ANÁLISIS DE LA JURISPRUDENCIA DEL TRIBUNAL

CONSTITUCINAL
El recurso de agravio constitucional que fue interpuesta por el señor Rodolfo Enrique Romero
Saldarriaga (quien se identifica como Ana Romero Saldarriaga) contra la resolución de Sala Mixta
de Tarapoto que invalido el derecho, sobre el cambio de nombre declarándola improcedente.
La parte agraviada inserta la demanda de amparo en contra de la RENIEC y el Ministerio Público,
solicitando el cambio de nombre y sexo en su Documento Nacional de Identidad, alegando que,
desde su infancia, siempre se identificó como mujer, pero la imposibilidad de efectuar las ya
mencionadas modificaciones en los registros afecta los derechos a su libre desarrollo de la
personalidad, igualdad y salud.
Alega que toda su vida ha transcurrido con el nombre y sexo de Rodolfo Enrique, lo que no
impidió que se identifique con el sexo femenino, durante su vida siempre ha sido víctima de
discriminación. Sus padres rechazaban su comportamiento de varón; en su adolescencia los
cambios en su cuerpo eran contrarios a lo que quería y las ofensas fueron cada vez más peores a
causa de esto cayó en un estado de depresión llevándolo a la posibilidad de suicidarse. Luego de
terminar toda esta etapa decidió tomar una apariencia más femenina, por lo cual dejo crecer su
cabello empezó a maquillarse y a vestir como una mujer e inclusive decidió establecer el nombre
de Ana.
Años después realizo un viaje a España en donde se sometió a una cirugía de cambio de sexo que
consistía en la ingesta de hormonas, implante de siliconas y vaginoplatía, todo esto estuvo
acompañado de un tratamiento psicológico como un apoyo emocional. En su regreso a Lima, a
pesar de tener apariencia femenina el nombre y el sexo establecidos en su DNI, le han venido
causando más incidentes de discriminación; esto sucedió cuando hizo una denuncia policial por
el robo de su celular y al ver sus datos registrados los policías impusieron a investigación y revisar
sus antecedentes penales. A pesar de su apariencia femenina siguió siendo víctima de
discriminación.
El Juzgado Especializado en lo Civil de la provincia de San Martín declaro fundada la demanda
de la víctima, considera que se han vulnerado los derechos a la identidad personal, su libre
desarrollo de la personalidad y la dignidad humana, a causa de que el nombre y sexo que se
registran en el DNI tienen una relación con la identidad de personas y por tanto pueden variar. En
dicha línea dejo determinado que el Estado debe permitir a la parte demandante el cambio de sexo
y nombre. El Tribunal Constitucional sostiene que cuenta con doctrina jurisprudencial en la que
ha precisado que no es viable solicitar el cambio de sexo de conformidad con la legislación
nacional.
Entra en debate la conveniencia de modificar la línea jurisprudencial desarrollada en la STC 0139-
2013-PA, en consecuencia, la posibilidad de reconocer que clase de alcances tiene el derecho a la
identidad personal. Esta situación no fue expresamente debatida en la Constitución de 1933,
aunque en un anterior oportunidad este tribunal haya establecido sus alcances, nada impide que
en la actualidad dicho pronunciamiento sea reexaminado para poder garantizar el derecho de
acceso a la justicia.
La victima de discriminación interpone la demanda de amparo con el propósito de que se le
reconozca como una mujer es decir como Ana Romero Saldarriaga, solicita el cambio de nombre
como el de su sexo en su partida de nacimiento en el DNI, a lo que la RENIEC le imposibilita
este cambio, así como la inexistencia de proceso judiciales en los que se pueda facilitar la
modificación de los datos relacionados con su identidad, afectan su dignidad, su derecho al libre
desarrollo de su personalidad y derecho a la identidad personal.
CRÍTICAS:
 En esta sentencia podemos analizar los casos jurídicos respecto al cambio de
nombre y sexo de una persona por motivos psicosexuales en lo cual consideramos
esta demanda justa, porque el caso transexual en una persona puede traerle y
generar inconveniencias y problemas psicológicos y fisiológicos en su vida
cotidiana y en esto tiene que ver mucho los derechos humanos porque este asume
las facultades y libertades de la persona sin distinción o exclusión alguna (raza,
color, sexo).

Podemos decir que hay una cierta injusticia de derechos de libertad de desarrollo
porque ya mencionado los DD.HH defienden este amparo hacia la persona
humana y debería ser precedida esta demanda.

 Esta demanda debería ser aceptada porque afecta su dignidad, su derecho al libre
desarrollo de su personalidad y derecho a su identidad personal, además de que es
un pasado fue víctima de discriminación lo cual le causó daños psicológicos que
no le permitieron vivir de una manera adecuada. Sin embargo su demanda es
improcedente respecto al pedido de cambio de nombre y sexo.

 La sentencia sobre el cambio de nombre y género del agraviado podemos afirmar

que la RENIEC, acepta su pedido de cambio de nombre, pero esta la reevalúa. Por
otro lado, el Tribunal Constitucional cuenta con una doctrina de jurisprudencia,
pues en ella se dice que no es viable solicitar el cambio de sexo de acuerdo con la
legislación nacional.

 Como se puede apreciar en la sentencia el agraviado siempre se consideraba

mujer, pero siempre estuvo sujeto a la discriminación por parte de la sociedad, y
lo más indignante es que los propios policías se burlan de su condición, es
indígnate que a su demanda la haya declarada improcedente ya que vulnera sus
derechos y uno de los principales es la libertad sexual de cada persona.

 El transexualismo debe ser entendido como disforia de género, más no como una
patología, todos las personas somos libres de decidir nuestra libertad sexual, y es
injusto que al señor Enrique Saldarriaga se les transgreda sus derechos, siendo una
persona cuerda como el resto.

 Los transexuales se sienten y se conciben a sí mismas como pertenecientes al

género opuesto que social y culturalmente se asigna a su sexo biológico y que
optan por una intervención médica, ya se ha hormonal, quirúrgica o ambas para
así adecuar su apariencia física, biológica a su realidad psíquica, espiritual y
social.