A lo largo de la existencia del hombre en la tierra, se han forjado infinidad de
sucesos, seres y fenómenos en los que este ha adoptado como objetivo suyo entender todo lo que a su alrededor acontece a partir de cuestionamientos anticipados. Aristóteles en sus manuscritos metafísicos manifestó escuetamente el siguiente pensamiento: “Todos los hombres tienen el deseo de saber. El placer que nos causa las percepciones de nuestros sentidos es una prueba de esta verdad”.1 De modo que es indiscutible su consigna al entrar a indagar en su inminente investigación sobre los animales donde se vislumbra enlazada la filosofía con la ciencia. En el presente escrito se abarcará la investigación empírica de Aristóteles en el mundo de la biología-zoología basada en observaciones naturalistas y en la contemplación teórica como en la rememoración de sus ideas filosóficas, lo cual contempla la vía principal y de los primeros escalafones de la ciencia.
En el tratado de la investigación sobre animales Aristóteles ubica el estudio de
la vida por la diversidad de formas en las que esta se encuentra presente, describe como una realidad neta, fascinante e incorruptible el hecho de que múltiples seres dispuestos en la naturaleza (atractivos o no a los sentidos), son una fuente inagotable de vastos conocimientos, en donde se distingue un dominio teleológico para justificar la existencia de cada forma viviente. Como primera medida Aristóteles describe estructuras corporales y expone diferencias entre animales, en cuanto a modos de vida, modos de reproducción, de locomoción entre otros, incluyendo al ser humano y con este abasteciendo de ejemplos equiparables con las demás creaturas, puesto que es evidentemente que la humana es la estructura que más se conoce. Entre estas diferencias establece excepciones para cada determinación, por ejemplo en el apartado de diferentes modos de vida, donde se expone que muchos animales terrestres obtienen alimento en ecosistemas hídricos mientras que muchos organismos acuáticos no están dispuestos para obtener alimento de 1. Aristóteles Metafísica, traducción Patricio de Azcarate (1873). 2. C. R. S. HARRIS, The Heart and the Vascular System in Ancient Greek Medicine. From Alcmaeon to Galen, Oxford, 1973. 3. Cf. De anima, 1 4,408b17 la tierra, de allí el planteamiento que demuestra que en la naturaleza domina el orden. Además de la observación para lograr estas afirmaciones el filósofo griego hizo analogías entre los seres vivos y sus órganos, en donde empírica y hábilmente empleo la anatomía comparada a partir de disecciones, también conocimientos coloquiales de la época y además de observaciones hechas específicamente por él, estaban las recogidas por pescadores, cazadores y viajeros, a la par, en base a conocimientos seguidos de tradiciones se evidenciaban corrientes de superioridad que hoy por hoy pueden ser erróneas en cuanto al predominio del macho sobre la hembra o de la derecha sobre la izquierda, con esto es claro que las influencias sociales entran a canalizar de alguna forma la ciencia. Con este cumulo de saberes, Aristóteles hizo una clara distinción entre vertebrados e invertebrados, donde los primeros poseían sangre y los segundos carecían de ella hipotéticamente. Se puede inferir que este punto marca indiscutiblemente el nacimiento de su tesis en la que refuta a Platón, pues declara que el corazón y no el cerebro es el órgano de control para las facultades superiores del hombre, ya que se consideró como el cimiento de la inteligencia2 puesto que este contiene el calor vital por ser un contenedor sanguíneo. Entre su obra, llama la atención descripciones en cuanto al carácter de los animales, que podrían tomarse como actitudes humanas, entre indolentes y reacios, prudentes y tímidos, astutos y malvados, creando un paralelo inmensurable entre todos los animales diferentes del hombre, dónde estos a pesar de poseer la facultad de la memoria y el aprendizaje carecen de la habilidad de recordar3, esta afirmación se basa en la idea aristotélica en la que según el tipo de vida, se distingue un tipo de alma, que para este caso expuesto, en el caso de los animales sería el alma sensible , y para el hombre la exclusividad del alma intelectual. Indudablemente Aristóteles en conjunto con pensadores de la época, dieron pasos agigantados para el avance de la ciencia, en este caso para la biología en su constante e imparable trabajo por conocer la vida, sus partes, sus formas y manifestaciones, pretendiendo así entender el orden y funcionamiento de este mundo animal tan diverso y esplendoroso, evadiendo su existencia de cualquier condición de azar y atándola a una finalidad única e inexorable reservando un importante lugar en la belleza de lo viviente.
1. Aristóteles Metafísica, traducción Patricio de Azcarate (1873).
2. C. R. S. HARRIS, The Heart and the Vascular System in Ancient Greek Medicine. From Alcmaeon to Galen, Oxford, 1973. 3. Cf. De anima, 1 4,408b17
DEFORMACIÓN DEL LENGUAJE ESCRITO, POR INFLUENCIA DEL FACEBOOK, EN LOS ESTUDIANTES DEL BACHILLERATO, ESPECIALIDAD CIENCIAS SOCIALES, DEL COLEGIO EXPERIMENTAL UNIVERSITARIO “MANUEL CABRERA LOZANO”, AÑO LECTIVO 2011 – 2012