Materia: Grandes problemas contemporáneos

Alumna: Amaranta Trujillo Alonso

Por qué el socialismo

Albert Einstein

Me parece interesante como aborda Albert Einstein las crisis de nuestro tiempo, (las crisis
sociales, económicas, éticas, ambientales, etc. a las que nos ha llevado el capitalismo y que
han sido más drásticas y agresivas por su asociación con la dominación del capital
monopolista-financiero); ya que las localiza en la relación individuo-sociedad. Es en esta
relación donde se explica el por qué la anarquía económica de la sociedad capitalista actual
es una “verdadera fuente del mal” (como dice Einstein) para los seres humanos y, por lo
tanto, por qué entonces es necesario el socialismo.
De esta manera, parte primero por tratar de explicar qué es el hombre. A esta pregunta
responde que el hombre es tanto un ser solitario como un ser social. En tanto ser solitario
trata de proteger su propia existencia y la de aquéllos que le rodean y son importantes para
él. Por otro lado, en tanto ser social, busca el reconocimiento y afecto de los otros, pero
también es a través de estos otros que se procura la subsistencia. Así, el hombre es un ser
contradictorio, pues en él se debaten sus propios impulsos y los de la sociedad. No obstante,
es la combinación específica de estos impulsos la que determina el grado en que un
individuo puede lograr un equilibrio interno y contribuir al bienestar de la sociedad.
Por otra parte, en segundo lugar, trata de dilucidar lo que es la sociedad para el hombre,
para el individuo. Y así, nos dice que la personalidad del hombre que finalmente emerge
resulta, en gran medida, de la influencia del medio en el que se desarrolla, de la estructura
social en la que se desenvuelve, de la tradición de esa sociedad y de la valoración que ésta
hace de los diversos tipos de comportamiento. Además, es la sociedad la que proporciona
al ser humano el alimento, la vivienda, instrumentos de trabajo, el lenguaje, etc. Entonces,
en resumen, aunque el hombre sea capaz de pensar, sentir, luchar y trabajar por sí mismo;
siempre dependerá de la sociedad, por tanto, resulta imposible pensarlo fuera del marco
de la sociedad.
Por otro lado, en tercer lugar, señala que, además de la constitución biológica que el
hombre hereda y que incluye los impulsos naturales característicos de la especie humana,
también se suma una estructura cultural que el hombre adquiere de la sociedad a través de
la comunicación y la convivencia. Así, es esta constitución cultural la que determina en gran
medida la relación hombre-sociedad.
En este sentido, considero importante cómo aborda Albert Einstein la relación individuo-
sociedad pues lo hace desde la totalidad, de una forma holística donde lo biológico, lo social
y lo cultural se interrelacionan.
Ahora bien, para proseguir y entender el por qué el socialismo, señala que en esta relación
individuo-sociedad (ya descrita y analizada anteriormente), como se mencionó, existe una
dependencia del hombre respecto de la sociedad. No obstante, en este sistema social y
económico en el que vivimos, dicha dependencia se ha vuelto más agobiante puesto que la
sociedad se ha convertido en una amenaza a los derechos naturales y a la existencia
económica de los seres humanos. Así, la posición del hombre en la sociedad es tal que los
impulsos egoístas de su personalidad se acentúan sin cesar mientras que sus impulsos
sociales, por naturaleza más débiles, se deterioran progresivamente. Todos los seres
humanos, por lo tanto, cualquiera que sea su posición en la sociedad, sufren este proceso
de deterioro.
Así, de acuerdo a lo mencionado, el sistema capitalista es una amenaza para los seres
humanos, pues los mutila. Por tanto, es necesario una economía socialista que además vaya
acompañada de un sistema educativo orientado hacia objetivos sociales; donde no se
busque la competición exagerada y se induzca a reverenciar el triunfo en términos
adquisitivos. Donde la educación del individuo, además de estimular sus potencialidades
naturales, intente desarrollar en él el sentido de responsabilidad hacia sus semejantes en
lugar de glorificar el poder y el éxito como hace nuestra sociedad actual.
En este sentido, como resumen, lo que concluye Einstein es que el socialismo es necesario
porque sólo en él los individuos no son mutilados pues se trataría de establecer una
economía planificada en la que se ajuste la producción a las necesidades de la comunidad,
se distribuiría el trabajo necesario entre todos los que fuesen aptos para trabajar y se
garantizaría la subsistencia a cualquier ser humano. Además, en este sistema económico la
educación sería un pilar importante.