Академический Документы
Профессиональный Документы
Культура Документы
Morelos
Escuela de Estudios
Superiores de Xalostoc
Monografía:
Trabajo para la materia de Floricultura del 6to
Semestre de la Ingeniería en Producción
Vegetal
Taxonomía
Clasificación Botánica
Reino Plantae
Subreino Tracheobionta
Superdivisión Spermatophyta
División Magnoliophyta
Clase Magnoliopsida
Subclase Rosidae
Orden Rosales
Familia Rosaceae
Genero Rosa L.
Morfología
Yong (2004) describió las características morfológicas de la rosa:
Flor: En su tipo, las flores son completas, de cinco pétalos y
periginias, es decir, con el tálamo de bordes más o menos elevados
alrededor del gineceo, lo que le confiere formas de tasa o copa, y
lleva inserto en lo alto de los sépalos, pétalos y estambres (Weyler
y Kusery, citados por Yong, 2004).
Fruto: Los frutos son secos, indehiscentes, monospermos y muy
duros (Álvarez, citado por Yong, 2004).
Hojas: La hoja típica de los rosales tiene una superficie lisa y está
compuesta de cinco o siete foliolos. No todas las hojas tienen
cinco o siete foliolos y algunas tienen un follaje denso, muy
atractivo, compuesto de numerosos folíolos pequeños (Yong,
2004).
Raíz: Posee raíz pivotante, vigorosa y profunda.
En las plantas procedentes de estacas este carácter se pierde,
puesto que el sistema radical del rosal se vuelve
proporcionalmente pequeño (aproximadamente entre 5-10 % del
peso total), por lo que su capacidad productiva es menor y al cabo
de uno a dos años la calidad de la flor baja significativamente.
En las plantas injertadas, el sistema radical es bien desarrollado,
lo que permite a estas plantas lograr una mayor producción y
calidad de las flores (Vidalie, citado por Yong, 2004)
Tallo: Los rosales presentan ramas lignificadas, crecimiento
erecto o sarmentoso, color verde o con tintes rojizos o marrón
cuando jóvenes, variando de pardo a grisáceo a medida que
envejecen; con espinas más o menos desarrolladas y variadas
formas, existiendo variedades inermes o con muy pocas de ellas
(Weyler y Kusery, citados por Yong, 2004).
Requerimientos Climáticos
Temperatura
La temperatura adecuada para la germinación de semillas es de 20
ºC. Las plantas en etapa de crecimiento requieren de 21-24 ºC
durante el día y 15-16 ºC por la noche. Las temperaturas mínimas
para el desarrollo vegetativo, formación del botón floral y
fecundación se ubican en 5 ºC, 12 ºC y 14 ºC, respectivamente (Ruiz
et al., 2013).
Iluminación
El nivel de iluminación está directamente relacionado con la
producción del rosal, por lo que el rendimiento es mayor en
primavera que en otoño. En zonas con bajo nivel de iluminación el
color de la flor es menos brillante, el follaje crece con problemas y
las posibilidades de desarrollo de enfermedades fungosas son
mayores (Bañón et al., 1993, citado por Ruiz et al., 2013).
Humedad Relativa
En el periodo de brotación de yemas y crecimiento de brotes, con
el propósito de incitar el desarrollo, se precisa de una humedad
relativa de 80-90 % que después se estabiliza a 70-75 % con el fin
de evitar la aparición de enfermedades fungosas. Una HR menor a
60 % puede causar deformaciones, poco desarrollo foliar, caída de
hojas, etc. (Ruiz et al., 2013).
Respuesta a CO2
Al incrementar la concentración ambiental de CO2 a 1000 µmol mol-
1
existe un aumento en el peso específico de las hojas y el peso
seco de la raíz. Cuando está asciende a 1500 µmol mol-1 la
concentración de clorofila en hojas se ve afectada positivamente
(Ruiz et al., 2013).
Material Vegetal
Principales Cultivos
Para flor de corte se utilizan los tipos de té híbrida y en menor
medida los de floribunda.
Los primeros presentan largos tallos y atractivas flores dispuestas
individualmente o con algunos capullos laterales, de tamaño
mediano o grande y numerosos pétalos que forman un cono
central visible.
Los rosales floribunda presentan flores en racimos, de las cuales
algunas pueden abrirse simultáneamente.
Las flores se presentan en una amplia gama de colores: rojo,
blanco, rosa, amarillo, lavanda, etc., con diversos matices y
sombras (INIFAP, 2017).
Las variedades recomendadas por el INIFAP (2017) en la “Agenda
Técnica Agrícola del Estado de México” son las siguientes:
Color rojo (mayor demanda): First Red, Dallas, Royal Red, Grand
Gala, Koba, Red Velvet, fridud, Samuray.
Color rosa (demanda media): Anna, Noblesse, Vivaldi, Sonia,
Omega, Versilia.
Color Amarillo: Gold stray, Titanic, Vendela, Golden Times, Texas,
Starlite, Liv.
Color Naranja: Pareo.
Color Blanco: Polvo start, Virginia, Tineke, Ariana.
Reproducción Asexual
Acodo, esqueje e injerto son las técnicas de propagación
vegetativa empleadas en el rosal, siendo mayormente practicada
por los productores la del injerto por su gran número de
procedimientos utilizables (Escudete, De T, Púa, etc). El acodo es
aplicado en rosales con tallos flexibles y largos, siendo ideal para
rosales de tipo enredadera (Yong, 2004).
Reproducción Sexual
La propagación sexual de la rosa se efectúa por medio de semilla,
la cual se encuentra dentro de una baya carnosa de color rojo u
amarillo (varía según la especie) que por su dureza complica la
germinación hace necesaria la aplicación de un tratamiento de
estratificación (Aquino, 1998).
Este tipo de multiplicación no es recomendable para producción a
gran escala por la variación genética y se utiliza unicamente para
la obtención de porta injertos con características destacadas. Rosa
canina es la variedad más explotada por este método debido a su
vigor y a su sistema radicular profundo (Aquino, 1998).
Plagas y Enfermedades
Enfermedades:
Mancha Negra
Es la enfermedad más importante y con mayor aparición dentro del
cultivo. Es producida por el hongo Diplocarpon rosae y se presenta
después de largos periodos de humedad.
Las manchas negras, de una décima a media pulgada de diámetro,
se desarrollan primero en las superficies superiores de las hojas.
Más tarde, las áreas adyacentes a las manchas negras se vuelven
amarillas y las hojas caen prematuramente, generalmente
comenzando en la parte inferior de la planta y avanzando hacia
arriba (MBG, 2019).
Nematodos:
Existen especies de nematodos fitófagos que pueden ocasionar
problemas en las raíces de los rosales. La presencia de
Meloidogyne hapla, Pratylenchus penetrans, Pratylenchus vulnus
(causante de los mayores daños en cultivos establecidos en suelo)
y Xhipinema diversicaudatum pueden llegar a producir un
descenso en la producción de flores de un 30 % y la transmisión
de virosis (de Hoog, 2001).
Síntomas:
Inhibición del crecimiento, hojas amarillentas y poco
desarrolladas, tallos florales de menor tamaño y formación de
agallas en las raíces (de Hoog, 2001).
Figura 4. Raíz de rosa infectada con Meloidogyne hapla (de Hoog, 2001).
Plagas
Ácaros (Tetranychus urticae)
Los ácaros son arácnidos muy pequeños considerados como una
de las peores plagas dentro de la floricultura. Se presentan
generalmente en el envés (abajo) de las hojas y succionan el jugo
celular, matando a la célula. Otros daños son enrollamiento y
deformación de hojas y tejidos (IICA, 2017).
Pulgones
Son insectos de tamaño pequeño (hasta 5 mm de largo), tienen
cuerpo blando ovoideo con colores variados (verde, negro,
marrón, rojizo, naranja) según la especie (IICA, 2017).
Los pulgones producen unas sustancias que son azucaradas y
sirven de base para el desarrollo de un grupo de hongos negros
denominados fumaginas, que se desarrollan sobre las hojas sin
afectar directamente el tejido. También los pulgones son vectores
de virus, cuando se alimentan de una planta enferma, se
contaminan y pueden inyectar el virus a una planta sana (IICA,
2017).
Control Químico de Plagas y Enfermedades
INIFAP (2017) recomienda el uso de los siguientes productos:
Plaga Producto/Volumen de Agua
Mosquita Blanca Confidor 0.5 ml/1 litro
Pulgón Pirimor 0.5 g/ 1 litro
Araña Roja Agrimec 0.5 ml/1 litro
Trips Traycer 0.5 ml/ 1 litro
Post-cosecha
En la postcosecha intervienen varios factores, en primer lugar hay
que tener en cuenta que cada variedad tiene un punto de corte
distinto y por tanto el nivel de madurez del botón y el pedúnculo va
a ser decisivo para la posterior evolución de la flor, una vez
cortada.
Finalizado el corte los factores que pueden actuar en su marchitez
son: dificultad de absorción y desplazamiento del agua por los
vasos conductores, incapacidad del tejido floral para retener agua
y variación de la concentración osmótica intracelular.
Los tallos cortados se van colocando en bandejas o cubos con
solución nutritiva, sacándolos del invernadero tan pronto como
sea posible para evitar la marchitez por transpiración de las hojas.
Se sumergen en una solución nutritiva caliente y se enfrían
rápidamente. Antes de formar ramos se colocan las flores en agua
o en una solución nutritiva conteniendo 200 ppm de sulfato de
aluminio o ácido nítrico y azúcar al 1,5-2%, en una cámara
frigorífica a 2-4ºC para evitar la proliferación de bacterias. En el
caso de utilizar sólo agua, debe cambiarse diariamente.
Una vez que las flores se sacan del almacén, se arrancan las hojas
y espinas de parte inferior del tallo. Posteriormente los tallos se
clasifican según longitudes, desechando aquellos curvados o
deformados y las flores dañadas (INFOAGRO).
Comercialización
INFOAGRO recomienda los siguientes criterios de calidad:
Calidad EXTRA: 90-80 cm.
Calidad PRIMERA: 80-70 cm.
Calidad SEGUNDA: 70-60 cm.
Calidad TERCERA: 60-50 cm.
Calidad CORTA: 50-40 cm.
Bibliografía
Aquino, P. M. A. 1998. Producción del cultivo del rosal (Rosa spp) bajo
condiciones de invernadero. Tesis Monografía. Universidad Autónoma
Agraria Antonio Narro. Buenavista, Saltillo, Coahuila.
de Hoog, J. (2001). Handbook for modern greenhouse rose cultivation.
Applied Plant Research. 220 p.
HGIC. (2016). Rose diseases. Consultado el 14 de mayo de 2019 a las
21:32. Obtenido de: https://hgic.clemson.edu/factsheet/rose-diseases/
IICA. (2017). Manual de floricultura: Producción y manejo fitosanitario
INFOAGRO. El cultivo de las rosas para corte. En linea:
http://www.infoagro.com/flores/flores/rosas
INIFAP. (2017). Agenda técnica agrícola del Estado de México. Instituto
Nacional de Investigación Forestal, Agrícola y Pecuaria.
SIAP. (2019). Servicio de Información Agrícola y Pesquera.
O’Farril Nieves H. & Gaud S.M. (2007). Las plagas comunes del jardín.
Identificación y manejo integrado. Servicio de extensión agrícola,
Universidad de Puerto Rico. Us Environmental Protection Agency.
Pesticide environmental Stewardship Program, EPA Region 2
UC-IPM. (2009). Roses: Diseases and abiotic disorders. Pests Notes.
Publication 7463. Recuperado de:
https://ucanr.edu/sites/sjcoeh/files/77097.pdf
Ruiz C., J.A., G. Medina G., I. J. González A., H.E. Flores L., G. Ramírez
O., C. Ortiz T., K.F. Byerly M. y R.A. Martínez P. (2013). Requerimientos
agroecológicos de cultivos. Segunda Edición. Libro Técnico Núm. 3.
INIFAP. Instituto Nacional de Investigaciones Forestales Agrícolas y
Pecuarias-CIRPAC-Campo Experimental Centro Altos de Jalisco.
Tepatitlán de Morelos, Jalisco, México. 564 p.
Yong, A. (2004). El cultivo del rosal y su propagación. Cultivos
Tropicales, 25 (2), 53-67.