción o movimiento. Casi siempre están conjugados
en pretérito imperfecto de indicativo: era simpática; estaba siempre enfadado. Son frecuentes los símiles o
comparaciones (astuto como un zorro, frío como el hielo), las metáforas (era un lince para los negocios), las
imágenes sensoriales (amarillo chillón), las personificaciones (el ordenador solía estar cansado), etc.
Para conseguir realizar una buena descripción, es necesario seguir estos pasos:
Observar detenidamente aquello que queremos describir, a través de los cinco sentidos, para anotar
todos los detalles, las características, las cualidades...
Seleccionar solo aquello que sea significativo para el tipo de texto descriptivo que queramos hacer:
técnico, científico, literario...
Clasificar y ordenar los datos elegidos de forma coherente.
Utilizar, al hacer la redacción, los recursos estilísticos descritos anteriormente.
Cuando se quiere demostrar a alguien que lo que se dice es verdad, cuando no se está de acuerdo con la
opinión de otro o al rechazar una invitación, se alegan una serie de razones con las que se justifica una opinión
o decisión; es decir, se argumenta.
Es una de las manifestaciones del discurso oral o escrito, cuya principal finalidad es la de convencer de algo a
quienes escuchan o leen. A través de razonamientos, se intenta probar o justificar aquello que se defiende y,
al mismo tiempo, rebatir las opiniones contrarias.
Defender una opinión o un punto de vista sobre algún tema, demostrando que son más acertados
que los de los demás;
Poner de manifiesto los fallos o errores de quienes se oponen a nuestra argumentación para hacerles
cambiar de parecer;
Convencer a los que nos escuchan o leen para que admitan como cierto lo que decimos.
¿Dónde y cuándo argumentamos?
Todas las personas argumentan en la vida diaria, cuando quieren convencer a los amigos o familiares de algo
o intentan inducirlos a que actúen de una determinada forma.
En las campañas electorales, se argumenta para convencer a los electores de que les conviene votar
a un determinado partido y no a otro.
En el campo judicial, cuando el fiscal o el abogado intentan convencer de la culpabilidad o inocencia
del acusado.
En los sermones religiosos, se argumenta a fin de persuadir a los fieles sobre la necesidad de seguir
una determinada doctrina.
En los medios de comunicación, cuya finalidad es la de informar y crear una determinada opinión, se
realizan argumentaciones de acuerdo con la ideología que estos tengan.
La argumentación se utiliza mucho en las disciplinas humanísticas (lingüística, literatura, filosofía...), cuyas
teorías se apoyan en razonamientos lógicos o valoraciones que no todos aceptan.
La estructura de la argumentación
1. La tesis o idea básica que se va a defender. Esta se presenta de forma concisa y clara.
2. El cuerpo de la argumentación, donde se apoya, justifica o fundamenta la tesis con una serie de
razones.
3. La conclusión, extraída a partir de los argumentos expuestos, con la que se refuerza la tesis inicial.
Los argumentos
Si el emisor quiere convencer a quien le escucha, es aconsejable que exista desde el principio un acuerdo
mínimo con este, pues de lo contrario será muy difícil convencerle completamente de los razonamientos que
se exponen. Los argumentos que se utilicen en una argumentación han de ser creíbles y estar documentados
y ordenados; no deben contradecirse entre sí ni ser falsos. También han de estar expresados de forma clara,
organizada y sencilla. ¡Sólo así será convincente la argumentación!
Constantemente el ser humano cuenta o le cuentan historias, episodios o sucesos reales, pues necesita
enterase de lo que ocurre a su alrededor o lo que sucede en el mundo; pero también le encanta escuchar o
leer historias inventadas: cuentos, leyendas, novelas... Para todo ello utiliza la narración.
Una narración es un relato de algo real o ficticio, contado de forma que resulte creíble. Se pueden narrar
historias o sucesos utilizando medios muy distintos: de forma oral o escrita, mediante gestos, a partir de
dibujos, con fotografías, fotogramas de películas...
Toda narración cuenta una historia, estructurada en tres partes: planteamiento, nudo y desenlace.
En el planteamiento se expone:
En el nudo o desarrollo se explica más extensamente la trama de lo ocurrido, es decir, cómo y por qué ha
sucedido.
Contar los hechos, en primera, segunda o tercera persona verbal, pues el narrador puede ser un
personaje de la historia o un testigo de esta.
Decidir el orden del relato: desde el principio hasta el final, empezando por la mitad de lo narrado o
comenzando por el final, como en las novelas policíacas.
Definir a los personajes por su aspecto físico, carácter, actuación o las relaciones que entabla con los
demás.
Decidir el ritmo, rápido o lento, de la narración.
Precisar el lugar y el tiempo de la historia.
Se cuenta un cuento, una fábula, una novela, una película, un chiste, etc., y también... una leyenda. El siguiente
fragmento pertenece a El monte de las ánimas, una de las famosas leyendas del escritor español del siglo XIX
Gustavo Adolfo Bécquer. Quizá, después de leerlo, sientas curiosidad por saber qué es lo que en ella se narra:
“Así pasó una hora, dos, la noche, un siglo, porque la noche aquella pareció eterna a Beatriz. Al fin despuntó
la aurora; vuelta de su temor, entreabrió los ojos a los primeros rayos de la luz. Después de una noche de
insomnio y de terrores, ¡es tan hermosa la luz clara y blanca del día! Separó las cortinas de seda del lecho, ya
se disponía a reírse de sus temores pasados, cuando de repente un sudor frío cubrió su cuerpo, sus ojos se
desencajaron y una palidez mortal descoloró sus mejillas; sobre un reclinatorio había visto, sangrienta y
desgarrada, la banda azul que perdiera en el monte, la banda azul que fue a buscar Alonso.”
Tipos de narraciones
En la narración se utilizan mucho los verbos que indican acción o proceso, generalmente, en tercera persona
del pretérito indefinido (vivió, corrió, se apresuró...) o del presente (habla, posee, trabaja...).
Apenas existen adjetivos calificativos porque retardan la acción.
Abundan las indicaciones temporales y locales: en aquel tiempo, muy cerca de allí... El narrador intenta captar
y mantener la atención del oyente o lector con fórmulas lingüísticas, apelaciones, interrogaciones, etc.: pero...
¿qué sería de ellos?; se preguntará el lector...
En una misma narración se pueden utilizar uno o varios puntos de vista desde los que se narren los hechos.
Para que una narración desempeñe bien su función, antes de escribirla, es imprescindible:
Determinar lo que se quiere contar, seleccionando solo lo relevante para no hacer pesado el relato.
Decidir entre la primera, la segunda o la tercera persona narrativa.
Disponer el orden en que se va a escribir o contar la historia.
Elegir los recursos lingüísticos o literarios, así como el tono que se va a utilizar para presentar los
hechos, los personajes e incluso la misma historia.
¿Te gusta charlar con tus amigos? ¿Sobre qué asuntos habláis? ¿Estás siempre de acuerdo o surgen
diferencias? Cuando conversas, estás entablando un diálogo, la forma de comunicación más directa, en el que
uno habla y otro responde, rebatiendo, reafirmando o completando los planteamientos que se presentan. El
diálogo es, además, un método ideal para conocer a los demás e intentar solucionar problemas. Quizá, en el
mundo actual, se echa en falta algo más de diálogo. ¿Tú qué crees?
¿Qué es un diálogo?
Un diálogo es una charla o conversación entre dos o más personas, en la cual intercambian ideas, opiniones o
puntos de vista.
Los diálogos son muy frecuentes en la lengua oral, ya que todos sentimos necesidad de hablar y escuchar a
los demás.
El diálogo elaborado se da en debates, tertulias, entrevistas, encuestas... Casi todos los textos narrativos
(novela, cuento, fábulas...) incorporan diálogos para hacer más variada y amena la narración, incluso algunos
poemas toman forma dialogada:
-El chamariz en el chopo. -Y ¿qué más? -El chopo en el cielo azul. -Y ¿qué más? -El cielo azul en el agua. -Y ¿qué
más? -El agua en la hojita nueva. -Y ¿qué más? -La hojita nueva en la rosa. -Y ¿qué más? -La rosa en mi corazón.
-Y ¿qué más? - ¡Mi corazón en el tuyo!
Pero cuando el diálogo es realmente básico es en las obras teatrales, donde el autor cuenta una historia a
través de las conversaciones entre los distintos personajes. Lo que dice cada uno de los interlocutores va
precedido por una raya (-). El siguiente ejemplo es un fragmento de Los tres sombreros de copa (1932), una
divertidísima obra teatral del escritor español Miguel Mihura:
DON ROSARIO. -Yo no podría dormir tranquilo si supiese que debajo de la cama hay una bota... Llamaré ahora
mismo a una criada. (Saca una campanilla del bolsillo y la hace sonar.) DIONISIO. -No. No toque más. Yo iré
por ella. (Mete parte del cuerpo por debajo de la cama.) Ya está. Ya la he cogido. (Sale con la bota.) Pues es
una bota muy bonita. Es de caballero... DON ROSARIO. - ¿La quiere usted, don Dionisio? DIONISIO. -No, por
Dios; muchas gracias. Déjelo usted... DON ROSARIO. -No sea tonto. Ande. Si le gusta, quédese con ella.
Seguramente nadie la reclamará... ¡Cualquiera sabe desde cuándo está ahí metida...! DIONISIO. -No. No. De
verdad. Yo no la necesito... DON ROSARIO. -Vamos. No sea usted bobo... ¿Quiere que se la envuelva en un
papel, carita de nardo? DIONISIO. -Bueno, como usted quiera... DON ROSARIO. -No hace falta. Está limpia.
Métasela usted en un bolsillo. (Dionisio se mete la bota en un bolsillo.) Así...
En un diálogo, el discurso se presenta fragmentado, ya que los interlocutores van alternando sus
intervenciones e incluso pueden interrumpirse en un momento determinado.
Con cada parlamento, cada vez que un personaje interviene, se intenta captar la atención de quienes escuchan
e influir en ellos, pero, a su vez, los interlocutores pueden contestar y contrarrestar lo dicho. Muchos
elementos de las frases están omitidos o elípticos, ya que los gestos, el contexto y la situación lo permiten.
Tipos de diálogos
Hay varias formas de expresar un diálogo, pero las más frecuentes son las siguientes:
Estilo directo. Recoge las palabras textuales de los interlocutores: —Está bien, iré —dijo ella.
Estilo indirecto. Un narrador cuenta lo que dijeron los personajes utilizando un verbo como decir,
replicar, responder, hablar, susurrar, gritar, etc., aclarando, al mismo tiempo, las circunstancias que
rodearon al diálogo: Sin pensárselo dos veces, ella dijo que iría.
Estilo indirecto libre. En él se mezclan el estilo directo y el indirecto: Sin pensárselo dos veces, ella
dijo que iría, aunque añadió: —Pero no conduciré yo.
Son frecuentes las expresiones de apertura, como los saludos (¡Hola!, ¿Cómo estás?, ¡Buenos días,
etc.), y de cierre (¡Adiós!, ¡Hasta pronto!, ¡Hasta mañana!, etc.), expresiones de cortesía a las que el
interlocutor suele responder con otras similares. También son habituales las llamadas de atención al
oyente (Escúchame, Atiende, etc.).
Se utiliza un vocabulario sencillo, directo, expresivo, favorecido por el contexto y la situación.
Las frases son breves, con tendencia a lo coloquial y espontáneo; en ellas cobra mucha importancia
la entonación.
El estilo, generalmente, es poco cuidado.
Si el diálogo se ha elaborado con anterioridad, como en los debates, coloquios, etc., el lenguaje es más
cuidado, estructurado y escogido, y la sintaxis, más compleja. Las normas del diálogo El diálogo supone un
intercambio de ideas entre dos o más personas, por lo que es indispensable:
Dentro de las habilidades idiomáticas y a las que se le debe dar un tratamiento especializado están las
siguientes:
Escuchar.
Hablar.
Leer.
Escribir
¿Qué se entiende por escuchar?
Proviene del latín auscultare. Oír con atención. Sinónimo de Oír. // Prestar atención a lo que dice otro. //
Hablar con pausa y afectación, como deleitándose en lo que dice uno. El oír se refiere a la recepción física de
las ondas sonoras a través del oído. Escuchar, en cambio incluye además de oír la capacidad de recibir y utilizar
la información captada a través del canal auditivo. La comprensión auditiva y el lenguaje oral están
estrechamente relacionados, tienen muchos aspectos en común. Se necesita desarrollar la escucha para lograr
un adecuado desarrollo de la expresión oral. Para garantizar el trabajo por la escucha se deben desarrollar
diferentes actividades como:
a) Atencional: Cuando el oyente la emplea para obtener información y poder participar afectivamente, se
utiliza con mucha frecuencia en el aula para escuchar órdenes, instrucciones, mensajes. b) Analítica: Cuando
el oyente analiza el mensaje para responder o resolver alguna cuestión, si llega a emitir un juicio, se está
entonces ante un “escuchar crítico”. Esta forma puede manifestarse al escuchar para responder preguntas o
para dar su opinión. Es importante que el maestro enseñe a sus alumnos los aspectos que deben tener en
cuenta para poder escuchar bien entre ellos están:
1. Guardar silencio.
2. Respetar la palabra ajena.
3. Atender y pensar en los que otros dicen.
4. Saber pedir la palabra.
5. No interrumpir al que habla, si se desea decir algo se debe esperar a que termine.
6. No hablar a coro ni a gritos.
7. No mostrarse impaciente y no hacer gestos exagerados mientras otros hablan.
La conversación: puede ser sobre temas sugeridos o seleccionados libremente; narrar cuentos, textos leídos,
hechos, vivencias y experiencias.
Dramatizar cuentos conocidos, textos leídos, diversas situaciones libremente seleccionadas, así como
vivencias y experiencias.
Describir estableciendo relaciones entre el elemento de lo que se describe personas, animales,
objetos y paisajes de la realidad, de lámina de lo que recuerdas o imaginas.
Memorizar trabalenguas y adivinanzas.
Recitar poesías.
En el programa de Ajustes Curriculares para el curso 2004 – 2005 de la enseñanza Primaria, se precisa que en
todos los niveles y particularmente en primaria, es fundamental que se atienda de manera específica lo que
usualmente identificamos como las cuatro habilidades idiomáticas: escuchar, hablar, leer y escribir. Ellas
deben atenderse en todas las asignaturas; pero de manera especial deben ejercitarse en las clases de Lengua
Española.
Obsérvese, por ejemplo, que aparece muy poca bibliografía especializada al respecto y que todavía son muy
pocos los trabajos investigativos que se ocupan de ella. Enseñar a escuchar debe ser una tarea priorizada de
la escuela; muchos problemas relacionados con el aprendizaje de la lectura y de la escritura y el desarrollo
exitoso de las habilidades ortográficas depende, en buena medida, de la atinada selección de variadas y
sistemáticas actividades que permitan alcanzar una escucha analítica y apreciativa.
La habilidad de hablar se vincula directamente con la de la escucha; tampoco suele atenderse de manera
particular en los diferentes grados. Por eso no es raro encontrarse alumnos que llegan a la enseñanza media
superior con grandes problemas de expresión, la que se ve afectada por diversas deficiencias relacionadas con
la dicción, por referir solo uno de muchos aspectos que había que atender.
DISCURSO
-Exposición oral y pública de alguna extensión: discurso de egresos en la Real Academia Española.
-Serie de las palabras y frases empleadas para manifestar lo que se piensa o siente: mientras hablaba, el
discurso quedaba entrecortado por las lágrimas.
-Escrito o tratado en que se discurre sobre una materia: el Discurso del método.
-Lapso: el discurso de la existencia.
En primer lugar, tenemos el contenido del discurso, el cual debe ser tejido en el telar de las experiencias, debe
estar copado de detalles, ilustraciones, personificaciones, dramatismo y ejemplos en algunos casos; y todos
estos expresados con términos familiares y concisos los cuales den la comprensión y el entendimiento
adecuado; en donde lo que se quiere decir sea entendido por todos.
En lingüística y en las ciencias sociales y cognitivas el discurso es una forma de lenguaje escrito (texto)
o hablado (conversación en su contexto social, político o cultural).
En la antropología y la etnografía se habla también de evento de comunicación.
En la filosofía, por ejemplo con Michel Foucault, un discurso es más bien un sistema de discursos, un
sistema social de pensamiento o de ideas
En el psicoanálisis, la noción de discurso se basa en la lógica, pero incorpora los aportes de la
lingüística, la antropología, la filosofía y la historia, entre otras disciplinas. A partir de los aportes de
Jacques Lacan, en psicoanálisis se trabaja con la “estructura de los cuatro discursos” [1]
El análisis del discurso es una praxis que se desarrolló en los años 1960 en la antropología, la lingüística, la
sociología, la filosofía, y la psicología, y después también en otras disciplinas, como la historia, el estudio de la
comunicación y el psicoanálisis.
Dado la multiplicidad de los enfoques, el discurso se puede definir como una estructura verbal, como un evento
comunicativo cultural, una forma de interacción, un sentido, una representación mental, un signo, etc. Tanto
el discurso hablado como el discurso escrito (texto) se considera hoy en día como una forma de interacción
contextualmente situada.
Como estructura verbal, un discurso es una secuencia coherente de oraciones. La coherencia global se define
por los temas o tópicos que se expresan por ejemplo en los titulares o los resúmenes del discurso.
1. Narración
2. Exposición
3. Argumentación
4. Discurso Público
5. Discurso Privado
NARRATIVO
*Narrar es contar un hecho que le acontecen a personajes en un lugar y tiempo específicos. Real o ficticio.
2.1Características:
-marco social determinado por una relación de carácter interpersonal
-finalidad: entretener, informar, convencer, etc.
-código que permite la transformación de la historia en señales conocidas por el emisor y receptor.
2.2 Tipos de Narradores: narrador: quien cuenta la historia, sujeto de la enunciación.
a) Homodiégetico: es parte de la historia:
-Protagonista: cuenta su propia historia, en primera persona. Personalizado y subjetivo.
-Testigo: es un espectador del acontecer. En 1º persona, menos subjetivo.
-Monólogo interior: modo en el que se reproducen los pensamientos como surgen en la mente del personaje,
debido a alguna situación límite que los obliga a dialogar consigo mismos.
b) Heterodiégetico: no forma parte del relato, 3º persona, mayor objetividad:
-Omnisciente: conoce todo respecto al mundo representado. Puede influir en el lector. Trata de ser objetivo.
-Objetivo: como una cámara de cine, no penetra en la siquis del personaje. Trata de ser objetivo.
*la objetividad total no existe en literatura.
EXPOSITIVO
DISCURSO PUBLICO
DISCURSO PRIVADO
Factores de la comunicación:
-emisor: posee relación personal y, generalmente, simétrica con el destinatario.
-Receptor: es un grupo pequeño e identificable.
-Mensaje: tiene estructura de diálogo o de carta, diarios, mensajes, etc.
-Tema: de interés particular.
-Situación: informal si la relación es simétrica, y formal si no lo es.
-Código: si es informal será coloquial, si no, culto.
-Canal: va a depender si es oral o escrito.
Asamblea: La asamblea se da a nivel interno, en una institución u organismo, o grupo que se ha unido para
conformar una causa. Las hay de dos tipos: asambles ordinarios y extraordinarias.
Conferencia: En la conferencia, una o más personas exponen los resultados de algo ante un auditorio,
permitiendo la participación o preguntas del auditorio.
Discurso: El discurso es muy similar a una conferencia, salvo que aquí el auditorio no participa y se limita
simplemente a escuchar. Por ejemplo: un discurso presidencial.
Debate: Dos personas o dos grupos de personas se encuentran para exponer ante un auditorio dos puntos
encontrados sobre un mismo tema.
[yuzo_related]
Dialogo: es una conversación informal entre dos o más personas. Es la forma de comunicación oral más
utilizada.
Entrevista: Una o más persona reciben a una o más personas con el fin de que ellos sean interrogados sobre
determinados temas. La entrevista en televisión presenta este mismo mecanismo, pero en ocasiones es el
entrevistador quien va en busca de la persona entrevistada, para conseguir un reportaje, etc.
Exposición: Similar a la conferencia, pero incluye participación de los asistentes con el expositor. La exposición
es pública, mientras que la conferencia puede ser privada.
Foro: Es una reunión de diferentes personas con el propósito de dialogar sobre un tema en común,
exponiendo sus puntos de vista.
Panel: Parecido al foro, salvo que éste tiene un moderador y unos panelistas definidos que disertan frente a
un auditorio.
Reunión: Se reúnen dos o más personas para hablar sobre temas que deben ser resueltos, sobre los cuales se
debe llegar a algún consenso o acuerdo. Por ejemplo: reunión de copropietarios de propiedad horizontal para
definir la nueva administración.
Simposio: Es una reunión de expertos o especialistas. Cada uno expone en forma breve, en forma sucesiva y
continuada. El propósito no es controvertir ni generar debates.
Seminario: Es una técnica de estudio en grupo, dirigida por especialistas a personas que tienen conocimiento
avanzado también. La duración es variable, pudiendo ir de unas cuantas horas, a años enteros.
GLOSARIO.
analogía
nombre femenino
1. Relación de semejanza entre cosas distintas.
"lo dramático de la obra estriba en la analogía entre lo teatral y lo real"
2. Procedimiento lingüístico mediante el cual se crean palabras o expresiones nuevas, o se transforman otras
que ya existen, con el fin de acomodarlas a un determinado modelo, en especial morfológico.
"el niño dijo ‘he rompido’ por analogía con el modelo regular de participios de la segunda conjugación"
aparato crítico
1. Las convenciones de la comunicación universitaria comprenden también los respaldos de autoridad del
autor, es decir, la información en la que el autor del escrito se fundamenta para la elaboración del trabajo,
esta información debe presentarse de acuerdo con ciertas reglas o normas
bibliografía
nombre femenino
1. Conjunto de referencias sobre publicaciones.
"incluyan al final del trabajo la bibliografía consultada"
2. Lista o catálogo de las publicaciones de un autor o de una materia determinada.
"el autor sabe que ha escrito uno de los libros más apasionantes y actuales de su bibliografía"
Causa-efecto
1. El principio fundamental para establecer causa y efecto está en demostrar que los efectos observados en
el experimento ocurrieron después de la causa.
científico, científica
adjetivo
1. Que se ajusta a los principios y métodos de la ciencia o está relacionado con ella.
"método científico; desarrollo científico; estudio científico"
2. nombre masculino y femenino
Persona que se dedica a la investigación y estudio de una ciencia.
conclusión
nombre femenino
1. Fin o terminación de algo.
"la conclusión de un trabajo; la conclusión de la guerra"
2. Decisión o consecuencia que es fruto del estudio y examen de una serie de datos.
"sacar conclusiones; llegar a una conclusión"
divulgación
nombre femenino
1. Acción de divulgar.
"obra de divulgación; ha escrito un libro de divulgación científica; apunta el periodista que además de grandes
biógrafos y memorialistas, los escritores en lengua inglesa son los reyes en el difícil arte de la divulgación"
2. Efecto de divulgar.
"el cronista criticó las divulgaciones que se habían hecho de las ideas de Popper por parte del diario"
epígrafe
nombre masculino
1. Título o enunciado del contenido de un escrito o de parte de él.
"los epígrafes de los artículos del periódico; los epígrafes de los capítulos de un libro"
2. Frase o cita al comienzo de un escrito o capítulo que sugiere su contenido o expresa la idea o pensamiento
que lo ha inspirado.
informe
nombre masculino
1. Acción de informar.
"tomó informe de la situación general"
2. Exposición oral o escrita sobre el estado de una cosa o de una persona, sobre las circunstancias que rodean
un hecho, etc.
introducción
nombre femenino
1. Acción de introducir o introducirse.
"la introducción del gas natural facilitó la calefacción de las viviendas modernas"
2. Parte primera que sirve para introducir o preparar el desarrollo de algo.
latinismo
nombre masculino
1.Palabra o expresión de la lengua latina que se usa en otro idioma.
"las expresiones ‘statu quo’ y ‘ad hoc’ son latinismos; la palabra ‘radio’ es un latinismo"
locuciones latinas
1.son expresiones en latín que se utilizan en el español con un significado cercano al original. Como el latín
fue la lengua de expresión cultural y científica en Europa hasta el siglo XVIII, muchas locuciones han pervivido
en el lenguaje jurídico, filosófico, técnico, religioso, médico y científico.
tecnicismo
nombre masculino
1. Cualidad de técnico.
"el tecnicismo del estilo dificultaba la comprensión"
2. Palabra que tiene un sentido preciso dentro de la jerga de una ciencia, un arte, una profesión o una actividad
determinada.
"la palabra ‘legítima’ es un tecnicismo del derecho"
tesis
nombre femenino
1. Proposición u opinión, especialmente de carácter científico, que se mantiene y se intenta demostrar con
razonamientos.
"la tesis de Popper no fue bien recibida por los neopositivistas ni por los instrumentalistas; las tesis del derecho
natural y las de la soberanía del pueblo o de la nación se integran en la construcción del estado democrático
liberal"
2. Trabajo escrito de investigación, especialmente el que se exige para obtener el grado de doctor.
"leer la tesis doctoral ante un tribunal; se pasó cuatro años trabajando sobre la tesis"