Discapacidad y Rehabilitación, Enero de 2007; 29 (1): 25 - 31

El estado funcional en niños de 5 a 7 años de edad con síndrome de Down en relación con la capacidad
motora y el rendimiento de la capacidad mental

MICHIEL JM volman 1,2, JACQUELINE JW VISSER 3 &

GERTY JLM Lensvelt-MULDERS 4

1 Universidad de Utrecht, Centro de Investigación de habilidades cognitivas y motoras, 2 NetChild, Red de Investigación discapacidad en la niñez, Utrecht, 3 Centro de

Rehabilitación Roessingh, y 4 Universidad de Utrecht, Departamento de Metodología y Estadística, Países Bajos

Aceptado de junio de de 2006

Disabil Rehabil descargado de informahealthcare.com por la Universidad de Columbia el 06/16/13

Resumen
Propósito. Para examinar la contribución de la capacidad motora y ' rendimiento ' capacidad mental en las habilidades funcionales en niños con síndrome de Down (SD).

Método. Un enfoque de modelado de ecuaciones estructurales se utilizó para probar la relación entre la capacidad del motor, el rendimiento de la capacidad mental y el estado
funcional. El estado funcional se evaluó con el Inventario de Pediatría Evaluación de la Discapacidad (PEDI), la capacidad motora con el Movimiento Batería de Evaluación para la
Sólo para uso personal.

Infancia (M - ABC), y el rendimiento de la capacidad mental se evaluó con el Bruto - Junta Formulario (GFB). Sesenta - fi cinco niños con síndrome de Down, seleccionados por la
Fundación holandesa Síndrome de Down, se les pidió a participar en el estudio. Los datos fueron analizados con el programa AMOS utilizando el Bollen - método de arranque
Stine. Chi 2 y el índice de NFI se utilizaron como bondad - de - fi t índices.

Resultados. La fi t del modelo fue bueno ( w 2 [ 4] ¼ 1.35, pag ¼ 0,85; y NFI ¼ 0,99). ' El estado funcional ' explicó el 70% de la varianza en el modelo. Pesos de regresión
estandarizados indican que la capacidad del motor era mucho mejor predictor del estado funcional de los niños con síndrome de Down que el rendimiento capacidad mental
(0,96 frente a 0,17).
Conclusiones. Limitaciones en las actividades funcionales de los niños de 5 a 7 años de edad con síndrome de Down parecen estar más relacionadas con el nivel de habilidad motriz que
al nivel de rendimiento de la capacidad mental.

Palabras clave: Actividades de la vida diaria, el estado funcional, síndrome de Down, la capacidad motora, la capacidad mental

los niños con síndrome de Down negativamente en fl uye co -

Introducción
Es bien sabido que el progreso en el desarrollo de los lactantes y niños
pequeños con síndrome de Down (SD) se retrasa tanto con respecto a
su desarrollo motor y mental. Los estudios que compararon el retraso
en el desarrollo mental de los niños pequeños y mayores con síndrome
de Down, incluso informaron un efecto de desaceleración entre la edad
de 6 meses y 2 años [1 - 3]. En comparación con los bebés y los niños
con retraso mental sin DS, el retraso en el desarrollo motor de los niños
con síndrome de Down es más pronunciado que el retraso en el
desarrollo mental [2,4]. La disminución en el desarrollo motor parece
ser particularmente relacionada con el grado de hipotonía observado
[2,5]. Lauteslager [6] sugiere que la hipotonía en los jóvenes
contracción y el equilibrio de reacciones que conduce a problemas en el
control postural y, como consecuencia, en los patrones típicos de movimiento
estáticos y simétricas, las estrategias de movimientos compensatorios, y la
falta de variabilidad del movimiento.
Tales retrasos en el desarrollo mental y motor, probablemente tienen
un impacto en las habilidades adaptativas y funcionales de los niños con
síndrome de Down. Conducta adaptativa es - además de IQ -
considerado como un nuevo concepto importante describir las
discapacidades de los niños con retraso mental, y puede ser de fi nida
como '' la colección de habilidades conceptuales, sociales y prácticas (por
ejemplo, actividades de la vida diaria y las habilidades ocupacionales)
que la gente ha aprendido a desenvolverse en la vida cotidiana '' [ 7]. Sin
embargo, no se sabe mucho

Correspondencia: Michiel JM Volman, Centro de Investigación y capacidades cognitivas de motor, Departamento de Ciencias de la Educación y pedagógica, Universidad de Utrecht, PO Box 80140, 3508 TC Utrecht, Países
Bajos. Tel: þ 31 30 2539313. Fax: þ 31 30 2537731. E-mail: M.Volman@fss.uu.nl

ISSN 0963 ª 2007 Informa UK Ltd DOI: 10.1080 / 09638280600947617

 26 MJM Volman et al.
sobre la contribución de las limitaciones en el motor y la capacidad mental
en las habilidades adaptativas y funcionales de los niños en edad escolar
con síndrome de Down, que es el foco de este estudio.
Varios estudios informaron que los niños tienen problemas en withDS
fi ne y las habilidades motoras gruesas, y en la mano - la coordinación
ojo [8 - 11]. Además, Spano et al. [10] encontró que fi ne habilidades
motoras, en particular la coordinación bimanual, eran más deteriorada y
mostraron menos progreso en el desarrollo de las habilidades motoras
gruesas.
Varios estudios examinaron las habilidades funcionales y de adaptación de
los niños con síndrome de Down. Leonard et al. [12] examinó el estado
funcional de 211 niños en edad escolar con síndrome de Down (5 - 17 años)
con la medida de la independencia funcional para la Infancia (WeeFIM). Se
encontró que las limitaciones funcionales graves son poco frecuentes, pero eso
ayuda (aproximadamente el 5% de los niños) y supervisión (aproximadamente
35 - se requiere el 45% de los niños) para el auto - cuidado, la comunicación y
las habilidades sociales. Mancine et al. [13] informó de que a los dos años de
edad, la capacidad de los niños con un desarrollo normal era superior a la de
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los niños con síndrome de Down en los tres dominios de habilidades
funcionales en la Evaluación de Pediatría del Inventario de Discapacidad
(PEDI) (es decir, la auto - cuidado, la movilidad y la función social). Pero al fi
cinco años de edad, signi fi diferencias de grupo no puede solamente se
observaron en los dominios de auto - cuidado y la función social, y no para la
movilidad. Resultados similares para 5 - años - de edad los niños con síndrome
Sólo para uso personal.
de Down se encontraron en el estudio de Dolva et al. [14] que también utiliza el
PEDI. Auto - las actividades de atención fueron las más retrasadas, en
particular, auto - las actividades de atención que requerían fi habilidades
motoras ne, y las habilidades básicas de movilidad funcional fueron menos
afectados. Dykens et al. [15] examinó la pro fi les y el desarrollo de habilidades
de adaptación en 80 niños con síndrome de Down (edades de 1 - 12 años)
utilizando las Escalas de Comportamiento Vineland Adaptive (habilidades de la
vida diaria, la cognición, la socialización, la comunicación). Los niños con
síndrome de Down mostraron una signi fi debilidad no puede en la
comunicación en relación con habilidades de la vida diaria y socialización.
Resultados similares para las habilidades de adaptación se reportaron en el
estudio de Fidler et al. [dieciséis].
Una serie de estudios examinó la relación entre la capacidad mental
y habilidades de adaptación o funcionales, pero no se encontraron
estudios que examinaron la relación entre el deterioro motor y las
habilidades funcionales. Carr [1,17,18] recogió datos longitudinales de
54 niños con síndrome de Down que fueron vistos a los 15 meses, 4,
11 y 21 años. Se encontró que a los 4 años de edad, una gran cantidad
de los niños necesita signi fi no puede ayudar con las actividades de la
vida diaria. Además, se informó que la adquisición de habilidades no fue
bien predicho por el CI en las edades más jóvenes. Sin embargo, a la
edad de 21 años, un signi fi Se encontró una correlación entre el CI y no
puede actividades de la vida diaria (por ejemplo, bañarse y vestirse). En
el estudio de Kokubun et al. [19] no
Se encontró relación entre el inicio de la marcha en niños con síndrome de
Down y sus coeficientes intelectuales medidos a la edad de 7 años de edad o
más. Spano et al. [10] trató de determinar la relación entre el CI y el
rendimiento del motor en los niños en edad escolar con síndrome de Down,
pero debido a la falta de variación en los niños ' puntuaciones de CI NO se
podría establecer esta relación. En un estudio reciente realizado por Fidler et
al. [16] Se investigó la praxis y la capacidad de adaptación de los niños con
síndrome de Down y su relación. Los niños con síndrome de Down realizan
signi fi cativamente peor en una batería de tareas praxis que los niños con un
desarrollo normal y un grupo de comparación de niños con otras
discapacidades del desarrollo, lo que llevó a los autores a la conclusión de
que los niños con síndrome de Down tenían un de fi cit en la praxis que es
específica fi c para el síndrome de Down. Además, encontraron una fuerte
relación entre la praxis y la capacidad de adaptación en los niños con
síndrome de Down. En otro estudio sobre el desarrollo de las habilidades de
adaptación de los niños preescolares con síndrome de Down, se encontró una
fuerte relación entre la edad mental y habilidades de adaptación, lo que indica
que los niños con edades mentales superiores mostraron mayores niveles de
habilidades de adaptación en todos los dominios [20].
En resumen, a pesar de las limitaciones funcionales graves en la escuela
- niños de con síndrome de Down son poco comunes, los problemas con
(complejo) auto - se han encontrado cuidado y habilidades sociales. Aunque
algunos estudios informaron una relación entre la edad o CI mental y
habilidades funcionales o de adaptación, otros no lo hicieron. Un estudio
encontró una relación entre la praxis y la capacidad de adaptación. La
relación entre el deterioro motor y las habilidades funcionales de los niños
con síndrome de Down ha sido escasamente estudiada. Queda claro a partir
de la literatura si las limitaciones observadas en las actividades de la vida
diaria, especialmente en la auto - las actividades de atención, surgen de sus
especi fi problemas de motor C o que son el resultado de una falta en el '
rendimiento ' capacidad mental para desempeñar adecuadamente tales
(complejo actividades). El objetivo del presente estudio es, por tanto, para
examinar la relación entre la capacidad del motor, el rendimiento de la
capacidad mental y el estado funcional en un grupo de escolares - niños de
DS con la aplicación de un enfoque de modelado estructural.
Método
Participantes
Sesenta - fi ve childrenwithDown syndromewere pidió a participar en el
estudio. Los niños fueron identificados fi cado con la ayuda de la
Fundación Síndrome de Down holandesa. La investigación fue aprobado
por la Facultad de Ciencias Sociales. Sesenta - fi cinco padres de niños
con síndrome de Down que viven en tres regiones diferentes en los
Países Bajos se les pidió por carta a participar en el estudio. El
consentimiento informado fue dado por los padres de 25 niños (13
varones, 12 mujeres) que fi nalmente participó en el
 El estado funcional en niños con síndrome de Down
estudio actual. La edad media fue de 82 meses (rango 67 - 94 meses).
Doce niños visitaron escuelas regulares, 13 recibieron educación
especial.
instrumentos
Movimiento Batería de Evaluación para la Infancia (MovementABC). Habilidad
motora general se midió con el Movimiento - Prueba ABC, una prueba
para niños de 4 - 12 años [21]. El Movimiento - ABC mide la destreza
manual (3 artículos), dominio del balón (2 artículos) y equilibrio (3
artículos). Las puntuaciones brutas se convierten en puntuaciones de
escala (de 0 - 5 por artículo). La puntuación total oscila entre 0 - 40. Una
puntuación alta indica un rendimiento deficiente. Hay cuatro de edad
diferentes - bandas disponibles (4 - 6, 7 - 8, 9 - 10 y 11 - 12 años). Debido
al retraso en el desarrollo motor de los niños con síndrome de Down, la
edad - banda de 4 - se aplicó 6 años en el presente estudio. Los artículos
de edad - banda de 7 - 8 años serían demasiado dif fi culto para los niños
con síndrome de Down y poner en peligro su motivación. Además, el
objetivo del presente estudio no era obtener norma - puntuaciones de
referencia. Durante la evaluación de las
Disabil Rehabil descargado de informahealthcare.com por la Universidad de Columbia el 06/16/13
Movimiento-ABC se
parecía que los niños con síndrome de Down no fueron capaces de
lograr el ' salto y aplaudiendo ' elemento (balance) de la banda de la
edad de 4 - 6 años, porque la cuerda colgaba demasiado alto para saltar
Sólo para uso personal.
por encima. Con el fin de obtener una medida del grado de cumplimiento
de este punto, planteamos la altura de la cuerda en fi cinco pasos para la
altura de la rodilla hasta que el niño no marcamos y en consecuencia (es
decir, el fracaso en fi primer paso ¼ 5, segundo paso ¼ 4, etc.). Según el
Movimiento - Abc manual, la prueba tiene validez y fiabilidad aceptables.
Prueba - retest es de 0,75, y entre - calificadores fiabilidad oscila 0.70 a
partir de - ,89 [21].
' Bruto - Forma Bord ' Prueba (Gross - tablero de formas, GFB).
Capacidad mental rendimiento se evaluó con la holandesa ' Bruto -
Forma Bord ' De prueba [22]. El GFB es una prueba para niños de 3 - 7
años de edad. Consiste en una caja de madera con nueve agujeros de
una forma geométrica diferente en ella, y nueve bloques de madera
geométricamente correspondientes. Se le pide al niño a poner los
bloques de madera en el cuadro lo más rápido posible. El tiempo que el
niño necesita para realizar la tarea se mide. La puntuación media de
tiempo de tres ensayos sucesivos se utiliza normalmente. En el
presente estudio, sin embargo, un número de niños con síndrome de
Down no tuvo éxito para llevar a cabo tres pruebas sucesivas debido a
la falta de motivación de la maestría. Por lo tanto, se optó por utilizar el
juicio con la puntuación menor tiempo para cada niño para su posterior
análisis. El GFB grifos visuo - espacial, construcción, y la capacidad de
planificación. Tanto la fiabilidad y validez de la GFB son juzgados como
' satisfactoria ' [ 23]. La validez concurrente de la GFB con el marcador
edad mental WPPSI es alta ( r ¼ 0.87) [24].
27
Evaluación pediátrica de Discapacidad de inventario (PEDI).
El estado funcional se evaluó con la adaptación holandesa del PEDI
[25]. El PEDI es una entrevista con los padres estandarizado que
examina el estado funcional con respecto a los tres dominios: el cuidado
personal, la movilidad y la función social. Consiste en una Habilidades
funcionales
(FS) escala, una Asistencia cuidador ( CA) a escala, y una
Modi fi cationes ( M) escala. La FS - escala mide el niño ' capacidad s para
realizar especí fi actividades funcionales c. Los productos que se califican
ya sea 1 (elemento capaz de realizar en la mayoría de las situaciones) o 0
(no del punto de realizar en la mayoría de las situaciones). El CA - escala
mide la cantidad de asistencia proporcionada por el cuidador sea capaz de
llevar a cabo una actividad funcional (puntuación en un 5 - escala de
puntos: 0 ¼ la asistencia total y 5 ¼ independiente). El M - escala consiste
en un recuento de la frecuencia de tipos de modi fi cación requeridas en la
realización de la actividad en circunstancias normales. Para todas las
escalas, las puntuaciones más altas representan una habilidad funcional
mejor. La fiabilidad y validez del PEDI holandesa es satisfactoria [25 - 27].
Las puntuaciones sumadas de los diferentes dominios de la PEDI funcional,
la asistencia cuidador, y modi fi escala cationes se utilizan como entrada
para el análisis estadístico.
Procedimiento
El orden de la evaluación de estos instrumentos era la siguiente: fi
primera la GFB se evaluó, entonces el movimiento - ABC, y fi nalmente
la entrevista PEDI con uno de los padres. La evaluación total de duró
alrededor de dos horas. Las evaluaciones se llevaron a cabo en casa, y
para algunos niños en la escuela.
análisis estadístico
Se utilizó un modelo de ecuaciones estructurales (SEM) enfoque [28]
para determinar la relación entre la capacidad del motor, el rendimiento
de la capacidad mental y el estado funcional. Los datos fueron
analizados con el programa AMOS [29]. Debido al tamaño pequeño de
la muestra se aplicó el método de arranque Bollen norte ¼ 5000. Chi - de
- fi índices t para probar la fi t del modelo (véase la figura 1). El modelo
consta de dos variables observadas (la capacidad motora y habilidad
de rendimiento mental), y una variable latente (estado funcional) que se
mide por los tres diferentes escalas de la PEDI.
resultados
la capacidad motora y el rendimiento de la capacidad mental
Las puntuaciones en el Movimiento
 28 MJM Volman et al.

seguido de equilibrio y luego habilidades con el balón. variabilidad
interindividual en la Prueba de Movimiento-ABC y la GFB era grande.
Estado funcional
Las puntuaciones en el PEDI se presentan en la Tabla II. Limitación de las
actividades funcionales de los niños con síndrome de Down fue más
pronunciada para el autocuidado y la función social de dominio. Los niños
obtuvieron relativamente bien en la movilidad. variabilidad interindividual era
grande, en particular para el dominio de autocuidado.
Marcadores y PEDI escala habilidad funcional, y entre Movimiento -
ABC y la escala de asistencia PEDI cuidador (Tabla III). Correlación
entre la puntuación de GFB y las puntuaciones en las tres escalas PEDI
eran signi fi peralte en el nivel 0,01. Con respecto a los sub
puntuaciones del Movimiento - ABC y los tres dominios en las PEDI
escala habilidad funcional signi fi correlaciones signifi fueron
encontrados entre la destreza manual y auto - cuidado ( r ¼ 7 0,65, pag 5 0,001),
entre las habilidades de bolas y de autocuidado (r ¼ 7 0,54, pag 5 0,01).
Equilibrio fue signi fi cativamente correlacionada con la auto - cuidado,
la movilidad y social
función (respectivamente, r ¼ 7 0,72,
pag 5 0.001; r ¼ 7 0.58, y r ¼ 7 0,57, ambos

pag 5 0,01). Las correlaciones entre las puntuaciones GFB y el

correlaciones
autocuidado, movilidad y función social eran
Signi fi no puede Pearson ' s producto - correlación momento a nivel de r ¼ 7 0.65 ( pag 5 0,001), r ¼ 7 0,19, y r ¼ 7 0,36, respectivamente.
0,001 No se encontraron entre la GFB y Movimiento - puntuaciones de
ABC, entre el Movimiento - ABC

Modelo
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Ausencia de multicolinealidad entre dos o más variables ( r 5 0.85) es un

requisito previo para SEM [28]. La correlación entre el Movimiento -
ABC y la puntuación GFB no superó el valor de 0,85 lo que indica que
no había ningún problema con la multicolinealidad. Análisis con el K -
Smirnov reveló que todas las variables no signi fi desvían
significativamente
Sólo para uso personal.

Tabla II. Medias, desviaciones estándar, rangos y porcentajes de puntuación máxima de los
niños ' resultados en escala s sobre la Evaluación de Pediatría del Inventario de
Discapacidad (PEDI).

Media Dakota del Sur Distancia %

PEDI - habilidades funcionales

Autocuidado 49,0 11.0 27 de - 63 67%
Movilidad 59.1 4.1 48 - 65 91%
Función social 49.3 6.8 36 - 60 75%

PEDI - Asistencia cuidador

Autocuidado 21.4 10.9 5 - 38 52%
Movilidad 32.4 3.1 22 de - 35 91%
Función social 12.8 5.8 3 - 22 de 52%

PEDI - Modi fi cación 53.9 5.4 39 - 60 90%

Nota: Una puntuación más alta en la escala de Asistencia cuidador significa ' se le da menos
ayuda ' .
Figura 1. Modelo estructural de la relación entre la capacidad del motor, el rendimiento de la
capacidad mental y el estado funcional.

Tabla III. Pearson ' correlaciones entre las puntuaciones s en Movimiento - Prueba ABC,
Tabla I. medias, desviaciones estándar, rangos y porcentajes de puntuación máxima de los prueba del tablero de forma densa y las habilidades funcionales, Asistencia cuidador, y
niños ' s de puntuación y subsecciones puntuaciones totales en el Movimiento - Prueba ABC, y Modi fi escala cación del PEDI.
en la prueba del tablero de forma grosera.
norte ¼ 25 2 3 4 5
Media Dakota del Sur Distancia %
1. Movimiento-ABC de prueba 0,77 ** 7 0,79 ** 7 0,74 ** 7 0.49
total de Movimiento-ABC 19.3 8.6 2 - 39 48% 2. Junta de forma grosera 7 0,55 * 7 0,51 * 7 0.45
Destreza manual 10.1 3.9 1 - 15 67% 3. PEDI habilidades funcionales 0,86 ** 0.48
Habilidades con el balón 3.1 2.7 0 - 10 31% 4. Asistencia PEDI cuidador 0.49
Equilibrar 6.1 4.4 1 - 15 41% 5. PEDI Modi fi cación

Junta Formulario bruto (seg) 77.8 37.4 21 de - 153

Nota: *pag 5 0,01; ** pag 5 0,001.
 El estado funcional en niños con síndrome de Down
de la distribución normal. Las correlaciones entre las variables fueron
lineales y ful fi llenaron el requisito de homocedasticidad.
bootstrapping Bollen-Stine ( norte ¼ 5000) mostraron
que el modelo es correcto ( pag ¼ 0,84).
Bondad - de - fi t índices indicó que la fi t del modelo fue bueno ( w 2 [ 4]
¼ 1.35, pag ¼ 0,85; y
NFI ¼ 0,99). Un valor por encima de NFI 0,95 se considera buena
[28,30]. El r 2 estado funcional de fue de 0,70, lo que indica que el
estado funcional explicó 70% de la varianza en el modelo (Figura 1).
pesos de regresión estandarizados indican que la capacidad del motor
era mucho mejor predictor de estado funcional de actuación capacidad
mental ( 7 0,96 vs. 0,17).
Discusión y conclusión
El objetivo del presente estudio fue investigar la contribución relativa de
la capacidad motora y el rendimiento de la capacidad mental en el
estado funcional de los niños con síndrome de Down utilizando un
Disabil Rehabil descargado de informahealthcare.com por la Universidad de Columbia el 06/16/13
enfoque SEM. Signi fi correlaciones signifi se encontraron entre las
puntuaciones en el Movimiento - ABC, GFB y habilidad funcional PEDI y
escalas de asistencia PEDI cuidador. El modelo mostró que las
limitaciones en las actividades funcionales de 5 a 7 - años - de edad los
niños con síndrome de Down se predijeron mejor por el nivel de
habilidad motriz que por el nivel de rendimiento de la capacidad mental.
Sólo para uso personal.
El presente estudio demostró que los niños con síndrome de Down están
alteradas con respecto a la fi ne y las habilidades motoras gruesas. Aunque
algunos estudios concluyeron que fi ne las habilidades motoras podrían verse
menos afectados [8,9], esto no fue apoyada por nuestros fi hallazgos. La
capacidad motor pro fi le observada en el presente estudio fue consistente con
el reportado en el estudio de Spano et al. [10]: La destreza manual fue más
afectada, seguida de equilibrio y habilidad con el balón se deteriora menos.
Nuestros fi hallazgos también con fi rmar el gran inter - variabilidad individual en
la capacidad motora en niños con síndrome de Down que fue encontrado por
Spano et al. [10]. Con respecto a las habilidades funcionales, nuestras fi
hallazgos son en gran parte de acuerdo con los reportados por otros [12 - 14].
Los niños con síndrome de Down mostraron limitaciones en las habilidades
funcionales, en particular para el dominio de la auto - cuidado y la función
social, mientras que la movilidad era relativamente buena. Al igual que en los
estudios sobre la capacidad del motor, entre otras - la variabilidad individual en
las habilidades funcionales era grande, excepto por el dominio de la movilidad.
La principal fi hallazgo de este estudio fue que el nivel de la capacidad
motora de 5 a 7 - años - de edad los niños con síndrome de Down fue un
mejor predictor de la limitación en las habilidades funcionales que el
rendimiento capacidad mental. Esto parece en contradicción con los estudios
que informaron una relación entre la capacidad mental y de adaptación o
habilidades funcionales [16,17,20]. Sin embargo, el presente estudio también
encontró un signi fi correlación entre las puntuaciones de peralte en la GFB y
la escala de habilidades funcionales PEDI
29
aunque esta correlación fue menos fuerte que entre las puntuaciones de la
prueba del motor y la escala de habilidades funcionales PEDI (Tabla III).
Teniendo en cuenta todas las variables, el modelo mostró que la capacidad
del motor parecía ser el mejor predictor de estado funcional. Una
explicación para este último fi hallazgo es que los especí fi problemas c en
la coordinación motora y el control postural observado en los niños
pequeños con síndrome de Down [cf. 6] todavía tienen un impacto
considerable en el progreso del desarrollo de las habilidades adaptativas y
funcionales a la escuela - años de edad, más de una de fi cit en la praxis o
la capacidad de planificación que se requiere para llevar a cabo este tipo de
habilidades [cf. dieciséis]. Altas correlaciones entre las puntuaciones sobre
el movimiento - ABC subsecciones y en los diferentes dominios de la escala
de habilidades funcionales PEDI revelaron que este fue el caso para el
dominio de la auto - cuidado. Por otra parte, la fi hallazgo de que estas
correlaciones fueron más altos para el Movimiento - ABC las subsecciones
destreza manual ( r ¼ 0,65) y Balance ( r ¼ 0,72) indicó que no sólo
alteraciones en la fi motor ne, sino también deterioro en las habilidades
motoras brutos (es decir, equilibrio) se asociaron con las limitaciones en la
auto - cuidado. Equilibrio fue también altamente correlacionado con el
dominio de las habilidades funcionales función social PEDI ( r ¼ 0,65). Esto
parece una extraña fi hallazgo, pero hay alguna evidencia de que la
adquisición de las habilidades de juego de niños pequeños con la edad DS
es un factor determinante de la función social en la edad avanzada [31].
Además, el progreso en el desarrollo de las habilidades de juego de los
niños pequeños con síndrome de Down puede retrasado fácilmente por su
falta de control postural, por ejemplo, porque tienen más dif fi cultad
explorar su entorno y más dif fi cultad para jugar con los juguetes porque las
manos son a menudo utilizado para la ayuda a mantener el equilibrio.
Otra explicación para el pequeño impacto de rendimiento de la
capacidad mental en el estado funcional es la de fl uencia de factores
distintos de la capacidad mental. Por ejemplo, en el estudio de Hauser
- Cram et al. [32] se encontró que el crecimiento de las habilidades de
adaptación (comunicación, habilidades de la vida diaria, y dominios de
socialización) fue predicho más por medidas del entorno familiar (es
decir,
la cohesión familiar y
interacción madre El entorno familiar de este modo puede ser un factor
para extender el modelo utilizado en el presente estudio.
Implicaciones para la Practica
La fi hallazgo de que las habilidades funcionales se predijeron mejor por el
nivel de habilidad motriz que por el rendimiento capacidad mental puede ser
relevante para la intervención. Aunque la relación causal entre la capacidad
motora y las habilidades funcionales no era Veri fi cados en el presente
estudio, los fi hallazgos sugieren que las intervenciones que tienen como
objetivo mejorar las habilidades funcionales de la escuela - niños en edad
con síndrome de Down, en especial auto - Actividades de atención, debería
centrarse más en el subyacente
 30 MJM Volman et al.
motor de fi déficits que en el rendimiento de la capacidad mental (es decir,
la forma de llevar a cabo la tarea) en la práctica de habilidades
funcionales. Esta idea está en línea con Dolva et al. [14] quien sugirió que
el apoyo a dominar las actividades diarias depende de fi habilidad de
motor ne puede ser un área importante para la intervención de la terapia
ocupacional.
Limitaciones y direcciones para futuras investigaciones
El presente estudio tenía un pequeño tamaño de la muestra y el diseño
era cruz - sección en lugar de longitudinal. Por lo tanto, los resultados
deben ser interpretados con precaución, y las conclusiones sobre la
causalidad no son válidos. Para investigar la relación causal entre la
capacidad del motor y habilidades funcionales más en detalle, se requiere
un diseño de investigación (mezclado) longitudinal. Además, la
replicación del presente estudio con un tamaño de muestra más grande, y
modi fi cación del modelo con otras variables pertinentes podría dar una
imagen más clara de los determinantes de la limitación en las habilidades
funcionales de los niños con DS. Son variables candidatas entorno
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familiar, así como la motivación del niño para dominar una habilidad
funcional. Los niños con síndrome de Down se sabe que tienen serios
problemas con el dominio motivación [33], y muestran tarea - Evitar
comportamientos más a menudo que los niños con retraso mental sin DS
[34], que en mayo fl uir en sus capacidades funcionales. Por último, se
requiere el uso de una más amplia batería neuropsicológica para
Sólo para uso personal.
representar mejor ' rendimiento de la capacidad mental ' como una
variable latente en el modelo.
Expresiones de gratitud
Los autores agradecen a los padres y los niños con síndrome de Down
por su disposición a participar en el estudio. Agradecemos la ayuda de
los holandeses ' Stichting de Down ' s
El síndrome ' para proporcionar
direcciones de los padres de niños con síndrome de Down.
Agradecemos al Dr. IRN Lagerweij por su asesoramiento estadístico en
una fase temprana de este estudio.
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