Artículo 3: Visita al Museo de San Carlos

El rostro del Gótico en el Museo Nacional de San Carlos

El término Gótico fue acuñado por el historiador de arte Giorgio Vasari en el siglo
XVI. Este movimiento artístico surgió en la Galia del siglo XII, actualmente Francia y
se extendió por toda Europa hasta principios del XVI.
El arte gótico se caracteriza por seguir fielmente la ideología religiosa, Dios como el
principio y fin de todo, el conocimiento como la mentalidad de la época eran
regidos por la Biblia. Además contribuyó a que los espectadores concibieran
didácticamente las emociones religiosas como el dolor, humildad, elevación y el
júbilo devocional.
La adaptación de los textos sagrados al arte tuvo como principal objetivo
evangelizar, ya que era la vía más práctica para acercar a la población,
principalmente analfabeta, a la palabra de Dios. Otras manifestaciones artísticas
como la arquitectura y la escultura también fueron utilizadas para exaltar la
grandeza divina, así como adoctrinar a los hombres y mujeres en los valores y
símbolos religiosos.
La CDMX es una de las ciudades en todo el mundo con más museos, sólo
después de Londres. Son 209 lugares entre los que se encuentran museos
interactivos, ciencia e historia y arte. Entre todos estos museos hay uno de particular
interés para los amantes del arte y específicamente el Gótico, el Museo Nacional de
San Carlos está ubicado en un inmueble el cual en el año 1788 fue una casa de
campo y perteneció a la marquesa Antonia Gómez Rodríguez de Pedroso y Soria,
quien en 1795 mandó construirla para su hijo el Conde de Buenavista, como
muestra de su aprecio. La construcción de la casa estuvo a cargo del escultor y
arquitecto valenciano Manuel Tolsá.
El Museo Nacional de San Carlos (MNSC) tiene la fortuna de exhibir una
colección de 13 piezas artísticas del Medievo. Desde la apertura del museo en
1968 las piezas góticas se exhibían en una vitrina que contenía toda la colección, no
obstante el Centro Nacional de Conservación y Registro de Patrimonio Artístico
Mueble determino que cada pieza merecía ser mostrada sola, cada una en su

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vitrina. El 21 de Abril del año 2016 fue reabierta la Sala Gótica, con motivo de la
remodelación que tuvo un costo de 200 mil pesos y que se logró mejor disposición
para la exhibición de las piezas después de 48 años de permanecer guardadas.
Las piezas expuestas en la sala del Gótico pertenecen al alto gótico del siglo
XIV al XV, en las cuales se aprecia combinación de formas flamencas, francesas e
italianas, conformando un hermoso colorido. La pieza más grande de la sala es el
Retablo de la Encarnación del siglo XV del catalán Pere Espallargués. Esta pieza
perteneció a una colección privada mexicana, después pasó a los acervos de la
Secretaría de Hacienda y Crédito Público la cual cedió su custodia al Museo
Nacional de San Carlos en el año 1973. En el retablo se puede apreciar varios
recuadros con pasajes de la vida y crucifixión de Cristo. Los colores que se
utilizaron en la pieza son de la gama de rojos, azules y ocres, además de los adorno
en oro.
Otra de las piezas de la sala es la tabla del pintor Pedro de Berruguete, La
adoración de los magos, es una pieza valiosa porque es la única de este pintor que
se conoce se encuentra en nuestro país, la pieza muestra recursos estilísticos
propios del Renacimiento.
Una de las piezas más antiguas del acervo de San Carlos es una tabla
datada del siglo XIV que muestra escenas de la vida de San Lázaro. Otra pieza de
la colección es la tabla de San Jorge y el dragón, muestra a San Jorge cazando al
dragón que aquejaba una localidad la cual puso en sacrificio a una doncella. Esta es
una de las piezas que particularmente atrae al público infantil, ya que el museo
cuenta con un servicio gratuito que son las visitas acompañados por un mediador,
quien narra el pasaje bíblico de forma lúdica para el público utilizando un peluche de
dragón. Además de la colección de arte Gótico el Museo Nacional de San Carlos
tiene un programa de visitas guiadas con las que se busca sensibilizar al público
para facilitar el acceso a las obras de arte apropiándose de ellas y reinventando y
potencializando su significado. La tabla de San Jorge y el dragón forma parte de un
programa especial “San Carlos en tu escuela” el cual tiene el objetivo de llevar
réplicas del acervo de MNSC a las localidades más alejadas de la ciudad, haciendo
posible que el arte llegue a más niños.
Además de la Sala de Gótico el Museo cuenta con una numerosa colección
de obras distribuidas en seis salas que van desde el Manierismo, Barroco,
Romanticismo. En la planta baja hay esculturas con las que el público puede

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interactuar, la dinámica busca sensibilizar a las personas sobre los sentidos, pues la
actividad se lleva a cabo con los ojos vendados, se utiliza guantes para poder tocar
las esculturas y tener una experiencia diferente a lo que acostumbramos cuando
visitamos un museo de arte.
El Museo Nacional de San Carlos es el único museo que tiene este tipo de
actividades por lo que representa un buen lugar para pasar un buen rato y disfrutar
del arte de una forma distinta.