Вы находитесь на странице: 1из 12

UNIVERSIDAD ABIERTA PARA ADULTOS

(UAPA)

Asignatura
EDUCACION A DISTANCIA

Tema
TAREA 4

Participante
HAGUEN MOREL VALENZUELA
201906350

Facilitadora
GEOVAN E. REYNOSO PEREZ (MA)

MARIA TRINIDAD SANCHEZ (NAGUA)


03 Septiembre, 2019
1. El proceso docente en la modalidad de Educación a Distancia.

El proceso docente entraña un conjunto de actividades desarrolladas por los


actores del mismo con la finalidad de alcanzar el aprendizaje de los alumnos. La
docencia, como actividad humana, va mucho más allá de las meras actividades de
enseñanza desarrolladas por el docente y de aprendizaje desarrolladas por los
alumnos. Abarca todo el proceso de planificación de la acción docente, de
administración, y de validación de los aprendizajes.

A continuación se presentan los conceptos de docencia y enseñanza, así como un


análisis de la concepción de enseñanza asumida para la modalidad de educación
a distancia.

Concepto de docencia.
La docencia es comúnmente asumida como sinónimo de enseñanza. Esta
concepción tiende a reducir un concepto que va más allá del proceso de
enseñanza, puesto que implica también la planificación de un conjunto de
actividades que configuran el proceso de aprendizaje.

Concepto de enseñanza.
La enseñanza puede ser definida como el proceso a través del cual el docente
interactúa con el alumno de manera intencional para ayudarlo en su proceso de
aprendizaje. Esto implica la planificación de una serie de acciones formativas, la
toma de decisiones pro y pre activo y la permanente retroalimentación.

Concepción de enseñanza en la educación a distancia.


En la educación a distancia el proceso de enseñanza, generalmente, se produce
en espacios y tiempos distintos al proceso de aprendizaje. De ahí que las
actividades de enseñanza se presentan mediadas a través de los materiales
didácticos. Las mediaciones docentes se manifiestan en los materiales en la
presentación de los contenidos de aprendizaje, en la integración de estrategias
didácticas que faciliten el aprendizaje de los mismos y en la permanente
evaluación y retroalimentación de lo aprendido
2. Metodologías activas de enseñanza y de aprendizaje utilizadas
en la Educación a Distancia.
La educación a distancia tiene como una de sus características distintivas el
aprendizaje independiente del estudiante. Reconoce al alumno como el centro del
proceso docente y como protagonista del aprendizaje. El papel del docente es de
facilitador del aprendizaje de los alumnos. Es responsable de la creación de
entornos de aprendizaje que potencien en los alumnos la capacidad de aprender a
aprender y la construcción de conocimientos. Para ello diseña actividades de
enseñanza con la perspectiva de desarrollar la capacidad de aprendizaje
autónomo. Se compromete en enseñar a aprender.
La metodología activa ha hecho signifcativas aportaciones didácticas a los
procesos de enseñanza y aprendizaje ya que ha propiciado la creación de
entornos de aprendizaje significativos, además de cambiar el rol de docentes y
alumnos, convirtiendo a los primeros en facilitadores del aprendizaje y a los
segundos en participantes activos.
Permite el desarrollo de actividades y habilidades que la enseñanza tradicional no
promueve, puesto que se caracteriza por la actitud pasiva de los alumnos, a través
de métodos como las largas explicaciones del docente, el dictado y la exposición
de contenidos.
Los nuevos entornos de aprendizaje, basados en el modelo participativo han dado
un giro completo al rol de docente y alumno, en tanto que, como plantea López, N.
(2005, p. 51) “…el profesor pasa de ser el dueño absoluto del hecho educativo a
ser partícipe del mismo, de transmisor a planifcador, de juez a facilitador” y el
alumno cambia su postura de dependiente, receptivo, pasivo e individual con
respecto al proceso educativo a otra autónoma, participativa y grupal.
De lo anterior se deduce que un entorno de aprendizaje basado en el uso de
metodologías activas implica que el docente ha seleccionado una nueva manera
de enseñar, basándose en el trabajo activo y respetando que el alumno sea, real y
efectivamente, el protagonista de su formación.
El diseño pedagógico en la educación a distancia.
Si en la educación presencial el diseño instruccional tiene una función principal,
aún la tiene más en la educación a distancia, debido a que son dos realidades
distintas en las que se desarrollan la enseñanza y el aprendizaje. En la educación
presencial el docente se constituye en el factor fundamental de la enseñanza y del
acceso al conocimiento, mientras que en la educación a distancia la enseñanza
está mediatizada, ya que debido a la separación espacio/temporal entre el docente
y los alumnos, la acción de enseñanza es asumida por los medios que se utilicen
para la transmisión de los conocimientos, ya sean estos impresos, audiovisuales y/
o informáticos.
3. Estrategias para un aprendizaje autónomo.
Aprendizaje autónomo implica la capacidad del alumno de tomar sus propias
decisiones de aprendizaje, o sea, de atender sus propias necesidades y
compromisos de aprendizaje. Piaget, (citado en Manrique, 2004), al referirse a la
autonomía, expresa que implica la capacidad de las personas de pensar por sí
misma con sentido crítico. En el aprendizaje autónomo el alumno asume la
responsabilidad y el control de su propio aprendizaje Para Manrique (2004), se
puede hablar de autonomía en el aprendizaje cuando el alumno está en
condiciones de tomar decisiones que le conduzcan a regular su propio
aprendizaje, en función a unas metas específicas y a unas condiciones específicas
de aprendizaje.
En esa misma línea, plantea que el alumno debe dirigir su propio aprendizaje,
reflexionar y tomar conciencia sobre su forma de aprender y los factores que
pueden incidir en este proceso para que sepa aprender a aprender.
Tanto la autonomía en el aprendizaje como el uso de adecuadas estrategias de
aprendizaje están íntimamente ligados a los niveles de conocimientos que ha
alcanzado el alumno sobre su propia capacidad de aprender, o sea, al
conocimiento de sus procesos meta cognitivos.
No todas las personas cuentan con autonomía para aprender lo que en muchos
casos puede provocar fracasos en los estudios que, finalmente, se traducen en
desmotivación y deserción de los cursos. Es por esto que tener pleno
conocimiento y dominio de adecuadas estrategias de aprendizaje y que estas se
utilicen adecuadamente puede generar un aprendizaje efectivo y, por
consiguiente, éxito en los estudios.
Fandos y González (2009), presentan un modelo elaborado por Brockett y
Hiemstra (1993) donde se plantean una serie de interrogantes que debe hacerse
el alumno, a manera de reflexión, sobre su propio proceso de aprendizaje. Estas
orientaciones favorecen del desarrollo del aprendizaje autónomo. La tabla que se
presenta a continuación esboza dichas orientaciones.
Las estrategias de aprendizaje son más que hábitos de estudios, en tanto que
implican procedimientos encaminados a desarrollar en los alumnos su capacidad
de aprender de manera autónoma.
4. Concepto de evaluación.
La evaluación es uno de los procesos fundamentales del acto educativo, en tanto
que constituye el recurso a través del cual los docentes y los alumnos obtienen
informaciones sobre los progresos y retrasos en el logro de los resultados de
aprendizaje esperados.

5. Características y tipos de evaluación.


Concebir la evaluación como una actividad aislada y fragmentada en períodos
específicos, generadora de un clima psicológico de tensión es totalmente
discordante con la naturaleza y la función que, en el proceso de aprendizaje, debe
tener esta actividad. La evaluación no debe concebirse como una actividad fnal,
de cierre de un período de aprendizaje, ya que es un proceso continuo e integrado
al proceso de aprendizaje. Es una evaluación centrada en la valoración del
desempeño de los alumnos durante el proceso de aprendizaje, más que centrada
en el resultado final del mismo.
La evaluación se caracteriza por ser una actividad continua que permite reunir
evidencias del trabajo de los alumnos, con la finalidad de mantener una
comunicación o retroalimentación permanente sobre sus aciertos y desaciertos y a
la vez, ir introduciendo mejoras para superar los escollos que dificulten la calidad
de su aprendizaje. Es una evaluación orientadora, de carácter formativo.
6. La evaluación alternativa.
En la última década se han planteado nuevas concepciones sobre la evaluación
de los aprendizajes, superando la tradicional concepción centrada en la evaluación
de contenidos memorísticos, de modo que, como indican Mateo y Martínez (2008)
a los contenidos académicos clásicos se añaden los contenidos procedimentales y
actitudinales, pero además, es actualmente objeto de evaluación el conjunto de
capacidades, habilidades y valores de tipo transversal. Estos nuevos aspectos a
evaluar han generado cambios e innovaciones introduciendo nuevas técnicas e
instrumentos de evaluación
En esa misma línea, López G. y M. Rodríguez (2003, p.74) indican que “…a
diferencia de las prácticas tradicionales de evaluación, en las que el estudiante
selecciona una respuesta de un menú de posibilidades (opción múltiple, falso o
verdadero, etc.), las alternativas requieren la construcción de una respuesta,
producto o demostración por parte del alumno”.
La evaluación alternativa implica la incorporación de nuevos procedimientos y
técnicas a las actividades cotidianas del aula. Propicia la recopilación de
evidencias acerca de cómo los estudiantes procesan y completan las tareas sobre
cuestiones reales. Incluye una variedad de técnicas de evaluación las cuales se
pueden adaptar a distintas situaciones.
Indican también, una serie de ventajas y desventajas que presenta la evaluación
alternativa. A saber:
Ventajas
- Se puede aplicar durante todo el proceso educativo.
- Brinda retroalimentación constante al estudiante para mejorar sus áreas
débiles y fortalecer sus áreas fuertes.
- Prepara al estudiante para desempeñarse en contextos reales, por lo que pone
en práctica sus conocimientos.
- Permite a los estudiantes desarrollar un proceso de auto regulación de sus
conocimientos, siendo éste el responsable de su proceso de aprendizaje.
- Brinda datos con respecto al desempeño, madurez y crecimiento cognitivo del
estudiante, ya que el seguimiento se realiza a largo plazo.
- El profesor tiene la opción de implementar diversas estrategias, técnicas e
instrumentos de evaluación.
- Provee de información al docente para perfeccionar el proceso de aprendizaje.
- Abre espacios para incluir el componente tecnológico como un factor
innovador en el proceso evaluativo.
Desventajas
➲ Exige mayor planifcación de las estrategias y construcción de instrumentos
para la evaluación dentro de los entornos virtuales.
➲ Su implementación consume más tiempo en el proceso de mediación
desarrollado por el profesor.
➲ Requiere una capacitación constante de los docentes en el diseño de
estrategias e instrumentos objetivos para evaluar el desempeño de nivel superior.
➲ Puede presentarse un aumento de costos, sobre todo si se desea implementar
el uso de un sistema tecnológico.
➲ Se requieren destrezas en el uso de las herramientas tecnológicas, tanto de
parte de los estudiantes como del profesor.
➲ Necesita una minuciosa coordinación entre las entidades involucradas en el
proceso de evaluación alternativa (académico, personal de apoyo, servicios
tecnológicos, administradores).
7. Evaluación por competencias.
Un estudiante es competente para realizar una tarea cuando es capaz de aplicar
exitosamente los conocimientos, procedimientos, actitudes y valores en una
realidad determinada.
La evaluación de competencias consiste en la valoración de las capacidades y
habilidades que muestra el alumno en la práctica. Implica recoger evidencias
sobre lo que sabe hacer. Lo que se evalúa es la capacidad de ejecución de la
competencia por parte del alumno.
La evaluación de competencias demanda de mecanismos que den testimonios de
su dominio. Es por ello que se hace necesario trabajar con criterios de evaluación,
con indicadores de los criterios y con muestras de desempeño. Estos elementos
indican el grado de desarrollo de las competencias que los alumnos deben
evidenciar.
Los criterios de evaluación hacen referencia a las competencias que serán objeto
de evaluación. Son variables de referencia que sirven de base de comparación
respecto al desempeño de los alumnos en su aprendizaje. Los criterios definidos
se asumen como indispensables para desarrollar las competencias en las
asignaturas.
Los indicadores del criterio son enunciados referentes a conductas observables
que evidencian claramente lo que el alumno sabe o hace respecto a determinado
criterio de evaluación. Están formados por los conocimientos, habilidades,
actitudes y valores implicados en criterio definido. La selección de los indicadores
es una tarea del docente, quien deberá asumir los más representativos del
aprendizaje que se está desarrollando.
Las muestras de desempeño están directamente relacionadas con los indicadores
de criterio establecidos. Hacen referencias a los procesos y conocimientos
involucrados en los indicadores que se espera haya logrado el alumno. Son las
evidencias que muestran el dominio de las competencias.
Luego de definidos estos elementos, el docente diseña las actividades de
evaluación pertinentes para valorar el grado de desempeño de los alumnos
respecto a la competencia evaluada.
8. Técnicas e instrumentos de evaluación.
Partiendo de los planteamientos de diversos autores, los cuales han hechos
signifcativos aportes al análisis de la evaluación alternativa y la evaluación de
competencias, se presenta una tabla que recoge elementos característicos de
distintas técnicas de evaluación.
9. Concepto de metodología participativa.
La metodología participativa es un proceso de trabajo que concibe a los
participantes de los procesos como agentes activos en la construcción del
conocimiento y no como agentes pasivos, simplemente receptores; de esta forma
promueve y procura que todos los integrantes del grupo participen. Cuando se
utiliza esta técnica en trabajo social, la percepción, análisis y solución de los
problemas no depende ya solo del experto, del científico sino que se tiene en
cuenta de manera primordial a los beneficiarios, a los usuarios o actores sociales y
sus expectativas, sus percepciones y necesidades.
10. Trabajo en grupo.
Es el trabajo hechos por varias personas donde cada uno hace una parte pero
todos tienen en un objetivo común. Pero para que se considere trabajo en equipo o
cooperativo, el trabajo debe tener una estructura organizativa que favorezca la
elaboración conjunta del trabajo y no que cada uno de los miembros realicen una
parte del trabajo y juntarlas.
Es una de las condiciones de trabajo de tipo psicológico que más influye en los
trabajadores de forma positiva porque permite que haya un compañerismo. Puede
dar muy buenos resultados, ya que normalmente genera entusiasmo y produce
satisfacción en las tareas recomendadas, que fomentan entre los trabajadores un
ambiente de armonía y obtienen resultados beneficiosos.

11. El trabajo en grupo colaborativo.


Es un conjunto de tres o más personas que interactúan de manera dinámica e
interdependiente con respecto a una meta y unos objetivos, donde cada individuo
adquiere algunas responsabilidades o funciones específicas. Según Rafael
González, las características que tienen los grupos colaborativos son las
siguientes:

 El liderazgo es una responsabilidad compartida, el equipo tiene un


propósito específico y bien definido.
 El producto del trabajo es tanto del equipo como del integrante.
 La efectividad se evalúa valorando directamente los productos del equipo.
Se hacen evidentes la responsabilidad individual y la del equipo.
 Se reconocen y celebran los esfuerzos individuales que contribuyen al éxito
del equipo.
 Se hacen discusiones abiertas para la solución efectiva de los problemas.

12. El trabajo cooperativo.


Es un término genérico usado para referirse a un grupo de procedimientos de
enseñanza que parten de la organización de la clase en pequeños grupos mixtos y
heterogéneos donde los alumnos trabajan conjuntamente de forma coordinada
para resolver tareas académicas y profundizar en su propio aprendizaje. En
términos de aprendizaje esta modalidad responde a una visión piagetiana del
constructivismo, en la que cada uno de los integrantes del grupo tiene destinada
una tarea específica dentro del proyecto o problema, realizando en este caso un
trabajo más individual, y en la que el profesor es el responsable de estructurar el
proceso. Es decir, es el profesor quien diseña y mantiene casi por completo el
control de la estructura de las interacciones y de los resultados que se han de
obtener.
13. Las técnicas participativas.
Las técnicas tienen una aplicación variable y flexible, pudiendo ser adaptadas en
función del tipo de grupo, de las necesidades, del momento en que se encuentre,
de cómo se establezca el trabajo, de los objetivos marcados, etc. Con su correcta
aplicación se pueden:

- Desarrollar procesos colectivos de discusión y reflexión.

- Que los conocimientos individuales se colectivicen y de ese modo se


enriquezca el grupo.

- Que a raíz del trabajo en grupo se pueda trabajar desde un punto común de
referencia.

- Que el grupo pueda, a través de lo estudiado, implicarse de forma más directa


en nuevas prácticas.

¿Cómo utilizarlas?

- Para aplicar una técnica participativa debe tenerse siempre muy claro qué
objetivo u objetivos pretendemos alcanzar con ella.
- Antes de aplicar una técnica debemos conocerla, saber cuándo y cómo
utilizarla y de que modo conducirla.
- Cuando se trabaja un tema es conveniente utilizar más de una. Es preciso
buscar técnicas que se complementen unas con otras, reorientándolas todas a
un objetivo común y que permitan profundizar en el tema de forma ordenada y
sistemática.

Вам также может понравиться