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ACTIVIDAD # 3

DOCUMENTO DE ANÁLISIS DE CONFLICTO

ASIGNATURA:
RESOLUCIÓN DE CONFLICTO

PRESENTADO POR:
JENY CAROLINA ALBA BAEZ
LEIDY MARCELA CALDERÓN ORTIZ
SERGIO ANDRES PAREJO VARGAS
EDWIN ALEXANDER OSORIO FORERO

DOCENTE
LUZ MERCEDES URIBE RODRIGUEZ

CORPORACIÓN UNIVERSITARIA MINUTO DE DIOS

BUCARAMANGA SANTANDER

AÑO 2019
INTRODUCCIÓN

La resolución de conflictos como un proceso de que permite a la humanidad resolver un


problema que en el caso es una problemática que se presenta en un sector determinado de
una región de Bucaramanga, sin que se recure a la violencia de la manera más acertada.
Se clasifica el conflicto en una estructura se establece el sector los autores de la
problemática se expone de manera concisa lo hechos que generan el conflicto y como se
desarrolla este conflictos muestran los principales afectados y el lugar en donde se realiza
esta problemática.
EL TRANSPORTE EN LA ZONA NORTE DE BUCARAMANGA, SALIÓ PIRATA

Estructura del conflicto

El transporte más que una actividad económica es un servicio público esencial, razón por

la cual implica un interés general que debe ser regulado por el Estado. Al respecto es

pertinente tener en cuenta que de conformidad con la Ley 336 de 1996, el servicio público

de transporte solo se presta por empresas debidamente constituidas y habilitadas por la

autoridad competente de transporte (organización, capacidad técnica y económica,

accesibilidad, comodidad y seguridad, necesarios para garantizar a los usuarios una óptima,

eficiente y continua e ininterrumpida prestación del servicio de transporte público), y en

vehículos homologados para el servicio de que se trate, por lo que los vehículos de servicio

particular no pueden prestar servicio público de transporte (Mintransporte, 2011).

Ante los altos niveles de informalidad en el transporte público el Gobierno nacional se vio

en la obligación de revisar esta modalidad que viene poniendo en jaque el transporte formal

no solo en razón de su competitividad sino también por los riesgos, la baja calidad y las

limitaciones en términos de cobertura (El Tiempo, 2016).

Pese estas medidas del gobierno nacional, y local, los conductores y dueños de los

vehículos que prestan un servicio de transporte público ilegal crean estrategias para

sobrevivir, se las ingenian para cuadrar rutas en cualquier punto de la ciudad, donde puede

transportar a las personas desde ahí hasta el barrio de residencia ofreciendo una baja tarifa,

comodidad y ante todo en corto tiempo, satisfaciendo de esta forma las necesidades de los

clientes.
Uno de los sectores que mayores índices de transporte informal presenta es la zona norte de

Bucaramanga en la que esta modalidad de transporte se ha convertido en una actividad de

subsistencia para muchos (teniendo que son pocas las alternativas de empleo rápidas,

efectivas y sobre todo con las que se alcance a vivir dignamente), buscando obtener

ingresos para la satisfacción de sus necesidades, afectando considerablemente a las

empresas de transporte público de pasajeros (tanto colectivo como individual) de la ciudad

que reclaman de la administración municipal planes de choque para evitar la quiebra de las

empresas legalmente constituidas (Alguero, 2014). Según el mismo autor, el transporte

informal en Bucaramanga como nueva alternativa de movilidad viene en aumento desde

2013 por las deficiencias del transporte público, falta de oportunidades laborales y

validación de la informalidad por parte de la ciudadanía.

En la zona norte de la ciudad de Bucaramanga, el servicio de transporte informal es

prestado en dos modalidades, mototaxi (traslado de personas por medio de una moto),

carros piratas (vehículos particulares que no cumplen con las regulaciones que la autoridad

de tránsito ha previsto para el transporte urbano de pasajeros). Generalmente estos

vehículos son vehículos antiguos de servicio público y en mal estado que por norma del

Ministerio de Transporte no pueden prestar el servicio, lo hacen como carros particulares.

La tercera modalidad son taxis de servicio individual que ante la feroz competencia prestan

también el servicio colectivo de pasajeros como estrategia para cumplir con las tarifas que

sus propietarios les exigen (al terminar el turno el conductor debe entregar $80.000, más

tanque lleno de combustible y el carro lavado) (Vanguardia Liberal, 2013).


Tipología del Conflicto

El conflicto del transporte público informal con la administración municipal se suscita por

el pésimo servicio que prestan las empresas de transporte como Transcolombia,Unitransa y

Cotrander que atienden las diferente rutas de la Comuna Uno y Dos, inconformidad que se

presenta por la baja frecuencia de recorrido, algunos transportadores abandonan las rutas,

otros esperan otras rutas para transbordar pasajeros, recorridos muy lentos, inseguridad

(atracos en los buses) y por la demora en la cobertura de Metrolínea aunque en la

actualidad se están estableciendo convenios con la empresa Transcolombia para ejercer la

modalidad de alimentador al esquema Metrolínea).

Pese a los continuos reclamos de la comunidad las empresas de transporte colectivo de

pasajeros hacen oídos sordos y no atienden los reclamos, aduciendo que la informalidad les

tiene quebrados y que están operando a pérdida (Transcolombia, 2017).

Por su parte la administración municipal en cabeza de la Dirección de Tránsito en lugar de

ejercer control a las empresas de transporte para que cumplan con las frecuencias de los

recorridos, se dedican a perseguir a los transportadores informales, que lo único que hacen

es prestar un servicio a la comunidad.

Para conocer la realidad, se efectúa una entrevista informal con usuarios del transporte

pirata como es conocido en la ciudad, quienes en términos generales manifiestan que les

resulta mucho más cómodo abordar esta modalidad de transporte porque es mucho más

ágil, se encuentran disponibles a toda hora, los precios del recorrido son asequibles y en

algunos casos el costo es el mismo del sistema formal que prestan los buses, pueden optar

por movilizarse en moto o en carro, los recorridos son rápidos, conocen a casi todos los
conductores aspecto que les genera confianza, encuentran rutas para Cabecera o El Centro

de la Ciudad.

Quisieran movilizarse en los buses, pero es evidente que los buses no cumplen con las

frecuencias de recorrido por la guerra del centavo, debiendo esperar en desde media hora

hasta cuarenta y cinco minutos que pase un bus, y cuando lo hace van como alma que

lleva el diablo, pareciera que el el bus se movilizaran animales y no personas.

En los únicos casos en que prefieren movilizarse en los buses es cuando por el recorrido

tienen que desplazarse al occidente o sur de la ciudad, pues les sale más barato esperar a los

buses alimentadores del Metrolínea, ya que pueden realizar el trasbordo en la estación de la

UIS o en la Estación San Mateo sin que ello les implique cancelar un nuevo pasaje.

Son conscientes que les resulta riesgoso movilizarse en mototaxi o carro pirata, porque

como son vehículos que no están legalmente autorizados para ejercer como medio de

transporte público de pasajeros en caso de accidente tienen que sufragar los gastos médicos

que se generen ante un accidente de tránsito porque los conductores, prefieren dejar a los

pasajeros botados (generalmente el servicio de mototaxi) y marcharse antes que lleguen las

autoridades del tránsito.

Lo mismo sucede cuando los sorprenden las redadas de las autoridades del tránsito para

controlar el transporte informal, caso en el que, al ser detenido el vehículo, se ven obligados

a abordar el transporte legal o formal, además de ser registrados en las planillas de la

Dirección de Tránsito como usuarios del transporte informal.

También manifiestan que la mayoría de los vehículos son viejos, en mal estado, en

ocasiones se varan en carretera (sectores con alta peligrosidad), y tienen que esperar que
pase otro vehículo con cupo disponible para poder continuar con el recorrido o esperar que

pasen los buses lo que les ocasiona llegar tarde a sus trabajos, citas médicas o diligencias

personales previamente agendadas, tienen mal olor, pero ante la necesidad de movilizarse

en sus apretados horarios prefieren correr el riesgo.

Actores del conflicto

 En el conflicto que se suscita entre el transporte formal o legal y el transporte

informal en la zona norte de Bucaramanga, se ven involucrados por una parte las

empresas de servicio urbano de pasajeros (Transcolombia, Unitransa y Cotrander)

que se quejan de la inoperabilidad de las rutas por la baja afluencia de pasajeros

que no les alcanza para cubrir los gastos de operación de los buses.
 El servició individual de pasajeros representados por las empresas de taxis que se

quejan que el transporte informal les hace imposible prestar el servicio en esta zona

de la ciudad.
 Las mismas empresas de taxis que se quejan de que algunos de los asociados están

prestando servicio colectivo de pasajeros como estrategia para sobrevivir a la

competitividad de los carros piratas y mototaxis.


 Los usuarios que ante la pésima calidad del servicio que prestan las empresas de

transporte urbano de pasajeros (buses) no les que otra alternativa que recurrir al

servicio informal.
 Los usuarios que se quejan que los taxistas se niegan a prestar el servicio de

transporte individual excusándose por la inseguridad (atracos que en ocasiones han

tenido consecuencias fatales)


 Los transportadores informales (carros piratas y mototaxis) que se quejan que ante

la falta de oportunidades laborales o empresariales n o les queda otra alternativa que


recurrir a la prestación del servicio para poder cubrir las necesidades económicas de

su grupo familiar.
 Las autoridades de tránsito que deben hacer cumplir las disposiciones legales para la

prestación del servicio público de pasajeros.


 La administración municipal que se ve presionada por los transportadores formales

(Taxis y buses) para hacer cumplir la ley y garantizar la prestación del servicio

urbano de pasajeros por parte de las empresas legalmente constituidas y autorizadas

por el Ministerio de Transporte.


 Las rentas departamentales y nacionales que con el auge del transporte informal ven

reducidos los ingresos tributarios por la baja operabilidad del servicio público de

pasajeros
 La empresa Metrolinea que no ha logrado consolidad el servicio de transporte

masivo de pasajeros en la ciudad de Bucaramanga, bien sea a través de su red

principal o a través del servicio de alimentadores.

Transformación del conflicto

La transformación del conflicto que se suscita con la prestación del servicio de transporte

informal en la ciudad de Bucaramanga implica un proceso de concertación entre las

autoridades municipales (Alcaldía de Bucaramanga y Dirección de Tránsito), empresas de

transporte formal de pasajeros (Buses y taxis), transportadores informales (piratas y

mototaxistas), usuarios y comunidad en general.

Este proceso de concertación se deriva de la necesidad de unos y otros de encontrar

solución por una parte al servicio de transporte público como actividad económica, dado

que para los transportadores informales representa una oportunidad de trabajo para atender
las necesidades de sustento de su núcleo familiar, razón por la cual la administración

municipal debería realizar asigaciones presupuestales para brindar oportunidades de empleo

a través de microempresas de las cuales se genere el sustento familiar.

También del compromiso real y efectivo por parte de las empresas de transporte formal por

mejorar el servicio en cuanto a frecuencias, cumplimiento de los recorridos, velocidad

media de los recorridos, esto con el fin de garantizar a los usuarios la disponibilidad del

servicio.

Y finalmente, el compromiso de los usuarios por hacer uso frecuente del sistema de

transporte formal para garantizar la operatividad de las empresas de transporte.

BIBLIOGRAFIA

Alguero, Miguel; Amaya, Yolanda; Pinilla, José. (2014). El transporte en

Bucaramanga, salió Pirata. Disponible en Internet:

https://plataformaupb.com/publicaciones/284-el-transporte-en-bucaramanga-

salio-pirata

Vanguardia Liberal. (2013). El gremio de taxistas ante el transporte informal. Disponible

en Internet: http://www.vanguardia.com/etiquetas/transporte-informal

El Tiempo. (2016). Según encuesta, en Bucaramanga prefieren el transporte informal.

Disponible en Internet: https://www.eltiempo.com/archivo/documento/CMS-16582934


Ministerio de Transporte. (2011). Ley 336 de 1996, por la cual se regula el servicio público

de transporte de pasajeros en Colombia.

Transcolombia. (2017). La inoperabilidad de las rutas en la zona Norte de Bucaramanga.

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