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Psicopatología y clasificación de los trastornos depresivos

Psychopathology and classification of depressive disorders

V. Peralta, M.J. Cuesta

RESUMEN ABSTRACT
Depressive disorders are a heterogeneous group
Las depresiones constituyen un grupo heterogé- of conditions in terms of their etiology, symptom
neo de trastornos desde los puntos de vista etiológico, composition and outcome, which has resulted in
sintomatológico y evolutivo, lo que ha conllevado difi- difficulties in the definition of the axial depressive
cultades para definir el síndrome depresivo axial y sus syndrome and its clinical forms. This gives rise to a
formas clínicas. Estas dificultades se han traducido en number of problems regarding their definition and
definiciones y sistemas nosológicos cambiantes a lo delimitation from other mental disorders and from
largo del tiempo, así como en dificultades para delimi- normality. As a result, changing and to some extent
tar los trastornos depresivos de variaciones afectivas overlapping definitions of depressive disorders have
de la normalidad y de otros trastornos mentales con been proposed over time. A definition of axial
síntomas depresivos. En este estudio, partiendo de la depressive syndrome is proposed based on the
distinción entre alteraciones de los sentimientos y del differentiation between disturbances of mood and
humor, se propone una definición del síndrome depre- affect. The two main classificatory approaches
sivo axial. Se analizan las características de las clasifi- (categorical and dimensional) are examined with
caciones categoriales y dimensionales en términos de regard to their appropriateness in classifying
su idoneidad para clasificar los trastornos depresivos. depressive disorders. Although the two approaches
Aunque ambas aproximaciones tienen pros y contras, possess pros and cons, the dimensional approach has
la aproximación dimensional parece tener más validez a number of characteristics that makes it more
para clasificar los trastornos mentales en general y los appropriate than the categorical approach for
depresivos en particular. Se propone un modelo de cla- classifying mental disorders in general and depressive
sificación multidimensional de las depresiones que disorders in particular. A multidimensional model for
integra los planos etiológico, psicopatológico y evolu- classifying depressive disorders is proposed. The
tivo, los cuales se componen a su vez de subdimensio- model includes etiological, symptomatological and
nes relevantes desde el punto de vista clínico y tera- course/outcome components, each of which is
péutico. composed of a number of dimensions that have clinical
and therapeutical relevance.
Palabras clave: Trastornos depresivos. Sentimien- Key words: Depressive disorders. Affects. Mood.
tos. Humor. Psicopatología. Clasificación. Psychopathology. Classification.

ANALES Sis San Navarra 2002; 25 (Supl. 3): 7-20.

Unidad de Psiquiatría. Hospital Virgen del Correspondencia:


Camino. Pamplona Víctor Peralta Martín
Unidad de Psiquiatría
Hospital Virgen del Camino
Irunlarrea, 4
31008 Pamplona
Tfno. 948 422488
Fax 948 429424
E-mail: victor.peralta.martin@cfnavarra.es

ANALES Sis San Navarra 2002, Vol. 25, Suplemento 3 7


V. Peralta y M. J. Cuesta

INTRODUCCIÓN análisis de los elementos psicopatológicos


básicos (afectos, sentimientos, humor)
Los trastornos depresivos constituyen realizamos una definición del síndrome
un grupo de trastornos mentales habitual- depresivo axial. Posteriormente, se mues-
mente caracterizados por un conjunto tran los principales enfoques para clasifi-
coherente de síntomas que son la expre- car los trastornos depresivos, y finalmen-
sión de la afectación de diferentes funcio- te, se describe un modelo de clasificación
nes psicológicas: afectividad (tristeza), multidimensional de carácter integrador y
cognición (desesperanza), psicomotrici- clínicamente relevante.
dad (inhibición) y conducta (hipoactivi-
dad). El síndrome depresivo es extraordi-
nariamente heterogéneo en relación a sus PSICOPATOLOGÍA DE
causas (desde factores biológicos a facto- LA AFECTIVIDAD
res psicológicos), su evolución (desde la
remisión ad integrum hasta la cronicidad o Afectividad, estado de ánimo o
el suicidio), o su intensidad (desde esta-
dos próximos a la normalidad o con reper-
humor y sentimiento
cusión casi exclusiva en la esfera subjeti- Para comprender la psicopatología de
va, hasta cuadros muy graves con los trastornos del ánimo, y particularmen-
incapacitación en todas las áreas de fun- te para diferenciar los trastornos del
cionamiento personal). ánimo como enfermedades de las reaccio-
nes vivenciales anormales y de los proble-
Por otra parte, hay que reconocer que
mas afectivos de la vida cotidiana es muy
los límites de la depresión son difusos, y
importante la diferenciación de dos fenó-
la depresión puede ser conceptualizada
menos psicopatológicos que subyacen en
alternativamente como síntoma, síndro-
cada una de estas condiciones: el estado
me, enfermedad, o incluso, como una
de ánimo o humor y los sentimientos. Por
forma de reacción normal del ser humano
afectividad entendemos el conjunto de los
ante acontecimientos de la vida. Esto
sentimientos y de estados de ánimo1. El
hace que cuestiones como la definición,
estado de ánimo o humor es un estado
diagnóstico y clasificación de la depre-
afectivo de carácter relativamente autóno-
sión planteen serios problemas teóricos y
mo y duradero en el tiempo, aunque gene-
prácticos (terapéuticos) aún no resueltos
ralmente de carácter autolimitado, que
completamente. Estos problemas se refle-
afecta de modo global a las experiencias
jan en las principales denominaciones
psicológicas y corporales. Es, por lo tanto,
empleadas para definir estas condiciones.
un modo de experiencia total que afecta
La palabra depresión es la más utilizada
primariamente a la percepción del propio
tanto en ambientes médicos como popu-
yo, y secundariamente a la experiencia del
larmente, sin embargo, es demasiado
mundo que rodea a la persona2. Los senti-
genérica e inespecífica y además implica
mientos son vivencias muy variables, que
que todas las depresiones son iguales, lo
en su concepción más habitual son de
cual no es cierto; con el término plural de
naturaleza psicológica (pena, alegría, ira,
las depresiones se enfatiza su heteroge-
rabia, frustración), pero no exclusivamen-
neidad clínica, el término de trastorno(s)
te2. Un filósofo, Max Scheler, ha elaborado
depresivos(s) refleja que la condición es
una clasificación de los sentimientos en
clínicamente relevante; y el término de
estratos que ha sido aplicada a la psiquia-
enfermedad depresiva se emplea para
tría por Schneider3 y Weitbrech4, que tiene
aquellos casos más graves con síntomas
importantes implicaciones psicopatológi-
endogenomorfos y de fundamento más
cas y neurobiológicas (Fig. 1). De acuerdo
biológico que clásicamente han constitui-
con esta clasificación las capas más pro-
do el núcleo de las definiciones de tras-
fundas de los sentimientos corresponden
torno depresivo.
a vivencias afectivas primarias, difusas y
En este capítulo se intenta realizar un poco elaboradas ligadas a la corporalidad
abordaje integrador de la conceptualiza- que serían el reflejo de alteraciones bioló-
ción de las depresiones. Partiendo de un gicas. Por el contrario, las capas más

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PSICOPATOLOGÍA Y CLASIFICACIÓN DE LOS TRASTORNOS DEPRESIVOS

psicológico
Condicionamiento
Sentimientos espirituales: frustración, decepción, enfado
Condicionamiento

Sentimientos psíquicos: tristeza, desmoralización, preocupación, pesar

Sentimientos vitales: tristeza patológica, astenia, anhedonia, anestesia afectiva


biológico

Sentimientos sensoriales: tristeza patológica, dolores, somatizaciones, malestar

Figura 1. Clasificación jerárquica de los sentimientos en referencia a aquellos de tonalidad depresiva.

superficiales corresponden a sentimientos xístico. El humor posee profundidad al


muy elaborados que son dependientes de estar anclado en la personalidad y entre-
la biografía y las circunstancias de la per- tejido en su estructura, carece de direc-
sona. La importancia de esta concepción ción, está dirigido al propio yo, está fuera
de los sentimientos se debe a que las alte- del alcance de la voluntad y carece de
raciones del ánimo conllevan principal- intencionalidad; el humor es una expe-
mente una alteración de las capas de los riencia básica que no está mediada por
sentimientos profundas entre las que procesos psicológicos. Por el contrario,
surge la denominada tristeza patológica, los sentimientos comportan una respues-
hasta el punto de que ambos ámbitos –el ta ante un acontecimiento, pueden ser
humor y los sentimientos profundos– dirigidos intencionalmente y por ello
están inextricablemente unidos. También representan bosquejos de acciones. En
tiene implicaciones terapéuticas para los este sentido, los sentimientos constitu-
estados depresivos, ya que la alteración yen fenómenos sociales. Otra característi-
de las capas superficiales de los senti- ca diferenciadora de los estados anímicos
mientos apuntan a abordajes psicológicos y los sentimientos es el hecho de que
y la de las capas profundas a los abordajes mientras la coexistencia simultánea de
biológicos. En definitiva, los sentimientos distintos estados de ánimo es la excep-
y el humor son fenómenos independien- ción (esto sólo ocurre en patologías afec-
tes, aunque las alteraciones del humor tivas raras como la ciclación rápida y los
pueden condicionar la alteración de los estados mixtos), la coexistencia de distin-
sentimientos sensoriales y vitales. La dis- tos sentimientos es la regla, así uno puede
tinción entre alteraciones del estado de sentir a la vez tristeza, cólera, rabia o
ánimo o sentimientos es particularmente incluso alegría.
importante para los sentimientos psicoló-
Las alteraciones básicas del estado de
gicos ya que éstos son los más frecuentes
ánimo son el depresivo, el eufórico y el dis-
y aparentes, por lo que en adelante nos
fórico. La alteración del estado de ánimo
referiremos a ellos a no ser que se especi-
del polo depresivo se corresponde con la
fique lo contrario.
aparición de los sentimientos de las capas
El estado de ánimo y los sentimientos profundas (vitales y sensoriales) de tonali-
se distinguen entre sí por su relación tem- dad depresiva, mientras que los sentimien-
poral, ya que los estados de ánimo per- tos psicológicos sólo se afectan de manera
sisten durante periodos relativamente lar- secundaria. La afectación de los sentimien-
gos y se oponen a la brevedad e tos vitales suele conllevar la experiencia de
inestabilidad de los sentimientos. Las tristeza, que por tener un carácter cualita-
alteraciones del estado de ánimo son rela- tivamente distinto de la experiencia normal
tivamente autónomas del ambiente y de tristeza, se la denomina tristeza patoló-
muchas veces comienzan y terminan sin gica. Esta diferenciación es básica para
motivo aparente, mientras que los senti- delimitar las enfermedades afectivas de las
mientos están unidos a las circunstancias reacciones vivenciales anormales y de los
vitales y tienen un comienzo y final paro- meros problemas afectivos (Tabla 1).

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V. Peralta y M. J. Cuesta

Tabla 1. Psicopatología de la afectividad depresiva.


Tipo de Mecanismo Experiencia Trastorno
afectividad psicopatológico subjetiva
Sentimientos Estimulación normal Tristeza normal No trastorno
Estimulación exagerada Tristeza disfuncional Reacción vivencial anormal
Estado de ánimo Alteración cualitativa Tristeza patológica Enfermedades del estado de
ánimo

Tristeza normal y patológica nal. Una persona que se siente apenada o


afligida puede contagiar estos sentimien-
La tristeza normal y patológica, respec- tos a otra persona, y ésta sentir senti-
tivamente, son la expresión de la afecta- mientos similares.
ción de dos fenómenos psíquicos muy dis-
tintos: el humor o estado de ánimo y los La tristeza patológica es un sentimien-
sentimientos. Hablamos de tristeza normal to cualitativamente distinto de la tristeza
cuando ésta es meramente una estimula- normal, que los propios pacientes diferen-
ción del sentimiento y de tristeza patológi- cian muy bien como una cualidad distinta
ca cuando ésta es la expresión de una alte- y a veces inefable del estado de ánimo. Tal
ración del estado de ánimo. es así que un enfermo deprimido puede
ser incapaz de sentir tristeza por un acon-
La tristeza es un sentimiento que se tecimiento que habitualmente le hubiera
experimenta ante una gran diversidad de entristecido, lo que le hace sentirse como
situaciones cotidianas desagradables o indigno y culpable. Por otra parte, la tris-
adversas, cuyo común denominador es, teza patológica se acompaña de una serie
por lo general, la pérdida de algo más o de manifestaciones en los ámbitos cogniti-
menos importante. Se trata, por lo tanto, vo, somático, y conductual que no suelen
de una experiencia psicológica corriente, acompañar a la tristeza normal. La tristeza
coherente con lo que la desencadena y patológica, probablemente por su distinta
con una intensidad y duración adecuados cualidad, no es tan fácilmente comunica-
a la situación desencadenante. La tristeza ble, y de hecho, no pocos pacientes con
patológica, que no siempre se puede dife- depresiones graves les cuesta expresar
renciar nítidamente de la normal, se carac- este sentimiento, y algunos incluso niegan
teriza por aparecer sin motivo fácilmente sentirse tristes, ya que la tristeza patológi-
identificable, y cuando éste existe, no ca muchas veces tiene un carácter difuso e
guarda proporción con el desencadenan- inefable. Cuando los enfermos deprimidos
te, y afecta de manera importante al fun- expresan sus sentimientos, éstos son difí-
cionamiento global. Entre la tristeza nor- cilmente comprendidos por otras perso-
mal y la patológica cabe mencionar la nas ya que no encuentran resonancias
tristeza disfuncional, que es una tristeza equivalentes en sus propias vivencias y
de cualidades normales pero que es exa- experiencias. Por ello muchos pacientes se
gerada tanto en intensidad como en dura- quejan, no sin razón, de que nadie com-
ción en relación con el acontecimiento prende su estado. Incluso dos pacientes
desencadenante. Esta tristeza puede ser melancólicos no pueden comunicarse su
desadaptativa, pero no necesariamente es tristeza sobre el mismo tema.
de carácter morboso ni implica necesidad
de tratamiento. La tristeza patológica también se cono-
ce como tristeza vital y como melancolía,
La experiencia de la tristeza normal términos que en gran parte se superponen.
es un sentimiento fácilmente identifica- El nombre de vital hace referencia al carác-
ble, comunicable y reconocible, tanto por ter corpóreo de la tristeza y a su frecuente
la persona que lo sufre como por la per- asociación con manifestaciones somáticas
sona a la que se le comunica. Es por lo diversas, mientras que el término de
tanto un sentimiento empático y relacio- melancolía fundamentalmente hace refe-

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PSICOPATOLOGÍA Y CLASIFICACIÓN DE LOS TRASTORNOS DEPRESIVOS

rencia a las distintas cualidades de la tris- uno o más de los componentes pueden
teza, tales como arreactividad, experiencia estar ausentes. Ninguno de los componen-
cualitativamente distinta y falta de reso- tes es condición necesaria para el diagnós-
nancia afectiva. tico del síndrome, ni tan siquiera la pre-
sencia de la tristeza, ya que hay formas de
EL SÍNDROME AXIAL DE depresión, no infrecuentes y que plantean
importantes problemas diagnósticos para
LA DEPRESIÓN
el médico de atención primaria, en que los
Tradicionalmente se ha considerado la pacientes no la experimentan (depresio-
depresión como síntoma, síndrome o enfer- nes vegetativas, enmascaradas o equiva-
medad, y se han realizado muchos esfuer- lentes depresivos). Las alteraciones somá-
zos para delimitar las características esen- ticas, motoras, y particularmente la
ciales de la depresión con el objeto de ser alteración de los biorritmos tradicional-
fiablemente diagnosticada y tratada. Un mente han sido consideradas como marca-
diagnóstico conlleva implicaciones psico- dores de la endogeneidad de la depresión
patológicas, etiológicas y terapéuticas, por y de una buena respuesta a los tratamien-
lo que cualquier esfuerzo en este sentido tos biológicos, por lo que se les ha atribui-
debe de ser válido con respecto a estas do una particular relevancia diagnóstica5.
variables (validez externa o de criterio). No El síndrome depresivo aquí expuesto tiene
es lo mismo el diagnóstico de una “depre- una finalidad eminentemente descriptiva,
sión” susceptible de ser tratada con psico- y cuantos más componentes (del A al G)
terapia que otra con el mismo nombre y estén presentes más probable es el diag-
susceptible de ser tratada con tratamien- nóstico del trastorno.
tos biológicos. Las dificultades en definir la
depresión a nivel sindrómico, por una Entre las múltiples definiciones de los
parte se deben a la dificultad de delimitar trastornos depresivos mayores, la caracte-
los distintos síntomas y el propio síndrome rización de melancólica es la que ha per-
de conductas y sentimientos normales o sistido más en el tiempo y sus característi-
proporcionales a determinadas situaciones cas según el DSM-IV están recogidas en la
vitales, y por otra a la enorme variabilidad tabla 2. Los síntomas melancólicos se aso-
clínica de los cuadros depresivos. cian con mayor frecuencia a los hallazgos
Ante la ausencia de validadores exter- de laboratorio del tipo de la no supresión
nos de los trastornos depresivos, el diag- con dexametasona; concentraciones eleva-
nóstico debe de ser necesariamente psico- das de cortisol en plasma, orina y saliva;
patológico y clínico. Con el propósito de test de provocación con tiramina anormal,
delimitar las formas de depresión (con sus asimetría anormal en la prueba de escucha
distintas implicaciones), se han desarrolla- dicótica y alteraciones polisomnográficas
do numerosos intentos de delimitación de como reducción en la latencia REM.
las características psicopatológicas nucle-
ares del síndrome depresivo. Las diferen- NOSOLOGÍA DE LOS TRASTORNOS
tes denominaciones que ha recibido el sín-
drome nuclear de la enfermedad depresiva
DEPRESIVOS
a lo largo del tiempo (endógena, melancó- En las ciencias naturales, la forma de
lica, autónoma, somatógena, vital, mayor) clasificar los distintos objetos de estudio,
reflejan las dificultades de la delimitación ha suscitado importantes problemas meto-
de sus características fundamentales. dológicos que tienen una raíz filosófica
En la tabla 2 se recogen las caracterís- sobre cómo entender la naturaleza, y que
ticas psicopatológicas de lo que podría- han tenido y tienen importantes repercu-
mos denominar el síndrome axial de la siones prácticas en el campo de la medici-
depresión2. Aunque los diferentes compo- na y más específicamente el de la psiquia-
nentes de este síndrome están muy cohe- tría. Los principales enfoques están
sionados y tienden a darse de manera con- representados por la aproximación catego-
junta, en un determinado paciente su rial y la dimensional, cuyas principales
expresividad puede variar enormemente y características se exponen en la tabla 3.

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V. Peralta y M. J. Cuesta

Tabla 2. El síndrome axial de las depresiones.


I.- El síndrome axial general (modificado de Glatzel2)
A.- Alteraciones del humor Humor depresivo, tristeza patológica
B.- Alteraciones de los sentimientos vitales Astenia
y sensoriales Anhedonia
Dolores, quejas somáticas
C.- Alteraciones del pensamiento/cognitivas Ideas de culpa
Ideas de minusvalía
Ideas de muerte
Ideas hipocondríacas
Desesperanza
Quejas cognitivas subjetivas
D.- Alteraciones vegetativas Alteraciones del sueño
Alteraciones del apetito
Pérdida de peso
Estreñimiento
E.- Alteraciones motoras Inhibición psicomotora
Inquietud/agitación psicomotora
F.- Alteraciones de la conducta Aislamiento social
Retraimiento emocional
Conducta autolítica
G.- Alteraciones de los biorritmos Empeoramiento matutino
Despertar precoz
Influencia estacional

II.- Características de la depresión melancólica (DSM-IV)


A.- Presencia de uno de estos dos síntomas:
Anhedonia
Falta de reactividad del humor ante estímulos habitualmente placenteros
B.- Presencia de tres o más de estos síntomas:
Cualidad distinta del estado de ánimo depresivo
Empeoramiento matutino de la tristeza
Despertar precoz
Enlentecimiento o agitación psicomotriz
Anorexia significativa o pérdida de peso
Culpabilidad excesiva o inapropiada

Tabla 3. Clasificaciones categoriales vs dimensionales.


CATEGORIAL DIMENSIONAL
Filosofía subyacente Platónica Aristotélica
Tipo de clasificación Cualitativa Cuantitativa
Metodología estadística Análisis de cluster Análisis factorial
Tratamiento de la información Dicotómica Cuantitativa
Mecanismo clasificatorio Tipos ideales (prototipos) Agrupamiento natural de síntomas
Tratamiento de lo clasificado Excluyente Complementario
Categorías diagnósticas Dependientes Independientes
Area principal de aplicación Clínica Investigación y clínica
Problemas asociados Simplista Compleja
Elevada comorbilidad No instrumentos estándar
Casos atípicos
Formas mixtas

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PSICOPATOLOGÍA Y CLASIFICACIÓN DE LOS TRASTORNOS DEPRESIVOS

Tabla 4. Clasificación categorial de las depresiones.


Según etiología:
a. Primarias
a.1. Endógenas
a.1.1. Con factores hereditarios
a.1.2. Sin factores hereditarios
a.2. Reactivas (a desencadenantes psicosociales)
b. Sintomáticas o secundarias (a factores biológicos o enfermedades médicas)
Según la presencia de factores específicos:
a. Estacionales
b. Hormonales
b.1. Catameniales
b.2. Postparto
b.3. Postmenopáusica
Según la presencia del síndrome melancólico:
a. Melancólicas
b. No melancólicas
b.1. Neuróticas
b.2. Distímicas
b.3. Atípicas
Según la clínica (depresiones melancólicas y/o endógenas, según Glatzel2):
a. Melancolía simple
a.1. Depresión agitada (angustiosa)
a.2. Depresión inhibida (estuporosa)
a.3. Depresión obsesiva
b. Depresión vital
b.1. Anérgica
b.2. Vegetativa (depresión enmascarada)
c. Depresión con síntomas de despersonalización
d. Depresión psicótica
Según la evolución:
a. Trastorno depresivo recurrente (depresión monopolar)
b. Depresión bipolar (trastorno ciclotímico, trastorno bipolar)
c. Depresión crónica (trastorno distímico)
d. Depresión resistente al tratamiento
Según la intensidad del síndrome depresivo
a. Leve
b. Moderada
c. Grave
c.1. Sin síntomas psicóticos
c.2. Con síntomas psicóticos
Según la edad de presentación:
a. Infantiles
b. Del adulto
c. De la tercera edad

En el ámbito de las enfermedades sos modelos integradores para algunos


mentales, tradicionalmente ha predomi- trastornos mentales 8. El caso de las
nado la aproximación categorial al diag- depresiones no es una excepción, y a
nóstico, aunque ésta ha sido criticada con pesar de que dentro de los trastornos
poderosos argumentos teóricos, empíri- mentales este grupo de trastornos es uno
cos y prácticos6. Sin embargo, las aproxi- de los candidatos más firmes para un
maciones categorial y dimensional no son abordaje dimensional, tradicionalmente
necesariamente antagónicas, sino com- han prevalecido las clasificaciones cate-
plementarias7 y se han propuesto diver- goriales.

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V. Peralta y M. J. Cuesta

CLASIFICACIONES CATEGORIALES de la normalidad por un lado y de otros


trastornos mentales por otro.
Si la definición del síndrome axial
depresivo no está exenta de dificultades, la Ya hemos hecho referencia a algunos
clasificación de las depresiones plantea criterios psicopatológicos que nos ayudan
aún más problemas, algunos de ellos deri- a distinguir la depresión como trastorno o
vados de la propia definición del síndrome enfermedad de formas de reacción normal
depresivo, y otros derivados de la gran o disfuncional con elementos depresivos,
heterogeneidad (etiológica, clínica y evolu- sin embargo esta distinción no siembre es
tiva) de los trastornos depresivos. fácil, de lo que se derivan cuestiones tera-
péuticas tan relevantes como si se debe
En la tabla 4 se presenta una clasifica- intervenir, cuándo y de qué manera. La
ción ecléctica, sistemática y clínicamente delimitación de los trastornos depresivos
relevante de los trastornos depresivos. de otras enfermedades mentales es aún
Esta clasificación es muy ilustrativa desde más compleja, ya que a menudo se plante-
varios puntos de vista. Primero, como toda an problemas de diagnóstico diferencial
clasificación categorial, los diferentes sub- con trastornos limítrofes, que están en fun-
tipos están expresados en términos cate- ción de los síntomas depresivos predomi-
goriales de presencia vs ausencia. En nantes (Fig. 2). Así por ejemplo, cuando
segundo lugar, es muy comprehensiva y aparecen síntomas psicóticos (delirios y/o
muestra claramente la gran heterogenei- alucinaciones) especialmente si son incon-
dad clínica, ya que una simple permuta- gruentes con el humor depresivo, a menu-
ción de los diferentes subtipos proporcio- do se plantea el problema del diagnóstico
naría cientos de posibles formas clínicas diferencial con un trastorno esquizoafecti-
de depresión. vo, problema que muchas veces se resuel-
Sin embargo, estas características ve en una u otra dirección por criterios tan
–que son las propias de cualquier siste- arbitrarios como la duración o intensidad
ma clasificatorio categorial– aunque váli- de un tipo de síntomas sobre otro. Aunque
das desde el punto de vista didáctico y no existen datos fiables al respecto, se
hasta teórico– tienen importantes difi- puede afirmar con bastante seguridad, que
cultades desde el punto de vista clínico y la tipicidad de los trastornos depresivos es
práctico. 1–. Algunos criterios de clasifi- la excepción más que la regla, particular-
cación producen subtipos excluyentes mente cuando se contempla su evolución a
entre sí; por ejemplo depresión endógena largo plazo.
vs reactiva, depresión melancólica vs dis-
timia. Esto es rigurosamente erróneo CLASIFICACIONES DIMENSIONALES
desde el punto de vista clínico, ya que un
paciente puede tener un trastorno distí-
mico y a la vez un episodio depresivo Supuestos de la aproximación
mayor con melancolía, y los factores dimensional a los trastornos
endorreactivos y psicorreactivos pueden depresivos
estar presentes a la vez, lo que de hecho Existe una evidencia consistente de
es la situación clínica habitual; 2.– Las que los límites de los trastornos afectivos
diferentes formas clínicas se pueden dar son difusos desde cuatro perspectivas o
de manera simultánea y con distinta fronteras distintas: la normalidad9-11, las
intensidad en un mismo paciente, y ade- características del propio síndrome depre-
más ser cambiantes a lo largo del tiempo; sivo12,13, la relación entre las distintas for-
éste es el caso de las características mas de trastornos afectivos14, y la relación
melancólicas que no siempre aparecen con otros trastornos psiquiátricos15,16. Por
en cada episodio depresivo; 3.– Aunque otra parte, es un hecho bien establecido
no está expresamente formulado, cual- que los factores causales son múltiples y
quier clasificación categorial de la depre- que en la mayoría de los pacientes están
sión lleva implícita la asunción de que la presentes en mayor o menor intensidad
depresión se puede delimitar claramente varios de ellos. Por ello, cualquier intento

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PSICOPATOLOGÍA Y CLASIFICACIÓN DE LOS TRASTORNOS DEPRESIVOS

TR. OBSESIVO-
COMPULSIVO

TR. POR
ANSIEDAD Obsesiones
GENERA-
LIZADA
CATATONIA
Ansiedad Alter.
motoras

DEPRESIÓN
Quejas
somáticas
TR. SOMA- Psicosis
TOMORFO
Síntomas
cognitivos TR. ESQUIZO-
AFECTIVO

ENFERMEDADES
NEUROLÓGICAS

Figura 2. Las fronteras de la depresión con otros trastornos mentales.

de clasificar las depresiones debe necesa- sionalidad de la depresión basándose en


riamente tener en cuenta estos factores, técnicas estadísticas multivariantes, com-
cuestión para la que los abordajes dimen- probando que la depresión tiene una dis-
sionales son más apropiados dado su tribución unimodal. Por lo tanto, la depre-
manera de integrar la información (com- sión puede ser conceptualizada a lo largo
plementaria, aditiva, y no excluyente). de un continuo en el que se sitúan todos
Estas aproximaciones también tienen los trastornos depresivos, y en el que las
validez neurobiológica como lo demuestra formas crónicas leves y las formas psicóti-
el clásico trabajo de Asberg y col17 en el cas graves representan los extremos del
que se demostró que niveles bajos en LCR continuo. Este modelo ha sido reciente-
de 5-HIAA (el mayor producto de la degra- mente revitalizado por otros investigado-
dación del 5-HT) en pacientes depresivos res21 al encontrar que, a pesar del hallazgo
estaba ligado a la dimensión de suicidio. de varias dimensiones clínicas, las depre-
Posteriormente se encontró que la rela- siones se agrupan en un continuo de gra-
ción entre niveles bajos de 5-HT y el suici- vedad. De hecho, la depresión representa
dio no era específico de la depresión ya el paradigma de la dimensionalidad de los
que se encontró en otros trastornos men- trastornos mentales al conectar los tras-
tales18. Más recientemente se ha encontra- tornos afectivos con la esquizofrénica
do que la 5-HT esta asociada con la dimen- siguiendo el criterio de gravedad: Sínto-
sión más general del trastorno del control mas depresivos ➞ Síndrome depresivo ➞
de los impulsos19, de la que forma parte la Depresión melancólica ➞ Depresión psicó-
conducta suicida. tica ➞ Trastorno esquizoafectivo subtipo
afectivo ➞ Trastorno esquizoafectivo sub-
tipo esquizofrénico ➞ Esquizofrenia con
Clasificaciones unidimensionales síntomas depresivos.
Kendell20 formuló una de las primeras Aunque probablemente existe una
formulaciones operativas sobre la dimen- dimensión común a todos los trastornos

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V. Peralta y M. J. Cuesta

depresivos que estaría en función del tenda ser comprehensiva e integradora


número, intensidad y duración de los sín- debe tener en consideración las 4 dimen-
tomas depresivos12-13, esta dimensión difí- siones cardinales: la presencia del síndro-
cilmente explica la gran variabilidad etio- me axial, la etiológica, los síndromes clíni-
lógica, psicopatológica y evolutiva de los cos y los patrones evolutivos (Fig. 3).
trastornos depresivos. De hecho, el mismo Seguidamente exponemos un modelo
Kendell20 observó que las formas más gra- jerárquico y multidimensional de las
ves responden mejor al tratamiento que depresiones similar al que hemos propues-
las formas más leves (pero más crónicas), to para la esquizofrenia24, y que en princi-
lo que evidencia una incongruencia entre pio podría ser generalizable, con modifica-
la gravedad de la sintomatología y la evo- ciones, a la mayoría de los trastornos
lución, lo cual es consistente con la prácti- mentales.
ca clínica.
El primer paso de esta aproximación
consiste en determinar la presencia en
Clasificaciones multidimensionales algún grado del síndrome axial y poste-
Estas clasificaciones, a diferencia de riormente evaluar al paciente en función
las categoriales, pretenden integrar toda la de las dimensiones etiológicas, sintomato-
información clínica y etiológica disponible lógicas y evolutivas. Estas dimensiones
de una manera aditiva e integradora. Hay básicas, a su vez se componen de subdi-
precedentes de propuestas de clasificacio- mensiones que representan sus elementos
nes multidimensionales que bien han esta- característicos. En las figuras 4, 5 y 6 se
do centradas en los síndromes psicopato- muestran respectivamente las dimensio-
lógicos22, o han esbozado una clasificación nes etiológicas, sintomatológicas y evoluti-
que integra aspectos biológicos, psicopa- vas. Cada dimensión esta expresada de
tológicos y evolutivos23. Sin embargo, toda forma cuantitativa en términos de ausen-
aproximación multidimensional que pre- cia y presencia en grado ligero, moderado

Síndrome
depresivo axial

0
Etiología Evolución

Dimensiones
clínicas

Figura 3. Multidimensionalidad de las depresiones.

16 ANALES Sis San Navarra 2002, Vol. 25, Suplemento 3


PSICOPATOLOGÍA Y CLASIFICACIÓN DE LOS TRASTORNOS DEPRESIVOS

Genética

2 Enfermedades
Factores médicas
hormonales
1

Personalidad
Factores previa
estacionales

Desencadenantes
Factores psicosociales
biográficos

Figura 4. Multidimensionalidad etiológica.

Psicosis

2
Disforia Ansiedad

Somatización
Suicidio

Psicomotricidad

Figura 5. Multidimensionalidad clínica.

ANALES Sis San Navarra 2002, Vol. 25, Suplemento 3 17


V. Peralta y M. J. Cuesta

y grave, aunque otros criterios de cuantifi- depresivo a las medidas apropiadas para
cación son posibles. controlar dicho riesgo.
La importancia de considerar los dife-
De acuerdo a la multidimensionalidad
rentes patrones de evolución (Fig. 6), estri-
etiológica (Fig. 4), en un determinado
ba en el hecho cada vez más contrastado
paciente pueden, por ejemplo, estar ausen-
de que, a pesar de la evolución normal-
tes factores genéticos, médicos y estacio-
mente cíclica de la depresión, existe una
nales, y estar presentes en diferente inten-
muy elevada prevalencia de síntomas resi-
sidad factores de personalidad,
duales (entre el 32 y 38%25,26 y de importan-
hormonales y reactivos. Este sería el caso
tes déficits funcionales en los ámbitos
de una paciente que presenta rasgos de
social y laboral, así como en la calidad de
personalidad obsesiva (factor predispo-
vida25-27. Estos datos ponen en entredicho
nente), relaciones afectivas inestables
la creencia bastante generalizada de que la
(factor biográfico), que de forma no desea-
mayoría de los trastornos depresivos se
da se queda embarazada (precipitante psi-
curan sin dejar secuelas, y aunque esto
cológico) y que tras el parto (factor hor-
puede ser cierto en el plano sintomático,
monal) presenta un trastorno depresivo
no lo es tanto en el plano de la discapaci-
mayor.
dad residual que provocan. La considera-
Las dimensiones sintomatológicas (Fig. ción de una dimensión bipolar nos permite
5) son especialmente relevantes desde el diferenciar las depresiones bipolares de
punto de vista clínico y terapéutico. Así, las monopolares, que tienen importantes
además del tratamiento habitual del sín- diferencias clínicas y biológicas.
drome depresivo con fármacos antidepre- Una característica común a la mayoría
sivos y psicoterapia, la presencia de cada de las nosologías categoriales de la depre-
una de estas dimensiones clínicas implica sión es que mezclan los planos etiológico,
abordajes terapéuticos diferentes. Así, la sintomatológico y evolutivo, lo que da
presencia de ansiedad es susceptible de lugar a solapamiento y confusión en los
tratamiento con ansiolíticos. La presencia subtipos. Por el contrario, una de las
de quejas somáticas plantea importantes características fundamentales de la clasifi-
problemas de diagnóstico diferencial con cación multidimensional que hemos des-
múltiples trastornos médicos que de crito es que los niveles etiológico, sinto-
manera demasiado frecuente conducen a mático y evolutivo son considerados de
exploraciones médicas innecesarias y manera independiente y a la vez de forma
diagnósticos erróneos, especialmente integradora. Este modelo no pretende sus-
cuando la tristeza es poco patente o está tituir a las clasificaciones categoriales al
ausente (depresiones enmascaradas). La uso, más bien, ambos tipos de clasificacio-
presencia de humor disfórico más que nes son complementarias y como tal debe-
depresivo implica dificultades adicionales rían de emplearse conjuntamente y eva-
de diagnóstico y de manejo, ya que estos luar su validez predictiva de forma
pacientes se muestran disruptivos, poco comparativa, tal y como se ha realizado en
colaboradores, con escasa conciencia de otros trastornos mentales28-29. Este modelo
enfermedad, y no suelen acudir al médico. tampoco pretende ser exhaustivo en cada
La presencia de síntomas motores, espe- una de sus dimensiones, y por lo tanto
cialmente cuando dominan el cuadro clíni- debe de considerarse provisional. Esta
co en forma de síntomas catatónicos (mar- aproximación parece ser válida desde el
cada inhibición, aquinesia, estupor, punto de vista teórico y clínicamente útil
rigidez) sientan la indicación de tratamien- ya que toma en consideración las princi-
to con Terapia Electro Convulsiva (TEC), a pales variables implicadas en el pleomor-
la que suelen responder muy bien. La pre- fismo de los trastornos depresivos. Ade-
sencia de síntomas psicóticos indica la más, es un modelo que permite generar
necesidad de tratamiento con neurolépti- hipótesis tales como la de que los tres pla-
cos y eventualmente con TEC. Por último, nos están interrelacionados, lo que puede
ante la presencia de riesgo de suicidio se arrojar luz sobre áreas que conocemos
debe supeditar el tratamiento del cuadro muy poco, tales como las relaciones entre

18 ANALES Sis San Navarra 2002, Vol. 25, Suplemento 3


PSICOPATOLOGÍA Y CLASIFICACIÓN DE LOS TRASTORNOS DEPRESIVOS

Síntomas residuales
depresivos

Síntomas residuales
Síntomas no depresivos
bipolares 2

Disfunción Disfunción
social laboral

Calidad
de vida

Figura 6. Multidimensionalidad evolutiva.

los diferentes factores etiológicos, sínto- 5. BERNER P. Die Unterteilung der endogenen
mas clínicos y patrones evolutivos. Por Psychosen: Differential Diagnostik oder
poner un sólo ejemplo, con relevantes Differential Typologie. En Gross G, Schüttler
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para el paciente y de política sanitaria,
sería interesante conocer los determinan- 6. VAN PRAAG HM. Over the mainstream:
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