Elaboración de un Sistema de Calidad según la Norma ISO 9001:2000 para una
Empresa que ofrece Servicios de Mantenimiento Industrial
4. CONCLUSIONES
Raquel Palacios Lira
PROYECTO FIN DE CARRERA Elaboración de un Sistema de Calidad según la Norma ISO 9001:2000 para una Empresa que ofrece Servicios de Mantenimiento Industrial
Como se mencionó en el apartado 2.3.2 Necesidades de la Normalización, el
Mantenimiento es una actividad que hasta los años 90 no ha empezado a cobrar importancia. De hecho, actualmente, aún carece del interés del que debería ser poseedor.
El Mantenimiento se ve como una actividad desagradecida, pues sólo llama la
atención cuando se producen problemas. Estos problemas, a su vez, suponen un gasto y es por ello por lo que el Mantenimiento lleva asociado la idea errónea de ser un coste para la organización, cuando realmente se podría considerar como una inversión de futuro.
Una buena planificación del Mantenimiento de los Equipos, respetando un acuerdo
entre coste y beneficio, entre cuánto gastar y qué se resuelve con ello, supone a largo plazo un ahorro económico derivado de la no necesidad de reposición de equipos de una mayor vida útil de los dispositivos.
El Mantenimiento Industrial constituye una actividad esencial para alcanzar altos
grados de eficacia en los sistemas productivos de la empresa y así garantizar la ventaja competitiva tanto en los productos como en los servicios ofrecidos. Esa ventaja competitiva supone un valor añadido del que se habló en la definición de Calidad (Apartado 2.2.1.Sistema de Gestión de la Calidad) y la que conllevará la satisfacción del cliente, que es el objetivo final de la Norma ISO 9001:2000.
Con la implantación del Sistema de Gestión de la Calidad a nuestra empresa de
Mantenimiento Industrial, y la aplicación del Manual de Calidad siguiendo todas sus directrices y empleando en el día a día los Registros establecidos conseguiremos tanto un control como un aseguramiento de la Calidad, incorporando también a la organización el concepto de Mejora Continua. La combinación de estos tres factores (control, aseguramiento y mejora)nos llevará a la consecución de la plena satisfacción de las necesidades y expectativas del cliente.