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ETICA PROFESIONAL

DEFINICION DE BIEN, MAL Y VIRTUD

BIEN. En la medida que vamos creciendo y capacitándonos los conceptos también

van cambiando y para este caso, entiendo por bien aquellas acciones que para mi juicio y

normas sociales son agradables, correctas y beneficiosas para la persona o comunidad que

la necesita y que de cierta forma me genera una satisfacción de bienestar y colaboración.

Pero sin duda, dependiendo de la moral, ética y otros aspectos como cultura, religión,

normas sociales y hasta el mismo individuo y su estado psicológico, es relevante conocer si

para quien recibió este bien, llámese individuo o comunidad, fue realmente útil, agradable y

legal.

MAL. Entiendo por mal lo contrario a lo anterior, es decir realizar acciones que van

en contra de las normas establecidas y que buscan perjudicar a las personas o comunidades,

haciendo cosas desagradables, incorrectas e ilegales en la mayoría de los casos

provenientes de fuerzas malignas, incluso que vinieran de la genética. Así mismo, el mal

aparece cuando hay excesiva libertad, porque al haber libre albedrío las personas se dejan

guiar por las pasiones, pecados o vicios para cometer estas maldades. Por tanto, el mal es la

ausencia de la virtud y carencia del bien.

VIRTUD. Concepto que lo entiendo, pero que no es fácil definirlo. Hace algunos

años la virtud era exclusiva para las mujeres, pero actualmente han cambiado estos

prejuicios y considero que la virtud o virtudes son cualidades que tienen las personas y que,
por lo general, producen efectos positivos en las personas o comunidades, tiende también a

confundirse con ser una persona buena o virtuosa, moralmente es una persona correcta en

su actuar y que este comportamiento es recurrente, para ello requieren cultivarse

continuamente mediante la disciplina y dedicación. La bondad, la solidaridad, la ética, el

respeto hacia el otro, el compromiso, la justicia y la verdad son algunos de los ejemplos

para ser considerado de grandes virtudes.

Con respecto a la entrevista a las personas, se realizó el siguiente cuestionario para

que fuera contestado por ellos:

¿Para Usted que es el bien, el mal y la virtud?

¿Cuáles cree Usted son los factores que influyen en la generación del bien?

¿Por qué cree Usted que se presenta el mal?

¿Usted se considera una persona buena, mala, virtuosa o todas las anteriores?

¿Considera Usted que una acción buena para otra persona o en otro país puede ser

considerada mala?

La primera persona entrevistada Dora Camargo de 50 años, estudiada, se vio un

poco turbada por definir los conceptos y no sabía cómo explicarlos incluso algunas

preguntas apenas las contesto con una o dos palabras, fue muy concreta en sus respuestas y

contesto en la primera pregunta sobre su concepto de el bien, para ella es hacer cosas

buenas, mientras que el mal es dañar algo o causar daño a alguien y la virtud para ella es

una cualidad de las personas que se inclinan por hacer cosas buenas. Con relación a los

factores que influyen en la generación del bien indicó los herenciales, religiosos y sociales;

la tercera pregunta de por qué se presenta el mal según ella es un deseo incontrolable de la
persona, no es consciente del acto malo que está realizando. La siguiente pregunta sobre si

hace el bien, el mal, virtud o todas ellas, se considera una persona que tiene de todas, es

decir, hace el bien a sus vecinos y familiares, a veces hace el mal cuando necesita serlo o

desquitarse de alguien y es virtuosa porque siempre está pensando en mejorar y ayudar al

prójimo. La última pregunta sobre si considera que algunas acciones buenas para otras

personas pueden ser malas, ella afirmó que SI, como por ejemplo dar monedas a los

venezolanos.

La segunda persona entrevistada se llama Paulina Morales, joven de 25 años,

universitaria y con fuertes conocimientos acerca del tema, fue muy directa y controversial

en sus respuestas y con respecto a la primera pregunta sobre su concepto de el bien, el mal

y la virtud contesto que está muy de acuerdo con las teorías de Kholberg, en donde el bien

y el mal no existen, son construcciones generadas a partir de patrones de crianza y el

contexto donde se desenvuelve el individuo; de otro lado, la virtud la definió como una

destreza individual enfocada a lo que el contexto considera benévolo. Con relación a los

factores que influyen en la generación del bien indicó como primordiales la religión, la

educación, la cultura y las experiencias contextuales. La tercera pregunta de por qué se

presenta el mal, ella afirma que el mal no existe, todo es una definición ética moral del

individuo. La siguiente pregunta sobre si hace el bien, el mal, virtud o todas ellas, afirma

que sólo trata de ser humano coherente con sus creencias apuntando a la virtud y

benevolencia. La última pregunta sobre si considera que algunas acciones buenas para otras

personas pueden ser malas, ella fue contundente en afirmar que SI, ya que todo es cuestión

de perspectiva y del contexto.


La última persona entrevistada responde al nombre de Anamaria Fajardo de 28 años,

también universitaria de la ciudad de Duitama, también mostró nerviosismo para contestar

las preguntas, incluso la mamá le ayudo en algunas respuestas, fue muy concreta en sus

respuestas y contesto en la primera pregunta sobre su concepto del bien, para ella es hacer

lo correcto, mientras que el mal es lo contrario de lo anterior, es decir hacer lo incorrecto y

la virtud para ella es algo esencial en las personas. Con relación a los factores que influyen

en la generación del bien indicó sólo la ética moral; la tercera pregunta de por qué se

presenta el mal según ella es por la falta de valores. La siguiente pregunta sobre si hace el

bien, el mal, virtud o todas, ella se considera una persona que tiene de todas. La última

pregunta sobre si considera que algunas acciones buenas para otras personas pueden ser

malas, ella afirmó que SI, como por ejemplo trabajar al ser menor de edad.

Basada en las respuestas de las entrevistadas, procedo a analizar ¿cómo las

creencias religiosas, culturales y sociales inciden en la definición de los conceptos del

bien, mal y virtud?; indudablemente, dos de las personas entrevistadas se nota como

patrón de crianza la religiosidad, donde se inculcan creencias que ponen por sobre todas las

cosas que el bien le agrada a Dios y tiene la salvación, mientras que el mal es producto del

pecado por no cumplir la ley de Dios y por tanto la condenación de su alma, cuando peca,

contraviene la voluntad de Dios, se produce el mal, pero el hombre no ama el mal, lo que

busca es las consecuencias del mal, lo que quiere es el placer sensible de un acto, que se

supone malo, pero su fin no es hacer el mal, .

Pero además también influyen otros factores como los herenciales, la educación, la

cultura y la sociedad donde vivo que genera normas de comportamiento que definen el
entorno ético del ser humano. Con respecto a la cultura y la ética influyen notoriamente en

el bien, mal o virtud porque que la ética es un reflejo directo de los valores fundamentales

de una cultura: una sólida creencia de lo que está bien o mal. Las afirmaciones categóricas

(como "robar es malo") pueden ser similares entre culturas, pero la realidad es que una vez

se comienza a explorar distintos conceptos, se hallan diferencias, algunas menores y otras

más relevantes, en la interpretación de las normas de ética. Si bien robar puede ser

indeseable en la mayoría de los casos, puede ser aceptable en otros.

Aquí otra de las entrevistadas sólo le dio relevancia a la ética moral, la idea de que

no existe ningún estándar definitivo del bien y del mal, así que cualquier juicio acerca del

bien y del mal es un producto de la sociedad. Por lo tanto, cualquier opinión sobre la

moralidad o ética está sujeta a la perspectiva cultural de cada persona; esto significa que

ningún sistema moral o ético puede ser considerado como el mejor o el peor, y ninguna

posición particular moral o ética puede realmente ser considerada buena o mala. Por tanto,

no podemos juzgar la moralidad de otras culturas, sin importar las razones de sus acciones.

Para finalizar y teniendo en cuenta las entrevistas realizadas se puede afirmar que

las creencias religiosas, culturales y sociales inciden en el concepto de el bien, el mal y la

virtud, porque nuestros padres desde niños van inculcando estos conceptos influenciados

por la religión, las normas establecidas y el contexto donde se desenvuelve en individuo,

pero con la salvedad que es el ser humano y la profundidad de su conciencia la única que

pude determinar si un acto u acción representan el bien, el mal y la virtud, por medio de una

evaluación moral en cuanto a la ley, la conciencia y la situación.

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